Opinión Si Rudyard Kipling hubiera viajado en el Titanic, nos habría dejado quizá un impagable recuento literario de lo que sucedió en aquella fatídica noche de 1912... Eso si hubiera sobrevivido; si hubiera fallecido, el escritor se hubiera ahorrado algunas de las grandes tragedias de su vida. El si condicional, que pone peros pero a la vez abre el mundo a numerosas posibilidades, es unao de los pocos términos poéticos que se han colado en el lengiuaje de los programadores. Y por ello merece un lugar en la historia milenaria de internet. [ Miguel Ángel Furones ] 24.‘If’ El trabajo de un programador se basa en algoritmos. Opera con instrucciones que sirven para ejecutar una tarea mediante una serie de operaciones lógicas. Programador-instrucciones-ejecutar-tarea-operaciones-lógica. No cabe duda de que los que escribieron el léxico informático no se pasaron la adolescencia leyendo a Rilke. Resulta difícil encontrar una sola palabra romántica, aventurera o evocadora en todo el léxico digital. Es una ocasión perdida. Cada vez que surge un nuevo mundo con cientos de sujetos y objetos por bautizar, nos encontramos con la oportunidad de recargar el diccionario de belleza. Nombrar ese nuevo mundo con palabras llenas de audacia ¿Se imaginan si todas las implica, sin la menor duda, mejorar el verbo de las palabras relativas a la informática siguientes generaciones. se las hubieran encargado a ¿Se imaginan si todas las palabras relativas a la Cervantes? A él le hubiera informática se las hubieran encargado a Cervantes? A él le encantado el pedido y, de hecho, hubiera encantado el pedido y, de hecho, ya lo dejó escrito ya lo dejó escrito. por si en los años venideros alguien alcanzaba a proponerlo: “¡Voto a Dios que me espanta esta grandeza y que diera un doblón por describilla! Porque ¿a quién no sorprende y maravilla esta máquina insigne, esta riqueza?” ¿O que las instrucciones que sirven para ejecutar una tarea hubieran sido realizas por García Lorca? “¡Alma, ponte color naranja! ¡Alma, ponte color de amor!” Aunque, siendo justos, hemos de reconocer que incluso en el más árido de los desiertos siempre aparece una flor de cactus. En nuestro caso se trata de una de las palabras más cortas tanto en español como en inglés: If . Los programadores la utilizan en las estructuras condicionales. El sistema consiste en comenzar con esa palabra seguida de una expresión lógica que se rodea entre estos dos paréntesis:{ }. En ese caso, las instrucciones serán ejecutadas tan solo si la condición se cumple. Aunque esto es algo que Rudyard Kipling ya sabía hace mucho tiempo sin haber programado nada en su vida. No en vano tituló If al famoso poema al que tan solo le faltan los paréntesis para poder trabajar en Java. “If {you can dream and not make dreams your master;} If { you can think and not make thoughts your aim;} If {you can meet with Triumph and Disaster And treat those two impostors just the same;}” If es una palabra tremendamente subestimada teniendo en cuenta su inmenso poder. Tal vez la razón sea porque aislada no parece gran cosa. Pero cuando actúa en manada las consecuencias pueden ser imprevisibles: If el Titanic hubiera utilizado mejores remaches, If no fuera a 21 nudos para batir el record de la travesía, If la mar no hubiera estado plana impidiendo así que las olas anunciaran los icebergs, If los marineros de proa hubieran tenido prismáticos, If el capitán no estuviera durmiendo, If el primer oficial no hubiera ordenado todo atrás disminuyendo con ello la virada de la nave, If hubieran contado con 33 “If el Titanic hubiera utilizado mejores remaches, If no fuera a 21 nudos para batir el record de la travesía, If la mar no hubiera estado plana impidiendo así que las olas anunciaran los icebergs...” suficientes botes salvavidas, If las señales de socorro hubieran sido tenidas en cuenta, If… Pero la versión española es todavía más inquietante. Porque en nuestro idioma Si es un arma de doble filo. Por un lado el Si condicional, por otro el Sí afirmativo. Los separa sólo un acento, pero cuando se unen (Sí… Si) son una bomba de relojería. Los novios en la boda, por ejemplo, dan el Sí afirmativo en voz alta, pero algunos se guardan el Si condicional para Sí por Si mas adelante lo necesitan. En resumen, que cuando luego el matrimonio no funciona y la cosa acaba en divorcio es probable que la razón sea porque todo estaba ya programado desde el principio. A lo mejor es que incluso eso que llamamos amor lleva en su interior un algoritmo que, por definición, ha de ser determinista, tener un número finito de instrucciones y acabar. No es una historia romántica y tal vez por eso los poetas no escriben versos del tipo: If AMOR.Text > odio Then / RESULTADO.Text = “BODA” /Else / RESULTADO.Text = “DIVORCIO” / End If Surrealismo Amor y tecnología… Resultan difíciles de casar y eso lo pagan los algoritmos. Porque si lo ingenieros nos aportan un mundo lleno de lógica y saber, los poetas podrían añadirnos un punto de refrescante surrealismo al estilo de los versos de Estébanez Calderón: “Caco, cuco, faquín, bibliopirata, tenaza de los libros, chuzo, púa; de papeles, aparte lo ganzúa, hurón, carcoma, polilleja, rata”. No es de extrañar, ante tantas posibilidades de combinatoria verbal, que Cervantes diera un doblón por describilla. “Y mucho más ofreciera en sabiendo la grandeza y renombre que la máquina insigne alcanzara con el caminar de los años”. Pero la vida es una permanente carrera de relevos entre el científico y el poeta. Tal vez esa es la razón por la que jamás consiguen trabajar juntos. Porque cada vez que uno de ellos se pone a correr, el otro ya no está en la pista. [email protected] Anuncios 1284 / 25 al 31 de Mayo 2009