issue - Hemeroteca Digital

. - c , ; * ? . ' jiTVi
.?«<iei,%**fl*ita#k^<»'jjíilíjiwij'' "««iiBiw '4
nnfx.'- Hm •<'«iifm'''í''íii"'if»i^'
j¿¿i^
ii'iíanii
' MADRII>.ii-ífi rt. U me* en lalíedadcíon, Á'ílmiíiistracíónV
oficinas del periódicf» iMtableeidaj « a la oaUe* ^e-Tragítiertl* fPrado),
ním.,?p,, entresuelo,—También ¡96 suaorilje en la» KbwríaS'file ^ i H v v
Bailüére; callé' del Príncipe, niitp. 11; Cuesta, calle dp'Caoretaí, n ú ioeiao.9; Lope^-oaHe d6l Cánnta', aúnl. 29- IM'é&a,' Oátferá'de San
Geróaimo, 7 99 toda*, las densas pñpdpates 'üJireriaa'de ¡este corte.
edición de Sfed^-id.
Madrfd.—Domingo 15 de^ Diciembre de 1861,
PROVINCIAS.—15 rs; H1 mes j ; 4 5 el triiníjstíes pa-o' ys inílisfií'n«able po^%i< el, importe en la Administraeioa poaf Hiaa |>ersi(Saa, ó Wiviarlo direotamente en letra, liíjríjuaa ó 8eUc>.s dfl .oíjrreoa ^n cartó
franca, porque las susorioiones indireq.tas ^r)¡ jas administraéíóties de
coi*reos y pnqcipiks^librerías, 6 girando ésta'efetpteSaaontra el Hiscritor, cuestan W>r8. éririmesÉfé.—Ulíratuar yfestrtítíjéro, 20 rs. al mes.
Año n.—NdmeFO o\H.
tt
Cada vez que Fray Gerunclio tropezaba, le ^ b a la
pedido gracia para los. infelices condenados por Ibs
pero no puede resistir; porque no representando n a ¿Quién iba.á toser á O, Saturnino si le Uegaa á ' >>
mano el SK Romero" Ofl|z, y álgun,a que jotra vez
da, comprende que perdiendo este apoyo perdería
sucesos de Loja, dirigiendo con «ste -motivo cm e l ó '
liacer marqués?
14 DE DKaEjMBRB.
cayó el orador, teñ(en<ío^.que áyu^^Je á le^vantar.el
toda su fuerza; por eso transije concomas que repruect^ntisimo apostrofe al gobierno, que arrancó un
;Sa'gun La Verdad, el Sr. Calderón Collantes se ha
-¡Hola! revcreRdop&áre-Oerundio; ¿eonqíie tan
iiuevo lazarílío.
ba en el fóndó dé Su cobcienfcia; por eso consiente
aplauso unánime y entusiasta á (Mes los oyentes.
liacKo
acreedor, por su último discurso, al aplauso de
mal ralo int pasado vuestra partefoidád, esouchaado
hechos que repugna la conciencia de todo el mundo.
H¿ áqóí uno de los argum.entos njas cwitalefdel
<^ómo, decía el orador, se atrévA'el gabinete á d e ios
espatloles
amantes de la religión, del trono, de la
el discurso del Sr. Rios Rosas? Pues nO' 16 tía pasado^
En la última parte de su discurso, y después de
Sr. Laltiente.
,
•
-,
cié qae la amtiistía nó sé otorgará porque la piden tos
dinastía, y del respeto'defeido 4,la CJonstitucion del
mejor el 8:obierho, porquero le aséffük'o ti su merced
car^ct^.ri?gir.eojmoJle.váti^Ksflieho
al
gobiernan
k,}a,
«¿Se marchan los' diputadps Cjiando empiezo mi
leiferpos co^eg^slá(lores, que son el supremo OpiJÍ^íjO
Estado.
que al •general O'Donaelt uno.? colores se le ibátí y
discurso? Pues bfen; me había propuesto ser muy
d ^ trono, de donde salen siempi^,,^>s hombres q,ue-.. mayoría, diio el Sr.,^Qs cosas de suma grpiyedad, ,
?E9 así qUe solo aplauden al Sr. Calderón Collanteíi
otros le veDiaa,.al oír aquel tórrenle de elocuencia y
Esplicó darisimamente que el p-^rtido absolutista,
breve; pero puesto que no quieren .oí^pjj.voy ,á e s diiigén |,os negocios público?;^ ,'3f ¿p<n!qué«Q se ba d e
uáos
"poeos ministeriales, no todos: luego los demás'
de eensuras: "
•
.vencido cu diversas.ocasiíKíes, influye poderosamentenderme ,tóáo cuanto pueda.» .,,
coticcdcr!añadia el orador; y o la imploro desde aquí
españoles
estamos reñidos con la religión, el trbno,
Figúrewtí 'Vds. cuál será el poder do la palabra.
te en la marcha dé los negocios-públicos, que el R-OEsto es capaz íjo convencer' álq^ j^ofaíeme?^ mas
y )a.pído á e ^ Reina que, cut^ndo cayó «I giolpc del
Ja'dioastía y la ley fundamental del Estado. ,,
El Sr. ñios Rosas estilatpaba:
bierno,
q«a
es
en
su
política
vacilante
é
indeciso
por
empedernidos.
,
,, ^
puñal regicida al ir á presentar su liija ai templo, la
Esta sentencia de un ex progresista nos ha hecho,
sistema, obedece sin saljerío tal vez á la presión'que
€ Eso mayoría no es mas que una serie dé ceros
Otro argumento:'
primera palabra que pronunció, bañado en sangre
' una impresión, qiie en vano trataríamos dedescribíc.
en
élejercc',
y'de
aquí
él
carácter
reaccionario
que
coa vaciuniíiad A la oaboza; Quitadlo la'uCFfdad,-'y
«La umon'libcrárdcbe ser ^na ^r^n eosa, estego-, su regazo, fué la de 'ptfrdob.» Nó creemos, no" és
La autoríaada voz de los consecuentes políticos que,
se nota eb sú conducta y que se revela con harta
¿qué queda? üoa ^ r i e de cero*..... Itelda.'*
'•
bíerñodebp s e r ' m u y bueno, .cu^^Q, to(^,QS le ataposible creer que dejé de concederse inmediatapatrociqan
La Verdad nos confunde y anonada ,
flrecuencía en ciertos Wchos que son áe la maypr
Gran número ée iodivídoos de la irtayoríá;'entré
can.'»' "" '
_.
'. " ,
^
¡mente'la amnistía-, habiéndose pedido "¿(él' modo
siempre,
grave^fid, . ^¡\
' ^
.
„ ,
,,
ellos D. Fernando Calderón Collares, -se dlrl^ierott
El dia qíüé dDtb á'ñ HHbanal 'sé presente un reo.
que lo ha hecho el. jgsigng. orador, y habiendo
.,
*i
á felicitar tilSí. Rios, cuando te^míaó» su cliscursó."
acusada i)or los té^trgós y maf'^^iténdido poír su abodado el públipo.r«peM4aG,<mfvastrffi|i dek<i|i)9«t.fVivo
Con este motivo manifestó el íluíM^orador qu€>.'
A-u&Bo'sd'í'sabíB qdieó' reemplazará 41 Sr. Santa '
4 La abnegación, llevada hasta «se esfremoj'raya en
gado, debffdecirle el trÍDliiikl,' áegun la lógiói gerundeseo de alcanzarla. Ef líoíáo'obstáculo que pueera üecc^iarío que los hombres, públicos tuvieran vaCruz onfa presidencia del tribunal mayor de cuentas.
herojsmo.
'
,•-'•'' t l t e n a ; ' '•
^ ''
do haber para que se ad«{ité esa ^generosa resolulor para dedr la verdad,- anunciando que el peligro
Un periódico habla de los Sre-í. Bermudez de Castro
Pero ¿qué :tiene esto de estraño, eaando ía itiiánra''
(UsbeddebeseriAuy bijeb ságeto;' V. debe ser
que corren las libertades públicas y el trono proviecien^ es d gobierno; pero sobte fel gofaierBO hay «na
y López Ballestero* (D. Diego).
Con espmdeneia eselama en su crónica:
muy Üfioorkdo euando-todoá fe acusad.»
^
ne únicamente del funesta influjo de eso partido, y
voluntad que no es dudosa, y que sabrá remover
Probablemente no se liara el nombraníi'ento hasta
«Al proDubetar. estas palabras, los bantos y TaS' ' .Pues vaya otro argltiiiénto: "'•'•" *•' ^'' >
después do trazar á grandes rasgeos, pero de un mocuantos obstáculos -se op9ag:an para reaHzar lo que
que termine la discusión del m'ensage á la corona.
Iribú ñas dan muestras de aprobación.»
:<
«La bp6$iciotf del Br. Gonzálei^ Brabo es una opo,do exactísimo, la historia y las maquinaciones do la
tan vivamente anhela.
El dia 21 del corriente empezará en Ziragozá la
El coude-duqtite tomaba notas y mas notas; mejor
sición, ¿cómo- dirá? es ana oposicloíí
eontempoOtra de las cosas mas importantes y naas exactas •parte turbulenta y ambiciosa de esa 5omunipn.polí,vista en primera ínátancia de la causa seguida contra
seria que tomase las ^e Villadiego antes de dar lugar
ránea^p • • •• '
tíca,
comprobó'
sus
indicaciones
y
.apoyó
sus
con-,
que notamos, ,ea el discurso del ,Sr. Rios Rosas fué '
el Sr. Ruiz Póns,-'el impresor Sr. Ariño y sus tres ó
á tristes vaticinios^
•• : '
' Ya iosabeo Vds.; laopcistc^la del Sr, González Brasejos e,n hechosf Ijjstóricos muy elocuentes. RecoBdó
el magnifico y profundo análisis-Rehizo J e la macuatro operarios.
bo
es&>Hteai^0f4n(ia',''i'Bé<m«tí&i^&^l
que
M^pbsidon
El vicalvarism^ sajiíi, de manos ^ei oi>adop dieklen'''
cómo Carlos 11, que volyió al trono de Inglaterra
yoría. Los ex-progresisfós que-á ^ a pertenecen su4e los otros seildMs-cjué'hiía' Hablado contra el gole ina$ bla<ado quef un gütaote y o i a s cocrldo v/aa unft
cumbieron ,«»' Ja. legislaluraantecllH-, vetando' nna •después de la gran revolución que hubo en aquel
Lai&ífios ea Las Novedades:
bípraovseráí/Wtira^ó'pa^liJíiV^oi'q'tfe,.según D. Molicbno perseguida.!, ' . '.<•' •
pais,' murió CQ su iecho porque se opuso á las ambiley a^mínístr^tiyaqjuo es la negtitím demias oj^inio-»
«Nada
mas ridiculo que ciertas protestas dé la prendesto, lo qptíeaopc&MotídMíétnporánea tío hay mafs
Concluir ;cljSr. Ríos, ^eeharácorrer la m&yOT parnes q|ue siempre ha^ostenido eM>fnrtido/ y -stracri- ,ciosas pretensiones del- partido reaccionario, miensa ministerial con motivo del discurso del Sr. 01¿aaga;
que3a.dolSP.'fl«n¿aléíBiabo.'- ' '•••--^
'•
te de lo^xlipatados, tfodo fué-uno.
-',
tras que su. descendiente, Jacobo il, cayó del poMpü^ un^proy9Cta,de ley para, Imbapreakki qué ^i
nada mas notable q^e el disgusto y el horror que lea.
Pm><,ii0Bn&a;'ik^\sé'(»tisáitaosl-9Ílái»iatei se ha
der por someterse á ellas, habiendo rtioéfto de una ' han cansado sus palabras.
En a<jue)( momento saUmne^a que nadie sfe«htenSft'saneiena y pone en vigor, será ef«epu]cro de la lid i a . e n que reinaba gran eoirfusioa, ep que todos caossdo eit balde» F^i 'Gtrunáiff'Mtt-sa petHoracíón,
CuaoJo leemos sus manifestaciones de cierto génebertad del pensamiento. Los «oc-^progi^sistas de la .manera miserable í l últinio -Stuardo. Después de la
que ha «ido predicar en deitertoi. ' '
conmoción qué agitó la Fratfcia á últimos del siglo
haci.^Q esfuerzas por ganar las .puertas,.-., se levantó
ro; cuando vemos á ciertos ministeriales con el incenmayoría, no tienen, no pueden tedef valor ni signlEl lunes esprobablequepídáí la paSkbca el condesario de aquí para allí, nBce.-3Ítaraog observar detenidaFray, Gca-nodio.
•flcacion alguna políticos. Los moderados que vot lo ,, pasado y principios del presente; después de 1a caída
mente todos sus gestos y contorsiones para convencerduque. ; '
.., •
.. • I
del
impeño,
ol
prudente
Luis
XVIII
logró
sentarse
«Estos Fabio, ¡ay dator! que vez aftora, •
con pl gplfierno han .abdicado este a ñ o , aceptando
nos d ' que son loa mismos del 54 los que hablan hby
• M'pcHb' tacto,- tni 'gsBeral•,•tííütefio'tiicto; tenga , jCn la puestiop de ,Italia una solución que no es la suen el trono de sus mayores, que, por haber rosi.stido
pmcos de soledad...........
. • < „•
'de
esta manera.
al influjo absolutista, legó á su hermano Carlos X, el
csl.'ibaa completamente lleisos dc'jipxitados «¿uando 'V. B< miioho aplomo' í que él terreñd'tes V¿sválad¡zo,
ya, que pugna coa todos sus'antecedentes. Por lo
¿Í5s
posible, señores, esclamatúos admirados; es poy
la
cosa
no
está
para
andarse
con
risitas.^"
''
cual, mas débil, cedió á aquellas influencias, dando
hablaba el Sr. Ríos Rosas;» 4»bió esclamar D. Motanto, la, mayoría' no es mas, decía el oracktr, que
sible quesean estos miamos aquellos furibundos de
Lo
mejor-sería'que
contestase
el
Sr.
Nfegfetc
,
á
motivp
á
la
catástrofe
de
julio,
y
perdiendo
una
hedesto en el exordio de su discurso.
una serie de ceros con una unidad d lú cabeza} pí1854, que conspiraban tan admirablemente, que se
ver st se acordaba'del nú de- marras, f salía" hadéarencia que tal vez no vuelva nunca á poder de sus
Y algo dijo sobre el asunto S. S.; pero dijo que las
fese la unidad y quedará una serie de ceros.
ponian como eaergúmenos porque el ministerio n o '
doleJa oposición al -micísfório.
' • ' • ''
sucesores.oposiciones sé 'Aiarchabdn por no oirlé'.
oaia, y que todos loa medips les parecían escelentes
¿Y qué es, qi^é valo, qué signiftca'esa «nidad?
"A todo esto, c-l Sr. Martínez de la Rosa se prepaEn aquel instante apenas habiá una dacéna de mi,-"
para conseguir sus deseos? ,
anadia el profundo orador. Esa unidad es el señor
Tiene razón el Sr, Rios: el graapeligro que amerará para decir con el tono solcrtme do la Convicción:
uislcriales detrás clel orador.
i
Nosotros, que como revolucionarios nqs quedábamos
conde de Lucena; el duque de Tetuad, cuya signifinazi á Fspanñ, proviene de"Tas aSMaciones y de los
¡A'volar! '•
entonces
muy atrás, comparándonos con los ministeN')sotros, aunque lo sentimos por el Sr. Lafuento,
cación proviene de sus victorias en Navarra diirante
intentos malignos de ese partido'^^^l^rotado siemriales de hoy; nosotros, que vimos y oimos en 1854
¡Palabra swramentalí Ante su 'elbC6enciá no r e coufosamos qw^|psministeriales tenían razonal marla guerra civil, de la sublevación de 1854 , do su
pre que '«e presenta francamente en la lucha, aspira
tantas cosas, que. vimos tantas proclamas suyas, esta-*
siste niogUD corazón vícalvarista. "
charse.
campaña de África. Esto es el general O'Donnell, no
á dominar por medio de la intriga y valifedose de
mos hoy condenados á presenciar un nuevo espectácuEl maá grande, el ma* proftlndo, el mas terrible
Kü íjracia de Fr, Gerundio, perjnítasenos un s í es mas que un personage militar. Y como S. S. es la
las peores arles; por eso nosotros hemos levantado la
lo, que no nos causa indignación, sino risa; porque ¿os
argumento dd'que el gobierno' puede valerse contra
mil (|ue huele alg:o á sacribtía.
unidad que dá valor á los ceros que te siguen, de
bandera liberal del partido conservador, y uos heparece mentira que muchos ministeriales de hoy sean
los oradures oposicionistas' lo tiene en los labios el
Figúreuse Vds. qdo oyen un magníftco sennóa,
aquí que el gabinete y la síluacioo'no tenga política ;;mos consagradoá la defensa de sus principios, delos furibundos revolucionarios de aquella memorable =
Sr. Martínez de la Rosa: •
que el orador arrebáíla al auditorio, que su elocuenni satisfag»; ninguna necesidad gabernamental. Be
mostrando qué no han tenido nada de eothun con los
época,B *
cia raya en lo sublime, y qué al concluir este, sube
¡Avotarüi
aquí, se infiere de un modo claro,y 0oneh:iyeuté cuál
de tosatosolutístás viergonzáolés, qué han tomado su
—.—
i*>
'
La Gacíía, pui)licó ayer el tratado relativo á la
al púliñto un cura do misa Sr olla, y con voz apenas
es
la
índole
y
naturaleza
del
minist^io
que
nos
-nombre
para Conseíguir sus'íñíé'ntos, causando notaEscribimos .estos rengloops bajo la impresión queabolición
del derecho de Stade ó dé'Brunshauseil,"
inteligible, empieza á, rezar la novena del santo.
rige. • . , , : : .
: : . - ; : ; ; . . : • . . , .'„ . = ..; ..'/ ' - 'ble daño á Una grande agrupación política,qye siemnos ha causado el discurso dei Sp, Rios Rosas, cuya
firmado
eo
Hannover el 22 de junio último, y acta
C')ij esto puede formarse ujoa idea do lo que es el,
pre lia sido y que seguirá siendo altamente constituComo decía con su lucidez característjcia el Señor
palabra si^spqndió cerca de tres .horas, al grsni condel
mismo
día
acerca del modo en que España debediscurso de Fr. Gerundio, después del de Ríos
Rios Rosas, el elemento militar bu wiqairído en E s - 'CÍon'al.' Buena ¡iirucba han dado de resistir á esas íocurso que poblaba ayer los banco» y todas las triburá
cumplir
por
su partela»«bligaeioaes que contrae.
Rosas.
fluencias ilegitimas los hombres de auestro partida,
paña una gran'ie importancia d e resulteade la guernas. Inmensa era la ansiedad con que se esiper^aba I J
Tirabeque, que estaba en la tribuna, no hacia mas
arrojando
lejos
de-la
corte
en
dos
distintas
ocasiones
ra civil de los siete años. Un representante de este
oración del jefe de la minoría disidente; pero el
Tomamos de un colega progresista;
que llorar á lágrima viva, esclaraando:
'
á uno de los instrumentos de que se vale el absolutis.elemento se alió con un partido político, dando oriefecto que li« causado es mayor todavía. Todo el
«Decíase anootie que .los resellada? se fel^itabíin.del,.;
—«Pero, scfior: ¿quién ha traído á mí amb á estos
mo, y que hoy está donde no debiera, dando origen
gen á una dictadura, que fué la dictadura del partido
discurso del Sr;.i)lózaga, no porque coi^ él estuviesen :
mundo coapce el carácter peculiar de la elocuencia
berenjenales? ¡Cuánto mejor estábamos allá en oíros
á fundadas sospechas de que sigue sien lo, como anprogresista.
Otro
representante
de
ese
mismo
poder
conformes, Kíno porqué algunas de sus observaciones
d é S. S., que pucd^ cpmpar^u-so á esos, mupos ciclóliímpos, metidilos en la celda, sin andarnos por,los
tes, agente funestísimo de los adversarios de la lireuuip mas tarde otro parlíJo, y hubo otra dictadullamando la atención sobre el discurso del Sr Luzupeos que contemplamos hoy con una m a ; a ^ d l e adarchivos, ni por las escuelas de diplomática, sino esbertad,
y
por
cí)nsiguiente,
de
la
dinastía.
riaga, harían mejorar su posición, reconociéndose la
ra,
la
del
partido
moderado:
por
último,
el
general
miración y de asombro, ¡porque p o . a e e ^ H B Á escribiendo únicamente en pro de ,las ideas progreconveóSenoia de dar entrad.t en el'pbdét' á algunos de
O'Donuell sirvió de brazo á la unión liberal, y fué
plicar cómo han podido sobreponer los h ^ ^ ^ m aquesus amigos. Creen que el discurso del Sr. Olózaga liasistas!»
'
dictador en su representación; pero hoy el espíritu de
Ha llamado mucho la atención el que habiendo
llas inmensas rocas. ,Si esas construcci|Ulíidan indidecidido la; entrada en el ministerio del S r . L u x á n . ' •
Así como hay un refrán que dice: «El diablo harto
ese
partido
no
esjtá
en
el
ministerio,
ni
puede
están'
esteudido sus censuras el Sr. Oló^ag.i á varios percio de.uija generación gigantesca, si casi comprueTaf^^enfrMcados están con esto.que juran y perjude carne, se metió fraile,» podemos decir de Fray
sonajes que mijitarou en las filas de D. Carlos, y que
ban ía existencia de los Encalados y 3rieareos, el , en la mayoría, que es una serie de ceros. La silua"
ran
que luego que^^ogren influir en el gobierno, han .
Gerundio que harto do fraile se metió á vícalvahoy, ooupaq altos puestos en la sociedad y disfrutan
discurso del Sr. Rios, es la seúal y la obra de don, pues, según la felicísima frase del Sr. Rios, es
de conseguir dar tal giro a l a posa piiblica»,que aun
rista.
- '•
la dictadura de un hombre.
mucho influjo, olsoñor ministro de Estado solo haya
un gigante de la inteligeocia, de un.hombr&de Estar
los mas liberales han de estar satisfechas del sello que
Su paternidad; cotilo apenas tenia esta tarde á
tomado á su cargo lade'ensí de la influyente monja
do do la mayor talla.
i
Antes do ahora habíamos significado nosotros esa
han de lograr inífirimir en la situación. Si jxp lo .OOBT
quien coolarle en í*~Congreso lo que iba diciendo,
de todos conocida, habiendo dejado completamente
siguen, se prometen que la retirad^ entonces ha de se?,
opinión, auaque con la reserva que la falta de- liberNQ.CS nuestro át^imp dar aquí qnaideageneral del
se lo contaba á uno de los diputados del bático prómucho nSas efioaa que sti separación' hby. "
indefoúsas
todas
las
demás
personas.
tad
nos
imponía:
hoy,
que
en
virtud
de
esa
ínhiunidiscurso que tan honda sensación causó ayer. en toximo. Al' tíjeaos M lo párccia por la acción y el
A iroso tros nos impoirtsí pobo que 'enfretí iS sslgáii,
dad !a ha «spuesto sin ambjcs el ilustre jefe de los
Esta defensa parece que tiene su esplicaciqn, y sé
dos los ánimos.. A njas de publicar el estracto de la
gesto.
'
" -• '
en
lainteligeaoia de'qtíeni su salida', í i stf entrada
disidentes, la acojenlos con grandísimaj satisfacción.
concibe el interés y el ardor conque el señor ministro
sésíQni,,.esp9pem08 ea otro .lugar-un anáiisía detallaservirá
para nada.»
j ^MÍ - - ; '¡I ' " ,¡" '
Algo le. faltaba S Fray Gerundio, y ese álgó que le
de Estado ha tornado á su cargo tan ingrata tarea.
«Pero, me preguntareis, continuaba el ,orador; si
do. En este,30ip queremos fijarnos en aigaoa^desus
faltaljá era Tirabeque, que, como es sábíclp, regañó
este ministerio nada significa, nada representa,' ¿por
Parece qué el señor miajstro de Estado aspira á
partes mas importantes.
<.
> <
«Parece, dice El Clamor, que en ei •S&jado'isB
con su merced por no pasar por el crisol de la inconqué vive? ¿do donde saca su fuerza?¿<3uereis saberlo?
titularse con la denominacipn de marqués del PatroHizose
cargo
el
.orador
de.uQafr9«e
imprudente,
preparft
cierta tempestad contra los doee homb'iȎ"s dfr
secuencia.
,
'
, •,
,-,.,,
Yo os lo diré; hay un partido que, lo sostiene, qué le
cinio.
pcrQ,(}e,j5ravcda<|,
suma,
que
había
pronunciado
en
corazón,
y q u e n o faltará cfulen pida el ekámen'ttiiSin duda lo cotttprendíó así el Sr. Romero Ot%w^ hace obrar á su antojo.» Este partido es el partido
Es lo único que le faltaba á D. Saturnino para colla
otra
Cámara,el,señor
nídnistrp
de
1»
GoberaAcion,
nucíGso:
de
wláí c u i t a s relativas á la guerra de
que se hallaba junto á él, y se aprestó á servirlede
absolutista. Bl gobiet-no lo vé, lo conode. y lo sabe,
mo de ridículo.
I
contestando
al
ilustre,duque
dj9,,Valencía,
que
había
África.»'.^
Tirabeque en su, pefegrínaeion oratoria.
. , . , . ;
as
truida para siempre, y que solo podía quejarse de ello
—Al principio, oootiAuÓ Tettdffré', sé mef mostró
HohagMdftAU^may.frio jf.resdiTMdo.' Yii'sttMn'tistedes - á un muerto y un vaso etrusoo.
Llegado á la casa, se tendió sobre el canapé donde
, qtie todos los «OMOOB SOB may d/sacodfiadus; ¡ESguraos
t^n estensa yAleliciosamentajiaaliaara la víspera su feq|ie,me.^malw;.]por vía .espía 4por ttn> jeuútat^... ¡Si
supieran ,Vd;j. oón^!^ los .aborrece! v.- Ala» pocas visi- licidad. Era ia.idea, que con ma» ftooor. aoaneiaba la
dé que su querida no era ana mujer como las ¡denta»;
, tas que le hiqe,, se opny^B,pi6 de. que. nft era m^s q»e
POK
'u|i viajero'sin predcppacienes, ansioso d^ .instruirme , que solo á él había amado y s^^o á él podía amar. Ahora
que desaparecía este hermoso ensueño ante la,triste y
álfofido en lias costumbres, en los hábitos y, en la pocruel realidad!, se áecia:
PROSPERO MÉRIMÉC:
lífica' de'Orienté. iSatonoea' riíé bábló óoñ la mayor
—Poseo una mujer muy hermosa
¡pero eso es tofranqueza. Efl hi állimí'audiencia, qtie 'era la tercera
do!.... Tiene talento'.,.., ¡pero por eso mismo es mas
que iMe «DBicedia; me toiu8 la 'libertad ñ6 dbcirle:
—¡Las Pirámides!.... No tienen ni con mucho la
'—¿No concibo el poE-qué t a alteía ab ée' {yroclama ' ' culpable!.... ¡Haber amado á Massigay!.... Es Verdad
que en la actualidad me ama con toda su alma
¡cuanaltura que ie cree. El Munster, de Strasbnrgo, soindependiente de la foierta?
' '
to le es dado amarl.... ¡Peto' ser «mado oomo lo ha sido
lo tiene cuatro pies menos que las Pirámides. 'V'en.-r¡]>iosmáo! eselau^r bi(ia lo'tfuiísiera;' pei^ temo
M^ssigny.....
go "basta los ojos de antigtiedi^es: no me' habléis' que los periódica» liberales, que l a dirigen todo en t u
' Matilde se ixa rendido á mis halagas, Á mis salamede ellas. ¡La vista de un solo geroglíñco mé haría '.país, oie nieguen su apoyo e>l dia qae.ibubiese proclarías, á mis impprtuniflades. Pero me he equivocado:
desmayar! Y luego, ¡hay tantos viajerps que se ,oou. imadp la.ipd^ndenoiade^JIgípto..
•¡
nuestros corazones no simpatizs^ban. ¡A^assigny ó yo,
pan de esas cosas! Mi'objeío era estudiar la fisojEs vin herpao^Q.ímoiai^o, cqn W * gE*n barba blanca
todo viene á ser una misma cosa! Era hermoso, y Ipamó
nomía y las costtiitibres'de esa ra^a población apiñada
7 que jamás se rie. Dióme escelentes dulces, y le hice
por su hermosura. Yo divierto alguna vez á esa señoen las calles de Atbjandrlá y'¿el Cairo, compuerta de ;a%unos regalos; pero de todos ello.s.el qff.^ : ^ s If agrara
Pues bien, sehabrádicho: amemos á Saint-Claír,
tuíSos, beduinos, coptos, tellahs y mogrebinos. D u dó, fué una colección de dibujos de los iiniformes de la
toda vez que el otro'no existe. Cuando Saint-Ciair muerante mi permanencia en 'el lazareto, tomé algunas no^
guardia imperial.'heohá por Charlet.
ra ó me fastidie
¡entonces
ya veremos!....
tas á la ligera. jPor supuesto que .vosotros no' c;;eeÍB en
—^¿Es romántico el bajá? preguntó Thémines.
el contagio!.... Yo puedo deciros que he fumado tranCreo que el diablo anda siempre invisible robdando
'—Se ocupa poco ó tiada de literatfnfa; mas no ignoquilamente mi pipa iil lado de trescientos apestados.
al inielis que se martiriza á sí propio. Tal espectáculo
rEm
Vds. que toda -la literatura árabe es romántícia. Tie¡Ah! ¡Coronel! Allí si que vería V. hermosa caballees divertido para el enemigo de los hombres, y cuando
nen so-poeta llamado MeléJc'AgCttalneftts Éb/í-Esra/, que la victima siente que sus heridas empiezan á cerrarse
ría
y bien montada. Ya enseñaré á V'. magníficas
h^ publicado últimamente anas Meditaciones, al lado de allí está el diablo para volver á abrirlas.
armas que hé traído. Tengó"tin djerid que perteneció
las cuales parecen piicisa 'otásiáa -la? de Lamartine. Lúe Saiut-Clair creyó oir una voz que mormuraba á
al famoso Murad-Bey. Traigo ademas un yata'gan.para
go que llegué al Cairo (orné un maestro de árabe, y
su óidoel coronel y un candjiar para Edmundo. Tac^bien •ve-'
can su ayuda estuxüié el Coram. A u o ^ ^ ¡ 90I0 me dio
Singular honor
rán 'Vds. mi metohlá, mi albornoz y mi jaique. ¿Saalgunaf,leccio;je.s, aprendí lo bastante p^ra oomprender
• el de ser nt suo»éir
ben 'Vds. que solo ha consistido'^en npi él no traeríijie
las sublimes bellezas de.^stilp del Profeta, y cuan deLevántese y dirigió una mi'ada feroz á su alrededor,
algunas mujeres? Ibrahim-bitjá Ka e'bviado tajitas destestables ' son' toáas' las traducciones ^ue , teñamos.
¡úuán Oiliz habría sido si hubiera visto á alguien en su
de Grecia, que cuestan poco menos de nada; pero i cauaposeutol {Lo liabria desgarrado!....
sa de mi madre
He hablado mucho COQ,él bajá. És^. ' ¿Quieren Vids. Ver un escrito árabe? Estai letras de
Olio quieren decir Á1Ídh; esto es. Dios.'
El reloj dió las oeho.
' ''
hombre de talento y despreocupado
¡Si'Vds. supíe;
' lAlpronánciar estas patálíras'saoó de 9u holsita de,
, A las ocbo y media le esperaba la oondesa.
ran cuan al corriente se halla de nuestros astmtos! Asesdda-; pértübolad», Una óáttá muy sucia y arrugada.
'. —i3i faltase á la cita!.... Y luego,¿para qué habla de
guro bajo palabra de bonor (Jaé 'conoce los secretos mas ',
- I—^¿Cnanto tiempo-bia^^rmaneoid» eti Egipto? pre- vjsr á la quenda de Massigny?
insignificantes del'gabinete francés. !Éáblándo óon éí
"' '
adquirí preciosos conocimientos acerca del estado ^e ^ gUBtó Thémines.
: Volvió á tenderse en el panapé, y cerró los ojos.
'—Stóáisemanft'r.'-'
''
"'
'[''
los partidos en Francia
En estos momento^ ais ocu—¡Quiero dormir! dijo.
> Y^et viajeM' oa%ttn«ó desoribiendo' todo el Egipto;
pa ¿nUciio de estadística. ¡Ah! ¡Mstá susorito^á todos
; Permaneció inmóvil medio minuto; luego volvió á
nuestros periódiijos, f es uñ bonajjartist^, furíosol.... ' desde ílloadrohBSt*'el hisopo;- ' J .< -••"••-•
levantarse, y corrió al péndulo para ver cuanto tiempo
¡Suto habla de Napoleón! ¡Ahí.... me decía: ¡qué gran-,
líabia trascurrido.
. SaiüK^lair salió^dél aposeat» aptínas' hitfid entrado
de hombre era Bmiabardól Ese és el nombre que dan" ijeodoro,. y sadteágió á su oasita de oaxüpd.
; —¿Cómo rae alegraría de que fuesen las ocho y meá Bonaparte.
'
'
'
S.&1 pensó: porque entonces seria ya tarde para poner' El impetuoso gaiop4 de aa caballo le impedia seguir
[ —Gwrdim, es decir, Joürdain, murmuró TÜémines
'
cpu fijeza el pttr«o de «DS peiuanileiitos; pero sentía va- . me encamino.
en voz baja.
'
' '
,
' " I g|unent9qaé9a£;líoidad,.ea este mundo estaba desNo eaeontrab» e s tu cotazoo'el valoi* necesario para
'
•
^ 1 .
.
,
.
•
E L V 4 S O ETRTÍSG.Q,.
quedarle en su casa, y buscaba afanosamente un protesto. Habría queridj? estar enfe¡rmo. 1
Dió algunos paseos pqr la babitagioifi, volvió á s«nr
tarse, tomó un libro, lo abrió maquinalapiente, y no
pudo leer una sola palabra.
Sentóse al piano y no tuvo fuerzas, para abrirle.
Silbó, liiiró á las ijubes'y ponto los árboles que crecían delante de su ventana. P w úl):imo, volvió á consultar el péndulo, y vio que solo habían trascurrido tres
minutos.
' —No puedo m^oos de amarla, esclamó rechinando los dientes y pateando; conozco que me domina; que soy su esclavo, como Majsigny lo era antes que
yo. Pues bien, miserable; puesto que no tienes bastante energía para romper esa cadena que pdias,
obedece.
Tomó el sombrero y salió precipitadamente de casa.
Cuando nos domina una pasión, sentimos una .especie de consuelo de amor propio al coi siderar nuestra
debilidad desde lo alto de nuestro orgullo.
—Es verdad que soy débil, nos decimos, ¡pero si yo
quisiera!
Marchaba lentamente por la senda que conducía á
la puerta del parque, y desde lejos veia una figura
blanca que se destacaba d^l fondo oscuro de los árboles. En la mano agitaba un. pañuelo. El corazón de
Saint-Clair latia fuertemente; temblábanle la piernas,
y se sentia sin fuerzas para hablar: era tal §u timidez,
qtie temía que' la condesa leyese su mal humor en
su semblante.
Tomó la mano que ella le presentaba, dióle un beso
en la frente cuando ella se arrojó sobre su pecho, muda
y ahogando los suspiros que se exhalaban de su pecho.
< Una sola bugía alumbraba el gabinete de lacondesa,^
; Sentáronse ambos, y Saint-Clair notó que Mad. de
doucy llevaba en su prendido por todo adorno una rosj;t de la estación. La víspera le había llevado él un
^abadd inglés representando á la duquesa de Portland
(que se peinaba de aquel modo), y la había dicho: ((Prefiero esta sencilla rosa á todos vuestros peinados.»
Saint-Clair no era aficionado á las joyas, y opinaba
cipmo aquel lord' que decía brutalmente: «Con mujer
adornada y caballo enjaezado, el .diablo se.queda á
oscuras.»
La noche anterior, jugueteando con un collar de perlas do la condesa (porque Saint-Clair en la intimidad
necesitaba tener siempre alguna cosa en ks manos)
había dicho:
•
—
^
»
;
"
I
-
-—Las joyas solo sirven para ocultar idefeoto», y túf
Matjlde^ eres deituasdado linda pswa neoesitar ds ella».
La condes», que retenia hasta las palabratf^'aiasinsigo^fi^an^ de Saint-Ciair, se había despojante áqtftálla.noqhe de sortijas, collares, pendientes y bi^alétés.
LpíPrímero que reparaba de la éüette d e u ñ a mu^'
jer, era el calzado, pues, oomo (riiros muoheis', era caprichoso acerca derpartieular. ;
I'•
í •
Antes de ponerseel sol habia ícaido un cedióse' r o ció; la yerba estaba eoínpletamentft mojada,y flittembargg, la condesa, salió: pisando el,hiimed»ioesped,-cOB
medias de seda y zapatos de isaten. <¡8i hubiera enffermado!.,
.,
.
• • . .,
. • ' :,; \ : ,•
.. • • ^
'
^'
—Me ama, se (lijo Saint-Olair, y suspiró á causa de
su locura: miró á Matilde, y se sonjrió ápesar suyo, halága(lb á despacho ,de„.sji ^ a l huJBí(r;:«l ver que una ';
^^¡%P°J^'^^'PW^^^^^M^^^^^ ?^'^'^^'^(> ^ todas
esas pé(jueñeoe»,que no tienen-.pra 4o á los ojos é?j loa '
enaincjrados.
,
.•
- *.
Respecto á la cbndesaí su radiante fisonpnjía.^spre-;
sabá una mezcla de amor y de simulada .malicia que,
la hacia aun ni^s encantadora. Tomó cierta cosa de un
cpfreciiló de lací del Japón, y presentaiídoi Saint-,
Clair cerrada ía'rdano qué contenia él objeto, 1¿ dijo:,
-^Nochéspasadas rompí tu reloj: aq,uí 1Q tienes cpm--,
puesto.-' •'' • • ' • • - • - ' •
^ • • • •' - ^
•• •
Entrególe la alhaja, y á la vez le contemplaba con
semblanite cariñbso ál par qué picaresco, mordiéndose
los labios pará-ncfsoíireir. ¡Vivé Dios qué sus dientes
eran bellísimos!.!.;'¡Giiáá'blancos 'brillaban éiitre la"
ardiente rosa de'Bus l a b i o s ! . ' , . . " ;
',
TodP hombre que recibe ftiamenté" las zalamerías de
unamUjér benita, tiene eitttquel móinento el aspect(>'
de un tonto. : ^ ' J
J
= >. ' Saint-Clair ledíóiasgraciaB,.*omó él'reloj é íb'á''á
guardárselo en el bolsillo, más'éllá prosiguió:
«^
—¡Abrelo,y mira si está bien cómpuéslóT Tú, que
eres taneábio, que: has estudiado en la escuela píplitécnica;'debesi^ber eso.
j —Entienda muy poco deesto, dijo Saint-Cláír 'cbíi
indolencia al par que abría la caja del rélój'Con ' áiíe
díslxaido. Ma« ¡iOHál-no í ü é i u sorpresá!3*Bn' el' fondo "
ée la caja había una miniá-turá que representaba á la
opndtiaaá ¿Quedaba áiíá'nSeáio ie eníáiíaíse? 'iSés^r-,
rpgóse su frente, olvidó S Mássigny, y soto pensó en
(|ue estaba al lado "dé una mujer encantadora y que
aquella mujer le aiüaba. . . . . ; ..'...'','
,
(^«
tmtinmré.)
Nuestro colcgr-i so refiere sia duda á la proposieioa
del general Pavía.
bre de va^s%a«d[ír^S||B£^íU(}^ ^
clemenBBPTW!. gwmewio
eu favor de aquellos infelices; y temiendo que el
gobierno no le escuchara ó le des^itondiera, elevó la
,voz
. j ^ . á, mas alto, lugar,^
, -. donde no ha &ido nunca des-
no tratará de renovarla en otro momento. Al esplícar la-xazao. hi&lpdca del acta a4i«idaaV4a.. «««lu-yó
implícitamente del número da sus constantes afirmaLa Época empieza á dar á cada cosa su verdadero
cioQcs.
•'
'
nombre. Suponiendo oquivocadamenle que el señor
V!a& pruel^a mas clara de^uo'el éf. Ríós'R.'Jsas iio
SantálCraz oomitKitóí «1 laáó dt*gobierao, le llama'
gofe'dotíed ^ení-erse y Ú¿Ú tttídét)!, Ií¡tói^i8¿<ilArorit^» ^^"^ '•! "^"^ «Jplofá.tnis^CÍJl-di^,' (lr,m movimiento
oratorio, arrebatgjpatét^o-fué.eldfil Sn. Ríos Rosas •Ihioíteh*blap de ufliaa liberal, sino como quien habla
este importante medio de pago, con gravísimo perKX-PROGREMSTA.
*fc
co aquel punta, reeardando BI íHa,'^'la- ocasión-mel- de'Wñ ¡ftfecbo, e¿ c[i<¿ííl hiblar dos'jdoelrioa, la llama
juicio
de
los
interesados;
cuando
el
valor
del
20
por
¡Pobres resellados!
'too
de.
propios
no
se
impose
en
ta
rttit^fTf»
qa«
-«B
íBoraWe,.^
ÍDstaiiter«iiblime en qu«fou%strá aogSstó '^SSwvniofet^es qtíe, al calificar el discurso pronuns
- *
.<
^»ii
haga euestionable el derecho al capital, y cuando han
soberana, herida por el
En lono de padre macsiro declara Aa Época que
ciado anteayer por el Sr. ü l p z ^ , po contento el sedoblado loB inf^iveos ffle }M rentas'públicas, y no sé' í i a d a f b r ' "
la iVfenaotta csplieJliva de fos gastos dt» la guerra dó
,íí(* Ríos con llamarle moulfqoíiM'constitucional, le
atiende á i la promesa oonsignada «fi el art 25', d« att»
mente'la palabra'pardo* en vez de exhalar una que- .jlalnó además coaser^^f^Sl^püÜimñgr&tisaLlvo en dos
Al'iica puede satisfacer al mas exigente. '
na monos ^t^ilea y. neoe^prifuirip^fa < ei. dfs^rroUo ,c^ la ÍI ¡mj^ntaE losiorbitrios parctí.ia.étcftfironta'^ftinuott Medita'.
„ó |r:!S(ptHJtog(.4QS;cW«l<í^d9Sí3cbQ,í ífaeptaiKlo lo da-Ahpra bien: ta .MTernoríaTpo se haj^pyl^jicado, y ,
riqueza nacional ,El pr^dito e$ la confíaniía, y est^ solo
dmda an^riiid^e, biefl pqedp dflWrse que Be faltará
El pueblo, los diputados, todas la¡^ personas de,, m|s^e8jii9irfa¥^ecliBáfld^eí;eoaaenfadoif >p¡M'a stüigre, ,
por consig:/ieiite, ó L(i,^/)oca eseribe por conjelu- se inspira cumpl^ííijdo ?l gobierno lo, religiosamente , |lai objjg^ciqnfif ff¡}ii-m^,,j que,a»,W)9ap(»il>leg(H,
lolP'w'Wartíads'i^'cSMíci'hnáís'kM
' j,piásshfe4ad'íís«n% s-ii^'i -(.>si ,^..'!]_ .••-"•.' -.-vi-^ .^¡>.
ras, j | f^íla SIQ conocimiento de,caujsa, ó ti^oe el pactado.
j^'cSMícfhnéssVe'll?^
z ^ del c r ^ i t o i q u , e habrift derecho ^i.wp(vpplieseaj^ nodoíP4^''partíaos
, 1 , 1
recinto,
probaron
entonces
la
ei
'
'
''^
"
|Elr 6<ial ídpj, diis«fí58a,.dol Sr,.;Rias, del- hombro ti
privilegio dfi leer ios trabajos oficiales antes que sean
con
toda
r^igi'osidad
los
compromisos
tal
.y
(^opio
se.,
erapcioq
mas
viva
y
El árt. 16 de la ley de I." de agosto de 18D1 señala
enlrc'g-ndos á la publicidad.
espedficaAp"nte los bienes'que'el Estado' destinaba á' ' cc|ntraieron.
^roftiffldáf jffdíéróhfflimtí^'íie'dlía ¿oíi¿lío yeíitÜ-' ,ai|aQl.&4e'i irooí» y^lgal ^(S'vidotideisíiweítev coíad* >:
Jíó'd-udari ífts ^esfíónénteí qué'ffsa cóniision, com- •siastíi'apláiíSo.'"'^'•• '•• ^"''' '"' ' ' " " ' '"- '' ''^^ '' di| c©njel,|íí^ild.el4iscMf»<>de|'SF,.Qiózagií<,' tachado 1
% j)|{^e<)uio,á aueatroxiojpga de la tarde, oreemos sus acretid(Jre8 pdf deuda ám'ortizanle. Son táü orarbá
EtSr.'Ríbfe RoSáá htzóVér de este modo, cii^ú Jaíi sin fundamento de anti-dinástico, por el Ssi'.Gal-!- í
que,p|j,^auto ,á la Mjjmoria esplicativa, habla de- stt espíritu y Stt letra'; que n6' puedft 'stiseíliarsfe diid^- 'p4eitfr dí'pefráohás táiitt'ootúpelentéá, mitiírá''de lá misd^onCollaptes; yc(^í«iidiió asiinistno; eoil'ílfioafi^ielíJ
'mh
míner*'nw
a'sunto
ta¡n''trascenclental;'y
que
se
algún»
racional
sobre
ítt
genuina
inteligeuéik.
Es
por
infundadas
son las sospechas del SrldalfleVon^
memori i..
lo mismoiocioso y-coAtTarioá la equidad'apelar á la la-^ s*viri aootdaiíe • apoyo que se la pide,^ eb raion de
tes. 'Wí Sí^;''RíóS'íldsas'déWiosÍr(j 'que tolosjiqs ep-' ,el|ganle discurso del Sr. GídíSailea.Bfabte .Oos .ft¡s>: '
El Sr. Olózaga parece á La Época un hombre que ter[)jretaGÍon ,>porqiue esta es legftttna eaaado la redac- \9k grande;: facultades de que «e há>lta revestida por razones españoles son tan leales como el suyo; (^ue
mios iteiBore^í los místnos-ayíaosíh^y en todos dlos^r
ción es oscura, orando la ley es ambigna ó están mal. la| ley.. ,. . r, ,
á cada paw tropieza, vadla y cae.
todos responden con igual afecto 4 su afecíp. /
. y Jos¿-misflRí^.ejpfnplQSjíe(|)ri»eipbSique SBitetoiihuoiEú deplorable que' él Sr. Calderón Collantes no cancebidas las convenciones Querer ii^terpretsi.r .1Q . JMadri(^ l^,d6.dj,(4e^bre dail&^.^Antooio de M s c
DeSéeiiidtendí}\i&^t^ k írdtar nuevamente ije los dito, porque susTOWislros-seAan«intíegayoTá' una''
bEJndeíía^perrvetsa, la oual, taientóas' tos sostenía, hari
paraWpertítyla'tolJfaiSiídfe La Época: ccü lociialéó • qíe está claro, arguye por lo general fin ,lo» deudores ,g4. —EstunísUo de^ TJrquijo, —FraneJíco l^fre^XJr^spOf raioiWds/ hiió notá'l-%"cafáncia líe'fé, iá atiotula
particulares penuria ó mala 'lé , y es en los gobiernos
hubfel» ahorrado'íifltílí?cnrííodivi'dY(Ío en i^os partes, uij sislenía funesto para el crédito de fas naciones; sis- —jSantos .^renza^.—Leoa Adplfp Laf§tt;e.—Benito falta de propós.ito y la yacjladoa.é j;^|e9f,t¡idi:uí<; re d e ' idj)sooí«fandelos.tE«B»í..i'') ".•i'.'''f'i ;'i.i-í-m'í . ' *-^)Í:de Ec'harri.»
, <
1; |E1 Sf,«|U9^fRiOsaiSsiSeg«roldo que«áSSad*ebtencia8 ¡ «
como las malas comedias.^_Jlo queremos creer que tema cuyas consecuencias estamos ya tocando por &es-jseyáa^
qotí^idepadí» .00*00 mufeirtMBvrtu8slrass;de SMÍ •'
el Sf. P^lderpo Co)laq.U»;rtuvicr9 ^,(sru«ldadda,Bial>^ gíacia en'fa^estrft patria. ^ ' - 1 "
•lodos éátós deféclos ^\ gj;. Posada. iH^crera;, y , |í()pio h
• •!•
ABIÍÍ;:
¡Mitad,
estuvo ayer mas franco que el Sr. Oiózaga, .>
gastar ^g^ gr;¡u9des facultades oratorias contra un in'mí)te'y emblema de sus aspiraciones y planes,, y,,,
,Nunca íe hat'puesto ch d«da'el'dereoh<4de'los ácrefeI.
•
E
|
SFÍTÍRÍRS
¡Roípsr jrecoaoeié quAjloí-Toeros déla rna- '
feliz cajd«.
doresoBi autor d«l arcaglo de la déndik, citando'Inten-^
í CONGRESO.
' como pagta y guía, de s^ conducta eft. todosjos ihígo'-l
.
y^ria
no
son
los epcfidao poder al(feiH!raí"0-Dooaell,. '
ó
la
anagenaeioQ
de
los
bieae»
de
propio^,
aconsejó
i
!La
mas
i^iva
íK^iosidad
yla
pa^OQ'poKtira
ttevaEl Sr. Cocllo fué, en todo caso, mas hum9Do, y
cios, aquellas eloquenl^;y'S^vfti?«s,p»lal»as; de Iréi',
y
|
)
i
^
y
hftltósífupbdQrfeüfésapaPdalidad
subiera
Sí M^ la publicación de,nn-}'i9^ld.9aretoj<el de 10 de serén ay«r áilasiribunas del GonffClso á utta'Tnultflud
levantó al Sr. Olózaga.
cito: omnia pro dominatione\^rvMUf^'in ^ ;
'
tiembre de 1852, disponiendo jjue el 20 por 100 de los
rlnea;
en
la
fracción
révsoIüdoaaHadéfpárlide'ábSo-'
áf personas, aasiosas desaberel ñnevtíiro^«e el
^>. .
De ^la.co|níl¡doa, e»enciíil des lo^-hombres q«e hoy
mismos, destinado por la ley de 1.° de pgosto á loa tejefe de los disidentes daba á la larga f aülirtüdíslma
Viendo que los bancos de la mayoría quedaron
™andaR,^^panan,
^egira el Sr, ;ílÍQS'•Rosas, 'C»a.ijtos báistaj qae vúocida en/1827 'pí»r' Péírfaírtído VIÍ, ii!|m-''
n«dor^8 de cleucJá amortizable, se emplease en renta
discusión del mensaje. '
> i i. •
••
desier^al puoto que tomó la palabra el Sr. Lafueumales
hay
que
lamentar
en lo pasado, y cuantos.pev ' t s(| probarforiuhaícbmraigu'hijüyy krcft'ódüráfnftó'slépública, para que á sus productos se les diese el destile, ai^n¡fes¡l,ó ^yer que pensaba ser muy brevís; pero
La posicidó del.'Sr. Rios Rosas era ayer dlficil-, lígrosi bftj mi^ oqnjurai' y prevenir pwá'/1<» fataro;' lciaños, que ha conspirado y conspira aun;-y que, '
no que esa les señalaba.
l4 veztóHit}U©?k)3fiAifc9tros.to'óotebvy siií^cídá'siQ '
que pijesto qii^ lodo el maado hgi.v de SÜ discurso
comprometida, solemne. Como orádoi^, terila'^üé tuDe ^,lf,fii)0,^jcioopsen6ial.se;orieina,l*|)eP|?étüaneliaA Cóite» Constituyentes 'respetaron áel mismo moi
q|e»loicre«n f^ligroso,!iejer<5éí80*»o éllcfeutitt BócivÜi ''
cBar'Con el reciente íecuerdo'delMbíPybdlfodis'-' gación., la lira¡idcz,4ai.W?ap!»á.*ad!(le.e9t« gafetaele,
como de un nublado, hablada largamente. <
do en 1^5 y 185é todo lo pactad'o en la ley'Áe 1851'; y
ykrande
influencia, prest:5ndolesá laifeíííBl'iser, lá' "
cijrso del Sr. Oiózagía;x»mo'hdttibPé'de ESÍádoi,'co- ,y s" HW<5^!y!%tal P,oslerijOde;«iia!iiláráil{)*\hió«iibres
Este terrible anuncio fomantó la deserción en las esD que si alguna vez pudiera 'escatitúa^se á los acreei
vfalicíad
y'el!sv%op,
qoo eHdt'-por'slí'ndíáéiiétí;'En '
ntio
jffifeée
haruBíoo'libeiratiptíáiMVECy
cortió
'tíótíítiíkb
que |^,sái5>f§n,.,ti|(?^ ,fdlgi».',l«i,^ier(« ¡ó ;p
filas ministeriales, y Fr. í^uhdto/ ttftis avnlgode' dores su dearecho, nunca-esto'htibiera sido mas dÍBCül,si|na,
según
el
Sr.
Ríos'RosáB]
#'ítetáált¿ibiÉíété'ea^'
dé
laiT]jcg;atÍTa;'h0»iian(iSn<{í<iU6
hífoei'
lá^'éiíáétli-á
íiig''
separadamente
algim
valor:
p^m
»iifKÍeado.al-actual
predicar eo dásierto «¡M en públifeo,' enhiló una* lai'^a páble qUf) e^itoooes,-después de una revolución', exal^
una
entidad'stó'«id«jiq«e;8lí'áb«)IÜllstnd''híntoág'i-'
eát»
y
desciíl«ir'Bli'raeloid«iíHS'dfl¿trítJ&§;
•áítio'
tenia'
tE«la$
las
p^sropies,
ficbatistoiel
Tesoro
y
amenguad^i's^
gab'^te,
l^B'i^j^fPí
SfifdiWtru^Wienili^e
áíS
oomQ^m'i
é\üofmsiívh''capiMd)a: ' "'
oltiísaéoj una especJe-Tfe'ifOtónSWW; étíwjétíal'lbfuiide ^' ^
IsB rentas, coQsecAjieQqia inevitablO' de todo trastorna
a^imiSBiar ^uea£ínD«i'y<si)tiLir4a« WtibS ^ [írftídfpidi' dostru^ei^ )p%,^érffliqoS'ipowtivQa;y nétaUvío» de t»í«
Háee'Bien 'fcl St*. Mueüte' en prcfprir 'la soledad
político
ó
^oQialj
Y
em
ecnbajrgo,
aquellius'Cortes
y
tsiiespmlu'yal
cuaima mOViffliefllb el absólütísmíc^. '
e4 q'tela.vsíípaadBra .<in}oB'"'llber'*t, iVno l^ea^adia','' misma serie, "y quedan r«dueádi9Siá,iiíeroi; El.'«(rio
para defender los actos de un goGierdo qiie choca, con.
aquel gobierno para honra svkF^i Po^isaeraron sus esDespués
de
la
brillante peroración del Sr'. RiW'fío-" '
p^econe^ida-y
trazada'énrssti
mente,
debe
dtJíteatrtíar
' valor q}>fi,tíenen,;e* uny^tar; pn^stadojielqBe les dáM
lodos tos antecedentes políticos Je $. S. ¿Cóiup hafuerzos á'mantener y fomentar el crédito, y al dictar
Seal
i,
se
pusoá
hablar Fray'(lle»níadio;'fpei^cFBftáío
y
apoyarse.
'
'
'
'
la
unidad
que
se
les
pone
delante;
el
que
les
dá
el,
bía de atreverse á pronunciar ^1 panegírico de San
la ley de 1." de m^yp de 1855 tuvieron buen cuidado
qi
iso
oír
lo
que
decía
por raasqutf éf se rtícbrififodate
general.O'Ponnoll,.Suprimidftlgeperal
O'DooneH,
ylí
Leopoldo, general, lenicüio dc!ai)te un auditorio nui Arduo empeño era el'dél'Sr. RittsRíteas, empresa
de espresar eií su art. 12 (jue el producto de la venta
vde
quBioa'teoyeaeBi
.Asi.seítertbiBéla'seiiíon'.'
'•>•'''
la
uni<3fft
Uhfifal
|se
disiparái,
se
aniquilará,;
como
:nori
meroso? ,
1
,1
¡igantoseá la de oicarv al-<lftdo de nnct ^entidad real,
de los bienes se invertiría en la amortización de la deu'•nada
ó
ensueñq,.^^,,;;
,.
;<••
;
•
rqoc*ín clferlo naodlo ledebefwl-sér, aiWi<iuB'íéná desda pública consblidíida sin preferencia alguna, y en la
Parece qu§ á prppuusla d^.L qiíjiislro do. Estado, la
amortiÉsacion mensual de la deuda amortizable de prihereda yidasiwnoce, lá unltífl liberal boedá', la conPero 0,0,^,esto.io.peor.Lo'peor e? que esta! uní- ;
conti!>ioa direcüva de la mayoría hará las ges>tiones mera y segunda clase, con arreglo á la ley de 1." de
f(*tn* <5on K1 perfecto arqucítipo dó''el!ái qoe" guarda dad jip,)3|j»|li^nje^u^ paosaii«ietíto> oo'es ana idea, no
^porlun^s para que cuando ,vuetv.t. á tomar la pala-»
PÍESiDÉííái^ 'ÜÉL'^ÍÍANSEJQ^ P ^ aíjpq$?pós. „.
agosto de 1851. Son notab'<8 las palabras que á este
en el alma.
• •
-.'.•*
es una doctrina; es la ambteioB.ies la voluntad de
bra.el Sr. ÍK SaluraiiK»,, no qucdwH díSierloá, como
S. .M. .la RjEiBfAaücsifa. Señora (Q-rD. G^),y,.su
píopósito empleó la comisión en su dictamen: «Nuestra
¡Aunque solo hoMera tenido el éfn'tnentó orador
un hombre. , , , , ;
, y , : • : •- .
oi%iis'ía réaf fkrtiífla coiitmüán'^n ésta.córte sin noel vierne^,' bs bancos de la defecha.
revolución, dijo, padece e^cí^geces oomo todas
pero
esta gi'ao dificultad que vencer, hubiera dado venLa guerra civil terminada,^ <hizo prevalecer entre
vqd.id en su importante salud. " ' ' ' '' '' ^
Se asegura que, con este motivo, varios diputados
mas justa y soverametité moyal que la mayor parte de
ciéndola, como ta ha veócido , la prueba mas clara
nosotros el predominio militar, y la consiguiente
miniáleri«les renuncidiráQ su cargo, por no resignarse
las que lo precedieron,'respeta y estií pronta i cumplir
de su poderosa elocuencia; pero había asimismo otras dictadura. ,Ij¿)s partidos, para ^canzar elipoder, m
I MINISTERIO T)EfefilOIi4:'Y'JüS'ÍÍGti:
á sufrfl"cl tormento á que quiero condenárseles.
todas las obligaeÍMBKB'^Así es como se cimenta el crénó menores difltiiltadess y las h,a 'áíllanado ésa elovalieron de este predominio; .mas al prevaleccrse de •. 5
R E L A DECBKTO.
dito en un paí¿'cumpliendo todo ló prometido por los
cuencia qneetí éPse admira, rKycOÍftiOárt^'éiíjgónío' él, se.^omeiieron.á «I,, .Lps .progresistas mandaron
íVengo en trasladar, a<icediiáttáí>.Siu8Íl^^os,-'ádou
Ayer fué recogido el riúmcró de El Pbfteuir /fregobiernos aati'riofes, oonciliándo el espíritu dé refordf decir bien, sino c6mo espreslon' ade«iada y fbr^-^' bajo,^ dictadura de EsRarteroj. bajo la dictadura da Sí^lvador Broca de Bofarull,..¿íagistrado dblaandien- •
fico,'periódico deinteres-es materiales.
ma y de progreso con- el respeto á los dereobbs adquium sensible: de un ciaráeter eaér^co • de un reótíí Nárvaqz, .19^ moderados; bajo la dictadura de O'Don- cii de MaUercajá; la plaza de igual ol^se que en la de '
ridos.
En estos tiem|K)^, nadie so libra del lápiz rojo.
juicio
yide lascréencisíSimaS'prDftmda*.' '
nell, mandó un momento, segúnelSr; Rios RosaSí . ZsBragoza sirve P . Pablo Marroquin; y.á. este, por conPues bien: lo único que piden' los esponentes es que
v ^ i r al mejor servioiO; 4 la que en,,SH,Ponsecueiioia
! Lotí distfuisos del' Sp. Ribs Rosas'M'ó 'sor» fíóridbá, 'el partido de la unión liberal. Pero, á lo que parece;
EnlHe los muchos diputados de 'a mayoría que , se cuippla hoy, que estamos en un período, normal,
resulta vacante en la referida audieppi^ de Mallorca.,
esa ley que ha sidp respetada ea ciroanstanoias azaro- ni atildados, ai amenos, üi^belló'*: 'pafó son bftó4ó:^ y" estas dictaduras han renido á'rápida decadencia y á
felicitaron ayer al Sr. Ríos Rosas, después do oír su
JDadó en palacio á tres de diciembre de mil ochociensdnprafundosj^á yécís p6í""el péfiSamienfe qué' re- mayorif)CTversíóhl Si'áñtes se ejci-cían én nombre tos sesentáyútto.—Está rubricado de ia real mapo.—
magnífico discurso,, vimds álosSre^l Coéilo ^'Cáliíe- j sais y difícil.es para el gobierno de la nación.
velan, y cuando no, por el sentimiento, por la pasión^; do uaypanidff, de tinn doctrina política, hoy se ejer- El ministró dfe Gracia y'Justi'oia, Sá'ntlágó Fernandez
ron,(3ollaates (l>í Fernando) esircébar entusiasmados ' jDice el art. 16 en su número 1.*, que, se destinan á
l4 deuda athortizable todas las fincas, foros y deriechc^
qae
los dicta. El Sr,Hió* Rosas no ^ lih orado/di-" cen ya áin doctrina', sin partido, por lá mera volun- Negretél
'• ' ' '
"• ••'''''' ^ ' •'"
la mano del jefe de los disidetites. Pot esto, sin dii- 1
partenéoieutes ai Estado como mostf enoos , y los protad de na «oIoHómW-e. Asi es' la éitüacibñ actual,
serlo;'peíro
es'ua ^ á d r áfiaéionfado, ora patético,
da, seiasegurafea aoodie qué \a unidad perderá ittW- '; , cedentes dé tatítebS'y adjudicaciones por débitos.
según el Sr. Rios Rosas la describe.
'
..,. DESPACHOS TBLE6RAFÍC08. ,
chos ceros, y de los mas redondos; pero nosotros, ¡ Pues bien: los esponentes solicitan que se cumpla ora terrible hasta rayar en la stibliitiídad. LteVá
Londres 12.—Segmi noticias traídas por el última
adem;ás
eñ
su
alma
1í(
mejor
l'ígictf
de
•tódas,
<
a
del
Pero
¿cómo
ha
dedurar
semi3jánte
situación
sin
aunque poco esperimeoraílOs eti las cosas da la poli^ í eáte precepto: estO'es, 'que'él producto de lo vendido y
vapor de los Estados ^ünifios, -el gabinebedl» .Washintica, sospechamos qu'e tos ceros quo «,1 Sr. Ríos Ro- realizado SU; emplee en ia amortización. *'
' ' '-'• propio cooveáciinieatGiqtwtiéae'sAémpré'toúchO'de • violdnctó? ¿¿CómO'fta de'dilrai-? CóQtéiníjfaQdo las
gton hasbia env|ado muphos buques d^ guerra para vicontagkíSOt,
Iftistaí'íftáSdd
d
Sr.
Riós"íió^áá'ny'nos
'bpuastas tendencíaé qiié' élitro si ise dóslrüyeo y
sas tuvo la galantería io colocar a la derepha, con- '
Dioe el mi^mp articulo en su número 2.°, q-Oé se de^-'
sitar el' 2Ve«í, y coger los despachos pfiqifles y l a corconvence
dé
tel'exactitud
de'lioqae
dicfe,
ndácanVén-"
'squedad'en reposo; •Comémpófrtzáttdo cbn las bplnioñe^ reSpondáridia del Süi-;,pero el comandante del San JaUnuafáncu su puesto, es decir, á fq^i^quierda.
, tinen igualmetite á la deijuia amoiMiizable los realengos
ce de íjoeél eStá convencido;''y teto pone éü sü'spá- •mas éonlradietorias, que-'pierdeh'^lbaó Sií vSlbr y Sü
y baldíos, á cuya; enagenacion se prpcederia con la escinto se ytfalíüiitóá.póíleráadóse Üe los cotn'igkríbsr
capcion y en la ^proji» que ae e,stable{4^r*,en. una ley,. tabnaS'tfatorldad é ittpério. -'Áái es que a^éniis'iShifuerza: al alOMKgamarse y tónüirsé'.'Eocerraiidó erí
El Sr. Moyyno ha prfisentadQ en lu becrataria del
Be áá^üra'queel gobierno'des los Estado's del áur
pezó ayer áhatílari todo& guardaron tin silíiífciofts- "un equlyo«>i#!eüe8lió(o de Ro*ito&', l¿ cuéstióa'ifláiá prepara un Memorándum á Europa, probando que el
Cougres,Q UQ proyecto de ley sobre matrimonios. Por . especial, para Ío cual sometería el gobierno á las Cortes el oportuno proyecto en aquella legislatura.
peiuoso. '
' *''
>
grande!qu»liof|ys«iiagíta enel'ftjundó: y haciendo'dé 'NbrlB'haiSempréhdído ansguerrít sin tS'mitfd razonaíí'
él se dispone que los varones no puedan contraer
P'ueá'bien- los esponentes solicitan qué el gob¡,eino
la
cueslkweonátíiayente, dé la ciiestítín de refbl'tñaí;
ble, pue'st no podra <!oaqiiiátai;, los Bítádds Separatistas.
.
DIjó
prifneró
que'
jámáS?
'árráíjcárá'áe
sú
alñilr
el
matrimoaio antes áó los 18 años, y las tíoihbras ím- someta á las Cortés'ese proyecto de ley especial que
El Su;: propone un^ sepapaoibn ftmiatosa.efreeiendodas •
afecto,'l«'\%iieracloft' éfifé «t^ ítooó 1e'iéruhdé,<6'hizd de l^cuesttoo-fliíiis Vi-ási^dénláldé íá política'•Inteles dQlos 15; h» varones necesitarán licencia de sus
debió presuülar en la legislatura de 1851 y no ha prer i o r / *togbgrifo^íie'SÚ descifrará en'su dia; tiü ehig- '•condiciones que reclama la civilización moderna.
'una'
ardidÉAo,
iiobife
y
§i'B(^íí*prbfeá(ía
d¿-ámOr'iá
la
mayores basta los 23, y las hembras hasta los 20;
sentado todavía, á pesar de haber trascurrido diez '
monarquía y á la dinastía: peí»Ó'#í^éi*-c?«no'Íii^-' ma ^Béeá actual gabtóéteno' Sé atreverá áüack ' á ' 10 Elrrí/»»«í di9.e<jjq^elim^nflajedei Linc<)ln.ídel'>2 del'
la lieencm han'de'darla prifneró el padre; á su falla
añoi»; y ijue el prodi cto de las enagenacioues venga á
I
nénalgHiwjs, uoa censura implieitadtíldfecüiíso dtel^ descifrar. La esfinge del miaislerio eS al revés dé la' corrie^te.depídiré (Íe,laípaí,ódelagnerr9, 1' ÍÍ
la msltírfe;'luego, el abuelo paterno, y en fin, el ma-. aumentar el l'ondo de amortización.
Ei^^nt^grJ^^aafig^r^
q»e^!sef,de^ara
.Isrgner-'
•;,=
f*.. Q!óis»ga.. iSii hüh® en -aquella> proteo* algiltiá de BdlpoiSItedé^tíéjtírife'éOnviUii, ha' móüé'slér'qiilé^
P.orúUÍWO, el mencionado art. 16 dice en su nún.elernói' los incluseros' necesitarán la liccintíia do los
ja, íngfatfrra r.ec,oinop^rá, ^. l()|i, E^,ta^í^ d # SuE^,»har':,
•
=
*' '
patrones ¿e los ¿stabl^cio^ientos de quejaooedao; ro 3.°, que se destina también A la deuda amortizable . censilra^iliué centffctosJqcre.eqaivocaftilosSíÉUtBíieü" ' 1 el én^rasf nflseaftlare.
ciendo'ademas alianza con ellos.
•
, •
el prodiiGlo total d^l 20 por 1(^0 con que se hallan gra,-. t(|s áet lealtádicon ias aHes #él' «ortcs^M»^ í i ^ t ^ lós^ ' Atüartodbestautfiótf tíbérál úegíaii4, al'ladtf 'd¿ '
los casan!),ie^tQ§ ü^^podi^án yerificacsje, en fía, Itasta
Pe^th 12.-r-í!l yice-palatiíjQ y.,elp(^¡s^rio de .se-j
cuatro nK^esd<;^puf?8,de la ncgalii/a dC' las personas vados á favor del Estado los bienes pertenecientes á qüe.^JttíttndéUilai,m«éi^B4ia(COB*la'isenja, éOntftt' este páttM* ¡ki'iiéim, 'bOtísi-rtiyó # Sr. Ribs WMs sú guridad áel contado de Hebes,,,han lÍeg|^o a¡qijií o^in r
' los que ;«í^n> K[Eei'.flel;tiliquQ,=eeroplace,iá«in en lo- uuiMí'«biért*4d^l; fcam» iidíc*'partido p'i^lblé dé'gb^
que deben por la ley dar la licencia.
i •• i los propios de los pueblos.
gadós'dó'Cádenasparáser juzgadas 'por_ el 9on8ejo de ,
'
y lóá espteentes solicitan que se cumpía ig'ualmen- que ipujdftjaearcear líbales ísftíi'coeafoyiqueál'qüe
bierno en estas circunslan jías. • ' ! " • • "
'• - - ^ g u e f f l á . * ' '• ' ' ' " • ' " "
•' '" '"''^
' ' '
•• • •
' ,'
, te esta proniesi. t o s tenédfó'res de deuda amortizable
avi^ iy.|*eviener foltea!tes speiigrosl lÁktíkiqvíé'áé^ • PaíÉíBaíQar élter^É^í, y auft|tóra abrir las áfáü^'
Berlín 12.—Dicen de Varsovia que el administra-•'
Dice El Reina: .
-, .
'
• creen qué- leb pertenece el oapitil del 20 por lOO de
disgii|slan-y.'basíta.dO!'que,se!<aFmo sct íwif síHBértdafai Vjas y%(0arlos'»Óltac«'S^4rfaigado§'Biníléto' efe ktr idor d«*lííd(ái6é*s^ée iflSga á piedir grádíá'áéí lái ri);oí-ofei'
«iKk >itviaicÍQ^ de la Hacienda fio puede ser mas des. los bienes de propios, porque así se deduce del testo
• ' '
•-= '
'^ i
abogs^a: el t|3»arQj>úbUca, satisface puntualmente to< '
•'
'
edifidtoi'ieowieíiía «t SK Rlí^íROsas por arftlhtóSr' de' fseptehcMJaDzadft dteltu'él. '
legal' y de las diacuaioaes ^ae ¡preaedieron á lá apr^oba- portílt»vi|ii&entoy descaro,
;.
Han
sido
enviado»»
Servir
tóoiaa
soldados
etí
el
e
j
é
r
''
das ^us obligaciones; el ^bierno.cuotple religtoaameoiHedía tsln.-solaímoc dbcíaraclon, pertioente y oon- cuaj^éeticampodela'pblftíicadambdsr partidos,t)rócwn de la leij tubre arreglo de la deuda.
cito
40
personas,
entre
ellas
ocho
sacerdotes.
Siguen
te lo dispuesto en las leyes. Estas ó parecidas afirmavcnicnte después de las escenas do anteayer, v de gresista, y liberal conservador. El Sr. Rios Rosas t^mmm^mBjtaé^rim^-'amFi^
!
Pero aunque tal sea su creencia, no quieren pedir
- " ^ -' -<^' ^ -^^
''^
ciones, desnudas siempre de pruebas, las repiten á camera y segunda clase, aou^en llenos de confianza i
Congreso, impetrando su justicia para el cumplimiento de lo pactado'en la ley da 1.° de agosto de 1851.
Esta ley esim contrato sagrado é InriolaHle: la p r o mesa qué en ella hizo el E-ífalo A sui acreedores, í m poBJéndples en cambio grandifu pérdidas y sacrificios,
deb^ cumplirse estrictamente Por su/faltsi de oumplimionto estamos amenazados de que se nos cierre un
mercado que ha contribuido y contribuye poderosamente á la constraocion en nuestro país de los oaminos de hierro y al establecimiento de otras empresas
existe un eseeso en el producto del 20 por 100 de
propios, desde el año de 1851 hasta 1Í57, Tlóa 6 m i llones presupuestados, y no se lleva este esceso al
fondo de amortización; cuando los baldíoa y realen-,
la. jímm^kSiérm^m^'^r^y,^''
' CRÓNICA pÁt|^isiÉ!iíf
j
da pj^jrittgUWW, oSaioBos del gabinete, tratando de
aturdir, ya que no puedan convencer á sus lectores.
I
li^p^t,Q(i^ la-tüeuahtoa desahogihJa' de la ECacleh- ^
;
dajiI^.dewBacílotaute elevada á una' suma fabulosa, e l '
'
rccttrgO(;i%vt»ih*- 'sui'rido el impuesto de consumos, el
¡
desacroMoiitMCOBcebibleique' sahA dado ''á tá renta del
•I
pap^íWVWíí lo*gMfOS Bobr» protinoias f los Bnlprés,
titQs,,5!Oatíat*do«r«cfenJdemen{e; 8oa pruebas indüda-i
j
bles de lAASe;tad« gestiooi de esto importantísimo dej
partamento. En cuanto al pago puiltuUi de todas las
i
obligaoi^j^^, lo» deggcaoiaiios contratistas de obras púj
blicas'p<}dr^ua£8pojE»der por nosotros.
I
Que el gobierno cumple religiosamente con lo dis- I
puesto! en las leyes^' ^s uaa de>las ájuchas afirmaciones j
aventuradas, cuya inexactitud demuestra todos los días
la pfeasA independiente.'
Los'ten^dores de deuda amortizable son esta vez los
encargadc|8 -de revelat que no se ctímple lo dispuesto en
la teydet:" de agtfsto áe 1851, por medio de la esposiciod q i e «opiamoa integra, dirigida al Cengreso y á
la comisión inspectora de ia deuda pública.
E!ti diSlátotaá'ocasiones nos hemos oeijpado de la condudtaqtts'liá seguido 'él gobierno en esta cuestión, que
tantbsyiáií'severos cargos ha vialido al miuistrp de
Haeiéüdia, aM de Ibs periódicos nacionales oon)o de los
estránjércB,'" y qüo ha sido causi de q'ie se cerrara la
Bolsa'de Páríá k la ootizticion de nuestros valores, coa
grave perjuicio de nuestro crédito, ,
La (|.óu(íá amortizable, qu^ no devenga iíiterés algu-i
no, y que por lo tanto no ¿iitne mas recurso que ia
amortización, no Se amortia*, sin embargo,, porque el
gobierno señala un tipo para la subasta, inferior al que
obtiene en la plaza. Ademas de ^ato, no se eumple l e
dispuesto enla ley de 1851^ qtje co^isutuye un eontrato bilateral entre la Hacienda y sus acreedores, produciendo^ do <\»te modp tiueja» y reolamacioaes que r e dundan en nji^strq descrédito.
La esp,ojici|^ qvjq á coofinuaoion iiisertaiiios , tan
dign^ coipo B^epvirada, hará oomprender ápucstros lectores la justicia con que íe pide el «uoiplimiento de
coiripromiso^ sagrados, y (ju^ ningún gobierno previsor
hubiera fjesatepdidp.
hoy-nfida que pueda parecer dudoso ó Cuestionable, y
reservándose hacer valer en su dia su derecho al capital,
soliiSítíii hoy lo que nadie'pútíde negarles: la reptficór-'
respondiente al 20 pbr' 100, y la sbí/rogacion de esta
hip<ft%ca. Poi"inufchió q<ie se agucé el ingenió para violeattir «l.espífítu y 1* letra de la ley, no "podrá negarse
que por su art. 16 quedó especialmente afecto á los t'enedores de deudía-ftiortizable el 20 por lOÓ de propios,
y claro es.'por'coñsiguien'te, que una vez vendido? estíos bienes, debe quedar con el mismo gravamen ó afec(ñoB "jsu- equivalente, aplicándose el producto de la
renta á estinguir la deuda amortizable.
í Hetíuerdei el Congreso que lo que piden acerca de
este ^ttnto los esponentes es lo mismo que lo que hizo
en 1852, al intentar la enagenacion de loa bienes de
propios, el autor de la ley sobre arreglo de la deuda;
por eso mandó que el 20 por 100 se emplease en renta
pública, para que pudiese servir de garantía á ios tc¿cdorés de debda amortiza'blé.
'
Ottand* toque se pide es notoriamente justo, es
cteioso todo comentario: así,'pues, los esponentes no
quieren añadir Una palabra mas, y se entregan confiados á la justicia del Congreso y á su celo por el crédito
público. En c&ta atención,
i Suplican al Congreso se sirva decretar:
I." ' Que el importe de los bienes á que se refiere el
número 1.'' del art. 16 sea destinado a la deuda amortizabl'í.
2.* Que se enagenen los realengos y baldíos, y que
el producto de las enagcnaoiones sea aumento al fondo
de amortización.
H.* Que el valor del 20 por 100 perteneciente al
Estado en 1<;>S bienes ¿e propios ya vendido? ó que se
v'endieien en lo sucesivo, sé invierta en renta pública
(inscripciones intrasferibl^s) la cual quede especial*
mente afect.i á la de ida" amortizable como lo estabael 20 por 100, destíníndose su producto a la amortización ppnsual, con arreglo á lo qué previene el ar«,
ticitlo IS di! U h^yñe 1." de agosto de 18(>1.—.V»í lo
efepéran de la justicia líe las COI tes.—Madrid 10 de,
daciembre de 1861.»
^ El objeto efe los esponentes al insertar esta esposi-,
cion
es buplioar á esa comisión tenga á bieii cooperar,
«EXGMO. SIÍHORji?lE^PES,ie D? XA «,0M1S10^ INSPECTORA DB
si lo cree justo, para que se lleve'á cabo en todas sus
I A DEUDA PVBUCA.
¡iartes la ley de 1851, aplicando al fondo do que trata
quje Suscriben, por si, y f npcubre de varioü t e <4 íirt. 16 todos los flerf ohos (¿ue perlcc^Mi .. i<' deuda
nedores de deuda amortizable <ie primera y segunc a
clase interior, han acudido al '^onj,.!o y al Co .^r-.- ^ de ^ 'i'Uiy. b'c r\i ¡inii-r.ij -Círu'id > < i.is >.
Cuando l,i iiirij^iír pane da ios, bieijcs que se -menlos disputados con la esposicion siguiente :
(iJi^ Congreso.—^Lo? que suscriben, por sí, y A nom- cionan "M o! • 'rrafo primero del art. 16 c«tán vendidos
;;
so han dadOj tpífp p^i ^r. j^ios Rosas, eon ít^pideí,;
pero con notable tino, varaos puntos de la politioa do
cfeití f;í*bínele,.
, ••
•• ' .
Dejando el ocuparse oa la ouoslíon de Marruecos'
paia cuando venga é^laslISirrefif cíl'iralado ele ¿omereiab* pocú' 'celebrtiae/ffiseurrfó''1fsÍ!ra'flhenteso,br*
l'os^asdillos dé' Kátíi»,'WSil'ándcJáb'Wuii fíartidarío'ae '
los'- cnsuénó<! "de Globérli, ehsucfios desvanecidos
acaso para mucho tiempo,.después,de,la tt\UQf'tede
Rossi,,'del 15 'dé'mayo en íí/ipoles', de la rola de Novara y dp la interyeneiai^dq las cuatro potencias.en
los Estados Pontificios; en la cuestwta de iVléjico sostuvo la, validez, del tratado Ahuóple-rMoD, y ensalzó'
la anexión de Santo Domingo como un .oconteeithlónIJ próspero y lisonjero,'como «un ttelsiob dé niayor''
engrande'élriMenlo y hónr'á de Éspaií'a, 'si ef gabinete
nn la piordfe' ó dasapro^^echa con feus desaciertos y
cortedad de miras, administrando mal la nueva colonia y sometiéndola, no solo á un régimen del ,todo
militar, sino á la dictadura y capricho del general
Scuilana, que inaugura allí ia dt^mínacion do la metrópoli fusilando á sus cxtmpatriotas.
Estrañó el Sr. Rios Rosas- lo reacio que ha atidado
este gobierno, que de trní donstilucíonal presume, en
presentar á las Cortes los presupuestos del áfio que
viene, y lamentó el mal cstadfa dc'la'HacIebd^,
Habló luegtí'él oradói' de la imprenta, deseándola
del lodo libro en la di^pusion do principios, en la región serena y elevada de lastípigirina^«i bien reprimida cop vigor para que pp descienda á los at^^juesi
persoDiiles; ui?a, itnprep^, p^ sujeta á ,l_as .veleJdosüft
oiprichos del liscal, sino.á l^s «oastantes y iju apasionadas determinaciones de las leyes. - ' ' • '^
Pasando luego á discurrir sobre los sucesos d^
Loja, iaiauloriizada'Wí! del gtefe de los disRléntSes'cstuvo en perfecta consonancia tiotí íafdd'tOTds láfeó'po-r
.siciones, asi en fa pretísafeoríiOónla tribuiia: dijóq,ue
d gobierno no supo precaverla íiébelíon : queja 'di-»
vina ProViáeocia, no la prudente' éiíergí?^ dé I%,g9-.
Ijon-antcí, logró áísiparlá; y que en el castigo.bocho
mi liis i|üi.! lumaroH parl^ en ella, so ha procedido de
lili * iiia i'^io, jrbiliaiia , nplicaudo la ley del 17 do
abiil, qiic no debiera aplicarse, y aplicándola erradameuto. Pidi<kenliciiicot!>ci Sr. iiies Rosas étp^don
París 12.—Especulaciones criminales han pertur-
restaMcadas^i^too {rag<(nen!itoiiidiii>pefSQS|r<de los cua- ^ bado I c ^ ^ ^ r á a ^ ^ f l ^ t M I ^ Í ^ e Cpaft^aútiíioi^la, pro4Í^- <
les,» wo««ei itao' der'deáeehaf i otrosital v8z:b6Bveog<s '' cíendo'un pánico momentáneo; j)erp.se t,OHiar,onjBedi-„.
qju&eott^^nrJst Dtteva<^>msg«stao8a<fáb(*ica.' '• '•
das eñli-gioas, y el orden público no llegó á turbara^^:
, Haca daí'oíto rpor cfertd, sapiisió'variSi Sdíá^'c! ea la capital,d^Tg^quip, r| pr. ^ .¿i;, / - , j 1 rq
tMArselliT 19.-^Asegurase que José Karam ha sido
iDgeÉtífetfíSfiádófi á i las C[íáT#'áb^(idíírif5s^^vétiíf'.
puesto en libertad por oonsidei;í«íion á Francia.
Süpltóft.-'ííftofííJalhítenttBf qlíe'p.lfé^^
jTurin 13.—La proposición'aceptada por el ministelísia'y''é"l Bfiéráí cónséryadór', fjuj^jda por tpM^í;to y
rib y votada e g | § j p f ) f | g ^ f | ^ mm^m^ím
«La
fracctónailó,'h^Y*'un^^)&¡sUo; ,y q^^
ppo||ef|s^a^'y J i depiOcráÜQ^^^^ hayrPJti??» uWqtrpg aiq- , C|raara confirma los votos del 27 de marzo, que decíarieron á Roma capital de Italia, y eonfl» en que el gagpmos ésto: .flc^trasncopvenimos «o el 'fraeeioBabtern,o se, apresurará á completa^ el armAmentOin^pioílJieyatQ,i,y^w^.jlo,flaisalOiqueconveaimos eb el frafe- nal y la organización del reipo y.á dar proteoei,oivy,
cíonamiento, no podemos creer éa !a solución de eficaz apoyó ,á las personas y las prppiedadea. La.CU-r* ,,
conMBiJÍd£»4.:Prpgíepi?tas'hay rayanos, donfinanftbs mará tpma, acta de las deoUratíioaeg del ministerio, jre - ;
conjla ütemoeraciatí'áModErado* hay, sobre lodo desde lativas á la seguridad púoliQa, á,la ej,eco^on de emplea- i,
lasprbdicaeiOBeisídeDpnosío Cortés; qué van á círa- dijs aptos, Tionradosy patriofas,, á la reorganizacio,i^da
fuodirso en el absolutismft.iy alióra 'y'feiemt)re há Ha'-, 'lam-agistratura, al desarjoljo de la^iobras públicas, de
bidoUnpufltijdé'ctolilaclodritro progresislas y con- la guardia' nacional y de cuantas medidas puedan pro»
ourar el bienestar de l^s provincias meridioaales.»
servadores.' <
'•
Puesta á votación esta proposición 232 dip.,ií.tados d y e , Lá HfúíionlllJerái' s'^fá acaso posible por este con- rosi s?, 79 no, y 6 se abtijvjeron de vo,tar. Entre los,qu«
tacto de dóiá partidos ¡I pero no es indispensable por
dijeron sí figura Ratazzi. ,
^
, ,
el aislamiento en q,ije el Sr. Ríos Rosas quiere poner
París 13.-^.4.quí se da gran importancia á la deciá los otros. La misra^ cadena, ¡a misma bérie de es- sión imperial de que á los decretos que graven el prelabone^ qtje ya de nosotros 4 los progresistas, pasa supuesto acompañe el dictamen del mipistro de Hade estos, á^los.de'íí.écíalag, y,de nosotros á los se- cienda. Esta decisión restringe Us facultades del b a ñ a
cuaces^»} ^tbsoiuiisuao- Los, partidos siguen vivien- Il&usman, prefecto del Sepa, por cuya i.uicÍ4tlva se.haa
haclío las obras gigantescas que h^n trasíormado » P a do, sime(DtafgO!,c: poi^que. tienen una organizaeioD,
iipaí^^tradkión,ít)aa historia, qae< forma de cada uno rís en estos últimos años.
Londres Í4.—El vapor Atrato que llegó a.yer i
djB ellos una entidatdqrfe ÍÍO muere. Sus individuds.
Soutbampton, trae noticia^ de las Antillas, quealcao-f ,
áf vascas los'tftdW^aílüébtes, podrán torcerse en la
zsin ál 28 de noviembre, en c^ya íe£ba.]|iada ocurría de.>',
^DCQiíla y'lcércai^ áafguú estrepio;pcíó él aloja,
notable. En iSan Tomás se decía que la escuadra espael espirita'del jiáli'tiáó'Viven siempre, renováadpse y
ñola había salido para Méjico.
,
t^sehvol^iéhao y meJ9íando su idea,,
"París 14,-.^El,ilfon!í«ír de hoy dice que los periódi
' El error del Sr. Rios Rosas no está sino en gna c(|s ingleses hablan de pretendid,o^ ofrecimientos de me(«labra. El Sr. Ríos Rosas ha,^i;nado esta idearen dición en la cuestión britano -americana, y de la partifia del general S'oott, piezclando ^ n este asunto el
sp última év<)lucl9'ü,,|»Qr,uti au^vo~partido,que Uanjf
nombre de Eranqiay dando.pormenores comple^^men4iion liberal; y esta idea no es otra, .sino la del
t4 infundados.
gjran partido conservador, siempre existente en Es.Turin 14.—El' Pangólo Act Nápoleij pretende qijp
plaña, y,;4ie|l,cyf«l,iel^. RiOft„áosQ&H.«s uoo da los)
)rge^ antes !e morir, reoorfoció c^ue np existen,elei^ias ilustres gefes. ¿Qué dijo-ayer al Sr.oRios Roentos'de revolucipn contra el reinq.^p ItaUa..
sáSf ;qii«v no^tfji^temQs DO^tros como de nuestro
Berlín 14.—;íi¡t rey se encuentra en estremo afecta- .
partido, á no serla negación de nuestro paitido?
d ) con el resultado de ías elecciones, en que el triunf*
ialiyez searcl Sr. Rios Rosas mas favx)rableque nosh \ sido para, el partido ayanzadcf.
4res átfaiisd'ornw; y «te duda ^ atraque ds justo^ que
'^arts'l4.—^bas noticias recibidas de Coshinchinai
áeñ6aaaí4-«f<*'tef()?ia'íén litf'mWftéüfó htetÓHtjo, ' «seguran que han vuelto á comenzar las hostilidades.
3
ffl OftimmémkfKhmisq %^J^éeB^]p^ ^M^n
Ufan
m
m
mmm
taUó iit íiisarMebiQa'd»,!»)^, 7. a§4f8>lúzo como la d«
Isturiz? Habla, pues, que hacer una fusión respecto
oratoria, que á mas de su talento, todos están muy hala Rápita, por laa<)CÍQa.4iTec^ j esolásiva de la Pro'-'
del símbolo de toíó^Vpíirtidd ctóítiítícitwfai'dé Espa- bil|iados al uso de la palabra. De esta diferenoi* Ijairiáencia.., '
' '
' '
oia}i al irde fuera de aquí los órganos da la oposición,
-fia. Pero el partido progreiista, ¿poli* afóbpttit','para
CONGRESO DB LOd BIPXrTASOS.'
íTerminadá lá insarreocion y publióada l i l e y d é ' Siompaginarse con el midacado, la "Otjnstitttcíon da
y i|os Ip advertían haie tieuií-), con razTU resp'loto de
mí, no da los OtíoS individuos de la comisión.
pRE&iDEiiciÁ DEL sEÑoK MúA'aES, 'i'icepKE^Dtini': " ' ^Wú; el g0bi«ra«:Mm3<íó'á 6ilft./;>'qiúeM 4¡ A los pri- 1815? Híibia que hacer, pues,na'nuevo símboto políti_ |l.lent4ban'ne,"sin embargo, algunas otras considerasiqneros hechos-ea tí capapí»? ,í^ó; i IpsJ^onnbpea desco,
una
transacción
entre
laCo'nstrt'icio'ide
1845
y
la
E!stract$ ofioiai de la stsion celébradc^- fl u'a 14 de di- arpados que,e3t»bjin en »us C4stas,;y que par decenas y
cimies. Una era el oonvenoimiento de que no e? lo_
de
1837
Tal
es
el
oarioter
del
acta
adicional.
ciembre'di 1861.
•
•'mismo la oi?.itoria qin la r.azia,qna no son las meiores.^
peptenares fapron & los! palabozos.
Habia en la Constitución le 37''UT^ artículo c¡ue manAÍiiérta á las dos'y cuarto,' «3'leyó y fué'-aprobada '
causas las que d^fiondan loí mejores aboí^adoS; y otra
Jpañores, la leyde'áíáít, add" ouatído estuviera v i daba que los prasupuestoi se presentaban primero al
el adta dé la anterior
'
• i1
era qu-; los oueblos, al^'Ciionados cort una lar^^^spé'^^4ité,'''ti(i pedia «apVioaiisa, porqtM~8er,hizo ea eircunsCongrtMo, y en CITO dfi dlioirlanírta píravalpiiesfíla-opiriopcia, si bien muchas veces 'i", han entusi.iSTiádo con
Quedó sobre la mesa ni dictátúen inoiMrDitendbi-la
ciis di&tinta*, <c(ute 09 puft^n,djw;s9,h»y, y. «reo adepíen'de este oderpo. h\ Con^titiloioTí da 1815 suprimió
lo|arroyos de una eliou'írioia aventajada,'han conoqiaprul?agioB de) a^ata^do Tremp^ y ^ 1^ a4a»iíiioq,, d» don mAsqu9.e8ti;¡íerog^pop.,eJ,,P^^is}0<p<!na,V ,E|§ todos
esta ^ewuuda pirte. Prevaleciendo siempre .Aa oiinioi
do'que no er^ ^s!--) lo Í(U» i i h I ÍTU- } al país J J I S P ' ^ ? Salvador Ma,lijg'\ej.
^
' '^
^nffidqs, no rige sino cuando'se ^p^da á un,'detern)iñado
del Congreso en materia de presupuestos, no habia mas
blj^s profieren ya,lis obras á las palabras; suceda ya á
Pasaron.'á ía ¿omisión las'peticiones'prásélitadJás e t
'háohó eacepcíbnal'. t)e'mUííefr* qdéla'flituaarOtt en 'que
que una O^iraaTa i'tnicí para esta leyi El -sistema de la
lo| pueblos^con'los buenos discursos ló qua'oon los ár-.'
secretaria desdo el dia 7 del actual.
' ' / -ri|e-l*l8y*!ah*ílfe8reso«p8i0ttsrtí'-<r i h •Gonstitnoion da 1845 daba el mism:! resntfcado;4>orqu3
El ür, FALCES: Pongo es lá mesaiinaeBpojnQi'oii dQ.'-f jEsta ley tiene dos partes: en la una hay un procedino hay 'medió -dé ídsrtlver reí coriQicto-. Pnej bien: el 'bí](lQs;qU'3 m prefieren los q.ie tienen mis lozanía, sin*
Tariof.^yjCVDtamientes^de l^itera, pi(^adg larevopat^on.,, ,Mentó. L^ jittrJ8«li«Í3mii(!»i4ina«Í9««)4j^iMgika generaÁ;
acta ndioibii*! qijiso e3(nbii*"er -la igiialdad hecesariii ' ac^iellos que, vestidos con paca hoja, diin buenos y sao
•z^ados. frutos.
de la concesión del causal do Tatu^rite.
14J*¿"}d»Bpj[j, «úlitfir-^,la eioapcipí»» Hín oasos concreen el sistema bioimír«l,íy diio qiíe ouando no hubiese
JTambien haa aprandido ya loi pueblos lo. que puetas i^detemmados és'soUmenié donde lá ley establSconfonuidarl «é'(SS'i»iRÍesft4 los preai¥ipiji'wt?3 anteriores, 1
Ó^DE», DEt DÍA. '
cáel déáafSeW'da los aó'üsaiti/á; y eii'é¡s6s-ca'ícM».'*e há
* OtrotaTtíoultf del «ota adicional,dev,(H7Ía 4 las Cortes,- dan dar de sí las oposiciones; y si no, ¿por qué habienFetician^a.
' dimo'irlrálcró a'4(f(4:k«M ltfi«rid(Hlciau4e mi'm hallaban
la íaonltad de iaterveoir en los matrimonios de los mott, d i e'nTa Oposición t^n^oí Démostenos no loaran conSe aprpljacon los dictámenes sobre las «e&aladas con
la inmensa mayoría de los sentenciados.
r , ,naroas, prescripción importantísima en este país.
. ¡^ mover á los atenienses? Porque bajO el gobierno qiie
los números 166 y 167.^.
" ', " ' ' , ' ' \
' ^ JEl gobierno, cuando se lai>a[fieiH3)j,í3í^^0)^p7r &s,tp,
Y véa^^ ojómo el acUadiploníil.v^U^ alg.0, „ ^ • sienten Saben que no ha de vepir ningún Filipo, Hé
aquí, pues, las ventajas que me alentaban al verme en
OonUetCicion al,discurío de la coroni! '
há evadido el cargo diciendo "ap,i no se mezclaba en
A«<_el partido al)solutí«ta oofiio al d.eijiocrático, vieite puesto.
1^ átribuoloáes dff loa ft'ibánáres."''3'é'l8 éD'ntesta ^que
Continuafldo esta disouáionl dijo
rea aisíaáos.'^'Entre el partido deníocrát\ca y lá fracción
Paro al Congreso comorenderi lo difícil que e4 Uael trlSuitiilBft'jírámo ha éstabteotáo'haá'jurispruden- .pura que aquí se sienta hay un aoisn^i, y otro hay enEl Sr. R í o s ROSASí Empieaffiái disoüíso ooü'prff*
nfor su atención después de un discurso tan gigantesco
CM. i¥-q«é?,Reáp9n!de'el gobiepoo; ¿Ew qué los inte-.
tre el p'artído absolutista y el moderado- |Jn esta situafunda tristesa; Habéis knda, señores, «1 disimrsa proyV.uyas intenciones aun no he podido comprender
ción el/r,^coionamiento dal pirtidij mídiq co,istituniq-,
nunciado el dia pasado contra el provecto de mjiiíaja'^ ,
bteo; de todos rao-los, es deveotajoso hablar después
'nal es'fuílftsto: es necesario que las do>i fracciones vidiscur^so grande por }a razoq, y ma8,»uji por el,^feoto:.
dé un orador tan disi-ingui,do y que ha ocupad ' mas de
' van juntas, hasta que, aban'ionaó'ío 'el piítidoíibsoludiscurso que fu5 esbuchado por el banpp azul sin pe!|tañSar, efeiúifo Itfs'minístíOT
riomb'pettifióiíÁsen'sa' riotamante la justicia? Para desempeñar a»te deber,.. tisfa"sti4erim?fta]hÁ te')rfa*í v-él íISTKt'ii'itíftoce'liííálo • tises hofas'k átetíclon de Ta Olhi>irti, p'^i'qdñ O'íta^S'aat^ral qué'esté'cansada, á locu"*! ^a debe sin duda que
en 9tH >i^plra'cioñ(M avanzadis, 8(í'^tield<ítt con los parbauoo; disevtTSo que>pos'lafiaiHiiadiaiGr-l»dootmn«.'^0''' ¿|o hay ua ministerio fiscal? Jí
se emuentrentan de,sier(tosel'rtos btnoos; cosa nq_muy
tidos aftíi'is. Esta! mi-in d'^ Hs frii'jnnfts consKtufciodian aeeptac 1A^ con8^i|))cic(i]alear),ina4,mfti^i;5),i:^oos; , | 0 el.gobieTnaciieÍAja«ft>elíiJ«patwOídft los de Loja
estraña, p-»Y']|ua Ip ntismi h i veni lo sl^«o'^i°n^o siemnileí es In^qiia tio^otron IKmimisníiion Ub-iral.'
disci^sp que er?i puramente iupnarqiÜQp-constit)iciopTf. qua ha conolñi-ló alQ;un orador de ta oposición'.
"' ''Ste éra'el^sfti^bolo^da este gó'Merno:"ffi!í qué raiüera
nal, salVo én'títi pasaje erí q i é Su afulorlikBlS oómó
, También es' desventaja paTa nri lo avanzado de la
' ha oamplMq con 'MB símSoTo.cOtt esd pro^rati^a, vos-' ' teraj
hombre del partido eatqtte sífeífipfe hlí'iftíHtildo".'' ' '
porque habiend'i de resu*iÍT el debate, no puedo
otros ló h^béi'J yisW. ¿Qué resblt* dJei haber ftMicado
Ddfdoqaeel;trüMhal>svifinam¿ iídló'ed;> la cnestion
A medida ^aS'el ocadJi'hibIabai<de<ii»yo para-oxti:
hacerlo-en el breve tiempo que que la para termin.ir
este"gobierno?
"Riscfltá
qae
la,
frácoi<>n
orq*résista'qué
yo np me de»po.j,aré jam¿s,fle e ^ 8^^ti(9ient0| d« ^ÍÍÜÍI competencia, el,s(ofcfiaj;nBf/iebi6 ,p);omq?sr la acción
las horas de íeelame.nto. Y si hoy rae estendiera, como
está ahí sentadti al lado del gobierno,' no representa
dad <)viajBnnQfaaece la,obediencia en las monajrquias
^caU^aun ,^1 i:5ÍaiítroJl.e,ls^^Querra debió consultar
no poiría oonclnir, el lunes tendría que resumir, cosa
nadat
no
tieneneíncnlo
niniruno
efa
el
-paíg.
¿Y
la
frací»
constitucionales. Proseguía el ofadúT ete qo rázoháe(tioi-)sa, mucho mis cuando habría de ijastar en ello
, tnbanal 4e su fuero. 'ToSos, pues, han f iltado á su cion moderada? Ss hace la ilu-?ioQ dé q»" representaal
'niit'nto,'Tdecia yo: no doblaré játú&a tdi rodilla' ábfb
' liastante tiempo.
<-i
•I Aaí''en la-Ten>lncion de.Lojaooma'e&ia d« la Ripi— partido iboderadoile tal ló cual época; pero no es mas
poderes fícticios y dinastías arti&oi»ies:,ya>8écóraO're8^
Además, vo tengo que dar aquí esplicaciones qne,s$
' '
&, fil^bie»» nad^ praT4fr„^ada pr;^«to. U n digno , queilnsioB.petan la^^bertad esos podras ^ esas dioaatíasifOqmido
me han p'ídido directamente , y con,tanta insistencia
En el discurs» de'la corona hay un pirrafo que en
se aoerqaba. S. S, al ñnal, deoia yo: no, no cloj^lare mi, i|idjyicli;o, del ^gobierno ha cUqho un^^a, tratándose de
como nunca se han pedido aquí; y tengo también otro
la inmensa cuestión'dé Italia y en la cuestioa de Roma
ita'oi^esÜQnl^yo'sóy ádvérsirip de U política prevenrodilla & dinastías amasadas por la traición ó inipnestas
deber que desempeñar; único representante de ntla
introduce ua eqníVoco. S'Í han hacho da él esplíoaoionoí el estíanjiéro','y al eonoiaiir 'S.'3.*.pronunciaba y<>
gran fracción de •determinada procedencia,, debo tamnes, y» ^raisaticale3>, yi políticas? y sin embanco, ahí
en mi'interior las láismas palabras que jS.'S. pcanuB-<
i El mibma individno;! hablando eo-ótra 0ía»0n de
bién esplicaciones, qne si pierdan su importancia,, será
esta el equívoco, y como se deshace es Seshaoiéndole;
ció hace veinte años: Dios salve i la patria; pK^jjalsYfia
al pas^t por mis .labios ; y diojí único representante,,
m,^\t:}mm^m^W'^»i^^^\m,m^ *4%v*ba, yo, haoienda la qae decía un ilustre escritor:
á la Reina.
^,. . ,, ,
. ^ , J
porque la suerte, m ha quejido que me^ precediera en
Si V. queríadmir^estoI ¿por quérno loüa dicha?
iubiera querido ser fflinis|¡ro ó cyMte^
asooiar¿Qué ps este discursean Si fonáo, siño'Sl nMSrfeíi qu^
0l Usó de' lá palabra mi compañero el S r Rotaíero
Eae.aiiAij'Ofii» p^iede sfjr f\ sítaoolo ieX cardenal 4-a^
S. S. nos'fói" esÉádd espóiiiénatt '»í«5é'dtó¿"ttBiSrp?d#
a á ella; y otra vez 9Sclaifi5:^yo cíffo'qaé e» u&s Osi-'
Ortiz. - ' - . ' '
'''.''
toaelli', y tamt>j?n d^^RújasVli. áañorae d« la mayoría:
qué.bahaGiUo el efeotOsiC(6e ha!'t>n>d^ei(lo%|^Uj,l9e3le^,is%'Óü*iéiWWpHtóoa-"^fKí^tím'i^kifo{«c(*^
, Muchos dias de debate sobre esta ojiestion ha,n ^CT
res,:est^ «s;el,tema df q;i;gnasiciuni Ssquepa^dpiUpS;,
vsí:¿B&q«é qned&caelKfia aüaslliñaiMerño deseeaoví! aceptípijM es<^,eqal.viooq„ Ifabeluabdicadq íie,nn¿otpe,
oho qu? ya se hayan tioado casi.tolos jos Da.qto3„en
situacipn ,ábán^doü^ su 'esp|rita,j}uan^.JÓ4 gobiernos
la noción del gobiernO},|[|^rj^ií,^ji|ifjgi|', ^ .pM,-!,,! no y4,leis-aad?, no represcataUpada, no sois jjn elemento político.
',,,.:
, ,
r ella envueltos, y ha da sar rauy'djflnil también ba^a
reñáíióian'íi sM íiíitfec&íinMri' Sus tidbifííbmláóS^
mí el darles ald^o dé dovedafl: h t t r é de infi^ntarlo, sin
0bMftR«ratbW»8%ÍW6Wp¿fe#fta!9*á«*a#'q««Séh:a '
Lp -qiíP .vosptroat, sois, m? lo forcnnlo -yq. con una
gobiernan; y cuando no gobiernan, nioubíStf «PwéíÉíO':
embargo, y tal voz logra presentar alguna idea irapiva
rn«i^flniieMa&«É(|óKM>émi¿(itenaañ<'«s beoesabcctaa
fórnu^la añtcaé^lca; sofís tolos , progrflsistjs^ J^ njodatay la<C^astitpeioav<'i»' 8aD{aii:4eieníderlo» '^wréiPict^'e^j«Mp«!í^,sB»a<ps^i!%e4i%-!fe.^ na«íl Í1W< tiene
dos de 1;^ mayojría.r' una .serie de,cei;os (fon upa unidad, para oontest<aii4-4<w oarsíos que se,nos han hacho.
ment»,,.,
,. „í .,,;....,,„;„;_; .-'. i;.,'-'. o;s^w ,.r-v¡vvf
, .^ntesi pues, de entrar en el resumen del debate, yo
Antes de entrar ,en ^ t e n a , me deseipbarazaré de ^ lada de esto, no gobierna; y por eso, ademas de .babé.r; á la oaljeza , (¡Rutnores.) Me liabais interrumpido sin
me permitiré exhortaros 'á que viajéis cotio es ahora '
nna cuestión. Esííóy' iíé^obhoci'dó £ líí'mááefe'BSiiéí'óTá*' lucedidalos aoontecimienjMs de. Loja y de la Ripita, *' ha^ar conoluidoila fra¡(a; ahora .digo : ¿en des-ipjirede modi,' 4 q\i^, vrajeii al re-ledor di' ésta Oamat-a y'os'
.10 ¥e Ká^écüóüadaPHaftaWdyEdW«aéftóifeát<ís'gló- ciendo la unidad, .qué seréis? Claro estif naa serie de
con qiieirie hai tratado itfto'dw los ¿fddoWS tdfe'iawá ífe»
preguntaré lo'qae habéis notado «h ella. Lo-primero
maca, ¡f leri<ináoi «kAribtiii»4e<mi .g^wlíitnd:<< igual iS^a-r- Íiosor,:'.f^O'iia:hatiybíd(J!f^bi«^aj oonhii^tHdo; le-' - cero?.
,
qne-sanota , naturalmente . han de sf.r las di-ferenfes
timientftymf, aninja. hacia pnjgr^ji^OF elogupnt^ q)+9 ni^^ |ea,(íko, hík.h»bi^9-)a»i«)yltipft djar^sfic^a^aiJW.,: ,. :
¿Y caál as el valor de eia unidii? Señores: ii los ceir lociones on que está dividida; muchas veces se ha_haha proporcionado ocasíon'ae diriéiros mi x6z enceste .
ros.np representan ningún elemento político, el que ha
blado de S|i han muerto ó viven los antiguos partidos
érden moral, y cuando ése gobiériío 4'ego ál poder con
hecho los ceros, .pl qui ¡^ las cifras positivas ha sustipolíticos; yo, sf^ñoíe.s, no diré lo prim<>ro; oerfo en
'^n'^WgíStóí1l«(ffl(f Pr.té^«éíh«bí« p t « ^ ' a ^ á ó en la
tuido los ¿ceros, ¿tendri una política? ¿Rjpreaoat'Jirá
Ts, isñort», hé'¥eeptádb*te 'éaíkáimtara d é í á ^ í í í í
ouaito A su íwccionamiento, ¿queréis mas pruebas da
posición, y no hizo nada de aquello á quétffltaba oom- - una política á los ojos de la nación , ó á los ojos de la
sidflnoiaáni^tal^isláfeura, por ana razón:- porqníe no
él que lo que está pasando'
_ •
•.
roijv^dot.
perdió
to4a<aj9^ridad(yij|»do
der^eicho
ntcn^al
corona?
No,
s^ño^es;
el
presidente
del
Consejo
tiene
la
obli{^b^,á,^ad^,ínV árl^a'^Qu.e:la biiad%^aa,.^ al qu«^;
IM^Kid
primero
los
dos
grupos
que
constituyen
esta
gobernar.
¿Y
qué
resulta
de
^3^íí(^ue,j
cuando
'se
importancia
personal
que
adquirió
en
la
guerra
civil,
la apepfeab^. ,Yc(-jde«eaba adenjiasj .6 que el biinísíerio'i
mayoría, y Inervólos cinco discursos aquí pronunciaierde la autoridacl moral, la autoridad legal se escapa ' que adquinó en 1851 y ISS"?, p^ro no representa, una
mudase de cbnaiidta;'ó qué <íáyése,'<b se'détíiíiialé para
dos, y veréis nrnió partidos que eh riidi sf pafécén.
.e'ijüéáMs^luSiioií''-' -*••>> siín »•?; , a-.-^,::^-.,'• . ••-• política; no tiene un verdadero valor político.
caer mftis adélafti'é;;^ sie'ildo títi intedioí paVa'que cayese
Primero, opoSirion francamohfce demnorárioa; 8'*ü!U'nPetotodawfa.'ea'lsoueKtion de Loja<ha habido un in-«
ma»i)ronto ^carlesdaioposioion en; 'laí. votaoioa' de la
Si el, presidente del Consejo no tiene un verliíefo
do, oposición místioi; y aunque aquí los oridores qae
mesa,'Se }%hi,ep. En las^bai^Uas nocturnas, no^seyenoe^ éideftteniOtabilisioM)» singnljir. det^ue ;^>hay memoria. , val'or poiíticto, ¿ijócm se esplica que esté en el podíc?
hinh"jho estis onosiciones no tienen aleptos, yo suHabí4^ yistc!,,s3ñore^i por,lp!q:ne..hí .resuítadq de este
j.imás sino á beneficio de las sorpresas; y quandio.íJfls
Se esphcaria en el primar año, en else:;iindi, y aun
pongo qu" los toní¡;,in fuera. Viena después l i oposi meSi2S antes loa partidos hablan desplegado su bande- iebate,' qué teniendo en cdasldéraciba (a c^cuastanoia.
en él tercsro, cuan lo represontabí siquier.x una especion, uo aé si moier.ada ó progresiva, pero que no me
ra i claro éá' que habiá. de vencer al VÉílor el núnleró.e habér'áidó'sedúoí<íó'sesóÍiíiielíáBS,'la ¿frcunsféihciáranza
ha parecido AA otros tieniDOS, del Sr G.in?:alsz Brab.).
Por«so;no tenia yalamenor esperanza de viotoriai «•
e^ haber obedkidoíá ,to,s><ps«0Bes was'oomnnesí en
Pero cuando la esperanza se ha desvanecido, ouando
Continuóla que yo creí que serii progresista pura
ieWa,«lí^,4<k.ois&u.ns49!B,ciat,de h*feer.,tido,mal júzgael niiaisterio no tiene una piUtici proplí, ¿cómo está
•SeSor^^'110 puedo ya hiicer el discurso que tejaia,,
del Sr, 01ó¿ag"i,'iy qua tal Vez no e n ni progresista ni
os, la de ser muchos, ha habi(Jonna yo? eiLel^iParlaen el poier ese gobier'n)'' SsAores, en las ontiendis
prepafadoj sin embargo, debo decir algo de la oonáuopura; y concluyó la del Sr. Ríos liosas, que creí que
ibento, que, ha pedido su perdón'. Señores, yo me he
civiles el ekí.Tionto militir tiene importancia, y se mata del gabinete.,
'
'
S'iria da unión libe"al pui'a, y que después vi que iba
Iorripilado
áV
óií
i
a
resptteSfa:
piSTCpie
lÓ
pides
tú,
por^
nifiesta
obrando
unas
vecs
bien
y
casi
siempre
mal,
EecOri-ei'é brevítímamente ía cuesfcttitfesteribr. Njk&
esiluyen-ii á todo, y ni qued*ba mas que el Sr Ríos
porqnie ao es tta elemento natural.' Así su6»dió en 1840;
' ué ie-pideea'efciparfiímíniío, áuaqiíe «reyératoos depuededecirseide kiicnestioa de MarraeOosñnodespués
Rojis, olcualera, sin embargr-), bis'-antopiriopoaerse
deSTKÍos
del
cwnvénio
de
'V^ergara'se
elevó
un
gobierno
eRhapejioj.íip.to
haríaaaaííJiPi^ade
es^^mpSitseñorfis?;
que e l gpbieufBOfí raiga aqiii el tratado dpcom^Kcip'.qae
al gobierno y la comisión Yo no sé si h ibra fricniocicu^*)
principal
elemento
era
el
militir
Vino
el
año
44
iDónde
busóii.l^,R^ina.su
09nse.ip
ñ>»8,8»peripr,
siinq^r
está pepííi^pte; yi^pgo, pues, á la cuestión de Italia.
llas deitro de estos s;rup-is, pero desle luego hace ver
y cambiaron los partidos, pero no dejó por eso de prciEn está cuestión profesó hoy las mismas opiniones' io, patriótico y, eievadp' íiñó' en las Cortes? Señores,'. se
esto que existe un gran fraccionamiento dalosoartidos
dominar
eserelsmeatfl.
fEn
l-SSQfOambió
otra-vez
el
goH
qwe profeéabá antes dé ir'á^ Roma. Por Oonsideíacidnes-' la'coínelidflí'fion esto ún 'á8ttidé dtópífécía'á los 'búérpolíticos.
;
bieínovíperq siguió imperando el elemento militar uni-,
de' delicadeza y dé deber, no diré mi* opiniones acerca" 6os-80tegisladore»,?ymMt oóncttlcaisito'délos princido
con;
la
unión
liberal;
en
1858
volvió«l
poder
el
conr¿Es
necesario,
pues,.apelar: á otras razones para dederlioma,y Ñapóles; pero heoido de labio» de un ora*^; liQaea't«e,S9pf!*ad%elnégÍ4ttpft4i»pí;e»ept%tiivo. . , :
mostrar que si hamos de ;tenér gobierno, fcensmos¡que
dor (}e,¿ comisión, (y no me ha estrañaáo, porq^pie»-:)! 1 G«9ÍP. aíMera,gua^e«i,4?8pne\?.del,íCastígp impuesto de de Lacena y abaádonóMauiúon liberal.
agrupar fas mayores de esas fracóiones, para marchar
i los süblebadós dé Loja; la éranquilidád OÍBI país detoy aóos't^imbrado á oir cjúe ae los bancos déla mayo¿Qué q-uedjii j^ues, en ,el. gobjwno? Una dictadnra
pou:eamaiio de todas ¡ las otras? No. Yo podia, pueSj
penderá de la política preventiva del gobierno, de que
ría Salgan ias'céilsíiraá'riías amargas al- gobieriío),he
mijitar, la d!«t»diKa de„un liambrejiy como esa.dicresumir al.debata dioiandiJ.qae nue,stro apoyo al goexamine ia cuestión an sd'abpeoto económico, de que
oido, digo, á ese orador, esponer el verdadero estado
tadura y ese elpgaento militar no puede existir en una
bierno a í justifioacon la contestación que sin querer
la reauelvíi. biea; por*} no 4ependar4 ¡Js que persistan
de la cuestión de Italia. Para España el nudo de la
monarquía constitucional sin el apoyo de unpirfido
se han dado unas á otras esas oposiciones. Sin mas qne
én presidio ó se ijiue^nr^eu JEjprnanjdo Póo loa qup allá
cuestión italiana estaba en Ñápeles, cuando el conde
político, <i e^te gobierno le apoya por su interés el parcoasideriiiítilss d^!)s enmiendas que. aquí.sa han disaúti^
han ido Por i^so sé debe insistirán pedir clemencia:
de Cavonr pedia la alianza cbií aquel país y con el Patido absolutista. ¿Creéis que podia estar ese gobierno
pa. ¿Qué política ha teiiido entonces el gobierao espa-, ro se la pido a la Réi'na, á esa Reina'que tanta's lá,;rien el poder sin qnt ua elemento político le sostenga? do, decidme .sino 'represantatíi Lisíaos, palos opuestos
de la política que viene á-oo(übatií<|al' fabi«n^!.4ua
ñol? ¿Hsipodido «jercer evande inñUieaieía en.esa cuss-^' has h» ^yígAá»( áu«Kií'R«in;a()tíe bafiad» en su s i agre
Esto se ñegarí, An combatirá, pero,es cierto; efrtá reveestillen eloííntroF. ¿Y sabéis poi'qué estamos allano'del
por «¿ipnñajl de uaA6esia«i mo tAvo<otnsifial»bra3 para
tion? Sí: ¿la ha i%jeroid<)?vNo lo só; lo pregunto,
lado por innumer.iblés si'ntomas 'd'e la situación Pues
gobierno.?.'.Pteeisamtáatei pata; hairtd-e .QS08.dos>.."e#tre-,
elq»^.la3de;p^0D.... , ; . ^
, ¡^,
qué, ¿se dan ciertos e3cáo4»lo3 por vuestra voluatadf
La cuestión de Italia ha podido tener en cierto pemes: porque no qu<!remos ir á la zona tórrida como e l
Yo os haíjo la justicia dp creer qne po por vuestra dig' Señores, yo me atreveriaá espUoar' la sitmicion con
riodo la solución de iá' alianza' de Ñapóles y el PiaSr.f Riviero¿:.iíi á-lazotiá frígida'con el Sr'.' Apatícii hSr
nid,id, pjro contra v'uestf'a dignidad está vuestro intemoTite con el poder temporal de Roma, ootho modera-' |in VBÍso. Habéis Visto lo'(^ti6 diíee un mlniítro cuando
moscqntiafñ^OrenieSta zona templada en^qüe nog-enn
habla de poiítioá preventiva y *Bpt<e«iv*; pues bien: la rés que 03 hace decir: si descontentamos á estos y no con
dor^eatce los dos. El Pa.|>a, sitiado en Roma por el Pía"
tramos.
nos apoyíw-.iqíié^séiííSfe aósofe^í?) ;,<
• '_ ^ ;
poHtüCftdelí gobierno éa.7e8ame'eni«sta redondilla:
mqnti;,.i^ \(n0 situación, insostenible.
,
,,
En
estas dos enmiendas, pues, se compendian las dos
Djjaian9:i.«pe8e
a
qjuieu
pese,
Yo
niego
eso
que
se
llamarpiMtáculos
tradicionales;
Énj^éjjoo empezamos por la ablicaoion y acabamos
estremidades del viaje político que 'cád.a uno quiere
'
yo soy.^e ese parecer.»
esos obstáculos no, pueden existir sino fundados en up
por la ruptura, al pasó'que en Venezuela empezamos
haaer, y es notab'e que'en todos los discursos se ha
Dijo otro* «no puede ser;»
partido político. Y vosotros áó'tendrías, no digo yo
pof la itíptuía y acabamos por la abdicación. Al t r a jr dijo él; «ta'ünbien soy de ese.»
las cualidades da buenos gobernSiiiííes, sino debombl-és ' analizado la unión liberal, á es'cépcíOn de unp Y debe
tado'respecto de Méuuo se le ha hecho u n í objeoion
sor, señores, una gran cosa esto qne se llama unión liSeñoreaos» barxhaDho .ebñripui.eatraifaado la, desf
honrados y -pcóbo»«r sucediera de otra manera. O b ^
de,ilegai|dai4(fl«e eB¿* en pié,, T ; ? * preciso ^^S*n<vlay¡->
beral, cuando, sin advertirlo tal vez los oradores, la
táoulo» tradiqloflaíes: yo oonpzoo unp, pero esfá dentro
traer aquí un oi¿¿ de^ indemnidad. .Según ,lf^ (Jonstitu- ," araQrtizao\Qn;CÍ74l,j.Jp^ paet^c«,jl^!(3a8tUla!, Estremaeligen como puntó de ataque, aunque diste mucho del
de los gobiernos;, este obstáculo es oraría ¿írodojwVíacion, no se puedé'haoét ninígün' tratado' déáliáíiaii * d u r a y ^ni^luola se tíúi ,óejyndicado,,noltable!nen6e
punto de vista de oadi uno de. elTfts. Esto demuestra
pof'esa ri¿ór. fel' pobre partibípa|a'.'aW la' propiedad
^ioneserviliter.'
'
•
Í
.1
,^
ofeiíslfa Mh'«nüeSéia de las Górtes. ¿Y no el''^ta úttá
que esa unión es lo que'ie quiere demoler y atacar; y
alianzaofensiTaíigNóes una aoeioa contpntdie do*:6'o isomatt;-^ d^pójáífóf í^«Wtót'^'¥loletíía^ñté dé eáá'
¥ ya qáé diét partido absolutistahablo.'y^a qiísesi^
prepÍ8dád<;¡eápí»ii»eiitaíaa fwMÜBStáefgvanáe; y el bionor c toy dioiendo'la verdad á mi país, 4(Uiero decírsela todai,' SI esta unión liberal no realizad^, en embrión, como yo
ma« p t o c f e a , , p«^,iograr¡:U^^r(fbjeW.(Q9.pins,ppr;^
creo que está, ha dado vida á un gobíer&d'por espacio
pre en esta situación está mas dÍA|^9tp|á,pir l»,ypz dp.. aunque no pénietirev deQiasi<ido en sn, profundiida'd; En
dios hostiles? Pues esta es la alianza ofensiva.
de tres años y medio, longevidad desconocida en nuesIa8_89(^ie('
^
>
.
>
roaaganda,
europea,
este,
partido,
como
en
todos,
hay
hombres
honrados,
Hablemos de la reiácofpofacion ^e Santo Domingo.
tros tiempos, el dia que sea una criatura formada, yo
apégaSosS
ró'ántíguo,
qiié
entienden
que
SU
política
y
Mi opinión en e s t a ^ r w v e s mwíiptetwmente conforme
,
, „. g^biér»jM á¿ra*e'lá
no sé si dará una duracjon scmi-et^rna á otro gobierno.
con la del gobiertlo',*'^ ceteSíO íéáer^'esta ocasión de
ley'ooaaííWí^ra*élí"pa» laf'tiftfeilaítiiWí^etacWn qu#» ?u réligiorr eétán Comprometidas 'por líasvariaclonesidó
Señor presidentjS, mé siento algo f?itígádo; y siS. S.
aplaqdir sv^ conducta. Sé que lo, que hpmM.hMlj^puejdeaella::d« iestáchadieadt/.ea ;&idir«a¿t<Ma<decJQÍeaiB3 na*', las.institociobes dél.paia* y qha lo oreen', mas que potr
lo tuviera por p8nvjBtliente, tíódá vpz que no.he de acade iénélf'iílbón'vfehretotes en el .porvet>ir*,'perí> í-'veces la
otra, oauga, tal yez,-, porque vifn qnán tris.teyouin cor-, bar hoy, estimáHa que se me conservara para el lunes
prudencia es la audacia. En d ' ííSr¥enif'%1)l3'es^rafr
¿ompidq'es 10 presente. Contra estos, hombres nada
1. i v"T'-?rirT{rm"^-''^t-ír'->r,»'"
™.itucional.'
en el uso de la palabra, áfinde evitar también repetigrandes peligíOSüSpn/SantorDomiítgo ónón ífei^ito^o?repr6a|iciíé Idá ariu'tiÍ6ntds'qá^''ág haif fechó con-'^ íed^o que'dicir; 'stfbóáducéá ¿s'desinteresada y gétiéciones.
''
mípgfli;}8e¡re?c% jantoi I^miñgiO-.coi;^ íaSideóíasi^rpviif*»
tr* 1» óé«dttm'aell8bKri£^'i^íéSléi%¥é*i óbsérvaEl
señor
VICEPRESIDENTE
(López Ballesteros):
cias, ó sálvese con Cuba y Puerto-Rico. jPePPiha,eni-j ision elocuentísima hechmpoi-li^ 9r.°€kRi^lez Brabo.
I Pero hay también en ese partido una fracción desSe suspende esta discusión.
panado Ja ,.gl<?ti*.^l gobierno Ja sangre derrstqpiaS^'
ereida,,atéa 4,ingrata, .i^unparala .mismaReina;¡esa
Pij;^ ..?9l»q>ente..%Q6 «p.^iex^o-íjos.^flflinstiíucioi»
Orden del dia para el lunes- continuación de la disesta'.es -(j^pl.9r#bl<¿i^w9£,hji,, jn^íiUguraíJ»,^m^sko¿j?e,f „ de qflS ÍB'e el hjjp%,4eÍqriBi^r.naij|e,§jm%90 un YOt^
fraóción, que/rodeó á Fernando ,"^11 en sp lecho de
fcusion pendiente.
mucha sangré,' la .dominación qe, íslWl ,ÍI en Santo
#o^reJaéenadú¥ía:htre<litarra.^^ '
.„
uérte, trabaja cóñs'tantemante. Muerto el rey, ácpde
He levantó'la sesión.
•D(íim^^':''\,^---:-ñ\''-•:•'•'• t '- ^-^'i^'l'i'í
J ^íbata.tisnaffteí» íjfemiprémaiA ttna'tóalllamiai
las tJrmáSpát* oónséjgtiir oontr^'tóhijala Usurpíioion
Eran las seis.
, _
piadaga^£oram,/'e[a««iH¡>e{(lmeatal»hb¿l^ohdstii3é«' Puo.intenió'Céinti:a:elpadreen 1827i Esvénoidaí ¿y qué
Vett^rlaitíitóstiífii^^teHóré^s. í o , dB|8'«^^^^
Eag^ entances? ,'}'rata„de ip^ponerse en Madrid, y viene
gislatuj:a pasada cpe la .situado^'dis^HsimáñdáílÉítiiJíírd-' giimn i4(««iia»ai9«t»l.e%in$' Ij^^nüaaftlli»; p ^ a ó «n,
í*lSl)l88Wte'l?y'#«f«99»ij:w«t?Pí^4 few deesta. i procnjar,la,in^ntóna de ^844,^ Es, también vencida,
tatf^vóííable óomo sé déíJ&."A&t*tó'ésia»,Cfí^Suíá; if
ESTRÁIWERO.
hoy qué sucede? ¿Por qué se hSáMí'oomréílSéS'mra'tftf'íJ' inovacun lá qpimondé un alto^ cuerpo, se lé consultó' Y yíiéívé á s^tlo en IW óuésltiioh de ló^ matrimonios; y
fen"iíí MMiai.«'yó;*'qu«pí*^Í'Se<^'4ese cuerpo, f; apelaíJeottéVóMala»' armáaéióf 18'49'.' NtíeVá dérrJtá-; y
bi»6l^sh(()W^aWBes (e#rigiit^í(5t3EB^q*4(peííí}q«/«rtp
¡ Como á pesar d 1 níiéstrosvaticinlos, aun no han
j}ttB/i*^«iq4i8q»iepielí^'a8l pí^liíoMiMfdef^áfta intttova*.
flespnes SeÁiieva'sublévaoioa én- Aragón, volviendo á'
Ya que hablo de ea!tfta8jíotpiiOJ^rrajj^,,q«e. qoíQCíi^, pqBifeBal!p^af^,|gM¡iMili,i|r qns mn tetájínsaadp aobM, la jfermillaídejfiw GártoUnVUrJi t«R.(pe yo ofeijda.a (legado á Europa noticia.saJgupfíS'í^latiyas á la resodías después,.deiabriiiitaltu Qós1fet:^^;|biao,^elenfiaq^
nómbifeide, 1852, vienpn.á diol^rlp^ aquella polítilución que el gobierno de los 'Estados-Unidos del
Ws^-^^-.-mBkm mm)§m^^m \r\f^%j pregun,- ios
los presupuestoSi y que, estarna» en el.c'atso 4é;hal;>er¡¡, té: ¿para qué se nos pide niMstra opinión? Dígase para
ca, "^sín'^Ujá ellos jñjsmos lo sepáii, Anda el tiempo;
Norte haya podido to.nar 'r(!specto -á las reclamaeiodesaparecido el blasón da,ef^ mjni?t^rio,.q«e,9ÓnsÍ8Jsábel II tíéné'hijos; 'el froníó fht íiííéibriSB respetan etí'
fanlié ffoS'pdi;'y.',ahm8egyrii'emofsi'ílíitteiSj ó^^IÓ
ties de laglaierra, inúlil es hacer mas comentarios
tia eá disbttttr todoS Ib?'aflosHp» gastos ,é ín^^és^ 3^1
Puropa, y hace la infamia de la Rápita para volver' á
|o qÚ6 se propon<9i'BSta?í%*tlad*rflqtté y© propuse tavo<
traer
un
régjnieu
qu,e
no
volyerái
nn!»Cí|,
por^tíieaiam-t
acerca del asuDlo, por ahora, mientras no sepamos,
f9,líO^HfimmBíé:fA h --i'íteri;;n'i .oiji/.. •;• . . . .
pre habrA Cortes; porque, como hij^^jíj^^ nxuy.bie^ el, pon dalos mas ^'5sitivos, sobreqtié'base fundar nuesi Ahora si me preg^a^,|PÍffic^j^e5i5Q,^né opino sopreceaido.
dignó presidente de esta Cániárá, «esas puertas se cierpre la senaduríaJhere^itWia,,díróíiue |ebe habéirla,
tras apreciaciones en la cuestión de que se trata.
ranVpérono sé tapian. V '
•
"*" '
Eesp(sotikde l»inipreiíta', h^'^Wo» <i?ofPi¿ W'Or^.^
que es un gran'íriSaeráao'r, ua-géiii éié&eiíió^ qué es;
• Yí señore»,-'y»' que hablo de la Rápita, diré tamministeHal que el gobierno concedemuohalipeirtát
comió en M^tei:ra%fOaiflárade'Wíío»e#,^n Congre^
Ocupándonos, pues, de la política interioren Franla^oposicií^Bjqifc- no resguarda ÍHIIIÍVS personas ni í ^
bién- que.ñp creo áeisa fracción agena, 4 ios aconteci-.
80 de- jíeyes. Déipaeá éé Itéaüafl» refor,iaa íde 1857, ao
cia,
diremos que, según aflaman varias correspondenactos de los ministros céntralos ataques de los periódl?
mientes
de
toja,
,09010
nq
CFÍÍO
que
ló
fué
^
los
de
18,54.
P®pft-b?](?áca d^sgíkr á l9««r|indqí8¡ íe,^!^^^
cosv, Y p h e tenid(0_el ^onor/de,^Pjp9riodj^tíi,j-¥,i)iare'' asi wy dé opinión de que, ¡al reformarse l a reforma,'
Estos son loi'sei'vioiós qué la'Reina y el país se pueden
cias procedentes de Paris, circulan en la capital ciernunciqá Vsphptiox; puaijidp fni,pe):ioaj8ta,,'1^DÍ4 teni- ^
prometer de esa fracción; fracbioü mas tóala que 'óüantos rumores de probable^ crisis miDÍsierial, motivada
do el honor de sfentarme • '' - - - - * ? " "
a__ii- . bos'ó%sdápjvaé''¿i.^'' "^ •' ' í - -•":" •
tas-tieneh queiexistir y qué yo Üo quisiera ver^>al ted'O
por la influencia del nuevo coDsej,eFQ!VI>.Fould, quien,
8i ¡Sef^iüé dioé ^nópéftsif ésberfííeáiíwario-íestatleioeaf
mMmp.gj^fí^BipÁli
del trono de mi Reina, procurando conseguir con soshiT
JosB9ft|r(íE8zgp^ (üré^.qae.nQ. »Gon njayorazgosyríin. Í)ocre8Ía lo qne no ha podido cpnseguir con las a r - al parecer, desea rodearse de personas'enteramente
En el estado de
ias., Y no'quiero esto, señores, porque p e enseña la
tumbres, 110 concibo una pr.ensa siná |'u^rtein^ente''ré- eUc^,¿5»gr^e?.#;B8^j^(jvigk.t^ng?ijagspíritu políticonsagradas á su devoción, pas.ánd6 él á ocupar olro
co, qué tengínñ.'ambicióñ generosa, pueden, con la ley
istóriá Shligtia de Inglatérráy la moderna de Francia
priniidá; ^erÓ eá' KÍnfbío cfniero una Íj^nsíi'notsújBtiá
puesto mas importante en elgabi^ete, desde el cual
que los monarcas que iio:4ian«íbido resistir á esa paral capric% del gobiernp , pino á íribñnales inidépin^ civit <fó''Espsfla't|óá3ertᥠsiis páMéóttiorensüs primogéflitóá'.'Lb'sH^fáe'vivatf bajo la te^islaéiffn de Catatido han muerto ,de8trpaado8, como Japobq II y Cardientes; Lá prensa cómete un erroí'y 'difil' impriíaérfpueda influir de un modo mástiireeto y autorizado,
luña iOOfcpbátite eiin9enrarl©6?.rYí«tt .CasJüia, el padre,, los X, legando á la pOste,rí,dad; una raza proscripta.'
cia atacando, las .pe^csona^ de,los j^j^istros; «cuando los
para llevar á cabo las reformas que ha propuesto.
que
mejj)re-fa.te5fií9,gy
q.v^intpá,sijprimpgénito,¿np
le
'
Voy
á
concluir,
señores,
porque'
estoy
muy
fatigaataca eáe en ellmoiqqersej^'tiei^, porqne los pinis-,
deiárá^^t
^aypr
par{e
ge
su
patrimonio?
'
.
do; y lo' haré haciéndome cargo de un apostrofe que
tros dúsen: ahij;est&.4a¡QonduAtaiQÍa^lj%prena^.9é.la rer
Con este motivo se asegura que el; actual ministro
Sélorés, etí"nítigiiá paíá'áél ÍBtttidpiingun patriclael & . Olózaga dirigió al elemento progresista de esta
priDae* y sin,embargo, auq: tiene libertad p^a.cqni^reformista
desea que salgandél gabinete IOS condes de
do ha vi'WiJff^m-tíaa'iey'dé SBéeSltfñ•contraria6 la gemayoría.
,
, , ^,
terescesos.
•
'
' ,',',|. .-i,.
Walewski y de Persigny, suslituyendo él al primero
nearaLdel pbisi JPoresaiJstle^ de^mE^ocazgos nacería
j^ En e^teap.Ó8tr.qfe dirigido á vosotros, almas seduciTenéis razón en la apariencia; pero precisament'ó
En cnanto á lá ley daTe^lamentós de ambas CamaauS, ólr'éjá's déyarriadas á quién llamaba á vtíest;r(í
hay artículos contra vuestros, actos, que no ven la luz
en la cartera de Estado, y al segundo en la del Inxas, laou^tióii'tó'áíi'aWy es^d#éfflsiíen6Ía Sel régimen" r«díl SqüélcttidadOso'pastor. Os aconsejaba que volpública por haber sjdó recogidos. Depositad ahí losarterior M. Rouher, dejando á su vez á M. Vitry el
constStttciohSíPW él póíVettiitS»Sftiiflnní país don&hay
vieseis bajo el lábaro protector del partido progresista,
tíoulos recogidos: yo estoy seguro que los noventa y
departamento de Hacienda. ,
,, ; . .
peyó ¿qué.jiqlítica.OSo^reqia el, Sr.,.Qlózaga? Porque
nuévé'Selos cielito Sé refiél'en'sS" •vüestroí-actos, y (jiw- naqjartidoíideíloipasadoriiiWB^ fnertei«dí)ttde hay una
centa;aJi^ojon.,coino i%iiaí. exjatejrty, .unásioosfjqimbres
^o h.e espi^esto una política. ¿Cuál .seria la que espula gran mayoría no se areferep 11jp^iguna institución
Todos estos rumores, mas ó menos enáctos, nos
elecfióralgs opqiP' í a | %!ie Jia ,traidp_ esa centralización,
(sierá alpüicíq'delCongresó él Sr. OÍÓzága? Yo no tíreo
sagrada.
' •'''''' *"' ' ' ' ' ' *'
f)arecea con todo prematuros, f'eá dé creer que el
iesós' élemeniS^k púepéií prodüoirmáyéHáS^tté Voten la
que'9'. S' éspo'ndrisl" la política de 1854, lá de las ConsVed áqui, señores, pOf qué esa ley de imprenta, buediiéífsióá ^ ( M t á ' y l á iftifiií'^{< i^iíiflBH 'co&stittitituciones que nunca se acaban, la de. lia Milicia oar, emperador no acceda á satisfacer ambiciones personajóni8]|i^¿tócatóMe|iaóí^la, |pfea|rii)tnoseílis?
.
cional^soberana, aqn^lla política que.concluyó en.esa
cule ifi>eé l Í M t i M . ' ' M esiíisituyi^Mét1Wprdble|i.l| oioriál.s': , - i.A. ,•:' •.') j,><--:,<;; 1; ;. -j- -;i- -. f^,, •• ., •
nales, desprérídiébdóse de fünélónarióS tan útiles
' Sientfft^ppr.que li§^lw de la unwn.Jibesral. No ten:poca por faltar 4 jos rninistros (^ la corona y hasta á
en la aparienc!%^^bre,^.reaUflad,Q^^a: situación
gQ la culp.¡^fs dé 4Í|B?¡iÉ^ ^cá. sé .^ayaúT^ispfrtó los
a répiíéséhtaoióí'iiácíónáí; Si ésesá'la pólitica prq-' como los que se designan para-victimas, al menos
magniñca para #gol9Íteiíl)i éMíwsntBSlílimprenta no
gresistáti yb confieso que ndpttédo querer «sa •política'- antes de reunir las Cámaras, cuyas sesiones deben
muere, n6 «slibre; siftuaci<M(>6ft.^^e l*jmpEf(B^p%a- idos grandes p a r t e a ¿fíiSstíOéméndoiléfeíle4*''pódér han
ca mnertá¡ys?!íiétop^ >moribftWÍat #S(iWna, (.síntje^f Qe^;j; •hásWo granagf éósaS. •Hé'Wstei^^en 1854'tífia ttítítktita de paral.mi^pa&<í<. .^•^, •-'(•>''"li •• i'ri'' .<i!'-'• i',.:' .••.•:; c
estar muy próximas.
* El Sr. LAFÜENTE: Señores dipn^ta^pS: tengo .la
vnestro>liatalrBÍ8teii».-)-ii| i>:t<H= ,.• ^.j',?;,-.H.\'r!'>s!^.^..'í^v' ireconstruccion del partido progresista. ¿Se tecBn^ruri
Otras versiones corren, y algunas harto inverosíconfianza de que me creeréis cn,andp Os d ^ f que desde
flAegp *B la cueatíioB mas'gKavé, i j a , ^ f t ^ j % J^í»,|ié,-,¡ yó? ííq^l«4iywiotta€>'ílií«ftJn^a8.p^p$lI^;,De ,la,piama
por dtodejempeató-; ppré.c^jn.eigneisiilado^nas'^Tjente' taa|l^?i,taafflwCTH<>?»*S?'feÍ',fln.<cle reoohstfpir sü par- j}ue me he visto colocado en esté piíést'o', primero" por
miles; lo seguro hasta boy es que el presidente del
Jruéfftra benevolencia, y deistpínes por üná déferíAtéia mestá.-; en cierta láenti&d i|ue hay entret la snble.yjacij^'f .tidó, y hásla se'hizo M. 'ásériflcio aamitiéiídó'i oiertaí
Senado, M. Troplong, ,ha íftidó"^ la comisión del
merecida'xleímisi.compañeroS) ipcl>e-sentida abrumado
de-Iíttj&yáad« teRápita, Cn»nílft^90Brri6«l,;,Go^^eto» V iráecrbn. ^*<^áftfi*'ét%bj^?.Bé«i<ignbiii»dO:0 ,«.
1 La manera de reconstruir los partidos esdoatrnislos, l5aj%eljW^9r4eígaa carM wuy.supaíjqivá;'.miSifuerzas.
|nisrao la memoria escrita por él aceirca de los nuede laiBipita^-^^iqné haWft pasadp?.Ón9;i<>4o.'fI^IQ^^
I Arre3rábfl(íne mas la. Taltal.dia costumbre de usai? aquí
sabia pocos diasiantea. .Lo mismo e)viqedÍ9^?,res^ctp dé . prjé:ifi«ae«t&ftyo; ^ ^ u { l § I ^ ^ J M T ^ 4e, w a írappiqn
vos decretos remitidos anaquel altó cuerpo, y hoy
tapjiierad?^:qi;ie qe^», ,i'íí^M^rmr..&aio otra Pandera su ^e la palabra, y qué proviene de que, habituado há
Loja: el g«báernp'loga4áa;eÍg<íbJernóe8teba,q^eto',
deberá verificario "eo la sesión'gehei'áf que ha de
muchos afio» á' émitir'los pensamientos con ía pluma,
eljg!ebj«sB»;«8taba; paraütixio: .elgabiert^p, gg.^ ba .soraój^ partido" ¿Pero logrará "atraer áéiüds loS ólie lecómpo5lifetftót'é8?'Nb,'\iBd?e^••nón0*créo,•'•• -' '
;•' • •• habia de. seguirse entorpecimiento en el uso de la palaestaba pjggQ....,
.,-..,.
' í ,
' •
celebrar.
"
-.
, •
I üeapues! de tó qneioouiaá&btti85B¿.¿pfiidia gobernar
prn., mucho maí, cuando nunca he poseído el don de
Para m i l a cuestión de'Loja'e8"anli,''Cuésli'6ti tríBtíLas.
Corles
de
BéigÍQ.a
siguen
aun
disculieado
el
la ^looui^ncia, .Acobárdame mas el saber que la comisima, Iúfiiub.réT hprr^le. Sabiéndolcctodo el «obiemoj iiadi«^8oe.©l.apfty9 d« }íP;^lp |a|ti4a?iPado gobernar
SBI
ministerio
moderado?
¿Pudo
gpberñw.
ej
nuiüsíerio
proyectó
de
coütestacíoa
al
discurso
del
irotjó,
en
sión
iba'á
tener
eni'rente.Wíip%ada
de
príncipes
de
ía
y nó ádS]^táníf#ntó|lÍfb'niédi<fera¥liíi^i»(«l»,'W
CORTES.
Í
S
f
FéM^lSiflUl
r
t
t
*%»U»,r,'!tel
cuyos debates ya iavirtieron bastantes sesiones, y
no es dé esperar que aun teímios, *<e;;iin el sistema
detallado que óbserv.m eú síil análisis.
, T i T i m ) ofí-i^íi'ítvhoy m'icho inlTés las del Par-lamento ftiljano, sirvíbndo úoicamonte de pret^sto
para qué algunos dipiitados 'Mze'in sns Plolfs oritó#ias, hicfenlo al gabinete fútiles cargos por el sistema di? gnbirrno puesto en práctica, y que los ministros r''f itan vietoriosamente,' eon aplauso de la ma•yoríasin que el país'preste atención á tales contra-'
versias.
"
1
. ,.
LasMúdértldilmbríis sobre el desenlace del conflicto
anglo-amiíricatib contini'nn. fjOS pirió-licos do íí'ieva-Y,'irk han modiñcido su lenguaje: los ingleses,
mas quede aprestos belicosos,, se oftupan del reconócimieato do los Estados del S'ir, r-^canoeimiento que
Dodria venir, en efecto, ^ consecuencia del Memorándum que dichos Estados se proponen dirigir á
Europa y q w el lllorninq-P)sl,. órgano de lord Palmerston, há indicado ya de cierto modo, dando mArgen á creer que su* realización pudiera estar menos
lejana deló que átíMíAera vista'parece-.' ' '
'^
A pe'sáf 'detodo, el afobiérrto británico; sin atett-'
der á la espeme de reacción piicíflca m^inifestada por
dos ó trqs periói/cosíngle^sis ínáuidos poriqlereses
mepQfinjtiles,, \\ a la 're5ólt|éion de nn>ñ«eí^g celebrado e,a,uPi barrio d(j ^Londres, reclamando una tpedif\-,
cion en el-ootiflieto con América, prosigi|e ?us aripar-.;
mentos con actividad y energía cada vez'mayores.,
La Gran Brétaña considérala guerra como una avén^
tualidad tan prob^Wev'qué y a n o •>'!SJ>Mei sus návescofréos^luó eséólta'díisí por bríqWeis dé sfii*rá:; *
El MÍíMíiíÍMín inglés HHbrá llhgádó'áWa'shíngton'
el 11, y'riáda podrí saberse acércfi de las dispóéiilóues ofleiafóS'del gobierno nórte-amérieano antes del
28'dei 'eofriéhte; por cónsecuepcia, cí)Tiíio-vá 'dijiftio^,'
todo cúantttse suoonga carece de valor."El gafcinéto
brit'áwco ñiá Iís^diiet56'fi#"d(á dé1áitaz'in de ta g'üeii^-'
ra; ^ ál aé'' Washington se halla, por'declrtóasí, éii
situación aMlo^a. Huk^^Án r e ^ a ' las' éom'u'dlcáeiOnes
oficiales y perénfotiás de Londres, eslafS y a pronunciado ef rneWaje del presidente' á lá apertufádeí
Con'gri-?só, y nó e^ dé esperar que esté díocúfriénto
esté escrito en sentido conciliatorio.'
M. Lincoln, influido por el dictamen de los jurisconsultos americanos, y quizá tanihien bajo la pre.siou popular, ignorindo por otra parle el sentimiento
do la opinión ingles'i, fiándose en los precedentes y
contando con eneontrir debili-li 1 dond'^ i)or el contrario existe una r.ísolucion que parece inflexible, ,se
habrá visto sin duda.omo'-íñado en la política tradicional de su pai«, aceptando claramente la responsabilidad de la agresión com'^tlda por (3I comandante
del b'i pie federalista, v en este caso no es verosímil
que o' asunto logre un deqenhc» satisractorio.
Hoy, empero, torna el Tiailii-Newi ^, insistir en la
idea que ayer djimos emitía de una mfídiacipn en el
cooflicto anglo-amerlcano, cuyo pinsamiento desarrolla mas p ir estenso. En su opinión es tanto mas fácil de aplicarse ahora, cuanto mas probabilidades hay,
do que á ello se preste el gobierno federal si no
aprueba el acto del capitán "WÍIJÍ-'ÍS; pi?roel MorningHerald, por su parte, declara preferible obtener las
simpatías de Fraacia eo la cuestión, por ser útil á
Inglaterra su apiyo moral en ciertas ocasiones; mas
sin que por ello le fuera forzoso prestar una cooperación activa que para nada há menester la GraaBretaiía.
;.
"Ona correspondencia de Alemania insería el Mó~
niteur muy notable bajodos aspectos; 'uno de be-'
neyóléncia hacia el Austria y otro de antagonismo
respectó a Prusia. Mientras* la carta á qué nos referimos da'las noticias mas traaquilizadoras acerca de
Hungría, y aplaude las determinaciones' adoptadas
por el gobierno austríaco, asegura que én Alemania
principia á disgustar la marcada añeion de Prusia á
la§-ánexiooés íddirectas por medio dé tratiáa'Os 'militares cbnlos pequeños Estados qué Irt circundan , y
pordeáflo así, giran'én"su'órbita. 'A'ude en ésto á
que af)énfá.s coücluido el convenio telebradd con S á jonia-Cobtrrgb-Gothá se habla y a dé ájtistar otros
pareciads'icoií Weitaar', AÍtémbiit'go y haStácon
BrúífsMtíh. '"' • • ' - ' ' • --"- •'':^'"^••'• •'••
•Sea'do=elto"l8''ctüé fuere, la verdad es'que'la políticíaíaleritír arldfrtttda é^ eSCá nación clesdéerád vénímieato de Guillerrtti'Fál'tfóbd,' ha'proidut^rdó etl'lá'
Dieta oposición bastante á diflcultar el desarrollo de
Jas ideas qué la itíSpiran'. Hessé-Erectoi-alv entreotros
Ef#ádés'¥e declaró ya hbslíl á tílertos actos en'que
imagina descubrir Uflatendíeiiciá-deabsoreio'nj 'y h a '
adquirido táJes proporciones éá tá Üietá seméjáilté
hostilidad, que desde la declaracloú emitida el 14
de noWembre por el représentattté'de aquol^aís,
;han estM'óá puntó de interrumpiráé las rélácíóneé
diplomáticas que mantiene conélgábiiieté dé'Berjlin, atibque es de eip'erar nO llegiien 1ks cósás á tal
estreilio. Ndobstante, sbá ya Ud indició cstak'di.sensiones (le la resistencia que halla el gobierno prusia•no eijtre los puejblos que, forma,D la CoaféderaeiW
ílermánica, \
;,..!!,,>
; Ayer digimps que el., rey d e Síiécia mostrábase
inclinad» á introdiitíf? reformasen la ley fundamental
de aquel paísj'íla mas atrasada dé todas la^ Gonstítuciones eopOpéas. Añadiremos hoy qué setratfide
mOdiflearén tal proyecto la'forma dé 'representación
íiacioñát','cüyp atrasado sistema no corresponde allí fí
las cotidiciones esenplaies do lo que jüslamente se
considera"^a como lá' espresion legítima del voto
Sabido es que él poder legislativo se ejerce ahora
fen^^Üecia por utia Pieta que constituyen la nolileza,
el clero,, la clase piedia y •! pueblo, cuyos diversos
brazos funcionan separadamente,; sin reunirse para
deliberar en conjunto mas que ea reuniones estraors- >
diaarias y rarísimas.
í Para modificar este sistema con arreglo á las míp s del soberano ha ido á Upsál el conde de Groór á
fin de coDsüIlar iSréíalivo a tan importante trabajo
coh'el ¿élébre profesor Calsón, cuyas opiniones rcspeltamente liberales, firmeza y réctilud.de carácter d e t)en,inspirar,|aníaypr confianza áflos liberales suecos,
• Las noticias de Polonia arntipúan siendo tan tristes y. desconsoladoras como lo-han sido hasta.aquí,
^ín que> pueda oonCí¿»irse la esperanza de que termlheo en época mas ó menos remota los escesos que
jas tropas y las' autoridades rusas están cometiendo
fliariánfenté en un pueblo que hace niuelió tifeftipo no
emplea coiítra la Rusia otras árthás que la resistencia
pasiva! t o s polacos* se cuidan ya muy poco d é las
juedidas arbitrarias ,del poder, y la autoridad contir
|iúa ejerctendo. actos de venganza con la apariencia
de actos administrativos.
•
í Para luchar en Polonia contra ia legalidad yi«l
derecho, los generales y oficiales rusos han concentrado en sus manos todos los poderos, y recurren á
todo género de violencias. Solo asi se comprende él
El Contemporáneo.-^Doiüfaigó íB'dié Dícíemfe^éá^ít^i:} 11
!#?•-
m
MI^>S9
tmm
m
•^¡•piqía perdida! Primero pefdlrí; yó eltseflotio dé .
';,
La GarAfe nfficieUe publica los nombras do los
Dijo Fernando estas p.alabra^ eóri.til acento , que la
' •
¿No habéis visto las pirámides
mis padres, y primero perderé el ánima éá mSíioá dé
dibuj,adas en un libro,
Ugrima que temblaba en los párpados de Iñigo, se res, muertos y de los fusilados.
SajUtniás, qne permitir que sema escape es^éí^ryo, el
y.á.^u lado'aoarecflT
baló silenoíoin.:.por BU iajsjilla, njientras «solainé con
Hace dos meses que se represonta on Turin y fn
como hormiaras loi egipcios?
único que ha herida • mi vanabla,. la primioia de n>ia; ¡acento sombrío.. ¡Cúmplase la voluntad del cielo!
• París una comedia ele doble sentido ÍA Pá'i.t ha p u Así junto á Rios Ro.sas
esdursioñes dé cazador,;.:. ¿ío vés?.;., ¿lo ves?..,. Aun
blicado muchos artículos sobre el gabinete italiano, y
vi á la unión y sus ministros.
se distingue á intervalos desdé aquí:.,.1 las piernas'le
.-¿Quién eres tú? ¿Cuál.es, tu patr|a? ¿En dónde ha-' ' '
i en Turin se ha creído que eran inspirados por la polí¡Que en donde existen ai orantes
faltan, su carrera se acorta, déjanje,...; déjame,....; bitas?,.Yo,vengo un dja y otro en tu busca, y ni veo el,.
! tioa francesa con el' objeto de proteger á Ratízzi en
manden duendes y vestiglos!
i suelta esa brida, 6 t e revuelco en el polvo.:..;.- ¿Quién vCoroel que té trae á estos lugares, ni á,,lps,>,«ervidoreei. ;„
i perjuicio de Ricasoli. Los italianos, que se precian
S. M, la'Reina a c a b a d e conceder la cruz d e IsaI demasiado de independientes, han mirado con malos
bel la Católica al distinguido nriniaturista M. Girard, * sabe si tío le'daré tngar para que UegueA la fuente? y ' que eóndttceiK tu litera. Rompe de u n a v e í el misterio-'^)
si llegase, al di?bío ella, su limpidez y; Sus habitádoires.
so veló éñ qué te^ñvüelves como enñná'-nóphe p r o ;. ojos esa protetcion concedida & Rátazzi; y así' se vé artista pintor del emperador de Mos franceses, y,que
acaba de hacer los retrato3dan«éstrosr«yesy4e la fa- ilSúslti^c^mpti^o! ¡súsr oaballp mío! ñ ié alcanzas, manDe los Estados-Unidos no tenemos noticias mas j claramente leyendo loa periódicos de aquel país.
funda., Y<^,t9 amo, y noble ó villana, seré tuyé, tuyo ,
milia real de. España. La,renutaRÍon europea deséate
ddengarzar los diamantesde mi joyel en t u serreta
avanzadas que la siguieníe carta de Washingtoa, que I
siempre....
:
Esta interpretación sorprende y lastima al Pays, y
célebre miniaturista, nos dispensa • de itodo; elogíei y
El sol había traspuesto la cumbre'del mente; las
publícala Crónieado New-York, fechada el 22 de i por ellas dirige vivas recriminaciones á la prensa itaademas, el público de Madrid ha podido ya jozgar de. 'de or.b. •
; íCabalto y gínete partieron como on huracán..' •
sombras bajaban á grandes paéoé jiórsuíálda: la Iwisa •
laíl)elleza de las obras de este distinguida artjiíSi, esnoviembre:
i liana , declarando que el embajador de Inglaterra en
pijestas'en la carrera de San .Géróniíao. . ;
, Sfiigo los siguió con'la vista hasta C[ue sé perdieron
gemía entre los álamos de la fuente',' y ía «ieblá, ele;
Turin,
sir
J.
Hudsoa
se
melóla
en
todo
esti,
como
de
;
«Muoho se habia, en ésta sobra la captura de
JLa infanta doñaisa.belS'ránciséa, hij» mayor
en Iftaialeija;,después, yolríÓ. I09 ojos en derredor
vándose poco á poco dé l a stíperfi'^ié del lago, comend^S. M. la Reina, disfruta en éstos día* des nb mny
M. Masony M.-Sl^dell. Hasta,ahora no se sabe que ^ póblioo se sabe,. Paede oontesfcarse al Pay$: «oso comsatisfactoria salud; pfero anoóhe habla esperitnentado 1 siJyo;.<Mdids, como él, permanecían inmévsi^ y^cons?^ s zaba á envolver las foca^ de'su margen.
I pete á los italianosrinfluencia poí influencia; y oonseel ministrp jngléí haya hecho gestión alguna sobre
algunalivio.
>
.,...,,
; j tinados.
' •
•
"
Sobre;un'á dé éstas rocas, sobre una qué parecía'pró^ ,
* jo por consejo, son dueños'de preferir los del miinistro
este aáuato: 'indudablemente espera instrucciones de su
Los
ejercicio»dé
oposicióná,las
d
o
s
p
í
á
i
a
s
d
e
'1
El
indiitóiro
etóJamS
al
fin:
ximaá desplomarse en el fondo dp. las aguas en cuya
r británico á los del Pays, cuya conversión á la causa de
maestros auj^iliare» de las escuelas.públioas dé esta 1
gotSerrio. Tanipóod íia teüidó conversación alguna
superficie se retrataba temblando,,-el primogénito de
' la unidad italiana es bastaate reciente.»
Í,
• corte que'résultaü vacantes,' darán pr¡ncip!i4,el dia.l6 ! • —Señores, vMotros-lo habéis visto; me he espuesto i
respebí» á este asunto con eí ministró de Estado. Las
,n*)rÍE
entre
los
pies
de
su
caballo
por
detenerle.,
Yo
Almenar.de rodillas álos pies de sa.misterios^ aman-^
del
corriente,
á
las
i^ueve
en
punto
de
la
ináfiana,
en
lá
\
j
La erupción del Vesubio ha causado, según parece,
persigas síMníaménte rélacionÉidfls con el lord Lyons,
callo de la; Rpína.núm. 24; cuartrt principal, y los de ] he cumplido con mi deber. Con él diablo nó sirven
te, procuraba en vaso arrancarle- el áecreto do sü
, graves desastres; pero el telégrajo apeaas ha trasraitipárvulos el 18 á latnisma hora de las nueve, «n la Car- i valantfas. Hasta aquí llega el montero con su ballesta;
dioeaqae tanto en éste negoció, como en todos los
existencia.
••[•}
I do aun los detalles.
rera de San Francisco, núm, 11, cuarto bajo.
|
demás, el ministro inglés ha manifestado la jnayor disde
aquí
en
adelante,
que
pruebe
á
pasar
el
capellán
Ella
era
bermosa,
hermosa
y
pálida,
conió
una
está' '
i
El gobierno francés, que ha dado plena sati&faccion,
El 24d-Ol actual S9 procederá. < a n e l s a l o a d e ,. cén. 8U hisopo.
creción, abgtepiéndose absolutamente de emitir opinión t seguo dicen, al suizo del asunto de Jussy, está deoidiitua de alabastro. Ünó de su3;rízo?caia íjobr.é.siiá hom?? ;
Oap&Uanefrá las eleocione? para el nombramiento de I
IL
. .
,— . ; • •
bros, deslizándose entré'íos pliegues del velo,-oémo un
alguna..
- Übilitados y vocales de las juntas eoonóaúqas ó de oaja
I do á hacer valer sus dereóhós ál valle de ló» Dappes.
í—Tenéis
la
color
quebrada;
andáis
mustio
y somrayo dé sol que atraviesa las nubes; y en él* cerco de '
Díoese que entre el cuerpo diplomático prevalece la I * Hasta el lunes próximo no leerá M.. Troplong ante
para el año próximo da lasilages militares queA conti- • |
teió: ¿qu4 08 Siioede? iDesde el dia, que yo siempifé
sns p'jstááas rubias, brillaban sus púpílaij, .c<too dos
creencia de que el capitán Wilkes ha obrado estricta- ' los senadores la Memoria sobre el proyecto de Sencftiu njUaoion se espreean. Señores jefes y oficiales «ín ^ t u a cjonde remplazo, escedentes deEE. MM,4e placas y j tendré por funesto, en que lleg&sieis i la fuente de los
esmeraldas sujetas en:UnaÍPya de. oro. , ' , ! .
mente con arreglo al derecho de gentes al sacar de un í (xmsulto. Se asegura qn« después de leerla á la oomidé juzgados de guerra; jefes y oficiales empleados en i Alamos en pos de la res herida, diriateque ana mala'
; Cuando el joven acabó de bablarle; sus labios se r e buque inglés á los comisionados del Sur, y que la Gran ; ¿on jr al Concejo de minis ros, ha hecho ciertas modicomisiones actiyag del servicio^^ y jefes ys oficiales embruja Os ha encanijado con sus hechizos.
movierbti
comojpáíá 'préañnéíar algünás'palabras; pepleados en EE. MM, de provimias y plazas.
]
Breta&a séri la última potencia que niegue el derecho j ficacióhes y anípliádola considerablemente. En ella se
Ya
no
vais
á
los
montes
precedido
de
la
ruidosa
j
a
a
ro
solé
-exlialaron
un suspiro, unsuspjro débil, dolienEl
instinto
d
e
los
ratones
se
h
a
demostrado
en
'
t trata de todas las cuestiones que tienen relación con la
quéasisim al capitán de la iSan/acíMío.
ria, ni el clamor de vuestras trompas despierta sus
«na catástrofe acaecida en Edimburgo recientemente.
te, como el de la,lígera onda que empujauna brisa,
é
importante
medida
cuya
iniciativa
se
debe
al
empeSe ha recibido un despacho del capitán Foot, que
Una casa que te hundió y que estaba infestada de raecos. Solo con esas oa-vílaciones que os persiguen, t o al morir entre los juncos. •
manda la escuadrilla destinada al Mississippf, anun- I lador.
tones^ hasta el punto que puede suponerse-en un : das las -mañanas tosíais la ballesta para enderenros
—¡No iñe respondes! ésclattjój'ernaiídó,' ál ver burciando qne muy pronto se hallará aquella lista para
L'Ámi de la Religión. h3. reCíbiSo una primera ad- edificiode mas de trescientos afiosde íeohai se'vi5 libré: & la "espesura y permanecer en ella hasta qué el sol se
de tal plaga seis ó siete días antes del derroínbamiento,
lada su esperanza; ¿querrás que dé crédito á Ipique de
i vertencia por unartículo sobjfe la Rusia, y La Patrie,
hacene á la vela y dar principio á las operaciones.»
esconde. Y cuando la noche oscurece y volvéis páüdo
oosaque había llamado la atención de todos sus cien
ti me han dicho? ¡Oh! No. Habíame: yo quiero saber
Ha modiflpado mucho en aquel país la opinión púi ' al dar cuenta de ello, dice que lo siente profandamennioradores, pertenecientes á i Las clases menos acomoda- y fatigado al'castillo, en balde busco en la bandolera
Á me amas; yo quiero saber si puedo amarte; m. erea
das dé la sooiedad.
• h
.
ú>8 despojos de la caca. ¿Qué os ocupa tan largas horas
blica, á juagar por las apreciaciones de la prensa. El ! te, aunque calla los motivos de su pesar.
Una mujer.'.,..
>
\^
, ;>
'
¿Si
serán
ratones
los
unionistas?
Según
van
derHoy se ha celebrado uña numerosa reunión de dipuNev}-York-Tribunii acons^a al presidente Lincoln j
¿umbándolo todo, motivws hay, para prestunirlo;
•' ' lejo8,de los qué mas oá quieren? .
J
—O^n
deínonio..,..,¿y
si
Iqfuese?^
i Dice un ministerial tfue la é^stíasea d é billete»
que na haga la guerxa á la Gran-Bretaña, pues p r e - I tados en el salón de los Pus Perdus, ej}cl palacio BorMientras Ifiigo hablaba, Fernando, a b ^ t o en,sus
• Eijovenvaailó un instante; un sudorírio corrió por y
ideas, saoaba maquinalínente astillas dé sq «seafio de
cisanjw^a ep íüflWe,6sla esperanza se levantó el Sur, 1 bon, siendo objeto principal de todas las oonversaoio- • qué se bota en Madrid para él «prted de Nóisbe^Buena,
sus
miembropr éus pupilas se dilataron al fijarse con'
procede dé la ráálá diétriWiBiítt que dé élfoSse ha' liej áeslacuftjtionflnanpiera.
ébano con el eú<Aillo'de monte, "
11! .•
y este cedería, si supiera que Europa no habla de
áiasiriténsidad fen las dé aquella iniqér,*y fascittMo
dho,
procurando
los
encargados
dé
hacerlo
fávórééer
á
j " Cpn el titulo de Él Genio dé la remíusion é$tá esoriDéspueídéunlargo silencié, que éolóiütefínmpia
f nos con perjuicio de otros.
^ r su brillo.fqíf^rioó, demépté pasi, psclapió énútt arayqdarle. Al propio tiempo, opina que seao «¡ntregaMendo una obra en cinco tomos, un jÓyen escritor poel chirrido de la hoja al resbalarse sobre ' k pnlimenri
rebato de anipr:
;,
;
dos los comisarios, y se declara opuesto á toda idea
•
El
señor
director
del
fatuo
estaba
eri
él
deber
de
ha-'
lítico, M, Chassitt.
tada
madenti
d
'jóvea
esclamó
idirigiéndose
áisn
éer<feer
evitado
estiis
ahnl[)s:'sitt
dtóla
n'é
le
há
hédhb
p»ii'-^Sild
fueses.....
tie
amaría.....
te
amaría, como te^
beUfosa, Én igual sentido se espresan ya otro^ m n El objeto de esta obra, consiste en «determinar clague se creerá llamado' á realizar mayores haia?i,as..
' Vidor,; Cotno si no hubiera esoQobndó; uña sola désAs
amo ahora, como es mi destino amarte, hasta mas allá '
clios periódicos americanos; veremos lo que decide
ramente cuáles son los principios de la revolución
• Ha habido administración que sin correspondería I palabras;
de esta vida, si hay algo mas allá dp ella,
el Congreso de la Union,
cien billete^ por consiárnaoión se la han dado seiscien(1789-1795); cómo se han presentado y desarrollado los
¡
—Iñigo, tú que eres viejo; tú que,conoces todas las
-—Fernando, dijo la hermosa entonces, con. una voz
tos.
¿Quién
manda?—Téllo.—.Isf
va
ello.
hechos, y de qué'modo d«ben manifestarseí Eúeontrar
Reflriéndose á uaa correspondencia de Londres,
; Dice un periódico gue el gobierno t r a t a d e a d - I guaridas delMoncayo, que has vivido en sus faldas
semejante áiina música: yo te amo más ai*» que tú me.
y probar la unidad de la revolución, determinar sU
quirir para el Múséó nabiónál de pinturas tina verda- ! persignielido á las flferas,' y en tus errantes esóursiodice La Patrie qué, en virtud de las repelidas conamas: yo qué'desciendo-hastánn mortal ^éttdcí'Uti e s - •
dera joya. Alude tiiiestrocolRgá al boceto del fáittoS^ ' ñes de'jjaíiador súbistes mas de una vez á su cninbre,
verdadera tradición, y por lo tanto, limpiarla de cuanpíritu puro. No soy una mujer como las que eXistetí en,
ferencias,celebradas entre algunos miembros del gacuadró del autpr sevillano, Bartolomé Esteban Muri- ! dime, ¿has encontrado, por acaso, una mujer que vive
to no la pertenece.» Terminará esta obra con la «con{a tierra; soy una mujer digna de tí, que eres.superior
binete británico y los representantes de los distritos
llo, qué representa á San Juan de Dios en'el apto de
ciliación de la libertad y de la igualdad, por medio de
levantar del suelo,á un pobre enfermo, óotí ayuda de •; ^ntre sus rocas?
4 los demás hombres; Yo vivo «n el fondo de estas
manufactureros de aquel país, parece que el gobierla justicia.»
Un ángel, cuyo original existe en el hospitalde la Sm- ' ; —¡Una mujer! esolamó el montero con asombro y
aguas;
incorpórea Pomo ellas, fugaz y trasparente, ha- '
no inglés, sea cual fuere el éxito de las negociaciota Candad de Sevilla,
Se ha abierto una susoricion con el objeto de facili'' diírándole'de hito en hito.
blo con sus rumores, y ondulo con sus .pliegues. Yo no
nes relativas al asunto del Trenl, ha resuelto de un
tar al joven autor loa medios de imprimir su obra; y
• r e s d e las nueve da la niañaiía hasta las nneVe I : —S!, dijo el joven ; es una cosa estrana 1» que me
éastigo al que osa turbar la fuente dondp moro; _antes
modo definitivo reconocer la apertura de los puertos
de la noche están abiertos en el gobierno de provincia ' sucede, muy estraña..... Creí poler guardar este seentre los suscritores se cuentan hombres eminentes del
le premio con mi amor como áuu mortal superior á las
los.despaohos
para
el
empadronamiento
general
de
los
americanos del Sur, apoyando su decisión en que
partido democrático. El precio de la obra, será de 30
;
¿reto
eternamente,
pero
no
es
ya
pow'ble;
rebosa
en
mi
éupersticiones
del vulgo, como á un amante eapaz de
sirvientes ds ambos sexos de Madrid, Todo está dispuesno siendo efectivo el bloqueo, debía con^derársele
francos.
to para qne cada dia pnedan quedar empadronados ' corazón y asoma á mi semblante. Voy, pues, á r e eomprender mi cariño estráño y misterioso,
'
como nulo y no ocurrido.
hasta mil ind¡<iduos, pero no llegan ni con mucho i,, ¡ Velártele...... Tú me ayudarás á desvanecer el mis¡ Mientras ella l^blaba así, el joven, absorto,en la
este número los que se presentan. Necesario es que_ los
ferio que envuelve á esa criatura, que al parecer solo
GACETILLA DEJLA CAPÍTAL,
contemplación de su fantástica hermosura; atraído coAl efecto se han entablado negociaciones con las
amos de casa ayuden á 1a autoridad en la graveé impara
mí existe; pues nadie-la conoce, ni la ha visto, ni
tno por una fuerza desconocida, se aproxiniába mas y
potencias signatarias del tratado de París, las cuales
portante tarea que se ha impuesto, haciendo que sus
Boletín religioso. San Ensebio, confesor.—Mupuede darme razón de ella.
mas al borde de la roca. La mujer dé los ojos verdes
criados se presentan á cumplir con lo dispuesto en su
cho se distinguió este ilustre romano por su celo conse han pronunciado en derecho á favor de la nulidad
propia utilidad y para moralizar el servicio doraéstioo.
I El montero, sin despegar los labios, arrastró su bantra
la
herejía
de
los
arríanos,
por
lo
qutfué
emparedaprpágnió así.—¿Ves, vas, el línapído fondo de ese lago,
déf-bloqueo, sin prescindir del hecho de su neutralido vivo por orden del emperador Constancio. Era roLa suscricion abierta en Cartagena p a r a rennir
quillo hasta colocarle junto al escaño de su señor, del
ves esas plantas de largas y verdes hojas que se agitan '^
dad por ello.
mano de nación, y padeció martirio por defender la fé
fondos y publicar las obras del malogrado poeta D. J o - que no apartaba nn puntólos espantados ojos. Este
en su foñdó^.,.. ellas nos darán un lecho de esmeralcatólica constantemente en tiempo de la cruel persesé Martínez Monroy, ha producido hasta ahora unos
En tales circunslaucias, con el apoyo do la adhelespiíes de coordinar sus ideas, prosiguió así:
das y corales..... y yo,.,, yo te daré una felicidad sin
cución de dicho emperador.
8,500
rs.
sión moral de Europa, la Graa-Brelafia está decidida
' —Desde el día en que á pesar de tus funestas prenombre, esa felicidad que has soñado en tus horas.de
Fiestas religiosas. Se gana la indulgencia plenaria
El veterano Bolfagon; uno d é los pocos valiená exigir, sea por via de negociación, sea de otra made cuarenta horas en la iglesia de monjas del Caballeáicci nes, llegué á la fuente de los álamos, y atravefelino, y que no puede ofrecerte nadie..... Ven, la
tes que nos restan de la rota de Trafelgar, de quien nos
ro de Gracia, donde por la mañana habrá misa mayor
nera, el alzamiento de un bloqueo que arruina al cosando sus aguas recobré el oiervo que vuestra supershemos ocupado algunas veces, se encuentra gravemenniebla del lago flota sobre nuestras frentes como ün
con sermón, que predicará D. Basilio Sánchez; por la
te enfermo de una congestión de pecho.
tición hubiera dejado huir, se llenó mi alma del deseo
mercio del mundo sin provecho para nadie, puesto
|>abellpn de lino.,..,'las ondas nos Itaman opa sUs votarde se cantarán completas y reserva.
Ayer quedó en l a Bolsa el consolidado á 4 9 - 7 5 .
áe la soledad.
pes incomprensibles, el viento empieza entre los álaqueésiá probado, con documentos irrecusables, que
En las parroquias y Capilla de Palacio habrá misa
El diferido A 43-30. Deuda amortizáble'de primer*
mayor boa sermón, y en San Justo, San Andrés, Hos-imos sus himnos de amor: ven
ven.....
la guerra puede durar un tiempo ilimitado, en aten;
¿Tú
no
conoces
aquel
sitio?
Mira,
la
fuente
brota
esolasé á 35. Díuda amortizáble de segunda clase á
íital general y San Antonio del Prado, se celebrará á
14-50,
Deuda
del
personal
á
20-75;
eondida
en
el
seno
de
una
peña,
y
oae
resbalándose
goLa
noche
odtnenzaba
á
tstender
sus sombras, la
ción á que ninguna de las,dos partes se halla en esa Virgen de la Concepción.
ta á gofa por entre las verdes y notantes hojas de las
Mercados. En el d e granos d e ayer se v(?ndleluna rielaba en la superficie del lago, la niebla ,se
lado de obligar á la otra á someterse.
Terminan las novenas de la Virgen dé la Concepron 1,647 fanegas de trigo al preoio de 55 á 62 I[2
{dantas que crecen al borde de su cuna. Aquellas gooion en Italianos, Santo Tomás, Maravillas, y oratoarremolinaba al soplo del aire, y los ojos,verdes brí- ,
Al levantamiento del bloqueo seguirá la salida de
iealps una, quedando por vender;782. La cebada se
rios del Olivar y Espíritu Santo,
tas que al desprenderse brillan como puntos de oro y
(laban en la oscuridad como los fuegos iatnes que
vendió de 32 á 34 y á 44 la algarroba.
los algodones, la suspensión de las liostilidades y la
Prosigue'la novena de Nuestra Señora de Loreto en
sueaan como las notas de un instrumento, se reúnen
forren sobre el haz ile las aguas infectas.;...'Vén.....
su
iglesia
titular,
y
la
de
Santa
Lucia
en
San
Juan
de
separación amistosa de ambos Estados, beligerantes;
entre los céspedes y susurrando , susurrando, con un
ten.... estas palabras zumbaban en ios oid'os défefDios.
por manera que este incidente presenta la cuestión
ruido semejante al de las abejas que zumban en torno
Bindo, pomo un conjuro. Ven..... y la piujer miste-,
Visita delá Carie de María. Nuestra Señora del
VARIEDADES.
Tránsito en San Cayetano, ó en el Carmen Calzado.
anwricana bajo un nuevo punto de vista.
de las flores, se alejan por entre las arenas y forman
ríosa lo llamaba al borde del abismo, donde estaba
un cauce, y luchan con los obstáculos que se oponen á
suspendida, y parecía ofrecerle Un besó..... un beso,.,.
Son,las
doce
d
e
la,noche.
/'
Solo está el cristiano grande;
su camino, y se repliegan sobre sí mismas, y saltan, y huFernaado dio up pasó' hacia ella
otro..,., y sintió
Noticias de Madagascar anuncian que el nuevo rey
Leyenda.
ya despidió su tertulia;
yen, y corren, unas veces pon risas, otras con suspiros,
irnos
brazos
delgados
y
flexibles
que
se liaban á su
Radama II, trata de introducir los beneficios de la
ya no le incomoda nadie.
: Hace mucho tiempo que tenia ganas de escribir cualbasta caer en un lago. En el lago caen con un rumor
cuello,
y
una
sensación
íria
en
sus
labios
ardorosos^
Los
codos
sobre
los
muslos
quier
cosa!
eon
este
título.
civilización en su pueblo. Para ello ha principiado por
indescriptible. Lamentos, palabras, nombres, cantares,
apoya, y el,rostro, grave
iin
beso
de
niéve
y
vaciló..:.,
y
perdi^
pié,
y cayó
Hoy, que seme ha presentado ocasión, lo he puesto
franqviear la isla á los europeos, decretado la libertad
sobre ambas manos sostiene,
yo no sé lo que he oído eti aquel rumor cuando me he
al
agua
con
un
rumor
sordo
y
lúgubre,
^on letras grandes en'la primera cuartilla de papel, y
mirando atento su sable.
comercial, aboliendo las costumbres bárbaras y susentado solo y febril sobre el peñasco, a cuyos pies
^ Las aguas saltaron en chispas de luz, y se cerraren
Ansioso mira el acero
luego he dejado á capricho volar la pluma. ,
persüciosas deaquejlps habitanlej. y hasta suprimienSaltan las aguas de la fuepte misteriosa para estancarse
lobre
su cuerpo, y sus círculos dar plata.fueron en-querelució en mi' combates,
Yo creo que he vistO: unos ojos corno los que he piur
do la pena de muerte en sus Estados. La misma carta
én una balsa profunda, euya inmóvil su{»rficíe apenas
> unas veces desdeñoso
éanohandosé, é&saneháñdose hasta espirar en las orillas.
tado
en
esta
leyenda.
No
sé
si
en
sueños,
pero
yo
los
e contempla, otras amante,
fiza el viento de la tarde.
que esto refiere, desmiente la noticia de queel nuevo
be visto. De seguro ño los podré describir tal cual¿Qué silencioso le dice?
* Todo es alU ¿ráñde., La soledad con sus mil rumores
soberana hubiese hecho perecer como s e dijo á un
¿De qué, triste, va aquejarse?
eüos eran, luminosos, trasparentes .gomo,,las- gotas d«
I
ESPECTÁCULOS.
llesoonoddos,
yive«í aquellos lugares y embriaga el
primo suyo que |e disputaba la corona.
¿Por qué el acero desdeña?
la íluviaque se resbalan sobre las hojas de los. árboles
espíritu en- su inefable melancolía. En las plateadas
¿Por qué el mismo le complace?
después de una tempestad de verano. De todos modos,
í TEATRO R E Á L . — A l a s ocho y media de ía noche.
¡Ay! que el podre conde-duque
hojas do los álamos, en los -hueoos de las peñas, en las
I—Tercer turno.r—,5isr«aní. ,
:.. .
Confirmando lo que- decimos en otro suelto antecuento con la imaginacioh'dé nfia lectores para haceroyó á Ríos ayer tarde,
ondas del agua , parece que nos'hablan los invisibles
y en lucha el sable y la lengua,
me comprender en este que pudiérainos llamar boceto,
rir, asegura un despacho d e Londres que lord Jobo
{
TEATRO
DEL
PRINGIFE.-¡-A
las
cuatro
de
la
é^íritus de la naturaleza, que reconocen un hermano
salió mellado su sable.
Íaíde.-^£¿ 5ói' rfe ínwernó.^Bailé.^-^La comedía en
de un cuadr* que pintaré algnn dia.
Ru^ell ha manifestado á los representantes de los
en el inmortal espiritó, del hombre;
Por eso triste le mira j .
un acto Maruja.
.
> .•
grandes centros manufactureros ingleses que pronto
ycontempla en sus,afanes
Cuando al despuntar la mañana me veías tomar la
'
A
las
ocho
y
inedia
de
la
noche.^—Za
.Busna alhaja.
—Herido va el ciervo... herido va; no hay duda ; se
que un discurso hace mas daño
se resolverá la cuestión capital para ellos puesto que
í—Baile;——^El jugiieté oómioú AndárK par las ramas.
ballesta y dirigirme al monte, no fué nunca para perque un... ¡apunten! ó un... ¡ataquen!
yé el rastro de la sangre entre las zarzas del monte, y
estaban ya adoptadas todas las medidas necesarias
derme entre sus matorrales en pos de la caza,n<>; ibafá
i TEATRO DE' VARIEDADES.—A las cuatroy mePor eso, no con sonrisas,
al saltar uno de esos lentisoos han flaqueadó. sus pierBia de la tarda.—Juan de las FíráíW.'T-Baile.—La pieza
que no es de risas el ti anee,
sentarme al bardedelafuente,Ábnsoaren ausondas....
pars^que libremente pueda esportarse el algodón desnas...
Nuestro
joven
señor
oomienza
por
donde
otros
'¿a FamUa dd boticarh.
*
y sí el bigote mordiéndose,
lióse quéi-¡ttna4oe«»a! El dia que salte sobrehila pon
de principios defebreropróxinjo...
acaban... en cuarenta,afl&8 de monteío ne he viéto 'measi le dice á su sable:
i A las ocho y media déla noche.—Zki Crúí d^í »<apii
Relámpago,
oreí
haber
visto
brillar
en
sú
fondo
üha
Si esto Acontecse, se remediará la crisis que tanto
|rin»o»!oi—Baiw.-T-íSáinete. .
jor golpe.-, ¡pero por §an Saturio_,¡ patrón de Soria!
cosa estriaña..... muy estraña.... losojosdéuna mujer.;
amenaza menoscabar la industria fabril de aquellos
Arma, que de mi,alma
I TEATRO DEL GlK(X>.-*-A las cuatro y media dé
eortadle ,eL paso p^r esaS'^arrasóas, azuzad los perros,
Tal vez seria un sayo de aolque serpeó, fugítive
fuiste el apoyo; ,
ia tarde.—A''acít« se mxtere hasta que Dios quiét-e.-^—llH .
habitantes y aiw 1» de Europa Cintera.
soplad en esas trompas hasta echar los hígados,' y
^ntre su «puma; tal vez una de esas flores que flotan
sable, con cuyos fílóé
caSallertparticulat.^-^Porcénquisla.
hundidle
á
los
coíceles
tmáVonartade
hierro
é
n
los
h
i
"
lo he sido todo.
entré las algaS de stt ifeno, y cuyos cálices parecen es(OorrespondMioia parlioular de M Ümtem¡}oréHe:')
'' A las ocho y üji^ia de la noche,—^Primer turno.— i
jaréa: ¿no veis qué sé'dirige Mcia la fuéáte de los álaDi, ¿será cierto
taeraldas
no sé: yo creí ver una mirada que se claPARÍS U de diciembre.
tía'zarzuela en tres actos Genaro iei gio«áP/ero.
mos, y si la salva antes de, morir podenios darle por
que la voz de la idea
vó en lamia; una mirada que encendió en mi pecho
i TEATRO DE LA ZARZUELA-—A las cuatro y
Hoy se ha reunido «n las Tullería», bajo la presidenvence al acero?
perdido?
:i
^
media de la tarde .-T-JEÍ/«roMiwnto.
un deseo absurdo, irrealizable: el de encontrar Una
cia del emperador, el Consejo de-ministros: el Consejo
Las Cuencas del Monoayo repitieron de eco en eco el
; A las ocho y media de la nophe.—Tercer turno,—
I
Me
pronuncié
en
Pamplona,
persona
con
unos
ojos
domo
aquellos.
celebrará desde ahora las sesiones de costumbre ó sean
La zarzuela en tres actos £¿ Tesoro escondido. ;,
bramido de las trbnípás: él latir de lá jauría desencadevencí en Vicálvaro,
I
En
s,u
busca
fui,
un
día
y
otro
á
aquel
sitio.
,
tres por semana; los lunes, miércoles y sábados.
ametrallé mi gente,
nada y las voces de los pages, resonaron con nueva fu' TEATRO DE'NOVEDADES.—A.lae cuatro y mePor último-, una tarde
yo tBe;0reí juguete de un
y en estos cambios^
Al Consejo de ministros de esta mañana, a8Lstim:on
dia dé la tarde.-^í7n Corpus d« sa«srre.
ria, y el confuso tropel de hombres, caballos y perros,
sueño....-. pero no, es verdad; la he hablado yamuchas- ! A las ochó y media de la noche,—La misma funTú, sable mío,^
el príncipe Napoleón y los.Sres. Morny y Troplong.
se dirigió al punto que Iñigo, el montero mayor de los
fcion.
• • ' • • • • •
•••"'
'
contra opuestas ideas
veoesi como te hablo i tí ahora..... una tarde encontré
Ño puedo garantizar la exactitud de los rumores
marqueses de Almenar,'señalara como el mas á propósiempre
has
vencido.
•
TEATRO
DE
LOPE
DE
VEGA.—A
las
cuatro
de
ieñtada
en
mi
puesto
y
vestida
con
unas
ropas
que
lleque circulan acerca de los diferentes puntos que se han
sito para cortarle el paso a l a r e s .
, ;,
la tarde.—Función dé Nacimiento representada por
gaban hasta las aguas y flotaban sobre su haz, una mudiscutido, pero me aseguran que el asunto principal
Por eso fiel amante Pero todo fué inútil. Cuando el mas ágil de los lefiguras de movimieíito.
,,
„
,
jer hermosa sobre toda ponderación. Sus cabellos
hé sido ttiyo;
ha sido el de los nuevos impuestos que se proyectan.
breles llegó á las oarrascas jadeante y cubiertas las fau• De nueve á dos de la noche baile estraordittario de
por
eso
siempre,
siempre
eran
cotno
el
oro;
sus
pestañas
brillaban
Como
hilos
de
Sigue atribuyéndose al príncipe Napoleón la idea
sociedad, ,
,
.
ces de espuma, ya al ciervo, rápido como una saeta, las
te he dado culto.
luz, y entre las,pestañas volteaban inquietáis unaspu^
CIRCO
DE
P
Á
ü
L
—
A
las
tres
de
la
tarde.—Baile
de hacer pública una teoría completa, aplicable á las
había
salvado
de
un
solo
brinco,
perdiéndose
entre
los
¡Ve mi falanje!
pilas que yo bahía visto
sí; porque los ojos de aque'pot La Juventud Española.
contribuciones, cuya iniciativa le corresponde, así comatorales de una trocha que conducía á la fuente.,
No hallarás una lengua,
A las ocho dp,la noche.—Baile por La Cpmtanté.,
lla mujer, eran los ojos que yo tenia clavados en la
mo su elaboración. Ese proyecto de tnoome-tax, ; epresi muchos sables.
—¡Alto!.,. ¡alto todo el mundo! gritó Iñigo entonces;
inente;
unos
ojos
de
un
color
imposible;
unos
ojos
,
PLAZA DE TOROS.—En la tarde de hoy dosenta cada año y nunca se resuelve nada.
estaba de Dios que había de marcharse.
Hoy frente de tu acero
mingo, á las tres, se verificará (si el tiempo no lo im—¡Verdes!
esclamó
Iñigo
con
uñ
acento
de
profundo
Mi corresponsal de Londres reduce á cuatro los moY la cabalgata se detuvo, y enmudecieron los tromse ha alzado un hombre,
pide) la cuarta corrida de novillos, con mojiganga,
terror, é incorporándose de un salto en su asiento,
tivos que inducen á Inglaterra á declarar la guerra á
armado de creencias
pas, y los lebreles dejaron refunfuñando la pista á la
);oro8 de ifiüerte; novillos para los aficionados y fuegos
Fernando le miró á su'vez como asotóbrado de que
y de razones.
los Estados-Unidos del Norte de América.
artificiales.
'
voz de los cazadores.
concluyese lo que iba á decir, y le preguntó con una
Busqué tus filos
1.* La violación del pabellón inglés, acerca de lo
En aquel momento sé reunía á la comitiva el héroe
tus filos no cortaban
mezcla de .ansi¿iad y.alegría:—¿La opnopes?
Por lodo lo nó firmado
cual no admite la legislación inglesa una opinión fade la fiesta, Fernando de Argensola, el primogénito de
JosB AGUIRRB.
1» voz deRios.
—-¡Oh!
no,
dijo
el
montero:
¡líbreme
Dio?
de
conO"
vorable al gobierno federal.
Almenar.
cerla!
Pero
mis
padres,
al
prohibirme
llegar
hasta
esos
Hoy busco una palabra,
2." Los antiguos rencores y los disimulados odios
—¿Qué haces? esolamó dirigiéndose á su montero, y
busco una idea,
lugares, me dijeron mil veces qué el espíritu, trasgo,
que reinan entre los americanos y los ingleses, y que
en tanto ya se pintaba el asombro en sus facciones, ya
ANUNCIOS.
y hoy, sable, eres tú solo,
demonio ó mujer que habita en sus aguas, tiene loaf
datan de la guerra de la independencia,
ardía
la
cólera
en
sus
ojos,,
¿qué
,hacQg,
imbécil?
Ves
lo que me queda.
ojos de ese color. Yo os conjuro, por lo que mas améis
3.° Numerosos intereses coníeroiales que han proque la pieza está herida, que es la primera que cae por
Sable impotente,
en la tierra, á no volver á la fuente de los Alamos. Un
vocado en Inglaterra grandes simpatías en favor de los
mí
manó,
y
abandonas
el
rastro
y
la
dejas
perder
para
¿pues qué? ¿Contra un discurso
dia ú otro os alcanzará su vengátiza, y espiareis muPastados del Sur.
ya nada puedes?
que vaya á morir en el fond,b del bósqiie! ¿Crees, acaso,
JDISCUÉNTOS/
riendo, el delito de haber encenagado sus ondas.
que he venido á matar .piervos, pa:^a festines de lobos?
4." El aprecio que ha sabido wjnquistarse en el
En atención á 1» proximidad de las fiesta» de Navi—Por lo que mas amo, murmura el jióven con una
p leblo inglés el gobierno, del presidente Davis, y la
—Señor, murmuró Iñigo entre dientes, es imposible
dad; lósseñores íinponénteBdela Oya <?«nenií de jímtriste sonrisa. •.
' "
impresión que ha producido el reciente mensage , que
pasar de este punto. '
Wcíones y Descuentos pueden presentarse á-recoger
los intereses deíéngadospor suscapitales hasta fin del
-^Sí, prosiguió él anciano: por vuestros padres, por
le dá la importancia de un hombre de Estado emi—¡ítnposible! ¿y pot qné?
Nadie sabe si el acero
corriente año enlosdias2a, 21, 2 2 y 23 del actinal, en
vuestros deudos, por las lágrimas de la que él cielo desnente.
'
—Porque
asa
trocha,
prosiguió
el
montero,
conduce
llegó al fin á contestarle.
la oficina dé la Compañía, calle de Atocha^ numoros
tina
por
vuestra
esposa,
poría^de
un
servidor
que
os
De estos motivos, tres-de ellos son muy graves, y
á lafuente de los álamós;!¡laiuente de los álamos, en
Hoy el discurso de Rios,
22, 24 y 26. Entendiéndose que;los qué so sé presen*'
-Í;
bastaría oada uüo de ellos para producir una lucha
en las casas y en las •calles,
Ü
cuyas aguas habita un espíritu del mal! El <jüe osa én-» ha visto nacer.
ten en Ips dias mencionados prefieren que sus intereses
leen, repiten y comentan
sean ácñínulados al capital. Operación que se practica-^,
—¿Sabes tú lo que mas afflo en éste mundo?'¿8abe8
terrible entre ambos países.
turbiar su corriente, paga caro su atrevimiento. Ya la
todos, desde Irun á Cádiz,
rá ép fin del mes, éégun costumbre de la eam:>
> •
CSroula un»,noticia muy importante si resultase vertú por qué daría yo el anior de mi padre, loa béips d^
res habrá salvado sus márgenes, ¿cómo las salvareis vos
Bl Sr. Bretón de los Herreros h a concluido una
dadera, como lo creo. La anuncia el Moniteur de hoy
la que me dio la vida, y todo el cariño que puedan
sin atraer sobro vuestra cabeza alguna calamidad horcomedia que desUim al leatio de V;jricüade3, y ca la
. Editor responsable, D. PEDRO JACOBO Y LOPES:.
lefiriéndose á La Gacette officiel de Turin.
atesorar todas las mujeres de la tierra? Por una mírarible'í Los cazadores soaioa reyes del Moacayo, pero
cual presenta y desenvuelve un carácter que sirve de
Trátase de la captura de Borgea y algunos de eus
da^
por
uíta
sola
mirada
de
esos
ojos:
mira
oómo
p
o
reyea
que
pagan
un
tributo.
Pieza
que
se
refugia
en
base á una fábula sencilla. La nueva producción lleva
I«^aBla;4«Luii'JUr^> calle i Í « , S a » l U ^
4,
cojnpafieros, también españoles.
dré yo dejar dé buscarlos.
esa fuente'misteriosa, pieza '
por título Lii hirinana de leche.
escesjvo cigor coa que ha sido tratado el adiniaisirador de la diócesis de Varsovl*, para.quiea el d e s Jlerro,«s LTua verdadera sentencia de muerto. Uaa
carta'hemos visto da,esta capital en que se refieren
escesos deplorables, añadiendo qne á mas de estar
converlila eo una ftwta'.eza rodeada de cafioaes par
todos lados hay cenliaelas ca las calles, las tropas
acampan so las plazaa pqblicas, y recorren la población jnQumerables.patrullas.
^
f
OJOS VERDES.
Í
.
•
•
•
I .
.
•
•
•
•