Untitled - Repositorio Institucional UAO

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EVOLUCIÓN
DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA
E IBEROAMÉRICA
TOMO II
Universidad Autónoma de Occidente
Escuela de Postgrados
Dirección de Investigaciones y Desarrollo Tecnológico
Facultad de Humanidades
EVOLUCIÓN
DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA
E IBEROAMÉRICA
TOMO II
HAROLD JOSÉ RIZO OTERO - Ph.D.
Bogotá - Colombia, 2013
Rizo Otero, Harold José, 1937
Evolución del conflicto armado en Colombia e Iberoamérica: tomo II.
Harold José Rizo Otero.
Cali: Universidad Autónoma de Occidente, 2013.
510 p.; 24 cm.
Presenta una minuciosa narración de todos los hechos de paz ocurridos
durante el gobierno del presidente Álvaro Uribe Vélez, que culminaron felizmente con la desmovilización de todos los grupos armados de las autodenominadas Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, y de otros grupos de
autodefensas independientes de las AUC.
ISBN 978-958-8122-49-6
1. Guerrillas - Colombia. 2. Proceso de paz - Colombia. 3. Conflicto
armado - Historia - Colombia. 4. Conflicto armado - Colombia. 5. Violencia política - Colombia. 6. Conflicto armado - América Latina. 7.
Violencia - América Latina. I. Tít. II. Serie. 303.64 cd 19 ed.
CEP-Banco de la República-Biblioteca Luis Ángel Arango.
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E
IBEROAMÉRICA - TOMO II
ISBN 978-958-8122-49-6
Derechos reservados de copia
© Harold José Rizo Otero
© 2013 Universidad Autónoma de Occidente
Gestión editorial
Dirección de Investigaciones y Desarrollo Tecnológico
Jefe del Programa Editorial
Jorge Enrique Salazar Ferro
Coordinación de edición
Claudia Lorena González González
Corrección de estilo
Eduardo Figueroa
Fotografía de carátula
Oficina del Alto Comisionado para la Paz
Presidencia de la República de Colombia
Diagramación e impresión
Impresora Feriva S.A.
PBX 524 9009
www.feriva.com - Cali - Colombia
Universidad Autónoma de Occidente
Km. 2 vía Cali - Jamundí. Conmutador: 318 8000. A.A. 2790
Cali, Valle del Cauca, Colombia
www.uao.edu.co - [email protected]
El contenido de esta publicación no compromete el pensamiento de la
Institución, es responsabilidad absoluta de su autor.
Este libro no podrá ser reproducido en todo o en parte, por ningún medio
impreso o de su reproducción sin permiso escrito del titular del Copyright
Impreso en Colombia
Printed in Colombia
ÍNDICE GENERAL
Introducción
Origen de las AUC
La búsqueda de la paz en el gobierno del presidente Álvaro
Uribe Vélez
Carta abierta de las FARC
Primeros contactos con las autodefensas
El ELN suspende diálogos con el Gobierno
Se inician diálogos con las autodefensas
Nuevo comunicado de las FARC
Documento de recomendaciones realizado por la Comisión
Exploratoria
Nuevo comunicado de las FARC
Carta de Martín Llanos
Las FARC nombran voceros
La muerte del gobernador de Antioquia
Comunicado de las Farc
XXXIII Asamblea General de la OEA
Carta abierta de las FARC a los Presidentes integrantes del
Grupo de Río
Se inicia el proceso de desmovilización de las AUC
Acta de la reunión entre el Gobierno Nacional y el Bloque
Central Bolívar y Vencedores de Arauca
Las FARC solicitan audiencia al Secretario General de la ONU
Anuncio de desmovilización de las AUC
Entrevista de la Revista Semana a Salvatore Mancuso
Declaraciones de Raúl Reyes al Diario El Comercio de Quito
Proyecto de ley sobre Justicia y Paz
Entrevista del Alto Comisionado de Paz con el Diario El País
Declaraciones de Ingrid Betancourt
Entrevista del Alto Comisionado con Yamid Amat
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Brasil ofrece territorio para diálogos con las FARC
La búsqueda de diálogos con el ELN
Comunicación de Manuel Marulanda a los coroneles
del Ejército
ELN libera a ciudadanos extranjeros
Desmovilización del Bloque Cacique Nutibara
Reportaje de Carlos Castaño a El Tiempo
Desmovilización del Bloque Cacique Nutibara
Se desmovilizan 160 miembros de las autodefensas
campesinas en el departamento del Cauca
Establecida la identidad del “Mono Jojoy”
Entrevista del presidente Uribe con Felipe Torres del ELN
Detienen en Quito a Simón Trinidad
Acuerdo del Sur del Casanare por la Paz de Colombia
Acuerdo entre el Gobierno Nacional y las AUC para la
zona de ubicación en Tierralta, Córdoba
Cronología del proceso con las autodefensas
Noviembre 28 de 2002
Julio 15 de 2003
Noviembre 25 de 2003
Marzo 31 de 2004
Abril 16 de 2004
Jefes de las AUC que se concentraron en Santa Fe de Ralito
Bloque Norte
Bloque Central Bolívar, BCB
Bloque Mineros
Bloque Centauros / Capital
Rueda de prensa del Alto Comisionado para la Paz en
Montería
México acepta ser garante de posibles acuerdos del Gobierno
con el ELN
Se inician las negociaciones de paz con las AUC
Se instala oficialmente el proceso de negociación entre el
gobierno nacional y las AUC
Jefes de las AUC se presentan ante el Congreso de la República
Las AUC anuncian nuevas desmovilizaciones
Anuncio de desmovilización del Bloque Norte
Liberación de todos los secuestrados
Suecia acompaña a la OEA en la verificación del proceso
con las AUC
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El asesinato de Miguel Arroyave
Comunicado de la Presidencia de la República
Comunicado del Alto Comisionado para la Paz
Comunicado de las AUC
Declaración del Alto Comisionado para la Paz
Entrevista de la Revista Semana con Carlos Alonso Lucio
Carta del Alto Comisionado al anuncio apostólico sobre
mediación con las FARC
Respuesta de las FARC
Reconocimiento de representantes de las AUC
Acto de Fe por la Paz
Resolución No. 233 de 3 de noviembre 2004
Caramagna solicita apoyo de la comunidad internacional
Visita de congresistas a Ralito
Ubicación del Bloque Catatumbo
Primeras desmovilizaciones: el Bloque Bananero
Indultados 23 guerrilleros de las FARC
Desmovilización de las Autodefensas del Sur del Magdalena
e Isla San Fernando
Zona de ubicación temporal en Terán, Cundinamarca
Desmovilización de las Autodefensas Campesinas de
Cundinamarca
Desmovilización del Bloque Catatumbo
Desmovilización de Salvatore Mancuso
Texto de la Resolución 303 del Ministerio del Interior y de
Justicia
Desmovilización del Bloque Calima
La extradición de “Simón Trinidad”
Desmovilización de las Autodefensas de Córdoba, Bloques
Sinú y San Jorge
Desmovilización del Bloque Suroeste
Desmovilización del Bloque La Mojana
Cambio de jefatura de las AUC
Posible diálogo con el ELN
Comunicado sobre acercamientos Gobierno Nacional-ELN
México renuncia a su facilitación con el ELN
La captura de “Don Berna” o “Adolfo Paz”
Comunicado del Alto Comisionado
Declaración de la Presidencia de la República sobre la
situación de “Don Berna”
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Se reanudan las negociaciones entre el Gobierno y las AUC
Entrevista con José Vicente Castaño Gil
Comunicado
Desmovilización del Bloque Héroes de Tovalá
Desmovilización del Bloque Montes de María
¿Cómo es la ley?
Un nuevo anuncio de desmovilización
Aclaración pública
Desmovilización del Bloque Libertadores del Sur
Desmovilización del Bloque Héroes de Granada
Carta de las FARC al ex presidente Alfonso López
Desmovilización de las Autodefensas de los Llanos Orientales
Comisión facilitadora se entrevista con Francisco Galán
Caicedonia ofrece a Aures como zona de encuentro
La Iglesia Católica propone pre-diálogos con FARC y ELN
Desmovilización del Bloque Pacífico
Nueva desmovilización del Bloque Pacífico
Desmovilización de los anillos de seguridad de Santa Fe de
Ralito
Desmovilización del Bloque Centauros
Entrevista con el ex presidente Pastrana
FARC descartan pre-diálogos propuestos por la Iglesia Católica
Comunicado del Comando Central del ELN
“Antonio García” abre posibilidades de diálogo
El Gobierno reconoce como representante del ELN a
Francisco Galán
Declaración de la Corporación Democracia
Propuesta del Gobierno a las FARC
El Bloque Élmer Cárdenas anuncia voluntad de paz
Desmovilización del Bloque Noroccidental
Condiciones para gozar de los beneficios de la desmovilización
Primeros en acogerse a la Ley de Justicia y Paz
Excarcelado Francisco Galán
Desmovilizaciones del Bloque Central Bolívar Frente Vichada
Las FARC explican su propuesta de despeje de Pradera y
Florida
Entrevista del Secretario de la OEA, José Manuel Insulza,
al Diario El Espectador
Se instala Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación
Comunicado del Gobierno Nacional
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Desmovilización del Bloque Tolima
FARC niegan atentado contra Germán Vargas Lleras
Retiran a Salvatore Mancuso la representación de los
desmovilizados
Comunicado de la Comisión de Conciliación Nacional
Nueva entrevista del Alto Comisionado a la Revista Semana
ELN acepta iniciar encuentro exploratorio
Comunicado del Comando Central del ELN
Comunicado de la Presidencia de la República
Se reanudan desmovilizaciones
Francisco Galán sale de Itaguí
Palabras de “Don Berna”
Nota editorial de El Colombiano
Desmovilización del Bloque Central Bolívar, frentes Nordeste
Antioqueño, Bajo Cauca y Magdalena Medio
Desmovilización del Frente Mártires de Guática
Concentración del Bloque Vencedores de Arauca
Propuesta de Misión Técnica Exploratoria
Propuesta de la Comisión Internacional
Proposición
Situación geográfica
El Gobierno recibe la propuesta
Primera reunión exploratoria con el ELN en Cuba
Palabras del Alto Comisionado para la Paz
Palabras de Antonio García
Comunicado conjunto Gobierno-ELN
Desmovilización del Bloque Vencedores de Arauca
Comunicado de las FARC sobre acuerdo humanitario
Reglamentada la Ley 975 de Justicia y Paz
Apoyo en materia de salud para desmovilizados
Anuncian desmovilización del Bloque Mineros
El Bloque Mineros se desmoviliza
Balance intermedio
“Jorge 40” anuncia desmovilización
Fijan fecha para nueva reunión con el ELN en La Habana
Comunicado de los comandantes de las AUC
Desmovilización de las autodefensas campesinas del
Magdalena Medio, Puerto Boyacá
Desmovilización del Bloque Central Bolívar frente Sur
de Bolívar
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Desmovilización del Bloque Resistencia Tayrona
Declaraciones de Hernán Giraldo
Desmovilización de las Autodefensas Campesinas del
Magdalena Medio
Anuncian desmovilización del Bloque Élmer Cárdenas
Desmovilización del Bloque Sur Los Andaquíes
Comunicado de las FARC
Desmovilización del Frente Sur Putumayo
Desmovilización del Frente Julio Peinado Becerra
Reconocimiento de estatus político a delegados del ELN
Comunicado conjunto del Gobierno y el ELN a la opinión
pública nacional
Gesto de paz del ELN
Desmovilización apresurada
Desmovilización del Bloque Norte de “Jorge 40”
Reflexiones sobre los comienzos y los finales
“Antonio García” manifiesta desacuerdo
Declaración del Presidente de la República
“Antonio García” vendría a Colombia
Declaración de las Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC
Posible aparición de nuevos grupos irregulares
Ayuda humanitaria de la Unión Europea
Concentración del Élmer Cárdenas
Estructuras aún pendientes por desmovilizarse
Desmovilización de las autodefensas de Meta y Guaviare
Desmovilización de los bloques “Héroes del Llano” y
“Héroes del Guaviare”
Desmovilización del Bloque costanero Élmer Cárdenas
Nuevo balance preliminar
“Antonio García” cancela agenda en Bogotá
Balance de las desmovilizaciones
Las AUC ya no existen, dice el Alto Comisionado para la Paz
Segunda desmovilización del Élmer Cárdenas
Se anuncia desmovilización del Bloque Élmer Cárdenas
La guerra no es opción hoy
Tercera y última desmovilización del Bloque Élmer Cárdenas
de las autodefensas campesinas
Desmovilizados buscaban más beneficios de ley
El acompañamiento: indispensable para la post-desmovilización
¿Cómo frenar el “rebrote” paramilitar?
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¿“Neoparamilitarismo”?
Dos fenómenos distintos
El Alto Comisionado entrega a la Fiscalía nueva lista de
personas que se acogerían a la Ley de Justicia y Paz
La Corte Constitucional declara exequible la Ley de
Justicia y Paz
Así era la ley
Así quedó la ley
Por incertidumbre con fallo sobre la Ley de Justicia y Paz,
aplazan desmovilización del Cacique Pipintá
Evalúan necesidad de cambiar la Ley de Justicia y Paz
Tres datos claves
Nace Alta Consejería Presidencial para Reinserción
Comunicado
Dirección de Carabineros
Los ex AUC crean Villa Esperanza
Las “víctimas de estado”: un capítulo más de la novela del
fundamentalismo humanitario
El Gobierno reglamentaría la Ley de Justicia y Paz
Fiscal: los jueces aplicarán discrecionalmente la favorabilidad
a los desmovilizados de las AUC
El presidente Álvaro Uribe conminó a los jefes de las AUC
a ir a centros de reclusión
Las AUC proponen realización de una Asamblea Constituyente
Comunicado del Alto Comisionado para la Paz
Los jefes desmovilizados de las AUC son concentrados
en La Ceja
El vicepresidente Santos propone acuerdo nacional para
reformar la Ley de Justicia y Paz
Autodefensas fueron un error
Vicente Castaño Gil ofrece entregarse a la justicia y pone
condiciones para su entrega
Comunicado público de Vicente Castaño
Expedido el Decreto Reglamentario de la Ley de Justicia y Paz
Bibliografía
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
INTRODUCCIÓN
Al finalizar el gobierno del presidente Andrés Pastrana Arango publicamos el Tomo I de esta obra, cuyo objetivo principal era recoger
para la posteridad todos los hechos de paz registrados durante los últimos años del siglo XX y los primeros del siglo XXI, con miras a poner
fin al conflicto armado que desde finales de la primera mitad del siglo,
XX ha convulsionado la patria colombiana.
En el Tomo I hicimos una historia sucinta del conflicto y de los actores que en él han intervenido a lo largo de los años, y registramos con la
mayor veracidad y exactitud el desenvolvimiento del fracasado proceso
de paz desarrollado entre el Gobierno Nacional y las FARC. En este
esfuerzo involucramos a nuestros alumnos del curso de Humanidades
V de la Universidad Autónoma de Occidente en sus distintos semestres,
y contamos con la eficaz colaboración de ellos.
Ahora presentamos el Tomo II, en el cual se hace una minuciosa
narración de todos los hechos de paz ocurridos durante el gobierno
del presidente Álvaro Uribe Vélez, que culminaron felizmente con la
desmovilización de todos los grupos armados de las autodenominadas
Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), y de otros grupos de autodefensas independientes de las AUC.
Este libro no registra las acciones bélicas ni los actos que al margen
de la ley realizaron durante su existencia las autodefensas campesinas.
Nos limitamos a describir en forma objetiva y de manera cronológica la
forma como esos grupos armados irregulares se fueron reincorporando
a la vida civil.
El objeto de esta narración es dejar un registro para la historia que
permita a las actuales y futuras generaciones conocer unos hechos que
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han ensombrecido la historia nacional, y los procesos que se han cumplido en la búsqueda de la reconciliación y la paz entre los colombianos.
De las acciones legales que se realicen a favor y en contra de los grupos
armados irregulares, llamados guerrilla o autodefensa, se ocuparán en
su momento otros autores.
En el tomo anterior recogimos la historia de los distintos grupos guerrilleros en las fuentes de sus propias páginas web y en documentos producidos por ellos mismos y por autores independientes. La mayor parte
de esas historias, como lo es el resumen histórico de las AUC que ahora
presentamos, fueron rastreadas por nuestros estudiantes.
Ramón Isaza y Carlos Castaño tienen su propia versión sobre la historia de las autodefensas reunidas en las AUC, y nuestros lectores pueden ir directamente a esas fuentes. Las FARC han difundido su versión
acerca de las AUC y diversos autores tienen sus propias presentaciones
sobre este tema. Aquí intentamos una síntesis del desarrollo que ha tenido a lo largo del tiempo esta organización, que para el gobierno de Colombia, al momento de escribir este relato, se considera desmovilizada.
En casi todos los países de América donde han existido confrontaciones entre los gobiernos y grupos armados irregulares al margen de la ley,
se han desarrollado movimientos ilegales conocidos como autodefensas.
El término paramilitares no lo utilizamos en este texto en boca del autor
porque tiene connotaciones que no entraremos a discutir. Sería tanto
como utilizar el calificativo de terroristas para aquellas agrupaciones
que se autodenominan guerrillas.
Los alias que aparecen en el texto son los que sus actores utilizan o
han utilizado a lo largo de su trajinar al margen de la ley. De la manera
respetuosa como se trató en el Tomo I el proceso de paz con las FARC,
se analiza el proceso con las AUC. De igual forma como reprodujimos
textos completos de comunicados expedidos por las FARC y declaraciones de sus jefes, reproducimos muchos textos originados en las AUC.
Todo esto con el propósito de transmitir una historia exenta de cualquier subjetividad por parte del autor.
Durante la intensa y sangrienta confrontación entre liberales y conservadores que tuvo lugar en Colombia durante los años comprendidos
entre 1948 y 1953, conocida como el período de la Violencia, se confor-
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
maron a lo largo y ancho del territorio nacional grupos guerrilleros de
origen liberal y comunista autodenominados autodefensas campesinas,
como respuesta, según ellos, a la agresión oficial.
En sentencia del 15 de septiembre de 2005, proferida por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos, se ordenó al Estado colombiano publicar la mencionada sentencia de la cual reproducimos textualmente el siguiente relato, referente a la normatividad dentro de la cual
se han desarrollado a lo largo de los últimos cuarenta años los “grupos
de autodefensa”.
A partir de la década de 1960 surgieron en Colombia diversos grupos guerrilleros, por cuya actividad el Estado declaró “turbado el orden
público y en estado de sitio el territorio nacional”. Ante esta si tuación,
el 24 de diciembre de 1965 el Estado emitió el Decreto Legislativo 3398
“por el cual se organiza la defensa nacional”, con una vigencia transitoria, pero fue adoptado como legislación permanente mediante la Ley
48 de 1968 (con excepción de los Artículos 30 y 34).
Los Artículos 25 y 33 del referido Decreto Legislativo dieron fundamento legal a la creación de “grupos de autodefensa”. En la parte
considerativa de esta normativa se indicó que “la acción subversiva que
propugnan los grupos extremistas para alterar el orden jurídico requiere
un esfuerzo coordinado de todos los órganos del poder público y de las
fuerzas vivas de la Nación” y, al respecto, el referido Artículo 25 estipuló que “todos los colombianos, hombres y mujeres, no comprendidos en
el llamamiento a servicio militar obligatorio, podían ser utilizados por
el Gobierno en actividades y trabajos con los cuales contribuyeran al
restablecimiento de la normalidad”.
Así mismo, en el parágrafo 3 del mencionado Artículo 33 se dispuso
que el Ministerio de Defensa Nacional, por conducto de los comandos
autorizados, podría amparar, cuando lo estimara conveniente, como de
propiedad particular, armas que estuvieran consideradas como de uso
privativo de las Fuerzas Armadas. Los “grupos de autodefensa” se conformaron de manera legal al amparo de las citadas normas, por lo cual
contaban con el apoyo de las autoridades estatales.
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En el marco de la lucha contra los grupos guerrilleros, el Estado
impulsó la creación de tales “grupos de autodefensa” entre la población
civil, cuyos fines principales eran auxiliar a la Fuerza Pública en operaciones antisubversivas y defenderse de los grupos guerrilleros. El Estado
les otorgaba permisos para el porte y tenencia de armas y les brindaba
el apoyo logístico.
En la década de los años ochenta del siglo XX, principalmente a
partir de 1985, se hizo notorio que muchos “grupos de autodefensa”
cambiaron sus objetivos y se convirtieron en grupos de delincuencia,
comúnmente llamados “paramilitares”. Primeramente se desarrollaron
en la región del Magdalena Medio y se fueron extendiendo a otras regiones del país.
El 27 de enero de 1988 Colombia emitió el Decreto Legislativo 0180,
“por el cual se complementan algunas normas del Código Penal y se
dictan otras disposiciones conducentes al restablecimiento del orden
público”. En este Decreto se tipificó como delito la pertenencia a grupos de sicarios, su promoción y dirección, así como la fabricación o
tráfico de armas y municiones de uso privativo de las Fuerzas Militares
o de la Policía Nacional. Posteriormente, este Decreto fue elevado a
legislación permanente mediante Decreto 2266 de 1991.
El 19 de abril de 1989 se emitió el Decreto 0815, mediante el cual se
suspendió la vigencia del Parágrafo 3 del Artículo 33 del Decreto Legislativo 3398 de 1965, el cual facultaba al Ministerio de Defensa Nacional
para autorizar a los particulares el porte de armas de uso privativo de las
Fuerzas Armadas.
En la parte considerativa del Decreto 0815 se indicó que “la interpretación del Decreto Legislativo 3398 de 1965, adoptado como legislación
permanente por la Ley 48 de 1968, dada por algunos sectores de la opinión pública, ha causado confusión sobre su alcance y finalidades, en
el sentido de que se pueda llegar a tomar como una autorización legal
para organizar grupos civiles armados que resultan actuando al margen
de la Constitución y las leyes”.
Posteriormente, mediante sentencia de 25 de mayo de 1989, la Corte
Suprema de Justicia declaró inexequible el referido Parágrafo 3 del Artículo 33 del Decreto Legislativo 3398 de 1965.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El 8 de junio de 1989 el Estado emitió el Decreto 1194, “por el cual se
adiciona el Decreto Legislativo 0180 de 1988, para sancionar nuevas modalidades delictivas, por requerirlo el restablecimiento del orden público”.
En la parte considerativa de esta norma se expuso que “los acontecimientos que vienen ocurriendo en el país han demostrado que existe
una nueva modalidad delictiva consistente en la comisión de actos atroces por parte de grupos armados, mal llamados paramilitares, constituidos en escuadrones de la muerte, bandas de sicarios, grupos de autodefensa o de justicia privada, cuya existencia y acción afectan gravemente
la estabilidad social del país, las cuales deben reprimirse para lograr el
restablecimiento del orden y la paz públicos”.
En este Decreto se tipificó como delito la promoción, financiación,
organización, dirección, fomento y ejecución de actos “tendientes a obtener la formación o ingreso de personas a grupos armados de los denominados comúnmente escuadrones de la muerte, bandas de sicarios o
de justicia privada, llamados paramilitares”.
También se tipificó la vinculación y pertenencia a dichos grupos, así
como el instruir, entrenar o equipar “a personas en tácticas, técnicas o
procedimientos militares para el desarrollo de las actividades delictivas”
de los referidos grupos armados. Así mismo, se estipuló como agravante de las anteriores conductas el que fueran “cometidas por miembros
activos o retirados de las Fuerzas Militares o de Policía Nacional o de
organismos de seguridad del Estado.” Posteriormente este Decreto fue
elevado a legislación permanente mediante el Decreto 2266 emitido el
4 de octubre de 1991.
El 14 de diciembre de 1990 el Estado emitió el Decreto 3030, “por
medio del cual se establecen los requisitos para la rebaja de penas por
confesión de delitos cometidos hasta el 5 de septiembre de 1990”.
El 17 de diciembre de 1993 se emitió el Decreto 2535, “por el cual
se expiden normas sobre armas, municiones y explosivos”. Según su
Artículo 1 “tiene por objeto fijar normas y requisitos para la tenencia y
el porte de armas, municiones, explosivos y sus accesorios y señalar el
régimen de servicios de vigilancia y seguridad privada”.
En su Artículo 9 dispone que “las armas de uso restringido son armas de guerra o de uso privativo de la fuerza pública, que de manera
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excepcional, pueden ser autorizadas con base en la facultad discrecional
de la autoridad competente, para defensa personal especial”.
El 11 de febrero de 1994 el Estado dictó el Decreto 356, “por el cual
se expide el Estatuto de Vigilancia y Seguridad Privada”, que según el
Artículo 1 “tiene por objeto establecer el estatuto para la prestación por
particulares de servicios de vigilancia y seguridad privada”. En su Artículo 39 prevé la dotación con “armas de fuego de uso restringido” y la
actuación “con técnicas y procedimientos distintos de los establecidos
para otros servicios de vigilancia y seguridad privada”.
El 26 de diciembre de 1997 el Estado emitió la Ley 418, “por la cual
se consagran unos instrumentos para la búsqueda de la convivencia, la
eficacia de la justicia y se dictan otras disposiciones”. Esta ley fue prorrogada por la Ley 548 de 23 de diciembre de 1999 y la Ley 782 de 23
de diciembre de 2002.
El 25 de febrero de 2000 el Estado promulgó el Decreto 324, “por el
cual se crea el Centro de Coordinación de la Lucha Contra los Grupos
de Autodefen sas Ilegales y Demás Grupos al Margen de la Ley”.
En agosto de 2002 algunos líderes de las Autodefensas Unidas de
Colombia (AUC) hicieron pública su intención de negociar términos
para la desmovilización de sus fuerzas.
El 22 de enero de 2003 el Estado produjo el Decreto 128, “por el cual
se reglamenta la Ley 418 de 1997, prorrogada y modificada por la Ley
548 de 1999 y la Ley 782 de 2002 en materia de reincorporación a la sociedad civil”, según el cual se establecen “beneficios jurídicos, socioeconómicos” y de otra índole para los “organismos armados al margen de
la ley” que se hayan sometido al programa de desmovilización.
El Artículo 13 de este Decreto consagra que tendrán derecho al indulto, a la suspensión condicional de la ejecución de la pena, a la cesación de procedimiento, a la preclusión de la instrucción o a la resolución inhibitoria, según el estado del proceso, los desmovilizados que
hubieren formado parte de organizaciones armadas al margen de la ley,
respecto de los cuales el Comité Operativo para la Dejación de las Armas, CODA, expida la certificación.
26
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
A su vez, el Artículo 21 de dicho Decreto excluye del goce de estos
beneficios a quienes estuvieren siendo procesados o hubieren sido condenados por delitos que de acuerdo con la Constitución Política, la ley
o los tratados internacionales suscritos y ratificados por Colombia no
pudieren recibir esta clase de beneficios.
El 24 de noviembre de 2003 el Estado emitió el Decreto 3360, “por el
cual se reglamenta la Ley 418 de 1997, prorrogada y modificada por la
Ley 548 de 1999 y por la Ley 782 de 2002”. De acuerdo con uno de sus
considerandos “es necesario fijar condiciones de procedimiento para
facilitar la desmovilización colectiva de grupos armados organizados
al margen de la ley, en el marco de acuerdos con el gobierno nacional”.
El 31 de agosto de 2004 el Estado dictó el Decreto 2767, “por el cual
se reglamenta la Ley 418 de 1997, prorrogada y modificada por la Ley
548 de 1999 y la Ley 782 de 2002, en materia de reincorporación a la
vida civil”.
De acuerdo con uno de sus considerandos “es necesario fijar condiciones, que de manera precisa y clara, permitan establecer competencias, asignar funciones y desarrollar los procedimientos para acceder a
los beneficios a que se refiere la Ley 418 de 1997, prorrogada y modificada por la Ley 548 de 1999 y la Ley 782 de 2002, una vez iniciado el
proceso de desmovilización voluntaria”.
El 15 de julio de 2003 se firmó el Acuerdo de Santa Fe de Ralito, por
el cual el Gobierno Nacional y las AUC convinieron la desmovilización
total de las fuerzas de éstas antes del 31 de diciembre de 2005.
El 25 de noviembre de 2003 entregaron armas 874 integrantes del
Bloque “Cacique Nutibara” de las AUC. A inicios de diciembre de 2004
fueron desmovilizados alrededor de 1 400 miembros del Frente “Catatumbo”. Con ello, a finales de 2004 se había realizado la desmovilización de alrededor de 3 000 miembros de las AUC.
En el año 2005, aproximadamente 7 000 integrantes de varios bloques de las AUC dejaron sus armas, con lo cual a la fecha de la sentencia, 15 de diciembre de 2005, se habían desmovilizado alrededor de 10
500 miembros de las AUC.
27
El 22 de junio de 2005 el Congreso de la República de Colombia
aprobó la Ley 975, llamada Ley de Justicia y Paz, “por la cual se dictan
disposiciones para la reincorporación de miembros de grupos armados
organizados al margen de la ley, que contribuyan de manera efectiva a
la consecución de la paz nacional y se dictan otras disposiciones para
acuerdos humanitarios”. La Ley fue sancionada y publicada el 25 de
julio de 2005.
Muchos críticos del proceso con las autodefensas consideran la Ley
975 del 2005 como una norma hecha a la medida de las autodefensas,
permisiva y favorable a la impunidad. La verdad es que la Ley 975 de
2005, junto con las leyes 418 de 1997, 548 de 1999 y 782 de 2002 constituye el actual marco jurídico que permite la negociación con todos
los grupos armados al margen de la ley y su desmovilización, llámense
ellos guerrillas o autodefensas.
Seguramente en la medida que se logre concretar nuevos procesos de
paz o desmovilización con otros grupos armados irregulares, será necesario expedir por parte del Congreso de la República nuevos instrumentos legales que perfeccionen la actual legislación y la hagan apropiada
para las circunstancias históricas que existan al momento.
Se ha estimado que los grupos de autodefensa son responsables de
numerosos asesinatos cometidos por motivos políticos en Colombia y
de una gran parte de las violaciones de Derechos Humanos en general.
Se ha documentado en Colombia la existencia de numerosos casos
de vinculación entre autodefensas y miembros de la fuerza pública en
relación con hechos similares a los ocurridos en el caso de Mapiripán,
así como actitudes omisivas de parte de integrantes de la fuerza pública
respecto de las acciones de dichos grupos.
En los informes publicados desde 1997 sobe la situación de Derechos
Humanos en Colombia, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones
Unidas para los Derechos Humanos ha documentado casos representativos de violaciones del derecho a la vida, en los que se afirma que el
Gobierno y las Fuerzas Armadas colaboraron con las autodefensas en
asesinar, amenazar o desplazar a la población civil.
28
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Dicha colaboración entre la fuerza pública y los paramilitares ha representado un obstáculo para la observancia de los Derechos Humanos
en Colombia, en opinión de la Oficina del Alto Comisionado. En el
informe de 1997, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los
Derechos Humanos mostró su preocupación por la posible participación de las Fuerzas Armadas y los paramilitares en actos de violencia,
incluyendo, entre otros, la masacre de Mapiripán.
Según ese informe, los actos cometidos por paramilitares constituyeron el
mayor número de violaciones de Derechos Humanos reportadas en el país
en 1997, incluidas masacres, desapariciones forzadas y toma de rehenes1.
Por el relato anterior, hecho por la Corte Interamericana de Derechos Humanos puede decirse, sin temor a equivocación, que a partir del
Decreto 3398 de 1965 los grupos denominados de autodefensa tuvieron
base legal y fueron fomentados en su creación y desarrollo por el Estado
en su afán por contener el avance de los grupos guerrilleros.
A partir de junio de 1989 el mismo Estado reconoció la desviación
de objetivos y procedimientos en que habían incurrido los llamados
grupos de autodefensa e inició, con la expedición del Decreto 1194, la
persecución de aquellos que por sus actuaciones se habían situado al
margen de la ley.
En una primera fase, el remoquete de “paramilitares” les es justamente
aplicable a estos grupos. A partir de 1989 esa calificación es dudosa, aunque
por su cuenta, como lo han sostenido sus jefes, la misión fue reemplazar o
reforzar la acción del Estado donde ésta no existiera o fuera deficiente.
No cabe duda de que entre 1965, fecha en la cual se expidió el Decreto 3398, y 1989, cuando se emitió el Decreto 0815, había una íntima relación entre las autodefensas y la fuerza pública, tal como lo autorizaba
la legislación vigente para esa época. Después de 1989 las autodefensas
pasaron a ser grupos ilegales.
A finales de la década de los años setenta del siglo XX empezaron
a gestarse nuevas propuestas de autodefensa en la población civil, por
1
Transcripción de hechos de la sentencia de 15 de septiembre de 2005, proferida por la Corte Interamericana de
Derechos Humanos en el caso de la masacre de Mapiripán.
29
grupos de campesinos, apoyados principalmente por agricultores, ganaderos, comerciantes y señores del tráfico de narcóticos, quienes decidieron armarse para hacer frente a la guerrilla y garantizar el control
y el dominio territorial en algunas zonas del Magdalena, Córdoba y
Antioquia, entre otras.
De esos inicios se desprendió toda una organización patrocinada por
los grandes capos de la droga del Cartel de Medellín: Pablo Escobar y
Gonzalo Rodríguez Gacha, quienes aportaron el armamento y facilitaron la capacitación del personal que integró los grupos de autodefensas.
Para esa labor trajeron al país al mercenario israelí Yair Klein, quien
instruyó a hombres como Alfonso de Jesús Baquero, alias “Vladimir”,
y a Henry Pérez, quien fue comandante de las autodefensas del Magdalena Medio a finales de los años ochenta.
Más adelante, esos mismos grupos pasaron de una posición defensiva frente a la guerrilla a una ofensiva. Fue así como empezaron a “limpiar” poblaciones del Magdalena Medio, como Puerto Boyacá, Puerto
Berrío, Puerto Triunfo, Doradal, La Dorada, y hasta Barrancabermeja,
donde se identificaron como MAS (Muerte a Secuestradores), más conocidos como los Masetos.
A las acciones militares se sumaron otras de carácter social y político; crearon la Asociación de Campesinos y Ganaderos del Magdalena
Medio, Acdegam, especie de fachada legal de las autodefensas, desde
la cual también desarrollaban labores de asistencia social y campañas
cívico-militares con el Ejército en las zonas de su influencia.
A mediados de los años ochenta aparecieron otros grupos armados
como el MRN (Muerte a Revolucionarios del Nordeste), los Blancos,
los Yeyes, Colsingue (Colombia sin Guerrilleros), cuya actividad se extendió a otras regiones como los Llanos Orientales.
Con el paso del tiempo fueron apareciendo fundadores y nuevos comandantes de movimientos de autodefensa, como es el caso de Ramón
Isaza, jefe de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio y los
hermanos Fidel (ya desaparecido) y Carlos Castaño, quienes organizaron las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, en coordinación con
las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, ACCU.
30
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Estos grupos centraron su accionar especialmente en zonas como
Urabá, Córdoba, Sucre, Meta, Norte de Santander, Cesar y Bolívar, entre
otros. Según su propia versión, las autodefensas como grupos organizados aparecieron en el Magdalena Medio y su fundador fue Ramón Isaza.
La siguiente es la versión personal de Ramón Isaza sobre este hecho:
“Un 22 de febrero del año 1978, hace ya 27 años, a la vereda La Estrella, del corregimiento La Merced o Las Mercedes, como se le conoce
comúnmente, en aquel entonces jurisdicción del municipio de San Luis,
Antioquia, hoy de Puerto Triunfo, incursionó una patrulla del noveno
frente de las FARC, esta vez con órdenes específicas de asesinar a varias personas, a quienes acusaban de colaborar con el Ejército, y como
retaliación, porque no les colaboraban con ganado vacuno o porcino, o
con aves de corral, con dinero o con hijos para reclutarlos. En la lista
me encontraba yo, Ramón Isaza, por ese entonces líder comunitario,
concejal en San Luis, en representación de Puerto Triunfo.
En otras ocasiones habían llegado, las primeras, a manera de visita
informativa, luego a que se les colaborara con animales o dinero, más
tarde se llevaban los animales, o los mataban ahí mismo sin informar
siquiera. Esto había sembrado el descontento entre los habitantes de la
vereda y algunas medidas que se tomaron hacían prever que alguna de
esas visitas tendría un desenlace fatal. Analizando eso en conversaciones que tuve con los vecinos, decidimos buscar ayuda y agruparnos para
defendernos, para defender la vereda.
Como ya se habían contactado en otras oportunidades con el Ejército, decidimos entonces ir a buscar ayuda, esta vez no para que mandaran patrullas hasta la vereda, sino para que nos dieran armas para
nosotros mismos hacerles frente, en caso de algún ataque que no diera
tiempo de avisar.
Ya en la, por aquel entonces, Base Calderón, ubicada cerca a Puerto
Boyacá, con otros amigos expusimos la situación al comandante de la
base y luego de mucho hablar y recibir algunas instrucciones, nos entregaron ocho escopetas, de varios calibres, con suficientes cartuchos,
ellas no en muy buen estado porque eran de las decomisadas a las personas que no tenían permiso para portarlas, las cuales repartimos entre
quienes nos habíamos comprometido a conformar este grupo para defendernos y no sufrir más el chantaje, la intimidación y el saqueo a que
31
nos estaban sometiendo y que menguaba gravemente la economía de
nuestros hogares.
Ese 22 de febrero, la sorpresa para las FARC fue grande, “fueron por
lana y salieron trasquilados”, pues no lograron su cometido, pero en
cambio sí perdieron tres hombres en ese momento y luego otro, de los
siete que se llevaron heridos. Fue ese el primer combate librado por los
valerosos hombres de esta vereda contra la guerrilla y ese día nacieron
las Autodefensas Campesinas, las que este próximo martes arriban a los
27 años de existencia.
Ese día será especial porque dos acontecimientos se unen en el tiempo: el último año de existencia de las Autodefensas como grupo armado
y el primero designado como día oficial de ellas, de modo que las generaciones futuras recuerden esta fecha como una de las más importantes
para nuestro país en materia de paz.
Como fundador y en representación de aquellos valerosos hombres
con los que enfrenté y dimos un duro golpe a la guerrilla, luego seguí
combatiéndola día tras día, y aún hoy lo sigo haciendo, recién nombrado Comandante General de AUC, quizás debido a mi incansable lucha
por la paz, seré el anfitrión en la casa del Bloque Magdalena Medio, en
Santa Fe de Ralito2”.
En algunas zonas de colonización fueron los mismos colonos, de
manera espontánea, quienes se organizaron para enfrentar a la guerrilla. Se sabe que algunos ex guerrilleros ingresaron a las autodefensas,
así como ex miembros de los cuerpos armados del Estado se incorporaron a estos grupos irregulares.
En el libro Mi Confesión, de Mauricio Aranguren Molina, Carlos Castaño da una versión personal del por qué y el cómo él y sus hermanos se
involucraron en el tema de las autodefensas3.
2
Ramón Isaza, febrero 15 de 2005.
3
ARANGUREN MOLINA, Mauricio. Mi confesión, Carlos Castaño revela sus secretos. Bogotá: Editorial Oveja Negra, 2001.
32
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Según Castaño, la causa principal y casi única para el ingreso de su
hermano mayor Fidel Castaño Gil, y de varios miembros de su familia,
fue el secuestro y asesinato de su padre, don Jesús, por parte de un grupo
de hombres de las FARC. A partir de este hecho Fidel y Carlos Castaño
decidieron tomar la justicia por sus manos, naciendo en ellos un ánimo
de venganza personal que poco a poco los llevó a convertir a la guerrilla
y a todo lo que les sonara cercano a ellas en sus peores enemigos.
Según el relato, los hermanos Castaño empezaron a asesinar uno a uno
a los guerrilleros involucrados directamente con el secuestro de su padre.
En 1985 Fidel y Carlos Castaño decidieron buscar un sitio que les
permitiera a las autodefensas expandirse, con las siguientes características: que tuviera salida al mar y frontera con los departamentos de
Córdoba, Antioquia y Chocó. Después de estudiar varios lugares, resolvieron ubicarse en el Alto Sinú, en el departamento de Córdoba. Con
esta ubicación geográfica los hermanos Castaño dieron origen a las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, ACCU.
33
ORIGEN DE LAS AUC
Desde 1995 Carlos Castaño venía gestando su idea de agremiar a
todas las autodefensas existentes en el territorio colombiano, como las
Autodefensas de Córdoba y Urabá, ACCU, lideradas por el propio Castaño; las de Puerto Boyacá, la Fuerza Armada de los arroceros de San
Martín en los Llanos y las Autodefensas de Santander, apoyadas por
comerciantes y ganaderos, cuya fuerza se orientaba solamente a la defensa de sus intereses.
El 18 de abril de 1997 las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC,
aparecieron en el panorama político militar del país como una organización civil armada antiguerrillera. Carlos Castaño conoció a Iván Roberto Duque, “Ernesto Báez”, con quien compartió la dirección política
de las AUC. “Ernesto Báez” convenció a Castaño de la importancia
de tener una autodefensa civil armada y la necesidad de construir una
fuerza social que apoyara la defensa y la economía en la zona.
Carlos Castaño inició la labor de convencer a cada uno de los disímiles grupos de autodefensas sobre la necesidad de unirse, con un solo
comandante y un norte político que todos respetaran. Las ACCU se
convirtieron en modelo de la estructura militar y política de las AUC.
Dentro de las AUC se aglutinaron ex guerrilleros, ganaderos, empresarios, comerciantes, agricultores y sectores del transporte. La expansión de las AUC tiene dos explicaciones: la lucha antisubversiva y
las diversas fuentes de financiación, que iban desde la minería hasta el
narcotráfico. Al momento de iniciar su desmovilización las AUC tenían
presencia en por lo menos 30 departamentos del país.
El propio Carlos Castaño, en su histórica entrevista con Darío Arismendi Posada en Radio Caracol, reconoció que las AUC, sin ser propiamente una organización narcotraficante, derivaban el 70% de sus recursos económicos de los cobros que ellas hacían a los narcotraficantes
establecidos en zonas bajo control de las AUC.
34
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Esta versión fue plenamente compartida por Salvatore Mancuso y
por otros jefes de autodefensas en sus declaraciones a la Revista Semana
y a otros medios de comunicación social.
En el presente Tomo II del libro Evolución del conflicto armado en
Colombia e Iberoamérica recogemos de manera cronológica y detallada
el proceso de desmovilización de las AUC realizado durante la presidencia del doctor Álvaro Uribe Vélez, mediante el cual más de 30 000
combatientes de las Autodefensas Campesinas entregaron sus armas al
Gobierno. Debe destacarse la inteligente, prudente y sobria labor del
Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, y del Ministro del
Interior, Sabas Pretelt de la Vega.
Muchas personas consideran que el que acaba de culminar no fue
un proceso de paz, porque las autodefensas no estuvieron en guerra
contra el Gobierno Nacional, sino de su lado en contra de los grupos
guerrilleros. Indudablemente lo contrario a la guerra es la paz, pero
para mayor claridad, el proceso al cual nos vamos a referir en este libro
podría considerarse no un proceso de paz sino uno de desmovilización
y reinserción de las autodefensas a la sociedad civil.
Se inició, pues, una nueva etapa, la reinserción de los desmovilizados a la vida civil, que deberá cumplirse con el apoyo de toda la nación,
con el liderazgo del Gobierno Nacional, cuyo fin es conseguir que todos
esos hombres y mujeres que han dejado las armas y la actividad delincuencial, puedan desarrollarse como gentes de bien.
Los lectores podrán completar este breve relato histórico a medida
que avancen en la lectura del texto y construir su propia opinión sobre
este tema.
Harold José Rizo Otero, Ph.D.
Cali, septiembre de 2006
35
LA BÚSQUEDA DE LA PAZ EN EL GOBIERNO DEL
PRESIDENTE ÁLVARO URIBE VÉLEZ
El 26 de mayo de 2002, en una elección que no tuvo mayores sorpresas en el contexto nacional, fue elegido, por abrumadora mayoría,
Presidente de la República el abogado antioqueño Álvaro Uribe Vélez,
liberal disidente, apoyado por una coalición de fuerzas políticas encabezadas por el Partido Conservador.
El nuevo presidente basó su campaña política en dos premisas fundamentales: garantizar la seguridad ciudadana y desterrar la corrupción
en todos los sectores de la administración pública.
En el discurso pronunciado la noche del 26 de mayo de 2002, una vez
conocidos los resultados de la elección, el doctor Uribe Vélez anunció
que estaba dispuesto a buscar una solución negociada al conflicto armado que padece el país desde hace más de cincuenta años, del cual en casi
cuarenta han sido protagonistas las guerrillas de las FARC y el ELN.
El presidente Uribe Vélez manifestó su interés en buscar una mediación internacional de las Naciones Unidas y, a través de esta organización, también de los países amigos que durante la administración del
presidente Andrés Pastrana Arango prestaron sus buenos oficios como
facilitadores de los procesos de paz.
El primer mandatario había sido enterado por el anterior presidente,
Andrés Pastrana, de los contactos que se venían adelantando con los
grupos de autodefensas a través de la iglesia católica. Con base en ello,
autorizó a la Comisión Episcopal, conformada por los obispos de Montería, Julio César Vidal; de Apartadó, Germán García y de la Diócesis
de Sonsón-Rionegro, Flavio Calle, para continuar con su labor.
El jueves 13 de junio el presidente completó su gabinete ministerial
que conformaron cinco ministras y siete ministros, a saber: Ministro
del Interior y Justicia: Fernando Londoño Hoyos; Relaciones Interna-
36
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
cionales: Carolina Barco; Defensa Nacional: Martha Lucía Ramírez;
Hacienda y Crédito Público: Roberto Junguito Bonnet; Comercio Exterior: Jorge Humberto Botero; Agricultura: Carlos Gustavo Cano Sanz;
Comunicaciones: Martha Elena Pinto de Hart; Obras Públicas y Transporte: Andrés Uriel Gallego; Trabajo y Salud: Juan Luis Londoño; Minas y Energía: Luis Ernesto Mejía Castro; Cultura: María Consuelo
Araújo; y Medio Ambiente: Cecilia Rodríguez.
Igualmente, fue nombrado como Alto Comisionado para la Paz, en
reemplazo de Camilo Gómez Alzate, Luis Carlos Restrepo, médico psiquiatra, quien se había desempeñado como profesor de la Universidad
Javeriana, asesor de la rectoría de la Universidad Nacional, Consultor
de las Naciones Unidas en Prevención de Drogadicción y Coordinador
General del Mandato por la Paz.
El nuevo Comisionado para la Paz manifestó: “no hay salidas milagrosas, tenemos que construir el camino a la paz, no vamos a hacer un
show porque tendremos un bajo perfil. Buscaremos la salida negociada
al conflicto”4.
El 17 de junio de 2002 el Presidente electo se entrevistó en Nueva York
con el Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan, pero los
temas tratados en este encuentro no fueron divulgados al público.
Al finalizar el mandato del presidente Andrés Pastrana Arango
se realizaron numerosos balances de su gestión. A continuación se
transcriben dos opiniones, las cuales el autor desea dejar como tema
de reflexión.
La columnista María Isabel Rueda escribió en la Revista Semana
lo siguiente:
Habrá grandes diferencias entre el empalme Samper-Pastrana y Pastrana-Uribe. La más importante es que a Pastrana nunca le dijeron la
verdad del desastre. En cambio el equipo de Uribe sabe muy bien en qué
condiciones se encuentra el país que recibe.
4
EL PAÍS. Cali. 14, junio, 2002. A2 p.
37
Y por más mala que sea la situación, Uribe no se quedará con las
manos vacías el día de la transmisión del mando. Aunque Andrés Pastrana tenga la más alta cifra de desprestigio de mandatario alguno, no
ha habido un juicio justo del balance de estos últimos cuatro años.
Hablando de errores, y chuleando el suficientemente cacareado fracaso del proceso de paz, a Pastrana habría que abonarle otras cosas a
esa lista. Una de las más graves, la increíble incomunicación en la que
naufragó su gobierno frente a las expectativas del país: inexplicable si
tenemos en cuenta que al Presidente le antecedía la fama de ser un gran
comunicador.
Ahora: en el empalme Samper-Pastrana, este último recibió un país
en bancarrota, con un sistema financiero colapsado, un sector cooperativo saqueado, con un hueco fiscal sin proporciones, con una cifra
de desempleo que se había duplicado en cuatro años, con tasas de interés del 60% y 70 % y con un sector de la construcción reventado. A
este panorama con el que comenzó a gobernar Pastrana, se añaden tres
grandes crisis financieras internacionales y la bobadita del terremoto
del Eje Cafetero.
En el segundo empalme, el del próximo miércoles, Uribe recibirá
de Pastrana un país que no es, ni mucho menos, Argentina o Uruguay.
Hoy a esos países podría estarlos acompañando Colombia, de no haber
manejado el gobierno Pastrana la economía con la cautela que requería
el panorama de la debilidad interna y de un mercado internacional peligrosamente frágil y volátil.
A Uribe se le entregará un país amenazado por enormes dificultades
pero con resultados: el hueco fiscal en proceso de reducción, los dineros de 16 millones de colombianos a salvo de la que era una inminente
crisis financiera, tasas de interés controladas, tasas de cambio con el
nerviosismo de última hora pero largamente estables, leves signos de
recuperación de la industria de la construcción, ligero aumento en los
índices de crecimiento agrícola, inflación de un dígito, recuperación de
la confianza internacional y, por cuenta de ella, una economía blindada
por lo menos durante los próximos meses con créditos del Banco Mundial y de la banca interamericana.
38
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Y aunque las cifras de desempleo siguen siendo tremendas, si consideramos que Gaviria se las entregó a Samper en el 8%, que Samper
se las entregó a Pastrana duplicadas al 17%, y que Pastrana se las entregará a Uribe en el 16%, debemos concluir que la gran disparada del
desempleo en Colombia fue en el gobierno Samper.
Pero a Pastrana también hay que abonarle la recuperación de los
espacios de legitimidad política de Colombia ante el mundo. Hoy nadie
puede acusar a nuestra democracia de ilegítima, como sucedía durante
el gobierno anterior.
Y aunque es cierto que el proceso de paz será un estigma que Pastrana lleve a cuestas quizá para siempre, alguien lo tenía que haber ensayado. Eso permite que Uribe, a partir del 7 de agosto, pueda escoger
el camino que se le antoje para manejar el tema guerrillero. Cualquiera
que él sea, sabrán entenderlo el país y la comunidad internacional, incluyendo el de mantener abierta la puerta de un diálogo5.
En cuanto al proceso de paz, el ex Ministro de Hacienda del presidente Andrés Pastrana, Juan Manuel Santos, escribió:
En la paz, fracasó ganando.
El balance de Semana se centra en el fracasado proceso de paz. Nadie, ni el propio Presidente, niega que fue un fiasco. Pero aquí es donde
al análisis le hizo falta contexto. ¿Hubieran podido Serpa y Noemí lograr un mejor resultado, por ejemplo, siendo más duros?
Si la guerrilla en el fondo nunca estuvo comprometida con el proceso, como hoy retrospectivamente lo reconocen hasta los más entusiastas
“pacifistas”, ¿fue bueno o malo que Pastrana haya sido tan generoso,
tan terco o inclusive tan iluso como para aguantar ingenuamente hasta
ver cómo la última humillante gota rebosaba la copa? ¿Ha debido romper antes? ¿Fue su estrategia negociadora la que fracasó?
Mirando retrospectivamente, es muy posible que el Presidente haya
cometido muchos errores en el proceso o hubiese sido demasiado terco
5
En: Revista Semana. Agotosto, 2002. 40 p.
39
en su búsqueda por la paz, si es que cabe el calificativo. ¿Hasta dónde se
puede ser “demasiado” obsesivo cuando se trata de buscar la paz?
Y no hay duda de que fracasó. Pero lo que no se dijo es que ¡vaya
paradoja! fracasó ganando. Esa “ingenua desesperación” por buscar la
paz de que habla Semana fue lo que a la postre dio pie para propinarle
a la guerrilla la peor derrota política de su historia.
Pastrana logró, de pronto hasta sin proponérselo, ¡he ahí su estrella!,
que la guerrilla terminara calificada como terrorista por la comunidad
internacional y violadora de los más grandes principios de la agenda política como son los Derechos Humanos, la democracia, el narcotráfico
y la ecología.
Hasta países como México y Cuba, para no hablar de los escandinavos, cambiaron radicalmente su actitud frente a los alzados en armas. Y
ni qué decir de su desprestigio interno.
Eso es lo que la historia va a registrar: Pastrana intentó, sin éxito,
negociar la paz, pero terminó derrotando estrepitosamente a la guerrilla
en el campo político (para muchos los desenmascaró), lo cual era un
paso fundamental y necesario para cualquier solución futura, sea esta
negociada o militar.
Por otro lado, la misma historia sería implacable si simultáneamente
hubiese descuidado el frente militar, porque la guerrilla sí se fortaleció
militarmente. Pero no. Resulta que hizo todo lo contrario. En medio de
las más severas dificultades fiscales, el estamento militar nunca había
recibido tanto apoyo ni nunca había estado tan bien armado, tan bien
entrenado y tan bien parado frente al país. Lo importante ahora es que
todo esto se vea en el campo de batalla para que el juicio de la historia
cumpla de veras su papel reivindicador6.
Por su parte, el presidente Andrés Pastrana en un reportaje a la Revista Semana, al ser consultado acerca de los principales logros de su
gobierno, manifestó:
6
En: Revista Semana. Agosto, 2002. 37 p.
40
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
“El diseño y puesta en marcha del Plan Colombia, la recuperación
y estabilización de la economía y la recuperación del protagonismo y
la dignidad internacional de Colombia a través de la diplomacia por la
paz”.
Al ser preguntado: ¿cuándo perdió la fe en el proceso de paz?, respondió:
“Nunca he perdido la fe en la solución política. Perdí la fe fue en las
FARC. Cada vez que destrozaban un pueblo, atentaban contra la infraestructura y se conocía un nuevo secuestro, se vulneraba la confianza
que habíamos depositado en su voluntad de paz. Las FARC perdieron
la oportunidad de que los colombianos creyeran en su palabra y la más
grande oportunidad política que han tenido”.
Al ser interrogado acerca de si fue o no error haber entregado a las
FARC la zona de distensión sin poner explícitamente unos controles, el
Presidente dijo:
“La zona siempre tuvo controles. Desde el primer día. El tema de los
controles de la zona fue más una excusa de las FARC para no avanzar
en el cese al fuego en esa etapa, y no les íbamos a seguir el juego”.
El 7 de agosto de 2002, cuando asumió como Presidente de la República el doctor Álvaro Uribe Vélez, durante su discurso de posesión,
a escasa una cuadra del Capitolio Nacional dos artefactos explosivos
impactaron en las edificaciones de la Casa de Nariño, sede de la Presidencia de la República.
A pesar de las fuertes medidas de seguridad impuestas sobre la
capital de la república por las Fuerzas Militares y de Policía, milicias,
presumiblemente de las FARC, desataban una oleada de atentados
con utilización de morteros, los cuales causaron la muerte a veintiuna personas, extremadamente pobres, residentes en la llamada “calle
del cartucho”.
En su alocución ante el Congreso y el país a través de la radio y la
televisión, el nuevo mandatario manifestó: “he solicitado al Secretario
General de las Naciones Unidas, Kofi Annan, los buenos oficios de la
41
institución para buscar el diálogo útil a partir de un alivio para la sociedad que debe ser el cese de hostilidades. En este marco exploraremos
soluciones humanitarias que liberen secuestrados, que se den a partir de
acuerdos que vislumbren la paz definitiva como algo posible”7.
El jueves 8 de agosto de 2002, el Secretario General de la Organización de Naciones Unidas, Kofi Annan, anunció al presidente Álvaro
Uribe Vélez que la organización a su cargo aceptó gestionar sus buenos
oficios para buscar la reanudación de los diálogos con las FARC.
El Presidente habló telefónicamente con el Secretario General de
Naciones Unidas desde Florencia, Caquetá, uno de los departamentos
más afectados por las acciones violentas de la guerrilla.
De la conversación fueron testigos el Defensor del Pueblo, Eduardo
Cifuentes; el Gobernador del Caquetá, Pablo Adriano Muñoz y el Alcalde de Florencia, Álvaro Pacheco. El señor Kofi Annan y el presidente
Uribe acordaron que el proceso se manejaría con total confidencialidad.
En una reacción casi inmediata al anuncio según el cual la ONU
estaría dispuesta a ofrecer sus buenos oficios para la reanudación del
proceso de paz, las FARC señalaron que “si no hay voluntad de cambio
del establecimiento colombiano, se cierra la posibilidad de ponerle fin
a la confrontación armada en el país”. Así lo consignaron en un escrito
publicado en su página de internet.
Las FARC manifestaron en su comunicado que “el papel de la ONU
en otros conflictos ha sido cuestionado. En Ruanda, en Indonesia, en
los Balcanes, hoy en el Medio Oriente con el drama del pueblo palestino. Recientemente este órgano mundial absolvió al Estado de Israel por
la masacre de Jenin”.
Igualmente, las FARC recordaron las condiciones que habían fijado
el 15 de mayo de 2002 para reanudar los diálogos con el nuevo Gobierno. En un comunicado emitido a través de la Red Resistencia, que
trasmite información de ese grupo guerrillero, las FARC solicitaban la
7
EL TIEMPO. Bogotá. 8, agosto, 2002. 1-2 p.
42
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
desmilitarización de los departamentos de Caquetá y Putumayo, con
un total de 117 000 kilómetros cuadrados y la fijación de una política
estatal contra los grupos llamados de paramilitares.
No obstante, las FARC en su comunicado indicaban que “reiteran su
profunda convicción en la urgente necesidad de la solución política al
conflicto social y armado que padece la familia colombiana”8.
Por su parte, el nuevo Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo,
manifestó: “no podemos tapar hechos como los ocurridos el día de la
posesión del Presidente, a los que tenemos que llamar actos terroristas, pero eso no quiere decir que se cierren los caminos a una eventual
conversación”.
Restrepo indicó que el presidente Álvaro Uribe Vélez deseaba emprender conversaciones con los guerrilleros de las FARC y del ELN, y
con los grupos paramilitares. Al respecto declaró: “tengo instrucciones
del Presidente de no ahorrar esfuerzos para buscar caminos que nos
lleven a la reconciliación, aunque no hay una sola fórmula ni un solo
mecanismo para lograrlo”9.
El domingo 11 de agosto el Presidente, con la firma de todos sus
ministros, dictó el Decreto 1837 de 2002, por medio del cual se declaró
el Estado de Conmoción Interior.
El siguiente es el texto del mencionado decreto:
Decreto 1837 de 2002 por el cual se declara el Estado de Conmoción Interior:
El Presidente de la República de Colombia, en ejercicio de las
facultades que le confiere el Artículo 213 de la Constitución Política
y considerando:
Que la situación de inseguridad del país se torna cada día más crítica
y son más frecuentes, despiadados y perversos los ataques contra los
ciudadanos indefensos y las violaciones a sus Derechos Humanos y a
las reglas fundamentales del Derecho internacional Humanitario.
8
Op. cit., Cali. 9, agosto, 2002. A2 p.
9
Op. cit., Bogotá. 9, agosto, 2002. 1-3 p.
43
Que la Nación entera está sometida a un régimen de terror en el que
naufraga la autoridad democrática y hace cada vez más difícil y azarosa
la actividad productiva, multiplicando el desempleo y la miseria de millones de compatriotas.
Que esos infames ataques contra el pueblo de Colombia tienen su
origen principal en la acción de bandas armadas, organizadas y financiadas al amparo del lucro gigantesco que les proporciona su participación directa y creciente en los delitos del narcotráfico, el secuestro
y la extorsión, fuentes principales de esta tragedia colectiva y su causa
eficiente más próxima y decisiva.
Que es ineludible tomar medidas inmediatas para prevenir actos de
terrorismo semejantes o peores a los que para sorpresa del mundo entero se han presentado durante las últimas semanas en diferentes lugares
del país, así como la amenaza a que está sometida nuestra democracia
por los actos de coacción de que vienen siendo víctimas los mandatarios
locales y nacionales y sus familias en todo el país.
Que por el poder financiero casi inagotable de estos grupos los hace
más temibles por su capacidad tecnológica creciente para el terror, su
desprecio a los valores más elementales del hombre y de la sociedad y
su indudable conexión con el poder destructivo que les ofrece su asociación con grupos afines de otros países o regiones.
Que la situación de inseguridad ha generado un deterioro adicional
de las zonas rurales y particularmente de las condiciones y posibilidades de empleo de la población más pobre del país.
Que los grupos criminales han multiplicado su actividad, tanto en el
terreno de los ataques terroristas a la infraestructura de servicios esenciales: la energía, el agua potable, las carreteras y los caminos; en la
comisión de delitos de lesa humanidad como las masacres, desapariciones, secuestros, desplazamientos forzados y destrucción de pueblos
indefensos. Hemos alcanzado la más alta cifra de criminalidad que en
el planeta se registra, en un proceso acumulativo que hoy nos coloca a
las puertas de la disolución social. Además, se han dedicado los grupos
armados a la vil empresa de amenazar a los legítimos representantes de
la democracia regional, los gobernadores, alcaldes, diputados y conce-
44
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
jales, y sus colaboradores, intentando la ruina de nuestras instituciones,
sembrando la anarquía y creando la sensación de orfandad, abandono y
desgobierno en amplias zonas del país.
Que los hechos públicos y notorios que anteceden, prueban dolorosamente la debilidad del Estado para contrarrestar eficientemente estas
acciones terroristas e impedir la extensión de sus efectos, con los recursos que el derecho ordinario ha previsto para una Nación en un estado
de relativa calma. Los medios económicos de que hoy se dispone son
insuficientes para la inversión adicional que reclama el crecimiento de
la Policía y las Fuerzas Militares, sus planes de expansión operativa y la
modernización de su equipamiento para los años 2002 y 2003.
Que corresponde al Presidente de la República liderar las acciones
necesarias de parte de las autoridades públicas contra estas formas salvajes de presión en perjuicio de la sociedad colombiana, restableciendo
el orden público, garantizando los postulados del Estado Social de Derecho y la lucha por reafirmar los principios tutelares del respeto a los
Derechos Humanos y al Derecho Internacional Humanitario.
Que sin descuidar las tareas que al Estado corresponde para crear o
fortalecer las condiciones estructurales que permitan combatir la anarquía, el terror y la violencia que lo amenazan, es impostergable la adopción de medidas extraordinarias, transitorias pero eficaces para devolver
a los colombianos su seguridad individual y colectiva y para responder
al desafío que sin antecedentes les proponen las bandas criminales.
Que todas las personas tienen que hacer un significativo esfuerzo tributario para poner al Estado en condiciones de garantizar la seguridad
ciudadana en vastas zonas de su territorio, hoy desamparadas, con pie
de fuerza, equipos de comunicación, dotación y medios militares y de
policía, adicionales a los hoy, limitados e insuficientes de que dispone.
Igualmente, será preciso adoptar medidas que permitan recuperar la vigencia de los derechos y las libertades públicas en todo el territorio nacional, sin sacrificio de las garantías consagradas en esta Constitución
y en los tratados internacionales sobre la materia suscritos y ratificados
por Colombia.
Que dada la grave situación fiscal del país, la Nación no cuenta
en la actualidad con los recursos necesarios para financiar la fuerza
45
pública y las demás instituciones del Estado que deben intervenir para
conjurar las causas de la perturbación e impedir la extensión de sus
efectos, motivo por el cual es necesario imponer y recaudar nuevas
contribuciones fiscales.
Que los recursos apropiados en el Presupuesto General de la Nación
no son suficientes para sufragar los gastos que demanda el Estado de
Conmoción Interior, por lo cual es necesario adicionar y modificar la
Ley de Apropiaciones para la vigencia fiscal del 2002.
Que es necesario ampliar el pie de fuerza a disposición de la Nación.
Su aumento se logrará mediante la incorporación de nuevos soldados y
policías a través de cualquiera de las modalidades previstas en la ley, así
como mediante la ampliación del período de prestación del servicio de
los soldados regulares.
Que se requiere establecer mecanismos para que los operadores de
sistemas de comunicación colaboren con las autoridades de forma eficaz.
Que es necesario aumentar y mejorar la capacidad técnica y el equipamiento que requieren las Fuerzas Armadas y de Policía para desarrollar los operativos necesarios que permitan enfrentar los ataques a
poblaciones y ciudadanos.
Que las autoridades nacionales deben desarrollar un plan nacional
tendiente a desmovilizar los grupos terroristas que vienen actuando en
diferentes lugares de la Nación.
Que es necesario fortalecer la dotación de los servicios de inteligencia, de la Fuerza Pública y de la Rama Judicial, con los recursos jurídicos y materiales necesarios para que su actividad sea efectiva y para
prever, evitar y sancionar actos terroristas y criminales.
Que resulta necesario extender la responsabilidad penal de los miembros de las organizaciones terroristas hacia sus cabecillas y dirigentes.
Que se requiere ampliar el apoyo de fiscales, procuradores especiales,
defensores de oficio, de Policía Judicial y de Defensoría del Pueblo, para
garantizar los derechos de los procesados, así como el respeto a los Derechos Humanos y a las normas del Derecho internacional Humanitario.
46
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Que resulta indispensable establecer mecanismos jurídicos para
operar eficazmente en contra de la delincuencia organizada facilitando la aprehensión, captura y retención de los eventuales implicados; realizando allanamientos e interceptaciones, identificando
sospechosos y recogiendo pruebas que conduzcan a establecer la responsabilidad de autores y participes. Así mismo asegurar que dichos
mecanismos jurídicos contribuyan a la eficacia de la investigación y
juzgamiento de conductas terroristas o de aquellas que resulten de la
actividad criminal organizada.
Que es necesario fortalecer los mecanismos de cooperación ciudadana y en especial organizar redes que a través de la Policía Nacional o
de las Fuerzas Militares, según el caso, cooperen de manera activa para
prevención del delito y de los actos terroristas tanto en las zonas urbanas como rurales, en cumplimiento de las normas constitucionales que
regulan los deberes de la persona y el ciudadano.
Que es necesario reforzar los programas de lucha contra el secuestro
y la extorsión, dotando a las autoridades competentes de los mecanismos para prevenir el delito, capturar y sancionar delincuentes, proteger
a los funcionarios judiciales, a los miembros de la Policía Nacional, de
Seguridad Nacional, de las Fuerzas Militares y los organismos de control. Así mismo, resulta necesario restringir el acceso de las organizaciones delincuenciales a los activos y recursos financieros originados en
cualquier actividad ilícita, sea cual fuere el mecanismo a través del cual
estén movilizando los recursos dentro del sistema económico. De igual
manera es indispensable acelerar los procesos de extinción de dominio
sobre los patrimonios ilegítimos, buscando su plena eficacia.
Que en las circunstancias de excepción que vive el país se requiere
que las autoridades adopten medidas tendientes a restringir la libre circulación de personas y vehículos en aquellos lugares y horas determinados por las autoridades respectivas.
Que las atribuciones ordinarias de las autoridades de policía no resultan suficientes para prevenir la ocurrencia de nuevos hechos criminales
y terroristas, y para conjurar la situación de grave perturbación mencionada, por lo cual se hace indispensable adoptar medidas de excepción.
47
Decreta:
Articulo 1º. Declarar el Estado de Conmoción Interior en todo el
territorio nacional, por el término de noventa (90) días a partir de la
vigencia del presente decreto.
Articulo 2º. Al Congreso se le presentará una exposición amplia y
detallada de las razones que justifican esta declaratoria.
Articulo 3º. A la Honorable Corte Constitucional se enviarán, para
su examen, los decretos legislativos que se expidan al abrigo y como
consecuencia de esta declaración.
Articulo 4º. El presente Decreto rige a partir de la fecha de su expedición.
Publíquese y cúmplase,
Dado en Bogotá D.C., a los 11 días de agosto de 200210.
CARTA ABIERTA DE LAS FARC
El 22 de agosto de 2002, en la página de internet de las FARC apareció publicada una carta abierta dirigida por esa organización guerrillera
al Presidente de la República, en la cual ratificaban estar dispuestas a
negociar con el nuevo Gobierno, pero no aceptaban la mediación de las
Naciones Unidas tal como lo había propuesto el presidente Uribe Vélez.
Las FARC manifestaban en su comunicación su disposición a retomar la agenda acordada con el anterior Gobierno y a reanudar los
diálogos en el país, para lo cual ratificaban algunas exigencias que la
organización había hecho al gobierno Pastrana el 15 de mayo de 200211.
En dicha comunicación las FARC reiteraban su profunda convicción
en la urgente necesidad de una solución política al conflicto social y
armado.
10
ANCOL. www.presidencia.gov.co. También: El Tiempo, Bogotá, 13 de agosto de 2002, 1-5 p.
11
Op. cit. 23, agosto, 2002. 1-6 p.
48
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El 13 de septiembre el presidente Álvaro Uribe participó en la asamblea anual de las Naciones Unidas, y en esa ocasión se entrevistó con
el Secretario General de la ONU, Kofi Annan. El Presidente reiteró al
señor Annan su petición para que la ONU, a través de sus buenos oficios, buscara la posibilidad de reanudar el proceso de paz con los grupos
insurgentes, especialmente las FARC. Dijo el presidente Uribe que su
Política de Seguridad Democrática no era opuesta al diálogo con los
alzados en armas12.
PRIMEROS CONTACTOS CON LAS AUTODEFENSAS
En el mes de octubre de 2002 los grupos de autodefensas manifestaron, a través de los obispos, su disposición para declarar un cese de
hostilidades con el fin de iniciar un proceso de paz. Por tal motivo, el
Alto Comisionado para la Paz adelantó los primeros contactos con
dichos grupos, en reuniones que tuvieron lugar durante el mes de noviembre de 2002.
El proceso se inició a finales del año 2002 con la declaratoria por
parte de los grupos de autodefensas de un cese unilateral de hostilidades, cumpliendo así el requisito del Gobierno Nacional para el inicio
de conversaciones. En carta pública enviada al señor Presidente de la
República el 29 de noviembre de 2002, las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, declararon un cese de hostilidades con alcance nacional,
a partir del primero de diciembre.
Similar pronunciamiento hizo días después el Bloque Central Bolívar, BCB, anunciando un “cese unilateral, incondicional e indefinido de
hostilidades, a partir de las cero horas del cinco de diciembre de 2002”.
De igual manera, el ocho de diciembre, la Alianza Oriente -compuesta
por las Autodefensas Campesinas de Casanare y las autodefensas de
Meta y Vichada- se comprometió a decretar un cese de hostilidades a
partir del mes de diciembre, aceptando los requisitos exigidos por el
Gobierno.
12
Op. cit. 14, septiembre, 2002. A4 p.
Op. cit. 14, septiembre, 2002. 1-3 p.
49
Sólo quedaba excluido de esta iniciativa el Bloque Metro, que se había separado de las AUC y se pronunciaba en contra del proceso.
Como respuesta a este gesto, el 23 de diciembre de ese mismo año el
Gobierno Nacional designó una Comisión Exploratoria de Paz, con la
tarea de realizar contactos con los grupos de autodefensas que habían
declarado públicamente un cese de hostilidades y expresado la voluntad
de iniciar acercamientos para adelantar un proceso de paz. Apoyándose
en la Ley 782 de 2002 que acababa de ser sancionada por el ejecutivo,
el Gobierno expidió el Decreto 185 de 23 de diciembre de 2002, escogiendo a los doctores Eduardo León Espinosa Faccio-Lince, Ricardo
Avellaneda Cortés, Carlos Franco Echevarría, Jorge Ignacio Castaño
Giraldo, Gilberto Alzate Ronga y Juan B. Pérez Rubiano para adelantar
sus labores con “la más estricta confidencialidad”. La responsabilidad
de informar sobre los desarrollos y avances del proceso quedó en manos
del Alto Comisionado para la Paz.
Los contactos se deberían hacer con las Autodefensas Unidas de Colombia, las Autodefensas Campesinas, el Bloque Central Bolívar, Vencedores de Arauca, las Autodefensas Alianza del Oriente, conformada
esta última agrupación por las autodefensas del sur del Casanare, Meta
y Vichada.
La Comisión Exploratoria de Paz quedó integrada por Eduardo
León Espinosa Faccio-Lince, Ricardo Avellaneda Cortés, Carlos Franco Echavarría, José Ignacio Castaño Giraldo, Gilberto Alzate Ronga y
Juan B. Pérez Rubiano.
Por medio de la siguiente norma se conformó la Comisión
Exploratoria de Paz:
Diciembre 23 de 2002
Resolución 185
23/12/2002
Por la cual se integra una Comisión Exploratoria de Paz.
50
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El Presidente de la República, en ejercicio de las atribuciones conferidas por la ley 782 de 2002, por medio de la cual se prorroga la vigencia
de la ley 418 de 1997 prorrogada y modificada por la ley 548 de 1999 y
se modifican algunas de sus disposiciones,
Considerando:
Que el Artículo 22 de la Constitución Política establece que la paz es
un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.
Que el Artículo 8 de la Ley 418 de 1997, modificado por el Artículo
3 de la Ley 782 de 2002, establece que los representantes autorizados
expresamente por el Gobierno Nacional podrán realizar actos tendientes a propiciar acercamientos y adelantar diálogos con los grupos armados organizados al margen de la ley.
Que los siguientes grupos armados organizados al margen de la ley
han declarado públicamente un cese de hostilidades y su voluntad de
iniciar acercamientos con el Gobierno para buscar opciones para la paz
y la reconciliación nacional: Autodefensas Unidas de Colombia, AUC;
Autodefensas Campesinas Bloque Central Bolívar, BCB, y Vencedores
de Arauca; y el Grupo de Autodefensas Alianza del Oriente, conformado por las autodefensas del sur de Casanare, Meta y Vichada.
Que es necesario integrar una Comisión Exploratoria de Paz, para
propiciar acercamientos y establecer contactos con los citados grupos de
autodefensas y buscar opciones para la paz y la reconciliación nacionales.
Resuelve:
Artículo 1º. Integrar una Comisión Exploratoria de Paz para propiciar acercamientos y establecer contactos con los Grupos de Autodefensas Unidas de Colombia, AUC; con las Autodefensas Campesinas
Bloque Central Bolívar, BCB, y Vencedores de Arauca; y con el Grupo
de Autodefensas Alianza del Oriente, conformada por las autodefensas
del sur de Casanare, Meta y Vichada.
Artículo 2º. Designar como representantes del Gobierno Nacional en
la Comisión Exploratoria de Paz a los doctores Eduardo León Espinosa
Faccio-Lince, Ricardo Avellaneda Cortés, Carlos Franco Echevarría, Jorge
Ignacio Castaño Giraldo, Gilberto Alzate Ronga y Juan B. Pérez Rubiano.
51
Artículo 3º. La Comisión Exploratoria adelantará sus labores con la
más estricta confidencialidad. De los desarrollos y avances del proceso
informará al país, exclusivamente, el Alto Comisionado para la Paz.
Artículo 4º. La presente resolución rige a partir de la fecha de su
expedición.
Comuníquese y cúmplase.
Dada en Bogotá, D. C., a 23 de diciembre de 2002.
Álvaro Uribe Vélez
El ministro de Justicia y del Derecho encargado de las funciones del
Despacho del Ministro del Interior, Fernando Londoño Hoyos.
El ministro de Justicia y del Derecho, Fernando Londoño Hoyos.
La ministra de Defensa Nacional, Martha Lucía Ramírez de Rincón13.
Carlos Franco Echavarría es Director de Derechos Humanos de la
Vicepresidencia de la República y desmovilizado del EPL; Eduardo
León es médico, Presidente de la Fundación para la Biodiversidad
y el Desarrollo; Ricardo Avellaneda es economista y ex integrante
de la Fundación Anti-secuestro, País Libre; José Ignacio Castaño ha
sido miembro de la Comisión de Acercamiento con el ELN; Gilberto Alzate es vicepresidente del Consejo Nacional Electoral y Juan
B. Pérez fue Senador de la República y Viceministro de Trabajo y
Seguridad Social14.
EL ELN SUSPENDE DIÁLOGOS CON EL GOBIERNO
El 26 de diciembre de 2002 el ELN suspendió los diálogos con el
Gobierno y anunció que ese movimiento consideraba que la administración del presidente Álvaro Uribe llevaría al país a una guerra de
consecuencias impredecibles. En su comunicado el ELN manifestó que
había suspendido las conversaciones exploratorias que adelantaba con
el Gobierno y expresó:
13
PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA DE COLOMBIA [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
14
Op. cit. 24, diciembre, 2002. 1 y A4 p.
Op. cit. 24, diciembre, 2002. 1-4 p.
52
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
“La gestión de este gobierno se dirige a preparar y financiar la guerra, involucrar al país en ella y legitimar la intervención extranjera, que
entre otras cosas avanza a espaldas y en secreto”15. Además, calificaba
al Gobierno de autoritario.
Por su parte, en la misma fecha se pronunciaron las Autodefensas Unidas de Colombia en un extenso comunicado en el cual celebraron la decisión del Gobierno de crear una comisión para explorar acuerdos de paz.
En carta abierta dirigida al Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, las AUC decían que valoraban la disposición del Gobierno a dialogar con todos los actores del conflicto sin exclusiones. Igualmente, manifestaban que la Comisión Exploratoria contaba con la buena voluntad
de esa organización.
Por su parte, las FARC llamaron a formar un gobierno en la clandestinidad para luchar contra el que llamaron “régimen fascista” del presidente Álvaro Uribe y rechazaron una vez más la posible mediación de
la Organización de las Naciones Unidas en un eventual diálogo de paz.
El 8 de enero de 2003 el presidente Álvaro Uribe planteó por primera
vez la posibilidad de un Acuerdo Humanitario con las FARC para liberar a los civiles y militares secuestrados por esa organización a cambio
de la libertad de algunos guerrilleros presos.
“Varié mi posición inicial y ahora estoy hablando de un Acuerdo Humanitario, siempre y cuando la guerrilla no regrese de la cárcel a delinquir”,
dijo el Presidente en una entrevista telefónica con la cadena radial RCN.
Por declaraciones de uno de los ex miembros de las FARC en el Comité Temático de la fracasada Mesa de Negociaciones, se supo que esta
guerrilla esperaba una propuesta distinta a la mediación de la ONU y a
reunirse en el extranjero con voceros gubernamentales para destrabar el
tema del intercambio entre secuestrados y guerrilleros presos.
15
Op. cit. 26, diciembre, 2002. 1 y 1-8 p.
Op. cit. 26, diciembre, 2002. 1y A4 p.
53
De otro lado, el presidente Uribe logró el compromiso de los embajadores de los cinco países que durante la administración Pastrana
actuaron como facilitadores en los contactos con el ELN.
Tras la primera reunión que sostuvieron el Presidente y los representantes en Colombia de Cuba, España, Suiza, Noruega y Francia, durante
cincuenta minutos en la Casa de Nariño, el Presidente solicitó los buenos
oficios de los representantes diplomáticos de los cinco países amigos.
“Queremos reafirmar públicamente la voluntad de paz del Gobierno. Se lo hemos manifestado así a los embajadores del grupo de países
amigos y esperamos que este grupo pueda adelantar una labor facilitadora que nos permita retomar nuevamente las conversaciones con el
ELN”, dijo el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, único vocero
autorizado en este tema.
El Gobierno decidió recurrir a esta instancia luego de que resultaron
frustrados cuatro encuentros que sostuvieron sus delegados con portavoces del ELN en Cuba y las visitas realizadas a los dos voceros guerrilleros de esa organización recluidos en la Cárcel de Itagüí.
La oferta gubernamental, sobre la que no se había podido avanzar,
consistía en el cese de hostilidades y avanzar en la convención nacional,
propuesta por el ELN para analizar problemas estructurales del país.
“La respuesta que hemos obtenido por parte del ELN es muy ideológica. Los vemos en una negativa sin razones ni argumentos”, explicó
a la prensa Restrepo, luego de su encuentro con Viktor Christen, embajador de Suiza; Daniel Parfait, de Francia; Tom Tyrihjell, de Noruega;
Luis Hernández Ojeda, de Cuba y Gonzalo Quintero, encargado de
negocios de España.
En todos ellos dijo el presidente Uribe haber depositado un voto de
confianza para hacer posible encontrarle un camino a la negociación
con el ELN. El comisionado agregó que la Iglesia Católica colombiana
ayudaría en esa labor. En el Gobierno pasado el ELN había pedido el
apoyo de los obispos de las Diócesis de Barrancabermeja, Jaime Prieto,
y de Sonsón-Rionegro, Flavio Gómez.
54
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Los cinco países actuaron durante la administración Pastrana como
facilitadores en los acercamientos con esta guerrilla, sin que fuera posible concretar una negociación de paz formal, principalmente por el
reclamo del ELN de una zona desmilitarizada en el sur de Bolívar.
El presidente Uribe había anticipado que no habría zonas de despeje
ni para los paramilitares ni para el ELN. Lo que el Gobierno tenía previsto eran “lugares de asentamiento para que los miembros del ELN pudieran permanecer durante las negociaciones”.
En declaraciones radiales del día anterior a RCN, el Presidente les
había pedido a los líderes del ELN expresar claramente cuáles eran las
condiciones para avanzar en un proceso de paz con el Gobierno, “no
con discursos ideológicos sino con puntos razonables. ¿Cuáles son las
condiciones para avanzar en ese proceso?”, precisó16.
El 31 de enero de 2003, el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, anunció que el Gobierno Nacional había designado una comisión
facilitadora para adelantar un Acuerdo Humanitario con las FARC tendiente a lograr la liberación de las personas retenidas por esa organización guerrillera.
La comisión facilitadora quedó conformada por Monseñor Luis Augusto Castro, Vicepresidente de la Conferencia Episcopal Colombiana;
el padre Darío Echeverri, Secretario de la Comisión de Conciliación
Nacional y el ex Ministro Angelino Garzón.
SE INICIAN DIÁLOGOS CON LAS AUTODEFENSAS
Al momento de iniciar diálogos con los grupos de autodefensas en
las primeras semanas de 2003, el Alto Comisionado para la Paz y la
Comisión Exploratoria debieron atender cuatro mesas de diálogo paralelas: una con las AUC, otras dos con el BCB y la Alianza Oriente,
y una cuarta con las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio,
ACMM, las cuales se negaron a compartir mesa con las anteriores.
16
Ibíd. 9, enero, 2003. 1 y A2 p.
Op. cit. 9, enero, 2003. 1 y 1-6 p.
55
En todas ellas se reafirmó por parte del Gobierno, como objetivo
prioritario de la fase exploratoria, el cumplimiento del cese de hostilidades que permitiera una disminución efectiva de los niveles de violencia
contra la población civil por parte de los grupos de autodefensas.
Con las AUC se realizó una primera reunión el 22 de enero de 2003,
después de la cual el Bloque Élmer Cárdenas se retiró de la mesa, anunciando al día siguiente que lo hacía considerando que la propuesta de
paz planteada por el Gobierno a las autodefensas era como invitarlas a
un “suicidio colectivo”.
Por tal motivo, y para impedir nuevas deserciones, los jefes de las
autodefensas que participaban en la mesa de diálogo firmaron un acta
de compromiso el 13 de febrero de 2003, que los obligaba a mantenerse
en el proceso so pena de perder la comandancia de sus estructuras.
Acta de compromiso
Febrero 13 de 2003
Reunión comandantes AUC
Las AUC estamos dispuestas a hacer un gran aporte para la paz
de nuestro país, generando condiciones que nos permitan creer en las
fortalezas del Estado y sus instituciones, las cuales consideramos han
tomado rumbos y fuertes vientos de cambio. Una negociación que favorezca al país y proteja los integrantes políticos, militares y sociales del
Movimiento Nacional de Autodefensas, consideramos es una racional
manera de encarar el nuevo milenio en busca de la convivencia y estabilidad de la gobernabilidad.
En este marco, es el compromiso de cada uno de los comandantes
presentes y firmantes que el Movimiento Nacional de Autodefensas llegará hasta el final en este proceso de negociación, el cual conducirá a la
reinserción a la vida civil del país, siendo claro que toda nuestra relación
territorios - hombres - armas, están en servicio en este momento histórico que vivimos.
Nos comprometemos a que, si uno de nosotros se margina de este
proceso, el conjunto de la organización asumirá la totalidad de sus te-
56
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
rritorios e integrantes; esto sería independiente del resultado final en la
negociación actual. Así mismo, este acuerdo queda como un principio
fundamental que debe ser asumido totalmente en el caso en que una de
las fuerzas aliadas defina más adelante reintegrarse al actual proceso de
negociación.
Conservar y construir la unidad de mando es la única forma para
salir airosos y ser alternativa para el conjunto del pueblo colombiano
que en un determinado momentos nos vio como una esperanza real y
posible.
A la presente firman,
Salvatore Mancuso
Adolfo Paz
José Vicente Castaño
DIPOM
Salvatore Mancuso
Bloque Norte - ACCU
Ramiro Vanoy Cuco
Bloque Mineros - ACCU
Hernán Hernández
Bloque Conjunto Calima - ACCU
Adolfo Paz
Bloque Pacífico - ACCU17
El 22 de enero de 2003 se produjo la primera reunión de la Comisión
Exploratoria creada por el Gobierno Nacional con representantes de
las AUC. Este encuentro tuvo lugar en un sitio no especificado, supuestamente del departamento de Córdoba. Asistieron los miembros de la
Comisión Exploratoria: Juan B. Pérez, Gilberto Alzate Ronga, Carlos
Franco, Eduardo Espinosa Faccio-Lince, Ricardo Avellaneda y Jorge
Castaño, presididos por el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo. También estuvieron presentes los líderes de las autodefensas Carlos
Castaño y Salvatore Mancuso.
En la misma reunión estuvo el Obispo de Montería, Monseñor Julio
César Vidal Ortiz, en calidad de facilitador de los diálogos.
17
Op. cit. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
57
Entre tanto, de manera paralela se adelantaron encuentros con el
Bloque Central Bolívar, la Alianza Oriente y las ACMM, comandadas
por Ramón Isaza. Sin embargo, los diálogos más estructurados tuvieron
lugar en la mesa que con las AUC se adelantaba en territorio de Córdoba. Al final de la tercera reunión con este grupo, que tuvo lugar los
días 20 y 21 de marzo de 2003, el gobierno nacional y las autodefensas
expidieron su primer comunicado conjunto reiterando su voluntad de
encontrar caminos que conduzcan a la paz del país, e informando que
“la fase exploratoria de diálogo entre el Gobierno y las AUC sigue avanzando para sentar las bases de una negociación, con el propósito de llegar a una reincorporación de los miembros de las AUC a la vida civil”.
El 11 de febrero de 2003 las FARC rechazaron la Comisión Exploratoria nombrada por el Gobierno para buscar acercamiento con esa organización guerrillera con miras a un Acuerdo Humanitario para liberar a
las personas en poder de ese grupo.
En un comunicado del día sábado 8 de febrero, conocido en esta
fecha, el Secretariado del Estado Mayor Central del grupo insurgente
dice que el nombramiento de la Comisión Exploratoria es un salto de
liebre con orejas de conejo dado por el presidente Álvaro Uribe Vélez.
Las FARC insisten en su comunicado en que el Gobierno no había
respondido a la propuesta que ellos formularon meses antes la cual se
resumía en realizar en algún lugar del territorio nacional una reunión
entre voceros de las FARC y del Gobierno Nacional y establecer una
zona desmilitarizada para la negociación. Piden, además, garantías de
seguridad para los voceros de esa guerrilla que vayan a participar en las
negociaciones con el Gobierno, al tiempo que manifiestan su voluntad
de llegar a un acuerdo que permita solucionar el problema de los retenidos. Son reiterativas, también, en llamar “prisioneros de guerra” a
los miembros del Estado y de la fuerza pública retenidos por ellos y a
los guerrilleros también retenidos en las cárceles del Estado. No hablan
para nada de los civiles en poder de la guerrilla.
El siguiente es el texto completo del comunicado de las FARC:
1. El señor Presidente de la República, Álvaro Uribe, persiste obstinadamente en su arrogante posición de negarse a nombrar su
58
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
comisión negociadora de alto nivel encargada de definir con las
FARC-EP, un acuerdo que posibilite la liberación de las personas
privadas de su libertad en poder de las dos partes: Estado y guerrilla de las FARC-EP.
El nombramiento de la Comisión Exploratoria es un salto de
liebre con orejas de conejo dado por el señor Uribe Vélez, con
la intención de distraer la atención de las personas interesadas
en la firma del acuerdo, al tiempo que sigue sin responder las
exigencias de las FARC.
2. La conocida intransigencia presidencial volvió a ser ratificada
por el propio jefe de Estado, en ocasión de la reciente reunión
protocolaria con los representantes del cuerpo diplomático acreditado en Colombia, al reiterar sus obsesivas elucubraciones dictatoriales de imponerle sus sueños y deseos a las FARC-EP, sin
antes responder a las exigencias formuladas por el Estado Mayor
Central de la organización guerrillera sobre ese objetivo, en carta
dirigida al Encuentro Nacional de los Retenidos por Razones del
Conflicto, en noviembre 4 de 2002, que dice:
Igualmente, aprovechamos esta formidable ocasión para que ustedes
conozcan detalles de nuestra propuesta:
a. Las eventuales entrevistas entre voceros autorizados del Gobierno y de las FARC-EP para la búsqueda de acuerdos sobre canje de prisioneros deben efectuarse en Colombia, en
un lugar previamente convenido por las dos partes, Gobierno y FARC-EP.
b. Para efectuar las entrevistas conducentes al canje, el Gobierno proporcionará garantías suficientes para los voceros guerrilleros encargados de construir y firmar el eventual acuerdo, para lo cual se requieren zonas desmilitarizadas.
c. En desarrollo del acuerdo sobre Canje, las FARC-EP están
dispuestas a dejar en libertad todos los militares y policías
en su poder, los doce diputados del Valle del Cauca, los dos
ex ministros de Estado, el Gobernador de Antioquia, el ex
Gobernador del Meta, la ex candidata presidencial Ingrid
Betancourt.
59
d. En contraprestación a la liberación de sus prisioneros, exigimos del Estado y del Gobierno la liberación de todas las
guerrilleras y todos los guerrilleros privados de la libertad,
actualmente en su poder.
e. Recibiremos del Gobierno los prisioneros guerrilleros en Colombia, en el mismo lugar donde haremos entrega de los suyos.
f. Se requiere conocer los nombres y apellidos de los voceros
oficiales del Gobierno para el intercambio de prisioneros.
3. Sin zona despejada es imposible lograr el encuentro de las dos
comisiones Gobierno y FARC-ER. El inusitado incremento de
las medidas represivas promulgadas al amparo de la Conmoción
Interior, con la indiscriminada, diabólica y desesperada cacería
de brujas contra los opositores políticos del Gobierno en toda
Colombia, imposibilita que personas de nuestra entera confianza sirvan de puente y enlace entre los Voceros del Gobierno y
de las FARC-EP, sin que sean detenidos o muertos a manos de
integrantes de la fuerza pública.
4. No obstante, a la evidente ausencia de sensatez y repetidas falacias del Gobierno para responder con evasivas al permanente llamado de los familiares, personalidades y países amigos del canje
o Acuerdo Humanitario, que ponga fin al indefinido cautiverio
de los prisioneros de guerra en poder de las dos partes, las FARCEP vuelven a ratificar su voluntad política de concertar un acuerdo que permita solucionar este problema de los colombianos,
surgido estrictamente por motivos políticos inherentes al conflicto político, económico, social y armado que vive Colombia.
5. Igualmente, las FARC-EP responsabilizan desde ahora, ante los
familiares, las comunidades internacional y nacional, al Presidente de la República y a sus fuerzas de seguridad por lo que pueda suceder con la integridad física de los prisioneros de guerra,
si prevalece en la casta gobernante la pretensión de recuperar sus
prisioneros por medio de la fuerza de las armas.
60
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Secretariado del Estado Mayor Central de las FARC-EP.
Montañas de Colombia, febrero 8 de 200318.
Los tres estadounidenses que realizaban operaciones de inteligencia
en el Caquetá y que fueron retenidos por las FARC el 13 febrero de
2003, “son prisioneros de guerra y sólo serán liberados junto a políticos
colombianos una vez se materialice el canje entre el grupo insurgente
y el gobierno nacional”. Así lo dio a conocer el secretariado del estado
mayor de las FARC en un comunicado difundido en internet el 24 de
febrero luego de haber admitido que los tripulantes de la aeronave siniestrada estaban en su poder.
“Para dejar en libertad a los tres altos oficiales capturados por nuestras unidades, declaramos: que los tres prisioneros de guerra gringos en
poder de nuestra organización serán liberados junto con los prisioneros
de guerra del Estado colombiano, una vez se materialice el canje en una
amplia zona desmilitarizada, entre el gobierno de Álvaro Uribe Vélez
y las FARC-EP”.
En el mismo comunicado las FARC manifestaban que “...para la
firma del acuerdo y la liberación de la totalidad de los prisioneros de
guerra por las partes, podrá convenirse el acompañamiento de representantes autorizados de algunos gobiernos y personalidades”. Por otra
parte, ratificaban que una unidad del Bloque Sur “derribó una avioneta
de propiedad del gobierno norteamericano, tripulada por un militar colombiano y cuatro norteamericanos”.
NUEVO COMUNICADO DE LAS FARC
Comunicado Gobierno - AUC
Marzo 21 de 2003
Comunicado a la opinión pública
18
DIARIO EL TIEMPO [ en línea], febrero, 2003. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
Op. cit. 12, febrero, 2003. 1 y 1-6 p.
61
El Gobierno Nacional y las Autodefensas Unidas de Colombia,
AUC, informan a la opinión pública que durante los días 20 y 21 de
marzo se reunieron el equipo negociador de las AUC y 34 dirigentes
militares y políticos de la organización con el señor Alto Comisionado
para la Paz y la Comisión Exploratoria nombrada por el señor Presidente de la República, con el fin de continuar la dinámica de este proceso
de acercamiento. Delegados de la Iglesia Católica estuvieron presentes
en condición de facilitadores.
Como conclusiones de este encuentro, las partes informan lo siguiente:
La fase exploratoria de diálogo entre el Gobierno y las AUC sigue
avanzando para sentar las bases de una negociación, con el propósito de
llegar a una reincorporación de los miembros de las AUC a la vida civil.
Las partes mantienen su voluntad de encontrar caminos para la paz
del país. El Gobierno ha insistido en que es requisito para avanzar en el
proceso mantener y perfeccionar el cese de hostilidades declarado por
las Autodefensas y, en especial, suspender todas las acciones que afecten
a los civiles. Las AUC han reiterado su compromiso con este objetivo.
Las partes convocan a la comunidad internacional y a la sociedad
colombiana a respaldar todos los esfuerzos que lleven a la reconciliación nacional y que fortalezcan el Estado de Derecho.
Las partes invitan a las fuerzas políticas, sociales y gremiales a aportar
ideas y hacer compromisos para ayudar a que este proceso sea exitoso y
lograr así una salida concertada para la reconciliación y la paz nacional.
Por el Gobierno Nacional:
Luis Carlos Restrepo
Por las Autodefensas Unidas de Colombia
Salvatore Mancuso
Carlos Castaño
Marzo 21 de 200319
19
Op. cit. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
62
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El 31 de marzo de 2003 el comandante de las FARC, Manuel Marulanda Vélez, envió una carta a los generales de la república en la cual
los invitó a dialogar y a dirimir las diferencias que han mantenido vivo
el conflicto armado durante los últimos 38 años. Esa comunicación no
recibió respuesta de los destinatarios.
A partir de los compromisos surgidos de la fase exploratoria, los grupos de autodefensas dejaron en manos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar a 69 menores, entre el 3 de junio y el 27 de julio de 2003.
Pasados los primeros cinco meses de reuniones exploratorias con los
grupos de autodefensas, la Comisión Exploratoria y el equipo de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz se dedicaron a sistematizar la
experiencia, proceso de análisis que culminó en una reunión el día 17
de junio con el señor Presidente de la República.
El 25 de junio de 2003 la Comisión Exploratoria hizo público un
documento de recomendaciones y sugirió continuar con el proceso de
paz -previo cumplimiento total y verificable del cese de hostilidades-,
con el objetivo central de desmovilizar y reincorporar a la vida civil a los
integrantes de las autodefensas. Se recomendó, igualmente, insistir en la
necesidad de congregar en una sola mesa nacional de paz a los diferentes grupos de autodefensas que estaban conversando con el Gobierno.
Para mantener, perfeccionar y verificar el cese total de hostilidades,
como condición del Gobierno Nacional para continuar con el proceso,
la comisión recomendó la concentración de las fuerzas irregulares y el
abandono total de sus actividades ilícitas, tales como narcotráfico, robo
de combustible, extorsión y secuestro. Así mismo solicitó el acompañamiento de la comunidad internacional y continuar con las labores de
facilitación de la Iglesia Católica y sugirió, además, aplicar y priorizar el
desarrollo de una política de seguridad integral en las zonas de influencia de las autodefensas, enmarcada dentro de la Política de Seguridad
Democrática contenida en el Plan de Desarrollo 2002-2006 “Hacia un
Estado Comunitario”.
63
DOCUMENTO DE RECOMENDACIONES REALIZADO
POR LA COMISIÓN EXPLORATORIA
Junio 25 de 2003
Los miembros de la Comisión Exploratoria, designados por el señor
Presidente de la República el 23 de diciembre de 2002, con la misión
precisa y explícita de entablar contactos directos con los grupos de autodefensa, informamos a la opinión pública que luego de realizar los
acercamientos con estos grupos, hemos coincidido en formular una
serie de recomendaciones al Gobierno frente al proceso de paz con
estos grupos.
Dichas recomendaciones ya fueron entregadas al señor Presidente
de la República y al Alto Comisionado para la Paz, para su correspondiente análisis.
A continuación damos a conocer las recomendaciones de la Comisión Exploratoria:
1. Continuar con el proceso de paz, -previo cumplimiento total y
verificable del cese de hostilidades-, con el objetivo central de
desmovilizar y reincorporar a la vida civil a los integrantes de las
autodefensas. Se recomienda insistir en la necesidad de congregar una sola mesa nacional de paz.
2. Mantener, perfeccionar y verificar el cese total de hostilidades
como condición del Gobierno Nacional para continuar con el
proceso, siendo la concentración de fuerzas la opción recomendada para su verificación.
3. Exigir el abandono total de actividades ilícitas, tales como: narcotráfico, robo de combustible, extorsión y secuestro.
4. Acordar fórmulas para la concentración de las fuerzas irregulares, como garantía de una siguiente etapa del proceso.
5. Aplicar y priorizar el desarrollo de la Política de Seguridad Integral en las zonas de influencia de las autodefensas, enmarcada
dentro de la Política de Seguridad Democrática contenida en el
Plan de Desarrollo 2002-2006 “Hacia un Estado Comunitario”.
64
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
6. Definir y concretar alternativas jurídicas que hagan posible el
avance de un acuerdo de paz.
7. Solicitar la continuidad de la Iglesia Católica como facilitador y
testigo del proceso de paz.
8. Solicitar veeduría y acompañamiento internacional, con el fin de
hacer evidente la seriedad del proceso y el cumplimiento de los
compromisos adquiridos por las partes.
9. Adecuar el Programa de Reincorporación del Gobierno Nacional de acuerdo con el perfil de los miembros de las autodefensas
y gestionar los recursos necesarios.
10.Diseñar y aplicar una “Política de Estado” para el tratamiento
de grupos de autodefensa, con el fin de evitar la perpetuación y
resurgimiento de este fenómeno luego de la desmovilización de
esta generación.
Firman
Juan B. Pérez
Ricardo Avellaneda
Carlos Franco
Eduardo Espinosa
Jorge I. Castaño
Gilberto Alzate
Bogotá D.C., junio 25 de 200320
El mismo día 25 de junio de 2003, en la Cárcel de Itagüí se reunieron
los integrantes de la Comisión de la Sociedad Civil para los diálogos
con el ELN, y los señores Felipe Torres y Francisco Galán, representantes de esa organización guerrillera21.
20
Ibíd. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
21
Op. cit. 23, enero, 2003. A2 p.
65
NUEVO COMUNICADO DE LAS FARC
El 13 de abril de 2003 el señor Marulanda Vélez emitió un nuevo
comunicado público mediante el cual volvió a referirse a las opiniones
consignadas en la carta a los generales del 30 de marzo y ratificó “la
voluntad política de la FARC en la búsqueda de una salida política civilizada al conflicto social y armado con acuerdos serios y de beneficio
para todos los colombianos”.
El 20 de abril de 2003, de nuevo Marulanda Vélez en un comunicado
que apareció en la página de internet de las FARC se refirió a sus comunicaciones anteriores y manifestó que el presidente Álvaro Uribe Vélez
le había declarado la guerra al secretariado de esa organización durante
la inauguración de la Novena Brigada Móvil de Contraguerrilla22.
El 21 de abril, en carta dirigida al Gobernador encargado de Antioquia, Eugenio Prieto, al cumplirse un año de secuestrados el Gobernador de ese Departamento, Guillermo Gaviria y el ex Ministro de
Defensa, Gilberto Echeverri, el presidente Álvaro Uribe Vélez insistió
en que el Gobierno Nacional había tenido contactos con las FARC,
cosa que había negado el máximo dirigente de esa guerrilla, Manuel
Marulanda Vélez.
El Presidente de la República dejó abierta la posibilidad de un Acuerdo Humanitario entre el Gobierno y las FARC pero con la participación
de un país amigo, que podría ser Francia.
Aunque la carta del presidente Álvaro Uribe no fue considerada una
respuesta a la misiva que el domingo 20 de abril hizo pública el jefe de
las FARC, Manuel Marulanda, llamó la atención el hecho que mientras
ese grupo había insistido no haber tenido contactos con el Gobierno,
éste señalaba lo contrario.
22
Ibíd. 21, abril, 2003. C8.
66
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
CARTA DE MARTÍN LLANOS
El 20 de abril de 2003 se conoció el texto de una carta dirigida por
Martín Llanos, jefe político de las Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC, dirigida al Alto Comisionado para la Paz, en la cual dice
contar con 3.500 hombres en armas, en la cual le anunciaba al Gobierno que las ACC abandonarían las áreas donde tenían influencia en el
Meta, Vichada, Guaviare y Caquetá y no continuarían los acercamientos con la administración del presidente Uribe.
La decisión de las ACC, según Martín Llanos, se debió a las operaciones del Ejército en los últimos días en las zonas donde se habían realizado reuniones con la Comisión Exploratoria y el comisionado Restrepo.
Con esta serían tres las agrupaciones de autodefensas que se marginarían de las reuniones exploratorias de paz con el Gobierno. Los otros
grupos eran el Bloque Metro de Antioquia y el Bloque “Elmer Cárdenas”, de la región de Urabá.
El Gobierno pidió a las Autodefensas Campesinas del Casanare seguir en la mesa de diálogos. Así lo hizo saber el Alto Comisionado de
Paz, Luis Carlos Restrepo, en una carta que dirigió a esa organización.
El Comisionado de Paz le respondió a las ACC en una carta y dijo
“que el Gobierno está comprometido con el éxito del proceso y que por
tal motivo espera que las dificultades transitorias que se han presentado
puedan superarse”.
Aunque el Comisionado no se refirió a las denuncias sobre operativos militares en las zonas de influencia de las ACC, manifestó su interés
en perfeccionar el cese de hostilidades anunciado por esa organización
armada desde el 8 de diciembre de 2002.
En su carta al Gobernador encargado de Antioquia, el jefe del Estado comentó que tanto para un proceso de paz, como para el acuerdo
humanitario, el Gobierno ha demandado los buenos oficios, con alcance determinante, de las Naciones Unidas.
67
Frente al orden público, el Gobierno tiene dos decisiones, dijo el
Presidente: “o un acuerdo de paz serio y estable o avanzar en el ejercicio
eficaz de la autoridad hasta desintegrar las organizaciones terroristas”23.
LAS FARC NOMBRAN VOCEROS
El 28 de abril de 2003 se conoció la noticia según la cual las FARC
habrían nombrado tres voceros para negociar con el Gobierno un
Acuerdo Humanitario.
En carta abierta a los ex presidentes liberales doctores Alfonso López Michelsen, Julio César Turbay Ayala, Ernesto Samper Pizano y
Carlos Lemos Simmonds, las FARC informaron que habían elegido
a los señores Carlos Antonio Lozada, miembro del Estado Mayor del
Bloque Oriental, Simón Trinidad y Domingo Bihojó.
El ex presidente López había sido insistente en su intención de contribuir a impulsar una negociación sobre Intercambio Humanitario.
La comunicación de las FARC dejaba claro que las posibles negociaciones con voceros del Gobierno Nacional deberían realizarse en algún
lugar del territorio colombiano previamente convenido entre las partes.
Las FARC manifestaban que proporcionarían garantías suficientes para firmar un eventual acuerdo y que la propuesta de canje
incluía la liberación de los tres estadounidenses secuestrados en febrero del año 2003.
La comunicación mencionaba que las FARC estaban dispuestas a dejar en libertad a todos los militares y policías en su poder, los doce diputados de la Asamblea del Valle del Cauca y los ex Ministros de Estado, el
Gobernador de Antioquia, el ex Gobernador del Meta y la ex candidata
presidencial Ingrid Betancourt, lo mismo que al Senador Jorge Gechem
Turbay y al Representante a la Cámara, Oscar Tulio Lizcano.
23
Op. cit. 21, abril. 1-7 p.
68
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
No aludían a la posibilidad de que los guerrilleros que sean excarcelados puedan ser llevados al exterior24.
El ex Presidente Julio César Turbay consideró el mensaje de las
FARC y el nombramiento de unos voceros para una eventual negociación como un acto de buena voluntad y dijo, antes de reunirse en Bogotá con López, Samper y Lemos: “lo que los ex presidentes podemos
hacer es ofrecer nuestros buenos oficios. Lo que falta es la voluntad de
las partes para negociar y llegar a un consenso”.
Turbay también dijo que un Acuerdo Humanitario sería “sui géneris”, por cuanto no buscaría el deseable pacto de finalización de la guerra interna, que lleva casi cuarenta años. “Es un acuerdo especial, un
acuerdo que dentro del Derecho Internacional Humanitario (DIH) es
no sólo deseable, sino posible. Basta la voluntad de las partes”25.
Los protocolos de Ginebra de 1949, explicó, permiten llegar a un
consenso de esa naturaleza y darle fuerza y vigor jurídico.
LA MUERTE DEL GOBERNADOR DE ANTIOQUIA
El lunes 5 de mayo de 2003 el país recibió la infausta noticia de la
muerte del gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria y del ex Ministro de Estado, Gilberto Echeverri, junto con ocho oficiales del Ejército,
la Armada Nacional y la Policía que estaban en poder de las FARC.
En una alocución radio-televisada, el presidente Álvaro Uribe reiteró sus condiciones a las FARC para un Intercambio Humanitario que
permitiera la liberación de todos los secuestrados, y asumió la responsabilidad por las órdenes sobre el operativo militar.
En su intervención, Uribe rechazó la acusación de las FARC de que
los secuestrados murieron en un intercambio de disparos y aseguró que
las víctimas fueron ejecutadas por sus captores.
24
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
25
Ibíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
69
Agregó que para un eventual Acuerdo Humanitario el Gobierno insistiría en los buenos oficios de las Naciones Unidas, en que todos los
secuestrados en poder de las FARC fueran liberados, en que no haya
zonas desmilitarizadas y en que los presos que eventualmente salieran
de prisión no volvieran a delinquir.
“El afán por un Acuerdo Humanitario no nos puede llevar a afectar
la política de orden público”, señaló el Presidente, quien fustigó a la organización guerrillera, señalando que “este grupo terrorista aplicó bien
la interpretación que Stalin hizo de Maquiavelo, según la cual cuando
el adversario tiene un gesto de generosidad no se debe tomar como generosidad sino como debilidad”26.
La muerte de Echeverri, Gaviria y de ocho militares se produjo en
momentos en que los ex presidentes, la Iglesia Católica, ONG y familiares de los secuestrados intentaban impulsar un Acuerdo Humanitario
entre el gobierno Uribe y las FARC, para obtener el intercambio de
decenas de plagiados por guerrilleros presos.
Los cuerpos del ex Ministro de Defensa, Gilberto Echeverri Mejía;
del Gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria, y de ocho militares
aparecieron en el sitio La Encarnación, zona rural del municipio de
Urrao, Antioquia.
Hacia las cinco de la tarde, en un comunicado emitido desde Antioquia, las FARC responsabilizaron de lo ocurrido al Gobierno y aseguraron que los secuestrados murieron durante un intercambio de disparos
entre los guerrilleros que los custodiaban y cerca de seiscientos soldados
aerotransportados que intentaban una operación de rescate.
Sin embargo, hacia las ocho de la noche el Gobierno expidió una declaración en la que señaló que las víctimas tenían señales de haber sido
baleadas con ráfagas de fusil y tiros de gracia en sus cabezas.
26
Ibíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
70
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
COMUNICADO DE LAS FARC
El siguiente es el comunicado divulgado por las FARC acerca de los
hechos ocurridos en Urrao:
Comunicamos:
1. Que la actitud prepotente del presidente fascista Álvaro Uribe
Vélez, quien está convencido que a través de la fuerza, es decir
a sangre y fuego, va a rescatar los prisioneros de guerra en nuestro poder, lo llevaron a aventurarse al rescate del Gobernador de
Antioquia y del ex Ministro Gilberto Echeverri, en un operativo
militar de más de 600 hombres aerotransportados.
2. En la confrontación entre los guerrilleros de las FARC-EP y el
Ejército fascista murieron el Gobernador Guillermo Gaviria y
Gilberto Echeverri, al igual que otros prisioneros.
3. Las FARC-EP responsabilizan directamente al señor Álvaro Uribe de los anteriores hechos.
Montañas de Colombia, mayo 5 del 2003.
Estado Mayor Bloque José María Córdova27.
Por su parte, la Presidencia de la República publicó el siguiente
comunicado:
Comunicado de la IV Brigada del Ejército
Hace una semana la IV Brigada del Ejército en Medellín recibió
información sobre la ubicación de un campamento de la guerrilla en
el cual podrían estar varias personas secuestradas por las FARC, entre
ellos 11 militares, el Gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria, y el
ex Ministro de Defensa, Gilberto Echeverri.
27
Ibíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
71
Dicha información confirmaba otras anteriores que la inteligencia
militar venía trabajando desde hacía tres meses y en razón de las cuales
ya se habían desplazado tropas hacia los alrededores del corregimiento
de Nutibara, municipio de Frontino, Antioquia.
El campamento, según la información, estaría ubicado a orillas de la
quebrada Papayal en jurisdicción de Murindó, Antioquia, muy cerca de
los ríos Murrí y Mandé.
La información fue procesada por especialistas del Ejército en Bogotá y Medellín. Una vez corroborada, por orden del Comandante del
Ejército, General Carlos Alberto Ospina, se integró un equipo conjunto
de la Fuerza de Despliegue Rápido y las Fuerzas Especiales del Ejército.
Paralelamente, el Comandante de la IV Brigada, General Mario
Montoya, ordenó a dos batallones que se encontraban cerca y en dirección al campamento de las FARC, que suspendieran su marcha y sus
operaciones militares para no alertar a los guerrilleros. Los dos batallones permanecen estacionados en Frontino y Nutibara, respectivamente.
Luego de analizada y complementada la información, el comandante de la Fudra, general Hernando Alonso Ortiz, le solicitó a la Fuerza
Aérea tomar fotografías del área en la que estaba ubicado el campamento y montó su base de operaciones en Urrao.
Una vez tomadas las aerofotografías y determinadas las posibles rutas para llegar al campamento, se montó el operativo de rescate.
La preparación de la operación duró 6 días y una vez corregida y
autorizada por los Comandantes de las Fuerzas, se puso en marcha. Se
estableció la fecha del 5 de mayo como día D para su realización.
Las once de la mañana fue la hora escogida para entrar al campamento, por dos razones: porque la situación meteorológica favorecía
la operación de los helicópteros y porque a esa hora, según la inteligencia oficial, se presentaba el menor riesgo táctico y operacional para
los rehenes.
En la operación participaron helicópteros y aviones encargados de
transportar a las tropas de las Fuerzas Especiales, la reserva y los apoyos
72
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
de fuego. El comando de la operación fue instalado en Urrao. La fase
final de la operación arrancó a las diez de la mañana en forma simultánea desde Rionegro y Urrao. Este último municipio está ubicado a 25
minutos en helicóptero del campamento de las FARC.
Desembarcaron 75 hombres por soga, en tres sitios escogidos previamente, situados en los alrededores del campamento, y empezaron
su desplazamiento a pie. A un grupo le tomó 30 minutos, y a los otros
dos 40 minutos, llegar hasta el sitio en donde las FARC escondían a los
secuestrados. El área es totalmente selvática, montañosa y sin vías de
comunicación.
Ni durante el desembarco, ni durante el desplazamiento, las tropas
hicieron disparos. Tampoco los helicópteros. No hubo combates. La
tropa llevaba altoparlantes para promover el rescate incruento de las
víctimas. El Gobierno registra con dolor este nuevo genocidio de ciudadanos inermes, por parte de las FARC.
La Fuerza Pública procedió con total profesionalismo, con tropas
altamente especializadas, con una planeación operativa que garantizaba el menor riesgo para las víctimas y en cumplimiento de su deber de
proteger la vida y devolver la libertad a los ciudadanos.
Una vez en el sitio, el Mayor Padilla, que comandó el operativo, reportó por radioteléfono a sus superiores lo que encontró: nueve rehenes
asesinados con ráfagas de fusil. Algunos con tiro de gracia en la nuca o
detrás de la oreja. Un rehén ileso y tres más heridos. Uno de ellos murió
durante su traslado en helicóptero a Urrao. Los sobrevivientes expresaron que cuando se escuchó el ruido de los helicópteros, un guerrillero
apodado “El Paisa” dio orden de asesinar a los secuestrados.
En el campamento no había comida, ni víveres para secuestrados y
guerrilleros. Las condiciones de vida eran infrahumanas. Prácticamente
los tenían enterrados en cambuches, según uno de los sobrevivientes.
Las condiciones de salud eran extremadamente precarias, especialmente la del ex Ministro Gilberto Echeverri Mejía.
El 22 de mayo de 2003 se reunió en la ciudad de Cuzco, Perú, la
cumbre de Presidentes del Pacto de Río. A esa cumbre asistió el presidente colombiano Alvaro Uribe Vélez. El presidente de Ecuador, Lucio
73
Gutiérrez, pidió a la ONU exigir a las FARC el cese del fuego y la iniciación de negociaciones serias con el Gobierno Colombiano.
Después de sostener una reunión privada con el presidente Uribe
Vélez, el presidente ecuatoriano desistió de su intención de mediar ante
la guerrilla, dado que el presidente colombiano había insistido en que
cualquier mediación en el conflicto debería venir de las Naciones Unidas; en cambio, decidió promover una propuesta en el sentido que el
Grupo de Río hiciera un llamado directo al Secretario General de la
ONU, Kofi Annan, con el fin de buscar acercamientos entre el Gobierno de Colombia y las FARC. La propuesta del presidente ecuatoriano
fue bien recibida por el presidente de Colombia.
El 23 de mayo de 2003 el presidente de Perú, Alejandro Toledo, adhirió a la propuesta del presidente ecuatoriano Lucio Gutiérrez y solicitó
al Grupo de Río que hiciera un pronunciamiento firme sobre el tema
del terrorismo que dijo afectaba a Colombia.
De otra parte, los cancilleres del llamado Grupo de los 8 o G8, constituido por Estados Unidos, Rusia, Gran Bretaña, Francia, Alemania,
Italia, Japón y Canadá, anunciaron su apoyo a la política del presidente
Álvaro Uribe, en el sentido de mantener firmeza frente a los grupos
armados ilegales, según un comunicado expedido por la presidencia de
Francia en la ciudad de París.
XXXIII ASAMBLEA GENERAL DE LA OEA
De otra parte, el 10 de junio de 2003 la XXXIII Asamblea General
de la OEA, reunida en Santiago de Chile, acogió textualmente la declaración aprobada por la cumbre del Grupo de Río realizada en Cuzco.
En esa declaración, los cancilleres de los países miembros de la OEA
piden al Secretario General de la ONU, Kofi Annan, que en coordinación con el gobierno de Colombia “impulse decididamente un proceso
de paz exhortando a los movimientos guerrilleros a firmar un acuerdo
de cese de hostilidades y entrar en un diálogo serio y transparente”28.
28
Op. cit. 11, junio, 2003. 1-9 p.
74
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El Bloque Central Bolívar de los paramilitares entregó a Bienestar
Familiar a 40 combatientes menores de edad el día miércoles 11 de junio de 2003. Fueron 38 hombres y dos mujeres, de edades entre 14 y 17
años, provenientes del Putumayo, Caquetá, Nariño, Arauca, Boyacá,
Bolívar y los Santanderes.
La entrega fue parte del proceso del Gobierno con las autodefensas. Al acto, que según la Oficina del Alto Comisionado para la Paz se
hizo en algún lugar del norte del país, asistieron delegados del Instituto
Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, del Fondo de las Naciones
Unidas para la Infancia, Unicef, y de la Defensoría del Pueblo.
Los jóvenes fueron enviados a algunos de los centros de atención que
tiene el ICBF en todo el país. Beatriz Londoño, directora de la entidad,
anunció que los menores iban a iniciar una etapa de resocialización
sicológica, la cual, posiblemente, duraría alrededor de un año. Según
el ICBF, la desvinculación de menores de los grupos armados había
aumentado considerablemente en comparación con el año anterior. En
los primeros cinco meses de 2003 se habían reincorporado a la vida
civil 258 jóvenes, cifra que en comparación con el mismo lapso del año
anterior era superior en 119. El año 2002 se desmovilizaron 394 niños.
Se estimaba en el momento de la entrega que en los grupos irregulares había entre 6 000 y 7 000 niños. El 70% de los menores desvinculados provenían de las FARC y sus edades oscilaban entre los 14 y 17
años. Las autodefensas ocupaban el tercer lugar.
El Gobierno anunció que pondría en marcha un plan integral de
resocialización para los 40 menores entregados por las autodefensas
ilegales en Antioquia. El plan incluiría atención en salud, educación
y capacitación para el trabajo productivo. La iniciativa hace parte del
Programa de Atención a Menores Desvinculados del Conflicto Armado que adelanta el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. Como
parte esencial del tratamiento, el Instituto busca la manera de reunir
a los jóvenes con sus familias, que son punto de apoyo básico para su
recuperación integral. Durante este proceso los niños reinsertados estarían acompañados por trabajadores sociales, siquiatras, sicólogos y
médicos, quienes velarían por su estado emocional y físico29.
29
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
Op. cit. 13, diciembre, 2003.
75
El siguiente es el texto de una carta enviada a los presidentes del
Grupo de Río por parte de las FARC, la cual apareció publicada en el
sitio internet de esa organización:
CARTA ABIERTA DE LAS FARC A LOS PRESIDENTES INTEGRANTES DEL GRUPO DE RÍO
Montañas de Colombia, junio 15 de 2003
Excelentísimos señores presidentes de los países integrantes del Grupo de Río en sus despachos.
Al escuchar las noticias de radio dando cuenta de la cumbre de presidentes del Grupo de Río, realizada en Cuzco, Perú, en la que finalmente
aprobaron una resolución de respaldo al Gobierno del señor Presidente
Álvaro Uribe Vélez, en su lucha contra el terrorismo, el narcotráfico y
no contra la guerrilla colombiana, calificada por el señor Uribe Vélez
de terrorista y narcoterrorista, y al mismo tiempo ustedes llamaron a
las Naciones Unidas para que le exija a las FARC-EP un cese de fuego
y hostilidades unilaterales para iniciar diálogos hacia la paz con el Gobierno de Colombia.
En las FARC-EP encontramos que este planteamiento requiere de
mayor claridad de parte de los mandatarios firmantes de la resolución
de apoyo al señor Uribe Vélez, no resulte peor el medicamento que la
enfermedad, por la improcedencia de la intervención directa de Naciones Unidas en un conflicto interno que deben resolver los colombianos
en su patria, sin ninguna clase de injerencias. En el entendido que los
colombianos no estamos en confrontación con los países vecinos, ni de
la región ni del mundo, también su solución debe ser sin la intervención
de potencias extranjeras como lo hizo recientemente la alianza de los
Estados Unidos, la Gran Bretaña y España contra el pueblo de Irak.
Entendemos que durante el curso de la cumbre de jefes de Estado en
la que participaron los vecinos de Colombia, fueron escuchados los argumentos expuestos por el señor Presidente Uribe Vélez en contra de la
insurgencia guerrillera, con la finalidad de conseguir respaldo político y
militar en el combate a las FARC, disfrazado en la llamada lucha contra
el terrorismo y el narcotráfico.
76
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Las FARC-EP son una organización revolucionaria, político militar
de oposición al Estado y al régimen político colombiano, que al conocer
la información de prensa sobre los resultados de la cumbre de Cuzco,
solicitan de los gobiernos que la integran igual escenario para explicar
su propuesta de Gobierno, plasmada en la plataforma política, y hacer
conocer en directo, de viva voz, los argumentos políticos indispensables
para que ustedes, haciendo uso de su buen juicio, puedan analizar y
concluir con certeza si realmente conviene darle el respaldo al señor
Uribe Vélez, o si por el contrarío esa no es la solución. Esto lo planteamos porque en realidad estamos convencidos del interés que a ustedes
los anima de contribuir con sus buenos oficios a la solución política del
conflicto colombiano por la vía pacífica.
A nosotros en las FARC-EP, por nuestra irrenunciable vocación de
buscar la paz con justicia social para nuestro pueblo por medio de una
salida política negociada, nos interesa realizar un foro con ustedes, de
la misma naturaleza al celebrado en Cuzco, en un lugar escogido de
común acuerdo con sus representantes.
Este foro tendría por fin aportar de nuestra parte mayor información
sobre nuestro conocido deseo de encontrar una solución política al conflicto social y armado por la vía diplomática.
Finalmente, quedamos a la espera de sus respuestas y les informamos
que con el propósito de atender el foro, desde ahora hemos nombrado al
Comandante Raúl Reyes para que nos represente en dicho encuentro.
Secretariado del Estado Mayor Central de las FARC-EP.
El canciller peruano calificó de insólito el pedido de las FARC de
una audiencia con presidentes del Grupo de Río. Allan Wagner dijo
que se trataba de una actitud sin sentido y que sería impropio que los
mandatarios se reunieran con los representantes del grupo guerrillero.
El jefe de la diplomacia peruana recalcó, en declaraciones a la emisora Radio Programas del Perú, desde España, donde se encontraba en
visita oficial, que Colombia es el interlocutor del Grupo de Río y no
dicha organización subversiva.
77
Wagner recordó que el Grupo de Río solicitó al Secretario General
de las Naciones Unidas, Kofi Annan, en mayo pasado, durante su cumbre en la ciudad peruana del Cuzco, que exhorte a las FARC y a otros
grupos alzados en armas en Colombia a que busquen la reconciliación
y la paz30.
La Comisión Exploratoria nombrada por el presidente Álvaro Uribe
para adelantar contactos con los grupos de autodefensa, en un comunicado conocido el 26 de junio de 2003, recomendó continuar el proceso
de negociación con esos grupos, siempre y cuando los mismos dieran
cumplimiento a un cese de hostilidades total y verificable.
La Comisión Exploratoria recomendó al Gobierno exigir a las autodefensas abandonar todas las actividades ilícitas y sugirió el establecimiento de una veeduría de carácter internacional.
La comisión consideró necesario un acuerdo para la concentración
de los miembros de las autodefensas e insistió en la conveniencia de
establecer una mesa de negociación unificada con todos los grupos que
operaban en el país.
El documento de la Comisión Verificadora, conformado por diez recomendaciones, fue entregado al Presidente Álvaro Uribe y al Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, para su correspondiente
análisis.
La comisión pidió a la Iglesia Católica continuar su labor facilitadora y como testigo del proceso de paz, y solicitó adecuar el programa de
reincorporación del Gobierno Nacional de acuerdo con el perfil de los
miembros de las autodefensas y gestionar los recursos necesarios.
La comisión estaba integrada por Juan B. Pérez, Ricardo Avellaneda,
Carlos Franco, Eduardo Espinosa, Jorge Castaño y Gilberto Alzate Ronga.
Simultáneamente con el comunicado de la Comisión Exploratoria,
los grupos de autodefensas de Casanare, Meta y Vichada anunciaron
su disposición de iniciar negociaciones con el Gobierno. Otro grupo,
30
Op. cit. [en línea], junio 2003. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
78
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
conocido como Bloque Central Bolívar, también anunció su voluntad
de iniciar una negociación formal.
Se esperaba que el mayor de los grupos de autodefensas, las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, iniciaran formalmente las negociaciones con el Gobierno Nacional.
La Embajadora de Estados Unidos en Colombia, Anne Patterson,
había informado la semana anterior que su país apoyaría los diálogos
entre Gobierno y autodefensas.
Los grupos de autodefensa en varias oportunidades, a través de sus
voceros autorizados, habían manifestado que las negociaciones deberían incluir a los grupos guerrilleros como una manera de encontrarle
una salida al conflicto de manera conjunta.
“Sería muy importante que a estas alturas del proceso se vincularan
honestamente los grupos guerrilleros, para que nos habláramos de frente al país, sin dobleces, llegando a entendimientos que permitan respetar
lo político, las libertades y desconocer lo armado, como consolidación
de la democracia, buscando la grandeza de la patria por la que dicen estar luchando, pero a la que miserablemente destruyen día a día”, afirmó
el bloque denominado Alianza de Oriente31.
En otro desarrollo de posibles negociaciones de paz, el Gobierno
Nacional autorizó al Gobernador del departamento de Bolívar, Luis
Daniel Vargas, para buscar acercamientos regionales con el ELN en el
sur de ese departamento, siempre y cuando las propuestas de esa guerrilla fueran concretas y serias.
En efecto, el Gobernador de Bolívar recibió una carta del Frente de
Guerra Norte de ELN mediante la cual ese frente proponía diálogos
con las autoridades civiles y eclesiásticas de esa región, especialmente
en los llamados Montes de María.
31
Op. cit. 26, junio, 2003. A10 p.
79
SE INICIA EL PROCESO DE DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUC
El martes 15 de julio de 2003, el Gobierno Nacional divulgó la noticia de que éste y las AUC llegaron a un acuerdo que permitiría la
desmovilización total de esos grupos al margen de la ley a más tardar a
finales del año 2005.
El texto del acuerdo es el siguiente:
Acuerdo de Santa Fe de Ralito para contribuir a la paz de Colombia
El Gobierno Nacional y las Autodefensas Unidas de Colombia,
AUC, como resultado de la fase exploratoria adelantada entre las partes
a partir del mes de diciembre de 2002.
Acuerdan:
1. Definir como propósito de este proceso el logro de la paz nacional, a través del fortalecimiento de la gobernabilidad democrática
y el restablecimiento del monopolio de la fuerza en manos del
Estado. Las AUC reiteran que su mayor aporte a la Nación en
este momento histórico es avanzar hacia su reincorporación a la
vida civil y contribuir al fortalecimiento del Estado Social de Derecho. Las partes se comprometen en este proceso, conscientes de
dar un paso que aporta de manera efectiva a la construcción de la
auténtica paz que espera y merece la nación colombiana.
2. Para el cumplimiento de este propósito, las Autodefensas Unidas de Colombia se comprometen a desmovilizar a la totalidad
de sus miembros, en un proceso gradual que comenzará con las
primeras desmovilizaciones antes de terminar el presente año y
que deberá culminar a más tardar el 31 de diciembre de 2005.
El Gobierno se compromete a adelantar las acciones necesarias
para reincorporarlos a la vida civil.
3. Las Autodefensas Unidas de Colombia valoran muy positivamente las recomendaciones finales de la Comisión Exploratoria
y coinciden en que las mismas constituyen un norte adecuado
para el proceso de paz entre el gobierno nacional y las AUC.
80
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
4. Acuerdan que a partir de las recomendaciones del informe final de la Comisión Exploratoria, se da por terminada la fase de
exploración del Proceso de Paz para dar inicio a una etapa de
negociación.
5. Crear las condiciones para que en un tiempo prudencial se concentren -con las debidas garantías de seguridad- los miembros
de las Autodefensas Unidas de Colombia, en sitios previamente
acordados. La concentración de sus integrantes incluirá todos
los rangos de mando, disponiendo de las garantías que para tal
efecto se convengan entre las partes. Dichas zonas contarán con
la presencia permanente de la fuerza pública.
6. Las Autodefensas Unidas de Colombia ratifican su compromiso
con el cumplimiento del cese de hostilidades, como expresión de
buena voluntad y continuarán con sus esfuerzos para lograr que
sea totalmente efectivo.
7. Las Autodefensas Unidas de Colombia comparten el propósito del Gobierno de una Colombia sin narcotráfico y respaldan
las acciones del Estado colombiano contra este fenómeno que
destruye la democracia, la convivencia, la economía y el medio
ambiente.
8. Agradecer la presencia permanente de la Iglesia Católica en este proceso de paz e invitarla a seguir acompañándolo, como garantía de
transparencia y compromiso de las partes con la paz de Colombia.
9. Convocar la solidaridad y el compromiso nacional para fortalecer al Estado y construir las condiciones que hagan posible la
desmovilización y reincorporación a la vida civil de los miembros de las AUC. Piden a los diferentes sectores nacionales y a
las comunidades locales que apoyen los esfuerzos institucionales
para consolidar la seguridad, la convivencia y el desarrollo.
10.Exhortar a la comunidad internacional a respaldar los esfuerzos
para defender y fortalecer la democracia colombiana y a prestar
su concurso para desactivar los factores de violencia que afectan
a Colombia. Con este acuerdo, el Gobierno y las Autodefensas
81
Unidas de Colombia responden al anhelo nacional de una Colombia en paz con oportunidades y garantías para todos.
Por el Gobierno Nacional:
Luis Carlos Restrepo
Alto Comisionado para la Paz
Por las Autodefensas Unidas de Colombia AUC:
Hernán Hernández
Ramiro Vano
Luis Cifuentes
Francisco Tabares
Adolfo Paz
Jorge Pirata
Vicente Castaño
Carlos Castaño
Salvatore Mancuso
Testigos
Miembros de la Comisión Exploratoria de Paz:
Carlos Franco
Jorge Ignacio Castaño
Eduardo Espinosa
Gilberto Alzate Ronga
Ricardo Avellaneda
Juan B. Pérez Rubiano
Facilitadores del proceso por la Iglesia Católica:
Monseñor Germán García
Monseñor Julio César Vidal
Padre Leónidas Moreno
Santa Fé de Ralito, 15 de julio de 200332.
El acuerdo fue sencillo en su concepción y claro en sus propósitos.
Gobierno y AUC acuerdan “dar inicio a una etapa de negociación,
32
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
Op. cit. 16, julio, 2003.
82
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
definiendo como propósito de este proceso el logro de la paz nacional, a través del fortalecimiento de la gobernabilidad democrática y el
restablecimiento del monopolio de la fuerza en manos del Estado”.
Las AUC dejan claro que su mayor aporte a la Nación en ese momento histórico “es avanzar hacia su reincorporación a la vida civil y
contribuir al fortalecimiento del Estado Social de Derecho”.
Por su parte el Gobierno se compromete a adelantar las acciones
necesarias para reincorporarlos a la vida civil. Para el cumplimiento de
este propósito, las Autodefensas Unidas de Colombia se comprometieron a “desmovilizar a la totalidad de sus miembros antes del 31 de
diciembre de 2005”, en un proceso gradual que comenzó con la desmovilización el 25 de noviembre de 2003 del Bloque Cacique Nutibara en
la ciudad de Medellín.
En las mesas de diálogo que de manera paralela se mantenían con el
Bloque Central Bolívar, BCB, y las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio, ACMM, se avanzó con la firma el 8 de noviembre entre
el Gobierno Nacional y la dirigencia del BCB, de un acta en la que se
consigna que “los miembros del Bloque Central Bolívar y Vencedores
de Arauca toman la decisión de avanzar en el proceso de negociación
para lograr la desmovilización y reinserción a la vida civil”. Su texto es
el siguiente:
Acta de la reunión entre el Gobierno Nacional y el Bloque Central
Bolívar y Vencedores de Arauca
Montañas de Caldas, noviembre 8 de 2003
1. Los miembros del Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca toman la decisión de avanzar en el proceso de negociación
para lograr la desmovilización y reinserción a la vida civil.
2. El Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca reiteran su voluntad de mantener y perfeccionar el cese de hostilidades como
muestra palpable de buena voluntad ante el país y la comunidad
internacional, y hacen un llamado para que la Oficina del Alto Comisionado para la Paz agote todos los recursos para buscar acompañamiento en el proceso de verificación y constatación del mismo.
83
3. El Estado Mayor del Bloque Central Bolívar y Vencedores de
Arauca está de acuerdo en que para avanzar en la consolidación
del cese de hostilidades es necesario definir e implementar el mecanismo de las zonas de concentración. Este tema será tratado
operativamente por la subcomisión de trabajo de la mesa.
4. El Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca parte de la
consideración de que la aplicación efectiva de la política de Seguridad Democrática desarrollada por el Gobierno Nacional,
constituye garantía suficiente para facilitar la concentración de
las fuerzas, sin perjuicio de la seguridad de las regiones.
5. Es necesario empezar a trabajar con la Oficina del Alto Comisionado para la Paz el tema de las garantías jurídicas para avanzar
en las concentraciones y en el trabajo político y pedagógico al
interior de la organización. El Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca tienen claras las responsabilidades, deberes y
compromisos que exige la concesión del levantamiento de las
órdenes de captura para los miembros representantes de la organización.
6. El Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca ratifican la
importancia de la participación e intervención de las comunidades en el proceso, por medio de un trabajo de inducción para
facilitar el acercamiento con el Estado, a través de los talleres comunitarios. Estos talleres contarán con la presencia del Gobierno y serán convocados por las organizaciones comunitarias y las
autoridades locales de las zonas y no contarán con la presencia
del Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca.
7. Las partes propugnarán por generar las condiciones que permitan la desmovilización del Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca antes de que finalice el Gobierno. Este proceso se
cumplirá de manera masiva y simultánea. No habrá desmovilizaciones parciales.
8. El Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca presentarán
una propuesta jurídica, que incluye una alternativa para los miembros de la organización que se encuentren privados de la libertad.
84
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
9. Los miembros del Bloque Central Bolívar y Vencedores de Arauca
ratifican su interés de hacer uso pleno de sus derechos civiles y
políticos, una vez culmine el proceso de desmovilización y reinserción a la vida civil.
10.Afirmamos la necesidad de llegar a una Mesa Única Nacional,
dada la dinámica que se viene presentando en el proceso.
Luis Carlos Restrepo Ramírez
Alto Comisionado la Paz
Bloque Central Bolívar
Bloque Aliado Vencedores de Arauca
Estado Mayor
Julián Bolívar
Comandante Estamento Militar
Ernesto Báez de la Serna
Dirección Política33
En el caso de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio,
hicieron el 4 de diciembre de 2003 una declaración en la que manifiestan “plena voluntad de desmovilizar, de manera gradual, la totalidad
de nuestras fuerzas”.
Declaración de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio
al gobierno y la opinión pública
Magdalena Medio, diciembre 4 de 2003.
1. Las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio, como pioneras en la conformación del movimiento de resistencia civil antisubversivo en Colombia, vemos con complacencia y optimismo
33
COLOMBIA. PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA. Acta de reunión entre el Gobierno Nacional y el Bloque Central Bolívar y
Vencedores de Arauca. Caldas, noviembre 8 de 2003.
85
el proceso de negociación que adelanta el actual Gobierno para
alcanzar la reconciliación nacional.
2. Consecuentes con nuestro compromiso con el actual Gobierno
de llevar a cabo un cese de hostilidades, las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio ratificamos nuestra determinación de trabajar en la consolidación de este propósito.
3. Frente al proceso de negociación, las Autodefensas Campesinas
del Magdalena Medio expresamos nuestra disposición a iniciarlo formalmente, teniendo como propósito central lograr la
legitimación del Estado social de derecho en nuestra nación y
el mantenimiento de garantías de seguridad y el bienestar para
nuestras comunidades.
4. Las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio manifestamos nuestra plena voluntad de desmovilizar, de manera gradual,
la totalidad de nuestras fuerzas, con el concurso del Gobierno
Nacional, la Iglesia Católica, la sociedad civil y el acompañamiento de la comunidad internacional, para garantizar el cumplimiento definitivo e irrestricto de ese anhelo de todos los colombianos.
5. Las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio consideramos viables las zonas de concentración como mecanismo para
adelantar un proceso de negociación serio, que conduzca al feliz
término de éste. Para ello es necesario que se garantice por parte
del Gobierno la disposición de medidas de seguridad, tendientes a
proteger la vida, honra y bienes de los ciudadanos de bien y a garantizar la integridad de los miembros de autodefensas concentrados.
6. Es indispensable contar con un marco jurídico que permita establecer garantías, para que todos los miembros de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio retornen a la civilidad,
incluyendo a quienes están en calidad de procesados o condenados por delitos propios y conexos, consumados en desarrollo del
accionar antisubversivo.
7. Las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio encontramos imperativa la vinculación de las comunidades de nuestra
región, para la puesta en marcha de proyectos productivos y de
86
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
inversión, con el apoyo del Gobierno Nacional dentro del marco
de la política del plan de desarrollo, que permitan la plena reinserción a la civilidad de nuestros miembros y la rehabilitación
social y económica de nuestras zonas de influencia.
8. Las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio compartimos la propuesta del Gobierno Nacional de establecer una Mesa
Única Nacional, como escenario indispensable y urgente, para la
concreción de los objetivos generales del proceso de negociación,
atendiendo y respetando las particularidades de cada región.
Atentamente,
Ramón Isaza Arango
Comandante General ACMM
Víctor Triana ‘Botalón’
Segundo Comandante ACMM”
Recibido
Luis Carlos Restrepo Ramírez
Alto Comisionado para la Paz34
Este hecho, articulado a la puesta en marcha de una mesa de diálogo
unificada con la concurrencia de las AUC y el BCB el 31 de marzo de
ese año, ayudó a generar el proceso que llevó a la firma del “Acuerdo
de Fátima” el 13 de mayo de 2004. En dicho acuerdo se decide crear
en marcha, a partir del 15 de junio, una Zona de Ubicación Temporal -ZUT- en Tierralta, Córdoba, la cual es formalmente inaugurada en
Santa Fe de Ralito el 1 de julio de ese año.
El presidente Álvaro Uribe Vélez dio el visto bueno al “Acuerdo de
Santa Fe de Ralito, para contribuir a la paz de Colombia”, firmado entre los delegados de su gobierno y las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, como resultado de la fase exploratoria adelantada entre las
partes desde el mes de diciembre del año pasado.
34
Op. cit. Declaración de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio al gobierno y la opinión pública. [en
línea] diciembre, 2003. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
87
El Jefe del Estado dijo que le parecía viable que los integrantes de los
grupos de autodefensas se concentraran en uno o varios sitios, siempre
y cuando la fuerza pública y las instituciones del Estado permanecieran
en dichos lugares. Recalcó el primer mandatario, que esos sitios de concentración no podían confundirse con zonas de distensión como la que
existió en la región de El Caguán durante el anterior Gobierno.
“En mis reuniones con el doctor Luis Carlos Restrepo y en mi reunión con la Comisión Exploratoria, la consigna que yo di fue una: sitios
de concentración sí, pero sin excluir la presencia del Estado en todas
sus expresiones”.
En cuanto a la fecha de desmovilización total, prevista para finales
del año 2005, el Jefe del Estado señaló que es necesario buscar desmovilizaciones parciales y anticipadas.
“Estos grupos han reiterado su compromiso del cese de hostilidades,
que incluye el abandono del narcotráfico y el abandono de todas las
conductas delictivas. Creo que eso puede contribuir a que el país vaya
cimentando la paz y puede contribuir al restablecimiento de los derechos humanos”.
Con la firma del acuerdo de Santa Fe de Ralito terminaba la fase
exploratoria y se iniciaba la fase de negociación con un horizonte cierto,
claro y un cronograma definido35.
Por su parte, el Gobierno Colombiano, por intermedio de la Canciller Carolina Barco, manifestó que cualquier contacto internacional
que hicieran las FARC debería ser a través de la ONU. De esa manera,
la señora canciller respondió a la solicitud de una audiencia que pidió
el movimiento insurgente a los presidentes de los países miembros del
Grupo de Río.
La Canciller Barco fue enfática al señalar que si las FARC aceptaban
la intermediación de las Naciones Unidas, un diálogo internacional tendría que hacerse siempre con la coordinación del gobierno de Colombia
35
Ibíd. [en línea] . Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
88
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
y con la precondición de un cese del fuego de la guerrilla. Agregó que se
había enviado una comunicación a todos los embajadores de los países
miembros de la OEA para fijar la posición del Gobierno sobre el tema.
LAS FARC SOLICITAN AUDIENCIA AL SECRETARIO
GENERAL DE LA ONU
El 19 de julio de 2003 se conoció una comunicación por medio de
la cual las FARC le solicitaban una audiencia al Secretario General de
la ONU, señor Kofi Annan, con el propósito de explicar el punto de
vista de esa organización sobre el conflicto armado en Colombia. En la
misma comunicación las FARC nombraban al señor Raúl Reyes como
vocero ante el secretario general.
En su carta, las FARC dejaban entrever la posibilidad de realizar
un encuentro con delegados del señor Kofi Annan. Anteriormente las
FARC habían solicitado una audiencia a los presidentes de los países
del llamado Grupo de Río. Según las FARC, el objeto de la reunión
con delegados de la ONU sería suministrarles información completa y
aportar elementos de juicio para la búsqueda de una solución política al
conflicto social y armado por la vía diplomática.
Por su parte, el señor Kofi Annan manifestó desde la sede de la ONU
en Nueva York que consideraba positiva la carta en que las FARC le pedían cita. Según un comunicado del Centro de Información de las Naciones Unidas, el secretario general de esa organización siempre había
dejado en claro que sus buenos oficios estaban a disposición de las partes.
ANUNCIO DE DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUC
En una entrevista concedida por el jefe de las AUC, Carlos Castaño,
el lunes 21 de julio de 2003, anunció que de sus hombres se concentrarían en la región de Urabá.
“En el transcurso de los próximos tres meses estarán concentrados
todo el bloque bananero y otros bloques del occidente antioqueño, en
el Urabá, bajo mi dirección”, aseguró Castaño, en una entrevista para
el programa “Lechuza” del Canal Caracol.
89
Carlos Castaño aseguró que las AUC eran un grupo en extinción en
cumplimiento del acuerdo firmado por esa organización con el Gobierno Nacional.
“Las autodefensas llegaron a su fin. La desmovilización de la totalidad de las AUC es irreversible”, afirmó Castaño36.
En su edición del 5 de agosto, el diario El Tiempo publicó unas declaraciones dadas por Salvatore Mancuso al canal de televisión RCN en
las cuales dijo:
“Yo quiero invitar al Departamento de Estado de Estados Unidos
para que envíe una comisión aquí a Colombia y paralelo a la mesa de
negociación podamos aclarar los casos de los comandantes de autodefensa que estamos pedidos en extradición”.
En ese sentido, el dirigente de las AUC consideró que el tema debería ser tratado por esa comisión mientras avanzaba el proceso de paz
con el Gobierno del presidente Álvaro Uribe, para la desmovilización
de unos trece mil hombres de las AUC antes de diciembre de 2005.
“No desconocemos al Gobierno de Estados Unidos, creemos en
su justicia”, añadió el señor Mancuso. “En mi caso no es la primera
prioridad, nuestra prioridad es la responsabilidad que tenemos con 44
millones de colombianos de devolverles una esperanza de paz, una esperanza perdida por las acciones de la guerrilla”, aseveró.
En la entrevista, Mancuso se refirió también a las acusaciones de
organismos internacionales de Derechos Humanos sobre vínculos de
los paramilitares con las fuerzas militares de Colombia.
“La relación con el Ejército colombiano no es una relación directa
y es falsa, puede que haya circunstancias especiales donde en el campo
de batalla nos encontremos los tres actores, guerrilla, Autodefensas y
Ejército y no atacamos la infraestructura del Estado”, explicó Mancuso.
36
Op. cit. 22, julio, 2003.
90
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Por su parte, Castaño negó que la intención de su grupo en las negociaciones de paz con el Gobierno sea que Estados Unidos revoque
los pedidos de extradición que ese país había hecho de él y Salvatore
Mancuso.
El jefe de las AUC hizo la aseveración en una nota difundida en internet, en la que respondió acusaciones que en tal sentido formuló uno
de los jefes de una facción paramilitar disidente que opera en el centrooeste del país.
“Dicen que las AUC negociamos por los problemas de las extradiciones. Puede que en parte sí haya influenciado esto, pero no es ese
el orden correcto de ver las cosas, porque la extradición fue el mecanismo de presión utilizado por los gobiernos de Estados Unidos y
Colombia para provocar el fin de todos los grupos de autodefensa que
hay en Colombia”37.
ENTREVISTA DE LA REVISTA SEMANA A SALVATORE
MANCUSO
En su edición número 1110 de agosto 11 a 18, la Revista Semana
publicó una entrevista con Salvatore Mancuso, cuyo texto, por considerarlo de la mayor importancia, se reproduce a continuación:
Semana: ¿Por qué deciden iniciar un proceso de paz con
el Gobierno?
Salvatore Mancuso: Por primera vez en la historia de este
país confluye un gobierno con la voluntad política de sentarse
a negociar con todos los actores del conflicto sin exclusión. Por
primera vez un gobierno busca fortalecer la democracia y fortalecer las instituciones del Estado. Nosotros siempre hemos reclamado al Estado su presencia, su responsabilidad. Empuñamos
un fusil porque no ha existido responsabilidad de ellos. Nos tocó
sustituirlo, reemplazarlo en las diferentes regiones donde hemos
37
Ibíd. [en línea], agosto, 2003. Disponible en Internet: www. eltiempo.com.
91
tenido un control territorial y actuado como autoridades de facto.
El proceso con nosotros se inicia cuando el presidente dice que
está dispuesto a dialogar con todo aquel que cumpla un cese de
hostilidades. Nunca un gobierno había dicho “nos queremos sentar a dialogar con las autodefensas”. Y por eso nunca antes nos
sentamos con ellos.
Semana: ¿En qué fase está el proceso?
S.M.: Entramos en un período que denominamos de exploración, en donde se miran los distintos problemas que tendría la
etapa de negociación. Armamos un cronograma de trabajo y el
Gobierno nos dice que está en capacidad de fortalecer las instituciones, de responder por la seguridad social y económica de las
regiones en donde están las autodefensas. Y finalmente se fija un
plazo para ello que es diciembre 31 de 2005. Esa es nuestra fecha
máxima para desmovilizarnos.
Semana: Ahí radica uno de las dudas de fondo sobre el supuesto final del paramilitarismo. ¿Cómo garantizar que el Estado
se va a fortalecer en esas regiones si no lo ha hecho en 40 años?
¿Cómo garantizar que la guerrilla no copará los espacios dejados
por ustedes? ¿Cómo garantizar que no van a resurgir otros grupos
paramilitares?
S.M.: Nosotros hemos conversado con el Gobierno sobre esa
situación. Nuestras poblaciones están bastante preocupadas con
el proceso de negociación que estamos adelantando para que no
vaya a haber desplazamiento de estas poblaciones, por miedo a la
guerrilla, hacia unos lugares más seguros donde el Estado tenga
presencia. Es importante en este sentido saber cuál va a ser el
compromiso del Gobierno y cómo el Estado va a hacer presencia
en lo social, económico e institucional. De no hacerlo así, este
proceso no funcionaría porque va a haber desplazamiento de la
población y esto le quitaría la credibilidad al proceso. A las comunidades hay que sentarlas y explicarles el proceso.
Semana: ¿De dónde saldrán los recursos para garantizar
el proceso?
92
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
S.M.: En el país no existen recursos y por eso es muy importante la participación de la comunidad internacional. En la
medida en que la comunidad internacional conozca exactamente quiénes somos las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC)
y conozca todos los matices de lo que sucede en el conflicto de
este país, ellos podrán hacer recomendaciones mucho más sanas
y acertadas con relación a la solución. Desafortunadamente ellos
lo único que han escuchado es lo que el Gobierno dice sobre nosotros, que es muy parecido a lo que dice la guerrilla que ha sido
el enemigo histórico de esta nación. Además existe un sesgo en la
visión del conflicto, porque no conocen exactamente el conflicto
como ha sido. La guerrilla ha hecho en Europa y en todo el mundo una diplomacia desde hace 25 años. No es sino que vengan a
la zona y conozcan quiénes somos las AUC. Los invitamos a que
caminen por toda la región, hablen con las poblaciones y miren la
diferencia entre las poblaciones en las que hemos reemplazado y
sustituido al Estado y la que existe en las regiones donde la guerrilla tiene una autonomía plena.
Semana: ¿Pero cómo ven posible un acompañamiento internacional si las autodefensas han sido catalogadas como grupo
terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea?
S.M.: Desafortunadamente a nosotros nos han tildado de grupo
de extrema derecha y eso no es cierto. Algunos sectores de la izquierda democrática y de la izquierda radical nos han estigmatizado.
Nosotros queremos invitar a todos los que no nos conocen para que
sepan exactamente quiénes somos, por qué luchamos y miremos qué
tan cerca estamos de la defensa de los intereses de la clase menos
favorecida de este país. Nosotros no somos ni de izquierda ni de derecha. Somos de centro y nos tocó radicalizarnos para pedir cambios
sobre lo que no está funcionando bien en este país.
Semana: ¿Ustedes realmente creen que la comunidad internacional dejará a un lado los crímenes de lesa humanidad cometidos
por los paramilitares y los apoyará decididamente en el proceso?
S.M.: Nosotros hemos empuñado unas armas no para implantar una ideología o para matar a todo aquel que piense diferente a
nosotros. Empuñamos un fusil por una sencilla razón: nos estaba
93
agrediendo la guerrilla, estaba matando millones de colombianos
y el Estado no asumió la responsabilidad que le correspondía.
Nosotros no empuñamos las armas para defender una idea de
izquierda o una idea de derecha. Si para lograr un estatus político
o un reconocimiento tenemos que recurrir a la barbarie de la guerrilla, utilizando cilindros llenos de dinamita y de excremento tirándolos sobre una población inerme o poniendo minas quiebrapatas, mutilando las piernas de los niños, nosotros no lo vamos
a hacer. No es el esquema nuestro. Cuando el Estado no cumple
con la función que le corresponde, pues nos toca defenderla. Es
muy sencillo. Se llama legítima defensa.
Semana: Pero los paramilitares también han cometido masacres atroces y son responsables del asesinato de miles de personas en el país.
S.M.: Desafortunadamente la guerrilla muestra las incursiones de nosotros como acciones contra campesinos y civiles indefensos. Pero deben entender algo muy importante. El que, por
ejemplo, yo esté vestido de civil no me hace civil. Yo soy el comandante y responsable de un movimiento de autodefensa. Entonces, cuando nosotros ingresamos a un campamento guerrillero que está en las afueras de un pueblo, también ingresamos al
pueblo porque sabemos que allí viven los comandantes y están de
civil. Desafortunadamente, cuando los vamos a capturar hay fuego cruzado y tristemente cae gente inocente. Eso desafortunadamente sucede en la guerra y tenemos responsabilidad en esto. Lo
que pasa es que cuando eso pasa llegan los medios de comunicación y dicen que eran civiles, pero la realidad es que se trataba de
alguien que estaba cumpliendo funciones dentro de la estructura
de la guerra en este país.
Semana: ¿Tienen países que hayan ofrecido ayuda económica
o provectos concretos para el proceso?
S.M.: No. Nosotros no hemos hablado con nadie de la comunidad internacional. Pero tenemos proyectos muy concretos, muy
claros con relación a la forma de resarcir un poco los daños que
hayamos podido causar en este conflicto. Devolviendo unas tierras que le quitamos a la guerrilla y otras tierras que compramos
en el transcurso de la guerra.
94
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: ¿Es decir que como una forma de resarcir los crímenes que han cometido las autodefensas entregarían sus tierras?
S.M.: Se ha contemplado que parte de las tierras que le hemos
quitado a la guerrilla y de las que hemos adquirido nosotros se
destinen a los campesinos y a los desplazados como una forma
de resarcir el daño que hayamos podido causar como consecuencia de la guerra. Pero en Colombia no ha funcionado muy bien
la repartición de la tierra, y no mirándola como la repartición
de la propiedad de la tierra. El Incora en cabeza del Incora, el
Gobierno es quien ha repartido las tierras y es quien ha liderado
este campo político del Gobierno en el agro colombiano. Y no ha
funcionado porque no ha habido un acompañamiento profesional tecnológico permanente al campesino. En la medida en que
las políticas agrarias en el país no sean estatales a largo plazo, que
generen credibilidad a la comunidad internacional, va a ser imposible volvernos atractivos para la inversión de ellos.
Semana: Si ustedes nacieron como una respuesta a las agresiones de la guerrilla, ¿por qué no condicionaron su proceso con el
Gobierno a un proceso de desmovilización de la guerrilla?
S.M.: La desmovilización de nosotros no está condicionada
a que la guerrilla haga lo mismo, porque creemos que sí existe
un Estado fuerte que esté en capacidad de ofrecer seguridad a las
regiones en donde nosotros actuamos como autoridades de facto
nosotros estamos dispuestos a entregar esa responsabilidad, que
siempre ha debido ser del Estado y nunca ha debido ser nuestra.
Semana: ¿Pero cuál Estado fuerte si el Estado colombiano está
prácticamente quebrado y escasamente tiene para mantener a su
fuerza pública?
S.M.: Este proceso es una apuesta de buena voluntad de parte
nuestra y del Gobierno. El Gobierno sabe que en este momento
no tiene la capacidad para asumir la responsabilidad que tenemos nosotros en las diferentes regiones en donde estamos. Pero
conjuntamente queremos construir el camino. Por eso es muy
importante la participación de la comunidad internacional. Hoy
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por primera vez existe un Gobierno que quiere legitimarse y fortalecer la democracia. Eso nos da razones para hacer esta apuesta
de buena fe.
Semana: Y en medio de estas dificultades, ¿cómo va a ser en la
práctica la desmovilización?
S.M.: En la medida que el Estado se vaya fortaleciendo le vamos entregando las zonas y por eso nuestro desmonte tiene que
ser gradual y no total. Ellos querían que fuera un desmonte total
y nosotros les respondimos que podíamos entregar los fusiles mañana mismo si las condiciones estaban dadas. Pero creo que no
sería un aporte nuestro a la paz si entregamos todos los fusiles
cuando el Gobierno no ha creado las condiciones de seguridad.
Por eso es un proceso largo que debemos ir transitando.
Semana: ¿Cuántos hombres de las autodefensas hacen parte
de este proceso?
S.M.: En este momento somos 13 000 hombres. Hay 6 500
hombres más entre los otros bloques que también están negociando por separado con el Gobierno. Estamos hablando de un total
cercano a los 19 500 hombres.
Semana: ¿El hecho de que usted y Carlos Castaño, entre otros
miembros de las autodefensas, estén pedidos en extradición por el
Gobierno de Estados Unidos no es una espada de Damocles para
el proceso con el Gobierno?
S.M.: Para nosotros en este momento la prioridad es el proceso de negociación. Nosotros no desconocemos al Gobierno de
Estados Unidos. No desconocemos su justicia. Por eso nosotros
queremos invitar al Departamento de Estado de Estados Unidos
para que envíe una comisión a Colombia para que de forma paralela a la mesa de negociación, podamos aclarar la situación de
los pedidos de extradición de algunos de nosotros. Sabemos de
nuestra responsabilidad con el sistema de justicia del Gobierno
colombiano y con el sistema del gobierno de Estados Unidos.
96
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: ¿Ustedes le han pedido al Gobierno colombiano que
les dé garantías para que no sean extraditados si el proceso de paz
con las autodefensas se consolida?
S.M.: Estados Unidos va a entender que nosotros, los comandantes de las AUC, somos los que estamos jalonando un proceso
de negociación que le va a devolver la paz y la esperanza a millones de colombianos. Que este proceso va a obligar a la guerrilla a
sentarse a negociar o a salirse de las fronteras del país. En la medida en que Estados Unidos comprenda esto entrará a apoyar con
mucha más fuerza el proceso. Desafortunadamente en la comunidad internacional existe en este momento mucha desconfianza
porque conocen lo que pasó con la guerrilla y eso genera desconfianza. A nosotros no nos conocen, no saben quiénes somos.
Semana: En concreto, ¿si ustedes no tienen garantías jurídicas
de que no van a ser extraditados no hay proceso?
S.M.: Un proceso de paz que no tenga un marco jurídico y unas
garantías claras es como jugar un partido de fútbol sin delanteros.
El partido se va a perder y la negociación va a fracasar. En la medida que no se nos dé una alternativa diferente a la cárcel para
resarcir los daños en donde hayamos tenido responsabilidad en este
conflicto es imposible llegar a feliz término en esta negociación. Y
esto no es sólo para las autodefensas. Esto es aplicable para todos
los actores que tenemos responsabilidades en el conflicto.
Semana: Desde hace meses se ha dicho que ustedes vienen
adelantando una serie de negociaciones directas con el Gobierno
de Estados Unidos para explorar alternativas a su situación jurídica en ese país. ¿Qué hay de cierto que han hablado con enviados
de la DEA, el FBI o la CIA?
S.M.: Yo no he tenido contacto directo con el Gobierno de Estados Unidos. Un enviado nuestro sí estuvo como intermediario
civil con el Departamento de Estado. Lo que tengo entendido de
esas visitas es que Estados Unidos evidentemente tiene mucho interés en que haya una buena solución que deje satisfechas a todas
las partes. Claro que está implícito que en una negociación cada
parte tiene que sacrificar algo. Ellos simplemente lo que han manifestado hasta ahora es que acompañan el proceso y lo ven con
97
buenos ojos, pero también entienden que faltan muchas cosas por
aclarar. En este momento no hay negociaciones con el Gobierno
de Estados Unidos. Ellos son conscientes de la gran importancia
que tiene y de todo lo que está en juego, también para Estados
Unidos. Pero una cosa es la instancia política del Departamento
de Estado y otra es la justicia de ese país, que son independientes.
Estados Unidos se preocupa mucho de transmitir el mensaje que
la política va por un lado y la justicia por otro.
Semana: Uno de los grandes temores es que con el proceso
de desmovilización, las autodefensas buscarían efectuar una gigantesca operación de lavado de activos legalizando las inmensas
extensiones de tierras que han venido adquiriendo ilícitamente.
S.M.: Nosotros no tenemos tierras adquiridas de forma irregular.
Semana: ¿Y de dónde han sacado la plata para comprar
tanta tierra?
S.M.: Desafortunadamente el narcotráfico ha penetrado todas
las esferas de este país y nosotros no hemos sido la excepción
a esa penetración. Nosotros cobramos un impuesto a las economías que existen en las diferentes regiones y desafortunadamente
nuestro país tiene una economía arraigada en las zonas cocaleras.
Nuestra mayor presencia está en las zonas cocaleras. Aproximadamente 70% de nuestras tropas están en regiones en donde existe
narcotráfico y lógicamente nos toca recurrir a cobrar un impuesto
en esas zonas cocaleras. Nuestros estatutos prohíben que nuestros
comandantes se vinculen directamente a procesos de narcotráfico. El único eslabón que está permitido es el del cobro al gramaje
en las zonas cocaleras. Aquí el que haya sido narcotraficante y
se presente a las autodefensas como uno de sus miembros tendrá
que responder por sus procesos de narcotráfico. Si está utilizando
las autodefensas con fines de narcotráfico tendrá que responder
ante la justicia del país y de los países que lo requieran.
Semana: Pero ¿cómo explica que haya presencia de capos del
narcotráfico dentro de las AUC y que muchos narcotraficantes
están ingresando a las autodefensas como parte de una estrategia
que les permite pasar como paramilitares otros comandantes que
98
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
aún no han sido pedidos en extradición y eventualmente obtener
los beneficios de un futuro acuerdo de paz?
S.M.: Eso no pasa en estos momentos dentro de las AUC.
Puede que algunos de los miembros de las AUC en el pasado hayan tenido una vinculación con el narcotráfico. Si en el presente
la tienen no lo conozco, pero está claro que es una responsabilidad que tendrían que asumir personalmente. Particularmente yo
no sé por qué estoy pedido en extradición por Estados Unidos.
No he puesto abogado, no he investigado absolutamente nada.
Cuando a mí me libraron la primera orden de captura me dolió
mucho pero yo sabía que me venía porque era consecuencia de las
acciones nuestras en la guerra y eso tiene consecuencias jurídicas.
Pero jamás me pasó por la mente que Estados Unidos me pidiera
en extradición porque jamás he sido narcotraficante.
Semana: ¿El cese de hostilidades que ustedes han planteado
no se ha convertido en una ventaja militar y territorial para las
guerrillas?
S.M.: No han ganado territorios. Nosotros hemos estado allí.
Pero sí ha existido ventaja en las zonas que nosotros queríamos
quitarles a las guerrillas porque ha habido un estancamiento en el
crecimiento de las autodefensas. Esa es una ventaja que se le está
dando a la guerrilla. Empezaron a fortalecerse nuevamente en
algunos territorios en donde ya no incursionamos.
Semana: Estamos en plena campaña electoral y ya hay conocimiento de que en algunas regiones del país las autodefensas
tienen candidatos propios. En el Cesar, por ejemplo, sólo hay un
candidato a la gobernación porque los otros se retiraron. ¿Qué tan
fuerte es la participación de las autodefensas en la política y hasta
dónde llega su influencia? ¿Han vetado candidatos?
S.M.: Nuestra participación en política no es directa. No es
que estemos imponiendo candidatos. Puede que uno que otro comandante esté imponiendo candidatos pero no es una política
que se imparta desde aquí. Nosotros les hemos dicho a los campesinos que participen en la elección de sus gobernantes, pero
desafortunadamente la política ha estado manejada por una clase
99
política tradicional que está muy corrompida y no hace presencia sino en las épocas de elecciones. Nosotros les decimos a los
campesinos que tienen que aprender a elegir a las personas que de
verdad les puedan ayudar a resolver sus problemas. Al comienzo
eso causó malestar dentro de la clase política tradicional. No hay
vetos a candidatos. Sólo en casos en que hay alguien que sea muy
corrupto. En esos casos sí incidimos y le decimos a la persona que
es mejor que no participe.
Semana: ¿Qué tan cercana es la relación con las autodefensas
de Venezuela?
S.M.: A ellos los asesoramos en su conformación cuando
mandaron a un grupo que capacitamos en nuestras escuelas de
formación. De ahí para allá han seguido solos.
Semana: ¿Cuánto cuesta el funcionamiento de las autodefensas?
S.M.: Depende del tamaño del bloque. El más grande que hay
en el país es el que yo manejo que tiene 4 500 hombres. Al muchacho raso le damos 450 000 pesos mensuales como sueldo. A él,
además, nosotros le damos el equipo, el material de intendencia y
material de guerra. En promedio un comandante de bloque gana
cinco millones, un comandante de frente tres millones. Haga usted
la cuentas.
Semana: El sostenimiento de esa cantidad de hombres es otro
de los grandes interrogantes que rodean este proceso. ¿Cómo se
financiaría el mantenimiento de los combatientes que ingresen al
proceso?
S.M.: Por eso es tan importante la participación de la comunidad internacional dentro del proceso. Si no participan ellos es imposible sacar esto adelante, porque puede que nosotros tengamos
la voluntad y el Gobierno también, pero si no existen recursos
¿cómo sacamos esto adelante?
Semana: Jurídicamente hay una serie de obstáculos que dificultan el proceso. A ustedes no los pueden amnistiar por delitos
como la ‘rebelión’ o la ‘sedición’, ya que no pretenden derrocar
100
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
un régimen establecido para imponer otro. ¿Cómo indultar lo que
no es indultable?
S.M.: Nosotros le hemos dicho al Gobierno que el delito de
sedición no nos cobija a nosotros. Que nuestro delito es un delito nuevo que se debe llamar ‘autodefensa’. Basados en eso les
hemos dicho que miren qué marco jurídico, dentro de la Constitución, se puede aplicar para resolver el problema que existe con
las autodefensas.
Semana: Todas las semanas hay un número importante de desertores tanto de la guerrilla como de los paramilitares. ¿Cómo
está la relación de fuerzas entre la guerrilla y los paramilitares?
S.M.: Las FARC podían tener 25 000 hombres pero hoy han
sido muy diezmadas, ha desertado mucha gente. Hoy deben estar en igualdad de número de hombres que nosotros. Eso sí,
tienen muchos fusiles enterrados. El problema es que no tienen
a quién entregárselos: el reclutamiento forzoso se les ha disminuido notoriamente.
Semana: ¿Cómo cree que las FARC ven el proceso de negociación de las autodefensas?
S.M.: Con muchísima preocupación, porque saben que desaprovecharon el cuarto de hora histórico que tuvieron. Saben que
nuestra negociación significa el fin de ellos porque en la medida en
que la comunidad internacional conozca la verdadera realidad social de este país se jodieron. Por eso se oponen a que la comunidad
internacional participe. ¿No han visto las cartas que están mandando ahora a la ONU como para reivindicarse políticamente?
Semana: ¿Por qué decidió poner la cara hasta ahora?
S.M.: Yo nunca quise figurar. Yo dije que cuando iniciáramos
un proceso De negociación serio e irreversible le daba la cara al
país, para que conocieran qué pensamos todos los comandantes
de las autodefensas.
101
Semana: ¿Sí cree que este proceso va a funcionar?
S.M.: Si no es ahora, no es nunca38.
DECLARACIONES DE RAÚL REYES AL DIARIO EL
COMERCIO DE QUITO
El 14 de agosto de 2003 se supo que el señor Raúl Reyes, miembro
del Secretariado de las FARC, había anunciado a un periodista ecuatoriano que las FARC estarían dispuestas a conversar con un prelado de la
Iglesia Católica colombiana para facilitar un proceso de paz.
Reyes hizo sus declaraciones a la agencia de noticias AFP y también
al diario El Comercio, de Quito, y dijo que estaban dispuestos a recibir
a la Iglesia pero si no actuaba a nombre del Gobierno. Señaló que “las
FARC no pueden recibir a nadie del Gobierno, y no lo van a recibir porque el Gobierno lo que ha ofrecido es guerra. Si la Iglesia tiene interés
en conversar con las FARC como Iglesia, para facilitar un proceso, eso
es distinto a que lo haga a nombre del Gobierno”.
“Bienvenido el representante de la Iglesia que quiera conversar con
nosotros y conocer de nuestra parte el interés que tenemos por la solución de los problemas que afectan a Colombia”, expresó Raúl Reyes.
Al diario ecuatoriano le dice que el gobierno de Álvaro Uribe no va
a lograr acabar con la guerrilla en Colombia pese a que anunció que
lo haría en 18 meses. “Eso no lo va a lograr porque las FARC son una
guerrilla ideológica, que lucha por unos principios revolucionarios”, y
agregó que “son 39 años de experiencia”.
También dijo que la lucha de las FARC “siempre ha sido ideológica
y pura con el objetivo de tomar el poder para gobernar a Colombia”.
Aseguró que Estados Unidos “es el principal beneficiario del narcotráfico”, y precisó que en ese país como “producto del narcotráfico
circulan 5 000 millones de dólares”.
38
Revista Semana. Bogotá. Agosto de 2003, edición 1120. 23-40 p.
102
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
“Nuestra participación llega hasta el cobro del impuesto a los narcotraficantes, a los empresarios y terratenientes”, sostuvo Reyes.
Asimismo, negó que las FARC se hayan quedado solas en su lucha
y afirmó que “lo que hay es muchos gobiernos interesados en que se
solucione el conflicto colombiano”.
Rehusó, sin embargo, identificar a esos gobiernos y explicó que “lastimosamente esos gobiernos no pueden expresarlo públicamente porque luego dicen que están apoyando a los terroristas”.
Reyes reiteró que las FARC tenían intención de reunirse lo más
pronto posible con el Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi
Annan, y manifestó su deseo de viajar a Nueva York para tal fin. Al
respecto declaró:
“Queremos explicarle nuestro punto de vista frente a la problemática del país, de manera que el señor Kofi Annan pueda entender cómo
es que nosotros vemos la problemática del país, cuáles pueden ser las
soluciones. El ya oyó a los representantes del Gobierno y al mismo
Presidente; ahora necesitamos que oiga a la otra parte. En ese sentido,
le hemos pedido al señor secretario una conversación sobre ese tema”,
indicó el jefe guerrillero. “Yo estoy dispuesto a irme ya a explicarle en
una de las sesiones de la ONU o a él personalmente, o a quien él delegue, esa posición política de las FARC”, recalcó Reyes.
Consultado sobre cuál sería el papel de la ONU dentro del conflicto
colombiano, Reyes señaló que “nosotros entendemos bien que Naciones Unidas tiene absoluta claridad de que lo que hay en Colombia es un
conflicto interno. Los colombianos no estamos en guerra con ningún
país, ni vecino ni de la comunidad internacional”.
Agregó que “como es un conflicto interno, ellos pueden ayudar
con algunas recomendaciones, con experiencia, para ver cómo pueden los colombianos resolver ese conflicto que nos desangra, que no
puede continuar por tiempo indefinido”.
103
Se le preguntó a Reyes por qué, si siempre las FARC rechazaron
a la ONU, ahora la invocan. “Son cosas distintas”, dijo. “Nosotros
estamos ahora planteando a Naciones Unidas que oiga nuestro razonamiento político frente a la solución del problema que nos afecta a los
colombianos. Porque entendemos que la solución de nuestros problemas se debe resolver acá en Colombia. Lo que no podemos aceptar es
que el Gobierno colombiano pretenda quitarse su responsabilidad de
la solución al problema que nos afecta y descargarlo sobre Naciones
Unidas”, añadió.
Por otra parte, aseguró que la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt se encontraba física y anímicamente bien. “El estado de salud
de Ingrid es bueno; su estado anímico, igualmente. Naturalmente
hay que entender que si uno está privado de su libertad está pensando las 24 horas en recuperar la libertad. Así están los camaradas que están en las cárceles, y así están también los que están en
nuestro poder”, señaló Reyes. Agregó que “de allí que uno no pueda
ser irresponsable y dejar de tener en cuenta esa realidad de decir
que están absolutamente bien, porque no es cierto. Pero en cuanto
a salud, en cuanto a lo demás, ella se encuentra bien. Se encuentra
muy preocupada sí, porque no ve que de parte del Gobierno haya el
más mínimo interés de que ella y los demás prisioneros recuperen
su libertad rápidamente”, indicó el líder rebelde.
Reyes reiteró que Betancourt, en poder de las FARC desde el 23 de
febrero de 2002, sólo será liberada en el marco de un acuerdo de intercambio humanitario de medio centenar de políticos y miembros de la
fuerza pública en cautiverio por unos 400 insurgentes presos.
“La señora Ingrid Betancourt, lo mismo que los militares que están
en poder de las FARC, y los políticos que están entre el grupo de canjeables, una vez se firme el acuerdo ellos inmediatamente recuperarán la
libertad, cuando los nuestros también salgan de las cárceles”, advirtió.
En tal sentido, fue enfático en señalar que “no tenemos como
política nada distinto con ellos que lograr un acuerdo que permita la
liberación de los camaradas nuestros que están en las cárceles para
entregarle también al Estado, a través de su Gobierno, los que están
en poder nuestro con ese fin, el fin canjeable”.
104
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Reyes desmintió igualmente que haya habido algún contacto con la
familia de la ex candidata o con el Gobierno de Francia para liberarla,
y dijo que fue una mentira fabricada por el presidente Álvaro Uribe y la
inteligencia militar.
“La versión que yo les puedo dar a todos mis compatriotas es que
aquí me encuentro, en las montañas de Colombia, y que todo eso que
se armó con la supuesta entrega de la señora Ingrid Betancourt es,
como se dijo en el comunicado, una obra de la inteligencia militar fabricada en la Casa de Nariño por el propio Presidente de la República
con la ayuda de los altos mandos militares”, aseveró el jefe guerrillero.
Añadió que con ello “infortunadamente enredaron al gobierno
francés y al gobierno brasileño en un problema que es completamente
ajeno a ellos porque el problema es de los colombianos”.
Sobre el particular, el jefe guerrillero subrayó que “las decisiones
sobre el canje, sobre el intercambio humanitario, tendrían que partir
de un acuerdo de la dirección de las FARC con el Gobierno”.
En la entrevista Reyes desmintió que padeciera un cáncer. “Yo, como
usted ve, estoy en perfecto estado”, dijo. “Nunca me he sentido mejor,
pero según los medios estoy de muerte”, agregó. Reyes culpó al gobierno
del Presidente Álvaro Uribe, al Ejército y a los medios de comunicación
de Colombia de realizar “una política de desinformación” y aseguró
que no es cierto que se encontrara enfermo y menos que tuviera un cáncer terminal.
El miembro del secretariado del grupo insurgente recibió en un caserío del Putumayo a un reportero ecuatoriano que indicó que el guerrillero, enfundado en un traje de camuflaje verde y con un pesado fusil HK
colgando de su hombro izquierdo, le brindó una copa de vodka danés
mientras bromeaba39.
39
Op. cit. 15, agosto, 2002. 1-5. p.
Ibíd. [en línea]. Disponible en internet: www.eltiempo.com.
105
La respuesta de la Iglesia Católica no se hizo esperar. Monseñor Luis
Augusto Castro, Vicepresidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, mostró su complacencia por las declaraciones del señor Raúl Reyes
y dijo que él estaba dispuesto a realizar los contactos que permitieran
explorar caminos para un intercambio humanitario40.
El periodista de la Revista Cromos, Jorge Enrique Botero, estuvo en
un campamento de las FARC el 22 de julio y ahí encontró a 32 personas
entre políticos y militares. El periodista dio testimonio de haber visto a
los retenidos en buenas condiciones de salud y dijo que se les daban tres
comidas diarias y los medicamentos necesarios. Esta información la suministró el periodista Botero en una entrevista al programa de Radio W
FM difundido el 16 de agosto de 2003.
PROYECTO DE LEY SOBRE JUSTICIA Y PAZ
El 21 de agosto de 2003 el Gobierno Nacional, a través del ministro
del Interior y de Justicia y del Alto Comisionado de Paz, presentó a
consideración del Congreso Nacional un proyecto de ley que permitiría
a los actores del conflicto armado que depongan las armas y se reincorporen a la vida civil, salvarse de ir a prisión a cambio de la participación
en proyectos de trabajo social, la entrega de bienes al Estado y el suministro de información eficaz.
El propósito del proyecto, según el ministro del Interior y de Justicia,
era el de allanar el camino para el logro de la reconciliación nacional.
El proyecto de ley partía de la base de que quienes se acogieran a los
distintos procesos de paz deberían hacerlo con la condición de entrar en
un cese de hostilidades definitivo y adquirir el compromiso de no cometer delito alguno durante los cinco años siguientes a su sometimiento.
En cuanto a las personas que mediante un acuerdo de paz o quienes
individualmente se reincorporaren voluntariamente a la vida civil podrían
ser juzgadas, o si lo habían sido con anterioridad a su reinserción podrían
ser condenadas a las penas correspondientes, el Gobierno podría para ellas
40
Op. cit. 16, agosto, 2002. A7 p.
106
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
solicitar a los jueces la suspensión condicional de la pena a cambio de que
los beneficiarios adquirieran un compromiso de paz y buena conducta y
reparasen a sus víctimas por el daño a ellas causado.
Estas personas no podrían salir del país y deberían informar a las autoridades cualquier cambio de residencia. La suspensión de la pena tendría efecto durante cinco años, al final de los cuales si los beneficiados
hubieren observado buena conducta, cumplido todos sus compromisos
y respondido por sus obligaciones con la sociedad y la justicia, podrían
obtener el perdón definitivo.
Los beneficios de este proyecto de suspensión de penas serían para
todos los actores del conflicto armado, guerrillas y autodefensas, y podrían beneficiarse de las suspensiones de las penas incluso aquellas personas que hubieren sido o sean condenadas por delitos atroces para los
cuales no son aplicables la amnistía y el indulto.
Veamos cuál era al momento de presentarse este proyecto de ley el
pensamiento del Alto Comisionado de Paz:
El Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, dijo que no habría
impunidad porque habría investigación, juicio y sentencia, y finalmente
una modificación de la pena de cárcel. En lugar de la cárcel, los implicados quedarían sometidos a alguna de las seis penas alternativas,
acompañada de la reparación a las víctimas, para compensar el dolor y
daño ocasionados.
El comisionado manifestó que no habría ningún delito excluido de la
ley, al ser interrogado sobre si los responsables de narcotráfico también
podían aspirar a una excarcelación por esta vía.
ENTREVISTA DEL ALTO COMISIONADO DE PAZ CON EL
DIARIO EL PAÍS
El País: El proyecto de reinserción enfrentará una dura oposición. ¿Cómo se llegó a esta propuesta?
Luis Carlos Restrepo: Hay una postura filosófica del Presidente, y nace de su corazón grande, no de su mano firme. Es
107
interesante entender que esto responde a una vieja inquietud del
Presidente de años atrás. Cuando él vio la experiencia de Irlanda
del Norte empezó a considerar que era aplicable a Colombia y
desde comienzos del Gobierno empezamos a discutir esta figura.
Él lo considera como una especie de incentivo para que personas que en este momento están al margen de la ley se integren a la
vida civil y ayuden activamente a la reconstrucción de la sociedad
con acciones de reparación. Ahí hay una propuesta de reconciliación muy importante.
E.P: ¿Hacia dónde apunta exactamente la iniciativa?
L.C.R: Se trata de abrir posibilidades de reconciliación. Hasta
ahora no se había abordado en Colombia lo que tiene que ver
con las herramientas jurídicas para la superación definitiva del
conflicto; siempre se había dejado en suspenso la posibilidad de
brindar alternativas jurídicas a quienes están con las armas en la
mano.
E.P: ¿Es viable el proyecto sin un proceso de paz en curso?
L.C.R.: Creo que esa postura nos lleva a una especie de círculo vicioso fatal. Es decir, sólo el día que usted pueda negociar
creamos el horizonte. Lo que nosotros estamos haciendo es adelantarnos a los hechos abriendo un camino jurídico y mandando
un mensaje: les estamos diciendo que hay una alternativa y una
posibilidad de que aquellos delitos por los que son perseguidos
no los conduzcan directamente a la cárcel, sino que puedan participar de manera activa en la reconstrucción del país. Lo que hacemos con esto es ablandar un poco la actitud de los guerreros y
mostrarles que en la sociedad democrática hay caminos abiertos.
E.P: ¿Pero no es esto una especie de ablandamiento de la justicia?
L.C.R.: No. Yo diría que se humaniza la justicia, que es distinto. Hasta ahora el sistema penal se ha centrado en el castigo
y éste ha sido entendido única y exclusivamente como pena de
prisión, y aunque todos los códigos y todos los sistemas penales
dicen que el horizonte es la resocialización, realmente con los
métodos actuales es muy poco lo que se logra. Aun más grave: se
108
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
castiga al victimario pero no se repara a la víctima, y se considera
que ésta queda reparada con el castigo. Se trata simplemente de
venganza, y así no se hace la paz.
E.P: A pesar de esos argumentos hay muchos otros en contra...
L.C.R.: En la ley no sólo hay reparaciones materiales y simbólicas a las víctimas, sino que además se consideran como acciones efectivas de reparación la contribución a la pacificación del
país: ahí hay una acción de reparación colectiva con la sociedad.
La gran ganancia final es que habrá más democracia, mejor tejido
social, mayor reparación, y no simplemente más criminales en las
cárceles.
E.P: ¿Cree que el proyecto va a ser bien recibido por los miembros de los grupos armados?
L.C.R.: Las personas que están en armas le declararon la
guerra a la legalidad. Allí se crea una especie de contrapunteo
en el que ellos no tienen otra alternativa que derrotar a la democracia para imponer su sistema, y la democracia no tiene otra
alternativa que derrotarlos para imponer su justicia. Esa es la
vía de la guerra.
Si uno quiere que haya justicia plena y a secas no tiene otra
alternativa que imponer la fuerza del Estado. Pero como estamos
pensando en una salida negociada, aquí hay que pensar en una
transacción que necesariamente fortalezca a la justicia pero también logre los intereses de la paz.
E.P: ¿Y eso lo logrará el proyecto?
L.C.R.: No van a deponer las armas a través de una negociación si no existe un atractivo para traerlos a la vida civil. Entonces, sí hay dentro del proyecto un factor motivacional. La sociedad les abre sus puertas, pero siguiendo los cánones y los criterios
de la democracia moderna, y eso significa que siempre y en toda
circunstancia debe haber verdad, justicia y reparación.
109
E.P: ¿Cómo se cumplen esos preceptos con un proyecto como
el que acaba de presentar el Gobierno?
L.C.R.: Nosotros cumplimos con los términos de la verdad
porque hay plena investigación y esclarecimiento de los hechos;
cumplimos con la justicia porque hay un fallo o una absolución y
hay condena, y por supuesto, enfocamos todo hacia la reparación
de las víctimas superando la noción estrecha del castigo.
E.P: En un país con tanta desconfianza por la justicia, con este
proyecto las víctimas podrían pensar que el único destino será la
impunidad...
L.C.R.: Por supuesto que en Colombia hay una enorme desconfianza sobre la posibilidad de superar el conflicto y alcanzar la
paz, porque en este momento todavía existe desesperanza. Pero si
somos capaces de abrir espacios, de abrir esos mecanismos jurídicos, de fortalecer la justicia, y simultáneamente abrir caminos de
paz, podemos producir también un cambio colectivo de opinión.
Al presentar el proyecto de ley el Gobierno también asume
una labor pedagógica: decirles a los colombianos que pensemos
en esta alternativa, que es absolutamente necesaria para aclimatar
la paz. Que no hagamos lo del avestruz, que esconde la cabeza
para no enfrentar los retos. Este Gobierno está enfrentando el reto
de entrada.
E.P: ¿El proyecto está hecho a la medida de Carlos Castaño?
L.C.R.: En las conversaciones que hemos tenido con las autodefensas hemos sido muy claros en cuanto a que los beneficios judiciales no se negocian. El Estado puede hacer ofertas para
aclimatar la paz nacional, y no sólo con uno sino con todos los
grupos armados. También el Gobierno ha dejado en claro que el
tema de la extradición no es un asunto de la mesa de negociación,
que no vamos a negociar si extraditamos o no a una persona. Si
se concede o no este beneficio, eso es discrecional del Presidente.
E.P: Castaño ha dicho que ya se siente desmovilizado. ¿Ese
aparente arrepentimiento le basta al país?
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
L.C.R.: ¿Que si uno debe valorar positivamente que alguien
que después de haber causado mucho daño y de poder seguir causando daño, voluntariamente decide parar el aparato de guerra y
contribuir a la reconstrucción? Yo creo que sí. Si Manuel Marulanda dijera lo mismo, habría una sensación de júbilo nacional y
disposición a la reconciliación41.
DECLARACIONES DE INGRID BETANCOURT
El sábado 30 de agosto de 2003, el noticiero de televisión Noticias
Uno presentó un video de veintitrés minutos en el cual la ex candidata
presidencial Ingrid Betancourt, quien se encontraba secuestrada en manos de las FARC, se refirió a la posibilidad que las Fuerzas Armadas
realizaran operativos tendientes a lograr el rescate de las personas que
se encontraban en poder de los grupos guerrilleros.
Al respecto manifestó: “Uno no puede renunciar a sus derechos, a
su libertad, ni siquiera por prudencia. Rescate sí, definitivamente sí,
por principio, pero no cualquier rescate: rescate con éxito”, dijo la
ex candidata presidencial. Estuvo de acuerdo en que cualquier decisión
en ese sentido debería tomarla el Presidente de la República.
“Que el Presidente les avise a las familias. No se trata de consultarlas. Que evalúe el riesgo y la posibilidad de éxito” [...] “Quiero
decirle al Presidente que todos los secuestrados lo tenemos en nuestras mentes y rezamos por él”. [...] “Es imposible que a todos nos
rescaten. Tenemos la responsabilidad con soldados y policías. El
canje es una obligación moral en un Estado democrático. Uno no
les puede decir a los soldados: allá ustedes si los capturan, porque
el Estado no responde. No es posible que ganemos esta guerra si no
les damos certeza a nuestros soldados de que vamos a estar con ellos
en las buenas y en las malas” [...] “Le quiero pedir a mi familia que
apoye a las Fuerzas Militares, que asuma el compromiso de adelantar operaciones de rescate, que nos lleve a la liberación”.
41
Ibíd. 24, agosto, 2003. 1 y A2 p.
111
Por su parte el presidente Álvaro Uribe, en una declaración emitida
el domingo 31, dijo:
“Ese tema lo tiene que manejar el Gobierno muy prudentemente, lo
tiene que analizar el ministerio de Defensa. Yo creo que la única respuesta del Gobierno es prudencia, prudencia”.
A su turno, la Ministra de Defensa, Martha Lucía Ramírez, dijo:
“Hemos querido ser muy respetuosos de los deseos de su familia, que
no es intentar ninguna operación de rescate, pero creo que esta declaración de ella va a poner a pensar a su familia’”.
“No se puede dudar de la capacidad y de la decisión de la Fuerza
Pública y de que el rescate es una acción válida”. La declaración de
Ingrid, dijo la ministra, “nos reafirma que lo que quieren quienes están
secuestrados es justamente que nuestras Fuerzas Militares y la Policía
sigan cumpliendo sus deberes en la búsqueda de darles libertad a nuestros secuestrados”42.
El domingo 31 de agosto se supo que las FARC y la ONU adelantaban con-tactos para una posible reunión en Brasil; así lo confirmó el
Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, al confirmar un informe de prensa sobre una posible entrevista entre un delegado de la ONU
y Luis Edgar Devia, alias “Raúl Reyes”.
ENTREVISTA DEL ALTO COMISIONADO CON YAMID AMAT
Igualmente, el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, en una
entrevista concedida a Yamid Amat, publicada en El Tiempo del domingo 31 de agosto de 2003 en la página 1-17, reafirmó sus puntos de
vista expresados al diario El País de Cali la semana anterior.
Por considerarlo del mayor interés y por ser la posición oficial del
Gobierno sobre esta materia, se transcribe a continuación la mencionada entrevista.
42
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Yamid Amad: ¿Usted esperaba semejante “mar embravecido”
contra el proyecto que posterga las sentencias contra crímenes
atroces?
Luis Carlos Restrepo: Es comprensible, pero estamos preparados para la “tempestad”, para el debate, no solo en el Congreso
sino en el seno de la sociedad. Es claro que necesitamos herramientas jurídicas para avanzar en el proceso de negociación. Este
es el momento de dar ese debate: ¿qué estamos dispuestos a hacer
para lograr la paz?
Y.A.: ¿Y qué cree usted que estamos dispuestos a hacer?
L.C.R.: Si vamos a explorar una salida negociada, es claro
que la oferta que uno hace a los grupos armados no puede ser
la cárcel; si la perspectiva es esa, simplemente cerremos la posibilidad de una salida negociada y dejemos abierta solamente la
puerta a la salida militar. Si creemos en la salida negociada, la
legislación internacional nos permite explorar modalidades diferentes al castigo.
Y.A.: El senador Rafael Pardo no solamente se opone abiertamente al proyecto, sino que sostiene que Álvaro Uribe no fue
elegido Presidente para perdonar asesinos...
L.C.R.: A Uribe lo elegimos para que montara un sistema
de seguridad democrática contra la violencia, pero también para
que, con corazón grande, explorara alternativas de paz.
Y.A.: El ex Ministro y Subdirector de El Tiempo, Rodrigo
Pardo, dice que en lugar de un “referendo fofo” por qué no se
somete a consulta del pueblo asuntos como el que llama “dosis de
impunidad” a los paramilitares...
L.C.R.: No se trata de someter a consulta del pueblo un proyecto de estas características, porque hay una instancia adecuada que
es el Congreso. Lo hicimos, precisamente, para que tanto la ciudadanía como el Congreso y la Corte Constitucional puedan expresar
su punto de vista al respecto. Creo que el camino escogido es el
mejor, es decir, el debate parlamentario y el control constitucional.
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Y.A.: ¿El proyecto está hecho para las autodefensas?
L.C.R.: No. No. Está dirigido a todos los grupos armados al
margen de la ley. Está orientado a motivar la desmovilización tanto individual como colectiva de personas que le están haciendo
gran daño al país. Está dirigido a cualquiera de las personas que
tienen armas en la mano, llámense Castaño, Marulanda, Jojoy o
Mancuso.
Y.A.: Una de las críticas al proyecto es que, supuestamente,
consagra la impunidad.
L.C.R.: Eso no es cierto. Hay impunidad cuando no se establece responsabilidad sobre los delitos cometidos, pero aquí se
establece plenamente responsabilidad sobre delitos. Lo que se
modifica es el castigo de cárcel. Lo que pasa es que hay personas
que confunden la justicia penal con la cárcel; consideran que si no
se le produce dolor al victimario llevándolo a la cárcel, como una
especie de venganza social, no ha habido justicia eficaz. Damos
un paso que nos lleva de la noción de castigo a la de reparación.
Y.A.: ¿No es posible la paz sin beneficios como el de no castigo?
L.C.R.: En las soluciones negociadas, no. No tiene sentido ir
a una negociación y ofrecer como única alternativa el presidio.
Y.A.: ¿Cree que no hay paz posible con cárcel?
L.C.R.: El país tiene que entender esto: la seriedad de un
proceso de paz se mide por la posibilidad de abrir alternativas
judiciales diferentes a la cárcel para quienes han participado en
el conflicto o en las hostilidades; de lo contrario, será imposible
hacer un proceso de negociación con las FARC, el ELN o las
AUC. Además, mi misión quedaría totalmente reducida y la Oficina del Alto Comisionado no dependería de la Presidencia sino
del Fiscal. No es posible un proceso de negociación sin ofrecer beneficios a las personas que voluntariamente van a dejar las armas.
Pero quiero aclarar que este asunto no se ha llevado a la mesa con
las AUC.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Y.A.: ¿Este proyecto no es condición de las autodefensas para
negociar?
L.C.R.: No ha sido, ni es condición. Hemos estado conversando sobre la posibilidad de que se desmovilicen. No hemos tratado los beneficios judiciales que se les podrían conceder; pero es
evidente que sin esa alternativa el proceso no avanza. Si esta ley
es negada en el Congreso, yo como Comisionado me quedo sin
herramientas.
Y.A.: ¿Sin el proyecto fracasa el proceso con las autodefensas?
L.C.R.: Indudablemente. Si no ofrecemos alternativas diferentes a la cárcel, el proceso de paz en marcha se hundiría.
Y.A.: ¿Y en qué va el proceso?
L.C.R.: Tenemos que definir una serie de zonas de concentración en todo el país, para que ellos reciban una capacitación
durante un tiempo y luego se reintegren a la vida civil. Debemos
ofrecer seguridad para esas zonas que han estado bajo influencia
de las autodefensas. Sería muy grave desmovilizar a las autodefensas y que otros grupos tomaran el control de estas zonas para
que comenzaran retaliaciones y masacres.
Y.A.: ¿Cuántas zonas de concentración existirían?
L.C.R.: Muchas, porque son muchos los frentes de las autodefensas. Hay medio centenar de frentes y las zonas de concentración
no pueden ser muy grandes. Estamos hablando de un total de 20
000 hombres que están dispuestos a desmovilizarse. Pensemos en
términos de diez o doce zonas que eventualmente se podrían rotar.
Y.A.: ¿Unas son las zonas de concentración y otras las zonas
de diálogo?
L.C.R.: Todavía no hemos decidido cómo vamos a manejar
la mesa de diálogo. El deseo del Gobierno es que sea una mesa
única. Les hemos dicho de manera reiterada a las AUC que queremos una mesa única para tratar grandes temas nacionales.
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Y.A.: ¿No teme que, si se desmovilizan las actuales autodefensas, aparezcan otros grupos?
L.C.R.: Sería gravísimo. Lo que hay que analizar es el temor de
algunas comunidades a que la desmovilización de las AUC deje el
espacio libre a la guerrilla para que lleguen a realizar masacres en
esos territorios. Hay que montar unos modelos de seguridad participativa. El gran problema es que hay muchos ciudadanos que recurren a modelos de seguridad ilegales, es decir, que de buena fe apoyan a las AUC creyendo que esa es una alternativa. Pero, como bien
lo dijo el ministro Fernando Londoño, eso es un Frankestein, porque
usted arma el monstruo pero después no es capaz de manejarlo.
Le critican al Gobierno que es contradictorio: presenta un proyecto en el que robustece al máximo las penas contra terroristas y
otro, en el que los perdona... El lema de campaña era mano firme y
corazón grande. Lo que estamos aplicando es eso: mano firme para
quienes persisten en el terrorismo y corazón grande para quienes desistan de él. Las dos cosas son complementarias, no contradictorias.
Y.A.: ¿Qué presentación tiene que a un hombre que mata a
otro lo condenen a treinta años de cárcel y a un hombre que ordena la matanza de cien le suspendan la pena?
L.C.R.: Ojalá toda la justicia se abriera de manera plena a la
dinámica de la reparación. Pero, en el homicidio culposo es posible que se obtengan beneficios judiciales si se repara totalmente a
la víctima; se suspenden, inclusive, proceso y pena.
Y.A.: ¿Usted está humanamente convencido de los beneficios
del proyecto?
L.C.R.: Sí. El argumento fundamental es el argumento humano. Es posible que desde el punto de vista del derecho positivo tenga muchas críticas, pero desde el punto de vista humano
y antropológico es justificable y necesario, porque la dinámica
del conflicto en Colombia ha arrastrado colectivamente a muchas
personas a un campo de criminalidad e insensatez del cual tenemos que salir.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Y.A.: Si usted hubiera sido víctima del conflicto, ¿estaría de
acuerdo con el proyecto?
L.C.R.: Se necesita magnanimidad. Abrir caminos de reconciliación. Hay que dejar de pensar en términos de cárcel y de venganza. Todos los que hemos tenido familiares muertos por el conflicto entendemos la necesidad de medidas para aclimatar la paz.
Y.A.: ¿Por qué dice usted “los que hemos tenido”?
L.C.R.: Mataron a un primo hermano muy cercano a mí. Al
esposo de mi hermana también lo mataron. He sentido el dolor
de cerca. Mi cuñado fue ejecutado por la guerrilla. Historias de
esas tenemos todos en Colombia.
Y.A.: ¿La paz en Colombia no tiene futuro si no hay sentimiento de perdón?
L.C.R.: No habría futuro. Sin perdón y reconciliación seguiría existiendo el sentimiento de venganza que nos tiene donde
estamos. Marulanda sigue vengándose por lo que le hicieron a su
familia; Castaño, por lo que le hicieron a su padre.
Y.A.: ¿Qué pasa si el proyecto no es aprobado?
L.C.R.: Que nos quedamos sin alternativa diferente a la cárcel.
Y.A.: ¿Si no hay ley no hay desmovilización?
L.C.R.: Si no hay ley se vería seriamente afectado el proceso
de paz con las AUC y se bloquearía el proceso de desmovilización. Sin esa ley no tenemos una alternativa para una negociación exitosa con ningún grupo al margen de la ley.
Y.A.: ¿Así de cierto?
L.C.R.: Así de cierto y así de grave43.
43
Op. cit. 31, agosto, 2003. 1-17 p.
117
BRASIL OFRECE TERRITORIO PARA DIÁLOGOS CON
LAS FARC
El 1 de septiembre Brasil confirmó estar dispuesto a aceptar que su
territorio fuera sede para un posible diálogo entre voceros de las FARC y
la ONU con miras a buscarle alguna salida política al conflicto armado.
El señor Marco Aurelio García, Asesor de Asuntos Internacionales
del Gobierno de Brasil, manifestó la voluntad de ese país de participar,
si era invitado en el posible inicio de las conversaciones.
“Estamos dispuestos a negociar cualquier solución de paz en el
conflicto. Queremos internacionalizar las soluciones de paz y no
las de guerra. Pero no podemos decir que participaremos hasta no
ser invitados formalmente por el Gobierno de Colombia y por la
ONU”.
La ONU y Brasil sostuvieron la primera conversación sobre el tema
varias semanas después de que el canciller brasileño, Celso Amorim,
visitara Bogotá y hablara con el presidente Álvaro Uribe sobre la posibilidad de ofrecer su apoyo. Luego, Amorin viajó a la ONU, donde fue
invitado informalmente a participar. “Recibimos una invitación informal de las Naciones Unidas”, confirmó García44.
LA BÚSQUEDA DE DIÁLOGOS CON EL ELN
El 26 de septiembre de 2003 el Presidente Álvaro Uribe dio un paso
importante hacia la reanudación de los procesos de paz al anunciar su
disposición para buscar un nuevo diálogo con la guerrilla del ELN. En
efecto, el Presidente ofreció buscar la excarcelación de los guerrilleros
Felipe Torres y Francisco Galán, quienes se encontraban cumpliendo
penas de quince años de prisión en la cárcel del municipio de Itagüí.
“Qué bueno que ellos (Torres y Francisco Galán) renunciaran al
componente militar del ELN, mantuvieran su condición de buscadores de paz y que encontráramos un mecanismo para que salgan de la
44
Ibíd. 2, septiembre, 2003.1-5 p.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
cárcel”, dijo el presidente, y agregó: “Quiero hacerle un llamado al
ELN para que haga un alto en el camino, libere a los secuestrados y
acepte entrar en un proceso de paz”.
A su vez el ex Procurador y miembro de la Comisión Facilitadora de
Paz, Jaime Bernal Cuéllar, manifestó que “hay que analizar la iniciativa
en el campo político y no jurídico”. Dijo también que con el anuncio
del presidente “se abren caminos firmes a la solución del conflicto y se
demuestra la necesidad de buscar alternativas para construir la reconciliación nacional”.
Simultáneamente a su anuncio sobre un posible acercamiento con el
ELN, el Jefe del Estado insistió en la necesidad de buscar un amplio consenso nacional e internacional frente al proyecto de ley sobre alternatividad
penal propuesto al Congreso Nacional. Al respecto dijo el presidente:
“Nosotros queremos sobre ese hecho un gran consenso nacional
e internacional. La postura del Gobierno no es dogmática. Estamos
invitando a que se busquen opciones en el Congreso, a que opinen
Europa y Estados Unidos y nuestros vecinos de Latinoamérica, y a
que pensemos muy bien que eso tiene que servir para todos los grupos violentos. Hay que decirle al mundo que nosotros necesitamos
el instrumento; que es para todo el mundo, sea paramilitar o guerrillero, y que queremos llegar a un gran consenso para encontrar el
instrumento. Estoy de acuerdo que fue conveniente, que era válido
amnistiar como se amnistió, a dirigentes de organizaciones que, por
ejemplo, con financiación del narcotráfico destruyeron el Palacio de
Justicia”, refiriéndose al M19. “¿Hoy no es válido buscar un camino
que sirva para desmovilizar a 10 ó 12 mil paramilitares, y mañana
para poder adelantar un proceso con la guerrilla?”45.
El 14 de octubre se conoció que la comisión de miembros de la Iglesia Católica creada por el Gobierno para facilitar un encuentro con las
FARC, logró entrevistarse en algún lugar del país con representantes de
ese grupo guerrillero.
45
Op. cit. 27, septiembre, 2003. 1, A6 p.
Op. cit. 27, septiembre, 2003.1, 1-2 p.
119
La agencia de noticias AFP dijo haber recibido un mensaje de las
FARC en el cual manifestaban: “acabamos de efectuar la entrevista con
Monseñor Luis Augusto Castro, Obispo de la ciudad de Tunja; Monseñor Darío Múnera y el sacerdote Darío Echeverry en sus calidades
de delegados de la Iglesia y de la Comisión Facilitadora de la misma”.
Las FARC en su comunicación reiteraron su pedido de una nueva
zona desmilitarizada para negociar el intercambio de miembros de esa
organización que se encuentran presos por miembros de la Fuerza Pública del país, retenidos por esa guerrilla46.
COMUNICACIÓN DE MANUEL MARULANDA A LOS CORONELES DEL EJÉRCITO
El mismo 14 de octubre se conoció una comunicación dirigida por
Manuel Marulanda Vélez a los coroneles del Ejército. La comunicación
apareció en el sitio de internet de las FARC. La carta de referencia tiene
fecha 12 de octubre.
El siguiente es su texto completo:
Montañas de Colombia, octubre 12 de 2003
Carta abierta a los señores coroneles del Ejército Colombiano, divisiones, brigadas y batallones en sus despachos.
En los meses de marzo y abril del año en curso, me dirigí mediante
dos cartas públicas a los señores generales de la República, con la finalidad de expresarles mi interés en convenir con ellos una entrevista
destinada a buscar acuerdos conducentes a parar la confrontación militar iniciada por el bipartidismo liberal-conservador a partir de 1948,
continuada con las FARC por más de 39 años.
Ya han transcurrido cinco meses de enviadas mis cartas, pero infortunadamente quedaron sin respuesta, en el olvido, seguramente por
diversas ocupaciones de los destinatarios.
46
Op. cit. [en línea], octubre 2003. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Conocemos que los generales dada su responsabilidad administrativa
desde las oficinas del Comando General, ya no tienen muchos riesgos
en el campo de combate con las guerrillas. Este riesgo sí lo enfrentan ustedes personalmente con los demás mandos operativos en las distintas
regiones de la patria.
Mientras el tiempo pasa y la confrontación se agudiza en toda Colombia, donde soldados y guerrilleros son las principales víctimas de
la guerra, así como las ONG y la población civil padecen calumnias y
masivas detenciones arbitrarias por supuestos vínculos con la guerrilla.
Observamos que el señor Presidente, Álvaro Uribe Vélez, emplea
injustas amonestaciones en privado y en público no solo hacia algunos
generales, sino particularmente contra los mandos operativos encargados de controlar el orden público a costa de exponer su propia vida,
empezando por los coroneles, mayores y capitanes.
Nosotros mantenemos invariable nuestro llamado urgente a los mandos militares patriotas y bolivarianos a que se nieguen definitivamente
a servir de verdugos de su propio pueblo, por defender los intereses y
privilegios de los politiqueros, corruptos, mañosos y oligarcas de este
país que tanto daño han causado y seguirán causando mientras permanezcan en el poder apoyados en su Ejército.
El futuro de Colombia no puede ser de guerra indefinida ni de expoliación de las riquezas de la Patria, ni puede continuar la vergonzosa
entrega de nuestra soberanía a la voracidad de las políticas imperiales
del Gobierno de los Estados Unidos.
Ustedes y nosotros estamos en mora de sentarnos a conversar en
serio para dirimir nuestras diferencias mediante el intercambio civilizado de opiniones hacia la solución definitiva de las causas políticas,
económicas y sociales generadoras del conflicto interno para bien de las
futuras generaciones de nuestros compatriotas.
Por las anteriores consideraciones, ahora acudo a ustedes y quedo
pendiente de su respuesta.
121
Atentamente,
Manuel Marulanda Vélez47
ELN LIBERA A CIUDADANOS EXTRANJEROS
El 28 de octubre de 2003 el ELN anunció la próxima liberación de
los siete extranjeros que tenía secuestrados en la Sierra Nevada de Santa
Marta. En efecto, el comando de ese movimiento guerrillero dijo que
liberaría uno por uno los ciudadanos extranjeros en su poder y que el
primero sería el señor Huegun Etzeberría, de origen vasco.
El ELN solicitó, a cambio, que llegara a la Sierra Nevada una comisión de la ONU y de la Iglesia Católica, según lo informó a los medios
de comunicación social Monseñor Alberto Giraldo Jaramillo, Arzobispo de Medellín.
Los ciudadanos extranjeros en poder del ELN eran los señores Huegun Etxberría, español vasco; los israelitas Beni Danaiel, Ortaz Ohayon, Ido Josep Guy y Erez Altawil; el británico Mark Henderson y la
alemana Reinhilt Weigel, los cuales fueron liberados.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE CACIQUE NUTIBARA
El 25 de noviembre de 2003, tal como estaba anunciado, depusieron
sus armas y se concentraron en el municipio de La Ceja, Antioquia, 870
miembros del Bloque Cacique Nutibara de las AUC. El delegado de la
OEA que estuvo presente en la ceremonia de entrega de estos miembros
de las denominadas autodefensas, señor Enrique Caramagna, de nacionalidad argentina, manifestó el apoyo de la Organización de Estados
Americanos al proceso que adelantan el Gobierno y las AUC con miras
a la desmovilización de ese grupo ilegal.
Los miembros de las AUC que se desmovilizaron en la fecha indicada realizaban operaciones en el departamento de Antioquia, especialmente en Medellín y zonas aledañas.
47
Ibíd. [en línea], octubre 2003. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
En igual sentido que el delegado de la OEA, se manifestó el representante de la Unión Europea, señor Diego Ojeda, portavoz oficial del
Comisionado Europeo para Asuntos Exteriores, Chris Patten.
“La desmovilización de elementos armados al margen de la ley
es un paso positivo en todos los casos, porque nos acerca a una situación de no violencia”, dijo el funcionario, y agregó: “esperamos
que este tipo de soluciones se extiendan lo más rápidamente posible
a todos los otros grupos armados que existen en Colombia en estos momentos. Manteniendo el respeto debido al necesario margen
de maniobra que Colombia necesita para articular sus soluciones al
conflicto, reiteramos nuestra percepción de que es bueno, es positivo,
además de justo y apropiado, que no se deje de lado el derecho de
las víctimas a la justicia, a la verdad y la reparación de los daños,
pues sería contraproducente no hacerlo. Nuestra política general en
el mundo entero -no sólo en el caso de Colombia- es contraria a la
impunidad, y se basa en una doble justificación: por un lado, porque
no es de buen recibo que crímenes gravísimos queden impunes; y por
el otro, porque creemos que semejante impunidad es contraproducente para el futuro mismo de los países afectados”.
Consultado sobre cuál sería el mejor camino para lograr desmovilizaciones de grupos alzados en armas con niveles aceptables de justicia, Ojeda destacó: “hay muchas fórmulas que se han articulado en
otros sitios, en Sudáfrica, en Perú más recientemente. Comisiones de
la verdad, tribunales especiales, etc. Hay muchas experiencias y todas
ellas son diferentes, pues tienen que estar necesariamente adaptadas a la
idiosincrasia local y a las condiciones del conflicto y de los crímenes”.
Y remató: “pero lo más importante, cualquiera que sea la salida
que escoja Colombia, es que la impunidad no sea un elemento, ya
que repito: la impunidad no sólo no es justa, sino contraproducente
para el país”48.
El mismo día de la desmovilización del Bloque Cacique Nutibara se
supo que próximamente se entregarían en el departamento del Cauca
48
Op. cit. 26, noviembre, 2003. 1 p.
123
otros 150 miembros de las AUC que habían venido operando en esa
región del país. Se preveía que para inicios del año 2004 se producirían
nuevas desmovilizaciones de miembros de las AUC, como los grupos
que venían operando en Córdoba y Urabá, en Nueva Antioquia y en
Turbo, y otros grupos en otras regiones del país.
Por su parte, el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, anunció
que 15 grupos adicionales se desmovilizarían antes de que terminara el año
2005, cuando se esperaba la entrega de los líderes nacionales de las AUC.
La desmovilización de los miembros del Bloque Cacique Nutibara
fue parte del compromiso adquirido por las AUC en el llamado Acuerdo de Santa Fe de Ralito, firmado el 15 de julio de 2003 con el Gobierno Nacional. Ese acuerdo estableció la entrega de aproximadamente
13 000 miembros de las AUC entre los últimos meses del año 2003 y
diciembre de 2005.
El 26 de noviembre de 2003 el ELN liberó a dos de los siete extranjeros en su poder y prometió ir liberando los cinco que aún permanecían
en cautiverio. Los primeros liberados fueron el español Huegun Etxberría y la alemana Reinhilt Weigel.
Tras la liberación de estas personas, el Comisionado de Paz, Luis
Carlos Restrepo, manifestó la disposición del Gobierno Nacional de
reanudar los diálogos de paz con el ELN. El comisionado explicó que
para la iniciación de un eventual proceso de paz el Gobierno entregaría
salvoconductos a los delegados del ELN e incluso consideraría la posibilidad de otorgar libertad provisional al señor Francisco Galán, quien
se encontraba detenido en la Cárcel de Itagüí.
REPORTAJE DE CARLOS CASTAÑO A EL TIEMPO
El 4 de diciembre de 2003 el diario El Tiempo publicó una extensa
entrevista realizada por la periodista Bibiana Mercado a Carlos Castaño, líder de los grupos de las AUC, en que éste propone, entre otras cosas, la creación de tribunales regionales de la verdad tendientes a esclarecer crímenes que se hubieran cometido a lo largo del conflicto armado
en el país. El siguiente es el texto de la entrevista:
124
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Bibiana Mercado: Si el 90% de las AUC es rural, ¿por qué,
entonces, comenzar con un frente urbano?
Carlos Castaño: Había que comenzar las reinserciones por
algún frente. Había menos inconvenientes para el Bloque Cacique Nutibara, que es exclusivamente urbano. Es una muestra de
que esto es en serio y esperamos la responsabilidad del Gobierno
Nacional y local de asumir la seguridad y atención social a estas
comunas. Es lo que formaliza el inicio real de un proceso de desmovilización. No hay nada oscuro.
B.M. ¿No será, mejor, que no confían aún en la capacidad del
Gobierno para brindar seguridad a las zonas que ustedes consideran ‘liberadas’?
C.C.: Hay un cronograma convenido con la oficina del comisionado en lo rural, pero por la inminente unificación de la
mesa de negociación donde se harán presentes otros bloques se
pospuso por un tiempo prudente el inicio de esa agenda. El Gobierno argumenta que es preferible consolidar ese cronograma ya
que el Bloque Central Bolívar tenía un cronograma de una única
concentración de fuerzas. La nuestra era gradual.
B.M.: El hecho de que no se desmovilicen primero los que
son, sino bandas barriales, genera desconfianza...
C.C.: Los colombianos no pueden tener ningún tipo de escepticismo frente al proceso. La voluntad de las autodefensas es
absoluta. Las AUC no los vamos a defraudar. Es el Gobierno el
que debe tener la certeza de contar con un presupuesto que lleve
seguridad a las áreas rurales de donde saldríamos.
B.M.: ¿Este el principio del fin de las autodefensas?
C.C.: Es un paso grande. De aquí vienen muchas cosas: el
acompañamiento y credibilidad de la sociedad colombiana y
apoyo de la comunidad internacional. Por eso es importante que
este proceso se lleve de cara al mundo. Que el señor comisionado
permita sacar este proceso del anonimato, como ha venido fun125
cionando. Que nos deje hablar y permita que aquí vengan congresistas opositores como Petro, Navarro, la negrita Piedad; los que
no creen de las ONG, como Gustavo Gallón, Alirio Uribe. Que
vengan todos los que desconfían para explicarles. Abramos esto y
hacemos irreversible el proceso.
B.M.: ¿Cree que para hacer irreversible el proceso, éste necesita publicidad?
C.C.: No hay un compromiso más valedero que cuando se
hace ante el pueblo, ante la sociedad, ante el mundo. Eso lo hace
irreversible. Si esto es en secreto, puede suceder que no se les cumpla al comisionado y al Gobierno.
B.M.: En concreto, ¿qué cree que necesita el proceso para que
sea público?
C.C: Se necesita ganar confianza de la sociedad. No se trata
de antojos nuestros. Si el proceso puede marchar sin salvoconductos y podemos desplazarnos a recoger nuestras tropas, se podría
hacer así. Pero hay un momento en el que el mismo proceso hace
inevitable que el Gobierno nos dé unas mínimas garantías, como
la posibilidad de que hablemos de cara al país, que podamos asistir al Congreso de la República, si nos invitan, a explicarles el
porqué. Eso requeriría de un salvoconducto. No estamos pidiendo nada que no sea indispensable para el buen desarrollo del proceso. Y no creemos que se nos pueda otorgar nada mientras no
haya credibilidad en el proceso.
La soledad del proceso
B.M.: El proceso está muy solo. Hay respaldos internacionales y nacionales, pero con temores. ¿Lo siente así?
C.C.: Sí y no. Hay soledad en cuanto a que públicamente no
se percibe el respaldo que tiene el proceso en sectores de la sociedad; no se percibe con cuántas personalidades nacionales e
internacionales hablamos. Solo hasta ahora en Medellín se percibió. César Gaviria autoriza a un representante de la OEA asistir
allí. Estuvieron dos dignos representantes de la Iglesia Católica;
126
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
el comisionado; autoridades departamentales y locales. Lo que
hace falta ahora es desestigmatizar esto y que la sociedad no tema
decir que acompaña este proceso. Cualquier cantidad de gente
prestante en Colombia en silencio nos apoya y nos dice avancen,
pero tengan cuidado.
B.M.: ¿Cómo miden ese acompañamiento que dicen tener?
C.C.: Lo más elemental: entre 100 y 150 correos electrónicos
que nos llegan diariamente de colombianos que se identifican o
no con el proyecto. Y, a pesar de nuestra clandestinidad, hablamos con los ganaderos, sectores empresariales de la clase media
colombiana y de las ciudades, representantes de la sociedad civil
y fuerzas vivas de Sucre, Cesar, región del Urabá, Bolívar. Más
que solos nos sentimos que nos acompañan, pero a escondidas.
B.M.: ¿Y usted sí cree que esos respaldos llegarán a ser públicos?
C.C.: Desde hace algún tiempo se viene judicializando a las
personas amigas de las autodefensas. El delito de simpatizante se
ha instaurado en el Código Penal en Colombia y han perseguido personas cercanas a nosotros por tener una fundación o por
visitar a un comandante de las AUC. Más no sucede lo mismo
cuando visitan a la guerrilla abiertamente. El Estado debe dejar
de considerar delito apoyar este proceso.
B.M.: ¿Cómo cree que deben expresarse esos apoyos?
C.C.: Qué bueno que hubiese estado monseñor Pedro Rubiano, Alberto Giraldo, el Procurador, el Defensor, los representantes de la Andi, Acopi, como sí iba el señor Sabas Pretelt, nuestro
digno Ministro del Interior y de Justicia, al Acuerdo de Río Verde
a hablar con el ELN. ¿Por qué ese temor a acompañar un proceso
como este? ¿Dónde está la diferencia?
La impunidad
B.M.: La diferencia puede estar en que ustedes han hecho la
guerra mediante masacres en todo el territorio nacional. ¿Dónde
queda esto?
127
C.C.: Soy el primer convencido de la justicia. Donde ésta no
se hace, queda vivo el dolor, la venganza. Donde no hay reparación y verdad para las víctimas hay impunidad. Pero si una
persona puede demostrar el porqué de sus actos, no encerrarla
veinte años o no extraditarla a Estados Unidos es necesariamente
impunidad. Las masacres no son justificables: son condenables;
asesinatos calculados de personas que no participan en hostilidades tienen una connotación diferente a dar de baja a un enemigo
en combate.
Tampoco quiero excusarme en la miseria, terror y atrocidades
que ha hecho la guerrilla en cuarenta años y la sociedad nunca
censuró nada. Hoy censura los actos del pasado de las autodefensas y no dicen nada por el asesinato de un ciudadano japonés.
Esta es la consecuencia de un proceso extemporáneo. Habrá que
ver si las ONG van a pedir extradición y cárcel para los guerrilleros. Soy el primero que no acepto la impunidad.
Llamo justicia al hecho de sentarnos a aceptar nuestras responsabilidades y tener el valor de pedir perdón por nuestros errores. No estoy pidiendo perdón para el que sea un verdadero narcotraficante. Si yo les anunciara hoy a las autodefensas que al
terminar el proceso todos van para la cárcel, lo único que consigo
es terminarlo de manera instantánea. No pueden pedir nada distinto que hacer viable el proceso.
B.M.: Las sindicaciones y condenas que pesan en contra suya
hacen difícil creer que usted sea el primero en no aceptar la impunidad...
C.C.: En el mismo momento en que el Gobierno considere a
Carlos Castaño un obstáculo para el buen desarrollo del proceso
y dejen de verme como un artífice y defensor con sensatez del
mismo, yo retiro mi participación del proceso de negociación. Le
doy curso a que lo manejen quienes no tienen el calificativo de ser
un obstáculo y me sujeto a acatar los acuerdos finales a que en la
mesa terminen. Si alguno de los comandantes de las AUC considera que mi problema de extradición y mi alto perfil en cuanto
a no sé qué cosa también es un problema para el desarrollo del
128
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
proceso, me margino de él y asumo mi futuro de manera individual. ¿A qué estaría aportando un sometimiento individual de
Castaño? Lo que quiero es salvar este proceso.
B.M.: ¿Quién responde, entonces y según usted, por los crímenes de las autodefensas?
C.C.: Conozco que existen crímenes de lesa humanidad y de
guerra. Sé que hay que explicarle al país qué es lo que se ha presentado y nuestra responsabilidad. Pero que se ponga esto dentro de un contexto en el cual antes de terminar la guerra fría no
eran censurables los métodos que se utilizaban para detener el
comunismo y luego se juzga distinto a las autodefensas por esas
situaciones. Que hubo excesos, es la realidad. No quiero que nos
obliguen a que esperemos a que la guerrilla se siente en una mesa
de negociación a ver si el país y Estados Unidos les va a hablar
como a nosotros: de que no es perdonable nada. Es difícil que los
colombianos entiendan que yo pida perdón hoy para crímenes
atroces. Va a ser muy difícil que los colombianos entiendan que a
las FARC hay que perdonarles El Nogal. ¿Nos seguimos matando
o buscamos cómo terminamos esto?
B.M.: ¿Qué propone usted en lugar de cárcel?
C.C.: Penas alternas con un mínimo de seguridad para nosotros. De una región como sitio de reclusión, un área rural y estar
allí bajo observación y mirar nuestro comportamiento. Las autodefensas, sin estar derrotadas, estamos en este proceso. Si este va
a ser para llevar a la cárcel, mejor que nos persigan y capturen.
¿En la agenda de negociación en el Caguán ese tema existió alguna vez? Se daba por descontado que no iban a la cárcel, sino al poder. Entonces, ¿al poder la guerrilla y a la cárcel las autodefensas?
B.M.: ¿No cree que sería más fácil pensar en que no pague
cárcel si ayuda a esclarecer los crímenes y sus autores, que no son
solo las autodefensas?
C.C.: Yo no tengo que delatar a nadie ni hoy ni nunca, ni aquí
ni en ningún tribunal de justicia. Jamás. Es el país el que me ha
ayudado, la gente honesta. Habría que juzgar a incontables colombianos por ayudarme en la defensa de las regiones.
129
B.M.: ¿Cree necesaria la indemnización a las víctimas de crímenes cometidos por las AUC?
C.C.: Claro, las víctimas debemos tener una indemnización
y conocer la verdad. De parte de las FARC, que me digan dónde
está el cadáver de mi padre, que no me lo han devuelto. Víctimas
somos la gran mayoría de los colombianos. ¿Qué podemos hacer
nosotros por las víctimas de los actos de las autodefensas? Primero, explicarles el porqué de nuestros actos; pedir perdón si es que
hubo una actitud equivocada; estamos dispuestos a aclarar las cosas y a trabajar con ellos en nuestras regiones, a que continúen
retornando desplazados.
B.M.: ¿Aceptarían una Comisión de la Verdad?
C.C.: Sin duda alguna. Pero si hay un conflicto que no ha
terminado y los enemigos del Estado continúan en pie de guerra,
¿vamos a darles esa arma? Lo deseable es un tribunal de la verdad
cuando se sienten a la mesa todos los actores del conflicto. No
digo que no se pueda manejar unas comisiones de la verdad regionales, con la Iglesia Católica, la Procuraduría, la Defensoría, para
que la verdad la sepan los que tengan que saberla.
B.M.: Habló usted de inmunidad...
C.C.: Lo que yo digo es que saquemos del atolladero el proceso. Si continúa sujeto al resultado de una ley de Alternatividad en
el Congreso, ¿cuándo va a avanzar? Sería muy irresponsable que
esa Ley de Alternatividad sea aprobada si el Congreso no sabe
qué se ha pactado, a quién se va a perdonar, cuándo y cómo. Yo
digo: dejemos esta ley. Como nunca fue consultada con nosotros,
no tenemos la obligación de acatarla. Le he dicho al comisionado
que hagamos unos acuerdos políticos en cuanto a desmovilización, en cuanto al marco jurídico y mostrarle al Congreso algo
establecido sobre lo que se pactó. Si la sociedad lo entiende, se
fue. Si no lo avala, lo reconsideramos.
B.M.: ¿Un acuerdo exclusivamente entre AUC y Gobierno?
130
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
C.C.: De ninguna manera. Sería desastroso sentarnos a oscuras, en la sombra, a resolver esta situación. El país debe estar.
Representantes de la Procuraduría, de la Defensoría, de organismos de Derechos Humanos, de las asociaciones de víctimas de
la guerrilla y de las autodefensas, de la comunidad internacional,
del Congreso.
B.M.: No hay veto por narcotráfico.
C.C.: Las órdenes de extradición por parte de Estados Unidos siguen en pie. Hay un proceso de negociación que inició el
Gobierno y lo ha apoyado Estados Unidos. Los narcotraficantes en Colombia son públicamente conocidos, así como los comandantes de las AUC que están en el proceso están plenamente
identificados. No hay ninguno escondido. Si Estados Unidos y el
Gobierno Colombiano mantienen este proceso es porque aceptan
que no están con narcotraficantes, que se está negociando. ¿O es
una trampa que se nos está tendiendo? Si hay un veto para determinadas personas dentro de las autodefensas es hora de que lo
digan los gobiernos de Estados Unidos y Colombia. No me pongan a mí a defender lo que ellos van a vetar. Yo no voy a defender
intereses del narcotráfico. Nunca he sido narcotraficante.
B.M.: ¿Pesa tanto el pedido de extradición para iniciar este
proceso?
C.C.: Desde el mismo momento en que se pide la extradición
a Castaño y a Mancuso a nadie le quedó duda en las autodefensas
que los gringos nos dijeron que se acabaron las autodefensas. Eso
nos dejó en el suelo. Con la extradición consideré que me trataban, por primera vez, como un delincuente. Tomamos el camino
que nos quedó: acabar esto de una manera seria y con responsabilidad. En la medida en que la extradición cumpla con su objetivo
de acabar con las autodefensas, alguna salida nos puede dar Estados Unidos. El Gobierno Colombiano podría decirle a Estados
Unidos que quedamos bajo observación con la garantía de que
si nuestro comportamiento es ejemplar y no alteramos el orden
público no vamos a ser extraditados.
131
B.M.: Pero si Estados Unidos no cede, ¿usted cree que pueda
vivir común y corriente con una extradición a cuestas?
C.C.: Ese es el garrote de E.V. Lo que sé es que no pienso
vivir clandestino el resto de mi vida. No sé cuál será mi futuro.
Me imagino poder vivir en Colombia, estudiar, hacer una carrera
y ver crecer a mi hija. O poder estar en otro país, en libertad. Y si
voy a Estados Unidos, que sea con un trato digno. No sé si sobreviviré al final del conflicto en Colombia.
B.M.: Con la desmovilización, ¿baja el narcotráfico?
C.C.: No me queda la menor duda que la desmovilización
de las AUC va haciendo que se caigan una cantidad de grupos
al margen de la ley y la misma guerrilla. En Colombia, exceptuando las zonas de la guerrilla, el narcotráfico se practica con la
anuencia de las autodefensas o de la Fuerza Pública, si no es imposible. Al salir de las autodefensas, se corre un telón tras del cual
se esconden muchas actitudes de corrupción que no son de las
autodefensas. Comienza a decantarse el panorama colombiano.
B.M.: ¿Cómo van a ser sus relaciones con los narcotraficantes? ¿Los van a sapear?
C.C.: Quien los tiene que sapear es el mismo narcotraficante.
Quien no es narcotraficante, tiene la obligación de delatar por
dónde salen aviones, barcos, laboratorios.
B.M.: O sea, van a delatar...
C.C.: Pienso que es una obligación de cualquier ciudadano.
Los cultivos de coca que hay en zonas de autodefensa, erradiquémoslos con su ayuda. Una autodefensa reinsertada tendría la
obligación de denunciar cualquier actividad al margen de la ley
que se practique en sus territorios. Si estamos pasando a la civilidad, es importante comprometernos como ciudadanos: no tolerar
lo que está al margen de la ley.
B.M.: Si usted hace lo que dice, van a tener problema con los
narcotraficantes...
132
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
C.C.: No estoy desatando una guerra contra los narcotraficantes. Es un problema que no me incumbe. Soy enemigo del
narcotráfico, sí. Que es la arteria que alimenta el conflicto, no me
cabe la menor duda. Que corrompe al Estado colombiano, no
me cabe duda. Pero mi guerra no es contra el narcotráfico. Mal
podría comprometer a una gente que se va a desarmar a que empecemos una guerra contra el narcotráfico. Esa es una guerra que
tienen que dar Estados Unidos y el Estado colombiano. Como
ciudadanos estamos dispuestos a contribuir.
¿Nuevos terratenientes?
B.M.: ¿Cuáles van a ser sus relaciones en el futuro con las fuerzas militares y sectores políticos y económicos que los apoyaron?
C.C.: En un término muy criollo, muy antioqueño, ¡por fin,
vamos a dejar de ser la amante y pasar a ser la esposa! Esa sociedad nos devuelve a su seno, porque de ahí salimos. No salimos de
la delincuencia.
B.M.: Siendo las autodefensas las responsables de una gran
mayoría de desplazamientos, ¿qué va a pasar con las propiedades
que ahora tienen?
C.C.: Cualquier bien mal habido tiene que regresar a la sociedad y cualquier bien que haya sido conseguido con dineros
lícitos o represente un patrimonio histórico de familia debe ser
respetado. Es cierto que las autodefensas pueden haber utilizado
mecanismos de presión para quitarles bienes a las personas argumentando, con razón o sin razón, o con parte de ella, que les
servían a la guerrilla.
De paso, les hago una invitación a los terratenientes de este
país para que hagamos una verdadera política rural y demos,
por ejemplo, parte de lo que tenemos de nuestro patrimonio.
Yo podría mencionar entre 10 y 15 políticos con 80 y 100 mil
hectáreas de tierra. Que no digan que los terratenientes somos
la autodefensa.
133
B.M.: ¿Es posible hacer un inventario de tierras de las AUC?
C.C.: Sí, claro. Es perfectamente mensurable. Es más, el proceso de negociación debe pasar por eso para devolver las tierras
mal habidas, si es que las hay.
B.M.: ¿Y el dinero producto del narcotráfico?
C.C.: Es que al que le encuentren dinero del narcotráfico
guardado para su lucro personal hay que extraditarlo. Pero para
aquellos comandantes que llegaron a zonas de narcotráfico y de
alguna forma el dinero los penetró para fortalecer la autodefensa,
pido algún tipo de aceptación, de entendimiento.
Aniversario del cese de hostilidades
B.M.: ¿Cuál es su evaluación del cese de hostilidades decidido
por ustedes hace un año?
C.C.: El cese de hostilidades se ha cumplido en muy buena
parte. A veces no, porque el enemigo nos agrede y porque todas
las autodefensas no decretaron el cese. Pero, sin duda, se han bajado muchas acciones de atropellos, de extorsión, muchas muertes.
B.M.: ¿El cese considera los asesinatos selectivos?
C.C.: Es una clara violación al cese de hostilidades y al derecho humanitario cualquier tipo de asesinato selectivo que se haga.
B.M.: Este año han sido asesinados 50 sindicalistas, 38 maestros y 40 indígenas Kankuamos, la mayoría de ellos a manos de
los paramilitares...
C. C.: Con respecto a los Kankuamos, hay una problemática
que no quiero ser yo quien la sustente. El comandante Jorge
40 lo hizo frente al comisionado hace 15 días. Suena fuerte el
número al que se refiere. Me imagino que será en todo el territorio nacional. Es difícil para mí entrar a individualizar un caso
u otro. Lo que hago es el llamado a las autodefensas para que
134
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
continuemos tratando de alcanzar el 100% el cumplimiento del
cese de hostilidades.
B.M.: ¿Cómo es eso de la mesa única?
C.C.: La dinámica del conflicto obliga a que haya una mesa
única. El Gobierno así lo ha exigido y el Bloque Central Bolívar
anunció que en la próxima reunión va a estar con las AUC. No tenemos ninguna objeción. Ojalá mañana haya otros bloques. Pero
para mí eso es indiferente.
B.M.: ¿Quiénes creen que vengan detrás del BCB?
C.C.: Quisiera ver al comandante Ramón Isaza, pionero de
las autodefensas. Y, por qué no, al señor ‘Martín Llanos’, para
que no continúe esa guerra absurda con otras autodefensas en el
sur del país.
B.M.: ¿Qué ha cambiado para Carlos Castaño desde el primero de diciembre del 2002?
C.C.: Hasta ese día estuvimos a la ofensiva, creciendo, consiguiendo armamento, tomando territorio, recogíamos más muertos, más heridos, atacábamos más a la guerrilla. De ahí para acá,
hemos venido en un trabajo de pedagogía con los combatientes y
con las comunidades para que se convenzan de que el Gobierno
debe brindarles seguridad a esas zonas. Ya no dirijo tropa. Estoy
trabajando más con la sociedad civil que con las autodefensas.
Permanentemente llamo a alcaldes, algunos me tiran el teléfono
y otros me atienden49.
Las Autodefensas del Magdalena, que mantenían un proceso separado, anunciaron que se unían a la mesa nacional de diálogo. En un
comunicado de ocho puntos, Ramón Isaza y Víctor Triana, alias ‘Botalón’, jefes de ese grupo, afirmaron estar dispuestos a iniciar una desmovilización gradual de sus hombres, siempre y cuando el proceso contara
49
MERCADO, Bibiana. Diario El Tiempo. [en línea], diciembre 2003, 1-5 p. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
135
con la veeduría de la Iglesia Católica, la comunidad internacional, la
sociedad civil colombiana y el Gobierno Nacional.
Las Autodefensas del Magdalena Medio estaban presentes en Puerto
Triunfo, Antioquia, Puerto Boyacá, Boyacá y La Dorada, Caldas.
A principios del mes de octubre de 2003, el Bloque Central Bolívar de
las Autodefensas, compuesto por 5 500 hombres y 29 frentes, también
anunció su inclusión en la mesa nacional de diálogo que integraban las
autodefensas de Córdoba y Urabá y el Bloque ‘Vencedores de Arauca’.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE CACIQUE NUTIBARA
La desmovilización del Bloque Cacique Nutibara se inició el 25 de
noviembre de 2003 en la ciudad de Medellín. El 17 de diciembre del
mismo año el grupo de miembros de las autodefensas del Bloque Cacique Nutibara que se encontraba en un proceso de readaptación en el
municipio de La Ceja, Antioquia, anunció que una Organización No
Gubernamental llamada Corporación Democracia asumiría la representación del grupo de 870 reinsertados que en esa fecha regresaron a
sus viviendas.
Antes de reincorporarse a la vida civil, los miembros de las AUC firmaron un acuerdo por medio del cual se comprometieron a cesar todas
las acciones al margen de la ley. Por su parte, el Gobierno Colombiano
prometió otorgar a estas personas beneficios laborales, sociales y educativos. La vigencia de este acuerdo era por año y medio contado a partir
de la desmovilización el 25 de noviembre de 2003.
La Corporación Democracia, registrada ante la Cámara de Comercio de Medellín, actuaría como su interlocutora con el Gobierno.
SE DESMOVILIZAN 160 MIEMBROS DE LAS AUTODEFENSAS
CAMPESINAS EN EL DEPARTAMENTO DEL CAUCA
Por medio de las resoluciones 223 y 224 de diciembre 5 de 2003, el
Gobierno Nacional declaró el inicio del proceso de diálogo, negociación y firma de acuerdos con las Autodefensas Campesinas de Ortega,
en Cajibío, Cauca.
136
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Mediante la resolución 223, el Gobierno designó una Comisión Verificadora integrada por la Comisión Exploratoria con las AUC y a un
grupo de ancianos del corregimiento de Ortega para supervisar el proceso de diálogo, negociación, firma y cumplimiento de los acuerdos.
Por medio de la resolución 224, el Gobierno reconoció a Ruvinder
Becoche y Lizardo Jair Becoche como representantes de las Autodefensas Campesinas de Ortega. Según dicha resolución, el Gobierno
“notificará a las autoridades judiciales correspondientes el contenido
de la presente resolución y certificará la participación de las personas
enunciadas” en el proceso de diálogo con el Ejecutivo. Esto con base en
el Artículo 8 de la ley 418.
El 7 de diciembre de 2003, 160 miembros de las autodefensas campesinas depusieron las armas en la aldea El Edén, en el corregimiento de
Ortega, municipio de Cajibío, departamento del Cauca. Los miembros
de las autodefensas que se desmovilizaron eran prácticamente desconocidos. No pertenecían a las AUC. Se trataba de un grupo totalmente
independiente. Su origen venía desde 1983, cuando unos campesinos de
esa región decidieron enfrentar a los guerrilleros.
Los 160 miembros de este grupo de autodefensas, que iniciaron el
proceso de desmovilización el 7 de diciembre de 2003, oscilaban en su
mayoría entre los 35 y 60 años de edad. Varios de ellos pertenecían a las
autodefensas desde 1960 y, según los registros, había menores de edad.
La ceremonia estuvo presidida por el Comisionado de Paz, Luis
Carlos Restrepo. Los combatientes entregaron sus armas, varias de ellas
de fabricación artesanal, algunas de largo alcance. Este grupo no pertenecía a las AUC, pues se trataba de campesinos armados con propósitos
de autodefensa.
Ante esta situación, Restrepo se pronunció diciendo: “lo del Cauca
es muy diferente a lo que se ha vivido en Medellín; primero, porque este es un grupo de autodefensas autónomo. Estas del Cauca
son unas auténticas autodefensas campesinas, es una comunidad que se
ha organizado por fuera de la ley para defenderse de los ataques de la
guerrilla”. Y agregó: “son muy diferentes a un bloque formalmente organizado como los de las AUC y no dependen de éstas o de las órdenes
137
de los señores Carlos Castaño y Salvatore Mancuso, máximos jefes de
esa organización”.
Restrepo precisó que el desarme consistía en una “reinserción en el
sitio, dentro de la propia comunidad”, y que sus combatientes entrarían
en un proceso de rehabilitación y trabajo social asistido por el Gobierno.
“Ellos abandonan la ilegalidad, entregan las armas, los uniformes y
los pertrechos, y desarrollamos un proceso de negociación y de reinserción, pero con la comunidad en pleno, para que ellos entren en el
Estado de Derecho y la defensa de su territorio pase a manos de las
autoridades legítimas”, enfatizó el comisionado50.
ESTABLECIDA LA IDENTIDAD DEL “MONO JOJOY”
El 19 de diciembre de 2003, el grupo de detectives del CTI de la Fiscalía en Villavicencio informó que al investigar la verdadera identidad
del “Mono Jojoy” pudo establecer que éste no se llamaba Jorge Briceño
sino Luis Suárez.
El domingo 21 de diciembre de 2003 se supo que 650 miembros del
frente “Libertadores el Sur” de las autodefensas se preparaba para hacer
entrega de sus armas al Gobierno Nacional. Este grupo estaba operando en el sur de Colombia en límites con Ecuador. La desmovilización
de este grupo podría iniciarse a comienzos del año 2004.
ENTREVISTA DEL PRESIDENTE URIBE CON FELIPE TORRES, MIEMBRO DEL ELN
El 23 de diciembre de 2003 se conoció acerca de una entrevista que
habrían sostenido en la ciudad de Medellín el Presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, y el señor Felipe Torres, miembro del ELN,
quien había recobrado la libertad por pena cumplida varios meses atrás.
El presidente Uribe manifestó haber invitado al ELN a entrar en un
nuevo proceso de paz.
50
Op. cit. 8, diciembre, 2003.
138
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El señor Felipe Torres, cuyo nombre de pila es Carlos Arturo Velandia, escuchó la propuesta deUribe y se comprometió a trasmitirla a los
dirigentes del ELN.
El 31 de diciembre de 2003 se difundió la noticia de que representantes de la Iglesia Católica se habían reunido nuevamente con miembros
de las FARC en el sur del país, en un nuevo intento por lograr un Acuerdo Humanitario que permitiera conseguir la liberación de personas retenidas por ese grupo guerrillero.
El encuentro entre Monseñor Luis Augusto Castro, Obispo de Tunja; el padre Darío Echeverri y el vocero de las FARC, Raúl Reyes, habría
tenido lugar el sábado 27 de diciembre. Los resultados de la reunión le
habrían sido comunicados oficialmente al Comisionado de Paz, Luis
Carlos Restrepo, por parte de la Comisión Nacional de Conciliación.
Según lo que se conoció de ese informe, las FARC estarían dispuestas a
reunirse de nuevo con los representantes de la Iglesia.
DETIENEN EN QUITO A SIMÓN TRINIDAD
El viernes 2 de enero de 2004, agentes de la policía de Ecuador, en
colaboración con miembros de la policía colombiana y de la Interpol,
detuvieron en Quito al guerrillero de las FARC, Ricardo Palmera, conocido con el alias de “Simón Trinidad”.
Trinidad fue uno de los representantes de las FARC en las negociaciones que se realizaron con esa organización guerrillera durante el
Gobierno del Presidente Andrés Pastrana y era considerado uno de los
miembros de la “línea dura” de la organización. Su captura se produjo
cuando transitaba por una importante avenida de la ciudad de Quito.
En el momento de su captura no portaba documentos, pero dijo ser
colombiano y llamarse Cristo Rey Mariscal Peralta. Sin embargo, los
uniformados colombianos iban a la fija. “Desde el 29 de diciembre lo
teníamos plenamente identificado y le íbamos a echar mano. Pero las
autoridades ecuatorianas no lo permitieron en ese momento, hasta tanto lo solicitara la Interpol”, contó al diario El Tiempo un militar cercano al caso. El permiso, solicitado a través de la policía colombiana, solo
llegó el 2 de enero y se hizo efectivo ese mismo día.
139
Tras su detención, Simón Trinidad fue conducido para su reseña a
la sede de la policía antinarcóticos de la capital ecuatoriana, que estableció contactos con las autoridades colombianas. Mientras tanto, y
desde el mismo viernes en la noche, el Presidente Álvaro Uribe recibió
la noticia en su finca, en inmediaciones de Montería, y esperó hasta que
la nave que transportaba al guerrillero surcara el espacio aéreo colombiano para pronunciarse.
Aunque no hacía parte del secretariado de las FARC -son siete
miembros-, Ricardo Palmera, bogotano, de 53 años e hijo de un rico
ganadero del Cesar, era integrante del Estado Mayor y uno de los más
reconocidos representantes de esa organización subversiva. Este golpe
se convirtió en el más importante contra la guerrilla en los últimos años.
Simón Trinidad tomó su alias en honor del personaje que más admira de la historia: el libertador Simón José Antonio de la Santísima
Trinidad Bolívar51.
El jueves 22 de enero de 2004, el Delegado de la ONU para la Paz
en Colombia, James LeMoyne, emitió una declaración mediante la cual
las Naciones Unidas abrieron las puertas al proceso de paz con los grupos de autodefensas.
“Hemos discutido con el señor Chris Patten, Comisionado Europeo de Relaciones Exteriores, el proceso paramilitar ahora en marcha. Bien hecho, puede terminar para siempre el flagelo del paramilitarismo, poner fin a la impunidad y reforzar la legitimidad del
Estado para fortalecer la democracia en Colombia y abrir paso a
soluciones negociadas con el ELN y las FARC. Mal hecho, podría
debilitar la democracia, el Estado colombiano y hacer perder una
oportunidad histórica para llegar a una solución global para el conflicto en este país. Tenemos la esperanza de que se va a encontrar el
camino adecuado”52.
51
Op. cit. [en línea], enero 2004. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
DIARIO EL PAÍS. [en línea], enero 2004. Disponible en Internet: www.elpais.com.co.
52
Op. cit. [en línea], enero 2004. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
Op . cit. 23, enero, 2004. 1 y 1-4 p.
140
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El ex presidente César Gaviria, Secretario General de la OEA, defendió los alcances de un acuerdo con el Gobierno colombiano para
crear una misión que se encargaría de verificar la desmovilización de los
grupos de autodefensa. Por su parte, el Asesor Especial de la ONU, James LeMoyne, dijo al respecto que la misión de la OEA podría servir en
forma positiva en el desarme y reintegración de esos grupos al margen
de la ley. Entre tanto, el Departamento de Estado de los Estados Unidos
se mostró partidario de la verificación internacional de este proceso.
El jueves 29 de enero de 2004 el Gobierno nacional divulgó un acuerdo por
la paz firmado con las autodefensas de Casanare, cuyo texto es el siguiente:
Acuerdo del Sur del Casanare por la Paz de Colombia
El Gobierno Nacional y las Autodefensas Campesinas del Casanare,
reunidos el día 29 de enero de 2004 en el sur del Casanare,
Acuerdan:
Reafirmar su compromiso con el proceso de paz que ambas partes
adelantan desde el mes de enero del año 2003. Las Autodefensas Campesinas del Casanare ratifican su compromiso con el cese de hostilidades, declarado el 8 de diciembre del año 2002. Por tal motivo, aceptan la
verificación internacional de este compromiso con la paz de Colombia,
para que la tranquilidad reine plenamente en su región.
Las Autodefensas Campesinas del Casanare afirman su compromiso
de avanzar hacia un proceso de concentración y desmovilización de todos sus efectivos, antes de terminar la presente administración.
El Gobierno Nacional se compromete a brindar las condiciones jurídicas y sociales para la plena integración de los miembros de las autodefensas a la vida civil y democrática.
Por las ACC
Héctor Buitrago Martín Llanos
Por el Gobierno Nacional
Luis Carlos Restrepo Ramírez
141
Testigos
Mons. Misael Vacca Ramírez
Obispo de Yopal Comisión Exploratoria
Ricardo Avellaneda Cortés
El miércoles 4 de febrero de 2004, en una carta enviada por el Comando Central del ELN a los obispos católicos reunidos en asamblea
ordinaria del Episcopado en la ciudad de Bogotá, se solicitó a la Iglesia
Católica promover el diálogo nacional de paz. “Se requiere volver a
colocar en el escenario nacional las propuestas para un diálogo nacional de amplia participación para buscarle salida a la crisis del
país”, dijo el ELN.
En su carta, el ELN reconoció la participación de la Iglesia Católica
en la búsqueda de la paz y le solicitó continuar la tarea de facilitación
con miras a encontrar salidas a la crisis. El Cardenal Arzobispo de Bogotá y Presidente de la Conferencia Episcopal manifestó la disposición
de la Iglesia Católica a colaborar en la tarea que se le solicitaba por parte de la agrupación guerrillera, y a su turno solicitó a ésta concretar su
voluntad en hechos mediante la presentación de propuestas y acciones
ciertas de paz.
Por su parte, el padre Darío Echeverri, miembro de la Comisión Nacional de Conciliación, estuvo de acuerdo en que lo expresado por el
ELN era importante porque reconocía la misión de la Iglesia Católica,
profundamente comprometida con la búsqueda de una salida negociada al conflicto.
“Qué bueno que el ELN esté pensando que la paz solo se puede
construir sobre base de la verdad y la justicia, de la reparación de los
daños causados a las víctimas, de la transparencia total. Qué bueno
que estén pensando que es obra de la luz y no de la oscuridad”, dijo
el sacerdote.
En su carta a los obispos, el ELN manifestó que habían optado por la
solución política al conflicto como la vía que tenía el país para construir
la paz. El siguiente es el texto completo de la carta enviada por el ELN
a la Conferencia Episcopal Colombiana:
142
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Nos hacemos presentes en este importante evento para manifestar
nuestro reconocimiento a la Iglesia por la labor desempeñada y su disposición a construir salidas a la crisis humanitaria que padecen los pobladores de la Sierra Nevada de Santa Marta, así como por su preocupación en obtener la liberación de los extranjeros retenidos.
Resaltamos también la contribución de la Iglesia en la búsqueda
de la paz a través de la participación en organismos de facilitación,
de carácter permanente o temporal, para la solución del conflicto, la
Comisión de Conciliación Nacional, la Comisión Episcopal de Seguimiento del Proceso con el ELN, la Comisión de Facilitación Civil,
la Comisión para la Búsqueda de un Acuerdo Humanitario con las
FARC, entre otras.
El ELN valora altamente la postura en contra de las guerras que ha
asumido la Iglesia Católica en el mundo, como mandato del Papa y su
valioso aporte en la consecución de la paz. En la construcción de la
paz la Iglesia enseña cuando reconoce sus errores pasados y se propone
rectificar sus comportamientos futuros. La verdad y la justicia, premisas
inseparables de la paz.
Ante la zozobra del país, la incertidumbre por la tragedia de la
guerra y los obstáculos por la paz y la justicia social, hemos optado
por la solución política del conflicto, como la vía que tiene el país para
construir la paz.
Somos conscientes de las dificultades por las que atraviesa la paz,
como producto de una estrategia de guerra del Gobierno que la desplazó. Esto no quiere decir que ante la imposibilidad de una salida real de
paz, cualquier cosa la reemplace.
Trabajar por la paz también es el esfuerzo por aclarar las confusiones
de lo que equivocadamente se llama paz. En tal sentido, son interesantes los interrogantes que el país en su conjunto le ha colocado a la
“desmovilización de los paramilitares”. Consideramos necesario que
públicamente se conozcan los acuerdos y alcances de la negociación del
Gobierno con los paramilitares. Pues la justicia ha sido pasada por alto
y atropellada por el Ejecutivo.
Mientras en Argentina se condena a los militares por las atrocidades
cometidas contra la sociedad hace más de veinte años, en la Colombia
143
de hoy a iguales criminales se les permite adelantar debates en el parlamento, donde los victimarios de los humildes ahora se presentan como
víctimas.
Mientras las verdaderas víctimas de tanto crimen y atropello padecen la persecución, el desplazamiento y el exilio, el Gobierno flexibiliza
la justicia con los criminales. Se entiende simple y llanamente que flexibilizar la justicia es sinónimo de perdón y olvido, pero con el descaro de
no decirlo claramente. Primero se hace la trampa y después la ley que
la disculpe.
La paz sólo puede construirse sobre la base de la verdad, la justicia y
la reparación de los daños causados a las víctimas. La paz es obra de la
luz, no de la oscuridad.
Es gratificante cuando la Iglesia asume la responsabilidad en la
orientación espiritual de las naciones, en la construcción del alma de
los pueblos, donde la ambición del enriquecimiento individual sea desplazada por el bienestar y el bien-ser colectivo, para poder existir como
comunidad de futuro. Nuestra sociedad está necesitada de una creativa
dirección espiritual que reconstruya nuestro tejido social que haga viable la paz con justicia social. Ese es el reto de la Iglesia en la Colombia
de hoy, y que para fortuna de todos la Iglesia se ha venido comprometiendo con la construcción de la esperanza de los colombianos en las zonas de conflicto. Es urgente seguir desarrollando los espacios de diálogo
humanitario y pastoral para abordar las diversas crisis humanitarias que
hoy salpican el mapa de Colombia.
Cuando la guerra se impone en nuestra patria y oscurece el futuro
colectivo, es un imperativo construir otra lógica de la paz.
Los intentos estrechos de la paz ofrecida por el actual Gobierno,
dentro de la lógica de la pacificación y bajo el monopolio excluyente
del ejecutivo, pretende destruir la experiencia acumulada que amplios
sectores de la sociedad venían construyendo desde hace muchos años.
La búsqueda de la paz es un patrimonio de la sociedad, por eso se
requiere volver a colocar en el escenario nacional las propuestas para
un diálogo nacional de amplia participación para buscarle salidas a la
crisis del país. Se necesitan espacios donde los diversos sectores de la
sociedad nos volvamos a encontrar para cimentar el camino hacia la
144
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
paz, para que la lógica de la paz supere la actual e irracional lógica de
la guerra.
Esperamos que este evento aporte nuevas motivaciones en cada uno
de ustedes para trabajar por la paz, y los humildes y sufridos de nuestra
patria puedan decir que el cielo está de su lado.
Comando Central
Ejército de Liberación Nacional
Montañas de Colombia, febrero del 200453
El 5 de febrero se recibió con sorpresa el anuncio de la desmovilización del Bloque Héroes de Granada de las autodefensas. El grupo
de paramilitares que anunció su desmovilización es una disidencia del
Bloque Metro.
El anuncio sobre la posible desmovilización de 980 paramilitares
pertenecientes al Bloque Héroes de Granada de las Autodefensas Unidas de Colombia, hecho el miércoles por “Marlon”, vocero político de
esa agrupación, tomó por sorpresa hasta a los miembros de la Oficina
del Alto Comisionado para la Paz. Por su parte, el Secretario de Gobierno de Antioquia, Jorge Mejía Martínez, aseguró que la administración
departamental desconocía esa posibilidad de desmovilización, y dejó en
claro que el manejo de cualquier acercamiento con los grupos armados
ilegales está en manos del Gobierno Nacional.
El 8 de marzo de 2004, el Secretario General de la OEA, ex Presidente César Gaviria, manifestó que la OEA no podría verificar la
desmovilización de las autodefensas si éstas no se concentraban en determinadas zonas del país. La declaración se produjo simultáneamente
con el anuncio del Bloque Central Bolívar de desactivar sus frentes que
operan en el Magdalena Medio.
Según el ex presidente, el cese del fuego y de hostilidades de las autodefensas no se había cumplido en su totalidad porque la no concentración en áreas determinadas no hacía posible una verificación efectiva.
53
Op. cit. [en línea], febrero 2004. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
Op. cit. 5, febrero, 2004. 1-3 p.
145
Gaviria hizo esa declaración al final de una conferencia sobre el tráfico ilegal de armas en la ciudad de Bogotá. Dijo además estar de acuerdo
con el Gobierno Nacional en el sentido de establecer una mesa de negociación unificada con los distintos grupos de las autodefensas.
El martes 9 de marzo de 2004, la Iglesia Católica propuso a las
FARC aceptar un acuerdo sin despeje militar y con retorno de guerrilleros a sus sitios de origen. La idea era poder conseguir la liberación
de personas en poder de esa guerrilla. Un borrador de propuesta elaborado por Monseñor Luis Augusto Castro, Obispo de Tunja, y el padre
Darío Echeverri, Secretario General de la Comisión Nacional de Conciliación, introdujo un cambio en el nombre de zonas desmilitarizadas
por cese temporal de operaciones militares ofensivas en lugares precisos
previamente acordados por las partes.
El primer borrador de la Iglesia, que a pesar de ser auténtico fue
desmentido por un vocero suyo cuando fue filtrado a la prensa, hablaba
de “zonas de seguridad”, término que para el Gobierno podría implicar
áreas veladas de despeje, por lo que descartó de plano el documento.
La Iglesia perfeccionó su propuesta, la presentó nuevamente al Alto
Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, y aspiraba a concretar
una reunión con las FARC para que éstas evaluaran el documento.
El último borrador contiene básicamente los siguientes elementos:
•
La liberación concurrente de miembros de las FARC recluidos
en las cárceles del país y de los militares y policías cautivos, varios de los cuales completaron seis años en poder de las FARC.
•
La liberación unilateral de civiles secuestrados, que incluye a los
servidores y ex servidores públicos.
•
El compromiso individual de los guerrilleros beneficiados con este
acuerdo de no volver a delinquir una vez salgan de las cárceles.
•
La posibilidad de los excarcelados de regresar a sus lugares de origen.
146
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El Gobierno se comprometería, por su parte, a remover los obstáculos de tipo jurídico que pudieran presentarse en la ejecución del acuerdo.
Las Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja
prestarían sus buenos oficios para ese propósito.
Los voceros de la Iglesia Católica para este tema se habían reunido
en dos oportunidades con las FARC. La última reunión se cumplió el
26 de diciembre del año 2003 y como fruto de ese encuentro Monseñor
Castro y el padre Echeverri elaboraron un primer borrador, fechado el
9 de enero de 2004.
Ese documento fue publicado por el periodista Dick Emanuelsson
en el diario Liberación de Suecia. Su contenido contiene modificaciones con respecto al último.
El primero estaba titulado como “Preacuerdo especial entre el Gobierno Nacional y las FARC-EP”, y el último aparece con el rótulo de
“Acuerdo de voluntades con propósitos humanitarios entre el Gobierno
Nacional y las FARC-EP”.
La Iglesia Católica había sido el único canal para llegar a las FARC.
Su papel de facilitador se había ido consolidando y ahora les presentaba
a las partes alternativas para poner fin al cautiverio de personas que las
FARC mantenían en su poder54.
El 1 de abril de 2004 las AUC ofrecieron participar en una mesa
única de negociación con el Gobierno Nacional y dar prioridad a la
concentración de sus tropas, tal como estaba pactado. El anuncio lo
hicieron los dos principales grupos de autodefensas, las Autodefensas
Unidas de Colombia, AUC, y el Bloque Central Bolívar, BCB, que decían agrupar 10 000 hombres, después que el Presidente Álvaro Uribe
manifestó que no incluiría el tema de la extradición en el proyecto de ley
sobre alternatividad penal.
“La mesa única nacional asume como tarea prioritaria de la
agenda de negociación la propuesta sobre el estudio, localización,
54
Op. cit. 9, marzo, 2004.
147
definición, reglamentación y condiciones de las denominadas zonas
de concentración”, dice su comunicado. Ambos puntos -mesa única
y concentración- habían sido las principales exigencias del gobierno
Uribe a los grupos de autodefensas en los últimos meses.
Casi de manera simultánea, en el Congreso de la República la representante a la Cámara, Rocío Arias, que ha hecho su trabajo político en
zonas de Antioquia de influencia paramilitar, anunció que propondría
una reforma constitucional para que no se extraditen personas que estén
comprometidas en procesos de paz.
En documento al que denominaron “Unidad por la Paz”, firmado
en Santa Fe de Ralito, Córdoba, por 33 jefes de las autodefensas, entre
ellos Carlos Castaño, Salvatore Mancuso y Adolfo Paz, “Don Berna”,
las autodefensas exigen, además, que se les den las garantías jurídicas
consagradas en la Ley 782.
Esta exigencia la hacen en el último de los siete puntos del documento, y aún estaba por verse qué implicaciones tendría esa ley frente a
las incertidumbres jurídicas que preocupaban tanto a las autodefensas
como al Gobierno Nacional.
La Ley 782 de 2002 reemplazó la Ley 418, que era el instrumento
con que contaba el Gobierno para adelantar procesos de cese de hostilidades, desmovilización y reinserción de los alzados en armas.
El 5 de marzo de 2004, Castaño, Mancuso y “Don Berna”, de las
AUC, se habían negado a aceptar la concentración como condición
para seguir los acercamientos, argumentando que el Estado todavía no
había demostrado que podía brindar seguridad a las zonas que eventualmente abandonaran las autodefensas.
Las AUC condicionaron el avance de los acercamientos con el Gobierno a que no se tuvieran en cuenta los pedidos de extradición de
Estados Unidos que pesaban contra ellos, al punto que llevó a Castaño
y a Mancuso a declarar públicamente que el proceso pendía de un hilo.
Dos días después, el 7 de marzo, el presidente Álvaro Uribe se
pronunció sobre el tema al término de un encuentro con alcaldes
del norte del Valle de Aburrá, en Llano Grande, oriente antioqueño.
148
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Uribe aseguró que el proceso de paz con las autodefensas “hay que
hacerlo con transparencia y sin espectacularidades”.
En el documento firmado el 1 de abril de 2004, las autodefensas dicen que irían a la mesa con el único nombre de AUC, en el que estarán
presentes miembros del Estado Mayor que fue designado en un pleno
nacional de esa organización ilegal armada que concluyó “con la aprobación unánime del documento que reconstruye la unidad interna de la
organización, y ratifica el carácter político de la negociación”55.
Con la mesa única, reza el manifiesto, las AUC aseguran que quieren
inspirar confianza en el proceso y reafirmar su voluntad de un diálogo,
con un cese de hostilidades con seguimiento y verificación. Además, solicitan el acompañamiento de la sociedad civil, la comunidad internacional, los medios de información, la clase política y organizaciones sociales.
Casi simultáneamente, los países miembros de la Organización de
Estados Americanos anunciaron que gestionarían ante sus gobiernos
aportes para apoyar los procesos de reinserción de los grupos armados
ilegales colombianos.
La decisión fue dada a conocer al finalizar una reunión del consejo
permanente de esa organización que escuchó un informe de Sergio Caramagna, Jefe de la Misión de la OEA que realizaba el acompañamiento del proceso de paz entre el Gobierno Nacional y los paramilitares.
Caramagna dijo que la misión realizaba una estrategia internacional
para conseguir los recursos necesarios y explicó que, de presentarse las
circunstancias, del proceso también podrían hacer parte otros grupos
armados como las FAR y el ELN.
El jueves 15 de abril se reunieron en algún lugar del sur del departamento de Córdoba todos los delegados de las AUC con delegados del
Gobierno Nacional y con la presencia del representante de la OEA,
señor Sergio Caramagna. El único de los líderes de las autodefensas que
no estuvo presente en la reunión fue Carlos Castaño, quien se marginó
voluntariamente de la misma.
55
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.co.
149
El Obispo de Montería, Monseñor Julio César Vidal Ortiz, quien
participó en la reunión en su condición de facilitador del proceso, informó que estuvieron presentes comandantes de las AUC del Magdalena
Medio, del Casanare, del Bloque Central Bolívar y de los Llanos.
La misión gubernamental la encabezó el Comisionado de Paz, Luis
Carlos Restrepo, quien estuvo acompañado de Carlos Franco, Director
de Derechos Humanos de la Vicepresidencia, y del Obispo de Apartadó, Antioquia, Monseñor Germán García.
Monseñor Julio César Vidal Ortiz reiteró que sigue la voluntad de
encontrar acuerdos de paz con estos grupos de autodefensas. El religioso dijo también que no se lograron determinar los sitios de concentración con miras a la desmovilización de los hombres de las AUC.
Antes de la Semana Santa, en una de estas reuniones, se anunció
que luego de los días de pascua el punto principal de la agenda era la
escogencia de los lugares de concentración.
Los voceros del encuentro manifestaron que en la reunión no se trató
el nuevo proyecto de alternatividad penal, rebautizado por el Gobierno
como de Justicia y Reparación, y rechazado por las autodefensas porque consideraban que era más un instrumento jurídico para un proceso
de sometimiento a la justicia y no un mecanismo facilitador para una
negociación política de paz.
El Director de la Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las
Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michael Frühling, pidió
a los grupos de autodefensas respetar el cese de hostilidades. Según el
funcionario, los grupos de autodefensas deberían asegurarse de que sus
tropas respetaran la cesación de hostilidades, pues hasta la fecha ese
compromiso no se había cumplido a cabalidad.
Y mientras el diplomático comentaba esa situación luego del lanzamiento del libro Derecho Internacional de los Derechos Humanos en la Feria
del Libro de Bogotá, el 29 de abril de 2004, las Autodefensas Unidas de
Colombia, AUC, y el Bloque Central Bolívar, que compartían una sola
mesa de negociación con el Gobierno, reiteraron la decisión del cese de
hostilidades, en las condiciones de verificación y zonas de concentración, con las cuales habían estado de acuerdo.
150
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El mismo día las autodefensas de Martín Llanos, que habían sostenido acercamientos con el Gobierno, dieron a conocer un comunicado
en el que decían estar dispuestas a la cesación de hostilidades, con una
condición: que el Gobierno les garantizara que no volvieran a suceder
hechos como los que hasta ese momento se estaban presentando en los
Llanos Orientales del país. Se referían a la guerra intestina que hasta
entonces mantenían con otro grupo de autodefensas. Estas autodefensas del Casanare manifestaron estar dispuestas a aceptar una zona de
concentración con la supervigilancia de la OEA.
ACUERDO ENTRE EL GOBIERNO NACIONAL Y LAS AUC
PARA LA ZONA DE UBICACIÓN EN TIERRALTA, CÓRDOBA
El Alto Comisionado para la Paz, en nombre del Gobierno Nacional
y los miembros del Estado Mayor negociador de las Autodefensas Unidas de Colombia, reunidos los días 12 y 13 de mayo de 2004 en Santa Fe
de Ralito, con el acompañamiento de la Misión de Apoyo al Proceso de
Paz en Colombia de la OEA, MAPP/OEA y la Iglesia Católica, llegaron a un acuerdo que regiría el funcionamiento de la zona de ubicación
en Tierralta, Córdoba56.
Justo cuando el proceso con los paramilitares parecía ahogarse en
múltiples crisis, el Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, y
diez comandantes de los grupos de autodefensa ilegal, en nombre de
un 90% de las autodefensas del país, firmaron un acuerdo que prácticamente garantizaba que habría negociación.
Durante un año y medio el proceso había estado en fase de “exploración”.
Desde este momento, con la negociación, comenzaría el debate de
cómo desmovilizar a los veinte mil hombres-fusil que, según las AUC,
tenían en sus filas.
El acuerdo de ocho puntos firmado en Santa Fe de Ralito, un caserío
en el municipio de Tierralta, Córdoba, creó la “zona de ubicación”,
donde los jefes de las AUC adelantarían la negociación.
56
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
151
Observando el mapa oficial que divulgó el Gobierno, eran 368 79 kilómetros cuadrados, donde los jefes de las autodefensas serían inmunes
a las órdenes de captura en su contra, incluso las que se habían expedido con fines de extradición.
“Mientras estas personas permanezcan concentradas aquí no
tendrán que responder ante ningún tribunal nacional o internacional”, explicó el comisionado.
La zona abarca cerca del siete por ciento del municipio de Tierralta,
en las estribaciones de la Serranía de San Jerónimo; su “capital” sería
Ralito y se instalaría en una fecha que sería acordada entre el Gobierno
y las autodefensas.
En principio se tenía previsto que se concentraran allí, según Restrepo, los diez comandantes que hacían parte de la mesa de negociación
con sus respectivas escoltas.
“Ellos tendrán un apoyo de seguridad de unos 400 hombres de
sus filas y el área perimetral de la zona de ubicación contará con
efectivos de la fuerza pública”. El comisionado hizo énfasis en que
se mantendría en ella la plena vigencia del Estado y el ordenamiento
legal colombiano. “Esto no se convertirá en un ‘Caguancito’ ni nada
que se le parezca; será un área integrada plenamente al control del
Estado”, puntualizó57.
El hecho más importante ocurrido durante el tiempo de negociación
entre el Gobierno y las AUC en los últimos tiempos fue la misteriosa
desaparición de Carlos Castaño, lo que llevó al comisionado, aun logrado el acuerdo, a insistir en que las AUC aclararan el hecho.
Aunque malentendidos en la mesa y fuertes recomposiciones en las
entrañas de las autodefensas generaban mucho ruido en los diálogos,
el punto más tirante era el de la solicitud de extradición que pesaba sobre varios de los jefes de las AUC. Primero, porque el 31 de marzo de
57
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
152
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
2004 las AUC hicieron modificaciones en su equipo de negociadores; y
segundo, porque el 27 de abril, en un fuerte comunicado, el Presidente
Álvaro Uribe dio prácticamente un ultimátum al proceso, y en cuanto a
la extradición envió un claro mensaje: “Quienes quieran evitarla deben
demostrar a la comunidad internacional su buena fe y su propósito de
enmienda”.
Entre los puntos más destacados del acuerdo cabe mencionar que la
zona tendría una duración de seis meses, prorrogables, y contaría con
verificación permanente de la OEA, para lo cual este organismo internacional instalaría una oficina en la zona.
Los combatientes podrían mantener sus armas, pero no fabricar o ingresar nuevas en la zona, ni en el perímetro acordado reclutar personas,
cometer delitos, ejercer presión, hacer entrenamiento armado u ordenar
o coordinar desde allí acciones ilegales; esto podría llevar al fin de las
garantías dadas por el Gobierno.
El acuerdo delimitó igualmente el espacio aéreo correspondiente, en
el que se suspendería la navegación comercial y privada a menos de diez
mil pies. Las aeronaves que requirieran utilizar este espacio deberían
contar con una autorización especial del Gobierno.
En caso de que las conversaciones fracasaren por decisión concertada entre las partes o de manera unilateral, los miembros de las autodefensas contarían con un plazo máximo de cinco días para evacuar la
zona, señalaba también lo acordado.
El siguiente es el texto del Acuerdo de Fátima
Tierralta, mayo 13 de 2004.
El Alto Comisionado para la Paz, en nombre del Gobierno Nacional
y los miembros del Estado Mayor Negociador de las Autodefensas Unidas de Colombia, reunidos los días 12 y 13 de mayo de 2004, en Santa
Fe de Ralito, con el acompañamiento de la Misión de Apoyo al Proceso
de Paz en Colombia de la OEA, MAPP/OEA, y la Iglesia Católica,
llegaron al siguiente acuerdo que regirá el funcionamiento de la zona de
ubicación en Tierralta, Córdoba.
153
1. Objeto de la zona de distensión
La zona de ubicación se establece con los propósitos de:
a. Facilitar la consolidación del proceso de paz y los acuerdos entre el Gobierno Nacional y las Autodefensas Unidas de Colombia.
b. Contribuir al perfeccionamiento y verificación del cese de
hostilidades.
c. Avanzar hacia la definición de un cronograma de concentración y desmovilización de los miembros de las Autodefensas
Unidas de Colombia.
d. Permitir la interlocución en la mesa de diálogo con todos los
sectores nacionales e internacionales.
e. Facilitar la participación ciudadana y contribución de los colombianos al proceso.
2. Delimitación de la zona
La zona de ubicación corresponde a los límites señalados en la resolución expedida por el Sr. Presidente de la República en uso de las
facultades que le confiere la Ley 782 de 2002.
El espacio aéreo correspondiente a esta zona se suspende para la
navegación comercial y privada a menos de 10 000 pies. Las aeronaves
que requieran usar este espacio contarán con autorización especial del
Gobierno Nacional.
3. Vigencia
a. La zona tendrá una vigencia de seis (6) meses prorrogables
de acuerdo con las necesidades del proceso.
b. La fecha de instalación de la zona de ubicación será concertada
entre el Gobierno Nacional y las Autodefensas Unidas de Colombia y se dará a conocer a la opinión en el momento oportuno.
154
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
c. En caso que finalice la vigencia de la zona por decisión concertada de manera unilateral, los miembros de las Autodefensas Unidas de Colombia contarán con un plazo de cinco
(5) días para la evacuación de la zona.
d. La Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA, MAPP/
OEA, verificará el cumplimiento de esta garantía, con el
acompañamiento de la Iglesia.
4. Garantías jurídicas en la zona
Conforme a la ley 782 y durante la vigencia de la zona, se suspenden
las órdenes de captura y las operaciones ofensivas contra los miembros
de los grupos de autodefensa que se encuentren dentro del territorio
delimitado.
5. Principios rectores
La conducta de los miembros de las autodefensas y del Gobierno
Nacional, dentro de la zona de ubicación, se ajustará a los siguientes
principios básicos:
•
Voluntad de paz
•
Transparencia
•
Respeto a la población que habita en la zona
•
Respeto mutuo
•
Legalidad
•
Flexibilidad y disposición para la conciliación
•
Buena fe
•
Confidencialidad concertada en la negociación y objetividad
en la información pública.
155
6. Normas básicas de funcionamiento
a. En el territorio de la zona de ubicación mantendrá plena vigencia el Estado y el ordenamiento legal colombiano.
b. El Gobierno Nacional y la Misión de Apoyo de la OEA,
MAPP/OEA, contarán con sendas sedes en la zona de ubicación, cuya seguridad es responsabilidad de la Fuerza Pública colombiana.
c. Las salidas de la zona y los reingresos de los miembros de las
Autodefensas Unidas de Colombia, deberán ser autorizados
y garantizados por el Gobierno Nacional, serán limitados y
otorgados sólo para desarrollar actividades relacionadas con
el proceso de paz.
d. En la zona de ubicación funcionará con carácter permanente
el Comité de Seguridad y Convivencia, conformado por: un
delegado de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz,
un delegado de la Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/
OEA, y un delegado de las Autodefensas Unidas de Colombia. Serán invitados permanentes: la Iglesia, un delegado del
Ministerio de Defensa, la Alcaldía de Tierralta, la Gobernación de Córdoba, un delegado de la comunidad, y/o las
otras entidades que se acuerden.
e. El Comité de Seguridad y Convivencia tomará decisiones y
coordinará acciones sobre: logística, seguridad, reglamento
interno de convivencia y comportamiento, comunicaciones
e ingreso de visitantes a la zona.
f. Los miembros de las Autodefensas Unidas de Colombia se
abstendrán de: desarrollar actividades ilícitas, reclutar personas, ejercer presión o amenazas sobre pobladores o visitantes, desarrollar entrenamiento armado y ordenar o coordinar
acciones ilegales desde la zona.
g. Si se presentare una violación o infracción a la ley colombiana, las autoridades competentes atenderán la situación,
según el ordenamiento legal vigente.
156
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
h. Se garantizará el ingreso, la salida y la movilización dentro
de la zona a los habitantes y aquellas personas que desarrollan actividades en ese territorio.
i. El Comité de Seguridad y Convivencia definirá una política
de comunicaciones y reglamentará el acceso de los medios
de comunicación a la zona de ubicación.
j. La Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/OEA, recibirá un
inventario de las armas, material de guerra y municiones
en poder de los miembros de las autodefensas en la zona.
Los miembros de las autodefensas se abstendrán de fabricar,
almacenar, ingresar o retirar armas, material de guerra y/o
municiones adicionales.
k. La Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/OEA, recibirá un
informe sobre los medios y equipos de comunicación en poder de civiles o autodefensas que funcionan en la zona.
l. La Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/OEA, desarrollará
un proceso de información y sensibilización con las comunidades que habitan la zona.
7. Seguridad de la zona
a. La Fuerza Pública colombiana se encargará de la seguridad perimetral de la zona y del control de acceso.
b. Las personas y vehículos que ingresen a la zona serán registrados y
se someterán a los controles de seguridad que existan para tal fin.
c. En coordinación con la Fuerza Pública se adoptarán las medidas
que permitan la instalación de un cordón de seguridad interno
para la seguridad de las autodefensas.
d. Se establecerá un plan de seguridad que será revisado por el Comité de Seguridad y Convivencia de manera periódica.
157
8. Verificación
a. La Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/OEA, verificará
el cumplimiento de este Acuerdo y de los compromisos
adquiridos.
b. En la zona de ubicación funcionará un Comité de Verificación,
encargado de apoyar a la Misión de la OEA, MAPP/OEA, en
la verificación del cese de hostilidades a nivel nacional.
c. El Comité de Verificación estará conformado por un miembro
de la Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/OEA, un delegado de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz y un delegado de las Autodefensas. Este comité elaborará un procedimiento para la recepción y atención de quejas, informaciones
o denuncias sobre el cumplimiento del cese de hostilidades.
Santa Fe de Ralito, mayo 13 de 2004
Por el Gobierno Nacional
Luis Carlos Restrepo Ramírez
Alto Comisionado para la Paz
Por las Autodefensas Unidas de Colombia
Salvatore Mancuso
Vicente Castaño
Adolfo Paz
Javier Montañez
Jorge 40
Julián Bolívar
Hernán Hernández
Miguel Arroyabe
Ernesto Báez
Ramiro Vanoy
Testigos
Por la Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/OEA:
Sergio Caramagna
158
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Por la Iglesia Católica
Monseñor Julio César Vidal58
El funcionamiento de la ZUT de Tierralta facilitó que se integraran
a la mesa única de diálogo de Santa Fe de Realito, las ACMM bajo el
mando de Ramón Isaza. Igual hicieron las Autodefensas de Meta y
Vichada, que habían iniciado el proceso dentro de la llamada Alianza Oriente con el grupo de las Autodefensas Campesinas de Casanare,
bajo el mando de Martín Llanos.
Después de firmar el Acuerdo del Sur del Casanare por la Paz de
Colombia con el Gobierno, el 29 de enero de 2004, este último grupo
se mantuvo independiente de la mesa única de diálogo, por lo que se
sostuvieron varias reuniones con sus representantes, la última de ellas
el 30 de julio de 2003, sin poder llegar a un acuerdo definitivo para su
desmovilización.
Resumimos los aspectos principales del Acuerdo para la zona de
ubicación.
Objeto: Perfeccionar el cese de hostilidades. Avanzar en un cronograma de concentración y desmovilización. Servir de sede de diálogo
con todos los sectores.
Delimitación: Suspendidos vuelos a menos de 10.000 pies de altura.
Vigencia: Seis meses, prorrogables. Puede ser acabada de mutuo
acuerdo o unilateralmente. Las autodefensas tendrán cinco días para
salir, con verificación de la OEA.
Garantías: Se suspenden órdenes de captura y operaciones contra
autodefensas en la zona.
Principios: voluntad de paz, respeto a la población y confidencialidad, entre otros.
58
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
159
Normas: Plena vigencia del ordenamiento legal. El Gobierno y la
OEA tendrán sedes en la zona con seguridad de la Fuerza Pública. Salidas y reingresos a la zona de los ‘paras’ autorizados por el Gobierno, las
reglas de convivencia, seguridad, ingreso de visitantes y comunicaciones estarán a cargo de un Comité de Seguridad y Convivencia tripartito:
Gobierno, AUC y OEA.
Las autoridades competentes atenderán toda violación a la ley. Se
entregará inventario de material de guerra y equipos de comunicación
a la OEA. Se pueden tener armas pero no ingresar ni retirar de la zona.
Seguridad: La fuerza pública hará un cordón perimetral y controlará
el acceso a la zona. Las autodefensas instalarán un cordón interno.
Verificación: A cargo de la OEA y habrá un comité integrado por
el Gobierno, las AUC y la OEA para el cese de hostilidades en el país.
CRONOLOGÍA DEL PROCESO CON LAS AUTODEFENSAS
Noviembre 28 de 2002
Las AUC anunciaron un cese de hostilidades unilateral para iniciar
acercamientos con el gobierno del presidente Álvaro Uribe con miras a
un pro-ceso de desmovilización. Pidieron salvoconductos para sus negociadores, ofrecieron el retorno de los desplazados, la entrega de niños
combatientes y se reservaron el derecho a defenderse de la guerrilla si
son atacados.
Julio 15 de 2003
Se firmó el acuerdo en Santa Fe de Ralito, Córdoba, para iniciar en
firme la negociación entre Gobierno y AUC. El proceso se iniciaría en
diciembre de 2003 y culminaría a finales de 2005. Se definirían los sitios
de concentración.
Noviembre 25 de 2003
Las AUC comenzaron su desmonte gradual con la desmovilización
de 871 combatientes del Bloque Cacique Nutibara en Medellín.
160
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Marzo 31 de 2004
Con el ingreso del Bloque Central Bolívar y el Bloque Vencedores de
Arauca a la negociación entre las AUC y el Gobierno, se conformó una
mesa única. Los grupos se comprometieron a dialogar con el Gobierno
bajo la bandera única de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Carlos Castaño decidió marginarse de los diálogos.
Abril 16 de 2004
Carlos Castaño, jefe político de las AUC, se vio involucrado en un
incidente armado en el que, según distintas versiones, murieron algunos
de sus escoltas. Kenia Gómez, esposa de Castaño, salió del país días
después del hecho. Aún no se sabía la suerte del jefe de las AUC. Nótese
que al suscribirse el Acuerdo de Fátima, por el cual se creó y reglamentó
la Zona de Distensión, ya no apareció Carlos Castaño entre los firmantes. Su desaparición causó extrañeza y se tejieron múltiples versiones
sobre la misma.
El proceso de desmovilización continuó hasta cuando las AUC
cumplieron las condiciones: la entrega de sus armas y la desmovilización de sus hombres. El misterio de la desaparición de Carlos Castaño
se mantuvo vigente hasta el 6 de septiembre de 2006, cuando uno de los
lugartenientes de Vicente Castaño, hermano mayor de Carlos, confesó
haber sido el autor material de la muerte del fundador de las AUC y
condujo a las autoridades al lugar donde fue encontrado el cadáver.
En una rueda de prensa en el aeropuerto de Montería, Córdoba, Restrepo dijo que “ningún miembro de las autodefensas que esté en la zona
de ubicación puede ser capturado con ningún fin. No puede ser capturado ni para responder ante autoridades nacionales ni para responder ante
autoridades internacionales”.
Restrepo anunció ese día el acuerdo entre el Gobierno Nacional y las
Autodefensas Unidas de Colombia para la zona de ubicación en Santa
Fe de Ralito, jurisdicción de Tierralta, Córdoba, de unos 268 kilómetros
cuadrados.
Conforme a la Ley 782 y durante la vigencia de la zona, se suspenderían las órdenes de captura y las operaciones ofensivas contra los
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miembros de los grupos de autodefensa que se encontraron dentro del
territorio delimitado.
El acuerdo fue suscrito por el Alto Comisionado de Paz, en representación del Gobierno; Salvatore Mancuso, Vicente Castaño, Adolfo Paz,
Javier Montañez, Jorge 40, Julián Bolívar, Hernán Hernández, Miguel
Arroyabe, Ernesto Báez y Ramiro Vanoy, por las AUC; y como testigos
aparecen Sergio Caramagna, por la Misión de Apoyo de la OEA, y
Monseñor Julio César Vidal, por la Iglesia Católica.
El acuerdo se inscribió en el marco de un diálogo que se inició en
enero de 2003 y que pretendía sacar de la guerra, antes del final de
2005, a unos 16 000 combatientes de los grupos paramilitares fundados
a comienzos de la década de 1980 con el argumento de “llenar vacíos de
Estado” en zonas de fuerte presencia de las guerrillas.
La zona de ubicación para las AUC tendría reglamentación clara. El
Caguán nunca la tuvo.
En Santa Fe de Ralito habría verificación de la OEA. Las FARC
jamás aceptaron verificación en la zona de distensión.
La zona de ubicación de las AUC tendría 368,79 kilómetros cuadrados. La zona del Caguán tenía 42 000 kilómetros cuadrados.
El plazo para la zona de negociación con las AUC se fijó en seis
meses, prorrogables; en el caso de las FARC se estableció inicialmente
en tres meses, los cuales fueron prorrogados en varias oportunidades.
En la zona de ubicación de las AUC hubo plena vigencia del Estado
de derecho. En el Caguán las FARC sacaron a los jueces y fiscales.
Ambas zonas se asimilaban en que durante su vigencia el Gobierno suspendería las órdenes de captura contra los líderes de los grupos
armados y en cuanto a que los líderes de los grupos armados podían
portar armamento.
El espacio aéreo fue restringido en Santa Fe de Ralito, igual a como
se hizo en el Caguán.
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Los líderes de las AUC podían salir y reingresar a la zona con un
permiso especial. Los líderes de las FARC no necesitaban permiso para
salir, pero podían ser capturados fuera del Caguán.
En la zona de ubicación funcionó un Comité de Seguridad y Convivencia, con miembros de la Oficina del Alto Comisionado, la OEA y las
AUC, e invitados de la Iglesia, el Ministerio de Defensa, la Alcaldía de
Tierralta, la Gobernación de Córdoba y un delegado de la comunidad.
Las AUC estaban obligadas a abstenerse de realizar actividades ilícitas, reclutamiento, entrenamiento armado, presionar o amenazar a pobladores o coordinar acciones ilegales. Las FARC, según información
militar, desarrollaban todas las acciones anteriores.
En la zona de ubicación de las AUC los habitantes podían desplazarse libremente. En el Caguán o podían hacer, pero las FARC ejercían
control sobre la movilización de la población.
Las autoridades competentes podían ingresar a Santa Fe de Ralito
para atender la situación en caso de una violación o infracción a la
ley. El Caguán fue desmilitarizado; las autoridades competentes no
podían ingresar.
En la zona de ubicación de las AUC, el Comité de Seguridad y Convivencia reglamentó el acceso de los medios de información. Esa actividad la regulaban, parcialmente, las FARC en el Caguán.
La misión de la OEA recibió un inventario de equipos de comunicaciones y armamento de las AUC, grupo al cual no le era permitido
almacenar, fabricar, entrar o sacar armas de la zona. Esto no ocurrió
en el Caguán.
La fuerza pública mantuvo la seguridad perimetral en Santa Fe de Ralito. En el Caguán también había anillos de seguridad de la fuerza pública.
Aunque la composición individual del llamado Estado Mayor de las
Autodefensas Unidas de Colombia ha cambiado varias veces, los diez
comandantes que se acogieron a la zona de ubicación aseguraban ser
los fundadores de las mismas. Ellos y sus guardias personales -que se
calculaban en algo más de 400 -se concentraron en los 396 kilómetros
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cuadrados alrededor del pueblo cordobés de Santa Fe de Ralito, centro
de una zona completamente bajo control de los grupos de autodefensas
ilegales, que desplazaron de allí al EPL y a las FARC a mediados de los
años 1990.
Los actuales integrantes proclaman representar a una fuerza de veinte mil hombres en armas. Los bloques que representan son la parte sustancial de las AUC, sostienen. Queda por fuera el Bloque Élmer Cárdenas, comandado por ‘El Alemán’, cercano a Carlos Castaño y que está
marginado de la negociación con el Gobierno desde un comienzo.
También se marginaron las Autodefensas Campesinas del Casanare,
ACC, de Héctor Buitrago y su hijo Martín Llanos, enfrascado en una
cruenta guerra con el Bloque Centauros que sí está en el Estado Mayor.
Las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio, lideradas por
Ramón Isaza, “El Viejo”, uno de los jefes históricos de las autodefensas en Colombia, no hacían parte orgánica de las AUC aunque habían
participado intermitentemente de las negociaciones con el Gobierno.
Finalmente, el desaparecido Bloque Metro, liderado por el comandante “Rodrigo” o “Doble Cero”, fue derrotado militarmente en enfrentamientos con el Bloque Central Bolívar y el Nutibara.
JEFES DE LAS AUC QUE SE CONCENTRARON EN SANTA
FE DE RALITO
Bloque Norte
Manuel Salvatore Mancuso Gómez, “Santander Lozada” o “Triple Cero”: de 39 años, es el hijo de un inmigrante italiano y tiene bajo
su mando autodefensas en ocho departamentos -Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, Santander, Norte de Santander, Córdoba y la Guajira-, reunidos en el llamado Bloque Norte. Además, ostenta la jefatura militar
de las AUC, la cual heredó de Carlos Castaño, de quien siempre fue segundo. Tras ingresar a las AUC se especializó en la guerra de guerrillas
en Vietnam y es piloto de helicópteros, gracias a las enseñanzas de un
capitán retirado del Ejército.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Rodrigo Escobar Pupo, “Jorge Cuarenta” o “El Papá Tovar”: es el
segundo al mando del Bloque Norte de las AUC. Pertenece a una familia prestante del departamento del Cesar. Su zona de influencia parte de
la Sierra Nevada de Santa Marta, territorio que se disputó con el grupo
de Hernán Giraldo, y pasa por Valledupar. También se le señala como
el jefe de los frentes Resistencia Tayrona y Contrainsurgencia Wayuu,
que operan en Cesar, Magdalena y la Guajira.
José Vicente Castaño Gil, “El Profe”: es el hermano mayor de
Carlos Castaño. Nació en Amalfi, Antioquia, y tiene cerca de 55 años.
Aseguran que es un estratega militar que no maneja ningún bloque pero
posee un ejército personal de más de 200 hombres y cumple un papel
de liderazgo. Es miembro del Estado Mayor de las AUC y del equipo
negociador desde el año pasado 2003.
Diego Murillo Bejarano, “Don Berna” o “Adolfo Paz”: de 41
años, nació en Cartago, Valle. Tiene a su mando los bloques Nutibara
(desmovilizado), Pacífico y Calima, con cerca de 600 hombres. También aparece como el inspector general de esa organización al margen
de la ley. Antes de llegar a las AUC hizo parte del grupo perseguido por
Pablo Escobar conocido como “Los Pepes”.
“Hernán Hernández”: es uno de los comandantes más jóvenes de
esa organización al margen de la ley y aparece en el organigrama de las
AUC como el Director General del Bloque Calima, integrado por cuatro frentes: el Ortega, el Quimbaya, el Occidente y Héroes de Tolová.
Su zona de influencia está en los departamentos de Cauca, Quindío y
Valle del Cauca. Se cree que tiene bajo su mando cerca de 400 hombres
en armas. Su hombre de confianza es Mario Rodríguez, jefe político de
ese bloque. La verdadera identidad de Hernández no se conoce.
Bloque Central Bolívar, BCB
Iván Roberto Duque, “Ernesto Báez”: ex dirigente político del
Magdalena Medio y, según las autoridades, ideólogo del denominado
partido “Morena”. Se identifica como el Comandante Político del BCB.
Hace presencia a lo largo del río Magdalena desde el sur de Bolívar hasta cerca de Magangué, Bolívar.
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Julián Bolívar, “Julio Pailitas”: se presume que su verdadera identidad es Lorenzo González Quinchía. De 34 años, 1,70 metros de estatura y una cicatriz en la frente. Es el comandante de un ejército de 5 000
hombres, aglutinados en el Bloque Central Bolívar, BCB. Fue quien se
encargó de la toma a Barrancabermeja para desterrar a las milicias del
ELN. Aunque inicialmente solicitó una mesa de diálogos independiente, en marzo pasado aceptó ingresar a la de las AUC.
Javier Montañez: pertenece a la cúpula del Bloque Central Bolívar.
Su verdadera identidad no se conoce.
Bloque Mineros
Ramiro Vanoy Cuco, “Cuco”: tiene cerca de 50 años. Se dice que
se inició como esmeraldero en la zona de Muzo, Boyacá. También señalan que trabajó para Pablo Escobar y que posteriormente organizó
un ejército privado de cerca de 400 personas, quienes a principios de los
noventa entraron a formar parte de las AUC. Inicialmente su área de acción era Jamundí, Valle, pero luego se trasladó a Antioquia. Las mismas
fuentes aseguran que Carlos Castaño es padrino de uno de sus hijos.
Bloque Centauros / Capital
Miguel Arroyabe: nació en Amalfi, Antioquia. Como él mismo lo
reconoció, maneja las llamadas “oficinas de cobro” en los Sanandresitos de Bogotá. Según él, tiene bajo su mando 5 600 hombres en Boyacá,
Cundinamarca, Meta, Guaviare y Casanare59. Arroyabe estaba enfrentado a las Autodefensas Campesinas del Casanare, al mando de Martín
Llanos, quien permanece, al momento de cerrarse esta obra, al margen
de la negociación con el gobierno Uribe.
RUEDA DE PRENSA DEL ALTO COMISIONADO PARA LA
PAZ EN MONTERÍA
Después de la firma del Acuerdo de Fátima, el Alto Comisionado
para la Paz, Luis Carlos Restrepo, concedió una rueda de prensa en el
aeropuerto Los Garzones, de Montería. Su texto es el siguiente:
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Op. cit. 14, mayo, 2004. 1-3 p.
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La zona de ubicación designada para las AUC mediante el acuerdo
firmado con el Gobierno Nacional es una zona que se inicia en Los
Volcanes, pasa por Santa Fe de Ralito, baja hasta el Cerro Cumbia, sube
por Palmira, pasa por los Agujos y llega nuevamente a Los Volcanes.
Esa es la zona acordada, tiene una extensión de 368 kilómetros cuadrados, está ubicada en la zona rural del municipio de Tierralta, Córdoba.
Corresponde a un siete por ciento de la extensión total del municipio
de Tierralta.
En esta zona estarán básicamente los miembros del llamado Estado
Mayor Negociador. Es decir, toda la comandancia de las autodefensas
con su respectivo cuerpo de seguridad. El cálculo total es de uno 400
hombres armados.
Con la presencia permanente en esta zona de concentración del
Estado Mayor de las Autodefensas, esperamos garantizar un perfecto
cumplimiento del cese de hostilidades, y como se dice en el documento,
avanzar con la mayor rapidez en la definición de un cronograma para
las concentraciones y las desmovilizaciones.
La zona servirá como sitio de interlocución para que entidades nacionales e internacionales y diferentes sectores puedan entrar en contacto más estrecho con el proceso, ya que hasta el momento éste se ha
manejado con la mayor confidencialidad.
Quiero dejar claro que en esta zona regirá a plenitud el Estado de
Derecho. Es decir, aquí no habrá nada que se asemeje a la antigua zona
desmilitarizada del Caguán.
Tenemos claro que aquí habrá no solamente un control permanente
de la Fuerza Pública, sino que se aplicará en su totalidad la legislación
vigente. Por otro lado, queda también claro que los pobladores y habitantes de la zona tendrán un total respeto para sus derechos fundamentales y la OEA se encargará, en una relación permanente con ellos, de
coordinar con los habitantes de la zona las medidas adicionales que se
requieran para su estado de bienestar y de tranquilidad.
Esperamos, por supuesto, la mayor colaboración de las autoridades
militares y civiles del departamento. El señor Gobernador de Córdoba, el señor Comandante de Policía de Córdoba, también el General
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Pico, e igualmente el Alcalde de Tierralta, han estado plenamente informados de este proceso y hemos encontrado en ellos desde el Gobierno Nacional la mayor buena voluntad para el acompañamiento.
Igualmente, Monseñor Julio Cesar Vidal, que ha estado actuando
como facilitador y que conoce desde adentro este proceso, nos ha dado el
mayor apoyo y por eso queremos hacer este reconocimiento de la Iglesia.
Finalmente, el señor Sergio Caramagna, en representación de la
OEA, nos ha acompañado también en esta reunión, y como ustedes se
dan cuenta, hay unos compromisos muy específicos que la OEA entrará
a desarrollar como parte de este acuerdo.
La fecha de inicio de la zona de concentración está siendo concertada internamente con el Gobierno Nacional. Haremos el anuncio en los
próximos días. Se necesita una logística previa antes de dar ese paso y
en el momento en que tengamos esa fecha decidida la anunciaremos a
los medios de comunicación.
Pregunta: ¿Va a ver un cese de hostilidades?
Alto Comisionado para la Paz: el cese de hostilidades está
declarado desde el comienzo de las negociaciones. De hecho, nosotros hicimos una primera evaluación del cese de hostilidades,
con una reducción significativa en los hechos violentos. Una reducción de un 44% en homicidios y un 59% de masacres. Sin
embargo, como aclaramos en su momento, han existido infracciones al cese de hostilidades. Esperamos que con la instalación
ya permanente de la Misión de la OEA, que actúa como verificadora, ese cese de hostilidades pueda perfeccionarse.
De hecho, en la evaluación que hemos hecho este año del cese
de hostilidades, hay unas cifras alentadoras. Hemos visto una reducción significativa en relación con el año anterior; sin embargo,
nuestro propósito es que ese cese de hostilidades se cumpla plenamente y creemos que la instalación de la zona nos va a servir
a ese propósito.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Pregunta: ¿La seguridad del Estado Mayor negociador de las
autodefensas la van a garantizar sus 400 hombres, o habrá cordones de fuerza pública?
Alto Comisionado para la Paz: la zona va a estar bajo control de la fuerza pública. La fuerza pública es la encargada de la
seguridad perimetral, del control de las vías de acceso y de todos
los territorios aledaños, y habrá una coordinación con las autodefensas para que haya un mecanismo de seguridad interno y,
por supuesto, puede haber coordinación con los miembros de la
seguridad de los jefes del Estado Mayor de las autodefensas.
Pregunta: ¿Qué figura se utilizó para levantar las órdenes de
captura?
Alto Comisionado para la Paz: la figura que hemos utilizado es la del levantamiento geográfico de la orden de captura. Es
decir, los miembros de las autodefensas que permanezcan en esta
zona de ubicación, en las condiciones establecidas por el Gobierno, no serán capturados. Sin embargo, se considera una figura:
podrá haber permisos individuales para que los miembros de las
autodefensas salgan con propósitos específicos relacionados con
el proceso de paz y por tiempo limitado, de tal manera que puedan seguir cumpliendo labores de coordinación en lo que tiene
que ver con el proceso, y ya que ellos mantienen una responsabilidad de mando sobre los hombres que están en sus organizaciones,
pues también ellos son los responsables del cabal cumplimiento
del cese de hostilidades.
Pregunta: ¿Esos permisos serían para salir del país, o para qué?
Alto Comisionado para la Paz: no. Serían desplazamientos
fuera de la zona a distintos lugares del país, con el propósito de
cumplir tareas relacionadas con el proceso de paz, por tiempo
limitado y con ese objetivo específico. Ellos saldrían y volverían a
ingresar a la zona. Cada uno de esos permisos se tramitará individualmente y será concedido por el Gobierno, una vez se establezca que se cumplen las condiciones pactadas en el acuerdo.
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Pregunta: ¿Quiénes están en el acuerdo?
Alto Comisionado para la Paz: todos los del Estado Mayor
negociador, que son las diez personas que firman el acuerdo. El
número de personas que los acompañará a ellos no está completamente definido. Tenemos un cálculo inicial de unos 400 miembros de las autodefensas que nos acompañarían. Sin embargo, eso
muy probablemente será sometido a ajustes posteriores. Pero se
trata básicamente de toda la comandancia de las autodefensas a
nivel nacional.
Pregunta: ¿Qué logró salvar los diálogos luego que se decía
que estaban pendiendo de un hilo a raíz de la desaparición de
Castaño?
Alto Comisionado para la Paz: el Gobierno les solicitó expresamente a las autodefensas que aclaren públicamente qué ha
sucedido con el comandante Carlos Castaño. El Gobierno les
ha hecho saber que lo sucedido con Castaño pende como una
sombra sobre el proceso; genera no solamente incertidumbre sino
también desconfianza.
Esperamos que las autodefensas, conjuntamente, fijen una
posición y colaboren con las autoridades en el esclarecimiento
de la situación. Ante este pedido del Gobierno, las autodefensas
han respondido que emitirán un comunicado público fijando su
posición frente a la desaparición del comandante Carlos Castaño
y, por supuesto, esperamos también que ellos se expresen positivamente en cuanto a la colaboración con las autoridades para
aclarar plenamente lo que sucedió con Carlos Castaño.
Pregunta: ¿Qué pasó con el pedido de extradición hecho por
los Estados Unidos contra Mancuso y los demás miembros de las
autodefensas?
Alto Comisionado para la Paz: mientras el señor Mancuso o
cualquier otra persona solicitada en extradición permanezca en
la zona de concentración no será capturado, ni para responder
ante los tribunales nacionales, ni ante los internacionales, porque
la Ley 782 -que es la que regula en Colombia los procesos de paz-
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
establece claramente que mientras ellos permanezcan en la zona
de ubicación y cumplan con los reglamentos acordados no serán
capturados.
Frente a la extradición, el Presidente ha fijado claramente su
posición, y eso quedó establecido en el comunicado que en días
pasados emitió la Casa de Nariño: no va a haber ningún cambio
de tipo normativo en lo relacionado con la extradición. La figura
de la extradición se conservará en Colombia tal como está en la
actualidad y con plena vigencia.
El Gobierno ha sido claro también en que si las personas que
participen en el proceso de paz, muestran una buena conducta,
un propósito de enmienda y el mundo conozca su intención de
avanzar en un proceso de paz, pues eventualmente puede haber
en la comunidad internacional y en la nacional una actitud comprensiva sobre su situación y, por supuesto, eso permitiría tener
más elementos de juicio en el momento en que el Ejecutivo deba
tomar una decisión al respecto. Esa es básicamente la posición
del Gobierno. Esa posición la hemos dejado sentada en la mesa
desde el comienzo y no ha variado hasta el presente.
Pregunta: ¿La zona incluye todo el municipio de Tierralta?
Alto Comisionado para la Paz: no. No incluye el casco urbano de Tierralta. El límite pasa por Cerro Pelao, que está alejado
del casco urbano de Tierralta, y por Palmira.
Le repito para que conozcan bien la zona: zona urbana de Tierralta, se inicia en Los Volcanes, límites entre las zonas rurales
de Tierralta y Montería, baja por Caramelo, de Caramelo baja a
Santa Fe de Ralito, de Ralito baja hasta el Cerro Cunabia, sube a
Las Pailas, de allí a Palmira, de Palmira a Cerro Pelao, de Cerro
Pelao a Los Agujos y de Los Agujos nuevamente a Los Volcanes.
No hay inclusión del casco urbano de Tierralta. Básicamente
hay jurisdicciones de los corregimientos de Caramelo y Santa Fe
de Ralito y, como he dicho con anterioridad, en esta zona regirá
plenamente la vigencia del Estado de Derecho. Es decir, las autoridades civiles y militares correspondientes.
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Pregunta: ¿Qué extensión territorial comprende exactamente
la zona de ubicación?
Alto Comisionado para la Paz: el área de la zona de concentración tiene una extensión aproximada de 368 kilómetros cuadrados.
Pregunta: ¿Dentro de los acuerdos se pactó la entrega de armas de los hombres que se van a concentrar?
Alto Comisionado para la Paz: no. Los hombres que se van
a concentrar hacen un inventario de armas y ese inventario es
entregado a la OEA. Ellos se comprometen a no entrar nuevas
armas, ni a sacar armas. En la zona no va a haber depósito de
ningún tipo de armamento, ni de explosivos, ni de municiones
y el inventario de la OEA va a ser no solamente sobre las armas,
sino también sobre los equipos de comunicación. Igualmente, en
la zona no se puede desarrollar ningún tipo de actividad militar,
ni se pueden coordinar actividades ilegales.
Pregunta: ¿Qué pasa con los demás grupos que no están en
este acuerdo?
Alto Comisionado para la Paz: nosotros mantenemos conversaciones con los demás grupos. De hecho, por ejemplo, hemos
avanzando en conversaciones con el Grupo del Élmer Cárdenas,
que estaba a mando de “el Alemán”. Con él también hemos empezado a estudiar la posibilidad de una zona de concentración.
Mantenemos conversaciones con las autodefensas del Magdalena Medio y mantenemos igualmente conversaciones con las
autodefensas del Casanare. Estos procesos continuarán y según el
ritmo iremos tomando las decisiones que sean del caso.
Pregunta: ¿Después de seis meses pactados qué vendrá?
Alto Comisionado para la Paz: esos seis meses son prorrogables. Digamos que nos damos un compás de espera y de prueba.
Nosotros esperamos que estos seis meses sirvan para consolidar
el proceso, que los comandantes de las autodefensas estén bajo la
vigilancia nacional e internacional, que quede claro ante los ojos
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
de colombianos y extranjeros que hay buenas intenciones, buen
comportamiento, buena conducta, que hay una disposición para
avanzar hacia la paz. Y por supuesto, si vamos cumpliendo los
objetivos de la zona, existe la posibilidad de prorrogarla.
Pregunta: Paradójicamente, ésta es una zona que hace un
tiempo fue de dominio de la guerrilla del EPL. ¿Qué le dice eso?
Alto Comisionado para la Paz: sí, históricamente esa fue una
zona de presencia de grupos guerrilleros y en este momento tenemos allí presencia de grupos de autodefensa. Esa es la realidad
de la dinámica y la historia nacional: en muchas zonas donde ha
habido presencia guerrillera en este momento hay presencia de
autodefensas.
Lo que a nosotros nos interesa como Estado es avanzar en la
institucionalidad, en la legalidad. El Estado ha dicho claramente,
y el Presidente lo ha planteado así de manera muy explícita, que
tienen que llegar al fin los grupos armados ilegales, y para eso
tenemos dos caminos: tenemos el camino de la Seguridad Democrática y del control territorial por parte de las autoridades legítimas, y tenemos también el camino de la negociación. Entonces,
esperamos que esta zona y sus alrededores sean recuperados plenamente para el Estado de Derecho.
La actividad del Gobierno no va a estar solamente centrada en
la zona, sino que alrededor de la zona, con las autoridades civiles
y militares, vamos a desarrollar también una presencia activa, de
tal manera que cada vez haya mayor control territorial por parte
del Estado y mayor legalidad.
Pregunta: El Procurador General de la Nación ha sugerido
que sea el Presidente de la República en persona quien asuma la
dirección de estas negociaciones. ¿Qué opinión tiene el Gobierno? ¿Se pensaría en una reunión del propio Presidente con estos
diez líderes paramilitares que firmaron el acuerdo?
Alto Comisionado para la Paz: yo actúo como delegado presidencial. De hecho, la única persona que toma decisiones en el
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Gobierno sobre el proceso de paz es el Presidente, y yo actúo por
delegación suya.
Por ahora el Presidente no ha considerado la posibilidad de
una reunión directa con los miembros de las autodefensas, y por
supuesto yo estoy actuando en su representación. Sin embargo, en
el momento en que él lo considere oportuno y tome las directrices
correspondientes, haremos los cambios que sean necesarios. Por
el momento esa reunión directa del Presidente con los miembros
de las autodefensas no está considerada y yo seguiré ejecutando
sus decisiones en este proceso de paz.
Pregunta: ¿Los miembros de las autodefensas podrán hablar
con la gente, contarle qué es lo que está sucediendo y podrán, no
sé, hacer proselitismo político?
Alto comisionado para la paz: no. No está considerado que
este sea un lugar de proselitismo político; eso ni está en los acuerdos ni está dentro de los propósitos del Gobierno.
Pregunta: ¿En cuánto tiempo estiman que será instalada la
zona de ubicación?
Alto Comisionado para la Paz: esperamos que sea lo más
pronto posible, pero ustedes entienden que, dado hoy el acuerdo
político, pues necesitamos unos días, un tiempo prudencial para
su operativización.
Pregunta: ¿Cuál cree usted que es el mayor compromiso del
Gobierno en este acuerdo?
Alto Comisionado para la Paz: el mayor interés del Gobierno
es el cabal cumplimiento del cese de hostilidades. Ese sigue siendo el mayor interés del Gobierno. Este proceso se justifica si hay
una disminución significativa de los hechos de violencia.
Yo he comparado la violencia con una tractomula que baja por
una pendiente a 80 kilómetros por hora, atropellando a todo el
que se encuentra. Es una tractomula sin frenos, hay que empezar
a frenarla con cambios, pasarla de cuarta a tercera, de tercera a
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
segunda. Creo que en la medida en que vayamos frenando esta
maquinaria loca de la violencia vamos ganando el proceso de paz
y para nosotros se expresa en disminución de homicidios; eso se
expresa en disminución de masacres, eso se expresa en mayor legalidad y menos actividades ilícitas.
El segundo propósito tiene que ver con que los jefes de las autodefensas que van a estar en esta primera zona de concentración
avancen de manera coordinada con el Gobierno en la definición
de un cronograma nacional de concentraciones y desmovilizaciones. Que muestren sus buenas intenciones y buena conducta
para que igualmente también la comunidad internacional confíe
en este proceso.
Y por supuesto, el tercer propósito es que allí puede haber una
interlocución con muchos sectores nacionales e internacionales
que creemos deben vincularse al proceso para que éste sea sólido
e irreversible.
Pregunta: ¿El Gobierno garantiza que la zona no se va a convertir en un “Caguancito”?
Alto Comisionado para la Paz: este Gobierno ha sido muy
claro en que nosotros ni tenemos zonas desmilitarizadas, ni vamos a permitir zonas donde los grupos armados al margen de la
ley impongan su voluntad.
Esta es una zona que, de alguna forma, se integra plenamente
a la legalidad del Estado, se integra plenamente al ordenamiento legal vigente. Esta es una zona que estará bajo control de las
autoridades civiles y militares. Lo que vamos a ganar con esta
zona es mayor institucionalidad y mayor coordinación con los
ciudadanos para avanzar en los propósitos de la convivencia y la
Seguridad Democrática. Nada que se parezca al Caguán, nada
que se parezca a episodios que el país rechaza en este momento
colectivamente, va a suceder en esta zona.
Pregunta: ¿La Iglesia va a seguir acompañando este proceso,
o hasta acá iba el acompañamiento?
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Monseñor Julio César Vidal: yo les quiero hacer notar algo.
Hoy es 13 de mayo, hoy es día de Nuestra Señora de Fátima; ese
día la Virgen se apareció en Lourdes, en Fátima, en Portugal, y
allí pidió a los católicos que oráramos por la paz del mundo. La
Iglesia seguirá acompañando el proceso en todos los momentos,
este proceso con las AUC y ojalá Dios quiera un proceso pronto
con las FARC y con el ELN.
Alto Comisionado para la Paz: los miembros de las autodefensas y el Gobierno fuimos muy conscientes de que este era un
día muy especial. Precisamente, era el día de la Virgen de Fátima,
e incluso alguien llegó a sugerir que debíamos llamar al acuerdo
‘Acuerdo de Fátima’. Pero de verdad que es un día muy especial
y me uno a esa observación, que la Virgen nos ha acompañado y
nos ha iluminado en este paso tan importante.
Pregunta: Señor Caramagna, ¿usted cómo ve este acuerdo al
que han llegado hoy el Gobierno y las autodefensas?
Sergio Caramagna (Misión de Apoyo de la OEA, MAPP/
OEA): yo en este caso hablaría en nombre de parte de la comunidad internacional, y específicamente de la misión de apoyo
al proceso de pacificación. Nosotros observamos esto como un
paso muy significativo y muy positivo, y como resultado de los
esfuerzos de la definición por un proceso de pacificación y por la
voluntad demostrada por los grupos de autodefensa por firmar
un acuerdo, por concentrarse, por entrar de lleno a un proceso
de negociación. De manera que para nosotros es un proceso muy
importante y ojalá que el mensaje de esta parte de la comunidad
internacional también sea recibido de la misma manera por el
conjunto de la comunidad internacional.
Pregunta: ¿Qué garantías encontraron ustedes para evitar que
estas personas que se quedan sin sus comandantes que van a ser
concentrados se conviertan en unos bandoleros en las diferentes
regiones del país?
Sergio Caramagna: yo creo que esto está dirigido básicamente a iniciar el proceso de negociación. Esto significa, como dijo
el comisionado, crear mecanismos que ayuden a un control más
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
efectivo y a una verificación más efectiva del cese al fuego. Es un
tema esencial y crucial que lo reclama la inmensa mayoría de los
colombianos y también es sensible a la comunidad internacional.
Si apuntamos hacia eso y sumamos en ese sentido se habrá hecho
una contribución importante.
Pregunta: ¿Cómo se va a regular la prensa?
Alto Comisionado para la Paz: muy probablemente el comité definirá unos responsables de comunicaciones y con ellos se
coordinará el acceso a los medios. El interés es que haya toda la
libertad de información, pero no queremos que esto se convierta
en un espectáculo en vivo, en una especie de show, sino que, con
la debida mesura, los medios puedan acceder a la zona, brindar la
información pero manteniendo la adecuada prudencia.
Pregunta: ¿Quién va a ser el vocero de las AUC?
Alto Comisionado para la Paz: no hay nombres todavía. Habrá un representante de la Oficina del Comisionado de Paz, un
representante de la OEA y un representante de las autodefensas.
Pregunta: ¿Que factores incidieron en este acuerdo?
Alto Comisionado para la Paz: bueno, siempre estos procesos de negociación van en medio de vaivenes, de pesimismo, optimismo, de esperanza, de desesperanza. De hecho, a pesar de
todas las dificultades, el Gobierno ha mantenido su propósito y
su voluntad de sacar adelante el proceso; creemos que también
hay voluntad de las autodefensas y finalmente se dieron hoy las
condiciones maduras para llegar a este acuerdo. Pero yo quisiera
pensar como Monseñor, que fue la Virgen de Fátima la que nos
ayudó a avanzar el día de hoy, y que seguiremos, por supuesto
con la protección de Dios, para poder concretar este proceso de
paz tan importante.
Pregunta: ¿El tema de paramilitares capturados en Venezuela
tuvo algún impase en este acuerdo; en algún momento tocaron
este tema?
177
Alto Comisionado para la Paz: no, no se tocó formalmente
y ustedes conocen la posición pública que han fijado las autodefensas. Ellos dicen que no tienen ninguna relación con lo que ha
acontecido en Venezuela.
Pregunta: ¿Podemos decir que a partir de este momento ya
comienza en firme este proceso con las autodefensas?
Alto Comisionado para la Paz: el proceso viene desde meses
atrás. Recuerden que el 15 de julio del año pasado firmamos el
acuerdo de Santa Fe de Ralito, donde las autodefensas se comprometieron -por primera vez en su historia- a desmovilizar a
todos sus miembros, y a fines del año pasado desmovilizamos
un frente importante del Cacique Nutibara, en Medellín. En este
momento, esos 874 jóvenes están en proceso de reincorporación y
ahora tenemos este otro paso adelante que lo consideramos muy
significativo, esta primera concentración, esta zona de ubicación
que va a permitir, por un lado, la concentración de los jefes de las
autodefensas, con sus respectivas escoltas personales, y por otro
lado, el avance del proceso de negociación y la interlocución de la
mesa con los sectores nacionales e internacionales.
Pregunta: ¿El tiempo que ustedes tienen previsto cuánto podría ser, teniendo en cuenta que hay muchos obstáculos y desde
luego hay cosas por resolver?
Alto Comisionado para la Paz: es cuestión de días. Es un
asunto de tipo operativo; tenemos que entrar en coordinaciones
con las autoridades departamentales, municipal de Tierralta, con
las autoridades militares, tenemos que hacer algunos acondicionamientos en infraestructura para que en la zona pueda funcionar
la sede del Gobierno y la sede de la OEA, pero creemos que es
cuestión de días. Vamos a avanzar rápidamente en esa parte operativa.
Pregunta: El señor Sergio Caramagna dijo que esperaba que
este acuerdo contara con el respaldo del resto de la comunidad
internacional. ¿Ustedes van a socializarlo con el resto de la comunidad internacional?
178
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Alto Comisionado para la Paz: por supuesto. Nosotros hemos
estado en permanente contacto con la comunidad internacional.
Vemos una buena disposición de ella y reuniremos a los embajadores acreditados en Colombia para explicarles en detalle este paso
que hemos dado y esperamos contar con todo el apoyo de la comunidad internacional en este esfuerzo de pacificación del país.
Pregunta: ¿El Gobierno tiene ya un presupuesto para mantener a los miembros de las autodefensas que se van a concentrar?
Alto Comisionado para la Paz: el Gobierno correrá con los
gastos que le corresponden: el funcionamiento de su sede, lo que
tiene que ver con la dinámica de la mesa de negociación, lo que
tiene que ver con la atención a la población civil, etcétera. Todos
esos gastos correrán por cuenta del Gobierno. Por ahora no tenemos un presupuesto establecido, pero es una responsabilidad del
Estado correr con estos gastos básicos que demande el proceso.
Pregunta: ¿Ya se sabe cuántas órdenes de captura van a ser
levantadas? ¿Ya hay un número exacto?
Alto Comisionado para la Paz: la orden de captura se levanta
territorialmente. Es decir, quien esté en la zona no va a ser capturado. No es un levantamiento individual de la orden de captura.
Una vez ellos estén ubicados en la zona podrán recibir permisos
autorizados por el Gobierno, específicos, para salir de la zona a
cumplir actividades relacionadas con la paz.
Básicamente, como ellos son hombres que tienen el mando de
una organización armada al margen de la ley y son responsables
por el cumplimiento del cese de hostilidades, tendrán que hacer
desplazamientos para hacer pedagogía con sus hombres, explicarles cómo va el proceso para ir avanzando en la definición de
zonas de concentración, y con ese propósito específico se darán
autorizaciones limitadas en el tiempo y relacionadas exclusivamente con labores de paz.
Pregunta: Y como no pueden estar armados entonces esa seguridad la va a brindar la fuerza pública que va a estar en ese sitio.
¿Y cuándo ellos necesiten esos desplazamientos?
179
Alto Comisionado para la Paz: dentro de la zona ellos pueden
conservar sus armas; sin embargo, esas armas serán inventariadas
y controladas por la misión de la OEA. Fuera de la zona ellos no
pueden tener armas y la seguridad será prestada de manera exclusiva por la fuerza pública.
Pregunta: En cuanto a esos jefes, señor comisionado, ¿ya se
conocen exactamente los nombres de las personas que van a estar
acá, o en ese sentido ustedes esperan que más adelante se puedan
verificar o comprobar todas esas identidades?
Alto Comisionado para la Paz: en principio se habla del Estado Mayor negociador, son las diez personas que firman el acuerdo
del día de hoy. Muy probablemente va a haber otras personas, otros
mandos altos de las autodefensas con sus respectivas escoltas personales; sin embargo, los nombres de estas otras personas no están
todavía definidos, eso lo concertaremos en los días que vienen.
Pregunta: ¿En un futuro se podrá establecer otro tipo de concentración?
Alto Comisionado para la Paz: sí. El Gobierno ha planteado
la posibilidad de varias zonas de concentración en el país, siempre
y cuando sirvan a los propósitos de perfeccionar el cese de hostilidades y avanzar en el programa de desmovilización.
Pregunta: ¿Las personas que se van a concentrar solo serían
miembros de las autodefensas que están en esta zona, o de qué
grupos que ustedes hayan podido establecer?
Alto Comisionado para la Paz: no. Son de la mesa nacional.
Ustedes saben que hace ya unas semanas se integró la Mesa Nacional de Negociación; entonces, serían jefes de esta Mesa Nacional de Negociación, lo cual incluye grupos de autodefensas que
tienen presencia en todo el país.
Pregunta: ¿Ustedes esperan que asista Carlos Castaño, aunque
ya Salvatore Mancuso se pronunció en el sentido de que él no ve un
obstáculo si no está Castaño en la mesa? ¿Cómo lo ve el Gobierno?
180
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Alto Comisionado para la Paz: es indudable que el señor
Castaño tenía una posición moderada, conciliadora, estaba
muy comprometido con el proceso de paz. De hecho, él ya
había aceptado públicamente los términos de la nueva Ley
de Justicia y Reparación; él incluso se inclinaba a aceptar un
tiempo de pena privativa de la libertad, a adelantar acciones
de reparación, estaba muy comprometido con el cumplimiento
total del cese de hostilidades.
Por supuesto que es lamentable la ausencia del señor Castaño, dado su compromiso con el proceso; sin embargo, es tanto
decisión del Gobierno como decisión de las autodefensas continuar adelante, y como ya les decía sobre este caso concreto,
el Presidente ha insistido en que las autodefensas fijen públicamente su posición, aclaren más sobre la situación y colaboren con las autoridades, ya que todavía existen muchos vacíos,
existen muchas sombras sobre lo que realmente aconteció con
Carlos Castaño y eso genera desconfianza y puede afectar el
proceso.
Pregunta: Al levantarse las órdenes de captura, ¿también el
tema que tiene que ver con la extradición queda detenido en ese
momento?
Alto Comisionado para la Paz: sí. Ningún miembro de las
autodefensas que esté en la zona de ubicación puede ser capturado con ningún fin. Es decir, no puede ser capturado, ni para
responder ante autoridades nacionales, ni para responder ante autoridades internacionales. Eso lo fija claramente la Ley 782, y por
supuesto será un beneficio al que accedan quienes se concentren
en la zona de ubicación de Tierralta.
Pregunta: ¿O sea que esa versión, en el sentido de la extradición y en el caso de Castaño, que se decía que posiblemente
estaba en Estados Unidos, ustedes no la conocen?
Alto Comisionado para la Paz: No, no tenemos ninguna información al respecto. Técnicamente, para el Gobierno la situación del señor Castaño es la de una persona desaparecida. No tenemos ninguna evidencia sobre su paradero y por supuesto sería
181
deseable que con la colaboración de los mismos miembros de las
autodefensas pudiéramos aclarar la situación60.
MÉXICO ACEPTA SER GARANTE DE POSIBLES ACUERDOS DEL GOBIERNO CON EL ELN
Durante una visita a México, donde asistió a una cumbre entre la
Unión Europea y los países centroamericanos y del Caribe, el presidente Álvaro Uribe anunció, el 30 de mayo de 2004, que había reiterado la
oferta de no exigir que la guerrilla que quisiera negociar con el Gobierno tuviera que dejar las armas o desmovilizarse.
“La claridad de México y su Gobierno en la lucha contra el terrorismo, en el afianzamiento del pluralismo democrático, constituirían una magnífica garantía para un eventual proceso de paz”,
declaró Uribe en una rueda de prensa conjunta con el presidente mexicano, Vicente Fox.
“Me pareció oportuno adelantar esto en México, después de que
hablé ampliamente con el maestro García Márquez”, señaló Uribe,
quien hizo énfasis en que “si el ELN aceptara esa propuesta habría
un garante internacional para ese cese de hostilidades”.
Sobre la posibilidad directa de que fuera México el que asumiera dicho papel, indicó que sería magnífico porque “la amistad, el recorrido
histórico conjunto, la definición de México contra el terrorismo,
su permanente deseo de contribuir a la paz, todo eso constituye
un conjunto de elementos que para Colombia son bien estimulantes. México ha cerrado las puertas al terrorismo pero ha dicho que
abrirá las puertas a la paz cuando así lo solicite el Gobierno de Colombia. Eso nos parece muy afortunado y nos ayuda muchísimo”,
explicó Uribe.
En relación con la participación mexicana, Fox dijo que Uribe sabe
que puede contar con nosotros para cualquier iniciativa que él lance
con el afán de que se encuentre solución a este problema. Me parece
que para Colombia no es justo que puedan frenarse sus aspiraciones de
6o
ALTO COMISIONADO PARA LA PAZ. [en línea]. Disponible en Internet: www.altocomisionadoparalapaz.gov.co.
182
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Desarrollo Humano, de formación de capital humano, de crecimiento
económico, de erradicación de pobreza, de elevar la calidad de vida de
las y los colombianos, con la condición de promover un clima de paz y
tranquilidad donde todo ese proceso se pueda dar”, agregó Fox61.
Por su parte, el ELN, en una carta que dirigió al presidente de México, Vicente Fox, aceptó la posible mediación de ese país en una eventual
negociación con el Gobierno colombiano.
Fox confirmó que el Gobierno Mexicano recibió una carta del ELN,
que fue analizada, y señaló que impartió instrucciones a la Cancillería
Mexicana para que respondiera la misiva del grupo armado colombiano.
El Gobierno Colombiano autorizó la salida de la cárcel de Itagüí de
Francisco Galán, vocero del ELN, a fin de que pudiera participar en un
foro internacional sobre minas antipersonales y acuerdos humanitarios.
Igualmente, se supo que el señor Galán se reuniría en Bogotá con el
Vicepresidente Francisco Santos y con el Embajador de México en Colombia, señor Mario Chacón.
Durante su visita a Bogotá, Francisco Galán, a nombre del Comando Central del ELN, propuso al Gobierno Nacional un Acuerdo Humanitario mediante el cual se eliminarían, al menos parcialmente, las
minas antipersonales y el uso de artefactos explosivos. También sugirió
la posibilidad de buscar una amnistía general para los presos políticos y
un cese al fuego bilateral y temporal.
Galán se entrevistó en un hotel de la capital de la república con el
Vicepresidente Francisco Santos, el Comisionado de Paz, Luis Carlos
Restrepo y el Director de Derechos Humanos de la Vicepresidencia,
Carlos Franco. Igualmente se reunió con el Embajador de México en
Colombia, señor Jesús Mario Chacón.
A través de su embajador, el Gobierno de México ofreció el territorio
de ese país para que el comisionado de paz y los voceros del ELN realizaran contactos iniciales. La participación mexicana, además, podría
incluir la definición de la agenda de las conversaciones y la solución
61
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
183
de eventuales diferencias. Esta participación de México en el proceso
de paz con el ELN no significaría eliminar la mediación del grupo de
“países amigos” en las comisiones de buena voluntad.
SE INICIAN LAS NEGOCIACIONES DE PAZ CON LAS AUC
El 15 de junio de 2004, el Gobierno Nacional declaró oficialmente
abiertas las negociaciones de paz con los grupos de autodefensa. Delegados del Gobierno y de los grupos de autodefensa se reunieron en la
localidad de Santa Fe de Ralito, departamento de Córdoba, y convinieron iniciar las negociaciones formales a partir del 1 de julio. El Gobierno Nacional suspendió a partir de esa fecha las órdenes de captura que
pesaban contra algunos de los jefes de las autodefensas que se encontraban en esa localidad y contra los que posteriormente se concentraran
en ese sitio.
Se conoció que el 7 de julio algunos comandantes de las AUC, encabezados por Salvatore Mancuso, visitarían el Congreso Nacional y
hablarían ante ese auditorio. Como la inmunidad de la que gozaban los
jefes de las autodefensas solo regía dentro del perímetro de 368 kilómetros cuadrados de la zona de ubicación, el Gobierno daría un permiso
especial para que los jefes de las AUC salieran del área de concentración.
El siguiente es el texto de la resolución 091 de 2004, por la cual se dio
inicio al proceso de paz con las autodefensas:
Presidencia de la República
Resolución No. 091 de 2004
Por la cual se declara la iniciación de un proceso de paz con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
El Presidente de la República de Colombia,en ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales, y en especial de las que le confiere
la Ley 418 de 1997, prorrogada y modificada por la Ley 548 de 1999 y
por la Ley 782 de 2002, y
Considerando:
Que el Artículo 22 de la Constitución política dispone que la paz es
un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.
184
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Que el Gobierno Nacional considera que se encuentran dadas las
condiciones para dar inicio formal a un proceso de diálogo, negociación
y firma de acuerdos con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Resuelve:
Artículo 1º. Declarar abierto el proceso de diálogo, negociación y
firma de acuerdos con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, de
que trata el Artículo 3 de la Ley 782 de 2002.
Artículo 2º. La presente resolución rige a partir de la fecha de su
expedición.
Publíquese, comuníquese y cúmplase.
Dada en Bogotá, a los 15 días del mes de junio de 2004
Álvaro Uribe Vélez
Presidente de la República
Sabas Pretelt de la Vega
Ministro del Interior y de Justicia
Jorge Alberto Uribe Echavarría
Ministro de Defensa Nacional
El Gobierno Nacional y las AUC expidieron un comunicado conjunto en el cual informaron al país acerca de la iniciación formal de las
negociaciones de paz. Su texto es el siguiente:
Santa Fe de Ralito, Córdoba, 15 junio de 2004
El Gobierno Nacional y las Autodefensas Unidas de Colombia informan:
1. Que de acuerdo con las resoluciones 091 y 092 expedidas por el
Gobierno Nacional, a partir de hoy, 15 de junio de 2004, quedó
legalmente establecida la zona de ubicación en Tierralta, Córdoba, para facilitar el proceso de diálogo y negociación entre el
Gobierno y las Autodefensas Unidas de Colombia.
185
2. Que el próximo 1 de julio de 2004 se realizará el acto de instalación de las negociaciones en Santa Fe de Ralito.
3. Que hacen un llamado a la sociedad colombiana y a la comunidad internacional a respaldar este proceso y a crear todas las
condiciones que hagan posible que este paso hacia la paz culmine con éxito.
Santa Fe de Ralito, junio 15 de 2004.
Por el Gobierno Nacional
Luis Carlos Restrepo Ramírez
Alto Comisionado para la Paz
Por el Estado Mayor Negociador de las AUC
Salvatore Mancuso
Jefe del Estado Mayor negociador de las Autodefensas Unidas de
Colombia.
SE INSTALA OFICIALMENTE EL PROCESO DE NEGOCIACIÓN
ENTRE EL GOBIERNO NACIONAL Y LAS AUC
El 1º de julio de 2004 se instaló oficialmente el proceso de paz entre
el Gobierno Nacional y los grupos de autodefensas congregados en la
AUC. Al acto no asistieron algunos gobiernos y organismos internacionales que estaban invitados.
Los jefes de autodefensas que se concentraron en Santa Fe de Ralito,
zona de concentración, fueron: Salvatore Mancuso: “Santander Lozada”, considerado como el máximo dirigente de las AUC; José Vicente
Castaño Gil, “El Profe”; Rodrigo Tovar Pupo, “Jorge Cuarenta” o “El
Papá Tovar”; Miguel Arroyave; Iván Roberto Duque Gavina; “Ernesto
Báez”; Diego Murillo Bejarano, “Don Berna” o “Adolfo Paz”; Hernán
Hernández; Lorenzo González Quinchía; “Javier Montañés” o “Macaco”; “Julián Bolívar”; Ramiro Vanoy Cuco, “Cuco”; Ramón María
Isaza Arango, “El Viejo”; “Víctor Rafael Triana Arias”; Guillermo Torres y “Botalón”.
186
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Se dijo que a este grupo se unirían “Rafael Mesa”, Jefe de las Autodefensas en Putumayo y “Delio Lozano”, del Bloque Vencedores
de Arauca; Gabriel Galindo, “Ramón Mojana”, “Gabriel Zapata” y
Daniel Ángel.
No estaba claro si se concentrarían otros comandantes tales como
Luis Cifuentes, “El Águila”, de Cundinamarca; Sebastián Colmenares,
del Bloque Central Bolívar; René, del frente Suroccidente de Antioquia;
Hernán Giraldo Serna, de la Sierra Nevada de Santa Marta y del Tairona; Camilo Catatumbo, del frente La Gabarra, del Bloque Norte; Alberto Memín, del Frente Occidente de Antioquia; “Fernando Dávila”,
José María Barrera, “Chepe”, del Bloque Norte; “Ricardo Leal”, del
Bloque Pacífico; “John Santamaría”, del Occidente Antioqueño; Daniel Roa, del Tolima y Rogelio Paz.
JEFES DE LAS AUC SE PRESENTAN ANTE EL CONGRESO
DE LA REPÚBLICA
El 28 de julio de 2004 se presentaron en la Cámara de Representantes del Congreso de la República Salvatore Mancuso, Ernesto Báez y
Ramón Isaza, quienes habían sido invitados para asistir a esa corporación por la Comisión de Paz de la Cámara para presentar sus puntos
de vista acerca del proceso de paz con el Gobierno Nacional. Salvatore
Mancuso y Ernesto Báez hicieron uso de la palabra en el Salón Elíptico
de la Cámara de Representantes.
Cada uno leyó su presentación escrita de diez páginas ante la Comisión de Paz de la Cámara. La audiencia fue transmitida en directo por la
televisión nacional a través de Señal Colombia. En ella, dijo Mancuso,
el primero de los jefes paramilitares en intervenir: “el cese de hostilidades declarado por las autodefensas no nos exime de la responsabilidad de defender a las poblaciones y regiones de los ataques de las
guerrillas, allí donde el Estado no hace presencia”.
Los representantes de las AUC hicieron presencia en el Congreso,
vestidos de civil, alrededor de las once de la mañana. Los copresidentes
de la Comisión de Paz de la Cámara comenzaron la audiencia pidiendo
a Mancuso, “Báez” e Isaza franqueza y compromisos para que su paso
por el Congreso tuviera sentido.
187
El señor Mancuso solicitó la conformación de una comisión de alto
nivel, de la que formaran parte representantes del Gobierno, del Congreso, de la rama judicial, de la Iglesia y de los gremios de la producción, destinada a acompañar al Gobierno y a las autodefensas en el
desarrollo del proceso de paz.
Según sus voceros, las AUC eran una organización confederada y
regional y pidieron fueran creadas otras zonas de ubicación, además de
la ya existente, en el Magdalena Medio, sur de Bolívar, Urabá, Cundinamarca, Llanos Orientales y Norte de Santander.
Dijo Mancuso que desmovilizar de tajo a todas las autodefensas sería “una demencial irresponsabilidad, que provocaría un desastre en
gran parte del territorio nacional y llevaría al derrumbe de la economía”. Condicionó la concentración de las tropas a la presencia de los
organismos de seguridad del Estado en su área de influencia.
“Quisiéramos escuchar del Gobierno Nacional más estadísticas
de sustitución que de erradicación... ¿Quién ha preguntado a los
campesinos con qué alimentan a sus hijos el día después de las fumigaciones...?”, preguntó Mancuso, y añadió sobre los campesinos:
“viven en silencio el drama del envenenamiento, el desplazamiento
y la miseria”.
Ernesto Báez se encargó de presentar las posiciones de las AUC sobre temas como el intercambio humanitario con las FARC y los acercamientos con el ELN.
Sobre un eventual intercambio de secuestrados por guerrilleros presos anunció: “desde ya las autodefensas campesinas hacemos formal
retiro de nuestras anteriores advertencias contra la integridad física
de los guerrilleros que salgan de las cárceles”. El intercambio, según
los paramilitares, debería ser la puerta a la exploración de una negociación con las FARC. Sobre el ELN, apoyaron la convención nacional propuesta por el grupo guerrillero.
Los jefes de las autodefensas pasaron de largo el espinoso tema de
los narcotraficantes supuestamente presentes en la mesa de negociación
188
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
en Santa Fe de Ralito, pero invitaron a un foro que denominaron “Conflicto armado y narcotráfico, solución integral para la paz” y que
pretendían realizar entre el 17 y 19 de septiembre de 2004 en la zona de
ubicación.
Casi al final del discurso en el que él hizo esta propuesta, Ernesto
Báez pidió perdón al país. “con el corazón expuesto al escrutinio de
Dios y de la Nación, ante ustedes, a nombre del Estado Mayor y de
todos los miembros de las autodefensas campesinas, vengo humilde
a pedir perdón a todos los familiares y amigos de las víctimas adversarias y propias de esta guerra triste de la patria...”, dijo Báez. Y
Ramón Isaza, que delegó la lectura de su discurso en uno de los miembros de la Comisión de Paz de la Cámara, justificó su comienzo en las
autodefensas en la desatención del Estado a los reclamos de seguridad
contra las acciones de la guerrilla. Dejó constancia de que su presencia
en el Congreso era primordialmente para ratificar su deseo de paz62.
LAS AUC ANUNCIAN NUEVAS DESMOVILIZACIONES
El 12 de agosto de 2004, el Estado Mayor de las AUC informó que el
Bloque Centauros y las autodefensas del Meta se desmovilizarían próximamente. Igualmente, anunciaron su desmovilización dos grupos que
operaban en el norte del país. El anuncio se hizo tras una reunión entre
el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo y los jefes de las
Autodefensas Unidas de Colombia en la norteña localidad de Santa Fe
de Ralito, sede de las negociaciones de paz iniciadas el pasado 1 de julio. “Los grupos desmovilizados serán el Bloque Centauros, las autodefensas de Meta y Vichada y el Bloque Vencedores de Arauca”,
señalaron en un comunicado las AUC, que reúnen al 95% de los cerca
de 20 000 paramilitares del país.
Las autodefensas que operaban en la región de los Llanos Orientales,
al mando de los comandantes Miguel Arroyave, Pablo Mejía y Guillermo
Torres, procederían a la concentración y desmovilización de las tropas.
Las AUC no precisaron cuántos combatientes integraban esos grupos, pero sólo el bloque Centauros aseguraba tener 6 000 efectivos.
62
Ibíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
189
La organización armada también anunció su inmediata disposición
para concentrar y desmovilizar a otras dos facciones que operan en la
región Caribe, una de ellas al mando de Salvatore Mancuso, máximo
líder de las AUC.
Tras ser informado telefónicamente sobre estas decisiones por el alto
comisionado, el presidente Álvaro Uribe calificó el hecho como un gran
paso para la paz del país. Uribe había exigido la inmediata concentración y desarme del Bloque Centauros, las autodefensas de Meta y Vichada y el Bloque Vencedores de Arauca, advirtiendo que de no ser así
se daría por terminado el proceso de paz con esos grupos, que se inició
a finales de 2002.
Las Autodefensas Campesinas de Casanare, que según las autoridades tenían unos 700 hombres, anunciaron igualmente el 5 de agosto de
2004 que estaban dispuestas a concentrar sus tropas de inmediato en el
oriente del país.
Al término de una reunión con el Alto Comisionado para la Paz,
Luis Carlos Restrepo, el Estado Mayor negociador de las AUC anunció
su decisión de desmovilizar los grupos que operan en los Llanos Orientales. El 2 de agosto el Presidente de la República había solicitado la
inmovilización inmediata de dichos grupos.
ANUNCIO DE DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE NORTE
Mediante el comunicado del 12 de agosto de 2004 y la declaración
del 7 de octubre, denominada “Acto de fe por la paz”, las AUC reiteraron su voluntad de desmovilización, abriendo paso a una serie de desmovilizaciones colectivas que se iniciaron el 25 de noviembre en Turbo,
con la entrega de armas del Bloque Bananero. El 10 de diciembre de
2004 se desmovilizó Salvatore Mancuso en el corregimiento Capo Dos
del municipio de Tibú, al frente del Bloque Catatumbo, iniciándose un
proceso de desarmes colectivos que se extendieron hasta el 11 de abril
de 2006.
En un comunicado público, las AUC anunciaron además su “disponibilidad inmediata para concentrar y desmovilizar el Bloque Norte de
las Autodefensas”, que opera en la costa caribe colombiana.
190
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
La Presidencia de la República publicó en su página web el comunicado expedido por el estado mayor negociador de las AUC, cuyo texto
completo es el siguiente:
El estado mayor negociador de las Autodefensas Unidas de Colombia informa:
1. De acuerdo con el documento firmado el 15 de julio de 2003, las
autodefensas que operan en la región de los Llanos Orientales,
al mando de los comandantes Miguel Arroyave, Pablo Mejía y
Guillermo Torres, procederán a la concentración y desmovilización de las tropas, como primer paso al proceso de reinstitucionalización del Estado, anunciado por el señor Presidente de la
República.
2. Para cooperar con los esfuerzos del Gobierno Nacional, en el
propósito de darle continuidad al proyecto piloto de reinstitucionalización pública, anunciamos la disponibilidad inmediata
de concentración y desmovilización del Bloque Norte, al mando
de los comandantes Salvatore Mancuso, “Jorge 40”, “Diego Vecino”, “Ramón Mojana” y “Camilo Catatumbo”, y del Bloque
Bananero, al mando del comandante “Hernán Hernández”.
3. Igualmente, los restantes bloques de las Autodefensas Unidas de
Colombia expresan su decidida voluntad de contribuir con los
procesos de recuperación institucional impulsados por el Gobierno Nacional y ratificados por las Autodefensas Unidas de
Colombia en los acuerdos de Santa Fe de Ralito.
4. Reafirmamos ante el país y el mundo nuestra firme posición de
paz y reconciliación.
Santa Fe de Ralito, agosto 12 de 200463.
63
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
191
LIBERACIÓN DE TODOS LOS SECUESTRADOS
El 23 de agosto de 2004 el Gobierno Nacional, por intermedio del
Ministro del Interior y de Justicia, Sabas Pretelt de la Vega, dijo que estaba dispuesto a proceder al Intercambio Humanitario de prisioneros de
las FARC por políticos, soldados y policías retenidos por esa organización, siempre y cuando las FARC estuvieran dispuestas a aceptar unas
condiciones mínimas en relación con las personas que fueran liberadas
por parte del Gobierno.
La semana anterior el Gobierno Nacional había manifestado su disposición de excarcelar a entre 50 y 60 miembros de las FARC que estuvieran presos por el delito de rebelión, a cambio de que esa guerrilla
liberara a políticos y miembros de la fuerza pública en su poder.
El 20 de agosto las FARC publicaron en su página electrónica una
comunicación de siete puntos en la cual insistían en que la propuesta del Gobierno carecía de realismo y seriedad, pues no había habido
discusión entre las partes sobre las condiciones en que los canjeables
deberían ser liberados.
El lunes 30 de agosto el Ministro del Interior y de Justicia, Sabas
Pretelt, se refirió a la aceptación por parte de las FARC de que el Alto
Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, fuera designado como interlocutor para discutir acerca de un posible Intercambio Humanitario.
Las FARC, por intermedio de su vocero, Raúl Reyes, respondieron
así las últimas declaraciones del Comisionado de Paz, quien dijo que él
era la persona indicada por el Gobierno Nacional para cualquier tipo
de negociación con los grupos alzados en armas. Raúl Reyes manifestó
que la negociación debería ser directa, no a través de internet, como se
había sugerido en algún momento por el propio Comisionado de Paz.
El ministro Pretelt de la Vega dijo haber recibido el mensaje pero
que era necesario hacer una evaluación cuidadosa del mismo, porque
no era un mensaje de esos comunes y corrientes que sacan las FARC
y que usualmente el Gobierno no suele contestar, sino que era ya una
aceptación para unas conversaciones acerca de un posible Acuerdo
Humanitario. “Esto es un avance. El Gobierno siempre ha tenido un
vocero, hemos estado con la disponibilidad de avanzar en el Acuerdo
192
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Humanitario con unas condiciones mínimas; si las acepta puede esto
tener un buen final”, aseveró Pretelt.
El funcionario señaló que habría que ver cómo se daba y dónde,
un encuentro con los tres negociadores designados por las FARC, pero
señaló que el Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, se pronunciaría al respecto.
“Yo creo que es un paso positivo, pero empezar a hablar de zonas
desmilitarizadas y asuntos de esta naturaleza para poder adelantar
conversaciones, es lo que hay que mirar con mucho detenimiento”,
afirmó Sabas Pretelt.
La FARC en su comunicado insistieron en que necesitaban zonas
desmilitarizadas para efectuar un encuentro cara a cara. La declaración
la hizo Raúl Reyes, vocero de esta agrupación guerrillera, a la periodista
Patricia Uribe, del noticiero de fin de semana Noticias Uno, quien lo
entrevistó personalmente.
Al rechazar el internet como vía para negociar el acuerdo, el jefe
guerrillero adujo que no discutirían el tema ni a escondidas ni fuera de
Colombia, y que se requerían sitios desmilitarizados. Habló de varios,
no de uno solo. “De que sea el señor Restrepo no solo como alto comisionado, sino como el vocero, será para que él también rubrique
el acuerdo y todo eso, entonces, necesita de una zona. La zona que
se requiere para que se puedan encontrar el representante del Gobierno con los voceros nuestros”, dijo Reyes.
El Comisionado de Paz había dicho que él era el negociador para
el Acuerdo Humanitario, que en pleno siglo XXI era factible utilizar el
internet para concretar una negociación de esta naturaleza y que Suiza
sería el nuevo canal de facilitación en este tramo, mientras que la Iglesia
pasaría a ejercer un apoyo espiritual.
Sobre este punto, las FARC dijeron que agradecían el papel facilitador de los prelados, pero que evidentemente el tema tenía que concretarse directamente entre las partes. Por eso, Reyes descartó que el papel
facilitador fuera asumido por Suiza, pues anotó que aunque agradecía
estos buenos oficios, eran las partes las que debían entrar a definir el
193
tema. “Eso le corresponde solamente al Gobierno colombiano y a
las FARC-EP”, comentó64.
SUECIA ACOMPAÑA A LA OEA EN LA VERIFICACIÓN
DEL PROCESO CON LAS AUC
El embajador saliente de Suecia, Olof Skoog, ofreció una explicación a la presencia de un delegado sueco para colaborar con la OEA
en la verificación del proceso de paz entre el gobierno colombiano y las
AUC. Suecia fue uno de los países que Víctor G. Ricardo, como Comisionado de Paz, y Raúl Reyes, entre otros guerrilleros de las FARC,
visitaron para conocer el modelo de desarrollo vigente en ese país.
El diario El Tiempo entrevistó al embajador Olof. El siguiente es el
texto del reportaje:
El Tiempo: Europa tiene temores frente al proceso. ¿No los
comparte?
Olof Skoog: tengo sentimientos mixtos de esperanza y miedo.
Esperanza de que si esto va bien, es bueno para el país. Los mejoramientos de algunos índices de Derechos Humanos son gracias
al cese de hostilidades parcial de grupos paramilitares. El miedo
es que el costo sería muy alto en cuanto a impunidad y al riesgo
de que ese fenómeno cambie de figura, pero no desaparezca.
El Tiempo: ¿Por qué no nos explica esa presencia sueca?
O.S.: No es una presencia sueca. Estamos aquí con una cooperación bastante importante cada año para promover los Derechos
Humanos y la paz del país. Ahora, vemos que el único proceso
que se ha movido un poquito es este con los paramilitares, que
para mí es más proceso jurídico, que uno político. ¡Claro! Falta
transparencia, faltan estrategias y muchas definiciones, pero sería
una lástima si no se avanza de una buena manera.
El Tiempo: ¿Cómo funcionará el mecanismo?
64
Op. cit. 31, agosto, 2004.
Op. cit. [en línea], agosto 2004. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
194
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
O.S.: hemos decidido apoyar a la OEA, a pesar de que no somos miembros de esta organización. Queremos que esta misión
tenga éxito.
E. T.: en la práctica, ¿cómo recibirá la OEA este apoyo?
O.S.: estamos en contacto casi permanente con el señor Sergio
Caramagna, escuchando las necesidades que él tiene. Nos preocupa que muchos de los países miembros de la OEA no se han
metido en ayuda concreta, pero entiendo que es porque hay falta
de precisiones. Hemos decidido apoyar con una persona que podría fortalecer las actividades de la OEA.
E.T.: ¿haciendo visitas sobre el terreno?
O.S.: sí.
E.T.: ¿presentando informes?
O.S.: a nosotros no. Aunque es sueco, es prestado a la OEA.
E.T.: ¿por qué cree que en el Caguán los temas de justicia,
verdad y reparación nunca se trataron?
O.S.: en el Caguán no hubo muchas definiciones. Es bueno
recordar que la generosidad del gobierno de Pastrana no fue una
idea de la comunidad internacional. Me sorprende que el comisionado nos acuse en su discurso de ir allá para hacernos fotos.
Nuestro mensaje hacia las FARC fue siempre muy duro en cuanto a liberar a secuestrados y no atacar a la población civil. No fue
nada amistoso en cuanto a compartir ideas revolucionarias.
E.T.: se va del país luego de tres años. ¿Qué fue lo que más le
impresionó?
O.S.: para un extranjero es surrealista la realidad colombiana
cuando uno ve la tremenda sofisticación del arte de la política
aquí en Bogotá y el tremendo contraste con la realidad y urgencias del país, miseria y víctimas del conflicto, entre otros. Es como
195
si hubiera un debate que no está metido en las realidades. Se discute el número de desplazados, pero no cómo hacer para ayudar
a esta gente. Y me sorprende que los políticos no entiendan la
urgencia de esos asuntos.
E.T.: ¿ve posibilidades de una salida negociada con la guerrilla luego de este fracaso?
O.S.: en el Caguán nunca empezó la negociación. Faltó voluntad política, sobre todo de las FARC, de hacer concesiones reales.
Pero no se puede tomar esta mala experiencia como ejemplo de
que cada negociación está predestinada a fracasar. También es
equivocada la simplificación de ver el problema como narcoterrorismo atacando a la democracia perfecta colombiana.
E.T.: ¿el concepto de Europa frente a las FARC ha cambiado?
O.S.: ha cambiado mucho. No es nada cierto que sean considerados como Robin Hood. A través de sus actuaciones de terror,
han perdido mucha credibilidad. No se acepta la violencia como
instrumento político.
EL ASESINATO DE MIGUEL ARROYAVE
El 21 de septiembre de 2004 se conoció la noticia acerca del asesinato de Miguel Arroyave, identificado como “Arcángel”, comandante del
llamado Bloque Centauros que operaba en el departamento del Meta.
El señor Arroyave había abandonado la zona de ubicación en Santa Fe
de Ralito con autorización del Gobierno, según lo corroboró el Alto
Comisionado de Paz.
La muerte de Miguel Arroyave, ocurrida en Puerto Lleras, Meta, era
el segundo asesinato de un negociador de las autodefensas en lo que iba
corrido del año, luego de la desaparición de Carlos Castaño en abril del
mismo año 2004.
Arroyave fue víctima de un ataque con cohetes en la inspección Casibare, cuando se desplazaba con otras cuatro personas en dos vehículos,
según el reporte entregado por el Director del CTI Seccional Villavicencio, José Castañeda.
196
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Las autoridades lograron identificar además a dos de las víctimas:
Juan Albeiro Londoño Alcántara, alias “Lucas”, al parecer encargado
de las finanzas de la organización, y Nelson Parra Sarmiento, escolta.
La explicación del Gobierno sobre por qué Arroyave se hallaba fuera
de Ralito la entregó la oficina del comisionado de paz en un comunicado en el cual aseguraba que a “Arcángel” se le había concedido un
permiso para que se desplazara al Meta, con el fin de concentrar a sus
hombres e iniciar su desmovilización inmediata.
El 28 de septiembre el presidente Álvaro Uribe reiteró su exigencia
a las autodefensas de desmovilizarse antes de diciembre de 2005, tal
como fue pactado. Agregó que se debía definir públicamente un cronograma para hacer efectiva esta desmovilización.
En el mismo comunicado, Álvaro Uribe respaldó al Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, por su labor frente al proceso y destacó
que se trataba de un patriota incorruptible.
El Alto Comisionado de Paz había comentado a la prensa que su
cargo estaba a disposición del Presidente, tras la revelación, por parte de
la Revista Semana, de una grabación donde se sostenía una acalorada
discusión en la mesa de negociación con las autodefensas, en Santa Fe
de Ralito, Córdoba.
Por su parte, el comisionado Restrepo expidió un comunicado donde aclaraba la posición del Gobierno sobre la extradición y el tema de
la discrecionalidad, que también se comentó en el Artículo de Semana.
En un aparte del comunicado el funcionario decía: “Ante las informaciones de la Revista Semana del día 26 de septiembre, donde se sugiere que el presidente Uribe, a través del comisionado, ha hecho saber
a las autodefensas que usará la facultad discrecional para no extraditarlos, me permito aclarar que jamás he recibido autorización del Presidente para decir a las autodefensas algo distinto a lo consignado en el
comunicado del 27 de abril”.
197
COMUNICADO DE LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA
El siguiente es el comunicado completo de la Presidencia de la República por medio del cual Álvaro Uribe reafirma su respaldo al Alto
Comisionado para la Paz:
1. El Presidente de la República confirma su confianza en el Alto
Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, quien es un patriota incorruptible.
2. El objetivo del Gobierno es una Colombia sin guerrilla, sin autodefensas y sin la droga que las sustenta.
3. El Gobierno no acepta presiones de las autodefensas ni de quienes, por favorecer a la guerrilla, se oponen a la negociación con
las autodefensas.
4. Se ratifica la decisión de exigir la desmovilización total de las
autodefensas antes de diciembre de 2005, según lo establecido
en el acuerdo de Santa Fe de Ralito del 15 de julio de 2003. Se
debe definir públicamente un cronograma para hacer efectiva
esta desmovilización.
5. Los delitos atroces son igual de graves, sean cometidos por autodefensas, por guerrillas o por cualquier otro grupo o persona. La
legislación nacional e internacional impide otorgar amnistías o
indultos para estos delitos. Así lo debe saber la opinión pública
y todos sus orientadores. No puede darse un tratamiento a las
autodefensas, y otro diferente a las guerrillas.
6. Los incursos en delitos atroces tienen que ir a sitios de ubicación
definidos por el Gobierno, en espera de que el Congreso defina
los instrumentos jurídicos aplicables en estos casos en el marco
de la Ley de Justicia y Reparación. Asimismo se deberá establecer una pena mínima privativa de la libertad en un centro de
reclusión.
7. El Gobierno ratifica la exigencia a las autodefensas de los Llanos
de hacer efectiva su desmovilización inmediata. Se definirá un
sitio de ubicación para los cabecillas desmovilizados.
198
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
8. Las Fuerzas Armadas continuarán en la lucha heroica para devolverle la paz a la Nación. Son inaceptables las alianzas con
unos sectores de la delincuencia en contra de otros sectores de la
delincuencia.
9. La política del Gobierno frente a la extradición quedó definida
en el comunicado emitido por la Presidencia de la República el
27 de abril de 2004: “a extradición no puede entenderse como
una norma de derecho interno generadora de actitudes nacionalistas en su contra. Es una norma de derecho internacional que
le permite a otro país castigar a quienes cometan ofensas contra
sus nacionales. Si se prohíbe la extradición, Colombia sufrirá los
rigores del descrédito internacional. La extradición no es tema
de negociación. Quienes quieran evitarla, deben demostrar a la
comunidad internacional su buena fe y propósito de enmienda”.
Bogotá, septiembre 27 de 2004
COMUNICADO DEL ALTO COMISIONADO PARA LA PAZ
El Alto Comisionado para la Paz informa a la opinión:
1. Que el día 27 de abril de 2004 el señor Presidente de la República
fijó de manera pública, mediante comunicado expedido por la
Casa de Nariño, su posición frente al tema de la extradición.
2. En el mencionado comunicado se dice de manera expresa: “La
extradición no puede entenderse como una norma de derecho
interno generadora de actitudes nacionalistas en su contra. Es
una norma de derecho internacional que le permite a otro país
castigar a quienes cometan ofensas contra sus nacionales. Si se
prohíbe la extradición, Colombia sufrirá los rigores del descrédito internacional. La extradición no es tema de negociación.
Quienes quieran evitarla, deben demostrar a la comunidad internacional su buena fe y propósito de enmienda”.
3. Ante las informaciones de la Revista Semana del día 26 de septiembre, donde se sugiere que el presidente Uribe, a través del
comisionado, ha hecho saber a las autodefensas que “usará la
facultad discrecional para no extraditarlos”, me permito aclarar
199
que jamás he recibido autorización del Presidente para decir a
las autodefensas algo distinto a lo consignado en el comunicado
del 27 de abril.
4. Cualquier referencia hecha en la mesa de diálogo al tema de la
discrecionalidad presidencial en el asunto de la extradición, ha
tenido simplemente un propósito pedagógico, de explicar ante
los miembros de las autodefensas cómo opera este mecanismo
jurídico. En ningún caso se ha tratado de llevar propuestas que
modifiquen la posición del Gobierno65.
El 26 de septiembre de 2004 el jefe de las AUC, Salvatore Mancuso, anunció que en breve regresaría a las negociaciones de paz con el
Gobierno Nacional. Así lo hizo saber el propio Mancuso durante una
reunión en Santa Fe de Ralito, en la cual estuvieron presentes varios
jefes de las autodefensas y congresistas de la república.
El senador Carlos Moreno de Caro, Vicepresidente de la Comisión
de Paz del Senado, declaró que en la reunión antes mencionada participaron la congresista Eleonora Pineda y los miembros de las AUC
Rodrigo Tovar, alias “Jorge 40”, “Ernesto Báez” y “Adolfo Paz”.
Moreno de Caro dijo que Mancuso regresaría a la mesa y se reuniría
con el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
El congresista explicó que en la reunión los jefes paramilitares concentrados en la zona de ubicación admitieron que dentro de las AUC
había fisuras por falta de contacto con sus respectivos frentes.
El Estado Mayor negociador de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, anunció que habría una desmovilización y desarme del más
grande contingente de combatientes del que se tenía historia en el país,
y señaló que era falso que el Gobierno en la mesa de negociación hubiera hecho ofrecimientos de no extraditar o de coartar los alcances de la
Corte Penal Internacional.
65
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
200
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
COMUNICADO DE LAS AUC
Las Autodefensas Unidas de Colombia, ante la campaña funesta de
varios medios de comunicación para acabar de tajo con la oportunidad
histórica de iniciar la desactivación de la guerra en Colombia a partir de
la desmovilización de nuestros principales actores, declaran:
Es absolutamente falso que el Gobierno Nacional en la mesa de negociación haya hecho ofrecimientos de no extraditar o de coartar los
alcances de la Corte Penal Internacional. El Alto Comisionado, ante
escasos requerimientos de los negociadores, solo se ha limitado estrictamente a ofrecer explicaciones que en todo se ajustan a las precisiones
que el Señor Presidente ha hecho públicamente.
Los temas de extradición, Ley de Justicia y Reparación y Corte
Penal Internacional no han sido debatidos oficialmente en la mesa ni
hacen parte de las prioridades de la agenda. Además, afirmamos categóricamente que el asunto de la discrecionalidad presidencial en estas
materias jamás se ha comprometido en la mesa. Solo se ha considerado
el alcance de los anuncios presidenciales dentro de los límites estrictos
de esos pronunciamientos y únicamente para ser aclarados.
Que la denominada expansión paramilitar hace parte de la campaña
perversa de asimilar las actuales negociaciones con el malogrado proceso del Caguán. No existe ni tiene por qué existir prueba alguna de
ingreso de armamento al país en los últimos 18 meses que evidencien
propósito de expansionismo. Por el contrario, no hay antecedentes en
nuestra historia de la intensa acción militar del Estado contra nuestra
organización como ahora. Esta ha provocado la eliminación, captura,
neutralización o el repliegue de nuestras tropas de extensas regiones del
país.
Expresamos el más enérgico rechazo contra la afirmación infame según la cual el señor Diego Montoya compró un supuesto bloque llamado “Héroes de Rionegro”. Ni ese bloque existe ni tenemos relación con
el mencionado señor. Esta aseveración hace parte del infame repertorio
montado para desacreditarnos ante la comunidad internacional.
La feroz saña contra el proceso no puede llegar al extremo protervo
de sindicar al Estado Mayor negociador del cobarde asesinato del co201
mandante Miguel Arroyave, como lo han dejado entrever algunos medios. No es posible construir la paz en medio de tanta vileza.
Dentro del cronograma acordado con el Gobierno Nacional, en la
actualidad adelantamos todos los ajustes para la desmovilización y desarme del más grande contingente de miembros de organizaciones irregulares de que se tenga noticia en la historia del país.
Si bien es cierto que respetamos en el marco de las potestades de la
prensa libre el derecho de los medios de otorgarles a las distintas fuentes
de información las interpretaciones, conceptos y lecturas que juzguen
acertados o convenientes para sus intereses, no nos niega nuestro derecho a rechazar, por tendenciosas o falsas, afirmaciones o conjeturas que
le hacen mucho daño al país, como en el caso de hoy cuando las grabaciones que dicen estar en posesión de algunos medios de comunicación
fueron manipuladas y perversamente editadas.
Una vez más invitamos a los columnistas y periodistas, a críticos
y políticos y demás orientadores de opinión para que entablemos en
Ralito un diálogo amplio y franco que permita disipar dudas y aclarar
conceptos desde el escenario mismo de los hechos66.
El 7 de octubre de 2004, de manera por demás sorpresiva, los comandantes de las AUC Salvatore Mancuso y “Ernesto Báez” anunciaron
la desmovilización de 3 000 de sus hombres antes del 31 de diciembre
de 2004. Esta sería sin lugar a dudas la desmovilización más grande
de combatientes ilegales de que se tuviera noticia en nuestro país. Este
anuncio se conoció al final de una reunión efectuada en Santa Fe de
Ralito entre el comisionado de paz y los jefes de las AUC.
“A partir del 3 de noviembre próximo iniciaremos una etapa de
desmovilización de tropas hasta completar un número no menor de
3 000 combatientes antes de finalizar el año”, decía el comunicado de
tres páginas firmado por Mancuso y “Ernesto Báez”.
Según el documento, la desmovilización se haría “de manera unilateral, sin exigir la más mínima contraprestación o condicionamiento.
66
COLOMBIA LIBRE. [en línea]. Disponible en Internet: wwwcolombialibre.org.
202
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Nos basta la confianza y credibilidad que tenemos ante la nación y el
mundo”, decían las AUC.
Por su parte, el comisionado Restrepo emitió un comunicado en el
que expresaba su beneplácito por la propuesta y explicaba que se la
entregaría de inmediato al presidente Álvaro Uribe y esperaba “en muy
pocos días, tener un estudio detallado de esta propuesta, para regresar
a la mesa y entonces sí, de manera definitiva, anunciarle al país de qué
manera se iba a poner en práctica esa decisión del las autodefensas”.
No se dieron los detalles sobre zonas y bloques que se proponían desmovilizar. Esos datos se mantendrían en reserva hasta tanto la oficina del
alto comisionado de paz se pronunciara al respecto, decía el comunicado.
Algunas versiones indicaban que dejarían las armas hombres de los
bloques Vencedores de Arauca, Bananeros y el Catatumbo.
A este acuerdo se llegó tres meses después de instalada la zona de
ubicación en Santa Fe de Ralito, el 1 de julio. El compromiso de las
AUC con el Gobierno era tener desmovilizados todos sus hombres, que
ellos mismos calculaban en 20 000, en diciembre del 2005.
En noviembre de 2003 se desmovilizaron 870 hombres del bloque
Cacique Nutibara del área de Medellín. La oferta de las autodefensas
fue calificada por ellos mismos como “un gesto de grandeza con la patria, de honestidad con el país, de franca seriedad ante el Gobierno y de
sinceridad frente a la comunidad internacional”, según ellos, “en medio
de enormes dificultades e incomprensiones”67.
El Alto Comisionado Para la Paz recibió con beneplácito la propuesta de desmovilización de 3 000 hombres de las Autodefensas Unidas
de Colombia antes de terminar el año, los cuales comenzaron a dejar
las armas a partir del 3 de noviembre de 2004, y así lo declaró el funcionario luego de una reunión con representantes de las AUC, quienes
presentaron un cronograma de desmovilización con fechas y cifras que
terminaría a finales de 2005, tal como lo señala el acuerdo de Santa Fe
de Ralito del 15 de julio de 2003.
67
Op. cit. [en línea], octubre 2004. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
203
DECLARACIÓN DEL ALTO COMISIONADO PARA LA PAZ
El siguiente es el texto completo de la declaración entregada por el
Alto Comisionado para la Paz:
El Gobierno recibe con beneplácito y esperanza esta decisión de las
Autodefensas Unidas de Colombia. Resaltamos el hecho significativo
de desmovilizar, antes de que termine el presente año, un número no
menor de 3 000 miembros de las autodefensas, y de entregar simultáneamente con esta desmovilización un cronograma completo que dé
cuenta de los pasos a seguir para la desmovilización total de frentes de
las autodefensas antes de finalizar el 2005, tal como está pactado en el
acuerdo de Santa Fe de Ralito, el 15 de julio de 2003.
He recibido el día de hoy el cronograma detallado sobre frentes, fechas y número de hombres que se desmovilizarían a partir del 3 de
noviembre. Entregaré esta propuesta, el día de mañana, al señor Presidente de la República y de manera inmediata empezará a ser estudiada
por el alto Gobierno.
Esperamos en muy pocos días, Dios mediante la semana entrante,
poder tener ya un estudio detallado de esta propuesta, para regresar a
la mesa y entonces sí, de manera definitiva, anunciarle al país de qué
manera se va a operativizar esa decisión de las autodefensas.
Celebro este paso. Agradezco a la Iglesia Católica, en cabeza de
monseñor Vidal, su acompañamiento, su tutoría espiritual que sigue
siendo fundamental y a la OEA, igualmente, su acompañamiento, resaltando que dentro del mandato está, precisamente, acompañar de manera detallada el proceso de desmovilización, lo cual nos da la máxima
credibilidad y confianza.
Muchas gracias.
Luis Carlos Restrepo, Comisionado de Paz68.
68
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
204
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
ENTREVISTA DE LA REVISTA SEMANA CON CARLOS
ALONSO LUCIO
El martes 19 de octubre de 2004 apareció en la Revista Semana una
extensa entrevista al ex miembro del M-19 Carlos Alonso Lucio, cuyo
texto completo reproducimos dada la importancia del mismo:
Carlos Alonso Lucio es impredecible. Primero fue guerrillero del
M-19. Después de desmovilizado, como representante a la Cámara, se
convirtió en el escudero de Ernesto Samper en la crisis del proceso 8
000. Luego, huyendo de la justicia que lo buscaba por estafa y falsa
denuncia, se refugió en Cuba, donde entabló una estrecha relación con
el ELN, organización que le ayudó a entrar clandestinamente al país.
Estando en el campamento central de esa guerrilla, se ofreció como
mediador para un acuerdo de paz entre los elenos y las autodefensas.
Fue así como llegó al campamento de Carlos Castaño, quien, para
sorpresa suya, decidió secuestrarlo. Después de versiones según las
cuales habría sido asesinado, finalmente fue liberado y se entregó a la
Corte Suprema de Justicia. En la cárcel se convirtió al cristianismo. Al
recobrar la libertad, cuando parecía haberse sumido en el anonimato,
regresó a la vida pública como el hombre que les habla al oído a los
jefes paramilitares en Santa Fe de Ralito. Después de meses de contacto
con las AUC, cuenta su visión sobre el futuro de la negociación con esa
organización.
Semana: ¿Cuál es su papel en esta negociación?
Carlos Alonso Lucio: soy asesor de las autodefensas en el
proceso.
Semana: ¿Contratado por quién y en qué condiciones?
C.A.L.: hace cuatro años Carlos Castaño me secuestró. En
ese momento se regó el rumor de que me habían asesinado. Eso
generó una presión que hizo que finalmente me liberara. Después
de esto recibí una carta del Estado Mayor presentándome excusas
por ese secuestro y reconociendo que yo podía ser un puente para
iniciar un diálogo.
205
Semana: ¿Entonces en esta entrevista usted es el vocero de las
autodefensas?
C.A.L.: no. Esta entrevista se hace a nombre de Carlos Alonso Lucio pero interpreta centenares de horas de conversaciones
con ellos.
Semana: entremos en materia: ¿qué opinión tiene usted del
ofrecimiento de los paras de desmovilizar 3 000 hombres a partir
de este 3 de noviembre?
C.A.L.: es una oferta que se hizo para salvar el proceso de
Santa Fe de Ralito y dotarlo de nueva confianza. Esta será la
desmovilización más grande en la historia de Colombia, medida
en hombres y fusiles. Y es excepcional porque ocurrirá no como
fruto de una negociación sino como un gesto sin ningún tipo de
contraprestación ni condicionamiento. Pero en el fondo es una
oferta simbólica. Lo importante no es que haya proceso sino que
éste tenga el rumbo correcto y un marco conceptual claro. Y esto
no se consigue desmovilizando a 3 000 hombres.
Semana: ¿Qué significa simbólica?
C.A.L.: mi preocupación es que usted puede tomar una foto
de 3 000 hombres entregando unas armas por la puerta delantera, mientras que por la puerta trasera el narcotráfico puede estar
comprando otras 3 000 armas para reclutar nuevamente a los desmovilizados. Lo único que no le falta a esa gente es plata.
Semana: ¿Qué se puede hacer para que esto no suceda?
C.A.L.: que se aborde el problema en términos realistas. No
en forma centra-lista y moralista como se ha hecho hasta ahora.
La gente de la 72 con séptima de Bogotá no tiene ni idea de lo
que ocurre en las regiones de Colombia. Y esa gente es la que está
manejando la opinión en el país.
Semana: ¿Qué quiere decir que tienen un enfoque moralista?
206
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
C.A.L.: pareciera que partimos del país que queremos y no
del que tenemos. Mientras no se aterrice en el momento histórico
que vive Colombia, no se podrá construir la paz. Esto no es entre
Gandhi y la madre Teresa de Calcuta. Es una guerra entre poderosos ejércitos irregulares, por fuera de la ley, que hoy controlan la
mitad del territorio nacional. Mientras en Bogotá consideran que
la solución es desarmar a uno de estos ejércitos, en las regiones
donde operan el problema es quién va a proteger a la población
cuando la guerrilla intente retomar el control.
Semana: pero el Gobierno ha dicho que puede garantizar la
seguridad en regiones.
C.A.L.: a corto plazo eso no es posible. No hay presupuesto. Hay escasez de pie de fuerza. El Estado tiene a sus hombres
concentrados en la ofensiva contra las guerrillas y aun para eso
se ve a gatas en la actualidad. Piense usted que el Plan Patriota es
una ofensiva con 15 000 hombres en un territorio inexpugnable,
frente a la guerrilla más curtida de América Latina. Para derrotar
a la guerrilla en El Salvador, que es un territorio de praderas del
tamaño de un solo departamento colombiano, se hizo una ofensiva parecida y se requirieron más de 40 000 hombres. ¿De dónde
va entonces a sacar el Ejército colombiano 20 000 hombres para
reemplazar a las autodefensas?
Semana: suena apocalíptico ese panorama.
C.A.L.: sería mucho más apocalíptico si se desmovilizan las
autodefensas, abandonan las regiones y el Estado no cumple con
una protección efectiva. De inmediato las guerrillas se tomarían
esas zonas, con el agravante de una venganza generalizada que
produciría ríos de sangre.
Semana: ¿Usted qué propone?
C.A.L.: que los 20 000 hombres que están armados y uniformados sean entregados directamente a las Fuerzas Armadas
para que, con mandos de la institucionalidad del país, asuman el
control de esa fuerza y se les retire el control a los ilegales. Que los
patrulleros de las autodefensas se conviertan en soldados.
207
Semana: ¿Usted cree que las Fuerzas Armadas y la opinión
pública aceptarán a tantos criminales en sus filas?
C.A.L.: es necesario entender la diferencia entre un guerrillero y un patrullero de las autodefensas. El guerrillero dice “yo milito en las FARC”. El patrullero dice “yo trabajo con las AUC”.
No es un convencido ideológico sino parte del mercado laboral
de la violencia. Por eso es mejor recogerlos que dejarlos en ese
mercado donde seguramente se venderán al mejor postor.
Semana: ¿Cómo se controlarían esos 20 000 mercenarios?
C.A.L.: aclaro que mercenarios es una palabra de ustedes, no
mía. Pero no quiero entrar en debates semánticos. En primer lugar hay que entender que no son 20 000 de un solo golpe. Serían
desmovilizaciones graduales. En toda fuerza armada, legal o ilegal, los soldados, patrulleros o guerrilleros les cumplen órdenes a
los jefes. Y esta vez los jefes serán los oficiales y suboficiales del
Ejército. Ningún mando paramilitar heredará rango institucional
militar. Los patrulleros serán distribuidos por todo el territorio
nacional a discreción de las Fuerzas Militares.
Semana: ¿Serían reentrenados?
C.A.L.: es indispensable que estas personas entren en un proceso de reentrenamiento bajo el mando de los militares y el apoyo
profesional de sicólogos, sociólogos, expertos en Derechos Humanos. Como dije antes, estas personas no tienen compromiso
ideológico. Tienen un problema de empleo y un conocimiento
de las armas. Con todo realismo, creo que el único camino para
que ellos avancen hacia una reinserción social e institucional y no
queden expuestos al reclutamiento del crimen organizado es que
sigan ejerciendo su experiencia armada, esta vez bajo el mando
de la Constitución, la ley y el Estado.
Semana: ¿Está el país preparado para ver a los paras como
soldados?
C.A.L.: Sobre la decisión política se construye la carpintería jurídica. No necesariamente tienen que ser soldados si esto
208
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
genera resistencia. Se puede pensar en la creación por ley de
una guardia rural o cualquier otra fórmula que se ajuste a la
decisión. Lo único importante es que sea bajo el mando de las
Fuerzas Armadas.
Semana: ¿Y qué pasaría con Mancuso, “Don Berna”, Báez y
los otros jefes?
C.A.L.: no nos engañemos: ellos no están en la mesa de Santa
Fe de Ralito para que los extraditen. Si la meta es esa, no habrá
negociación. Eso sería un escenario totalmente diferente.
Semana: ¿Estarían dispuestos a ir a la cárcel en Colombia?
C.A.L.: ellos lo único que esperan es un tratamiento equiparable al que recibirían las guerrillas. Si “Marulanda”, el “Mono
Jojoy” y “Gabino” van a terminar en la cárcel, los jefes de las autodefensas aceptan cárcel. Lo que no aceptan es que se esté pensando en un indulto para la guerrilla, mientras la oferta para ellos
sería extradición y cárcel. O todos en la cama o todos en el suelo.
Semana: deja usted claro que no cree en la cárcel para las AUC.
C.A.L.: estoy convencido de que partiendo del presupuesto
de la cárcel nunca empezará una negociación política con la guerrilla. ¿Por qué pensar entonces que los jefes paramilitares deben
ir a prisión? No creo que la cárcel sea ni buena ni mala. Lo que
pienso es que es inútil y que se pueden hacer cosas más productivas con los jefes de las AUC que tomarles una foto con pijama
de rayas.
Semana: ¿Cómo qué?
C.A.L.: por ejemplo, comprometerlos en las zonas que ellos
controlan con la más grande y eficiente erradicación de cultivos
ilícitos.
Semana: ¿Y usted cree que alguien se come ese cuento?
209
C.A.L.: entonces invitemos a los norteamericanos para que
ellos supervisen directamente ese compromiso con cifras, metas
y medición de resultados. Así como los patrulleros rasos tendrían
que rendirles cuentas a los oficiales de las Fuerzas Militares, los
jefes de las AUC deberán rendírselas a la DEA o a quien el Gobierno norteamericano decida.
Semana: pero los gringos no van a levantar las solicitudes de
extradición...
C.A.L.: los norteamericanos no son tontos. Son prácticos y
expertos en negociación. Ellos no quieren meter a Mancuso a
la cárcel para que pague por sus pecados sino porque creen que
con ello se combate el narcotráfico. Ellos tienen que entender que
Mancuso, ‘Jorge 40’, ‘Don Berna’ y los otros jefes de las AUC son
más útiles liderando el proceso de erradicación de cultivos ilícitos
bajo la supervisión del Gobierno de Estados Unidos, que en Miami, presos, comiendo por cuenta del erario de ese país.
Semana: ¿Cómo sería esa erradicación?
C.A.L.: primero lo harían desde el conocimiento absoluto de
las zonas donde se produce la coca. Nadie más que ellos conoce
esas regiones. Segundo, lo harían acompañados por los equipos
designados por los gobiernos colombiano y norteamericano. Tercero, es imperioso hacerlo desde proyectos que sean verdaderas
alternativas para quienes hoy viven de la coca.
Semana: su propuesta sorprende. ¿Es un hecho que ellos están
dispuestos a ponerse bajo las órdenes del Gobierno de Estados
Unidos para erradicar los cultivos ilícitos?
C.A.L.: Es un hecho que estos planteamientos son estudiables en Santa Fe de Ralito. Y se puede ir mucho más lejos.
Existe la disposición de ellos de entregar grandes extensiones de
tierras cultivables en distintas regiones del país. También están
dispuestos a entregar los recursos necesarios para que estas tierras
puedan ser explotadas. Ellos creen que en Colombia se pueden
crear nuevas vocaciones económicas. Han estudiado el caucho, la
palma, el cacao, los maderables y la producción de alimentos en
210
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
general. También han estudiado formas asociativas en las que los
habitantes de las regiones no serían solamente asalariados sino
socios de estos proyectos.
Semana: suena tan perfecta esa propuesta que deja de ser creíble.
C.A.L.: no. Lo que ocurre es que quienes se empeñan en un
proceso desde el ángulo centralista y moralista en mi opinión incurren en una miopía. Este proceso de paz puede convertirse en
un punto de quiebre para el desarrollo de las regiones en Colombia y beneficiar a más de un millón de personas. Para mí eso tiene
mucho más valor que la fotografía de diez tipos detrás de una reja.
Semana: da la impresión de que estos señores están ofreciendo
una utopía para que no los extraditen ni les extingan los bienes.
C.A.L.: lo que es una utopía es pensar que es fácil la extinción de dominio en las zonas rurales de Colombia. Si con Pablo
Escobar muerto ha tomado casi 20 años extinguir el dominio
del edificio Monaco, símbolo del poder del capo, en pleno centro de Medellín, imagínense ustedes lo que será determinar qué
es de quién en Córdoba, el Magdalena Medio, sur de Bolívar,
Cesar y hasta la Orinoquia. Mucho más realista es escucharles
a ellos su propuesta de entregar enormes extensiones de tierras
cultivables y cuantificar los recursos que estarían dispuestos a
invertir. Como dije anteriormente, todo ese proceso sería bajo la
supervisión del Gobierno colombiano, del norteamericano y de
la comunidad internacional.
Semana: y asumiendo que se llegue a un acuerdo sobre todos
los puntos mencionados por usted, ¿qué pasa si no se cumple con
lo acordado?
C.A.L.: si existe evidencia de mala fe, que los metan a la cárcel o que los extraditen. En otras palabras, si la erradicación es
un engaño y alguien de las AUC sigue en el negocio, que le caiga
todo el peso de la ley.
Semana: pero su propuesta en el fondo es una apología a la
impunidad de crímenes atroces.
211
C.A.L.: lo único que yo sé es que en un proceso de paz debemos preocupamos más por los vivos del presente y del futuro que
por los muertos del pasado. ¿Ustedes qué creen que le conviene
más a Colombia: lo que yo he planteado en esta entrevista, o tener a los jefes de las autodefensas en las cárceles norteamericanas, dejar 20 000 desempleados violentos a merced de cualquier
contratista, y la guerrilla en guerra a muerte por reconquistar las
regiones donde las AUC se desmovilizaron?
Semana: Pablo Escobar hizo propuestas similares y nunca fueron aceptadas.
C.A.L.: no confundamos. Pablo Escobar fue un narcotraficante que vivió para el dinero. Las autodefensas son el fruto de
grandes ausencias del Estado en las regiones de Colombia, y por
lo tanto no son una organización narcotraficante, sino un ejército
irregular con razones políticas, aunque también se haya financiado con dineros del narcotráfico. Es preciso tener mediana claridad de que en Santa Fe de Ralito no se está ejerciendo ningún
tipo de chantaje contra el Estado o la sociedad colombiana. Allí
nunca se ha dicho que se atentaría contra la vida de ciudadanos,
ministros, jueces o candidatos a cambio de beneficios. Santa Fe
de Ralito no es una trinchera de amenazas sino un escenario donde se buscan sincera y afanosamente soluciones para Colombia.
Semana: ¿Usted ha hablado sobre esto con el comisionado
Luis Carlos Restrepo?
C.A.L.: no, estos temas no los he conversado con él. Pero
me parecería muy interesante que recibiera estos planteamientos
como una contribución a la negociación que el Presidente y él
conducen y lideran. Yo siento a Uribe y a Luis Carlos como personas serias y bien intencionadas que se tropiezan con el muro
de la incomprensión y la estigmatización. Si nos cuesta trabajo
interpretar los conflictos regionales a quienes llevamos más de
25 años viviéndolos, cómo será los que los miran desde la 72 con
séptima en Bogotá o desde una oficina en Washington.
212
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: asumiendo que se haga lo que usted propone, ¿cuál
sería la posición de las FARC cuando los paras estén integrados al
Ejército, y los jefes, bajo la supervisión de la DEA?
C.A.L.: así como el Gobierno de Estados Unidos no es tonto,
tampoco lo son las FARC. Acuérdense de que una de las principales razones por las cuales fracasó el proceso de paz de Andrés Pastrana fue porque las FARC y el ELN exigieron la liquidación del
paramilitarismo antes de iniciar cualquier negociación en firme.
El paramilitarismo siempre ha sido la obsesión de esas dos guerrillas, y en el fondo la propuesta que estoy presentando equivaldría
a su desmonte. Obviamente, el Ejército quedaría enormemente
fortalecido. Y a la guerrilla le quedaría muy difícil reconquistar
esas regiones. En esas condiciones es más factible iniciar un proceso de paz con ellos, que en cualquier otra circunstancia. No se
engañen, aquí todo el mundo quiere la paz, hasta las FARC.
Semana: usted es un ex guerrillero del M-19 y hasta hace poco,
un hombre de izquierda. Todo lo que está proponiendo es lo contrario de lo que reclama la izquierda en Colombia hoy. ¿Acaso las
personas que critican un posible indulto a las AUC no conocen la
realidad regional?
C.A.L.: la dignidad nacional es acabar con la guerra. Lo
único que estoy haciendo es recoger las tesis de Jaime Bateman,
quien fue el primero que propuso dialogar con todos los actores del conflicto. Y de Carlos Pizarro cuando propuso en Santo
Domingo, Cauca, la negociación política con las autodefensas de
Puerto Boyacá. Si este proceso otorga beneficios judiciales a cambio de la sola desmovilización de fusiles y hombres, a mi juicio
es un proceso de impunidad. Le habría hecho un conejo social al
pueblo colombiano. Lo importante es que se convierta en un proceso de desarrollo, con tierras para quienes han sufrido la guerra.
Semana: ¿Usted de corazón cree que esa propuesta puede
ser aceptada?
C.A.L.: no sé si lo sea. Pero si lo es, podría ser el inicio de la
verdadera paz en Colombia. Este proceso puede marcar un importante salto social en las regiones. La paz del Frente Nacional
213
fue la del cogobierno. La de los noventa con el M-19 y los demás
grupos fue la paz del pluralismo. Esta podría y debería ser la paz
de las regiones69.
CARTA DEL ALTO COMISIONADO AL NUNCIO APOSTÓLICO SOBRE MEDIACIÓN CON LAS FARC
El 29 de octubre de 2004 se conoció una comunicación enviada por
el Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, a Monseñor Beniamino Stella, Nuncio de Su Santidad el Papa Juan Pablo II en Colombia.
El siguiente es su texto:
Bogotá, 28 de octubre de 2004
Monseñor
Beniamino Stella
Nuncio apostólico de Su Santidad
Excelencia:
El Gobierno colombiano agradece los esfuerzos realizados por la
Iglesia Católica en la búsqueda de un Acuerdo Humanitario que nos
permita liberar a las personas secuestradas por las FARC, de tal manera
que retornen pronto a sus hogares.
Ante usted, señor Nuncio, el Gobierno ratifica su disposición para
adelantar un acuerdo humanitario en los términos expresados al Gobierno de Suiza el 23 de julio de este año y hechos públicos el pasado
18 de agosto:
“El Gobierno libera de acuerdo con las leyes colombianas y de
manera unilateral 50 guerrilleros procesados o condenados por rebelión, a los cuales se les ofrece una alternativa para su incorporación a la sociedad. Se ofrecen dos posibilidades: viajar al extranjero
o adelantar su proyecto en Colombia en el programa de reinserción
del Gobierno Nacional. Estas alternativas se adelantarán bajo la
garantía de Francia y la iglesia colombiana.
69
Op. cit. Bogotá. Octubre de 2004, edición 1172.
214
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Acto seguido, la guerrilla libera a los secuestrados políticos y a
los miembros de la fuerza pública en su poder. Para su liberación se
contará con el apoyo de Suiza, Francia y el CICR”.
Para avanzar en la concreción de este acuerdo de voluntades, el Gobierno Nacional propone el siguiente procedimiento:
1. Reiterando su palabra empeñada, el Gobierno libera 15 guerrilleros que estén en las cárceles por el delito de rebelión.
2. Acto seguido la guerrilla libera, como prueba de buena voluntad,
un número similar de personas secuestradas en su poder.
3. De manera inmediata se procede a una reunión con las FARC
en una embajada en Bogotá. Podría ser la sede de la Nunciatura
Apostólica de Colombia.
4. La reunión se adelantará por un tiempo no mayor de cinco días,
con el único propósito de perfeccionar el acuerdo.
5. El transporte de los miembros de las FARC a Bogotá y su regreso
se adelantará por cuenta de la Cruz Roja Internacional, con el
apoyo de la Iglesia Colombiana.
6. No se suspenderán acciones militares en ninguna parte del territorio nacional.
Excelencia: de ser aceptada esta propuesta, esperamos contar con su
valiosa colaboración para sacar adelante este nuevo esfuerzo por aliviar
el sufrimiento de los secuestrados y sus familias.
Atentamente,
(Fdo.) Luis Carlos Restrepo Ramírez70
70
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
215
RESPUESTA DE LAS FARC
El domingo 7 de noviembre de 2004, las FARC, en una comunicación que hicieron llegar al noticiero de televisión Noticias Uno, rechazaron la propuesta del presidente Álvaro Uribe.
En su comunicación, las FARC manifestaron que sus voceros estarían listos a hablar con el Gobierno en los términos de la comunicación que esa organización envió el 14 de septiembre a los ex presidentes
Alfonso López Michelsen y Ernesto Samper Pizano, y exigían al Gobierno despejar de nuevo los municipios de San Vicente del Caguán y
Cartagena del Chairá como condición para iniciar negociaciones sobre
un eventual Acuerdo Humanitario para liberar a personas retenidas por
esa organización.
RECONOCIMIENTO DE REPRESENTANTES DE LAS AUC
El miércoles 3 de octubre de 2004 el Gobierno Nacional reconoció
la calidad de miembros representantes de las Autodefensas Unidas de
Colombia a los señores Salvatore Mancuso, Iván Roberto Duque Gaviria y Ever Veloza García, quienes participaban en las negociaciones en
Santa Fe de Ralito.
El Alto Comisionado Para la Paz, Luis Carlos Restrepo, hizo este
anuncio durante una conferencia de prensa en Santa Fe de Ralito en la
que se informó de manera oficial que serían 11 los bloques de esa agrupación ilegal armada que dejarían las armas.
Los miembros del grupo negociador tendrían libertad para trasladarse libremente por el territorio nacional a fin de organizar la desmovilización de alrededor de 3 000 hombres de las AUC antes del 31 de
diciembre de 2004.
El Alto Comisionado de Paz informó que se desmovilizarían las
autodefensas de Córdoba y Bloque Catatumbo, al mando de Mancuso; Bloques Bananero y Calima, de Hernán Hernández; Bloque Pacífico, de Adolfo Paz; Bloque Cundinamarca, de Luis Eduardo Cifuentes,
“Águila”; Frente Mojana, de “Ramón Mojana”; Frente de Suroeste
de Antioquia, al mando de “John Santamaría”; Autodefensas del Sur
del Magdalena e Isla de San Fernando, al mando de “Chepe Barrera”;
216
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Autodefensas del Meta y Vichada, al mando de Guillermo Torres; y
Frente Vichada del Bloque Central Bolívar, al mando de “Javier Montañez” y “Julián Bolívar”.
Los únicos comandantes que no se desmovilizarían inmediatamente
serían “Adolfo Paz”, “Julián Bolívar” y “Javier Montañez”.
Mediante la declaración del 7 de octubre denominada “Acto de Fe
por la Paz”, las AUC reiteraron su voluntad de desmovilización, abriendo paso a una serie de desmovilizaciones colectivas que se iniciaron el 25
de noviembre en Turbo, con la entrega de armas del Bloque Bananero.
Acto de Fe por la Paz
En medio de enormes dificultades e incomprensiones, las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, en un gesto de grandeza con la patria,
de honestidad con el país, de franca seriedad ante el Gobierno Nacional
y de sinceridad frente a la Comunidad Internacional, damos el paso a la
más grande desmovilización jamás producida en Colombia. Este hecho
constituye el gran Acto de Fe y lo realizamos de manera unilateral, sin
exigir la más mínima contraprestación o condicionamiento. Nos basta
la confianza y credibilidad que ante la Nación y el mundo genere nuestra voluntad manifiesta de paz.
A partir del 3 de noviembre próximo iniciaremos una etapa de desmovilizaciones de tropas hasta completar un número no menor de tres
mil (3 000) combatientes, antes de finalizar el año. A la cabeza de esta
desmovilización masiva estarán los Comandantes Salvatore Mancuso
Gómez e Iván Roberto Duque Gaviria. El proceso de reincorporación
de los combatientes a la vida civil es responsabilidad total del Gobierno
Nacional. La transparencia y el éxito de este proceso, les brindará a los
grupos armados claridad y seguridad para un futuro cierto y seguro en
el seno de la vida civil.
Además de este Acto de Fe por la Paz, ratificamos con toda claridad
nuestra decisión de cumplir con los acuerdos de Santa Fe de Ralito, suscritos con el Gobierno Nacional, a fin de realizar la desmovilización de
las Autodefensas Unidas de Colombia antes del 31 de diciembre de 2005.
217
Desde el comienzo formal de las negociaciones, el pasado primero
de julio, abordamos la discusión sobre la continuidad de la desactivación de nuestro aparato militar, ahora desde los campos colombianos,
donde han operado durante muchos años miles de nuestros combatientes, en una lucha frontal contra el comunismo armado, que durante largas décadas sometió a su arbitrio criminal a millones de compatriotas,
abandonados a su suerte por el Estado.
El pasado 12 de agosto anunciamos a la opinión pública nuestra determinación de desmovilizar, en varias zonas del territorio nacional, un
considerable sector de nuestras tropas. El asesinato aleve de uno de los
más destacados comandantes del Estado Mayor Negociador, simultáneamente con el despliegue mediático tendencioso y lleno de argucias
en contra de las AUC, no mellaron nuestro decidido espíritu de paz y
reconciliación.
Las Autodefensas Unidas de Colombia acompañamos esta decisión
de desarmar nuestro aparato militar, con la declaración firme de que no
nos asiste ningún sentimiento vindicativo contra quienes han aventurado opiniones adversas. Es nuestro anhelo que este gesto se convierta en
la apertura de un capítulo nuevo de la concordia y la reconciliación nacionales; que cesen las dudas, que la comunidad internacional sea más
generosa con la paz de nuestro país, que los partidos políticos estén por
encima de las contiendas electorales de la coyuntura. Que se desarmen
los espíritus y la palabra.
Es responsabilidad del Gobierno Nacional la seguridad de las poblaciones. Sus bienes y economías quedarán bajo la responsabilidad absoluta e irrenunciable del Estado, al igual que la seguridad y financiación
de las tropas concentradas. La gobernabilidad y la legitimidad las garantizará el Estado con su presencia permanente y eficaz en las regiones
que desalojen las Autodefensas Campesinas.
Confiamos en que la verificación sobre el desarrollo y cumplimiento
del proceso de concentración y desmovilización sea tarea de los organismos nacionales e internacionales interesados en la paz de Colombia,
dentro de los cuales juega un papel de primera importancia la Organización de Estados Americanos, OEA.
218
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Simultáneamente, con la primera desmovilización de esta etapa excepcional en la historia del conflicto armado colombiano, y honrando
el valor sagrado de nuestra palabra empeñada en los Acuerdos de Santa
Fe de Ralito y de Fátima, las Autodefensas Unidas de Colombia presentaremos al Gobierno Nacional, al país y a la comunidad internacional
el cronograma de desmovilizaciones graduales que permitirá durante
2005 la reincorporación a la vida civil del 100% de los integrantes de las
AUC, con pleno ejercicio de los derechos ciudadanos, políticos y económicos, y respetuosos de los principios universales de Verdad, Justicia y
Reparación, conciliados sabia y generosamente en un marco necesario
y posible de Paz, Equidad, Desarrollo y Reconciliación.
En el día de hoy, el Estado Mayor Negociador ha entregado al Gobierno Nacional el cronograma detallado de desmovilizaciones, precisando las fechas, frentes y número de combatientes. Esta propuesta
se mantendrá en reserva, hasta tanto la oficina del Alto Comisionado
de Paz se pronuncie al respecto. La presente declaración constituye un
Acto de Fe en Dios y en Colombia, y un aporte patriótico de las AUC a
la construcción de una solución consensuada y definitiva para la guerra
entre hermanos, que lleva ya más de medio siglo.
¡Bienvenida la reinstitucionalización!
Santa Fe de Ralito, 7 de octubre de 2004
Día de Nuestra Señora del Rosario
Salvatore Mancuso Gómez
Iván Roberto Duque Gaviria
Dirección Política
Estado Mayor Negociador
Autodefensas Unidas de Colombia71
De acuerdo con el Comisionado de Paz, el proceso tendría una fase
de sensibilización, preparación y adecuación, que duraría de 15 a 30
días, y una segunda fase de concentración, desmovilización y verificación, de 2 a 10 días aproximadamente.
71
Ibíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
219
De otro lado, se conoció que al menos un grupo de 30 congresistas
viajarían a Santa Fe de Ralito en un avión dispuesto por la Fuerza Aérea
colombiana.
La mesa directiva de la Cámara autorizó el viaje a nueve representantes de la Comisión de Paz, mientras que en el Senado se atendió
una invitación del delegado de la OEA, Sergio Caramagna, y del Alto
Comisionado de Paz.
El siguiente es el texto de la resolución número 233 de 3 de noviembre de 2004 expedida por la Presidencia de la República:
Resolución No. 233 de 3 de noviembre 2004
Por la cual se reconoce a unas personas la calidad de miembros representantes de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
El Presidente de la República de Colombia en ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales, en especial de las que le confiere la
Ley 782 de 2002, y
Considerando
Que el Artículo 22 de la Constitución política dispone que la paz es
un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.
Que mediante Resolución No. 091 de 15 de junio de 2004 se declaró
abierto el proceso de diálogo, negociación y firma de acuerdos con las
Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Que las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, han manifestado
su voluntad y compromiso de realizar todos los actos tendientes a la
desmovilización de los miembros de los grupos armados organizados al
margen de la ley que operan bajo su mando.
Que para efectos de la coordinación de dichas desmovilizaciones, el
Gobierno Nacional considera pertinente reconocer la calidad de miembros representantes a los señores Salvatore Mancuso, Iván Roberto Duque Gaviria y Ever Veloza García.
220
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Resuelve
Artículo 1º. Para los efectos mencionados en la parte considerativa
de esta resolución, reconocer el carácter de miembros representantes de
las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, a los señores Salvatore
Mancuso, Iván Roberto Duque Gaviria y Ever Veloza García, desde el
4 de noviembre de 2004 hasta el 15 de diciembre del mismo año.
Artículo 2º. Notificar a las autoridades competentes el contenido de
la presente resolución, para los efectos establecidos en el inciso segundo
del parágrafo segundo del Artículo 3 de la ley 782 de 2002.
Artículo 3º. La presente Resolución rige a partir de la fecha de su
expedición.
Publíquese, comuníquese y cúmplase
Dado en Bogotá, D.C., a los 3 días de noviembre de 2004.
Álvaro Uribe Vélez
Presidente de Colombia
Sabas Pretelt de la Vega
Ministro del Interior y de Justicia.
CARAMAGNA SOLICITA APOYO DE LA COMUNIDAD
INTERNACIONAL
El 9 de noviembre de 2004, Sergio Caramagna, Jefe de la Misión de
Apoyo de la OEA para los Procesos de Paz, solicitó mayor apoyo de
parte de la comunidad internacional para el proceso que se adelantaba
con los miembros de las AUC.
Al advertir que Colombia está ante el hecho inminente de desarticular una dura y difícil maquinaria armada, y de salvaguardar en forma
práctica y no teórica los derechos y libertades de miles de personas que
sufrían la violencia, dijo que debería apoyarse sin dudar esta desmovilización con todas sus imperfecciones.
221
A su juicio, se había perdido mucho tiempo en decir qué era lo que
debería hacerse con los jefes de las AUC cuando ya existía un consenso
general en el sentido que los crímenes atroces deberían recibir castigo y
que, en cambio, se perdía la dimensión social del conflicto, que no solo
estaba referida a los armados, sino a miles de colombianos de las comunidades afectadas y sometidas a ellos.
“Le estamos dando mucha vuelta al asunto. Nunca había visto
un proceso de paz tan condicionado”, dijo. Agregó que hay que mirar
cómo se han desmovilizado enormes ejércitos en otras latitudes y en
nuestro mismo continente en función del defender el derecho humano
de los vivos.
“No hemos visto ningún síntoma de que las personas acusadas por
crímenes atroces tengan el camino libre para reinsertarse a la vida civil”, dijo, y agregó: “estas personas van a tener que asumir responsabilidades judiciales. Yo no sé cuáles. No nos corresponde a nosotros
decirlo, pero me consta que eso ha sido una manifestación clara en la
mesa en Ralito”.
Informó que su oficina pondría especial énfasis en el acompañamiento
a la reinserción. “Si la reinserción no es efectiva, si no se ponen en ella los
recursos, la desmovilización podría ser una gran frustración”, puntualizó72.
VISITA DE CONGRESISTAS A RALITO
De otra parte, 27 congresistas entre senadores y representantes a la
Cámara asistieron a una reunión en Santa Fe de Ralito, invitados por el
Alto Comisionado para la Paz, con el propósito de hacer control político al proceso de paz, hablar con la comunidad y con los comandantes
de las autodefensas.
Los senadores asistentes fueron Gustavo Vives Pupo, Ciro Ramírez
Pinzón, Humberto Builes Ortega, José Ignacio Mesa, Carlos Higuera
Escalante, Guillermo Gavina Zapata, Oscar Iván Zuluaga, Carlos Moreno de Caro, Vicente Blel, Nelson Figueroa, Jorge Castro, Habib Merheg y Jairo Merlano.
72
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
222
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Asistieron a esta reunión los representantes Rocío Arias, Eleonora Pineda, Jorge Barraza, Óscar Arboleda, Bernarda Córdoba, Ricardo Arias,
Juan Hurtado Cano, Miguel Ángel Flórez, Edgar Fandiño, Adalberto
Jaimes, Santiago Castro, Pompilio Avendaño y José Albeiro Mejía.
UBICACIÓN DEL BLOQUE CATATUMBO
El 13 de noviembre de 2004 el Alto Comisionado para la Paz, Luis
Carlos Restrepo, informó a las autoridades del departamento de Norte
de Santander que en sitio denominado Campo Dos, ubicado a dos horas de Tibú, se concentraría el llamado Bloque Catatumbo de las AUC,
el cual tenía previsto desmovilizarse antes del 15 de diciembre de 2004,
aunque la fecha exacta de esta desmovilización no se dio a conocer. Se
esperaba que antes de finalizar el año 2004 alrededor de 1 400 hombres
de esa agrupación dejarían las armas.
Los miembros de las AUC próximos a desmovilizarse llegarían a
una finca cercana a Campo Dos, según lo hizo saber el Gobernador del
departamento de Norte de Santander, quien no precisó la fecha de esta
concentración.
Campo Dos, atravesado por una sola calle y bañado por las aguas
del río Sardinata, cuenta con dos pequeñas residencias, un colegio, una
iglesia y una oficina para la corregidora. Tiene líneas telefónicas y electricidad, pero carece de agua potable.
Antes de la llegada de las autodefensas en 1999, el ELN estuvo presente en esta zona, realizó un ataque al puesto de policía de este corregimiento y secuestró a 21 policías.
El Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, informó que el corregimiento de Terán sería el probable sitio de concentración para el sector
de las autodefensas que se desmovilizarían en esa área del país. Dijo el
comisionado que aunque no disponía de un dato oficial, los miembros
de las AUC que dejarían las armas en Terán serían un grupo pequeño.
223
PRIMERAS DESMOVILIZACIONES EL BLOQUE BANANERO
A partir del 25 de noviembre de 2004 se inició en Apartadó, Antioquia, la desmovilización de las AUC. El primer grupo en desmovilizarse lo hizo en la finca La Macarena, en el corregimiento de El Dos,
del municipio de Turbo, donde 453 miembros del Bloque Bananero de
las AUC entregaron sus armas. El acto fue presidido por el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, y por el comandante de
las AUC, Salvatore Mancuso. A la ceremonia de entrega de armas y
brazaletes asistió el argentino Sergio Caramagna, Jefe de la Misión de
la Organización de Estados Americanos, OEA, quien verificaba el proceso de paz entre el gobierno de Álvaro Uribe y las AUC.
“Hoy estamos haciendo un gesto mayor avanzando hacia la reincorporación a la vida civil de todos los combatientes de las autodefensas y de todos los grupos de guerrilla que vienen detrás”, dijo
Salvatore Mancuso ante los medios de comunicación social.
En campamentos improvisados, vestidos aún con sus camuflados
y escuchando vallenatos en la finca La Macarena, pasaron su última
tarde como combatientes los 453 hombres del Bloque Bananero que se
reincorporaron a la vida civil. Muchos llevaban más de diez años en la
guerra, pues buen número de ellos militó primero en el Ejército Popular
de Liberación, EPL, y luego se incorporaron a las autodefensas para resistir el plan de exterminio decretado por las FARC contra los miembros
de esa organización guerrillera desmovilizada en 1990.
El Dos fue por unas horas un hervidero de políticos, comandantes de
las AUC, prensa nacional, internacional, familiares de combatientes y
personalidades encabezadas por el Jefe de la Misión Verificadora de la
OEA, Sergio Caramagna.
Según el comandante del Bloque Bananero, Hernán Hernández,
145 hombres del bloque Suroeste llegaron desde Titiribí para desmovilizarse también.
El dominio de las AUC en el eje bananero de Urabá, conformado
por los municipios de Turbo, Apartadó, Chigorodó y Carepa y San Pedro de Urabá, fuera del eje, fue logrado por hombres bajo las siglas de
las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, ACCU, lideradas
por los hermanos Fidel, Carlos y Vicente Castaño Gil.
224
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
En Urabá se realizó la conferencia que dio lugar a las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, en abril de 1997, dentro de las cuales las ACCU
formaron el cuerpo principal de la organización al margen de la ley.
La zona tiene una posición geográfica estratégica por sus salidas al mar,
en el océano Pacífico y en el Atlántico, lo que facilita el tráfico de armas y
drogas ilícitas, y por su acceso a las selvas del Darién, en límites con Panamá.
Las FARC iniciaron en Urabá su predominio a través del frente 5, el
cual posteriormente dio origen al frente 34. En esa misma zona operaban también los frentes 57, 58 y 47.
Los sindicatos de las fincas bananeras, Sintagro y Sintrabanano, se
vieron fuertemente influenciados por las FARC y el EPL, hasta la desmovilización de esta última guerrilla el 1 de marzo de 1991. Tras la
dejación de armas, el EPL adoptó el nombre político Esperanza, Paz y
Libertad y entró a disputarles, desde la legalidad, espacios a las FARC y
a la Unión Patriótica, movimiento político creado por las FARC, el cual
ejercía el poder en algunas alcaldías y concejos municipales.
Las FARC respondieron con muertes selectivas contra los miembros
de Esperanza, Paz y Libertad y masacres contra los simpatizantes de
estos. En un barrio de invasión de Apartadó conocido como La Chinita,
las FARC asesinaron a 35 obreros y habitantes del barrio.
Las ACU llegaron desde el norte de Urabá a Necoclí, San Pedro y San Juan
de Urabá. Allí se presentaron las tropas de Carlos Castaño a disputarle el poder
a las FARC. Los grupos de autodefensas creados por desmovilizados del EPL,
respaldados luego por las ACCU, se enfrentaban también a las FARC.
De 1990 a 1999 Chigorodó y Apartadó fueron los municipios más
críticos en materia de homicidios, superando en más del doble la tasa de
Antioquia. En la región, entre 1993 y 2002, hubo 65 masacres con 449
víctimas. Apartadó y Turbo encabezaron con 20 masacres cada uno, en
las que fueron asesinadas 170 personas en el primero y 120 en el segundo. En los cinco municipios de influencia del Bloque Bananero hubo en
ese período 55 masacres, con un total de 391 víctimas73.
73
bíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
225
La Corte Suprema de Justicia de Colombia autorizó la extradición
a los Estados Unidos de Carlos Castaño, Salvatore Mancuso y Ricardo
Palmera, “Simón Trinidad”.
El máximo dirigente de las AUC, Salvatore Mancuso, quien había
llegado a Turbo para asistir a la desmovilización del Bloque Bananero
de las AUC, manifestó que continuaría al frente de la negociación con
el Gobierno a pesar de que la Corte Suprema de Justicia autorizó su
extradición a los Estados Unidos.
Mancuso gozaba en ese momento de una suspensión de orden de
captura concedida por el Gobierno por estar en la negociación, y según
el Ministro del Interior, Sabas Pretelt de la Vega, continuaría disfrutando de ese beneficio durante todo el tiempo que duraran las negociaciones de paz entre el Gobierno Nacional y las AUC.
Ese bloque entregó 257 armas largas, 82 armas cortas, 12 armas de
apoyo, explosivos, 234 granadas, 61 radios, 2 m y 2 radios de base.
Simultáneamente, en la ciudad de Medellín 849 ex militantes del Bloque Cacique Nutibara que se desmovilizó el año anterior, vestidos con
camisetas blancas, marcharon por las calles del centro de la ciudad para
conmemorar el primer año de su desmovilización. La marcha, organizada por la Corporación Democracia, que agrupaba a todos los reinsertados, esperaba reunir a unas 30 mil personas. Su objetivo era establecer el
25 de noviembre como el Día Blanco en todo el país para ser recordado
como la fecha en que se consolidó el proceso de reconciliación.
INDULTADOS 23 GUERRILLEROS DE LAS FARC
El 2 de diciembre de 2004 el Gobierno Nacional dio a conocer la
decisión de indultar a 23 guerrilleros de las FARC como un paso para
facilitar un Acuerdo Humanitario con ese grupo guerrillero. Los beneficiados por la medida se comprometieron previamente y por escrito
a no retomar las armas y a entrar a programas de reincorporación del
Gobierno.
226
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Todos los indultados estaban condenados por el delito de rebelión.
El Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, explicó que los 23
habían sido llevados en los últimos días a Bogotá desde diversas cárceles
del país. Los indultos fueron firmados por el presidente Álvaro Uribe y
el Ministro del Interior y Justicia, Sabas Pretelt de la Vega, en presencia
del Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, y de varios
congresistas que fueron invitados a la Casa de Nariño.
La medida del Gobierno fue acogida por muchas personas e instituciones, como el ex presidente Alfonso López y el Alto Comisionado
de la Unión Europea para la Política Exterior, Javier Solana, quienes
expresaron que se trataba de un paso hacia el Acuerdo Humanitario.
DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUTODEFENSAS DEL SUR
DEL MAGDALENA E ISLA SAN FERNANDO
El 4 de diciembre de 2004 se desmovilizaron 47 miembros del Bloque de Autodefensas del Sur del Magdalena e Isla San Fernando, cuyo
representante era José María Barrera Ortiz. Estos hombres estuvieron
ubicados temporalmente en el corregimiento Santa Rosa, municipio de
Santa Ana, en el departamento del Magdalena.
Los desmovilizados entregaron 27 armas largas, 9 armas cortas, 2
armas de apoyo, 2 411 municiones de diferente calibre, 72 granadas y
material de comunicación.
El 7 de diciembre se supo que “Simón Trinidad” estaría dispuesto
a ser vocero de las FARC para un posible Acuerdo Humanitario. Esta
información la su-ministró el abogado de “Trinidad”, Oscar Emilio Silva, quien manifestó que su cliente no pretendía con este gesto evitar su
extradición a los Estados Unidos. Aclaró el abogado Silva, que la propuesta de su apoderado sobre su posible vocería no era conocida por el
secretariado de las FARC ni por el Gobierno Nacional.
Se conoció un comunicado de las FARC, fechado el 28 de noviembre
de 2004, en el cual proponían el despeje de los municipios de Pradera
y Florida en el departamento del Valle del Cauca a fin de discutir allí
el posible intercambio humanitario, con mediación de la Iglesia Católica. En él señalaban que la extradición a Estados Unidos del guerrillero Ricardo Palmera, “Simón Trinidad”, afectaría seriamente cualquier
227
acercamiento con el Gobierno para resolver el tema de un intercambio
de detenidos de esa organización para permitir la liberación de los secuestrados que tenía en su poder74.
ZONA DE UBICACIÓN TEMPORAL EN TERÁN,
CUNDINAMARCA
El mismo día 7 de diciembre de 2004, el Gobierno Nacional creó una
nueva zona de ubicación temporal para la desmovilización de miembros de las autodefensas que operaban en el departamento de Cundinamarca. Según la Resolución No. 295, la zona operaría hasta el día 30 de
diciembre del año 2004.
El siguiente es el texto completo de la resolución gubernamental:
Presidencia de la República
Resolución No. 295 de 2004
Diciembre 7 de 2004
Por la cual se establece una zona de ubicación temporal dentro del
territorio nacional.
El Presidente de la República de Colombia en ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales, en especial de las que le confiere la
Ley 782 de 2002,
Considerando:
Que el Artículo 22 de la Constitución Política dispone que la paz es
un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.
Que mediante la Resolución número 091 del 15 de junio de 2004 se
declaró abierto el proceso de diálogo, negociación y firma de acuerdos
con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Que el Artículo 3 de la Ley 782 de 2002 faculta al Gobierno Nacional para acordar la ubicación temporal de miembros de grupos armados
74
Ibíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
228
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
organizados al margen de la ley, con los que se adelanten diálogos, negociaciones o firma de acuerdos, en precisas y determinadas zonas del
territorio nacional o internacional, de considerarlo conveniente.
Que las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, han manifestado
su voluntad y compromiso de realizar todos los actos tendientes a la
desmovilización de los miembros de los grupos armados organizados al
margen de la ley que operan bajo su mando.
Que para la concentración y desmovilización del Bloque Cundinamarca
de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, se considera necesaria la ubicación temporal de sus miembros en una precisa zona del territorio nacional.
Resuelve:
Artículo 1º. Con el único propósito de concentrar y desmovilizar a
quienes foman parte del Bloque Cundinamarca de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, créase como zona de ubicación temporal para sus
miembros, el Instituto Técnico Agrícola “Luis Carlos Galán”, ubicado en
el corregimiento de Terán, municipio de Yacopí, departamento de Cundinamarca, hasta las 24:00 horas del día 30 de diciembre del mismo año.
Artículo 2º. En la zona a que se refiere la presente resolución regirán, en
lo pertinente a ella, los efectos previstos en el Artículo 3 de la Ley 782 de 2002.
Artículo 3º. La presente Resolución rige a partir de la fecha de su
expedición.
Publíquese, comuniqúese y cúmplase
Dada en Bogotá, D.C., a los 7 días del mes de diciembre de 2004
El Ministro del Interior y de Justicia
Sabas Pretelt de la Vega
El Ministro de Defensa Nacional
Jorge Alberto Uribe Echavarría75
75
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
229
DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUTODEFENSAS CAMPESINAS
DE CUNDINAMARCA
Tal como lo habían anunciado, 147 miembros de las Autodefensas
Campesinas de Cundinamarca, que habían permanecido desde el año
1982 bajo el mando de Luis Eduardo Cifuentes, “El Águila”, entregaron sus armas y se desmovilizaron formalmente el 10 de diciembre de
2004 en el corregimiento de Terán, municipio de Yacopí, departamento
de Cundinamarca.
La concentración de los 147 combatientes se produjo en el Instituto
Técnico Luis Carlos Galán de la inspección de Terán. Hasta allí fueron
llegando a lo largo de la semana desde las distintas veredas donde patrullaban. El primero en llegar fue “Rasguño”, quien de pie y a la derecha
de “El Águila” coordinó las actividades logísticas del desarme. Luego
llegaron los jefes conocidos con los alias de “Tumaco”, “Buena Suerte”, “Peligro”, “El Pote” y “Gurí Hurí”, quienes venían operando en los
municipios de Pacho y Zipaquirá; la región de Topaipí, Caparrapí; “El
Pote”, La Palma y Llano Mateo.
La ceremonia de desmovilización fue presidida por el Comisionado
de Paz, Luis Carlos Restrepo. Los ex combatientes entregaron todo su
arsenal al gobierno nacional; 114 armas largas, 23 armas cortas, 19 armas de apoyo, 209 granadas, 46 radios 2m y 7 radios de base.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE CATATUMBO
El 10 de diciembre de 2004 en la finca Brisas de Sardinata, del corregimiento Campo Dos, en el municipio de Tibú, Norte de Santander,
se efectuó la entrega de armas por parte de Salvatore Mancuso y 1 437
hombres del Bloque Catatumbo de las AUC. El acto se inició a las 11
de la mañana y estuvo presidido por el Comisionado de Paz, quien hizo
una intervención que duró aproximadamente cuarenta y cinco minutos.
Salvatore Mancuso, el líder principal de las AUC, leyó un discurso
en el que explicó las razones que lo motivaron a desarmar esta estructura paramilitar que operó durante cinco años y siete meses. Mancuso
regresó a Santa Fe de Ralito, en Córdoba, mientras que los demás combatientes marcharon con sus familias. Algunos de ellos deberían presen-
230
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
tarse periódicamente en una oficina que instaló el Gobierno en Cúcuta
para definir las situaciones judiciales pendientes.
Los desmovilizados hicieron entrega de un potente arsenal compuesto por 988 armas largas, 71 armas cortas, 55 armas de apoyo, 200 radios
2m, 287 444 unidades de munición de diferente calibre. Igualmente, el
bloque hizo entrega de 11 vehículos automotores, 2 lanchas, 8 canoas,
15 perros anti explosivos, 15 motores, 45 muías, siete mil hectáreas en
el corregimiento de La Gabarra, y 58 viviendas vacías en El Catatumbo.
Además, suministraron información sobre 105 predios utilizados por la
organización como apoyo logístico.
DESMOVILIZACIÓN DE SALVATORE MANCUSO
Vestido camuflado y con gafas de sol, el jefe de las AUC entregó su
arma al Alto Comisionado de Paz del Gobierno, Luis Carlos Restrepo,
y luego le estrechó la mano.
“Con el alma anegada de humildad pido perdón al pueblo de
Colombia, pido perdón a las naciones del mundo, entre ellas a los
Estados Unidos de Norteamérica, si por acción u omisión las pude
ofender”, dijo Mancuso ante los asistentes al acto. “Ruego el perdón
de cada madre y de aquellos cuyo dolor causamos. Asumo mi responsabilidad a partir de la jefatura ejercida, por lo que pude haber
hecho mejor, por lo que pude haber hecho y no hice, errores seguramente por mis limitaciones humanas y mi nula vocación para la
guerra. Absuelvo a quienes causaron en nuestras almas el daño que
hoy buscaremos sanar al abrigo de la fe y la misericordia de Dios”76.
Mancuso, pedido en extradición por Estados Unidos por cargos de
narcotráfico, responsabilizó al Estado por la existencia de los paramilitares al no haber protegido extensas regiones del país de la acción de
las guerrillas. El líder de las AUC reiteró el compromiso de esos grupos
de avanzar en el proceso de paz y pidió al Gobierno respetar, por su
parte, los acuerdos asumidos para la reinserción a la vida civil de los
desmovilizados. En su discurso, el jefe paramilitar abogó por un proyecto de ley que definiera la forma en que los desmovilizados pagarían por
76
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
231
sus delitos, basado en los conceptos de justicia y verdad, pero que no
estuviera inspirado en la venganza. A la ceremonia asistieron, además
del Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, varios jefes
paramilitares y el argentino Sergio Caramagna, Jefe de la Misión de la
Organización de Estados Americanos, OEA.
El 16 de diciembre de 2004 el Gobierno Nacional se pronunció acerca de la posible extradición del señor Salvatore Mancuso, la cual dejó
en suspenso con la condición que éste abandonara toda clase de actividades ilícitas y contribuyera efectivamente al desarrollo del proceso de
paz y la desmovilización de los grupos de autodefensa.
El Ministerio del Interior y de Justicia expidió la Resolución 303 en
la que se hacen los condicionamientos a Mancuso para evitar su extradición, requerido por la Corte Distrital de Columbia, Estados Unidos,
por delitos de narcotráfico. La resolución advierte además que “en caso
de ser procedente la extradición y la entrega de Salvatore Mancuso a Estados Unidos, no podrá ser juzgado ni condenado por hechos anteriores
diversos del que motivó la solicitud de la justicia de ese país”.
TEXTO DE LA RESOLUCIÓN 303 DEL MINISTERIO DEL
INTERIOR Y DE JUSTICIA
Resolución No. 303 de 2004
Por la cual se decide sobre una solicitud de extradición
El presidente de la República de Colombia, en ejercicio de la facultad
que le confiere el Artículo 509 del Código de Procedimiento Penal, y
Considerando
1. Que mediante Nota Verbal No. 1373 del 20 de septiembre de
2002, el Gobierno de los Estados Unidos de América, a través de
su Embajada en Colombia, solicitó la detención provisional con
fines de extradición del ciudadano colombiano Salvatore Mancuso Gómez, requerido para comparecer a juicio por delitos federales de narcóticos.
2. Que el Fiscal General de la Nación mediante Resolución del 23
de septiembre de 2002 decretó la captura con fines de extradición
232
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
del ciudadano Salvatore Mancuso Gómez, identificado con la
cédula de ciudadanía No. 6 892 624.
La referida orden de captura con fines de extradición se encuentra
suspendida en virtud de lo dispuesto en la Resolución No. 0-5243 del 4
de noviembre de 2004, proferida por el Fiscal General de la Nación (E).
3. Que la Embajada de los Estados Unidos de América en Colombia, mediante Nota Verbal No. 732 del 1 de abril de 2004,
formalizó la solicitud de extradi-ción del ciudadano Salvatore
Mancuso Gómez.
En la mencionada nota informa:
“Salvatore Mancuso Gómez es requerido para comparecer a juicio
por delitos fe-derales de narcóticos. Es el sujeto de la Resolución de
Acusación No. 02-388ESH dictada bajo el sello el 17 de septiembre de
2002 en la Corte Distrital de los Estados Unidos para el Distrito de Columbia, mediante la cual se le acusa de:
Cargo 1. Concierto para importar y para fabricar y distribuir cinco
kilogramos o más de cocaína con la intención y a sabiendas de que dicha cocaína iba a ser importada a los Estados Unidos, en violación del
Título 21, Secciones 963 y 960 del Código de los Estados Unidos, y del
Título 18, Sección 2 del Código de los Estados Unidos (...)
Un nuevo auto de detención contra el señor Mancuso Gómez por
estos cargos fue dictado el 17 de septiembre de 2002 por el Magistrado
Juez de los Estados Unidos John M. Facciola de la corte anteriormente
mencionada. (...)
Todas las acciones adelantadas por el acusado en este caso fueron
realizadas con posterioridad al 17 de diciembre de 1997”.
4. Que de conformidad con lo dispuesto en el Artículo 514 del Código de Procedimiento Penal, el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través de la Oficina Jurídica, mediante oficio. No. 0369 del 1
de abril de 2004, conceptuó: “... que por no existir convenio aplicable al caso es procedente obrar de conformidad con las normas
pertinentes del Código de Procedimiento Penal Colombiano”.
233
5. Que el Ministerio del Interior y de Justicia, mediante oficio No.
04807 del 16 de abril de 2004, remitió a la Sala de Casación Penal
de la H. Corte Suprema de Justicia la documentación traducida
y autenticada, con la cual la Embajada de los Estados Unidos de
América en Colombia formalizó la solicitud de extradición del
ciudadano Salvatore Mancuso Gómez, para que fuera emitido
el concepto a que hace referencia el Artículo 517 del Código de
Procedimiento Penal.
6. Que la Sala de Casación Penal de la H. Corte Suprema de Justicia, mediante providencia del 24 de noviembre de 2004, al encontrar cumplidos los requisitos que exigen las normas aplicables al
caso, conceptuó favorablemente a la extradición del ciudadano
Salvatore Mancuso Gómez.
La Sala de Casación Penal en el concepto precisó:
“En conclusión, agotadas las condiciones previstas en el capítulo III,
del título 1º, libro V del Código de Procedimiento Penal, procederá la
Corte a emitir concepto favorable a la solicitud de extradición por el delito que se le atribuye al requerido, máxime si no son de carácter político.
Importa precisar, que de conformidad con lo normado por los Artículos 12 y 34 de la Carta Política, el requerido en extradición no podrá
ser juzgado por hechos anteriores distintos de los que motivaron la extradición, ni sometido a penas de muerte, destierro, prisión perpetua o
confiscación, ni a desaparición forzada, por el país solicitante.
El concepto quedará limitado a los hechos ocurridos con posterioridad al 17 de diciembre de 1997, fecha en que entró a regir el Acto
Legislativo 01 de ese mismo año.
En mérito de lo expuesto, la Corte Suprema de Justicia en Sala de
Casación Penal, conceptúa favorablemente a la extradición del ciudadano colombiano, Salvatore Mancuso Gómez, también conocido como
“Mono” y como “Santander Lozada”, de anotaciones civiles y personales conocidas en el curso de este proveído conforme con la Nota Verbal
No. 732 del 1o de abril de 2004, suscrita por la Embajada de los Estados
Unidos de América...”.
234
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
7. Que el Gobierno colombiano podrá subordinar la decisión de la
extradición a las condiciones que considere oportunas, y en todo
caso, para que pueda concederse la extradición, deberá exigir al
Estado requirente, que la persona solicitada no vaya a ser juzgada por un hecho anterior diverso del que motiva la solicitud
de extradición, ni sometida a sanciones distintas de las que se le
hubieren impuesto en la condena, según lo prescribe el inciso 1o
del Artículo 512 del Código de Procedimiento Penal.
Que respecto del inciso primero del Artículo 512 del Código de Procedimiento Penal, en Sentencia C-1106-00 la Corte Constitucional encontró ajustadas a la Carta Política dos facultades diferentes: la potestad
que se concede allí al Gobierno para “subordinar el ofrecimiento o la
concesión de la extradición a las condiciones que considere oportunas”,
así como la facultad de exigir “que el solicitado no vaya a ser juzgado
por un hecho anterior diverso del que motiva la extradición, ni sometido
a sanciones distintas de las que se le hubieren impuesto en la condena”.
Que la Corte Constitucional en Sentencia C-048-00 señaló:
“...dentro de los medios para el mantenimiento y conservación del
orden público, el Presidente de la República puede adoptar diferentes
tipos de medidas, las cuales pueden oscilar entre las soluciones pacíficas de conflictos hasta la utilización de acciones coercitivas como el
uso de la fuerza, tal es el caso de la declaratoria de Estado de Guerra
para repeler la agresión exterior (C.P. art. 212). Sin embargo, los instrumentos pacíficos para la solución de conflictos se acomodan mejor a la
filosofía humanista y al amplio despliegue normativo en torno a la paz
que la Constitución propugna. De ahí, pues, que las partes en controversia, particularmente en aquellos conflictos cuya continuación pone
en peligro el mantenimiento de la convivencia pacífica y la seguridad
nacional, deben esforzarse por encontrar soluciones pacíficas que vean
al individuo como fin último del Estado”.
En la sentencia citada la Corte Constitucional sostiene que para la solución pacifica de los conflictos no bastan las conversaciones entre las partes,
sino que se requiere de un proceso donde la buena fe y la confianza en los
negociadores se convierten en factores determinantes para la consecución
de la paz; lo cual depende del momento histórico en que se desenvuelve el
proceso que, en consecuencia, será evaluado políticamente.
235
El 15 de julio de 2003 el Gobierno Nacional y las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, como resultado de la Fase Exploratoria adelantada entre las partes a partir del mes de diciembre de 2002 firmaron el
“Acuerdo de Santa Fe de Ralito para contribuir a la paz de Colombia”,
uno de cuyos signatarios es el ciudadano Salvatore Mancuso Gómez.
Que mediante la Resolución 091 de 2004 el Gobierno Nacional declaró abierto el proceso de diálogo, negociación y firma de acuerdos
con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, de las cuales forma
parte el ciudadano Salvatore Mancuso Gómez requerido por conductas
relacionadas con el narcotráfico.
Que mediante la Resolución 233 de 2004, prorrogada mediante Resolución 300 del 14 de diciembre de 2004, el Gobierno Nacional reconoció como miembro representante de las Autodefensas Unidas de
Colombia, AUC, al ciudadano Salvatore Mancuso Gómez, razón por
la cual la presencia en Colombia del citado ciudadano resulta de especial importancia para el avance del proceso de paz con las Autodefensas
Unidas de Colombia, AUC.
Las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, han manifestado su
voluntad y compromiso de realizar todos los actos tendientes a la desmovilización de los miembros de los grupos armados organizados al
margen de la ley que operan bajo su mando.
Que de conformidad con lo dispuesto en el Código de Procedimiento Penal, el Gobierno Nacional, en uso de su poder discrecional, atendiendo las conveniencias nacionales, considera pertinente subordinar la
concesión de la extradición del ciudadano Salvatore Mancuso Gómez a
las siguientes condiciones:
Que cumpla con los compromisos adquiridos en el marco del proceso de paz con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Que abandone las actividades ilícitas.
Que contribuya a la participación de los miembros de las AUC en el
proceso de paz.
236
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
8. Que en el caso de concederse la extradición y ordenarse la entrega, el Gobierno Colombiano deberá exigir al Estado requirente
que la persona solicitada no vaya a ser juzgada por un hecho
anterior distinto del que motiva la solicitud de extradición, ni
sometida a sanciones distintas de las que se le hubieren impuesto
en la condena, según lo prescribe el inciso 1o del Artículo 512 del
Código de Procedimiento Penal.
El inciso 2o del Artículo 512 del Código de Procedimiento Penal
establece que si según la legislación del Estado requirente, al delito que
motiva la extradición corresponde la pena de muerte, la entrega sólo se
hará bajo la condición de la conmutación de tal pena.
La H. Corte Constitucional, mediante sentencia C-1106 del 24 de
agosto de 2000, al decidir sobre la demanda de inconstitucionalidad en
contra de, entre otros, el Artículo 550 del anterior Código de Procedimiento Penal (hoy reproducido en el Artículo 512), resolvió:
“Tercero: declarar exequible el primer inciso del Artículo 550 del Código de Procedimiento Penal, así como el segundo inciso de la norma
citada, pero este último bajo el entendido de que la entrega de una persona en extradición al Estado requirente, cuando en este exista la pena
de muerte para el delito que la motiva, sólo se hará bajo la condición de
la conmutación de la pena, como allí se dispone, e igualmente, también
a condición de que al extraditado no se le someta a desaparición forzada, a torturas ni a tratos o penas crueles, inhumanos o degra-dantes, ni
a las penas de destierro, prisión perpetua y confiscación, conforme a lo
dispuesto por los Artículos 11, 12 y 34 de la Constitución Política”.
Teniendo en cuenta que los delitos referidos en la solicitud formal
no están sancionados con la pena de muerte, el Gobierno Nacional,
en caso de resultar fallidas las condiciones establecidas en el presente
acto administrativo y en consecuencia ser procedente la extradición,
ésta se realizará bajo el compromiso por parte del país requirente, sobre
el cumplimiento de las demás condiciones señaladas por la Corte Constitucional, en especial que no se le someta a la pena de prisión perpetua
o la pena de muerte prohibidas en la legislación colombiana.
237
Por lo expuesto,
Resuelve
Artículo primero: subordinar la decisión de la extradición del ciudadano colombiano Salvatore Mancuso Gómez, identificado con la cédula de ciudadanía No. 6 892 624, por el siguiente cargo 1. concierto para
importar y para fabricar y distribuir cinco kilogramos o más de cocaína
con la intención y a sabiendas de que dicha cocaína iba a ser importada
a los Estados Unidos, referido en la Resolución de Acusación No. 02388ESH dictada bajo el sello el 17 de septiembre de 2002 en la Corte
Distrital de los Estados Unidos para el Distrito de Columbia, al incumplimiento de cualquiera de las condiciones establecidas en la parte motiva de la presente resolución y en especial de las siguientes:
Que cumpla con los compromisos adquiridos en el marco del proceso de paz con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Que abandone las actividades ilícitas.
Que contribuya a la participación de los miembros de las AUC en el
proceso de paz.
Parágrafo: el Presidente de la República evaluará el cumplimiento de
las condiciones establecidas en el presente Artículo.
Artículo segundo: advertir al Estado requirente que en caso de ser procedente la extradición y la entrega del ciudadano Salvatore Mancuso Gómez, no podrá ser juzgado ni condenado por un hecho anterior diverso
del que motiva la presente solicitud, de conformidad con lo dispuesto por
el inciso 1o del Artículo 512 del Código de Procedimiento Penal.
Artículo tercero: notificar la presente decisión al interesado o a su
apoderado, haciéndole saber que contra la misma procede el recurso de
reposición, el cual podrá interponer dentro de los cinco (5) días siguientes a su notificación.
Artículo cuarto: enviar copia auténtica de la presente resolución, previa
su ejecutoria, a las autoridades judiciales que adelantan en Colombia proceso penal en contra del ciudadano requerido, al Ministerio de Relaciones
Exteriores y al Fiscal General de la Nación para lo de su competencia.
238
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Artículo quinto: la presente Resolución rige a partir de la fecha de
su expedición.
Publíquese, comuníquese, notifíquese y cúmplase.
Dada en Bogotá, D.C. a 16 de diciembre de 2004.
El Ministro del Interior y de Justicia,
Sabas Pretelt de la Vega
Igualmente, el Gobierno Nacional condicionó la posible no extradición del señor Ricardo Palmera, “Simón Trinidad”, aprobada en
noviembre pasado por la Corte Suprema de Justicia, a que las FARC
liberaran antes del 30 de diciembre de 2004 a 63 personas en poder de
esa organización.
Mediante la resolución 305 del 17 de diciembre de 2004, emanada
del Ministerio de Interior y de Justicia, se autorizó la extradición de
‘Trinidad’ a Estados Unidos, donde es solicitado por la Corte del Distrito de Columbia para ser juzgado por narcotráfico.
Comunicado de la Casa de Nariño
El Presidente de la República concedió esta noche la extradición del
señor Juvenal Ovidio Ricardo Palmera Pineda, también conocido como
Simón Trinidad, a los Estados Unidos.
El Presidente de la República, el Ministro de Interior y de Justicia y
el Alto Comisionado para la Paz, informan su disposición de revocar
esta extradición si las 63 personas secuestradas por las FARC -59 ciudadanos colombianos, tres norteamericanos y un alemán- son liberadas
antes del 30 de diciembre del presente año.
La extradición de Simón Trinidad fue autorizada mediante la resolución 305 del 17 de diciembre de 2004, emanada del ministerio de Interior y de Justicia. Trinidad es solicitado por la Corte del Distrito de
Columbia para ser juzgado por narcotráfico.
Casa de Nariño
Diciembre 17 de 2004
239
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE CALIMA
El 18 de diciembre de 2004 se desmovilizaron 564 integrantes del
Bloque Calima de las AUC, al mando de Éver Veloza García. La ceremonia, efectuada en la finca El Jardín del municipio de Bugalagrande,
departamento del Valle del Cauca, contó con la presencia de delegados
del Gobierno y de la Organización de Estados Americanos.
El acto fue presidido por el Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos
Restrepo, así como por los comandantes de las Autodefensas Unidas de
Colombia, AUC, Salvatore Mancuso y “Ernesto Báez”.
En su discurso, Restrepo dijo confiar “plenamente en la voluntad de
paz de Mancuso, Veloza y “Báez”. “Yo puedo decir hoy ante el país que
las autodefensas, de manera , están dando pasos en la construcción de
la paz, aunque haya dificultades por superar”77.
Los desmovilizados entregaron 370 armas largas, 60 armas cortas,
21 armas de apoyo, 15 subametralladoras; 14 pistolas, 33 revólveres,
1.008 proveedores, 2 500 eslabonados, 149 granadas de mano, 51 granadas de 40 mm, 10 morteros, 2 granadas de fusil, 79 radios de comunicación, 2 radios de base, uniformes y equipos de campaña.
LA EXTRADICIÓN DE “SIMÓN TRINIDAD”
El 31 de diciembre de 2004, el Gobierno de Colombia entregó en extradición al señor Ricardo Palmera, conocido como “Simón Trinidad”,
dado que las FARC no atendieron la solicitud hecha por el Gobierno
en el sentido que liberaran 63 personas en poder de esa organización.
DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUTODEFENSAS DE CÓRDOBA,
BLOQUES SINÚ Y SAN JORGE
El 18 de enero de 2005, 925 integrantes de los bloques Sinú y San
Jorge, bajo el mando de Salvatore Mancuso, los más antiguos de las
77
íbid. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
240
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
AUC, que operaban en el departamento de Córdoba, hicieron entrega
de sus armas y se desmovilizaron para reincorporarse a la vida civil.
Luego de desalojar a sangre y fuego a las FARC y al EPL, Castaño y
sus hombres fueron consiguiendo el apoyo de ganaderos, comerciantes,
organizaciones cívicas y buena parte de la clase política, hasta lograr
que el departamento de Córdoba se convirtiera en un bastión de las
AUC. Después, a comienzos de los 1990, Castaño empezó a extender la
operación de los grupos de autodefensa a otros departamentos del país.
El bloque que se desmovilizó en esta fecha estaba conformado por
las autodefensas del Sinú y San Jorge, al mando de Jairo Andrés Angarita “Andrés”, un antiguo oficial de la aviación militar. También se desmovilizó con el ánimo de incorporarse a la civilidad el llamado Grupo
de Sanidad, integrado por combatientes lisiados por la guerra.
El acto de entrega fue presidido por el Alto Comisionado para la Paz,
Luis Carlos Restrepo, y el jefe máximo de las AUC, Salvatore Mancuso.
Actuaron como testigos en este acto de rendición de armas el Obispo
de Montería, Julio César Vidal, y el diplomático argentino Sergio Caramagna, que coordina la Misión de Apoyo al Proceso de Paz, MAPP, de
la Organización de Estados Americanos, OEA.
Caramagna se mostró satisfecho por el avance del programa de desmovilización que adelantaban los grupos de autodefensa en cumplimiento del acuerdo firmado entre las AUC y el Gobierno colombiano.
Los desmovilizados entregaron 307 armas largas, 53 armas cortas,
33 armas de apoyo, 128 granadas, 83 radios 2m, 13 radios de base.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE SUROESTE
El 30 de enero de 2005 se produjo la desmovilización del Bloque
Suroeste de las AUC, el cual estaba al mando de Alcides de Jesús Durango, llamado “René”, quien a la hora de la verdad no se hizo presente
en el sitio de los acontecimientos.
241
A las 3:40 p.m. del domingo 30 se inició la desmovilización de 127
miembros de este grupo, en el corregimiento Alfonso López de Ciudad
Bolívar, al suroeste del departamento de Antioquia.
Por la mañana comenzó a escucharse el rumor de que Jesús Alcides
Durango, “René”, confinado en Santa Fe de Ralito, Córdoba, no se
haría presente en la entrega de armas de su bloque.
La desmovilización se trasladó para las 4:00 p.m. Se dio inicio de los
actos sin la presencia del comandante “René” pero no se dieron explicaciones acerca de las razones de la ausencia de esta persona. Al final
se supo que “René” mandó una nota en la que dejó claro que hacía un
año no dirigía el Bloque Suroeste, pero lo había retomado por solicitud
de Vicente Castaño.
El comunicado fue leído por “Ernesto Báez”, quien dijo que hasta el
último momento se trataron de sortear los problemas de orden personal
de “René”, sin haberlo logrado.
Tampoco asistió en esta ocasión Sergio Caramagna, Jefe de la Misión de la OEA, quien estuvo presente en las otras dos desmovilizaciones efectuadas con anterioridad en Antioquia.
El Bloque Suroeste, perteneciente a las Autodefensas Unidas de Córdoba y Urabá, tenía influencia en el suroccidente antioqueño, más exactamente en los municipios de Urrao, Caramanta, Betulia, Concordia,
Amagá, Angelópolis, Titiribí y Ciudad Bolívar.
Los desmovilizados entregaron el siguiente arsenal: 68 armas largas,
22 armas cortas, 13 armas de apoyo, 174 granadas, 41 radios 2m y 8
radios base.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE LA MOJANA
El 2 de febrero el jefe del bloque denominado La Mojana, Eder Pedraza Peña, anunció públicamente la intención de su grupo de reincorporarse a la vida civil, siempre que el Gobierno Nacional les diera las
garantías del caso.
242
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El bloque hizo entrega de su armamento en un acto presidido por el
Alto Comisionado para la Paz del Gobierno, Luis Carlos Restrepo, en
la aldea La Nueva Esperanza, municipio Guaranda, del departamento
de Sucre.
El Gobernador de Sucre, Jorge Anaya Hernández, dijo que había
cinco miembros del Bloque La Mojana que tenían cuentas con la justicia y que irían a Santa Fe de Ralito, en el departamento de Córdoba.
De la región de La Mojana forman parte los municipios de Majagual, Sucre y Guaranda, en el departamento de Sucre; San Jacinto del
Cauca, Montecristo y Achí, en Bolívar; y Nechí, en Antioquia.
Los desmovilizados entregaron 86 armas largas, 2 armas cortas, 5
armas de apoyo, 14 radios 2m, 2 radios de base.
CAMBIO DE JEFATURA DE LAS AUC
El mismo día de la desmovilización del Bloque Mojana en Guaranda, Sucre, “Ernesto Báez” informó que la jefatura de las AUC había
pasado a “Ramón Isaza” en reemplazo de Salvatore Mancuso, quien
pasó a la vida civil al momento de desmovilizarse el Bloque Córdoba.
“Ramón Isaza” era el comandante de las autodefensas del Magdalena
Medio.
De otra parte, “Julián Bolívar” asumió como comandante vocero del
Estado Mayor negociador.
POSIBLE DIÁLOGO CON EL ELN
El 25 de marzo de 2005 se conoció una propuesta del Gobierno Nacional para un posible diálogo de paz con el ELN. Este grupo habría
sugerido una posible reunión entre representantes de su comité central
y portavoces autorizados del Gobierno, en un país por determinar entre
las partes.
El grupo habría considerado, según Radio Caracol, que los buenos
oficios del embajador mexicano Andrés Valencia, facilitador de los contactos entre el grupo rebelde y el Gobierno, podrían resultar positivos en
la parte logística de los diálogos y en la verificación de las negociaciones.
243
El 28 de marzo de 2005 se supo que Raúl Reyes, vocero de las FARC,
habría enviado un correo electrónico al periódico Jornal do Brasil, por
medio del cual esa organización proponía la creación de un grupo de
países amigos, incluido Brasil, para facilitar la búsqueda de una salida
política a la crisis.
Según las informaciones conocidas, las FARC, a través de su vocero,
insistieron en una reunión con la ONU.
El 29 de marzo de 2005 el presidente Álvaro Uribe Vélez condicionó los posibles diálogos con el ELN a que ese grupo guerrillero cesara
sus ataques a la población civil. Este pronunciamiento lo hizo el Presidente durante una cumbre realizada en la ciudad de Guayana con los
presidentes de Brasil, España y Venezuela. Hasta el momento de hacer
el Presidente esta declaración, el ELN solo se había comprometido a
suspender ataques contra la fuerza pública y la infraestructura nacional.
Por su parte, el Alto Comisionado para la Paz confirmó los acercamientos entre el Gobierno y el grupo guerrillero para efectuar un posible encuentro en México. Así lo confirmó el presidente en Venezuela,
sin revelar detalles del resultado de la charla preliminar y aprovechó
para agradecerles a los gobiernos de Cuba y México la gestión que realizan para que el grupo armado ilegal acepte sus condiciones.
COMUNICADO SOBRE ACERCAMIENTOS GOBIERNO
NACIONAL-ELN
El siguiente es el texto del comunicado expedido el 28 de marzo de
2005 por el alto comisionado para la paz, Luis Carlos Restrepo:
El Gobierno Nacional y el ELN desde el mes de junio del año pasado han venido realizando acercamientos con el propósito de analizar la
posibilidad de abrir un diálogo serio y constructivo.
Actualmente se estudian iniciativas con el fin de cualificar esta fase
exploratoria y darle continuidad hacia un proceso de paz, que permita
fortalecer la democracia colombiana.
244
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El Gobierno y el ELN destacan la efectiva facilitación de México y
llaman al acompañamiento internacional una vez se concrete este nuevo esfuerzo por la paz nacional.
Marzo 28 de 2005
Luís Carlos Restrepo
Alto Comisionado para la Paz
Desde las ochenta semanas que llevaba el proceso de negociación
con las autodefensas, en el Congreso se hundió el Artículo que permitía
darles un tratamiento de delito político a los crímenes de las autodefensas. En una maratónica campaña de medios, el Alto Comisionado, Luis
Carlos Restrepo, atacó a los opositores del proyecto como enemigos de
la paz. El senador Rafael Pardo declaró que estos diálogos eran “una
farsa”. Y en Ralito las cosas se pusieron tan tensas, que el principal vocero de las AUC dijo que el proceso estaba agonizando y que estaban
dispuestos a volver al monte.
Con el proceso en agonía, el Gobierno envió a Córdoba una delegación conformada por el Ministro del Interior, Sabas Pretelt; Luis Carlos
Restrepo y varios congresistas, con el propósito de bajarle la temperatura a la situación. ¿Qué tan real era la crisis? ¿Era todo esto un “cañazo”
de las AUC para presionar al Gobierno y al Congreso para que sacaran
una ley a la medida de sus intereses? ¿Qué tan divididos estaban los comandantes de las AUC frente a la negociación con el Gobierno?
Ante estos interrogantes, el Gobierno enfrentaba un enorme desafío.
De un lado, sacar una ley que facilitara el desmonte definitivo de los distintos grupos armados, por encima del chantaje y las presiones, y de otro,
lograr que esa ley pasara sin que las autodefensas se parasen de la mesa.
En este punto decisivo, Salvatore Mancuso era la figura que más simbolizaba lo que estaba viviendo el proceso. Junto con Carlos Castaño
fue el arquitecto de la idea de buscarle una salida política a la presencia
de los grupos de autodefensa. Era el único comandante que se había
desmovilizado, pero a la vez su suerte estaba amarrada al proyecto de
ley que se tramitaba en el Congreso, pues no había que olvidar que él
estaba solicitado en extradición por Estados Unidos y tenía varios procesos en la justicia colombiana.
245
Por considerarlo del mayor interés para los lectores, a continuación
se transcribe un reportaje publicado por la Revista Semana con el señor
Mancuso.
Semana: ¿Por qué ha guardado silencio desde su desmovilización?
Salvatore Mancuso: desmovilizarse es más duro que armarse.
La desmovilización implica una pausa que no había tenido en
años de guerra. Fue un reencuentro con la familia y con la sociedad. También fue un tiempo para buscar por dónde sigue mi vida.
Semana: ¿Cree que los diálogos de paz están en su peor momento?
S.M.: sí. Porque una ley que cercene la posibilidad de proyectarse dentro de la democracia a quienes son líderes naturales en
las regiones legitima la acción armada como alternativa de expresión política y desconoce el derecho de las poblaciones a elegir a
sus representantes.
Semana: ¿Lo que las AUC buscan básicamente es que se conceda un estatus político a todos los actores del conflicto?
S.M.: no. Esa no es la idea.
Semana: ¿Entonces qué pretenden?
S.M.: cuando se viene de la guerra y se abandonan las armas,
sólo se puede continuar la defensa de los intereses de las regiones
y poblaciones que desatendió el Estado, desde la política. Por lo
tanto, a los desmovilizados sí hay que otorgarles todos sus derechos políticos.
Semana: ¿Ese interés en la actividad política es personal o es
una aspiración de las AUC como organización?
S.M.: los tres grandes problemas de Colombia son paz, seguridad
y empleo, y si uno no actúa políticamente no tiene forma de resolver
esto. Y si se queda en el monte, menos. En los escenarios políticos
que hay falta conocimiento y representatividad. Los políticos están
246
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
tratando de resolver problemas que no conocen, de regiones que no
conocen y de comunidades que no representan.
Semana: lo que usted está diciendo es que tiene aspiración de
llegar al escenario político. ¿Quiere ser senador, representante o
gobernador?
S.M.: al escenario político sí. De hecho ya estoy en él. Mis actividades de hoy tendrán un desarrollo que inevitablemente desembocará en algún cargo de elección en cuanto la ley lo permita.
Semana: ¿Cree que si eso fuera posible, tendría los votos y el
apoyo popular suficientes para llegar a esos cargos?
S.M.: no sólo yo, seguramente muchos de quienes han liderado procesos de autodefensa en beneficio de las comunidades
serían elegidos.
Semana: ¿Y cuándo cree que puede darse ese escenario? ¿En
las próximas elecciones?
S.M.: no creo que sea conveniente identificar la política con
las elecciones y las candidaturas; hay un momento en que convergen, pero no son sinónimos. El ejercicio de la política no solo es
electoral. Las próximas elecciones ya están encima y el proceso
de paz, todavía en desarrollo; tampoco el marco legal ha sido
definido por el Congreso de la República, por lo cual nuestros
esfuerzos están centrados en la negociación política.
Semana: ¿Van las AUC a apoyar listas en la contienda electoral?
S.M.: eso dependerá de cómo defina la ley las posibilidades de
hacer política a los desmovilizados; si acaso se abre esa puerta y
culmina completamente el proceso de desmovilización antes de
que se agote el calendario electoral, con seguridad habrá candidatos de las antiguas AUC.
Semana: ¿Cómo van a ser las condiciones electorales en las
zonas de influencia?
247
S.M.: siempre han sido buenas y con plenas garantías. Si usted analiza quiénes son los protagonistas de la política en la Costa
y en otras partes del país, notará que son los mismos rostros, los
mismos apellidos y en general la misma clase dirigente que existía
antes de que se formaran las AUC.
Semana: ¿Hay más comandantes u otros miembros de las
AUC con las mismas aspiraciones políticas que usted?
S.M.: sí. Pero esa no es una aspiración que salga de uno; lo que
pasa es que se termina aceptando como una consecuencia de la
voluntad de la gente que durante años se sintió apoyada en nosotros. Recuerde que hablamos de zonas en donde el Estado nunca
estuvo y los comandantes ejercieron un liderazgo natural. Es más,
yo me atrevería a pensar que gran parte de los inconvenientes que
la ley ha enfrentado en el Congreso se deben a que algunos políticos tradicionales se sienten incómodos ante la perspectiva de que
nos permitan participar en política, por la competencia que ello
supone en territorios donde ellos ostentan el monopolio.
Semana: Alfredo Rangel ha dicho que la Corte Penal Internacional no es el ‘coco’ que todos piensan. ¿Qué tanto temor hay en
las AUC por el tema de esta Corte?
S.M.: más que un ‘coco’, es una realidad con la que hay que
contar. Nos hemos venido ilustrando sobre el alcance y la competencia de la CPI frente a nuestra seguridad jurídica. No es un
asunto de poca monta.
Semana: ¿Usted le tiene miedo a la CPI?
S.M.: la palabra no es miedo. A la CPI se le tiene respeto porque Colombia voluntariamente comprometió su concurso para el
éxito de su misión en todo el mundo.
Semana: Ernesto Báez dijo que los miembros de las AUC no
le tienen temor a la CPI, ni al tema de las penas de prisión, ni a la
extradición. ¿Entonces a qué le temen las AUC? ¿El tema acaso
se reduce a que los dejen participar en política? ¿O es parte de la
estrategia de negociación?
248
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
S.M.: hay una distorsión en los observadores frente al orden
de las prioridades para las AUC. El tema de la elegibilidad política es superior a los temores frente a lo punitivo o penal. Quienes
enfrentamos a la guerrilla con éxito tantos años no nos debatimos
en el miedo sino en la incertidumbre frente a un futuro que aún
no está muy claro y frente a nuestros compromisos con la gente.
Semana: ¿Pero no va a decir que le teme más a no tener espacios políticos que a que lo extraditen a Estados Unidos?
S.M.: le temo a la extradición, pero más que a la extradición le
temo a la falta de garantías jurídicas para esclarecer acusaciones
penales.
Semana: sí, pero a usted lo piden en extradición por un tema
muy concreto que no es político, y es el envío de un cargamento
de coca.
S.M.: jamás acepté esos cargos; desde que se conoció mi pedido de extradición vengo manifestando públicamente que no he
sido, no soy ni seré nunca narcotraficante. Esa certeza que yo
tengo acerca de mi inocencia es la que me induce a pensar que detrás de esa acusación existe un trasfondo político originado en mi
responsabilidad al frente de las autodefensas, el cual cobra más
importancia que el hecho en sí mismo del que se me acusa.
Semana: dicen que a usted se le ve muy tranquilo. Se rumora
que su tranquilidad se debe a que tiene una negociación en curso
con el Gobierno de Estados Unidos. ¿Qué hay de cierto?
S.M.: no. No tengo ningún acuerdo ni por encima ni por debajo de la mesa, ni con el Gobierno Nacional ni con Estados Unidos. No tengo nada asegurado a futuro. La preocupación va por
dentro.
Semana: aunque el Presidente dijo recientemente que el tema
de la extradición no es negociable, ¿las AUC pretenden que se
encuentre alguna fórmula que garantice por escrito que no serán
extraditados?
249
S.M.: es claro que la extradición no es negociable porque es
una potestad discrecional del Gobierno, por lo mismo que dije
anteriormente: las decisiones legales sobre las AUC se desprenden de la política más que de la ley penal. La firma de los acuerdos de paz y su cumplimiento deberían ser suficiente garantía que
afiance la paz de Colombia por encima de todo.
Semana: pero si no les aseguran la no extradición ¿las AUC
no dejan las armas?
S.M.: la seguridad jurídica necesaria para sustentar en el tiempo cualquier negociación de paz no es más que la creación por
parte del Gobierno de las condiciones de regreso a la vida civil.
Semana: el vocero de las AUC, Ernesto Báez, dijo que como
está planteado el proyecto, a las autodefensas no les queda otra
salida que “irse para el monte”. Algunos creen que esas declaraciones fueron simplemente un ‘cañazo’ para presionar al Congreso y al Gobierno.
S.M.: No hay que equivocarse, los comandantes de las AUC
tienen voluntad de paz. Pero tenga la seguridad de que cuando
dicen que si no se dan las condiciones adecuadas para la reinserción, van a volver al monte, no están “cañando”.
Semana: usted ha dicho que la ley como está planteada propiciaría una escalada del conflicto. ¿Qué quiere decir con eso?
S.M.: en la medida en que no facilite una salida para los protagonistas del conflicto, éstos se convencerán de que la única forma
es recrudecer la guerra para volver fortalecidos a la mesa con este
u otro gobierno.
Semana: ¿Quiere eso decir que, de romperse el proceso, se
podrían incrementar las acciones de las AUC para demostrar
su poder?
S.M.: la dinámica del conflicto se aceleraría de tal manera que
de parte de todos los actores no podría sino esperarse un recrudecimiento de la violencia.
250
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: Cree que si el proceso se rompe, ¿podría suceder que
para demostrar que son un grupo capaz de desestabilizar al Gobierno se enfrentarían al Estado?
S.M.: las AUC nunca han querido enfrentarse al Estado y
nunca incurrirían en tales prácticas porque se estarían desnaturalizando y perdiendo su identidad.
Semana: ¿Usted cree que podrían llegar al extremo de que algunos sectores de las AUC acudan al terrorismo como mecanismo para presionar al Gobierno y así forzarlo a negociar como
ocurrió en la época del terror con Pablo Escobar?
S.M.: jamás. La comparación es inaceptable.
Semana: ¿Qué tan fuertes militarmente están hoy en día las
AUC? ¿Tienen el poder para desestabilizar a un gobierno?
S.M.: el poder sí. La voluntad no. La capacidad militar ha
sido evidente; mire nada más los resultados en términos de territorios liberados.
Semana: usted ha dicho que no está satisfecho por los términos en que está planteado el proyecto. ¿Qué es lo que le molesta?
S.M.: La falta de universalidad de la ley. Nadie puede pensar en Colombia que las FARC y el ELN iniciarán negociaciones
bajo ese marco. La ley debe ser para Colombia, no exclusivamente para las AUC, o para tal o cual sector.
Semana: ¿Pero qué importancia tiene esto para las AUC, si lo
que importa es hacer por ahora una ley que funcione para acabar
con el fenómeno del paramilitarismo?
S.M.: cualquier ley que sea visualizada como hecha a la medida de las AUC y no a la medida del conflicto armado y de los
actores ilegales en su totalidad carece de legitimidad, despierta
suspicacias y aviva prejuicios, venganzas y retaliaciones que conspiran contra la seguridad jurídica de los desmovilizados.
251
Semana: muchos sectores de la sociedad han dicho que lo que
realmente quieren las AUC es que les concedan simplemente perdón y olvido y dejar a un lado la verdad, justicia y reparación a
las víctimas...
S.M.: aceptamos una reparación enmarcada en la convicción
de que todos hemos sido víctimas; la justicia es el equilibrio que
se debe lograr al evaluar la verdad integral de todos los actores,
debe ser una verdad total para que pueda ser liberadora. Una verdad que no desconozca la génesis, el desarrollo y la degradación
del conflicto. Sólo así será útil en el proceso de reconciliación.
Nosotros desempeñamos un papel que a nuestros ojos ha sido
patriótico. Sin embargo, somos conscientes de que la propaganda
del enemigo ha sido eficaz en distorsionar lo que para las comunidades es una certeza.
Semana: pero después de todo lo que han hecho los paras en
Colombia, ¿ustedes se consideran más víctimas que victimarios?
S.M.: el sólo hecho de vernos obligados a ingresar a una guerra que nunca quisimos nos convirtió en víctimas desde el primer
momento. Ya dentro de la guerra resultó inevitable que se causaran víctimas. Esto es parte de la lógica perversa de cualquier
conflicto armado. Lamentablemente es así.
Semana: ¿Qué cree que pueden opinar las víctimas con lo que
usted está diciendo?
S.M.: cada cual habla en nombre de su propio dolor. No veo
por qué haya que estratificar las víctimas según sean policías, militares, guerrilleros o autodefensas. Mucho menos entiendo por qué
hay que estratificar a las víctimas de la sociedad civil según hayan
sido producidas por unos u otros actores armados legales e ilegales
del conflicto. La víctima es siempre víctima y merece el mismo
tratamiento de parte de la ley. Ojalá todos los actores del conflicto
lleguen a la misma conclusión a la que ya arribaron las AUC en
cuanto a la necesidad de que todas las víctimas del conflicto sean
reparadas de alguna manera, y nosotros somos víctimas.
252
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: ¿Cuál sería esa salida por medio de la ley?
S.M.: cuando usted ve que los grupos de narcotraficantes empiezan a organizarse como facciones militares, terroristas, e incluso con infiltraciones en la política, podemos ver allí que están
buscando salidas negociadas a sus problemas ante la legalidad. Si
el Estado no facilita la salida ante esas mutaciones, la violencia se
perpetuará con los actores cambiando de forma.
Semana: ¿Está planteando una ley de sometimiento para los
narcotraficantes?
S.M.: definitivamente sí, para quienes muestren buena voluntad. Mientras el Estado no lea correctamente las diferentes expresiones que están manifestando los narcotraficantes, el fenómeno
se agravará y la paz no será alcanzable. No podemos olvidar que
el narcotráfico es el banquero de la guerra.
Semana: ¿Ese planteamiento podría ser interpretado como
que también es para resolver los problemas de narcotráfico de algunos comandantes que están en Ralito? Podría convertirse en
una operación gigantesca de lavado por medio del estatus político
que adquieren los sectores del narcotráfico vía paramilitarismo.
S.M.: no. El planteamiento busca resolver los problemas de
Colombia, que repercuten en Ralito, así como también en todos
los escenarios de la vida nacional.
Semana: el narcotráfico ha sido un tema que permanentemente ha rondado los diálogos, especialmente porque se ha señalado
que algunos comandantes de las AUC tienen vínculos o viven de
esa actividad. ¿Hasta dónde llega esa relación narcotráfico-AUC?
S.M.: la guerrilla se estacionó en las zonas de producción
de narcóticos para financiarse -más aún, los incentivaron-. Para
debilitarla militarmente debimos sacarla de esos territorios; del
mismo modo, el aparato militar de las AUC se fortaleció con los
tributos de las economías de las zonas donde combatimos. Siempre hemos encarado el tema con mucha franqueza, pero eso no
nos convierte en narcotraficantes. La ley de Estados Unidos la-
253
mentablemente no hace estas distinciones que los colombianos sí
tenemos el deber de identificar.
Semana: ¿Hay narcotraficantes en la negociación?
S.M.: no. Hay dinero del narcotráfico en el conflicto.
Semana: Se cumple un año de la desaparición de Carlos Castaño. Al fin, ¿está vivo o muerto?
S.M.: sólo Dios lo sabe.
Semana: ¿Cree que usted podría correr el mismo destino trágico de algunos comandantes de las AUC como “Doble Cero” o
Miguel Arroyave, que fueron asesinados por los propios paras?
¿Siente miedo?
S.M.: soy consciente de todos los riesgos, más ahora que estoy
desmovilizado, pero yo no me detengo en esas consideraciones.
Mi ocupación es la vida, el futuro de este país, el porvenir de
quienes han confiado en nosotros, y eso me lleva todo el tiempo.
Semana: ¿Cuál es su actual contacto con los comandantes de
Ralito? ¿Cómo percibe el ambiente entre ellos?
S.M.: permanentemente hablo con ellos. Siempre existe la oportunidad de aportar positivamente. En cuanto al ánimo de los comandantes, no puedo ocultar que hay desconcierto y preocupación.
Semana: es un hecho que cada vez más hay divisiones internas
en las AUC y que algunos comandantes quieren levantarse de la
mesa de diálogo. ¿Qué tan grave es la atomización?
S.M.: hay que entender que las AUC tienen una estructura de
mando horizontal. Es una especie de junta directiva donde hay
diferentes opiniones y todas poseen un peso equilibrado. Al final,
las decisiones se toman por consenso.
Semana: si el proceso se rompe, ¿cuál va a ser su futuro? ¿Se
devuelve al monte?
254
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
S.M.: no, no regresaré al monte. Es una decisión de vida, no
dejé las armas para tomarlas al día siguiente o al año o a los diez
años. Permaneceré en la vida civil y desde allí seguiré trabajando.
Semana: ¿Cree que el proceso se va a romper?
S.M.: lo veo en su etapa más crítica, pero debe triunfar la
sensatez78.
MÉXICO RENUNCIA A SU FACILITACIÓN CON EL ELN
El 18 de abril de 2005, el Gobierno de México renunció a su papel de facilitador en los diálogos entre el Gobierno Nacional de Colombia y el ELN.
La razón para esta inesperada decisión fue la descalificación que
hizo el ELN sobre el Gobierno Mexicano, a través de un comunicado
de su comando central. El ELN criticó el voto de México en contra de
Cuba en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. Igualmente,
este grupo guerrillero se pronunció en contra del desafuero del alcalde
de la capital mexicana, Manuel López Obrador.
Estos hechos tomaron por sorpresa al Gobierno Nacional y a la opinión pública que veían cercana la iniciación de unos diálogos formales
con el ELN, posiblemente en territorio mexicano.
LA CAPTURA DE “DON BERNA” O “ADOLFO PAZ”
El 26 de mayo de 2005 se conoció la noticia según la cual un fiscal de
la ciudad de Montería había dictado auto de detención contra el señor
Diego Murillo, alias “Don Berna” o “Adolfo Paz”, uno de los directivos
de las AUC reunidos en Santa Fe de Ralito.
El Gobierno Nacional autorizó a la policía para cumplir con la orden de captura en la zona de ubicación de las autodefensas, lo cual puso
en serio peligro la continuidad de las negociaciones entre esos grupos al
margen de la ley y el Gobierno.
78
Op. cit. Bogotá, abril, 2005.
255
El Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, se reunió con el Estado Mayor de las AUC en Santa Fe de Ralito, en el marco de una jornada
de tensión que parecía amenazar la continuidad del proceso.
El documento de la Fiscalía sindicaba a este jefe de las AUC, uno
de los más influyentes en la organización, el más curtido en la guerra
y el de mayor poder militar, de ser el autor intelectual del asesinato del
diputado de Córdoba, Orlando Benítez, ocurrido el 10 de abril de 2005.
La Fiscalía había suspendido la medida teniendo en cuenta que “Don
Berna” se encontraba dentro de la zona destinada a las conversaciones
de paz.
Cuando la policía al mando de su comandante general llegó a Santa
Fe de Ralito, “Don Berna” había desaparecido. “Ernesto Báez”, el vocero político de las AUC, manifestó a los medios de comunicación que
mientras no existiera una prueba contundente contra “Don Berna” él
contaría con el respaldo de las AUC.
El comisionado Luis Carlos Restrepo y el delegado de la OEA, Sergio Caramagna, viajaron a Ralito e iniciaron una reunión con los dirigentes de las AUC. El Gobierno se enfrentaba al dilema de mantener un
área que, similar a lo ocurrido con la zona de distensión de las FARC,
colocaba lejos del alcance de las autoridades a personas que podrían
cometer delitos por dentro o fuera de ella.
A pesar de las situaciones críticas que se vivían en Santa Fe de Ralito, los miembros del Bloque Suroeste de las autodefensas anunciaron
la próxima desmovilización de 130 de sus militantes. Esta desmovilización se cumpliría el domingo 29 de mayo de 2005 en el corregimiento
Alfonso López, en Ciudad Bolívar, al suroccidente del departamento
de Antioquia.
Después de tres días de búsqueda, Diego Murillo se entregó el 27 de
mayo a la Policía en la zona de concentración de Ralito. Diego Murillo,
conocido con los alias de “Don Berna” o “Adolfo Paz”, se entregó ante
el Director de la Policía, General Jorge Castro, en un punto cercano a
Santa Fe de Ralito.
256
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
La entrega de “Don Berna” fue resultado de un acuerdo entre el Alto
Comisionado de Paz y los jefes de las autodefensas, con quienes estuvo
reunido durante varias horas el mismo día de la entrega.
En un comunicado expedido por el Ccomisionado de Paz se estableció que “Don Berna” permanecería a disposición de la Fiscalía General
de la Nación recluido en un lugar bajo la vigilancia y custodia del Inpec,
pero no sería llevado a una cárcel. Se supo también que “Don Berna” se
comprometía a desmovilizar a todos los hombres bajo su mando.
COMUNICADO DEL ALTO COMISIONADO
El Alto Comisionado para la Paz informa a la opinión:
1. El día de hoy a las 6:00 de la tarde, el señor Diego Fernando
Murillo Bejarano quedó a órdenes de la justicia para investigar el
crimen por el que se le solicita.
2. El señor Murillo Bejarano se compromete a desmovilizar de manera inme-diata la totalidad de las estructuras que operan bajo
su mando.
3. En su condición de desmovilizado, el señor Murillo Bejarano
permanecerá en un sitio definido por el Gobierno Nacional bajo
el cuidado del Inpec y la fuerza pública.
4. Las Autodefensas Unidas de Colombia comunican que a partir de la fecha se reanudan las desmovilizaciones colectivas en
todo el país. Al frente de este proceso se desmovilizará el señor
Vicente Castaño Gil. Anuncian también el inicio de la desmovilización del Bloque Central Bolívar, bajo la dirección del señor
Javier Montañez.
Bogotá, mayo 27 de 2005.
DECLARACIÓN DE LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA
SOBRE LA SITUACIÓN DE “DON BERNA”
“El ejercicio firme y transparente de la autoridad para recuperar la
paz en Colombia nos conduce finalmente a lo que tienen que ser acuer257
dos humanitarios. Invito al país a una reflexión sobre la necesidad de
persistir en la autoridad firme, cada día más eficaz y más transparente, e
invito a todos los que han estado en caminos equivocados a ver que en
Colombia hay la posibilidad de llegar a la paz a partir de la autoridad
firme por el camino de los acuerdos humanitarios”.
SE REANUDAN LAS NEGOCIACIONES ENTRE EL
GOBIERNO Y LAS AUC
El sábado 28 de mayo el Gobierno Nacional y las autodefensas reanudaron las negociaciones de paz. El Alto Comisionado viajó a Santa
Fe de Ralito, sede de los diálogos, en el departamento de Córdoba.
El Alto Comisionado y las Autodefensas Unidas de Colombia sostuvieron la primera reunión tras superar la crisis que hasta la víspera
sufrió el proceso de paz por la orden de captura a uno de sus jefes, quien
decidió entregarse luego de una negociación.
Este fue el tercer encuentro del comisionado con las AUC desde que
el presidente Álvaro Uribe ordenó dar cumplimiento a una orden de
detención de Diego Murillo, tercero al mando de esa organización, y su
juicio, sin los beneficios que le puede otorgar el proceso de paz.
Después de rendir indagatoria ante la Fiscalía, Diego Murillo, “Don
Berna”, fue confinado en calidad de retenido en una finca en Valencia,
Córdoba, mientras se definía su situación legal. El lugar estaba situado
en la vereda Las Piedras. El comisionado aclaró que el predio no era
propiedad del líder paramilitar ni tenía nada que ver con las autodefensas. La vigilancia del retenido estaría a cargo de 150 policías y dos
asesores del Inpec.
“Don Berna” era considerado heredero directo del poder de los hermanos Castaño. En el corregimiento de Villanueva, Fidel Castaño montó su centro de operaciones contra las FARC y el EPL. Al ingresar a las
AUC, “Don Berna” se asentó en este territorio como parte de una presunta negociación con Carlos Castaño. “Don Berna” era el alias con el
que se identificaba a Diego Murillo antes de ingresar a las AUC. Luego
adoptó el de “Adolfo Paz”.
258
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El 1 de junio de 2005 el Gobierno Nacional resolvió reconocer como
“miembro representante de las Autodefensas Unidas de Colombia” a
José Vicente Castaño Gil. La decisión se tomó a través de la Resolución
107 del 1 de junio de 2005, firmada por el presidente Álvaro Uribe Vélez y el Ministro del Interior y de Justicia, Sabas Pretelt de la Vega.
Por considerarla documento de la mayor importancia, se transcribe
la entrevista realizada por los periodistas Víctor Diusabá Rojas y Carlos
F. Álvarez C., de Colprensa, al Alto Comisionado de Paz.
Luis Carlos Restrepo asegura en ella que el fenómeno de las autodefensas tiene raíces culturales. “Este país es propenso al linchamiento, a
la justicia por propia mano, lo que frente al horror de la guerrilla generó
el fenómeno paramilitar con cierto apoyo ciudadano”.
Pragmático: así calificó el proceso de paz con el grupo armado ilegal
de autodefensas el Alto Comisionado para la Paz. Y esa funcionalidad
es lo que, según el comisionado, le dio un vuelco de 180 grados al estancamiento en que estaban las negociaciones. Resolver la crisis de alias
“Don Berna”, que reconoció como la peor sucedida en el difícil proceso
con los paramilitares, fue la clave.
Nueva entrevista con el Alto Comisionado
A mí no me asustan las crisis, como la de “Don Berna”, afirma Restrepo, quien en diálogo con Colprensa hizo un balance sobre el estado
actual del proceso de negociaciones con los paramilitares, respondió a
las críticas sobre el mismo y habló sobre el proyecto de Justicia y Paz.
Colprensa: ¿Hoy cómo está el proceso de paz con las AUC,
en medio de las críticas que ya lo comparan con el del Caguán?
Luis Carlos Restrepo: el proceso es muy distinto hoy al de
hace diez años. Es indudable que una circunstancia de crisis bastante grave y delicada como la de “Don Berna” se pudo sortear
de manera constructiva y hoy tenemos el compromiso de Vicente Castaño de liderar las desmovilizaciones que faltan, al Bloque
Central Bolívar en esa línea y las estructuras de Diego Murillo ya
en desmonte. Eso cambió completamente el panorama. Ya entra259
mos en la recta final de este proceso. A mí no me asustan las crisis. Creo que eso es propio de estos procesos de diálogo, y lo que
le toca a un comisionado, o a un negociador, es cabalgar sobre
ellas y convertirlas en oportunidades.
C.: “Don Berna” está detenido en una finca-cárcel de Córdoba. ¿Cuál es la sensación que quedó en la zona de ubicación?
L.C.R.: entiendo que dentro de sectores de las autodefensas
hay molestia. Es normal. Un forcejeo de esto deja moretones,
heridas y desconfianzas. Les he dicho que deben comprender el
momento en el que estamos y es el de la desmovilización, el de
aceptar unas condiciones generosas que el Gobierno les ha ofrecido. ¿Qué tanto lo han comprendido?. No sé. Yo sí he visto en
ellos muchas dudas e incertidumbres. El hecho de que el tema de
Murillo nunca haya sido tratado en la mesa, dificulta saber qué
querían. Hace semanas el país conoció que tampoco les gusta el
proyecto de Justicia y Paz. No se trata de si les gusta o no, sino
de la realidad, de atender a unas exigencias de la sociedad. Estoy
seguro de que lo entenderán. Aquí no hay “plan b”. O lo toman
o lo dejan, pero si lo dejan, les significará unos costos muy altos.
C.: una de las críticas al proceso es que los desmovilizados
han vuelto por sus fueros o han sido asesinados.
L.C.R.: los índices de desmovilizados asesinados y encarcelados, después de la desmovilización, no son muy altos: apenas del
1% por homicidios y 1% de reincidentes. En otros países del mundo se habla del 15%. En términos generales eso está bien. Quienes
regresaron a sus lugares de origen están recibiendo salud, subsidio por parte del Gobierno y capacitación por parte del Sena.
C.: hay cerca de dos mil casos de violaciones del cese el fuego
reportados por organizaciones independientes.
L.C.R.: diferenciemos dos ángulos: el de los desmovilizados y
el de aquellos que no lo han hecho. Quienes se han desmovilizado
en general están cumpliendo el cese el fuego, sobre todo los jefes.
Debo dar fe que Salvatore Mancuso, Éver Velosa, “El Águila” y
otros desmovilizados cesaron toda actividad delictiva, están bajo
260
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
custodia de las autoridades, cumpliendo labores relacionadas con
el proceso. Otros han incurrido en actos delictivos, el 1%.
C.: pero se dice que existe el llamado reciclaje de combatientes.
L.C.R.: en ninguno de los sitios donde hubo desmovilizados
se reprodujeron esas estructuras. No hay ese reciclaje. Siguen presentes fenómenos delincuenciales.
C.: pero, ¿de qué tamaño es, según el Gobierno, la violación
al cese?
L.C.R.: es claro que sí ha habido violaciones al cese de hostilidades. Esta oficina cuenta hasta la fecha cerca de 500 homicidios
atribuidos a las autodefensas desde el inicio del cese. Hemos informado de eso a la opinión pública.
Como lo dijo César Gaviria cuando empezó la misión de la
OEA al proceso, la verificación plena de un cese puede darse
cuando hay desmovilización. Cuando estas estructuras permanecen armadas y con una presencia difusa en el país, es muy difícil
garantizar un cese de hostilidades total. Eso es histórico en Colombia, desde Belisario, Barco y Pastrana.
C.: ¿Y cómo hacerlo respetar?
L.C.R.: para el Gobierno lo valioso es el criterio. Las autodefensas empeñaron su palabra en cuanto a que cesaban acciones
violentas, y al haberla empeñado, violar el cese de hostilidades
tiene un costo político. Por supuesto, las acciones judiciales derivadas de esa violación mantienen plena vigencia. Pero políticamente, cada vez que ellos violan el cese, de alguna forma se
acercan más a la desmovilización.
El Gobierno ha cobrado políticamente en la mesa. Precisamente, por esas violaciones que han hecho es que hoy hablamos
de desmovilización. Sin embargo, no deja de horrorizarnos cada
delito, cada crimen cometido es inadmisible. Pero el Gobierno
también ha respondido militarmente a esas violaciones.
261
C.: ¿Cuáles son los resultados concretos de esa respuesta?
L.C.R: el país no tiene buena memoria. En el 2000 y el 2001
no hubo un solo abatido de las autodefensas por parte de la fuerza
pública. Entre enero y abril de este año van 1 060 capturados y
132 abatidos. Las acciones militares contra las autodefensas crecieron en un 300%.
En el 2004 fueron abatidos 558 y capturados 4 836. Además
de la negociación, está la respuesta militar como nunca se había
desarrollado en el país contra las autodefensas. Y también este
problema, que no era claro, el Gobierno lo ha visibilizado. Fue el
Gobierno el que dio a conocer la penetración de las autodefensas
dentro del sistema de salud.
C.: según el senador Jimmy Chamorro, como está redactado
el proyecto de Justicia y Paz se dejan las puertas abiertas para la
comisión de otros delitos, como narcotráfico, lavado de activos y
hasta peculado.
L.C.R.: me sorprende la argumentación del senador Chamorro. Él es un hombre estudioso. Por eso me llama la atención que
haga afirmaciones carentes de fundamento. Cuando él plantea
que los delitos atroces y el narcotráfico pueden ser conexos de la
sedición, desconoce no solamente toda la legislación colombiana
que prohíbe expresamente eso, sino las normas internacionales.
Hay exceso de interpretación y suspicacia.
C.: los opositores dicen que el Gobierno les está dando estatus
político a las autodefensas.
L.C.R.: eso es falso. El estatus político era una resolución que
emitía el Presidente para poder conversar con los grupos armados
ilegales. Resoluciones de ese tipo firmaron el presidente Pastrana, el
presidente Samper y de ahí para atrás. Nosotros excluimos ese requisito y no queremos revivirlo, porque es un absurdo que para hablar
con unos ilegales, el Presidente tenga que concederles ese estatus.
Sólo tipificamos la conducta de las autodefensas como un delito de sedición, que tradicionalmente se llama delito político. Y lo
hacemos porque interfieren con el orden constitucional y legal, y
262
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
porque hay que darle un marco legal al asunto, para que después
no nos digan que, por error de interpretación, esas resoluciones
inhibitorias que otorgamos a los desmovilizados no sirven, y siete
mil reinsertados vayan a la cárcel.
C.: ¿Y los delitos de lesa humanidad o asesinato?
L.C.R.: está claro que la ley no beneficiará a quienes estén
comprometidos en ellos. Las personas que cometen sólo sedición
conservan sus derechos políticos; quienes cometen secuestro u
homicidio los pierden y no lo queremos modificar. Esto hay que
verlo como un asunto pragmático, de seguridad jurídica.
C.: ¿Hay doble moral y apoyo social al paramilitarismo en
Colombia?
L.C.R.: yo no utilizaría ese término de doble moral, pero sí
me preocupa que las mismas personas que durante tantos años
han sido tan entusiastas en buscar una salida negociada con la
guerrilla, sean los más duros críticos del proceso con las autodefensas. Que las mismas personas que adelantaron procesos de paz
con la guerrilla, sin hablar nunca de justicia, porque esa palabra
no se mencionó ni en los diálogos del Caguán o del ELN, ahora
se escandalizan porque los jefes de las autodefensas no van a terminar de por vida en la cárcel. Y me preocupa, porque se trata de
gente muy inteligente y capaz.
C.: ¿Por qué insiste en que usted es pragmático?
L.C.R.: para mí, unos y otros son personas al margen de la
ley. No tengo especiales simpatías con guerrilleros ni con paramilitares, pero creo que debemos buscar una alternativa con ellos.
C.: vienen elecciones y el debate parece girar, otra vez, en el
manejo de la paz.
L.C.R.: me preocupa también, porque hay un ambiente político inmaduro. Todavía aquí se tiene la estrategia de identificar al
contradictor con el ilegal, con el bandido armado. Me preocupa
la superficialidad con la que personas de muy alto nivel, generadores de opinión, dirigentes, dan declaraciones que rayan en
263
la calumnia. Adelantar un proceso de paz así es difícil. Se dicen
cosas inimaginables. A mí me han identificado con los ilegales,
por momentos. Al Gobierno se le acusa de tener alianzas con
un grupo armado ilegal o se nos muestra como si estuviéramos
legalizando a una mafia. Pero esa es la democracia que tenemos.
Además de lo difícil que es manejar a los grupos ilegales, es
más complejo ma-nejar la cultura política del país. Falta grandeza de espíritu y visión de estadista para manejar problemas tan
complejos.
C.: ¿Le preocupa que una vez pase la desmovilización de las
AUC su semilla subsista?
L.C.R.: el fenómeno de las autodefensas se ha simplificado
al extremo. Hay una especie de visión esquemática de las autodefensas, en cuanto a decir que estos señores son unos asesinos
feroces, que defendieron a unos terratenientes y que mataron a
unos campesinos pobres, y además, aliados del Estado. Esa es la
percepción de algunos sectores en el país y que es comprada por
otros en el extranjero.
Pero en las zonas donde operan las AUC se da uno cuenta de
algo más complejo: las autodefensas tienen unas raíces culturales.
Este es un país con mentalidad de autodefensa, que no cree en las
mediaciones democráticas, ni en el Estado, propenso al linchamiento, a la justicia por propia mano, y que frente al horror de
la guerrilla se generó el fenómeno paramilitar con cierto apoyo
ciudadano. Esa es una fragilidad seria de la democracia. En esto
no se diferencian las autodefensas ni la guerrilla.
C.: ¿Cuestión de mentalidad?
L.C.R.: sí. Por esa creencia, los analistas ni la comunidad internacional prestan atención a las poblaciones donde ocurren las
desmovilizaciones. Me he cansado de pedirle a la comunidad internacional y sectores académicos que nos ayuden a mostrar ese
problema. Se necesita una gran acción de educación democrática
y pedagogía.
264
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Se cree que el problema de la autodefensa se resume a un comandante paramilitar que hay que meter a la cárcel y no se mira
al fenómeno sociológico, de cómo en el país se legitimó la violencia para enfrentar la violencia.
El problema no son los tres o cuatro comandantes de autodefensa en el proceso de desmovilización, sino las comunidades.
Sería lamentable que ante una nueva amenaza, llámese guerrilla
o de cualquiera otro grupo ilegal, este fenómeno se reprodujera.
Hay que aprender a vivir la amenaza violenta enfrentándola con
mecanismos democráticos79.
ENTREVISTA CON JOSÉ VICENTE CASTAÑO GIL
Por tratarse de un documento de la mayor importancia, dado que es
el testimonio de uno de los más caracterizados dirigentes de las AUC,
transcribimos textualmente una entrevista exclusiva entregada por José
Vicente Castaño Gil a la Revista Semana. José Vicente Castaño Gil jamás había hablado en público. La única imagen que se conocía de él era
una vieja fotografía que tiene más de treinta años. En la última década
su nombre ha estado cubierto por un manto de misterio.
Por años dejó que sus hermanos, Carlos y Fidel, fueran los protagonistas públicos de la historia reciente del paramilitarismo en Colombia.
Mientras ellos, Fidel en los 80 y Carlos en los 90, concentraban la atención de los medios y la opinión pública, en el transfondo del siniestro
mundo paramilitar, Vicente fue asumiendo las riendas de uno de los
ejércitos ilegales más poderosos y sangrientos del país: las AUC.
Mientras Carlos era el vocero, Vicente era el cerebro. Mientras Carlos salía en televisión, Vicente creaba frentes de paramilitares en distintas regiones del país. Fue él quien hace más de diez años consolidó los
primeros bloques de autodefensa y se encargó de diseñar y expandir el
fenómeno paramilitar a todos los rincones del territorio.
No ha sido, ni es, jefe de ningún bloque de las autodefensas. No tiene
a ningún hombre bajo su mando. Pero tiene el respeto y la obediencia
79
DUISABÁ, ROJAS, Víctor y ÁLVARES C., Carlos. En: Colprensa.
265
de todos los comandantes. Vicente es hoy el único factor de cohesión de
esa confederación armada bastante anárquica en que se han convertido
las autodefensas.
Junto con Salvatore Mancuso convenció a los comandantes paramilitares de todo el país de sentarse en la mesa de negociación con el
Estado. Y ha sido clave en dirimir las diferencias internas entre los paramilitares y afianzar un proceso de diálogo con el Gobierno, que ha
estado lleno de tropiezos y escepticismo. Vicente Castaño ha estado relacionado con muchos episodios criminales y varias investigaciones penales. Una de ellas lo señala de haber ordenado el atentado del dirigente
sindical Wilson Borja en diciembre de 2000. También está relacionado
en los procesos que se abrieron tras los asesinatos de los ex congresistas
araucanos Alfredo Colmenares Chía y Octavio Sarmiento.
Su nombre también ha sido vinculado con el mundo del narcotráfico. El año pasado el fiscal David Kelly, del Distrito Sur de Nueva York,
lo acusó, junto con Diego Fernando Murillo, alias “Don Berna”, de haber exportado “miles de kilos de cocaína a Estados Unidos, y es responsable de haber proporcionado cómplices con rutas para la importación
de miles de kilos de cocaína desde Colombia hasta Estados Unidos”,
según el “indictment”.
La semana pasada el Gobierno anunció la próxima desmovilización
de Vicente Castaño. Después de años de silencio, “El Profe”, que es el
alias con el que se le conoce por sus consejos hacia los comandantes,
decidió ponerle la cara al país para hablar de todos los temas. Semana
presenta en exclusiva la única entrevista que ha dado el verdadero hombre fuerte de los paramilitares.
Semana: ¿Por qué después de tantos años de permanecer en la
sombra y en el anonimato decidió hablar públicamente?
Vicente Castaño: porque estoy cada día más convencido de
que las armas sobran y para tratar de convencer a la gente que las
armas sobran hay que hablar.
Semana: ¿Cómo se vinculó usted con las autodefensas?
266
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
V.C.: hace once años por un llamado de mi hermano Carlos
cuando ocurrió la desaparición de Fidel. Antes de eso yo estaba
dedicado a manejar los negocios de la familia.
Semana: ¿Por qué lo llamó su hermano Carlos?
V.C.: porque él se sintió solo. Cuando Fidel desapareció Carlos continuó con el grupo de Fidel y comenzó a formar unas autodefensas. Pero, como al año él no sabía si seguir con las autodefensas. Fue ahí cuando me llamó en total desespero y me dijo
que cogiera las riendas. En ese momento, hace once años, no eran
propiamente autodefensas sino un pequeño grupo de hombres,
menos de cuarenta. Frente al desespero de Carlos yo asumo la
dirección de lo poco que había en ese momento.
Semana: una vez adentro, ¿qué hizo?
V.C.: la situación en el norte del país se comenzó a complicar
y aumentaron los ataques de la guerrilla. Entonces yo llamé a
todos los vecinos que tenían pequeños grupos para defenderse. El
primero al que llamé fue a Mancuso. Eso fue a finales de 1995.
Semana: concretamente, ¿qué papel desempeñaba usted y cuál
era la posición de Carlos?
V.C.: Carlos empezó manejando y coordinando todas las relaciones entre los diferentes grupos. Él se encargaba de las relaciones con la fuerza pública y del poco trabajo político que se podía
hacer en ese momento. Él toda la vida ha sido muy fuerte en ese
tema. Yo empecé a crear y manejar la escuela de formación.
Semana: ¿Cómo era la escuela de formación?
V.C.: inicialmente la escuela era de formación militar. Después fue de formación política y trabajo social.
Semana: ¿Usted sabía de táctica militar?
V.C.: yo no sabía nada de entrenamiento militar. Esa tarea
se la delegué al comandante Rodrigo, quien era un hombre bri267
llante y había sido el jefe de seguridad de Fidel. Rodrigo había
sido Capitán del Ejército y tenía gran conocimiento de táctica y
estrategia militar. La escuela empezó a crecer gracias a los contactos y las amistades que Rodrigo y Carlos tenían para ingresar
armamento al país.
Semana: durante años Carlos Castaño fue el comandante de los
paramilitares y de un momento a otro decidió renunciar. ¿Qué pasó?
V.C.: fue una cosa que inicialmente nunca entendimos y él
nunca lo explicó. Después con el tiempo ya nos dimos cuenta, y
él mismo confesó que renunció por algo estratégico, que era tratar
de tomar distancia de la Corte Penal Internacional, CPI.
Semana: ¿Pero cuál era la estrategia?
V.C.: él empezó a estudiar muy bien el tema cuando salió el
rumor de que podía ser juzgado por la CPI. El argumento de Carlos era que tenía que tomar distancia porque había ciertas fechas
a partir de las cuales la Corte empezaría a cobijar los delitos que
le imputaban y necesitaba blindarse.
Semana: usted y Carlos estaban distanciados y se habla de discusiones muy fuertes entre los dos por diferentes temas.
V.C.: nosotros nunca tuvimos riñas. Carlos siempre hacía sus
cosas solito y yo siempre hacía las mías. Él nunca me anunciaba
sobre sus cosas y yo siempre le anunciaba las mías. A nosotros
nunca nos vieron alterados. Nuestras relaciones toda la vida fueron buenas. Jamás llegamos a tener un problema.
Semana: ¿Qué opina de la versión que le atribuye a usted el
asesinato de su hermano Carlos Castaño?
V.C.: la versión de que yo lo mandé matar apareció porque
hubo un incidente entre los hombres que manejan mi seguridad
en un intercambio de disparos. La versión sale del hecho de que
a mi gente de seguridad la vieron en el lugar de los hechos y que,
como ellos no hacen nada sin mi consentimiento, entonces la
conclusión fue que yo lo había ordenado.
268
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: ¿Y qué hacía su gente de seguridad en el lugar donde
desapareció Carlos Castaño?
V.C.: solucionando un problema de tierras del cual Carlos estaba enterado.
Semana: ¿Carlos Castaño está vivo o muerto?
V.C.: está desaparecido, porque ninguno de nosotros lo ha visto muerto. Hasta que no aparezca o lo vea muerto no diré nada.
Semana: entonces, ¿qué pasó con él?
V.C.: él manejaba unos sofismas que nunca los entendíamos
y nunca los entenderemos. Él, por ejemplo, preguntaba por Pedro
para averiguar por Juan. Hacía cosas planeadas con show y cuando
las cosas son así uno nunca puede asegurar qué fue lo que pasó.
Semana: ¿Está insinuando que negoció y se entregó a la justicia de Estados Unidos?
V.C.: él toda la vida siempre soñó con eso. Fue un sueño que
mantuvo pero nunca los americanos le aceptaron una negociación.
Semana: ¿Por qué no?
V.C.: porque nosotros no hemos entendido todavía la verdadera política de los americanos respecto al narcotráfico. Él hizo
una vez una gran convocatoria a nivel nacional con los narcotraficantes más poderosos y los convenció de entregarse. La lista era
de más de cien personas dispuestas a negociar con los gringos.
La presentó a la embajada y se la rechazaron. Ni siquiera se la
recibieron.
Semana: ¿Pero él negoció con los estadounidenses?
V.C.: no puedo decirlo con seguridad. Lo que sí sé es que él
mantenía buenas relaciones con algunos americanos. Lo del asilo
269
político y de sus dos esposas es muy diciente. La primera esposa tiene asilo político y la segunda tiene carácter de refugiada en ese país.
Semana: ¿Usted cree que como contraprestación a eso Carlos
Castaño colaboró con la justicia de Estados Unidos?
V.C.: es una posibilidad que no es descartable.
Semana: ¿Cómo han asumido los comandantes de las autodefensas el proceso de paz?
V.C.: en las autodefensas no todo el mundo estaba preparado
para un proceso de paz. Comenzando porque en las autodefensas
había algunas pocas personas que siempre soñaron con tener un
grupo con poder, unas buenas relaciones y una buena cantidad de
dinero. Y en el momento en que consiguen todo eso, se les dice
“ya no más, ahora a entregarse”. Eso cayó como un baldado de
agua fría para muchos comandantes. El trabajo de convencimiento que nos tocó hacer al comienzo a Mancuso y a mí fue muy
duro para que la gente aceptara la posibilidad de dialogar sobre
un proceso de paz.
Semana: ¿Cuál es su papel en el proceso de paz?
V.C.: convencer a todos los comandantes de entregar las armas. La Seguridad Democrática funcionó y se nos ha terminado
la razón de existir. Las autodefensas nacieron porque el Estado
no podía defendernos, pero en este momento el Estado está en
capacidad de defender a los ciudadanos.
Semana: ¿Usted decide desmovilizarse porque cree que ahora
sí hay seguridad?
V.C.: el Estado sí puede garantizar la seguridad en las zonas
en donde nosotros estamos. Si no lo hace es porque no quiere, le
da pereza, o le da miedo cometer algún exceso de fuerza. Pero no
es por incapacidad. En donde el Estado quiere llegar, llega. Hay
que obligar al Estado a que cumpla con sus funciones.
Semana: ¿Qué tan convencidos están los comandantes y los
combatientes de desmovilizarse en plena campaña electoral?
270
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
V.C.: el ambiente ahora es de preocupación e incertidumbre
debido al cambio de Presidente. Nosotros tenemos la palabra de
un presidente comprometido con el país, pero eso nos dura un
año. A los comandantes les preocupa saber cuándo y en qué condiciones les va a tocar desmovilizarse. Cuáles van a ser las condiciones de la Ley de Justicia y Paz, y cuál va a ser la posición del
próximo Presidente frente a las autodefensas. Porque con Uribe
uno ya sabe a qué atenerse.
Semana: ¿Eso quiere decir que el compromiso de desmovilizar todas las estructuras paramilitares a finales de 2005 no se
cumpliría?
V.C.: si hay seguridad legislativa se podrá cumplir con todas
las desmovilizaciones. Si no tenemos seguridad y no sabemos con
qué política llegará el nuevo Presidente será muy difícil convencer
a toda la comandancia de las virtudes del proceso de paz. Habría
que esperar el nuevo Gobierno.
Semana: cuando hablan de seguridad jurídica, ¿incluyen el
tema de la extradición y la Corte Penal Internacional?
V.C.: por supuesto. Es muy difícil desmovilizarse y entregar
las armas si existe la posibilidad de terminar en una cárcel de
Estados Unidos. Cuando hablo de un blindaje jurídico incluyo la
extradición.
Semana: el Espectador reveló una acusación en su contra de
1989 por haber enviado un cargamento de 650 kilos de coca que
fue decomisado en Alemania.
V.C.: esa fue una de las estrategias que utilizaba Pablo Escobar para presionar. Él quería que uno de los hombres que lo
acompañara en la guerra contra la extradición fuera Fidel, pero
Fidel siempre lo eludía. Ese cargamento fue decomisado en un
barco que yo utilizaba para cargar café. Yo le comenté a mi hermano Fidel el incidente y me dijo que iba a investigar.
Empezó a averiguar y descubrió que Pablo Escobar había metido la droga en el cargamento. Era una estrategia. Él trataba de
271
ensuciar a las personas para que, una vez los pidieran en extradición, se vieran obligados a entrar con él y los extraditables en la
lucha contra el Estado.
Semana: usted, “Don Berna” y “Macaco” están solicitados en
extradición. ¿El anuncio de la desmovilización de los tres no es
una manera de tratar de evitar la extradición?
V.C.: esas son especulaciones políticas ligadas a la coyuntura.
Nosotros no entramos a las autodefensas por miedo a ser extraditados o miedo a terminar en una cárcel. Entramos a luchar por
este país. Sin embargo, ¿qué sentido tiene entrar a un proceso de
negociación si no tenemos las garantías de que no nos van a extraditar?
Semana: es decir, que si no se resuelve el tema de la extradición, ¿no se entregan?
V.C.: nosotros siempre hemos visto el tema de la extradición
como un tema político que depende de las buenas relaciones que
Colombia tenga con Estados Unidos. Creemos mucho en el Presidente y en el aval que le han dado los americanos al apoyar el
proceso. Los americanos nunca incumplen.
Semana: ¿La palabra del Presidente es suficiente?
V.C.: la palabra del Presidente es pública sobre el tema de la
extradición, pero basta. Nosotros siempre hemos pensado que el
tema de la extradición debe sellarse con un acto legislativo. Todos
los temas de la negociación deben terminar con un acto legislativo.
Semana: ¿Y el tema de la Corte Penal Internacional?
V.C.: tenemos la misma posición. Creemos que el Gobierno
debe buscar las soluciones a esos obstáculos para lograr la paz.
Semana: ¿Cómo ve el proyecto de justicia y paz que cursa en
el Congreso?
272
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
V.C.: todavía no estamos muy contentos con él porque falta solucionar el tema de la extradición y ahí no se dice nada al respecto.
Semana: ¿Usted está dispuesto a ir a la cárcel para pagar por
sus delitos?
V.C.: dependiendo del tipo de cárcel.
Semana: ¿Por ejemplo, La Modelo?
V.C.: nosotros nos encaminamos por una colonia agrícola.
Semana: ¿Cuántos años está dispuesto a pagar?
V.C.: lo menos posible.
Semana: ¿Las autodefensas cómo van a reparar a las víctimas
de sus crímenes?
V.C.: la reparación es más simbólica. No entendemos cómo
le podemos reponer a una persona un familiar perdido. Nosotros
también hemos sido víctimas. El solo hecho de vernos obligados
a ingresar a una guerra que nunca quisimos nos convirtió en víctimas desde el primer momento.
Semana: ¿Pero la reparación podría incluir, por ejemplo, las
tierras que ustedes se han apropiado o han comprado?
V.C.: si nos toca dar las tierras para programas sociales no hay
diferencia, porque eso ya lo venimos haciendo con proyectos productivos en varias zonas del país. Queremos que nos dejen hacer
nuevos modelos de empresas que ya hemos venido desarrollando
a nivel nacional.
Semana: ¿En dónde están desarrollando esos proyectos?
V.C.: en Urabá tenemos cultivos de palma. Yo mismo conseguí
los empresarios para invertir en esos proyectos que son duraderos
y productivos. La idea es llevar a los ricos a invertir en ese tipo de
proyectos en diferentes zonas del país. Al llevar a los ricos a esas
zonas, llegan las instituciones del Estado. Desafortunadamente
273
las instituciones del Estado sólo le caminan a esas cosas cuando
están los ricos. Hay que llevar ricos a todas las regiones del país
y esa es una de las misiones que tienen todos los comandantes.
Semana: ¿Qué tan grande es la penetración de los paramilitares en la política?
V.C.: hay una amistad con los políticos en las zonas en donde
operamos. Hay relaciones directas entre los comandantes y los
políticos y se forman alianzas que son innegables. Las autodefensas les dan consejos a muchos de ellos y hay comandantes que
tienen sus amigos candidatos a las corporaciones y a las alcaldías.
Semana: pero ahora que se avecinan las campañas políticas,
¿cuál es la instrucción que le ha dado a los comandantes en las
diferentes regiones?
V.C.: tratar de aumentar nuestros amigos políticos sin importar el partido al que pertenezcan.
Semana: pero en esa intención de “aumentar los amigos” las
autodefensas han acudido a las amenazas y al proselitismo armado. Son varias las regiones del país dominadas por ustedes donde
sólo se presenta a elecciones un candidato. ¿Eso continuará en la
próxima campaña?
V.C.: por eso les estamos aconsejando a todos los comandantes que entreguen las armas, para que no haya lugar a discusión
y a que los adversarios políticos digan que los amenazamos. Pero
en esta campaña, en las regiones que controlamos, todos los candidatos van a tener garantías para hacer su proselitismo político.
Semana: hace varios años Salvatore Mancuso dijo que las
AUC tenían el 30% del Congreso. ¿Qué hay de cierto en ese
porcentaje?
V.C.: creo que podemos afirmar que tenemos más del 35% de
amigos en el Congreso. Y para las próximas elecciones vamos a
aumentar ese porcentaje de amigos.
274
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: ¿Usted aspira a hacer política?
V.C.: no, esa nunca ha sido ni será mi intención. Mi campo es el
campo social y desde la legalidad podré hacer más en este campo.
Semana: uno de los que no ha cumplido con el cese al fuego es
“Don Berna” y eso fue justamente lo que desató hace dos semanas una crisis en el proceso cuando se libró una orden de captura
contra él por el asesinato del diputado de Córdoba.
V.C.: fue una decisión un poco apresurada la del Presidente
ordenar la detención de “Berna” en la zona de ubicación. Pero
vimos una salida muy salomónica por parte del Estado y “Berna”
con el acuerdo al que se llegó.
Semana: ¿Qué acuerdo hay entre el Gobierno y las AUC detrás de la entrega de “Don Berna”?
V.C.: ninguno. El único acuerdo es que el proceso de paz tiene
que proseguir y estar por encima de estos incidentes.
Semana: pero la decisión del Gobierno de permitir que “Don
Berna” permanezca recluido en una casa-finca hace inevitable
pensar que existió un acuerdo secreto debajo de la mesa y que
puede ocurrir lo mismo que pasó con Pablo Escobar y la Catedral.
V.C.: nosotros no hemos notado que desde aquí se den órdenes para efectuar acciones militares afuera de la zona. No sabemos qué pasó en el caso de “Berna”.
Semana: pero la Fiscalía tiene pruebas de que “Don Berna”
ordenó a sus hombres asesinar al diputado.
V.C.: no sabemos ni tenemos certeza que en ese episodio haya
estado “Don Berna” o su gente.
Semana: parte de la expansión de las autodefensas fue también posible debido a que usted vendió “franquicias” de grupos
paramilitares a narcotraficantes para consolidar esa expansión
territorial.
275
V.C.: la evolución de las autodefensas se da por varios procesos. Cuando tu-vimos la avalancha de gente de todo el país pidiendo que lleváramos a las autodefensas, eso causó una oleada
que se desbordó en una cantidad de acciones armadas sin control en todo el país. Todo el mundo comenzó a armar grupos. El
Estado, para tratar de frenar esos excesos, libró una cantidad de
órdenes de captura contra muchos ganaderos y eso los obligó a
frenar su financiación. Ahí empieza un nuevo proceso evolutivo
de las autodefensas.
Semana: pero es innegable que “Los Mellizos”, Mejía en
Arauca, Arroyave en los Llanos y “Gordolindo” en el Pacífico,
que eran narcos, fueron algunos de los que compraron “franquicias” paramilitares.
V.C.: lo que sucedió es que cuando la expansión llegó a esos
territorios en donde sólo había narcotráfico, Carlos se inventó esa
cuestión de que se estaban vendiendo los frentes pero eso no era
así. Aquí nunca se le ha vendido un frente a nadie.
Semana: pero hace dos años una investigación del CTI de la
Fiscalía señalaba que usted les vendió a “los mellizos” el bloque
Vencedores de Arauca en 2 000 millones de pesos.
V.C.: acá nunca se vendió un frente.
Semana: ¿Cómo explica que “los mellizos”, que eran narcotraficantes reconocidos, terminaran como comandantes paramilitares?
V.C.: la llegada de “los mellizos” acá tiene una explicación.
En la parte final de la expansión quedaron unas zonas muy difíciles a las que las autodefensas no pudieron llegar. No había
con quién cubrirlas. Entonces se abrió un consenso nacional para
saber quién podría encargarse de esas regiones. Una de las regiones fue Arauca, donde la guerrilla era amo y señor. Se les pidió
a los comandantes Ramón Isaza, a “botalón”, a los del norte y
nadie quiso encargarse de esas zonas por lo difícil y complicado
que era. En ese entonces la política era terminar de cubrir todos
los territorios a nivel nacional y sólo estaban descubiertos cuatro.
276
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: ¿Cuáles?
V.C.: Nariño, Arauca, Guaviare y Caquetá. De allí fue que
salió el Bloque Libertadores del Sur, que se encargó de Nariño,
y que lo cogió “Don Berna” en compañía del Bloque Central
Bolívar, BCB. Ese bloque también cogió la zona del Caquetá y
Guaviare. Arauca nadie lo quería. “Los mellizos” eran conocidos
de la organización y se fueron acercando, ofreciendo donaciones
para los grupos de los Llanos, hasta que nos dijeron que por qué
no les dábamos ese frente.
Nosotros tuvimos al comandante “Pablo Mejía”, Víctor Mejía Múnera, un año en formación y después de eso él empezó a
manejar el Bloque Vencedores de Arauca. Con “gordolindo” fue
igual. Él se acercó y fue él quien expandió el Bloque Calima hacia el Cauca. Él financió los costos de su entrada financiando el
bloque totalmente por un año.
Semana: ¿Pero usted le vendió a Miguel Arroyave la “franquicia” del Bloque Centauros en los Llanos en seis millones de
dólares?
V.C.: Arroyave llegó después de que él salió de la cárcel. Arroyave había sido un gran apoyo en logística cuando nosotros entramos a los Llanos, pero después de que él salió de la cárcel vio que
nosotros no fuimos capaces de controlar el Llano. Carlos estaba
al frente de eso y me preguntó la forma de penetrar sólidamente
en los Llanos. Yo le dije que el problema era que no había una
persona capaz de controlar el Llano y esa persona tenía que tener
dinero. Entonces fue cuando él tomó la determinación de designar a Arroyave como comandante.
Semana: ¿Por qué matan a Arroyave?
V.C.: fue por la descomposición en que venían las autodefensas, producto del nerviosismo en que entraron todas las autodefensas desde que empezó el proceso de paz.
277
Semana: los casos de “los mellizos”, Arroyave y “gordolindo”
son una muestra de que en ese afán por expandirse, los narcotraficantes fueron clave. ¿No les importó convertirlos en jefes paras?
V.C.: en las autodefensas la mayoría éramos ilegales y con
problemas jurídicos. Nunca vimos problemas en que alguien con
problemas jurídicos ingresara.
Semana: pero esa política terminó abriendo las puertas para
que entraran poderosos narcotraficantes.
V.C.: cuando eso no se hablaba que las autodefensas iban a
entrar a un proceso de negociación, ni que iba a haber un proceso
político. Nosotros sólo pensábamos en la libertad del país de la
opresión guerrillera.
Semana: ¿El tema del ingreso de narcotraficantes, el que algunos bloques protejan a capos y la financiación del dinero de la
droga ha causado divisiones en las autodefensas?
V.C.: el tema del narcotráfico nunca nos ha dividido.
Semana: pero fue justamente el tema del narcotráfico en las
AUC uno de los detonantes de la guerra entre Rodrigo, que criticó abiertamente la presencia de narcotraficantes en las autodefensas, concretamente con “Don Berna”.
V.C.: Rodrigo y “Berna” estuvieron juntos en la guerra contra
Pablo Escobar. Rodrigo era el jefe de seguridad de Fidel y el coordinador de todo lo de los Pepes era “Berna”. Desde esa época
Rodrigo no quería a “Berna”. Rodrigo nunca aceptó que “Berna”
fuera autodefensa. La ideología de Rodrigo era que las autodefensas debían estar conformadas por personas muy selectas, muy
puritanas.
Semana: pero usted y el estado mayor de las AUC terminaron
tomando partido en esa guerra a favor de “Berna”.
V.C.: inicialmente todo el Estado Mayor terció en favor de
Rodrigo. Todos lo llamamos para que se reconciliara con “Berna”
278
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
y él se negó. Rodrigo empezó a atacar a todo el mundo. Hubo ataques militares de Rodrigo al BCB y la respuesta fue autorizar para
que se defendieran militarmente. Rodrigo no me perdonó nunca
que no me hubiera hecho del lado de él y que otras personas de
las autodefensas ayudaran a “Berna’. Ahí Rodrigo cogió un odio
infernal contra mí.
Semana: ¿Cómo ve el tema de los desmovilizados?
V.C.: están improvisando con ese tema. Uno de los más difíciles ha sido, por ejemplo, el de los miembros del “Cacique Nutibara”, porque la mayoría fueron personas recogidas de las bandas
que no tenían una formación muy profunda en las autodefensas.
Semana: ¿Y cómo ve que están funcionando los albergues de
desmovilizados en Bogotá?
V.C.: los albergues en Bogotá son un fracaso total. Un gran
porcentaje de los que están ahí no son desmovilizados de las autodefensas o de la guerrilla. Son colados que se metieron ahí a ver
qué pescan. Creo que lo mejor para los desmovilizados es involucrarlos en departamentos de seguridad, en seguridad privada o
con el Estado. Son muchachos que son profesionales en un campo, que es la seguridad, y si se les pone a hacer cosas que ellos no
saben hacer van a estar inconformes.
Semana: ¿Qué opina del comisionado Luis Carlos Restrepo?
V.C.: es un hombre muy inteligente, muy pragmático y muy sagaz. Lo malo es que es muy personalista. Todo lo quiere manejar
él y al modo de él. Cuando llegó lo veíamos como un loco pero
después uno no es capaz de vivir sin él. Eso pasa siempre con los
siquiatras.
Semana: desde su perspectiva de líder de las autodefensas,
¿cómo ve a las FARC?
V.C.: el Estado les ha quitado territorio. Pero la comandancia
está intacta. Están acudiendo a la estrategia de esperar y ganar
tiempo. Si la Política de Seguridad Democrática continúa habría
éxito frente a la guerrilla. Si el próximo Presidente no continúa
279
con esa estrategia, las FARC, en uno o dos años, recuperarían
todo el terreno que han perdido con las autodefensas y el Estado.
Semana: ¿Cree que las FARC han sido golpeadas militarmente?
V.C.: las FARC tienen muchas armas y deben tener alrededor
de 15 000 hombres, y eso es un pequeño ejército. Todas las armas
que tienen son nuevas. La renovación de todo su armamento se
dio en el período del Caguán. Tienen mucho material de apoyo
liviano como morteros, lanzagranadas, ametralladoras y municiones por cantidades. Hay que reconocer que, aunque los hemos
sacado de muchas regiones de Colombia, tienen más capacidad
de fuego y armamento que nosotros.
Semana: ¿Es cierto que en el campo militar la guerrilla se desempeña mejor que las autodefensas?
V.C.: no. Nos llevan ventaja en cuanto a armamento. Aunque
debemos reconocer que algunos de nuestros mejores comandantes en la actualidad son ex guerrilleros. En este momento debemos tener a unos 4 000 ex guerrilleros en nuestras filas, eso es
cerca del 40% del total de nuestro pie de fuerza. Tuvimos una
época en la que ese porcentaje llegó al 80%.
Semana: ¿Y tienen muchos ex miembros de la fuerza pública?
V.C.: los ex militares que tenemos en nuestras tropas son muy
buenos en la parte administrativa, pero malos para combatir. Algunos de estos soldados son buenos es en táctica de defensa, especialmente cuando hay que salir corriendo, porque hasta para
correr se necesita táctica.
Semana: ¿Ha estado en un combate?
V.C.: nunca.
Semana: ¿Por qué le dicen “El Profe”?
V.C.: Mi hermano Fidel me puso el “Profesor Yarumo”, porque cuando yo lo visitaba le decía que empezara programas en
el campo. La mayoría de los comandantes me dicen “El Profe”
porque me han visto como un consejero nacional.
280
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Semana: ¿Se considera más guerrero o estratega?
V.C.: no soy un guerrero. Soy un estratega80.
El 13 de junio de 2005 el Gobierno Nacional, mediante un comunicado expedido por la Presidencia de la República, informó a la opinión
nacional la decisión de mantener al señor Diego Murillo Bejarano, conocido como “Don Berna”, en el lugar de reclusión definido previamente por el Gobierno. El siguiente es el texto del comunicado emanado de la Casa de Nariño:
COMUNICADO
El Gobierno Nacional se permite informar que:
1. Ante la decisión de la Fiscalía General de la Nación de dictar
medida de aseguramiento sin beneficio de excarcelación en contra del señor Diego Fernando Murillo Bejarano, el Gobierno Nacional, en uso de las facultades que le otorga la ley 782 de 2002,
tomó la siguiente decisión: mantener al señor Murillo Bejarano,
en su condición de desmovilizado, en el lugar definido por el Gobierno desde el 31 de mayo, bajo vigilancia de la fuerza pública.
El señor Murillo Bejarano continuará a disposición de la justicia.
2. Para consolidar el proceso de paz que se adelanta con las autodefensas, el Gobierno considera conveniente mantener la condición de desmovilizado del señor Murillo Bejarano, a fin de hacer
efectivo su compromiso de desactivar la totalidad de las estructuras que operan bajo su mando.
3. Con motivo de la desmovilización, el próximo 15 de junio, del
Bloque Héroes de Tovalá, el señor Murillo Bejarano será trasladado, bajo vigilancia de la fuerza pública, a la vereda Alto de
Rusia del municipio de Valencia, Córdoba. Terminado el acto de
desmovilización el señor Murillo Bejarano regresará al lugar en
donde permanece por decisión del Gobierno Nacional.
80
Op. cit. Bogotá. Edición 1205.
281
4. En la actualidad se adelantan las labores para la concentración
del Bloque Héroes de Granada en el departamento de Antioquia
como parte de los compromisos adquiridos por el señor Murillo
Bejarano.
La fecha de desmovilización de este bloque se definirá en los próximos días.
Junio 13 de junio de 2005.
El embajador de Estados Unidos defendió la desmovilización de los
grupos de autodefensa y el proyecto de justicia y paz. El diplomático
William Wood asistió en Washington a un foro sobre el tema colombiano y dijo que el proceso no era perfecto, pero sí equilibrado. Expresó
su confianza en que las diferentes fuerzas políticas del país llegarían a
un acuerdo razonable y encaminado a un fin último: proteger a los inocentes a través de la paz. El 14 de junio de 2005 el Gobierno Nacional
otorgó el carácter de miembro representante de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, a Diego Fernando Murillo Bejarano. El reconocimiento fue por un término de 48 horas (entre las 0 horas del 15 de
junio y las 24 horas del 16 de junio), y se dio para que Murillo Bejarano
participara en la coordinación de la desmovilización del Bloque Héroes
de Tovalá de las AUC.
“Los desplazamientos a que haya lugar se realizarán bajo la vigilancia de la fuerza pública”, indica la Resolución 131 de la Presidencia de la República, firmada por el Jefe del Estado, Álvaro Uribe Vélez
y el Ministro del Interior y de Justicia, Sabas Pretelt de la Vega.
El siguiente es el texto completo de la resolución:
Resolución No. 131 de 2005
13 de junio de 2005
Por la cual reconoce la calidad de miembro representante a una persona de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
El Presidente de la República de Colombia, en ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales, en especial de las que le confiere la
ley 782 de 2002, y
282
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Considerando
Que el Artículo 22 de la Constitución Política dispone que la paz es
un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.
Que mediante Resolución No. 091 de 15 de junio de 2004 se declaró
abierto el proceso de diálogo, negociación y firma de acuerdos con las
Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Que las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, han manifestado
su voluntad y compromiso de realizar todos los actos tendientes a la
desmovilización de los miembros de los grupos armados organizados al
margen de la ley que operan bajo su mando.
Que para efectos de la coordinación de la desmovilización del Bloque Héroes de Tovalá de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC,
el Gobierno Nacional considera pertinente reconocer la calidad de
miembro representante al señor Diego Fernando Murillo Bejarano,
Resuelva
Artículo 1º. Para los efectos mencionados en la parte considerativa
de esta resolución, reconocer el carácter de miembro representante de
las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, al señor Diego Fernando
Murillo Bejarano, por el término de cuarenta y ocho horas (48) contadas a partir de las cero (0) horas del 15 de junio de 2005 hasta las veinticuatro (24) horas del 16 de junio del mismo año.
Los desplazamientos a que haya lugar se realizarán bajo la vigilancia
de la fuerza pública.
Artículo 2º. Notificar a las autoridades competentes el contenido de
la presente resolución, para los efectos establecidos en el inciso segundo
del parágrafo segundo del Artículo 3 de la Ley 782 de 2002.
Artículo 3º. La presente resolución rige a partir de la fecha de
su expedición.
Dado en Bogotá, D.C., a los 13 días de junio de 2005.
283
(Firmado)
Álvaro Uribe Vélez
Presidente de la República
Sabas Pretelt de la Vega
Ministro del Interior y de Justicia
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE HÉROES DE TOVALÁ
El 15 de junio de 2005, tal como estaba previsto, se desmovilizaron
464 miembros del bloque de las AUC conocido como Héroes de Tovalá,
responsable de la seguridad personal de Diego Fernando Murillo Bejarano, alias “Don Berna”.
La desmovilización se cumplió en la vereda Rusia Ocho del corregimiento Mata Maíz, municipio de Valencia, departamento de Córdoba.
Los desmovilizados entregaron 231 armas largas, 14 armas cortas, 11
armas de apoyo, 33.148 municiones de diferente calibre y 44 granadas.
El número de desmovilizados de las AUC desde diciembre del 2002
llegó, con ello, a 5 285.
El acto de entrega fue presidido por el Comisionado Luis Carlos Restrepo. En la ceremonia, “Ernesto Báez”, vocero político de las AUC,
aseguró que estos grupos no tendrían participación alguna en el proceso
electoral del año 2006. Estas declaraciones de “Baéz” eran contrarias
a lo que Vicente Castaño había expresado a la Revista Semana en días
anteriores.
El 27 de junio de 2005 se conoció por parte del Comisionado de Paz
que próximamente se produciría una desmovilización de autodefensas
del Meta y Vichada, ACMV, en la inspección de San Miguel. Las Autodefensas Campesinas de Meta y Vichada tienen como comandante
a José Baldomero Linares, conocido como “Guillermo Torres”. No se
anunció la fecha de la desmovilización ni el número de hombres que se
acogerían a ella.
Igualmente, el Alto Comisionado anunció como casi segura la desmovilización de otros grupos de autodefensa en los Llanos Orientales,
284
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
especialmente en el departamento de Casanare, donde operaba un grupo del Bloque Centauros. Se esperaba que los grupos que operaban en
el sur del Meta y en Guaviare, al mando de Martín Llanos, también se
desmovilizaran próximamente.
El 30 de junio se supo que el primer grupo de combatientes de los
bloques Centauros y Central Bolívar se concentrarían en la finca Las
Marías, ubicada en la inspección de San Miguel del municipio de Gaitán, Meta. Lo comandaron “Mauricio” y “Andrés”. Este fue el grupo
que se mantuvo fiel a las orientaciones de Arroyave y al compromiso
que él tenía en vida. Vicente Castaño mantenía liderazgo e influencia
en la mesa de Ralito. Después de la muerte del señor Arroyave, fue
Castaño quien se comprometió con la desmovilización del grupo de
Casanare.
Una vez aprobada por el Congreso de la República la ley conocida
como de Justicia y Paz, Salvatore Mancuso no se dejó esperar para pronunciarse acerca de los alcances de la mencionada ley. “Era imposible
dejar a todo el mundo plenamente satisfecho”, manifestó Mancuso
en Montería.
Mancuso habló el 30 de junio de 2005 en el auditorio de la Universidad de Córdoba en el acto de lanzamiento del “Proyecto productivo por
la Paz”, un programa agrícola y pecuario dirigida a desmovilizados de
las AUC, y desplazados y a campesinos de ese departamento.
Mancuso manifestó que entre los comandantes de las AUC había
inconformidad con algunos aspectos de la ley, pues consideraban que
su lucha antisubversiva no debió ser penalizada con un rigor mayor al
aplicado a los guerrilleros.
Tanto en Córdoba como en Urabá, el Gobierno realizó programas
de ganadería y agricultura, con lo que espera impulsar zonas deprimidas
que han estado alejadas del desarrollo por culpa del conflicto interno.
Se decidió que estas empresas fueran integradas por ex combatientes,
desplazados y campesinos, como una forma de apoyar la reconstrucción del tejido social y la reparación de las víctimas. La financiación
de los proyectos se ha hecho a través de Finagro y el Banco Agrario,
que prestan no menos del 80% del dinero requerido. El Gobierno, por
su parte, entrega dos millones de pesos por cada desmovilizado y un
285
millón 700 mil por cada desplazado para financiar los gastos iníciales
del proyecto81.
El 5 de julio de 2005 el Gobierno Nacional creó una zona de concentración temporal para 700 miembros de las AUC, que operaría en el
municipio de María la Baja, Bolívar, para la desmovilización del Bloque
Montes de María. El proceso de desmovilización de este grupo estaba
previsto para mediados del mes de julio. La resolución fue firmada por
el presidente Álvaro Uribe; el Ministro de Defensa, Jorge Alberto Uribe
y el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
El 7 de julio de 2005, en un comunicado emitido por las Autodefensas Campesinas del Bloque Central Bolívar, anunciaron la concentración de sus efectivos y la desmovilización de sus estructuras políticas y
militares. El siguiente es el texto de este comunicado:
Comunicado a la opinión pública
Las Autodefensas Campesinas del Bloque Central Bolívar, que operan en los territorios del sur de Bolívar, Santanderes, Vichada, Antioquia, Boyacá, Caldas, Risaralda, Caquetá, Nariño y Putumayo, hacemos el siguiente anuncio público.
1. En el marco del actual proceso de paz, el Estado Mayor del Bloque Central Bolívar anuncia la decisión de concentrar en las diferentes zonas de operación la totalidad de los miembros de los
estamentos político y militar.
2. Esta determinación obedece al propósito de facilitarle a la Organización de Estados Americanos, OEA, el seguimiento y verificación del cese de hostilidades, además de constituirse en el
escenario previo al proceso de desmovilización de todas las estructuras políticas y militares del Bloque Central Bolívar.
3. Tan pronto como proceda la concentración de todas las tropas,
confiaremos al Gobierno Nacional la totalidad de los territorios
81
Op. cit. [en línea], julio 2005. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
286
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
ocupados y controlados por las autodefensas campesinas del
Bloque Central Bolívar.
4. A partir de la fecha quedamos a la espera de la definición de las
zonas de concentración, acordadas por el Gobierno Nacional,
para los fines anunciados.
Santa Fe de Ralito, julio 7 de 2005
Javier Montañez
Julián Bolívar
Pablo Sevillano
Estamento militar
Ernesto Báez de la Serna
Dirección Política82
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE MONTES DE MARÍA
El martes 5 de julio habían llegado 170 miembros del Bloque Montes
de María a la hacienda Usomaría, propiedad del Gobierno, desde donde se administra el sistema de riego artificial de Marialabaja. El arribo
lo hicieron en tres tandas, la más grande, de 130 hombres procedentes
de Magangué.
Usomaría, sobre la vía entre el cruce El Viso y Marialabaja, estaba
habilitada durante dos meses como zona temporal de ubicación; se esperaba el arribo de más hombres, hasta completar unos 600 que harían
parte de esta desmovilización, la número doce al amparo de los acuerdos de Santa Fe de Ralito, Córdoba, donde se realizaba la negociación
del Gobierno con las autodefensas.
El siguiente es el texto de un comunicado expedido por varios bloques de las Autodefensas Unidas de Colombia, el día 9 de julio de 2005:
1. Los bloques Magdalena Medio, Mineros, Vencedores de Arauca
y Norte, de las Autodefensas Unidas de Colombia, ratificamos
nuestro compromiso y voluntad de avanzar en la construcción de
82
Op. Cit. [en línea], julio 2005. Disponible en Internet: www.colombialibre.org.
287
un país sin violencia, a través del diálogo y la concertación, en
concordancia con la invitación hecha a los ac-tores armados por
el Presidente de la República, doctor Álvaro Uribe Vélez.
2. Invitamos una vez más a la comunidad internacional para que
apoye decididamente esta iniciativa del Gobierno, y pueda hacerse realidad el sueño de paz y tranquilidad del pueblo colombiano.
3. Hacemos un llamado a los enemigos del proceso que se está llevando, a desarmarse y despojarse de sus intereses políticos particulares, para fortalecer el consenso nacional necesario, con el
aporte de sus ideas, y así la paz de este país sea una realidad
sostenible en el tiempo.
4. Invitamos también a la FARC, al ELN y demás grupos armados
organizados, a no postergar el sueño de paz de los colombianos
y no despilfarrar más la oportunidad que el pueblo y el Gobierno nos están dando para que unidos concurramos con ideas que
faciliten la búsqueda de un lenguaje común y un camino de entendimiento que nos conduzca a escenarios de convivencia sin
armas y la concreción de una Colombia donde quepamos todos,
donde las nuevas generaciones puedan vivir en paz.
5. Informamos al pueblo colombiano, al Gobierno Nacional y a
la comunidad internacional que, a partirle la culminación de las
desmovilizaciones de los bloques de autodefensas anunciadas el
mes pasado por el Alto Comisionado para la Paz, tras alcanzar
un consenso con el Estado Mayor Negociador de las AUC, iniciado con la desmovilización del Bloque Héroes de Tovalá, continuará sin dilaciones el proceso que culminará con la concentración y desmovilización de todas las estructuras que conforman
los bloques Magdalena Medio, Mineros, Vencedores de Arauca
y Norte, en cabeza del Comandante Ramón Isaza.
6. Agradecemos a la Iglesia y a la OEA su permanente acompañamiento y decidido apoyo para sacar adelante este proceso.
Ramón Isaza Arango, Comandante Bloque Magdalena Medio
Ramiro Vanoy Murillo, Comandante Bloque Mineros
Pablo Mejía, Comandante Bloque Vencedores de Arauca
Jorge 40, Comandante Bloque Norte
288
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El jueves 14 de julio, tal como se había anunciado, el Ato Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, presidió el acto formal de
entrega de armas de 594 militantes del Bloque Héroes de los Montes de
María de las AUC, en Marialabaja, departamento de Bolívar.
Además de entregar las armas, los desmovilizados se comprometieron a devolver tierras y vehículos adquiridos por este grupo durante el
período de su actividad al margen de la ley. Así lo manifestó Edward
Cobos Téllez, conocido con el alias de “Diego Vecino”, jefe de este
bloque de las AUC.
Esta fue la quinta desmovilización de un grupo de las AUC durante
el año 2005 como parte del proceso de paz iniciado en 2003 y en el
marco del cual hasta la fecha habían abandonado las armas unos 5 300
integrantes de las AUC.
En el acto en Marialabaja estuvieron presentes delegados de un comité de la Organización de Estados Americanos, OEA.
Los desmovilizados entregaron 265 armas largas, 74 armas cortas,
25 armas de apoyo, 410 granadas 73 radios 2m, 11 radios base.
“Diego Vecino” manifestó que se acogería a los términos establecidos en la Ley de Justicia y Paz aprobada por el Congreso colombiano.
“Estoy dando un paso para reintegrarme nuevamente a la legalidad; por
lo tanto, tendré que acogerme a los dictámenes que diga la Ley de Justicia y Paz”83, señaló. “Diego Vecino” pronunció el siguiente discurso en
el acto de entrega de armas de su grupo:
La vida son momentos. Momentos en los cuales hay que tomar
una decisión, asumir una alternativa y luego ser pacientes y consecuentes, hasta que otra vez, en otros momentos y otras circunstancias, la vida vuelve y juega, y otra vez exige de nosotros total compromiso y responsabilidad.
De mi trabajo en el campo, de mi vida en el hogar, del afecto cotidiano, de las amistades y la familia, de mis padres queridos, que cuando
83
Ibíd. [en línea], julio 2005. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
289
faltan es cuando más están, de la compañía y el amor de mi esposa y
de mis hijos, me arrancaron las fauces devoradoras de la guerra y sus
zarpazos inclementes. Llevo en el cuerpo la marca del disparo con que
las guerrillas, que asolaban en aquellos tiempos, pretendió ultrajar a mis
padres, en La Renta, área rural del municipio de Lebrija, cuando yo era
apenas un niño de 12 años, sin más ocupaciones que mis juegos y mis
estudios.
Las heridas más dolorosas son las que llevamos en el alma, para las
que no hay más remedio que la paciencia, el perdón, la resignación y
el olvido. No el olvido de la memoria, porque eso es imposible, pero sí
el olvido del espíritu, que perdona y no vuelve, obsesionado, una y otra
vez, sobre las propias heridas y las mismas pesadillas. Entre las heridas
del alma padecí por dos veces, en mi persona, el flagelo del secuestro; en
1994, en el corregimiento El Cañito, municipio de Tolú Viejo, a manos
del Frente 37 de las FARC, y en 1998, en el corregimiento de Mampuján, municipio de Maríalabaja, a manos de un frente del ELN, subordinado a las FARC; en ambas ocasiones en sitios que están a muy pocos
kilómetros del lugar donde hoy nos encontramos. Del primer secuestro
logré escapar, del segundo, logré mi libertad a cambio del dinero que
recibieron quienes me secuestraron.
Sin embargo, no fue la venganza la que me indujo a incorporarme,
posteriormente, a las autodefensas, sino la evidencia, perturbadora e
inquietante, de que mi madre, mi esposa, mis hijos, toda mi familia,
mis amigos, mis compañeros de trabajo, miles y miles de personas y
de familias enteras, estaban sometidas, diariamente, en estas zonas de
Bolívar y de Sucre, a los mismos riesgos, a los mismos vejámenes, que
producían las guerrillas comunistas, sin que el Estado asumiera la defensa de todos estos ciudadanos expuestos al ultraje de su honra, de sus
bienes, de su libertad y su vida.
La vida está hecha de momentos. Hoy ya no soy el niño inocente
que recibió la bala guerrillera en su cuerpo, ni el hombre que muy joven vivió en carne propia, por dos veces, el padecimiento lacerante del
secuestro. Tampoco soy ya el hombre atribulado de entonces, cuando
busqué, por fuera de la ley, curar las heridas abiertas en el corazón de mi
gente y en mi propio corazón, tan confiado en mis humanas fortalezas
como inexperto en los asuntos de la guerra, disputándole el monopolio
de la fuerza al Estado.
290
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Hoy vivimos otros momentos. Ni yo soy el mismo, ni Colombia, ni
el mundo son los mismos. Dice el filósofo que el hombre nunca se baña
dos veces en el mismo río y esto es totalmente cierto. Ni yo, ni el paisaje
bellísimo de los Montes de María somos los mismos hoy que ayer, porque
el contexto es distinto, porque las personas evolucionamos, porque los
pueblos progresan y los mismos Estados aprenden de sus propios errores.
Hoy, aquí reunidos, participamos de una ceremonia cuyos alcances
hacen vibrar nuestros corazones. Venimos de transitar un largo camino. Las peripecias azarosas de la guerra hirieron para siempre nuestras
fibras más íntimas. El dolor de Patria que nos hizo tomar el fusil es el
mismo dolor de Patria que sentimos hoy cuando el peligro sigue acechando los campos y las ciudades de Colombia.
La vida es también un aprendizaje permanente. Es la búsqueda constante de mejores caminos. Vivir es también morir todos los días y renacer cada mañana con la confianza en nuestras propias fuerzas y la fe en
Dios que mueve montañas.
Los colombianos no nacimos para la guerra. Nuestros corazones están, desde siempre, inclinados hacia la paz. La cultura de la muerte no
ha logrado arraigarse en nuestra Patria y no habrá rincón en nuestro
suelo que eternice el odio ni avive, fatalmente, el fuego de la discordia
entre hombres y mujeres colombianos que nacimos para ser hermanos,
bajo una sola bandera y un solo ideal de libertad, dignidad, y justicia.
Los años no pasan en vano. Los seres humanos aprendemos de
nuestros errores y somos capaces de rectificarlos. Los seres humanos
no perdemos dignidad cuando pedimos perdón, cuando damos demostraciones elocuentes de nuestro arrepentimiento y tendemos las manos,
y abrimos el corazón al corazón del hermano, ese mismo hermano o
hermana que agraviamos con nuestra intervención en la guerra.
El pedido de perdón cuando es sincero, cuando nace del sentimiento
fraternal, nos cura interiormente de nuestros sentimientos de culpa, de
los tormentos y los malos sueños, de quienes hemos sido educados por
nuestras familias en el amor, en el espíritu religioso y como tales hemos
vivido, como extraños, en carne propia, las contradicciones y exigencias
de la guerra.
291
Hombres y mujeres del Bloque Montes de María, comandantes, patrulleros y auxiliares: los invito a que me acompañen, desde lo más
profundo de sus almas, en el día de hoy, no sólo con la entrega de armas
sino con algo aún más decisivo y trascendente. Depongamos hoy, aquí,
ahora, todos los rencores acumulados en los años de combate.
Quitémonos el enorme agobio acumulado en nuestro corazón por
habernos visto, más de una vez, cara a cara con la muerte. Los seres
humanos tenemos el derecho de equivocarnos, también quienes han
sido, hasta hoy, nuestros enemigos, tienen ese mismo derecho de haberse equivocado, como nosotros.
Ofrezcámosle entonces a Dios, el Dios del amor y la misericordia,
que estuvo con nosotros en los momentos más trágicos de nuestras vidas, todo el pesar que contienen nuestros espíritus, para que sea Él, con
su infinita justicia y bondad, quien nos perdone a nosotros por nuestras
culpas y a nuestros enemigos por las suyas.
Hemos sufrido y hemos hecho sufrir. Comprendemos el dolor de
aquellos que han padecido por nuestros actos, porque también nosotros,
con nuestras familias y nuestros amigos, con nuestras comunidades, hemos padecido y hemos sufrido los horrores de la guerra.
No todos en Colombia han sido victimarios, pero todos, absolutamente todos los colombianos hemos sido víctimas, en mayor o menor
medida, de las estrategias bélicas, legales e ilegales, de las tácticas de la
guerra irregular de guerrilla y de contraguerrilla que unos y otros hemos
utilizado, y también todos hemos sido víctimas de los dardos sutiles y
envenenados de aquellos que se rasgan las vestiduras, pero tiran la piedra y esconden la mano.
La guerra no la hacen solamente los guerreros, sino que también
encienden las hogueras del infierno y atizan sus llamas devoradoras,
aquellos que escudándose detrás de sus intereses económicos, ideológicos y políticos insultan la dignidad del ser humano, alimentan sus
odios y resentimientos, corrompen y envilecen las almas, y hacen de la
explotación del hombre por el hombre el caldo de cultivo propicio para
que germinen en nuestra Patria las guerras interminables de los unos
contra los otros.
292
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
La paz es posible. No hagamos caso de las voces agoreras que siembran el pesimismo y la desesperanza. No nos abandonemos en los estados de desánimo y desconsuelo colectivos. No tengamos la actitud
de aquellos que para cada solución tienen un problema, y para cada
enfermedad un remedio peor que la propia enfermedad.
Hagamos de la democracia el lugar que cure todas nuestras heridas, el lugar de nuestro encuentro con todos aquellos que disienten con
nuestras ideas y que sean sus ámbitos e instituciones constitucionales
los únicos espacios que hagan posible el porvenir de prosperidad y desarrollo.
Sumémonos a la construcción colectiva del patrimonio común. No
seamos mensajeros de violencia ni tampoco sembremos el desaliento y
la pereza.
La tarea es grande, es mucha, necesita de nuestros mejores esfuerzos
y de nuestra mejor actitud y destreza.
La paz es merecida. Incontables son los muertos y todas las víctimas
que nos dejan, de lado y lado, décadas de enfrentamiento. Sin embargo,
contra todas las dificultades y padecimientos, 45 millones de colombianos hemos visto a nuestros abuelos, a nuestros padres y hermanos, y
ahora también a nuestros hijos, levantarse cada mañana creyendo en el
destino de Colombia y en la paz que sabremos alcanzar.
La paz es necesaria. La guerra no resuelve los problemas económicos sino que los agrava. La guerra no elimina las injusticias sociales
sino que las alimenta. La guerra no crea fuentes de trabajo sino que las
destruye. La guerra no es el camino hacia la paz; la guerra es el camino
hacia más guerras.
La paz es el camino. El compromiso social por la paz es una urgencia
de Colombia. De ese compromiso ningún colombiano ni colombiana
puede desertar. Es un compromiso que el Estado no puede desatender y
es un clamor nacional que ningún ciudadano puede despreciar.
Honrar la vida es la primera exigencia que nos debemos hacer. Ante
el clamor de paz de nuestro pueblo, no sigamos retrasando el reloj de
293
la historia, ni insistiendo en la terquedad, absurda, de ponerle más condiciones retardatarias a la paz. ¡Por Dios!, no más rigidez ni soberbia
entre las partes enfrentadas, ni más cálculos geoestratégicos, ni subordinación de la paz a la política.
Un legado grande le está dejando Santa Fe de Ralito a la paz de Colombia, donde la voluntad de paz es una decisión irrevocable, donde los
hechos de paz, de menor a mayor, van jalonando un círculo virtuoso.
Cuando los acercamientos entre las partes y la exploración, y los
diálogos consecuentes, están despojados de interés sectario y egoísta, es
posible sentarse a conversar de cara al país y al mundo, aun sin marco
legal, aun sin seguridad jurídica, sin desarme previo, sin tampoco esperar el silencio total de los fusiles. Sólo la mínima confianza entre las
partes es necesaria para poder iniciar los diálogos.
Si la paz es el camino, y además la sentimos como el único camino,
no hay razones para insistir en ponerle exageradas condiciones a la otra
parte, condiciones que la otra parte enfrentada no puede sino ver como
una humillación y un mal augurio para lo sustancial que, necesariamente, viene después y requiere de más tiempo para madurar.
Seguramente los procesos de paz en Colombia no serán los mismos
después de la experiencia inédita que estamos viviendo hoy entre el Gobierno Nacional y las AUC en Santa Fe de Ralito. Pero esto, siendo
un paso gigantesco, no alcanza. Habrá que iniciar, ojalá muy pronto,
procesos de paz con todos los grupos ilegales alzados en armas que prosiguen sus hostilidades entre sí, contra la población civil y el Estado, y
también, negociaciones provechosas que desactiven el impacto negativo
de las narcoeconomías y sus secuelas de violencia y corrupción contra
las personas, las instituciones, las economías lícitas y los ecosistemas.
Narcoeconomías que alimentan también, dentro de la lógica financiera del más duro capitalismo salvaje, a los armados ilegalmente por
razones políticas, de insurgencia y contrainsurgencia.
Dios nos da la vida y después la vida nos presenta las oportunidades.
Las AUC avizoramos hace unos años -particularmente a partir de los
trágicos sucesos del 11 de septiembre de 2001 en los EE.UU.- que ya las
armas nos estaban sobrando, que ya el Estado, hasta entonces débil e
294
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
indolente en la defensa de las comunidades agredidas por las guerrillas
comunistas, estaba comenzando a dar muestras de querer fortalecerse.
El abrupto final de las negociaciones del Caguán permitió que las
aproximaciones, con vistas a un proceso de paz, con las AUC, fructificaran. En la primera mitad de 2002, ante la insistente prédica en ese
sentido de los máximos líderes de las AUC, le correspondió a la Iglesia
Católica la delicada misión de producir los primeros contactos en vista
de una posible negociación política de paz entre el Gobierno nacional
y las AUC.
Lo que siguió después todos lo sabemos; lo que solamente Dios conoce es cuánto nos costó producir este pasaje trascendente de la guerra
hacia la paz, y cuán difíciles y azarosas han sido las etapas y las crisis
superadas para llegar a este escenario de desmovilización, que alcanza
con el de hoy el número 11, de una larga sucesión que continúa de hechos definitivos de paz, protagonizados por los hombres y mujeres de
las AUC, a lo largo y a lo ancho de la Patria, y que completará, en su
momento final, el desmonte total del aparato militar de las AUC y todas
sus estructuras ilegales.
Las dificultades del proceso no se debieron a la falta de dones pacíficos, con los que Dios nos ha dotado a todos los seres humanos, sino
a la falta de oportunidades de paz que nos legó el tiempo pasado, hasta
convertirse en este presente, aún atribulado de temores y de dudas frente
a la real capacidad del Estado para retomar la protección de aquellos
territorios y comunidades que nunca debió haber abandonado.
Esas dudas y esos temores subsisten -disminuidos, pero subsisten-, y
sin embargo, la voluntad de paz se ha encarnado tan fuerte en las AUC,
que la decisión de abandonar las armas se convirtió, en cada momento
del proceso, en las horas cruciales de dificultad y crisis, en un norte y
un aliciente poderosos para regresar a la orilla de la legalidad, echando
raíces allí de donde nunca debimos partir.
Compañeros del Bloque Montes de María, el de ustedes y también
el mío son pasos importantes e inolvidables en nuestras vidas, pero
créanme que lo que hace grande e histórico este momento es que este
modesto paso nuestro constituye para Colombia un gigantesco paso
hacia adelante, hacia la construcción de la paz, el fortalecimiento de
295
la democracia y el regreso de la presencia del Estado a las regiones de
Colombia.
Somos protagonistas hoy de la apuesta más grande que pudimos haber soñado jamás en realizar: hoy estamos apostando por la vida y por
la paz, cuando los fusiles del enemigo todavía apuntan sobre nuestras
cabezas, y la defensa del Estado está que llega, pero todavía no ha llegado en la medida de las necesidades y de las angustias que compartimos
con la población civil, de las zonas rurales y urbanas, que hasta hoy
depositaron toda su confianza exclusivamente en nuestra presencia armada y nuestra acción social.
La vida está hecha de momentos. La vida está en riesgo todos los
días. En riesgo de contaminarse, de enfermarse, de perderse. La vida
no se defiende solamente con las armas, también se defiende la vida sin
armas. Se la defiende con leyes justas, con respeto por el ordenamiento
legal, con trabajo, con arte, con actos de amor, con solidaridad y también con inteligencia. Abandonar las armas no es abandonar la causa
que defendimos con las armas. El momento de defender la causa con las
armas ha quedado atrás, pero el compromiso de defender la causa de la
libertad, la dignidad y la justicia, nos acompañará toda la vida.
Cada vez que en nuestra vida nos encontramos ante una realidad
que exige cambios de nuestra parte, la primera reacción humana es de
duda, de angustia por lo que perdemos con el cambio. Sin embargo, los
cambios forman parte de la vida, constituyen ocasiones de superación
y perfeccionamiento. Nos vamos haciendo hombres y mujeres mejores
en la medida en que sabemos crecer, a partir de las transformaciones y
los cambios interiores que vamos produciendo, para adaptarnos a un
contexto que permanentemente se está modificando ante nuestros ojos.
Ni nosotros ni las comunidades que creyeron en nosotros tenemos
que dejarnos abatir por las dificultades iníciales que nos tocará enfrentar y derrotar. El marco general de la seguridad democrática, que es el
compromiso del Gobierno con los colombianos, deberá ser enriquecido
con nuestro aporte ciudadano, con nuestra actitud honesta y vigilante,
atentos a los peligros y las amenazas que quieren arrastrarnos a situaciones ya padecidas y superadas.
296
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Ningún Estado puede asistir, en todo momento y lugar, a toda la
población, si la población no asume activamente sus obligaciones ciudadanas y se organiza, dentro de la ley, para preservar de la mejor manera sus derechos constitucionales, sus derechos humanos a la paz y la
seguridad.
El día en que todos los colombianos, desde el ámbito estatal y privado, desde las ideas de izquierda y de derecha, desde los grandes centros
urbanos y los corregimientos y veredas más Apartadós, hagamos culto
del respeto por la vida, y asumamos a plenitud nuestro compromiso
social con la paz, la paz será una realidad y la vida merecerá ser vivida.
Mientras tanto, no nos queda sino predicar con la palabra y con el
ejemplo, y avanzar, con medios lícitos hacia los fines más nobles que
dignifican y le dan sentido a nuestras vidas.
La comunidad internacional merece todo nuestro respeto y le queremos dar todas las disculpas, por aquello en que pudimos haberla ofendido en el transcurso de la guerra. También los colombianos merecemos
que la comunidad internacional sea un factor de progreso y de paz para
Colombia con el aporte invalorable de su experiencia en el campo de la
solución política de los conflictos armados, de la solución pacífica de
los conflictos sociales, y en el terreno del crecimiento económico y el
desarrollo de los pueblos.
Las Autodefensas Unidas de Colombia nacimos para ejercer la solidaridad con el clamor de los pueblos desprotegidos que clamaban por
que alguien hiciera algo para detener el caos productivo y el terror visceral al que las guerrillas comunistas sometían sus vidas de trabajadores
honestos y pacíficos, productores de bienes y de servicios para las ciudades y el campo.
Hoy, cuando las AUC estamos en el tramo final de concentración
y desmovilización, lo hacemos también solidarios con el clamor popular de que sean las Fuerzas Armadas institucionales quienes adelanten
la fase final de la disuasión guerrillera, ahora que el Estado aparece
fortalecido y dispuesto a ejercer finalmente su responsabilidad por la
seguridad de todos los ciudadanos, responsabilidad que por largos años
desatendió con las tristes consecuencias que están a la vista de todos.
297
A los seres humanos nos duele nuestro propio dolor y lo anteponemos al dolor de los demás. Solemos caer en la tentación de ver más la
paja en el ojo ajeno que la viga en el propio. Todos somos proclives a
la crítica desbordada de los errores que cometen los demás y hacemos
sobre nuestros errores una autocrítica insignificante, cuando acaso la
hacemos.
Este momento, esta ceremonia, esta oportunidad que nos regala la
vida a quienes no siempre la valoramos en su justa medida, tiene que
ser el punto de partida que nos renueve interiormente el alma, y nos
convierta en hacedores de paz, en productores de riqueza material y
espiritual, en luchadores incansables por la consecución pacífica y democrática de los grandes anhelos colectivos.
El compromiso social por la paz de Colombia exige cesar de inmediato el derramamiento de sangre entre hermanos, para avanzar, desarmados y de la mano, hacia la derrota de los verdaderos enemigos de
Colombia: las inequidades sociales, las injusticias que claman al cielo,
la tragedia de ver manipuladas, por el discurso incendiario de los profetas de la revolución armada, las jóvenes y naturales rebeldías, pervertidas por quienes han convertido a los niños y los jóvenes campesinos
de Colombia en instrumentos de guerra, en máquinas de matar. En fin,
se trata de luchar pacífica y democráticamente contra todo aquello que
impide la reconciliación y el abrazo de la familia colombiana, de todos
los hijos y las hijas de Colombia.
Todos hemos perdido algo importante de nuestras vidas durante el
transcurso de la guerra. Hemos visto caer bajo las balas, impactados
por la minas o destruidos por cilindros y bombas, a jóvenes y adultos,
hombres y mujeres, niños y ancianos.
Los muertos y los heridos, los mutilados y los que perdieron hasta las
ganas de vivir, nos duelen inmensamente en el alma. En nuestros corazones ya no existen distingos, no vale más la vida humana de unos o de
otros, amigos o enemigos; todos los muertos, todos los heridos, todos
los secuestrados y los desaparecidos son parte del mismo dolor que sentimos, son partes de nuestra propia vida que ya dejó de vivir y de soñar.
Con lo que nos queda de vida a los afortunados que aún estamos
vivos -algunos heridos, golpeados, secuestrados, mutilados, pero vivos-,
298
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
hay solo dos cosas que nos pueden devolver el alma al cuerpo y la paz
al espíritu, y son la libertad y el trabajo sin desmayos por construir la
paz que Colombia se merece, que Colombia se ha ganado el derecho a
conocer y disfrutar.
A mis compañeros del Bloque Montes de María: sepan que los guardaré eternamente en mi corazón, agradecido por tanto sacrificio y lealtad. A los compañeros privados de su libertad en las cárceles de Colombia, toda mi solidaridad y compromiso de continuar luchando por su
pronto regreso a casa.
A los habitantes de las zonas de influencia del Bloque Montes de
María: les agradezco la infinita paciencia con que supieron sobrellevar
nuestras actividades, inevitables en la guerra. Sabemos que no siempre
estuvimos a la altura de tan grande compromiso con su seguridad, y que
han sido muchos los inconvenientes que por nuestra presencia cercana
tuvieron que sortear. Mucho aprendimos de su sabiduría y mucho nos
queda por aprender.
A mis compañeros de las AUC, a mis compañeros del Bloque Norte: continuemos siendo fieles a las metas que unidos nos trazamos de
alcanzar la paz. Cumplamos con honor nuestro compromiso con Colombia de enriquecer su democracia y aportarle a nuestro pueblo, desde
hoy y hasta el fin de nuestras vidas, todo aquello que soñamos en los
tiempos duros de la guerra, cuando momentos como el que vivimos hoy
en San Pablo, en Maríalabaja, parecían tan inalcanzables e imposibles
de lograr.
Fieles con la palabra empeñada aquí estamos los integrantes del Bloque Montes de María reafirmando nuestra voluntad de Paz con hechos
contundentes, que señalan el inicio del nuevo camino que arranca sin
demoras, ahora mismo, bajo la mirada tutelar de los Montes de María,
esos montes que no solo nos dieron su nombre, sino que se hicieron
carne de nuestra carne y luz eterna de nuestros ojos.
Los Montes de María fueron testigos de nuestra lucha por la libertad
contra el enemigo guerrillero que atacaba con ferocidad.
299
Esos mismos Montes de María le dirán también a Colombia y al
mundo entero que quienes fueron valientes en la guerra supieron finalmente ser más valientes, y más heroicos todavía, en su decisión de
abandonar las armas y seguir luchando, desarmados, por los mismos
ideales de libertad, dignidad y justicia.
Llegó el tiempo de reincorporarse a la vida civil, de la puesta en marcha de los proyectos económicos articulados en sistemas productivos y
comerciales. Llegó el tiempo del abrazo fraterno y tantas veces postergado de los ex combatientes desmovilizados con sus familias, con sus
seres queridos, con los desplazados que pronto podrán retornar y con
los habitantes de las zonas afectadas por el conflicto.
A partir de hoy comenzamos a escribir otra historia que requiere en
el terreno de los hechos y las concreciones -porque solos no podemosel decidido apoyo de las instancias del Estado, del sector privado, de la
comunidad internacional y la participación activa de las comunidades,
edificando su propio destino, para mayor gloria de Dios y legítimo orgullo de los hombres y mujeres de buena voluntad.
Agradezco el permanente acompañamiento espiritual de la Iglesia
en todo el proceso que ha llevado al Bloque Montes de María desde la
guerra hacia la paz.
Agradezco también la labor silenciosa e imparcial, abnegada y constante, del Comité Internacional de la Cruz Roja, durante todos estos años
de participación del Bloque Montes de María en el conflicto armado.
Agradezco también los esfuerzos de acompañamiento y verificación
adelantados por la Misión de Apoyo de la OEA al proceso de paz que
constituyen un invalorable aporte de la comunidad internacional a la
implementación y concreción de los acuerdos, en el terreno del cese de
hostilidades, la desmovilización y el desarme.
¡Gracias, Colombia! ¡Infinitas gracias, Colombia!, porque pese a todos los desatinos humanos, siempre estás aquí, confiada y generosa,
esperando de tus hijos y tus hijas lo mejor.
300
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
¡Perdón, Colombia!, con cristiana humildad te decimos: ¡perdón, Colombia!, ¡perdón, colombianos y colombianas!, por todo aquello que hicimos mal, por todo aquello que pudimos haber hecho mejor y no hicimos.
Con la ayuda de Dios sabremos merecer esta nueva oportunidad que
nos da la vida.
¡Vivan los Montes de María!, ¡Viva Bolívar!, ¡Viva Sucre!, ¡Viva
Colombia!84
El número de combatientes que ha entregado sus armas ascendía
hasta el 14 de julio de 2005 a 5 985 hombres de los 12 500 que decían tener en sus filas las AUC. Se esperaba la entrega de otros 1 800 hombres
de los Bloques Héroes de Granada y Libertadores del Sur.
De la misma manera, se esperaba la concentración del Bloque Central Bolívar, anunciada el 8 de julio desde Ralito, que según decían sus
jefes contaba con alrededor de 5 500 hombres.
El Bloque Héroes de los Montes de María tuvo como área de influencia los Montes de María, región que comparten Sucre y Bolívar. En el
primer departamento tenían presencia en Sincelejo, San Onofre, Sincé, Tolú, Corozal, San Marcos, Ovejas, Toluviejo, Palmito y Coveñas.
En el segundo, en Cartagena, Turbaco, Turbana, Maríalabaja, Arjona,
Zambrano, El Carmen de Bolívar, San Jacinto, San Juan Nepomuceno
y Calamar.
Este bloque venía actuando desde 1996. Contaba con tres frentes:
Canal del Dique, al mando de alias “Juancho Dique”, cuyo nombre
es Húbert Banquez Martínez; Golfo de Morrosquillo, comandado por
alias “Cadena”, cuyo nombre real es Rodrigo Antonio Mercado Peluffo; y Sabanas de Sucre y Córdoba, al mando de alias “Román”.
Por su parte, el Bloque Héroes de Granada tenía como jefe a Diego
Fernando Murillo, “Don Berna” o “Adolfo Paz”. Al frente de la desmovilización estuvo “Daniel Ángel” o “Danielito”, a quien las autoridades
identificaban como el segundo al mando de la Oficina de Envigado. Su
área de influencia la constituían La Unión, El Santuario, La Ceja, San
84
Op. cit. [en línea], Disponible en Internet: www.colombialibre.org.
301
Carlos, San Rafael, San Vicente, Concepción, El Retiro, Guarne, Marinilla, Rionegro y San Luis, en el oriente antioqueño. En el nordeste
del departamento: Cisneros, Santodomingo, San José del Nus y San
Roque. También barrios de la comuna nororiental de Medellín y el área
metropolitana.
Algunos de sus integrantes eran miembros del desaparecido Bloque
Metro, que perdió la pelea con “Don Berna”. También tenía ex miembros del ELN. Considerado el brazo rural del Bloque Cacique Nutibara,
también de “Don Berna”.
El 15 de julio de 2005, el Diario El Nuevo Siglo informó que José
Alfredo Berrío, alias “El Alemán”, estaría próximo a entregarse con
los hombres del Bloque Elmer Cárdenas de las AUC. “El Alemán” no
había participado en las negociaciones de paz que adelantaban las AUC
con el Gobierno Nacional en Santa Fe de Ralito.
El Bloque Elmer Cárdenas tenía su radio de acción principalmente
en el Darién y estaba integrado por unos 900 hombres. Con el anuncio de la decisión de “El Alemán” se lograría la desmovilización de no
menos del 98% de los paramilitares que operaban en el país. Por fuera
quedaría el Bloque de Martín Llanos.
De otra parte, el secretario general de la Organización de Estados
Americanos OEA, José Miguel Insulza, calificó de “trascendentales”
las desmovilizaciones de integrantes de grupos armados, entre otras, la
del Bloque Montes de María.
En conversación con Caracol Radio, el Secretario General de la
OEA consideró muy importantes las desmovilizaciones de grupos armados al margen de la ley. El funcionario ratificó que la OEA respaldaría y acompañaría el proceso de negociación del gobierno colombiano
con las AUC.
El 18 de julio, el Gobierno Nacional desplazó una misión a los Estados Unidos presidida por el vicepresidente Francisco Santos y la señora
canciller Carolina Barco. El vicepresidente hizo un llamado a la comunidad internacional para que le dieran una oportunidad a la Ley de
Justicia y Paz y escucharan las bondades que ofrecía la legislación para
ponerle fin a la violencia en Colombia.
302
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Los comisionados colombianos se reunieron en Washington con
Santiago Cantón, presidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, de la Organización de Estados Americanos,
OEA; el Secretario de Estado para el Hemisferio Occidental, Roger
Noriega y con Nicholas Burns, Subsecretario de Estado para Asuntos
Políticos, entre otros funcionarios.
Santos sostuvo que en las reuniones con las organizaciones no gubernamentales se explicaría que la ley fue el producto de un debate democrático en el Congreso de la República en el cual se escucharon toda
clase de opiniones y objeciones.
La Ministra de Relaciones Exteriores manifestó que estas reuniones
revestían importancia una vez aprobada la ley, no en medio del debate
legislativo en el que no se tenía certeza sobre los términos en que sería
redactado el texto final de la norma.
La funcionaría recordó el viaje que realizó la semana anterior el presidente Álvaro Uribe a Madrid y Londres, donde el Jefe del Estado tuvo
oportunidad de explicar los alcances de la ley, eliminar prejuicios y aclarar malas interpretaciones sobre esta legislación.
“Había la percepción que es una ley de impunidad, cuando va a ser
la primera ley de un proceso de paz que prevé que haya juicios y penas.
Entonces las explicaciones que pudo dar el Presidente ayudaron a aclarar la ley. Lo vimos con, por ejemplo, una persona tan reconocida, tan
importante como fue Baltazar Garzón”, señaló la canciller85.
¿CÓMO ES LA LEY?
El presidente Álvaro Uribe manifestó que en la Ley de Justicia y Paz
no hay impunidad, como algunos opositores han sostenido. Es una ley
de paz, no de sometimiento; es de justicia sin ser de sometimiento. En
esa ley hay pena privativa de libertad para delitos atroces. Por supuesto,
como es una ley de paz, hay reducción de penas. No hay amnistía ni
85
Op. Cit. [en línea], julio 2008. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
303
indulto para delitos atroces. Los autores de delitos comunes no podrán
aspirar al Congreso Nacional como sí podrán hacerlo quienes sean culpables de delitos políticos.
La ley, para reparar a las víctimas, obliga á que quienes se acojan a
ella entreguen la riqueza adquirida de manera ilícita, la cual debe ir a un
fondo de reparación de víctimas.
La ley no aplica solo a los miembros de las AUC, sino a todos los
miembros de grupos armados al margen de la ley, así que ella abarca
por igual a los miembros de las llamadas autodefensas y a los militantes
de los grupos guerrilleros que deseen acogerse a sus mandatos.
Cuando una persona se desmovilice tendrá un plazo para rendir una
declaración ante los fiscales y ante tribunales que elige de manera independiente la administración de justicia sin intervención alguna de parte
del Gobierno.
La persona que se someta a la ley debe informar los delitos que ha
cometido. En cualquier momento posterior puede aparecerle un delito
que cometió en el pasado y sobre el cual no hizo confesión, ¿qué ocurre?. Si lo ocultó intencionalmente, pierde los beneficios. Si ayuda al
esclarecimiento, si contribuye con la justicia, mantiene los beneficios
pero se le puede agravar la pena en un 20%.
Esta ley obliga al desmantelamiento de las organizaciones que están
bajo la dirección criminal de quienes se sometan a ella. Si una persona
se somete a la ley, tiene que desmantelar la organización en la cual ha
venido participando. Si los sometidos a esta ley interfieren el transparente ejercicio de la democracia, pierden los beneficios.
UN NUEVO ANUNCIO DE DESMOVILIZACIÓN
El 19 de julio de 2005 el comisionado de paz de Antioquia, Jaime
Fajardo, informó que para finales de julio se esperaba la desmovilización de militantes del Bloque Héroes de Granada en número superior a
los mil hombres, posiblemente alrededor de mil doscientos.
El funcionario explicó que ello se debía a que se desmovilizarían
todos los hombres que tenía a su mando Diego Fernando Murillo Beja-
304
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
rano, alias “Don Berna” o “Adolfo Paz”, incluidas las fuerzas urbanas
que operaban en Medellín y el Valle de Aburrá.
Para que esta desmovilización se produjera era preciso terminar la
concentración de los hombres y comprobar su situación jurídica.
El 21 de julio de 2005, el Estado Mayor de las autodefensas campesinas del Bloque Central Bolívar dio a conocer un comunicado que a
continuación se detalla:
Aclaración pública
El Estado Mayor de las Autodefensas Campesinas del Bloque Central Bolívar, ante las temerarias denuncias difundidas por algunos medios de comunicación en los últimos días, nos permitimos precisar:
1. El Bloque Central Bolívar, BCB, nunca ha intervenido, ni tiene
presencia en la jurisdicción territorial de la capital de la república. Cualquier acusación en este sentido carece de total veracidad.
2. El Bloque Central Bolívar es ajeno a las acciones delictivas que
vienen realizando organizaciones criminales en la zona del suroeste antioqueño. La afirmación pública de un funcionario de
la Oficina de Paz de la Gobernación de Antioquia, denunciando
la presencia nuestra en la mencionada región, no corresponde de
ninguna manera a la verdad.
3. En desarrollo y cumplimiento de nuestro anuncio público de
concentrar la totalidad de las tropas, con el objetivo de proceder
a su desmovilización, negamos categóricamente cualquier actuación o compromiso de nuestros militantes con personas dedicadas a actividades de narcotráfico, en cualquier sitio del país y
concretamente en el departamento del Caquetá.
4. Denunciamos ante la Presidencia de la República, el Alto Comisionado de Paz, el Procurador General, el Fiscal General de
la Nación, la Embajada de los Estados Unidos, la Defensoría
del Pueblo, la Misión de Paz de la OEA, la Iglesia Católica y la
opinión pública, la proterva campaña de desinformación en que
están empeñadas algunas ONG y ciertos sectores políticos ma-
305
nifiestamente enemigos del proceso de paz con las Autodefensas
Unidas de Colombia.
5. Las Autodefensas Campesinas del Bloque Central Bolívar, BCB,
reafirman el propósito de servir los altos intereses de la paz nacional, avanzando, sin dilación, en el proceso de concentración y
desmovilización de las estruc-turas militares que operan en todo
el territorio de la nación.
Montañas del sur de Bolívar, julio 20 de 2005
Javier Montañez, Julián Bolívar, Pablo Sevillano
Estamento Militar
Ernesto Báez de la Serna
Dirección Política86
El corresponsal del Diario El Tiempo en la ciudad de Washington
informó el 21 de julio de 2005 que la Cámara de Representantes de los Estados Unidos había aprobado un apoyo económico a la desmovilización
de los grupos de las autodefensas. Aunque no se mencionó la cuantía de
esta ayuda, se supo que la Embajada de los Estados Unidos en Bogotá
la estimaba en unos cuarenta millones de dólares anuales. El legislador
Dan Burton, autor de la enmienda que permite la asistencia, se mostró
complacido con la aprobación de la medida, pues ofrece un criterio justo,
balanceado y constructivo para que Estados Unidos. ayude en la desmovilización. Burton hizo estos comentarios en la plenaria un día después
de reunirse con el vicepresidente Francisco Santos, que se encontraba en
Washington promocionado precisamente la Ley de Justicia y Paz.
El proyecto incluye tres condiciones que deben ser certificadas por
el Departamento de Estado antes de que se puedan entregar fondos:
solo se darán recursos para aquellos individuos que hayan renunciado
a la organización terrorista; que el Gobierno de Colombia esté cooperando de manera plena con Estados Unidos en materia de pedidos de
extradición que involucren a miembros de estos grupos; y que se haya
establecido un marco jurídico para el desmantelamiento de las estructu-
86
Op. Cit. [en línea], julio 2005. Disponible en Internet: www.colombialibre.org.
306
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
ras de estos grupos que balancee adecuadamente tanto la necesidad de
reconciliación como de justicia en cuanto a Derechos Humanos.
El 21 de julio de 2005, en entrevista con la agencia de noticias Reuters, “Ernesto Báez”, vocero político de las AUC, reconoció que las
autodefensas habían tenido injerencia en la política local en los últimos años. “Durante varios años levantados en armas defendimos unas
ideas, intervinimos en política, estuvimos penetrados de manera íntima
y permanente en los procesos políticos locales y regionales, construimos
estructuras de poder local y regional”, afirmó “Báez”.
Según Iván Roberto Duque, alias “Ernesto Báez”, la organización
de la que hacía parte no podría terminarse con el proceso de paz ni
terminar en la muerte política. Al respecto dijo: “esta organización no
va a desaparecer de ninguna manera. El proceso de paz lleva implícito
el propósito de que, como organización armada ilegal, superemos la
guerra y nos transformemos en un movimiento que a través de los mecanismos que ofrece la democracia se convierta en una alternativa de
poder”. Afirmó que iban a defender sus tesis, sin botas pero con votos y
desde el debate, no desde el combate.
Desde Medellín, el Diario El Colombiano informó el 21 de julio, que
cerca de 800 integrantes de la estructura urbana del Bloque Héroes de
Granada de las AUC, conocida con el nombre de la Oficina, salieron de
Medellín el día anterior con rumbo al corregimiento Cristales, de San
Roque, donde ese bloque se desmovilizaría la semana siguiente.
Daniel Rangel, inspector del Bloque Héroes de Granada y encargado
de la estructura urbana de esa organización ilegal, habló con El Colombiano sobre los señalamientos que se han tejido acerca de la llamada
oficina y las expectativas que tienen sus integrantes frente al proceso de
desmovilización. Al respecto, Rangel dijo que la llamada oficina era un
mito que se había creado en Medellín para adjudicarle la culpa de todo
lo malo que sucedía en esa ciudad.
El 22 de julio de 2005 el Gobierno Nacional anunció la creación de
una nueva zona de ubicación temporal en el paraje El Tablón, finca El
Romance del municipio de Taminango en Nariño. Al efecto se produjo
la Resolución No. 189 divulgada por la Consejería de Paz.
307
En este predio se concentrarían alrededor de mil militantes del Bloque Libertadores del Sur que venían operando en los departamentos del
Cauca y Nariño. El comandante de este bloque ha sido Carlos Mario
Jiménez o Lorenzo González Quinchía, conocido en las AUC como
“Javier Montañez”. También tiene el alias de “Macaco”. La fecha de la
desmovilización no fue precisada.
El 22 de julio de 2005, a las 11:15 de la mañana, en la sede del Ministerio del Interior, el presidente Alvaro Uribe Vélez sancionó la Ley de
Justicia y Paz. En el acto estuvieron presentes, además del Presidente de
la República, el Ministro del Interior, Sabas Pretelt de la Vega, y el Alto
Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
El Consejo Superior de la Judicatura prepararía los concursos para la
selección de los magistrados de los tribunales superiores de distrito, que
serían escogidos por la Corte Suprema de Justicia, y quienes tendrían a
su cargo el juzgamiento de los delitos cometidos por los desmovilizados.
Por su parte, la Fiscalía designó a los primeros fiscales que tendrían
a su cargo las investigaciones de los casos que involucraran a desmovilizados en procesos con el Gobierno.
El Gobierno, a su vez, estudiaba la creación de dos cárceles para
recluir a los reinsertados de los grupos armados ilegales que fueran detenidos, en la Costa Caribe y los Llanos Orientales.
El 26 de julio de 2005 el Gobierno colombiano anunció su disposición de tener un encuentro directo con voceros de las FARC con miras
a discutir la posibilidad de un acuerdo humanitario que permitiera la
liberación de personas en poder de esa organización. Al efecto, el Alto
Comisionado de Paz manifestó:
“Tengo instrucciones de parte del señor Presidente de reunirme
con las FARC en cualquier sitio, el día y la hora que ellos establezcan, con unas condiciones de seguridad que les den confianza, con
acompañamiento nacional o internacional, el que ellos consideren
adecuado”.
308
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El Gobierno había insistido en que no habría desmilitarización de
ningún territorio para adelantar la negociación, ni permitiría que los
guerrilleros que salieran de las cárceles volvieran a la filas de la organización guerrillera.
Las FARC propusieron la desmilitarización de los municipios de
Florida y Pradera, en el Valle, para la negociación del posible intercambio humanitario.
El Gobierno, por su parte, ha autorizado las gestiones de una comisión integrada por la jerarquía de la Iglesia Católica, el ex Presidente
Alfonso López Michelsen y de un representante del Gobierno de Francia con “Raúl Reyes”, interesado en gestionar la liberación de la ex
candidata presidencial Ingrid Betancourt.
El Comisionado de Paz dijo que el encuentro con las FARC podría
realizarse en el exterior, en caso que no pudiera realizarse en el territorio nacional. Manifestó que por razones constitucionales no era posible
para el Gobierno despejar ninguna porción del territorio nacional, así
como tampoco a suspender operaciones militares. Lo importante era
encontrar un sitio donde las FARC pudieran tener todas las seguridades
por ellos demandadas.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE LIBERTADORES DEL SUR
El 30 de julio de 2005, en el predio denominado El Romance, ubicado en el paraje El Tablón, municipio de Taminango, departamento de
Nariño, hicieron entrega de sus armas 689 hombres del Bloque Libertadores del Sur. Otros 2 000 hombres pertenecientes al Bloque Héroes de
Granada se desmovilizarían la semana siguiente.
La ceremonia de entrega de armas fue presidida por el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo. Al acto asistieron también
el delegado de la OEA, Sergio Caramagna y el Gobernador de Nariño,
Eduardo Zúñiga. Con banderas blancas y sus uniformes limpios, uno
a uno los 632 hombres y 57 mujeres entregaron sus armas a Restrepo.
“Ahora a conformar un partido político y a continuar la lucha no
armada sino política”, dijo el comandante del Bloque Libertadores del
Sur, “Julio Castaño”.
309
Los desmovilizados entregaron a las autoridades 449 armas largas,
98 armas cortas, 49 armas de apoyo, 540 granadas, 85 radios 2m y 13
radios base. Igualmente entregaron 4 vehículos, 5 motocicletas, 2 lanchas y 4 motores.
Esa facción de las AUC tenía su territorio de influencia hace cinco
años en el litoral pacífico de Nariño y en valles y selvas del río Mira y
también en zona mon-tañosa de varios municipios. El Bloque Libertadores del Sur, al mando de “Pablo Sevillano”, era el primer grupo del
Bloque Central Bolívar en desmovilizarse.
“Julio Castaño”, jefe militar de los Libertadores, “Diego Rivera”,
jefe político, y “Alex Medellín”, gestor de esa organización en Nariño,
le respondieron a El Tiempo por algunas de las acusaciones sobre narcotráfico, masacres, muertes selectivas y amenazas que se le atribuían.
A continuación se detalla:
El Tiempo: al bloque se lo sindica de tener nexos con la guerrilla y el Cartel del Norte del Valle para negocios de narcotráfico.
¿Cómo es esa relación?
Entrevistados: el Bloque Libertadores del Sur es una estructura
político-militar en la que jamás hubo algún vínculo con carteles
de la droga colombianos. Nuestra relación con los narcotraficantes
se limitó a cobrar el “impuesto al gramaje” (cobro por el paso de
cocaína hacia los centros de acopio). No somos narcotraficantes.
E.T.: se los acusa de muertes y amenazas a estudiantes y profesores de la Universidad de Nariño. ¿Cuál es su responsabilidad?
E.: somos conscientes de quién es el enemigo. No hubo relación
directa ni indirecta con esas muertes. Tampoco con las amenazas.
E.T.: ¿Y los asesinatos selectivos y masacres en los que se los
señala como autores?
E.: aquí no hubo masacres, no hubo delitos de lesa humanidad,
nunca fuimos partidarios de eso. Este bloque fue siempre respetuoso
de la población civil y del Derecho Internacional Humanitario.
310
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
E.T.: ¿Quién garantiza que los hombres que se desmovilizan
no formarán parte de bandas delincuenciales?
E.: Es nuestra mayor preocupación, porque el problema social
en Colombia es complejo, pero nuestros hombres dejan esta vida
militar para ocuparse de proyectos productivos, agrícolas y ganaderos. Le pedimos a la romanidad que los acoja.
E.T.: entonces, ¿nada de lo que se los acusa es cierto?
E.: le estamos diciendo a Colombia que hoy queremos la paz,
nuestro arrepentimiento es de corazón. Les pedimos perdón al
país, a Nariño y a la comunidad internacional por todos los atropellos y abusos que pudimos haber cometido en estos años87.
El presidente Álvaro Uribe anunció que los paramilitares y guerrilleros desmovilizados pueden ser incorporados como “policías cívicos no
armados” en labores de vigilancia de espectáculos culturales y deportivos.
También solicitó a los empresarios que emplearan a los desmovilizados88.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE HÉROES DE GRANADA
El 1 de agosto de 2005, en la finca La Mariana, paraje Palo Negro del
corregimiento de Cristales, municipio de San Roque, del departamento
de Antioquia, se produjo la desmovilización de 2 033 hombres del bloque Héroes de Granada, comandado por Daniel Alberto Mejía Ángel.
Los desmovilizados entregaron 608 armas largas, 480 armas cortas,
32 armas de apoyo y 791 granadas.
CARTA DE LAS FARC AL EX PRESIDENTE ALFONSO LÓPEZ
El 3 de agosto de 2005 se conoció una carta enviada por el secretariado de las FARC al ex presidente Alfonso López Michelsen; al Procurador General de la Nación, Edgardo Maya Villazón; y al ex Ministro Álvaro Leyva, por medio de la cual insistían en la desmilitarización de los
municipios de Florida y Pradera a fin de adelantar negociaciones con el
87
Op. Cit. 3, julio, 2005.
88
DIARIO EL COLOMBIANO. 31, julio, 2005.
311
Gobierno Nacional tendientes al logro de un acuerdo humanitario que
permitiera la liberación de muchas personas, entre ellas políticos, militares y civiles que permanecían en poder de esa organización.
En el mismo mensaje, el secretariado de las FARC solicitaba al Procurador General asumir la investigación por la extradición de los guerrilleros “Simón Trinidad” y “Sonia” a los Estados Unidos.
Ocho días después que el presidente Álvaro Uribe Vélez hizo a los
empresarios de las compañías de vigilancia privada la propuesta de darles ideas sobre cómo emplear a los reinsertados, la Oficina para la Reinserción del Ministerio de Interior y Justicia anunció que los reinsertados
de las autodefensas y la guerrilla serían capacitados para desempeñarse
como guardias cívicos. En ese momento existían 14 492 ex miembros
de las AUC y ex guerrilleros desmovilizados.
Los nuevos guardias serían capacitados por la Superintendencia de
Vigilancia y Seguridad Privada, y al terminar las primeras cincuenta
horas de preparación serían contratados para prestar servicios de guías
en parques, eventos masivos, centros comerciales y actividades comunitarias, sin porte de armas.
El Gobierno Nacional, por intermedio del Ministro del Interior y
Justicia, Sabas Pretelt, descartó la desmilitarización de los municipios
de Florida y Pradera para la negociación del posible intercambio humanitario. Dijo el ministro que las FARC deseaban el despeje de esos
municipios porque hacían parte de un corredor estratégico para ese grupo guerrillero. Insistió el ministro que el Gobierno estaba dispuesto a
reunirse con la guerrilla en cualquier lugar de la geografía nacional sin
condicionamientos de ninguna de las partes y se darían todas las garantías para la seguridad de la guerrilla.
A su turno, desde Cuba, Ramiro Vargas, miembro de la dirección y
portavoz internacional del ELN, desestimó la invitación del Gobierno
Nacional para conversar sobre un proceso de paz. Vargas se refirió a una
propuesta expresada por el Alto Comisionado Presidencial para la Paz,
Luis Carlos Restrepo, quien señaló que el Gobierno entendía que el ELN
se tomara su tiempo para evaluar y reflexionar acerca de su propuesta.
312
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUTODEFENSAS DE LOS
LLANOS ORIENTALES
El 6 de agosto de 2005, 209 combatientes de grupos de autodefensas
de los Llanos Orientales entregaron sus armas. Eran las Autodefensas
Campesinas de Meta y Vichada, ACMV.
Un año después del ultimátum lanzado por el presidente Álvaro Uribe para que se acogieran al proceso de paz, las Autodefensas Campesinas de Meta y Vichada, bajo el mando de José Baldomero Linares, se
convirtieron en el primer grupo paramilitar de los Llanos Orientales en
entregar sus armas. El grupo se desmovilizó en la finca La María, inspección de San Miguel, en el municipio de Puerto Gaitán, Meta. En diciembre de 2004 el jefe de este bloque, “Guillermo Torres”, se decidió a
meterse de lleno en las conversaciones de paz con el Gobierno Nacional.
Este grupo controló durante varios años algunas rutas fluviales y
terrestres en los Llanos Orientales del país. Aunque el número de combatientes que lo integraban no era muy significativo, se esperaba que el
desmonte de las Autodefensas Campesinas de Meta y Vichada estimulara a otros grupos como Los Buitragueños, el de “Martín Llanos”, a
dar un paso semejante. La desmovilización del Bloque Centauros estaba prevista para los próximos meses e implicaría el desarme de los tres
mil integrantes del mayor grupo de autodefensas en el oriente del país.
El verdadero nombre de “Guillermo Torres” es José Baldomero Linares Moreno. Se dice que nació en San Martín, Meta, y que había
hecho parte de las ACMV desde hacía más de doce años.
El bloque desmovilizado entregó el siguiente armamento: 137 armas
largas, 83 armas cortas, 12 armas de apoyo, 84 granadas, 26 radios 2m
y 9 radios de base. Además entregaron 3 vehículos.
COMISIÓN FACILITADORA
FRANCISCO GALÁN
SE
ENTREVISTA
CON
El 5 de agosto de 2005, la Comisión Facilitadora de las relaciones
entre el Gobierno Nacional y el ELN se entrevistó con “Francisco Galán” en la cárcel de Itaguí para proponer de nuevo la creación de una
mesa de conciliación.
313
Los comisionados María Emma Mejía, Antonio Navarro, el ex procurador Jaime Bernal Cuéllar, el sacerdote Darío Echeverri y el profesor
Alejo Vargas no dieron información acerca del resultado de su gestión.
El comisionado de paz, Luis Carlos Restrepo, reveló que el Gobierno había ofrecido al ELN negociar un cese al fuego bilateral en el exterior con el acompañamiento de garantes internacionales.
El 9 de agosto de 2003 el Gobierno propuso a las FARC la vereda
Aures, en el municipio de Caicedonia, Valle del Cauca, como sitio para
diálogo sobre acuerdo humanitario. El Comisionado de Paz señaló que
en esa vereda existirían todas las garantías de seguridad para negociar.
La idea de proponer a Aures como lugar para un posible encuentro entre las FARC y el Gobierno Nacional fue de los familiares de muchos
de los secuestrados
CAICEDONIA OFRECE A AURES COMO ZONA DE
ENCUENTRO
El 11 de abril de 2005, el alcalde de Caicedonia, Jorge Aldemar Arias,
llevó a la Asamblea del Valle la propuesta de convertir a Aures en zona de
encuentro entre delegados del Gobierno y las FARC para que buscaran el
intercambio de secuestrados por guerrilleros presos. Ese día se cumplían
tres años del plagio de varios diputados en el recinto de la Asamblea.
La idea, entre otras, tenía que ver con que una de las escasas 22 viviendas que conforman el centro de ese caserío del norte del Valle es de la familia del ex Diputado Nacianceno Orozco, quien se encontraba en poder
de las FARC y cuya esposa, Ruby Jaramillo, era diputada en ejercicio.
De nuevo le plantearon la idea al Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, quien anunció en Cali que el Gobierno aceptaba a Aures
como sitio de encuentro con la guerrilla. Aures es una vereda situada
a 45 minutos de Caicedonia. Las FARC, sin embargo, descartaron la
vereda de Aures como sitio para hablar del acuerdo humanitario, por
considerar que allí no existían garantías de seguridad.
En un comunicado transmitido vía internet con fecha 14 de agosto de 2005, insistieron en que el Gobierno despejara por 30 días los
314
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
municipios de Florida y Pradera, tal como lo habían solicitado anteriormente, y dijeron valorar el esfuerzo de los familiares secuestrados
para lograr un encuentro con el Gobierno Colombiano que permita el
intercambio humanitario.
El Gobierno aseguró que en Aures había garantías para suscribir el
acuerdo humanitario, pero aclaró que no habría desmilitarización. El
presidente Uribe insistió en que no aceptaría la desmilitarización de
Florida y Pradera, pero autorizó al Comisionado de Paz para que buscara contactos con voceros de las FARC en alguna de las iglesias de los
dos municipios mencionados.
LA IGLESIA CATÓLICA PROPONE PRE-DIÁLOGOS CON
FARC Y ELN
El presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, anunció el lunes
22 de agosto de 2005 que el Gobierno había aceptado que la Iglesia Católica realizara un “pre-diálogo” conducente a un cese de hostilidades
por parte de los grupos armados al margen de la ley. Este anuncio lo
hizo el Presidente después de reunirse con el Presidente de la Conferencia Episcopal, Monseñor Luis Augusto Castro.
El primer mandatario manifestó que durante el encuentro se hizo
un repaso de los esfuerzos que ha realizado la Iglesia en busca de la
paz y reiteró la disposición del Gobierno Nacional hacia el ELN para
comenzar un proceso de diálogo serio y con voluntad por parte de la
organización alzada en armas.
“La posibilidad del pre-diálogo que ha planteado la Iglesia podría aplicarse no sólo para los acercamientos con el ELN sino también con las FARC”, dijo el Presidente, quien aseguró que en cualquier
caso estas organizaciones tendrán todas las garantías de seguridad por
parte del Gobierno.
Durante la reunión entre el Presidente de la República y Monseñor
Castro también se habló del asesinato reciente de varios sacerdotes en
Norte de Santander y el Tolima. Álvaro Uribe manifestó que habría una
reunión con el Ministro de Defensa, los altos mandos militares, la Conferencia Episcopal y la Nunciatura Apostólica para analizar este tema.
315
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE PACÍFICO
El 22 de agosto de 2005, 358 hombres del grupo llamado Bloque
Pacífico, al mando de Francisco Javier Zuluaga, conocido con los alias
de “Gordo Lindo” o Gabriel Galindo se desmovilizaron en el estadero
Kurangano, situado a un kilómetro de Istmina, sobre la vía entre Istmina y Condoto en el Chocó.
Hasta último momento se definía si Francisco Javier Zuluaga, alias
“Gordo Lindo”, pedido en extradición por una corte de Fort Lauderdale, en el estado de Florida, Estados Unidos, se desmovilizaría en esta
fecha o si lo haría próximamente en Santa Fe de Ralito, con medio
centenar de paramilitares de su guardia personal.
En todo caso, para recibir los beneficios de penas alternativas debería
esperar que su historial delictivo, a ojos de la justicia colombiana, “no
hubiera tenido como finalidad el tráfico de estupefacientes o el enriquecimiento ilícito”, según los requisitos de elegibilidad establecidos en la
nueva Ley de Justicia y Paz.
Zuluaga, nacido en Cali, con 35 años de edad, formaba parte del Estado Mayor negociador de las AUC desde el comienzo del proceso. Los
orígenes del Bloque Pacífico no eran muy claros. Las autoridades decían que eran “herederos” del grupo Héroes del Chocó que pertenecía a
las estructuras de Rodrigo García o “Doble Cero”, jefe de autodefensas
asesinado el año 2004 en la guerra a muerte con “Don Berna”. Desde
entonces quedó en manos de “Gabriel Galindo” o “Gordo Lindo” y de
Jonatan Samuel Guevara.
Este grupo tenía su escenario de operaciones desde el Pacífico vallecaucano hacia el Medio San Juan, en Chocó, una de las zonas más
disputadas por los grupos armados ilegales. Tenía presencia en nueve
municipios del suroriente del departamento de Chocó: Istmina, Tadó,
Unión Panamericana, Baudó, Medio San Juan, Sipí, Litoral del San
Juan, Condoto y Nóvita.
El jefe del bloque Pacífico, “Johnatan”, manifestó que uno de sus
subalternos lo había suplantado al decir en la emisora de radio ‘La W’
que “Gordo Lindo” no tenía mando sobre el grupo.
316
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Contactado por El Tiempo, “Johnatan Guevara”, cuyo nombre real
es Luis Eduardo Durango Echavarría, confirmó que Diego Fernando
Murillo, “Don Berna”, le entregó hace tres años el Bloque Pacífico a
Francisco Javier Zuluaga. Es decir, por la misma época en la que empezaban los acercamientos de paz entre el Gobierno y las AUC.
“Adolfo Paz” era el comandante político del bloque, pero se dedicó al Cacique Nutibara, al Granada y al Tolová. El Estado Mayor
decidió que lo coordinara “Gabriel Galindo”, también conocido
como “Gordo Lindo”.
Un centenar de hombres del frente San José del Palmar, uno de los
tres que conformaban el bloque Pacífico, se desmovilizarían el sábado
27 de agosto de 2005 como parte de la guardia personal de Zuluaga en
Santa Fe de Ralito.
De los 150 hombres y mujeres que entregaron las armas en esta
ocasión, la mayoría chocoanos y antioqueños, ocho tendrían que trasladarse a Ralito porque enfrentaban procesos y condenas penales que
no eran indultables o amnistiables sino a través de la nueva Ley de
Justicia y Paz.
A 8 948 ascendió el número de combatientes de las Autodefensas
Unidas de Colombia desmovilizados, con el desarme de 150 miembros
del Bloque Pacífico-Héroes de Chocó.
La ceremonia de desmovilización se llevó a cabo en el municipio de
Istmina, Chocó, donde los paramilitares se habían concentrado previamente para recibir charlas sobre el programa de reincorporación a la
vida civil, ayuda económica y ropa.
La Fiscalía y la Registraduría sometieron a los desmovilizados a un
proceso de identificación, que incluyó la toma de huellas dactilares, fotografías, muestras de ADN y expedición de cédulas de identidad.
Durante el acto, los 150 paramilitares hicieron entrega de 144 armas
largas, 38 granadas de 40 milímetros, 8 granadas de mano y 8 granadas
de mortero de 60 milímetros. Todo este material sería trasladado a un
batallón militar cercano.
317
Según el Alto Comisionado para la Paz, el sábado 27 de agosto, en
la zona de ubicación de Tierralta, Córdoba, culminará la desmovilización de este bloque. “Hoy estamos asistiendo a la desmovilización del
frente Héroes del Chocó, y el próximo sábado se desmovilizará el resto
de la estructura que corresponde, básicamente, al frente que actuaba en
la zona de San José del Palmar”, dijo el Comisionado. Durante su intervención, Restrepo también recordó que la desarticulación del Bloque
Pacífico se inició en diciembre de 2004, conjuntamente con el Bloque
Calima de las AUC89.
NUEVA DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE PACÍFICO
El 27 de agosto de 2005, tal como se había anunciado, los 300 miembros del Bloque Pacífico de las autodefensas entregaron sus armas en
Santa Fe de Ralito. Su jefe, “Gordo Lindo”, insistió en no tener nexos
con el tráfico de narcóticos tal como se le había venido sindicando.
Con la desmovilización de los hombres de “Galindo” aumentó a
9 248 el número de combatientes desarmados en el proceso de paz de
las AUC.
El Alto Comisionado para la Paz, y el Jefe de la Misión de Apoyo de
la OEA al proceso de paz, Sergio Caramagna, presidieron la ceremonia
en la que se desarmaron los combatientes al mando de alias “Gabriel
Galindo”.
Durante el acto, el delegado de la OEA señaló que el proceso de paz
entre el Gobierno y las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, debería ser apoyado con mayor presencia de la comunidad internacional.
Algunos jefes de las AUC como Francisco Zuluaga, “Gordo Lindo”,
y “Pablo Arauca”, a quienes los Estados Unidos habían solicitado en
extradición por supuestas actividades relacionadas con el tráfico de narcóticos, aún permanecían en Santa Fe de Ralito. El Gobierno Nacional
estaba estudiando el sitio donde serían recluidos quienes tuvieran problemas jurídicos por resolver.
89
Op. Cit. [en línea], Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
318
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
También permanecían aún en Santa Fe de Ralito: Rodrigo Antonio
Peludo, “Cadena”, jefe del bloque Montes de María, quien había entregado sus hombres con anterioridad; “Jorge Cuarenta”, del Bloque Norte; “Juancho Dique”, jefe del grupo Canal del Dique, parte del Bloque
Montes de María y “Simón”, del Bloque Sur.
Estaban fuera de Santa Fe de Ralito, resolviendo asuntos relacionados con las próximas desmovilizaciones, “Ramiro”, “Cuco Vanoy”,
“Ernesto Báez”, Ramón Isaza, jefe máximo de las AUC; Víctor Triana,
“Botalón”, de Puerto Boyacá; y Hernán Giraldo, de la Sierra Nevada.
DESMOVILIZACIÓN DE LOS ANILLOS DE SEGURIDAD
DE SANTA FE DE RALITO
El 27 de agosto de 2005, tal como se había anunciado, los 300 miembros de los anillos de seguridad existentes en Santa Fe de Ralito, en
Tierra Alta, departamento de Córdoba, entregaron sus armas.
Los hombres desmovilizados pertenecían: al Bloque Pacífico, 208;
al Bloque Libertadores del Sur, 12; al Bloque Centauros, 18 y al Bloque
Vencedores de Arauca, 62.
El material entregado constaba de 142 armas largas, 37 armas cortas,
16 armas de apoyo; 10 067 unidades de munición de diferente calibre,
91 granadas y 41 radios.
Una vez producida la desmovilización de este grupo de autodefensas, la Policía Nacional asumió el mismo 27 de agosto de 2005 el control total sobre la zona de ubicación en Santa Fe de Ralito.
Un equipo de 40 policías, bajo el mando de un mayor, asumió la
responsabilidad, de garantizar la seguridad en esta pequeña localidad
que fue testigo ese sábado 27 de agosto de 2005, del último proceso de
desmovilización de unos 120 hombres del Bloque Pacífico.
“Ernesto Báez”, el jefe de las AUC, cuestionó el papel de la prensa
en algunos aspectos del proceso. Dijo que sectores de opinión habían
descalificado a Zuluaga como miembro de las AUC, y aseguró que ha-
319
bía testimonios sobre la militancia y entrega de Zuluaga a su organización desde 1997.
Por su parte, el comisionado Luis Carlos Restrepo se refirió al manejo de la información en los hechos de la noche del jueves 25 de agosto
de 2005, en el corregimiento de Guadal, jurisdicción de Valencia, sur
de Córdoba, donde fue avistada una columna guerrillera que provocó el
desplazamiento de unas 500 personas.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE CENTAUROS
El sábado 3 de septiembre, 1 135 hombres del Bloque Centauros de
las AUC, al mando de Vicente Castaño, se desmovilizaron en Casanare.
Este grupo tenía presencia en Bogotá. Ocho años después de la incursión de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, ACCU, en
el Llano, adoptaron el nombre de Bloque Centauros, una de las tres
facciones en que quedó dividido este grupo tras el asesinato de Miguel
Arroyave.
La Oficina de Alto Comisionado de Paz hasta esta fecha no había
oficializado la intención de desmovilización de los otros dos grupos que
operan en Meta y Guaviare al mando de Jesús Pirabán Garnica, “Jorge Pirata”, y de Pedro Oliveros Guerrero, “Cuchillo”. En la línea de
mando seguía “Mauricio”. Era el único subgrupo del Centauros que
mantenía diálogos con el Gobierno Nacional.
Esta facción es la misma que durante un año mantuvo una sangrienta lucha con las Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC, fundadas por Héctor Buitrago, con las que se disputaba el dominio del sur de
ese departamento.
Producto de esa batalla murieron cerca de 1 000 combatientes de
ambos grupos armados ilegales, contó a El Tiempo Buitrago, jefe de las
ACC. Su hijo, Héctor Germán Buitrago, alias “Martín Llanos”, asumió
el mando de esa organización mientras su padre estuvo preso durante
cinco años.
La entrega de armas se produjo en la finca Corinto, a 24 kilómetros
de Yopal, en el corregimiento de Tilodirán, municipio de Yopal, departamento de Casanare, ante el comisionado Luis Carlos Restrepo. Tres
320
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
años atrás las AUCC habían tomado el nombre de Bloque Centauros y
el mando lo asumió Miguel Arroyave, alias “Arcángel”.
El 19 de septiembre de 2004 Arroyave fue asesinado días después de
salir de Santa Fe de Ralito para concretar su desmovilización y la de sus
hombres. Tras su muerte, el grupo que dirigía se dividió en tres facciones, una de ellas al mando de Pedro Oliveros Guerrero, alias “Didier” o
“Cuchillo”, a quien las autoridades responsabilizaban de ese asesinato.
El grupo de “Cuchillo” no hacía parte del proceso de negociación con el
Gobierno.
Uno de los grandes interrogantes con la desmovilización de una de
las tres facciones del bloque Centauros era el futuro de las estructuras de
este grupo de autodefensas que operaban en Bogotá, conocidas como el
bloque Capital. Después del asesinato de Miguel Arroyave se inició una
disputa por el poder dentro del Bloque Centauros.
En un breve discurso en el lugar de concentración, la finca Corinto,
en el corregimiento de Tilodirán, a media hora de Yopal, Castaño Gil
hizo una invitación a los demás grupos al margen de la ley para que
siguieran la idea de la desmovilización y pidió perdón a los familiares
de las víctimas.
Castaño Gil, hermano del desaparecido Carlos Castaño, estuvo con
una de las tres facciones en que se dividió el Bloque Centauros tras el
asesinato de Miguel Arroyave. A la finca Corinto llegó, procedente de
Córdoba, en su condición de “miembro representante de las AUC”.
Según los organismos de seguridad, José Vicente Castaño fue quien
coordinó las acciones para que el grupo fundado por su hermano Fidel
y luego heredado por Carlos, otro de los Castaño, incursionara en los
enclaves de la guerrilla en el suroriente de Colombia.
José Vicente Castaño empezó a ser conocido cuando se produjo
la misteriosa desaparición de Carlos Castaño y varias fuentes cercanas a las AUC le atribuyeron el supuesto asesinato de su hermano
menor.
Según se dijo en esa oportunidad, Carlos Castaño estaba buscando
una negociación con el Gobierno, y el sector más radical de las autodefensas, conformado por reconocidos narcotraficantes como “Don
321
Berna”, empezó a mirarlo como un obstáculo para sus planes frente a
la posible negociación con el Gobierno Nacional90.
Los desmovilizados entregaron 586 armas largas, 102 armas cortas,
17 armas de apoyo, 317 granadas, 159 719 unidades de munición de
distintos calibres, 117 radios, 8 vehículos y 9 motocicletas.
El siguiente es el texto completo de la intervención de Vicente Castaño Gil en el acto de desmovilización del Bloque Centauros:
Doctor Luis Carlos Restrepo, Alto Comisionado para la Paz; doctor
Sergio Caramagna, Jefe Misión de Apoyo de la OEA; doctor Juan David
Angel, Director Nacional de Reincorporación; señor Gobernador del Casanare, Elí Cala; Alcalde de Yopal, Nelson Mariño; autoridades civiles,
militares y eclesiásticas; embajadores y demás representantes de la comunidad internacional; señores medios de comunicación; colombianos:
Después de observar desde una prudente distancia por más de una
década a mis hermanos, enfrascados en una lucha interminable y en
una actitud servil que solo era útil para unas instituciones indolentes,
negligentes y auspiciadoras de nuestra tragedia nacional, y después de
soportar además silenciosamente la desaparición de los seres queridos,
fui llamado por clamor familiar para tomar las riendas de unas autodefensas que tenían que ser reconstruidas.
Al comienzo no tomé las filas de las armas, sino que busqué un liderazgo social y productivo en la región del norte de Urabá y parte del Sinú.
Posteriormente, tras un intento fallido de mi hermano Carlos de buscar un acuerdo de no agresión con la guerrilla, utilizando la mediación de la Iglesia y la de varios personajes de la vida pública, y tras las
constantes agresiones guerrilleras, más el llamado incesante de miles de
compatriotas desprotegidos, tomé la decisión inquebrantable, acompañado de mi hermano Carlos en la dirección política, de llevar las autodefensas hasta el último rincón de la patria, con el convencimiento de
lograr uno de estos dos objetivos: hacerle entender a la guerrilla que
su forma de lucha era una utopía o hacerle entender al Estado que nos
defendía o nos defendíamos al precio que fuera necesario.
90
Op. cit. 4, septiembre, 2005.
322
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Ahora que hemos ocupado casi todo el territorio nacional con autodefensas, logrando así el segundo objetivo tomé el camino de la desmovilización.
Quiero invitar a todos a seguir ese mismo sendero del desarme, continuando la lucha por nuestro país desde un ámbito legal. Los invito
a tomar la otra bandera, como lo hemos venido haciendo en los últimos diez años: la de un compromiso social y de desarrollo productivo,
que nos permita desterrar la miseria hasta en la más apartada región de
nuestra geografía, esta vez, apoyándonos en las instituciones.
Quiero anotar también que el proyecto de justicia y paz no fue construido para la paz, si sólo se pensaba en el desarme. Esto refleja claramente que muchos de nuestros dirigentes mostraron una gran debilidad
para tomar las grandes decisiones que transformen el país. Esperamos
que en el futuro sea el pueblo, mediante una consulta popular, el que
decida qué es lo que nos merecemos.
La paz no es el resultado de un decreto, sino el fruto de un proceso
en donde lo importante es el cambio interior. De este cambio es toda la
comunidad internacional la que debe tomar conciencia, para que la paz
no sea simplemente un sueño sino una realidad.
En nombre de todos los compañeros, les pido un sincero perdón a todas
las personas que han sido víctimas de este conflicto. Invito al país, lo mismo
que a la comunidad internacional, a no dejar pasar este acontecimiento sin
interrogarnos cuál fue el aprendizaje en este doloroso proceso. También. a
preguntarnos por una economía que no busque solamente acumular, retener y poseer, sino a descubrir su verdadera dimensión social.
Roguemos al todopoderoso que nos ilumine a todas las víctimas
para que logremos una gran reconciliación, y que nos guíe a reconstruir
juntos el país que todos anhelamos: una Colombia sin hambre en donde
sea realidad la frase de Gandhi: “hay para la necesidad de todos, pero
no para la avaricia de pocos”.
Muchas gracias.
Vicente Castaño Gil91
Casanare, septiembre 4 de 2005
91
COLOMBIA LIBRE. [en línea]. Disponible en internet: www.colombialibre.org.
323
Durante el acto de desmovilización del Bloque Centauros, los máximos dirigentes de las AUC reiteraron sus intenciones de participar
abiertamente en política. En tono beligerante, “Ernesto Báez”, máximo
líder de las autodefensas, se refirió a recientes críticas de la entidad Amnistía Internacional al proceso de desmovilización de su organización y
la acusó de querer engañar al país y a la comunidad internacional sobre
el curso de las negociaciones de paz. También anunció que él y Salvatore Mancuso liderarían el proyecto político. “Nosotros, las AUC, no
desaparecemos. Las autodefensas se transformarán: seremos un gran
movimiento, un movimiento que exige participar en las grandes decisiones de la nación”, subrayó “Báez”.
Entretanto, el comisionado Restrepo llamó a las Autodefensas Campesinas de Casanare, el grupo de “Martín Llanos”, a que aceptaran la
invitación a negociar con el Gobierno y se desmovilizaran.
El ex presidente Andrés Pastrana Arango, a su regreso definitivo al
país, lanzó un libro con el título: La palabra bajo el fuego, escrito en colaboración con el Comisionado de Laz durante su gobierno, Camilo Gómez Alzate, en el cual habla por primera vez de sus contactos secretos
con las AUC, en los cuales participaron Felipe González, ex Presidente
del Gobierno Español y el Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez.
ENTREVISTA CON EL EX PRESIDENTE PASTRANA
Por considerarlo un documento de la mayor importancia, transcribimos un reportaje concedido por el ex Presidente Pastrana a Argemiro
Piñeros, de Colprensa.
Colprensa: ¿La palabra bajo fuego es un libro escrito para responder a sus críticos?
Andrés Pastrana: en el libro seguí el consejo de un amigo, que
hoy valoro más que nunca: escribir sin resentimiento ni rencor.
Eso fue lo que hice. Segundo, no voy a escribir un libro de mentiras; yo quiero que sea el lector el que defina si lo hicimos bien o
mal. A veces es difícil reconocer errores. Lo que estamos tratando
de dejar claro son unos hechos que se dieron, para bien o para
mal de Colombia.
324
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
C.: ¿Qué errores reconoce en el libro?
A.P.: haber comunicado mal lo que pasaba en San Vicente del
Caguán. No hay un proceso en el mundo del que se haya contado más que el nuestro con las FARC. Siempre insistí en que era
mejor comenzar a dialogar por fuera y no en Colombia, porque
la paz no puede producir noticias todos los días y ustedes (los
medios de comunicación) siempre buscan saber qué pasó en el
día, y en estos procesos a veces se avanza mucho, pero también
se retrocede.
C.: ¿El proceso de paz fue sólo la zona del despeje y no más?
A.P.: no. El proceso de paz fue mucho más. Por ejemplo, el
fortalecimiento de las Fuerzas Armadas, reconocido por los propios militares y el presidente Uribe. Hay un capítulo muy interesante sobre el tema en el libro. En la primera reunión que tuve
con el comandante de las Fuerzas Militares, el General Fernando
Tapias, me dijo: “Presidente, la democracia está en peligro”, y
se refería a la verdadera situación de orden público del país. Así
fue que titulé ese capítulo en el que cuento cómo recibí el país en
1998.
C.: en el capítulo “La silla vacía”, que tiene que ver con la
frustrada reunión con “Tirofijo”, ¿qué cuenta?
A.P.: cuento todo lo que se dio en torno a cómo se concibió el
proceso de paz. Inclusive, recuerdo en el libro que le dije a Víctor
G. Ricardo (Consejero de Paz en ese momento) que el acto debió
de ser sencillo para iniciar el diálogo. Lo importante no era la
reunión del Presidente de la República con Manuel Marulanda.
No. Lo clave era el diálogo.
C.: ¿Y del momento crítico que tuvo con el ministro Rodrigo
Lloreda y los militares?
A.P.: en primer lugar, cuento cómo fue la relación con el ministro Lloreda y por qué decidió salir del Gobierno. De la reunión
con los militares en la base de Tolemaida, digo qué se discutió. Yo
325
siempre tuve una relación muy fluida con el General Fernando
Tapias y el país aún no ha reconocido todo el esfuerzo y trabajo
que este hombre hizo en todo aspecto.
C.: ¿Cómo fue el proceso con el ELN, que tampoco llegó a
buen puerto?
A.P.: si hubo alguien que se la jugó en el proceso con el ELN
fue el presidente Fidel Castro, quien participó de manera personal
y directa en el tema. Inclusive, en La Habana ya se había llegado
al acuerdo de iniciar el diálogo. Yo mismo les dije a los del ELN
que hablaran con Fidel y él les recomendó: “firmen y comiencen
un proceso de negociación”. Fue más allá al explicarles que nunca iban a conseguir condiciones tan favorables con un presidente
conservador. Salieron de hablar y no firmaron.
C.: ¿Qué significa para usted que el ex presidente Bill Clinton
haya escrito el prólogo del libro?
A.P.: es un honor contar con su prólogo. Clinton, desde el
primer momento, ha sido un gran interesado en Colombia. Hace
un resumen muy interesante de mi Gobierno; destaca en primer
lugar cómo en el país se dio el referendo informal del mandato
por la paz, y dice que fue escuchado por mí durante la administración. Destaca, también, que no entiende cómo las FARC no
aceptaron todo lo que se les ofreció en ese momento. Además,
resalta que el Plan Colombia, iniciado por nosotros dos, lo hayan
continuado los presidentes Bush y Uribe. Hay un sentimiento de
cariño de Clinton hacia Colombia.
C.: ¿Cómo ve la posibilidad de un proceso con las FARC?
A.P.: la veo muy lejana, y ojalá que ellos entiendan que sólo
hay un camino para llegar a la paz: la solución política negociada.
C.: ¿En su misión como Embajador trabajará en este aspecto?
A.P.: si se puede hacer, estoy dispuesto a realizarlo. Alguien
me ha preguntado que si por el tema de la paz volvería a hacer lo
que se pidiera y yo insisto en que debe hacerse lo necesario.
326
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
C.: ¿Cómo avanza la conformación de la Comisión Internacional para la verificación del proceso con las AUC?
A.P.: se está trabajando. Hay mucho interés de Europa en apoyarla. He tenido reuniones con el Fiscal General, el Vicepresidente y el Ministro del Interior. Hoy hay un proceso y para bien
o para mal hay que mejorarlo, y además, debe servir para otros
grupos que quieran regresar a la legalidad. Aspiro que antes de
finalizar el año ya tengamos consolidada la comisión.
C.: ¿Qué características debe tener ese organismo?
A.P.: dos aspectos: uno, el de verificación, pero también el de
la gente que esté ‘in situ’ trabajando. La idea es tener personalidades que han estado vinculadas en otros procesos, pero también
que estén trabajando en el interior del proceso.
C.: ¿Sigue distante su relación con el senador Carlos Holguín?
A.P.: la verdad es que no he tenido relación porque no he estado vinculado a la actividad política. Es un distanciamiento desde
el punto de vista político, porque nosotros los ex jefes de Estado
somos tan sólo asesores. El presidente del partido no ha creído
necesario que se le preste esa asesoría, y eso está muy bien, porque simplemente he asumido unas posiciones políticas personales
y no de la colectividad, por ejemplo, en el tema de la reelección.
C.: ¿En qué quedan las críticas de Andrés Pastrana al presidente Uribe, ahora que será su embajador?
A.P.: la crítica fundamental ha sido la reelección. Le planteé
al Presidente que no era bueno cambiar las reglas de juego a mitad de camino. No he dicho que la reelección es mala; es buena.
Lo malo es cambiar las reglas, pero la Corte Constitucional tomará una decisión que debemos respetar todos los colombianos,
incluido el Presidente92.
92
Op. cit. 6, septiembre, 2005.
327
FARC DESCARTAN PRE-DIÁLOGOS PROPUESTOS POR
LA IGLESIA CATÓLICA
El secretariado de las FARC, en un comunicado fechado el 3 de septiembre de 2005 en su página de internet, desestimó la propuesta de
pre-diálogos hecha por la Iglesia Católica.
La organización insurgente cuestionó con diminutivos como “veredita”, “capillita” y “casita”, los mismos que utiliza el presidente Uribe
para referirse a los lugares de encuentro, la voluntad del Gobierno para
facilitar el intercambio humanitario.
El pre-diálogo, propuesto por Monseñor Castro, consistía en que
voceros del Gobierno y de la guerrilla se reunieran en un lugar del extranjero, sin condiciones, en busca del cese de hostilidades, como paso
previo a las negociaciones del acuerdo humanitario.
Las FARC agradecieron al obispo y a otros dirigentes políticos el interés
en facilitar el encuentro, pero rechazaron radicalmente esta posibilidad.
El 22 de agosto de 2005 el Presidente, Álvaro Uribe, aprobó que la
Iglesia Católica conversara con las FARC y con el ELN con miras a
conseguir un cese de hostilidades que diera lugar al inicio de negociaciones formales entre el Gobierno y esos grupos.
A pesar de su rechazo a la propuesta eclesiástica, las FARC llamaron
a los prelados a no cesar sus esfuerzos para conseguir el acuerdo humanitario. El pre-sidente Uribe insistió en que estaba dispuesto a hacer las
concesiones que fueran necesarias para lograr acuerdos fructíferos.
Al hablar en un acto de graduación de oficiales en la Escuela de
Policía General Santander, el mandatario dijo que estaba dispuesto a
“deponer sus convicciones personales en aras de la paz y aceptar la negociación de una solución definitiva del conflicto”.
Uribe reversó en lo que parecía ser una posición inamovible: la no
existencia de un conflicto armado en Colombia. Pero claro, con condiciones. “Si se avanza en un proceso hacia la paz con el ELN, si se
acepta pactar un cese de hostilidades con todas las garantías para
328
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
hacer la paz, si se le da una señal de paz creíble al pueblo colombiano, yo no tengo inconveniente en ceder ese punto”.
El anuncio de Uribe se dio precisamente un día después de conocerse la entrega de los restos del ex Congresista Ancízar López, a quien
habían secuestrado en el 2002.
COMUNICADO DEL COMANDO CENTRAL DEL ELN
En un comunicado del Comando Central del ELN del 25 de agosto
del 2005, se habló de cinco obstáculos que han impedido la solución
política al conflicto. A continuación se detallan.
Causas sociales del conflicto: “el primer obstáculo es negar las causas sociales, económicas y políticas que originaron el conflicto”.
Participación de la sociedad civil: “el segundo obstáculo es pretender
que la paz es un asunto entre la insurgencia y el Gobierno, negando
que la paz es un derecho y un deber de todos los colombianos, y en esa
medida un proceso de paz debe contar con la participación activa de los
diversos sectores de la sociedad”.
Crisis humanitaria: “el tercer obstáculo es negar que el conflicto ha
producido una profunda crisis humanitaria en los sectores más empobrecidos de la sociedad y que requiere ser atendida con prioridad y a la
par que se trabaja por la solución política”.
Conflicto interno: “el cuarto obstáculo es la negación que hace el
actual Gobierno de la existencia del conflicto interno, colocándose en
abierta contradicción con la dinámica de solución política que el conjunto de la sociedad venía construyendo en la última década”.
Proceso con AUC: “como quinto obstáculo podemos señalar la falsa negociación del Gobierno con los paramilitares. Nunca existió una
guerra entre ellos; siempre ha habido cooperación y coordinación. Los
testimonios y registros históricos abundan”.
El presidente Uribe en dos discursos, uno en la Universidad de la
Sabana y otro en la Escuela General Santander, hizo referencia directa
a los obstáculos aducidos por el ELN.
329
Causas sociales del conflicto: “el terrorismo que reivindicaba la lucha contra la pobreza como una explicación de su accionar, ha producido un resultado social catastrófico en Colombia. ¡Que hay una crisis
social profunda que tenemos que superar, es cierto!”.
Participación de la sociedad civil: no hizo mención.
Crisis humanitaria: “que la crisis humanitaria existe, no hay duda.
El 52% de nuestros compatriotas en la pobreza, pero esa pobreza se
ha profundizado y se ha eternizado por el terrorismo que ahuyentó la
inversión”.
Conflicto interno: “depondría mis personales convicciones y en aras
de la paz aceptaría que hay que negociar la solución definitiva de un
conflicto. ¡Lo haría dejando a un lado mis convicciones personales y
poniendo por encima mis deberes con la Patria, para hallar la paz, que
es el propósito final de nuestra firmeza en la seguridad!”.
Proceso con AUC: “las autodefensas han venido negociando, no
porque lo hubieran querido, no por espontaneidad; por la presión militar, por la presión policiva, con transparencia, con imparcialidad, con
eficacia. Y entonces los tenemos que recibir a ellos, como a los guerrilleros, con generosidad, porque el fin último de la Política de Seguridad
Democrática es la paz, la reconciliación de los colombianos”93.
“ANTONIO GARCÍA” ABRE POSIBILIDADES DE DIÁLOGO
El 6 de septiembre de 2005 se conocieron unas declaraciones del
líder del ELN, Antonio García, quien manifestó que un diálogo exploratorio con la sociedad civil y un eventual encuentro con el Gobierno podrían llevar a ese grupo guerrillero a buscar acuerdos en torno al
tema de la paz.
Igualmente, García reiteró cinco obstáculos que impedirían en ese
momento avanzar en una negociación con el Gobierno. Uno de esos
inconvenientes era la no aceptación por parte del presidente Uribe de la
existencia de un conflicto armado en el país94.
93
Op. cit. 6, septiembre, 2005.
94
Op. cit. 6, septiembre, 2005.
330
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El vocero de la guerrilla del ELN, Francisco Galán, saldría de la cárcel de Itagüí para llevar a cabo gestiones encaminadas a lograr una negociación entre el Gobierno Nacional y el ELN, en su condición de vocero
autorizado. De esta manera, el Gobierno Nacional dio el paso más concreto de los últimos meses para lograr los diálogos de paz con el ELN.
En un comunicado leído por el Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, dijo el Gobierno: “bajo tal condición, el señor Galán podrá salir del lugar de reclusión donde se encuentra para adelantar consultas con la sociedad civil y los diferentes estamentos del país, a fin de
dar los pasos que permitan iniciar un proceso de paz”95.
“Desde hace varios meses, con el apoyo de facilitadores internacionales, el Gobierno Nacional ha venido adelantando acercamientos con
el ELN en procura de iniciar un proceso de paz”, agregó Restrepo.
El 25 de junio de 2005 el Gobierno Nacional propuso a ese grupo
guerrillero la instalación de una mesa de acercamiento con garante internacional, para definir por parte de ese grupo un cese de hostilidades
que contara con la suspensión de acciones ofensivas contra el ELN por
parte de la fuerza pública, como reciprocidad gubernamental.
El 5 de septiembre de 2005, a través de uno de sus voceros, el COCE
demostró interés en un “diálogo exploratorio del ELN con la sociedad
y un eventual encuentro con el gobierno”. El ELN ha insistido en lo
que considera obstáculos que impiden avanzar en el camino de la paz.
Piden, entre otras cosas, que se reconozca la existencia de un “conflicto
interno” y se permita la “participación activa de los diversos sectores de
la sociedad”.
El señor Presidente de la República planteó que si el ELN aceptara
entrar en un cese de hostilidades, “en aras de las superiores conveniencias de la Patria, depongo mis personales convicciones y en nombre de
la institución presidencial acepto que hay conflicto”.
Como un aporte al avance de los acercamientos, el Gobierno ha concedido por un período de tres meses la condición de miembro represen-
95
Op. cit. 8, septiembre, 2005.
331
tante del ELN al señor Francisco Galán, quien se encontraba detenido
en la cárcel de Itaguí. En tal condición, el señor Galán podría salir del
lugar de reclusión para adelantar consultas con la sociedad civil y los
diferentes estamentos del país, a fin de dar los pasos que permitieran
iniciar un proceso de paz.
EL GOBIERNO RECONOCE COMO REPRESENTANTE DEL
ELN A FRANCISCO GALÁN
Texto de la Resolución número 251 de 200596
El siguiente es el texto de la resolución número 251 de 2005, expedida por la Presidencia de la República de Colombia.
Presidencia de la República
Resolución No. 251 de 7 de septiembre de 2005
Por la cual se reconoce a una persona la calidad de miembro representante del Ejército de Liberación Nacional, ELN.
El Gobierno Nacional
En ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales y en especial de las que le confiere la ley 418 de 1997, prorrogada y modificada
por la ley 548 de 1999 y por la ley 782 de 2002, y
Considerando:
Que desde hace varios meses, con el apoyo de facilitadores internacionales, el Gobierno Nacional ha venido adelantando acercamientos
con el Ejército de Liberación Nacional ELN, en procura de iniciar un
proceso de paz.
Que el pasado 25 de junio el Gobierno Nacional propuso a ese grupo
guerrillero la instalación de una mesa de acercamiento para la definición de un cese de hostilidades por parte de este grupo, que contará con
reciprocidad gubernamental.
96
Op. cit. [en línea], septiembre 2005. Disponible en Internet: ww.presidencia.gov.co.
332
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Que el pasado 5 de septiembre, a través de uno de sus voceros, el
COCE mostró interés en un “diálogo exploratorio del ELN con la sociedad y un eventual encuentro con el Gobierno”.
Que con el propósito de adelantar consultas con la sociedad civil y
los diferentes estamentos del país que permitan dar inicio a un proceso
de paz, el Gobierno Nacional considera pertinente reconocer la calidad
de miembro representante del Ejército de Liberación Nacional ELN
a Gerardo Antonio Bermúdez Sánchez, “Francisco Galán”, quien se
encuentra actualmente privado de la libertad.
Resuelve:
Artículo 1º. Para los efectos mencionados en la parte considerativa
de esta resolución, reconocer el carácter de miembro representante del
Ejército de Liberación Nacional, ELN, al señor GERARDO ANTONIO BERMÚDEZ SÁNCHEZ, por el término de tres meses.
Artículo 2º. La presente resolución rige a partir de la fecha de su
expedición.
Comuníquese y cúmplase
Dada en Bogotá, D.C., el 7 septiembre de 2005
Álvaro Uribe Vélez
Presidente de la República
Sabas Pretelt de la Vega
Ministro del Interior y de Justicia
De otra parte, la Corte Constitucional fijó las pautas que en adelante
se aplicarían para otorgar a miembros de grupos armados el beneficio
de indulto consagrado en la Ley 782 del 2002.
El Alto Tribunal hizo el pronunciamiento al condicionar la exequibilidad de un parágrafo del Artículo 19 de esa ley. Tal y como estaba
redactada la norma abría un boquete para que miembros de grupos armados no políticos pudiesen acceder a ese beneficio.
333
La Ley 782 fue aprobada el 23 de diciembre del 2002 y hace parte de
las normas expedidas durante la administración del presidente Álvaro
Uribe Vélez, y dirigidas a los procesos de negociación y desmovilización con grupos armados ilegales.
El inciso dice textualmente: “también se podrá conceder beneficio a
los nacionales que, individualmente y por decisión voluntaria, abandonen sus actividades como miembros de los grupos armados organizados al margen de la ley y así lo soliciten”.
Según la Corte, el parágrafo podía interpretarse de dos maneras. La
primera, que el Gobierno puede conceder el indulto por delitos no políticos, lo cual es contrario a la Constitución. Y la segunda, que el Gobierno solo puede otorgar el beneficio por delitos políticos.
Para el Alto Tribunal, esto último es lo que se ajusta a la Carta del 91
y ordena que se excluya la primera interpretación de la ley 78297.
DECLARACIÓN DE LA CORPORACIÓN DEMOCRACIA
Los cerca de 3 000 desmovilizados de los bloques Cacique Nutibara,
Bloque Central Bolívar, BCN, y Héroes de Granada, BHG, agrupados
en la Corporación Democracia, invitaron a las Organizaciones No Gubernamentales nacionales e internacionales que han manifestado sus
reparos frente a la negociación, a que hicieran una inspección directa
del proceso en las comunidades.
Sobre las críticas y denuncias sobre abusos de los ex combatientes en
sectores populares del Valle de Aburra, recopiladas en el último informe de Amnistía Internacional, la corporación dijo en un comunicado
firmado por el presidente de su junta directiva, Daniel Mejía, que “estamos comprometidos en un proceso de paz con el Estado, proceso que
ha sido transparente, de cara al país, sin cartas marcadas ni nada qué
ocultar. En consecuencia, invitamos a todas las ONG de carácter nacional e internacional que quieran inspeccionar directamente en las comunidades en donde hemos desarrollado nuestras diferentes actividades,
para que, sin intermediarios y sin prevenciones que deformen la reali-
97
Op. cit. 8, septiembre, 2005.
334
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
dad, observen el papel que estamos desempeñando en la construcción
de civilidad y la recuperación de la confianza, tanto de los ciudadanos
entre sí como de la que estos ciudadanos deben tener en el funcionamiento de las instituciones del Estado”.
Al valorar y rescatar el papel de la OEA como verificadora del proceso, los desmovilizados dijeron que “estamos dispuestos a rectificar todo
lo que sea necesario para que sigamos avanzando en la consolidación de
los nuevos vientos de paz”98.
PROPUESTA DEL GOBIERNO A LAS FARC
El 8 de septiembre de 2005 el Gobierno Nacional, mediante un comunicado expedido por la Presidencia de la República, lanzó una nueva
propuesta a las FARC con miras a un diálogo en torno al llamado acuerdo humanitario. El siguiente es el texto de la propuesta anunciada por el
Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo:
Ante la necesidad de establecer un sitio de encuentro con las garantías de seguridad y los mecanismos de acompañamiento que sean
necesarios para la definición de un acuerdo humanitario, el Gobierno
Nacional propone una reunión entre los delegados del Gobierno y los
delegados dispuestos por las FARC, en la escuela del corregimiento de
Bolo Azul, jurisdicción del municipio de Pradera, Valle del Cauca, para
el desarrollo de las conversaciones y por un periodo máximo de diez
días. De igual manera, se propone la siguiente metodología:
Verificación de las condiciones del sitio de encuentro por parte de
garantes nacionales e internacionales, un día.
Ingreso al sitio de encuentro de los delegados dispuestos por las
FARC con el acompañamiento de garantes, dos días.
Desarrollo de las conversaciones entre el equipo de Gobierno y delegados de las FARC, cinco días.
Retorno de los delegados de las FARC con el acompañamiento de
garantes, dos días.
98
Op. cit. 8, septiembre, 2005.
335
El Gobierno garantizará las condiciones de seguridad del delegado
o delegados de las FARC, durante el traslado al sitio de encuentro y su
regreso al lugar de origen. La verificación de las condiciones de seguridad acordadas estará a cargo de garantes nacionales o internacionales
convenidos previamente. Además ofrecerá salvoconductos especiales y,
en consecuencia, solicitará a los organismos judiciales competentes la
suspensión de las órdenes de captura que tengan vigentes en todo el
territorio nacional.
Durante el tiempo previsto para la reunión no se adelantarán acciones militares ni policiales por parte de la fuerza pública sobre el sitio de encuentro.
El Gobierno Nacional expresa su disposición inmediata para adelantar las coordinaciones con las FARC y garantes que faciliten el encuentro directo. Y se declara a la espera de un gesto de buena voluntad
de las FARC, que acompañe el anhelo de muchos colombianos que hoy
claman por el regreso de sus familiares privados de la libertad al seno
de sus hogares.
EL BLOQUE ÉLMER CÁRDENAS ANUNCIA VOLUNTAD
DE PAZ
Después de un prolongado proceso de diálogo independiente, el Bloque Élmer Cárdenas anunció mediante un comunicado expedido el 8 de
septiembre de 2005, su voluntad de avanzar en el proceso de paz.
Comunicado:
1. El Estado Mayor del Bloque Élmer Cárdenas de Autodefensas
Campesinas, BEC-AC, manifiesta su disposición para avanzar
en la negociación con el Gobierno Nacional conducente a la
concentración, la desmovilización, el desarme y la reinserción a
la vida civil de sus miembros.
2. En consecuencia con lo anterior, el Bloque Élmer Cárdenas de
Autodefensas Campesinas se compromete con el “cese total de
hostilidades” por parte de la totalidad de sus estructuras armadas.
336
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
3. De igual manera, confiamos y esperamos que la fuerza pública
adelante las acciones para la seguridad de las comunidades en las
zonas desde donde se comiencen a desplazar los combatientes
hacia los sitios de concentración que se definan, al igual que el
dispositivo de protección de dichos lugares.
Estado Mayor
Bloque Élmer Cárdenas de Autodefensas Campesinas, BEC-AC
José Alfredo Berrío, “El Alemán”
Comandante
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE NOROCCIDENTAL
El domingo 11 de septiembre, en el Colegio y lote aledaño de la vereda El Rodeo, en el municipio de Sopetrán, Antioquia, 222 miembros
del Bloque Noroccidental de las AUC, al mando de Luis Arnulfo Tuberquia, se reincorporaron a la vida civil.
Los desmovilizados entregaron 120 armas largas, 23 armas cortas,
10 armas de apoyo, 112 granadas, 13.460 cartuchos de diferente calibre
y proveedores para distintos tipos de armas y 3 vehículos.
Con esta desmovilización ascendieron a 10 589 los miembros de las
AUC que se habían acogido a la política de reinserción en el marco del
proceso de paz del Gobierno con esa organización.
La ceremonia, en una escuela en la zona rural del municipio, contó
con la asistencia del Alto Comisionado Presidencial para la Paz, Luis
Carlos Restrepo.
También asistieron el Jefe de la Misión de Apoyo de la OEA al Proceso de Paz, Sergio Caramagna; el Asesor de Paz de la Gobernación,
Jaime Fajardo; el Alcalde de Sopetrán, Luis Arnulfo Tuberquia, así
como alcaldes y pobladores de la región.
El bloque desmovilizado, según la Oficina del Alto Comisionado, mantenía presencia desde hacía nueve años en 22 municipios de Antioquia99.
99
Op. cit. 12, septiembre, 2005.
337
El Bloque Noroccidente de las AUC había operado durante nueve
años en los municipios de San Jerónimo, Santa Fe de Antioquia, Sabanalarga, Anzá, Ebéjico, San José de la Montaña, Caicedo y Sopetrán.
La mayoría de sus integrantes son campesinos de dichas poblaciones.
El alcalde del municipio de Sopetrán, Germán de Jesús Vanegas,
puso de presente la necesidad de aumentar el pie de fuerza pública, debido a que la comunidad temía por su seguridad, ya que piensa que con
la desmovilización de las AUC podrían llegar a los municipios mencionados otros actores armados ilegales.
Quienes se hubieran desmovilizado individualmente de los grupos
armados ilegales y quienes lo hicieren en el futuro podrían beneficiarse
con el programa de reinserción siempre y cuando hubieren cumplido o
cumplan con las siguientes acciones:
Condiciones para gozar de los beneficios de la desmovilización
•
Colaborar o entregar información que permita el desmantelamiento del grupo al que pertenecían.
•
Desmovilizarse cumpliendo todos los requisitos que establece el Gobierno.
•
Firmar un acta de compromiso con el Gobierno Nacional.
•
Cesar toda actividad ilícita.
•
Entregar bienes producto de la actividad ilegal para resarcir a las
víctimas.
•
No estar vinculados con el narcotráfico o el enriquecimiento ilícito.
Voceros de la oficina del aAlto Comisionado para la Paz explicaron
que la Ley 975, conocida como Ley de Justicia y Paz, establece dos figuras jurídicas para acceder a los beneficios de la reinserción. La primera,
que se aplica a quienes están detenidos, es el parágrafo del Artículo 10
que dice que los alzados en armas que estén privados de la libertad se
pueden acoger a la norma “siempre que en las providencias judiciales
correspondientes se determine su pertenencia al respectivo grupo”. En
338
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
el caso de los condenados, el inciso segundo del Artículo 20 establece que cuando el desmovilizado ha sido previamente condenado por
hechos delictivos cometidos durante su pertenencia a un grupo armado ilegal, “se tendrá en cuenta lo dispuesto en el Código Penal sobre
acumulación jurídica de penas pero en ningún caso la pena alternativa
podrá ser superior a la prevista en la presente ley.
PRIMEROS EN ACOGERSE A LA LEY DE JUSTICIA Y PAZ
Los primeros en acogerse a la Ley de Justicia y Paz fueron 38 guerrilleros de las FARC, entre ellos dos cabecillas de frente y dos jefes de
milicias. Estaban presos en la cárcel de máxima seguridad de Cómbita,
en Boyacá, purgando penas que oscilaban entre los 40 y 60 años.
La decisión de esos 38 hombres de las FARC se convierte en la demostración de que esta ley es tanto para guerrillas como para grupos de
autodefensas. Estos guerrilleros quedarían cobijados por los beneficios
que otorga la ley tales como: penas alternativas que no superarán los ocho
años después de confesar sus delitos cometidos durante su permanencia
al grupo guerrillero y con ocasión de ella, y entregar los bienes adquiridos
ilícitamente, los cuales irían al Fondo de Reparación de Víctimas.
En la capilla de la Cárcel de Chiquinquirá, adonde fueron trasladados los guerrilleros, el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo,
acompañado por el director de esa reclusión, los comandantes del batallón Sucre del Ejército y de Policía de Distrito, envió un mensaje constructivo a los hombres de las FARC que aún estaban en armas:
Sé que tienen temor, por supuesto. Dar este paso es abrirse de alguna forma a lo desconocido; pero sé también que tienen esperanza,
que quieren reparar, que tienen conciencia de que han hecho daño y
que quieren que sus vidas se conviertan en símbolo de paz. No queremos más discursos, no queremos más promesas. Esta semana ha estado marcada desde los actos de Gobierno por propuestas bien claras y
decisiones bien claras hacia el ELN y hacia la paz para mostrar que el
país está cansado de la violencia y delante de la reconciliación”, agregó
el comisionado. “Estos hombres que hoy se acogen a Justicia y Paz,
alguna vez se movieron dentro de sus filas. Algunos de ellos tuvieron
mando. Algunos de ellos actuaron como hombres de confianza de altos
jefes guerrilleros y miembros del secretariado. Lo que hoy se está dando
339
es un ejemplo que debe ser entendido constructiva y positivamente”100,
concluyó Restrepo.
Este hecho deja ver que las ventajas de la Ley de Justicia y Paz no
son solo para los miembros de las AUC, y que si bien es cierto que la
norma fue expedida por el Congreso de la República durante el proceso
de paz con las AUC, los beneficios en ella consagrados podrán obtenerlos otros miembros de grupos armados al margen de la ley que se acojan
a los programas de reinserción.
EXCARCELADO FRANCISCO GALÁN
El comisionado de paz se reunió por espacio de tres horas el domingo 11 de septiembre de 2005 con Francisco Galán, negociador del ELN.
El “COCE” había autorizado a Francisco Galán a salir del penal de
Itagüí. Galán se encontraba preso desde 1992 y podría salir de prisión
por tres meses con la misión específica de realizar contactos con la sociedad civil y los diferentes estamentos del país a fin de dar los pasos
que permitan iniciar un proceso de paz.
En un comunicado emitido el 23 de septiembre, el ELN dio vía libre
a las gestiones que adelantaría el señor Francisco Galán. Igualmente,
el ELN aceptó una posible mediación del Gobierno de Venezuela en el
caso de iniciar negociaciones con el Gobierno colombiano101.
DESMOVILIZACIONES DEL BLOQUE CENTRAL BOLÍVAR
FRENTE VICHADA
El 24 de septiembre de 2005 se inició la desmovilización de unos 300
hombres del Bloque Central Bolívar, que operaban en el departamento de Vichada. La desmovilización de este grupo, al mando de Carlos
Mario Jiménez, “Macaco”, se produjo en el corregimiento El Placer del
municipio de Cumaribo.
100
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
101
Op. cit. 24, septiembre, 2005.
340
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Los desmovilizados entregaron el siguiente material de guerra: 268 armas largas, 14 armas de apoyo, 63 granadas, 12 radios 2m y 1 radio base.
De la presencia de este grupo de autodefensas en el Llano apenas se
supo hace un año y llegó a esa región de la Orinoquia para apoyar a las
Autodefensas Campesinas de Meta y Vichada, ACMV.
Esta fue la tercera desmovilización de los grupos de autodefensas
del Llano. Ya lo habían hecho en Puerto Gaitán, Meta, las ACMV, al
mando de “Guillermo Torres”, y posteriormente lo hizo una facción
del Bloque Centauros de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y
Urabá, ACCU, al mando de Vicente Castaño Gil, que operaban en Casanare y el norte de Meta. Estos grupos son los que de manera permanente habían tenido contacto con el Gobierno Nacional en Santa Fe de
Ralito, y en total suman 1 600 hombres que entregaron sus armas en el
Llano.
Seguían distantes del Gobierno Nacional las dos facciones de Meta
y Guaviare del Bloque Centauros, al mando de Jesús Pirabán Garnica,
“Pirata”, y Pedro Oliveros Guerrero, “Cuchillo”, así como las Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC, al mando de Héctor Buitrago y
su hijo Héctor Germán Buitrago, “Martín Llanos”.
El Diario El Colombiano de Medellín calculaba que para finales del
año 2005 el número de reinsertados de las autodefensas llegaría a 21
000. Hasta el 25 de septiembre de 2005 habían entregado sus armas 10
912 hombres, pero faltaban desarmes en el sur de Bolívar, Antioquia y
Arauca. En esta fecha nadie podía precisar cuántos miembros de las
AUC faltaban por desmovilizarse, pero se estimaba que el número podía llegar a los 10 000.
Los bloques Vencedores de Arauca, Cumaribo, Tolima, Central Bolívar, Norte, Mineros y dos facciones disidentes de las AUC, el frente
Resistencia Tayrona y el bloque Élmer Cárdenas se desmovilizarían antes de finalizar el año 2005.
La desmovilización de las AUC es la primera gran experiencia que
Colombia tiene en esta materia. En los últimos 50 años el Estado concretó los desarmes de las guerrillas del Llano de Guadalupe Salcedo, del
341
Quintín Lame del M-19, del Partido Revolucionario de los Trabajadores, PRT, de la Corriente de Renovación Socialista, de la disidencia del
ELN, y del Ejército Popular de Liberación, EPL.
La desmovilización de los grupos armados ilegales se había cumplido desde dos perspectivas: los desarmes individuales y los masivos,
resultado del proceso con las AUC. Se calculaba que alrededor de 8 000
hombres se habían desmovilizado de manera individual.
El 29 de septiembre de 2005 el Presidente de la República condicionó la decisión de extraditar a los Estados Unidos a Diego Fernando
Murillo a lo siguiente:
Que cumpliera con los compromisos adquiridos en el marco del proceso de paz con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, y contribuyera a la participación de los miembros de las AUC en el proceso de paz.
Que abandonara las actividades ilícitas.
Que colaborara efectivamente con la verdad, la justicia y la reparación en los términos establecidos en la Ley 975 de 2005.
Que se cumplieran las condiciones y procedimientos establecidos en
la Ley 975 de 2005.
En una palabra, la extradición se haría efectiva si el señor Murillo
Bejarano llegare a incumplir cualquiera de esas cuatro condiciones.
La resolución 269 del Ministerio de Interior y de Justicia advierte
que, “una vez dictada la sentencia correspondiente al proceso judicial
que se adelante en el marco de la Ley de Justicia y Paz, 975 de 2005, el
Gobierno Nacional revisará lo dispuesto en la presente resolución” y
“evaluará el cumplimiento de las condiciones establecidas”.
Así mismo, dice que en caso de ser extraditado Diego Fernando Murillo Bejarano no podrá ser juzgado ni condenado por “un hecho anterior
diverso del que motiva la solicitud de la justicia de Estados Unidos”.
342
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Diego Fernando Murillo Bejarano era requerido por la Corte Distrital del Sur de Nueva York, para ser juzgado por delitos federales de
narcóticos y de lavado de dinero102.
Para mediados de octubre de 2005 se tenía prevista la desmovilización de unos 1 600 combatientes del Bloque Mineros de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, que operaban en el nordeste y bajo
cauca antioqueño y que dejarían sus armas en el municipio de Tarazá.
El Asesor de Paz de la Gobernación, Jaime Fajardo Landaeta, explicó que se estaba avanzando en el proceso, con la realización de diferentes reuniones con las autoridades de los municipios de Nechí, Cáceres,
Tarazá y Caucasia, donde operaba este bloque.
Según los acuerdos firmados entre el Gobierno Nacional y las Autodefensas Unidas de Colombia, este grupo al margen de la ley, con
una fuerza de 17 mil a 19 mil miembros, debería estar desarticulado el
próximo diciembre.
Hasta el momento 10 912 combatientes habían dejado las armas
desde noviembre del 2004, cuando el proceso entró en la fase final de
desmovilizaciones masivas.
“El Consejo Europeo ve la Ley de Justicia y Paz, adoptada el 21 de
junio por el Congreso colombiano y convertida en ley por el presidente
Álvaro Uribe el 25 de julio, como un avance significativo, ya que brinda
un instrumento legal para el desarme, desmovilización y reintegración
en Colombia”, afirma el texto finalmente acordado por los 25 estados
miembros de la Unión Europea.
LAS FARC EXPLICAN SU PROPUESTA DE DESPEJE DE
PRADERA Y FLORIDA
Mediante un video que las FARC hicieron llegar al Sexto Foro de
Biarritz, reunido en Bogotá el 29 de septiembre, Raúl Reyes explicó la
propuesta de despejar los municipios de Pradera y Florida. Lo nuevo en
102
EL MUNDO. en línea], septiembre 2005. Disponible en Internet: www.elmundo.com.
343
el contenido del video era que explicaba detalladamente por qué necesitan un despeje de 30 días para hablar con el Gobierno del intercambio
humanitario. De acuerdo con la explicación de Raúl Reyes, los primeros 15 días servirían para verificar el terreno, es decir, para analizar las
condiciones de seguridad para sus negociadores. En los siguientes 10
días se realizarían diálogos con el Gobierno para el intercambio de personas. Los últimos cinco se emplearían para el repliegue de los delegados de la guerrilla.
El 1º de octubre de 2005 la Primera Cumbre Suramericana de Naciones, de Brasilia, emitió declaración de respaldo unánime al proceso
de paz entre el Gobierno y las AUC y propuso fortalecer la misión de la
OEA en Colombia.
La declaración constituyó un logro importante para la delegación
colombiana a la cumbre, encabezada por el vicepresidente, Francisco
Santos, y el Vicecanciller, Camilo Reyes.
Los jefes de Estado presentes en la cumbre emitieron una declaración en la que apoyaban de manera unánime los esfuerzos de paz del
gobierno del presidente Álvaro Uribe, destacaban el proceso de desmovilización de los grupos de autodefensa y reconocían el papel de la misión de la OEA en Colombia.
En la declaración, además, los presidentes expresaron su interés en
fortalecer el apoyo a la misión con el propósito de que ésta pudiera
concluir de manera integral el mandato impartido por el Consejo Permanente de la OEA, e invitaron al secretario general de ese organismo
a que en el término de un mes les indicara a los países de la Comunidad
Suramericana de Naciones la mejor forma en que se podría materializar
ese apoyo.
ENTREVISTA DEL SECRETARIO DE LA OEA, JOSÉ
MANUEL INSULZA, AL DIARIO EL ESPECTADOR
Por considerarla del mayor interés, se transcribe a continuación una
entrevista concedida por Sergio Caramagna al Diario El Espectador de
Bogotá, en momentos en que el Secretario General de la OEA, José
Miguel Insulza, hizo un llamado a todos los países miembros de la or-
344
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
ganización para que ayudaran a mantener la misión que verifica en Colombia el proceso de desmovilización de las autodefensas.
El Espectador: gran parte de lo que se está viviendo tiene que
ver con las críticas a la misión en la verificación del cese al fuego.
¿Qué responde a ellas?
Sergio Caramagna: vinimos a Colombia con un sentimiento
de respeto por su historia y lo vivido en experiencias pasadas de
pacificación. Se ha dicho que la misión no ha sido crítica, que ha
tenido una posición pegada al Gobierno o que no hemos hecho
suficientes denuncias sobre violaciones al cese de hostilidades.
Pero el mandato tiene una configuración basada en el respeto
a las instituciones, a las decisiones que ustedes tomen y con un
principio básico: la paz de los colombianos tiene que ser obra de
los colombianos. Sólo así podrá ser legítima, sostenible y real.
E.E.: ¿Pero acaso esa no es la tarea como misión de verificación?
S.C.: si entramos en el tema de las denuncias, entre la denuncia que tiene su papel pero que no incide directamente en la transformación de la realidad, y la gestión para tratar de desactivar la
causa de esa misma denuncia, nosotros ponemos más énfasis en
lo segundo. Hay que priorizar la desactivación de los mecanismos
que generan los hechos que a su vez generan las denuncias.
E.E.: ¿Y qué se ha hecho hasta ahora en ese sentido?
S.C.: hemos acompañado y ayudado a aclimatar el proceso;
hemos colaborado en darle legitimidad a la Oficina del Alto Comisionado en las gestiones directas, de las cuales se deriva la posibilidad de las desmovilizaciones.
E.E.: ¿Más que verificación se trata de acompañamiento?
S.C: esa es la palabra clave. Los colombianos son los que están
haciendo su proceso de paz y la comunidad internacional lo que
tiene que hacer es cooperar, trabajar de lado, no adelante ni atrás.
Pero si no tenemos los suficientes recursos vamos a ir muy atrás
del proceso, que ya tiene una dinámica enorme. Queremos hacer
345
muchas más tareas de las que estamos haciendo, y esa limitación
nos angustia.
E.E.: ¿Y por qué se dan esas limitaciones?
S.C: porque el proceso se ha visto sólo desde lo jurídico. Se
ha puesto demasiado énfasis en cómo los responsables de delitos
graves van a terminar en la cárcel y cuántos años van a purgar
de pena. Pero hay otras dimensiones que son tan importantes e
incluso más trascendentes para el futuro de los colombianos y
tienen que ver con lo territorial, las comunidades, los millones
de colombianos que viven sometidos a situaciones de violencia
ilegal. De lo que se trata es que Colombia recupere soberanía integral. Un proceso de paz como este tiene que ser también un
proceso de sinceridad de Colombia consigo misma.
E.E.: ¿Cómo califica la manera en que el Gobierno ha manejado el proceso?
S.C: nosotros no hemos visto acuerdos políticos ni el tratamiento de temas vinculados a la impunidad o la no extradición.
Puedo asegurar que no hay ningún acuerdo en ese sentido.
E.E.: ¿Y desde el punto de vista de las autodefensas?
S.C: hay que valorar la decisión del desarme. Sin embargo,
eso tiene que demostrarse en el tiempo, porque hay que desmontar estructuras, abandonar conductas, cambiar estilos y modificar
situaciones que se han vivido durante largos años. Todo eso se
verá en la medida en que las comunidades que estuvieron bajo
el arbitrio de estos grupos vivan y sepan que ya no hay nadie que
los esté condicionando, que esté haciendo parajusticia. Que esas
comunidades se pongan de pie y recobren la dignidad que habían
mantenido a pesar del miedo.
E.E.: precisamente uno de los temores es que el proceso legalice unas estructuras que no se van a desmontar.
S.C: lo que hemos visto es el comienzo del desmonte del aparato militar; lo otro, lo que significa los mecanismos de influencia
social o los proyectos políticos, no depende de un proceso de des-
346
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
movilización. Si a este proceso le ponemos encima la mochila del
desmonte total de esas estructuras, con todas sus ramificaciones,
le estamos poniendo una tarea no prevista y que no está en condiciones de cumplir. El proceso del desmonte de la ilegalidad en este
país depende de una decisión que tomen los colombianos a mediano y largo plazo, en términos de definir qué tipo de país quieren.
E.E: ¿Cuál es hoy el futuro de la misión?
S.C: va a depender de la decisión que tomen los 34 países
miembros de la OEA y de si nosotros somos capaces o no de asumir el mandato en plenitud. En esta carrera me gustaría que nos
evaluaran con el vehículo en movimiento y no con un vehículo
sin gasolina. Creo que el Secretario General lo tiene claro, tiene
un compromiso firme con la misión y con la necesidad de fortalecerla. Lo que pasa es que a veces los tiempos de las decisiones son
disonantes con la dinámica del proceso y eso crea estas angustias
de que lleguemos a fin de mes y tengamos que parar los motores
o apagar la luz. Ojalá no ocurra.
E.E.: ¿No se han sentido muy solos en ese acompañamiento?
S.C: en algunos momentos nos sentimos absolutamente solos. Durante año y medio estuvimos explicando y justificando el
porqué estamos aquí. Ahora el tema es el proceso en marcha y no
podemos quedarnos a ver cómo pasa delante de nosotros.
E.E.: ¿Por qué se ha dado tanto rechazo internacional?
S.C: eso ha venido cambiando y las señales son muy alentadoras cuando se ve a países como Holanda o Suecia apoyando, lo
mismo que El Salvador y Guatemala. Con esas señales no es el
momento de bajar los brazos. El consenso y la comprensión del
proceso marchan, a lo mejor no a la velocidad que se requiere,
pero hay países que empiezan a acercarse y a explorar condiciones de cooperación103.
103
EL ESPECTADOR. 2, octubre, 2005.
347
Los desmovilizados de los bloques Héroes de Granada y Cacique
Nutibara, miembros de la Corporación Democracia, quienes en el pasado estaban al mando de Diego Fernando Murillo Bejarano, “Don Berna”, anunciaron que la decisión del Ejecutivo de recluir a este último en
la cárcel de máxima seguridad de Cómbita no beneficiaba el proceso de
paz pero, aún así, la acataban.
De esta forma, descartó hechos como los ocurridos meses atrás en
Medellín, cuando la orden de capturar a Murillo Bejarano por el homicidio del diputado de Córdoba Orlando Benítez, su hermana Iris y el
conductor José Mestra, desencadenó en una parálisis de buses en Medellín y otros municipios del Valle de Aburrá104.
La situación de Diego Fernando Murillo Bejarano, alias “Don Berna”, cambió de forma dramática: el jefe de las autodefensas fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad de Cómbita en Boyacá. Este hecho
generó malestar en la cúpula de ese grupo armado ilegal que consideró
como “sorpresiva” la decisión del Ejecutivo de enviarlo a ese penal.
Iván Roberto Duque, “Ernesto Báez”, encargado de la parte política
de las AUC, precisó que a ese grupo le tomó por sorpresa la decisión del
Gobierno de llevar a “Don Berna” a Cómbita, en momentos en que él
había cumplido con varios compromisos: desmontar por completo los
bloques Héroes de Tolová, Héroes de Granada y algunas estructuras del
bloque Pacífico que estaban bajo su mando.
Según “Ernesto Báez”, era importante tener claras las reglas de juego en momentos en que faltaba por desmovilizar más del 50% de las
estructuras de las autodefensas acordadas este año. Más aún cuando a
mediados de octubre estaba previsto el desmonte de uno de los bloques
más grandes: el Bloque Central Bolívar.
“El Gobierno jamás nos comunicó la decisión de encarcelar a
Murillo. Ahora sale con el cuento de que fueron cuestiones de seguridad. Eso no es cierto”, precisó el jefe político de las AUC105, y reiteró:
estuve al frente de la negociación que hizo posible la entrega voluntaria
104
EL COLOMBIANO. 1, octubre, 2005.
105
Ibíd. 3, octubre, 2005.
348
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
de “Don Berna” a las autoridades. Había unos acuerdos muy claros
(...) Lo que ocurrió hoy necesariamente va en contravía de una serie de
acuerdos y entendimientos a los que habíamos llegado”106.
SE INSTALA COMISIÓN NACIONAL DE REPARACIÓN Y
RECONCILIACIÓN
El 3 de octubre de 2005 se instaló la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación en la Casa de Nariño. El objeto de esta comisión
era lograr la mayor dosis de reparación simbólica, judicial y material de
las víctimas de la violencia.
Para lograrlo, la CNRR tendría ocho años contados a partir de la instalación. Su reto sería por partida doble si se considera que tiene recursos mucho menores que comisiones similares creadas en otros países.
La CNRR tiene doce miembros, siete de ellos del Gobierno, y aún
no están definidos los recursos para su funcionamiento. Aunque la idea
inicial era lanzar la comisión en La Gabarra, Norte de Santander, por
ser el único lugar donde las AUC devolvieron tierras tras su desmovilización, la CNRR consideró prematuro el viaje porque hay confusión en
los títulos de esos bienes y no se puede garantizar su pronta devolución,
confirmó Ana Teresa Bernal, uno de sus miembros.
La Comisión Nacional para la Reparación y Reconciliación tiene
entre otras las siguientes funciones:
106
•
Garantizar a las víctimas su participación en procesos de esclarecimiento judicial y reivindicación de sus derechos.
•
Presentar un informe público sobre las razones para el surgimiento y evolución de los grupos armados ilegales.
•
Hacer seguimiento y verificación a los procesos de reincorporación y a la labor de las autoridades locales. La Comisión podrá
invitar a organismos o personas extranjeras.
Ibíd. 3, octubre, 2005.
349
•
Presentar un informe acerca del proceso de reparación a las víctimas.
•
Coordinar la actividad de las Comisiones Regionales para la
Restitución de Bienes.
A raíz del traslado de Diego Fernando Murillo a la cárcel de Cómbita, los miembros del Estado Mayor Negociador de las Autodefensas
Unidas de Colombia, AUC, se reunieron en el corregimiento de Santa
Fe de Ralito, de Tierralta, Córdoba, donde revisaron el estado del proceso y el futuro de la negociación con el Gobierno.
Como resultado de sus deliberaciones, el Estado Mayor de las AUC
expidió el siguiente comunicado.
Comunicado público
El Estado Mayor Negociador de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, ante los hechos relacionados con el intempestivo traslado del
miembro negociador “Adolfo Paz” a la cárcel de Cómbita, informa:
Que por determinación unánime declara, a partir de la fecha, suspendida la agenda de desmovilizaciones, hasta tanto el Gobierno Nacional redefina las reglas de juego y ofrezca las garantías necesarias para
restituir la confianza, seriamente afectada en el marco de la presente
negociación de paz.
Certifica la condición de líder nacional de las negociaciones de paz
al señor Diego Fernando Murillo Bejarano, y le concede plena y válida
interlocución en las gestiones encaminadas a la solución de la grave
crisis que acusa actualmente el proceso de paz
Santa Fe de Ralito, octubre 6 de 2005
Estado Mayor Negociador AUC107
Al momento de producirse esta crisis, según el cronograma de la
Oficina del Alto Comisionado para la Paz, estaban pendientes por dejar
107
Op. cit. 6, octubre, 2005.
350
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
las armas el Frente Resistencia Tayrona, cuyo jefe era Hernán Giraldo;
el Bloque Mineros, de Ramiro “Cuco” Vanoy, y el más numeroso, el
Bloque Central Bolívar, que tenía como cabezas visibles a “Javier Montañez”, “Julián Bolívar” y “Ernesto Báez”.
Sin embargo, había otros pequeños grupos que estaban en camino
de desmovilizarse, como las Autodefensas del Magdalena Medio, de
Ramón Isaza; las del Tolima, cuyo jefe era “Daniel”; el bloque Élmer
Cárdenas, del “Alemán”; facciones del bloque Centauros y las Autodefensas Campesinas del Casanare, de “Martín Llanos”.
En una reunión sostenida el 6 de octubre de 2005 entre los cinco garantes de los acuerdos entre el ELN y el Gobierno Nacional, el vocero
del ELN, Francisco Galán, y el grupo de apoyo, se evaluó lo realizado
durante los veinte días que llevaba el proceso y se definió la agenda de
la Casa de Paz, que consistía en 30 reuniones de consulta con diferentes
estamentos de la sociedad civil.
En la Casa de Encuentros La Salle, donde se hallaba instalado el comisionado del ELN Francisco Galán, se anunció que en los próximos días se haría
la inauguración de la Casa de Paz, que tendría como sede permanente el
municipio de Medellín, posiblemente en el corregimiento de San Cristóbal.
Francisco Galán resaltó la incorporación masiva de distintos sectores sociales a esta iniciativa de paz, al tiempo que informó que el comando central del ELN produciría un mensaje nacional para el día de
la inauguración de la sede permanente de la Casa de Paz en Medellín,
acto que coordinaría la Fundación Ideas para la Paz.
COMUNICADO DEL GOBIERNO NACIONAL
El día 10 de octubre de 2005 el Gobierno Nacional expidió el siguiente comunicado:
Comunicado
1. El Gobierno Nacional reitera la necesidad de avanzar en el cronograma de desmovilizaciones pactadas con las Autodefensas
Unidas de Colombia en el marco del Acuerdo de Santa Fe de
Ralito del año 2003.
351
2. Aclara que no ha negado su condición de líder desmovilizado de
las Autodefensas a Diego Fernando Murillo Bejarano. En tal condición, el señor Murillo Bejarano podrá seguir cumpliendo, desde
su lugar de reclusión, sus compromisos con el proceso de paz.
3. Para facilitar dichas labores, el Gobierno ha solicitado el traslado
del señor Murillo Bejarano a la cárcel de Alta Seguridad de Itagüí.
Bogotá, octubre 10 de 2005
Con el traslado de Diego Murillo Bejarano a la cárcel de máxima
seguridad de Itagüí, en Antioquia, se esperaba que, en su condición
de desmovilizado, pudiera seguir cumpliendo sus compromisos en el
proceso de paz. Este fue uno de los primeros pasos del Gobierno para
sortear la crisis del proceso con las AUC.
El Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, propuso multiplicar por seis el presupuesto y aumentar a más de cien el personal
destinado a esta labor. La mayoría de países miembros de la OEA respaldaron el plan que busca casi triplicar la Misión de Apoyo al Proceso
de Paz con las AUC en Colombia.
La propuesta implicaría incrementar su financiación a unos diez millones de dólares anuales, seis veces más de su presupuesto vigente al
momento de hacerse la declaración.
Insulza, quien había demostrado su decidido apoyo al proceso de
paz en Colombia, inició su intervención pidiendo a los miembros de
la Organización de Estados Americanos responder a la “oportunidad
histórica” pasando del simple “apoyo simbólico” a hechos concretos.
De acuerdo con el Secretario, los países podrían sumarse bien fuera
aportando personal con experiencia en desmovilización y reinserción o
a través de recursos financieros.
Simultáneamente, se conoció que Irlanda del Sur se había comprometido a entregar 390 mil euros durante los próximos tres años y que el
primer cheque, de 130 mil, ya había sido depositado108.
108
Op. cit. 14, octubre, 2005.
352
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Rafael Armando Forero Hernández, alias “Zarco”, jefe del Frente
Capital de las AUC que operaba en Bogotá, planteó al Gobierno, el 17
de octubre de 2005, desmontar lo que quedaba de la estructura de esa
organización al margen de la ley. Lo hizo desde una celda en el cuarto
piso del Pabellón de Alta Seguridad de la cárcel La Modelo de Bogotá.
El frente Capital de las AUC fue liderado hasta su asesinato por Miguel
Arroyave.
Forero Hernández, quien llegó a tener bajo su mando a 600 hombres, le dirigió un derecho de petición al Alto Comisionado para la Paz,
Luis Carlos Restrepo, en el que expresaba su voluntad de acogerse a
las leyes 782 del 2002 y 975, Justicia y Paz, del 2005. Según Forero, la
voluntad de colaborar en “el desmonte de las estructuras que aún permanecían en Bogotá del Bloque Centauros y de su Frente Capital” ya
había sido expresada por Arroyave en el acuerdo de Santa Fe de Ralito,
de julio del 2003, por medio del cual se dio inicio a las negociaciones
entre el Gobierno y las AUC.
Forero agregaba en el documento que, como jefe del Capital, ya había tenido un gesto de buena voluntad al desmovilizar a 30 de sus combatientes el 3 de septiembre de 2005 en Yopal, cuando dejaron las armas
1 200 miembros del Bloque Centauros, que estaban bajo las órdenes de
José Vicente Castaño tras la muerte de Arroyave.
Miguel Arroyave fue asesinado el 21 de septiembre del año pasado
en la inspección Casibare de Puerto Lleras, Meta, a donde llegó después
de salir de Ralito con un permiso especial del Gobierno para coordinar
la desmovilización de sus tropas. De su muerte fue responsabilizado Pedro Oliverio Guerrero Castillo, “Didier” o “Cuchillo”, quien asumió en
Guaviare el control del segundo grupo en que se dividió el Centauros.
La tercera facción operaba en el Meta bajo el mando de Jesús Pirabán
Garnica, “Jorge Pirata”.
La facción de “Pirata” era la que tenía el mayor poder en Bogotá y
la que desplazó al bloque Capital que, según Forero, estaba en cese de
hostilidades.
353
Aunque dice que su facción es de solo 50 hombres, la verdad es que
su eventual desmovilización ayudaría a desactivar un poco la explosiva
presencia de autodefensas en la ciudad109.
El 21 de octubre de 2005, varios obispos del país se reunieron con
Francisco Galán en el Recinto de Quirama, Rionegro, Antioquia, y desde
ahí hicieron un llamado al ELN para que tratara de superar cuanto antes
el conflicto armado. En igual sentido se pronunció la Iglesia Católica.
Los obispos de Tibú, Monseñor Camilo Castrillón Pizano; de Magangué, Mmonseñor Leonardo Gómez Serna; de Barrancabermeja,
Monseñor Jaime Prieto Amaya; de Arauca, Monseñor Carlos Germán
Mesa Ruiz; de Pasto, Monseñor Enrique Prado; de Sonsón, Ricardo
Tobón; y el padre Darío Echeverri, encargado de los temas de paz, estuvieron al frente del encuentro.
“Los prelados, procedentes de regiones del país donde se vive de manera cotidiana el conflicto armado y social, recibieron una petición de
perdón por parte de Francisco Galán y el Comando Central del ELN,
por la muerte de Monseñor Emilio de Jesús Jaramillo y de dos sacerdotes a manos de ese grupo insurgente en días pasados. Los obispos hicieron el acto de perdón, pero con esperanza de paz”. Afirmaron que es
necesario pasar cuanto antes de una fase exploratoria “a un tiempo de
hechos y decisiones que conduzcan al diálogo directo entre esa guerrilla
y el Gobierno”.
Los prelados ratificaron que el conflicto es un “pecado social”, porque quita las oportunidades mínimas sociales de subsistencia a los ciudadanos, pues “sus vidas están en constante peligro, y estructural, porque viene de tiempo atrás, sin que se reformen las causas del mismo”110.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE TOLIMA
El 22 de octubre entregaron sus armas 207 miembros del llamado
Bloque Tolima, un grupo considerado como disidente de las AUC. La
desmovilización de este grupo se cumplió en la hacienda Tau Tau, en
la vereda Tajomedio, zona rural del municipio de Ambalema, y en ella
109
Ibíd. 18, octubre, 2005.
110
Op. cit. 22, octubre, 2005.
354
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
participaron el comisionado de paz del Gobierno, Luis Carlos Restrepo,
y el Jefe de la Misión de la OEA que Apoya el Proceso, el argentino
Sergio Caramagna.
El Bloque Tolima era una disidencia de las AUC bajo el mando de
Diego José Martínez Goyeneche, alias “Daniel”, quien negoció la entrega de armas directamente con el Gobierno, en una acción independiente del proceso que adelantaba desde 2003 el grueso de esa organización armada ilegal.
Los desmovilizados entregaron 36 armas largas, 12 armas cortas, 3
armas de apoyo, 65 granadas, 20 radios 2m y 5 radios base.
Desde noviembre de 2003 y hasta esta fecha, unos 10 889 miembros
de las AUC habían entregado sus armas en el marco del desarrollo de
las negociaciones de paz con el Gobierno del presidente Álvaro Uribe,
que buscaban sacar del conflicto a unos 20 000 combatientes a más tardar el 31 de diciembre de 2005.
La desmovilización del Bloque Tolima no significaba una superación de la crisis en la cual se encontraba el proceso de negociación entre
el Gobierno Nacional y las AUC; así lo hizo saber Iván Roberto Duque,
“Ernesto Báez”, según el cual aún quedaban muchos asuntos por resolver con el Gobierno para dar por superada la crisis. Ajuicio de Báez,
diez mil hombres desmovilizados estaban a expensas de los ejércitos del
narcotráfico y de las guerrillas. Aseguró que ante la crisis que atravesaba
el proceso, los tiempos se corrieron y sería imposible cumplir el cronograma de dejación de armas.
La desmovilización de la totalidad de las autodefensas al finalizar
el año 2005 era uno de los acuerdos clave en el proceso de paz entre el
Gobierno y esa organización.
“Ernesto Báez” aseguró que el traslado de “Don Berna” a la cárcel
de Cómbita había sido solo la chispa que encendió la mecha, pues las
inconformidades de los jefes de las AUC venían de tiempo atrás. Según
el jefe político de las AUC, los problemas de fondo estaban en la falta
de claridad en la aplicación de la Ley de Justicia y Paz para los ex combatientes de las AUC, la no presencia de las autoridades en las zonas
que ellos desalojaron, la ausencia de proyectos productivos y de oportu355
nidades para los desmovilizados, y la falta de claridad en el tema de los
centros de reclusión donde purgarían condenas.
Por el asesinato del floricultor antioqueño Hernando Cadavid fueron
capturados cinco ex integrantes del Bloque Héroes de Granada, que comandaba Diego Fernando Murillo, alias “Don Berna”, quien se encontraba recluido en la cárcel de Itagüí desde donde reiteró su compromiso
con el proceso de paz entre el Gobierno y las autodefensas.
“Mis mejores deseos son para que todas las partes involucradas
superen los escollos que se han presentado y se logre destrabar el
proceso que nos conducirá al puerto seguro del desarme, desmovilización, resocialización y reincorporación a la sociedad”, dijo el jefe
de los desmovilizados Héroes de Granada111.
Aunque el llamado de “Don Berna” apareció en el portal electrónico
de las AUC, todavía no había encontrado eco en la cúpula de Ralito,
que mantenía congelada la desmovilización de combatientes.
FARC NIEGAN ATENTADO CONTRA GERMÁN VARGAS
LLERAS
El 25 de octubre de 2005, en un comunicado aparecido en internet, las FARC negaron su participación en el atentado de que fuera
víctima el Senador Germán Vargas Lleras. La declaración fue hecha a
través de un comunicado del vocero de esta guerrilla, Raúl Reyes. El
senador Vargas Lleras salió ileso del estallido de un vehículo cargado
con explosivos.
RETIRAN A SALVATORE MANCUSO LA REPRESENTACIÓN DE LOS DESMOVILIZADOS
El 27 de octubre de 2005 se supo que por decisión de los representantes de 11 facciones que se habían desarmado, Salvatore Mancuso no sería en adelante el vocero de los desmovilizados de las AUC. Esa función
la cumplirían Diego Fernando Murillo Bejarano, alias “Don Berna” o
“Adolfo Paz”; Antonio López, en representación del Bloque Cacique
111
Op. cit. 18, octubre, 2005.
356
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Nutibara y Eduard Cobos, alias “Diego Vecino”, por el Bloque Héroes
de los Montes de María, quienes lideraron en una reunión realizada en
la ciudad de Medellín la toma de la anterior decisión. Antonio López,
otro de los nuevos voceros y directivo de los reinsertados de Medellín,
manifestó que Mancuso quedaba como un hombre querido e invitado
a hacer parte de la organización de desmovilizados, y podría participar
cuando lo tuviera a bien.
El 14 de noviembre de 2005 se supo que las desmovilizaciones de
grupos de autodefensa podrían reanudarse en los próximos días, pero
para ello, según las AUC, era indispensable que el Gobierno cumpliera
sus compromisos.
El Gobierno no descartaba la posibilidad de revisar el cronograma
de desmovilizaciones, pero existían otras barreras que hacían difícil la
negociación, como la extradición y la Ley de Justicia y Paz que estaba
a revisión de la Corte Constitucional.
El vocero político de las AUC, alias “Ernesto Báez”, advirtió que la
extradición debería ajustarse al interés nacional de la paz. Para el Gobierno Nacional el punto referente a la extradición no era negociable, en
tanto que “Ernesto Báez” consideraba que el presidente Uribe honraría
su palabra.
En julio de 2005 los habitantes de Santa Fe de Ralito, sede de los
diálogos de paz, denunciaron la amenaza de las FARC para tomarse
la región una vez concluyera el proceso de paz con las autodefensas.
La misma situación se presentaba en zonas donde se habían producido
desmovilizaciones como el Catatumbo, Norte de Santander, los Montes
de María, Bolívar, Nariño y Vichada. Se esperaba que la fuerza pública
asumiera el control de esas zonas evacuadas por las AUC.
El Gobierno había advertido que los desmovilizados que no tuvieran
su situación jurídica definida no podrían participar en política. En la
sentencia sobre Ley de Garantías Electorales la Corte Constitucional
cerró cualquier posibilidad de que los miembros de las AUC pudieran
participar en la próxima campaña electoral.
El proceso de paz con las autodefensas se había convertido en la
principal bandera de todas las campañas políticas. Sin embargo, ante
357
la petición de la Iglesia de reconsiderar la fecha del 31 de diciembre
de 2005 para completar las desmovilizaciones, el Alto Comisionado de
Paz advirtió que el Gobierno lo aceptaría siempre que se tratase de una
salida seria.
COMUNICADO DE LA COMISIÓN DE CONCILIACIÓN
NACIONAL
La Comisión de Conciliación Nacional emitió el siguiente comunicado:
La Comisión de Conciliación Nacional, motivada por la necesidad
de persistir en la solución política negociada del conflicto armado que
vive el país, hace un llamado para que se superen las dificultades que
obstaculizan el camino hacia la paz y se mantengan abiertas las puertas
del diálogo y la negociación. En este sentido manifiesta:
1. Ayudar a la construcción de una Colombia reconciliada y en paz
es el fin de la Comisión de Conciliación Nacional, correspondiendo así a las voces de la sociedad colombiana que claman,
con esperanza, que se detenga de una vez por todas el menosprecio por la vida, y se respete la dignidad y la libertad de todos los
colombianos.
2. La búsqueda de la paz por los caminos del diálogo y la negociación no es una tarea fácil; está condicionada por las dinámicas
de los procesos políticos, económicos y sociales, en ocasiones
ajenos a las partes, que determinan los alcances y posibilidades
para el cumplimiento de los acuerdos.
3. La evaluación que del proceso de desmovilizaciones haga el país
y la historia, así como la legitimidad que a éste le otorguen los
colombianos y la comunidad internacional, dependen no solamente del cumplimiento de los cronogramas, sino también de
las condiciones y procedimientos que garanticen una paz duradera, a través de factores como la transparencia en el desarme y
desmovilización de los combatientes y sus estructuras militares,
el cese efectivo y permanente de las hostilidades, la reincorporación plena de los alzados en armas a la vida civil y la reparación
integral a las víctimas.
358
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
4. El trámite y aprobación en el Congreso de la República de la Ley
975 de 2005 de Justicia y Paz fue el resultado de un amplio debate democrático. Una aplicación efectiva y cuidadosa de esta ley
contribuye, sin lugar a dudas, al encuentro de puntos comunes
entre las partes, la disminución de las incertidumbres jurídicas
que rodean el proceso y la posibilidad de que las instituciones
cumplan cabalmente las tareas asignadas frente al mismo. Es importante que el país conozca la reglamentación de esta ley.
5. La Comisión de Conciliación Nacional propone la creación y
fortalecimiento de mecanismos de verificación que permitan una
evaluación continua y acertada del proceso, para adoptar medidas
oportunas y necesarias que impidan el incumplimiento del cronograma establecido y garanticen su transparencia, con el fin de
afianzar progresivamente la confianza de la sociedad en el mismo.
6. La concentración geográfica de los desmovilizados en determinadas áreas del país puede ser una alternativa que facilite las tareas de verificación de los organismos designados para tal fin
y disminuya la vulnerabilidad frente a eventuales tensiones que
ponen en riesgo el desarrollo del proceso.
7. Terminar la confrontación que durante tantos años ha desangrado los campos y ciudades de Colombia, es un desafío que
requiere no solo del compromiso de la sociedad colombiana,
sino también de la concurrencia y cooperación de la comunidad
internacional, a través del apoyo a los programas de reincorporación y al Fondo de Reparación de las víctimas. Solo así se aunarán esfuerzos que contribuyan a cerrar las heridas y nos permitan
caminar hacia la reconciliación nacional.
8. La búsqueda de la paz necesita hoy, más que nunca, que la opinión pública nacional e internacional hagan un juicio comprensivo de las dificultades que supone todo proceso de negociación,
especialmente cuando éste se adelanta en medio de las hostilidades y las presiones políticas internas y externas que afectan el
curso de los procesos.
9. La fortaleza de la democracia y sus instituciones se materializa
en el periodo electoral que se avecina. Por tal motivo, y como
muestra de un verdadero compromiso de cesar las hostilidades,
359
es fundamental que los grupos armados al margen de la ley sostengan públicamente su voluntad de respetar el libre juego democrático, de abstenerse de cualquier interferencia directa o indirecta en los procesos políticos locales y de permitir el desarrollo
transpa-rente e independiente de las campañas electorales.
Bogotá, noviembre 10 de 2005112.
Hasta el 14 de noviembre de 2005 la única organización hemisférica
que acompañaba el proceso era la OEA.
La aplicación de la Ley de Justicia y Paz era una de las principales
preocupaciones de las autodefensas, pues aunque fue aprobada por el
Congreso aún faltaba la revisión jurídica de la Corte Constitucional.
Incluso, debería ser reglamentada en algunos aspectos113.
Durante los últimos dos meses el proceso con las autodefensas salta
de una crisis a otra. Arrancó con el traslado de “Don Berna” de Ralito a
Cómbita, que congeló las desmovilizaciones y, al mismo tiempo, generó
una avalancha de comunicados, ultimátums, amenazas y declaraciones
explosivas que aún no terminaban.
NUEVA ENTREVISTA DEL ALTO COMISIONADO A LA
REVISTA SEMANA
En todo este tiempo, el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo,
con discreción, había buscado bajarle la temperatura al enfrentamiento verbal. Por primera vez desde cuando estalló esta crisis, Restrepo le
contó a la Revista Semana para dónde pensaba él que iba el proceso con
las AUC y reveló algunos detalles de las relaciones del Gobierno con
distintos grupos al margen de la ley, en procura de la paz.
Por considerarlo del mayor interés para que los lectores se formen
una idea sobre el desarrollo de este proceso, se transcribe a continuación
la entrevista concedida por Luis Carlos Restrepo a la Revista Semana.
112
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
113
Op. cit. 14, noviembre, 2005.
360
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
SEMANA: ¿Por qué se echó para atrás con el cronograma de
desmovilizaciones?
Luis Carlos Restrepo: no es adecuado adentrarnos en un proceso electoral con una desmovilización a medias. Hemos recibido
una solicitud de la Iglesia para que el Gobierno reconsidere el 31
de diciembre como fecha límite. Estamos dispuestos a estudiar
la solicitud siempre y cuando eso no implique un aplazamiento
indefinido de las desmovilizaciones. Todo depende de que el paso
a dar resulte claro para el país.
SEMANA: ¿Es viable desmovilizar a las autodefensas de aquí
al 31 de diciembre?
L.C.R.: nosotros tenemos todo preparado. Nos preocupa que
en ocasiones anteriores las autodefensas han aplazado desmovilizaciones y han utilizado esto como una estrategia de negociación. Esto no se puede convertir en una excusa para reabrir en
la mesa temas que ya están definidos, o que están en manos del
Gobierno, como la aplicación de la Ley de Justicia y Paz, o las
cárceles donde tendrían que pagar la pena alternativa.
SEMANA: ¿Puede el Gobierno evitar que los paras participen
en política?
L.C.R.: si el Estado Mayor Negociador interviene en política,
el Ejecutivo puede echar para atrás la suspensión de sus órdenes
de captura. Desde todo punto de vista es perturbador que miembros de una organización armada ilegal que todavía mantiene
gente en la clandestinidad adelante acciones políticas, así ellos
se hayan desmovilizado. No podemos repetir la experiencia de la
Unión Patriótica, que fue un baño de sangre.
SEMANA: pero no parecen estar absteniéndose. Varios congresistas han denunciado amenazas.
L.C.R.: la representante Nancy Patricia Gutiérrez puso una
queja ante el Presidente de que algunos paramilitares desmovilizados de Cundinamarca la estaban amenazando. Le pedí que
me dijera quiénes y cómo le había llegado la amenaza. Ella se ha
361
negado a hacerlo. Los grupos de autodefensas de Cundinamarca
dicen que ellos no están presionando. Sería muy bueno que nos
dieran nombres.
SEMANA: ¿Y el caso de Borja y Petro?
L.C.R.: no tenemos ninguna información oficial de la Fiscalía en el sentido de que el señor “Don Berna” esté tras algún
atentado que se vaya a cometer contra ellos. Salen denuncias en
los medios que generan pánico social, pero no se fundamentan
ante las autoridades competentes. Si alguien tiene una prueba,
que la entregue. Es importante que en medio del debate electoral,
las denuncias se concreten. Igual creo que es necesario un acompañamiento internacional para darle la mayor transparencia al
debate electoral.
SEMANA: Jairo Angarita y Giovanni Marín fueron jefes paramilitares y hoy son candidatos. ¿No cometieron crímenes atroces?
L.C.R.: las autoridades judiciales son las que tienen que determinar quiénes tienen que responder por delitos no indultables.
En principio, aquellos que no tengan requerimientos, tienen vigentes sus derechos políticos, lo cual no quiere decir que el día de
mañana no sean requeridos.
SEMANA: sí, pero la Fiscalía sigue esperando que usted entregue la lista de los paras que se acogerán a la Ley de Justicia y
Paz. ¿Cómo va eso?
L.C.R.: en este momento no tenemos una lista conformada.
A mi juicio, la ley se debe aplicar a todos los desmovilizados, cuyos datos están en manos de la Fiscalía. Yo he defendido dentro
del gobierno que para acogerse a la Ley de Justicia y Paz el grupo debe haberse desmovilizado completamente. Ese es el primer
criterio de elegibilidad. Y una de las razones para que las desmovilizaciones no se suspendan indefinidamente porque entramos
en un limbo jurídico. Los que se han desmovilizado no podrían
beneficiarse de la Ley de Justicia y Paz porque no cumplen el
requisito central.
362
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
SEMANA: Todos los días se informa sobre nuevos laboratorios de coca, cargamentos, o grupos armados que se les atribuyen
a “Macaco”, a “Don Berna”, ¿por qué el Gobierno no los ha
extraditado?
L.C.R.: hay que diferenciar la voluntad política de las decisiones judiciales. Nunca hemos detenido una investigación judicial.
El país debería reconocer que es el Gobierno el que captura y
le entrega a la opinión pública información sobre personas que
siguen delinquiendo y siguen vinculadas a las AUC. Y esas pruebas se les entregan a la Fiscalía y los jueces, y serán ellos los que
definan, por ejemplo, si un delito de narcotráfico o de otro tipo
puede ser cobijado por la Ley de Justicia y Paz.
SEMANA: ¿En qué va la reglamentación de la ley?
L.C.R.: hay un borrador bastante adelantado del decreto. Se
precisa, por ejem-plo, que serán los jueces y no el Gobierno los
que dirán quiénes son elegibles para beneficiarse de la ley. También se establece con claridad que la reparación corre a cargo del
victimario. Pero, en general, no habrá grandes sorpresas.
SEMANA: José Miguel Vivanco propuso que los fiscales no
les imputen a los paramilitares los cargos por los que son solicitados en extradición. ¿Qué opinión tiene el Gobierno al respecto?
L.C.R.: es imposible que se le pida a una autoridad judicial
colombiana que se abstenga de investigar determinado delito. La
extradición es una decisión política que toma el Presidente. Él
puede suspender la extradición de algunos miembros de las autodefensas, siempre y cuando cumplan con algunos requisitos. Eso
es diferente a que las autoridades judiciales se inhiban de entrada
a actuar sobre ellos.
SEMANA: ¿El juez Baltasar Garzón revisará la reglamentación de la ley?
L.C.R.: desde su visita a España, el Presidente le pidió al juez
Baltasar Garzón que le hiciera un comentario sobre el decreto,
pero no sé en qué va ese trámite.
363
SEMANA: el Bloque Central Bolívar, BCB, es uno de los grupos más involucrados en narcotráfico, ¿por eso la extradición inquieta tanto a “Ernesto Báez”?
L.C.R.: la extradición inquieta a todos los ilegales. El único
punto de convergencia de los grupos ilegales en Colombia es oponerse a la extradición y en eso los acompañan ciertos sectores de
la izquierda democrática. Todas las estructuras de autodefensa y
las FARC están comprometidas con el narcotráfico y se apoyan
en estructuras mafiosas. El Gobierno no va a modificar la figura
de la extradición. Ese no es tema de la mesa ni es excusa para
parar la desmovilización.
SEMANA: ese es el nudo del proceso y nadie se desmoviliza
para que lo extraditen.
L.C.R.: no podemos negar que eso les produce temor. Ellos
tienen la idea de que una vez entren a las cárceles, este u otro gobierno los va a extraditar si hay presión de Estados Unidos. Como
siquiatra entiendo sus temores. Como funcionario debo decirles
que el gobierno ha ido muy lejos. El hecho de haber suspendido
estas dos extradiciones ha implicado un alto costo político. Haber
suspendido la extradición de “Don Berna” fue una decisión muy
firme del Presidente, pero mal vista a nivel internacional y de Estados Unidos. Aun así, hemos puesto en primer lugar los intereses
de la paz del país. Simultáneamente, para que haya credibilidad,
el señor “Berna” debe estar en una institución carcelaria seria.
Todo el mundo sabe que esa decisión generó la crisis del proceso,
pero el Gobierno en eso es firme. Podemos buscar alternativas
para solucionar las crisis, pero en el tema de la extradición no
habrá modificación.
SEMANA: el Gobierno fue demasiado generoso al aceptar a
tantos narcos en la mesa. Las AUC no han sido recíprocas con
esta generosidad...
L.C.R.: más que generoso, pragmático. El primer día que yo
me senté en la mesa, ahí estaban los señores Diego Murillo, Víctor Mejía, “Gordolindo” y “Macaco”. Según todos los informes
364
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
de inteligencia, decían que ellos eran jefes de estructuras armadas.
Hemos hablado con los jefes de autodefensa que encontramos,
pero no vamos a permitir que aparezcan nuevos jefes ni nuevas
estructuras. Tampoco habrá más diálogos ni negociaciones con
nuevos grupos de autodefensa, como esas supuestas autodefensas
del norte del Valle que nosotros no reconocemos ni reconoceremos jamás.
SEMANA: Es evidente que varios grupos mafiosos quieren
colarse en el proceso.
L.C.R.: ellos pueden tener las intenciones que quieran, pero
el pragmatismo no puede llegar hasta generar esas ambigüedades. También nosotros hemos sido claros: aquellos que tengan
responsabilidad por delitos de narcotráfico y que hayan estado
dedicados al enriquecimiento ilícito, antes, en o después del proceso, tendrán que responder por esos delitos. No veo dónde está
el problema. Si mañana el señor Mellizo Mejía entrega toda su
estructura armada, se pone a disposición de la Ley de Justicia y
Paz, entrega todos sus bienes ilícitos, él ante los tribunales tendrá que responder por todos los delitos cometidos y serán esos
tribunales los que definan si ese señor realmente era un jefe de
autodefensas o si tiene unos delitos de narcotráfico por los cuales debe responder de manera autónoma. Esa ya es una ganancia
neta para el Gobierno.
SEMANA: ¿Y la captura del capo Johnny Cano en una finca
de “Macaco”?
L.C.R.: si el señor Johnny Cano tenía alguna relación con
algún jefe de autodefensa, lo deben probar las autoridades judiciales y nosotros no interferimos en nada.
SEMANA: hay mandos medios que no se han desmovilizado.
¿Son ruedas sueltas?
L.C.R.: nosotros no tenemos información de nuevas estructuras. Hay redes delincuenciales pero eso es normal en todo proceso. Hace poco salió una noticia sobre el Bloque Capital que quería
desmovilizarse. Pero yo no conozco al Bloque Capital. Entiendo
365
que todos fueron capturados y están en la cárcel. ¿Qué quedó en
Bogotá? Parte de una red mafiosa y sicarial. En la mesa de Ralito
no hay ninguna estructura de autodefensas que opere en Bogotá. No contribuyamos a la confusión. No llamemos, por ejemplo,
autodefensas a ese grupo de narcotráfico que está actuando en el
cañón del Garrapatas.
SEMANA: pero en todas partes están apareciendo estos grupos.
L.C.R.: claro. Miremos el caso de Tierralta. Una vez desmovilizadas las autodefensas, que tenían el monopolio sobre la comercialización de la droga en la zona, quedó un libre mercado
que están tratando de ganarse las FARC y los narcotraficantes. En
el Catatumbo, al otro día que salieron las autodefensas, llegaron
las FARC y dieron la orden de que todo el mundo sembrara coca.
Allá también están las famosas Águilas, que son un grupo que
actúa por la zona de Puerto Santander, dedicado al narcotráfico y
la corrupción pública. Además, tienen un corredor para la droga,
seguramente concertado con las FARC, porque hasta ahora no
han tenido ningún enfrentamiento con ellos. En Urabá también
existe el riesgo de que actúen redes mañosas. Son realidades que
debemos reconocer porque con la desmovilización de las AUC
no se va a acabar el narcotráfico.
SEMANA: ¿Con qué criterio decidió que 38 guerrilleros fueran los primeros beneficiados con la Ley de Justicia y Paz?
L.C.R.: los mayores interesados en recibir los beneficios de la
Ley de Justicia y Paz son los guerrilleros que están en las cárceles. Tenemos una avalancha de 1 500 solicitudes individuales. Las
cartas que nos escriben dicen que quieren reparar a las víctimas,
que el Estado les dé una oportunidad, y un canal institucional
para reencontrarse con sus familias y la sociedad. Sin embargo,
como no teníamos claro cómo se podía aplicar a estas personas la
Ley de Justicia y Paz, decidimos esperar.
Pero ocurrió que este grupo que estaba en Cómbita empezó a
alegar problemas de seguridad y un senador muy locuaz quería
salir a contar a los medios este problema. Entonces el Presidente
me pidió que me encargara del asunto. Como no podíamos hacerlo clandestinamente porque generaba más sospechas, entonces
366
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
opté por mostrar lo que había: 38 personas que dicen ser de las
FARC para explorar la aplicación de la Ley. Revisando expedientes nos dimos cuenta de que seis de ellos no tenían registrada su
pertenencia a ningún grupo ilegal. Con los otros 32 empezamos a
explorar el proceso de aplicación de la ley. Pero no hay claridad.
Hay varias interpretaciones sobre la ley.
SEMANA: ¿Aplicarle la ley a gente que ha sido capturada no
es un mal mensaje?
L.C.R.: hay que entender una realidad sociológica: hay cientos de hombres en las cárceles que han pertenecido a los grupos
armados ilegales y que están dispuestos a colaborar con la justicia
y quieren reparar. Creo que debemos ofrecerles un camino. Deberíamos aprender de la justicia americana que sabe que se pueden
conceder beneficios cuando el bien común es resarcido. Así como
ellos hay cientos de jefes guerrilleros que no quieren hacer parte
del canje. No sabemos si la Ley de Justicia y Paz es el instrumento
claro e idóneo. Esta es la escueta verdad.
SEMANA: ¿Hay divisiones dentro de las autodefensas?
L.C.R.: el gran drama de este proceso es que las AUC no son
un aparato unificado. Me ha tocado vivir todo el tiempo en medio
de choques e intereses contrapuestos que hay en el interior de las
autodefensas. En medio de todas estas contradicciones y dificultades le hemos podido fijar un norte. Hay mucha complejidad.
Mandos medios con gran poder y que no están convencidos del
proceso. Días antes de que se produjera la crisis de “Don Berna”,
habíamos logrado lo imposible: que se firmara un acuerdo de desmovilización con fechas. El encarcelamiento de “Don Berna” da
la excusa para que muchos que tenían temores los reafirmen. Ellos
creen que esto es una encerrona del Gobierno, que nosotros los
estamos llevando a un matadero, que una vez estén en la cárcel,
no van a volver a salir de allí. Tratar con hombres asustados, desconfiados, que además tienen un poder local grande, no es fácil.
SEMANA: ¿Está rota la confianza?
367
L.C.R.: el proceso de desmovilización es una combinación de
coacción y persuasión. Pero a mí me corresponde la persuasión.
Por otro lado, la sociedad tiene que empezar a darle confianza
al proceso. Pero si todavía hay gente apostándole a que la ley la
tumbe la Corte Constitucional, es muy difícil generarles una confianza a estos señores. Si ellos sienten que les van a hacer conejo,
dicen de aquí no me muevo.
SEMANA: en privado, los jefes de las autodefensas dicen que
si no se les cumple, no le ponen votos a la reelección. ¿Le preocupa eso al Gobierno?
L.C.R.: en eso de la reelección ha habido mucha especulación
y fantasía. Yo estuve reunido con las autodefensas el día después
de que la Corte Constitucional emitió el fallo sobre la reelección.
No dijeron ni una sola palabra sobre el tema. Las cosas se han
visto de manera simplista. El señor “Báez” dijo algo que el país
debe mirar con atención. Que de pronto el candidato es Álvaro
Leyva. Yo he sabido de reuniones de Leyva con las autodefensas
en las que éste les dice que Uribe ya está quemado y que él sí tiene
puentes con las FARC y Estados Unidos para sacar adelante las
cosas. Entonces de pronto los intereses electorales de las autodefensas vayan por otro lado. Creo que a ellos al principio les dio
confianza la posición de autoridad de Álvaro Uribe y su decisión
de enfrentar la guerrilla, pero en el camino les ha producido gran
molestia ver cómo el Gobierno los ataca militarmente. Tampoco
les gustan las condiciones de la mesa de diálogo: que la extradición la defina el Presidente y que la Ley de Justicia y Paz la definiera el Congreso. La sociedad puso las reglas del juego.
SEMANA: en estos días el tono de “Báez” ha sido muy fuerte,
¿es una bravuconada?
L.C.R.: la gente se descompensa con el tono de “Báez”. A
todo el mundo hay que escucharlo y a “Báez” hay que escucharlo.
No quiero decir que esté de acuerdo con él. El cuento de la posible unión con la guerrilla no es nuevo. Yo lo escuché por primera
vez en 2003, en una reunión con las AUC. Y me lo dijeron con
claridad: si este proceso fracasa, las autodefensas se van a convertir en una organización armada antiestatal. Y me lo han dicho los
368
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
jefes de autodefensas desmovilizados en esta crisis: Comisionado,
si esto fracasa, aquí va a aparecer una cosa muy rara, que no sabemos si es guerrilla o autodefensa.
Cuando a finales del año pasado el Cartel del Norte del Valle
nos hizo llegar su propuesta de negociación, lo primero que nos
dijeron fue: recuerden que nosotros les comercializamos la droga
a las FARC. En el Llano uno se da cuenta de que las mismas mafias les comercializan la droga a la guerrilla y a las autodefensas.
Al señor Miguel Arroyave lo mataron al parecer justamente por
eso. Porque quería quedarse con todo el negocio de la droga, y las
mafias querían comercializar no sólo con las autodefensas. La posibilidad de que en el camino las organizaciones armadas ilegales
se articulen por la vía de los hechos con organizaciones mafiosas
no es una suposición, sino una realidad.
SEMANA: de ahí a una unidad política entre derecha e izquierda hay mucho trecho.
L.C.R.: desde el año pasado las autodefensas empezaron a
coquetearle a la izquierda. A Ralito fueron congresistas de izquierda que están en contra de la extradición y esos congresistas
presentaron a finales del año pasado una propuesta para que se
pudiera avanzar en el proceso, suspendiendo la extradición. No
olvide tampoco que la estructura de “Don Berna” en Medellín
es una copia del trabajo de masas del ELN, y que “El Alemán”,
por ejemplo, está en una gran pelea con los propietarios de tierras
de Urabá, porque dice tienen que entregarles los terrenos a los
campesinos. Dice que busca una revolución social. No podemos
negar que “Báez” tiene razón cuando dice que si esto se revierte,
puede derivar hacia una cosa rarísima. Ellos han pensado alternativas si esto se rompe. Incluso en alianzas con países vecinos.
Ese tipo de cosas yo las he escuchado y me he dado cuenta de
que han caminado en ese sentido. Eso muestra la complejidad de
la realidad colombiana por un asunto que se llama narcotráfico.
SEMANA: ¿Siguen los acercamientos con los carteles del norte del Valle?
369
L.C.R.: el grupo del señor Diego Montoya y Johnny Cano
le hizo una propuesta al Gobierno a finales del año pasado y comienzos de éste. La propuesta consistía en que ellos entregaban
sus redes, sus rutas, sus hombres armados, algunos de sus bienes,
pues pedían que se les dejara una parte para seguir sobreviviendo.
Y que estaban dispuestos a pagar una pena aquí en Colombia o en
Estados Unidos, pero no en las dos partes simultáneamente. Pedían además que esa pena fuera negociada de manera previa, un
tiempo definido, y que se estableciera una mesa de negociación
con extraditables, algunos de los cuales ya estaban en las cárceles.
Y que mientras se adelantaban las negociaciones se suspendieran las extradiciones. Tanto el Gobierno Colombiano como el de
Estados Unidos consideraron que eso no era viable. Nosotros no
podemos hacer ese tipo de negociaciones. No podemos comprometernos de entrada en una mesa a fijar una pena privativa de la
libertad. Tampoco asegurar que no sean requeridos por la justicia
de Estados Unidos. Y políticamente no hay condiciones para una
negociación de ese tipo.
SEMANA: ¿Siguen los contactos con ellos?
L.C.R.: la propuesta del año pasado llegó a través del senador
Luis Elmer Arenas. Mandaron dos cartas, que las conocieron el presidente Uribe y el Gobierno de Estados Unidos. Cumpliendo instrucciones del Presidente colombiano, se les dijo que estaban abiertas las puertas para un sometimiento a la justicia. Las cartas estaban
firmadas por Montoya y Cano, con sus huellas. Pero la información
era que otros jefes, incluido el señor Varela, entrarían al proceso.
SEMANA: ¿Habrá intercambio humanitario?
L.C.R.: el gran problema del intercambio humanitario es la
falta de unidad de acción entre los que estamos interesados en él
desde la legalidad. Es una locura que haya facilitadores que actúen con las FARC y el Gobierno no lo sepa. Llevamos tres años
de gobierno, y las FARC se han negado sistemáticamente a tener
un canal de comunicación con nosotros. Porque les resulta más
rentable un canal paralelo. Con los ex presidentes, con la Iglesia,
con la comunidad internacional. La falta de unidad nuestra es
utilizada por las FARC para ganar espacios políticos.
370
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
SEMANA: ¿La reelección dificulta más el acuerdo?
L.C.R.: el asunto de la reelección no es determinante. Con las
FARC las dos cosas se unen si dejamos que se unan. Ellos quieren
hacerle pagar un costo al Presidente y mostrar que con Uribe no
es posible el acuerdo humanitario. Todo para favorecer a un candidato que puede ser de su cercanía. El país no puede caer en ese
juego. Tenemos que separar lo electoral del acuerdo humanitario.
SEMANA: ¿Se refiere a Álvaro Leyva?
L.C.R.: al doctor Álvaro Leyva le he dicho varias veces que
por favor me ayude a establecer un puente con las FARC. ¿Sabe
qué me responde? Que él no es razonero. O que de pronto eso
es posible si Uribe cambia la Política de Seguridad Democrática.
Eso es como si yo le pidiera a “Marulanda” que cambiara la estructura de las FARC. Sabemos que el señor Leyva se reúne con
las FARC. ¿Qué va a hablar con ellos si las mismas FARC dicen
que el acuerdo humanitario se debe hacer con el Gobierno?
SEMANA: ¿Hay comunicación con el Comando Central
del ELN?
L.C.R.: no. Este proceso de la casa de paz responde a una
sintonía forzada entre el Gobierno y el ELN. El Gobierno propone un acercamiento en el exterior con garante internacional, el
COCE responde con cinco obstáculos que tiene que consultar con
la sociedad civil. Es decir, el agua y el aceite. Nos preocupa que
el ELN esté interesado en ganar espacios políticos nacionales e
internacionales sin un compromiso de abandonar la violencia. Y
que durante el tiempo que ha durado la Casa de Paz, el ELN haya
reactivado sus acciones contra la Fuerza Pública. El ELN debería
aprovechar la disposición de sectores nacionales e internacionales
de acompañar este proceso. Algo con lo que no cuentan ni siquiera las FARC. Ojalá vean esta oportunidad con claridad114.
114
REVISTA SEMANA. [en línea], noviembre 2005. Disponible en Internet: www.semana.com.
371
ELN ACEPTA INICIAR ENCUENTRO EXPLORATORIO
“Sin romper los tiempos de la consulta y buscando elevarla al máximo nivel de eficiencia, el comisionado del ELN y el comisionado del
Gobierno pueden reunirse para que inicien la construcción de borradores de lo que podría ser un esquema -de procedimientos y contenidos- para un encuentro exploratorio formal entre el Comando Central
del ELN y el Gobierno”, afirma el Comando Central, COCE, en un
comunicado fechado el 19 de noviembre de 2005115.
El 21 de noviembre de 2005 se conoció un comunicado emitido por
el Comando Central del ELN por medio del cual ese grupo guerrillero
aceptaba iniciar un encuentro exploratorio con el Gobierno Nacional,
después de que su vocero Francisco Galán se reuniera con diferentes
sectores de la sociedad civil en la Casa de Paz.
COMUNICADO DEL COMANDO CENTRAL DEL ELN
El siguiente es el texto del comunicado enviado por el Comando
Central del ELN a los miembros del Grupo de Garantes:
Que la paz con justicia social sea la bandera que nos una a todos los
colombianos en este tiempo crucial de nuestra historia.
Ha sido gratificante recibir sus palabras desde la Casa de Paz desde
donde los diversos sectores de la sociedad también puedan expresar sus
opiniones y sentirse constructores de una verdadera estrategia de paz.
Trabajar por la paz de Colombia implica comprender a cabalidad la
existencia de un conflicto de más de cuatro décadas y que su existencia
va más allá de que un Presidente lo quiera reconocer o no.
Pero el hecho de que un conflicto se haya extendido tantísimo en el
tiempo tiene que ver con la manera como los gobiernos esquivaron y
siguen esquivando sus responsabilidades con el conjunto de la sociedad,
sobre todo con las mayorías empobrecidas.
Para el ELN, caminar hacia la paz implica inevitablemente dirigirse
hacia profundas transformaciones sociales, económicas y políticas que
115
Op. cit. 21, noviembre, 2005.
372
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
edifiquen una verdadera democracia. Pero para el Gobierno, paz es dejar todo intacto y que se acabe la oposición de los marginados y empobrecidos. Esta es la gran contradicción que habrá de enfrentarse cuando
de construir la paz se trate.
Por estas razones, hemos dicho que este Gobierno no está preparado
para la paz y en ese sentido vimos conveniente que la sociedad analizara los cinco grandes obstáculos que dificultan el camino hacia la paz
para que de sus reflexiones se identifiquen alternativas que hagan viable
la superación de los mismos.
Será estimulante para toda Colombia conocer las conclusiones de
la Casa de Paz, pues este ejercicio marcará el camino para crear nuevas formas de participación democrática directa donde la voz de todos
pueda ser escuchada y tenida en cuenta. Esa es la obligación de quienes
pretenden gobernar y es un derecho inalienable de todo ser humano.
En tal sentido, coincidimos con ustedes que “sin romper los términos
de la con-sulta, y buscando elevarla al máximo nivel de eficiencia”, el
comisionado del ELN, Francisco Galán, y el comisionado del Gobierno, Luis Carlos Restrepo, puedan reunirse para que inicien la construcción de borradores de lo que podría ser un esquema de procedimientos
y contenidos para un encuentro exploratorio formal entre el Comando
Central del ELN y el Gobierno.
Esperamos que los esfuerzos de todos puedan cristalizar en un camino de paz y por ende en la necesaria democratización de Colombia.
Con aprecio y consideración,
Comando Central Ejército de Liberación Nacional
Montañas de Colombia, noviembre 19 de 2005116
El mismo día, 21 de noviembre de 2005, después de una reunión
entre los comandantes de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC,
y el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, en la cárcel de máxima
seguridad de Itagüí, Antioquia, donde se encontraba detenido Diego
Fernando Murillo, alias “Don Berna,” las partes acordaron presentar
116
Op. cit. 21, noviembre, 2005.
373
en los días siguientes un nuevo cronograma para continuar las desmovilizaciones de los grupos de autodefensa.
COMUNICADO DE LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA
Igualmente, el Palacio de Nariño divulgó el siguiente comunicado:
El Presidente de la República ha autorizado al alto comisionado para
la paz, Luis Carlos Restrepo, trabajar con una comisión internacional
para sacar adelante un acuerdo humanitario que permita la libertad de
los secuestrados en poder de las FARC. El alto comisionado ya ha dado
los primeros pasos en ese sentido117.
SE REANUDAN DESMOVILIZACIONES
Con el inicio de la concentración de los frentes Nordeste Antioqueño, Bajo Cauca y Magdalena Medio, del Bloque Central Bolívar, de las
AUC, a partir del 26 de noviembre se reanudaron de manera formal las
desmovilizaciones en el país.
En un encuentro en el cual participaron el Alto Comisionado para
la P Luis Carlos Restrepo, y el Ministro del Interior, Sabas Pretelt de la
Vega, y en el que también estuvieron presentes “Ernesto Báez”, “Javier
Montañez”, Javier “Cuco Vanoy” y “Julián Bolívar” se produjo el comunicado conjunto entre el Gobierno Nacional y las AUC por medio
del cual se informó que próximamente se indicarían las fechas de otras
desmovilizaciones.
Se supo que la idea era desarmar alrededor de 3 000 hombres antes
del 31 de diciembre de 2005. El grupo más próximo a desmovilizarse y
el más numeroso sería el Bloque Central Bolívar, BCB, y luego lo harían
los bloques Vencedores de Arauca y Mineros.
Mientras se definía el cronograma del desarme, en Montería se conoció que el desmovilizado jefe de AUC, Antonio Mercado Peluffo,
alias “Rodrigo Cadena”, había desaparecido en circunstancias que eran
investigadas por parte de las autoridades.
117
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
374
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Las noticias indicaban que el vehículo en el que se desplazaba el jefe de
autodefensas había sido encontrado incendiado en las afueras del municipio
de Tierra Alta, sede de las negociaciones entre el Gobierno y las AUC.
Este hecho no entorpece el desarrollo de las desmovilizaciones en el
país, para las que el Gobierno amplió el plazo hasta el 15 de febrero de
2006. Según estimativos del Gobierno, cerca de 10 000 combatientes de
las AUC faltarían por desmovilizarse118.
FRANCISCO GALÁN SALE DE ITAGUÍ
Francisco Galán, vocero del ELN, al que el Gobierno autorizó a salir
temporalmente de la cárcel de máxima seguridad de Itagüí, encabezaba
la lista de integrantes de ese grupo guerrillero que podrían recuperar la
libertad gracias a un posible acuerdo humanitario, según lo planteó el
25 de noviembre de 2005 el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo.
“El Gobierno ha hecho una propuesta muy clara: si el ELN cesa en
sus accio-nes violentas, el Gobierno cesa de inmediato acciones ofensivas. Igual, si libera a las personas que están secuestradas, estudiaríamos
la entrega de beneficios para personas que están detenidas en las cárceles”, dijo el Alto Comisionado.
El piso de un eventual acuerdo sería la Ley 782, aplicable para los
guerrilleros procesados sólo por delitos políticos. Pero, en caso de ser necesario, se echaría mano de la Ley de Justicia y Paz, en uno de cuyos Artículos quedó abierta la puerta a la liberación de acusados de delitos más
graves para darles paso a acuerdos humanitarios. “Esa ley puede ser usada tanto para los paramilitares como para el ELN”, agregó Restrepo119.
PALABRAS DE “DON BERNA”
El siguiente es el texto de las palabras pronunciadas por Diego Fernando Murillo, “Don Berna”, durante la conmemoración de dos años
de la desmovilización del Bloque Cacique Nutibara de las AUC:
118
Op. cit. 26, noviembre, 2005.
119
Op. cit. 26, noviembre, 2005.
375
Hoy estamos de celebración. Honrando la palabra que un día empeñamos ante el país y el mundo, se cumplen dos años de la desmovilización del otrora Bloque Cacique Nutibara, producto de un acuerdo
político entre la comandancia de las Autodefensas Unidas de Colombia
y el Gobierno Nacional. El 25 de noviembre de 2003, 868 hombres y
mujeres hicieron dejación de sus armas, iniciando de esta manera el
retorno a sus familias y la sociedad.
Digo que estamos de celebración, porque muy a pesar de los detractores y de las difíciles circunstancias que han impuesto las urgencias de
la hora, se sigue avanzando en la consolidación de los caminos de la
convivencia pacífica en la región.
Reiteradamente hemos invitado a los críticos y a los escépticos de
los logros obtenidos, para que se acerquen a las comunidades, para que
sin presiones, pero también sin prevenciones de parte de ellos, ausculten
la labor que se está haciendo, y puedan hacer un diagnóstico sobre la
conveniencia o no de estas tareas.
Debo reconocer que muy pocos han aceptado la invitación, y muchos de ellos siguen propalando rumores sin fundamento, que persiguen
los intereses turbios de perpetuar un conflicto en el que han medrado y
del cual derivan su sustento, así sea a costa del dolor de sus hermanos.
Es celebración porque este es un proceso exitoso, que ha traído indudables beneficios para la región, como lo demuestran las decrecientes
cifras de homicidios, entre otros indicadores.
Pero no sólo este es un logro, que obviamente es el principal, por lo
que implica en términos de salvaguardar el bien más preciado: la vida.
Se percibe también en la región un generalizado clima de optimismo, al
cual es mi convencimiento que hemos contribuido.
La territorialidad extrema, que ponía rejas invisibles pero efectivas
en los barrios y calles de los sectores populares, ha desaparecido. El
clima de tranquilidad que hoy se vive por doquier permite el normal
desarrollo de las actividades personales y comunitarias, hoy cualquier
persona puede desplazarse a los confines más recónditos de la ciudad
sin que haya riesgo para sus vidas.
376
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Estos son hechos en los que hemos realizado nuestro aporte, obviamente en compañía de otros muchos factores que no me corresponde
señalar. Así mismo, son un indicativo del grado de seriedad de nuestros
compromisos, porque los que fueron combatientes han regresado al entorno en el que libraron la guerra, sin que ese regreso haya implicado
grandes traumatismos para las comunidades, que por el contrario los han
acogido, y la mayoría de ellos se encuentran liderando actividades conducentes al afianzamiento de la convivencia en paz, incluso mediante la
utilización de mecanismos alternativos para la solución de los conflictos.
Ahora bien, para que este sea un proceso exitoso como lo hemos señalado, ha sido indispensable el apoyo de la Administración Municipal
de Medellín, en cabeza del doctor Sergio Fajardo, quien en todos los
idiomas y latitudes del mundo ha defendido este proceso, por su transparencia y resultados obtenidos.
Merecen reconocimiento igualmente el Concejo de la ciudad de Medellín, y nombres que por su compromiso en la construcción de la paz
siempre estarán en la historia de la reconciliación de esta ciudad, como
son los del señor Presidente de la República, doctor Álvaro Uribe Vélez,
el Alto Comisionado para la Paz, doctor Luis Carlos Restrepo y el Director de la Oficina de Paz y Reconciliación de Medellín, doctor Gustavo Villegas, quienes entendieron la urgencia de respaldar los esfuerzos
que hacíamos para desactivar nuestra estructura armada.
Hay que reconocer que todavía falta mucho trecho por avanzar. La
sociedad debe entender que el establecimiento de un clima de confianza entre todos los sectores que la componen es un proyecto en el largo
plazo, máxime cuando tenemos un conflicto de la complejidad del colombiano, en donde concurren tantos factores y actores.
Seguimos esperando el aporte generoso del sector privado, en el sentido de abrir las fuentes de empleo requeridas por los desmovilizados
en trance de reincorporación plena a la vida social, económica y política del país, bien sea directamente en sus empresas, o por medio de
la contratación de los servicios externos que requieran. Igualmente, el
Gobierno Nacional debe procurar los recursos y la continuidad en los
programas para aquellos municipios que por falta de fondos no pueden
agenciar las fuentes de financiamiento requeridas por los planes de reincorporación.
377
Sin continuidad en los proyectos correspondientes, porque ellos deben ser políticas de Estado y no eventos coyunturales de los gobiernos
de turno, es muy posible que quienes fueron nuestros combatientes sean
reciclados por otros actores violentos, como también lo hemos señalado
reiteradamente. Y ésta no es ninguna amenaza, como lo han indicado
perversamente nuestros contradictores, sino que cumplimos nuestro deber al poner de presente los peligros que se corren si los programas que
se adelantan no se hacen con diligencia, eficiencia y continuidad en el
tiempo.
Pese a todo, seguimos avanzando, como siempre lo hemos hecho,
anteponiendo los intereses de la patria a los nuestros propios. Porque
creemos que debemos construir una sociedad en donde el respeto por la
diferencia, por la opinión del contradictor, esté en la base de las relaciones que se den entre todos los actores sociales. Creemos que una sociedad viable no es la versión idílica de una novela rosa, sino una sociedad
en donde los conflictos se tramiten sin violencia y sin la eliminación
física de quien opine distinto.
Nuestro trabajo en las comunidades se ha orientado a ofrecerles la
oportunidad de capacitarse tomando las decisiones en los asuntos que
más les afectan, porque es la intervención en los asuntos públicos lo que
los cualifica, lo que los hace sentirse parte de las soluciones, lo que los
motiva a realizar sus contribuciones, que más a menudo de lo que a primera vista parece, tienen una alta dosis de ingenio y de sentido común.
Creemos que es el debate abierto el que propicia la formación de una
verdadera cultura política en amplios sectores de la sociedad, porque al
calor de ese debate podremos albergar la esperanza de ampliar la democracia en la base, pues solo la participación amplia y sin restricciones
abre los espacios para encontrar las soluciones que sean aceptadas por
consenso y no por imposición.
Debemos entonces hablar de nuevo de la recuperación de la confianza como uno de los pilares de nuestro trabajo social y comunitario,
porque el fortalecimiento del Estado pasa por dar oportunidades reales
a las gentes para que participen en las decisiones que los afectan, además de hacer presencia efectiva, no solo con las fuerzas de seguridad,
sino con toda la estructura legalmente constituida y con la inversión que
378
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
debe empezar a cancelar la enorme deuda social que se tiene con los
sectores más pobres de la población.
Un Estado fuerte, que haya ganado legitimidad entre la población
por medio de la participación y la inversión, hará que sea imposible que
surjan otros actores violentos, pues serán las comunidades mismas las
que los denuncien y rechacen sus actividades.
Debo aquí hacer un reconocimiento a todas las personas que me han
acompañado en estos esfuerzos de paz, buena parte de ellos agrupados
en la Corporación Democracia, en donde se integraron tanto quienes
pertenecieron al Bloque Cacique Nutibara, como los recientemente
desmovilizados miembros del Bloque Héroes de Granada. Mi gratitud
especial para sus directivas, quienes se han jugado por completo para
preservar los logros hasta ahora alcanzados y continuar luchando sin
desmayo en la mejora de las condiciones de vida de quienes hacen parte
de la corporación y de las comunidades en donde habitan.
Son motivo de mis preocupaciones quienes se encuentran privados
de la libertad en razón de las actividades que debieron desarrollar como
miembros de la autodefensa. Un saludo especial para ellos. Continuamos haciendo todos los esfuerzos para que cuanto antes recobren su
libertad y regresen al seno de sus hogares de donde nunca debieron salir.
Igualmente, un gran espacio en mi corazón ocupan quienes han caído víctimas de la intolerancia a lo largo de este proceso. Una oración
por sus almas y paz en sus tumbas.
De otro lado, saludo con optimismo la reanudación del cronograma
de desmovilizaciones de las estructuras que aún permanecen en armas
de las autodefensas. Agradezco a mis compañeros de lucha que hayan
aceptado los criterios que expusimos en la reunión que celebramos en
mi lugar de reclusión el lunes 21 de noviembre.
Este hecho significa que tanto la comandancia de la autodefensa
como el Gobierno tienen la suficiente confianza mutua para seguir adelante con un proceso que le ha quitado a la guerra más de diez mil hombres y mujeres y que hará otro tanto en los próximos meses.
379
No debe haber duda sobre la rectitud de los propósitos de la autodefensa al desmantelar su fuerza armada. Corresponde ahora al Estado,
a los gobiernos nacionales, departamentales y locales, así como a la
sociedad en su conjunto, trabajar mancomunadamente para erradicar
definitivamente los fenómenos de violencia que nos aquejan, con la
construcción de un país más justo e incluyente.
¡Por la paz nos la jugamos toda!
Diego Fernando Murillo Bejarano
Itagüí, noviembre 25 de 2005
La Comisión Internacional para Liberación de Secuestrados comenzó a funcionar en confidencialidad. La información fue confirmada por
el Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, quien estuvo en Europa,
pero no mencionó los países participantes. El funcionario no precisó
detalles sobre las gestiones adelantadas ni el nivel de los funcionarios
que participarían. Tampoco el tipo de acercamientos que tendrían.
Restrepo insistió que los trabajos de la comisión internacional se
adelantarían con estricta reserva120.
NOTA EDITORIAL DE EL COLOMBIANO
La siguiente es la nota editorial de El Colombiano, de Medellín, del
sábado 26 de noviembre de 2005:
A dos años de la reinserción del Bloque Cacique Nutibara, BCN, de
las Autodefensas Unidas de Colombia, es preciso hacer un balance de
este proceso, porque el desafío es mayor.
Lo primero que debe quedar claro es que la reinserción es una parte
del camino de paz que construye el Estado, no sólo el Gobierno, o este
gobierno del presidente Álvaro Uribe Vélez, sino todos los colombianos.
120
Ibíd. 26, noviembre, 2006.
380
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
La reinserción es pieza clave del proceso de paz. El acto público, ritual
y simbólico, que representa la dejación de las armas, guarda un profundo
significado. Quien abandona la rebelión y la violación sistemática de
los derechos humanos y de la normatividad constitucional y legal, pone
un punto final, de llegada. Y también da un paso al frente en el camino
de la reinserción social. A partir de ese momento hay responsabilidades
compartidas entre los reinsertados, el Gobierno y la sociedad.
La reinserción de los miembros del Bloque Cacique Nutibara, desmovilizados el 25 de noviembre de 2003, marcha en términos aceptables, a juzgar por las declaraciones del Director de Paz y Reconciliación
de la Alcaldía de Medellín, Gustavo Villegas Restrepo, y del vocero de
la Corporación Democracia, entidad que los agrupa, Antonio López.
El municipio de Medellín se apersonó de la situación y dispuso de
los recursos necesarios para asumir este reto. El actual Alcalde, Sergio
Fajardo Valderrama, aún sin posesionarse, comprendió el desafío y el
compromiso desde el inicio. El modelo de Medellín, pionero porque
aquí se produjo la primera desmovilización, ha demostrado ser eficiente
en estos primeros dos años. Hay un acompañamiento cercano a cada
uno de los ex combatientes, todos están en un programa sistemático
de educación y socialización. Es evidente el control que se ejerce para
generar la confianza necesaria.
El proceso es lento, se construye paso a paso. Este ejemplo debería
ser replicado en el resto de los municipios antioqueños y colombianos.
En muchas de estas localidades no son tan eficaces ni los programas
ni los controles. La reinserción implica el acompañamiento. No pueden los desmovilizados actuar como ruedas sueltas, porque aparece el
riesgo de caer nuevamente en los grupos ilegales y criminales. Si no
hay control, la sociedad actuará con recelo y aun con miedo. Algunas
organizaciones de Derechos Humanos han formulado denuncias del
fenómeno de réplica o reciclaje del paramilitarismo, que por fortuna
son aislados. También, las víctimas reclaman la reparación de los daños
morales y materiales infligidos por quienes ahora gozan de la condición
de reinsertados.
La Ley de Justicia y Paz avanza sobre algunos de los vacíos y riesgos
señalados. En estos casos es necesario apresurar el paso. Y más allá
de las normas, la sociedad debe cumplir una doble tarea indelegable:
381
apoyar solidariamente este proceso de reincorporación a la vida civil y
ejercer vigilancia para que el Gobierno atienda el programa, y los desmovilizados no se enreden en nuevas aventuras criminales.
El desafío de la reinserción es inmenso. No es posible un programa perfecto desde el primer día. Hace dos años se desmovilizaron 868
miembros del Bloque Cacique Nutibara. Hoy son 2 285 en la sola ciudad
de Medellín. Y de acuerdo con Villegas Restrepo, a Medellín llegarán
unos diez mil hombres y mujeres, producto del proceso de desmonte de
los diferentes bloques de las AUC. Como se ve, la paz se construye. Es
una meta de logros parciales. Su éxito o fracaso depende del compromiso que asuman todas las partes involucradas121.
El 25 de noviembre de 2005, al cumplirse dos años de la desmovilización del Bloque Cacique Nutibara, en el Palacio de Exposiciones
de Medellín se cumplió un acto en el cual, con pancartas, los desmovilizados de ese bloque de las AUC y varios miles de personas que los
acompañaron en el “Día Blanco” pidieron a la comunidad internacional apoyar los procesos de desmovilización.
Alrededor de cincuenta mil personas partieron del Parque Bolívar,
donde algunos recibieron bolsas de agua y camisetas blancas para iniciar el recorrido que terminó en el Palacio de Exposiciones.
Según Antonio López, vocero de la Corporación Democracia, alrededor de 1 073 buses, cada uno con 50 pasajeros, arribaron al punto de
partida con personas de diversos barrios de Medellín y regiones como el
bajo Cauca, el oriente y el nordeste antioqueño.
Para López, la amplia participación de la comunidad en la marcha
fue una muestra de que el proceso de desmovilización estaba siendo
legitimado por la ciudadanía.
El Delegado de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, Alejandro Albarracín, indicó que con su presencia el Gobierno Nacional deseaba hacer un reconocimiento a las personas que participaban del proceso
121
Op. cit. 26, noviembre, 2005.
382
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
de paz y a la ciudad por acoger a los desmovilizados, pues luego de dos
años de la desmovilización se observaba progreso en los desmovilizados.
Aunque reconoce que existen algunos problemas en el proceso, de lo
que responsabilizó al hecho de ser pionero en el país, el Delegado del
Comisionado de Paz considera que no debe juzgarse a todos los desmovilizados por los errores de unos pocos. En algunos pasacalles en inglés
los manifestantes pedían que no le pusieran más trabas al proceso.
Para la Alcaldía de Medellín y la Corporación Democracia, que
agrupaba a los ex combatientes del Bloque Cacique Nutibara, BCN
de las autodefensas, las cosas mejoraron en la ciudad en materia de
convivencia ciudadana, tras la desmovilización, hace dos años, de 868
hombres que entregaron sus armas durante un acto que se cumplió en
el Palacio de Exposiciones.
El Director de Paz y Reconciliación de la Alcaldía de Medellín, Gustavo Alberto Villegas, consideró que los efectos reales de la desmovilización en Medellín se sentirían a largo plazo, y por eso se diseñó un
programa que no sólo garantizara una resocialización con programas
de choque sino que, a futuro, los ex combatientes tuvieran posibilidades
de vida y no reincidieran en la ilegalidad122.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE CENTRAL BOLÍVAR,
FRENTES NORDESTE ANTIOQUEÑO, BAJO CAUCA Y
MAGDALENA MEDIO
El jefe de autodefensas “Ernesto Báez” estuvo presente en el acto de
desmovilización del Bloque Central Bolívar, frentes Nordeste Antioqueño, Bajo Cauca y Magdalena Medio, el lunes 12 de diciembre de 2005,
en el cual regresaron a la vida civil 1 922 hombres. En este acto las autodefensas entregaron dos helicópteros artillados y más de 1 600 armas.
“Ernesto Báez” propuso en esta ocasión que el Gobierno Nacional
creara dos cúrales para los miembros desmovilizados de las autodefensas con miras a que las AUC se convirtieran en una organización política legal después de dejar las armas.
122
Ibíd. 26, noviembre, 2005.
383
Entre los desmovilizados en esta ocasión, aparte de “Ernesto Báez”,
se encontraban dos de los miembros de mayor jerarquía en las AUC:
Julián Bolívar y Carlos Mario Jiménez Naranjo, comandantes militares
del Bloque Central Bolívar.
Los desmovilizados entregaron 1 253 armas largas, 31 armas cortas,
102 armas de apoyo, 14 0091 unidades de munición de diferente calibre,
546 granadas, 15 radios y 2 helicópteros.
De esta manera las AUC reanudaron las desmovilizaciones masivas
de combatientes, en cumplimiento de una negociación de paz que iniciaron en 2003 y en el marco de la cual se habían entregado a la fecha
más de 13 000 hombres.
DESMOVILIZACIÓN DEL FRENTE MÁRTIRES DE GUÁTICA
El 15 de diciembre de 2005, en la vereda La Esperanza, municipio de
Santuario, departamento de Risaralda, se desmovilizaron 552 militantes del
Frente Mártires de Guática, liderados por Carlos Mario Jiménez Naranjo.
Los desmovilizados entregaron 307 armas largas, 28 armas cortas,
16 armas de apoyo, 20 668 unidades de munición de diferente calibre,
98 granadas, 13 radios 2m y un vehículo.
CONCENTRACIÓN DEL BLOQUE VENCEDORES DE ARAUCA
El 16 de diciembre de 2005 se conoció que el desarme de las AUC
continuaría en el departamento de Arauca. La Oficina del Alto Comisionado para la Paz informó que el Ejecutivo había establecido la “zona
de ubicación temporal” en la que debería concentrarse el llamado bloque Vencedores de Arauca, BVA.
Según una resolución del 16 de diciembre de 2005, firmada por los
ministros de Defensa, Camilo Ospina, y del Interior y de Justicia, Sabas
Pretelt de la Vega, el BVA tenía como sitio de reunión el caserío rural
de Puerto Gaitán.
384
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El establecimiento de la zona de concentración para el bloque Vencedores de Arauca fue anunciado horas después de que el Comisionado
de Paz formalizara el desarme del Frente Héroes y Mártires de Guática
en una hacienda de la localidad de Santuario; 552 integrantes de este
grupo hicieron entrega formal de sus armas. Este frente dependía del
Bloque Central Bolívar.
Con ellos se elevó a 13 593 el número de militantes de las AUC que
habían dejado las armas en virtud del proceso de paz del Gobierno.
PROPUESTA DE MISIÓN TÉCNICA EXPLORATORIA
El 13 de diciembre de 2005, el Gobierno Nacional aceptó la propuesta presentada por la Misión Técnica Exploratoria -conformada por los
gobiernos de Francia, Suiza y España-, en la que se establece un sistema
de seguridad que permitiría a los representantes del Gobierno y de la
guerrilla de las FARC encontrarse para buscar un acuerdo humanitario.
El lugar propuesto era el caserío El Retiro, perteneciente al municipio
de Pradera, en el Valle del Cauca.
La zona propuesta comprendía 180 kilómetros cuadrados, y había
sido previamente visitada e inspeccionada por los miembros de la misión entre el 28 de noviembre y el 2 de diciembre de 2005. Iría desde
el oriente montañoso del municipio de Pradera, a partir del puente de
Potrerito sobre el río Bolo, hasta la línea del filo de la Cordillera Central
y el oriente montañoso del municipio de Florida, a partir de la salida
de La Diana al norte de la vía La Diana-El Caleño-La Palmera-Sinaí.
También tendría una franja de seguridad a la redonda de dos kilómetros de ancho, que iría desde el oriente de la línea del filo que separa
al Valle del Cauca del Tolima, a lo largo de Pradera y Florida, hasta el
paso de montaña situado sobre la vía Florida-Herrera-Chaparral.
La misión propuso que siete días antes de la fecha de inicio del encuentro y siete días después de concluido el mismo, los observadores internacionales adelantarían las operaciones para garantizar la seguridad
de los representantes tanto del Gobierno como de las FARC.
La Misión Técnica Exploratoria también propuso que fueran entre
30 y 40 los observadores internacionales que garantizarían la seguridad
en la zona.
385
El Comité de la Cruz Roja Internacional, CICR, garantizaría la seguridad de los desplazamientos de los negociadores, en diferentes helicópteros. Uno para los negociadores de las FARC y otro para los negociadores del Gobierno.
El caserío El Retiro está compuesto por unas treinta familias, una
iglesia, una escuela, una casa comunal, un puesto de salud y una cancha
de fútbol que facilita el aterrizaje de los helicópteros123.
PROPUESTA DE LA COMISIÓN INTERNACIONAL
El siguiente es el texto completo de la propuesta hecha por la Comisión Internacional al Gobierno colombiano sobre un Sistema de Seguridad para un encuentro humanitario en la Cordillera Central:
Berna, París, Madrid
Diciembre 2005
Berna, 12 de diciembre de 2005
El Departamento Federal de Asuntos Exteriores Suizo, a nombre
de los gobiernos de España, Francia y Suiza, se permite transmitir al
Gobierno colombiano y al secretariado de las FARC-EP el resultado de
la “Misión Técnica Exploratoria” que ha tenido lugar en la Cordillera
Central entre el 28 de noviembre y el 2 de diciembre del 2005.
Los tres gobiernos habían avisado con anticipación a las diversas
autoridades. Estas no emprendieron operaciones militares durante los
cinco días y así han permitido el buen desarrollo de la misión. Igualmente, esta misión ha sido posible gracias al CICR que ha garantizado
tres desplazamientos en helicóptero.
Proposición
Los gobiernos de España, Francia y Suiza proponen un sistema de
seguridad que permita a los representantes del Gobierno colombiano y
a los representantes de las FARC-EP encontrarse directamente en condiciones óptimas.
123
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
386
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
España, Francia y Suiza proponen garantizar la seguridad de los negociadores con su compromiso político y con su presencia física.
Los tres países no prejuzgan en ningún caso sobre la duración, la
forma o el contenido de las negociaciones. Ellos desean simplemente
dar confianza a los negociadores así como a los diversos sectores de la
población colombiana.
El sistema de seguridad incluye dos dimensiones: A. espacial y B.
operacional.
Situación geográfica:
Oriente montañoso del municipio de Pradera a partir del puente de
Potrerito sobre el río Bolo hasta la línea del filo de la Cordillera Central.
Oriente montañoso del municipio de Florida a partir de la salida
de La Diana al norte de la vía La Diana-El Caleño-La Palmera-Sinaí
(incluyendo la vía).
Una franja de 2 kilómetros de ancho al oriente de la línea del filo
que separa el departamento del Valle del departamento del Tolima a lo
largo de los municipios de Pradera y Florida hasta el paso de montaña
situado sobre la vía sin terminar Florida-Herrera-Chaparral.
Sobre esta franja de seguridad se sitúan varios pasos:
Paso No. 1 sobre la vía entre Florida y el departamento del Tolima:
La Diana, El Caleño, La Palmera, Sinaí y el camino sobre el que está
proyectada la vía Florida- Herrera-Chaparral.
Paso No. 2 entre Pradera y el Tolima, camino de herradura Bolo
Azul, Entremos, Bolivia y sobre el territorio del Tolima, el sitio llamado
Norales.
Paso No. 3 entre Pradera y el departamento del Tolima, camino de
herradura Bolo Azul, Casablanca, La Cabaña y sobre el territorio del
Tolima, el sitio llamado La Virgen cercano a la laguna de La Virgen.
387
Para garantizar la seguridad de un paso o de una zona de paso a tales
altitudes, es necesario controlar la parte baja del paso y no la cima. Esta
es la razón por la cual es deseable incluir en el sistema una franja de 2
kilómetros al oriente del filo de la cordillera Central.
Después de un examen minucioso de todas las posibilidades al interior de este espacio de seguridad, se propone que el caserío de El Retiro
sea la sede de las negociaciones.
El Retiro cuenta aproximadamente con treinta familias, una iglesia
en buen estado, una escuela con cinco salones, comedor, cocina y sanitarios; una casa comunal (ex inspección de policía) de cuatro piezas
en buen estado, un puesto de salud de cuatro piezas en buen estado, así
como otras varias edificaciones privadas en buen estado.
Además, El Retiro se encuentra en el cruce de dos vías, está equipado
de energía eléctrica, de agua y teléfono. Situado a 1 600 metros de altitud,
goza de un clima agradable. Una cancha de fútbol bien despejada facilita
el aterrizaje de helicópteros. La población de El Retiro dio una acogida
muy calurosa a los miembros de la Comisión Técnica Exploratoria.
La vía es transitable pero de difícil acceso. Parte de una altitud de 1
200 m. en Potrerito hasta los 2 800 m. en Bolo Azul.
Teniendo en cuenta la extensión de la topografía, convendría seleccionar lugares estratégicos donde posicionar a los observadores internacionales (España, Francia y Suiza).
Se trataría de controlar el acceso sobre las vías siguientes:
La coordinación de los observadores se establecería en El Retiro.
Estos estarían comunicados por su propia red de radio.
El coordinador de los observadores estaría bajo la responsabilidad
del órgano político de coordinación de los tres países, el mismo basado
en El Retiro.
El coordinador de los observadores estaría en contacto directo con
el comando de las Fuerzas Armadas Colombianas y de las FARC, con
tropas por fuera de los límites del sistema de seguridad.
388
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Treinta a cuarenta observadores internacionales podrían cumplir la
tarea prevista.
Los observadores serían operacionales siete días antes del comienzo
del encuentro y siete días después del final del mismo. Esto no prejuzga
sobre la duración de las conversaciones.
Los tres países garantes seleccionarían sus observadores entre personas con la experiencia de montaña; en efecto ciertos puestos de observación se encuentran a más de 3 000 m. de altitud sin acceso en vehículo.
El CICR garantizaría la seguridad de los desplazamientos de los negociadores:
Helicópteros para los negociadores de las FARC.
Helicópteros o vehículos del CICR para los negociadores del Gobierno desde Potrerito.
El CICR podría proteger con su emblema el (los) local (es) de negociación.
EL GOBIERNO RECIBE LA PROPUESTA
Esta proposición es entregada en la propia mano al representante del
gobierno colombiano y al representante oficial de las FARC el martes
13 de diciembre simultáneamente y en términos estrictamente idénticos.
Si el principio de este sistema de seguridad es aceptable para el Gobierno y para las FARC, los tres países facilitadores podrían emprender
las tareas y los contactos apropiados para precisar su funcionamiento.
El 13 de diciembre empezaron a reunirse en el Hotel Palco de La
Habana, Cuba, las personas que habrían de participar en la reunión
exploratoria de paz entre el Gobierno Nacional y el ELN. Entretanto,
seguían llegando los participantes y acompañantes de esta fase exploratoria de paz entre el Gobierno y el ELN.
389
Antonio García llegó al Hotel Palco en compañía de Francisco Galán y tras una hora de charla, García se reunió por primera vez con los
embajadores y delegados internacionales.
“Desde luego que somos optimistas; sin optimismo no estaríamos aquí”, aseguró García, quien insistió en que siempre hay obstáculos y problemas pero esperan trabajar por superarlos. Afirmó también
que vienen por resultados, pero estos solo se conocerán al final.
“La lógica del encuentro es una reunión exploratoria formal; de ahí
para adelante depende cómo trabajemos. Una reunión exploratoria significa que nos vamos a introducir a algo, esperemos que llegue ese momento y de los resultados de esta primera reunión podemos pensar unas
siguientes y dejar abierto el camino”124.
El día para los diálogos amaneció impregnado de expectativa debido
al sorpresivo anuncio del presidente Álvaro Uribe de aceptar la propuesta de la comisión internacional para llegar a un acuerdo humanitario
con las FARC.
Desde su casa en el sector de El Laguito, el Nobel Gabriel García
Márquez estaba atento al desarrollo del encuentro.
PRIMERA REUNIÓN EXPLORATORIA CON EL ELN EN CUBA
El viernes 16 de diciembre de 2005 se inició en La Habana, Cuba, la reunión formal exploratoria entre el Gobierno Nacional y la guerrilla del ELN.
Al acto inaugural asistieron Rafael Dauzá, Vicecanciller de Cuba;
Bernardino León, Vicecanciller de España; miembros de las delegaciones del grupo de países acompañantes de España, Suiza y Noruega; Moritz Akerman y los garantes ciudadanos, la ex Canciller María
Emma Mejía; el Nobel colombiano Gabriel García Márquez, los senadores Carlos Gaviria y Antonio Navarro Wolf y varios miembros de la
sociedad civil colombiana.
En la sesión inaugural del encuentro llevaron la palabra el Alto Comisionado Para la Paz, Luis Carlos Restrepo y Antonio García.
124
Op. cit. 14, diciembre, 2005.
390
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
PALABRAS DEL ALTO COMISIONADO PARA LA PAZ
No es esta la primera vez que se emprenden esfuerzos de paz en Colombia. De hecho, durante muchos años y en varios gobiernos, colombianos y colombianas eminentes han transitado este mismo camino.
Nosotros, durante la presente administración, ya hemos adelantando esfuerzos que en su momento no han dado fruto.
A finales del año 2002, aquí mismo, con la hospitalidad del Gobierno cubano, intentamos iniciar un proceso de diálogo con el Ejército
de Liberación Nacional, ELN. Posteriormente, con el acompañamiento
fraterno de México, adelantamos una experiencia que tampoco fue exitosa. Sirva el momento para rendir agradecimiento al Gobierno mexicano que nos acompañó en esa tarea.
Hoy nuevamente emprendemos este camino. Las circunstancias, por
cierto, son distintas; el funcionamiento de la Casa de Paz, que el Gobierno reconoce como un esfuerzo válido, importante y consistente de
la sociedad civil, ha sido fundamental para aclimatar la confianza y
hacer posible esta reunión formal exploratoria. De parte del Gobierno,
hemos brindado las garantías y las condiciones de seguridad para que
la casa funcione.
Igualmente, hoy de nuevo, con la hospitalidad del Gobierno cubano,
emprendemos esta tarea de la que esperamos ver los mejores frutos.
Por parte del Gobierno queremos ser prudentes, realistas, responsables. Somos conscientes de la tarea que tenemos entre manos, pero no
queremos generar falsas expectativas.
Colombia no resiste más frustraciones en el campo de la paz; por tal
motivo, actuaremos con prudencia y persistencia, tratando de consolidar paso a paso el proceso.
Nuestro propósito central en este momento es ganar confianza y definir las líneas estructurales que nos permitan avanzar de manera decidida en el camino de la reconciliación.
391
No quiero desconocer el profundo abismo que nos separa del Ejército de Liberación Nacional. No sería honesto ni correcto aminorar las
contradicciones; son esas contradicciones -en gran parte- la causa del
sufrimiento de pueblo colombiano en las últimas décadas. Sin embargo,
queremos adelantar un diálogo respetuoso, queremos adelantar un diálogo sin agravios, es necesario que nos revistamos de madurez y que se
pueda construir un escenario donde se dé un debate con altura.
Comprometidos en una política de Seguridad Democrática, tenemos
siempre presente que nuestro horizonte es el fortalecimiento del pluralismo político. Por tal motivo, creemos que esta fase exploratoria que
hoy se inicia y un eventual proceso de paz con el ELN, deberán tener
como beneficiario directo a la sociedad y a la democracia colombiana.
Si al final de este camino tenemos una Colombia con más democracia, con más diversidad, con más garantías y con más pluralismo, todos
los esfuerzos realizados se habrán justificado.
Amigos del Gobierno de Cuba: nos merecen ustedes la más alta credibilidad; conocemos de su seriedad, de su responsabilidad y de su compromiso con la paz de Colombia. Por su hospitalidad, muchas gracias.
PALABRAS DE ANTONIO GARCÍA
Desde cuando el Ejército de Liberación Nacional dialogó por primera vez con un gobierno en 1991, hemos venido construyendo de manera
sostenida diversos escenarios de diálogo con todos los gobiernos sin
excepción. Ejercicios importantes que nos han permitido construir una
estrategia permanente de paz.
Nunca antes los contradictores habían estado tan distantes como
en la actualidad en este Gobierno. Por esta razón ha sido difícil plantearse un escenario de paz y se ha requerido y se continuará necesitando una activa participación de la sociedad colombiana y de la
comunidad internacional.
Los modelos de los procesos de paz anteriores no han resuelto el
conflicto y a veces han distorsionado la realidad del mismo. Hoy, las
heridas son más profundas y el dolor es muchísimo más grande que lo
vivido en la violencia de los años de 1950.
392
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
En aquel entonces, las víctimas se contabilizaron en centenas de miles; hoy se cuentan en cifras de millones. Víctimas propias del conflicto,
pero ante todo, del terrorismo de Estado y de la guerra sucia. Ya no hay
espacio en Colombia para tanto dolor.
Somos enfáticos en señalar que se requiere construir un nuevo diseño de proceso de paz que apunte a desactivar de fondo las causas esenciales del conflicto que vivimos.
Construir ese nuevo modelo de proceso de paz es el gran reto al que
estamos convocados hoy. El centro de nuestra propuesta de paz es atacar las causas que originaron y continúan reproduciendo el conflicto: la
injusta estructura social que acrecienta la pobreza y acentúa la desigualdad social, el sistema político que bloquea e impide la participación de
las mayorías en el gobierno de sus destinos y una economía que siempre
favorece al gran capital. Por tanto, un proceso de paz real deberá conducirnos a producir cambios estructurales en los ámbitos social, político
y económico.
El ejercicio de construir caminos de paz debe ser la mejor pedagogía
de participación democrática. Por eso, es determinante la participación
activa de la sociedad en este proceso.
Los millones de víctimas de la grave tragedia humanitaria existente
miran incrédulas cómo los procesos de paz pasan de largo.
En esta oportunidad, si la paz habrá de ser real, deberemos detenernos frente a ellos y comprometernos de verdad con una agenda humanitaria que permita superar definitivamente este problema.
El camino hacia la paz está referido a la superación de los problemas sustanciales y sólo se podrá construir en la medida que el proceso
permita elaborar una agenda social y humanitaria y a la vez dote de
instrumentos para ejecutarla.
Siendo que los obstáculos son mayúsculos, acudimos a abrir este escenario de diálogo, porque se está empezando a permitir la participación de la sociedad. No se condicionó el diálogo y vamos a empezar
con una agenda abierta. Venimos abiertos a escuchar al Gobierno y
esperamos que el Gobierno también acuda con la misma disposición.
393
En la creación de condiciones para este diálogo es importante destacar el trabajo que a lo largo de años realizaron el grupo de países amigos, la comisión de facilitación civil y la Iglesia.
En la actualidad, se han presentado hechos iniciales importantes
como la Casa de Paz, que se convierte en un testimonio de hasta dónde
puede la creatividad generar nuevas dinámicas.
Casa de Paz es la vía por donde ha empezado a transitar la participación de la sociedad en la construcción de la paz, que ahora, en una
nueva fase, debe convertirse en una verdadera autopista amplia y de
múltiples carriles.
La participación de Noruega, Suiza y España ha sido muy importante para darle vida y proyección a esta iniciativa.
De igual manera, la presencia de estos países en el paso de abrir un
proceso de diálogo con el Gobierno, es parte de las garantías que le dan
seguridad y continuidad al proceso, así como el acompañamiento a la
participación de la sociedad.
El grupo de garantes jugó un papel importante en la gestación y desarrollo inicial de esta propuesta hacia la paz. Ahora se requiere de un
salto que afiance y anime una creciente y vigorosa participación de la
sociedad en la obra de la paz y que las ‘Casas de Paz’ florezcan y se
reproduzcan en todo el país.
La paz no es una propuesta, sino un proceso de trabajo intenso y
sostenido y de cara al país.
Ayer recibimos unas primeras conclusiones de las consultas que se
hicieron en la Casa de Paz, pero las consultas faltantes y el diálogo con
la sociedad deben continuar. Sus opiniones serán tenidas en cuenta en
el proceso que puede abrirse.
Estamos convencidos de que los compañeros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, están presentes en la estrategia de solución política del conflicto.
394
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Que la paz ha de ser una sola y de todos. Que la gratificante presencia del Nobel Gabriel García Márquez sea el mejor augurio para que
podamos trascender cien años de soledades y dolores y al fin los tiempos puedan parir eternidades de paz y de vida para Colombia.
Nuestro profundo agradecimiento al Gobierno y al pueblo cubano
por permitirnos realizar este encuentro en su territorio, ejemplo claro de
su preocupación y solidaridad con las naciones y pueblos del mundo.
Muchas gracias
COMUNICADO CONJUNTO GOBIERNO-ELN
Delegados del Gobierno Nacional y del Ejército de Liberación Nacional, ELN, se reunieron en La Habana, Cuba, entre el 16 y el 21 de
diciembre de 2005, de conformidad con el acuerdo suscrito por ambas
partes el 5 de diciembre.
Al finalizar sus deliberaciones, el Gobierno Nacional y el ELN informan:
1. Las reuniones se desarrollaron en un ambiente franco y cordial
en el que los participantes manifestaron su interés de avanzar en
un proceso que tenga como objetivo central la paz nacional y
cuyo principal beneficiario sea el pueblo colombiano.
2. Con el propósito de continuar el análisis de las propuestas presentadas, convinieron en realizar un receso en esta fase exploratoria y llevar a cabo una nueva ronda de conversaciones. Ésta
tendrá lugar a finales del mes de enero de 2006 en la ciudad de
La Habana, Cuba.
3. La construcción de la agenda para la negociación será uno de los
aspectos fundamentales para ser considerados en dicha reunión.
4. El Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional,
ELN, agradecen a los representantes de España, Noruega y Suiza su presencia y acompañamiento; al gobierno de Cuba su hospitalidad y compromiso con la paz de Colombia, y al Gobierno
de la República Bolivariana de Venezuela su apoyo para el buen
éxito de las conversaciones.
395
5. Igualmente, agradecen al premio Nobel de Literatura Gabriel
García Márquez, a los garantes ciudadanos de la “Casa de Paz”,
a los miembros de la sociedad civil, a los líderes políticos y sociales que se hicieron presentes en la ciudad de La Habana, su
disposición favorable y respaldo hacia el proceso que se inicia.
Por el Gobierno Nacional,
Luis Carlos Restrepo
Alto Comisionado para la Paz
Por el ELN
Comandante Antonio García
Comando Central -ELNCiudad de La Habana, 21 de diciembre de 2005125
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE VENCEDORES DE
ARAUCA
Los habitantes de Tame, en el piedemonte llanero, vieron llegar el 22
de diciembre de 2005 una de las cosas que más habían esperado en los
últimos años: el desmonte del bloque de las AUC Vencedores de Arauca: 548 hombres al mando de Miguel Ángel Melchor Mejía Múnera
entregaron 399 armas y se desmovilizaron junto con su jefe.
La ceremonia se realizó en la vereda Puerto Gaitán, en Tame, apenas unas horas después de que el comisionado Luis Carlos Restrepo
regresó de Cuba, donde dialogó con voceros del ELN.
En la zona seguían actuando las FARC y algunas estructuras del
ELN. Según el alcalde, Alfredo Guzmán, los enfrentamientos entre
los dos grupos se habían intensificado por la disputa del territorio
que abandonaban las autodefensas, lo que había originado desplazamientos masivos.
125
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
396
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Los desmovilizados entregaron 303 armas largas, 57 armas cortas, 39
armas de apoyo, 75 641 unidades de munición de distinto calibre, 142
granadas, 86 radios 2m, 5 radios base, 3 bienes inmuebles y 5 vehículos.
El 2 de septiembre de 2005 la prensa nacional había divulgado una
información según la cual el vocero de las FARC, Raúl Reyes, en un
comunicado que apareció en la página www.anncol.com, manifestó
que esa guerrilla insistiría en la desmilitarización de los municipios de
Florida y Pradera para la firma de un posible intercambio humanitario.
La declaración hacía referencia a la propuesta hecha por la comisión
internacional para impulsar tal intercambio.
La agencia de noticias Associated Press dio a conocer una declaración
de las FARC cuyo texto es el siguiente:
Comunicado de las FARC sobre acuerdo humanitario
El principal obstáculo que tiene el acuerdo humanitario es la ausencia de voluntad política en el actual Presidente de Colombia. No es un
secreto que durante más de tres años Uribe se la ha jugado toda por el
rescate militar de los prisioneros; que en este empeño ha utilizado todo
el poder bélico del Estado y los miles de millones de dólares aportados
por el Gobierno de los Estados Unidos, sin resultados favorables. Fue
precisamente su insensatez la que forzó el lamentable desenlace de las
montañas de Urrao, donde murieron el gobernador de Antioquia y el ex
ministro de Defensa Echeverri Mejía, entre otros.
Entendemos que en su afán de explotar electoralmente una iniciativa
de los países facilitadores del acuerdo de canje, que aún no conocemos,
ha lanzado al despeñadero todo un esfuerzo diplomático. Al tiempo
que lamentamos esta actitud precipitada y ligera del Presidente, hacemos un reconocimiento a los buenos oficios de los gobiernos de Francia, Suiza y España. El problema de Uribe candidato es que pretende
“muñequear” a todo el mundo con sofismas y falsas humildades. Afirmar, como lo hizo desde Vista Hermosa, que los cultivos ilegales de La
Macarena pertenecen a las FARC, y declararle la guerra a la población
civil a través de los medios, es un acto reprochable que solo apunta a
distraer la atención del país sobre el estruendoso fracaso de su política
de Seguridad Democrática con inocultables propósitos electoreros.
397
Llevamos años buscando un acuerdo humanitario de canje para
que los cautivos en poder de las partes salgan de las cárceles y de las
montañas y se reencuentren con los suyos, pero ni en Pastrana ni en
Uribe hemos hallado reciprocidad. Ningún gesto logramos arrancar
del Gobierno cuando por voluntad propia liberamos a más de 300
militares y policías, prisioneros de guerra. El señor Uribe, a pesar de
los resultados melancólicos del Plan Patriota, parece seguir obstinado
en el rescate a sangre y fuego. Se dirige a las FARC como si se tratara
de una guerrilla derrotada, interpone abismos descalificando al adversario y atraviesa escollos insalvables como la extradición de Simón y
Sonia a los Estados Unidos.
Está claro que con Uribe no habrá intercambio humanitario. El país
necesita un Presidente con voluntad política, no solo para el canje sino
para pactar con la insurgencia y con la participación del pueblo la solución del conflicto sobre la base de cambios estructurales en lo social,
económico, político y otros órdenes que beneficien a las mayorías.
Secretariado del Estado Mayor Central de las FARC-EP
Montañas de Colombia, diciembre 29 de 2005126
REGLAMENTADA LA LEY 975 DE JUSTICIA Y PAZ
El Gobierno Nacional expidió la reglamentación de la ley 975 de
2005, conocida como Ley de Justicia y Paz, orientada a facilitar los
procesos de paz con los grupos armados al margen de la ley, guerrillas
y autodefensas, y a garantizar los derechos de las víctimas a la verdad,
la justicia y la reparación.
En el Decreto 4760 del 30 de diciembre de 2005 se dedica especial
atención a los aspectos relacionados con la orientación y asistencia legal
a las víctimas, la divulgación de sus derechos, su participación activa en
los procesos judiciales, su derecho a la reparación y la regulación del
fondo en la ley para tales efectos.
La norma reglamentaria define la forma en que el Gobierno debe
presentar a la Fiscalía General de la Nación la lista de postulados para
126
AGENCIA DE NOTICIAS NUEVA COLOMBIA. [en línea]. Disponible en Internet: www. ancol.com
398
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
acceder al procedimiento de la Ley de Justicia y Paz, y aclara que la
presentación no implica la concesión automática de los beneficios establecidos en la ley.
Además, fija los parámetros dentro de los cuales podrán ser investigadas y juzgadas las conductas delictivas cometidas por miembros de
los grupos armados al margen de la ley durante su pertenencia al grupo
y con ocasión de ella, y que no queden cobijadas por la ley 782 de 2002,
así como la forma de dar cumplimiento y hacer seguimiento a la pena
alternativa y de la libertad a prueba.
Según el Decreto 4760, las víctimas tendrán derecho a:
•
Participar activamente en el proceso de la Ley de Justicia y Paz
aportando pruebas a las autoridades judiciales, conociendo y
controvirtiendo las decisiones que se tomen dentro del mismo.
•
Recibir durante el proceso un trato digno y humano.
•
Ser oídas, a que se les facilite el aporte de pruebas y a conocer la
verdad de los hechos de que fueron víctimas
•
La Fiscalía velará por la seguridad de las víctimas.
•
Tener traductor gratuito en el evento de no manejar el mismo
lenguaje.
•
Ser asistidas por un abogado de confianza o en su defecto por la
Procuraduría.
•
La reparación de los daños sufridos.
•
Ser informadas sobre la decisión definitiva adoptada por la justicia y a controvertir las decisiones que la afecten.
La reglamentación de la Ley de Justicia y Paz establece que las personas que hayan sido víctimas de hechos punibles por parte de grupos
armados al margen de la ley, tendrán derecho a la reparación individual
y colectiva. Esta consiste en la restitución, indemnización, rehabilita399
ción y garantías de no repetición. Los pagos de estas reparaciones serán
hechos por intermedio de Acción Social, Fondo de Reparación a las
Víctimas.
Para tal efecto, los miembros de los grupos armados al margen de la
ley deberán entregar los bienes obtenidos ilícitamente al Fondo de Reparación. Cuando la víctima considere que fue despojada ilícitamente de sus
bienes por parte de los acusados, podrá presentar su respectiva denuncia.
Este fondo será administrado por el Alto Consejero Presidencial
para la Acción Social y la Cooperación Internacional, quien tendrá que
destinar el dinero suficiente para que pueda operar la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación. También se podrán crear las
comisiones regionales para la restitución de bienes.
La Procuraduría diseñará y ejecutará los programas de divulgación,
promoción e información general de los derechos de las víctimas.
Las listas de postulados, que deben ser entregadas por el Gobierno
Nacional a la Fiscalía General de la Nación, podrán estar integradas por
nombres de miembros de grupos armados al margen de la ley que se hayan desmovilizado individual o colectivamente, de acuerdo con las leyes.
El miembro representante del grupo deberá informar -por escrito- al
Comisionado para la Paz sobre la pertenencia al mismo de quienes se
encuentren privados de la libertad, la cual en su oportunidad será determinada en su respectiva providencia judicial.
En cualquier caso, los desmovilizados deben manifestar por escrito al
Alto Comisionado para la Paz o al Ministro de Defensa, su voluntad para ser
postulados para acogerse a los procedimientos y beneficios de la ley, y deben
declarar bajo juramento que cumplen con los requisitos de elegibilidad.
Las listas deben ser enviadas al Alto Comisionado para la Paz, a los
ministros de Defensa o del Interior y de Justicia, según sea el caso. El
Ministerio del Interior y de Justicia será el encargado de remitir las listas
a la Fiscalía.
En ningún caso la postulación realizada por el Gobierno Nacional implica la concesión automática de los beneficios previstos en la Ley 975 de
2005, ni el aval sobre el cumplimiento de los requisitos allí consagrados.
400
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
La verificación corresponde a las autoridades judiciales, quienes
contarán con todo el apoyo de las entidades del Estado. La sala del
Tribunal Superior de Distrito Judicial creada por la ley es la instancia
competente para conceder los beneficios de la misma.
Para continuar con el proceso las personas integrantes de la listas
deberán rendir versión libre y confesión ante la justicia. Las autoridades
judiciales tendrán 60 días para investigar y verificar. Si el desmovilizado
cumple con los requisitos y las unidades judiciales encargadas de la respectiva revisión así lo acreditan, éste pagará una pena de entre cinco y
ocho años de prisión según la gravedad de los delitos.
Quienes en el momento de entrar en vigencia la Ley de Justicia y Paz
se encuentren condenados, tienen derecho a una rebaja de la décima parte
de la pena siempre y cuando no estén pagando penas por delitos relacionados con narcotráfico, de lesa humanidad, secuestro y delitos sexuales.
Además, el director del establecimiento carcelario debe dar fe del
buen comportamiento del preso, que el condenado manifieste su compromiso de no volver a reincidir y haber cooperado con la justicia en
los procesos en su contra. Este también debe realizar actos de reparación a las víctimas, siempre y cuando hayan sido individualizadas en el
respectivo proceso; pero el Decreto establece que no se podrá negar la
rebaja a un interno que carezca de capacidad económica. En tal caso la
reparación será simbólica y con la garantía de no repetición.
Durante el 2005 se desmovilizaron de forma individual 2 564
miembros de los grupos armados al margen de la ley, con los que
se completan 22 865 durante la administración del presidente Álvaro
Uribe Vélez.
Según las cifras suministradas por el Programa de Atención Humanitaria al Desmovilizado, en el 2005 se entregaron individualmente 1
135 miembros de las FARC, 1 096 de las AUC, 301 del ELN y 32 de
grupos disidentes.
Estas personas se presentaron ante las siguientes autoridades: 2 226
a unidades de la Fuerza Pública, 39 a la Fiscalía, 49 a la Defensoría, 27
a la Personería, 11 a la Iglesia, 105 al DAS, 106 al ICBF y uno directa-
401
mente al programa de reinserción. Dentro de este grupo se da cuenta de
365 menores de edad y 319 mujeres.
Los departamentos en los que más desmovilizaciones se reportaron
durante este año fueron: Antioquia con 362, Caquetá con 265, Cundinamarca con 245, Casanare con 188, Meta con 169, Santander con 138,
Arauca con 121 y Valle del Cauca con 107. Las demás deserciones se
registraron en cifras menores en el resto de departamentos del país.
En total, durante el gobierno de Uribe Vélez han abandonado las
armas de manera voluntaria e individual 8 804 miembros de los grupos
violentos. A estos se suman los 14 061 miembros de las AUC que lo
han hecho de manera colectiva por estar en negociaciones de paz con el
Gobierno Nacional.
APOYO EN MATERIA DE SALUD PARA DESMOVILIZADOS
El Gobierno Nacional, por medio del Decreto128 de 2002, estableció apoyo en materia de salud para los desmovilizados y sus familias, al
igual que protección y solución jurídica a través del Ministerio del Interior. Este Decreto también consagra apoyo económico para la creación
de microempresas y la posibilidad de validar el bachillerato y acceder a
capacitación impartida por el Sena.
Además de estos beneficios, el Gobierno estableció en el Decreto
2767 de 2004, que quienes se acojan a dicho proceso y colaboren de
manera voluntaria con la justicia o la fuerza pública entregando información que permita evitar o esclarecer delitos, podrán recibir una bonificación económica acorde con el resultado de dicha colaboración.
Los desmovilizados que entreguen material de guerra, intendencia,
comunicaciones, sustancias o drogas estupefacientes, insumos y maquinaria para la producción de drogas ilícitas, o cualquier otro elemento
que facilite a los grupos armados al margen de la ley el desarrollo de
actividades ilícitas, también recibirán una bonificación económica.
El Decreto aclara que los beneficios los podrán recibir todos aquellos
nacionales que individualmente y por decisión voluntaria abandonen
los grupos armados al margen de la ley. Estos deberán demostrar, además, a criterio del Gobierno Nacional, su voluntad de reincorporarse a
402
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
la vida civil. Los menores de edad quedan excluidos de cualquier forma
de colaboración con la fuerza pública.
ANUNCIAN DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE MINEROS
El 6 de enero de 2006, RCN Noticias informó que los miembros
del Bloque Mineros de las AUC se desmovilizarían y entregarían sus
armas en Tarazá, Antioquia, después del 10 de enero del mismo año.
Esta sería la vigésima segunda entrega masiva de miembros de las AUC
desde cuando se inició el proceso de desmovilización y la primera del
año 2005.
Se calculaba que los miembros del Bloque Mineros que entregarían
sus armas en Tarazá serían entre 1 700 y 2 000 y lo harían en la finca La
Ranchería de ese municipio.
El desarme del Bloque Mineros se cumpliría en una región en la que la
mayoría de sus habitantes vive de raspar y comercializar la hoja de coca
y donde desde hace más de quince años Ramiro Vanoy, alias “Cuco”,
comandante de ese grupo de AUC, era considerado la “otra autoridad”.
Tarazá, un municipio de 42 00 habitantes, 15 000 de ellos en el área
urbana, limita con Anorí, Cáceres, Valdivia, Ituango y el departamento
de Córdoba, regiones donde también ha habido una fuerte presencia de
la guerrilla de las FARC.
El Bloque Mineros hacía presencia en Tarazá, Caucasia y Cáceres y
en otras zonas del bajo Cauca donde compartía el poder con el Bloque
Central Bolívar, al mando de Javier Montañez, “Macaco”.
La alcaldía y varios finqueros de la región iniciaron un proyecto que
lidera la Asociación Campesina de Cultivadores de Caucho de Tarazá
para que los raspachines sembraran ese producto en vez de coca, y esperaban se tuviera en cuenta de forma paralela con el desarme.
El bajo Cauca comprende los municipios de Caucasia, Nechí, Tarazá, El Bagre, Zaragoza y Cáceres. Sus tierras se encuentran entre las
planicies de los bajos del río Cauca y las estribaciones occidentales de la
serranía de San Lucas, entre los ríos Nechí y Cauca.
403
Esta región basa su economía en la minería de aluvión. Como complemento se realiza una actividad agropecuaria, con predominio de la
ganadería y en menor grado la agricultura con cultivos de arroz y de
sorgo. Al momento de anunciarse la desmovilización del Bloque Mineros se trabajaba en el desarrollo de la piscicultura.
La región tiene más de 260 veredas y el mayor número de problemas
se relaciona con la creciente economía ilegal de la coca, altos niveles de
desnutrición en la población vulnerable, alto déficit de vivienda y baja
calidad y cobertura de la educación en todos los niveles127.
EL BLOQUE MINEROS SE DESMOVILIZA
En Tarazá, Antioquia, el 20 de enero de 2006, un total de 2 790 hombres pertenecientes al Bloque Mineros de las Autodefensas Unidas de
Colombia se desmovilizaron e iniciaron el proceso de reincorporación
a la vida civil.
La ceremonia protocolaria contó con la presencia del Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo Ramírez; el Jefe de la Misión
de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA, Sergio Caramagna; el Alcalde
de Tarazá, Reinaldo Posso; autoridades departamentales y locales y la
comunidad de la zona.
Al frente de esta estructura armada ilegal se desmovilizó Ramiro Vanoy Murillo, quien era conocido dentro de esta organización al margen
de la ley como el jefe militar.
El acto fue presidido por el Alto Comisionado para la Paz y por el
argentino Sergio Caramagna.
Este bloque había surgido doce años atrás y era dirigido por Ramiro
Vanoy, alias “Cuco”.
Según informes de las autoridades colombianas, Vanoy Murillo trabajó, primero para el extinto Pablo Escobar, y luego integró el grupo de
Los Pepes que se enfrentó a Escobar.
127
Op. cit. 6, enero, 2006.
404
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Esta es la desmovilización colectiva más grande en número de hombres que se había dado en Colombia hasta la fecha. Los desmovilizados
entregaron en esta ocasión 1 099 armas largas, 187 armas cortas, 147
armas de apoyo, 136 599 unidades de munición de diferente calibre, 611
granadas, 9 vehículos y una aeronave.
El acto de reincorporación se adelantó en la hacienda La Ranchería,
vereda Pecoralia, del municipio de Tazará, y era el primero de esta naturaleza realizado durante el 2006. Las AUC se habían comprometido
a desmovilizar a unos 20 000 combatientes antes del 15 de febrero de
2006, en el marco del proceso de paz. Además de las armas, los miembros del Bloque Mineros entregaron un helicóptero y un centro hospitalario. Entre los desmovilizados aparecieron 40 mujeres.
Estos alzados en armas operaban en once municipios de las regiones
del bajo Cauca y el nordeste de Antioquia.
La anterior fue la vigésima quinta desmovilización colectiva desde
noviembre de 2003 y la primera del año 2006, tras la del bloque Vencedores de Arauca, el 23 de diciembre de 2005.
A los combatientes les tramitaron documentos de identidad y certificados de antecedentes judiciales, y les practicaron exámenes médicos y
sicológicos. Los reinsertados recibieron ropa y una ayuda de alrededor
de 150 dólares cada uno.
BALANCE INTERMEDIO
Durante el proceso de paz que adelantaba el Gobierno Nacional con
las Autodefensas Unidas de Colombia, ya eran 16 869 hombres y mujeres los que habían hecho dejación de las armas.
Según un balance divulgado por la Oficina del Alto Comisionado de
Paz, con corte al 23 de diciembre de 2005, hasta esa fecha 14 079 miembros de las AUC se habían desmovilizado desde el 25 de noviembre
de 2003, fecha en la cual se inició el proceso de paz entre el Gobierno
nacional y esos grupos al margen de la ley.
131 Op. cit. 3, febrero, 2006.
405
Según el mencionado balance, un total de 24 actos de desmovilización se habían efectuado, incluidos los anillos de seguridad de Santa Fe
de Ralito. Esos hombres habían entregado a las autoridades 7 294 armas
largas, 1 671 armas cortas y 551 de acompañamiento, 5 759 granadas y
1 338 605 municiones, además de explosivos, material de intendencia,
materiales de comunicaciones y accesorios.
“JORGE 40” ANUNCIA DESMOVILIZACIÓN
Rodrigo Tovar Pupo, alias “Jorge 40”’, manifestó el 23 de enero de
2006 que se desarmaría en breve junto con los 16 frentes que conformaban su estructura armada, el Bloque Norte de las AUC.
“Jorge 40” manifestó que el desmonte del Bloque Norte comenzaría
con el desarme del frente denominado Resistencia Tayrona, con la dirección de Hernán Giraldo, cuyo centro de operaciones se encontraba
situado en la Sierra Nevada de Santa Marta.
La desmovilización de los otros 15 frentes del Bloque Norte, que
operaban en los departamentos del Cesar, La Guajira, Magdalena, Atlántico y Santander, se produciría inmediatamente después.
Hernán Giraldo, de la Sierra Nevada, buscaba quedarse en la zona
como cooperante del Gobierno. Los 1 200 hombres que conformaban
el Frente Resistencia Tayrona comenzaron a concentrarse en la vereda
Quebrada del Sol, en la Sierra Nevada de Santa Marta. Se trataba de uno
de los grupos más antiguos de la costa caribe y que durante más de quince años habían mantenido el control del sector nororiental de la Sierra.
Se esperaba que después del desarme de los hombres de Giraldo continuara el del Bloque Norte que comandaba “Jorge 40”, compuesto por
unos cuatro mil hombres. En el Magdalena los procesos de desmovilización comenzaron en el 2004, en el sur del departamento, con el grupo
comandado por “Chepe” Barrera.
Los alcaldes de Puerto Triunfo, Puerto Nare y Puerto Berrío se reunieron el 25 de enero de 2006 en Doradal, para conocer los detalles
de la desmovilización de unos 1 400 combatientes de las Autodefensas
Campesinas del Magdalena Medio, ACMM, al mando de Ramón Isaza.
406
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
A esta reunión asistió ,en representación del Alto Comisionado para
la Paz, el coronel retirado Jorge Vargas, Asesor de la Oficina del Comisionado. También estuvo presente el Asesor de Paz de la Gobernación
de Antioquia, Jaime Fajardo, y delegados de las alcaldías de Sonsón,
Argelia, Nariño y El Carmen de Viboral.
La oficina del Alto Comisionado para la Paz anunció que la concentración y el desarme se llevarían a cabo en el corregimiento Las Mercedes de Puerto Triunfo.
Las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio, con el frente
José Luis Zuluaga, hacían presencia en parte del Magdalena Medio y el
oriente antioqueño, en especial en Puerto Triunfo, Puerto Nare, Puerto
Berrío, San Francisco, incluyendo el corregimiento de Aquitania, La
Unión, Argelia, Nariño, San Luis y Sonsón.
Esta facción de las AUC comenzó a desplazar a los frentes 9 y 47 de
las FARC desde el año 2000. De este grupo hacían parte jefes conocidos
con los alias de “McGuiver”, “Samuel” y “Alan”. Este era uno de los
grupos más antiguos de las AUC, con casi treinta años de actividad.
Un relato de Ramón Isaza, publicado en una de las páginas de las
AUC en internet, cuenta que su primera acción anti-guerrillera fue un
22 de febrero de 1978, cuando las FARC llegaron a la vereda La Estrella, de Las Mercedes128.
La decisión de escoger a Las Mercedes como sitio de concentración
tiene que ver con la intención de Isaza de desmovilizar su grupo en el
mismo lugar en el que hicieron sus primeras acciones en 1978.
FIJAN FECHA PARA NUEVA REUNIÓN CON EL ELN EN
LA HABANA
El 25 de enero de 2006 se conoció la noticia según la cual el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, y el vocero del ELN para
los acercamientos, Francisco Galán, acordaron que la segunda ronda
128
Ibíd. 25, enero, 2006.
407
de negociaciones se adelantaría entre el 17 y 28 de febrero de 2006 en
La Habana, Cuba. El encuentro entre el Gobierno y el ELN tendría dos
fases en la reunión de Cuba, una primera entre el 9 y el 16 de febrero,
donde Francisco Galán y los demás representantes del ELN adelantarían conversaciones con sectores de la sociedad civil colombiana y la
comunidad internacional; y posteriormente se iniciarían las reuniones
formales a partir del 17 de febrero.
COMUNICADO DE LOS COMANDANTES DE LAS AUC
Por su parte, los comandantes de los distintos bloques de las AUC
expidieron la siguiente declaración:
El Alto Comisionado para la Paz, doctor Luis Carlos Restrepo, es
un hombre honesto, funcionario competente que ha estado cumpliendo
con su deber, que es ni más ni menos que procurar el desmantelamiento
de las organizaciones armadas irregulares del país.
De lo anterior da fe el hecho de que a la fecha se han desmovilizado
más de 16 000 mujeres y hombres de la autodefensa, lo cual es un número
sin precedentes en la historia reciente del país, proceso que está en marcha
y continuará en los próximos días con la desactivación de las estructuras
del Magdalena Medio, Sierra Nevada de Santa Marta y sur de Bolívar.
Hemos tenido serias discrepancias con el doctor Restrepo, que son
apenas naturales cuando se trata de emprender caminos de paz en un
conflicto de la complejidad del colombiano, situaciones que se han ido
solucionando y que nos han permitido continuar avanzando en el proceso de seguirles quitando armas y hombres a la guerra.
La continuidad en las políticas del Estado es indispensable para que
se obtengan resultados positivos. Por eso, valoramos la decisión del señor Presidente de la República de confirmar en su cargo al doctor Restrepo, pues de esta manera se garantiza que el actual proceso continuará
por la senda trazada por la experta mano del alto comisionado.
La Oficina del Alto Comisionado debe seguir explorando escenarios de paz, cambiando paradigmas para lograr el restablecimiento de
la concordia y la vigencia plena de las instituciones democráticas en
nuestro país.
408
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
¡Aquí no solo hablamos de paz; la hacemos!
Salvatore Mancuso Vicente Castaño Gil
Ramón Isaza
Águila
Jorge 40
Diego Vecino
Julián Bolívar
Ernesto Báez
Javier Montañez Botalón
Ramón Mojana
Hernán Hernández
Ramiro Vanoy
Pablo Sevillano
Pablo Arauca
Gabriel Galindo
Adolfo Paz
Medellín, jueves 26 de enero de 2006129
DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUTODEFENSAS CAMPESINAS DEL MAGDALENA MEDIO, PUERTO BOYACÁ
El 28 de enero de 2006, tal como se venía anunciando, se desmovilizaron 742 miembros de las autodefensas del Magdalena Medio en la
localidad de Puerto Boyacá. Se trataba de la entrega de armas de uno de
los grupos contrainsurgentes más antiguos del país en esta población,
considerada cuna de las autodefensas.
El acto, al que asistieron el Alto Comisionado para la Paz de la Presidencia, Luis Carlos Restrepo, y autoridades civiles regionales, se llevó a
cabo en la aldea El Marfil, en el municipio de Puerto Boyacá, en donde
se gestó en 1978 la primera de esas organizaciones armadas ilegales.
Para su creación, hace 28 años, el grupo contó con el apoyo de miembros de la fuerza pública, ganaderos y empresarios de la región, así como
de políticos. En la década de 1980 se expandió en la región del Magdalena Medio con la ayuda de los narcotraficantes Pablo Escobar Gaviria,
Gonzalo Rodríguez Gacha, Gilberto Molina y Jairo Correa, miembros
principales del Cartel de Medellín, y de las mafias de las esmeraldas.
129
Ibíd. 26, enero, 2006.
409
“Botalón”, su jefe, según un informe del Programa Presidencial para
los Derechos Humanos, fue miembro de la organización de Rodríguez
Gacha y recibió, hace cerca de dos décadas, instrucción militar del israelí Yair Klein.
Desde el Magdalena Medio, donde confluyen los departamentos de
Antioquia, Bolívar, Boyacá, Caldas, Cesar, Santander y Cundinamarca,
las AUC se movieron hacia a otras zonas del país con el argumento de
que combatían a las guerrillas de las FARC.
Con esta desmovilización, más otra que estaba anunciada para el
mes siguiente, serían unos 1 700 miembros del bloque Central Bolívar
de las AUC los que se desmovilizarían bajo el comando de Ramón Izasa, alias “El Viejo”, en la aldea de Buena Vista, en el municipio de
Santa Rosa del Sur, a unos 350 kilómetros al noroeste de Bogotá, en el
Magdalena Medio del departamento de Bolívar.
Isaza se desmovilizaría en la aldea La Merced, en el municipio de
Puerto Triunfo, vecino de Puerto Boyacá, en donde el Gobierno autorizó la concentración de las AUC del Magdalena Medio, en el mismo
lugar en el que se realizaron las primeras acciones de esa organización,
a finales de los años setenta.
En los días previos a la entrega del armamento y la desmovilización,
funcionarios de la Fiscalía realizaron labores para la plena identificación, huellas dactilares, carta dental, ADN y fotografías de frente y de
perfil de cada uno de los miembros de la organización armada ilegal.
En Puerto Boyacá, hombres como Jaime Eduardo Rueda Rocha, el
ex congresista liberal Pablo Emilio Guarín, Gonzalo de Jesús Pérez, su
hijo Henry Pérez y Ariel Otero dieron vida y consolidaron a las autodefensas del Magdalena Medio. Puerto Boyacá fue también la cuna del
grupo “Muerte a Secuestradores”, MAS.
Víctor Rafael Triana Arias, conocido como “Botalón”, había estado
al frente de las autodefensas del Magdalena Medio por más de dos décadas. También se le ha conocido con el alias de “Absalón Samudio”.
410
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
A mediados de los años ochenta, el municipio de Puerto Boyacá, en
el departamento de Boyacá, fue declarado el “Primer Fortín Antisubversivo de Colombia”, en un foro en cuya organización participaron
miembros de la fuerza pública, ganaderos, empresarios y líderes políticos regionales.
Se crearon entonces organizaciones con fachada política, pero con
estrechos vínculos con los paramilitares, como el Movimiento de Renovación Nacional, Morena, y la Asociación de Campesinos y Ganaderos
del Magdalena Medio, Acdegam, para apoyar la estrategia armada civil
contra las FARC.
Las AUC comenzaron a hacer presencia en Barrancabermeja en
1998. Los bloques Pablo Emilio Guarín y Fidel Castaño, pertenecientes
al Bloque Central Bolívar, se tomaron las viviendas de barrios como Primero de Mayo y Miraflores y presionaron a sus habitantes a brindarles
alimentos y protección.
Los desmovilizados en Puerto Boyacá entregaron 234 armas largas, 52
armas cortas, 30 armas de apoyo, 45 400 unidades de munición de diferente
calibre, 177 granadas, 100 radios 2m, 19 radios de base y 6 vehículos.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE CENTRAL BOLÍVAR
FRENTE SUR DE BOLÍVAR
2 523 hombres pertenecientes a este bloque, representados por Carlos
Mario Jiménez Naranjo, entregaron sus armas el martes 31 de enero de
2006 en el caserío Buena Vista, en Santa Rosa del Sur. El Bloque Central Bolívar era uno de los más numerosos que operaban en la región.
Los reinsertados entregaron 893 armas largas, 131 armas cortas, 70
armas de apoyo, 66 725 unidades de munición, 299 granadas, 6 radios
y 7 vehículos.
Con esta desmovilización eran 20 134 miembros de las autodefensas
los que habían dejado las armas en el marco de la negociación con el
Gobierno. La Presidencia de la República informó que con esta nueva
desmovilización se habían completado 26 estructuras de las AUC que
habían regresado a la vida civil.
411
El lunes 30 de enero de 2006 comenzaría en el corregimiento Las
Mercedes, de Puerto Triunfo, la concentración de entre 800 y 1 000
combatientes de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio,
ACMM.
Uno de los afanes de la comunidad del Magdalena Medio era la
reinserción de los ex combatientes de las Autodefensas Campesinas
del Magdalena Medio, razón por la cual las autoridades de municipios
como Puerto Triunfo anunciaron programas de proyectos productivos
que involucrarían a los desmovilizados y a parte de la población vulnerable de ese municipio.
En el corregimiento La Mesa, Valledupar, Cesar, el 10 de marzo de
2006 se desmovilizaron 1 220 miembros de los frentes de choque y 1
325 miembros de los frentes de apoyo social, del bloque Norte de la
Autodefensas.
Este grupo entregó un total de 793 armas entre largas, cortas y de
apoyo, clasificadas así: 561 fusiles, 93 pistolas, 41 revólveres, 23 escopetas, 28 lanzamorteros, 3 carabinas, 27 morteros, un lanzacohetes RPG7,
2 lanzacohetes RPG22, 3 lanzagranadas MGL, 8 ametralladoras PKM
y una pistola artesanal. Así mismo, 135 886 unidades de munición de
diferente calibre, 660 granadas, entre las que se cuentan: 337 granadas
de mano, 227 granadas de 40 mm, 66 granadas de 60 mm, 24 granadas
de fusil, 5 granadas de humo y una bengala.
En equipos de comunicación se contabilizaron 59 radios de dos metros y 7 radios de base.
Otro bloque de las AUC, el Bloque Norte, comenzó el lunes 30 de
enero de 2006 el proceso para la entrega de armas de unos 4 000 hombres al mando de Rodrigo Tovar, alias “Jorge 40”. A este bloque también pertenecía Hernán Giraldo, del frente Resistencia Tayrona130.
El Bloque Central Bolívar, BCB, que hacía presencia en Antioquia,
Bolívar, Santander, Nariño, Vichada y Cesar concluyó su desarme con la
desmovilización de 2 523 combatientes en Santa Rosa del Sur, Bolívar.
130
Ibíd. 1, febrero, 2006.
412
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Los desmovilizados entregaron 1 121 armas entre cortas y largas
y 17 219 cartuchos de munición de diferentes calibres. Además, ocho
camionetas.
Los reinsertados hacían parte de la última facción en armas del grupo ilegal que estaba al mando de Lorenzo González Quinchía, alias
“Macaco”, y Julián Bolívar, quienes se desmovilizaron en Remedios,
Antioquia, el 12 de diciembre de 2005.
La seguridad de la zona quedó a cargo de la V Brigada del Ejército y
el Comando de Policía del Magdalena Medio, que pondrían más hombres en servicio para garantizar la tranquilidad en la serranía de San Lucas, una región disputada por las FARC, el ELN y, antes, por las AUC.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE RESISTENCIA TAYRONA
A las 10:00 a.m. del día 3 de febrero de 2006 se efectuó la desmovilización del Bloque Resistencia Tayrona de las AUC, comandado por
Hernán Giraldo Serna. 1 166 hombres entregaron sus armas en presencia del Comisionado de Paz y el representante de la OEA. La parte
oriental de la Sierra Nevada de Santa Marta ha sido la zona de influencia de este bloque durante los últimos veinte años.
La propuesta de Hernán Giraldo era que los integrantes del Bloque
Resistencia Tayrona, con él a la cabeza, se convirtieran en miembros
de la red de cooperantes, con vigilancia del Inpec. El Gobierno respondió que serían los jueces los encargados de definir cómo se cumplirían las condenas de los miembros de las autodefensas desmovilizados. Pero las autoridades civiles del Magdalena consideraban que,
en aras de la paz, bien valía considerar la permanencia de Giraldo en
la Sierra.
El Gobernador, Trino Luna Correa, había anunciado que los treinta
alcaldes del departamento estarían en la ceremonia de desarme, en el
corregimiento Guachaca, de Santa Marta. También estarían todos los
diputados y varios concejales y empresarios de la zona.
En el año 2001, Carlos Castaño obligó a Giraldo a someterse a “Jorge
40” y anexarse a las AUC. Hernán Giraldo nació en Caldas, y su grupo
413
se llamaba Los Chamizos. Cuando ofreció desmovilizarse manifestó tener
alrededor de 400 hombres, pero al momento de hacerlo resultaron 1 166131.
Después de Ramón Isaza, Hernán Giraldo era el hombre con más
años de autodefensa. Nació en el corregimiento San Bartolomé, de Pácora, Caldas. Siempre lleva un sombrero, un poncho, unas botas, una
pistola al cinto y siempre está acompañado de alguno de sus veinticinco
hijos. Giraldo era visto como “el Patrón” por los campesinos de la Sierra.
Los reinsertados de este bloque entregaron 512 armas largas, 59 armas cortas, 26 armas de apoyo, 73 420 unidades de munición de diferente calibre, 352 granadas, 35 radios 2 m, 9 radios base y 7 vehículos.
Más que un inventario de hombres, armas y bienes, su bloque entregará
una despensa ecológica que ha estado restringida por efectos del conflicto.
DECLARACIONES DE HERNÁN GIRALDO
En reportaje a El Colombiano de Medellín, Hernán Giraldo dio las
siguientes declaraciones:
“Entregamos una zona sin cultivos ilícitos, pero con mucha pobreza, donde viven unos cincuenta mil campesinos que requieren opciones para producir la tierra, porque necesitan vivir de algo, y ojalá, de
algo legal”.
En la ceremonia, los presidentes de 102 juntas de acción comunal le
presentaron al Gobierno un inventario de las obras que hicieron autodefensas y comunidad.
La lista incluye un puente, nueve escuelas rurales, tres puestos de
salud, dos iglesias, tres parques infantiles, seis caminos carreteables,
cinco sistemas veredales de electrificación, cuatro acueductos, tres cementerios y tres canchas deportivas. Todo valorado en más de 20 000
millones de pesos.
131
Op. cit.. 3, febrero, 2006.
414
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El Colombiano: las autodefensas dicen que no son narcotraficantes. ¿Quiénes son entonces?
Hernando Giraldo: el campesino produce la coca por necesidad,
pero quien la procesa está en la clandestinidad, son personas rancias
en el negocio. Eso todos lo saben. Los que son narcotraficantes auténticos, de otrora, hoy nadie los conoce y nadie los conocerá.
E.C.: ¿Quiénes son?
H.G.: las autodefensas son un dragón con mil cabezas y cada
cabeza responde por lo suyo. Nosotros (el bloque) hablamos con
los políticos antes, pero cuando nos encerramos en el monte ese
contacto se acabó. Ahora hemos hablado con algunos para que
nos ayuden en la desmovilización, pero que tengamos un político
propio, nada más lejano de la realidad.
E.C.: ¿Qué quedó del enfrentamiento con los grupos de
Carlos Castaño?
H.G.: Fue un malentendido (derivado de la muerte de tres agentes de la DEA), provocado por terceros, que terminó en enfrentamientos, pero que al final se resolvió a nuestro favor, porque quedó
demostrado que el campesinado estaba con Hernán Giraldo. Cuando un grupo quiso meterse -pensé que era la guerrilla- nos enfrentamos con él hasta que ambos llegamos a la salomónica decisión de
sentarnos a dialogar y lo hicimos con el comando “Jorge 40”.
E.C.: pero las mismas autoridades dijeron que era una guerra
por territorio y por coca.
H.G.: le aseguro que nada de eso tuvo que ver. De todas maneras, no fuimos nosotros los que fuimos a otra parte sino que
otros vinieron donde nosotros y no nos dejamos sacar.
E.C.: ¿Usted cree que la Ley de Justicia y Paz cicatrizará las
heridas de la guerra?
415
H.G.: no sabría decir si las cicatrizará en las regiones donde
hubo masacres. En nuestro territorio nunca hubo una masacre.
De la ley espero que beneficie a las personas que lucharon por
esta causa. Aceptamos que nos judicialicen en pago de 102 veredas que entregamos sin guerrilla, sin secuestro, sin extorsiones y
sin masacres.
E.C.: la norma también beneficiaría a la guerrilla y actos tan
criticados como el secuestro.
H.G.: Colombia se merece la paz. Si miramos la contraparte
con la intención de que seamos nosotros los beneficiados y ella la
perjudicada, no estamos en nada. Si el Gobierno busca la resocialización de este país tiene que ofrecerle perdón a las personas que
han cometido errores. Nadie se entregará si sabe de antemano
que lo van a condenar a penas altas como las estipuladas para
delitos como secuestros y masacres.
E.C.: ¿Cómo repararía a una víctima?
H.G.: es doloroso para las personas que salieron perjudicadas
por las acciones de la guerra, ver que sus victimarios recibieron
beneficios, pero es mucho más complicado dejarlos que sigan delinquiendo.
E.C.: ¿Qué pasará después de la desmovilización?
H.G.: vamos a apoyar al Gobierno, pero el Gobierno tiene
que cumplir con lo que prometió: hacer presencia en la región.
E.C.: ¿En las autodefensas se consigue dinero?
H.G.: Se consiguen satisfacciones. Sobre todo cuando uno ve
que salvó el patrimonio de una familia pobre.
E.C.: ¿Se ha arrepentido de algo?
H.G.: lo único que quisiera es tener veinte años menos.
416
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
E.C.: ¿Para tener cuántos hijos más?
H.G.: Siquiera otros 50132.
Juan David Angel, Director del Programa de Reinserción, manifestó que este aumento en el número de reinsertados era el resultado de
la desmovilización de las redes de apoyo e informantes de las autodefensas. El Ejército en el 2004 había calculado en 13 514 el número de
posibles autodefensas desmovilizables. Con la desmovilización número
27 del bloque Resistencia Tayrona los desmovilizados llegaron a 21 300.
Según estos estimativos, los desmovilizados le iban a representar al Estado colombiano cerca de 100 mil millones de pesos anuales por concepto de ayudas humanitarias, sin tener en cuenta que a la fecha había más
de nueve mil reinsertados individuales entre autodefensas y guerrilleros.
El acto de entrega de Hernán Giraldo fue presidido por el Comisionado Luis Carlos Restrepo. Asistieron el Jefe de la Misión de Apoyo de
la OEA, Sergio Caramagna; la Ministra del Medio Ambiente, Sandra
Suárez; el Gobernador del Magdalena, Trino Luna; el Alcalde de Santa Marta, José Francisco Zúñiga y el Obispo Ugo Puccini. También
estuvieron presentes delegaciones de comunidades de la zona y algunos diputados y alcaldes del departamento. Hernán Giraldo, junto con
sus hombres, entregó 582 armas, 351 granadas y siete vehículos en el
acto de desmovilización cumplido en la vereda quebrada El Sol, corregimiento Guachaca, en la Sierra Nevada, a tres horas de la ciudad de
Santa Marta.
Hernán Giraldo llegó 37 años atrás a esa zona y hace 25 años tomó
las armas y empezó a formar su grupo de autodefensas. Giraldo, además de armas y sus hombres, hizo entrega al Estado de obras por más
de quince mil millones de pesos que incluyen desde iglesias, carreteras,
puentes, puestos de salud, y hasta cementerios y canchas deportivas.
Giraldo y sus hombres permanecerían bajo custodia en Quebrada El
Sol hasta mediados de marzo, fecha en que esperaban el Gobierno les
definiera su situación jurídica.
132
Op. cit. 3, febrero, 2006.
417
Mientras Hernán Giraldo entregaba sus armas, en la vereda La
Mesa, jurisdicción de Valledupar, el Bloque Norte de las AUC, integrado por unos 4 500 hombres bajo el mando de “Jorge 40”, se comenzaba
a concentrar para fijar el día de su desmovilización.
DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUTODEFENSAS CAMPESINAS
DEL MAGDALENA MEDIO
El 7 de febrero de 2006 se produjo la desmovilización de 990 hombres
del más antiguo de los comandantes de las autodefensas, Ramón Isaza
Arango, quien llevaba 28 años como jefe de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio. A Isaza se le considera como fundador de
los primeros grupos de las AUC en la década de los años setenta.
Isaza, conocido como “El Viejo”, por sus 86 años de edad, en el
2005 fue ascendido al rango de Comandante General de las Autodefensas. La ceremonia de desmovilización de Isaza, junto con sus combatientes, se efectuó en la aldea La Merced, cerca al municipio de Puerto
Triunfo en el departamento de Antioquia:
Puerto Triunfo y la localidad vecina de Puerto Boyacá fueron en las
últimas décadas tradicionales bastiones contra la guerrilla de las FARC
y el ELN.
El Alto Comisionado de Paz presidió la ceremonia en la que estuvo
presente Sergio Caramagna, Jefe de la Misión de Apoyo de la OEA. El
propio Isaza dijo que fue el Ejército el que le regaló “ocho escopetas
viejas” en febrero de 1978 para iniciar su lucha contra las guerrillas en
la misma aldea en la que se desmovilizó.
Desde varias semanas atrás los hombres de Isaza se encontraban
concentrados en una finca de La Merced y antes de la entrega formal de
sus armas, funcionarios de la Fiscalía General llevaron a cabo, como en
otras desmovilizaciones, labores para su plena identificación133.
El 22 de febrero de 1978 se enfrentó por primera vez a un grupo de
hombres pertenecientes al noveno frente de las FARC y así comenzó
133
Noticias RCN Radio. [Programa radiofónico]. RCN Radio. 6, febrero, 2006.
418
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
su organización contraguerrillera. Su historia y la de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio pasa por la de nombres como
Jaime Eduardo Rueda Rocha, Pablo Emilio Guarín, Gonzalo Pérez,
su hijo Henry Pérez, asesinado en 1991, y Alonso de Jesús Baquero,
“Vladimir”134.
Los combatientes, distribuidos en cinco frentes, se desmovilizaron
en un acto celebrado en esta localidad de la región ganadera del Magdalena Medio, donde precisamente nacieron hace más de dos décadas los
escuadrones de justicia privada que dieron origen a las AUC.
Ramón Isaza fue conocido por el país en el año 2005 cuando visitó
el Congreso Nacional. Ese día Isaza llegó acompañado por el jefe militar, Salvatore Mancuso, y por el responsable del ala política, “Ernesto Báez”, desmovilizados. Los tres comandantes de las AUC pidieron
perdón en esa ocasión al órgano legislativo de la nación pero también
reclamaron reconocimiento por haber, según ellos, salvado al país del
comunismo.
La desmovilización de Isaza y su gentes fue la número 29 de las efectuadas desde el año 2003, y con la entrega de sus 989 hombres se elevó
a 22 289 el número de reinsertados de las AUC desde cuando se inició
el proceso de desmovilización hasta esta fecha.
Los desmovilizados entregaron 759 armas: 518 armas largas, 192
armas cortas, 49 armas de apoyo, 59 636 unidades de munición de distintos calibres, 487 granadas, 96 radios 2m y 15 vehículos.
Con Ramón Isaza se desarmaron sus hijos y su yerno, “McGuiver”. Aseguraba Ramón Isaza que él no hizo masacres, que solo respondería por muertos en combate. Aseguraba no conocer una mata
de coca porque no trabajó con narcotraficantes. Isaza tiene cara de
campesino, gestos de campesino, su voz es de campesino y se define
como un campesino:
Por considerarlo del mayor interés para el lector y para la reconstrucción de la historia de las AUC, reproducimos la siguiente crónica
134
OQUENDO, Carolina. En: El Tiempo. Bogotá. 6, febrero, 2006.
419
publicada por el Diario El Colombiano de Medellín con ocasión de la
entrega de armas de Ramón Isaza:
Dice que se dedicará a hacer lo que le gusta: sembrar yuca, plátano y
cuidar el ganado, las gallinas y los cerdos…“soy un hombre de campo”.
En su caso, agrega, la decisión de tomar las armas no fue gratuita. El poco
res-paldo de los políticos que visitaron la zona en busca de votos y las quejas
que ignoraron los comandantes de los batallones que visitó para denunciar
las ame-nazas de las FARC en su finca La Estrella del corregimiento Las
Mercedes antes lo obligaron a proveerse la seguridad que otros le negaron.
Así se acercó a la base Guasimal, del Ejército, en Puerto Berrío, donde recibió las primeras ocho escopetas que se las entregó a igual número
de hombres que habían prestado el servicio militar, los primeros en integrar lo que hasta su desmovilización fueron las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio, ACMM.
“Sabía que la guerrilla era bandida y que nosotros teníamos que ser
más bandidos, porque íbamos a pelear con escopetas de un solo tiro y
ellos con fusiles galil, de 20 tiros en un proveedor. Ponía cuatro hombres
en un camino y cuatro en otro; cuando sentía dos tiros, eran guerrilleros
que se iban al suelo. Les quitábamos las armas”. “Don Ramón”, como
lo llaman en Las Mercedes, jura que financió a sus hombres, 96 en total,
con aportes de ganaderos y comerciantes.
El jefe de las ACMM asegura que el grupo a su mando nunca hizo
una masacre y que las personas que perdieron la vida durante los 28
años de lucha estaban relacionados con la guerrilla.
“Ni “Pájaro”, ni “Terror”, ni “McGuiver”, ni yo hemos cometido
masacres. El único que hizo una fue un muchacho, sin permiso, por allá
en Tolima: mató como a once. Ahí lo agarraron y está pagando”.
Varios miembros de la familia Isaza han pertenecido a las ACMM.
Su hijo John fue asesinado por gente de Pablo Escobar y Omar murió
en un accidente. Los otros, Roque y Rubén, y su yerno, conocido con
el alias de “McGuiver”, estuvieron en las AUC y acompañaron a Isaza
al momento de su entrega de armas. Las únicas que permanecieron al
margen de la organización fueron sus cuatro hijas.
420
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Con Isaza Arango se desmovilizaron cinco bloques que actuaban
en la zona de Puerto Nare, el oriente y el suroriente de Antioquia, así
como en los límites con el departamento de Caldas. Se trató de los bloques John Isaza, al mando de Roque; el José Luis Zuluaga, comandado
por “McGuiver”; Héroes del Prodigio, de alias “Rubén”; el frente Ómar
Isaza, que tenía por jefe a alias “Bazo”, y el Celestino Mantilla, comandado por “El Pájaro”.
El Alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, confirmó el
desarme de alias “McGuiver”, jefe del frente José Luis Zuluaga; y de
alias “Gurre”135.
Las armas, munición, explosivos, material de comunicaciones y de
intendencia quedaron al cuidado del Batallón Bárbula de la Decimocuarta Brigada.
El presidente Álvaro Uribe Vélez aseguró el martes 7 de febrero de 2006
que el Gobierno no fracasaría en el proceso de reinserción de los miembros
de los grupos armados ilegales que se habían venido desmovilizando.
El jefe del Estado dijo que para cumplir este objetivo el Gobierno
había creado un esquema administrativo para buscar oportunidades laborales a los reinsertados, cuya gerencia estaba en cabeza de la doctora
Lucía Gutiérrez de Piñeres, Directora de Empleo del Sena.
Adicionalmente, aseguró que se estaba estimulando la creación de
empleos para esta población como auxiliares cívicos, al mando de la
Policía Nacional, sin necesidad de estar armados.
“Hemos tomado la decisión de estimular un número muy grande de
auxiliares cívicos que dependan de la Policía, que no estén armados y
que se dediquen al cuidado de las carreteras, al cuidado de los parques,
a apoyar a la ciudadanía en los estadios, a atender situaciones de desastres, a atender emergencias”, manifestó el presidente Uribe.
135
Op. cit. 8, febrero, 2006.
421
Estos auxiliares cívicos tendrán la oportunidad de estudiar, de manera paralela a su función social, en el Sena o en cualquier otra institución
educativa, como parte del proceso de reinserción a la vida civil.
El mandatario añadió que “por esta razón el Gobierno realiza un
esfuerzo presupuestal grande, el cual tendrá que prorrogar en el tiempo
para que la reinserción no fracase [...] Confío que se desmonte totalmente
la estructura paramilitar y que eso cree condiciones para poder avanzar
en procesos semejantes con las guerrillas”, enfatizó el Presidente136.
ANUNCIAN DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE ÉLMER
CÁRDENAS
El 9 de febrero de 2006 se conoció la noticia según la cual se estaría preparando una nueva desmovilización de autodefensas en el Urabá
antioqueño. Según el Asesor de Paz de Antioquia, el corregimiento de
Pavarandó, del municipio de Mutatá, sería el sitio de concentración del
Bloque Élmer Cárdenas, BEC, al mando de Luis Alfredo Berrío, alias
“El Alemán”. La fecha de esta desmovilización no fue precisada.
El Bloque Élmer Cárdenas es una disidencia de las AUC que venía
operando desde hacía unos 12 años en los municipios Arboletes, San
Juan de Urabá, Necoclí, Mutatá y Dabeiba, en Antioquia; y Jurado,
Ungüía, Acandí, Riosucio, Carmen del Darién y toda la ribera del río
Atrato, en Chocó. También tenía presencia en localidades de Córdoba
y Sucre137.
Ante los graves hechos sucedidos en la vereda Llanos de los Encuentros del municipio de Sabanalarga, Antioquia, en los que perdieron la
vida seis inocentes campesinos, miembros de una misma familia, el ex
comandante Luis Arnulfo Tuberquia, del Bloque Noroccidente Antioqueño de las Autodefensas Unidas de Colombia, aclaró:
1. Condenamos y rechazamos el asesinato de personas inocentes
en el área donde operábamos antes de nuestra desmovilización.
136
SERVICIO PÚBLICO DE EMPLEO. [en línea], febrero 2006. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
137
Op. cit. 9, febrero, 2006.
422
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
2. Es totalmente falso que exista una facción disidente en dicha zona,
ya que la totalidad de los miembros del bloque que el suscrito comandaba se desmovilizaron el día 11 de septiembre de 2005.
3. Si algunos desmovilizados resultaren comprometidos en tan
condenables hechos, todo el peso de la justicia deberá recaer sobre ellos.
4. Presentamos nuestra sincera condolencia a los habitantes de Sabanalarga y, en especial, a los familiares de las víctimas.
5. Nuestra voluntad de paz es total e inquebrantable. El pueblo colombiano puede estar tranquilo porque no lo vamos a defraudar.
Luis Arnulfo Tuberquia, ex comandante Memín138.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE SUR LOS ANDAQUÍES
El 15 de febrero de 2006 se cumplió la entrega número 30 de las
estructuras de las AUC: 552 integrantes de los bloques Próceres del Caguán, Héroes de los Andaquíes y Héroes de Florencia, que dependían
del Bloque Sur Andaquíes, entregaron sus armas en la vereda Liberia,
municipio de Valparaíso, a 60 kilómetros al sur de Florencia.
El acto protocolario de reinserción fue presidido por el Comisionado
de Paz y asistieron, además, “Ernesto Báez”, el delegado de la Misión
de Apoyo al Proceso de paz de la OEA, Stefan Astrom, y el Delegado
del Programa de Reincorporación del Ministerio del Interior y Justicia.
Germán Serna Pico, “Nicolás Rodríguez”, quien comandaba el Bloque Sur Andaquíes reemplazó a Julio Lobo Moreno, hasta enero de
2006, jefe de esos frentes. Lobo, conocido con el alias “Uriel Henao”,
desapareció el 19 de enero del mismo año en la vía a Villavicencio. Allí
fue hallado su vehículo marca Vitara, de blindaje número cinco, con sus
documentos y sin rastros de él.
138
Op. cit. [en línea], febrero 2006. Disponible en Internet: www.colombialibre.org.
423
Los bloques desmovilizados entregaron 341 armas: 314 armas largas, 5 armas cortas, 22 armas de apoyo, 92 605 unidades de munición
de diferente calibre, 155 granadas, 8 radios de comunicación139.
El Bloque Central Bolívar estuvo conformado por unos 37 frentes en
todo el país y hasta la fecha había realizado desarmes en Remedios, nordeste antioqueño, y en el sur de Bolívar. Jaime Montañez fue el primero
en entregar las armas en la vereda Liberia, del municipio de Valparaíso.
Con los 552 combatientes que se entregaron en el municipio de Valparaíso, en el departamento del Caquetá, ya eran 21 850 los desmovilizados en el marco del proceso de paz con las AUC iniciado en 2003140.
COMUNICADO DE LAS FARC
El 21 de febrero de 2006 se conoció el siguiente comunicado de las FARC:
1. El presidente Uribe en uno de sus actos políticos de campaña, realizado el pasado 11 de febrero en La Mesa, Cundinamarca, ha
insinuado a las FARC el diálogo de paz apoyándose en el argumento mentiroso del desmonte del paramilitarismo en Colombia.
2. Por el contrario, la política paramilitar de Estado durante este
gobierno está siendo legalizada y con ella institucionalizada la
impunidad de su terrorismo, en contra de los luchadores sociales, populares y revolucionarios. Es de público conocimiento que
los paramilitares mantienen intactas sus criminales estructuras
y que procuran más curules e incidencia política a nivel de la
administración pública.
3. Más de la mitad de los paramilitares supuestamente desmovilizados no han entregado sus armas, una parte de esta gente está
prestando vigilancia sobre las carreteras, otros como empleados
en centros productivos o en oficinas estatales de celadores, otros
fueron desplegados a ejecutar planes de asesinatos selectivos,
amenazas y desplazamientos forzados de la oposición al Go-
139
Op. cit. 16, febrero, 2006.
140
Noticias RCN. [Programa televisivo]. Bogotá: RCN Televisión. 16, febrero, 2006.
424
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
bierno en distintas regiones del país, y al mismo tiempo con la
misión de hacer campaña por la reelección presidencial de Uribe y sus voceros al Congreso, las gobernaciones, las asambleas
departamentales, las alcaldías y los concejos municipales. Otra
cantidad considerable de estos elementos del uribismo abandonados por su gobierno andan sueltos como Pedro por su casa
causando grave daño y zozobra entre la gente honesta y decente
de los poblados y campos de Colombia. La ONU en su informe
reciente acaba de denunciar el aumento de muertos, desaparecidos y desplazados a cuenta de estas bandas, hecho que certifica
la enorme distancia entre las fantasías del Presidente y la verdad
de la llamada política de paz con sus paramilitares de Ralito.
Ni siquiera el Gobierno de Uribe puede garantizar a los jefes
paramilitares que no serán extraditados a Estados Unidos en
cualquier momento, porque por encima de las consideraciones
políticas, del pago de favores por los aportes a su campaña por
la presidencia o por la inocultable afinidad con ellos, están los
compromisos con la Casa Blanca.
4. Ante el estruendoso fracaso del Plan Patriota, y movido por el
cálculo electoral reeleccionista, ahora el presidente Uribe aparenta agitar la bandera de la paz montado en la farsa de la desmovilización paramilitar. Si su gobierno se negó a desmilitarizar
los municipios de Pradera y Florida para buscar un acuerdo de
intercambio humanitario de prisioneros, no creemos que esté
dispuesto a despejar de tropas los departamentos de Caquetá y
Putumayo, como nuevo escenario de los futuros diálogos de paz.
Además es imposible el diálogo con este gobierno mientras persista en su estrategia mediática de calificar a la insurgencia como
narcoterrorista y mientras siga criminalizando la protesta y la
inconformidad popular.
Colombia necesita y merece la paz, pero Uribe representa todo lo
contrario: es guerra irracional y es incendio del país, olvido de los
programas sociales, entrega de nuestra soberanía a los gringos, impuestos y más impuestos, ganancias para las empresas y pobreza para
los colombianos. Lo que está en juego en estas elecciones es el futuro
de Colombia, la reconciliación y reconstrucción del país en paz, la
posibilidad de los cambios estructurales represados por tantos años, la
justicia social, la soberanía y la democracia verdadera. En todo esto
425
debemos pensar los colombianos de cara a los comicios electorales
que se avecinan.
Secretariado del Estado Mayor Central
Montañas de Colombia, febrero 14 de 2006
El comunicado no rechaza el llamado intercambio humanitario, ni
se refiere de manera concreta a la propuesta que sobre el intercambio
hicieron Francia, Suiza y España.
DESMOVILIZACIÓN DEL FRENTE SUR PUTUMAYO
En Puerto Asís, Putumayo, el 1 de marzo de 2006, un total de 504
miembros del Frente Sur Putumayo del Bloque Central Bolívar de las
Autodefensas Unidas de Colombia se desmovilizaron e iniciaron su
proceso de reincorporación a la vida civil.
La ceremonia de entrega de armas se cumplió en el corregimiento
Santa Ana, vereda La Esperanza, municipio de Puerto Asís.
Al evento asistieron el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos
Restrepo; el Gobernador de Putumayo, Fabián Alfonso Balnavis Barreiro; el Alcalde de Puerto Asís, Luis Fernando Gaviria; el Delegado del
Programa de Reincorporación a la Vida Civil, Jorge Rodríguez; el Jefe
de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz MAPP/OEA, Sergio Caramagna, entre otros.
Con esta desmovilización son 30 las estructuras de las Autodefensas
Unidas de Colombia que han hecho dejación de armas dentro del proceso de paz que adelantan con el gobierno nacional.
Los integrantes del Frente Sur Putumayo entregaron, en un conteo
preliminar, 292 armas: 217 armas largas, 49 armas cortas, 26 armas de
apoyo, 33 592 unidades de munición de diferente calibre, 421 granadas,
11 radios y un vehículo.
426
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
DESMOVILIZACIÓN DEL FRENTE JULIO PEINADO BECERRA
En San Martín, Cesar, el 4 de marzo de 2006, la totalidad de integrantes
del frente Julio Peinado Becerra de las AUC, 251 hombres y mujeres, se
desmovilizaron e iniciaron su proceso de reincorporación a la vida civil.
Esta era la octava desmovilización colectiva que se realizaba en lo
corrido del año 2006 dentro del proceso que adelantaba el Gobierno
con las Autodefensas Unidas de Colombia.
El evento, que contó con la presencia del Alto Comisionado para la
Paz, se llevó a cabo en el corregimiento Torcoroma del municipio de
San Martín, departamento del Cesar.
Asistieron, además, el Gobernador del Cesar, Hernando Molina
Araújo; el Alcalde de San Martín, Luis Dorián Quintero; el Coordinador Regional de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA, Gonzalo Román; el Director del Programa de Reincorporación a la Vida Civil del Ministerio del Interior y Justicia, Juan David Angel; autoridades
militares y civiles de la región.
Esta estructura armada hacía parte del Bloque Norte y operaba al
sur del departamento del Cesar.
Los desmovilizados entregaron 89 armas largas, 53 armas cortas, 37
armas de apoyo, 35046 unidades de munición de diferente calibre, 357
granadas, 28 radios 2 m; 2 vehículos y 5 motocicletas.
RECONOCIMIENTO DE ESTATUS POLÍTICO A DELEGADOS
DEL ELN
El 24 de marzo de 2006 el Gobierno Nacional reconoció a los delegados del ELN estatus político, según declaración leída por el Alto
Comisionado para la Paz en La Habana, Cuba.
Según el funcionario, con esta decisión se le abre un espacio político
al ELN, confiando en que habría soluciones rápidas y efectivas al problema de la violencia en Colombia. El texto del comunicado expedido
de manera conjunta por el Comisionado de Paz y los delegados del
ELN es el siguiente:
427
Comunicado conjunto del Gobierno y el ELN a la opinión pública nacional:
El Gobierno Nacional y el ELN reafirman como eje central de la actual Fase Formal Exploratoria el tratamiento de los temas relacionados
con la agenda y el diseño general del proceso de paz.
Para estabilizar la mesa de diálogo y poner en marcha procedimientos y rutinas de trabajo que permitan culminar con éxito la Fase Formal
Exploratoria, el Gobierno Nacional y el ELN han creado un mecanismo alterno y complementario a la mesa para tratar asuntos que permitan aclimatar la confianza entre las partes y solucionar dificultades que
surjan en el curso del diálogo.
Haciendo uso de este mecanismo y con el propósito de construir
un mejor clima de confianza y darle estabilidad al proceso de paz, el
Gobierno Nacional reconoce la calidad de Miembro Representante a
los integrantes de la delegación del ELN, de conformidad con la Ley
782 de 2002.
La incorporación de la comunidad internacional como testigos,
en el tratamiento de las dificultades iniciales, ha permitido darle
estabilidad a la mesa de diálogo, despejando así el camino para
continuar el trabajo del diseño del proceso y de construcción de la
agenda.
El país debe ser consciente que para la solución de un conflicto tan
prolongado se requiere un trabajo serio y sostenido, donde la creación
de confianza logrará ser un factor determinante en la estabilidad del
mismo. En tal sentido, la participación de la sociedad colombiana y el
acompañamiento de la comunidad internacional son de gran importancia para el futuro del proceso de paz
Por el Gobierno Nacional,
Luis Carlos Restrepo Ramírez
Alto Comisionado para la Paz
428
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Por el ELN,
Comandante Antonio García
Comando Central - ELN.
Se firma en la ciudad de La Habana, Cuba, el 24 de febrero de 2006141.
Al cierre de la segunda ronda de diálogos entre el Gobierno Nacional y el ELN, los participantes en ese encuentro anunciaron una tercera
reunión para el mes de abril de 2006 en La Habana.
Según el Comisionado de Paz, esa reunión fue una primera aproximación a lo que podrían ser los ejes estructurales y las líneas fundamentales del diseño de un posible proceso de paz entre el Gobierno y
esa organización. Tanto el comisionado como el señor Antonio García
enfatizaron el hecho de haber logrado estabilizar los contactos entre las
partes.
Para el Alto Comisionado resultó importante poder escucharse, “dar
por recibidos mutuamente estos puntos de vista, de tal manera que nos
preparemos para la tercera ronda y podamos llegar con documentos
más elaborados, sustentados, que nos permitan ir avanzando hacia
acuerdos”142.
Antonio García, por su parte, indicó que “la paz es el tema central
de la política colombiana”. Por eso, dijo, el hecho de que los diálogos
coincidan con el proceso electoral es “importante en la medida en que
puede motivar la toma de decisión” de los colombianos143.
Gesto de paz del ELN
En un gesto de paz del ELN, Antonio García, uno de los máximos
dirigentes de esa agrupación al margen de la ley, anunció que ese grupo
no atentaría contra la jornada electoral que avanzaba en el país con miras a elegir miembros del Congreso de la República.
141
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
142
Op. cit. 27, febrero, 2006.
143
Ibíd. 27, febrero, 2006.
429
En una teleconferencia desde La Habana, Antonio García manifestó
que se trataba de una manifestación unilateral del ELN a favor de la
paz. El líder guerrillero aclaró, sin embargo, que la decisión del ELN no
implicaba un cese al fuego, ni una invitación a los colombianos a votar.
El 8 de marzo de 2006 el Gobierno reconoció a Antonio García,
Ramiro Vargas y Francisco Galán como miembros representantes de
la guerrilla del ELN por un período de tres meses. Según la resolución
oficial, divulgada por la Presidencia de la República, el Gobierno consideró necesaria esta decisión para que el ELN pudiera continuar la fase
formal exploratoria que se adelantaba en La Habana y darle estabilidad
al proceso.
El Gobierno Nacional y el ELN realizaron en diciembre de 2005 una
fase exploratoria de negociaciones en Cuba, la cual continuarían en el
mes de mayo de 2006.
La tercera semana de enero de 2006, la Sijín desplegó un rápido y
certero operativo en las afueras de Bogotá, que contó con aprobación
del Gobierno, y logró capturar a Walter Guisao Ochoa, “El Gurre”,
uno de los más destacados lugartenientes de Ramón Isaza.
La noticia de su captura se regó como pólvora entre los ganaderos
del Magdalena Medio que creyeron que era un error, pues faltaban tan
solo unos días para que “El Gurre” y Ramón Isaza, su jefe y padre
adoptivo, se desmovilizaran junto con 989 integrantes de las autodefensas de la región. “El Gurre” fue capturado por negarse a entregar
voluntariamente sus armas al Gobierno.
Otros tenientes de Isaza, “McGuiver” y “El Pájaro”, también se habían negado a entregar sus armas pero fueron convencidos finalmente
por el Comisionado de Paz para que lo hicieran.
“El Gurre” apareció uniformado y armado en la ceremonia de desmovilización que se cumplió el pasado 5 de febrero en Puerto Triunfo. Es
más, su nombre fue inscrito entre los desmovilizados. Se supo que Ramón
Isaza exigió que su comandante consentido entrara en la desmovilización
y amenazó con aplazar su desarme si esto no ocurría. La versión oficial,
430
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
sin embargo, es que después de la captura, el paramilitar manifestó su
deseo de dejar las armas y su solicitud fue atendida por el Gobierno144.
DESMOVILIZACIÓN APRESURADA
El líder del Bloque Norte de las AUC, “Jorge 40”, opinó que la desmovilización de las AUC había sido apresurada y agregó que mientras
continuaran las economías ilícitas, el conflicto continuaría. Con su desarme en el corregimiento La Mesa, de Valledupar, las AUC estarían
dando cumplimiento al acuerdo de Santa Fe de Ralito de desmovilizar
todo el aparato militar. Insistió en que unas 6 000 personas volverían a
sus familias y emprenderían el camino más duro: el de la reincorporación a un ambiente social para el que no estaban preparadas.
A su juicio, el Gobierno había reducido el problema de las desmovilizaciones a la entrega de un auxilio de 358 000 pesos a cada uno de los desmovilizados, lo cual no garantizaba la reinserción efectiva de los ex combatientes.
Sobre el tema del narcotráfico, aceptó que su facción cobró gramaje,
pero advirtió que “las economías ilícitas en esta zona no alcanzan a representar el 2% del total de las finanzas de las autodefensas. Si quedan
los cultivos otros grupos u otras personas pueden llegar detrás de ellos.
Los narcotraficantes pueden llegar a las zonas y si no hay una reinserción efectiva los desmovilizados pueden volver a las armas”145.
Con el desarme del Bloque Norte de las AUC, la estructura militar
de esta organización ilegal desaparece, tal y como se había pactado en
2003. El entonces jefe de las AUC, Salvatore Mancuso, había anunciado la desmovilización de cerca de 15 000 combatientes en todo el país.
Sin embargo, con esta última entrega el número de desmovilizados se
estaría elevando a 27 000.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE NORTE DE “JORGE 40”
El 8 de marzo, Rodrigo Tovar Pupo, “Jorge 40”, el último jefe de las
AUC, se desmovilizó en el corregimiento de Chimila, municipio de El Copey, Cesar, luego de hacerle entrega de su fusil al maestro Rafael Escalona.
144
UNIDAD INVESTIGATIVA EL TIEMPO. [en línea]. Disponible en Internet: www.eltiempo.com.
145
Op. cit. 16, marzo, 2006.
431
Fueron 2 215 hombres del bloque Norte los que se desmovilizaron
en ese caserío a 25 kilómetros de Valledupar, en las estribaciones de la
Sierra Nevada de Santa Marta.
Esta fue la estructura paramilitar número 33 que entregó las armas.
Según el comisionado Luis Carlos Restrepo, el 25% del territorio nacional quedó libre de actores ilegales. En total los grupos de las AUC
desmovilizados entregaron 15 000 armas, lo que equivaldría a un arma
por cada dos combatientes.
Rodrigo Tovar Pupo manifestó estar dispuesto a comparecer ante las
cortes de Estados Unidos y Europa para asumir el grado de responsabilidad que le corresponda en el tema del narcotráfico.
Explicó que ello sería posible si el Gobierno Nacional lideraba un
proceso, a través de canales diplomáticos y mecanismos de cooperación
judicial, que permitiera aclarar cualquier participación del bloque Norte en esos hechos.
Reconoció que algunos frentes utilizaron durante el conflicto recursos provenientes de la droga, la cual se convirtió en la principal fuente
de ingresos de la guerrilla y de las autodefensas, y que de allí nacieron
las luchas por el control de los territorios de producción.
En su discurso, el Alto Comisionado para la Paz aseguró que no
se están formando nuevas autodefensas, sino grupos de narcotraficantes cuyo número no supera los 65 hombres. “Ningún comandante está
comprometido en esto”, dijo146.
Al acto asistieron, además del comisionado Restrepo y el delegado
de la OEA, Sergio Caramagna, los gobernadores de La Guajira, Magdalena y Cesar y decenas de alcaldes.
También estuvieron los embajadores de México, Argentina y Holanda, el agregado político de Japón, la clase dirigente del Cesar y campesinos de la región.
146
Op. cit. 11, marzo, 2006.
432
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Después de la desmovilización de “Jorge 40” y los hombres del Bloque Norte de las AUC, los ex comandantes de esa organización publicaron en su página Web las siguientes reflexiones:
Reflexiones sobre los comienzos y los finales
El viernes 10 de marzo de 2006, con la desmovilización de los últimos frentes del Bloque Norte, al mando del comandante Jorge 40, ha
concluido la desarticulación de la estructura armada de las Autodefensas Unidas de Colombia, honrando de esta manera los compromisos
adquiridos con el Gobierno Nacional, compromisos que se pactaron del
cara al país y a la comunidad internacional.
Termina así un proceso plagado de dificultades, y en el que reconocemos que ni nosotros, ni el gobierno, ni la sociedad, han tenido la suficiente preparación. Esta aparente contradicción se explica por la magnitud
del número de hombres y mujeres desmovilizados, que en cifra cercana a
los 26 000 han planteado ingentes retos que debemos solucionar.
Uno de los interrogantes que más a menudo se plantean quienes han
sido críticos acerbos de este proceso de desarme, por cierto sin antecedentes en la Colombia contemporánea, es la relación de desmovilizados
con respecto a las armas entregadas. Lo explicamos en su momento,
pero lo volvemos a hacer, con el ánimo de que quienes quieran entender, y sean de buena fe, lo hagan.
Una fuerza como la de la Autodefensa, que perduró en muchas regiones por varios lustros, solo puede sostenerse en ese tiempo si tiene
estructuras de apoyo en lo logístico fuertes y muy bien conformadas. Colaboradores que suministran desde el avituallamiento habitual de las tropas (alimentación, vestuario, medicinas), pasando por los pertrechos de
guerra, y siguiendo con las labores cotidianas que implica la vida de todo
ser humano (aseo, raciones alimenticias, descanso), incluso la vital atención médica y paramédica, además de la indispensable comunicación.
Capítulo aparte merecen las redes de inteligencia que tuvimos que
construir para enfrentar enemigos tan poderosos y que nos excedían
ampliamente en experiencia militar, como la guerrilla marxista. Estas
redes nos permitieron ser efectivos en la guerra y brindarle a la patria
zonas libres de su nefasta influencia.
433
Pues bien, habríamos sido irresponsables si todas las personas que de
buena fe proporcionaron la logística necesaria y la colaboración imprescindible en las labores que debíamos desempeñar, quedaran abandonadas a su suerte, después de habernos prestado su valioso concurso. Por
eso, los invitamos a sumarse a las desmovilizaciones. Esta es la razón
para que no haya una relación uno a uno entre ex combatientes y armas
cortas y largas entregadas.
Otro asunto espinoso que se ha tocado con insistencia en estos días
ha sido la supuesta o real participación de desmovilizados en delitos,
especialmente los relacionados con extorsiones, narcotráfico o redes de
protección para quienes están dedicados a este delito. Al respecto, nuestra posición ha sido de una claridad meridiana: quienes abandonaron
las filas de la autodefensa deben convertirse en ciudadanos comunes y
corrientes, después del necesario proceso de adaptación que debe hacerse (este es un tema al que nos referiremos más adelante). Cualquier infracción de la ley que cometan los desmovilizados, debe ser investigada,
procesada y castigada.
Flaco servicio se le hace a la paz lanzando acusaciones generales que
desacreditan buena parte del esfuerzo realizado, como las lanzadas por
el señor Sergio Caramagna, o las ligeras declaraciones del señor Vicepresidente de la República, endilgándole toda la responsabilidad de lo
que hagan los desmovilizados a quienes fueran sus comandantes.
No estamos eludiendo las responsabilidades que nos competan, pero
son las autoridades legítimamente constituidas las que deben investigar
y apresar a los responsables de conductas punitivas. No pueden los comandantes reemplazar las funciones del Estado, pues precisamente una
de las razones para que estemos en este proceso de paz, es justamente
para que ese Estado asuma las responsabilidades que está obligado a
cumplir. No es el terreno de las amenazas y las intimidaciones el más
fértil para sembrar las semillas de la paz.
De otro lado, y somos conscientes de que estamos lloviendo sobre
mojado, conviene reiterar una vez más que este proceso no termina con
la entrega de las armas, los discursos, las fotos y las imágenes en los
noticieros de televisión.
434
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Es más, nos atrevemos a señalar que la entrega de las armas es apenas la cuota inicial, el punto de partida. Ahora debe venir el esfuerzo de
toda la sociedad de Colombia para que los ex combatientes, que muchos
de ellos solo saben hacer la guerra, aprendan a convivir en armonía, y
aprendan a acatar las normas de la convivencia pacífica y el respeto por
nuestro ordenamiento jurídico.
En la medida en que se tenga éxito en esta gigantesca tarea, se podrá decir que nuestra desmovilización fue exitosa. De lo contrario, y
de una vez decimos que esta labor no es nuestra responsabilidad, los
ex combatientes serán reciclados por otros actores armados, incluida la
delincuencia común.
De tal suerte que los retos que nos impone la hora presente son monumentales. Nosotros hemos puesto toda nuestra voluntad para llegar
a puerto seguro. Pero nuestra responsabilidad colectiva cesa a partir de
este momento. Nos corresponde ahora, desde la esfera individual que
cada uno maneja, seguirle aportando y apostando a la construcción de
un país justo e incluyente.
Estas páginas de internet seguirán al servicio de las causas que conduzcan al bienestar de quienes integraron nuestras estructuras, de su
familia, su entorno y la sociedad en general.
¡Buen viento y buena mar, hombres y mujeres en pie de paz!
¡Que el Dios de Colombia nos arrope a todos con su misericordia,
su infinita bondad, y nos lleve hacia la reconciliación y la concordia
nacionales!
Consejo Editorial
Ex Comandantes AUC147
Los desmovilizados entregaron 388 armas largas, 199 armas cortas,
38 armas de apoyo, 47 640 unidades de munición de diferente calibre,
378 granadas, 99 radios 2 m, 1 radio base, 5 vehículos y 6 motocicletas.
147
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.colombialibre.org.
435
“ANTONIO GARCÍA” MANIFIESTA DESACUERDO
El 14 de marzo de 2006, el portavoz del ELN, Eliécer Erlington Chamorro Acosta, “Antonio García”, manifestó su desacuerdo con el reconocimiento político que a él y a los señores Rafael Sierra Granada
(“Ramiro Vargas”), Gerardo Antonio Bermúdez Sánchez (“Francisco
Galán”) y a los otros dos voceros de esa agrupación, les hizo el Gobierno Nacional. La vigencia de ese reconocimiento “quiere decir que es
un proceso de paz hasta mayo”, advirtió el líder insurgente desde La
Habana.
En declaraciones a la cadena radial RCN, “García” manifestó: “estamos ante una incertidumbre todavía, donde las políticas de paz no
se han configurado con claridad de parte de este Gobierno”. Para el
jefe guerrillero el plazo obligaría al ELN a reconsiderar la decisión que
adopte el Ejecutivo una vez expire el reconocimiento político148.
El 17 de marzo de 2006 el presidente de la república, Álvaro Uribe
Vélez, hizo la siguiente declaración pública:
Declaración del Presidente de la República
En el Consejo de Seguridad que acaba de concluir, hemos tomado
siguiente decisión: consideramos que para la paz del país es de gran
importancia que los guerrilleros de la FARC que están en la cárcel se
puedan desmovilizar y contribuir eficazmente a que los guerrilleros que
están por fuera de la cárcel, de las FARC, en las escuadras terroristas,
se desmovilicen.
En consecuencia, hemos autorizado al Alto Comisionado para estimular los procesos de desmovilización de guerrilleros en la cárcel. Y
si un guerrillero de la FARC, además de desmovilizarse, contribuye eficazmente para que guerrilleros de la FARC que están por fuera de la
cárcel se desmovilicen, el Gobierno buscará que a aquel guerrillero que
está en la cárcel, como respuesta a su gestión para ayudar a desmovilizar a los guerrilleros que están por fuera de la cárcel, se le aplique la Ley
de Justicia y Paz.
148
Op. cit. Noticias RCN Radio. [Programa radiofónico]. RCN Radio. 14, marzo, 2006.
436
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Consideramos que esto puede ser de tal importancia, que el Gobierno incluso, si el texto actual de la Ley de Justicia y Paz no lo permitiera,
propondría una modificación de ese texto al Honorable Congreso de
la República. En resumen, para avanzar más hacia la paz, el Gobierno
está dispuesto a considerar como elegibles para la Ley de Justicia y Paz
a los guerrilleros de las FARC que están en la cárcel, con dos condiciones. La primera, que ellos acepten desmovilizarse. Y la segunda, que
ellos contribuyan eficazmente a la desmovilización de los guerrilleros
de las FARC que continúan en las cuadrillas terroristas.
Se les aplicaría a estos guerrilleros la Ley de Justicia y Paz en su
actual texto. Y si hubiere problemas de interpretación por parte de la
justicia, el Gobierno está dispuesto a proponer la enmienda requerida
al Honorable Congreso.
Bogotá, 17 de marzo de 2006
“ANTONIO GARCÍA” VENDRÍA A COLOMBIA
El 21 de marzo de 2006 se supo que durante los primeros días de
abril, el líder militar del ELN, “Antonio García”, estaría en Colombia
a donde llegaría procedente de Cuba con el fin de iniciar contactos tendientes a un diálogo de paz con el Gobierno Nacional, el cual le otorgaría un salvoconducto.
Su primera escala sería la “Casa de Paz” ubicada en el corregimiento
San Cristóbal, de Medellín, donde tenía prevista una reunión pública
para refrendar la intención política de su grupo. Después viajaría a Bogotá, para una estadía que podría ser alrededor de una semana.
“García” se alojaría en una sede facilitada por la Conferencia Episcopal y tendría previstos algunos contactos con representantes de la sociedad civil y de los países europeos que estaban apoyando el proceso
con el ELN.
El 22 de marzo de 2006 se conoció la noticia según la cual Estados
Unidos acababa de abrir un proceso contra las FARC mediante la vinculación de 50 miembros de esa organización a un proceso judicial por
437
exportar cocaína a ese país por valor de 25 mil millones de dólares en
un período de aproximadamente diez años.
Entre los acusados figuraban siete miembros del secretariado de las
FARC con “Manuel Marulanda” a la cabeza. Así mismo, fueron sindicados 17 miembros del Estado Mayor conjunto y otros mandos medios.
Estados Unidos también ofreció el pago de 75 millones de dólares por
unos 30 de los mencionados, 5 millones por los miembros del secretariado y 2.5 millones por los del Estado Mayor, y oficializó el pedido de
extradición de tres guerrilleros que estaban en poder de las autoridades
colombianas.
El 23 de marzo de 2003, el señor “Martín Llanos”, comandante de
las Autodefensas Campesinas de Casanare, desmintió la noticia que
había circulado anteriormente en el sentido que la organización a su
mando se desmovilizaría próximamente.
“Llanos”, en un comunicado emitido en la fecha, dijo: no fuimos
la fuente de esta noticia que fue difundida la semana pasada. Todos
nuestros comunicados son enviados vía email y publicados en nuestra
página de internet149.
Además, afirmó que la muerte del vocero de las Autodefensas del
Casanare, que servía de enlace con el Gobierno, provocó la postergación de los diálogos orientados a la desmovilización. Sin embargo, reconoció que los miembros del grupo armado ilegal mantenían su interés
por acogerse a la Ley de Justicia y Paz.
Este es el texto del comunicado:
Declaración de las Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC
Llanos de Colombia, marzo 24 de 2.000
Las Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC, consideran que es
deber suyo hacer las siguientes precisiones ante el país:
149
LLANO ADENTRO. [en línea]. Disponible en Internet: www.llanoadentro.com.
438
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Primero: antes de tomar fundamentales determinaciones las ACC
envían un fraternal saludo a la población casanareña y territorios donde
hemos operado. Nuestra lucha fue contra la guerrilla que tenía agotada
la región, defendiendo la vida y bienes de los habitantes.
La comunidad sabe que nuestra meta no es la criminalidad en ninguna de sus manifestaciones, todo lo que hicimos fue en defensa de nuestra región, para que la gente pudiera trabajar en paz. A esa comunidad
que entendió nuestra misión enviamos un caluroso saludo y la gratitud
por su solidaridad y apoyo.
Segundo: históricamente fueron estas autodefensas las primeras en
entrar en conversaciones con el Gobierno para estudiar cómo se viabilizaba una seria y definitiva política de paz para Colombia.
Tercero: para poner a caminar el proyecto, solicitamos garantías tanto para la cúpula de estas autodefensas como para todos sus integrantes.
Cuarto: la muerte del vocero de la ACC que servía de puente entre
el Gobierno y nosotros fue causa de una no deseada postergación de
los comunes empeños. Por lo mismo, no tiene asidero alguno la noticia
abordada por la prensa de nuestra inmediata reinserción. No fuimos la
fuente de esta noticia que fue difundida la semana pasada; todos nuestros comunicados son enviados vía email y publicados en nuestra página de internet.
Quinto: sin embargo, todos nuestros efectivos que se encuentran detenidos, ejerciendo el derecho legal de la desmovilización individual,
adelantan los trámites para acogerse a la Ley de Justicia y Paz.
Sexto: manifestamos ahora, con absoluta claridad, que estamos prestos para nuestra desmovilización con la totalidad de nuestros frentes,
previas garantías para todos los miembros de nuestra organización y
para los familiares de los mismos.
Séptimo: consecuencia de los puntos anteriores, solicitamos al Gobierno (Alto Comisionado para la Paz) nos permita nombrar un vocero para que se entienda directamente con los entes estatales y sirva
de puente comunicador entre nuestra voluntad de paz y las decisiones
finales que tome el Gobierno.
439
Octavo: nuestra permanencia en la comandancia de las ACC solo ha
tenido, tiene y tendrá un objetivo: no permitir que la guerrilla regrese a
esta región. Casanare vive una etapa de paz que no puede ser alterada
por nuestra posible reinserción a la política de paz del actual Gobierno.
Noveno: por último, solicitamos exactamente igual tratamiento al
que se les dio a todas las organizaciones de autodefensas que se reunieron en Santa Fe de Ralito. En consecuencia, y en concreto, pedimos
al Alto Comisionado de Paz retomar los diálogos con nuestra organización, buscar un territorio en Casanare para nuestra desmovilización
y ubicación, con proyección de granja agrícola, que sirva para nuestro
tranquilo confinamiento.
Cordial saludo,
Estado Mayor Conjunto ACC150
POSIBLE APARICIÓN DE NUEVOS GRUPOS IRREGULARES
El 24 de marzo se conocieron afirmaciones de “Ernesto Báez”, ex
comandante de las AUC, en el sentido que muchos de los hombres reinsertados estarían ofreciéndose para integrar grupos irregulares ante la
carencia de oportunidades de empleo.
Los ex comandantes de las AUC propusieron entregar 100 000 hectáreas para reparar a las víctimas de las autodefensas. “Jorge 40”, jefe
del Bloque Norte de las AUC, sería el que más tierras entregaría: 20 000
hectáreas en Magdalena y Cesar.
El Ministro del Interior y de Justicia, Sabas Pretelt de la Vega, confirmó que el Gobierno ya tenía información sobre esas propiedades,
casi todas ubicadas en la Costa Atlántica, Antioquia, Meta y Casanare
y que, en principio, también serían utilizadas para los proyectos productivos de los desmovilizados.
150
Ibíd. [en línea]. Disponible en Internet: www.llanoadentro.com.
440
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
“Jorge 40” ofreció entregar 20 000 hectáreas en Cesar y Magdalena;
Vicente Castaño, el mayor de los hermanos Castaño, cofundadores de
las AUC, otras 15 000 en Antioquia y los Llanos Orientales; Salvatore
Mancuso, 10 000 más en Córdoba y Sucre. Y cabecillas como “Cuco
Vanoy”, “Ernesto Báez”, “Don Berna”, “Macaco”, “Pablo Arauca” y
Hernán Giraldo también anunciaron la entrega de una cantidad de tierras importante, señaló Juan David Ángel, Director del Programa de
Reinserción151.
El 28 de marzo de 2006 se supo que “Antonio García” llegaría al país
el 17 de abril y comenzaría sus diálogos con gobiernos locales, congresistas, empresarios y otros sectores de la sociedad sobre las perspectivas
de un proceso de paz entre el Gobierno Nacional y el ELN. El jefe guerrillero actuaría con el estatus político que le concedió el Gobierno. El
Alto Comisionado para la Paz anunció el aval del Gobierno a esas gestiones, tras la invitación que los garantes de la “Casa de Paz” le hicieron
al jefe militar del grupo armado para que viniera a Colombia.
El anuncio fue hecho tras una reunión con “Francisco Galán”, el grupo de garantes, el ex Procurador Jaime Bernal, María Emma Mejía, Alejo
Vargas, Monseñor Jaime Prieto y el ex Presidente de la USO, Hernando
Hernández. La próxima ronda en Cuba será entre el 2 y el 12 de mayo.
AYUDA HUMANITARIA DE LA UNIÓN EUROPEA
El 28 de marzo de 2006 se conoció el otorgamiento por parte de la
Unión Europea de una ayuda humanitaria por valor de 14.5 millones de
dólares con destino a desplazados por el conflicto armado en Colombia.
Los recursos estaban destinados a unos 169 mil desplazados, incluidos
63 700 refugiados en Ecuador, Venezuela y Panamá.
CONCENTRACIÓN DEL ELMER CÁRDENAS
El Bloque de Autodefensas Élmer Cárdenas, que operaba en el Urabá antioqueño y chocoano, inició el proceso de concentración de hombres con el objetivo de desmovilizarse en tres fases, anunció el 28 de
marzo de 2006 el Aalto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
151
TORRES, John Jairo. Redactor Períodico El Tiempo.
441
El alto funcionario del Gobierno colombiano explicó que en la primera fase entregarían las armas el Frente Costanero y los hombres que
se encontraban en el Valle del Danela; la segunda etapa de este proceso
comprometía a los miembros que operaban en las cercanías al río Atrato y la serranía del Baudó; y la tercera era básicamente el resto de la
estructura que se hallaba cerca del corregimiento de Pavarandó.
De esta manera, por lo menos 1 000 combatientes dejarían las armas luego de superar inconvenientes como la negativa que inicialmente
expresó el grupo a través de su página de internet, donde afirmaba que
para el BEC no había posibilidad de paz sin un escenario de verdad,
justicia y desarrollo.
El sitio inicial, según Luis Carlos Restrepo, sería el corregimiento
El Mellito, del municipio antioqueño de Necoclí, en la zona de Urabá,
donde ya se encontraba el Delegado de la Oficina del Alto Comisionado, Darío Mejía, coordinando el proceso. Allí llegarían los hombres del
frente Costanero.
Para brindar seguridad a la población, el Alto Comisionado para la
Paz explicó que con la fuerza pública se había venido trabajando con
el fin de fortalecer la presencia de efectivos en Urabá. “Sobre todo para
hacer un cubrimiento en una región del Chocó que se encuentra entre
el río Atrato y la Serranía del Baudó. Allí se hará un esfuerzo conjunto
por parte del Ejército y de la Marina; incluso en este momento ya hay
un batallón en Riosucio que está preparado para entrar en el sitio”152.
El Gobierno Colombiano y la guerrilla del ELN aplazaron para comienzos de mayo próximo la tercera ronda de la reunión formal exploratoria de paz en La Habana, Cuba. La nueva cita sería abierta el 2 de
mayo de 2006 y duraría hasta el 10 de ese mes, precisaron en Medellín el
Alto Comisionado para la Paz y el portavoz del ELN, Francisco Galán.
Las partes no informaron de las razones que las llevaron a aplazar la
tercera ronda, que en principio había sido prevista para comienzos de
abril. En el encuentro de mayo, el Gobierno y el ELN tenían previsto
152
Op. cit. Noticias RCN. [Programa televisivo]. RCN Televisión. 29, marzo, 2006.
Op. cit. 29, marzo, 2006.
442
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
profundizar en los componentes esenciales del diseño general del proceso y en la construcción de la agenda. En ese asunto avanzaron en la
segunda ronda, celebrada en la última semana de febrero, dos meses
después de que inauguraron estos acercamientos para la eventual apertura de un proceso de paz que cuentan con España, Noruega y Suiza
como países acompañantes.
El aplazamiento de la ronda fue decidido durante un encuentro
que las partes y los comités que los respaldan celebraron en la llamada
“Casa de Paz”, domicilio temporal de Galán en San Cristóbal, en jurisdicción de Medellín.
El 2 de abril de 2006 el Gobierno Nacional anunció que 2 000 desmovilizados de las AUC erradicarían cultivos ilícitos en varios municipios del sur del departamento de Córdoba. En los territorios donde
antes tenían influencia las AUC, según informaciones oficiales, se registraba un aumento de las siembras de hoja de coca.
Así, el Gobierno pondría en marcha una operación de erradicación
de cultivos ilícitos similar a la que se llevaba a cabo en la serranía de La
Macarena. El Ministro del Interior y Justicia, Sabas Pretelt de la Vega,
reveló que el plan de erradicación se haría inicialmente con unos 1 500
o 2 000 reinsertados de las AUC.
Así quedó definido tras varias reuniones a las que asistieron Luis Alfonso Hoyos, de la Consejería de Acción Social de la Presidencia de la
República; Juan David Ángel, del Programa de Reinserción del Ministerio del Interior y Justicia; el Director Nacional de la Policía, General
Jorge Castro, y los ex comandantes de las AUC Salvatore Mancuso y
Vicente Castaño, “El Profe”.
Aunque el Gobierno ocuparía a unos 2 000 reinsertados, la iniciativa
que presentaron Mancuso y Castaño a los altos funcionarios, a nombre
de los ex comandantes de las AUC, era más ambiciosa. Según Mancuso
y Castaño, si se llevaran a cabo operaciones de erradicación, como la
de La Macarena, en diez regiones del país donde se había identificado el crecimiento de cultivos, se podrían erradicar completamente los
cultivos de coca en dos años, empleando 20 000 erradicadores. De esta
manera se solucionaría en muy buena medida el problema de empleo
para un número considerable de reinsertados.
443
Esta fue la tercera propuesta de los ex comandantes de las AUC en
los últimos días, después del ofrecimiento de devolver 100 000 hectáreas
de tierras, con miras a cumplir los requisitos para ser cobijados por la
Ley de Justicia y Paz, y luego de expresar su intención de pagar penas
en Estados Unidos, previo acuerdo avalado por el Gobierno. Algunos
sectores interpretaban esta actitud como una manera de mostrar ante el
país una imagen menos beligerante153.
Al iniciarse la primera semana del mes de abril de 2006, se habían
desmovilizado 33 estructuras de las AUC con un total de 28 357 hombres. Se anunciaba la desmovilización del Bloque Élmer Cárdenas, que
operaba en el Urabá antioqueño y parte del Chocó.
ESTRUCTURAS AÚN PENDIENTES POR DESMOVILIZARSE
De producirse esta desmovilización, sólo quedarían pendientes las
estructuras de Martín Llanos en Casanare, y las de “Jorge Pirata” y
“Didier” en el Meta y Guaviare. El Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, anunció la semana anterior que los grupos de autodefensa
estaban a punto de desaparecer en Colombia; las Autodefensas Campesinas del Casanare, ACC, que aparecieron en 1981 en Monterrey,
Casanare, auspiciadas por hacendados de esa región con el nombre de
“Buitragueños”’, por el apellido de sus jefes Héctor y Héctor Germán
Buitrago Parada, padre e hijo respectivamente, más conocido el último
como “Martín Llanos”. La otra estructura sin contacto con el Gobierno
era el frente Cacique Pipintá, facción que no cumplió la cita para desmovilizarse en el año 2005 en Risaralda.
Las Autodefensas Campesinas del Casanare, al mando de Héctor
Germán Buitrago Parada, “Martín Llanos”, continuaban actuando en
Casanare, Boyacá, Cundinamarca y Meta, con unos 300 hombres. Hace
cuatro años libraron una guerra contra el Bloque Centauros. Este bloque habría entablado diálogos con el Gobierno, aun cuando el Comisionado de Paz admitió que no existían contactos con la agrupación.
153
Op. cit. 3, abril, 2006.
444
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Se conoció que a partir del Miércoles Santo, 12 de abril de 2006, se
iniciaría definitivamente la desmovilización de los primeros hombres
del Bloque Élmer Cárdenas, al mando de Freddy Rendón Herrera, conocido como “Alfredo Berrío” o “El Alemán”.
Este grupo era el conocido como “Frente Costanero”, que operaba
en Necoclí, San Pedro de Urabá y el Valle del Tanela. Dejaría las armas
en el corregimiento Mello, de Necoclí. Un segundo grupo que dejará las
armas hacía presencia en Pavarandó, y el tercero operaba entre los ríos
Atrato y Baudó. Se estimaba que tenía unos 2 500 hombres.
El frente Cacique Pipintá, del Bloque Central Bolívar, BCB, debió desmovilizarse el 15 de diciembre del 2005, cuando lo hicieron los 552 hombres del frente Héroes y Mártires de Guática, en Santuario, Risaralda.
Este grupo fue absorbido por el BCB, luego de la guerra que se
libró entre el Metro y el bloque Nutibara de “Don Berna”. El grupo
se calculaba en unos 200 hombres, pero del mismo no se había vuelto
a tener noticia.
DESMOVILIZACIÓN DE LAS AUTODEFENSAS DE META Y
GUAVIARE
A Casibare, Casanare, llegaron 700 hombres de las autodefensas y
unos 1 200 desplazados por la violencia, según noticias conocidas el
7 de abril de 2006. Casibare es un caserío, ubicado a 60 kilómetros de
Puerto Lleras, y ahí se esperaba la desmovilización de las autodefensas
de Meta y Guaviare.
Este grupo de autodefensas estaba liderado por Pedro Guerrero, alias
“Cuchillo”, y Héroes del Llano, al mando de Manuel de Jesús Pirabán,
conocido como “Jorge Pirata”.
El 29 de marzo de 2006 se supo que varios de los jefes de las AUC
estarían interesados en acelerar la entrega de tierras con el propósito de
acogerse a la Ley de Justicia y Paz. Una de las fincas que entregarían
estaría ubicada en los Llanos Orientales y tendría alrededor de 30 000
hectáreas.
445
El Gobierno Nacional tenía calculada la entrega de unas 100 mil
hectáreas por parte de las AUC con el propósito de reparar a las víctimas de la violencia.
Fuentes cercanas a “Jorge 40” confirmaron que el jefe del “Bloque
Norte” entregaría las 18 mil hectáreas que ofreció el día de su desarme.
Algunas víctimas se asociarían con reinsertados.
DESMOVILIZACIÓN DE LOS BLOQUES “HÉROES DEL
LLANO” Y “HÉROES DEL GUAVIARE”
En Casibare, Puerto Lleras, Meta, el 11 de abril de 2006, un total de
1 765 hombres y mujeres pertenecientes a los frentes Héroes del Llano
y Héroes del Guaviare, al mando de Manuel de Jesús Piraban y Pedro
Oliveiro Guerrero Castillo, se desmovilizaron e iniciaron el proceso de
reincorporación a la vida civil.
La ceremonia protocolaria, que contó con la presencia del Alto Comisionado para la Paz, se realizó en la inspección de policía de Casibare,
a 65 kilómetros del municipio de Puerto Lleras, departamento del Meta.
Con este ya eran 35 actos de desmovilización dentro del proceso de
paz que se adelantaba entre el Gobierno Nacional y las Autodefensas
Unidas de Colombia.
El evento contó igualmente con el acompañamiento del Gobernador
del Meta, Adán Enrique Ramírez Duarte; del Alcalde de Puerto Lleras,
Miguel Ángel Ramírez López; del Jefe de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA, Sergio Caramagna; del Delegado del Programa
de Reincorporación a la Vida Civil, Jorge Rodríguez, y de la comunidad
de la región, entre otros.
La entrega de armas fue encabezada por Manuel de Jesús Pirabán,
comandante del Frente Héroes del Llano, y Pedro Oliveiro Guerrero
Castillo, comandante del Frente Héroes del Guaviare de las AUC.
Estos grupos, al igual que el Bloque Élmer Cárdenas, no hacían parte de la mesa de negociación de las AUC en Santa Fe de Ralito.
446
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Los desmovilizados entregaron 850 armas largas, 23 armas cortas y
151 armas de apoyo, 54 lanzagranadas, 45 morteros y 12 ametralladoras, 178 798 unidades de munición de diferente calibre, 1 485 granadas,
141 radios 2m, 14 radios base. También entregaron 26 automotores y 4
máquinas de coser154.
DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE COSTANERO ÉLMER
CÁRDENAS
El desarme de los grupos pertenecientes al Bloque Élmer Cárdenas,
al mando de José Alfredo Berrío, conocido como “El Alemán”, se inició en el corregimiento El Mello, Villavicencio, en el municipio de Necoclí, con la entrega de armas por parte de 309 combatientes.
Junto a “El Alemán” marcharon Otoniel Segundo Hoyos, alias “Rogelio”, comandante del Bloque Costanero; “Juan Diego”, comandante
político; “Alex Rivera” y “Don Rafa”
Para el completo desarme de este bloque armado se preveían otras
dos zonas de concentración, una en Pavarandó y otra en la región del
río Salaquí, en el Chocó, donde se esperaba que “El Alemán” o “Luis
Alfredo Berrío” haría entrega de sus armas y las de su escolta personal.
Los desmovilizados entregaron 186 armas largas, 17 armas cortas,
59 593 unidades de munición de diferente calibre, 243 granadas, 19 radios 2m, 55 radios base y 6 vehículos.
NUEVO BALANCE PRELIMINAR
Hasta el 11 de abril de 2006, en virtud del proceso de paz, 30 150
miembros de las AUC habían dejado las armas, incluidos los 1 765 de
los frentes Héroes del Llano y Héroes del Guaviare.
El Gobierno notificó que había concluido la desmovilización de los
bloques de las Autodefensas que firmaron el acuerdo de Santa Fe de
Ralito con el Gobierno Nacional.
154
Fuentes: Caracol Radio, períodico El País de Cali, periódico El Colombiano de Medellín, periódico El Tiempo de Bogotá,
periódico Nuevo Siglo de Bogotá.
447
El Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, informó que el total
de desmovilizados en ese proceso fue de 30 150 integrantes de las autodefensas, quienes entregaron 17 000 armas, 117 vehículos, tres helicópteros, además de 59 predios urbanos y 24 mil hectáreas de tierra.
El comisionado Restrepo también explicó que 604 desmovilizados
de las autodefensas serían llevados ante el Tribunal de Justicia y Paz,
una vez concluido el proceso de desmovilización de la estructura militar
de las AUC.
El funcionario señaló que de los 604 miembros que firmaron el documento de sometimiento a la ley estaban 20 jefes representantes, es decir,
que se encontraban en la mesa de negociación, entre ellos Salvatore
Mancuso, Vicente Castaño, alias “Jorge 40”, y “Ernesto Báez”.
La aplicación efectiva de la Ley de Justicia y Paz dependía de dos decisiones que estaban pendientes en las altas Cortes. Inicialmente, el estudio
de las once demandas elevadas contra esta norma ante la Corte Constitucional; y la decisión de la Corte Suprema de Justicia sobre los ocho
Magistrados de Justicia y Paz que tendría que elegir en los próximos días.
Durante la Semana Santa de 2006, el Gobierno Nacional hizo un llamado para conseguir trabajo a los reinsertados, con un aporte superior
a los 200 mil millones de pesos para el desarrollo de proyectos productivos, y anunció una campaña a todos los niveles, pero con énfasis en el
sector empresarial, para vincular laboralmente a los más de treinta mil
reinsertados de los grupos armados ilegales.
No se descartaba la posibilidad de condicionar la concesión de contratos de obras públicas a la vinculación de personal que se hubiere reincorporado a la vida civil. El Ministro del Interior, Sabas Pretel de la
Vega, dijo que si bien legalmente es muy complicado ese procedimiento, a los contratistas de obras públicas se ha hecho saber que deben tener
un mínimo de reinsertados vinculados a los proyectos.
“Necesitamos la solidaridad de todo el mundo”, señaló el funcionario. Dijo que con el Ministerio de Obras Públicas se evaluaba la posibilidad de vincular al programa de construcción de dos mil quinientos
kilómetros de carreteras a varios de los reinsertados.
448
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El ministro informó que a 1 500 personas se les consiguió trabajo en
proyectos productivos del sector agropecuario, mientras que se estaba
capacitando a un número similar como auxiliares cívicos para la vigilancia de las carreteras. Adicionalmente se tienen 1 200 reinsertados
vigilando los parques, los estadios y conciertos también como guardias
cívicos. Dijo el funcionario que en esta campaña se han generado más
de 2 000 proyectos productivos a los que se agregarán otros 600 proyectos que ya se tienen identificados.
“Hemos tocado las puertas de todos los gremios exponiéndoles la
posibilidad para que vinculen a los reinsertados por distintos mecanismos, ya sea comprándoles productos o servicios que ellos vendan o empleándolos directamente”, señaló Sabas Pretelt.
El funcionario agregó que en esta ofensiva el Gobierno ya se había
reunido con más de medio centenar de Cámaras de Comercio para que
con sus afiliados se promueva en las regiones la vinculación laboral de
los reinsertados.
“Hay que tener mucha solidaridad si queremos la paz. El Gobierno los reinserta pero la sociedad toda tiene que colaborar en su
vinculación laboral. Toda esta confianza que se ha generado con el
crecimiento del turismo, del comercio, de la economía, tiene que
tener también una contraprestación del empresariado hacia la sociedad marginada, entre ellos los reinsertados”, puntualizó el ministro
Sabas”155.
Por su parte, el Alto Comisionado de Paz pidió no presionar a los
reinsertados para que confesaran posibles acciones criminales. En una
ponencia enviada a la Universidad de los Andes, advirtió que ante el
temor de no lograr los beneficios, los reinsertados podrían aceptar todos
los cargos, incluso por delitos que no hubieran cometido.
El 18 de abril, el Servicio Nacional de Aprendizaje, Sena, informó
haber logrado llegar con formación en áreas productivas a 13 801 personas en condición de desplazamiento, hasta lo que iba corrido del año
2006. Así lo registró la entidad en el sistema de metas presidenciales, en
155
Noticias Caracol Radio. [Programa radiofónico]. Caracol Radio.
449
donde tenía como objetivo llegar a beneficiar en agosto del año 2006 a
82 719 colombianos desplazados con esta capacitación gratuita. Esto
hacía parte de la atención integral que prestaba el gobierno nacional a
esta población vulnerable en todo el país.
En esta formación, los alumnos recibían módulos de emprendimiento con el fin de darles herramientas válidas a la hora de crear nuevas empresas, las cuales podrían ser una solución en la consecución de ingresos.
Durante la administración del presidente Álvaro Uribe Vélez el Sena
había llegado con este beneficio a 106 516 personas desplazadas. De
ellas 9 199 fueron atendidas en el 2002; 12 749, en el año 2003; en el
2004 el Sena llegó a 15.538 desplazados y en el 2005 a 64 428.
Las personas de las poblaciones vulnerables formadas por el Sena
también hacían parte de la meta que la entidad tenía para el año 2006 en
todo el país, que era llegar a beneficiar a cuatro millones de colombianos.
“ANTONIO GARCÍA” CANCELA AGENDA EN BOGOTÁ
El jefe militar del ELN, “Antonio García”, canceló la agenda que
tenía programada para la ciudad de Bogotá entre el 24 y el 28 de abril,
según la cual visitaría la Alcaldía Mayor y hablaría con el Episcopado,
congresistas y organizaciones sociales. El hecho fue confirmado a El
Tiempo por “Francisco Galán”, quien omitió explicar la razón por la
que había declinado parte de la invitación que le hicieron los garantes
de la “Casa de Paz”, para la cual contaron con el aval del Gobierno. Sin
embargo, como quedó previsto en la agenda que divulgaron de manera
conjunta el 28 de marzo de 2006 el Comisionado de Paz, Luis Carlos
Restrepo y el vocero del ELN, “Francisco Galán”, “Antonio García”
llegaría a Medellín el lunes 17 de abril para discutir con autoridades
locales y distintos sectores civiles cómo podría concretarse un proceso
de paz con el presidente Álvaro Uribe.
Las reuniones de “Antonio García” con autoridades locales y representantes de distintos sectores en la capital antioqueña comenzarían el
martes 18 y se extenderían hasta el sábado 22. El jefe guerrillero haría
los encuentros bajo el estatus político que le concedió el Gobierno.
En su primera visita a Medellín dejó entrever sus dudas sobre un cese
de hostilidades del ELN para las elecciones presidenciales que tendrían
450
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
lugar el 28 de mayo de 2006. “García” consideraba que no era claro el
reconocimiento del Gobierno a la existencia del conflicto y argumentaba esto como una de las razones por las cuales los acercamientos con el
ELN continuaban en fase exploratoria, sin avanzar a un proceso de paz
formal. “Sólo se ha logrado reconocimiento político a la delegación, mas
no a todo el ELN como fuerza política”, dijo en la “Casa de Paz”156.
El 18 de abril de 2006 el Comisionado de Paz informó que 604 ex
integrantes de las AUC se someterían a la Ley de Justicia y Paz. La lista
con los nombres sería entregada al ministerio del Interior, que debería
actuar como filtro antes de pasarla a la Fiscalía.
A partir del momento en que la Fiscalía tuviera en su poder los nombres, dispondría de 60 días para iniciar los procesos a que hubiere lugar.
Aun en caso de ser condenados por delitos como masacres, desplazamientos y desaparicio-nes forzados, los procesados recibirían una pena
máxima de ocho años.
Para tener el beneficio, según la norma, deberían reparar a sus víctimas y contribuir eficazmente al desmonte de sus grupos ilegales.
Entre los jefes de autodefensas que se acogerían a la nueva jurisdicción,
el comisionado Restrepo mencionó a los miembros representantes en la
nego-ciación de paz, como Vicente Castaño, Salvatore Mancuso, Hernán Giraldo, “Ernesto Báez” y otros que desearan acogerse a la mencionada ley.
Según el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, en
Colombia sólo estaban pendientes de desmovilización algunos de los
frentes del Bloque Élmer Cárdenas, que actuaba en el noroeste del país,
el cual se había separado del proceso del Gobierno con las AUC.
El Alto Comisionado señaló que en la misma situación estaban las
Autodefensas Campesinas del Casanare, ACC, grupo independiente
con centro de actividad en el este del país.
156
Op. cit.
451
El proceso de paz del gobierno del presidente Álvaro Uribe con las
AUC fue emprendido en diciembre del 2002 y a finales del año siguiente pasó a la fase de desmovilizaciones masivas157.
Ni el Gobierno Nacional ni los ex jefes de las AUC se habían pronunciado sobre el desarme del frente Cacique Pipintá, con presencia
en Caldas, y al parecer también en el suroeste antioqueño. Sus cerca de
200 combatientes estaban al mando de Iván Roberto Duque, “Ernesto
Báez”, quien era el jefe político del Bloque Central Bolívar y quien ya
se había desmovilizado.
BALANCE DE LAS DESMOVILIZACIONES
El 19 de abril de 2006, con la desmovilización de 30 431 miembros
de las autodefensas se llegó al fin de un desarme histórico, no sólo por el
número de combatientes que dejaron la guerra, sino por lo que significa
desactivar a uno de los actores más sangrientos del conflicto. Este ha
sido el desarme más importante en la historia del país. Nunca antes tantos hombres habían abandonado las armas mediante un proceso de paz.
Desde noviembre del 2003 el gobierno de Álvaro Uribe logró el regreso a la legalidad de más combatientes irregulares que todos sus antecesores sumados, que reinsertaron a 5 528.
Con dichas desmovilizaciones, según un informe patrocinado por la embajada de Suecia, la criminalidad en Colombia cayó 48% en las zonas de
desarme. Estos hechos representan el mayor logro de una política de paz.
“El que se ha cumplido con las autodefensas es uno de los pocos
procesos de paz, en todo el mundo, en el que habrá cárcel para los responsables de delitos atroces”, dijo el académico Eduardo Pizarro, presidente de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación.
También el Director del Programa de Reinserción, Juan David Ángel, dijo que este proceso le deja un “un activo muy importante” a la
justicia: la plena identificación de personas que antes estaban en la ilegalidad y de las que no existía dato alguno.
157
Noticias Caracol Radio. [Programa radiofónico]. Caracol Radio. 19, abril, 2006.
452
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Con la definición de un primer listado de miembros de las autodefensas que se presentarían ante los jueces de justicia y paz empieza una
etapa que dirá qué tanto se logró con las desmovilizaciones para sanar
las heridas.
Algunos mandos medios y combatientes, parte de los 1 175 que están en las cárceles, podrían beneficiarse de la Ley de Justicia y Paz, pero
ninguno de ellos, sin embargo, estaría ante los jueces antes del 2007.
El mayor reto de la histórica desmovilización que ha tenido lugar,
sin embargo, apenas comienza: evitar que los reinsertados se conviertan
en un polvorín social, tal como ocurrió en El Salvador y Guatemala158.
LAS AUC YA NO EXISTEN, DICE EL ALTO COMISIONADO
PARA LA PAZ
“Las Autodefensas Unidas de Colombia se acabaron. Eso debe quedar claro para que no aparezca por allí un extorsionista que quiera actuar a nombre de esa organización”, subrayó Luis Carlos Restrepo.
La Corte Suprema de Justicia escogería ocho magistrados que se encargarían del juzgamiento de los reinsertados que se acogieran a la Ley
de Justicia y Paz. Todo esto para que pudieran comenzar los procesos
contra los 604 desmovilizados de las Autodefensas Unidas de Colombia, que deberían ser juzgados con los parámetros de la ley 975 de 2005
o de Justicia y Paz. Ellos harían parte de las dos salas de cuatro magistrados cada una, de Justicia y Paz, que operarían en los Tribunales Superiores de Bogotá y Barranquilla. Tres serían asignados como magistrados de decisión, encargados de fallar los procesos, y el último como
magistrado de garantías, quien tendría la función de avalar las medidas
cautelares solicitadas por la Fiscalía General de la Nación.
La lista de 88 aspirantes a los ocho cargos, seleccionada de un grupo
de 823 aspirantes, fue entregada el 7 de abril de 2006 a la Corte Suprema
de Justicia, la cual iniciaría el estudio de las hojas de vida de los pre-
158
Op. cit. 19, abril, 2006.
453
seleccionados y procedería al nombramiento de los ocho magistrados
para los tribunales.
Además de la selección de los ocho magistrados, quedaría pendiente
la escogencia de su grupo de apoyo, es decir: un abogado asesor para
cada magistrado, un secretario de tribunal, un oficial mayor, un relator
y un asistente social.
Para la puesta en marcha de este engranaje jurídico se requerían
unos 8 000 millones de pesos, 4 000 millones para cada sala.
La Vicepresidencia de la República informó que el 27 de marzo viajaron a La Haya, Holanda, 20 fiscales de las unidades de Justicia y Paz
y Derechos Humanos para recibir, durante dos semanas, capacitación
en técnicas de investigación, tipificación y acusación en materia de crímenes atroces.
Otro de los organismos que también tendría que ver en la puesta en
marcha de la Ley de Justicia y Paz era la Defensoría del Pueblo, que
tendría a su cargo la asistencia jurídica a los ex combatientes que deberían responder por crímenes de guerra y de lesa humanidad.
Los desmovilizados que no pudieran pagar un abogado defensor podrían contar con un abogado de oficio de la misma forma que en los
casos que van a la justicia oral159.
De otra parte, se supo que de los 868 jóvenes que el 25 de noviembre
de 2003 dejaron atrás su historia como miembros del Bloque Cacique
Nutibara, BCN, de las Autodefensas Unidas de Colombia, 226 se presentaron el 20 de abril de 2006 hoy como nuevos ciudadanos en un
acto simbólico en el que los muchachos, pertenecientes al Programa de
Paz y Reconciliación de la Alcaldía de Medellín, se graduaron como
“ciudadanos comprometidos”, en reconocimiento a su dedicación en el
proceso formativo que comenzó hace más de dos años.
El convenio inicial para la formación de los desmovilizados era de 18
meses, a partir del proceso que comenzó en La Ceja luego de la entrega
de armas, pero el Alcalde de Medellín, Sergio Fajardo, decidió extender
159
Op. cit. 20, abril, 2006.
454
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
la atención siempre y cuando los reinsertados mantuvieran su compromiso de incorporación a la sociedad civil.
El acto se realizó en el Centro Internacional de Convenciones y a él
asistieron el Vicepresidente de la República, Francisco Santos, y el Embajador de Estados Unidos en Colombia, William Wood160.
SEGUNDA DESMOVILIZACIÓN DEL ÉLMER CÁRDENAS
El 30 de abril de 2006, un total de 484 combatientes de uno de los
últimos bloques activos de los grupos ilegales Autodefensas Unidas de
Colombia, se desmovilizó en el caserío El Cuarenta, municipio de Turbo, en el golfo de Urabá, departamento de Antioquia, en presencia del
Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
Esta desmovilización correspondía a la segunda fase de las tres previstas para estos grupos que operaban en zonas selváticas de la frontera
entre Colombia y Panamá. Con esta entrega de miembros de las AUC
ascendió a 30 635 el número de autodefensas que dejaron las armas en
el proceso de desmovilización comenzado en diciembre del 2002.
Los desmovilizados entregaron 332 armas largas, 4 armas cortas, 24
armas de apoyo, 290 728 unidades de munición de diferentes calibres, 1
207 granadas y 3 vehículos.
El grupo de las Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC, que
comandaba “Martín Llanos”, una disidencia de las AUC, era el único
que quedaba por desmovilizarse, aunque, según habían señalado sus dirigentes, mantenían su interés por acogerse a la Ley de Justicia y Paz161.
SE ANUNCIA DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE ELMER
CÁRDENAS
El nombre de Freddy Rendón Herrera poco o nada dice en las regiones del Urabá y el Atrato Medio antioqueño y chocoano. Si se habla en
esas zonas de “El Alemán”, el máximo jefe del bloque Élmer Cárdenas
160
Ibíd. 26, abril, 2006.
161
Op. cit. Noticias RCN. [Programa televisivo]. Bogotá: RCN Televisión. 2, mayo, 2006.
455
de las autodefensas, la expresión puede ser de terror o de la más profunda admiración.
A juicio de Rendón, algunos “señores de las autodefensas” aprovecharon el miedo de los campesinos y miembros de las comunidades negras
para comprar predios, pero fueron “grandes empresarios antioqueños”
los que se beneficiaron de ese temor para adquirir terrenos en Llanorrico,
Chocó y el corregimiento El Mello, Villavicencio, de Necoclí.
“Si la Procuraduría y el Incoder dicen que esas tierras son de ‘El Alemán’, estoy dispuesto a entregarlas al Fondo de Reparación a las víctimas”, dijo el jefe de autodefensas. Advierte que buena parte pertenece a
una familia de transportadores antioqueños, y que él también tenía unas
20 000 hectáreas entre la Panamericana y Riosucio, Chocó.
Para “El Alemán”, carecían de fundamento las denuncias que habían
llegado a la Gobernación de Antioquia sobre la coacción a una familia
de El Mello, para vender sus predios. “A esos empresarios (la familia
de transportadores) les pedimos no comprar esa tierra que la teníamos
negociada para proyectos productivos con los desmovilizados, pero no
dejaron”, afirmó. Después ofreció comprarla al precio que pagaron y,
¿qué pasó?: “que presentaron la denuncia ante la Vicepresidencia y el
presidente Álvaro Uribe nos mandó a decir, con el Alto Comisionado
para la Paz, que se iba a dañar el proceso”.
Luego vino otra denuncia ante la Vicepresidencia y, según “El Alemán”, esto lo llevó a pedir una reunión con la OEA y los dueños de los
predios que denunciaron la coacción.
“Lo que estamos diciendo es: señores, el capital de ustedes debe cumplir una labor social. La tierra es el epílogo del conflicto y esto volverá
a dar la vuelta si sus dueños no la ponen a jugar un papel importante en
la construcción de país”, recalcó “El Alemán”.
Sus hombres también estuvieron vinculados a uno de los incidentes
de guerra que han marcado la historia reciente del país: la muerte de
119 personas dentro del templo católico de Bojayá, Chocó. “Da tristeza
recordar lo que pasó. Saber que de una u otra manera tuvimos responsabilidad en esa acción tan cruel...”, confesó el paramilitar, y añadió
456
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
que, aunque la justicia había actuado contra los culpables (la Fiscalía
procesó a varios guerrilleros de las FARC), no fueron llamados ajuicio
integrantes de las autodefensas.
En menos de dos semanas él y el resto de su bloque entregarían las
armas en Ungía, Chocó. “El Alemán” reconoció que aún había enfrentamientos en el Atrato Medio, pero a pesar de esa circunstancia sus
hombres continuarían hasta llegar al sitio de concentración.
Esa desmovilización marcaría no solo el final del bloque Élmer
Cárdenas sino el de la etapa de negociación del Gobierno con las
autodefensas.
Una de las cosas que suelen enorgullecer a “El Alemán” es de no haber tenido vinculación con el narcotráfico. De ahí surge la pregunta sobre
la financiación de un bloque que contaba con cerca de 1 500 hombres.
Según “El Alemán”, obtuvo recursos de extorsiones a transportadores,
comerciantes, ganaderos y empresarios madereros. Admitió que a los ganaderos se les cobraba un “impuesto” por cada hectárea y cada res.
En Riosucio, Chocó, les quitó a las FARC el control del transporte
de la madera. Otros recursos los obtuvo del cobro de “peajes comunitarios”. Uno de ellos estaba cerca de Dabeiba, en la carretera al mar. En
él, reconoció, llegaron a recaudar hasta 40 millones de pesos diarios.
“Los empresarios nos pagaron porque teníamos el fierro, pero también
porque les convenía. Podían sacar sus productos de la zona”, dice162.
“El Alemán” entregaría sus armas junto a otros 500 paramilitares, en
el municipio de Ungía, en unos 10 días.
El Asesor de Paz de la Gobernación de Antioquia, Jaime Fajardo
Landaeta, destacó que con esta desmovilización culminaría el desarme
de la totalidad de grupos paramilitares que actuaban en el departamento de Antioquia163.
162
Op. cit. 3, mayo, 2006.
163
Op. cit. 30, abril, 2006.
457
LA GUERRA NO ES OPCIÓN HOY
Carlos Mario Jiménez, “Javier Montañez”, habló con el Diario El
Colombiano, antes de que el presidente Álvaro Uribe pusiera algunas
condiciones al proceso de negociación con las Autodefensas Unidas de
Colombia, AUC.
Quien comandó a 7 076 hombres del Bloque Central Bolívar con
el seudónimo de “Javier Montañez”, concedió una entrevista a El Colombiano y habló acerca de los hechos que se le imputaban al Bloque
Central Bolívar, cuya presencia se conoció en once departamentos del
país, y también se refirió a la futura aplicación de la Ley de Justicia y
Paz y la posibilidad de que terminaran en prisión.
“Cuando las FARC secuestraron a mi esposa, en ese momento nació
´Javier Montañez´”, dijo el desmovilizado jefe del bloque Central Bolívar, BCB, de las AUC, una persona cuyo verdadero nombre es Carlos
Mario Jiménez, y que “durante mucho tiempo alimentó ese odio”.
El Colombiano: ¿Por qué creció tanto el BCB?
“Javier Montañez”: aunque comenzamos en el Bajo Cauca
y nos dimos a la tarea de entrar al sur de Bolívar, antiguo bastión
del ELN, ese reto nos abrió puertas y comenzamos a crecer tanto
que llegamos al Catatumbo, Norte de Santander, la Sierra Nevada, Cesar, Magdalena, La Guajira, Nariño, el Eje Cafetero y, por
último, Caquetá.
E.C.: ¿Vendieron franquicias al narcotráfico?
J.M.: estar en tantas partes fue un error. La verdad, crecimos
por petición de muchas personas que nos llamaron para que les
ayudáramos. Formamos anillos de seguridad en las regiones donde estaba más fuerte la guerrilla, Meta y Caquetá. Allí nos consolidamos. Cuando llegamos ya estaba y sigue estando el narcotráfico.
E.C.: pero los cultivos crecieron.
J.M.: nunca nos opusimos a que el Estado entrara, ni siquiera
para perseguirnos -solo huimos-. Hicimos el trabajo sucio: quitarle las zonas a la guerrilla, zonas que estaban sembradas con coca.
458
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
E.C.: ¿Cuál era la actitud frente a los cultivos ilícitos?
J.M.: solo nos interesaba quitarle el poder a la guerrilla, pero
como no somos Estado no podíamos erradicar. Cuando estábamos consolidados, pensamos en proyectos alternativos, y le juro
que si no nos hubiéramos desmovilizado, en tres años, habríamos
entregado el sur de Bolívar sin una sola mata de coca, sin necesidad de abusar y maltratar al campesino.
E.C.: ¿La coca financia la guerra?
J.M.: toda. Es una gasolina que está en el ambiente. Quienes viven del negocio le pagan al poder que impere en la zona,
sea guerrilla, paramilitar o los mismos narcotraficantes. Somos
igual de alcahuetas que todos, pero no los únicos. A nosotros nos
pagaban por permitir esa alcahuetería. Decir que no recibíamos
dineros de ese negocio (gramaje) es mentira, porque sostener una
guerra cuesta, y cuesta mucho.
E.C.: bueno, pero si ustedes se desmovilizaron ¿por qué sigue
el narcotráfico en esa zona?
J.M.: ese es el mercado de esas zonas. Cómo se va a acabar
de la noche a la mañana. Si el Estado no ha sido capaz de acabarlo en 18 años con todo el mecanismo y la plata que le ha dado
el gobierno americano, ¿vamos a ser capaces nosotros? Además,
¿cómo acabarlo si no somos los dueños de los cultivos?. El problema del narcotráfico sigue latente y seguirá latente hasta que el
Gobierno busque otra alternativa digna para los campesinos que
viven de eso.
E.C.: ¿Y qué pasa entonces con el reciclamiento del que hablan
las autoridades, en el que estarían involucrados desmovilizados?
J.M.: es que hay que entender el fenómeno. El narcotráfico
está ahí, porque es el campesino el que siembra la mata, pues vive
de eso, y si tú no le compras, pues él busca a otro comprador.
E.C.: ¿El narcotráfico reciclará a esos 30 mil desmovilizados?
459
J.M.: en muchas regiones es posible, porque siempre son las
mismas personas las que manejan el negocio. La erradicación
acaba con la coca de un territorio, pero quienes sembraban allí se
van para otro. Lo importante para esos 30 mil hombres es capacitarlos, orientarlos, brindarles oportunidades para hacerlos sentir
colombianos, porque nos rechazan y excluyen por el hecho de ser
desmovilizados. ¿Dónde está la reconciliación y el perdón?
E.C.: ¿Cree que la Ley de Justicia y Paz logrará esa reconciliación?
J.M.: como está planteada, no. La reconciliación no se logra
con llevarnos a la cárcel a todos.
Queremos que nos miren en otra perspectiva: si fuimos capaces de ser empresarios para la guerra también seremos capaces de
ser empresarios para la paz.
E.C.: pero muchos sectores de la sociedad dicen que ustedes
quieren pan y pedazo.
J.M.: es peor para el país seguir sosteniendo el aparato de guerra y la reparación no puede calcularse desde la visión de quienes siempre nos han atacado. Estamos dispuestos a reparar. Por
ejemplo, el BCB está dispuesto a entregar 50 o 60 mil hectáreas,
pero con proyectos productivos, con alternativas, con seguridad,
una seguridad que tiene que brindar el Estado, con educación,
con salud.
E.C.: ¿Usted volvería a la guerra?
J.M.: yo, Carlos Mario Jiménez, no. Si el Gobierno o los colombianos quieren cárcel para nosotros, pues me voy para la cárcel, pero hice un compromiso al desmovilizarme. La guerra me
impidió criar a mis hijos. Ahora que he dado este paso quiero
criar a mis nietos.
E.C.: sectores de la sociedad esperan condenas de 30 ó 40 años.
460
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
J.M.: el destino lo dirá. Tenemos que preguntarnos: ¿Queremos la paz o que siga la guerra? No vuelvo a la guerra, pero si no
hay una verdadera reconciliación, no sé cuántos volverán.
E.C.: y los delitos atroces.
J.M.: se pudo cometer excesos. Hubo confrontación cuerpo
a cuerpo que derivó en muertos. Claro, todo en su contexto, por
ejemplo, sobre las fosas: no creo que las tengamos, pero no las
puedo negar. Una vez, con 2800 hombres, hice una operación
desde el Bajo Cauca hasta la serranía de San Lucas, operación
que me quitó a 48 hombres, mutiló a 29 más y dejó 110 heridos.
Hubo combates en los que nos gastamos un millón de tiros. El
BCB puso 1 200 muertos y le ganamos la guerra al ELN. Vi mis
muertos, pero nunca vi los de mis enemigos. Y, si los sacamos de
sus áreas, ¿dónde están sus muertos? ¿O los quieren hacer aparecer como víctimas?
E.C.: ¿Y los excesos.?
J.M.: arrasando nunca te ganas el respeto de la población
como nos lo ganamos nosotros. Hubo gente que murió porque
hacía más daño de civil, pero sabíamos quiénes eran y no es un
misterio porque la gente los mostraba.
E.C.: ¿Cuál es la propuesta de paz?
J.M.: mire, la guerra la hemos hecho todos: unos por acción
y otros por omisión. Entre todos tenemos que construir la paz, y
para lograrlo, la sociedad deberá generar los escenarios en los que
todos nos encontremos. Por nuestro lado, caso Movimiento Nacional de Autodefensas Desmovilizados, estamos promoviendo
un gran acuerdo nacional por la reconciliación y la paz164.
164
Op. cit.15, agosto, 2006.
461
TERCERA Y ÚLTIMA DESMOVILIZACIÓN DEL BLOQUE ÉLMER CÁRDENAS DE LAS AUTODEFENSAS
CAMPESINAS
El 15 de agosto de 2006 en Unguía, Chocó, un total de 745 hombres y
mujeres del Bloque Élmer Cárdenas de las autodefensas campesinas entregaron sus armas e iniciaron su proceso de reincorporaron a la vida civil.
Ante el Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, uno a uno
estos hombres desmovilizados fueron depositando sus armas en un cajón de madera. El evento, que se adelantó en el casco urbano de Unguía, contó con la presencia del Gobernador del Chocó, Julio Ibarguen
Mosquera; el Alcalde de Unguía, Cayetano Tapias, y de la Delegada
de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA, Claudia Pérez.
Así mismo hicieron presencia autoridades civiles, militares, de policía y
la comunidad de la zona. Dentro de los desmovilizados se encontraba
Fredy Rendón Herrera, alias “El Alemán”, comandante de esta estructura armada ilegal.
Con esta desmovilización fueron 1 538 los integrantes del Bloque
Élmer Cárdenas, los que se desmovilizaron.
Abundante munición, 484 armas entre largas y de apoyo, granadas y
explosivos, fueron entregados por los miembros de este bloque.
Según información entregada por el Grupo Interinstitucional Antiterrorismo, GIAT, entre las armas se encuentran 451 fusiles, 10 ametralladoras, 3 lanzagranadas MGL, 4 lanzagranadas de 40 mm, 14 morteros
de 60 mm artesanales, 2 lanzacohetes RP67 y 10 cohetes PG7.
Así mismo, se recibieron 109 896 unidades de munición de diferente
calibre. Entre el material de guerra había 116 granadas de fusil, 29 de
granadas de mano, 304 granadas de 40 mm y 90 granadas de 60mm.
Un grupo de técnicos antiexplosivos realizó la destrucción controlada de explosivos que fueron entregados por este grupo.
Todo el material de guerra fue trasladado a la Brigada XVII, con
sede en Carepa, Antioquia, donde quedó a disposición de las autoridades judiciales y de control.
462
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
La Corte Constitucional declaró que la ley 975 de 2005, llamada de
Justicia y Paz, aprobada por el Congreso de la República para regular la
reinserción de los miembros de los grupos armados al margen de la ley,
se ajusta a la Constitución Nacional.
Muchos críticos del proceso con las autodefensas consideran esa ley
como una ley hecha a la medida de las autodefensas, permisiva, favorable a la impunidad. La verdad es que la Ley 975 de 2005 junto con las
leyes 418 de 1997, 548 de 1999 y 782 de 2002 constituyen el actual marco jurídico que permite la negociación con grupos armados al margen
de la ley y su desmovilización.
Seguramente en la medida que se logren concretar nuevos procesos
de paz o desmovilización de otros grupos armados irregulares será necesario expedir por parte del Congreso de la República nuevos instrumentos legales que perfeccionen la actual legislación y la hagan apropiada para las circunstancias que existan al momento histórico.
El Presidente del Alto Tribunal, Jaime Córdoba Triviño, anunció
que el organismo concluyó que la ley resulta constitucional y por ello le
había dado el visto bueno de constitucionalidad. Los magistrados declararon “exequible”, es decir, ajustada a la Carta Magna la Ley de Justicia
y Paz por seis votos a favor frente a dos en contra165.
DESMOVILIZADOS BUSCABAN MÁS BENEFICIOS DE LEY
En total 1 099 desmovilizados de las AUC habían solicitado acogerse a la Ley de Justicia y Paz, entre ellos, Diego Fernando Murillo
Bejarano, alias “Don Berna”.
El Alto Comisionado para la Paz entregó la segunda lista de personas
desmovilizadas de las AUC que solicitaron acogerse a la Ley de Justicia y
Paz. Fueron 495 nuevos nombres que se adicionan a los 604 que ya se habían entregado el pasado 17 de abril al Ministerio del Interior y de Justicia
con destino a la Fiscalía General de la Nación, para un total de 1 099.
165
Op. cit. Noticias RCN. [Programa televisivo]. Bogotá. RCN Televisión. 26, abril, 2006.
463
Estos ex combatientes deberían entregar bienes, reparar a las víctimas y entregar información a las autoridades para acceder a la pena
alternativa de entre 5 y 8 años.
El Alto Comisionado explicó que las personas reseñadas en los listados hacían parte de los 30 151 desmovilizados colectivos que entregaron sus armas entre el 25 de noviembre de 2003 y el 11 de abril de 2006,
fechas durante las cuales tuvo lugar la desmovilización colectiva de las
AUC. También declaró que las AUC le habían hecho llegar una nueva
lista con los nombres de los miembros de ese grupo armado ilegal que
se encontraban privados de la libertad y no estaban incluidos dentro de
los 30 845 desmovilizados colectivos ya reseñados.
Hasta el 25 de abril de 2006 se habían acreditado por parte de los
miembros representantes 1 552 presos, cuyo listado había sido enviado
a las Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía General de la Nación y al
Ministerio del Interior y Justicia, teniendo claro, según lo establece la ley,
que la pertenencia de estas personas a las AUC debería ser “determinada
en la respectiva providencia judicial por las autoridades competentes”.
De igual manera, Luis Carlos Restrepo suministró a la Unidad de
Justicia y Paz de la Fiscalía la relación de bienes entregados por los
miembros de las autodefensas durante los actos de desmovilización. Se
trataba de 59 bienes inmuebles ubicados en cascos urbanos e información sobre 334 predios rurales con un total de 25 601 hectáreas, en los
cuales al parecer se adelantaban operaciones logísticas de las AUC.
También entregó información sobre el procedimiento seguido en la
recepción de 149 automotores y 3 aeronaves entregadas en las diferentes
desmovilizaciones de las AUC.
En la nueva lista de desmovilizados que esperaban acogerse a la Ley
de Justicia y Paz, 21 tenían la calidad de miembros representantes y dos
estaban privados de la libertad. Se trataba de Diego Fernando Murillo
Bejarano y Juan Francisco Prada, quienes actuaron como Miembros Representantes para las desmovilizaciones del bloque héroes de Tolová y del
Frente Julio Peinado Becerra de las AUC, declaró el Alto Comisionado166.
166
Op. cit. [en línea], abril 2006. Disponible en Internet: www.elmundo.com.
464
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
El 26 de abril de 2006, el Periódico El Meridiano de Córdoba, de
Montería, informó que Salvatore Mancuso Gómez, comandante desmovilizado de las AUC, encabezaba la erradicación manual de cultivos
ilícitos en zona rural de Tierralta.
El ex comandante de las AUC estaría, desde esa fecha, junto con
un grueso número de desmovilizados en terrenos cultivados con coca
para erradicar esos cultivos como parte de la reparación que le harían al
Estado luego de su desmovilización.
El Ministro del Interior, Sabas Pretelt de la Vega, había dicho la semana anterior que alias “Macaco” y José Vicente Castaño también estaban al frente de las erradicaciones manuales en las zonas donde antes
ellos tenían operando sus tropas.
Con la culminación del proceso de sensibilización de las comunidades de Mutatá y Dabeiba se daban los últimos pasos para la ceremonia
de desmovilización de otros 484 hombres del Bloque Élmer Cárdenas
de las autodefensas campesinas, BEC.
La primera fase, en la que se desmovilizaron 309 hombres, se realizó el
pasado 12 de abril en el corregimiento El Mello, Villavicencio, de Necoclí.
La segunda fase se cumplió el domingo 30 de abril y en ella tomaron
parte 484 hombres del BEC que dejaron sus armas en el corregimiento
Lomas Aisladas, de Turbo, conocido como El 40, donde termina la vía
Panamericana. En ese sitio se desmovilizaron “Fredy” y “David”, jefes
de los frentes Pavarandó y Dabeiba, respectivamente.
En la tercera y última fase de este proceso de desmovilización, cuya
fecha no había sido definida, participarían unos 700 hombres y se esperaba que se realizara en una zona cercana a la cuenca de los ríos Salaquí
y Truandó, en Chocó.
En esta última fase se desmovilizaría Fredy Rendón Herrera, “El
Alemán”, máximo jefe del BEC. Este bloque de las autodefensas no
participó de la negociación de Santa Fe de Ralito y proponía construir
una política social en las comunidades donde hacía presencia167.
167
Op. cit.15, agosto, 2006.
465
El acompañamiento: indispensable para la post-desmovilización
Una vez iniciado el proceso de desmovilización de las Autodefensas
Unidas de Colombia, AUC, que incluyó a grupos que no hacían parte de
la negociación adelantada en Santa Fe de Ralito, como el caso del Bloque
Élmer Cárdenas, los ex comandantes de las AUC publicaron en su página el
siguiente editorial que reproducimos para conocimiento de nuestros lectores:
Conviene realizar algunas reflexiones sobre el presente y el futuro de
quienes integramos la primera fuerza anti-subversiva del país. Antes de
cualquier observación, quisiéramos resaltar el compromiso del gobierno
del señor Álvaro Uribe Vélez, quien pese a tantas y tantas críticas infundadas e injustas, ha persistido en el camino de quitarle hombres y armas
al conflicto que nos agobia, pese a que sus contendores en la actual campaña electoral han empleado como armas para atacar su administración,
el proceso con las autodefensas, porque según ellos lo que se quiere es
amnistiar generalizadamente, asunto que está muy lejos de la realidad.
Y es que cabe hacerse la pregunta: ¿en qué otro proceso de paz en el
mundo quienes firmaron los pactos de armisticio prácticamente se paran de la mesa de negociaciones y salen para la cárcel como en el caso
de Colombia? No creemos que haya antecedentes similares, lo que demuestra que de ninguna manera se trata de impunidad, ni de perdón y
olvido, como perversamente se trata de hacer ver, en el afán de capturar
los votos que les son tan esquivos.
Decíamos inicialmente que después de hacer dejación de las armas,
cabe preguntarse por la post-desmovilización, además porque en Colombia no podemos hablar de post-conflicto, ya que las guerrillas persisten en su accionar contra el pueblo. De entrada empezamos hablando
de post-desmovilización y no de reinserción ni de reincorporación, y la
diferencia no sólo es semántica.
Y la razón es simple: la autodefensa no fue una fuerza mercenaria
que hiciera presencia arbitraria en regiones en donde no teníamos ningún respaldo ciudadano. No. El grueso de nuestros combatientes siempre estuvo conformado por personas nativas de la zona en donde nos
vimos obligados a batallar contra la subversión marxista, por lo que mal
podrían ellos “reinsertarse” o “reincorporarse” en territorios y grupos
sociales que de hecho no han abandonado.
466
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Cosa muy distinta es el acompañamiento que debe hacerse a los desmovilizados, para que de la manera menos traumática posible asuman
las tareas que les corresponden a cualquier ciudadano, lo cual implica
no solo ganar el sustento para él y sus familiares, sino creer en una institucionalidad que hasta ahora pocas razones le ha dado para hacerlo.
Estamos hablando entonces de dos enormes tareas: la generación
de los proyectos de vida para todos los que estuvimos vinculados a la
autodefensa, y la recuperación de la confianza, tema sobre el que volveremos más adelante.
El primer eje del que hemos hablado corresponde no solo a la manutención inmediata de quienes dejamos las armas, sino a que tengamos
oportunidades reales y sostenibles en el tiempo, de construir actividades
que nos generen los ingresos suficientes para subsistir con dignidad, y
que de paso tengan como propósito ser generadores de polos de desarrollo en muchas de las olvidadas zonas de la patria en donde estamos
ubicados, es decir, que no solo se solucione el aspecto concreto del desmovilizado sino el de su entorno familiar y social. Esta sería la situación
ideal, especialmente en las áreas campesinas, además recogiendo experiencias de desmovilizaciones hechas en el pasado.
Esta aspiración debe ser analizada con diligencia, y su implementación hacerse aún más rápidamente. En varias oportunidades señalamos
que de no obrarse con prontitud en este tema, los desmovilizados irían
a ser cooptados por la delincuencia común o guerrillera, como desafortunadamente ya empezó a suceder. Esta circunstancia es apremiante y
ya no permite más dilaciones.
En segundo término está la recuperación de la confianza en la institucionalidad, lo que a su vez tiene dos aristas: la del desmovilizado
como tal, y la de su entorno familiar y social.
De manera que no sólo debe haber una preparación de quienes dejamos las armas, sino del medio social en donde nos vamos a desempeñar, porque de nada sirve que tengamos toda la disposición de empezar
a ser productivos bajo los cauces de la legalidad, si esa sociedad no está
dispuesta a corresponder a nuestros esfuerzos.
467
Vemos con preocupación que muchos de quienes deberían contribuir en
este sentido se hacen los desentendidos. No hemos visto aportes significativos de la clase empresarial, por ejemplo, y la intelectualidad en general, y la
academia en particular, están en mora de plantear soluciones imaginativas
pero realistas a la ingente tarea que todo este propósito implica.
Y la verdad es que en el largo plazo solo la confianza en el eficaz
funcionamiento de los mecanismos que consagran la Constitución y las
leyes en un Estado social de derecho hará viable la pacificación definitiva del país, porque este principio no solo es válido para la autodefensa
sino para los demás actores armados.
Una sociedad que respete las reglas, con unas autoridades civiles y
militares que garanticen su funcionamiento, es la mejor garantía de que
podremos romperles el espinazo a las denominadas causas objetivas de la
violencia, además de impedir que otros grupos armados, sea cualquiera
su justificación y orígenes, tomen el lugar de quienes dejamos las armas.
La paz es un esfuerzo colectivo. Los colombianos de toda condición
tienen mucho que aportar para que las semillas que estamos sembrando
fructifiquen.
Consejo Editorial, ex Comandantes de las Autodefensas168.
El diario conservador El Nuevo Siglo publicó el 29 de abril de 2006
el siguiente editorial que recoge algunas informaciones que se habían
venido presentando en relación con el surgimiento de nuevos grupos
de autodefensas al margen de la ley en sustitución de los grupos de las
AUC desmovilizados.
El editorial hace importantes reflexiones sobre el tema que vale la
pena tener en cuenta.
¿Cómo frenar el “rebrote” paramilitar?
Lo que en un principio sólo era objeto de denuncias aisladas de algunos sectores sociales en varias regiones, hoy es aceptado como cierto
168
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.colombialibre.org.
468
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
por parte del gobierno Uribe, la cúpula de las “desmovilizadas” Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, la Misión de Verificación de la
OEA y las autoridades judiciales: están surgiendo nuevos grupos paramilitares en zonas donde ya se han registrado desmovilizaciones de
combatientes.
Las denuncias más concretas fueron reiteradas la semana que termina por el Jefe de la Misión de la OEA, el argentino Sergio Caramagna,
quien indicó que las zonas en donde se ha registrado este fenómeno son
Norte de Santander, Nariño y Antioquia, así como Puerto Libertador y
Tierralta en Córdoba.
Luego fue el propio presidente Álvaro Uribe el que habló sobre el
asunto el pasado miércoles. “ahora, hay casos de reincidencia, por ejemplo, los hemos encontrado en Tierradentro, Córdoba o en el Catatumbo
o en Nariño. Esas reincidencias el Gobierno las reconoce y han sido
perseguidas con toda la determinación de autoridad. Los beneficios de
la Ley de Justicia y Paz son para aquellos que cumplan, los beneficios
de la ley, de ellos se priva a aquellos que incumplan”.
Indicó que no es fácil “en un proceso que tiene alrededor de 30 mil
desmovilizados de los paramilitares y 7 mil desmovilizados de la guerrilla, evitar reincidencias; lo importante es reconocerlas, enfrentarlas con
toda determinación”.
“Cuando me dicen que mis críticos advierten que el proceso con los
paramilitares ha fracasado porque algunos reinciden, digo: el Gobierno
no puede negar los hechos. Recuerdo una profesora de liderazgo que
me decía: los gobiernos para ejercer liderazgo no pueden negar reveses,
lo que tienen que hacer es buscar soluciones. Me hacen una denuncia
de unos paramilitares que están sembrando coca en Tierradentro; el
Gobierno no lo va a negar, lo que hace es ir, enfrentarlos, reducirlos
militarmente y quitarles los beneficios de la Ley de Justicia y Paz. El
país puede tener absoluta confianza en ello”, precisó el Jefe del Estado.
¿“NEOPARAMILITARISMO”?
Varios sectores nacionales consideran que el Gobierno no está evaluando en su debida dimensión los casos de rearme de grupos paramilitares desmovilizados y, peor aún, los eventos en que no hay reincidencia
469
criminal, sino que se trata de nuevos bloques y frentes de autodefensas
que están surgiendo.
La cuestión ha llegado a tal punto que ya no pocos analistas y editorialistas hablan de “paramilitares de primera y segunda generación”,
con el fin de distinguir los efectivos de las autodefensas que se desmovilizaron pero se han vuelto a armar, de aquellos compuestos por nuevos líderes e incluso personal que antes no había militado en facciones
armadas ilegales de extrema derecha. “Neoparamilitarismo” es el término que se está empezando a acuñar ya para describir este fenómeno.
Incluso, en algunas de las regiones mencionadas por la OEA y el
propio Gobierno ya se ha denunciando que los nuevos grupos ‘paras’
tienen nombres como “Autodefensas Unidas Independientes de Colombia” y que sus líderes afirman que su objetivo es frenar los intentos de
“retoma” de zonas por parte de la guerrilla de las FARC, puesto que el
Ejército, que se había comprometido a aumentar su presencia en esas
regiones después de las desmovilizaciones de las AUC, nunca cumplió
ese objetivo.
DOS FENÓMENOS DISTINTOS
Una fuente del alto gobierno, consultada por El Nuevo Siglo, pero
que pidió la reserva de su nombre, advirtió que es urgente diseñar una
estrategia que contenga el rebrote paramilitar, pero que, al mismo tiempo, tenga mecanismos distintos para enfrentar “fenómenos distintos”.
“El castigo a los desmovilizados que reinciden en actividades armadas ilegales es claro y se limita a retirarles los beneficios de la alternatividad penal y que sus delitos sean castigados por la ley ordinaria, lo
que implica duplicar o triplicar sus penas de prisión. Sin embargo, en el
caso de los nuevos grupos, el Estado debe tener mucho cuidado, porque
es posible que detrás de ellos haya capos del narcotráfico o delincuentes
de alta peligrosidad que, al ver cómo los jefes de las AUC y algunos narcotraficantes se “colaron en el actual proceso de paz y tendrán penas de
máximo ocho años de cárcel, ahora traten de imitar esa jugada”.
Aquí lo clave es definir cuáles son las fechas límites que el Estado tiene
para forzar a que los grupos armados ilegales se acojan a la alternatividad
penal, y a partir de qué fecha ya, por más que los grupos quieran hacerlo,
470
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
no se reconocerá estatus político a ninguna facción armada nueva y, por
lo tanto, se les tratará como delincuentes comunes, se les perseguirá militarmente, descartando cualquier posibilidad de negociación política y
asegurando que a los capturados se les aplicará la ley ordinaria y las penas
máximas establecidas en el Código Penal.
Si el Estado comete el error de tratar de negociar con cada nuevo
grupo, creará un “carrusel maléfico”, en el que mes tras mes tendrá que
reinsertar falsos paramilitares, muchos de ellos delincuentes comunes y
narcotraficantes, explicó la fuente gubernamental.
Paradójicamente, los más partidarios de que la estrategia del Estado para
combatir el “rebrote” paramilitar se active rápidamente y haga la diferenciación planteada anteriormente, son los jefes desmovilizados de las AUC.
En la Asamblea Departamental de Córdoba, “Ernesto Baéz” y Salvatore Mancuso aceptaron que se estaba presentando un proceso de
rearme en algunas zonas y acusaron al Estado de tener parte de culpa
en ello por no retomar el control y seguridad de las regiones dejadas
por los “paras” e incumplir los compromisos a los desmovilizados. Sin
embargo, al mismo tiempo coincidieron en reiterar que los beneficios de
la Ley de Justicia y Paz debían mantenerse a los reinsertados “cumplidos”, que aseguran son la mayoría de los 30 150 ex combatientes, y que
en los otros casos las autoridades debían tomar las medidas del caso.
Como se ve, la fórmula para controlar el “rebrote” paramilitar no es
fácil de encontrar y, por ahora, lo único claro en esta delicada situación es
que todos los sectores involucrados, a diferencia de lo que ocurría meses
atrás, ya aceptan como una realidad el rearme de las autodefensas169.
EL ALTO COMISIONADO ENTREGA A LA FISCALÍA NUEVA LISTA DE PERSONAS QUE SE ACOGERÍAN A LA LEY
DE JUSTICIA Y PAZ
El 11 de mayo de 2006, el Gobierno Nacional por intermedio del
Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, entregó una nueva lista de autodefensas que decidieron acogerse a la Ley de Justicia y Paz170.
169
EL NUEVO SIGLO. 29, abril, 2006.
170
Op. cit. [en línea], mayo 2006. Disponible en Internet: www.elmundo.com.
471
Con esta nueva lista eran 2 180 los desmovilizados sometidos a la Ley
de Justicia y Paz.
La localidad de Unguía, en el departamento del Chocó, sería el sitio
para la tercera y última fase del proceso de desmovilización del Bloque
Élmer Cárdenas de las Autodefensas Campesinas de la región de Urabá.
Así lo informó el Asesor de Paz de Antioquia, Jaime Fajardo Landaeta, quien reportó la selección del municipio de Unguía para la desmovilización final de los 700 hombres y mujeres que restaban del bloque Élmer Cárdenas y de su comandante, José Alfredo Berrío, conocido
como “Fredy Rendón” o “El Alemán”.
Faltaba definir la fecha de la desmovilización, pero se estimaba que
antes de concluir mayo de 2006 terminaría este proceso que comenzó a
finales de marzo en Necoclí y siguió 20 días después en la localidad de
El 40 en jurisdicción de Turbo.
El grupo que se desmovilizará en Unguía era el que actuaba sobre
las márgenes del río Atrato y sobre las cuencas de los ríos Truandó y
Salaquí, en territorio del Chocó171.
El 4 de mayo de 2006 se supo que el Congreso de los Estados Unidos
había aprobado el desembolso de 15.4 millones de dólares para apoyar
la desmovilización de los grupos de autodefensa. Los recursos habían
sido aprobados para el año fiscal 2005, pero no habían podido ser entregados pues requerían del aval del Legislativo.
En todo caso, se trataba de la primera inyección directa de recursos
dirigidos a este propósito. En el 2004, el Gobierno de Estados Unidos
entregó una partida inferior de 3,2 millones de dólares, que se utilizó
para financiar las operaciones de la Misión de Verificación de la OEA y
para la reinserción de niños combatientes.
171
Op. cit. Noticias Caracol Radio. [Programa radiofónico]. RCN Radio. 10, mayo, 2006.
472
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
LA CORTE CONSTITUCIONAL DECLARA EXEQUIBLE LA
LEY DE JUSTICIA Y PAZ
El 19 de mayo de 2006 se conoció en el país la sentencia por medio
de la cual la Corte Constitucional declaró exequible la Ley de Justicia y
Paz, pero recortó algunos beneficios para las personas que se acogieran
a ella. Una primera lectura de la sentencia dejó la sensación que se le
había asestado un duro golpe al proceso de desmovilización cumplido
entre el Gobierno Nacional y los grupos de autodefensas y a los futuros
procesos que pudieran iniciarse eventualmente con otros grupos armados al margen de la ley.
La reacción del Gobierno y de varios ex jefes de las autodefensas en
relación con la sentencia que supuestamente los obligaba a pagar las
condenas impuestas antes de desmovilizarse, obligó a los magistrados
de la Corte a emitir un documento para explicar los alcances del fallo.
El punto central de la incertidumbre fue la aplicación de las penas
alternativas a que tienen derecho los desmovilizados. La tensión fue tal,
que varios jefes expresaron a los medios de comunicación su alarma por
los posibles efectos de la sentencia. “Ernesto Báez” calificó la decisión
como “un golpe mortal al proceso”, mientras que Salvatore Mancuso
llegó a proponer la realización de un plebiscito para avalar el proceso.
El Ministro del Interior y Justicia, Sabas Pretelt, como vocero del
Gobierno, calificó el hecho de “preocupante”.
La confusión generada por el fallo de la Corte Constitucional consistió en que la Ley de Justicia y Paz establecía que las condenas impuestas
a los reinsertados antes de su desmovilización quedarían extinguidas
cuando estos cumplieran las obligaciones de la Ley 975 del 2005.
La primera interpretación del fallo hecha por los medios de comunicación consistió en pensar que la Corte había señalado que esas penas
no debían eliminarse, sino acumularse con la condena emitida por el
Magistrado de Justicia y Paz por los delitos que, al desmovilizarse, hubiese confesado el desmovilizado.
El Presidente de la Corte, Magistrado Jaime Córdoba, explicó a
los medios la decisión y en ese punto señaló que ambas condenas se
473
acumulaban y pagaban “efectivamente”. Esto fue interpretado como
que los desmovilizados con condenas pendientes antes de su desmovilización debían pagarlas en su totalidad. De ser así, el proceso sufría
un duro revés.
Cuando se anunció una reunión de emergencia de los ex jefes de las
autodefensas para tratar el tema, los magistrados de la Corte Constitucional analizaron la situación y decidieron emitir un nuevo comunicado, en el cual precisaron los alcances del fallo.
En el mismo señalaron que si el desmovilizado condenado con anterioridad se acogía a la Ley 975 del 2005 y cumplía con los requisitos
atinentes al derecho a la verdad y reparación de las víctimas, dicha condena se acumularía jurídicamente a la nueva condena que se le impusiera. El tribunal, después de efectuada la acumulación, le concedería
el beneficio de la pena alternativa de 5 a 8 años, en relación con la pena
acumulada, si se cumplían los requisitos de la ley.
Además, la Corte precisó que la inexequibilidad del Artículo que castiga la sedición como delito político no cobijaba a quienes ya se habían desmovilizado, atendiendo el principio constitucional de la favorabilidad172.
Igualmente, el presidente de la Corte aclaró que la sentencia no era
retroactiva, lo cual significaba que las penas vigentes no eran acumulables con las penas alternativas, las cuales varían entre cinco y ocho años
de prisión. Una interpretación distinta Cerraría las puertas a futuros
procesos de paz con otros grupos armados ilegales.
En otras palabras, según el magistrado, si un desmovilizado tenía
una condena vigente de 40 años, pero se acogía a la Ley de Justicia y
Paz cumpliendo todos los requerimientos de la ley, y era condenado a
ocho años por el delito que había confesado, sería esta última pena la
que tendría que pagar.
De esta manera, el magistrado Córdoba aclaró que el fallo de la
Corte Constitucional no vulneraba el proceso de paz entre el Gobierno
172
Op. cit. 20, mayo, 2006.
474
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Nacional y las autodefensas, como lo habían considerado el Ejecutivo,
analistas y los jefes desmovilizados. La decisión había causado una intensa polémica y llevó al Gobierno, por medio del Ministro del Interior,
Sabas Pretelt, a anunciar el estudio en profundidad de la sentencia para
proponer mecanismos que evitaran el retroceso de las negociaciones.
Esto no sería necesario con la aclaración hecha por el presidente de la
Corte, pero es muy probable que sea preciso en el futuro producir nuevas normas que permitan la realización de nuevos procesos de paz con
los grupos al margen de la ley que aún no se han desmovilizado.
ASÍ ERA LA LEY
El Artículo 71 homologaba la conformación de grupos de autodefensa al delito de rebelión, es decir, era considerado delito político. La ley
abría la posibilidad de que los desmovilizados que no confesaran todos
sus delitos tuvieran una segunda oportunidad, con apenas el 20% más
de la pena original. La norma preveía un descuento de hasta 18 meses
en las penas para todos los autodefensas que hubieran estado asentados
en Santa Fe de Ralito, en el proceso de paz con el Gobierno. El Decreto
reglamentario daba hasta seis meses para llevar a los procesados ante
los jueces. Todos aquellos bienes adquiridos por los desmovilizados de
manera ilegal deberían ser devueltos a las familias de las víctimas a
manera de reparación. Los jefes y demás miembros del grupo ilegal
responden solidariamente por la reparación de todos y cada uno de los
delitos cometidos por la organización.
ASÍ QUEDÓ LA LEY
La formación de grupos ilegales de autodefensa sigue siendo un delito común en Colombia. Por el mismo motivo se cayó la rebaja general
de penas del 10%, incluida en el Artículo 70. En adelante, según el fallo
de la Corte Constitucional, todo desmovilizado que se compruebe que
miente u omite delitos perderá el beneficio de la pena alternativa. El
tiempo que los desmovilizados hubieren estado en las zonas de ubicación no se descontará de sus penas. Los sitios de reclusión funcionarán
bajo las normas del régimen carcelario común.
Los beneficiarios de la norma cumplirán el requisito de reparar a las víctimas con los bienes ilegales y con los legalmente adquiridos. Los jefes y demás miembros del grupo ilegal responden solidariamente por la reparación
de todos y cada uno de los delitos cometidos por la organización.
475
Al conocer la sentencia de la Corte Constitucional, el ex jefe de las autodefensas Salvatore Mancuso dio las siguientes declaraciones a El Tiempo:
“Me mantengo en mi posición: no retomaré las armas’”.
El Tiempo: ¿Usted sigue firme en la desmovilización o está
dispuesto a volver al monte?
Salvatore Mancuso: me mantengo en mi posición: no retomaré las armas. Agotaré todos los caminos que sean necesarios para
que esa percepción se cambie y con el Gobierno y el Legislativo y
la gente busquemos alternativas.
E.T.: ¿Estaría dispuesto a cumplir los 40 años de condena que
le impuso un juez?
S.M.: es inconcebible que producto de un acuerdo de paz, después de jalonar un acuerdo vaya a pagar 40 años de cárcel, más
ocho años de Ley de Justicia y Paz. Creo que eso sería injusto,
conmigo y con los actores del conflicto.
E.T.: ¿Y si en algún momento se hace inevitable que tenga que
cumplir esas penas?
S.M.: en todo momento he sido un hombre positivo y constructivo. Repito que estoy dispuesto a construir lo que tengamos
que construir, estoy dispuesto a luchar por cambiar estas situaciones y hacer un camino que traiga la paz173.
POR INCERTIDUMBRE CON FALLO SOBRE LA LEY DE
JUSTICIA Y PAZ, APLAZAN DESMOVILIZACIÓN DEL
CACIQUE PIPINTÁ
El fallo de la Corte Constitucional, que recortó varios de los beneficios que les daba la Ley de Justicia y Paz a los desmovilizados de los
grupos de autodefensa, terminó por paralizar la entrega de algunos grupos que aún estaban pendientes por desmovilizarse.
173
Op. cit. 20, mayo, 2006.
476
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
La Corte Constitucional declaró exequible la Ley de Justicia y Paz,
pero los grupos que aún no se habían desmovilizado deberían acogerse
a las condiciones establecidas en la sentencia del Alto Tribunal y sobre
las cuales no había claridad.
El Cacique Pipintá, una disidencia del Bloque Central Bolívar, conformado por 200 hombres que hacía presencia en La Merced, Aguadas,
Pácora y Salamina, en el norte de Caldas, suspendió su desmovilización.
Igualmente, el recorte de beneficios que le hizo la Corte Constitucional a la Ley de Justicia y Paz dejó en suspenso la desmovilización
del último reducto del Élmer Cárdenas, una disidencia de las AUC que
hacía presencia en Chocó y en parte de Antioquia, el cual, no obstante
las dudas que existían sobre la aplicabilidad de la Ley de Justicia y Paz,
se desmovilizó el 15 de agosto de 2006.
Otro desarme que quedó en suspenso fue el del grupo de Martín Llanos, las autodefensas del Casanare. Esa facción se apartó de las negociaciones de paz en Santa Fe de Ralito y no había atendido los llamados
del Gobierno174.
EVALÚAN NECESIDAD DE CAMBIAR LA LEY DE JUSTICIA
Y PAZ
Especialistas y representantes de la sociedad civil coincidieron con
el presidente Álvaro Uribe Vélez en que era necesario reformar la Ley
de Justicia y Paz para futuras negociaciones. Afirmaron que se puede
incluir el concepto de amnistía en la norma, siempre y cuando se fortalezca la administración de justicia contra los delitos de lesa humanidad.
El jefe del Estado aceptó que, pese a que sus opositores consideran
que la ley es “muy blanda” para las autodefensas, habría que elaborar
otra más blanda aún en una eventual negociación con las guerrillas de
las FARC y el ELN.
174
Ibíd. 24, mayo, 2006.
477
Esa misma posición había sido planteada por el Alto Comisionado
para la Paz, Luis Carlos Restrepo, quien se refirió a los guerrilleros presos. “Tenemos que buscarles un camino, hay que ver si se les puede aplicar la Ley de Justicia y Paz o si necesitamos normas adicionales para
que estos hombres puedan recibir beneficios a cambio de ayudarnos a
desmantelar la organización a la que pertenecen”, añadió.
A juicio del empresario Moris Ackerman, quien había sido uno de los
principales promotores de la “Casa de Paz” con el ELN y quien integraba
la Comisión de Facilitación de la Sociedad Civil, la ley tiene vacíos, pero
es un esfuerzo válido en la búsqueda de un equilibrio entre justicia y paz.
Por eso, dijo, las modificaciones que se plantearan deberían girar en torno
al narcotráfico y su relación con los grupos armados ilegales.
El académico Álvaro Jiménez manifestó que si bien en un documento del año 2004, antes de la aprobación de la norma, el ELN proponía
una amnistía, la figura estaba prevista para los prisioneros políticos en
caso de un acuerdo humanitario y no a los hechos cometidos como
parte de una confrontación armada.
“El pronunciamiento de Uribe no puede dar lugar a confusiones. Si
ahora se propone un cambio a la ley es porque el Gobierno entendió sus
fallas y desea corregirlas, lo cual es loable”, dijo Jiménez, y agregó: “si
bien en la norma se tendrán que incluir los delitos políticos, los crímenes de lesa humanidad no pueden quedar impunes frente a la justicia ni
a los colombianos”.
El ex Procurador Jaime Bernal Cuéllar se manifestó de acuerdo con
los planteamientos de Jiménez, y explicó que uno de los primeros puntos que se deben tener en cuenta a la hora de reformar la norma es que
las guerrillas tienen una ideología diferente de la de las AUC. “En consecuencia, al estar en contra de la estructura del régimen constitucional,
enmarcan su conducta en el concepto de rebelión”, precisó.
Señaló que existen dos vías para permitir que la ley sea aplicada también a los subversivos: “integrarla parcialmente al Código Penal, que
consagra la rebelión, y así permitir la amnistía y el indulto. O elaborar
una nueva norma que permita la amnistía, pero deje en claro los delitos
conexos a la rebelión que serían objeto del beneficio”.
478
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
TRES DATOS CLAVES
1. El delito político está consignado en la Constitución Política de
Colombia, el Código Penal y la jurisprudencia de las cortes. Allí
se establecen sus lineamientos y tratamiento.
2. Según las Altas Cortes, la diferencia entre un delito político y
otro común es la motivación para cometerlo. El Código Penal
define tres clases: rebelión, sedición y asonada.
3. Según el Consejo Superior de la Judicatura, mientras un delito
común está inspirado “por motivos innobles”, el delito político
es motivado por “intereses comunes”175.
NACE ALTA CONSEJERÍA
REINSERCIÓN
PRESIDENCIAL
PARA
El Gobierno creó una nueva Alta Consejería Presidencial para la
Reinserción. Así desaparece la oficina del Ministerio del Interior que
venía manejando estos aspectos, a cargo de Juan David Ángel.
Según el vocero de la Casa de Nariño, Ricardo Galán, quien leyó
un comunicado, aún se estaba en consultas para definir la persona que
ocuparía esa nueva posición. Además, el presidente Uribe ordenó que
se prosiguiera a la captura de las bandas delincuenciales que habían surgido en las regiones donde antes operaban bloques de las autodefensas,
para determinar si había participación allí de reinsertados.
El presidente Uribe señaló que la recientemente creada Consejería
para la Reinserción debería reunir todas las competencias que se ejercen alrededor de la reinserción. Es decir: tendría que ser constructora
de políticas y ejecutora. La Consejería debería estar en coordinación
permanente con la oficina del alto comisionado para la paz y con el
ministerio del Interior y de Justicia.
175
Op. cit. 25, mayo, 2006.
479
Para esto el jefe del Estado encargó a la dirección de la Policía adelantar una estrategia de monitoreo sobre las actividades de las personas
que dejaron las armas176.
El siguiente es un comunicado emitido por el Gobierno Nacional:
Comunicado
La Presidencia de la República informa que:
1. El Gobierno Nacional ha tomado la decisión de crear la Alta
Consejería para la Reinserción.
2. Las bandas criminales que se han identificado en algunas partes
del país, donde anteriormente operaban los grupos de autodefensa, deben ser perseguidas con toda la decisión por parte de la
justicia y de la fuerza pública.
3. Si en esas bandas hay miembros de las autodefensas que se hayan
sometido a la Ley de Justicia y Paz, perderán todos los beneficios.
4. A partir de hoy, la Policía Nacional cumplirá con la tarea de
monitoreo y seguimiento de los reinsertados, a fin de tener la
certeza de que sus conductas se ajusten a la ley. Para tal efecto, la
Policía adelantará la coordinación requerida con la Alta Consejería para la Reinserción.
5. La Policía Nacional ha puesto en marcha un plan operativo para
combatir el surgimiento de dichas bandas.
DIRECCIÓN DE CARABINEROS
El jefe del Estado reveló que otra de las medidas adoptadas, para
prestar seguridad en las zonas donde se habían presentado desmovilizaciones y había información sobre reorganización de bandas criminales,
fue la de crear la Dirección de Carabineros para la Policía Rural y la de
avanzar con la cobertura policiva en las áreas de desmovilización.
176
Op. cit. Noticias Caracol Radio. [Programa radiofónico]. RCN Radio. 9, junio, 2006.
480
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Recalcó el Presidente de la República que la fuerza pública había copado todos los municipios del país y que la meta era seguir avanzando
en este propósito, en los corregimientos estratégicos y los lugares donde
se habían presentado desmovilizaciones.
Agregó el Presidente que había sido creado un equipo interinstitucional integrado por la Policía, la Fiscalía, el DAS y las Fuerzas Militares,
para identificar y capturar a las personas desmovilizadas que estuvieren
organizando bandas delincuenciales en diferentes zonas del país177.
LOS EX AUC CREAN VILLA ESPERANZA
El 21 de junio de 2006, desmovilizados de las autodefensas, liderados por “Ernesto Báez”, manifestaron su deseo de convertir la parcelación Villa Roca, donde habían tenido lugar reuniones con el Gobierno,
en una sede permanente para reunirse con distintos sectores sociales
para dialogar acerca de la paz. “Villa Esperanza” fue el nombre que
escogieron para esa parcelación.
Los desmovilizados habían lanzado en el pasado la idea de un referendo sobre la extradición y uno de los temas que más les preocupan del
reciente fallo de la Corte Constitucional sobre la Ley de Justicia y Paz
era haber perdido el estatus de delincuentes políticos.
“Villa Esperanza”, por su ubicación y fácil acceso, permitiría el acercamiento de muchos sectores que no pudieron ir a Santa Fe de Ralito.
El 23 de junio de 2006, el Consejo Editorial y los ex Comandantes
AUC en un editorial publicado en su página de internet, comentaron
favorablemente la creación de la Consejería para la Reinserción en los
siguientes términos:
Saludamos con esperanza la estructuración de esta nueva dependencia, porque creemos que los problemas que debe enfrentar son de tal
magnitud que ya era una necesidad sentida que hubiera un doliente del
más alto nivel para encarar los retos que demanda la desmovilización
177
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
481
colectiva de 30 947 hombres y mujeres, y más de 10 000 desmovilizaciones individuales, según los datos oficiales del Gobierno.
De todas formas es de reconocer la meritoria labor de Juan David
Ángel, quien era el encargado de estos temas, porque este es un proceso
sui generis, al que a la dificultad de encontrar soluciones para tan alto
número de ex combatientes, debe agregarse la particularidad de cada
una de las estructuras desmovilizadas.
En efecto, Colombia es un país de regiones, y las estructuras armadas desmovilizadas y en proceso de reinserción de quienes integrábamos las autodefensas, correspondían a los rasgos distintivos de esas regiones. Por eso, las fórmulas simplistas y uniformes no son aplicables
para la totalidad de los desmovilizados, sino que, por el contrario, deben
consultar esos contrastes regionales, además de que deben también ser
acordes con las aspiraciones individuales de quienes detuvimos la amenaza de la sombra marxista, que ominosa se proyectaba sobre grandes
regiones de la patria.
Y es que esta no es una graciosa concesión que se nos está haciendo.
Es evidente que si se quiere que el proceso de paz con la autodefensa
termine de manera constructiva, el tema de la reinserción en la vida
social y productiva de los ex combatientes debe estar en la agenda de
prioridades de la nación.
Otro anuncio que se hizo recientemente por parte del Presidente de
la República fue el ordenar al director de la Policía que se informe mensualmente sobre en dónde se encuentran cada uno de los desmovilizados, y que se tenga un recuento pormenorizado de sus actividades.
Como ciudadanos de pleno derecho que respetamos la ley y acatamos las autoridades legítimamente constituidas, nos parece un hecho
positivo que así se haga, para que desmientan de una vez tantas leyendas y versiones sin fundamento sobre lo que estamos haciendo los desmovilizados de la autodefensa.
Pero, igualmente, convendría que de forma detallada también se informara sobre cómo va la marcha de la reinserción en la vida productiva
de los ex combatientes, qué programas se están llevando a cabo, cuál es
su grado de éxito y de aceptación en la sociedad.
482
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
De todas formas se sigue avanzando. Ya hay un proyecto en marcha, en coordinación con el Gobierno Nacional, en Amalfi, Antioquia
y Córdoba, en donde los desmovilizados están adelantando labores de
erradicación de cultivos ilícitos. Este programa cuenta con la participación decidida de Vicente Castaño y Salvatore Mancuso, quienes se han
apersonado de su ejecución y de la organización de los hombres comprometidos con esta tarea, que además es una muestra fehaciente de la
voluntad de quien fue la comandancia de la autodefensa en contribuir
en la terminación de quien provee la gasolina que mueve el conflicto
colombiano, como lo es el narcotráfico.
Este es un hecho tangible de la voluntad que nos asiste y una prueba
comprobable del grado de compromiso con las tareas de reparación y reconstrucción de la verdadera vocación agrícola del campesinado de la patria, que conformó buena parte de la que fue nuestra estructura armada.
Es conveniente buscar otras alternativas, viables, financiables y sostenibles en el tiempo, que se correspondan con esa diversidad de la que
hablábamos anteriormente. Continúa así la autodefensa transitando los
senderos de la reconciliación nacional, a la cual llegaremos más temprano que tarde.
“Dios me da la capacidad para ver a mi pasado no como fantasma
que me atormenta, sino como un tesoro del que puedo sacar lecciones y
tener una guía para el presente.”
Consejo Editorial ex Comandantes AUC
Colombia, junio 23 de 2006
A raíz de la discusión que ha rodeado el proceso de desmovilización
de las autodefensas, vale la pena conocer los argumentos que cada una
de las partes involucradas tiene respecto de sus motivaciones y de la
forma como se desarrolló este proceso. A continuación reproducimos
textualmente un nuevo editorial de los ex combatientes desmovilizados.
483
Las “víctimas de estado”: un capítulo más de la novela del fundamentalismo humanitario
Recientemente se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá un encuentro
denominado “Víctimas de Crímenes de Estado”, en el que hubo no solo
delegados nacionales sino de otras naciones de América, especialmente
del cono sur. Persigue este movimiento el muy loable objetivo de luchar
contra la impunidad y de lograr la verdad, la justicia y la reparación
integral. Nadie puede oponerse a tan nobles metas.
Sin embargo, para mirar todo el panorama del conflicto colombiano conviene matizar el análisis sobre lo que aquí ha ocurrido. Si bien
inicialmente el nacimiento de algunas agrupaciones de autodefensas se
dio por iniciativa de los gobiernos de la época, muy pronto la dinámica
del crecimiento del movimiento nacional antisubversivo que más adelante se denominó como Autodefensas Unidas de Colombia excedió
ampliamente la iniciativa oficial.
Posteriormente, en el gobierno de Virgilio Barco fuimos declarados
ilegales, hace casi veinte años, por lo que la mayor parte del tiempo de
nuestra existencia no hemos tenido vínculos con autoridades oficiales.
Cosa distinta es que precisamente por luchar contra un enemigo común, la fuerza de la coyuntura a veces haga aparecer las acciones que
se ejecutaron como fruto de una imposible coordinación de los organismos de seguridad del Estado y nosotros como AUC.
Y otra cosa muy distinta también es que esporádicamente, y de manera concreta, hayamos recibido colaboración de elementos de las fuerzas militares. Torpes seríamos en negarlo. Pero de ninguna manera las
acciones que pueden atribuírsenos serían consideradas como “crímenes
de Estado”, que es lo que persiguen estas agrupaciones; queremos creer
que lo hacen de buena fe.
Porque una cosa es la justicia y la reparación, con lo cual todos estamos de acuerdo, y otra muy distinta la venganza y la retaliación, que es
lo que se percibe que desafortunadamente persiguen muchos, entre ellos
varios de los participantes en el evento que reseñamos.
Hace pocos días se descubrió una red de miembros activos de la Policía Nacional que colaboraba con un frente de las FARC, secuestrando
484
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
compatriotas para luego entregarlos a los guerrilleros. Igualmente, no
hace mucho nos enterábamos de que militares pertenecientes a la Armada Nacional vendían pertrechos y otros elementos de guerra a las FARC
en varios lugares del país, y que lo habían hecho desde hace varios años.
Siguiendo la misma lógica de quienes hacen parte del movimiento de víctimas al que hacemos alusión, también los hechos atribuidos
a la guerrilla deberían ser calificados como crímenes de Estado, por
esas vinculaciones concretas de miembros individuales de las fuerzas
de seguridad del Estado con los movimientos aunados de inspiración
marxista.
Lo que puede verse en la intención de llamar crímenes de Estado a
los actos de guerra que debimos hacer, es un por lado el interés económico de las multimillonarias que se vendrán como reparación, y como
es imposible que nosotros de nuestro peculio podamos absolverlas, se
repicará en contra del Estado, por considerarse que hubo complicidad o
abierta participación en muchas actividades.
Pero por otro lado, está la ventaja para nuestros enemigos naturales, la guerrilla, en hacer aparecer a la fuerza de la autodefensa como
parte de un gigantesco entramado de guerra sucia, con la complicidad
y el patrocinio del Estado, en contra de luchadores populares, que únicamente perseguían legítimas reivindicaciones sociales. Y ellos están
interesados en presentar así las cosas porque de esa manera conseguirán que un manto de olvido cubra sus impresionantes crímenes en
contra de la humanidad. No será tan fácil para la guerrilla y quienes
les colaboran que así sea. Aquí estamos para denunciar sus aviesas
intenciones.
Nunca hemos estado en contra de que busquemos y encontremos la
verdad. Pero verdades a medias son mentiras completas. ¿Cuándo empezará el país a entender que la guerra que se ha librado es una guerra
de todos? ¿Que todos estamos involucrados en ella, por omisión, incitación o acción? ¿Está preparado el país para que nos veamos en el espejo
de lo que realmente somos, y no como aparentamos ser?
Nosotros no clamamos por impunidad, ni por perdón y olvido incondicionales. Solo queremos que la imagen representativa de la justicia, una
mujer que está vendada y que tiene una espada y una balanza en sus ma485
nos, se haga realidad, y no le sigamos el juego a los que califican los hechos según sus afinidades ideológicas, con una doble moral que espanta.
“Los defensores de las causas deben andar más solícitos de la verdad
que del triunfo”.
Consejo Editorial ex Combatientes AUC
Colombia, julio 13 de 2006178
Ex Comandantes AUC
EL GOBIERNO REGLAMENTARÍA LA LEY DE JUSTICIA
Y PAZ
El 30 de julio de 2006 se supo que el Gobierno, mediante un Decreto
reglamentario, trataría de asegurar a las autodefensas desmovilizadas
los beneficios que les otorgaba la Ley de Justicia y Paz y que fueron
eliminados por la Corte Constitucional.
Según el Diario El Tiempo, el posible Decreto consagraría que los
beneficios de la ley se aplicarían a los desmovilizados desde el momento
en que manifestaron su deseo de desmovilizarse, no desde cuando se
acogieron a la norma antes del fallo de la Corte.
Según esta apreciación, el tiempo que los desmovilizados pasaron
en las zonas de concentración se les tendría en cuenta como parte de la
pena y se les reconocería la desmovilización bajo la Ley 782, que establece el delito de sedición.
Sin embargo, la favorabilidad no se les aplicaría a los grupos que se
desmovilizaron después del fallo de la Corte.
Se suspendería la ejecución de las penas y se reemplazaría por una
alternativa que no excedería los ocho años. Sin embargo, el nuevo Decreto no tendría un marco tan amplio para la ley como el 4760, expedido el 30 de diciembre del año 2005.
178
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www. colombialibre.org.
486
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Uno de los puntos restrictivos sería el de la confesión. Ésta, dijo la
Corte, debería ser plena, completa y veraz. En caso contrario, podrían
perderse los beneficios de la ley. El decreto, al parecer, pondría límites.
En cuanto a la verdad y la reparación, la Corte dijo que los familiares
directos, no solo en primer grado de consanguinidad, podrían intervenir
en los procesos para buscar resarcimiento de sus derechos.
Faltaba esperar cómo resolvería el Gobierno el tema de la indemnización, pues la Corte dejó abierta la posibilidad de que los desmovilizados lo hicieran también con sus bienes lícitos.
FISCAL: LOS JUECES APLICARÁN DISCRECIONALMENTE LA FAVORABILIDAD A LOS DESMOVILIZADOS DE
LAS AUC
El Fiscal General, Mario Iguarán, consideró que los desmovilizados de las autodefensas podrían ser juzgados con la sentencia de la
Corte Constitucional sobre la Ley de Justicia y Paz, o sin ella; principal
razón de la crisis en el proceso con los paramilitares.
El fiscal indicó que serán los jueces y fiscales de Justicia y Paz los
que adopten esta decisión en virtud de la aplicación del principio de la
favorabilidad de quien se acoja a la norma.
Informó que el principio de favorabilidad podría interpretarse en el
entendido de que el proceso jurídico del ex combatiente empezaría desde el momento en que se produjo la desmovilización, con lo que no se
aplicaría la sentencia de la Corte.
Pero si se tiene en cuenta que el proceso de juzgamiento empezaría
desde el envío de las listas de los desmovilizados a la Fiscalía, se aplicaría dicha decisión del alto tribunal179.
179
Op. cit. Noticias Caracol Radio. [Programa radiofónico]. Caracol Radio. 15, agosto, 2006.
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EL PRESIDENTE ÁLVARO URIBE CONMINÓ A LOS JEFES
DE LAS AUC A IR A CENTROS DE RECLUSIÓN
El 15 de agosto el presidente Álvaro Uribe les advirtió a los ex jefes
de las AUC desmovilizados, que si no se entregaban a la justicia podrían perder el beneficio que les mantenía suspendidas sus órdenes de
extradición a Estados Unidos.
El mensaje, que fue leído por el propio Uribe, señala que los miembros de las AUC que por sus delitos debieran ponerse a disposición de
los magistrados de Justicia y Paz, deberían hacerlo sin ninguna dilación.
“La voluntad oficial es salvar el proceso, dentro del ordenamiento
jurídico, contando con la colaboración de quienes se han acogido a él”,
dijo Uribe Vélez.
El pronunciamiento cayó por sorpresa, pues lo que se esperaba era
un Decreto que precisaría el camino a seguir para los desmovilizados
y se trata de una orden que se da más de un año después de aprobada
la Ley de Justicia y Paz y cinco semanas después de conocerse el texto
completo del fallo de la Corte Constitucional que les limita beneficios
a las AUC.
No obstante, “Julián Bolívar’”, vocero de las AUC, dijo: “el Decreto
no lo conocemos, lo que conocemos es lo que El Tiempo publicó, pero
con lo que no estamos de acuerdo, lo que nos deja una incertidumbre
jurídica grande, es el fallo de la Corte”.
El vocero de los desmovilizados, “Julián Bolívar”, indicó que siempre habían estado dispuestos a ir a centros de reclusión.
Texto del comunicado oficial
1. Dije el 7 de agosto: “la generosidad oficial en los procesos de
paz, muchas veces injusta, es comprendida por la ciudadanía
cuando hay reciprocidad y buena fe en los beneficiarios”.
2. “La credibilidad nacional e internacional en el proceso de paz con
los grupos ilegales de autodefensa, necesita que el proceso avance”.
488
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
3. En consecuencia con lo anterior, el Presidente de la República ha
tomado las siguientes decisiones:
a. Los desmovilizados, con el ejemplo de los miembros representantes, que por la naturaleza de los delitos deban ponerse a disposición de las salas de magistrados recientemente
constituidas, deben hacerlo sin dilación.
b. También deben ubicarse de inmediato en sitios de reclusión
dignos, sobrios y austeros, así sean temporales, mientras se
deciden los definitivos.
c. Los beneficiarios de la suspensión condicionada del envío en
extradición, deben acatar estas determinaciones. Caso contrario, perderán el beneficio.
d. El Gobierno expedirá el Decreto reglamentario de la Ley de
Justicia y Paz. En caso necesario acudirá de nuevo al Congreso.
La voluntad oficial es salvar el proceso dentro del ordenamiento jurídico, contando con la colaboración de quienes se han acogido a él180.
LAS AUC PROPONEN REALIZACIÓN DE UNA ASAMBLEA
CONSTITUYENTE
El 15 de agosto de 2006, los ex comandantes de las AUC, desmovilizados, plantearon la realización de una constituyente o la expedición
de una nueva ley que les garantizara los beneficios que deberían recibir
por su desmovilización, en respuesta al presidente Álvaro Uribe, que el
día anterior los había conminado a ponerse a disposición de la justicia.
“Recibimos ese llamado con la mayor serenidad. Su anuncio corresponde, en mucha parte, a lo que le afirmamos al ministro del Interior,
Sabas Pretelt, de nuestra disposición de asistir a los tribunales pero que
en el entretanto el Gobierno explore vías que garanticen seguridad jurídica”, dijo “Ernesto Báez”, uno de los dirigentes de las AUC. “Báez”
planteó al Gobierno la convocatoria de una constituyente o la presenta-
180
Op. cit. [en línea], agosto 2006. Disponible en Internet: www.presidencia.gov.co.
489
ción al Congreso de un proyecto de ley que suplantara la Ley de Justicia
y Paz y les garantizara que recibirían los beneficios jurídicos tras su
desmovilización.
“Esas son soluciones que le planteo al país pero yo dejo que esa decisión la tome el Gobierno. Sólo quiero decirle que con las condiciones
en que quedó la Ley de Justicia y Paz, ningún paramilitar se entregará a
la justicia”, añadió “Báez” a Radio Caracol. El jefe desmovilizado de las
AUC recordó a Uribe que tanto él como otros líderes de esos escuadrones
venían cumpliendo las citaciones que les hacía la justicia colombiana.
El ex jefe militar de las AUC, Salvatore Mancuso, “ha ido a veinte
audiencias. Yo estuve en otra hace quince días. Entendemos que eso
hace parle de un compromiso que hemos cumplido. Mientras confiamos que el Gobierno dispondrá de mecanismos para solucionarnos la
terrible incertidumbre jurídica que tenemos”, añadió “Báez”, cuyo verdadero nombre es Iván Duque181.
El día 16 de agosto de 2006, los ex comandantes de las AUC desmovilizados empezaron a ser conducidos por la policía a distintos sitios de reclusión para ponerlos a disposición de los tribunales encargados de juzgarlos.
Comunicado del Alto Comisionado para la Paz
1. El día de hoy, miembros representantes y desmovilizados de las
Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, fueron conducidos
por las autoridades de Policía y DAS a sus instalaciones, y acatando la directriz del Presidente de la República del pasado 14 de
agosto, se pusieron a disposición de dichas autoridades.
2. El Gobierno Nacional dispondrá su reclusión en una instalación
de ubicación temporal digna, segura y austera, bajo la custodia
de la Policía Nacional.
3. Los miembros representantes y desmovilizados permanecerán
en las sedes de la fuerza pública o en la instalación que se determine, hasta cuando queden a disposición de las Autoridades
181
Op. cit. 15, agosto, 2006.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Judiciales para efectos de la aplicación efectiva de la ley 975 de
2005 a cada uno de ellos.
4. La suspensión de las órdenes de extradición de los miembros
representantes se mantendrá en tanto permanezcan en el lugar
de ubicación previsto y se acojan a la Ley de Justicia y Paz, de lo
contrario perderán el beneficio.
5. El Inpec señalará el lugar de reclusión donde permanecerán los
Miembros Representantes y desmovilizados, cuando sean sujeto
de la medida de aseguramiento judicial, en condiciones de dignidad, seguridad y austeridad.
6. Los miembros representantes de las Autodefensas Unidas de
Colombia, AUC, que han atendido las directrices presidenciales
contenidas en el comunicado en mención, podrán adelantar tareas relacionadas con el proceso de paz, para lo cual recibirán las
autorizaciones respectivas para su movilización y desempeño.
Dado el 16 de agosto de 2006182
LOS JEFES DESMOVILIZADOS DE LAS AUC SON CONCENTRADOS EN LA CEJA
Los máximos jefes de las AUC, trasladados a un lugar de concentración en La Ceja, en el departamento de Antioquia, emitieron un comunicado en el que llamaron a sus bases para continuar el proceso de paz
con el Gobierno Nacional. Este es su texto:
“En nuestra condición de miembros representantes y presos políticos de la organización de las autodefensas desmovilizadas, hacemos la
siguiente declaración:
Primero. Convocamos a todos los desmovilizados de las autodefensas a cumplir cabalmente con las obligaciones contraídas ante el país,
para contribuir eficazmente con la construcción de la paz.
182
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www. altocomisionadoparalapaz.gov.co.
491
Segundo. La violación de los compromisos adquiridos por parte de
los desmovilizados afecta la credibilidad y seriedad del proceso de paz.
En consecuencia, la comisión de conductas constitutivas de delitos por
parte de los desmovilizados acarreará las correspondientes sanciones
penales en cabeza de quienes sean señalados como responsables.
Tercero. Exhortamos a nuestros ex compañeros de armas a servir
con su aporte y compromiso los intereses supremos de la paz por los
líderes paramilitares conducidos en las últimas horas a las estaciones
de la Policía en las localidades antioqueñas de La Ceja y Rionegro”183.
EL VICEPRESIDENTE SANTOS PROPONE ACUERDO NACIONAL PARA REFORMAR LA LEY DE JUSTICIA Y PAZ
El Vicepresidente de la República, Francisco Santos, dejó entrever
la posibilidad de reformar la Ley de Justicia y Paz con base en un gran
consenso nacional que le diera credibilidad y posibilidades para acuerdos con otros sectores armados.
Santos confió en el cumplimiento de los desmovilizados a los requerimientos de la ley, que puede ser mejorada, pero dijo que debería haber
hechos concretos y voluntad para sacar adelante el proceso y pensar en
los ajustes necesarios para eventuales diálogos con grupos que quisieran
aterrizar en la paz.
Sostuvo que el Gobierno mantenía su palabra y esperaba que quienes no se habían desmovilizado lo hicieran y ayudaran al proceso por la
paz nacional. De otro lado el vicepresidente le pidió mucha prudencia
a la Iglesia Católica en torno a los diálogos para buscar un acuerdo humanitario con la guerrilla de las FARC184.
El Alto Comisionado para la Paz concedió al Diario El Espectador
una entrevista el día 16 de septiembre de 2006 que resume la situación
en la cual se encontraba el proceso de desmovilización de las AUC al
momento de cerrarse la edición de este Tomo II de la Evolución del
Conflicto Armado en Colombia e Iberoamérica. Luis Carlos Restrepo
se autodefine como “un intensivista de la paz”.
183
Op. cit. Noticias RCN. [Programa televisivo]. Bogotá: RCN Televisión. 18, agosto, 2006.
184
Op. cit. Noticias Caracol Radio. [Programa radiofónico]. Caracol Radio. 18, agosto, 2006.
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EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
Autodefensas fueron un error
Después de las agitadas semanas que precedieron al fallo de la Corte
Constitucional sobre la controvertida Ley de Justicia y Paz, en el asunto impera una calma chicha. Pero el Comisionado de Paz, Luis Carlos
Restrepo, sabe que no durará mucho tiempo, pues ya se acostumbró a
trabajar por el proceso de paz con las autodefensas como si no saliera
nunca del ojo del huracán.
El Espectador: ¿Cuándo debe empezar a aplicarse la Ley de
Justicia y Paz?
Luis Carlos Restrepo: el Gobierno ya entregó los listados de
postulados a la Fiscalía. Hay un Decreto que establece el procedimiento para que individualmente los postulados ratifiquen su
sometimiento a la Ley de Justicia y Paz. De manera que hoy mismo podrían empezar las versiones libres. Yo espero que tanto la
Fiscalía como los tribunales de Justicia y Paz aceleren este procedimiento para que muy rápidamente empiecen a recibir versiones
libres y formalmente se dé por iniciada la aplicación de la ley 975.
E.E.: ¿Y hasta cuándo hay que esperar a Vicente Castaño para
que se entregue?
L.C.R.: es un hecho que avergüenza a las autodefensas. El
país está escandalizado de saber que Carlos Castaño haya sido
asesinado y se les impute el crimen a sus propios hombres. Fue
importante lo hecho por Jesús Ignacio Roldán, alias “Monoleche”; de reconocer ante la opinión pública la autoría del delito
y llevarnos hasta el lugar donde estaba enterrado Castaño. Ojalá
sea el principio de la revelación de muchas otras verdades que el
país necesita conocer, para que podamos encontrar los restos de
tantas personas que fueron asesinadas por las autodefensas.
E.E.: ¿Cuándo fue la última vez que habló con Carlos Castaño?
L.C.R.: la última reunión a la que asistió Castaño fue a mediados de marzo de 2004, es decir, un mes antes de su desaparición. En esa reunión conocimos una carta suya donde renunció al
493
Estado Mayor Negociador de las autodefensas. Una carta que no
permitía inferir que hubiese alguna situación de riesgo o peligro.
Después su desaparición tomó por sorpresa al país, lo mismo que
ahora en que se descubren sus restos. Pero hay que recordar que
no ha sido el único caso de un jefe de las autodefensas muerto
durante el proceso. También sucedió con Miguel Arroyave y con
Rodrigo Doblecero. Lo que sí puedo decir es que internamente
las autodefensas manejaban rivalidades y luchas de poder muy
fuertes y llegué a decirles que estaban corriendo más peligros ante
sus propios jefes. Esta dinámica de pugnas internas o de guerras
abiertas ha afectado mucho la negociación y la credibilidad del
proceso, pero eso comprueba que las autodefensas no eran una
organización unificada. Eran una colección heterogénea de ejércitos privados, cada cual con sus intereses, y de ahí lo difícil de
integrarlos al mismo propósito de desmontar su organización.
E.E.: a propósito de ejércitos privados, ¿cuál es la posición
del Gobierno respecto a Martín Llanos, Megateo, Didier, u otros
jefes paramilitares que aún no quieren entregarse?
L.C.R.: de las estructuras de autodefensas que estuvieron
en la negociación, sólo dos siguen por fuera. Las Autodefensas
Campesinas del Casanare, que comanda Martín Llanos, y el Bloque Cacique Pipintá, que actúa en el norte de Caldas. Las Autodefensas del Casanare sufrieron golpes muy fuertes en 2004 y
prácticamente es una estructura sin presencia territorial en el Llano. En el caso del Bloque Cacique Pipintá, que es un grupo muy
pequeño, desde diciembre del año pasado se negó a avanzar en la
desmovilización.
No tengo instrucciones presidenciales en cuanto a plazos fatales. Yo sigo trabajando en lo que el Presidente me pidió, que de
manera persuasiva lleve a Vicente Castaño ante las autoridades.
He tenido comunicación con él; el Gobierno ya aceptó una reunión con presencia de la Iglesia, la OEA y un representante de
un medio de comunicación, porque Castaño dice que quiere dejar
las cosas claras, ojalá por escrito, y que quiere tener plenas garantías para dar ese paso. Mi trabajo es convencerlo de que responda
ante los tribunales de Justicia y Paz.
494
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
E.E.: ¿En qué medida afectó el proceso de paz la noticia de la
muerte de Carlos Castaño y las sindicaciones a su hermano Vicente?
L.C.R.: por supuesto, tiene que ser tratado como un caso de
orden público. Las desmovilizaciones prácticamente terminaron
con la entrega de armas del Bloque Elmer Cárdenas. Por eso, los
jefes paramilitares que no se sometan tienen que ser enfrentados
militarmente.
E.E.: ¿Y cuál es la realidad frente al tema de las extradiciones
suspendidas a algunos jefes de las autodefensas?
L.C.R.: son cuatro casos. Se les ha suspendido la extradición
a dos jefes negociadores: Diego Murillo Bejarano y Salvatore
Mancuso, y a otras dos personas, Juan Carlos Sierra y Eduardo
Vengoechea, que en las solicitudes de extradición de los Estados
Unidos aparecen con actividades de los grupos de autodefensa.
En el caso de Juan Carlos Sierra, el Gobierno autorizó su extradición hace dos años porque no lo reconocía como miembro de las
autodefensas. Pero no teníamos en ese momento los elementos
de juicio para entender su caso. Durante estos dos años las autodefensas insistieron en que él era miembro de su organización y
establecimos que era la persona que cambiaba droga por armas.
Por esta razón y debido a que en el indicment de Estados Unidos aparece clara su pertenencia a las autodefensas, el Gobierno
tomó la decisión de suspender su extradición.
E.E.: pero hay quienes siguen afirmando que el proceso de
paz ha sido una ventana para que algunos traquetos se legalicen.
L.C.R.: esa es una crítica superficial, pues nosotros partimos
es de los hechos. Es el caso, por ejemplo, del Bloque Vencedores
de Arauca, donde dos de sus jefes fueron acusados por narcotráfico, pero también aparecían como comandantes de una estructura armada ilegal que hacía enorme daño al departamento.
Atendiendo que llegaron a la mesa de negociación, los desmovilizamos. Pero eso no quiere decir que automáticamente vayan a
recibir beneficios. Lo que asumieron fue responsabilidades. Por
eso ahora los señores Mellizos Mejía (Víctor y Miguel Ángel) tienen que entregar sus bienes ilícitos.
495
E.E.: ¿Y sigue abierta la puerta para que se puedan suspender
otras extradiciones?
L.C.R.: esa puerta no se ha cerrado. Hay casos en que tenemos certeza de pertenencia a las autodefensas y han sido jefes
que han liderado las desmovilizaciones y han entregado hombres
y armas. Pero eventualmente pueden aparecer otros casos, en los
cuales el Presidente, como lo ha hecho hasta ahora, evaluará persona por persona. De llegar a suspenderse alguna extradición, ese
jefe quedará comprometido de responder ante los tribunales de
Justicia y Paz.
E.E.: ¿No le preocupa que, de todas maneras, el asunto siga
tan represado en la Fiscalía?
L.C.R.: creo que el aparato judicial va a enfrentar un reto muy
grande, tanto en la Fiscalía como en los tribunales de Justicia y
Paz. La Corte Suprema de Justicia ya manifestó su preocupación
por la cantidad de procesos que van a llegar a su conocimiento sin que administrativa y logísticamente estén preparados para
enfrentarlos. Hay que tener en cuenta que la experiencia internacional de juzgamiento de criminales de guerra siempre ha dejado
mucho que desear en cuanto a eficacia. Hay una sana preocupación de las autoridades judiciales, que valdría la pena debatir
públicamente, a fin de que se determine si es necesario recurrir a
procedimientos innovadores para recoger versiones. Hasta ahora
son 2 600 postulados y 2 500 presos más de las autodefensas que
están pidiendo que se les aplique la ley. Es un número muy alto y
sólo hay dos tribunales. Debe abrirse el debate público porque la
tardanza no puede interpretarse como una desidia del Gobierno o
de los fiscales. No tenemos recursos logísticos ni administrativos
ni financieros para enfrentar el caso. Esto sin hablar de reparación. Por eso creo urgente este debate. Si colapsa la justicia y no
somos capaces de juzgar adecuadamente a los sometidos a la Ley
de Justicia y Paz, la censura al país sería muy grande en la comunidad internacional.
496
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
E.E.: ¿Por qué insiste en que el país no está preparado para
asumir la verdad?
L.C.R.: porque es la primera vez en la historia del mundo que
les vamos a pedir a los líderes de una organización armada ilegal
que cuenten la verdad histórica y la verdad procesal. Generalmente primero se hace la paz, y décadas, o incluso siglos después,
se conoce la verdad por parte de los historiadores. Creo que hay
que pensar en asuntos conexos como la protección de los familiares de los miembros de las autodefensas que cuenten la verdad y
delimitar claramente qué es lo que se pretende que los miembros
de las autodefensas confiesen. Hay que recordar que ellos se movieron en una matriz social bastante compleja y en las regiones
tuvieron muchos auxiliadores. ¿Se trata de criminalizar esa matriz social? ¿Que todo aquel que, forzado o voluntariamente, dio
una contribución a las autodefensas, termine ante los tribunales?
Si les pedimos a las autodefensas que hablen de sus colaboradores, ¿cómo se va a manejar esa situación? ¿Vamos a terminar en
una cacería de brujas? ¿Los que cuenten la verdad van a tener
penas alternativas y sus colaboradores terminarán pagando penas
de cárcel por la justicia ordinaria? Estas son preguntas que deben
hacerse para que el país entienda que la exigencia de que se cuente toda la verdad debe ser asumida con responsabilidad y hacerlo
bien para que ayude a la reconciliación.
E.E.: después de la pelotera que se armó con el fallo de la Corte Constitucional, ¿cómo es la tesis de no reglamentar los puntos
polémicos de la sentencia?
L.C.R.: fue muy importante el debate público en torno a los
proyectos de Decretoreglamentario de la Ley de Justicia y Paz,
para acabar con la dañina sospecha de que se pretendía modificar
el fallo de la Corte. Por ejemplo, en lo que tiene que ver con las
víctimas, se ha dicho que en la redacción de uno de los Artículos
se terminó poniéndolas en la obligación de denunciar a riesgo de
terminar encarceladas. Eso es absurdo. No será nunca la intención del Gobierno y es motivo suficiente para que se revise ese
Artículo. De tal manera que en aquellos puntos polémicos que
generan sospecha, pues simplemente nos vamos a atener al fallo
de la Corte Constitucional.
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E.E.: ¿Se siente satisfecho o incomprendido en su labor de
Comisionado de Paz?
L.C.R.: me siento satisfecho y a veces incomprendido. Lo segundo no afecta lo primero. Me siento tranquilo, con la satisfacción por el deber cumplido, aunque a veces me siento agobiado de
no poder transmitir de manera adecuada todo el esfuerzo que se
realiza. Pero lo entiendo por tratarse de un asunto polémico que
tiene que ver con dolores muy profundos de la Nación y es difícil
transmitir con claridad los esfuerzos que se hacen para que hombres que han causado tanto daño puedan volver a la civilidad.
E.E.: usted es médico siquiatra, ¿cómo diagnostica el proceso
de paz con las autodefensas?
L.C.R.: hace rato definí mi cargo como una unidad de cuidados intensivos, donde por la mañana se atiende un infarto, por
la tarde un abdomen agudo y por la noche un accidente cerebro
vascular, con turnos de 24 horas, siete días a la semana y 12 meses
al año. Pero en toda unidad de cuidados intensivos lo importante
es que el paciente no se muera, así que ya es una ganancia, que el
paciente no se me haya muerto. Lo importante ahora es llevarlo a
una adecuada rehabilitación. La mejor descripción de mi tarea es
afirmar que soy un intensivista de la paz.
E.E.: a propósito de la figura del comisionado, siempre su labor se centra en negociar con guerrillas o autodefensas. ¿Ha pensado en desmovilizar grupos de narcos?
L.C.R.: no está dentro del horizonte del Gobierno adelantar
negociaciones con grupos de narcotraficantes. No es viable ni jurídica ni políticamente. El tema del narcotráfico es determinante,
pero eso no quiere decir que la forma de abordarlo sea en una
mesa de negociación con sus capos.
E.E.: ¿Qué reflexión le hace usted al colombiano de a pie frente a lo que pasa en el proceso con las autodefensas?
498
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
L.C.R.: a los colombianos de a pie les diría que mucha gente
se equivocó de buena fe apoyando mecanismos ilegales de seguridad y dinámicas de justicia privada. Las autodefensas fueron un
error nacional y me preocupa que en muchas zonas del país siga
primando esta visión simplista de la justicia y de la autoridad.
Creo que ante las amenazas, los ciudadanos sólo deben responder
apoyando siempre a las autoridades legítimas.
E.E.: ¿Y qué reflexión le deja el manejo que los medios de
comunicación le han dado al proceso de paz?
L.C.R.: los medios se han centrado en lo que no es: los prontuarios judiciales de los jefes de las autodefensas. Han manejado
el asunto como casos de policía y se quedaron cortos en asumir
la realidad del problema: la inseguridad rural. Las autodefensas
surgieron por un problema de seguridad rural no resuelto, pero
después de su desmovilización, el problema sigue vivo. Por eso
creo que a los medios les ha faltado análisis histórico y sociológico. Se han quedado centrados en los jefes y no están haciendo
pedagogía para que los colombianos entiendan cómo surgió el
problema y cómo se debe atacar en su raíz.
E.E.: ¿No pasaría lo mismo con la guerrilla?
L.C.R.: con la guerrilla es distinto. Es una especie de prejuicio,
pero cuando se mira a la guerrilla, se tiende a analizar las causas
históricas, políticas y sociales que llevaron a su surgimiento, y se
habla muy poco del prontuario de sus jefes. Es una especie de desbalance porque hay más trabajo académico tratando de mostrar la
matriz social de la guerrilla, que reconociendo la matriz social de
las autodefensas. A estas últimas se les ve como organizaciones
lideradas por criminales que actuaron en provecho propio y lo
que yo he visto en estos años es distinto. A mí me han insultado
muchas comunidades, otros me gritan diciéndome irresponsable.
y no hablo de propietarios sino de campesinos. Y yo me pregunto:
¿cómo llegamos a esto? Los medios se quedan en el escándalo
moralista de por qué algunas personas aplauden a “Jorge 40”,
pero no se profundiza sobre la situación sociológica. Y mucho
menos le hacen seguimiento a los problemas de seguridad que se
han ido generando en las zonas de desmovilización. Esa es una
499
amenaza real, y si fracasamos en brindar seguridad institucional
en esas zonas, el pantanero en el que se hundiría el país no tiene
nombre. Esa realidad no la ven los medios por estar centrados en
Mancuso o en Vicente Castaño.
E.E.: ¿Si en otro Gobierno tuviera la posibilidad de seguir
como Comisionado de Paz, lo aceptaría?
L.C.R.: no me imagino de comisionado de otro presidente
distinto a Álvaro Uribe, porque realmente creo en su política de
seguridad y me siento cómodo como comisionado de paz de este
gobierno.
E.E.: ¿Cómo quiere que lo recuerden los colombianos?
L.C.R.: sería suficiente con que se diga que fue un señor serio
que cumplió con su deber185.
VICENTE CASTAÑO GIL OFRECE ENTREGARSE A LA
JUSTICIA Y PONE CONDICIONES PARA SU ENTREGA
Vicente Castaño Gil, quien no se había entregado a la justicia hasta
el 22 de septiembre de 2006, envió a la página de internet de las AUC la
siguiente comunicación que reproducimos por considerarla de la mayor
importancia.
COMUNICADO PÚBLICO DE VICENTE CASTAÑO
En julio de 2003 la dirigencia nacional de AUC firmó con el Gobierno Nacional un documento compromisorio en el que, entre otros
puntos, nuestra organización en armas se comprometía a la desmovilización en un tiempo límite.
Igualmente, en mayo de 2004, en otro documento trascendental las
autodefensas y el Gobierno Nacional suscribieron nuevos acuerdos, entre los cuales figuraban temas tan importantes como las zonas de concentración y de ubicación, garantías para el repliegue en el evento de
185
Op. cit. 16, septiembre, 2006.
500
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
romperse las negociaciones y facilitación de condiciones (jurídicas y
políticas) para garantizar nuestra plena reinserción a la sociedad.
Hoy, cuando las autodefensas cumplimos a cabalidad con todos los
compromisos suscritos con el Gobierno Nacional, incluyendo el desarme, la desmovilización y la desactivación de todas nuestras estructuras
militares, me veo obligado a denunciar el incumplimiento del Gobierno
en materias tan decisivas para nuestro futuro como:
1. Inseguridad jurídica:
a. La mayoría de los compañeros del estado mayor negociador
fueron capturados mucho antes de que se pusiera en marcha
la Ley de Justicia y Paz.
b. No se respetaron los salvoconductos mediante los cuales se
suspendía la orden de captura.
c. Después de un mes de la captura aún no se han expedido los
decretos reglamentarios de las leyes 782 y 975.
d. El acogimiento a la Ley de Justicia y Paz lo hicimos en circunstancias y condiciones muy diferentes de las de hoy.
2. Centros de reclusión:
a. Los compromisos adquiridos por el doctor Sabas Pretel de la
Vega no se cumplieron en cuanto a la definición, construcción o adecuación de cuatro centros de reclusión especiales
para justicia y paz.
b. Los compromisos para la creación, traslado y funcionamiento de unidades de justicia y paz y de tribunales complementarios a los de Bogotá y Barranquilla no se ha dado aún.
3. Privación de las garantías políticas a favor de la paz: con la detención precipitada de los líderes del proceso de paz, se le asestó
un golpe mortal al proyecto de Villa Esperanza, que se había
convertido en un excelente escenario de reconciliación.
501
A pesar de este panorama de sistemático incumplimiento por parte del Gobierno Nacional, quiero reafirmar ante la opinión pública mi
voluntad de acogerme al requerimiento presidencial de someterme a la
Ley de Justicia y Paz, si se me ofrecen las siguientes garantías:
1. Que se publiquen los decretos reglamentarios de las leyes 782 y
975, ya aprobados.
2. Que se nos restituyan todas las condiciones y garantías jurídicas
que nos otorgó la Ley 975 antes del fallo de la Corte Constitucional, por la vía del principio constitucional de la favorabilidad.
3. Que se nos garantice por la vía legislativa el reconocimiento de delincuentes políticos tal como lo establecía el Artículo 71 de la Ley 975.
4. Que se nos faciliten los instrumentos necesarios para continuar
con los programas y tareas de Villa de la Esperanza, a favor de la
paz y la reconciliación.
5. Que aunque estemos privados de la libertad se nos den todas las garantías e instrumentos para continuar liderando los proyectos productivos y los programas de erradicación manual de cultivos ilícitos.
6. Que se nos den plenas garantías de resocialización, a través de
una efectiva oferta laboral y educativa en los centros de reclusión
especial de justicia y paz.
7. Que se nos garanticen condiciones de dignidad y respeto a los
derechos humanos en los citados centros de reclusión.
Para efectos de convenir el acuerdo a que me refiero en las peticiones
anteriores, solicito:
1. Una reunión con el Alto Comisionado de Paz, con la presencia
de la Iglesia en cabeza de Monseñor Julio César Vidal, la OEA
a través del Jefe de la Misión, el Viceministro de Justicia y el
director de un medio de comunicación relevante.
2. De llegarse a un acuerdo, éste debe ser suscrito por las partes con
el aval de la Iglesia y de la OEA.
502
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
3. Las condiciones de mi entrega, el sitio de reclusión y mi conducción en caso de materializar este acuerdo, serían convenidas con
el Alto Comisionado de Paz. En todo caso, sería con la presencia
de Monseñor Julio César Vidal, la OEA y un alto delegado de la
Defensoría del Pueblo.
Vicente Castaño Gil186
EXPEDIDO EL DECRETOREGLAMENTARIO DE LA LEY
DE JUSTICIA Y PAZ
El 29 de septiembre de 2006, el Gobierno Nacional expidió el Decreto3391 por medio del cual se reglamentó parcialmente la Ley 985 de
2005, conocida como la Ley de Justicia y Paz. En él se mantiene lo fundamental sobre reparación y justicia, y se establece un procedimiento
para que las autoridades establezcan la verdad material.
El Decreto se expidió luego de ser sometido a más de doscientas observaciones de la ciudadanía a partir de las cuales se realizaron modificaciones significativas. El texto original sometido a consideración de la
opinión pública constaba de 44 Artículos, los cuales se redujeron a 22.
El Decreto establece que el Estado garantizará la participación de
las víctimas del conflicto en el proceso judicial, la protección de su integridad física, la reparación con bienes que les habían sido arrebatados e
indemnizaciones. El Estado también hará que se cumpla el principio de
no repetición de acciones violentas de los desmovilizados a las víctimas.
El Decreto igualmente establece un procedimiento y un plazo para
que las autoridades realicen averiguaciones acerca de la verdad material
en relación con las conductas delictivas de los desmovilizados, la identificación de los bienes que servirán para la reparación de las víctimas
y en general determinar los elementos necesarios para llevar a cabo los
procesos judiciales.
Según el Decreto, solo recibirán los beneficios de la Ley de Justicia y
Paz quienes hubieran cometido crímenes con ocasión de su militancia
186
Op. cit. [en línea]. Disponible en Internet: www. colombialibre.org.
503
en grupos armados al margen de la ley, quienes habrán de hacer confesión completa y veraz deberán indicar la totalidad de los bienes de
origen ilícito, los cuales se destinarán a reparar a las víctimas.
La “pena alternativa” será revocada si durante la ejecución de la misma
o del periodo de libertad a prueba, se establece que el desmovilizado incurrió en nuevos delitos o incumple injustificadamente alguna de las obligaciones impuestas. Asimismo, si antes de finalizar el periodo de libertad a
prueba se emite condena por un delito ocultado durante la versión libre.
En caso, además, de que al desmovilizado no le alcancen sus bienes
ilícitos y lícitos para reparar a sus víctimas, el bloque al que perteneció
tendrá que aportarlos.
En cuanto a las familias de los desmovilizados, la Fiscalía aplicará el
principio de oportunidad y perdonará a quienes hubieren servido como
testaferros, siempre y cuando no mediaren delitos de lesa humanidad,
narcotráfico y terrorismo.
En el caso de los desmovilizados que hayan sido condenados por
otros delitos, la pena se acumulará con la que se imponga a través de la
Ley de Justicia y Paz, pero se aplicará la pena alternativa que corresponde a un máximo de ocho años, siempre y cuando el desmovilizado
no haya incurrido en otros delitos.
En los casos en que se pruebe que el beneficiario incurrió dolosamente en
conductas delictivas, incumplió las obligaciones impuestas en la sentencia o
haya ocultado un delito durante su versión libre, perderá los beneficios.
A la pena alternativa se le descontará el tiempo que los beneficiarios
hayan pasado privados de su libertad luego de su desmovilización. Lo
anterior significaría que a quienes se acojan a la Ley de Justicia y Paz se
les tendría en cuenta el tiempo que permanecieron en Santa Fe de Ralito
y el que permanezcan detenidos durante el juicio al que serán sometidos.
Comoquiera que los procesos de desmovilización y reinserción de
las AUC continuaran así como los procesos de paz que el Gobierno
intenta realizar con las FARC y el ELN, un tercer tomo de esta obra
recogerá con el mismo rigor y de manera cronológica todos los desarrollos que estos procesos tengan en el inmediato futuro.
504
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA E IBEROAMÉRICA
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