ENTREVISTA A ALBERTO FERRUS “La futura neurobiología hará

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Dia: 25/01/2006 - Hora: 22:24
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el Periódico
ENTREVISTA
JUEVES
26 DE ENERO DEL 2006
biología
8
NEIMA PIDAL
ALBERTO
FERRÚS
EL PROFESOR ALBERTO FERRÚS VISITÓ AYER
ZARAGOZA INVITADO POR EL PROGRAMA ‘CIENCIA
VIVA’, EN EL QUE PARTICIPÓ DANDO UNA
CONFERENCIA EN EL INSTITUTO DE SECUNDARIA DE
CASETAS.
LICENCIADO EN CIENCIAS BIOLÓGICAS POR LA
UNIVERSIDAD DE SEVILLA. PROFESOR DE
INVESTIGACIÓN DEL INSTITUTO CAJAL DEL CONSEJO
SUPERIOR DE INVESTIGACIONES CIENTÍFICAS (CSIC), DEL
QUE FUE DIRECTOR DESDE 1993 HASTA 1996.
«La futura neurobiología hará
replantearnos nuestros valores»
NEIMA PIDAL
legaremos algún día a comprender totalmente cómo funciona el cerebro?
–Ésa es una cuestión muy debatida, pero
a mí personalmente no me preocupa si eso
es posible o no. Hay quien dice que es imposible
que una máquina que se estudie a sí misma llegue
a autocomprenderse, pero no veo ninguna razón
por la que esto tenga que ser así. Todos los profesionales que nos dedicamos a la neurociencia trabajamos con la suposición de que eso es posible; si
algún día se demuestra que hay una barrera infranqueable, hasta ahí habremos llegado.
–En todo caso, ¿están los investigadores cerca
de alcanzar esa meta?
–De lo que no tengo desde luego ninguna duda
es de que la neurología es la ciencia del futuro. Pero
no es sólo que la neurobiología vaya a cambiar
nuestra forma de vida, sino que va a afectar hasta la
manera de entendernos a nosotros mismos, más de
lo que cualquier otra ciencia haya podido hacer: la
biología molecular nos ha ofrecido todo un repertorio de animales y
alimentos modificados, o fármacos
de diseño, que es
algo estupendo,
pero que no afecta a los conceptos
de lo que entendemos como ser
humano. La neurobiología sí va a
cambiar lo que
significa para nosotros ser humano, o qué es la conciencia.
–¿Cómo puede afectar la neurobiología a un aspecto como la conciencia?
–Por ejemplo, nuestro sistema de valores está basado en el concepto del libre albedrío: cada individuo es responsable de sus actos, y por lo tanto está
justificado que pueda juzgárselos. Si llegásemos a
comprender que no somos tan libres como hasta
ahora hemos pensado, habría que revisar todos los
fundamentos sobre los que está construido el sistema judicial. Eso significa crear todo un nuevo orden social, y es algo que sin lugar a dudas provocará la neurobiología del futuro: hacernos repensar
la estructura de nuestra sociedad y sus cimientos.
–¿Podría llegar a formularse algo como la conciencia o el libre albedrío?
–Lo más inmediato será comprender qué ocurre
en el cerebro cuando decimos que estamos ejecutando un acto con completa libertad. De hecho, ya
L
«Aún es pronto
para hacer una
máquina tan
eficiente como
el cerebro»
33 Alberto Ferrús estuvo
ayer en Zaragoza para dar
una charla a los jóvenes
estudiantes sobre la
neurobiología.
hay datos que nos muestran que el cerebro se anticipa a lo que llamamos actos libres en 80 milisegundos. Puede parecer un tiempo muy corto, pero conceptualmente es revolucionario, porque nos hace
preguntarnos dónde empieza un acto voluntario.
Creo que vamos a comprender esa fisiología mucho
mejor, y vamos a comparar qué ocurre en cerebros
de otras especies cuando se dan los actos que definiríamos como libres, para poder sacar conclusiones de cómo ha aparecido en la evolución el acto
consciente, o el concepto de libre albedrío.
–¿También se va a desarrollar el campo de los
cerebros artificiales?
–Los científicos que se dedican a la llamada inteligencia artificial llevan años preocupados por el
producto final que quieren conseguir. Hubo un
tiempo en que pensaban que la mejor estrategia
era tratar de mimetizar lo que hace un cerebro humano, pero hace también mucho tiempo que desistieron de ello, y desgraciadamente los neurobiólogos y los científicos de inteligencia artificial han trabajado unos a espaldas de otros. Creo que es una pe-
na, porque hubiera sido más provechoso que siguieran colaborando. Ahora existe alguna tendencia
que quiere volver a intercambiar ideas entre ellos,
pero el hecho cierto es que los ingenieros que están
diseñando máquinas capaces de aproximarse a la
biología del cerebro natural, pero están todavía
muy lejos de lograrlo. Hay otra estrategia, que es incorporar aparatos al funcionamiento de los cerebros humanos, y en esta línea se han hecho experiencias piloto con chips electrónicos, incorporándolas a personas con alguna discapacidad, sobre todo visual. En ese campo entre la cibernética y la
neurobiología creo que también va a haber cambios sustanciales en un futuro más o menos cercano. Pero si va a haber una máquina tan eficiente o
tan inteligente como un cerebro humano, no lo sé.
Lo dudo en un futuro previsible, pero no puedo negar que pudiera llegar a ocurrir.
MIGUEL ÁNGEL ORDOVÁS
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