"Algunas Puntuaciones Acerca Del Tiempo Y Del Final De Análisis" (*) Jornadas De Carteles De La Escuela Freudiana De Buenos Aires; Cartel: "fantasma Y Fin De Análisis"; 2001 Alejandra Rodrigo Todo cartel que termina, ¿tiene un final? Esta pregunta me acompañaba desde hacía bastante tiempo, pués una experiencia que había tenido lugar hace algunos años ya, quedaba abierta a una finalización que en la oportunidad de estas Jornadas y a propósito de una invitación de M.E.Vila, me propongo realizar. Me estoy refiriendo a mi participación en el Cartel Fantasma y Fin de Análisis que compartí con Jorge Leiva y Clelia Conde y Pablo Román, ambos miembros de la Escuela Freudiana de la Argentina. El entusiasmo del comienzó en torno a compartir aquellos temas que nos convocaban, fue propiciando una transferencia de trabajo sostenida durante un tiempo. Sin embargo, luego, diversas cuestiones fueron promoviendo desencuentros, ausencias, dificultades en acordar horarios, que derivaron en interrupciones discontinuas terminando por diezmar las reuniones hasta instalar el silencio de la palabra y el vacío de la presencia. No pudimos volver a encontrarnos ni sancionar su finalización. Si así hubiera ocurrido, quizás, podría haber sido o no, esta, la punta de donde asirnos para relanzar la tarea. A propósito de algunas invitaciones a testimoniar como Cartel, respondía que no nos estábamos reuniendo y con la insistencia de la repetición, los significantes retornaban en lo real haciendo consistir un Cartel fantasma, sin fín. Bueno, en nombre propio y a la manera de concluir aquel Cartel, elegí traerles algunas reflexiones acerca de lo que pude retomar hoy, en ocasión de estas Jornadas , de aquel trabajo. Considero al cartel como un lugar privilegiado para trabajar con otros haciendo jugar el deseo y la transferencia, y poner en acto el lazo social, de ahi el entrecruzamiento de estos - Página 1 de 6 Copyright 2011 - EFBA - Todos los derechos reservados significantes que comparte, no obstante la particularidad de las diferencias, con la experiencia del análisis. Esta breve puntuación pone quizas en acto precisamente la temática que quería compartir con uds., la cuestión del tiempo y del acto en el final de análisis. En una conferencia de 1927, "El problema del fin del análisis", Sandor Ferenczi refrenda algunas cuestiones que Freud planteara luego respecto del análisis del analista como decisivo para conducir un análisis hasta su final, tal como después se puede leer en "Análisis terminable e interminable". Dice allí Ferenczi: "...el análisis no es un proceso sin final, sino que puede llegar a un término natural si el analista posee los conocimientos y paciencia suficientes"... y acerca del tiempo, agrega ... "se trata menos del tiempo físico del que dispone el paciente que de su determinación interior a mantenerlo todo el tiempo necesario, sin calcular su duración real del tiempo...no podemos prometerle un resultado cierto de modo que nos contentamos con recordar que en muchos casos basta con períodos más cortos". Ahora bién, Cuándo es suficiente? Para qué o quién el tiempo deviene necesario? Dejemos por ahora estos interrogantes, para retomarlos después. Parto del presupuesto de que todo análisis conlleva un término y que dicho término hace a la singularidad de cada caso particular, pudiendo o no coincidir con su final. Ya en la carta que escribiera a Fliess en abril de 1900 (133),la cuestión del tiempo preocupaba a Freud, el par terminable-interminable anticipaba lo que luego en el 37 mostrarí con un cierto escepticismo acerca del fin de la cura. Allí leemos: "Comienzo a entender que el caracter de apariencia interminable de la cura es algo acorde a la ley y depende de la transferencia". Sin embargo en "Análisis terminable e interminable", luego de abrevar en las posibilidades de que el tiempo de duración de la cura pudiera acortarse es, desde el inicio, concluyente: "Librar a un ser humano de sus síntomas, de sus inhibiciones y anormalidades de caracter,es un trabajo largo".Interrogado sobre el caracter preventivo y predictivo de la eficacia del análisis, Freud se pregunta: "es duradera la curación?" Planteada su preocupación acerca del tiempo, pareciera quedar zanjada la cuestión cuando decididamente afirma que lo interminable del análisis no tendría que ver con la duración, o sea, con las condiciones temporales. - Página 2 de 6 Copyright 2011 - EFBA - Todos los derechos reservados Cómo entonces conjugar la dimensión temporal con lo que puede ser terminable de una cura, ahora sí, de la transferencia? Si la neurosis se juega en la transferencia, qué hacer con los restos transferenciales luego de terminado el análisis ? O acaso no hacen éstos a la esencia de la neurosis misma ? Cómo concluir si no esta todo dicho, cómo concluir ya que no todo puede ser dicho ?... Ahora bién, al oponer el término, análisis imperfecto, Freud aborda aquellos casos que por razones externas no pueden arribar a un final, como así también al adjudicar un factor decisivo a la intensidad de la pulsión, en lo que se refiere a su factor cuantitativo, alude a la posibilidad de prolongar su duración hasta lo inconcluible haciendo depender de ello su desenlace. Desliza, pués, que franquear este obstáculo podría llevar a un final posible, por lo que entonces éste no dependerá del acortamiento o prolongación de su duración. Aunque recomienda que los analistas debieran reanalizarse periodicamente, mencionará: "No tengo el propósito de aseverar que el análisis como tal sea un trabajo sin conclusión, la terminación del análisis es un asunto práctico". Pues bién, un asunto práctico...o un asunto de la práctica, de la práctica de cada analista? Una práctica que no se sostiene en el saber acumulado ni en los meandros de una pretendida cientificidad de la teoría destinada a validar y garantizar los fundamentos de la experiencia analítica. Volvamos al comienzo, decía necesariedad y suficiencia quedarían desgajados de la cuestión del tiempo como lo durable, pues dicha cuestión no es sin la imbricación con el espacio en el que la práctica del análisis se lleva a cabo y de las condiciones que regulan su especificificidad. Ya Freud nos advertía: "El fin del análisis no pasa por su duración , no pasa por este atajo". El análisis aportaría para el neurótico, continúa, "un estado que nunca existió y cuya neocreación constituye su diferencia con el nó analizado". Cuál es pués este estado al que se refiere Freud? Cuáles serían las connotaciones para el neurótico analizado que atañen a la novedad de una creación? Cuál es, entonces, el estatuto de esta creación? Acaso no deberíamos leerlas allí donde es el mismo Freud el que vacila entre la indiferencia que la "conclusión asintótica del tratamiento" le promueve en 1895 y la dificultad que plantea el obstáculo del dominar la actividad del basamento rocoso del enigma de la sexualidad?. - Página 3 de 6 Copyright 2011 - EFBA - Todos los derechos reservados Indiscutiblemente Lacan toma por el atajo señalado por Freud, atajo que despeja la cuestión del límite , tal como lo mencionara en su seminario, límite no absoluto, es el de la asíntota en tanto indica que el análisis no es infinito en Freud sino que ilimitado e indefinido, en tanto parcial. Atajo por donde lo real irrumpe, práctica de lo imposible, Lacan inventa el objeto ‘a’. Subrayando a Badiou, "lo real no se conoce, se demuestra". Demostración que nos remite, entonces, a la especificidad del acto analítico. Volvamos a la cuestión del tiempo, en Radiofonia, nos dice Lacan: "es necesario el tiempo...lo que sera necesario del tiempo que es necesario, ahi reside la falla conque se dice el ser...ese tiempo lógico no tiene mas que eso que de ello cae, eso es lo que el analista releva por hacer ahí figura de alguien". Entonces, tiempo y acto se ordenan en transferencia en un hacer la experiencia del objeto "a", en tanto el tiempo subjetivo aportara otra lógica, aquella de la finitud del ser, por la que, vuelvo a Badiou, "tal acontecimiento ha tenido lugar" aunque "nada lo funda de antemano sino su supuesta evanescencia". El análisis define un hacer a través de la interpretación pero es solo por su acto que el analista se autoriza allí. El analista,como Lacan lo planteara, es la verdad de su acto. Cómo no leer al imposible freudiano, en lo insoportable de todo acto ! Al evocar la verdad, la eficacia del acto deviene inscripción significante en el lugar del Otro, su lugar verdadero se realiza en el pensamiento del no ser o sea al nivel del objeto "a". El sujeto no es entonces causa de sí, sino por el contrario, como sujeto dividido es, en efecto, pérdida, ya que su causa le es extrínseca, en tanto deviene resto en el analista. El lugar del acto es el lugar del decir, de su lectura, y opera como función de nudo, en tanto el sujeto se aprehende mas allá de su acto arrojado a una función de causa que le ex-iste, es como no siendo como plantea la verdad del inconciente.También por el acto, el sujeto se anoticia del saber acerca de una verdad incurable, aquella donde se realiza como falta, en la castración. El movimiento de la transferencia , en sus tiempos lógicos, efectuará el pasaje del saber - Página 4 de 6 Copyright 2011 - EFBA - Todos los derechos reservados supuesto a un saber sin sujeto, que concierne al objeto "a", causa del deseo. En este tiempo, donde se juega lo indecidible, se conjugará el "habiendo sido" analizante en el devenir analista del momento de concluir. Para terminar, la temporalidad del significante permite la construcción de la historia del sujeto, pero también está aquello del objeto que conecta con lo real, indecible, y que solo se bordea por el acto. Así, la operatoria del análisis y su efectuación recortará el devenir inconciente en la repetición de su discontinuidad, falla, fisura, como lo no realizado en su movimiento de apertura y cierre; construirá la a-historicidad del fantasma, plasmando la eternización del instante; sancionará la lógica del acto con la singularidad de una gramática que escribe el tiempo por venir al subjetivarlo en una certeza anticipada pero nunca calculada. Tiempo, entonces, del corte,es el tiempo del acto, en el que lo interminable se vuelve finito: el sujeto ya no será el mismo antes que después. Producción de un nuevo significante, caída del objeto, inconsistencia del Otro. Por último y como final , retomando lo que antes decía del cartel y la experiencia del análisis, elegí para terminar un texto que llegara a mis manos hace tiempo ya. Esta ocasión me brindó la posibilidad de en el a posteriori de la lectura, hacerlo presente. A propósito de una exposición que se hiciera en el colegio al que concurre uno de mis hijos, leía en el título de la misma: "Borges en el Jardín de Senderos que se bifurcan". Allí, las temáticas borgeanas y sus textos guiaban los caminos. El recorrido por los senderos que se bifurcan conducían al centro y había que buscarlo entre los pasadizos de la figura humana. Al dejarse llevar por el texto, avanzar, era transformaarse en lector. La invitación concluía poéticamente así: "Cada uno eligirá la posibilidad de perderse, pero también de alcanzar el destino, el lugar del encuentro con el otro y con uno mismo, al salir la palabra se habrá multiplicado". Bibliografía: - Página 5 de 6 Copyright 2011 - EFBA - Todos los derechos reservados S.Freud: "Análisis terminable e interminable", Obras Completas. S.Ferenczi: "El problema del fin del análisis", Obras Completas. Varios Autores: "Cómo terminan los análisis".Ed. Eolia. C.Kuri: "Notas sobre el fin del análisis". Conjetural. P.Julien: "Lacan, síntoma de Freud". Lacan Hoy. J.Lacan: "Radiofonía"; Seminarios: "La angustia"; "El acto analítico". I.Vegh: "El acto analítico y la lógica del tiempo. Contemporaneos". J.Kahanoff: "Disimetría temporal". E.Einsemberg: "Aproximaciones al tema del tiempo. Deja vu , cuando fue ya vivido ?". A.Badiou: "Reflexiones sobre nuestro tiempo".; "Conferencia sobre la sustracción. R.Mauro: "Paradojas del tiempo". - Página 6 de 6 Copyright 2011 - EFBA - Todos los derechos reservados