10221885 11/04/2003 10:02 a.m. CULTURALES Page 5 | MARTES 4 DE NOVIEMBRE DE 2003 | EL SIGLO DE DURANGO | 5B “Don Juan Tenorio” atrapó al público durante dos horas y media por su interesante trama. Es una clásica de la temporada. DESVENTAJA | POCO PÚBLICO ACUDIÓ AL “RICARDO CASTRO” Estrenan “Don Juan Tenorio” La Compañía Estatal de Teatro de Durango tiene el reto de hacer una obra clásica reconocida Gerardo Gómez Cano Fotos: Juan Fco. Chávez | EL SIGLO DE DURANGO En el majestuoso escenario del Teatro “Ricardo Castro” el pasado fin de semana la Compañía Estatal de Teatro de Durango estrenó la puesta en escena de José Zorrilla, “Don Juan Tenorio”, bajo la dirección de Juan Manuel González, quien además protagoniza la historia junto a Karla Rubio, quien interpreta a Doña Inés. La función del sábado, que habría de comenzar a las 19:00 horas, inició 25 minutos después ante un público que no alcanzó a llenar ni la mitad de las butacas de la parte baja del recinto, pero que de inmediato se dejó seducir por la clásica obra de fama mundial. La obra empieza en la hostería de Butarrelli, en Sevilla, sitio en el que Don Juan Tenorio y Don Luis Mejía regresan para saber quién ganó una apuesta realizada hace un año; el objetivo era lograr más amores, engaños y muertes que el otro. Don Juan gana la apuesta y asegura a su contrincante que le quitará a su prometida, Doña Ana. Sin embargo, Don Gonzalo, el Comendador, padre de Doña Inés, oye eso y se enfada porque el Tenorio iba a casarse con su hija. Entonces prohíbe el matrimonio y quiere que su hija sea monja por lo que la lleva a un convento, pero Don Juan jura que se la robará. BUENA PRODUCCIÓN Todos los detalles de la producción estuvieron bien cuidados, desde el vestuario y maquillaje de cada personaje, hasta la escenografía que resultó bastante atractiva, no sólo por tener varios niveles o su semejanza a edificios de cantera propios de la época en que se desarrolla la trama, sino porque al tener ruedas en su base, permitió que con rápidos cambios de posición simulara otros sitios. Cada parte del escenario fue utilizada al máximo, desarrollaron varias escenas a gran altura, lo que resultó interesante para el espectador. El montaje tuvo un buen manejo TRASCENDENTE FICHA TÉCNICA Estilo irrepetible ■ OBRA: “Don Juan Tenorio” ■ AUTOR: José Zorrilla ■ DÍAS: 1 y 2 de noviembre ■ HORA: 19:00. ■ LUGAR: Teatro “Ricardo Castro” ■ PRODUCCIÓN EJECUTIVA: Fabricio Porras ■ DIRECCIÓN: Juan Manuel González ■ PARTE DEL REPARTO: Don Juan Tenorio: Juan Manuel González Don Luis Mejía: Fabricio Porras Doña Inés: Karla Rubio Brígida, Gastón: Érika Ramírez Doña Ana: Silvia Romero Butarelli: Arnoldo Martínez Ciuti: Jesús Alvarado Capitán Centerras: Jesús Díaz de León Rafael Avellaneda: Carlos Saravia La Tornera: Sandra Tena, Don Juan Tenorio y Don Luis Mejía, en plena batalla. Claudia Gallegos Madre Abadesa, Escultor: Isabel Guzmán Pascual: Arnoldo Martínez Don Diego: Fernando Manzanera Don Gonzalo de Ulloa: Santos Vega La escenografía constó de varios niveles, lo que permitió un mejor desarrollo de las escenas. de iluminación, aunque en algunas partes no cambió en el momento preciso. Cabe destacar que cada personaje estuvo a la medida de los actores, cuyas características físicas tenían el aspecto ideal. Si bien la entrega de cada uno se hizo presente, también es cierto que fue evidente que no todos tienen la misma experiencia, por lo que unos, sin pretenderlo, se lucen más. CÚMULO DE TALENTO En el caso de Doña Inés, que es un personaje fundamental, es desarrollado favorablemente aunque sin explotar matices. Don Juan Tenorio, por su parte, es realizado con mucho dominio escénico, pero tener más seguridad en el texto para jamás titubear, lo enriquecería en próximas presentaciones. Un par de mujeres realiza personajes de hombre, lo que les permite demostrar su capacidad, sobre todo al interpretar Las características físicas de cada actor fueron las ideales para su personaje. después personajes femeninos completamente opuestos. En “Don Juan Tenorio” el público comprobó la clásica frase que dice “no hay personajes pequeños”, pues algunos no tiene demasiadas líneas y seguramente quedarán en la mente de los asistentes. Durante las dos horas y media que duró la obra se volvió dinámica, pero eso no impidió que hubiera quienes miraran el reloj constantemente un tanto desesperados, sobre todo aquellos que se “perdieron” al no poner la atención adecuada a los versos que de por sí son un tanto complicados por el lenguaje utilizado. No cabe duda que “Don Juan Tenorio” es una buena producción, como hace mucho tiempo no se realizaba en Durango, en la que el público duranguense se percató del cúmulo de talento que existe en la localidad y que representa un orgullo. Todos los detalles de la producción estuvieron bien cuidados, para dar una buena función. El poeta y dramaturgo de origen español José Zorrilla y Moral nació en Valladolid en el año 1817 y falleció en Madrid en 1893. Desde muy joven fue aficionado a la literatura de autores como Walter Scott, F. Cooper, Chateubriand, Dumas y Víctor Hugo. A los 19 años se inició en su hacer literario frecuentando los ambientes artísticos y bohemios de Madrid. Se dice que Zorrilla es el mejor dramaturgo del Romanticismo español, desde el punto de vista nacional y tradicional. La España cristiana y monárquica dominan los valores de los héroes y de sus obras. Los personajes que creó son rebeldes y satánicos, pero siempre tienen una reconciliación al fin de la historia con el cielo y Dios. En “Don Juan Tenorio”, su máxima obra, consigue hacer de su personaje un arquetipo humano cuyas características difícilmente pueden ser imitables sin caer en la versión o en el plagio. La pareja protagónica derrocha amor ante las múltiples dificultades.