Toyota Hilux SW4 SRV Manual

| Impresión de manejo: Toyota Hilux SW4
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El eslabón perdido
Aventurero y ágil, pero a la vez educado caballero, se puede
comparar al Hilux SW4 con el «eslabón perdido», antepasado
común entre el humano y el simio. Este es el nuevo 4X4 de
Toyota producido en Argentina, dentro del proyecto mundial
denominado IMV.
Prueba: E. Babicolla / H. Calaza
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Fotos: E. Babicolla
Versión
Origen
Precio
SRV Manual
Argentina
$ 122.000
Velocidad máx. aprox.
170,0 km/h
N
Así como la evolución de los seres vivos, los vehículos también han progresado, surgiendo desde sus orígenes como mecanismos simples hasta convertirse
en complejos organismos tecnológicos de transporte. Durante el proceso evolutivo, tanto de los seres como de las amadas máquinas rodantes, se han producido bifurcaciones, separaciones de un tronco común que si bien cuentan con parecidos ya son irreconciliables como raza.
Dentro de la historia de la humanidad se encuentra el clásico ejemplo del «eslabón perdido», ese misterioso antepasado a partir del cual simios y humanos tomaron caminos separados. En el caso de los 4X4, también los rudos todo terreno destinados a enfrentar las inclemencias naturales, han visto nacer a los SUV,
vehículos que se han adaptado para dominar la jungla de cemento. Si bien parecen similares, varias son las señas que los diferencian, especialmente a nivel «orgánico» donde, por ejemplo, presentan esquemas de suspensión más complejos
y estructuras con carrocería autoportante, aunque también han dejado en el camino elementos como la reductora.
Analizando solamente las fichas técnicas, la nueva Hilux SW4 no puede incluirse dentro del nuevo grupo, pero tampoco íntegramente en el de los todo terreno
extremos. ¿El SW4 será ese mítico eslabón perdido? Este es el enigma que esta
prueba intentará dilucidar.
Diciembre/Enero 2006 061|
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Para comenzar hay que examinar la estructura orgánica de este nuevo 4X4. Chasis y carrocería independientes, suspensión
delantera con doble brazo, trasera de eje rígido y reductora hablan a las claras de un todo terreno. Sin embargo, hay que sumarle al eje trasero la presencia de resortes en lugar de elásticos y cuatro brazos que vinculan al eje. Además, hace acto de
presencia un diferencial central de deslizamiento limitado (LSD),
lo cual habla claramente de evolución o progreso técnico.
Tanto su estética interior como exterior complican la clasificación pues se trata de un vehículo refinado y moderno, elementos propios de un SUV. Para sumar se encuentra un tercer punto, quizás el que habla mejor de la difícil tarea de enmarcar a este modelo: sus aptitudes. Se mueve bien en ciudad, en ruta y
fuera de camino, o sea que reúne las cualidades de todo terreno y las de sport utility vehicle. Hasta aquí los argumentos no
permiten llegar a una conclusión, ameritando un análisis más
detallado.
Su diseño claramente emparentado con la pick up Hilux, su
compañera de proyecto IMV, presenta varios elementos que lo
Equipamiento
Espejos y levantavidrios eléctricos
Sensor de velocidad
Airbags frontales
Volante regulable en altura
Asiento conductor regulable en altura
Asientos traseros reclinables y rebatibles
Tapizado en cuero (Opcional)
Computadora de a bordo
Cierre central c/mando a distancia
Inmovilizador de motor y alarma
AM/FM c/ pasacassette
Cambiador de 6 CDs y MP3
Climatizador automático
Estribos laterales
Alerón trasero c/tercera luz de freno
Limpiaparabrisas trasero
Rieles portaequipajes
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tornan aún más elegante. En el frontal se destacan los faros de
formato similar, pero con grupos de iluminación compuestos y
nueva parrilla con labio superior cromado. Donde se aprecia la
mayor diferencia es en el remate posterior, que cuenta con un
pilar C fuertemente inclinado para expresar dinamismo, con tercera ventanilla trapezoidal y con portón trasero amplio, con
grandes ópticas unidas por un grueso lazo cromado. Alta y maciza, el resultado es imponente.
En el interior se pueden reconocer fácilmente elementos de la
pick-up, aunque el ambiente es totalmente diferente, más espacioso, luminoso y con varios detalles especiales como tablero en
dos colores, cromados y tapizado en cuero. Las plazas traseras
cuentan con grandes cotas habitables en todas las direcciones y
con respaldos que se pueden reclinar para aumentar el confort.
La zona de carga es generosa y ampliable rebatiendo los respaldos (60/40) o todo el asiento posterior, aunque en este caso no
queda del todo perpendicular con respecto al suelo. Ante tanto
confort, la palanca de cambios actúa como recordatorio de sus
ancestros todo terreno. De vástago muy extenso, requiere recorridos longitudinales muy largos y es algo lenta, aunque muy
precisa. La posición de manejo idónea resulta levemente entorpecida por el volante, que aún en la posición más alta es bajo.
Esta disposición tampoco ayuda a la visibilidad en manejo 4X4
porque el conductor no se puede colgar, aunque es de destacar
la buena visión tanto hacia atrás como hacia adelante.
Tanto los materiales como los encastres y el equipamiento superan cualquier expectativa generada para un 4X4 producido en
el Mercosur. En este último ámbito se encuentran el climatizador digital, control de velocidad crucero (solo disponible con caja automática), computadora de a bordo, radio con CD changer
de 6 CDs y MP3, por solo nombrar los elementos más destacados de la lista. La seguridad también alcanza buenos estándares
con fijaciones ISOFIX para sillas de bebes, doble airbag frontal
y sistema ABS en los cuatro frenos.
En marcha lo primero que llama la atención es el inocultable
«traqueteo» del 3.0 turbodiesel. Este sonido solo se hace notar
mientras regula, ya que apenas gana velocidad de giro, se llama
a silencio. Importado sin escalas de la Hilux pick-up, este impulsor se destaca técnicamente con sus 16 válvulas, sistema tipo
common rail, turbo de geometría variable e intercooler. Esto se
traduce en 163 caballos a solo 3.400 rpm y un torque cuyo valor
máximo de 34.9 kgm se mantiene inalterado entre las 1.400 y
3.200 revoluciones. Esta entrega queda manifestada en la gran
agilidad citadina, apoyada en la primera y en la segunda marcha,
ambas cortas, que culminan en una equilibrada tercera. En ruta
los, dos últimos cambios largos se encargan de mantener en paz
al tacómetro, reduciendo ruidos y consumo. Hay que destacar
por último el buen trabajo aerodinámico que minimiza todo
zumbido producto del roce con el aire, aún a altas velocidades.
Si bien no se realizaron pruebas estrictas, alcanzó los 170 km/h
y los consumos se destacan teniendo en cuenta que pesa casi
1.900 kilos y su tracción integral es permanente.
En las urbes, su andar no es tan refinado como el de un SUV,
aunque brilla en comparación con los todo terreno a secas. Se
NUEVA
HILUX SW4
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destaca la suspensión trasera, que hace notar claramente sus
mejoras respecto de la pick-up y la rigidez de toda la carrocería,
que ante secuencias de pequeños baches o empedrados en mal
estado (o sea todos), apenas vibra. Ayudan el logrado chasis Hilux con largueros muy robustos y la cabina, que al ser toda de
una pieza, mejora la rigidez torsional. En ruta, casi no se siente
la ausencia de la estabilizadora trasera, presentando solidez en
recta y hasta poco rolido en curva. La tracción integral con reparto variable entre ejes es de gran ayuda en virajes, ya que si
contara con sistema fijo tendería a hacer resbalar la trompa.
Además resulta muy útil en situaciones de suelos resbaladizos,
mojados o con nieve.
Llegados al punto de abandonar el asfalto, lo primero que se
aprecia es su calzado, con dibujo más de calle, pero de generosas dimensiones (256/70), montados sobre llantas de aleación
de 16". Sobre tierra seca la tracción es muy buena y la suspensión copia muy bien el terreno, aunque ante algunas exigencias
tiene a levantar la rueda trasera. Si bien su ángulo de ataque no
es el mejor, tiene muy buen ángulo de salida. Tampoco tocan los
estribos gracias a su despeje de 220 mm, que respecto de la
pick-up crece 8 mm y distancia entre ejes de 2.750 mm, 110 milímetros más corto. Encarando las partes más exigentes de una
pista 4X4 las superó muy bien, con el motor casi regulando. Este gran productor de torque trabaja perfectamente, aún sometido a pruebas tales como salir de 0 en pendientes de 40º, regulando en 1º de baja, sin «tirar» a apagarse e inclusive, haciendo
patinar las ruedas.
Especificaciones técnicas
Motor:
Alimentación:
Cilindrada:
Delantero, longitudinal,
4 cilindros en línea, 16 válvulas,
2 árboles de levas
Common Rail, turbo de geometría
variable, intercooler
2.982 cm3
96.0 x 103.0 mm
163 CV a 3.400 rpm
34.9 kgm entre 1.400 y 3.200 rpm
17.9:1
Integral, Alta/Baja con bloqueo
de diferencial central, Manual 5 vel.
Dirección:
Hidáulica, piñon y cremallera
Suspensión delantera:
Independiente, c/doble brazo,
resortes y barra estabilizadora
Suspensión trasera:
Eje rígido c/4 brazos y resortes
Frenos del./tras.:
Discos ventilados / Tambor
Sist. electr. seguridad act.: ABS
Llantas:
Aleación 16”
Neumáticos:
265/70 R16
Diámetro x carrera:
Potencia máx. medida:
Torque máximo:
Relación de compresión:
Tracción, transmisión:
Dimensiones (mm) y Pesos (kg)
Respondiendo a la pregunta planteada al inicio de la prueba se puede
afirmar que estamos frente al «eslabón perdido». Pero no hay que
confundirse, el Hilux SW4 no es una muestra de paleontología, es una
moderna pieza de tecnología automotriz que conjuga la elegancia del
Largo / ancho / alto:
Distancia entre ejes:
Trocha delantera/trasera:
Despeje mín./ Radio giro:
Peso en orden de marcha (kg):
Capacidad de carga (kg):
Volumen del baúl (l):
Tanque de combustible:
4.695 / 1.840 / 1.850
2.750
1.540 / 1.540
220 mm / 6.0 m
1.900
610
ND
65 litros
SUV, con la destreza de un todo terreno.
Combustible:
diesel
Capacidad de vadeo: 700 mm
Angulo de ataque: 30°
Angulo ventral: 23°
Angulo de salida: 25°
Inclinación máxima: 42°
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