EL DIA E, OTRA FALACIA EN LA POLITICA EDUCATIVA DE SANTOS A través de declaraciones de prensa de la Ministra de Educación, la expedición de algunos decretos y la puesta en marcha de una serie de programas desarticulados, con eufemísticas denominaciones que impactan a la opinión pública mostrándole a través de los medios de comunicación unas realizaciones que distan mucho de la realidad de la educación y sus procesos en el país, arribamos de improviso a la realización del Día E, bajo una total improvisación y una absoluta imposición de los designios gubernamentales contrastando con su aparente visión democrática y participativa de la educación. De un momento a otro supimos que en el país se pone en marcha un modelo de evaluación para las instituciones, sus directivos y docentes, inspirado en una experiencia desarrollada en el Estado de Minas Gerais en Brasil. De golpe nos hallamos con una medición que será lanzada durante esa jornada, el Índice Sintético de Calidad Educativa -ISCE-, que tendrá una escala de 1 a 10, para cada uno de los ciclos y niveles escolares, en la cual se medirán los logros de la institución, se fijará una meta y se diseñarán unas estrategias para su mejoramiento. Así, sin concertación, sin investigaciones previas, sin la palabra de los actores del proceso educativo en el país, conocimos que se impondrá una nueva modalidad de evaluación-medición, la cual conducirá a unas “premiaciones” por productividad consideradas bajo cuatro elementos, a partir de lo cual, habrá “bonos anuales” para los colegios que cumplan, los que no, serán señalados. Los maestros serán definitivamente medidos por los resultados de sus alumnos. Sin más. Y los directivos docentes, por la escala 1 – 10. Abruptamente la excelencia educativa se nos estableció en un imperativo y excluyente indicador. Bajo este concepto de la EXCELENCIA, se formaliza la competencia no sólo entre los colegios del país, sino la competencia entre los docentes. El nuevo sistema anuncia que se medirán: El Progreso, el cual mide el mejoramiento del colegio entre un año y otro, determinado por el desempeño en las pruebas Saber. El Desempeño, el cual compara el promedio del colegio en las Pruebas Saber con el promedio nacional. La Eficiencia, entendida como el número de estudiantes que se promueven de un grado al otro, midiendo que todos los estudiantes alcancen los logros propuestos en el grado escolar, y teniendo en cuenta la matricula del MEN. Y finalmente, el Ambiente escolar y de aprendizaje, revisa el clima del aula, los procesos de retroalimentación y seguimiento de la tarea, definido a partir de “los cuestionarios anexos de factores asociados que diligencian los estudiantes de quinto y noveno cuando se presenta el examen.” La excelencia así medida, deja por fuera todos los demás factores conexos a la calidad, desde las responsabilidades del Estado y las familias, los problemas de los entornos, las afectaciones socio-económicas y la violencia que traspasa nuestro orden social. Y descansa sobre “la magia de la educación” que ocurre es en el aula, es decir, sobre la responsabilidad de instituciones, docentes y directivos, todo el peso de los resultados. Si la institución sale bien calificada, se les reconocerán bonos. Y dónde la profesionalización de los salarios docentes? Dónde los reconocimientos salariales adecuados para los directivos docentes? Dónde las infraestructuras adecuadas para excelentes ambientes escolares? Cuándo las plantas adecuadas de personal docente, directivo docente, administrativo y de apoyo para que los colegios funcionen cómo es? Cuándo el compromiso serio de fortalecer la inversión de recursos financieros de los establecimientos? La búsqueda de la excelencia, que genere una competencia donde se exalte el individualismo sólo conduce a la formación de seres egoístas poco solidarios y autoritarios, justamente lo contrario a los principios que motivan legalmente nuestra educación y nuestro sistema democrático. La excelencia debe estar cruzada por la búsqueda concertada de unos propósitos que sirvan a los intereses nacionales, que favorezcan el desarrollo de los nuevos ciudadanos como seres auténticos e independientes capaces de posibilitar transformaciones con el otro en un verdadero ejercicio de alteridad. Por todo ello, USDIDOC convoca a todos los directivos docentes del país, a hacer efectiva la desobediencia civil frente al Día de la Excelencia para el gobierno nacional, realizando las reflexiones colectivas con los docentes y comunidades educativas, que den como conclusión, no la firma de los acuerdos enviados por el Ministerio, sino la firma de MEMORIALES POR LA EDUCACION DE CALIDAD, desde todos los colegios, que den cuenta de todos los requerimientos institucionales para desarrollar procesos educativos sustancialmente mejores en el seno de nuestras comunidades. Estos MEMORIALES pueden ser igualmente sistematizados por las organizaciones gremiales regionales, remitidos a USDIDOC y posibilitarán incluso nuestras discusiones nacionales en los procesos de negociación que actualmente adelantamos con el MEN, en defensa de la educación pública y los derechos de los directivos docentes del país. JUNTA DIRECTIVA NACIONAL USDIDOC MANUEL PRESIDENTE A. LOPEZ RAMIREZ JAIME A. CARDONA SECR. ASUNTOS EDUCATIVOS MONTOYA