El Sr. Arzobispo invitó a los voluntarios de Cáritas a construir un mundo basado en el amor página 9 Donativo: 0,30 euros. AÑO XXXI. NÚMERO 1.309 13 de abril de 2014 La archidiócesis y el IEME, unidos en la acción misionera de la Iglesia página10 2 PALABRA DEL SEÑOR DOMINGO DE RAMOS PROCESIÓN DE RAMOS: Mateo 21, 1-11 Cuando se acercaban a Jerusalén y llegaron a Betfagé, junto al monte de los Olivos, Jesús mandó dos discípulos, diciéndoles: «Id a la aldea de enfrente, encontraréis en seguida una borrica atada con su pollino, desatadlos y traédmelos. Si alguien os dice algo, contestadle que el Señor los necesita y los devolverá pronto». Esto ocurrió para que se cumpliese lo que dijo el profeta: «Decid a la hija de Sión: «Mira a tu rey, que viene a ti, humilde, montado en un asno, en un pollino, hijo de acémila»». Fueron los discípulos e hicieron lo que les había mandado Jesús: trajeron la borrica y el pollino, echaron encima sus mantos, y Jesús se montó. La multitud extendió sus mantos por el camino; algunos cortaban ramas de árboles y alfombraban la calzada. Y la gente que iba delante y detrás gritaba: «¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna en el cielo!» Al entrar en Jerusalén, toda la ciudad preguntaba alborotada: «¿Quién es éste?» La gente que venía con él decía: «Es Jesús, el Profeta de Nazaret de Galilea.» PRIMERA LECTURA: ISAÍAS 50,4-7 Mi Señor me ha dado una lengua de iniciado, para saber decir al abatido una palabra de aliento. Cada mañana me espabila el oído, para que escuche como los iniciados. El Señor Dios me ha abierto el oído; y yo no me he rebelado ni me he echado atrás. Ofrecí la espalda a los que me golpeaban, la mejilla a los que mesaban mi barba. No oculté el rostro a insultos y salivazos. Mi Señor me ayudaba, por eso no quedaba confundido; por eso ofrecí el rostro como pedernal, y sé que no quedaré avergonzado. SEGUNDA LECTURA: FILIPENSES 2,6-11 Hermanos: Cristo, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango, y tomó la condición de esclavo, pasando por unos tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo, y le concedió el «Nombresobre-todo-nombre»; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble -en el cielo, en la tierra, en el abismo-, y toda lengua proclame: «¡Jesucristo es Señor!», para gloria de Dios Padre. EVANGELIO: Cuando llegaron al lugar llamado Gólgota (que quiere decir: «La Calavera»), le dieron a beber vino mezclado con hiel; él lo probó, pero no quiso beberlo. Después de crucificarlo, se repartieron su ropa, echándola a suertes, y luego se sentaron a custodiarlo. Encima de su cabeza colocaron un letrero con la acusación: «Éste es Jesús, el rey de los judíos». Crucificaron con él a dos bandidos, uno a la derecha y otro a la izquierda. Los que pasaban lo injuriaban y decían, meneando la cabeza: «Tú que destruías el templo y lo reconstruías en tres días, sálvate a ti mismo; si eres Hijo de Dios, baja de la cruz». Los sumos sacerdotes con los escribas y los ancianos se burlaban también, diciendo: «A otros ha salvado, y él no se puede salvar. ¿No es el rey de Israel? Que baje ahora de la cruz, y le creeremos. ¿No ha confiado en Dios? Si tanto lo quiere Dios, que lo libre ahora. ¿No decía que era Hijo de Dios?» Hasta los bandidos que estaban crucificados con él lo insultaban. Desde el mediodía hasta la media tarde, vinieron tinieblas sobre toda aquella región. A media tarde, Jesús gritó: «Elí, Elí, lamá sabaktaní.(Es decir:«Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?»). Al oírlo, algunos de los que estaban por allí dijeron: «A Elías llama éste.» Uno de ellos fue corriendo; en seguida, cogió una esponja empapada en vinagre y, sujetándola en una caña, le dio a beber. Los demás decían: «Déjalo, a ver si viene Elías a salvarlo.» Jesús dio otro grito fuerte y exhaló el espíritu. PADRE NUESTRO / 13 DE ABRIL DE 2014 ¿QUIÉN ES ESTE? CLEOFÉ SÁNCHEZ MONTEALEGRE A l estilo de la primavera los pueblos alborean las fechas y espabilan los corazones avivando sentimientos cuando tocan con la mano la Semana de las Semanas, Semana Santa. El pórtico de la Semana Santa. Apertura de Gloria con palmas y ramos, con árboles y ramajes, con mantones de seda abalconados, con música y cantos, con el pueblo en la calle. Todos con admiración, con asentimiento, en contemplación y al final el seguimiento del cortejo, la procesión. ¡Viva el Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Viva el Altísimo! El griterío concertado aunque desconcentrado por la variedad de voces compone el cierre de la Antigua Alianza y la apertura de la Alianza Nueva. ¿Quién es éste? Jesús, el profeta de Nazaret. El Salvador. El vínculo de unión. El que ha bendecido a los enfermos y ha hecho camino con los pobres. ¿Quién es éste? El que respeta la libertad de cada uno, invita y no violenta. Jesús Dios y Hombre en una pieza. Dios descendente para que el Hombre fuese ascendente. Dios y Hombre. Signo de contradicción. La Pasión como partitura de agudos contrastes. Pecado y perdón. Entrega y traición. Compañía y seguimiento. Afirmación y negación. Jesús debía cumplir la misión que le había encomendado el Padre, porque yo he bajado del cielo, no para hacer lo que yo deseo, sino lo que desea el que me ha enviado (Jn 6,38). Si no entendéis lo que yo digo, es sencillamente porque no queréis aceptar mi mensaje (Jn 8,43). Constante en la vida de Jesús y contraposición del poder sea del signo que fuere. El pueblo, como de costumbre, pasará de la alabanza al grito de condena, manipulado por los notables que mejor sería calificarlos de suspensos en dignidad. Promesas hasta la muerte, pronunciadas con la solemnidad del ofrecimiento y dormilona en el Huerto y negación al calor de la hoguera. Bolsa sonante , beso chocante y venta de precio ambulante. Espadas y palos de prendimiento y olvido de las enseñanzas en el templo. Preguntas e interrogatorios ¿Quién es éste? Acusaciones de verborrea y afirmación aplastante. Tú lo has dicho. Soy el Mesías, el Hijo de Dios. El rey de los judíos. ¿Qué hacer con Jesús, llamado el Mesías? Que lo crucifiquen. Realmente éste era Hijo de Dios. Crucificado el Hijo de Dios. Misterio desconcertante matar al Hijo de Dios. ¡Morir Dios! ¿Cuáles eran los sentires indecibles del Padre y del Espíritu Santo? Palabras no valen. Solo corazones quebrantados y humillados, rotos de amor y de temblores pueden asomarse al brocal del pozo del amor del Padre y del Espíritu Santo. ¿Sufren el Padre y el Espíritu Santo? Si el dolor y el gozo son hermanos, veneremos, adoremos al Padre y al Espíritu Santo con el Verbo Crucificado, que resucitará por los brazos del Padre y el aliento del Espíritu Santo. El asno. Lo teníamos olvidado. Ahora «no te avergüences de ser jumento para el Señor. Llevarás A Cristo, no te extraviarás cuando vayas por el camino: sobre ti va sentado el camino. ¿Os acordáis de aquel asno ofrecido al Señor? Nadie sienta vergüenza: aquel asno somos nosotros. Vaya sentado sobre nosotros el Señor y llámenos para llevarle a donde él quiera. Somos su montura. Cuando él va sentado, no nos aplasta, nos levanta; teniéndole a él por guía, no nos extraviamos; vamos por él, no perecemos» (san Agustín, s.189,4). n LECTURAS DE LA SEMANA SANTA: Lunes Santo: Isaías 42,1-7; Juan 12,1-11. Martes Santo: Isaías 49,1-6; Juan 13, 21-33.36-38. Miércoles Santo: Isaías 50, 4-9a; Mateo 26,14-25. Jueves Santo: Santa Misa de la Cena del Señor. Éxodo 12,1-8.11-14; 1 Corintios 11, 23-26; Juan 13,1-15. Viernes Santo: Celebración de la Pasión del Señor. Isaías 52,13-53,12; Hebreos 4,14-16; 5, 7-9; Juan 18, 1-19,42. Sábado Santo. Vigilia Pascual.Génesis 1, 1-2,2; Éxodo 14, 15-15; Isaías 54, 5-14; Ezequiel 36, 16-28; Romanos 6, 3-11; Lucas 24, 1-12. TERCERA PÁGINA 3 SR. ARZOBISPO ESCRITO SEMANAL ANUNCIO PASCUAL H abitualmente nos hallamos en medio de trabajos, fatigas y hasta sinsabores; pero los cristianos siempre nos hallamos, a la postre, en espera de la resurrección, en la esfera de la vida nueva. Por ello, hermanos míos, os invito a una pequeña meditación sobre la Pascua 2014, en medio de la Semana Santa, que comienza con la solemnidad de la entrada de Jesús en la ciudad santa el Domingo de Ramos. En realidad, vemos cómo vamos pasando sin apenas darnos cuenta, de una fiesta a otra, de una celebración a otra, de una solemnidad a otra. Estamos en una sociedad de muchas fiestas y espectáculos. Pero ahora ha llegado aquel tiempo en que todo vuelve a comenzar. Me estoy refiriendo a la preparación de la Pascua venerable, en la que el Señor fue inmolado. Hemos de caer en la cuenta, pues, de que nos alimentamos, como de un manjar de vida, y deleitamos siempre nuestra alma con la sangre preciosa de Cristo, como de una fuente; y con todo, aunque hayamos celebrado bien la Pascua el año pasado, siempre estamos sedientos de esa sangre del Señor, siempre sentimos un ardiente deseo de recibirla; ¿o tal vez no es así? Estoy persuadido, sin embargo, que nuestro Salvador está siempre a disposición de los sedientos y, que por su benignidad, Cristo atrae a la celebración del gran día de Pascua a los que tienen sus entrañas sedientas, según aquellas palabras suyas: el que tenga sed que venga a mí y que beba. De modo que no sólo podemos siempre acercarnos a saciar nuestra sed, sino que además, siempre que lo pedimos, se nos concede acceso al Salvador, encontrándonos con Él. Ya sé que el fruto espiritual de esta fiesta de Pascua no queda limitado a un tiempo determinado, ya que sus rayos esplendorosos no conocen ocaso, sino que están siempre a punto de iluminar las mentes que así lo desean, la tuya y la mía. La Pascua tiene una virtualidad ininterrumpida, sobre todo para aquellos que el Salmo proclama bienaventurados, cuando dice: Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los impíos, ni entra por la senda de los pecadores, ni se sienta en la reunión de los cínicos; sino que su gozo es la ley del Señor, y medita su ley día y noche (Sal 1,1-2). dad: que el Señor reúne para celebrarla a los que están lejos y junta en una misma fe a los que se encuentran corporalmente separado. ¿V eis cómo cobran un nuevo sentido aquellas palabras del salmista: Tú eres mi júbilo: me libras de los males que me rodean? Realmente en esto consiste el verdadero júbilo pascual, la genuina celebración de la gran solemnidad: en vernos libres de nuestros males; para llegar a ello, tenemos que esforzarnos en reformar nuestra conducta y en meditar asiduamente, en la quietud del temor de Dios. ¿Dejamos escapar esta nueva oportunidad de gracia? X Braulio Rodríguez Plaza Arzobispo de Toledo Primado de España P ero es verdad: el mismo Dios que al principio instituyó para nosotros esta fiesta, nos ha concedido poderla celebrar cada año; y el que entregó a su Hijo a la muerte por nuestra salvación nos otorga, por el mismo motivo, la celebración anual de este sagrado misterio. Aquí está. Esta fiesta nos sostiene en medio de las miserias y dificultades de este mundo; y ahora es cuando Dios nos comunica la alegría de la salvación, que irradia de esta fiesta, ya que en todas partes, en casa o de viaje, nos reúne en el Espíritu a todos en una sola asamblea de la Iglesia Católica. Esto es lo admirable de esta festivi- «Estamos en una sociedad de muchas fiestas y espectáculos. Pero ahora ha llegado aquel tiempo en que todo vuelve a comenzar. Me estoy refiriendo a la preparación de la Pascua venerable, en la que el Señor fue inmolado. Hemos de caer en la cuenta, pues, de que nos alimentamos, como de un manjar de vida, y deleitamos siempre nuestra alma con la sangre preciosa de Cristo, como de una fuente». 13 DE ABRIL DE 2014 / PADRE NUESTRO 4 COLABORACIONES CONCILIOS de la iglesia INFALIBILIDAD José Carlos Vizuete E l 21 de enero de 1870 se repartió entre los padres conciliares el esquema sobre el que habían de versar los trabajos: «De la Iglesia de Cristo», en el que no se mencionaba el tema de la infalibilidad pontificia, que durante los primeros días del concilio era el que acaparaba mayor interés. No todos los obispos estaban de acuerdo en este punto: unos –a cuya cabeza estaba el cardenal Manning, arzobispo de Westminster– eran partidarios de realizar una proclamación de la infalibilidad; otros –entre ellos Dupanloup, de Orleans, y Ketteler, de Maguncia– eran contrarios a tal declaración. El 9 de febrero, los partidarios de la proclamación –que eran mayoría y procedían de países de tradición católica– pidieron su inclusión en el documento que se preparaba. Así, el 6 de marzo se presentó un nuevo esquema que ahora llevaba por título «Sobre el Romano pontífice y su magisterio infalible». La minoría, que reunía al veinte por ciento de los padres, trató de impedir que los trabajos siguieran adelante con este nuevo esquema y se opuso, punto por punto, al texto durante un acaloradísimo debate. Esta oposición permitió matizar y mitigar el texto primitivo. En la sesión plenaria del 18 de julio se aprobó la constitución «Pastor aeternus», que definía la primacía y la infalibilidad pontificia. Sin embargo, la víspera de la votación, 55 obispos abandonaron Roma, tras escribir una carta al Papa en la que explicaban los motivos de su marcha, para no participar en la votación. En la basílica de San Pedro, en medio de una gran tormenta, en la más completa oscuridad, iluminados por unas pocas velas, 535 obispos de los 537 presentes dieron su aprobación. La constitución consta de cuatro capítulos que tratan: del primado de jurisdicción de San Pedro; de la perpetua transmisión de esta prerrogativa a sus sucesores, los obispos de Roma; de la naturaleza del primado romano como poder episcopal, ordinario, inmediato y universal; y de la infalibilidad personal del Romano pontífice cuando, como maestro universal, propone doctrinas o dirime cuestiones en relación con fe y costumbres. PADRE NUESTRO / 13 DE ABRIL DE 2014 LA CRUZ EN LOS CRISTIANOS José Díaz Rincón C on veinte años, una noche de Pentecostés, mi obispo me entregó un crucifijo con su mandato para incorporarme a los Propagandistas en la Acción Católica Diocesana. Jamás dejé de llevarlo conmigo. A nadie he besado tanto como al Crucificado ni he contemplado tanto. Le agarro con fuerza, le miro y siempre confió en Él. Este icono me recuerda y actualiza lo que Dios nos ama. ¿Quién es el Crucificado? ¡Jesucristo, el Hijo de Dios hecho hombre! Él ha venido como Mesías y Señor para hacernos hijos de Dios. Es la expresión más fuerte, conmovedora e impresionante del amor de Dios a todos los hombres revelado en Cristo Jesús. ¡Contémplale todo lo que seas capaz en el patíbulo de la Cruz y en la Eucaristía, que es su actualización! Así descubrirás quién es y cuánto es lo que te ama. Santo Tomás de Aquino, el sabio más santo y el santo más sabio, asegura: «Mucho más y mejor que en todos los libros he conocido a Jesucristo contemplándolo en la Cruz». Relee los relatos de la Pasión en el Evangelio y los cuatro cánticos del Siervo del Señor, sobre todo el cuarto, en el capítulo 53 de Isaías. Participar del misterio Toda la vida cristiana es una continua participación en la Cruz y en la Resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Cada momento de la vida sobrenatural, que vivimos los cristianos, es pascual. Sin tomar la cruz no podemos seguir a Jesucristo. Si no participamos en la Pasión, no podemos ser vivificados por la Resurrección. En el bien que hacemos, en el mal que sufrimos y en las penitencias que asumimos, participamos de la Cruz gloriosa de Cristo. De ningún modo experimentemos nuestras cruces como algo negativo, sin valor alguno, como si nada bueno pudiera surgir de ellas, como si no nos las mereciésemos, quejándonos por ello. Una cosa es que sintamos dolor por nuestras penas y sufrimientos, y otra muy distinta es que consintamos la tristeza, alegando que tenemos causas sobradas para ello. «La tristeza vivida como Dios quiere, produce arrepentimiento decisivo y saludable, la tristeza de este mundo lleva a la muerte». Los discípulos de Cristo debemos rechazar enérgicamente, con la gracia de Dios, los sentimientos estables de negatividad ante ciertas realidades penosas de la vida, ya que sería rechazar la Cruz de Cristo que siempre conlleva la Resurrección y la Vida. La alegría cristiana ha de ser permanente en la prosperidad y en la adversidad. Insiste san Pablo: «Alegraos siempre en el Señor, os lo repito, alegraos». La alegría se opone a la tristeza, no a la cruz, que es signo de amor. Es muy importante localizar en nuestra vida personal las cruces que experimentamos, para hacer positiva cada una de ellas a la luz de la Cruz de Cristo. El signo de la cruz es el signo «más», el cual es signo positivo por excelencia. Descubramos en nuestras cruces la Cruz del Señor, que es la que nos salva, para abrazarlas por la aceptación de la voluntad de Dios providente. El Evangelio ensalza la Cruz Tengamos la certeza que la Cruz de Cristo es lo más atractivo y convincente del Evangelio. Dice Jesús: «Cuando yo sea elevado sobre la tierra atraeré a todos hacia mí» (Jn 12, 32). La Cruz es la suprema epifanía del amor de Dios uno y trino. El cristianismo sin Cruz es falso, triste e infecundo, por ser una enorme falsificación del Evangelio. «Predicamos a Jesucristo y este crucificado». Esta fue la norma de los Apóstoles, protagonistas e iniciadores de la más grande evangelización de la historia de la Iglesia. Y es que el anuncio más fuerte, persuasivo y que más conversiones consigue es aquél que se centra en la Cruz de Cristo. Por otro lado, el más atractivo y apasionante. Si no plantamos la Cruz no existe evangelización. Con emoción te contemplo ¡mi Jesús crucificado! Tu Cuerpo hecho una llaga, triturado por mi amor. Déjame aquí abrazarte para pedirte perdón. Para motivar mi fe y entregarme a ti mejor. SEMANA SANTA 5 Meditación con el Papa Francisco LAS SIETE PALABRAS DE CRISTO EN LA CRUZ 1 Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen (Lc 23,24) Estás pendiente de la Cruz. Ellos te han clavado. Estás en ese puente entre cielo y tierra que ya no abandonarás. Las heridas arden en tu cuerpo. La corona de espinas deshace tu cabeza. Tu alma es mar de tristeza, dolor y desesperanza. Tú en cambio dices. Perdónalos. Dios no se cansa de perdonar, somos nosotros los que nos cansamos de acudir a su misericordia. Él no defrauda. Él ya esperaba con los brazos abiertos (Evangelii gaudium, 3). Que levantéis la cabeza y volver a empezar. Que hay a nuestro lado personas muy pobres que tienen poco a que aferrarse. Que hay personas sin horizonte nuevo y sin orientación decisiva (7). Permite que el Padre nos lleve más allá de nosotros mismos para alcanzar nuestro ser más verdadero. Allí está el manantial de la acción evangelizadora (8). Mira al Crucificado. La Cruz es camino, método nuevo, estilo creativo, expresión distinta, signo elevante, palabra cargada de significado para el mundo actual y venidero (11) Soy la Cruz a la que has de mirar con memoria agradecida, que jamás se puede olvidar y siempre se ha de pedir, que hace brotar nuevos creyentes con el gozo agradecido y el testimonio sencillo que fructifica en brotes del Espíritu (13). Con mi palabra, una invitación. Descentralízate, no te creas el centro, que el centro está en la Cruz, hundida en el hoyo de la tierra, buscando la nada para traerla a la riqueza compartida de mi familia –toda la familia– comenzando por la periferia y haciendo de los pobres, misterio de salvación cuando se mira con fe al Dueño en la Cruz (16). Los fieles, las personas bautizadas que no viven las exigencias del Evangelio, las personas que me rechazan (14), todos unidos por la indulgencia con una gota de sangre de mi cabeza. 2 En verdad te digo: Hoy estarás conmigo en el Paraíso (Lc 23,43) Estás en plena agonía, Señor, y en tu Corazón extenuado de tormentos te queda aún sitio para el dolor de los demás. Estás a punto de muerte y te preocupas de un bandido. Hablas primero con el hijo perdido y le hablas del Paraíso. Un ladrón te pide un recuerdo y Tú le prometes el Paraíso. Tu Palabra tiene una potencialidad que no podemos predecir. Más que la semilla que crece por sí sola, cuando el agricultor duerme. La libertad inaferrable de tu Palabra, eficaz a la manera divina que supera las previsiones y rompe todos los esquemas (22). Tu Palabra primereando las iniciativas en el amor. Antes que el ladrón pidiera, ya tu Palabra la inspiraba su adentros. Tu Palabra acompañaba todos sus procesos, por más duros y prolongados que hayan sido, pacientemente, sin maltratar límites. Por eso tu Palabra festeja cada victoria, sea grande o pequeña, cada paso adelante, con la promesa, ya adelanto con certeza, de la gloria venidera (24). Hoy es mañana y es eternidad. Siempre y jamás. El Texto: Cleofé Sánchez Montealegre. Fotos: El Greco, «Santa Faz». Convento de la Purísima Concepción de Toledo. El Greco, «Crucificado», S. I. Catedral Primada. Papa Francisco, en la Celebración de la Pasión del Señor el Viernes Santo 2013. 13 DE ABRIL DE 2014 / PADRE NUESTRO 6/7 SEMANA SANTA que se ve en espera, con cabeza levantada por la esperanza, al que se arriesga, el Señor no le defrauda y, cuando alguien da un pequeño paso, descubre que ya Él esperaba su llegada con los brazos abiertos en Cruz (3). Sueña con una opción misionera capaz de transformar todo, costumbres, estilos, horarios, lenguaje, estructuras, eliminado las intervenciones eclesiales (27). Préstame tu Palabra. Concédeme el eco de tus promesas. Hazme oír tu sinceridad. Oyéndote, todo en silencio, solo permanece tu Palabra que hiere como dardo de infusión de tu sangre en el corazón del ladrón arrepentido. Señor, considérame ser tu ladrón, el ladrón de tu perdón y la satisfacción ante tu Gloria. 3 Mujer, ahí tienes a tu Hijo. Luego dijo al discípulo: Ahí tienes a tu Madre (Jn 19, 26-27) Con la muerte llega la hora en que tu Madre pueda volver a estar contigo. Ahora, cuando no hay que pedir ningún milagro, cuando no queda sino morir, viene a tu lado. La hora de la misión más íntima entre Madre e Hijo. Mirada con mirada se adivina la vida. Doblemente pobres son las mujeres que sufren situaciones de exclusión, maltrato y violencia, porque frecuentemente se encuentran con menores posibilidades de defender sus derechos (212). Esta admiración por la vida es defensa, es grito único en armonía de afectos. La vida por nacer ligada íntimamente a la defensa de cualquier derecho humano, en principio por el principio de la vida, impidiendo cualquier conato de negación de la dignidad humana a los niños por nacer (213). Hay que luchar para vivir y, a menudo, para vivir con poca dignidad a pesar de las fuentes de nuevas formas de un poder muchas veces anónimo (52). Comenzó con este alumbramiento una economía de la exclusión y la iniquidad y así se considera al ser humano en sí mismo como un bien de consumo, que se puede usar y luego tirar. Se ha dado ini- PADRE NUESTRO / 13 DE ABRIL DE 2014 cio a la cultura del descarte que, además, se promueve. Los excluidos no son explotados sino desechos, sobrantes (53) ¡La negación de la primacía del ser humano! Una de las causas de esta situación se encuentra en la relación que hemos establecido con el dinero (55). La Iglesia reconoce el indispensable aporte de la mujer en la sociedad, con un sensibilidad, con una intuición y unas capacidades peculiares que suelen ser más propias de las mujeres que de los hombres, pero todavía es necesario cumplir los espacios para una presencia femenina más incisiva en la Iglesia y en el mundo. El genio femenino en todas las expresiones de la vida social, por ello se ha de garantizar la presencia de las mujeres en el ámbito laboral y en los diversos lugares donde se tomen las decisiones importantes (103). No nos dejemos robar la fuente de la fe. Que la Madre se haga presente. 4 Dios mío, Dios mío ¿por qué me has desamparado? (Mt 27, 45) Se le acerca la muerte, no como fin de la vida del cuerpo, que es redención y paz. Sino como inconcebible hondura de angustia. Se le acerca la muerte que es aniquilación, desierto sin luz. La muerte en que todo se desvanece. Este grito corre como una saeta abrazando los costados de los continentes. Algunos simplemente se regodean culpando a los pobres y a los países pobres de sus propios males con indebidas generalizaciones y pretenden encontrar la solución en una educación que tranquilice y los convierta en seres domesticados e inofensivos. Esto se vuelve todavía más irritante si los excluidos ven crecer ese cáncer social que es la corrupción profundamente arraigada en muchos países (60). ¿A dónde vamos? El individualísimo posmoderno y globalizado favorece un estilo de vida que debilita el desarrollo y la estabilidad de los vínculos entre las personas y que desnaturaliza los vínculos familiares (67). Todo por tener algún poder sobre los demás sin olvidar las rupturas en la transmisión generacional de la fe. Rupturas de espacios de diálogo familiar, influencia de los medios de comunicación, subjetivismo relativista y consumismo desenfrenado, falta de acompañamiento pastoral a los más pobres (70). No podemos ignorar que en las ciudades fácilmente se desarrollan el tráfico de drogas y personas, el abuso y la explotación de menores, el abandono de ancianos y enfermos, varias formas de corrupción y de crimen… lugar de la huida y de la desconfianza mutua (75). En esta situación se trata de llevar el Evangelio a las personas que cada uno trata, tanto a los más cercanos como a los desconocidos… disposición permanente de llevar el amor de Jesús y eso se produce espontáneamente en cualquier lugar, en la calle, en la plaza, en el trabajo, en un camino (127). ¡Acojamos con toda veneración este grito de desamparo que es clamor de esperanza revelada! 5 Tengo sed (Jn 19, 28) Con eso confirmaste lo que de Ti había profetizado el Espíritu de Dios mirando a tu Pasión. Mi garganta está seca como una teja y la lengua se me pega al paladar (Sal 22,16). En mi sed me han dado a beber vinagre (Sal 69,22). Siento una enorme gratitud por la tarea de todos los que trabajan en la Iglesia… Nuestro dolor y nuestra vergüenza no deben hacer olvidar cuantos cristianos dan la vida por amor: ayudan a tanta gente a curarse o a morir en paz en precarios hospitales o acompañan a personas esclavizadas por diversas adicciones en los lugares más pobres de la tierra, o cuidan a ancianos abandonados por todos, a se entregan de muchas otras maneras que muestran el inmenso amor a la humanidad que nos ha inspirado el Dios hecho hombre (76). Hoy se puede advertir una preocupación exacerbada por los espacios personales de autonomía y de distensión que lleva a vivir los temas como un apéndice de la vida, pero que no alimentan el encuentro con los demás… Una acentuación del individualismo, una crisis de identidad y una caída del fervor. Son tres males que se alimentan entre sí (79) y crean, entre otras cosas, una de las tentaciones más serias que ahogan el fervor y la audacia, conciencia de derrota que nos convierte en pesimistas quejosos y desencantados con cara de vinagre. El mal espíritu de la derrota es hermano de la tentación de separar antes de tiempo el trigo de la cizaña (85). En este contexto se alimenta la vanagloria de quienes se conforman con tener algún poder y prefieren ser generales de ejército derrotado antes que simples soldados de un escuadrón que sigue luchando… Cultivamos nuestra imaginación sin límites y perdemos contacto con la realidad sufrida de nuestro pueblo fiel (96). Sed de Dios. Sed de los hermanos. Sed de los en13 DE ABRIL DE 2014 / PADRE NUESTRO 8 SEMANA SANTA fermos. Sed de los moribundos. Sed y sed. Danos de beber del agua de la vida porque mi alma tiene sed de Ti como el ciervo la tiene de los manantiales. 6 Después de haber gustado el vinagre, dijo Jesús: Todo está consumado (Jn 19,30) Todo está cumplido. Ya es el fin. El fin de tu vida. El fin de tu honor, de tu esperanza humana, el fin de tu lucha y de tu trabajo. Todo ha pasado ya. Todo se ha vaciado. Y tu vida está destrozada. Tu muerte es tu victoria. El ideal cristiano siempre invitará a superar la sospecha, la desconfianza permanente, el temor a ser invadidos, las actitudes defensivas que nos impone el mundo actual. El Evangelio nos invita siempre a correr el riesgo del encuentro con el rostro del otro, con su presencia física que interpela, con su dolor y sus reclamos, con su alegría que contagia en un constante cuerpo a cuerpo. La verdadera fe en el Hijo de Dios hecho carne es inseparable del don de si, de la pertenecía a la comunidad, del servicio de la reconciliación con la carne de los otros (88). Sin embargo la mundanidad espiritual, que se esconde detrás de apariencias de religiosidad e incluso de amor a la Iglesia, es buscar, en lugar de la gloria del Señor, la gloria humana y el bienestar espiritual (93). Quien ha caído en esta mundanidad mira de arriba y de lejos, rechaza la profecía de los hermanos, descalifica a quien lo cuestiona, destaca constantemente los errores ajenos y se obsesiona por la apariencia. Es una tremenda corrupción con apariencias de bien. Es necesario, por el contrario, poner a la Iglesia en movimiento de salida de sí, de unión centrada en Jesucristo, de entrega a los pobres. ¿Dios me libre de una Iglesia mundana bajo ropajes espirituales o pastorales! No nos dejemos robar el Evangelio (97) ¡Qué bueno es que los jóvenes sean callejeros de la fe, felices de llevar a Jesucristo a cada esquina, a cada plaza, a cada rincón de la tierra (106). Espero que cuando lo hagan tengan en cuenta que cada vez que intentamos leer en la realidad actual los signos de los tiempos, es conveniente escuchar a los jóvenes y a los ancianos. Ambos son la esperanza de los pueblos (108). La salvación que Dios nos ofrece es obra de su misericordia. El principio de la primacía de la gracia debe ser un faro que alumbre permanentemente nuestras reflexiones sobre la evangelización (112). El Señor también te llama a ser parte de su pueblo y lo hace con gran respeto y amor. 7 Jesús, dando una gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu (Lc 23,46) Totalmente abandonado. Deshecho de dolor, Jesús, ya has llegado al término. En ese fin en que todo se nos arrebata: el alma, la libertad, el ser. Porque eso es la muerte. ¿Quién arrebata y qué se nos arrebata? El Padre, Dios que es sabiduría y amor infinito. PADRE NUESTRO / 13 DE ABRIL DE 2014 El Espíritu Santo enriquece a toda la Iglesia evangelizadora con varios carismas. Son regalos del Espíritu integrados en el cuerpo eclesial, atraídos hacia el centro que es Cristo. En la comunión, aunque duela, es donde un carisma se vuelve auténtico y misteriosamente fecundo. Si vive este desafío, la Iglesia puede ser un modelo para la paz en el mundo (130). En la presencia de Dios, en una lectura reposada del texto, es bueno preguntar, por ejemplo: ¿Qué me dice, Señor, este texto? ¿Qué quieres cambiar de mi vida en este mensaje? ¿Qué me molesta en este texto? ¿Por qué esto no me interesa? ¿Qué me agrada? ¿Qué me estimula de esta palabra? ¿Qué me atrae? ¿Por qué me atrae? Nadie es más paciente que el Padre Dios, que nadie comprende y espera como Él. Invita siempre a dar un paso más (153). Ahora te dice: Jesucristo te ama, dio su vida para salvarte y ahora está vivo a tu lado cada día, para iluminarte, para fortalecerte, para liberarte (164). Nada hay más sólido, más profundo, más seguro, más denso y más sabio que este anuncio. Es el anuncio que responde al anhelo de infinito que hay en todo corazón humano (164-165). Cada cristiano y cada comunidad están llamados a ser instrumentos de Dios para la liberación y la promoción de los pobres, de manera que puedan integrarse plenamente en la sociedad; esto supone que seamos dóciles y atentos para escuchar el clamor del pobre y socorrerlo (187). ¡El clamor de los pobres! El problema se agrava con la práctica generalizada del desperdicio (191). El criterio clave de autenticidad fue y es que no se olvidaran los pobres, la opción por los últimos, por aquellos que la sociedad descarta y desecha (195). Para la Iglesia, la opción por los pobres es una categoría teológica antes que cultural, sociológica, política o filosófica. Dios les otorga su primera misericordia (198). Con María avanzamos en esta contemplación del Cristo Crucificado y con Él los hermanos crucificados: Virgen y Madre María, Tú que, movida por el Espíritu, acogiste al Verbo de la vida en la profundidad de tu humilde fe, totalmente entregada al Eterno, ayúdanos a decir nuestro sí ante la urgencia, más imperiosa que nunca, de hacer resonar la Buena Noticia de Jesús. ACTUALIDAD IGLESIA EN TOLEDO 9 750 voluntarios en la VIII jornada diocesana del voluntariado en oropesa Don Braulio invitó a los voluntarios de Cáritas a construir un mundo basado en el amor Sus palabras fueron acogidas con ovaciones por los 750 asistentes a la octava Jornada Diocesana de Voluntariado, celebrada el pasado 29 de marzo,en la parroquia de Oropesa y en la que Marisa Martínez y Eva Alonso recibieron un homenaje de gratitud por sus dos décadas al frente de la institución diocesana. Consuelo Sánchez Galán «El momento es apremiante para mostrar el amor de Cristo», manifestó el Sr. Arzobispo, quien presidió la VIII Jornada Diocesana de Voluntariado en Oropesa, a la que acudieron 750 voluntarios de 77 localidades diocesanas. Monseñor Braulio Rodríguez invitó a los voluntarios a crear un mundo distinto, «pues ese debe ser el panorama de Cáritas», donde «el voluntario debe purificar su intención y profundizar en su corazón con el objetivo de amar, servir y estar dispuesto». «Tenemos que vivir nuestra vocación de cristianos queriendo devolver al Señor todo el amor que nos ha entregado, para que nuestra voz no humille sino que enaltezca a aquellos que necesitan, a través de nosotros, de los demás hermanos», añadió durante la homilía celebrada en la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción. Y continuó: «Hemos de alegrarnos cuando prestamos algún beneficio y nunca debemos dejarnos vencer por el desánimo, sino luchar para que haya un verdadero espíritu de acogida con el fin de que las cosas cambien». El Sr. Arzobispo celebró que Cáritas Diocesana cuente en la actualidad con un grupo de 2.100 voluntarios que se ha ido multiplicado en los últimos años, buena parte de cuya representación se encontraba en la Iglesia de la Compañía de Jesús en Oropesa. En su saludo de bienvenida rindió su gratitud a todas y cada una de las Cáritas parroquiales «que cada día tratan de solucionar los problemas de los necesitados, no todos» y apeló a la necesidad de que el Estado y los Poderes Públicos deben apoyar esta tarea. Cáritas como animadora Durante la jornada, la psicóloga técnico de Cáritas Española en el Departamento de Cáritas Institucional, María Santos Sastre, dió la conferencia «Cáritas animadora en la comunidad». Santos Sastre remarcó la idea de que Cáritas está a la escucha del clamor de los pobres. «Cáritas escucha, promueve, se compromete y se mueve sintiéndose junto a los más excluidos para escuchar su clamor. Para la psicóloga debe ser misión fundamental de los voluntarios de Cáritas dar traslado a la comunidad de lo que ven y escuchan, porque «Cáritas está llevada a implicar a toda la comunidad y a compartir con ellos esa respuesta a los pobres. El delegado episcopal, José María Cabrero Abascal, fue el encargado de abrir el acto institucional y agradecer al Ayuntamiento la cesión del local donde se celebró toda la jornada, incluido el almuerzo que fue preparado por los voluntarios de Cáritas de Oropesa con la colaboración de Cáritas de Lagartera. Antes del almuerzo todos los voluntarios se reunieron en la parroquia de la localidad donde participaron en la Santa Eucaristía presidida por Monseñor Braulio Rodríguez cuya colecta ha sido destinada a Cáritas Diocesana. Homenaje de gratitud El Sr. Arzobispo expresó su agradecimiento a Marisa Martínez, y a Eva Alonso, directora y secretaria general de Cáritas Diocesana, respectivamente, tras más de 20 años de servicio. «Les agradezco sobre todo su generosidad, en mi propio nombre y en el de los que me precedieron, por la asunción de esa «realidad caritativa» tan querida por ellas durante tantos años y que han demostrado desempeñar con tanta donación propia, siendo así que han decidido seguir con nosotros». El ejemplo de ambas, según el Sr. Arzobispo, es el de aquellas personas que sienten para desempeñar su trabajo una fuerza personal, y se apoyan en las demás hasta hacer avanzar una empresa con unos objetivos únicos y verdaderos. En su turno de intervención, las homenajeadas hicieron un pequeño repaso a su recorrido por Cáritas Diocesana, finalizando con su reconocimiento por el trato y apoyo recibido. 13 DE ABRIL DE 2014 / PADRE NUESTRO 10 / IGLESIA EN TOLEDO CRÓNICA ENCUENTRO CON EL IEME La archidiócesis y el IEME, unidos en la acción misionera de la Iglesia Fernando Redondo Benito La Delegación Diocesana de Misiones de Toledo y el Instituto Español de Misiones Extranjeras (IEME) han mantenido un encuentro en Toledo con el objetivo de compartir línea de trabajo y acción misionera para la Iglesia. Labor misionera compartida que queda plenamente manifestada en las palabras del Papa Francisco, cuando afirma que «la salida misionera es el paradigma de toda obra de la Iglesia», según recordó Jesús López, Delegado de Misiones de Toledo, como también pusieron en común los misioneros del IEME, Luis Miguel Avilés, Amadeo Puebla y Claro Jesús Díaz, que han estado desarrollando su labor misionera en los últimos años en Tailandia, República Dominicana y Nicaragua, entre otros lugares. Jesús López ha manifestado, durante la reunión mantenida con el IEME, la disposición de la Delegación para proseguir la colaboración que fomente la labor de los misioneros del IEME, como sacerdotes diocesanos que son, profundizando en la comunión con las «Iglesias de destino y de origen». PADRE NUESTRO / 13 DE ABRIL DE 2014 Tanto desde el IEME como desde la Delegación de Misiones se ponen al servicio de la Misión de la Iglesia en España, que sienten con un renovado impulso desde los deseos que constantemente manifiesta el Papa Francisco, que además en una de sus intervenciones a los Obispos españoles en la visita ad Limina pidió que pusieran a sus Iglesias «en un verdadero estado de misión permanente». Desde los desafíos siempre nuevos de la misión evangelizadora de la Iglesia, en los que todos somos llamados a esta nueva «salida misionera», los miembros del IEME fueron recibidos por el Sr. Obispo auxiliar, que mostró su afecto y compromiso por el trabajo y la acción misionera de la Iglesia y de sus agentes, quien además recordó la importancia de comunicar la misión de forta- lecer e impulsando el mandato misionero en la Archidiócesis, desde la actualización de la Misión. Fernández Collado también recordaba, que la alegría del Evangelio es una alegría misionera, como destaca de igual manera el Papa Francisco. n EL MFC CELEBRÓ SU RETIRO DE CUARESMA.- El pasado 22 de marzo tuvo lugar en Villacañas el tradicional Retiro de Cuaresma. En este caso nos unimos al que ya estaba organizado por la parroquia para todos los fieles y que fue dirigido por su párroco don Luis Lucendo. Tuvo lugar el acto de renovación a la integración del MFC que realizaron varios matrimonios con más de 10 años de antigüedad en el movimiento. Una tarde especial para adentrarnos en este especial tiempo de Cuaresma. CRÓNICA IGLESIA EN TOLEDO 11 Rehabilitada la ermita de Visita al taller de Cáritas, de san Sebastián, en Carranque apoyo escolar, en Seseña El pasado 29 de marzo y en el marco de la Visita pastoral a la parroquia de Carranque, el Sr. Arzobispo presidió la eucaristía e inauguró la remodelada ermita de san Sebastián, que se encuentra junto al cementerio. Un numeroso grupo de fieles acompañó al Sr. Arzobispo, al párroco y a las autoridades locales en tan memorable acto para este pueblo de la Sagra toledana. En el archivo diocesano se encuentran los documentos del año 1599 mediante los que el pueblo de Carranque pedía autorización al Arzobispo de Toledo para la construcción de una ermita en el camino de Batres y que se terminó a mediados del siglo XVII. La rehabilitación efectuada por el ayuntamiento con la participación del pueblo ha afectado a cubiertas, instalación eléctrica, carpintería, vidrieras y mobiliario. Tras el acto el ayuntamiento entrega a la parroquia la ermita para que vuelva a ser un lugar de culto en el pueblo. Acompañado por el alcalde y varios concejales del equipo de gobierno, conoció los detalles de las actividades que se realizan en las instalaciones del albergue municipal Durante su estancia en la localidad de Seseña, don Braulio Rodríguez, visitó el Taller de Apoyo Escolar de Cáritas, acompañado por el párroco de Seseña Nuevo, don Jesús Moreno, así como por el alcalde, don Carlos Velázquez y varios concejales del equipo de go- bierno municipal. Esta iniciativa es fruto de un acuerdo con el Ayuntamiento, por el que Cáritas puso en marcha, hace unos meses, un taller infantil que proporciona a los niños apoyo escolar, actividades extraescolares y merienda en las aulas. Además, los niños reciben diariamente la cena para llevar a sus domicilios. De la misma forma, Cáritas se hace cargo del servicio de acogida y atención primaria a las familias y colectivos con menos recursos. n «LA PASIÓN» EN EL REAL DE SAN VICENTE.- Durante este fin de semana, 12 y 23 de abril, a las 19:30 h., se escenificará la representación viviente por las calles de «La Pasión» en El Real de San Vicente», organizada por la parroquia. 13 DE ABRIL DE 2014 / PADRE NUESTRO Director: Juan Díaz-Bernardo Navarro. Adjunto a la dirección: José María Díaz Alejo. Redacción: Marga G. Heras. Toledo: Jesús Javier Merchán. Talavera de la Reina: Jorge López Teulón. La Mancha: Juan García Martín. Edita: Secretariado Diocesano de Medios de Comunicación Social. C/ Trinidad, 12. 45002 Toledo. Teléfono: 925 250012. Fax: 925 253288 e-mail: [email protected]; [email protected]. http: www.architoledo.org Impresión: Ediciones Toledo S.L. Depósito legal: TO. 1641/1983 NUESTROS MÁRTIRES (200) Miguel Torija Pérez (y 2) Jorge López Teulón El Boletín Eclesiástico del Arzobispado de Toledo, cuando finalizó la contienda, publicó en siete páginas la interminable «relación nominal de sacerdotes martirizados durante la pasada revolución en la Archidiócesis de Toledo». En el encabezamiento puede leerse: «Se pone en Apéndice de la Estadística diocesana la lista de sacerdotes mártires, como debido homenaje de la Archidiócesis a quienes rubricaron con su sangre generosa el ministerio sacerdotal. Parecía necesario hacer constar, junto a la orfandad de la Diócesis, el nombre y cargo de los sacerdotes cuya muerte la ha producido y con cuya protección espera confiadamente resurgir. Sirva esta relación asimismo para satisfacer el legítimo anhelo de cuantos desean conocer el volumen glorioso y abrumador de nuestros sacerdotes mártires, mientras se ultima la preparación de la historia detallada de su martirio, del trastorno producido en nuestras iglesias por la revolución, y de los esfuerzos llevados a cabo por los sacerdotes y fieles para restaurar el culto en forma decorosa». El número de mártires computados es de 292. Miguel Torija Pérez aparece con su último nombramiento: coadjutor de Casarrubios del Monte. Rivera Recio afirma en su obra que el Siervo de Dios «se hallaba convaleciente en Los Yébenes, en el domicilio de sus familiares». Sobre esto, el padre escolapio Fernando Torija, destinado en el Colegio Calasanz de Medellín (Colombia), nos ha contado que «mi familia era de hondas raíces cristianas. Mi abuelo era sacristán de la parroquia y mi padre, Pedro Torija, fue alumno de los escolapios del Colegio de San Antón de Madrid. Como era técnico de Correos, fue destinado a Los Yébenes y allí formó su familia». Este es el motivo por el cual encontramos al Siervo de Dios Migue Torija en Yébenes porque estaba en casa de su sobrino Pedro, descansando y recuperándose de unas dolencias. El 9 de agosto fue sacado de la casa donde se encontraba y a duras penas, conducido al paredón del cementerio fue allí fusilado. Enterrado allí mismo, fue exhumado su cadáver el 18 de octubre de 1939, notándose que tenía fracturados un brazo y una pierna. Actualmente reposa en la capilla de los mártires de la iglesia parroquial. Los Yébenes, en los años 30 del siglo pasado. Semana Santa en Radio Santa María de Toledo y Canal Diocesano de TV 13 de abril, Domingo de Ramos: –A las 11 de la mañana, Procesión de Ramos y Santa Misa, desde la Catedral Primada. 15 de abril, Martes Santo: –A las 12 de la mañana, Santa Misa Crismal, desde la Catedral Primada. –A las 8 de la tarde, Via Crucis de la ciudad, desde la Catedral Primada. 17 de abril, Jueves Santo: –A las 9:30 de la mañana, Santa Misa Crismal, presidida por el Papa Francisco, desde la basílica de San Pedro. –A las 6 de la tarde, Santa Misa de la Cena del Señor, desde la Catedral Primada. 18 de abril, Viernes Santo: –A las 10 de la mañana, Canto Coral de Laudes, desde la Catedral Primada. –A las 6 de la tarde, Celebración de la Pasión del Señor, desde la Catedral Primada. –A las 9 de la noche, Via Crucis desde el Coliseo de Roma, presidido por el Papa Francisco. 19 de abril, Sábado Santo: –A las 9 de la mañana, Canto Coral de Laudes, desde la Catedral Primada. –A las 11 de la noche, Vigilia de Pascua, desde la S. I. Catedral Primada. 20 de abril, Domingo de Pascua: –A las 10 de la mañana, Santa Misa de Pascua, presidida por el Papa Francisco, desde la plaza de San Pedro.