Bases pedagógicas EI progresismo de John Dewey

Bases pedagógicas
de la escuela nueva.
EI progresismo de John Dewey
Virginia Cuichot
Departamento deTeoría e Historia de la Educación y Pedagogía Social
Universidad de Sevilla
Presentación
John Dewey ('l859-1 952) es quizás una
de las figuras más representativas de la
pSSSggB*S"g n19r p9 rá n 9" y
américa se
"n
le considera una de
las
grandes glorias nacionales. Su persona
a ser encasillada bajo un
único calificativo debido a que sus intereses abarcaban los más variados
campos, en los que, además, alcanzase resiste
ba los primeros puestos. lniciador de la
psicoloqía funcional, *pi"*"il"iá-a"r
-.r'.+'="4rG
pragmatismo instrumentalista, este tra-
bajo está destinado a analizar su pen-
samiento educativo
ya que
la
educación fue probablemente la gran
lmagen 1. Retrato de John Dewey
pas¡ón de su v¡da.' Junto con sus publicaciones, lEr_que destacar su fuerte
com_
promiso sociopolítico, el cual le llevó a implicarse en Ia escena ro.i"l
zando movimientos que siempre reivindicaban un mundo más democrático"n..bJ
y más
humano.
lntentar comprender la filosofía educativa del personaje exige clirigir
nuestra mirada a un movimiento educativo más amplio donde se incluye el mo_
vimienro de la Escuela Nueva, corr¡ente qug
9P{tqlqsjefta ras bases dela pg
dagogía conterporánea. originraá
"@vimiento
heterogéneo, sin que exista un único fundador, sino una serie au p""o*¡e, c.rismáticos que exponen y buscan compartir su visión sobre el hecho educativo.
Decroly, Montessori, Claparéde, Ferriére, Cousinet, Dewey... poseen sus propias
teorías, su peculiar manera de concebir el ser humano, la sociedad, y, por supuesto, la educación; pero todos ellos van a coincidir en un cuestionamiento de
las formas tradicionales de enseñanza. De ahí ese calificativo del movimiento,
ese adjetivo de onuevar, que expresa ese deseo de ruptura, de renovación de lo
espír¡tu, se ha mantenido en el tiempo y buena parte de sus aportaciones se encuentran presentes en la mayor parte de los sistemas educativos actuales del mundo occi-
dental. Pljncip_iqi.cp-ryS elde-ac-lyrdj¿_Cl-dej!.Cifdy3!!_z9cí6n, el de socialización,
el de creatividad... están ¡lggjggg: Slg_lgglg jdrg":!gq!_¿-gl tlglo xxt. A conti-
nuación vamos a centrarnos en el máximo representante de la progressive education
norteamericana, John Dewey, en el que veremos la concreción de estas ideas.
El progresismo
de John Dewey
Breve biografía
que hasta entonces se había estado desarrollando en la mayoría de las escuelas.
Una persona sólo puede ser comprendida atendiendo a las circunstancias que la ro-
La falta de homogeneidad, de un patrón unánimemente aceptado, afecta
dean, al ambiente en el que ha vivido. Si bien ello es c¡erto para cualquier ser huma-
inclu-
so a la propia denominación del movimiento. El apelativo de nEscuela Nueva> proviene de las primeras institucíones que se crearon en Cran Bretaña y que se llamaron
New Schools, pero en los distintos países se fue acuñando una terminología propia
flara
>---É-
mino de muchas experiencias y motivó un desencanto frente al optimismo pedagógico que había predominado en décadas anteriores. Sin embargo, su influencia, su
definirlo, como éducation nouvelleen Francia, Reformpádagogiken Alemania o
Progressive Education en Estados Unidos. Además, en 1920, Ferriére ideó la
expresión
escuela activa, basándose en uno de los principios fundamentales cJel movimientq el
no, cobra especial fuerza en el caso deJohn Dewey quien en su intensa vida contactó
con buena parte de la intelectualidad de la época, que dejó una huella patente en sus
planteamientos. Además, hemos de contar también con otras personas que le ro-
lmagen 2. Sello con la imagen de Dewey, 1968
dearon a lo largo de toda su vida, desde
su
familia más directa, padres, hermanos,
de actividad, y dicha fórmula caló rápidamente en países como España e ltalia.
Si el comienzo de la Escuela Nueva se sitúa alrededor de 1g75,1su
final como
movimiento organizado podría fecharse en 1939, en el caso de Europa, o 1955,
en
yuge; también a profesores, maestros, ca-
el caso de Estados Unidos, debido a que la Segunda Guerra Mundial provocó el
tér-
replantearse muchas de sus conviccio-
y, quizá en la cima de su carrera, su cónmaradas profesionales... que le hicieron
nes. Una ojeada a su biografía nos per-
1' su ingente obra abarca múltiples campos: psicología, ontología, epistemologÍa, lógica,
ética, estética, antropología, sociología, polÍtica y, por supuesro, pedagogía- L" óbra co.piet,
dá¡oÉn Dewey, en
edición deJoAnn Boydston, ha venido publicándose por liSóuthern lllinois úniversity press,
de 1967
a I 991, hafa completar un número de treinta y siete volúmenes. 5e organizan
en ves apartados: farly
Works (E.W.), MiddleWorks (M.W.) y LaterWorks (L.W), que es ya la ciasificación
canón¡ca para c¡rar
sus trabajos.
2. Marín lbáñez sjtúa el origen en I 889, fecha en que Cecil Reddie funda
una (escuela nueva, que va
a ser el modelo de otras muchas eutopeas. La New Sclroo/ era un intento de
contraponerse a las public Schools, los centros clásicos ingleses, marcando nuevas rutas educativas. Fue fundada en
Abbotsholme. Véase Marín tbáñez (,l9S6, p. 260).
mitirá entender mejor ,su pensamiento
educatiyo_ y su ideal democrático.'
3.
La mayor parte de los datos de esta biografía han sido extraídos de la escrita por la hija de Dewey,
y aparecen en The Philosophy of lohn Dewey, obra editada por Paul Arthur Schilpp, que
Jane Mary,
contiene 'l 7 ensayos críticos escritos por distintos autores sobre diferentes aspectos del pensamiento
deweiano, junto con un ensayo final donde el misn¡o John Dewey responde a las críticas (La Salle, lllinois. Open Court, pp. 3-45).
gAlEllEQAGQGrcAs pÉ rA EscuELA NUFVA. EL pRoGREs,sMo pE
JoHN p€wEy
BAsEs pÉpAGóGrcAs pE LA EscuELA NUEVA. EL PRoGREslsMo DE JoHN DEWEY
tg¡n.P
(Mead, I 930, p. 231),
nació el 20 de octubre de 1g59 en Burlington, Vermont, una ciudad
de Nueva rnglaterra que en estas fechas era el centro comerciaf y cultural
del Estado. Duran_
te su infancia, junto a sus dos hermanos, asistió a una escuela púbrica
muy
heterogénea, donde acudían níños y niñas de ra más variada procedencia
y dis_
tinción -ricos y pobres, americanos descendientes de los primeros
colonos e in_
migrantes- en la que probablemente Dewey vivió un auténtico
ambiente de
&r"gesE
&-]g-rrg!.qc-4*y*d9--avr9!gg*{e.dirslsuesrs!Éde-ebre¡deas
que
más tarde defendería reiteradamente en sus obras.. Además,
era frecuente
que desdg*peguqños los niños fueran asumiendo parte de
las responsabilidades
r¡sltyidg*-i-*"-la-.f¡r'r'!ia; eran puestos en estrecho contacto con un extenso
conjunto de ocupaciones agrícolas e industriales sencillas. Esta
costumbre, de la
que Dewey constatará más tarde todo su potencial moral
y cívico, será asimismo
contemplada en sus propuestas curriculares a través de
lo que se han denomina_
, do (gcupaciones) (occupations).
Cuando su padre estuvo sirviendo como intendente de un regimiento
de
caballería durante la guerra civir, su madre, mujer de gran
coraje, du.¡d¡o u.o,npañarle junto con sus hijos a su cuarter generar en Virginia
der Norte. Esta experiencia impactaría en los hermanos Dewey, quienes sólo
volvieron a la escuela
primaria tras la guerra en rg62. Sus estudios universitarios
-realizados gracias al
empeño de su madre, puesto que su padre parecía haberse
conformado con un
nivel más bajo-, los inicia en 1BZ5 en ra universidad
deVermont, graduándose
Morris, de la Universidad de Michigan,
enseñó la primera mitad del año académico que pasó Dewey, y el Dr. Stanley Hall,
En la Hopkins, el profesor Ceorge S.
uno de los padres fundadores de la psicología experimental, la otra m¡tad. El contacto con estos dos hombres, sobre todo con el primero, dejó una fuerte lmpresión
en a mente de John Dewey. Morris lo puso en contacto con Hegel el cual dejó una
f
permanente huella en su pensamiento que, por ejemplo, aparecerá cuando Dewey
hablede(-req j-u:t-gl.y,tLe9*o..fflr-g-qqlqu.
Morris se traslada a la Universidad de Michigan y consigue que Dewey
sea contratado como profesor en 1884, donde permanecerá diez años. Durante su primer invierno en Ann Arbor, vivió con otro nuevo profesor, Homer
Kingsley en una casa de huéspedes donde conoció a la que se convertiría dos
años después, en julio de 1886, en su esposa, Alice Chipman. La influencia de
Alice sobre John Dewey pronto se dejaría notar. Sosteniendo siempre una ac-
titud crítica hacia las condiciones e injusticias sociales fue la responsable del
temprano ensanche de los íntereses filosófícos de Dewey hacia el campo de
los problemas de la vida contemporánea. Debido a ¡u-!¡J!ujg, cgmgnló 9.p31t'cipar en los movimientos r9for.111tar_eql'l1g:_q:ial9s,_e¡t1e ellg_s,_9]_n1c191te feminis¡no, con el que progresivamente se fue identificando cada vez más,
hasta el punto de que en 1919 fue el único hombre que encabezó una manifestación pidiendo el voto femenino.' Empezó a ¡nteresarse,también p_or_la
educacióJlpública, siendo un miembro fundador def Schoolmasters Club of
Michigan, que nació con el propósito de fomentar la colaboración entre los
cuatro años después.
Aqú_re-tll-si4_su_t!!919: p,9Í le filp:efl gr_aqiqs a b_ l.q_qr_r{q_
incidía
en ras Dterreraciones e interdepgn4gn_.i"sq-re caracrH-¡y¡lgLque
tqrizan todo pl"j"t_Ly¡'{_""l¡9.|._r
¿"r¿"
profesores de todos los niveles educativos.
nal'no_sJt_dg. (D.gwey,
nesota. Ese año el Dr. Morris, su reverenciado profesor, murió y Dewey fue invi-
d"
_"¡""r,
OC/L.W 5, pp. 147-148).
gnied
" "quuffffifttu_
oqggf f,fuplg]|.e.:g_dfe*-_cg.lg1.l_q9!n.dat!q, hasta que
un antiguo profeso¿ Torrey, le animó a seguir estudiando.
Asistió desde el otoño
de 1BB2 a la Johns Hopkins university, donde consiguió
su-doctorado con ra tesis
lh9 ehjlo2oply 9! Kq1t, Tynca pubticada.
Entre 1879 y 1881,
-- ;-
4. Burlington contaba con unos quince mir habitantes
en ra fecha en que nació Dewey. Esta pobración
se repartía por iguar entre inmigrantes, procedentes
de rrranda y queüec
,u ,ryoiir, | ¡J, d"r.un_
dientes de los primeros coronoi, Ios-oráAmericant
"n
qr. ráti"n ser protestanres
angrosajones de crase
media. Véase Dykhuizen (19S6, p. 6S0).
La enseñanza de Dewey en la Universidad de Michigan fue interrumpida
durante un año cuando aceptó ejercer como profesor en la Universidad de Mintado a volver a Ann Arbor para hacerse cargo del departamento. Conoció entonces
a James Hayden Tufts, un auténtico erudito de Historia de la Filosofía con quien
escribió Etfrics -publicada en 1908-,u y fue el comienzo de una duradera amistad.
Tufts marchó a trabajar a la Universidad de Chicago y en 1894 se encargó de que
a Dewey le ofrecieran un puesto. Antes, en Michigan, Dewey había entablado
En dicha manifestación tuvo lugar una graciosa anécdota. Entre8aron a Dewey una pancarta, cuyo
lema no debió leer, que decía: .los hombres votan, ¿Por qué yo no?,. Véase Westbrook (1991).
6. Hay una nueva edición en 1 932.
5.
u:-.^-i- .. --4^^-+i'-
--t"^l /^ t- Á"...;A^
i^f .^ril
{ at
\.
B¡s¡s peo¡cÓclces oe Le escuet¡ ¡lu¡v¡. Et pnocnes¡stiro
DE JoHN DEWEY
BA5E5 PEDAGÓGICA5 DE LA ESCUETA NUEVA. EL PRoGRESISMO DE JOHN DEWEY
lmagen 3. Dewey y su mujer en los años cuarenta
inclusión.{g la pedagogía en el departamenlo, junto_9on=13 lilo¿ceptarla fue la
sofía y la psicología. En 1895, presentó su PIan of Organízation of the University
irlr"ii-srnioól. poco después encontró un Brupo de padres interesados en proporcionar a sus hijos un tipo de educación diferente a la disponible en Chicago y
le ayudaron, financiera y moralmente a abrir una escuela elemental, bajo los auspicios de ese departamento, con Dewey como director, dos maestros y dieciséis
niños: esta institución sería The Laboratory School
Oewey 9ctooI,V
¿sta
o, más popularmente,
la
-o-que ¡r1á9-1q¡du-se-hg!-d9.n"-Dingdggo-
la -qse
AFt:Jr":S!"o!t*1U¡Sj*!É-l,qgn el Dgp¡lqme.nts-de.Pss[gogíe.s¡e-co¡p
los laboratorios de ciencias físicas guardan con la instrucción en esos temas.
9¡í9,_c9
U plo
":!
pecialmente la si*c-g!gg(a g$ucqti.yg"
o:'¿
c
p
D
r
gyrey, qu
m p¡ gbq
r
l
a
s n u-e131!99¡
iqt-pegt3lgTr
g
d-g.Jen-e!. !¡ ellS cgb1qb!-l,1g ¡¿lp-r-llqggs
como el.ap.rende¡_p91 .la¡rcción.lq qqliyfqgd personal coqs-gg$¡q-d" lg-gd.rcaqlgn, lq necesidad de considera¡ constantemente los interese-s de,t ¡1[o.-e19.
Durante los años de Chicago, Dewey perteneció a los comités ejecutivos de
p.
contacto con dos personas cuyas ideas influirían también en sus propuestas filosóficas y educativas, éstas eran Alfred H. Lloyd y C.H. Mead.
Dos fuertes vínculos lig-gron a la universidad de Michigan ar sistema
la Herbart Society for the Scientific Study of Teaching y a la lllinois Society for
Child Study, abanderadas del movimiento educativo centrado en el niño, aunque
él mismo cuestionó muchos de sus planteamientos.
Fue también elegido presi-
-
dente de la American Psychological Association (1899) y de la American Philosophical Association (1904). En el campo de las publicaciones salen a la luz algunas
de sus obras pedagógicas más famosas: My pedagogic creed (1897), School and
ggtydia¡1gs aqe.F¡ _d9. !qp{9p9i-ac!g! del tr9!gj9_{glga_
do al collese. El interés de*-Dewey porla g{ygagón se vio estimulado por las visitas qus.resj!2,ó-.a.es-tq¡ -e-en.trer_.ed¡¡,sativos. su airi;¿id
p;icologajlt
902). De estos años es su Studies
in LogicalTheories (1903), escrito con sus colegas de departamento, quienes a partir de aquí forman un grupo de investigación filosófica conocidos como (Escuela
cgdgl-g"g.p:tUdi_ar el pro,ceso*_Qg gp-tgdEgjg y, en sus últimos años en Ann Arboi
de Chicagor, con planteamientos cercanos a los de William James.
¿
"
qgqly. gtt'ld-jg_g I
.1qLb
f -..¡¡n
¡pgplf
".
4lÍ:" .,"t
ñpr.
trn
;;et"á,,
¿
¿u
""
cación del pa5¡¡)gt lr,g!:glo_g-lj i¡1l_u'{tggg¡!%plgferglg! de ta universidad,
gg!9t'9¡¡[o-r¡eb.e! e lql
b._qJ.-F
hab.!íÍss.qe!!e.!re$-e- q'.r ins-r,[l]Jq:
-v,-p9Ju-e!:rq!orcL4s_prgf.elq.t9:_:gbl9_lgtas
!9I9.1q!-e-!-c_igll..,.t9r_91¡u1,11pelllg¡inl_y (pensamiento,. En tos años de
Michigan tuvo tres hijos -Frederick,qrchibáld,-E"Jy;
y l" observación
/M.;;ii-'
de éstos dio un acento práctico a lo que había aprendido acerca de la relevancia del correcto desarrollo en los años más tempranos.
Cuando en 1894 John Dewey recibió una oferta de la universidad de Chicago, bien dotada por John D. Rockefeller, u¡ggle
!o-s-lrqlqlglq;" i; it"""-Ll
7. Morris murió en Milán con 2 años y medio a causa de la difteria.
Society
(1
S99)
y
The child and the curriculum
(1
e
l
E
i-g
g,e-l q: Lüq¡49!g a
iggsld e .! !,,9!f
-{9 1 lc
de
este
desacuerdo, dimite de todos sus
consecuencia
. inteÍnas hurog¡átQ1sr-Como
la uniuel¡dJ a"!ñ¡qgg,-El2qf 9!;g
c.a¡gc:académicos y
S_1
s
911
¡ e IZs lL_e¡Pgtgtq
deilü.-tq
ta
!!!
"n
en la Universidgd -{9- Colupbia, en Nueva York'o
pgesto de la ryri1¡q
-c-qle€oríg
8. Justo antes de comenzar las clases, John Dewey lleva a su fanrilia a realizar un viaje por Europa. Tres
hijos más habían nacido en Chicago: Gordon, Lucy Alice y |ane Mary. Precisamente en ese viaie, murió
I
años. Los Dewey adoptaron en ltalia a Sabino, prácticamente de la misma edad que el
desaparecido, el único que con el paso del tiempo seguiría el kabaio práctico de sus padres, como
maestro en progres sive schools y como diseñador y fabricante de materiales educativos para garantizar
un aprendizaje constructivo y de experimentación científica. Cuenta la hija de lohn Dewey, Jane, que
su madre, Alice, nunca se recuperó de la muerte de este hiio. Alice murió en 1927.
Córdon, de
B¿¡el¿e.o_qqóqfeas SE L¿J¡qq!|A,l¡rrEVA. Er- pRocnrsrsrr¿o DE roHN DEWEY
lmagen 4. Cita de Dewey en la entrada del Teachers
College de la Universidad de Columbia
Hgt9,S- d-"jlg*ge[np_f gll
:o* :o^cJq- !,. 4 q¡tg períor
e-
La
eñriumerosas confeiencias.
Deféndía que ,ná aémocia-
Analizar rigurosamente la teoría educativa de John Dewey exigiría, sin duda, examinar sus propuestas filosóficas que discurren dentro de la corriente pragmatista,
es impóiibte
-iin
una democracia económica e
¡ñclulñáI. Eñ T914.,-Déwe/
-corneñilJ
"*piéñr
*
opi-
niones acerca de la política
nacional americana, utilizando para ello el semanario lhe
New Republig donde escribiría durante dos décadas. En estas fechas, concretamente en 1916, aparece su obra pedagógica más representativa, Democracy and
Education, donde se reJl,eja.p]_qjenpge_j-e
ideA-s fiLosófiqAl.qo_n
*r{f'9.-!-_{9_g1
-tas
1917, el filósofo pragmatista considerará positiva la intervención
estadounidense en la Primera cuerra Mundial, pues esperaba que ésta contribu-
"gtT!¡=q:.:3
yese a la reorganización del mundo dentro de un orden democrático, caracterizado por el fin del capitalismo y de las clases altas privilegiadas. sin embargo, en
los primeros años de posguerra, su pensamiento acerca de la contienda y de la
política internacional sufriría una profunda revisión, ya que se implicó en un mo-
vimiento que pretendía incluir dentro de las leyes internacionales una cláusula
que declaraba que cualquier tipo de guerra era un crimen y sólo una forma ilegal de resolver las disputas entre las naciones. En 1920, ayudó a establecer la
Unión Americana de Libertades Civiles y fue presidente durante varios años de la Liga
para la Acción Política lndependiente. A partir de 1940, y con motivo de las sucesivas reelecciones de Rooselvelt como presidente de los Estados unidos, empezó a apartarse del activismo político, aunque siguió trabajando, tanto a nivel
nacional como en el estado de Nueva york, para crear un tercer partido radical.
En 1930, Dewey se iubiló en la Universidad de Columbia, pero ya antes
había iniciado largos viajes al extranjero que continuarán .en años sucesivos:
China y Japón (1918-'l 919), Turquía (1924), México (1926), Unión Soviética
(1928)... ll 1 de junl,o de l-9s-z-.fa[e_eté.&h.1"_Q-u.}ygL un¡grgle-*c9mpr-ometido
f 86
has¡a
el fbal,pcl !e .aq$- d.em9-9t4ti.¡,-!,-e!i€nd9:9,-l9t9n99ido
com
J¡]gglg
Historia v
y- 99-!
rerso{t¡va acttnl
gg-qg.rrespec
¡le
i
a
I
m en
la c¡lt¡cacián infanri!
te en e I
á
mb
i
educación como reconstrucción continua de la experiencia
do expuso su filosofía política
Cñlóiiiict
o-
principales ideas educativas
to
a n
g I osa j ón.
t" ;r*pr"rtid;*
pues Dewey, junto con Charles Sanders Pierce y William James, es uno de sus
principales representantes, pero ahora no vamos a detenernos en ello.' Sin embargo, h,ay
qu-e*Irylffgyg
9s13.
$Lo¡glia de
sa co n cépc i ón, de 1 e¡99¡i e19 i a,
I
f
rulo
de
!-q
39.fgry-g11¡3lery¡1l9v9{
I 9 g:ry]lgjgjn1g g9!8' ?!S"dl g-
lu -btel9€le-y.Cu- lg: ¡uenpel.qientí{igp".9 .{e-finelei del-¡tx y- pt:.i.ncipls:-d-"|It*yg.g
esql_g!_,b.!3.s__e !-e la a9J!¡!c-l91.agweianq d9 9du91ión. 59 q1a de u13 1-9!ión
dqe1pq¡igq9lg-q.yJlrgligtyl9.-"*.1,-u!gg9:lggr.T:.9L1"'"9i9_-""t9'ig:_""1pasivo del sujeto:
contra de teorías anteriores que hacían hincapié en el carácter
*^
l
a retrpe [ime
l'rleii -ü¡ü¡ j"¡ls.qnrbi"l-qe eLi-o$!e l,!a
Comencemos examinando su concepto de educación. Esta es considerada un fenómeno característico del ser humano y en ese sentido conviene dirigir nuestra mirada a la antropologÍa deweiana. Pqlq-,e! p¡qgp.qti¡1a |tQl"?l 9.ghombre es hablar_dq viqg..Dewey, con una perspectiva darwinista, no se refie-
re sólo al nivel ontogenético sino también al filogenético; no piensa únicamente en el ser individual, sino asimismo en la sociedad. La palabra uvidao
designa en su filosofía toda la extensión de la experiencia, tanto del género humano como del sujeto en su individualidad, de modo que incluye costumbres,
instituciones, creencias, ritos y todo aquello que podríamos introducir en el
concepto de cultura o espíritu de un pueblo o de una persona.Yida,-q¡pgl!-glci_q _-palabras claves en el pensamiento deweiano- esta¡4q rPlqgl-o-1adgl$1g.-
lln'sl[gS9Ll3
9q3!3-cl9l],-.p99:-é-:13 Jl--u"t-..s.4igr--or-,9l'9sl919|t P1r3
fe*auar
la continuidad de ambas.
Rlq qL!-e_r,¡.q[e!9*tq elille-!9!g_-g_s t_igjlgg:g.iul, y ,"" to.i"
puede mantenej gracias a u n proce:o dS- transm isión deigUtgg&igggdgfg!rlly;gll!'j.*qgl-q-u_191-1ás-v-iej9¡.u"lgl13¡j9y_u_les.
Esa
comunicación, esa creación
de un fondo común de significados, de una inteligencia colectiva, es la esencia de
todo grupo social, hasta el punto de que -O:lyey*lleee*UfillSlq9e !-q ¡*o-cjgdad. lo
só!g_qo!!!úe_gjs-tjgn{o por la transmisión, po1 l19olulicació¡,..¡i1t9- 9y19}¡.-!9
9. lára un análisis pormenorizado de la filosofía deweiana y de su teorÍa educativa, véase Cuichot (2003).
H¡stor¡a
y perspectiva actual de la educación
¡nfantil 147
"!Ir"Tl]sión,
I
e
É
en la comunicación. Educación, comunicación y vida social
I q9_s..9o.lc9p-1-os
e¡tr99f am e
lié
li
sáád@
Al o¿ienqr las conductái Je las ;re"ar
la'lgi"dd
pragmatista norteamericano relacionará con
d"r.io"es
;i-¿;
*,
¡
e"
,""
ñi
que se conoce lo que
poder adicional de dirección o control subsiguiente. Decir
ciertas acciosi
se
efectúan
ocurre supone ser capaz de prever lo que va a s.uceder
¡es, de anticiparse a los acontecimie-ntos, de prepararse ante las conseCuenCias.
crecimiento posee como-c*ondición primaria la inmadurez, que posee a su vez
Cos
rasgos caracterGt¡goltIdg-g9$:lS"g,f-bjlg_s,1i9i_da$ eit".Itir-, huy
q*.*.*
y
ó<Jñltéüa
ll'poribifimA
En este análisis de la educación concebida
t" ü;¡;FFtúqdos de*e*p-g,.19¡,cjfr_flfgr.tglg,
"..io*, -bnu
ei'áec¡r, de ióntiaer disposiciones ur[".iri.ri. ig_sgygr,,,9;_!ila",",. defi nida
cgmo!-lggg ¡s q q n de c ertos_ há! tos-q ue*efectúa n-u n
f Ji" a;¡ y,
de modificar 1",
i
i
i
i
i
-dgtg.on?t
clgd-gqq nglp-e-lTitq -adugiqrnos de las verdades últimas; y es que para John
Dewey, el pensamiqnto rgfle4¡v recurso Por excelencia con-.el que cuenta el
.u¡
"r¡g,a" ¡,
activo, de control de medios para la conde fines. No se trata de conseguir, gracias al proceso educativo, una
uconformidadr con €l ambiente ni éste debe ser v¡sto como algo fijo que propor-
entendido tal ajuste en un sentido
-!$,",
secución
q*
*':..*..**
suP!9n g9[rlani9-n!9*.c.ilicia,tt-va"p.ata aBlieadassap,aEtdad.es-anuevas situaciones.
concepción de la educación tiene dos consecuencias importantes. ya
que el crecimiento es la característica de la vida, la_edu.cac.r'1in co_¡-s_-!i-t-gy,g'una
Esta
nlpn_a gCiq.gg-¡,gf cre_gimien!9¿ l-o !i-e_ne*U¡ fin más allá.de ella misma, g! slt plo_:
pio fin.Tanto el niño como el adulto están consagrados a crecer, a desarrollarse.
En este marco hay que entender la afirmación deweiana que sostiene
que nel cri-
terio de valor de la educación escolar es la medida en que crea un deseo de crecimiento continuado -de aprender- y proporciona los medios para hacer efectivo
tal deseo, (Dewey, 1995, p. 55). La segunde co_nsgcuencia eltrolc-q con su concepto_!gi:._9l!gi!"e]_d9-,gCy--q,q9-i9liJf.g-dyS_nción
como reconstrucción continua de
la- experienqia, ya que ni el-q€ur:
ió,qiGir:ráttg,r. üidu ;t
dinamismo, movimiento, cambio: alcanzamos así una definición técnica de la
educación: es aquella reconstrucción o r"-o-l8¿r!!i"g,9l de qgp"tglcia que da
'e"t,gt¡
I
a
e,.dññt
pgg5lf:gb_rJg1ignlg
qrejillnglajümq¡ffi
(,Dew ey,'t e9 5,
p. 7 4).
En cualquier momento de la vida del ser humano se ha de procurar un enri-
quecimiento del significado de la experiencia, en definitiva, de la propia vida.
IAA
Hi\toria v
np6ññ^a art¡a!
¡le la
oilra.íán inÍ,at;t
El
como reconstrucción se observa
el papel de primer orden que juega.!a intelrgencia,.e.ntendida ggmo método de observación, de experimenta.-i-ol,
JY:::_-i_-1.!9$9.reflexiv,o y no.como órgano o fa-
;;_
ciona el fin y Ia norma de los cambios que tienen lugar en el organismo. Dewey ir_r,
siste en la adaptación actíva, en la capacidad del ser humano para modificar el
ambiente que le rodea. Propone la consecución de uhábitos activoso qr" ron tos
i
&i_e$glgss.
.9n"g-lq:gp*a".1.*d--dgds:erclls, "n
el
'á¡&a;A"
l
nueva no quede aislada€n :9.91te,-99-tgLggflq-gg-"-:9 Llpg,e-en
rnonitiVá de manera Sustantiva, no arbitraria, relaciOnándOSe con SUS ConOCimienLvE¡--r;*.Ol¡-g,¡¡-sp*e-9!q de !e*-elpgig!S¡a-99!ggyges el de proporcionar un
cierra dirección.
""
düñl ;rorn*ro
;;;.¡d
y
uiq'
r"' ac q
"d', " " "
jg r{99!9I3
más cone*iones
obje!ryq9ll9!le-8irr--q-Y9.P-"y!9!i"9tgl!9j-""j:-t"blg9an
¿adsr -" n Jg:ig g ig9-"":" "9 y :. J g gg:g!1-Yl gg:1llgt9
prgggo de educación y enriquecimiento personal que
¿g¡1tgdqS"lgg,es decir, es el instrumento que permite la plena humanización.
indiv_i"dt¡g.p.erq :ontinga!._ese
_
_': hábito de la reflexión hay que fornnarlo, Partiendo de ciertas tendencias innatas
Este
presentes en el individuo. Éstas constituyen la materia prima sobre la que se ejerce
la intervención docente. Entre ellas se encuentran la curiosidad, la disposición a ex-
plorar el ambiente, a realizar hipótesis sobre las consecuencias de los actos, a investigar lo desconocido, etc. Cracias al conocimiento de la naturaleza humana, a su
prepagq!é!-sn-q[errqg-dg le- ffi.p!-o-ee,Sl {etg¡lu t'g !-" i!]yS'¿-q-lg1ngo'9t
conClgg-nej 3[U9¡tql-e¡- pgrlel fome-1t9 :!91 g9¡91m1-en-t9 ¡ef exivo.
Es necesario dg¡teSel
ggtlí.glel.
¿-"-."p1g'-9-f.o-f-q9-!*991
qglvg-g]glgg3l
la forja de lo: h4bitos deLejlucando. Él se constituye en
eiemplo del educS-dqr
modelo para el discípulo. El educador es el primero que debe mostrar una mentae_n
lidad abierta, carente de prejuicios, una actitud responsable ante sus acciones, un
deseo de argumentar sus conclusiones, un compromiso con la sociedad de la que
forma parte; es decir, todo aquello que intente conseguir en su alumnado.
Reflexiones sobre el currículo y papel del profesorado
Si analizamos diversos elementos del currículo, tendremos que responder a preguntas como: ¿qué materias debe incluir?, ¿qué métodos se han de utilizar?, ¿cómo
organizar el ambiente de clase y, en general, el centro educativo? Frente a obieti'
vos parciales y secundarios, para Dewey la fina[idad últirfra*de-crfdryieilntery9,!-
ciÉlgdy.g*tju¡"e:le,nglqg jg"]g{!-{"ad-devidadelindi¡1!ay.9,;{S.!g;;g!-"Jhg.
His¡^ti^ v ñpt<ñF(tiva act¡nl de la pducación
infantil 189
Dado que educar es enseñar a vivir, posibiritar una adaptación activa
a las
miten las materias y hace hincapié en esa condición que hoy se considera básica
para que se produzca el aprendizaje, la significatividad de las mismas para el
nuevas situaciones y contribuir al progreso de la sociedad, una buena educación
g9.il g
compren s i ón de I m u ndo, a" g:,f"ne,n"no** i |
-lorl.q:t-1
"l'
t
bá;¡.'
ta con?ic¡ón
pñ;tr';
;;i"n;ñ*fiñ."Erüñtiüñlli
"
"r,
poffi,
criterio social que propone Dewey en la elección de materias, éste es el sentido
que adquiere la introducción de materias como la historia o las ciencias naturales
y sociales. L"
ryrcIg1gflglg1.
capacidad criti:g. pero eila sola no basra.
hay que pasar a la acción. El,:gglg
tullién
D_e
ta cgÍtplg1l_qtSn
qgq1p*qseer estrate€ias de
actuación,
ial. Ambos apartados
formarán parte del conten¡do educativo.
Dury_:y_r"_9tlgg:"
.gr¡*gg"1n1i33l gt_Igigg_1preld i¡aj
e
medi
a
nte
un
a
se_
!!stsr3:i-ti-L-d9.9-oiler,:!g-s*gpl9g4"ss¡ll'?q._yld,tli$l@
r:!*,".:,:I!'vadLg.r_qSlüliil'nLr
tu, ¿ir","ntes edades. p,¡ru utt¡t"ñ"n
psicológico sobráéi togiáó. i" qru tá rp*.ia;;;-"r pl-t*rientos de la historia
y de las ciencias sociales y naturales. El pragmatista subraya que se comience
por
algo que resulte cercano al infante, ya que el objetivo es la apreciación de qué
es
la vida social, lo que ésta supone y cómo se ha desarrollado. sin duda,
una de las
-Sg$Ilbggj
mi,ento curricular son las lla-
'
dadanos demócratas, a través de la intervención que programe en sus clases. Se
trata de un educador que fomenta e.n_el discípulo el d199_-{eipr91d9! _s! P!91-tj:_
cidad originaria, su afán de enriquecerse.col ft!rev9:.:xg9r1en9ias, que lo o_llg!!e_
para que sus juicios y elecciones sean razonables, que¡otencia su vocación. Es
un profesor con suficiente aglg-nomh y profesiorytj$d para decidir qué hacer y
cómo sin necesidad de subordinación a otros expertos educativos; un docente qúe
vive en un cuestionamiento continuo de su labor de cara a ogtimiz_gf .:ll_13!¿o;
un educador que es consciente de su r_esponsab_ilidq{sobre la opinión pública, un
con la realidad social que le rodea y con la lucha por
justicia para toda la humanidad.
Estas cualidades convierten al qdgcador en un auténtico líder. El lideraz-
ser humano comprometido
la
go se lo aporta el conocimiento más amplio y
p[r""J" a"-ili'"il¡u,
su buen
hacer docente, no su posición social. Son cualidades, además, que le permi-
T^,91r.*:Egqt:J: ':S|y:tgt9*Le;p_o11{9!U$_r.ilc]EqdcelgFqtlz4g!ónntravés
r.J:j !r3*lf lgtllt I l' I q l: r' ryg -y*-4 v-'.131*Pglg qelgsgl s's
lu.3sflgl-ablgry1l:'lg,cglplerg".g jis9*-yll"gLst="tu*s.3.._*_g-
bajarlamadera,etc,)medianteuncontextodu@o
pr"gl3 uti-q9^au-toridad ante sus-4lsgípylgs, término muy alejado del despre-
de experiencias que tipifican situaciones socialeslcocinar, arreglar el jardín,
tra-
n iñ
a,
se-.est
i
m,
hh
ouffi
légiea,_la*qaBaej dac!--erca&E y
constructiva del sujeto. En ellas se
qgl,lgrpbnlrincipios educativos deweianos
rv
q!
¡5|e' e.t{ff
:. !.o_9 o.T p_lltiT_g t te 9!
el educando Ját
.*t""¡Jo
";i;;
d
;;;iil;li
e'.'
exper¡encia, cooperación con ros se-
mej,antes...; en suma, las ocupaciones conliüffi";n óntrñamiánto iao.eo
para
la vida democrática.'u Dewey da una gran importancia a la forma
en que se trans1o' <Debemos concebir el trabajo en metal o en madera, y el tejido y la costura
o la cocina, no como
estudios especiales sino como métodos de vida y de aprendizaje. DeÉemos
concebirlos en su significación social, como clases de procesos por los cuales la sociedaá se conserva,
como agentes para traer al
niño-algunas de las primeras necesidades de la vida comunal, y como inodás
según los cuales han sido
satisfechas esas necesidades por la inteligencia e ingeniosidad crecientes
en el hámbre; en una palabra,
como instrumentos mediante los cuales la escuela misma aspira a ser una fo¡ma genuina
de la vida activa comunal, en vez de constituir un sitio aparte donde se aprenden lecciones,.
V?ase Dewey, l, 11gg4,
p. 85). Procede del libro School and Society (1ggg]l.
19O
alumnado'
El docente *es. u¡3 fSuF i1npre,scindible g{!_lg4a tg,p-g-{fg-gg!i qgyg1gla.
'l'iene una gran responsabilidad en la forja de auténticos seres humanos, de ciu-
significado det
H¡stor¡a
y
perspect¡va actual de
la
educación infantil
te
n pf:ta
á
ciable autoritarismo. La autoridad es respetuosa con la libertad del discente; el
autoritarismo, no.
Realizaciones prácticas: la Escuela Dewey (1896-19A4)
Kilpatrick califica a Dgygy -9_o¡o el-oa^pósto_l de la democracia para la educación
americallqr (Kilpatrick, 1971, p.467)y es que, en efecto, toda su filosofía de la
educación transmite su fe en ella. Esta, en opinión del pragmatista, supone el esfuerzo por conducir los asuntos sociales sobre una correcta base ética. La democracia es, para é1, una forma de vida, una manera de concebir la existencia que,
por lo tanto, se hace patente en las prácticas culturales y en las relaciones sociales cotidianas; es mucho más que un mero régimen de gobierno. Y nadie nace
qqg3!Lby--g!g"apr.e[d9l e 9gl {"1liggta.
En este sentido,_sólo_-err
{9*
.l_as es-c_tte-las
que sean auténticqs comunidades dgmocráticas pueden los ildividyos a4quirir
las capacidades intelectuales y las _agltj¡des
sociajs:qgejg! eLprerrgqgE4glgr1
t¡:-.^-:^.,
-^é-^-.:.,-
^-..,^l
)^
l- ^)..---iA^
:^f^6tl
ióa
BAsEs pEoAGóGtcAs pE
rA EscuErA
NUEVA.
Ellgoclle1tMo
lmagen 5. Busto de Dewey en el Teachers
College de la Universidad de Columbia (Nueva
York)
DE JoHN DEwEy
Bases proacócrcns
el logro de una sociedad genuinamen-
lgms*ics-
Quizá el ejemplo más claro de
organizar correctamente el ambiente
escolar de manera coherente con sus
teorías se pueda apreciar en la Escuela
Laboratorio, adscrita a la Universidad
de Chicago, durante los años en que
John Dewey fue director de los departamentos de filosofía, psicología
y
pedagogía
de dicha
universidad
(1894-'1904). De todas las denominac¡ones con las que fue conocido este
centro (Universitary Elementary School,
Dewey's School), la favorita de Dewey
era la de Laboratory school, Escuela Laboratorio, pues comparaba su función con
la de los laboratorios de biología, física o química.
a. la
gl
Qeseaba
{ar
in:lilgg¡ór
c-aráctj:r experi.mental, dg qgngj1,gqe-.Ig s_e_Ig-[e-1lgg*pLrng-1p_1g.gito{ol o
iaeln-!139o-'r-i-ilg g-9*!ig9-19l:-q" $!eior.u-rggT
g:gh"*g_919*c9Tp19b-ar y*yglili."1i
1!_gran
9.! le9,{9:f9gue-¿g[9radecuadas a través ae ra piaitica
egsl*evh,--La Universitary Elementary school abrió sus puertas en enero de lg96 con
16 alumnos de seis a nueve años, y fue aumentando su número de tal forma que en
1904, cuando concluyó la experiencia, contaba con 140 discentes de cuatro a quince
años' El volumen del profesorado también fue creciendo: de los dos maestros contratados originalmente se pasó a los veintitrés de los últimos tiempos, ayudados por diez
graduados en prácticas. Dewey figuraba como director; su esposa, Alice chipman, era
u ¡scuELA
NUEVA. EL pRocREstsMg_gqlsrN IEWEY
:n :ggfacultadesa demostrarolJranJlerg:-pq
implanqbg.__
la
sqs.-{q lg¡mació¡r !e_ d_gc_gn¡gr
teoría pgQgggica que se
las ideas deJohn Dewey acerca.de cómo
o¡
s os_upac'-o nes (occupa
La
tp!@
-c_q!:![@"
núc
-e_!-
I
ep
-f
u
ndam gI
ta I
/etdlseño. Con'Plgldlq!-qctividades comg cgginar costUls y !-gJ_'-dgjgpf"gndas, trajg:gn.113ggral1n gg|9,tc._E_qnJrilqrSgf o-le99_l-qg!é|lJdealpara j¡te€rar_lstdss_
E
contextgrjn los que se-4esarrollab4? ll¡ey-o1-pg¡¡9_d9-laJtéj!bn!i..1-!a-fanjlbJ-l¿
escuela.
Aqgl¡gpglígl*e¡
fg!"p|o-¡q¡,nie¡!o_.!os.gg_a.tro
intereses naturales de la infan-.-
constructivo -que, desde simples coordinaciones sensorio-motoras evoluciona
-ql,
hacia el uso de herram¡entas y habilidades técnicas-, el-investigador o experimeJltal,
cjA:
el social_-deseo de comunicar y compartir experiencias- y el expresivo.g-?-$S!cq.
L
io terminó de forma abrupta y por raNunca
más
volvería
Dewey
a comprometerse con este tipo
:g¡_q:!gigqlgti-ca-:,
de experimentaciones prácticas en la escuela, probablemente decepcionado de
cómo había concluido esta apuesta educativa.
r
Vigencia actual del pensamiento educativo deweiano
El pensamiento educativo de John Dewey sigue conservando en la actualidad
plena vigencia. En los albores del siglo xxr, su mirada crítica, sus reflexiones
el mundo educativo, mantienen su fuerza vital. S_u concgptg-{e*g!!g:.
sobre
.ióIt.
.ojno_.Lu_99.n1!'ygg!91 c.ontinua.9S_
de a corr iente
l
co
n
stru c-tiv!
@rus
:E
g.u" se
lg ulp:li"n-9i"L^rgp.g,"-dq glTg{_ggnlLg .
d9_!1p9_n gl qo_-g_1. .u_l_gfry¿gSq r1g3!:_
.! q
i
i
lpq üG*inte¡-es-qiq*nds-en--u-n-med-io. al
gue asigna sig.nificados, dando sentido a la realidad. Actualmente, a través de la
educación, sg,p-¡¡1tgde,. gepacit¿I al-ser.h"Vt':.el-o-p,ar¡_Afr-qnle-r*l-e5_rutiplq-e¡
-eglUgut'qgg" !e- depara sq .C9y9tif 9"L9!,j1qdo.g!-"- c_gpgcjtac.ig!_gg9_!9ll-ey9_
a la cornpren{ql !"J_:iejlfica{g {9 ca!{59]1o en que se vea envuelto, permitiéndole interve4{*_e-l,e-s,?.silugc_ign-yj_c_1rui.-g¡ órr actuá9iOn¡iómo seRala
la autoridad académica visible, y Ella Flaggyoung ejercía como inspectora de estudios.
Dewey-.uI_glgggllgslgyg-99_!-qF!9l.ig-e¡c_1.a, que ha de permitir observar cuidadosamente todos los factores implicados, seleccionar los recursos que nos po-
a]g1¡¡Ado,{e_!" lg!-q¡atgy S_9h_o9! pqgvs!ía mayoritariamente de familias
corip:91Él9!9-ll j.u_elgl.ejlls-.lgsggggf
sibiliten la solución del problema
El
e:.dta.sus,;d-;;;;ñ.h*;;-
siones, colegas de Dewey en la universidad, y casi todos apoyaban tanto económica como moralmente al centro. L_a gf-cq^"-la rort"níu url-r I."1"
con la Univergidad de ClliceggJ_lllll-9j9!__pl_ofeggrql, i!.Lq:g..d".d.S.partamentos
d¡sti,lt_Si e!-de-QgW*yr.-?SJdLer-o.n,a dar chartas a los¡riños
y.-Ijl3:,_...r".gq;i!lg1*qy-;
inteligencia que está"al
y juzgar la estrategia
:g1.j",.91*t"r.Tj9q1*éJfu'
más oportuna. Es la
a1u9l!1 que busca
eltienes-
sin descuidar la autorreali-zg.Cié.LC3l*ild¡.ylggo. El lnforme Delors,
!9¡ ¡ocial
a finales del siglo xx, no hace sino subrayarnos este enfoque educativo. Expone
que el princip.aljroblemq.g_S!_":jejg_ x¡I.t9_!9l31ilIgp_r3pg1g¡_3-.!9!-rM!_y
BAsEs
pEllSQqEAl pE_tAllgUELA-NltEVA.
Beses peoacÓc¡c¡s oe Le escu¡L¡ ¡tuEvn. Et pRocn¡ststr¿o oe
EL pEqcEEslIMe qE roHN oEWEy
fyufZg:V p94g: dgelu11u"lcia
iltelec_tuales prrm.lnenles que le permitan comprender el mundo q9e
l9-: Igq91y io''poiiiri" a"u ,"*n"iiiüfióni.urJ! ¡urta.
,1rrlgiq"
"tg"¿ii
d"
iilG
&rí
cio, de sentimig{gy-d""" ¡Iggil*qg,..ól
rnun9,
-9¡._la
,
Otro aspecto a destacar en las propuestas deweianas es su insistencia
de la educación infantil, los decretos por los que se establecen la ordenación y las enseñanzas correspondientes a la educación infantil en las distintas comunidades autónomas, como el desarrollo de la actual ley
de educación, la LOE (2006), insisten en la apuesta deweiana entendiendo la
replantear
ti tu c i o n
I
I
qye|qry',
gqe"
prióe'9
"-9_l
n
-qt
-u
"
hum a
nos y du
¡uf
-!gr_1,
tq
gde9$:gJ-d-9. Tgsl 4t rs3li'
sS:gnplgn-elg¡$-!9!--c]q-.deweialt3^en-qLe*gl-fitld-e-
d";
f*d-
""
t"
l"it
7
l3r-educ-ación esJa
_gducacign mig¡-na, pggqo^que elJ¡¡,¡q¡¡i.{enpl1|t=f,gp_q_c-i.{q_{ ggnqlnuada de creC¡ggnla-y-desartsllo. Se.trata de la idea actualmente aceptada de 9-Qyq9j_ó1p_s¡;
rygge_ntgt {e,edgc¡ciQ¡.9,.1.g Jgr,F.g.Au*r,q*Jf vjdl No hay ninguna erapa dentro
del ciclo vital humano en la que se frene la posibilidad de enriquecerse, de in-
a
res
: s q grl€Tg!1qa.¿
i
B.d ggb¡1_gl-
rqTe 1!gs ffi
rurere1tad al
I
do¡glg el niño reproducía alguna clase dá irabajó ieiac¡oña-da conlá viáa sóc¡al:
cocinando o trabajando la madera aprendía química, física, matemáticas, ciencias
sociales...; tgdo eslo, c]aro está, con yna, planificación cuidadosa del profesorado.
Y prestaba gran cuidado en atener al crirerio psiéológicó¡Acart;¡ffiñü?-i-os
contenidos educativos, es decir, se preocupaba po
las yjg!¡y¡-q*"des e_4.ucaiv.as re_speta-sen 13:
"c-3l-q9-tgrÍ:1i91¡.
prgpial.pet.cJeglmie¡¡g y
_"L$1"..1.d¡-
iaje- de los niñ-o-sJ niñas, siempre pr.-o5yrqnqg que fuesen ellos mismos,
pequeños
irygsl8aCgrq
c-omo-
f.I4_losjlg9q-agqsen, ya que era cons;p,;; d ¡;" j
s
119rjJ¡@9-9@ *
te d 9
-ggg:glgff rglng-r o :
.r!l.!!atiyo!. Si rspj:lm,os pll"cipioi páiiet aesar.IñAilrrí.,Io-q,eipárece' eñ
q';
pái i oi -9,"g3 !: :{y ga9! o_1,i¡fa nt i l, n os ¿"o'
c'
I
1 "s*gg
es escol
É$e
es el inmenso valor del papel de las oocupacionesr, de esas formas de actividad
para las niñas y niños de esta etapa)." Además,
h*g-n_!nSg.p9 q!9_rygfr9_le__
preocupa.ción"bé:-tg-q_pg,t""
pragm{is!1-n_o-rteamericano,
el logro de una aurén9l
tica _dg[o-cja.qja: <[la educación infantit] i;i;g;r; de fóirna irañ;uerraGi?oá"o-
ere, el .re¡pe!q-{e os derec h os
en
"
alumnado. Dewey pro:uraba_gue éstg ¡lntiq_r_q-ry y¡lgf qgli?]r-l9.sig¡.lf¡qeti_"i4ad*el
su vida, sg apliqqgi.on a-lg_gr-&lige*99!i.d.iana,--l_qlug¡-o*n.a!Ldad.*"1g.qp_t9A{d9,
éstas sepan interyretll la realidad circundante a través de aprendizaj"r sigñiññ
tivos: <el currículo ¿e la-eauiac¡ó" i"i""t¡lie;¡""d; tquó fos ñinos y ni*,
desarrollen el máximo de sus capacidades, procurando que adquieran aprendizajes que le permitan interpretar gradualmente el mundo que les rodea y actúen
en él y se desarrollará en aprendizajes relevantes, significativos y motivadores
i
cugstio
hecho, el pragmatista nortea-De
mericano no descartaba las disciplinas que habitualmente se impartían en las ins-
"
hub
d" adquirir nuevos conocimientosr."a.ulgrJg.
1in-!-es-9g{a1.3q segu¡d1
condicián,.proporciona.r
lqgr?dajs ese-(aprsnder a aprender,
un reflejo de lo que el educador ha de buscar como meta más alta:!g[g!&
nomía del .educando en el proceso de aprendizaje.
alcanzar ta ptemedid3*!-e lo..p9qiple,
llg_dg y-aloles democráticos, cívicos y_-licos de nuesña iociedad t...1-y
.q$A,-bLlf4.ul5$gf 99lq9]1s__qglgu1gade_slü_üaé&9_slrlfqqcrandotas
"l
los ¡ec_ur2-o9,p?.fq.
_qy_g_!-¡19¡¡e,c-gsitan.para
t'!q9*C.:*::-fp¡lL4e!f--v-¡-"941¡¡e1d9-1r.{{ic9¡,
gr
criterio_p-or.ex,cgle¡cla_d9 !q_gllqtery_¡_ 4""__e!i4gd, C.gg9!b9!9&'94a_9!_9ldircente el deseo de aprender, de continuar amplian-do*su. h.o¡izg¡1g cg¡1qger hu-
vemo' ünipléñá AinciA-encltcon
lg:.l.fg:.lt nglgl!f-[!gtq19:f:lsam_iento, de jui-
Dewey- es 9_9 ng|f_1!g_{e.
-ds-:g*-de¡tinp.
Dentro del campo
corporar nuevos conceptos, habilidades, valores. Sin duda, Qgrygy
"9,"13
¡ou¡l o¡wgv
"!
iüni';;
"ñ
;;;';;üé"
;é;; ¿üili;_E ¡J#sCüi ó Lrsüiener¡áirsgs*e"is:GssLsJrj13iüie ¡.
se señala que olas áreas del currículo se organizarán desde un enfoque globalizador y deben entenderse de manera interdependiente y planificarse, consecuentemente, de forma integrada y contextualizada, acomodando su desarrollo a las
características, intereses y necesidades de los niños y niñas. Deben ser, pues, consideradas como contextos significativos de aprendizajer; asimismo, ula vida cotidiana será considerada como la realidad a través de la que se aprende y sobre la
1 1. Decreto 42Bl2o0B, de 29 de julio, por el que se establecen la ordenación
correspondientes a la educación infantil en AndalucÍa, BOJA 169, p. I Z.
y las enseñanzas
12. Decreto 42812008, de 29 de julio, por el que se establecen la ordenación y las enseñanzas
correspondientes a la educación infantil en Andalucía, BOJA I 69, p. I Z.
que se aprende, tanto si los aprendizajes versan sobre sí mismo, como si se refieren al conocimiento del medio físico, natural, cultural y socialr; y que, (para con-
tribuir a la construcción de aprendizaje significativos
U¡.r^.;^,¡
y
^ t ^ -ti,\
relevantes
[...] las
^.t,,.1 ¿^ l- ^),,?--iA^:^t^^.:t
.óE
BAsEI_lEp¡G0_c rcj!p_E_LLE_s!!!!4_[U
svA._Ell¡ogEEllMe_eE
lmagen 6. Dewey en la portada de la revista lime
Bases p¡oecóqtcas oe
roH N pEwEy
propuestas didácticas permitirán
y
fh¡
tÍ'rcÁly Nctca¡
do las conductas exploratorias
jgt-
_!.' jfl "9diggl"t..y_li!iJj"¡1.'f e"'utl."i.i99*':"iü"'*p!r,@.
Po¡. ytli¡no, ésta debe tet !a p[tqipal preocuplcjg(eflgggl'99¡fo--,g{qtqgf"".
mentar ese deseo de aprender y ofrecer los recursos necesarios para su logro,
e
indagatorias>." En definitlva, pq¡qc.g
-que gs.a comunidad social en miniatura,
constitu¡da por la Escuela Dewey, res-
¡tcinc
#
61A
tYl
d+r
\{/
6
M
5i?
M
DEWEv
que sus ideas siguen teniendo fuerza en estos comienzos del siglo xxr._La pedagogía de qewey.nos-in-v,ita g p1gg_y-$arlo5 c-ada día, en cada momento, (¿qué
po-
tenciarán la acción infantil, estimulan-
-rI Lf r
I TIV rl)
L¡ rscu¡u uu¡v¡. El pnocnrsrsrr¡o os loIN
pondía claramente al enfoque metodo-
consegu¡r que el educando alcance su plena autonofi-ía y éonsiga uná rnadwe/.
real en la qye complenda el mundo.en que vive, y qu9]gcfre por su progreso y
lógico contemporáneo que se pretende
por ula dglocracig auténtica que sea el mejor horizonte al que dirigir nugsllo¡.
instaurar en la etapa de educación
pasos.
in^-^
_fantil.
l[ql'gr_toI!a_s_epet!lglo_lgs-.9:
John Dewev ql lgnlq :lgl_¡¡gferolado
-como larpotenciación de su autono-
Referencias bibliog ráficas
Obras de John Dewey
TÍ1 -_{9! d9c9n-19 c919 ]rygigáilc,r
¿ei auÍá, el foméntó Jéi-urb"Jr;
equipo; áprrtados en los que áñto";e
insiste hoy en día-," de la formáCidn
en valores, de la_cre_ación de actitud_el
,gf lgIíyar,_de].--c-p.1¡te.g!p'_es!¡eghqggn
ttjgllias,]5
de las que podíamos hablar, pero hemos señalado algunas de las
más relevantes para el mundo de hoy. Sin embargo, animamos a seguir profundizando en su pensamiento ya que no sólo anticipó las propuestas educativas
que alcanzarían su máximo desarrollo en la segunda mitad del siglo xx, puesto
13. Decreto 42Bl2oO8, de 29 de julio, por el que se establecen la ordenación y las enseñanzas correspondientes a la educación infantil en Andalucía, BO.,A 1 69, pp. I 7-18.
1 4. r$e ¿ssgu¡¿¡á el rabajo en equipo de los profesionales, con objeto de proporcionar un enfoque
multidisciplinar del proceso educativo, Barant¡zando la coordinación de todos los miembros del equipo educativo que atienda a cada alumno o alumna,, art. 4.3, BOJA 169, p. 18. En todos los decretos
examinados acerca de la organización del currículo en la educación infantil, pertenecientes a las
comunidades autónomas de España, se hace hincapié en el reconocimiento de la capacidad y la responsabilidad de los centros y del equipo del profesorado y demás profesionales de la educación en
el desarrollo curricular, const¡tuyendo esta tarea una de las manifestaciones más importantes de la autonomía profesional. Con respecto al profesorado, se indica su responsabilidad de desarrollar, adaptar y concretar el currículo teniendo en cuenta las peculiaridades del alumnado y el contexto social
y cultural del centro.
1 5. Dewey buscaba una colaboración estrecha con padres y madres, prueba de ello es que algunos de
ellos dieron charlas al alumnado de la Escuela laboratorio. Hoy en día, se considera fundamental que
la escuela establezca una relación permanente con la familia de su alumnado, para lo que debe procurar la colaboración, participación y comunicación de ésta en la vida escolar.
La
-
obra completa de John Dewey, en edición de Jo Ann Boydston, ha venido publicándose
por la Southern lllinois University Press, de 1967 a 1991, hasta completar un número de
treinta y siete volúmenes.
Se
organizan en tres apartados: EarlyWorks, MiddleWorksy Later
Works, que es ya la clasificación canónica para citar sus trabajos. Algunas obras relacionadas
con la educación y traducidas al castellano son:
DEWEY J.: <From Absolutism to Experimentalism,, en OC/L.W 5, pp. 147-148.
-
930): Pedagogía y Filosofía. Seleccionada y compilada por Joseph Ratner, traducción
del inglés porJ. Méndez Herrera. Madrid. Francisco Beltrán, Librería española y extran-
(1
jera.
-
(1944):
(1
Mi credo pedag,ógico. Buenos Aires.
Losada.
950): La escuela de mañana. Buenos Aires. Losada.
(1966); Naturaleza humana y conducta. México. FCE.
(1965): Herencia, conducta y motivación. México. FCE.
(1967): EI niño y el programa escolar. Buenos Aires. Losada.
(1989): Cónto pensamos: nueva exposición de la relación entre pensamiento reflexivo y
proceso educativo. Barcelona. Paidós.
(1994): Antología sociopedagógica. Madrid. CEPE.
(1995): Democracia y educación. Madrid. Morata.
--