2 de marzo de 2001 Traducción no oficial CONVERGENCIA DE PUNTOS DE VISTA SOBRE LAS COMISIONES NACIONALES DE COOPERACIÓN CON LA UNESCO Comparación de las posiciones mantenidas en la 160ª reunión del Consejo Ejecutivo por el Equipo Especial sobre la UNESCO en el siglo XXI, la Dependencia Común de Inspección de las Naciones Unidas y la Secretaría de la UNESCO I. INTRODUCCIÓN 1. El Consejo Ejecutivo, en su 160ª reunión celebrada en París del 9 al 25 de octubre de 2000, trató algunas cuestiones estratégicas relacionadas con la misión global de la UNESCO en los albores del siglo XXI, así como los medios para reforzar la eficacia y credibilidad de la Organización. Aunque el Consejo no inició ningún debate específico sobre las Comisiones Nacionales de Cooperación con la UNESCO, se mencionó en varias ocasiones durante las deliberaciones e intervenciones que tuvieron lugar a lo largo de toda la reunión el papel esencial que éstas desempeñan en la elaboración, ejecución y evaluación del Programa de la Organización. 2. Uno de los resultados importantes de la reunión fue que tres órganos diferentes -el Equipo Especial sobre la UNESCO en el siglo XXI, del Consejo Ejecutivo, la Dependencia Común de Inspección de las Naciones Unidas y la Secretaría de la UNESCO- destacaron la importancia de las relaciones entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales en sus respectivos documentos dedicados a la estrategia futura de la Organización y a las reformas que se han de realizar en materia de gestión y descentralización. Los puntos de vista de cada uno de estos tres órganos se expusieron en los documentos siguientes: - Informe final del Equipo Especial sobre la UNESCO en el siglo XXI - “Hacia la paz y la seguridad en el siglo XXI: Retos y oportunidades que plantea la humanización de la mundialización” (160 EX/48 y 160 EX/48 Partes 6 y 7 Rev.) - Examen de la gestión y la administración en la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (JIU/REP/2000/4), preparado por la Dependencia Común de Inspección de las Naciones Unidas (160 EX/41). - - Informe del Director General sobre el proceso de reforma y calendario de aplicación, comprendidos los aspectos financieros pertinentes y sus repercusiones en los futuros presupuestos de la Organización (160 EX/6 Parte III: Descentralización y 160 EX/INF.10). -2- 3. Nos hallamos de hecho ante uno de los pocos casos en que documentos preparados por un órgano interno de la Organización, un observador exterior y la Secretaría se centran simultáneamente en la cuestión de las Comisiones Nacionales y admiten la singularidad de su importante contribución a la labor de la Organización. 4. Aunque en los susodichos documentos se traten los distintos grupos de cuestiones desde perspectivas diferentes, una lectura completa de todos ellos permite destacar cuáles son los principales ámbitos de convergencia de sus respectivos análisis sobre las Comisiones Nacionales. Por consiguiente, reviste mucha importancia comparar las similitudes y disparidades de los puntos de vista expresados en esos documentos para establecer qué valor atribuyen los tres órganos mencionados a los “interlocutores privilegiados” de la Organización, así como para saber qué “soluciones” proponen para mejorar el actual statu quo de las relaciones entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales. II. ¿CÓMO SE DEFINEN LOS MANDATOS Y LAS FUNCIONES DE LAS COMISIONES NACIONALES CON RESPECTO A LA UNESCO? 5. En todos los documentos mencionados se ha tratado de definir las funciones y mandatos de las Comisiones Nacionales con respecto a la UNESCO. El Equipo Especial sobre la UNESCO en el siglo XXI (que en lo sucesivo denominaremos Equipo Especial) trata esta cuestión en el contexto de sus reflexiones sobre la visión estratégica de la UNESCO y las ventajas comparativas que ofrece la Organización dentro del sistema de las Naciones Unidas. Al mismo tiempo que insiste mucho en la importancia que, en la era de la mundialización, reviste el hecho de hacer participar a la sociedad civil en la labor de la UNESCO, el Equipo Especial considera que las Comisiones Nacionales son “vínculos esenciales” de la Organización “con la sociedad civil” y órganos que proporcionan “una visión excepcional de las aspiraciones del público” en general. Asimismo, el Equipo Especial reconoce que las Comisiones Nacionales son órganos “inconfundiblemente nacionales” que pueden ayudar a la UNESCO a cumplir eficazmente su mandato en los Estados Miembros. 6. Tanto la Dependencia Común de Inspección de las Naciones Unidas (DCI) como la Secretaría se refieren a la función y el mandato de las Comisiones Nacionales en el contexto de la descentralización. La DCI hace un análisis general de los mandatos de las Comisiones Nacionales señalando que deberían servir de relevo principal en la labor de la UNESCO en el plano nacional. La DCI se refiere a la función fundamental de las Comisiones Nacionales que consiste en ejecutar una serie de actividades del programa de la UNESCO, y destaca que la contribución de las Comisiones Nacionales se debe considerar un indicador importante en la evaluación de las Oficinas fuera de la Sede. 7. En los documentos preparados por la Secretaría, se menciona sistemáticamente a las Comisiones Nacionales como interlocutores “constitucionales” o “principales” de la Organización para la preparación, ejecución y evaluación de su Programa. También se mencionan otras tareas encomendadas a las Comisiones Nacionales en la Carta de las Comisiones Nacionales de Cooperación con la UNESCO (adoptada en 1978 en la 20ª reunión de la Conferencia General), por ejemplo las de consulta, información y enlace. Sobre todo, la Secretaría hace gran hincapié en el hecho de que las Comisiones Nacionales son órganos nacionales responsables ante sus respectivos gobiernos. -3- 8. RESUMEN: El Equipo Especial presenta una visión teórica global de la función de las Comisiones Nacionales. Aunque señala que estos órganos sirven a la UNESCO de ventana abierta a la sociedad civil, y a los órganos de consultación asociados con la elaboración del programa por el medio de consultaciones regionales, el Equipo Especial no profundiza su reflexión sobre otros aspectos importantes de las Comisiones Nacionales (por ejemplo, su condición de ejecutoras del Programa de la UNESCO). No obstante, la posición del Equipo coincide con la de la Secretaría por lo que respecta al carácter “inconfundiblemente nacional” de las Comisiones Nacionales, que determina concretamente que no sean responsables ante el Director General. La DCI y la Secretaría tienen una posición común sobre la función de las Comisiones Nacionales en la ejecución del Programa y ambos órganos hacen hincapié en el hecho de que esta función debe mantenerse en el futuro. III. ¿QUÉ DIFICULTADES SE HAN SEÑALADO EN LAS RELACIONES ENTRE LA UNESCO Y LAS COMISIONES NACIONALES? 9. El Equipo Especial se centra principalmente en las dificultades con las que tropieza la mayoría de las Comisiones Nacionales en sus respectivos países. Una de esas dificultades estriba en el desfase existente entre las responsabilidades que se les encomiendan y sus capacidades reales. La insuficiencia de recursos financieros y humanos les suele impedir que funcionen con plena eficacia. En algunos países, las Comisiones Nacionales son órganos de índole “excesivamente gubernamental” y por ello pierden su vínculo esencial con la sociedad civil. 10. La DCI trata algunos de los problemas que han surgido entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales en el contexto de la descentralización. La DCI considera que la insuficiente cooperación entre las Comisiones Nacionales y las Oficinas fuera de la Sede de la UNESCO representa un inconveniente para la descentralización que deriva de la duplicación de sus funciones. La DCI deplora que los interlocutores locales suelan confundir a las Comisiones Nacionales con las Oficinas fuera de la Sede y crean que representan oficialmente a la UNESCO en sus respectivos países. El hecho de que las Comisiones Nacionales dependan por lo general de un solo Ministerio se presenta como otro inconveniente frecuente porque les crea algunas dificultades para cumplir con su cometido de abarcar todas las esferas de competencia de la UNESCO. La DCI también deplora que las Oficinas fuera de la Sede de la UNESCO no siempre informen adecuadamente a las Comisiones Nacionales de sus actividades. 11. Habida cuenta de que no era un objetivo primordial de la Secretaría en esta etapa el análisis de las dificultades existentes en las relaciones entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales, esta cuestión se abordó de manera más bien limitada en los documentos que presentó sobre la descentralización. En esos documentos se alude implícitamente a la cuestión de la duplicación de las funciones de las Oficinas fuera de la Sede de la UNESCO y de las Comisiones Nacionales, si bien no se hacen comentarios al respecto. 12. RESUMEN: El Equipo Especial sólo aborda las dificultades que impiden a las Comisiones Nacionales desempeñar su papel de vínculo sólido entre la Organización y la sociedad civil, es decir sólo se refiere a las dificultades relacionadas principalmente con sus capacidades técnicas y operativas. La DCI plantea una de las cuestiones fundamentales de la descentralización, a saber, la duplicación institucional y funcional de las tareas de las -4- Comisiones Nacionales y de las Oficinas fuera de la Sede; y su evaluación de la situación coincide en parte con las preocupaciones manifestadas por la Secretaría. IV. ¿QUÉ PROPUESTAS SE PUEDEN FORMULAR PARA REFORZAR LAS CAPACIDADES DE LAS COMISIONES NACIONALES Y MEJORAR SU PARTICIPACIÓN EN LA EJECUCIÓN DEL PROGRAMA? 13. El Equipo Especial destaca que se necesitan con urgencia medidas para “clarificar la función de las Comisiones Nacionales”. También estima que “contar con Comisiones Nacionales sólidas e intelectualmente pujantes debe ser uno de los objetivos de la UNESCO”, y para alcanzarlo pide a la Secretaría que adopte una serie de medidas para reforzar su capacidad operativa. Recomienda en especial a la Secretaría que: • despliegue esfuerzos sostenidos y a largo plazo para ofrecer asistencia técnica y profesional, cuando sea necesario, a fin de ayudar a los Estados Miembros en su intento de fortalecer sus respectivas Comisiones Nacionales; • prepare un compendio de las mejores prácticas de las Comisiones Nacionales, que comprenda, en particular, las importantes relaciones mantenidas entre las Comisiones Nacionales y las ONG como instrumentos clave para llegar a la sociedad civil; • dé cuenta, por conducto del informe del Director General sobre la ejecución del Programa de la UNESCO, de la asistencia técnica y profesional que se haya brindado a las Comisiones Nacionales. (Nota: El Consejo Ejecutivo hizo suyas todas estas recomendaciones del Equipo Especial en su Decisión 160 EX/9.6.) 14. La DCI estima que la definición de las funciones respectivas de las Comisiones Nacionales y las Oficinas fuera de la Sede de la UNESCO conducirá a mejorar las relaciones entre unas y otras. Según la DCI, los Estados Miembros y la Secretaría deben compartir responsabilidades en la tarea de reforzar las capacidades de las Comisiones Nacionales. Por consiguiente, recomienda que: • el Consejo Ejecutivo inste a los Estados Miembros a contribuir a reforzar la capacidad de las Comisiones Nacionales para que cumplan sus importantes funciones; • la Secretaría contribuya a fortalecer la capacidad de las Comisiones Nacionales y alentar una participación más eficaz de las mismas en la elaboración y ejecución de los programas y proyectos en el plano nacional. (Nota: El Consejo Ejecutivo, en su Decisión 160 EX/8.5.3, invitó al Director General a que tenga en cuenta cuando proceda las recomendaciones pertinentes de la DCI.) 15. La Secretaría estima que, para mejorar aún más las relaciones entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales, se debe reforzar la cooperación entre éstas y las Oficinas fuera -5- de la Sede haciendo uso de su buena voluntad y de la celebración de consultas entre ellas. 16. La Secretaría destaca también la necesidad de establecer un equilibrio institucional entre los dos órganos: las Comisiones Nacionales son órganos responsables ante sus respectivos gobiernos, mientras que las Oficinas fuera de la Sede rinden cuentas al Director General. Las Comisiones Nacionales podrían intensificar su participación en la ejecución del Programa estableciendo relaciones contractuales con la Secretaría, por conducto de la Oficina fuera de la Sede correspondiente. En ese caso, las Comisiones Nacionales serían responsables de la utilización de los fondos de la UNESCO ante todos los Estados Miembros por intermedio de la Secretaría. 16. RESUMEN: Hace ya años que la Secretaría viene aplicando dos de las tres recomendaciones formuladas por el Equipo Especial, a saber: (1) la Secretaría siempre ha dispensado, en la medida de sus recursos limitados, toda la asistencia intelectual y técnica posible a) capacitando Secretarios Generales así como el personal de dirección de las Comisiones Nacionales; b) otorgando fondos dentro del marco del Programa de Participación con el fin de reforzar las capacidades operacionales de las Comisiones Nacionales; y c) ofreciendo servicios de consultoría a las Comisiones Nacionales para que puedan satisfacer sus necesidades específicas; (2) el Director General, tanto en su informe periódico al Consejo Ejecutivo sobre la ejecución del Programa como en su informe bienal a la Conferencia General (documento C/3), da cuenta sistemáticamente a los órganos rectores de la asistencia técnica y profesional dispensada a las Comisiones Nacionales por la Secretaría 18. Las recomendaciones de la DCI confirman una vez más algunas de las disposiciones de la Carta de las Comisiones Nacionales de cooperación con la UNESCO, así como diversas resoluciones de la Conferencia General, en virtud de las cuales se pide a los Estados Miembros y a la Secretaría que contribuyan al reforzamiento de las Comisiones Nacionales. 19. La Secretaría ha puesto de relieve una y otra vez la necesidad de reforzar la cooperación de la Organización y las Comisiones Nacionales, si bien no ha formulado propuestas a este respecto. En esta etapa, el objetivo era mostrar exclusivamente el grado de participación de las Comisiones Nacionales en el proceso de descentralización. Con arreglo a la Decisión 159 EX/7.4, el Director General presentará al Consejo Ejecutivo, en su 161ª reunión, propuestas sobre el establecimiento de un “procedimiento especial” destinado a estrechar las relaciones entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales para ampliar su participación en la ejecución del Programa. V. CONCLUSIONES 20. Reviste una trascendencia política excepcional el hecho de que, en este periodo decisivo de cambios profundos en la política y orientaciones de la Organización, los distintos -6- interlocutores reconozcan la importancia de las Comisiones Nacionales en la labor de la UNESCO. Se trata, en medida nada despreciable, de un reconocimiento de la importancia estratégica de las Comisiones Nacionales en la realización de la misión fundamental de la UNESCO, a saber, promover la solidaridad intelectual a escala nacional y mundial. 21. Los documentos mencionados coinciden en varios puntos. Por ejemplo, todos destacan el hecho de que las Comisiones Nacionales aportan un valor añadido a la labor de la Organización. Al mismo tiempo, destacan también de una u otra forma que es necesario mejorar el estado de las relaciones entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales. Aunque no se dé ninguna “receta mágica” al respecto, las recomendaciones formuladas por el Equipo Especial y la DCI fijan a la Organización nuevas tareas para los años venideros. 22. Una de esas tareas consiste en clarificar los mandatos y la situación de las Comisiones Nacionales con respecto a la UNESCO en el contexto de la descentralización. La Conferencia General ha admitido que las Comisiones Nacionales son uno de los actores principales del proceso de descentralización de la UNESCO (Resolución 26 C/13.2). No obstante, parece que actualmente ha surgido la necesidad apremiante de definir las modalidades y los principios de esa cooperación para lograr el mejor equilibrio institucional posible y evitar las duplicaciones indeseadas de tareas. Se trata de una cuestión política muy delicada sobre la cual divergen las ideas y posiciones del conjunto de las partes interesadas1. 23. Otra problemática que se debe afrontar es la concepción de un mecanismo eficaz que pueda ayudar a las Comisiones Nacionales a cumplir con eficiencia su mandato básico, es decir, ofrecer una visión de la sociedad civil. Las formas y los principios de existencia de cada sociedad dan a ésta un carácter único. Un modelo aplicado con éxito en una parte del mundo puede resultar completamente obsoleto en otro rincón del planeta. Las prácticas idóneas de una Comisión Nacional para llegar a la sociedad civil pueden resultar utópicas para una Comisión de otro país. Por lo tanto, podemos preguntarnos legítimamente de qué manera puede contribuir a mejorar las capacidades reales de las Comisiones Nacionales un conjunto de prácticas idóneas, cuando el contexto en el que funcionan y los recursos de que disponen difieren tanto, de unas a otras. También podemos preguntarnos cómo la experiencia de las Comisiones Nacionales que han cosechado más éxitos puede resultar útil a las demás, si los encargados de las políticas no están resueltos a que evolucione el contexto político de sus respectivas sociedades. 1 A este respecto se puede decir que hay dos corrientes de ideas entre las partes interesadas. La primera propone que no se considere a las Comisiones Nacionales meros “interlocutores”, sino partes integrantes de la UNESCO en los Estados Miembros. Esta posición representa una “nueva visión liberal” de las Comisiones Nacionales. Los defensores de un planteamiento conservador estiman que las Comisiones Nacionales son “órganos nacionales” dependientes de sus respectivos gobiernos, que no deben reemplazar a la UNESCO en sus respectivos países. -7- * * * ANEXO Convergencia de los puntos de vista expresados en la 160ª reunión del Consejo Ejecutivo sobre las Comisiones Nacionales de Cooperación con la UNESCO Equipo Especial sobre la UNESCO en el siglo XXI, del Consejo Ejecutivo (Documentos 160 EX/48 y 160 EX/48 Partes 6 y 7 Rev.) • Las Comisiones Nacionales son órganos “inconfundiblemente nacionales”. ¿Cómo se definen los mandatos y las funciones de las Comisiones Nacionales con respecto a la UNESCO? ¿Qué dificultades se han señalado en las relaciones entre la UNESCO y las Comisiones Nacionales? Dependencia Común de Inspección de las Naciones Unidas (Documento 160 EX/41) • Las Comisiones Nacionales son el principal relevo en la labor de la UNESCO en el plano nacional. • Las Comisiones Nacionales son vínculos esenciales de la UNESCO con la sociedad civil. • Las Comisiones Nacionales deben participar en la ejecución del Programa de la UNESCO. • Las Comisiones Nacionales deberían de participar al programa de elaboración por el medio de consultaciones regionales • Las Comisiones Nacionales deben participar en la evaluación de las Oficinas fuera de la Sede. • Existe un desfase entre las responsabilidades encomendadas a las Comisiones Nacionales y su capacidad para cumplir con ellas. • La cooperación entre las Comisiones Nacionales y las Oficinas fuera de la Sede presenta insuficiencias a causa de la duplicación de sus funciones. • Las Comisiones Nacionales carecen con frecuencia de recursos financieros y humanos. • Las Comisiones Nacionales dependen por lo general de un solo Ministerio, lo cual les impide con frecuencia abarcar todas las esferas de competencia de la UNESCO. • Las Oficinas fuera de la Sede no siempre informan de sus actividades a las Comisiones Nacionales. • La índole de algunas Comisiones Nacionales es “excesivamente gubernamental”. Secretaría de la UNESCO (Documentos 160 EX/6 Parte III: Descentralización; y documento 160 EX/INF.10) • Las Comisiones Nacionales son interlocutores “constitucionales” y “principales” de la Organización para la elaboración, ejecución y evaluación de su Programa y constituyen un componente esencial del sistema descentralizado de la UNESCO. • Las Comisiones Nacionales son responsables ante sus respectivos gobiernos. • Las Comisiones Nacionales deben participar más en la ejecución del Programa. • Las Comisiones Nacionales deben participar en la evaluación de las Oficinas fuera de la Sede. • Existe duplicación de tareas de las Comisiones Nacionales y de las Oficinas fuera de la Sede de la UNESCO. • Se debe clarificar la función de las Comisiones Nacionales. • La Secretaría debe: ¿Qué propuestas se pueden formular para reforzar las capacidades de las Comisiones Nacionales y mejorar su participación en la ejecución del Programa? - ayudar a los Estados Miembros a que fortalezcan sus respectivas Comisiones Nacionales; - preparar un compendio de las mejores prácticas de las Comisiones Nacionales; - informar al Consejo Ejecutivo, por conducto del informe del Director General sobre la ejecución del Programa, sobre la asistencia proporcionada a las Comisiones Nacionales. • Se deben definir las funciones y mandatos respectivos de las Comisiones Nacionales y las Oficinas fuera de la Sede. • Los Estados Miembros deben reforzar sus Comisiones Nacionales respectivas. • La Secretaría debe contribuir a fortalecer la capacidad de funcionamiento de las Comisiones Nacionales. • Se debe reforzar la cooperación entre las Oficinas fuera de la Sede y las Comisiones Nacionales tratando de establecer un equilibrio institucional. • Cuando establezcan relaciones contractuales con la Secretaría, las Comisiones Nacionales deben responsabilizarse de la utilización de los fondos ante todos los Estados Miembros por intermedio de la Secretaría.