Despido objetivo por reducción de ventas La diferencia fundamental es económica, ya que en un despido objetivo, la indemnización serán 20 días por año trabajado y en un despido improcedente serán 45 días por año trabajado, pero los Tribunales son muy reacios a admitirlo, se precisa presentar un estudio riguroso, exhaustivo y muy minucioso de la evolución del negocio. Algunas notificaciones de este talante no son admitidas por Tribunales: "Muy Sra. mía: Debo comunicarle que esta empresa se ha visto en la necesidad de proceder a la extinción de contrato de trabajo por circunstancias de carácter objetivo, ya que en el último año, y en los meses transcurridos del actual, la farmacia, como usted muy bien conoce, ha visto reducidas sus ventas, por lo que su puesto de trabajo será amortizado a tenor del art. 52 del Estatuto de los Trabajadores." La respuesta del Tribunal fue meridiana: "Debo declarar y declaro nula la decisión extintiva llevada a cabo por la empresaria, condenándola a la readmisión inmediata de la empleada en el mismo puesto de trabajo y condiciones que regían con anterioridad a la extinción" (Tribunal Superior de Justicia de Galicia.). Con esta manera tan tosca de presentar una demanda no es de extrañar que el Tribunal la desestimara. La causa objetiva de despido basada en la necesidad de amortizar puestos de trabajo se ampara en alguno de estos tipos de causa: - causas económicas - causas técnicas - causas organizativas y productivas Jurisprudencialmente las causas económicas se dividen en dos tipos de criterios: a) Tribunales que defienden que deban existir pérdidas en la Cuenta de explotación y el Balance de la Oficina de farmacia. En este sentido, Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria de 5 de diciembre de 1994, Sentencia del Tribunal 1 Superior de Justicia de Murcia de 23 de octubre de 1995 y Sentencia del Tribunal Superior de Justicia con sede en Granada de 3 de julio de 1995, entre otras. b) Tribunales que consideran suficiente una simple reducción de beneficios en la Cuenta de Pérdidas y Ganancias y el Balance de Situación. En este sentido, Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León de 13 de febrero de 1996, Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de 4 de septiembre de 1996. El titular de la farmacia debe demostrar una situación de crisis actual, real y con entidad suficiente para justificar la amortización del puesto de trabajo. No se exige presentar un plan de viabilidad. Dicha amortización no contribuye por sí sola a la superación de la situación económica negativa y debe estarse al supuesto concreto. En este sentido, Sentencias de los Tribunales Superiores de Justicia, de 21 de marzo de 1995, de Castilla y León, de 18 de noviembre de 1995 y de 19 de octubre de 1995 de Andalucía y de 6 de octubre de 1995 y 23 de marzo de 1999 de Cataluña. No se admitirá si es un simple medio para lograr el incremento del beneficio empresarial. En cuanto a las causas técnicas, podemos concluir que se trata de innovaciones en la empresa que producen un desequilibrio en las prestaciones del contrato laboral. Debe acreditarse que se han realizado inversiones por parte del titular de la Oficina de farmacia que justifican la amortización del puesto de trabajo, siempre que sea una inversión inmediata. Desde este foro podrían ponerse como ejemplo las funciones de la robótica de la Oficina de farmacia que excluiría la manipulación del stock por parte de determinados empleados en el centro de trabajo. En este sentido, la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra de 24 de octubre de 1995 y del Tribunal Superior de Justicia de Granada de 20 de mayo de 2003. 2 Respecto a las causas objetivas organizativas y productivas. El titular debe demostrar que reorganiza los medios materiales que vacíen de contenido el puesto de trabajo que pretende amortizar o bien que se ha producido disfunción o descenso de clientes básicamente que por reducción del horario de la farmacia u otros que obligan a modificar o disminuir la producción haciendo obsoletos uno o varios puestos de trabajo. Deberá acreditar la causa-efecto entre la medida tomada y la disminución productiva. En este sentido la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura de 12 de septiembre de 1995. Con respecto a todas las causas debe acreditarse que la viabilidad futura de la Oficina de farmacia y el empleo se encuentran en peligro, aunque la situación económica no sea negativa y que las medidas adoptadas contribuyen razonablemente a superar dicha situación. En este sentido la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de 7 de abril de 1997. 3