Arte Gótico ARQUITECTURA La catedral de León Fue construida en el siglo XIII sobre el emplazamiento de una obra anterior, reinando Alfonso X el Sabio. El arquitecto que la trazó, conocido como maestro Enrique, fue quizá el mismo que dirigió la de Burgos y que trabajó en ambas catedrales hasta su muerte en 1277. Está inspirada en la catedral francesa de Reims, pero reducido en un tercio su tamaño. Aunque es una catedral pequeña comparada con los modelos franceses, es muy esbelta, llegando en la nave central a la altura de dos veces y media su anchura. El transepto es ancho y espacioso, casi tanto como la nave longitudinal. En el exterior, la fachada principal está flanqueada por torres, y tiene triple portada, rosetón y un alto gablete triangular coronando el cuerpo central. El interior, de gran pureza estilística, está iluminado por las vidrieras, en las que trabajaron grandes maestros. Más información en: www.catedraldeleon.org 1 La catedral de Toledo En 1226 se inició su construcción y se levantó sobre el solar de la antigua mezquita mayor, lo que pudo condicionar en gran medida la forma de su planta, que es basilical sin brazos. Se distinguen cinco naves y un transepto que sólo se advierte en anchura y altura, ya que no sobresale en los laterales de la iglesia. La catedral tiene doble girola, y el trazado curvo de esta zona se resolvió alternando bóvedas de planta rectangular con otras triangulares. Así se evitaron los problemas de las bóvedas de planta trapezoidal, frágiles y poco armoniosas. Destacan en el interior elementos constructivos de influencia islámica, como los arcos lobulados. Más información en: www.architoledo.org/Catedral/Default.htm 2 La Catedral de Burgos La obra Fue iniciada en 1221 bajo la protección del rey Fernando III El Santo y, sobre todo, del obispo Mauricio, y sustituyó a la vieja catedral románica, cuyos cimientos se aprovecharon en una parte de la cabecera. En el siglo XIV se terminó la fachada principal y en el siglo XV se construyeron las torres, el cimborrio y la capilla del Condestable. Análisis formal - El exterior (fig. 1) La fachada fue concluida en el siglo XIV si bien se mantuvo en la línea de la catedral del siglo XIII De esta época es la triple portada, el rosetón y el cuerpo superior con dos arcos y decoración escultórica. Las torres son del siglo XV y las levantó Juan de Colonia ya con decoración flamígera, que se advierte sobre todo en el calado de las agujas. En el exterior destaca el cimborrio, coronado por pináculos y con decoración flamígera, y que fue levantado también por Juan de Colonia y su hijo Simón. Fig. 1 - El interior (Fig. 2) En el interior se distinguen los dos momentos más importantes de la construcción de esta catedral: son propios del siglo XIII los motivos de las tracerías del triforio; y la plementería del crucero, ya del siglo XV, tiene una labor calada en la que se funden Fig. 3 Fig. 2 la influencia islámica y la flamígera. Este cimborrio fue construido por Juan de Colonia, pero pronto se derrumbó y hubo de levantarlo de nuevo su hijo Simón, según la misma concepción que el primero. Destaca también por su decoración flamígera la capilla del Condestable (Fig. 3). Significado La catedral de Burgos sintetiza la evolución de la arquitectura gótica castellana, desde el trazado, aún cisterciense, de la planta, hasta la incorporación del repertorio decorativo del siglo XV, que aúna la influencia europea y la raíz hispánica. Los maestros que trabajaron en ella a lo largo de las distintas épocas de su construcción crearon además un foco de influencia artística que irradió a toda el área en torno a Burgos: es el caso del maestro Enrique, que trabajó en parte del programa iconográfico del siglo XIII, y, sobre todo, de la familia Colonia, cuyos miembros definieron el estilo de ciudades como Valladolid o Segovia. 3 Arte Gótico ESCULTURA Portada del Sarmental de la catedral de Burgos La obra La Puerta del Sarmental fue realizada a mediados del siglo XIII, y en ella trabajaron maestros franceses. Análisis formal En el tímpano (fig.1) aparece una representación del Pantocrátor, iconografía típicamente románica y que será poco frecuente en el gótico. Alrededor de Él aparecen los cuatro evangelistas (tetramorfos) representados como copistas medievales, con sus símbolos tradicionales: San Marcos (león), San Juan (águila), San Mateo (ángel) y San Lucas (toro). Los otros temas representados en la portada (fig. 2) son reyes y profetas en las jambas, apóstoles en el dintel, los veinticuatro ancianos del Apocalipsis en las arquivoltas, junto a algunas imágenes de las artes liberales que se enseñaban entonces en la Universidad, y ángeles. En el parteluz aparece la figura del obispo Mauricio, que inició las obras de la catedral, y sobre él se encuentra el Cordero. Fig. 1 Significado El estilo, lleno de dignidad y majestuoso, recuerda a las figuras de la catedral de Amiens, y por eso esta portada está atribuida a un maestro anónimo de esta ciudad francesa. El autor (o autores) demuestra un cierto apego a la iconografía arcaica al tomar como tema principal el Pantocrátor, pero también una capacidad de observación propia del talante gótico. Fig. 2 4 La Virgen Blanca La obra La imagen de Nuestra Señora la Blanca, de la catedral de Toledo (mediados del siglo XIV), es obra de un taller francés, y pertenece a la tipología de las llamadas "Vírgenes Bellas", que se difundió por Europa. Análisis formal Está hecha en alabastro con ligeros toques de policromía. El canon es muy esbelto, y el cuerpo de la Virgen está arqueado hacia un lado, según un modelo que se había hecho popular en la talla de marfil y que luego se extendió a otros materiales. Los ricos vestidos, el movimiento y la gentileza son características de estas Vírgenes góticas. Significado El gesto tan humano y tierno del Niño que acaricia suavemente la barbilla de su Madre, y la sonrisa entrañable de Ella, hunde sus raíces en la iconografía de la Virgen “Eleousa” bizantina. 5 PINTURA Políptico del Cordero Místico de Jan van Eyck La obra El Polítpico del Cordero Místico es la obra más importante de Jan van Eyck, pintada entre los años 1426 y 1432. Está formado por un conjunto de tablas para colocar sobre el altar, y también está pintado en la parte exterior, que quedaba a la vista cuando el políptico se cerraba. Análisis formal Comentaremos la parte central de retablo (Fig. 1). La tabla inferior representa la adoración del Cordero Místico según el texto litúrgico a su vez inspirado en el Apocalipsis. En ella describe cómo los bienaventurados van a adorar al Cordero, símbolo de Cristo. En un paisaje muy profundo, aparece el Cordero rodeado de un coro de ángeles y hacia el que se dirigen distintos grupos de santos y santas. En el eje de la composición están los tres símbolos de la redención: la paloma (Espíritu Santo), que dispensa la Gracia, el Cordero (Cristo), que murió por la salvación de los hombres, y la propia fuente de la Gracia. Fig.1 El paisaje tiene una línea de horizonte alta y la perspectiva es muy profunda; a pesar de esta profundidad se distinguen con nitidez todos los detalles, que están pintados con precisión de miniaturista, pero el paisaje es simbólico (representa el reino de los bienaventurados). Sobre esta escena aparece Dios Padre entronizado entre la Virgen y San Juan Bautista. Es de destacar la representación minuciosa de detalles. La factura de las calidades (joyas, tejidos, cabello) es impecable. Significado Las tablas que completan el conjunto hacen del políptico un auténtico tratado de la redención humana: Adán y Eva (fig.2) (representados en el interior de las tablas que cierran el políptico) asisten al misterio que salvará a la humanidad del pecado original que ellos cometieron, y en la parte exterior del políptico, la Anunciación señala que Cristo será el origen de esa salvación. Desde el punto de vista estilístico destacan el dominio de la perspectiva aérea y la primorosa Fig. 2 ejecución de los detalles y las texturas (gracias a la utilización del óleo), que no están puestos al servicio de una mera representación de la realidad, sino encaminados a descubrir en todas las cosas su carácter trascendente. 6