[email protected] Expresa tu opinión. Envía un mensaje a este correo con una extensión máxima de 200 palabras. Debe incluir nombre completo y teléfono. La gaceta se reserva el derecho de edición y publicación correo-e Falta grave El ex Rector expulsado por el Consejo General de la Universidad de Guadalajara “por cometer falta grave”, se presentó ante los medios de comunicación ostentando un papelito, de la misma manera que los que piden limosna muestran una receta médica. ¿Para qué? Nadie, que yo sepa, se molesta en saber qué dice la presunta receta. Ninguna persona con tres dedos de frente se va a entretener en revisarla para enterarse si está vigente, si el médico que firma tiene cédula profesional, etcétera. Si el máximo organismo rector de una Universidad Autónoma ya no lo apoya ¡Entonces se brinca las trancas y pide limosna en otros lados donde la Ley Orgánica no opera! El depuesto Rector nunca entregó el famoso amparo ni en tiempo ni en forma. Si las autoridades que, como él asegura, se supone que deben notificar a quien corresponda acerca del amparo, no lo hicieron, tal vez sea simplemente porque llegaron a la conclusión de que tal documento no procede. El Rector destituido permitió la entrada de las chicas del coro al Consejo General Universitario. Admitió que insultaran a los consejeros ahí reunidos (como Rapunzel: desde el balcón) y nunca los llamó al orden; sólo se limitó a sonreír con cinismo ante las ofensas. Cerró la sesión impulsivamente, sin tomar votación a la asamblea ahí reunida. No se había decidido a citar a reunión antes, postergó la aprobación del presupuesto más de lo usual… Junto con su lacayo vicerrector se comportó prepotente y abusivo con todos los de Casa desde el primer día en que entró a la Rectoría General. Ejerció sobre trabajadores y docentes una hostilidad y tensión que desde hacía décadas no se vivía dentro de la máxima casa de estudios. Contrató como asesor al nefasto lugarteniente de Mario Marín y cerró la pinza trayendo a la Universidad al mismísimo asesor de campaña de Etilio (¡quien por cierto, jura por el Osito Bimbo que se ha mantenido al margen!). Y cuando el Consejo General Universitario (CGU) le llama a cuentas por estas acciones, monta una serie de shows baratos (¡la Chimoltrufia ante los medios masivos de comunicación!). Un berrinche que resulta en una ofensa a la inteligencia del CGU y a la sociedad en general. Antepuso sus intereses muy personales a los intereses de la Universidad. Quiso imponer sus decisiones a las de la mayoría simplemente por ser Rector general. Creyó que usando frases panistas trilladas como “bien común”, “transparencia,” y “democracia” (¡nomás le faltó “lucha contra el narco”!) iba a conseguir el favor de las masas. ¡Malas noticias! La mayoría que rige en la Universidad de Guadalajara está formada por intelectuales. ¡Oh decepción! La mayoría que lo puso en la Rectoría General tiene todo el derecho a destituirlo de nuevo. El amparo no procede. Si procediera, ¡entonces cualquiera se ampara primero y luego agarra a balazos al vecino! El ex Rector con su papelito, pidiendo limosna, es patético. El máximo órgano directivo de la Universidad de Guadalajara ha decidido. Donde la Ley Orgánica opera, un amparo no procede. CÉSAR CANE Lugares no permitidos Por este conducto quiero manifestar mi desacuerdo con el comentario de Humberto Aguaro Ramírez que bajo el título “Qué pena” fue publicado en La gaceta 539 del 25 de agosto, manifestando su inconformidad por la facultad que tiene el H. Ayuntamiento de Guadalajara para infraccionar a quienes violan el reglamento de vialidad estacionando sus autos en zonas no permitidas (línea amarilla). Yo no sólo estoy en desacuerdo con su punto de vista, sino que promovería que esta facultad fuera extensiva a todas las policías de los ayuntamientos del área metropolitana. Sería de gran ayuda para aliviar un poco el gran problema de movilidad urbana que nos afecta, dado que éste se agrava por la falta de respeto de muchos automovilistas y choferes que se estacionan en lugares no permitidos, el tiempo que quieren y creen que con el hecho de activar las luces intermitentes ya cumplieron. Qué pena que siendo egresado de la facultad de derecho esté inconforme con que se sancione a quienes no respetan las leyes. Debería de abogar por quienes somos afectados en nuestro derecho de libre tránsito y proponer leyes que ayuden a resolver éste y muchos otros problemas de convivencia social. ¿Qué clase de abogados se están formando en nuestra Universidad? IGNACIO CARDONA MUÑOZ Respuesta al comentario Por este conducto solicito de la manera más atenta nos permita publicar respuesta al comentario expresado por Cecilia Galván Ángel el pasado lunes 1 de septiembre referente a “La realidad de los antros” que fue publicado en La gaceta, en el cual se describe la forma en que los establecimientos denominados por los jóvenes como “antros” donde se condiciona y cobra el ingreso al mismo. Al respecto me permito informarte que la Procuraduría Federal del Consumidor ha venido implementando el programa denominado “¡En el antro tú también tienes derechos!”, con el objeto de que los jóvenes como tú estén bien informados de sus derechos, entre los cuales se encuentran los siguientes: 1. No puedes seleccionar a la gente por su manera de vestir, por su apariencia física (¡eso es discriminación!). 2. No puedes darle mesa sólo si compra una botella (¡eso es condicionamiento!) 3. Los precios deben de estar a la vista o en la carta. 4. No puedes obligarlo a un consumo mínimo. 5. No le puedes cobrar el servicio ni exigirle propina (¡ésta es voluntaria!). Es necesario destacar, la importancia de que jóvenes como tú denuncien las irregularidades y anomalías que cometen estos establecimientos al teléfono del consumidor 01 800 468 8722, incluso de manera anónima proporcionando el nombre y domicilio completo del establecimiento, así la PROFECO podrá realizar las visitas de verificación correspondientes a los establecimientos y aplicar las sanciones con el objeto de garantizar que estas cumplan con la normatividad vigente. LILIA BEJARANO CÁSAREZ, DELEGADA DE PROFECO EN JALISCO Felicitaciones Les escribía para comentarles que leí un número reciente de La gaceta y me llevé la sorpresa de que tiene artículos ¡Muy interesantes! ¡Muchas felicidades!, sigan con el buen trabajo. Otra cosa por lo que les escribía era para comentarles que el artículo de las micro cervecerías. ¡Está muy bueno! Sólo tengo una pregunta: el Beer Lounge dónde se encuentra, en Tlaquepaque? ¿Cuál es la calle o cómo puedo llegar? Gracias de antemano. RODRIGO CORONADO FIGUEROA directorio UNIVERSIDAD DE GUADALAJARA • Rector general: Dr. Marco Antonio Cortés Guardado • Vicerector: Dr. Miguel Ángel Navarro Navarro • Secretario general: Lic. José Alfredo Peña Ramos • Director General de Medios: Mtro. David Rogelio Campos Cornejo • Director de Información: Lic. Leonardo Schwebel Esquivel • CONSEJO EDITORIAL: Dra. María Elena Hernández Ramírez • Dr. Jorge Ceja Martínez • Dr. Marco A. Cortés Guardado • Mtra. Irma Amézquita Castañeda • Dra. Dulce María Zúñiga Chávez • Dr. Marco Aurelio Larios • Dra. María del Refugio Torres Vitela • Dra. Silvia Valencia Abundiz • Dr. Carlos Ramiro Ruiz Moreno • Dr. Javier Hurtado González • Mtro. Emmanuel Carballo • Mtro. Boris Goldenblank • Mtra. Nubia Edith Macías Navarro LA GACETA: Editor: Cristian Zermeño: [email protected] • Jefe de información: Ricardo Ibarra Álvarez: [email protected] • Productor: José Luis Ulloa Luna: [email protected] • Jefa de diseño: Miriam Mairena Navarro: [email protected] • Diagramación: Gabriela Hernández Ramos • Diagramación y sistemas: Fernando Ocegueda Luna • Corrección: Fanny Enrigue, Víctor Manuel Pazarín • Ventas y publicidad: 31 34 22 22 extensión 2616 • Distribución: Vicente Pérez Márquez: 31 34 22 22 extensión 2616 • Edición electrónica: www.udg.mx/gaceta. Número de reserva del Instituto Nacional de Derechos de Autor: 04-2006-062312221000-102 lunes 8 de septiembre de 2008