Un profesor conservador, neoliberal, de ultraderecha comenzaba una clase sobre "El Milagro Económico" durante el Gobierno (sic) Militar. -"Después del Padre Nuestro y antes de que la clase comience deben ponerse de pie y en posición militar firme cantar el Himno Nacional 11 veces incluyendo la estrofa de los Valientes Soldados" En ese momento uno de los alumnos (becado, trabajador, pelo largo, de boina, moreno, de apellido mapuche y mirada indómita de guerrero toqui, que se había comido a todas las rubias burguesas de la universidad y que creía en el pluralismo) se levantó mientras sostenía una piedra. -¿Cuánto vale esta Piedra?" El arrogante profesor sonrió toscamente y respondió: -"Su valor es tanto como el sagrado mercado está dispuesto a pagar por ella por la simple pero inmutable Ley de la Oferta y la Demanda" -"¡EQUIVOCADO!- Exclamó el sagaz alumno- Como bien declaró Marx esta piedra vale tanto como el trabajo depositado en ella para su producción lo que le da una plusvalía de la que injustamente se apropia el capitalista explotador. Por lo tanto, los medios de producción y la materia prima pertenecen por derecho soberano a los trabajadores y deben ser expropiados ya que sin el trabajo de ellos estos mismos no valen absolutamente nada de por sí" El profesor, que estaba visiblemente afectado, se puso pálido y comenzó a sudar, se le cayó su rosario y su copia de "El Día Decisivo" autografiada por Jaime Guzmán y salió corriendo de la sala invocando la Ley Antiterrorista en contra de toda su clase. Todos los estudiantes estallaron en aplausos. Comenzaron a cantar canciones de Inti Illimani y formaron una barricada con sus sillas tomándose la universidad. Juraron unirse a la Jota, dejarse barba y no volver a bañarse jamás. El profesor no volvió a la universidad y se fue a su fundo en Temuco donde cometió suicidio quemando su propia casa con él y toda su familia adentro.
