Util prueba de diagnóstico en pacientes con ortostatismo

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Salud
Ciencia - Agosto de 2001
Util prueba de diagnóstico en pacientes con ortostatismo
Johan-Heinrich Füssli, «La pesadilla», óleo sobre tela, 1781.
La prueba con mesa basculante es útil en
pacientes de riesgo y en la evaMontreal, Canadá - La prueba
con mesa basculante se utiliza
pacientes con manifestaciones clínicas inducidas luación del síncope asociado con
el ejercicio.
principalmente para la investigapor el ortostatismo [Canadian Medical
Hay distintas opiniones
ción de los síntomas ortostáticos.
Association Journal].
sobre su utilidad para difeAunque con frecuencia es la norrenciar síncope convulsivo de
ma para la evaluación del
convulsiones en el estudio de
síncope neuro-cardiogénico,
ancianos que experimentan
disautonomía y el síndrome de
caídas frecuentes y en la evataquicardia ortostática postural
luación del mareo recurrente
(STOP), su valor y método son
o del síncope en sujetos con
discutidos. A pesar de sus limitaneuropatías.
ciones, señalan los doctores
Las contraindicaciones comLamarre Cliche M y Cusson J, de
prenden la existencia de patola Universidad de Montreal, la
logía cardiovascular inestable,
prueba es útil en pacientes con
el embarazo y la negativa del
una variedad de manifestaciones
paciente. Aunque la prueba es
clínicas inducidas por el ortostasegura, existen informes de
tismo.
vasoespasmo coronario,
La prueba con la mesa bascuangor, crisis hipertensiva y
lante permite valorar la respuesta
taquiarritmia. Los efectos
ortostática neurocardiovascular
adversos más comunes son los
en un ambiente controlado. El
cambios hemodinámicos,
procedimiento consta de 2 fases
como hipotensión, taquicardia
principales. Comienza con el parante el procedimiento la presión arterial
o bradicardia asociada con intolerancia
ciente en reposo en posición supina por
(PA) y frecuencia cardíaca (FC) son conortostática, presíncope o síncope.
30 minutos; esta etapa favorece la
troladas en forma regular.
A pesar de sus limitaciones, la prueba
estabilización del sistema cardiovascular
El procedimiento puede formar parte
con mesa basculante es útil en individuos
y puede incrementar la sensibilidad del
de la investigación de cualquier síntoma
con manifestaciones clínicas inducidas
estudio. En la segunda fase, el sujeto es
ortostático, especialmente en pacientes
por el ortostatismo. Los pacientes deben
incorporado en posición vertical durante
sin hallazgos físicos objetivos ni evidencia ser cuidadosamente seleccionados para
30 a 45 minutos en un ángulo entre 60°
de patología cardiovascular estructural.
acrecentar el valor diagnóstico. La resy 80°. En esta posición se ejerce la máxiGeneralmente, integra el algoritmo
puesta hemodinámica anómala en sujema fuerza ortostática pasiva. Una tercera
diagnóstico en el síncope o presíncope. El tos con síntomas de ortostatismo es una
fase con estimulación farmacológica
Colegio Norteamericano de Cardiología
evidencia importante de patología exispuede efectuarse en la investigación del
recomienda la prueba en caso de síncope tente que debe motivar cambios en el
síncope; el isoproterenol es el agente
recurrente o de un episodio sincopal en
tratamiento médico.
provocador comúnmente utilizado. Du-
Variaciones mensuales y estacionales de la patología psiquiátrica
Filadelfia, EE.UU. - La morbilidad
por consumo de sustancias es más alta
al inicio del mes, pero no se demostró
que los ingresos en esos días sean la
causa [The American Journal of
Medicine].
La variación mensual y estacional en
la incidencia de patología psiquiátrica
aguda -en especial las relacionadas con
el consumo de sustancias- son tema de
gran interés pero de explicaciones aún
inciertas. El cobro de subsidios y
beneficios sociales al incio del mes
posibilita mayor consumo de alcohol y
sustancias ilegales, con aumento de las
tasas de psicopatología. Un trabajo
reciente encontró aumento en el
número de muertes a principios de mes,
al que denominaron «efecto límite»,
que demostró su importancia entre las
muertes producidas a consecuencia del
abuso de sustancias.
En el presente estudio se evaluaron
las descompensaciones psiquiátricas
incluyendo variables como efecto de las
vacaciones, del año nuevo y de los ciclos
lunares.
Los autores identificaron un total de
12 904 visitas de pacientes al departamento de urgencias en el Hospital Universitario de Pennsylvania (entre 1990 y
1997), para quienes el diagnóstico primario fue la existencia de un trastorno
psiquiátrico. En el 19% el diagnóstico
primario se relacionó con el consumo de
sustancias. La presencia del «efecto límite» fue evaluada por comparación de
las visitas de los pacientes durante los
primeros 7 y los últimos 7 días del mes.
Los resultados apoyaron la noción de
37
la presencia de un «efecto límite» sobre
la incidencia de las patologías con abuso
de sustancias, comprobándose una
continua disminución en la incidencia de
éstas a lo largo del mes. Las visitas
debidas a otras patologías psiquiátricas
permanecieron estables. Los ciclos
lunares no ejercieron ninguna influencia
en este tipo de patología.
Es posible, concluyen los expertos,
que la variación temporal en la
descompensación psiquiátrica responda
a diferentes causas. Entre ellas,
fluctuaciones en los recursos económicos a lo largo del mes, tendencia social
al consumo de alcohol y sustancias
ilegales cuando se acercan algunos
feriados, y determinados factores
psicológicos y sociológicos variables que
guardan relación con esas fechas.
TEMAS DE CONVERSACION
http//www.siicsalud.com/tit/1045.htm
Disfunción sexual secundaria al empleo de medicamentos
Interrogantes frecuentes
Una de las preguntas más comunes
apunta a establecer de qué manera
un medicamento puede influir sobre
la función sexual. En este sentido, los
autores señalan múltiples mecanismos de acción en los que están
involucradas diversas sustancias
endógenas. En algunos casos, los
efectos se producen por la inhibición
de la libido; en otros, se ve afectada
la lubricación, la erección, el orgasmo
o la eyaculación.
Entre las sustancias endógenas con
reconocido efecto favorable sobre la
función sexual se encuentran la
actividad alfa-1-adrenérgica, la
actividad beta-1-adrenérgica, la
actividad colinérgica, la dopamina, los
estrógenos (en el caso de las mujeres),
la histamina, el óxido nítrico, las
prostaglandinas y la testosterona. En
contraposición, se reconocen como
sustancias desfavorables a la alfa-2adrenérgica, el cortisol, los estrógenos
(en el caso de los hombres), la
progesterona, la prolactina, la
serotonina y las hormonas tiroideas.
Respecto del diagnóstico diferencial
de las disfunciones sexuales, los autores
analizan los casos en los cuales se debe
pensar en posibles efectos
farmacológicos secundarios. En todos
los casos en que se usen medicamentos,
aunque sólo sea en la forma de gotas
oftálmicas, puede haber este tipo de
sospecha. Por lo tanto, se debe analizar
la relación temporal entre la aparición
de la disfunción sexual y el comienzo de
un tratamiento farmacológico. Como se
ha señalado, la forma de administración
no permite excluir este tipo de relación.
Un ejemplo de ello son los conocidos
efectos, sobre las funciones sexuales, de
la administración de ß bloqueantes en
gotas oftálmicas para el tratamiento del
glaucoma.
Cuando el símbolo del Círculo de Lectores SIIC
acompaña una novedad sus asociados pueden
solicitar información complementaria o la fuente
primaria completa. Círculo de Lectores SIIC: informes
e inscripción, llamando al tel (54 11) 4342-4901- Fax (54
11) 4331-3305.
Diversos fármacos pueden provocar
falta de deseo sexual, retraso en la
eyaculación, ausencia de orgasmo y
dificultades para la erección [Médecine
et Hygiène].
Ernst Kirchner, «Mujer deasnuda al lado de la estufa», acuarela, lápiz y crayon, 1914.
Ginebra, Suiza - Esta es una
revisión de la bibliografía médica
reciente sobre los principales
fármacos asociados con disfunciones
sexuales. No pretende ser un
desarrollo exhaustivo, señalan los
doctores Pause C, Chatton D y
Archinard M (Unité de Gynécologie
Psychosomatique et de Sexologie,
Division de Psychiatrie de Liaison, en
Ginebra), sino darle al tema una
orientación clínico-farmacológica.
Problemas sexuales más
frecuentes
Los trastornos sexuales más frecuentemente causados por el empleo de
medicamentos son el retraso de la
eyaculación y el orgasmo, y la
disfunción eréctil. En particular, estos
trastornos están asociados con dos tipos
de psicotrópicos, los antidepresivos y los
neurolépticos, y también con los
antihipertensivos. Por el contrario, no se
conocen casos se eyaculación precoz
asociados al empleo de medicamentos.
Entre los antidepresivos tricíclicos
(como nortriptilina, amitriptilina,
imipramina y trimipramina), la
clomipramina, frecuentemente utilizada
en Suiza, parece estar asociada con un
mayor impacto sobre la actividad sexual.
Con esta droga, aproximadamente el
40% de los pacientes presenta retardo
o ausencia de eyaculación, el 20%
muestra perturbación de la libido y el
15% disfunción eréctil.
Los inhibidores de la recaptación de
serotonina, en tanto, están principalmente vinculados con el retraso de la
eyaculación y la anorgasmia. Estos
fármacos, al igual que la venlafaxina,
pueden provocar pérdida de libido y
trastornos eréctiles. A partir de la
experiencia directa de los autores, sobre
un total de 344 pacientes analizados
que recibían tratamiento con fluoxetina,
fluvoxamina, paroxetina o sertralina, el
38
58% presentaba algún tipo de
disfunción sexual.
Ante este panorama, los especialistas señalan los fármacos de elección.
La nefazodona inhibe selectivamente
la recaptación presináptica de
serotonina y bloquea los receptores posinápticos de este
neurotransmisor, con menos
efectos negativos sobre la
sexualidad que los inhibidores
selectivos de la recaptación de
serotonina. De igual modo, la
moclobemida, un inhibidor
selectivo reversible de la
monoamino oxidasa (MAO), tiene
relativamente pocos efectos
sexuales secundarios.
Efectos secundarios de los
antihipertensivos
Los ß bloqueantes se caracterizan por provocar principalmente
problemas de erección y bloquear
el deseo sexual. Los diuréticos
aumentan la prolactina y los
estrógenos, afectando también el
deseo y la erección.
Los agentes antihipertensivos de
elección para reducir al mínimo los
posibles trastornos sexuales son
los inhibidores de la enzima
convertidora de angiotensina (como el
enalapril).
Los antagonistas del calcio, como la
nifedipina, también afectan la libido;
con éstas, como con otras drogas
antihipertensivas, los efectos suelen ser
proporcionales a las dosis suministradas.
Los trastornos no disminuyen con el
tiempo. Es decir, no existe un proceso
de adaptación y no se puede tranquilizar al paciente indicándole que los
trastornos se corregirán con el paso del
tiempo. Ante la detección de este tipo
de problemas es recomendable, en
primer lugar, reducir la dosis de
medicación. Para los casos en que esto
no resulta suficiente hay que pensar en
terapias alternativas como el sildenafil.
Conclusión
En caso de disfunción sexual, el
médico debe sospechar que el trastorno
puede deberse a un efecto secundario
de una medicación en curso. Debido a
que numerosas drogas empleadas en
psiquiatría, al igual que otras, como los
antihipertensivos, pueden generar
disfunciones sexuales como efectos
secundarios, el médico debe advertir a
los pacientes sobre estas posibilidades al
comenzar la terapia. Una vez en
tratamiento, es recomendable mantener
un monitoreo de la capacidad sexual de
los pacientes.
MUJER
SALUD http://www.siicsalud.com/main/mujerysalud.htm
Consejos para el empleo de antiarrítmicos durante la gestación
Dallas, EE.UU. - Las arritmias cardíacas durante la gestación se deben principalmente a variaciones metabólicas,
hormonales y hemodinámicas. Además,
los adelantos en materia de cirugía cardíaca permiten que mujeres con malformaciones congénitas lleguen a la edad
fértil.
Las arritmias también pueden ser la
presentación inicial de una patología
cardiovascular grave que se desarrolla o
es descubierta durante esta etapa, como
la miocardiopatía periparto. Las más
frecuentes comprenden la ectopia
auricular y ventricular, mientras que la
taquicardia supraventricular y el aleteo
auricular son características del feto.
El tratamiento durante las primeras
semanas de gestación, cuando el riesgo
de malformaciones congénitas es mayor,
debe ser evitado. El empleo de
antiarrítmicos está reservado a casos
con síntomas importantes o compromiso
hemodinámico. A su vez, es fundamental tener en cuenta que las variaciones
fisiológicas del embarazo pueden afectar
la absorción, biodisponibilidad y
eliminación de los agentes, lo que
requiere mayor control de las dosis.
Antiarrítmicos específicos
Es recomendable, sostienen los
doctores Joglar y Page (Universidad de
Texas), el empleo de las menores dosis
eficaces, así como el control de la
respuesta clínica y de los niveles de la
droga en sangre. La proarritmia es el
efecto adverso más preocupante en la
madre, que puede desarrollarse con
agentes de la clase I y III de la clasificación Vaughan Williams. La quinidina,
perteneciente a la clase IA, utilizada
desde 1930 en el tratamiento de las
arritmias maternas y fetales, es considerada relativamente segura a dosis
terapéuticas. La procainamida posee propiedades y aplicaciones clínicas similares
a la quinidina, y cuenta con la ventaja de
su administrración intravenosa. Sin
embargo, es necesario evitar su empleo
prolongado debido al riesgo de desarrollar un síndrome símil lupus.
La clase IIB comprende a lidocaína,
mexiletina y fenitoína. La lidocaína
intravenosa es utilizada principalmente
en el tratamiento agudo de las arritmias
ventriculares. Si bien la experiencia sobre
su aplicación como antiarrítmico durante
el embarazo es limitada, estudios en
animales y seres humanos mostraron que
Cuando el símbolo del Círculo de Lectores SIIC
acompaña una novedad sus asociados pueden
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primaria completa. Círculo de Lectores SIIC: informes
e inscripción, llamando al tel (54 11) 4342-4901- Fax (54
11) 4331-3305.
Existen varias opciones
farmacológicas para tratar la
mayoría de las arritmias maternas
y fetales [Current Opinion in
Cardiology].
es segura para la madre y el feto. Las
mujeres con disfunción hepática o insuficiencia cardíaca deben recibir dosis inferiores debido al metabolismo hepático
del agente. La mexiletina es segura, incluso durante la lactancia, dada la baja
cantidad de droga excretada en la leche.
La fenitoína, por otra parte, no debe
utilizarse en el embarazo debido al riesgo
de malformaciones congénitas y efectos
adversos.
La clase IC incluye a propafenona y
flecainida, ambas de utilidad en las
taquicardias ventriculares y
supraventriculares y relativamente
seguras durante el embarazo. En caso de
arritmias fetales, la administración de
flecainida es sumamente eficaz, y
produce efectos clínicos con mayor
rapidez que la digoxina o el verapamilo.
Además, su acción es superior en
presencia de hidropsia fetal. En vista de
los presentes hallazgos, la flecainida
puede considerarse una alternativa de
primera línea en el tratamiento de la
taquicardia supraventricular fetal
complicada con hidropsia. La experiencia
con la propafenona resulta más limitada,
aunque no existen informes de efectos
adversos en madre o feto en el tercer
trimestre. Por último, todos los agentes
de la clase IC deben evitarse en sujetos
con miocardiopatía o infarto miocárdico
previo.
Los agentes de la clase II, ß-bloqueantes, son útiles frente a arritmias supraventriculares, taquicardia ventricular
idiopática y control de la respuesta
ventricular en el aleteo y fibrilación
auricular. A pesar de los excepcionales
casos de efectos adversos en el feto como bradicardia, apnea, hipoglucemia,
parto prematuro y anomalías metabólicasestos agentes son considerados seguros.
Un estudio reciente comprobó la relación
entre retraso de crecimiento intrauterino
y empleo de atenolol en el primer
trimestre. Por otra parte, los ßbloqueantes generalmente no producen
efectos adversos en el lactante con
funciones renal y hepática normales.
Los agentes de la clase III bloquean los
canales de potasio, con retraso en la
repolarización y prolongación del
intervalo QT. La amiodarona se utiliza
principalmente para el tratamiento de
las arritmias ventriculares. Su contenido
de iodo atraviesa la placenta con elevada
40
afinidad por el tejido tiroideo fetal. Los
efectos adversos de la amiodarona
incluyen hipotiroidismo fetal, bajo peso
de nacimiento, prematurez, bradicardia
y prolongación QT. También puede
producir malformaciones congénitas,
por lo que debe evitarse durante el
primer trimestre. De hecho, la amiodarona está contraindicada durante el
embarazo -excepto en casos en que la
vida corra peligro- y es aconsejable
evitarla durante la lactancia. Los agentes
de clase III son especialmente eficaces
en el aleteo auricular fetal; el sotalol es
la droga de elección. La ibutilida, un
agente intravenoso utilizado en la
interrupción del aleteo o de la fibrilación
auricular, no presenta antecedentes de
empleo durante la gestación.
El verapamilo y diltiazem, clase IV
(bloqueantes de los canales de calcio),
reducen la recurrencia de taquicardias
supraventriculares y controlan la respuesta ventricular en pacientes con fibrilación o aleteo auricular. El verapamilo
puede producir bradicardia fetal, bloqueo cardíaco, depresión de la contractilidad, hipotensión y hasta muerte.
Estos agentes son relativamente seguros
para la madre, pero debido a sus efectos sobre el feto deben ser empleados
con sumo cuidado. Ambas drogas son
compatibles con la lactancia materna.
La adenosina -no incluida en la clasificación anterior, al igual que la digoxinaes eficaz y segura en la interrupción de
la taquicardia supraventricular de la
gestante. Efectos adversos -como
bradicardia y disnea- son transitorios y
sin consecuencias. Los autores la
consideran la droga de elección frente a
la taquicardia supraventricular luego del
fracaso de las maniobras vagales. Por
último, la digoxina es el antiarrítmico
más seguro durante el embarazo. Es
utilizada mediante administración
transplacentaria en el tratamiento de las
arritmias supraventriculares fetales. La
vía intramuscular fetal directa ha sido
empleada con buenos resultados en el
tratamiento de la taquicardia
supraventricular. La droga también
puede ser utilizada por madres que
amamantan.
Conclusiones
En caso de arritmias benignas, las terapias conservadoras resultan apropiadas. Si está en peligro la vida de la
madre o el feto, la terapia se iniciará sin
duda alguna, pero, si es posible, debe
evitarse en el primer trimestre. Los
agentes con el mejor perfil de seguridad
constituyen la primera elección.
Asimismo, deben ser administrados bajo
control estricto y frecuente.
INFANCIA
SALUD
http://www.siicsalud.com/tit/1543.htm
Aspectos clínicos de la hiperuricemia infantil
Nápoles, Italia - Aunque la hipercalciuria idiopática (HC) ha sido extensamente
investigada como causa de hematuria y
urolitiasis en niños, la hiperuricemia (HU)
idiopática infantil ha recibido poca atención. El doctor La Manna y colaboradores de la Universidad de Nápoles estudiaron la existencia de HU y HC en niños
con hematuria y en los que consultaron
con síntomas sugestivos de cristaluria
(disuria, dolor abdominal recurrente o en
el flanco, en pacientes con historia familiar de urolitiasis).
Para el análisis de la presentación clínica seleccionaron 102 niños con HU y concentraciones séricas normales de ácido
úrico y creatinina. La HU fue definida
como la concentración urinaria de ácido
úrico corregida según la depuración de
creatinina; y la HC, como calciuria superior a 4 mg/24 hora. Los puntos hiperecogénicos en los cálices renales condujeron
al diagnóstico de microlitiasis calicial y se
efectuaron diversas determinaciones en
suero y orina. La presencia de más de 5
eritrocitos por campo de gran aumento
en orina centrifugada, en dos días
diferentes definió la hematuria.
El 75% de los participantes tenía
historia familiar de urolitiasis. Sesenta y
uno tenían HU y 41, HU más HC. Los
Se debe sospechar hiperuricemia
e hipercalciuria en niños con
disuria, dolor abdominal o en el
flanco y antecedentes familiares
de urolitiasis [Pediatrics].
síntomas de presentación más frecuentes
fueron hematuria microscópica (más
común en pacientes con HU) en 26 niños
y dolor abdominal o en el flanco en 25.
Siete refirieron la eliminación urinaria de
arenilla entre 3 y 24 días antes. Cerca de
un tercio de los niños presentaban
análisis de orina normales. En tres
cuartos de los participantes con HU y en
menos de la mitad de los que presentaban HU y HC se detectó hematuria
microscópica de origen no glomerular.
Casi la mitad de los pacientes tuvieron
ecografías renales normales; en la mitad
se observaron microcálculos y en 12%,
cálculos mayores de 3 mm. Treinta
participantes (77%) de los 39 con análisis
de orina normales presentaron
microcálculos o cálculos en la ecografía
renal. En total, 32 niños nunca presentaron hematuria y en 2 de ellos la ecografía
fue normal. Quince de los 26 niños
seleccionados para el seguimiento tenían
HU y 11, HU más HC. Cuatro pacientes
nunca tuvieron hematuria. Cinco
pacientes tuvieron microcálculos en
todos los estudios, y otros cinco en
ninguna de las ecografías realizadas
durante el seguimiento. En 15 pacientes,
los microcálculos presentes en una ecografía no fueron detectados en exámenes ulteriores. En el último control, 11
pacientes tenían análisis de orina normales, pero en 6 se detectaron microcálculos en la ecografía. Los restantes
presentaron hematuria microscópica; se
observaron microcálculos en 10 de ellos.
Como hallazgos sobresalientes de este
estudio, los autores destacan los microcálculos en cerca de la mitad de los niños
con HU, la ausencia de hematuria como
síntoma de presentación en más de la
mitad de ellos y la falta de correlación
entre hematuria y microcálculos o cálculos. El riesgo de urolitiasis aumentaría
con la edad. Estos hallazgos indican que
se debe sospechar HU en casos de
síntomas sugestivos de cristaluria aun en
ausencia de hematuria.
Para los autores, un análisis de orina
normal no es predictivo de una ecografía normal. Durante el seguimiento, un
análisis de orina normal tampoco se
asoció con ecografía normal y viceversa.
Lactancia materna y riesgo de coronariopatía en el adulto
Londres, Reino Unido - La nutrición en
la vida neonatal parece ejercer efectos
«programadores» en la fisiología, metabolismo y evolución clínica de animales y
seres humanos. Así, aunque la lactancia
materna se relaciona con menor riesgo
de enfermedad cardiovascular, los varones amamantados hasta el año, nacidos
a principios del siglo XX, presentaron
mayores tasas de enfermedad coronaria
70 años después.
Para investigar si la duración de la lactancia materna influye en el desarrollo
de enfermedad vascular, un equipo de
expertos, conducido por el doctor Leeson,
estudió una cohorte de personas de ambos sexos de entre 20 y 28 años, nacidos
en el mismo hospital del Reino Unido.
La población en estudio fue distribuida
en 2 grupos de acuerdo con el tipo de
alimentación; los que habían sido
amamantados informaron además sobre
la duración de la lactancia materna. La
distensibilidad de la arteria braquial durante el ciclo cardíaco permitió cuantificar la «rigidez» del vaso, al relacionar el
cambio en el diámetro durante el ciclo
cardíaco con la presión de pulso.
La menor distensibilidad, como era de
esperar, estuvo relacionada con mayores
La duración de la lactancia
materna se relacionó con
reducción de la distensibilidad
arterial 20 años después [British
Medical Journal].
niveles de colesterol total y registros
superiores de presión arterial sistólica. La
clase social, el tabaquismo, el peso de
nacimiento y el peso durante la lactancia
no se asociaron con la función arterial.
Los participantes que habían sido exclusivamente amamantados durante menos
de 4 meses tenían distensibilidad similar
a los alimentados con fórmula. Sin embargo, los amamantados por más de 4
meses evidenciaron menor distensibilidad. La duración de la lactancia materna
no presentó relación con el perfil lipídico,
talla, índice de masa corporal, consumo
de tabaco, presión arterial, clase social,
peso de nacimiento o prevalencia de
enfermedad cardiovascular prematura en
parientes. En el modelo de regresión, la
intensidad de la asociación entre duración de lactancia materna y distensibilidad no se vio afectada por la inclusión
del perfil lipídico, índice de masa corpo-
42
ral, talla, peso o clase social.
Se comprobó cierta relación entre la
distensibilidad de la arteria braquial en
adultos jóvenes y la duración de la lactancia materna. Debido a la elección de
la muestra, exenta de factores de riesgo
cardiovascular presentes en cohortes de
mayor edad, los resultados sugieren que
la influencia de la leche materna en el
riesgo cardiovascular ocurre tempranamente. El presente hallazgo puede obedecer a la posible programación del metabolismo del colesterol en respuesta a
los contenidos lipídicos y hormonales de
la leche materna. Estos factores pueden
alterar la expresión de las enzimas hepáticas, o de los receptores de las lipoproteínas de baja densidad, alterando la respuesta frente a una dieta rica en grasas.
La lactancia materna está ampliamente aceptada y es promovida como la
mejor alimentación para el lactante. De
este modo, cualquier sugerencia de asociación entre su duración y la salud vascular requiere una evaluación cuidadosa
y crítica. En esta etapa, la presente información observacional (que no establece
relaciones causales) no debe influir en el
criterio actual sobre su importancia,
finalizan los expertos.
DEPORTES
SALUD http://www.siicsalud.com/tit/1528.htm
Influencia de los esteroides anabólicos androgénicos sobre la
estructura y función arteriales
Sydney, Australia - Los efectos
El uso de esteroides anabólicos
fisiológicos y farmacológicos de los
androgénicos no se asocia con anomalías
andrógenos sobre la estructura y
importantes en la estructura o función de
función arteriales están escasamente
las arterias [Journal of the American
descriptos en la literatura. Sin emCollege of Cardiology].
bargo, algunas evidencias indican
que podrían tener acciones proaterogénicas. Estudios epidemiológicos
han demostrado que la enfermedad
cardiovascular es más frecuente y
grave en hombres adultos que en
mujeres de cualquier edad. Los andrógenos pueden promover la adhesión de monocitos a las células endoteliales y alterar la reactividad arterial. En contraste, ciertas observaciones sugieren un efecto antiisquémico
de los andrógenos. Además, los
hombres con bajos niveles de estas
hormonas tienen mayor riesgo de
sufrir eventos cardiovasculares. Los
efectos vasculares de los andrógenos
son importantes en la evaluación de
la influencia del empleo ilícito de esteroides anabólicos androgénicos
(EAA) sobre la estructura y función
arteriales en atletas.
En el presente estudio, el doctor
Sader MA y colaboradores de la Universidad de Sydney y otros centros
australianos examinaron la estructura
y función cardíaca y de las arterias en
fisicoculturistas de sexo masculino
que empleaban EAA.
Cuando el símbolo del Círculo de Lectores SIIC
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primaria completa. Círculo de Lectores SIIC: informes
e inscripción, llamando al tel (54 11) 4342-4901- Fax (54
11) 4331-3305.
diografía Doppler bidimensional y determinación de la reactividad arterial. Esta
última fue estudiada mediante ultrasonido vascular externo de alta resolución
de las arterias braquial o radial. El
diámetro arterial fue determinado en
reposo, durante hiperemia (que produce DMF, un estímulo endotelio dependiente) y luego de la administración de
nitroglicerina sublingual (NTG) (vasodilatador endotelio independiente).
Las respuestas frente a la hiperemia
reactiva se evaluaron luego de la oclusión temporal de la arteria braquial. La
comparación de los diámetros arteriales
permite el cálculo de la DMF, debida
fundamentalmente a la liberación
endotelial de óxido nítrico. El grosor de
íntima y media (GIM) se midió por
ecografía de las carótidas derecha e
izquierda. Por último, la evaluación
ecocardiográfica permitió la valoración
de la masa y volúmenes VI.
Resultados
Los consumidores de EAA admitieron
el empleo simultáneo de varias drogas
44
Markus Lüpertz, «Titán», bronce patinado, 1985.
Metodología
La población de estudio comprendió a 20 fisicoculturistas (entre 18 y 55
años) y 10 controles sedentarios (entre
27 y 48 años) sanos. El grupo de atletas
incluyó a consumidores de EAA y a
quienes no los utilizaban, con confirmación, en ambos casos, por pruebas de
detección en orina.
Los puntos de evaluación primarios
incluyeron la comparación de la dilatación mediada por el flujo (DMF) y la
masa ventricular izquierda (VI) entre los
fisicoculturistas. La historia clínica de los
participantes incluyó información acerca
del consumo regular de fármacos, esteroides u otros agentes con influencia
sobre el rendimiento físico, características de la actividad física y fuerza. La
evaluación también incluyó medición de
la presión arterial, concentraciones hormonales, perfil lipídico y bioquímico,
detección de drogas en orina, ecocar-
(en promedio 4) durante un período
que varió entre 2 y 13 años. Los
agentes identificados con mayor frecuencia en orina incluyeron estanozolol (70%) y nandrolona (50%). Los
niveles plasmáticos de gonadotrofinas estuvieron disminuidos en los
consumidores de EAA, al igual que
los de testoterona y globulina ligadora de hormonas sexuales.
Los niveles de estradiol no difirieron entre los 2 grupos de atletas. El
colesterol total, los triglicéridos y la
lipoproteína(a) fueron similares en
ambos grupos y dentro de los rangos normales. Los niveles de colesterol asociado a lipoproteínas de
baja densidad no difirieron entre los
atletas. Sin embargo, el coleste-rol
asociado con lipoproteínas de alta
densidad (HDLc) disminuyó
notablemente en el grupo EAA.
Las dimensiones vasculares fueron ligeramente superiores en los
consumidores de EAA. Aún así, las
respuestas de DMF resultaron similares en los 2 grupos de atletas.
Los controles sedentarios experimentaron DMF de menor magnitud,
aunque la diferencia no fue significativa. Las reacciones frente a la
NTG sublingual tampoco variaron
demasiado entre los fisicoculturistas, aunque fueron notablemente
inferiores en comparación con los
controles.
En cuanto a la estructura arterial,
los fisicoculturistas presentaron valores
de GIM carotídeos similares y significativamente superiores a los de los controles. Los atletas EAA evidenciaron masa VI
notablemente mayor en comparación con
los otros deportistas (245 g y 199 g, respectivamente). Sin embargo, la masa VI
ajustada de acuerdo al área de superficie
corporal y a la fuerza resultó similar en
ambos grupos. Por otra parte, los volúmenes VI, el grosor de la pared VI y el
acortamiento fraccional no difirieron de
manera significativa en el grupo de
atletas.
Discusión
La experiencia demostró que el consumo de esteroides anabólicos androgénicos disminuye los niveles plasmáticos
de HDLc e incrementa la masa ventricular izquierda. Sin embargo, los autores
no encontraron evidencia de anomalías
estructurales o funcionales en las arterias
sistémicas. El empleo de esteroides anabólicos por sí solo no está asociado con
engrosamiento arterial significativo o disfunción endotelial en individuos sanos.
ANCIANIDAD
SALUD http://www.siicsalud.com/tit/2251.htm
Prevalencia de incontinencia urinaria en la edad avanzada
Padua, Italia - La doctora Maggi y
colegas del Centro de Envejecimiento de
Padua, en colaboración con el Centro
para el Control de Enfermedades de
Atlanta, comprobaron una elevada
prevalencia de incontinencia urinaria (IU)
en hombres y mujeres de edad avanzada. Asimismo, el impacto fue significativo: más de la mitad de los pacientes con
IU refirieron síntomas diarios o más de
una vez por semana.
Los expertos italianos recordaron que
la IU es un problema muy frecuente en
ancianos. Sin embargo, según la definición que se adopte, la prevalencia puede variar de un 2% a un 55% en este
grupo etario. Además del impacto económico, la IU influye desfavorablemente
sobre la calidad de vida y la salud global
a causa de su asociación con mayor
riesgo de infecciones urinarias, problemas cutáneos y alteraciones del sueño.
Además, el impacto social y psicológico
es sustancial, añadieron los autores.
El estudio abarcó una muestra aleatoria de más de 2 500 sujetos de 65 años
o mayores, no institucionalizados y residentes en cinco áreas rurales y cuatro
áreas urbanas definidas de la región del
Veneto, en el nordeste de Italia. Se es-
La incontinencia urinaria es muy
frecuente en ancianos y produce
importantes efectos en más de la
mitad de los casos [Journal of
Gerontology].
tima que casi el 10% de la población de
dicha región tenía 85 años o más en
1989. Los casi 2 500 participantes, categorizados en grupos etarios, completaron un cuestionario detallado que permitió conocer las características demográficas, sociales, familiares y económicas. Se
evaluó la funcionalidad física por medio
del cuestionario de actividades diarias
(ADL), estado global de salud, medicaciones recibidas en forma regular y
estado mental. Se determinó la presencia y frecuencia de síntomas de IU.
De esta forma pudieron comprobar
que el 11% de los hombres y el 21% de
las mujeres presentaba IU. Casi los dos
tercios refirieron síntomas diarios o muy
frecuentes. La enfermedad pulmonar
obstructiva crónica, el parkinsonismo y
la fractura de cadera en mujeres, y la
diarrea crónica en hombres se asociaron
con IU. Además, la incapacidad física y
las alteraciones del sueño, en mujeres,
duplicaron el riesgo de IU. Este hecho
fue sorprendente porque se sabe que
los problemas prostáticos y la necesidad imperiosa de vaciar la vejiga conducen a varones ancianos levantarse
varias veces por la noche.
Debido a la posibilidad de tratamiento eficaz, la alteración debe ser investigada específicamente, agregaron los
expertos. La mayoría de los enfermos
no refiere el problema en forma espontánea por considerar que no tiene solución, generándoce un fuerte impacto
social y psicológico, con cambios del
estilo de vida y marginación creciente.
La deficiencia de estrógenos y los problemas prostáticos tienen, a menudo,
alternativas de tratamiento. Asimismo,
la ejercitación del piso pelviano suele
ser muy eficaz. La disminución de la
ingesta de líquidos, especialmente de
las bebidas con elevado contenido en
cafeína, es una medida general que
puede aplicarse en la mayoría de los
casos. Por lo tanto, los médicos deberían indagar siempre sobre síntomas de
IU en ancianos para poder brindarles
terapias adecuadas, concluyen los
expertos.
Sobrevida después del inicio de la demencia
Montreal,Canadá - La demencia
acorta la expectativa de vida. La sobrevida, calculada por el seguimiento desde
el diagnóstico, alcanza a un promedio de
5 a 9.3 años. Sin embargo, esta forma
de estimación puede estar asociada con
subestimación de los efectos deletéreos
de la demencia. En efecto, la imposibilidad de incluir personas con patología
rápidamente progresiva que fallecen
antes de que puedan considerarse para
la investigación introduce una distorsión
denominada sesgo longitudinal (SL).
Dado que el principio de la demencia
es gradual y no puede determinarse con
precisión, se aconseja calcular la
duración de la sobrevida a partir de un
momento de inicio cuidadosamente
establecido.
Con información del Estudio Canadiense de Salud y Envejecimiento
(CSHA), los doctores Wolfson C y
colaboradores de la McGill University
(Montreal) estimaron la duración de la
sobrevida en pacientes con demencia
después del ajuste según el SL.
El diagnóstico se realizó según criterios del Manual de Trastornos Mentales,
Tercera Edición. De esta forma quedaron
establecidos los casos de demencia,
alteración cognitiva sin demencia y
Luego del inicio de la demencia,
la sobrevida promedio es menor
de lo que habitualmente se
acepta [The New England Journal
of Medicine].
ausencia de déficit cognitivo. También
se determinó, según criterios específicos, enfermedad de Alzheimer (EA)
probable o EA posible, demencia vascular y otros tipos de demencia. El análisis
se limitó a las tres primeras formas. La
EA probable fue reconocida en pacientes
con comienzo insidioso y progresión en
ausencia de otras causas de demencia.
Las manifestaciones de EA posible fueron presencia de hallazgos clínicos atípicos o progresión atribuible a la enfermedad, aun en presencia de otras causas
capaces de originar alteración cognitiva.
Cinco años después, la cohorte fue
reevaluada.
La prevalencia de demencia fue del
8%; la mayoría de los enfermos tenía
diagnóstico de EA. La edad de inicio se
calculó según un algoritmo de validez
establecida.
Se pudo evaluar un subgrupo de 821
enfermos. La mayoría era de sexo
46
femenino, con diagnóstico de EA
posible o probable. La edad promedio
de los individuos fue de 83.8 años al
inicio y sólo el 21.9% (n = 180) sobrevivió hasta la fase 2. Antes del ajuste
según SL, la sobrevida promedio de los
821 pacientes se estimó en 6.6 años;
después del ajuste, fue de 3.33 años. La
sobrevida disminuyó con el aumento de
la edad en el momento del diagnóstico
y fue levemente en varones, sin diferencias en relación con el diagnóstico.
En el modelo de covariables, el sexo
femenino y la menor edad en el
momento del inicio de la demencia
fueron factores predictivos de mayor
sobrevida.
Los resultados del estudio demostraron que, luego de efectuar el ajuste
correspondiente según SL, la sobrevida
de pacientes con diagnóstico de demencia es sustancialmente más baja que lo
considerado en general. La menor edad
en el momento del inicio se acompaña
de sobrevida más prolongada. Asimismo, los pacientes con diagnóstico de EA
posible sobrevivieron algo más que
aquellos con EA probable. La sobrevida
en enfermos con demencia vascular fue
intermedia entre las otras dos formas de
demencia.
TRABAJO
SALUD http://www.siicsalud.com/tit/1526.htm
Trastornos musculoesqueléticos en trabajadores industriales
Análisis comparativo de los
padecimientos reportados y los
exámenes clínicos en
trabajadores industriales [Pain].
Tebas, principios de la XII dinastía, «Portadora de ofrenda», madera pintada, 1990-85 a.C.
Glostrup, Dinamarca - A pesar de la
frecuencia de los trastornos
musculoesqueléticos, los casos
clínicamente comprobados corresponden
a un número limitado de individuos y
puede ser necesario reiterar exámenes
clínicos. En el estudio PRIM (Proyecto
sobre Investigación e Intervención en
Trabajos Monótonos) se aplicó un
método basado en un cuestionario para
identificar la existencia de estos padecimientos. De esa investigación participaron 3 123 individuos de 19 empresas
diferentes, que fueron objeto de un
seguimiento de 3-4 años con el propósito de examinar los efectos físicos y
psicológicos del trabajo repetitivo y
monótono. Al inicio y cada 9 meses los
trabajadores completaron el interrogatorio sobre los padecimientos
musculoesqueléticos, con especial énfasis
en los referidos a la zona del cuello y
regiones superiores de los brazos. Los
sistemas para otorgar una puntuación
son numerosos. Los autores, especialistas
de los departamentos de Salud Ocupacional de dos ciudades danesas (Herning
y Glostrup), evaluaron la relación entre
padecimientos de cuello-hombro (SCH)
graduados y los signos clínicos de este
síndrome, y estudiaron la aplicabilidad
del cuestionario mencionado con respecto a la identificación de signos clínicos.
El trabajo abarcó a una subcohorte de
un año de seguimiento. Todos los participantes, operadores de máquinas de 3
compañías, completaron el cuestionario
al inicio y al año y, también, fueron
sometidos a un examen clínico estandarizado del cuello y de los miembros
superiores. La subcohorte se evaluó
entre 1994 y 1995; 240 sujetos fueron
examinados e incluidos en el análisis de
resultados. La edad media fue de 38.3
años y al final del seguimiento permanecían en el estudio las dos terceras partes
de los individuos.
Las preguntas del cuestionario incluyeron datos acerca del empeoramiento
sintomático, el promedio de padecimientos, la magnitud de la reducción en la
capacidad de trabajo provocada por el
SCH durante los 3 últimos meses y los
síntomas de los últimos 7 días. Las respuestas abarcaron una escala graduada
de 0 (ausencia de síntomas) a 9 (peor
padecimiento posible). Los signos clínicos se investigaron siguiendo procedimientos estándar a cargo de profesionales que desconocían los resultados del
cuestionario.
La mayoría de las categorías fueron
respondidas como 0. El puntaje de padecimiento de la región del cuello (8.3, en
promedio) fue significativamente más
alto que los de las regiones izquierda y
derecha del hombro (6.3 y 5.9, respectivamente, en promedio). Los puntajes
referidos al cuello y hombro fueron
altamente correlacionables, y otro tanto
ocurrió con los puntajes de ambos
hombros entre sí.
Se estableció una relación positiva
entre la sumatoria del puntaje de padecimientos del hombro y del cuello y el
puntaje total de la palpación y otros
signos clínicos de ambas regiones musculares. Este tipo de coincidencia también se mantuvo cuando se analizó lo
que ocurría en cada hombro por separado. Todos los que reunían los criterios
clínicos de tendinitis del manguito de los
rotadores tuvieron algún tipo de síntoma y sólo el 10% de los casos de los
que refirieron padecimientos de hombro
observaron un puntaje inferior a 12. El
puntaje de alteraciones aumentó de
manera significativa en el grupo de individuos con signos clínicos del síndrome
miofascial.
La capacidad del cuestionario de puntaje para clasificar a las personas de
48
acuerdo con sus signos clínicos en el examen inicial se analizó con respecto a su
sensibilidad, especificidad y valor predictivo positivo y negativo. Para el caso del
síndrome miofascial, la sensibilidad fue
de 0.78 para el lado derecho y 0.69 para
el izquierdo, con una especificidad de
0.70 y 0.68, respectivamente. Para el
caso de la tendinitis del manguito de los
rotadores, la sensibilidad fue de 0.70
para el lado derecho y de 0.75 para el
izquierdo, mientras que la especificidad
correspondió a 0.82 para el derecho y a
0.79 para el izquierdo. Del total de trabajadores estudiados, el 26% padecía por
lo menos una alteración, mientras que el
12.3% tuvo un padecimiento al inicio de
la investigación. La cuarta parte desarrolló pautas clínicas completas de SCH
durante el desarrollo de todo el estudio
aun cuando estos criterios no estuvieron
presentes al inicio. El tipo de padecimiento registrado fue tendinitis del manguito
de los rotadores derecho en 6 casos, un
cuadro similar pero del lado izquierdo en
4, 11 cuadros dolorosos miofasciales del
lado derecho y 10 del izquierdo. De estos
25 individuos, 10 habrían sido seleccionados para el examen clínico si se hubieran
implementado los criterios del PRIM. De
los restantes no seleccionados, 6 podrían
ser clasificados como poseedores de
algún tipo de SCH.
Los padecimientos reportados por el
PRIM se correlacionaron fuertemente con
los hallazgos clínicos. Además, en el
relevamiento local inicial los puntajes de
12 o más se observaron en el 90% de
todos los casos que reunían los criterios
completos de tendinitis del manguito de
los rotadores y en el 67% de todos los
casos clínicos de miofascitis dolorosa. Al
año de seguimiento, los criterios de
selección determinaron en 10 de 25
individuos coincidencia de signos clínicos
de un SCH. Esa alta correlación entre los
hallazgos del PRIM y el examen clínico
corrobora los resultados de estudios
anteriores.
La alta tasa de deserción observada en
esta investigación fue resultado de la
política industrial del período, pero un
número mayor de deserciones se registró
entre quienes padecían un SCH. El
hecho de que el PRIM haya detectado 10
de los 25 sujetos con SCH clínicamente
manifiesto demuestra una sensibilidad
bastante baja, que podría haber sido más
alta si sólo se hubieran considerado los
padecimientos referidos por el paciente.
Los resultados de la cohorte deben ser
cuidadosamente interpretados debido al
reducido número de participantes; sin
embargo, pueden servir como antecedente para el desarrollo de nuevos
estudios de validación del cuestionario.
EVENTOS CIENTIFICOS http://www.siicsalud.com
Congresos auspiciados por SIIC
SIIC auspicia oficialmente congresos, simposios y acontecimientos científicos de interés para los profesionales de la salud iberoamericanos. Para realizar su tarea de divulgación, celebra acuerdos de cooperación con las instituciones organizadoras de los
eventos. Los congresos que solicitaron la presencia de corresponsales médicos de SIIC se acompañan con un círculo (l).
Año 2001
II Hemasur - XV Congreso Argentino de Hematología - I
Congreso de Enfermería Hematológica.
31 de octubre al 3 de noviembre. Mar del Plata, Buenos
Aires, Argentina.
LXXII Congreso Argentino de Cirugía.
5 al 8 de noviembre. Buenos Aires, Argentina.
XIX Simposio de la Fundación de Quimioterapia. Innovadoras
Terapias del Cáncer para el Futuro.
7 al 10 de noviembre. Nueva York, EE.UU.
XIV Curso de Enfermedades Hepatobiliares.
16 al 17 de noviembre de 2001. Coimbra, Portugal.
III Congreso de la Sociedad Europea de Cirugía Genital
Masculina (ESMGS).
22 al 24 de noviembre. Barcelona, España.
Biología de las Células Beta en el Siglo XXI.
26 al 28 de noviembre de 2001. Bethesda, Maryland, EE.UU.
XVII Simposio de la Asociación de Físicos de Hospitales
Belgas.
30 de noviembre al 1 de diciembre. Bruselas, Bélgica.
V Reunión de la Asociación Cardiovascular Siria.
31 al 2 de noviembre de 2001. Damasco, Siria.
XII Congresso Brasileiro de Infectologia.
2 al 5 de diciembre. Rio de Janeiro, Brasil
Año 2002
ECR 2002 – Congreso Europeo de Radiología.
1 al 5 de marzo. Viena, Austria.
XXVIII Congreso Nacional de Pediatría Morelia 2002.
26 al 30 de abril. Morelia, Michoacán, México.
IUPHAR XIV Congreso Mundial de Farmacología.
7 al 12 de julio de 2002. San Francisco, California, EE.UU.
XII Congreso Mundial de Psiquiatría.
24 al 29 de agosto. Yokohama, Kanagawa, Japón.
VII Congreso Argentino de Virología.
23 al 25 de setiembre. Buenos Aires, Argentina.
V Congreso Internacional de Neuroendocrinología.
7 y el 11 de setiembre. Bristol, Reino Unido.
~
Las consultas relacionadas con esta sección deben remitirse a
Directora PEMC-SIIC, Casilla de Correo 2568, Correo Central
C1000WAZ, Buenos Aires, Argentina. Para información complementaria sobre estos u otros congresos auspiciados por SIIC, comunicarse por email: [email protected]. Mencionar a esta sección como fuente informativa.
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