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SABER EscRrBrR
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Fr¿ses hechas
*Ala-a quien haya visto un
a]'a
-o un ha}'a.
"Tomó el vino degustándolo tal
-como yi¡o.
Halla a quien haya visto un aya
-(cuidadora)
o un haya (árbol)
ciones, aurque en grarnática se a¡ulizan como
Reír las gracias
Sacar las castañas del
fuego
Degustó el vino en el momen-to en
que llegó.
locuciones verbales.
Sacar punta a las cosas
Son equivalentes a ora-
Tener la cabeza sobre
los hombros
Agrapæión
de
Sonar la flauta por casualidad
Soñar despierto
Caer en la cuenu, en la
úamPa
Echar de menos
pølabras
l,as þalabras seeligen de acuerdo con su forma y su significado; si
alteramos la forma o ia escritura de la palabra, cometemos un barbarismo o una falø de ortografra, al iguãl que, si modificamos el significado, câmbiaríâmos el sentido de la comunicación, Las palabras
son como los ladrillos que configuran la estructura (en esrc caso, las
oraciones) de un edificio (rexro: unidâd textual). Son unidades aislables que pueden combinarse y ordena¡se de manera libre e intencional, con tal de que no infrinjan las reglas de lâ sem ántrcay dela
sintaxjs. Es cierto que, al igual que sucede en la albañilería con los
mâteriales prefabricados, la lengua dispone de conjuntos de palabras agrupadas que constituyen unidades de sentido, como:
Tomar el pelo
Mandar
a paseo
Expresiones que contienen rasgos sentenciosos,
No lo tome usted tân a
malotanapecho
Estaralasdurasyalas
maduras
galgo
Máxinas
Expresiones breves
El amor
que contienen un pen-
quien sabe elegir
samiento moral del
La vida es bella si te va
Locuciones
que se extrae alguna
bien
Resultan de la unión
enseñanza.
Sé
de dos o más palabras
con el significado de
Sâlida de tono
De punta en blanco
[-o hizo en un santiamén
Estaba de horc en h.rt"
desajustado
- elegante
- rápido
- li".^
alegrarse
- solucionar
o resol-ver
-
agtdizar
equilibrar, razonar
acertar
idear
recordar
/ engañar
necesitar
mofarse o desdeña¡
desairar
Dichos
De c¿sta le viene al
una sola.
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,fi.ËËìlë.ft ëili;iåiiiÈ;ì.
es
libre para
infiel y no rnires
a
quién
No
es
¡eluce
todo oro
1o
que
no se enfade
-se obsesione
/ no
-
afrontar la realidad
-
le viene de herencia
libenad consiste
-en lasaber
elegir
-
vive para disfrutar
-ti
acnía pensando en
que vemos no es
-todolo real
CoNsrRUccIóN y REDAccróN DEL TEXTo
SÀBER EScRIBIR
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Evüe'éstos usos
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i.rli',r,rcônêüidàäô
Prqcureelegir'êstáä'fci-iríâs
:
Frases hechas
Homónimos
ciones, aunque en gra-
Reír las gracias
Sacar las castañas del
mática se analiz¿n como
fuego
locuciones verbales.
Sacar punta a las cosas
Son eçhzlentes a ora-
*Alla a ouien hava visto un ava
-o un hava.
"Tomó el vino degustándolo tal
-como
vino.
Halla
quien haya Yisto un aya
(cuidadora) o un haya (árbol)
Degustó el vino en el momento en que llegó.
-
a
-
.
Tener la cabeza sobre
los hombros
Sonar la flauta por ca-
sualidad
Soñar despieno
Caer en la cuena, en la
Agnryøción de paløbrøs
Las pøløbrøs se eligen de acuerdo con su forma y su significado; si
alteramos la forma o la escritura de la palabra, cometemos un barbarismo o una fala de ortograffa, al igual que, si modificamos el significado, cambiaríamos el sentido de la comunicación. Las palabras
son como los l¿drillos que configuran la estructura (en este caso, las
oraciones) de un edificio (texto: unidad textual). Son unidades aislables que pueden combinarse y ordenarse de manera libre e intencional, con tal de que no infrinjan las reglas de la semántica y de la
sintaxis. Es cierto que, al igual que sucede en la albañilería con los
materiales prefabricados, la lengta dispone de conjuntos de palabras agrupadas que constituyen unidades de sentido, como:
trfìmpa
Echar de menos
a paseo
Expresiones que contienen rasgos sentenciosos.
No lo tome usted tan
a
malotânâpecho
Estaralasdurasyalas
madu¡as
galgo
Máximas
Expresiones breves
de dos o más palabras
con el significado de
una sola.
Salida de tono
De puna en blanco
[-o hizo e¡r un santiamén
Rstaba de bote en hote
-
desajustado
elegante
rápido
ileno
El amor
es
libre para
samiento moral del
quien sabe elegir
La vida es bella si te va
que se extrae alguna
bien
enseñanza.
Sé
que contienen rm pen-
Resultan de la unión
-
o resol-
agtdizar
equilibrar, razonar
acertar
idear
recordar
/ engañar
necesitar
mofa¡se o desdeñar
desairar
Dichos
De casta le viene al
Locuciones
-
-
Tomar el pelo
Mandar
alegrarse
- solucionar
-ver
no se enfade
-se obsesione
/ no
-
afrontar la realidad
-
le viene de herencia
libertad consiste
-en lasaber
elegir
-
vive para disfrutar
-ti
actúa pensando en
quién
No es todo oro lo que
reluie
-todolo real
ìnfiel y no mires
a
que vemos no es
SABER EScRIBIR
CoNSTRUccIóN y REDACCIóN DEL TEx-t-o
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frecubntes pafa usat
co¡ cuidado
Aforismos
Son sentencias que
resumen un pensamiento. Si lâ senten-
'Tópicos estilísticos
Las apariencias engañân
No te
ficado moralìzante,
ffes ni de ru sombra
Para muestra basta un
sería un adagio.
botón
cia contiene un signi-
Cada uno es preso de
y dueño de
sus silencios
sus palabras
desconfía de los
-sentidos
-
sé
desconfiado
la experiencia
-demuestrâ
lo
ser comedido
-hablar
al
Son formas de cons-
Su comportamiento es
fiel refleio de su vida
-
copra
de
-
buena salud
Este tema es de rabio-
-
actual
-
ímpetu
-
gran película
trucción muy repetid4s por lós hablantes
Tiene una sâlud
para resaltar algún
hierro
'rasgo o enfatizar.
sa actualidad
Acnía en el têatro con
una oasión desenfrenada
He visto una oelícula
maravillosa
Refranes
Son expresiones de tipo popular basadas en
la
experiencia que
contíenen algrna enseñanza para la vida.
Agua pasada no mueve
molino
Quien
se pica ajos
come
El que siwe al público
nadie sirve
Quien ríe el último ríe
a
dos veces
Quien bien te quiere te
ha¡á llorar
A perro flaco todo son
-
Expresiones realizadas
en vez usar las palab¡as directas.
le afecta
- algo
sentirse o no co-rrespondido
espera la mejor
-ocasión
-dolorel amor entrâña
cebarse el mal so-
pulgâs
-bre uno
En el transcurso de la
histor.ia, a lo largo de
-
durante
-
lo diio de pronro
-
por
-
tengo frío o calor
los años
De buenas a primeras
lo soltó
En visa de lo ocu-rrido
En lo concerniente a
tus asuntos
Percibo unas sensacio-
Hemos presenciado
olvida lo pasado
Circunloquios
por medio de rodeos
]r.:-II --:.1.1"II' :i
' üsôs piêfeientes '
:...] :Ì..|. .:::,.
sobre
una ridícula situación
-blehecho desagrada-
.
Normalmente todas las expresiones y frases hechas tienen una
gfan vitalidâd en la lengua oral, aunque en la lengua escritâ hây que
utilizarlas con sentido incisivo, no de mânera abundante ni frecuente. Convie[e relegâr o desechar las ercpresiones uncía.s o gøstødøs,los túpicos estilísticos,la incorporación de aoces extrønjeiøs o
børbarismos y el recurso a pâlâbras altisonantes. P¿ra empezar â escribir, resulta imprescindible tener ideas, ya sean generadas por la
imaginación y el pensamiento o provengan de sugerencias, ãe estímulos externos o internos. A pardr de ahí, elegiremos las palabras
portâdorâs de las ideas que deseamos transmitir de acue¡do con los
principios de propiedad, claridad, sencillez, nârurâlidad, corrección, coherencia y elegancia, que proporcionan la unidad de sentido y la armonía al texto.
21,2. La combinación de palabras en oraciones
Cuando esc¡ibimos, elegimos las palabras y las combinamos pâra
construir oraciones, consideradas como unidades mayores de la cons-
CoNSTRUCCIóN y REDÀCCIóN DEL
SABER EscRI¡IR
bras se unen formando coniuntos sintácticos a los que llamamos
oraciones constituidas por sujeto y predicado.
El predicado puede estar integrado por un verbo prediôativo +
complementâción (adverbio, adjetivo, nombre o proposición en
función de CD, CI, CC): construcción predicativa (<<Juan estudia
Filosofía durante el día y tral:aja por la noche>>); o por un verbo
atriburivo + adjetivo u otra palabra en función de at¡ibuto: construcción nominal (..La casa de edificios es elegante>). El orden más
normal de los elementos de la oraciónprede ser lígico: SVO -+ Sujeto: determinante + nombre + modificadores o complementos del
núcleo nominal y predicado: verbo + adverbio y/o CD, CI y CC
(<.La casa del molino se ha deteriorado mucho por no estâr ocupada'). Sin embargo, la construcción de las oraciones no está marcadâ por un orden fijo, puesto que interwenen føxores Lígicw, psicológicos y prøgmáticos. Cuando el orden natural de los elèrfientos
o¡acionales se altera completamente, se produce el hipírbaton empleado literariamente pârâ proporcionar ritrno y musióalidad (.Del
salón en el ángulo oscuro> por <<en el ángulo oscuro del salóp>
<<desde mi ventana, la lluvia caer veía sin cesap> por ..veía caer la
lluvia sin cesâr desde mi ventana>). En el ámbitoestilístico se admite cualquier orden en consonancia con la armonía de las frases.
El orden oracional tiene algunos límites, como el de colocar
el verbo al final de todos los elementos (*El sol antes de ponerse
con luz propia brilló). Podemos variarlo por razones psicõlógicas
para dar mayor impulso a la frase o para hacerlo más expresivq pero conviene no abusar de cambios que obstaculicen la lectura y la
comprensión del texto. AI redactar, debemos utiiizar algunâs estrategias básicas:
La colocación de los modificadores, complementos y determinâciones, al,lado de las palabras modificadas o contiguos a los
núcleos.
La posición de adjetivos, complementos preposicionales, aposiciones, explicaciones, adverbios y proposiciones subordinadas inmediâtâmente antes o después de las palabras que modifican.
El pronombre relativo se colocará detrás de su antecedente.
Se utilizarán los signos de puntuación
rayas, paréntesis, dos puntos y punto y comâ- para -comas,
clarificar la relación de
las palabras dentro de la oración.
Utilización de las elipsis necesarias que hagan más ágil el texto
/
':
-
TExro
Preferencia de la voz activa y de la construcción pronominâl en
vez de la pasiva.
La posición de las construcciones de relativo será contig-ua a los
-
antecedentes.
Cambio de posición de complementos nominales pârâ evitâr que
se concentren en un solo punto de la secuencia (..En verano, los
habitantes de las ciudades de pobiaciones grandes, a lo largo
, . de julio y agosto, mâyoritariamente vân â la play>).
--- El atributo. debe ir detrás del verbo, salvo por razones enfáticas.
-- El adverbio se coloca al lado del verbo, al que suele modificar.
.- La acumulación de palabras con sonidos semejantes debe evitârse por razones de cacofonía, al igual que la repetición inneòesaria de palabras (..E1 resplandor domin¿dor del verdor es
-:
.-
desolador).
En enumeraciones de adverbios eî -mente, solo el último lo
lleva.
-
La intercalación continua y excesiva de explicaciones entorpece la lectura y dificulta la comprensión.
Por 1o demás, las oraciones no tienen límites determinados.
Podemos udlizar frases extensas, complejas o simples. EI predominio de oraciones amplias da lugar a períodos largos y a un estilo
4mplificado, mientras que el de frases breves y sencillas contribuye a la formación de períodos cortos y de un estilo conciso.
Se suele decir que los textos construidos con frases simples y
yuxtaposiciones resulta más ágil y se comprende con mayor facilidad; en cambio, los textos construidos con o¡aciones subordinadas
son rnás. diffciles de entender. Por esta razón, se recomienda con
frecuencia el uso de períodos cortos. Pero no siempre es âsí, puesto que un texto construido completamente en períodos cortos resulta pobre, entrecortado y falto de unidad, Lo más recomendable
es la combinación de peíodos largos y conos, según las exigencias
armónicas de los párrafos, para hacer más ágil, variada y comprensiva la lecrura de los textos.
El estilo ømpfficado vtene dzdo mediante las frases largas, las
períftasis, las comparaciones, las digresiones, las explicaciones,
las recurrencias y las enumeracione s. El estilo contiso, por el contrârio, es breve, lacónico y preciso en la forma de expresar los con-
..
S,{BER EscRIBIR
CoNSTRUCCTóN y REDÀCCIóN DEL
ESTILO AMPLIFICADO
7,1.3. La integrapión de oraciones en párrafos
Løs lønzas coloradøs
Sentía el encanto de'aquella ionversación, donde tana temura había. Nun_
ca había conocido persona semejante. Era dulce corno ninguno,
al mis-
¡
mo tiempo, rudo y fuerte como todos los otros; como todos los otros, hâblaba también de la guerra. Había hecho la guerra en Europa y contaba
histodas terribles, de moribundos que escribían con sangre iu ádiós a 1",
amadas, de regimientos fântasmas que venían a presentâr armâs a sus
coroneles, de soldados que habían escogido entre su madre y la patria. Como
los otros. Pero solo é1, solo él y nadie más sabía tanta cosa grata de oír.
Aquellos cuentos de los hombres que se suicidaban de amoi; de bando_
leros, de capitanes piratas que prescindían de la sociedad de los hombres;
aquellas descripciones de París, de las ciudades de España, de Italia, de
Londres, de las noches en el teat¡o de Drury Lane, de los trajes de Ma_
dame Recamier, de las chisteras deJorge Brummel; ninguno que como él
cantâse y recitase en inglés, traduciendo luego con tanta gracia:
un
-...
oio que, al contemplarlas, dora las cosas...-.
(A Uslar Pieri:
trøs lønzøs ækrød.øs,
TExro
Madrid,, Nianza, 1996).
ESTILO CONCISO
Cøstilla
En el jardín, lleno de silencio, se escucha el chiar de las rápidas golondrinâs. El âgua de la fuente cae déshilachada pbr el tazónìe mármol. Al
pie de los cipreses se abren las ¡osas fugaces, blancas, amarillas, bermejas.
U1 delso aropa
jazmines y magnolias embalsama el aire. Sobre las pa{e
redes de nítida cal resalta el verde la fronda; por encima del verde y del
blanco se extiende el añil del cielo. Alisa se halia en el jardín, sentada, con
un libro en la mano. Sus menudos pies asoman por debajo de la falda de
fino contray; están calzados con chapines de terciopelo negro, adornados
con rapacejos y clavetes de bruñida plata. Los oios de Alisa son verdes, co_
mo los de su madre; el rostro, más bien alargado que redondo.
¿euién podría contar la nitidez y sedosidad de sus manos? Þues de la duÌzura de su
habla, ¿cuántos loores no podríamos decir?
En el jardín todo es silencio y paz. En lo alto de la solana, recostado sobre la barandilla, Calixto contempla extático a zu hija. De pronto, un halcón aparece revolando úpida y violentamente por entre los árboles; Tras
é1, persiguiéndole, todo agitado y descompuesto, sìuge un mâncebo.
Al llegar frente a Alisa, se deciene absorto, sonríe y comiinza a hablarle.
Al igual que las palabras se combinân formando orâciones, estas se
unen entre sí consttnryendo párrafos, unidâdes que expresân pensâmientos completos dentro de un mârco lógico. Cuando se integran de modo coherente, dotan al texto de unidad de sentido y
coherencia signìfi cativa.
r El párrafo está conformado por ùn con¡mto de oraciones integradas y armónicamente felacionadâs en tomo a r:nâ idea centrâI. Es
también la unidad estrucrurâl que funcionâ jerárquicamenre dentro
de la secuencia del texto. En cada párrafo hay una ideâ que se ¡elâciona con las precedentes y las siguientes como pârtes v€rtebrâdotas
de la unidad temádca. Podemos decir que el párrafo esrá consrituido por una serie de oraciones unidas significativamente entre sí. El
párrafo se caracteriza principâlmente por ser una uniàad teruítica, pot
presentar cløridad. comprensiaa y pot tener cohermciø senuínticø.
. . Es preciso que la unidad de los párrafos se nos muestre claramente en la disposición y en la conexión entre las oraciones que
lo integran. Los párrafos no tienen dimensiones fijas. Se recomienda
componer párrafos de extensión variable, aunque no deben ser ni
muy extensos nì muy complejos. Lo importante es que reflejen con
claridad ias ideas y su relación con el tema mânteniendo el mismo
tono general y un estilo natural. Los párrafos en que dominan las
o¡aciones simples y )'uxtapuestâs âportan dinamismo y fluidez al
texto; en cambio, en los que dominan las constn-rcciones subordinadas, los textos son más lentos,
. Es aconsejable en la composición no utilizar más de tres o cuâtro vâriedãdes de párrafos en el mismo texto, poniendo su estructura en cor¡espondencia con la distribución de las ideas. Existen
diferentes tipos de párrafos, que elegiremos en frrnción del criterio
que adoptemos y la orientación que demos al escrito.
Observamos las diferencias de párrafos segtnla dþoición qte
tienen en el siguiente texto de Guillermo Cabrera Infante:
.
Introductores
[1] Una vez declaré que el idioma español era demasiado importante pa-
CoNSTRUCCIÓN Y REDÂCCIÓN DEL
SÀBER ESCRIBIR
sarta de insìrltos de los que opinan que no hay que dejar opinar a los demás. Lo que yo pretendía no era una ridícula propuesta de modificar la
ortografía española, cuando el español no tiene nada que copiar de las
otras ortografías occidenøles. Todo lo contrario.
Medulares
l2)La onogratía española es, en el sentido de conjugar la forma con el
fondo, una de las más lógicas, y tendría mucho que enseñar al francés y al
inglés, con sus ortografías endiabladas. (Tanto, que en inglés ese arte se
llama spellingy es rno de los vocablos rnás usados por esclarecedor).
[3] Podría lamenur que entre escatología, una de las formas de la meøfísica, y escatología, la expresión de lo asqueroso, no existe en español
ninguna distinción, arcadas ambas. Pero hay ciertas novedades que me resisto a compartir. Eztorno no quiere decir medio ambiente, sino que se dice cuando una puerta queda entreabierta. |lampoco quiere decir decøntar
por favorecer o decidirse es un barbarismo. Mitómøno (tna manía tân âbusada como carisma) no quiere decir amante de los mitos, sino dado a decir mentiras, Estas son unas pocas nociones del español usadas en España que nunca me leerán usando. Soy amigo del idioma, pero más amigo
de su uso.
:
I
Esenciales
uniuersal de lø infømiø (n título usado y
Dice
Borges,
en
st
Historiø
[4]
abusado): ..4 veces creo que los buenos lectores son cisnes aú¡ más tenebrosos y singulares que los buenos autoresn. Quiero confesar que
prefiero los buenos lectores a los mejores autores, Pero, añade Borges,
..leer es una actividad posterior a la de escribir". De decir: yo escribo, los
lectores leen. Sucede, sin embargo, que los lectores no saben o ignoran
que entre la escritura y la lectura median demasiados intermediarios: lectores profesionales, correctores, editores, correctores de estilo y ese oûcio del siglo >oc que antes ejercían las linotipias: los ordenadores de palabras, Este es un nuevo orden.
viehay entre la moral, ética, y la enfermedad, ético por tuberculoso' Pero
ne en mi auxilio esa autoridad, María Moliner, que en st Diccionørio de
aso
del español pone: ..Ético. Igual a héctico, tísico, tuberculoso'o Ah, de-
socupâd; Iec¿r, que no deias lugar al iuego, que crees que Paronomasia
es algrin lugar de Asia, que no me dejas ser ético sin p-adecer la å de tuberc,uloso, como en la canción que dice: '.Etico, esquelético y espeletâncridico>,. O aquel piropo soez a una belleza rauda: "No corras, nifia, que
te eticas. ¡Qué me eticas!>.
(G' Cabrera Infante: De nomhres y de erratøs)'
Veamos diferentes párrafos (a) segtnla fu ndón,que desempeñân
dentro del texto de Ahìdena Grandès tin:Iado ..Areas de influenøa>,y (b) segúnLa distribución de ideas principales y secundariâs en
el texto de Femando Savater ti¡¡lado El pesimismo optimirtø:
ExPlicativos
puertas Pdecen sugerirlo Como
[1] El mercado no termina allá donde sus
otros edificios grandes y singulares se alzan con el proagonismo en sus respectivos barrioi, él arnbién ha ido conûgurando poco a poco zu-paisaje más
inmediâto hastâ conyenir las calles que lo rodean en una peculiar znna de
influencia. Si las grandes estaciones ferroviarias hacen florecer hoteles y
pensiones, si el Museo del Prado siemb ta rfe¡das de souuenirs y Ia Puerta
àelSol despachos de loteía, mi mercado, aunque de horizontes mucho más
modestos, sale urnbién de sí mismo para eiercer ùna autoridad simbólica
sobre el comercio de los alrededores. El resulado haría las delicias de cualquier hipotético sociólogo empeñado en tipificar las necesidades y la5 aspiåciones del modelo de mujer consumidora de dase media, que puede abastecerse aquí de todo lo necesario parâ tdunfar en su doble y acrisolada
vertiente de ama de câsa eiemPlar y seductora congénita'
Finales
[5] Hace un tiempo traduje y publiqué en España un tomito de cuentos de
James Joyce q.iLe tit;lé Dublines¿s. En uno de los cuentos hay un juego
de palabras entre z eumático y reumótico. Un lector me achacó el crimen de
lesa literatura de haber destruido el juego joyceano. Pero no fui yo, por sunuesto. oue sé de oaronomasias. sino el linotipista, que crevó enmendar-
TExro
EiemPlificadores
las ferreterías coexis[2] Las droguerías, las merceías, las tintorerías y
lastiendas decospeluquerías,
las
con
i"n p""ifi""-y ptorrechosamente
las pequeñas ioyerías y bisuterías, los gimnasios y
o mohasta un flamante local de bronceado por rayos IJVA
-éti"ot y pé.fu*"s,
CoNSTRUCCIóN y REDACCIóN DEL
SABER EscRIBIR
ra por ìrn pequeño y hermético seø-såop que âcapâra para sí mismo todos
los grados de la rareza.
Comparativos
[3] En este contexto, tân representâtivo de lo típicamente femenino _por
eso el sociólogo al que he aludido antes es solo hipotético, porque, des,_
conøndo los rayos UVA, y los bombos y los platillos que han celeb¡ado el
comienzo del milenio de las mujeres, yo me temo que, por desgracia, no hay
antas cosâs nuevas que tipiûcar-, subsisten alguaos viejos negocios que no
necesitan consenan la fachada nì el mobiliario original para hablar dá otras
TExro
ùn concepto que aquí, más que identificarse, llega a coùfrrndirse con el de
'consumo. Nada ha cambiado, pero todo ha carnbiado, porque ha cambiado el valor de las cosas. Amas de câsâ eiemplâres y seductoras congénitas, las parietarias del nuevo milenio at¡¿viesan con toda clase de objetos
dè mala calidad y precio û.io, que no llegâ ni siquiera â un euro. Y todavía
se creen que están haciendo un buen negocio,
..'í
(Almudena Grandes: <Areas de influencia").
:
épocas, otros modos de vida. Son reliquias de un tiempo ya remoto en el
que
cada cosa tenía su valor; y este bastaba par" que merÈciåra la penâ repírar_
las cuando se estropeabal. El taller de ¡eparación de calzado ,igrr"
oi"rrdo
exactamente igual que en mi infancia, y perÂma
ÞerÂìmâ Ia acera
âcera con el a¡oma
,".,-, de_
,1._
"l
lìcioso y tóxico de pegamento especial de color de carâiirelo. Cerca
sþe
ha_
biendo un cerrajero, y un local pequeñìto donde se enfilan collares]y otro
que ofiece cremalleras de todas las variedades imaginables, y urr,
-Ldiro
que welve abrigos, arregla solapas y ensancha y estrecha las costu-ms
de cual_
quier prenda.
:
Causativo-consecutivos
.,
Inductivos
[1] Estoy acostumbrado a soportar que, después de escuchar una de mis
charlas o leer algrín libro mío, haya alguien que se acerque y me digâ,
cori leve reproche: <<Me parece que es r¡sted demasiado optimistÞ>. Como
y'o me tengo por un auténtico integrista del pesimismo, a veces me siento
uri poco dolido. Hasta que recuerdo que es una cuestión de perspectiva,
como cuando alguien que está frente a nosoüos dice <<â lâ izqrderdÞ y una
reprocesa inmediatamente lâ indicâción con <.o sea, a mi derecha".
.
[4] Todos ellos parecen agìrantar el tirón, porque conservan, como rníni_
mo, una clientela de la misma edad que sus propietarios,
sin embargo,
zu futuro, más que dudoso, es improbable. Cuando paso por delante de su
puerta, recuerdo aquellos cilindros de metâl que vibraban mientras una
especie de aguja manejada por dedos expertos trazaba diminutos círculos sobre una superficie de nailon transparente, y me pregunto si algrín
niño de los de ahora sería capaz de enconffar la soluciån ãe ese acertijo,
cuando ni siquiera yo me acuerdo de en qué momento empecé a tirar las
medias con carreras a la basura.
¡
Analógicos y contrastivos
[5] La memoria de lâ máquina desapa¡ecida me produce una extrâia sensación de su_perviviente de un planeta extraño, e imprime un inquietante
to_
no sepia a las fachadas de esos mue¡tos en yida, las pequeñas tiendas y
talleres condenados a subsistir apenas futuros catálogo;de exposiciones.
Sinteti zadores
[6] En resurnen, un paseo por los alrededores del mercado ømbién sirve
.
Deductivos
[2] Para mí, el pesimismo y el optimismo son actitudes teóricas ante el
universo, mientras que para la mayoría de la gente son disposiciones práctiias o solo reconocibles por sus efectos prácticos (que por otra pâfte suelen interpretar ømbién al revés).
.:,.1
Generalizadores
[3] La mayoía de la gente ---¿unque no usted, querido lector, cuya inteIiiencia natural le hace coincidir con mi punto de r'istâ- cree qùe espcsinzistø q,tien ntnca mueve un dedo para modificar el orden del mundo
porque no vale la pena ni intentarlo, ya que es imposible. Usted y yo sa:
hemos qltre perezay pesimi.smo no sonlo mismo (al contrario, la pereza suelê ser muy optimista): por tanto, como buenos pesimistas, luchamos sin
cesar contra lo que rios parece malo porque estamos convencidos de que
nos va la vida en ello.
' ., ..
[4]'Sesún vo entiendo
Paralelos-contr¿stivos
decir. usted v vo lo entendemos-
Ðesimistø es
CoNsrRuccróN y REDÀccróN DEL TEXTo
SABER EscRIBTR
.
ø) de la presencia poderosa y real de lo malo de este mundo;
Ð de que lo malo nunca es solo malo para oftos, sino que siempre descubri¡á nuestro escondrijo e irá ømbién a por nosotros. Lo"go ,r,r"rtro pesimismo es necesariamente activo y defensivo, nunca inmovi_
Iista. Supongamos que alguien descubre que en su casa (o en casa del
vecino) hay fuego. Si es un verdadero optimista se sentará a ver la televisión, convencido de que en pocos rninutos llegarán los bomberos
a apagar el incendio (o de que el fuego no se extenderá desde la casa
del vecino hasta la propia.
[5] En cambio, el pesimista, convencido de que los bomberos siempre
llegan demasiado tarde y de que todos los fuegos se propagan velozmente, se pondrá de inmediato a intentar sofocar las llamas propias o ajenas.
Circulares o concéntricos
[6] Esta diferencia de perspectiva es mi única discrepancia con un libro
que por otrâ parte me resulta positivamente simpáti cot Optimis.mo inteli_
gente, de MaríaDolores Avia y Carmelo Vázquez (Editorial Aust¡al). Se
trata de un razonable estudio que ofrece argumentos de peso conta la perczay la apatiavrtd,, que ellos considera:r señales de pesimismo. Si su obra
se hubiera
titulado Puimirmo inteligenre me hubiera parecido perfecta...
Pero no nos enredemos en disputas de palabras,
Encuadrados
[7] Pero no nos enredemos en disputas de palabras. Admitamos que existe un <<pesimismo optimist>, que no buscâ coartâdas pârâ arrojar la toalla ante lo ineviable, sino que lo ve como un estímulo para poner mânos
a la obra e intentar salvar lo que pueda salvarse...
¡o por lo menos no perecer sin lucharl
[8] Si de lo que se trâtâ es de amar lâ vida, seguro que la quie¡e más
el que la ve en peligro e .intenta rescâtarla que quien la considera ya salvada por la benevolencia del desri¡ro o de los dioses.
Sintetizador-deductivo
[9] Puede que tâmbién haya un pesimismo inmovilista, cuyos creyentes
decidan que no merece la pena tomarse molestias, Seguro que comparten
un criterio de Leibniz que pasa por el colmo del optimismo y segrin el
cual, ¡imagínense!, el nuestro es <.el mejor de los mundos posiLlerl.,r.
(l . Savater: El peirnisno optimisø) .
Veamos los tipos de párrafos de acuerdo con el desarrollo
dê las ideas en dos textos extrâídos, uno de Juân R:J'fo, de Ped,ro
Párørin,,i oto ðe Lø selaø d,el lenguaje, deJosé Antonio Marina:
TExTo I
'ìr':.
Narr¿tivo-cronológico
[1] Por el techo abierto al cielo vi pasâr parvadas de tordos,
esos pája-
ros que vuelan al atardecer antes que la oscuridad les cierre los câminos. Luego, unas cuantas nubes ya desmenuzadas por el viento que viene a lleva¡se el día. Después salió la estrella de la tarde, y más tarde la
Iuna.
'.,: [2] El hombre y la mujer no estaban conmigo. Salieron por la puerta
que daba al pâtio y cuando regresaron ya era de noche. Así que ellos no
sìrpieron lo que había sucedido mientrâs andaban afuera.
[3] Y esto fue lo que sucedió:
Viniendo de la calle, entró una mujer en el cuarto. Era vieja de muéhos años, y flaca como si le hubieran estirado el cuero. Entró y paseó sus
ojos redondos por el cuarto. Se frre derecho a donde estaba lâ câmâ y sâcó de ella una petaca. La esculcó (exploró). Puso unas sábanas debajo de
su brazo y se fue andando de puntita como pâra no despertârme.
[4] Yo me quedé tieso, âguântâ¡do la respiración, buscando mirar hacia otra parte. Hasta que al fin logré torcer la cabeza y ver hacia allá, donde la estrella de la tarde se había juntado con la luna.
.r
'
.
Descriptivo
[5] El calor me hizo despertar al filo de la medianoche. Y el sudor. El
cuerpo de aquella mujer hecho de tierra, en'uelto en costras de tierra,
se desbarataba como si estuviera derritiéndose en un charco de lodo.
Yo:me sentía nadar entre el sudor que chorreaba de ella y me faltó el
aire, que se necesita para respirar. Entonces me levanté. La mujer dormía. De su boca borbotaba un ruido de burbujas muy parecido al del
estertor.
.
t'
[6] Salí a la calle para buscar el aire; pero el calor que me perseguía no
se despegaba de
rr 'Y
mí.
es que no había aire; solo la noche entorpecida y quieta, acalorada
SABER EScRTBIR
CoNsrRUccróN
No había aire. Tuve que sorber el mismo aire que salía de mi boca, deteniéndolo con las manos antes de que se fuera, Lo senda ir y venir, cada
vez menos; hasta que se hizo tan delgado que se ûltró ence mis dedos pa-
'i,
.
ra siempre.
íi
!'i
{:uan Piulfot
Ped.ro
Párømo, Barcelona, Anagrama, 1993).
Y REDAccIÓN DEL
TExro
es la incapacidad emocional' El sujeto que enademás,
tiene que percibir la incongmencia
chiste
cuentra divertido un
juego'
nos
instruyen
Los
niños
que
en
el
entrar
adherirse a ella. Tiene
adecu"damente sobre eso. La sorpresa solo les resulta graciosa si la expe,i-"rr,"n on contexto âfectiv; de seguridad y juego' De lo contrario,
in albis. Más interesante
¡
"r,
puede resultarles turbadora.
(osé Antonio Marina: Lø
TE)cro 2
seløø del lenguaje,
Barcelona, Anagrama, 1999)'
Introductor-expositivo
[1] Me interesa mucho averiguar cómo comprendernos un chiste, porque
me parece tarea de extremâda dificultad. Decimos que hay personas sin
sentido del humor, que no captan el significado de las ingeniosidades.
idea esenIJn texto se conformâ, generâlmente' mediante unâ ideâ
cial, que constituye el núcËo temático, âl que se van añadiendo
âportaciones y que
otrâs ldeâs
ideas sucesivas que responden â nuevâs âportaciones.y-que
(ei
Í^ro añadida)'
anaotoa) ' Parnueva
¡r'r"n el
,oroa
(es decir.
la i¡formación
tntormâdon
información
decir,
decir,ia
elrena
rema \ei
cotrstitùyer,
"l
pâesquemâ
o
de
un
timos,
ímos, pârâ
Þara ello, de la elaboración de un plan
la
configurara cois'truir la unidad semántica del texto mediante
ción y articulación de párrafos, delimitados Pol medio de marcas
Pâra lâ ordenación de la
SáfiÉas: el sangrado yìl punto y aparte.
a modo de sintepárøfos
introductorios,
información, utilizarcmos
de una afiranécdotâ,
sis.anticipadora, de presentación de algrna
comparâde
una
mación seneral, de una cita, de una pregunta o
ción, ptíí'rafos medulares, donde se explicân y des-arrollan las ideas
oue constituven el cuerpo del texto; y |os párraJos conctustuos' qlJe
las ideas èsenciales presentadas o de-n.tit.rrr"r, Ll t"ru-"i d"
ducidas. ! â su vez, pârâ el logro de la integración y de la unidad
de sentido del texto'-debemo;recurrir a los párr alos de enurnera-
¿Qué les pasa?
[2] Intenaré seguir el proceso del humor estudiándolo en los niños pequeños. El chiste zupone una violación de las expecøtivas, una i¡remediable
sorpresa. El discurso no sigue la vía prwista, descarrila, organiza estropicios
sin cuento. La secuencia previsible se rompe, como en el câso siguiente,
Dialógico
[3] Una niña dice:
-Ma:ná,
¿cuando sea mayor me casaré y tendré un marido como papá?
La mamá, sonriendo:
que sí, mi amor.
-Claro
si no rne caso, seré una solterona como la tía Emestinal
-¿Y querida.
-Sí, qué dura es la vida de las mujeres, mamál
-¡Ay,
ìión, de sentencia, de compøraci,ín-conlraste' ðe desørrollo de conceptos,
de
ðe pløntramierti-solaciûn de problenzas, de rehción cøusø-efecto y
Expositivo-argumentativo
[4] Este suceso puede comprenderse de mane¡a realista, y entonces resulta trágico, no cómico. Es verdad que en la vida real puede darse la
tágica alternativa entre la aspereza y la soledad. Por eso, para interpretar la afirmación de la niña como un suceso cómico hay que instalarse
en la irrealidad, hay que sintonizar afectivamente con é1. Françoise Bariaud, autora del mejor estudio que conozco sobre la génesis del humo¡
en el niño, explica que la comprensión del chiste tiene dos etapas: la percepción de lo inesperado y su evaluación. Hace después ula finta interesante y lista. Antes de hablar de la comprensión habla de la incomprensión. ¿Por qué una persona no entiende r:n chiste? Hay una incomprensión
de origen cognitivo que es fácil de explicar. El oyente no dispone de los
tj m p lif ruc i ón explicativa.
72.
Er-
TErro:
UNTDAD TEMÁTrca E INTEGRADoRA
DE PI{-RRAFOS
,
I
:.
i
Là consmrcción de oraciones y la distribución de. párrafos han de
¿star al servicio de la significación global y de Ia coherencja del texto. Los oárrafos forma-n parte de ia organización textual al incorporar id'eas, informacionËs, datos, detalles o anécdotas' A-través de
ejemplifican, comparân' contrâstân, refuerzan o
è[or r"
SABER EScRTBIR
CoNsrRUccIóN y REDAcctóN DEL TExro
PÁm¡ros cpNtn¡r,Bs
Explicativos
Oraciones/Verbos
-.l&¡ú¡nécdict€ú
pos se lavan en casa.
que los tra-
liwen para aclarar ideas
Te recuerdo que los trapos se
-lavan
en casa.
"Pseoec€tr-dsposroaldc4re.
-sgûax
todo lo dicho.
Presentamos todo lo dicho.
Asi
en otrøs pøløbras
Aditivos
tl;
(ñirden elementos al tema
Ademós, incluso, y, øsimbno
Eiemplificadores
1...
Muchos de los; nexos texfirâles coinciden formalmente con los
oracionales. No obstante,
stante, suelen realizar una frrnción distinta que
afecta al plan general
ral y organizativo
or
del texto, tal como podemos
comprobar en el siguiente
guiente esquema:
es d.ecir,
)lmuestran y clarifican
ideas
Por ejeruplo, aéase, obséruese
Adversativos
1:
troducen opostcrones
No obstønte, ahora bien, pero
Concesivos
ièSenan dificultades
Aanque, a no ser que, por más
Comparativos
P/iRÌA¡os n\rIcIALEs
Iniciadores
i.þparan diferencias-semejanzas Como, de modo similør, igual
Sirven como punto de partida
Antes de nøda, pøra iniciør
Causativos
t.:.".
toen razones y mot¡vos
Ayudan a identiûcar el tema
Me interæø dejør cløro
Pues, porque, puesto qae
Consecutivos
rrporan consecuencias-efectos Por lo tunlo,I)or
Plantean la idea esencial
Es en cin lm ent e, b ós i cøm
mt e
eso,
luego
Distributivos
[én dos componentes
alternos
Yø,
yø; bien, bien; orø, ora
SÀBER EscRIBTR
Establecen correspondencias
CoNsrRUccIóN y REDAccróN DEL TExro
Relacionan dos partes en donde la que
se repite acnía como
reformulación de la
No sok, sino; por un lado, por otro
anterior
P¡Í¡n¡¡os ¡nv¡r.ts
Conclusivos
Condicionan las po-
mentativas
de
¡arla con la anterior
l]nen
Estos elementos de ¡elación funcionan como señales
explíci_
tas parâ proporcronarr sentido lógico-semántico
ras
lógico_semántico al conjunio
coniunio de
párrafos
integradores uçr
del texto.
Lcxfo,.¿rlas
Hqrraavr !4eËr¿urlrss
A las
lãs ¡alabrâs
palabras grâmaucales
palâDras
gramati.rl"l
or¡mqri"ol". .',"
que
oo" âc_
"^nian dentro del texto,
"._
texto. los invesriø¡.1.,.."
investigadóres en piagmática lrr'Jãrro_
""
minãrr
minan ntnrcødzres,
mnrcødores disrursiztos,
d.isrursiztos, en cuânto à que, aãemás
¿ãemás de unir
uni. las
las.
ideas, orientan al lector sobre la estrucmia
pretativa del texto.
pi"*;;^.
':.';:-^
¡"f"r-"iià J
mación
Conecto¡es
organización informativa
Ijnen
semántica-
mente dos o¡aciones
o dos párrafos como
-
Dista¡ciadores
-
Reforzadores ar-
-
Ejernplificadores
-
Formula do¡es
-
Comentado¡es
Pueq paes bien, d.i-
-
Digresores
Pø'cie,fo,
a
O¡denado¡es
Primero,
úbirno
en
-
Aditivos
Además, tømbién,
cho et'to
aún
Deductivos-con-
o seø,
Mejor
d.icho, øún
a søber
En caølqaier
cøso
Recapitulativos Ensmø,enøndwirin
realidad, d.e
-En
hecho, en øeuiø,fiindamentalrnmte
-Por
jarylo,
en
øn-
cretø
-Bumo,
centr/tmds
øønøt
ø
eft
ciones de los ha- -témica
las interven-
Modalidad epis-
Por npuesto, por lo
aisn, en efexo, de z
blantesyaJudanala
inte¡acción comuni-
laego
Modalidad deón-
c¿tiya
-tica
Bueno, claro, bien,
vengø
Indicadores de Hwttbre, mirø,
-alteridad
oigø,
escucha, ¿no? , ¿øer-
dtdl
-Estructu¡ado¡es
de la conversación
Yø, sí, bueno, aale,
hìm, esto
,ìCqândo queremos cârâcterizâr los râsgos y las cualidades del
to 9 de la idea que pretendemos definir, recurrim os L ejentplii.ones, anakgíøs y explicøciones.Yeâtnoslo leyendo un fragmento
y Gasset:
pqóito
fn, par
nó¡
parte de la unidad -secutivos
Por tøntø, por ello,
de øhí
semántic¿
En
Concaargumen-tâtivos
de concoirtacm
Er dzcir,
m4ùr
la
oración en que apa-
recen sin ¡elacio-
Señalan al lector la
Explicativos
Rectiûcativos
sibilidades argu- gumentativos
Sintetizan o ¡esumen lo tratâdo
siguiendo un proceso lógico
Estucn¡¡ado¡es de infor-
-
cornbio, por eI
La Flistoria. cuando es lo oue debe ser. es una elaboración de ûlms. No se contenta con instâlârse en
cada fecha y ver el paisaje moral que desde ella se
divisa, sino que a esa serie de imágenes esráticâs,
CoNsrRUccróN y REDACCIóN DEL TExro
SABER EScRIBIR
tinuas aparecen ahora emergiendo unas ile otras,
continuándose sin intermisión unas en otrâs. La
realidad, que un mornento pareció consistir en una
infinidad de hechos cristalizados. quietos en su con_
gelación, se liquida, mâna y toma un andar fluvial.
La ve¡dadera realidad histó¡ica no es el dato. el hecho. la cosa. si¡o la evolución que con esos materiales fundidos, fluidiûcados, se construye. La His-
toria movilize
Analogías
En el museo
w de
A veces nos servimos del recurso d ela øfinnøci1n, lø negnciín 1
mediânte la utilización de expresiones que repreideas objetivas o manifiestan opiniones y pensâmienros contes y
fiffnes.
l^ .";^r^ -"-- l^ -^',,;^-
se conserva a fuerza de barniz el ca-
dáver de una evolución. Allí está el flujo del afán
pictórico que siglo tras siglo ha brotado del hom_
bre. Para conserva¡ esta evolución ha habido que
deshacerla, triturarla, convertirla de nuevo en fragmentos y congelarla como en un frigoríâco.
eaila
c.uadro es un cristal de aristas jnequívocas ríÉ¡iJ¡
das separado de los demás. isla heimérjca.
como muv claro lo oue dila¡to como que el sol alumbra
iYo sí lo he estado viéndolo
el libro que
Y. sin embargo. no sería diffcil resucitar el cadáver. Bastaría con colocar los cuadros en un cier_
to orden y resbalar la mi¡ada velozmente sobre
ellos
-y
si
Es tan cierto como la luz del sol.
-
Lo he visto con todo detalle.
Negación: p¿rtículas o prefiios negativos
po¡ lo que ha dicho.
Explicaciones
-
por lnnecesaflo.
-
No me interesa lo que ha dicho.
el libro que com-próHaporcambiado
no ser útil.
no la mirada, la meditación-. Entonces
movimiento de la pin -
se haría o¿le!]!€-quqql
ra..desde Giotto hasta nuestros días. es un gesto
único ]¡ sencillo. con su comienzo y¡ufin, So¡_
prende que una ley tan simple haya dìrigido las'
variaciones del arre pictórico en nuestro mundo
occidental. Y lo más curioso. lo más inquiet¿nte
es la analogía de esta le]' con la que ha regido los,
destinos de la filosofía eu¡opea. Este paraleüsmo
entre las dos labores de cultura más distantes pg!:
mite sospechar la existencia de un principio ge¡ç¡¿[aún más amplio que ha acruado en l" euolución entera del espíritu europeo.
(. Ortega y Gasset: La deshumønizaci,ón det ane,l
Madrid Aliqn,' 7ônaì I
I
Probablemente duda de lo que
-ha hablado.
en esto que digo.
Seglro que estás de acuerdo en
-lo que
digo.
FÔRMA Y ESTILo DE LA. ESCRITURA
SÀBER EsCRIBIR
bre que había encontrado en varias oportunidades, el de cabeza casi rapada, parecido âl seüetario yitalicio del club de tenis. <.Un tu-
rista corno yo, seguramente y, si vive en el hotel, como.todo lo
indica, pronto empezaremos a saludarnos y seremos amigos>>.
(4. Bioy Casares: Unø møgiø
modestø).
8.2. RBo¡,ccróN y Esrrlo DE uN TExro NoRlvrALtzADo
i
.,,1''
I
ìtlì
Los textos son formas de producción de la comunicación escrita.
Aunque no hay esquemas preconcebidos y lâs variantes que pueden presentar son ilimitadas, partimos de modelos reconocidoi pot
el valor literario, por exigencia institucional (académico, administrativo, jurídico, etc.), por el sentido práctico o por el carácter
instructivo. A la identificación contribuyen también el grado de formalización, las modalidades utilizadas, el género, la intención
comunicativa y el estilo.
El modelo normalizado
normalir
es un tipo de texto utilizado habitualmente por pârte de los hablantes. A trâvés de estos textos contâmos
hechos, describimos la realidad, opinamos, râzonamos, ¡eflexionamos y sacamos conclusiones. Sueien presentar una disposición sêi
cuencial donde se combinan de forma variada lo concreto con lo
abstracto y el hecho con la idea.
La lorma de relacionar l¿s ideas, los datos o los hechos puede partir de lo abstracto para llegar a lo concreto, de lo general a
lo particular, y al contrario. Esto nos permite hablar, al menos, de
dos tipos de disposición texrual: una deductiva, que vâ de 10 gene.
ral a lo particula¡ y otra inductiva, de lo particular a 1o generãI. En
ocasiones, se iirtroducen ejemplificaciones o abst¡acciones intermedias. Es, â su vez, frecuente en estos textos la combinación
enunciados ârgumentativos con elementos narrativos y otrâs in-.
formaciones con distinto nivel de concreción v abstracción.
IIn texto normalizado presenta un desariollo ordenado don.r
de la información se distribuye en la estructura que presentan lós
párrafos que lo integran. Según esto, el texto presentaría unâ organización semejante al modelo expositivo-argumentâtivo en que
âpârecen tres partes bien diferenciadas:
1) Presentación o parte introductoria, cuya firnción es presentaf la
idea básica del tema, señalar los anrecedentes y dirigirse al des.
o pâfte centrâl, donde se explicâ y se jusdfica el contey la información conocidâ y desconocida por medio de aro mediante
's, ejemplos, opiniones, citas, testimonios
dialécticos.
iônclusión o pârte finâl, donde se resume lo tratado o se deoce lâ tesis de lâ explic¿ición informativa. AI final, pueden añairse otras informaciones complementarias donde se planteen
supuestos que dejen abierto el tema a nuevas expectatívas,
Veamos cómo se nos muestra la organización en el sigu.iente
F. Ayala.
ôy a referirme al escritor literario, al autor de
poéticas, cuya orientación es, sobre todo,
el vâlor estético.
'Habrá quienes supongân que, pâra esta clase
cuya obra libérrima depende tan solo
virtud creadora, es menor o nulo el proplanteado por la expatriación, ya que, de una
esu le propone experiencias que, en principio,
t sèrvirle de estímulo tânto como de rémorâ,
¡(jþa parte, tiene la forruna de esc¡ibir en un
òe extiende por el mundo mucho más allá
Ltèras políticas del Esado Español. El heque sir mensaje se dirija, como se dirige, a
íntimas del senti¡niento, a la imaginación
teras, y eso mediante los recursos del lenguaie
de que se hable a ti, directamente, con las patiidós, parece apoyar esa opinión: el salto
hasta lo universal está exento ahí de la
e a instancias intermedias.
la cuestión no resulta øn simple. Si el esèomo ensayista, como crítico de costumperiodista, maneja discursivamente los
oùe encuentra dados en la realidad histó-
PRESENTACION
1."
IDEA
I
V
DESARROLLO
I
Y
lþ
}."
IDEA
I
J
SaBER EscruBIR
FoRMA Y
EsrILo DE LA ESCRITUM
E)cLIcActoNBs sucEsrvAs
dición (unión, agregación de ideas o progresión d,eltexto: y más
incluso, øsirnismo, ød.emás, tarnbim, cøbe øñad.ir, d.eEués de, por otrø
rica presente, se ve trabado por las brutales alter_
nativas en que esa realidad se descoyunta y, en pa¡_
ticular, por el hecho de haber sido dãsconectadá del
pleno (tejido) social originario, también, aunque su_
til, la-invención literaria se cumple y ha de cumplir_
se baio el supuesto de un cierto ambiente, y someti_
da a las condiciones que éste le impone.
[4] El literato, el poetâ, produce, es cierto, a
partir de su personal genio; pero este impulso pro_
pio requiere ser realizado sob¡e la base de unosta_
ørín más, todaaíø más, inchso..
nzirø, fljøte, obseruø, cuidødo con, te pongo m anteløción,
det enid.a.ment e, øh -..
z\náfora (o repetición): Sabíø qae..., también søbíø qae...;øaeces
y høblø in parar...
ióbación (afirmación): Sí, cløro, bien, øsí es, por sapuesto, en efecd.escontada, d.æde lue g0...
m cierto modo, høsta
teriales de experiencia con los que se relacionará, no
solo el contenido concreto de la obra, y no solo el
g-rado de su logro estético, sino incluso la posibili_
dad misma
.
.;ll,
terial- de -posibilidad
ejecutarla.
t mQor dicbo, dicho
decir, esto es..
d.eseo
d.e
puntl,
otro
si ltctso,
rn todo caso, si-
m.oda, qaiero decir, o sea
drí 4ue, øsí puæ, putsto que, pues, pùrque, l.ø rø.4ón del hecbo, esø
'èxplicøción...
:
espiritual, tanro como ma_
@. Ayala: <Para quién escribimos
]itiirriili
cie?to
(o semejanza):
nosotroo).
de igaøl modo, como, de modo semejan-
øsimismo, parecida ø...
..cesióni
tl
:i
ll
bien,
ø
pesar de todo, con todo (y con eso), aunque, pormucho que,
por otro lød0...
en todo caso, si faerø posible, aistos los hechos, d,e høberlo
,i
iiiiill i,
recci6n: mejor d.icho, quiero decir, más bien digo, en
'þøløbras,
otlt
tér.minos
dc otro rnoda.-.
crelaitín: øhorø-luego,
no solo sino tømbién, øquí-àtlí, cercøJejos,
lødo-por otro, øntes- después...
'
por tønto, por coniguiente, por
eso,
por
k
caøL, d.e
ahí, dc
quel conqae, total que...
Esqucma en el que presentamos los elementos de cohesión
más frecuentes que contribuyen a la organización in¿Ér"J;;
de las ideas en función del tipo de texio de que se ._.-:te
Iwtno¡uccróN oe rt¡.r¡s
ia
continuøciín, posterionnente,
d.espaés,
øhorø bien, en-
anterì0r...
frasÌet øl c\ntrario, pero, m cømbio, no obstønte, sin embørgo, por
ztolaiendo ø lo
rio,
øntes bien,,.
(o referencia deíctica o seialadon): dùho esm, de øbí que, a
hablø mucbo, søbemos ya...
Presentación: øzte toda, en primer t&Tnino, k primero qae,
el objeto d,e,.
con relaciín a, øntes de nødt,,.
Apoyos de inicio de texto o d.iscu¡ so: bueno, bi*, aøyo
-
Oo, d.ela.uti,_.,
ø
þropósitl de lo dicho, øl respecto, tsí tømbìén, øanque no
cumtq me aiene ø lø mente.,.
: øcøso,
quizá@ , tøl aez, yø aeremos, no tengl cløro, sería caestión
FoRMA Y Dsrtl,o DE LÄ ESCRITUR¡.
SABER ESCRIBIR
por
Ejemplificación
Semplo,
-gømos
por ejeru.plo, como...
-d
Enumeración:
e sp u
és, a nte
r
ah
en
pongo por cøso, øsí naede en,
es
decir, pon-
Printer lugør, en seganda, primero, segundo, laego,
ora -d espu és...
cla.ro, es eaidcnte, ciel'tantente, estli claro que, por saPuettl;
-Eviðencia
dade luego, no ha1 duda, in
duda...
Excepción (o restricciín)t si
acøso, salø0, excepto,
-etccepciona.l, caso a.palfe, al rnørgen,,,
øntes bien, øl contrørio, por el
-Exclusiôll
Explicación:
es d.ecir,
øl ntenos, un
cøso.
contrãri!..,
en otrot términos, ø søber,
-to es, o lo que es igual, rn Íodo cøs0...
rnfor
dicho, o seø,
u-
Expresión negativa: ni m.ucho mmos, ni øun øsí, en absoluto, no, tømni hablar, nunta, jamís...
Generalización: de cualguier modo, generalmente, en sentidn ømplit,
-
poco,
-en líneøs generules. de todos modos,..
encinn,l tømbién,
Intensificación: mrh, øtin
1'
- Matización
intensiñcadora; sobre tod.o, principalmente, más øún,
-mds, arín mrß, de mmo interés...
más, inchao,
en rigor, nuís exactøruente,
-d d,Precisión:
rø m
e...
ractam enfe,
ß
e
cla
es
øsí así..,
es
más, esencialmente, en reøli-
en I
estrictømente, øhorø, øquí, ut eae innøøe o lugør, preT
-Pun¡j¿ltzact'n:
øhora, ahoro
citsmenÍe
Pues...
.._ Relación espacial: øqui øllí, øbøjo, øl ladn, encimø, øribø, en medio,
a la derecha, al fondo, a la izquierda...
Relación temporal: øhorø, øntes, laego, nuß tørde, fnølrnønte, en cunn-
-to, despaés, a continuación, Iaego...
Reiación temád ,^, * *oito o, ,0, ,upecto a, con reløción a, por Io que
-se refere a, a propósito de...
Relación ãe tran síción: por oto lado, en otro orden de cosøs,
-a otro
øwnto, ademds, siguiendo,..
Restricciónt øl menos, en toda cøso, ei cietto nndn, rnás bien,,. t ,
- Transición:
pøttntos ø otrl tema, en otro ordm d.e còsøs, þoì otro là,:
-do, pasemos por alto.
pøwndo
,La redacción ha de estar presidida por el orden, la claridad y
¡edad y, al mismo tiempo, guiada por la intención comunidel redactor. Pero, al escribiq hemos de pensar en el inteenìla reacción del lector. Por ello, debemos recurrir a estraque no solo câpten y aaaigan el ánimo del lecto¡ sino que le
en los iuicios, vâloraciones y apreciâciones. Entre estas
ß, podemos apuntar lâs siguientes:
tación de las ideas desarrolladas y la elección de palabras
hacia el lector por medio del recurso de la 3.'persona
., la 1." de plural asociativa, la 2.'persona (tu, vosotros/as)
,lár3:' de tratamiento (usted/es).
ión de informaciones contrastadas mediante referencias,
testimonios, citâs, argumentos de autoridad, estudios y
.ciones que den credibilidad.
datos se suelen presentar en ciÊâs concretas, en porcentaies
o aproximâdos (.ha subido el pân en torno â un 3 por
toÐ. Lâs cifras deben escribirse con letrâ hâsta el número
con letrâ o número hasta el 20 y con número desde el 20, exla edad. Los números de más de tres cifras (millares, mietc.) se separan con punto; sin embargo, los números dese separan con un coma en la parte inferior.
referencias han de estar claramente de6nidas. Por ello, han
evitarse las informaciones subliminales o subyacentes y las
informativas no explícitas en la literalidad de las pade las ideas orientadas a ¡esalar las informaciones
De esa manera, se coniugârán las funciones de pro:ôi6n discursiva
y rema- mediante:
'La anteposición-tema
de palabras esenciales en oraciones que inician o cierran párrafos.
:I¿a.u¡ilización de frases breves recapitulatorias.
'La'segregación de expresiones o palabras esenciales.
1f:a.repetición de palabras clave.
empleo de la recurrencia como elemento estabilizador del
CoNcLUsroñES
Formas de concfusión en corceruencia,
-tan cia, en consecuencia, remm iendo -..
Cierre de discurso o texto:
a
fin
de mentøs, en úbimø ins-.
en d.ertniüvø, þor
rtn, m suma,
en
fin,
eä
uso de marcas tipográficas complementariâs: negritâ, curo subravado.
bién se puede recuffir â âcotâciones, paréntesis y explillamativas por razones eruditas, científicas, litera-
ft
il
'
SÀBER EscRtBrR
LÀ CULTURA y sus
å
luma, técnica común púa la lecturø y la estifitrø' lJos
de comprensión lectorâ âi expresar de manera
como
técnica
sirve
abreviada el contenido de un texto amplio y como técnica de escritura al anticipar en pocas f¡âses el t€ma que vâmos a desarrollar.
Resumen: es
civilización se reûere más a la esfera del trabajo, a la cara material
de la cultura, a lo técnico y práctico, al ámbito de lâs necesidâdes
inferiores y su satisfacción refinada, mientras la cultura apunta rnás
al reino de las artes, las ideas, los valores científicos, morales y religiosos, esto es, âl riundo de la libertad y del espíritu. El desarrollo
industrial ha impulsâdo inmensamente el progreso de la civilización
y difrmdido los niveles elementales de la culrura; ciertos aspectos superiores de esta se han visto, en cambio, frenados o negátivamente
afectados por el desarrollo de la civilización industrial.
Hay varias clases de cultura: unâ, la culturâ mânifiesta, que
incluyer la material (civilización) centrada en la técnica y en los
productos industriales; la espiritual (kultur) que marca el espíritu
objetivo: ciencia, arte, literatura, derecho, etc.; y la comportâ:mental, que se percibe en usos y pâutâs externas de cornportamiento,
ñodas, etc. Otra, la cultura interior, que representâ valores sub.jetivamente éstimados, vivencias habituales, encubiertas, creenciâs
íntimas y pautas interiorizadas.
La cultura es el modo de vivir que el hombre adquiere y transmite en el transcurso de la historia, al comportârse como un ser
social dotado de razón. La culrura es, por trnto, lo qo" rros sepârâ
de todas las demás especies y nos unifica como hombres; pero a la
vez es también lo que separa y enfrena a unos gn:pos humanos con
otros. Las diferencias culturales enriquecen el patrimonio espiritual
y material de la humânidad con aportaciones diferentes, pero, al enfrentar u¡os valores con otros, contribuyen también a fomentar una
lucha fiatricida que es casi desconocida en el resto de la naturaleza.
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PRocEso DE ESCRITURÂ: oRGÀNlzÀcIóN Y CREACIÓN :rExruAr
CLASES
Podemos definir la cultura como el estilo y los medios de vida propios de toda sociedad humana. Es, por lo tanto, el sistema de valoies y metas vigentes en toda comunidad humana, a cuyo se¡yicio se
hallar las técnicas materiales de alimentación y defensa, y para cr¡ya
consecución hay que âtenerse â usos y normas comunes. La culturâ es, pues, el contenido del cornportamiento humano en ¿uanto tal,
esto es, algo puesto por el hombre y no me¡amente dado por 1â na$ralezâ de forma instintiva; es una creación humana que regula la
propia vida del hombre y la potencia.
Con los términos, civilización y culturâ, se pretende a r'eces diferenciar los aspectos mâteriâles y espirituales del vivir humano. La
(osé Luis Pinillos:
a
mmte hu:rnnn4 Madrid, Temas de
Ho¡
1991).
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â
producto de las formas de vida propias de todo grupo
humano que adquiere y transmite
a lo largo de la historia. La constituyen un con r¡nto de valores y de
comportamientos humanos puestos al servicio de cualquier comuLa culnrra
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l
1
I
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nidad. Mientras el concepto de
cultura está relacionado con la
creación artística, las ideas, los valores científióos, morales y religiosos; el de civilización se refiere a
la parte material de la cultura, a la
técnica y a la práctica. Según esto, puede hablarse de dos tipos de
cultura: una, que se manifiestâ en
lo material
l
es
civilización-,
-la
creativo-ardstico-cientíûco
en
La culru¡a es el modo de vida heredado y trânsmitido por los seres
humanos. Es, a su vez, el resultado de la combinación de valores,
comportamientos y técnicas que
comparten los miembros de una
sociedad. La cultura es un concepto muy amplio que abarca el de civilización, circunscrita a la esfera
de lo material, de la técnica, de la
industria y del desarrollo. Existen,
además, otros tipos de cultura en
relación con la creación artística,
la investigación científica, las forrnas de comportamiento sociâl y la
expresión interna de vivencias,
creencias y sentimientos.
y en lo
comportamentâl; y otra interior,
que refleja los valores, las vivencias
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y las creencias. De todo ello se deduce que las diferencias culturales enriquecen material y espiritualmente a la humanidad.
fuqaenw o guión: es una técnicâ âpropiada para comentar y planificar un texto escrito. Así estructurâmos el temâ distribuyendo
las ideas en ènunciados numerados para desarrollarlas una a una.
Es también una técnica válida tânto parâ medir lâ comprensión
de un texto, como pafa pfesentâr el boceto de un temâ que vâmos
a desarroilar.
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PRocESo DE ESCRITURA: oRGÀNtzÀcIóN Y CREACIÓN
SABER ESCRIBIR
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TExruÀL
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Cuødro sinóptito: es unâ técnicâ que sirve para esbozar o simplifrcar las partes principales de un tema o de una materiâ con un
fin didáctico o informativo:
que nos sirva de base para el desarrollo de un tema semejânte, aunque
no sabemos todavía la composición
ni la distribución de párrafos:
u
1. Relación entre cultura y socie-
Modo de vid¡ propio de un¡ comüid¡d
dad.
2. Fo¡mas de identiûóación cultural: ârte, ciencia, costumbres, valores, comportamientos y creencias.
3. Cultura heredada y aprendida:
diferencias y confluencias.
L,
civilz¿ciótr s€ co'r€spond€ con lo
Claes de cultùrâ:
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Mnpa. conce1taøl: es una técnicâ de aplicación para sistematizîÍ
las ideas de una obra leída, pero también es útil para establecer lâs
asociaciones de ideas previas a la redacción.
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Idcndficeción
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Intenamos establecer un esquemâ
El texto está constituido por cuatro ideas que se corresponden con
los cuatro párrafos de su est¡ucturâ externa:
1. [.- párrafo] Delirnitación del
concepto de ..culturar'.
2- 12." pârrafol Diferencia entre
cultura y civilización.
3. [3.' párrafo] Clases y formas de
presentarse la cultura,
4.[4." pánalol Conclusión: La cultura diferencia, pero enriquece.
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Con independencia de la técnica que empleemos, cada gruno de ideas poãemos reorgânizârlo en subgrupos o en subapartaã.,.., t¿mbiéi cabe Ia posib'ilidâd de estâblecer üstâs ordenâdâs por
o por.,ivelås. Hay' sin embargo, diferencias en lâ formâ
""t"'gorí",
de n?esentar^las ideas: por elemplo en el *apa 'oncepnal,las ideas
'
nrii-rci¡ales âDarecen en el cenri y las secundâriâs, los eiemplos y
personâles en los márgenes; en el es4 uftlø,I^s ide s
ír,
"rp.a"n"ir.
se sitúan siguiendo urr
orden ierárquico.
De cuãlquier forma, debemos aclarar cuál será el orden que
vamos â seguir :-deductivo, iaductivo, analítico o sintéti-co- pay .elacionar las ideas que- redactaremos' Nos pode,"
"r*.*i"t
mos servir de indicaciones numéricas, de tipos y cuerpos distintos
con
de letras v de símbolos. Importa, ante todo, que dispongamos
claridad Ías ideas secundarias en torno a la principal'
Volvamos a :utílizat el procedimiento del esquema o guión
ooo,*, p".o pârtiend; del subrayado y de ia delimitación de
T
Y CRI'ÀCTÓN TEX.I.UAL
PROCESO DE ESCRITÙÃÀI ORôÄNIZACION
SÀBER EScRTBIR
I
oscurâ que
noche
eico último Van Gogh se debatió por pintar una
-tan
T."bo
*"iif .or*ir,i.ndo
-Ei;u^&o
i"
[1] No hay duda de que el origen del mundo fue en blanco y negro, contracolores entre sí, por ser ambos absolutos, ya que, cada uno. por su parte.
luzcontiene todos los colores y. asimismo. su negación. El blanco
-la
es más popular, pero debe su prestigio creador a hendir la gscuridad, la noche de los tiempos, el negro vientre que ha de ser luminosamente i¡seminado. No sabemos cómo era el etemo i¡sunte ânterior a la creación, pero
esta Âre, desde luego, en blanco y negro, como ha de serlo el matrimonio del
cielo y el infierno. Sin el contraste entre el blanco ]¡ el negro. no se Podría
concebir la existencia humana. crryo drama se desarrolla en el tiempo: el proceso o el paso del blanco al negro y viceversa, la progresión y la regresión.
[2] En este sentido, lo moderno del arte moderno se inició. a fines del
siglo xr.'r. con el ennegrecimiento de la pintura, que potenció la fuerza
dramática del claroscuro, la iluminación de la conciencia, que, para emanciparse, para enfocâr, para-clotetqpl¿daEaÌidad, tan invisible en su plenind radiante como en su cornpleta oscuridad, necesitaba pone¡ las cosas negro sobre bla¡co. devolverles su tensión expresiva.
Aunque indudable. no sabemos en qué medida pudo influir en este
pero, de Caravaggio en adelante, con Rembrandt,
ç^¡^ -l i-^,,1.^
". L" L--h^ êñ 1rñ4 nê-^,1---:.",{^.
Velázquez y
* ^l^-.- -^å,"^Ii-+^ el color de laslnE@i4rdcj?-EcIxa. En l8ó5, con motivo de su viaje a Madrid para visita¡ el Museo del Prado, el naturalista
Manet descubrió, fascinado, que el revulsivo poder fecunda¡te de la tradicionalmente menospreciada Escuela Española se debía a la negra conversación que Goya había mantenido conYelâzqtez
I-a radical oaleta esoañola estuvo basada nrincioalmentclDd¿bsoluto del blanco v nesro. deiando como una rebaba de gris para que
cupiera el drama humano. También conta¡on en ella el rojo y el ocre, la sangre y la arcna,læ entrañas de la pura terrenalidad profundamente oscura.
[3] La fotograúa-elciae.la:eleruol: también estâs técnicas ârtísticas
nacieron en blanco ]' negro. aunque su progreso sea en colorines, la desfiguración del grama original, algo entretenido, pero sin sustancia. Sin
embargo, sin retorno a la primera oscuridad, sin regresar al principio, sin
ese oroceso oue los alouimistas denominaron nieredo- el<lcl soscurcci=
mlento>>.
Para el sen-
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fuego'
la-s estrellas en gigantescas ruedâs de
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comPi.æro. bl-.o y t"gto' No obstante, nuest¡a actualidad çs casi su
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I yo "t'o^""t me pregunto: ¿dónde.estará
J;il;" *.tj.;i;., ese
punto crítico en el que se cobija la luzl
salvador- agujero negro,
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(F. Calvo Serraller)'
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Plante¿miento
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son consustanciales con la eústen[1] (1."'párrafo) El blanco y el negro
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--- humana.
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los colores y su negación ¡i.t1 l-o, do, "olores contienen todos
p^. a"r tranco al negro y viceversa suponen al tiempo la re-
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gresión y el progreso.
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CuerPo: desarrollo
del arte se inicia en el siglo xvr
l2l Q.",3." y 4." párrafos) La mJdernidad
la fuerza dramática del claroscu¡o'
con
*'ìt.lf
ð;;**plar la realidad consistía en poner las cosas negro sobre
blarrco,-Ca."uaggio, Rembrandt, Velázquez y Goya'
se ha logrado en negra clave nâtura[2.2] El impulso modernizador
grado de influencia de la imprenta y de la estarnpación
fir,i, ti" t"t".^"f
de
-- imágenes.
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(S.'p¿rr"fo) La creación y la regeneración artísticas se producen
.on ,"toino ..nigredo" o al <'oscurantismo"'
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"i t1 r-as tecnicasirtísticas,
fotografia' cine y televisión' surgieron en
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bl"n"o y n"gro, p"ro el progreso
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ìi.íl-i, pi"*.a
española se ha basado en el absoluto del blanco
negro.
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¡i.
las ha desvirnado al incor?orâr los co-
ii
L
1j
lorines.
Renoir y Van Gogh' no consideran ne[3.2] Atgunos pintores, como
cesario el negro.
Conclusión
Guernùø' está en blanco
t4l (6.'párrafo) El mejor cuadro del s iglo xx, el
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