e rreb - OdeMIH - Institutum Historicum Ordinis de Mercede

Orgapo be su Veperable Orbep
e rreb
15 DE FEBRERO DE
Cercera y (ofraäias
Dirección y Administración:
Silva, 25.—Madrid (12).—Teléfono 12803
1935
S
<>
T_T M
NUM. 2
A. 17e, 10
Carta de S. S. el Papa Pío XL—Sobre la noción de criatura y Criador, por Fr. Juan G. Castro.—El P. Francisco Ponce de León, por Fr. Guillermo Vázquez. —Canto a la Merced, poesía,
por Fr. J. Santiago Crespo. —El pintor mercedario P. Fr. Agustín Leonardo, por Ceán Bermúdez. — Los cuentos para niños, por Fr. Luis Barros. —De la Economia nacional, por Guillaume. —Estadistica, contrastada oficialmente, de la revolución de octubre pasado. — Vida
Católica, por X. —La Cruz de la tía Liboria, por la Srta. Julia G. Herreros.---Necrología.Amenidades.—Radiogramas, por Ujitn.—Favores de la Beata Mariano de Jesüs.—Noticias.
210
PAPA XI
A Juan del Carmelo Garrido Blanco, Maestro General de la Orden
de Santa María de la Merced, Redención de Cautivos
Amado Hijo, salud y Bendición
Apostólica.
Todavía está Nuestro corazón rebosando de singular gozo por las fiestas cente •
nanas del Derecho, que congregaron en
Roma de todas partes del mundo a tantos varones doctos y eruditos, los cuales,
en Nuestro Ateneo Jurídico de San Apoli
flan, ante muchos de los Padres de Nuestro
Sagrado Senado y una numerosa y selectlsima corona de clérigos y seglares, comentaron oportuna y magníficamente las
Decretales de Gregorio Nono, cuando al
glorioso nombre de este Pontífice y a la
insigne loa de San Rairnundo de Peñafort, su cooperador, viene a añadírseles
felizmente otro acontecimiento de ,no
pequeña importancia.- la Confirmación
Apostólica de esa Orden Mercedaria, cuyas fiestas, siete veces seculares, se celebrarán dentro dé POCO. Porque, empleando las palabras de la Sagrada Liturgia:
«en el tiempo que la mayor y mejor parte
de España estaba oprimida bajo el pesa
do yugo sarraceno e innumerables fieles
gemían apresados en cruel esclavitud con
peligro grandísimo de abjurar la Fe y de
perderse para siempre», por inspiración
de la misma Reina de los Cielos y con el
favor de San Raimundo de Peñafort y
de Jaime, Rey de Aragón, San Pedro
Nolasco echó los cimientos de vuestro benéfico instituto A esta Orden, pues, cuyos
miembros por peculiar voto se obligan a
quedar en rehenes en poder de los infieles,
— 33 —
cuando se juzga necesario para la redención de los cautivos cr istianos, Gregorio IX la confirmó solemnemente el 17 de
enero de 1235 con el vigor de la Autoridad
Apostólica,.
Desde entonces los Religiosos Merceda
ríos, abrasados de caridad y poniendo
sus vidas ' por sus amigos >y prójimos; se
ganaron la benevolencia y el favor de los
Romanos Pontífices, de suerte que Alejandro IV no dudó en llamarlos « los
nuevos Macabeos de la Ley de Gracia»,
ensalzándolos con estos elogios: (Porque
éstos, al dar de comer al hambriento, de
beber al sediento, posada al peregrino, de
vestir al desnudo, y no sólo al -visitar a
los enfermos, sino también al tomarlos
por su cuenta en las enfermedades, al
servir a los encarcelados y al enterrarlos,
cuando fallecen, a los que asisten en sus
enfermedades, hacen todo aquello, por lo
cual el Señor asegura que en el día del
Juicio premiará a los buenos y castigará a los malos». (Bula SI JUXTA SENTENTIAM , del 4 de septiembre del
año 1255).
Con casi iguales alabanzas honraron
muchos de Nuestros Antecesores a esta
Orden en que, como en fecundo vergel de
la Iglesia, brotaron no pocas flores de
santidad, entre las cuales sobresalen principalmente el mismo Pedro Nolasco, primer Maestro General de la Orden, el cual,
en la redención de los cautivos cristianos
de la esclavitud de los enemigos, gastó
sus bienes y sus fuerzas; San Ramón
Nonato, milagroso devoto de la Sagrada
Eucaristía, que por sus preclaros hechos
mereció que el mismo Gregorio IX lo
agregase al Colegio Cardenalicio. Ni se
puede pasar en silencio a Raimundo de
Blanes y a San Serapio, los primeros de
vuestra Familia, que por la defensa de la
Pe sucumbieron en el martirio. Y entre
las religiosas vírgenes brillan por sus . clarisimas virtudes Colagia, Santa María
de CervellÓn, Natalia de Tolosa y Mariana de Jesús, siguiendo cuyos ejemplos
las demás _Hermanas de la Orden, prestansus servicios en las misiones y Casas
de Beneficencia.
Con razón, pues, y oportunamente .os
disponéis a celebrar las fiestas centenarias, en que recordadas las principales
glorias de vuestro Instituto vengan a gozar de su. merecido brilló, -Y Nos,, que
nada deseamos tanto como que los Religiosos se enfervoricen con las ejemploS dé
los Santos y renueven los p . reclaros ejemplos de caridad y fortaleza de sus mayores, al felicitarte a ti, amado Hijo, y a
toda la Orden de Santa María de la Merced en gloriosa fecha, compartimos gustosamente la celebración del fausto acon
tecimiento, y pedimos a Dios-que vuestra
Orden florezca más y más cada día, y
que «la santidad de la vida, el cultivo de
las letras y la laudable piedad para con
los prójimos » ( Bula AETERNUS ALTERNI PATRIS, del 9 de julio de 1725),
virtudes que Benedicto XIII publicó como
peculiares de vuestro Instituto, se conserven y aumenten continuamente.
Con estos Nuestros votos y augurios, y
pidiendo a Dios para vosotros abundancia de gracias celestiales, a tí, amado
Hijo, y a toda la Orden, y a todas las
Familias Religiosas que gozan el nombre
y la protección de la Santísima Virgen
de la Merced, damos con la efusión de la
caridad en el Señor la Bendición Apostólica.
Dado en Roma, en San Pedro, a 6 de
enero, Epifanía del Señor, año 1935 y de
Nuestro Pontificado décimotercero.
*
el)
— 34 —
511
Puntos de Religión
Sobre la noción de criatura y Criador San Juan, en su Evangelio, también
expresó la creación por hechura total o
Criatura, según la noción corriente, totalitaria. (Todas las cosas, dice, fuequiere decir hecha de nada, y hecha de ron hechas por El, y sin El no se hizo
nada lo mismo es que del todo hecha; cosa alguna de todas las que han sido
de modo que ella y, si es compuesta, los hechas».
e lementos que la componen, todos sean Si el concepto dado de creación, que
hechuras. Criatura, pues, es hechura es el genuino, es imposible absoluto, o
total.
lo que es lo mismo, absurdo, lo será o
El carpintero hace una mesa, pero de por hechura, o por total hechura,
madera preexistente. No hace, pues, Lo imposible absoluto—de él hablatoda la mesa, porque no hizo las tablas mos—no existe; más aún, ni puede
que la componen, ni el tronco de donde existir.
se sacaron, ni la semilla que creciendo ¿Existe? Pues por lo mismo es posiformó el tronco, ni las sustancias mine- ble, aunque para algunos, aunque para
rales, o no minerales, que se transforma- muchos, aunque para todos menos para
ron en madera, uno, sea ininteligible. Creo que estos
Pero si hiciera toda la mesa, nada conceptos son ' esencialmente objetivos,
habría en ella que no fuera hechura del que es la piedra de toque de toda verdac arpintero: forma de mesa, y tablas, y dera
ciencia. Partiendo, pues, de lo exisMadero, y árbol, y semilla y sustancias lente, probaremos la posibilidad de la
que la virtud vital de la semilla transfor- creación, o sea su concepto. La existentnó en árbol.
cia de la creación es y será para nosLa hechura, en aquello que es hechu- otros otra cuestión.
ra, es algo nuevo que no había,antes
de Que en el mundo hay hechuras, que
ser hecho. Luego criatura, hechura total, ahora aparecen nuevas hechuras, y que
es todo nuevo, de lo cual nada había en adelante aparecerán, y más generalantes que fuese hecho. Criador, pues, mente que el que hace, aunque sea un
Por correlación, es lo mismo que Hace- desatinado, hace algo, todos los conodor total. Dos conceptos, en la forma cemos.
di ferentes, en el fondo idénticos, que En toda hechura hay aquello de que
Profesa la Santa Madre Iglesia. Porque se hizo y lo que se hizo. Lo que se hizo
en el Credo ordinario llama a Dios es p ropísimamente la hechura, no aquee Criador del cielo y de la tierra», que es lb o
de que se hizo. Obra del carpintero
decir que los hizo de la nada, y en el es la forma de la mesa, no las tablas ni
Credo de la misa le llama « Haiedor del lo demos de que y con que la hizo.
C ielo y de la tierra, de todas las cosas La hechura es cosa nueva. No había
vi sibles e invisibles». Si de todas, ninmesa y se hizo una mesa, ¿Qué habla
g una hay que por El no fuese hecha, de la hechura como tal antes de ser
H acedor, pues, total, hech4ContestarA todo el que sea ra-
— 35 —
cional: nada, pues toda la razón de la
hechura es haber sido hecha.
Cata aquí, hermano racional, dos
cosas: la hechura es cosa nueva al ser
hecha, y nada había de la hechura antes
de ser hecha.
Luego la hechura en lo que es hechura
ha sido hecha totalmente y por la equivalencia arriba mostrada, si hecha total,
hecha de nada.
Tenemos, pues, que en donde se atascan los impíos al no admitir la creación
que es el que sea hecha de la nada, es
de la esencia misma de toda hechura.
De modo, que si niegan por esto la creación, nieguen por lo mismo que en el
mundo se hace algo.
No hay, pues, absurdo en la creación
por hechura, y, más aún, por hecha de
nada,
FR. JUAN G. CASTRO
Rincón Noroeste del sereno y acogedor claustro de Verín.
— õ6 —
Mercedarios
El P. Francisco
Ponce
Ilustres
de León
-1-
por
1661
Los mercedarios chilenos han puesto ventos, por patente despachada en Lima
en el lugar que le correspondía a este el 19 de mayo de 1619 (1).
insigne misionero que desempeñó el proPara estas fechas el P. Ponce había
vincialato en Chile en 1628.
organizado ya un destacamento de cinEl P. Ponce de León había nacido en cuenta españoles y algunos indios auxiSevilla por 1576, de noble familia, empa- liares, con los que atravesó los Andes, y
rentada con los Duques de Arcos y de el 21 de septiembre tomó posesión de la
Medinasidonia. En 1596 cera capitán de provincia de Mainas, siendo el primer
Caballería cuando el inglés entró en Sacerdote que celebró la Santa Misa y
Cádiz, pasando después a otros mayo- predicó el Evangelio en aquellas tierras.
res grados que de propósito dejó en siEl 14 de octubre del mismo año, con
lencio» (dice él mismo) (1).
su trato afable, insinuante, con su caridad
En 1602 estaba ya en el Perú y allí inagotable, reune en la laguna Maynaye
abandonó las armas terrenales para ins- y sus contornos 4.000 indios guerreros
cribirse en la milicia espiritual de la Mer- con sus familias, a los que convierte e
ced. El mismo dice en 1632 que cha instruye en el cristianismo. El día 8 de
treinta años que es religioso y en ellos diciembre funda la ciudad de San Franha sido Comendador en diferentes con- cisco de Borja, y con generosidad y
ventos, Visitador y Reformador General abnegación sin límites es Cura, Vicario
de las provincias de Chile y de Tu- General y Juez eclesiástico, sin retribucumán, Provisor y Vicario General en ción alguna durante tres años.
los obispados de Quito, Trujillo y ChiEl 20 de marzo de 1620, bautiza solemle» (2).
nemente a todos los habitantes de la naEl hábito no había podido ocultar su ciente ciudad, entre ellos a un gran cacimérito, por lo cual la Orden, el Estado que de los más prestigiosos de aquellas
y la Iglesia, se disputaban sus servicios.
tierras, llamado Xamanate, su mujer MoEn 1618 era Comendador de Jaén de Bra- roro y un hijo.
camoros en el Perú, cuando el Virrey,
En 1621 descubre los ríos de Pastaza,
Príncipe de Esquilache, le confió la con- Guaringa, Paitite, Dorado, Panarapura y
quista espiritual de las vastísimas regio- Marañón; las provincias de los Xeberos,
nes de la cuenca del Marañón. El repre- Urariñas, Panarapuxas, Cocamias, PamSentante del General de la Orden en el pas, Tonchetos, Aguames, Zerbetaneros
Virreinato, M.° Fr. Francisco de Vilches, y Gente Barbuda, y en todas ellas predile dió también el título de Vicario Pro- ca el Evangelio y funda iglesias, tomanvincial en aquellas provincias y descu- do posesión en nombre del Rey de Esb rimientos, con facultad de fundar con- paña.
Por los padrones y libros de bautismo
(1)
Pérez: Religiosos de la Merced. 462.
(2) lbid, 464.
(1) lbid.
—
ä7 —
de Paita a aguardar que llegase el Virre Y,
Marqués de Guadalcázar, que venía de
gobernar la Nueva España».
e A 20 de marzo llegó al puerto de Paita dicho Virrey, y luego empezó a tratar
sus nuevas capitulaciones.—Consta del
decreto rubricado del Virrey, y firmado de Francisco de Pärraga, secretario, y de que le mandó a dicho religioso, que para que mas bien se pudiese
tratar de todo, lo siguiese a Lima,.
«Año de 1622, a 15 de julio, entró
dicho Virrey, Marqués de Guadalcázar, en Lima, y tratando de nuevo sus
capitulaciones, se mandó dar traslado
al fiscal, Luis Enríquez, y que con lo
que dijese se llevase al oidor más
antiguo, D. Juan Jiménez de Montalvo.
Honróle mucho el fiscal en la respuesta .--Consta de los decretos y testimonios que originales ha presentado,
y de que a 20 de enero de 1623 respondió dicho oidor que era justo se le
concediese todo lo que pedía dicho
religioso, así para los nuevos fundadores, de gracias y mercedes, como
para los naturales (de Mainas) y para
las fundaciones de conventos de su
Orden, y que todas las doctrinas se
diesen a religiosos de Nuestra Señora
de la Merced y que debía el dicho
Virrey pedir a su majestad honrase
famoso
misionero.
El P. Francisco Ponce de Ledn,
al dicho religioso» (1).
No sé si por mero honor o con espeen la fe, con su propia mano bautizó con
olio y crisma dos mil setecientos cuaren- ranza de retenerlo en su diócesis, «el
Obispo de Trujillo, D. Carlos Marcelo
ta y cuatro almas».
El cristianismo exige y produce el ade- Corni, le nombró por su Provisor Golanto material; para desarrollar el de bernador, Vicario General y Juez ecleaquellas vasta s regiones y buscar misio- siástico, con todos sus poderes, gracias
neros, hub o de volver el P. Ponce al y prerrogativas, para poder nombrar curas y vicarios, quitarlos y ponerlos en
Perú a n egociar con el nuevo Virrey,
Marqués de Guadalcázar, que había sido las partes que le pareciese, con amplia
jurisdicción en todo.--Consta del título
traslad ado de México a Lima.
«A tío de 1622, después de haber padecid o muchos trabajos y peligros y con
(1) Ob. dt. 463, donde se copia el texto del Padre
asto muy considerable, llegó al puerto Ponce.
da certificación el escribano Francisco
Añasco, comprobada de otros cuatro escribanos, de que hasta 20 de mayo de
1621 el Mercedario «trabajó en la doctrina cristiana y enseñanza de los indios,
que después de catequizados e instruidos
— 38 —
y nombramiento despachado en Trujillo donde le nombró por Capellán Mayor de
del Perú en 1.° de julio del año 1622».
aquel ejército, que sirvió cinco arios y
Las misiones de Mainas podían ya vi- más, hallándose en todas las campeadas
vir sin su fundador, y el Virrey juzgó y malocas que se tuvieron con los indios
que en las graves circunstancias en que rebeldes, (los famosos araucanos).
se encontraba el Perú era más importan-
A este mismo ario 25 se refieren sus
te la presencia del Mercedario en su con- nombramientos de Visitador de la Mersejo y así ele nombró por Capellán Ma- ced de Chile y de Provisor y Vicario
yor del reino del Perú y Armada real, con General del obispado de la Imperial. En
asistencia cerca de su persona, teniendo 1626, el Capítulo Provincial de Lima le
noticias de que el enemigo holandés ha- nombró Elector del Capítulo General. Al
bía entrado a infestar aquellos mares y ario siguiente, terminada la visita en
reinos por el estrecho de Magallanes con Chile, fui nombrado Vicario Provincial
16 galeones.—Consta del título despa- de aquel reino.
chado en el Callao all de mayo de 1623».
«Y por el amor y voluntad que tenía a
El capitán pirata holandés se llamaba los soldados y buenas obras que reciIacobo l'Hermite, y causó daños graves bieron de su persona, para conseguirlas
en las costas del Pacífico, aunque fue mayores, en el mes de enero de 1629 le
rechazado en varios puertos. Fue él nombraron poi su Procurador General, y
quien martirizó en la Puná a nuestro mi- le pidieron viniese a estos reinos a Water
sionero Fr. Alonso Gómez de Encinas, de sus causas y a procurar el remedio _de
el día de San Antonio de 1624.
ellos; y aunque no tenía intento de venir,
Quiso el Virrey utilizar en trance tan por hacerles bien se determinó de poner.
difícil el celo y valentía del antiguo capi- se en camino a sus expensas , y, gastando
tán, y así en el año,1624 nombróle por su patrimonio,. La necesidad más urgenCapellán Mayor del Ejército del Perú y te de los sqldados españoles solía ser 'e,1
Real Armada, en ocasión que el enemigo hacer efectivas sus pagas, para remediar
holandés estuvo surto con once galeones su hambre y , desnude,. Eso más hay que
en el puerto del Callao más de tres m'e- ponderar en sus hazañas.
ses; en cuya ocasión acudió en läs de El 12 de diciembre de 1628, los Mercemás peligro, embarcándose muchas ve- darios de Chile eligieron por su Provinces con el agua a la cinta, a confesar la cial al P. Ponce en Santiago, estando él
gente de mar, con que se alentaba mucho en Concepción. Tomó posesión del cara los soldados y por ser Vicario Provin- go, pero las necesidades del Ejército y de
cial y Comendador del convento que la Orden le obligaron a venir a España,
está en dicho puerto, tuvo siempre dos dejando por Vicario al celoso Padre Pereligiosos en las trincheras y puestos dro Miguélez, ilustre misionero tambien.
más peligrosos para que animase& a los
En 1631 llegó el P. Ponce a España 'y
soldados».
ele4,de septiembre estaba en Barcektga
eY acabada esta ocasión, en que hizo para asistir al Capítulo general. El ndevo
servicios sin querer sueldo, renunciánz General de Ja Orden, M.° Fr. Diego Sedolo en Su Majestad, , e1 mismo Virrejr, n'ano, le mändó por obediencia impricon licencia de su religión, a 7 de abril miese el Memorial de sus servicios, prede 1625, le envió con el Gobernador don , sentado al Consejo de Indias. El
CapfLuis Fernández de Córdoba, que iba por tulo elogió su actividiid y mandó que los
P residente de la Audiencia de Çhile,
cronistas hicieran memoria de sus er-
- 39 —
vicios, dándole además el título de Maestro y prorrogando por veintitrés meses
su provincialato, en atención a la ausencia forzosa que había hecho. Con todo,
parece que no volvió allá.
Durante los cinco años que residió en
Chile, no recibió sino plácemes y parabienes de todas las autoridades, así eclesiásticas como seculares. El Cabildo,
Justicia y regimiento de la ciudad de
Concepción en 1625, lo califica de «persona de gran virtud, calidad, letras y
capacidad, de que se han seguido grandes servicios a Dios Nuestro Señor y a
Su Majestad en el discurso de muchos
arios que ha ejercitado los ministerios de
su profesión ' . No menos entusiasta es
la recomendación que de él hacen el
Obispo de la Imperial y la Audiencia de
Chile en 1626.
En 1635 fue incorporado de nuevo a la
provincia de Lima, y el 15 de enero de
1639 el Rvdmo. Serra lo prohijó en la de
Castilla (1).
En consideración a sus servicios, el
1. 0 de octubre de 1638 Su Majestad le
decretó una renta anual de 300 ducados
y otros 500 por una sola vez para ayuda
(1) Biblioteca Nacional. Ms 2684: Extracto del libro
de provincia.
de costas, pero estas sumas no llegaron
a hacerse efectivas, sino en pequeña
parte, y el P. Ponce se vió en grandes
apuros para satisfacer las deudas contraídas para sus grandes empresas y
para socorrer a los soldados. Su historia es en esto parecida a la de otros muchos hombres de gran corazón por aquellos años.
En 1642 lo hallamos de Secretario en
el Capítulo general celebrado en Calatayud, a 7 de julio, en que fue elegido el
el Rvdmo. Salmerón (1). Después residió habitualmente en Madrid, donde en
1644 imprimió una Descripción del Peino
de Chile, muy interesante, en la que insertó como apéndice un resumen de sus
papeles personales.
Creía, sin duda, próximo el fin de su
vida tan azarosa, pero el Señor se la
prolongó bastantes años. En las actas
de visita del convento de Madrid consta
la presencia del P. M.° Francisco Ponce
de León, en los años de 1640-41-44-49-55
y 1661 (2), en que debió pasar a mejor
vida, lleno de méritos y virtudes.
FR. GUILLERMO VÁZQUEZ
(1) A. C. A. Biblioteca: Tomo de capítulos de la
Merced, impresos.
(2) A. H. N. Papeles del Clero. Madrid, leg. 439.
Canto a La Merced
en et 1)11 Centenario de su Confirmación
¡Belleza Eterna! ¡Tú, de cuya boca
p endían los profetas
Para rimar sus salmos y plegarias,
a dmiración y envidia de poetas!
A Tí mi labio humildemente invoca
para ensalzar las glorias mercedarias.
Dame que pueda percibir tu aliento
cual Débora y Moisés lo percibían,
y entonces como barco majestuoso
cuyas velas propicio llena el viento
y avanza acompasado y armonioso,
bogaré con soltura
mientras el soplo de tu aliento dura.
En los Maestros Cantores Wagner canta
el certamen famoso,
cuando Walther de amores inflamado,
prorrumpe en aquel himno portentoso
que cantó el corazón, no la garganta,
y al fin obtiene el galardón preciado.
Yo también, del amor sólo traído,
que profeso a esta Orden, Madre mía,
bajo a la arena en medio de maestros,
mas también como Walther convencido
de que amor, que a los torpes trueca en diesno tornará ilusoria, [tros,
la esperanza que puse en la victoria.
Quiero asociarme a este triunfal cortejo
hoy en que el alma goza
con un hecho inmortal de nuestra historia;
quiero aprestar mi espléndida carroza
como en días de triunfos y de gloria;
quiero uncir mis caballos relucientes
l lamados Ilusión y Fantasía,
que con rítmico trote y pie ligero
marchaban otros tiempos obedientes
a la voz conocida del cochero
que marcaba sus sendas
ya recogiendo, ya soltando riendas.
Tuviera yo el favor de aquellas Gracias
y las Musas aquellas
Vista de la parte posterior del convento de Verín, en que se destaca
el noviciado Al fondo se veia cumbre de la antigua Plaza fuerte de
Monterrey.
—
40 —
que en las alas sutiles de la fama
s ublimaron un dia a las estrellas
el pindárico vuelo y las audacias.
Hoy que mi pecho el entusiasmo inflama
y he de cantar tan encumbrado asunto;
hoy que tomo el carcaj, premio de Apolo,
y entes° el arco que dormido estaba,
y hacia ese blanco tan excelso apunto
con una y otra flecha de mi aljaba,
¡ojalá que mis flechas
venzan la altura de pasadas fechas!
Mas como el ave que al surcar el cielo
por mil y mil senderos
puede extender la gala de sus plumas;
como tiene ante sí mil derroteros
la nave que cabalga a todo vuelo
sobre el dorso del mar, blanco de espumas;
tal me acontece al pretender mis cantos
remontarse a las cumbres eternales
donde fulgen con vivos resplandores
tus mártires, tus sabios y tus santos,
tus misioneros y tus redentores,
y otros héroes que un día
perfumaron el huerto de María.
¡Orden nacida en años inmortales
que puedes cual ninguna
gloriarte de mostrar en tus blasones
la regia procedencia de tu cuna
y la cruz de las gestas medievales
que sobre el pecho de tus hijos pones!
Vedlos partir con rumbo a Baleares
mezclados entre nobles caballeros
cruzando el mar en altas carabelas;
ved sus mantos de frailes militares
entre un bosque de lanzas y rodelas
— 41 —
bendiciendo las celdas del convento,
y atrás las mieles de su va z oyeron
cantar eii nuestros coro» los niaitines
y ocupar de Nolasco el misma asiento.
Hasta las islas por el mar sembradas
' donde la aurora sus palacios tiene;
hasta América, hermosa hija de España,
hasta el Brasil de selvas nunca holladas
y las Antillas que el Caribe baña
lleva, oh Sol, mi saludo
rojo de amor cual mi sangrante escudo.
mientras suenan clarines
y relincha el corcel blandiendo crines.
et)
¡Salve a vosotras, barras catalanas!
¡Salve, a tí, blanca cruz que las coronas;
que fuAteis otro tiempo espanto al moro
flotando en nuestras recias barbacana§
o mar adentro en nuestras blancas lonas!
j Salve, noble blasón del mercedario,
mancha de sangre, de las almas precio;
•I'llama que brillas sobre blanco cirio;
• luz de paz en las cuevas del corsario
encendida en hogueras de martirio!
¡Salve a ti, viejo escudo,
cantor de nuestras glorias, aunque mudo!
¡Madre de Dios! Recibe estos cantares
como nueva corona
con que ceñir tus sienes soberanas!
Y Tú que descendiste a Barcelona
¡Salve libreas de inocentes lanas,
para fundar tus frailes militares
y vaciar las mazmorras africanas,
¡haz que tu Grey que, cual cansada tierra,
tuvo tal vez un tiempo de reposo,
y hoy ofrece argumento a nues... ds cantos,
lance nuevos cruzados a la guerra,
sea madre de sabios y de santos
y salve redentora
la humanidadque entre cadenas llora!
Yo no soy escultor para labrarte
bellos arcos triunfales
que muestren, al rodar generaciones,
tus glorias esculpidas por el arte,
cual Roma levantó a los generales
que a sus plantas rindieron cien naciones.
No manejo el pincel ni la paleta
cual Zurbarán que a tantos hijos tuyos
arrancó de las sombras tantas veces;
mas yo que siento alientos de poeta
probé a cantarte, no como mereces,
volcando el alma toda
en la síntesis breve de una oda (1).
que viera el mar latino
flotando a fuer de velas en sus olas!
Sóis corporales de nevado lino
que la sangre tiñó de rojas granas;
sóis trigales pintados de amapolas;
y nos habláis de gestas legendarias,
de nuevas rutas para vuestro celo,
de otras playas y mundos ignorados,
y de las aulas universitarias
y de las farsas sobre los tablados
y de aquel siglo de oro
que de Tirso escuchó el verso sonoro.
¡Rey de los astros que en un solo día
tantos pueblos y climas
alumbras con tus rayos soberanos!
Sé portador de mis aladas rimas
a las mansiones donde la ale grta
llena hoy el corazón de mis hermanos.
Deja raudo estas playas y campiñas,
deja estas rías de olas espumosas
(holandas de tu lecho en los ocasos)
los frescos prados y torcidas viñas
y lleva mi canción con prestos pasos:
a las tierras aquellas
que de María guardan aún las huellas;
le, escoltada por los serafines,
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muchas noches la vieron
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FR. J. SANTIAGO CRESPO
(1) Leida en una de las veladas con que la Reverenda Comunidad de San Juan de Poyo celebró el
VII Centenario de la Confirmación de la Orden de la
Merced.
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La publicación en el número pasado los cristianos. Estos mismos lienzos se llepor el P. Guillermo Vázquez de dos cua- varon a Valencia el ario 1738, como muy
dros ciertos y uno dudoso de este pintor, oportunos por sus asuntos para adornar
brinda ocasión para transcribir lo que de la fachada del convento de la Merced
él dice Ceán Bermúdez en su Dicciona- cuando esta ciudad celebró la cuarta cenrio, 1800.
turia de su conquista, como refiere don
- Leonardo (Fr. Agustín), pintor. Don Josef Vicente Ortí en la relación que puAntonio Palomino le hace hijo del con- blicó de estas fiestas.
Vento de la Merced calzada de Madrid; No hay duda que el P. Leonardo
estuvo
mas el erudito D. Marcos de Orel!ana en Madrid, adonde hubo de llamarle el
afirma haber nacido en el reino de Valen- R. P. Fr. Gaspar Prieto, General de su
eia, y que tomó el hábito en Xativa o religión, para adornar el convento de esta
San Felipe.w7 aunque no da pruebas po- Corte, en que tanto se esmeró este Prelasitivas, por haberse quemado el archivo do con la construcción del retablo mayor
del convento de aquella ciudad a princi- y colaterales, que ya no existen, y con la
pios del siglo XVIII, expone razones ve- del claustro principal y sus pinturas,
rosímiles que obligan a creer que fuese todo en el tiempo de su generalato, desde
hijo de aquella provincia, principalmente 1622 hasta el 29, pues que Fr. Agustín
cuando no consta en los libros de Madrid, pintó los dos cuadros que están en la
ni en los de Toledo, ni Guadalaxara que escalera grande, firmados el 24 y 25. Ni
lo sea de Castilla; y así se halla conven- tampoco debe haber duda de haber estatual en el convento de Nuestra Señora del do también en Sevilla, pues que yo hallé
Puig, dos leguas y media de Valencia ,en aquella ciudad un cuadro de su mano
El P. Fr. Francisco Martínez dice en su que representaba a Jesucristo con la Sahistoria de esta imagen hablando de la maritana sentado junto al pozo con esta
capilla mayor «y un sagrario pequeño, firma: Frater Augustinus Leonardo hisque por el tiempo fué muy hermoso, pues panus inventor faciebat Hispali die 4
se adornó, todo de finísima pintura por junii anno Drii 1644.
uno de los primorosos pinceles, que vie- También afirma Palomino que falleció
ron este reino y el de Aragón, que fué el en Madrid el ario 1640, y no constando la
P. Fr. Agustín Leonardo, de mi sagrada partida de su entierro de los libros de este
religión, que florecía en el siglo XVI». Se convento, ni diciéndolo D. Lázaro Díaz
conservan en la sacristía de este conven- del Valle en su manuscrito, es más proto cuatro lienzos grandes de su mano, bable que se haya restituido a su provinque representan el , hallazgo de Nuestra cia de Valencia a acabar sus días.
Señora del Puig, el cerco de Valencia por Dibujaba con corrección, entendía la
Don Jaime, la entrega de esta ciudad y perspectiva, la composición y otras parl a batalla que hubo en las cercanías del - tes del arte; pero pintaba con sobrada
Puig contra los moros, en la que figura la dureza en las tintas, bien que eran muy
a parición de San Jorge, defendiendo a estimados sus retratos.
— 43
1 Habiendo pintado el del cronista don
Gabriel Bocángel, le compuso este soneto:
Habla, bulto animado. No esquivo
Silencio a su moderno padre ofenda;
Mas deja que hable yo, porque se entienda
Cuál el pintado es o cuál el vivo.
Tú no sientes, ni yo, puesto que vivo
De dar a mi dolor la infausta rienda;
Tú callas, y yo también, aunque me encienda
Un ardor en que muero y me concibo.
Nada de tu bulto de mi bulto ignora:
Firme semblante ofreces, y no acaso,
Porque retratas mi contraria suerte.
¡Oh arbitrio del amor! Forma ahora
Otro yo, que padezca lo que paso,
Por negarme el alivio de la muerte.
Los citados cuatro lienzos en la sacristía.
Madrid.— Merced calzada. Los dos de
la escalera principal que representan una
aparición de la Virgen a San Ramón, pastor de ganado, y la decisión del pleito
que hubo entre los religiosos y caballeros
de la Orden de la Merced.
Toledo.—Convento de Mercedarios calzados. El cuadro grande del testero en el
Las obras más conocidas de su mano
son las siguientes:
Nuestra Señora del Puig, convento de
Mercedarios del reino de Valencia.
refectorio, que representa el milagro de
pan y peces.
Córdoba.—Mercedarios calzados. Dos
lienzos en la escalera.
(Fuentes). Díaz del Valle. —Jusep Martín.—Arch. del convento del Puig.—Fray
Franc. Martín.—D. Josef Vicent. Ort.—
Palom.---Ponz.—Orellan.
Los cuentos para niños
La curiosidad infantil es el gran factor
Psicológico que, hábilmente aprovechado,
mejores y rápidos 'éxitos proporciona al
pedagogo. Por eso los padres son los mejores maestros de sus hijos, porque son
los primeros y más constantes observadores de esos porqués de los niños, que, a
veces, ponen en no pequeños apiiietos a
los más expertos Varones. He observado
que en tales casos las mejores contestaciones salen de labios de la madre, no porque sean las más sabias, sino porque son
Jas más oportunas. De ahí el que importe
tanto que esa natural y primera 'maestra
'del hombre sepa muchas cosas que enseriar a sus hijos.
¿Quiere esto decir que las madres debieran saber mucha Filosofía, muchas
,Matemáticas, ser muy literatas? ,Aparte
aquello de que el saber no ocupa lugar,
bien se nos alcanza que la ciencia maternal no se cursa en las universidades. Su
.doctorado no se cOnsigne en Salamanca
precisamente.
Dios Nuestro Señor 'que, 'al . conceder la
fecundidad al seno materno,:celóle el secreto de la vida que en él se agita, dotó al
eOrazón de su colaboradora en la vida de
las almas de la intuición suficiente para
entender y comprender los primeros bal31hiceos del niño, y para satisfacer esa
ansia de saber que se manifiesta como
carácter indeleble de su naturaleza en los
destellos de sus primeras miradas.
Sin embargo, no hay duda de que los
padres deben estudiar y aprender, para
desempeñar con lucimiento y eficacia su
Cátedra.
Claustro del convento de Verín: lienzo del mediodía, adosado a la iglesia, cuatro de sus cinco
arcadas. Los ventanales que cierran los vanos del claustro alto, de hierro forjado y de mucho gusto,
se estrenaron el 17 de enero último.
- 44 -
¿Dónde, cómo, en qué escuela? Principalmente en la de la naturaleza misma.
Sabiendo que los seres racionales deben
vivir de algo más que del instinto. Este
facilita a los irracionales todo lo que precisan para subvenir a sus necesidades,
r educidas a un orden puramente fisiológico; pero los que tenemos alma racional
necesitamos vivir algo más que una vida
Meramente instintiva. Por eso precisa-
Leg
mos perfeccionar la naturaleza con nuestra propia actividad discursiva. 'Sobre
todo no debemos olvidar otra cualidad
todavía superior que nos eleva más 'y más
sobre la vida sensorial: la vida de la
Gracia.
Lejos nos llevaría el desarróllo de este
interesantísimo tema, y no fue nuestro
intento escribir 'ahora - un tratado sobre
los deberes ' integräles de los padres para
con sus hijos. Aun creo que me COrri: un
„poco con lo dicho, pues es demasiado prólogo para lo que ahora viene.
Es el caso que muchas veces tuve ocasión de observar cómo una buena y cariñosa mamá entretenía a sus niños con
' cuentos y fantasías, no ya para que ellos
aprendiesen alguna cosa, sino principalpalmente .para lograr eso: entretenerlos.
IY qué bien lo hacía la muy discreta señora! Que el niño no qüería dormir, cuento del «Servidor» o de «Perico portugués».
t:bie no galería comer, cuento de ' « Caperusita roja». :Y así, un cuento -.para cada
..circunstancia. Sabía aquella mamá, más
,cuentos.., que los libros de cuentos.
Toda la fauna y la flöra conocida aparecían. como protagonistas principales en
'estas verídicas narraciones que los niños
aprendían. con una. fidelidad tal, que era
expuesto alterar cualquier detalle en la
repris. Esopo, Fedro, Lafontain, Iriarte
pueden estar satisfechos... del éxito de su
género literario.
Según esto podría juzgarse que la fábula y el apólogo constituyen el alimento
más apropiado a las facultades cognoscitivas del niño. Y, sin embargo, estoymuy lejos de admitir que sean el medio
educativo más conveniente para nutrir
esa insaciable curiosidad de la infancia,
que lo mismo se manifiesta ante los secretos impenetrables de los matices de una
flor, que viendo a una muñeca abrir y
cerrar los ojos. No; el apólogo y la fábula
están bien para los que son capaces de
darse cuenta de la clase de verdad que
encierra la metáfora. Todavía recuerdo el
- 45 -
entusiasmo con que un condiscípulo mío
de Bachillerato, enamorado él, y con
razón, de las grandezas de su patria chica,
recababa para ella la gloria de haber nacido en su suelo el inmortal Don Quijote,
cuya real existencia ni por las mientes se
le pasaba poner en duda, a los quince
años.
Ciertamente que debemos explotar la
curiosidad del niño por las narraciones
pero ¿por qué no sustituir la fábula y el
cuento inverosímil, totalmente fantástico,
por las historietas verdaderas y las leyendas tradicionales basadas en hechos históricos?
La Historia Sagrada, la Historia patria, los viajes, la Geografía, ¡cuántos recursos nos ofrecen para aprovechar deleitando, que diría nuestro Tirso!
He comprobado que el niño muéstrase
singularmente encantado con estas narraciones en forma de cuento, y retiene maravillosamente en su infancia primera
estas cosas que jamás tendrá que dar al
olvido como vacías de toda realidad.
Las mismas oraciones que nuestras madres nos enseriaron de niños, pueden hacérsele aprender a los pequeñuelos entre
las delicias de un desarrollo escénico que
cautive su viva fantasía. No puedo olvidar el interés con que unos niños me pedían constantemente les repitiese el cuen
to del joven Tobías. Cuando intencionadamente fingía no saber a qué cuento se
referían, me decía Ramoncito, niño de
tres arios, que era aquel del perrito que
acompañaba a Tobías y al Arcángel, y
que fué el primero que llegó a la casa
cuando los papás llenos de tristeza aguardaban la vuelta del hijo, apesadumbrados por haberle enviado tan lejos. O tam-
bién que era aquel del joven que fué a
lavarse los pies al río y luego vino un pez
muy grande a querer comérselo. Y José
Miguel, niño de cinco arios, solicitaba el
cuento de la niña Inés, a quien mató el
tirano, y a la que se le caían las cadenas
de las manitas porque no podían ajustárselas convenientemente.
¿Qué narración más encantadora y sublime, más verdadera y divina que la del
Arcángel que vino a saludar a la jovencita de Nazareth y le dijo unos muy lindos
requiebros? De esta forma los niños
aprenden el Ave-Mar ía, y hasta son capaces de darse cuenta perfecta del sentido
de las palabras con que San Gabriel saludó a la Virgen
Don Pepe es un niño de cuatro años.
Se llama José Antonio; pero su padre,
desde el preciso momento en que se le
entró por las puertas este delicioso huésped, le llamó con toda confianza Don Pepe,
y así le siguen llamando sus íntimos.
Pues a Don Pepe le estaba un día enseriando su cristiana y cariñosa mamá el
Ave-María. El niño repetía con un interés y atención que estamos muy lejos
de considerar frecuente en los tales aquellas palabras: Dios te salve, María, llena
eres de gracia... Al llegar aquí se para
Don Pepe y dice con total convencimiento de la frase: ¡Vaya piropo que le echas
a la Virgen!
,Véis cómo los niños se fijan? Pues tengámoslo en cuenta para lo bueno, y...
también para lo malo. ¡Cuánta imprudencia, por no decir otra cosa, con lo que, sin
respeto a la conciencia de los niños, se
dice y hace en su presencia, juzgando
que no entienden o no se fijan!
FR. L. B.
— 46 —
De la economía naciona
Hace tinos meses comenzó el ministro
de Hacienda, señor Marraco, a desarrollar una política dineraria (hasta entonces no tuvo ninguna), para abaratar el
dinero y favorecer de ese modo la reanudación de la actividad industrial y
comercial, que ha de dar trabajo y pan a
los parados, que pasan de seiscientos
mil, según las estadísticas oficiales.
La cosa es de la mayor trascendencia
y esperamos que ha de producir buenos
resultados, aunque tengan que sufrir
algo los capitalistas.
Porque es evidente que éstos han de
ver reducidos sus intereses. Pasaron las
vacas gordas y los grandes beneficios
obtenidos a poca costa. En años anteriores, el capital podía cobrar un 6 por
100, y a veces más, porque las ganancias obtenidas en cualquier empresa
llegaban al 12 y al 15 por 100, de modo
que el empresario y los obreros podían
ser bien pagados. Eso se acabó, quizá
para siempre, y de ahí que la cotización
de casi todas las empresas haya bajado
enormemente.
Sólo se han mantenido bien en España los valores del Estado, pues aun
siendo modesto su rendimiento, era el
mejor y más seguro. El señor Marraco
se proponía aumentar el descuento de
esos valores, que es hoy del 20 por 100,
al 30 o por lo menos al 25, sometiendo a
él aun aquellos títulos que están exentos.
La baja que tal noticia causó en su cotización,, hizo desistir al ministro de su
Proyecto, tratando de llegar al mismo
resultado por la conversión de las deudas actuales en otras de menor interés.
Ese es el camino que han seguido las
demás naciones, y aunque un poco más
largo, será el más seguro. Desde luego
el papel de 5 por 100 puede ser canjeado
por otro más barato, pues el dinero
abunda y se contenta con menos.
El ministro comenzó por rebajar el
descuento de letras en el Banco de España desde el 6 al 5,50 por 100. No es
mucho, pero por algo se empieza, y no
puede hacerse todo de una vez. El Banco
ha rebajado también un medio por ciento
el interés que cobraba por los préstamos con garantía de valores industriales,
que antes era del 6 por 100.
Redújose también del 2 al 1,5 por 100
el interés que los Bancos abonaban por
los depósitos en cuenta corriente a la
vista, aunque pueden abonar el 3 por 100
cuando se dan por lo menos tres meses
de término para retirar el dinero. Con lo
primero se pretende que los capitalistas
busquen mayor actividad para sus ahorros, favoreciendo así el trabajo.
A pesar de ello, será preciso que el
Gobierno mismo tome la iniciativa de
emprender obras, pues la de los particulares está retraída. Lo que hizo el presidente de los Estados Unidos ha sido
criticado acerbamente en Europa, y sin
embargo son muchos los que se van
decidiendo a imitarlo. En Italia Mussolini se le había adelantado en muchas cosas y Alemania sigue el mismo camino.
El pueblo norteamericano, que es el
mejor enterado de los resultados obtenidos por su presidente, confirmó a éste
su confianza en las . últimas elecciones,
dándole una mayoría aplastante, y en
Alemania -sucede lo mismo con Hitler,
aunque uno y otro juegan con el crédito
- 47 -
.
de una manera loca. Alemania está realizando obras importantísimas con letras descontadas a noventa días por el
Banco Nacional, que es la manera más
graciosa de obtener empréstitos sin
límite.
Las letras descontadas por el Banco
de España en 1933 fueron en números
redondos t.142.000, por un valor total
de 7.622 millones de pesetas, pero como
la duración de las letras es de noventa
días, el dinero facilitado en esa forma es
relativamente poco, pues hay que dividir
el total por cuatro, para obtener la suma
anual.
Ahora que el Banco de España rebaja
el interés, habrán de seguir el mismo
camino los bancos particulares y cabe
esperar un aumento de actividad industrial.
Los católicos que se vean perjudicados con estas medidas (y serán muchos)
recuerden que el Padre Santo ha dicho
que es preciso repartir mejor los frutos
del trabajo entre el capitalista y los obreros. ¡Pues, ahí tienen una aplicación
concreta de ese principio!
Habrá de reducirse la renta del dinero,
como se ha reducido ya la de las casas,
de la tierra, fábricas, minas.., y, en
suma, de casi todo el capital, para que
todos podamos vivir, aunque sea modestamente. ¡Y quiera Dios que así se
logre!
Porque muchos temen que al abaratarse el dinero y circular en abundancia,
subirán las mercancías y se encarecerá
la vida. Es casi inevitable y en parte deseable, pues la baratura de los productos agrícolas hace imposible la agricultura. Los labradores (que son en España
más del 75 por 100) andan cubiertos de
andrajos, por no poder comprarse un
traje, ni pagar las contribuciones, pues
sus productos no se venden. Labradores
son también la mayoría de los parados,
pues la baratura de los productos hace
imposible la continuación de muchos
cultivos.
Los habitantes de las ciudades dirán
que ellos apenas advierten esa baratura
y tienen razón, pero deben pedir cuenta
de ello a sus Ayuntamientos y a los intermediarios. Los primeros gravan el
comercio con impuestos intolerables, y
los comerciantes hacen lo posible por
enriquecerse rápidamente, aunque no
siempre lo consigan. La baratura de
los precios en los campos, es indiscutible.
En Alemania se ha comprobado ya que
el encarecimiento de la vida, aunque
sensible, no es proporcional a la enorme suma de dinero puesta en circulación y que redujo a menos de la mitad a
los parados. Con todo, será preciso que
el Gobierno conserve en su mano el regulador del dinero circulante, para evitar una catástrofe, como sería la depreciación de la moneda, que es inseparable del alza de precios. Dinero abundante y precios altos son los platillos de la
balanza. Dinero abundante significa lo
mismo que moneda depreciada, y ya sabemos los horrores que esto produjo en
Alemania y otras naciones.
Se advierte en el mundo un aumento
de movimiento comercial e industrial,
pero muchos creen que todo eso es artificial y que cesará cuando los Gobiernos
se cansen de impulsarlo.
La perspectiva exterior de nuestro comercio continúa siendo tan triste, si no
más que en los meses anteriores. Sólo
se logra cambiar algunos de nuestros
productos sobrantes por otros que necesitamos, pero en cantidades pequeñas y
venciendo mil dificultades. De Valencia
se enviaron a la Argentina 40.000 toneladas de arroz a cambio de maíz, aliviando así a los agricultores levantinos
que no podrían en muchos arios espe-
— 48 —
rar un precio razonable para el arroz.
D esgraciadamente no se puede hacer
lo mismo en favor de los naranjeros y
fa bricantes de conservas agrícolas o de
Pescado, que tienen abarrotados sus
al macenes, sin poder adquirir los nuevos
Productos que en abundancia, y a precios de ruina, llegan a sus puertas. El
e spectáculo es descorazonante. La exp ortación se hace casi imposible, pues
nuestros mejores clientes extranjeros
están en la miseria y se ven asediados
de ofrecimientos de todas partes.
Lloyd George ha preconizado estos
días en Inglaterra el empleo de los métodos yanquis para avivar el movimiento industrial, pero es un poco difícil que
los sesudos ingleses se decidan a lanzarse por ese camino. A nosotros nos
ap rovecharía, por el momento, que lo
hiciesen. Nuestro comercio de exportación bajó considerablemente en el año
último, y es de temer que continúe el
descenso.
Los destrozos ocasionados en Asturias por la revolución repercutirán sobre
la economía nacional como baja en las
c ontribuciones y aumento de gastos,
Pues hay que reconstruir los edificios
Públicos incendiados y prestar auxilio a
los particulares, aunque el Estado no
acostumbre a hacerlo (testigos los conv entos quemados). Se han votado ya
Para ello créditos por valor de unos cien
Millones y se necesitarán más.
Una de las muchas cosas buenas que
se han seguido de la victoria obtenida
Por el Gobierno contra los revoltosos,
es la sumisión del mercado libre de Barcelona a las normas dictadas para las
b olsas nacionales. El tal mercado actuaba anárquicamente en daño de la economía española, no respetando los topes y
demás medidas comunes.
GUILLAUME
—
Estadistica, contrastada olicialmente, de 18 revolucien de Octubre
Pasado
MUERTOS
Paisanos Guardia civil..
Seguridad Vigilancia Asalto Carabineros Ejército
•' ' •
1.051
100
17
2
51
16
98
'
TOTAL 1.335
HERIDOS
Paisanos Ejército y fuerza pública
2.051
900
.
2.5 1
TOTAL ..... INCENDIOS, VOLADURAS Y DETERIOROS
Edificios públicos Iglesias Fábricas. Puentes Carreteras Ferrocarriles., Edificios particulares... 63
58
26
58
31
66
730
ARMAS RECOGIDAS
Largas Pistolas Fusiles ametralladoras Pistolas ametralladoras Otras ametralladoras Cañones 89.354
33.211
149
98
27
41
MUNICIONES RECOGIDAS
Fusil y escopeta ...
Pistola y revólver Cañón 97.322
255.375
1.777
EXPLOSIVOS
Bombas .
Petardos ............
.
•
•
31.345
3.507
DINAMITA Y OTRAS SUBSTANCIAS
Cartuchos
Kilos ...............
50.585
10.824,70
ROBOS
Del Banco de España, 14 millones de pesetas.
Otros robos y saqueos, 26 millones.
Total: 40 millones.
49 —
•n••nnnn•n•n1111.111111»......
NOTAS
VIDA CATÓLICA
La cruz de la tía Liboria
0
1,==.5 c=i cmrrä El Papa recibió en audiencia al niño tantes ante el Santísimo y el altar de la
vencedor en el certamen diocesano, el Confesión.
El 18 de enero de 1535 Francisco Pizaemperador de la Doctrina Cristiana», ro- rro,
empezó la conquista del Perú con
deado de su corte, otros pequeños vence- tres que
naves,
183 hombres y 37 caballos,
dores subalternos, de estudiantes univer- fundó la ciudad
de Lima, poniendo con
sitarios y de bachillerato. Comentó bre- sus propias manos
primera piedra de
vemente el fin para que fuimos criados y la iglesia de NuestralaSeñora
de la Asunexcitó a todos al estudio del Catecismo, ción, elevada en 1543 por Paulo
III a Ca«en el que siempre queda mucho qué ha- tedral y a la dignidad de Basílica por
cer y mucho qué estudiar y mucho en Benedicto XI en 1621. Concurrieron a las
qué pensar».
centenarias representaciones de
A manos de los salvajes, murió en la fiestas
todo
el
y las especialísimas de la
montaña de Bismarch el misionero Padre Madre mundo
Patria, España, y de las demás
Morschlenser, a los treinta años de edad Repúblicas hermanas, de América. Los
y dos de evangelización, en la Nueva principales actos religiosos fueron la coGuinea Oriental. Pertenecía a la Con- locación de la primera piedra de la Basígregación de los Padres del Verbo Di- lica de Santa Rosa de Lima, el solemne
vino.
Deum en la Catedral, la celebración
Con fecha 10 de enero el Santo Padre Te
de un Congreso Eucarístico Nacional, la
dirigió al Obispo de Tarbes y Lourdes un
breve aprobando la iniciativa propuesta colocación de las reliquias del Beato Fray
por el Sr. Obispo y sugerida por el re- Martín de Porras en un relicario de plata
bronce, regalo del Ayuntamiento, y un
cientemente fallecido Cardenal Bourne y y
el Cardenal Verdier de cerrar las fiestas homenaje
a los Santos
limeños.
Los Mercedarios
tenemos
títulos espejubilares
del
Año
Santo
de
nuestra
Redención en la «blanca ciudad de María», ciales para celebrar este centenario. «El
Lourdes, con un solemnísimo triduo euca- 27 de diciembre del año 1530 en la iglerístico, en que por sus tres días y noches, sia que los mercedarios
tenían
enlos
el
Pizarro
de Dios hizo bendecir
sin interrupción, se celebren los Sacrifi- Nombre
estandartes reales para la conquista del
cios Eucarísticos. «En que forma mejor Perú» (1). El P. Sebastián de Trujillo,
y más digna—comenta el Papa—se pue- célebre teólogo, fué el confesor de Pizaden cerrar y cómo coronar estas fiestas rro, a quien siempre inculcó el temor de
seculares?» Este triduo se celebrará en Dios, la fidelidad al Emperador, la propalos mismos días en todo el mundo cató- gación de las Ordenes religiosas para
lico.
El 7 de enero, al medio día, recibió el evangelizar
el país
(2). El P. entre
Bobadilla
su consejero
y mediador
Piza Santo Padre al ministro francés de Nego- fué
rro
y
Almagro.
Los
Padres
Mercedarios
cios Extranjeros Pedro Laval. La visita , fueron los primeros que levantaron confué más que de cortesía. Grandes intere- vento en el Perú y ofrecieron a Dios las
ses de la Iglesia y de Francia hay en las
Misiones que este país sostiene. Además primicias de aquel dilatado país. Cuenta
todavía en su gran mayoría es católica la también con varones santos dignos de los
nación Primogénita de la Iglesia. El mi- altares, entre los cuales está el P. Pedro
Urraca y Fr. Gonzalo de Amarante.
nistro francés obsequió al Papa con tres i
X.
preciosos volúmenes del siglo XVII: Le '
sacre de Luis XV (?), Les croniques de (I) Los Primeros A péstoles de América... 1934, del
France y Les delices de Paris. Bajó a la
Policarpo Gazu l la, pág. 16.
Basílica de San Pedro, tomó devotamente P. (2)
Chronica Ordinis, del P. Vargas, torno I, páagua bendita y se arrodilló por unos ins- gina 402.
(CONCLLISION)
ración, que entierro juntamente con el
depósito, para que en su día pueda ser
V
entregado a sus herederos.
Firmado en... a 30 de mayo de 1789.
Este escuchó pacientemente la prolija El Conde de Casafeliz.»
r elación de la viuda, después de darle la El señor cura limpió sus gafas con
Palabra, que ella le exigió, del más rigu- mano temblorosa.
roso secreto, y cuando hubo terminado: —Esto es muy diferente, tía Liboria-Va usted a tener algún disgustillo dijo—este papel encierra una infamia
con esto—dijo—, porque los dueños del muy grande... El desdichado que lo firte arrrenn.o en que está el escondite, recia- mó, quiso, sin duda, tranquilizar así su
mä
conciencia y no tuvo valor de restituir,
La tía Liboria se estremeció; ya le ¡desgraciado!
Pareció ver su tesoro arrebatado, ¡aquel —De modo que ese dinero es mío.
t esoro al que ya amaba como suyo! —No sólo el dinero.., sino el castillo
—¿Dice usted que había un pergamino y tierras de Casafeliz.
en la olla?—preguntó el buen cura pen-
La tía Liboria tuvo un deslumbras ativo—A ver... enséñemelo, tal vez diga miento.
a quién pertenece... —De modo que con ese papel...
—Pero si yo lo he encontrado, señor
El señor cura suspiró.
C ura; me pertenece a mí. --Con este papel puede usted arrojar
—Enséñeme el escrito, del castillo a la condesita Caridad, ¡po-Bueno, pero ya sabe usted que me bre niña, que acaba de perder a su ma(lió su palabra de no decir nada a nadie... dre!
— Bueno, bueno...
--Sí, pero por su abuelo, mis padres
La tía Liboria, con alguna repugnan- y yo hemos vivido en
la miseria...
Cid, sacó el pergamino de su seno y lo —Es verdad; pero me atrevo a aconalargó al sacerdote. sejarla que no acuda a los tribunales
Este lo desenvolvió y leyó lentamente: más que en último caso. ¿Quiere usted
Yo, Juan Manuel Feliciano Pérez de que yo la hable?
l as Casas y Torres Fuertes, Conde de —¿Puede usted ir conmigo? — dijo
C asafeliz, declaro haber recibido del tío Liboria
después de vacilar.
Juan Liborio López, a su regreso de Fili-
Y como no quería perder tiempo, se
Pinas, la cantidad de 1.204.375 reales,
dirigió con el señor cura al castillo de
C omo precio de mi castillo y tierra de Casafeliz,
Casafeliz, y 200.000 reales en depósito, La tia Liboria iba por
el camino echanPara entregárselo el día que me lo recia- do sus cuentas y preparando su actitud;
tnen, y dicho tío Juan Liborio
murió de contaba con una gran resistencia de
una apoplejía en la misma noche de parte de la condesita y estaba dispuesta
h acer este contrato, yo firmo esta declaa no transigir.
— 51 —
.4n11111111fflir
—Si se pone a malas, peor para ella—
—A mi abuelo—dijo vivamente la tía
decía—; la llevaré ante los tribunales.
Liboria.
El señor cura la oía en silencio y
bajaba tristemente la cabeza.
Cuando la tía Liboria se encontró
ante la condesita Caridad, sintió que la
lengua se le pegaba al paladar y un
nudo la oprimía la garganta.
Aquella jovencita enlutada, con los
ojos enrojecidos por el llanto y el ademán
dulce y resignado, le daba casi miedo.
Y algo parecido debía ocurrirle al
señor cura, pues su voz temblaba al
empezar su discurso.
Pero a las primeras palabras de éste,
la condesita elevó los ojos, un rubor
sonrosado invadió sus mejillas y juntando sus manos:
—Dice usted, señor cura—exclamó
con voz casi alegre—que han encontrado una declaración de mi tatarabuelo en
que dice...
—Que este castillo y sus tierras me
pertenecen—dijo la tia Liboria como
quien rompe un dique—. Mi abuelo 1 o
pagó en buenas monedas a su vuelta de
Filipinas; así lo oía yo siempre de cir a
mi padre, que esté en gloria; mi padre
era muy bruto y debió dejars e robar,
pues él trajo cuartos de las In dias y no
se le ha encontrado ni un oc havo.
Y alargaba el pergamin o a la joven,
que apenas fijó en él su y ista.
—¡Bendito sea Dio !—dijo elevando
sus ojos al cielo con profundo reconocimiento—. Este pen samiento fué la cruz
de mi pobre madr e y ella la mató; siendo
muy pequeña s e halló ante el lecho de
muerte de su abuelo, y cuántas veces me
decía: «Est e castillo no es nuestro...
estamos c ometiendo un robo... mi abuelo murió sin poder decir el nombre del
dueño. .. pero sus últimas palabras fueron:, «Yo he recibido el dinero, yo vendí
las tierras, la codicia me cegó, pero esto
—Mi oración de todos los días era
pedir al Señor me hiciera encontrar al
dueño legítimo—siguió la joven—. ¡Bendito sea!, pues ha oído mis plegarias;
mi pobre madre descansará ya en paz.
Y volviéndose a la tía Lloria:
—Estoy dispuesta a darle a usted posesión del castillo—dijo—; el señor cura
sabrá los pasos que hay que dar; en sus
manos me pongo..
Pocos días después, la tía Liboria,
convertida en la castellana de Casafeliz,
abandonaba su choza y, lo que es peor,
abandonaba a su pobre suegra, pues la
pobre y vieja se obstinó en no ir al castillo aun cuando la llevaran a rastras.
—H comido muchos años el pan de
los señores condes—decía—para vivir
en el castillo, después de arrojar de él a
a señorita Caridad.
Ruegos, amenazas, todo fué en vano.
Liboria, furiosa, partió de la choza, dejando a la pobre vieja llorando en compañía del señor cura, cuyos ojos estaban también enrojecidos.
Y «doña» Liboria se instaló en el castillo, libre de su cruz de pobreza, libre de
los ayes continuos de su suegra, rodeada
de criados, de muebles magníficos, etc.
Liboria se creyó feliz.
Pero bien pronto empezó a pesarle la
cruz de oro que voluntariamente escogiera.
Ella, que dormía como un tronco en
su camastro de tablas, mal cubiertas por
un jergón de paja, se agitaba insomne
en las mullidas plumas de su lecho de
bronce.
Ella, que con tan buen apetito comía
las sopas y patatas, guisadas por ella
misma, apenas gustaba los suculentos
manjares, demasiado pesados y excitantes para su estómago, hecho a la sobriedad.
ertenece a,..»
_
Ella, que departía de tan buena gana
con sus vecinos, se veía sola y aislada
en el castillo; los señores del contorno
la miraban con ' despreciativa ironía, sus
antiguos conocidos la volvían las espaldas: eran antiguos servidores afectos a
l a difunta condesa, que amaban a la
s eñorita Caridad, tan buena como su
madre, y murmuraban en voz baja de la
C onducta de «doña» Liboria.
Los criados, en su mayoría, se habían
d espedido por no servir a la que arroj ara de aquel modo de su casa a la
Pobre huérfana.
El antiguo administrador, hombre probo y recto, presentó sus cuentas el mis
rno día de la instalación de la nueva castellana, y los arrendatarios, campando
Por sus respetos, hacían mangas y cap irotes de la hacienda,
Liboria comprendió que se hacía odiosa a todos, vió que todos la robaban, se
sintió incapaz de evitarlo y se halló más
desgraciada que en su pobre choza.
Y lo que más le atormentaba eran dos
r ecuerdos: el de su suegra, sola y enferma, a merced de la caridad de los vecinos, y el de la condesita Caridad, huérfana y sola, arrojada de la casa que la
viera nacer...
Esto llegó a hacerse un suplicio intol erable para la castellana de Casafeliz;
la cruz de oro pesaba horriblemente,
más que la tosca de hierro.
Un día no pudo reprimir doña Liboria
el deseo de ver su choza, de ver a su
suegra, de rogarle de nuevo se fuera
con ella al castillo. En la soledad que la
r odeaba, había llegado hasta echar de
Menos los lamentos de la pobre vieja.
Se envolvió en su capa de terciopelo,
se colocó su capota de plumas sobre la
Moña de bucles que había reemplazado
al moño de picaporte, y mandando enganchar, dió orden de ir hasta el bosque,
a cuya entrada se apeó.
Su corazón latía violentamente, sus
piernas temblaban cuando dijo al lacayo:
—Esperen aquí...
Mil temores asaltaban su ánimo. ¿Habría muerto su suegra? ¿Cómo estaría
la infeliz?
Cuando divisó la pequeña choza, dorada por un rayo de sol, tuvo que detenerse; la emoción la ahogaba.
Avanzó lentamente; los árboles le
ocultaban la entrada, pero una voz juvenil llegó hasta ella, haciéndola estremecer.
—¿Leo un poco, abuelita?—decía la
voz.
¿Habría allí auevos inquilinos? Luego
su suegra había muerto.
Pero se detuvo estupefacta al reconocer la voz cascada de la anciana, que
decía dulcemente:
—Sí, ángel de Dios; léeme un poquito
ese libro tan hermoso que habla del cielo.
El camino hacía un recodo y la entrada de la choza quedó a la vista de doña
Liboria, que se detuvo apoyándose en el
tronco de un árbol.
Sentadada en un sillón al sol estaba
su suegra; pero su suegra rejuvenecida, resplandeciente de limpieza, con sus
cabellos de plata bien alisados y el rostro inundado de una expresión de paz y
bienestar que nunca había visto en ella.
Y a sus pies, sentada en una piedra
hojeando un libro, en el que parecía buscar la continuación de su lectura, una
jovencita enlutada, de cabellos de oro y
aspecto dulce y resignado... en la que
reconoció a la condesita Caridad.
Doña Liboria no pudo contener un
grito que hizo levantar la cabeza a la
anciana y a la joven, alzándose esta última del suelo respetuosamente al ver una
señora desconocida.
- 53 -
Porque era imposible conocer en aquella señora delgada y pálida, vestida de
terciopelo y tocada con plumas, a la
gorda y colorada tía Liboria, con su
falda de bayeta, su pañuelo de ramajos
y su moño de picaporte.
—¿Quiere usted un asiento para descansar, señora?—preguntó la joven al
advertir la actitud de doña Liboria—.
¿Está usted mala?
—¡Gracias, gracias, señorita! — dijo
ésta con voz desfallecida—. Pero ¿cómo
viven ustedes aquí?
La joven no comprendió el sentido de
la palabra.
—Muy bien, señora—dijo sonriendo—;
yo tengo una renta muy pequeña, me
ayudo bordando para el convento próximo y no nos falta nada, ni a la abuelita
ni a mf. ¡Es Dios tan bueno!
—¿Su abuelita?—repitió Liboria como
quien sueña.
— Oh, set-toral—dijo la anciana juntando las manos—si usted viera el ángel
que Dios me ha mandado; ella me cuida
me asea, porque tiene que hacérm elo
todo, acostarme, levantarme...
—1Acostarla...! ¡Levantarla...! —repifió Liboria como un eco.
—Sí, señora; ¡y llevaba cinc o años sin
acostarme! Ahora duermo en mi cama y
estoy mejor de mis dolore s, pues hasta
doy mis paseítos con ayu da de un palo
y apoyada en el brazo e este ángel.
La tía Liboria lan zó un gemido y,
deshecha en lágrim as, cayó a los pies
de la joven solloz ando:
—IPerdón, se riorita Caridad...! ¡Perdón...!
La joven , estupefacta, dió un paso
atrás, y la anciana, levantando la cabeza, dijo c on asombro:
—¡Li borla!, pero ¿eres tú?...
Si, yo!—sollozó la pobre mujer—;
o, que veo lo mala que he sido; yo,
ue no puedo vivir sin remordimien-
tos, yo, que necesito que me perdonen.
Y tomando la mano de la condesita y
llenándola de besos y lágrimas:
— ¡Perdón, señorita Caridadl—repitió--. No me moveré de aquí sin su perdón, ¡perdón, madre...!
—Pero si yo no tenga nada que perdonarla—dijo la joven conmovida, retirando a duras penas su mano.
—Pues si me perdona... pruébemelo
volviendo al castillo, será usted allí la
dueña como antes, se hará lo que usted
ordene...
Y como la joven hiciera un movimiento negativo:
—De lo contrario, saldré yo de él—
añadió llorando la tía Liboria—. ¡Venga
usted, señorita Caridad; llevaremos a
mi madre!
—¿Verdad, madre, que con la señorita
sí s e vendrá usted?
La viejecita hizo una señal afirmativa,
y juntando sus trémulas manos:
— Hágalo por mil—suplicó.
Ante este ruego, la joven no dudó.
—Haré lo que quieran—dijo dulcemente—; ya que usted es tan buena, ¿a qué
quitarle el placer de hacer bien?
—1Yo buena!—dijo Liboria llorando a
mares—; lo que he sido es una infame
avariciosa.
Y cediendo a una costumbre añeja en
ella y olvidándose de su magnífico traje
y de su rango de gran señora, limpió
sus ojos y narices con el faldón de terciopelo de su abrigo.
VII
Aquel día la condesita Caridad volvió
al castillo de sus mayores, y doña Libo •
na instaló a su suegra en una alegre
habitación del piso bajo con salida al
jardín.
Y aquella noche no se agitó insomne
en su mullido lecho; apenas se dejó
- 54 -
caer en él, cuando el mismo resplandor
invadió su estancia y el ángel, que ya
una vez la visitara, la mostró la cruz de
hierro, sí, pero lisa y pulimentada, diciéndola:
—Aquí tienes la cruz que un día te
Pesaba tanto, vuélvela a tomar.
Liboria la tomó, hallándola ligera como una pluma.
—¡Pero esta no es la misma cruz!—
exclamó.
—Es la misma, pero al tornarla la condesita, con el fuego de la caridad, fundió
todas sus puntas y asperezas, y este
fuego, penetrando en su interior, la ha
Perforado, quitándola su peso.
Y cuenta la tradición que esta cruz
es la que se venera en la ermita, aunque muchos dicen que no es sino una
cruz mandada forjar por la tía Liboria,
en conmemoración de su maravilloso
sueño.
estudios, dando conclusión a la carrera sa,cerdotal en junio del ario 29. Cantó su primera Misa el 31 de diciembre del mismo ario en
la iglesia conventual de las MM. Mercedarias
de Santiago. En enero de 1930 fué nombrado
Coadjutor de Santa Maria de Rús (Carballo),
cargo que desempeñó con gran celo sacerdotal y muy a satisfacción de sus superiores.
En mayo del 34, sintiéndose gravemente enfermo, quiso retirarse a su casa de Lousame,
donde falleció, rodeado de su querida familia, el 2 de enero del corriente ario. Su muerte fué la de un verdadero santo, pues la recibió resignadisimo y conformado con la voluntad del Señor. La noticia de su falleci-
JULIA GARCIA HERREROS
T. M.
NECROLOGIA
El dia 20 de enero, a las dos de la tarde,
f alleció santamente, después de recibir los
Santos Sacramentos con edificante fervor, en
esta villa, el virtuoso caballero doctor don
Salp a' Aranzadi, médico titular de Zumárraga y presidente de la Asociación de médicos
t itulares de Guipúzcoa. La noticia de su
muerte causó verdadera sensación en Zumarraga y Villarreal, en los que desde hace
muchos años venia ejerciendo su profesión
Con mucho aplauso. De corazón nos unimos
al dolor de todos sus familiares y especialmente de su hermana la Rvda. M. Juana,
Superiora de la Clínica de Nuestra Señora de
Aránzazu, de nuestra Casa de San Sebastián.
Pedimos una oración por el eterno descanso
de su alma.
—D. José Martínez Ces (Presbítero). Nació
en Lousame el 28 de febrero de 1903, hijo
de padres humildes y cristianisimos. Ingresó,
disfrutando de una beca, en la Universidad
Pontificia de Compostela el 15 de septiembre
de 1918. Interrumpió sus estudios para cumplir con el servicio militar en los campos de
Africa (Drius) tres meses durante el periodo
de guerra. Terminado este deber reanudó sus
D. José Martínez Ces.
miento causó gran impresión en Lousame y
Rús, donde se le profesaba especial cariño
por su bellísimo carácter y santas virtudes.
La conducción al cementerio y funerales
fue plena demostración de lo mucho que le
querían sus paisanos y feligreses. Era ferviente devoto de la Santísima Virgen de la
Merced, interesándose grandemente por que
todos sus familiares fuesen Cofrades de la
Orden Mercedaria, socios de la Visita Domiciliaria y suscriptores de la Revista, a cuyas
Asociaciones pertenecía 61 también de manera particularisima.
Descanse en paz el Sacerdote virtuoso y
ejemplar. Que nuestra Santísima Madre, a
quien él amaba con todo su corazón, haya
acogido bajo su blanco manto al queridísimo
joven D. José, que desde el cielo seguirá pidiendo a Dios santa resignación para su atribulada familia y bendiciones para los devotos Cofrades Mercedarios de Lousame, que no
le olvidarán nunca mientras vivan en este
destierro del dolor.
- 55 -
UN COFRADE DE LA MERCED
AMENIDADES
No lo pintó Alfaro
Estaba este artista, al decir de Ceän
Bermúdez, más lleno de vanidad que de
pintura. A la vuelta de Madrid, de escuela tan buena como la de Velázquez, a su
patria Córdoba, logró se le adjudicase
la pintura del claustro de los franciscanos, asunto: la vida del Santo Fundador. Con sobrada presunción iba poniendo al pie de cada uno: Alfaro pinxit.
Resentido por haber sido pospuesto en
esta obra su maestro Antonio del Castillo, solicitó y obtuvo que le dejasen pintar uno de los cuadros. Al pie escribió:
Non pinxit Alfar° (no lo pintó Alfaro),
frase que fue muy celebrada en la ciudad
y quedó en proverbio.
Ya murió Castillo
Este Castillo, sin duda el mejor pintor
de Córdoba, se tenía también como el
mejor de los de toda Andalucía. Por lo
que se propuso pasar a Sevilla a lucir
sus habilidades. Pero paróle los pies de
su pretensión, que no era vana, la contemplación de los cuadros de Murillo en
el claustro chico de San Francisco, y del
todo le sacaron de sí los cuadros del
mismo autor en la Catedral, de San
Leandro, San Isidoro y San Antonio de
Padua, y prorrumpió en las palabras
dichas: Ya murió Castillo. ¡Murillo,
aquel discípulo servil de mi tío, puede
ser el autor de tanta gracia y hermosura
de colorido!
Y por lo visto, de la oración se le iba
la imaginación y la vista a la contemplación artística. Dábale prisa a que saliese
el sacristán que aquel día cerraba más
temprano que de costumbre. Pero Murillo no acababa de decidirse a dejar su
imagen. ¿Qué hace vuesa merced en esa
capilla?, le preguntó el sacristán ya aíra
do. Estoy esperando, contestó Murillo,
que estos santos varones acaben de bajar
al Señor de la Cruz.
Lección a los envidiosos y a los que,
sin serlo, sólo ponen la atención en
los defectos de las obras propias
y ajenas
La prudencia y el desinterés eran las
peculiares virtudes del gran pintor, escultor y arquitecto Bartolome Carducci.
Con la prudencia templaba la envidia de
sus discípulos y los animaba a mayores
progresos. Celebrando un día el cuadro
que otro pintor había hecho, le dijo uno
de sus discípulos: No ve vuesa merced
este pie tan mal dibujado y fuera de su
lugar. No lo había visto, respondió, porque estas manos y este pecho me lo encubrían con su excelencia y dificultad.
(Ceán Bermúdez).
Receta segura contra la hipocondría,
llamada también la décima
de la salud
Estoy esperando que estos santos
varones acaben de bajar al Señor de
la Cruz
Pues también Murillo, con ser tan grande artista, sabía pasmarse ante las obras
de los otros. Se cuenta que iba a tener
muchos ratos de oración a la parroquia
de Santa Cruz, ante el famoso Descendimiento, de Pedro Campaña.
— 56 —
De D. Francisco Gregorio
de Salas.
Vida honesta y arreglada,
Hacer muy pocos remedios,
Y poner todos los medios
De no alterarse por nada.
La comida moderada,
Ejercicio y diversión,
Nunca tener aprensión,
Salir al campo algún rato,
Poco encierro y mucho trato,
Y continua ocupación.
RADIOGPAMAS
¿Son de guardar las fiestas de los
Patronos de las Diócesis? Mi estado de
duda nace por un lado de que el Calendario de familia editado por una revista
Popularísima y, a lo que parece, bien
informada, entre las fiestas de guardar
Pone la de los Patronos de las Diócesis,
y un taco calendario, de mucha aceptación, en lo que va de año y en la que
deshojé, suele poner: Mañana fiesta de
guardar en tal parte por Patrono de la
Diócesis o de lugar, y por otro ledo
aquí en Madrid nos hemos pasado el 25
de enero, fiesta de San Alfonso, Patrono de la Diócesis, en que ni se notó
mayor concurrencia a Misa, ni se mentó
entre personas enteradas y diligentes
que hubiese obligación de oirla.
Por ley general están suprimidas como
fiestas de guardar todas las de los Patronos de lo que sean, naciones, diócesis o ciudades. Algunas naciones, diócesis y ciudades pidieron y obtuvieron de
la Santa Sede la conservación o reposición de las fiestas de sus Patronos como
de guardar. Tal sucede en España con
la fiesta de Santiago el Mayor; en Madrid, ciudad, con la de San Isidro. Pero
S i no consta lo contrario, las fiestas de
los Patronos, cualesquiera que sean, no
son de guardar.
Por este pueblo anda un mendigo,
malicioso o loco, que para sacar mendrugo, blasfema, maldice y dice gros erías. Más de cuatro personas, sólo
Por no oirle, le dan limosna. ¿Tengo
O bligación de dársela para evitar ese
escándalo?
Ninguna obligación tiene, porque los
d eberes radican en acciones u omisiones propias, y ninguna acción ni omisión suya es causa de esas blasfemias.
¿Cuáles son los títulos o tratamientos
que debemos dar a los que murieron en
fama de santidad?
Que yo sepa, no hay ningún tratamiento apropiado. Suele decirse: Fulano
es un santo, y algunos vün más allá y
quitan el un y a boca llena le llaman
santo. Como manera de expresar nuestro sentir, sin darle mayor alcance, es
tolerable. Pero en esto como en todo lo
que interviene nuestro parecer, es recomendable la moderación; tomemos por
modelo a la Santa Iglesia en el pensar,
en el hablar y en el proceder.
La Iglesia, pues, da el tratamiento de
Siervo de Dios a la persona muerta en
olor de santidad y en este tratamiento
persevera al hacer el proceso de vida,
virtudes y milagros y en los demás trámites canónicos hasta el de la declara.
ción de la heroicidad de virtudes, en que
le llama Venerable. Y Venerable es hasta la beatificación, permisión del culto
público con ciertas limitaciones. Desde
entonces se le llama Beato, hasta que
solemnemente canonizado, es y se le puede llamar verdaderamente Santo.
UNA SUPERIORA: ¿Dentro de las Constituciones qué norma debo seguir en la
cantidad y calidad de los alimentos?
En cuanto a la comida general de la
Comunidad procure que la cantidad sea
tal—si se sirve racionada como es de
ordinario—que ni unas pasen hambre, ni
a otras sobre demasiado, y que la calidad
sea de modo que ni las de buen apetito
se regalen, ni las de paladar delicado se
queden sin comer. En caso de duda propenda a cierta esplendidez sabiendo que
la cocina por la estrecha relación con la
salud, tiene mucha importancia en la
buena marcha de la vida de la observancia regular.
En trabajos extraordinarios y penosos
la ración debe aumentarse, porque una
es la ración de sostenimiento, y otra,
mayor, la de trabajo. Por lo cual ciertas
monjas de vida contemplativa apenas
comen, y no sé las pobres lo que podrän
— 57 —
contemplar mal alimentadas, pero las
de vida activa tienen que comer a veces
como los trabajadores del campo, pues
no son menos laboriosos sus ministerios.
En esto hemos retrocedido por este
afán loco de igualdad en que salen gananciosos los más sanos y los menos
activos, y por esta natural inercia y rutina de gobierno y por evitar trabajos a
los cocineros o cocineras—son dignos
de lástima—contrariamos aún en la letra
la norma sapientísima de San Agustín
en su Regla, que en esto es regla también
para los que no la profesan: <( Y distribuya el superior—dice—a cada uno de
vosotros el alimento y vestido, no igualmente a Iodos, porque no son iguales
las necesidades, sino a cada uno según
lo hubiere menester. Así, pues, lo leéis
en los Hechos de los Apóstoles que
médicos. Fueron nuestras Hermanas a visitarle y empezó una de ellas a hablarle, y le
dijo la mamá del niño:
«Ya le puede hablar, que no le contestará». La Hermana llevaba la reliquia de la
Beata Mariana, y le dijo al niño: «Mira, besa
esto». El niño abrió los ojos al punto; besó la
reliquia y empezó a hablar; desde entonces
comenzó a mejorar y hoy se encuentra perfectamente curado. Sus padres, D. Luis ASín
y D.' Margarita Mata, están agradecidisimos
y desean se publique en LA MERCED.
todo era común de todos y a cada uno
en particular se le asistía con lo que
necesitaba».
1.580,00
A mí nunca me cupo y espero que
jamás me cabrá en la cabeza que sea una
misma la comida para el religioso que
cava en el campo al aire libre y para el
que estudie, para el que trota mundos y
suda dando voces y agitándose en esos
púlpitos y para el que apenas ha comido
se sienta a la mesa de estudio, y se
sume en profundas meditaciones; porque
no se han de atemperar estas ocupaciones a la comida, sino al revés, la comida, en cuanto sea posible, se ha de regular en la cantidad y en la calidad a las
necesidades del que come.
LIJÄN
Colecta para la Canonización de la
Beata Mariana de Jesús
Pesetas.
Suma anterior (noviembre pasa.......
do) . . .....
Una señorita de Burgos (agosto
pasado) D. Manuel Devesa Canabal, de
.
Lestedo (Santiago).......
Madres Mercedarias de Marquina
..... . ..
(Vizcaya)
Las Hijas de Maria de la Merced,
de Don Juan de Alarcón, por
todo el ario 1935, a razón de 5
pesetas, cuota mensual indicada
por el M. R. P. Provincial La Comunidad de Madres Mercedarias, de Don Juan de Alarcón, por el mismo concepto Otro donativo de esta misma Comunidad 50,00
1,60
50,00
60,00
60,00
100,00
Colecta de la Buena Dicha:
111n111M11•11.
Las Hermanas Mercedarias de Mallén, nos
envían datos de una gracia obtenida por mediación de la Beata Mariana de Jesús.
Uno de los niños del colegio, llamado Rafael Asín, de tres arios de edad, se encontraba gravemente enfermo y desahuciado por los
— 58 —
TOTAL MADRID
Buena Dicha.— Fecha gloriosa fué para
todos los IVIercedarios la del 17 de enero, séptimo centenario de la Confirmación de nuestra Orden.
En nuestra iglesia lo celebramos con la
mayor solemnidad posible.
La Misa de Comunión, muy numerosa, la
celebró el M. R. P. Provincial.
La Solemne, el R. P. Comendador. A una
y otra asistieron los Terciarios y Cofrades
vistiendo el santo escapulario.
Por la tarde predicó, el R. P. Fernando
Diez; a continuación se organizó la procesión
por el interior del templo, cantándose luego
el «Te Deum» en acción de gracias.
Nuevos Terciarios. —Ese día recibieron
el escapulario de la V. O. T. los señores don
Jacinto de Saludes Rosell, D. Virgilio Garcia
Gallo y D . Maria Suárez. A todos nuestra
enhorabuena.
—Del 23 al 31, celebramos la novena a
Nuestro Santo Padre. Los tres últimos días
con toda solemnidad, predicando en ellos el
R. P. Director.
—Los días 1, 2 y 3 tuvo lugar el Triduo a
San Blas, predicando el R. P. Fernando Diez.
El dia 3 se repartieron a los fieles las tradic ionales rosquillas del Santo.
dedica al Sagrado Corazón, dándole gracias
por los beneficios recibidos durante el ario y
pidiéndole nuevas gracias para el ario que
empieza. Predicó las tres tardes el orador
Sr. D. Rafael Sanz de Diego.
—La Comunidad, en unión de algunos devotos, celebró solemnemente el Triduo al
Divino Niño que, con el titulo de la Parra, se
venera en esta iglesia, predicando las tres
tardes el R. P. Fernando Diez.
El 31, fiesta de nuestro Santo Padre, la celebramos fervorosamente. Comulgó el Colegio. A la tarde nos predicó el P. Director de
la revista, haciendo un bosquejo somero de
las etapas de la vida espiritual de S. Pedro
Nolasco: presentimiento de su misión redentora—se lo daba el corazón, compasivo y generoso—; símbolo el de la Oliva, y orden concreta de la fundación recibida de los mismos
labios de la Santísima Virgen, con lo que
quedó completa la personalidad de S. Pedro
Nolasco.
—El 18 celebró las Bodas de Oro Sacerdotales el Arcediano de la Santa Iglesia Catedral, M. I. Sr. D. José Rodríguez del Valle,
Capellán de la Comunidad. A las nueve de la
mañana se celebró Misa de Comunión, a la
que asistieron las alumnas del Colegio, y por
la tarde celebraron un homenaje en su obsequio en el salón de actos del colegio.
ALARCON
Una Hermana Tercera de este
Centro, 100 pesetas, y las demás
recogidas en la bandeja el día
de San Antón, fiesta centenario
de la fundación de la Orden ... Colecta en Alarcón el mismo dia
Favor de la Beata
Mariana de Jesús
NOTICIAS
175,55
7,25
2.084,40
También en esta iglesia se celebró solemnisimamente la fiesta centenaria de la Confi rmación pontificia de la Orden. Misa de
C omunión general, Misa cantada, Ejercicios
de la tarde, con asistencia de la Archicofradía de la Merced en corporación y con mantos, como en las grandes solemnidades. Asistió también el doble colegio de niñas. Predicó
el P. Director.
—Los días 2, 3 y 4 de enero, el Centro del
Apostolado de la Oración, establecido en esta
i glesia, celebró el Triduo que anualmente
Poco tenemos que contar. Monotonía santa
de esfuerzos diarios para una Casa de estudios.
—Con motivo del séptimo centenario de la
Confirmación Pontificia de la Merced, hemos
celebrado dos veladas, y en el verano proyectamos algo grande en nuestra vieja casona.
—Luego ha venido la novena a nuestro
Fundador, celebrada, como todos los arios,
con el cariño de hijos.
— 59 —
—De Jueves, se han fundado el Centro de
Meános, en las cercanías de Vimianzo, con
diez coros, que cuentan un celoso y optimista
Director, D. Severino Souto.
—No se el número de novenas predicadas
por el P. Gaite, es extraordinario, y que produce abundantisimo fruto en las almas. Las
últimas fueron en el Jobre, La Guardia
y Cée.
—Cada día que pasa es mas meritoria la
labor de nuestros jóvenes de la Acción Católica masculina. Tienen ya las secciones de
Piedad y de Apostolado. No pasa la semana
sin su correspondiente Circulo de estudios,
que suele ser la tarde en que concurren mayor número de socios al local, y se interesan
verdaderamente por los problemas que se
discuten en ella.
Y no veo más. Si algo queda en cartera, lo
pondremos otro día. —Corresponsal.
FERROL
En el salón del colegio «Tirso de Molina»,
se celebraron lindas fiestas. En una de ellas
hizo el Sr. Sagarmínaga, Director de la Propagación de la Fe en España, el elogio de las
misiones, con hermosas proyecciones. Se inscribieron en la Santa Infancia los niños de
nuestro colegio y muchos otros.
En Navidad se hizo allí también el reparto
de premios del catecismo diario de nuestra
iglesia, reuniéndose unos 250 niños, casi todos de escuelas laicas. Las niñas de las escuelas dominicales, que son unas 300, hicieron
también su fiesta dramática y musical, muy
agradable.
En dicho salón celebra mensualmente sus
reuniones la Asociación de San Cosme y San
Damián, compuesta de los más ilustres médicos y farmacéuticos de esta ciudad, en número de unos 50, que admiten al público a
sus interesantes conferencias.
Esta Asociación celebra su comunión mensual en nuestra iglesia con la de Padres de
Familia, que labora activamente por la enseñanza católica. En la junta celebrada últimamente salió elegido presidente el acreditado médico, director del Laboratorio Municipal, Dr. Chaos Losada.
Los Padres de Familia han abierto una es-
cuela católica y proyectan otras varias con
el apoyo de la población, que hace colecta en
todas las iglesias a ese efecto uno de los domingos del mes.
Del 2 al 5 de enero tuvimos en nuestra
casa al Sr. Obispo de Lugo, Administrador
Apostólico de Mondoñedo, Dr. Balanza, que
confirmó unos 250 niños y examinó detenidamente el estado religioso de la ciudad, animando a los que trabajan y ganándose el
amor de todo el pueblo. Las autoridades se
esmeraron en obsequiarle, haciendo olvidar
así el negro laicismo oficial.
El P. Rector, Fr. Miguel Escánez, ha predicado un triduo en la parroquia de San
Jorge, de la Coruña, para reanimar la antigua Cofradía de la Merced allí establecida.
En nuestra iglesia se han celebrado, con
el fervor acostumbrado, las novenas del Niño
Jesús y de Nuestro Padre San Pedro Nolasco.
El 17 de enero, centenario de la Confirmación de la Orden, llenaron la iglesia las niñas
con su comunión, hasta cansarnos de imponer
escapularios. ¡Sea todo para mucha gloria de
Dios!
VER.IN
17 de enero. VII Centenario de la aprobación de la Orden por la Santa Sede.—
El Convento de Verin recordará doblemente
esa fecha, pues, a más de ser centenaria, fué
el dia en que se inauguró su claustro hasta
hace poco totalmente inservible por carecer
de pisos y tener tapiados y mutilados todos
sus arcos.
Recuerdo a este propósito la pena que sentíamos cuando en 30 de mayo del pasado ario
de 1934 tomamos posesión del Convento.
Todo él era un montón de ruinas si exceptuamos la parte destinada a Noviciado que se
había levantado de nuevo desde los cimientos. Preveiase, sin embargo, que unas pesetas, pocas, y un mucho de trabajo y limpieza,
convertirían el Convento en una pequeña
joya digna de ser conocida y visitada. Las
pesetas no quiso el Señor dárnoslas en abundancia, pero nos regaló sobrada salud y fuerzas para que con nuestras propias manos emprendiésemos la restauración y saneamiento
que necesitaba.
- 60 -
Día tras dia fueron los religiosos quienes
d estapiaron los arcos del claustro y limpiaron sus corredores del escombro de que estaban llenos; y ellos mismos, bajo la dirección
del maestro de obras señor don Bernardo
Otero, tomaron gran parte en el entarimado
de los pasillos. La realidad pareció un sueño
a los hijos de Verín cuando ayer penetró en
el claustro el estandarte y la imagen de Nuestra Santísima Madre, seguida de la multitud
que había venido a escuchar la elocuencia
del P. Gaite en el ejercicio de la tarde. Nunca oi cantar con más emoción y tanta propiedad las palabras del himno:
Salve, Orden Redentora
imitadora fiel del Redentor
Surge radiante hoy la Orden celeste
Real y militar de la Merced.
Gloria a Maria su adorada Reina
a Jaime y a Nolasco gloria y prez...
En el solemne triduo del séptimo centenario de la Orden, los sermones estuvieron a
cargo del ilustre mercedarío P. Gaite; fueron
bellísimas oraciones.
El jueves, último dia del triduo, se celebró
una misa solemnisima con Comunión general. El número de fieles que recibió el Pan de
la Eucaristía fué inmenso.
Por la tarde se verificó la Hora Santa. El
reverendo Padre Gaite explica el evangelio
de la Ultima Cena, momentos sublimes en
que Jesucristo instituyó la Sagrada Comunión, para saciarnos ese «apetito de Dios» de
que habla San Juan de la Cruz.
Los días segundo y tercero del triduo el
párroco de Campobecerros cantó unas plegarias, acompañado del órgano por el maestro
de Novicios; de honda emoción, estilo sugestivo y elevado rango artístico, lograron
arrancar lágrimas a muchos fieles.
NOVICIADO.—ZUMARRAGA
Y mientras cantábamos acompañando a la
Madre alrededor del claustro, presenciaron
nuestros ojos un espectáculo maravilloso: Los
ventanales colocados recientemente en los
vanos del claustro alto lucían la esbeltez y
y finura de sus lineas que al unirse formaban
con belleza y detalle las armas o escudo de la
Orden. Es este un trabajo realizado en los
talleres del señor Martiná, de Orense, cuya
pulcritud y esmero en la obra es necesario
reconocer. El claustro ha ganado un treinta
por cien al verse adornado con estos ventanales tan ajustados a su estilo del renacimiento clásico, de linea matemática, sencilla,
con recuerdos del estilo severo de Herrera,
a pesar de que el claustro es fabrica de 1721.
Al Padre Predicador, Fr. Juan Rojas de
Ribera, hijo de este Convento y Comendador
del mismo, nueve años continuos, pertenece
la gloria de haber levantado este pequeño,
pero hermoso claustro. Y otro Comendador
que lo fue también aquí durante nueve arios,
aunque discontinuos, el P. Antonio Rodríguez, compartirá esa gloria con el benemérito P. Ribera, al restaurarle hoy dia con
tóa n itc.
oa caririo y adecuada forma arquitec-
Profesiones.—E1 29 del pasado diciembre
emitió sus votos perpetuos nuestra querida
hermana Sor Maria de la Piedad Altube.
Para acto tan soleme practicó el mes de Ejercicios Espirituales.
El mismo dia, tres novicias, Sor Amparo
Olarieta, Sor Maria del Pilar Pérez y Sor
Ana Maria García, hicieron su profesión temporal. A continuación, tres postulantes fueron revestidas con el blanco y hermoso hábito de la Merced: Maria Rosa Fernández, Carmen Olazábal y Maria Múgica, que recibieron
los nombres de Sor Balbina de Jesús, Sor
Maria Vicenta de Jesús y Sor Esperanza de
Jesús, respectivamente. Reciban todas nuestra cordial felicitación. Como delegado del
ilustrísimo Sr. Obispo, presidió los actos de
la profesión y toma de hábito, el dignisimo
párroco de Andoain (Guipúzcoa), don Joaquín Bermejo. Dirigió hermosa alocución a
las nuevas Religiosas y familiares. El coro
interpretó después de la misa cantada preciosos motetes, gustando mucho «Juro seguir,
Jesús mio».
Fin de atio.—Como arios anteriores, también en éste hemos tenido la dicha de celebrarlo con gran solemnidad. Desde las once
de la noche del último dia del ario 34 hasta
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primera hora del 35, estuvo expuesto en nuestra iglesia S. D. M., y durante este tiempo
nuestro capellán nos dió una fervorosa Hora
Santa.
A las doce, hora que nos anunciaba el termino del ario, la Comunidad, que velaba
ante el Santísimo, entonó un solemne «Te
Deum», en acción de gracias.
Fue un momento verdaderamente feliz y
de santas emociones, en el que el alma, desagraviando y acompañando a Jesús, parecía
abstraída de la tierra y todo haciale recordar
la paz de los bienaventurados en el cielo.
Nos comunican nuestras queridas hermanas de Mallen (Zaragoza), que han celebrado
solemnes funciones religiosas los días 18, 19
y 20 de enero, por el 50.° aniversario de la
fundación del Hospital y Colegio de aquella
villa.
A las fiestas religiosas se unieron nuestras
hermanas de Ejea de los Caballeros, Reverenda Madre Concepción, Sor Gemma, Sor
Imelda, Sor Celina y Sor Maria, y las colegialas señoritas Carmen Alastuey, Conchita
Campos, Pilar Campos, Carmen Montañés,
Isabel Jiménez y Emilia Sarriá, que muy
gustosas se asociaron a la Comunidad. El
último dia predicó el elocuente orador Mosén
Pascual Puncel. Nuestra enhorabuena a todos.—La corresponsal.
CUENCA
Bodas de plata de una religiosa.—En
el Seminario de San Julián se han celebrado el 31 de enero las bodas de plata de
Sor Mariana de Jesús Gallartegui, religiosa
Mercedaria de la Caridad. Predicó el jesuita
padre Laureano Hernández. La ceremonia
fue presenciada por numerosisimas personas.
Por la tarde se ha celebrado en su honor
una velada en el teatro de la Merced, totalmente lleno, con asistencia del Sr. Obispo.
PUENTE GENIL
Hermanas Mercedarias de Caridad.—
El 1. 0 de septiembre pasado ingresó en este
hospital Victor Hugo Tobias, de setenta y
tres arios, enfermo del corazón. Era protestante, y eso fué nuestra preocupación, por-
que le veiamos agravarse y temíamos muriese sin abrazar la Religión católica. No se le
podía hablar, ni de su peligro de muerte, ni
de su conversión; se enfadaba y decía no le
hablase de eso a nosotras y al párroco. Hicimos novenas; se agravó de forma que temíamos se nos muriese. Por fin triunfó la gracia;
el 22 de noviembre dijo: me muero; se llamó
al párroco, y al verle le dijo: Quiero abjurar
mi religión y abrazar la católica. El 24 se
bautizó y recibió los últimos sacramentos con
mucho fervor. El párroco le preguntó si estaba contento, le contestó que si, que todo lo
hizo con grandísima voluntad, porque la
gracia le había tocado, y que en cierta ocasión unos marqueses le daban miles de pesetas para que se hiciese católico, y no había
querido. Murió el 25 con la muerte de los
justos, besando el Crucifijo.
En nuestra Casa-Hospital y Colegio de
La Rambla.—E1 17 cíe de enero 1935, por
orden de nuestra muy querida Madre la Reverendísima Superiora General del Instituto
celebramos con gran entusiasmo la conmemoración del VII centenario de la aprobación de la Orden de la Merced por Gregorio IX.
A las siete y media de la mañana de este
hermoso día se celebró misa de comunión en
que se cantaron bonitos motetes por el coro
de religiosas y niñas. Comulgaron en ella
gran número de niñas y fieles.
A las nueve y media, la misa solemne; se
cantó la «De Angelis». Ofició en ella don
Lorenzo Ciria, capellán de la Comunidad,
siendo ayudado por el P. Superior de los
Trinitarios y otro padre de la misma Orden.
El coro estaba compuesto de inmenso número de niños, dirigidos por un padre Trinitario, y otros niños acompañaban al armonium con violines y flautas. Durante el Ofertorio se cantó «Alleluia Psallite», por L. Usabiaga, a dos voces; resultó grandioso por el
número de cantores.
Por la tarde, a las cinco, se hizo un ejercicio con exposición de S. D. M., y al final se
•cantó la salvé popular a dos voces y el himno
de nuestra Orden; el Sr. Rector de esta ciu-
- 62 -
dad entonó el «Te Deum» en acción de gracias.
Algo más todavía, las religiosas ofrecieron
por Jesús a su amantisima Madre la Santisin'a Virgen, un ramito de flores espirituales,
sa crificios voluntarios, en fiesta tan mercedaria, con la petición de que no falte su protección maternal a este su predilecto Instituto,
fu ndación suya.
BRASIL.— SANATORIO
SANTA CRUZ
También en el Brasil se prepara como en
E spaña para el asalto comunista y tienen
Para el ario 35 fijado el golpe bajo las amenazas de retirarles los sueldos que les envían de
Moscú. ¡Dios nos las prepare buenas!
Aquí lo vamos pasando muy bien con la
l ucha que supone el tratamiento de los tub erculosos del Brasil que, aunque en todas
Partes son tuberculosos, pero en el Brasil
h asta los bacilos de Koch están menos disciplinados.
El dia del Natal, como aquí dicen, D. Leonor preparó una fiestecita muy bonita para los
que no fueron a pasar el dia con su familia.
Los brindis y discursos que hicieron en la
c ena, a los que, ahora que ya entendemos el
Portugués, pudimos sacarles la sustancia,
fueron muy graciosos y piadosos porque el
Principal objeto de ellos fue poner de relieve
el misterio del dia.
Este ario el Sr. Obispo de Taubate prohibió
C n el Preventorio de Santa Clara, muy prórimo a este Sanatorio, que se hiciera el árbol
d e Natal para los niños, y habrá sido general
en su diócesis, y mandó se celebrara la venida
de los Reyes Magos a traer los presentes para
los niños, como en otro tiempo se los llevaron
al Niño Jesús. Aquí les ha extrañado mucho
tee els asot nrgdt . ,
y yo les di la explicación de cómo
origen de ese árbol de Natal es de los proA las doce de la noche tuvimos Misa de
G allo, a la que acudieron todos los enfermos,
nos llamó la atención lo devotamente que
la oyeron, que no se oyó ni toser. En fin,
también los brasileros saben mantener su espíritu recogido aun en esos das. A la mañana siguiente, a las ocho, dijeron las otras GOS
misas, en la que hizo la primera comunión
una negrita de estas chozas a quien habíamos preparado con la dificultad que supone
de no saber hablar bien el brasileño y con el
poco tiempo que disponemos, porque sólo en
los ratos de recreo de los domingos podemos
dedicarnos a esta faena con estos desgraciados que viven en estas chozas. También comulgaron los otros niños nuestros compañeros y después de la misa también el Nilo
Jesús les trajo a ellos los presentes de ropa
confeccionada por las hermanas, con la generosidad de la señorita Isabel, a quien ya conocen por otras relaciones en esta revista, y
también por la distinguida señora del Doctor
Clowis, siempre pronta a todo lo que sea caridad, lo mismo que el doctor. Quedaron estos
niños tan encantados con sus ropitas, sus dulces y sus brin queados, así llaman aqui a los
juguetes.
En octubre visitamos el santuario de Nuestra Señora La Aparecida, Patrona del Brasil,
una imagen negrita que unos pescadores encontraron en el rio Parahiba, Santuario visitado diariamente por fervorosas romerías.
Todos los brasileños le tienen una devoción
indescriptible y también los extranjeros,
pues entre los exvotos los hay de españoles
que se habian acogido a su protección en
algunos apuros, especialmente de su salud.
En aquellos dias de la visita a la referida
imagen, España pasaba por la prueba terrible de la revolución; hicimos una súplica a la
Patrona del Brasil por nuestra querida Patria. Ahora estamos en verano y llueve más
que en el norte de España; llevamos más de
treinta dias lloviendo. El mejor tiempo aqui
es el invierno.
Se van multiplicando las Comunidades de
religiosas en estos campos; somos cuatro distintas y en breve seremos seis.
-
o
El
BIBLIOGRAFIA
Prodigios de Santidad.-Editorial Luis Vives, S. A. (Sicilia, 400, Barcelona).
Esta Editorial está publicando una serie
de 12 páginas que son hermosísimas vidas de
santos ilustradas, muy a propósito para recompensas de catequesis, para premios de
escuelas y para repartir a los jóvenes de los
patronatos y a los fieles en las festividades
del santo patrono de la parroquia, el titular
de la iglesia o de la cofradía, etc. La lectura
de estas vidas ilustradas es muy interesante.
De estas «Vidas» ha dicho la importante
revista El Mensajero: «Novedad muy práctica que recomendamos encarecidamente. Estos libritos están muy lindamente presentados, con preciosa cubierta a dos tintas. Excelente medio de propagar la lectura de vidas
de santos e ir desterrando lecturas malsanas.
Muy bonito premio para catecismo». Hasta
ahora la colección se compone de 32 folletos
o «Vidas» y su precio es de 25 céntimos el
ejemplar, con importantes rebajas para los
propagandistas.
Los publicados ya son los siguientes: San
Pedro Apóstol. -San Isidro Labrador.-Santa
Inés.-Beata Imelda.-San Antonio de Padua.- San Pascual Bailön.-San Fernando.
San Luis Gonzaga.-San José.-San Vicente
Ferrer.-Santa Catalina de Sena.-San Antonio Abad.-Santa Febronia.- San Pablo.Santa Isabel de Portugal.-San Juan Gualberto.-San Enrique.-San Alejo.-San Camilo de Lelis.-San Vicente de Paül.- Santa
María Magdalena.- Santiago Apóstol.-San
Ignacio de Loyola.- Santo Domingo de Guzmán.- San Roque. -San Bernardo. -San José
de Calasanz.-San Agustin.-Santa Rosa de
Lima.-Santo Dominguito del Val.-San Lorenzo.-Santa Clara.
Pinceladas y Cuadros de Artista y Misionera. - Colección de narraciones entresacadas
de los escritos de la Rydrna. M. Margarita
M. Maturana por la Rvda. M. M. a Celina
Apezteguia, illercedaria Misionera. Editorial Vizcaina.-Henao, 8. Bilbao. - 83 páginas. -11 grabados. - Contiene XVI artículos.
Fueron escritos por la Rvdma. M. Margarita. Ya muerta, importa conocer su alma,
su cultura, su vocación de apóstol de misionera... «pero leedlos por vosotros mismos, y
saboread la vena poética que tan abundosa se derrama en el deslizarse de esas lindas
narraciones, cuyo mejor comentario es su
propia y nativa belleza». Hacemos nuestra
esta invitación de la prologuista. Leed este
librito los que no habéis conocido a la Madre
Margarita: después de leerlo podéis saber lo
que era. Los que habéis tenido la dicha de
conocerla y tratarla, os figuraréis que la estáis oyendo hablar. Son pinceladas de artista
y misionera; pinta, habla... Leedlo todos.
CON LAS DEBIDAS LICENCIAS
Editorial Católica Toledana, Juan Labrador, 6, teléfono 211.
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