Trabajo social experimental aplicado al estudio descriptivo de la excluisón social ROSARIO CONDE MEGÍAS * IGNACIO PEREDA PÉREZ ** ASPECTOS CONCEPTUALES GENERALES E l término «Trabajo Social» «es utilizado para denominar la disciplina y la actividad profesional dedicadas al desarrollo del bienestar humano en los procesos de cambio social individuales y sectoriales» (Conde Megías, 1998, pág. 23). El Trabajo Social precientífico o tradicional, en nuestro País, «nunca se ocupó de producir una teoría social propia, o al menos de forma sistemática, ni, en consecuencia, de desarrollar una acción social fundamentada en un conocimiento científico específico de la realidad. Sólo cuando se apropió del método científico, al igual que otras disciplinas sociales, se convirtió en una disciplina científica autónoma y moderna». «En la Escuela Universitaria de Trabajo Social de Granada, surgió entonces su rama científica básica: el «Trabajo Social Experimental». «que comenzó a estructurarse y a desarrollarse acumulando sistemáticarnente un conjunto de fenómenos objetivables, repe- Profesora Titular de «Trabajo Social» de la Escuela Universitaria de Trabajo Social de Granada. ** Diplomado universitario en Trabajo Social, Licenciado en Derecho, Presidente de la Fundación «Escuela de Solidaridad». * tibles, comunicables y, por ello, racionalmente transmisibles, acerca de: a) la naturaleza de la realidad social, y b) la naturaleza de los procesos de transformación de la misma, desde la especialidad profesional» (Conde Megías, 1999, pág. 29). El objeto de conocimiento científico específico del Trabajo Experimental es «la realización del ser humano como sujeto activo del bienestar social en su área porticular de actividad y entorno habitual», considerando siempre la doble naturaleza social del individuo: consumidora y productora de condiciones estables, o relativamente estables, de bienestar. En este sentido, según lo expresado en nuestro manual de Trabajo Social Experimental, «el ser humano, además de consumidor de recursos sociales como beneficiario de las políticas y servicios institucionales existentes en su medio social habitual, es, ante todo, productor racional de bienes sociales, condiciones humanas y materiales de vida: salud, manutención, cultura, recreación, etc., en su área particular de actividad: familia, trabajo, grupos de amistad, organizaciones asociativas, vecindad... y, por consiguiente, generador de realidad social (para sí y para los demás)». En consecuencia, para la Disciplina, la realización social del ser humano, se REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 167 INFORMES produce como consecuencia del desarrollo adecuado de sus dos roles individuales fundamentales: el rol de consumidor y el rol de productor del bienestar. comprenderla de forma global e integrada, valiéndose de la definición de tres tipos de núcleos diagnósticos: de necesidad, de dependencia y de riesgo social. En líneas generales, establecidas las fronteras epistemológicas con otras ciencias sociales (Ver en Conde Megías, 1998, Cap. I.3.1) puede afirmarse que los dominios o campos de investigación específica del Trabajo Social Experimental son: C) Teoría Prospectiva de los Procesos de Cambio Social, que expone la contribución realizada por la especialidad profesional, a la realización del ser humano como sujeto activo (productor y consumidor) del bienestar social, a través de dos tipos de intervención específica: autonomista-promocional y asistencialista-prestacional. 1) Las diversas problemáticas o «situaciones de malestar social reales o potenciales» que motivan la formulación de las demandas de ayuda profesional especializada en nuestras instituciones sociales. 2) Los «cambios situacionales» que, inducidos y orientados por el profesional, es necesario producir para superarlas (1998, pág. 23). Tras una larga trayectoria de estudio empírico de la realidad social marginal y de las posibilidades transformadoras de la misma, trabajando sistemáticamente con el ser humano como sujeto activo del bienestar social, hemos podido crear un sistema metodológico de investigación científica específica, así, como identificar, definir y sistematizar el material obtenido, para formular las teorías científicas básicas del Trabajo Social Experimental: A) Teoría Descriptiva de la Naturaleza de la Realidad Social que estudia las variables contextualizadoras de cualquier realidad social, individual o sectorial, que pueda considerarse objeto de evaluación e intervención profesional específica: a) históricas, b) físico-geográficas, c) económicas, d) infraestructurales, e) culturales, f) convivenciales, g) político-administrativas, y h) perceptivoconductuales. B) Teoría Diagnóstica de las Situaciones de Malestar Social, que se ocupa de determinar la problemática situacional a tratar, a modo de síntesis interpretativa, para poder 168 Ambas intervenciones tienen un solo objetivo central, que según lo indicado en nuestro «Manual para las Prácticas Universitarias de Trabajo Social en las Instituciones Sociales» (2001), es: «la promoción, mantenimiento o restauración de la operatividad del ser humano, como sujeto activo del bienestar social, para renovar las condiciones de su entorno ambiental, potenciando, movilizando y utilizando, de forma consciente y deliberada, todos los recursos a su alcance» (Conde Megías, 2001, pág. 4). * De acuerdo a lo señalado en el Diccionario de Sociología (1980), la expresión «exclusión social» es sinónima de «marginación social» o «marginalidad»: «Posición marginal o fuera de lugar de una persona dentro de un grupo o la posición marginal de un grupo dentro de un colectivo mayor» (1980, pág. 151). En este sentido, en el Diccionario de Trabajo Social (1994), la exclusión, marginación, o marginalidad social, significa, en esencia, estar «separado de», «cortado de», «a la orilla de», «aparte de», y, más concretamente, «situación en la que un individuo o un grupo quedan excluidos de un determinado sector de la convivencia social». En América Latina, el término fue usado para designar «la falta de participación en la vida política, económica y social del país» y «la separación de la sociedad global pertene- REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ ciendo a ella, como característica específica del subdesarrollo». En España, «con un alcance un tanto diferente, la expresión es utilizada para caracterizar la situación de determinados colectivos o sectores sociales, como los gitanos, los homosexuales, los ancianos, etc., que viven una situación de no integración con el resto de la sociedad» (1994, págs. 189 y 190). En coherencia lógica con todo lo dicho hasta ahora, la exclusión social como objeto de conocimiento científico específico del Trabajo Social Experimental, puede definirse como: «una situación que, de forma puntual, obstaculiza el proceso natural de evolución social del individuo, y que éste desea superar de forma activa, consciente y deliberada, de acuerdo con sus recursos, aspiraciones y expectativas de bienestar». * En este sentido, de acuerdo a lo indicado en nuestro citado Manual para las Prácticas Universitarias de Trabajo Social en las Instituciones Sociales, los núcleos de problemática social que originan situaciones de exclusión social, son, básicamente: a) Problemática social asociada a la ancianidad: situaciones de malestar real o potencial, de las personas de avanzada edad que, afectadas por su deterioro físico y/o mental, no pueden valerse por sí mismos (de forma parcial o total) para desenvolverse con normalidad en su entorno ambiental habitual. b) Problemática social asociada a la discapacidad física: situaciones de malestar real o potencial, de las personas con minusvalías físicas (genéticas o adquiridas por accidente o enfermedad) que dificultan u obstaculizan su interacción con otros individuos, y con el entorno ambiental en general. c) Problemática social asociada a la discapacidad psíquica: situaciones de malestar real o potencial, de las personas con minusvalías psíquicas (retraso mental, trastornos del desarrollo psicológico, trastornos del comportamiento, de las emociones y del conocimiento habitual) que dificultan u obstaculizan su interacción con otros individuos, y con el entorno ambiental en general. d) Problemática social asociada a la drogodependencia: situaciones de malestar real o potencial, de las personas con adicciones tóxicas de diversa etiología (alcohol, cannabis, cocaína, drogas de diseño, heroína, psicofármacos, y tabaco, fundamentalmente), detectadas y atendidas en las instituciones especializadas. e) Problemática social asociada a la infancia y a la adolescencia: situaciones de malestar real o potencial, de las personas menores de edad (de acuerdo al código civil, las que no han cumplido los 18 años) con problemas de desamparo y especial vulnerabilidad a las dependencias y exposición a los riesgos sociales en general. f) Problemática social asociada a la insolvencia básica: situaciones de malestar real o potencial, de las personas que carecen de medios económicos para solventar las necesidades materiales de su vida, y se encuentran expuestos por ello a una mayor incidencia de problemas carenciales, de dependencia y de riesgo social en general. g) Problemática social asociada a la reclusión penitenciaria: situaciones de malestar real o potencial, de las personas privadas de libertad (internos de los centros penitenciarios, liberados condicionales adscritos a los mismos, condenados a arrestos de fin de semana, penados con medidas de seguridad, penados a trabajo en beneficio de la comunidad), y de las familias afectadas. h) Problemática social asociada al rechazo convivencial: situaciones de malestar real o potencial, de las personas marginadas del grupo de relación habitual, de forma generalizada (colectivos de etnia gitana, de gays, de lesbianas, de refugiados, de asilados y de in- REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 169 INFORMES migrantes extranjeros, básicamente) o de forma particular (parejas, hijos, familiares disminuidos, y otras personas dependientes de maltratadores habituales) (2001, págs. 3 y 4). a) Valores fundamentadores: dignidad humana, autodeterminación y libre actuación en base a las capacidades personales. * En relación con estos núcleos problemáticos, los factores implicados en la transformación de la realidad que contextualiza y explica cualquier situación de exclusión social, son, básicamente: b) Objetivo: autodeterminación de las personas marginadas, como forma específica de contribución profesional a la evolución del hombre como ser social y a su participación activa en los procesos sociales de cambio situacional. A) «La capacidad de respuesta racional para enfrentar el malestar social creado en tomo a las presiones, problemáticas o limitaciones surgidas en su área particular de actividad», en términos de dificultades para el desarrollo de las «facultades» inherentes a dicha capacidad, y, en definitiva, de dificultades para el desarrollo del «rol generador de condiciones de bienestar» (que procuramos optimizar desde una intervención autonomista-promocional, de alta especialización profesional). B) «La accesibilidad a la burocracia administrativa del bienestar social para satisfacer necesidades generadas por las deficiencias de calidad de vida percibidas en el medio o entorno social habitual», en términos de dificultades de acceso a las «posibilidades» existentes a nivel de las áreas administrativas generales, de los servicios sectoriales y de los servicios comunitarios o vecinales, y, en definitiva, en términos de dificultades para el desarrollo del «rol consumidor de bienes, recursos o servicios sociales» (que procuramos optimizar desde una intervención asistencialista-prestacional, de alta especialización profesional) (1998, págs. 68 y 69). * Como acabamos de mencionar, existen dos tipos de intervención profesional en las situaciones de exclusión social, que también son objeto de conocimiento, en este caso de carácter operativo, del Trabajo Social Experimental: A) La intervención autonomista-promocional, se concreta en lo siguiente: 170 c) Rol profesional: asesor/educador social en el desarrollo de capacidades y habilidades sociales. B) La intervención asistencialista-prestacional, se concreta en lo siguiente: a) Valores fundamentadores: justicia social, no discriminación y reparto equitativo de los bienes sociales. b) Objetivo: facilitar el acceso a los bienes sociales básicos (salud, alimentación, vivienda, recreación, salario, educación, trabajo) que no pueden conseguirse por los cauces normales, como forma específica de contribución profesional a la participación de la población en los resultados prácticos del desarrollo social. c) Rol profesional: diseñador e implementador de políticas sociales (1998, pág. 231). PRINCIPIOS ESTABLECIDOS POR EL TRABAJO SOCIAL EXPERIMENTAL PARA EL ESTUDIO CIENTÍFICO DE LA REALIDAD SOCIAL Como hemos apuntado ya, el Trabajo Social Experimental, como disciplina científica autónoma, nace y se desarrolla para investigar, sistematizar y comunicar el objeto y la actividad de los trabajadores sociales de alto REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ nivel de especialidad, es decir, de alto nivel de exclusividad competencial en el ejercicio profesional. En este sentido, trata de romper y de superar la visión obsoleta y simplista de la realidad, característica de un Trabajo Social precientífico o tradicional. Para ello, como cualquier otra ciencia empírica, establece dos tipos de criterios para el control científico de la práctica profesional en general para poder comprobar, verificar, reforzar, reformular, y, en definitiva, desarrollar, su cuerpo de conocimientos en general: A) Fundamentos y criterios de control teórico, referidos a las condiciones del estudio evaluativo de la realidad social, en lo que se refiere a fuentes y formas de obtención de los datos, categorías de análisis, y claves interpretativas de los mismos. B) Fundamentos y criterios de control metodológico, referidos a la reproducibilidad del proceso de transformación situacional, mediante el que se realizan las principales demostraciones de base. Estos son los aspectos más significativos que diferencian la observación científica experimental del Trabajo Social de alto grado de especialidad, de la observación intuitiva ordinaria del Trabajo Social precientífico o tradicional. En este sentido, en nuestro primer manual de Trabajo Social Experimental, afirmamos que, desde la perspectiva científica de esta Disciplina, «cualquier estudio empírico específico es un acto de análisis sistemático de la realidad social en condiciones preestablecidas y cuidadosamente controladas que, repetidas por cualquier otro investigador, le permiten rehacer el proceso metodológico y obtener los mismos resultados» (1998, pág. 110). Según lo expresado en nuestro texto de Trabajo Social Experimental, los principios para el estudio científico de la realidad social son, fundamentalmente: a) el principio de funcionalidad analítica de la realidad social, b) el principio de constancia de categorías descriptivas de la realidad social, c) el princi- pio de globalidad, y d) el principio de autoevaluación situacional. a) El principio de funcionalidad analítica de la realidad social, puede formularse del modo siguiente: todo trabajo de investigación especializada es funcional, es decir, está en función de las posibilidades de intervención en la transformación situacional posterior. En este sentido, «como fase previa del proceso metodológico general, el estudio de las situaciones de malestar social se justifica considerando que, metodológicamente, es necesario delimitar dónde y con quiénes se va a trabajar, no sólo por establecer el ámbito del estudio, sino también la competencia profesional. Los mismos resultados del estudio previo son los que delimitan el ámbito de trabajo al dejar patente dónde se producen los problemas o existen las necesidades concretas que requieren la intervención del profesional del Trabajo Social». b) El principio de constancia de categorías descriptivas de la realidad social, en el texto citado, queda formulado en los puntos siguientes: «La realidad social constituye un conjunto de variables situacionales que aparecen con regularidad. En consecuencia, las casuísticas sociales se configuran como campos de atención limitada de estas variables, en distintos episodios de la trayectoria de vida social de los seres humanos (a nivel individual o sectorial), Esta consideración epistemológica singular, nos permite acotar y enfocar, con base científica específica, el estudio de las más diversas situaciones de malestar social con fines evaluativos y, en definitiva, de intervención profesional para superarlas». «..., consideramos, como argumento central de nuestra tesis, el principio de constancia de categorías descriptivas, capaces de definir, como unidades de atención específica, las diversas situaciones o casuísticas atendi- REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 171 INFORMES das por los trabajadores sociales en su ejercicio profesional habitual y de contextualizarlas adecuadamente en el marco global de la realidad social». «El principio de constancia de categorías descriptivas dice que, en el contexto amplio de la realidad social, diferentes problemáticas o situaciones de malestar social, que afectan a personas con características funcionales y de status social (en relación comparativa con su medio habitual) también diferentes, contienen siempre los mismos aspectos o elementos combinados, aunque en distintas proporciones. Estos configuran un campo de fuerzas positivas y negativas, favorecedoras y obstaculizadoras de los cambios necesarios para la consecución del bienestar social». «La propia experiencia nos dice que, definiendo estas variables en el contexto general de la realidad social, podemos describir la estructura básica de todas las situaciones sociales específicas que puedan presentarse. Esto es así porque se reflejan regularmente de forma global e integrada, aunque cada una mantenga su peculiaridad. (Algo parecido a como nos devolverían la misma imagen total las partes separadas de un gran espejo roto, independientemente del tamaño y de la limpieza ocasional de cada una)». c) El principio de globalidad, en el mismo libro de texto, se describe del modo siguiente: ... sea cual fuere el nivel de atención a las personas que requieren nuestro servicio profesional –individual o sectorial–, el estudio de las situaciones de malestar social ha de contemplar la generalidad de la realidad social, por lo que habrá de integrar todos sus aspectos. ... consideramos que una de las características de nuestra profesión es el estudio y la atención de las situaciones de malestar social de forma global e integrada, es decir, contemplando o atendiendo todas sus facetas o aspectos concurrentes». 172 «En este sentido, en la propia investigación experimental hemos podido comprobar que la totalidad de los datos respecto a las variables configuradoras de la realidad social que contextualizan de forma puntual las diferentes casuísticas sociales, deben procesarse, analizarse y sistematizarse, clasificándolos en los diversos marcos o aspectos básicos siguientes: — El marco histórico, tiene correspondencia directa con la génesis de la situación de malestar social, es decir, con las condiciones de origen y con las de evolución de los acontecimientos que han influido en el proceso hasta llegar a su estado actual. — Al marco físico-geográfico, pertenecen todos los aspectos que podemos captar en la experiencia sensorial, es decir, por los sentidos físicos. — Al marco económico corresponden las variables de producción de los aspectos materiales. Abarca las fuentes y cuantías de ingresos, así como las actividades que se desarrollan para su obtención. — El marco infraestructural se corresponde con los recursos sociales, básicamente con las políticas y las instituciones de derecho público existentes para dar respuesta a las necesidades. — El marco cultural contiene una faceta informativa, de niveles de instrucción en relación con la educación formal o enseñanza reglada, y una faceta formativa, en relación con el aprendizaje del individuo a través de su experiencia de vida, que también implica todo el marco normativo de valores, leyes, usos, costumbres y tradiciones socialmente aprendidas. — Al marco convivencial corresponderían las dinámicas relacionales vinculadas al desarrollo de los roles básicos en el área particular de actividad social: familiares, vecinales, etc. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ — El marco político-administrativo se refiere a todos los aspectos relacionados con la toma de decisiones: posibilidades y limitaciones, personas que las toman y formas de hacerlo. — Al marco perceptivo-conductual corresponde la totalidad de manifestaciones y expresiones de la subjetividad, es decir, las respuestas emocionales, intelectuales y físicas, en términos de posiciones, actitudes y conductas adoptadas (Ver en Conde Megías, 1998, págs. 245-252). d) EI principio de autoevaluación situacional, se encuentra estrechamente vinculado a la tesis evolucionista del Trabajo Social Experimental, según la cual, el ser humano posee la «capacidad de evolucionar obteniendo un aprendizaje experimental y acumulativo, de todos los procesos de cambio situacional (hacia el bienestar), que haya de protagonizar en su trayectoria de vida social», a la par que una capacidad intrínseca para modificar la realidad renovando las condiciones de su entorno ambiental. En este sentido, el Trabajo Social Experimental estudia «la utilidad del propio raciocinio del individuo para realizar objetivos superadores de situaciones de malestar social, a partir de la autoevaluación de necesidades y posibilidades materiales, así como de los procedimientos técnicos que incrementan esta capacidad natural» (1998, 64 y 65). EXPERIENCIA PRÁCTICA: EL ESTUDIO DESCRIPTIVO DE LA EXCLUSIÓN SOCIAL EN LA FUNDACIÓN «ESCUELA DE SOLIDARIDAD» * La Fundación «Escuela de Solidaridad», con domicilio en la Zubia (Granada), Camino de Enmedio, nº 7, y N.I.F. G. 18459685, está inscrita en el Registro de Entidades, Servicios y Centros de Servicios Sociales de la Consejería de Asuntos Sociales de la Junta de Andalucía, con el número AS.ATNI/E/3.028, y clasificada como de Asistencia Social según Resolución de 1 de junio de 1998, del Instituto Andaluz de Servicios Sociales. Es un Centro colaborador con la Universidad de Granada, donde desarrollan las prácticas profesionales sus alumnos, entre los que se encuentran los de la Escuela Universitaria de Trabajo Social. Gracias a la oportunidad de investigar empíricamente la realidad social y las posibilidades transformadoras de la misma, que, entre otros, nos viene brindando este Centro, hemos podido desarrollar gran parte de los sistemas teóricos y metodológicos del Trabajo Social Experimental. En la actualidad acoge a sesenta personas distribuidos en tres casas situadas en La Zubia (Granada), Brácana (Granada) y Valverde del Camino (Huelva). En su primer Boletín Informativo (JulioSeptiembre 2000), se destacan, como características principales de «una familia llamada solidaridad», las siguientes: – Un proyecto integrador. – Acogida de personas necesitadas del sentido familiar, autoestima y habilidades sociales. – Aprendizaje de tareas. Talleres ocupacionales, campos de trabajo nacionales e internacionales. – Club deportivo, actividades lúdicas y recreativas, intercambios culturales con otras comunidades. En el mismo documento se señala que tienen su puerta abierta en la Fundación: – Abuelos y abuelas que necesitan la compañía, el afecto y la ternura de los demás. Se encuentran solos y necesitan compartir su existencia con alguien. – Mujeres jóvenes que quedan embarazadas y no tienen espacio ni medios para hacer familia. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 173 INFORMES – Madres con hijos que viven en situaciones de emergencia y necesitan apoyo para evitar que sus hijos acaben en centros de menores. – Jóvenes que cumplen 18 años en otros centros de menores y deben abandonarlo. Aquí pueden sentir el grupo familiar que los acoge e integra. – Jóvenes adultos que se encuentran desamparados, sin familia, desorientados y sin medios económicos suficientes para la independencia. – Jóvenes que sufren alguna minusvalía física o psíquica, además del abandono de su propia familia. Es urgente que sientan la pertenencia a un grupo familiar que los quiera, los defienda y los integre. – Adolescentes de 14 a 18 años que son rechazados por su problemática conducta. Las familias necesitan ayuda para trabajar con ellos y acuden a la Fundación en busca de acogida. – Todo menor que necesite protección, cuidado y atención. – De igual forma, todas aquellas personas que quieran ser parte activa de este proyecto esencialmente solidario. En la actualidad, en correspondencia con los fines estatutarios, los objetivos de la Fundación se concretan en once programas: – «Obrador de confitería». – «Operaciones financieras». * Cuando decidimos estudiar el fenómeno de la exclusión social en la Fundación «Escuela de Solidaridad» desde la perspectiva científica específica del Trabajo Social Experimental, pudimos realizar nuestro estudio con facilidad, gracias a que la información del perfil social de todas las personas acogidas se encontraba actualizada y organizada en un fichero diseñado desde la misma perspectiva (al final del trabajo incluimos la ficha básica). Nos bastó seleccionar veinte fichas de las sesenta existentes en la Fundación, en la actualidad, y analizar el material empírico ya estandarizado, para poder realizar, con el control científico necesario, el estudio que presentamos, ofreciendo las suficientes garantías de representatividad, rigor y objetividad, y, en consecuencia, validez científica en general. En todo momento procuramos ser lo más fieles posibles a la propia expresión de los pensamientos, recuerdos y proyectos de las personas entrevistadas. Siguiendo las pautas de investigación experimental que venimos señalando, sistematizamos la información de las veinte situaciones de exclusión social, organizándola en los siguientes apartados: 1) Datos de identificación general. – «Mejor con mamá». – «Intervención socio-educativa con menores de edad». – «Intervención integral con jóvenes mayores de edad». – «Formación y aprendizaje laboral (Ejecución y desarrollo de oficios)». – «Atención primaria». – «Obras de adaptación de inmuebles». – «Promoción del voluntariado». – «Centro de actividades». – «Cursos de formación permanente». 174 2) Variables autodescriptivas del control situacional inicial. 3) Variables autodescriptivas del malestar social de origen material: físico-geográficos, económico, e infraestructural. 4) Variables autodescriptivas del malestar social de origen intelectual: cultural, convivencial y político-administrativo. 5) Variables autodescriptivas del malestar social de origen perceptivo-conductual: afectivo y racional. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ Exponemos el caso nº 10 a modo de ejemplo ilustrativo. – De esta cantidad dona voluntariamente 10.000 pesetas mensuales a la Fundación. Acogido nº10 D) Variables autodescriptivas del malestar social de origen intelectual: cultural, convivencial y político-administrativo A) Datos de identificación general – Nacido en Jaén, en 1978. – Reside en un hogar funcional de la Fundación «Escuela de Solidaridad» desde 1981. – El presidente de la Fundación lo encontró con tres años abandonado en una granja de caballos y lo acogió en los «Hogares de Nazaret». – Su nivel cultural es bajo, aunque tiene algunos estudios de jardinería, encuadernación, y albañilería. – Aunque sus amigos y compañeros lo encuentran muy sociable, el dice que se lleva mal con «Ios de afuera» como «Jesús el Gitano». – Padece oligofrenia, con una minusvalía del 67%. E) Variables autodescriptivas del malestar social de origen perceptivo-conductual: afectivo y racional – Dice que no tiene a donde ir porque su madre murió de un infarto cuando el tenía tres años. – Se muestra inseguro y temeroso de la sociedad. B) Variables autodescriptivas de control situacional inicial – Aspira a trabajar en una imprenta de encuadernador para vivir, «pero no salir de la Fundación». De forma que lo que haría es «colaborar más» con esta. – Su principal obstáculo cree que es la ignorancia: desconoce los recursos existentes y afirma que «todo lo que conoce le llega a través de la Fundación». – Cree que puede demostrar «lo que es capaz» dentro de la Fundación. – Está dispuesto a seguir formándose y colaborando con la Fundación. C) Variables autodescriptivas del malestar social de origen material: físico-geográfico, económico e infraestructural – No tiene domicilio, estaba abandonado en el campo. – Sus únicos recursos económicos consisten en una pensión de 45.000 pesetas mensuales que cobra por discapacidad psíquica. – Se confiesa ignorante de los recursos y posibilidades del entorno ambiental. A) Datos de identificación general En primer lugar hemos analizado los datos referentes al lugar y fecha de nacimiento del grupo de acogidos (en estudio) en la Fundación «Escuela de Solidaridad» y los hemos dividido en dos grandes categorías: A) los nacidos en España y B) los nacidos en otros países. a) En España han nacido catorce, y, concretamente en Granada: 1) en 1981, 6) en 1975, 13) en 1976 y 17) en 1978; En Baza, provincia de Granada: 7) en 1976, 11) en 1950, 12) en 1960 y 15) en 1966; En otras provincias andaluzas: 8) Almería, en 1949; 10) Jaén, en 1978; 20) Cádiz, en 1964; En otras provincias españolas: 4) Albacete, en 1978; 18) Barcelona, en 1981; 19) Palma de Mallorca, en 1978. b) En otros países han nacido seis: 2) Malabo, (Guinea Ecuatorial), en 1975; 3) El Sáhara, en 1967; 5) Pavía (Italia), en 1970; 9) REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 175 INFORMES Toulouse (Francia), en 1980; 14) Casablanca (Marruecos), en 1978; 16) Beni Mellal (Marruecos), en 1973. La media de edad de las catorce personas nacidas en España es de treinta años, y la de las seis personas nacidas en otros países es de veintiocho, aproximadamente. En relación con las fechas de acogida en la Fundación, el grupo de personas en estudio puede ordenarse, en base a la antigüedad, de la forma siguiente: 10) desde 1981; 4) desde 1990; 1) desde 1991; 19) desde 1995; 17) y 2) desde 1997; 3), 5), 6) y 14) desde 1999; 7), 8), 9), 11), 12), 13) y 16) desde 2000; y 2), 15) y 18) desde el 2001. Respecto a los motivos de la acogida, por lo que hemos podido comprobar, las personas que viven en los hogares funcionales de la Fundación «Escuela de Solidaridad» padecen, o han padecido con anterioridad situaciones extremas de rechazo y abandono familiar, así como de rechazo y marginación social en general. En consecuencia, necesitan del acogimiento que les brinda la Fundación, para poder cubrir las graves carencias, tanto físicas como convivenciales, que les impiden experimentar, aún a sus niveles más básicos, la sensación de seguridad y bienestar. Para matizar y concretar esta motivación inicial, como variables destacadas podemos citar: a) Problemática social asociada a la insolvencia básica: falta de recursos económicos para la subsistencia, inmigrantes, transeúntes y personas sin hogar, en diez casos: 2), 3), 5), 7),13), 14), 15),16), 17) y 20). b) Problemática social asociada al rechazo convivencial, malos tratos a menores, a mujeres, y relaciones familiares deficientes en general, en ocho casos: 1), 4), 6), 9), 11), 12), 18) y 19). c) Problemática social asociada a la discapacidad física y psíquica, a la drogodepen- 176 dencia y a la enfermedad en general, en seis casos: 2), 3), 5), 7), 8) y 10). Por último, nos parece interesante destacar aquí que, además de las razones señaladas, la necesidad de ocupación personal, en un voluntariado social, en la formación, y/o en la práctica profesional, constituye una de las motivaciones básicas para la permanencia en la Fundación «Escuela de Solidaridad», al menos en nueve casos declarados: 9), 13), 14), 15), 16), 17), 18), 19) y 20). B) Variables autodescriptivas del control situacional inicial Por lo que hemos podido comprobar, los veinte acogidos en la Fundación «Escuela de Solidaridad», cuya casuística de exclusión social hemos estudiado, han demostrado conocer sus aspiraciones, objetivos e intereses personales, definiéndolos con claridad. Citándolos por orden de aparición, podemos resumirlos en los siguientes apartados: a) Lo que quieren ser: feliz, activo, independiente, responsable, buen profesional. b) Lo que quieren hacer: estudiar, desarrollar una actividad profesional, ayudar a los necesitados, colaborar en la Fundación «Escuela de Solidaridad». c) Lo que quieren tener: carnet de conducir, coche, vivienda propia, formación personal y profesional, trabajo estable, tranquilidad, seguridad económica, familia biológica, empresa o negocio propio. Los principales obstáculos que tendrían que salvar para satisfacer las aspiraciones y los intereses personales que acabamos de citar, en orden de aparición, podemos resumirlos del modo siguiente: Obstáculos ambientales: acceso a una vivienda en propiedad o alquilada, conseguir un trabajo estable, ser admitido en un centro de discapacitados, adquirir la nacionalidad española (los inmigrantes). REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ Obstáculos personales: adquirir la formación personal y profesional adecuada, superar las pruebas de admisión en instituciones recreativas, aprobar exámenes, conocer los recursos existentes, aprender el idioma español (los inmigrantes), adquirir experiencia de vida en general, superar la adicción a las drogas, solucionar conflictos internos para poder tomar decisiones, afrontar separaciones familiares necesarias, elevar la autoestima, superar sentimientos depresivos, superar hábitos de incidencia negativa, superar la adicción a los juegos de azar. Además de los de la Fundación «Escuela de Solidaridad», como recursos que podrían movilizar y utilizar para alcanzar sus objetivos, los acogidos reconocen los siguientes: Recursos ambientales: becas, programa de acceso a la universidad para mayores de veinticinco años, pensiones no contributivas, otras ayudas económicas para la manutención básica, «Salario Social», asociaciones de minusválidos, Centro Municipal de Drogodependencias, clubes deportivos, trabajo en el obrador del hogar funcional que tiene la Fundación en Valverde del Camino, todas las oportunidades de formación y promoción personal que la Fundación brinda, especialmente los Programas de taller (de velas, de forja, de cobre), «Programa de Voluntariado Europeo», trabajadores sociales profesionales, amigos, personas que tengan los mismos intereses. Recursos personales: la propia capacidad de trabajo. Por último, en relación con las actividades y esfuerzos que estarían dispuestos a realizar para el desarrollo de sus proyectos, todas las personas componentes del grupo estudiado tienen claro su cometido y están dispuestas a asumir su autoridad y su responsabilidad al respecto. Las expresiones verbales más utilizadas para expresar esta disposición personal con- cretada a cada caso en particular, por orden de aparición, son: trabajar, estudiar, solicitar ayudas económicas, ahorrar, cambiar el «estilo de vida» y adquirir hábitos más saludables, desplazarse a donde haga falta, luchar, «poner todo su empeñó», «hacer lo que haga falta», ser más constante. C) Variables autodescriptivas del malestar social de origen material Por lo que respecta a las variables físicogeográficas intervinientes en la casuística social estudiada en la Fundación «Escuela de Solidaridad», catorce personas manifiestan tener problemas de vivienda, diez por malas condiciones de habitabilidad: 1), 3), 6), 7), 8), 14), 15), 16), 19) y 20); y cuatro vivían en la calle por carecer de ella: 2), 10), 11) y 13). En lo que se refiere a las variables económicas, los veinte acogidos reconocen carecer de recursos económicos para independizarse de la Fundación. Sólo trece tienen o han tenido algún tipo de ingresos, entre los cuales, provienen de la mendicidad: 1), 2), 13) y 20), del trabajo como empleados de hogar: 12), 15) y 16), del trabajo de jornalero: 14), del trabajo de monitor en campamentos de verano: 3), de una pensión (34.700 pts.): 8), de prestaciones sociales por discapacidad (45.000 y 50.000 pts.): 7) y 10). Dos personas reconocen tener gastos adicionales ocasionados por las drogadicciones: 1) y 20). Ninguno de los acogidos reconoce la existencia de variables infraestructurales asociadas a su problemática social. Lo cual puede explicarse si tenemos en cuenta que la mayoría piensa que los recursos institucionales, instalaciones, equipamientos y servicios más necesarios, se los ofrece ya la Fundación «Escuela de Solidaridad». REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 177 INFORMES D) Variables autodescriptivas del malestar social de origen intelectual para tomar decisiones y para elaborar iniciativas de cambio situacional. Del grupo de acogidos estudiado en la Fundación «Escuela de Solidaridad», sólo cuatro personas no reconocen la influencia de variables culturales problemáticas en sus situaciones de problemática social: 3), 7), 9) y 16). Los dieciséis restantes, en general, afirman tener un nivel educativo muy bajo. E) Variables autodescriptivas del malestar social de origen perceptivo-conductual Hay un analfabeto, el 12); Doce personas no llegaron a terminar la E.G.B.: 1), 4), 5), 6), 8), 10), 11), 13), 14), 15), 19) y 20); Dos han cursado el graduado escolar: 2) y 17) y otro ha terminado la E.G.B., el 18). Nueve personas poseen otros conocimientos: 1) jardín de infancia e informática, 2) habilidades sociales y decoración de escayola, 6) fontanería y electricidad, 10) jardinería, encuadernación, y albañilería, 11) albañilería, 13) albañilería y forja, 14) cobre, forja y albañilería, 17) formación en mecánica, y 18) reparación de electrodomésticos. En sólo seis casos no existen variables convivenciales reconocidas que concurran en las diversas situaciones de problemática social: 4), 5), 6), 7) , 9) y 16), el resto afirman tener experiencias muy negativas, sobre todo debido a la incidencia de ciertos factores agravantes: adicción a la heroína, abandono de menores, pérdida de contacto con los padres por diversos motivos, desde muy temprana edad, separación matrimonial, deserción del hogar, falta de sociabilidad con «los de afuera», falta de comunicación y de vínculos familiares estables en general, malos tratos físicos y psicológicos, falta de familia biológica, núcleo familiar desestructurado, irresponsabilidad a la hora de asumir roles familiares básicos, y pérdida de la custodia de los hijos. No se reconocen variables político-administrativas intervinientes en la problemática social objeto de estudio. Los acogidos se sienten con libertad para evaluar su realidad, 178 Seis personas del grupo de acogidos en la Fundación «Escuela de Solidaridad» reconocen la existencia de variables afectivas y racionales que dificultan el proceso de cambio situacional: el 2) duda de su capacidad para definir y realizar sus aspiraciones sociales, el 5) duda de su capacidad para terminar con éxito el programa de drogodependencia que sigue, y tiene conflictos internos, para definir sus proyectos de vida, con los que le resulta difícil luchar, el 9) confiesa ser una persona «muy agresiva», el 10) se muestra inseguro y temeroso de la sociedad, y se confiesa ignorante de los recursos y posibilidades del entorno ambiental, el 12) presenta depresión y baja autoestima, y el 15) reconoce tener bajo el nivel de autoestima y el de seguridad en sí mismo. Como se puede comprobar, las variables autodescriptivas del malestar social de origen perceptivo-conductual aparecen con un nivel de frecuencia muy inferior al de las variables materiales e intelectuales que acabamos de analizar. En sólo seis casos de los veinte analizados, se aprecian indicadores de alguna dificultad personal, afectiva o racional, para la participación activa, consciente y deliberada, en la renovación de las condiciones del entorno ambiental. COMENTARIOS Y CONSIDERACIONES FINALES Como hemos mencionado ya, el objeto de conocimiento científico específico del Trabajo Social Experimental es: «La realización del ser humano como sujeto activo (consumidor y productor) del bienestar social en su área particular de actividad y medio habitual». REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ En nuestro estudio del fenómeno de la exclusión social en la Fundación «Escuela de Solidaridad», hemos asumido este objeto de conocimiento en la medida en que hemos investigado a fondo el funcionamiento social autónomo de las personas acogidas, es decir, su autocracia intelectual natural para observar, interpretar y transformar su realidad social a nivel de base, o a nivel microsocial. En el primer apartado del presente trabajo definimos el fenómeno de la exclusión social, desde la perspectiva científica específica del Trabajo Social Experimental, en los términos siguientes: «una situación que, de forma puntual, obstaculiza el proceso natural de evolución social del individuo, y que éste desea superar de forma activa, consciente y deliberada, de acuerdo con sus recursos, aspiraciones y expectativas de bienestar». Pues bien, tras el análisis de los datos obtenidos en nuestro estudio de la realidad social en la Fundación «Escuela de Solidaridad», en contraste con estas bases conceptuales generales, la conclusión más general que cabe formular, es la siguiente: todas las personas acogidas padecen una clara situación de exclusión social en la actualidad, debido a que, un gran número de obstáculos, materiales, intelectuales y/o perceptivo-conductuales, se interponen en su evolución social natural, de manera totalmente ajena a su voluntad, y a pesar de que poseen los elementos suficientes para intervenir, de forma activa y controlada, en sus propios procesos de cambio situacional. Según expresamos también en el primer apartado, el Trabajo Social Experimental establece, como principales núcleos de exclusión social, los siguientes: 1) problemática social asociada a la ancianidad, 2) problemática social asociada a la discapacidad física, 3) problemática social asociada a la discapacidad psíquica, 4) problemática social asociada a la drogodependencia, 5) problemática social asociada a la infancia y a la adolescencia, 6) problemática social asociada a la insolvencia básica, 7) problemática social aso- ciada a la reclusión penitenciaria, y 8) problemática social asociada al rechazo convivencial. Pues bien, en base a esta tipología establecida por el Trabajo Social Experimental, podemos caracterizar la situación de exclusión social que afecta a los acogidos en la Fundación «Escuela de Solidaridad», catalogándola en dos núcleos: el núcleo nº 6 y el núcleo nº 8: Núcleo nº 6, de problemática social asociada a la insolvencia básica, que hemos definido en los siguientes términos: «situaciones de malestar real o potencial, de las personas que carecen de medios económicos para solventar las necesidades materiales de su vida, y se encuentran expuestas por ello a una mayor incidencia de problemas carenciales, de dependencia y de riesgo social en general». En efecto, a la vista de los datos expuestos con anterioridad, se observa claramente que el grupo de acogidos carece de los recursos económicos suficientes para hacer frente a sus necesidades básicas de subsistencia. Predominan además las situaciones de desempleo y de subempleo o desarrollo de trabajos marginales mal remunerados, lo cual condiciona y explica también la existencia de otras variables descriptivas del malestar social de naturaleza material: entornos urbanísticos marginales de procedencia, con deficientes instalaciones y equipamientos en general, viviendas insalubres y en deficientes condiciones de habitabilidad: escasa superficie, estados ruinosos, humedad, falta de luz y de agua potable, etc. Núcleo nº 8, de problemática social asociada al rechazo convivencial, que hemos definido en los siguientes términos: «situaciones de malestar real o potencial, de las personas marginadas del grupo de relación habitual, de forma generalizada (colectivos de etnia gitana, de gays, de lesbianas, de refugiados, de asilados y de inmigrantes extranjeros, básicamente) o de forma particular (parejas, hi- REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 179 INFORMES jos, familiares disminuidos, y otras personas dependientes de maltratadores habituales)». Como hemos podido comprobar en los datos recabados, las personas acogidas en la Fundación «Escuela de Solidaridad», en su gran mayoría, son víctimas de la falta de patrones de conducta adaptados a las necesidades de convivencia humana, de la falta de desarrollo de los roles familiares básicos, de la deserción del hogar, del abandono, de la desestructuracion familiar, del maltrato físico y psicológico, del separatismo y del aislamiento social en general. En nuestro estudio descriptivo del fenómeno de la exclusión social en la Fundación «Escuela de Solidaridad», hemos asumido plenamente los principios metodológicos establecidos por el Trabajo Social Experimental para la investigación científica específica de la realidad social, en los términos siguientes: A–Hemos asumido el «principio de funcionalidad analítica de la realidad social», en la medida en que hemos recopilado y estudiado los datos descriptivos de cada situación social personal en función de las necesidades básicas de conocimiento, para poder cumplir con eficacia el objetivo básico del trabajo profesional: «la promoción, mantenimiento o restauración de la operatividad del ser humano, como sujeto activo del bienestar social, para renovar las condiciones de su entorno ambiental, potenciando, movilizando y utilizando, de forma consciente y deliberada, todos los recursos a su alcance». Lo cual supone asumir los objetivos implícitos en los dos tipos de intervención profesional especializada: autonomista-promocional y asistencialista-prestacional: a) En la intervención autonomista-promocional: la promoción, mantenimiento o restauración de la capacidad de respuesta, de las personas acogidas en la Fundación, para enfrentar las situaciones de malestar social con la suficiente autonomía personal, 180 en términos de: a) superación de problemas y necesidades, b) realización de aspiraciones y finalidades, c) movilización de recursos y posibilidades, y d) reducción de limitaciones y dificultades. b) En la intervención asistencialistaprestacional: la promoción, mantenimiento o restauración de las posibilidades de acceso, de las personas acogidas en la Fundación, a la burocracia administrativa del bienestar social, para satisfacer sus necesidades y cubrir las deficiencias en su calidad de vida, en términos de: a) acceso a la prestación estatal, b) acceso a la prestación comunitaria, c) acceso a la prestación provincial, y d) acceso a la prestación municipal (Conde Megías, 2001, pág. 24). B–Hemos asumido el «principio de constancia de categorías descriptivas de la realidad social», en la medida en que hemos investigado, cualitativa y cuantitativamente hablando, los mismos aspectos descriptivos de la realidad en todos los casos individuales. C–Hemos asumido el «principio de globalidad», estrechamente relacionado con el anterior, en la medida en que hemos investigado el fenómeno de la exclusión social desde una perspectiva integraI, es decir, contemplando la totalidad de los aspectos implicados: materiales, intelectuales, y perceptivoconductuales, según al sistema de variables establecido por el Trabajo Social Experimental en su «Teoría Descriptiva de la Naturaleza de la Realidad Social». D–Hemos asumido el «principio de autoevaluación situacional», en la medida en que hemos aplicado también los principios contenidos en la tesis evolucionista del Trabajo Social Experimental, que son en gran parte innovadores de la metodología de investigación tradicional: Principio de autonomía descriptiva de la realidad social: hemos cambiado el punto de REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ referencia descriptiva de la realidad social utilizado en la metodología tradicional, en la medida en que hemos centrado nuestra atención en primer lugar en «la conciencia situacional del ser humano como sujeto activo del bienestar social» (persona acogida), pasando a un segundo lugar «la adversidad manifiesta en su entorno social actual» (situación marginal observable en la actualidad), admitiendo en todo momento el propio discurso descriptivo de cada sujeto experimental. Principio de autonomía interpretativa de la realidad social: hemos cambiado el punto de referencia interpretativa de la realidad social utilizado en la metodología tradicional en relación con la causalidad o esencia primigenia de las diversas situaciones de exclusión social, en la medida en que hemos asumido la perspectiva personal, individual e intransferible, de cada una de los afectados. Para lo cual, como se puede comprobar, hemos comenzado atendiendo a los cuatro «planos de conciencia situacional» que definen su control operativo inicial: a) aspiraciones, objetivos, e intereses personales, b) limitaciones y obstáculos que tendría que salvar para satisfacerlos, c) expectativas respecto a los recursos que podría movilizar y utilizar, y d) actividades y esfuerzos que estaría dispuesto a realizar. A modo de recapitulación de lo expuesto hasta ahora, creemos poder afirmar que, en general, las principales aportaciones del Trabajo Social Experimental al estudio científico de la exclusión social, son básicamente: • Una tesis de partida sólidamente argumentada, que trabaja con el ser humano como verdadero sujeto activo del bienestar, desarrollando sus facultades naturales para evaluar y transformar la realidad social. Lo cual aporta un nuevo prisma desde el que po- der estudiar el fenómeno de la exclusión social: el de la participación personal en la causalidad, en la misma medida que en el control operativo del cambio situacional. También aporta una nueva perspectiva para estudiar los sistemas técnicos adecuados para enfrentar el mismo fenómeno con la suficiente eficacia profesional. • Un sistema teórico válido y original, de producción (y verificación) científica propia, a utilizar como marco de referencia para analizar con la suficiente objetividad la realidad que contextualiza y explica las situaciones particulares de exclusión social. • Un sistema metodológico eficaz para recorrer el proceso investigador de esta misma realidad en la forma más rigurosa, organizada, y, en definitiva «avanzada», que conocemos y que somos capaces de aplicar en la actualidad, desde nuestra especialidad científica y profesional. Por último, a modo de resumen, nos parece interesante reafirmar una vez más nuestro ya expresado convencimiento de que: « ... en el marco de las Ciencias Sociales, el gran descubrimiento del Trabajo Social Experimental es, en el fondo: La utilidad del propio raciocinio del individuo (observador, calculador, creativo y práctico) para realizar objetivos superadores de las situaciones de malestar social, a partir de la autoevaluación de sus necesidades y posibilidades materiales. Los procedimientos técnicos que incrementan esta capacidad natural, como contribución específica al progreso humano y bienestar social en general» (Conde Megías, 1998, pág. 65). REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 181 INFORMES 182 REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 ROSARIO CONDE MEGÍAS E IGNACIO PEREDA PÉREZ REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35 183 INFORMES BIBLIOGRAFÍA – (1999): Gerontología y Trabajo Social, en MANUEL ANDER-EGG, E. (1994): Diccionario del Trabajo Social. Edit. Humanitas. Buenos Aires. Argentina. BOLETÍN INFORMATIVO DE LA FUNDACIÓN ESCUELA DE SOLIDARIDAD (2000): Año 1, nº 1. Julio-Septiembre 2000. Editado por la Fundación Escuela de Solidaridad. Granada. MARTÍN GARCÍA Y RAMONA RUBIO HERRERA (comp.): «Alzheimer, un Nuevo Reto Social en el silgo XXI». Colección «Biblioteca para el Bienestar Social». Edit. Ayuntamiento de Granada, Área del Bienestar Social. Granada. – (2001): Manual para las Prácticas Universitarias de Trabajo Social en las Instituciones Sociales. Edit. Método Ediciones. Granada. CONDE MEGÍAS, R. (1998): Trabajo Social Experimental. Kental. Colección «Políticas de Bienestar Social», nº 4. Edit. Tirant lo Blanch. Valencia. 184 STROBL, W. (1980): Sociología, «Diccionario Rioduero». Ediciones Rioduero. Madrid. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 35