UNIVERSIDAD VERACRUZANA FACULTAD DE MEDICINA VETERINARIA Y ZOOTECNIA INSUFICIENCIA RENAL EN PERROS Y GATOS. REVISIÓN BIBLIOGRAFICA Y ESTUDIO RETROSPECTIVO DE 10 CASOS TRABAJO RECEPCIONAL EN LA MODALIDAD DE: TRABAJO PRÁCTICO EDUCATIVO COMO REQUISITO PARCIAL PARA OBTENER EL GRADO DE: MÉDICO VETERINARIO ZOOTECNISTA PRESENTA: STEPAHANIE ALDASORO ALARCÓN ASESORES MVZ ARTURO MORENO LOYO MVZ JAIME CAMPUZANO GRANADOS H. VERACRUZ, VER. ENERO 2014 CONTENIDO DEDICATORIA ....................................................................................................... ii INDICE DE FIGURAS ............................................................................................ v 1. INTRODUCCIÓN............................................................................................... 1 2. ANTECEDENTES ............................................................................................. 3 2.1 INSUFICIENCIA RENAL AGUDA (IRA) ....................................................... 3 2.1.2 TRATAMIENTO ..................................................................................... 8 2.2 INSUFICIENCIA RENAL CRÓNICA (IRC) ................................................... 8 2.2.1 INCIDENCIA........................................................................................ 12 2.2.2 SIGNOS CLINICOS Y DIAGNÓSTICO ............................................... 14 2.2.3 FISIOPATOLOGIA .............................................................................. 16 2.2.4 HIPERTENSIÓN SISTÉMICA ............................................................. 18 2.2.5 HIPERPARATIROIDISMO RENAL SECUNDARIO ............................. 19 2.2.6 PRUEBAS DE LABORATORIO CLÍNICO ........................................... 19 2.2.7 TRATAMIENTO ................................................................................... 21 3. JUSTIFICACION ............................................................................................. 23 4. OBJETIVOS .................................................................................................... 24 4.1 OBJETIVO·GENERAL .................................................................................. 24 4.2 OBJETIVOS· ESPECÍFICOS ........................................................................ 24 5. MATERIAL Y MÉTODOS ................................................................................ 25 6. RESULTADOS ................................................................................................ 26 7. CONCLUSIONES ............................................................................................ 52 8. RECOMENDACIONES ................................................................................... 53 9. LITERATURA CITADA .................................................................................... 54 i DEDICATORIA A mis padres, Alfonso y Lola; Sépanse siempre mi más grande adoración. A mi hermana Marilolis; Cómo me haces enojar pero así te quiero. A mis abuelos, Txomin, Lupe y Rosa; Porque siempre los llevo en mente y alma. A mis queridos cuadrúpedos Urko, Sabina y Copito, y los que se han ido también. ii AGRADECIMIENTOS A mis asesores, el Médico Jaime Campuzano Granados y el Médico Arturo Moreno Loyo, por sus enseñanzas, su gran apoyo, y el tiempo invertido para lograr ésta meta. Al Departamento de Anatomopatología de la MVZ- UNAM; por permitirme el acceso y uso del material requerido para finalizar el trabajo, así como también al resto de los integrantes de éste (patólogos 1 y 2), A mis compañeros de trabajo: Fabi, Sebastián, Alonso, Celic, Jonathan, Dani, Catalina y Ángeles, gracias por compartir tantos conocimientos y por los buenos momentos juntos. Al Histotecnólogo Luis y Daniel, gracias por la ayuda con las laminillas que hacían faltan, y al fotógrafo Jaime Eugenio por haberme ayudado con edición de las fotografías microscópicas. Al MVZ José Alfredo Villagómez Cortés, qué aunque no sea mi coordinador oficial de ésta materia, siempre me mantuvo al tanto y me trato con paciencia. A la FMVZ- UV, por mi formación académica. Pese a algunas carencias, me siento orgullosa de mi institución. Por último, a mis amigos del alma y compañeros de universidad; Paulina, Félix, Belisario, Betty, Montse y Gibran por estar siempre conmigo. A todos ustedes, gracias. iii INDICE DE CUADROS PÁG CUADRO 1. Diagnóstico diferencial de hiperazotemia en perro (Nuñez y Bouda, 2007) ..................................................................................................................... 2 CUADRO 2.- Causas más frecuentes de la IRA (Couto y Nelson, 2007) ......... 6 CUADRO 3.- Manifestaciones de la alteración de las funciones renales (De Bainbrige, 2005). .............................................................................................................. 9 CUADRO 4. Principales causas de Insuficiencia renal crónica en perros y gatos (Ettinger y Feldman, 2005). ............................................................................. 11 CUADRO 5. Hallazgos encontrados al examen físico (Leib y Monroe, 1997). ............................................................................................................................................. 16 iv INDICE DE FIGURAS FIGURA 1.- Clasificación de la insuficiencia renal aguda (Bainbrigde, 2005). ............................................................................................................................................... 4 FIGURA 2.-Fibrosis intersticial grave difusa FIGURA 3.-Nefritis intersticial linfoplasmocítica ............................................................................................ 49 FIGURA 4.-Mineralización de membranas basales FIGURA 5.-Necrosis tubular ............................................................................................................................................. 49 FIGURA 6.-Dilatación quística glomerular FIGURA 7.-Dilatación quística tubular ................................................................................................................................ 49 FIGURA 8.- Glomeruloesclerosis FIGURA 9.- Glomerulonefritis membranoproliferativa ..................................................................................................... 50 FIGURA 10.- Pielonefritis FIGURA 11 .- Necrosis renal no túbulo-réctica. .............................................................................................................. 50 FIGURA 12.- Edema pulmonar FIGURA 13.- Glositis ulcerativa zonal ............................................................................................................................................. 51 FIGURA 14.- Mineralización de tejidos blandos FIGURA 15.- Hiperplasia de paratiroides........................................................................................................................ 51 FIGURA 16.- Degeneración astrocítica ........................................................................ 51 v RESUMEN Aldasoro Alarcón Stepahanie. 2014. Insuficiencia renal en perros y gatos. Revisión bibliográfica y estudio retrospectivo de 10 casos .Trabajo Práctico Educativo. Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, Universidad Veracruzana. Veracruz, Ver. Asesores: MVZ Jaime Campuzano Granados y MVZ Arturo Moreno Loyo. La insuficiencia renal representa un problema importante en la salud de las pequeñas especies. El desafío es la detección temprana, que en la actualidad se dificulta porque los signos clínicos no son aparentes o son poco específicos en los primeros estadios de la enfermedad. En el presente trabajo se realizó una investigación bibliográfica amplia sobre el tema, además se analizaron algunos casos relevantes de enfermedades renales en perros y gatos que se presentaron durante el periodo enero del 2012 a agosto del 2103 en el Departamento de Patología de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM. Del 73% de necropsias en pequeñas especies, se diagnosticaron 31(4.01%) casos cuya causa de muerte se relacionó con insuficiencia renal grave. Los signos clínicos más comunes a estos casos fueron: anorexia, vómito, diarrea, pérdida de peso, letargia, poliuria, polidipsia y deshidratación; las lesiones más linfoplasmocítica, Bowman, comunes fueron fibrosis intersticial, nefritis intersticial mineralización de la membrana basal tubular y cápsula de necrosis tubular, dilatación quística, glomeruloesclerosis, glomerulonefritis membranoproliferativa, pielonefritis y hemorragia grave. Las lesiones histopatológicas extrarrenales fueron: edema pulmonar, estomatitis ulcerativa, mineralización de tejidos blandos, enteritis y gastritis ulcerativa, ascitis y meningitis. Finalmente, este trabajo pretende que el médico obtenga conocimientos sobre la insuficiencia renal y con ello tenga herramientas suficientes para actuar con prontitud y ofrecerle al paciente una buena calidad de vida. vi 1. INTRODUCCIÓN El sistema urinario para su correcto funcionamiento requiere de la perfusión adecuada de la sangre (presión mayor de 60 mm de Hg), flujo sanguíneo adecuado (corresponde al 25% del volumen del gasto cardíaco) y tejido renal normal (Jubb y Kennedy, 2007). Todo esto permite realizar diferentes funciones vitales para la homeostasis como: formación de orina para eliminar metabolitos tóxicos, regular las concentraciones hidro-electrolíticas, regular el balance ácido-base; y producir hormonas, como la eritropoyetina y la renina, además transforma la vitamina D a su forma activa la 1,25 dihidroxi-desoxi colecalciferol (Cunningham, 2005). La insuficiencia renal se define como la incapacidad de los riñones para desempeñar sus funciones normales. Las manifestaciones clínicas, asociadas a la insuficiencia renal, se presentan cuando los individuos presentan daño en más del 75% del parénquima (Curra, 2009). La azotemia es uno de los primeros cambios bioquímicos a nivel sanguíneo que suceden en el paciente con insuficiencia renal; es la concentración de compuestos nitrogenados, como la urea y la creatinina (cuando éstas se encuentran aumentadas se denomina hiperazotemia) y se derivan de la degradación de las bases puricas o pirimídicas de los ácidos nucleicos y de las proteínas (MacGavin y Zachary, 2007). Otras alteraciones asociadas a la insuficiencia renal son (Jubb y Kennedy, 2007): 1.- Acúmulo sanguíneo de desechos metabólicos, como guanidinas, ácido fenólico y moléculas de alcohol de alto peso molecular. 2.-Reducción del pH sanguíneo (acidosis metabólica). 3.-Alteraciones en las concentraciones de iones en el plasma, particularmente potasio, calcio y fósforo. 4.- Hipertensión. El síndrome urémico es el resultado final de la falla renal, que origina una toxicosis sistémica, que se caracteriza por la aparición de signos y 1 lesiones asociadas al acúmulo de compuestos nitrogenados. La severidad de las lesiones extrarenales asociadas a la uremia depende en gran medida del tiempo que sobrevive el individuo en estado urémico. Por lo tanto, en la insuficiencia renal aguda, las lesiones extrarenales son escasas o no existen, en tanto que en insuficiencia renal crónica se observa una gran variedad de lesiones (Jubb y Kennedy, 2007). La insuficiencia renal, se puede dividir de acuerdo al curso en insuficiencia renal aguda y crónica (Trigo, 2011). Insuficiencia renal aguda (IRA): Se caracteriza por la presentación súbita de oliguria o anuria y azotemia, que resulta de daño glomerular, intersticial o de necrosis tubular aguda. Generalmente es reversible, si la causa que lo origina se elimina. Insuficiencia renal crónica (IRC): Es el resultado de una gran variedad de enfermedades renales y extra-renales que no se resuelven y conllevan al deterioro de la función renal y se caracteriza por uremia prolongada. Es irreversible. CUADRO 1. Diagnóstico diferencial de hiperazotemia en perro Interpretación Urea Creatinina Densidad Hematocrito Urinaria Proteínas Plasmáticas Hiperazotemia Prerrenal ˃1.030 Hiperazotemia Renal-IRA ≤1.030 Normal Normal Normal Normal Hiperazotemia Renal- IRC ≤1.030 Hiperazotemia Posrenal Variable Fuente: De Nuñez y Bouda (2007). 2 2. ANTECEDENTES La insuficiencia renal representa un problema importante en la salud de las pequeñas especies. El desafío es la detección temprana, que en la actualidad se dificulta porque los signos clínicos no son aparentes en los primeros estadios de la enfermedad (Watson et al., 2005). 2.1 INSUFICIENCIA RENAL AGUDA (IRA) Es un síndrome clínico que se caracteriza por el rápido incremento de las concentraciones de creatinina y nitrógeno ureico en la sangre. IRA también puede estar asociada con la regulación anormal de electrolitos, el equilibrio ácido-base y balance de fluidos Puede ser catastrófica para la salud del paciente si no se resuelve el problema dentro de un periodo de tiempo razonable. En cuanto a su origen se divide en prerrenal, intrínseca (primaria) y posrenal. Se definen a continuación (Chew at al., 2011). IRA Prerrenal.- Causada por factores que hacen disminuir el flujo sanguíneo en el riñón, entre los que se incluye todas las causas de choque hipovolémico. La respuesta fisiológica del riñón consiste es reducir la producción de orina y retener sodio y agua para sostener la circulación; a esto se le denomina “oliguria fisiológica”. El flujo sanguíneo renal se sostiene mediante la producción de prostaglandinas. Los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINES), incluso en dosis terapéuticas, pueden inhibir los efectos protectores de éstas, dando lugar a isquemia renal dañina (Rubin, 1986). Sí la isquemia renal se mantiene durante demasiado tiempo, se producirá necrosis tubular aguda e insuficiencia renal. 3 IRA intrínseca.- Puede estar relacionada con anomalías de los glomérulos, los túbulos, el intersticio o los vasos, y es consecuencia de una amplia gama de etiologías (Osborne y Polzin, 1983). La fisiopatología suele ser incierta. Los factores precipitantes más comunes son las nefrotoxinas y la isquemia renal que lleva a necrosis tubular aguda. Mecanismos como la reducción en la presión capilar glomerular, la reducción de la permeabilidad de la membrana de filtración del glomérulo, la obstrucción intratubular y el escape de líquidos entre los túbulos están implicados en la azotemia que se hace presente clínicamente. IRA post renal.- Las causas son obstructivas o traumáticas, y a menudo se asocian con anuria completa. La obstrucción resulta en la falla del proceso de filtración de productos de desecho debido presión retrograda en la nefrona. Los estudios radiográficos y ultrasonográficos son técnicas extremadamente útiles para el diagnóstico de la rotura o de la obstrucción en el tracto urinario a cualquier nivel. FIGURA 1.- Clasificación de la insuficiencia renal aguda (Bainbrigde, 2005). 4 La nefritis es el proceso inflamatorio del riñón, que dependiendo de la ubicación anatómica de la lesión puede ser a nivel glomerular, en intersticio o en la pelvis, o bien puede abarcar diferentes regiones, es decir, puede ser mixta como glomerulonefritis. Dependiendo de la etiología la respuesta inflamatoria puede ser supurativa o no supurativa, y una de las causas más comunes está asociada con Leptospira sp, que puede causar un proceso agudo o crónico, siendo esta última la más relevante por el cuadro clínico que produce. La nefrotoxicidad es una de las causas más comunes de IRA intrínseca en el hospital de Veterinaria de la Universidad del estado de Ohio, seguida por nefritis e isquemia (Chew et al., 2011). Los gatos son muy sensibles al envenenamiento con plantas del género Lilium. Se han documentado tres especies de Lilium que causan toxicosis en gatos: lilis de pascua, lilis atigradas y lilis híbridas asiáticas. Aunque los gatos son comedores selectivos, por una razón desconocida comen las hojas y las flores de las plantas de Lilium. Ambas, flores y hojas son consideradas toxicas. El riñón es el primer órgano afectado y los gatos mueren de IRA 3-5 días después de la exposición. Los signos clínicos reportados incluyen vómito, anorexia, poliuria, isostenuria y deshidratación (Wilson et al., 2004). 5 CUADRO 2.- Causas más frecuentes de la IRA (De Couto y Nelson, 2007) Nefrosis Nefritis Inflamación de origen infeccioso Isquemia Renal Leptospirosis Deshidratación Leishmaniasis Choque hipovolémico Pielonefritis Hemorragias Glomerulonefritis Traumatismo Quemaduras Golpe de calor Coagulación intravascular diseminada (CID) Disminución del gasto cardíaco Transfusiones sanguíneas Hipertermia Hipotermia Nefrotóxicos Etilenglicol Antibióticos: aminoglucósidos, tetraciclinas, cefalosporinas Antimicóticos: Amfotericina B Analgésicos no esteroidales: Piroxicam, ibuprofeno, fenilbutazona, naproxeno Quimioterapéuticos: Ciclosporina, cis- platino, doxorrubicina Anestésicos : Metaxiflorano Metales pesados: Plomo, talio, zinc, arsénico, mercurio Misceláneos: Medios de contraste yodados, cloroformo, en gatos intoxicación por consumo de plantas del género Lilium (lilis). 6 2.1.1 SIGNOS CLÍNICOS Y DIAGNÓSTICO Según Bartges y Polzin, 2011, los signos clínicos que presentan los pacientes con insuficiencia renal, son los siguientes: IRA PRERRENAL Signos: La oliguria, es el signo más común. Causas: Estos pacientes usualmente tienen transtornos como deshidratación, choque, hipotensión o gasto cardíaco disminuido. IRA INTRÍNSECA Signos: Azotemia, anorexia, letargia, vómito y diarrea, dolor renal de tipo postural (poco específicos). Basado en estudios clínicos: Anuria (18%). Oliguria (43%). Excreción de orina normal (25%). Poliuria (14%). Causas Traumatismo reciente, shock, cirugía o procesos anestésicos sugieren la posibilidad de nefropatía isquémica. Nefrotoxicidad, por administración o consumo de sustancias nefrotóxicas. IRA POST RENAL Signos: Acumulación de orina en el peritoneo (uroperitoneo) Éstos pacientes generalmente tienen gran soporte de historial y diagnóstico basado en imagenología. Causas Urolitiasis ureteral o uretral. Cistitis. Neoplasias y abscesos. Fibrosis ureteral o uretral. Hiperplasia prostática. 7 2.1.2 TRATAMIENTO Con base en la guía de tratamiento para perros y gatos con insuficiencia renal aguda (Couto y Nelson, 2007), se debe: Descontinuar el uso de medicamentos nefrotóxicos; considerar medidas para disminuir su absorción (inducir emesis y administrar carbón activado o sulfato de sodio). Identificar y tratar cualquier anormalidad prerrenal o pos renal. Comenzar con una terapia de líquidos, vía intravenosa con solución salina normal o solución salina de 0.45% en 2.5% de dextrosa; Rehidratar al paciente en las primeras 6 horas, proveer mantenimiento de líquidos y reemplazar continuamente la pérdida de los mismos. Evaluar el volumen de producción de orina. Administrar vasodilatadores o diuréticos como el manitol, furosemida o dopamina para incrementar la excreción de orina. Considerar diálisis peritoneal en caso que no haya respuesta a los tratamientos anteriormente descritos. Controlar la hiperfosfatemia con una dieta baja en fósforo Tratar el vómito y la gastritis con: metoclopramida, trimetobenzamida o clorpromazina. Ocurre 2.2 INSUFICIENCIA RENAL CRÓNICA (IRC) cuando los mecanismos compensatorios de los riñones lesionados de manera progresiva ya no pueden mantener sus funciones adecuadas para excretar los productos de desecho. Ésta puede persistir por tiempo prolongado, puede ser de meses a años. 8 CUADRO 3.- Manifestaciones de la alteración de las funciones renales (De Bainbrige, 2005). Función general Funciones específicas Excretora Eliminación de residuos Azotemia o uremia -Control de volumen de -Deshidratación líquidos corporales sobrehidratación Reguladora -Control composición de de Manifestaciones de IRC o la -Anomalías del contenido los o las concentraciones de líquidos corporales electrólitos -Producción de renina -Hipotensión o hipertensión sistémica -Producción Endocrina de eritropoyetina -Anemia -Activación de la vitamina -Trastornos D metabolismo y/o del del calcio hiperparatiroidismo renal secundario Enfermedad glomerular La glomerulonefritis (GN) es una causa común de proteinuria en perros y gatos. Puede ser idiopática u ocurrir secundaria a agentes infecciosos, neoplasias, enfermedades inflamatorias y endocrinas y nefropatías congénitas. En la mayoría de los casos, el daño glomerular es el resultado de una cascada de eventos patológicos que se producen secundariamente a los complejos inmunes formados o atrapados en los glomérulos. Éste daño perturba el filtrado glomerular y su permeabilidad selectiva, permitiendo que las proteínas se filtren y se pierdan en la orina (Grant y Forrester, 2001). Normalmente los perros y gatos excretan una cantidad menor a 30-35 mg de proteína/kg/día en la orina. Cantidades mayores a estos valores son considerados significativos (proteinuria) (Leib y Monroe, 1997). 9 El glomérulo previene el paso de moléculas mayores a 70,000 D (daltones) y a aquellas cuya carga es negativa. La albumina es una de las principales proteínas perdidas en GN y su peso molecular aproximadamente de 65,000 D. A ésta función de filtración, basada en peso molecular, forma y carga, se le conoce como permeabilidad selectiva. Una vez que los complejos inmunes se han formado, se daña el glomérulo y ocurre una combinación compleja de activación del complemento, infiltración de neutrófilos y macrófagos, agregación plaquetaria, activación de la cascada de coagulación y con formación depósitos de fibrina (Osborne y Fletcher, 1995). Las proteínas plasmáticas se escapan del glomérulo en proporción al daño glomerular. En la medicina veterinaria, la condición de la GN es comúnmente categorizada basándose en la descripción histológica y clasificándose de la siguiente manera: (Ettinger y Feldman, 2005) GN membranosa: Se caracteriza por el engrosamiento de la membrana basal glomerular. GN proliferativa (mesangioproliferativa):Se caracteriza por hipercelularidad glomerular con acumulación de matriz mesangial. GN membranoproliferativa: Es una mezcla de hipercelularidad y engrosamiento de la membrana basal glomerular. Glomeruloesclerosis: Es un incremento en la matriz mesangial y cicatrización o fibrosis glomerular. Enfermedad de cambio mínimo: se caracteriza por proliferación en el aumento de células mesangiales que va de normal a leve, anomalías de los procesos podales y la falta de deposición de inmunoglobulina en inmunofluorescencia. La microscopía electrónica se utiliza para la confirmación del diagnóstico. 10 CUADRO 4. Principales causas de Insuficiencia renal crónica en perros y gatos (De Ettinger y Feldman, 2005). Perros Nefritis tubulointersticial crónica de causa indefinida Pielonefritis crónica Glomerulonefritis crónica Amiloidosis (en perros Shar-pei) Nefropatía hipercalcémica Hidronefrosis Enfermedades renales genéticas IRA irreversible Toxicidad crónica Neoplasias ( primaria o secundaria) Hipertensión sistémica primaria Gatos Nefritis tubulointersticial crónica de causa indefinida Pielonefritis crónica Glomerulonefritis crónica Amiloidosis ( en gatos Abyssinian) Enfermedad renal poliquística ( en gatos de raza Persa) Nefropatía hipercalcémica IRA irreversible Uropatía obstructiva crónica( urolitiasis) Neoplasia (linfoma renal) Acromegalia Nefritis piogranulomatosa debida a peritonitis infecciosa felina Nefropatia por hipocalemia Toxicidad crónica Hipertensión sistémica primaria 11 2.2.1 INCIDENCIA Aunque la IRC se considera una enfermedad de animales geriátricos, puede también ocurrir también con frecuencia en animales jóvenes (generalmente por enfermedades congénitas). Una estimación de la incidencia de IRC en la población general de perros y gatos es de 0.5-1.5% en perros y 1-3% en gatos (Bartges y Polzin, 2011). La International Renal Interest Society (IRIS), ha propuesto recientemente un esquema de clasificación basado en el nivel de azotemia y la divide en 4 estadios: I) disminución de la reserva renal, II) Insuficiencia Renal, III) Falla renal, y IV) Síndrome urémico. Cada una de las etapas depende de los valores plasmáticos de creatinina, es decir, está asociado con la tasa de filtración glomerular. La detección de los pacientes en los primeros estadios de la disfunción renal, podría permitir el inicio de medidas nefroprotectoras, como dietas renales específicas o tratamiento farmacológico para retrasar el avance de la nefropatía y así mejorar el tiempo de supervivencia y l a calidad de vida del paciente (Lefebvre, 2005). Un estudio reciente demostró que uno de cada 15 perros con insuficiencia renal terminal tenía glomerulonefritis como la causa subyacente de la enfermedad renal en vez de enfermedades tubulares. Se creía que la insuficiencia renal en los perros incluía enfermedad tubular, pero estudios histopatológicos demostraron que había más enfermedades glomerulares que enfermedades túbulo intersticial, que no se estaban reconociendo. Anterior a esto, se subestimo la prevalencia de enfermedades glomerulares como la causa principal de enfermedad renal en perros (Brown et al, 2005). Tanto los perros como los gatos padecen de GN, pero se reconoce con más frecuencia en perros. La mayoría de los perros con GN son mayores de 7 años. En aquellas razas afectadas por GN congénita, la edad de inicio puede ser mucho más jóvenes (Macdougall et al., 1986). 12 Los gatos con GN tienden a ser más jóvenes que los perros, en promedio, la edad oscila entre 3 y 4 años. Los machos suelen ser afectados con mayor frecuencia (64% al 100%) pero no hay explicación para éste hallazgo (Nash, et al., 1986). La disminución en la tasa de filtración y el síndrome nefrótico (lipiduria/ proteinuria) pueden producirse de manera independiente o simultánea en los animales con glomerulonefritis. Mientras que la mayoría de los perros con enfermedad glomerular muestran azotemia (Macdougall et al 1986), muchos gatos la desarrollan sin elevaciones de la urea y de la creatinina (Arthur et al., 1986). La enfermedad poliquística renal autosómica dominante es común en humanos, en el 85% de los casos, está causada por la mutación del gen PKD1. El 15% restante es causada por la mutación del gen PKD2 caracterizado por la formación de quistes llenos de fluido. La enfermedad del riñón poliquístico en gatos es heredada especialmente en gatos de raza Persa o cruzas con Persa y se caracteriza por quistes renales, así como hepáticos y pancreáticos (Lyons et al 2004). Cuando se diagnostica la insuficiencia renal crónica al detectar un cuadro de azotemia, los pacientes han progresado a los estadios III y IV. Los pacientes seniles tienen la más alta incidencia de enfermedad renal, por lo que se establece que es importante monitorear a los animales jóvenes, menores a 7 años. Debido a que la mayoría de pacientes son identificados cuando se encuentran en el estadio III o más, esto sugiere que hay cambios patológicos que no fueron identificados cuando estaban jóvenes (Maurey, 2011). Al principio de la enfermedad la tasa de filtración de las nefronas sanas aumenta para garantizar la homeostasia; a consecuencia de esto estas nefronas se hipertrofian. La hiperfiltración es acompañada de hipertensión intraglomerular, de modo que las nefronas restantes se vuelven gradualmente escleróticas y es agravada a causa de la calcinosis relacionada con el hiperparatiroidismo secundario (Bourgeois, 2007). 13 El fallo en la filtración y el síndrome nefrótico (uremia/ proteinuria) pueden producirse de manera independiente o simultánea en los animales con glomerulonefritis. Histopatológicamente las lesiones renales de uremia son variadas; en la uremia crónica, ocurren cambios renales con glomérulos esclerosados, áreas de hipertrofia e hiperplasia tubular y mineralización. Éste proceso se diagnostica con frecuencia como estado terminal del riñón. Es de considerar que con independencia de la causa inicial, la insuficiencia renal crónica tienda a ser progresiva (Trigo, 2011). 2.2.2 SIGNOS CLINICOS Y DIAGNÓSTICO Los pacientes con IRC presentan la historia clínica siguiente (Bartges y Polzin, 2011). Poliuria y polidipsia Problemas gastrointestinales o Vómito Común en perros urémicos Debido a la estimulación de la zona desencadenante de los quimiorreceptores por una toxina urémica o bien a causa de ulceras gastrointestinales o Gastroenteritis hemorrágica El sangrado debido a la disfunción plaquetaria Edema y engrosamiento de la mucosa gástrica El exceso de gastrina acumulado en la circulación estimula la secreción ácida en el estómago y contribuye a la gastroenteritis urémica. Anorexia Debido a la pérdida de apetito por erosiones orales, úlceras y la gastroenteritis presente. 14 Pérdida de peso Se debe a la inadecuada cantidad de consumo calórico pero también se le asociada a la activación de procesos catabólicos. La acidosis metabólica puede activar rutas del catabolismo de proteínas en el músculo El exceso de glucagón puede contribuir a un balance negativo de nitrógeno aumentando el catabolismo de los tejidos. Letargia, debilidad y signos neurológicos o Pérdida de masa muscular o Encefalopatia urémica Puede ocurrir cuando la tasa de filtrado glomerular disminuye a menos de 10% de su normalidad Algunas veces se le ha asociado a altas concentraciones de hormona paratiroidea (HPT) Signos clínicos reportados en perros afectados incluyen espasmos faciales, movimientos de la cabeza, comportamiento anormal, temblores y convulsiones. Las bajas concentraciones de iones de calcio en el suero y la hipertensión sistémica pueden contribuir en algunos casos. 15 CUADRO 5. Hallazgos encontrados al examen físico (De Leib y Monroe, 1997). Pérdida de peso (incluyendo pérdida de masa muscular). Pelaje hirsuto. Ulceras y erosiones en la mucosa bucal y lengua (parte lateral). Mucosas pálidas. Deshidratación, pérdida de la elasticidad de la piel y sequedad de las mucosas . A la auscultación es común escuchar soplos en el corazón y estertores en pulmón debido al edema. A la palpación los riñones se pueden apreciar aumentados de tamaño y duros; también puede haber aumento de volumen en la vejiga. Osteodistrofia (más común en perros jóvenes). Edema subcutáneo. Ceguera (consecuencia de la hipertensión sistémica). Defectos hemostáticos (hemorragias). 2.2.3 FISIOPATOLOGIA La uremia es un síndrome que ocurre después de una importante reducción del funcionamiento renal, donde la azotemia se desarrolla en conjunto con los signos clínicos y lesiones. Se puede detectar por varias pruebas de laboratorio, como lo son las hematológicas, endocrinas o bioquímica sérica. Una toxina urémica es cualquier compuesto que se acumula en exceso debido al mal funcionamiento renal; cómo ejemplo de toxinas urémicas se encuentra la urea, compuestos de guanidina, mioinositol y algunas hormonas (cuyo peso molecular oscila de 500-3000). La hormona paratiroidea (PTH) es la toxina urémica más conocida. Tiene un papel en el desarrollo de la osteodistrofia renal, también llamado hiperparatiroidismo renal secundario. La fisiopatología de la Insuficiencia renal crónica puede considerarse a nivel orgánico y sistémico. 16 A nivel del riñón, el cambio patológico fundamental que ocurre es la pérdida de las nefronas funcionales y la disminución de la filtración glomerular, que lleva como consecuencia un aumento de las concentraciones plasmáticas de las sustancias que normalmente son eliminadas del cuerpo mediante la excreción renal como urea y creatinina (Couto, 2000). La urea es un catabolito de los aminoácidos producido por los hepatocitos. Su producción proviene principalmente del catabolismo de las proteínas y funcionamiento hepático. Esta molécula es eliminada por filtración glomerular y es secretada por los túbulos. Su concentración plasmática depende del catabolismo proteico, el flujo urinario, y la tasa de filtración glomerular; debido a esto, la urea no puede utilizarse como un marcador confiable de la función renal. La determinación de la urea, tiene interés cuando se asocia al aumento de creatinina en el diagnóstico de una insuficiencia renal de la que se desea saber si es funcional u orgánica (Maurey, 2011). Los pacientes urémicos presentan tendencia a sufrir hemorragias debido a un defecto en la función plaquetaria, reducción de la liberación del factor 3 plaquetario y escasa retracción del coágulo (Bick, 1992). El incremento en la permeabilidad vascular en la uremia suele causar pericarditis fibrinosa y edema pulmonar difuso. Mediante observación microscópica se puede observar que los alveolos están llenos de líquido y hay moderada infiltración alveolar de macrófagos y neutrófilos; a ésta lesión se le denomina neumonitis urémica (Trigo, 2011). La encefalopatía urémica y la polineuropatía son síndromes bien conocidos en humanos; en pequeñas especies son poco comunes (DeDeyn at al., 1992). Existen también otras complicaciones secundarias que contribuyen al progreso de la enfermedad e incrementan el riesgo de morbilidad y mortalidad en los pacientes con IRC. 17 2.2.4 HIPERTENSIÓN SISTÉMICA La prevalencia de hipertensión en perros con IRC se ha descrito desde el 9% de hasta 93% de los casos, mientras que en los gatos se ha informado de una prevalencia que varía del 19% al 65%. La presión sanguínea en perros y gatos es similar a la de los seres humanos (120 mm de Hg sistólica, 80 mm de Hg diastólica). Los perros que presentan presión sanguínea sistólica de 145 a 165 mm de Hg se consideran leve a moderadamente hipertensos, aquellos cuya presión oscila de 165 mm de Hg a 200 mm de Hg se consideran moderada a severamente hipertensos y los que tienes una presión sanguínea sistólica mayor a 200mmHg se consideran severamente hipertensos (Chew et al, 2011). Los factores que contribuyen a la hipertensión en la IRC son los siguientes (Jepson, 2011): Estimulación del sistema nervioso simpático Isquemia renal con activación del sistema renina-angiotensina- aldosterona (RAAS) Expansión de volumen plasmático cuando la excreción de sodio se deteriora a niveles muy bajos de su tasa de filtrado glomerular ( menor al 5% de lo normal) Un mecanismo intrarrenal que incrementa la retención de sodio en la enfermedad glomerular. Las manifestaciones clínicas y patológicas de la hipertensión sistém ica incluyen efectos adversos en los ojos, corazón, sistema nerviosos y los riñones. 18 2.2.5 HIPERPARATIROIDISMO RENAL SECUNDARIO Es una enfermedad metabólica que se presenta como una complicación del Síndrome Urémico en los casos de IRC. Esto se atribuye principalmente a la retención de fósforo (Pi) plasmático debido la disminución en la TFG (Tasa de del filtrado glomerular) y a la transformación inadecuada de 1,25 dihidroxidesoxi colecalciferol o calcitriol encargado de regular los niveles de Calcio (Ca++) en el líquido extracelular. Lo cual origina un incremento en la secreción de la HPT cuya función es regular el equilibrio de Ca y Pi a nivel sérico. (Bainbridge y Elliot, 2001). 2.2.6 PRUEBAS DE LABORATORIO CLÍNICO Para realizar una evaluación del sistema excretor del cuerpo, es necesario realizar exámenes de orina y sangre, así también como pruebas de imagenología. 2.2.5.1Hemograma La anemia no regenerativa (normocítica, normocrómica) es común en IRC. La severidad de la anemia está correlacionada con la severidad de la IRC debido a la concentración de creatinina en el suero. La principal causa de la anemia se debe a un déficit absoluto o relativo en la producción de eritropoyetina; la eritropoyetina estimula la diferenciación final de las células progeni toras eritroides en glóbulos rojos maduros en la médula ósea. La esperanza de vida de eritrocitos en pacientes con síndrome urémico es aproximadamente del 50% comparada con los individuos sanos. Algunas toxinas urémicas afectan a la eritropoyesis. En tanto, que la disfunción plaquetaria promueve la pérdida de sangre (Chew et al., 2011). Pibot et al (2006) establece que para tratar la anemia utiliza administración de andrógenos, transfusiones sanguíneas, e inyecciones de eritropoyetina recombinante humana (2-8 semanas, 100 U/kg vía subcutánea, 3 veces por semana, más la suplementación de sulfato de hierro. 19 Es importante obtener muestras de sangre y de orina antes del inicio de la fluido terapia. Los hallazgos hematológicos orientan al clínico a determinar las causas de la uremia. La insuficiencia renal crónica se asocia frecuentemente con una anemia grave, normocítica, normocrómica y no regenerativa (King et al, 1992). 2.2.5.2Urianálisis Debe recogerse una muestra de orina en la evaluación del paciente con sospecha de uremia. Sobre las tiras reactivas debe utilizarse un refractómetro para medir la densidad urinaria. Las tiras reactivas de orina y el examen del sedimento pueden revelar la causa de anemia (Brainbridge, 2005). Un perro adulto produce entre 24 y 40 ml/kg al día; en el gato, el volumen es de 15 a 20 ml/kg al día. La densidad urinaria refleja la capacidad del riñón para concentrar la orina; está comprendida entre 1.015 y 1.045 en el perro y entre 1.035 y 1.060 en el felino (Maurey, 2011). La orina con una alta densidad se califica como hiperestenúrica; esta situación puede ser el reflejo de una deshidratación o un defecto de perfusión renal. Una densidad urinaria muy baja, inferior a 1.007, se califica como hipoestenúrica, y refleja un defecto en la síntesis de la hormona antidiurética, o una disminución de receptores para la misma hormona (diabetes insípida nefrogénica). La orina que presenta una densidad similar a la del filtrado glomerular se le denomina isostenúrica y está dentro de los rangos 1.007 – 1.012 (Bainbridge, 2005). 2.2.5.3 Perfil bioquímico sérico Los parámetros más importantes a evaluar son: creatinina, nitrógeno ureico, fosfato, potasio y calcio. El nitrógeno ureico en sangre (BUN) y la creatinina son sustancias nitrogenadas no proteicas cuya medición se utiliza para determinar la funcionalidad renal. La creatinina plasmática es un marcador fiable de la insuficiencia renal en las fases avanzadas de la enfermedad. El objetivo principal está en determinar lo más precozmente posible una alteración 20 de la función renal, antes que ocurra un aumento significativo de la urea y creatinina plasmática; la creatinina plasmática es un residuo metabólico nitrogenado, que es producto terminal del catabolismo de la creatinina muscular. Los valores habituales están comprendidos entre: 60-130 µmol/L en perros y 56-176 µmol/L en gatos (Lulich y Osborne, 1990). Valores séricos de creatinina de 130 a 250 µmol/L sugieren una probable hiperazotemia prerrenal, mientras que los valores mayores de 250 µmol/ L, una hiperazotemia renal o posrenal (Nuñez y Bouda, 2007). 2.2.7 TRATAMIENTO Los objetivos de la terapia en animales que padecen IRC son los siguientes: Mejorar la calidad y duración de vida reduciendo la frecuencia y gravedad de las complicaciones asociadas Tratar de impedir o retardar el desarrollo de la enfermedad renal De acuerdo con la Guía de tratamiento para perros y gatos con insuficiente renal crónica (Couto y Nelson, 2007), se debe: Descontinuar todos los medicamentes potencialmente nefrotóxi cos. Identificar y tratar cualquier anormalidad prerrenal o post renal. Identificar cualquier condición tratable como pielonefritis o urolitiasis renal por medio de radiografías o ultrasonido. Medir la presión sanguínea; considerar tratamientos con bloquea dores de canales de calcio en animales con hipertensión sistémica. Iniciar una dieta baja en proteínas si hay azotemia de moderada a severa. Sí el animal presenta hiperfosfatemia, restringir el fósforo de la dieta; considerar el uso de calcitriol. Sí hay presencia, tratar el vómito y la gastroenteritis con: o Metoclopramida. o Trimetobenzamida o cloropromazina. En caso de anemia, tratar con: 21 o Esteroides anabólicos. o Eritropoyetina recombinante humana. Proveer requerimientos calóricos (70 a 100kcal/kg/día). La disminución de la cantidad de la ingesta de proteínas es fundamental una vez alcanzado el umbral crítico de la función renal. La restricción de proteínas en la dieta reduce los efectos de las toxinas urémicas derivadas de las mismas. Esta restricción acompaña de forma natural a la disminución del fosforo en la dieta, puesto que las fuentes de proteínas animales habitualmente son ricas en fosforo (Bourgeois, 2007). 22 3. JUSTIFICACION Los antecedentes antes descritos señalan la importancia de las enfermedades renales en los perros y gatos; algunas de las enfermedades citadas, no solo son de importancia en salud animal sino también en salud pública como es el caso de la Leptospirosis. En el presente trabajo se realizó una investigación bibliográfica amplia sobre el tema y además se analizaron algunos casos relevantes de enfermedades renales en pequeñas especies durante el periodo enero del 2012 a agosto del 2103 en el Departamento de Patología de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM. Todo ello con la finalidad determinar los signos y lesiones renales y extra-renales asociados al cuadro de insuficiencia renal en los casos. El presente trabajo, es un documento con información concerniente acerca de la insuficiencia renal en perros y gatos, que pretende contribuir a que el médico veterinario zootecnista esté más documentado sobre éste padecimiento. La detección de los pacientes en los primeros estadios de la disfunción renal, podría permitir el inicio de medidas protectoras, como dietas renales específicas o tratamiento farmacológico para retrasar el avance de la nefropatía y así mejorar el tiempo de supervivencia y la calidad de vida del paciente. 23 4. OBJETIVOS 4.1 OBJETIVO·GENERAL Realizar un estudio retrospectivo sobre los hallazgos histopatológicos, la historia clínica, las pruebas de laboratorio y del diagnóstico etiológico de casos de insuficiencia renal de pacientes seleccionados para éste estudio, atendidos en el Departamento de Patología de la FMVZ-UNAM durante el período de 2012-2013. 4.2 OBJETIVOS· ESPECÍFICOS Recopilar y analizar la información bibliográfica actual sobre insuficiencia renal aguda y crónica en perros y gatos. Determinar la frecuencia de insuficiencia renal en perros y gatos en el periodo el período de 2012-2013 en el Departamento de Patología de la FMVZ-UNAM. Caracteriza los cambios bioquímicos y hematológicos presentes en los individuos con insuficiencia renal (en los casos donde exista la información). 24 5. MATERIAL Y MÉTODOS Recopilación de datos en la bitácora: Se realizó la búsqueda de casos de perros y gatos con insuficiencia renal, registrados en la bitácora del Departamento de Patología de la FMVZ-UNAM en el periodo de enero del 2012 a agosto del 2013. Casos clínicos: La selección de los pacientes para ser incluidos en éste trabajo, se hizo de acuerdo a los siguientes criterios, que posean: historia clínica, pruebas de laboratorio o etiología bien definida para así correlacionar los datos con los hallazgos anatomopatológicos. De los casos seleccionados para su estudio, se obtuvieron los bloques en parafina o las laminillas con el tejido y fueron nuevamente evaluados. Para la evaluación histológica los tejidos se procesaron de manera rutinaria y se tiñeron con hematoxilina y eosina (H&E). De las lesiones más representativas se tomaron imágenes fotográficas. Recopilación bibliográfica: Los artículos recientes sobre insuficiencia renal en pequeñas especies se obtuvieron al emplear las siguientes palabras claves: insuficiencia renal, síndrome urémico, pequeñas especies, azotemia, medicina veterinaria, patología renal, perros, gatos. La información bibliográfica se obtuvo de diferentes bases de datos con las cuales cuenta la UNAM como son EBSCO HOST, SCIENCE DIRECT, SPRINGER LINK, SCIENCE AAAS, WILEY, JAMA, RSC_JOURNALS. 25 6. RESULTADOS CASO 1 Reseña: Especie: Canis lupus familiaris (Perro); Raza: Bull terrier; Género: macho; edad: 3 años de edad; peso 27 kg; identificación o nombre; Makesh. Historia clínica: Paciente remitido al Hospital Veterinario de Especialidades (HVE) de la FMVZUNAM, presento poliuria, polidipsia, dolor abdominal, necrosis de la punta de la lengua, dificultad para respirar y deshidratación al 8%. Se procede a eutanasia por sobredosis de pentobarbital. Interpretación de los análisis clínicos Hemograma: Anemia no regenerativa Perfil bioquímico: Incremento de urea y creatinina (hiperazotemia de tipo renal); Además de hiperfosforemia e hipercolesterolemia. Patología macroscópica: Condición corporal 3/5, mucosas rosa pálido, retracción de los globos oculares (deshidratación); hiperplasia bilateral de paratiroides, consolidación pulmonar, engrosamiento de la pleura, endocarditis valvular vegetativa biventricular, gastritis ulcerativa y hemorrágica y congestión hepática. Al incidir la cavidad abdominal se percibió un fuerte olor amoniacal; La superficie de ambos riñones era irregular y multinodular, al corte se apreció congestión cortico-medular. Histopatología Riñón derecho presenta extensas áreas de infiltrado por linfocitos y células plasmáticas y gran parte del intersticio exhibe fibrosis. Aproximadamente la mitad de los glomérulos revisados muestran dilatación severa del espacio glomerular y fibrosis alrededor. La mayoría de los tubos residuales contienen material eosinofílico denso en su luz, consistente con proteína. Riñón izquierdo muestra lesiones menos graves además de mineralización. Sección de pulmón: Tanto en la pared de los bronquiolos como en el intersticio y algunas 26 áreas de la pleura hay depósito de material amorfo laminando refringente que sugiere mineralización. Estómago: En la mucosa se observan ulceras y erosiones. Corazón: Las válvulas atrioventriculares presentan abundante material necrótico e infiltrado inflamatorio supurativo y abundantes colonias bacterianas intralesionales que alternan con áreas basofílicas que correponden a calcificación. Diagnósticos Morfológicos 1.-Nefritis intersticial moderada con fibrosis grave multifocal en ambos riñones Atrofia glomerular y dilatación quística en el 50% de los glomérulos evaluados. Hiperplasia bilateral del endocardio de las aurículas y la íntima de la aorta. Gastritis ulcerativa y hemorrágica. 2.-Endocarditis vegetativa biventricular grave, con bacterias intralesionales y calcificación distrófica. Neumonía fibrinohemorrágica grave en lóbulos caudales, con cambios quísticos alveolares y calcificación multifocal. Interpretación Los títulos reportados en el suero no son sugerentes de una infección por Leptospira sp. y el cadáver tampoco mostró lesiones consistentes con este agente. Las lesiones más graves encontradas en el estudio postmortem fueron la endocarditis vegetativa y la fibrosis renal bilateral. La primera es generalmente de origen bacteriano; las bacterias en la vegetación pueden invadir la corriente sanguínea y producir bacteriemia desarrollando así la nefritis. Las bacterias relacionadas con endocarditis en perros son: Staphylococcus sp, Streptococcus sp, Corynebacterium sp y Shigella sp. Las alteraciones descritas en los riñones aunadas a los altos niveles de urea son compatibles con riñón terminal. Las úlceras y hemorragias en el estómago, se pueden explicar ya sea por la uremia y/o la administración de AINE´S. 27 CASO 2 Reseña: Especie: Canis lupus familiaris (Perro); raza: Golden Retriever; Género: macho; Edad: 8 años; peso 25 kg; identificación o nombre: Oliver Historia clínica Paciente remitido al HVE de la FMVZ-UNAM. Clínicamente presentó anorexia, vómitos, pérdida de peso y aliento urémico. Se procede a eutanasia por sobredosis de pentobarbital sódico. Interpretación de los análisis clínicos Hemograma: anemia moderada, no regenerativa. Perfil bioquímico: Se apreció hiperazotemia de tipo renal, con hiperfosforemia. e hipercalemia. Además presentó hipoalbuminemia por proteinuria. Urianálisis: densidad urinaria de 1.024 (por debajo del punto crítico). Patología macroscópica Los principales hallazgos a la necropsia fueron: mala condición corporal, los linfonodos poplíteos, mandibulares y preescapulares se encontraban aumentados de tamaño, el abdomen estaba distendido y ocupado por 2 L de líquido sanguinolento. A la inspección interna la superficie de ambos riñones era café y tenía discretas áreas irregulares, y la superficie de corte los rayos cortico-medulares se apreciaban muy evidentes, la pelvis renal izquierda estaba ligeramente dilatada. Los pulmones no colapsaron, eran rojo oscuro difusamente, de consistencia elástica. El lóbulo caudal izquierdo tenía un área blanca, irregular, deprimida. Histopatología Riñón: Los glomérulos exhiben engrosamiento de su membrana basal. Algunos de estos glomérulos están retraídos por tejido conectivo fibroso y en otros no se aprecia el ovillo glomerular (glomeruloesclerosis). En el intersticio se observan agregados de linfocitos, así como tejido conectivo fibroso, en otras partes hay cúmulos de células neoplásicas. La membrana basal de los túbulos se aprecia adelgazada y refringente por la mineralización. Linfonodos: Están ocupados en su totalidad por áreas hipercelulares, conformadas por las células neoplásicas redondas con moderado 28 pleomorfismo que se disponen en patrón sólido, sostenidas por fino estroma de tejido conectivo. Dichas células miden ligeramente más de 1.5 con relación a un eritrocito, presentan escaso a moderado citoplasma eosinofílico claro. Los núcleos son redondos, con cromatina fina granular. Se aprecian de 3 a 4 figuras mitóticas por campo aleatorio de 40 x, así como áreas multifocales con restos celulares (necrosis). Pulmón: Alrededor de los vasos sanguíneos y de los bronquios se aprecian células neoplásicas como las antes descritas en linfonodos. Algunos bronquios muestran el epitelio descamado y la membrana basal se observa adelgazada, basofílica y refringente (mineralización). Diagnósticos morfológicos 1.-Ascitis de 2 L 2.-Linfoma multicentrico de grado intermedio de malignidad con metástasis a hígado, bazo, pulmón, riñón y tráquea 3.- Riñón: Glomerulonefritis mesangioproliferativa moderada multifocal Nefritis intersticial linfoplasmocítica moderada multifocal Mineralización tubular grave difusa 4.- Congestión y edema moderado difuso con mineralización alveolar. Interpretación De acuerdo con las lesiones macroscópicas y microscópicas antes referidas el animal curso con insuficiencia renal crónica y linfoma. El linfoma es una neoplasia de comportamiento biológico maligno originada de las células linfoides que se extienden a otros órganos contribuyendo al deterioro del animal; el síndrome paraneoplásico asociado al linfoma es la hipercalcemia y mineralización metastásica provocando así, un extenso daño renal. 29 CASO 3 Reseña: Especie: Canis lupus familiaris (Perro); raza: Pastor Alemán; género: macho; edad: 13 años; peso 20 kg; identificación o nombre: Lobo Historia clínica Paciente remitido al HVE de la FMVZ-UNAM. Paciente diagnosticado con insuficiencia renal crónica desde hace 3 años. Clínicamente presentó caquexia, depresión, poliuria, polidipsia y deshidratación al 7%. Se procede a eutanasia con pentobarbital sódico. Interpretación de los análisis clínicos Hemograma: anemia moderada, no regenerativa Perfil bioquímico mostró hiperazotemia de tipo renal e hiperfosforemia. Patología macroscópica: Los principales hallazgos a la necropsia fueron: mala condición corporal, mucosas pálidas y pelo hirsuto. A la inspección interna, ambos riñones se encontraban aumentados de tamaño, eran café amarillos, firmes y a nivel de la corteza exhibían áreas granulares blanco amarillentas. La vejiga urinaria presentaba su pared engrosada y la mucosa exhibía extensas zonas de hemorragia. Las glándulas paratiroideas se observaban aumentadas de tamaño. Se tomaron muestran de riñones, vejiga y glándulas paratiroides. Histopatología Riñón: En la corteza, la mayoría de los glomérulos se encuentran retraídos y algunos esclerosados por la dilatación marcada de los espacios urinarios, los cuales contienen moderada cantidad de material de material eosinofílico proteinaceo y escasos macrófagos con citoplasma espumoso. La membrana de dichos glomérulos se encuentra ligeramente engrosada; asimismo se aprecia aumento en la cantidad de células mesangiales. El epitelio que reviste los túbulos se encuentra desprendido hacia la luz con el citoplasma intensamente eosinofílico, granular y núcleos picnóticos. Algunos túbulos se encuentran tortuosos y dilatados por moderada cantidad de material proteinaceo, escasos macrófagos y material basofílico acelular refringente 30 (mineral). El intersticio de la región cortical y medular se encuentra sustituido por abundante tejido conectivo fibroso, entremezclado con moderada cantidad de material eosinofílico claro amorfo y agregados multifocales de linfocitos y células plasmáticas. La pelvis renal, está infiltrada por números linfocitos, células plasmáticas y escasos neutrófilos. Paratiroides externas: El parénquima glandular se encuentra aumentado de tamaño por hiperplasia difusa de las células principales. Diagnósticos morfológicos 1.-Riñones Fibrosis grave difusa Pielonefritis grave zonalmente extensiva 2.- Vejiga Urinaria Cistitis grave difusa con erosiones y hemorragias moderadas multifocales 3.-Paratiroides externas Hiperplasia paratiroidea bilateral Interpretación Las lesiones macroscópicas y microscópicas presentadas, sugieren que el animal curso con daño renal grave crónico, cuya causa primaria no es posible determinar debido a la cronicidad del proceso. La pielonefritis y cistitis descritas anteriormente, son sugerentes de infección bacteriana ascendente. Los agentes comúnmente involucrados en dichas infecciones son: E. coli,Proteus sp, Staphylococcus sp, Streptococcus sp, entre otras. En procesos crónicos predomina la fibrosis. 31 CASO 4 Reseña: Especie: Canis lupus familiaris (Perro); raza: Mestizo; género: macho; edad: 14 años; peso 16 kg; identificación o nombre: Dark Historia clínica Paciente remitido al HVE de la FMVZ-UNAM. Clínicamente presenta anuria, oliguria y convulsiones después de una caída con 5 días de anterioridad. Fue sometido eutanasia por sobredosis de pentobarbital sódico. Interpretación de los análisis clínicos Hemograma, anemia moderada no regenerativa Perfil bioquímico: hiperazotemia de tipo renal (densidad urinaria de 1.024). Urianálisis: Hipoalbuminemia ligera por proteinuria (proteínas en orina: trazas) y acidosis metabólica por ganancia de ácidos con aciduria secundaria (pH en orina: 5.5). Patología macroscópica Los principales hallazgos la necropsia fueron: mala condición corporal, mucosas pálidas. Los riñones se encontraron ligeramente amarillos a naranjas; el riñón izquierdo presentó un área deprimida cuya superficie de corte exhibió una zona triangular rojo oscuro con puntilleo blanco, entremezclado (infarto).La pared de la vejiga estaba engrosada y la mucosa mostraba múltiples hemorragias combinadas con áreas negras (necrosis). El bazo estaba ligeramente aumentado de tamaño y violáceo. En el corazón se observó endocardiosis de la válvula mitral y el epicardio derecho presentó áreas irregulares pálidas mezcladas con hemorragias. El cerebro se encontraba ligeramente amarillo y su superficie tenía aspecto granular. Se tomaron muestras de riñón, cerebro, bazo y corazón. Histopatología Riñón: La corteza y médula presentan extensas áreas de hemorragia. La mayoría de los túbulos renales tienen pérdida de la afinidad tintorial, el epitelio tubular de algunas zonas está ausente, en otras se encuentra desprendido a la luz con los núcleos picnóticos o ausentes (necrosis). El intersticio de algunas zonas se encuentra expandido por escaso tejido conectivo fibroso, 32 que ocasiona engrosamiento de la membrana basal, así como en otras secciones infiltra y sustituye numerosos glomérulos. Se aprecian escasos agregados de neutrófilos, linfocitos y células plasmáticas ocupando el intersticio de varias zonas. Bazo: Se aprecia moderada despoblación de las estructuras linfoides, además se aprecian trombos de fibrina que obliteran parcialmente el múltiples arteriolas. Hay numerosos grupos de lumen de hemosiderófagos y megacariocitos (hematopoyesis extramedular). Meninges y encéfalo: Las fibras de la pared de algunos vasos sanguíneos están separadas por edema, además se encuentran rodeados por escasos agregados de neutrófilos y en menor cantidad de linfocitos. Paratiroides: Se observa aumento de la densidad celular formada por células principales las cuales son cúbicas y ovaladas, presentan de moderado a abundante citoplasma eosinofílico y núcleo ovalado basofílico granular. Pulmón: La pleura está discretamente engrosada por fibrosis. También se aprecian cúmulos discretos de mineral. Diagnósticos morfológicos 1.-Corazón Miocarditis fibrinonecrótica moderada, multifocal con hemorragia grave multifocal. 2.- Riñón Necrosis tubular grave difusa, con hemorragia moderada multifocal. Nefritis intersticial linfoplasmocítica y neutrofílica leve multifocal con fibrosis intersticial moderada multifocal y glomeruloesclerosis moderada multifocal. 3.- Meninges y encéfalo Meningoencefalitis neutrofílica y linfocítica moderada multifocal con edema y degeneración vascular moderada multifocal. 4.-Bazo Hematopoyesis extramedular. Trombosis moderada, multifocal 33 Interpretación Con base en los hallazgos macroscópicos y microscópicos antes descritos, la signología manifestada por el paciente se correlaciona con la insuficiencia renal crónica. Las lesiones vasculares y cambios inflamatorios observados en la mayoría de los órganos, se asocian al daño endotelial resultante de la acumulación de productos de desecho; mismos que podrían haber ocasionado las convulsiones como parte de un síndrome de encefalopatía urémica. 34 CASO 5 Reseña: Especie: Felis silvestris catus (gato); raza: Europea doméstica; género: hembra; edad: 10 años; peso 4 kg; identificación o nombre: Etienne Historia clínica Paciente emitida al HVE de la FMVZ-UNAM, desde hace 15 días ha presentado clínicamente vómitos, poliuria, polidipsia, deshidratación al 6% e hiporexia. Se diagnostica hace dos meses con insuficiencia renal crónica. Se le aplicó eutanasia con sobredosis de pentobarbital. Interpretación de los análisis clínicos Hemograma: anemia ligera, no regenerativa así como presencia de neutrófilos hipersegmentados y linfopenia por estrés. Perfil bioquímico: Hiperazotemia de origen renal con hiperfosfatemia relacionada con hipercolesterolemia por probable alteración en el metabolismo lípidico. Incremento de ALT por actividad/degeneración hepatocelular. Urianálisis: Isostenuria secundaria a la IRC y aciduria por acidosis metabólica. Patología macroscópica Los principales hallazgos a la necropsia fueron: mucosas ligeramente ictéricas, úlceras en la región dorsal y ventral de lengua. Las glándulas paratiroides se encontraban aumentadas de tamaño y de color blanco. Al corte, los riñones estaban ligeramente amarillos, retraídos y con los rayos cortico-medulares evidentes. Se tomaron muestras de riñones, lengua, paratiroides y pulmón. Histopatología Riñón: El intersticio de la médula y la corteza presentan extensas áreas de proliferación de tejido conectivo fibroso que sustituyen a la mayoría de los túbulos renales, mezclado con agregados multifocales de linfocitos y células plasmáticas. Los túbulos restantes se encuentran degenerados, con el citoplasma granular y el núcleo ausente o picnótico, en el lumen de algunos se observan cristales refringentes y material basofílico amorfo (mineral). Los glomérulos se observan disminuidos en su tamaño y número, asimismo en algunos el ovillo glomerular está reemplazado por tejido conectivo 35 (glomeruloesclerosis) y el espacio urinario presenta escaso material de aspecto proteináceo. Lengua: Extensas zonas con pérdida de la continuidad del epitelio, mezcladas con cúmulos de neutrófilos degenerados, restos celulares necróticos y colonias bacterianas. Pulmón: La pleura está ligeramente engrosada por fibrosis. También se observan cúmulos discretos de mineral. Paratiroides: Se observa aumento de la densidad celular formada por células principales. Diagnósticos morfológicos 1.-Riñón Fibrosis grave difusa con degeneración y necrosis tubular severa multifocal Nefritis insterticial linfoplasmocítica moderada multifocal con atrofia glomerular, proteinosis, cristales intratubulares y glomeruloesclerosis moderada multifocal 2.-Lengua Glositis ulcerativa y necrosupurativa severa multifocal con bacterias intralesionales. 3.-Pulmón Fibrosis pleural y mineralización leve multifocal 4.-Paratiroides Hiperplasia de células principales moderada difusa Interpretación Las lesiones macroscópicas y microscópicas antes descritas corresponden a insuficiencia renal crónica, la cual tiende a ser progresiva y generalmente se acompañada de lesiones extrarrenales; úlceras en epitelios, hipertrofia y dilatación cardiaca o mineralización de las paredes alveolares en el pulmón. Los signos clínicos puededen estar relacionados a la disminución de la función renal o por respuestas compensatorias ésta. En gatos, las principales causas de insuficiencia renal crónica están asociadas a infecciones por el virus de inmunodeficiencia felina (VIF), leucemia felina así como también a linfoma renal, enfermedades del tracto urinario superior, dietas inapropiadas, entre otros. 36 CASO 6 Reseña: Especie: Felis silvestris catus (gato); raza: Persa; género: hembra; Edad: 7 años; Peso 3.3 kg; identificación o nombre: Missi Historia clínica Paciente remitida al HVE de la MVZ-UNAM, clínicamente presento vómitos, depresión, anorexia y letargia. En el examen físico general, a la palpación presenta dolor y aumento de tamaño de ambos riñones. Se reporta que hace dos 2 días ingirió una flor de lili. Interpretación de los análisis clínicos Hemograma: Sin alteraciones Perfil bioquímico: aumento muy elevado de urea y creatinina, así como hiperfosforemia. Patología macroscópica Los principales hallazgos a la necropsia fueron: mucosas congestionadas, edema en tejido adiposo subcutáneo. Se recuperaron 50 ml de líquido serosanguinolento en cavidad torácica y 40 ml en cavidad abdominal. Entre la capsula y corteza renal de ambos riñones se observó sangre coagulada (hematoma). El riñón derecho exhibía una zona pálida en la corteza. El hígado se apreció pardo difuso con patrón lobulillar incrementado. Se tomaron muestras de riñón e hígado. Histopatología Riñón: Los glomérulos presentan aumento del espacio urinario con presencia de material acelular eosinofílico granular. El citoplasma del epitelio tubular se encuentra vacuolado y con núcleos picnóticos; en otras áreas hay cariolisis. En la luz de los túbulos renales se observan células descamadas y detritos celulares. Hígado: Los sinusoides se observan ectásicos por congestión generalizada, los hepatocitos, principalmente los centrolobulillares, están gravemente disociados y con degeneración vacuolar y necrosis individual. 37 Diagnósticos morfológicos 1.-Riñón Necrosis renal no túbulo-réctica, grave difusa 2.-Hígado Degeneración vacuolar y necrosis hepatocelular moderada, centrolobulillar Congestión hepática grave difusa. Interpretación Las lesiones macroscópicas y microscópicas antes descritas sugieren que el animal curso insuficiencia renal aguda asociada a nefrotoxicidad, por consumo de la planta referida en la historia clínica. 38 CASO 7 Reseña: Especie: Canis lupus familiaris (Perro); raza: Mestiza; género: hembra; edad: 13 años; peso 14 kg; identificación o nombre: Camila Historia clínica Paciente remitida al HVE- Bruselas. Clínicamente presento vómito y diarrea, al examen físico se observa ligero dolor en abdomen y deshidratación. Se le aplicó eutanasia con sobredosis de pentobarbital. Interpretación de los análisis clínicos Hemograma: Anemia no regenerativa Perfil bioquímico se apreció azotemia renal e hiperfosfatemia Urianálisis: isostenuria (1.012) Se tomaron radiografías del tórax donde se muestra un patrón bronquial por mineralización por bronquitis crónica. Patología macroscópica Los principales hallazgos a la necropsia fueron mucosas pálidas, mala condición corporal y pelaje hirsuto. A la inspección interior, la pleura visceral de todos los lóbulos pulmonares se apreció blanca-café, con áreas firmes al tacto, aumentados de tamaño y bordes redondeados. Ambos riñones se apreciaron gravemente disminuidos de tamaño, la capsula se encontraba adherida, la superficie de la corteza era irregular con algunas áreas deprimidas. Se tomaron muestran de riñón, pulmón e hígado. Histopatología Riñón: A nivel de la corteza se aprecian múltiples focos de reacción inflamatoria constituida principalmente por linfocitos y células plasmáticas con proliferación moderada de fibroblastos. Algunos túbulos se aprecian gravemente dilatados con material granular y homogéneo eosinofílico (proteína) en su luz y el epitelio es plano. En otros túbulos las células epiteliales muestran necrosis y en su luz, el mismo material antes descrito (proteinosis) y cristales de calcio. Muchos glomérulos se ven aumentados se 39 tamaño con disminución del espacio glomerular y otros están disminuidos con aumento en el espacio glomerular; hay numerosas células mesangiales con necrosis y la presencia de abundante material eosinofílico homogéneo. La membrana basal de la capsula se encuentra engrosada y con material basófilo-anfofílico que corresponde a calcio. Pulmón: Los alveolos que se encuentran por debajo de la pleura visceral están moderadamente colapsado (atelectasia). Las paredes alveolares se aprecian engrosadas y algunas muestran presencia de clavas de retracción (enfisema). En la luz alveolar hay moderada fibrina, numerosos macrófagos alveolares (neumocitos tipo II) y escasos neutrófilos. Hígado: En la luz de los vasos sanguíneos y sinusoides se aprecian numeroso eritrocitos (congestión) y también se identifican numerosas áreas de necrosis centrolobulillar. Diagnósticos morfológicos 1.-Riñón Glomerulonefritis membrano proliferativa moderada, difusa Nefritis tubulointersticial linfoplasmocítica Fibrosis moderada multifocal Dilatación, nefrocalcinosis y necrosis tubular aguda con proteinosis grave difusa 2.-Pulmón Neumonía urémica moderada difusa. 3.-Hígado Necrosis hepática centrolobulillar moderada, multifocal Congestión grave, difusa. Interpretación Las lesiones macroscópicas y microscópicas antes descritas sugieren que el animal cursó con una insuficiencia renal crónica, ocasionados posiblemente por Leptospira spp, dentro de las serovariedades que más afectan al perro son L. canicola e icterohaemorrhagiae. 40 CASO 8 Reseña: Especie: Felis silvestris catus (gato); raza: Europea Doméstica; género: hembra; edad: 9meses; peso 2 kg; identificación o nombre: Minina Historia clínica Paciente remitida al HVE de la FMVZ-UNAM con signos de hiporexia y depresión. Se le realizó ultrasonografía donde se le diagnosticó probable displasia renal. Se le aplicó eutanasia con sobredosis de pentobarbital. Análisis de laboratorio Hemograma: Sin alteraciones Perfil bioquímico se apreció hiperazotemia de tipo renal con hiperfosforemia e hipercolesteronemia. Urianálisis: La densidad urinaria se encontró en 1.021 (por debajo del punto crítico). Patología macroscópica Los principales hallazgos a la necropsia fueron: condición corporal regular, y mucosas pálidas. A la inspección interna los riñones estaban disminuidos de tamaño, ligeramente redondeados. El riñón izquierdo midió 3 cm y el derecho 3.5 cm en su eje mayor. Ambos riñones eran firmes y amarillos pálidos. Al corte la pelvis renal estaba discretamente dilatada. Los pulmones no colapsaron, eran rojo oscuro difusamente y brillantes. Histopatología Riñón: En la corteza, los glomérulos exhiben material globular eosinofílico en el espacio urinario. Este material también se observa en la luz de los túbulos renales. Algunos glomérulos están ligeramente retraídos e hipercelulares y otros muestran hiperplasia de las células mesangiales. En el intersticio hay escasos focos de linfocitos. En algunas zonas de la corteza y en toda la médula, a nivel del intersticio, hay abundante estroma mesenquimal hipercelular, no diferenciado, conformado por células fusiformes, el cual rodea a los túbulos. Dichos túbulos en la médula son primitivos, algunos distendidos 41 y tortuosos, revestidos por epitelio cúbico alto y columnar atípico, que en varios túbulos oblitera su luz. En el interior de varios de estos túbulos hay abundante material basofílico refringente y escasos cristales hialinos. Tanto en el intersticio de la corteza y médula hay escaso tejido conectivo fibroso. Diagnósticos morfológicos 1.-Riñón Displasia renal bilateral o Nefritis linfocítica y fibrosis intersticial leve multifocal con mineralización marcada zonal. Interpretación Las lesiones macroscópicas y microscópicas junto con los análisis clínicos sugieren que el animal cursó con insuficiencia renal aguda debido a ésta anomalía congénita. Se define como displasia renal a cualquier anormalidad del desarrollo que ocasione una alteración de la organización estructural como resultado de una diferenciación anormal en la nefrogénesis. Se han descrito casos en gatos causados por la infección fetal con panleucopenia felina. 42 CASO 9 Reseña: Especie: Canis lupus familiaris (Perro); raza: Bull Terrier; género: hembra; edad: 13 años; peso 17 kg; identificación o nombre: Yara. Historia Clínica Paciente remitida al HVE de la FMVZ-UNAM. Clínicamente presentó vómitos, 3 meses antes presentó una úlcera gástrica. Análisis de laboratorio No se le realizaron pruebas clínicas. Patología macroscópica Los principales hallazgos a la necropsia fueron: condición corporal regular y mucosa oral ligeramente ictérica con presencia de 2 ulceras de aproximadamente .5 cm en el labio superior y 2 más en el borde de la lengua. A la inspección interna se apreció moderada congestión pulmonar y edema en tráquea. En la cavidad abdominal se recolectaron aproximadamente 500 ml de líquido serosanquinolento. La superficie de ambos riñones era café oscuro de aspecto granular y presentaba fino puntilleo blanco difuso. Al corte se observaron moderadamente pálidos y la corteza presentó aspecto granular. Se tomaron muestras de riñones, pulmón y lengua. Histopatología Riñón: En el intersticio se aprecia infiltrado inflamatorio compuesto principalmente por linfocitos y células plasmáticas, adyacente a estas áreas se aprecia proliferación de tejido conectivo. Algunos glomérulos se observan retraídos o sustituidos por material eosinofílico acelular (glomeruloesclerosis) con depósito de material basofílico en la capsula glomerular, mismo que también se observa rodeando los túbulos (mineralización). El epitelio tubular se observa desprendido de la membrana basal y presenta citoplasma intensamente eosinofílico y granular (necrosis tubuloréctica). Pulmón: Las paredes alveolares se observan degeneradas y los espacios alveolares se observan gravemente ocupados por abundantes eritrocitos, material eosinofílico acelular claro y hebras eosinofílicas consistentes con 43 fibrina (edema y congestión). Multifocalmente se observan restos celulares en el intersticio (necrosis), así como infiltrado inflamatorio compuesto principalmente por linfocitos y neutrófilos degenerados. Lengua: Se observa un área de pérdida de la continuidad del epitelio reemplazada por restos celulares (necrosis) y moderado infiltrado inflamatorio compuesto principalmente por neutrófilos. Diagnósticos morfológicos 1.-Riñón Nefritis intersticial linfoplasmocítica grave multifocal con fibrosis moderada difusa. Degeneración tubular moderada difusa. Glomeruloesclerosis leve multifocal. Mineralización leve multifocal. 2.-Pulmón Neumonitis linfocítica y neutrofílica grave multifocal con congestión y edema grave difuso. 3.-Lengua Glositis ulcerativa y necrótica moderada multifocal. 4.-Intestino Enteritis ulcerativa grave focal con presencia de tejido de granulación. Interpretación Las lesiones macroscópicas y microscópicas encontradas sugieren que el animal curso con una falla orgánica multisistémica desencadena por la insuficiencia renal crónica. 44 CASO 10 Reseña: Especie: Canis lupus familiaris (Perro); raza: Cocker Spaniel; género: macho; edad: 5 meses; peso 2 kg; identificación o nombre: Anoxi Historia clínica Paciente remitida a clínica veterinaria no referida. Inicialmente presento anorexia y letargia, dos meses más tarde presento perdida de peso, ascitis, vómito, diarreas y finalmente poliuria y polidipsia. Al examen físico se palparon diversas masas en cavidad abdominal. Análisis de laboratorio A éste paciente no se le realizaron pruebas clínicas. Patología macroscópica Los principales hallazgos a la necropsia fueron mucosas pálidas. A la inspección interna se apreció edema pulmonar. Ambos riñones tenían forma irregular, con presencia de lóbulos, el 90% de la corteza presentó múltiples quistes de 0.1 a 0.2 cm que contenían líquido traslucido, al corte dichos quistes se continuaban hasta la médula. El hígado estaba aumentado de tamaño, abarcando el 70% de la cavidad abdominal, con los bordes redondeados. Presentó áreas de color amarillo claro, con depresión en las mismas áreas (apariencia de nuez moscada) al corte presentó quistes de 0.2 a .5 cm de diámetro. Se tomaron muestran de riñón, hígado y pulmón. Histopatología Riñón: Se aprecian numerosos quistes de distintos tamaños, los cuales sustituyen y comprimen el parénquima renal, se encuentran interconectados por proliferación de tejido conectivo fibroso, así mismo estos quistes están revestidos por epitelio simple plano. En el intersticio se aprecian áreas de mineralización refringentes. Hígado: Se observa marcada proliferación de conductos biliares, algunos de los cuales se encuentran dilatados formando dilataciones quísticas, el epitelio 45 que los reviste se convierte en simple plano. La mayoría de estos conductos se encuentran conectados por proliferación de tejido conectivo fibroso. Pulmón: Los septos alveolares están engrosados por numerosos eritrocitos, el intersticio alveolar se observa ocupado por material eosinofílico acelular (edema). Diagnósticos morfológicos principales 1.-Riñones poliquísticos Fibrosis intersticial grave multifocal 2.-Hígado: Colestasis grave multifocal, con presencia de quistes y fibrosis grave multifocal. 3.-Pulmon: Congestión y edema leve difusa Interpretación Con base en los hallazgos macroscópicos y microscópicos, se sugiere que el paciente cursó con Poliquistosis renal y hepática congénita. La compresión de las dilataciones quísticas en el parénquima renal y hepático provoca la disfunción de las nefronas y de los hepatocitos, causando hepatomegalia y falla renal. 46 De los 10 casos seleccionados: Los signos clínicos más comunes encontrados son: anorexia, vómito, diarreas pérdida de peso, letargia, poliuria, polidipsia y deshidratación. En cuanto a la edad, 6 de los animales eran mayores de 10 años, 2 de ellos se encontraban en 7 -10 años y 2 de ellos eran menores al año. Esto es compatible con el hecho sabido de que la insuficiencia renal afecta tanto a perros y gatos de todas las edades, pero en su mayoría a animales adultos (Bartges y Polzin, 2011). Del total de casos seleccionados, 8 de ellos contaron con pruebas clínicas; en el hemograma, 6 pacientes presentaron anemia no regenerativa, mientras el resto no sufrió alteraciones. En cuanto al perfil bioquímico, los ocho pacientes presentaron hiperazotemia de tipo renal. Para los dos casos que no contaron con pruebas clínicas, los pacientes fueron diagnósticos por la gravedad de las lesiones macroscópicas y microscópicas, además de los signos clínicos. Las lesiones histopatológicas renales mostradas con mayor frecuencia son: El 80 % del total de todos los casos cursó con fibrosis intersticial de moderada a grave. El 70 % de todos los casos cursó con nefritis intersticial linfoplasmocítica de leve a grave. El 40% de todos los casos cursó con mineralización en la membrana basal tubular y capsula de Bowman. El 30 % de todos los casos cursó con necrosis tubular. El 30 % de todos los casos cursó con dilatación quística y tubular. EL 30% de todos los casos cursó con glomeruloesclerosis. EL 20% de todos los casos cursó con degeneración tubular. El 20% de todos los casos cursó con glomerulonefritis membranoproliferativa. EL 30% de todos los casos cursó con pielonefritis, hemorragia grave y necrosis no túbulo réctica. 47 Las lesiones histopatológicas extrarrenales encontradas con mayor frecuencia, son: Edema pulmonar. Glositis ulcerativa. Mineralización de tejidos blandos. Enteritis y gastritis ulcerativa. Hiperplasia de paratiroides. Ascitis. Degeneración astrocítica. 48 Lesiones histopatológicas renales FIGURA 2.-Fibrosis intersticial grave difusa FIGURA 3.-Nefritis intersticial linfoplasmocítica FIGURA 4.-Mineralización de membranas basales FIGURA 5.-Necrosis tubular FIGURA 6.-Dilatación quística glomerular FIGURA 7.-Dilatación quística tubular 49 FIGURA 8.- Glomeruloesclerosis (Tricrómica de Masson) FIGURA 9.- Glomerulonefritis FIGURA 10.- Pielonefritis FIGURA 11 .- Necrosis renal no túbulo-réctica. 50 Lesiones histopatológicas extrarrenales FIGURA 12.- Edema pulmonar FIGURA 14.- Mineralización de tejidos blandos FIGURA 13.- Glositis ulcerativa zonal FIGURA 15.- Hiperplasia de paratiroides FIGURA 16.- Degeneración astrocítica 51 7. CONCLUSIONES La insuficiencia renal crónica es uno de los padecimientos que se presentan en la clínica cuando ya se encuentra muy avanzada, por lo que es necesario que el médico tenga los conocimientos y herramientas suficientes para detectarla con prontitud y para prolongar la vida del paciente bajo la premisa de una calidad aceptable. En el Departamento de Anatomopatología de la FMVZ-UNAM, durante el periodo de enero del 2012 a agosto del 2013 se realizaron un total de 1059 necropsias, de las cuales 773 necropsias equivalentes al 73% correspondieron a pequeñas especies; 675 (87.32 %) perros y 98 (12.67%) felinos domésticos. De las 773 necropsias en pequeñas especies, se diagnosticaron 31(4.01%) casos cuya causa de muerte se relacionó con insuficiencia renal grave. De los 31 casos, 10 casos fueron seleccionados por que cumplieron con los criterios de inclusión mencionados previamente para su análisis. A través de los hallazgos en los 10 casos clínicos anteriores, es conveniente considerar que la histopatología nos lleva a encontrar las lesiones que se consideran causantes de la insuficiencia renal. Si bien, la histopatología es una herramienta que nos permite identificar lesiones en diversos tejidos, en la mayoría de los casos no fue posible llegar a un diagnóstico confiable, dado que para un diagnóstico integral, no se corrieron análisis bacteriológicos, virológicos o de inmunohistoquímica. Con la ayuda de éstos sería posible considerar cual fue o pudieron ser los agentes etiológicos que inicialmente desencadenaron las lesiones encontradas por histopatología. 52 8. RECOMENDACIONES Sería conveniente incluir el uso de diversas técnicas de diagnóstico como los estudios de virología, bacteriología e inmunohistoquímica junto con la histopatología, así como un historial clínico más completo, para obtener suficientes evidencias que permitan establecer un diagnóstico integral. Es conveniente considerar también qué en la práctica clínica veterinaria, se dificulta mucho, tanto por costos como por operatividad, la aplicación de procedimientos diagnósticos que son muy valiosos para la temprana detección de alteraciones en el funcionamiento renal. 53 9. LITERATURA CITADA Arthur J.E, Lucke V.M, and Bourne F.J. 1986. The long-term prognosis of feline membranous glomerulonephropathy. Journal of the American Animal Hospital Association, 22: 353-359. Bainbridge J. 2005. Manual de Nefrología y Urología en pequeñas especies. Ediciones Barcelona Pp. 61-78. Bartges J and D. Polzin. 2011a. “Chronic Kidney Disease”. In: Nephrology and Urology of Small Animal. Blackwell, Iowa. pp 433-471. Bartges J. and Polzin D. 2011b. “Acute Renal Failure”. In: Nephrology and Urology of Small Animal. Blackwell Iowa. Pp 472-515. Bink R. 1992. Acquired platelet function defects. Hematological Oncology Clinics of North America, 6: 203-208. Bourgeois H. 2007. 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