el conflicto religioso en orizaba: de la ley calles a la ley tejeda, 1926

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UNIVERSIDAD VERACRUZANA
FACULTAD DE HISTORIA
“EL CONFLICTO RELIGIOSO EN
ORIZABA: DE LA LEY CALLES A
LA LEY TEJEDA, 1926-1940”
TESIS
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE
LICENCIADO EN HISTORIA
PRESENTA:
Julio César Zúñiga Trujillo
DIRECTOR:
Dr. Juan Ortiz Escamilla
XALAPA-ENRÍQUEZ, VER.
DICIEMBRE DE 2015.
Índice
Introducción........................................................................................................... 5
Marco teórico ..................................................................................................... 11
Hipótesis y estructura del trabajo ....................................................................... 13
Capítulo I. El conflicto religioso en Veracruz (1925-1926) ............................... 18
1.1 Adalberto Tejeda en la presidencia de Plutarco Elías Calles ....................... 18
1.2 La Ley Calles en Orizaba, Veracruz ............................................................. 25
1.2.1 Aplicación del artículo 3° Constitucional ................................................ 31
1.2.2 Las Juntas Vecinales, el control por los bienes del clero ....................... 39
1.3 El apoyo obrero, la fuerza política ................................................................ 47
1.4 Los medios de protesta de los católicos ante la Ley Calles ......................... 51
Capítulo II. La ley antirreligiosa en Orizaba: de Heriberto Jara Corona
a Adalberto Tejeda (1927-1930) .......................................................................... 56
2.1 La crisis del gobierno de Heriberto Jara Corona .......................................... 56
2.2 Un gobierno interino en Veracruz (1927-1928) ............................................ 58
2.2.1 Desobedientes de la ley: el caso de Paulino Martínez Pacheco
y agraviados ................................................................................................... 61
2.2.2 Los espiritistas, una breve participación en la política
religiosa de Orizaba ........................................................................................ 72
2.2.3 La administración de las Juntas Vecinales ............................................ 74
2.3 El camino hacia la concordia entre la Iglesia y el Estado,
la derogación de la ley antirreligiosa en Veracruz durante la
administración de Adalberto Tejeda ................................................................... 80
2.3.1 El primer año de la política religiosa en el gobierno
tejedista en Orizaba ........................................................................................ 81
2.3.2 El “Modus Vivendi”: hacia la reconciliación entre
el Estado y la Iglesia, el descontento de Adalberto Tejeda ............................ 85
2.4 Después del modus vivendi y el regreso a los templos................................ 91
2.4.1 La entrega de los templos a los feligreses de Orizaba,
respetando el “modus vivendi” ........................................................................ 94
2
Capítulo III. El gobierno radical en Veracruz. La segunda ley antirreligiosa
en la década de los treinta del siglo XX .......................................................... 106
3.1 El anticlericalismo veracruzano .................................................................. 107
3.1.1 Un nuevo enfrenamiento, el clero y el gobierno veracruzano .............. 116
3.2 Tiempos difíciles en el segundo semestre de 1931,
crisis e incertidumbre entre el clero y el gobierno de Veracruz ........................ 124
3.2.1 1932: el segundo cierre de templos en Orizaba .................................. 137
3.2.2 El rumbo de la Ley 197 ........................................................................ 150
3.3 La Iglesia de la Santísima Trinidad, un caso presbiteriano ........................ 157
Capítulo IV. El fin de la Ley 197 en Veracruz: 1937, rumbo a la
reapertura de los templos en Orizaba ............................................................. 161
4.1 Un nuevo panorama político ...................................................................... 161
4.2 La situación religiosa en 1937: el último año de la Ley 197 ....................... 166
4.3 La nueva entrega de templos a las Juntas Vecinales en Orizaba .............. 182
4.3.1 En búsqueda de otros implicados en el asesinato
de Leonor Sánchez ....................................................................................... 188
4.4 Hacia una solución de la ley antirreligiosa ................................................. 191
4.4.1 Rumbo a la reconciliación entre el Estado y la Iglesia en Orizaba ...... 193
Conclusión ......................................................................................................... 207
Anexo ................................................................................................................. 214
Bibliografía......................................................................................................... 224
3
Agradecimientos
Las palabras nunca alcanzan cuando
lo que hay que decir desborda el alma.
-Julio Cortázar-
A mis abuelos paternos, Irineo Zúñiga Trujillo y Guadalupe García Cerón, quienes fueron
testigos del acontecimiento histórico regional que se expone en el presente trabajo, por
ellos fue que me interesó estudiar y analizar este periodo de la historia de Orizaba. A
cada miembro de las familias Luna Trujillo, Rossains Trujillo, Trujillo Antonio y Zúñiga
García, quienes demostraron su apoyo incondicional.
Externo especial agradecimiento a mis padres, Sofía Trujillo Antonio y Gaspar
Fernando Zúñiga García, quienes con su guía moral me brindaron las herramientas
necesarias para lograr cumplir este proceso universitario. Especialmente a mi mamá,
quien con su esfuerzo, lucha, perseverancia y dedicación hizo que esto se llevara a cabo,
jamás dudó en darme su apoyo incondicional; a mi hermano Adán.
A los amigos que me acompañaron: Hilda, Indira Daniela, Jesús Antonio, Maribel,
Mario Alberto, Marisol, Miguel Enrique, Paulo César. Asimismo, agradezco a la Facultad
de Historia de la Universidad Veracruzana durante la estancia 2011-2014. Hago mención
que la presente investigación fue asesorado por el Dr. Juan Ortiz Escamilla, profesorinvestigador del Instituto de Investigaciones Históricos-Sociales de la Universidad
Veracruzana, quien además me brindó una beca del Consejo Nacional de Ciencia y
Tecnología (CONACYT) 2014-2015, gracias a ello logré elaborar esta investigación. A
mis lectores: Dra. Julieta Arcos Chigo, Dr. Gerardo Antonio Galindo Peláez y Dra. Dora
Cecilia Sánchez-Hidalgo Hernández, gracias por sus atinadas observaciones.
Finalmente, agradezco a la directora del Archivo Municipal de Orizaba “José María
Naredo” Lic. Aracely Rodríguez Contreras y al personal, quienes me auxiliaron al
momento de la consulta de los expedientes. De igual manera al Pbro. Antolín Bernardi
Castelán, párroco de la Catedral de San Miguel Arcángel de Orizaba y al Pbro. Helkin
Enríquez Báez, capellán del templo de El Calvario de la misma ciudad, quienes me
permitieron la consulta del archivo parroquial.
4
Introducción
El presente trabajo tiene como objetivo explicar el impacto que tuvo la ley anticlerical del
siglo XX en el estado de Veracruz, concretamente en la ciudad de Orizaba. Como se
recordará, en los primeros años del siglo XX, estalló la Revolución Mexicana, que dio fin
al gobierno de Porfirio Díaz, como consecuencia el sistema político de México sufrió un
cambio con los siguientes presidentes y líderes de la Revolución. En ese tiempo se da el
triunfo de Venustiano Carranza con quien la vida política del país tomaría un curso
diferente al decretarse una nueva Constitución en 1917, si bien varios artículos son
reformados de diferentes índoles, unos en particular son de especial interés para esta
investigación: el 3°, 24 y 130, que tratan sobre la educación y los intereses del clero.
El origen de esta investigación surgió de los estudios que se han hecho de manera
nacional, siendo el máximo exponente el historiador Jean Meyer con su obra “La
Cristiada”. La investigación que se presenta, de manera local, se orienta a un espacio en
específico: Orizaba, Veracruz; asimismo se trata de buscar cuáles fueron los factores que
durante los años veinte y treinta el anticlericalismo se puso en práctica. Así como dar a
conocer por qué en esta entidad no hubo enfrentamientos violentos en comparación con
la zona centro-occidente del país a pesar de que México es mayoritariamente católico;
siendo que el impacto de las leyes en contra de la Iglesia1 fue diferente en Veracruz en
comparación con las otras entidades del país.
La Iglesia mostró su desaprobación a la Constitución e incitaba a desobedecerla y
no acatarla, mientras que el gobierno mantenía su postura de que la única manera de
lograr el progreso del país era limitar la influencia del clero que, según los ideales
revolucionarios, venía perjudicando a la sociedad; a pesar de que la Carta Magna fue
promulgada en 1917, los artículos referentes a materia de cultos se empezaron a ejercer
en 1926 y se extendió hasta los años treinta.
El Estado mexicano tomó un nuevo rumbo al reformar las leyes y ejercerlas,
destacando la cuestión educativa, laboral, social, agraria y religiosa. Al aplicarse los
1
Como observación, se escribirá “iglesia” cuando se trate del recinto, del inmueble. Mientras que cuando se vea
“Iglesia” se referirá a la Institución religiosa.
5
artículos 24 y 130 donde el Estado podía intervenir en asuntos religiosos, lo que provocó
serios enfrentamientos, primero de 1926 a 1929 a nivel nacional con la llamada “Ley
Calles”, después a nivel estatal, en Veracruz fue de 1931 a 1937 con la “Ley Tejeda”.
Algunos artículos que se plasmaron en la Constitución como producto de las ideas
radicales, fueron tomados como una amenaza por aquéllos en donde sus intereses se
veían afectados, como lo fue en materia de libertad de cultos. Uno de los radicales fue
Francisco J. Múgica, quien influyó en la redacción de los artículos 24 y 130. El primero
expresaba que las manifestaciones de los cultos debían permanecer en el interior de los
templos, mientras que el segundo, era como una extensión del 24, garantizaba que las
leyes no prohíben ningún tipo de culto, además de que concede al Estado intervenir en
asuntos religiosos de carácter externo para evitar conflictos entre los diversos credos,
este artículo se basa en las Leyes de Reforma de Juárez.2 Ante esto, la Iglesia Católica
Mexicana reaccionó de tal manera que años después se llevó a cabo un enfrentamiento
violento entre el Estado y la Iglesia.
El tema de la religión fue importante y controvertido durante las sesiones del
Congreso Constituyente celebrado en Querétaro para la formación de la nueva Carta
Magna, algunos buscaron su limitación, sino es que eliminación del clero, otros no
querían reformar las leyes. Enrique Recio buscaba reformar el artículo 24, agregando que
se prohibía al sacerdote de cualquier culto impartir la confesión auricular y que el ejercicio
del sacerdocio se limitara a ciudadanos mexicanos por nacimiento, por lo que una vez
planteada la propuesta se pone a discusión y es aprobada.3 Del mismo modo, el artículo
130 (en un momento llamado art. 129), fue puesto en debate para su reforma y
nuevamente hubo pros y contras; David Pastrana Jaimes dijo: “…El pueblo mexicano no
es religioso, es fanático, es simplemente un fanático”, mientras Múgica deseaba terminar
con el clero al que llamaba “hidra”.4
2
ARCOS Chigo, Antonio. “Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917” en ARCOS Chigo, Julieta
(Coord. y Comp.). Documentos Fundamentales de México. Jornadas Veracruzanas de Historia, México, Gobierno del
Estado de Veracruz, Universidad Veracruzana, 2010, pp. 228-229.
3
http://constitucion1917.gob.mx/contenido/pdf/congreso_const/023.pdf, (consultado el 01 de diciembre de 2014).
4
Ibíd.
6
El Presidente Plutarco Elías Calles hizo valer el Artículo 130 de la Constitución
mexicana,5 limitando la intervención política y social de la Iglesia Católica ya que ésta
comenzaba a tener una participación activa en la vida de los ciudadanos, pues contaba
con escuelas religiosas, fomentaba la práctica de culto y cuestionaba al gobierno, por lo
que a esta medida por parte del gobierno mexicano se le conoció como “Ley Calles”. De
esa manera se puso en práctica la “reglamentación de los curas”, el cual consistió en que
debían de registrarse ante un padrón para poder ejercer su culto, donde sus actividades
serían tomadas como “oficios” siempre y cuando fueran mexicanos por nacimiento.
Por otro lado, en Orizaba hubo movimientos obreros que al principio apoyaron al
gobierno. Sobre la política religiosa mostraron su apoyo al presidente Plutarco Elías
Calles a través de la máxima casa obrera, la Confederación Regional Obrera Mexicana
(CROM). Tal Confederación agrupó a miles de obreros en todo el país, siendo Veracruz
uno de los bastiones de esos movimientos por albergar a ciudades fabriles y mercantiles
como Córdoba, Orizaba, Xalapa y puerto de Veracruz. Los obreros mostraron su apoyo
ante esta medida pero con el paso del tiempo las constantes luchas entre el gobierno y
los sindicatos abrirían una brecha que los distanciaría, culminando con la ruptura entre
ellos. Asimismo, años después los obreros abogarían por los derechos de los católicos y
ellos mismos se llamarían así, mostrando apoyo a los feligreses de Orizaba para la
reapertura de los templos en 1937.
No es intención ahondar sobre la cuestión laboral o del movimiento obrero en
Orizaba, pero conforme avance el presente trabajo se abordarán ciertos aspectos para
ayudar a tener en cuenta cuál era la situación que se vivía en esa época, donde las
posturas tanto de la Iglesia como del Estado eran diferentes buscando imperar una sobre
la otra. Del mismo modo cómo la sociedad, con énfasis en los católicos, buscaba resistir
a las leyes anticlericales del gobierno, así como algunos sectores apoyaron las
disposiciones gubernamentales; sin embargo, no sólo la ley afectó al clero católico, sino
a otras religiones.
5
En este Artículo la Federación tiene poder sobre materia de culto y no reconoce personalidad alguna en las
agrupaciones religiosas. Al igual que el ejercicio de sacerdote será visto como una profesión, los Estados podrán
designar el número de sacerdotes y éstos tienen que ser mexicanos por nacimiento, así como prohibirles
agrupaciones políticas ni criticar las leyes del país. Véase a ARCOS Chigo, Antonio, Op. Cit., 2010, pp. 247-248.
7
A modo de respuesta, el Episcopado Mexicano rechazó el artículo y suspendió los
cultos, creyendo que de esa forma el gobierno daría marcha atrás, pero no fue así por lo
que la ley se puso en práctica en todo el país, como consecuencia estalla la “guerra
cristera”. Además del presidente, había otros revolucionarios que buscaban la limitación
del clero, entre ellos sobresale Francisco J. Múgica, quien destacó en el Congreso
Constituyente de Querétaro cuando se redactaba la Constitución de 1917; también
destaca el veracruzano Adalberto Tejeda, un revolucionario con ideales radicales.
Tejeda ocupó la gubernatura de Veracruz por primera vez de 1920 a 1924, en ese
tiempo mostraba ya su desagrado hacia la Iglesia, durante esa administración tuvo un
acercamiento hacia las clases populares, obreros y agraristas, por lo que años después
se valió de eso para un segundo mandato. Fue llamado a formar parte del gabinete de
Calles; al decretarse la ley anticlerical en junio de 1926, como secretario de Gobernación
exigió su cumplimiento a todos los funcionarios.
En Veracruz, se encontraba como gobernador Heriberto Jara Corona (1924-1927),
otro revolucionario que era allegado a Adalberto Tejeda, quizás este fue el motivo por lo
que en la entidad la ley anticlerical se puso en práctica; el gobernador Jara seguía las
órdenes del Gobierno Federal, la influencia que se tenía uno sobre del otro jugó un papel
fundamental, Tejeda tenía autoridad en Veracruz a pesar de que se encontraba en la
ciudad de México, esto debido a que ya había destacado en el campo político al ser
gobernador de 1920 a 1924.
Mientras la guerra cristera se libraba en ciertos lugares del país, en el estado de
Veracruz no sucedió lo mismo, a esto se debe la figura de un personaje caracterizado y
reconocido incluso por el gobierno, el obispo Rafael Guízar y Valencia; él era la
contraparte del gobierno, figura principal del clero veracruzano y a pesar de su exilio
siguió teniendo presencia en su diócesis. Tan fuerte fue su liderazgo que llamó la atención
de los católicos a no tomar las armas como sus semejantes, para Guízar la violencia no
era necesaria, por lo que debía buscar una solución de manera pacífica, aunque repudió
la reglamentación de los curas pidió a sus feligreses que se respetara la ley y no se
metieran en asuntos políticos.
8
En la ciudad de Orizaba, la ley se comenzó a ejercer a petición del gobernador
Heriberto Jara Corona, por lo que los sacerdotes que no se registraron ante un padrón
eran expulsados, se confiscaban todos los bienes eclesiásticos y pasaban a manos del
gobierno; posteriormente se crearon las Juntas Vecinales para su cuidado, limpieza y
conservación. Al momento de ejercer la ley se buscaron todos los recintos en los que
pudieran ejercer el culto o enseñar la educación religiosa, por lo que se ordenó vigilar
asilos u orfanatos y si se encontraba una capilla se tenía que clausurar; lo mismo pasó
con las escuelas particulares que ejercían la enseñanza religiosa, las cuales debían de
sujetarse al plan educativo del gobierno y si no lo hacían eran cerradas.
La Ley Calles se mantuvo en Orizaba hasta el segundo mandato de Tejeda en
1928, dicha ley se deroga al año siguiente. A pesar de que el obispo Guízar rechazaba
la violencia, su resistencia se basó en la desobediencia y se oficiaban misas en casas
particulares. Sin embargo, en 1929 se realizan los arreglos entre el Gobierno Federal y
el Episcopado Mexicano, dando fin a la guerra cristera; algunos políticos rechazaron esta
actitud, entre ellos Tejeda, quien en los años treinta, junto con otros gobiernos estatales
llevaron a cabo el cumplimiento del artículo 130 en algunas entidades del país.
Adalberto Tejeda reprobó los acuerdos y sostuvo que era un sometimiento hacia
el clero; en Orizaba los católicos celebraron el arreglo y esperaban la entrega de los
templos, sin embargo el gobierno veracruzano no los entregó inmediatamente y se
prolongó por varios meses más. Faltando un año para que su gestión terminara, el
gobernador Tejeda propuso una ley de reglamentación de sacerdotes pero ahora con
jurisdicción estatal, ésta fue aprobada en junio de 1931 y de esta manera se aplicaba otra
ley anticlerical. Ahora el número de ministros sería de 13 por cada 100,000 habitantes;
esta ley no sólo afectó a los católicos, sino que también a los protestantes que tenían
presencia en Orizaba. Esta ley alcanzó tal dimensión, que días antes de entrar en vigor
Tejeda fue víctima de un atentado, esto motivó al gobierno veracruzano a culpar a los
católicos y de acuerdo con las averiguaciones pertinentes se dijo que el autor intelectual
del crimen fue el sacerdote Rafael Rúa Álvarez, de Orizaba.
Conforme pasaban los años, desde que Adalberto Tejeda promulga la ley los que
le sucedieron en el gobierno mantuvieron su vigencia, pese a que algunos católicos
9
solicitaban derogarla. El gobernador en turno no aceptaba esa petición y como
consecuencia siguieron las insubordinaciones y aquellos que fueron sorprendidos, tanto
sacerdotes como civiles, fueron consignados ante las autoridades siendo procesados y
trasladados a la cárcel municipal.
Rafael Rúa, cura distinguido entre los habitantes del valle de Orizaba, mantuvo su
postura contra el gobierno y fue muy cercano al obispo Guízar, soportó las dos
persecuciones religiosas en Veracruz. Su participación fue tal que influía entre los
habitantes al igual que en los obreros; Rúa tuvo que huir cuando se le buscaba por el
atentado hacia el gobernador, entre sus actividades estuvo el de misionar por la zona
central de Veracruz para hacer frente a la ley Tejeda, la forma en que lo hizo fue
entregando los amparos que buscaron los sacerdotes para resistir la persecución y evitar
su detención por parte de las autoridades.
Además, tanto el padre Rafael Rúa como el obispo Rafael Guízar, tuvieron
influencia para que la ley en Veracruz terminara. La muerte de una joven llamada Leonor
Sánchez fue el inicio, el gobernador en turno era Miguel Alemán Valdés; después de que
Leonor murió se hicieron grandes manifestaciones que pedían la apertura de los templos,
ante esto jugaron un rol importante los clérigos antes mencionados, por un lado Rúa fue
compañero de clases de Alemán, por lo que tenía cierta cercanía hacia su persona, pero,
quien tuvo más peso fue el obispo ya que era amigo de la familia del gobernador.
El obispo conocía a la familia de la esposa del gobernador, la señora Beatriz
Velasco, concretamente a su hermano, a quien le pidió en diversas ocasiones interceder
entre Guízar y el gobernador, el cual pedía que los templos tenían que ser abiertos y así
reanudar los cultos católicos. Ante esto el gobernador junto con las presiones del
Gobierno Federal, dado que Lázaro Cárdenas buscaba una solución al conflicto, se tuvo
que ceder y en noviembre de 1937 los cultos en Veracruz fueron restablecidos, no
obstante, el gobierno entregó poco a poco los templos, de nueva cuenta las Juntas
Vecinales jugaron un papel crucial para el manejo y control de los inmuebles religiosos
de Orizaba.
10
Marco teórico
Durante el tiempo que se libró la guerra cristera en México, el gobierno veracruzano
ejerció la ley anticlerical con el apoyo de las autoridades civiles, los obreros mostraron su
fuerza al secundar esa disposición, en primer lugar porque el presidente municipal de
Orizaba era un obrero y estaba afiliado a algún sindicato. Si la autoridad civil no ejercía
lo que el Estado demandaba los obreros actuaban y le recordaban que era parte del
gremio, logrando así su influencia en la política.
En la historia nacional, la guerra cristera se ha centrado en el centro-occidente del
país, en aquellos estados donde los cristeros tomaron las armas y se enfrentaron al
ejército nacional, pero eso no significa que el tema no se ha abordado en los años treinta.
Jean Meyer señala que debido a que los arreglos del 29 no se respetaron, llamando a
este periodo como “La Segunda”, refiriéndose a un segundo episodio de la persecución
de los católicos. Meyer aborda este concepto en otras obras, como el estudio que realiza
en Oaxaca.6
En Orizaba no se ha investigado de manera crítica este episodio de la historia. Los
trabajos que hay son obra de los cronistas de Orizaba, pero estos se centran únicamente
en los años treinta, por lo que esta investigación profundiza en la problemática desde
inició con Calles, pasando por el gobierno radical de Adalberto Tejeda, del mismo modo
que no se ha aclarado cómo termina la aplicación de la Ley Tejeda, por lo general, el
periodo se corta dramáticamente en febrero de 1937. Si bien la ley se deroga en
noviembre de ese año, los templos fueron entregados paulatinamente.
En palabras de Jean Meyer,7 este segundo movimiento lo llamó “alberchigal” por
referirse al albérchigo o al durazno de cosecha tardía. Tejeda logró mantenerse en el
palacio de gobierno de Xalapa por su habilidad para afianzar su respaldo entre los grupos
populares, se convirtió en ferviente callista, recurso que había de brindarle jugosos frutos
6
MEYER, Jean. El conflicto religioso en Oaxaca (1926-1938), CIESAS, Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca,
Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, Oaxaca, México, 2006.
7
Conferencia celebrada en Xalapa, Veracruz. Por el aniversario 150 de la arquidiócesis efectuada el 27 de junio de
2014.
11
en los años por venir.8 Para 1933 hubo un descontento hacia Adalberto Tejeda por parte
del gobierno federal por haberse “vendido” a compañías con intereses petroleros,9 él y
Calles se iban distanciando debido a las diferencias políticas.
Como revolucionario, Tejeda tenía en Veracruz su fuente de poder en los
trabajadores y los campesinos, organizados en ligas campesinas, sindicatos obreros y
partidos socialistas. Al mismo tiempo, estaba en juego el dominio, es decir la capacidad
del Estado o de la Iglesia para controlar a las instituciones y a la sociedad como los
obreros, los campesinos, la juventud, la clase media; el cura llegaba a ser más importante
que el presidente municipal.10 Orizaba, junto con Xalapa y Veracruz serían los centros
productivos más importantes de la entidad, se buscó que estuvieran sujetas a las
disposiciones del gobierno por la importancia económica que representaban.
Las ideas revolucionarias estaban presentes en algunas partes del país y pese a
que la Cristiada había terminado, algunos gobernadores implementaron leyes
anticlericales en sus estados. Otra definición de anticlericalismo puede ser como el
conjunto de ideas, discursos, actitudes y comportamientos que se manifiestan en forma
pacífica o violenta contra las instituciones eclesiásticas. Esta postura anticlerical puede
llegar a cuestionar o descalificar dogmas, creencias, ritos y devociones. René Remond
dice que el anticlericalismo se desarrolla principalmente donde hay clericalismo, es decir,
donde la fuerza de la Iglesia Católica ha sido fundamental en su historia, su sociedad y
su cultura.11
De esta forma se hace evidente que en las rebeliones que ocurren en un país
causarán estragos en lo social, político y económico, pero a pesar de ello los bandos que
se enfrentan mantendrán sus ideales y harán lo posible por ganarle a su adversario. Para
8
FALCÓN Romana y Soledad García. “La anarquía pura. El nuevo régimen” en La semilla en el surco. Adalberto Tejeda
y el radicalismo en Veracruz 1883-1960, El Colegio de México, México, 1986, p. 154.
9
Fondo Francisco J. Múgica, Caja 16, Tomo CXLIV, documento 202, de Lázaro Cárdenas a Francisco J. Múgica, julio 17
de 1933.
10
PÉREZ-Rayón Elizunda, Nora. “El anticlericalismo revolucionario” en Estado, Iglesia Católica y Anticlericalismo en
México. La primera visita de Juan Pablo II en la prensa de opinión, México, Universidad Autónoma MetropolitanaAzcapotzalco, Almaqui Editores, 2013, pp. 53-55.
11
PÉREZ-Rayón, Elizundia Nora. Estado, Iglesia Católica y Anticlericalismo en México. La primera visita de Juan Pablo
II en la prensa de opinión, México, Universidad Autónoma Metropolitana-Azcapotzalco, Almaqui Editores, 2013, pp.
11-12.
12
la década de 1930 en Veracruz había una lucha ideológica,12 los ideales revolucionarios
estaban presentes y algunos políticos llegaron a ser radicales al momento de ejercer su
política. A pesar de todo, en Veracruz –concretamente Orizaba–, no hubo rebelión por
las armas, sino más bien se trató de una desobediencia civil 13. Esta fue una manera de
protestar y resistir ante las adversidades que atravesaban, pues se sentían agraviados
por la conocida ley 197.
Como se recordará el anticlericalismo en México estaba presente desde antes de
la Revolución, pero es en el siglo XX cuando esta política es llevada cabo por el gobierno.
Primero de manera nacional donde el presidente de la República pide el cumplimiento de
la Constitución con base a ese tema, posteriormente esa política es trasladada a
gobiernos estatales. La temporalidad de la investigación es larga, por lo que hubo varios
gobernantes, tanto presidentes como gobernadores, por lo que no se profundizará en la
política de cada uno, sino más bien de aquellos que tuvieron una participación más activa
en las dos formas de gobierno.
Hipótesis y estructura del trabajo
Para entender esta investigación se tratará de responder las siguientes preguntas:
 ¿Por qué la guerra cristera no llegó al estado de Veracruz?
 ¿Hasta qué grado fue la influencia del obispo Rafael Guízar y Valencia para que
los católicos veracruzanos no tomaran las armas?
 ¿Por qué los obreros fueron un apoyo importante para el gobierno?
 ¿Cuál fue la relación del padre Rafael Rúa Álvarez con los católicos orizabeños?
 ¿Cómo fue tomada la ley de cultos por los protestantes en Orizaba?
12
Norberto Bobbio dice que como ideología se entiende a los sistemas de creencias políticas: un conjunto de ideas y
de valores concernientes al orden político que tienen la función de guiar los comportamientos políticos colectivos.
BARRIOS, Miguel Ángel. “La filiación ideológica de Manuel Ugarte” en El Latinoamericanismo en el pensamiento
político de Manuel Ugarte, Buenos Aires, Biblos, 2007, p.30.
13
Es una forma particular de desobediencia, en cuanto que es llevada a cabo con el fin inmediato de demostrar
públicamente la injusticia de la ley y con el fin mediato de inducir al legislador a cambiarla. BOBBIO Norberto, Nicola
Matteucci, Gianfranco Pasquino y otros. Diccionario de Política 2 Vol., Siglo XXI, México, 1995, pp. 534-535.
13
 ¿Qué impacto tuvo la muerte de Leonor Sánchez con los católicos y obreros en
Orizaba?
 ¿Cómo terminó la ley de cultos en Orizaba?
Durante la administración del presidente Plutarco Elías Calles (1924-1928) se presentó
una ley anticlerical (1926-1929), en ella se buscó la limitación del culto católico y
minimizar su influencia en la sociedad mexicana. Para lograrlo, utilizó los sindicatos
existentes a través de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), la cual era
la máxima casa de obreros reunidos en un solo gremio, su dirigente fue Luis N. Morones
que a su vez era aliado de Calles.
Limitar la religión católica fue un serio problema que enfrentó el gobierno
posrevolucionario en México, la mayoría de los habitantes profesaban esa religión y hubo
serios enfrentamientos, especialmente en el centro-occidente del país, donde se originó
la “Guerra Cristera”. Sin embargo, a la par de que se librara la rebelión de los cristeros
en contra del ejército mexicano, en otros estados parecía no haber guerras; esto se
tratará de explicar en la presente investigación.
Probablemente la influencia del obispo Rafael Guízar y Valencia evitó que la
guerra entre católicos y el ejército mexicano alcanzara el estado de Veracruz, Guízar
condenó desde un principio tomar las armas y llamó a sus feligreses a no desatar una
guerra como ocurrió en otros estados de la República Mexicana, para el obispo la mejor
manera de hacer frente era por la vía legal, sin violencia. Esto pudo haber ayudado a que
no hubiera enfrentamientos violentos, sin embargo, no pudo evitar ciertas escaramuzas
en algunas regiones veracruzanas, principalmente en el centro y norte.
Adalberto Tejeda, fue parte del gabinete callista al ocupar la Secretaría de
Gobernación, pedía el cumplimiento de la ley anticlerical a los gobernadores de los
estados. Esto hizo que Heriberto Jara Corona, quien se encontraba al frente del gobierno
veracruzano en aquella época ordenara el cumplimiento de la ley, en Orizaba –campo de
estudio– se empezaron a confiscar los templos, conventos y escuelas católicas, al mismo
tiempo que se pedía la inscripción de los sacerdotes para que se decretara quiénes
podían oficiar.
14
Para que en el valle de Orizaba la ley se pudiera cumplir, el gobierno se valió del
apoyo de los sindicatos que se encontraban allí, los obreros tenían una considerable
presencia en la sociedad, en la política y en la economía. Fueron un bastión importante
durante los años veinte y treinta, donde los gobiernos, tanto federal como estatal, se
valían de los gremios para tener el control político. Algo que significó una alianza entre
los grupos obreros con la fuerza política del país.
Para una mejor comprensión lectora sobre este trabajo le informo al lector que la
primera parte –por así decirlo– se abordará la ley anticlerical promulgada por el gobierno
federal; aquí se implementará cómo fue que el gobierno, tanto federal como estatal,
lograron hacer cumplir la ley Calles, las sanciones que se daban si era violada y cómo
fue que los orizabeños, feligreses católicos, la percibieron, del mismo modo cómo fue la
influencia de los sacerdotes Rafael Rúa y Rafael Guízar ante las acciones del gobierno y
del cómo fue que evitaron que hubiera enfrentamientos violentos entre los católicos y el
ejército.
Mientras que la segunda parte será desde el ámbito estatal, cuando Adalberto
Tejeda asume de nueva cuenta el gobierno de Veracruz (1928-1932), en este contexto
la guerra cristera había terminado con los arreglos del 29 entre el Estado y la Iglesia en
México, pero algunos políticos rechazaron ese tratado y promulgaron una nueva ley
anticlerical pero ahora bajo la dirección del gobernador, entre ellos Tejeda; en Veracruz
inicia en junio de 1931 y nuevamente se enfrenta el gobierno –ahora estatal– con la
Iglesia, a diferencia de la ley federal que duró solo tres años, la nueva ley estatal duraría
hasta 1937.
La ley de cultos no incluía únicamente la religión católica, sino que las existentes
en el país (protestante, judía, cristiana, etc.), aunque la mayoría de la población en México
era de culto católico, por ello los enfrentamientos fueron inevitables. Por otro lado, durante
la segunda gestión de Tejeda en Veracruz, se pidió que no solo la religión católica debía
de limitarse, sino también las otras religiones que se encontraban presentes. En Orizaba,
la segunda religión con más adeptos, después de la católica, era la protestante
A diferencia de los feligreses católicos, los protestantes mostraron obedecer las
disposiciones en cuanto a la materia de cultos desde 1926; esto provocó inconformidades
15
con los católicos pues estos los acusaban de estar aliados con el gobierno. Sin embargo,
desde que la Ley Calles y posteriormente la Ley Tejeda se decreta, los protestantes
obedecieron y no tuvieron problemas con el gobierno, desde el primer momento se
reglamentaron ante el padrón que pedían, además, cualquier acto que querían hacer los
notificaban a las autoridades correspondientes, esto permitió que las relaciones entre la
Iglesia Presbiteriana en Orizaba y las autoridades de aquella ciudad fueran tolerables
pero también fue clausurada por el gobierno municipal,14 siempre y cuando no se violara
la ley.
Por otro lado, los obreros siguieron siendo una fuerza fundamental en la política
de Veracruz y por ende en Orizaba debido a la concentración de las fábricas que se
encontraban allí y en los alrededores. Si bien los obreros mostraron apoyo a la política,
el cambio de ésta hizo que las divisiones entre los sindicatos se hiciera cada vez más
fuerte, tanto que la CROM va perdiendo poder y más cuando nace la Confederación de
Trabajadores Mexicanos (CTM) en 1936, provocando una lucha intergremial por el control
de las fábricas en el valle de Orizaba.
Aunado a esto, en 1937 la muerte de Leonor Sánchez, hija de un obrero hizo que
los obreros se unieran en contra del gobierno y sus dirigentes sindicalistas, ellos ya no
tolerarían más abusos y buscaron justicia, esto fue el inicio del fin de la ley anticlerical en
Orizaba, posteriormente en Veracruz. Fue la primera vez en que los obreros se
expresaron como católicos y pedían garantías para profesar su culto, además de que
exigían mejores tratos y condiciones de trabajo.
El presente trabajo se realizó en cuatro capítulos. Se utilizaron fuentes
encontrados tanto en el archivo histórico municipal y el archivo parroquial de Orizaba, la
Casa Jurídica de Veracruz, Veracruz, así como fuentes bibliográficas referentes al tema.
El primer capítulo muestra cómo llegó la ley anticlerical a Veracruz, así como la reacción
que tuvieron los orizabeños cuando la ley se tuvo que acatar por órdenes del gobierno
estatal, también se explica cómo los obreros mostraron su apoyo durante ese tiempo y
las muestras de resistencias de los católicos ante esa adversidad. El capítulo dos muestra
14
Archivo Municipal de Orizaba (en adelante AMO). Ramo Gobierno, Iglesias, Informe, C.-726, Exp. 3; Ibíd. Ramo
Gobierno, Iglesia, Correspondencia, C.-726 Exp. 5.
16
el seguimiento de la ley Calles, así como una breve semblanza del conflicto político que
se vivía en Veracruz, ocasionando que Heriberto Jara Corona fuera derrocado y no
lograra terminar su gestión.
También, durante ese tiempo los católicos siguieron mostrando su lucha en contra
de la ley y el gobierno no tuvo más remedio que procesarlos por desobedientes. Además
de que en ese momento se presentaban los arreglos entre el Estado y la Iglesia para dar
fin al problema, por lo que el gobierno de Tejeda tuvo que entregar los templos. El tercer
capítulo explica la ley anticlerical en Veracruz, donde el gobernador Tejeda la ejerce,
además de que su política radical limita al clero, dando inicio a un nuevo enfrentamiento
entre la Iglesia y el Estado.
También se menciona a los presbiterianos que se encontraban en Orizaba, los
católicos no fueron los únicos afectados con la ley de cultos, pero a diferencia de ellos
los protestantes acataron la ley sin muchas dificultades y daban cuentas de todo lo
referente a su templo, miembros y religión. Informaban de los movimientos que realizaban
y esto pudo haber influido para que el gobierno no los persiguiera con énfasis como lo
hicieron con sus semejantes católicos.
El cuarto y último capítulo aborda parte del escenario político en que se encontraba
Veracruz en ese entonces, cómo fue que Miguel Alemán Valdés llega a la gubernatura y
el final de la Ley Tejeda, se exponen los acontecimientos que se dieron en Orizaba para
que se llevara a cabo; del mismo modo de cómo fue que los obreros que alguna vez
apoyaron al gobierno, ahora defendían sus derechos hacia la religión católica,
desconociendo a sus líderes “tiranos”. Esto hizo que el gobierno veracruzano tuvo que
anular la ley y reabrir los templos en todo el estado de Veracruz.
17
Capítulo I. El conflicto religioso en Veracruz (1925-1926)
El general Plutarco Elías Calles llegó a la presidencia del país el primero de diciembre de
1924. Desde entonces ya se le conocía su desagrado y hostilidad hacia la Iglesia. El
presidente decretó la ley anticlerical el 14 de junio de 1926, conocida como “Ley Calles”,
consistió en que las iglesias debían permanecer cerradas, los sacerdotes extranjeros
debían salir del país y sólo podían oficiar mexicanos de nacimiento y que estuvieran
registrados ante un padrón. El gobierno federal pidió a los estados hacer cumplir la ley,
por lo que inmediatamente los templos fueron confiscados y las escuelas religiosas se
clausuraron. En este capítulo se analizará la Ley Calles en el estado de Veracruz,
concretamente en la ciudad de Orizaba, Heriberto Jara Corona era gobernador cuando
estalló el conflicto político-religioso; quien además ejecutó las disposiciones que se daban
desde la ciudad de México en materia de culto.
La política anticlerical se ejerció con rigor en el país, el estado de Veracruz se vio
involucrado dado que la orden venía desde la presidencia de la República, además, la
influencia de Adalberto Tejeda, quien tenía a su cargo la Secretaría de Gobernación, fue
de vital importancia para el cumplimiento de la ley. Se describirá también por qué el
conflicto no fue tan violento como en otros puntos del país y cuáles fueron las medidas
de los clérigos para combatir al gobierno, así como los métodos que el gobierno utilizó
para el acatamiento de los artículos anticlericales (3° y 130).
1.1 Adalberto Tejeda en la presidencia de Plutarco Elías Calles
En el gabinete callista, el veracruzano Adalberto Tejeda tuvo a su cargo la Secretaría de
Comunicaciones y Obras Públicas en el primer año, y de 1925 a 1928 ocupó la Secretaría
de Gobernación, sustituyendo a Gilberto Valenzuela. Fue bajo esta administración y
cargo que estalló la Guerra Cristera o Cristiada (1926-1929),15 que consistió en un
conflicto entre el Estado mexicano y la Iglesia católica. El problema entre estos se venía
presentando desde años atrás, en especial cuando entró en vigor la Constitución de 1917;
15
Para mayor referencia véase a MEYER, Jean. La Cristiada, 3 Tomos, Siglo XXI, México, 1999.
18
sin embargo, fue hasta la presidencia de Calles cuando se agudizó el enfrentamiento
entre los católicos y el gobierno que hizo valer el artículo 130 de la Constitución, el cual
se reformó para el Distrito y Territorios Federales, sancionando con penas y multas a los
eclesiásticos en caso de violar la Constitución. En 1926, el Episcopado Mexicano declaró
su inconformidad por lo que solicitó la derogación del artículo, no sólo del 130, sino
también del 3°, 5°, 24 y 27; el gobierno omitió esta petición y los artículos se pusieron en
práctica, se expulsaron a los sacerdotes extranjeros y se confiscaron los templos. Como
medida, el Episcopado Mexicano cerró los templos y suspendió los cultos, con el
propósito principal de incitar a los católicos para que protestaran contra el gobierno.16
Al cerrarse los templos y esconderse los sacerdotes, la Liga Nacional Defensora
de la Libertad Religiosa (LNDLR) –organización civil fundada el 09 de marzo de 1925–
convocó a un levantamiento nacional,17 para que los católicos lucharan por la abolición
de la ley anticlerical. El gobierno había ordenado desde el 10 de febrero de 1926 que se
ejerciera el artículo 130 y el 3°, ocasionando que para el 15 de marzo fueron expulsados
202 sacerdotes, 118 colegios se clausuraron y se cerraron 83 conventos.
18
Acto seguido, el clero ordenó la suspensión de los cultos mediante una carta
pastoral el 25 de julio. Ante esto el secretario de Gobernación, Adalberto Tejeda,
respondió diciendo que era una nueva maniobra del clero para desvirtuar la vigencia de
la Ley Suprema de la República, además, exhortó a los gobernadores para que pidieran
a los presidentes municipales formar juntas de vecinos. Las juntas se encargarían de los
templos una vez que el clero católico los dejara o fueran abandonados, cada junta estaría
integrada por diez vecinos de carácter reconocido ante la población y no podrían ser
nombrados por el clero. Otra de sus funciones era evitar que los sacerdotes volvieran a
hacer uso de los templos, a menos que se registraran ante las autoridades
correspondientes.19
16
GARCÍA Morales, Soledad. “Arreglos de 1929. Solución al conflicto clerical de 1926” en El Conflicto Clerical de
Veracruz de 1931, Tesis de Maestría en Historia, Universidad Veracruzana, Jalapa, 1974 pp. 3-4.
17
BUTLER, Matthew. Devoción y disidencia. Religión popular, identidad política y rebelión cristera en Michoacán,
1927-1929, El Colegio de Michoacán, México, 2013, pp. 12-13.
18
CHURRUCA Peláez, Agustín. Historia de la Iglesia en México, Obra Nacional de la Buena Prensa, México, 2002, p.
190.
19
BUTLER. Op. Cit., “A las catacumbas. Crisis y persecución, 1926-1929”, 2013, pp. 221-222.
19
Tejeda mostró su apoyo al presidente Calles, el anticlericalismo del secretario de
Gobernación fue base para la lucha contra el clero porque les pedía a los funcionarios y
a la población acatar la ley. El levantamiento cristero se desencadenó entre la Iglesia y
el poder civil en México, la crisis religiosa que se vivió en los años veinte fue desgastante
y destructiva porque se desarrolló en el contexto político, además de que se incluyeron
reformas agrarias y educativas. De esta manera, el conflicto entre la jerarquía católica y
la élite política revolucionara obligó a muchos mexicanos a sostener sus lealtades
espirituales y seleccionar la línea política a seguir.20 Jean Meyer, atribuye la geografía
política de la rebelión cristera a una diversidad regional de mentalidades, ya que la guerra
se libró y adquirió fuerza en la zona centro-occidental de México, donde la expresión
religiosa era sinónimo de la cultura popular. Por ello se debe tener en cuenta las
especificidades católicas junto con las creencias y prácticas ante una postura política, en
este caso el anticlericalismo revolucionario.21
Plutarco Elías Calles continuó con la estrategia de fortalecer el Estado mexicano
postrevolucionario. Algunos buscaban participar en la vida política de la nación; los
jerarcas del ejército trataron de mantener el control político y económico que ejercían en
algunas partes del país. Por otro lado, la Confederación Regional Obrera Mexicana
(CROM), buscó rebasar su dominio sindical y ambicionó llegar al poder político pero
dejando al margen a los líderes agraristas. Además, la crisis entre el poder estatal y la
Iglesia hacía inevitable un enfrentamiento entre ellos, ocasionando una guerra que
sacudiría al país. La política antirreligiosa y el radicalismo jacobino de los gobernantes,
produjeron una fuerte reacción del pueblo al cuestionarle una de sus más sólidas
creencias, asimismo atacaron tanto a la Iglesia como institución como al culto religioso
popular.22
Tejeda, ahora como secretario de Gobernación ordenó a los gobiernos estatales
la aplicación de los artículos constitucionales referentes al anticlericalismo, porque
culpaban al clero de propagar una “religión perniciosa” que amenazaba la unidad
20
BUTLER. 2013, p. 13.
Ibíd., p. 17; “Católicos, marianistas y protestantes. La vida parroquial, 1920-1925”, p. 153.
22
DOMÍNGUEZ Pérez, Olivia. “La presencia de Tejeda en México”, en Política y movimientos sociales en el tejedismo,
Centro de Investigaciones Históricas, Universidad Veracruzana, México, 1986, p.67.
21
20
nacional; además de embrutecer al indígena. También consideraba a la religión como un
asunto “inmoral”; por otro lado, Calles declaraba en sus entrevistas con los prelados: “no
les queda más remedio que las cámaras o las armas”.23
El año de 1926 fue el inicio de la resistencia de los católicos, ya que tomaron las
armas y se enfrentaron contra el ejército federal, pero esto no se vio en todo el país. Sin
embargo, en Veracruz no hubo luchas ni se tomaron las armas, su resistencia consistió
en oficiar misas en los domicilios, así como sacar de los templos las reliquias y objetos
sagrados para esconderlos, incluso también se escondieron a los sacerdotes, estas
prácticas las siguieron hasta la década de los treinta cuando Adalberto Tejeda regresó al
gobierno de Veracruz.
Hubo manifestaciones por parte de los católicos pidiendo al gobierno la derogación
de la ley. En septiembre de 1926 se rechazó la petición de dos millones de católicos que
pedían la revocación de la legislación anticlerical.24 El presidente se mantuvo firme en la
aplicación de la ley y mediante la CROM pudo seguir su lucha en contra del clero, Calles
junto con Morones, intentaron formar una Iglesia cismática llamada “Iglesia Católica
Apostólica Mexicana”, nombrando a José Joaquín Pérez Budar como Patriarca, este
intento no tuvo éxito y se desintegró. Las manifestaciones se presentaron con más fuerza
cuando los templos se cerraron, lo mismo sucedió con las escuelas y orfanatos de índole
religioso. Quienes apoyaban la decisión del gobierno eran las sociedades protestantes,
por lo que los católicos sospechaban de que aquellos fomentaban el anticlericalismo del
presidente Calles, además de que era notorio su acercamiento a esas personas, pues su
hijo se casó con la hija de un ministro protestante.25
Plutarco Elías Calles destacó en la administración pública con grandes avances
en la infraestructura carretera y la cuestión agraria, en cambio, lo religioso fue un punto
crucial en su gestión. No se sabe con precisión qué provocó la crisis Iglesia-Estado. El
gobierno arguyó que el detonante fue cuando el 4 de febrero de 1926 el periódico El
Universal hizo pública una carta del arzobispo Mora y del Río, en la cual condenaba varios
23
Ibíd. Pp. 68-69.
BUTLER. Op. Cit., 2013, p. 225.
25
DOOLEY, Francis Patrick. “Calles ¿Un Nerón moderno?” en Los cristeros, Calles y el catolicismo mexicano,
SepSetentas, México, 1976, pp. 59, 61.
24
21
artículos constitucionales, pero la noticia sorprendió al mismo arzobispo y negó haber
escrito dicha carta y tener alguna conexión con el periódico.26
La guerra entre la Iglesia y el Estado se prolongó por tres años (1926-1929), los
enfrentamientos fueron violentos y sangrientos, por un lado el clero pedía respeto a sus
derechos, a abrir los templos y que los sacerdotes regresaran a oficiar misa, mientras
que el gobierno solicitaba que los artículos fueran acatados por la ciudadanía y los
políticos. Desde 1928 hubo varios intentos de llegar a un acuerdo, donde la participación
del embajador norteamericano Dwight Morrow en México fue de vital importancia para
que sucedieran los anhelados arreglos. Morrow influyó en Calles para que se entrevistara
con el padre John J. Burke el 4 de abril de 1928, la incertidumbre se apoderó de los
católicos porque no sabían cuáles eran los términos para los arreglos, pero este intento
fracasó; la situación se complica cuando el arzobispo José Mora y del Río muere el 22
de abril.27
En ese mismo año (1928), Tejeda deja su cargo como secretario de Gobernación
para buscar la presidencia del país, sin embargo su intento se vio frustrado por la
reelección del general Álvaro Obregón, por lo que optó reelegirse como gobernador de
Veracruz.28 Para ello contó con el apoyo del presidente Plutarco Elías Calles. Otro factor
que le valió el triunfo a Tejeda fue su experiencia en su primer mandato como gobernador
(1920-1924), además de la simpatía de la que gozaba por parte de los grupos populares
como lo fueron los agraristas y obreros.
La política en México dio un nuevo giro cuando, el 1 de julio de 1928, se llevaron
a cabo elecciones presidenciales, Álvaro Obregón buscó reelegirse y ganó la contienda.
Sin embargo éste fue asesinado dos semanas después. Se culpó de ello a Calles y a
Morones de haber sido los autores intelectuales, porque no querían que volviera a la
presidencia, sino que lo fuera Morones. Pero después se aseguró que había sido José
de León Toral, bajo la influencia de la madre Conchita, quien decía que la paz llegaría si
Obregón y Calles morían. El asesinato de Obregón sacudió al país. Calles culpó al clero
26
Ibíd. pp. 52-53.
DOOLEY. Op. Cit., “Convenio sin victoria”, 1976, pp. 154-155.
28
DOMÍNGUEZ. Op. Cit., 1986, pp. 69-70.
27
22
por el crimen; aunque el inspector de policía, obregonista, Antonio Ríos Zertuche
responsabilizaba a Morones, pero por las intervenciones del presidente de que fueron los
religiosos la investigación debía seguir ese camino. Había una fuerte presión hacia
Morones y a Calles por la muerte del general Obregón.29
Debido a las fuertes presiones y acusaciones que se les presentaron, Calles
aceptó las renuncias de Morones como secretario de Industria, Comercio y Trabajo y de
sus partidarios el 21 de julio. Además, el presidente tuvo que salir en su defensa al afirmar
que Morones no había tenido participación en el asesinato de Obregón. A pesar de esto,
Morrow siguió con los planes para la reconciliación Estado-Iglesia, aunque Calles culpaba
al clero y viceversa. Aarón Sáenz, quien fue el asesor de campaña de Obregón, le sugirió
al embajador de que si la Iglesia repudiaba el crimen podría ser el primer paso para las
negociaciones; de la misma forma el obispo de San Luis Potosí, Miguel de la Mora, ya
había declarado que Toral era un “fanático”.30
Para sorpresa de muchos, Calles anunció ante el Congreso que no se reelegiría,
tampoco ocuparía la presidencia interina, la decisión de nombrar a un presidente interino
fue del Congreso, esto también para calmar los ánimos de los obregonistas, el elegido
fue Emilio Portes Gil, quien tomó posesión el 1 de diciembre de 1928. Sin embargo,
Plutarco Elías Calles tenía intenciones de seguir gobernando bajo las sombras mediante
el Partido Nacional Revolucionario (PNR). Las tensiones volvieron cuando el 9 de febrero
de 1929 José de León Toral fue fusilado, el gobierno hizo énfasis en la ejecución y los
católicos visitaron el domicilio del finado para velarlo.31
El embajador Morrow no desistía de llegar a un acuerdo y el Vaticano también
buscaba lo mismo porque se dio cuenta de que la guerra originada en 1926 no llevaba a
nada. De esta manera, el 12 de junio de 1929 el presidente Portes Gil se reunió con los
obispos Pascual Díaz Barreto y Leopoldo Ruíz y Flores para llegar a unos acuerdos para
finalizar el conflicto. Posteriormente se entrevistó con el enviado papal, el arzobispo
Leopoldo Ruíz y Flores el 14 de junio de 1929. El arzobispo Ruíz también se reunió con
29
DOOLEY. Op. Cit., 1976, pp. 157-162.
DOOLEY. 1976, pp. 163-165.
31
DOOLEY. 1976, pp. 166-167, 172.
30
23
el padre norteamericano Edmund Walsh y el embajador chileno Miguel Cruchaga
Tocornal, quienes le dijeron que el presidente estaba dispuesto a llegar a un arreglo; el
20 de junio un telegrama del Vaticano le informa a Ruíz que podía firmar un acuerdo ya
que el Papa Pío XI lo había nombrado delegado apostólico. El telegrama decía:
1.
2.
3.
4.
Santo Padre ansioso por pacificar y laica solución.
Completa amnistía para obispos, sacerdotes y fieles.
Devolución de casas episcopales, curatos y seminarios.
Relaciones libres entre el Vaticano y la Iglesia mexicana. 32
Al día siguiente de que llegó el telegrama, Ruíz y Díaz se dirigieron al castillo de
Chapultepec y fueron recibidos por Emilio Portes Gil; los clérigos le mostraron el
telegrama que envió el Vaticano por lo que el presidente ordenó que las peticiones fueran
cumplidas, parecía que los acuerdos pondrían fin a la guerra e iban por buen camino; los
arreglos fueron preparados por el embajador Dwight Morrow, ante las peticiones el
delegado apostólico Ruíz y Flores, el obispo de Tabasco Díaz Barreto y el presidente
Portes Gil firmaron, poniendo como fin la “Guerra Cristera”. A continuación se muestran
cuáles eran los acuerdos:
1. Que el artículo de la ley que determina el registro de ministros, no significa que el Gobierno pueda
registrar a aquellos que no hayan sido nombrados por el superior jerárquico (sic) del credo religioso
respectivo, o conforme a las reglas del propio credo.
2. En lo que respecta a la enseñanza religiosa la Constitución y leyes vigentes prohíben de manera
terminante que se imparta en las escuelas primarias y superiores oficiales o particulares, pero esto
no impide en el recinto de la Iglesia, los ministros de cualesquiera religión impartan sus doctrinas a
las personas mayores o a los hijos de éstas que se acudan para tal efecto.
3. Que tanto la Constitución como las leyes del país garantizan a todo habitante de la República el
derecho de petición, y en esa virtud, los miembros de cualesquiera Iglesia pueden dirigirse a las
autoridades que corresponde para la reforma, derogación o expedición de cualesquier ley.
Palacio Nacional, junio de 1929
El Presidente de la República
(Firma)
E. Portes Gil.33
Además, el arzobispo Ruíz expidió una hoja donde declaraba que el clero reanudaría los
cultos, siguiendo y respetando las leyes constitucionales vigentes, porque no se
modificarían, algo que los católicos buscaban desde que la Constitución de 1917 se puso
en vigor.34 Ruíz aceptó los términos y así se volvieron a abrir los templos; del mismo
32
CHURRUCA. Op. Cit., 2002, p. 195; DOOLEY. Op. Cit., 1976, p. 185.
CHURRUCA. 2002, p. 196; DOOLEY. 1976, p. 186.
34
CHURRUCA. 2002, p. 197.
33
24
modo, Portes Gil indicó que el arzobispo de Durango José María Gonzáles y Valencia y
el obispo de Huejutla José de Jesús Manríquez y Zárate permanecieran en el exilio, al
mismo tiempo de que el arzobispo de Guadalajara, Francisco Orozco y Jiménez, fuera
exiliado del país, estas fueron otras condiciones que consideró el gobierno para calmar
la rebelión.35
Al concretarse los acuerdos con todas la peticiones se pensaba que de nuevo
habría paz en el país, a este proceso se le conoció como “modus vivendi”, ya que tanto
el Estado como la Iglesia llegaron a un arreglo para que pudieran convivir sin meterse en
asuntos que no les concernían.36 Sin embargo, esos acuerdos solo pusieron fin a la
guerra, porque algunos cristeros desconocieron los arreglos, haciendo que la disputa
fuera disminuyendo gradualmente, por lo que a los obispos Pascual Díaz y Leopoldo Ruíz
les esperaba una ardua tarea para convencer a los católicos.37 El rechazo a los acuerdos
por algunos jacobinos y católicos provocaron la continuación de los enfrentamientos; por
su parte, el Vaticano y el Episcopado Mexicano retiraron su apoyo a los cristeros. De la
misma forma algunos radicales desconocieron el acuerdo, poniendo en práctica el
anticlericalismo en algunos estados de la República, como lo fue en Veracruz con el
segundo mandato de Adalberto Tejeda (1928-1932) al igual que en Tabasco, Jalisco,
Oaxaca, entre otros.
1.2 La Ley Calles en Orizaba, Veracruz
Además de Veracruz, en otros estados la práctica de la ley Calles no fue estricta a pesar
de que habían católicos; las relaciones entre los estados con la ciudad de México eran
importantes, del mismo modo la influencia entre políticos del gobierno federal, del
gobierno estatal y los sacerdotes, así como las alianzas de los militares, como fue el caso
de Tejeda y Jara, ambos eran generales y veracruzanos que compartieron algunos
ideales revolucionarios.
35
DOOLEY. 1976, p. 186.
BLANCARTE, Roberto. Historia de la Iglesia católica en México, 1929-1982, El Colegio Mexiquense, Fondo de Cultura
Económica, México, 1992, p. 21; Ibíd. “Entre la guerra de los cristeros y el ‘modus vivendi’ (1929-1938)”, p. 29;
37
Ibíd. p. 29; DOOLEY. 1976, p. 195.
36
25
En San Luis Potosí, siendo gobernador Abel Cano Villa, estaban los generales
Saturnino Cedillo y Genovevo Rivas; en Oaxaca estaba la presencia del general
Heliodoro Charis, que además fue diputado por el 17 Distrito electoral de aquél estado;
mientras que en algunos estados del norte como Chihuahua y Sonora tenían la influencia
del país vecino del norte y del protestantismo, además los diputados a pesar de ejercer
el catolicismo negociaban con los prelados para llegar a un acuerdo.38
Los gobernadores del país empezaron a cerrar los templos, Jara Corona fue quien
hizo valer las disposiciones federales en materia de culto en territorio veracruzano; para
contrarrestar estos actos el 2 de diciembre de 1925 S. S. Pío XI nombra al obispo George
J. Caruana de Puerto Rico como Delegado Apostólico de México para interceder en el
conflicto, el obispo Caruana promovió una resistencia contra el gobierno, bajo esta
acusación fue expulsado del país en mayo de 1926. En enero de ese año la arquidiócesis
de México mostró su descontento y el gobierno reaccionó con el cierre de los templos y
escuelas religiosas; en el mes de febrero, el primer mandatario mandó telegramas a los
gobernadores pidiendo el cumplimiento del artículo 130; exigía el registro de los
sacerdotes como responsables de las iglesias en donde oficiaban, si no cumplían tenían
que pagar una multa de 500 pesos o una sentencia de 15 días en la cárcel.39
Con el ejercicio que llevó a cabo el gobierno federal, los gobiernos estatal y
municipal tuvieron que cumplir los artículos en materia de cultos. El Ayuntamiento de
Orizaba expidió una circular en donde invitaba a los sacerdotes de la ciudad a reunirse
con el presidente municipal en la sala de cabildos, para tratar asuntos respecto al tema
político-eclesiástico. Los templos que confirmaron su asistencia fueron los siguientes:
San Antonio, Santa María, La Concordia, El Carmen, Los Dolores, San Miguel, El
Calvario, San José y San Juan de Dios.40
38
MEYER, Jean. “El conflicto religioso en Chihuahua. 1925-1929”, en De una revolución a otra, El Colegio de México,
México, 2013, p. 344; “Resistencias católicas en el México revolucionario a la hora del conflicto religioso”, Ibíd., p.
365.
39
Archivo Parroquial de Orizaba (en adelante APO). Sin Clasificación (S/C). Anuncio del Presidente Municipal Rodrigo
Maldonado al público, Orizaba, 3 de septiembre de 1926; WILLIMAN, John B. “Reconstrucción eclesiástica en
Veracruz, 1919-1926” en La Iglesia y el Estado en Veracruz, 1840-1940, SepSetentas, México, 1976, pp. 59-61.
40
AMO Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C. 551, Exp. 182. Circular, del Presidente Municipal
a los señores prelados de las iglesias de esta ciudad, Orizaba, 18 de febrero de 1926. El templo de Santa Gertrudis no
confirmó su asistencia a la reunión.
26
Se confiscaron los bienes del clero en Orizaba, fueron expulsados los sacerdotes
extranjeros, como fue el caso del cura Ignacio Orbarraños a quien se le consideró como
nocivo y creían que era español.41 Sin embargo, el gobierno del estado tenía que
comprobar primero que fuera extranjero, de ser así, el presidente municipal de Orizaba
podría ordenar su traslado a Veracruz para su expulsión del país. En este caso se logró
comprobar que el cura Ignacio Orbarraños era mexicano, originario de la ciudad de
México.42
El inspector de policía del municipio de Orizaba fue decisivo para aplicar la ley
Calles. El gobierno le pidió que supervisara si se estaban cumpliendo los artículos
constitucionales; en caso de que no fuera así, podría intervenir arrestando a quienes
infringieran la norma, como fue el caso de la iglesia El Calvario. Al gobernador Jara
Corona le informaron que allí se ocultaban unos curas españoles, por lo que se tuvo que
inspeccionar el templo, para cuando llegó la policía ya habían huido.43 El presidente de
Orizaba, Rodrigo Maldonado, le comunicó al gobernador Jara que los curas se habían
fugado, pero le aseguraba que haría cumplir el artículo 130 constitucional en la ciudad y
arrestar a quienes que desobedecieran.44
El gobernador Jara tuvo que seguir las órdenes del presidente Calles y de Tejeda
para promover los artículos anticlericales. De este modo, a través de la H. Legislatura del
estado de Veracruz se expide la ley reglamentaria en la que se determinaban el número
de sacerdotes para el Estado por medio del decreto número 247 con fecha del 25 de
febrero de 1926:
Art. 1°. El número de sacerdotes quedará de la siguiente forma de acuerdo a la población:
500 a 10,000 habs., un sacerdote.
41
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182. Del Presidente Municipal al C.
Gobernador de Veracruz, Orizaba, 8 de febrero de 1926.
42
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Secretario General de
Gobierno al C. Presidente Municipal, Jalapa-Enríquez, 23 de febrero de 1926; Ibíd., de V. Vargas Galeana al Presidente
Municipal, Orizaba, 02 de marzo de 1926.
43
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, de Heriberto Jara
Corona al Presidente Municipal, Jalapa, 15 de febrero de 1926; Ibíd., del Inspector de Policía al Presidente Municipal,
Orizaba, 16 de febrero de 1926.
44
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 16 de febrero de 1926; Ibíd., de Heriberto Jara al Presidente
Municipal, Jalapa, 16 de febrero de 1926; Ibíd., del Secretario de Gobierno al C. Presidente Municipal, JalapaEnríquez, 19 de febrero de 1926.
27
10,000 a 30,000 habs., dos.
30,000 a 60,000 habs., cuatro.
Más de 60,000 será de seis sacerdotes como mínimo por cada culto.
Art. 2°. En el estado de Veracruz sólo se permitirá un Jefe Superior Jerárquico por cada culto, siendo la
capital del estado su residencia oficial.
Art. 3°. La autoridad municipal, bajo una multa de hasta $1,000.00 cuidará del cumplimiento de esta
disposición.45
Si la población del estado de Veracruz la conformaban 1.159,935 habitantes, de los
cuales vivían en las principales ciudades: Córdoba 26,892 habitantes; Orizaba 39,563
habitantes; Veracruz 58,225 habitantes y Xalapa 29,233 habitantes, 46 con base a dichos
datos, el número aproximado de sacerdotes para esas ciudades para atender el culto
católico serían: Córdoba y Xalapa dos, mientras que Orizaba y Veracruz cuatro.
La Ley Calles tomó el nombre del gobernador y fue conocida como “Ley Jara”,
hasta cierto punto fue flexible, no hubo batallas violentas pero sí protestas, en parte
debido a la influencia del obispo Rafael Guízar y Valencia que pedía a sus fieles no
involucrarse en los asuntos del Estado. La ley Jara permitía un mayor número de
sacerdotes, ya que para esa época Veracruz contaba con 186 municipios; a pesar de que
Guízar rechazó y solicitó la suspensión de la ley, Heriberto Jara informó que se
encargaría del cumplimiento de las designaciones federales y estatales.47
Al día siguiente que se estableció la ley reglamentaria, el gobierno del estado
mandó una circular al H. Ayuntamiento de Orizaba explicando cuáles eran las
condiciones que imponía el artículo 130 constitucional para su debido cumplimiento, el
comunicado dice:
Párrafo 1°. Corresponde a los Poderes Federales ejercer en materia de culto religioso y disciplina
externa, la intervención que designen las leyes. Las demás autoridades obrarán como
auxiliares de la Federación.
Párrafo 6°. Los ministros de los cultos serán considerados como personas que ejercen una profesión y
estarán directamente sujetos a las leyes que sobre la materia se dicten.
Párrafo 8°. Para ejercer en México el ministerio de cualquier culto se necesita ser mexicano por
nacimiento.
Párrafo 9°. Los ministros de los cultos nunca podrán en reunión pública o privada constituida en junta,
ni en actos de culto o de propaganda religiosa, hacer crítica a las leyes fundamentales del
país, de las autoridades en particular o en general del gobierno; no tendrán voto activo ni
pasivo, ni derecho para asociarse con fines políticos.
45
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C-551, Exp. 182, Ley Reglamentaria, el gobernador
Heriberto Jara, Jalapa-Enríquez, 1 de marzo de 1926.
46
http://www.inegi.org.mx/est/contenidos/proyectos/ccpv/default.aspx. Censo de Población y Vivienda 1921,
(consultado el 22 de febrero de 2015).
47
WILLIMAN. “Reconstrucción eclesiástica…“, Op. Cit., 1976, p. 63.
28
Párrafo 10°. Para dedicar al culto nuevos locales abiertos al público, se necesita permiso de la
Secretaría de Gobernación, oyendo previamente al Gobierno del Estado, debe hacer en todo
templo un encargado de él, responsable ante la autoridad del cumplimiento de las leyes
sobre disciplina religiosa en dicho templo y de los objetos pertenecientes al culto.
Párrafo 11°. El encargado de cada templo, en unión de diez vecinos más, avisará desde luego, a la
autoridad municipal, quien es la persona que está a cargo del referido templo. Todo cambio
se avisará por el ministro que cese acompañado del entrante y diez vecinos más. La
autoridad municipal bajo pena de destitución y multa de hasta mil pesos por cada caso,
cuidará de cada caso, cuidará del cumplimiento de esta disposición; bajo la misma pena
llevará un libro de registro de los templos y otro de los encargados. Da todo permiso para
abrir al público un nuevo templo, o del relativo al cambio de un encargado, la autoridad
municipal dará noticia a la Secretaría de Gobernación por conducto del Gobernador del
Estado. En el interior de los templos, podrán recaudarse donativos en objetos muebles.
Párrafo 12°. Por ningún motivo se revalidará, otorgará dispensa o se determinará cualquier otro trámite
que tenga por fin dar valides en los curos oficiales, a estudios hechos en los establecimientos
destinados a la enseñanza profesional de los ministerios de los cultos. La autoridad que
infrinja esta disposición, será penalmente responsable, y la dispensa o trámite referidos, será
nulo y traerá consigo la nulidad del título profesional para cuya obtención haya sido parte la
infracción de este precepto.
Párrafo 13°. Las publicaciones periódicas de carácter confesional ya sea por su programa, por su título
o simplemente por sus tendencias ordinarias, no podrán comentar asuntos políticos ni
informar sobre actos de las autoridades del país, o de particulares, que se relacionen
directamente con el funcionamiento de las instituciones públicas.
Párrafo 14°. Que estrictamente prohibida la formación de toda clase de agrupaciones políticas, cuyo
título tengan alguna palabra o indicación cualquiera que la relacione con alguna confesión
religiosa. No podrán celebrarse en los templos reuniones de carácter político.
Párrafo 15°. No podrán heredar por sí ni por interpósita persona ni recibir por ningún título un ministro
de cualquier culto, un “inmueble” ocupado por cualquiera asociación de propaganda religiosa
o de beneficencia. Los ministros de los cultos tienen incapacidad para ser herederos, por
testamento, de los ministros del mismo culto o de un particular con quien no tengan
parentesco, dentro del cuarto grado.
Párrafo 17°. Los procesos por infracción a las anteriores bases nunca serán vistas en jurado.
Y lo transcribo a usted a efecto de que se sirva vigilar el exacto cumplimiento de las disposiciones
contenidas en dicho artículo, recomendándole muy especialmente cuidar las partes que en esta Circular
se encuentran subrayadas.
Recomiendo a usted se sirva a indicar el número de habitantes de ese Municipio, así como lo
sacerdotes que están oficiando en ese lugar, debiendo indicar expresamente el culto religioso de cada
uno de ellos. 48
Una vez que la ley reglamentaria de sacerdotes se aprobó, fue enviada a los municipios
veracruzanos para que estuvieran enterados de cuántos curas debían permanecer en su
población. En Orizaba, dado que la población en esa ciudad oscilaba entre los 30,000 y
60,000 habitantes, quedaron autorizados cuatro sacerdotes, uno sería el Jefe Superior,
en este caso el párroco Eduardo L. Munguía, que a su cargo tendría a los otros tres
48
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Circular No. 3957, del
gobernador del Estado al C. Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 2 de marzo de 1926.
29
sacerdotes para atender a la población católica orizabeña. El secretario de Gobierno de
Veracruz, Manuel Maples Arce, fue el encargado de mandar las publicaciones de la ley. 49
Los católicos no aceptaron las disposiciones de la ley Calles, por lo que siguieron
protestando para abolir el artículo 130 constitucional, pero mientras en el Bajío estallaba
la guerra cristera, en Veracruz las cosas fueron diferentes; en la ciudad de Orizaba, a
partir de septiembre los católicos usaban una insignia como medio de protesta y de
reconocerse entre ellos, esta distintivo era de color verde y se la ponían en la solapa del
saco. En un principio se creyó que simplemente era un accesorio de la ropa, pero
después el agente del ministerio público hizo la observación que varias personas lo
usaban y tenía en común la religión católica, por lo que pidió fueran investigadas.50 El
Ayuntamiento de Orizaba interpretó el hecho como una violación al artículo 18, por lo que
pidió al inspector de policía que proceda legalmente contra aquellos que portaran el
“distintivo verde”.51
Sin embargo, los católicos no fueron los únicos a quienes se les hizo cumplir la
ley, también a los protestantes, como fue el caso del templo “La Santísima Trinidad”
perteneciente a la Iglesia Presbiteriana. El pastor Apolonio C. Vázquez, encargado de
este recinto, rindió por escrito el cumplimiento del artículo 130, algo que sus semejantes
católicos hicieron cuando las autoridades se los pidieron; en dicho documento plasmó los
bienes con que contaba la Iglesia protestante, así como un inventario de lo que contiene
el templo en su interior, además, se nombró al pastor Vázquez encargado del templo. 52
Del mismo modo, en el mes de julio otro templo evangélico localizado a dos cuadras del
anterior haría su registro ante las autoridades para el cumplimiento de la ley. Se dijo que
desde 1892 realizaban los servicios en la misma dirección (Sur 10 No. 63) el encargado
49
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Presidente Municipal al señor
Presbítero Eduardo L. Munguía, Orizaba, 9 de marzo de 1926; Ibíd., Circular No. 4998, el Secretario de Gobierno al C.
Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 17 de marzo de 1926.
50
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 2 de septiembre de 1926.
51
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Presidente Municipal al C.
Inspector General de Policía, Orizaba, 2 de septiembre de 1926; Ibíd., del Presidente Municipal al C. Inspector de
Policía, Orizaba, 3 de septiembre de 1926.
52
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Presbítero Apolonio C.
Vázquez al C. Presidente Municipal, Orizaba, 6 de marzo de 1926.
30
en ese momento fue Justo Alamillo, que a su vez era el responsable de las reuniones que
se hacían en una casa de la fábrica de yute “Santa Gertrudis”.53
Por otro lado, se presentó un caso en Orizaba con el sacerdote Rafael Giliberti,
quien al parecer se encontraba practicando culto y fue sorprendido en el acto, por lo que
se tuvo que arrestar, además era extranjero y fue puesto a la disposición de las
autoridades correspondientes para investigar su caso, para así dictaminar si se
encontraba oficiando misa.54
El secretario de Gobernación, Adalberto Tejeda, supervisaba que los estados y
municipios cumplieran la ley, una vez que se enteró del caso del cura Giliberti, solicitó
informe al presidente de Orizaba si fue trasladado al puerto de Veracruz para su exilio, si
realmente practicaba el culto, en caso de que no, desde cuándo dejó de hacerlo, se le
informó a Tejeda que el sacerdote no ejerce su profesión desde el diez de marzo, días
después de que se decretara el número de sacerdotes dependiendo de la población en
el estado de Veracruz.55 Para que no hubiera enfrentamientos, todo se hacía conforme
la ley, de la manera más pacífica para no alterar el orden público, los sacerdotes que eran
aprehendidos podían tener un juicio para demostrar su inocencia, la autoridad municipal
a través del gobierno del estado, tenía que demostrar a gobernación cuáles eran las
actividades que hacían los clérigos cuando dejaron de ejercer su culto.56
1.2.1 Aplicación del artículo 3° Constitucional
Otro artículo que restaba autoridad al clero y a su organización fue el 3°, el cual estipulaba
que la educación debería de ser supervisada por el Estado y debería de ser laica, sin
ninguna influencia religiosa, José Manuel Puig Casauranc estuvo a cargo de la Secretaría
53
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, de Justo Alamillo al Sr. Presidente
del H. Ayuntamiento de Orizaba, Orizaba, 26 de julio de 1926.
54
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Presidente Municipal a quien
corresponda, Orizaba, 19 de mayo de 1926.
55
Ibíd., Telegrama, del Secretario A. Tejeda al Presidente Municipal, México, D.F., 21 de mayo de 1926; Ibíd.,
Telegrama, del Presidente Municipal al C. Secretario del Estado y del Despacho de Gobernación, Orizaba, 21 de mayo
de 1926.
56
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del asistente del secretario el
Oficial Mayor al C. Presidente Municipal de Orizaba, México, D.F., 27 de mayo de 1926; Ibíd., del secretario de
gobierno al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 8 de junio de 1926; Ibíd., del Presidente Municipal
al C. Secretario de Gobernación, Orizaba, 16 de junio de 1926.
31
de Educación Pública en el gabinete callista. A través de la educación se buscó instruir a
la población, se volvió un instrumento para unificar al país, enseñándole a trabajar e
inculcarles un nacionalismo, a modo de que se desplazara a la religión como fuente de
la verdad y formación de la sociedad; Puig Casauranc, como secretario de Educación
Pública, pidió el cumplimiento del mencionado artículo, similar como lo hizo su compañero
Tejeda en la Secretaría de Gobernación.
En la década de los veinte, se le tenía más confianza a la escuela para lograr una
reconstrucción nacional. Después de 1921, la Secretaría de Educación Pública a cargo
de José Vasconcelos, y siendo presidente Álvaro Obregón, se promovía con mayor
firmeza; buscaba la liberación del pueblo para transformarse en una ciudadanía nacional,
patriótica y próspera, dejando a un lado la superstición y la ideología religiosa. Los
programas educativos que se planteaban eran la enseñanza del castellano, la historia, la
geografía, el arte y disciplinas humanísticas, a fin de que transformaran al pueblo
analfabeto en culto.57
Para 1925, durante la administración callista, se introdujo el calendario escolar
cívico el cual fomentó una ética patriótica basada en los héroes nacionales, empezando
los ataques hacia la educación religiosa, que imperaba en ese entonces. Posteriormente,
en febrero de 1926, se obligaron a todas las escuelas religiosas presentar sus currículos
ante la SEP para evaluarlos y hacerles una revisión oficial, además, se prohibieron la
colocación de crucifijos en las aulas y la educación primaria religiosa Ante estas medidas,
la Iglesia se opuso a la educación pública emanada de la revolución porque la percibía
como una amenaza al catolicismo, según los eclesiásticos, imitaba la enseñanza de la
fe, ponía al maestro en el mismo nivel que a un sacerdote restándole poder en los asuntos
espirituales e intelectuales, asimismo argumentaron que la laicidad de la educación
pública violaba el derecho natural que tenían los padres de familia de educar a sus hijos. 58
Puig Casauranc, solicitó informes sobre el convento que era parte del templo del
Carmen de Orizaba para que sea utilizado como escuela pública, el secretario de
Educación quería saber el estado que presentaba el inmueble y quién estaba a cargo. La
57
58
BUTLER. Op. Cit., “Al encuentro de los misioneros. La educación rural, 1920-1929”, 2013, pp. 113,117.
BUTLER. 2013, pp. 118-119.
32
autoridad municipal de Orizaba pidió que fuera el Inspector de Policía quien recabara la
información que se pedía.59 El gobierno federal pidió que en los templos se dedicaran
únicamente a profesar la religión por aquellos sacerdotes que se registraban en el padrón
estatal, que no se instruyera la educación en recintos religiosos.
Para evitar que los católicos desobedecieran el artículo 3°, el presidente de la
república ordenó la clausura de las Instituciones Monásticas y de los planteles educativos
particulares en el país, el gobernador Jara secundó la petición de la presidencia y mandó
el aviso a todo el estado de Veracruz. En Orizaba se expresó que los vecinos que
habitaban junto a un templo y si éste impartía la educación serían consignados ante las
autoridades por no hacer la denuncia correspondiente, su delito era el de “encubridores”
y podrían pasar de diez a treinta días de prisión, y pagar una multa de 50 a 300 pesos.60
La circular emitida por el gobierno de Heriberto Jara decía lo siguiente:
La enseñanza es libre; pero será laica la que se de en los establecimientos oficiales de la educación, lo
mismo que la enseñanza primaria elemental y superior que se imparta en los establecimientos
particulares.
Ninguna corporación religiosa ni ministro de algún culto podrán establecer o dirigir escuelas de
Instrucción primaria.
Las escuelas primarias particulares sólo podrán establecerse sujetándose a la vigilancia oficial.
Este gobierno espera que cumpliendo con estas instrucciones, esa Corporación Municipal habrá
procedido a hacer conocer a los habitantes de esa región, las penas en que incurren los contraventores
de las disposiciones previstas tanto en la Constitución General de la República como en las Circulares
que sobre el particular ha girado el C. Presidente de la República. 61
Se entiende como establecimiento oficial de la educación a las escuelas aprobadas por
el gobierno que cumplían con los requisitos y el Plan de Estudios que estipulaba la SEP,
los
otros
planteles
educativos
fueron
inspeccionados
por
las
autoridades
correspondientes para determinar si seguían ejerciendo o se clausuraban. El gobernador
Jara concedió al Ayuntamiento de Orizaba al profesor Juan Galicia como Inspector
59
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Secretario J. M. Puig
Casauranc al C. Presidente Municipal de Orizaba, México, 17 de febrero de 1926; Ibíd., del Presidente Municipal al C.
Inspector de Policía, Orizaba, 26 de febrero de 1926.
60
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Circular No. 3702, del
Gobernador H. Jara al C. Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa, 27 de febrero de 1926; Ibíd., del
Presidente Municipal a la Oficina de la Policía Judicial, Orizaba, 1 de marzo de 1926; Ibíd., del Oficial Judicial al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 1 de marzo de 1926.
61
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Circular No. 3956, del
Gobernador del Estado de Veracruz al Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 2 de
marzo de 1926.
33
Técnico Escolar para que se clasificaran los planteles que se encuentran en esa ciudad,62
se le notificó al obispo Rafael Guízar que las escuelas católicas serían cerradas para que
fueran inspeccionadas.63
Para apoyar al profesor Juan Galicia, la presidencia de Orizaba designó el 1 de
marzo de 1926 una comisión para que se inspeccionaran los establecimientos de
cualquier índole donde se pudiera instruir la educación religiosa, no solo en las escuelas
(ver tabla 1), siendo los siguientes revisados por las autoridades entregando su informe
al presidente municipal y al gobernador, también se buscaba que en esos inmuebles no
hubiera ninguna imagen religiosa y en caso de hallarlas serían consignadas por las
autoridades.
TABLA 1. Establecimientos donde hubo inspección por las autoridades
civiles en busca de evidencia de educación religiosa católica en
Orizaba
AUTORIDAD
ESTABLECIMIENTO Y
REPORTE
MUNICIPAL
ENCARGADA
 En los salones habían 7
Eugenio Vigil.*
Hospital Infantil
niños y 10 niñas enfermas.
Arnulfo M.
“Isabel la Católica”.
 Armazón de un altar sin
Rodríguez.
Srita. Josefina Álvarez.
imágenes
 10 ancianos de distintas
edades.
 45 señoras que no podían
trabajar
Eugenio Vigil.
 Armazones de altares en
Asilo de Ancianos
Filiberto Valdés.
diferentes
puntos
del
Desamparados.
Arnulfo M.
plantel.
Rosalía de la Rosa.
Rodríguez.
 Una capilla religiosa, un
confesionario y 17 bustos de
santos, éstos quedaron a
disposición
de
las
autoridades.
 Nunca estuvo a cargo de
Eugenio Vigil.
alguna
corporación
Asilo de Ciegos “Llera”.
Arnulfo M.
religiosa.
Sra. Luisa Castillo.
Rodríguez.
 No existe oratorio ni
imágenes religiosas.
62
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Gobernador del Estado de Veracruz, Orizaba, 2 de marzo de 1926; Ibíd., Telegrama, del Gobernador
H. Jara al Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 3 de marzo de 1926.
63
WILLIMAN. “Reconstrucción eclesiástica…” Op. Cit., 1976, p. 64.
34
Eugenio Vigil.
Filiberto Valdés.
Asilo de Huérfanas.
Sra. Concepción
Ramírez.
 Se
da
instrucción
únicamente de lectura,
escritura, cuentas y música.
 Nunca estuvo a cargo de
alguna
corporación
religiosa.
 12 huérfanas
 No se encontró oratorio o
algo que delatara se
impartiese
la
religión
católica.
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182.
*Eugenio Vigil fue el comisionado del gobernador Heriberto Jara Corona para el cumplimiento de la ley.
Estas inspecciones se realizaron entre el 1 y 2 de marzo de 1926, como complemento de
la Circular No. 3702 (clausura de instituciones monásticas y de escuelas particulares) del
27 de febrero de ese año. A excepción del asilo de ciegos y del asilo de huérfanas, los
otros establecimientos estuvieron atendidos por las madres de la Caridad, las cuales se
retiraron el 27 de febrero cuando se anuncian las medidas hacia el clero católico. Del
mismo modo, las revisiones se hicieron en las escuelas particulares de la ciudad
garantizando que la Circular antes mencionada se cumpliera con las siguientes bases:
Primera. Si los profesores o profesoras visten hábitos que revelen pertenecer a corporación monástica.
Segunda. Si la enseñanza impartida tiene visos de religiosidad.
Tercera. Si por los libros, registros y anotaciones de los maestros y por los libros y útiles de los alumnos,
se desprende que se imparte enseñanza religiosa.
Cuarta. Si por la documentación de los Directores se llega al conocimiento de la religiosidad buscada.
Quinta. Si para el sostenimiento de las escuelas proporcionan fondos algunas sociedades religiosas.
Sexta. Si los edificios o locales son propiedad de alguna corporación religiosa.
Séptima. Si en los lugares destinados para clases o en los despachos de los Directores se hallan
imágenes o cuadros que reflejen la falta del laicismo.
Octava. Si en los mismos edificios hay templos u oratorios.64
En la siguiente tabla se muestran a detalle las escuelas que fueron inspeccionadas:
Tabla 2. Escuelas particulares que se inspeccionaron
Nombre de la escuela
Reporte
Colegio Guadalupano
 La directora, profesora normalista Isaura
Marroquín Santander no viste hábito de
monja. Las demás profesoras son conocidas
64
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Informe General de la Comisión
Especial Encargada de Visitar las Escuelas Particulares de Orizaba, de la Comisión al H. Ayuntamiento, Orizaba, 5 de
marzo de 1926.
35








Escuela del Orfanatorio de
“San Luis Gonzaga”





Escuela “Antonio Pérez“






Escuela
“Del Corazón de Jesús”
Escuela “Vilaseca”

y no pertenecer a ninguna institución
monástica.
La enseñanza se ajusta al Programa de
Estudios Oficiales de la SEP. Se comprueba
su laicismo por estar anexa a la Normal de
Profesores de la Ciudad de México.
Todos los libros son de autores liberales.
La escuela se sostiene por las cuotas de los
padres de familia.
El edificio es propiedad particular.
No se encontraron imágenes religiosas.
No hay espacio destinado para oratorio.
Los profesores visten de color porque revelan
costumbres de haber pertenecido a alguna
corporación religiosa.
La enseñanza impartida en el momento de la
vista no tuvo nada de religiosa. Se
interrogaron a tres niñas para saber si
practicaban la religión, dos contestaron que
se les llevaba a misa y les enseñaban
oraciones en el dormitorio, la otra negó todo,
pareciendo que ya estaba preparada para
contestar.
Los libros no tuvieron nada de religión.
La escuela, comprendida dentro del asilo de
huérfanos, está sostenida con fondos del Lic.
Agustín Aguilar.
El edificio es particular, pues el que le
correspondía en propiedad está ocupado por
el Hospital Militar.
No hay oratorio ni imágenes religiosas.
El profesor, Modesto Cadena, es bien
conocido como laico.
La enseñanza refleja el laicismo.
Los libros no tienen indicios de religión.
La escuela está sostenida por fondos que
ministra el Lic. José de L. y Pasquel.
El edificio es propiedad particular.
No hay oratorio ni imágenes religiosas.
Se encontró esta escuela clausurada con
muebles escolares. En el archivo de la
Inspección Escolar del Estado aparece como
directora la Sra. Soledad Valiente.
El personal viste de color, reflejando que
pertenecieron a alguna corporación religiosa.
36
Escuela “Covadonga”
Escuela Particular Mixta
Escuela Particular de
“Ana Luisa Latour”
Escuela Presbiteriana
“Hidalgo”
 La enseñanza que se mostró en el momento
de la visita no tiene nada de religión
 Los libros son reglamentarios, aunque los
libros de tareas escolares denotaban por su
tinta y color que estaban recién formados.
 No se mostraron los libros de la Dirección,
excepto el de las cuotas.
 Se dijo que los fondos provienen de las
colegiaturas.
 El edificio es propiedad particular.
 No hay oratorio ni imágenes religiosas.
 Algunos profesores vestían trajes civiles de
color evidenciando haber pertenecido a
alguna corporación religiosa, pero había tres
profesoras civiles.
 La enseñanza no era religiosa.
 Los libros son reglamentarios.
 La documentación de la Directora contiene
actas de visitas del Inspector Escolar
Gonzalo R. Cortina.
 Las cuotas provienen de las colegiaturas.
 El edificio es propiedad particular.
 No hay oratorio ni imágenes religiosas.
 La profesora Concepción Menchaque es civil.
 La enseñanza es laica.
 No se llevan libros ni registros.
 La Dirección del plantel no contiene
correspondencia oficial
 Las cuotas no bastan para el sostenimiento.
 Ocupa como salón de clases el corredor de
la casa de la profesora Menchaque.
 No hay oratorio ni imágenes religiosas.
 La directora no es religiosa.
 La enseñanza es laica.
 Libros reglamentarios.
 Escasez de alumnos.
 Ninguna corporación provee fondos.
 El edificio es particular.
 No hay oratorio ni imágenes religiosas.
 Es Directora la Sra. Luisa B. de Sherwell, con
título de la Iglesia Evangélica.
 La enseñanza no es religiosa.
 Libros reglamentarios.
 Se hace el pago de 215 pesos mensuales
para el sueldo de las maestras.
 El edificio pertenece a la misma Iglesia.
37
 No hay cuadros religiosos.
 En todos los documentos legales aparece el
nombre “Misión Presbiteriana” y “Escuela
Presbiteriana”, siendo la Inspectora de
Escuelas Presbiterianas, la Srita. Mary F.
Turner. La Sra. Sherwell expresó que la
Iglesia ya no dará fondos a partir de este año.
Se hace la siguiente clasificación tomando los datos anteriores



Escuelas Laicas, pero por la 
vestidura se revela que hubo 
religiosidad.
Escuelas
donde
no
se 
encontraron
pruebas
de 
religiosidad, pero hay detalles
que lo reflejan y desde la
entrada se respira el ambiente
religioso
Escuela
que
por
sus 
documentos y fondos está
controlada por la Iglesia
Evangélica.
Escuelas enteramente Laicas.
Antonio Pérez.
Mixta de Menchaque.
Ana Luisa Latour.
Colegio Guadalupano.
Colegio Covadonga.
Escuela Vilaseca.
Escuela San Luis Gonzaga.
Presbiteriana Hidalgo.
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182. Reporte de las escuelas
inspeccionadas por el gobierno de Orizaba.
En este reporte se menciona que solo el Colegio Guadalupano suspendió clases, pero el
profesor Juan Galicia y el comisionado Eugenio Vigil sugirieron que reanudara sus
funciones porque era el único que se ajustaba con la ley y no representaba peligro para
la sociedad, por lo que el presidente municipal de Orizaba ordenó su reapertura el 6 de
abril.65 Por otra parte, el gobernador Jara estaba consciente que las escuelas reanudarían
labores una vez que la inspección terminara y se evaluara la certificación de los maestros,
del plantel y de los planes educativos, siempre y cuando cumplieran con los
requerimientos de la ley. El obispo Rafael Guízar y Valencia proporcionó la ayuda
65
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Informe General de la Comisión
Especial Encargada de Visitar las Escuelas Particulares de Orizaba, de la Comisión al H. Ayuntamiento, Orizaba, 5 de
marzo de 1926; Ibíd., del Oficial 1° Enc. del Desp. Sría. al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 26 de marzo de
1926; Ibíd., del Presidente Municipal al C. Secretario de Gobernación del Estado, Orizaba, 6 de abril de 1926.
38
necesaria e invitó a los católicos para obedecer las peticiones del gobierno y evitar
enfrentamientos.66
Obedeciendo las peticiones de Guízar, las Damas Católicas de Orizaba buscaron
una solución pacífica, por lo que una comisión salió hacia la capital veracruzana para
entrevistarse con el gobernador para que se reanudaran los colegios y templos cerrados
por órdenes del Gobierno Federal67. Sin embargo, esto no se logró ya que Jara Corona
siguió las órdenes dictadas por el presidente Calles y el secretario de Gobernación
Tejeda, las escuelas se abrieron únicamente si se sujetaban al Plan de la SEP, mientras
que los templos permanecieron cerrados.
Si bien había otras religiones, las que contaban con mayor presencia de
seguidores en Orizaba eran la católica y protestante, antes de limitarlos de acuerdo a la
población, la ciudad contaba con once curas católicos y posteriormente cuatro; había
cinco pastores protestantes, por un momento se les admitió que todos podrían oficiar su
culto, pero después se determinó la expulsión de tres porque eran extranjeros y que el
número de los pastores debería ser acorde a la población por lo que finalmente fueron
cuatro los que permanecieron, como sus semejantes católicos.68
1.2.2 Las Juntas Vecinales, el control por los bienes del clero
Los católicos veracruzanos protestaron –de forma pacífica– en contra de las medidas que
el gobierno veracruzano puso en práctica, los inconformes pedían la reapertura de todos
los templos; como esto no fue concedido, en agosto de 1926 se solicitó a través de una
carta pastoral que todas las iglesias estuvieran al cuidado de los feligreses, el gobierno
no aceptó estos términos. Por tal motivo, la Secretaría de Gobernación señaló que el
patrimonio nacional debería de ser protegido por personas que el mismo gobierno
designaría, se realizaron inventarios de los bienes que se encontraban en los templos,
66
WILLIMAN. “Reconstrucción eclesiástica…” Op. Cit., 1976, p. 64.
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 15 de marzo de 1926.
68
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Secretario de
Gobierno Manuel Maples Arce al C. Presidente de la H. Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa, 1 de mayo de 1926;
Ibíd., Telegrama, del Presidente Municipal al C. Gobernador Constitucional del Estado, Orizaba, 2 de mayo de 1926;
Ibíd., Telegrama, del Gobernador del Estado al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 3 de mayo de 1926; Ibíd.,
Telegrama, del Presidente Municipal al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 8 de mayo de 1926.
67
39
así como el nombramiento de “Juntas Vecinales”.69 El 31 de julio, Gobernación vuelve a
expedir otra circular donde informaba a los funcionarios que podían pedirle autorización
para modificar las iglesias y poder dedicarlas al uso civil.70
La orden llegó al gobierno de Veracruz a mediados de julio para pedirle que
recabara los inventarios de los bienes eclesiásticos y así ser nacionalizados, de esta
manera la entidad veracruzana estaba facultada para ordenar la petición que venía
desde la ciudad de México; en agosto la presidencia de Orizaba le proporciona la noticia
al Inspector de Policía para que se encargara de ejecutar la disposición gubernamental,
no sin antes haber notificado a los sacerdotes de la ciudad que deberían tener listos los
inventarios
de
todas
las
iglesias
para
ser
entregados
a
las
autoridades
correspondientes.71
En todo el país los católicos estaban disgustados por la aplicación de inventarios
en los templos, por lo que algunos optaron por sacar las imágenes, los muebles, las
esculturas y todo lo que se pudiera. Ante esto, el presidente de la República pidió a los
gobernadores que se vigilaran los templos, sancionando tanto a sacerdotes como a
civiles que extrajeran cualquier objeto ya que se impedía el control del patrimonio
monástico, se pidió la rápida formación de las juntas que custodiarían los templos para
evitar el saqueo.72 De esta manera y por petición del gobernador para el cumplimiento de
la vigilancia de los inmuebles religiosos, en Orizaba se creó una comisión para recibirlos
de las juntas vecinales y entregarlos al gobierno:
69
WILLIMAN. “La Iglesia y el Estado en México, 1926-1931. Discordia a la nación armónica en Veracruz”, Op. Cit.,
1976, p. 68.
70
Ibíd. pp. 68-69.
71
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Circular No. 13414, del Secretario
de Gobernación Manuel Maples Arce al C. Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 15 de
julio de 1926; Ibíd., del Presidente Municipal al C. Inspector General de Policía, Orizaba, 5 de agosto de 1926; Ibíd.,
del Presidente Municipal al Sr. Cura Párroco, Orizaba, 29 de julio de 1929.
72
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Gobernador H.
Jara al Presidente Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa, 30 de julio de 1926.
40
Tabla 3. Reparto de la vigilancia de los templos a cargo de
funcionarios del H. Ayuntamiento de Orizaba. 31 de julio
de 1926
Templo
Comisionado
C. Presidente Municipal
Rodrigo Maldonado
C. Síndico Primero
Fortunato Ramírez
C. Síndico Segundo
Luis Massa
C. Regidor Primero
Cornelio de los Santos
C. Regidor Segundo
Isaías Castillo
C. Regidor Tercero
Aurelio Pérez
Parroquia de San Miguel
San Juan de Dios y San José de
Gracia
Santa María y El Carmen
El Calvario y San Antonio
Los Dolores y La Concordia
Santa Gertrudis y Barrio Nuevo
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182.
Nombramiento de las personas que se harían cargo de la vigilancia de los templos en Orizaba.
A partir del 30 de julio, cuando se solicitó la vigilancia, el Ayuntamiento de Orizaba
comenzó enviar cartas a los ciudadanos considerados para formar parte de las juntas
vecinales, estos vecinos tenían que ser conocidos por las autoridades y por los miembros
de la población. Una vez que aceptaban ser parte de la junta y comprometerse a
salvaguardar el templo y todo lo que contenga en su interior, se registraban en las
instalaciones de la iglesia que les era asignada ante las autoridades convenientes (Tabla
3) y el sacerdote a cargo.
Tabla 4. Lista de las Juntas Vecinales de los Templos Católicos de Orizaba
a
en 1926
Junta de la Parroquia de San Miguel
Junta del templo El Calvario
Sacerdote a cargo: José Ma. Flores
Sacerdote a cargo: Mariano Álvarez
Representante: Ernesto Galland
Representante: Luis Durand
Porfirio Vázquez
Guillermo Rangel
Francisco Mendoza
Manuel Ramírez
Aurelio M. Ramírez
Luis Fernández
Rafael Hernández
Aurelio Trejo
Antonio Báez
Gregorio Valderrama
Juan Báez
Cesáreo Osorio
Roberto Alamillo
Delfino P. Ramírez
Francisco Campos
Ausencio Izquierdo
Prócuro Peregrina
Próspero Flores
Zeferino Cruz
Pedro Peña Fuentes
41
Junta del templo Santa María
Sacerdote a cargo: Vicente Vargas G.
Representante: Francisco González
Rubén Yáñez
Ruperto Islas
Manuel Bravo
Luis Ortega
Luis Fuentes C.
Francisco Rosete
Alberto Osorio M.
Oswaldo Barruecos
Eliseo S. Acosta
Juan Trujillo
Junta del templo San José de Gracia
Sacerdote a cargo: Juan B. Pérez
Emiliano Marín
Emilio Arellano
Eduardo Egea
Eduardo López
Agustín Martínez
Sacramento Osorio
Luis Maya
Ezequiel Carrillo
Guillermo Ramírez
Agustín Ramírez
Junta del templo San Antonio
Sacerdote a cargo: Francisco Vallejo E.
Representante: Carlota Hernández
Pascual Álvarez
Melesio Bolaños
Abraham Álvarez
Fidencio Vázquez
Liberio Rosas
Gonzalo de la Rosa
Ignacio Trejo
Higinio Huerta
Delfino Contreras
Manuel Rodríguez
Junta del templo La Concordia
Sacerdote a cargo: Leopoldo Osorio
Representante: Gertrudis Sánchez
Diego Cerón
Laureano Álvarez
Alberto Lechuga
Hilario Miranda
Junta del templo El Carmen
Sacerdote a cargo: No hay
Representante: Severiano Contreras
Rafael Ariza
José Polo
Luis Uruñuela
Enrique Valdés
Alberto Uruñuela
Régulo Fernández
Alonso Francisco Pacheco
Francisco Aspiri
Pedro Bobadilla
Jesús Castillo
Junta del templo San Juan de Dios
Pedro Yáñez
Severiano Plasencia
Manuel Noguera
Daniel Domínguez
José Gómez
Eduardo Peña
Manuel Islas
Gerardo Zepeda
Francisco Amor
Miguel Díaz
Junta del templo Los Dolores
Sacerdote a cargo: No hay
Representante: Rogelio Valiente
Felipe Nieva
Miguel L. del Castillo
Andrés P. Palacios
Enrique González
Antonio Martínez
Eulogio Benítez
Francisco Amador
Ignacio Pérez Campos
Agustín Vignon
José María Lugo
Junta del templo Santa Gertrudis
Sacerdote a cargo: No hay
Representante: Cesáreo Miranda
Próspero Rodríguez
Melitón Sánchez
Francisco Reyes
Luis Hernández
42
Florentino Flores
Florentino Sánchez
Pedro Moreno
Eduardo Ramos
Antonio Rosete
Marcos Monterrosas
Junta del templo de Barrio Nuevo
Gregorio de los Santos
Margarito Almanza
Crescencio Torres
Faustino González
Tomás Torres
Luis Celisco
Porfirio Vázquez
Ángel Ciruelo
Manuel Ciruelo
Paulino Torres
Bartolo Gallegos
Felipe Trujillo
Jesús Calderón
Juan Miranda
José S. Gallardo
Eduardo B. Rodríguez
 Los curas de San Miguel, Santa
María San José y La Concordia,
reconocidos por la ley reglamentaria.
 Los curas de El Calvario y San
Antonio expulsados por la ley
reglamentaria.
 El cura de El Carmen, expulsado por
ser extranjero.
 No se sabe de los curas de Los
Dolores, San Juan de Dios, Santa
Gertrudis y Barrio Nuevo.
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182.
Los nombres de las listas varían conforme la renuncia y la integración de nuevos vecinos.
La junta vecinal de San José de Gracia fue la que tuvo mayores cambios desde su
formación; cuando un miembro quería renunciar, tenía que enviar una carta al presidente
municipal explicando cuáles eran los motivos por los que no podía seguir y si tenía una
sugerencia para que fuera ocupado su lugar tenía que decírselo, posteriormente el
alcalde aceptaba la renuncia y enviaba otra carta al candidato en la que se le informaba
haber sido nombrado para ser miembro de la junta. A diferencia de las juntas vecinales
de los templos católicos, en el caso de los dos templos protestantes no se hicieron juntas,
sino que se nombró únicamente a un encargado. Por lo general eran los pastores, para
la Iglesia de la Santísima Trinidad quedó Apolonio Vázquez y para la otra que no tenía
nombre permaneció Justo Alamillo.
En el momento de la creación de las juntas, 31 de julio y el 1 de agosto, se hizo
una lista detallando todos los objetos y artículos que había y por disposición del gobierno
federal, éste junto con el gobierno municipal y estatal tendrían que tener una copia de los
inmuebles. Una vez formadas las juntas el Ayuntamiento de Orizaba informó al
gobernador que estaban listas para ejercer sus funciones y para mayor seguridad se
43
pusieron como vigilantes a funcionarios del Ayuntamiento.73 Cada junta tenía que
informar al gobierno de Orizaba si la ley era violada para que posteriormente se
sancionaran a los que desobedecían la ley. Pero la vigilancia se reforzó aún más a partir
del 10 de agosto, tomando como referencia la ley del 14 de junio (Ley Calles), esto porque
el gobierno veracruzano no quería arriesgarse a que los católicos desobedecieran, por lo
que mandó a la ciudad de Orizaba ejemplares de la ley Calles para que éstas se pegaran
en las puertas de los templos o espacios públicos y recordándole que no olvidara lo
convenido respecto al artículo 3°.74
A pesar de las juntas vecinales, no se pudo controlar por completo a los católicos,
ya que seguían practicando el culto y no respetaban los artículos constitucionales.
Cuando el gobierno de Veracruz se enteró de estos actos, culpó a los fanáticos de alterar
el orden público. De esta manera pidió a los presidentes municipales vigilar estrictamente
a todos los sacerdotes que estuvieran a su cargo e identificar a quienes practiquen el
culto fuera de la ley para aprehenderlos y enviarlos ante el Secretario de Gobernación en
México para recibir su castigo; Maples Arce dejaba claro que las autoridades municipales
eran auxiliares para el acatamiento de las leyes, sino cumplían por tolerancia o
indiferencia también serían castigados.75
Para prevenir que fueran sancionados, las autoridades municipales de Orizaba
comenzaron a vigilar los templos y las acciones de los católicos; se descubrió que el día
25 de agosto en el templo La Concordia se había celebrado un matrimonio sin el
consentimiento de las autoridades. Si bien el sacerdote de dicho templo estaba registrado
ante el gobierno, el presidente municipal tuvo que preguntarle al gobernador y al
secretario de Gobernación hacia quien tendría que proceder, si contra el sacerdote que
ofició la misa o contra los diez vecinos por no haber detenido la ceremonia. Tanto Jara
73
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 1 de agosto de 1926.
74
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Circular No. 15100, del Secretario
de Gobierno Manuel Maples Arce al C. Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 10 de
agosto de 1926.
75
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Circular No.15850, del Secretario
General de Gobernación Manuel Maples Arce al C. Presidente de la Corporación Municipal, Jalapa, 19 de agosto de
1926.
44
como Tejeda respondieron que tenían que investigar previamente y castigar a quienes
resultaran culpables.76
Lo más preocupante fue que se pensó que la junta vecinal de La Concordia nunca
recibió el templo ni hicieron el inventariado correspondiente, pero esto se resolvió al
notificar que sí tenían el inmueble a su cargo. Para solucionar el problema que se
presentó con el matrimonio, se solicitó la ayuda al ministerio público y éste a su vez pidió
la lista de todos los templos y sus respectivas juntas para hacer un expediente e investigar
a cada uno, con especial atención al templo en cuestión que tras una especulación se
dictaminó que sí se había realizado una ceremonia religiosa, por lo que se procedía a la
aplicación de las sanciones correspondientes, siendo acreedores tanto los vecinos como
el sacerdote.77
Ante estas medidas, el Ayuntamiento de Orizaba tenía que estar seguro de las
diligencias practicadas; persuadió al ministerio público de comprobar la verdad,
contestando que también los vecinos podían salir perjudicados ya que ellos tenían a su
cargo el templo y el dictamen podría variar de acuerdo a la culpabilidad que podrían tener;
no podrían valerse de las versiones callejeras, pues así fue como el municipio se enteró
de la boda, pero aun así pidió que se preguntara a los habitantes que vivían cerca de la
iglesia para encontrar cualquier pista. Sin embargo, al no tener pruebas contundentes y
sólo valerse de los comentarios callejeros, tanto el ministerio público como la policía no
lograron encontrar culpables, por lo que tanto el cura como los vecinos no fueron
sancionados.78
76
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 25 de agosto de 1926; Ibíd., Telegrama, del Presidente Municipal al
C. Ministro de Gobernación, Orizaba, 25 de agosto de 1926; Ibíd., Telegrama, de Adalberto Tejeda al Presidente
Municipal de Orizaba, México D.F., 27 de agosto de 1926; Ibíd., Telegrama, de Heriberto Jara al C. Presidente
Municipal de Orizaba, Jalapa, 27 de agosto de 1926.
77
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Gobernador H.
Jara al Presidente Municipal, Jalapa, 27 de agosto de 1926; Ibíd., Telegrama, del Presidente Municipal al C.
Gobernador del Estado, Orizaba, 28 de agosto de 1926; Ibíd., del Agente del Ministerio Público al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 1 de septiembre de 1926; Ibíd., del Presidente Municipal al C. Agente del Ministerio Público,
Orizaba, 1 de septiembre de 1926.
78
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Agente del Ministerio Público
al C. Presidente Municipal, Orizaba, 2 de septiembre de 1926; Ibíd., del Secretario de Gobierno Manuel Maples A. al
C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 17 de septiembre de 1926.
45
Lo que le importaba al gobierno sobre los inmuebles católicos era su
nacionalización, fue por esto que se pidió el inventario de todos los templos así como su
clausura para impedir que la población hiciera uso de ellos. En Veracruz se hizo una vez
que la relación de las posesiones del clero se haya terminado deberán de hacérselos
saber a las autoridades correspondientes para su debido cuidado, además de que se
haría un padrón de todas las adquisiciones que se hicieron en Orizaba para después
sumarlas a las que hayan recolectado a nivel nacional.79
A diferencia de los católicos, con quienes las juntas se hicieron por petición del
gobierno, la iglesia protestante de la Santísima Trinidad giró un documento justo cuando
el gobierno mostraba su inconformidad hacia la religión, expuso el cumplimiento del
artículo 130 y como anexo dio el inventario del templo, algo que a los católicos se les tuvo
que pedir tiempo después. Mientras que el otro templo protestante no dio su inventario –
al menos en el AMO no se tiene registro–, de igual manera mostró acatar las leyes.
Hasta aquí se muestra la importancia de las juntas vecinales como una extensión
del gobierno para cumplir los lineamientos constitucionales, las juntas estaban obligadas
a informar cualquier movimiento que los católicos hacían para que la policía intercediera,
del mismo modo sólo permitían que el sacerdote registrado podía oficiar el culto
únicamente dentro del templo a su cargo, cualquier anomalía tenía que ser informada,
los vecinos que formaban estas juntas llegaron a ser los ojos y oídos del gobierno. Tiempo
después, en los años treinta, las juntas vecinales volverían a ser cruciales para el
cumplimiento de la ley bajo la supervisión del gobierno veracruzano.
79
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del J. de la C. F. de Hda. A. del
M. P. Federal por Ministro de Ley Arturo Valenzuela al Juez 2do. Instancia, Orizaba, 10 de septiembre de 1926; Ibíd.,
Circular No. 17199, del Secretario General de Gobierno Manuel Maples Arce al C. Presidente de la Corporación de
Orizaba, Jalapa-Enríquez, 11 de septiembre de 1926.
46
1.3 El apoyo obrero, la fuerza política
Al llegar el siglo XX la población de Veracruz alcanzaba 981,030 habitantes, de acuerdo
con el II Censo Nacional de Población de 1910.80 En el valle de Orizaba estaban
asentadas varias empresas, el giro textil y cervecero eran las principales, esto gracias
por su ubicación geográfica y estratégica dado a que estaba en un punto intermedio entre
la ciudad de México y el puerto de Veracruz, facilitando el tránsito de personas y
mercancías a través del ferrocarril; desde el siglo XIX prácticamente el valle se fue
industrializando, por lo que después se volvería una región económica importante para
el país, el capital invertido era principalmente francés e inglés, distribuido entre Nogales,
Orizaba, Santa Rosa (hoy Cd. Mendoza) y Río Blanco.
Una de las primeras formas de agrupación que tuvieron los trabajadores fueron las
Sociedades Mutualistas, siendo la primera la llamada “Sociedad de Socorros Mutuos,
fundada por obreros en la ciudad de México, cerca del año de 1853.81 Los obreros
significaron la mano de obra más importante para que las fábricas siguieran produciendo;
antes de 1915 los obreros comenzaron a organizarse 82 con la ayuda del gobierno de
Venustiano Carranza; por lo que destaca la alianza entre la Casa del Obrero Mundial
(COM) con los Constitucionalistas.
Así quedó establecido en el histórico pacto firmado por Venustiano Carranza y la
COM el 17 de febrero de 1915, en el cual la Casa del Obrero Mundial se comprometía a
acelerar el triunfo en la revolución, para lo cual se crearon guarniciones de trabajadores,
las cuales fueron conocidas como "Batallones Rojos". A cambio de este apoyo, la COM
pudo extender su presencia en varias entidades de la República. 83 Estos Batallones
80
FLORESCANO, Enrique y Juan Ortiz Escamilla. “Dinámica de la población Siglos XVI al XXI y perspectivas a futuro”,
en Atlas del Patrimonio Natural, Histórico y Cultural de Veracruz, Tomo II, Patrimonio Histórico, México, Gobierno del
Estado de Veracruz, 2010, p. 133;
http://www.inegi.org.mx/est/contenidos/proyectos/ccpv/default.aspx. Censo de Población y Vivienda 1930,
(consultado el 22 de febrero de 2015).
81
http://www.conampros.gob.mx/historiasind_01.html (Consultado el 25 de febrero de 2014).
82
Por movimiento obrero se entiende al conjunto de los hechos políticos y organizativos que afectan la vida política,
ideológica y social de la clase obrera o, más ampliamente, al mundo del trabajo. BOBBIO Norberto, Nicola Matteucci,
Gianfranco Pasquino y otros. Op. Cit., 1995, pp. 1066-1072.
83
http://www.conampros.gob.mx/historiasind_03.html (Consultado el 25 de febrero de 2014).
47
llegan a Orizaba desde la ciudad de México en 1915, cuando Carranza se encontraba en
Veracruz.84
Después de una serie de problemas entre los sindicatos de la época, en marzo de
1918 se fundó la primera Confederación de Trabajadores con carácter Nacional: la
“Confederación Regional Obrera Mexicana”, CROM. La Casa del Obrero Mundial había
perdido importancia, se generó la inquietud para que se fundara una organización sindical
que representara al mayor número de sindicatos del país. Los primeros intentos al
respecto se dieron en los Congresos realizados en las ciudades de Veracruz y Tampico,
en donde se discutieron las principales estrategias de lucha que la futura central habría
de tener para salvaguardar los derechos de sus trabajadores.85
El Gobierno Federal utilizó el apoyo de los sindicatos y obreros, se alió con el grupo
más prominente de obreros, la CROM. Al igual que Cales, Luis N. Morones mostró su
anticlericalismo. Morones usó su influencia en los sindicatos para que todos los
trabajadores apoyaran la ley, para ello hizo reuniones donde hablaban de las ventajas de
limitar al catolicismo y que expulsando esa religión el país tendría un mejor desarrollo. El
sindicalismo se volvió un bastión para la política en México; en febrero de 1925 la CROM
junto con el presidente Calles trataron de imponer una Iglesia Cismática en México,
apoyado por los obreros se nombró al patriarca Pérez como líder de los cismáticos, pero
este proyecto no dio resultados por lo que se disuelve más tarde, sin embargo los obreros
y el sindicalismo siguieron teniendo participación en el conflicto Estado-Iglesia.
En la ciudad de Orizaba, tras la promulgación de la ley Calles, los obreros
mostraron su apoyo al gobierno, tanto que se pidió el teatro Llave de la ciudad para dar
una conferencia sobre el problema religioso que atravesaba el país, sin embargo la
presidencia municipal no otorgó el establecimiento, aunque se le solicitó previamente,
esto ocasionó que los sindicatos de la región reprobaran el acto del presidente de aquella
ciudad. Dicha petición fue solicitada por el sr. David Lara Pardo, pero el presidente
84
Para mayor detalle véase a GARCÍA Díaz, Bernardo. “Las tácticas de agitación de los militantes de la Casa del Obrero
Mundial entre los trabajadores textiles” en Documentos, testimonios y crónicas de la Revolución Mexicana en
Veracruz (Antología), Secretaría del Estado de Veracruz, México, 2010, pp. 141-143; GARCÍA Díaz, Bernardo. Los
obreros textiles de Santa Rosa y la Revolución, Tesis de Doctor en Historia, Puebla, Instituto de Ciencias Sociales y
Humanidades “Alfonso Vélez Pliego”, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, 2011.
85
http://www.conampros.gob.mx/historiasind_05.html (Consultado el 25 de febrero de 2014).
48
municipal respondió que el teatro estaba arrendado pero haría lo posible para prestar el
recinto, mostrando su total apoyo al gobierno ante el problema religioso.86
Los sindicatos se manifestaron enérgicos cuando Rodrigo Maldonado, presidente
municipal de Orizaba, no dio facilidades de prestar el teatro mencionado para la 1ª
Conferencia que trataría el asunto en cuestión, pidieron que recapacitara ante esto y que
otorgara aquél inmueble para poner al tanto a la ciudadanía del asunto religioso que
atravesaban Veracruz y el país. Solicitaban al presidente que acatara las normas que la
política había adoptado respecto al tema religioso, si no cumplía con los lineamientos
sería considerado enemigo del gobierno y de los trabajadores, éstos argumentaban que
ejercían su labor de liberación de las clases oprimidas, por lo que consideraban
indispensable que se realizara la conferencia.87
La presidencia de Orizaba respondió a las acusaciones que los sindicatos hacían,
particularmente se dirigió al secretario Francisco García, el presidente Maldonado le
explicaba al secretario que el teatro Llave se encontraba arrendado al sr. José Jiménez
y al haber un contrato de por medio no podía hacer uso del espacio prontamente, pero
que estaría al pendiente de que el recinto se les diera lo más rápido posible. Por lo tanto
esa era la única razón por el cual no se podía dar la instalación solicitada, por lo que no
había necesidad de que se culpara al presidente de no estar de acuerdo con la política
religiosa, manifestaba además, que el viernes 20 de agosto podía hacer uso del teatro. 88
Del mismo modo, el gobierno estatal le pidió a la presidencia de Orizaba que
atendiera el asunto del teatro Llave, debiendo mostrar su apoyo a los trabajadores para
que la ley no fuera infringida, Jara recomendó que este tema no debía de pasarse por
alto y se debían de cumplir las disposiciones constitucionales.89 Cabe resaltar que el
86
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Gobernador H.
Jara al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 17 de agosto de 1926; Ibíd., del Presidente Municipal al C.
Gobernador del Estado, Orizaba, 17 de agosto de 1926.
87
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, de Miguel C. Pérez Secretario
General del Sindicato de Obreros y Similares de Río Blanco al C. Rodrigo Maldonado Presidente Municipal de Orizaba,
Río Blanco, 17 de agosto de 1926; Ibíd., de Francisco García Secretario General del Sindicato Obrero de las Aguas
Gaseosas y Oficios Varios al H. Ayto. de Orizaba, Orizaba, 17 de agosto de 1926.
88
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Presidente Municipal al
Sindicato Obrero de las Aguas Gaseosas y Oficios Varios, Orizaba, 18 de agosto de 1926.
89
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Gobernador H. Jara al C.
Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 18 de agosto de 1926.
49
ayuntamiento mandó copias al gobernador y a los sindicatos de la carta girada hacia el
secretario Francisco García para que estuvieran pendientes del porqué no se podía
disponer por el momento del edificio.
Esto ocasionó tensión entre los grupos sindicales del valle con el Ayuntamiento de
Orizaba, los obreros pensaron que el presidente municipal no apoyaba la ley y se
mantenía tolerante a la religión, el sindicato de la fábrica de San Lorenzo de Nogales le
hizo notar a Rodrigo Maldonado que gracias al apoyo obrero está en la presidencia
municipal y no debía de olvidar que pertenece a la clase obrera. El presidente municipal
de Orizaba le hizo llegar su respuesta para que el secretario de San Lorenzo entendiera
cuál era la situación del teatro y que por ningún motivo la presidencia estaría alejada del
gobierno estatal y federal.90
La noticia le llegó a Adalberto Tejeda, a través del secretario Anselmo Aguilar por
parte de los estableros y campesinos, le pedía su intercepción para usar el edificio para
las conferencias porque el Ayuntamiento obstruía el deber. La autoridad municipal de
Orizaba hizo saber que estaría al pendiente del teatro Llave, a su vez, comunicó que lo
estaba arrendando a una empresa de espectáculos y tomaría las medidas necesarias
para conseguirlo, para lograrlo pidió a los sindicatos cuál es la fecha en que lo
necesitaban. Al parecer el asunto quedó arreglado y la presidencia informa que pueden
hacer uso del inmueble el viernes 20 de agosto.91 A continuación se muestran los
sindicatos que solicitaban dicho teatro:
Tabla 5. Sindicatos que solicitaban el Teatro Llave para dar
conferencias sobre el asunto religioso
Sindicato
Lugar
Sindicato de Obreros y Similares de Río Blanco,
Río Blanco, Ver.
adherido a la CROM
Sindicato de Obreros y Artesanos de la Cervecería
“Moctezuma”,
Orizaba, Ver.
miembro de la CROM
90
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Sindicato de Obreros y
Artesanos Progresistas de San Lorenzo al H. Ayto. de Orizaba, Villa de Nogales, 19 de agosto de 1926; Ibíd., del
Presidente Municipal al Sindicato de Obreros y Artesanos Progresistas de San Lorenzo, Orizaba, 20 de agosto de 1926.
91
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del secretario
Adalberto Tejeda al Presidente Municipal, México D. F., 21 de agosto de 1926; Ibíd., Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Ministro de Gobernación, Orizaba, 23 de agosto de 1926; Ibíd., Telegrama, del Presidente Municipal
al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 18 de agosto de 1926.
50
Sindicato Obrero de las Fábricas de Aguas
Gaseosas y Oficios Varios,
adherido a la CROM
Sindicato de Obreros y Artesanos Progresistas de
San Lorenzo,
miembro de la CROM
Sindicato de Obreros Cigarreros y Similares de la
Fábrica de Puros “La Violeta”,
miembro de la CROM
Estableros Campesinos
Orizaba, Ver.
Villa de Nogales,
Ver.
Orizaba, Ver.
---
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182.
Se puede notar que estos sindicatos están agrupados a la CROM, por lo que su influencia
llegó a ser de gran importancia en el país, logrando mover a miles de obreros cuando
hacía falta, como lo señaló el sindicato de San Lorenzo de Nogales, la influencia del
sindicato era que podían determinar a los gobernantes. La dualidad entre la política y el
sindicalismo fue importante para establecer la hegemonía gobernante de la época.
1.4 Los medios de protesta de los católicos ante la Ley Calles
Así como se opuso el arzobispo de México, José Mora y del Río, en Veracruz protestó el
obispo Rafael Guízar y Valencia, que desde 1919 ostentaba el cargo. La diferencia es
que mientras en otras partes de México algunos sacerdotes se mostraron enérgicos de
la ley y buscaban su derogación lo más pronto posible, incitando a los católicos a
protestar; en Veracruz el obispo Guízar buscó la vía de la conciliación pacífica. Incluso
desde antes de la persecución religiosa ya se notaba el anticlericalismo de Tejeda cuando
fue gobernador por primera vez, en ese momento Guízar mostró su interés de llegar a un
arreglo con el gobierno veracruzano, provocando que el gobernador y el obispo se
enfrentaran en algunas ocasiones.
Después de febrero de 1917 las tensiones entre los católicos y revolucionarios
jacobinos se fueron agravando debido a los artículos constitucionales. Los Caballeros de
Colón fueron un grupo de católicos que defendieron su fe contra las aversiones del
Estado, su participación fue sustancial durante la guerra cristera; en Veracruz se
establecen en la ciudad de Xalapa en 1921, a finales del año ya tenían sedes en Córdoba,
Orizaba y Veracruz, teniendo presencia en las principales ciudades de la entidad
51
veracruzana. Este grupo fue culpado de un atentado en Orizaba en contra de agricultores
arrendatarios el 23 de octubre de 1923, ellos fueron atacados desde las torres de una
parroquia en dicha ciudad, a partir de entonces las relaciones entre eclesiásticos y
autoridades civiles se volvía cada vez más frágil.92
Otro grupo que sobresalió durante la crisis religiosa en México fue la Liga Nacional
Defensora de la Libertad Religiosa (LNDLR), en Veracruz el clero no aceptó ni apoyó a
los miembros de la Liga y decayó. Del mismo modo, la Asociación Católica de la Juventud
Mexicana (ACJM) no logró atraer suficientes miembros para que la Liga se mantuviera y
así garantizar una oficina en el estado de Veracruz; hubo miembros en esta organización
pero no los suficientes como para mantenerla; en Córdoba, Paula Espinoza dirigía la filial
con 200 miembros; en Xalapa hubo tres filiales dirigidos por Elvira Núñez, Julio R.
Luengas y Fernando Ruiz con 200 miembros; en Orizaba se encontraba Manuel Gómez
con 300 miembros. Veracruz, junto con Puebla y Tlaxcala formaban la “zona 8” de la
LNDLR y a su cargo estaba el inspector Julio M. Helguera con residencia en Orizaba.93
La Liga, valiéndose de la prensa invitaba a los católicos a defender su fe, los
boletines que publicaron fueron enviados a los estados para mantener informados a los
feligreses sobre los acontecimientos que estaba atravesando la religión católica. En un
boletín publicado en el mes de septiembre de 1926 rechazaban la actitud que había
tomado el gobierno, comparaban a los políticos con los sayones de la Inquisición, pero
además mencionaba que la Inquisición daba días hábiles para mostrar la inocencia de
un presunto hereje y si éste pedía perdón se le concedía. Lo que resaltaba en este
comunicado era que los involucrados no debían vender la patria, si eran católicos tenían
que respetar a sus semejantes que luchaban por la religión y si no lo eran también tenían
que respetar. Los miembros de la Liga llamaron “judas” a quienes ayudaban al gobierno
y “pilatos” a los que apoyaban las acciones tanto del gobierno como del clero.94
Probablemente el fallo de la Liga residió en que el obispo Guízar y Valencia
repudiaba la violencia, dado que la LNDLR se había caracterizado por desempeñar
92
WILLIMAN. “Reconstrucción eclesiástica…” Op. Cit., 1976, pp. 54-55.
WILLIMAN. Ibíd., p. 56.
94
APO. S/C. Liga Nacional Defensora de la Libertad Religiosa (LNDLR), boletín No. 6, sep./26/1926.
93
52
ataques en contra del ejército federal apoyando a los cristeros en la batalla, además el
obispo buscaba una solución diplomática sin llegar a un enfrentamiento, tratando de
acatar las disposiciones del gobierno, aunque esto se dificultó dado el hecho de que
Tejeda rechazaba las agrupaciones religiosas. Guízar se limitó exclusivamente a la
religión e invitando a sus fieles a hacer lo mismo, de esta manera se evitó la persecución
de los católicos en Veracruz, con esta hazaña el obispo se ganó el respeto de Adalberto
Tejeda, que incluso cuando éste fue gobernador por primera vez su relación con el obispo
fue tratable.
Después de que Tejeda pasara a formar parte del gabinete del presidente Plutarco
Elías Calles en 1924, las relaciones entre el clero y el gobierno veracruzano siguieron
tranquilas bajo el mandato de Heriberto Jara Corona.
95
Incluso en 1926, cuando estalla
la crisis político-eclesiástico en el centro del país, en el estado de Veracruz las relaciones
permanecieron calmosas; si bien se pidió al gobernó veracruzano el cumplimiento estricto
de la ley, no hubo severos enfrentamientos, los católicos respondían mediante protestas
mientras que las autoridades políticas actuaban si se infringía la ley.
El Episcopado Mexicano apoyaba la resistencia de los católicos en la ciudad de
México y lugares cercanos, aunque también pudo haber apoyado a la causa cristera en
los estados involucrados. Sin embargo, los católicos en Veracruz no recibieron apoyo y
el que se recibió fue mínimo por lo que tuvieron que pelear con contratiempos, en parte
también porque Guízar prohibía a sus fieles involucrase. Las medidas anticlericales
fueron firmes, prohibía que los sacerdotes extranjeros oficiaran y se exigía el
cumplimiento de la Ley Jara. Orizaba albergaba sacerdotes españoles que servían a los
católicos ricos y tuvieron que abandonar la ciudad por las medidas en contra de ellos. 96
Cuando se prohibieron los cultos el gobierno creyó que podía doblegar a los
católicos, en cambio los religiosos mostraron que podían dar batalla, esto se nota en los
tres años que duró la guerra cristera. Como primer medio de protesta fue que el
arzobispado suspendió oficiar misas como medio de huelga, pero después el gobierno
declara que debe haber un número limitado de sacerdotes. Otra medo de resistencia de
95
96
WILLIMAN, “Reconstrucción eclesiástica…” Op. Cit., 1976, p. 57.
WILLIMAN. “La Iglesia y el Estado…”, 1976, p. 85.
53
los curas fue que daban sus servicios como practicar misas, bautizos, comuniones o
matrimonios en domicilios particulares, con estas acciones los propietarios se exponían
a la expropiación de sus bienes. En Veracruz el obispo Guízar apoyó este medio de
protesta, debido a que no era violenta y se podía hacer en secreto.97
Los sacerdotes que permanecieron en Orizaba oficiaron misas “clandestinamente”
en casas particulares, era su única forma de desobedecer la ley, ya que si lo hacían
abiertamente eran arrestados al igual que los que estaban presentes. En el mes de
octubre el Ayuntamiento de Orizaba recibió la noticia de que un sacerdote de nombre
Juan Valiente había oficiado en una casa ubicada en la casa No. 34 de la calle Colón,
por lo que se procedió investigar el caso resultando ser otra persona, el verdadero
nombre del cura era Francisco Rodríguez.98 No obstante, el cambio de identidad fue otra
más de las estrategias para despistar a las autoridades que buscaban a los clérigos.
Al momento de que las autoridades se enteraron de la misa clandestina, se
procedió a arrestar al padre inculpado, Juan Valiente, por lo que permaneció en la cárcel
municipal, éste solicitó al agente del ministerio público, Lic. Miguel Ángel Martínez, su
liberación porque no había pruebas contundentes por el delito que se le acusaba, que
también era el de efectuar un bautizo afuera de la iglesia de San Miguel. Siguiendo con
la averiguación se llegó a la conclusión de que se trataba del mismo padre Rodríguez,
por lo que las autoridades procederán conforme a la ley, dejando en libertad al padre
Valiente.99 Los curas que llegaban a ser sorprendidos y que se les averiguaba, muchas
veces abandonaban el lugar donde permanecían, cambiando de nombre para pasar
desapercibidos.
Cuando se trataba de propaganda religiosa, el gobierno debía buscar a quienes
las repartían, si estaban pegadas en las calles eran retiradas, de esta manera la autoridad
97
BÁEZ-Jorge, Félix. “Los aristas de la intolerancia y el fanatismo” en Olor de santidad: San Rafael Guízar y Valencia.
Articulaciones históricas, políticas y simbólicas de una devoción popular, Universidad Veracruzana, México, 2006, p.
232.
98
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, Telegrama, del Presidente
Municipal al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 26 de octubre de 1926; Ibíd., del Presidente Municipal al C.
Gobernador del Estado, Orizaba, 27 de octubre de 1926.
99
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, boleta de libertad del padre Juan
Valiente, Orizaba, 27 de octubre de 1926.
54
civil podía mantener el orden, ya que la única propaganda que podían estar en las calles
eran las que contaban con el permiso del gobierno. En la ciudad de Orizaba se presentó
el caso de que se repartían volantes de propaganda religiosa, por lo que se alertaron al
cuerpo de policía para que estuviera vigilando las calles.100
De este modo inició el primer enfrentamiento entre la Iglesia y el Estado en
Veracruz, si bien la ley Calles fue rechazada por los católicos del país, en el bajío y
occidente del país estalla la guerra de los cristeros, mientras que en Veracruz las
relaciones se mantenían un poco tolerantes. La ley se aplicó siguiendo las órdenes del
presidente Plutarco Elías Calles y del secretario de Gobernación Adalberto Tejeda, el
gobernador Heriberto Jara Corona dispuso de la ejecución de los artículos 3° y 130
constitucionales, además resalta la influencia del prelado Rafael Guízar y Valencia quien
supo llevar un trato con el gobierno y los católicos para que no se enfrentaran entre sí, a
pesar de que rechazó la ley anticlerical mostró otros medios de protesta.
La ley anticlerical seguiría su curso en los siguientes años, a pesar de que el
gobierno jarista llegara a su fin, los siguientes gobernadores la mantendrían vigente. Los
católicos por su parte, buscarían bajo todos los medios derogar dicha ley para poder abrir
los templos, algo que se les dificultó porque los gobernantes no estaban dispuestos a
ceder. La figura del obispo de Veracruz fue crucial para que no se llevaran a cabo
enfrentamientos violentos, pero esto no significó que hubiera resistencia, pues una de
ellas fue hacer misas clandestinas.
100
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-551, Exp. 182, del Presidente Municipal al
Agente 1º del Ministerio Público, Orizaba, 9 de diciembre de 1926; Ibíd., de Miguel Ángel Martínez Agente 1º del
Ministerio Público al C. Presidente Municipal, Orizaba, 10 de diciembre de 1926.
55
Capítulo II. La ley antirreligiosa en Orizaba: de Heriberto Jara
Corona a Adalberto Tejeda (1927-1930)
La política veracruzana dio un giro inesperado cuando el gobierno de Heriberto Jara
Corona se ve truncado a consecuencia de los problemas políticos, sociales y económicos
que atravesaba el país, aunque en un momento recibió el apoyo del presidente Plutarco
Elías Calles éste le retira su apoyo dado que en su administración presidencial también
se destacó que podía anular los gobiernos estatales que ya no le favorecían. Veracruz
atravesaba una crisis debido al petróleo y además se desarrollaba en el estado la rebelión
de Arnulfo R. Gómez que rechazaba la reelección.
En este capítulo se desarrolla cuál fue el motivo por el que el gobernador Jara no
concluyó su mandato, aunque no es tema central de esta investigación se debe
mencionar ya que afectó a la política veracruzana. Además, después de que se destituyó
como gobernador se nombra a un gobernador interino para que más adelante se elija a
un gobernador constitucional. A pesar de esto la ley Calles siguió vigente hasta 1929,
cuando Adalberto Tejeda fungía como gobernador constitucional del estado de Veracruz.
2.1 La crisis del gobierno de Heriberto Jara Corona
Veracruz fue clave para la rebelión que encabezaba Arnulfo R. Gómez para luchar a favor
de la no reelección, durante el mandato del gobernador Jara ocupó la Jefatura de
Operaciones Militares. Sin embargo, cuando Álvaro Obregón presenta sus intenciones
para reelegirse como presidente el general Gómez junto con el general Francisco R.
Serrano buscaron hacerle frente a Obregón; además, durante este proceso se vivía la
guerra cristera y el general Gómez se interesó por el respeto de las religiones con
independencia entre el Estado y la Iglesia. Finalmente, en el mes de octubre el general
Arnulfo es traicionado por Gonzalo Escobar y Jesús M. Aguirre en Ayahualulco, siendo
fusilado el 4 de noviembre de 1927 en Teocelo.101
101
http://www.memoriapoliticademexico.org/Efemerides/6/23061927.html;
http://plumaslibres.com.mx/articulo/arnulfo-r-gomez-nuevamente-fusilado/ (Consultados el 29 de marzo de 2015).
56
Con la muerte del general Gómez la rebelión es sofocada, al año siguiente
Obregón es electo presidente de la República, pero es asesinado. Mientras tanto, en
Veracruz, Jara ya no es gobernador por lo que es elegido uno interino, más tarde
mediante las elecciones es electo gobernador Adalberto Tejeda tras ser secretario de
Gobierno; para 1929 el país y el estado sufrieron las consecuencias de la depresión
económica.
La crisis del gobierno jarista se debió porque dejó de recibir las regalías por parte
del Gobierno Federal (petroleras, estancias de reos federales, etc.), esto hizo que el
estado dejara de recibir el presupuesto por lo que se vio imposibilitado de solventar los
gastos presupuestales, afectando a su vez el sueldo de los maestros y el de los
funcionarios.102 Al mismo tiempo, el gobierno de la República, a través de la Secretaría
de Industria, Comercio y Trabajo detuvo las acciones para recuperar los adeudos de las
empresas petroleras y estorbó los embargos que el gobierno estatal promovió hacia estas
compañías. A pesar de esto, el gobierno jarista emprendió una campaña a través de los
licenciados Eugenio Méndez y Francisco Escudero para que las compañías petroleras
respondieran por los daños causados al violar los estatutos gubernamentales por
establecerse en tierras que no les competían.103
Maples Arce expuso también que pudo haberse promovido la crisis del gobierno
de Jara porque éste apoyaba a los enemigos de Obregón y Calles. Además el erario
veracruzano fue disminuyendo ocasionando que la Legislatura local se dividiera
provocando que algunos nombraran gobernador a Roberto A. Morales, quien era
secretario particular del jefe de operaciones militares en el estado, Jesús M. Aguirre, y
otros que se mantuvieron fieles al gobierno constitucional del general Jara.104
Heriberto Jara Corona no pudo controlar la crisis, las deudas ascendían a cinco
millones de pesos y se debían pagos a los acreedores del gobierno, a maestros y a
102
MAPLES Arce, Manuel. “El gobierno del general Heriberto Jara Corona y su crisis” en GARCÍA Díaz, Bernardo.
Documentos, testimonios y crónicas de la revolución mexicana en Veracruz (Antología), Secretaría de Educación de
Veracruz, México, 2010, pp. 252-253.
103
MAPLES. Ibíd. pp. 254-255.
104
MAPLES. Ibíd., p. 255.
57
empleados por lo que pasó a ser un problema político que acabó con su gobierno. 105 Fue
destituido de su cargo en septiembre de 1927 y en su lugar se nombró a Roberto A.
Morales, estuvo en el cargo poco tiempo ya que al no ser veracruzano de nacimiento la
Constitución local no lo aprobó, nuevamente desaparecen los poderes en el estado y es
designado como gobernador el profesor Abel S. Rodríguez, oriundo de Xalapa, en el mes
de octubre de ese año. El nuevo gobernador interino convocaría a elecciones
constitucionales y esto fue apoyado por el presidente Plutarco Elías Calles y el secretario
de Gobernación, Adalberto Tejeda.106
2.2 Un gobierno interino en Veracruz (1927-1928)
El periodo de Abel S. Rodríguez como gobernador interino sería de octubre de 1927 a
noviembre de 1928 cuando se llevaran a cabo elecciones. Durante su gobierno la ley
Calles siguió su curso y todo seguiría prácticamente igual en cuanto a ese tema. En el
estado se cumplió con la disposición federal pero siguieron las protestas y
desobediencias por parte de los católicos, si bien las iglesias permanecieron cerradas,
en los domicilios particulares llegaron a celebrarse misas oficiadas por los sacerdotes
que se rehusaban a abandonar el estado o a registrarse ante el padrón.
Como ya señalamos, la Iglesia en Veracruz no propició una revuelta como se hizo
en otros puntos del país, en gran parte porque el obispo Rafael Guízar y Valencia no lo
permitió y se enfocó únicamente a profesar su culto en vez de instigar en la política;
además, el obispo rechazó las acciones que la Liga Nacional Defensora de la Libertad
Religiosa había tomado; el obispo Guízar expresó: “…yo no fui partidario del boicot
porque lo veía como una lucha civil que debilitaba al pueblo… no veo posibilidades de
105
BLÁZQUEZ Domínguez, Carmen. “Informe del Gobernador del Estado Abel S. Rodríguez. Septiembre 1927 a
septiembre 1928”, en Estado de Veracruz. Informe de sus gobernadores. 1826-1986, Tomo XI, Gobierno del Estado
de Veracruz, Xalapa, 1986, p. 6060.
106
Ibíd. p. 6060; LÓPEZ Escalera, Juan. “Desaparición de los poderes” en Historia del Poder Legislativo y de los
Gobernadores del Estado de Veracruz-Llave, Ed. Arte y Letra, Veracruz, 1971, pp. 112-113.
58
éxito, ya que los cristeros carecen de dinero, de armas y del apoyo de Estados
Unidos…”.107
Por causa de la ley, desde mayo de 1927 a mayo de 1929 el obispo dejó del país,
Tejeda que fungía como secretario de Gobernación se encargó de que su salida fuera
con las mejores condiciones, el retorno del obispo coincide cuando Tejeda era
gobernador de Veracruz; a pesar del exilio Guízar siguió estando presente en la vida
religiosa de los veracruzanos y desde el extranjero coordinaba las actividades de su
diócesis. Sostenía que la defensa de la Iglesia dependía de la fuerza moral sin llegar a la
violencia, no tenían que volverse enemigos de las autoridades civiles pero sí tenían que
resistir cuando se atacaba la fe.108
Durante los dos años que se mantuvo en el exilio las relaciones entre la Iglesia y
el Estado se volvieron tensas, la crisis que atravesaba al país hacía más enérgica la ley
Calles. La única medida de resistencia fue la desobediencia de la ley anticlerical, en
algunos puntos del estado se realizaban misas clandestinas en casas particulares. El
gobierno no podía controlar estas acciones ya que no sabían en qué casa se oficiaba el
culto, por lo que dependían de la vigilancia de algunos vecinos que apoyaban al gobierno,
cuando se violaba la ley daban aviso a las autoridades y enviaban a la policía para
arrestar a quienes infringían el decreto federal.
El gobierno utilizó a la Junta de Administración Civil para llevar a cabo las
disposiciones gubernamentales, de esta manera al tener controlado los ayuntamientos
era más factible el cumplimiento de las leyes. Estas Juntas se establecieron en 1914 con
la intención de controlar al municipio y realizar las funciones propias del Ayuntamiento
como recabar impuestos y tomar decisiones políticas.109 Durante la gestión de Tejeda el
control de los municipios fue vital para que su gobierno fuera efectivo, esto se desarrollará
107
ANTONIO Peñalosa, Joaquín. “Vuelven las catacumbas” en Rafael Guízar a sus órdenes, Ed. Rafael Guízar y
Valencia, Xalapa, 1995, p. 160.
108
Ibíd. p. 161; BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, pp. 239, 246; WILLIMAN. “La Iglesia y el Estado…”, Op. Cit., 1976,
p. 75.
109
JUÁREZ Martínez, Abel. “Especulación y crisis en el centro de Veracruz, 1915” en Anuario, Universidad
Veracruzana, Centro de Investigaciones Históricas, No. 6, Jalapa, octubre de 1989, p. 240.
59
más adelante; sin embargo en el mandato de Abel S. Rodríguez, la Junta también fue
importante para la política.
Los vecinos que no informaban de las acciones de los católicos cuando violaban
la ley eran sancionados, por lo que en cuanto tenían conocimiento y no deseaban ser
acreedores de una multa denunciaban los actos, aunque algunos tomaban el riesgo y
pese a las sanciones practicaban el culto o prestaban su casa. No sólo los católicos
sufrían de sanciones, sino que también los protestantes, como fue el caso de una casa
ubicada en la calle Sur 10 No. 63 de Orizba, la cual se inspeccionó porque se oficiaba
una misa por el presbiteriano inglés Eglón Harris, por lo que el gobierno de Veracruz pidió
al Ayuntamiento que hiciera la investigación correspondiente y castigara a los culpables
con el apoyo de la policía.110
Jean Meyer fundamenta que el hombre vive en primera instancia de la sociedad;
en un país como México la religión pertenece a la cultura del pueblo y la modela, por lo
que para la mayoría de la población es una garantía de supervivencia mental de dignidad
y de esperanza contra todo, llegando a ser una forma de patriotismo, esta fue la razón
por la que la Iglesia se adaptó a la secularización y a la crisis porque conservó su base
popular.111
La crisis entre la Iglesia y el Estado se vivía de diferentes maneras en México, si
bien la religión se sostuvo de la sociedad, las dimensiones políticas y económicas fueron
variadas, además de que había diversas vidas religiosas en diferentes estados:
protestantismo, masonería, anticlericalismo y ateísmo revolucionario; de esta manera, lo
que sucedió en Oaxaca respecto al problema religioso en esos años no fue igual que en
Tabasco o Jalisco.112 Lo mismo aplica para el caso veracruzano, las circunstancias fueron
distintas en comparación con otros estados del país, en parte debido a que la política fue
decisiva a esta situación, la radicalidad política jugó un papel importante.
110
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del Subsecretario de Gobierno E. González Aparicio al C.
Presidente de la Junta de Administración Civil, Jalapa-Enríquez, 7 de marzo de 1928; AMO. Ibíd., del Pte. de la H.
Junta Isaac J. Barragán al Subsecretario de Gobierno del Estado, Orizaba, 10 de marzo de 1928; AMO. Ramo Gobierno,
Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Presidente de la H. Junta de Admón. Civil Isaac J. Barragán al C. Inspector
Gral. de Policía, Orizaba, 13 de marzo de 1928.
111
MEYER. “Resistencias católicas…”, Op. Cit., 2013, pp. 364-365.
112
MEYER. Ibíd., p. 364.
60
Sin embargo, a pesar de que cada estado vivió la crisis política-religiosa de manera
diferente (al parecer) los católicos se organizaron para hacer frente al anticlericalismo, de
esta manera se forman el ejército cristero y grupos religiosos, mientras que el gobierno
se respaldaba en los funcionarios. A pesar que la guerra se libraba en el centro-occidente
del país, algunos grupos católicos viajaron por diferentes entidades para apoyar a la
religión católica, ya sea para distribuir propaganda o recaudación de fondos para sostener
la guerra.
Un grupo proveniente de Jalisco recolectaba fondos para destinarlos a la rebelión
de esa entidad, en Veracruz se alertaron a las autoridades para aprehenderlos lo más
pronto posible, además se puso vigilancia extrema a la salida de los fondos católicos. 113
En Orizaba se recibió el aviso por lo que inmediatamente se notificó la noticia a la policía
municipal.114 Así, en caso de sorprender a estas personas serían arrestadas y puestas a
disposición de las autoridades correspondientes; ahora no sólo tenían que vigilar a los
católicos que practicaban el culto clandestino, sino que también debían de vigilar a los
visitantes que llegaban a la ciudad y todo aquel que pudiera ser sospechoso. Todo con
el fin de evitar que elementos católicos hicieran colectas de fondos para destinarlos a la
rebelión del estado tapatío.115
2.2.1 Desobedientes de la ley: el caso de Paulino Martínez Pacheco y agraviados
Algunas ciudades del estado donde los católicos desobedecieron fueron Córdoba,
Orizaba y Xalapa, pero en lo que compete a esta investigación se desarrollará la última
ciudad. Cuando se daba aviso a las autoridades de que se realizaba una misa en un
domicilio, los presentes tenían “vigilancia” para anunciar cuando la policía iba en camino,
por lo que en ocasiones no se podía arrestar a las personas ni al cura ya que escapaban.
La casa del señor Paulino Martínez era utilizado como recinto religioso, cuando se dio
113
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Circular No. 42, el secretario de Gobierno al C. Presidente
de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 8 de marzo de 1928.
114
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del presidente de la Junta Isaac J Barragán al C. Inspector
Gral. de Policía, Orizaba, 24 de marzo de 1928.
115
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Inspector Gral. de Policía Teniente Coronel
Víctor M. Guajardo al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 3 de abril de 1928.
61
aviso a las autoridades y se procedió a la detención de los asistentes la mayoría escapó
por lo que únicamente se confiscaron los objetos religioso que estaban ahí. 116
A pesar de que las personas escapaban al momento de que la policía arribaba al
lugar para detenerlos por la violación del artículo 130, en ocasiones eran aprehendidas
en el momento o buscadas por las autoridades para rendir cuentas ante la justicia. En
primer lugar se arrestaba al dueño o dueña de la casa donde se oficiaba la misa y al cura,
al igual que a las personas que eran devotos católicos y posteriormente a los presentes;
después de que se supo de la misa en casa de Paulino Martínez, treinta personas
resultaron detenidas y esperaban el dictamen del gobierno para castigar a los
concurrentes, en especial al dueño de la casa, María de Jesús García, Josefina Merino,
Juana Flores, Antonia González, Prisca López, Francisca Ochoa, Rosa Montiel, María
Guadalupe Flores, Felipa Ramírez y Francisca Tello.117
La casa en cuestión tenía como dirección la Av. Morelos (hoy Poniente 7) No. 223,
además el dueño, Paulino, era de origen español, se dio la noticia a las autoridades de
que ahí se estaba celebrando una misa y al llegar las autoridades el cura ya no se
encontraba porque huyó del lugar de los hechos, pero las personas arriba mencionadas
fueron puestas a disposiciones de las autoridades.118 Por esta razón el caso fue asignado
a las autoridades judiciales competentes, siendo el Juez 2°Municipal en Funciones
Federales encargándose del señor Martínez Pacheco y del Distrito las demás
personas.119
Como pudieron apreciar fueron mujeres las que fueron detenidas, desde este
punto de vista pueden ser parte del grupo de las “Damas Católicas” que tanto en el país
como en el estado tuvieron presencia para hacer frente a la ley anticlerical. Su principal
característica era hacer propaganda católica, apoyar a los sacerdotes y católicos en la
116
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-554, Exp. 200, Telegrama, del Presidente de la
Junta de Administración Civil Pedro Gómez C. al Sr. Cor. Isaac J. Barragán, Orizaba, 7 de abril de 1928.
117
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-554, Exp. 200, Telegrama, del Presidente de la
H. Junta al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 9 de abril de 1928.
118
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del Inspector Gral. de Policía Teniente Coronel Víctor M.
Guajardo al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 7 de abril de 1928.
119
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Subsecretario de Gobierno Lic. E. González
Aparicio al C. Presidente de la Junta de Admón. Civil, Jalapa-Enríquez, 9 de abril de 1928; Ibíd. Del Presidente de la H.
Junta Pedro Gómez C. al C. Secretario de Gobierno del Estado, Orizaba, 18 de abril de 1928.
62
resistencia para seguir practicando el culto o buscar que la ley se aboliera. Sin embargo,
no se consta que estas mujeres pertenecieron a dicho grupo, pero se pudo comprobar
que radicaban en la ciudad y otras partes del estado y el país, además fueron partícipes
de una lucha legal que se llevó a cabo a través del amparo.
Esta detención de personas causó conmoción entre los asistentes y las
autoridades, no obstante se levantó un acta que describía los hechos, que fue elaborada
por el Comandante de la Policía, Luis Martínez G., puesto que el Comisario de Guardia
de la Inspección General de Policía Juan Hernández describió lo que sucedió: “…ordenó
que entraran al domicilio encontrando un altar, un sagrario con copón lleno de ostias, una
custodia y un cáliz”. Como se dijo anteriormente el cura no fue arrestado, por lo que se
arrestaron a los demás, sin embargo llegó el General Edmundo Durand, Jefe del 5° Sector
Militar, ordenando la liberación de las personas.120
Esta acción sorprendió a los policías que efectuaban el arresto, pero su primera
reacción fue de no dejarlos libres, el General Durand ordenó que de no hacerlo se
arrestaría al Comandante Martínez, la confusión ente los policías se presentó, no sabían
qué hacer, por lo que se pidió la ayuda de la Inspección de Policía, finalmente Durand
dijo que soltaran a las personas porque ya había hablado con el Inspector General de
Policía. Sin embargo, se procedió a interrogar a los policías que llevaron a cabo el arresto
preguntándoles por qué dejaron libres a las personas que violaron la ley de cultos, estos
respondieron que el General Durand dijo: “ya todo está arreglado, ya ustedes se pueden
ir (dirigiéndose a las detenidas) y yo soy el responsable de lo que resulte”.121
Algunos policías esperaban la orden directa del Teniente Coronel Inspector
General de Policía, desobedeciendo en primera instancia a Durand, pero éste respondió:
“que se valían de la fuerza y que para la fuerza estaba la fuerza, habiéndole ordenado a
su acompañante del coche hablara por teléfono pidiendo una escolta de diez soldados
para que se llevara a efecto la orden”. Los asistentes que se encontraban y escuchaban
las declaraciones del General Durand comenzaban a irse, algunas nuevamente entraron
120
121
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Acta de los hechos elaborada el 7 de abril de 1928.
Ibíd. Acta de los hechos elaborada el 7 de abril de 1928.
63
a la casa; se remitieron copias del acta al C. Presidente de la H. Junta de Administración
Civil y al C. Agente Primero del Ministerio Público.122
Sin embargo, pese a que las personas fueron liberadas algunas se valieron del
amparo contra los actos del presidente municipal y de las autoridades para asegurar su
libertad para que ellos no “violaran” los derechos de quienes fueron agraviados. El
amparo fue promovido en la ciudad de Veracruz por Josefina Merino, una de las
integrantes cuando la casa fue sorprendida por la policía, a favor de sí misma, Paulino
Martínez Pacheco, Rosa Montiel, Francisca Ochoa, Juana Flores, María de Jesús García,
Guadalupe Flores, Prisca López, Antonia González, Francisca Tello, Felipa Ramírez y
Cleofas Moreno. Si bien estas personas estaban conscientes de su detención, debían de
esperar al menos 72 horas después de haberse dictado el amparo para esperar el fallo,
citando a los involucrados primero el 13 de abril a las 11 de la mañana y después el 30
de mayo a las 9 de la mañana para la audiencia.123
El gobernador Rodríguez respondió
que
debían
de efectuarse
penas
administrativas infractoras a quienes violaron la ley federal de cultos.124 Las autoridades
procedieron al cumplimiento de la petición del gobernador, sin embargo, Paulino Martínez
Pacheco salió libre bajo fianza amparado por el Juez 2° Municipal, mientras que las
detenidas se encuentran en la Inspección de Policía donde se esperaba el dictamen de
la autoridad, asimismo se pone a disposición el cuerpo del delito recogido por la policía
(custodia, copón con ostias, sagrario y cáliz).125 La liberación de Paulino se debió porque
122
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Acta de los hechos elaborada el 7 de abril de 1928; del
Inspector General de Policía Víctor M. Guajardo al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 8 de abril de
1928.
123
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Acta de juicio de amparo, del Juez Numerario de Distrito
Francisco Montellano Lanz al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 8 de abril de 1928; Ibíd. Telegrama, del
Lic. Francisco Montellano Lanz al C. Presidente Municipal, Veracruz, 8 el 9 de abril de 1928, de ayer depositado hoy.
124
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Telegrama, del gobernador provisional Abel S. Rodríguez
al Presidente Municipal, Jalapa, 10 el 11 de abril de 1928, de ayer depositado hoy.
125
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del Pte. de la Junta de Admón. Civil Isaac J. Barragán al
C. Juez 2° Municipal, Orizaba, 9 de abril de 1928; Ibíd. Telegrama, del presidente de la Junta de Admón. Civil Isaac J.
Barragán al C. Juez Numerario de Distrito, Orizaba a Veracruz, 11 de abril de 1928.
64
también su esposa, Amada Montiel, interpuso un amparo en el cual describía que se
violaban los artículos 14 y 16 constitucionales.126
Amada Montiel se presentó ante el Segundo Juez Municipal de Primera Instancia
en Asuntos Federales para promover el amparo a favor de su esposo contra actos del
presidente de la Junta de Administración Civil, Oficial Judicial e Inspector de Policía, todos
de la ciudad de Orizaba por violar los artículos antes mencionados, el acta que se
presentó fue narrada por Amada, diciendo lo siguiente:
HECHOS:
 Tiene citado esposo tiene en su recámara un pequeño oratorio para uso particular, además guardaba
ahí un copón de oro, una custodia y un cáliz, valuados en más de mil pesos, que estaban en vías de
adquirir.
 Hoy como a las ocho de la mañana, estando en reunión íntima con familiares y amigos, llegaron
como diez agentes de la policía, dependientes de la Inspección de la misma, según indicaron, y sin
órdenes de la autoridad se introdujeron a las habitaciones recogiendo los objetos, aprehendiendo a
mi esposo.
 No se ha dictado orden de detención ni orden de cateo, por lo cual es atentatorio el procedimiento
de la policía, que ha infringido la ley al aprehender al esposo y recogiendo objetos.
 Al llegar la policía no había ningún sacerdote, ni siquiera de visita, mucho menos se ejercía un acto
de culto religioso que pugnara contra las disposiciones gubernamentales.
DERECHO:
 Nadie puede ser privado de su libertad o de sus propiedades, posesiones o derechos, sino mediante
juicio ante los tribunales previamente establecido, en el que se cumplan las formalidades denúnciales
del procedimiento, nadie puede ser molestado en su persona, familia o domicilio. No podrá librarse
ninguna orden de aprehensión o detención a no ser por la autoridad judicial, sin que proceda
denuncia, acusación o querella de un hecho determinado que la ley castigue con pena corporal.
Artículos 14 y 16 Constitucionales.
 Proceden las suspensiones de acuerdo con lo prescripto por los artículos 54 fracción II, 55 fracción
I y 56 de la ley reglamentaria de los artículos 103 y 104 Constitucionales.
 Para cumplir con lo prevenido por la ley paso a especificar:
A. Como autoridad responsable al C. Presidente de la Junta de Administración Civil como jefe nato
de la Policía.
B. Como autoridades ejecutoras el Inspector de Policía, agentes especiales de la misma.
C. Como fundamento de la queja el artículo 1° fracción I de la ley de Amparo.
D. Como acto reclamado la detención injustificada de mi citado esposo Paulino Martínez Pacheco,
y el apoderamiento de las prendas que he hecho mención, actos llevados a contra lo
expresamente prevenido por los artículos infringidos.
E. Y como garantías violadas las que consignan los artículos 14 y 16 Constitucionales.
 Por lo expuesto y con fundamento de los artículos 1° fracción I, 2, 3, 12, 3(x), 46, 53 a 56 de la ley
reglamentaria de amparo, pido a Ud., atentamente se sirva acordar:
1. Se me tenga por presentada con este escrito y representación de mi citado esposo que se halla
incomunicado contra toda ley en la Inspección de Policía, promovido juicio de amparo por los
actos atentatorios expreso y de los cuales ya se dirigió poniéndolos en conocimiento del Cónsul
de España, por tratarse de un extranjero.
2. Decretar por el término legal la suspensión acto reclamado.
126
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del Juez 2° Municipal en Funciones Federales Julio Bellos
al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 7 de abril de 1928.
65
3. Resolver en definitiva, que la justicia de la nación me ampara y protege contra los actos de que
me quejo por ser así de justicia que impetro, y protesto con lo necesario y al Juzgado mis
respetos, al que suplico se sirva poner al detenido a disposición de la Justicia Federal a fin de
que quede expedito en el ejercicio de sus derechos y pueda solicitar su libertad provisional.
 Señalo para que conozcan de ante juicio al C. Jue Supernumerario de Distrito.
Orizaba, Ver. Abril siete de mil novecientos veintiocho. (Firma de Amada M. de Martínez) 127
Del mismo modo, Josefina Merino promovió dos amparos por las violaciones de los
artículos 14 y 16 constitucionales, bajo los fundamentos de los artículos 48 y 73, 56 y 59
de la ley de amparo. El primero admitía la demanda de amparo y el segundo pedía el
informe de los sucesos, pedían la suspensión de los actos cometidos a quienes se
encontraban en la casa del señor Martínez Pacheco y a él mismo. 128 Posteriormente al
levantamiento de las actas, el Juez Montellano mandó una notificación al demandado, el
cual dice que el juicio seguirá su curso conforme a la ley por violación de los artículos 14
y 16 Constitucionales, para que se anexe a la demanda que se presentó.129
Sin embargo, también los agraviados presentaron una demanda donde detallaban
lo que sucedió:
HECHOS:
El día de ayer, con motivo del sábado de Gloria, nos reunimos en la casa del señor Paulino Martínez
a rezar en su oratorio particular, cuando de momento se presentó el C. Inspector de Policía de esta
ciudad con otros agentes aprehendiéndonos así como al dueño de la casa señor Martínez Pacheco,
en el momento en que la policía llegó el señor Pacheco estaba en su escritorio arreglando sus
asuntos y su caposa en el despacho de la casa comercial, quien fue la que nos permitió que
entráramos al oratorio a rezar. Al hacer la aprehensión no se encontró sacerdote ninguno que
estuviera con nosotros, para que pudiéramos haber infringido alguna disposición del Superior
Gobierno de la Nación, por lo tanto creemos no tener culpa alguna para que se nos haya detenido y
mucho menos incomunicadas, cosa prohibida por nuestra Constitución General de la República y,
solo hasta en la tarde se nos concedió el haber puesto el telegrama que dirigimos a Ud. en demanda
de amparo.
Sabemos que la Inspección mandó un acta que levantaron a su gusto, en la que hacen aparecer
que recogieron unos útiles religiosos; pero estos son del Sr. Mayer quien se los dejó al dueño de la
casa en calidad de guardados, y sobre los que se funda dicha Inspección para hacernos cargos.
Entre ocho y nueve de la mañana del día sábado fue la aprehensión, hora en que el catolicismo no
celebra misas, para que si se hubieran encontrado que estaban diciendo alguna pudiéramos tener
culpa alguna, y solo como hemos dicho estábamos orando.
127
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Acta donde pide amparo de la justicia por federal por
violación de garantías individuales, de Amada M. de Martínez al C. Juez Segundo Municipal, Orizaba, 7 de abril de
1928.
128
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Telegrama, de Josefina Merino al C. Juez Numerario de
Distrito, Orizaba, 7 de abril de 1928; Ibíd. Acta de Juicio de Amparo, de Francisco Montellano Lanz al C. Presidente
Municipal de Orizaba, Veracruz, 8 de abril de 1928.
129
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Notificación, del Juez Numerario de Distrito Francisco
Montellano Lanz al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 9 de abril de 1928.
66
DERECHO:
Con los hechos que hemos expuesto constituyen una violación a las garantías individuales que nos
otorga nuestra Constitución, pues esta faculta a todos los habitantes tener sus creencias y libertad
de cultos, cuando estos sean lícitos, se ha cometido en nuestras personas un atropello incalificable,
porque la orden de aprehensión no fue dada por autoridad competente y el cateo que hicieron en la
casa también fue un atropello, pedimos el amparo de la Justicia Federal.
No se nos pueden hacer otros cargos pues en el lugar donde nos aprehendieron solo fuimos a orar
con motivo de Semana Santa, de la manera más atenta y ya que toda detención no puede exceder
de setenta y dos horas que cumplimos el día de mañana, apoyadas en las disposiciones de los
artículos relativos a la ley de amparo y ampliando nuestro telegrama del día de ayer a Ud. C. Juez
Numerario de Distrito pedimos se sirva a ordenar se nos ponga en libertad de la prisión injustificada
que estamos sufriendo, pues no queremos pedir se castigue al que ha cometido el atropello que bien
pudiéramos hacerle, ya que ha violado las disposiciones de los artículos 14 y 16 Constitucionales y
que nadie más que él es el culpable.
Protestamos a Ud. nuestras atenciones y respetos.
Orizaba, Ver. Abril ocho de mil novecientos veintiocho. 130
El gobierno se valió de la Constitución para cerrar los templos, las personas agraviadas
utilizaron la vía legal para defenderse, alegando que sus derechos fueron violados. Sin
embargo es necesario observar que en la declaración de la esposa de Paulino Martínez
detalla que los objetos religiosos estaban por ser adquiridos, mientras que en la anterior
se dice que pertenecían a otro señor y estaban en calidad de préstamo. Los amparos
fueron de gran ayuda porque era la forma de defenderse de la ley, se acudía a ellos
cuando la persona sentía que su derecho era violado. Pudiera ser que esta fue la manera
en que las autoridades dejaron ir a los detenidos, ya que no se encontró culpable alguno.
El caso de Paulino Martínez Pacheco es importante, ya que las autoridades se
vieron sumamente involucradas porque se trataba de un extranjero, por lo que el nueve
de abril se procedió a la interrogación de cada detenida sobre el asunto si estaban o no
oficiando misa y saber la razón del por qué el General Durand ordenó su libertad:
Tabla 1. Toma de declaración de los detenidos.
Nombre
Paulino Martínez
Pacheco
Procedencia
España
Declaración
No eran actos religiosos, era un rosario
que lo rezaban veinte o treinta señoras y
niñas, en un oratorio en los altos de su
casa en una pieza que se destinaba
exclusivamente para ello. Los objetos
encontrados son de él, que la piedra de
oficiar es del padre Mayer, dijo que todas
130
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. De los subscritos al C. Juez Numerario de Distrito,
Orizaba, 8 de abril de 1928.
67
María de Jesús García
Oaxaca
Josefina Merino
Ixhuatlán
Juana Flores
Jalisco
Antonia González
Orizaba
Prisca López
Orizaba
Francisca Ochoa
Michoacán
las personas son de Orizaba, que desde
hace un año vienen a las reuniones
religiosas en su casa.
Que no la invitaron para asistir a dicho
acto religioso, sino que iba de pasada
cuando traían a los detenidos y la
enrolaron en el grupo sin culpa alguna.
Que no la invitaron y que si entró fue por
curiosidad,
siendo
que
los
acontecimientos la sorprendieron, que si
ella entró fue porque le informaron sobre
el particular, adentro había mujeres y vio
que en un departamento había bancas.
Que sí se celebraba acto religioso,
asistió tres días consecutivos y tenía a su
cargo “el rosario o lo que se ofreciera”,
solo vio entrar una vez al padre Mayer,
reconoce los útiles de oficiar, invitada por
Amada Montiel.
Asistía desde hace una semana, dijo que
el departamento estaba destinado para
el culto, dijo que la participación del
General Edmundo Durand fue porque al
preguntar sobre las detenidas se
disgustó sobre el procedimiento de
aprehensión que se llevó a cabo en la
casa del Sr. Martínez Pacheco.
Visita esa casa desde hace dos años y
que el día de los acontecimientos fue
parte del rosario y que antes no había
asistido a ellos, vio al Gral. Durand que
iba en un automóvil y que se detuvo para
hablar con la policía y vio cuando
quedaron libres las demás personas,
ignora por quien fueron puestas en
libertad.
Tenía tres o cuatro días de concurrir allí
a rezar el rosario, invitada por la señora
Amada Montiel, no sabe si algún
sacerdote oficiaba allí, dijo que el local
estaba destinado a oficiar el culto y se
encontraban
alrededor
de
veinte
personas, dijo haber visto al Gral. Durand
en el automóvil y que se detuvo para
hablar con la policía y que las personas
68
Rosa Montiel
Huamancla
María Guadalupe Flores
Jalisco
Felipa Ramírez
Oaxaca
Francisca Tello
Tequila
que fueron liberadas se debió a
instancias del General.
No sabía cuántas personas había en el
lugar y ningún sacerdote oficiaba, no
conoce la procedencia de los objetos
recogidos, desde hace tiempo rezaban el
rosario, dijo que el Gral. Durand intervino
con la policía para que las dejaran libres.
Que solo había asistido dos días y no
completos, no oficiaba ningún sacerdote,
ignora a quien pertenecen los objetos,
para asistir no fue invitada por nadie, no
sabía si el departamento era para el fin
religioso, el Gral. Durand ordenó su
libertad.
Se encontraba allí porque se encontró
con unas amistades, concurrió tres veces
a rezar, no sabe si oficiaba algún
sacerdote, ignora a quien pertenecen los
objetos.
Que nunca había ido a la casa de Paulino
Martínez Pacheco, no supo que se
hacían actos religiosos y si fue detenida
hace constar que fue estando dentro de
la Inspección General de Policía y no en
la casa indicada, esto le sucedió por ir
siguiendo a la señora Felipa Ramírez
que es su amiga, dijo que iba por hojas
de naranjo.
Fuente: AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121.
Con esas declaraciones se comprobó que la actitud del General Edmundo Durand fue
porque estaba inconforme con el procedimiento que hizo la policía al momento de la
detención. Además se percataron de la presencia de mujeres que venían de Jalisco, uno
de los estados que estaba envuelto en la guerra cristera y que se había ordenado
vigilancia de las personas que procedían de esta entidad al buscar apoyo económico para
financiar su guerra. A pesar de sus declaraciones fueron detenidos y después hicieron su
acta donde pedían su liberación, como se explicó anteriormente.
Tanto los quejosos como los demandados mostraban sus versiones sobre los
actos, los jueces fueron quienes dictaron el fallo; por ello se hizo un documento donde se
mostraban las actas de los hechos en la cual se narraban todo lo que ocurrió, tanto de la
69
parte quejosa como de las autoridades. En esa acta, el C. Agente del Ministerio Público
Federal de Orizaba remitió lo actuado al Juzgado de Distrito, por lo que lo resolvió y firmó
el C. J. Bellos, Juez 2° Municipal de esta ciudad en Funciones Federales. Asimismo la H.
Junta de Administración pedía el informe justificado para que surta los efectos legales.131
La resolución que se dictó fue a favor del C. Paulino Martínez Pacheco, quien fue puesto
en libertad bajo caución de $2,000.00 otorgados por el señor Filogonio Alvarado y a
disposición del C. Juez Numerario de Distrito el detenido señor Martínez Pacheco.132
Después de que el General Durand dio la orden de liberar a las personas, estas
se dirigieron a la Inspección de Policía a pedir los objetos religioso que se habían
confiscado, como confesaron que Durand los dejó ir, el C. Inspector de Policía Teniente
Coronel Víctor M. Guajardo, ordenó su detención y las puso a disposición de la
Presidencia. Se interrogaron a las mujeres detenidas y dos confesaron que vinieron a
misa, por lo que las autoridades corroboraron que efectivamente se estaba llevando a
cabo el culto religioso.133
Asimismo, las autoridades sospecharon que de las limosnas que se recolectaron
se estaban fomentando revoluciones, ya que se comprobó que dos personas provenían
del Estado de Jalisco, se confesó desde hace tiempo se celebran misas en la casa de
Paulino Martínez Pacheco, pero que los objetos consignados solo son usados por
sacerdotes. Se estipula además que el General Durand tuvo una participación directa de
la liberación de las presuntas culpables que celebraban actos religiosos, no en la
recámara de Martínez Pacheco, sino en dos departamentos arreglados para oficiar. 134
Las autoridades creen que las dos personas que confesaron ser de Jalisco, una
dio como dirección el curato de Los Dolores y la otra da un domicilio de esta ciudad pero
no vive allí, vinieron exclusivamente a recoger limosnas, quizás para fomentar la
131
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Informe sobre el juicio de amparo, del Presidente de la
H. Junta Isaac J. Barragán al C. Juez Numerario de Distrito de Veracruz, Orizaba, 10 de abril de 1928.
132
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Informe sobre el juicio de amparo, del Presidente de la
H. Junta Isaac J. Barragán al C. Juez Numerario de Distrito de Veracruz, Orizaba, 10 de abril de 1928; Ibíd., del Juez 2°
Municipal en Funciones Federales Julio Bellos al C. Presidente de la H. Junta de Administración Civil, Orizaba, 9 de
abril de 1928.
133
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Informe sobre el juicio de amparo, del Presidente de la
H. Junta Isaac J. Barragán al C. Juez Numerario de Distrito de Veracruz, Orizaba, 10 de abril de 1928.
134
Ibíd.
70
revolución de ese Estado, asimismo confesaron venir únicamente a las misas que ellas
sabían se celebraban en diversos lugares de esta ciudad.135 Con las declaraciones de
las detenidas se pudo comprobar que hasta cierto punto se infringía la ley, por lo menos
el caso de las jaliscienses que tiempo atrás se había alertado de la presencia de católicos
provenientes de aquella entidad.
Finalmente, la resolución a favor de los detenidos se logró, por lo que el
comandante enterado de la disposición del Juez 2° Municipal ordenó su libertad.136
Aunque se dijo que aproximadamente treinta personas se encontraban presentes al
momento de la detención en la casa de Paulino Martínez, sólo las mujeres que se
mencionaron fueron detenidas. Sin embargo, como estas personas se ampararon ante
un Juez, lograron una resolución y se les liberó por caución con el precepto de violación
de las garantías individuales.137
Para los efectos legales que procedieran se les notificó a las partes involucradas
la resolución del juez, de este modo Paulino Martínez Pacheco y demás personas fueron
puestos a disposición de las autoridades competentes, siendo enterado el C. Gobernador
del Estado que fueron dispuestas al C. Juez 2° Municipal en Funciones Federales de
Orizaba.138 Los dos mil pesos que se pagó como fianza para la libertad de Paulino
Martínez también sirvieron para las mujeres que se encontraban detenidas.139
Queda claro que ambas partes, tanto la población como el gobierno, se valieron y
se respaldaron del recurso legal, unos para hacer cumplir la ley que era violada mientras
que otros para defender sus derechos si consideraban que eran violados; este recurso
legal fue necesario porque en cierta forma fue otra lucha, una resistencia que la población
de Orizaba utilizó cuando se sintieron atacados. Las acciones del gobierno fueron
135
Ibíd.
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del Comandante Luis Martínez G. al C. Presidente de la
H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 12 de abril de 1928.
137
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Cotejada el Secretario, Veracruz, 13 de abril de 1928;
Ibíd., del Juez Numerario de Distrito Francisco Montellano Lanz al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 13
de abril de 1928.
138
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del Lic. E. González Aparicio al C. Presidente de la Junta
de Administración Civil, Jalapa-Enríquez, 25 de abril de 1928.
139
AMO. Ramo Justica, Juzgados, Amparo. C.-650, Exp. 121. Del Presidente de la H. Junta P. M. D. L. Pedro Gómez C.
al C. Juez Numerario de Distrito de Veracruz, Orizaba, 13 de abril de 1928.
136
71
conforme a su conciencia, el hecho de irrumpir en una vivienda sin orden previa ocasionó
que un militar ordenara que todos fueran libres porque no era la forma correcta, esto hizo
que los amparos fueran el arma para defenderse al considerar que sus garantías eran
ultrajadas.
2.2.2 Los espiritistas, una breve participación en la política religiosa de Orizaba
Otro grupo, aunque no menos importante, fueron los espiritistas que practicaban sus
creencias de contactar y hablar con los espíritus de personas fallecidas, esta ideología
proviene de Francia en el siglo XIX representado por Allan Kardec, sobre esta corriente
se puede decir:
"El Espiritismo es una ciencia que trata de la naturaleza, el origen y destino de los Espíritus, así como
de sus relaciones con el mundo corporal."
Allan Kardec (Qué es el Espiritismo – Preámbulo).
"El Espiritismo realiza lo que Jesús dijo del Consolador prometido: conocimiento de las cosas, que hace
que el hombre sepa de dónde viene, a dónde va y por qué está en la Tierra; recuerdo de los verdaderos
principios de la ley de Dios y consuelo por la fe y la esperanza."
Allan Kardec (El Evangelio según el Espiritismo – cap. VI – ítem 4).140
En México la Sociedad Espírita de la República Mexicana fue formalizada en 1872 y en
su acta constitutiva quedaron registradas las firmas del general Refugio I. González
(fundador del periódico “La Ilustración Espírita”), Manuel Powers y Santiago Sierra, este
último hermano de Justo Sierra.141 A partir de este momento el espiritismo comenzó a
tener participación en el país siendo aceptado por la población, un personaje que es
conocido por haber practicado esta corriente es el revolucionario Francisco I. Madero.142
De este modo, los espiritistas llevan sus dogmas en un plano diferente al de la fe
católica. Sin embargo, en la ciudad de Orizaba los espiritistas eran minoría a diferencia
de los católicos o protestantes que habitaban allí, pero aun así practicaban sus sesiones
y debieron de acatar las disposiciones de la ley respecto a la práctica de cultos, cualquiera
que fuera. Es por ello los centros espiritistas que se encontraban en Orizaba también
140
http://www.espiritismoenmexico.org/index.php/que-es-el-espiritismo (Consultado el 12 de abril de 2015).
http://www.espiritismoenmexico.org/index.php/el-espiritismo-en-mexico/las-sociedades-espirita
(Consultado el 12 de abril de 2015).
142
Para mayor información véase a TORTOLERO Cervantes, Yolia. El espiritismo seduce a Francisco I. Madero,
CONACULTA-FONCA, México, 2003.
141
72
fueron dados a conocer a la autoridad municipal, en este caso eran tres que existían en
toda la ciudad a cargo del representante de la Federación Espirita Mexicana, Abraham
del Valle.143
Los Centros Espiritas, así llamados, se encontraban en la Calle Montiel No. 61 Int.
14, Poniente 9 No. 152 y Centro Espirita del Yute cuartos de mampostería No. 44; y si se
formaban más centros de éstos se tenía que notificar al Ayuntamiento. Lo que resulta
interesante de estos establecimientos es que habían más, pero el representante
aseguraba que son con fines de explotación y desprestigian a la “ciencia espiritista”,
llevándolos a un fanatismo más dañino que la Iglesia Católica, por lo que pedía facultades
para poder someter a esos Centros.144
Abraham del Valle pedía que se le otorgaran las facilidades para que interpusiera
su orden cuando se presentaran Centros que no cumplían los requerimientos, por lo que
la solicitud fue pasada del Ayuntamiento al Gobernador del Estado para que éste diera
su veredicto. La respuesta del gobierno veracruzano fue que no le concedían a Abraham
esas facultades que pedía, porque si los Centros no cometen faltas a la ley o al
reglamento de la policía el gobierno no podría autorizar al representante para que
interviniera en acciones que solo a las autoridades les compete. Posteriormente la
respuesta del gobierno fue dada a conocer al representante de los Centros Espiritistas.145
La participación de estos establecimientos no fue tan abierta como el de los
católicos, posiblemente por la minoría que representaban en la ciudad, pero acataron las
disposiciones del gobierno y no eran sancionados sino infringían la ley. Sus miembros
solo se abstuvieron en las reuniones y no se mezclaron en asuntos políticos, al menos
no hay documentos de disturbios ocasionados por esta corriente en la ciudad de Orizaba;
hasta cierto punto los espiritistas, como los protestantes, acataron la ley de cultos.
143
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 206. Del representante de la FEM
Abraham del Valle al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 26 de mayo de 1928.
144
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 206. Del representante de la FEM
Abraham del Valle al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 26 de mayo de 1928.
145
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 206. Del Secretario de Gobierno E.
Rosas al C. Presidente de la Junta de Admón. Civil, Jalapa-Enríquez, 8 de junio de 1928; Ibíd., del Presidente de la
Junta de Admón. Civil Severino Méndez a Abraham del Valle, Orizaba, 14 de junio de 1928.
73
2.2.3 La administración de las Juntas Vecinales
El principal motivo de las juntas era la vigilancia y custodia de los templos católicos o
protestantes –según sea el caso–, para ser parte de ese nombramiento tenían que ser
designados únicamente por la autoridad municipal bajo el consentimiento del gobierno
estatal. El nombramiento de estas juntas facilitó que el gobierno pudiera tener un mayor
control sobre los templos así como de los bienes que se encontraban en ellos, aunque
hubo ocasiones en que algunos integrantes desertaron por diferentes motivos, como no
llevarse bien con otros miembros o tener otras actividades que les imposibilitaba ejercer
bien sus funciones.
Los templos pasarían a ser parte de los Bienes Nacionales, por lo que se pedía un
registro de cada uno así como las condiciones que presentaban, en febrero de 1928 se
pidió un informe al presidente de Orizaba sobre los edificios y propiedades, incluyendo
los anexos de los templos, a su vez la noticia fue informada a la policía de la ciudad, ya
que en uno de ellos se aprovecharía para instalar una oficina de los Telégrafos
Nacionales.146
Por si fuera poco, los miembros de las juntas llegaron a tener desacuerdos , desde
su creación la única que cambió varias veces de integrantes fue la del templo de San
José de Gracia. Ahora el de Los Dolores presentaba una situación similar, un trabajador
de la junta de este templo, José María Hernández, presentó una queja, porque uno de
los representantes (Sr. Nieva) insultaba a él y a sus hijas, pero Nieva argumentó que
pagaba treinta y cinco pesos mensuales por su servicio y ofreció un departamento para
que viviera el trabajador, en cambio llevó a vivir también a sus tres hijas.147
A diferencia de las juntas católicas, las protestantes no hacían disturbios y sus
miembros pasaban desapercibidos porque no ocasionaban problema alguno, sólo
cuando se hacían cambios se les notificaban a las autoridades, como fue el caso del
146
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Jede de Oficina de Telégrafos Nacionales
Amado Toledano al C. Presidente de la Junta de Administración Civil, Orizaba, 14 de febrero de 1928; Ibíd., del
Presidente de la Junta al C. Vocal d Policía, Orizaba, 18 de febrero de 1928.
147
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Inspector de Mujeres Públicas al C. Presidente
de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 3 de abril de 1928.
74
presbiteriano Nicolás Cortés Esparza quien tomó posesión de la iglesia evangélica La
Santísima Trinidad, mientras que el Sr. Próspero Mendoza era el encargado de la junta
Vecina; decía cumplir los lineamientos de la Carta Magna en cuanto al artículo 130, de
este modo el presidente municipal le concedió que tomara el puesto como presbítero en
dicha iglesia.148
Para que las iglesias estuvieran bajo una mejor protección, la Oficina Federal de
Hacienda, bajo la aprobación de la Procuraduría General de la República, pidió a su cargo
los nexos contiguos de los templos, más no de las sacristías cuando estas formen parte
integrante de los mismos templos. La tarea para cumplir esta orden le fue asignada a la
junta vecinal de cada templo, de este modo la orden es pasada a los encargados por
parte de la autoridad municipal y aquellos proceden a cumplir, registrando cada uno de
los templos con sus respectivas construcciones contiguas para ser entregados a las
autoridades correspondientes.149
Tabla 2. Registro de los templos de Orizaba
Templo
San Antonio
San José de
Gracia
El Carmen
San Juan de
Dios
Informe
La sacristía forma parte de la casa anexa y que
las puertas selladas quedan dentro de la casa.
La persona que cuida habita la casa y se encarga
del aseo y la conservación del edificio.
No tiene anexos, las puertas fueron cerradas y
selladas por el C. Agente del Ministerio Público,
permaneciendo así hasta el día de hoy.
Los anexos fueron cerrados y sellados por el C.
Agente del Ministerio Público, permaneciendo
así hasta hoy, la Junta Vecinal no los recibió ni
tiene en su poder.
Tiene como anexo una pequeña pieza que da al
atrio y sirve de habitación al sacristán y una
sacristía interior con puerta al presbiterio que fue
cerrada y sellada por el C. Agente del Ministerio
Público.
148
Registro
4 de junio
de 1928
8 de junio
de 1928
7 de junio
de 1928
7 de junio
de 1928
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Pbro. Nicolás Cortés Esparza al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 9 de abril de 1928; Ibíd., del Presidente de la Junta de Admón. Civil Isaac J. Barragán al C. Nicolás
Cortés Esparza, Orizaba, 10 de abril de 1028.
149
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Jefe de la Oficina Guillermo Prieto al C.
Presidente de la Junta de Admón. Civil, Orizaba, 26 de mayo de 1928; Ibíd., del Presidente de la H. Junta Severino
Méndez a los CC. Encargados de todos los templos de la ciudad, Orizaba, 30 de mayo de 1928; Ibíd., del Presidente
de la H. Junta Severino Méndez al C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 30 de mayo de 1928.
75
Los Dolores
El Calvario
San Miguel
Los nexos ya están a disposición del C. Jefe de
la Oficina Federal de Hacienda
Tiene como anexo una casa de ocho piezas
(cuatro abajo y cuatro arriba).
Desde agosto de 1926, la casa cural está a
resguardo de la junta y la sacristía fue clausurada
por el Juzgado Segundo de Primera Instancia y
el Juzgado Eclesiástico (de la parroquia)
sellando y recogiendo la llave, desde entonces
no tiene intervención del anexo que se trata
15 de junio
de 1928
14 de junio
de 1928
19 de junio
de 1928
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5.
La junta vecinal del templo del Carmen no tenía a su cargo la sacristía porque fue
clausurada junto con los anexos, por lo que el Lic. Rafael Ariza la pidió para su cuidado
a cargo de la junta que le corresponde. En contestación a su petición se le dijo que se
dirigiera a la Agencia del Ministerio Público porque la Oficina de Hacienda no tenía la
autoridad de levantar los sellos, sin embargo no se le pudo entregar la sacristía. Además,
se dijo que desde el momento en que la junta asumió el templo se dedicó únicamente a
su cuidado, dejando a cargo a las señoras que dirigen las Asociaciones Religiosas la
colecta y distribución de las limosnas; por otro lado, se sabe por parte de una de esas
señoras, doña Fe H. (sic) viuda de Villa, lo poco que se recauda apenas alcanza para el
pago del sacristán, del alumbrado y de otros gastos150
Lo mismo pasó con la junta del templo de San Juan de Dios, pedía la sacristía para
estar a su cuidado ya que únicamente los nexos serían trasladados; la noticia llegó al
Agente del Ministerio Público, éste alegó que el cargo le corresponde a la Oficina Federal
de Hacienda. Esta última respondió que podía acceder a sus deseos por no ser de su
competencia, por lo que la sacristía permanecerá en el estado actual en que se
encuentra, la noticia les fue dada a los miembros de la junta.151
150
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Jefe de la Oficina Federal de Hacienda
Guillermo Prieto al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 25 de junio de 1928; Ibíd., del Presidente
de la H. Junta Severino Gómez al C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 10 de julio de 1928; Ibíd., de
Rafael Ariza al C. Presidente de la H. Junta, Orizaba, 4 de mayo de 1928.
151
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. Del Presidente de la H. Junta de Admón. Civil
Severino Méndez al C. Agente del Ministerio Público del Estado, aux. del Ministerio Público Federal, Orizaba, 13 de
junio de 1928; Ibíd., del Agente 1° del Ministerio Público Lic. Rubén D. Martínez Murillo al C. Presidente de la H. Junta,
Orizaba, 15 de junio de 1928; Ibíd., del Jefe de la Oficina Fed. de la Hda. Guillermo Prieto al C. Presidente de la H.
Junta de Admón. Civil, Orizaba, 25 de junio de 1928.
76
En el caso de la junta a cargo del templo de Los Dolores, pasó algo similar al de
El Carmen, porque no lo pueden cuidar continuamente ni hacerse cargo del templo
alegando que no es su profesión. Con lo que se saca de las limosnas el representante
de los vecinos contrató a una persona para que lo cuide y limpie, pero existen otros pagos
como el de alumbramiento y gastos extraordinarios, en ocasiones los miembros de la
junta han puesto de su bolsa para completar los gastos.152
Una vez que se terminara el registro de los templos se hacía pasar una copia a las
autoridades competentes para que estuvieran informados del procedimiento y se llevara
un mejor control. Sin embargo no se encontró información disponible de estos trámites
de los otros templos de la ciudad como el de La Concordia, Santa María o Santa
Gertrudis. Asimismo se puede notar que las juntas tuvieron ciertos problemas para
administrar los templos, puesto que su principal ingreso eran las limosnas.
Otro caso fue el de la parroquia de San Miguel, ya que se tenía sospecha del uso
que se le daba a la limosna recaudada. La autoridad municipal de Orizaba interrogó al
encargado de San Miguel, Aurelio M. Ramírez, quien ostentaba el cargo desde 1926
cuando se formaron las Juntas Vecinales. Aurelio informó al presidente Isaac J. Barragán
que desde entonces visitaba diariamente el templo para cerciorarse de que todo esté
bien, saliendo en ocasiones hasta la una de la mañana con el propósito de estar seguro
si el personal a su cargo cumple con su deber y que no recibe sueldo ni gratificación por
esta actividad.153
Sobre el uso que se le daba al dinero que se juntaba en el templo, Aurelio dijo que
se hizo cargo porque unos feligreses se lo pidieron por ser el encargado de la parroquia;
de la limosna solventa los gastos que se presentan: sueldos de 90 pesos al sacristán y
35 pesos a cada ayudante que son dos, el cantor no recibe sueldo fijo porque depende
de la entrada y del trabajo que realice, para los mozos de limpieza que son de diez a
quince personas paga al mes 1 peso a cada uno; otros gastos son de velas, flores,
adornos y la luz que paga alrededor de 175 pesos. Al cuestionarle si llevaba un libro de
152
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 5. De Felipe Nieva al C. Presidente de la Junta de
Admón. Civil, Orizaba, 3 de mayo de 1928.
153
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informe. C.-529, Exp. 6. Acta de informes de la parroquia de San Miguel, 10 de
abril de 1928.
77
contabilidad, Aurelio respondió que no, pero que podría demostrar los gastos con los
comprobantes.154
El manejo de los ingresos de los templos, en este caso el de las limosnas, fue
vigilado por las autoridades, aunque eran los mismos católicos quienes las manejaban
pero el dinero era controlado probablemente porque estaba la noticia de que católicos
provenientes de Jalisco buscaban un financiamiento para la guerra que había estallado.
No obstante las limosnas recaudadas eran pocas, pero a pesar de eso las juntas
administraban lo recaudado para los gastos que se presentaran en los templos. La
supervisión de este modio de ingresos para los templos fue aplicado para todos.
A finales de la administración interina de Abel S. Rodríguez, el gobierno estatal a
través de la Secretaría de Gobernación, gira una circular en la cual las Juntas Vecinales
sufren un cambio en su estructura:
Por acuerdo del C. Presidente de la República se aclara y se reforma la circular telegráfica de esta
Secretaría expedida bajo el número 103 con fecha 27 de julio de 1926, en los términos siguientes:
PRIMERO. Las Juntas Vecinales que se encargan del cuidado de los templos católicos abandonados
por el clero, estarán por tres vecinos en las poblaciones que no sean Capital de Estado o
Cabecera de Municipalidad y por cinco en las que tengan esa categoría. Esos vecinos
deberán escogerse entre los que profesen la religión católica, sean de reconocida
honorabilidad y tengan posición social que garantice su solvencia.
SEGUNDO. Se hará un nuevo nombramiento de Juntas Vecinales conforme al artículo anterior y a las
nuevamente nombradas se les entregarán los templos conforme a los inventarios con que
los hayan recibido las actuales Juntas. Los miembros de las Juntas serán responsables en
los términos del artículo 22, párrafo 3o. de la Ley de 14 de junio de 1926, dar cuidado y
conservación de los edificios, muebles y objetos pertenecientes al culto.
TERCERO. Las limosnas en dinero efectivo que se recauden en el interior de los templos, serán
administradas libremente por dicha Junta Vecinal, la que podrá nombrar un Tesorero; y
serán dedicadas exclusivamente al cuidado, conservación y aseo del templo y a los gastos
del culto que pueda celebrarse arreglo a la ley.
CUARTO. La Autoridad Municipal ni ninguna otra tendrán injerencia en el manejo e inversión de esas
limosnas; y sólo en caso de que tengan datos comprobados de que distraen de su objeto y
se invierten en usos distintos me darán cuenta a esta Secretaría para que disponga lo que
procede.
QUINTO. Respecto a los donativos: en objetos muebles que no sean dinero y de los en dinero que se
hagan para la adquisición de muebles, ornatos, etc., o para reparaciones en el edificio, se
procederá como lo dispone el artículo 14 de la Ley de 4 de enero de 1927.
SEXTO. Habrá una sola Junta Vecinal para todos los templos de la población; y solo en caso de tratarse
de templos que por su importancia lo necesitan, se hará nombramiento especial de Junta para
esos templos.
SEPTIMO. Las disposiciones anteriores no impiden la facultad que tienen las Autoridades para vigilar
que en el interior de los templos se cumplan estrictamente todas las disposiciones
Constitucionales y legales, relativas al culto público y disciplina externa.
154
Ibíd.
78
Y de conformidad con el artículo 130 de la Constitución General de la República, lo comunico a usted
para su conocimiento y a fin de que lo haga saber a las Autoridades Municipales dependientes de ese
Estado, para su debido cumplimiento.
Lo transcribo a usted por acuerdo del ciudadano Gobernador para su conocimiento y debida
observancia.155
La Junta de Admón. Civil de Orizaba pasó la noticia a la presidencia municipal para citar
a los miembros vigentes de las juntas e informarles el cambio que se presentaba, en esa
reunión los integrantes: CC. Ernesto Galland-Presidente de la Junta Vecinal, Dr. Luis
Fuentes Cicero-Tesorero, Lic. Agustín Aguilar Muñoz-Vocal, Prof. Hermelindo DíazVocal; los CC. Encargados de los templos: Rubén Yáñez-Parroquia San Miguel, Ricardo
Segura-Sta. María, Delfino Ramírez-Calvario, Bernabé Polanco-San José, Hilario
Miranda-Concordia, Juan Miranda-Santa Gertrudis, Felipe Nieva-Dolores, Manuel
Romero Coeto-San Juan de Dios, Manuel Rodríguez-San Antonio y Dr. Luis Fuentes
Cicero-El Carmen, que junto con la presidencia municipal formarían a los nuevos
comisionados de los templos para su cuidado, algunos permanecieron en la custodia de
los inmuebles.156
La reunión se llevó a cabo el 6 de noviembre y el 15 del mismo mes se
establecieron los miembros de las nuevas juntas que fueron elegidos por unanimidad:
Tabla 3. Organización de las Juntas
Vecinales para la ciudad de
Orizaba
Administración de la Junta Vecinal
Nombre
Cargo
Ernesto Galland
Presidente
Dr. Luis Fuentes Cicero
Tesorero
Lic. Agustín Aguilar Muñoz
Vocal
Prof. Hermelindo Díaz
Vocal
Gustavo Sota
--Responsables de los templos católicos
Nombre
Templo
Bernabé Polanco
San José de Gracia
155
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Inventarios. C.507, Exp. 7. Circular No. 101, del Subsecretario de Gobierno Lic. E.
González Aparicio al C. Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 18 de septiembre de
1928.
156
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Inventarios. C.507, Exp. 7. Del Secretario de la Junta de Admón. Civil al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 5 de octubre de 1928; Ibíd., Aviso, del presidente de la Junta de Admón. Civil Severino
Méndez a los CC. de la Junta Vecinal y encargados de los templos, Orizaba, 19 de octubre de 1928.
79
Hilario Miranda
Juan Miranda
Ricardo Segura
Delfino P. Ramírez
Emanuel Rodríguez
Próspero Vigil
Emanuel Romero Cueto
Felipe Nieva
Rubén Yáñez
La Concordia
Santa Gertrudis
Santa María
El Calvario
San Antonio
El Carmen
San Juan de Dios
Los Dolores
Parroquia San Miguel
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Inventarios. C.507, Exp. 7.
El 24 de noviembre se entregaron las llaves de los templos junto con los inventarios. Las
autoridades consideraron que en lugar de nombrar otras juntas, como lo indica el artículo
sexto de la circular de Juntas Vecinales, nombraron a delegados los cuales tendrán a su
cargo un templo.157 Adalberto Tejeda continuaría con la vigilancia de los templos, ya que
en diciembre de 1928 toma posesión como Gobernador Constitucional del Estado de
Veracruz.
2.3 El camino hacia la concordia entre la Iglesia y el Estado, la derogación de la ley
antirreligiosa en Veracruz durante la administración de Adalberto Tejeda
Adalberto Tejeda se mostró como un personaje que ejercía la política en su totalidad,
siguiendo los principios de la revolución y cumpliendo con los lineamientos de la
Constitución de 1917. Por esto fue que Plutarco Elías Calles lo nombra secretario de
Gobernación, porque durante su presidencia se ejercen leyes que disminuyen los
intereses del clero, Tejeda lo apoyó considerablemente al hacer cumplir esas
legislaciones constitucionales. Siempre hacía notar su radicalismo al momento de hacer
valer la política, esto lo caracterizó tanto en México como en Veracruz. Sobre esto último,
en el siguiente capítulo se mencionará las principales características del tejedismo.
Al asumir la gubernatura de Veracruz para un segundo periodo (1928-1932) la ley
Calles seguía vigente, su antecesor Abel S. Rodríguez siguió cumpliendo esta norma,
ahora Tejeda se encargaría del gobierno veracruzano y sus acciones serían diferentes,
157
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Inventarios. C.507, Exp. 7. Aviso del Presidente de la H. Junta de Admón. Civil
Severino Méndez a los CC. miembros de las Juntas Vecinales, Orizaba, 15 de noviembre de 1928; Ibíd., Acta de
formación de las Juntas Vecinales, Orizaba, 6 de noviembre de 1928.
80
pero bajo los lineamientos que el gobernador consideraba pertinentes para ejercer la
política. De este modo en Orizaba siguió presente la ley anticlerical, aunque al año
siguiente la situación entre el Estado y la Iglesia tomaría un nuevo rumbo con el “modus
vivendi” que daba fin al conflicto religioso en el país.
2.3.1 El primer año de la política religiosa en el gobierno tejedista en Orizaba
Durante el primer semestre de 1929 la política religiosa seguía su curso con las acciones
que el gobierno planteaba; durante el final del gobierno interino de Abel S. Rodríguez se
modificaron las juntas vecinales, el procedimiento terminó al año siguiente, cuando en
enero de 1929 se da por terminado el registro de los inventarios de los templos ante las
autoridades municipales, que desde diciembre pasado se venía haciendo porque las
nuevas juntas custodiarían los templos católicos de la ciudad de Orizaba. 158 A partir de
este momento el gobierno de Tejeda se encargaría del asunto religioso, aunque la ley
estaría por terminar meses después.
Ante esa reforma en las juntas vecinales, nuevamente se pidió el registro de los
sacerdotes ante el gobierno, esto sería únicamente para aquellos que residían fuera de
la ciudad de México en el cual manifestaban sus domicilios de acuerdo a la disposición
del 12 de febrero. Pero, para el cumplimiento de esta norma, el obispo de Chihuahua,
Antonio Guízar y Valencia, que a su vez era hermano del obispo de Veracruz, pidió una
prórroga de 15 días para el registro de los sacerdotes, lo que le fue concedido por el
presidente de la República; en Orizaba, la solicitud es dada por el gobierno estatal y se
lleva a cabo un registro de cada sacerdote que habitaba, exponiendo su domicilio y el
templo.159 Los sacerdotes comenzaron a registrarse ante la autoridad municipal:
158
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informe. C.529, Exp. 6. Del Presidente de la Junta de Admón. Civil Severino Méndez
al C. Ernesto Galland Pte. de la Junta Vecinal, Orizaba, 2 de enero de 1929.
159
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. Circular No. 18, del Secretario
de Gobierno Gonzalo Vázquez al C. Presidente de la H. Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 2 de marzo
de 1929; Ibíd., del Presidente de la Junta Rafael Sierra Domínguez al C. Secretario de Gobierno del Estado, Orizaba, 4
de abril de 1929.
81
Tabla 4. Registro de los sacerdotes en Orizaba
Nombre
Rafael Rúa Álvarez
José María Flores
J. V. Heredia
Vicente Vargas
Galeana
Juan D. Gallardo
Culto
Católico
Católico
Católico
Católico
Dirección Templo
Calle Norte 2 No. 5
Calle Sur 5 No. 24
Calle Sur 7 No. 6
Calle Sur 7 No. 6
Registro
1 de marzo de 1929
28 de febrero de 1929
28 de febrero de 1929
28 de febrero de 1929
Católico
Vicente Pallares*
Católico
Calle Norte 4 No.
2 de marzo de 1929
174
Av. Oriente 4 No. 47 1 de marzo de 1929
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222.
*Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informes. C.-529, Exp. 6.
Conforme los sacerdotes se registraban, se le notificaba al Secretario de Gobierno de
Veracruz con copia a cada sacerdote en cuestión, para que a su vez el gobierno
veracruzano mandara la noticia a la Secretaría de Gobernación. El número de sacerdotes
permaneció conforme a la ley reglamentaria de 1926, cuatro de acuerdo al número de
población, sin embargo se puede notar que hay seis registrados, de los cuales cinco son
mexicanos, por lo que el gobierno pondría especial interés en el Pbro. Vicente Pallares
por ser extranjero.
En el caso de los protestantes, el encargado del templo de la Santísima Trinidad,
el Pbro. Nicolás Cortés Esparza, informó a las autoridades que el H. Cuerpo Eclesiástico
lo cambió a Tacubaya, D.F. Al no poder esperar a su sucesor nombró al Sr. Próspero
Mendoza, junto con la Junta Vecinal hacerse cargo del templo hasta la llegada del nuevo
encargado, poniendo además el inventario que se hizo.160
El sacerdote Vicente Pallares notificó al mismo tiempo que su registro ser de
nacionalidad española, dejando de ejercer el culto desde el 15 de febrero de 1926 pero
pernoctando en el mismo domicilio, el gobierno municipal de Orizaba dio por enterado
este hecho y lo notificó al gobierno del estado. Ante esto, el gobierno veracruzano pidió
que se vigilaran los actos de este cura en particular, en especial de que no ejerciera el
ministerio religioso y en caso de hacerlo ponerlo a disposición de la Secretaría de
160
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. De Nicolás Cortés Esparza al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 9 de abril de 1929.
82
Gobernación.161 Para el cumplimiento de esta petición, la autoridad municipal se valió de
la Inspección de Policía para proceder en caso de violación de la ley. 162
Además, la situación con los sacerdotes seguía siendo vigilado por las
autoridades, desde el municipal hasta el federal, debido a que era importante que se
cumplieran los artículos constitucionales. Sin embargo, nuevamente el sr. Paulino
Martínez Pacheco vuelve a ser protagonista del asunto religioso, esta vez pide permiso
a las autoridades de conceder una fiesta religiosa en su domicilio particular el día 25 de
julio, permiso que es concedido siempre y cuando no ejerza ningún sacerdote; 163 se
puede decir que no se tenía previsto que los arreglos entre el Estado y la Iglesia se
llevarían a cabo.
Paulino Martínez se dirigió desde un principio al Gobierno Federal, una vez que se
le concedió el permiso por la Secretaría de Gobernación, se le avisó a la autoridad
municipal del asunto para permitir que se realice la fiesta, asimismo se avisa a la
Inspección de Policía para vigilar que el día señalado no se violen los artículos en materia
de culto, especialmente en el artículo 24, de ser así se procedería legalmente. Sin
embargo, el 21 de junio de 1929 se da por terminado el conflicto religioso en el país, por
lo que Paulino se dirige nuevamente a la Secretaría de Gobernación pidiendo que en esa
fiesta esté un sacerdote.164
A pesar de los arreglos que se llevaron a cabo, la tensión entre el Estado y la
Iglesia permaneció. La petición de Paulino para que estuviera un sacerdote le fue negada
por el Gobierno Federal, debido a que las fiestas religiosas de carácter público deben
celebrarse dentro de los templos. Se le informaba que si violaba el artículo 24
Constitucional, la autoridad municipal de Orizaba podría consignar a quienes resulten
161
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informes. C.-529, Exp. 6. Del Subsecretario de Gobierno Luis Vega Pavón al C.
Presidente de la Junta de Admón. Civil de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 29 de mayo de 1929.
162
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informes. C.-529, Exp. 6. Del Presidente de la Junta de Admón. Civil Rafael Sierra
Domínguez al Subsecretario de Gobierno del Estado, Orizaba, 6 de junio de 1929; Ibíd., del Presidente de la Junta de
Admón. Civil al C. Inspector Gral. de Policía, Orizaba, 6 de junio de 1929.
163
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Del Oficial Mayor Ignacio García
Tellez al Sr. Paulino Martínez Pacheco, México, D.F. 8 de junio de 1929.
164
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Del Sr. Paulino Martínez
Pacheco al C. Ministro de Gobernación, Orizaba, 12 de julio de 1929
83
responsable de los actos, poniéndolos a disposición de las autoridades judiciales
competentes.165
Aunque los templos permanecieron cerrados, el gobierno procuró su cuidado y es
donde las juntas entraban en el cumplimiento de su deber, se pedía que la arquitectura
no debía de ser afectada porque estaban conscientes del legado histórico que
representaban. Para lograr esto, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público pidió la
conservación de estos monumentos que existen en el país, por lo que hizo llegar a todas
las Oficinas Federales de esa dependencia recordándoles las disposiciones del artículo
38 de la ley sobre Clasificación y Régimen de los Bienes Inmuebles de la Federación. En
el cual se establece que no se pueden hacer obras que afecten la arquitectura, sin el
permiso de esta Secretaría; para el cumplimiento de esta petición se pide el apoyo de los
gobiernos estatales.166
Sin embargo, los templos que fueron cerrados desde 1926 difícilmente recibieron
el mantenimiento correspondiente, algunos se encontraban en pésimas condiciones, si
bien le correspondió al Gobierno Federal hacerse cargo de los inmuebles, éste alegó que
no tiene los fondos necesarios para atender la conservación, sólo en casos excepcionales
se llevaron a cabo obras a cargo del Erario.167 El gobierno aludía que la obligación de la
conservación de los templos era de las juntas y de los feligreses, ya que ellos hacían uso
de las instalaciones, además porque todo edificio religioso es la manifestación artística
más poderosa que se ha producido en México. Cualquier arreglo debía de anunciarse a
las autoridades competentes y esperar si se aprueba o no, así como la disposición de
fondos. Además, se clausurarán los templos que presenten peligro para los fieles.168
165
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Del Subsecretario encargado
del despacho Felipe Canales al Sr. Paulino Martínez Pacheco, México, D.F. 20 de julio de 1929.
166
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. Circular No. 20, del
Subsecretario de Gobierno Lic. Luis V. Pavón al C. Presidente de la Corporación Municipal, Jalapa-Enríquez, 20 de
marzo de 1929; Ibíd., del Presidente de la Junta Rafael Sierra Domínguez al C. Secretario de Gobierno del Estado,
Orizaba, 4 de abril de 1929.
167
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. Circular No. 30-3-187. Del P. O.
del Secretario, el Oficial Mayor Manuel Guerrero a las Juntas Vecinales encargadas de los templos, México, D.F. 30
de mayo de 1929.
168
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. Circular No. 56, del Secretario
de Gobierno G. Vázquez Vela al C. Presidente de la H. Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 11 de junio
de 1929; Ibíd., del Presidente de la Junta de Admón. Civil Francisco Riveros al C. Presidente de la Junta Vecinal Ernesto
84
2.3.2 El “Modus Vivendi”: hacia la reconciliación entre el Estado y la Iglesia, el
descontento de Adalberto Tejeda
Tras los arreglos de 1929 se pensó que la situación entre el Estado y la Iglesia mejoraría,
sin embargo se llevó más tiempo para llegar a calmar los ánimos que había dejado la
guerra cristera desde 1926. A este proceso se le llamó “modus vivendi”, pero también se
dificultó esta medida conciliatoria ya que no todos los cristeros estaban dispuestos a dejar
las armas, inclusive acusaron a los sacerdotes de traidores por haber propiciado los
arreglos, además, el Vaticano ya no apoyaba la rebelión, se buscaba el fin la crisis
religiosa.
Los arreglos comenzaron a tratarse a finales de 1928, cuando el gobierno y el clero
comenzaron a trabajar de solucionar las dificultades que atravesaba el país, Emilio Portes
Gil, como secretario de Gobernación y sucesor de Tejeda en este cargo, le hizo ver al
aun presidente Plutarco Elías Calles la necesidad urgente de reprimir los incontables y
escandalosos abusos que se venían cometiendo en la Secretaría de Gobernación, se
saqueaban hogares de las personas fanáticas con el pretexto de buscar a los rebeldes,
se extraían reliquias de valor histórico, pinturas, alhajas, dinero, etc. En la Jefatura de
Policía se acusaba de complicidad a la gente adinerada obligándoles a dar fuertes
cantidades de dinero para no perjudicarlos, generando un ambiente de odio hacia el
gobierno.169
Estos primeros arreglos no se llevaron a cabo porque Portes Gil no contó con el
favor de Calles, por lo que fue hasta su designación como presidente interino de la
República cuando se vio su empeño para llegar a un acuerdo, llevándose a cabo en junio
de 1929. Sin embargo, no todos estuvieron de acuerdo, algunos creyeron que era una
claudicación de los principios revolucionarios y una traición a las Leyes de Reforma (las
de Juárez) y a la Constitución de 1917, mientras el clero argumentó que los prelados
hicieron a un lado los principios por los que habían combatido.170
Galland, Orizaba, 26 de junio de 1929; Ibíd., del Presidente de la Junta de Admón. Civil Francisco Riveros al Secretario
de Gobierno del Estado, Orizaba, 26 de junio de 1929.
169
GARCÍA Morales. “Arreglos de 1929…”, Op. Cit., 1974, pp. 5-6.
170
GARCÍA Morales. 1974, pp. 7-8.
85
Finalmente, el presidente Emilio Portes Gil y los obispos Pascual Díaz y Leopoldo
Ruíz, con la aprobación del Papa Pío XI, firman los tratados con la participación del
embajador Morrow. El 22 de junio se publica el acuerdo modus vivendi, en el cual se
finiquitaba el conflicto entre la Iglesia y el Estado, de la misma forma Portes Gil aseguró
a Pascual Díaz de que no habría venganza y se devolverían los templos que no habían
sido asignados a usos seculares.171 Morrow fue acusado de servir a los intereses del
sionismo por ser socio de J. P. Morgan, un banquero judío de Wall Street. Por otro lado,
el Gral. Jesús Degollado Guízar, sobrino de Rafael Guízar, comandante de los cristeros
en el occidente del país, rechazó los arreglos por lo que sus tropas no estuvieron sujetos
a los lineamientos firmados, a pesar de eso hubo cristeros que depusieron las armas al
reanudarse los servicios religiosos. En agosto de 1929 el Gral. Degollado disolvió el
ejército cristero, aunque esto no evitó que continuara habiendo rebeliones en otros puntos
del país.172
Pero no todos los católicos siguieron la solución, algunos seguían peleando y no
consentían esos arreglos. El mismo día en que se publicaron los arreglos, la Liga
Defensora de la Libertad Religiosa expresó su incondicional, sincera y filial sumisión a
las resoluciones del Papa; había inconformes entre los cristeros y católicos, creían que
el Papa estaba mal informado. Algunos obispos invitaron a Rafael Guízar a renunciar
como protesta de inconformidad por los arreglos, por lo que el obispo de Veracruz
declaró: “yo apruebo y acato cuanto el Papa ha aprobado”.173
Sin embargo, Blancarte menciona que era natural que el episcopado estuviera
interesado en un arreglo porque la rebelión surgió de manera espontánea y la Liga no
necesariamente acataba las indicaciones de la jerarquía eclesiástica. Se consideró que
la jerarquía traicionó de alguna manera a los cristeros y que los obispos debían de haber
apoyado a la rebelión, en lugar de acatar los arreglos de 1929. Así, si la mayoría de los
obispos ayudaron a sofocar la rebelión, no fue porque considerara injustificada la causa
cristera, ni porque el episcopado se uniera al Estado, sino que era la lucha armada, la
171
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, pp. 249-250.
Ibíd. p. 251.
173
ANTONIO. “Puertas abiertas”, Op. Cit., 1995, pp. 177-178.
172
86
autonomía que llegó a tener, esto era lo que temían tanto la Santa Sede como la mayoría
de los obispos mexicanos.174
En efecto, la Iglesia pretendía llevar el problema religioso con los medios que
consideraba pertinentes, por ello no es difícil entender que un movimiento como el
cristero, con la autonomía que ejerció, no contara con la aprobación episcopal. Por lo
tanto, si la Iglesia no aprobó la rebelión cristera es porque no consideró la violencia y
porque el movimiento cristero escapaba del control clerical.175 Quizás este fue el motivo
por el que algunos clérigos, el caso de Rafael Guízar, desaprobaron la violencia y la lucha
armada, buscando otros medios, como el legal y el pacífico para una conciliación.
La desaparición de los cristeros no significó el fin del conflicto Estado-Iglesia, sino
que cada uno utilizaría los medios a su alcance para controlar los grupos sociales que
estaban en disputa, estos eran: obreros, campesinos, trabajadores, niños, mujeres,
hombres, etc., que era visto como un terreno exclusivo que cada uno peleaba para poder
controlarlo. El Estado pretendía que la Iglesia se concentrara en el cuidado de las almas,
por lo que promulgó e hizo cumplir las leyes constitucionales.176
Jean Meyer afirmó que desde junio las hostilidades se suspendieron en la totalidad
del territorio mexicano, hubo combates hasta agosto debido a las regiones más aisladas.
Además, ya que los cristeros no fueron consultados durante las negociaciones, durante
todo el mes de julio se organizaron los licenciamientos entre el gobierno y los
combatientes que terminaron en agosto. Sin embargo, los cristeros tuvieron una doble
presión, por un lado el pueblo y por otro el clero, haciendo que se inclinaran a sus
peticiones.177
Los últimos cristeros depusieron las armas a finales de 1929, sólo la tercera parte
cumplió las órdenes recibidas: el gobierno contó 14,000 armas entregadas y otros tantos
caballos. En Colima 900 hombres entregaron 728 rifles, no daban las armas tan
fácilmente, entregaban aquellas armas viejas e inservibles, por lo que el gobierno se
174
BLANCARTE. “Entre la guerra…”, Op. Cit., 1992, p. 30.
Ibíd. pp. 31-32.
176
Ibíd. p. 32.
177
MEYER, Jean. “La Segunda” en La Cristiada 1. La guerra de los cristeros. Tomo I, Siglo Veintiuno, México, 1999, pp.
323-324.
175
87
molestaba, pero alegaba que se las aceptaban porque se quiere la paz; en diferentes
partes no se resignaban, tardando de dos a tres meses en hacerlo.178
La incertidumbre se apoderaba de los cristeros, solamente se les dijo que los
arreglos habían puesto fin a la guerra, pero nada más se les informaba. Aurelio Acevedo,
un cristero, preguntaba a su obispo: “1) Nada sabemos… ¿Qué está arreglado? ¿Y quién
dice que está arreglado? Pues el gobierno y el delegado apostólico ¿Y el señor obispo
dónde está? ¿Y qué dicen los demás obispos? Nada sabemos. 2) ¿Por qué el señor
Delegado no se interesa en arreglar al mismo tiempo la parte más delicada, la militar?
¿O nada se le debe a ésta? 3) Hay quien diga que el Episcopado está dividido… ¿En
dónde estará la razón y la justicia?”179
Los cristeros vieron que la Iglesia había hecho un “mal negocio”, porque trataban
de apaciguarla para desarmar a los rebeldes y a quienes temía el gobierno, esto no les
sorprendió porque sabían que eran hombres de la revolución y de antemano sabían que
no cumplirían uno sólo de lo que se prometió a los prelados:
“El gobierno no cumplió lo que por medio ofreció el 21 de junio de 1929… porque soberbio, avaro,
envidioso, avorazado, quiere adueñarse hasta de lo que no le pertenece… por eso resulta enredado en
sus mismos malos hechos y lego dicen que el que se defiende de ellos tiene toda culpa del malestar de
la patria y luego vuelven a la carga y a su hipocresía de siempre, lavándose sus mugrosas manos en
periódicos, revistas, volantes, presumiendo lo poco bueno que tienen y callan como un muerto lo mucho
y malo que hacen contra los ciudadanos de verdad… El presidente Portes Gil, mandil o interino del
César Calles, prometió la paz y devolver todo lo que robaban a la Iglesia, y en cuanto a los muertos, ni
hablar, ¡amén!”. Portes Gil decía en un banquete masónico del 27 de julio de 1929 que “el clero se había
sometido estrictamente a la ley”, dándole así la razón a Acevedo, que envió una proclama a sus tropas:
“Dicen que ya se hizo la paz, que está concedido lo que vosotros pedíais. Mentira.”
“Nada más tenían que amistiarse (sic) en señal de amistad unos con otros… sin embargo, los cristeros
siguieron siempre con el mismo temor, porque no tenían confianza alguna al govierno (sic); cuanta
cabesilla agarraba el gobierno después de la rebolución (sic) lo fusilaba; el gobierno no seguía siempre
amusgando en sus ideas, ideas de más persecución, ideas de más guerra.” 180
De esta manera, para los cristeros el modus vivendi pasó a ser un siniestro “modus
moriendi”. Los antiguos cristeros decían: “Han muerto más después de los ‘arreglos’ que
durante la guerra”, y no podemos dejar de pensar que es una costumbre antigua de todos
los estados, eclesiásticos o no, sacrificar las personas a las instituciones. Las condiciones
de paz fueron notablemente suaves: se perdonaba a los rebeldes con la única condición
178
MEYER. “La Segunda”, 1999, pp. 328-329.
Ibíd. p. 335.
180
Ibíd. pp. 336, 344.
179
88
de someterse en un plazo de 45 días (ampliado a 100) y de deponer las armas en puntos
determinados. Por otro lado, se comienza el asesinato sistemático y premeditado de los
jefes cristeros, con el fin de impedir cualquier reanudación del movimiento.181
Sin embargo, no todos los políticos de la época aprobaron los arreglos; en
Veracruz, Adalberto Tejeda se mostraba inconforme con las noticias de un posible arreglo
por lo que mandó un telegrama al presidente provisional con fecha del 13 de junio de
1929:
“La prensa clerical y reaccionaria habla a la Nación del regreso de connotados representativos del
funesto clero católico, que aún insiste en su pretensión de quebrantar la fuerza y la alta justicia de
nuestras leyes, que ponen límites a sus innobles ambiciones.
Vienen ensombreciendo el cielo de la Patria después de su criminal rebeldía contra las Instituciones de
la República, tal vez a ofrecer una hipócrita sumisión para asó preparar mejor, como lo han hecho
siempre, una nueva y siniestra maniobra contra ellas.
Quieren volver al púlpito, al confesionario, a los colegios, etc. para reanudar su monstruosa tarea de
reformar la conciencia y la moral del pueblo estorbando su liberación y su progreso.
El pueblo no los necesita; ha adquirido con su ausencia y la suspensión de cultos la alta conciencia de
la verdad que le ha dado la Revolución y espera fundamentalmente de usted, como digno mandatario
de la Nación y de sus limpios antecedentes revolucionarios, que con la firmeza que le caracteriza y con
la clarividencia y patriotismo que justamente le reconocemos todos, no permitirá que se vulneren las
Leyes de Reforma y la Constitución vigente.
Con mi doble carácter de ciudadano y Gobernador de esta Entidad, satisfáceme hacerle presente una
vez más y en ocasión de esta amenaza para la Patria, mi sincera y firme adhesión. 182
Del mismo modo, la Liga de Comunidades Agrarias del Estado de Veracruz, aliada del
gobierno tejedista, giró una circular con motivo de los presuntos arreglos que estaban por
llevarse a cabo entre el clero y el gobierno, mostraba un telegrama el cual decía que la
Liga fue una de las primeras organizaciones que apoyaba el anticlericalismo durante el
gobierno del Gral. Calles, a nombre de los campesinos veracruzanos le pedía retroceder
para no efectuarse tales acuerdos. Asimismo, en esa circular se mostraba que la actitud
de Portes Gil era apegarse a la Ley y los acuerdos se llevarían a cabo con las leyes
vigentes, que serían acatadas por los representantes de la Iglesia para permitírsele
reanudar los cultos.183
181
MEYER. “La Segunda”, 1999, pp. 336-337, 344.
Periódico El Gladiador, 23 de junio de 1929, No. 52 p. 1, citado en GARCÍA Morales. “Arreglos de 1929…”, Op. Cit.,
1974, pp. 8-9.
183
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. Circular No. 7, del Comité
Ejecutivo de la Liga Presidente Isauro Acosta a todas las agrupaciones dependientes de esta Liga, Jalapa-Enríquez, 15
de junio de 1929.
182
89
El gobierno veracruzano y la Liga mostraron su inconformidad por la reanudación
de los templos y del regreso del clero a la vida pública, consideraron un peligro que la
Iglesia reconquistara el terreno que las “Leyes Liberales” habían adquirido, la Liga
recomendó a sus compañeros:
PRIMERO. Que interpretando el sentir de la inmensa mayoría de los trabajadores mexicanos, acerca
de la cuestión religiosa, se dirijan al Supremo Gobierno de la República, haciéndole patente
el gran descontento que entre la clase proletaria ha causado de celebrar pactos conciliatorios
con la facción clerical, fuera de lo que al respecto establece nuestra Carta Magna.
SEGUNDO. A partir de sus familias de todo trato con los individuos de sotana, negándoles toda
cooperación o ayuda económica; y procurando hacer el vacío más completo a su alrededor
a fin de obligarles a renunciar a su vida de parásitos de la sociedad.
TERCERO. Que siguiendo la costumbre ya implantada en muchos lugares de la República, se prive a
los frailes de las entradas que reciben por concepto de bautizos y que éstos sigan llevándose
a cabo en ríos o en los propios domicilios de los interesados; pues a mayor abundamiento
de razones para proceder en tal forma, recordamos que los mismos obispos mexicanos
antes de levantar la bandera de la rebelión, abandonando los templos, declararon que los
bautizos serían “válidos” llevándose a cabo en el propio domicilio del recién nacido, actuando
como padrino, cualquier persona, incluso los padres de la creatura (sic) a quien se pretende
“cristianizar”.
CUARTO. Por ningún motivo permitir que sus hijos concurran a las Escuelas dirigidas por los curas y
sus colaboradores, y
QUINTO. Evitar hasta donde sea posible, que entre ustedes tenga el lugar el hecho humillante y
vergonzoso de que sus esposas, novias, hijas y hermanas vayan a postrarse a los pies de
esos sátiros ensotanados para revelar las intimidades del hogar. 184
Tejeda no logró convencer al primer mandatario de desistir de los arreglos, al decretarse
que la ley Calles se levantaba los clérigos comenzaban a regresar a los templos. El
gobernador veracruzano tuvo que esperar a que se la situación siguiera su curso y vigilar
la conducta de los sacerdotes una vez que se reanudaran los servicios religiosos. El
temor de Tejeda se hacía realidad, el clero empezó a pedir colectas y a hacer campañas
para la restauración de los templos, al poco tiempo empezaron a celebrarse fiestas
religiosas. Los sacerdotes no acataron los arreglos ya que algunos que eran extranjeros
se hicieron cargo de parroquias o curatos, violando el art. 130 Constitucional.185
Las fricciones entre el gobierno y el clero se iban acentuando conforme pasaba el
tiempo, cada uno debía de acatar lo que se acordó en el pacto del 29, pero no fue así,
los enfrentamientos seguían, aunque ya no por las armas. En cierta manera las partes
involucradas no respetaron los lineamientos que se establecieron, por un lado la decisión
184
Ibíd.; Archivo Adalberto Tejeda, Vol. No. 150, Fojas No. 120-121, citado en GARCÍA Morales. “Arreglos de 1929…”,
1974, pp. 9-11.
185
GARCÍA Morales. “Labor reformista en Veracruz (1928-1932). La obra de restructuración y saneamiento dentro
del Estado”, 1974, pp. 21-22.
90
de que los cristeros seguirían peleando, pero que después se disolvería; también de que
el clero se comprometió a cumplir la Constitución con el fin de regresar al ministerio; a su
vez el gobierno entregaría los templos, aunque esto se llevó más tiempo. No hubo
realmente un modus vivendi, se tuvo que aprender a vivir entre el clero y el gobierno.
Después de junio de 1929 las relaciones entre el estado de Veracruz y el Gobierno
Federal se deterioraron rápidamente, la religión no tuvo nada que ver en este
distanciamiento, sino más bien que los problemas giraron en torno a la política. La
presidencia buscaba someter a Adalberto Tejeda al Partido Nacional Revolucionario,
cosa que el gobernador veracruzano no aceptó, por consiguiente el PNR concluyó que lo
más sensato era permitir que Tejeda terminara su periodo como gobernador.186
2.4 Después del modus vivendi y el regreso a los templos
El obispo de Veracruz, Rafael Guízar y Valencia, se encontraba fuera del país y regresa
de su exilio en mayo de 1929 un mes antes de que se celebraran los tratados que daban
fin a la guerra cristera, caracterizado por mantenerse fiel a su credo; repudió la violencia
y esto propició que no hubiera enfrentamientos en Veracruz.187 A su vez, Guízar había
anticipado la armonía entre la Iglesia y el Estado, invitaba a los feligreses a orar para
alcanzar la merced divina, el perdón y la caridad universal. Tras la resolución IglesiaEstado, el obispo pidió que se debía de respetar a las autoridades civiles en el ejercicio
de sus funciones. Guízar, junto con el obispo de Querétaro, Francisco Banegas Galván,
hicieron un llamado “a la paz y a la concordia”, que se publicó en El Universal el 9 de
junio de 1929.188
En Veracruz, la reanudación de los servicios religiosos comenzó el 1 de agosto de
1929 en Xalapa, por lo que el obispo ofició una misa pidiendo a sus fieles unión y
fraternidad, a su vez, hizo una oración por el presidente Emilio Portes Gil y por el
gobernador Adalberto Tejeda, esto disgustó a algunos prelados y expresaron que el
obispo Guízar debía renunciar al episcopado. Pese a la reapertura de los templos, estos
186
WILLIMAN. “La Iglesia y el Estado…”, Op. Cit., 1976, p. 84.
Ibíd. p. 74.
188
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, p. 253; WILLIMAN. Ibíd., p. 82.
187
91
se fueron entregando parcialmente, como fue el caso del templo parroquial de la ciudad
de Veracruz que se entregó hasta septiembre.189
El gobernador Tejeda desaprobaba la apertura de los templos y el regreso de los
sacerdotes, esto pudo influir en que los templos en Veracruz no se entregaran
inmediatamente manera oficial, los católicos pedían los templos que no eran entregados.
La depresión económica de 1929 que se vivió en esos años fue perjudicial para la
economía mexicana; en Veracruz, esa fue la razón por la que Tejeda evitó que los
templos volvieran a abrirse, al ser una época de carencias el clero utilizaría las limosnas
que les pedirían a los indígenas, a los humildes y a los trabajadores para enriquecerse
aún más y crear nuevas capillas, lo que el gobernador llamaba “centros de ignorancia”.190
La lucha por el poder entre las facciones fue un factor que evitó que las relaciones
internas del país mejoran, se estaba viviendo un periodo conocido como “Maximato”, en
el cual Calles aún tenía influencia y poder en México. Portes Gil deja el cargo de
presidente de la República y en su lugar es nombrado el 5 de febrero de 1930 Pascual
Ortiz Rubio, designado por Calles. Aun así, desde que se presentaban los intereses para
conciliar el asunto religioso, los gobernadores de los estados de Tabasco y Veracruz
criticaron los arreglos por lo que alentaban una lucha contra el clero católico.191
Entre 1929 y 1931 se pensó que el modus vivendi podría ser viable, pero fue difícil,
sino es que imposible para algunos lugares del país. La Iglesia aceptaba su
independencia del Estado que se logró por la vía legal, si bien las autoridades aplicaban
la ley prohibían que se interviniera en la vida interna de la Iglesia. Para 1930 ya había
4,390 sacerdotes autorizados para ejercer su ministerio, como muestra de apoyo a la
voluntad que presentaba el gobierno mexicano, la Iglesia apoyó a Ortiz Rubio para que
fuera presidente de México.192
El regreso de la Iglesia a la vida pública cambió considerablemente la situación
tanto en México como en Veracruz, debido en parte porque se fue infiltrando en las
189
ANTONIO. “Puertas abiertas”, Op. Cit., pp. 179-180; BÁEZ. Ibíd., p. 254; WILLIMAN. Ibíd., p. 82.
BLÁZQUEZ. “Informe que rinde el C. Gobernador del Estado ante la XXXIII H. Legislatura”, Op. Cit. Tomo XII, 1986,
p. 6272; GARCÍA Morales. “Arreglos de 1929…”, Op. Cit., 1974, p. 15.
191
BLANCARTE. “Entre la guerra…”, Op. Cit., 1992, pp. 34-35.
192
MEYER. “La Segunda”, Op. Cit., 1999, p. 355.
190
92
cuestiones educativas, agrarias y políticas, que según el Estado sólo le competían a él.
En Veracruz, la unión clerical fue notoria, en parte favorecida por los terratenientes que
estaban resentidos con el gobernador por haber apoyado a los campesinos. 193 Con las
diferencias entre el Estado y la Iglesia, el distanciamiento entre el Gobierno Federal y el
estado de Veracruz, se inicia una nueva política anticlerical propia, tomando como
principal argumento la crisis económica por la que atravesaba el estado.194
A finales de 1931, Emilio Portes Gil le manda una carta a Plutarco Elías Calles en
el cual expresa que las relaciones entre el clero y el gobierno estaban lejos de los arreglos
del 29 celebrados entre Portes Gil y el Episcopado mexicano:
1. La insolencia del clero ha sido provocada, en parte, por la complacencia de que el mismo gobierno
e instituciones que dependen de él o publicaciones que pertenecen a funcionarios de alta categoría,
han venido teniendo para la propaganda religiosa.
2. El resurgimiento del clericalismo, es además, consecuencia de la política de moderación que ha
tratado de implantar en los últimos tiempos, y que ha provocado un doble movimiento de audacia en
las clases acomodadas y de recelo en las clases proletarias.
3. Para combatir el clericalismo con el respaldo de las masas no hay camino más eficaz que el de
ofrecer el combate en todos los sectores, y muy principalmente en el económico, usando como
instrumento un gobierno radical unido.195
En la década de los treinta inicia un nuevo conflicto entre la Iglesia y el Estado, esta vez
en los gobiernos estatales, las iglesias nuevamente son cerradas por mandato de cada
gobernador como fue el caso en los estados de Oaxaca, Puebla, Tabasco, Veracruz y
Sonora, aunque en otros también se llevó a cabo esta nueva anti religiosidad, de esta
manera los arreglos de 1929 no aplicaba a esta nueva política estatal. 196
La vida religiosa en Veracruz empezó tras los acuerdos Iglesia-Estado del 29, pero
se llevó un tiempo para que los templos se entregaran, además, se emplearía otra política
anticlerical a partir de junio de 1931, cuando el gobierno veracruzano inicia una campaña
en contra del clero en la entidad, haciendo que en Veracruz nuevamente los católicos
sean perseguidos por las autoridades.
193
GARCÍA Morales. “Labor Reformista…”, Op. Cit., 1974, p. 23.
GARCÍA Morales. “Arreglos de 1929…”, p. 11.
195
PORTES Gil, Emilio. Autobiografía de la Revolución, citado en GARCÍA Morales. Ibíd., p. 16.
196
MEYER, Jean. “La marcha de los acontecimientos en Oaxaca, 1929-1932: el modus vivendi respetado” en El
conflicto religioso en Oaxaca (1926-1938), Op. Cit., 2006, p. 51.
194
93
2.4.1 La entrega de los templos a los feligreses de Orizaba, respetando el “modus
vivendi”
Los acuerdos se celebraron el 21 de junio de 1929, se dio la noticia a través de la
Secretaría de Gobernación al resto del país para que se entregaran los templos y los
inmuebles al clero católico, siempre y cuando acate las disposiciones constitucionales,
así lo dijo en un telegrama Portes Gil al Presidente de la Junta de Admón. Civil de
Orizaba.197 El Gobierno Federal pidió a cada estado una lista de los templos existentes,
la clase de culto que practica, la ubicación y sus condiciones, asimismo el gobierno
veracruzano notificó esta disposición al Ayuntamiento de Orizaba pidiendo la información
requerida.198
Tabla 5. Lista de los templos entregados al
Gobierno de Veracruz
Templo
Parroquia Santa María
Guadalupe “La Concordia
Los Dolores
El Carmen
Santa María
San Juan de Dios
Parroquia San Miguel
San José de Gracia
San Antonio
Santa Gertrudis
Capilla San Antonio
El Calvario
Barrio Nuevo
Tercer Orden*
Santísima Trinidad
(sin nombre)
Culto
de Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Católico
Protestante
Protestante
Lugar
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Jalapilla
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Orizaba
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222.
*Clausurado por deterioro. Posiblemente se refiera al templo de La Soledad, que se encuentra adjunto al de
San José de Gracia.
197
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informe. C.-529, Exp. 6. Agustín Barrios Secretario de la Junta de Admón. Civil
certifica que en su oficina hay in telegrama, Orizaba, 21 de junio de 1929.
198
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. Circular No. 67, del Secretario
de Gobierno G. Vázquez al Presidente de la H. Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 24 de junio de
1929.
94
Ante la noticia de que los templos serían regresados al culto, en Orizaba los católicos
expresaron su regocijo a las autoridades municipales pidiendo la parroquia de San Miguel
para que el día de que les sean entregados los templos esté adornada de la parte exterior,
siguiendo los estatutos que marcaba la Constitución; el permiso les fue concebido.199
El 29 de junio se giraba una Circular por parte del Departamento de Gobernación
y Justicia del Gobierno del Estado, que fue pasado a todos los municipios:
El C. Subsecretario de Gobernación, Encargado del Despacho de la Secretaría, en telegrama 27 del
actual, dice a este Gobierno lo que sigue: Habiendo resuelto el clero católico romano reanudar
próximamente servicios culto con sujeción leyes vigentes según acuerdo celebrado con C. Presidente
de la República encarézcole (sic) atender instrucciones siguientes: Juntas Vecinales encargadas
administración Templos deberán entregarlos previo inventario a sacerdotes mexicanos por nacimiento
proponga a ese Gobierno Autoridad eclesiástica correspondiente expresados sacerdotes en unión diez
vecinos mexicanos católicos levantarán por duplicado acta entrega acompañada inventarios de bienes
muebles e inmuebles dejando originales Presidente Municipal lugar y enviando a esta Secretaría copia
certificada de dichas actas e inventarios entendiendo omisión aviso castigarase (sic) términos Código
Penal y esta Secretaría ordenará clausura Templo, entre tanto cúmplase requisitos legales. Sacerdotes
quedan carácter encargados Templos serán responsables ante Autoridades del cumplimiento Leyes
sobre culto y disciplina externa y de conservación bienes reciban. Entrega Templos comprenderá
locales y dependencias encuéntranse (sic) actualmente poder Juntas Vecinales a excepción los que
estén destinados a servicios públicos federales o locales y los administra Oficinas Federales de
Hacienda. Para velar celosamente cumplimiento anteriores disposiciones conviene autoridades
municipales intervengan esta sola vez a efecto entregas verifíquense cuidadosamente especificando
objetos faltantes de acuerdo últimos inventarios para exigir responsabilidades procedieran. Igualmente
dichas Autoridades Municipales deberán abrir libros registro Templos encargados pena de aplicárseles
sanciones artículo ciento treinta constitucional y leyes reglamentarias. La aplicación de esta Circular se
hará sin contravenir leyes locales que fijen número máximode ministros de los cultos según las
necesidades regionales. Atentamente. El Subsecretario Encargado del Despacho. F. Canales y por
acuerdo del C. Gobernador, lo transcribo a ustedes para su conocimiento y a fin de que sirva comunicar
estas instrucciones a los Sres. Presidentes de las Juntas Vecinales de ese Municipio, recomendándole
a usted a la vez, la observancia de las mismas disposiciones. 200
La autoridad de Orizaba informó al gobierno del Estado que el obispo Rafael Guízar y
Valencia nombró a los sacerdotes que recibirían los templos, estos eran: José María
Flores, Leopoldo Osorio, Alfonso G. Sánchez, Santos Torres, Gustavo Domínguez,
Vicente Vargas Galeana, Francisco Rodríguez y Celedonio Pérez, por lo que pedía
autorización si se le autorizaba la entrega a ellos o no. Sin embargo, el gobierno del
199
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. De José María Ramírez, Víctor
Castillo, Amado Arias y demás firmantes al C. Presidente de la Junta de Admón. Civil, Orizaba, 26 de junio de 1929;
Ibíd., del Presidente de la Junta de Admón. Civil Rafael Sierra Domínguez a los CC. José María Ramírez y demás
firmantes, Orizaba 3 de julio de 1929.
200
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Inventarios. C.-507, Exp. 7. Transcripción de Circular No. 70, del Presidente de la
Junta Rafael Sierra Domínguez a los miembros de la Junta Vecinal encargada de los Templos del culto católico Sres.
Ernesto Gallan, Gustavo Sota, Luis Fuentes Cicero, Agustín Aguilar Muñoz y Hermelindo Díaz, Orizaba, 6 de julio de
1929.
95
Estado respondió que los templos debían de ser entregados a los sacerdotes que las
Juntas Vecinales presentaran, haciendo caso omiso de que el obispo los acredite o no. 201
Conforme a lo estipulado en la Circular No. 70, tanto las autoridades municipales
como los representantes del clero se comprometieron a acatar la ley, especialmente lo
que se estipuló en los arreglos del 21 de junio de 1929. Ante esto, los católicos
empezaron a agruparse para recibir los templos, por lo que nuevamente se nombrarían
a los vecinos encargados de recibirlos, así como del cura que fuera asignado por las
autoridades. El obispo Guízar aprobaría esto último para evitar enfrentamientos.
La entrega de los templos fue en el mes de julio. Según el protocolo, la junta vecinal
y las autoridades deberían de estar en el templo para asignar a los nuevos encargados y
al sacerdote seleccionado para su custodia:
Tabla 6. Lista de los nuevos encargados de los Templos después
de los arreglos del 21 de junio de 1929.
Templo
Barrio Nuevo
Margarito Almanza
Luis Celiceo
Manuel Ciruelo
Faustino González
Cresencio Torres
Tomás Torres
Porfirio Vázquez
Paulino Torres
Ángel Ciruelo
Gregorio Santos
Pbro. Francisco T. Zepeda
Templos
Santa María
Jesús García González
Ricardo Ortega
Isaac Osorio
Manuel Gómez y Gómez
Francisco Vázquez
Manuel Vázquez
El Carmen
Ricardo Osorio
Isaac Osorio
Manuel Gómez y Gómez
Humberto Ahuja
Leonardo Gallardo
Alberto Osorio
201
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Inventarios. C.-507, Exp. 7. Telegrama, del Presidente Municipal Rafael Sierra
Domínguez al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 8 de julio de 1929; Ibíd., del Secretario de Gobierno G. Vázquez al
C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Jalapa-Enríquez, 11 de julio de 1929.
96
Gabino Alonso
Eliezer Jara
Leonardo Gallardo
Humberto Ahuja
Rubén Yáñez
Francisco Vázquez
Daniel Díaz
Felipe Sánchez Déctor
Pbro. Vicente Vargas Galeana
Templos
San José de Gracia
San Juan de Dios
Jesús García González
Ricardo Osorio
Ricardo Ortega
Isaac Osorio
Isaac Osorio
Manuel Gómez y Gómez
Manuel Gómez y Gómez
Humberto Ahuja
Francisco Vázquez
Leonardo Gallardo
Manuel Vázquez
Alberto Osorio
Gabino Alonso
Rubén Yáñez
Eliezer Jara
Francisco Vázquez
Leonardo Gallardo
Daniel Díaz
Humberto Ahuja
Felipe Sánchez Déctor
Pbro. Alfonso M. Sánchez
Templos
La Concordia
Santa Gertrudis
Los Dolores
Humberto Ahuja
Humberto Ahuja
Humberto Ahuja
Jesús García González
Jesús García González
Jesús
García
González
Ricardo Ortega
Ricardo Ortega
Ricardo Ortega
Isaac Osorio
Isaac Osorio
Isaac Osorio
Manuel Gómez y Gómez
Manuel Gómez y Gómez
Manuel Gómez y
Gómez
Francisco Vázquez
Francisco Vázquez
Francisco Vázquez
Manuel Vázquez
Manuel Vázquez
Manuel Vázquez
Gabino Alonso
Gabino Alonso
Gabino Alonso
Eliezer Jara
Eliezer Jara
Eliezer Jara
Leonardo Gallardo
Leonardo Gallardo
Leonardo Gallardo
Pbro. Leopoldo Osorio
Templos
Parroquia San Miguel
El Calvario
San Antonio
Jesús García González
Ricardo Osorio
Jesús
García
González
Ricardo Ortega
Isaac Osorio
Ricardo Ortega
Isaac Osorio
Manuel Gómez y Gómez
Isaac Osorio
Manuel Gómez y Gómez
Humberto Ahuja
Manuel Gómez y
Gómez
Francisco Vázquez
Leonardo Gallardo
Francisco Vázquez
Manuel Vázquez
Alberto Osorio
Manuel Vázquez
Gabino Alonso
Rubén Yáñez
Gabino Alonso
97
Eliezer Jara
Leonardo Gallardo
Humberto Ahuja
Francisco Vázquez
Daniel Díaz
Felipe Sánchez Déctor
Pbro. José María Flores
Eliezer Jara
Leonardo Gallardo
Humberto Ahuja
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Inventarios. C.-507, Exp. 7.
Todos, con excepción del templo de Barrio Nuevo fueron entregados el 17 de julio de
1929, aquél fue entregado el 20 de julio. De la misma manera, los sacerdotes tenían que
ser mexicanos de nacimiento para que se les entregaran los templos y pudieran ejercer
el ministerio. A pesar de que el clero recibía los templos, no tenían la libertad que
pensaban, puesto que el gobierno supervisaba que se cumpliera la Constitución, para
lograrlo giró otra Circular a los Ayuntamientos para su cumplimiento, lo cual fue avisado
a los sacerdotes que recibieron los templos en Orizaba:
LEY REGLAMENTARIA DEL ARTÍCULO 130 DE LA CONSTITUCIÓN FEDERAL
Art.1°. Corresponde al Poder Ejecutivo Federal, por conducto de la Secretaría de Gobernación ejercer
en materia de culto religioso y disciplina externa la intervención que esta Ley le concede.
Art. 2°. El matrimonio es un contrato civil.
Este y los demás actos del estado civil de las personas son de la exclusiva competencia de los
funcionarios y autoridades del orden civil, en los términos prevenidos por las Layes, y tendrán las fuerzas
y validez que las mismas les atribuyen.
Sólo cumplidas las disposiciones de las Layes sobre actos o contratos referentes al estado civil, podrán
los ministros de cultos celebrar las ceremonias que prescriba una religión o secta sobre actos de esta
naturaleza y siempre que ante ellos, los interesados o deudos comprueben con el certificado o
certificados correspondientes, haber llenado los requisitos de la ley
Los ministros de culto que desobedezcan la disposición anterior serán castigados administrativamente
con multa de hasta cien pesos, y si no se pagan, con arresto hasta ocho días.
Art. 3°. Los encargados de los templos, así como de los ministros oficiantes, están obligados a participar
a la Secretaría de Gobernación, en el Distrito Federal, o a los Gobernadores de los Estados y Territorios
en las demás Entidades Federativas, dentro de plazo de cinco días, la celebración de prácticas
religiosas que se refieren a los actos mencionados en el artículo anterior; expresando si se cumplió lo
dispuesto en ese artículo.
El transcurso del plazo señalado sin que se dé el aviso, es motivo suficiente para imponer al encargado
del templo y al ministerio del culto que intervino en el acto religioso, la pena que señala el último párrafo
del artículo anterior.
La Secretaría de Gobernación en cumplimiento a lo dispuesto en el primero de los artículos citados,
recuerda y exige el estricto acatamiento a las prevenciones y ordenamientos que contienen los artículos
2° y 3° con motivo de la reanudación del culto católico apostólico romano, según su respetable circular
número 27 de 27 de junio último.
El Ejecutivo del Estado, consecuentemente con las disposiciones respectivas de la propia Secretaría
de Gobernación y, respetuoso al par a la Ley Reglamentaria citada, por mi conducto recomienda a esa
Presidencia Municipal a su cargo observancia debida a los preceptos legales hechos de su conocimiento
y le encarece vigilancia especial tendiente a que los encargados de templos así como los ministros
oficiantes, proporcionen a este Gobierno por conducto esa Presidencia, dentro del plazo legal, los
informes relativos a la celebración de prácticas religiosas sobre actos o contratos del estado civil,
RECORDANDO A DICHOS MINISTROS, DESDE LUEGO, LA PROHIBICIÓN DE CELEBRAR LAS
CEREMONIAS RELIGIOSAS, SIN LA PREVIA CERTIFICACIÓN DE LOS CERTIFICADOS
OFICIALES.
A efecto de que pueda llevarse un registro general de los actos del estado civil verificados en todo
el Estado, por los ministros de los cultos radicados en esa Entidad, recomiendo a usted atentamente se
98
sirva enviar a esta Secretaría, -Departamento de Estadística-, MENSUALMENTE, un resumen total del
número de actos religiosos de quese trata por lo que respecta a ese Municipio.
Anticipando a usted las debidas gracias por la atención preferente que de seguro se servirá dispensar
a (tal) asunto y, recomendándole acusar de recibido, le reitero mis consideraciones. 202
Como los católicos de Orizaba ya esperaban la apertura de los templos desde que se dio
la noticia de los arreglos, solicitaron a la Secretaría de Gobernación que diera la orden
para que los templos de esa ciudad se incorporaran al culto, esto ocasionó que
Gobernación pidiera informes del asunto que ya se había arreglado, por lo que a través
del gobierno veracruzano se supervisó de las autoridades de dicha ciudad cumplieran
con lo dispuesto en los arreglos del 29, habiendo contestado que los templos se
entregaron desde el 17 de julio.203
No sólo el templo fue lo que se confiscó y posteriormente se devolvió, sino que
también los anexos con que contaban, mismos que debían de ser vigilados y mantenerse
por parte de las juntas y las autoridades políticas. Por lo tanto, una vez que los templos
pasaron a mano de los católicos se hizo lo mismo con los anexos que tuviera cada uno,
en la ciudad de Orizaba, por parte del Agente del Ministerio Público Federal adscrito al
Juzgado Segundo de Distrito de Veracruz, que recibió un telegrama de la Procuraduría
de General de la República, se pidió una relación de los anexos y del uso que se les
da.204
Tabla 7. Informe de Ernesto Galland sobre el estado de los
aaaaaaa anexos
Anexos
Parroquia de San Miguel
Iglesia El Calvario
Iglesia Santa María
Descripción
Antes anexo vacío, hoy casa cural
Antes anexo vacío, hoy casa cural,
empleados al cuidado del templo
No tiene anexos
202
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Circular No. 48, del Secretario
de Gobernación Lic. Gonzalo Vázquez Vela al C. Presidente Municipal, Jalapa-Enríquez, 31 de julio de 1929.
203
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Del Subsecretario de Gobierno
Lic. Luis Vega Pavón al C. Presidente de la Junta de Admón. Civil de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 1 de agosto de 1929;
Ibíd., del Presidente de la Junta de Admón. Civil Rafael Sierra Domínguez al C. Subsecretario de Gobierno, Orizaba, 8
de agosto de 1929; AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informe. C.-529, Exp. 6. Del Subsecretario de Gobierno Lic. Luis
Vega Pavón al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Jalapa-Enríquez 26 de agosto de 1929.
204
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Circular No. 75, del Secretario
de Gobernación G. Vázquez al C. Presidente de la Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 12 de julio de
1929; Ibíd., del Presidente de la Junta de Admón. Civil al C. Enrique Galland Presidente de la Junta Vecinal, Orizaba,
13 de agosto de 1929.
99
Iglesia El Carmen
Iglesia La Concordia
Iglesia Santa Gertrudis
Iglesia Los Dolores
Iglesia San Juan de Dios
Iglesia San José de Gracia
Iglesia San Antonio
Iglesia Tercer Orden
Casa en ruinas. Antes una parte
habitable, ocupada por el Sindicato de
Eventuales, el cual sigue ocupándola y
parte reparada, ocupada actualmente
por empleados al cuidado del templo
Antes anexo vacío hoy casa cural
No tiene anexos
Antes ocupada por Oficina Verificadora
de Pesas y medidas y demás, familias
que supongo de los empleados
federales, que continúan ocupándola
Antes y ahora, ocupado su anexo por
empleados al cuidado del templo
Antes vacío, hoy ocupado por el
capellán
Antes vacío, hoy ocupado por
empleados del templo
No fue recibido por esta junta ni
entregado, estando destinado antes y
ahora a garage
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217.
Los anexos que se entregaban debían de encontrarse vacíos, así lo dispuso la Secretaría
de Gobernación, siendo recibidos por el mismo sacerdote que custodiaba el templo, para
ello debían de contar con la aprobación de las Juntas Vecinales o del Agente del
Ministerio Público, según sea quien lo tenga a su resguardo. Aquellos anexos que
tuvieran un uso por parte del Ejecutivo Federal, quedarán pendientes de ser entregados;
sin embargo, el Ministerio Público argumentó que no tenía a su disposición ningún anexo,
por lo que el asunto debía de ser tratado directamente con las autoridades federales. 205
Así como las autoridades civiles estuvieron al pendiente del cumplimiento de los
lineamientos políticos, de la misma manera lo estuvo el obispo Rafael Guízar y Valencia
para que el gobierno cumpliera con su parte de entregar los templos al culto católico, el
obispo se mostraba atento a sus feligreses y buscaba la manera de atenderlos, así como
tener en cuenta las necesidades de su diócesis. Esto se plasmó cuando se percató que
205
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-556, Exp. 222. Circular No. 76, del Secretario
de Gobierno G. Vázquez al C. Presidente de la Corporación Municipal, Jalapa-Enríquez, 15 de julio de 1929; Ibíd., del
Presidente de la Junta de Admón. Civil al C. Agente 1° del Ministerio Público, Orizaba, 7 de agosto de 1929; Ibíd., del
Agente 2° Auxiliar de la Procuraduría Lic. Miguel Tejera al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Orizaba, 16 de
agosto de 1929.
100
el templo de la Tercera Orden no había sido entregado, por lo que solicitó a la Secretaría
de Gobernación cumpliera su palabra para que se lo entregaran, al respecto la autoridad
municipal respondió que jamás fue recogido por el gobierno ni por el clero, que era
ocupado por un particular que se entendía con la Junta Vecinal.206
Por otra parte los protestantes siguieron presentes, Cirilo Ávila, representante en
Orizaba y siguiendo las leyes que la política religiosa establecía, presentó una petición
ante la Secretaria de Gobernación para construir un templo, el permiso le fue concedido
siempre y cuando obedeciera el artículo 130 Constitucional, cumpliendo cada inciso que
establecía así como presentar los requisitos correspondientes, la noticia le fue dada por
parte del gobierno del Estado.207
Para construir el templo, Cirilo debía esperar la respuesta del gobierno si aprobaba
o no la construcción del templo, así, cuando se le da el permiso correspondiente con las
normas a seguir, además tuvo que informar dónde estaría el templo: Av. 6 No. 56,
Orizaba, así como el permiso a la Secretaría de Gobernación para la inauguración del
templo, lo cual le fue concedido al interesado, respetando el art. 130 Constitucional.208 La
autoridad municipal de Orizaba informó que las prácticas de culto habían iniciado desde
el 17 de abril de 1930.209
206
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informe. C.-529, Exp. 6. Del Subsecretario de Gobierno Luis Vega Pavón al C.
Presidente de la Junta de Admón. Civil, Jalapa-Enríquez, 18 de octubre de 1929; Ibíd., del Presidente de la Junta de
Admón. Civil Rafael Sierra Domínguez al C. Subsecretario de Gobierno, Orizaba, 29 de octubre de 1929.
207
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Del Subsecretario de Gobierno
Luis Vega Pavón al C. Presidente de la H. Junta de Admón. Civil, Jalapa-Enríquez, 17 de agosto de 1929; Ibíd., del
Presidente de la Junta de Admón. Civil Francisco Riveros al C. Subsecretario de Gobierno del Estado, Orizaba, 29 de
agosto de 1929; Ibíd., del Gobernador del Estado de Veracruz al C. Secretario de Gobernación, Jalapa-Enríquez, 18
de octubre de 1929.
208
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-507, Exp. 9. Del Oficial Mayor al Sr. Cirilo Ávila, México, D.F.,
abril de 1930.
209
AMO. Ramo Gobierno, Presidente Municipal, Correspondencia. C.-559, Exp. 253. Del Subsecretario de
Gobernación Lic. Luis Vega Pavón al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 19 de mayo de 1930; Ibíd.,
del Presidente Municipal Pedro López al C. Subsecretario de Gobernación, Orizaba, 13 de junio de 1930.
101
El Gobierno Federal llevaba un control minucioso sobre los templos, solicitó
nuevamente los informes de los inmuebles religiosos, para llevar un control estadístico;
en Orizaba lo hizo el cura José M. Flores, el resultado lo entregó a las autoridades.210
Tabla 8. Informe rendido al Presidente Municipal de Orizaba en
contestación a la Circular 104 por el cura José María
Flores
Informe
I. Bajo la
responsabilidad de
quien se halla el
templo o templos del
lugar
II. Desde qué fecha
III. Quién ocupa los
anexos curales
IV. Desde qué fecha
V. Qué autoridad los
facultó para usar los
anexos, citando la
fecha si se trata de
acuerdos
Presidenciales
VI. En qué estado se
hallan dichos anexos
curales
VII. Qué oficina de
Gobierno hay
establecida
VIII. Si dicha Oficina
ocupa todo el anexo, si
hay Departamento
desocupado
IX. Nombre de la
persona o personas a
cuyo cargo se hallan el
templo y los anexos
Descripción
Los templos de esta ciudad están bajo la
responsabilidad de los sacerdotes siguientes: José
María Flores: San Miguel, El Calvario y San Antonio;
Leopoldo Osorio: La Concordia, Los Dolores y
Santa Gertrudis; Gastón Ferrer: Santa María y El
Carmen; Alfonso M. Sánchez: San José de Gracia y
San Juan de Dios
17 de julio de 1929
Los anexos de San Miguel y de La Concordia están
ocupados por los párrocos respectivos
Julio citado
Tengo entendido que se entregaron por orden de la
Secretaría de Gobernación en la fecha citada
En regular estado
En el anexo del templo Los Dolores, entiendo había
una Oficina de Peso y Medidas
Como dicho anexo no ha sido entregado aún, la
Oficina local de Hacienda podrá informar
Santa María y San José de Gracia carecen de
anexos, San Juan de Dios solo tiene una pieza
ocupada por el sacristán, el de El Calvario está
ocupado por el sacristán Luis Durán y su familia, el
de San Antonio por Francisca Vallejo Espejo quien
cuida el aseo del templo, el de Santa Gertrudis por
210
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informe. C.-529, Exp. 6. Circular No. 104, del Subsecretario de Gobierno Lic. Luis
Vega Pavón al C. Presidente de la H. Corporación Municipal, Jalapa-Enríquez, 10 de octubre de 1919; Ibíd., del
Presidente de la Junta Rafael Sierra Domínguez al Sr. Cura José María Morelos.
102
el Sacristán Juan Miranda y su familia, el de El
Carmen está en ruina alguna parte lo ocupa el
sacristán Guadalupe López
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informe. C.-529, Exp. 6.
La información recaudada entre esta última tabla y la número 7 es variada, podría haber
sido porque las circunstancias cambiaron de julio a octubre de ese año. Del mismo modo
para 1930 hubo cambios en los sacerdotes que se encargarían de los templos, todo tenía
que hacerse de acuerdo a los lineamientos del gobierno para un mejor control.
Todo en cuanto a la situación de los templos tenía que seguir un estricto
procedimiento en cuanto a solicitudes, quejas, permisos, registros y pedimentos de
cualquier índole. De acuerdo al asunto a tratar era como se dirigían a las autoridades,
pero para mayor seguridad, en ocasiones solicitaban la intervención de la Secretaría de
Gobernación que era quien tenía las facultades de dictaminar si se cumplían o no lo
encomendado. Un caso se presentó en Orizaba cuando algunos ciudadanos pidieron su
intervención porque las autoridades de la ciudad reglamentarían el uso de las campanas,
aunque en ocasiones ciertas demandas debían de ser acordadas con la autoridad
municipal a petición de Gobernación.211
Para mayo de 1930 llegaba el nuevo en cargado de la iglesia de la Santísima
Trinidad, que desde el año pasado se encontraba sin representante religioso con la salida
de Nicolás Cortes Esparza, el nuevo representante siguió los lineamientos
constitucionales y se presentó ante las autoridades para hacer de su conocimiento que
tomaría posesión del templo que le fue concedido por la Iglesia Nacional Presbiteriana
en México, el presidente de Orizaba le informaba al nuevo representante que debía
cumplir con el art. 130 Constitucional..212
En ese mismo mes, el obispo Guízar y Valencia avisó al presidente de Orizaba
que había nombrado al sacerdote Juan Valiente para hacerse cargo del templo La
Concordia, en cuanto el sacerdote llegó a la ciudad tuvo que presentarse ante las
211
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-555, Exp. 217. Del Oficial Mayor Manuel
Collado a los CC. Carlos Ortiz y demás, México D.F., 12 de diciembre de 1929.
212
AMO. Ramo Gobierno, Presidente Municipal, Correspondencia. C.-559, Exp. 253. De A. Vázquez D. al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 29 de mayo de 1930; Ibíd., del Presidente Municipal Jesús Ponce al C. A. Vázquez D. Orizaba, 9
de junio de 1930.
103
autoridades para hacer de su conocimiento que sería el nuevo encargado de dicho
templo, siendo esta la manera de cubrir los requisitos que pedía la ley para una relación
entre el clero y el gobierno orizabeño.213
Además, el 20 de junio de 1930 se fundó en Orizaba el grupo parroquial de la
Juventud Católica Mexicana por el sacerdote Rafael Rúa Álvarez, quien nombró al
sacerdote José María Flores como “Primer Asistente Eclesiástico” y a Elena Galland
Naredo como “Primera Presidenta Parroquial” que en el mes de septiembre sería
sustituida por Dolores Oliver y Suárez Peredo que ocuparía tal cargo hasta octubre de
1937. Este grupo conformado por mujeres católicas enfrentó una nueva ley anticlerical
en Veracruz.214
El modus vivendi que presentaba Orizaba se podría considerar que fue menos
agresivo que el de otros puntos del país, principalmente de aquellos en donde se libró la
guerra. A pesar de que Tejeda no estaba a favor de los arreglos tuvo que entregar los
templos por petición del Gobierno Federal, aun así la situación religiosa siguió un camino
difícil, pues a pesar de esos arreglos el gobierno estaba vigilante de que los artículos
plasmados en la Constitución se cumplieran perfectamente.
Supervisar que el clero, católico o protestante al menos en Orizaba, cumplieran
con tales disposiciones era tarea del gobierno. Todo se tenía que hacer de acuerdo con
la ley, por eso hubo comunicación entre los funcionarios, siguiendo la línea jerárquica que
iba desde el presidente municipal pasando por el gobernador para finalmente llegar al
presidente, de la misma manera la respuesta que se daba. Aunque hubo casos que si la
situación lo meritaba se dirigían directamente al Gobierno Federal, como fue la petición
de los templos o permisos de oficiar misas.
Las relaciones entre el clero y el gobierno orizabeño eran viables de acuerdo a la
ley, sin embargo, una nueva medida anticlerical fue tomada por los gobiernos estatales.
213
AMO. Ramo Gobierno, Presidente Municipal, Correspondencia. C.-559, Exp. 253. Del obispo de Veracruz Rafael
Guízar Valencia al Alcalde Municipal de Orizaba, Actopan, 29 de mayo de 1930; Ibíd., del Presidente Municipal al
obispo Rafael Guízar Valencia, Orizaba, 19 de junio de 1930; Ibíd., del Pbro. Juan Valiente al C. Presidente Municipal,
Orizaba, 10 de junio de 1930; Ibíd., del Presidente Municipal al Pbro. Juan Valiente, Orizaba, 19 de junio de 1930.
214
APO. S/C. Acta de actividades de este grupo católico, en el cual se muestra que estuvo presente hasta la década
de los cincuenta.
104
Durante el mandato de Adalberto Tejeda se decreta una nueva ley anticlerical en 1931,
el cual da inicio a un nuevo enfrentamiento entre la Iglesia y el Estado ahora en el terreno
estatal que se prolongaría hasta 1937, donde una situación que ocurre en Orizaba pone
a los católicos fervientes de justicia y exigen la reapertura de los templos.
105
Capítulo III. El gobierno radical en Veracruz. La segunda ley
antirreligiosa en la década de los treinta del siglo XX
En junio de 1929 se llevaron a cabo los arreglos entre el Gobierno Federal y el
Episcopado Mexicano que dio fin a la guerra cristera. De acuerdo a los tratados, el
gobierno entregaría los templos y permitiría que los clérigos regresaran al culto siempre
y cuando respetaran los artículos de la Constitución, los cristeros entregarían las armas
y el ejército no los perseguiría más.
Sin embargo, los acuerdos no fueron suficientes para frenar el enfrentamiento
entre el clero y el gobierno, ambos se acusaban mutuamente de no acatar los
lineamientos estipulados por lo que los enfrentamientos siguieron hasta la década de los
treinta, pero ahora bajo el dominio del gobierno estatal, donde algunos gobernadores que
estaban en contra de los arreglos del 29 decretaron leyes anticlericales. Veracruz no fue
la excepción, Adalberto Tejeda apoyó la política anticlerical de Plutarco Elías Calles y
más tarde decretó una ley anticlerical estatal.
Tejeda mostró desde un principio no estar de acuerdo con los arreglos, pero antes
de que decretara la ley debió de gestionar su política valiéndose de las clases populares
que eran su principal apoyo. Para 1931 el gobernador Tejeda logra que la ley anticlerical
sea válida en el estado de Veracruz, que se extendió hasta 1937 con Miguel Alemán
Valdés al mando del gobierno veracruzano. La ley anticlerical veracruzana también es
conocida como “Ley Tejeda”, como lo fue en un momento la “Ley Calles”, que tomaron el
nombre por su legislador.
En este capítulo se pretende explicar el “comienzo” y el “fin” de la ley Tejeda, así
como los medios que el gobierno veracruzano utilizó para lograr su cumplimiento; no se
pretende desarrollar la política de Adalberto Tejeda ni de ningún otro gobernador que
mientras la ley anticlerical estuvo vigente, sino que se abordará el contexto ante esta
cuestión. Cabe señalar que cada mandatario estatal gestionó su propia política, por lo
que el gobierno de Veracruz tuvo distintos matices de 1931 a 1937 en cuanto a la
administración pública.
106
3.1 El anticlericalismo veracruzano
Cuando Tejeda arribó al poder en Veracruz la ley Calles seguía vigente, por lo que siguió
cumpliéndose, se creyó que las medidas serían más extremas porque se le conocía el
anticlericalismo que el gobernador profesaba, pero mientras se cumpliera la ley no habría
problema alguno; sin embargo, a pesar de estar en contra de las tendencias religiosas
no se consideraba enemigo de la religión en sí, sino del “fanatismo”, acusaba al clero de
los males que perpetuaban la ignorancia, sumisión y pobreza de la población. Tejeda se
mantenía firme en su idea y atribuía que el mejoramiento del pueblo estaba en la
ilustración, para el gobernador el buen gobierno era el gobierno ilustrado.215
Desde que ocupó la gubernatura de Veracruz por primera vez, Tejeda plasmó los
ideales revolucionarios articulándolo con la política liberal de Juárez en cuanto a la
política religiosa, estaba convencido de que a través de estos preceptos se podían
extirpar del país los males que radicaban en el sentimiento religioso para lograr el
“despertar” de los ciudadanos. Su experiencia en el campo político lo llevó al gabinete
callista; de regreso como gobernador hizo lo posible por controlar la política a través de
sus “facultades extraordinarias”, que consistieron en la influencia que ejercía sobre los
ayuntamientos y políticos allegados al gobernador Tejeda.216
Tejeda consideró a los arreglos del 29 como una claudicación por parte del Estado,
en los años treinta se mantuvo al frente de la lucha en contra de la Iglesia, el radicalismo
empezaba a ejercerse; el obispo Guízar sabía que el gobernador repudiaba tales
acuerdos por lo que se centró en seguir la línea conciliatoria que practicó desde la guerra
cristera.217 El escenario conflictivo ahora sería el estado de Veracruz, un nuevo
enfrentamiento estaba por empezar debido a que los gobiernos estatales consideraban
que la Iglesia violaba la Constitución.
Después de casi un año de que los cultos regresaron a las iglesias, el descontento
del gobierno iba creciendo, Adalberto Tejeda junto con otros gobernadores, siguieron
mostrándose enérgicos contra el clero, por lo que vigilaban que los clérigos cumplieran
215
FALCÓN y García. Op. Cit., 1986, p. 170.
FALCÓN y García. 1986, pp. 171, 194.
217
FALCÓN y García. 1986, pp. 172, 255-256.
216
107
la Constitución. Sin embargo, en el caso veracruzano, el gobernador tuvo que solucionar
su propia política, como afianzarse en el poder lográndolo con el apoyo de las clases
populares y buscó el favor de la presidencia del país, lo cual no fue fácil para Tejeda
debido a que Pascual Ortiz Rubio era su rival en la contienda política, además de la
situación económica que se atravesaba el país desde 1929.
Sin embargo, desde inicios de 1931 la lucha contra el clero tomó fuerza cuando en
la Convención de la Cámara de Trabajo que se celebró en el mes de enero en Xalapa,
se tocó el tema de una campaña anticlerical donde los obreros querían llevarlo a cabo
con el objeto de desfanatizar a sus hijos. Ante esta iniciativa se integra una Liga de
Resistencia Anticlerical que contaría con la ayuda del Sindicato de Maestros y de los
obreros más capacitados dentro de los problemas sociales. Mientras tanto, en la ciudad
de México se forma la Liga Anticlerical Revolucionaria (LAR), la cual tendrá presencia en
la capital veracruzana, con una visión ideológica de la lucha antirreligiosa, que además
sería encargado del primer Congreso Nacional Anticlerical con sede en el D.F., durante
los días 2 y 3 de abril de 1931.218
Por parte de la entidad veracruzana asistieron los anticlericales Manlio Fabio
Altamirano, Agapito Barranco, Rafael Ortega C., Ignacio R. Ojeda, Germán List Arzubide,
José Mancisidor, Juan Bartolo Hernández, Francisco J. Mancillo, Moisés de la Torre y
otros,219 la relación entre estos personajes fue que algunos tenían tendencias políticas
de izquierda; asimismo se da a conocer el programa de la LAR:
La acción clerical, producto obligado de la mentalidad religiosa, ha sido a través de los tiempos una
reaccionaria que ha actuado frenando el progreso de la humanidad. Con la proclamación dogmática de
sus principios, que a pesar de ser notablemente absurdos, no pueden discutirse, esclavizan la
conciencia del hombre introduciéndose en el seno de la familia, en donde el pretendido carácter de
Ministros Divinos que tienen sus miembros, les abre las puertas, pervierten las costumbres.
Además, la religión no es sino uno de tantos puntales del actual sistema de explotación capitalista, que
sólo la revolución social podrá derribar. Combatir al fanatismo religioso sin combatir un régimen que lo
fomenta porque de él obtiene provecho, sería demostrar una torpe miopía en la apreciación de los
fenómenos sociales.
Los elementos clericales, especialmente en el caso del catolicismo que es el que mayormente nos
interesa por su carácter predominante en nuestro medio, están fuertemente unificados, lo que hace que
su poderío se acreciente, obligando a adoptar también una organización homogénea a los elementos
que deseen combatirlos.
218
GARCÍA Morales, “La lucha contra el clero. Organización de la unión revolucionaria anticlerical”, Op. Cit., 1974, p.
27.
219
Ibíd. p. 27
108
El fanatismo religioso y las instituciones que en él encuentran su origen, medran el amparo de la
ignorancia ambiente y, por tanto, es menester combatirlos destruyendo dicha ignorancia. Además
habiendo dispuesto de todos los medios para ello, con el transcurso de los siglos, han falseado la
historia, adulterando la moral y corrompiendo las costumbres, lo que obliga urgentemente a hacer la luz
sobre todas sus infamias seculares, para que el pueblo pueda apreciar la verdad de las cosas. Todos
los medios de difusión cultural, conferencias, periódicos, folletos, libros o carteles, son pues, armas
importantes en la lucha anticlerical.
Por otra parte, tenemos en nuestro país todo un conjunto de disposiciones legales que limitan las
actividades eclesiásticas pero que, desgraciadamente, con aterradora frecuencia son olvidadas por
quienes tienen obligación de hacerlas cumplir. Sólo una organización anticlerical potente, contando con
el apoyo de las masas, podrá hacer la suficiente presión para que tales leyes no sean letra muerta.
La historia nos enseña que los defensores del fanatismo religioso no han vacilado nunca en recurrir a
los medios más viles para deshacerse de sus enemigos y, por lo tanto, los anticlericales debemos estar
fuertemente unidos y estrechamente solidarizados para defendernos de las acometidas del
oscurantismo y sus testaferros.
Por último, fácilmente podemos ver, y esto no sólo en México, sino en el mundo entero, cómo la clerecía
de todas las denominaciones, contando con el apoyo de la burguesía, que ha abandonado ya casi por
completo su máscara demagógica y liberal, se apresta a iniciar la ofensiva contra los elementos que le
son antagónicos. El “arreglo” del conflicto religioso entre nosotros, la recuperación del poder temporal
por el Papa, el concordato de Prusia con la Santa Sede, así como la ruda campaña contra la Unión
Soviética, secundando las maniobras de los intereses capitalistas, son magníficas ilustraciones de lo
anterior.
Considerando pues, todo lo expuesto, la Liga Anticlerical Revolucionaria acepta para la organización
básica de sus labores, los siguientes postulados:
1. Al combatir la funesta acción del clericalismo en todos sus matices, se combate también el fanatismo
que lo alimenta y que es una ofensa a la razón humana.
2. Siendo las masas obreras y campesinas las únicas capaces de combatir el clericalismo en todas sus
manifestaciones por ser las que más resienten la explotación del mismo, y no pudiendo llevarse a
buen término este combate sino después de la revolución social, se admite sin taxativas el principio
de la lucha de clases y se hace frente único sin reserva alguna, con el proletariado revolucionario.
3. Siendo menester organizaciones homogéneamente en escala nacional emprender con éxito el
combate contra el clericalismo, se admite como base para ello un centralismo democrático que dé
cohesión a nuestros elementos.
4. Todos los medios de difusión cultural son buenos para el combate contra el fanatismo religioso y por
consiguiente, todos ellos se emplearán de acuerdo con las posibilidades materiales, procurando
orientarlos hacia hechos y problemas concretos en el terreno social.
5. Viendo que las autoridades, en la mayoría de los casos, no hacen aprecio de las Leyes de Cultos,
se procurará presionar sobre ellas para que les den el debido cumplimiento, y se luchará tenazmente
para impedir su derogación o reforma, a menos que esta última sea para hacerlas más radicales.
6. La organización se hace solidaria de las dificultades que puedan presentarse a sus miembros en el
desarrollo de este programa, y luchará tenazmente para defenderlos en todos los terrenos de las
acometidas clericales.
7. Considerando que las actuales contradicciones del régimen social, así como la agresividad clerical
hacen inevitables futuras luchas de orden material, que ya se vislumbran en el horizonte, la
organización prepara a sus miembros para poder ir, en el momento dado, al terreno que las
circunstancias exijan.220
Con el regreso de los representantes a Xalapa se pusieron en práctica las disposiciones
que se plantearon en el Congreso, la Liga Anticlerical fue quien emprendió la labor de
desfanatización, instaló un Comité Ejecutivo formado de la siguiente manera: “Secretario
General Alfredo Monterrosa; Secretario del Interior Manuel Herrera Ángeles y Secretario
220
AGETRO, Leafar. Las luchas proletarias en Veracruz, citado en GARCÍA Morales. 1974, pp. 28-32.
109
de Finanzas Gerardo García H.” Además se designó una delegación que llevaría la
campaña llamada Comisión de Agitación y Propaganda, conformada por Francisco S.
Mancilla, German List Arzubide, José Luis Díaz Castilla y Raymundo Flores Fuentes.221
Se inició la tarea de emancipación de conciencias por parte del gobierno
veracruzano, llevaron esta misión a las principales ciudades veracruzanas donde se
integraron comités locales dependientes del Comité Central de la Unión Revolucionaria
Anticlerical (URA) en el estado, siendo Xalapa la sede. La URA utilizó a la prensa y atacó
al clero mediante publicaciones de revistas, periódicos, así como conferencias y
manifestaciones públicas, siendo la principal tarea la de desfanatizar al pueblo.222
Los convenios del 29 llegaban a su fin, a pesar de que las partes involucradas
acordaron respetarlos tal pareciera que no fue así, el gobierno, sobre todo los estatales,
iniciaron una campaña en contra del clero, mientras que estos seguían pidiendo los
templos que fueron cerrados. El conflicto político-religioso seguía firme, pero ahora más
radical porque los gobernadores ejercieron su poder respaldándose en la Constitución,
aunque cada uno lo ejerció a su manera, entre los conocidos están Sonora con Rodolfo
Elías Calles, Tabasco con Tomás Garrido Canabal y Veracruz con Adalberto Tejeda.
Las características de estos gobernadores fue que practicaron su anticlericalismo
en sus respectivos estados. El gobierno estatal se valió de recursos para apoyar su
campaña en contra de la Iglesia, como fueron los obreros y los maestros a través de la
educación. En 1931 inició una nueva lucha contra el clero, los católicos no estaban
dispuestos a ceder lo que habían conseguido desde 1929, por lo que hicieron resistencia
ante las acciones del Estado para mantenerse en la vida pública.
Se vivía en el país el “Maximato”, representado por Plutarco Elías Calles, quien
aún influía en la política. El nuevo aliado del Estado era el Partido Nacional
Revolucionario (PNR), el cual adoptó un programa radical en el que tenían cabida el
anticlericalismo, el agrarismo, el nacionalismo económico y un compromiso con la
“educación socialista”. Es en la década de los treinta donde el anticlericalismo favoreció
221
222
Periódico El Dictamen, 24 de abril de 1931, No. 8460 p. 7, citado en GARCÍA Morales. 1974, pp. 32-33.
Ibíd. pp. 33-34.
110
un segundo conflicto religioso, limitado sólo en los estados, pero que provocó la extensión
de la resistencia popular llevando al obstruccionismo, boicots y desobediencia. 223
El Estado mantuvo la prohibición de los partidos confesionales, asegurando así
que ningún partido cristiano pudiera impugnar la hegemonía del PNR, asimismo el Estado
truncó a los sindicatos católicos, fortaleciendo el predominio de los ejes PNR-CROM.224
El poder estatal pudo hacerle frente al eclesiástico, valiéndose de las instituciones y de
los grupos populares para lograrlo. Los problemas entre el gobierno y el clero en Veracruz
se debieron a que los sacerdotes comenzaron a oficiar misas sin consentimiento del
gobernador, además los sacerdotes extranjeros estaban regresando a los templos. Por
otro lado, esos problemas se agravan cuando el 6 de marzo de 1931 hubo una explosión
en la catedral de Xalapa dejando a varios heridos, el gobierno investigó los hechos y se
arrestó a Ernesto Pacheco, secretario general del Sindicato Unitario (comunista), pero
fue liberado debido a la falta de pruebas.225
El 9 de junio, casualmente el mismo mes en que inició y terminó la ley anticlerical
a nivel nacional, el gobernador Tejeda anunció que se tratarán todas las medidas para
eliminar el catolicismo del estado:
Tejeda declaró que todos los gobiernos emanados de la Revolución tenían el imperioso deber de lograr
la desfanatización del pueblo, y de mostrarle simultáneamente el camino hacia el progreso y la
civilización. Que consideraba que la mejor manera de lograrlo era limitando el número de sacerdotes de
las sectas.226
En la ciudad de Orizaba la incertidumbre entre los católicos no se hizo esperar, se
enteraron de que el gobernador estaba dispuesto a una reglamentación de sacerdotes,
en un principio eran once los sacerdotes que podían oficiar en territorio veracruzano,
tomando en cuenta a la población. El gobernador tenía la intención de desfanatizar al
pueblo, así lo demostró el día 10 de junio ante la Cámara Legislativa, en esa primera
lectura los diputados mostraron estar a favor, además, derogaba toda oposición a ese
223
KNIGHT, Alan. “Estado y Sociedad” en Repensar la Revolución, Vol. I, El Colegio de México, México, 2013, pp. 285286.
224
KNIGHT, Alan. “Ideología e identidad” en Repensar la Revolución, Vol. II, El Colegio de México, México, 2013, p.
155.
225
WILLIMAN. “El drama de la Iglesia en Veracruz. Del 6 de marzo al 25 de julio de 1931”, Op. Cit., 1976, p. 88.
226
Periódico El Dictamen, 10 de junio de 1931, citado en WILLIMAN. 1976, p. 89.
111
decreto y comenzará a surtir efectos desde su publicación en la Gaceta Oficial del
Estado.227
A pesar de que los católicos en Orizaba ya conocían la intención del gobernador,
siguieron celebrando el culto, un ejemplo fueron las festividades religiosas de San
Antonio de Padua, tanto en el templo que lleva su nombre como en el de San José de
Gracia, en éste último fue el padre Rafael Rúa quien ofició la misa.228 En el estado de
Veracruz se promovió una legislación para que se permitiera un sacerdote por cada 100
mil habitantes, la cual fue aprobada el 16 de junio de 1931, conocida como la “ley número
197”; más radical en comparación con otros estados que permitían a un sacerdote por
cada 50 ó 4 mil habitantes, inclusive uno por cada municipio; la Gaceta Oficial publicó la
nueva ley de cultos:
ADALBERTO TEJEDA, Gobernador Constitucional del Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave, a
sus habitantes, sabed:
Que la H. Legislatura del mismo, se ha servido expedir la siguiente ley:
ARTÍCULO 1. EL MUNDO MAXIMO DE MINISTROS DE CADA UNO DE LOS CULTOS EN ESTE
ESTADO, SERA DE UNO POR CADA CIEN MIL HABITANTES.
ARTÍCULO 2. LAS AUTORIDADES MUNICIPALES BAJO PENDA DE MULTA DE $1,000.00 UN MIL
PESOS, POR CADA CASO, CUIDARAN DEL EXACTO CUMPLIMIENTO DE ESTA
DISPOSICIÓN.
TRANSITORIOS:
PRIMERO. LA PRESENTE LEY COMENZARÁ A REGIR DESDE LA FECHA DE SU PUBLICACIÓN
EN LA “GACETA OFICIAL” DEL ESTADO.
SEGUNDO. QUEDA ABROGADA CUALQUIERA LEY QUE SE OPONGA A LA PRESENTE.
Dada en el salón de sesiones de la H. Legislatura del Estado, a los diez y seis días del mes de junio de
mil novecientos treinta y uno.
Antonio M. Carlón, Diputado Presidente.
Isaac Fernández, Diputado Secretario.
Por tanto, mando se publique en la “Gaceta Oficial” del Estado para su debido cumplimiento.
Jalapa-Enríquez, a 18 de junio de 1931. A. Tejeda.
El Secretario de Gobierno, G. VÁZQUEZ VELA. 229
La respuesta del clero veracruzano no se hizo esperar, el mismo día en que se publicaba
la nueva ley el obispo de Veracruz declaró:
Como la ley sólo permite que once sacerdotes en todo el Estado cuyo territorio corresponde tres
diócesis; y descontando tres obispos, sólo quedan ocho sacerdotes de manera que quedan para la
diócesis de Veracruz cuatro sacerdotes y cuatro para otras dos. La verdad es que esta nueva ley
227
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 12 de junio de 1931, No. 396, p. 1.
Ibíd. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 14 de junio de 1931, No. 398, pp. 1, 6.
229
BÁEZ. “Los aristas…” Op. Cit., 2006, p. 263; García Morales. “La lucha contra el clero…”, 1974, pp. 36-37.
228
112
equivale a tanto como si no nos dieran nada; por lo que, mientras no se pueda disponer de mayor
número de sacerdotes no se podrá ejercer el ministerio eclesiástico.230
El artículo 130 constitucional se reglamentó en Veracruz, algo que los políticos de aquella
entidad lo aprobaron, una comisión de Damas Católicas entregaron un memorial que fue
leído pero no fue tomado en cuenta, ellas presenciaron la decisión final de la Legislatura
y los agraristas expresaron su contento al ser aprobada por unanimidad la ley. Sin
embargo, los diputados Isaac Fernández, Sostenes Blanco y Agustín Alvarado buscaban
que hubiera sólo cinco sacerdotes en todo el estado, ya que consideraban que once era
demasiado para la desfanatización del pueblo.231
Al momento de decretarse la “Ley Tejeda”, no se hizo mención de las cláusulas
relativas a la cuestión de las leyes de 1926, en la cual prohibía a los extranjeros ejercer
el ministerio y se limitaba a uno el número de obispos para el estado. Por ello, se emitió
una aclaratoria donde se hizo la observación de que la Constitución puede delimitar a
través de las legislaturas estatales y conforme el artículo 130 el número apropiado de los
sacerdotes.232
Para esos años la población total de Veracruz era de 1, 377,293 habitantes,
haciendo que el total de sacerdotes fuera de trece.233 Las poblaciones que superaban los
25,000 habitantes eran: Xalapa con 36,812 habs. Orizaba con 42,904 habs. Veracruz con
67,801 habs.234 Esto indica que la población de los municipios que no llegaban al límite
debió de haberse sumado para dar el total que la ley 197 pedía, de esa forma les fuera
asignado el sacerdote por las autoridades civiles.
Los católicos, ante la nueva crisis que enfrentaban buscaron la ayuda del Gobierno
Federal, girando telegramas a la Secretaría de Gobernación, a la Cámara de Diputados
y Senadores, así como al Gobernador del Estado y a la Legislatura Local. Todo esto para
que los funcionarios los auxiliaran para evitar que el nuevo decreto entrara en vigor o
230
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cot., 2006, pp. 263-264.
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 18 de junio de 1931, No. 401, pp. 1, 4.
232
WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, Op. Cit., 1976, pp. 89-90.
233
García Morales. “Fundamento constitucional de la Ley 197. Sus bases en el artículo 130 Constitucional”, Op. Cit.,
1974, p. 41; http://www.inegi.org.mx/est/contenidos/proyectos/ccpv/default.aspx. Censo de Población y Vivienda
1930, (consultado el 22 de febrero de 2015).
234
http://www.inegi.org.mx/est/contenidos/proyectos/ccpv/default.aspx. Censo de Población y Vivienda 1930,
(consultado el 22 de febrero de 2015).
231
113
fuera reconsiderado.235 Sin embargo, todo esto fue inútil debido a que los funcionarios, al
menos los estatales, estaban dispuestos a continuar con el cumplimiento de la ley.
Debido a que el gobierno veracruzano siguió con la intención de ejercer la ley
antirreligiosa, llegaron felicitaciones al gobierno veracruzano por parte de los Comités
Agrarios, Sindicatos Obreros, Logias Masónicas, maestros y particulares residentes en
el país y en el extranjero, donde elogiaban el decreto de Tejeda en contra de la Iglesia.
Así como también de la Legislatura en donde se pronunciaron discursos en defensa del
gobernador, donde se dijo que la citada ley era Constitucional, para evitar que se
presentaran apelaciones ante el poder judicial.236
El presidente Pascual Ortiz Rubio y el gobernador veracruzano Adalberto Tejeda,
no mostraban amistad entre sí, sus diferencias políticas los colocó como rivales; la nueva
ley en contra de la Iglesia preocupaba al presidente y mostró su desacuerdo al
gobernador, debido a su radicalidad, Ortiz Rubio informó a Tejeda que la situación política
y económica que se vivía en el país le obligaba a proceder con la mayor discreción en
relación al tema religioso para evitar que se alterara el orden público.237
Ortiz Rubio y Tejeda no tenían comunicación, el presidente a través del magistrado
de la Suprema Corte, Manuel Padilla, se comunicaba con el gobernador y fue el
intermediario entre ambos. El 17 de junio, Padilla informó a Tejeda que habló con el
secretario de Gobernación, Octavio Mendoza G., donde le informó el punto de vista del
presidente diciendo que estaba dispuesto a enfrentarse a cualquier desafío clerical, pero
que deseaba evitar desórdenes tanto en Veracruz como en el resto del país; asimismo
esperaba que el gobernador cooperara con el presidente y que la ley se modificara
ligeramente.238
Tejeda se mostró firme en su decisión sobre la ley 197, le informó a Padilla para
que a su vez le dijera a Ortiz Rubio, que no deseaba provocar conflictos ni exacerbar las
pasiones, le informó que las religiones eran nocivas y son un instrumento de explotación,
235
GARCÍA Morales. “Fundamento constitucional…”, 1974, p. 44.
Ibíd. p. 49; WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, Op. Cit., 1976, p. 90.
237
ANTONIO. “El viacrucis de Julio”, 1995, p. 192.
238
WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, Op. Cit., 1976, p. 91.
236
114
le hizo llegar muestras de violaciones por parte del clero y copias de los mensajes de
apoyo a la ley. Aunque desde un principio se postulaba en contra de la medida del
gobierno veracruzano, el presidente Ortiz Rubio cedería después argumentando: “el
Poder Ejecutivo Federal a mi cargo, tiene absoluto respeto por la soberanía de los
estados”. Con esto Tejeda ganó terreno en el camino político y otros gobernadores del
país adoptarían legislaciones similares en contra de la Iglesia.239
Por otro lado, en la ciudad de Orizaba los católicos no aceptaban la ley 197,
aunque poco podían hacer ya que las autoridades municipales apoyaban al gobierno
estatal, de no hacerlo serían sancionados. Un caso en Orizaba se dio a conocer el día de
la promulgación de la mencionada ley, una mujer de nombre María Agripina Arenas –que
padecía de sus facultades mentales–, comenzó a orar gritando en el templo de El
Carmen, ocasionando que se congregara la gente, se llamó a la policía pero finalmente
un familiar de esa mujer la recogió.240
Iniciaba de cuenta la crisis religiosa, el radicalismo de Tejeda y su política lograron
que los templos volvieran a cerrarse, los sacerdotes tenían que ser limitados y registrarse
ante un nuevo padrón. Las autoridades estatales vigilarían que la ley se cumpliera. El año
de 1931 fue el inicio de un radicalismo más energético en contra del clero, donde el
Estado buscaba limitarlo de la gente y utilizar otros sectores como la educación, para
llevar a la población hacia el “progreso”.
En 1931 había 18 “Distritos Judiciales” en el estado de Veracruz y Orizaba era
cabecera, esto se mantuvo desde 1917 hasta que en 1933 aumentó a 19 distritos.241 La
característica de la ley Tejeda era congregar a las poblaciones para juntar los 100,000
habitantes y así haber un sacerdote, había dudas con respecto a cuál sería la “cabecera”
que serviría como referencia. Esta situación se vio en Orizaba cuando se le mandó
239
ANTONIO. “El viacrucis de Julio”, Op. Cit., p. 192; WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, 1976, p. 92.
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 19 de junio de 1931, No. 402, pp. 1, 4.
241
http://www.letrasjuridicas.com/Volumenes/7/montero7.pdf (Consultado el 16 de mayo de 2015). Texto de
ÁLVAREZ Montero, José Lorenzo. División territorial del Estado de Veracruz y Distritos Judiciales, 1824-2003.
240
115
telegrama al gobernador para que se fijaran las poblaciones a tomar, 242 no se encontró
información de que se haya contestado a ese telegrama.
3.1.1 Un nuevo enfrenamiento, el clero y el gobierno veracruzano
Con la promulgación de la ley Tejeda la situación religiosa se volvería a avivar, el obispo
Guízar se opuso a esta medida mientras que el gobernador se valió de los municipios
para que se respetara la ley. Después de que se dio a conocer en qué consistía la Ley
197, el obispo junto con otros sacerdotes viajaron a la ciudad de México para examinar
cómo podían enfrentar el anticlericalismo estatal.
El sacerdote orizabeño que se mostró enérgico en contra de la ley fue Rafael Rúa,
quien se caracterizó por su desempeño para combatir contra el gobierno, opinaba que
aceptar la ley equivalía a cubrirse de vergüenza y prepararse para el martirio. 243 La
solución de los clérigos veracruzanos que dieron en la ciudad de México fue que Guízar
aceptara la disposición del gobernador y nombrara a los 13 sacerdotes que podían oficiar
legalmente, así el resto lo harían secreta e ilegalmente; al parecer el Delegado Apostólico
Leopoldo Ruíz y el primado Pascual Día alentaron a Guízar para que se opusiera a la ley
anticlerical de Veracruz.244
La desobediencia de los sacerdotes se presentó desde la ley Calles, ejercer su
ministerio en las casas fue una de las maneras que encontraron para contrarrestar la
política del gobierno. Después de que se pusieron de acuerdo para la práctica de los
cultos regresaron a Veracruz; por otra parte el gobierno pedía el registro de los
sacerdotes para que pudieran oficiar legalmente en el territorio veracruzano, la
resistencia de los prelados fue notoria debido a que no lo hicieron inmediatamente,
buscaban persuadir al gobierno, sobretodo el obispo Rafael Guízar, de que derogara la
ley para evitar enfrentamientos.
El gobierno estatal no presentó ningún interés en razonar con el clero para eliminar
la ley 197, al contrario, mostró mayor énfasis en limitarlos y para ello otorgó a la educación
242
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-559, Exp. 262. Telegrama, del Presidente
Municipal Pedro López al C. Coronel Adalberto Tejeda Gobernador del Estado, Orizaba, 23 de junio de 1931.
243
García Morales. “La oposición del clero. Sus argumentos en contra de la ley 197”, Op. Cit., 1974, p.55.
244
WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, Op. Cit., 1976, pp. 94-95.
116
un papel fundamental para lograrlo. Tejeda ordenó a la Dirección de Educación que
indicara a los docentes de las escuelas elementales las instrucciones necesarias para
erradicar “el virus religioso de las consciencias infantiles”. Lo mismo se pidió para los
niveles medio superior y superior, donde el Departamento Universitario y la Escuela
Normal organizaron debates, conferencias y actos culturales para erradicar a la
religión.245
Aún había relaciones entre Calles y Tejeda, por lo que éste informó a aquél el 20
de junio de 1931 la situación en Veracruz, le explicó que los católicos infringían las leyes
estatales y federales, que intervenían en asuntos agrarios y laborales criticando a las
autoridades civiles. El presidente Pascual Ortiz Rubio mostró preocupación por la crisis
veracruzana, se reunió con Rafael Guízar y le dijo que la Ley 197 fue aprobada sin el
consentimiento de las autoridades federales. Ante esto, el gobernador Tejeda movilizó a
los diputados federales Carlos Darío Ojeda, Luis G. Márquez y Manlio Fabio Altamirano
para obtener el respaldo del Congreso de la Unión, fue por esta razón que en el mes de
julio el presidente comunicó que mostraba respeto a la soberanía de los estados a través
de la Constitución.246
De la misma manera en que se mantuvo firme durante la guerra cristera, el obispo
Guízar siguió con su temple de no llamar al levantamiento de armas, que la mejor manera
de enfrentarse al gobierno era a través de la vía legal y agotar los recursos necesarios
sin llegar a la violencia, se mantenía firme en su actitud de no meterse en cuestiones
políticas. Estas características que presentó el obispo fue lo que le valió que Tejeda lo
respetara como un hombre de influencia, si los católicos mantenían su posición de acatar
la ley el gobierno no haría nada en su contra, si llegaran a desobedecer serían
sancionados.
Había dos personajes centrales en esta contienda, por un lado Adalberto Tejeda
Olivares, gobernador de Veracruz, que se mostraba como un líder de las ideas
revolucionarias y por el otro, Rafael Guízar y Valencia, quinto obispo de Veracruz, que se
representaba como un ejemplo de serenidad. Estos dos personajes llegaron a
245
246
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, p. 269.
Ibíd. pp. 271-272.
117
enfrentarse, pero no con violencia ni golpes, sino de palabras, de discursos prominentes
que se hacían uno al otro destacando en la situación religiosa veracruzana, uno manejaba
la política y el otro la religión.
La situación que empezaba en Veracruz hizo que el obispo se dirigiera al alto clero
de México para saber cómo proceder, estos mostraron su descontento ante la ley 197 y
Guízar les comunicó lo siguiente:
Diga usted a todos mis sacerdotes que si las autoridades cívicas le impiden el ejercicio de su ministerio,
que no ejerzan; y que permanezcan al cuidado de las iglesias y las casas curales que les tienen
encomendadas la Secretaría de Hacienda y la de Gobernación.
Pueden los católicos y los sacerdotes pedir amparo. Yo no designo a ninguno para el ejercicio del
ministerio sagrado, supuesto que la vigencia de la ley hace que sea imposible en esa forma atender a
los católicos.247
Como lo había dicho Guízar, el recurso legal era el camino hacia una solución, el alto
clero apoyó esta medida como resistencia por parte de los católicos. Los principales
estados antirreligiosos eran Tabasco y Veracruz, situación que fue criticada por el
Delegado Apostólico Leopoldo Ruíz y Flores, de igual manera no aceptaba la reducción
de los sacerdotes y enunció:
Es del dominio público que la base general sobre la que se dio principio a los arreglos que permitieron
la reanudación del culto en los templos, fue la mutua buena voluntad por parte del Gobierno y de la
Iglesia.
Esta llevó a cabo su condescendencia hasta donde su conciencia se lo permitía, a juicio de su suprema
autoridad; y si se resolvió reanudar el culto de acuerdo con las leyes, fue porque, entre otras
declaraciones, se ofreció solemnemente interpretar y practicar esas mismas leyes dentro de un espíritu
amistoso y no sectario.
Desgraciadamente se han prestado muchos casos en que de esa voluntad se ha demostrado todo lo
contrario; esta Delegación Apostólica ha preferido callar ante el público y no gestionar el remedio
oficialmente, sino en lo privado, demostrando con esa conducta que la Iglesia quiere dar pruebas de su
buena voluntad, apresurando así, si es posible, el día en que reine una verdadera concordia y evitar
agraviar los ánimos.
Es de lamentar que algunas autoridades locales, no teniendo en cuenta ese espíritu de buena voluntad,
y guiadas por su espíritu de sectarismo injurioso a los católicos y el menos propio para crear la necesaria
concordia, hayan dado ejemplos tan tristes de intolerancia y hostilidad. Nos referimos a los Gobernantes
de Tabasco y Veracruz, el primero de los cuales, con una tenacidad digna de mejor causa, ha impedido
durante varios años el que pudiera haberse reanudado el culto en aquel Estado y ha cometido multitud
de atropellos de los cuales ha dado cuenta la prensa, con verdadera violación de los derechos
ciudadanos más sagrados que están reconocidos en la misma Constitución. Y en cuanto al gobierno de
Veracruz, patente es la violación imposibilitando a los católicos de aquel Estado a practicar su religión
y alegando motivos injuriosos a la Iglesia Católica.
Patentes es la violación a la Constitución la cual manda que el fijarse el número de sacerdotes, será el
necesario para cada lugar; y patente es el desprecio a la Circular de Gobernación Número 33, que
recordaba esto mismo a los Gobiernos de los Estados, precisamente con el fin de favorecer la Reforma
247
Periódico El Dictamen de Veracruz, 20 de junio de 1931, No. 8416, citado en GARCÍA Morales. “La oposición del
clero…”, Op. Cit., 1974, p. 62.
118
de las leyes expedidas el año 1926. No creo que tenga ninguna autoridad civil el derecho de injuriar la
religión que profesa la religión que profesa la mayoría de los habitantes de la República; el deber de las
autoridades es respetar los derechos católicos.
Rogamos a todos los católicos que ante todo, ofrezcan oraciones con qué alcanzar de Dios el remedio
y en segundo lugar, que, mancomunados con los afligidos católicos de los estados de Tabasco y
Veracruz presenten, en cumplimiento de su deber numerosas peticiones al Gobierno Federal, para que
haga justicia en asunto de tanta importancia. Eso servirá de mayor estímulo y preparación para unirnos
al presentar nuestra petición de la reforma a la Constitución. 248
Los acuerdos del 29 fueron nulos, tanto el clero como el gobierno se acusaban entre sí
por no cumplirlos, este pudo ser el motivo para que los gobiernos estatales iniciaran su
propia campaña anticlerical; los católicos no estuvieron de acuerdo ante estas acciones
pero la radicalidad de los gobiernos imposibilitó que los fieles pugnaran por tener sus
iglesias abiertas.
Nuevamente se buscó el amparo para que los sacerdotes no fueran aprehendidos,
el obispo Guízar fue quien los promovió a través de los abogados, pero le fue difícil debido
a que muchos temían las represalias que pudiera tomar el gobernador Tejeda. El
abogado Víctor Velázquez aceptó llevar los casos de los curas, ante esto, el obispo le
pidió al sacerdote Rafael Rúa que entregara todos los documentos al clero veracruzano,
al parecer ellos se encontraban en la ciudad de México, debido a que Rúa viajó a Orizaba
y después a Xalapa por petición de Guízar para informar al cura José María Folres y al
vicario Pedro Castillo el procedimiento legal que se estaba llevando a cabo.249
En Orizaba, una comisión de Damas Católicas recorrió las calles solicitando firmas
para el amparo que presentarían ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación en contra
del art. 130 Constitucional en Veracruz. Sin embargo, el gobernador Tejeda ya había
declarado que la derogación de la ley la podría hacer únicamente su sucesor. 250 Guízar
instruía a los clérigos de su diócesis para exigir a las autoridades la orden escrita cuando
se les conminara a no ejercer su ministerio, debiendo acudir de inmediato a solicitar
“amparo ante la justicia federal”. Buscaron los amparos debido a que la ley 197 entraría
en vigor el 25 de julio de 1931, el padre Rúa coordinó estas medidas por ser de confianza
para el obispo veracruzano; los sacerdotes que recibieron amparos definitivos fueron
248
Las Noticias, Diario Libre de la Mañana, Guadalajara, Jalisco, 20 de junio de 1931, citado en GARCÍA Morales. 1974,
pp. 62-65
249
GARCÍA Morales. “La oposición del clero…” Op. Cit., 1974, pp. 57-58.
250
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 20 de junio de 1931, No. 403, pp. 1, 4.
119
Rafael Rosas, Justino de la Mora, Daniel Palacios, Adalberto Landa y Darío Acosta, todos
del puerto de Veracruz.251
Del mismo modo, los sacerdotes de Orizaba José María Flores, Jesús Morfin,
Alfonso M. Sánchez y Antonio Sánchez buscaron el amparo en contra de la H.
Legislatura, el Gobernador del Estado, el Presidente Municipal e Inspector General de
Policía de Orizaba, lo solicitaron al Juez 2º. de Distrito del puerto de Veracruz, alegando
que se violaban los artículos 4 y 130 constitucionales, asimismo pedían garantías ante
los actos cometidos por el gobierno y días para la audiencia correspondiente.252 El
amparo fue promovido y la notificación le llegó al Presidente Municipal por parte del Lic.
Bartlett, pidiendo que debía esperar la resolución legal.253
La autoridad municipal orizabeña respondió que no había ordenado algún acto en
contra de los sacerdotes para representar la queja, por lo que pidió al Juez que
suspendiera el reclamo por ser improcedente.254 La situación entre el clero y el gobierno
veracruzano hicieron que la información se cruzara, los sacerdotes alegaban que ya
habían sido sentenciados por las autoridades, mientras que estos anunciaban que no
habían ordenado acto alguno en contra de los clérigos, por lo que se convirtió en un
vaivén de acusaciones respecto a la ley Tejeda.
El juicio que los sacerdotes orizabeños pidieron se llevó a cabo en la ciudad de
Veracruz, donde se dictó la resolución, en el cual ambas partes exponían sus puntos,
todo giraba en torno a la ley 197; el gobierno veracruzano designó a los Licenciados
Cayetano Rodríguez Beltrán, Rodolfo Chávez como representantes de la H. Legislatura
y Gobernador del Estado respectivamente, por la parte quejosa se presentó el señor
Rafael Rosas para oír las notificaciones únicamente del cura Flores, los actos reclamados
son:
251
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, pp. 265-266.
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparos. C.-919, Exp. 10. De José María Flores, Jesús Morfin, Alfonso M. Sánchez
y Antonio Sánchez al Juez 2º. de Distrito de Veracruz, Orizaba, 19 de junio de 1931.
253
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparos. C.-919, Exp. 10. Acta de juicio de Amparo, del Juez 2º. de Distrito en el
Estado Lic. Manuel Bartlett al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 19 de junio de 1931.
254
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparos. C.-919, Exp. 10. Del Presidente Municipal de Orizaba Pedro López al C.
Juez Segundo de Distrito en el Estado, Orizaba, 22 de junio de 1931.
252
120
I. La ley (197) expedida por la H. Legislatura local, restringiendo el número de sacerdotes que deberán
ejercer su profesión a uno por cada cien mil habitantes que haya en el Estado.
II. La promulgación de dicha ley.
III. La aplicación de la misma ley por el ciudadano Gobernador del Estado, Presidente Municipal e
Inspector General de Policía de Orizaba.
IV. En impedirles como consecuencia de esa ley, el ejercicio de su profesión de ministros de culto
católico de Orizaba.
V. En proporcionarles el destierro como consecuencia de la aplicación de la propia ley. 255
Por otro lado, la H. Legislatura local informó que se expidió la ley 197 el 18 de junio
publicándose en la Gaceta Oficial núm. 73, en su declaración dice:
“…contrayéndome únicamente a la naturaleza y fines de la misma Ley número 197, debo significar a
usted ciudadano Juez, que es verdaderamente sensible que los interponentes no hayan fundamentado
e ilustrado las reglas constitucionales que dicen han sido violadas, con la espaciosa o maliciosa
afirmación de que se trata de aplicar una pena inusitada a los coagraviados, como es el destierro,
violación que citan y no reclaman, seguramente por la evidencia de no existir la privación del ejercicio
profesional de los demandantes…” “… no pudiéndose deducir de la misma que haya existido o exista
el propósito de imponer pena su ministerio por motivo de la nueva reglamentación o no…”. “No puede
dejar pasar desapercibido este Poder Ejecutivo el hecho de que en la demanda los quejosos hagan la
errónea apreciación de que por virtud de la ley que están reclamando como anticonstitucional, se
pretenda desterrarlos del lugar de su residencia. Sobre este particular la autoridad informa se concreta
a decir que rechaza enérgicamente tal imputación que estima poco meditada y más poco seria…”. 256
Mientras que el presidente de Orizaba volvió a decir en su informe lo que le había dicho
al Juez, que no dictó alguna disposición en contra de los quejosos, lo mismo pasó con el
Inspector de Policía de Orizaba, que no recibió órdenes de ninguna dependencia para
proceder en contra de los sacerdotes o para privarlos del ejercicio de su profesión; con
estas declaraciones el juzgado comprobó los actos I y II porque lo confesaron tanto la
Legislatura como el Gobernador, mientras que el IV y V se lo atribuyen los quejosos a las
partes acusadas, siendo estos que niegan las acusaciones al no haber ninguna
prueba.257
En el juicio, se deja claro que en términos generales la expedición de una ley no
perjudica a nadie, pese a que los quejosos argumentaron la ley 197 y como prueba
presentaron el número de la Gaceta en que se expidió, siendo que los sacerdotes
alegaron que no se cumplió con los estatutos constitucionales, debido a que la ley
empezó a ejecutarse al día siguiente de haber sido aprobada, en el acta se estipula que
una ley no queda perfeccionada por la simple expedición por el Poder Legislativo, sino
255
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparos. C.-919, Exp. 10. Acta de resolución firmada por el Lic. Manuel Bartlett
Juez Segundo de Distrito en el Estado, Veracruz, 26 de junio de 1931.
256
Ibíd.
257
Ibíd.
121
cuando el Ejecutivo hace su promulgación, en este caso el gobernador Tejeda. 258
Finalmente, el juez dio a las partes implicadas una resolución:
1. Se niega a los señores José María Flores, Jesús Morfin, Alonso M. Sánchez y Antonio Sánchez, la
suspensión definitiva de los actos reclamados a la Honorable Legislatura local, y a los ciudadanos
Gobernador del Estado, Presidente Municipal de Orizaba de este Estado e Inspector General de
Policía también de Orizaba, los cuales actos se han dejado expresados.
2. Notifíquese.259
Sin embargo, no todo quedó dicho en esta resolución, ya que para noviembre de 1931
se volvió a citar a la autoridad municipal de Orizaba para una segunda audiencia, esta
vez para el 21 de marzo de 1932 ya que el suscrito no estaba del todo autorizado para
dar el fallo definitivo, ante esto, el presidente de Orizaba respondió de enterado. 260
Desde que se dio a conocer la intención del gobierno veracruzano de limitar a los
sacerdotes, buscaron una resistencia para lograr que la ley no fuera aprobada, el apoyo
vino de los católicos y de grupos como las Damas Católicas o Caballeros de Colón. El
obispo Guízar fomentó los amparos para que lo sacerdotes no fueran reprimidos de sus
templos, asimismo, otra medida fue oficiar clandestinamente. Pese a los amparos, el
gobierno siguió con su política desfanatizadora, el año de 1931 solo fue el inicio, al
siguiente año, en la ciudad de Orizaba los templos empezarían a cerrarse.
El Lic. Bartlett jugó un papel importante para los sacerdotes, era quien les
promovía los amparos, tanto en el puerto de Veracruz como en Orizaba, Bartlett expidió
esos documentos que salvaguardaban al sacerdote que lo solicitaba tanto en el puerto
de Veracruz como en la ciudad de Orizaba, aunque también pudo haber otorgado
amparos para sacerdotes de otras localidades veracruzanas, el esfuerzo del Lic. Bartlett
fue tomado en cuenta por clérigos debido a que otros licenciados no habían aceptado
ayudarlos.
258
Ibíd.
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparos. C.-919, Exp. 10. Acta de resolución firmada por el Lic. Manuel Bartlett
Juez Segundo de Distrito en el Estado, Veracruz, 26 de junio de 1931; Ibíd., Resolución del amparo, del Juez 2º. de
Distrito en el Estado Lic. Manuel Bartlett al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 27 de junio de 1931.
260
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparos. C.-919, Exp. 10. Del Secretario del Juzgado Segundo del Distrito
encargado del despacho por ministerio de ley Lic. Antonio Pirrón Quej al C. Presidente de Orizaba, Veracruz, 18 de
noviembre de 1931; Ibíd., del Presidente Municipal de Orizaba Pedro López al C. Secretario del Juzgado Segundo de
Distrito, Orizaba, 27 de noviembre de 1931.
259
122
Por este motivo, los meses de junio y julio fueron difíciles para Bartlett cuando
emitía una decisión relacionada con la Iglesia, se reunían grupos anticlericales
manifestándose en contra de los veredictos favorables, entre los manifestantes que se
identificaron se encontraron el Inspector General de Policía, Samuel Rojano; el Jefe de
Comisiones de Seguridad en el Estado, Alfonso Vela; el Presidente de la Liga de
Comunidades Agrarias, Manuel Almanza y el líder del Sindicato Revolucionario de
Inquilinos, Herón Proal.261
Así como los sacerdotes declararon en la audiencia que anteriormente se explicó,
que la ley 197 no era legal porque atentaba a las garantías y que aún no se decretaba
oficialmente por parte del gobernador, Tejeda hizo lo mismo, pero ahora bajo el
fundamento de que los amparos no tenían fundamento legal, debido a que la ley 197 se
aprobó el 18 de junio ésta aún no se aplicaba. Asimismo alegó que no se atentaba en
contra del art. 4, argumentó que debido a su “influencia moral”, los sacerdotes no tenían
derecho al amparo.262
Los sacerdotes del estado de Veracruz no podían esperar, buscaron el amparo
como un recurso legal. No obstante, estos se prepararon para dejar el estado durante la
semana del 21 al 28 de julio si la situación no les favorecía; algunos civiles interpusieron
una demanda en contra de la ley 197 porque consideraban violación al artículo 24, de los
200 amparos que se solicitaron aproximadamente, se otorgaron 10 de forma definitiva,
40 de manera provisional y 150 fueron negados; aun con los amparos, el obispo Guízar
dijo a sus sacerdotes que aquél que quisiera irse podía hacerlo, el delegado apostólico
Leopoldo Ruíz, apoyó esta decisión.263
Guízar y Ruíz pusieron una condición a aquellos sacerdotes que decidieron
quedarse en Veracruz, que fue de abstenerse de su vocación y celebrar ritos en secreto,
tanto el obispo como el delegado amonestaron a los curas que no acataban esa
disposición, además les informaron que serían suspendidos sino acataban la orden. 264
La práctica de cultos se vio por varias partes del estado, su estrategia se basó en
261
WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, Op. Cit., 1976, pp. 101-102Ibíd. p. 103.
263
Ibíd. pp. 99-100, 103.
264
Ibíd. p. 104.
262
123
disfrazarse para pasar desapercibidos y no pernoctar en un solo lugar, aunque hubo
algunos que no se movían del lugar donde vivían y en su domicilio efectuaban el culto,
como en Xalapa y Orizaba. El obispo presentó una rectificación en forma de carta pastoral
el 4 de julio de 1931:
1. Los clérigos deberían continuar sus funciones como tales ignorando la reciente ley.
2. Que si las autoridades estatales o municipales les ordenaban lo contrario, exigieran una copia escrita
para que fuera presentada ante el Tribunal Federal como apoyo de una queja (y que hicieran una
copia para los archivos diocesanos).
3. Que si las circunstancias evitaban la celebración de servicios religiosos en una determinada
localidad, los clérigos deberían mantener las iglesias abiertas, ya que la Secretaría de Hacienda de
manera automática asumiría el control directo de los templos que estuvieran cerrados. 265
En ese documento, Guízar expresaba su firmeza ante la ley. A pesar de esto el gobierno
de Veracruz expidió el 10 de julio una carta a cada sacerdote en el estado diciendo que
debían de ser 13 los que podían oficiar, tenían hasta el 21 de ese mes haber decidido
quienes serían los que ejercerían el culto y cuáles eran los funcionarios municipales que
deberían recibir una carta que explicara sus intenciones para tal efecto, pese a las
suplicas del obispo no pudo convencer al gobernador de desistir.266
3.2 Tiempos difíciles en el segundo semestre de 1931, crisis e incertidumbre entre
el clero y el gobierno de Veracruz
Después de que se aprobara la Ley 197 el 18 de junio, hubo protestas por parte de los
católicos aunque el gobierno siguió con su plan de hacer cumplir esta nueva disposición
una vez que entrara en vigor. Sin embargo, hubo quejas por algunos feligreses debido a
que dicha ley entró antes de lo planeado, pidiendo que ésta se derogara o que interviniera
el gobernador para actuar conforme la ley. Por otro lado, Tejeda rechazó los amparos
que los sacerdotes buscaron.
En los meses que siguieron después de que se aprobó la ley de cultos en Veracruz,
hubo movilizaciones de los sacerdotes, quienes buscaron el apoyo del Procurador de
Justicia de la Nación, el Ministro de Gobernación y el Juez Segundo de Distrito, Manuel
Bartlett, fue éste quien concedió algunos amparos provisionales para los 54 sacerdotes
265
266
WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, Op. Cit., 1976, pp. 97-98.
Ibíd. p. 98.
124
que oficiaban en ese año. El cura José M. Flores dijo en una entrevista al periódico Los
Sucesos que obedecerían a la ley, por obediencia y no por rebeldía, pero aun así
recibieron una orden procedente de la Sagrada Mitra firmado por el Vicario General que
en los templos debían de efectuarse los cultos.267
La incertidumbre se apoderó de los sacerdotes orizabeños cuando se les negó la
suspensión definitiva a sus compañeros del puerto de Veracruz, los curas Rafael Rosas,
Justino de la Mora, Daniel Palacios, Alberto Landa y Darío Acosta, que también solicitaron
el amparo ante al Lic. Bartlett, en respuesta a este fallo los sacerdotes porteños pidieron
a la Suprema Corte de Justicia de la Nación la revisión y fue ésta quien tuvo la última
palabra, no solo con los curas del puerto sino con toda la entidad veracruzana.268
Esto llevó a que la Secretaría de Gobernación interviniera, la cual dijo mediante su
subsecretario que se estaba llevando un diálogo para arreglar la situación que se vivía
en el estado de Veracruz respecto a la reglamentación del art. 130. Además, se plasmó
que esta medida afectaba las garantías y la Federación sólo podía legislar en esta
materia, se explicó que si los amparos fallaron fue porque se precipitaron al solicitarlos
antes de que la ley se aplicara y por consiguiente era motivo de negárseles; asimismo se
dice:
“Ninguna autoridad en el Estado puede aplicar, constitucionalmente esa ley, porque la Constitución dice
que la Federación será la única y que podrá conceder derecho a las Legislaturas, para legislar en la
materia, indicando como auxiliares y de acuerdo con las necesidades locales el número de sacerdotes
que puedan ejercer, ya que toca a la Secretaría de Gobernación, de acuerdo con esas necesidades
señaladas por las Legislaturas, reglamentar cómo y en dónde habrán de ejercer esos sacerdotes pues
en la nueva ley señalan uno por cada cien mil habitantes, pero le falta reglamentación donde indique
cual es el lugar en que deben oficiar, sin en Veracruz, Córdoba, Orizaba o Jalapa.”. 269
La situación de dónde podrían ejercer los sacerdotes era lo que tenía inquietos a los
católicos, pero además estaban pendientes de cuáles eran las noticias de la época debido
a que el Gobierno Federal estaba inmiscuido en el asunto religioso veracruzano, a pesar
de que anteriormente había declarado respetar el gobierno estatal, seguía teniendo
participación debido a que los feligreses buscaban a la autoridad Federal. Esos días
pudieron haber sido tensos para los devotos como para los políticos de Veracruz.
267
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 21 de junio de 1931, No. 404, pp. 1, 6.
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 26 de junio de 1931, No. 408, pp. 1, 4.
269
Ibíd. Orizaba, 27 de junio de 1931, No. 409, pp. 1, 4.
268
125
El padre Rafael Rúa se encontraba en Huatusco entregando amparos, pidió a los
católicos que se opusieran a la ley e hicieran propaganda católica y hacer comités para
que estuvieran preparados en caso de enfrentamientos armados. En Huatusco también
hubo problemas porque el 13 de junio hieren de muerte al padre José Cano y después
de su sepelio los católicos se congregaron en la plaza a gritar “¡Abajo el mal gobierno!”,
“¡Mera Tejeda!” y “¡Viva Cristo Rey!”. La policía llegó al lugar y hubo fuego cruzado, el
tumulto terminó con muertes entre ambos bandos y el saqueo de la oficina de la liga
agraria local.270
Durante el cortejo fúnebre del sacerdote Cano, el 20 de junio, hubo
enfrentamientos entre católicos y representantes municipales, mueren el Comandante de
la Policía Ricardo Ramírez, un policía y el representante del Sindicato de Obreros
Panaderos y cuatro miembros; de los católicos el saldo fue de tres muertos y quince
heridos, los feligreses queman las oficinas del sindicato, repican las campanas y marchan
sobre las calles.271
Este fue un enfrentamiento que se llevó a cabo en la parte central de Veracruz, lo
cual delataba que la crisis política-religiosa se encontraba sensible debido a la división
de quienes estaban en contra o a favor de la ley reglamentaria. El zafarrancho que ocurrió
en Huatusco evidenció que los problemas se encontraban latentes, no había tolerancia
hacia los católicos y estos no esperarían la medida legal por lo que tomaron acciones por
su propia mano para frenar lo que ellos llamaban “abuso del gobierno”.
Sin embargo, este enfrentamiento no fue el único que se presentó, durante los
años en que la crisis religiosa estuvo en Veracruz se suscitaron más, como en Tierra
Blanca, Santiago Tuxtla y Rodríguez Clara, donde se descarrilaron trenes en 1934, así
como escaramuzas en la Antigua, Salmoral, Villa Cardel, Orizaba y Córdoba. Félix Báez
describe que Guízar no tuvo nada que ver con esos duelos, sino que fue Rúa quien formo
270
GARCÍA Morales. “Levantamientos cristeros. Circular del Gobernador a los sacerdotes”, Op. Cit., 1974, pp. 71-72;
WILLIMAN. “El drama de la Iglesia…”, Op. Cit., 1976, pp. 106-108.
271
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 27 de junio de 1931, No. 409, pp. 1, 3.
126
parte de esos movimientos, poco a poco el padre orizabeño tomaba presencia, fue el
obispo Guíaz quien trató de impedir el levantamiento en Huatusco y sus alrededores. 272
Asimismo, el obispo Rafael Guízar buscaba una solución sin llegar a
enfrentamientos violentos, por lo que días antes de que la ley 197 entrara en vigor le
envió una súplica al gobernador Tejeda para que se retractara de la ley:
Este procedimiento es injusto y opuesto a la más sagrada voluntad de Dios; es un ataque a la sagrada
libertad de la humanidad y esclaviza a un pueblo entero, sin siquiera redundar en el beneficio de la
nación; a cuyo nombre, yo le suplico una vez más que no aplique tan lamentable ley en contra de
nosotros.273
Resulta interesante la posición del obispo veracruzano ante la situación que se vivía,
puesto él había aprobado que los sacerdotes que se quedaban en el estado podían
ejercer el culto de manera clandestina; esto demuestra su hábil hazaña de enfrentar al
gobierno, porque de frente ante la política mostraba que hacía todo conforme a la ley.
Pero esto no le evitó enfrentamientos directos con el gobernador Tejeda; no obstante el
gobernador siguió con la intención de efectuar la ley a partir del 25 de julio.
Sin embargo, la crisis se agudizó más cuando el gobernador Adalberto Tejeda
sufrió un atentado el sábado 25 de julio de 1931 –día en que la Ley 197 entró en vigor–
por un fanático religioso, ocasionando que tres días después los servicios religiosos
fueran suspendidos. El altercado ocurrió alrededor de las 03:00 p.m. cuando Tejeda salía
del palacio de gobierno en compañía del secretario de gobernación, Gonzalo Vázquez
Vela; el Presidente de la Junta de Administración Civil de Xalapa, Agapito Barranco;
Enrique Díaz Mirón, un sobrino del poeta Salvador; el ex diputado Adolfo Montiel y un
ayudante, Antonio Ávila.274
El desconocido abrió fuego hacia el gobernador y éste respondió de la misma
forma hiriéndolo y cayendo al suelo, inmediatamente el personal que se encontraba cerca
del palacio lo registraron y sólo se encontraron algunos artículos religiosos, no dio su
nombre y afirmó haber actuado solo. Fue atendido por médicos y una multitud compuesta
por agraristas, empleados y ciudadanos se reunieron enfrente del palacio expresando
272
BÁEZ. Los aristas…”, Op. Cit., 2006, pp.307-309.
Guízar a Tejeda, 23 de julio de 1931 en WILLIMAN. “EL drama de la iglesia…”, pp. 98-99.
274
WILLIMAN. “¿Persecución o fanatismo?”, Op. Cit., 1976, p. 110.
273
127
mediante gritos saludos al gobernador. Tejeda proclamó un discurso ante los presentes
en el que les informaba que no incitaba la violencia y que el clero no detendrá nunca su
campaña de desfanatización, afirmó que si los asesinos lo abatían, otros tomarían su
lugar.275
Del mismo modo, otras dependencias municipales repudiaron el atentado que
sufrió el gobernador, expresando el apoyo a éste; como fue el caso de las autoridades
municipales de Orizaba, que al día siguiente del crimen le enviaron un telegrama en
donde protestaban por el acto cometido y manifestaron que combatirían a los clericales
enemigos de la revolución.276 La lucha en contra del clero se enfatizó después del ataque
que sufrió Tejeda, provocando que hubiera represalias en contra de los católicos.
El atacante del gobernador murió el 27 de julio, su cuerpo fue expuesto en el
parque Juárez y reconocido por dos mujeres estudiantes de la Escuela Normal –debido
a que se desconocía su verdadero nombre puesto que utilizó uno falso–, lo identificaron
como José Ramírez Frías originario de Santa Rosa (Cd. Mendoza). Días después, el 6
de agosto, agentes federales junto con la policía de Orizaba dirigida por Juan C. Gómez,
arrestaron a la madre de José (Manuela Frías), así como a su tío Manuel Frías y sus
hermanos Vicente y Socorro Ramírez, quienes junto con otros sospechosos fueron
trasladados a la Xalapa, la situación de los detenidos se agravó cuando encontraron una
carta del obispo Guízar donde autorizaba que su domicilio funcionara como depósito de
las limosnas del seminario.277
El gobierno veracruzano hizo que se buscaran a los culpables del atentado, debido
a que cuestionaron la confesión de José Frías de haber actuado solo, cuando se arrestan
sus familiares y encontraron la carta de Guízar concluyeron que habría más implicados
en delito por lo que se empieza una búsqueda de los otros autores. Para ese momento
ya tenían sospechas de que el padre Rafael Rúa estaba implicado debido a que
275
Ibíd. p. 111.
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia. C.-559, Exp. 262. Telegrama, del Presidente
Municipal Pedro López al C. Gral. Adalberto Tejeda Gobernador del Estado, Orizaba, 26 de julio de 1931.
277
WILLIMAN. “¿Persecución o fanatismo?”, Op. Cit., 1976, pp. 119-121.
276
128
entregaba los amparos por la zona central de Veracruz, asimismo arrestaron a los
representantes católicos de la ciudad de Orizaba al considerarlos cómplices.
Sin embargo, en los expedientes se muestra que la detención de las personas no
fue el 6 sino el 7 de agosto. Para arrestar a los “cómplices” del atentado se giró un
telegrama a las autoridades de Orizaba, exponiendo que con base al artículo 16 y 21
constitucionales deberían de ser arrestados los señores Gustavo Sota, Ernesto Galland,
Agustín Aguilar Muñoz, Alberto Vargas, Ángel (de) la Vega, Manuela Frías, Vicente Frías
Ramírez, Nieves Frías Ramírez; porque debido a la pena que se les imputa la sanción es
de dos años de prisión.278 Independientemente de los familiares del occiso José Frías,
no se encontró cuál es la relación de la familia con los otros individuos, aunque se sabe
que eran devotos católicos.
La disposición de que las personas anteriormente mencionadas fueran arrestadas
fue aprobada por las autoridades del ministerio público de la ciudad de Xalapa, de esa
manera se haría la averiguación respectiva de los hechos en contra del gobernador, todo
se basaba en el atentado y como prueba estaba el cuerpo de José Frías. Así, en cuanto
fueran arrestados los trasladaran a Xalapa para su juicio, no sin antes haberles dado una
filiación de las características de los sospechosos, así como su dirección.279
Los arrestos en Orizaba fueron en la madrugada del 8 de agosto, cuando se le dio
orden a la policía de esa ciudad para aprender a Gustavo Sota, Ernesto Galland, Agustín
Aguilar Muñoz; por otra parte y según el expediente, se muestra que Manuela Frías,
Vicente y Nieves Frías Ramírez, fueron arrestados el mismo día que los mencionados
anteriormente, por lo que fueron dispuestos ante a las autoridades y abordados en el
primer tren matutino rumbo a Xalapa para proseguir con su detención.280
El mismo 8 de agosto, las autoridades policiacas de Xalapa informaron al
presidente de Orizaba que los detenidos habían llegado y puestos a disposición del Juez
de 1ª. Instancia de ese Distrito Judicial, sin embargo, llama la atención que aparecen
278
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. Telegrama, del Juez de 1ª. Instancia Juan
N. Garrido al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 07 de agosto de 1931.
279
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. Telegrama, del Juez de 1ª. Instancia Juan
N. Garrido al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 07 de agosto de 1931.
280
Ibíd. Telegrama, del Presidente Municipal Jesús Ponce al Juez de 1ª. Instancia, Orizaba, 8 de agosto de 1931.
129
otros nombres: Ricardo Islas, Alberto de la Llave y Jesús Ramírez, 281 ellos junto con los
demás fueron procesados por el atentado al gobernador Tejeda. El presidente de Orizaba
envió una comisión para que siguieran el proceso de los detenidos.282
Indudablemente, la detención de estas personas causó furor en la prensa, hubo
ciertas discrepancias debido a que en el periódico Ortiguilla de la ciudad de Xalapa se
publicó lo siguiente: “En la ciudad de Orizaba las Autoridades Municipales protegen a los
curas”. Esta publicación ocasionó el descontento del presidente de Orizaba, por lo que
pide al director de El Dictamen que esa nota sea aclarada para el conocimiento del
público, aludiendo que su posición revolucionaria está bien definida, asimismo pidió
apoyo a otros Ayuntamientos para secundar la protesta ante el periódico. 283
El diario xalapeño se valió de una declaración que dijo Vicente Lombardo
Toledano: “hay que rehabilitar los valores espirituales, respetando toda clase de
creencias, para que dentro del patriotismo, colaboremos con la reconstrucción
nacional…”, esta interpretación se dio porque Lombardo Toledano es un líder sindical y
Orizaba representa a una ciudad fabril de gran importancia para el país; de esa manera
supusieron que el alcalde Pedro López daba garantías a los curas. 284 En ese mismo
periódico, se dio a conocer que los detenidos procedían de Orizaba, pero además se
describía que José Frías había confesado quiénes habían confabulado con él, pero para
no estropear la investigación las autoridades acordaron no decir nada, así como de que
se encontraron documentos firmados por el obispo Guízar. Además de que había nueve
sacerdotes escondidos en Orizaba.285
Mientras seguía el proceso en contra de los acusados, se vio que otro fundamento
para su detención fue que se logró averiguar que José Frías Ramírez mantuvo contacto
281
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. De Inspector General de Policía Ernesto M.
al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 08 de agosto de 1931.
282
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. Telegrama, del Presidente Municipal Pedro
López al C. Gobernador Adalberto Tejeda, Orizaba, 11 de agosto de 1931; Ibíd., del Presidente Municipal Pedro López
al C. Lic. Rodolfo Chávez Procurador General de Justicia del Estado, Orizaba, 11 de agosto de 1931.
283
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. De Pedro López a Juan Malpica Silva
Director de El Dictamen, Orizaba, 11 de agosto de 1931.
284
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. Fragmento del periódico Ortiguilla.
285
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. Periódico Ortiguilla, Orizaba, 9 de agosto
de 1931, No. 15, pp. 1, 4.
130
días antes con las personas anteriormente dichas, así como otras personas que se
desconocen, las reuniones eran en su casa junto con su familia; esta información era
intercambiada entre el Juez Garrido, el presidente de Orizaba y el Inspector de Policía de
la misma ciudad para seguir con el orden de la detención.286
Las investigaciones en Orizaba y sus alrededores, concretamente en Santa Rosa,
siguieron por varios días, las autoridades de la ciudad buscaban a aquellos que instigaron
el ataque al gobernador por lo que su pista a seguir fue el de la reunión en casa de los
Frías Ramírez. También buscaban a sacerdotes o similares que fueran sospechosos, se
dio la noticia de que la policía arrestó a los seminaristas Gabriel Sánchez, Othón Godínez
y Erasmo Ponce, enviados a la cárcel de la ciudad de Orizaba a esperar su proceso bajo
la acusación de complicidad por el atentado que sufrió el gobernador días antes, se les
interrogaría para que diera parte de los hechos.287
Los acusados presentaron un amparo ante la ley, por lo que nuevamente se pidió
al Lic. Manuel Bartlett que tomara el caso de los civiles detenidos acusados por el ataque
al gobernador Tejeda, para el cumplimiento de esta medida retomaron los artículos 14 y
16 constitucionales por haber sido detenidos injustamente, así lo expresó el Lic. Agustín
Aguilar que presentó la demanda a favor de sus hijos Ricardo y Luis; ante esto, el alcalde
de Orizaba respondió que no había dado orden de arrestarlos.288
Al parecer, el Lic. Agustín Aguilar temía por la vida de sus hijos, por lo que estipula
que estos debían de permanecer en la cárcel y a disposición del juzgado de Orizaba,
para garantizar su seguridad y no ser privados de sus vidas, posteriormente el alcalde
286
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. Del Juez de 1ª. Instancia Juan N. Garrido al
Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 8 de agosto de 1931; Ibíd., del Presidente Municipal Pedro López al C.
Inspector de Policía, Orizaba, 12 de agosto de 1931.
287
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Orden de aprehensión. C.-920, Exp. 37. Del Inspector de Policía Eulalio Martínez al
C. Presidente Municipal, Orizaba, 11 de agosto de 1931.
288
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparo. C.-920, Exp. 27. Telegrama, del Lic. Agustín Aguilar al Juez 2º. de Distrito
de Veracruz, Orizaba, 6 de agosto de 1931; Ibíd., del Lic. Manuel Bartlett al C. Presidente Municipal de Orizaba,
Veracruz, 6 de agosto de 1931; Ibíd., del Presidente Municipal Jesús Ponce al C. Juez 2º. de Distrito de Veracruz,
Orizaba, 7 de agosto de 1931.
131
acusa de recibido para proceder con lo estipulado.289 Con esta medida del Lic. Aguilar
trató de “defender” a sus hijos de la misma acusación que se le imputó.
De la misma manera, la esposa del Lic. Aguilar –Esther Carrillo– promovió un
amparo para su esposo, pidiendo su libertad absoluta y en contra de las autoridades de
Orizaba para proceder con el cumplimiento de la ley.290 Sin embargo el amparo no podía
proceder puesto que Aguilar ya se encontraba en la ciudad de Xalapa; días después se
da la resolución de que el Lic. Aguilar fuera puesto en libertad el 12 de agosto, lo que le
fue notificado al presidente Jesús Ponce.291 Ernesto Galland fue otro al que se le
interpuso un amparo, fue por parte de su hijo Francisco Galland el mismo día que el de
los Aguilar.292 Ernesto sufrió el mismo percance que Agustín, el ser trasladados a la
ciudad de Xalapa por ser sospechosos de un delito del orden común.293
El Juez Juan N. Garrido ordenó la liberación de los detenidos el 11 de agosto, a
excepción de uno que siguió siendo interrogado; para que los detenidos fueran
procesados se hizo una averiguación previa, como estrategia las autoridades decidieron
no decir nada para no alertar a los cómplices, el cuerpo de José Frías fue identificado por
el alcalde de Orizaba, Pedro López, además se descubrió que estuvo en el seminario de
Veracruz entre 1924 y 1927. En una declaración por su hermana se vio que mantenía
contacto con el padre Rafael Rúa y que había saldo de Santa Rosa el 23 de julio, por lo
289
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparo. C.-920, Exp. 27. Acta de juicio de amparo, del Juez 2º. de Distrito en el
Estado Lic. Manuel Bartlett al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 6 de agosto de 1931; Ibíd., telegrama,
del Lic. Manuel Bartlett al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 6 de agosto de 1931; Ibíd., del Presidente
Municipal al C. Juez 2º. de Distrito, Orizaba, 8 de agosto de 1931.
290
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparo. C.-920, Exp. 27. Acta de juicio de amparo, del Juez 2º. de Distrito en el
Estado Lic. Manuel Bartlett al C. Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz 6 de agosto de 1931; Ibíd., telegrama, del
Lic. Manuel Bartlett al Presidente Municipal de Orizaba, Veracruz, 6 de agosto de 1931.
291
AMO. Ramo Justicia, Juzgados, Amparo. C.-920, Exp. 27. Del Presidente Municipal Jesús Ponce al C. Juez 2º. de
Distrito, Orizaba, 8 de agosto de 1931; Ibíd., acta de resolución, del Juez 2º. de Distrito en el Estado, Manuel Bartlett,
Veracruz, 19 de agosto de 1931; Ibíd., del Juez 2º. de Distrito Manuel Bartlett al C. Presidente Municipal de Orizaba,
Veracruz, 19 de agosto de 1931.
292
AMO, Ramo Justicia, Juzgados, Amparo. C.-919, Exp. 12. Telegrama, de Francisco Galland al Juez 2º. de Distrito,
Orizaba, 6 de agosto de 1931; Ibíd., Acta de juicio de amparo, del Juez 2º. de Distrito en el Estado Lic. Manuel Bartlett,
Veracruz, 8 de agosto de 1931.
293
AMO, Ramo Justicia, Juzgados, Amparo. C.-919, Exp. 12. Del Presidente Municipal Pedro López al C. Juez 2º. de
Distrito, Orizaba, 11 de agosto de 1931.
132
que se pensó que fue éste quien le dijo que matara al gobernador; de esta manera se
expide una orden de detención en contra del sacerdote Rúa.294
Ante la amenaza de ser detenido, el padre Rúa huye del estado de Veracruz para
eludir a las autoridades que lo buscaban, primero llegó a la ciudad de México y
posteriormente se trasladó a Estados Unidos. El padre Rúa se convirtió en uno de los
sacerdotes más requeridos por las autoridades y pese a nunca ser detenido se rumoraba
que oficiaba clandestinamente en Córdoba y Orizaba, así como otras partes de la zona
central de Veracruz, por más que se nombraron a varios agentes nunca pudo ser
aprehendido para ser procesado ante la ley.295
Los sacerdotes que se escondían recibieron ayuda de los católicos así como de
sus colegas de otros estados, en este caso Puebla, dado que Guízar pidió apoyo al
obispo de aquél estado. Para el caso de Orizaba, ya no sólo era el obispo veracruzano
una figura central ante la situación religiosa, sino también Rúa, que oriundo de la ciudad
llegó a profesar su ministerio, además se sabía que tenía contacto con todas las clases
sociales de la población por lo que era bien recibido por los feligreses del valle.
Rafael Rúa representaba un liderazgo en ciertos sacerdotes de Veracruz y además
se convirtió en un prominente personaje de la sociedad orizabeña. Ante esto, el líder
obrero Daniel Sierra no creyó que Rúa fuera autor intelectual del atentado contra Tejeda.
Para los años siguientes al cierre de templos en Orizaba, Rúa se mantenía como un
personaje principal ante las autoridades estatales y municipales, debido a que –según
Félix Báez– benefició a los trabajadores del valle, destacando como un discípulo fiel a
Rafael Guízar.296
La idea de llevar acabo un congreso anticlerical estuvo presente, como se dijo
anteriormente, se buscó uno en Veracruz en donde asistirían todos los anticlericales que
existían en el estado. La intención del congreso era hacer una campaña enérgica y
efectiva para llevar a cabo la total “desfanatización” del pueblo veracruzano, además de
294
WILLIMAN, “¿Persecución o fanatismo?”, Op. Cit., 1976, pp. 121-122.
GARCÍA Morales. “Vigorización de la campaña anticlerical”, Op. Cit., 1974, p. 105; WILLIMAN. Ibíd., p. 123.
296
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, p. 310.
295
133
pedir al Congreso de la Unión reformas que garanticen al pueblo una liberación de la fe
católica; la sede sería en Xalapa para fines de año o inicios de 1932.297
La prensa fue el medio por el que se daban a conocer las posturas en que se
encontraban tanto los católicos como los políticos, en el Semanario Juventud se
expresaban las intenciones de por qué la religión tenía que ser desplazada del pueblo,
del mismo modo los católicos mostraban su actitud explicando que si se apoyaba a la
educación laica era como si “Judas” estuviera traicionando de nuevo a “Jesús” por
entregar los niños al Estado. El escenario cambió a las escuelas, donde el gobierno
veracruzano puso énfasis para iniciar con su campaña anticlerical, algunos profesores
apoyaron esta acción mientras que otros no, en el puerto de Veracruz fue cesada de su
cargo la profesora Guadalupe Policante que trabajaba en la escuela primara “Francisco
J. Clavijero” por haberse negado a secundar la campaña de desfanatización.298
La URA desarrollaría el Congreso Anticlerical en el Estado en diciembre de 1931,
el tema principal sería la educación, se elaboraba un proyecto por parte de profesores
anticlericales el cual sustituiría la escuela laica de ese momento, porque consideraban
que era tiempo de una nueva, que denominaron escuela “Proletaria”, que representaban
las exigencias actuales. Después de éste Congreso, se llevaría a cabo el Congreso
Pedagógico y ahí explicarían los pasos necesarios para realizar las encomiendas a la
educación contra el clero para “liberar” a los niños; para llevar a cabo la escuela
Proletaria, la URA sugería modificar el artículo 3º. Constitucional.299
La educación fue otro de los medios que utilizó para combatir a la religión, se
impulsó a la Normal Veracruzana y se crearon otras Normales Regionales para
incrementar el número de maestros; el gobernador pensaba que la educación debía ser
capaz de sentir y de pensar con las clases laborantes.300 Ante las adversidades que vivían
los católicos, declaraban que los fanáticos son los revolucionarios, considerados menos
297
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 24 de septiembre de 1931, No. 1,
pp. 1, 6.
298
Ibíd., pp. 2-5.
299
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 15 de octubre de 1931, No. 4, pp.
1, 4.
300
GARCÍA Morales. “La educación como medio de exterminio religioso. Difusión de la educación”, Op. Cit., 1974, p.
106.
134
inteligentes, porque llevan un falso concepto al tiranizar al pueblo de México en nombre
de la Revolución.301
Si bien la educación fue primordial durante la administración tejedista y en las
siguientes, no se desarrollará este tema, sino que solamente se menciona la importancia
que tuvo este rubro durante esos años; para 1932, Tejeda menciona que el primer paso
hacia la tendencia desfanatizadora del pueblo fue la expedición de la ley 197. Para
lograrlo, fue necesario la “liberación” del alma de las nuevas generaciones, la escuela
debía abandona su posición neutral, respetar las instituciones, leyes y decretos porque
en las escuelas primarias, urbanas y rurales se va elaborando un nuevo espíritu sin las
trabas de la religión, poniéndola en contacto con el pensamiento de los obreros y
campesinos.302
En octubre de 1931 se dio la noticia de que se reduciría el número de Diputados a
la H. Legislatura del Estado de Veracruz, siendo 14 por cada cien mil habitantes, aunque
en principio serían 13, casualmente el número equivalía al de los sacerdotes. Por esos
mismos días y tras las elecciones los resultados anunciaron que el Partidlo Veracruzano
del Trabajo, adherido al Partido Laborista, ganaron en las “tres villas” (Orizaba, Xalapa y
Veracruz).303 El poder municipal fue un factor que controló Adalberto Tejeda, en cambio,
no tuvo un control total en aquellos donde los obreros imperaban en la política.
Además, varios representantes de la Iglesia Católica en Veracruz se encontraban
en la capital del país buscando que el presidente de la República intercediera en el asunto
religioso que se presentaba en aquél estado, por lo que se rumoraba que los cultos serían
reanudados, esto lo afirmaba el secretario de Gobernación, Manuel C. Téllez, que se
trataría el tema religioso no sólo en Veracruz sino en las otras entidades que se
presentaran, siguiendo el estricto apego a la ley; algunos templos ya se encontraban
301
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 15 de octubre de 1931, No. 4, pp.
3-4.
302
BLÁZQUEZ. “Informe que rinde el C. Gobernador del Estado ante la XXXIII H. Legislatura”, Op. Cit. Tomo XII, 1986,
pp. 6304-6305.
303
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 30 de octubre de 1931, No. 518, pp. 1, 4.
135
cerrados, pero con las peticiones de los católicos los de Huatusco y Veracruz fueron
reabiertos al culto.304
Si bien los templos fueron cerrados y algunos reabiertos, en Orizaba seguían
estando al servicio de los cultos pese a la ley 197, obviamente las autoridades
municipales hacían cumplir tal ley pero poco pudieron hacer ya que en diciembre se
llevaron a cabo las festividades guadalupanas (conmemoración a la aparición de la
Virgen de Guadalupe el 12 de diciembre). Estas celebraciones empezaron a finales de
noviembre e inicios del mes siguiente con peregrinaciones, además de actos religiosos
en los templos de La Concordia (dedicado a la Virgen de Guadalupe), El Carmen, San
Antonio, San José y San Juan.305
Estas festividades se llevaron a cabo a pesar que el gobernador Tejeda había
ordenado al presidente municipal de Orizaba de no permitir las celebraciones
guadalupanas, debido a que infringían la ley de cultos, de igual manera pidió que se
vigilaran los templos para que no fueran adornadas con el pabellón nacional con
imágenes y adornos religiosos, ante esta petición el presidente acusó que cumpliría con
la disposición gubernamental.306 No se encontraron documentos de las medidas que el
gobierno orizabeño usó o si hubo detenidos para evitar las fiestas religiosas, sin embargo,
periódicos de la época muestran que éstas se llevaron a cabo.
El día 12 de diciembre Orizaba llevó a cabo con júbilo la fiesta guadalupana, entre
los católicos estaba presente el problema religioso que atravesaban tanto el estado como
el país, además los feligreses acentuaron que Guadalupe es igualdad, nacionalidad e
independencia, pedían que el problema que estaba presente sobre el asunto religioso
304
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 31 de octubre de 1931, No. 6, pp.
1, 4; Ibíd., Periódico Los Sucesos, Orizaba, 31 de octubre de 1931, No. 519, pp. 1, 4.
305
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 06 de diciembre de 1931, No. 11,
p. 2.
306
AMO. Ramo Gobierno, Presidencia Municipal, Correspondencia C.-559, Exp. 262. Telegrama, de Adalberto Tejeda
al Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 10 de diciembre de 1931; Ibíd., Telegrama, del Presidente Municipal de
Orizaba Pedro López al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 11 de diciembre de 1931.
136
terminara. Días después de las festividades guadalupanas, el diputado veracruzano Luis
F. Márquez presentó la iniciativa de restricción de sacerdotes en el Distrito Federal.307
Poco a poco el problema religioso iba en aumento, Chihuahua se sumaba a la ley
reglamentaria de sacerdotes y en el puerto de Veracruz se pidieron las bancas de la
iglesia de la Asunción para que fueran trasladadas a la biblioteca municipal; por otro lado
el arzobispo de México, Pascual Días, pedía al presidente que intercediera para evitar
que la ley de cultos se llevara a cabo en el Distrito Federal y en los estados del país. Esta
situación puso enérgicos a los Senadores, destacando Manlio Fabio Altamirano.308
Desde que la Ley Tejeda entró en vigor la resistencia católica se hizo presente y
el gobierno veracruzano junto con los municipios llevaron a cabo su cumplimiento, poco
a poco la tensión crecía cuando en otros puntos de la República se llevó a cabo la misma
política en contra de la Iglesia. La situación se agravó más cuando en 1932, en Veracruz,
el cierre de templos comenzó a ser definitivo en todo el estado, el gobierno ya no estaba
dispuesto a permitir que los católicos siguieran quebrantando la Constitución.
3.2.1 1932: el segundo cierre de templos en Orizaba
En 1931 la Ley Tejeda fue tomada con hostilidad por algunos grupos católicos, mientras
que por parte del gobierno veracruzano fue una medida para acabar con la religión, los
enfrentamientos no pudieron evitarse. Los cierres de templos en el estado fueron poco a
poco por la entidad, los primeros en cerrar fueron Córdoba, Orizaba, Veracruz y Xalapa,
además debían de expulsar a los sacerdotes quedando sólo los permitidos por el estado
para oficiar.
Rafael Sevilla, jefe de la Hacienda Federal de Veracruz, se encargó de la
conservación de los templos, así lo apunta Williman; en Orizaba y Veracruz, los
funcionarios de la Secretaría de Hacienda colocaron sellos federales en las puertas que
estaban cerradas, mientras que en la zona de Xalapa se levantaron inventarios en las
307
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 12 de diciembre de 1931, No. 12,
pp. 1, 4; Ibíd., Periódico La Última Hora, Orizaba, 17 de diciembre de 1931, No. 13, p. 1
308
AMO-Hemeroteca. Periódico La Última Hora, Orizaba, 19 de diciembre de 1931, No. 15, p. 1; Ibíd., Periódico La
Última Hora, Orizaba 20 de diciembre de 1931, No. 16, pp. 1, 4; Ibíd., Semanario Nacionalista de Información
Juventud, Orizaba, 27 de diciembre de 1931, No. 14, pp. 1, 4.
137
iglesias y los objetos fueron trasladados a la catedral, que también fue cerrada y sellada,
ante esto, las juntas vecinales nuevamente jugaron un papel importante para la custodia
y resguardo de los templos veracruzanos.309
Para que la campaña de Tejeda funcionara, dependía de la expulsión de los
sacerdotes, a finales de 1931 lo empezaron a hacer, siendo desterrados también los
obispos Nicolás Corona y Jenaro Méndez, de San Andrés Tuxtla y Papantla
respectivamente, el primero se trasladó a Teziutlán y el segundo a Tehuantepec y ahí
instalaron la nueva sede de sus diócesis, por lo que a pesar de estar en otros estados
podían ejercer sus funciones en su jurisdicción veracruzana; para que esto funcionara el
arzobispo de Puebla, Pedro Vera Zurita cedió temporalmente algunos templos de la
frontera para que fueran utilizadas por el obispo Guízar. La ley 197 permitía un solo
obispo para todo el estado de Veracruz.310
La ciudad de México también limitó a los sacerdotes, el 30 de diciembre de 1931
se celebró la última misa y a partir de enero los templos permanecerían cerrados,
aquellos curas que no se registraron y oficiaban eran consignados ante las autoridades,
el número que se designa para la capital de México fue de 25 –uno por cada 50,000
habs.–, la ley fue anunciada en el Diario Oficial el 30 de diciembre y el arzobispo Ruiz y
Flores pidió al presidente Pascual Ortiz Rubio que interviniera y exhortó a los sacerdotes
a buscar una medida legal; en el puerto de Veracruz se pedía una iglesia para que fuera
ocupada como escuela.311
Del mismo modo que en Veracruz, los sacerdotes del D.F. buscaron el amparo
bajo el alegato que se violaba el artículo 24 constitucional, además de que el arzobispo
Díaz alegaba al reglamentar el número de sacerdotes los legisladores no tuvieron en
cuenta las necesidades del pueblo; se entregaron seis mil amparos, siendo el Lic.
Fernando I. Ramos quien los patrocinaba. La situación política en México hizo cambios
en el gabinete presidencial; además, pese a que se tramitaron los amparos y hayan sido
309
WILLIMAN. “¿Persecución o fanatismo?”, Op. Cit., 1976, p. 128.
WILLIMAN. “El programa de ‘desfanatización’ en Veracruz, 1931-1932”, 1976, p. 131.
311
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 3 de enero de 1932, No. 15, pp. 1,
4; Ibíd., Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 10 de enero de 1932, No. 16, pp. 1, 4.
310
138
presentados en la capital mexicana, estos fueron rechazados, por lo que se pidió a la
Suprema Corte de Justicia que resuelva el conflicto.312
Por otro lado, en el estado de Veracruz la campaña desfanatizadora que empleaba
el gobernador Tejeda era bien recibida por los obreros, debido a que lo tomaban como
un beneficio para el proletariado veracruzano y de la Nación. La medida para erradicar
estos problemas era el radicalismo que representaba Adalberto Tejeda, se apoyó que
tanto en el D.F., como en otros estados del país la lucha antirreligiosa era auspiciada por
la “Juventud Revolucionaria”.313
En 1932 inició una potente campaña propiciada por el gobierno del estado en
contra del clero al que llamaría hipócrita. La URA en Orizaba dio su apoyo al gobernador
Tejeda siendo su lema “¡Abajo el clero! Por la desfanatización del pueblo” y a gritos de
“¡Abajo los ídolos de madera!” “¡Abajo las imágenes rodeadas de simbólica santidad!”
“¡No más farsas!” “¡Ha llegado la edad del pensamiento y de la idea, y en ella
demostraremos al pueblo que ha sido víctima eterna del engaño y la explotación!”
buscaban erradicar al pueblo la religión. Se mantenían firmes ante la actitud
revolucionaria y asentaban que no cesarían en su lucha hasta lograr que los sacerdotes
cambiaran su misión por la de ciudadanos de bien, pedían a las iglesias como aulas para
impartir la instrucción.314
Debido a que el gobierno veracruzano no cedería ante las peticiones de los
feligreses de abstenerse sobre la ley de cultos, éstos decidieron volver a formar una junta
vecinal por cada templo para salvaguardar los intereses de la Nación, por lo que al
organizarse pidieron el permiso correspondiente al alcalde de Orizaba para permitirles
tomar posesión del recinto, la respuesta del Ayuntamiento de Orizaba fue que debían
dirigirse a la Secretaría de Gobernación.315 La primera junta vecinal en formarse fue la
312
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 17 de enero de 1932, No. 17, pp. 1,
4; Ibíd., Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 24 de enero de 1932, No. 18, p. 1.
313
AMO-Hemeroteca. Periódico Pro-Paria, Orizaba, 9 de enero de 1932, No. 552, pp. 3- 4.
314
APO. S/C. Comunicado del Comité No. 7 de la Unión Revolucionaria Anticlerical (Srio. Gral. Edmundo López; Srio.
del Interior Francisco Arey; Srio. del Exterior F. B. Pavón Jr.; Srio. de Actas Aurelio M. Pérez; Srio. de Finanzas Juan
Gálvez), Orizaba, 9 de enero de 1932.
315
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. De la Junta Vecinal al Presidente Municipal,
Orizaba, 12 de enero de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal de Orizaba Martín Torres al C. Bernabé Polanco,
139
del templo de San José de Gracia. La situación con los templos fue un poco complicada,
el gobierno de Orizaba respondía que era el poder superior quien servía de disponer lo
que mejor convenga.316
Se tuvo que poner atención ante la posibilidad de una rebelión liderada por Camilo
Corona, a quien las autoridades llamaban “fanático religioso”, originario de Maltrata se
descubrió que permanecía oculto en Orizaba y según las fuentes planeaba junto a su
suegra Gumersinda Rosas y sus hijos desequilibrar el gobierno, mantenía contacto con
otros personajes y pedía armamento siendo Orizaba y Maltrata los lugares de
operaciones, del mismo modo llegarían más secuaces provenientes de diversos puntos
del país al estado de Veracruz que pretendían derrocar el actual gobierno y las
autoridades que lo secundan.317
Al ser evaluada la situación se procedió a investigar al señor Camilo Corona, la
inspección de policía de Orizaba argumentó que Corona habitaba en Maltrata y muy
pocas veces se veía en Orizaba, era de oficio agricultor y estaba afiliado al partido
“Vicente Guerrero” que es miembro del Partido Veracruzano del Trabajo, se le dio
vigilancia y se le informaría al gobernador cualquier situación.318
Nuevamente, los católicos orizabeños debían de dirigirse ante las autoridades para
cualquier acontecimiento, de no hacerlo las sanciones se aplicarían dependiendo de la
falta, estos iban desde permisos para algún evento hasta vigilancia de los templos.319
Para una mejor clasificación el gobierno de Veracruz pidió que se informara cuáles eran
Orizaba, 13 de enero de 1932; Ibíd., del Subsecretario de Gobierno al C. Presidente Municipal de Orizaba, JalapaEnríquez, 12 de febrero de 1932.
316
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Presidente Municipal Martín Torres al
Subsecretario de Gobierno, Orizaba, 27 de febrero de 1932; Ibíd., del Gobernador al C. Secretario de Gobernación,
Jalapa-Enríquez, 7 de marzo de 1932.
317
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Gobernador Adalberto Tejeda al C. Presidente
Municipal de Orizaba Martín Torres, Jalapa-Enríquez, 26 de febrero de 1932.
318
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Inspector de Policía Eulalio Martínez al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 10 de marzo de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres al C. Gobernador
del Estado, Orizaba, 23 de abril de 1932.
319
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. En el templo de Los Dolores se pidió permiso para
audición de bandas de música, mismo que fue negado; en el caso de El Calvario una surada azotó a la ciudad
provocando que la puerta se abriera y se pidió asegurarla nuevamente.
140
los templos menos suntuosos que existían en Orizaba, el Ayuntamiento informó que estos
eran: San Juan de Dios, Los Dolores, San Antonio y Santa Gertrudis. 320
Ante cualquier caso, tanto las autoridades como los particulares debían de hacer
trámites correspondientes en cuanto a trámites que tuvieran que ver los templos, no
necesariamente tendría que ser una misa o alguna festividad religiosa. También podrían
ser trámites legales o consulta de los archivos parroquiales (sacramentos religiosos),
como el que solicitó Fernando de la Llave y Blagborne para comprobar el lugar de
nacimiento de Gregorio Mendizábal y ser cotejada por un notario público, para lograr esto
se tenían que dirigir a las dependencias establecidas para conseguir el permiso
correspondiente.321
Los permisos debían de esperar, debido a que la Oficina de Hacienda no daba
fácilmente el acceso a los templos y sus anexos porque las llaves estaban en el
Ayuntamiento, además de que no estaban organizadas las juntas vecinales para que se
hicieran responsables de los inmuebles y así el público pudiera asistir a solicitar los
documentos que requieren de los archivos parroquiales.322 Por otro lado, se presentaron
más solicitudes para consultar esos archivos, la Oficina negaba esos permisos por la falta
de las juntas que respondieran para proteger los bienes de la Nación, por lo que dijo a la
presidencia que organizaría unas juntas relativas para que recibieran los templos y sus
anexos de acuerdo a la ley en vigor.323
El asunto que se suscitó fue porque pidieron permiso para revisar los archivos
parroquiales del templo de San Miguel, debido a que se tenía que comprobar un
parentesco del finado Gregorio Mendizábal con los señores Fernando, Joaquín y Mariano
Mendizábal así como del matrimonio Dolores Mora y Miguel Vázquez, esto por tratarse
320
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Telegrama, del Gobernador Adalberto Tejeda al C.
Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa, 15 de marzo de 1932; Ibíd., telegrama, del Presidente Martín Torres al C.
Gobernador del Estado, 15 de marzo de 1932.
321
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. De la Oficina Federal de Hacienda al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 12 de marzo de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres al C. Jefe de Oficina Federal
de Hacienda, Orizaba, 23 de marzo de 1932.
322
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Jefe de la Oficina Maximiliano Jofre al C. Lic.
Luis Salmerón, Orizaba, 12 de mayo de 1932.
323
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Secretario Municipal Agustín G. Barrios al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 9 de abril de 1932.
141
de una herencia. El Lic. Salmerón pidió el permiso correspondiente al Jefe de la Oficina
Federal de Hacienda pero éste informó que las llaves estaban en el Ayuntamiento, pero
también debía de organizarse con la Junta Vecinal del templo en cuestión, el
procedimiento tenía que ser de acuerdo a la ley porque estaba prohibido abrir los templos.
Para recibir la respuesta debieron de insistir ante la Oficina, ya que la presidencia no tiene
inconveniencia para no afectar a terceros.324
Para cumplir los preceptos de la ley de cultos, se basaron en la Ley Federal del 14
de junio de 1926, esos mismos lineamientos los llevó a cabo el gobernador del Estado
de Veracruz. Una vez hecho esto el Ayuntamiento de Orizaba tenía que seguir las
disposiciones dictadas y se comprometía a hacerlas cumplir estrictamente 325 Asimismo,
se dijo que los templos tendrían que permanecer cerrados o en su defecto ocuparlos de
forma discrecional de acuerdo con las necesidades del culto y dentro de las restricciones
que la ley establece, para el caso de aperturas de nuevos templos se mencionó que es
contraproducente, puesto que por un lado se trata de reducir por otro estarán abriendo
más, por lo que queda expuesto que no se autorizará ninguna apertura ni construcción
de un nuevo templo religioso.326
Aunque la Ley 197 se aplicaba, el gobernador giró un telegrama a la presidencia
municipal de que en Orizaba los templos seguían abiertos por los sacristanes, pidió que
se cerraran todas las iglesias a fin de evitar propaganda en contra del gobierno; tal orden
fue dada por la autoridad municipal al Inspector de Policía para que se cumpliera. 327 Este
fue el inicio de la clausura de los templos en la ciudad de Orizaba, si bien debían de
permanecer cerrados desde el año pasado, no se había cumplido en su totalidad con la
ley, por lo que bastó la orden del gobernador para cumplirla estrictamente.
324
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Lic. Luis Salmerón al C. Presidente Municipal,
Orizaba, 13 de mayo de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres al Lic. Luis Salmerón, Orizaba, 18 de mayo
de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres al C. Jede de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 23 de
mayo de 1932.
325
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Circular No. 4, del Gobernador al C. Presidente
Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 21 de enero de 1932.
326
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Circular No. 20, del Subsecretario de Gobierno al
C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 16 de febrero de 1932.
327
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Telegrama, del gobernador A. Tejeda al C.
Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 20 de mayo de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres
al C. Inspector General de Policía, Orizaba, 25 de mayo de 1932.
142
Para su conocimiento, el gobierno estatal pidió informe detallado de cuáles eran
los templos que se ubicaban en Orizaba,328 siendo los siguientes:
Tabla 1. Templos existentes en Orizaba
Templos Católicos
Templos de otras religiones
San José de Gracia, San Antonio, San
Miguel, El Calvario, Santa María, El
Carmen, Los Dolores, Nuestra Señora
de Guadalupe (La Concordia), Santa
Gertrudis, San Juan de Dios y Barrio
Nuevo
La Santísima Trinidad
Templo Evangelista
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Presidente Municipal Martín Torres al C.
Subsecretario de Gobierno, Orizaba, 6 de junio de 1932.
El procedimiento para la clasificación de los templos fue similar al de la “Ley Calles”. Se
pidió el nombre de los sacerdotes autorizados para ejercer su ministerio dentro de
Veracruz, describiendo su cargo, culto y ubicación, la autoridad municipal respondió que
no había ningún sacerdote puesto que los templos ya habían sido cerrados.329 Las llaves
de los templos fueron entregados al presidente municipal:
Tabla 2. Entrega de llaves
Templo
Llaves
El Carmen
Los Dolores
San Antonio
San Juan de Dios
San José
Santa María
La Concordia
Santa Gertrudis
Total
15
9
7
4
8
2
12
3
60
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Inspector
de Policía Eulalio Martínez al C. Presidente Municipal, Orizaba, 30 de mayo de 1932.
328
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Circular No. 58, del Subsecretario de Gobierno Lic.
Miguel Aguillón Guzmán al C. Presidente de la H. Corporación Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 24 de mayo de
1932.
329
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Circular No. 66, del Subsecretario de Gobierno Lic.
Miguel Aguillón Guzmán al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 31 de mayo de 1932; Ibíd., del
Presidente Municipal Martín Torres al C. Secretario de Gobierno, Orizaba, 9 de junio de 1932.
143
En mayo se cerraron los templos en Orizaba que permanecían abiertos desde el año
pasado, se negaron a nombrar a las Juntas Vecinales para hacerse cargo de estos
templos y cualquier oportunidad para la apertura de cualquier templo. La presidencia
cumplía con las órdenes del gobernador, por lo que el 26 de mayo a las 5 de la madrugada
junto con la policía cerraron y sellaron las puertas de las iglesias Santa María, El Carmen,
La Concordia, Santa Gertrudis, Los Dolores, San Juan de Dios, San José y San Antonio,
quedando las llaves a disposición de la Inspección de Policía de la ciudad y
posteriormente a la presidencia municipal, la noticia le fue enviada al gobernador y al Jefe
de Hacienda.330
En 1931 se ordenó el cierre de los templos pero al año siguiente fueron retirados
oficialmente del culto, debido a que las autoridades tenían que dar seguimiento a la
situación de los templos en los años siguientes se daba constancia de que los templos
permanecían cerrados:
Tabla 3. Situación de los templos en Orizaba
Iglesia
Retirado del culto
Nombre del encargado
Santa María
San Antonio
El Carmen
Los Dolores
4 de enero de 1932
19 de abril de 1932
21 de abril de 1932
24 de abril de 1932
Cayetano Flores
Manuel Rodríguez
Severiano Plasencia
Felipe Nieva
Parroquia de Santa María
de Guadalupe
(La Concordia)
25 de abril de 1932
Pascal Flores
4 de mayo de 1932
4 de mayo de 1932
4 de mayo de 1932
Alberto Báez
Bernabé Polanco
Juan Miranda Reyes
24 de mayo de 1932
Margarito Almanza
San Juan de Dios
San José de Gracia
Santa Gertrudis
La Asunción
(Barrio Nuevo)
330
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Telegrama, del Presidente Municipal Martín Torres
al C. Gobernador del Estado, Orizaba, 26 de mayo de 1932; Ibíd., del Inspector de Policía Eulalio Martínez al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 26 de mayo de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres al C. Inspector de
Policía, Orizaba, 27 de mayo de 1932; Ibíd., del Subsecretario de Gobierno Lic. Miguel Aguillón Guzmán al C.
Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 27 de mayo de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal de Orizaba al
C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 25 de mayo de 1932.
144
El Calvario
Parroquia de San Miguel
Arcángel
Tercera Orden
26 de julio de 1932
Luis Durand
19 de julio de 1932
Mariano A. López
---
---
---
Próspero Mendoza Reinaldo
Ávila
La Santísimia Trinidad
(Iglesia Presbiteriana)
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Informes C.-726, Exp. 3. Constancias del Ayuntamiento de Orizaba en favor
de los encargados de los templos, Orizaba, 6 de enero de 1934; sobre la constancia de la entrega del templo de la
Santísima Trinidad a Prospero Mendoza, Orizaba 6 de junio de 1935 y posteriormente constancia a Reinaldo Ávila,
Orizaba, 22 de agosto de 1935.
Al parecer, la decisión de que se cerraran definitivamente los templos, –excepto los de
San Miguel y El Calvario que se encontraban sellados por un atentado dinamitero–, fue
porque no sólo iban los feligreses a practicar su culto, sino que las autoridades
municipales y del gobierno estatal descubrieron que también invitaban a los feligreses a
desobedecer la ley siendo incitados por algunos curas que permanecían de incógnito en
la ciudad; esto fue lamentable para los católicos porque creyeron que ya no podría haber
una solución..331
Los
católicos
orizabeños
pidieron
la
intervención
de
las
autoridades
correspondientes para que fueran nuevamente abiertos, basándose en que la
Constitución daba garantías de practicar su religión dentro de los templos; otro argumento
era que la orden no era de la autoridad Federal; para poder ejercer la ley de cultos debían
de estar abiertas las iglesias para hacer adentro las prácticas religiosas y es el Gobierno
Federal el único que puede ordenar sobre los bienes de la Nación; estas peticiones fueron
recolectadas para dárselas a conocer a la presidencia de Orizaba.332
Para contrarrestar las acusaciones anteriores, se rindió un informe justificado
donde tanto el gobierno orizabeño como el estatal se basaron en las investigaciones de
que los católicos preparaban disturbios al gobierno veracruzano, por lo que tuvieron que
cerrar los templos, por ello se dieron a conocer los telegramas de las sospechas del
331
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 27 de mayo de
1932, No. 698, pp. 1, 3.
332
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Subsecretario de Gobierno encargado de la
Secretaría Santiago Mota Barrientos al C. Presidente Municipal de Orizaba, 17 de junio de 1932.
145
gobernador así como de la orden para cerrar los templos, del mismo modo cuando el
gobierno de Orizaba cumplió los mandatos.333
De acuerdo con los expedientes, los únicos templos que se entregaron a la Oficina
de Hacienda por las autoridades municipales fueron San Miguel y El Calvario, tomaron
posesión de los templos y sus anexos con intervención de Contraloría y de las
autoridades municipales, levantaron el respectivo inventario y mientras se resolvía qué
fin tendrán los templos se debieron de asignarse a una persona a cada templos de
confianza y honorable que se comprometiera a cuidarlos gratuitamente, con el derecho
de habitarlos. El 27 de junio se estableció que el 18 de julio se haría la entrega formal,
siendo el comisionado por la Oficina de Hacienda el señor Antonio Arévalo.334
Las actas que denotaba la entrega de templos fueron el 19 de julio y 26 de julio
para San Miguel y El Calvario respectivamente, en ambos casos el Síndico 2º. Anselmo
Aguilar fue el representante jurídico del Ayuntamiento, Antonio Arévalo comisionado por
la Oficina Federal de Hacienda para recibir los templos; una vez elaborada el acta se
prosigue a hacer el inventario de cada templo para ponerlo como anexo. 335 Con el cierre
de los templos todo se tenía que hacer de manera legal, es decir, cualquier situación se
tenía que hacer saber a los responsables de los templos. Otro templo que fue retirado del
culto fue el de Santa María bajo los mismos lineamientos que los otros dos.336 La Oficina
Federal de Hacienda permitió a algunas personas de vivir en los templos con carácter de
responsable, con la condición de velar por la conservación y aseo del inmueble, a
continuación se muestra cómo quedó el nombramiento:
Tabla 4. Entrega de templos a personas para su cuidado y aseo
Templo
Nombre
Fecha
Santa María
Parroquia de San Miguel
Cayetano Flores
Mariano A. López
16 de febrero de 1933
25 de marzo 1933
333
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Presidente Municipal Martín Torres al C.
Gobernador del Estado de Veracruz, Orizaba, 25 de junio de 1932.
334
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Jefe de la Oficina Maximiliano Jofre al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 24 de junio de 1932; Ibíd., del Jefe de la Oficina Maximiliano Jofre al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 15 de julio de 1932.
335
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Actas de entrega de los templos San Miguel y El
Calvario; Ibíd., del Síndico 2º. al C. Presidente Municipal, Orizaba, 30 de julio de 1932.
336
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Acta de entrega del templo de Santa María.
146
El Calvario
San Antonio
Los Dolores
El Carmen
La Concordia
San Juan de Dios
San José de Gracia
Santa Gertrudis
Barrio Nuevo
Luis Durand
Manuel Rodríguez
Felipe Nieva
Severiano Plascencia
Pascual Flores
Alberto Báez
Bernabé Polanco
Juan Miranda Reyes
Margarito Almanza
4 de abril de 1933
19 de abril de 1933
24 de abril de 1933
24 de abril de 1933
25 de abril de 1933
4 de mayo de 1933
4 de mayo de 1933
4 de mayo de 1933
24 de mayo de 1933
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22.
Para el cumplimiento de esas disposiciones se giraban avisos entre las partes
involucradas para que todo estuviera en orden, asimismo le hacían saber a los “vigilantes”
de los templos que su función era salvaguardar el templo, siendo su tarea principal la de
mantenerlos aseados. Así se pudo mantener un orden sobre el cuidado de las iglesias
entre el gobierno y las personas nombradas para el cargo de custodio; hasta este
momento las Juntas Vecinales no tenían la importancia como la vez anterior, pero
algunos miembros y se optó entregarles los templos, del mismo modo se realizó el
inventario a cada uno.
La entrega de templos fue tan importante para el gobierno que la Oficina Federal
de Hacienda en Orizaba daba seguimiento a los trámites, debido a que todos los
inmuebles formaban parte del Departamento Bienes Nacionales de la Secretaría de
Hacienda, ésta dependencia federal era quien procedía con la entrega de los templos a
las personas encomendadas mediante las gestiones necesarias por el Ayuntamiento.
Una de las peticiones fue mantener a los inmuebles libre de propaganda:
En virtud de que la mayoría de las oficinas que tienen a su cargo la administración y custodia de los
bienes nacionales e intervenidos, permiten que en los edificios públicos de la Federación, así como en
los templos y sus anexidades, se lleve a cabo la fijación de anuncios, sin tener en cuenta que, en el
primer caso, dichos edificios presentan un aspecto indecoroso, si se considera el destino que se les ha
dado, y que, en el segundo, se trata de predios que deben tenerse como monumentos de gran valor
artístico e histórico, dignos de conservarse, esta Dirección con apoyo en lo dispuesto por el artículo 32
del Reglamento de Oficinas Federales de Hacienda, en vigor, previene a usted que, para lo sucesivo,
esa oficina a su cargo se servirá ordenar que se ejerza una estricta vigilancia a fin de que no se permita,
por ningún motivo, la fijación de anuncios de cualquier índole en todo predio de los antes señalados. 337
337
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Circular No. 30-6-312 Dirección de Bienes
Nacionales del 17 de octubre de 1929, de la Oficina Federal de Hacienda al C. Presidente Municipal, Orizaba, 6 de
abril de 1933.
147
En este año, también se pretendió celebrar las fiestas guadalupanas para el día 12 de
diciembre, pero como la ley se cumplía en ese momento de manera más estricta, los
vecinos cercanos al templo de La Concordia y de algunos barrios de Orizaba pidieron
permiso desde los primeros días del mes en curso al presidente municipal para realizar
las festividades religiosas, cosa que les fue negada y se les informó que para tal efecto
debían de dirigirse al gobierno del Estado.338 Además, el relojero municipal Rafael
Mendoza, tuvo problemas para entrar a los templos desde que las llaves fueron
entregadas a miembros de las juntas, por lo que después de dirigirse a las autoridades
competentes se le dio todas las facilidades para acceder a las iglesias que tuvieran relojes
las veces necesarias para darles cuerda cada vez que lo necesiten.339
Un edificio que llamó la atención del gobierno estatal y federal desde la Ley Calles
fue el “San Luis Gonzaga” que fungió como asilo para niños y el cual fue ocupado como
cuartel de 1914 a 1917; tras ser abandonado por los militares su uso volvió a ser el mismo.
Esto motivó a las autoridades de pedir informes a las autoridades de Orizaba para saber
el uso actual que tiene el inmueble, por lo que si le pertenece al clero podría ser objeto
de juicio de nacionalización. Entre las averiguaciones se descubrió que fue donado por
el Sr- Luis González Gómez y su patrono actual es el Lic. Agustín Aguilar Muñoz; era
sede de un salón de artes manuales y domésticas.340
La situación religiosa en Orizaba llegó a tal punto que para poder oficiar misas en
los templos se debía de pedir permiso al presidente municipal; en cambio, de nueva
cuenta el Sr. Paulino Martínez Pacheco vuelve a interferir a favor de los católicos, esta
vez pide que el templo de San Miguel se abra al culto, para ello se tuvo que dirigir al
338
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. De Mauricio Vargas, Miguel Villarello y demás
firmantes al C. Presidente Municipal, Orizaba, 5 de diciembre de 1933; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres
a los Sres. Vargas, Villarello y demás, Orizaba, 9 de diciembre de 1933; Ibíd., de los Sres. Emilio Ramos, Zeferino García
y demás firmanes al C. Presidente Municipal, Orizaba, 6 de diciembre de 1933; Ibíd., del Presidente Municipal Martín
Torres a los Sres. Ramos, García y demás, Orizaba, 18 de diciembre de 1933.
339
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Del Regidor de Ornato S. Jaramillo al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 12 de mayo de 1933; Ibíd., del Presidente Municipal Martín Torres al C. Jefe de la Oficina Federal
de Hacienda, Orizaba, 16 de mayo de 1933; Ibíd., del Jefe de la Oficina Esteban C. Sánchez a los CC. Mariano A. López,
Bernabé Polanco, Alberto Báez, Orizaba, 22 de mayo de 1933.
340
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Del Secretario de Gobierno Francisco Salcedo
Casas al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 11 de mayo de 1933; Ibíd., del Presidente Municipal al
Secretario de Gobierno, Orizaba, 18 de mayo de 1933; Ibíd., del Gobernador Interino Francisco Salcedo Casas al C.
Secretario de Gobernación, Jalapa-Enríquez, 26 de mayo de 1933.
148
gobierno del estado y éste a su vez informó a la presidencia de Orizaba, la respuesta fue
negada a Paulino diciendo que se le negaba la autorización que pedía, debido a que el
edificio dependía de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y a su vez del Ejecutivo
Federal.341
La Oficina Federal de Hacienda dio seguimiento sobre los inmuebles de índole
religioso en Orizaba, pidió informes de escuelas y hospitales que pudieran pertenecer al
clero para que posteriormente se nacionalizaran, con la respectiva averiguación se
informó que estos edificios se encontraban cerrados desde 1931.342 Por otro lado, se
presentó una queja hacia el encargado de los relojes, puesto que en los templos de San
Miguel y San José la persona dio las llaves a personas ajenas a los establecimientos y
repicaron las campanas sin el consentimiento de las autoridades, por lo que advirtieron
al responsable de los relojes que sería sancionado si se volvía a repetir el suceso.343
El gobierno del estado presionaba al Ayuntamiento de Orizaba para vigilar y hacer
cumplir la ley de cultos para evitar que fuera violada, debido a que había recibido
denuncias de que los sacerdotes estaban oficiando toda clase de actos religiosos
utilizando las casas particulares de las damas de sociedad y por esto recibían grandes
cantidades de dinero. Esta disposición le fue informaba a la Inspección de Policía de la
ciudad para redoblar la vigilancia y sancionar a aquellos que infrinjan la ley. 344
La administración de Adalberto Tejeda estaba por terminar, a finales de 1932 dio
su último informe de gobierno. Culpaba a los sacerdotes de haber violado sistemática e
intencionalmente las leyes, así como de explotar al pueblo desviándolos del trabajo y
robándoles el patrimonio de sus familias en épocas de depresión y aflicción económicas
341
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Del Subsecretario de Gobierno Santiago Mota
Barrientos al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 3 de octubre de 1933; Ibíd., del Presidente
Municipal Martín Torres al C. Subsecretario de Gobierno, Orizaba, 13 de octubre de 1933.
342
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Se encuentran varias notas de diferentes
establecimientos que requirieron investigación sobre el estado de los inmuebles.
343
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Del Jefe de la Oficina Daniel Ortega Camarena al
C. Presidente Municipal, Orizaba, 18 de octubre de 1935; Ibíd., del Presidente Municipal Jesús Ponce al C. Encargado
de los relojes públicos, Orizaba, 30 de octubre de 1935.
344
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Del Secretario de Gobierno al C. Presidente
Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 19 de octubre de 1935; Ibíd., del Presidente Municipal Jesús Ponce al C.
Inspector General de Policía, Orizaba, 1 de noviembre de 1935; Ibíd., del Inspector de Policía Pablo Ayala al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 5 de noviembre de 1935.
149
por recolectar fondos para construir y reconstruir capillas, iglesias o templos. Además
reclamaba que la Iglesia nunca había dado un peso para ayudar a las víctimas de las
catástrofes que habían conmovido a la Nación o para ayudar a los damnificados por
inundaciones, epidemias, terremotos, etc.; los acusaba que a pesar de que el gobierno
hace lo posible por enmendar la crisis económica el clero roba millones para reedificar la
nueva Basílica del Tepeyac.345
De acuerdo con su informe, Tejeda aludía que su deber era velar por el pueblo
trabajador contra las empresas capitalistas, los patronos inhumanos, los comerciantes
sin escrúpulos y hasta algunas autoridades arbitrarias, así como protegerlo y defenderlo
contra la rapacidad y los fraudes del clero. Expuso que esa fue la razón para la
reglamentación de la séptima base del artículo 130 Constitucional al proponer la
reducción el número de sacerdotes de las distintas religiones; si bien la Honorable
Asamblea aprobó la iniciativa, fanáticos, católicos, cretinos y extremistas hicieron de la
ley antes de su vigencia objetos de desahogo a sus iras implacables y al entrar en vigor,
los prelados, mismos que se habían ofrecido a obedecer las leyes, asumieron un papel
rebelde.346
Tejeda reprochaba enérgicamente la actitud que había tomado el clero, debido a
que los sacerdotes que oficiaban en el Estado acudieron a jueces en demanda de amparo
alegando que se violaba las garantías que la Constitución otorga en sus artículos 4, 6, 9,
14, 16 y 24 por lo que solicitaron la protección de la justicia.
347
Esto fue el principal
descontento del gobernador, debido a que los católicos desconocían la Carta Magna de
México y acudían a los artículos para “defender sus derechos”. Pero como se ha expuesto
la ley se puso en vigencia en Veracruz a finales de la administración de Adalberto Tejeda,
siendo que los siguientes gobernadores tendrían que seguirla practicando.
3.2.2 El rumbo de la Ley 197
Cuando los templos se entregaron en Orizaba, Gonzalo Vázquez Vela ya fungía como
Gobernador Constitucional del Estado de Veracruz, desde sus primeros días como tal
345
BLÁZQUEZ. “Informe que rinde…”, Op. Cit. Tomo XII, 1986, pp. 6272-6273.
Ibíd., p. 6273.
347
Ibíd., p. 6275.
346
150
recibió solicitudes para que los templos fueran reanudados al culto. Vázquez Vela llegaba
a la gubernatura y se le pidió abrir los templos en la entidad, la respuesta del gobernador
Vázquez Vela fue que debían de dirigirse al Gobierno Federal, porque a petición de la
Secretaría de Hacienda los tenían clausurados e inventariados como bienes
nacionales.348
Sin embargo, la situación cambia para 1933 cuando Lázaro Cárdenas dice que
Tejeda se vendió a compañías petroleras y al igual que Plutarco Elías Calles, piensa que
es suficiente para darle “muerte política”, puesto que el interés que tiene el ex gobernador
es en Veracruz. Asimismo, Cárdenas sostiene que deben de mantenerse en con el
propósito ideológico para resolver los problemas que afligen al país. 349 Esto dio inicio a
la ruptura política entre Calles al ser el “Jefe Máximo” y Tejeda, del mismo modo lo hace
Cárdenas al ser electo presidente de México, no obstante Tejeda seguía teniendo
presencia política en Veracruz.
Otro medio para lograr el cumplimiento de la Ley Tejeda, las autoridades se
apoyaron de los mismos habitantes, como lo fue en la ley de cultos federal, por lo que si
recibían avisos de que la ley era violada actuaban para sancionar a los responsables. Se
detuvo a una mujer de nombre Carolina Muñoz por violar la ley de cultos, al inspector de
policía le llegó un aviso anónimo de que en la casa de aquella señora con domicilio en
Norte 10 No. 24 se estaba efectuando una reunión religiosa, el inspector se trasladó al
domicilio junto con otros elementos y logró entrar a la casa encontrando a alrededor de
300 personas. Al parecer se estaba coronando a una virgen pero la Srita. Muñoz fue
puesta a disposición del Agente del Ministerio Público.350
Carolina hizo su declaración bajo la acusación de ser su casa sede de una
celebración religiosa sin ser recinto aprobado para ello, en ella la Srita. Muñoz afirma que
era verdad, pero que la celebración era de carácter privado y por ende no había violado
348
BLÁZQUEZ. “Informe que rinde…”, Op. Cit. Tomo XII, 1986, p. 6324.
Fondo Francisco J. Múgica, Tomo CXLIV, C.-16. De Lázaro Cárdenas al Sr. Gral. de Bgda. Francisco J. Múgica, Baja
California, 17 de julio de 1933.
350
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Inspector General de Policía Eulalio Martínez
al C. Presidente Municipal, Orizaba, 1 de junio de 1932.
349
151
ninguna disposición legal y si lo hizo no quería faltar en materia de cultos. Después de la
declaración, se dictó que la sentencia sería una multa de $50.00 pesos.351
Días después de haber sido liberada, Carolina Muñoz se queja con las autoridades
estatales de allanamiento y aprehensión después de que se dieron disparos al aire, ante
esto, la autoridad municipal rechazó la acusación que se le imputaba, por lo que informó
mediante copias certificadas de las declaraciones que se presentaron, aludiendo que en
ellas estaban las confesiones de la quejosa, así como de los hechos que se presentaron
para llevar a cabo la detención de Carolina y cuál fue la falta que cometió.352
Los católicos siguieron efectuando los cultos en casas particulares, un caso fue la
detención de un grupo de personas en la casa de María Vázquez en la calle Sur 25 No.
50, donde el cura Ambrosio Vázquez oficiaba una misa, los hechos fueron a las 7 de la
mañana y se encontraron un cáliz y objetos que sirven para oficiar misas siento estos
recogidos, las personas de tenidas fueron las siguientes:
Tabla 5. Personas detenidas por infringir la ley de cultos
Sacerdote: Ambrosio Vázquez.
Hombres: José Hernández, Diego Cerón y Eleuterio Ramírez.
Mujeres: María Vázquez, Carmen Hernández, Ester Terrazas, Rita Flores,
Praxedis Farras, Luisa Castillo, Brígida Hernández, María Moreno,
Julia Sánchez, Dolores Callejo y Guadalupe Carbajal.
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Inspector de Policía al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 6 de noviembre de 1932.
No es de sorprenderse que haya más mujeres que hombres cuando se detenían a las
personas por violar la ley, esto se puede deber a que son ellas quienes tienen más
participación en la vida religiosa de algún lugar. Además, en Orizaba estaba el grupo de
“Damas Católicas” que apoyaba la causa para derrocar la ley 197. Entre los objetos que
se consignaron al momento de detener a las citadas personas fueron: una sotana negra,
un alba, un cordón blanco denominado “singuio”, una casulla, una estela morada, una
351
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Acta de declaración, de la Srita. Carolina Muñoz
por el Agente del Ministerio Público Lic. Lorenzo Alfaro Alomia, Orizaba, 1 de junio de 1932.
352
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Subsecretario de Gobierno Santiago Mota
Barrientos al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 5 de julio de 1932; Ibíd., del Presidente Municipal
al Subsecretario de Gobierno, Orizaba, 16 de julio de 1932; Ibíd., copia certificada de los hechos por el Secretario del
Ayuntamiento Agustín C. Barrios, Orizaba, 16 de julio de 1932.
152
estela blanca, un manípulo, un cubre cáliz de lienzo blanco y dorado, un lienzo blanco
pequeño para coger el cáliz dorado conteniendo una hostia fragmentada.353
Ante los hechos y las pruebas encontradas se abrió una investigación, en el cual
de ser encontrados culpables se pide decretarles formal prisión dentro del término legal,
pero mientras eso pasaba las personas fueron trasladadas a la cárcel pidiendo a los
representantes tanto de la cárcel de hombres como de mujeres un permiso para su
estancia en las instalaciones.354 Además, para octubre se dio la noticia de que los
sindicatos adheridos a la CROM acordaron durante la convención obrera intensificar la
campaña antirreligiosa y solicitó los templos para que ahí se establecieran escuelas o
bibliotecas.355
Los acontecimientos que ocurrieron a fines de 1932 ocasionaron que se vigilara
más la ciudad para evitar que los católicos violaran la ley de cultos, además se dijo que
había sacerdotes que oficiaban sin autorización, la petición fue dada por el gobierno del
Estado de Veracruz y girada a las autoridades de Orizaba.356 Esta medida por parte del
gobierno ocasionó que los católicos fueran más precavidos para practicar su culto de
manera clandestina, pero no los salvó de ser descubiertos en algunas ocasiones.
Otro problema en donde se vieron afectados personas de religión católica, fue por
motivo del Sr. José Loza Cerda, que al parecer ejercía el culto en Orizaba y se hacía
pasar como un agente viajero, fue detenido en la dirección Oriente 4 No. 27 en conjunto
con las señoras Concepción Azpiri, Guadalupe Azpiri, María Azpiri Muñoz y María
Martínez, también se le decomisaron objetos de ornamentos religiosos.357 La noticia pasó
353
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Presidente Municipal Martín Torres al C. Agente
del Ministerio Público Federal, Orizaba, 6 de noviembre de 1932.
354
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 1. Del Jefe de la Oficina en Funciones de Agente del
Ministerio Público Federal Luis G. Velázquez al C. Juez 1º. Instancia, Orizaba, 7 de noviembre de 1932; Ibíd., del
Presidente Municipal Martín Torres al C. Alcalde de la cárcel municipal, Orizaba, 6 de junio de 1932; Ibíd., del
Presidente Municipal Martín Torres a la Señora encargada de la detención de mujeres, Orizaba, 6 de noviembre de
1932.
355
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista y de Información El Ciudadano, Orizaba, 2 de octubre de 1932, No. 49,
p. 1.
356
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Del Subsecretario de Gobierno Santiago Mota
Barrientos al C. Presidente Municipal de Orizaba, Jalapa-Enríquez, 27 de diciembre de 1932; Ibíd., del Presidente
Municipal Martín Torres al C. Inspector de Policía, Orizaba, 10 de enero de 1933.
357
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Del Inspector General de Policía Eulalio Martínez
al C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 29 de enero de 1933.
153
a la Oficina de Hacienda debido a los objetos que se encontraron y así fueran anexados
a inventario.
Los inculpados, rindieron su declaración ante las autoridades y ahí el Sr. Loza dijo
que sí era verdad haber sido detenido en la dirección antes puesta, pero que no lo era el
hecho de que se estaba efectuando una ceremonia religiosa, al preguntarle sobre los
objetos dijo que la familia los tenía en calidad de depósito por lo que considera que portar
esos objetos no es motivo de enjuiciamiento, mencionó que era huésped de la familia e
ignora el motivo de su detención. Lo anterior fue sostenido por las mujeres que también
fueron detenidas, pero los objetos encontrados fueron suficientes como pruebas de
práctica de culto, por lo que a petición del Inspector de Policía fueron trasladados a la
cárcel.358
También se encontró un papel con nombres de más personas y lugares aledaños
como Nogales e Ixhuatlancillo, con esto llegaron a la conclusión de que se realizaban
bautizos en las casas; los objetos eran un crucifijo de metal, una custodia de metal, 4
piezas de ropa blanca, 4 piezas de seda, 7 piezas negras, 5 piezas azul, un libro de misa,
un platillo chico de cristal, un atril de madera para libros, 2 ceras sin encender, 3 ceras
encendidas, 81 ceras medianas sin encender, un frasco de cristal que contenía una
sustancia grasa con un rótulo que dice “Crisma”, un frasco de cristal conteniendo santos
olios, un vaso conteniendo sal y un vaso de cristal floreado.359
Mientras los sacerdotes seguían oficiando misas clandestinamente eran
perseguidos por el gobierno, otro que fue detenido en plena celebración de misa fue el
cura Leopoldo Osorio en la avenida Oriente 2 No. 30 y como todos los aprehendidos fue
trasladado junto con los ornamentos que utilizaba a las instalaciones de la policía local. 360
El cura Osorio fue procesado legalmente y se levantó el acta establecida, donde declara
358
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Acta de los hechos elaborada en Orizaba el 30 de
julio de 1933.
359
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-708, Exp. 22. Acta certificada por el Secretario de la Inspección
de Policía Modesto Solano, Orizaba, 31 de enero de 1933; Ibíd., del Inspector General de Policía Eulalio Martínez al
C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 31 de enero de 1933; Inventario de los objetos encontrados,
Orizaba, 30 y 31 de enero de 1933.
360
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Del Presidente Municipal Eduardo Huerta al C. Jefe
de la Oficina, Orizaba, 12 de noviembre de 1934; Ibíd., del Presidente Municipal Eduardo Huerta al C. Alcalde de la
cárcel municipal, Orizaba, 12 de noviembre de 1934.
154
que al estar en su domicilio no afectaba a la ley por estar en la intimidad de su hogar. 361
Después de permanecer en la cárcel municipal, la Srita. María Domínguez pagó una
fianza y el sacerdote Osorio fue puesto en libertad.362
No solo los sacerdotes desobedecían la ley, el policía municipal de Orizaba
Epifanio Pulido presentó ante el Inspector al Sr. Ignacio Martínez Urriola a quien
sorprendió repartiendo propaganda religiosa en la Av. Oriente 2, Martínez Urriola dijo que
se le había comisionado para llevar a cabo dicho reparto; en la declaración rendida
mencionó que eran dos mil volantes y que llegó un señor que no conoce a recogerlos en
la imprenta donde trabaja, se ofreció a repartirlos porque iba de salida a su casa. La
publicidad era sobre la conmemoración de la Virgen de Guadalupe; además, también se
le decomisó una publicidad que criticaba a la “Educación Socialista” referente al artículo
3º. Constitucional, el Sr. Martínez Urriola fue puesto a disposición de las autoridades.363
Probablemente la situación que alarmó más a los católicos fue cuando se detuvo
al padre José María Flores, quien junto con Rafael Rúa eran los más prominentes de
Orizaba, la detención del cura Flores fue en el domicilio de uno de los practicantes
católicos más reconocidos en la ciudad, se trata de Agustín Aguilar, quien desde inicios
de la ley anticlerical ha tenido participación a favor de la religión y fue catalogado como
uno de los autores intelectuales en contra del gobernador Tejeda. Durante los años
treinta, Aguilar y otros miembros formaron parte de la resistencia que ayudaba a los
sacerdotes a oficiar en casas.
Para vigilar la ley los policías patrullaban las calles, según el reporte los oficiales
Aurelio Arcos y José Osorio se percataron que en la conocida casa del Lic. Aguilar se
congregaron 500 personas aproximadamente, al revisar la casa se notaron que se
realizaban actos religiosos y procedieron con la detención del sacerdote y trataron de
confiscar los objetos religiosos pero estos fueron escondidos debido a la gran multitud,
361
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Acta de declaración de los hechos por el C.
Inspector de Policía, 12 de noviembre de 1934.
362
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Del Juez 1º. Instancia Lic. Arnulfo Zárate Palacios
al C. Alcalde de la cárcel municipal, Orizaba, 14 de noviembre de 1934.
363
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Acta de declaración de los hechos por el C.
Inspector de Policía, Orizaba, 11 de diciembre de 1934; Ibíd., del Inspector de Policía Pablo Ayala al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 11 de diciembre de 1934
155
cuando se sacó al sacerdote del domicilio hubo una muchedumbre que peleaba la libertad
del cura, siendo detenidos algunas personas. En la declaración tomada a José Ma. Flores
admitió el por qué fue detenido y afirmó que ha oficiado antes en casas.364
Acto seguido, se interrogó a las personas detenidas, en especial a mujeres que
resultaron ser hijas del Lic. Aguilar, ellas respondieron que al haberse cerrados los
templos optaron por dar su casa como recinto para celebrar las misas, siendo
regularmente los domingos y en ocasiones entre semana, por lo que fueron puestas a
disposición de la policía para rendir castigo por infringir la ley de cultos, la noticia le fue
dada al presidente.365 Para defenderse ante las autoridades por el delito cometido, el cura
Flores nombró a Ernesto Galland como su representante legal, por lo que
inmediatamente el Sr. Galland le informó al presidente la situación que representaba.366
El 31 de diciembre de 1934 otro problema se presentó en el templo de San José
de Gracia cuando la policía descubrió a feligreses celebrando el culto, por lo que fueron
castigados conforme la ley. A pesar de que los templos estaban a cargo de Hacienda,
quien procedía legalmente era el Ayuntamiento y/o el Gobierno Estatal. Sin embargo, los
presentes notaron a la policía y éstos se disiparon por lo que no pudieron detenerlos,
únicamente interrogaron a las pocas que alcanzaron a detener, todas mujeres, siendo su
respuesta que ignoraban quién había abierto la iglesia, pero que al notarlo ingresaron a
practicar sus creencias religiosas no habiendo solicitado permiso alguno para entrar.367
364
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Acta de declaración de los hechos por el C.
Inspector de Policía, Orizaba, 23 de junio de 1935.
365
Ibíd.; AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Del Inspector de Policía Pablo Ayala al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 23 de junio de 1935.
366
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Carta poder de Ernesto Galland en representación
de José María Flores, Orizaba, 25 de junio de 1935; Ibíd., de Ernesto Galland al C. Presidente Municipal, Orizaba, 25
de junio de 1935.
367
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 4. Del Jefe de la Oficina José Rodríguez Magaña al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 2 de enero de 1935; Ibíd., del Presidente Municipal Eduardo Huerta al C. Jefe de la
Oficina, Orizaba, 2 de enero de 1935.
156
3.3 La Iglesia de la Santísima Trinidad, un caso presbiteriano
La ley reglamentaria de cultos abarcaba a todas las religiones existentes, tanto en la
federal como en la estatal, desde el inicio se procuraba que los practicantes y
representantes de las diferentes religiones acataran la ley. En Orizaba, los protestantes
no quedaron fuera y debieron de obedecer, siendo que estos accedieron desde el
principio a acatar las disposiciones estatales, pero en ocasiones hubo quejas hacia ellos.
Cuando la Ley 197 entró en vigor, en 1932 hubo quejas en Orizaba de que dicha
ley no era cumplida por los protestantes, los quejosos argumentaron que había dos
templos y los ministros eran de nacionalidad inglesa, por lo que piden a las autoridades
que se encarguen del cumplimiento de la Constitución y pongan orden a este problema,
debido a que el principal reclamo era que oficiaban tres ministros protestantes y no uno,
como lo marcaba la ley tomando en cuenta a la población.368
En 1935, los miembros de la Iglesia de la Santísima Trinidad comunicaron al
presidente municipal de Orizaba haberse organizado y crearon la Junta Vecinal del
templo, así como la elaboración del inventario; para aclarar la situación del inmueble
nombraron al Sr. Miguel Zavaleta como encargado ya que el ministro Apolo Vázquez es
de la ciudad de Córdoba, de todas maneras solicitaban a las autoridades que fuera él
quien fungiera sus funciones como sacerdote presbiteriano en calidad provisional y por
ende que el templo siguiera abierto al culto.369
Apolo Vázquez pidió al Ayuntamiento un documento que le constara que era él
quien se hacía cargo del templo para trámites que se requirieran, el gobierno municipal
respondió que desde 1930 no comprobó que fuera mexicano por nacimiento siendo que
la situación cambiaba para Vázquez.370 Posteriormente, se notificó a las autoridades que
el Sr. Rafael Alvear era el pastor de la Santísima Trinidad, por lo que para tomar al templo
368
AMO-Hemeroteca. Semanario Nacionalista de Información Juventud, Orizaba, 6 de marzo de 1932, No. 24, pp. 1,
4.
369
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 5. Miembros de la Junta Vecinal de la Santísima
Trinidad al C. Presidente Municipal, Orizaba, 26 de abril de 1935; Ibíd., de G. S. B. y Vicente Zárate al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 14 de mayo de 1935; Ibíd., miembros de la iglesia al C. Presidente Municipal, Orizaba, 16 de mayo
de 1935; Ibíd., del C. Presidente Municipal a los miembros de la iglesia, Orizaba, 17 de mayo de 1935.
370
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 5. De A. Vázquez al C. Presidente Municipal, Orizaba,
14 de mayo de 1935; Ibíd., del Presidente Municipal Jesús Ponce al Sr. Apolo Vázquez, Orizaba, 16 de mayo de 1935.
157
se pidió que se comprobara que fuera mexicano por nacimiento, además el pastor Alvear
mandó una carta a las autoridades presentándose como el encargado del templo, siendo
la respuesta que debía comprobar ser mexicano.371
Sin embargo, había problemas dentro de la Iglesia protestante en Orizaba. El
pastor Vázquez se dirigió al alcalde mediante una carta en donde explicaba que había
enemigos dentro de su religión y querían desestimarlo del cargo, además de que dichas
personas eran ajenas a ese credo, ante esto, el alcalde recomendó a Vázquez que debía
de presentar una denuncia ante el Ministerio Público para consignar a los responsables;
asimismo el presidente municipal pidió ayuda al gobernador para solucionar este
problema en cuanto a quién sería el encargado del templo.372
Otro problema que enfrentaron los miembros de la Santísima Trinidad fue su
“independencia” del Presbiterio Nacional que se celebró el 28 de abril de 1935, donde el
pastor expone lo siguiente el acta:
“No es ajena a ninguno de los presentes, la actitud que el Presbiterio Nacional de la ciudad de México
ha asumido en relación con la Iglesia de la Santísima Trinidad de Orizaba, actitud que ha afectado a los
intereses materiales y espirituales de la Iglesia ya por largos tres años, en los cuales se ha luchado con
el interés de solucionar todos los conflictos. Todo al parecer se había solucionado si no fuera porque el
Presbiterio nombró una comisión que con carácter de justicia viniera a inspeccionarlos trabajos y la vida
calumniada del pastor de la Iglesia, cosa
en contraposición no solamente de los principios del
gobierno Presbiteriano sino contra todo principio de razón; sin embargo el informe de dicha Comisión
puso de manifiesto que eran infundados los prejuicios de algunos elementos inquietos e intrigantes de
la Iglesia.
En su reunión anual, en los últimos días de enero del presente año, el Presbiterio acordó el retiro del
Pbro. Apolo Vázquez D. del Pastorado de la Iglesia la Santísima Trinidad para dejar en libertad a la
Iglesia de elegir al Pastor que más le convenga. Acuerdo aceptado por el que habla contra toda la
voluntad de las mayorías de la Iglesia y solo por el principio de disciplinas. Efectuáronse dos elecciones;
en la primera de ellas se hacía notar engañosamente que la Iglesia estaba dividida habiéndose igual
número a favor y en contra del Pbro. A. Vázquez y acordó convocar la Iglesia a nuevas elecciones
nombrando para dirigir la Reunión Congregacional al Pbro. Eleazar Z. Pérez, Presidente del Presbiterio
efectuándose dicha elección el día 20 de marzo próximo pasado con un resultado de 22 votos contra 7
elección que favorecía al Pbro. A. Vázquez.
Inmediatamente el grupo de las mayorías hizo las gestiones necesarias para que de acuerdo con la
Constitución de la Iglesia Presbiteriana, se instalara el Pastor elegido, cosa a la que se opuso la Mesa
Directiva del Presbiterio, a pesar de que las elecciones habían sido dirigidas por el Presidente del
371
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 5. Miembros de la Junta Vecinal de la Santísima
Trinidad al C. Presidente Municipal, Orizaba, 15 de mayo de 1935; Ibíd., del Presidente Municipal Jesús Ponce a los
miembros de la Junta, Orizaba, 16 de mayo de 1935; Ibíd., de Rafael Alvear al C. Presidente Municipal, Orizaba, 16
de mayo de 1935, Ibíd., del Presidente Municipal a Rafael Alvear, Orizaba, 16 de mayo de 1935.
372
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 5. De A. Vázquez al C. Presidente Municipal, Orizaba,
16 de mayo de 1935; Ibíd., del Presidente Municipal Jesús Ponce al Sr. Apolo Vázquez, Orizaba, 17 de mayo de 1935;
Ibíd., telegrama, del Presidente Municipal Jesús Ponce al C. Gobernador del Estado Gonzalo Vázquez Vela, Orizaba
17 de mayo de 1935.
158
Presbiterio, dejando por lo tanto abandonada a la Iglesia por cerca de dos meses, hasta que se convocó
a Reunión Extraordinaria para el día 23 de marzo en el templo la Santísima Trinidad sin haber pedido
el templo a la Iglesia, exigencia de elemental cortesía pero que es el primer indicio de que el Presbiterio
estaba dispuesto a pisar la soberanía de la Iglesia.
Ya en plena reunión, fue presentada credencial que acreditaba una comisión para presentarse delante
del Presbiterio para arreglar el asunto del pastorado de la Iglesia, en la forma más adecuada
aceptándose a esa Comisión, pero desconociéndola más tarde a tal grado que para tratar dicho asunto
pidieron a todos salieran, para así dañar en libertad al Presbiterio para obrar conforme a sus deseos y
entonces, con arbitrariedad inusitada, anulan las elecciones pisoteando así no solamente la soberanía
de la Iglesia, sino los principios de la Iglesia Presbiteriana y la dignidad del actual Presidente del
Presbiterio, que fue quien convocó y llevó a cabo las elecciones.
Inmediatamente el Presbiterio acordó que el que habla actuará como Pastor de la Iglesia por el resto
del año presbiteral, es decir, hasta fines de enero de 1936 y que entonces, se convocaría a nuevas
elecciones, cosa que no aceptó ni el suscrito, ni la Iglesia que pedía la instalación y en los momentos
de mayor agitación, el suscrito rogaba al Presbiterio que para la tranquilidad de la Iglesia, transara de
alguna manera con la Iglesia, obcecándose a tal grado que orilló a la Iglesia para que en ese mismo
instante se declarara independiente; pocos momentos después, el Presbiterio se había aliado con
elementos que por inmorales había sido desechados por la Iglesia, elementos que apoyados por el
Presbiterio, han fraguado planes atentatorios contra la vida del Pastor de la Iglesia y dando documentos
de notoria falsedad para desvirtuar y escandalizar a la Iglesia y al pastor, quienes defenderán con
decisión absoluta los intereses de la Iglesia de Cristo en este lugar.
En vista de lo expuesto, la Iglesia, después de quieta deliberación y habiendo sido testigo presencial de
los hechos manifestados, llega a los siguientes acuerdos:
1. La Iglesia da un voto de simpatía y de absoluta adhesión al Pbro. Apolo Vázquez D. manifestando
todos estar dispuestos a luchar hasta donde sea posible para sostenerlo como pastor único de la
Iglesia de la Santísima Trinidad.
2. Que la Iglesia Evangélica Nacional Presbiteriana la Santísima Trinidad se declara
INDEPENDIENTE del Presbiterio Nacional de la ciudad de México.
3. Que acepta como confesión de fe la adoptada por la Asamblea de Wensminster de origen calvinista
encerrada en la Biblia.
4. Que adopta la forma de gobierno de la Iglesia Presbiteriana, asentada en la Biblia, a excepción de
todos aquellos puntos que de manera directa o indirecta la liguen al Presbiterio Nacional de la ciudad
de México.
5. Que se comunique y se envíe copia al Presbiterio de la ciudad de México para su conocimiento y
otro al Ayuntamiento de la localidad y otra a la Oficina Federal de Hacienda.
En el nombre de Dios y con el deseo del adelanto de su Obra en este lugar, y siendo las 22 horas 15
minutos damos fin a la presente reunión Congregacional, estampando nuestras firmas en señal de que
aprobamos lo hecho y seremos fieles a esta Iglesia y a Cristo nuestro Bendito Salvador.” 373
En los meses siguientes varios hombres fueron nombrados como encargados del templo
de la Santísima Trinidad, se notaba que dentro de esa religión en Orizaba había algunos
problemas que impedían ejercer sus funciones, a pesar de ello trataron de respetar la ley
al dirigirse a las autoridades cada vez que un pastor era nombrado, del mismo modo que
373
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 5. Acta levantada con motivo de los acuerdos
tomados por la Iglesia Evangélica Nacional Presbiteriana “La Santísima Trinidad” al independizarse del Presbiterio
Nacional de la ciudad de México.
159
al designar a un encargado para los bienes del templo. Para esos trámites también se
contó con la participación de la Oficina Federal de Hacienda.374
Se tiene la idea de cómo fue la relación de los habitantes de Orizaba con la Ley
197, algunos apoyaban la causa del gobierno veracruzano y otros la rechazaron desde
el principio; el uso de los amparos o misas clandestinas era una manera de resistencia,
y no sólo los católicos se vieron afectados, también los protestantes, siguieron los
lineamientos estatales. La ley anticlerical fue radical en el estado de Veracruz, en Orizaba
se empezó a ejercer de manera total a partir de 1932 y se extendió otros años más, hasta
que en 1937 un acontecimiento sacude a Orizaba y los católicos exigieron la apertura de
los templos.
374
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia C.-726, Exp. 5. Varios expedientes relativo a la situación del
Templo de la Santísima Trinidad.
160
Capítulo IV. El fin de la Ley 197 en Veracruz: 1937, rumbo a la
reapertura de los templos en Orizaba
Habían transcurrido 6 años desde que Adalberto Tejeda promulgó la ley reglamentaria
que limitaba a los sacerdotes de cualquier religión a uno por cada 100,000 habs. Del
mismo modo que han otros gobernadores han estado al frente del estado y seguían
ejerciendo esa ley; sin embargo para 1937 el panorama político en Veracruz como en
México ya era diferente y el camino de la Iglesia tomaría un nuevo rumbo en el país.
Las discrepancias políticas habían sacudido al país, Lázaro Cárdenas expulsó a
Plutarco Elías Calles y una nueva vida política empezaba a gobernar, de la misma
manera en Veracruz, cuando el candidato electo Manlio Fabio Altamirano es asesinado
en la ciudad de México, por lo se opta elegir a un sucesor, siendo nombrado Miguel
Alemán Valdés como el nuevo Gobernador Constitucional del Estado de Veracruz.
El presente capítulo explicará el proceso en el que la ley Tejeda es abolida por el
gobierno de Veracruz, de cómo los católicos enérgicos por un suceso que los indignó
tomaron las riendas para reclamar al gobierno la atrocidad de un crimen, qué al tratar de
sofocar una misa en una casa, muere una mujer dando como origen que la política
antirreligiosa en el estado se tambaleara. Las presiones llegaron al Gobierno Federal y
el gobernador tuvo que estar presente en Orizaba para dar “fin” al problema con la
ciudadanía. Irónicamente fue un acto del gobierno lo que originó que los templos
empezaran a abrirse, no sólo en Orizaba sino en toda la entidad veracruzana.
4.1 Un nuevo panorama político
Lázaro Cárdenas fue el último en este periodo conocido y en un principio se pensaba que
seguiría igual la figura de calles en la vida del país; mientras tanto, en Veracruz la oleada
anticlerical había limitado los cultos y los templos fueron cerrados, pero no sólo en esta
entidad, sino en otras más del país.
Cárdenas siguió la política anticlerical cuando fue gobernador de Michoacán; al
llegar a la presidencia algunos gobernadores reglamentaron el número de sacerdotes:
161
Tabla 1. Número de sacerdotes reconocidos por la autoridad civil
Febrero de
Diciembre de
Marzo de
1935
1935
1936
132 900
95 516
89 860
528 654
440 000
436 425
62 301
1 229 576
493 530
987 970
641 690
667 000
1 255 213
990 112
1 048 341
132 723
167 724
417 479
1 082 191
1 150 425
233 655
2
0
0
0
0
5
0
25
2
39
0
5
50
34
33
40
5
28
?
23
2
2
0
0
0
0
5
0
25
2
?
0
5
29
34
?
8
5
¿?
1
23
2
2
0
0
0
1
5
0
25
2
39
0
0
29
34
33
8
5
28
0
23
3
579 831
40
56
56
395 027
316 271
224 168
344 589
0
0
0
0
0
0
0
0
205 578
0
1 376 476
838 964
448 344
17 012 573
0
0
0
333
0
0
0
0
(comprende
Puebla)
0
0
0
197
Estado
Habitantes
Aguascalientes
Baja California
Campeche
Chiapas
Chihuahua
Coahuila
Colima
Distrito Federal
Durango
Guanajuato
Guerrero
Hidalgo
Jalisco
México
Michoacán
Morelos
Nayarit
Nuevo León
Oaxaca
Puebla
Querétaro
San Luis
Potosí
Sinaloa
Sonora
Tabasco
Tamaulipas
Tlaxcala
Veracruz
Yucatán
Zacatecas
Total
0
0
0
0
293
Fuente: MARTÍNEZ Assad, Carlos. “El radicalismo anticlerical" en El laboratorio de la Revolución. El Tabasco garridista,
SIGLO XXI, México, 2004, p. 51.
Como se puede apreciar, para esa época no había ningún sacerdote “oficial” para que
practicara su ministerio ante la sociedad, a pesar de que en el estado de Veracruz se
162
permitió un total de 13 sacerdotes siempre y cuando se registraran ante un padrón. Aun
así, los sacerdotes siguieron administrando su culto de manera clandestina, ocasionando
que fueran perseguidos por el estado.
Entre los primeros meses de gobierno, Cárdenas auspició algunas actividades
anticlericales, tomando en cuenta que una de las tendencias ideológicas del gobierno es
la de “combatir por todos los medios legítimos el fanatismo y los prejuicios religiosos”,
también evitó que se hicieran publicaciones, impresos de índole religioso. El presidente
anunciaba que la Iglesia debía cumplir las leyes y reglamentos establecidos como medio
de impedir su intromisión en el terreno político, jurídico, económico y social; para
Cárdenas, su deber era el cumplimiento de la ley “sin que existan persecuciones en
contra de las creencias o sentimientos religiosos”. Sin embargo, responsabilizó a la
Iglesia en México de haber retrasado la evolución social y económica de la nación.375
Durante dos años Calles estuvo presente en la administración cardenista, el nuevo
presidente había heredado las políticas antirreligiosa y educativa de Calles, por lo que
fue resentido por la Iglesia militante y por la mayoría de los católicos. Los padres de
familia reaccionaron contra el art. 3º Constitucional porque se sentían amenazada la
libertad de cátedra y la “libre expresión” del pensamiento y la moral religiosa. 376 Con estos
puntos, la población pensaba que Calles estaba vinculado, sin embargo, Cárdenas
ejercería una política propia en los siguientes años de su periodo.
Para 1936 la situación en México cambió; se comenzó a exigir la eliminación de
los callistas del gobierno, pidiendo que se expulsara a Calles al extranjero a la par de que
Saturnino Cedillo junto con Portes Gil pedían la libertad de cátedra y la libertad religiosa.
El problema entre Calles y Cárdenas provocó cambios en la política mexicana así como
de gobernadores en las entidades, entre los que se encontraba Veracruz, pero el
gobernador electo, Manlio Fabio Altamirano, fue asesinado.377 Finalmente, Calles es
expulsado en abril de 1936 y Cárdenas nombra a un nuevo gabinete.
375
MARTÍNEZ. “El radicalismo anticlerical”, Op. Cit., 2004, pp. 53, 55.
HERNÁNDEZ Chávez, Alicia. “La sucesión presidencial y los políticos del régimen” en Historia de la Revolución
Mexicana 1934-1940. La mecánica cardenista, Tomo 16, El Colegio de México, México, 1981, pp. 47-48.
377
Ibíd., pp. 48, 60.
376
163
A partir de 1936, en los discursos del presidente Cárdenas se notó una disminución
del anticlericalismo y una cierta tolerancia, probablemente el presidente haya decidido
terminar con la campaña antirreligiosa, pero esto no pudo llevarse a cabo debido a que
los poderes locales (estatales) no captaron el mensaje o desobedecieron la intención;
para mantener la paz con la Iglesia, Cárdenas exigía el cumplimiento a los artículos 3º,
5º, 24, 27 y 130 de la Constitución, mismos que el clero desconocía. A diferencia de los
arreglos del 29, los cuales buscaban terminar con la guerra cristera, de 1936 a 1938 se
intentó establecer pautas de comportamiento para las relaciones Iglesia-Estado en los
años futuros.378
Durante la administración cardenista, Veracruz sufrió una pérdida al ser asesinado
su gobernador electo, además, la crisis religiosa en el estado estaba por cambiar cuando
en 1937 muere una mujer y la población se moviliza para abrir las iglesias; Meyer apunta
que Cárdenas deseaba terminar con la cuestión religiosa que azotaba al país, debido a
que después de la crisis del petróleo (expropiación en 1938), la cuestión nacional volvía
a primer plano, siendo que Roma reclamaba la reconciliación desde hacía años.379
Continuando con Veracruz, la política seguía su curso desde que Adalberto Tejeda
llegó en 1928. La situación cambia cuando se llevan a cabo las elecciones en el estado;
estas son efectuadas en el mes de julio de 1936, siendo los candidatos Eduardo
Hernández Cházaro, Joaquín Muñoz, Adolfo Ruiz Cortines, Francisco Ochoa Zamudio,
Manlio Fabio Altamirano y Juan Soto Lara. Hubo también elecciones para senadores
siendo los candidatos Luis Vázquez Vela, Miguel Alemán Valdés, Othón León Lobato,
Manuel Olmos Ruíz y Adalberto Tejeda.380
El dúo Altamirano-Valdés contaba con apoyo del pueblo por lo que se les atribuía
el triunfo, pero el 25 de junio de 1936 Manlio Fabio Altamirano es asesinado en la ciudad
de México –se hace la observación de que anteriormente se le denominó “gobernador
electo”, pero por la simpatía que recibía ya lo declaraban ganador de las elecciones–.
378
BLANCARTE. “Entre la guerra…”, Op. Cit., 1992, pp. 40-41, 58.
MEYER. “La Segunda”, Op. Cit., 1999, pp. 364-366.
380
HERNÁNDEZ García, Erasmo. “Alianzas políticas y el ascenso de un nuevo grupo al gobierno estatal: Alemán Valdés
y el proyecto conciliador, 1936-1940” en Redes políticas y sociales: Consolidación y permanencia del régimen
posrevolucionario en Veracruz, 1920-1970, Tesis de Doctorado, Universidad Veracruzana, Instituto de Investigaciones
Históricos-Sociales, Xalapa, 2010, p. 122.
379
164
Ante esto, el PNR estatal, algunas organizaciones sociales y miembros de la campaña
de Altamirano, acusaron como autores intelectuales a Manuel Parra, Joaquín Muñoz,
Guillermo Rebolledo y Vázquez Vela, días antes Altamirano había declarado que sus
enemigos eran Rebolledo, Parra y el Gral. Quiroga.381
El atentado fue la respuesta de los grupos de derecha a la posición progresista
representada por Altamirano, donde daba respaldo a la Liga Roja que combatía a los
guardias blancas auspiciados por los latifundistas, si bien no seguía a Tejeda, si
Altamirano llegaba al poder sería el retorno de los agraristas, el radicalismo y el aumento
de la persecución clerical.382 Las elecciones para gobernador se suspendieron, mientras
que Alemán Valdés llegó a ser senador; el PNR realizó nuevos plebiscitos internos para
determinar quién sería el nuevo candidato. Durante la definición de nombrar al sucesor,
los altamiranistas nombran a Manuel Zorrilla Rivera y los aguilaristas (partidarios de
Cándido Aguilar) a Miguel Alemán, éste recibe el respaldo de Cárdenas porque coordinó
su campaña presidencial en Veracruz.383
La llegada de Alemán al gobierno de Veracruz fue muy rápida, siendo esto su
primera prueba como político ya que no ejerció como Senador, por lo que el reto era
grande dado las circunstancias en las que atravesaba el estado. Sobre la situación
religiosa, el 16 de enero de 1937 un contingente de católicos pidió reanudar los cultos,
tras ser atendidos por el gobernador se dijo que el asunto sería tratado para ser resuelto.
El presidente trató de poner fin a este problema al haber declarado: “Me cansé de cerrar
iglesias y de encontrar templos llenos (…) el consuelo está en abrir escuelas”; la política
sería a través de la tolerancia, para evitar que se avivaran los rescoldos del fanatismo.384
El gobernador Alemán tomó las riendas del asunto religioso, pero la respuesta no
fue inmediata, si bien los católicos esperaban que finalmente los templos volverían a
abrirse, el gobierno veracruzano no cedía fácilmente a pesar de que Cárdenas ya tenía
una política conciliatoria hacia la Iglesia. La presión por parte de los católicos hacia el
381
Ibíd., pp. 124-125.
BÁEZ. “Los aristas…” Op. Cit., 2006, p. 314.
383
HERNÁNDEZ García. 2010, pp. 125-126.
384
MIJARES Sánchez, Mario Raúl. “El gobierno de Miguel Alemán Valdés en Veracruz (1936-1939)” en México: Génesis
de su descomposición política. Miguel Alemán Valdés (1936-1952), Palibro, Estados Unidos de América, 2012, pp.
174, 179-180.
382
165
gobernador empezó a inicios de febrero de 1937, por lo que debieron de actuar
rápidamente antes de que el problema se saliera de control, pero esto fue el inicio para
que dichos templos volvieran al uso de los católicos a pesar de que el procedimiento fue
lento.
4.2 La situación religiosa en 1937: el último año de la Ley 197
La situación en Orizaba parecía seguir normal respecto a la ley anticlerical, Alemán
apenas había asumido la gubernatura y los católicos esperaban que con él la situación
con la Iglesia se resolviera, pero tomaría unos días más cuando una comitiva lo propuso,
sin embargo, en la ciudad se seguían reuniendo las personas en casas particulares para
seguir ejerciendo su ministerio o por lo menos hacer reuniones religiosas.
En enero de 1937 se detuvieron a unas personas en la casa de María Cristina
Izquierdo ubicada en la Norte 12 No. 14 y se confiscaron unos objetos religiosos que de
acuerdo a las declaraciones pertenecían a varias iglesias de la ciudad. Las personas que
fueron dispuestas a la cárcel municipal fueron: José González, Ignacio Jesús Noriega,
Enrique Hernández, Julián Flores Hernández, Florentino Flores, Guadalupe Nieves,
Anastasia Reyes, Lorenza Texcahua, Soledad Martínez y la propietaria.385
Siguiendo con el trámite, se presentaron ante las autoridades los objetos que se
decomisaron en la casa de la Srita. Izquierdo, los cuales fueron: dos libros en latín “El
Devoto Purgatorio” y “Misal”, tres casullas, dos albas, tres estolas, dos manípulos, un
cíngulo blanco, un cíngulo dorado, un amito, un manículo, tres bolsas de corporales, tres
talías y dos porta relicarios.386 La casa en donde fueron aprehendidos era la misma que
en 1935 se presentaron otros hechos similares, en esta ocasión el presunto sacerdote
era Ignacio de Jesús Noriega por lo que se pidió revisar su expediente, sin embargo no
385
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Presidente del Concejo Municipal al C.
Agente del Ministerio Público Federal, Orizaba, 12 de enero de 1937.
386
Ibíd. Acta de los objetos encontrados en la casa de María Cristina Izquierdo, por el Inspector Gral. de Policía
Maroclino Absalón Pérez, Orizaba, 13 de enero de 1937; Ibíd., del Presidente del H. Concejo Municipal al Jefe de la
Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 20 de enero de 1937.
166
existía tal sacerdote pero informaron que en 1935 uno de los detenidos era José de Jesús
Noriega.387
Es hasta el mes de julio de 1937 cuando se dio a conocer el veredicto por un
periódico local, donde decía que se les notificaba el auto de absoluta libertad por falta de
méritos dictados por el C. Juez Primero de Distrito de Veracruz a favor del Sr. Cura
Ignacio de Jesús Noriega, Enrique Hernández, Julián Flores, María Cristina Izquierdo,
Guadalupe Nieves, Anastasia Reyes, Lorenzo Texcahua y Soledad Martínez. La libertad
fue otorgada por una fianza de 100 pesos cada uno cosa que rechazaron por lo que pasó
a revisión del Tribunal Quinto de Puebla y éste consideró que no había delito de violación
a las leyes de cultos.388 Se debe tomar en cuenta que los sacerdotes tomaban otras
identidades para pasar desapercibidos ante las autoridades, los únicos que sabían de su
“identidad” eran los católicos que los ayudaban a moverse por la ciudad, ya sea para
oficiar ahí mismo o trasladarse entre los poblados. El problema se presentaba cuando
eran descubiertos o acusados de practicar su ministerio.
La Oficina Federal de Hacienda jugó un papel importante en este asunto, se
encargaba de vigilar que los templos y todo lo perteneciente a ellos estuvieran bajo el
resguardo de la Nación, por lo que al momento de confiscar los objetos a las personas
éstos eran trasladados ya sea al departamento de policía o a las iglesias para guardarlos.
Aunque también pedía información de las casas donde se pensaba se ejercían los cultos
o que en algún momento hubo alguna capilla, para ello solicitaba a tres personas de
entera confianza para ser interrogados.389
Orizaba se preparaba para celebrar el carnaval, por lo que el comité solicitó
permiso para repicar las campanas del templo de San José de Gracia y de la parroquia
de San Miguel el día 3 de febrero a las 23:00 horas y el 7 del mismo mes a las 10:00
horas por motivo de la elección de “Señorita Carnaval”, dado a que las llaves estaban a
manos de personas encargadas, la petición fue enviada a Hacienda y ésta autorizó el
387
Ibíd. De Alcalde de la Cárcel Municipal al C. Agente del Ministerio Público Federal, Orizaba, 13 de enero de 1937.
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 9 de julio de 1937, No. 2243, pp. 1, 4.
389
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Sobre la casa de la calle Sur 11 No. 27, del Jefe
de la Oficina Blas Camacho al C. Presidente Municipal, Orizaba, 16 de enero de 1937; Ibíd., sobre la casa de la calle
Norte 12 No. 17, del Jefe de la Oficina Blas Camacho al C. Presidente Municipal, Orizaba, 19 de enero de 1937.
388
167
repique de las campanas.390 Este mes marcaría el destino de los católicos en Veracruz,
en los siguientes días empezarían a hacer grandes manifestaciones pidiendo justicia y la
apertura de los templos.
El día 7 de febrero de 1937, en la casa de la calle Sur 5 No. 41 el padre José María
Flores oficiaba una misa ante un gran número de asistentes, debido a esto, policías
municipales irrumpieron en el lugar de los actos para aprehender a los presentes. Sin
embargo, entre el caos generado la gente se dispersó y los policías abrieron fuego
hiriendo de muerte a una joven llamada Leonor Sánchez López, hija del obrero
Encarnación Sánchez y Catalina López, ambos de Orizaba, a pesar de esto los católicos
fueron trasladados a la inspección de policía, el cura Flores estuvo tres preso tres días
mientras que los demás fueron liberados al poco tiempo de ingresar. 391
Leonor fue trasladada al Hospital Civil y no se le permitió que la auxiliara un
sacerdote ni que la vieran sus familiares, murió a causa de haber recibido un disparo por
la espalada, en el hospital se redactó el certificado médico de defunción donde
estipularon que la causa de su deceso fue por “heridas de proyectil de arma de fuego”, la
joven contaba con 20 años de edad, fue declarada muerta a las 10:15 a.m.392 Los
católicos quedaron consternados ante estos actos, por lo que ese mismo día (7 de
febrero) empezaron a manifestarse exigiendo justicia:
CIUDADANOS ORIZABEÑOS:
Estáis enterados del sangriento suceso acaecido hace unas horas en la ciudad. Agentes policíacos,
allanando una morada contra todo derecho y contra toda ley, ultrajando los más sagrados derechos del
hombre, con lujo de fuerza y a larde de poder, penetran en un recinto donde un grupo de creyentes,
cumpliendo con su deber de católicos y sumisos y obedientes a la infame y bárbara ley que en materia
de cultos nos rige, reza y eleva sus oraciones a Dios… Ancianos, mujeres, jóvenes y niños, todos
amigos entre sí, convictos de su inocencia y movidos por su amor a Cristo se posternan (sic) ante un
sagrado Crucifijo pidiendo alivio a sus dolores, consuelo y protección, y cuando en esos momentos de
piedad y recogimiento enjugan sus lágrimas y confortan sus corazones, un grupo de dichos agentes
390
Ibíd. Del Presidente del Comité “Pro-Carnaval” Lic. Jorge E. Gómez Casauranc al C. Presidente Municipal, Orizaba,
2 de febrero de 1937; Ibíd., del Presidente del H. Concejo Municipal al C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda,
Orizaba, 2 de febrero de 1937; Ibíd., del Jefe de la Oficina Blas Camacho al C. Presidente Municipal, Orizaba, 3 de
febrero de 1937; Ibíd., del Presidente del H. Concejo Municipal al C. Lic. Jorge E. Gómez Casauranc, Orizaba, 3 de
febrero de 1937.
391
AGUILAR Muñoz, Carlos. “Las manifestaciones populares para la apertura de los templos católicos en 1937 en
Orizaba” en GARCÍA Díaz Bernardo. Documentos, Testimonios y Crónicas de la Revolución Mexicana en Veracruz
(Antología), Secretaría de Educación de Veracruz, México, 2010, pp. 293-294; en el periódico Los Sucesos y otras
fuentes marcan que el número de la casa era 31.
392
Ibíd. p. 294; AMO. Ramo Registro Civil, Defunciones, Certificados. C.-940, Exp. 18. Certificado de defunción de
Leonor Sánchez.
168
ataca y ultraja sus derechos y sembrando el pánico y el espanto entre aquellos seres que estaban
cometiendo el enorme delito de alabar a Dios, respetando las leyes que contra todo derecho les impide
orar en sus templos, entran disparando sus armas y ofendiendo e injuriando a una sociedad que cree
en Dios, y no conformes, cuando una indefensa criatura que aún no llegaba a los quince años (Leonor
Sánchez) sale huyendo de la casa, azorada sin duda porque su alma inocente no pudo comprender
tamaña maldad, LOS ESBIRROS DISPARAN CONTRA ELLA Y ATRAVESANDOLE EL CUERPO CON
UNA BALA COBARDE, LA DEJAN MUERTA EN MITAD DE LA CALLE, hiriendo además a un niño y
un señor que también están al borde del sepulcro.
Católicos que en realidad lo seáis, ciudadanos que alardeáis de tan digno nombre, dejaréis de serlo, si
en estos tremendos instantes de luto y de dolor para la sociedad orizabeña, prestáis vuestro contingente
a las fiestas con que se celebra el carnaval en esta ciudad.
Os exhortamos a cumplir con vuestro deber; a los católicos, porque su religión lo manda, su religión de
amor y de piedad y a los ciudadanos, porque su condición de tales se los impone, porque no se podría
ser buen ciudadano si un acto de barbarie y de ignominia como el acaecido hace unos instantes en
nuestra ciudad, no fuera suficiente para llenar de luto a cualquier corazón y de lágrimas y angustia
cualquier hogar honrado.
Absteneos de concurrir a las fiestas de Carnaval en señal de duelo. Así lo impone el honor, así lo impone
la justicia y así aclama a gritos el pecho honrado, así lo impone la justicia y así clama a gritos el pecho
honrado y el ser que haya sentido arder en sus venas el amor, el honor y la vergüenza. 393
Ante esta petición, la Srita. Blanca Hartz, Reina del Carnaval 1937, accedió y pidió al
presidente municipal Horacio Xochihua la libertad del padre José María Flores, la
respuesta fue negativa, debido a que estaba a disposición de la Policía Judicial, el Comité
del Carnaval pidió la transferencia de las fiestas como muestra de sentimiento y respeto.
Además, el cura José Ma. Flores declaró haber sido nombrado párroco de la ciudad por
el obispo Rafael Guízar y se declaraba que Flores era el único responsable. 394 Sin
embargo, el Ayuntamiento de Orizaba respondió a las acusaciones:
AL PUEBLO ORIZABEÑO
ACLARACIÓN IMPORTANTE
En virtud de que se han propalado noticias sobre que este Concejo Municipal fue el culpable de los
hechos sangrientos ocurridos el día de ayer a las 7 de la mañana, siendo el mismo completamente
ajeno a ellos, se permite poner en conocimiento de los habitantes de esta ciudad el mensaje condensado
que ha enviado al C. Gobernador Constitucional del Estado y Presidente de la República, el cual por si
solo habla:
Orizaba, Ver., a 8 de febrero de 1937.
AL LIC. MIGUEL ALEMAN.
Gobernador Constitucional del Estado de Veracruz.
JALAPA, VER.
Para superior conocimiento usted permitome (sic) informarle que ayer seis horas ciudadanos Efraín
Moreno Lara y Antonio Morell, Jefe y Secretario Policía Judicial detuvieron dentro de casa particular
setenta y tres personas en su gran mayoría mujeres, varias menores de edad clase media y pueblo, así
como a sacerdote católico José María Flores, manifestando dichos empleados judiciales que detención
hacíase por violación Ley de Cultos. Citados Jefes Judiciales informaron a esta Presidencia que
ordenaron directamente a Policías Municipales sesenta y cinco y cuarenta y ocho, acompañáranlos para
efectuar aprehensiones ampliando después dicha orden directamente otros policías, conduciendo a
393
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Comunicado a los ciudadanos orizabeños,
Orizaba, 7 de febrero de 1937.
394
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 9 de febrero de 1937, No. 2119, pp. 1, 3-4.
169
Inspección Policía todos los detenidos y ordenando ingreso cárcel sacerdote Flores, según boleta
firmada Jefe Judicial, poniendo disposición esta Presidencia resto de personas detenidas que fueron
libertadas inmediatamente sin multa alguna, por suscrito por no existir para ellos responsabilidad alguna.
Al mismo tiempo Policía Judicial informó al suscrito que había sido lesionada por arma de fuego sin
saber por quién y a una cuadra de distancia casa sacerdote señorita Leonor Sánchez, quien falleció
horas después. Madre, hermana y cuñado de la señorita muerta, presentáronse hoy esta Presidencia
declarando ante el suscrito Vocal 1º Jorge Guapillo, que estando la madre en el lugar de los hechos
presenció cómo Agustín Saldaña
, Agente de la Policía Judicial hizo fuego sobre su hija y que
secretario Morell al salir dicha casa llevando sacerdote ordenó a Policías Municipales hicieran fuego
sobre quienes huyeran. Estos hechos están siendo utilizados por elementos conoció usted
personalmente como interesados en apoderarse administración municipal por medio de bajas intrigas y
calumnias, alterándolos y tratando sorprender funcionarios del Estado y Federales, para impresionarlos
con hechos en los cuales como puede comprobarse con los mismos afectados y documentos esta
Autoridad, que no ha tenido intervención alguna en lo absoluto (punto) Con todo respeto suplico a usted
quiera nombrar personas su absoluta confianza investiguen hechos (punto) Usted sabe soy incapaz
sancionar cualquier violación Leyes nos rigen pero tampoco estimo justo enemigos gratuitos esta
Administración háganme responsable de un hecho sangriento utilizándolo como medio para satisfacer
ruines ambiciones (punto) Salúdolo respetuosamente (punto) Presidente Concejo Municipal (punto)
HORAIO XOCHIHUA.
El C. Víctor F. Ochoa, Agente del Ministerio Público del Distrito, quien se encontraba ausente el día de
ayer, se ha abocado el conocimiento de la investigación hasta descubrir al o los culpables de estos
hechos, los cuales serán castigados con todo rigor de la ley.
Por su parte esta Presidencia declara y a todos los habitantes de Orizaba consta, que han tenido y
tienen la más completas garantías legales de su parte, sin distinción de credos políticos o religiosos.
SUFRAGIO EFECTIVO NO REELECIÓN
ORIZABA, VER., A 8 DE FEBRERO DE 1937
El presidente del Concejo Municipal
El Vocal 1º
HORACUO XOCHIHUA
JORGE GUAPILLO
El Vocal 2º
El Vocal 3º
Alfredo Ramírez
Francisco Franco395
Ese comunicado es un telegrama que se le envió al gobernador, fue utilizado para dar a
conocer a los ciudadanos cómo se encontraba el asunto. El funeral de la Srita. Sánchez
fue en casa de unos familiares, los católicos de Orizaba empezaron a reunirse para una
protesta colectiva siendo invitados por el sacerdote José Mondragón miembro de la
Acción Católica y Vicario de la Parroquia de San Miguel; Carolina Muñoz, Leopoldo
Franco y otros más recorrieron las calles de la ciudad invitando al pueblo para que
acudieran al entierro de Leonor Sánchez llevando una flor en la mano.396 Un testimonio
de la época dice lo siguiente sobre el cortejo fúnebre:
“(…) Eran las tres de la tarde. Allá va el cortejo mudo, camino del cementerio Juan de la Luz Enríquez.
Son centenares de creyentes los que forman. El comercio cierra sus puertas en señal de duelo. La
ciudad enmudece. Todos callan y cual más o menos abandonan todo, hasta sus ocupaciones para
unirse al cortejo… ¡Leonor Sánchez va al cielo y Orizaba a la libertad! (…)”. 397
395
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Comunicado a los ciudadanos orizabeños,
Orizaba, 8 de febrero de 1937.
396
AGUILAR. “Las manifestaciones…”, 2010, pp. 294-295.
397
Ibíd. p. 295.
170
El 9 de febrero se reunió una multitud frente al Palacio Municipal para pedir justicia al
Procurador del Estado, Lic. Adolfo Moreno. Se congregaron desde el Palacio Municipal
(antes los poderes del Ayuntamiento se encontraban en el Palacio de Hierro) hasta el
parque Castillo. Los católicos ya pensaban en la libertad contra la Ley de Cultos, el
Procurador informó que no estaba en sus manos entregar los templos pero que
transmitiría la petición del pueblo a las autoridades competentes.398
No solo los católicos se manifestaron, también lo hicieron los obreros de la ciudad,
debido a que la víctima era hija de uno de ellos, los obreros apoyaron las acciones del
gobierno en un momento, pero las constantes pugnas orillaron a que los sindicatos se
alejaran de los políticos. El mismo día 9 de febrero, debido a los acontecimientos
ocurridos, giraron un volante diciendo:
¡ALERTA!
A nuestros camaradas católicos
CAMARADAS: Ha llegado el momento de DEMOSTRAR CON HECHOS al C. Presidente de la
República y a los malos dirigentes de nuestras agrupaciones, tanto la CTM como la CROM, que el 95
por ciento de los trabajadores y campesinos SOMOS CATÓLICOS y que NO SON NUESTROS
DIRIGENTES los que van a obligarnos A DESTRUIR NUESTRA RELIGIÓN, porque YA ESTAMOS
CANSADOS de sus amenazas y traiciones.
SEPAN los señores dirigentes, líderes políticos y convenencieros de todos los sindicatos de la CROM
y la CTM que nos amenazan con quitarnos el trabajo SOLO POR SER CATÓLICOS, que si en otras
ocasiones lograron sorprender y dividir a las masas obrera y campesina en dos y grandes facciones con
sus criminales engañifas, no importándoles manchar el suelo mexicano con la sangre leal y honrada de
nuestros compañeros; QUE HOY NO SERÁ IGUAL; las masas obreras y campesinas MENOS LOS
PROFESORES, a quienes no perdemos de vista, estamos unidos por el fuerte y fraternal lazo de nuestra
religión, y NO NOS IMPORTA que unos seamos de la CROM y otros de la CTM ¡¡TODOS UNIDOS
LUCHAREMOS POR LA LIBERTAD DE CONCIENCIA!! Los Sindicatos sólo son para luchar por el
mejoramiento colectivo del trabajador y del campesino pero NUNCA PARA DESTRUIR RELIGIONES.
Si nuestros dirigentes anticatólicos obligan a efectuar manifestaciones públicas o mítin (sic)
anticatólicos, NO PROTESTAMOS, IREMOS, pero en todos estos actos nuestros únicos gritos de
entusiasmo y demostrativos de que ya no nos importan las amenazas de nuestros dirigentes, será el de
¡VIVA CRISTO REY! ¡QUEREMOS LIBERTAD DE CULTOS!
CAMARADAS: Hemos acabado con el temor al hambre, ARMA COBARDE que siempre han esgrimido
las dos grandes organizaciones CROM y CTM para obligarnos a tomar determinaciones en su mayoría
erróneas y hoy, ¡NO TEMEMOS A SUS RUINES AMENAZAS!; los campesinos y los obreros DE
TODOS LOS GREMIOS formamos una sola masa LA MASA CATÓLICA, y todos unidos, porque “LA
UNIÓN ES LA FUERZA”, VENCEREMOS ¡NO NOS IMPORTA! Que Morones y Lombardo Toledano
desconozcan a los sindicatos actuales ¡YA FORMAREMOS LOS NUESTROS! ¡NO QUEREMOS
ESCLAVIZADORES! ¡QUEREMOS LIBERTADORES!
ORIZABA, FEBRERO DE 1937
Los Trabajadores Católicos de todas las Agrupaciones
LEALA UD. Y PASELA A OTRA PERSONA399
398
399
Ibíd. p. 295.
APO. S/C. Girado el 9 de febrero de 1937.
171
Aunque no es objeto de estudio, en los años treinta hubo conflictos gremiales y la CROM
va en decadencia, de esta manera surge la CT, además, surgieron conflictos por
contratos colectivos siendo la fábrica de Cocolapam el motivo de las disputas. Además
estaban las luchas por las presidencias municipales en el valle de Orizaba, los sindicatos
tuvieron poder político hasta 1935, cuando pierden las elecciones. 400 A pesar de los
conflictos entre los sindicatos, la ley de cultos siguió vigente; a partir de febrero de 1937
los obreros, en cierta manera, se unieron por los actos cometidos por la policía, en ese
momento las diferencias se hicieron a un lado y se unieron por lo único que tenían en
común: la religión católica. Apoyando a los feligreses de reabrir los templos.
La multitud que se encontraba frente al Palacio Municipal gritaba “¡abramos los
templos!”, por lo que se dirigieron hacia el atrio de la parroquia de San Miguel, treparon
el barandal y llegaron a la puerta con la intención de abrirla a empujones, el sacristán
Mariano López conservaba una llave de la puerta lateral, por lo que la abre y la gente
logra entrar abriendo las demás puertas (3 frontales), rezaban a gritos, con este acto los
manifestantes toman el templo.401 El obispo Rafael Guízar y Valencia fue informado de
lo ocurrido en Orizaba, debido a la comunicación que mantenía con el cura José María
Flores, la postura del obispo fue la de proceder sin caer en la no violencia, señala: “…
de ninguna manera apruebo que los católicos hagan movimientos violentos. Si obran así
me desobedecen…”.402 A pesar de la proclama del obispo de Veracruz, los católicos
orizabeños se enfrentaron a las autoridades locales, únicamente manifestándose y
tomando los templos a la “fuerza”, no se registró violencia que dejara heridos o muertes.
Antonio Morell, ante la acusación en su contra y que sería detenido junto con los
demás involucrados en los actos del mes de febrero de 1937, pidió un amparo de la
Justicia Federal por violación de los artículos 14 y 16 Constitucionales, en contra del
Presidente Municipal, Oficial de la Policía Judicial, Jefe del Sector Militar, Agente del
Ministerio Público del Ramo Penal y Juez Primero de Primera Instancia de Orizaba. Morell
se dirige al Juez de Veracruz diciendo:
400
Para mayor información véase a TRUJILLO Anaya, Lauro Ángel. Los conflictos intersindicales en Orizaba 1935-1940,
Comunidad Morelos, Col. Los Hijos de Ahauilizapan No. 3, Orizaba, 1998, 32 pp.
401
AGUILAR. “Las manifestaciones…”, Op. Cit., 2010, pp. 295-296.
402
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, pp. 226-228.
172
I. Soy desde hace muchos años, Secretario de la Policía Judicial de esta ciudad, son haber recibido
nunca amonestación o reprensión de mis superiores que lo son el Jefe de la Oficina el C. Agente del
Ministerio Público del Ramo Penal y el C. Procurador de Justicia del Estado, ni menos aún la propia
sociedad ha tenido que censurarme acto alguno de mis funciones, cuya actuación puedo justificar
ampliamente llegada la vez.
II. Desde el día dos de este mes se recibió en la Policía Judicial estando entonces de turno mi Jefe el
señor Efraín Moreno Lara, la denuncia de que en la casa del referido sacerdote José María Flores,
se estaba violando la Ley de Cultos porque en ella además de hacerse propaganda católica, se
celebraban misas siendo el oficiante dicho sacerdote. En tal virtud, desde esa fecha mi expresado
Jefe dio órdenes al señor Agustín Saldaña, que venía fungiendo como Agente Auxiliar de la Oficina,
para que vigilara aquella casa y el domingo siete de los corrientes, como poco después de las cinco
horas, se me presentó en mi domicilio participándome que efectivamente se estaba diciendo misa
en la citada casa, por lo que, en cumplimiento de la orden recibida de mi Jefe, me dispuse a
entrevistar al C. Agente del Ministerio Público Penal para a mayor abundamiento recibir de él las
instrucciones que tuviera a bien darme; pero no lo encontré en su domicilio, donde me informaron
que se hallaba en Veracruz de vacaciones, debiendo advertir que no entrevisté al Representante del
Ministerio Público Federal que lo es el C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, porque a esa hora
nadie pudo darme su domicilio. Y en tal concepto me trasladé acompañado de solamente de dos
gendarmes municipales y del referido Agente Auxiliar, en auxilio de la Policía Federal.
III. Al llegar a la casa del mencionado sacerdote estaba abierto el zaguán y entrando muchas personas,
y comprobado que hube que en efecto se celebraba un acto religioso efectué la aprehensión del cura
Flores, quien no se resistió a ser conducido por mí personalmente y cuando trasponía la puerta que
da a la calle se había formado un gran tumulto y comenzaron a hacerse los disparos, sin poder
precisar yo de parte de qué personas, porque la confusión era completa, ya que algunas gentes de
la concurrencia a la misa abandonaron esa casa, pero la mayor parte quedó adentro, y con haberse
tocado el poste que es la señal de alarma en esta ciudad, se provocara ésta, mayor fue el número
de personas que se congregó en la calle que era donde se hacían los disparos, por lo que me
concreté a conducir al padre Flores a la Inspección de Policía, quedándose en la puerta de la casa
de éste los dos gendarmes municipales con el señor Saldaña y fue cuando yo me encontraba en la
Inspección cuando llegó el aviso de que encontrábase una señorita gravemente herida en la esquina
opuesta a la dirección que yo había tomado al conducir al expresado sacerdote y a una distancia de
la casa de este de más de media cuadra por lo que ni yo mismo me doy cuenta de quien haya sido
el autor de ese delito.
IV. Ha llegado a mi conocimiento que personas interesadas en perjudicarme tratan de presentarme
como responsable por la sola circunstancia de haber sido el aprehensor del cura Flores y que las
autoridades antes mencionadas pretenden ordenar mi aprehensión con el propósito de calmar la
excitación que ha causado la muerte de la citada señorita, pero, repito, soy ajeno completamente a
ese infame crimen, que yo soy el primero en reprobar.
Consideraciones de derecho.
I. Como Queda relatado, no tuve ninguna participación en el homicidio perpetrado en la persona de la
señorita Sánchez, a quien ni siquiera conocí y por lo demás no existe en la averiguación practicada
para esclarecer ese delito, ningún dato ni declaración que me señale como autor y en tal concepto
la orden que se ha dictado o pretende dictarse en mi contra restringiendo mi libertad, no tiene no
puede tener fundamento alguno y por lo mismo es indudable que por lo que a mí respecta, no resulten
cumplidas las formalidades esenciales del procedimiento penal, violándose así el artículo 14
Constitucional supuesto que se trata de aprehenderme sin existir indicio alguno en mi contra.
II. En cuanto a la violación del artículo 16 de la Constitución General, resulta del hecho de que
independientemente de que no está probado que yo haya tenido intervención en el asesinato,
circunstancia por la cual nunca podrá fundarse ni motivarse mi detención, hay la particularidad de
que ninguna de las autoridades, excepto el C. Juez Primero de Primera Instancia, es competente
para restringir mi libertad, ya que esas autoridades solo tienen competencia para restringirla en el
caso de delito infraganti y en tal concepto como yo no traté de evadir la acción de la justicia, sino al
contrario he colaborado en que ésta se imparta, es evidente que si alguna responsabilidad se supuso
desde el principio, debía haberse ordenado desde entonces mi detención, por lo que no me explico
por qué motivos y en qué razones de carácter legal puede fundarse mi aprehensión.
173
Por todo lo expuesto, como no tengo ninguna responsabilidad en el asesinato, pero sí se pretende
perjudicarme con inmiscuirme en un proceso injustamente, y por otra parte estoy dispuesto a
presentarme a declarar ante la autoridad que deba juzgarme, en su oportunidad, con apoyo en los
citados preceptos constitucionales, así como en los artículos 103, fracción I, y 107 de la misma
Constitución, 1, 2, 3, 4, 5, 11, 36, 37, 114, 116, 117, 122, 123, 124, 130, 131, 136, 145,146 y demás
relativos de la Ley de Amparo.
A usted atenta y respetuosamente suplico se sirva:
I. Tenerme por presentado promoviendo demanda de amparo de la Justicia Federal contra actos de
los CC. Presidente Municipal, Inspector de Policía, Oficial de la Policía Judicial, Jefe del Sector
Militar, Agente del Ministerio Público del Ramo Penal y Juez Primero de Primera Instancia de esta
ciudad por violación de las garantías que me conceden los artículos 14 y 16 de la Constitución
General de la República, por los conceptos que dejo ampliamente expresados.
II. Como temo ser aprehendido de un momento a otro, y con ello recibiría grave perjuicio, dignarse
concederme la suspensión previa respectiva por setenta y dos horas y comunicar a las autoridades
tal suspensión por la vía telegráfica, ya que se trata de mi libertad personal.
III. Pedir a las autoridades responsables el correspondiente informe y por último,
IV. Oportunamente concederme la suspensión definitiva y resolver a su tiempo, que la Justicia Federal
me protege contra los actos de que me quejo.
Señalo como llevo dicho para oír acuerdos al despacho situado en Colón 77 de esta población.403
El amparo que promovió Antonio Morelll fue recibido por el juez, asimismo éste le notificó
al juez de Orizaba para que estuviera enterado de los hechos redactados y de quiénes
eran los implicados en el asunto.404 Asimismo el juez de Veracruz informó a las partes
involucradas, es decir a los acusados, que la ley de amparo promovida por Morell, debían
de suspender bajo estricta responsabilidad, todo acto que pueda poner en peligro la vida
del quejoso.405 Ante eso debían de cumplir con el cumplimiento de las garantías; sin
embargo, el Oficial Judicial expresó la intención de arrestar a Morell por los actos del 7
de febrero, por orden del C. Agente del Ministerio Público del Distrito; días después
403
Casa de la Cultura Jurídica en Veracruz, Veracruz (En adelante CCJV) Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito,
Exp. 51/937. De Antonio Morell al C. Juez Primero de Distrito, Orizaba, 9 de febrero de 1937.
404
CCJV. Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp. 51/937. Certifica Lic. Fernando Zapata Díaz la demanda
de amparo, Veracruz, 10 de febrero de 1937; Ibíd. De Lic. Fernando Zapata Díaz al C. Juez Primero de Primera
Instancia de Orizaba, Veracruz, 10 de abril de 1937.
405
CCJV, Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp. 51/937 Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp.
51/937. Telegrama, del Juez Primero de Distrito Lic. Fernando Zapata Díaz a los CC. Juez Primero de Primera Instancia,
Presidente Municipal, Inspector General de Policía, Comandante de Policía, Jefe de la Policía Municipal, Jefe del
Sector Militar, Veracruz, 13 de febrero de 1937; Ibíd. Telegrama, del Juez Primero de Distrito Lic. Fernando Zapata
Díaz a los CC. Procurador General de Justicia del Estado, Gobernador del Estado, Veracruz, 13 de febrero de 1937.
174
informa que no intentó la aprehensión de Morell así como no haber recibido orden de la
autoridad superior.406
Por otro lado, los acusados de arrestar a Antonio Morell presentaron su posición
de los hechos, expusieron que no habían girado orden alguna para la detención del
quejoso, debido a que la investigación la realizaron las autoridades competentes. Del
mismo modo que nadie había dictado orden alguna en contra de Morell para privarlo de
su libertad, esto se dejaba ver en los informes justificados hacia el juez de Veracruz
después de haber recibido la notificación del amparo.407 La misma declaración la hicieron
las autoridades estatales como la Procuraduría General de Justicia y el Gobernador del
Estado, donde informaban que no se dictó ninguna disposición de arresto al referido
Antonio.408
Un periódico local dijo que se arrestaron a los oficiales Agustín Saldaña, Antonio
Morell y Efraín Moreno Lara gracias a la intervención del Lic. Francisco Sánchez Torres,
secretario particular de Miguel Alemán, quien fue el enviado especial para la averiguación
de los hechos del día 7 de febrero. Saldaña fue detenido por el Jefe de las Comisiones
de Seguridad, Miguel Rodríguez M. en su intento de escapar a Río Blanco; Morell fue
detenido en Córdoba, mientras que Moreno se presentó voluntariamente, al parecer estas
detenciones se llevaron a cabo el día 9; otro de los detenidos fue el Lic. Agustín Aguilar
Muñoz quien recibió su libertad incondicional así como el cura Flores que era esperado
afuera por católicos.409
406
CCJV. Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp. 51/937. Del Oficial Judicial Eduardo A. Espíndola al C. Juez
Primero de Distrito en el Estado, Orizaba, 12 de febrero de 1937; Ibíd. Del Oficial Judicial Eduardo A. Espíndola al C.
Juez 1° de Distrito, Orizaba, 16 de febrero de 1937.
407
CCJV. Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp. 51/937. Del Coronel Comandante del Batallón 3er. Sector
Baltazar Treviño Sepúlveda al C. Lic. Fernando Zapata Díaz, Orizaba, 12 de febrero de 1937; Ibíd. Del Juez 1° de
Primera Instancia de Orizaba Lic. José Canales al C. Juez Primero de Distrito, Orizaba, 12 de febrero de 1937; Ibíd. Del
Agente del Ministerio Público Lic. Víctor F. Ochoa al C. Juez Primero de Distrito, Orizaba, 13 de febrero de 1937; Ibíd.
Del Inspector Gral. de Policía Marcelino Absalón Pérez al C. Juez Primero de Distrito, Orizaba, 14 de febrero de 1937;
Ibíd. Del Presidente del Concejo Municipal Horacio Xochihua al C. Juez 1° de Distrito Orizaba, 15 de febrero de 1937;
Ibíd. Del Comandante de la Policía Municipal Jesús González Marrufo al C. Juez 1° de Distrito, Orizaba, 15 de febrero
de 1937.
408
CCJV. Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp. 51/937. Del Procurador General de Justicia Lic. Adolfo
Moreno al C. Juez Primero de Distrito, Jalapa-Enríquez, 16 de febrero de 1937; Ibíd. del Secretario de Gobierno Lic.
Fernando Casas Alemán al C. Juez Primero de Distrito, Jalapa-Enríquez, 17 de febrero de 1937.
409
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 10 de febrero de 1937, No. 2120, pp. 1-2.
175
La investigación hacia Antonio Morell siguió su curso, este personaje fue el único
a quien se le encontró más información en los expedientes de archivos, por lo que se
sabe más de su situación legal a diferencia de los otros acusados, donde no hay más
evidencia de cómo procedieron en su contra. Sin embargo, gracias a los expedientes
localizados en la Casa de la Cultura Jurídica en Veracruz, Veracruz, se logró saber más
de la situación de Morell, ya que él promovió su amparo y se abrió la averiguación
pertinente.
Pues bien, tras la demanda de amparo promovido por el quejoso, se pidió que las
partes acusas no actuaran en contra de su persona ni libertad; de acuerdo con la
averiguación que se abrió al asunto, en el mes de agosto se declaró la audiencia pública
en la ciudad de Veracruz, después de leerse la demanda de amparo se dieron a conocer
los informes rendidos por las autoridades designadas como responsables y el pedimento
del Ministerio Público dictó la sentencia:
RESULTANDO:
1. Por escrito de fecha 9 de febrero próximo pasado, ocurrió ANTONIO MORELL, en demanda de
amparo contra los actos de los CC. Presidente Municipal, Inspector General de Policía, Oficial de la
Policía Judicial, Jefe del Sector Militar, Agente del Ministerio Público del Ramo Penal y Juez Primero
de Primera Instancia de Orizaba, reclamando la orden de aprehensión dictada en su contra.
2. Por telegrama de fecha 12 del propio mes el referido quejoso amplió su demanda contra actos de
los CC. Procurador General de Justicia del Estado, Gobernador del Estado y Comandante de Policía
de Orizaba, reclamando tanto de estas responsables como de las anteriormente citadas, hecha
excepción del Agente del Ministerio Público del Ramo Penal, atentados contra su vida. Estima el
agraviado que tales actos violan en su prejuicio las garantías que consignan los artículos 14, 16 y 22
Constitucionales, por cuanto que no se han cumplido las formalidades esenciales del procedimiento
supuesto que se trata de aprehenderlo sin existir (----) alguno en su contra y porque al no estar
probado que haya tenido intervención en el asesinato, (----) delito se le considera presunto
responsable no (----) fundarse ni motivarse su detención.
3. Admitida la demanda y pedidos los informes con justificación a las autoridades designadas como
responsables, los CC. Agente del Ministerio Público, Presidente Municipal, Inspector General de
Policía y Jefe del Sector Militar de Orizaba; Procurador General de Justicia del Estado, Gobernador
del Estado, Jalapa y Comandante de Policía de Orizaba, negaron expresamente los actos que se
les imputan. C. Oficial de la Policía Judicial de Orizaba, manifestó: que es cierto que trata de
aprehender al quejoso por existir en su contra graves indicios de responsabilidad por el delito de
homicidio de Leonor Sánchez y niega el acto que se le imputa, consistente en (----) contra su vida.
Y el C. Juez Primero de Primera Instancia, manifestó: que el quejoso le fue (----) en calidad de
detenido, por el Oficial Judicial de Orizaba, quien lo internó a la cárcel a disposición de ese Tribunal;
y que dentro del término constitucional se le dictó auto de formal prisión como presunto responsable
de los delitos de homicidio, (----) de autoridad, acompaño con su informe y usurpación de funciones.
La referida autoridad, acompañó con su informe copia certificada de dos fojas de dicho auto de formal
prisión y negó expresamente el acto reclamado que se le dicta, consistente en atentados contra la
vida del quejoso.
4. En esta audiencia el Ministerio Público pidió el sobreseimiento.
176
CONSEDERANDO:
I. No se acreditó la existencia de los actos reclamados de los CC. Agente del Ministerio Público,
Inspector General de Policía, Presidente Municipal, Jefe del Sector Militar y Comandante de Policía
de Orizaba; Procurador General de Justicia del Estado y Gobernador del Estado, Jalapa, pues fueron
negados expresamente por dichas responsables, sin que la parte quejosa desvirtuara sus informes
con prueba alguna en contrario. Por tanto, procede a su respecto sobreseer el presente amparo por
falta de materia.
II. Tampoco se acreditó la existencia de los actos reclamados de los CC. Juez Primero de Primera
Instancia y Oficial de la Policía Judicial de Orizaba, consistentes en atentados contra la vida del
agraviado, pues ambas responsables los negaron, sin que se demostrara lo contrario en autos. Por
tanto, y por el mismo concepto expresado en el considerando anterior, procede sobreseer también
este amparo.
III. La existencia del acto reclamado consistente en la orden de aprehensión dictada en contra del
quejoso, en lo que respecta a los CC. Juez Primero de Primera Instancia y Oficial de la Policía
Judicial de Orizaba, se encuentra debidamente acreditada con sus respectivos informes justificados;
pero apareciendo de la copia certificada que la primera de dichas autoridades remitió con su oficio
número 1083 de 7 de mayo último, que corre agregada a fojas 85 y 86 de este expediente, que ya
se dictó auto de formal prisión en la causa número 54/937, instruida contra el quejoso y socios por
los delitos de homicidio, abuso de autoridad y usurpación de funciones, cambiando así su situación
jurídica y cesando por tanto los efectos del actor reclamado, procede sobreseer este amparo en lo
que hace a dichas responsables, por la expresada causa de improcedencia.
Por lo puesto y con fundamento en los artículos 73 fracciones XVI y XVIII y 74 fracciones (III) y (----) de
la Ley Orgánica de los artículos 103 y 107 de la Constitución, se resuelve:
I. Se sobresee el presente juicio de amparo, promovido por ANTONIO MORELL, contra actos de los
CC. Juez Primero de Primera Instancia, Agente del Ministerio Público, Presidente Municipal,
Inspector General de Policía, Oficial de la Policía Judicial, Jefe del Sector Militar y Comandante de
Policía de Orizaba; Procurador General de Justicia y Gobernador del Estado, consistentes en
atentados contra su vida y en la orden de aprehensión dictada en contra por la primera de dichas
autoridades, como presunto responsable de los delitos de homicidio, (abusando) de autoridad y
usurpación de funciones.
II. Notifíquese.
Con lo que terminó la audiencia levantándose esta acta que firma el C. Juez Primero de Distrito en el
Estado, Licenciado Fernando Zapata Díaz.410
En esa acta se dio a entender que la búsqueda de Antonio Morell por los oficiales de
Orizaba fue por un mal entendido, con las averiguaciones pertinentes la situación de los
oficiales cambia considerablemente. Quizás esto junto con las demás declaraciones de
los acusados, fue el motivo por el que el amparo que Morell buscó no le fuera concedido,
por lo que tuvo que acatar la ley y sujetarse a la sanción que se le establecía. A finales
de 1937, las autoridades acusadas informan de recibido la resolución que dio el juez. 411
410
En la misma fecha se libran oficios 7429, 7430, 7431 (----), 7433 y 7434 a las responsables enviándoles copias (---) anterior resolución y exhorto al Juez de la 1ª. Instancia de Orizaba para que notifique al quejoso. CCJV. Juicio de
amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp. 51/937. Acta de resolución del amparo, Veracruz, 9 de agosto de 1937.
411
CCJV. Juicio de amparo del juzgado 4to. de Distrito, Exp. 51/937. Del Procurador General de Justicia Lic. Emilio
Gómez Sariol al C. Juez de 1° de Distrito, Jalapa-Enríquez, 10 de noviembre de 1937; Ibíd. Del Presidente del Concejo
Municipal al C. Juez 1° de Distrito, Orizaba, 10 de noviembre de 1937; Ibíd. Del Oficial Judicial Eduardo Arellano
Espíndola al C. Juez 1° de Distrito, Orizaba, 10 de noviembre de 1937; Ibíd. Del Secretario General de Justicia Lic.
177
Por otro lado, se pidió reconstruir los hechos, los cuales fueron narrados por los
familiares de Leonor y autoridades municipales, narrando que la joven recibió el balazo
arriba del pecho, de la tetilla izquierda, al caer un joven trata de levantarla pero éste huye
al ver a los policías con pistola en mano, siendo Saldaña el autor del crimen. La noticia
ya había llegado a Cárdenas siendo que los templos volverían a abrirse, éste mandó a
dos Delegados a averiguar los hechos y a través de la Secretaría de Gobernación
procedería en este asunto.412
Debido a los actos que se llevaron frente al Palacio Municipal, se le comunicó al
gobernador lo ocurrido, donde le informaron que todos los presentes pedían la apertura
de dichos templos, el Procurador les hizo saber que eso no era de su competencia pero
se haría justicia, por lo que los manifestantes se introdujeron a las iglesias a repicar las
campanas, por lo que llegó más gente al escuchar el sonido, quedando resguardados por
ellos, dándose la orden que si se acercaban fuerzas militares impidieran que fueran
cerrados nuevamente, asimismo se le comunicó que el pueblo volvió a marchar y se
encontraba excitado por lo que no pudieron contenerlos.413 La manifestación era grande,
según cuenta Carlos Aguilar:
“(…) las casas se vacían y cuarenta mil orizabeños de todas las clases sociales y miles de obreros de
las fábricas cercanas: Río Blanco, Santa Rosa, Nogales, Cerritos, Yute, Cocolapam, Mirafuentes, San
Lorenzo y las cervecerías Moctezuma y Nogales, vienen a unirse a la multitud que se precipita por las
calles a abrir los templos clausurados: la Concordia, Santa Gertrudis, los Dolores, San José, San Juan
de Dios, Santa María, el Carmen, el Calvario, San Antonio (…)”414
Ante el fervor de los manifestantes, el 10 de febrero los obreros volvieron a dar su postura:
¡¡A NUESTROS CAMARADAS CATÓLICOS!!
CAMARADAS: es hora de que despertemos y sacudamos el yugo de nuestra esclavitud. Tengan en
cuenta que el Sindicato al que pertenezcamos no tiene derecho a violar nuestra libertad de
conciencia. No dejemos que nuestros dirigentes, abusando de la confianza que en ellos hemos
depositado, traicionen nuestros derechos más sagrados, llevando a efecto determinaciones que no han
sido con la plena aprobación de las asambleas, como son las que tomaron algunos COMITES DE LA
REGION ORIZABEÑA, girando telegramas en contra de los católicos a las principales autoridades del
Fernando Casas Alemán al C. Juez 1° de Distrito, Jalapa-Enríquez, 11 de noviembre de 1937; Ibíd. Del Comandante de
Policía Serafín Vázquez al C. Juez 1° de Distrito, Orizaba, 11 de noviembre de 1937; Ibíd. Del Inspector General de
Policía Marcelino Absalón Pérez al C. Juez 1° de Distrito, Orizaba, 11 de noviembre de 1937; Ibíd. Del Coronel
Comandante del Sector Arnulfo de Nova Delgado al C. Juez 1° de Distrito, Orizaba, 11 de noviembre de 1937.
412
AMO. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 10 de febrero de 1937, No. 2120, pp. 1-2; Ibíd. Periódico El Universal Gráfico,
México, No. 6097, p. 3.
413
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Telegrama, del Presidente del Concejo
Municipal Jorge Guapillo al Gobernador del Estado Lic. Miguel Alemán, Orizaba, 10 de febrero de 1937.
414
AGUILAR. “Las manifestaciones…”, Op. Cit., 2010, p. 296.
178
Estado y de la República. Es hora de que demostremos nuestra soberanía en las asambleas,
defendiendo nuestra fe, nuestro Dios y nuestros templos, imponiéndonos para obligar a nuestros
dirigentes, a respetar nuestras creencias. De este modo verán el C. Gobernador y el C. Presidente de
la República, que han sido sorprendidos por tres o cuatro elementos contrarios a nuestra doctrina y de
que el único lazo de unión fuerte, grande y sagrado, es el de la Religión.
No temamos a las amenazas de nuestros dirigentes, recordemos que “La Unión es la Fuerza” y
triunfaremos. Seamos valientes, defendiendo con entusiasmo y optimismo nuestra doctrina religiosa y
vigilemos los actos de nuestros dirigentes, para que no burlen nuestra confianza. Tengamos presente,
que los Sindicatos sólo deben luchar por el MEJORAMIENTO DEL TRABAJADOR pero nunca, poder
determinar nuestra religión, que es la única que lucha por mantener la paz en todas las esferas
sociales, y la única doctrina socialista que nos legó el Divino Rabí de Galilea, al pronunciar sus
consoladoras palabras.
“AYUDAOS LOS UNOS A LOS OTROS”. “DAN AL CESAR LO QUE ES DEL CESAR Y A DIOS LO
QUE ES DE DIOS”.
ORIZABA, FEBRERO DE 1937.
Los Trabajadores Católicos de todas las Agrupaciones.
LEALA UD. Y PASELA A OTRA PERSONA.415
Con esto quedaba claro que los obreros, pese a seguir a sus dirigentes y políticos, se
consideraban católicos, pero no lo expresaran “abiertamente”. Pero debido a los
problemas sindicales y a al ser asesinada la hija de un obrero, despertaron sus deseos
de profesar la religión católica, dando su apoyo y respaldo quienes se manifestaban sin
tomar en cuanta si eran religiosos o no y sin importar que fueran en contra de sus líderes,
del gobernador o del presidente.
Los templos permanecieron abiertos todo el diez de febrero, pero fueron cerrados
en la noche a solicitud de la Oficina Federal de Hacienda, en representación de la
Dirección de Bienes Nacionales; al día siguiente llega el gobernador Alemán, las
actividades estaban paralizadas, había gente de poblados cercanos y obreros de las
fábricas del valle. Indígenas de Santa Ana Atzacan se dirigieron a Orizaba y traían con
ellos al padre Jorge Gómez, en Córdoba siguieron el ejemplo de manifestarse por las
calles y abrieron sus templos.416
Durante ese día el Comité Pro-Carnaval de Orizaba manifestó su apoyo a los
católicos, con los templos ocupados los feligreses practicaron rezos y el Himno Nacional
se escuchó dentro de los muros de la iglesia de San Miguel, era tal la gente que se
encontraba que ésta llegaba a la calle Madero; seguían las averiguaciones por la muerte
415
416
APO. S/C. Girado el 10 de febrero de 1937.
AGUILAR. “Las manifestaciones…”, Op. Cit., 2010, p. 296.
179
de Leonor y había contradicciones, pero se llegó a la conclusión de que Saldaña y los
otros implicados actuaron por cuenta. 417
La situación se volvía cada vez más crítica, con la presencia del gobernador en
Orizaba se pensaba que la ley sería retirada y las iglesias volverían a abrirse, los
feligreses daban sus peticiones a través de pancartas donde se podía leer:
“El pueblo de Orizaba pide garantías”; “Una nueva víctima de la injusticia”; “Ciudadano Gobernador,
pedimos la justicia y libertad de cultos”; “Respeto a nuestras creencias”; “Orando en nuestros templos
no violaremos la ley”; “Para quitarnos la fe nos deben de quitar la vida. Aquí estamos”; “Todo el Estado
de Veracruz odia la ley Tejeda y pide al Gobierno la reanudación de los cultos”; El pueblo de Maltrata
se une al dolor”; “Orizaba cuando tiene un derecho, no lo pide de rodillas, ¡lo arrebata!”. 418
El gobernador se retiró el mismo día en que llegó pero no solucionó nada, ante esto los
católicos se lanzaron al Palacio Municipal (el gobernador tuvo que salir por la parte de
atrás debido a la gran cantidad de gente), un grupo de mujeres ondeó la bandera de la
Virgen de Guadalupe desde el balcón principal, otro grupo de católicos volvieron a abrir
los templos pero ahora los vigilarían día y noche por medio de guardias voluntarios,
siendo la Juventud Católica Femenina Mexicana quien les suministraba alimentos. Los
orizabeños católicos pedían oficialmente la entrega de las iglesias y sus llaves. 419 Ante
los problemas que se presentaron, una comisión de orizabeños católicos también se
dirigió a los poderes superiores:
A las H.H. Cámaras de Diputados:
El pueblo de Orizaba y en general del Estado de Veracruz ante esas H.H. Cámaras hace escuchar una
vez más su voz de protesta, en contra de la ley extorsionadora de sus creencias que están en pugna
con el sentir no solo del pueblo veracruzano sino del pueblo de la Nación Mexicana.
Creemos que las legislaturas pasadas sufrieron la influencia de un Maximato y en su abyección
sancionaron leyes que lesionan las libertades del pueblo, en esta era de reajustes morales que el C.
Presidente de la República trata de normar sus esfuerzos por la unificación de la gran familia mexicana
toca a la H.H. Cámaras de Diputados y Senadores derogar las leyes que opongan a la voluntad del
pueblo mexicano, siempre amante de respeto a su libertad por lo que espera el pueblo de este Estado
Libre y Soberano de Veracruz que esas H.H. Cámaras sabrán interpretar los principios democráticos
que rigen a la Nación Mexicana y (acatar) el respeto que el pueblo merece.
Por el pueblo Veracruzano.
LA COMISIÓN
Andrés Salinas, Paula M. de Herrera, Herlinda Vázquez 420
417
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 11 de febrero de 1937, No. 2122, p. 1, 4.
AGUILAR. “Las manifestaciones…” 2010, p. 297.
419
Ibíd. p. 297.
420
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 25 de febrero de 1937, No. 2134, pp. 1, 4.
418
180
El mes de febrero estuvo marcado por la presencia de los católicos en Orizaba, inicio de
su lucha por abrir sus templos y pidiendo justicia por el crimen cometido; el 23 se hizo
otra manifestación donde exigían que las llaves fueran entregadas a las Juntas Vecinales,
porque se había esparcido el rumor de otra clausura, para evitar enfrentamientos una
señora de nombre Carolina Ojeda de Islas se dirigió a los feligreses para calmar los
ánimos, inmediatamente se retiraron a los templos para seguirlos cuidando. Acto seguido
las autoridades orizabeñas pasaron el informe al gobernador, explicando que la Fuerza
Federal impidió desórdenes, además hubo agrupaciones de los municipios adyacentes a
Orizaba.421
No obstante, los católicos orizabeños se dirigieron al presidente de la República,
Lázaro Cárdenas, a través de una carta donde exponían que desde hace años los
templos en Veracruz permanecían cerrados como consecuencia de la política
antirreligiosa, del mismo modo que se han hecho gestiones para que los templos vuelvan
a los cultos pero han sido infructuosas, debido a que la Secretaría de Gobernación dice
que se tienen que dirigir al gobernador del estado y éste a su vez a México. En esa carta
expusieron lo acontecido el día 7 de febrero, y en últimas declaraciones el gobernador
dijo que no tenía comentario sobre la cuestión religiosa, por lo que solicitaron al
presidente las siguientes peticiones:
I. Que Ud. como Primer Mandatario de la República Mexicana, intervenga directamente para que quien
tenga que dictar la orden de entrega de Templos a las juntas vecinales, lo haga en obsequio al
Pueblo que lo exige; y lo haga lo más rápidamente posible como es de justicia.
II. Que intervenga Ud. ante el C. Gobernador del Estado para que en este Estado de Veracruz se
restablezca la tranquilidad mediante la reapertura de los templos y la reanudación de los cultos
católicos.
III. Que apoye Ud. nuestras futuras gestiones ante la Legislatura Local para que sea derogada la actual
y sectaria Ley sobre reglamentación del número de ministros que pueden oficiar y en virtud de la
cual, solamente un sacerdote está autorizado para atender las necesidades de cien mil habitantes,
lo cual es IMPOSIBLE.422
El problema religioso se salió de control, los católicos se movilizaron y en un primer
momento tomaron los templos por la fuerza, tras las acciones del gobierno para
421
Ibíd. pp. 297-298; AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Presidente del Concejo
Municipal Jorge Guapillo al C. Lic. Miguel Alemán Gobernador Constitucional del Estado, Orizaba, 24 de febrero de
1937.
422
APO. S/C. Los que suscriben católicos de la ciudad de Orizaba al C. Presidente de la República, Orizaba, 24 de
febrero de 1937.
181
detenerlos y evitar que abrieran los templos decidieron dirigirse al presidente, éste
mantuvo una postura mediadora pero daba pie a que tomaría el asunto en sus manos y
se resolvería conforme a la ley; Alemán, por su parte, no daba una respuesta concreta,
desde que iniciaron las manifestaciones ya se hablaba de que los templos en Orizaba
serían dados a las juntas vecinales.
4.3 La nueva entrega de templos a las Juntas Vecinales en Orizaba
Las autoridades contemplaron entregar los templos de nueva cuenta a las juntas
vecinales. El día 8 de febrero de 1937 las autoridades municipales de Orizaba citaron a
los señores Agustín Aguilar, Ernesto Galán (Galland), Delfino Ponce, Manuel Gómez,
Francisco Ramírez, Ignacio Gómez Zavaleta, Carolina Muñoz y Sritas. Domínguez para
tratar los asuntos urgentes, probablemente por lo ocurrido el día anterior.423 La noticia de
que los templos se entregarían a las junas corrió desde el 14 de febrero, en el periódico
se dio que en un plazo de 72 horas las iglesias serían entregadas. Esto alegró a los
católicos, porque la palabra del gobernador empezaba a cumplirse, además, no solo en
Orizaba se entregarían los templos sino que en todo el estado de Veracruz. 424
En Orizaba esperaban la resolución del gobernador para que las autoridades
pudieran nombrar las juntas, estas serían formadas en menos de dos días, al parecer
algunos miembros fueron cambiados; en cuanto a los sacerdotes, se dijo que sólo
oficiarían tres, pero aún no quedó aclarado ese punto.425 Al ser un momento crítico en
Orizaba, todo tenía que hacerse siguiendo la ley para evitar problemas, se debió esperar
a que el gobernador autorizara el nombramiento de las juntas y a su vez las autoridades
municipales informaran del procedimiento. Las juntas católicas no variaron mucho en
cuanto a su estructura y a mediados de febrero se instauraron de la siguiente manera:
423
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Citatorio, del Presidente del H. Concejo
Municipal a los Señores ya mencionados, Orizaba, 8 de febrero de 1937.
424
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 14 de febrero de 1937, No.2125, p. 4.
425
Ibíd. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 16 de junio de 1937, No. 2126, pp. 1, 4.
182
Tabla 2. Las Juntas Vecinales en Orizaba en 1937
Templo de la Concordia
Nombre
Edad
Gabriel Zepeda
63 años
Francisco
Reyes
85 años
Diego Cerón
47 años
Amelio
Martínez
Alejandro
Serrano
54 años
50 años
Emiliano Rivera
39 años
Leopoldo
Ortega
50 años
Pedro Flores
56 años
Luis Cordero
60 años
Dirección
68 años
Nombre
Edad
Arcadio Franco
60 años
José
Hernández
49 años
Juan Miranda
35 años
Luis Hernández
55 años
Jesús
Hernández
Eulogio
González
Próspero
Rodríguez
Emilio Rico
35 años
31 años
60 años
37 años
Nombre
Oriente 4
Eulogio
No. 451
Benítez
Id. 6 No.
Benito Tello
226
Id. 3
Abraham
No. 500
Villegas
Oriente 4 y
Manuel
Sur 25
Mendoza
Oriente 3
Víctor Tello
No. 452
Oriente 10
Felipe Loyo
No. 118
Oriente 6
Felipe Nieva
No. 95
Oriente. 6 Hermenegildo
No. 167
Ramírez
Oriente 2
No. 3
Oriente 6
No. 155
Templo de Santa Gertrudis
Librado Serna
Templo de Los Dolores
Herminio
Cruz
Edad
76 años
61 años
29 años
34 años
63 años
30 años
56 años
56 años
46 años
Dirección
Oriente 4
No. 47
Sur 13
No. 43
Sur 13
No. 55
Sur 15
No. 103
Sur 13
No. 41
Sur 11
No. 13
Sur 13
No. 14
Sur 13
No. 18
Oriente 4
No. 61 int
9
Leobardo
40 años
Colón 139
Carmona
Templo de San José de Gracia
Dirección
Nombre
Edad
Oriente 6
No. 374
Oriente 6
No. 378
Oriente 6
No. 320
Oriente 6
No. 320
Oriente 6
No. 354
Oriente 6
No. 352
Oriente 6
No. 332
Oriente 6
No. 310
Bernabé
Polanco
66 años
Ángel Torres
41 años
Basilio
Villagómez
Daniel
Fougerat
Alfredo
Echegaray
Juan Ruíz
Alfonso
Martínez
Donato
Merino
183
62 años
55 años
56 años
37 años
40 años
49 años
Dirección
Poniente 5
No. 72
Poniente 7
No. 133
Sur 6 No.
8
Poniente 7
No. 141
Sur 10
No. 80
Sur 8 No.
9
Poniente 5
No. 73 B
Sur 8 No.
4 Int. 3
Oriente 6
No. 314
Cuartos
Emilio Cortés
53 años
Yute
No. 101
Templo Parroquial de San Miguel
Dionisio Rico
36 años
Nombre
Edad
Roberto
Martínez
30 años
Nombre
Edad
Manuel Roque
42 años
Dirección
Madero
No. 64
Madero
Gustavo Sota
67 años
No. 81
Rafael
Oriente 5
54 años
Hernández G.
No. 31
Madero
José Mendoza 39 años
No. 113
Encarnación
Norte 2
45 años
Hernández
No. 7
Alejandro
Madero
32 años
Boschetti
No. 97 Bis.
Leopoldo
Sur 8
27 años
Franco
No. 11
Sur 9
Rubén Yáñez
49 años
No. 15
Norte 4
Leopoldo Lima 42 años
No. 49
Madero y
Basilio Orea
45 años
Poniente 3
Templo de El Carmen
Francisco
Pacheco
Ricardo Osorio
M.
Enrique
Hernández
Pedro Aguilar
Alberto
Uruñuela
Antonio
Gargantua
42 años
37 años
48 años
25 años
40 años
39 años
Dirección
Oriente 2
No. 59
Oriente 4
No. 48
Oriente 3
No. 50
Sur 9
No. 26
Oriente 2 y
Sur 7
Oriente 4
No. 25
Norte 8
No. 2
Poniente 5
No. 72 B
Sur 8
Sacramento
56 años
No. 17
Osorio
Int. 29
Templo de El Calvario
Antonio Rey
26 años
Nombre
Edad
Leodegario
Peregrina
Francisco
Huerta Ávila
Alberto
Osorio M.
Mauricio
Martínez
Dirección
Norte 4
No. 6
Norte 4
54 años
No. 5
Oriente 3
48 años
No. 50
Av. Colón
44 años
No. 74
Oriente 3
Félix Rosas
46 años
No. 5
Delfino P.
Oriente 3
56 años
Ramírez
No. 90
José Orozco
Sur 3
45 años
Ríos
No. 12
Eliseo
Oriente 2
37 años
Sánchez
No. 27
Gabriel
Av. Colón
58 años
Palacios
No. 86
Ricardo
Oriente 4
40 años
Aguilar M.
No. 15
Templo de San Antonio
52 años
Nombre
Edad
Luis Cardel
40 años
Delfino
Contreras
Gonzalo
Rivera
Cornelo
Santos
Nemesio
Bolaños
Toribo
Campos
Manuel
Rodríguez
184
49 años
34 años
64 años
80 años
60 años
56 años
Dirección
Norte 5
No. 39
Norte 5
No. 59
Norte 5 A
No. 1
Poniente 8
No. 9
Poniente 8
No. 18
Norte 5
No. 62
Poniente 8
No. 36
Oriente 3
No. 70
Frumencio
Av. Colón
43 años
Suárez
No. 177
Norte 6
Javier Vivanco 63 años
No. 16
Templo de Santa María
Julio Arenas
47 años
Nombre
Edad
Osvaldo
Berruecos
Cayetano
Flores
Dirección
Oriente 3
No. 7
Oriente 2
30 años
No. 19
Sur 3 No.
Mario Sánchez 45 años
9
Ignacio
Poniente 3
55 años
Berruecos
No. 19
Francisco
Sur 7 No.
45 años
Meneses
33
Oriente 4
José Ahuja
35 años
No. 19
Oriente 2
Diego Bringas 50 años
No. 12
Sur 7 No.
Luis Aguirre
22 años
8
Fernando
Norte 4
28 años
Araujo
No. 32
Sur 7
José Villa
22 años
No. 18
Templo de Barrio Nuevo
48 años
Eduardo
Poniente 8
23 años
Galland
No. 40
Aurelio R.
Poniente 8
36 años
Trejo
No. 21
Salvador
Norte 5
35 años
Gutiérrez
No. 44
Templo de San Juan de Dios
Nombre
Roberto
Escamilla
Manuel C.
Iturriaga
Eduardo
Gómez
Florentino
Sánchez
Edad
42 años
69 años
51 años
24 años
José Gómez
60 años
Félix Reyes
48 años
Martín
Sánchez
Porfirio
Chávez
63 años
56 años
Alberto Díaz
39 años
Francisco
Mendoza
56 años
Dirección
Sur 3
No. 41
Poniente 2
No. 1
Oriente 10
No. 22
Sur 2
No. 58
Oriente 8
No. 24
Sur 5
No. 56
Oriente 10
No. 24
Madero
No. 23
Poniente 9
No. 8
Sur 5
No. 36
Nombre
Pascual
Vázquez
Tomás Torres
Felipe Pliego
Julián Pliego
Isequio Pliego
Ascensión
Hernández
Pedro Vázquez
Manuel Ciruelo
Ventura Pliego
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Las Juntas Vecinales fueron formadas el
16 de febrero de 1937, siendo la comisión integrada por:
Delfino P. Ramírez, Cástulo Hernández y Manuel
Gómez. El caso de la iglesia de Barrio Nuevo, la junta se creó el 1 de marzo de 1937.
185
Una vez que quedaron formadas se le notificó al gobernador Alemán para que siguiera
con los lineamientos legales.426 Los grupos católicos como las “Damas Católicas” fueron
cruciales para el seguimiento y que se llevara a cabo la reformación de las juntas, algo
que el gobierno permitió siguiendo el medio legal; el gobierno municipal, estatal y federal
mantuvieron comunicación sobre el avance del tema de cultos.
La Oficina de Hacienda pidió a las autoridades municipales el nombramiento de
las juntas vecinales para que todo estuviera en orden y por el medio legal, ya había
estipulado que las juntas se encargarían del cuidado y conservación de los templos que
se les encomendara, claro que ese nombramiento tuvo que estar aprobado por las
autoridades competentes y hacérselas saber a Hacienda, en la documentación que pidió
la Oficina de Hacienda sólo se encontraron los templos de San José y San Miguel. 427
Cuando la junta del templo de San Miguel recibió el inmueble, estos se dirigieron
mediante una carta a Hacienda, en la ciudad de México, donde explicaban que dicho
edificio estaba de deplorables condiciones tanto en el exterior como en el interior debido
al abandono que sufrió por 7 años por permanecer cerrado. Por esa razón los vecinos se
juntaron para darle el mantenimiento correspondiente porque daba “mal aspecto” tanto
para la ciudad como para los turistas que llegaban, en esa carta pedían autorización para
las siguientes mejoras:




Resanar las partes que sean necesarias.
Blanquear todo el cuerpo del edificio que sea de mampostería y la torre.
Pintar con aceite puertas y barandales.
Limpiar las partes que no necesiten pintura de ninguna índole. 428
Bajo los mismos lineamientos se dirigieron al presidente municipal y pidieron su “apoyo
moral” para verse realizado sus deseos por ser iniciativa del pueblo católico de salvar un
edificio digno de la cultura de Orizaba. El Ayuntamiento respondió que no le concierne
426
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Presidente del F. Concejo Municipal Jorge
Guapillo al C. Lic. Miguel Alemán, Orizaba, 18 de febrero de 1937.
427
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Jefe de la Oficina Blas Camacho al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 6 de marzo de 1937; Ibíd., del Presidente del H. Concejo Municipal Jorge Guapillo al
Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 6 de marzo de 1937.
428
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. De la Junta Vecinal del Templo San Miguel al
C. Secretario de Hacienda y Crédito Público, Orizaba, 14 de abril de 1937.
186
dar autorización para arreglar el templo de San Miguel, pues al ser propiedad federal
deberían haberse dirigido a las Autoridades Federales para solicitar el permiso.429
Los vecinos de Orizaba estuvieron al pendiente de los templos, ellos se
organizaron para atender cualquier problema que afectara a las iglesias. En julio de 1937
hubo un temblor en la ciudad ocasionando que parte de la cúpula del templo de La
Concordia se desplomara, ante esa adversidad los vecinos cercanos a dicho templo se
organizaron para retirar los escombros e ir reparando los daños, siendo que aún
pertenecían a los Bienes de la Nación, la Oficina de Hacienda pidió apoyo policiaco para
que no se retirara ningún objeto.430
El templo de La Concordia tenía un valor simbólico para los católicos de la ciudad,
por ser el recinto de veneración de la Virgen de Guadalupe, por esa razón las fiestas
guadalupanas tenían un gran valor sentimental. Nuevamente volvían a pedir permiso
para celebrar a la “morenita”, como se le conoce por los católicos, en primer lugar se
presentó la petición Manuel González para quemar cohetes y fuegos artificiales, pero
esto le fue negado y de una vez se le advirtió que se tendría que abstener de cualquier
manifestación pública de carácter religiosa por estar prohibidas por la ley. 431
Asimismo la junta encargada de dicho templo pidió permiso para poner puestos
dentro del perímetro del parque “Francisco I. Madero” (también conocido como La
Concordia, ubicado frente al templo), para vender, confeti, cerveza, tamales, tortas,
limonadas, etc. con el fin de obtener recursos para la reconstrucción del parque y a
beneficio del Manicomio del Estado (ubicado junto a dicho templo). Para corroborar esta
petición las autoridades enviaron una carta para saber si era cierto que lo obtenido de
429
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. De la Junta Vecinal del Templo San Miguel al
C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 4 de mayo de 1937; Ibíd., del Presidente del Concejo Municipal a la
Junta Vecinal del Templo San Miguel, Orizaba, 10 de mayo de 1937.
430
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Jefe de la Oficina Blas Camacho al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 27 de julio de 1937; Ibíd., del Presidente del Concejo Municipal al C. Inspector Gral.
de Policía, Orizaba, 29 de mayo de 1937.
431
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. De Manuel González al C. Presidente
Municipal, Orizaba, 22 de noviembre de 1937; Ibíd., del Presidente del Concejo Municipal al C. Manuel González,
Orizaba, 22 de noviembre de 1937.
187
esas ventas sería destinado al Manicomio, la respuesta fue que se ignoraba el beneficio
que podían obtener.432
Nuevamente la junta vecinal de La Concordia se volvió a dirigir a las autoridades
municipales para solicitar el permiso correspondiente y así llevar a cabo las ventas que
se dijeron anteriormente los días 11 y 12 del citado mes, bajo la justificación de la
recaudación de fondos para el parque y el Manicomio, pero en esta ocasión esas
actividades estarían vigiladas por la junta y el administrador del Manicomio. El alcalde
negó la solicitud porque las fechas que eligieron corresponden a las festividades
religiosas de la Virgen de Guadalupe, pero se les hace la observación de que pueden
escoger otros días y así se les concederá el permiso y las facilidades necesarias.433
4.3.1 En búsqueda de otros implicados en el asesinato de Leonor Sánchez
Se dijo que solamente el oficial Agustín Saldaña fue el autor de la muerte de la joven
Leonor, pero descartaron quién o quienes o acompañaban. Los católicos pidieron justicia
a las autoridades, estas procedieron con la detención del oficial Saldaña y otros presuntos
culpables o por lo menos sospechosos de los actos. Pero al parecer estos no fueron los
únicos que tuvieron una participación el día 7 de febrero de 1937, sino que hubo otros
más, los policías acompañantes que estuvieron presentes aquél día, esto se sabe debido
a que se ordenó la confiscación algunas armas.
Aunque no se tenía noticia si otros policías dispararon en contra de la multitud en
la casa del cura José María Flores, las investigaciones que se hicieron llevaron a que se
le decomisaran las armas a los policías que acompañaron al oficial Saldaña, Morell y
Moreno, me refiero a los policías Juan Cruz Castillo y Félix Mendoza, con el número 65
y 48 respectivamente, a ellos se les decomisaron sus armas, a Castillo un revolver marca
432
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. De la Junta Vecinal del Templo La Concordia al
C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 20 de noviembre de 1937; Ibíd., del Presidente del H. Concejo
Municipal al C. Presidente de la Junta Local de Beneficencia, Orizaba, 1 de diciembre de 1937; Ibíd., del Presidente
de la H. Junta de Beneficencia Dr. Francisco Memije al C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 6 de diciembre
de 1937.
433
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. De la Junta Vecinal del Templo La Concordia al
C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 1 de diciembre de 1937; Ibíd., del Presidente del H. Concejo
Municipal a la Junta Vecinal del Templo La Concordia, Orizaba, 2 de diciembre de 1937.
188
B. H. cal. 38 matrícula 2102 con dos cartuchos útiles, a Mendoza una pistola automática
marca Plus Ultra cal. 7-65 matrícula 20267.434
Estos policías se conocían con los números de identificación 65 y 48, es necesario
mencionarlos ya que se creyó que hubo otros más que fueron cómplices de los hechos
ocurridos en los primeros días de febrero. Con las movilizaciones de las masas de los
católicos orizabeños pidiendo castigo a los culpables, las autoridades municipales
tuvieron que proseguir con las detenciones de los que estuvieron presentes.
Al ser procesados estos policías, las armas pasaron a manos de la policía
municipal, se hicieron gestiones a través del Juez 1º de Primera Instancia de que estas
pasaran a manos del municipio por ser de su propiedad ya que no pueden tomarse como
instrumento de delito de los acontecimientos del día 7 en cuestión.435 Se le informó al
gobernador Alemán para que decidiera qué se procedía y a su vez al Procurador de
Justicia, éste último porque el municipio carecía de armas, además le informaban que los
policías no fueron autores del homicidio por lo que las armas no eran consideradas
instrumentos de delito.436
El presidente de Orizaba siguió solicitando las armas en cuestión, se le respondió
que no podían ser entregadas debido a la investigación que se estaba llevando a cabo
porque al parecer una de esas armas sirvió para privarle de la vida a la Srita. Leonor
Sánchez.437 Más adelante se da la noticia de que los señores Félix Mendoza y Juan Cruz
fueron absueltos de toda responsabilidad, por lo que inmediatamente se piden las pistolas
al ser una necesidad para el servicio de la policía municipal; ahora la respuesta que se
434
AMO. Ramo Gobierno, Policía, Correspondencia. C.-760, Exp. 85. Del Inspector Gral. de Policía Marcelino Absalón
Pérez al C. Agente del Ministerio Público, Orizaba, 10 de febrero de 1937.
435
AMO. Ramo Gobierno, Policía, Correspondencia. C.-760, Exp. 85. Del Inspector Gral. de Policía Marcelino Absalón
Pérez al C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 26 de febrero de 1937; AMO. Ramo Gobierno, Policía,
Correspondencia. C.-760, Exp. 87. Del Inspector Gral. de Policía Marcelino Absalón Pérez al C. Presidente del H.
Concejo Municipal, Orizaba, 26 de febrero de 1937.
436
AMO. Ramo Gobierno, Policía, Correspondencia. C.-760, Exp. 85. Del Presidente del H. Concejo Municipal al C.
Gobernador del Estado Miguel Alemán, Orizaba, 23 de marzo de 1937; AMO. Ramo Gobierno, Policía,
Correspondencia. C.-760, Exp. 87. Del Gobernador del Estado Miguel Alemán al C. Procurador General de Justicia del
Estado, Jalapa-Enríquez, 29 de marzo de 1937.
437
AMO. Ramo Gobierno, Policía, Correspondencia. C.-760, Exp. 87. Del Presidente del H. Concejo Municipal al C.
Procurador de Justicia del Edo., Orizaba, 2 de abril de 1933; Ibíd., del Secretario de Gobierno al C. Presidente del H.
Concejo Municipal, Jalapa-Enríquez, 7 de abril de 1937.
189
enviaba era que pese a que los señores fueron liberados no gestionaron el trámite para
que se entregaran las armas, por lo que éstas estaban guardadas, inmediatamente se
pidió a Félix y a Juan que gestionaran los trámites necesarios para recuperarlas.438
El asunto de los policías Mendoza y Cruz fue largo, se requirió de bastantes
trámites para lograr comprobar su inocencia y que las armas fueran regresadas al
municipio, sin embargo no se encontró documentos referentes a los otros policías
implicados ni de la situación de las armas que presentaban al momento de detener a los
católicos aquél día. Pero es necesario mencionar esta situación de los policías porque se
hacía una averiguación para aclarar los hechos.
Sin embargo, con las investigaciones que se llevaron a cabo se descubrió que
Efraín Moreno Lara, –Jefe de la Policía Judicial en turno en el momento de los sucesos
del 7 de febrero–, fue encontrado como culpable y se le adjudicaron los delitos de abuso
de autoridad y usurpación de funciones, asimismo se tenía presente los cargos por el
delito de homicidio contra Antonio Morell, Juan Cruz Castillo, Félix Mendoza y Agustín
Saldaña, a este último se le adjudicaron también los de allanamiento y usurpación de
funciones.439
Dentro de esa acta se registraron las averiguaciones y los hechos que se
presentaron en cuanto al asunto de los implicados. Dando como consecuencia la formal
prisión de Antonio Morell, como presunto responsable de los delitos de homicidio, abuso
de autoridad y usurpación de funciones de que lo acusa el Ministerio Público, por lo que
se le comunicó al alcalde de la cárcel de Orizaba para su conocimiento así como aclarar
que han pasado 72 horas desde la detención legal de Morell.440 De los otros implicados
no se encontró dato alguno de su situación legal.
438
AMO. Ramo Gobierno, Policía, Correspondencia. C.-760, Exp. 87. Del Presidente del H. Concejo Municipal al C.
Secretario de Gobierno, Orizaba, 30 de junio de 1937; Ibíd., del Oficial Mayor Fernando López Arias al C. Presidente
del H. Concejo Municipal, Jalapa-Enríquez, 6 de agosto de 1937; Ibíd., del Presidente del H. Concejo Municipal a los
CC. Félix Mendoza y Juan Cruz, Orizaba, 13 de agosto de 1937.
439
CCJV. Acta certificada de los hechos por el C. Ernesto Martínez Secretario del Juzgado Primero de Primera Instancia
de Orizaba, 7 de mayo de 1937.
440
CCJV. Acta certificada de los hechos por el C. Ernesto Martínez Secretario del Juzgado Primero de Primera Instancia
de Orizaba, 7 de mayo de 1937.
190
4.4 Hacia una solución de la ley antirreligiosa
La búsqueda de una solución fue larga, las autoridades municipales no podían entregar
los templos sin antes tener el consentimiento del gobierno del estado, que a su vez debía
de tener autorización del gobierno federal. Esto dificultaba que los templos se entregaran
inmediatamente; el gobernador Alemán había declarado que los templos sí se
entregarían a las juntas vecinales.
La intención de arreglar la condición de los templos y que la Ley 197 se levantara
ocasionó fricciones; tal fue la importancia de esta ley para algunos políticos que
rechazaron la reforma de la ley de cultos, el diputado local, Rafael Murillo Vidal dijo que
prefería renunciar a su cargo con el argumento que de permitir esa reforma significaría
dar pasos atrás a los “ideales de la Revolución”. Hubo maestros que rechazaron la
derogación de la ley antirreligiosa y los padres de familia se organizaban para ir en contra
de la educación social.441 Algunos padres de familia apoyaron a los sacerdotes:
A NUESTROS CAMARADAS LOS ESTUDIANTES DE ORIZABA y sus CONTORNOS
Con mucha frecuencia se nos habla en las escuelas, del amor al árbol, con tanto entusiasmo que a
veces nos parece ver a nuestros Maestros revestidos de hermoso plumaje y transformados en aves del
cielo, o en zorras o en leopardos que también gustan mucho estar en lo más espeso de los bosques.
A esta clase de profesores, nosotros debemos formular estas preguntas: ¿Quién existió primero, Dios
o el árbol? ¿Dios da la hermosura al árbol o el árbol a Dios? Y si nuestros profesores no son más
ignorantes que nosotros o más necios que las bestias del campo, nos dirán que Dios existió antes que
todas las cosas y que todas reciben de Él, el ser y la hermosura. Pues si esto es así, que se nos enseñe
primero a AMAR A DIOS y DESPUÉS AL ÁRBOL
Todos testigos de lo mucho que han luchado nuestros padres en estos días, para lograr tener los
templos abiertos a la libertad de cultos, sin que esto haya sido todavía posible por falta de las más
elementales garantías. Tiempo es ya de que nos unamos todos los estudiantes de uno y otro sexo, y
respaldemos a nuestros padres en tan justa petición.
Nuestros padres no saben vernos sufrir sin que nos remedien nuestros males. Nosotros tampoco
podemos verlos sufrir sin que nos unamos a ellos para ayudarlos a conseguir su objeto.
Si para el seis de los corrientes, nuestros padres no han logrado la libertad de cultos no pisemos más
las escuelas hasta no ver resuelto el conflicto.
Somos Chicos pero Tenemos Conciencia de Nuestros Actos
Marzo 1º de 1937.442
La lucha tomó otro giro al dirigirse a las conciencias de los niños, donde la educación era
parte fundamental de la sociedad orizabeña. Estos nuevos cambios fueron enfrentados
441
442
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 19 de febrero de 1937, No. 2127, pp. 1, 4.
APO. S/C.
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por la Iglesia y por los padres de familia; hubo diversos volantes que invitaban a la
resistencia educativa:
Condiscípulos Escolares
de Orizaba y Contornos
No queremos ser Ateos. Debemos de exigir nuestra Religión Católica, Apostólica, Romana es nuestra
fe y la creencia de nuestros padres.
No queremos la Doctrina Comunista, porque es un descrédito para nuestra Patria y para el mundo
entero.
No debemos admitir nada contrario a la Religión que nos han infundido nuestros padres. Recordemos
lo que un compañerito nuestro traía en un cartelón en reciente manifestación: “PARA QUITARNOS LA
FE ES NECESARIO QUE NOS QUITEN LA VIDA. AQUÍ ESTAMOS”. Unámonos, Condiscípulos, no
olvidando que en la unión está la fuerza.
No vayamos a las escuelas, si las Autoridades no conceden lo que nuestros padres, con toda justicia
piden.
Orizaba, Ver., marzo de 1937.
La Comisión Estudiantil.443
No se explicará la educación socialista en este trabajo, pero se muestran esos
comunicados para que se tenga una idea de cómo se encontraban las circunstancias,
esto muestra que la apertura de los templos fue pedida por los católicos tanto civiles,
obreros y estudiantes. Para marzo se celebraba Semana Santa y el cura José María
Flores pedía su inscripción como párroco de la ciudad, la contestación del gobierno
veracruzano fue que debido a las manifestaciones de los católicos y actos de desorden
no estaba dispuesto a tolerar más desobediencia y violencia.444
En esta investigación se utilizaron las notas periódicas, debido a que la prensa era
el medio fundamental para saber los acontecimientos que acaecían, se debe tener
cuidado con la información que estos periódicos manejan ya que suele suceder que se
exagere con la notica. Este fue el motivo para que el presidente municipal de Orizaba
hiciera un llamado al director del periódico Los Sucesos para desmentir la noticia “que
hubo sermones y rosarios” publicada el 16 de marzo, el coronel Baltazar Treviño secundó
la acción del presidente.445
443
APO. S/C.
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Presidente del Concejo Municipal Jorge
Guapillo al C. Gobernador del Estado Miguel Alemán, Orizaba, 22 de marzo de 1937; Ibíd., del Secretario de Gobierno
Lic. Fernando Casas Alemán al C. Presidente del Concejo Municipal, Jalapa-Enríquez, 27 de marzo de 1937.
445
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Acuse de recibido, México, 19 de marzo de
1937; Ibíd., del Coronel Baltazar Treviño Sepúlveda, al Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 22 de marzo de
1937.
444
192
Las noticias que se investigaron fueron a partir del 7 de febrero de 1937, también
de años anteriores, pero con minucioso cuidado para no desvirtuar la información. A partir
de febrero de 1937 el periódico Los Sucesos publicó varias notas referentes a la situación
religiosa en Orizaba y en el estado. Un problema se presentó el 9 de abril de 1932, cuando
el periódico Pro-Paria publicó una nota diciendo que su homólogo Los Sucesos debía de
tener cuidado para informar a sus lectores.446 Los Sucesos tiene información
prácticamente a diaria sobre la situación política-religiosa a finales de los treinta.
4.4.1 Rumbo a la reconciliación entre el Estado y la Iglesia en Orizaba
Desde que los grupos católicos se movilizaron para abrir los templos y exigir que la Ley
197 fuera derogada, el gobierno respondió que todo sería por la vía legal y castigarían a
quienes resultaran culpables. El ejemplo de Orizaba se propagó por toda la diócesis
donde varios grupos católicos dieron su apoyo y respaldo, en ese momento el gobierno
se percató de la magnitud del movimiento y pidió al obispo Rafael Guízar y Valencia que
intercediera para que pusiera orden.447 El 2 de marzo de 1937 el obispo se dirigió a Luis
de Velasco448 mediante una carta, explicaba la situación religiosa que se vivía en
Veracruz y le sugería un plan para la apertura de los templos, Guízar junto con los otros
tres obispos escribían a las secretarías de Hacienda, Gobernación y al gobernador Miguel
Alemán Valdés solicitando la apertura de los templos:
El pueblo está sumamente excitado, tomando como base que en el resto de la República todos los
gobernadores han sio ya benignos, facilitando ampliamente el culto católico, y que sólo en el Estado de
Veracruz son oprimidos en una forma tal, que hasta la fecha no se les ha concedido en forma legal que
se abra ningún templo no la inscripción de un solo sacerdote para que ejerza su ministerio con toda
libertad. Como vera usted, por todo lo expuesto, mi situación es muy delicada, y sólo en lo privado he
estado haciendo muchas gestiones para calmar al pueblo; pero lejos de conseguirlo el incendio va
cundiendo de día en día, por lo que he creído que estoy muy lejos de conseguir lo que me propongo, o
sea que venga la calma para continuar tratando nuestro asunto religioso con las autoridades civiles.449
La respuesta que dio Luis Velasco fue que Miguel Alemán aceptó el plan del obispo
Guízar mediante la intervención de su cuñado (Luis Velasco); había tensión sobre la
situación de los templos por lo que se recomendó “prudencia” al momento de la entrega
446
AMO-Hemeroteca. Periódico Pro-Paria, Orizaba, 9 de abril de 1932, No. 565, p. 1.
ANOTNIO. “Doy mi vida”, Op. Cit., 1995, pp. 209-210.
448
En otras obras como la de Mario Raúl Mijares Sánchez se menciona únicamente como “Luis Velasco”, hermano
de Beatriz Velasco, esposa de Miguel Alemán Valdés.
449
BÁEZ. “Los aristas…” Op. Cit., 2006, pp. 228-229.
447
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a las juntas vecinales, se debía esperar que la custodia de los inmuebles fuera entregada
por la Secretaría de Hacienda, mientras que el número de sacerdotes autorizados era
determinado por la Legislatura del Estado; el obispo no pudo evitar la corrupción en el
estado y temía que fuera aprovechado por la situación, informaba en una carta:
Tacuba, D. F. abril 6 de 1937
Sr. Canónigo D. José María Flores.
Orizaba, Ver.
Muy amado Sr. Cango.:
Estuvo en ésta a visitarme, el Sr. Lic. Manuel Limón Maciel, jefe de los servicios confidenciales del
Estado de Veracruz, ofreciéndome su cooperación para que se reanude el Culto en el referido Estado.
Agradecí al Sr. Lic. muchísimo sus magníficos deseos, rogándole que interpusiera su valiosa influencia
para que nuestros asuntos terminen con feliz éxito.
Me indicó que necesitaría algunos fondos para gastos y le contesté por medio del Sr. Ingeniero Lainé,
esclareciéndole mi situación financiera, la que me imposibilita para ello; pero a la vez le hice saber que,
si por su conducto y sus ayudantes logramos restablecer el Culto público que debemos a Dios Nuestro
Señor, pasado un mes de la reanudación, nos cotizaremos todos los eclesiásticos, con la reserva que
el caso requiere para darles una ayuda pecunaria.
Quiera Dios Nuestro Señor que en la cooperación del Sr. Lic. Logremos nuestro deseado fin.
Dios colme a S. S. (su señoría) de bendiciones y le llene de su santo amor.
+Rafael
Obispo de Veracruz450
Aunque Rafael Guízar se encontraba en la ciudad de México, se mantenía informado de
la situación en Veracruz, la correspondencia entre los sacerdotes fue importante para
saber cuáles eran las decisiones que se tomaban desde el momento en que inició la ley
antirreligiosa en los años veinte hasta los años treinta. No obstante la familia de Beatriz
Velasco intervendría para apoyar la causa del obispo de Veracruz, se tenía que esperar
cuál era la decisión del gobernador.
Hubo problemas para que la sede diocesana no permaneciera en Xalapa, por lo
que a través de gestiones se logró que por un tiempo lo fuera Orizaba; Guízar pidió al
cura Flores de instruir a los sacerdotes de la diócesis a fin de que se pidiera a los
diputados del Congreso Local que se ampliara el número de sacerdotes que deberían
inscribirse. El obispo no pudo inscribirse, por lo que se dirige a Luis Velasco para
entregarle una carta a Miguel Alemán:
La inmensa mayoría de los obispos están ya trabajando en sus respectivas diócesis y yo aún estoy en
el destierro, por lo que ruego a usted haga uso de su valiosa influencia, para conseguir que el Sr.
Gobernador facilite mi inscripción, como lo hicieran en Chihuahua tratándose de mi hermano, quien ya
está autorizado para ejercer su ministerio en todo el Estado; si esto no se consigue, que se me inscriba
450
Ibíd. pp. 229-231.
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como a uno de los trece sacerdotes que concede la ley; pero lo primero será mejor para mí, porque así
podré llevar más almas al cielo.451
Lamentablemente no se encontraron los nombres de los sacerdotes que podían oficiar
en Orizaba ni su registro ante las autoridades; sin embargo, podrían haber sido los
sacerdotes que se inscribieron desde la “Ley Calles”. A pesar de que el conflicto religioso
iba en camino a una solución en la entidad veracruzana, los políticos siguieron ejerciendo
los lineamientos de la Constitución en cuanto a la práctica de cultos.
El obispo Rafael Guízar y Valencia llegó a Xalapa el 5 de agosto de 1937, ese
mismo día se entrevista con el gobernador Alemán el cual le pidió que moderara su
participación en la vida pública; en la obra de Jorge Félix se menciona que el obispo ya
había bautizado a una hija el gobernador. La cercanía que tuvo el obispo con el
mandatario estatal se debió a la amistad que tenía con el hermano de su esposa Beatriz,
Luis Velasco, esto ayudó a acercarse para que trataran los asuntos políticos-religiosos.452
Félix Báez expone que la carta dirigida al gobernador Alemán no tuvo buenos resultados:
“Ya fines de agosto de 1937 pudo el Sr. Guízar regresar a Jalapa y después de múltiples gestiones se
abrió al culto la Catedral, pues los señores del mandil (prenda de la indumentaria simbólica utilizada por
los masones) pusieron multitud de trabas. Abierta al culto de la Catedral, se inscribieron los Sres. Mesa
como párroco, don Daniel y don Miguel como párroco auxiliar. Al Siervo de Dios no le fue permitido
inscribirse en Jalapa, y para evitarse mayores complicaciones, optó por mantenerse aislado en la casa
que servía de obispado. A pesar de su prudencia y ocultamiento, no logró evadir las molestias que
habían resuelto ocasionarle. Sucedió que determinados empleados del Gobierno, insidiosamente le
rogaron que administrara la confirmación a una criatura. Estos mismos acusaron y se impuso grave
multa que tuvo que pagar con gran regocijo de los pillos empleados, que comentaban alegremente: ‘Ya
tenemos para la parranda del 15 de septiembre’”.453
Esto podría interpretarse de que el gobierno no tenía interés por entregar los templos o
que el clero tenía que mantenerse al margen, los católicos siguieron buscando una
solución, el obispo, con la ayuda de la familia de Beatriz Velasco hacía lo mismo para
influir en la persona del gobernador. Durante el mes de septiembre de 1937 los católicos
empezaron a abrir los templos, la justificación fue que los vecinos cumplían con los
lineamientos y daban el mantenimiento que acordaron con el gobierno.454
451
Ibíd. pp. 232-233.
MIJARES. “El gobierno de Miguel Alemán Valdés…” Op. Cit., 2012, p. 184.
453
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, pp. 333-334.
454
MIJARES. “El gobierno de Miguel Alemán Valdés…”, Op. Cit., 2012, p. 193
452
195
Sin embargo, ante la dificultad que se le presentó a Rafael Guízar, éste junto con
los representantes católicos decidieron establecer la diócesis en Coatepec como sede
provisional, esto no duró mucho debido a que la Jefatura Eclesiástica de Xalapa ordenó
que el asiento de la sede sea Xalapa, porque no podía estar en otra ciudad; 455 el 11 de
noviembre se terminaría oficialmente el conflicto entre la Iglesia y el Estado en Veracruz.
El obispo escribió el 12 de enero de 1938 sobre este acontecimiento:
Por la infinita misericordia de Dios se ha establecido ya el culto público en nuestra amada Diócesis,
disfrutando nuestros sacerdotes de relativa libertad para ejercer su santo ministerio, por lo que creído
conveniente reorganizar nuestra Curia Diocesana y darla a conocer al venerable clero de esta
Diócesis.456
Asimismo el obispo anunciaba la reorganización de la diócesis de la siguiente manera:
“Vicario General y Provisor, Sr. Canónigo Lic. D. Pedro Castillo y Landa; Secretario de la
Sagrada Mitra, Sr. Cura D. Miguel Mesa; Promotor Fiscal, Sr. Cura D. Luis G. Mora;
Defensor del Vínculo, Sr. Canónigo D. Justino de la Mora; Examinadores Sinodales, Sres.
Canónigos Daniel Mesa, José Manuel Flores y Justino de la Mora y Sres. Curas D. Miguel
Mesa, D. Luis G. Mora, D. Ignacio Lehonor y D. Enrique Trejo; Jueces Sinodales, Sres.
Canónigos D. Daniel Mesa y D. José María Flores y Sres. Curas D. Ignacio Lehonor y D.
Luis G. Mora; Párrocos Consultores, Sr. Canónigo D. Daniel Mesa y Sres. Curas D. Luis
G. Mora, José Olivares e Ignacio Lehonor; Diputados de Disciplina para el Seminario, Sr.
Canónigo D. José María Flores y Sr. Cura D. Prudencio Ortiz e Ignacio Díaz.”457
A pesar de que los templos se abrirían y el conflicto terminaría, los masones de
Orizaba acusaron a los católicos de pretender asaltar los Templos de las Logias
Masónicas el 20 de noviembre. Los masones pensaban que debido al fanatismo se
llevaría a cabo y pidieron a las autoridades garantías en caso de que se efectuara el
asalto; es así como se gira el comunicado a la policía municipal para que ésta ordene
vigilancia a los templos masónicos.458
455
BÁEZ. p. 334; MIJARES. p. 193.
BÁEZ. p. 334.
457
BÁEZ. 2006, p. 334.
458
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Gran Maestro Roberto Sierra al C.
Presidente Municipal, Orizaba, 15 de noviembre de 1937; Ibíd., del Presidente del Concejo Municipal al C. Inspector
Gral. de Policía, Orizaba, 17 de noviembre de 1937.
456
196
En el estado de Veracruz los templos fueron abiertos al culto en noviembre de
1937, ante esto, Mijares Sánchez apuntó que la fortaleza del gobierno de Miguel Alemán
estuvo cimentado en el buen manejo que realizó sobre el problema religioso.459 El obispo
Guízar y Valencia escribió en enero de 1938: “Por la infinita misericordia de Dios se ha
establecido ya el culto público en nuestra amada Diócesis, disfrutando nuestros
sacerdotes de relativa libertad para ejercer su santo ministerio, por lo que he creído
conveniente reorganizar nuestra Curia Diocesana y darla a conocer al venerable clero de
esta Diócesis.”460 También tuvo mucho que ver las relaciones entre el obispo de Veracruz
con la familia del gobernador Alemán, gracias a la intervención que hicieron Luis y Beatriz
se logró unificar el conflicto y buscaron una solución a la crisis religiosa.
Ésta fue otra de las causas que ayudaron al conflicto político-religioso que se vivía
en Veracruz, tanto Rafael Guízar como su hermano Prudencio, conocían al padre de
Beatriz, así como la amistad que sostenían con sus hijos, entre ellos Luis, quien fue
intermediario entre el gobernador y el obispo. Otro factor importante fue la relación
amistosa entre Miguel Alemán Valdés y el padre Rafael Rúa Álvarez, quienes fueron
compañeros de escuela en Orizaba por lo que su influencia también pudo haber
ayudado.461
El padre Rafael Rúa era conocido en el estado de Veracruz por su afán de
resistencia ante la Ley Tejeda, ejercía un liderazgo y se convirtió en un personaje
prominente entre los orizabeños; se destacó entre los obreros y el líder obrero Daniel
Sierra Rivera dijo que debido a la amistad entre Rúa y el gobernador se beneficiaron tanto
la sociedad como los trabajadores, pero no solo de Orizaba, también de Río Blanco,
Nogales, Mendoza y los alrededores. Recordaremos que en esa época estaba el conflicto
intergremial y el padre Rúa intercedía para que no se derramara más sangre, tal fue su
influencia que en el sepelio de su madre, 17 de mayo de 1941, los obreros de la región
lo acompañaron y juraron no volver a derramar sangre humana.462
459
MIJARES. “El gobierno de Miguel Alemán Valdés…”, Op. Cit., 2012, p. 198.
BÁEZ Jorge, Félix. “El poder y los instrumentos de la fe (San Rafael Guízar y Valencia en el entramado del
catolicismo social)” en Revista Ulúa No. 22, julio-diciembre 2013, Universidad Veracruzana, 2014, Xalapa, p. 162.
461
BÁEZ. “Los aristas…”, Op. Cit., 2006, pp. 315-316, 319.
462
Ibíd. p. 310.
460
197
A finales del año 1937 los templos permanecían cerrados, no había indicios de que
el gobierno los entregaba, la Ley Tejeda –ya levantada– parecía seguir vigente. Ante esta
situación, nuevamente los protestantes mostraban estar sujetos a las leyes del Estado,
ahora se presentaba una petición al gobierno por parte del Pastor Evangélico Lutero
Gotthelf Federico Fraustadt en la cual decía que casaría a la señorita Ilse Dorn, hija de
George Dorn, dueño de la “Botica Alemana” ubicada en la calle Poniente 7 No. 53, Ilse
contraría nupcias con el señor Walter Meyer-Wendt, dicha ceremonia sería celebrada en
el Templo de la Santísima Trinidad en el mes de enero de 1938.463
Dicha solicitud fue girada al gobernador veracruzano para que decidiera si se le
concedía el permiso, la respuesta fue favorable, pero se hacía énfasis de que por esa
única vez el Pastor Evangélico Fraustadt oficiaría la ceremonia el día 28 de enero de
1938 en el templo mencionado.464 La declaración que dio el gobierno pudo haber sido
porque Fraustadt no era el pastor a cargo del templo evangélico, por lo que solo se
encargaría de oficiar la boda y nada más; el registro de los ministros fue un requisito y
sólo ellos se encargarían de los actos en sus respectivos templos, pero al parecer hubo
ciertas excepciones siempre y cuando lo solicitaran a las autoridades.
Por otro lado, a mediados de 1938 ocurre una tragedia que marcó a los católicos
de Veracruz y del país, el obispo Rafael Guízar y Valencia falleció en la ciudad de México
el 6 de junio –coincidiendo con la fecha de la promulgación de la ley anticlerical–. El
cortejo fúnebre partió rumbo a Xalapa el día 7, en Perote y Banderilla fue recibido por
miles de feligreses; las autoridades civiles prohibieron manifestaciones, rezos cantos y
luces, por lo que el canónigo Pedro Castillo y Landa pidió que se acataran esas
disposiciones para evitar enfrentamientos con el gobierno.465 En Orizaba, los feligreses
463
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. De G. Dorn al C. Horacio Xoxhihua Presidente
del H. Consejo Municipal, Orizaba, 23 de diciembre de 1937.
464
AMO. Ramo Gobierno, Personal, Correspondencia. C.-747, Exp. 37. Del Presidente del Concejo Municipal al C.
Gobernador Constitucional del Estado, Orizaba, 27 de diciembre de 1937; Ibíd. Del Presidente del Concejo Municipal
Edmundo Durán al Sr. Jorge Dorn, Orizaba, 19 de enero de 1938.
465
ANTONIO Peñalosa, Joaquín. “Llama de amor viva” en Rafael Guízar a sus órdenes, Ed. Rafael Guízar y Valencia,
Xalapa, 1995, p. 245; ANTONIO. “La última misión”, Ibíd., pp. 249-252.
198
pidieron permiso a las autoridades para que los negocios cerraran por dos horas, de las
diez a las doce del día como señal de luto.466
El día 8 de junio el cuerpo del obispo Rafael Guízar fue trasladado al cementerio
de la ciudad de Xalapa, miles de devotos se unieron a la marcha antes de enterrarlo se
detuvieron enfrente del Palacio de Gobierno y gritaron: “Viva el señor obispo, viva el
Papa, viva la Virgen de Guadalupe” –“¡Viva!”.467 Estas acciones se podrían tomar como
resistencia a las leyes del Estado en contra del clero, aunque la ley fue levantada en 1937
seguían defendiendo su fe.
Se creyó que con la muerte de Rafael Guízar y Valencia la Iglesia esperaba que
el gobernador Miguel Alemán apresurara la apertura.468 Durante 1937 y 1940, el
presidente Lázaro Cárdenas buscó una política conciliatoria para que diera fin al conflicto
político-religioso en Veracruz, por otro lado se encontraba la indiferencia del gobernador
Miguel Alemán, aun así, poco a poco el anticlericalismo en el estado comenzó a
disminuir.469 Se llevó un tiempo para llegar a un arreglo.
Durante los siguientes meses de 1938 algunos templos permanecían cerrados, el
gobierno no los entregó inmediatamente a pesar de la muerte del obispo Rafael Guízar,
los problemas siguieron presentándose entre los católicos orizabeños, las autoridades
municipales y el gobierno veracruzano. Hasta 1939 los inconvenientes seguían presentes
y las juntas pedían los templos para su resguardo. El problema se fue serenando poco a
poco hasta la salida de Lázaro Cárdenas y la llegada de Manuel Ávila Camacho a la
presidencia de México.
Un problema que se presentó en Orizaba fue en marzo de 1938, un grupo de 15
católicos llegaron a la casa con No. 1 de la calle Norte 2, quienes se dirigieron al señor
Mauro Dondé, quien arrendaba el inmueble, le pedían la casa en virtud de que se trataba
de un anexo del templo de San Miguel. El inquilino Dondé alegó que al ser parte de un
Bien Nacional tenía un contrato ante la Federación y sólo ésta podría pedir el desalojo de
466
AMO-Hemeroteca. Periódico Los Sucesos, Orizaba, 7 de junio de 1938, No. 2, p. 1.
ANTONIO. “La última misión”, Op. Cit., pp. 253-254.
468
MIJARES. “El gobierno de Miguel Alemán Valdés…” Op. Cit., 2012, p. 208.
469
WILLIMAN. “La Iglesia y el Estado en Veracruz y el nuevo modus vivendi”, Op. Cit., 1976, p. 172.
467
199
la casa, los creyentes no aceptaron eso y dieron plazo de un día para que fuera
desocupada y de no hacerlo usarían la fuerza, se hizo un acta correspondiente donde se
exponía la situación a fin de que intervinieran las autoridades.470
Los inmuebles eclesiásticos seguían a resguardo de los Bienes Nacionales,
dependiente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, los católicos peleaban que
todos regresaran al clero. Sin embargo, esto fue tardado debido a que algunos eran
ocupados tanto por civiles como por el gobierno para diversos usos; otro ejemplo fue el
caso del templo de San José de Gracia, un grupo de católicos repartieron volantes
invitando a apoderarse de aquél templo, que era ocupado por la Junta Local de Caminos
y que tenía instalado un taller mecánico, ésta Junta pidió a las autoridades garantías ya
que los católicos no se habían dirigido al Departamento de Bienes Nacionales, encargada
de resolver ese problema.471 Uno de los volantes que circulaba decía lo siguiente:
¡PUEBLO CATÓLICO!
Se recuerda que este LUNES 27 del presente mes de Junio (Dios mediante), a las 11 de la mañana,
estaremos todos reunidos en las afueras de San José de Gracia, con el fin de lanzar a los mercaderes
del Templo.
“LA 3a ORDEN DE SAN FRANCISCO,”
pues lo sabemos que están profanando un lugar Sagrado, al igual como El mismo Nuestro Señor nos
enseñó lanzando a los profanadores de su Templo.
Como Católicos no debemos tolerar el que se ofendan nuestros más sagrados ideales, siendo celosos
para el respeto general en nuestras creencias y sus propiedades.
ORIZABA, VER., JUNIO 26 DE 1938.
LOS CATÓLICOS ORIZABEÑOS
Una vez leída esta nota pásela a sus amistades.472
Un año después de las grandes manifestaciones que se llevaron a cabo tras la muerte
de Leonor Sánchez, los templos parecían seguir bajo la custodia del gobierno. Aun así,
parecía que algunos habitantes de Orizaba seguían apoyando al gobierno, como se
mostró en una misiva donde algunos pidieron al Presidente Municipal que no aprobara
470
AMO. Ramo Gobierno, Sindicato, Correspondencia. C.-810, Exp. 46. Del Jefe de la Oficina Blas Camacho al C.
Comandante del 3er. Batallón, Orizaba, 12 de marzo de 1938.
471
AMO. Ramo Gobierno, Sindicato, Correspondencia. C.-810, Exp. 46. Del Secretario de la Junta Local de Caminos
Eduardo Ramos Millán al C. Gral. Edmundo Durán Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 23 de junio de 1938.
472
AMO. Ramo Gobierno, Sindicato, Correspondencia. C.-810, Exp. 46.
200
una reunión donde tratarían asuntos religiosos, argumentando que el interés público
estaba de por medio y podrían originar males que deben prevenirse.473
Los católicos seguían dirigiéndose a las autoridades municipales para pedir
permisos para alguna festividad religiosa, nuevamente se trató de la celebración de la
“aparición” de la Virgen de Guadalupe. Algunos vecinos de Orizaba se dirigieron a la
autoridad municipal para que les fuera concedido tales celebraciones que consistían de
mañanitas, música, cuetes, banderas y farolitos los días 11 y 12 de diciembre, se
realizarían en el atrio de la Parroquia de San Miguel.474
La respuesta del gobierno de Orizaba fue favorable para los vecinos, pero a su vez
se les dijo que debían evitar toda violación de la ley de cultos, siendo ellos los únicos
responsables de cualquier accidente que se presentara al quemar los cuetes. 475 La
respuesta que dio el presidente de Orizaba daba a entender que la mencionada ley
antirreligiosa seguía vigente, si los católicos la desobedecían eran consignados ante las
autoridades, tenían que pedir los permisos correspondientes; la ley fue levantada de
palabra pero no en la práctica.
Conforme transcurría el tiempo se presentaron más hechos sobre la situación de
los templos católicos en Orizaba, todo se hacía acorde a la ley mediante solicitudes y
expedientes de los interesados a las autoridades, al menos por parte de los feligreses;
por otro lado, el gobierno decidía si favorecía o no las demandas que se les presentaban.
Ya en 1939, se volvió a solicitar formación de una nueva junta vecinal para el templo de
El Carmen, alegando que la anterior estaba desintegrada, los nuevos miembros elaboran
un acta estipulando a los nuevos integrantes:
473
AMO. Ramo Gobierno, Sindicato, Correspondencia. C.-810, Exp. 46. Manuel Durán, José María Luna Gómez,
Antonio Báez, Rafael Hernández y otros firmantes al C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 20 de julio de
1938.
474
AMO. Ramo Gobierno, Sindicato, Correspondencia. C.-810, Exp. 46. De Rafael Porras, Manuel González, Francisco
Martínez y otros formantes al C. Presidente del H. Concejo Municipal Lic. Rafael Murillo Vidal, Orizaba, 15 de
noviembre de 1938.
475
AMO. Ramo Gobierno, Sindicato, Correspondencia. C.-810, Exp. 46. Del Presidente del H. Concejo Municipal Lic.
Rafael Murillo Vidal a los CC. Rafael Porras, Manuel González, Francisco Martínez y demás signatarios, Orizaba, 17 de
noviembre de 1938.
201
Tabla 3. Nueva Junta Vecinal del Templo El Carmen
José Ricardo Trujillo
Bernabé Camiro
Alfredo Aguilar
Severiano Plascencia - Joaquín Romero
Eulogio Benítez
David Torres Sánchez
Mario P. Sánchez
Fidencio Mendoza
José Rosas
Matías Ramírez
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Miembros de la nueva Junta Vecinal
formada el 26 de agosto de 1939 en Orizaba.
La notificación fue girada al presidente municipal y ahí mismo se expresó que también se
le avisó a la Oficina Federal de Hacienda de Orizaba; los miembros de la nueva junta
pedían que se aprobara la demanda para tomar posesión del templo y cuidarlo,
cumpliendo con todos los preceptos de la ley.476 A los días de haberse dado a conocer la
nueva junta, surgieron unos inconvenientes como la revocación de Severiano Plascencia
que él mismo pidió debido a problemas de salud, para que fuera relevado de su cargo
tuvo que notificar a las autoridades y fue sustituido por Joaquín Romero.477
El señor Joaquín Romero fue propuesto por la autoridad civil para ser ocupar el
lugar de Severiano Plascencia; asimismo, la Oficina de Hacienda dio a conocer mediante
una carta que los vecinos del tempo El Carmen, que pedían al señor Plascencia su
renuncia, ahora decían que permaneciera en su cargo, siendo que ellos mismos se
comprometían a cubrir los gastos de sus curaciones. Ante esto, se pidió al Presidente de
Orizaba y demás autoridades competentes dejarlo en su puesto. 478 Tal petición fue
tomada en cuenta y Severiano Plascencia siguió como miembro de la junta.
476
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. De Joaquín Romero, José Ricardo Trujillo al C.
Presidente de la Admón. Civil, Orizaba, 29 de agosto de 1930; Ibíd. Acta de la formación de la Junta Vecinal en Orizaba,
26 de agosto de 1939.
477
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Del Jefe de la Oficina de Hacienda Alfredo Andreu
Almazán al C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 30 de agosto de 1939; Ibíd. Del Presidente del Concejo
Municipal Armando Martínez Acosta al C. Jefe de Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 01 de septiembre de 1939.
478
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Del Presidente del Concejo Municipal Armando
Martínez Acosta al C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 1 de septiembre de 1939; Ibíd. Del Jefe de la
Oficina de Hacienda Alfredo Andreu Almazán al C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 4 de septiembre de
1939.
202
Sin embargo, la Oficina Federal de Hacienda en Orizaba rechazó la solicitud de
José Ricardo Trujillo, la creación de la junta vecinal para el templo de El Carmen,
Hacienda dijo que la junta no tenía representación y no podía tomarse en cuenta, además
de que aquél templo fue uno de los que se tomaron a la fuerza por católicos; asimismo
se le dijo al Sr. Trujillo que debían dirigirse a la Secretaría de Gobernación para que
quedara legalizada tanto la apertura del templo como de la junta.479 Para 1940 Severiano
Plascencia tuvo problemas con el sacerdote, sacristán y otros vecinos del templo El
Carmen, la Oficina Federal de Hacienda tuvo que relevarlo de su cargo, entregando su
puesto al señor Francisco Barragán.480
En septiembre de 1939 la Oficina Federal de Hacienda pidió informes de la
situación del templo protestante La Santísima Trinidad, pedía que se describiera desde
cuándo suspendió las actividades religiosas, el comisionado para esta tarea fue Samuel
Marañón, quien explicó que el templo protestante suspendió sus actividades religiosas
desde hace 3 años, siendo el encargado el señor Reynaldo Ávila y éste hace gestiones
culturales en dicho recinto. Para saber del asunto se giraron oficios a las autoridades
pertinentes; cabe mencionar que en los documentos se estipula que la dirección del
templo La Santísima Trinidad es “Norte 3 No. 13”, habiendo analizado tal información no
se encontró en esa dirección, sino que se ubica en la calle “Sur 6”,481 a no ser que se
trate de otro templo con el mismo nombre.
Al parecer, la situación entre el Estado y la Iglesia ya no era crítica como en años
anteriores, pese a que la Ley Tejeda fue levantada el gobierno aun influía en el manejo
de los bienes eclesiásticos. No obstante, los católicos seguían dirigiéndose a las
autoridades civiles para el uso y manejos de las iglesias, esperando que les favorecieran
479
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Del Jefe de la Oficina de Hacienda Alfredo Andreu
Almazán al Sr. José Ricardo Trujillo y demás firmantes vecinos del templo El Carmen, Orizaba, 30 de agosto de 1939.
480
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia. C.-727, Exp. 11. Del Jefe de la Oficina Alfredo Andreu Almazán al
C. Severiano Plascencia, Orizaba, 13 de febrero de 1940; Ibíd. Del Jefe de la Oficina Alfredo Andreu Almazán al C.
Francisco Barragán, Orizaba, 13 de febrero de 1940.
481
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Del Jefe de la Oficina Alfredo Andreu Almazán al
C. Presidente Municipal, Orizaba, 25 de septiembre de 1939; Ibíd. Del Comisionado Samuel Marañón al C. Presidente
del H. Concejo Municipal, Orizaba, 27 de septiembre de 1939; Ibíd. Del Presidente del Concejo Municipal Armando
Martínez Acosta al C. Jefe de la Oficina Federal de Hacienda, Orizaba, 29 de septiembre de 1939.
203
sus peticiones, sin embargo, se notaba que el Estado aún tenía control sobre la
administración de los templos y los feligreses debían de sujetarse a su disposición.
La situación por saber las condiciones de los templos era importante, a finales de
1939 se giró una circular donde pedía informes del estado de los inmuebles, para saber
si se realizaron obras de construcción o reconstrucción.482 Ante esta petición se describió
lo siguiente:
Tabla 4. Descripción de los arreglos a los templos
Templo
La Concordia
San José de Gracia
Obra
Se están realizando obras
en una de las cúpulas,
parte de la bóveda, una
torre que levantarán y
arreglo de las paredes
Arreglos y blanqueo de las
paredes
Costo
$ 20,000.00
$ 500.00
Fuente: AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Informe de las obras a las iglesias, del Vocal
de Obras Públicas Carlos Gris al C. Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 24 de enero de 1940.
El informe sobre las obras de los templos le fue enviado al secretario de Gobierno del
Estado para su conocimiento.483 En diciembre de 1939, los protestantes se dirigieron al
presidente de Orizaba pidiendo la apertura del templo La Santísima Trinidad que desde
hace años permanecía cerrado al culto religioso, se estipuló que en 1935 el
Departamento de Bienes Nacionales expresó que no había inconveniente que el templo
reanudara el culto público siempre y cuando se llenen los requisitos de Gobernación, los
protestantes alegaban que tenían uno para todo el municipio de Orizaba, por lo que
solicitaban este otro para sus actividades religiosas.484 Desde 1935 la Ley de
482
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Circular No. 78, del Secretario de Gobierno Lic.
Carlos P. Carrión al C. Presidente de la H. Corporación Municipal, Jalapa-Enríquez, 16 de noviembre de 1939. Ibíd. Del
Presidente del Concejo Municipal Lic. Rafael Murillo Vidal al C. Vocal de Obras Públicas, Orizaba, 22 de noviembre de
1939.
483
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Del Presidente del Concejo Municipal Lic. Rafael
Murillo Vidal al C. Secretario de Gral. de Gobierno, Orizaba, 29 de enero de 1940.
484
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. De Pedro V. García al C. Presidente Municipal,
Orizaba, 20 de diciembre de 1939.
204
Nacionalización de Bienes del Clero se encontraba en vigor, siendo la Secretaría de
Educación quien los utilizaba como escuelas.485
El presidente municipal respondió que la solicitud le fue enviada al Secretario de
Gobernación para que resolviera la situación referente a la apertura del templo que los
protestantes expusieron, la autoridad federal informó que se dará a conocer
posteriormente la resolución.486 Al año siguiente, 1940, la situación del templo de La
Santísima Trinidad no tenía respuesta, Gobernación expresó que el tema sería tratado y
a su vez el gobierno del Estado de Veracruz informó a las autoridades de Orizaba que la
autoridad federal estaba al tanto de los hechos.487
Para el seguimiento de la situación del templo La Santísima Trinidad, el
comisionado giró un informe al presidente de Orizaba donde aludía que por los años
1924-1925 el templo fue cerrado, pero una parte del inmueble estaba destinado a una
escuela primara pero que fue clausurado en 1930, desde entonces la Oficina Federal de
Hacienda administró ese edificio y era ocupado por tres familias; Pedro V. García ocupó
un departamento contiguo al templo por ser el encargado de su cuidado. 488 La situación
parecía favorable para las personas que solicitaban la reapertura, la Secretaría de
Gobernación, a través del gobierno de Veracruz, se dirigió a las autoridades de Orizaba
para saber si no tenían ningún inconveniente en que se abriera nuevamente el templo, la
respuesta fue favorable para ser reanudado al culto.489
Hacia 1940 la mayoría de los templos en Orizaba fueron regresados al culto
católico y protestante, a pesar de que las autoridades civiles tardaron en devolverlos, los
485
MIJARES. “El gobierno de Miguel Alemán Valdés…” Op. Cit., 2012, p. 208.
AMO. Ramo Gobierno, Iglesias, Correspondencia. C.-727, Exp.10. Del Presidente del Concejo Municipal Lic. Rafael
Murillo Vidal al Sr. Pedro V. García, Orizaba, 21 de diciembre de 1939; Ibíd. Del Presidente del Concejo Municipal Lic.
Rafael Murillo Vidal al C. Secretario de Gobernación, Orizaba, 21 de diciembre de 1939; Ibíd. Del Jefe del
Departamento Lic. Euquerio Guerrero al Lic. Rafael Murillo Vidal, México, 12 de enero de 1939.
487
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia. C.-727, Exp. 11. Del Oficial Mayor de Gobierno Lic. Silvestre
Aguilar Jr. al C. Presidente del H. Concejo Municipal, Jalapa-Enríquez, 2 de febrero de 1940.
488
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia. C.-727, Exp. 11. Del Comisionado Samuel Marañón al C.
Presidente del H. Concejo Municipal, Orizaba, 4 de marzo de 1940; Ibíd. Del Presidente del Concejo Municipal Lic.
Rafael Murillo Vidal al C. Oficial Mayor de Gobierno, Orizaba, 12 de marzo de 1940; Ibíd. Del Secretario de Gobierno
Adolfo Ruiz Cortines al C. Secretario de Gobernación, Jalapa-Enríquez, 22 de marzo de 1940.
489
AMO. Ramo Gobierno, Iglesia, Correspondencia. C.-727, Exp. 11. Del Secretario de Gobierno Adolfo Ruz Cortines
al C. Presidente del Concejo Municipal, Jalapa, 17 de mayo de 1940; Ibíd. Del Presidente del Concejo Municipal Lic.
Rafael Murillo Vidal al C. Secretario de Gobierno, Orizaba, 14 de septiembre de 1940.
486
205
feligreses se mantuvieron firmes al solicitar los inmuebles para los usos que deseaban
darles. Además se apoyaban porque la ley anticlerical fue levantada, ellos consideraron
el derecho de pedirlos y hacer uso de ellos como mejor les pareciera; por lo menos uno
por uno esos templos fueron devueltos después del trámite correspondiente y todo
acorde a la ley.
También se contribuyó que los edificios eclesiásticos fueran entregados debido a
que el presidente Lázaro Cárdenas buscaba una conciliación entre los religiosos y su
gobierno, por lo que medió para que se llevara a cabo. Asimismo, gracias a la pericia del
gobernador Miguel Alemán y la relación entre la familia de su esposa Beatriz con el obispo
Rafael Guízar y Valencia, los católicos recibieron la noticia de la apertura de los templos.
Esto trajo consigo una nueva posibilidad de solucionar la crisis política-eclesiástica
que se había presentado años atrás. No solamente para el credo católico, sino también
para las otras religiones que se encontraban. De esta manera, poco a poco los curas
fueron regresando a los templos de Orizaba y la religión volvía a tener presencia en la
vida pública de los ciudadanos, el gobierno no tuvo otra opción que entregar los templos.
206
Conclusión
A pesar de que la Constitución de 1917 se encontraba vigente, no se exigió el
cumplimiento de las leyes en materia de cultos, al menos no de manera rigurosa,
manteniendo una forma de vida hasta cierto punto estable, eso fue aprovechado por la
Iglesia para seguir estando presente en la sociedad. Pero, en los años veinte se optó por
exigir el cumplimiento de todas las leyes y sancionar a quienes no las acataran: limitar a
los sacerdotes y confiscar sus bienes
En los años veinte y treinta del siglo XX el gobierno inició un proceso de
“desfanatizar” al pueblo mexicano, en parte debido a la presencia e influencia que tenía
la Iglesia Católica, no solo con la sociedad sino también en la política. La primera parte
fue durante el gobierno de Plutarco Elías Calles, que la ley de cultos se implementó de
manera federal, durante ese tiempo estalló una guerra que devastó ciertas regiones del
país.
La desfanatización del siglo XX consistió en limitar al clero, para lograrlo el
gobierno se apoyó en los lineamientos de la Constitución de 1917. Aprovechó los
artículos 3° y 130, entre otros para lograrlo, asimismo se valió de la educación para llegar
a las conciencias de los jóvenes. El gobierno veía mal la presencia del clero en la
sociedad, pues consideró que en vez de ir hacia el “progreso” permanecían en la
“ignorancia”. Esta situación no fue bien tomada por los católicos y decidieron
contraatacar, situación que llevó a una guerra que duraría tres años.
El proceso de desfanatización también fue llamado como “ley anticlerical”, esto se
entiende a que únicamente se vio afectada la religión católica, cabe hacer mención que
no fue así. Para igualar la situación, en esta investigación se le nombró “ley antirreligiosa”
a las acciones del gobierno en cuanto al proceso de desfanatizar, debido a que en México
y en Veracruz había distintas religiones que se profesaban. Por lo que la dicha ley fue
ejecutada para todas, aunque claro que siendo la mayoría católica, fueron estos quienes
se opusieron con más fuerza.
En ese tiempo Veracruz vivió dos leyes anticlericales, una a nivel federal y otra a
nivel estatal, la primera fu conocida como la “Ley Calles” y la segunda como la “Ley
207
Tejeda”. En ambas circunstancias el gobierno buscó una libertad de la Iglesia, que le
permitiera separarla en su totalidad de la sociedad. La diferencia en ambas leyes fue la
temporalidad, pero en la forma de ejecutarla siguió siendo básicamente la misma,
utilizaron los recursos a su alcance para ello.
La Ley Calles llegó a Orizaba en 1926 pero los templos comenzaron a cerrarse un
año después, el gobierno veracruzano pidió el cumplimiento de la Constitución por lo que
las autoridades municipales debieron acatar las órdenes provenientes del presidente de
la república. Sin embargo, la situación en Orizaba fue un tanto distinta al de la zona
centro-occidente del país. A pesar de que los católicos veracruzanos se opusieron a la
ley de cultos, no estalló una guerra.
El escenario era otro, a pesar de que en el estado de Veracruz también había
mayoría católica, se pudo evitar que la guerra estallara debido a la presencia del obispo
Rafael Guízar y Valencia, quien fue su líder “espiritual” en esta contienda, desde que la
ley fue promulgada pidió que no se tomaran las armas y se obedeciera, sin embargo su
modo de resistencia fue distinta, se practicaron los cultos clandestinos, que consistieron
en que los sacerdotes oficiaran en casas particulares para que no fueran descubiertos
por el gobierno.
Aunque no hubo una “guerra cristera” en el estado de Veracruz, muchos de los
curas fueron perseguidos, incluido el obispo, por lo que optaron en esconderse entre la
sociedad y moviéndose de lugar. Algunos católicos apoyaron a esos curas prestando sus
casas para que ahí se llevaran a cabo las misas, incluso para que se hospedaran,
después de un tiempo tenían que irse a otro lado para evitar ser arrestado. De esta
manera algunos curas no lograron ser detenidos, sin embargo, las autoridades
anunciaron que aquellos que desobedecía la ley serían sancionados, ante esto, los
católicos de Orizaba se vieron forzados a denunciar las actividades religiosas que se
practicaban fuera de la ley. Además, la vigilancia por parte de las autoridades municipales
incrementó y cuidaban de que no se infringiera la Constitución.
La resistencia que se dio en Orizaba hacia la Ley Calles fue “pacífica”, pero esto
no evitó que existieran enfrentamientos tanto en la ciudad como en otros puntos del
estado de Veracruz. Para seguir con el cumplimiento de esa ley el gobierno tomó en
208
cuenta las organizaciones obreras a través de la CROM, gracias a ello los sindicatos
ayudaron a su cumplimiento, pues de acuerdo a su pensamiento, el proletariado podía
llevar al país a mejores condiciones de vida.
Para que la ley anticlerical se cumpliera destacó la participación de Adalberto
Tejeda, quien desde la ciudad de México y como parte del gabinete callista, mantuvo su
influencia en la política veracruzana. De este modo Veracruz, junto con otros estados, se
ejerció la ley. Sin embargo, Tejeda desaprobó los arreglos de 1929 entre el gobierno
mexicano y el clero, lo que dio origen a otro enfrentamiento entre estos poco tiempo
después.
Adalberto Tejeda llegó a la gubernatura de Veracruz para un segundo periodo en
1928, en ese momento la Ley Calles se encontraba vigente, pero con los arreglos del 29
esto cambiaría. A pesar de su postura, Tejeda tuvo que entregar los templos en la
entidad, en Orizaba se entregaron los templos y los católicos empezaban a regresar a su
credo en el ambiente público. Esto cambió para 1932, cuando el gobernador decide
implementar su ley antirreligiosa.
La radicalidad del gobernador Tejeda era conocida, cuando la ley antirreligiosa es
aprobada se da la orden de que los sacerdotes se registraran nuevamente ante un padrón
y se decidieron cuántos debía de haber, asimismo los templos volvieron a cerrarse y
fueron confiscados por el gobierno. El gobierno federal mantenía una postura donde no
apoyaba la decisión del gobernador veracruzano, pero terminó diciendo que respetaba la
soberanía de los estados.
Al momento de que se ejerce la ley de cultos, el gobierno (federal y estatal) pidió
la formación de juntas vecinales, integrada por diez miembros, quienes se encargarían
del cuidado, mantenimiento y vigilancia de los inmuebles religiosos, estos eran
nombrados por las autoridades civiles y debían de registrarse ante ellos. De igual manera
se pidió que los templos debían de conservarse al ser considerados joyas
arquitectónicas, el cuidado de los templos fue minucioso y el encargado de eso fue la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público a través del Departamento de Bienes
Nacionales.
209
El camino de la lucha de la ley de cultos en Veracruz pareció haber sido la legal,
el obispo Guízar y el sacerdote Rúa buscaron los amparos para que los clérigos no fueran
detenidos y siguieran oficiando. Esto descontentó al gobierno ya que repudiaba que los
curas se refugiaran mediante la ley, debido a que desde un principio desconocían la
Constitución y después se respaldaban en ella para no ser detenidos. El gobierno
veracruzano hizo lo posible porque los amparos no fueran otorgados, pero algunos jueces
favorecieron su entrega.
Orizaba se caracterizó por las industrias que se establecieron, congregando a un
gran número de obreros junto con Xalapa y Veracruz. Gracias a eso la organización
sindical fue favorable y el gobierno se alió con ellos para lograr sus cometidos, asimismo
parte del gremio obrero ocuparon la presidencia municipal de Orizaba, conformando así
un bastión importante tanto para Veracruz como para México. Los obreros, que buscaban
el bienestar de la sociedad secundaron la ley de cultos, con tal de liberar a la sociedad
de la influencia del clero.
Sin embargo, la ley anticlerical compartió temporalidad con el movimiento obrero
en Veracruz, cuando la CROM comenzó a decaer y los obreros buscaron más autonomía,
esto llevó a grandes pugnas inter sindicales por el control de las masas obreras, el
gobierno tuvo que buscar una solución ante estos hechos; surgió una nueva agrupación
sindical: la CTM, que inmediatamente tuvo poder y apoyo de algunos sindicatos que se
salieron de su contraparte para adherírseles.
A diferencia de la Ley Calles, la Ley Tejeda duró más tiempo, hubo diferentes
gobernadores que siguieron cumpliéndola y se prolongó hasta 1937.En ese año ocurrió
una tragedia que azotó a la ciudad de Orizaba, la muerte de Leonor Sánchez a manos
de un oficial de la policía municipal, ella era hija de un obrero de la ciudad. Este hecho
no solo indignó a los habitantes sino que también a los obreros, provocando grandes
manifestaciones que exigían la apertura de los templos y algunos fueron abiertos a la
fuerza. Las autoridades civiles argumentaron que sancionarían a los culpables, pero los
habitantes de Orizaba buscaban justicia por su propia mano; a quienes se encontraron
culpables fueron puestos ante las autoridades y recibieron su castigo, algunos fueron
exonerados al no encontrarse pruebas contundentes.
210
Esa coyuntura fue aprovechada por la población católica quienes empezaron a
manifestarse por las calles, lograron reunir a miles no sólo de Orizaba, sino de las
poblaciones cercanas. Se encontraba como gobernador Miguel Alemán Valdés y en su
visita a la ciudad dijo que debía cumplir con la ley de mantener los templos cerrados, pero
que se haría la investigación de los hechos, esto detonó el malestar de los orizabeños
católicos y siguieron abriendo los templos por la fuerza. El obispo Guízar volvió a tener
una participación porque conocía a la familia de la esposa del gobernador y esto ayudó
a un acercamiento entre ambas partes.
Asimismo, los obreros apoyaron las manifestaciones de los católicos porque
Leonor era hija de un obrero, entre las demandas que exigían era el castigo a los
culpables y la reapertura de los templos. Además, los obreros demostraban descontento
hacia sus líderes debido a que ya no cumplían con sus funciones de proteger al
proletariado, sino que buscaban sus intereses, esto motivó a que mostraran su apoyo
hacia los católicos indignados ante la desgracia que se presentó.
Ante la presión de los manifestantes, junto con las intermediaciones del obispo
Rafael Guízar y del cura Rafael Rúa en noviembre de 1937 la ley de cultos es levantada,
pero los templos no se entregaron inmediatamente, esto fue motivo de otras discusiones
entre los católicos y el gobierno, entre 1938 y 1940 los templos fueron entregados a
quienes los solicitaban. La situación empezaba a calmarse cuando los recintos religiosos
volvían al culto. Por otro lado, también marcó la influencia del sacerdote Rafael Rúa,
quien estuvo cerca de los obreros, pero también de la sociedad orizabeña, por lo que se
ganó el respeto de todos los habitantes. Gracias a esto, en el sepelio de la madre del
cura Rúa, los obreros manifestaron que ya no derramarían sangre de sus “hermanos”.
A pesar de que la ley ya había sido levantada, el gobierno aún prohibía actos
religiosos fuera de los templos, incluso algunos seguían cerrados. Esto quedó
demostrado en 1938, cuando el obispo Rafael Guízar y Valencia fallece, en el momento
en que es velado en la ciudad de Xalapa las autoridades piden que no haya
manifestaciones ni actos religiosos, para evitar enfrentamientos se acata tal disposición,
en Orizaba el comercio permaneció cerrado como señal de luto.
211
Durante las leyes anticlericales que se vivieron en el siglo XX no sólo los católicos
se vieron afectados, sino que también otras que estaban presentes en el país y en
Veracruz, la segunda como más presencia fue la protestante. Por un momento los
católicos los acusaron de favorecer la ley de cultos debido a que Plutarco Elías Calles
provenía del norte de México, donde esa religión tenía más fuerza que la católica en el
centro del país.
Pues bien, los protestantes también se vieron sujetas al artículo 130 y tuvieron que
acatarla, sin embargo hubo una diferencia que marcó las relaciones entre estos y el
gobierno. Desde que la ley antirreligiosa entró en vigor los protestantes comenzaron a
obedecer todas las disposiciones que se dictaban, esto ayudó que las relaciones entre
ambos fuera más cordial y menos violento que con sus semejantes católicos.
Los protestantes de Orizaba entregaron sus templos prácticamente sin oposición,
cualquier cosa que deseaban hacer avisaban a las autoridades y las relaciones fueron
más favorables para ellos. Los católicos tuvieron que ceder ante las presiones del
gobierno y de la misma manera pedían de manera legal sus demandas, en ocasiones les
fueron favorecidas y otras denegadas. Con el levantamiento de la Ley Tejeda se pensó
que la situación mejoraría.
Esto no fue así, aunque la ley ya estaba levantada en la práctica parecía lo
contrario, debido a que las relaciones entre los católicos y el gobierno siguió siendo la
misma, como si aún se encontraba en vigor. Después del conflicto religiosos los católicos
comenzaron a regresas a sus templos, las juntas vecinales se encargaron de la apertura
y buscaron por la vía legal que se abrieran lo más rápido posible. Por otro lado, la política
también cambió, porque tuvo que ser más tolerante ante la práctica religiosa.
La prensa, otro medio de información de la época también fue utilizada para
comprender el tema que abordo, pero noté que hubo un periódico donde a primera vista
exageraba las noticias, lo primero que concluí fue que pudo haber sido una manera de
llamar la atención y así lograr que se vendiera el periódico, por lo que tuve que compararlo
con otros de la época para comparar la misma noticia, en especial en el año de 1937
cuando surgen las manifestaciones en Orizaba por la apertura de templos. Este periódico
212
llamado Los Sucesos ya mostraba inconformidades desde años atrás, su contraparte
Pro-Paria le llamó la atención de que debía tener cuidado con las noticias.
Durante la elaboración de esta investigación encontré que la información llegó a
ser mal interpretada, en Pro-Paria del año de 1932 hallé fotografías donde se observan
a grupos de personas en Orizaba con pancartas frente a la parroquia de San Miguel,
algunos han atribuido a que son obreros apoyando a los católicos de la región, sin
embargo, los expedientes del archivo muestran que en esos años se llevó a cabo una
convención de la CROM, donde la sede fue Orizaba y de este modo hubo un gran número
afiliados a esa confederación, esto originó que se confundieran los acontecimientos.
213
Anexo
En este apartado se muestran algunas fotografías de los sucesos ocurridos en febrero
de 1937 tras el asesinato de Leonor Sánchez. Asimismo, al final se muestran unas
fotografías alusivas a reuniones obreras y que han sido tomadas por una mala
interpretación como apoyo de obreros hacia los católicos, pero en realidad se trataba de
una convención de la CROM celebrada en Orizaba en el año de 1932. De esta manera,
con la fotografía se puede tener una idea de lo que sucedía en dicha ciudad en aquellos
años, donde los católicos pedían al gobierno la reapertura de los templos clausurados
años atrás en diversas ocasiones.
Gracias a la fuente fotográfica podemos “ver” cuáles eran los acontecimientos más
importantes que sucedían en determinado momento. Además, se le conoce como
“referencia singular” por los objetos o personas retratadas, debido a que muestran lo que
estuvo frente a la cámara en un momento y espacios concretos.490 Ahora bien, la presente
investigación no hace un estudio profundo de la fotografía en Orizaba, sino que da a
conocer a grandes rasgos lo que sucedió en un momento, sin llegar a un análisis
exhaustivo.
Las fotografías que se muestran a continuación fueron tomadas de un álbum que
se ubica en el Archivo Municipal de Orizaba,491 otro ejemplar está a resguardo del
presbítero de la Iglesia de El Calvario, Helkyn Enríquez Báez, algunas imágenes que se
encuentran en dicho álbum fueron otorgadas por el Lic. Andrés Guzmán Olmos del
“Museo de San Rafael Guízar y Valencia” de la ciudad de Xalapa, por lo que se utilizaron
ya que algunas estaban en malas condiciones y no se lograba apreciar la imagen. Se
agregaron fotografías tomadas por el autor de esta investigación y otras más de un
periódico de 1932.
490
AGUAYO Fernando y Lourdes Roca (Coords.). Investigación con imágenes, usos y retos metodológicos, Instituto
Mora, México, 2012, p. 9.
491
AMO-Biblioteca Histórica. MONDRAGÓN A. J. Álbum gráfico histórico de los sucesos del 1 de febrero de 1937 en
la ciudad de Orizaba, Ver., Imprenta J. P. Talavera, Orizaba, s/a.
214
Biblioteca Histórica del Archivo Municipal de Orizaba (en adelante AMO), Álbum,
Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México; iglesia de La Concordia junto al Hospital Civil
“Ignacio de la Llave”.
Museo de San Rafael Guízar y Valencia de Xalapa, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz,
México; marcha fúnebre y féretro de Leonor Sánchez por las calles de la ciudad de
Orizaba.
215
Museo de San Rafael Guízar y Valencia de Xalapa, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz,
México; una multitud de católicos orizabeños manifestándose por el asesinato de Leonor
Sánchez.
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México; una
marcha de católicos orizabeños en protesta por la muerte de Leonor Sánchez.
216
Museo de San Rafael Guízar y Valencia de Xalapa, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz,
México; católicos protestando durante el sepelio de Leonor Sánchez en el cementerio de
la ciudad de Orizaba.
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México; el
gobernador Miguel Alemán Valdés hablando con los manifestantes católicos.
217
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México;
manifestantes católicos en la visita del gobernador Miguel Alemán Valdés en febrero de
1937.
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México; se
observa al cura José María Flores declarando por los sucesos del 7 de febrero de 1937.
Lo acompañan el Inspector General de Policía Antonio Morell y un Notario quien toma
nota de la declaración.
218
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México;
católicos de Río Blanco frente al Palacio Municipal pidiendo al Gobernador del Estado,
Miguel Alemán Valdés, reanudar los cultos.
Museo de San Rafael Guízar y Valencia de Xalapa, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz,
México; católicos orizabeños esperando la manifestación proveniente de la ciudad de
Córdoba.
219
Museo de San Rafael Guízar y Valencia de Xalapa, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz,
México; la Srita. Berta González, proveniente de Córdoba, hablando hacia los católicos
antes de entrar a Orizaba.
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México;
católicos provenientes de Orizaba, Córdoba, Río Blanco, Nogales y Santa Rosa (hoy Cd.
Mendoza) que exigen la reapertura de los cultos.
220
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México;
católicos en el atrio de la Parroquia de San Miguel Arcángel.
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México; algunos
sacerdotes siendo cargados en hombros por los manifestantes católicos.
221
Biblioteca Histórica del AMO, Álbum, Anónimo, 1937, Orizaba, Veracruz, México;
católicos en el interior de la Parroquia de San Miguel Arcángel.
Museo de la Ciudad de Orizaba del AMO, Personajes Ilustres, Anónimo, 1940-1950,
Orizaba, Veracruz, México; retrato del cura Rafael Rúa Álvarez.
222
Fondo particular, Julio César Zúñiga Trujillo, 2015, Orizaba, Veracruz, México; estas
fotografías muestran el lugar donde se encuentra actualmente el sepulcro de Leonor
Sánchez, en la ahora Catedral de San Miguel Arcángel.
Hemeroteca del AMO, Periódico Pro-Paria, 1932, Orizaba, Veracruz, México; estas
fotografías muestran parte de las manifestaciones obreras en Orizaba debido a la X
Convención de la CROM, que en ocasiones se confunden con las manifestaciones
católicas que se dieron en el año de 1937.
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