Fotoeducación Fotoprotección

Anuncio
Otorga 1 crédito
para la recertificación profesional
Código: 2.01.06 DO-11712-0413-0
Protección solar en la farmacia
Módulo 4
Fotoeducación
Fotoprotección
Cuarta entrega del curso que abordará el cuidado de la piel de los rayos
del sol desde el rol farmacéutico. Serán cuatro módulos especiales. En
una quinta entrega (dosis 206, abril 2013), el cuestionario de evaluación.
Por Dra. Gabriela Berengust *
Pautas. Para prevenir la aparición de
arrugas y manchas, así como el cáncer de
piel, es fundamental reducir la exposición solar y evitar las quemaduras, sobre
todo en las dos primeras décadas de la
vida, particularmente en la infancia.
La Fotoeducación consiste en una serie
de pautas de cuidados frente al sol entre
las que se destaca el uso de fotoprotectores (Fp). En este coleccionable desarrollaremos su clasificación, principios activos,
conceptos como factor de protección solar (Fps), resistencia al agua, fototipos de
piel, cuidados en la infancia.
La fotoeducación se trata de una serie de
medidas y procedimientos cuyo objetivo
es instruir a la población para que realice una fotoexposición responsable que
contribuya a prevenir y/o minimizar el fotodaño. Estas pautas abarcan la fotoprotección química con Fp, física con ropa y
anteojos; cuidados en cuanto a horarios
de riesgo, entre muchas otras.
Fotoprotectores. Son sustancias que se
aplican en la piel integradas por principios activos que bloquean o reducen la
penetración de los ultravioletas (UV) del
tipo UVA y UVB, y cuya finalidad inmediata es la prevención de la quemadura so-
lar, y a largo plazo, del fotoenvejecimiento y fotocarcinogénesis.
- Clasificación: los Fp o filtros solares se
dividen en químicos y físicos:
1. Filtros químicos: actúan por absorción
de fotones de UV, proceso que libera
energía de longitud de onda más larga
lo cual da brillo y calor a la piel. Son bastante cosméticos. Hay filtros químicos
contra UVA, UVB y de amplio espectro
(UVA-UVB). En este grupo se encuentran
derivados de PABA (ácido paraabino benzoico), ácido cinámico, octocrileno, salicilato, ácido sulfónico, alcanfor, benzofenona y debenzoilmetano.
2. Filtros físicos: actúan como barrera que
reflejan o dispersan los UV (pantallas). Incluyen al dióxido de titanio y el óxido de
zinc. Las nuevas generaciones de partículas no dejan tanto residuo blanquecino
en la piel.
- Propiedades de los Fp:
a) Factor de protección solar: para entender el concepto de Fps hay que definir la
“dosis eritematosa mínima” (Dem), que es
la menor cantidad de energía necesaria
para producir eritema solar. El Fps corresponde a un número que define la relación
entre el Dem de la piel protegida por un
Fp en relación a la Dem de la piel sin protección, y mide la protección frente a los
UVB exclusivamente. En forma práctica el
número del Fps de una pantalla corresponde a la cantidad de minutos que tal
producto nos protege de la quemadura
solar. Por ejemplo, si un individuo enrojece a los 10 minutos de estar al sol, con Fps
20 lo hará en 200 minutos.
Actualmente, se agrupan los Fp según la
protección que ofrecen en: baja (Fps 6 a
14); media (Fps 15 a 29); alta (Fps 30 a 50),
y muy alta (Fps mayor de 50).
Dentro de los filtros de protección baja,
un aumento del Fps reduce mucho el
riesgo de quemadura solar, no así entre
los que son de protección alta. Por eso en
algunos países los Fps mayores de 50 deben rotularse 50+.
En la actualidad el Fps mínimo a recomendar es el 15 que filtra los UV en un
90%. La elección del Fps dependerá de
variables como fototipo de piel, actividad al aire libre, edad, lugar de residencia, dermatosis que se agravan con el sol
(rosácea), presencia de lunares, latitud
(montaña), etc.
b) Protección contra los UVA: para cuantificar el daño por los UVA se mide el Fpuva
por el método in vivo del Ppd (President
Pigment Darkening) que toma com parámetro el bronceado, o un método equivalente in vitro validado. La protección
UVA se indica en el envase con un círculo
con la palabra UVA en su interior, para lo
cual la relación Fps/Fpuva debe ser al menos de 3 del Fps.
c) Protección contra la luz visible: como
la luz visible estimula la melanogénesis,
puede acentuar manchas como el melasma; también puede desencadenar reac-
ciones por fotosensibilidad medicamentosa. Por esto se recomiendan Fp color
con óxido de hierro u otros pigmentos.
d) Antioxidantes: los Fp deben incluir sustancias que contrarresten los radicales
libres y la inflamación por estímulo de los
UV, tales como vitaminas E, C y pantenol, té
verde, flavonoides y resveratrol, entre otros.
e) Resistencia al agua:
- El contacto con el agua puede afectar la
persistencia y eficacia de los Fp en la piel.
- El método para evaluar la resistencia
al agua del Fp es el de inmersiones de
20 minutos.
- El método para evaluar la resistencia
al agua mide el Fps luego de dos o cuatro inmersiones sucesivas en períodos
de 20 minutos. Se dice que el producto es resistente al agua (40 minutos)
o muy resistente al agua (80 minutos)
si conserva protección luego de dos o
cuatro inmersiones de 20 minutos, respectivamente.
- Igualmente es preferible reaplicar el Fp
al salir de la piscina o el mar.
f ) Otras propiedades: los Fp pueden ser
hipoalergénicos, no comedogénicos,
es decir que no favorezcan la seborrea
ni aparición de puntos negros, proveer
propiedades adicionales de hidratación y
acondicionamiento de la piel.
- Formas farmacéuticas: el vehículo de
los Fp influye en su eficacia (resistencia
al agua), y en el cumplimiento de su uso.
Para su elección se deberá considerar el
área del cuerpo a aplicar, el sexo (más vello), tipo de cutis (seca, grasa), afecciones
como acné, rosácea. También variará según preferencias personales del dermatólogo y de los pacientes clientes.
Se recomiendan: cremas en la cara en pieles normales a secas, y gel-crema o gel, en
piel grasa, mixta o acneica, para el cuerpo:
loción cremosa o spray. Las fórmulas con
color sirven de base de maquillaje.
Otras medidas de Fotoprotección. Se
recomendará siempre el uso de: ropa
de trama cerrada y telas sintéticas que
absorben más UV que algodón o lycra
(tener en cuenta que pierden eficacia al
mojarse), de colores oscuros que protegen más contra los UV aunque dan más
calor, sombrero de ala ancha o gorro con
visera y anteojos oscuros.
Será muy importante buscar sombra mediante sombrilla, carpa, árboles, sobre
todo en horarios de riesgo.
Fototipos de piel. A la hora de recomendar un Fp es básico conocer el fototipo
de piel del cliente, que se define como
su aptitud para broncearse y/o quemarse
frente al sol. Estos son:
I: piel muy blanca, pelirrojos, con pecas y ojos
claros. Se quema siempre, nunca se broncea.
II: piel clara, ojos azules y cabello rubio. Se
quema con facilidad y se broncea ligero.
III: piel blanca, ojos claros y cabello castaño. Se
quema moderado y se broncea progresivo.
IV: piel pigmentada, ojos oscuros. Se quema mínimo, broncea moderado.
V: piel morena, raza india. Se quema raramente, broncea marrón intenso.
VI: piel profundamente pigmentada,
raza negra. Nunca se quema, broncea
oscuro intenso.
Se recomiendan pantallas muy altas en
fototipos I y II, altas en fototipos III y IV,
media en fototipos V y VI.
Fotoprotección en la infancia. En la infancia hay más riesgo de quemadura solar por características de la piel del niño
y porque están más tiempo frente al sol.
Teniendo en cuenta además que el riesgo
de desarrollar melanoma u otros cánceres de piel aumenta si hubo quemaduras
en la infancia, es muy importante la fotoprotección en esa etapa de la vida. En general se aconseja limitar la exposición al
sol hasta los tres años.
En los lactantes hasta 6 meses se recomienda proteger con ropa, y de usar Fp, elegir Fp
físicos ya que los químicos se pueden absorber. A partir de los seis meses se puede
indicar también filtros químicos.
Consejo farmacéutico
- Aplicar el Fp media hora antes de salir.
- Reaplicar Fp cada dos a tres horas o después
de meterse al agua, en cantidad generosa.
- Recomendar el Fp según el fototipo de
piel (mínimo 15).
- Asociar protección física (ropa, gorro).
- Elegir Fp de amplio espectro (UVA/UVB).
- Buscar sombra al mediodía.
- Aplicar Fp en días nublados.
- Interrogar acerca de la toma de fármacos, existencia de lunares, antecedentes
familiares de melanoma.
- Desaconsejar la cama solar.
- Si hay antecedente de alergia al sol recomendar Fps 50 o superiores.
Conclusiones. Exponerse al sol implica
riesgos a corto y largo plazo que pueden
minimizarse adoptando una serie de medidas entre las que el uso de Fp es solo una
parte. La difusión de consejos acerca de
fotoprotección depende principalmente
del dermatólogo. Sin embargo, la llegada
masiva del farmacéutico a gran parte de la
comunidad, le otorga una posición de privilegio para colaborar en cuanto a información y consejos. Para cumplir con esta
tarea es necesario que se capacite acerca
de las manifestaciones del fotodaño en la
piel y de los recursos que existen para su
prevención y tratamiento.
* Dermatóloga. Miembro de la Sociedad
Argentina de Dermatología.
Especialista en tratamientos de estética y criocirugía.
[email protected]
www.cursopiel.com.ar
Descargar