Extractos DOCUMENTO METODOLÓGICO ORIENTADOR PARA LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA AÑO 2008 Diferentes diseños de investigación en el campo educativo Existen varios tipos de diseños de investigación que pueden desarrollarse en el campo de la educación. Algunos son más frecuentemente utilizados que otros, dependiendo del contexto histórico y geográfico. En nuestro país predominan los estudios de tipo descriptivo, a menudo basados en diversas formas de triangulación, mayormente triangulación de métodos. Investigación no experimental. Se trata de un tipo de diseño que se distingue fundamentalmente porque no está destinado a producir explicaciones causales, es decir, no nos permite probar empíricamente relaciones causales entre las variables, sino poner a prueba nuestras hipótesis acerca de que ciertos fenómenos se hallan relacionados, es decir, probar si existen o no relaciones entre las variables de nuestro estudio y cómo son esas relaciones en intensidad y dirección, pero no en términos causa-efecto. Entre los métodos de investigación no experimental modelos considerar: el descriptivo, el histórico y el correlacional. I. Investigación descriptiva Una investigación descriptiva, realiza una “descripción” de un fenómeno (en nuestro caso el que estemos estudiando), de su estado en el presente. Su propósito es describir las características del objeto de conocimiento recortado, en un proceso respecto del cual tenemos escaso o nulo control sobre las variables, a través de técnicas como las encuestas y/u observaciones, por ejemplo. Cuando abordemos diseños cualitativos y cuantitativos, veremos más en profundidad el tema de las técnicas de recolección y la triangulación de métodos. A diferencia de los diseños causales de tipo experimental, los estudios descriptivos no conllevan un alto grado de control de las variables, es decir, no suponen la manipulación de variables como se da en situaciones experimentales de laboratorio. En general, los experimentos en el campo de las ciencias educativas son poco frecuentes: implican manipulación de sujetos humanos y, además, la dificultad de establecer control sobre los atributos o cualidades de la conducta humana, multideterminada. Los estudios descriptivos suelen ser muy recurridos en nuestro campo, ya que producen un tipo de información de relevancia respecto de cuáles aspectos del problema son significativos y qué dimensiones del mismo tienen relación entre sí. La investigación descriptiva se ocupa de establecer: (...) Las condiciones o relaciones que existen; las prácticas que prevalecen; de las creencias, puntos de vista o actitudes que se mantienen; de los procesos en marcha; de los efectos que se sienten o de las tendencias que se desarrollan. A veces, la investigación descriptiva se preocupa de cómo lo que es o lo que existe se relaciona con algún hecho precedente que ha influido o afectado a un suceso o condición presentes. II. Investigación histórica Según la presenta Salkind, una investigación de este tipo trata de responder a la pregunta: ¿Cuál es la naturaleza de los acontecimientos que han ocurrido en el pasado? Un ejemplo de ella sería, indagar de qué manera se trabajaron determinados contenidos curriculares en los inicios de la materia Epidemiología / Salud Pública / Psicología General; tomar un período en particular (décadas por ejemplo) y estudiar nuestro objeto en relación con las características que este tenía en el período seleccionado. Dado que se trata de un fenómeno ya sucedido, respecto del cual probablemente ni siquiera podamos contar con testimonios de los actores involucrados, se suele trabajar con fuentes secundarias, es decir documentos y con testimonios de personas que si bien no estuvieron presentes, tienen conocimiento sobre el tema; también se recurre, cuando se da la feliz situación de que existan, a documentación de primera mano, fuentes primarias (documentos y testimonios de personas que sí han participado de los acontecimientos). Las fuentes que citamos a Extractos DOCUMENTO METODOLÓGICO ORIENTADOR PARA LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA AÑO 2008 continuación se refieren exclusivamente a la investigación histórica. Esta aclaración es pertinente dado que no existe un criterio “absoluto” que permita establecer una fuente como primaria o secundaria: es remitiéndonos a nuestro recorte del objeto, que una fuente devendrá primaria o secundaria. Cohen y Manion se refieren a la investigación histórica como aquella que sitúa, evalúa y sintetiza la evidencia sistemática y objetiva con el objetivo de establecer los “hechos” y extraer conclusiones acerca de determinados acontecimientos del pasado. (...) Comprende la identificación y limitación de un problema o de un área de estudio; algunas veces, la formulación de una hipótesis (o conjunto de cuestiones); la reunión, organización, verificación, validación, análisis y selección de los datos; prueba de la hipótesis (o contestación a las cuestiones) cuando corresponda, y la redacción de un informe de investigación. Esta secuencia nos conduce a un nuevo entendimiento del pasado y de su relevancia para el presente y el futuro. El investigador que se aboque a este tipo de indagación, tendrá que examinar la autenticidad de las fuentes con las que trabaja (crítica externa) tanto como la precisión y el valor de los datos que contenga (crítica interna), pues aun siendo auténtico, un material no siempre ni necesariamente será relevante para nuestro trabajo. La investigación histórica puede resultar un aporte sustantivo en la búsqueda de soluciones a problemas actuales, dado que arroja luz sobre las tendencias presentes y futuras, permitiendo también relativizar la realidad, pues nos pone en contacto con los cambios culturales. Esto tiene especial relevancia dentro del campo educativo: podemos comprender cuándo, dónde y por qué se han desarrollado diferentes teorías y prácticas educativas, por ejemplo, y ello puede aportarnos otra perspectiva a nuestra tarea docente, vía comparación y reflexión contextualizadas. La tendencia de nuestras prácticas habituadas a resistirse al cambio, puede ser sacudida por un conocimiento y una comprensión histórica de la realidad educativa, en este caso particular. El investigador puede enfocarse en un grupo, una idea o una institución, no obstante ninguno de ellos pueden ser estudiados en forma aislada unos de otros, ya que estos elementos siempre se hallan interrelacionados. Podemos mencionar cuatro preguntas básicas para iniciar el recorte del objeto: ⇒ ¿Dónde tienen lugar los hechos? ⇒ ¿Cuándo ocurrieron los hechos? ⇒ ¿Quiénes son los actores involucrados? ⇒ ¿Qué clases de prácticas realizan los actores? Las diferencias específicas de la investigación histórica, en relación con la descriptiva, reside fundamentalmente en que el investigador no puede realizar observaciones in situ, y debe valerse de observaciones de otras personas, que no necesariamente ( ni generalmente) son sujetos idóneos en técnicas de investigación. III. Investigación correlacional Este tipo de investigaciones se ocupa de establecer cuán importante es la relación entre dos variables, a través del cálculo de un coeficiente que se sitúa entre 0 y 1, siendo un rasero importante de esta medida, el hecho de que el coeficiente indique un decimal próximo a 1. No obstante, si encontráramos un coeficiente de correlación, por ej., de 0,80, de ningún modo podríamos decir que uno de los fenómenos es causa del otro, sino, que existe una asociación fuerte entre ambas variables, esto es cuando una de ellas varía, la otra lo hace conjuntamente con ella. El tipo de información que nos da este coeficiente es respecto de la dirección y la intensidad: si cuando una de las variables crece la otra decrece, o si ambas crecen en la misma dirección, y en qué medida. Extractos DOCUMENTO METODOLÓGICO ORIENTADOR PARA LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA AÑO 2008 En estos casos, observaremos que no tenemos modo de saber si alguna otra variable interviene en esa variación, de modo que, si la hubiésemos aislado, probablemente la asociación desaparecería o sería mucho menor. Como ejemplo, vamos a tomar uno que da Salkind, porque es ilustrativo y hasta humorístico: (...) Es un hecho bien establecido que a medida que aumenta el número de delitos en una comunidad, ¡sucede lo mismo con el nivel de consumo de helados! ¿Qué está sucediendo? Sin duda, ninguna persona que razone normalmente llegaría a la conclusión de que existe una relación causal entre ambas cosas, de modo que si se prohibieran los helados desaparecerían los delincuentes. Más bien, otra variable, la temperatura, explica mejor la cantidad de helado consumido y la tasa delictuosa (ambas aumentan cuando hace calor). Este tipo de investigación tiene la ventaja de que, por contraste con el método experimental, que manipula una sola variable, (y como dijimos, por ese motivo no es muy apropiado para las conductas humanas, multideterminadas), permite tratar con un complejo de variables, en un escenario más real que el de un laboratorio, y establecer, en ciertos casos, elementos de control. Investigación experimental, pre-experimental y cuasi experimental Tipos de experimentos (según su grado de confiabilidad) Pre-experimento: son aquellos en los que el grado de control es mínimo. No se utiliza grupo control. Cuasi experimento: son aquellos experimentos que tienen un menor grado de confiabilidad o seguridad que un experimento verdadero ya que, si bien hay un grupo control, este no se asigna al azar, sino que está formado antes del experimento, tal como se da en el campo. Experimento verdadero o puro: son aquellos experimentos que reúnen los dos requisitos necesarios para lograr control y validez interna. En este caso, los grupos son equivalentes, y por lo tanto permiten la comparación, ya que la asignación de individuos a cada uno de ambos grupos –el grupo testigo y el grupo control– se realiza al azar. P ej. estímulos testigo control P ej. Tiempo de rta.