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LA CAMPAÑA Y EL DISCURSO POLITICO DE ALVARO NOBOA: (el “Héroe de Dios” y la
Política de la Caridad)
La política interpretativa que ha sido puesta en marcha por Alvaro Noboa se caracteriza por
resaltar toda una simbología religiosa en sus discursos, son las oraciones (el Padre Nuestro), las
plegarias de sanidad, las invocaciones divinas, las que dan forma a sus palabras y las que las
llenan de emotividad. Pero, la presencia de estos elementos no agota su discursividad, ya que al
mismo tiempo que se hace referencia a lo “Divino”, se asegura el cumplimiento de las ofertas de
campaña basadas en las 300.000 viviendas, los microcréditos, empleos y salud; pretendiendo de
esta manera (sin abandonar el campo de la política), llevar la discusión al campo económico,
haciendo de la economía de las necesidades y de la política caritativa sus instrumentos de lucha
política, de definiciones identitarias y de diferenciación con otros actores políticos.
Noboa construye toda una representación donde el “único capaz de hacer algo en este país, es un
hombre caritativo, honrado, un hombre con experiencia de empresario, el Abogado”1. Así, el
discurso de Noboa apuesta a la conquista de un imaginario social y una (s) cultura (as) política en
las que la tradición popular y el valor los preceptos religiosos constituyen parte de las prácticas
cotidianas (sociales y políticas) y de su sentido común.
En uno de sus artículos sobre el cierre de campaña, Diario el Comercio señala “Con las manos
hacia el cielo y con los ojos cerrados, Alvaro Noboa agradeció anoche a Dios por haberlo elegido
como el candidato de los pobres”2. Su discursividad, se apoya en una campaña que se ha movido
entre la Misa, la Donación y el Show (elementos que para nada son contradictorios en la cultura
popular), donde Noboa se convierte en la figura principal, él adquiere el papel de “Redentor”, del
“Héroe de Dios”3, “Donador”, del “Bailarín”, principalmente queriendo mostrar al público, a “su
pueblo”, sus “dones naturales”, “su capacidad” para hablar con Dios, Ser, que en la dramaturgia lo
llena de poderes y que lo ha escogido a él: “En un arrebato de emoción, el dueño de más de 110
empresas se lanzó de hinojos en el piso de la tarima para agradecer a Dios ¡que quiere que les
sirva de rodillas como su presidente!” (El Comercio 12 de Octubre del 2006)
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Entrevista Realizada a un militante del PRIAN en Quito.
Diario el Comercio 12 de Octubre del 2006.
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Frase con la que se autodenominó durante el discurso de la inscripción de su candidatura en el TSE
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Sus mítines políticos se caracterizan por una dualidad complementaria entre el cielo y la tierra,
reproducida en un “ritual sacramental” compuesto por el “predicador” (Alvaro Noboa que haciendo
uso de sus “poderes trascendentales” dice hablar con Dios directamente y puede pedirle cualquier
cosa) y por los “creyentes” que adquieren un papel en la escena (que se ha proyectado a lo largo
de la primera vuelta), disfrutan del acto, y esperan ansiosos recibir un poco de la “gracia divina”
(material o espiritual). La referencia al cielo guarda relación con las continuas Invocaciones de
Noboa al Dios de la Religión Católica, y la referencia terrenal se basa en actos caritativos,
donaciones, marcados por una Redistribución Ostentosa (Bourdieu: 1990) de la Autoridad4.
Juntas, estas acciones facilitan, complementan y sellan el “acto de fe”, construyéndose una
identidad política - colectiva entre el que manda y tiene el poder y los que obedecen, “el pueblo”
que espera la voluntad y los “regalos” de su líder5. La campaña de Noboa, sus presentaciones,
retoman una construcción simbólica de las prácticas clientelares del populismo ecuatoriano (ver
Carlos de la Torre, Felipe Burbano: 1989) donde el intercambio de votos y lealtad por beneficios
materiales, va más allá de ser un simple cálculo racional y se constituye en una compatibilidad
sagrada entre lo que se da y el cómo se da (Auyero: 1996). La política de la caridad impulsada por
Noboa, tiende “lazos de amor”, un “puente solidario” que une a las élites y a los sectores
populares (Auyero: 1998); por eso siempre habla de amor a Dios, del amor a los pobres6, del amor
al País. Y sus donaciones (sillas de ruedas, dinero, oraciones por sanidad de los enfermos) junto al
recibimiento de las mismas, cargan de significaciones sus recorridos y presentaciones en la
campaña electoral. Las relaciones identitarias entre Noboa y “su Pueblo”, “sus adorados
ecuatorianos”7, fortalecen las prácticas y subjetividades de una Cultura Política Negociada
(Kigman; 2006) que gira alrededor de la obediencia y protección.
Es en la escenificación teatral donde el candidato se abraza, se arrodilla y quiere mostrarse
“sensible frente al dolor y el sufrimiento ajeno”, protagonizando su papel de “enviado”, haciendo
parecer (queriendo imitar a Cristo) como si él llegara a salvarlos, a ayudarlos, a “receptar sus
dolencias”, a “compartir sus bienes con los más necesitados”. Noboa busca acercarse
“piadosamente” a los enfermos, a los pobres, manejando así, un tipo de relación con los “otros” (el
pueblo) atravesada por la infantilización y por la minimización de la persona humana. En su
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Como fundamentos de su legitimación estarán por un lado Dios y el “poder divino” que inviste al líder, que le da esa
capacidad de “hacer milagros”, y por otro la “fuerza de su personalismo”, de su experiencia como empresario.
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Cuando se preguntó sobre la figura de Álvaro Noboa, a los militantes y simpatizantes de l PRIAN, la mayoría acordó
que él es un hombre de dinero. Pero es humilde, tiene buen corazón y va a trabajar por los pobres, por el pueblo. Los
algunos militantes del partido decían: no cuenta tanto lo que nosotros hagamos, más vale lo que el puede hacer, lo que
va hacer por el pueblo cuando sea presidente.
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No es la primera vez que Noboa ha utilizado estos símbolos y discursos para establecer lazos identitarios con los
sectores populares, así, en la campaña del 2002 utilizaba frases como: "Mi corazón está con los pobres; quiero que
entierren mis cenizas en un cementerio de los pobres", repetía emocionado (Diario Hoy 25/11/2002 sección política).
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Frase utilizada por Noboa en el debate organizado por ECUAVISA y la CNN
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campaña los contactos cara a cara siguen siendo, de una importancia fundamental en la formación
de opiniones políticas (Javier Auyero en Burbano de Lara 1998:82) y en la reproducción de una
práctica política concreta.
El antagonismo de Noboa, se construye frente a Rafael Correa (aunque también frente a los otros
candidatos pero con menor intensidad, ya que lo que se ha tratado es de polarizar el campo
político y de representarlo en dos discursos diferentes), quien es continuamente interpelado con
frases como el “Coronel Correa”, “el Comunista”8, el “Anarquista”, haciendo referencia a sus
presuntos nexos con el Presidente de Venezuela y a sus propuestas de campaña, las cuales,
desde el discurso de Noboa, toman la connotación de “peligrosamente inestables” para el “orden y
la gobernabilidad”.
Noboa plantea la idea de un Ecuador con estabilidad jurídica y política que mejore la productividad
mediante el empleo de los pequeños microempresarios, comerciantes, artesanos, “donde el pueblo
pueda vivir en libertad y no en una dictadura como Cuba”9, “un pueblo con paz en donde Dios viva
en nuestros corazones”10. De esta manera podemos decir, que tras su propuesta existe una
posición contraria a la “Patria Altiva y Soberana” defendida por Correa11. Noboa no “invita” a
“volver a tener Patria”, él propone en “esta Patria” convertir a los pobres en “señores de clase
media”.12 El no quiere una “Revolución Ciudadana”, un “cambio radical”; menos aún una “Reforma
Constituyente”, la re interpretación del “Nuevo” Modelo - País hecha por Noboa pone como último
término del poder, a la voluntad Divina y a la “experiencia empresarial” de su “héroe en la tierra”.
Ambos discursos luchan por dar sentidos diferentes a la Democracia, al Estado y a la Economía:
frente a la “política revolucionaria” y la “democracia directa”, Noboa implementa la “política de la
estabilidad” y la “democracia representativa” “construida por los mejores hombres y mujeres del
Ecuador”13; un “Estado Fuerte” a un “Estado Mínimo”14, una “Economía más Humana” a una
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No es la primera vez que Noboa utiliza estas categorías para interpelar a sus adversarios políticos, así en la campaña
del 2002 decía: "Los ecuatorianos deberán elegir entre el comunismo que representa el MPD y la reactivación del agro",
fue la frase con que Noboa alentó a los simpatizantes que desde pasadas las 17:30, hasta cerca de las 23:30 acudieron a
Industrial Molinera para celebrar el triunfo del PRIAN. (Diario el Hoy21 -01 2002). En otro artículo publicado por el
mismo diario se dice: Aprovechó las entrevistas con las dos cadenas televisivas para insistir que Gutiérrez fue
respaldado por el MPD que "es un partido comunista chino". Incluso relacionó al coronel con Fidel Castro (Cuba) y
Hugo Chávez (Venezuela). Diario el Hoy21 -01 2002)
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Declaraciones de Álvaro Noboa en el cierre de su campaña electoral en Guayaquil. (videos facilitados por el centro de
monitoreo de Participación Ciudadana)
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Ibis.
11
El discurso de Correa que invita a “la patria altiva y soberana” intenta construir sujetos políticos que se reconozcan y
sean reconocidos como “ciudadanos de una democracia directa”. El discurso de Noboa mantiene la concepción del
“pueblo que espera la redención de su líder”
12
Ibis.
13
Declaraciones de Álvaro Noboa.
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“Economía de libre empresa y abierta al Mercado”. En lo que se refiere al “ataque contra la
partidocracia”, Noboa tiene una posición no definida, pero si una concepción utilitarista de los
partidos, en ocasiones los acusa de ser “quienes han llevado al fracaso del país”, otras veces los
invita a formar parte de una “gran acuerdo de gobernabilidad”. Noboa coquetea con algunos
partidos políticos (especialmente con el PSC y PSP) y estos empiezan a proyectar sobre él
discursos e imágenes que buscan expresar un sentido de “estabilidad y el orden”
Sin embargo y pese a las posiciones distantes que toman estos antagonismos, a las identidades
colectivas que se han configurado en base a los mismos, la campaña nos ha mostrado como sus
propuestas no escapan de la fuerza de sus personalismos, y de concepciones autoritarias de la
política democrática, ya sea transformando el orden a través de la “revolución ciudadana” o
dejando a un lado una concepción política del Estado, para “convertirlo en una empresa más”15.
BIBLIOGRAFIA:
AUYERO Javier. La doble vía del clientelismo, en Sociedad 8, Facultad de Ciencias Sociales,
Universidad de Buenos Aires, 1996
BOURDIEU Pierre. ¿Qué Significa Hablar?, 1985
BURBANO DE LA LARA Felipe. “El Fantasma del Populismo”, 1998
FOUCAULT Michel. “El Orden del Discurso”, 1999
FOUCAULT Michel. “Nietzsche, Freud, Marx”
KIGMAN Eduardo. “La ciudad y los otros Higenismo, ornato y policía”, 2006
LACLAU Ernesto. Discurso, Hegemonía y Política: Consideraciones sobre la crisis del Marxismo.
Articulo publicado en: “Los nuevos procesos contemporáneos y la teoría política” ,1986
LACLAU Ernesto. “La Razón Populista”, 2005.
LACLAU Ernesto y MOUFFE Chantal. Posiciones de Sujeto y Antagonismo: la plenitud
imposible. Artículo publicado en: “El reverso de la diferencia Identidad y política”, 2000
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Las tesis defendidas por Álvaro Noboa acerca del Estado mínimo, en realidad , funcionan más como propaganda
neoliberal, que como una propuesta verdadera, ya que como sabemos el Estado siempre ha sido utilizado como
instrumento de los grupos oligárquicos – dominantes, con los cuales se ha vinculado Álvaro Noboa.
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Al concebir al Estado “como una empresa más” Noboa coloca como ideal la administración privada sobre la pública,
poniendo como evidencia de “eficiencia y éxito” lo realizado con sus empresas.