PUNTO DE ACUERDO SOBRE PRESUNTAS IRREGULARIDADES EN EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL. RICARDO MONREAL ÁVILA, integrante de la LXI Legislatura del Congreso de la Unión, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 8, fracción II, del Reglamento del Senado de la República, presento ante esta Honorable Asamblea la siguiente proposición con Punto de Acuerdo, al tenor de la siguiente Exposición de Motivos. Una vez más el “escándalo nuestro de cada día” es la corrupción y las prácticas de opacidad, ahora en el Instituto Federal Electoral (IFE), siendo ésta una de las instituciones que en su accionar se encargan de promover los principios democráticos; pero lo paradójico es que no hay verdadera democracia sin ética pública, vocación de servicio, honestidad, responsabilidad, pulcritud, decoro y la transparencia a la que están obligados los funcionarios públicos en el ejercicio de sus funciones. Cuando hay una ausencia de estos principios y valores éticos en la administración pública existe un desencanto, desconfianza y recelo de la mayoría de la población hacia quienes ejercen los cargos públicos. Tal es el caso ahora, reitero, del IFE, quien ha entrado a la agenda de la discusión en las últimas semanas porque presumiblemente adquirió una propiedad en avenida Acoxpa No. 434, de la Ciudad de México de manera irregular. De entrada se optó por la adjudicación directa, sin contar con los elementos legales que fundaran y motivaran dicha decisión. A su vez, el 28 de marzo de 2011, se publicó en un diario de circulación nacional el informe de la Contraloría en el que destacó que en 2009, una de las dos áreas del edificio ubicado en Acoxpa No. 436, fue adquirida en 262.9 millones de pesos, sin embargo, el órgano de fiscalización subraya que la escritura No. 51617 de diciembre de 2007 consignó que las dos áreas del mismo edificio estaban valuadas en 45.1 millones de pesos. Esto quiere decir que se pagó el 583% más del valor real.[1] En esta tesitura es necesario señalar que en el mismo caso no se analizó la modalidad del arrendamiento financiero y se presentaron una larga lista de inconsistencias en los datos de la propiedad adquirida, por ejemplo, el avalúo del citado inmueble señaló que éste tenía una antigüedad de 3 años, no obstante la escritura pública 53,761 del 2 de diciembre de 2008 del Distrito federal afirma que en esa fecha el edificio tenía entre 29 y 33 años, por lo que la edificación tenía todavía un valor menor por la lógica de depreciación que sufren las propiedades en el transcurso del tiempo, además, el avaluó estableció el inmueble como propiedad individual, pero la escritura mencionada lo tiene registrado como régimen en condominio, lo que reduce más el valor del inmueble. Ello sin considerar que en el 2008 el IFE había invertido 41 millones de pesos en remodelaciones y ampliaciones, lo cual no fue descontado por el vendedor y el IFE, a través de su secretaría ejecutiva, no dijo nada aún cuando ello violaba el acuerdo JGE26/2008 del propio IFE que establece límites para estos rubros.[2] Asimismo, el notario público admitió que se omitiera información básica para un acto de compraventa de un bien inmueble previstos en la ley para dar certeza sobre la propiedad, como pagos al corriente de agua, predial, libertad de gravamen, entre otros. El notario, por supuesto, no lo hizo gratuitamente. Aceptó 12 millones de pesos por pagos por derechos de la escritura de compraventa, sabiendo que tratándose de un bien inmueble de la Federación está exento del Impuesto sobre Adquisición de Bienes Inmuebles que equivale a más del 90% de la cantidad recibida por el fedatario público. Así el IFE aceptó quedarse con un adeudo de más de 4 millones del impuesto predial del propietario anterior.[3] Las sospechas, suspicacias y dudas en torno a este caso son más profundas e inquietantes ya que el señor Gregorio Guerrero, contralor general del IFE, ha dicho que esta irregularidad en la adquisición del inmueble había sido denunciada en septiembre de 2010 por el propio Edmundo Jacobo, secretario ejecutivo del IFE, pero extrañamente éste último dio un giro de 180 grados en sus afirmaciones y ahora se torna en garante del asunto y arguye que no hay prácticas de opacidad en la compra del edificio. Pareciera ser que trata de esconder algo o encubrir a alguien. El fraude electoral del 2006, bajo la presidencia de Luis Carlos Ugalde, minó la confianza ciudadana en el IFE y lo colocó en la peor situación de sus dos décadas de existencia, que a la fecha no ha logrado superar. Esta situación se complica aún más porque estamos en la antesala de que inicie formalmente el proceso electoral federal del 2012 y el IFE tiene un consejo general “mocho”, con un deterioro en su credibilidad, con sospechas de corrupción derivadas por la creación de un "guardadito" estimado en más de 350 millones de pesos y que se negó a devolver y, ahora más reciente, este escándalo de la adquisición de un inmueble a precios exagerados. Bajo ninguna circunstancia el órgano electoral del Estado mexicano encargado de organizar los comicios electorales a nivel federal puede llegar en esas circunstancias a las elecciones que se avecinan. En suma, el combate a la corrupción, al abuso en el ejercicio de las funciones y cualquier práctica de opacidad en la que incurra todo servidor público, se presenta como una amenaza para la sociedad y un obstáculo para el desarrollo de la democracia, de ahí que hoy más que nunca la lucha contra estos flagelos se erija como uno de los soportes fundamentales para construir el Estado de derecho que tanto anhelamos. Derivado de lo anterior, someto a consideración de esta Honorable Asamblea el siguiente Punto de Acuerdo. Primero.- Que esta Soberanía exhorte al Instituto Federal Electoral a que envíe un informe detallado sobre las supuestas irregularidades en la adquisición del edificio en avenida Acoxpa No. 434 de la Ciudad de México. Segundo.- Que esta Soberanía Cite a comparecer al Consejero Presidente del Instituto Federal Electoral sobre los presuntos casos de corrupción en la adquisición del inmueble de Acoxpa No. 434. Tercero.- Que esta soberanía pida una auditoria externa en el Instituto Federal Electoral a fin de esclarecer los presuntos casos de corrupción en los que ha incurrido esta institución. Dado en el salón Legislativo del Senado de la República, a los 3 días del mes de mayo del 2011. [1] “Preparan sanciones en el IFE”, EL UNIVERSAL, 28 de Marzo de 2011; http://www.eluniversal.com.mx/primera/36548.html [2] Ver Villanueva Ernesto. “Complot contra el IFE”, 17 de abril del 2011; http://www.e-puebla.com/portal/index.php?option=com_k2&view=item&id=7104:%C2%BFcomplot-contra-elife?&Itemid=334 [3] Ibíd.