FELIZ ANO MU£vo - Hemeroteca Digital

Año Itl ~ SEMANARIO SATÍRICO - N im. 102
SE PUBLICA TODOS LOS SÁBADOS
mADFiiD- 2 DE eneRO DE 1915
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Hacia Oriente.
El inanes último decidimos trasladarnos
A Oriente, aproveciíando la linca de Lerroux,
y con un pasaporte de éste y una manta de
viaje, fabricada en Falencia, que nos prestó
•el simpático D. Abilío, eciíainos por la carretera de Extremadura.
Nos iba molestando un poco, además de
una de las botas—que era, por cierto, de las
t'abricadas para los franceses—la idea de
que todos los años se nos adelanten los co-
El teatro por dentro.
Hay cosas que parecen inexplicables, y,
sin cnibarjío, son sencillísimas. ¿ Por qué
García Valero declama siempre desmayado
y sin fuerzas y Ruiz Tatay semeja en las
labias un Icón africano? Porque el último
toma TÓNICO KOCH y el primero lo desdeña. Doctor Mateos, Puerta del Sol.
legas en eso de decir lo que traen los Reyes, y al pasar por el puente de • Segovia,
después de saludar a un consumero disfra/ado, que tenía toda la oara de Brocas, lanzamos esta frase:
—Aliora si que no se nos adelanta ningún
madrugador.
Pero, ¡oh, sorpresa!; a los diez minutos
•He camino divisamos en lontananza dos jioetes, uno en burro y otro en burra, que
•iban canturreando, a media voz, aquello de
"Solos vamos por el mundo
en busca de unas carteras...
Si no las traen los Reyes,
¡bonito papel el nuestrol"
—¡Caray!— exclamamos en tono indes•^'riptible—. De estos dos homljres, uno tiene que ser poeta, por lo mal que rima.
Y nos acercamos con cierta curiosidad al
^rupo, que se quedó unánimemente sorprenilido, y emitió a la par esta exclamación:
—¡ Mamporro, amigo!
—¡Burgos de mi alma I ¡Adorable Satursiino!
—¿A qué Saturnino alude usted?—preguntó Burgos, con esa gracia de sainelero
que Dios le ha dado.
—A éste; a Esteban Collaiites. ¿No sabe
usted que se llama Saturnino?
—Saturnino me llamo—replicó el conde—¡
pero, francamente, desearía que no me lo
flijera usted en "El Mentidero", porque Salurnino no es el nombre que mejor le c u i dra a un ministro de Instrucción.
—¡CarambaI ¿Tiene usted ya la cartera
•sn el bolsillo?
—"A por" ella voy.
—¡Toma! Entonces, ¿se dirigen ustedes a
Oriente?
—Justo. En busca de los Reyes.
—Allá iba yo.
—Iremos juntos ambos a tres — Insinuó
Burgos.
Y continuamos carretera de •Extremadura
adelante, oliarlando sobre todas las tonterías imaginables, incluso la oratoria de Romanones.
En el Alcá»ar.
Burgos y Saturnino, llegaron más contenlos que una pandereta de seis reales al al-
dará blanco. Soria, digo Burgos, también
palideció lo suyo al contemplar la figura gallarda de un caballero en blanco corcel, vestido (el caballero) con manto y birrete.
—¡Vive el ciclo, camarada! ¿No es aquél
Prado y Palacios?—gritó iracundo el conde.
—El mismo que viste y calza.
—¡No triunfará, por mi vida, o dejo de
ser quien soyl Intenta quitarme la cartera...
—¡Guardia!...—gritó un teniente negro—.
jA formar!
—Señores, la audiencia—anunció un portero.
Y penetramos todos en el Alcázar.
Oyendo al Rey.
Nuestro asombro no tuvo límites al penetrar en el salón de audiencias, porque
cuando creíamos que éramos los únicos españoles que anticipaban su visita a los Reyes, deseosos de conocer los regalos con
destino a España, nos encontramos con casi todos los diputados y senadores.
Apareció Melchor, y después de una venia, que no venía a cuento, habló así:
—Por acuerdo de Gaspar y Baltasar, que
este año han de recorrer los países beligerantes, estoy encargado de las peticiones
españolas, y siento decirles a ustedes que
habrá muchas decepciones, porque en ese
hermoso país nadie pide menos de una cartera. Aunque liemos decidido hacerlas de
: Los concejales, perdidos.
Del chaparrón de denuncias que Alcalá
Martín hace en "El Mundo" contra los concejales, no hay modo de defenderse, como
no sea comprándose un impermeable Christian, bien corriente u de paño sin goma, que
han popularizado a la gran sastrería de la
calle del Caballero de Gracia, núm. 50.
cartón y baratitas, sólo podemos disponer
de dos, que serán adjudicadas...
—¡A mí!
—¡A mil
—¡A mí!
—Poco a poco, poco a poco. Según la nota que me ha enviado el visir mayor, se le
adjudican, una a Saturnino y otra a Burgos.
—¡Al fin, ministros!—exclaman los agraciados, abrazándose.
!E^e3res.
—Yo no sé lo que se propone el visir co:i
esa solución de tintura de yodo; pero como
en España, desde hace cinco años, no se ha
ccn mas que tonterías, por mí, que continúen.
—¡Bravo! ¡Bravo! ¡Esto es un Rey!
—¡Juego!—grita, despertándose, un romanonista, que se había dormido.
—A mí me parece que et país va a la ruina a todo correr—prosigue Melchor—; pero
como dicen que tan pronto dejen de gobcrYa no tosen los aliados a los alemanes, ni estos
a los francese?; toman
PASTILLAS CRESPO
nar Fresquera y D. Cerato, o sus similares,
estalla la revolución, porque los cabecillas
están dispuestos a no dejar de comer opíparamente, sigo al pie de la letra la orden
tle reparto, consignada en la siguiente
Lista grande.
En el salón se produce una algarabía espantosa, y cuando se hace el silencio, el
bondadoso Rey Melchor, lee la lista de regalos, que se repartirán entre los inocentes
políticos el día (3.
Es ésta:
A Fresquera, un Gabinete conservador,
para hacer tiempo; la prórroga de las contribuciones, el censo electoral y la fusión de
las iztjuierdas.
A D. Cerato, una caja de tresillo, un Manual del perfecto indiferente, seis latas de
vaselina y dos mil millones de pesetas para
gobernar en paz,
A Lerroux, todo lo que pida, menos las
aguas de Dos Ríus. por mor del escándalo;
a Cambó, las zonas, con exposición... de
que no salgan; a Gasset, un ejemplar de
"Los chorros del oro", para que siga regan
do; 3 Melquíades, la projiiedad del Princí
pado de Asturias y todas las credenciales
que necesite; a Soriano, unos cuantos perros (galgos, podencos, etc.) y un retrato
de Sánchez Guerra; a Burcll, una caja di
pastillas Merino; a Suárez lucían, un tomo
de la ley de Contabilidad.
Al "trust"', una plancha con la leyenda
"¡Mattta, no!", y otras muchas planchas; 8
Urzáiz, una liaraja para hacer solitarios
un peine; a Besada, dos trompetillas
¿Creen ustedes que nos referimos a un
político más o menos vulgar? ¡Cal'Nos referimos a un hermoso chaleco de fantasía,
cou solapas, que lia acabado de confeccionar Víctor González, el popular sastre de
la calle: de la Cruz, núm. 42, que es una
fnaravilia.
cazar de los Magos, por no baber cncouti'ado en todo el camino citros pielendientcs
* carteras; pero nosotros 110 las llevábamos
todas consigo, como dice Sánchez Robledo.
Efectivamente. A JÍOCU de üc^íar, notamos que Esteban Collaníes empezaba a pci•der el color, como sí se destiñera y se que
lHo3?- s a l e ,
íi-oyl
EL MENTIDERO
,jDe Un acto? De una tragedia en tres actos y im epilogo.
*•*
No dejaremos tampoco de memorar en
dos líneas un hecho significativo.
Le locó a Casero leer unas cuartillas de
D. Benito Pérez Galdós, y lo hizo el hombre como acostumbra a hacerlo todo; esto
es. muy bien. (Quéjate.)
Pero al hnal le vimos titubear, hizo un
gesto de duda y acabó por comerse el párrafo último,
No fué comerse mucho, si reparamos^ en
que se tralalja"dc un concejal, aunque éste
sea de los que no conicn; pero, en ñu, lo
cierto es que se lo comió.
Y es que D. Benito acababa sus cuartillas tneti¿]idose de un modo feroz con el
Ayuntamiento.
Conio se trata del único casero simpático que conocemos, nos entregamos a 1*
mudez; pero htdnéramos dado hasta una
peseta treinta céntimos por saber lo que
decía D. Benito del Municipio madrileño
*•*
P r a d o y Palacio.—¡Guardia, me lian dejado sin cartera'.
Guardia.—Pero, ¿está usted seguro de que la llevaba en cl bolsillo?
ticas; a Prast, un reglamento para el cobro
del ingiulitiato y otro de la Liga de las clases medias; a Sanz Escartín, una colección
de postales de las estrellas de varietés, para
que vea las estrellas; a todoí los revolucionarios qnc lo solicilcü, subvenciones, credenciales y cnclnifes; al contribuyente, 900
millones de délicit; a Maura...
—¡Maura, no! ¡Maura, no!—grita la concurreucia rom anqdatista revolución aria.
—Digo que a Maura no se le lia incluido
en esta lista, porqnc nos lia notificado que
no admite regalos de Reyes. ,;Alguno de
los presentes tiene que formular reclamación?
—^o—dice La Cierva, adelantándose, en
medio de la conmoción de la mayoría—.
A mí no me lian dado nada, aunque no he
pedido para mí, sino para mi país.
—¿Cómo que no? Pues si yo he visto su
.nomhre en la lista que me trajeron Romanones y Dato. ¿A ver?... Sí, aquí está. A
usted le han dado...
~..—íQné me lian dado?
—El limo de la gratitud y el camelo de
la sonrisa... Ha terminado la andicncia,
porque ya no queda más por repartir... ¡Ah,
sí! Aiin queda un poco de pie! de España.
—De esa no se preocupe usted—dice Lerroux—, que ya se la tengo ofrecida a los
franceses.
Aplausos, vítores y apoteosis.
El Rey se va. En sus labios se dibuja
una sonrisa de amargura.
¡Vaya una tareíta que le ha correspondido este año al buen Melchor!
Si tuviera un rasgo de entereza y en vez
de regalos hiciera ima "razzia", ¡cómo le
aplaudirían hoy el pueblo y la Historia mañana I
[Atrévete, Rey Mago, que no pasa nadal
A fuer ele madrileños, no queremos dejar
sin elogio el descubrimiento de la estatua
a Mesonero Romanos.
El tal D. Ranióu nos fué siempre muy
simpático, tanto por lo que escribió, cuanto
porque tenía un parecido alarmante con Linares Becerra, según ima fotografía que
anda ]íor ahí, y en la que es el, talmente.
Mesonero Romanos previo el caso y se
cuidó el rostro, para asenicjarse en todo lo
posible al susodicho Linares, con objeto de
procurarse mayor gloria para el día de mañana, que era por entonces el día de boy,
naturalmente.
Adeinás de esto, Mesonero Romanos es
autor de una obra que cuenta con todo
nuestro entusiasmo, y por la que sentimos
verdadera debilidad cardíaca. Esta obra es
su señor nieto, el exteniente de alcalde del
distrito del Congreso, D. Luis Mesonero
Romanos, que, aparte de ser romanonista,
como descendiente de Romanos que es, resulta una persona digna de toda consideración y cariño.
Le aceptamos enternecidos, con bisoñe y
todo, porque le cae muy bien.
Un concejal republicano, al marcharse, le
preguntaba a otro, romanonista:
—Oye, ¿quién era este Mesonero?
—Un sujeto que vino a España cuando
la República y estableció los primeros mesones en Madrid.
¡Sea usted el Curioso Parlante para estol
«'•^
A esperar
a Bos Reyes.
Este año no van a ir a esperar a los Tí.eycs, como de costumbre, el gobernador y el
alcalde, sino que irá un ejército de criaturas que tienen puestos los ojos en los Magos.
Esto es debido a que, como premio de
Reyes, se han comprado por las escuelas y
colegios centenares de liljritos para niños,
con objeto tic re|)artirlos, a los Srcs. Hi.ios
de Santiago Rodríguez, imprenta y lihreria
de Burgos, seguros, como están tos maestros, de que es lo que más agradecen los
muchachos. Hay diversas bibliotecas, con
precios que varían entre 0,50 y 5 pesetas
tomo, y las recomendamos con totias nuestras fuerzas.
—
w^
Los enemigos de la seguridad.
Los aprobados para ingreso en el cuerpo
de Vigilancia, que se quedan con nota..._ y
sin garbanzos, se lamentan de que, habiéndose anunciado que se habrían de cubrir
200 plazas, resulta que sólo pueden ser colocados unos 120 aspirantes.No necesitamos decirles que eso se lo deben al simpático Fresquera y a sus colaboradores, que, después de meter todos los
embuchados imaginables, echaron por tierra las consignaciones para servicios tan
importantes, tan serios y tan admirablemente organizados como los de la Dirección
Por cierto que en el acto del descubri- general de Seguridad. Salude, D. Ramón,
que le hemos aludido.
miento del busto ocurrió una escena que
nos produjo ciertas contracciones epigásSi se hubiera tratado de cualquier centro
tricas, bastante violentas, debidas a una en los que hay chupen para amigotes- y
risa nerviosa que se nos desarrolló ante el paniaguados, le echan encima una milloeápectáculo.
nada de pesetas; pero como en la Dirección
.A.I hacer su entrada la infanta doña I.sa- •de Seguridad no existe posibilidad de cobcl, a los acordes de la Marcha Real, salu- locación para los pipis, se la deja a medio
dotar.
dáronla con todo respeto las autoridades y
la familia de Mesonero Romanos.
Claro que si se le dan a la Policía todos
los elementos necesarios, ¿cómo van a viOcurrió que entre las primeras estaba un
^^R
concejal republicano, que en aquel momen- vir, sin timos, atracos y demás filigranas a
que se dedican en tiempos normales, los
to se nos representaba como iiombre perdido para toda clase de asuntos, ya que te- elementos visibles del motín?
Dc la cabeza de alginios prohombres sema las dos manos ocupadas, nna con la
Se ñas figura a nosotros que lo menos
ria ini]iosibIc sacar idea alguna, por mu- chistera y otra con un puro del tamaño de que se puede pedir es que a quienes han dechos esfuerzos que hiciéramos .para conse- la torre de la Vela.
mostrado suficiencia, se les conceda el deRtiirlo; y en canibici. a poca.í fricciones de
recho de ir cubriendo las vacantes que ocuLa infanta le teutlió la mano, ¡y aquí mis
Regenerador Paz del Cabello que diéramos apuros I, es decir, los suyos. Empezaron los
rraii.
en i\lgun;i;i cabezas ilustres, .saldría pelo en
manoteos. siguieron los juegos malabares
•i^iP
abundaiicia. Son fenómenos indiscutibleü; con el puro y la chistera, y a la postre se
pero que no tienen explicación.
quedó síu saludar.
Pídase en farmacias y perfumerías y en
Luego decía que se trataba de un acto
El Gloijilo, Montera, 16,
político...
Xd.eas "y pelos-
P e d i d A n í s LA D O L O R E S
y Licor MONASTERIO DE PIEDRA
SI
Insuperable para limpiar metales. No confundirse y desconfiad de fas imitaciones.
. - . . - . -a. . - . Concesionarios para Espanaa Hijos de M. Grases.—Madrid
-:- -:- -t- ••"
EL MENHDcKO
fv
Su miaja de pánico
No sabemos lo que liabr;i ociirrido; pero
lo cierto es que, de protKO, los periódicos CÍpayos que hacían inás furiosa campana contra los alemanes, lian empezado a quitar
hierro y a puljlicar iina sci'ie de informaciones en que se liabla de los pesimismos de
París, del pánica en Londres, de los deáaciertos de Inglaterra, y asi todo seguido.
Al "Heraldo", por cjeinplo, ya no le queda de germanófoljo mas que el rabo de última hora, que le envía Martínez, el cual
Martínez no ha debido enterarse aún de que
esas cosas de la destrucción fulminante de
.•Meniania hacen aqu¡ casi tanta gracia como
los chistes de Paso y Abatí.
Y, demás, no se ha enterado tampoco de
lo que están padeciendo las planas de anuncios del "trust".
¡Caray! Ahora caemos en la cuenta. jSerá
que eso de las planas ha hecho enmendar
las otras planas de la guerra?
El caso es que la mayoría de los señores
del rnargen empiezan a sentirse piadosos
con Alemania, y Iiasta revelan una leve simpatía por el Ixlrbaro y desacreditadísimo
pueblo teutón, que tiene la osadía de seguir
ocupando el territorio francés, a pesar de
la estrateG:ia admirable de los aliados.
La cosa no nos hace maldita gracia, porque los ]n 11 reos que venían envíandole al
sinvergüenza de Mamporro para que se pitorreara de los bulos cipayos, van a disminuir, de un modo lamentable, si ahora se
empie;:an a sentir yertuaiiófilos todos los
presentes.
Verán ustedes cómo el día menos pensado liasta Alejandrito lanza un ¡viva Guillermo 1
Como que eso de bombardear las costas
inglesas no era lo convenido.
FABUICA DE CORBATAS, Capellanes, \l Camisas, guantes, pañuelos, géneros de punto.
FJesíancia. Surtido. Economía.
iVayan ustedes a paseo!
"Le Temps", que tantos liorrores ha dicho de España, se inclina almra sonriente
hacia nosotros y nos dice que no intentemos una mediación de paz, que sería prematura.
Claro que sería prematura, cuando los
alemanes no han terminado de establecer
los servicios cu las provincias írancesas
conquistadas hace cinco meses.
A continuación asegura "Le Temps" que
los reaccionarlos españoles han inleiitado
extraviar a la opinión; pero que ésta se va
convenciendo de la superioridad francesa.
Sobre todo en las modas y cu el queso
de Roquefort.
Pero hay algo en las tonterías de "Le
Temps" que no podemos pasar, porque se
nos atraganta. Se permite aludir a "las mentiras españolas" en los asuntos de la guerra, y eso 3'a es salirse fuera de los Vosgos.
Los infundiosos mayores de Europa, los
fabricantes de bulos y embustes más acreditados de todo el globo, no tienen derecho
a hablar de las mentiras españolas... que
ellos nos han exportado.
¡Habrá frescales!
Claro que no los vamos a tomar a tragedia, porque ya tienen bastante con lo que
le zumban los teutones.
Y todavía hay puntos españoles que nos
hablan del amor de los vecinos.
¡Vayan ustedes a paseo I
|Encantadora boquilla!
Cualquiera que lea este título, se figurará
que estamos cxtasiados ante el recuerdo de
la preciosa boca de cualquiera de nuestras
artistas de varietés, cuando lo cierto es, que
sólo nos acordamos de la Boquilla dcsinío.\icadora del humo del tabaco del doctor
Parant Alexiades, Infantas, 13.
[I ifiiKifl IB lllS lliDPS.
Ya saben ustedes que Mamporro no tiene pelos eji la lengua, porque los lleva lodos en el lunar con que se dignó agraciarle
la Pro\'idencia.
Y como es más claro que el agua y le
fastidian, las penumbras, va a exponer unos
cuantos detalles que confirman sus sensacionales denuncias de otros números, sobre
exportación a Francia de artículos que aquí
nos hacen una falta loca.
Pero no quiere pasar adelante, como
cualquier candidato a niinístro, sin reiterar
su felicitación sincera a Bugallal, por las
disposiciones que, atendiendo las reclamaciones de von Delgado Barreto, dictó hace
días, poniendo coto a los escandalosos negocie jos de los cipayos.
Acá tenemos la costumbre de comprobar
siempre lo que decimos, y para comprobarlo, nuestros espías han salido por esos
mundos de Dios en busca de datos, más o
menos Iradier,
He aquí, en síntesis, cómo se ha venido
haciendo el negocio:
I'-u España se constituyó una especie de
sindicato anónimo y secreto, en el que predominaba la gente política, bajo la dirección de un cabecilla revolucionario, y nombró representante en París a un señor Quintana, que sirve de intermediario cerca del
Gobierno francés.
A los pocos días, después de cuatro o
cinco viajes, que no han pasado inadvertidos para el público, quedó planeado el negocio, que consistía en enviar a Francia artículos de guarnicionería para el Ejército
aliado, pieles, calzado, telas, caballerías, ganado vacuno y lanar, patatas, judias, lentejas, embutidos, carnes saladas, bujías, yodo,
morfina, vendajes, etc.
Inmediatamente cayeron sobre las regiones productoras de España agentes franceses e ingleses, instrumentos del sindicato, que no quiso emplear personal español
a fin de que, en el caso de cualquier contratiempo, la calidad de extranjeros fuera contó un escudo que parase los golpes de las
autoridades.
F.n esa forma se hizo la requisa y se comenzó el acaparamiento desvergonzado y
la exportación, que ha podido llevar al país
a un espantoso estado de hambre y de miseria,
Porípie nosotros no nos quejamos de que
se exporte lo que en España no =
. ea indispensable al consumo, como los artículos de
guarnicionería, y por eso no decimos nada
al saber que dos grandes fábricas han trabajado día y noche en la confección de canteras, rlnturones, etc., como tampoco nos
alarma cjue trabajen para la exportación
las fábricas de calzado, mantas y ropas, Al
fin y al cabo, es una producción industrial
que pro|>orciona trabajo a muchos obreros
y que, lejos de traer conflictos, los aminora.
Lo que no podemos tolerar, ni toleramos,
es que Quintana pida desde París mil muías al jefe del sindicato y que éste las busque, pagándolas a cualquier precio, para
privar a nuestros agricultores de todo medio de labranza; lo que no consentimos ea
que se lleven por vagones los artículos de
comer, beber y arder, que aquí nos son indispensables; a lo que no nos resignamos
es a que de Valencia se hayan llevado todas
las caballerías disponibles, y de otros sitios
las vacas, las ovejas y las cabras.
En cambio, no se lian llevado muchos
burros, que aquí no hacen maldita falta.
Ahora, con las disposiciones de Bugallal,
los traficantes están un poco temerosos (poquito); pero no hay que perderles de vista,
porque el acaparamiento sigue y esos puntos son capaces de todo, incluso de matar
por hambre al pueblo, con tal de que sus
negocios se redondeen.
De modo que, ¡ojo a las fronteras y a t o s
acaparadores que recorren las provinciasl
Hombre, se nos acaba de ocurrir una
ideíca. ¿Nc neria eficaz emprenderla a palos con unos cuantos agentes de esos que
intentan llevarse lo que aquí nccesitamtts
para vivir?
En cuaLito a los del sindicato, ya llegará
también el día de arrearles en la pelota lo
suyo.
Lo sentimos; pero no bay más remedio.
Don J a i m e e n Madrid.
El iiigiés—Cie\oi\ Esto no es un regalo de Reyes; es de Emperadores.
A cuantos les ha llamado la atención la
estancia de D. Jaime en Madrid, les diremos que aún tiene que permanecer muchos
años. Nos rcrerimos a D. Jaime Ruiz, dueño de los grandes almacenes ríe lámparas
y objetos eléctricos de Goya, 4, y Arenal, 22.
-•^•"'•-W-
CL M C N T I D E K U
Naranjas de la china.
'
-t
T
—[•"•
Ha resuHado muy bonito eso que ideó el
Sr. Fabié de enviar unos naranjeros a Nueva York, pagándoles el Estado su viaje, pn~
ra introdncir la naranja en el mercado yanqui, a falta de la exportación a Europa con
tnolivo de la guerra.
Hn efecto, iio lian heclio mas qne llegar
los naranjeros a los Estados Unidos, y se
han encontrado con nnos señores qnc les
\]:i.n presentado buenas naranjas del país a
precios baratísimos.
Los naranjeros lian reííresado todos mustios y cabizbajos, aunque satisfechos de la
excursión.
No hay qtie negar que se trataba de un
viaje heclio por azar, o por azahar, y que
se lian vuelto azarados coniplctameiite.
Dan ganas de recitar aquello de
"Estos Fabic, ¡ay, dolor I, que ves ahora..."
LIBRAS INGLESAS Y LIBRAS DE-ESPANA
Cuando oímos ensalzar el valor de las libras inglesas, no podemos por menos de indignarnos al pensar que las tenemos en España niuebas más valiosas; las del clioco'iate marca "La España", de venta en iiltraniarinos, que es producto de los que honran la fabricación naciotial y satisface todos los gustos.
Joffre, en el sillón.
París, 2.—Los continuados éxitos del generalísimo Joffre veníati demandando, hace
tiempo, una recompensa extraortlinaria, algo c¡ue fuera demostración de lo que la
patria debe a este hombre ilustre y de lo
que le reserva.
Se pensó en concederle la gran cruz del ,
Mérito agrícola o eit regalarle iu\ álbum
artístico; pero personas de relieve han proptiesto algo más en armonía con su condiiión de militar; otorgarle el sillón de la
Academia, vacante por fallecimiento del
conde de Mun.
No se ha hecho piiblico todavía qué Academia ha de acoger en su seno al general
Joffre, así es que todo se vuelven comentarios.
Calculamos que de la Academia de la
Lengua no será, dado que el general Joffre
es hombre casi tan apegado al silencio como Vicente Pastor; de la de Ciencias Exactas, lo dudamos, porque a Joffre, como a
García Prieto, le han fallado varías veces
los cálculos. ¿De qué Academia será nombrado, pues, Joffre el taciturno?
Nosotros le designaríamos para una Academia de baile, con objeto de que recobrara el humor, o de la Academia de Ciencias
Morales y Políticas, que cuenta entre sus
miembros el regocijante marqués del Vadíllo.
El espíritu francés, ha reaccionado mucho con esta designación inesperada.
El del kepis—¿Te parece que compremos eso?
El de !a ptpa.—iPma qué gastar dinero si ya es nuestra, según dice esc?
que las conversaciones se oían por el tabique.
Empezó la lucha de trinchera a trinchera,
y se liizo tnia carnicería tan graiide, que
Niembro mismo se hubiera asoiTÜirado de
verla. ¡Aquello era una carnicerial
Para que no faltara natía en la carnicería,
un cerdo—no un cliupóptero, sino un cerdo
más auténtico—cruzó entre trinchera y tritjchera, sin comprender qtie se jtigaba la vida y comprometía la de los soldados ingleses y teutones. Unos y otros dispararon
y le mataron; pero no pudieron hacerse con
él a causa de las rivalidades.
—¡Queremos cerdo!—gritaban loa ingleses.
—Sí; jy un jamónl—contestaban los otros.
Aquello ponía pavor en el ánimo.
Mientras tanto, las muertes eran continuas y el cerdo seguía indemne.
Después de varios días de lucha, el propio cerdo se vio obligado a acercarse, por
sí mismo, muerto y todo como estaba, a
tma de las trincheras, para que terminara la
matanza.
La conquista de un cerdo.
El hecho se telegrafió a Inglaterra y ha
Londres, 2.—Se reciben noticias de Bou- sido publicado por toda la Prensa
íOgne que. causan estremecimientos.
Un héroe alemán en Madrid.
En Londres la emoción es vivísima; pero
al transmitiros el telegrama debo recomenAcabamos de recibir noticias de que se
dar primeramente a aquellas personas que
halla en Madrid un señor aleinán que ha sipadezcan asma que se abstengan de leerle,
do calificado siempre como un verdadero
pues en estos enfermos una explosión de héroe del comercio, ya que no de la guerra;
risa suele ser fatal.
el Sr. Koclbcr, dueño de la Gran Papelería
Alemana de la calle de Esparteros, i, que
En Soplincs, cerca de Armenteres, al Este
en pocos años ha conseguido colocar a su
de Liile, un poco más abajo de Calais, seestablecimiento entre los de primera línea.
gún se va a la región diel Iser, ingleses y
Su mayor crédito se debe al ma£,'níí¡co insalemanes se encontraron frente a frente y
trumental de dibujo y aparatos de Topose dispusieron a la batalla.
grafía y Geodesia que vende, y del que se
Antes se dedicaron a construir trine llesurten todos los csturliaiites e ingenieros
ras, mirándose amorosamente.
de España.
Hicieran aquéllas tan cerca unas de otras,
Batalla brutal.
LA mm ñ omENTE
Monte Sinaí, 2 de enero.—Las operaciones han adquirido estos días una actividad
extraordinaria.
Por la Palestina y por la Congruna, a»
sur de la Mansurancia, han desfilado millones de camellos, que van a reforzar el enorme ejército que los tres monarcas aliados
han logrado reunir para dar un avance formidable el día 6,
En la líiiea de fuego caen por doquier
mortíferas peladillas, análogas a las que los
"ches" valencianos venden en Madrid e" '*
plaza Mayor, y enormes granadas; pero
granadas de verdad, esto es, de esas que resultan deliciosas aderezadas con un poco ae
vino y aziicar.
'
Los tres Reyes, Melchor, Gaspar y Baltasar, están de perfecto acuerdo, y se cree
que pronto se iniciará la marcha.
Es todo lo que de la guerra en Oriente.
hoy por hoy, puedo telegrafiaros.
:BMLM C S - I L J O I B X T O
es la mejor fábrica de corbatas, C H m i s e r f a i géneros de punto, paroIguas. Precio fijo. Montera, 15>
Para que no haya duda.
Los Icrrouxislas, no sabiendo ya qué hacer para sacar unas perras, han inventado
el negocio de las insignias aliadr-oVcase cómo lo describe el órgano del <'-^bo" primero;
"Se están confeccionando insignias con
las banderas de las naciones aliadas, que
podrán ser adquiridas a precios económicos
NAVAS PIANOS
FUENCARRAL, 2 0 DUR"^
"r':E:xj3E3E'oisTo a s a s
MADRID
• i^-:r^]^
•
-^T^^iu^:^'^^:
7
EL MENTIDERO
para exliibirlas quienes sientan simpatías
por las naciones que ijeficndcn el (lereclio
^•iolado (¡Ay, liijolj por los alemanes.
La idea iios parece mny acertada, y esperamos que tendrá gran cxiío. (No lo saben
ustedes tiicn.)
La sordina que poiie el Gübienio a todas
las manifestaciones de simpatia por las naciones beligerantes, liay qnc romperla de alguna manera. (Se roníperá, -se romperá.)
España, por virtud de la neutralidad, parece un país sin pnlso, y es preciso reaccionar contra la letal indiferencia, que se parece niLiclio al estado afrójiico de un pueblo.
Ya qtie esté cobartaiia la lilíerlad de la
tribnna pública y de la Prensa, iia.iíamos saber de alyún modo que el pueblo vive, y
que está al lado de la razón y del derecho
representados por las nacinnes aliadas. (¡Já,
id, já!)
Esperamos ver pronto piicatos en circulación los escudos aliados, y rápidamente
exlenrlidos por toda España. (Nosotros,
también.)
Es una campaña francófila que está liaciendo mnclia falla, siquiera para que se cotio;:ca el divorcio del país con sus gobernantes."
Como tistedes verán, el óryano del hombre qne fué a P'rancia a ofrecernos como
nna mercancia, y que en pleno Co]if,'reso,
sin protesta de nadie, ijisultó a Esjjaña diciendo qnc nuestra neutralidad es de "las
neulralidaties qne inane han", no pierde
ocasión de arrastrarno.s a la guerra.
Está bien, si el Gobierno lo tolera; pero
frente a esa tolerancia y a ese intento ridículo de las insignias aliadas, nosotros nos
limitamos a publicar los cuatro renglones
que nos entrega una Comisión de señores
con toda la barba germanófila:
"Hemos leído en el [¡eriódico de .'Mejanirillo la provocación de las iusignias aliadas. Como eso rompería la neutralidad y
somos partidarios del mal menor, nos juramentamos para roniperle la cabeza a todo
ittdividuo que se eche a la calle luciendo esa
cursilería.—Varios hispanófilos."
Acaban ustedes de dar en el clavo.
Kfamporro, rubrica.
I-ia-
CHIRIGOTEO BELICOSO
Dice Maczlu en "El Heraldo", que Churchil íia encontrado, refiriéndose a los alemanes, una ])alabra feliz: los llama "matanenes ".
Si esta injusticia fuera verdad, ¡qué falta
nos harían unos cuantos teutones por acal
Con los nenes que nos sobran.
*•*
Dice "La Correspondencia":
"Burdeos, 28.-—El ministro de la Guerra
regresará a París con todos los servicios
[iel Rfinislerio en la primera semana de
enero."
¡Cuak|uiera se acerca a Millerand í^\n ponerse un pañuelo en las narices!
*•*
El Sr. Pichón, que tiene en Francia una
autoridad en materia de Guerra, como su tocayo el Sr. Paloma la tiene de Marina en
España, ha dicho que todas las naciones
aliadas están conforme,^ en pedir al Japón
que mande refuerzos a Europa.
¡Qué cosas nos descubre Pichón! Lo que
faha saber es si los japoneses aceptan.
No parece sino que les van a hacer un
favor. —-¡Os permitimos que os matéis por
nosotros!
[Pichón, hijo, fíjate en lo que dices I
Un periodista yanqui ha visitado el cuartel general del generalísimo Joffrc, que está,
por cierto, a Bo kilónietros de la línea de
fuego, por lo que pudiera ocurrir.
Ha descubierto que el generalísimo íran
CCS tiene un automóvil especial, lionde hay
uji escritorio y dos banquetas. El general,
cuando se traslada tic un punto a otro, puede continuar viendo planos y escribiendo
perfectanicnte.
¡En la carretera del Pardo lo qni.'íiéramo?
ver nosotros escribiendo!
Un gramo de sonido.
Maeztu dijo una vez que " teléfono" se componía de dos voces: Tele, hilo, y foiio. scnido, [lor lo que había que creer también
que Gramophone es un gramo de iiiúsica
en vez de im mugnítico aparato íojiojjráfico
que vende Urefia. Prim, i.
En el próximo número:
"UN CASO DE ADMINISTRACIÓN
MUNICIPAL.— COMO S E PERSIGUE
A UN CIUDADANO."
Sensacional información documentada en
que salen a relucir ediles, secretarios, agentes ejecutivos, industriales felices y otro sinnúmero de cosas raras del Ayuntamiento
de Madrid.
DEL HOMENAJE A
LA ESFERA,
reventas-
Hay muchos señores que se indignan con
la reventa, y esto no es justo. Si nosotros
queremos adquirir dos butacas, por ejemplo, que estén como nuevas, a un precio
módico, ¿quién nos lo impide? No liay sino
ir al Hotel de Ventas y comprar lo que se
nos antoje, nuevo o usado, barato y elefante. Atocha, 34.
Asomando la oreja.
París, 2.—Gracias al concurso de senegaleses y de argelinos, Francia va imponiendo, poco a poco, el castijío a los teutones, y al mismo tiempo, la política de paternidad universal.
Es muy frecuente ver en París a dichos
soldados coloniales con collares formados
por orejas, cortadas a Ins heridos que caen
en el campo de batalla.
Interrogado sobre esto un eminente sociólog-o francés, lia dicho:
—Hace tiempo qne se viene demostrando que el apéndice auricular, como el apéndice intestinal, como el apéndice de la Enciclopedia Larouse, no sirven absolutamente para nada. Es una prueba del salvajismo de los tiempos, que tos hombres estilen
todavía las orejas, por !n cual está justificadísimo que nuestros soldados las corten
a rape.
Francia, en esto como en todo, va a la
cabeza de la civilización; por eso yo digo:
no desmayad: ¡duro, y a la cabeza... de la
cultura!
Para dicho político no existe nada en el
mvmdo como un pueblo de desorejados.
• " ' • ^ ^
.jj,^;;V;--^L;vj-.:-.i'i:y:^yí;.
Este que a la izquierda ves,
caro lector, es Frrmcés:
el fornido "Caballero"
de la diestra. Carretero,
y los dos valen por tres.
;r^;.iiv
^MMál
Van del éxito seguros
organizando un banquete
qne será de rechupete.
El cubierto a cuatro duros...
¿Pnnrirán de seda el tapete?.
Variedad de calidades y dibujos» Precios ventajosos,
i-i Hijos de M. Grase5."Atochay 16 y Fuencarra!, 8 c-i
EL MtNTlDERu
PRAST
N'uestro queridü cülcy:! " L a T r . b i i n a " .
que aliza to suyo cuainlo ac le a h n n r m ins
iiaricc:3, publica un auclto litiilailo "ILl pcl-j
J e la Dcliena", que dice así:
" ¿ P o r q u é se ha callado en e! A y u r ; i inieiito el uscaiuiaioso a s u n t o tle la Dehu :i
de la Villa? Nadie lo sabe. "KI Metiiidero".
líji su hcmrosa campaña, llegó hasta el fin.
El Sr- Alvarcz v\rranz, inflexible y perspicaz, llegó lia&ia el fin."
D e s p u é s de decir que el e x p e d i e n t e del
íjácándalo está dcfinitivanietUe esclarecido y
de p r e g u n t a r por cjué no nos e n t e r a m o s y
por tiLié no se publica, a ñ a d e :
" E l pueblo de Madi-id está interesado en
el esclarecimiento de este ncgocito, que ha
puesto los dientes l a r g o s a m á s de mil madrileños. P o r q u e , ¡cuidado que es b o n i t o !
E s preciso que t o d o s s e p a m o s lo que saben el Sr. Alvarez A r r a n z , el alcalde y los
concejales privilegiados de la f o r t u n a . "
Tiene razón '*La T r i b u n a " , H a s t a el fin
llegó l i o n r a d a m e n t e " E l M e n t i d e r o " ; p e r o
ahora eitipczarcitios otra vez, para decir por
qué no se da publicidad a ese escándalo,
Y enioitccs sabrá el pueblo de M a d r i d
que a ese negocio, coit la t a p a d e r a de un supuesto envío a los T r i b u n a l e s , se le quiere
echar tierra, p o r q u e de las hectáreas r o b a das al vecindario S E E S T Á N A P R O V E C H A N D O MUCHAS MAS P E R S O N A S
DE LAS Q U E EN UN P R I N C I P I O SE
DIJO._
; E s t á claro? P u e s lo estará más, porque
esto va a dar m u c h o j u e g o arriba, y abajo,
rf«t^
Una earía de Ventilador.
Nue.scro e n t r a ñ a b l e a m i g ó l e D . Alvaro
del V e n t i l a d o r y la Eresquera, se ha sentido
humorista y ha, resuello e n v i a r n o s un;i caria, que p u b l i c a m o s con m n c h o gusto, porque lo c o r t é s n o quila lo M a m p o r r o .
Dice a s í :
"Sr. D. Feliz del M a m p o r r o y de la Sonrisa.
Mi querido y chisluso p a n e g i r i s t a : En el
ultimo [lúniero de su irónico s e m a n a r i o " E l
M e n t i d e r o " , que tan m a l o s r a l o s me hace
pasar, be leído la información referente a
mi ruina, información que le agradezco, porque me quita de encima un s i n n ú m e r o de
Al empezar el año...
VADILLO
Si-guiré cobrando
^•! m i l i nato
pelmas, que se ]>a-;nn i.i •.•: • , ILIIMICIO d-i
los c o n d e n a d o s nuilones.
P e r o lie de rectificar una :,r- - r i ó r nue
me mortifica: ^ Usted me cree a i":' '.n Ü-a-o
que nte deje en£;añar por Lcrrrii:'.:
Ctiando y o le doy algo al hom!"i:e, ':; '•1:1c
me conviene, no conio D. Cerato, (. c lo
hace el g u s t o en todo, p o r q u e cree cr.c c'
em]>crador es una potencia, ¡Si sabré y ^ c^'H
quién me g a s l o las p e r r a s !
De m o d o que mi ruina no v e n d r á por ahívenclrá cuantío y o vuelva al poder, que sera
p r o n t o , p o r q u e mi c o m p a ñ e r o de landa está
dejando esto c o m o para que venga a goberjtar Rotscliild, después de a s e g u r a r s e u n a
plaza eit el Asilo tle la P a l o m a .
Me parece a mí que ya es hora de que usted declare qtie me han e c h a d o la p a l a p o r
encima.
H e q u e r i d o r e d a c t a r e s t a s líneas en el
propio estilo m a m p o r r í s t i c o , y al firmar, para que la g-ente p e r m a n e z c a en la duda de
si es mía o no es mía esta carta (que sí es
mía), iu liago con el noiniare y apellidos de
la invención de D. Feliz, a quien desea m u chas p r o s p e r i d a d e s en el nuevo año su asiduo y a veces indignado lectorcete.—Alvaro
del V e n t i l a d o r y la F r e s q u e r a , — P o r no saber firmar, B r o c a s . "
Realmc]ite, la carta de D. Alvaro, imitando el eslilo de M a m p o r r o , tiene gracia, y a
cambio de la que nos ha hecho cua]ido la
recibiittos y a h o r a que la releemos, declar a m o s que a n t e la untuosidad y la laxitud
de Ceratillo, V e n t i l a d o r empieza a parecernos un cstadisla, sino de cuerpo cillero, de
busto y para Guadalajara.
-•'
p r o v i n c i a s ; y en prueba de que n o s o m o s
sistemáticos m a s que en la antipatía a los
ingleses, sean o no de I n g l a t e r r a , v a m o s hoy
a elogiar una suscripción hecha e n t r e emjdcados para agasajar a un jefe.
E s t e n o es o t r o que U. M a n u e l de Vicente
y T u t o r , jefe de la sección p r i m e r a de la Dirección de Correos, y aqtiéllos no son o t r o s
qtie los funcionarios del mismo Cuerpo, desde el que frcga los sábados el interior de
los buzones del Inlcrior, hasta el jefe del'
personal.
T u t o r es, r e s p e c t o a C o r r e o s , algo así com o B r o c a s r e s p e c t o a R o m a n o n e s ; el-cereb r o creador y o r g a n i z a d o r ; con la diferencia de que B r o c a s es un " c e r e b r o . , , verte
g ü e n o " y T u t o r es una " c e r e b r i d a d " ; y si
no lo es, lo será.
¡ C u á n t o n o habrá t r a b a j a d o este h o m b r e
en Correos, c u a n d o al c r e a r s e a h o r a la Subdirección ha sido elegido para este cargo,
sin que osara nadie disputárselo, y se le ha
concedido, con el beneplácito del gran O r tuño, la gran cruz de Isabel la Católica!
T u t o r vive para C o r r e o s y sueña con Correos, ¡ Se está q u e d a n d o c o r r e o s o i P e r o
hay que r e c o n o c e r que es un g r a n " t u t o r ,
N u e s t r a única tristeza al publicar la noticia, es que al Cuerpo de T e l é g r a f o s , herm a n o del de Correos, no se le hayan concedido también los beneficios a que aspiraba y a que tiene derecho, por su laboriosidad, por su cultura y por los g r a n d e s servicios que presta,
•A Telétfrafos le hace falta un T u t o r , que
pitede e n c o n t r a r en su seno, p o r q u e es de
suponer que, t r a t á n d o s e de un Cuerpo, tenga seno. Búsqnelo, ntímelo, elévelo...
E l será el que. cerca de los directores,
consiga para Telégrafos lo que hace falta,
Cartas a los Reyes.
I^as c a r t a s (¡ue los nenes de los polilieos
han enviado a los Reyes, son t o d a s pidiend o a g r i t o airado l a ' N E F A R I N A , m u c h o
m á s suÍJSlanciosa para los chiquillos que
; ^dos los enclnifes del prcsuptiesto,
^f%^m
—
El que paga, descansa.
¡ Q u é verdad tan g r a n d e ! P o r eso R o m a r,r.-^~ dice que es incansaijle y qlie no conoce c' r e p o s o . A n t e todo, n o p o d e m o s hacer c t r ? coí^a sino aconsejarle que adquiera i-ra cama en el Gran Bazar de c a m a s y
Miicb-ci de Armonio Mercadal, y que ^^ P**
gue. p ' i c t ' c para descansar c ó m o d a m e n t e
n o exis'c nana mejor, Atocha, 8, 10 y 12.
D . HILARIO
ESO ESTA BIEN
Ya no soy nada, no haré mida.
Lo de que n o s o t r o s " n o s m e t e m o s " con
la g e n t e por sistema, es un c o m u n i c a d o oficial írancés.
N o s o t r o s s o m o s en eso c o m o Isabel la
Católica, s o b e r a n a que, c o m o ustedes saben, se parecía a u n c o r s é eit que é s t e ensalza a los débiles, r e ú n e a los dispersos y
reprime a los p o d e r o s o s .
E s t e es, precisamenle, n u e s t r o p r o g r a m a ,
H e n t o s c e n s u r a d o a l g u n o s r e g a l i t o s hechos por a l g u n o s funcionarios a a l g u n o s jefes de a l g u n a s c o r p o r a c i o n e s de algunas
Ale eslaré qiiiideciío en el Congreso, por-
t[tie lo de D. Nicanor me ha llegado al alma.
UL M C N T I D E R O
J^X oro. 15 o¡z;^.r &± a . x i o .
! S
LA VIDA EN 1939
e
TT" i "\7" o ' !
rato, Fresquera y Compañía, Sr, Lerroux,
lia salido para el extranjero en viaje de propaganda.
*•*
(NoticÍAB que conocemos con veinticiDco
El diputado por Madrid, señor conde de
Santa Engracia, ha rogado al ministro de
años de anticipación.)Fomento que se tramite cuanto antes el
Han sitio detenidos y cojiducides a la Cocxpedietite para coiuenzar !ag obras de pamisaria tres vendedores de pi^riüdicos que
vimentación.
riñeron en la Puerta del tío! por la posesión de una cartera, que uno de ellos se ha*«*
bía encontrado en un tranvía,
Ha fallecido en el pueblo de Getafe el seLlániaiise los detenidos Burgos, Prado crclario de aquel Ayuntamiento, D. Eduary Esteban Collantes.
do Dato.
Parece ser que la cartera pertenecía a
•©*
ui] caballero llamado Francisco Eerffamtn.
Según los últimos partes franceses, la situación en las líneas del Este sigue siendo
Ayer se suicidó en la Moncloa un depen- estacionaria.
Los alemanes continúan haciendo su vida
diente conocido por Manuel Brocas, que
ní)rinal en las regiones coJiquistadas.
se acababa de jngar el dinero de sn príuci1 " ^
pal en un tiro al blanco de serioriliis.
*«*
El conde de Romanones lia manifestado,
que la benéfica gestión que desde Iiacc años
vienen realizando los idóneos y romaiionistas, puede apreciarse por el lieclio de que
hoy nuestro déficit apenas si llega a pesetas
248.338.433.iJJ7-54^-99ü.25.
*«-
Según dicen de Barcelona, continúan los
trabajos preparatorios para la Exposición
de industrias, suspendida en 1917.
El Gobierno lleva entregados ya gü millones de pesetas.
La tranqnitidad en Barcelona es absoluta.
*©*
El conocido representante de la Casa Ce-
:-: AGUA DE VILLAZA :-:
Única para
mesa.
Infalible p:\ra el estómago.
PERIODIQUERIAS
"]U Mundo" sigue su campaña interesante de gazapco municipal, y descubre cada Cosa ([ue tira de espaldas.
IvO qne nos asombra es que nadie se dé
por aludido, ni siquiera las autoridades superiores, qne han debido apresurarse a comprobar las e3tn]>enda3 demmcias, por virtud
de las cuales qucdari inhabilitados muchos
fimeionarios del Municipio.
Las cosas descubiertas por Alcalá Martín, que se ha acreditado de lanzatorpedos
de primera, merecen una investigación.
¿Es que se ha acabado la lacha u qué?
Doña " Colombino" no se limita ya a meterse con los alemanes que tuvieron el
buen liunior de confundirla con un ruso,
sino que la toma con los sacerdotes» echándoselas de "pogrcsLva".
En esa serie de conversaciones con artistas, que endulzan las planas del "Heraldo",
le llegó su turno a la Fons, y en el diálogo,
doña "Colombine" le dice a Julia;
—" Vo tuve la desgracia de venir con una
peregrinación. Ochenta curas, cuatro obispos y no sé cuántas devotas.
—Ahora también—dice la Fons — venían
mucíios curas.
—¿Y añrma usted que lo ha pasado
bien?"
^:De modo que doña Carmen considera
una desgracia venir con una peregrinación
y se pc-mite tratar despectivamente a los
obispos, los sacerdotes y las devotas?
¡Muy ijonito y muy edificante!
¿Qué dialdos le gustará en este mundo
a dofia "Colombine"?
Estas literatas son terribles.
"V7"ÍiiO
d o
:BiJi.i»g;os.
El Sr, Burgos, desde que se cree ministro,
no toma ya otros vinos que los de las Bodegas Gallegas Los Pcares (Orense), Tinto
Tres Ríos y Blanco Brillante. Pídanse en
hoteles y en el Sanatorio, Cruz, 21.
10
EL MENTIDERO
?KOvi;^Ci^;^£K»Ai
En Rianjo no se puede vivir. Desde hace
la mar de años padecen allí una caciquería
aguda.
Vamos a zumbar unas m¡ají 11 as, incluso
a Mangarriégiicz, a menos cjiíe el Gobierno
quiera enterarse de los manejos cjtie se trae
por aquel pueblo el secretario de la DiputaciÓi] de Covuña, amo y señor de los caciques menores de la demarcación,
¿Sí o n¿i?
*©*
Y como ahora nos lia ciado el naipe por
Galicia, allá va otro cinlnitido.
En Carril existe una J'^uiidacióii Fernández, y por vohmlad del fundador, la plaza
de jnédico debe ser adjudicada: i." A cnalquier pariente del fundador, qnc posea título de médico. 2° A cualquier hijo de la
localidad, con el propio limlo.
Sí no existiera niédico en uingima de esas
condiciones expresas, se le adJLUÜcará la
plaza al de mayores méritos que se presente.
La cosa está clara, ;no? T'ues no lo está,
porque se presentan el médico pariente del
fundador, otro médico de Carril y LHI médico forastero... y le dan la plaza a este
111 timo.
Esperamos que ci señor niinistro de la
Gobernación y el señor director general se
enteren de si ha llegado al Ministerio un
recurso sobre este leve pitorreo del Municipio que se ha realizado en Carril.
*•Y va el último íTolpe.
En Bayona, tain!)icn de Galicia {boy nos
sentimos admiradores de la gaita) padecieron a un misnio alcalde y a un mismo secretario durante veinticinco años.
¡Hay que ver lo qne significa esa pesadumbre I
Al fin los hicieron saltar; pero inmediatamente se metieron ambos por la puerta
de la concejalía y siguen iiacienclo mangas
y capirotes.
Y por si faltaba algo, parece ser que el
señor gobernador de Pontevedra, al aprobar los presupuestos de Bayona, ordena un
aumento de gastos, que favorece a la caciquería, que crea un déficit insostenible y
que impedirá pagar obras importantes de
caminos y fuentes, ya realizadas.
¿A ver si en esta Bayona vamos a tener
que repartir capones como en la otra?
Se continuará.
— •
1
^
£1 ¡Maura^ si! en Bélgica.
Resulta asombroso que en Bélgica, donde
tan feroz caniiiaña se hizo contra España
en i 909, se oiga decir por todas partes
'"i\faura, sí!", y es porque basta Bruselas
ha llegado la faina del gran papel de fumar
cuya marca lleva este nombre, y todos los
belgas, como casi todos los españoles, no
usan otro papel sino el indicarlo.
serjc, con su módica fianza, cuando la fianza debió exigirla él al entrar allí; el propietario de la casa, con sus correspondientes
ale]nileres; el profesor, D. Fernando de las
I-feras, con sus haberes: la profesora, doña
Josefa Plaza, con sus ídem; etc., etc,
El material pedagógico, por decirlo así,
lo ha adquirido un simijático trapero cultural, y está ex|ntesto en un patio de la calle de Juan Pauloja, 7, a diaposición de las
e[n])resa3 educativas del conjuncionismo.
Si los señores del Municipio quieren más
detalles, pueden dirigirse al señor tesorero
y víctima, que se encomienda ahora a la
Virgen, patroua de su establecimiento mercaiiiil, y se lira de los pelos por haberse dejado meter en esas cosas.
jHaliría que ver a esos señores de la con•junción rigiendo la enseñanza nacional I
(tf^p*
Y le llamaban "Educativo".
Recordarán los que tienen el pésimo gusto lie leernos, que hace meses descubrimos
que el Centro educativo de conjimción repiiblicano-socialistíi, de Cuatro Caminos,
establecido en la calle de Bravo Murillo, 103,
inteiilal.ia hacer efectiva,^ las 500 pesetejas
de subvención que el Ayuntamiento había
desíinatlo al Centro educativo de obreros
republicanos, falleciilo cu diciembre del 13.
PiLes el aviso, con la demostración de
que 1L11 Centro no tenía que ver con e! otro,
jio sirvió de nada, porque los vivales del
Ayuntaniiento continuaron el expediente
para que el "Educativo conjuncionista" se
llevara 1,000 pesetejas, o sean las 500 con
que le habían subvencionado y las sop del
otro Centro difunto.
Pero, ahora viene lo gordo. Están a punto de librarse las j.ooo pesetas, si no se han
librado ya, a favor del Educativo de la conjunción, y resulta que ese ¡tantbién lia fallecido a primeros de diciembre!
Y no es lo peor que la haya diñado, sino
que deja un rosario de víctimas, entre las
cuales se cuentan el tesorero, Sr. Ruiz, con.
450 del ala, que no volverá a ver; el con-
jIE^ese vLsted- a.el oTojeti-vo!
GAZAPiLLOS
Dice el '•Heraldo" cji un telegrama de
Cádiz: " l i a llegado el diputado Sr. Sánchez
Robledo, senador por Carranza."
¡.'Vliza, que es tarde! líe un golpe han hecho compatibles los cargos de senador y
diputado, han confundido el pueblo de Carranza con una provincia y han dejado sin
personalidad a! senador Sr. Carranza.
¡Una irmieria de trastorno nnindial I
CONSERVAS T B E V U A N O
"La T]-¡buna", en otro telegrama:
"El ministro irá a Ceuta y luego hará ^1
viaje por mar a Málaga."
¡Ah, seguro I Y crean ustedes que si no
hace el viaje por mar de Ceuta a Málaga
se queda en Ceuta.
O no hay "Jografía".
Dice "Kl Mundo": "La Navidad es el día
de la renovación."
Pues no lo sabíamos, y hemoa dejado vencer todas las papeletas.
Pe la tierra de ;^lba.
Nos escriben de Valladolid diciendo que
siguen allí los jóvenes con la moda de andar arrastrando los pies, hasta el punto de
que en las casas no dura otro piso que el
de LINOLEUM, que para que sea más resistente se compra en la Plaza de Bilbao, 2.
Madrid.
LOS
Los corresponsales telegráficos de la
guerra nos cuentan bulos; pero ¡anda, (jue
los fotógrafos!...
Habrán visto ustedes en la ]nar de periódicos ilustrados españoles unas fotografías del célebre mortero de 42, y al pie de
ellas unos elogios apocalípticos de los fotógrafos que tuvieron la fijrtuna de sorprender ese secreto alemán y dejarlo grabado en sus placas.
Contemplen ustedes la fotografía que
acompaña a estps renglones y dígannos si
es la misma, exactamenle, que han visto en
los periódicos ilustrados. ;La misma? Pues
ese no es el mortero de 42, ni cosa que se
íe parezca.
Es una postal de carácter técnico, correspondiente a una serie que desde hace años
tiene en circulación la Casa Í-Crupp. "para
que se conozca el modelo de vagón especial que construye con destino a trasporte
de grandes piezas de artillería".
De esas postales de la 7>riniera serie, dedicadas al material ferroviario, circulan inillonca por todo el mundo, y tienen tanta
relación con el mortero de 42 como nosotros con el presidente de la República
china.
REGALITOS
Los empleados de un centro oficial de
Madrid han '"escotado" para recaudar una
cantidarl crecida y con ella regalar a cada
niíembro de la Corporación un pergamino,
en el cual se estampe el agradecimiento del
personal administrativo de la casa por ascensos y otras mejoras.
Lo gracioso del caso ha sido que, después de largos caljildeos, se nombró tieposilario de la colecta, y éste se ha distraído
hasta el extremo que ya no puede el personal regalar los pergaminos proyectados.
Hombre, tiene gracia.
A ver ,íi así cscannienlan los tontos de
las suscripciones para regalos.
B a ^ o s San F e l i p e Ñero
AIEDIOINAI.ES -:- BUCHAB -:- BIGIENIOOS
Consultas: de doce a una y rie cuatro a cinco.
H i l e r a s p 4- M a d r i d .
EL MtíNJiunhu
£1 pueblo 5S infera.
Como el piieíilo, que a ratos es niño, pero nn]ica tonto, se va e[iterando de que
aquello del ¡Maura, no!, quería decir que
\[aura no dejaba comer a los ]iol|j;íizanes ni
robar a los vividorcrf, que se nutren de la
savia del país, puede que la maiirofohia le
lié uno de estoá días un di = fjiislo gordo a
los tra!j;oncetes, sí se juzfía por un síníoina
que casi todos los periódicos, en sn afán de
sinceridad, se han callado.
Hace noches se rcprescnlalja en Martín,
<londe el púbíico no suele ser manrisla, ni
mantecas de las bombas catalanas, de los
motines de provincias, de los gritos y de las
amenazas, son nnos distinguidos sinvergiiencitas en escabeche, que le han engañado para sacarle del bolsillo hasta el último ]>erro, con lo del "¡Abajo Cánovas I"
y lo del "¡Maura, no I"
Créannos ustedes a nosotros.
Aquí, para vivir en sanca calma, sólo es
necesario que un día se levanten de buen
humor cincuenta ciudadanos fornidos y la
emprenda]! a escobazos con las ratas nacionales, que han conseguido nicterse en
los quesos de algunos monárquicos.
i Palabra I
11
no )ia habido manera, pues el buen conde,
apenas ve un fotógrafo, tira el cigarrillo de
brea, se tapa con nna mano el rostro, se sujeta con la otra el ])aiitalón y grita: "¡Atrásf
Usted es de "El Mentidero."
Pero ya lo pescaremos en postura, porque
no es cosa de que estos dos refuerzos, Saturnino y Albacete (antes Burgos), con que
nos brinda D. Cerato, se escapen a nuestro
objetivo.
Nuestro objetivo, como ustedes saben, es
hacerle pasar el rato al público.
Por hoy basta. Saturnino, r:idiante y tricolor, entra en el campo de la iiunortalidad.
Le trataremos sin acritudes, con chistes
nada más, ya que tanta afición les tiene.
Felicidades, Saturnino.
BRES
Faltos de energías, nervioso-musculares, Impotentes, gastados por abusos de Veniss, solitarios, alcchállcos,
pesares, estudios, &, viejos sin años,
recobrarán las fuerzas de la juventud
con el VIGOR SEXUAL KOCH de uso
extern'j. Los medicanrentos al Interíor,
si sn,i débiícG, estropean el estúmago
y no producen efecto, y si son fuertes
matan la saSud. El VIGOR SEXUAL
KOCH se vende en las boticas bien
surtidas del mundo. Conviene que para
determinar el grado de DEBILIDAD se
pida á la C L Í N I C A M A T E O S ,
Arenal, 1,1.°, M A D R I D (España) el GRÁFICO SEXUAL, y lo recibirán gratis por correo, reservadamento.
y aquí el coro:
"¡Saturnino, Saturnino!,
ya has pescado tu destino, etc."
Vómitos
niRAN
Cólera Ti f u S
Diarreas prontoxbien
_r"»..?;" Disenteri;
nas
INDISPENSABLE
& LOS
VIAJEROS
iSaiufnino!... iSaturnino!
Ese gran español qtie se llama D. Cerato
Simple y Malvaloca, se ha empeñado en
hacernos ricos, y lo consifíue.
Fresquera nos proporcionó a Tontolln,
Mangarriégncz, Amoscócegui, etc.; D. Cerato nos entrega a Saturnino.
Con la diferencia de que a Saturnino ni
siquiera tenemos tjue tomarnos la molestia
de bautizarle. ¿Dónde íbamos a encontrar
nada tan eufónico? ¡Saturnino! Parece que
habla uno de las saturnales y de Taboada
a un tiempo.
Claro que Saturnino tiene varios nombres: Satnrnino Esteban Miguel Collantes,
pero nosotros no tenemos derecho a nomlipíitico, tina obra, y en esa obra parece que
brarle sino por el primero que le adjudicahaijía una ahisióii inoportuna e irrespetuoron en la pila.
sa, para el Sr. Maura.
Saturnino, con cartera, señala nn punto
El pi'iblico, al oiría, se puso en pie, dio un de partida en la literatura teatral y humoviva a Maura y abandonó el teatro, sin que rística. Muy pronto, lo de "Baldomera, BalU representación terminase.
domera" reaparecerá con cambio de letra o
Y es que la gente discurre con la cabeza, letra de cambio, y las maritornes espumalo contrario de lo que hacen los zascandirán el "piri" al compás de:
les de la política.
"¡Saturnino, Saturnino!
A raíz del desbarajuste de la revolución,
ya has pescado tu destino...
Cánovas, con mano fuerte, llevó al país por
Píntala, píntala, píntala,
el camino del orden, para que pudiera vivir
que algt'in día se desteñirá."
y comer. Los revolucionarios, en sus comEsto va a ser una juerga que ni "La caplicidades sórdidas con gentes que se lla- tástrofe de Burgos", en Gracia y Justicia.
man monárquicas, le empezaron a combatir
Porque ahora falta lo mejor: el retrato de
fluramente, hasta quitarlo del medio.
Saturnino, con los pantalones por las corVolvió el desbarajuste, la francachela y
vas, para que se estén ustedes riendo dos
surgió Maura, durante cuyo período de trimestres sin pagar el inquilinato.
mando, con l,a Cierva, andaban muy malaPensábamos publicarlo en este número,
mente el juego, la bebida, las navajas, los porque Saturnino se ha paseado por csaa
chanchullos y las subvenciones; pero el pue- calles mirando a los transeúntes, como diblo comía y descansaba, y la administra- cicndoles: " ; N o os huelo a ministro?" Pero
ción del país se iba adecentando.
Pues, ¡duro con Maural
Al recordar todo esto, la gente deduce:
cuando gobiernan hombres de energía y de
talento, los pillos andan con las botas rotas; pero las personas decentes, de todos los
colores, comemos, nos vestimos y no nos
• •.L»l.lffT^Wi-|«M I -
—
J^a nariz d^l eondíj.
Habrán ustedes observado que cuando at
conde de Romanoncs le sale bien un asunto se le pone la nariz rojiza, lo ctial ocurre
a diario, .algunos lo atribiryen a herpes,
erupciones u otras enfermedades de la sangre, y, en la duda, le aconsejamos que se
aplique el compuesto arscnical X3 y curará,
porque ya que no vuelva a ser presidente,
por lo menos que se ponga más guapo.
*^pi
Ande la j u e r g a .
El 7 va a inaugurar el ministro de Fomento las obras de riego del Alto Aragón
Nos lieiiios quedado de una pieza.
¿Que obras se van a inaugurar? jQuién
las ha planeado? ¿Por qué no se habla de(
proyecto que se va a ejecutar?
. ¿Lo ven ustedes? ICn las Cortes, algunos
defensores de esa juerga, muchos melindres y mucho lavarse las manos, y ahora,
la lo mismo que veníamos diciendol
Nos dicen que el director de Obras públicas es contrario a esc enjuague, y que el
ministro va arrastrado a inaugurar unas
obras que no se pueden hacer,
4 Quién patrocina esc escándalo y quién
lo impone?
Nosotros lo averiguaremos y lo diremos.
E! "trust" publicará una brillante información del acto.
¿Cuánto se apuestan ustedes?
PiTi itnbo dj^estlTO, rlfloues, dlibeleí, trtfltiiBs
j CTlIiT Inrccclones eisIro-IntHtlDilet.
AGUA Oe B0F{inE5
VerdadePB Reina de las de mesa.
^OepAsttoi Cruz, 30 n Teltiono 2.7A8f
De Brocas a García Prieto...
El día !.•" de año celebraron su santo miles de Manolos, y ¡cosa sorprendente!, desde eí Manolo más lírico, como García Prieto, hasta el más apegado a las cosas terrenas, como Brocas, lian recibido soberbios
regalos del Gran Almacén de joyería, objetos artísticos y de metal Illanco, El Cont'ort, Barqnillo, 21. Saldo verdatl.
iropezamos cada dos minutos con nna chirlata, nna ramera, un borracho o un crimíTiSl. Criando gobiernan frescos, tontos o
débiles, los pillos engordan y el pueblo enllaquece.
Y como ven que Maura, entristecido ante
este repugnante espectáculo, ni sií[uiera pasa por las puertas de la ''Mondongiieria nacional", el pueblo comprende que los saca-
'ÜK^'-^tSi^-
— Oye, abnelifo; ese caballero tan viejo ¿esperará también a los Reyes?
— Ño,' hijo; espera a las solas.
=
•
13
,-i¿>yi^%^sie^gigT?^i^
••y^:^?^,'^.:^_:^-^:í8''^m^;P^:>w^-:y^r^
t L MENTIDERÜ
CALENDARIOS
S e ñ o r e s ; no se t r a t a de uit arLíenlo de
fondo de "lll L i b e r a l " , diciendo lo que va
a p a s a r en la política, p o r q u e eso ]io le ÍJtceresa a nadie.
Se t r a t a de un a n í c n l o c o m p l e t a n i e n l e
c o m e r c i a ] y de e x p o r t a c i ó n p a r a provincias.
E n p r i m e r ItTgar, liemos de r e í c r i r n o s al
c a l e n d a r i o maurista, qne los cliicos de la
J u v e n t u d han lanzado al m u n d o , y que es
una v e r d a d e r a preciosidad.
N o s o t r o s a c o n s e j a m o s a R o n i a n o n e s que
se haga en seguida con uno, siempre que
lo pague.
T r a e en todas las hojas frases y c o m e n t a rios de D. A n t o n i o , y c r e e m o s qtie esto es
lo suficiente para que la g e n t e se a p r e s u r e a
adquirirle y p o n e r l e en su despacho.
; H a y alg^o p o r encima de los versos de
P é r e z Zúñiga y de las obras de M a r q u i n a t
¡ D u r o con el a l m a n a q u e !
*•*
O t r o calejidarío digno de ser leído con
atención es el calendario de la familia, edit a d o p o r " L a S e m a n a Católica".
E s m u y i n t e r e s a n t e ; y n o decimos que
m u y fjracioso, p o r q u e n o es cosa d e que
nadie piense que " L a Seiiiana C a t ó l i c a "
haga cosas festivas con motivos tan serios.
P r e c i s a m e n t e , por lo que nos g u s t a el alm a n a q u e es, prccisainejite, por la seriedad.
Y ha prescindido basta de los versos de
D. J u a n de Dios, Vico y Bravo, que erají
lo m á s g r a c i o s o que se conocía de e s t a s publicaciones.
E n cambio, el "Sui g e n e r i s " que pnblica
el p a t r i a r c a l M e s t r e M a r t í n e z , ¡no h a y derecho!
j U s t e d e s creen que hay f u n d a m e n t o para
t o m a r a b r o m a el s a n t o r a l ?
P u e s en el "'Sui g e n e r i s " hay chistes a
costa de tocios los s a n t o s varones, que nos
a g u a r d a n en los reijios de los cielos. A m é n .
E s t e chiquillo de M e s t r e , siempre t a n r e voltoso y tan indiscreto.
P o r e s o le q u e r e m o s n o s o t r o s t a n t o en
esta casa, y le p e r d o n a m o s b a s t a que sea
e m p l e a d o de la Diputación, que es una de
las cosas m á s tristes que se conocen en
este m u n d o .
EL "TRUST,. EN TRES
A pesar de todo5 los esfuerzos hidráulicos, el " t r u s t " se deshace, cumpliéndose
asi las predicciones del clarividente M a m porro.
Si no hay c o n t r a o r d e n o p a s o a t r á s , parece que muy ])ronta, aunque la cosa t a r d e
en exteriorizarse, el " t r u s t " quedará d e s d o blado en la siguiente f o r m a :
R o m a i i o n e s , con el " H e r a l d o " .
Casset, con " E l I m p a r c i a l " .
Helerodo.xo, con " E l L i b e r a l " , dirigido
por Toniás Romero.
L o de Romajiones se explica, porque, a
pesar de e s t a r a r r u i n a d i t o , el infeliz todavía dispone de a l g u n a que o t r a p e s e t a para
la adquisición.
L o de Gassct, pase, p o r q u e es cosa de
familia.
P e r o lo de Melquíades, francamente, no
nos lo explicamos.
¿Asciende a t a n t o la m i n u t a p o r el célebre pleito de la seííorita M u s o ?
Imp. de "El MEDlÍleio„-"[ai[eri is San fiancisto, 13.—Madñd.
PANo
EÍT ZM. L C T E E i A HÚMERO 34
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Madrid 23 de Diciembre de 1914.
El Secretario dci Consejo, Manuel GarcfaBriz.
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tanta BI por msyor y el delall de ti>dot Ia4 prodaotoa qoimloaa y ortiouloi da droButrís,
E s p a r t e r o s i 9 - s ^ JSi/T ,A,'HiiFt.Tny
•«a»';-Espartares, 9
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SOMBREROS
T r e s gT:a.ncLsB m i i e s t r a r l o a
XTiiin.ica.aia,
^ e
f r a o n c e s e s e n cÍLa.les, r e n a r d - s
ix>.od.elos exi t e r c i o p e l o .
O c^ X J E ca-1 .-9^ T .A.,
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