La UE toma más medidas en favor de la paz en Colombia Con motivo de la Cumbre UE-CELAC que tendrá lugar los días 10 y 11 de junio en Bruselas, la UE reiteró su firme apoyo político a los diálogos de paz iniciados en La Habana en octubre de 2012 entre el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La UE se ha comprometido a apoyar la aplicación de un futuro acuerdo de paz. Se está trabajando para establecer un Fondo Fiduciario de la UE en apoyo a la fase posterior al conflicto colombiano, que podrá estar en funcionamiento desde el inicio de la aplicación del acuerdo de paz. El Fondo Fiduciario reunirá las contribuciones financieras del presupuesto europeo, de los Estados miembros de la UE y, posiblemente, también de otros donantes. Mientras tanto, la alta representante y vicepresidenta Mogherini anunció que la UE destinará 5 millones de euros para apoyar la labor del Ministerio de Posconflicto, Seguridad y Derechos Humanos colombianos, así como la aplicación del acuerdo sobre la limpieza conjunta de minas concluido en marzo entre el gobierno colombiano y las FARC, un hito en las actuales negociaciones en La Habana. La UE reforzará aún más su apoyo a largo plazo para contribuir a aliviar el sufrimiento y la pobreza en las regiones más afectadas por el conflicto interno. En el margen de la Cumbre UE-CELAC, el Comisario Mimica anunció un nuevo programa de 21 millones de euros, que tiene como objetivo apoyar a Colombia a combatir las disparidades sociales y económicas de las regiones marginadas y afectadas por el conflicto. El programa apoyará al desarrollo local sostenible en remotas áreas donde la presencia del Estado es mínima. Se espera favorecer las oportunidades de fuentes ingresos para cerca de 2.000 familias campesinas y la mejoría de los medios de sustento de alrededor 3.000 familias indígenas y afrocolombianas que viven en las aéreas naturales protegidas de la Amazonía y en las regiones costeras del Caribe y del Pacífico y, que se ven afectadas por los conflictos sociales y ambientales. La UE tiene una experiencia única en la que se puede basar para seguir acompañando a Colombia en sus esfuerzos para lograr una sociedad más pacífica, justa e integradora. A medida que el final del conflicto interno se está convirtiendo en una perspectiva realista, la UE seguirá apoyando a Colombia para afrontar este reto. Background: Todas estas iniciativas están basadas en dos décadas de compromiso de la UE en Colombia en favor de la paz. En 50 años de conflicto, se estima que más de 220.000 colombianos han perdido la vida y millones han sido desplazados por la fuerza. El conflicto también ha causado múltiples violaciones de los derechos humanos, como secuestros, desapariciones forzadas, violencia sexual, tortura y reclutamiento forzado de niños soldados. Colombia es el segundo país en el mundo más afectado por las minas después de Afganistán y las minas terrestres han matado o herido a más de 11.000 personas en los últimos 15 años. La contaminación por minas terrestres impide a las comunidades locales llevar una vida normal, como ir a la escuela o al mercado local, o acceder a la asistencia médica. Ayudar a retirar minas terrestres en algunas de las regiones más afectadas, es una manera de hacer más tangible los beneficios de la paz para el pueblo colombiano. Desde su creación en 1994, la Oficina Humanitaria ECHO de la UE ha proporcionado asistencia humanitaria a muchas víctimas del conflicto, en particular a las personas desplazadas dentro del país, a las comunidades afectadas por la violencia y a los colombianos refugiados en los países vecinos, principalmente en Ecuador y en Venezuela. ECHO trabaja junto con organizaciones no gubernamentales, con la Cruz Roja y con agencias de la ONU que operan en zonas de conflicto; la mayoría de ellas con poca o ninguna presencia firme del Estado colombiano. La financiación humanitaria de la UE a las víctimas del conflicto desde 1994 asciende a más de 200 millones de euros. La UE también ha tratado de abordar las causas del origen del conflicto interno y favorecer la reconciliación y la consolidación de la paz en las comunidades rurales más afectadas por el conflicto. La consolidación de la paz ha representado la columna vertebral de la cooperación de la UE con Colombia en el marco del Instrumento de Cooperación al Desarrollo en la última década, con 150 millones de euros concedidos para el período 2002-2013. En 2002, la UE comenzó a promover los llamados "Laboratorios de Paz ', un nuevo enfoque basado en las iniciativas de desarrollo local con la participación de todos los actores relevantes, que tiene como objetivo crear medios de sustento como alternativa a las actividades ilegales. Evaluados en primer lugar en una región del centro del país, los laboratorios de paz se extendieron más tarde a todo el territorio, sobre la base de las lecciones aprendidas de las primeras experiencias. Más de 200 municipios y 300.000 personas se han beneficiado directamente de estas iniciativas. Los laboratorios de paz son ahora extensamente reconocidos como una de las contribuciones iniciales clave para reducir la intensidad del conflicto y son considerados por las instituciones colombianas a cargo de la preparación de la fase de posconflicto, como un punto de referencia. En los próximos años la UE consolidará estos logros y ampliara su ámbito geográfico. El apoyo a las víctimas del conflicto es otro ámbito en la que la UE ha estado activa. La restitución de tierras y el retorno de los desplazados a sus tierras son y seguirán siendo uno de los desafíos más complejos del proceso de paz. La UE ha estado apoyando los esfuerzos para aplicar la ley histórica de 2012 sobre las víctimas y la restitución de las tierras. Una dimensión clave del enfoque de la UE para la construcción de paz en Colombia es el papel central dado a la sociedad civil en la aplicación del proyecto, especialmente en aquellas áreas en las que el Estado es demasiado débil para proporcionar servicios básicos a los ciudadanos. La sociedad civil también es un actor central en las iniciativas patrocinadas por la UE para el refuerzo de la protección de los derechos humanos en Colombia. La UE está apoyando proyectos relacionados con la situación de las mujeres en el conflicto interno, el reclutamiento forzado de niños por grupos armados, las amenazas y los desafíos que enfrentan los defensores de los derechos humanos o las necesidades específicas de las comunidades indígenas y afrocolombianas.