LA HOJA VOLANDERA RESPONSABLE SERGIO MONTES GARCÍA Correo electrónico [email protected] En Internet www.lahojavolandera.com.mx EL ANARQUISMO Y LA EDUCACIÓN. TRES MOMENTOS DEL ANARQUISMO MEXICANO. Sergio Montes García* *Lic. en Pedagogía (FFyL UNAM). Prof. Titular "C" T.C. Def. Profesor de Historia de la Educación e Historia de la Educación en México en la carrera de Pedagogía (FES-Acatlán) [email protected] Surgido originalmente en Europa durante el siglo XIX, el anarquismo es un movimiento que busca la solución de los problemas sociales en beneficio de todos. Para alcanzar esta meta, según Ericco Malatesta (un importante anarquista italiano), “sólo hay un medio: acabar revolucionariamente con los detentadores de la riqueza social, ponerlo todo a disposición de todos y dejar que todas las fuerzas, todas las capacidades y toda la buena voluntad existente entre los hombres contribuyan a proveer las necesidades de todos”.1 Contrario a la idea popular que identifica al anarquismo sólo como una manifestación permanente y violenta contraria a todas las formas de gobierno, como son los atentados terroristas contra personajes y funcionarios del Estado, esta corriente utiliza los medios más variados de propaganda y de acción, entre los que se pueden mencionar la organización de nuevos sindicatos e infiltración en los existentes; mítines, asambleas, huelgas y boicots; la impresión de libros, folletos y periódicos; y, sobre todo, la que nos interesa y que es el motivo central de esta plática: la organización y funcionamiento de escuelas cuyo fin es adoctrinar y preparar a los futuros anarquistas. 1 Malatesta, Ericco, La anarquía y el método del anarquismo, 2ª ed. Premiá, México, 1989. p. 79. Diciembre 10 de 2007 www.lahojavolandera.com.mx EL ANARQUISMO Y LA EDUCACIÓN. TRES MOMENTOS DEL ANARQUISMO MEXICANO. Dos figuras de gran relevancia en la construcción de la doctrina anarquista fueron el francés Pedro José Proudhon (1809-1865) y el ruso Mijaíl Bakunin (1814-1876). Proudhon, originario de un pequeño pueblo agrícola del sur de Francia, comparte con otros intelectuales franceses el rechazo a las ciudades en crecimiento producto de una cultura capitalista-industrial. Contra ellas propone una sociedad agrícola y con pequeña industria, basada en comunas voluntarias y cooperativas de trabajadores, donde no hubiera la propiedad privada pero sí el derecho a la retención individual de los productos del trabajo y la distribución por partes iguales de los excedentes. Pugna por la libertad individual y manifiesta su oposición a las intromisiones del gobierno en la vida de las personas. Es partidario del cambio social sin violencia.2 A diferencia de Proudhon, Bakunin reconoce en la acción revolucionaria y violenta la única vía para lograr la transformación de la sociedad, aunque no soslaya la importancia de la educación como medio de transformación social. Su pensamiento se expresa con claridad en los propósitos generales del programa anarquista publicado en Roma a mediados del siglo y que se exponen en los siguientes términos: “Toda autoridad humana o celestial debe desaparecer, desde Dios hasta el último agente de la policía. Abolición de todo privilegio. Propiedad colectiva de la tierra y de los instrumentos de trabajo. Emancipación y reintegración del hombre individual y colectivo. No más amos. Trabajo, pan, riqueza, instrucción, justicia y libertad para todos. La tierra, al que la cultiva; la máquina, al que la emplea; la casa, al que la habita; la comunidad federada... he aquí lo por venir”.3 Tres momentos del anarquismo mexicano. Las ideas de éstos, como de otros pensadores anarquistas, traídas a México por inmigrantes europeos tuvieron gran acogida en algunos sectores de la población, particularmente estudiantes, intelectuales y trabajadores artesanos, y, como escribe John M. Hart, “durante los cuarenta y cinco años que precedieron a la Revolución mexicana, los anarquistas, que fueron los primeros agraristas urbanos, contribuyeron con una doctrina al antes mal entendido movimiento agrario mexicano”.4 De la injustamente no muy conocida historia del anarquismo mexicano atisbaremos un poco sobre el relevante papel que desempeñaron en ella tres notables personajes: Rhodakanaty en la introducción del socialismo en México; Flores Magón en el movimiento precursor de la Revolución mexicana; y Moncaleano en la fundación de la Casa del Obrero Mundial. Hart, John M., Los anarquistas mexicanos, 1860-1900, SEP, México, 1974 (Sep Setentas Núm. 121). p. 10. Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo Americana, T. 5., Madrid-Barcelona, 1982. p. 354. 4 Hart, John M., El anarquismo y la clase obrera mexicana, 1860-1931, 3ª ed., Siglo XXI, México, 1988, p. 24. 2 3 ╣2╠ www.lahojavolandera.com.mx EL ANARQUISMO Y LA EDUCACIÓN. TRES MOMENTOS DEL ANARQUISMO MEXICANO. Rhodakanaty y la introducción del socialismo en México. Plotino Constantino Rhodakanaty fue el fundador del primer grupo anarquista que organizó a la clase trabajadora en México. Nació en Atenas, Grecia, el 14 de octubre de 1828. Hizo estudios de medicina en Viena y de idiomas y filosofía política en París. En esta ciudad conoció a un mexicano que le habló de la política agraria promovida por el presidente Comonfort y de su invitación a los extranjeros para venir México a crear colonias agrícolas, otorgándoles, inclusive, el derecho de naturalización. Entusiasmado, Rhodakanaty se trasladó a nuestro país al que arribó en febrero de 1861, y en el que vivió durante veinticinco años, realizando una vasta labor política y educativa así como de difusión de la doctrina socialista.5 Así, en 1863, siendo profesor de una escuela preparatoria de la ciudad de México organizó un círculo de estudios conocido después como el “grupo de estudiantes socialistas” donde estaban, recuerda Hart, “Francisco Zalacosta, un joven fanático que posteriormente encabezó luchas agrarias, y Santiago Villanueva, quien organizó el primer movimiento obrero”.6 Fuera de este grupo, en 1865, creó La Social, organización anarquista secreta que pretendía instaurar el socialismo en México. Ese mismo año fundó en Chalco la Escuela del Rayo y el Socialismo dedicada a la instrucción de niños y peones en lectura, escritura, oratoria, métodos de organización e ideales socialistas. A pesar de su corta existencia, alrededor de cuatro años, la Escuela del Rayo tuvo una considerable influencia en la región. La prueba de esto la encontramos en un joven asistente a ella, trabajador de una hacienda cercana a Texcoco, Julio Chávez López, quien influenciado por las ideas libertarias de Rhodakanaty encabezará una rebelión contra los hacendados y el gobierno, la que en poco tiempo fue sofocada. Rhodakanaty fue un prolífico escritor, que además de fundar su propio periódico El Cronoscopio. Periódico frenológico y científico, colaboró con importantes diarios de corte radical como El hijo del trabajo, El combate y El socialista. Las temáticas abordadas por él fueron muy variadas como lo muestran algunos títulos de artículos y ensayos: “Cartilla socialista”; “Reflexiones filosófico-sociales a favor del divorcio”; “Escuela de filosofía trascendental”; “El Estado es el padrastro del pueblo”; “Estudios de filosofía social”; “Filosofía de la religión”; “Estudios trascendentales de filosofía natural aplicada a la sociología”.7 Después de haber dejado sus mejores años en México desplegando su vitalidad e inteligencia en la escuela o en la prensa, Rhodakanaty se embarcó para Europa un día de 1886, sin hacer ruido, discretamente como había llegado.8 Era el epílogo de la primera época del socialismo mexicano. Illades, Carlos, “Prólogo” en Rhodakanaty, Plotino C., Obras, UNAM, México, 1998. p. 8. Hart, John M., op cit. p. 31. 7 Rhodakanaty, Plotino C., op. cit., pp. 41-67. 8 Illades, Carlos , op. cit. p. 17. 5 6 ╣3╠ www.lahojavolandera.com.mx EL ANARQUISMO Y LA EDUCACIÓN. TRES MOMENTOS DEL ANARQUISMO MEXICANO. Flores Magón, el gran precursor de la Revolución mexicana. Cuando en noviembre de 1922, enfermo y casi ciego, muere en la penitenciaría de Leavenworth, EE.UU., probablemente asesinado, Ricardo Flores Magón concluía una vida dedicada a hacer la revolución y que se había iniciado treinta años antes, en 1892, año en que por dirigir una manifestación estudiantil en contra del gobierno de Porfirio Díaz fue arrestado por primera vez. Tenía entonces 19 años. Nacido en Oaxaca, sus padres fueron Teodoro Flores y Margarita Magón. Junto con sus hermanos, Enrique y Jesús, recibió su educación formal en la Escuela Nacional Preparatoria de Gabino Barreda, y en la Escuela de Jurisprudencia. Solamente Jesús concluyó la carrera. Probablemente en esta época empezara a conocer la doctrina anarquista; lo cierto es que, como relata Gonzalo Aguirre Beltrán, “sabemos con certeza que para 1903, Ricardo ha leído las obras de los socialistas revolucionarios Proudhon, Bakunin, Kropotkin, Malatesta y Marx”;9 y es ampliamente conocido también que junto con Camilo Arriaga, Antonio Díaz Soto y Gama, Juan Sarabia y Librado Rivera participó en la fundación y dirección del Partido Liberal Mexicano, en torno al cual se desarrolló, dice Hart, “la primera organización anarquista poderosa del siglo XX”,10 cuya lucha política está encaminada al restablecimiento de la democracia a través de un cambio en la presidencia de la República. El otro pilar en que se sustenta el movimiento magonista es Regeneración. Periódico independiente de combate. Fundado en 1901 y en el que Ricardo, junto con su hermano Enrique, tendrá una notable participación hasta la desaparición de aquél en 1918, es concebido, según Armando Bartra, “como estructurador ideológico, político y orgánico de una corriente revolucionaria de masas, como la forma fundamental de propaganda, agitación y organización colectivas”.11 Si la transformación violenta de la sociedad no forma parte de los planes del grupo magonista, su táctica y formas de lucha descansarán en la línea de la propaganda y la educación cívica, las conferencias y la prensa liberal. Pero tal vez la contribución más importante del magonismo a la Revolución mexicana fue el Programa del Partido Liberal Mexicano, fechado en San Luis Missouri el 1 de julio de 1906 y cuyo contenido social radical, asevera James Cockcroft, “fue imitado pero nunca igualado en su totalidad por las proclamas revolucionarias durante todo el periodo de 1911-1917”,12 y es importante, sobre todo, por las trascendentes repercusiones que tuvo, pues su plataforma obrera y sus cláusulas socioeconómicas serían incorporadas casi en su totalidad en la Constitución de 1917. Conviene recordar ahora las propuestas que para el mejoramiento y el fomento de la instrucción contiene el programa:13 - Multiplicación de escuelas primarias, en tal escala que queden ventajosamente suplidos los establecimientos de instrucción que se clausuren por pertenecer al clero. Aguirre Beltrán, Gonzalo, Un precursor y un realizador de la Revolución Mexicana, Injuve, México, 1972. p. 14. Hart, John M., op. cit. p. 118. 11 Bartra, Armando, “Prólogo” en Flores Magón, Ricardo, et al., Regeneración. 1900-1918, SEP-Era, México, 1987 (Lecturas Mexicanas, Segunda serie, Núm. 88). p. 16. 12 Cockcroft, James D., Precursores intelectuales de la Revolución Mexicana, 8ª ed, Siglo XXI, México, 1982, p. 123. 13 Obra citada, pp. 221-222. 9 10 ╣4╠ www.lahojavolandera.com.mx EL ANARQUISMO Y LA EDUCACIÓN. TRES MOMENTOS DEL ANARQUISMO MEXICANO. - Obligación de impartir enseñanza netamente laica en todas las escuelas de la República, sean del gobierno o particulares. - Declarar obligatoria la instrucción hasta la edad de catorce años, quedando al gobierno el deber de impartir protección en la forma en que le sea posible a los niños pobres que por su miseria pudieran perder los beneficios de la enseñanza. - Pagar buenos sueldos a los maestros de instrucción primaria. - Hacer obligatoria la enseñanza de artes y oficios y prestar preferente atención a la instrucción cívica que tan poco atendida es ahora. La Revolución mexicana no podrá explicarse cabalmente si no se valora la actuación precursora de Flores Magón. Moncaleano y la fundación de la Casa del Obrero Mundial. Juan Francisco Moncaleano, un anarquista colombiano y fugitivo político perseguido por las autoridades de su país, llegó a México en junio de 1912 estimulado por las noticias sobre la revolución de Madero, el levantamiento de Zapata y el trabajo de organizaciones obreras como la Confederación Tipográfica Mexicana, dirigida ésta por el exiliado español, Amadeo Ferrés. Tras establecer algunos contactos, Moncaleano se dio a la tarea de formar su propio grupo. Éste, con apenas ocho miembros, se formalizó con el nombre de Grupo Anarquista Luz el cual se planteó dos objetivos: fundar una escuela racionalista semejante a la de Francisco Ferrer Guardia en España y publicar un periódico.14 Recabar fondos para la empresa constituyó la inminente tarea del naciente grupo. Fue la Unión de Canteros Mexicanos la que aportó trescientos pesos con los que se tomó en arrendamiento una casa y se compró la madera destinada a la construcción de mesa-bancos escolares. “Hechas las necesarias adaptaciones del local, refiere Alberto Morales Jiménez, los canteros patrocinadores de la idea de materializar el proyecto de fundar una escuela racionalista, fijaron el 8 de septiembre de 1912 como la fecha de inauguración de este establecimiento docente”.15 Luz. Periódico Obrero Libertario fue el nombre de la publicación. En los tres números que aparecieron, Moncaleano publicó, entre otros asuntos, ensayos sobre Ferrer Guardia y artículos que daban a conocer la causa de Flores Magón y del Partido Liberal Mexicano. Huitrón, Jacinto, Orígenes e historia del movimiento obrero en México, 2ª ed., Editores Mexicanos Unidos, México, 1980. p. 198. Morales Jiménez, Alberto, La Casa del Obrero Mundial. Ensayo Histórico, Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, México, 1986. p. 45. 14 15 ╣5╠ www.lahojavolandera.com.mx EL ANARQUISMO Y LA EDUCACIÓN. TRES MOMENTOS DEL ANARQUISMO MEXICANO. Muy pronto las actividades de Moncaleano despertaron el enojo del régimen de Madero y “la proyectada organización de la primera escuela racionalista... no se llegó a realizar a causa de una redada policiaca que dio por resultado el arresto masivo de los miembros del grupo y la expulsión inmediata de Moncaleano del país. Sus principales asistentes fueron encarcelados en la prisión de Belén. Los anarquistas fueron liberados dos semanas después de haber dirigido una tumultuosa manifestación de protesta que estalló en el interior de la prisión el 15 de septiembre y que duró varios días”.16 Con motivo de estos acontecimientos, los miembros del Grupo Anarquista Luz se reunieron con representantes de otras agrupaciones y resolvieron establecer, el 22 de septiembre de 1912, la Casa del Obrero que empezó a funcionar como un centro que sería utilizado para actividades organizativas, culturales y de propaganda. Allí se impartían clases gratuitas de modelado, higiene personal, historia, física, aritmética y otras asignaturas y se realizaban conferencias sobre temas relacionados con la ideología anarquista.17 Fue hasta el 15 de octubre de 1915 cuando finalmente se cumplió el sueño de Moncaleano: la Casa inauguró la Escuela Racionalista. Fue develado un busto de Ferrer Guardia y el Dr. Atl, Agustín Aragón y Díaz Soto y Gama, entre otros oradores, hablaron ante cientos de espectadores.18 Con una planta de siete profesores de tiempo completo, sin la exigencia de cuota de inscripción ni el requisito de cursos anteriores, la escuela funcionó hasta agosto de 1916, cuando el gobierno determinó clausurar la Casa del Obrero Mundial.19 Si es cierto que directamente el anarquismo no produjo un cambio social en México, lo es también que sí tuvo una influencia crucial en el desarrollo de la clase obrera y en las tendencias revolucionarias. Conviene reconocer, asimismo que, su llamémosle propuesta educativa, dejó una marcada huella en diversas regiones de nuestro país, sobre todo en el sureste donde un grupo de profesores yucatecos encabezados por José de la Luz Mena construyó un sistema educativo que, junto a la obra política del gobernador Felipe Carrillo Puerto, constituyen lo que algún investigador ha llamado con justicia el “socialismo olvidado de Yucatán”. Hart, John M., op. cit., p. 153. Morales Jiménez, Alberto, op. cit., p. 47. 18 Obra citada, p. 87. 19 Obra citada, p. 168. 16 17 ╣6╠ www.lahojavolandera.com.mx EL ANARQUISMO Y LA EDUCACIÓN. TRES MOMENTOS DEL ANARQUISMO MEXICANO. Referencias bibliográficas Aguirre Beltrán, Gonzalo, Un precursor y un realizador de la Revolución Mexicana, Injuve, México, 1972. Bartra, Armando, “Prólogo” en Flores Magón, Ricardo, et al., Regeneración. 1900-1918, SEP-Era, México, 1987 (Lecturas Mexicanas, Segunda serie, Núm. 88). Cockcroft, James D., Precursores intelectuales de la Revolución Mexicana, 8ª ed, Siglo XXI, México, 1982. Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo Americana, T. 5, Madrid-Barcelona, 1982. p. 354. Hart, John M., Los anarquistas mexicanos, 1860-1900, SEP, México, 1974 (Sep Setentas Núm. 121). _____, El anarquismo y la clase obrera mexicana, 1860-1931, 3ª ed., Siglo XXI, México, 1988. Huitrón, Jacinto, Orígenes e historia del movimiento obrero en México, 2ª ed., Editores Mexicanos Unidos, México, 1980. Illades, Carlos, “Prólogo” en Rhodakanaty, Plotino C., Obras, UNAM, México, 1998. p. 8. Malatesta, Ericco, La anarquía y el método del anarquismo, 2ª ed. Premiá, México, 1989. Morales Jiménez, Alberto, La Casa del Obrero Mundial. Ensayo Histórico, Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, México, 1986. ╣7╠