Este documento ha sido elaborado por: Dirección General de Salud Pública Servicio de Salud Infantil y de la Mujer Av/ Cataluña nº 21 46020 Valencia Revisado por: Sociedad Valenciana de Pediatria Asociación Valenciana de Pediatria de Atención Primaria Asociación de Pediatria Extrahospitalaria de Alicante Comité Asesor de Vacunaciones de la Comunidad Valenciana Febrero 2015 2 Contenido 1. Introducción....6 • Agente etiológico……………………………………………………………7 • Condiciones y patología de base como factor de riesgo………………...8 • El problema de la resistencia de S. pneumoniae………………………….8 • Prevención de la enfermedad Neumocócica……………………………...9 • Distribución de serotipos en población con enfermedad neumocócica invasiva………………………………………………………………………10 • Vacuna neumocócica polisacarida simple de 23 serotipos (VNP23)......10 • Vacuna neumocócica conjugada de 10 serotipos (VNC10)……………. 12 • Vacuna neumocócica conjugada de 13 serotipos (VNC13)……………..12 • Situación actual de las recomendaciones de vacunación en CCAA…….14 • Recomendaciones de vacunación antineumocócica polisacarida 23valente en España…………………………………………………………...15 2. Vacunas conjugadas: VNC7, VNC10 y VNC13…………………………………..17 • Inmunogenicidad…………………………………………………………….17 • Eficacia y efectividad de la VNC13………………………………………….17 • Administración concomitante con otras vacunas………………………...19 • Sospechas de reacciones adversas a las vacunas frente al neumococo notificadas en Comunidad Valenciana. Años 2005-2011 ………………..20 3 3. La vacunación frente al neumococo en la Comunidad Valenciana…………..21 • Vacunación sistemática del niño sano……………………………………..21 • Pauta de vacunación………………………………………………………...21 • En niños sanos nacidos a partir de 1 de enero 2015……………………...21 • Adecuación de pauta en niños sanos nacidos a partir del 1 de enero de 2015 que inician la vacunación con posterioridad a los dos meses…….21 • Niños con factores de riesgo………………………………………………..22 • Intervalo entre dosis………………………………………………………...23 • Vía de administración……………………………………………………….23 • Inmunogenicidad y eficacia clínica………………………………………...23 • Precauciones y contraindicaciones………………………………………...24 • Seguridad……………………………………………………………………..24 • Administración simultanea con otras vacunas……………………………25 • Intercambiabilidad entre las vacunas frente al neumococo……………..25 • Conservación………………………………………………………………….25 • Notificación de sospechas de reacciones adversas……………………….25 • Registro de los actos vacunales……………………………………………. 26 4. Bibliografía…………………………………………………………………………27 4 Acrónimos utilizados ACIP Comité Asesor sobre Practicas de Inmunización (Advisory Comittee on Immunization Practices) CCAA Comunidades autónomas y ciudades de Ceuta y Melilla CDC Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (Centres for Disease Control and Prevention) CMG Concentraciones Medias Geométricas CHMP Comité de Medicamentos de Uso Humano ELISA Ensayo por Inmunoabsorcion ligado a enzimas EMA Agencia Europea del Medicamento ENI Enfermedad Neumococica Invasiva LCR Líquido Cefaloraquideo NAC Neumonía adquirida en la comunidad NRAV Notificación de sospecha de reacción adversa a vacuna OMA Otitis Media Aguda OMS Organización Mundial de la Salud OPA Anticuerpos Funcionales por Opsonizacion PCR Reacción en Cadena de la Polimerasa (Polymerase Chain Reaction) SIV Sistema de información Vacunal TIV Vacuna trivalente inactivada frente a la gripe VNC7 Vacuna neumocócica conjugada Heptavalente (Prevenar®) VNC10 Vacuna neumocócica conjugada Decavalente (Synflorix®) VNC13 Vacuna neumocócica conjugada Trecevalente (Prevenar 13®) VNP23 Vacuna neumocócica polisacárida 23 valente (Neumovax®, Pneumo 23®). 5 1. Introducción La infección por Streptococcus pneumoniae constituye una causa importante de morbilidad y mortalidad en el mundo1. Según estimaciones de la OMS, cada año, mueren por infecciones neumocócicas, sobre todo neumonías, entre 1 y 2 millones de niños menores de 5 años en los países en vía de desarrollo, siendo la enfermedad prevenible por vacunas que más mortalidad causa, afectando preferentemente a los niños más pequeños y los adultos de mayor edad2. En España, donde S. pneumoniae es el agente patógeno más frecuentemente identificado en la neumonía adquirida en la comunidad (NAC), responsable hasta del 63,7% según series3. Durante el periodo 2003-2007, se registraron un total de 75.932 muertes por NAC en adultos de 50 años o más4. La mortalidad asociada a la neumonía neumocócica oscila entre <1% en jóvenes adultos y el 10-30% en la neumonía bacteriémica del anciano5. En nuestro país, un estudio retrospectivo de 263 casos a lo largo de 10 años en un hospital de Madrid estimó una mortalidad del 12,5%6. La enfermedad neumocócica invasiva (ENI) representa la forma más grave de la enfermedad neumocócica y se define como la presencia de S. pneumoniae en sangre, líquido cefalorraquídeo (LCR) u otro fluido normalmente estéril7. La definición de ENI no incluye, por tanto, la neumonía salvo que se acompañe de bacteriemia. Las tasas de incidencia más elevadas de la ENI se dan en los grupos de edad extremos de la vida8. Según datos de nuestro país (2007-2009), la tasa de incidencia anual media en menores de 2 años fue de 49,79 casos por 100.000 habitantes y de 20,76 casos por 100.000 habitantes a partir de los 65 años9. En los países desarrollados, las infecciones neumocócicas afectan, con más frecuencia, a las edades extremas de la vida. La mortalidad de los niños en estos países es muy baja y casi siempre se debe a la meningitis. Sin embargo, en los adultos la mortalidad se debe sobretodo a las neumonías, que en las personas ancianas o con enfermedades subyacentes puede alcanzar una mortalidad superior al 20 %. Antes de la llegada de la VNC7, la incidencia de enfermedad neumocócica invasiva en España oscilaba entre 60 y 170 casos por 100.000 niños menores de 2 años de edad. Las tasas de incidencia de meningitis fluctuaban entre 8 y 12 casos por 100.000 niños menores de 2 años, disminuyendo de forma marcada a partir de esta edad. La vacunación universal con VNC7, además de reducir la ENI causada por los serotipos vacunales, ha dado lugar a un incremento de formas invasoras producidos por otros serotipos como el 1, el 19A, el 7F, el 3, el 6A y el 19F. En Madrid, los serotipos 1 y 19A han llegado a producir el 65 % de los casos de ENI, una vez que los serotipos contenidos en la VNC7 han desaparecido. El cambio más llamativo ha sido el aumento del serotipo 19A, un serotipo al que, en la actualidad, van ligadas más del 80% de las multirresistencias y que es también responsable de casi todas las resistencias de alto nivel a cefotaxima en la meningitis. 6 El incremento del 19A no se debe solo a la VNC7 (de hecho se ha producido en varios países antes de la introducción de la vacuna) sino que han influido otros factores. Quizás el más determinante ha sido el uso excesivo de antibióticos al seleccionar y permitir la expansión de clones resistentes como el ST320. El cambio de serotipos ha introducido, a su vez, modificaciones en la distribución por edad y en las formas clínicas de ENI. El serotipo 1 propende a causar infecciones pulmonares y afecta, de forma preferente, a niños mayores de 2 años. El serotipo 19A se distribuye en todas las edades. También produce el 80 % de las mastoiditis graves y más de la mitad de las otitis medias agudas (OMA). Las meningitis neumocócicas, más allá del predominio del 19A, están producidas por serotipos muy diferentes, mucho de ellos no contenidos en ninguna de las vacunas neumocócicas conjugadas de las que disponemos actualmente10. La enfermedad neumocócica invasiva (ENI) supone un grave problema de salud entre los adultos con determinadas condiciones y patologías de base, entre los que destacan los inmunodeprimidos que les hacen más susceptibles a la infección y favorecen cuadros de mayor gravedad y peor evolución. Entre las estrategias para prevenir la ENI se encuentra la vacunación, aunque las coberturas vacunales en este grupo son más bajas de lo deseable. Uno de los principales cuadros clínicos que produce S. pneumoniae es la neumonía, especialmente la adquirida en la comunidad (NAC), pero la vigilancia microbiológica de ésta no es siempre posible y además solo un pequeño porcentaje produce bacteriemia por lo que solo estos casos pueden ser considerados ENI. La incidencia de NAC en nuestro país en mayores de 65 años se estima en 14 casos por 1000 personas-año (IC95% 12,7-15,3) y aumenta con la edad (29,4 casos por 1000 personas-año en mayores de 85 años)11. Las variables asociadas significativamente (p<0,002) a la hospitalización por NAC, según un estudio realizado en Badalona, para el periodo 2008-2009, fueron la hepatopatía crónica (OR 5,9), el ictus (OR 5,9), la demencia (OR 3,5), la EPOC (OR 2,9) y la diabetes mellitus (OR 1,9). En este estudio el patógeno más frecuentemente identificado fue S. pneumoniae (57,5%; 34,7% en los pacientes ambulatorios y 71,9% en los pacientes hospitalizados, p>0,001)12. Agente etiológico: El Streptococcus pneumoniae o neumococo es un coco gram positivo que forma cadenas cortas. Hay más de 90 serotipos, cada uno de ellos definido por la especificidad de su polisacárido capsular del que depende la inmunidad tipo específica. Esta bacteria coloniza la nasofaringe del 25-80 % de los niños menores de 4 años y causa dos formas de enfermedad: invasiva (meningitis, bacteriemia, sepsis, neumonía bacteriémica y otras) y no invasiva, como la neumonía, la otitis media y la sinusitis. 7 La colonización nasofaríngea constituye el único reservorio del neumococo y contribuye a la diseminación comunitaria e intrafamiliar del microorganismo. La colonización nasofaríngea es más frecuente en los adultos que conviven con niños en sus domicilios que aquéllos que no lo hacen. Los niños que tienen hermanos que asisten a guardería se colonizan por las mismas cepas que sus hermanos. Además, los serotipos que colonizan la nasofaringe de los ancianos son similares a las que colonizan a los niños que viven en la misma casa; esta similitud aumenta a medida que lo hace la edad del adulto. Condiciones y patologías de base como factor de riesgo: Además de la edad, se ha descrito que determinadas condiciones y enfermedades concomitantes subyacentes aumentan el riesgo de enfermedad neumocócica invasiva y su evolución. Entre ellas destacan aquellas condiciones médicas que conllevan un estado de déficit inmunitario, o alteración de las defensas locales del órgano diana, tales como la enfermedad renal, hepática, respiratoria y cardiovascular crónica; los pacientes infectados por el VIH; pacientes en espera de trasplante de órgano sólido y trasplantados de órgano sólido y/o progenitores hematopoyéticos; pacientes bajo quimioterapia por tumor sólido o hematopatía maligna; pacientes con enfermedad autoinmune y tratados con corticoides a dosis altas, inmunosupresores o productos biológicos; pacientes diabéticos; personas con fístulas de líquido cefalorraquídeo, implantes cocleares así como pacientes con asplenia anatómica o funcional2-14. Estas mismas patologías influyen de manera determinante en las tasas de hospitalización. El problema de la resistencia de S. pneumoniae: La resistencia del neumococo a los antibióticos está claramente relacionada con el impacto ecológico que producen sobre las cepas de la nasofaringe15,16. La mayoría de los estudios han documentado, desde la introducción de la vacuna VNC7, un descenso paralelo en las infecciones por cepas resistentes a la penicilina. En EE.UU. se produjo un descenso del 81% en la incidencia de ENI por estas cepas entre 1996 y 2004 en menores de 2 años, y del 49% en mayores de 65 años17. Este descenso también se ha documentado en otros antibióticos como cefalosporinas de tercera generación o macrólidos18. En nuestro país, se documentó un descenso de neumococo resistente a penicilina productores de ENI del 39,5% en 2001 al 33% en 2003 (p=0,05). Este descenso fue más significativo en el grupo de edad de menores de 14 años (de 60,4% a 41,2%, p=0,002)19. El Instituto de Salud Carlos III, partiendo de cepas remitidas voluntariamente, comunicó un descenso en neumococo resistente a penicilina de 36,1% en el periodo 1997-2001 a 22,4% entre 2007-08, con una disminución estadísticamente 8 significativa entre las cepas resistentes de los serotipos 6B, 9V, 19F y 23F20. En el caso de los macrólidos, el descenso solo se apreció en niños ya que en adultos permaneció estable (22%) entre los periodos 1997-2004 y 2004-2008. En nuestra comunidad, según el informe del 2013 sobre la ENI realizado por el Subdirección General de Epidemiologia y Vigilancia de la salud, las resistencias del S. pneumoniae se han mantenido en niveles similares a años anteriores, confirmándose como la mejor opción terapéutica el levofloxacino y la amoxicilina/clavulanico. Se mantienen los niveles de resistencia a penicilina más bajos que los del conjunto de España según las cifras del ECDC21. Prevención de la enfermedad Neumocócica: La prevención de la enfermedad neumocócica se basa exclusivamente en la utilización de vacunas de las que se dispone, de dos tipos en función de la conjugación o no con proteínas transportadoras. La introducción de las vacunas neumocócicas conjugadas ha dado lugar a cambios marcados en la epidemiología de la infección neumocócica. Así la utilización de la vacuna neumocócica heptavalente (VNC7), desde que se comenzó a utilizarse en España en el año 2001, ha dado lugar a una disminución de las enfermedades producidas por los serotipos contenidos en la vacuna, que se acompañó a su vez de un aumento de los serotipos no vacunables. En la ENI de los adultos, también se han producido cambios en los serotipos neumocócicos aislados, comparando el periodo pre-VNC7 y el periodo post-VNC7. La proporción de casos de ENI producidos por los serotipos contenidos en la vacuna ha descendido desde el 43% en el periodo prevacunal hasta el 14% en el postvacunal, por el contrario, los serotipos no contenidos en la vacuna aumentaron un 51%, destacando los serotipos 19A. La sustitución de la vacuna VNC7 por la VNC13 en la Comunidad de Madrid, en el año 2010, utilizando un esquema vacunal de 2+1 (primovacunación a los 2 y 4 meses y un recuerdo a los 15 meses), dió lugar a una reducción de todos los casos de ENI. Desde junio de 2010 a junio de 2013, la incidencia de ENI por cualquier serotipo y por los serotipos contenidos en la VNC13 se ha reducido en un 68% y en un 84% respectivamente. Según el estudio Heracles realizado en todos los hospitales de la Comunidad de Madrid, las reducciones en la incidencia de ENI causada por los serotipos 1, 19A y 7F han sido del 81%, 95% y 86% respectivamente. 9 Distribución de serotipos vacunales en población con enfermedad neumocócica invasiva: Los serotipos contenidos en la vacuna antineumocócica polisacárida simple de 23 serotipos (VNP23) causaban al menos el 85%-90% de los procesos invasores en niños y en adultos en los Estados Unidos antes del uso de las vacunas antineumocócicas conjugadas22, mientras que en 2010, en ese mismo país, esta vacuna cubría el 71% de los serotipos en adultos inmunodeprimidos con enfermedad invasora23 (el 50% estaba cubierto por la vacuna de 13 serotipos). En Francia durante el periodo 2008-2009 los serotipos incluidos en la vacuna VNC13 suponían el 60% de los aislamientos invasores en los enfermos de 16-64 años y el 61% en los de 65 o más años24. En cuanto a la situación española, el estudio ODIN, prospectivo, activo y de vigilancia hospitalaria de ENI en mayores de 18 años y realizado en nueve hospitales terciarios mostró que en el periodo 2010-2013, de un total de 637 muestras, los serotipos incluidos en la vacuna VNC13 (más 6C) fueron los responsables del 55.2% de los episodios25, mientras que en 436 aislamientos la cobertura de VNC13 (más 6 C) en sujetos inmunocompetentes fue del 63,2% y del 45% en inmunodeprimidos26. En Castilla-León entre 2007 y 2010 y con 272 aislamientos, los contenidos en la vacuna VNP23 cubrían el 77,2% de los procesos invasores en mayores de 50 años y el 69,1% los de la vacuna VNC1327. En la Comunidad Valenciana la notificación de ENI se implanto en 2007, habiendo disminuido la tasa de incidencia por 100.000 habitantes del 12,62 en 2007 al 7,33 en 2013. Las tasas mas altas se producen en los mayores de 65 años y en los menores de un año, en este último grupo se ha pasado de una tasa de 26,4 por 105 en 2009 a 16,5 en 2013. Vacuna neumocócica polisacárida simple de 23 serotipos (VNP23): Esta vacuna contiene 25 microgramos de los serotipos neumocócicos 1, 2, 3, 4, 5, 6B, 7F, 8, 9N, 9V, 10A, 11A, 12F, 14, 15B, 17F, 18C, 19A, 19F, 20, 22F, 23F y 33F. La vacuna fue comercializada en los Estados Unidos en 1977 con catorce serotipos en su formulación, siendo sustituida por la actual de 23 en 1983. En España se incluyó en adultos de riesgo y en personas mayores de modo sistemático en varias CCAA entre 1999 y 2005. La respuesta inmune es de tipo T independiente lo que implica que la duración de la respuesta es de corta duración, los anticuerpos generados son de escasa afinidad, no genera memoria inmune, no afecta al transporte nasofaríngeo de la bacteria al no proporcionar inmunidad mucosa por lo que no genera protección comunitaria. Otra 10 desventaja de esta vacuna es el fenómeno de la hiporrespuesta inmunológica que se observa tras la administración repetida de varias dosis de esta vacuna. La duración de la hiporrespuesta no suele superar los cuatro-cinco años28-29. La vacunación con VNP23 previa condiciona negativamente la respuesta inmune a las vacunas conjugadas cuando estas últimas se administran con menos de un año de intervalo3031 . Sin embargo, la vacunación con VNP23 a partir de las ocho semanas tras recibir VNC13, genera una respuesta booster T dependiente para los antígenos comunes a ambas lo que provocaría un efecto aditivo de las dos vacunas, aunque por demostrar desde la perspectiva clínica32. La efectividad vacunal ha sido objeto de amplio debate en las últimas décadas, En lo concerniente a la efectividad frente a la ENI se ha publicado una actualización de la revisión Cochrane33 que incluía 18 ensayos clínicos aleatorios y 7 estudios con distintas metodologías (casos-control y cohortes) en mayores de 16 años donde en el metaanálisis de los ensayos clínicos la efectividad estimada en el adulto fue del 74% (IC 95%: 54%-86%) aunque en los de alto riesgo no llegó a evidenciarse claramente una protección por falta de potencia del metaanálisis. Otros metaanálisis ponen en duda la efectividad de la vacuna en el adulto para prevenir las neumonias34-35. Un reciente estudio de casos y controles en individuos de 65 o más años llevado a cabo en Inglaterra y Gales36 mostró una efectividad variable según el tiempo transcurrido desde la vacunación. Globalmente alcanzó un 24% (IC 95%: 10-36) pero fue del 48% (IC 95%: 32-60) en los dos años posteriores a recibir la vacuna. Se observó también una tendencia, aunque no significativa, a una menor efectividad a medida que era mayor la edad del vacunado, en los inmunodeprimidos y en las personas inmunocompetentes con factores de riesgo. Respecto a España, en un estudio llevado a cabo en Madrid con datos de las EDO´s, la efectividad frente a ENI por serotipos incluidos en la vacuna VNP23 en mayores de 59 años, calculada por el método de cohortes indirectas (Broome) fue del 44,5% (IC 95%: 23,8-59,6)37. Con relación a la prevención de las neumonías por cualquier causa, otra revisión Cohrane38 mostró una efectividad vacunal del 46% (IC 95%: 33-57) en países de baja renta pero fue no concluyente en adultos sanos y con enfermedades crónicas de países de alta renta. En España en un amplio estudio poblacional prospectivo de cohortes39 entre 2008 y 2011, la efectividad frente a neumonías no bacteriémicas en mayores de 60 años llegó al 48% (hazard ratio: 0,52 IC 95%: 0,29-0,92), siempre que la vacuna se hubiera recibido en los últimos cinco años. La vacuna polisacárida ha mostrado un buen perfil de seguridad tanto en la dosis primaria como tras la administración de recuerdos. Los efectos más frecuentemente detectados fueron locales, del tipo de dolor, eritema, induración, todos ellos más frecuentes significativamente en las revacunaciones. Los sistémicos se ciñeron a mialgias, escalofríos y con menor frecuencia la fiebre40. 11 Vacuna neumocócica conjugada de 10 serotipos (VNC10): Esta vacuna fue comercializada en 2009 y contiene 1 microgramo de polisacárido capsular de los serotipos 1, 5, 6B, 7F, 9V, 14, 23F y 3 microgramos de los serotipos 4, 18C y 19F. Todos los serotipos están conjugados con proteína D recombinante de Haemophilus influenzae no tipable, excepto el 18C que está conjugado con toxoide tetánico y el 19F que está conjugado con toxoide diftérico. Esta vacuna, de acuerdo con su ficha técnica sólo está autorizada en menores de entre 6 semanas y 5 años de vida. Al tratarse de una vacuna conjugada la respuesta inmunitaria es T dependiente por lo que genera memoria inmune y tienen efecto sobre los portadores nasofaríngeos. Vacuna neumocócica conjugada de 13 serotipos (VNC13): Esta vacuna fue comercializada en 2010 y contiene 2,2 microgramos de los polisacáridos capsulares de los serotipos 1, 3, 4, 5, 6A, 7F, 9V, 14, 18C, 19A, 19F y 23F y 4.4 microgramos del polisacárido 6B, conjugados covalentemente con la proteína transportadora CRM197. Inicialmente fue comercializada con la indicación de uso para niños pequeños y posteriormente se amplió la indicación para incluir a todos los grupos de edad. Recientemente el CHMP de la EMA ha emitido una opinión positiva recomendando la ampliación de la indicación de esta vacuna para la prevención de la neumonía neumocócica en adultos de 18 años o mayores41. Las vacunas conjugadas generan una respuesta T dependiente, son inmunógenas a partir de las seis semanas de vida induciendo la producción de anticuerpos de alta afinidad por el antígeno, generan memoria inmunológica tras la recepción de dosis de recuerdo por un priming del sistema inmune, aunque en las personas mayores, respecto a este efecto, hay datos contradictorios39,42, no provocan fenómenos de hiporrespuesta inmunológica o tolerancia inmune tras dosis repetidas, y disminuyen la colonización nasofaríngea de la mayoría de los serotipos vacunales al proporcionar inmunidad en la mucosa. Este efecto es muy beneficioso al proporcionar protección indirecta o comunitaria pero tambien podría ser un factor contribuyente al fenómeno de reemplazo de serotipos al crear un nicho ecológico por cepas no vacunales. Los títulos de anticuerpos postinmunización son significativamente superiores para la mayoría de los serotipos al compararla con la vacuna polisacárida43. Los anticuerpos no son de larga duración ya que los niveles encontrados al mes de la vacunación difícilmente sobrepasan los 12 meses, aunque los detectados tienen mayor capacidad opsonofagocítica43-45 Por otra parte los niveles de anticuerpos postvacunales se correlacionan inversamente con la edad del vacunado39,46. 12 En lo relativo al reemplazo de serotipos, hasta ahora solo se ha observado fehacientemente tras el uso infantil con carácter poblacional de la vacuna conjugada de siete serotipos. Para la vacuna de 13 serotipos los datos no son concluyentes hasta el momento actual. La vacuna VNC13 genera protección comunitaria. Datos de un estudio poblacional de cohortes en Dinamarca, donde en 2011 se introdujo la vacuna VNC13 en el calendario infantil de vacunación, han mostrado una reducción de la incidencia de ENI para todos los serotipos neumocócicos del 21% (IC 95%: 17-25) en el conjunto de la población entre ese año y 201347. En los Estados Unidos, con datos de vigilancia poblacional del Active Bacterial Core Surveilance, se han observado también reducciones significativas de ENI en todos los grupos de edad (a los tres años de la introducción y para cinco serotipos exclusivos de VNC13), la reducción ha sido del 93% para los de menos de 5 años y de 58% para los mayores de 65 años. También en los Estados Unidos el uso sistemático de la vacuna en la infancia ha impactado notablemente en las neumonías48. En relación a la protección comunitaria se especula que a los pocos años de implantada la vacunación sistemática en la infancia, y con altas coberturas de inmunización, los efectos indirectos de la vacuna VNC13, por experiencias previas con la vacuna heptavalente49, reducirán notablemente en el adulto sano y con factores de riesgo la proporción de ENI vacunal y la carga de las neumonías50-53 . Recientemente en los Estados Unidos la ACIP ha decidido la inclusión rutinaria de esta vacuna en los mayores de 65 años, sanos y de riesgo, aunque sometida a reevaluación para 2018 en función del grado de protección comunitaria que se alcance con la vacunación sistemática en el niño. En Navarra este efecto indirecto también se ha observado en un estudio de vigilancia poblacional, la incidencia de ENI por cualquier serotipo sufrió un descenso significativo en los de 5 a 64 años y en los ≥65 años entre 2010 y 2013, mientras que la ENI por serotipos VNC13 descendió significativamente (52%) en el total de la población54. En la Comunidad de Madrid donde entre 2008 y 2013 se redujo también de manera significativa la incidencia de ENI en mayores de 59 años un 26%53. Los datos respecto de la eficacia/efectividad de la vacuna en adultos, que proporciona el estudio CAPITA desarrollado en Holanda con la vacuna de 13 serotipos en adultos en la prevención del primer episodio de neumonía comunitaria no bacteriémica causada por serotipos vacunales y donde, participaron 42.240 sujetos en el grupo vacunal y 42.256 en el placebo durante un periodo de seguimiento de 3,97 años. La eficacia vacunal por protocolo reportada para el primer episodio de neumonía comunitaria por serotipos vacunales fue del 45,56% (IC 95%: 21,8-62,4), del 45,0% (IC 95%: 14,2-65,3) para la neumonía vacunal no bacteriémica, del 30,56% (IC 95%: 9,75-46,74) para la neumonía neumocócica para tipos vacunales, no vacunales y no tipables, y del 75% (IC 95%: 41,4-90,7) para el primer episodio de ENI vacunal55. La eficacia, especialmente en la prevención de la enfermedad invasora, fue mayor a medida que era menor la edad del vacunado y por otra parte el efecto protector más prominente frente a los primeros episodios de ENI y de neumonía 13 comunitaria se obtuvo para los serotipos 3, 7F y 19A. Este hecho contrasta con los datos no concluyentes observados en la infancia para el tipo 356-57. Los efectos adversos postvacunales en los receptores de 50 a 64 años, tanto locales como sistémicos, fueron similares a los de la vacuna VNP23, con dolor local importante aunque menos frecuente con la vacuna VNC13 respecto a la polisacárida simple y también menos comunes en los grupos más jóvenes. En los de 65 o más años solo fueron significativos respecto del placebo, el incremento de reacciones locales y de algias musculares y exantemas como efectos sistémicos. En relación a la compatibilidad de la vacuna VNC13 con la antigripal inactivada, se ha comprobado para algunos serotipos una significativamente menor inmunogenicidad opsonofagocítica58. Aunque los hallazgos tienen una significación clínica dudosa por lo que algunos autores propugnan la coadministración de ambas vacunas en función de las circunstancias clínicas. Situación actual de las recomendaciones de vacunación en CCAA: En España, la VNP23 se recomienda en todas las CCAA en las personas de cualquier edad con determinados factores de riesgo o patologías de base y a partir de los 60-65 años de forma generalizada en algunas comunidades sólo a personas institucionalizadas. La vacuna VNC13 se autorizó por la EMA en octubre de 2011 para su uso en mayores de 50 años. En julio de 2012, la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia aprobó el reembolso de la VNC13 por el Sistema Nacional de Salud para la primovacunación de la población de pacientes de 50 años o mayores considerados de riesgo. Posteriormente, se han producido distintas modificaciones en su ficha técnica ampliando las edades de utilización: • En diciembre de 2012 se autorizó su uso de 6 a 17 años. • En mayo de 2013 se autorizó su uso para mayores de 18 años. En España, las indicaciones de vacunación con VNP23 son bastante homogéneas siendo la principal diferencia la edad de inicio en las CCAA en las que se considera adecuada la vacunación generalizada, que varía entre los 60 y 65 años. En las CCAA que inician la vacunación a una edad más temprana, esta suele coincidir con la de la vacunación antigripal y tiene por objetivo asegurar una mejor cobertura en ambas vacunas. 14 Recomendaciones de vacunación antineumocócica polisacárida 23-valente en España: PERSONAS INMUNOCOMPETENTES Enfermedad cardiovascular crónica Enfermedad pulmonar crónica Diabetes mellitas Portadores de fístula de LCR Portadores de implante coclear Alcoholismo Hepatopatía crónica o cirrosis hepática Fumadores $ PERSONAS CON ASPLENIA ANATÓMICA O FUNCIONAL Anemia de células falciformes Asplenia adquirida o congénita, disfunción esplénica o esplenectomía INMUNODEPRIMIDOS Inmunodeficiencias humorales o celulares, deficiencias del complemento y trastornos de la fagocitosis Infección por VIH Insuficiencia renal crónica y síndrome nefrótico Leucemia Linfoma Enfermedad de Hodgkin Mieloma múltiple Otras neoplasias Trasplante de órgano sólido Trasplante de progenitores hematopoyéticos Tratamiento inmunosupresor * Personas a partir de cierta edad y/o institucionalizadas ** Todas las personas a partir de 60 - 65 años Personas institucionalizadas a partir de 60 - 65 años Personas institucionalizadas sin límite de edad $ Solamente Castilla la Mancha y Cataluña * Incluidos quimioterapia, corticoides sistémicos y radioterapia ** Varía según Comunidad Autónoma (se recomienda en población general a mayores de 60 años en 5 CCAA (Cantabria, Castilla y León, Cataluña, Madrid y Murcia. Y a mayores de 65 en 4 CCAA: Canarias, Castilla la Mancha, Galicia, La Rioja) 15 En el siguiente cuadro se muestran las diferentes vacunas antineumocócicas comercializados en España actualmente. Vacuna (laboratorio) Pneumo 23® Pneumovax 23® (Sanofi Pasteur MSD) Synflorix® (GSK) Composición antigénica Polisacáridos capsulares simples: • 1, 2, 3, 4, 5, 6B, 7F, 8, 9N, 9V, 10A, 11A, 12F, 14, 15B, 17F, 18C, 19A, 19F, 20, 22F, 23F y 33F Polisacáridos Fosfato de aluminio capsularesconjugados a Cloruro sódico proteínas transportadoras: Agua estéril • • Prevenar 13® (Pfizer) Composición no antigénica Fenol, cloruro sódico, hidrógeno-fosfato de disodio dihidrato, 25 µg del polisacárido dihidrógeno-fosfato de capsular de cada uno sodio dihidrato, agua estéril de los siguientes serotipos: 1 µg de los polisacáridos capsulares de los serotipos 1, 5, 6B, 7F, 9V, 14 y 23F. 3 µg de los polisacáridos capsulares de los serotipos 4, 18C y 19F. Todos los serotipos, excepto los serotipos 18C y el 19F, están conjugados con la proteína D recombinante de H. influenzae no tipable. El serotipo 18C está combinado con toxoide tetánico y el 19F con el toxoide diftérico Polisacáridos capsulares conjugados con la proteína CRM197 (mutante atóxico de toxina diftérica) • • 2,2 µg de los polisacáridos capsulares de los serotipos 1, 3, 4, 5, 6A, 7F, 9V, 14, 18C, 19A, 19F y 23 F 4,4 µg del polisacárido capsular del serotipo 6B Fosfato de aluminio Cloruro sódico Ácido succínico Polisorbato 80 Agua estéril Presentación y reconstitución Jeringa precargada con, 0,5 ml de solución inyectable transparente e incolora. No precisa reconstitución. Debe conservarse refrigerada entre +2 ºC y +8·ºC Jeringa precargada con 0,5 ml de solución inyectable, turbia, de color blanco. No precisa reconstitución Debe conservarse refrigerada entre +2 ºC y +8·ºC Jeringa precargada con 0,5 ml de solución inyectable de color blanco homogéneo. No precisa reconstitución. Debe conservarse refrigerada entre +2 ºC y +8·ºC 16 2. Vacunas conjugadas: VNC7, VNC10 y VNC13 Inmunogenicidad: La OMS ha definido los siguientes criterios serológicos de protección frente a ENI: un título ≥ 0,35 µg/ml de anticuerpos IgG frente al polisacárido capsular del neumococo y una actividad opsonofagocítica (OPA) del suero ≥ 1/8 un mes después de la primovacunación. Después de dos dosis de cualquiera de las vacunas conjugadas, la mayoría de los lactantes alcanza concentraciones de anticuerpos anti-polisacáridos ≥ 0,35 µg/ml para todos los serotipos, con la excepción del 6B y del 23F, que no logran alcanzar el dintel protector en un 20-45 % de los niños. El serotipo 3 parece ser menos inmunógeno que otros serotipos con respecto a la inducción de anticuerpos frente al polisacárido capsular, pero induce capacidad bactericida sérica adecuada. Después de una tercera dosis o la dosis de refuerzo, los niveles de todos los serotipos, incluidos el 6B y 23F, superan varias veces los niveles protectores. La inmunidad mucosal (IgA e IgM salivales) aparece, sobre todo, tras la administración de la dosis de refuerzo. En los sujetos inmunodeprimidos y en algunas personas con infección por VIH, la inmunogenicidad de la VNC7 (no hay estudios con la VCN10 y la VNC13) es menor que en los sujetos sanos, y un porcentaje de ellos no alcanza títulos protectores. Eficacia y efectividad de la VNC13: No existen estudios de eficacia específicos de las vacunas VNC10 y VNC13, que han sido aprobadas teniendo en cuenta criterios de no inferioridad con respecto a la VNC7. Sin embargo, cada vez van apareciendo más estudios sobre la efectividad de ambas vacunas. En un estudio realizado en 8 hospitales de los EE. UU., donde se utiliza un esquema de vacunación 3+1 con VNC13, tras un año de la introducción de la vacuna, la frecuencia de ENI por cualquier serotipo disminuyó un 53 % en los niños menores de 24 meses y un 47 % en los niños de todas las edades. Los casos de ENI por serotiposVNC13 disminuyeron un 57 %. La efectividad de la vacuna para los serotipos 19A, 7F, 1 y 3 fue del 70 %, 76 %, 62 % y 66 %, respectivamente, aunque el número de casos producido por el serotipo 3 fue bajo. En el Reino Unido, según la Health Protection Agency (HPA), donde la VNC13 se introdujo en el calendario sistemático en abril de 2010, con un esquema 2+1, se ha producido una disminución significativa de la tasa de incidencia acumulada de ENI producida por los serotipos presentes en VNC13 en los niños de todas las edades, lo que de demuestra la capacidad de la vacuna para inducir inmunidad de grupo. 17 En Madrid, se inició la vacunación universal con la VNC13 en el calendario sistemático en junio de 2010 con pauta 2+1, sustituyendo a la pauta 3+1 con la VNC7. Desde entonces se ha producido un caída de incidencia de ENI en niños menores de 15 años desde 17/100.000 hasta 7,7/100.000 (reducción del 57 %) en un período de 2 años. La disminución de serotipos contenidos en la VNC13 ha sido el 68 %, siendo particularmente marcada en el serotipo 1 (47 %) y en el serotipo 19A (87 %), ambos causantes del 60 % de ENI. Pese a que en julio de 2012 se suspendió la vacunación universal con VNC13 en Madrid la disminución de ENI ha continuado. Con unas coberturas estimadas del 70 %, la reducción de la tasa de ENI por cualquier serotipo ha sido del 68 % y por los serotipos vacunales del 84 %, respectivamente, con respecto al periodo anterior al uso de esta vacuna. Asimismo, la incidencia de ENI en menores de 15 años ha pasado de 17 a 5,35 por 100.000 y las tasas de incidencia de empiema, neumonía bacteriémica y meningitis neumocócicas se han reducido el 62 %, el 87 % y el 73 %, respectivamente. La protección se ha extendido a los niños no vacunados, lo que demuestra que la vacuna induce protección de grupo según datos no publicados del Estudio Heracles. No se disponen de estudios de efectividad de la VNC10 y la VNC13 frente a las infecciones neumocócicas no invasoras. Hay evidencia de que algunos de los serotipos que causan la neumonía bacteriémica causan también neumonía no bacteriémica, siendo presumible que el impacto de las nuevas vacunas sobre la neumonía neumocócica sea mayor que el de la VNC7. Un estudio de una vacuna conjugada 11 valente con el mismo carrier que la VNC10 demostró una eficacia del 33,6 % frente a cualquier forma de OMA y del 35,3 % frente a cepas no tipables de H. influenzae. No existen estudios sobre la eficacia de la VNC13 frente a la OMA, pero es posible que su efectividad para prevenir la colonización por el 19A, un serotipo que en nuestro país ha llegado a producir más del 50 % de las OMA neumocócicas, se traduzca en una disminución de esta forma de enfermedad. La VNC13 disminuye alrededor del 40-50 % la tasa de colonización nasofaríngea de los serotipos 1, 6A, 7F y 19A en comparación con la VNC7, pero no afecta a la colonización por el serotipo 3. Es posible que la menor inmunogenicidad del serotipo 3 no permita alcanzar títulos de anticuerpos ≥ 5 µg/ml frente al polisacárido capsular, que han sido los títulos considerados necesarios para prevenir la colonización. El mayor descenso en las tasas de colonización se produce en el 19A, y es posible que este hecho esté relacionado con la excelente efectividad que la VNC13 ha mostrado frente a este serotipo en Madrid y en otros países. Los estudios de colonización nasofaríngea con la VNC10 son escasos. Uno reciente ha demostrado que no hay diferencias en la colonización nasofaríngea por Haemophilus no tipables entre niños vacunados con la VNC10 y la VNC7. Tampoco existieron diferencias en la colonización por neumococo, tanto si se consideró la colonización global por todos los serotipos, como la colonización por los serotipos considerados individualmente, incluido el serotipo 19A. 18 El ACIP en sus últimas recomendaciones con relación a las vacunas neumocócicas dice que tanto VNC13 y VNP23 deben administrarse de forma rutinaria en serie para todos los adultos mayores de 65 años de edad con las pautas siguientes: - Personas sin vacunación antineumocócica previa Los adultos mayores de 65 años de edad que no han recibido previamente la vacuna antineumocócica o cuya historia previa de vacunación se desconoce deben recibir una dosis de VNC13 primero, seguido por una dosis de VNP23. La dosis de VNP23 debe darse 6-12 meses después de una dosis de VNC13. Si VNP23 no se puede dar durante este periodo de tiempo, la dosis de VNP23 debe administrarse en la siguiente visita. Las dos vacunas no deben administrarse conjuntamente, y el mínimo de intervalo aceptable entre VNC13 y VNP23 es de 8 semanas. - Vacunación previa con VNP23 Los adultos de 65 o más años de edad que han recibido previamente más de una dosis de VNP23 también deben recibir una dosis de VNC13, se debe de dar alrededor de 8 semanas después de recibir la dosis más reciente VNP23. Para quienes está indicada una dosis adicional de VNP23, esta dosis posterior debe darse entre 6-12 meses después de VNC13 y alrededor de 5 años después de la dosis más reciente de VNP23. Esta recomendación de la ACIP sobre el uso rutinario de VNC13 entre adultos mayores de 65 años será reevaluado y revisado en 2018. Administración concomitante con otras vacunas: Prevenar13® puede administrarse con cualquiera de los siguientes antígenos vacunales, tanto como vacunas monovalentes o combinadas: difteria, tétanos, tosferina acelular o de células completas, Haemophilus influenzae de tipo b, poliomielitis inactivada, hepatitis B, meningococo del serogrupo C, sarampión, parotiditis, rubéola y varicela. Los ensayos clínicos demostraron que las respuestas inmunitarias y los perfiles de seguridad de las vacunas coadministradas no se vieron afectados. En los ensayos clínicos con administración concomitante de Prevenar 13® y vacuna frente a rotavirus, no se observaron cambios en los perfiles de seguridad de estas vacunas. La administración concomitante de VNC13 y vacuna trivalente inactivada contra la gripe (TIV) se ha demostrado que es inmunogénica y segura. VNC13 se puede coadministrar con TIV en un programa de vacunación de adultos. 19 Sospechas de reacciones adversas a las vacunas frente al neumococo notificadas en Comunidad Valenciana. Años 2005-2011: En el periodo de 2005 a 2011 se registraron en Comunidad Valenciana un total de 119 notificaciones de sospechas de reacciones adversas (NRAV) a través del Sistema de Información Vacunal (SIV) a las vacunas frente al neumococo59. Notificaciones de sospechas de reacciones adversas a las vacunas frente al neumococo por tipo de vacuna. Comunidad Valenciana. Años 2005-2011. Vacuna Dosis de vacunas (N) NRAV (N) Tasaa IC 95% VNP23 60.818 10 16,444 8,932 30,267 VNC7 583.176 62 10,631 8,294 13,627 VNC10 34.218 6 17,535 8,037 38,254 VNC13 196.886 41 20,824 15,352 28,247 a Tasa por 100.000 dosis de vacunas administradas y registradas en SIV Las reacciones descritas como trastornos generales y alteraciones en el lugar de administración fueron las más frecuentemente registradas. Destaca en este grupo la pirexia en las vacunas frente a neumoco conjugadas y el dolor en la zona de inyección para la vacuna antineumococica polisacárida (VNP23), tal y como se detalla a continuación. Reacciones adversas notificadas a las vacunas frente al neumococo por tipo de vacuna y tipo de reacción más frecuente. Comunidad Valenciana. Años 2005-2011. N %a Tasab 22 91,67 36,176 23,892 54,771 5 20,83 8,222 3,512 19,247 24 100 39,465 26,523 58,718 84 77,06 14,404 11,636 17,831 33 109 30,28 100 5,659 18,691 4,03 15,496 7,946 22,544 5 55,56 14,612 6,242 34,205 2 9 22,22 100 5,845 26,302 1,603 13,839 21,311 49,985 Trastornos generales y alteraciones 83,61 25,903 51 en el lugar de administración 12 19,67 6,095 Pirexia c 100 30,982 61 Total RA RA: Reacción adversa a Porcentaje respecto al total de reacciones adversas notificadas a la vacuna b Tasa por 100.000 dosis de vacunas administradas y registradas en SIV c Número total de reacciones adversas incluidas en las NRAV 19,703 34,052 3,487 24,122 10,654 39,791 IC 95% VNP23 Trastornos generales y alteraciones en el lugar de administración Dolor zona inyección/vacunación Total RAc VNC7 Trastornos generales y alteraciones en el lugar de administración Pirexia Total RAc VNC10 Trastornos generales y alteraciones en el lugar de administración Pirexia Total RAc VNC13 20 3. La vacunación frente al neumococo en la Comunidad Valenciana La vacunación frente al neumococo en la Comunitat Valenciana se concreta en: • Vacunación sistemática de los niños sanos. • Vacunación de niños y adultos con factores de riesgo. Vacunación sistemática del niño sano: La fecha de Inicio de esta vacunación sistemática será el 1 de marzo del 2015 incluyendo a los niños nacidos a partir del 1 de enero de 2015. Pauta de vacunación: En niños sanos nacidos a partir del 1 de enero de 2015: Edad en el momento de la consulta 2 meses Dosis de vacuna Prevenar 13® 4 meses 1 dosis 12 meses dosis de refuerzo 1 dosis La vacuna a utilizar será la VNC13 (Prevenar 13®) Adecuación de pauta en niños sanos nacidos a partir del 1 de enero 2015 que inician la vacunación con posterioridad a los dos meses: Si la inician antes de los 6 meses, dos dosis con una separación mínima entre dosis de 4 semanas (un mes) y luego revacunar a los 12 meses. Si comienzan la pauta a partir de los 7 meses, dos dosis en el primer año de vida, con un intervalo de al menos 4 semanas entre dosis y una tercera dosis en el segundo año de vida entre los 12 y 15 meses. Si comienza pauta a partir de los 12 meses, una única dosis lo antes posible. 21 Niños con factores de riesgo: La pauta de los niños con patología de riesgo que inicien la vacunación será: Edad en la primera dosis Series primarias de VNC131 Dosis de recuerdo de VNC132 2 a 6 meses 3 dosis 1 dosis entre los 12 y 15 meses 7 a 11 meses 2 dosis 1 dosis entre los 12 y 15 meses 12-23 meses 2 dosis3 - 2 dosis en alto riesgo* - 1 dosis en inmunocompetentes** - 24-59 meses 5 - 17 años 1 dosis 1 Intervalo mínimo entre dosis en menores de 12 meses será de 4 semanas. A partir de los 12 meses el intervalo mínimo entre dosis será de 8 semanas. 2 Esta dosis se administra al menos a las 4 semanas después de la dosis previa. 3 Intervalo mínimo de 4 semanas entre dosis. *Asplenia, drepanocitosis, pérdidas de LCR, implantes cocleares o inmunodeficiencias. **Cardiopatías cianógenas, enfermedad pulmonar incluyendo asma en tratamiento con corticoides orales a altas dosis y diabetes. Los niños de hasta 17 años con patologías de riesgo que ya estaban recibiendo vacunación frente a neumococo deberán completar la pauta según su historia vacunal y las indicaciones de la ficha técnica vigente. - Grupos de riesgo: Niños con asplenia anatómica o funcional Niños inmunocomprometidos: • Infección VIH • Enfermedad crónica renal y síndrome nefrótico • Leucemias y otras neoplasias generalizadas • Receptores de trasplantes de órganos o médula ósea • Terapias inmunosupresoras • Inmunodeficiencias congénitas Niños inmunocompetentes: • Enfermedad cardíaca crónica • Enfermedad pulmonar crónica • Diabetes mellitas • Enfermedades con pérdida de LCR • Implantes cocleares 22 Intervalo entre dosis: El intervalo mínimo entre dosis es de 8 semanas (2 meses), salvo en los vacunados menores de 12 meses que puede ser de 4 semanas. Vía de administración: Intramuscular, en la cara antero lateral externa del muslo en lactantes y en la región externa del músculo deltoides en niños mayores. La vacuna no debe ser administrada por vía intravascular o intradérmica. No existen datos sobre la administración subcutánea por lo que no esta recomendada. Inmunogenicidad y eficacia clínica: La evaluación de esta vacuna se basa en la comparación de los datos de inmunogenicidad y seguridad con la vacuna VNC7. Según los criterios establecidos por la OMS, la respuesta inmune frente al neumococo fue comparada siguiendo un criterio de no inferioridad que incluye el porcentaje de sujetos con una IgG específica frente al polisacárido del serotipo en suero ≥ 0,35μg/ml un mes después de la serie primaria y la comparación de las concentraciones medias geométricas de IgG (ELISA CMG); de modo adicional se compararon los títulos de anticuerpos funcionales (OPA) entre sujetos que recibieron VNC13 y VNC7. Para los 6 serotipos adicionales se ha cumplido la no inferioridad basándose en el porcentaje de lactantes que alcanzaron unas concentraciones de anticuerpos ≥ 0,35μg/ml y en la comparación de las CMG de IgG mediante ELISA. Para los 7 serotipos comunes se han cumplido los criterios establecidos de no inferioridad para las CMG de IgG medidas por ELISA. VNC13 ha inducido niveles de anticuerpos comparables, aunque ligeramente menores, a los de VNC7 frente a los 7 serotipos comunes, tras la primovacunación y tras la dosis de recuerdo. Prevenar 13® ha inducido anticuerpos funcionales frente a la totalidad de los 13 serotipos vacunales. Después de la dosis de refuerzo, las concentraciones de anticuerpos aumentaron en relación con el nivel previo a esta dosis para la mayoría de los serotipos. 23 Precauciones y contraindicaciones: La vacuna esta contraindicada en el caso de hipersensibilidad a algún principio activo de la vacuna, a alguno de los excipientes o al toxoide diftérico. Los niños con deterioro de la respuesta inmune, bien sea debido a uso de terapias inmunosupresoras, defectos genéticos, infección por VIH u otras causas, pueden presentar una menor respuesta de anticuerpos. - Enfermedad febril grave concurrente La vacunación esta contraindicada en presencia de enfermedad febril aguda grave, y deberá diferirse hasta la recuperación de la enfermedad. La presencia de enfermedad leve no es motivo para aplazar la vacunación. - Trastornos de la coagulación La vacuna no se debe administrar a lactantes o niños con trombocitopenia o alteraciones de la coagulación que puedan contraindicar la inyección intramuscular, a menos que el beneficio potencial supere claramente el riesgo de la administración. Seguridad: La seguridad de la vacuna se ha evaluado en los diferentes ensayos clínicos llevados a cabo, y en general el perfil de seguridad es similar al de la vacuna VNC7, sin que existan diferencias clínicamente significativas en la frecuencia y gravedad de los efectos adversos observados en los niños. Las reacciones adversas tras la administración son, en general, leves y transitorias. Las reacciones más frecuentemente observadas son las alteraciones en el lugar de la inyección: dolor, enrojecimiento e hinchazón. Otras menos frecuentes son: fiebre, irritabilidad, disminución del apetito y alteración del sueño. En niños mayores de 12 meses se ha detectado un aumento de las reacciones locales con respecto a los lactantes. En estudios con lactantes sanos en los que se administró concomitantemente la vacuna Prevenar 13® con otras vacunas pediátricas sistemáticas, no mostraron diferencias significativas en la seguridad. 24 Administración simultánea con otras vacunas: Se estudió la administración concomitante de VNC13 con otras vacunas, tanto monovalentes como combinadas: DTPa, IPV, HB, Hib, Triple Vírica, Meningococo C y Varicela. Los datos sobre la administración concomitante con estas vacunas no muestran diferencias significativas en las respuestas inmunes frente a los diferentes anfígenos administrados de manera concomitante. En el caso de administrar simultáneamente más de una vacuna, se deberá hacer en lugares anatómicos diferentes. Intercambiabilidad entre las vacunas frente al neumococo: No se dispone de datos sobre la inmunogenicidad cuando se intercambian la vacuna antineumocócica VNC10 con la vacuna VNC13, por lo que a la hora de completar un esquema de vacunación iniciado con VNC10 con la vacuna VNC13 se debe tener en cuenta que no hay evidencia científica para esta pauta. No obstante, tampoco existe una razón teórica que sugiera que la vacunación previa con la vacuna conjugada con una proteína transportadora diferente pueda suponer interferencia con la respuesta a otra vacuna conjugada. Conservación: Las vacunas deben conservarse entre +2ºC y +8º C (no se deben congelar). Durante la conservación, se puede observar un sedimento blanco y un sobrenadante transparente. Antes de su utilización, la vacuna se debe agitar enérgicamente, comprobando que no se producen cambios de color ni aparecen partículas extrañas. Notificación de sospechas de reacciones adversas: Debe notificarse cualquier evento adverso siguiente a la vacunación. Estos eventos se definen como cualquier acontecimiento adverso en relación temporal con la administración de la vacuna y que puede estar causado o no por ella. En este sentido, se notificará todo acontecimiento clínico que ocurra en el plazo de seis semanas tras la administración de la vacuna, sea este acontecimiento una posible reacción o no. La notificación se realizará bien a través del SIV (Sistema de Información Vacunal) o al Servicio de Farmacovigilancia de la Conselleria de Sanitat a través del sistema de Tarjeta amarilla on line en: https://www.notificaram.es/TipoNoti.aspx 25 Registro de los actos vacunales: Las dosis administradas se registraran en el Registro de Vacunas Nominal (RVN), en los centros públicos, bien a través de SIA (Sistema de Información Ambulatoria) o del SIV en: https://rvn.sp.san.gva.es/portalSIV Mientras que los centros privados no integrados en la red ARTERIAS de la Conselleria de Sanitat, la declaración se realizará directamente en el SIV a través de la siguiente dirección: https://www.rvn.sp.san.gva.es/portalSIV La vacuna seleccionada a la hora de declararla en el RVN es “NEUMOCOCO CONJ 13 POLISAC” tal como se muestra en la figura siguiente: En el caso de ser un niño sano, se registrará como grupo de No riesgo. En caso de pertenecer a un grupo de riesgo se seleccionará el grupo correspondiente en el desplegable. 26 4. Bibliografía: 1. Centers for Disease Control and Prevention. Pneumococcal disease. In: Atkinson W, Wolfe S, Hamborsky J, eds. Epidemiology and Prevention of Vaccine-Preventable Diseases. 12 ed. Washington, DC: Public Health Foundation; 2011:233-48. 2. World Health Organization (WHO). 23-valent pneumococcal polysaccharide vaccine. WHO position paper. Wkly Epidemiol Rec 2008;83:373-84. 3. Giannella M, Pinilla B, Capdevila JA, Martinez Alarcon J, Munoz P, Lopez Alvarez J, et al. Pneumonia treated in the internal medicine department: focus on healthcare-associated pneumonia. Clin Microbiol Infect 2011;18:786-94. 4. Gil-Prieto R, Garcia-Garcia L, Alvaro-Meca A, Mendez C, Garcia A, de Miguel AG. The burden of hospitalisations for community-acquired pneumonia (CAP) and pneumococcal pneumonia in adults in Spain (2003-2007). Vaccine 2011;29:412-6. 5. 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