Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura Consejo Ejecutivo ex 159ª reunión 159 EX/40 PARIS, 28 de abril de 2000 Original: Francés e inglés Punto 8.5 del orden del día provisional LA UNESCO A LA HORA DE LA MUNDIALIZACION RESUMEN El presente documento, preparado a petición de la Presidenta del Consejo Ejecutivo en calidad de introducción al debate temático de la 159ª reunión, contiene una síntesis de las contribuciones de los diversos sectores de la Secretaría relacionadas con los desafíos a los que la UNESCO debe responder a la hora de la mundialización. 159 EX/40 EL FENOMENO DE LA MUNDIALIZACION 1. Hace por lo menos diez años que la creciente aceleración del desarrollo científico y técnico y la rapidez sin precedente de los flujos económicos y financieros vienen provocando, en escala mundial, auténticos trastornos de las economías, las sociedades, las mentalidades, las culturas y los modos de vida. Sin embargo, las consecuencias de estas conmociones, que resume apresuradamente el término “mundialización”, no son adecuadamente medidas, ni anticipadas con precisión ni realmente sometidas a control. Por este motivo exigen una reflexión a fondo, que favorezca el surgimiento de una mundialización verdaderamente adaptada a las necesidades y aspiraciones de los pueblos, cuyo ritmo esté en armonía con las tradiciones, los modos de vida y las opciones de cada uno. 2. En la actualidad muchos fenómenos y procesos muy diversos se agrupan bajo el término de “mundialización”, lo que hace difícil aprehenderlos. ¿Se trata de un fenómeno de orden meramente financiero y económico? ¿Se resume al auge de la revolución científica y tecnológica contemporánea, cuyos ejemplos más notorios serían la ingeniería genética e Internet? ¿No es acaso también un proceso profundamente social y cultural, que altera los modos de vida y los comportamientos, los modos de decisión y de gobierno o las formas de expresión artística? 3. Aunque resulta difícil aprehender el conjunto de las manifestaciones de la mundialización y percibir todas sus consecuencias, se puede sin embargo observar algunas de sus principales características y tendencias. 4. En tanto que la “mundialización” debería por definición llegar a todos los pueblos del planeta, que podría traducirse en un proceso de acercamiento e inclusive de convergencia entre los pueblos y las culturas, salta a la vista que la “mundialización” no es hoy en día un fenómeno universal. No es homogéneo ni uniforme, y se desarrolla a un ritmo muy variable. Beneficia en primer lugar a los países y a las poblaciones más pudientes; por lo tanto, tiende a perpetuar y agravar las asimetrías existentes en materia de desarrollo en lugar de reducirlas o eliminarlas, al menos en un futuro próximo. La mundialización resulta pues profundamente paradójica e incompleta. Por ejemplo: a) Está ampliamente dominada por una lógica económica, financiera y mercantil. Las consideraciones sociales, políticas y éticas son secundarias; existen muy pocos instrumentos de “conducción” política y ética de la mundialización, que va acompañada de insuficiencias en la gobernación democrática y de un aumento de la pobreza; b) Se apoya en una revolución científica y tecnológica acelerada que contribuye al progreso del conocimiento abriendo nuevas perspectivas a la investigación científica e intelectual, y que hacen del conocimiento, la inteligencia, la innovación y la creatividad el núcleo del desarrollo. Empero, esta revolución está distribuida de manera muy desigual; c) Acelera la conciencia sobre los problemas globales comunes a toda la humanidad (pobreza, medio ambiente, derechos humanos, etc.), pero se produce junto a una considerable fragmentación social y cultural que en algunos contextos favorece la intolerancia, la xenofobia, la discriminación y los conflictos; 159 EX/40 – pág. 2 d) Suscita encuentros inéditos entre los individuos, las sociedades y las culturas, pero al mismo tiempo da lugar a temores de uniformización cultural y de empobrecimiento de la diversidad y el pluralismo culturales. 5. La mundialización abre perspectivas totalmente nuevas de auge de la cooperación internacional y de progreso de las naciones. Sin embargo, va a la par de problemas nuevos que debemos comprender y anticipar, y que hacen más que nunca indispensable el trabajo en común para asegurar un mejor porvenir a todos. 6. En este contexto nuevo y paradójico, la misión de la UNESCO resulta más actual que nunca. Sus esferas de competencia -la educación, la ciencia, la cultura, la comunicación y la información- son el centro mismo de la “mundialización” y de la revolución científica y tecnológica sin precedente que la acompaña. En su calidad de organización intelectual y ética, la UNESCO está en condiciones particularmente ventajosas para percibir los desafíos y los problemas de la mundialización en toda su complejidad, para anticipar sus tendencias principales y para proponer oportunamente, en un espíritu interdisciplinario e intercultural, unas estrategias y unas políticas que puedan contribuir a reforzar la cooperación internacional en sus esferas de competencia y a través de ellas. 7. La mundialización no se desarrolla a un ritmo uniforme, ni con arreglo a modalidades comparables en todo el mundo. Exige por lo tanto políticas adaptadas que permitan a los grupos afectados aplican medidas de control y regulación en su propio beneficio. Frente a la inédita rapidez de los cambios en curso, las políticas educativas, científicas, culturales y de comunicación deben permitir acompañar esta adaptación y contribuir a ella. 8. La mundialización representa por lo tanto para la UNESCO un desafío histórico: el de reafirmar la actualidad, la pertinencia y la universalidad de los principios enunciados en su Constitución, que le asigna en particular la misión de velar por “el respeto universal a la justicia, a la ley, a los derechos humanos y a las libertades fundamentales (que) sin distinción de raza, sexo, idioma o religión...”, así como ayudar “a la conservación, al progreso y a la difusión del saber”, a “la libre circulación de las ideas por medio de la palabra y de la imagen” y al “acceso de todos los pueblos a lo que cada uno de ellos publique”. 9. Esta misión no puede ser ejercida de manera aislada: en efecto, la UNESCO debe tener en cuenta el nuevo contexto institucional, caracterizado en particular por la necesidad de una cooperación más estrecha con el conjunto de las organizaciones internacionales y nacionales, gubernamentales y no gubernamentales. La intensificación de la coordinación y de las relaciones de colaboración en el seno del sistema de las Naciones Unidas, así como el fortalecimiento de la política de cooperación de la UNESCO con todos sus interlocutores potenciales (organizaciones gubernamentales, no gubernamentales, sector privado) son una condición indispensable de su supervivencia. El éxito y el impacto de su acción dependerá en gran parte de su capacidad para movilizar a esos interlocutores, para poner de relieve sus ventajas comparativas específicas, y para proseguir su esfuerzo de sensibilización entre todos los públicos y los actores interesados (por ejemplo, los alcaldes, los parlamentarios y los órganos de la sociedad civil). 10. Como lo destaca la Constitución de la UNESCO, “una paz fundada exclusivamente en acuerdos políticos y económicos entre gobiernos no podría obtener el apoyo unánime, sincero y perdurable de los pueblos”; debe basarse “en la solidaridad intelectual y moral de la humanidad”. De cara a la mundialización, la UNESCO tiene la obligación de reafirmar la importancia de esta solidaridad en momentos en que se acentúan las desigualdades y las 159 EX/40 – pág. 3 polarizaciones entre “los que tienen” y “los que no tienen”. La mundialización debe tener lugar en beneficio de todos, especialmente de quienes en la actualidad están excluidos de ella; para que la mundialización sea provechosa deben participar en ella todos los pueblos en condiciones de igual dignidad y sobre la base de oportunidades equitativas en los ámbitos de la educación, la ciencia y la tecnología, la cultura, la comunicación y la información. En una palabra, hay que humanizar la mundialización. EDUCACION Los desafíos de la mundialización 11. La mundialización va acompañada de una creciente disparidad en lo que respecta al suministro de educación, entre los países y dentro de ellos. Esta disparidad genera varios problemas: a) Polarización educativa: cada vez más, hay escuelas ricas para ricos y escuelas pobres para pobres. Ello afecta especialmente a la educación básica; en efecto, en el último decenio, el gasto público para la enseñanza primaria en los países menos adelantados permaneció invariable, en aproximadamente 20 dólares por alumno, mientras que en los países desarrollados aumentó muy por encima de los 5.000 dólares; hay también un inquietante aumento en el número de niños no escolarizados en los países más pobres, especialmente en Asia Meridional y en Africa al sur del Sáhara. b) Mayor privatización de la educación: cada vez más, los bienes y servicios educativos se privatizan y se convierten en un gran negocio1. En todo el mundo, el mercado de programas informáticos educativos era de 776 millones de dólares en 1996 y se sitúa en la actualidad por encima de los 4.000 millones de dólares. Se ha observado también un crecimiento significativo en el sistema educativo paralelo, es decir, el ámbito de la instrucción privada. Al mismo tiempo, hay una tendencia convergente hacia la internacionalización de las normas sobre rendimiento educativo. 12. Otras tendencias asociadas con la mundialización ya plantean importantes problemas a la educación: a) Relaciones interculturales: las migraciones de población, la urbanización y los cambios impresionantes en las condiciones económicas, sociales y culturales favorecen un rápido incremento de las interacciones e intercambios culturales. Las naciones adquieren constantemente una índole cada vez más pluricultural. Una cuestión importante, acentuada por la polarización social y económica entre las naciones y dentro de ellas, es el aumento de incidentes graves imputables al racismo, la discriminación racial, la intolerancia y la xenofobia. 1 La industria de la educación y la capacitación ocupa actualmente el segundo lugar en los Estados Unidos de América y representa casi el 10% del PIB. Se sitúa asimismo en el quinto lugar entre las más importantes exportaciones de servicios, y registró un valor de 8.500 millones de dólares en 1997. De los 26 mil millones de dólares dedicados a los bienes y servicios educativos en 1997, 2.100 millones de dólares se utilizaron para la Web y cerca de 1.000 millones para programas informáticos. En el caso de otros países de la OCDE, la exportación de libros de textos y servicios constituyó también un negocio de gran envergadura: en 1997, el Reino Unido exportó libros de texto por un valor superior a 114 millones de dólares. Las editoriales de libros educativos, dotados de importantes capitales, están sustituyendo la comercialización de títulos individuales por la comercialización de servicios a editores locales, mientras que las modernas agencias que los ponen a prueba siguen una trayectoria similar. 159 EX/40 – pág. 4 b) Nuevas tecnologías de la información y la comunicación: Estas nuevas tecnologías ofrecen nuevas posibilidades de facilitar el acceso a la educación para un gran número de personas y de comunidades aisladas, a través de la educación a distancia, y de mejorar el contenido de la educación. Sin embargo, estas nuevas posibilidades sólo redundan actualmente en beneficio de los ricos y las nuevas élites de la era de la información. c) Además, la definición de “educación” se está ampliando, en la medida en que la distinción tradicional entre niveles de educación tiende a desaparecer y a ser sustituida por un proceso que da a todos la posibilidad de aprender durante toda la vida, preparando el camino para una “sociedad del aprendizaje” y que la participación en la “sociedad del saber” del siglo XXI, en rápida evolución, exige nuevos conocimientos y aptitudes, así como una educación “personalizada” orientada a satisfacer necesidades que cambian rápidamente. La función de la UNESCO 13. Promover la educación para todos a lo largo de toda la vida: a) De conformidad con la Declaración Universal de Derechos Humanos, la educación debe reconocerse como un derecho, y como un bien común, que exige la cooperación internacional y apunta a integrar a los excluidos, los marginados y los privados de derechos, especialmente las niñas y las mujeres; ello supone, con carácter prioritario, invertir en la educación básica; b) Promoción de la educación a lo largo de toda la vida: cada vez más se considera que la “educación” es un proceso que dura toda la vida (“aprender a aprender”), que ya no está limitada a un grupo de edad o a la escolarización formal, y apunta al desarrollo personal y cultural, al fortalecimiento de la ciudadanía y al aprendizaje permanente en contextos escolares y extraescolares; c) Se debe mejorar la calidad de la educación, para que cada vez más esté centrada en el que aprende y corresponda a las necesidades y aspiraciones de las poblaciones y los individuos; es preciso prestar más atención al contenido, los métodos, las modalidades de la educación (incluidas las cuestiones lingüísticas), así como las finalidades de la educación; además, es necesario investigar sistemáticamente las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías de la comunicación y la información para reducir las disparidades educativas entre los “pobres” y los “ricos” en materia de educación, sin por ello descuidar otros instrumentos educativos. 14. Aprender a convivir2. A medida que las naciones y las culturas se vuelven cada vez más entrelazadas, los sistemas educativos deben dar prioridad al desarrollo de la educación intercultural, en el sentido de comprensión de los demás pueblos y apreciación de la 2 Este concepto fue definido por la Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XXI, establecida por la UNESCO, como uno de los principales desafíos que se plantean a la educación. 159 EX/40 – pág. 5 interdependencia, en un espíritu de respeto de los valores del pluralismo, el entendimiento mutuo y la paz3; la promoción de la cohesión social a través de la educación, mediante el desarrollo de programas de educación para la ciudadanía que hagan hincapié en valores básicos (por ejemplo, el pluralismo, los derechos humanos, la tolerancia, la democracia en participación, la igualdad de oportunidades, la justicia); el desarrollo de las aptitudes lingüísticas. 15. La formulación de políticas y estrategias educativas que atiendan a esos objetivos, orientadas a la renovación de los sistemas educativos, lo que incluye la renovación de la pedagogía, el material y los métodos didácticos, la formación de personal docente y especialistas en educación. Ello incluye políticas en relación con los libros de texto, la formulación de políticas lingüísticas basadas en el plurilingüismo y la elaboración de indicadores estadísticos más fiables y diversos que permitan definir mejor las necesidades y prioridades para las políticas educativas. CIENCIA Los desafíos de la mundialización4 16. La creciente disparidad en la capacidad científica y el desarrollo entre el Norte y el Sur muestra que los rápidos adelantos en la ciencia y la tecnología no redundan en beneficio de muchos países y regiones del mundo en desarrollo. Esta tendencia, que contribuye al “éxodo de especialistas” de dichos países, tiene perspectivas de acentuarse, a menos que se dé prioridad a la formación de capacidades endógenas en ciencia e ingeniería, especialmente en los países menos adelantados. El fenómeno se ve agravado por las rápidas transformaciones en las condiciones para la producción y el intercambio de los conocimientos científicos y, en particular, la función cada vez más importante que asume el sector privado en la investigación científica (en la actualidad, un 90% de las investigaciones se llevan a cabo en los países desarrollados, y el 60% por cuenta del sector privado, frente al mundo en desarrollo donde este porcentaje es inferior al 20%). Este elemento ha suscitado en muchos países en desarrollo la creciente preocupación de que la excesiva titularidad de patentes y el monopolio del saber por parte de los países desarrollados, tanto en los sectores público como privado, estén distorsionando gravemente los posibles beneficios de la mundialización5. 17. Es necesario realizar un importante esfuerzo científico en favor de un desarrollo sostenible desde el punto de vista social y ambiental, especialmente en el ámbito de la seguridad alimentaria, la seguridad del agua, el cambio ambiental mundial, la utilización de 3 4 5 Este es uno de los mandatos fundamentales de la UNESCO: “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos y religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz” (Artículo 26.2 de la Declaración Universal de Derechos Humanos). En la Conferencia Mundial sobre la Ciencia, organizada por la UNESCO y el ICSU, se examinó de forma exhaustiva la cuestión de la ciencia y la mundialización; la “Declaración sobre la Ciencia y el Uso del Saber Científico y el Programa en pro de la Ciencia: Marco General de Acción”, aprobados en la Conferencia de Budapest, indican una estrategia y un marco de acción para todas las partes interesadas, entre ellas, la UNESCO. Los países en desarrollo generan hasta el 90% de las reservas mundiales de recursos biológicos; esta diversidad biológica representa un valor económico potencialmente importante para la elaboración de medicamentos por parte de empresas farmacéuticas multinacionales. 159 EX/40 – pág. 6 la tierra, la desertificación, la salud, el desarrollo económico, la energía, los modelos de consumo y los modos de producción. 18. Las nuevas tecnologías y los adelantos teóricos han provocado una revolución en las ciencias de la vida, que plantea serias cuestiones éticas, por ejemplo, en el ámbito del genóma. La función de la UNESCO 19. La UNESCO debe tratar de garantizar el acceso equitativo de todos los países, y de todos los segmentos de la población dentro de los países, a los posibles beneficios de los nuevos adelantos científicos y tecnológicos. En cooperación con sus interlocutores, dentro y fuera del sistema de las Naciones Unidas, la UNESCO debe abordar los problemas interconectados de la mundialización, mediante la elaboración de enfoques auténticamente interdisciplinarios e integrados en el ámbito de la ciencia. 20. La UNESCO debe en particular: a) Afirmar su liderazgo en el ámbito de la ética de la ciencia y la tecnología, mendiante una reflexión internacional, el intercambio de experiencias y prácticas recomendadas, en aspectos de interés común para los gobiernos, los científicos, el sector privado y la sociedad civil. b) Mejorar las condiciones para el intercambio, la transferencia, y las aplicaciones de los conocimientos científicos y tecnológicos, dentro de las regiones y entre ellas, a fin de reducir la creciente disparidad entre las naciones y fortalecer las capacidades endógenas en las diferentes ramas de la ciencia, en particular la enseñanza de la ciencia y la ingeniería en los países en desarrollo. c) Promover políticas y estrategias científicas basadas en la cooperación internacional, que apunten a reforzar la contribución de la ciencia al desarrollo sostenible desde el punto de vista social y ambiental, en el marco de la mundialización, en particular mediante programas de cooperación sobre medio ambiente y gestión sostenible de los recursos naturales. d) Promover una reflexión y una acción internacional en relación con el “monopolio del saber” y los derechos de propiedad intelectual, en estrecha cooperación entre la UNESCO, la OMPI, la OMC y otros organismos e interlocutores. CIENCIAS SOCIALES Y HUMANAS Los desafíos de la mundialización 21. La mundialización es un poderoso factor de cambio de los comportamientos sociales y las estructuras económicas, así como de la estructura del poder político y de los modos de buen gobierno. Estos cambios, de no ser convenientemente regulados, pueden llevar a la exclusión de determinados grupos de la población, de países y hasta de continentes enteros y, en todo caso, hacer que aumenten su dependencia y su vulnerabilidad ante la pobreza. 159 EX/40 – pág. 7 22. La mundialización representa un desafío para la paz. Verdad es que representa una oportunidad, que no hay que dejar escapar, de intensificación del diálogo y la cooperación entre los pueblos y las culturas. Pero va también unida al desarrollo de fenómenos de búsqueda de refugio en la propia identidad, de conflictos de carácter nacionalista, racista o xenófobo, y de discriminaciones étnicas o religiosas. Plantea el problema ético de las normas de existencia colectiva y de conducta individual que permitan alcanzar un mínimo de cohesión y de armonía en las sociedades. 23. La mundialización tiene profundas consecuencias, tanto positivas como negativas, en lo tocante a los derechos humanos. Al favorecer una fecundación mutua de los ideales, los valores culturales y las aspiraciones, tiende a promover la universalidad de los derechos humanos. Sin embargo, plantea asimismo diversos desafíos mundiales en el ámbito de los derechos humanos, en particular con respecto a la extrema pobreza, a la situación de los grupos víctimas de discriminaciones o agresiones, o privados de representación política, a las incidencias de los problemas ambientales, al desarrollo del crimen organizado, la corrupción y el terrorismo, etc. 24. La mundialización representa un gran desafío para el buen gobierno, la democracia y la participación en todos los planos. Modifica los papeles y el peso relativo de los distintos protagonistas de la escena internacional y nacional (los Estados y las organizaciones internacionales, pero también las ONG y las empresas privadas). Pero va unida también a problemas mundiales que exigen soluciones mundiales, y por lo tanto nuevas formas de buen gobierno. Por otra parte, la participación de las mujeres y de los jóvenes en la “aldea mundial” es también un problema esencial y que todavía no ha sido suficientemente analizado. La función de la UNESCO 25. La interdependencia cada vez mayor de todas las partes del mundo que ha traído consigo la mundialización exige que se examinen atentamente las cuestiones relacionadas con la ética mundial y la responsabilidad mundial, y que se preste aún más atención al respeto a la dignidad humana y los derechos humanos fundamentales. En este mundo nuevo, en el que las interrelaciones son cada vez mayores, la solidaridad y la tolerancia son, hoy más que nunca, una necesidad esencial tanto para la sociedad civil como para la simple supervivencia de la humanidad. La UNESCO debe en particular: a) Suscitar políticas y estrategias de desarrollo social que puedan prestar ayuda a los Estados Miembros para: prever y controlar las transformaciones sociales y humanas relacionadas con los procesos de mundialización; favorecer la participación en los procesos de decisión democrática de determinados grupos que dichos procesos tienden a excluir; suscitar una mayor comprensión de las interacciones entre problemas globales y problemas locales en estos procesos. Las incidencias de la mercantilización y el papel cada vez mayor del sector privado en todas las esferas de competencia de la UNESCO han de ser también mejor evaluadas. b) Profundizar su reflexión y su acción en pro de los derechos humanos, de la democracia, del Estado de derecho y de la ciudadanía, ante los nuevos desafíos de la mundialización, e intensificar su participación activa como organismo principal, en las Naciones Unidas, de la promoción de la tolerancia y la no violencia. 159 EX/40 – pág. 8 CULTURA Los desafíos de la mundialización 26. La mundialización hace que sean posibles diálogos y nuevos encuentros entre las culturas, abre nuevos espacios de expresión, creatividad, intercambio e innovación culturales y suscita nuevas esperanzas para el desarrollo cultural. Pero trae también consigo nuevos desafíos y problemas: a) Se observa una tendencia a la disminución de la diversidad cultural (desaparición acelerada de determinados saberes, lenguas y tradiciones; presión que ejercen la urbanización y la demografía en el patrimonio) y a la uniformización cultural, favorecida por la circulación de bienes y servicios. b) Junto a la mundialización aparecen poderosas corrientes de reafirmación de la identidad que pueden llevar a la búsqueda de la autarquía, a la intolerancia y a la xenofobia. c) La tendencia a la mercantilización del patrimonio, de los bienes y los servicios culturales (ya se habla de “economía del patrimonio” y de “consumo del patrimonio”), puede llevar a un deterioro acelerado de este patrimonio y a un empobrecimiento no sólo de los contenidos culturales, sino también de los estilos de vida, de la ética y de los valores. d) El rápido desarrollo de la utilización de las nuevas tecnologías favorece la aparición de una sociedad mundial cada vez más interactiva, que podría estar sensibilizada a la riqueza de las diferencias culturales como fuente de creatividad, pero a la que sólo tiene acceso por el momento un reducido número de personas. El potencial de estas nuevas tecnologías en el ámbito de la cultura ha sido por el momento muy poco estudiado. La función de la UNESCO 27. Ante el fenómeno de la mundialización, la actualidad de la misión de la UNESCO en el ámbito de la cultura es mayor que nunca. En la Constitución de la UNESCO encontraremos las referencias indispensables para la búsqueda de un dominio consciente de esta transformación profunda de la realidad mundial: por un lado, la afirmación de la indispensable libertad de circulación de las ideas por la palabra y por la imagen -con independencia de que los soportes sean ahora reales o virtuales- y, por otro lado, el reconocimiento de la cultura como motor del mayor entendimiento entre los seres humanos y como factor de paz. La UNESCO tiene también un mandato particular en el marco de Plan de Acción adoptado por la Conferencia intergubernamental de Estocolmo sobre las políticas culturales. 28. La UNESCO, en particular, deberá: a) Promover el conocimiento y la valorización de las culturas y de la diversidad cultural y lingüística, y favorecer la ampliación del concepto de patrimonio (patrimonio inmaterial, patrimonio vernáculo, paisajes culturales, etc.), en particular mediante una acción normativa adaptada a las necesidades específicas de los países y de las regiones, y al reconocimiento de los derechos culturales. 159 EX/40 – pág. 9 b) Favorecer el desarrollo del pluralismo y del diálogo intercultural, evitando tanto la fragmentación de las culturas como el universalismo reductor. Uno de los grandes desafíos con los que la UNESCO ha de enfrentarse a la hora de la mundialización es el fomento de un “diálogo en las civilizaciones”6 que se refiera a todas las dimensiones del diálogo intercultural e interreligioso. c) Favorecer la creatividad y la innovación culturales y el desarrollo de industrias culturales, prestando, en particular, especial atención a los problemas de propiedad intelectual y de derechos de autor, y aprovechando los soportes tradicionales o nuevos para compartir e intercambiar en el ámbito de la cultura. Debe estar a la escucha de las sociedades para permitir que en ellas se manifieste especialmente el mensaje de la juventud, el de una nueva cultura del porvenir. d) Promover políticas culturales que sepan aprovechar las oportunidades que presenta la mundialización en materia de creatividad y de intercambios, revitalizando al mismo tiempo las culturas tradicionales y suscitando un desarrollo que sepa estar arraigado en la cultura. COMUNICACION, INFORMACION E INFORMATICA Los desafíos de la mundialización 29. Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación afectan ya a casi todos los sectores de la actividad humana y provocan con el tiempo hondas transformaciones en la sociedad y en las personas, tanto en su modo de vida como en la forma de trabajar, estudiar, comunicar o utilizar su tiempo libre. Las repercusiones de estas nuevas tecnologías plantean problemas que todavía no se han llegado a conocer cabalmente: a) Acentuación de la divisoria informática entre los “ricos” y los “pobres” en el campo de la información, tanto en cuanto a precios como a infraestructuras7 y contenidos. Esta disparidad es un factor suplementario de aumento de las desigualdades dentro de cada país y entre las naciones, que puede ahondar las diferencias entre países ricos y pobres e intensificar el éxodo de competencias del Sur hacia el Norte. b) Incremento de la privatización: los principales protagonistas de la sociedad de la información pertenecen sobre todo al sector privado, y más concretamente a los tres sectores empresariales principales que forman el núcleo generador de la evolución en curso, a saber, las telecomunicaciones, la informática y los proveedores de contenidos –sobre todo los medios de comunicación. Las autoridades gubernamentales e 6 En la Resolución por la que la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el año 2001 “Año de las Naciones Unidas del Diálogo entre Civilizaciones”, se invita a los organismos de las Naciones Unidas, y en particular a la UNESCO, “a que planifiquen y ejecuten programas culturales, educacionales y sociales adecuados para promover el concepto de diálogo entre civilizaciones, incluida la organización de conferencias y seminarios y la difusión de información y estudios sobre el tema”. En julio de 1999, la densidad mundial de servidores Internet era de 95 por 10.000; con la diferencia de que en los países de ingresos elevados la proporción era de 573 por 10.000, mientras que en Asia era de 9,4 por 10.000 y en Africa de 2,5 por 10.000. 7 159 EX/40 – pág. 10 intergubernamentales se muestran todavía muy indecisas con respecto a la función que deben desempeñar en la sociedad de la información8. c) La problemática intelectual y ética suscitada por esas nuevas tecnologías no se conoce ni se domina bien (diversidad lingüística en Internet, contenidos transmitidos por esos nuevos canales, educación a distancia, etc.). La función de la UNESCO 30. Habida cuenta de la problemática planteada por la sociedad mundial de la información y la comunicación, la UNESCO ha de: a) Promover políticas de cooperación para reducir la creciente disparidad entre “ricos” y “pobres” en el campo de la información dentro de las distintas esferas de competencia de la Organización, y hacer uso de su autoridad moral para promover y defender, en cualquier circunstancia, los derechos humanos más pertinentemente relacionados con la sociedad de la información9. b) Ofrecer un foro de debate sobre la problemática intelectual y ética de la sociedad de la información, dentro de las esferas de competencia de la Organización, a los Estados Miembros, la sociedad civil (representada por las ONG) y el sector empresarial privado. Los intercambios de ideas en este contexto podrían conducir, llegado el caso, a la adopción de principios rectores comunes, sobre todo en relación con Internet. c) Fomentar la expresión de la diversidad cultural y el pluralismo, y más concretamente el pluralismo lingüístico, en los nuevos medios de comunicación, sobre todo en Internet, creando también medios de comunicación de servicio público en las comunidades (emisoras de radio, periódicos, multimedia y centros de información a distancia). d) Impulsar la expansión del concepto de “dominio público” en Internet y el de “utilización leal” en materia de derechos de propiedad intelectual, basándose en un amplio debate internacional, y fomentar también el acceso universal a los recursos públicos de información y conocimientos. e) Proporcionar asesoramiento, en las esferas de competencia de la Organización, a los Estados Miembros que lo soliciten para ayudarles a definir sus políticas y estrategias nacionales y adaptarlas a las exigencias de la sociedad de la información, y prestar asistencia para la formación de personal nacional que se responsabilice de proyectar y aplicar esas políticas y estrategias. f) Definir e impulsar una serie de proyectos concretos para las poblaciones más desfavorecidas de los países en desarrollo, a fin de que puedan acceder a la sociedad de 8 En el “Plan de Acción para el siglo XXI” que acaba de presentar a la Asamblea General, el Secretario General de las Naciones Unidas ha propuesto varias iniciativas que las Naciones Unidas podrían adoptar para vincular a los países en desarrollo a la sociedad de la información. Por su parte, el “Global Knowledge Partnership”, un consorcio con sede en el Instituto del Banco Mundial (Washington) que agrupa a unas 60 organizaciones intergubernamentales (comprendida la UNESCO), organizaciones no gubernamentales, organismos nacionales para el desarrollo y empresas privadas, acaba de adoptar su propio Plan de Acción en la Conferencia que ha celebrado en Kuala Lumpur hace un mes. Véanse en particular los Artículos 19 (“derecho a la libertad de opinión y de expresión”), 26 (“derecho a la educación”) y 27 (“derecho a tomar parte libremente en la vida cultural … y en el progreso científico”) de la Declaración Universal de Derechos Humanos. 9 159 EX/40 – pág. 11 la información (acceso a los equipos y a los contenidos), en colaboración con distintos interlocutores gubernamentales, intergubernamentales y no gubernamentales, así como con el sector privado. Esos proyectos tendrían que comprender un componente de “formación” importante.