SUGERENCIAS A LA PRÁCTICA DE LAS RADIOGRAFÍAS EN

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SUGERENCIAS A LA PRÁCTICA DE LAS RADIOGRAFÍAS EN PALEOPATOLOGÍA
Some suggestions about the use of X-ray technique in the Paleopathology
Santiago VILA GAY
Colaborador del Museo de Arqueología de Cataluña
RESUMEN: La radiografía, en la investigación paleopatológica, constituye el examen complementario
más importante en ayuda de la obtención de un paleodiagnóstico. Sin embargo, la técnica radiográfica
en hueso "seco" difiere en algunos aspectos de la radiografía clínica, motivo que nos induce a destacar
algunas de sus peculiaridades, que a nuestro entender dependen de dos factores:
1. Instrumental, aparato de rayos X, filtros, película radiográfica...
2. Técnica empleada por el radiólogo.
PALABRAS CLAVE: Paleopatología, rayos X, técnica, radiología, pseudopatología.
ABSTRACT: In the paleopathology research the use of the X-ray technique constitutes the most impor tant of the complementary examination to obtain a paleodiagnostic. Notwithstanding, its application on the
"dry" bones is different -in some aspects- from the clinical habitual use, for which reason we have to frame
some of its peculiarities, because they depend, principally, of two factors:
1st, the set of instruments, the X-ray machine, the filters, the type of X-ray film...
2nd, the technique employed by the radiologist.
KEYWORDS : Paleopathology, X- ray, technique, radiological, pseudopathology.
INTRODUCCIÓN
Numerosos exámenes clínicos tienen su aplicación en Paleopatología, destacando entre ellos la radiología en sus distintas versiones, siendo esta última la que ha aportado más datos al paleodiagnóstico. Sin
embargo, es imprescindible comentar que, cuando se usan las técnicas radiográficas en el estudio de los
restos esqueléticos, ni la técnica empleada para la obtención de imágenes, ni éstas, son superponibles a las
de la clínica médica. Consideramos que estas diferencias se deben primordialmente a dos factores: primero, la
ausencia de tejidos blandos, que siempre modifican la nitidez de las imágenes radiográficas, y en segundo
lugar, la estructura intrínseca de los huesos a estudiar. Así, no nos debe extrañar que al personal no habituado a estudiar restos esqueléticos con frecuencia le sea difícil obtener radiografías correctas, así como que
la persona no habituada a la valoración de estas imágenes, tenga cierta dificultad en su interpretación.
En nuestra exposición nos limitaremos a los estudios de la radiología convencional y nos referiremos
por separado a tres aspectos de la cuestión: primero, uso del aparato de rayos X; segundo, características de
los huesos a estudiar; tercero: proyecciones para la obtención adecuada de las imágenes.
CARACTERÍSTICAS INSTRUMENTALES PARALA OBTENCIÓN DE LAS IMÁGENES
Distintos tipos de aparatos:
Generalmente los equipos utilizados en estos estudios son los habituales en un gabinete radiológico.
El foco empleado es el llamado "foco fino" (1 mm) y la técnica empleada, generalmente, es de 75 ó 100 mA.
Es recomendable que la distancia entre el foco y el hueso a radiografiar sea de un poco más de 1 metro, y éste debe estar en contacto con la placa; de esta forma, la magnificación la imagen obtenida en la radiografía
es mínima.
Referente a los parámetros de penetración (kV) y al tiempo de exposición (mS), son siempre en relación inversa; es decir, kV bajos y mS largos.
La combinación de las pantallas de refuerzo y la película utilizada es muy importante para lograr
una buena representación radiográfica. En nuestros estudios utilizamos pantallas de refuerzo Ultravisión
Rapid y la película indistintamente puede ser la Cronex 4, o también la Ultravisión G, ambas de la casa
Dupont.
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Sugerencias a la práctica de las radiografias en Paleopatología
Ocasionalmente, cuando un hueso tributario de estudio radiográfico está muy deteriorado o muy
descalcificado, es conveniente colocar un filtro entre el hueso y el haz de rayos X, para conseguir una mayor absorción de la radiación. Una forma muy sencilla de confeccionar este filtro es interponer una película velada entre la pantalla de refuerzo (la más próxima al tubo de rayos X) y la película.
Debido a la simplicidad de los equipos y de los parámetros empleados, se podrían realizar estos estudios con un equipo portátil.
Restos esqueléticos:
En primer lugar, es obvio que no es lo mismo radiografiar un cráneo que un hueso largo, un hueso
plano o uno corto y que los parámetros antes mencionados (kV y mS), y la incidencia serán distintos en
cada caso y adecuados a la lesión que se pretenda estudiar.
Las características de los restos óseos antiguos variarán en función de muchos factores, que no estudiaremos aquí, pero que resumiremos en tres posibilidades:
a) Huesos desecados que conservan una textura y una densidad prácticamente normal.
b) Huesos que han sufrido una descalcificación tafonómica más o menos intensa, con disminución
importante de su densidad.
c) Huesos que han sufrido un proceso de fosilización con absorción de sustancias pétreas, que dan lugar a un aumento importante de su densidad.
Cualquiera de estas tres posibilidades nos obligará a tener que adecuar los parámetros para la obtención de la radiografía.
Una dificultad añadida será el estudio de fragmentos óseos por deterioro póstumo, que alterarán las
imágenes radiográficas. Y con frecuencia, los huesos que no se han podido limpiar adecuadamente,
quedando restos térreos en su interior, concreciones calizas o impregnación de substancias diversas, sobre todo de origen metálico, muestran diferentes dificultades. Todos estos factores deben, pues, tenerse
en cuenta.
CARACTERÍSTICAS DE LOS HUESOS AESTUDIAR
No todo son desventajas para el paleorradiólogo; también hay algunos factores ventajosos, por ejemplo:
a) Pueden realizarse proyecciones imposibles en el individuo vivo, en el cadáver o en el individuo
momificado.
b) No hay superposición de huesos.
c) Al poder estudiar los huesos por separado, se pueden adecuar los parámetros radiográficos a cada
uno de ellos.
d) Es obvio que, si se quieren estudiar los huesos articulados entre sí mediante el empleo de bandas de
sujeción radiotransparentes, se deben colocar en posición anatómica.
PROYECCIONES MÁS ADECUADAS
Habitualmente se emplean las mismas proyecciones que en clínica médica, pero ante imágenes
dudosas se pueden practicar otras proyecciones. Las más comunes son el frente y el perfil, aunque en las
vértebras se practica una axial. Las mayores dificultades se encuentran en la radiografía craneal.
El cráneo se considera un esferoide, pero es sumamente irregular y en su interior hay numerosas
estructuras de gran finura. Para poder visualizar estas estructuras se requieren diferentes proyecciones,
en ocasiones específicas; para poder ver una estructura en particular, se deben sacrificar unas estructuras
para poder ver otras. Tiene suma importancia en las proyecciones sagitales conservar la simetría, pues una
desviación del plano puede originar imágenes difíciles de interpretar e incluso pseudopatológicas, teniendo
en cuenta que la pequeña asimetría en el cráneo es normal. En las proyecciones laterales deberá tenerse en
cuenta que el plano sagital del cráneo sea paralelo a la mesa de rayos X.
No es indiferente una proyección anteroposterior (AP) de otra posteroanterior (PA), ya que siempre
se aprecian con mayor nitidez y menor deformación las estructuras más próximas a la placa radiográfica.
Esta norma, que se describe para el cráneo, también es válida para los estudios de otros huesos y fragmentos de éstos, teniendo suma importancia cuando se estudia un hueso aislado, en el que existe la sospecha
de una trepanación (cráneo) o de una infección. De esta manera se pueden valorar mejor la imagen y los
bordes de la misma.
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Las finas estructuras etmoidales, los orificios de la base del cráneo, la silla turca y el aparato cocleovestibular son difíciles de visualizar, aun realizando las incidencias específicas para cada caso. Pero afortunadamente estos problemas se pueden obviar mediante la tomografía computarizada, técnica a la que no nos
vamos a referir.
ALGUNAS NORMAS BÁSICAS
1) Examen meticuloso del hueso a radiografiar, para tener plena conciencia de las imágenes que se
deseen esclarecer mediante la radiografía.
2) Adecuar los parámetros del aparato y buscar la incidencia más idónea en cada caso.
3) Excepto cuando se desee realizar un estudio de conjunto -como la columna vertebral íntegra o una
extremidad-, no se deben incluir en la misma exposición huesos de distintos tipos, grosores y tamaños.
Por ejemplo, podemos radiografiar ambos fémures, pero no un fémur y un radio, pues en este caso
los parámetros intermedios serían inadecuados para ambos y los correctos para uno serían incorrectos para el otro.
4) Cuando se radiografían huesos pares, a ser posible, se tienen que colocar en posición anatómica,
o por lo menos encarados simétricamente.
LAS IMÁGENES OBTENIDAS
No debemos olvidar que la capacidad de reacción de nuestro organismo es limitada y rara vez hay una
imagen patognomónica, o dicho de otro modo, imágenes similares o idénticas aparecen en patologías muy
distintas.
Así, por ejemplo, una osteítis puede ocasionar una imagen igual a una metástasis. Por esta razón, que
nadie crea que la radiografía siempre solucionará nuestros problemas etiológicos. El diagnóstico tendrá
que realizarse asociando a las imágenes radiográficas otros muchos aspectos de la cuestión.
CONSECUENCIAS DE UNAMALAPRAXIS
Las radiografías pueden dar origen a conclusiones pseudopatológicas:
– Interpretar como condensación ósea una falta de penetración (kV).
– Error de tiempo de exposición (mS) en la realización de la radiografía.
– Apreciar en un cráneo imágenes patológicas por superposición de estructuras.
– Valorar como signo de hipertensión endocraneal la presencia de unas impresiones digitales normales que en el hueso "seco" aparecen más pronunciadas.
CONSIDERACIONES FINALES
En nuestra exposición hemos querido poner de manifiesto que, si bien la radiografía es de gran utilidad para el diagnóstico, una mala praxis conducirá a grandes errores interpretativos, y por ello se deben
tener en cuenta los distintos aspectos que antes hemos expuesto.
Casi todo lo dicho también es válido para las otras técnicas utilizadas en el diagnóstico por la imagen,
como la tomografía lineal, la ortopantomografía, la TC, etc.
Para ilustrar lo dicho anteriormente, mostraremos unas imágenes iconográficas.
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ICONOGRAFÍA
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