PERIODICOSEMANAL ILUSTRADO PRECIOS D E SUSCRTCION: En Barceloca á domicilio 6 Ptas, Año. F.n el resto de España, id . . . . 6 » » Paisns de La Union postal, id. . . . 8 » » Número suelto 10 Cents, de peseta. Año I.—N.° 32.—10 Noviembre i883. GUILLERMO PAREBA, Librero 6, P i n o , 6. BARCELONA. Modo de suscribirse: Remitiendo sellos de franqueo ó libranza del Giro Mutuo, allibrero, G, Parera 6, Pino, 6. Bar celoaa. Se publica en Barcelona todos los sábado» En esta misma página se pueden admi- mentido en nada las grandes cualidades rar las nobles líneas, la frente espaciosa, de un artista. la mirada inteligente, la fisonomía franNació en Ñapóles en i683 y fué su fines del siglo xvu corría en boca ca, de donde parece brotei la eleyjtda ins- mismo padre quien le inició en los estude todos d i o s musicales; _ el n o m mas,porcircunr,bre de un gran tanstancias q u e músico por ingeignoramos, estos nio y por doclos completó en trina, no sólo en Roma, bajo la su patria, sino dirección del céallende los Allebre teórico pes.— Alejandro Gasparini, quien Scarlatti, el perle mstruyo e n feccionado r d e todos los secreaquella clase de tos de la compomonólogo d r a sición, mientras mático musical que Pasquini le llamado aria da, p u s o en pleno t'íijt^o, cuya forma conocimiento no fué e n t e r a del magisterio de m e n t e abandolos instrumentos nada ni siquiera de teclado y le por aquel atrevireveló el supredo i n n o v a d o r mo ideal, tanto quefuéWagner. de la música para Alejandro Scarórgano, cuanto latti, digno conde la de clavitinuador d e la cémbalo, instruobra de Montemeuto entonces verde y Cavalli, en gran boga. descubrió n u e Una circunsvos y felicísimos tancia q u e inefectos orquestafluyó felizmente l e s , agrupando enelporvenirarlos diversos instístico de Domintrumentos en el go Scarlatti, fué modo más ingesu encuentro en nioso y aceenRoma con Haentuando, aunque del. Jóvenes ende lejos, algunos trambos , entuprocedimientos siastas de lo beq u e d o s siglos llo, llénala menmás tarde reapate de la antigua recen en las pargrandeza del suetituras de Meyerlo que pisaban, beer y del menpaseaban por las c i o n a d o sumo calles de la ciumúsico de Lipdad eterna palsia. El,Scarlatti, pitando ante cafué de una rara da m a r a v i l l a fecundidad, hasuya, de aquel b i e n d o escrito, sentimiento sólo tan sólo en el gésensible á quien nero teatral, más lanaturalczo dio de ciento diez y u n corazón d e seis obras. artista, y templando su alma Desde poco a severa belleza más de unos diez del arte clásico y años acá, el nomcorriendo con la bre de Scarlatti Do.MENico S C A R L A T T I . fantasía alosmas volvió á la vida entre nosotros, pero no para recordar al piracion que caracteriza las obras'de Do- lejanos confinesfdel idealcélebre operista, sino al insigne clavi- mingo Scarlatti. Algún tiempo después el sajón Haencembalista compositor Domingo, hereEs uno de los pocos casos que se ha- del sube sobre el pedestal de los grandes dero del genio musical de su ilustre padre. llan en que las líneas del rostro no han maestros en Londres y realza la suerte DOMENICO SCARLATTI LA ILUSTRACIÓN MUSICAL. de la música en Inglaterra. Contemporáneamente Domingo Scarlatti bate la solfa en San Pedro, en el Vaticano (i7i51719), hasta que, no sabemos si llamado ó por voluntad propia, le vemos en 1719, en la patria adoptiva de su amigo, asistir á la representación de la ópera Narciso, la primera debida á la pluma de Alejandro Scarlatti. Después de Londres, campo de los triunfos artísticos de Domingo Scarlatti, fueron Lisboa y Madrid. Las cortes de estas dos metrópolis le tuvieron por largo tiempo maestro de clavicémbalo de los infantes y virtuoso de cámara. Entre sus discípulos se cita á la princesa de Portugal, que luego fué reina de España, cuando su esposo, el príncipe de Asturias, subió al trono con el nombre de Fernando VI. Domingo Scarlatti volvió á su patria en 1754, en donde murió en 1757. Las obras escritas por Scarlatti para clavicémbalo son notorias, mientras son ignoradas las que compuso para iglesia y teatro. Las primeras justifican plenamente su celebridad, las segundas Quisiéramos tenerlas en las manos por alguna feliz circunstancia y ver si son también dignas del renombre de su ilustre autor. Entre éstas, se cita una misa á cuatro voces con acompañamiento de órgano, una Salve Regina, solo con acampañamiento de cuarteto, y las óperas Silvia, Orlando, Tolomeo ed Alessandro, Higenia in Aulide, Ifigenia in Tauride, Amleto, L' amare di uri' ombra, representadas en Roma, en el teatro particular de la viuda del rey de Polonia, María Casimira. El Narciso fué representado en Londres, en el teatro italiano. La grande profundidad de Scarlatti se demostró en el género de música instrumental, en las obras para clavicémbalo V órgano. Son cuatrocientas piezas, por lo menos, las que escribió para estos dos intérpretes del pensamiento musical. El estilo de Scarlatti deriva del de los maestros de la escuela veneciana ; por esto nada tiene que ver con la forma de la Suite frangaise de la cual tuvimos ocasión de ocuparnos al hablar de Francisco Couperin, forma inspirada por las danzas del tiempo y de las cuales eran una especie de variada paráfrasis. La sonata de la escuela veneciana era una transcripción ó reducción del motete á varias voces, para clavicémbalo, y se uniformaba rigorosamente a l a tonalidad del canto litúrgico-cristiano, composición constituida por fragmentos á coral, esto es, nota contra nota, como en los llamados/aiíoi bordones, ó de fragmentos, á imitaciones llanas, puestos al lado de pasos de agilidad á ritmos figurados, y esto por amor de aquella variedad que es condición necesaria del bello arte. Aun cuando la sonata de Scarlatti deriva de la de la escuela ilustrada porGabrielli, Merulo, Luraschi y del mismo Frescobaldi, se distingue, sin embargo, muchísimo de otra cualquiera. En esta, se encuentra el desarrollo de un pensamiento musical lleno de prestigio por sí mismo, independientemente de los artificios escolásticos y de la continuación de las partes propiamente del Rebuscar, y también de la canción para tocar. Es una música esencialmente elaborada con los elementos de ambos modos mayor y menor y emancipada de todo resto de antigua tonalidad; los elementos melódicos y las agregaciones de los acordes, están vinculados por poderosas atracciones tonales; los ritmos expontáneos, incisivos, estrosos, vivos, variadísimos se disponen á estos elementos fónicos, para constituir un arte que mejor que otro cualquiera se presta para eitrinsecar el estado del espírtu del hombre y los vuelos geniales de las fantasías selectas y peregrinas. Nada hay que extrañar pues si creemos deber saludar en el creador de este arte—en Domingo Scarlatti,—al jefe de la música instrumental moderna. Ni Purcell en Inglaterra, ni Couperin en Francia, ni en fin Kuhnau en Germania pueden disputarle este honor, por mas que el progreso de un arte dependa menos de la obra de un solo individuo que de la variada y colectiva de muchos. Por lo demás, ninguna confirmación hay que tomar en sentido demasiado absoluto, puesto que lo absoluto no es mas que una abstracción. Casi todas las composiciones para clavicémbalo de Scarlatti, fueron recogidas por el abate Fortunato Santini de Roma, en donde hoy se conserva aun este tesoro. Su número asciende á trescientas cuarenta y nueve piezas, de las cuales doscientas vieron la luz en Viena por el editor Haslinger y el pianista Czerny; cuatrocientas cuarenta y nueve piezas aguardan todavía que las den á conocer á los admiradores del excelso compositor. Muy obsequiado cuando recorría las grandes capitales de Europa, dando conciertos de clavicémbalo, y en las cuales iba esparciendo ricas joyas de su pluma, hasta en nuestros dias su nombre está cubierto de honores. Según Czerny, el maestro napolitano tiene el verdadero don de una originalidad marcadísima y exenta de todo con vencionalismo; en sus obras de arte encanta por la natural frescura del pensamiento melódico, por el brio y por la vida esplendorosa. Hasta Hans Se. Bulow, en el prefacio puesto en una colección de diez y nueve piezas de Scarlatti, publicadas por Peters, reconoce—bien que á pesar suyo—lo? méritos del mae-tro. Al establecer un paralelo entre C. F . E. Bach y D. Scarlatti, nota que si aquél estaba exento de cualquiera tacha del vituperio, en lo que concierne á la pureza de la frase musical, en la disposición de las partes armónicas caia sin embargo algunas veces en lo raquítico, en lo vano y abusaba, en las frasilentas, de los agréments y de los flattés. Scarlatti, por el contrario, sabia componer, como dice Bulovtf, de un modo más adecuado al clavicémbalo; su inventiva es más característica y concisa, y su pohfonismo muy amenudo alcanza hasta el último grado, casi podríamos decir al imposible, en causa de la excesiva robustez y extensión de los acordes. Algunos pasos, ciertamente, se apropiaban mucho mejor al ckvicordo del siglo xviii, sobre el que debían producir también mayor efecto que al moderlio piano forte, por no admitir éste el excén trico adorno llamado acciaccatura. Y concluye: «No fué un Epigone, sino un Progne. Si consideramos (Bulow continúa su comparación entre el maestro alemán y el italiano) á C. F . E. Bach como predecesor de H a y d n y Mozart, debemos apropósito de Scarlatti decir además; En él se agita ya una de las arterias del grande espíritu de Beethoven. La prueba más poderosa de ello es la del scher^o en fa tnayor que tiene que retocar menos que todas las demás piezas. La ironía y el humor toman por primera vez una forma nueva por obra de Scarlatti.» Y aquí hay que notar que Bulow por humor entiende, con Arturo Schopenhauer, la seriedad oculia detrás del scherjo, y por ironía el scher^o escondido detrás de la seriedad. Un importante estudio apropósito de Domingo Scarlatti se publicó recientemente por Marmontel, en su bello volumen Symphonistes et Virtuoses. El también nota la originalidad de este insigne compositor clavicembalista, y la delicadeza de sus invenciones melódicas. Añade algunas útiles advertencias sobre el modo de interpretar las obras de este autor. «La mayor parte de sui sonatas, — así escribe Marmontel, — rondós, caprichos, tocatas, gigas, ejercicios, estudios, tocatinas, piezas de estilo, fugado y fugas, deben ejecutarse con movimiento animadísimo, con mucho espíritu y con slancio.D Se encuentran todavía pastorales, cantables y alemannas de Domingo Scarlatti que no exigen semejante estilo como las que ofrecen modelos degusto correspondientes á los géneros gracioso, expresivo y hasta patético. Domingo Scarlatti tuvo una grave culpa en medio de tantas virtudes artísticas: la de dejarse dominar por la pasión del juego y de amar poco á su mujer y á sus hijos. Cuando dejó de vivir, éstos se hubieran encontrado sumidos en la más escuálida indigencia, si el célebre cantantante Farinelli, apellidado Coraron de oro, que siempre fué amigo sincero de Scarlatti, no hubiera acudido en ayuda de aquellos desvalidos. A. GALLI. NUESTRA HOJA DE MÜSICA LA NOCHE, nocturno, por G. FOSCHINI. —Damos hoy un nocturno del egregio maestro Foschini, conocido por sus doctos artículos científico-musicales, excelente director de orquesta y escritor de música para piano forte muy recomendable y que logró excitar simpatía su nombre entre los aficionados. Foschini es aún joven y dirige el Instituto musical de Arti, en el cual cultiva la música con serios y felices resultados. LA OPERA ITALIANA (Continuación.) En la época en que estos chistosos autores intentaban la ópera bufa, un santo que la iglesia venera mucho crea la ópera religiosa. Cosa singular! Un mismo procedimiento hizo hallar esos dos géneros del todo opuestos. San Felipe Neri, fundador del Oratorio en 1564, hacía cantar himnos y cánticos después del sermón y en cada una de las partes de que se componían los ejercicios de piedad. Estos cantos ejecutados por una ó muchas voces, tenían la doble ventaja de atraer y retener á los jóvenes en el templo del Señor y de ale- LA ILUSTRACIÓN MUSICAL. teresó más que aquella diva. Ni un gesjarlos de los pasatiempos mundanos. Coto, ni una mirada, ni una palabra que mo estos himnos y laudes no tenían enno exprese filosóficamente lo que debe lace entre sf, y por lo mismo los auditoexpresar; una verdadera miniatura de la res dejan de oír el principio ó el fin de estos conciertos espirituales, el santo TEATRO LicEo.—Antes de ocuparnos de parte, sin recurrir á las frases y braceos fundador imagina reunir toda esti mú- la música permtíasenos un justo desaho- de relumbrón para arrancar el aplauso sica sobre uno de los pasos de la Santa go. Es cosa proverbial que una parte del de los que poco se andan en minuciosiEscritura, á fin de interesar más viva- público que asiste á este teatro, á partir dades. Por nuestra- parte felicitamos cormente á los fieles. Así ellos no dejan de del "i." piso hasta el 5.° debe dejar la díalmente á la Sra. Vitali por su extraorquedarse hasta el desenlace de la acción educación y buenos modales en la puer- dinario talento. El tenor Engel sostuvo relatada. El drama religioso en sí cons- ta, mientras que en los teatros populares la parte del protagonista bastante bien, tituido, recibe más tarde notables refor- á bajo precio observa una compostura sacando buen partido de su órgano vocal, mas; y como tomó vida en Roma en la digna del mayor elogio. Y lo sensible es algo limitado, pero hay que tener en iglesia del Oratorio, de aquí también el que cada dia vamos de mal en peor. A cuenta que no ocupa la plaza de tenor nombre d' oratorio. La Pasión de Jesu- muchas empresas se ha aconsejado su- de fuerza, y por lo tanto está en donde cristo, tal como se canta durante la se- primir los palcos del 3.° para convertir- debe estar. La romanza la cantó admiramana santa, sirvió de modelo para la los en galería por asientos, y hoy más blemente. El bajo Mr. Vidal como en distribución de los papeles. Uno ó mu- que nunca esto convendría á los intere- otras ocasiones desempeñó muy bien su chos protagonistas, el historiador y el ses del público, puesto que con el nuevo parte de Mefistófeles, lo propio que la pueblo; tales eran los personajes puestos arreglo ó desarreglo, se na puesto al pú- Sra. Treves la de Siebel. El Sr. Lalloni en acción en un Oratorio. La parte del blico, en el caso de ó gastar tres pesetas algo indispuesto y conmovido al princinarrador, del testigo ó del cronista la sin tener en donde sentarse ni ver la pio, no pudo hacer gala de sus magníficos hacía casi siempre el tenor. función ó una peseta teniendo que subir dotes vocales, pero en el tercer acto á San Felipe Neri gozó en su éxito y en á las altas regiones á asarse de calor, es pesar del pánico que seguía dominánel triunfo de su piadosa institución; en- decir que falta un precio medio que ase dole, cantó como buen artista que es. tre los músicos que lo secundaron cuén- gurase la localidad, y este en ningún Las masas perfectamente y la dirección tjse al sabio Animuccia y al divino Pa- sitio estaría mejor que en el tercer piso. de conjunto hábilmente llevada por el lestrina. Hsendel, Sebastian Bach,Grann, Pero á las empresas esto no cuadra, por- simpático Maestro Masino Mancinelli, Naumann, Haydn, Mozart y casi todos que uno de sus mayores recursos estriba por cuyo ajuste felicitamos ala Empresa. los maestros italianos, distinguiéronse en el sistema de alquilar esos palcos La mise ín scine la misma de hace 2 5 en este género grandioso. Revestido de y de los abonos especíales para los con- años, que se estrenó esta ópera en el Liformas más francamente dramáticas, el currentes á ellos, sin tener en cuenta que ceo, con añadidura de la huella que esoratorio llegó también á brillar en el tea- lo que gana de más en dinero, lo pierde tos pocos años han hecho en las decoratro. Debbora de Guglielmi y el Mosé át en el prestigio del teatro, y hasta en el ciones. Rossini son testimonios recientes de tan mérito material de algunos artistas. La reprensible conducta de una parte del bella conquista. BUEN RETIRO.—LOÍ Hugonotes n a t u Durante el siglo xiv, muchos composi- público barcelonés de poner apodos á ralmente son el imán que atrae á este los artistas y de hablarles desde sus restores escribieron algunos centenares de popular teatro de ópera á una concuroratorios; mujeres virtuosas como Pc- pectivos asientos, silbando cuando otros rencia numerosa, que se divierte un tronilla Paoli, Massimi, Francesca Man- aplauden y viceversa, solo por guasa, no mundo y aplaude con efusión. La señora zoni, distinguiéronse en ellos. Ottavio se vé mas que en Barcelona y en el Li- Bazzani se indispuso y también la señora Tronsarelli dio la Crea:¡ione del Mondo, ceo. Se figuran que tienen gracia, y mal- De Sanctis, y la empresa se vio precisada que J. Haydn debía crear musicalmente dita la que tienen. Desde allá lanzan á confiar respectivamente los papeles de insultos á muchos artistas, á quienes cara Valentina y Rema á las Sras. Castiglioni por segunda vez en 1800. á cara se guardarían muy bien de hacerMonteverde estableció en Venecia un lo, y esto solo para divertirse y pasar por y Tressols, cuando hete ahí que al saberlo la Sra. Bazzini, saltó de su cama y teatro lírico; su Proserpina rápita fué gente de espíritu. echó á correr al teatro en donde curada desde luego representada en el palacio Mocenigo (16J0). Soriano Cavalli (FranEl tercer piso da el ejemplo mayor milagrosamente cantó los Hugonotes &ncesco), sus contemporáneos, también es por la impunidad de que goza gracias á tes de que otra prima donna la suplancribieron para la escena. Aplaudióse en ios palcos cerrados en donde la autori- tase. Y se curó del todo, puesto que el Venecia, en 1639, le no;f^i di Teti é di dad no puede vigilar.—Si allí se propo- sábado dio su beneficio con Heruani el Peleo de éste último. El ilustre Monte- nen matar á un artista, ya puede hacer bandito, haciendo gala de una voz y unos verde poco trabajó para el teatro. En maravillas, que le matan, y una vez des- pulmones que por cierto no estaban eni668. Cavalli daba su trigésimanona ópe- concertado ya ha acabado para Barce fermos, y SI nó dígalo el joven tenor Rubys que le estuvo muchas veces cerca ra; 65o dramas de este género, se p u - lona. sieron en escena en Venecia desde 1657 Todo este preámbulo se nos ha ocurrido durante las tiernas situaciones del drama. á 1700. (Planches 26 á 3i). hoy por lo que en la primera noche pasó El público de los palcos vecinos que / / Santo Alessio, 1634, la morte d' Or- con alguno de los artistas que cantaron siempre fué galante con las prima-donfeo, de Landi, 1639, son de las obras en Faust, cuyo artista, de sentada repu- nas, le fué en esta ocasión pródigo de más notables á la vista de la ciencia, del tación y excelentes facultades, pasó un muchos y notables regalos, que le fueron gusto y de la novedad Lo mismo se pue- mal rato atroz por el miedo que desde presentados por varios pajes de escoba disfrazados con ciertos de decir de las óperas de Cesti (Marcan- las altas regiones le metieron en el cuer- elegantemente tonio) recoleto d' Artzzo, tales como po: al punto tal de que hoy se encuentra pinreles que daban lástima y compasión. No comprendemos porque las direccioOrontea, en 1649; Cesare amante, en realmente indispuesto. 1651, etc. (Planches, 25). Y, para esta clase de espectadores sirve nes de nuestros teatros no hayan atinado Bastando il dirti, che il concertó di si un teatro de los primeros y más elegan- sino en vestirles con trajes análogos á la perfetta melodía sia valore d' un Ales- tes del mundo que deberla infundir res- época y estilo de la acción que se represandro, cioé del signar Stradella, rico- peto al que en él entra, antes que asimi- senta. Es un absurdo el más garrafal. nosciuto senja contrasto per il primo larle á una plaza de toros, quizás porque Los d m b i o s de escena no forman Apollo della música. le ven grandioso. Para tales individuos parte de dicha acción; son solo un conSus títulos de nobleza proclamando á la Dirección, en vez de haberle decorado vencionalismo exigido para poder trasAlessandro Stradella primer Apolo de la tan soberbiamente, debiera haberle man- portar á los actores y al público de un música, están estampado.s sobre el libre- dado blanquear por los blanqueadores lugar á otro sobre el único palco escénito de una ópera de este maestro que tie- que pasean el llano de la Boquería, y co no pudiendo trasportarles á otro teane por título : la For^a delV Amor pa- correspondería mejor al uso á que aque- tro con diferente decoración; por conterno, Genova, 1678. San Giovan Bat- llos le destinan. siguiente los servidores encargados de tista, oratorio, /' Aria di Mesa para En el Fausto se presentó la Signora trasportar los muebles pertenecen al tenor, que Rul3ini cantó deliciosamente Vitali-Angustí, artista querida y admirada teatro, no á la producción, y por lo tanen los conciertos históricos de Fétis en de nuestro público, y hemos de confesar to no deben ir vestidos de Romanos, de i832, y los fragmentos que nos quedan que jamás después de la Patti oímos una ejipcios, etc., etc., sino de librea decente de Stradella, justifican plenamente los Margarita más ideal, tanto en el canto con su peloquin y cordones y media elogios concedidos á este cantor y com- como en la acción y dicción del poético blanca ó de color bien calzada, como se positor célebre. (Planches, 32, 35). personje, En algunos momentos nos in- efectúa en los primeros teatros de Euro(Se continuará.), REVISTAS TEATRALES LA ILUSTRACIÓN MUSICAL. pa no inferiores al Liceo. Así á más de dar una prueba de buen sentido, se evitarían las palabrotas que una parte del público suele dirigir á los infelices adefesios que cambian los trastos de la escena Estamos seguros de que ninguna dirección teatral hará caso de cuanto decimos por aquello de no haberlo ideado en su seno, pero nos tiene sin cuidado porque el ridículo no lo pasamos nosotros. TEATRO CIRCO. — Es verdaderamente laudable la actividad que el distinguido actor-cantante D. Alfredo Moragas, desplega por dar vida y animación á este teatro. En pocos dias lleva dadas distintas obras y todas ellas con mucho acierto por los excelentes elementos artísticos con que cuenta, en primer lugar su señora esposa Doña Asunción Martí. El caso es que el público ha comprendido que vale la pena de ir al Circo y vá en buen número, particularmente en las fiestas en que tarde y noche convierte el local en barril de sardinas. Merece mención especial el desempeño de La Tempestad en este teatro, sobre todo el Sr. Moragas, que es el que hasta hoy mejor ha cantado y declamado la difícil parte de barítono. La escena del último acto es de una ilusión completa y las apariciones nada dejan que desear. PRINCIPAL.—Alternando la compañía de opereta italiana con la dramática española, va sosteniéndose la animación en este teatro y el público está contento con las funciones que en él se dan, y con él la activa empresa que lo tiene á su cargo. NOTASJ^&RIAS El Fígaro anuncia que Maurice Berhnardt está escribiendo un drama, que su madre Sarah lo representará en Londres en el próximo verano. Asi será él. En el Burgtheatre de Viena, se representará una comedia i863, de Schauffert, que se dio como una novedad, mientras que no es más que una copia del Alcalde de Zalamea, de Calderón. niendo que tomar marido, no necesita Maestro Basili.—A los diez y siete salió del Colegio y tuvo encargo de componer tantos animales. una ópera para la Scala, que fué Elena Ha sido contratada para cantar en las Y Malvina, representada en Noviembre funciones de tarde en el Liceo la señora de i832. Muy joven fué á Londres, en donde Castiglioni, que tanto ha sido aplaudida permaneció haciéndose honor por espaen el Retiro. Para el próximo domingo por la tarde, cio de más de cuarenta años; siendo u n a díceseque se dará la Aída, desempeñando de las figuras más pronunciadas del arte la parte de la protagonista una Señorita musical Italiano. Frecuentaba los centros más aristocrápaisana nuestra, recientemente llegada de adonde ha obtenido muchos aplausos, ticos.—Fué Director de orquesta de valo propio que ^en otros teatros extran- rios teatros de Londres.—Compuso va-^ rias óperas, entre ellas Nicolo de Lapi jeros. con buen éxito. Lia, y la Selvaggia. un repertorio vastísimo de piezas En un palco bajo del teatro Liceo, la de Deja salón. Uno de los más importantes primera noche del Faust , llamaba la periódicos de Londres dice de él: «Franatención el traje de la Sra. Singer y el cisco Schira fué compositor de tipo gesombrero de su compañera. nuinamente italiano, por nacimiento, fué también italiano de predilección, un verVíctima de una apoplejía fulminante, dadero hijo de aquella Sunny land, á falleció anoche, en edad avanzada, don la que debemos á Piccini , Cimarosa, Pablo Fargas y Soler, hermano de uno Paisiello , Bellini, Donizetti , Rossini, de nuestros compañeros de redacción y Verdi, Aosto y Ponchielli. uno de los profesores músicos más antiSe enorgullecía con varias órdenes caguos de esta capital, pues que ejerció el ballerescas, pero la que más le envanearte por espacio de más de cincuenta cía era la encomienda de la Corona de años. Discípulo que fué de la antigua y Italia que le dio el Rey Humberto. acreditada escolain'a del convento de la No deja familia. Merced;, siendo muv joven ocupó el puesto de primer violoncello d;.' la orquesta del nuevo Teatro de Ópera de M. N A V A S , B a r c e l o n a . Valencia, cuya parte desempeñó durante dos años y hasta la muerte del Rey Fernando VII en que se cerró el coliseo. Después ocupó igual puesto en el primitivo Teatro Liceo, desde que se instaló en el convento de Montesion en iSSy, p a los niejeres del munilo.—la maravilla del arle sando algunos años después al actual Liceo , en cuyo Conservatorio formó L a admiración d e t o d o s l o s p i a n i s muchos discípulos de su instrumento, tas, f a b r i c a n t e s y aficionados notable alguno de ellos. Además el se Para cerciorarse de la gran superioridad ñor Fargas habia compuesto varias obras de música religiosa, que se ejecutaron de los pianos S t e i n w a y sobre los de tolos demás fabricantes, bastará con con frecuencia en diferentes iglesias de dos examinarlos y compararlos en el esta ciudad por la capilla de música de la parroquial iglesia de Santa Maria del Mar, á la que perteneció durante más de Único depósito en España, 10, Vidrio, 10. cuarenta años, hasta la muerte del últi mo maestro que fué de la misma Rdo. librería de G. Parcra, 6 , P1.\0, 6 , Barcelona. D. José Barba, quien tuvo en mucha estima al Sr. F;irgas. Fué también uno de los primeros que cultivó la música de salón del género clásico, ejecutando en POLCA PARA PIANO varias reuniones particulares las obras por de los célebres maestros alemanes. PIANOS STEINWAY lÁ LOS TOROSI Amigos particulares y admiradores del difunto, nos asociamos al sentimiento El autor de Nana, Pot-Bouille y Asso- general que su fallecimiento ha producimoir está escribiendo un nuevo roman- do en Barcelona y mandamos el pésame ce. Le Bonheur conjugal.—¡Qné antí- á su atribulada familia. tesis! El tenor Fernando Valero, actualmente contratado en el teatro imperial de Pe tersburgo, ha sido escriturado para la cuaresma en Moscou, y para la primavera en el Covent-Garden de Londres. El tenor Lorenzo Abruñédo solicita contrata. El barítono Vittori Carpi también. Los cantantes brotan como los hongos en Italia y sin embargo hay escasez de ellos... de los buenos se entiende. Un anuncio tomado de un periódico Suizo: Se vende un mono , dos perritos y un loro. Dirigirse á la señorita C... que, te- ANTONIO URGELLÉS P r e c i o fijo S p e s e t a s RICARDO WAGNER Ensayo biográfico-crilico FRANCISCO SCHIRA.—¡Ha fallecido este maestro! No era joven, nó; pero nadie mirándole de lejos, le hubiera dado los 76 años que Ikvaba á cuestas, gracias á todo lo postizo que usaba.—Una especie de Felipe Angles, más vigoroso—Extremado en el vestir y hasta en su conversación á fin de parecer siempre verde.— Corria todavía detrás de las bailarinas del Covent-Garden. Este apreciable compositor y maestro de canto, murió dos semanas há en su elegante habitación de Welbeck Street en Londres Francisco Schira nació en Malta; á los nueve años entró en el conservatorio de Milán aprendiendo contrapunto con el G U I L L E R M O P A R E R A , 6, P i n o 6, Barcelona FOR J O A Q U Í N MARSILL.ACH con un estenso prólogo epistolar, por el doctor D, JOSÉ DE LETAMENDI PRECIO: S'50 PESETAS AIHIM DE U li.l\STlüCIO,\ HÜSICAl CUATRO MAZURCAS PARA PIANO I T O V H 3 0 A X> POR 2 PESETAS Imp. L A RENAIXENSA, X u c l á , i 3 .