(643) la porción del maslo que se quiere, para lo cual dos asistentes sujetan un palo, sobre el que se coloca la cola, y poniendo un cuchillo fuerte y bien cortante, ó la hoja de un sable, en el parage en que se señala se le pega un gran golpe, y queda cortado: después se restaña la sangre con un hierro hecho ascua en la forma acostumbrada, y se arreglan las cerdas. Esta operación no tiene absolutamente ningún peligro: el caballo puede continuar en su trabajo desde el punto en que se le acaba de hacer como si no se le hubiera hecho. Algunos aconsejan hacer el corte con un bisturí ó con unas tijeras ; pero lo primero es mas sencillo y mejor. Amputación de la cola d la inglesa. Los caballos de la A r a bia, Persia y Berbería, especialmente cuando corren, levantan la cola en forma de trompa, lo que se considera en aquellos paises como una belleza y señal de vigor y fuerza. Los ingleses, cuyos caballos descienden de estos, á fin de ayudar ó* suplir á la naturaleza , han recurrido á la operación que se va á describir, por la cual lo consiguen en efecto, y consiste en estraer los músculos abajadores de la cola, de lo que resulta que no teniendo antagonistas los elevadores , se levanta la cola por precisión cuando el caballo en egercicio pone en acción todos sus músculos. Los ingleses, que son sin duda los inventores de esta operación, no la egecutan mas que en los potros, en quienes las partes conservan todavía bastante flexibilidad, con lo que pueden estar mas seguros del buen resultado, en lo que son mas prudentes que sus imitadores que la hacen en los caballos de toda edad. Se ha de sujetar bien al animal, y a tirándole á tierra, y a en el potro, ó y a , lo que es mejor, arrimándole á una pared; se le pondrá un acial con el mango muy largo, que tendrá un ayudante, procurando mantener la cabeza del caballo muy levantada. Se trabará la estremidad posterior del lado izquierdo: el ramal de la traba, pasándole por debajo del vientre, se fijará en el lado derecho del cuello en un correon, que se pondrá al rededor de este cerca de la cruz, y después se meterá en la anilla de una traba que tendrá la cuartilla de este mismo lado. Otro ayudante tendrá la cola levantada de manera que su cara inferior ó anterior, en donde se ha de practicar la operación, mire si puede ser hacia arriba. Tensa la piel, los músculos abajadores de la cola se manifiestan muy visiblemente, y entonces coge el operador el maslo con la mano izquierda, y con un instrumento adecuado, á dos dedos de distancia del ano cerca de la línea que señala el medio de la cola, hace una incisión en el lado derecho y otra en el izquierdo de la figura de un cuarto de círculo; en la inteligencia que estas dos primeras incisiones deben ser las mas considerables, tanto por tener eu este parage los músculos mas grosor, cuanto porque de ellas depende