Valoración personal Johanna Velásquez

VALORACIÓN
PERSONAL
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R EALIZADO POR : J OHANNA V ELÁSQUEZ S ÁNCHEZ
Una de las características más personales de las que no estoy nada conforme es que no
soy una persona que demuestre mis sentimientos, inclusive me han llegado a decir eso de
“estas muerta por dentro”, por el simple hecho de no ser expresiva con mis sentimientos,
aunque siempre he pensado que una cosa es lo que yo quiero mostrar y otra es lo que hay
dentro de mí, no le encuentro ninguna lógica, el llorar por las esquinas no va resolver
ninguno de mis problemas. He llegado a esta conclusión al leer esta frase en uno de los
capitulo: “No es cuanto sufres, sino como lo sufres.” Tal vez la rara sea yo, ¿debería
dejarme llevar por todos los sentimientos e impulsos que se cruzan por mi cabeza a lo
largo de mí día a día? Sinceramente creo que no sería lo más acertado, pues tengo un
carácter difícil y me ha llevado mucho trabajo aprender a controlarme, puede que me ha
pasado en ese autocontrol, y me haya convertido en una inútil sentimental, incapaz de
mostrar mis sentimientos, sé que es algo que ha determinado mis relaciones afectivas e
inclusive las ha condenado a su fin pero en ese sentido estoy tranquila porque estoy
segura de que nunca me he enamorado, tal vez sea porque tengo una idea demasiado
utópica del amor causada oír leer demasiadas novelas románticas donde los enamorados
con capaces de entregar su propia vida por poder estar junto a la persona a la que amar
siempre me he auto-convencido de que no existe, que es un enrevesado complot mundial
para causar dolor a las personas porque el amo conlleva dolor o bien antes , durante o
después en algún momento del proceso aparece el dolor, entonces, ¿Por qué seguimos
buscándolo insaciablemente?, ¿por qué me sigo comprando novelas románticas?¿por
qué?, pero es mas ¿Qué es el amor, que es en sí todo aquello que anhelamos?¿Alguien lo
sabe de verdad?. Cada uno lo explica de forma diferente: confianza, seguridad, pasión, no
poder dejar de pensar en esa persona, necesitarle al fin de al cabo. Pero ¿eso está bien?,
¿Cómo puede ser bueno que tu felicidad dependa de alguien que no seas tú mismo? Yo
diría que no es sano para nadie, pero aun así he de confesar que me encantaría sentirlo,
sentirme capaz de darlo todo por una persona sin pensarlo dos veces, dejarme llevar y
perderme en la inmensidad de ese sentimiento, explorar ese complejo dilema llamado
amor, pero ¿y si se acaba?, si se acaba y me convierto en una víctima más de ese
despiadado causante de noches en vela llantos desconsolados y me embarga la soledad
más absoluta. He de admitir que si me he ``encariñado´´ por decirlo de alguna forma, y lo
he pasado mal, entonces ¿por qué quiero volver a jugarme mi estabilidad emocional? Tal
vez sea por que como se suele decir pesa más lo bueno que lo mal, el primer te quiero
pronunciado por esa persona, formulado en sus labios mientras clava sus ojos en tus
pupilas y sientes que te desnuda el alma, ese sentimiento de complicidad absoluta, el
estado continuo de embriagadora y adictiva alegría que nubla el resto de tus sentidos, el
mero tacto de su piel es capaz de producir vértigo en lo más profundo de tus entrañas, yo
creo que nos enamoramos de esas sensaciones y estas valen más que cien noches en vela.
Un aspecto que me hallado muchísimo la atención y que desconocía es que en la
Antigua Grecia la enseñanza se impartía con el objetivo de convertir al pupilo en un buen
ciudadano y no para ejercer una profesión , es un detalle en el que antes no había pensado
, ahora mismo y a lo largo de toda nuestra vida mi educación ha estado orientada para
formarme profesionalmente, el objetivo último de mi estancia en centros educativos es
que cuando acabe sea una profesional cualificada para desarrollar algún oficio, mientras
que por aquella época el objetivo era que los alumnos se convirtiesen en buenos
ciudadanos. ¿Por qué después de dos mil años nos centramos en convertirnos en seres
muy productivos y no en seres humanos de verdad?, ¿cuándo ha ocurrido esto?, ¿como lo
hemos permitido? Desde luego que la educación ha de darse en casa pero nadie aprueba
siendo buena persona y si no hay in titulo de por medio tu valor en la sociedad actual es el
equivalente al de una farola, bueno no, hasta ellas cumplen una función en esta sociedad.
Otra cuestión que ha despertado mi interés ha sido el de la actual obsesión por la
belleza, hay miles de tratamientos estéticos y determinados intervenciones quirúrgicas
que aseguran corregir los signos de la edad y quitar diez años de vida de tu expresión
facial, queremos dar la impresión de juventud, ¿Por qué no queremos reconocer que nos
encontramos en el ocaso de nuestra existencia? O pueda que no nos queramos recordar a
nosotros mismos al mirarnos en el espejo cada mañana. ¿Tanto nos duele pensar que se
esta acabando nuestra vida? Sinceramente no lo entiendo, a mí me encanta acumular
recuerdos , experiencias¿? Por qué iba a negarme a mi misma el trecho que ya he
recorrido de mi corta vida? Puede que lo que nos da miedo es que llege el momento de
hacer balance y no estar conforme o satisfechos con lo que hemos llegado a ser, ha haber
llegado tan alto como nos propusimos un dia o simplemente ver que vas a dejar este
planeta y dentro de die añlos nadie se acordará que tú pisaste esas calles, desde luego ese
si que es mi miedo más profundo, de hecho es algo que me atemoriza desde ahora, temo
ver llegar el fin de mi vida y que haya sido irrelevante y que haya ido como vine, quiero
que se recuerde mi nombre a lo largo de las siguientes generaciones, ese es mi miedo. No a
la muerte sino al olvido.
Para finalizar quisiera mencionar el ejercicio en el que se pide una reflexión sobre
las tres pasiones que han gobernado mi vida. He de decir que tras leer el enunciado me he
quedado mirando al folio en blanco durante un buen rato hasta llegar a la conclusión de
que mi vida no esta gobernada por sentimientos loables como la solidaridad o la entrega a
los demás, me he dado cuenta de que de que mis actos son regidos por un patrón de
conducta y están condicionadas por y en mi propio beneficio. Busco complacer MI orgullo,
MI interés, MI relaciones amistosas (en ese orden de preferencia). Nunca me he
considerado mala persona y tras realizar el ejercicio tampoco ha cambiado esa percepción
de mi misma pero me he sorprendido ¿Cómo es posible que nunca me haya dado cuenta
de esto? Me he indignado, porque es el típico comportamiento que a mi no me gusta en
otras personas pero jamás había caído en cuenta de las pocas veces que he actuado sin
esperar algo a cambio, no económico, el interés que me mueve no es el económico sino es
mas bien un beneficio personal o afectivo, si definitivamente soy una persona convenida.
Si realizo las tareas propias de ama de casa en mi casa no es por quitarle trabajo a mis
padres sino para que estén contentos y no me pongan impedimentos para salir con mis
amigos, o si estudio mucho y me esfuerzo en algo no es porque sea lo correcto
engrandecer mi ego, por decirme a mi misma “olé tú”, he descubierto aspectos de mi
misma que desconocía y que tengo claro que voy a cambiar por ello y tengo claro que voy
a cambiar por ello y por todo lo anterior creo que de todos los trabajos que he realizado a
lo largo del curso este ha sido el que mas me ha hecho planterame ciertos temas que antes
ni se me pasaban por la cabeza, nunca me había planteado por que hago lo que hago y
como lo hago pero sobre todo con que fin lo hago. Independientemente de lo que puedan
decir y pensar mis allegados ahora me conozco un poco mejor a mi misma, se que no soy
la persona que ni ellos ni yo creía pero estoy mucho mas conforme, puede que no me
guste, pero me acepto y ahora se que debo mejorar de mi misma y solo por esta sensación
de plenitud este trabajo ha sido el más gratificante de realizar, sin lugar a dudas.