Enero 10, 2010 Salud y bienestar emocional Estilo de vida Desde épocas remotas, el hombre siempre ha querido vivir más y mejor, sin aceptar los cambios que el tiempo y la edad van produciendo sobre su salud tanto física como emocional llevándolo al envejecimiento y a la muerte. Las enfermedades, las dolencias, las pérdidas, son procesos difíciles de aceptar en la cultura de hoy que quiere vivir una eterna juventud. Es imposible hablar de estilo de vida sin enmarcarlo dentro del concepto de modo de vida, ya que ambos determinan la forma como se desarrolla el hombre dentro de la sociedad y su relación con el proceso salud-enfermedad. Por estilo de vida queremos denominar de una manera genérica, aquellos patrones cognitivos, afectivos-emocionales y conductuales que muestran cierta consistencia en el tiempo, bajo condiciones más o menos consistentes. La Psicología, interesada en el estudio del sujeto individual de modo holístico, ha utilizado frecuentemente el término estilo, porque hace alusión a lo típicamente individual. En la psicología cognitiva se ha utilizado para estudiar el pensamiento (estilo de pensamiento). La psicología social se ha apoyado en el mismo para el estudio del liderazgo y la dirección (estilo de liderazgo y estilo de dirección). Por su parte la psicología de la salud lo ha utilizado para estudiar el afrontamiento al estrés (estilo de afrontamiento). Al hablar de estilo de vida saludable, nos referimos a comportamientos que disminuyen los riegos de enfermar, tales como: un adecuado control y tratamiento de las tensiones y emociones negativas, un buen régimen de ejercicios, sueño y distracción; el control y la evitación del abuso de sustancias como la cafeína, nicotina y alcohol; una correcta distribución y aprovechamiento del tiempo, etc. Entendemos por estilos de vida al conjunto de comportamientos que ponemos en práctica de manera consistente y mantenida en su vida cotidiana, y que puede ser pertinente para el mantenimiento de su salud, o que lo coloca en situación de riesgo para la enfermedad. Entre los estilos de vida tenemos los comportamientos de autoactualización, responsabilidad con la salud, ejercicios físicos, nutrición, soporte interpersonal y por último tenemos también el manejo de estrés. El autocontrol del comportamiento constituye la más importante herramienta de la que puede disponer un individuo para realizar cambios en su estilo de vida; y dado que el estilo de vida está determinado por las condiciones de vida, un elemento importante es la identificación de los factores de riesgo. Aspectos como factores motivacionales, el aprendizaje, las creencias y las influencias sociales, además de la historia bio- lógica, han sido identificados como com- Estilos de Vida ponentes de las conductas y hábitos que Saludables caracterizan el estilo de vida de una persona, establecer conductas saludables y eliminar conductas de riesgo de manera estable, como aspiración de la promoción de salud, constituye un reto. Necesidades Humanas Definidos como los procesos sociales, las tradiciones, los hábitos, conductas y comportamientos de los individuos y grupos de población que conllevan a la satisfacción de las necesidades humanas para alcanzar el bienestar y la vida. Algunos de los estilos de vida saludables podrían ser: Somos seres de necesidades múltiples e interdependientes, que conforman un sistema que se interrelaciona e interactúa, complementándose y compensándose simultáneamente para lograr dinamismo en el proceso de satisfacción. Tener sentido de vida, objetivos de vida y plan de acción. Las necesidades humanas universales, son iguales en todas las culturas y momentos históricos, su variación la determina el mecanismo o medio utilizado para satisfacerlas. Brindar afecto y mantener la integración social y familiar. La satisfacción de las necesidades humanas debe darse en tres contextos, también interrelacionados: Con uno mismo. Con el grupo social. Con el medio ambiente. Los estilos de vida se han identificado principalmente con la salud en un plano biológico pero no la salud como bienestar biopsicosocial espiritual y como componente de la calidad de vida. En este sentido se definen como Estilos de Vida Saludables. Mantener la autoestima, el sentido de pertenencia y la identidad. La autodecisión y el deseo de aprender. Tener satisfacción con la vida. Promover la convivencia, solidaridad, tolerancia y negociación. Capacidad de autocuidado. Seguridad social en salud y control de factores de riesgo como obesidad, vida sedentaria, tabaquismo, alcoholismo, abuso de medicamentos, estrés, y algunas patologías como los son la hipertensión y diabetes. Ocupación de tiempo libre y disfrute del ocio. Comunicación y participación a nivel familiar y social. Accesibilidad a programas de bienestar, salud, educación, culturales, recreativos, entre otros. La estrategia para desarrollar estos estilos de vida saludables es en un solo término el compromiso individual y social convencidos de que sólo asi se satisfacen necesidades fundamentales, se mejora la calidad de vida y se alcanza el desarrollo humano en términos de la dignidad de la persona. En sociología, un estilo de vida es la manera en que vive una persona (o un grupo de personas). Esto incluye: La forma de las relaciones personales Del consumo De la hospitalidad La forma de vestir. Una forma de vida típicamente también refleja las actitudes, los valores o la visión del mundo de un individuo. Tener una “forma de vida específica” implica una opción consciente o inconsciente entre un sistema de comportamientos y de algunos otros sistemas de comportamientos. La primera vez que apareció el concepto de “estilo de vida” fue en 1939 (las generaciones anteriores pudieron no haber necesitado este concepto porque no era significativo al ser las sociedades relativamente homogéneas.