Salifdable advertencia

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MADHIB-^Miéar'
4 i do Agosto de 1920
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REDACCIÓN: TELÉFONO J 111! ADMINISTRACIÓN: TELÉPONü J. tí.Q^
A P A R T A D O N Ú M . 101
IILTIMOS llLEliKAMAS Y M M S M LA TARM
NO SE DEVUELVES LOS OHIQíNALEH
nn
PALABRAS DEL MONARCA
Salifdable advertencia
Kl importante discurso do S. M. el l!cy en la
Asamblea médico-social de tíaiitander. merece
«tlgo más que un elogio por su orientación y un
í^plauso por su oportunidad. Merece, á, nuestro
.luicio, una atención especialisima y, ,i ser posible, una seria meditación, por tratarse de un
problema que afecta á la entraña misma del
pais.
La natalidad en España lia disminuido, de,
catorce años á esta parte, en una proporción
oe un cinco por mil: de seguir asi, se cncontra'"ú la nación, en un período lolativamente cor*^o, en una situación de manifiesta inferioridad social respecto de otros pueblos. Y esto
flay que exitarlo á toda costa.
No hasta, con ser importantísimo, que se
Jtiulti])liquen los esfuerzos i)ara reducir las ciíras de mortalidad, (jue se procure combatir
por todos los medios esos terribles azotes que
se llaman tuberculosis y paludismo, y que se
redoblen las medidas de higiene preventivas
contra posibles epidemias ó infecciones. No es
suficiente que los mi'dícos luclien denonadaiftente por conservar la energía física ó restablecer la salud corporal, .'vada se conseguirá
do verdadera eficacia si la acción colectiva no
coopera á la obra cientilica.
Mientras que lodos y cada uno de los ciudadanos no se percaten de la imi)ortanc¡a que
para la vida nacional tiene el coeficiente de
natalidad, nada logrará la lal)or aislada del
módico, encargado de defender cada, vez menor número de e x i s t e n c i a s .
Bien patento es la trascendencia del facter
jiombre en el florecimiento de un pais. UocienleiTicnte, en la misma última guerra (juc por
desdichado contraste sei)ultó entre sus gigantescas í'aui;es millones de seres , pudo comPi'obarsc (¡ue si importantes eran las máquinas
dostruc'toras y los armamentos y las municiones, tnás decisivo era aún el soldado. Y la i'.uer''¡a constantemente estuvo alli donde el nlimero
'ominó, siempre que estuvo, claro está, secun«ftílo por los elementos necesarios.
Ahora mismo, ;,no parece sorprendente el opJimismo que, á pesar del re«ulf;ulo do la con'iCnda y de las enormes obligaciones cotiLraidas con los países venccdoi'os, sigue mostrando
Ajiímania'r' No se ha dcses|)crado el itueblo ,ger'llünico; no lia perdido la confianza en si mis'no. ;,Poi' qucV ¡.\h! Pues, sencillamente, porHiie observa el constante cretdmiento de su poOIH<",ÍÓIJ: por(|úe viene desdé liai.-e muchos años
••tendiendo a r d c s a r r o l l o y fortfilccimicnl.o de
'«i raza; porque no ha considerado asunto bala
jtí'Problema do tanta impoi taucJa como ol >;ie
**, fiitogra conaervacjón de las especies. Asi
liira ahora ,al porvenir, dolorida, eso si; pero
íio' resignada. lía de vivir, porque el futuro de
Su. actual infancia lo retjuicrc.
Kn Kspaña no nos habíamos prcocui>ado janiás de tal problema. Pnel)iu de l)ueiuis costumbres, poco influido por perniciosas piopafíandas, hi.jas del egoísmo, apenas si nos dábanlos cuenta del peligro que poco á poco nos
nju amenazando. Por fortuna, la advertencia
'jegia consecuencia de estudios y deducciones
de lod médicos españoleas- ha llegado con oportunidad suficiente para que el remedio se pon^a antes de que los resultados del mal se experimenten.
Hi ello se consigue, por lo menos en parte, si
ni Medicina española puede triunfar en su lucha contra la mortalidad, reduciéndola á proporciones desgraciadamente naturales, y si se
'ogra encauzarel movimiento emigratorio, que
en estas circunstancias representa una g r a v e
Preocupación, podremos desempeñar gallardatnente en el mundo la misión que á nuestro
País, llamado á obtener g r a n florecimiento coniereial é industrial, le compete.
Pero hay (]|ue comenzar por los cimientos;
no vaA'araba a levantar todo un edificio sobre
oaees falsas y luego, cuando creamos que henips realizado un bello propósito, nos encontrenios con que han sido nuestras conatiiicciones
poco menos que castillos en el aire.
Nuestra P a t r i a , que anualmente c e l é b r a l a
^ieala de la Raza, y que en ella ostenta con orfiullo el noble titulo de m a d r e de naciones, porgue tuvo alientos i)arasu expansión, mientras
¡lUe su población interior aumentaba, no puede
jihora hacer traición á su nombre y á au historia. Sus hijos sabrán despertar de su letargo.
^' l'^paña, advertida á tiemi)o por su lley,
sabrá emprender de nuevo la verdadera ruta
'inc lleva al bienestar y al progreso de los
Pueblos.
101 Rííñiir 'írtiidra ha marchado en el expreso
para la capital del Paraguay, con,juntaínente con
los embajadores del Uruguay y do la Argentina
en Asuiicióti. Inmediatamente que llegue se celebrará la toma de posesión.
Noticias oortss.
Comunican de El Haya que la Emperatriz de
Alemania está mu.y débil, á consecuencia de un
nuevo ataque al corazón.
— Dicen <ie Ooniítantinopla que Damad Ferid
Bajá, jefe del Gobierno otomano, ha sufrido dos
síncopes durante el día de ayer y su estado inspira
serins imiuietudes á lo.s que le rodean.
- Ha resultado elegido presidente del Senado
peruano el señor don Augusto Bedoya.
—El presidente del Consejo francés se ha dirigido esta tarde á R»mbouillet para poner al Presidente de la Uepública al corriente de las entrevistas celebradas en llythe con Lloyd Goorge.
EL DÍA POLÍTICO
Lo que dloe el presidente.
En el ministerio de Marina visitaron hoy al presidente el encargado de Negocios de Portugal ,y ol
obispo de iSión.
También recibió el seftor IJato á una numerosa
Comisión de las Cámaras Agrícolas de Córdoba y
Sevilla, venidas piírü protestar contra la Keal orden del nígimen de trigos y harinas y presentarle
unas conclusiones acordadas por aquellas entidales.
Los comisionados le anunciaron <iue después de
visitarle á él, se dirigíin al ministerio de Fomento
para entregar al señor Ortuño las citadas conclusiones.
' El jefe del Gobierno oyó, atento, las manifestaciones que le hicieron, y fes dijo que una vez estudiadas por el ministro las conídusiones presentadas, aquél daría cuenta al Consejo, y éste, á su
vez, trataría de atender en lo posifileá todo aquello
que fuese ju.sto y realizable, puesto que ol deseo
del Gobierno l^s el de armonizar todos los intereses.
¡Sin embargo, obligado por ol bien do todos, so había visto constreñid") k adoptar algunas medidas,
impuestas por las circuastaucias, y en éste sentido
artadió ol señor Dalo que conllaba en el patriotismo y buena volunta<l de todos para llevar á la
práctica e.^sas medidas que demanda el interés
general de la nación.
Afta<l¡ó c¡ señor D,ito á los periodiatas ((ue Su
Majestad (il K,e,v llegaría esta tarde A Son Sebastián, donde permaneceríi tres ó cuatro días, volviendo después á S.intander, y <iue ol ministro de
la Gobernación irá A esta última capital el yáhado,
con objeto do presidir la sesión de clausura del
Congreso médico.
---Así, pues—agregó—, hasta que no regrese el
señor Bergamín, r|ua será en la p/óxima semana,
no tendrotnos Consejo de ministros.
l>ijo tanjbiérj que anoche salió la Reina Cristina
de Paríi para Suiza.
Fué ifiusrrogiido el presidente acerca del artículo qnf, boy imbiica un diari > de laiuañaua, diciendo (jue su i.ra'M'iba ilc adquirir por c! Gubjorno una
l''/ii-r;,-í.'v df. I ariíii».s, para '«nUMgaria •después al
Siad¡ca.,o único.
— El Estado—rlíplicó el seftor D*lo—no tiene atribuciones para talos compras. Ks cierto que un grupo determinado que tenía alguna organización en
Zaragoza, tuvo esa aspiración de que eon la intervención del Eitado so ampliase la citada fábrica,que seguirían trabajando, con toda la inter
vención precisa como ya digo, pero en realidad
eso no podía pasar de la categoría de una aspiración.
Conflictos sool«l9c, -Sindloallstas detenidos.
El ministro de la Gobernación, al recibir esta
mañana á los periodistas, dijo que, de conflictos
sociales, no había más noticia nueva que la do haberse declarado en huelga lo» panaderos y harinerosdeHuelva, haciendo preciso al gobernadorel habilitar equipos militares que puedan sustituir A los
huelguistas y garantizar el abastecimiento de la
población.
Agregó el señor Bergamín, que en El Ferrol, y
en ol momento en que iban á colocar una f)omba á
la puerta de la Constructora Naval, han sido detenidos seis sindicalistas.
En registros practicados en sus domicilios se han
encontrado materias explosivas, de las que les servían para la fabricación de bombas.
Los seis detenidos han sido puestos á disposición
del Juzgado.
Comentando el señor Bergamín esta noticia, decía que desde que se posesionó del Poder este Gobierno se ha detenido á 17 individuos que tuvieron participación en los atentados. Once de ellos
están convictos y confosos, y siete, pertenecen á
Barcelona.
Bacía resa'tar esto el ministro concediéndole
Inda la importancia que tiene, toda vez que han
sido tantos los crímenes sociales que han quedado
impunes por no coger ú sus autores.
X.BS medidas d« exoepolóa.
Un periodista preguntó al ministro ftcercí. de la
noticia publicada yov algunos periódicos diciendo
que el Gobierno ha adquirido una fábrica de harinas.
—Lo único que hay en eso-dijo—es que unos
panaderos de Zaragoza comunicaron al Gobierno
que se comprometían A dar el pan á (>.') céntimos,
quedándoles aúa un margen de ganancia, y aun
estando las harinas á loa precios actuales.
Pero ni se ha acordado nada sobre el particular
ni siquiera se ha estudiado ese ofrecimiento.
—Pues se dice que con eso so favorece á un sinEl «bolaot> costra Haogria.
dicalista—objetó un periodista.
HiiDACEHT 10.—Anoche, á las doce en punto, cesó
—Es que se han empeñado -contestó humorísti^ihfii, (,t contra Hungría.
camente ol seftor Bergamín—en que j'o uo solaTodas las comunicaciones se han reanudado.
mente no quiero que haya presos gubernativos
Oheooaslovaqala, aeatral.
sino que, además, les doy recompensas.
'
PRAOA 10.—El ministro de Negocios Extranjeros
Yo, en esto, ya lo he dicho muchas veces, lo que
na <leclarado que el Gobierno checoeslovaco desea
pienso es que las medidas de excepción como priConservar la neutralidad en el conflicto ruso-posiones gubernativas, deportaciones, cierre de cen'Hí-O.
tros, etc., pueden ser, y lo son indudablemente,
recursos eficaces de gobierno en determinados moQ*tAatrofa da aviación «a Fraaola.—Doi aviamentos, pero nunca pueden quedar como régimen
dores maarioa.
permanente, porque así so destruiría su eficacia.
f, VKRSALLKS 10.—El canitáA Luis Planquier, del
Esas medidas, utilizadas con prudencia, hacen
^^eniro aeronáutico de Viüacoubiay, pilotaba ol
abortar movimieatos y facilitan la labor de los Goy i ó n numero 2>j (i'.), en el que iba eooio pa3a,iftro
biernos-, pero, exagerándolas, no se consigue más
Andrés Valdona, r(*portero rotográtíco de la Óincque engendrar nuevos factores de odios. Y además,
'"^u-Qnzzete, de París.
yo entiendo que en todo país se debe tender á viA una altura de 200 metros, el avión se inclinó
vir en un régimen,de normalidad.
•Obre un ala y fué á estrellarse contra el suelo en
— Entonces—dijo un periodista—<Be levantará
los alrededores de Bicetro, cerca de la carretera de
ya pronto la suspensión de las garantías?
J;''ioÍRy.ie-Uoi, Iniuadiatamenté se fué A prestar so-A juzgar por los síntomas no estamos en un
'Orro á los dos hombros; pero cuando se llegó al
momento muy propicio para ello—repuso el minisn j * " ^ del accidente no se encontraron más que dos
tro- . Ahora lo que hace falta, á mi juicio, en pri•^dáveres. Ambos habían muertp on el acto,
mer término, es que se abarátela vida, porque
j. iJn automóvil trasladó al hospital de Dominiemientras las huelgas y las conmociones que ellas
)^l^y, de la calle Gambetta, de Versalles, los dos
producen interesan sólo Auna parte del país, los
'^dáveres.
precios de las subsistencias alcanzan A todos. Por
*1 aaovo Preildsnto del Paraguay en Buenos
eso cuanto se combata el alza será poco.
Aires.
—Ya ha visto usted el interés con que se pide la
j.JlVKNos AiKiíH 10.—A bordo del vapor Vaubánha, exportación del calzado.
"'•gado el Prosidcnte electo del Paraguay, seftor
—Como que llegan A amenizar, por esa causa,
^Jfondra. Fué recibido A bordo por el canciller,
incluso con un paro general en Mahón. Yo no soy
Miiien le dio la bienvenida en nombre del Presidenpartidario de que se conceda esa autorización
"* de la Uepública y del Gobierno,
mientras el calzado tenga los precios actuales.
tpi I®*!® el muelle, rindiendo honores las tropas, se Además, hay que recordar que cuando se hizo la
!•«, ii?o ^ ^* residencia del Presidente, adonde fué
primera petición en esto sentido, los interesados
*^«cib)do poniste.
en ella se comprometían, además de asegnrar ol
1 or la noclie, el Presidente, seftor Irigoyen, dio mercado nacional, A fabricar un tipo único de cald».,. "^'í?^'-*' "^ ^n reudencia en honor del Presiz&do á precio económico y, hasta ahora, no lo han
"*snte del lirugaay, aástieado el Gobierno.
hecho ni parece (|uo piensan hacerlo.
DESPACHOS TELEGRÁFICOS
S Y PÁPELEW
Guárdanse muy bien los periódicos adscritos á
la defensa de los fabricantes de papel de contestar á lo que concretamente sobre el caso de
éstos se dice. Prefieren endosar á la industria
siderúrgica lo que de tales razonamientos les
molesta, con la doble finalidad de cohibirnos
con una lista de nombres, respetadisimos p a r a
nosotros, y de lograr la colaboración de éstos
para la defensa de aquella industria. Sospechamos que el fracaso responderá á la maniobra, tanto en la una como en la otra finalidad
Por lo pronto, no pueden ponerse en la misma línea de consideración lu siderurgia y la
industria papelera. Ni política ni económicamente son lo mismo, ni tienen análogo valor,
ni en general, rii concretamente por lo (jue se
refiere á España! Bastaría sirRplementehal)lar
de las primeras materias de una y de otra y
de su nacionalidad, p a r a que la pretensión de
aijuelloa ]ieriódicos se viniera aba.jo al pretender refugiar en los intereses de la siderurgia,
los muy resiietables, pero mucho, menores de
la papelería.
l']so quiere decir que dentro de nuestras con\ icciones i)ioteccionÍ8ta8 j)oderao8 y debemos
dar trato muy diferente á la una y á la otra,
puesto que el proteccionismo no es p a r a nosotros un dogma, sino un instrumento üe gobierno que debe aplicarse de la m a n e r a que se considere en cada caso más eficaz p a r a el bien colectivo. Kl proteccionismo en bloque podrá pa
sar p a r a doctrinarios como los que pontifican
en determinados peri(»dicos debajo del rótulo
de radicales. P a r a nosotros, uo. Ni en eso ni en
nada somos doctrinarios.
Nosotros no hemos dicho que «un industrial
ó un grupo de industriales no jjueda convertirso en transformadores de sus productos sin caer
de lleno en la maraña del Código Penal.» Ni lo
hornos dicho ni lo pensamos., Lo quo decimos
es (pie para eso no^se puede entregar á a(|ucIlos industriales un arma que los permita prat;ticar dentro del propio i)ais consumidor una csl>ecic de duiin>in(], mediante el cual unos industriales forjen á s u s c x p o n a a s l a s armas con
que otros han do arruinarles.
Parécenos «pie la diferencia no es de matices, sino de substancia. Nos parece muy
l)ion (pie los fabricantes de pape! sostengan
grandes j)eriódic08, llenos de todos los progi'oS(>S imaginables, y magnificas casas editoriales que difundan en libros impresos on nuestra lengua todos los pciiaamfentos dignos de
ser difundidos. Pero nos parece inu.y mal la
prelensióii de (pío ci Arancel entregue de tal
modo el mercado nacional á uí-judlor: falirican
tes de papel ()ue sólo ellos puedan sostener
esos grandes periódicos y esas grandes casas
editoriales. He ahí concreta y sumariamente él
criterio á que responden nuestros artículos sobre el particular.
Y como no nos duelen prendas, aquí podríamos escribir un párrafo recogiendo lo ({MQEISOI
nos dice hoy sobre la Central Siderúrgica y la
participación de algunos de sus componentes
on v a n a s empresas transformadoras del acero;
pero no debemos prestarnos al .juego de los
defensores de los fabricantes de papel que pretenden endosar á los otros lo que sólo á ellos
so-refiere. No. Somos mayores de edad y decimos las cosas cuando deberaios á nuestro entender decirlas, y las examinamos en el terreno
que nos parece ine.jor p a r a el servicio del interés nacional.
LA INVASIÓN D£ POLORIá POR 1.08 ROIOS ~
Declaraciones de Mr. Lloyd OeOrge
en la Cámara de los Comunes
X.a tltnaolóa de PolosU y U «otltnd
de los aliados.
LONDRES 10.—El salón de sesiones de la Cámara
de k s Cumunes estaba repleto, cuando, algunos
minutos antes de las cuatro, Mr. Tjloyd George hizo
su entrada, en medio de aplausos.
En la tribuna diplomática se notaba la presencia
de Ivamenef f y Krassin y del embajador de los Estados Unidos, Mr. David.
Algunos instantes después se levantó A hablar
Mr. Lloyd George, y declaró que cumplía su promesa y que iba á hablar sobre la situación de la Eu
ropa oriental.
• He prometido, en nombre del Gobierno, que antes de tomar una decisión definitiva, se pondría A
la Cámara de los Comunes al corriente de las intenciones del Gobierno.
Conservo aún la esperanza de que la paz será
mantenida; pero las vacaciones parlamentarias comenzarán A fin de semana, y las circunstancias
pueden cambiar; aunque, lo repito, tengo la esperanza de que no será atí.
Si se produjeran he^^ios nuevos, el Gobierno se
vería obligado á tomar decisiones. Me propongo,
por consiguiente, declarar aquí las medidas que el
Gobierno piensa tomar si llega ese caso, y pedir á
la Cámara que aprueibe esta proposición.»
Hizo un llamamiento A los trabajadores organizados, para que no juzguen muy severamente al
Gobierno polaco, que es un «Gobierno sin experiencia».
Citó las declaraciones de la señora Snowden y de
otras personalidades, que constitnían lo más selecto de la Ddlegación laborista que fué recientemente A Rusia en viaje de estudjo, según las cuales, resulta que el bolchevismo no tiene nada que ver con
el socialismo, con el cual prácticamente os incompatible.
El orador declaró despmSs que no se trataba, en
modo alguno, de enviar tropas A Polonia, poniue
los recursos enormes de este país serían suficientes
si sus ejércitos estuvieran en condiciones; pero, en
el caso de que las negociaciones de Minsk fracasaran, los stocks considersibles de material de guerra
que aún existen, serían enviados á Polonia.
Los Estados Unidos loa d»fensores de la ladepandeBOla de Polonia.-Xntervaaoldn de la Liga
de Naotones.—Él bioqneo.
En respuesta A una interpolación, en la que se
preguntaba cuál era la actitud de Norte América,
dijo que los Estados Unidos son los defensores mAs
convencidos de la independencia de Polonia, y que
en aquel pais nadie puede ser defensor más celoso
de su independencia que Wilson.
Los aliados utilizarán, hasta los limites posibles,
los buenos oflcios de la Liga de Naciones.
Mr. Lloyd George enumeró A continuación los
medios do acción y las prerrogativas de la Liga, y
recordó que todas las naciones que firmaron el
pacto se han comprometido á participar en el blo-
(|ueo, si fuera necesario, y recurrir A (fste mísdio
para impedir A los bolcheviques que destruyan A
Polonia.
El bloipioo será aplicado, si es necesario, y se
enviarAn municiones al general Wrangel.
• La oposición de los aliados al régimen sovietis
ta—dijo el primer ministro—, obedece á las diver
sas pruebas que han dado los Soviets de su falta
de buena fe.
La guerra terminará inmediatamente que el Gobierno de Moscú lo deaoe, y una paz general podrA
firmarse en la Conferencia proyectada en íjondres;
pero si la libertad y la civilización de Europa se
encontraran en peligro, se puede tener la seguri dad de que obraremos con ta mayor energía.
Esperamos los resultados de las negociaciones
de Minsk-terminó diciendo Mr. Lloyd George—;
pero no fiay tiempo que perder. Hay que prever todas las alternativas, y estaría ciego si negara la
existencia de tttt peligro y descuidara una sola de
las medidas que hay que adoptar »
Hacia el fin d© sn discurso, y sobre todo cuando
hizo el proceso del régimen sovietista, el primer
ministro fué interrumpido varíes veces por loa So
ciaii-stas, y el presidente tuvo que intervenir para
llamar al orden A los Interruptores.
lias ooadloloaes dol armlstlolo de los Soviets.
A las declaraciones de Mr. ¡[Joyd Geoj-ge ha seguido un debate en la Cámara de ios Comunes. En
este debate participaron namerosos miembros de
la oposición. Todos declararon quo están conven
cidos de que el Gobierno de los Soviets no desea la
desaparición de Polonia.
Mr. fionald Mac Lean proniinció un discurso al
(Itte contestó Mr. Lloyd George manifestando que,
posteriormente A sus declaraciones, Kamonftf le
había enviado las condiciones del armisticio de
Kusia, A las que iba A dar lectura.
La Asamblea las escuchó con religioso silencio.
He aquí el extracto:
«El Ejército polaco deberá quedar reducido á
un contingente anual de .50.000 hombres, y el personal de los servicios administrativos nó debarA
pasar de 10.000 hombres. La desmovilización debe
empezar en el más breve plazo. Las armas que no
sean precisas para las nuevas milicias deberán ser
entregadas A la Kusia de los Soviets.
Todas las indURtrias do guerra quedarán suprimidas. Además. Polonia se comprometerá A no recibir tropaa ni material del extranjero.
Se abrirA A Rusia una vía do comunicación polaca para su tráfico comercial con loa territorios del
Atlántico.
Las familias de los polacos muertos ó invAlidos
durante la guerra recibirán concesiones gratuitas
de tierras del Gobierno de Varsovia.
Al mismo tiempo que Polonia desmovilice, las
tropas ukranianas serán retiradas del frente.
La línea do armisticio será el terreno adquirido;
I>ero al Este no pasará do la indicada por lord
Curzon en su nota de 20 de julio.
El Ejército polaco se retirara á fiO kilómetros de
esta línea. La zona entre los dos Ejércitos será neutra!. Las fronteras definitivas del listado indepen
diente de Polonia HBirán idénticas A las indicadas
on !a nota do lord Curzon de 20 de julio.
Sin embargo, al Este, en la región de BielofítokCliolnr ye atribuirán á Polonia torritono» adicion»il»;vi
>
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Declaraciones de M. Milíerand
á «L'Echo de París».
Resumen dol criterio franoéi.
PARÍS 10.—El enviado especial de L'Echo dé Pa
vis en Hythe, Marcel Hutin fué recibido por monsieur Milíerand antes do abandonar éste aquella
población inglesa.
Kl presidente dol Consejo francés, hablando coa
palabra reposada, A la vez que enérgica, declaró
lo siguiente:
• Mi criterio se resume en pocas palabras:
Primero. El Tratado de Veraaües da la independencia A Polonia y esa independencia sefá
mantenida.
Segundo. El Tratado de Versalles dio A Polonia
fronteras occidentales que no sólo han de ser protección para (illa, sino quo, además, han de garantizar la seguridad de Europa occidental.
Esas fronteras serán mantenidas.
Estas últimas palabras las pronunció ol presidente francés con significativa fuerza.
M. Hutin no ocultó al presidente (pie la opinión publica francesa observa con inquietud bastante grande los sucesos que se desarrollan en Polonia, y lo preguntó si no pensaba on movilizar
tropas francesas.
M. Milíerand, encogiéndose de liorobros y riéndOKBt le contestó: «¿Movilizar nosotros?» No se trata de ello. Fuera estúpido.»
AL.
ReQRESAR
Los exploradores de España
PASÍS, agosto 1920.
La reunión, exposición y concurso escultista que
el fundador de los boy scouts bautizó con el nombre
indio de Jamboree, ha terminado. En el colosal
Circo Olympia, entre burras y vivas, se han despedido los contingentes extranjeros, Los suecos,
noruegos, daneses y estonianos, parten hacia ol
Norte; los españoles nos despecMmos camino del
Sur, contentos y satisfechos, convencidos de que
semos una raza"que cuando quiere, puede y cuando puede y quiere no hay quien la aventaje.
Con el alma llena de alegría por los laureles conquistados y el placer de volver á la madre patria;
de regresar al país do la luz y del sol, después de
quince días de lluvia y frío, de privaciones, de mal
comer y medio dormir, de obstáculos por todos
conceptos.
,
.
. . •
La nostalgia, bajo aquel cielo gris, se bacía intensa. Pero el Club Español la supo disipar; desde
el presidente al último miembro so excedieron en
obsequios v atenciones; en suS salones nos hallábamos en ííspaña: los vivas á la patria se sucedían
sin interrupción, las canciones patnóucas y callejeras resonaban en la casa de Cavendih Square; la
bandera roja y gualda ondeaba empujada p e r l a
fría brisa londinense; su bordado escudo se empapaba con la persistente lluvia y con las lágrimas
de emoción de los viejos españoles que lloraban de
entusiasmo al oir la rondalla, compuesta de exploradores aragoneses y andaluces. ¡Días inolvidables les días más hermosos, los pasados entre la
colonia española reunida en el Club Español de
Londres!
_ ,
,,^.
„ . ,
A España, vía Newhaven Dieppe; en París, descanso y visita A los campos de batalla.
Todo lo agradable, todo lo bueno, todo lo selecto, todosios ratos do mayor placer se lo debemos A
la'imponderablo amabilidad de los embajadores de
España en Paris y Londres, á los señores don Alfonso Merry del Val y don José M. QuifloneiB de
León y personal de ambas Embajadas, asi como al
cónsul general do España en Londres, don José
Congosto. Nuestro agradecimiento á tan obsequiosas, dignas y patrióticas autoridades.
Y ahora a España, llenos de emoción, satisfechos de haber dejado en buen tugar el nombre de
la patria.
El viernes 13, es el día suspirado por el contingente de exploradores españoles que & Ijondres
fué el 22 del pasado. El viernes 18, volverán A pisar
tierra española, más querida y más deseada, después de ver otras tierras y convencidos aún los
más X -nófilos de que el ttnlco país que en la actualidad es libre, hospitalario, cómodo y hermoso ei
nuestra bendita tierra.
F. i)B CASAS.GANCEDO
Eeo^
del
dio
Las declaraciones de Mr. Lloyd (ieorge y
M. Milíerand, que a p a r t e publicamos, fijan el
criterio francés é inglés respecto al problema
polaco. Con más enérgica decisión el presiden
te del Consejo de ministros francés; eon líiás
frialdad, pero también decididamente, e l ' p r i mer ministro biiiánico, los dos han estado do
acuerdo en ciue no puede ni debo abandon;irs<í
á Polonia, y abandonarla sería consentir iin.i
ficticia independencia bajo un Soviet de Var
sovia á las órdenes del Soviet de IMoscii.
El embarazo de ambos Gobiornoaante la actitud del proletariado internacional es grande.
Las medidas de blotjueo, de auxilio presiando
material, no son (iiiizás y a bastantes cuando
Varsovia ha sido evacuacla. So necesitaba aluo
más inmediato, algo más eficaz, y oso, dopgi-ii,
ciadamento, no se ve á través de las vacilacio
nea de Paris y Londres.
Por cierto que al examinar este punto hcmon
de in.«íisíir en que la opinión española no se ha
dado cuenta de lo que significa ol pleito plan
toado y de L-t g r a v e d a d que envuelve i)ar;i.
Europa entera, sin e.Kcluir á Ktspaña. Los espíritus superficiaJes pueden 1)urlarse do la iuv
gemonía inglesa,, de las ambiciones fi-ancoBas,
y hasta nc falta alguno que contempla con doloslo ia p(Mi.|iectiva do que Leuín se iinp()ii;.:;a
á Lloyd (ieoT're y Milíerand.
iM*^ngu.:ui< sritorio el de quienes así pien.san!
El aplastamiento de la J'íilünia actual, su in
corporación á Rusia, SÍ no politicamente al
menos espíritu.'!laíonte, es do trasoendcnicia
para toda Europa.
AI soítcíjíer á P(.ii(!rij,-í„ !a Enif-n', ,•• ¡UÍ' Iiacc
en rigor ea sostener la causa d e l ' ;L.V,: y d*.- la
democracia conira ci régimen de abuso;s, de
violencia y de tiranías. Kí sovi(^ti:-''no c". Polo
nía podría H(\V el cspa,rta(iuÍ3mo fsn Pfírlín, y el
em[ieño de amor propio tío qiK; el Tratad.) dr
Versalles no se cLim]-'-!, no cíO'-'oos quo dob;»,
sei tan decidido en i<',",i,ini*s qm; lu triunfo (ic
ello sacrifiquen la ¡m./ ufü .aunrlo, !iiclu;w la
del propio ¡jais.
Desdo la piiincra c'.invi'rs.'udón que (lublicó
Le Maün, atribuida ;l S. U. el Rey, comprondimos (pie so t r a t a b a do UM • de t:u'itas informa,
ciónos Ronsacionaleedc h;; quo cultiva ol g n m
diario do París; y fan fué assi. (pío nos abstuvimos do puldicar iuia sola letra, de el la.
Kti .realidad eso no fué sólo criterio niioRl r*),
Rastantes colegas nos acompañaron, y algiinn
publicó la conversación, á título de curiosid;»*',
jKjro advirtiendo, desde la i)rimera, que ii»
eran auténticas.
Ayer, un compañero de Prensa interrogó al
señor presidente del ('oasei-:, >, éate conUrturia~fftp.a d«-«»teíitici<lad.
•• :
En honor á la verdad, á medida «jue bi ¡ni
It'.icación de las intimidades ha avanzado, han
ido dicicndo.^e cosas más burdas, de modo t|ii!i
la rectificación holgaba, si no hubiera ¡íido <;.\
presamente solicitada.
El Sol, sin embargo, la lia encontrado aigo
pálida, y escribe un artículo que dice v a <-en
defensa de la realeza española'. N'osotros, que
acogemos siempre con gusto cuanto v a y a eu
elogio do nuestro Soberano, no hay que decir
quo lo hemos sentido hoy mucho mayor al ver
ol celo monár(|uico del'colega, que deseamos
se consolido y perdure.
Raquel Mellerjn Buenos Aires
Oraa éxito de la |!r«nl>l «rtlBta espciolft.
BuKNos AinuH 10,-Se ha celebrado con extcaof
(ünario éxito el defait de la exquisita artista mp»
ílolaRa(|U(il Meller. Presentó al público lo máí» ei
cogido de su repertorio y arrancó entusiastftFi fivn,
ciones.
La crítica, sin excepción, hoce grandes elogiíKs
de IB artista, reputándola como la primera en BU
género.
B U S O S Y POIi A O 0 3
Parte oflolal raso.
LoNDRiw 10.-«Nuestras tropaa han ocupada las
ciudades de Prafinycliy y Dstrolenka,
Hemos hecho prisioneros y nos apoderamos de
ametralladoras y un depósito de Artillería.
Ocupamos puntos situados á veinte verstas al
sudoeste de Ostrolenka.
Nuestras tropas han atravesado el río Nareu.
•Hemos hecho prisiouero,s y cogimos material.
Hemos alcan.zado puntos situados al noroeste do
Wicekow.
La ciudad de Sokoloff está en nuestro poder. En
dirección de Sedletz y de Lukew, nuestras troiiaü
har roto la resistencia del enemigo en la orilla izquierda dfci Bug, y ocuparon la estación do Prat«vero.
Sector d^-, Crimea.—En dirección de Kerson,
nuf!^,irH!i tropüs continúan su ofen&iva.»
P a r t e oflcU' polaoo.
LoNDHKH 10.—Los destacamontow (jue ricup»M
Brody imn recha-^ado A !as tiopas bolclievi'ptfsfit PH
Kndrnvilou-, cogiéndoles prisionero», iw;». • :'toi ía y
varias amctralladorfis.
Entre el Strypa y el Sereth fueron deu^itadíia las
tropas sovle.tistas a pecar de su sup.'írioridad numó
rica. Tuvieron 40(J prisioneros.
Ilusionas de na J«fe boJoliovíqae.
ferocoL.Mo 10.—Kn un radio A laTercera Internacional de Moscú, el jefe de la cabaUoría ru-iía relata
los combates contra lo.-> polacos, á les que caHflca
de guardia blanca de Europ.*, .1 ura 8oiemneinemn
no cesar en la lucha hasta el dfaen qna «I ejército
rojo recíbala ordeít áíi detenerse en tíerlía y en
Londres, convertidas en capitales s-ojas.
Armas y mnaloloni^s para los polaoos.
. AMSTBRn.-\M 10.—Se üa tábido que un barco aloman ba desembarcado en i .H costas polacas 170 ca
jas de fusiles y municiones da contrabando dtuti
nadas al ejército do Polonia.
Betlr&da de la delesraolda rusa de Loadras.
LoNDREK 10.—Las decisiones tomadas por hi^ j'v
fes de los G-obiernos francés é inglés en Hytho fuív
ron comunicadas A Karoeueff.
Este y Krassin saldrán para Rusia ol domingo
por la tarde, si hasta entonces no da seguridades
el (robierno de loa Soviets del mantenimiento de la
independencia é inteírridad du 1 Vilonia.
La delegación rusa hace ya preparativos para
su salida de aíjui por considerarse inevitable la
ruptura.
Una Cosfarenoia «a EatoooJmo.—OimialdB del
ministro de la Onorra polaoo,
CopKNHAtíiJK lO.-En breve celebrarán una Conferencia en Estocolmo los presidente» de los Consejos de Dinamarca, Suecia y Noruega, con el fin de
examinar la cuestión ru8opol*<ia. .
, , „
VARSOVIA lO. Tía dimitidd#|»inistro de la Guerra.
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