El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites

Anuncio
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 201
El funcionamiento limítrofe y la ampliación
de los límites de la analizabilidad
* Judith Goldschmidt
Todos los pensadores psicoanalíticos post-freudianos que han trascendido,
han dejado un legado que transformó al psicoanálisis con algún hito creando un antes y un después. En el caso de Green fue la ampliación de los límites de la analizabilidad a través de su conceptualización del funcionamiento
limítrofe lo que significó un hito. La dificultad para aplicar el método psicoanalítico clásico a ciertos pacientes lo llevó mucho más allá de una reconsideración de la psicopatología: provocó una reformulación de la teoría. Es
decir, que el concepto de fronterizo ha dejado de ser una categoría nosográfica para producir una teoría sobre el funcionamiento básico del psiquismo. No obstante, las teorizaciones de Green suelen tener un firme anclaje en la clínica. Un ejemplo particularmente esclarecedor de este
matrimonio fructífero entre la clínica y la teoría es “L’enfant de ca” (1973),
relato de una única entrevista realizada a un interno de un hospital psiquiátrico a comienzos de la década del 70. El entrevistado, un joven alto de cabellos largos, a quien llamaron Z, fue protagonista de una singular historia:
su nacimiento, producto de la relación entre su madre y el yerno, provocó
la separación entre ambas parejas, la de su madre y la de su hermana, resultando en el desmembramiento de la unidad familiar. Durante la entrevista,
estos hechos fueron lo primero que mencionó Z, quien les achacó la causa
de su padecimiento actual. Presa de un sufrimiento visible, el paciente, si bien
no se niega a hablar, tiene una dificultad marcada para expresarse. Su pensamiento parece perderse o confundirse, no puede asir las sugerencias del
entrevistador, adjudica la causa de todos sus males a la nefasta influencia de
la relación con su madre, mientras que, por el contrario, su padre biológico
es idealizado pero inalcanzable. La amalgama entre el relato, la desesperanza
que trasunta, y el lenguaje parco que denota la cuasi parálisis del proceso representacional causaron un alto impacto en sus interlocutores.
Z. deviene el caso princeps en cuyo estudio se hallan ya presentes las características referidas a los pacientes fronterizos que Green ha privilegiado
*
[email protected] / Argentina
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 202
202 |
Judith Goldschmidt
como objeto de estudio a lo largo del tiempo. Una de ellas es la estructura
edípica como bitriangulación: Z no tiene una situación libidinal con la madre
a la cual tiene que renunciar presionado por un padre con quien finalmente
se identifica, sustituyendo a la madre por otras mujeres. Sus padres se hallan divididos dentro suyo en una madre intrusiva a cuya influencia maléfica es imposible renunciar y un padre, ejemplo de bondad pero no disponible para él. Situación intrapsíquica cuya sombra cae sobre el régimen de
la afectividad de modo tal que vive en una permanente alternancia entre
angustias de intrusión y angustias de abandono. Se crea, entonces, un espacio siempre ocupado por el objeto, impidiendo la configuración de la ausencia. La consecuencia es la inhibición intelectual basada en el libre flujo
representacional (Green 1975). Como se verá, estamos ante un individuo
cuyo narcisismo apenas pudo ser construido, que necesita de otro para subsistir pero que es incapaz de estructurarlo de modo tal que pueda ser un
factor de desarrollo yoico. Es decir, que ya en el estudio de este caso se hallan en germen todas las características que Green desarrollará después en
relación a los pacientes no neuróticos y que le permitirá ampliar sensiblemente el panorama teórico clínico del psicoanálisis.
Si bien Z fue un caso extremo, mostraba que, en pacientes similares, lo
que se daba por sentado en los neuróticos era en ellos inexistente: no había
aquí alguien cuyo inconsciente pudiera hacerse inteligible a través del libre
flujo de sus representaciones con un analista cuya presencia fuera apenas
notable. La atmósfera del sueño recreada en la sesión imaginada por Freud
ya no era funcional. El paciente capaz de poblar ese tipo de sesión debía ser
creado. Había que pensar un nuevo modelo para sustituir aquel nacido de
la primera tópica consistente en sueño, relato del sueño, interpretación. El
relato del sueño que lleva a la interpretación de la otra escena supone un
trabajo de elaboración pulsional ya realizado. La imposibilidad de realizarlo
deja como alternativa la tendencia a la descarga pulsional directa. Se le impone entonces a nuestro autor un cambio de paradigma: sueño, relato del
sueño, interpretación tendrá que ser sustituido por la disyuntiva: pulsión
en forma de descarga directa o elaboración representativa, inspirado en la
segunda tópica (Green, 1996). Pero Green no deja librada la idea de la elaboración psíquica de la pulsión a la imaginación del interlocutor. Crea una
teoría general de la representación en la cual se presenta de diferentes maneras de acuerdo al recorrido que va haciendo desde su punto de partida en
el soma hasta su llegada al contacto con el objeto y con el mundo externo.
A nuestras conocidas representación de cosa y representación de palabra,
Green le agrega el concepto de representante psíquico de la pulsión. Lo describe como una primera instancia de la pulsión en contacto con el psiquismo,
primera instancia que no se presenta como representación figurativa sino
REVISTA DE PSICOANÁLISIS | LXIX | N° 1 | 2012
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 203
El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites de la analizabilidad
| 203
como expresión de una excitación somática que se manifiesta en forma de
tensión psíquica. Es el representante de la fuerza pulsional en estado casi
puro. Para que esta fuerza adquiera sentido deberá ligarse a la representación de cosa que le otorgará figurabilidad y, en el paso siguiente, a la representación de palabra que le permitirá la comunicación con el otro semejante y el paso a la acción en el mundo de los objetos (Green, 1994).
Uno de los supuestos de valor clínico que se desprende es considerar que
en el caso de los pacientes como Z o fronterizos similares, el trabajo de elaboración representativa no ha podido completar las instancias de ligadura
requeridas quedando el representante psíquico de la pulsión como la manifestación pulsional provocadora de una tensión psíquica que busca alivio
inmediato. Habrá que encontrar la manera de transformar la urgencia en
espera reflexiva.
Las implicancias de estos desarrollos no son menores. Ya queda claro que
el objetivo inicial del psicoanálisis de hacer consciente lo inconsciente es
insuficiente y necesita ser ampliado. También invita a pensar que así como
no hay un estatuto único para la representación, tampoco los objetivos terapéuticos pueden pensarse como homogéneos sino dependientes de las
problemáticas psicopatológicas y del campo creado entre analista y paciente
alrededor de su abordaje. En los casos tratados por Green, la cuestión del
nivel de desarrollo o de la destrucción del mundo imaginario y del pensamiento ocupa un papel de primera figura a la hora de encarar un tratamiento.
Hablar de hacer consciente lo inconsciente frente a un psiquismo con déficit en la instalación de la represión resulta inadecuado o por lo menos
prematuro. En este punto se plantea el siguiente problema: si el encuadre
psicoanalítico fue creado para hacer consciente lo inconsciente haciendo
desaparecer, dentro de lo posible, la presencia del analista para que su influencia en el libre fluir de las representaciones del paciente sea mínima, en
el caso de personas cuyo fluir representacional es sustituido por vacíos causantes de angustia, habrá que introducir variaciones que permitan percibir
lo que no se puede representar. El analista desaparecido deberá ceder su
lugar a un analista de presencia perceptible. La ausencia de representaciones será reemplazada por la percepción del analista, percepción que no solo
se refiere a lo visible sino también a lo audible. Ya no se trata de ubicar el
deseo inconsciente sino de generar un aparato psíquico deseante. Para ello,
el objetivo del analista será crear el espacio y la capacidad productora de
representaciones. Partiendo de una estructura en la cual prima el mecanismo
básico de la escisión, la tarea principal del analista consistirá en una tarea
de religazón de los trozos del discurso que en él se hallan desperdigados.
Se trata, en una primera instancia, de “un trabajo que para ser eficaz, debe
ser superficial”. (Green, 1979, p. 152) En esta instancia las intervenciones
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 204
204 |
Judith Goldschmidt
analíticas se limitarán a comentar los dichos del paciente trabajando preferentemente con los términos conscientes relacionando sus distintos aspectos entre sí en busca de su sentido preconsciente. Se espera constituir así
un preconsciente que opere como filtro entre consciente e inconsciente para
que ya no sea necesario recurrir a mecanismos extremos previniendo incursiones crudas de contenidos inconscientes. Si la tarea prospera, habiéndose ligado lo desligado, el analista podrá intervenir interpretando, recuperando entonces su función originaria. En el trabajo con pacientes
fronterizos la contratransferencia asume un rol protagónico ya que será tarea
prioritaria del analista realizar, con su propio aparato de pensar, las elaboraciones psíquicas tan dificultosas para el analizando. Para ello, deberá superar en muchas ocasiones las mismas sensaciones de capacidad de reacción superada y de inhibición intelectual que suelen duplicar en el analista
las vivencias de su paciente.
De lo dicho hasta aquí se desprende que la ampliación de las fronteras
psicopatológicas y de la metapsicología se acompaña en Green de una ampliación de la concepción de un encuadre clínico que pasa de una situación
estandarizada a otra confeccionada más a la medida de los padecimientos
subjetivos de las personas.
Desde este punto de partida se generan en Green ramificaciones cuyas
consecuencias van mucho más allá de la ampliación de los límites de la psicopatología. Se ampliaron las posibilidades de pensar el psicoanálisis desde
otras ópticas. Dentro de su teorización, hay un basamento que recorre toda
su obra: la teoría de las pulsiones y su ligazón con lo corporal. Este es un
axioma que tiene un protagonismo siempre presente.
¿Que tiene de novedosa la teoría pulsional tal como la encara Green?
En un primer acercamiento podría pensarse que no dice nada que no haya
dicho Freud cuya palabra es un referente permanente dentro de su obra,
pero, ¿es así? Green, partiendo de su experiencia con pacientes no neuróticos, parece haber querido llegar a las instancias últimas de lo que diferencia a las personas bajo los influjos pulsionales. Como Freud, concluye
que el trabajo de ambas pulsiones llevado al límite de lo más básico consiste en la tarea de ligar y desligar. Estos términos, si bien son correctos,
no alcanzan a configurar descriptivamente su alcance clínico. Por lo tanto,
Green concluye que su función específica no puede ser independiente de
su relación con los objetos (1988). ¿De qué objetos se trata? De la amalgama de lo que el yo encuentra en su ámbito relacional, tanto en el mundo
externo como en su mundo representacional. Estos objetos, para devenir
tales, deben ser investidos pero también podrán ser desinvestidos. ¿De qué
investidura estamos hablando? Se trata de un movimiento motorizado por
una fuerza que, partiendo de lo corporal, involucra al yo en un proceso
REVISTA DE PSICOANÁLISIS | LXIX | N° 1 | 2012
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 205
El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites de la analizabilidad
| 205
de apropiación dirigido no solo a los objetos de sus vínculos sino también
a las tareas, fantasías, y anhelos que le deparen algún tipo de satisfacción.
Es decir, se objetaliza lo ya-ahí, pero también lo que el propio yo crea a
partir de sus experiencias vinculares. No solo la obra literaria sino la lectura y no solo la lectura sino el placer de leer. Mientras la ligazón-objetalización da cuenta del enriquecimiento del psiquismo, el concepto de
desobjetalización refiere a pulsiones de destrucción. Si bien la ligazón solo
puede completar su labor conjuntamente con la desligazón, tal como ocurre con el trabajo de pensamiento cuando es necesario desligar parte de
lo anterior para que nuevas ideas hallen un lugar, hablar de desligadura
implica considerar no solo su aspecto desestructurante sino también el
contrario. En cambio, la desobjetalización de Green (1984) refiere predominantemente a la destructividad: desobjetalizar, como su nombre lo
indica, significa retirar la cualidad objetal, no se trata de un retiro que
puede dar lugar a una sustitución. Su predominio indica el camino hacia
la pobreza psíquica donde reina el vacío: la depresión esencial, el pensamiento operatorio, tendencia hacia el narcisismo cero. Estos temas llevan a reflexionar sobre la importancia adquirida por lo negativo en el
pensamiento greeniano. Es este tal vez el aspecto más difícil de captar dentro de sus propuestas.
Lo que pulsa y motoriza al aparato psíquico en dirección hacia la satisfacción pulsional es, como se ha visto, un axioma de base. No obstante, la
direccionalidad y el objetivo hacia el cual se dirige no son unívocos. ¿Que
quiere decir esto? Que en determinadas condiciones, lo que originariamente
fue una meta pulsional puede negativizarse (Tal como ocurre en la anorexia donde el hambre se transforma en un ideal a satisfacer). Bajo el imperio de la no tolerancia hacia la alteridad del otro, no solo se renuncia a la
satisfacción que este pudiere otorgar sino que se erige en ideal la capacidad
de prescindir de él; meta del narcisismo negativo, que comienza por anular al objeto y termina anulando al propio yo. Dice Green:
“El ideal es el tipo mismo del trabajo de lo negativo que se instaura como
modo de satisfacción cuando la pulsión no es satisfecha… La idealización aparecerá no solo como negativización de la satisfacción pulsional
sino como tentativa de repositivización, es decir, restablecimiento omnipotente de la desinvestidura, como modalidad desesperada de lucha contra los efectos destructores de la no-satisfacción. Esta no se conforma
con revertir el deseo conservando el objeto, sino que, desembarazándose
del objeto cree poder realizar la mira de liberarse de un deseo cuya satisfacción depende demasiado de la exclusiva buena voluntad del objeto”
(1993, pp. 105 y 111).
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 206
206 |
Judith Goldschmidt
Pensar, como propone Green, que las defensas pueden pulsionalizarse
transformando el propósito para el cual fueran creadas en su contrario, reubica la noción de yo de manera tal que, lejos del yo de funciones de la Ego
psychology, aunque tampoco sede de desconocimiento como el yo lacaniano,
pierde gran parte del poder que se le supone como intermediario entre la
realidad y las pulsiones.
La posibilidad de negativización ha enriquecido el horizonte de este
pensamiento teórico otorgándole una flexibilidad que tiene importantes
consecuencias clínicas. Cabe consignar que lo negativo en el pensamiento
de Green es complejo ya que cambia de formato de acuerdo a las necesidades de su reflexión definiéndose a veces, como en el caso de lo inconsciente, en aquello que se oculta detrás de lo visible, en otros adquiere la
forma de mutar en lo contrario como cuando la meta de la satisfacción
pulsional es buscada en lo que originariamente fue causa de insatisfacción o de frustración. Más importante aún es que estas formas de lo negativo pueden ser estructurantes o desestructurantes. Lo negativo es parte
constitutiva del yo, como lo prueban los mecanismos de defensa, los sueños, la posibilidad de abstracción en el pensamiento etc. Tal vez el mejor
ejemplo de lo negativo como estructurante en un caso y desestructurante
en otro sea la alucinación negativa de la madre. Tal como la describe Green
(1995), la alucinación negativa consiste en no percibir algo perceptible
en el campo de la atención sensible del yo, sea en el orden de la realidad
o en el orden representacional.
Cuando la relación madre-hijo ha sido satisfactoria, llegado el momento
de la separación mediante el reconocimiento de la diferencia sujeto-objeto,
el espacio representacional, hasta ese momento íntegramente ocupado por
el objeto fusional, objeto primario, sufrirá un borramiento pasando de ser
figura a ser fondo. Se constituye así en un espacio vacío, estructura encuadradora (Green, 1982) que conserva la afectividad materna pero alucina
negativamente su figura para dar lugar a las sustituciones que se irán sucediendo a lo largo de la vida.
El encuadramiento así producido suele pasar desapercibido a menos que
se produzcan experiencias que interfieran en su constitución, tal como ocurre en “el complejo de la madre muerta” (1980), en el cual fracasa el intento de separación con la madre. Ya no habrá entonces, posibilidad de ligarse a nuevos objetos bajo la protección de un marco encuadrante, sino
que el hijo permanecerá invistiendo eternamente al objeto madre desaparecido afectivamente. Los objetos investidos con posterioridad tendrán las
mismas características que el objeto primitivo. El mecanismo de la sustitución es débil, volviéndose, en definitiva, siempre al objeto primitivo: falta
el espacio vacío de la alucinación negativa de la madre como posibilitador
REVISTA DE PSICOANÁLISIS | LXIX | N° 1 | 2012
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 207
El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites de la analizabilidad
| 207
de una vida psíquica más satisfactoria. Pasamos así de un espacio vacío estructurante a otro tipo de vacío producido por una carencia en la estructuración del psiquismo. ¿Cómo se produce esto?
La constitución de un espacio negativo propio como destino de las representaciones investidas por el yo incipiente corresponde a la constitución del narcisismo primario. Su ausencia trae consigo un vaciamiento narcisista precisamente porque al carecer de un espacio propio, el sujeto tiende
a recaer una y otra vez en la situación fusional con el objeto primario cuya
pérdida revive. Este movimiento resulta en el sentimiento de vacío, característico de las depresiones de los fronterizos.
Estas son algunas de las ideas de Green que han contribuido a la ampliación del espectro de lo pensable en el psicoanálisis contemporáneo.
RESUMEN
Este trabajo se propone sintetizar aquellos aportes de Green que han producido un cambio significativo en la concepción del psicoanálisis desde la teoría y desde la clínica.
Partiendo de la impactante entrevista con Z., paciente hospitalario que dramatiza el padecimiento psíquico de un no-neurótico, se van desplegando las ideas que configuran un
nuevo enfoque del psicoanálisis. La posibilidad o no de representar deviene factor primordial: prueba de la capacidad de elaboración pulsional. De ella depende la creación de
la represión, que separa los espacios psíquicos según su grado de consciencia. Cuando lo
representacional no cumple con su cometido, el objetivo psicoanalítico de hacer consciente lo inconsciente deviene insuficiente. Se amplían los objetivos de la cura adaptándose a la problemática particular del sujeto, problemática que, en caso de requerirlo, implicará también cambios en el encuadre.
La cuestión de los objetos en su relación con las pulsiones implicó nuevas reflexiones definidas por los conceptos de objetalización y desobjetalización que explican sus ideas acerca
de las diferentes amalgamas posibles entre lo más subjetivo de cada uno, la pulsión, y lo
que el medio objetal ofrece.
Por último se hace alusión al trabajo de lo negativo como posibilidad transformacional
de distintos aspectos del psiquismo.
DESCRIPTORES: BORDERLINE / ANALIZABILIDAD / REPRESENTACIÓN / PSICOANALISTA /
ENCUADRE / LIGAZÓN / DESOBJETALIZACIÓN / LO NEGATIVO / GREEN ANDRÉ.
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 208
208 |
Judith Goldschmidt
SUMMARY
Borderline functioning and extension of the limits of analyzability
The author proposes to summarize contributions by Green that have produced a significant change in the conception of psychoanalysis, its theory and clinical practice. She takes
the moving interview with Z, a hospital patient, who dramatizes the psychic suffering of
a non-neurotic, to develop ideas that configure a new approach in psychoanalysis. The
ability to represent becomes a primordial factor: proof of the capacity for working through
the drive. On it depends the creation of repression, which separates psychic spaces according to their degree of consciousness. When the representational does not fulfil its
purpose, the psychoanalytic objective of making conscious the unconscious becomes insufficient. The objectives of the cure are extended, adapting themselves to the particular
problems of the subject. Problems that, if necessary, also involve changes in the setting.
The theme of objects in their relation to the drives led to new reflections defined by
concepts of objectalization and de-objectalization, which explain his ideas concerning the
different possible amalgamations between the most subjective in each subject, the drive
and what the object environment offers.
Finally, the author refers to the work of the negative as a possibility to transform different aspects of the psyche.
KEYWORDS: BORDERLINE / ANALYZABILITY / REPRESENTATION / PSYCHOANALYST /
SETTING / LINK / DE-OBJECTALIZATION / THE NEGATIVE / GREEN ANDRÉ.
RESUMO
O funcionamento limítrofe e a ampliação dos limites da analisabilidade
Este trabalho se propõe sintetizar aquelas contribuições de Green que produziram uma mudança significativa na concepção da psicanálise desde a teoria e da clínica.
Partindo da impactante entrevista com X, paciente hospitalar que dramatiza o padecimento
psíquico de um não-neurótico, vão se apresentando as ideias que configuram um novo enfoque da psicanálise. A possibilidade ou não de representar devém fator primordial: prova
da capacidade de elaboração pulsional. Dela depende a criação da repressão, que separa os
espaços psíquicos segundo seu grau de consciência. Quando o representacional não cumpre com a sua meta, o objetivo psicanalítico de tornar consciente o inconsciente passa a ser
insuficiente. Os objetivos da cura são ampliados adaptando-se à problemática particular do
sujeito. Problemática que, caso seja exigida, implicará também mudanças no enquadramento.
A questão dos objetos em sua relação com as pulsões implicou novas reflexões definidas
pelos conceitos de objetalização e desobjetalização, que explicam suas ideias sobre as diferentes amálgamas possíveis entre o mais subjetivo de cada um, a pulsão e o que o meio obREVISTA DE PSICOANÁLISIS | LXIX | N° 1 | 2012
10-Panel Tebaldi Goldschmidt_El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites 5/31/12 9:49 PM Page 209
El funcionamiento limítrofe y la ampliación de los límites de la analizabilidad
| 209
jetal oferece.
Por último, se faz alusão ao trabalho do negativo como possibilidade transformacional de
diferentes aspectos do psiquismo.
PALAVRAS CHAVE: BORDERLINE / ANALISABILIDADE / REPRESENTAÇÃO / PSICOANALISTA
/ ENQUADRAMENTO / LIGAZON / DESOBJETALIZAÇÃO /O NEGATIVO / GREEN ANDRÉ.
Bibliografía
Green, A. y Donet, J.L. (1973). L’enfant de Ca, Psychanalyse d’un entretien: la psychose
blanche. Paris, Minuit.
Green, A. (1975). El analista, la simbolización y la ausencia en el encuadre analítico en De locuras privadas. Buenos Aires, Amorrortu, 1990.
(1979) El silencio del psicoanalista en La nueva clínica psicoanalítica y la teoría de
Freud. Amorrortu Editores, Buenos Aires, 1993.
—— (1980) La madre muerta en Narcisismo de vida, narcisismo de muerte. Buenos
Aires, Amorrortu, 1986.
—— (1982) La doble frontera en La nueva clínica psicoanalítica y la teoría de Freud
Amorrortu Editores, 1993.
—— (1984) El objeto y la función objetalizante en La metapsicología revisitada, Eudeba, 1996
—— (1988) La pulsión y el objeto en La metapsicología revisitada.Eudeba, Buenos
Aires, 1996
—— (1993) Huellas de lo negativo en la obra de Freud en El trabajo de lo negativo,
Amorrortu Editores, Buenos Aires, 1995
—— (1994) Teoría en Interrogaciones Psicosomáticas bajo la dirección de Alain Fine
y Jaqueline Schaeffer. Amorrortu Editores, Buenos Aires, 2000
(1996) Repetición, Transferencia y Tiempo Conferencia pronunciada en U.B.A
en ocasión de recibir el título Honoris Causa en Zona erógena, revista de psicoanálisis y pensamiento contemporáneo. Buenos Aires, 1996
Descargar