NÚMERO 13/SÁBADO 14 DE ABRIL DE 2007 N A T U R A EL MUNDO TECNOLOGÍA Los satélites vigilan la salud del planeta desde el espacio Controlar las transformaciones que sufre la Tierra desde las alturas es imprescindible para gestionar catástrofes naturales y entender algunos de los problemas científicos más acuciantes, como el cambio climático. Desde hace décadas, diversos satélites estudian las constantes del planeta, aportando datos de extraordinario valor. Estas tecnologías cobran cada vez más importancia y nuestro país no es ajeno a ello. España, que participa en varios proyectos internacionales, acaba de construir la carga útil del satélite ambiental europeo SMOS, que se lanzará a finales de 2007 y observará los océanos y continentes. El valor de las imágenes que toman los satélites no es sólo científico, sino también estético. Prueba de ello es que la NASA ha iniciado una campaña de divulgación llamada La Tierra como Arte para dar a conocer algunas de las más bellas imágenes de nuestro planeta visto desde el espacio. En este número reproducimos las más espectaculares, captadas por los satélites Landsat 7 y Terra. / PÁGINAS 10 Y 11 G FAUNA Los buitres ibéricos G se quedan sin alimento debido a la ley que obliga a retirar los cadáveres de animales del campo a raíz del mal de las ‘vacas locas’ PÁGINAS 16 Y 17 G VIDA SANA La carne ecológica G se alza como una alternativa creciente que no sólo es más saludable sino que además contribuye a mantener el paisaje PÁGINAS 28 Y 29 G RELATO El ganador del último G Premio Cervantes, el poeta Antonio Gamoneda, critica el deterioro del medio natural en un relato inédito escrito para NATURA PÁGINA 31 ➔ COCHES G LIMPIOS Híbridos, biocombustibles y conducción eficiente son las claves para emitir menos MIGUEL G. CORRAL ¿Quién no desea poder moverse en coche sin pensar que está contribuyendo a calentar el planeta? En los últimos años, varias tecnologías nuevas ofrecen la posibilidad de reducir las emisiones del transporte privado. Sin embargo, no siempre es fácil saber qué coches hay en el mercado con estas características o qué combustible JAMES LOVELOCK Nunca ha sido un científico normal. Lleva 42 años investigando solo en su propio laboratorio situado en la casa de campo en la que vive en medio de la Inglaterra más rural. Del trabajo que ha realizado allí ha salido una de las propuestas se puede echar al vehículo para reducir el cambio climático. Los coches híbridos, que incluyen un motor eléctrico, son ideales para reducir el consumo y las emisiones hasta en un 40%, sobre todo en ciudad. Para el que no pueda cambiar de vehículo pero quiera reducir sus emisiones de CO2, los biocombustibles le ofrecen la posibilidad de hacerlo. científicas más geniales de la ciencia moderna: la Hipótesis Gaia, que propone al planeta como un sistema capaz de autorregularse. Ya antes, Lovelock descubrió el efecto de los aerosoles sobre la capa de ozono, colaboró con la NASA en las misiones a Marte e hizo algunos inventos de alta tecnología con los cuales financia su trabajo. «EL ÁRTICO SE CONVERTIRÁ EN TROPICAL» Además, existen cursos de conducción eficiente que enseñan a reducir el consumo de los nuevos motores. ¿Cómo serán los coches en el futuro? Nadie lo sabe con certeza. La tecnología del hidrógeno aún presenta algunos problemas, pero los expertos coinciden en que es la mejor alternativa al petróleo. / PÁGINAS 2 A 6 Ahora, a sus 87 años, lanza en España su nuevo libro –La venganza de la Tierra (Planeta)– para alertar sobre las consecuencias que tendrá la acción del hombre sobre el planeta. «La temperatura del Ártico subirá ocho grados y la de los trópicos, cinco. En otras palabras, el Ártico se convertirá en tropical». / PÁGINAS 8 Y 9 N2 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O P R I M E R TRANSPORTE LIMPIO ➔ P L A N O LAS TECNOLOGÍAS COCHES SIN MALOS HUMOS ¿Qué vehículo puede ser más eficaz en la lucha contra el cambio climático? MIGUEL G. CORRAL Milán / Madrid o es fácil imaginar lo que nos vamos a encontrar después de bordear el lago Maggiore, bajo la mirada de las nevadas cimas de Los Alpes, y tras cruzar los densos bosques de coníferas de Ispra (Italia). A medio camino entre Milán y la frontera suiza, la carretera nos conduce hacia un protegido control policial. Un cartel advierte de que estamos entrando en el Joint Research Center (JRC, Centro Común de Investigación), el lugar donde se realizan las actividades de investigación de la Comisión Europea y desde el que se hacen las recomendaciones científicas oportunas a las autoridades políticas de la UE. En uno de los edificios de este enorme complejo integrado en el bosque está el VELA (Laboratorio para las Emisiones de Vehículos). Nada más cruzar la puerta principal del laboratorio nos sorprende la imagen de un señor de edad avanzada con auriculares en las orejas y vestido con bata blanca conduciendo una scooter sobre un simulador mientras sus colegas llenan de tubos los escapes y el motor de la pequeña motocicleta. «Nuestra labor es hacer análisis de emisiones de todos los vehículos que circulan por la UE», dice Alois Krasenbrink, científico del VELA. «Comparamos vehículos, circunstancias de conducción y carburantes y aditivos. Gracias a estas pruebas sabemos, por ejemplo, que cada litro de gasolina emite 2,35 kilogramos de CO2, mientras que cada uno de gasóleo produce 2,64 kilos. Pero aún así los diésel emiten menos CO2 porque consumen menos litros haciendo la misma distancia». La preocupación por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero ha sido una constante en la política europea de los últimos años. Pero, hasta ahora, nadie le había puesto límites a las emisiones del transporte, a pesar de que «produce casi la tercera parte de todos los productos tóxicos y del CO2 emitidos a la atmósfera», según aseguró el comisario europeo de Ciencia e Investigación, Janez Potocnik, durante el ciclo de conferencias Transporte y Medio Ambiente: Un desafío global organizado por la Comisión Europea y que tuvo lugar en Milán el pasado mes de marzo. Tras la publicación de la primera parte del informe del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC) el pasado febrero en París, las actuaciones se han concretado y cada vez existen más normas que restringen las emisiones en todos los sectores. Hace algo más de un mes el Parlamento Europeo propuso una nueva medida para obligar a los fabricantes de coches a reducir las emisiones de CO2 hasta alcanzar, antes de 2012, una media de 130 gramos por kilómetro recorrido, desde los 163 gramos que emiten de media los vehículos fabricados en Europa en la actualidad. Los avances tecnológicos necesarios para cumplir con la nueva normativa traen de cabeza al sector de la automoción. Parte del trabajo del Laboratorio para las Emisiones de Vehículos es investigar nuevas formas de reducir el consumo de carburante y las emisiones de CO2. Allí han realizado mediciones en coches convencionales, híbridos, vehículos que queman biocombustibles e incluso coches eléctricos. Sin embargo, no existe una sola tecnología que, por el momento, solucione todos los problemas de emisiones a los que nos enfrentamos a un precio razonable. «Para reducir de forma drástica las emisiones del sector del transporte necesitamos voluntad política y desarrollo científico», asegura el director del VELA, Giovanni de Santi. Si los científicos no han logrado aún averiguar cuál es la mejor opción para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, ¿cómo va a poder decantarse por uno u otro modelo un ciudadano que pretenda cambiar de coche? NATURA le ayuda a conocer las diferencias entre las tecnologías que existen en la actualidad en el mercado y a saber qué beneficios ambientales ofrecen. Los motores híbridos, los flexibles, los vehículos que se mueven con biocombustible, los eléctricos y los de hidrógeno van a dejar de parecerle lejanos. Los coches sin malos humos ya están en las calles. N 14/ABRIL 2007 CÓMO FUNCIONA UN MOTOR HÍBRIDO Los vehículos híbridos combinan un motor de gasolina y un motor eléctrico. Esta combinación y el uso de estrategias diversas permiten el ahorro de hasta el 40% de combustible en los híbridos integrales. EL APROVECHAMIENTO DE LA ENERGÍA Batería Motor Motor de eléctrico gasolina Batería Rueda Encendido Se produce con el motor eléctrico y con la energía almacenada en la batería. Motor de Motor eléctrico gasolina Rueda Batería Motor de Motor eléctrico gasolina Batería Motor Motor de eléctrico gasolina Rueda Rueda Aceleración total Deceleración Parado La energía la suministra tanto el motor eléctrico como el motor de explosión. La salida de energía se eleva al máximo para dotar al vehículo de una aceleración muy potente. El motor eléctrico funciona como un generador durante la deceleración y el frenado. La energía regenerada se usa para recargar la batería. Al frenar hasta detener el vehículo, el motor de gasolina se apaga y el eléctrico conduce el vehículo hasta una frenada suave. El sistema evita el derroche para ahorrar gasolina y parar la emisión de CO2. Conducción normal El sistema de gestión controla el motor de gasolina y el eléctrico para obtener un nivel óptimo de eficiencia. La batería se va recargando durante la marcha. FUENTE: ‘Investigación y Ciencia’, ‘Time’, Lexus, Toyota y Honda. VEHÍCULOS HÍBRIDOS Los coches que combinan un motor de gasolina convencional con uno eléctrico pueden reducir el consumo de gasolina un 40% G Mecánicas más eficientes. Los vehículos híbridos funcionan combinando el uso de un motor de gasolina con el de un motor eléctrico impulsado por potentes baterías. Éste funciona solo mientras el coche está iniciando la marcha y cuando alcanza velocidad el motor de gasolina se enciende y ambos funcionan aportando potencia a las ruedas. Los vehículos normales consumen de 0,5 a 0,7 litros de combustible por hora cuando están en un semáforo. Así que sólo con este pequeño detalle se ahorra el 15% del combustible que se gasta circulando por ciudad. Además, el motor eléctrico recarga las baterías recuperando la energía que se genera durante la frenada. De esta manera el motor resulta mucho más eficiente ya que aprovecha una energía que los vehículos convencionales desperdician. En los vehículos híbridos la potencia del motor de gasolina no es tan importante, porque el motor eléctrico aporta casi la mitad de los caballos necesarios para mover el coche. Así que llevan motores de tipo Atkinson, que generan menos potencia que los normales, pero que reducen el consumo de combustible y la emisión de CO2. G Reducción del consumo. Las mecánicas de gasolina y eléctricas combinadas pueden reducir el consumo de combustible y las emisiones de gases de efecto invernadero un 40%. Pero para poder lograrlo hay que ser consciente de las características del vehículo. Según los expertos del Laboratorio para las Emisiones de Vehículos del JRC, los vehículos híbridos resultan eficientes y ahorradores en condiciones de conducción urbana, pero no lo son tanto en carretera, donde los vehículos diésel convencionales son los que menos combustible consumen, y por tanto los que menos emisiones de CO2 producen. La contrapartida está en que los diésel son los que emiten a la atmósfera una mayor cantidad de contaminantes, que no son tan dañinos para el clima, pero que resultan tóxicos para el hombre. G Modelos en el mercado. En el mercado español se pueden comprar cuatro modelos de vehículos híbridos. Las marcas Toyota y Honda, con los modelos Prius y Civic Hybrid, ofrecen coches de tamaño medio y con las menores emisiones de CO2 por kilómetro del mercado, con 104 y 109 gramos de dióxido de carbono por kilómetro recorrido respectivamen- te, más de 20 gramos por debajo de los límites medios fijados por la UE para 2012. La marca de coches de lujo Lexus ofrece los otros dos híbridos para quien se los pueda permitir. Los modelos GS 450H, una berlina de gran tamaño y potencia, y RX 400H, un todoterreno de lujo, completan, por el momento, la oferta de vehículos híbridos comerciales en España. El consumo y las emisiones de estos dos coches de lujo están por encima del límite medio fijado por Bruselas para dentro de cinco años, pero están muy por debajo de los que tienen los vehículos de las mismas características y motores convencionales. La gran desventaja de los coches híbridos es el precio. Uno de estos vehículos cuesta de 3.000 a 5.000 euros más que sus competidores de gasolina o gasóleo. Uno de los autobuses públicos híbridos que funcionan en Londres. / SHAUN CURRY / AFP EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O P R I M E R TRANSPORTE LIMPIO ➔ P L A N O LAS TECNOLOGÍAS VENTAJAS PARA EL MEDIO AMBIENTE En los coches no híbridos, la climatización, la dirección asistida, etc. son alimentadas por las partes giratorias del motor. Las baterías mayores de los coches híbridos alimentan directamente estos componentes ahorrando energía. Materiales reciclados Algunos componentes (salpicadero, moquetas, etc.) del interior están fabricados con ecoplástico, un material procedente del reciclado de plásticos usados. TOYOTA PRIUS Generador eléctrico. Motor eléctrico de 68 caballos. Divisor de potencia (parte de la transmisión). Coches híbridos Modelos de vehículos que se pueden comprar en España. -,- --Consumo Emisiones l/100 km. CO2 (gr/km) Toyota Prius Motor de explosión Atkinson de bajo consumo de 4 cilindros y 78 caballos. Lexus GS 450 H 7,9 186 Unidad de control de potencia. Kilómetros que pueden recorrer con 50 litros de combustible Vehículo gasolina 50 l 4,3 104 Honda Civic Híbrido 4,6 109 Motor híbrido eficiente Cuando el vehículo se para, el motor se apaga y la propulsión queda a cargo del motor eléctrico y la batería. Lexus RX 400 H 500 Vehículo diésel 750 Híbrido 750 Banco de baterías de níquel e hidruro metálico. 8,1 192 Depósito de gasolina. Isabel González / EL MUNDO BIOCOMBUSTIBLES se redujeran en un 90% las emisiones de CO2. Y el biodiésel de aceites vegetales al 100% lo haría en un 91%. Funcionan como los convencionales, pero sus emisiones no aumentan la cantidad total de CO2 en la atmósfera G El crecimiento de los biocombustibles. Los bio- G ¿Gasolina de las plantas? Igual que la gasolina y el gasóleo se obtienen de forma diferente, sus sustitutos vegetales tampoco provienen de las mismas plantas. El etanol, cuyo uso reduciría el consumo de gasolina, se obtiene de los cereales o de las plantas ricas en derivados de la glucosa. Por ejemplo, en EEUU se utiliza el maíz, mientras que en Brasil se hace de caña de azúcar. El biodiésel, en cambio, se obtiene de plantas oleaginosas, como el girasol, la soja o la colza, o incluso reciclando los aceites vegetales ya usados. Un reciente estudio realizado por el Ciemat aporta datos sobre la reducción de emisiones que supondría en España el uso de biocombustibles. El uso de un 85% de bioetanol mezclado con la gasolina convencional permitiría que EL ABC DE LOS COMBUSTIBLES VERDES 1 ¿Por qué es mejor para el clima un biocombustible que uno normal? Los biocarburantes también emiten CO2, pero ese carbono es el mismo que las plantas han absorbido en su crecimiento. De esta forma el CO2 está en un ciclo en el que la cantidad total del gas en la atmósfera no varía. Por el contrario, el carbono de las fuentes fósiles ha estado millones de años capturado en las capas internas de la Tierra y sí incrementa la cantidad de este gas en la atmósfera. 2 ¿Mi coche de gasolina puede usar bioetanol? Todos los vehículos de gasolina actuales pueden usar mezclas de bioetanol de hasta un 10% sin hacer ningún cambio en el motor. Para poder utilizar mezclas con porcentajes superiores es necesario disponer de un vehículo flexible que admita mezclas de hasta un 85% de bioetanol. En España, Ford ya vende coches de este tipo. 3 ¿Puedo echarle biodiésel a mi nuevo vehículo con motor diésel? Sí. Todos los vehículos de gasóleo fabricados en los 10 últimos años pueden usar biodiésel en cualquier porcentaje, incluso al 100%. 4 ¿Dónde puedo repostar este tipo de carburantes vegetales? En la actualidad hay en España 300 estaciones de servicio que dispensan biodiésel. Pero todavía no se puede repostar bioetanol en ninguna gasolinera porque los productores no fabrican mezclas de este carburante con gasolina. En la página web www.energiasrenovables.com se pueden consultar las biogasolineras de nuestro país por comunidades autónomas. 5 ¿La gasolina actual está mezclada con bioetanol? No está mezclada, pero sí contiene un máximo de un 5% del aditivo ETBE que se obtiene de la mezcla de bioetanol y un subproducto de la destilación del petróleo y que usan las petroleras para fabricar gasolinas convencionales. El Gobierno está preparando una ley llamada de «obligación de biocarburantes» que obligue a los productores a incorporar un porcentaje mínimo de bioetanol y biodiésel en los combustibles normales. 6 N3 14/ABRIL 2007 ¿Son más caros los biocombustibles que los carburantes convencionales? El precio de producción de los biocombustibles es aún un poco más alto que el de los carburantes derivados del petróleo, pero el precio para el consumidor es muy parecido en ambos casos debido a que los combustibles bio están exentos del impuesto de hidrocarburos con el que se grava a los carburantes convencionales. combustibles están cobrando una gran importancia en unos años en los que el petróleo ha pasado de valer 18 dólares en 2002 a 78 en 2006. Prueba de ello es el acuerdo estratégico que firmaron en marzo los presidentes de EEUU, George W. Bush, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, para cooperar tecnológicamente para producir bioetanol. En Europa, tampoco se ha dejado pasar la oportunidad de reducir las emisiones de CO2. La UE obligará a sus miembros a que el 10% del total de carburantes consumidos sean biocombustibles antes de 2020. En España tenemos un objetivo intermedio marcado por el Plan de Energías Renovables: en 2010 el 5,83% de los combustibles tendrá que ser de origen vegetal. Aunque nuestro país es el mayor productor de bioetanol de Europa, casi todo se exporta a países como EEUU o Suecia. El consumo nacional es del 1,57% del total de gasolinas, lejos de los objetivos marcados por la UE. G Cultivos no comestibles. Uno de los problemas de los biocombustibles es la posible repercusión que puede llegar a tener la producción de carburantes sobre los productos alimenticios si continúa el aumento del consumo de combustibles. Para evitar este problema, los expertos ya empiezan a manejar formas de producir con las partes no comestibles de los cultivos. HIDRÓGENO La mejor alternativa para olvidar las emisiones del petróleo, según los expertos «A la tecnología de los motores de hidrógeno todavía le falta superar algunos problemas para poder estar en los mercados de vehículos comerciales, pero estoy segura de que mi hijo conducirá uno dentro de 20 años. El hidrógeno será el sustituto del petróleo», afirma convencida Marieke Reijalt, directora de la Asociación Europea del Hidrógeno. Todavía no se pueden comprar coches de hidrógeno en España, pero un buen número de fabricantes ya tienen prototipos que funcionan en condiciones reales. Incluso hay flotas de autobuses urbanos impulsados con este gas, que no genera ninguna emisión aparte de vapor de agua, en ciudades como Madrid, Bilbao o Barcelona. Los coches de hidrógeno tienen actualmente dos grandes problemas para llegar al público en condiciones competitivas: el precio, que es todavía muy alto, y la falta de disponibilidad de estaciones de servicio que permitan recargar el combustible. Algunos fabricantes de coches como Honda, BMW o Chevrolet han apostado por los vehículos de hidrógeno. Entre finales de 2007 y 2008 sacarán en EEUU y Japón pequeñas flotas de vehículos para alquilar que les servirán como prueba definitiva para lanzarse a los mercados internacionales de vehículos comerciales con una alternativa firme para el petróleo. El modelo que prepara BMW dispone de dos sistemas de alimentación, uno de hidrógeno y otro de gasolina, que le permitirán moverse con combustibles fósiles cuando no sea posible repostar hidrógeno. La casa alemana propone esta tecnología como transición entre la era del petróleo y una posible del hidrógeno. Precisamente para facilitar ese cambio de paradigma, algunas petroleras como Agip han comenzado a construir estaciones de servicio mixtas que dispensen combustibles fósiles e hidrógeno. «No sabemos qué tecnología será la que nos permita liberarnos del petróleo y combatir el cambio climático», dice Reijalt, «pero es indudable que el hidrógeno es la única alternativa que tenemos con emisiones cero, si conseguimos que se produzca con fuentes renovables como la solar o la eólica. De nada nos serviría producirlo con petróleo y seguir emitiendo CO2». Quedan siete meses El transporte genera el 30% de las emisiones de CO2. Cuestiones como ésta estudia el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático de la ONU (IPCC), que acaba de presentar el día 5 la segunda parte de su IV Informe. Los cientos de expertos de la ONU se reunirán en noviembre en Valencia para dar las conclusiones finales a los gobiernos. El documento de Valencia será una suerte de hoja de ruta con la que trabajarán los jefes de Estado en la cumbre de la ONU sobre Cambio Climático que se celebrará en Bali en diciembre de 2007. N4 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O P R I M E R TRANSPORTE LIMPIO ➔ 14/ABRIL 2007 P L A N O EL AHORRO ¿Te gusta conducir? Sí, pero con cabeza PEDRO URTEAGA i algo nos vende la publicidad de automóviles, además de difusas promesas de éxito en la vida y en el amor, es la experiencia de disfrutar al volante. Pero las ciudades se hallan cada vez más congestionadas de tráfico y las limitaciones de velocidad imperantes difícilmente permiten generar adrenalina, así que en estas circunstancias el placer de conducir ha quedado en poco más que un reclamo comercial. Metido en un atasco, no se puede aspirar a más que estar cómodo en el asiento y que la radio funcione. Hay que tener muy atrofiada la conciencia medioambiental para negar las virtudes de modelos como el Honda Civic Hybrid y el Toyota Prius en el tráfico urbano. Cada parada en un semáforo o en una retención, que con un coche normal equivalen a consumo y contaminación improductivos, suponen en éstos emisiones cero y silencio total, dado que su pequeño motor de explosión se para hasta reiniciar la marcha. La ausencia de ruido es precisamente el factor que más choca al conducir por primera vez un coche híbrido. Al pulsar el botón de arranque, no hay indicio alguno de que todo está dispuesto para ponerse en movimiento, salvo la palabra Ready que se ilumina en el cuadro de instrumentos. En la misma proporción en que crece la velocidad lo hacen el consumo –y por tanto las emisiones– y el ruido; es decir, sus cualidades se desvanecen. No así las del Lexus GS 450h, que se comporta en carretera con la S AJUBEL EFICIENCIA EL ARTE DE AHORRAR Cursos de conducción ‘ecológica’ como los que imparte la Comunidad de Madrid ayudan a reducir el consumo de combustible un 20% y a ahorrar hasta 500 euros MIGUEL G. CORRAL o es necesario hacer un curso para saber que conducir como un macarra no beneficia ni al clima ni a la seguridad vial ni al bolsillo. Pero a nadie le vendría mal una ayudita para lograr que su coche consuma menos y ahorrar así algo de dinero y evitar emisiones innecesarias a la atmósfera. La idea surgió en varios países del norte de Europa cuando los motores de los vehículos cambiaron la carburación por la inyección. La forma habitual de conducir de los ciudadanos hacía que los coches consumiesen más combustible del que debían. «Los holandeses lo bautizaron como cambiar el estilo de conducción», recuerda Juan Larrazábal, del departamento de Transporte del IDAE. «Cada litro de gasolina gastado suponía 2,35 kilogramos de CO2 más en la atmósfera». Tenían que reenseñar a conducir a sus ciudadanos. Así surgieron hace 10 años los cursos de conducción eficiente, como los 5.000 gratuitos que ha puesto en marcha la Comunidad de Madrid, junto con el Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) y con el IDAE. No cuestan ni un euro a quien desee realizar uno y no le llevará más de una mañana. A cambio le permitirá ahorrar- N se hasta 500 euros al año en combustible para su vehículo. Suena bien, ¿no? «Con el curso se pretende que cada uno pueda ver la diferencia que hay entre conducir como lo hace habitualmente y hacerlo siguiendo unos criterios sencillos de conducción eficiente», dice Gema Barrios, instructora del RACC. La clase comienza montando a los recién llegados en un coche equipado con un ordenador de a bordo que mide la distancia recorrida, la velocidad media, el consumo medio de combustible y el tiempo. Los alumnos hacen un recorrido por ciudad y autopista conduciendo como lo suelen hacer y ven cuánto combustible han gastado. Después reciben una clase teórica y vuelven a hacer el mismo recorrido conduciendo con marchas largas, cambiando a bajas revoluciones y utilizando el acelerador como les indican los instructores. Y calculan cuánto podrían ahorrar conduciendo de forma eficiente si hicieran con su vehículo 20.000 kilómeEMISIONES DE LOS TURISMOS tros al año. En gr. cada 100 km. «Hay de todo», 0,9 Gasóleo cuenta Barrios. 0,7 «Algunos reduci0,5 Gasolina rían el gasto sólo 0,3 20 euros al año, 0,1 pero hay otros 20 40 60 80 100 120 140 que se ahorraKm/h. rían hasta 500». EL MUNDO Como término medio un conVELOCIDAD MÁXIMA: 90 ductor normal puede evitar caGLimitación en Bélgica. El Gobierno belga ha reducido recientemente la da año un gasto velocidad máxima por autopista y autovía a de 250 euros en 90 kilómetros por hora para tratar de el combustible de mejorar la calidad del aire. El Benelux y el su coche. Esto norte de Italia son las zonas con más supone una recontaminantes en el aire de toda Europa. ducción del conGLas menores emisiones, a 80. Según sumo de alredelos expertos, los motores de combustión dor de un 20%. modernos, tanto diésel como de gasolina, Además, las emitienen a 80 kilómetros por hora el punto siones de gases de menor emisión de gases nocivos. A de efecto inverpartir de ahí, un aumento de la velocidad nadero y de otros provoca un incremento exponencial del productos nociCO2 expulsado a la atmósfera. vos para la salud también se reducen en el mismo porcentaje, ya que dependen directamente de los litros consumidos por el vehículo. «Las medidas que sirven para reducir el consumo y las emisiones también son adecuadas para mejorar la seguridad vial», asegura Juan Larrazábal. Por ello, tan importante como educar a los conductores es que las autoesculelas enseñen a conducir de forma eficiente a los noveles. Algunos ejemplos Las medidas que se enseñan en los cursos de conducción ecológica no son complicadas. Para reducir el consumo basta con cambiar de marcha a 1.500 revoluciones en los coches diésel y a 2.000 en los de gasolina o utilizar bien los desarrollos del motor. Otras costumbres que resultan ecológicas al volante de un coche son utilizar la primera velocidad sólo para mover las ruedas y no pasar el vehículo de 2.500 revoluciones, salvo en quinta. Las ciudades van a agradecer este tipo de iniciativas, además de por la reducción de emisiones, por la reducción del ruido. «Un solo coche a 4.000 revoluciones por minuto hace el mismo sonido que 32 a 2.000 revoluciones», afirma Larrazábal. www.idae.es/consejos/ El Chevrolet Sequel usa una pila de hidrógeno. / GM brillantez de un Porsche 911 al que se hubiera privado del adictivo sonido de su motor... y con un tercio menos de su gasto de gasolina. Hablando de silencio, impresiona ver cómo acelera un vehículo movido por hidrógeno y oxígeno como el Chevrolet Sequel sin otro ruido que el de los neumáticos al rodar y el del aire en colisión con la carrocería, y que el único residuo que sale de sus escapes sea agua tibia que uno podría beberse si tuviera un vaso a mano. Mientras los híbridos se generalizan o los fabricantes apuestan de forma decidida por el hidrógeno, la mejor iniciativa individual contra el cambio climático consiste en conducir con cabeza, es decir, intentando que el consumo sea el menor posible, y en adquirir coches eficientes. Los omnipresentes vehículos diésel no son desde luego la solución porque emiten menos CO2 pero más óxidos de nitrógeno y partículas dañinas para la salud, y entre atentar contra el planeta o contra sus pobladores, un servidor se inclina por ninguno de los dos. Pedro Urteaga es periodista y jefe de sección de Motor de EL MUNDO. N6 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O P R I M E R TRANSPORTE LIMPIO ➔ 14/ABRIL 2007 P L A N O EL HIDRÓGENO Rick Margolin y Daniel Emmett, de EINow, en un coche eléctrico en Santa Barbara. / ISAAC HERNÁNDEZ Terry Tamminen, fundador de Environment Now, en un vehículo de hidrógeno. / MERCURYPRESS.COM INVESTIGACIÓN EL ‘SUEÑO CALIFORNIANO’ Las autoridades del estado más rico de EEUU quieren construir 200 estaciones de hidrógeno en tres años CARLOS FRESNEDA Los Angeles (California) l sueño californiano se despliega en un mapa moteado por puntitos azules que recorren el espinazo de la costa oeste y representan otras tantas hidrogeneras (estaciones de hidrógeno). De momento hay ya 24 y la meta utópica es llegar a las 200 de aquí a tres años... «aunque el salto de gigante lo daremos cuando lleguemos a las 50, y los fabricantes empiecen a bombear coches de hidrógeno: California se convertirá sin duda en el laboratorio de pruebas del futuro». Hablamos con Daniel Emmett, director de Energy Independence Now (EINow), la incubadora donde se gestó este ambicioso proyecto al que se subió sobre la marcha Arnold Schwarzenegger. El impulso de Gobernator ha sido vital, pero Emmett sostiene que el auténtico motor de las autopistas de hidrógeno son los californianos de a pie, marcando el camino al resto del planeta. En ningún otro punto del mundo se conduce tanto como en California. En pocos lugares existe, sin embargo, una conciencia ecológica tan arraigada, heredera de la contracultura de los años 60. Aquí na- E ció el Día de la Tierra, y aquí se está gestando esa otra revolución verde –y azul– que aspira a cambiar radicalmente el modo en que conducimos y respiramos. «En California hemos alcanzado ya esa masa crítica de ciudadanos, convencidos de que no podemos seguir quemando petróleo y envenenando el aire», sostiene Emmett. «Esa gente se apunta ahora a los híbridos y a los biocombustibles como transición, pero sabe que el futuro está en la fueldiversidad. Y por supuesto en el hidrógeno». «Don’t be fuelish!» (algo así como «no seas tonto con el combustible») es una de las pegatinas más vistas en los parachoques californianos. Los conductores privilegiados de Los Angeles y San Francisco tienen ya un abanico de hidrogeneras a tiro de piedra. Pero la idea es instalar una estación cada 32 kilómetros en las grandes autopistas, y crear así una tupida red de puntos azules que incite a los futuros conductores a abonarse a esta tecnología que empieza a coger tracción. Un coche de hidrógeno funciona gracias a las pilas de combustible, que transforman el elemento químico en electricidad y producen únicamente vapor como residuo inocuo. El dilema está sin embargo en el origen: el hidrógeno ¡Divórciate del coche! Más arriba de San Francisco, donde el asfalto de la autopista 101 se va diluyendo en la espesura del bosque, se encuentra Arcata, la capital verde de California: todo vehículo que no sea híbrido se considera «sospechoso» y el culto a la bicicleta es comparable al de Dinamarca y Holanda. La «república independiente» de Arcata –como autoproclaman con orgullo sus vecinos– no es sólo uno de los bastiones progresistas del país, sino un ejemplo tangible de que «otra vida es posible» dentro de las ciudades. En Arcata tiene su sede la Auto-Free Times, que aboga por una total redefinición del estilo de vida americano para reducir la movilidad y superar la dependencia casi absoluta del automóvil. El mensaje liberador se ha propagado hasta la otra costa: una vez al mes se reúnen en Manhattan los miembros de Auto-Free New York, reclamando la «desvehicularización» de la gran ciudad y la reconquista del espacio para los paseantes. Porque la solución, como apunta el arquitecto Moshe Safdie en La vida en la ciudad después del automóvil, pasa necesariamente por levantar barreras a la circulación rodada y crear ambientes urbanos más respirables. En Estados Unidos hay ya más coches que conductores. Otras asociaciones, como la Alianza para una Moratoria de Pavimentación, reclaman puede obtenerse a partir del pehora de superar la adicción al petróleo, del carbón o del gas natutróleo (acaba de publicar el libro ral, o bien separándolo del oxígeLives per gallon). no por un proceso de electrólisis, «Con el hidrógeno pasa como utilizando energías renovables con el huevo y la gallina», admite (solar, eólica, biomasa, etc.). Tamminen. «Los fabricantes no California ha dado otro paso al producen coches en serie si no frente con la aprobación de una ley hay infraestructura, y los inversoque exige que al menos una tercera res no ponen dinero si no ven auparte del hidrógeno usado para el tomóviles de hidrógeno circulantransporte proceda de fuentes redo... en California hemos logrado novables. «Queremos que el futuro sentarlos en la misma mesa, sinsea el hidrógeno, pero lo queremos cronizar los esfuerzos e impulsar limpio», asegura Daniel Emmett. económicamente el proyecto». El sueño californiano no habría Los números cantan, pero no sido posible sin la tenaz labor de tanto como se sospechaba. Se calTerry Tamminen, fundador de Environment Now, ex director de la Agencia de Medio Am- Una ley obliga en California a biente del estado y artí- que la tercera parte del hidrógeno fice de la conversión al credo verde de Arnold proceda de fuentes renovables Schwarzenegger (y de la hibridación al hidrógeno de su monstruoso Humcula que reconvertir una cuarta mer). Tamminen sigue asesoranparte de las 10.000 gasolineras de do a Gobernator, aunque ahora California para poder suministrar está embarcado en una empresa hidrógeno costaría unos 1.125 miaún mayor: concienciar a los llones de dólares (o sea, un 1% del americanos de que ha llegado la nuevo presupuesto para las guerras de Irak y Afganistán). Las 200 hidrogeneras proyectadas costarán entre 100 y 200 millones. Tamminen recuerda cómo en agosto de 2004 cortó la cinta de la primera hidrogenera de California, y cómo repostó el futurista la congelación de nuevos proHonda FCX que le dejó prestado yectos de autopistas y circunel Ayuntamiento de Los Angeles valaciones, ese crecimiento «con la misma facilidad con la cancerígeno «a la americana» que se echa gasolina». «Entonces que ahora estrangula nuesse veía el hidrógeno como una tras ciudades y que tan atinapromesa lejana, pero ahora hadamente describe Jane Holtz blas con los fabricantes y todos Kay en Nación de Asfalto. parecen estar pisando el acelera¡Divórciate del coche! da tídor y deseando poner coches en tulo a otro libro reciente, fircirculación», asegura Tamminen. mado por Katie Alvord, con Pese a todos los avances, la flota las experiencias de «esa pede hidrógeno de California no llega queña legión» de americanos aún a los 200 vehículos, sumando que han superado la adicción los autobuses, los camiones y los al automóvil. «Divorciándote coches cedidos como promoción del coche no sólo consigues (su precio de venta alcanza la friomejor salud, menos estrés y lera de un millón de dólares). El más satisfacción personal», impulsor del sueño californiano reescribe Alvord, «sino que conoce que aún quedan muchas contribuyes de una manera millas por trillar, pero su nueva muy activa al bienestar de la idea es estirar la proa californiana comunidad en donde vives y a para poder viajar con el hidrógeno la situación del planeta». desde Vancouver a Tijuana. N8 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 E N T R E V I S T A ” JAMES LOVELOCK «La Tierra se calentará tanto que el Ártico se convertirá en tropical» MIGUEL G. CORRAL s uno de los intelectuales más importantes del siglo XX y, quizá, el más controvertido. Tiene 87 años, profundas gafas y la vitalidad de quien parece que no va a morir nunca. El día está soleado y él camina con las manos en los bolsillos de E CIENTÍFICO Nació en Reino Unido en 1919. Se licenció en Química y en pocos años obtuvo el doctorado en Medicina. Es inventor y padre de la Hipótesis Gaia, una revolucionaria teoría que considera a la Tierra como un complejo sistema que se autorregula. Ha colaborado con la NASA en las misiones para buscar vida en Marte su pantalón de pana por el Paseo de Recoletos, en Madrid. Durante la entrevista no pierde ocasión para hacer una broma y romper a reír a mandíbula partida. A cada paso que da deja alguna pincelada de su genial manera de pensar. Nos recuerda que en uno de los capítulos del libro que ha venido a presentar en España (La venganza de la Tierra, editorial Planeta) explica la Hipótesis Gaia a través de la pregunta: «¿Qué tiene que ver orinar con el gen egoísta?». PREGUNTA.— ¿Podría describir la Inglaterra de su infancia? RESPUESTA.— El país que conocí era increíblemente hermoso. Los británicos no somos muy buenos haciendo ciudades bonitas, como lo hacen los franceses o los españoles. Pero somos muy buenos haciendo campo. Y, antaño, conseguimos tener un medio natural singularmente bonito. Era un paisaje muy humanizado, pero a la vez muy natural. La gente que vivía en las áreas rurales lo hacía rodeada de naturaleza y con un enorme grado de implicación con ella. Lo que yo he visto durante mi vida ha sido una enorme degradación de todo aquello que conocí. Las técnicas de cultivo han cambiado y eso ha hecho que la conservación del mundo natural vaya cayendo cada vez más y más. Hasta alcanzar el estado de degradación que tenemos en la actualidad. Es horrible. P.— Usted ha tratado de conservar un pedacito de tierra tal y como era hace tiempo. R.— Sí, es cierto. Mi mujer, Sandy, y yo compramos un pedacito de tierra en el campo para vivir y tratar de conservarlo tal como era. Por eso vivimos allí, no podríamos hacerlo si viviésemos en una ciudad. Pero la casa ya no nos pertenece a nosotros. La hemos donado a la caridad para que la conserve como está ahora y se haga cargo de ella cuando nosotros muramos. Entonces no necesitaremos una casa, la propiedad pertenece a la Tierra. El planeta está cambiando muy rápidamente y todo el daño que le hagamos será un error. Es la manera de actuar del ser humano, cometiendo errores, pero tenemos que aprender de ellos. P.— ¿Qué le han enseñado los pavos reales con los que convive en su casa? R.— (Se ríe a carcajada abierta). Ohhh, sí. Todos cometemos errores, muchos errores... P.— Tengo entendido que tiene usted alguna anécdota graciosa con ellos... R.— Sí. Sandy y yo adorábamos los pavos reales, y cuando nos fuimos a vivir a nuestra casa actual quisimos que hubiese algún ejemplar por allí. En la propiedad hay mucho espacio para los pavos. Pero siempre venían a cagar al pavimento que hay justo delante de la casa. Al principio me enfadaba mucho, pero luego comprendí que lo que querían hacer era transformar de nuevo el pavimento en tierra. Aprendí que si quieres que algo cambie tienes que cambiarlo tú mismo. P.— ¿Cómo realiza usted su trabajo de investigación desde su casa en el campo? R.— Soy un científico que trabaja como un artista. Investigo en mi propio laboratorio, que está en el campo, y sin nadie que me James Lovelock posa en el Paseo de Recoletos de Madrid momentos antes de la entrevista el pasado mes de marzo. / JAVI MARTÍNEZ ayude. Me pago las investigaciones como lo hace un artista. Ellos sacan dinero haciendo tarjetas de felicitación y pequeñas obras con las que pagarse su verdadera creación artística, con la que no ganan dinero. Yo también tengo que pagarme mis investigaciones. Hace algún tiempo hice un par de inventos muy técnicos que han solucionado algunos problemas y resultan útiles a mucha gente. De ellos saco el dinero suficiente para dedicarme a tiempo completo a mi trabajo científico. P.— Entonces, ¿usted se ha retirado al campo para vivir más tranquilo alejado de todo? R.— No estoy retirado, nunca me voy a retirar. Vivo allí para seguir trabajando. En el momento en que te retiras tu cuerpo dice: «¡Ah!, así que ya has dejado de vivir». Y tú mismo desencadenas una extraña forma de apoptosis [sistema de muerte celular programada] y todos tus órganos vitales se colapsan y comienzan a fallar hasta que llega la muerte. «He visto a lo largo de mi vida la degradación que ha sufrido el campo inglés que conocí» «Soy un científico que trabaja como un artista y pago yo mismo mi propia investigación» «Los ecologistas de ciudad no se ocupan de comprobar que lo que defienden es verdad» Yo voy a trabajar hasta el día en que muera. P.— ¿Por qué ha escogido esta forma de investigar tan especial? R.— Nunca hubiese podido trabajar en Gaia para una universidad o para un departamento del Gobierno porque no me hubieran dejado hacer lo que yo quería. Los científicos no son libres, son empleados de quien les paga. P.— Pero usted ha trabajado durante algún tiempo para universidades o para organizaciones como la NASA... R.— De esto hace ya más de 42 años. Como todo el mundo, tuve que comenzar de alguna manera. Pero ahora soy libre. Llevo 42 años trabajando libremente. P.— ¿Cómo era el trabajo cuando lo realizaba en esas instituciones con ayuda de otros científicos? R.— En los primeros pasos de la Hipótesis Gaia tuve la ayuda de la fantástica bióloga norteamericana Lynn Margulis, durante casi 15 años. Ella era quien hacía la mayor parte del trabajo de laboratorio. Pero la institu- ➔ G EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 N9 E N T R E V I S T A ➔ G Viene de página 8 ción para la que ella trabajaba le rechazó algunas de las investigaciones necesarias para desarrollar la Hipótesis Gaia, porque no pertenecían a la corriente dominante de la ciencia. Las decisiones las toman mentes sencillas y eso es muy decepcionante. El trabajo que yo realizo no es posible hacerlo en un organismo oficial. P.— ¿Piensa usted que la ciencia moderna necesita más científicos libres, como usted? R.— Claro que los necesitamos, muchísimo. La gran mayoría de los científicos son especialistas en cosas muy concretas. Te voy a hacer una analogía. Si vas al campo y encuentras una flor que no conoces, lo que harás es ir a una facultad de Biología y preguntar al primer profesor que veas. Pero lo más probable es que te responda: «Lo siento mucho, pero soy biólogo molecular». Te dirá que vayas al departamento de Botánica y preguntes allí. Lo harás, y cuando veas a un profesor y le preguntes, es posible que te diga: «Oh, es una planta asombrosa, pero lo siento mucho, soy especialista en criptógamas [plantas inferiores, sin flor], no puedo ayudarte. Tendrás que ir dos puertas más allá». Así es como funciona la ciencia moderna. P.— ¿Cómo fue su trabajo en las misiones a Marte de la NASA? R.— Bueno, la NASA está increíblemente fragmentada desde un «Después del cambio que estamos sufriendo, la temperatura del mar será de 23º centígrados» «En el futuro habrá migraciones en masa hacia donde haya mejores condiciones» «El peligro de los residuos radiactivos no es nada comparado con el del cambio climático» punto de vista científico. Yo me uní a ellos tres años después de que los rusos enviasen al espacio a la perra Laika a bordo del Sputnik-2, cosa que dejó a la NASA realmente preocupada. Uno de sus objetivos era buscar vida en Marte, para lo que reclutaron a los 50 mejores biólogos del mundo. La mayoría de ellos estaban afanosamente concentrados en realizar pequeños experimentos muy tontos en la superficie de Marte de la misma forma que lo harían en la Tierra. Yo les dije: «¿Qué os hace pensar que la vida que pueda haber en Marte es parecida a la que conocemos aquí? Podría ser diferente». Se ofendieron un poco y me preguntaron qué es lo que buscaría yo. Les contesté que buscaría entropía. El director del laboratorio me llamó a su despacho y me preguntó: «¿Qué maldito experimento mandarías tú para encontrar lo que buscamos?». Le dije que necesitaba tiempo para pen- sarlo. Y él dijo: «Te doy hasta el viernes». Y como el viernes no le di una respuesta, mi contrato finalizó inmediatamente. (Se ríe). Ahora, lo que pienso es que basta con analizar la atmósfera. P.— ¿No es necesario mandar misiones a Marte para saber si hay vida allí? ¿Basta con analizar la atmósfera desde la Tierra? R.— Absolutamente, con eso es suficiente. Sólo necesitamos analizar sus elementos químicos. Los gases de una atmósfera muerta tienen un equilibrio diferente al de una atmósfera en la que están interviniendo seres vivos. Y eso es muy fácil de comprobar para la ciencia moderna. P.— En su último libro usted dice que Gaia cambiará para adaptarse a la nueva situación, ¿a qué cambio se refiere? R.— Es algo que ya ha ocurrido muchas veces antes. La última, hace 55 millones de años. Por eso sabemos bien cómo será. El principal cambio será un gran aumento de la temperatura de la Tierra, de tal manera que en el polo aumentará 8º C y en los trópicos alrededor de 5º C. En otras palabras, el Ártico se convertirá en tropical. Habrá cocodrilos nadando en el Océano Ártico y la temperatura del mar será de 23º C, igual que durante aquella época a la que me refiero hace 55 millones de años. Con estos cambios la vida tendrá que desplazarse hacia el Ártico para poder sobrevivir. P.— ¿Cree usted en la energía nuclear para salvar a la Humanidad o para salvar a Gaia? R.— Creo en la energía nuclear como la única opción real que podemos utilizar hoy. Tenemos muy poco tiempo. Si seguimos emitiendo como hasta ahora, Europa tendrá todos los veranos tan cálidos como el de 2003. Se utilizará más el aire acondicionado y eso hará que se tenga que producir más energía para poder garantizar el suministro. Además, habrá más sequías y... ¿cómo conseguiremos la comida si no llueve? Habrá migraciones en masa hacia donde haya mejores condiciones de vida. La civilización necesita un suministro constante y fiable de electricidad. Y, hoy, la única manera de conseguirlo de una forma segura es la energía nuclear. El peligro de los residuos de las centrales no es nada comparado con el peligro del cambio climático. Yo mismo he ofrecido mi casa para albergar los residuos nucleares que produzca una central durante un año entero. P.— ¿Qué opinión le merecen los ecologistas urbanos? R.— Están bastante equivocados. Son gente bien intencionada, pero no se preocupan en comprobar que lo que defienden es verdad. Mientras ellos criticaban la producción de electricidad con energía nuclear, el campo inglés estaba sufriendo una de las peores transformaciones que ha padecido en toda su historia. La amenaza de una guerra nuclear durante la Guerra Fría hizo muchísimo daño a la imagen de este tipo de centrales. La gente le tiene pavor a la energía nuclear porque les recuerda aquella época tan horrible. Pero deberían distinguir entre su terrible uso militar y el uso civil para producir electricidad. El peligro que entraña hoy es trivial. Fuertes olas invaden los accesos a la playa de La Concha en San Sebastián durante el pasado mes de marzo. / JAVIER ECHEZARRETA GESTIÓN DEL LITORAL El urbanismo agravará el efecto del calentamiento sobre las playas mo los puertos, quedarán obsoletas, ya que estarán expuestas a rebases del agua con variaciones de hasta el 250% respecto al rebase actual, como es el caso de la línea de costa entre Málaga y Algeciras. Por lo tanto, será necesario realible. «Hay que estar preparados anzar importantes obras de readapte el cambio climático», afirmó el tación y modificar el peso de las Director General de Costas. piezas utilizadas en dichas obras. Del estudio se desprende que En realidad, las consecuencias como consecuencia de la subida del calentamiento global sólo viedel nivel del mar aumentarán las nen a reforzar los problemas que cotas de inundaciones, sobre todo ya existen en el litoral español. El en la cornisa gallega y la zona normás grave, recordó Fernández Péte de las Islas Canarias; retrocederez, es el urbanismo y la ocupación rá la línea de costa, sobre todo en masiva de las playas, que han deslas playas de arena fina, como es el naturalizado y deteriorado los siscaso de la cornisa atlántica espatemas costeros, interrumpido la ñola o las Islas Baleares, y habrá circulación de sedimentos (como variaciones del flujo medio de la arena) y provocado un déficit de energía que también provocará un las aportaciones de los cauces al retroceso de la línea de costa (que mar debido a la enorme demanda se compensará ganando arena sehumana de agua. ca de la playa, es decir, el agua «Si se construyera de la noche avanzará sobre la tierra) especiala la mañana todo lo que está plamente en la zona norte del Mediteneado urbanizar en la costa, nos rráneo (Costa Brava), Baleares y el llevaríamos las manos a la cabesur de Canarias, donde habrá reza», advirtió. «La costa es de totrocesos de hasta 70 metros. dos; de los españoles o de los poEl informe también concluye lacos o de cualquier otro. Hay que muchas obras marítimas, coque protegerla». El Director General de Costas sugirió como ideal establecer PROTEGER LA COSTA una especie de moratoria para «poder evitar El Ministerio de Medio Ambiente está un nuevo desarrollo aplicando medidas encaminadas a proteger el permanente» en el litolitoral de su degradación: ral español, si bien reG Delimitar el dominio público. Uno de los conoció que al Ministeobjetivos del Ministerio es terminar de marcar rio no le corresponden el deslinde entre lo que es zona pública y lo tales competencias. que no a lo largo del litoral. Esto afecta a los La conferencia tuvo primeros metros de playa, que pueden ser de lugar en la Universidad hasta 300 ó 500 metros. de Islas Baleares en el G Compra de fincas. Desde 2005, el Programa de Adquisición de Fincas se ha marco de un módulo hecho con ocho fincas, seis de ellas de uso que formó parte del VII militar en Murcia, y se prevé que en este año Máster en Gestión y se adquieran otras ocho, incluido el ya célebre Administración Amhotel en Algarrobico, Almería. biental que organiza la G Declaración de utilidad pública. Diez Fundación Biodiversifincas de Almería, Alicante, Valencia, dad, entidad depenCanarias, Guipúzcoa, La Coruña y Málaga diente del Ministerio serán a partir de ahora de utilidad pública. de Medio Ambiente. El cambio climático elevará el nivel del mar y obligará a evacuar la primera línea de costa, según un estudio encargado por el Gobierno TANA OSHIMA Mallorca / Madrid entro de 30 años La Manga va a ser una montaña de escombros». La sentencia no vino de una vidente agorera, sino del Director General de Costas, José Fernández Pérez, mientras pronunciaba, como parte de un máster organizado por la Fundación Biodiversidad el pasado marzo, una conferencia esclarecedora sobre el impacto del cambio climático en el litoral español. «Habrá políticas de migración hacia el interior y planes para retirarse de las playas. Se llevarán a cabo expropiaciones», continuó, en referencia a algunas de las medidas que ya tiene previstas el Ministerio de Medio Ambiente para hacer frente a lo que se avecina como algo inevitable y próximo: la subida del nivel del mar. Según el último informe del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas, se espera que el nivel del mar se eleve una media de 15 centímetros en todo el mundo para 2050. El grado de expansión del océano dependerá de las zonas costeras del planeta y tendrá como resultado la modificación del litoral tal como lo conocemos actualmente. Algunas líneas de costa retrocederán, otras avanzarán y todas cambiarán de orientación. En España, se estima que el agua invadirá hasta 70 metros de arena y tierra en ciertas regiones costeras. Así lo ha concluido un estudio encargado por el Ministerio de Medio Ambiente a la Universidad de Santander. La ocupación del litoral será, más que nunca, insosteni- D N10 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 E S P A C I O los cambios del agujero de la capa de ozono. Con la llegada de los satélites artificiales y el inicio de la carrera espacial, a finales de la década de los 50, nuestra especie pudo contemplar por primera vez la Tierra desde fuera, como un cuerpo único y luminoso flotando en la negrura del espacio. Este hecho sentó las bases técnicas para el desarrollo de los actuales sistemas de teledetección espacial y, además, provocó una oleada de entusiasmo por los estudios planetarios. La primera mujer que voló al espacio, la cosmonauta soviética Valentina Tereshkova, describió así la Tierra tras contemplarla desde su nave, la Vostok 6, el 6 de junio de 1963: «Es imposible imaginar lo bonita que es. Cualquiera que vea la Tierra desde el espacio exterior, aunque sólo sea una vez, no podrá evitar ser asaltado por un sentimiento de reverencia y respeto por este planeta que es nuestro hogar». La ingeniera y empresaria de origen iraní Anousheh Ansari, que en septiembre de 2006 se convirtió en la primera mujer en viajar al espacio como turista, recordó estas declaraciones antes de emprender su vuelo a la Estación Espacial Internacional (ISS) y añadió: «Espero que la experiencia me haga tomar conciencia de la fragilidad del planeta y de nuestra común responsabilidad en su conservación». También la declaración de inRAÚL ARIAS TECNOLOGÍA OJOS QUE TODO LO VEN Los satélites son una herramienta esencial para vigilar el cambio climático ÁNGEL DÍAZ a humanidad lleva más de tres décadas vigilando la salud de su propio planeta con satélites ambientales, pero la influencia científica y social de estos instrumentos, hijos ecológicos de la Guerra Fría y la carrera espacial, no ha hecho más que crecer desde entonces. La capacidad de controlar los cambios que sufre la Tierra desde las alturas es una herramienta imprescindible para gestionar catástrofes naturales y entender algunos de los problemas científicos más acuciantes, en especial el cambio climático. España, pese a participar en varios proyectos internacionales, aún no posee un satélite propio que pueda dedicarse a medir las constantes vitales de la Tierra. Este problema, sin embargo, podría solucionarse en los próximos años. De hecho, nuestro país acaba de dar el primer paso con la L construcción de la carga útil del satélite ambiental europeo SMOS, que será lanzado a finales de año y observará los océanos y continentes gracias a una innovadora antena desarrollada en Madrid por EADS Casa. Pero la preocupa- Éstos son algunos de los satélites que vigilan el planeta: ción por desarrollar y mantener un sistema de observación terrestre aún preocupa incluso a las economías más avanzadas. En Estados Unidos, un grupo de científicos del National Research Council (Consejo de Investigación Nacional) acaba de alertar de que, si no se toman medidas, la capacidad de este país para vigilar la salud de la Tierra se verá mermada en un 40% de aquí a 2010. Y conocer el estado del planeta es ahora una cuestión fundamental: los preocupantes informes presentados este año por el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático de la ONU hace imprescindible seguir chequeando en cada momento el creciente calentamiento atmosférico y sus consecuencias. Pese a las urgencias actuales, el interés por estudiar nuestro entorno desde los cielos no es nuevo, y ya ha contribuido en más de una ocasión a despertar el interés por cuidar nuestro mundo. El primer satélite civil dedicado a observar centrada en el ciclo del agua y sus efectos sobre el clima. Fue lanzado en 2002. TERRA Lanzado en 2000. Su misión se prolongará 15 años y lo gestiona la NASA junto a las agencias espaciales japonesa y canadiense. Estudia cómo afectan al clima los cambios que provoca el hombre en la superficie terrestre. AQUA Como Terra, forma parte del conjunto de satélites A Train (Tren A), pero su misión está El cambio climático ha hecho imprescindibles los sistemas de observación Científicos de EEUU creen que no se invierte el presupuesto necesario la Tierra fue lanzado en 1972, mientras la exploración humana de la Luna llegaba a su fin y tanto el público como los especialistas creían encontrarse ante el umbral de la conquista humana del cosmos. La realidad es que los vuelos tripulados no han evolucionado casi nada desde entonces, pero los estudios del clima y los procesos atmosféricos han experimentado un gran avance: hoy hay más de medio centenar de satélites dedicados a tareas ambientales, como observar el nivel de contaminación sobre una ciudad, medir las cantidades exactas de gases que rodean nuestro planeta o registrar realizó el mapa de la contaminación atmosférica más preciso que se ha realizado hasta el momento. AURA Lanzado en 2004, completa el A Train. Estudia la composición química y las variaciones de la atmósfera terrestre. ENVISAT Lanzado en 2002, es el satélite de observación más grande que existe. La ESA gastó en él 2.300 millones de euros, de los que España aportó el 8,3%. En 2004, CALIPSO Lanzado en 2006 con una vida útil estimada en tres años, es un proyecto conjunto de la NASA y el Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES) de Francia. Estudia el papel que tienen en el clima las nubes y las partículas atmosféricas. Una función similar realiza el satélite Cloudsat. tenciones de la NASA, que lleva observando la Tierra desde su fundación en 1958, contenía una referencia a la «protección» de nuestro planeta, aunque en la última redacción, realizada hace un año, se ha eliminado este término y el objetivo se limita ahora a «entenderlo». Según publicó The New York Times, los climatólogos de la agencia están convencidos de que ésta pretendía mantenerse así al margen de las tormentas políticas que están provocando los estudios sobre el cambio climático, muchos de los cuales se deben, precisamente, a datos obtenidos por satélites de la NASA. ERS-2 Responde a las siglas en inglés de Teledetección de Europa (Europe Remote Sensing), el primer programa de satélites ambientales del continente. Lanzado en 1995, es antecesor del Envisat. Está dañado, pero transmite datos útiles aún. LANDSAT 7 Lanzado en 1999 por la NASA, es el último de la serie Landsat, que desde 1972 ha tomado millones de imágenes de la superficie terrestre para aplicaciones científicas. EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O N11 14/ABRIL 2007 E S P A C I O LA TIERRA COMO ARTE La NASA ha puesto en marcha una campaña de divulgación llamada Earth as Art para dar a conocer algunas de las más bellas imágenes de nuestro planeta tomadas por los satélites artificiales. Los GGG colores que pueden observarse en estas páginas no son los que percibe el ojo humano, sino los recreados por el ordenador. Los técnicos funden las mediciones de distintos anchos de banda captadas por el satélite Landsat 7 y por el radiómetro ASTER instalado en el satélite Terra. GGG GGG ISLA AKPATOK TAKLIMAKÁN RÍO VOLGA Satélite Landsat 7. La isla canadiense, un santuario de aves marinas en el Ártico y zona de pesca de esquimales, aparece rodeada de icebergs en esta imagen de enero de 2001. Satélite Terra. En mayo de 2002 el desierto de Taklimakán, en la región autónoma china de Xinjiang, mostraba estos restos aluviales en forma de abanico esparciéndose sobre la llanura reseca. Satélite Landsat 7. Los 500 canales que forman el delta del Volga se pierden en el mar Caspio en esta imagen tomada en agosto de 1999. Las pesquerías más ricas se encuentran en ese área de contacto. GGG GGG IRÁN ESTADOS UNIDOS Satélite Landsat 7. Los vientos marinos levantan estas dunas de hasta 300 metros de altura en el desierto de Namibia. La imagen de satélite apunta hacia el Parque Nacional de Namib-Naukluft. Satélite Landsat 7. Los depósitos de sal y las aguas salobres del desierto de Dash el Kevir, la zona árida más extensa de Irán, adoptan estas formas artísticas. La imagen data de octubre de 2000. Satélite Landsat 7. En esta imagen de diciembre de 2000, sobre el estado de Utah, se observa el Green River (arriba) atravesando la meseta de Tavaputs antes de entrar en Desolation Canyon. GGG GGG MALI GOLFO DE MÉXICO Satélite Landsat 7. Las aguas del Atlántico cambian de color por los sedimentos que arrastran los ríos hasta la costa de Guinea. En esta imagen de diciembre de 2000 se observa el gran cauce del Geba. Satélite Terra. El errático curso del Níger, que fluye hacia el desierto, se encuentra con las aguas del Bani. Ambas se pierden en un laberinto de canales, islas y lagunas rodeadas de arena en febrero de 2003. Satélite Terra. El intrincado delta del Misisipí, cuyo terreno se hunde cada vez más en el océano debido a la regulación artificial del río, aparece en esta imagen tomada en mayo del año 2001. NAMIBIA GUINEA GGG GGG N12 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 A C T U A L I D A D INMERSIÓN COCHES... Y MÁS COCHES Por Gustavo Catalán Deus isto lo visto de esta campaña electoral municipal, parece que los españoles nos quedamos de nuevo sin el verdadero debate que más nos interesa: recuperar la calidad de vida en los espacios urbanos. Salvo las candidaturas minoritarias, al PP y al PSOE les importa un rábano entrar al meollo de la cuestión: ¿quién saca el tráfico contaminante de las ciudades, quién limpia de verdad las aceras y calzadas, quién acabará con tanto y tan molesto ruido, quién devolverá la paz –que no más arrogantes agentes municipales– a las grandes urbes españolas? Me perdonarán que me fije en el caso de Madrid, pero es el que más conozco y quizá el más paradigmático. Ni Gallardón ni Sebastián libran su batalla electoral en este campo, hurtando a los ciudadanos el poder elegir su alcalde en base a la sostenibilidad de las propuestas. Sólo IU y las demás formaciones que vienen detrás se atreven a poner sobre el tapete lo que los primeros espadas impiden. Que el actual alcalde no quiera mover ficha, pase. Pero que el aspirante no saque el asunto a la palestra me parece incluso cobarde. Su grupo de asesores o él mismo piensan que a aquél que se atreva a poner alguna tasa o peaje a los cientos de miles de vehículos que entran en la capital degradando su ambiente y provocando enfermedades, los electores le despreciarán en las urnas. La dejación de Sebastián es manifiesta y la falta de miras, aún más. ¿Acaso no piensa el candidato que en el casco urbano madrileño viven tres millones de personas que se mostrarían muy agradecidos si logra evitar unos cientos de miles de coches? ¿Es que los madrileños no votan? ¿Acaso votan los propietarios de esos coches que entran cada mañana en los colegios electorales de Madrid capital, para que le dé V CARLOS GARCÍA tanto miedo la propuesta? No tengo explicación salvo aquélla de que el que se mueve no sale en la foto, una frase muy cínica y de paso guerrista. Es una lástima que ninguno de los dos grandes candidatos haya copiado a sus homólogos de Europa. Allí, el ejemplo de civismo es envidiable porque a los ciudadanos se les trata como lo que son: escaso ruido, ausencia de tanto tráfico perturbador, limpieza de calles, falta de acoso con multas, impuestos y guardias, servicios de recogida de basura de verdad... y peajes para aquéllos que compraron sus casas fuera de la ciudad y que pagan impuestos en otro municipio con aire limpio. Da auténtica envidia que eso ocurra al otro lado de los Pirineos y aquí tengamos que esperar otros cuatro años para que llegue un candidato desafiante de verdad, como son esos veleros que durante estos días estarán retando con valentía a otros para disputar la Copa América en aguas de Valencia. Mucho ir a ver la conferencia de Al Gore, pagarle un dineral para que nos cuente lo mal que está el cambio climático, oírle reclamar que este tema debe estar en la campaña electoral, para luego mirar hacia otro lado. Pero no me cabe ninguna duda de que si esta vez no hay esa oferta, en la siguiente contienda electoral será el único punto electoral. Y el que no tenga trayectoria, que le pillen confesado. [email protected] Nicolas Hulot, quien ha conseguido que los políticos franceses incluyan en sus programas sus propuestas ecologistas. / AFP LA CAMPAÑA VERDE Las ONG hacen 10 peticiones electorales Se acercan las elecciones municipales y autonómicas y los grupos ecologistas no quieren dejar pasar la oportunidad de hacer llegar sus propuestas, quizá con la esperanza de conseguir lo mismo que en Francia. Allí, el respetado divulgador ambiental Nicolas Hulot ha logrado un éxito sin precedentes al lograr que los candidatos principales a las presidenciales francesas firmen el llamado Pacto Ecológico. De este modo, Ségolène Royal y Nicolas Sarkozy se han comprometido a incorporar en su programa las peticiones de Hulot. En España no se ha llegado a tanto, pero al menos las cinco principales ONG ambientales han he- cho público su Programa por la Tierra por si hay algún político que lo quiera recoger. Greenpeace, SEO/BirdLife, Ecologistas en Acción, WWF/Adena y Amigos de la Tierra esbozan un decálogo de medidas que los gobiernos locales deberían adoptar para frenar el actual modelo de crecimiento insostenible, basado, en gran parte, en la construcción. Las ONG recuerdan que las comunidades autónomas ya tienen plenas competencias sobre muchos asuntos ambientales, más aún con los nuevos estatutos, por lo que no pueden quedarse de brazos cruzados. Éstas son algunas de las medidas que proponen los ecologistas. 1 Menos CO y más renovables. 2 Hay que evitar que la temperatura media del planeta aumente más de 2ºC. Para ello, hay que reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de los países industrializados hasta que en 2050 éstas estén un 80% por debajo del nivel de 1990. El consumo energético deberá reducirse un 20% entre el inicio y el final de la próxima legislatura y habrá que favorecer las energías renovables con planes concretos. 6 Proteger la costa y el mar. La explotación turística del litoral ha llegado a unos límites inadmisibles. Así lo consideran los ecologistas, quienes señalan a las comunidades como responsables de la gestión de sus costas. Hay que proteger todos los suelos no urbanizados situados a 500 metros del mar, destinar el 25% del Fondo Europeo de Pesca a la creación de reservas pesqueras y desarrollar la acuicultura con criterios ambientales. 2 Hacia la movilidad sostenible. 7 Conservar la biodiversidad. Hay que poner un límite al número cada vez mayor de automóviles. La política actual fomenta el transporte privado frente al público. Es necesario elaborar un Plan de Movilidad Sostenible en todas las comunidades autónomas antes de 2009, cumplir la normativa de calidad del aire para 2010, impedir nuevas urbanizaciones alejadas del casco urbano e imponer una tasa ecológica sobre el consumo de carburantes para mejorar la calidad del aire. 3 No especular con el futuro. Entre 1987 y 2000 se urbanizó una cuarta parte de todo lo construido en la historia de España, con la pérdida consecuente de ecosistemas. En 2005 se batieron todos los récords con 800.000 viviendas nuevas, y se espera que 2006 lo supere. Sin embargo, los jóvenes siguen sin poder acceder a la vivienda. ¿Qué comunidad autónoma se está ocupando de este problema? Las ONG piden que se acabe con la corrupción y los convenios urbanísticos «antidemocráticos». La construcción también está acelerando la pérdida de especies. Es necesario elaborar planes de vigilancia de los espacios protegidos, crear una estrategia para controlar y erradicar las especies invasoras y aprobar planes de recuperación de especies. Las ONG recordaron que algunas comunidades autónomas no cuentan con dichos planes. 8 Gestionar adecuadamente los bosques. Las competencias en materia de montes recaen sobre las comunidades, por lo que deben aumentar los recursos económicos y técnicos para combatir mejor los incendios y la erosión y fomentar la gestión sostenible de los bosques mediante el uso de la certificación internacional FSC. Para empezar, la madera utilizada por las administraciones debería llevar este sello de garantía de sostenibilidad. 9 Generar menos residuos. 4 Conservar ríos y ahorrar agua. España está lejos de cumplir los objetivos de la Directiva Marco del Agua de la UE. Es fundamental impedir los trasvases y la construcción de nuevos embalses así como reducir el consumo de agua agrario en un 20%. También la producción y la gestión de los residuos está en manos de cada comunidad, pero de momento no existen planes adecuados de prevención, que es, para los ecologistas, lo más importante: generar menos residuos. Los ecologistas también piden el cierre de las incineradoras por sus emisiones tóxicas y mecanismos que permitan obtener datos más precisos sobre la producción, la gestión y el reciclaje de residuos. 5 Impulsar la agricultura ecológica. 10 Fomentar la participación y la transparencia. En los últimos años ha aumentado un 50% el consumo de pesticidas agrícolas, nocivos para la salud y el medio ambiente. Los ecologistas proponen que al menos un 10% de la superficie agraria de cada comunidades sea ecológica. Tener un medio ambiente limpio es un derecho ciudadano. La participación y el acceso a la información también. Los ecologistas denuncian que la consecución de estos derechos brilla por su ausencia. EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O E C O L O G I A 14/ABRIL 2007 N13 U R B A N A Una campaña de reciclaje en el País Vasco enseña, a través del personaje de animación Bart Simpson pintado en un autobús, a utilizar el contenedor amarillo. / EL MUNDO RESIDUOS ¿SON INÚTILES LOS ENVASES? El reciclaje es la prioridad de la UE para reducir el impacto de los envoltorios de plástico, papel, cartón, vidrio y metales MIRANDA PRADOS pocos metros de proximidad, un ligero olor a basura se abre camino por la planta de clasificación de envases de Colmenar Viejo, en la Comunidad de Madrid. Hasta aquí llegan al día unas 55 toneladas de envases recogidos de los contenedores amarillos y azules de la zona Norte para ser separados según el material. Pero no es oro todo lo que reluce. Donde se supone que sólo puede haber envases ligeros (plástico y metal) y papel, hay mucho más de lo que debería. Ropa, restos de comida o juguetes se mezclan entre envases y cartones. El motivo es una separación inadecuada de los residuos en los hogares. En una de las secciones de la planta, varios operarios separan manualmente, de entre una maraña de basura que corre por una cinta transportadora, los plásticos de alta densidad, los de baja densidad, el PET (el material de las botellas de agua), el brik y el papel. Lo que llega hasta las manos enguantadas de estos operarios es lo que previamente se ha clasificado como recuperable, es decir, que puede ser reciclado o, en menor medida, incinerado, según explica Ecoembes, la organización gestora A de los residuos de envases en España. Muchos de los plásticos vienen todavía pegados a las bolsas de basura, agujereadas y rotas, o todavía cerradas. Una mujer deshace pacientemente el nudo de una para sacar de su interior el material reciclable. «Sería mucho más fácil si las bolsas vinieran abiertas», bromea Daniel Clemente, jefe de planta, mientras se dirige al electroimán donde se hace la clasificación automática, esta vez de acero y aluminio. Latas y chapas quedan atrapadas mientras el resto de material cae en un contenedor. Una vez separados, los materiales reciclables se condensan en balas (paquetes de varios cientos de kilos) y el resto se «rechaza», es decir, se incinera o va al vertedero. Estas dos opciones son las que mayores daños ambientales acarrean y son el motivo por el cual se incentiva el reciclaje: además de obligar a seguir agotando los recursos naturales al impedir la reutilización de los materiales, el vertido es contaminante por sus lixiviados, aguas que arrastran los componentes tóxicos de la materia degradada y que pueden llegar a penetrar en los acuíferos. A su vez, la incineración emite dioxinas (gases nocivos para la salud) y genera cenizas tóxicas. Aunque los desechos han existido siempre, la industrialización ha cambiado sustancialmente su composición. «Hasta hace 50 años había un equilibrio entre la generación de residuos y lo que la naturaleza podía asimilar. Ahora la Tierra no puede absorber todo lo que se genera», explica Rafael CLAVES PARA UN BUEN RECICLAJE GCOMPOSTAJE Devolver materia a la tierra. Según datos del Ministerio de Medio Ambiente, la materia orgánica constituye casi la mitad de los residuos sólidos urbanos. En España no se practica la recogida selectiva de esta basura pese a su fácil reaprovechamiento en forma de compost (materia fermentada), útil como abono o fuente de combustible. Hay quienes reciclan en casa los restos de comida con la ayuda de vermicompostadoras. GPAPEL Y CARTÓN Maximizar la utilidad con material limpio. Cualquier material, envase o envoltorio de papel y cartón debe ir directo al contenedor azul. Pero para que pueda volver a utilizarse, hay que evitar que esté manchado de grasa y que no vaya en el interior de una bolsa de plástico. No se deben incluir ni briks ni servilletas o pañuelos usados. GACEITES Evitar contaminar. Los aceites industriales y de cocina son altamente contaminantes y deben desecharse en los Puntos Limpios de cada distrito. G¿VIDRIO O CRISTAL? Distinguir materiales. Para facilitar el reciclaje hay que evitar tirar al contenedor García, profesor titular del deparmercado. Concretamente, se recitamento de Tecnología Química y cló un 25,9% del plástico, un Ambiental de la Universidad Rey 68,6% del cartón-papel y un 61,7% Juan Carlos de Madrid. de los metales, dice Ecoembes. Hoy, los envases constituyen En España, la ley de envases de un tercio de los llamados residuos 1997 obliga a que todas las empresólidos urbanos, que son las basusas que generan productos con ras generadas a nivel doméstico. envases gestionen sus propios reSegún la Agencia Europea de Mesiduos para su reciclaje, bien por dio Ambiente, la producción de su cuenta, bien mediante una emestos residuos aumentó un 7% enpresa externa. Éste es el caso actre 1997 y 2001 en Europa. En Estual, en el que las empresas delepaña se generan unos 3,9 millones gan la gestión de estos residuos a de toneladas de residuos de papel, Ecoembes y pagan una tasa por el plástico, vidrio y metal al año, sePunto Verde, sello fácilmente gún estimaciones de Ecoembes. identificable en botellas, latas, caLa forma más común de eliminarjas o briks y que certifica el cumlos en Europa ha sido hasta hace plimiento de la ley de envases por poco la incineración, pero la diparte de dichos fabricantes. A rectiva europea exige recuperar Ecoembes está adherido el 90% de un 60% de todos los envases generados y reciclar un mínimo del 55% para 2008. Índice que, Los envases constituyen un según Ecoembes, ya hetercio de la basura doméstica y mos conseguido. Para 2006, el gestor han crecido un 7% en cuatro años de los residuos tiene previsto reciclar un 53%, aproximadamente, de todos las empresas de este tipo, que en los envases generados –los pues2006 fueron 12.200, frente a las tos en el mercado y adheridos a 12.000 de 2005. Esa tasa hace que esta sociedad–. Las cifras son silos productos envasados sean almilares a 2005, cuando se recicló go más caros para el consumidor, un 51,5% de todos los envases del quien indirectamente está pagando por un buen reciclaje. Pero no siempre se consigue. El reciclaje sirve, básicamente, para prolongar la vida de los materiales y evitar la utilización de nuevos recursos. De unas cuantas verde el cristal (vasos, copas, botellas de PET puede salir un fobombillas), ya que tiene una rro polar; con el plástico de mezcomposición distinta al vidrio. cla se pueden hacer bancos para El cristal y otros materiales, sentarse, del vidrio sale más vicomo el espejo o la cerámica, drio y del papel, más papel. Pero deben ir al Punto Limpio. «con el desarrollo de las sociedades industrializadas y la la cultura ENVASES de usar y tirar, cada vez consumiNo mezclar residuos. Es importante saber que en el mos más», añade Rafael García. contenedor amarillo sólo se En este mismo sentido, los ecolodeben destinar los envases de gistas hacen un llamamiento para plástico (bolsas, productos de que los ciudadanos consuman melimpieza, botellas), de metal nos desaforadamente. Greenpea(latas, aerosoles, aluminio y ce denuncia que casi el 90% de los acero) y los briks, pero en residuos españoles no se reciclan ningún caso objetos que no ni se recuperan, por lo que la clasean envases (pañales, ve está en cambiar de hábitos y electrodomésticos, textil, empezar a consumir menos y a cubos, CD, cintas de vídeo, reutilizar más. Sólo así se generaperchas, etcétera). rá menos basura. G N14 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 A C T U A L I D A D ASTURIAS METEOROLOGÍA Un parque eólico a cambio de cien mil frutales para el oso pardo La Conferencia de la Organización Mundial de Meteorología (OMM), celebrada en marzo en Madrid, concluyó con un compromiso de todos los países participantes para mejorar la utilidad de los servicios meteorológicos. Para ello, se buscará un lenguaje común en todo el planeta y se intentará conocer mejor la demanda de la sociedad para aprovechar al máximo la tecnología existente. El Plan de Acción de Madrid incluye también actuaciones para ayudar a los países en desarrollo a contar con personal formado y con la tecnología adecuada. 161 países firman el Plan de Acción de Madrid Obligada por la ley, una empresa de energía eólica planta castaños y cerezos como medida que compense la instalación de molinos en zona osera Imagen del parque eólico construido en la sierra de Begega. / FAPAS TANA OSHIMA os vecinos del concejo de Belmonte de Miranda, Asturias, aún no se lo creen. Hasta que no lo vieron con sus propios ojos difícilmente podían imaginar que la construcción de un parque eólico en la sierra de Begega, en el mismo concejo, traería decenas de árboles frutales a sus fincas, como caídos del cielo. El motivo no fue un milagro, sino un nuevo modelo de gestión basado en el equilibrio entre los daños y los beneficios que produce una acti- L www.fapas.es vidad sobre el entorno natural o social: las llamadas medidas compensatorias. En este caso, la instalación de 68 aerogeneradores por parte de la empresa eólica Barbao en esta región asturiana tenía un impacto sobre el hábitat del oso pardo (Ursus arctos) que debía ser corregido. El resultado fue la plan- tación de 100.000 castaños y cerezos que servirán de alimento a los plantígrados. Actualmente, la ley obliga a las empresas a compensar el impacto que sus actividades tienen en todo territorio que goce de alguna protección. El Fondo Asturiano para la Protección de Animales Salvajes (FAPAS) ha sido el encargado de coordinar un proyecto que, pensado inicialmente para beneficiar al oso, ha resultado TRASLOCACIÓN G Falta de acuerdo. Según Roberto Hartasánchez, director del Fondo Asturiano para la Protección de Animales Salvajes, una medida necesaria para mantener la recuperación que están mostrando los osos pardos sería llevar ejemplares de una zona a otra para facilitar la comunicación entre poblaciones que están aisladas entre sí. Aunque los técnicos no se ponen de acuerdo, así se facilitaría, según Hartasánchez, la reproducción entre individuos. crucial también para el hombre. Si en un principio se trató de plantar en las montañas, la idea fue pronto descartada. «Era algo muy difícil porque son montes que se queman para limpiar, la gente tiene ganado y el suelo es pobre», explica Roberto Hartasánchez, director del FAPAS, que recuerda cómo contactó con la empresa eólica para «presentar un proyecto alternativo» consistente en realizar las plantaciones dentro de fincas privadas. «Son fincas abandonadas, o casi, de las que los propietarios no esperan obtener ningún rendimiento», continúa Hartasánchez. En este tiempo, el FAPAS ha plantado ya 75.000 castaños y cerezos, árboles que proporcionan, por un lado, buena madera para fabricar muebles y, por otro, alimentos clave para el oso: el cerezo por tratarse del primer fruto de la primavera, y el castaño por ser uno de los más importantes del otoño. El proyecto alternativo consiguió así dos objetivos: dar un rendimiento a los propietarios de las fincas –de forma totalmente gratuita para estos últimos– y así reavivar la economía de la zona, en gran parte despoblada, y reforzar el hábitat del oso haciendo más abundantes los alimentos. De momento, más de 100 vecinos del concejo han podido ver en sus fincas cómo son plantados los frutales. «Hace 25 años, el oso provocaba animadversión entre la gente local porque producía daños», señala el director del FAPAS. «Ahora hemos conseguido convertirlo en un elemento positivo. Gracias a él hay rendimientos», concluye orgulloso. CANARIAS La isla renovable 100% La isla de El Hierro, que ya es Reserva de la Biosfera, pretende lograr que el 100% de su energía eléctrica provenga de fuentes limpias a isla canaria de El Hierro pretende convertirse en la primera del mundo autoabastecida al 100% con energías renovables. El Hierro es la más pequeña de las siete islas del archipiélago y la más alejada del continente. Sus valores naturales y la buena conservación de un L www.elhierro.es entorno todavía no muy alterado por el turismo le han valido ser declarada Reserva Mundial de la Biosfera de la Unesco. Ahora, los herreños quieren dar un paso más hacia la sostenibilidad apostando por la autosuficiencia energética con el proyecto llamado 100% Energías Renovables. En él participan la Comisión Europea, el Gobierno español, a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el Gobierno canario, el Cabildo de El Hierro, y la compañía eléctrica Endesa. Se trata de construir un sistema de generación eléctrica capaz de abastecer la isla sin producir emisiones de gases de efecto invernadero. Para ello, se combinaría la energía eólica y la minihidráulica. AGRICULTURA La UE apoya la producción ‘bio’ 0% transgénica La agricultura ecológica ya está libre de transgénicos. Puede parecer evidente, pero no lo era hasta el pasado 29 de marzo, cuando la propuesta vigente de la UE permitía hasta un 0,9% de contaminación por transgénicos en los alimentos biológicos. Esto ocurre cuando un cultivo ecológico se encuentra próximo a uno transgénico y recibe el polen de las variedades cercanas manipuladas genéticamente. Pero la nueva enmienda pone fin a esta tolerancia y obligará a que los alimentos ecológicos sólo tengan el mínimo detectable (0,1%) de transgénicos. LEGISLACIÓN Una ley para ser responsables con el entorno El pasado 9 de marzo el Gobierno aprobó la Ley de Responsabilidad Medioambiental, que se basa en el principio de ‘quien contamina, paga’. Aunque, más que pagar, el responsable de las actividades contaminantes deberá reparar los daños incluso si éstos no son considerados delito. Ya no bastará con pagar una indemnización: habrá que dejar el medio ambiente como estaba antes de iniciar la actividad. Hasta ahora, estas reparaciones se han hecho con dinero público. Con esta nueva ley, será responsabilidad única de quien contamine. CONSERVACIÓN El declive de escualos amenaza a los moluscos Durante decenas de millones de años, mucho antes de la aparición y extinción de los dinosaurios, los tiburones han cruzado los océanos del planeta alimentándose de animales marinos. Ahora, por primera vez en su historia, están gravemente amenazados. La sobrepesca ha acabado con el 97%, incluso el 99%, de algunas especies de ellos. Y las consecuencias en el ecosistema marino se han dejado notar rápidamente. Según un estudio de investigadores de la Universidad de Dalhousie, Canadá, publicado en ‘Science’, la drástica disminución de escualos en la costa este de Estados Unidos en los últimos 35 años ha aumentado significativamente las poblaciones de especies que se sitúan en el nivel medio de la cadena trófica. La razón es EL MUNDO sencilla: la falta de depredadores ha hecho que proliferen aquellos animales que solían ser sus presas, como las rayas. Sin embargo, estas últimas se alimentan de conchas y moluscos. Al ser cada vez mayores en número (crecen en torno al 8% anual), están llevando al colapso a las poblaciones de moluscos en EEUU, concluyen los autores. BOTÁNICA Cuando se dé un excedente de energía eólica que no pueda ser vertido a la red eléctrica, se utilizará para bombear agua entre dos depósitos situados a diferente altura. Después, en los casos en los que hubiera necesidad de cubrir una demanda eléctrica excepcional, la caída del agua almacenada en el depósito superior movería las turbinas de una central hidroeléctrica, generando de nuevo electricidad. Para la construcción del sistema se ha estimado realizar una inversión de 54 millones de euros y se espera comenzar las obras en este mismo año 2007. Además, el proyecto contempla el apoyo a la implantación de otras fuentes renovables como la solar fotovoltaica y termoeléctrica. De planta amenazada a invasora incontrolable El ojaranzo (Rhododendron ponticum) es un arbusto que se encuentra en peligro de extinción en Andalucía. Sin embargo, la misma planta, llevada hace 50 años a Europa occidental, está convirtiéndose en una plaga difícil de controlar. El ojaranzo requiere humedad continua, por lo que se ve afectado por los ciclos de sequía del sur de España. En Europa, en cambio, ha encontrado las condiciones idóneas para propagarse. Además, sus hojas tóxicas le defienden contra competidores. Un equipo del CSIC estudia cómo paliar estas dos situaciones extremas. GENÉTICA El CSIC aclara cómo se dispersan las semillas Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha conseguido documentar, por primera vez, los efectos directos que provocan diferentes animales frugívoros (que se alimentan de frutas) en la dispersión de semillas. Los científicos utilizaron análisis del ADN de las cubiertas de las semillas para saber el árbol de procedencia del fruto. Los resultados, publicados en la revista PNAS, ayudarán a conocer cómo sobreviven especies amenazadas que se encuentran en poblaciones fragmentadas y que dependen de la actividad de estos animales para mantener la variabilidad genética. N16 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 F A U N A CONSERVACIÓN LAS CARROÑERAS SE ‘MUEREN’ DE HAMBRE La obligación de retirar las reses muertas del campo debido a las normas dictadas por la UE tras la crisis de las ‘vacas locas’ deja a los buitres ibéricos sin comida y causa gastos y molestias a los ganaderos extensivos ISAAC VEGA spaña acoge la mayor población de aves carroñeras de Europa. Nunca les ha faltado alimento porque la tradición ganadera del país y la abundancia de fauna silvestre han suministrado la carne necesaria. Sin embargo, los buitres están empezando a pasar hambre, dicen los ornitólogos. Desde la crisis de las vacas locas, la ley obliga a retirar el ganado que muere en el campo. A la vez, aparecen noticias alarmantes en las que se afirma que los buitres están atacando a animales vivos. ¿Qué está pasando en el campo español? «El problema de los ataques al ganado viene de antiguo, pero los casos recientes están teniendo un tratamiento mediático exagerado, como si se tratase de una mutación E de buitres», explica José Antonio Donázar, investigador de la Estación Biológica de Doñana. «Desde siempre se han producido ataques a animales disminuidos, ovejas mal paridas o enganchadas», cuenta Donázar. «Aún así, los ataques no tienen una trascendencia biológica ni económica: las supuestas pérdidas en Navarra en 2005 fueron de 6.000 euros. Hay que valorar cada caso e indemnizar si se comprueba que han sido atacados por buitres, pero son pocos los demostrados». Al parecer, los buitres no son asesinos mutantes ni se han vuelto locos, pero sí están pasando hambre. Según opina Ernesto Álvarez, presidente del Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona (Grefa), «en los últimos años, los centros de recuperación de toda España estamos recibiendo cantidades inusuales de buitres leonados debilitados y hambrientos. En 2006 el incremento superó el 40% respecto a la media de años anteriores». De la misma opinión es Juan Carlos Atienza, coordinador del área de Conservación de SEO/BirdLife, quien afirma que hay colonias con descensos en su productividad, como la del Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega (Segovia), gestionada por WWF/ Adena. «Un claro ejemplo es el cambio de comportamiento en el comedero de Montejo», explica Luis Suárez, responsable del Área de Especies de WWF/Adena. «Años atrás, los buitres esperaban a que el guarda abandonase el recinto. Hace poco comenzaron a posarse en el borde del cortado aledaño y, en los últimos meses, comienzan el festín antes de que haya cerrado el remolque donde CARROÑEROS HABITUALES +1.600 Vulnerable RAPACES EN PELIGRO Gyps fulvus Normas europeas «Hay muchas zonas de España en que sus habitantes subsisten gracias a la ganadería extensiva, conviviendo en armonía con las carroñeras. Las normas están pensadas para países centroeuropeos donde la mayoría del ganado está estabulado y donde no entienden nuestra situación», comenta Ana Íñigo, responsable de especies amenazadas de SEO/BirdLife. Las competencias sobre gestión de residuos y retirada de animales muertos están transferidas a las comunidades autónomas y la situación tras la entrada en vigor del reglamento que obliga a retirar los cadáveres del campo es muy desigual. Según los expertos, destaca lo realizado en Aragón, Navarra, Buitre negro Acude a grandes festines, donde deja el papel protagonista al buitre leonado y espera para aprovechar los restos corporales en la zona periférica de la carroña. Sus piezas preferidas son de pequeño y mediano tamaño. Buitre leonado Buitre leonado transporta la carroña», asegura perplejo. Debido a la aparición de enfermedades transmisibles en distintas cabañas ganaderas, como la encefalopatía espongiforme bovina (EEB) –o mal de las vacas locas–, las autoridades comunitarias regularon el depósito de cadáveres para evitar contagios entre el ganado y otros animales y las personas. Ese Reglamento 1774/2002 ha implicado serias restricciones al abandono de cadáveres en el campo y una importante merma en la alimentación de las carroñeras. Una situación que Ernesto Álvarez explica de la siguiente manera: «Tras el imperativo legal llega el caos burocrático, se cierran los muladares y un conflicto generado por la mala gestión de algunas explotaciones intensivas agroindustriales termina afectando a los ganaderos extensivos tradicionales y a la fauna carroñera, que siempre fue un fiel aliado y ahora se ve como un enemigo peligroso». Ingiere todo tipo de animales muertos, aunque selecciona los grandes rumiantes. En las carroñas voluminosas forma grandes concentraciones y por su agresividad desplaza a los otros buitres. Sus constumbres de prospección en dehesas, monte bajo y áreas abiertas le permiten detectar presas más pequeñas. Pero esto le hace vulnerable al consumo de cebos envenenados por su vinculación a las zonas de caza menor durante la mayor parte del año. La Rioja, Castilla-La Mancha y Andalucía. Esta última comunidad ha creado desde 2004 una red de muladares con 22 puntos. Todos son nuevos, cubren una hectárea y están vallados para evitar la entrada de jabalíes, zorros o perros asilvestrados. En Aragón, ya funcionan 17 comederos y está previsto que en abril concluyan las obras de otros 15, asegura Manuel Alcántara, Jefe del Servicio de Biodiversidad de Aragón. Sin embargo, esas medidas no cubren las necesidades de las carroñeras privadas del ganado muerto repartido por el monte que ahora se retira: en aplicación de la ley, en 2006 se recogieron 336.000 toneladas de cadáveres para su destrucción, según datos de la Comisión Nacional SANDACH del Ministerio de Agricultura. Esta situación está afectando a los dos elementos de un binomio tradicional como son el ganadero y los buitres. «La coevolución entre pastores y buitres ha sido efectiva, exitosa y necesaria desde el Neolítico. No se puede concebir la ganadería extensiva sin buitres, hubiéramos muerto de peste», afirma Gerardo Báguena, Presidente de la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ). «Si las cosas no cambian y los buitres necesitan comida, aumentarán los ataques a animales que estén pariendo», advierte Pedro Herraiz, ingeniero agrónomo y Secretario Ejecutivo de la Asociación de Criadores de la Raza Avileña Negra Ibérica. «Cuando antes moría una vaca, asumías la pérdida, llegaban los buitres y asunto resuelto. Ahora tienes que estar pendiente de encontrarla, avisar al veterinario, coger el tractor, sacarla con un remolque a la puerta de la finca y esperar a que venga el camión de recogida. Algo que antes no tenía un coste ahora cuesta dinero, mucho dinero», ➔ G Alimoche Consume restos pequeños de aves muertas y conejos. También acude a grandes festines de grandes animales muertos. Espera hasta que los otros buitres se han comido las partes más voluminosas. Depende mucho del conejo y del ganado doméstico Buitre negro Aegypius monachus 1.400 En peligro 22.500 No amenazada 81 En peligro Prospecta zonas abiertas donde visualiza animales muertos ayudado por otras especies como cuervos y milanos. Alimoche Quebrantahuesos LAS PARTES DE LAS QUE SE ALIMENTAN Neophron percnopterus Vísceras Músculos Tendones Pieles Huesos Buitre leonado Buitre negro Alimoche Quebrantahuesos ----------- Quebrantahuesos Gypaetus barbatus Prospecta zonas abiertas y junto a cuervos y milanos es de los primeros en llegar a las presas detectadas. Número de parejas reproductoras Catalogación según el ‘Libro rojo de las aves’ Siente especial predilección por los restos óseos de vacas, ovejas, caballos y animales silvestres. Ingiere los huesos enteros, de hasta 20 cm. Vuela por los valles en busca de carroñas, presentes casi siempre en prados y collados, es fácil de detectar. H m á s m EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O N17 14/ABRIL 2007 F A U N A ➔ G Viene de pág 16 asegura Herraiz. «Si no tienes seguro, por la retirada y la incineración del animal tienes que pagar entre 180 y 300 euros. Si pagas el seguro, el coste es de entre dos y cuatro euros por cabeza; pero, como está subvencionado, los españoles estamos pagando entre 10 y 12 euros por cada vaca que, multiplicados por cuatro millones de vacas extensivas, da un total de 40 millones de euros», explica. Herraiz asegura que para resolver el problema se debería reducir «un modelo de gestión de residuos innecesario». De hecho, hace dos meses, el Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) y las fundaciones alemanas Euronatur y Heidehof-Stifftungentre organizaron un encuentro de especialistas europeos. Entre las conclusiones, se destacó que la falta de alimento para buitres, lobos y osos en España «no se produce para garantizar exclusivamente la erradicación de la EEB, sino para mantener el lucrativo negocio de la recogida de animales muertos en España», asegura Roberto Hartasánchez, presidente del FAPAS. Según la Asociación Nacional de Industrias Transformadoras de Grasas Animales, Decomisos y Subproductos Cárnicos (ANAGRASA), el crecimiento del número de empresas del sector en España responde a una carencia histórica. «Mientras que en Francia se recogen los cadáveres desde hace 40 años, en España se hacía la vista gorda porque no le interesaba al ganadero que estaba acostumbrado a echar los cadáveres al vertedero, como antes se tiraban las basuras, sin costes», asegura Javier García Odriozola, miembro de la Junta Directiva de ANAGRASA. «Cuando Águila real Entre sus presas destacan palomas, córvidos, conejos y liebres, pero no depende tanto del conejo como el águila imperial. Es una excelente cazadora pero se alimenta en muchas ocasiones de carroña. OTROS ANIMALES SILVESTRES SUFREN LA FALTA DE ALIMENTO GOTROS AFECTADOS No sólo los buitres pasan hambre. La retirada de cadáveres de animales domésticos del campo también afecta a otras especies protegidas de nuestra fauna. «El consumo de carroñas por carnívoros es de vital importancia, tal y como demuestran nuestros trabajos de fototrampeo», asegura Roberto Hartasánchez, presidente del FAPAS. «En Asturias, habría que plantearse si el se implantó el reglamento hubo que montar toda una nueva infraestructura de recogida, tratamiento e incineración, y de las tres empresas en 2000 se pasaron a las 19 en 2006», explica. Excepciones a la ley La solución según algunos, sería encontrar una excepción a la rígida ley. Según el ganadero Pedro Herraiz, «tendrían que definirse ya las zonas remotas o inaccesibles [previstas en la legislación] para que algunos animales muertos pudieran quedarse en el campo, para que los buitres se los coman». Hasta ahora, «España no se ha acogido al régimen de excepciones comunitarias sobre zonas remotas. Es algo que debe justificar y solicitar el Ministerio de Agricultura», explica Juan José Areces, de la Dirección General de Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente. Carlos Javier Escribano, Director General de Ganadería del Ministerio de Agricultura, afirma que está de acuerdo en hacer uso de las excepciones que contempla la legislación, como la fijación de zonas remotas: «Es un asunto que se está debatiendo y se espera alcanzar un acuerdo a supuesto aumento de los lobos, manifestado a partir de los daños al ganado, no es en realidad una consecuencia de la falta de carroñas», afirma Hartasánchez. Juan José Areces, de la Dirección General de Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, corrobora que «desde que se implantó la obligatoriedad de recoger los cadáveres en el campo, hay una clara tendencia en los lobos marcados con lo largo de este año». En aplicación del Reglamento 1774/2002, por el que se establecen las normas sanitarias aplicables a los Subproductos Animales No Destinados al Consumo Humano (SANDACH), el Ministerio de Agricultura creó la Comisión Nacional SANDACH con tres grupos de trabajo: mataderos, métodos de destrucción alternativos y recogida de cadáveres. Este último lleva meses preparando una actualización de la normativa y, en colaboración con el Ministerio de Medio Ambiente, las comunidades autónomas y otros sectores, ha preparado un borrador de Real Decreto que regulará la alimentación de aves rapaces necrófagas con subproductos animales no destinados al consumo humano. «Podría ser aprobado durante el segundo trimestre de este año», asegura el director General de Ganadería del Ministerio de Agricultura. Además de crear un marco para todas las comunidades, «establece condiciones para las autorizaciones y registros de comederos de aves necrófagas, regula la solicitud y el registro de las autorizaciones y la forma de acreditar que los animales han sido analizados», añade el director general. radioemisores a desplazarse más, seguramente porque tienen menos comida». Según Hartasánchez, su asociación ha explicado a los responsables de la UE que el Reglamento 1774/2002 no ha tenido en cuenta la dependencia del oso pardo para alimentarse en meses de invierno y primavera con cadáveres de animales domésticos que antes eran abandonados en las montañas. Otra de las novedades es que, «además de incluir a los ungulados cinegéticos, va a flexibilizar el aporte de ovino y caprino a los muladares, teniéndose que analizar sólo el 4%. El resto podrá ser depositado para alimentación si está exento de enfermedades transmisibles», asegura Rubén Moreno-Opo, biólogo de la Fundación CBD-Hábitat. «Hay restricciones, como la oveja –considerada material específico de riesgo– que no están justificadas. Es fundamental como fuente de alimento y, salvo un par de casos en Francia y Malta, no se ha comprobado el contagio en toda la UE», explica Moreno-Opo, que coordina el proyecto LIFE de Conservación del Águila imperial, Buitre negro y Cigüeña negra de la Fundación. Aunque supone una mejora en algunos aspectos, el nuevo Real Decreto no satisface a todos. Según los ornitólogos de BirdLife y un informe que acaban de presentar a la Comisión Europea, la situación no es compatible con la Directiva 79/409/CEE de Conservación de Aves Silvestres por diversas razones. «Va a ser imposible disponer de todos los puntos para garantizar la alimentación de una población de carroñeras que ronda los 125.000 ejemplares», explica Juan Carlos Atienza de SEO/BirdLife. Pero hay más razones de peso: «Concentraría a las aves en lugares concretos, aumentando el riesgo de contagio de enfermedades, las forzaría a un gasto energético extraordinario e incrementaría el riesgo de colisiones con tendidos eléctricos. Además existiría riesgo de que se produjeran cambios en sus áreas de distribución atendiendo a la disposición de los comederos», vaticina el experto de SEO/BirdLife. «Las soluciones tienen que ser cuidadosamente evaluadas ya que un sistema natural de alimentación no se va a reproducir con uno artificial que tiene muchas desventajas», piensa José Antonio Donázar, de la Estación Biológica de Doñana. «Por su climatología y riqueza natural, en España tenemos unos métodos tradicionales que han demostrado ser muy eficaces para reciclar cadáveres. La normativa comunitaria está poniendo en peligro a la ganadería extensiva y a un entramado de vida que ha evolucionado descomponiendo y reciclando a sus carroñas», concluye Juan Carlos Atienza de SEO/BirdLife. CARROÑEROS OCASIONALES 9.000 Casi amenazada Águila imperial Aquila adalberti Milano negro Se alimenta de conejos, roedores, aves y reptiles, también consume carroñas en elevada proporción. Aprovecha todo tipo de tejidos de los cadáveres o restos que encuentra. Suele ser de las primeras que llega a la carroña y aprovecha para comer antes de que lleguen los buitres. Si es un animal grande y está entero entonces no puede franquear su piel y espera a que los buitres acaben con las partes más voluminosas. 1.400 Casi amenazada Milano real Habita sobre todo zonas de matorral mediterráneo, rodeadas de cultivos y con árboles aislados. Es parcialmente carroñera, sobre todo carroña de aves y pequeños mamíferos. Águila real Aquila chrysaetos Águila imperial 2.000 En peligro Su dieta está compuesta en un 50%-70% por conejo de monte que caza y sólo consume carroña en una pequeña proporción. Milano real 216 En peligro Milvus milvus Los animales jóvenes son los que más aprovechan los restos de animales muertos porque resulta un alimento fácil de conseguir. Milano negro Milvus migrans FUENTES: CBD Hábitat, ‘Libro Rojo de las Aves’ y SEO/Birdlife. INFORMACIÓN: Pedro Cáceres. GRAFICO: Rafa Estrada N18 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 C I E N C I A EL ANIMAL HUMANO INVESTIGACIÓN LOS PÁJAROS MAFIOSOS REUNIÓN INTERNACIONAL SOBRE BELUGAS Por Pablo Jáuregui e haré una oferta que no podrá rechazar». La mítica frase de El Padrino, aquella joya cinematográfica concebida por un sapiens visionario llamado Francis Ford Coppola, resume a la perfección la filosofía del gánster. Cuando el animal humano no logra conseguir algo por las buenas, con frecuencia opta por recurrir al chantaje (eso que los ingleses llaman el correo negro, blackmail). En la inolvidable película basada en la novela de Mario Puzo, el capo de los Corleone envía a su rival la cabeza decapitada de su caballo favorito para dejarle muy claro que no se anda con chiquitas. Sin embargo, las técnicas de los mafiosos sicilianos son sólo un pequeño ejemplo, probablemente el más obvio y burdo, de un comportamiento bastante más extendido en nuestra especie de lo que quizás nos guste reconocer. La inteligencia humana –con su impresionante capacidad para concebir estrategias ingeniosas con el fin de obtener ventajas y satisfacer necesidades– ha desarrollado una espeluznante gama de métodos de coacción. Todas las variantes del terrorismo se basan en mecanismos de intimidación fundamentados en la misma filosofía del padrino: desde el impuesto revolucionario y el secuestro hasta el tiro en la nuca y el coche-bomba, el objetivo es siempre que un grupo de animales humanos intente imponer su voluntad sobre otros mediante el miedo, haciendo «una oferta que no se puede rechazar», como en la clásica amenaza del atraco a mano armada: «la bolsa o la vida». Pero también hay otras formas más sutiles y retorcidas de intimidación en nuestra especie: desde el sufrido currante que no tiene más remedio que acatar las órdenes de un jefe despótico hasta el sometimiento que tiene que padecer cualquier país satélite frente a la fuerza del superpoder que posee armas de destrucción masiva. L Un grupo de investigadores, junto a una beluga en el Ártico. / ROBERT SUYDAM G PONER EN COMÚN LOS TRABAJOS CIENTÍFICOS. El pasado mes de marzo se celebró en el Oceanográfico de Valencia una reunión científica internacional sobre investigación de belugas. El congreso sirvió para poner en contacto, por primera vez, las investigaciones realizadas con un animal en cautividad con las hechas en medios naturales. En la reunión se tomaron medidas para mejorar la conservación de este amenazado mamífero marino. TESTIGOS DEL DESHIELO El cambio climático amenaza el hábitat de las belugas en el Ártico RICARDO Si miramos a nuestro alrededor con un poco de agudeza antropológica, quizás nos sintamos obligados a reconocer que el animal humano es un gánster por naturaleza. Pero una vez más, la etología nos ha vuelto a revelar que no somos las únicas criaturas que recurrimos al chantaje: un equipo de investigadores de EEUU ha descubierto un ave con tendencias descaradamente mafiosas. Los pájaros en cuestión, conocidos como vaqueros de cabeza castaña, recurren a métodos propios de la camorra para obligar a otra especie, el chipe anaranjado, a incubar y cuidar de sus crías. En menos de 10 segundos, las hembras de vaquero colocan sus huevos en un nido ajeno, e inmediatamente montan una guardia de vigilancia para asegurarse de que los pobres chipes se ocupan de cuidar bien a sus crías. Si algún chipe se atreve a resistir esta invasión, y decide dañar o deshacerse de estos huevos extranjeros, los vaqueros se vengan de inmediato para dejar claro quién manda. Los científicos, cuyo trabajo se acaba de publicar en Proceedings of the National Academy of Science, han observado a vaqueros agujerear y destruir los huevos de los chipes que se niegan a incubar y cuidar de sus crías. No es de extrañar, por lo tanto, que ante la intensa coacción que ejercen los vaqueros, la mayoría de los chipes opten por la sumisión. De esta forma, un ave parasitaria asegura la reproducción de su especie mediante un mecanismo de intimidación que tiene un inquietante parecido con las calles de Chicago en tiempos de Al Capone. ¡Menudo pájaro! [email protected] MIGUEL G. CORRAL Valencia l investigador ruso Stanislav Belikov lleva cerca de 30 años estudiando las ballenas beluga en los mares de Barents y Kara, al norte de Siberia (Rusia). Durante ese tiempo la presencia de hielo en la zona del Ártico donde él trabaja se ha reducido en más de un 70% en verano, según asegura el científico del Instituto de Investigación para la protección de la Naturaleza en toda Rusia. «Este deshielo no les depara nada bueno a las ballenas beluga», vaticina Belikov. Los científicos que se dedican a estudiar los hábitos de este tipo de ballenas –también conocidas como ballenas blancas– aún tienen algunas preguntas sin responder acerca de su modo de vida. Precisamente, algunas de las conclusiones de la E primera reunión internacional para la investigación de belugas en cautividad y en medios salvajes, que ha tenido lugar en el Oceanográfico de Valencia el pasado mes de marzo, son que aún queda mucho trabajo de investigación por hacer y que es necesario que los científicos estén en contacto para que pue- BALLENAS POLARES G La especie. Las belugas (Delphinapterus leucas) también son conocidas como ballenas blancas por el color lechoso de su piel. Pueden llegar a medir cinco metros y pesan unos 1.000 kilos. G Población. Es difícil de saber con certeza, pero los científicos estiman que viven en libertad alrededor de 145.000 individuos. G Comunicación. Las belugas poseen un sofisticado sistema de comunicación basado en una enorme variedad de sonidos. dan compartir resultados. Sin embargo, los investigadores ya conocen algunos de los cambios que van a comenzar a sufrir los hábitats de las belugas en los próximos años. La retirada del hielo permanente cada vez más hacia el norte debida al cambio climático está facilitando a la industria rusa el acceso a bolsas de petróleo y de gas a las que hace años era impensable acceder, según el propio Belikov. Las belugas son animales que han desarrollado un sofisticado sistema de comunicación que utilizan para buscar alimento y para mantener las relaciones sociales propias de la especie, por lo que el desarrollo industrial del Ártico puede interferir en su modo de vida. «No sabemos bien de qué manera les afectará el ruido producido por las plantas de extracción de petróleo y gas en mar abierto y por el tráfico marítimo que traerá consigo», dice Sam Ridgway, profesor emérito de la Facultad de Medicina de la Universidad de California San Diego (EEUU). «Pero lo más probable es que les cueste mucho adaptarse a tener nuevos ruidos durante 24 horas, siete días a la semana». Una especie amenazada En la actualidad, se estima que el número de ballenas beluga en libertad ronda las 145.000, aunque los propios científicos reconocen que aún tienen muchas dudas sobre algunos lugares debido a la dificultad que encuentran para realizar muestreos en latitudes tan altas. Algunos científicos no dudan de que la población mundial de este mamífero marino decrecerá en los próximos años por las consecuencias del cambio climático. «El hielo se está retirando y el ruido y el tráfico, creciendo. Además, el aumento de agua dulce en las capas superficiales del océano está dificultando la vida de las especies criofílicas [que viven en ambientes muy fríos] de plancton, que están en la base de la pirámide ecológica de la que se alimentan las belugas. En mi opinión, lo tienen muy difícil para que su población no decrezca en los próximos años», dice Belikov. Sin embargo, otros de sus colegas no tienen tan claro que estos cambios vayan a amenazar a su población. Robert Suydam, director del Departamento de Gestión de la Vida Salvaje de Alaska (EEUU), conoce bien el cambio que ha experimentado la capa de hielo desde que comenzó a trabajar en el norte de Alaska hace ya más de 17 años. Pero asegura que desconoce el efecto que tendrán estos cambios. «Las belugas viven en la actualidad en aguas que están unos cuatro grados centígrados más cálidas que las del océano Ártico. Si con el calentamiento, la temperatura de éste se queda alrededor de la que tiene el mar de Beaufort donde ellas viven hoy, la productividad del océano puede subir y mejorar el hábitat para las belugas», dice Suydam. «El peligro es que si sube más de esos cuatro grados centígrados, bajará la productividad dificultando la vida a los mamíferos acuáticos», matiza. www.cac.es EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O N19 14/ABRIL 2007 C I E N C I A JAE-CSIC: 100 años de historia en ciencias naturales CARLOS MARTÍNEZ n instituciones como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) es siempre razonable realizar una mirada al pasado, para acometer el futuro con mayor seguridad y tener mejores garantías de no equivocarnos. Esta reflexión es quizás más importante en momentos como el presente, sobre todo en relación con áreas de máxima vigencia, como son el cambio global, el desarrollo sostenible o el mantenimiento de la biodiversidad. Este organismo ya manifestó en el pasado sensibilidad con este tipo de materias, sensibilidad que abrió el camino para las apuestas de futuro en marcha. Así, a finales del siglo XIX, don Francisco Giner de los Ríos eligió personalmente un lugar en la sierra de Guadarrama como sede y punto de partida de los estudios sobre el medio ambiente que habría de realizar más tarde la Institución Libre de Enseñanza. Por aquel entonces no se había acuñado todavía el término «medio ambiente», y apenas estaba Ernest Haeckel inventando la palabra y el concepto de ecología. Don Francisco Giner hablaba, más bien, de «ciencias naturales», y a quienes se dedicaban a ellas se les llamaba «naturalistas», palabra que conserva toda la ingenua hermosura de la adolescencia de la ciencia moderna. El hecho es que en aquel mismo lugar que en su día había elegido don Francisco estableció luego, ya en el año 1911, el Museo de Ciencias Naturales –entonces perteneciente a la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE)–, una estación biológica: la finca de El Ventorrillo. La misma que hoy mantiene el CSIC, como herencia de la JAE y, en último término, de la Institución Libre de Enseñanza. Recuerdo ahora esta historia, en primer lugar, porque en 2007 estamos celebrando el centenario de la creación de la JAE, institución madre del CSIC. Y en segundo lugar, porque queremos reivindicar que el interés de esta institución por lo que en tiempos se llamaban las ciencias naturales y hoy se llama medio ambiente, biodiversidad, ecología u otros conceptos afines, está entre nosotros desde antes incluso de nuestro nacimiento institucional. Decía sir Oliver Wendell Holmes que «la educación de un niño debería comenzar, al menos, cien años antes de su nacimiento». Pienso que en el CSIC se cumple este desideratum en lo que a preocupación ideológica y ocupación profesional por el medio ambiente se refiere. Para comprender la presencia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en este área basta con ver la participación de investigadores de la Estación Biológica de Doñana (Sevilla), del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (Mallorca), de la Estación Experimental del Zaidín (Granada), del Instituto Pirenaico de Ecología (Aragón), del Centro de Estudios Avanzados de Blanes (Gerona), así como del Centro Iberoamericano de la Biodiversidad, junto con colegas de varias universidades y otras instituciones que, probablemente sin saberlo ellos mismos, están dando continuidad a una tradición centenaria, que este año conmemoramos. La continuidad de esta tradición queda además asegurada. No en vano hemos escogido el cambio global en el Plan de Actuación del CSIC 2006-2009 como una de las ocho líneas estratégicas de actividad. Nuestro futuro, el del CSIC y, en definitiva, el del mundo en el que vivimos, nos va en ello. E Una vista del Parque Nacional de Ordesa, cubierto por la nieve, tras el temporal de frío del pasado mes de marzo. / EFE LO QUE FALTA POR SABER La investigación en los parques nacionales ofrece conocimientos para mejorar su gestión PEDRO CÁCERES n el Parque Nacional de Doñana hay un insecto invasor, la hormiga argentina, que hay que mantener vigilado porque es un feroz competidor para las especies autóctonas; en los Picos de Europa se han hallado líquenes que hasta ahora no se conocían en España y que son indicadores de la buena conservación de zonas cuya protección debe extremarse; sobre la Caldera de Taburiente vuela la única población canaria de chovas piquirrojas, pero se sabe ahora que la mayoría anida fuera del parque, por lo que el cuidado de este ave requerirá medidas especiales. Todas estas historias tienen un hilo en común: son fruto de los trabajos de investigación que se realizan en la Red de Parques Nacionales. El mes pasado, el secretario general para el Territorio y la Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, Antonio Serrano, inauguró en Madrid las I Jornadas de Investigación en la Red de Parques Nacionales, en las que se expusieron en público los resultados de los proyectos realizados en 2003-2006. La red está formada por 14 espacios que gozan de la máxima protección jurídica de las existentes en España. Son las joyas de la Corona de la naturaleza ibérica y algunos de ellos, como Ordesa o Picos de Europa, fueron protegidos hace casi un siglo. Podría pensarse que, con este historial, debe ser muy poco lo que quede por conocer en ellos, E pero sin embargo no dejan de ofrecer sorpresas. De hecho, no es inusual que aparezcan incluso especies nuevas en España. Este es el caso de los líquenes encontrados por Gregorio Aragón, de la Universidad Rey Juan Carlos, en Picos de Eu- ropa, o el ejemplo del Parque Nacional de Cabañeros, donde la profesora Mª Ángeles Marcos, de la Universidad de Alicante, ha encontrado seis nuevas especies de insectos para la ciencia. Sin embargo, su objetivo no era hacer una lista de especímenes raros, si- NUEVA LEY DE PARQUES NACIONALES El pasado mes de marzo, el Congreso de los Diputados aprobó el Proyecto de Ley de la Red de Parques Nacionales, que supone la respuesta a las recientes sentencias del Tribunal Constitucional que ha dictado que las competencias de gestión pertenecen a las comunidades autónomas. Según la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, la nueva Ley de la Red de Parques Nacionales abre el camino a «un reparto de tareas nítido entre el Gobierno y las comunidades autónomas». La ley otorga a las comunidades la gestión de los parques, pero atribuye al Estado la tutela general de la red, la legislación básica, la elaboración del Plan Director, la dirección del Consejo de la Red y actuaciones de apoyo a las El Pico de El Teide. / EL MUNDO comunidades. La Red está formada por 14 parques, tras la inclusión de Monfragüe (Cáceres) el mes pasado. Ocupan el 0,6% del territorio. La ministra Narbona afirma que se desea crear alguno más. LA MÁXIMA PROTECCIÓN LEGAL GControl. La Ley de la Red de Parques Nacionales prohíbe la caza, pesca y tala de árboles dentro de los Parques Nacionales salvo cuando se establezca por la comunidad autónoma responsable un programa de control de población. La norma establece un sistema de evaluación continuada, ya que el Ministerio elaborará un informe cada tres años sobre la situación de la Red, que elevará al Senado. También prevé, de forma excepcional, que se pueda retirar la catalogación de Parque Nacional si se produce «una degradación significativa, mantenida en el tiempo» de uno de esos espacios. no ofrecer datos para una mejor gestión. Marcos descubrió así, por ejemplo, la función de refugio para los insectos que cumplen algunos bosquetes de árboles viejos en Cabañeros, por lo que insistió en la importancia de conservarlos. El Organismo Autónomo Parques Nacionales del Ministerio de Medio Ambiente es la institución que subvenciona estos estudios, abiertos a investigadores de entidades públicas y privadas. Equipos del CSIC y de numerosas universidades españoles han participado hasta ahora en las tres convocatorias llevadas a cabo, incorporadas al Plan Nacional I+D+i 20042007, y que han dado soporte a 70 proyectos. En las jornadas celebradas en Madrid se presentaron resultados de trabajos de todo tipo, desde estudios sobre especies hasta otros relacionados con el funcionamiento general de los ecosistemas. También se han investigado actividades humanas, como la capacidad para acoger visitantes sin perjudicar al medio o la carga ganadera que pueden soportar los pastos, como mostró José Luis González Rebollar, de la Estación Experimental del Zaidín, del CSIC, quien ha llevado a cabo un estudio sobre la capacidad de carga de herbívoros que pueden mantener los pastizales de Sierra Nevada. En todos los trabajos presentados, una veintena, primó un objetivo: que el resultado de la investigación sirva de ayuda a quienes tienen que tomar las decisiones de gestión en el parque. Carlos Martínez es presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. N20 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 C L I M A FENOLOGÍA ESCRIBAS DE LA NATURALEZA Numerosos voluntarios registran a diario en España las variaciones meteorológicas y sus efectos sobre el ciclo natural: la fenología TANA OSHIMA ntonio Morcuende lleva 25 años observando el cielo y la naturaleza. Como un feliz y amistoso delator, toma nota e informa de cuanto ve y de todas las novedades de cada temporada. Al igual que el resto de sus 4.000 compañeros repartidos por todo el país, registra a diario la temperatura máxima, la mínima y las precipitaciones. Con un termómetro y un pluviómetro, el trabajo básico está hecho. Pero su pasión por la naturaleza le lleva a buscar más: cada día apunta, rigurosamente, el estado del campo y de los animales próximos a la ciudad de Cáceres, donde vive. El resultado es un valioso diario de las estaciones y de los ciclos biológicos recurrentes y sus cambios. Es decir, de la fenología. Antonio forma parte de la amplia red de colaboradores con los que cuenta el Instituto Nacional de Meteorología (INM), sin los cuales no sería posible realizar estudios climáticos de gran importancia. Desde toda la geografía de España, y dotados con una pequeña y sencilla garita, los observadores envían sus registros a los centros territoriales, dependientes del INM. De entre ellos, algunos remiten, además, datos fenológicos. Es el caso de Antonio. Con la llegada de la primavera, ya ha visto muchas plantas en flor. «Realmente la primavera en Cáceres es en marzo y abril. En mayo ya está todo seco», dice este experto en las intimidades del mundo natural. Sin embargo, desde que se jubiló, hace unos meses, realiza menos salidas al campo, por lo que ahora se centra más en tomar notas –acompañadas de dibujos que han hecho sus cuadernos famosos A VIDAS PREMIADAS Como todos los años, con motivo del Día Meteorológico Mundial, el INM premió, el pasado 23 de marzo, a tres colaboradores meteorológicos que han estado durante las últimas décadas tomando mediciones diarias a las 8.00 horas solares. GEDUARDO PUYUELO De Abiego, Huesca. 76 años. Cuando empezó a tomar registros, en 1962, tan sólo contaba con un rudimentario pluviómetro. Desde entonces, este agricultor ha hecho mediciones de precipitaciones y, a veces también, de temperatura. Su trabajo en el campo le permitió durante un tiempo ofrecer también datos fenológicos, sobre todo de especies agrícolas como el en el INM– de lo que ocurre en la ciudad. Receptivos a cualquier cambio en los acontecimientos animales y vegetales, los observadores detectan las alteraciones en el medio antes que nadie. Y este año ha habido algo que ha llamado la atención a Antonio: el mirlo común (Turdus merula), que habita en los jardines, ha salido antes de su nido. El domingo 11 de marzo, según apuntó en su cuaderno, avistó al primer ejemplar joven ya fuera de su cuna. «¡En el campo, sin embargo, están ahora empezando a hacer los nidos!», apunta. Antonio tiene su propia explicación. Tras años de atenta mirada, cree que el culpable de esta alteración es el alumbrado urbano. «El exceso de iluminación está calentando el clima de las ciudades, y a lo mejor también del planeta», dice, suspicaz. Como un buen detective, basa su conclusión en otras observaciones: «En un día de nieve, si un coche está aparcado debajo de un alumbrado, verás que no se hiela. También pasa con las acacias, que se quedan casi un mes más con las hojas verdes si están bajo un alumbrado». Este observador, que ha trabajado durante décadas como capataz agrícola hasta su reciente jubilación, no descarta que el cambio climático esté haciendo también de las suyas. Pero, de momento, como sin querer entrar en terreno científico, se agarra a argumentos tangibles. Así explica la floración precoz del cerezo (Prunus avium) cultivado, que últimamente comienza una semana antes de lo habitual. «Se adelanta porque los cereceros hacen un abono nitrogenado rico y asimilable que se aplica a las ramas. Así las cerezas tienen más valor», revela. «En su ambien- Cuaderno de Antonio Morcuende, en el que se puede leer: «Las moreras están brotando, estando algunas con hojas pequeñas» . / JAVIER GARCÍA te natural, florece una semana o 10 días después». Observadores altruistas La observación voluntaria de meteorología en España tiene una historia que se remonta a 1912. Entonces eran 400 colaboradores, explica Ángel Rivera, portavoz del INM, y los instrumentos eran todavía muy poco sofisticados. Hoy, de los 4.000 puntos de observación, mil están automatizados. Y el número de voluntarios se ha multiplicado por diez. «Son observadores altruistas, aficionados a la meteorología y al clima. A veces la pasión se transmite de padres a hijos. Suelen ser maestros, sacerdotes o agricultores», indica. Pero la observación fenológica no ha corrido la misma suerte. De unos 400 volun- G entre 2000 y 2006, la media es de 12,79ºC. «Es por toda la porquería que echamos», se lamenta. «El clima, lo mismo se calienta que se enfría. Y nosotros somos los notarios de lo que sucede». almendro, el olivo y la viña. Su hija, profesora, ha heredado la afición y se encarga de hacer los registros en la estación del pueblo vecino, Angüés. GTOMÁS MARTÍNEZ De Allariz, Orense. 67 años. Lleva 47 años siendo voluntario del INM. Todo comenzó cuando la central lechera en la que trabajaba recibió una estación meteorológica. Entonces se aficionó a tomar los datos de lluvias, y cuando la central cerró, no pudo resistirse a llevarse la garita a su casa. Allí continúa desde entonces tomando registros diarios de temperatura (desde 1975) y pluviometría (desde 1959). Cuando él está ausente, es su hija quien le sustituye. A diferencia de sus compañeros, él asegura no haber observado ninguna tendencia de tarios en los años 60, han pasado a ser hoy poco más de cien, recuerda Antonio Mestre, del INM. Jesús Cañas es guarda forestal. Lleva desde 1990 registrando datos de temperatura, lluvia y humedad en el aire, como manda el reglamento del INM, pero su trabajo le permite además dar informes detallados de los cambios fenológicos. En el Valle de Cabuér- ➔ GENRIQUE MOLINA De izq. a dcha: Eduardo Puyuelo y su esposa; Enrique Molina y su esposa, y Tomás Martínez y su sobrino, poco antes de recibir el premio del INM. / KIKE PARA calentamiento en las últimas décadas, sino más bien todo lo contrario. «A mí no me sube la temperatura; a mí me baja», dice. Si entre 1970 y 1979 registró una media de 13,06ºC, De Pontones, Jaén. 75 años. Lleva 56 años acudiendo a diario a su garita para tomar la lectura del termómetro y del pluviómetro. Antiguo trabajador del campo, quiere transmitir la afición a su sobrino. Según sus mediciones, en las últimas dos décadas la temperatura máxima ha subido y la mínima ha bajado en Pontones. En 2004 fue él quien anotó la temperatura más baja jamás registrada en España: 22º bajo cero. Al mismo tiempo, la máxima batió el récord de Pontones en 2006 con 38ºC. EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O N21 14/ABRIL 2007 C L I M A Sobre estas líneas puede verse al voluntario Antonio Morcuende registrando datos fenológicos en Cáceres. A la derecha, uno de sus dibujos sobre un pito negro. / JAVIER GARCÍA ➔ G Viene de página 20 niga, Cantabria, donde reside desde hace 20 años, toma apuntes de todo cuanto ve en los bosques. En el mes de marzo, el día 2, dejó escrito en su cuaderno su primer avistamiento del alimoche (Neophron percnopterus), que pareció llegar de África con una semana de antelación, «aunque quizás debido al viento sur». El día 7 vio a los primeros milanos negros (Milvus migrans), «puntuales como un reloj», dice entre risas, sorprendido por que en los últimos años estas aves hayan sobrevolado por primera vez la comarca el mismo día, con exactitud. También llegaron en marzo los aviones comunes (Delichon urbi- cum). En cambio, «las golondrinas (Hirundo rustica) no han venido todavía y tendrían que haber llegado ya, en torno a los días 14 y 15 de marzo», detalla el día 19. Por lo demás, añade, la primavera sigue su curso habitual. Pese a un mes de enero extremadamente cálido –«yo diría que el tercero más cálido desde 1990 en esta comarca»–, los frentes de frío que vinieron luego paralizaron un ciclo que en un principio se estaba acelerando. De modo que, como suele ser normal, a mediados de marzo las yemas florales estaban a punto de estallar, incluso muchas flores estaban abiertas. Los endrinos (Prunus spinosa) estaban florecidos, al igual que los avellanos (Corylus avella- na), mientras que el pino radiata (Pinus radiata), el eucalipto (Eucalyptus globulus) y el sauce (Salix sp.) estaban floreciendo. Previsiblemente, con unos días de variación tal vez, en abril llegarán el cuco (Cuculus canorus) y los vencejos (Apus apus) y, como en un poema, en mayo cantará el ruiseñor (Luscinia megarhynchos). Es el calendario natural que, a base de observar, Jesús ha grabado en su memoria. «Pero cada vez llegan menos ejemplares», se lamenta. «A los cucos se les oye menos cantar, posiblemente porque en África, que es de donde vienen, se les está esquilmando. Además, dicen que el Sáhara está creciendo y les debe costar más atravesarlo». En cuanto a los vencejos, últimamente abandonan antes la comarca. «Antes se iban a principios de septiembre. Ahora se van a primeros de agosto», afirma. Para Jesús, una posible explicación es la disminución de mosquitos: cuando los inviernos son cálidos, estos insectos se reproducen antes y no coinciden con la época de cría de los vencejos; una descoordinación que se observa frecuentemente en la fenología. Floraciones precoces Con todo, desde 1997, las floraciones se dan con una semana de adelanto con respecto a 1990, recuerda Jesús. «Es pronto para hablar de cambio climático, al menos en el Valle de Cabuérniga», añade caute- loso. Lo que sí reconoce, en base a sus meticulosos registros, es que ha habido una tendencia de calentamiento. Desde 1997, dice, los veranos del valle, antes frescos, han pasado a ser calurosos. Esto afecta a los árboles frutales y de hoja caduca, «que necesitan determinadas horas de frío para paralizarse, recuperar energía y desparasitarse». Hoy, en general, las hojas de los árboles salen antes y caen más tarde. Ésta es una tendencia comprobada por los científicos, que advierten de una descoordinación entre especies, particularmente entre aves, insectos y plantas. Pero a partir de ahora también podrán comprobarlo por sí mismos los nuevos voluntarios que se apunten a esta afición: la Sociedad Española de Ornitología, con el apoyo del Ministerio de Medio Ambiente y el INM, ha lanzado una red virtual de fenología (www.avesyclima.org) de aves en la que cualquier persona podrá participar rellenando sus registros en la base de datos. Juan José Sanz, del Museo Nacional de Ciencias Naturales, destaca la extrema sensibilidad de los seres vivos a cualquier cambio. «Los animales se guían por pistas», dice, «como puede ser el fotoperiodo [horas de luz que tiene un día] o la temperatura y la disponibilidad de alimentos. Dependiendo de estos factores, las aves migratorias, por ejemplo, se reproducen, adelantan o retrasan sus desplazamientos», explica. Así, si tienen mucho alimento o muchas horas de luz, darán por hecho que les ha llegado el momento y adelantarán su reproducción. Tal vez ésta haya sido la razón del extraño comportamiento de los mirlos de Cáceres. www.inm.es www.avesyclima.org N22 EL MUNDO/NÚMERO 13/ Z O O NATURA / S Á B A D O H O M O 14/ABRIL 2007 S A P I E N S ADN Tiene 77 años / Es profesor honorario de Harvard y director del Departamento de Entomología del Museo de Zoología Comparada Vive en Massachusetts (EEUU) y dirige al menos dos expediciones científicas al año / Es el mayor especialista mundial en el estudio de las hormigas GGGSUS OBRAS GGGSUS TEORÍAS HA DICHO Publicaciones. En 1979 recibió el primer Pulitzer por La naturaleza humana. El segundo Pulitzer fue en 1991 por Las hormigas (escrito con Bert Holldobler). Sus libros más celebrados son la autobiografía El Naturalista, Sociobiología, La diversidad de la vida, La unidad del conocimiento y El Futuro de la vida. Acaba de publicar La Creación. Pionero. En 1975, acuñó el concepto de sociobiología y defendió la influencia de la biología y del factor genético en el diseño de las sociedades humanas, lo que le valió numerosas críticas. Fue también uno de los precursores del concepto de biodiversidad y recalcó la importancia de la conservación de las especies para la supervivencia humana. LA ‘CREACIÓN DIVINA’: J. ARÉVALO ➔ EDWARD G O. WILSON El ‘padre’ de la biodiversidad y de la sociobiología CARLOS FRESNEDA Corresponsal en Nueva York l despacho de Edward Osborne Wilson está tomado por las hormigas. Gigantes hormigas metálicas a modo de pisapapeles, pululando por las mesas. Hormigas de resina caminando por los anaqueles y desbrozando los libros. Hormigas de fuego incendiando un lienzo y apuntándonos amenazadoramente con sus antenas... Las hormigas son a Wilson lo que las mariposas fueron a Nabokov, que también tuvo su despacho, en el Museo de Zoología Comparada de la Universidad de Harvard, antes de pasarse a las nínfulas. Como Nabokov, Wilson ha trascendido a su primer amor y ha convertido sus observaciones de campo en una prodigiosa obra, marcada por su profundidad humana y por la pasión desbocada del naturalista que siempre fue. A sus 77 años, con más de 20 libros y dos Pulitzer en sus espigadas espaldas, con su prosa proverbial y su incuestionable talla científica, estamos tal vez ante el biólo- E go más eminente del planeta y uno de los 25 científicos más influyentes de las últimas décadas (según la revista Time). A Edward O. Wilson hay que atraparlo estos días con cazamariposas, pues rara es la semana que no anda de gira por el país, subido al púlpito de una de tantas iglesias en las que ha predicado el sermón de La Creación. Así se titula su último libro –recién publicado en España por Katz Editores–, que es una larga epístola consagrada a una misión casi imposible: tender un puente entre Darwin y Dios. Cuando le vimos en su observatorio de Harvard, estaba rematando el libro. Sin renunciar a su con- dición de «humanista laico», admitía que cada vez que se acerca al mundo natural siente una especie de veneración, como si estuviera ante algo realmente sagrado: «Vivimos en el paraíso absoluto en este planeta y no nos damos cuenta». Cuenta el propio Wilson en su autobiografía –El Naturalista– cómo su pasión por la vida en la Tierra se despertó a picotazos. Tenía 13 años cuando descubrió la primera colonia de hormigas de fuego en su Alabama natal, y allí acaba de regresar hace unos meses a rodar un documental sobre las interioridades de sus viejas amigas. Con razón le llamaron «el señor de las hormigas». Tres pisos más La labor de este influyente científico resultó esencial para que la preservación de las especies se considere un pilar de la política ambiental Sin renunciar a su ‘humanismo laico’ afirma que cada vez que se acerca al mundo natural siente veneración, como si estuviera ante algo sagrado Edward O. Wilson posa en su despacho detrás de una maqueta gigante de una hormiga. / MIGUEL RAJMIL abajo de su despacho reposa la mayor colección del mundo: casi un millón de especímenes de 5.000 variedades distintas. El biólogo descendió a su nivel, rastreó sus señales químicas y probó la existencia de las feromonas. También llegó a la conclusión de que su labor es fundamental para mantener la estabilidad del medio ambiente: «Remueven más materia que las lombrices y los gusanos». Siguiendo la senda de las hormigas (fiel al proverbio del rey Salomón), Wilson llegó a apreciar «la diversidad de la vida». Ya antes se había ganado el apelativo de padre de la biodiversidad: su labor fue esencial para que la preservación de las especies se considere como un pilar de la política ambiental. Sin desdeñar a sus insectos, ha sido también un entomólogo de la especie humana. En 1975 acuñó el concepto de sociobiología y abrió un apasionante campo de investigación. Por aventurar que la semilla de la evolución está en los genes, y que éstos influyen tanto o más que la cultura en la conducta, fue denostado como «determinista» y cosas peores por sus colegas. El tiempo y la Ciencia han barrido a su favor. Tres años después recibió el premio Pulitzer por La naturaleza humana, y en el tránsito hacia el nuevo siglo se vengó de sus críticos con otro libro, La unidad del conocimiento, en el que propone una confluencia aún mayor entre la biología y otras ramas del saber. En los años 90 volvió a sus orígenes con Las hormigas, que le valió el segundo Pulitzer (compartido con Bert Holldobler), y desde entonces todo son distinciones. Pero Wilson prefiere seguir coleccionando hormigas, y cuando no está en Harvard es que está embarcado seguramente en otra expedición. Últimamente, con su frente altiva y su sonrisa de prestidigitador, se deja caer más de la cuenta en los conciliábulos científicos, empeñado en lanzar lianas hacia los líderes religiosos. El tiempo apremia, y tiene muy claro que ésta puede ser su penúltima misión: «El cielo o el infierno es lo que los hombres queramos hacer con la Tierra... La acción humana nos ha llevado hasta aquí, a la sexta mayor extinción en la historia del planeta, y sólo la acción humana va a poder evitar un apocalipsis ambiental digno de El Libro de las Revelaciones». Amén. «Aunque no comparto las creencias cristianas sobre la intervención divina (...), le propongo que dejemos de lado nuestras diferencias para salvar la Creación», le escribe Wilson a un pastor imaginario en su último libro recién publicado en España. «La ciencia y la religión son las dos fuerzas más poderosas del planeta: uniéndolas en pro de la conservación biológica, podríamos resolver el problema» de la masiva extinción de especies actual, añade el científico en su epístola. EL CAMBIO CLIMÁTICO: «Según las últimas estimaciones, el cambio climático por sí solo puede hacer desaparecer de la faz de la Tierra una cuarta parte del millón y medio de especies que hoy se conocen. Hay quien dice que la mitad de las especies pueden desaparecer a finales del siglo XXI si continúa el proceso de degradación y la crisis de la biodiversidad causada por el ser humano. Parece que la población va a tocar techo con 9.100 millones de seres humanos a finales de siglo. Toda esa gente puede vivir en la Tierra de una manera digna. El problema es que, a este paso, acabaremos con todos los recursos del planeta». LAS HORMIGAS: «Las hormigas son maravillosas, pero es difícil llegar a amarlas. Satisfacen mi curiosidad intelectual. Son seres muy altruistas con los suyos, pero también muy belicosos. Cuando defienden su territorio, actúan como auténticas fundamentalistas. Son las criaturas más guerreras que hay en la Tierra. Las hormigas tienen cualidades que podríamos llamar subhumanas: son solidarias con miembros de su propio grupo, pero muy agresivas con los miembros de otras colonias vecinas». LA GENÉTICA: «Estamos empezando a descifrar las reglas del desarrollo genético. Es muy difícil hoy por hoy medir exactamente cuál es la conducta heredada. Pero estoy convencido de que si ponemos juntos a un campesino del Tíbet y a uno de Iowa y les quitamos el lenguaje y algunas que otras tradiciones de los sitios donde se han criado, la conducta humana sería básicamente la misma». GEORGE W. BUSH: «Es una época muy mala para la ciencia en EEUU. Tenemos un presidente que menosprecia a los científicos. Piensa que sus opiniones son meras especulaciones o, lo que es peor, conspiraciones. Muchos republicanos creen que hay una conspiración de la Ciencia contra sus creencias. Están haciendo que la Ciencia se convierta en algo sospechoso». EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 N23 C U L T U R A EXPOSICIÓN COLECCIÓN SABATER PI El Parque Científico de Barcelona guarda el legado del eminente estudioso del África ecuatorial RECUERDOS DE ÁFRICA La Universidad de Barcelona alberga el legado de un científico que empezó con el machete en la mano y acabó de catedrático PEDRO CÁCERES odo ser humano tendría que ir a África a arrodillarse y besar el suelo, porque es nuestra cuna, la de todos nosotros. Sin embargo, los países occidentales la están esquilmando». A sus 84 años, Jordi Sabater Pi habla de África con la misma pasión que le llevó a pasar décadas estudiándola sobre el terreno. Al científico catalán se le recuerda siempre por ser la persona que encontró en los 60 a Copito de Nieve, el famoso gorila blanco que fue la atracción del Zoo de Barcelona. Sin embargo, él lo considera «una pura anécdota». No le falta razón, porque aunque aquella historia le diera fama, era un hecho menor en su trayectoria científica. Antropólogo y zoólogo, Sabater Pi ha colaborado con las más prestigiosas instituciones científicas internacionales. En los años 50, era ya uno de los mayores expertos en primates y había documentado usos culturales de los chimpancés, como el empleo de los bastones, antes siquiera de que Jane Goodall o Dian Fossey –con las que ha colaborado activamente– hubieran empezado a trabajar. Y todo fue obra de un autodidacta. «Llegué a Guinea en 1940, cuando era un muchacho. Tenía vocación científica, pero fui a trabajar en una finca de cacao y café de unos parientes», explica. «Pero pronto me interesé por los indígenas», añade, «aprendí la lengua fang, hice trabajos etnológicos y acabé trabajando para el Museo de JORDI SABATER PI Ciencias Naturales de Nueva Nació en Barcelona en 1922 / York». Sabater Pi recuerda Llegó a Guinea en 1940 / Se inició los encargos de diversas insen la antropología y la etología de tituciones que le sirvieron forma autodidacta / Desde los para recorrer el Congo, Gaaños 50 colaboró con diversas bón, Etiopía, Kenia, Tanzainstituciones científicas y llevó a nia, Ruanda y para describir cabo estudios pioneros sobre especies nuevas, como las primates / A mediados de los 60 aves indicadoras de la miel, o encontró al gorila blanco, Copito la mayor rana del mundo, la de Nieve / En 1969 regresó a Goliath, que encontró en los Barcelona, donde se licenció en ríos de Guinea con ayuda de Psicología y dio clases de Etología indígenas pigmeos, «los que / Es catedrático emérito de la mejor conocen la selva». Universidad de Barcelona desde 1987 y profesor ‘honoris causa’ de Sin embargo, el explorala Autónoma de Madrid / En el dor cambió totalmente de viaño 2000 donó su colección a la da cuando en 1969 Guinea se Universidad de Barcelona independizó. Volvió a Barcelona, se licenció en Psicología y empezó a enseñar Etología en la Universidad de Barcelona. «Empecé con el machete en la mano y acabé de catedrático», dice riéndose mientras recuerda su trayectoria. Desde la distancia, Sabater lamenta el abandono de Guinea: «No he querido volver. Los gobernantes son ricos, pero el pueblo está muy mal. Hoy en día Guinea está esquilmada y España no se preocupa, cuando está obligada moralmente a hacer algo por haber estado allí». Esa destrucción, lamenta Sabater, amenaza a la fauna también: «Si continuamos con la depredación ac- T En las ilustraciones pueden verse algunos de los dibujos y acuarelas realizados por Jordi Sabater Pi en África entre 1940 y 1969. Los retratos de personas forman parte de sus trabajos antropológicos sobre la función de los tatuajes en la etnia fang, que siguen siendo una obra de referencia sobre el uso de marcas corporales. Además aparecen gorilas, chimpancés y elefantes dibujados en diversos países de África. / COLECCIÓN SABATER PI / PARQUE CIENTÍFICO DE LA UNIVERSIDAD DE BARCELONA tual, en 50 años ya no quedará ningún gorila ni ningún chimpancé. Salvo en los zoos, claro, pero allí no tienen nada que hacer porque son animales culturales y si no viven en su entorno, no aprenden. Los zoos no juegan ningún papel en la conservación de la naturaleza. Deberían desaparecer». De los gorilas, dice, le sorprendió «su mansedumbre». «El hombre es un ser soberbio terrible», afirma, «y de los simios deberíamos aprender humildad ante todo. Somos más ricos y cada vez destrui- mos más. Nos estamos cargando el planeta y en gran parte es porque el hombre se considera un ser separado del resto de la biología y esto no es verdad». Sabater Pi habla con nostalgia de un mundo que desaparece. Lo que él documentó durante su estancia en África puede contemplarse en el Parque Científico de la Universidad de Barcelona, que conserva miles de dibujos, acuarelas, fotografías, manuscritos y documentos que donó para uso público en el año 2000. N24 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O A I R E 14/ABRIL 2007 L I B R E FIO El pasado mes de marzo se celebró en Monfragüe la segunda edición de la Feria Internacional de Turismo Ornitológico (FIO)Extremadura Birdwatching. El encuentro, organizado por la Institución Ferial de Extremadura-FEVAL, la Consejería de Economía y Trabajo y la Junta de Extremadura, aspira a convertirse en la cita de referencia del sector de la observación de aves o birdwatching, una afición que mueve a millones de personas en el mundo y es ejemplo de turismo verde y respetuoso con el medio. ASISTENCIA La ministra de medio ambiente, Cristina Narbona, observa aves en Monfragüe el pasado mes de marzo. / EFE / EDUARDO PALOMO ENCUENTRO El objetivo de la Feria de Turismo Ornitológico de Monfragüe es, según la organización, reunir a turoperadores especializados, aficionados a la observación de la avifauna, estudiosos de especies protegidas y representantes de los destinos turísticos internacionales que tienen en las aves uno de sus principales recursos para atraer visitantes. FLORA Los bosques galería (Populus alba, Populus nigra y Salix sp.) son uno de los principales valores de la vegetación del nuevo parque. Igual que los de pino carrasco (Pinus halepensis) y los tarayares (Tamarix gallica). El espacio cuenta también con algunos endemismos, como la albaida sedosa (Anthyllis henoniana) o el rabo de gato (Sideritis juryi). FAUNA Dentro de los ecosistemas acuáticos, las especies más emblemáticas son aves, como la garza real (Ardea cinerea) o el martín pescador (Alcedo atthis); reptiles como el galápago leproso (Mauremys leprosa) y algunos peces de río. MONFRAGÜE El nuevo Parque Nacional acoge la gran cita española del turismo ornitológico PEDRO CÁCERES Monfragüe (Cáceres) n día cualquiera del año, sobre Villarreal de San Carlos vuelan aves difíciles de ver en otro lugar del mundo. La mañana de marzo en la que un grupo de periodistas se acercaba en autobús hasta el flamante nuevo Parque Nacional para asistir a la II Feria Internacional de Turismo Ornitológico (FIO), un ave tan esquiva como la cigüeña negra (Cicconia nigra) pasó graciosamente por encima de la carretera, arrojando la sombra de sus alas so- U bre el arcén. Sin descender del autobús, los viajeros ya habían visto un pájaro por el que los aficionados europeos a la observación de aves están dispuestos a recorrer miles de kilómetros. Y la cigüeña negra es sólo una de las joyas de estas sierras cacereñas. Cubiertas de bosque y matorral mediterráneo, anidan en ellas todas las grandes rapaces ibéricas que encuentran alimento en las dehesas de alrededor. Cientos de buitres leonados, pero también alimoches, buitres negros, búhos reales o águilas imperiales, de las que quedan 200 parejas en todo el mundo, planean cotidianamente sobre Monfragüe. De hecho, la riqueza ornitológica es el valor biológico fundamental que ha llevado a Monfragüe a ser elevado a la categoría de Parque Nacional. Protegido desde finales de los 70 como Parque Natural, el espacio cacereño ha sido incluido ya en la Red de Parques Nacionales, haciendo el número 14 de la restringida lista estatal. El 17 de marzo pasado, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, lo visitaba para la celebración oficial. Dos semanas antes se celebró la Feria de Turismo Ornitológico, que recibió unos 18.000 visitantes y que reunió a turoperadores especializados, estudiosos de especies protegidas y representantes de destinos turísticos internacionales que tienen como reclamo principal a las aves. No faltaron tampoco los aficionados a la observación. Y en Monfragüe, como si las aves quisieran contribuir a su entusiasmo, es fácil irse satisfecho. Las más raras especies anidan en cantiles rocosos que pueden verse desde los caminos del parque. La existencia entre medias de las aguas del Tajo y del Tiétar ofrece la distancia suficiente como para que, año tras año, vuelvan a los mismos nidos pese a que la presencia de visitantes es constante. Si años atrás eran los coches de matrícula extranjera los que se podían ver a la caza de aves, ahora crece el birdwatcher nacional. Sin llegar todavía a los niveles de Gran Bretaña, que tiene más de un millón y medio de aficionados, en España va en aumento la pasión. Éste es uno de los motivos que mueve a la organización para organizar la feria: «La afición a observar aves en su hábitat natural es un turismo demandado por personas respetuosas con el entorno y que además prestan atención a otros aspectos, como los valores históricos, artísticos o gastronómicos», aseguran. Además, los promotores consideran que la ornitología es «uno de los grandes activos del sector turístico de Extremadura», una región rica en valores biológicos. En los stand del FIO se reunieron expositores de toda Extremadura, pero también del resto del Estado, que mostraron sus excelencias al público y a los profesionales de turismo acreditados. Cualquiera de ellos, al salir de la sala de exposiciones, podía encontrar un buitre negro sobrevolando el pueblo. www.fioextremadura.es PARQUE DEL TURIA Un espacio protegido integrado en la gran ciudad MIGUEL G. CORRAL Villamarchante (Valencia) n Parque Natural al que se puede llegar en bicicleta desde la ciudad puede parecer una locura en más de una ciudad europea. Pero el nuevo espacio protegido del curso bajo del río Turia, que acaba de incorporar el Gobierno valenciano a la red de parques naturales, se va a convertir en uno de los destinos preferidos de los ciudadanos para los fines de semana. Y sin que sea necesario llegar en coche. «Con este parque natural se busca preservar la riqueza natural de los alrededores de Valencia y protegerla del urbanismo», asegura uno de los técnicos del Servicio de Ordenación que ha trabajado en el proyecto. La superficie de este espacio protegido abarca nueve municipios y ronda las 4.700 hectáreas, que se reparten entre los 35 kiló- U metros lineales preservados del cauce del río –desde Valencia hasta Pedralba–, algunas de las mejores zonas de huerta valenciana y las tres manchas de bosque de pino carrasco (Pinus halepensis) de la Pea, Les Rodanes y La Vallesa. Así contado, como si fuera una enumeración de parajes, es imposible percibir el valor ecológico de estas zonas. Pero oyendo hablar a Salvador Villalba, técnico forestal del Ayuntamiento de Villamarxant, su pueblo natal, los paisajes cobran otro sentido. «Les Rodanes es un caso rarísimo dentro de la geología valenciana», dice el técnico desde el punto más alto del pico al que se refiere. «El 90% de la provincia está formada por materiales calcáreos, pero bajo estos bosques hay rocas silíceas del Triásico [hace más de 200 millones de años]. Así que, según el suelo y la ubicación, este bosque debería ser de alcornoques (Quercus suber). ¿Por qué hay pi- El río Turia a su paso por La Vallesa, en la provincia de Valencia. / BENJAMÍN ALBIACH no carrasco? Porque la pluviometría que necesita el alcornocal es de más de 400 milímetros y aquí las lluvias medias son de 310». Algunas de las medidas que pretende adoptar la Consellería de Territorio y Vivienda pasan por preservar la flora y la fauna autóctonas, entre las que hay varios endemismos y algunas joyas, como el águila perdicera. Otras, están dirigidas a mejorar el saneamien- to de los núcleos de población cercanos y a controlar los vertidos al Turia. Pero quizá la más popular entre la población sea el carril bici que recorrerá el Parque Natural. Para los menos deportistas la cercanía a una gran ciudad les depara algunas ventajas: la línea de metro pasa por algunas de las zonas más bellas. www.gva.es EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O A I R E PASAJERO DEL PAISAJE N25 14/ABRIL 2007 L I B R E Por Joaquín Araújo De la misma forma que son muy pocos los admitidos en el paraíso sin haber leído a don Antonio Machado, resulta casi imposible llegar a la condición de emboscado –que es otro de los modos de la delicia– si no se ha visitado Muniellos. Sobre todo si, como ahora mismo, comienza la floresta a revitalizarse con las primeras hojas, las flores de sus herbazales y con los cantos de las aves. BOSQUE DE BOSQUES El parque asturiano de Muniellos, declarado Reserva de la Biosfera, es uno de los mejores ejemplos de las húmedas arboledas atlánticas uniellos consigue alzarse con el título de bosque de bosques por muchos motivos. En primer lugar por representar, con suficiente esplendor, al glorioso pasado de las arboledas caducifolias del norte ibérico. En seguida por su excelente estado de salud. Sus casi 3.000 hectáreas, en efecto, acogen una madurez forestal excelente, ésa que por fomentar un convivencial hermanamiento de las principales especies de árboles atlánticos en realidad se convierte en lozanía. Los bosques viejos son los más dinámicos, saludables y por supuesto los que más ilusión ponen en la renovación de la vida. Esta edad, es decir, la madurez de buena parte de las masas arbóreas, algo que es rareza extrema en casi todo el país, convierte a Muniellos en singular, en casi único. Es uno de los pocos ejemplos válidos de lo que es un verdadero bosque. Al lado de los albares, robles a los que dedicamos la breve monografía de más abajo, Muniellos es M también hogar de rebollos, hayas, abedules, alisos, arces, acebos, serbales, fresnos, varias especies de frutales no domesticados… Tiene incluso un par de endemismos: un ranúnculo y una especie de alga que sólo cuenta en el planeta con las lagunas del alto Muniellos como morada. La fauna resulta todavía más imponente. Raros resultan aquí los osos pero muy frecuentes los ciervos, corzos y rebecos, lobos, nutrias, lirones grises, desmanes de los Pirineos, martas y jabalíes... Entre las cien especies forestales de aves y no pocas del aguazal y del torrente destacan el urogallo cantábrico y el pico mediano. Casi todos los reptiles y anfibios del norte esconden aquí sus lentos propósitos. Los mil musgos, líquenes y hongos de estos reinos siempre húmedos. En fin, una multiplicidad vital pletórica como siempre sucede dentro de un bosque y más, si es el mejor. Una de las circunstancias que consigue, finalmente, consolidar por completo el título de nuestro bosque más bosque es la exigente regulación de las visitas, restringi- ILUSTRACIONES: ARTURO ASENSIO das a un máximo de 20 personas por día y a que nadie pueda entrar más de una vez al año. En cualquier caso la arboleda asturiana nos brinda la oportunidad de recordar, más que su contenido, sus dos principales cometidos. Que son agrandarse a sí misma y fijar al paisaje entero con todas sus funciones a cuestas. Para lo que siempre es crucial convertir a las cuestas en algo estable. El bosque nunca empieza donde parece y mucho menos culmina en el ápice de sus copas o en el punto más enterrado de su aparato radicular. En realidad el árbol y los suyos jamás terminan. Porque una de sus más olvidadas destrezas es que su principal producción –la transparencia– se incorpora a la atmósfera para volver a fundarla a cada instante. Como, al mismo tiempo, el aire es lo más viajero, podemos considerar que el aliento de los bosques alcanza todas las latitudes y longitudes. La otra cara de la misma moneda es todo lo que podemos entrever como relacionado con la estabilidad de los sistemas. Y ahí también los bosques despejan toda duda. Las laderas cubiertas por el bosque mixto de Muniellos nos proponen la comprensión de lo que aporta la función estabilizadora del bosque. La quieta función de las raíces pone en marcha lo más dinámico de este planeta que no es otra cosa que la renovación de la vida, es decir, la fertilidad natural. Entre otros motivos porque consigue la participación de todos los elementos esenciales para la vida. La malla de suelos de Muniellos es la suma de las aguas, los aires, las tierras, la energía y la multiplicidad vital de sus comunidades zoológicas y botánicas. Si añadimos que la sensatez de protegerlo estrictamente nos incluye a nosotros mismos entre los factores de la fertilización, estaremos de acuerdo en que poco o nada resulta tan completo como un bosque que es el mejor bosque de esta enorme península en la que no acabamos de apostar por la mejor oportunidad ganada como es un bosque vivo. «...Sin los despojos de estos árboles y estos vivientes (...) fueran estériles los valles...» –GASPAR MELCHOR DE JOVELLANOS / (Gijón 1744–Vega 1811) GLA FAUNA GLA FLORA El oso. Las pisadas del oso ya sólo hollan lo remoto. Pero cuando las encuentras pueden augurar que has llegado a uno de los lugares menos corrompidos. Hay rastros que imprimen carácter al lugar donde quedan marcados. Un lugar con osos, en consecuencia, no necesita más presentaciones que la rúbrica de unas huellas que levantan acta de lo mejor. Una estela de nostalgia, en cualquier caso, recorrerá las sombras del bosque atlántico por lo perdido. Por la sustitución de robles por eucaliptos, por la mengua de los urogallos, por la proliferación de lo transitable... Nos quedan tan pocos osos que a menudo es historia y no actualidad el argumento dominante a la hora de contar algo sobre los mismos. Porque se trata de un viejo argumento cuajado de violencia. Hasta hace dos décadas sólo la muerte medió entre humanos y osos. El millón de años anteriores quedaron acaparados por la contienda, en la que no siempre perdió el plantígrado. Pero desde la Edad Media todas las batallas se saldaron negativamente para los osos que pasaron de merodear por toda la península a quedar arrinconados en Pirineos y la cordillera Cantábrica. Casi El roble albar (’Quercus petraea’). Como una lluvia de primavera, el roble consigue vivificar a sus paisajes. La reciprocidad, en realidad, es su norma y hasta se convierte en su medida. Porque mide lo justo entre la eterna sombra de los suelos y la solemne solvencia de los rayos solares. Conquistan estos robles muchos abrazos de la niebla a la que ayudan en sus propósitos. Se nos suele olvidar que todo árbol, incluso éstos que no pasan calor, sudan. Y que esa liberación de humedad al aire puede sumarse a la que ya, por el mismo, volaba. Así, muchas veces se consigue que las nubes bajas se conviertan en un follaje sobre las copas de los árboles. Una suave sábana que, a menudo, nos quiere hurtar, por las mañanas, el panorama de la emboscadura. Sobre la cordillera Cantábrica no hay bosques sin nubes ni nubes sin bosque. El albar es uno de nuestros seis robles básicos, híbridos y posibles nuevas especies aparte. Es de los que necesita más sombra, agua y menos días soleados. Por eso ocupa preferentemente la base de las laderas y deja a su hermano el roble carballo las posiciones menos húmedas y más soleadas. desaparecen por completo. Hoy se les vigila, se evitan tropiezos entre cazadores y osos; se persigue a los furtivos y envenenadores. Se han creado, incluso, parques naturales para su conservación y se plantan cientos de árboles para que cuenten con más alimento. Por eso tras temerse por su desaparición en estos momentos se constata una leve recuperación. Sus efectivos que quedaron reducidos a unos 60 ya superan los 130 ejemplares. Se ha procedido a reintroducir algunos ejemplares en los Pirineos. En suma ha comenzado una nueva etapa en la que la paz ha tomado la palabra. N26 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 E S C A P A R A T E LIBROS TRASHUMANCIA Ideas, coordinación y textos: Manuel Rodríguez Pascual / Ed. Secretaría General Técnica del Ministerio de Agricultura / Precio: 45 euros / Venta en librerías EL PAISAJE DE LOS NÓMADAS ESPAÑOLES Fotografías, prosa y versos reflejan las vivencias de los últimos pastores trashumantes y los paisajes que recorren PEDRO CÁCERES a trashumancia favorece el mantenimiento de ecosistemas de gran importancia y un patrimonio multifuncional, único en Europa. Los riesgos que se ciernen últimamente sobre la trashumancia, relacionados con la pervivencia de los pastores profesionales, determinados usos de las vías pecuarias y los desplazamientos de la cabaña ganadera, afectan negativamente al modelo de ganadería extensiva y a los territorios rurales, originando pérdidas de la biodiversidad, facilitando la erosión y los incendios». Con esta rotunda defensa de la ganadería trashumante abre la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, este magnífico trabajo que vuelca una L mirada conocedora y afectuosa sobre el mundo de relaciones tejido durante siglos en torno a la trashumancia. Manuel Rodríguez coordina y escribe un volumen en el que también aparecen los versos de dos poetas, Eleuterio Prado, pastor antes que escritor, y Ángel Fierro, cuya obra está también ligada a la tradición rural. Uniendo las palabras de los tres brillan las fotografías de Fernando Fernández, que ha sabido capturar por igual ganados y pastores, paisajes solitarios de pastizales y montañas y jornadas de trabajo en las que el retrato de quienes son los últimos supervivientes de una actividad en desaparición se convierte en testimonio antropológico de primer orden. Como dice el novelista Julio Llamazares en el prólogo: «Son ya pocas las personas que puedan dar fe de una actividad que tuvo sus mejores años hace ya tiempo y que dejó en la memoria de quienes la conocieron una añoranza sempiterna y un sentido de la vida diferente». Dividido en tres partes: el entorno, los actores y las vivencias, el libro es, efectivamente, el testimonio de los últimos nómadas españoles, pastores que siguieron la tradición heredada del Neolítico de moverse de norte a sur de la Península para aprovechar los pastos. «Una deslumbrante epopeya que ya apenas transita por la luz del recuerdo», como recuerda Llamazares. La Secretaría General Técnica del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y el Centro de Publicaciones WENAEWE son los responsables de la publicación de esta obra de venta en librerías. LAS CITAS CURSOS Y CONGRESOS Congreso nacional sobre cambio global. La Universidad Carlos III de Madrid da cita a expertos y autoridades para que intercambien ideas sobre el cambio global desde distintas disciplinas científicas para entender las alteraciones que se avecinan en el planeta, incluido el cambio climático, en un sentido holístico e integral. El encuentro tendrá lugar los días 25, 26 y 27 de abril en la universidad. Más información: www.uc3m.es/uc3m/dpto/CPS/ceicag/congreso El agua en la industria. ¿Cuál es el impacto de la actividad industrial sobre los recursos hídricos? Un seminario organizado por la Fundación Biodiversidad debatirá esta cuestión el próximo 26 de abril en Santander. El programa y el lugar de la cita están por confirmar. Para todos los públicos. Más información: www.fundacionbiodiversidad.es/opencms/export/fundacionbiodiversidad/envios/portal_debate07.html Economía sostenible. Los próximos días 25 y 26 Almería acogerá el I Seminario sobre Economía Ecológica, que discutirá las formas de alcanzar un modelo de crecimiento sostenible. Más información: www.ecomimesis.com Huella ecológica. La III Jornada de Medida de la Sostenibilidad estará centrada en el concepto de la huella ecológica y su impacto tanto a escala local como regional. Tendrá lugar el 20 de abril en el Museo de la Ciencia y de la Técnica de Terrassa, desde las 9.15 hasta las 14 horas. La jornada está organizada por la Cátedra Unesco. Más información: www.catunesco.upc.es LA MOCHILA EXCURSIONES Y SALIDAS LIBROS DEL UNO AL OTRO CONFÍN Desde el Ártico al Antártico pasando por el atolón de Bikini o las playas de Costa Rica, el fotógrafo Bill Curtsinger ha recorrido todo el planeta fotografiando el mundo marino para la revista National Geographic, cuya portada ha ocupado en numerosas ocasiones desde los años 70. Algunas de las imágenes de los océanos más novedosas publicadas por la prestigiosa revista, como la de las morsas buceando en el Ártico o las extrañas formas de vida de los gélidos fondos antárticos, son obras de Curtsinger. La editorial Blume ha reunido una amplia colección de esos trabajos en este libro de gran formato en el que brillan con luz propia las fotografías, pero en el que la imagen no lo es todo. Los textos de Curtsinger describen el modo en el que ha realizado su trabajo durante décadas, mostrando sus amplios conocimientos tanto de la naturaleza como de las técnicas necesarias para captar momentos irrepetibles. La narración de sus peripecias practicando la fotografía submarina a lo largo del globo es en sí misma un relato de aventuras. En el libro no falta una honda preocupación por el deterioro del mundo natural. Chris Johns, editor de National Geographic, afirma de Curtsinger: «El autor es un biólogo y un artista que busca temas interesantes y rara vez vistos. Es, además, un fotógrafo con una misión en la que convergen su compromiso con la conservación y su compromiso con el arte». EL GRAN AZUL. IMÁGENES DE LOS CONFINES DEL MUNDO Bill Curtsinger Editorial Blume 403 páginas / 39 euros Manifestación por el clima. El próximo 21 de abril, en vísperas del Día Mundial de la Tierra, los ciudadanos están invitados por las ONG a salir a la calle en Madrid para exigir medidas urgentes contra el cambio climático. La marcha partirá de la plaza de Jacinto Benavente a las 19 horas. Más información: www.tierra.org/spip/spip.php?article351 Fotografiando el paisaje. El Parque Natural de las Bardenas Reales, en Navarra, es el lugar elegido para realizar el taller práctico de fotografía de paisaje que organiza Fotonatura. Eduardo Blanco, galardonado en el prestigioso concurso fotográfico de la GDT Alemana y guía titulado de naturaleza, será el instructor de este curso que se celebra los días 11, 12 y 13 de mayo. El precio es de 195 euros y hay abiertas 20 plazas. Más información: www.fotonatura.org Cabo de Gata en Bici. El grupo especializado en bicicletas y ciclismo, Bicimanía, organiza un recorrido de 91 kilómetros por el Parque Natural de Cabo de Gata, en Almería, del 20 al 22 de abril. Salidas desde Madrid. Precio: 270 euros, incluido alojamiento, seguro y viaje. Más información: www.bicimania.com LA VITRINA EXPOSICIONES Y FESTIVALES NUESTROS ANTEPASADOS CONSTRUIR BIEN RUTAS CON SENTIDO ÁRBOLES EN EL QUIOSCO El autor es especialista en la reconstrucción científica de fósiles y ha sido el ilustrador del equipo de Atapuerca. En esta interesante obra explica cómo es posible recomponer el aspecto completo de una especie extinta en base a unos simples huesos fosilizados. Nada mejor que esta obra para ver que las cosas se pueden hacer bien en materia de construcción. Se muestran decenas de ejemplos de viviendas bioclimáticas y sostenibles y se ofrecen entrevistas con sus arquitectos. Una idea original la de esta guía que invita a apreciar el entorno ligándolo a la actividad de los productores ecológicos. Sirve para hacer turismo rural y para conocer a esas personas que demuestran que la producción es compatible con la conservación. El número de abril de la revista decana de libros dedica un especial a los árboles. Leer, la publicación dirigida por José Luis Gutiérrez, titula en su portada Árboles: De la vida a la literatura y ofrece un amplio despliegue de artículos. Uno de ellos analiza las mejores guías de árboles del mercado. EL SECRETO DE LOS FÓSILES Mauricio Antón Editorial Aguilar 356 páginas / 20 euros VIVIENDA Y SOSTENIBILIDAD EN ESPAÑA Toni Solanas Editorial Gustavo Gili 211 páginas / 55 euros MADRID ECOLÓGICO Miguel Ángel Acero Editado por Juglara 280 páginas / 16,10 euros REVISTA LEER Número 181. Abril Precio: 3 euros Festival internacional de cine científico. La Asociación Española de Cine Científico (ASECIC) anuncia, en su página web renovada, el Festival Internacional de Cine Científico que dará comienzo en Atenas el día 17 de abril. El festival durará hasta el 21 y proyectará 40 películas de distintos países. Más información: www.caid.gr/isffa Cine Forum Medioambiental. Barcelona acoge desde el pasado 28 de marzo un ciclo de películas cuya temática común es la naturaleza, el medio ambiente o la sostenibilidad. El 25 de abril se proyectará un cortometraje de Eric Rohmer y el 9 de mayo, Baraka, de Ron Fricke. El ciclo finaliza el 6 de junio. Más información: www.eco-union.org El agua en la pintura andaluza. Con motivo del Día Mundial del Agua se inauguró el pasado 22 de marzo en Málaga una exposición de pinturas sobre el agua de célebres pintores. Más información: www.juntadeandalucia.es/medioambiente N28 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 Z O N A ( 2 ) VIDA SANA ALIMENTACIÓN La carne que proviene del paisaje tradicional ALBERTO CUÉLLAR Vacas locas, fiebre aftosa, antibióticos y hormonas han contribuido a escribir la historia negra de la carne. Ésta es la otra cara, la de la ganadería más ecológica TANA OSHIMA a llegado la primavera a la finca de Rodrigo. Leguminosas y gramíneas asoman sus brotes jóvenes sobre las colinas. Una decena de vacas negras avileñas pastan libremente sobre el prado. «Se han escapado atraídas por el verde. Pero todavía no deben pastar aquí», dice Rodrigo mientras ayuda a guiar al ganado para que vuelva por donde vino. «Esta parte la tengo reservada», añade. Es decir, es H tierra que se está recuperando de la última vez que pastaron allí las vacas: es así como se evita la sobreexplotación y la erosión del suelo. Los brotes de lentejas, trigo, cebada y guisantes han nacido solos de los granos que se esparcieron antes de molerlos como harina para el ganado. No hubo que regar ni remover la tierra: crecieron con el agua de lluvia y el estiércol que fueron dejando las reses. El rebaño rebelde vuelve al terreno que le corresponde y se une al resto del ganado. Es una parcela grande de monte mediterráneo que forma parte de las 250 hectáreas que tiene Gavisa, la empresa de carne ecológica de Rodrigo, cerca de Ávila. Ahí se alimentan las vacas del heno y la alfalfa repartidos por el suelo, pero sólo hasta que la primavera acabe de devolver a la tierra su pasto, como en las colinas de enfrente. El pienso y la paja sirven de complemento, pero no son suficientes si al final no hay brotes o ramones de encinas que llevarse a la boca, como está a punto de ocurrir. Todo lo contrario sucede en la ganadería llamada intensiva, que intenta aumentar el rendimiento gastando lo mínimo. En las granjas intensivas los animales, demasiados en número, suelen estar estabulados, comprimidos en un espacio pequeño, sin lugar para pastar o hacer ejercicio y en unas condiciones de higiene que los hace propensos a contraer enfermedades, de ahí que se haya abusado de los antibióticos preventivos y de las hormonas de crecimiento, hoy prohibidas, aunque sí están permitidos en la cría convencional los aditivos que estimulan el desarrollo, dice Clemente Ma- ta, catedrático de Producción Animal de la Universidad de Córdoba. En las prácticas ecológicas, en cambio, casi toda sustancia química está prohibida. Los animales deben comer exclusivamente alimentos ecológicos y no se les debe administrar antibióticos más que una vez y sólo cuando hayan contraído una enfermedad. A partir del segundo tratamiento farmacológico, la carne ya no podrá ser vendida como ecológica. Como en toda buena medicina, aquí se trata de prevenir antes que curar. La clave está en mantener el bienestar del animal y explotar a las razas autóctonas, mejor adaptadas al medio y por lo tanto más resistentes a las enfermedades, añade Clemente Mata. Para garantizar las condiciones ecológicas, el ganado debe ser sacrificado los lunes a primera hora en los mataderos, antes de que se comience a matar a los animales convencionales. Asimismo, la carne ecológica debe ser la primera en llegar a las salas de despiece. De ahí suele salir empaquetada y con el debido sello de certificación ecológica, por lo que se hace difícil encontrar piezas enteras en las tiendas. Forma parte del celo por mantener las condiciones naturales de la carne en una época en la que el sector cárnico industrial atraviesa una crisis de confianza. El abuso de químicos y las prácticas aberrantes han tenido la culpa. «La ganadería ecológica surge ante una preocupación creciente por comer sano», dice Carmelo García Romero, presidente Pienso natural con granos ecológicos en la finca de Gavisa. / A. CUÉLLAR Los químicos están prohibidos en la ganadería ecológica «El herbívoro es esencial en los sistemas naturales» de la Asociación para la Ganadería Ecológica de España. «Y también por el medio ambiente», añade. Aunque menos popularizada que la agricultura ecológica –en buena parte porque la clientela de productos bio suele ser vegetariana–, la ganadería natural también va ganando terreno: de unas 1.880 fincas en 2005 se ha pasado a 2.428 en 2006. A diferencia de la convencional, la cría ecológica de animales de granja no es contaminante. En la práctica industrial, los tóxicos purines que se producen cuando la orina y el estiércol no fermentan lentamente con los restos vegetales, como ocurría tradicionalmente, ahogan los suelos y amenazan con contaminar los acuífe- ros, explica Antonio Gómez Sal, catedrático de Ecología en la Universidad de Alcalá de Henares. Esto no ocurre con la cría ecológica, que «mantiene los hábitos de la cría tradicional y los mejora», continúa. Históricamente, el pastoreo ayudaba a conservar la fertilidad del suelo. Pero también ejercía muchas otras funciones. En realidad, la ganadería tradicional ha sido crucial para los ecosistemas y paisajes que hoy conocemos. «La labor de los herbívoros es consustancial a los ecosistemas naturales, pero se está perdiendo en los montes. La materia vegetal se acumula sin ser descompuesta, lo que facilita los incendios. El ganado ayudaba a que esta materia se incorporara al suelo una vez descompuesta por el tubo digestivo de los rumiantes», continúa. Es lo que la cría ecológica y la extensiva –la que practica el pastoreo, sin necesidad de ser ecológica– intenta hoy mantener. Porque además, este tipo de ganadería contribuye a mantener la biodiversidad. Gómez Sal lo ha podido comprobar en un estudio suyo reciente. «Las ovejas crean pastizales [co- ➔ G LA UE TOMA MEDIDAS PEDRO CÁCERES a ganadería ecológica, en la que las reses se crían de un modo que imita al máximo las condiciones naturales, sólo ocupa una pequeña parte del mercado. El resto corresponde a un sistema industrial de producción que ha causado más de un susto a los ciudadanos, como demuestra la crisis de las vacas locas. La existencia de casos así no puede hacer desconfiar de todo el sector ganadero, pero es evidente que supone una quiebra de la confianza del consumidor. No es extraño, por tanto, que la Unión Europea haya ido tomando medidas para mejorar las condiciones de los animales de granja. Aparte de las cuestiones éticas sobre el sufrimiento animal, está la necesidad de reforzar la seguridad alimentaria, basada en la idea de que un animal sano se convertirá en una comida sana. Así, la UE ha legislado sobre cómo debe realizarse el transporte del ganado o cómo llevar a cabo el sacrificio en los mataderos. Pero también ha dictado normas sobre el espacio mínimo que deben tener los pollos de corral para que no se toquen hombro con hombro en las jaulas. En el caso de los cerdos, todos deben tener acceso a un lugar con luz natural. «¿Es que antes se los podía criar sin que les diera la luz del sol?», pensará más de un ciudadano alarmado. Parece lógico que la UE haya decidido velar por la salud de los animales y por la seguridad alimentaria. Según una reciente encuesta publicada por la Comisión Europea, un 62% de los europeos estaría dispuesto a cambiar de tienda o incluso a pagar precios más elevados por productos que sean respetuosos con los animales. L EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O N29 14/ABRIL 2007 Z O N A ( 2 ) 02 ➔ G Viene de pág 28 miéndose el matorral], pero no lo aprovechan al máximo, y ahí viene el conejo para rematar la tarea», cuenta el profesor. «La acción pastadora de los herbívoros aumenta la tasa de productividad de un ecosistema, lo que lo hace capaz de alimentar a un mayor número de fauna». En su libro Otra manera de vivir, la célebre primatóloga británica Jane Goodall recuerda cómo, en su niñez, las granjas guardaban un equilibrio perfecto: las vacas pacían en un prado y luego eran trasladadas a otro cediendo su lugar a los cerdos, que con su hocico hozaban la tierra para extraer raíces y alimentos. Luego, las aves de corral iban a comer los restos que dejaba el cerdo y las lombrices que emergían de la tierra removida. Así lo na- RAZAS AUTÓCTONAS GRUBIA GALLEGA GMERINA GGOCHU ASTURCELTA GTUDANCA GMANCHEGA GCHATO MURCIANO GNEGRA AVILEÑA GCOLMENAREÑA GIBÉRICO ILUSTRACIONES: RAÚL ARIAS Raza tradicional de Galicia. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la considera ‘de fomento’, lo cual significa que su censo está en expansión. Es la variedad más popular de entre las razas gallegas, tanto por su carne, altamente apreciada por su calidad, como por su capacidad lechera. Está muy bien adaptada a distintos tipos de paisajes, como llanura y montaña, lo cual la hace versátil; es prolífica, produce mucha leche y es dócil. Está considerada como una de las razas idóneas para la ganadería ecológica debido a su capacidad de pastoreo y su buen manejo. Típica del centro y oeste de la península, es la principal raza lanar autóctona del país. Está clasificada como ‘de fomento’, es decir, en expansión. Procede del ‘Ovis aries turdetanus’, asentado originalmente en el Valle de Alcudia. Destaca por su gran capacidad de pastoreo y campeo y es, con diferencia, la más conocida de España. Es rústica, resistente a condiciones duras, a la fatiga y a la sequía. Históricamente se explotó su lana, muy apreciada por su calidad. Su distribución se extiende por Ciudad Real, Extremadura y parte de Andalucía. Actualmente se explota comercialmente su carne, sobre todo de lechal y recental. Raza antigua de cerdo oriunda de la región de Asturias. Estuvo a punto de extinguirse y actualmente se está recuperando, aunque su situación sigue siendo crítica. Suele alimentarse de productos de huerta, como patata, nabo o zanahoria, además de cebadas, frutos del bosque, castañas o bellotas. Su carne es muy apreciada para embutidos, como el célebre Xuan, los chorizos como el Sabadiegu o las morcillas. Su recuperación, en manos de la Asociación de Criadores del Gochu Asturcelta, ayudará a mantener los paisajes asturianos. Su explotación comercial permitirá que esta raza autóctona no se extinga. Todas las razas autóctonas ayudan a preservar el paisaje El ganado industrial es contaminante por su alta intensidad rra también Carmelo García en Ganadería Ecológica y Razas Autóctonas, según el cual cada raza (hay unas 50 razas por especie) está adaptada a convivir con animales que le benefician, como las aves que eliminan patógenos dañinos para los rumiantes. En la finca de Rodrigo, siete machos de 14 meses esperan a ser enviados al matadero. Son terneros que han vivido junto a sus madres, amamantándose, luego pastando entre pinos y encinas. Se matará a un animal por semana, pues la demanda, como el propio sistema ecológico, es de pequeñas dimensiones. Y el precio es un 30% más caro, pero con cada bocado se estará contribuyendo no sólo a la salud humana, sino a mantener la integridad de ecosistemas típicamente españoles. www.gavisa.net Carne vacuna de raza negra avileña. www.carnebraman.com Carne vacuna de raza negra avileña. www.ecoibericos.com Jamones y embutidos de cerdo ibérico. www.ecoviand.com Carne vacuna de Bruna, autóctona de Arán. www.cogace.com Carne de Rubia Gallega. www.bernatderubio.com Embutidos de cerdo ibérico. www.razanostra.com Tienda especializada en razas autóctonas. Originaria de Cantabria. Está clasificada como ‘de protección especial’, es decir que su población está en grave retroceso o en vías de desaparición. Históricamente sirvió al hombre para cargar mercancía, pero entró en declive con la mecanización del transporte y del laboreo. Se trata de una vaca rústica y resistente a la escasez de alimentos en invierno. Actualmente se explota su carne y está muy ligada al paisaje cántabro, al folclore y a las tradiciones populares de la zona. Tiene fama de tener mal genio, pero es apreciada por su capacidad de aprovechamiento de prados. Raza autóctona de Ávila típica de montaña y paisajes adehesados. Está distribuida por todo el centro peninsular y en zonas limítrofes de Castilla y León. Destaca por su buena adaptación a las condiciones climáticas extremas propias de la zona, a la sequía y a la escasez de alimento, y es muy resistente a los parásitos y a las enfermedades comunes de la región. Es capaz de producir mucha carne de alta calidad, comercializada como carne de Ávila y con Indicación Geográfica Protegida. También produce mucha leche para sus crías. Es la segunda raza de ordeño de España. Tiene una gran aptitud lechera que se manifiesta en el famoso queso manchego con denominación de origen. Pero su carne también tiene un reconocido prestigio, sobre todo como cordero lechal y como ‘cordero manchego’ con Indicación Geográfica Protegida. Está considerada como una raza ‘de fomento’, es decir, su población está en expansión. Es resistente y competitiva, adaptada a climas extremos y secos y a vegetaciones pobres y tiende a mantener buena salud, a diferencia de las razas extranjeras introducidas. Oriunda de Madrid, en concreto de Colmenar Viejo. Es una de las dos razas madrileñas en peligro de extinción, junto con la Rubia del Molar. Es pequeña de tamaño y cuenta con tres variedades: la Carbonera, la Ojalada y la Barrosa. Está muy bien adaptada al medio, aprovecha eficientemente los montes y matorrales aromáticos. Da una leche de gran calidad al igual que su carne, centrada en la producción de corderos lechales. Sin embargo, su situación actual es crítica debido al peligro de hibridación al mezclarse con otras razas. Como resultado del esfuerzo de recuperación, esta raza se ha salvado de su extinción, aunque sigue estando amenazada. Autóctona de la Región de Murcia, es descendiente directa del Ganano, una antigua raza murciana. Tiene un gran valor ecológico por su capacidad de pastoreo y para aprovechar los recursos de la huerta. Está muy adaptado a las condiciones climáticas de la zona y a las altas temperaturas. Es ideal para productos de charcutería por su adecuada proporción magro-grasa. Es una auténtica máquina de transformar los productos del huerto en finos embutidos. Es, sin duda, el animal estrella de la fauna y la gastronomía españolas. Sin embargo, en el último siglo también ha perdido diversidad. La raza ha ido perdiendo estirpes tras la introducción de cerdos foráneos. Su presencia es decisiva para la conservación del paisaje mediterráneo ya que está íntimamente ligado a las dehesas. Información extraída del libro Ganadería Ecológica y Razas Autóctonas, de Carmelo García Romero y Remedios Cordero Morales (Editorial Agrícola Española). N30 EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O 14/ABRIL 2007 Z O N A ( 2 ) 03 TRABAJO La revolución de las oficinas ecológicas El ‘boom’ verde también ha llegado a las grandes compañías de EEUU. Bombillas de bajo consumo y paneles solares decoran los mejores edificios SILVIA TAULÉS Nueva York i se puede comer hierba, beber oxígeno y dormir en un hotel ecológico, ¿por qué las empresas no pueden seguir la misma senda? Ha llegado la revolución verde a Estados Unidos y nadie, ni las más poderosas compañías, quiere quedarse atrás. Toda el agua que pasa por el edificio se recicla. Las oficinas tienen bombi- S llas de bajo consumo que imitan la luz natural y dañan menos la vista. La electricidad procede en su mayoría de los paneles solares fotovoltaicos instalados en los tejados del inmueble. Ni las pinturas de las paredes ni los barnices del suelo o de los muebles contienen productos químicos tóxicos. Techos altos, grandes ventanales, espacios generosos y diáfanos. Podría ser el anuncio de un lujoso apartamento o la descripción de una comuna hippie, pero se trata de la estructura de una de las empresas de comestibles más potentes del mundo, General Mills. Y es tan sólo un ejemplo de una moda que arrasa: los edificios verdes, la salud del trabajador y el bienestar en la oficina. Todo, dicen, ayuda a aumentar los beneficios. «Si un trabajador está a gusto en su empresa, trabaja mejor, reduce su estrés y su salud mejora», comenta la responsable de Recursos Humanos de General Mills, Ann Merrill. En la empresa automovilística Ford se emplean a fondo para que el edificio en el que empezó el sueño americano sea alabado por su respeto al medio ambiente. En el todavía algo romántico edificio matriz se lee en los carteles: «Cuidado con las abejas». Y es que han llegado al colmo de lo verde y han decidido instalar panales en el aparcamiento de la fábrica, con lo que hay miel e insectos por doquier. «No la vendemos, ni siquiera la consumimos», admite una de las guías del lugar, «pero en algunas celebraciones se envasa para que los visitantes lo admiren». Los trabajadores en cadena de la sede de Ford en Dearborn (Detroit, EEUU) pueden aparcar el coche junto a un panal de miel. En el mismo edificio el tejado de hierba natural favorece el equilibrio de la temperatura y el agua reciclada reduce costes y evita el uso ex- cesivo de este recurso. Ford, como tantas otras empresas, trata de respetar el medio ambiente. Al mismo tiempo, la empresa pionera de la automoción en EEUU sufre una grave crisis que le obliga a reducir la plantilla. Pero no ha renunciado por ello a su apuesta verde en la oficina. Cualquier ayuda es necesaria, y el sector empresarial estadounidense tiene asumido ya que mejorar las condiciones del lugar de trabajo genera beneficios. Caitlin Bennett, portavoz del US Green Building Council –un grupo de empresas dedicadas a distintas áreas de la industria de la construcción que asesora y subvenciona parte de la construcción de los edificios si se rigen por criterios ecológicos–, indica que en 2002 se registraron 630 proyectos; este año ya cuentan con 4.200. Los principios en los que se basa la construcción de oficinas verdes no distan mucho de los utilizados por los arquitectos que, desde hace algunos años, han apostado por la arquitectura bioclimática. Pero existe una diferencia muy importante: se busca la comodidad y el bienestar de los trabajadores, no de los propietarios. En los tejados crecen verdes praderas de césped que ayudan a reducir la insolación y a regular la temperatura interior de forma natural. Las ventanas permiten la circulación de aire desde el exterior y reducen el número de horas de uso de los aparatos de aire acondicionado. Y las vistas miran al La salud y el confort en la oficina hacen subir los beneficios En los tejados crece césped que ayuda a reducir la insolación campo o a jardines poblados por especies autóctonas que tienen menor dependencia hídrica que aquéllas traídas de lugares más húmedos. Todo para que el trabajador esté cómodo. Hines, la firma internacional, anunció recientemente la creación de una fundación, Green Development Fund, que se dedicará a certificar e incentivar la construcción de edificios sostenibles. Según publica la revista Forbes, esta fun- Paneles solares en los tejados para producir electricidad y generar agua caliente. LA OFICINA VERDE Interior de la oficina: Pintura blanca para favorecer el reflejo de la luz natural. Sensores de ocupación para reducir el gasto de energía. dación, que cuenta con una inversión inicial de 500 millones de dólares, enfocará sus proyectos en todo EEUU. El primero, Tower 333, se construirá en Bellevue (Washington) y contará con una superficie de 37.000 metros cuadrados que terminarán de edificarse a finales de 2007. La torre séptima del que será el nuevo World Trade Center seguirá los mismos pasos. Del mismo modo, todos los edificios públicos que se construyan desde ahora en Los Angeles, Chicago, Salt Lake City y Washington serán ecológicos. Ni General Mills ni Ford son un caso excepcional en la maraña de grandes empresas que invierten en verde en Estados Unidos. Toyota Motor Corporation empezó su particular andadura ecológica hace tres años en Torrance y se dio cuenta de que el absentismo laboral disminuía. Warner Bros ahorró el 38% del consumo de agua, electricidad y gas al decidir respetar el medio ambiente en la construcción de sus edificios de Burbank. Así lo aseguraba a Los Angeles Times la vicepresidenta de la compañía, Shelley Billik, quien recordó que fue en 2004 cuando decidieron tomar la senda verde. Tejados verdes sembrados con césped para evitar la insolación directa y facilitar la regulación de la temperatura en el interior del edificio. Ventanas orientadas e inclinadas para evitar que el sol entre directamente. Uso de madera siempre certificada y materiales de construcción reciclados. Paneles inclinados sobre las ventanas que miren al sur para evitar la insolación directa sobre el trabajador. Iluminación natural de la mayor parte posible de la oficina. Ventilación natural que permita reducir el uso del aire acondicionado. Pavimentos porosos que filtren agua para prevenir riadas y el colapso del alcantarillado con lluvias fuertes. Vistas a zonas ajardinadas o a campo abierto directamente desde el puesto de trabajo. Utilización de especies autóctonas para reducir el consumo de agua y para evitar la introducción de especies exóticas. Recogida de agua de lluvias y reutilización en los sistemas de riego. FUENTE: US Building Council. GLA MEJOR EMPRESA Los empleados votan a la compañía más confortable. Revistas como Forbes y Fortune publican listas anuales de todo tipo. Una de las que más preocupa a algunas empresas es la que apunta los lugares favoritos para trabajar. Aparecer entre las 100 compañías más votadas por los empleados es un reto que muchas empresas se imponen y, de conseguirlo, lo muestran con orgullo. Uno de los aspectos que valora el empleado es la calidad de las instalaciones del lugar de trabajo. Sin embargo, la idea de mejorar el bienestar del trabajador a través de la mejora de las condiciones ambientales de la oficina no es algo que Aparcamientos para bicicletas de los trabajadores. Mario Chimeno / EL MUNDO defiendan sólo las empresas privadas. Son muchos los condados e incluso los estados que han decidido aplicar la teoría entre sus funcionarios. Vermont, Tennessee y Lake son algunos de los ejemplos de entidades públicas que dedican parte de su presupuesto a mejorar la calidad de vida de sus empleados, siempre que los resultados sean visibles. La primera piedra de la moda de las oficinas verdes surgió de la ecología. Algunas empresas decidieron construir sus nuevos edificios basándose en criterios medioambientales y, perplejos, se dieron cuenta de que la cuenta de resultados mejoraba. Las facturas de electricidad, gas y agua disminuían. Había menos bajas laborales. Todo empezó como una inversión auspiciada por el grupo interempresarial US Green Building Council y se ha convertido en una verdadera plaga. Y es que las empresas se han dado cuenta de que invertir en calidad proporciona bienestar al trabajador y eso, en los beneficios, también se nota. / SILVIA TAULÉS EL MUNDO/NÚMERO 13/ NATURA / S Á B A D O N31 14/ABRIL 2007 L E T R A S CARTAS VERDES El cuestecillo Por Antonio Gamoneda RAÚL ARIAS Antonio Gamoneda, nacido en 1931 en Oviedo y afincado desde la infancia en León, es el último ganador del Premio Cervantes, un galardón que le será entregado este mes. En su obra abundan las referencias al paisaje y al mundo natural, como muestra este relato escrito para NATURA, que toma como título un leonesismo: cuestecillo. Es el diminutivo de «cuesto», una palabra que, según la Academia, es, en León y Asturias, «una cuesta, un cerro de tierra de poca altura». O como explica el poeta con sus propias palabras: una «subida leve o una breve elevación». Tengo un problema. No me lo tomen a broma; tengo un problema: mi cuestecillo ha desaparecido de la realidad. No aparece por ninguna parte. Era suave y corto: tres o cuatro metros de ascensión, con 12 ó 13 grados angulares; eso tendría y no más. Se truncaba 30 ó 40 centímetros antes de llegar al cuerpo de la encina. ¿He dicho encina? No; creo que no. Sería una chopa de tronco engrosado por los años. Tenía un largo ramaje horizontal que hacía sombra (una circunferencia casi perfecta al mediodía) sobre el césped. ¡Ah el césped! Verde y fresco. No muy largo; lo suficiente para hacer un ligero mullido debajo de mi cuerpo. Pero, ¿he estado yo alguna vez tumbado en el cuestecillo? ¿Lo he visto siquiera? Sí, es imposible que esto no haya sucedido; está muy presente en mí (incluso en mis sueños) para que no haya sido una verdad; una verdad necesaria, probablemente. Sé además que yo dormí bajo la chopa una larga siesta. Cuando desperté, las hojas se movían en un temblor finísimo encima de mis ojos. Era una música sin melodía ni accidentes; sólo, continuamente, el rasguño del aire en los lóbulos —minúsculamente dentados, me parece— de las hojas dentro del espesor vegetal que me separaba de la profundidad azul. Había comido una ración muy decente de empanada y bebido media botella de un saludable prieto picudo. ¡Ah las empanadas! Las empanadas de Sergia, mi madrina de pila; las empanadas sobrenaturales. Tengo que decir algo de ellas. De sardinas desespinadas, procedentes, probablemente, de Gijón: capa de sardinas, capa de pimientos verdes y despellejados; capa de sardinas, capa de pimientos rojos, igualmente liberados de pellejos. Todo ello ligeramente asado de antemano y embalsamado con un glorioso puré de tomate en el que abundaba la cebolla perfeccionada en diminutas lascas. La harina de la masa la cernía escrupulosamente con un cedazo y, en un goteo sucesivo, la aceitaba con prudencia mientras amasaba sobre la madera limpia. Amasaba con una santa paciencia que producía la sensación de que estaba amasando para la eternidad. La empanada, aún fresca, primorosa en el lacerío de tirabuzones paniegos, entraba en la cocina económica (Sagarduí, de Bilbao), debidamente caldeada, durante un tiempo en el que no podía producirse ni un solo minuto de imprecisión. Liberada del horno, la empanada era llevada procesionalmente otra vez a la mesa. ¡Ah las empanadas! Pues bien. Teniendo yo treinta y varios años y en ocasión de haber publicado algún libro, un periodista ocioso me preguntó por un lugar y la circunstancia en que yo podría sentirme feliz. Le hablé del cuestecillo, de la empanada de sardinas y del Las hojas se movían en un temblor finísimo encima de mis ojos. Era una música sin melodías ni accidentes prieto picudo. No entendió nada. Posiblemente esperaba que le hablase del Karnak, del Barrio Latino o del Machupichu. Yo qué sé. Pero, al cuestecillo. Mi madre, cuando yo tenía tres años, me afilió —y allí sigo— a una aseguradora obitual, a través de la cual podía comprarse ropa y zapatería a plazos. No hace mucho, me interesé por si, con algún moderado suplemento, también podía incluirse en el aseguramiento la incineración, negocio en el que ya debo ir pensando. Sí. Todo bien, pero aquí aparece el problema: el cuestecillo. Yo no soy hombre de aguas. Ni de mares, cuya visión no acabo de entender, ni de ríos —atorados por malolientes berrañas— a los que no logro tener cariño. El cuestecillo; eso es lo mío: me incineran; mi hija Amelia agarra el tarro de cenizas; lo lleva al cuestecillo, esparce (bien esparcidas, no tirándolas de cualquier manera) las partículas cenicientas, y aquí paz y después nada. Vendrán días de lluvia que, con suave naturalidad, adentrarán los restos polvorientos en la tierra. No serán fertilizantes, pero sí cosa limpia que no hará daño. Creo que no me enteraré de estos detalles, pero me bastaría tenerlos ahora como posibles. Pero, al cuestecillo. Hace un par de veranos, iba yo, no sé a qué, por la Omaña y, dando con la vista en la parte más baja de una laderilla poco menos que plana, me dije jubiloso: «¡Ahí, ahí está el cuestecillo!». Fui a por todas. Atravesé un río —más bien un regato— por una pasarela temblorosa y di en la otra ribera, llegando en pocos pasos al lugar donde creí encontrar el cuestecillo. Llegué a él casi tomado por la veneración a pesar de que no llevaba conmigo la empanada (mi madrina Sergia hacía ya largo tiempo que estaba perfectamente muerta), y alcancé la cercanía de la chopa. No; aquel no era el cuesto. Estaban la chopa y la sombra circular, pero la hierba, la serena alegría de la hierba, aparecía maltratada, imposible para la serenidad, porque la suya, que había de darse en estado de absoluta pureza, ya no estaba en ella. Vi plásticos arrugados y grasientos, una lata redonda con restos de escabeche en putrefacción y abarrotada de hormigas rojas; vi abundantes ramas del árbol desgajadas y colgantes y, finalmente, un preservativo amarillento y reseco. Era suficiente. Aquel no era mi cuestecillo. No quiero ni pensarlo, pero parece que, sin remedio posible, ha desaparecido. Queda el problema. Prieto picudo lo hay, incluso mejorado; suponiendo que pudiera encontrar una empanada condigna con las de Sergia (aceptaría, resignado, que fuera de berberechos en costra de maíz), sin el cuestecillo, ¿qué hacer? ¿Cómo alcanzar en grado decoroso la felicidad? Y, en cuanto a mis restos cenicientos, ¿qué hacer también con ellos? Me niego a que se conserven en un tarro de porcelana en el salón-comedor de alguna de mis hijas. Ni siquiera admitiría que los trasladasen a un fanal acristalado en alguna cátedra o fundación que llevase mi nombre. ¿Qué hacer? Entregárselos al camión de la basura, en comunión con residuos orgánicos e inorgánicos, me parece una grosería. Vendrán días de lluvia que, con suave naturalidad, adentrarán los restos en la tierra No había otra solución que la desaparecida: el cuestecillo. Así no se puede vivir. Ni morir. Si algún lector enterado y benéfico, por casualidad supiese que el cuestecillo había ido a parar a alguna parte, que me lo diga, por favor. Muchas gracias. Antonio Gamoneda Es poeta y autor de ensayos y textos en prosa. Su obra ha sido reconocida con el Premio Nacional de Poesía (1988) y con el Premio Cervantes (2006). NATURA se publica los segundos sábados de cada mes / Editor: Aurelio Fernández / Director de Arte: Carmelo G. Caderot / Redactor Jefe de Arte: Manuel de Miguel / Coordinador de Redacción: Pedro Cáceres / Redacción: Miguel González Corral y Tana Oshima / Publicidad: Jaime Caro / Correo electrónico: [email protected] / Versión digital: www.elmundo.es/natura / Entidad colaboradora: Fundación Félix Rodríguez de la Fuente