Comunión Aprueban ley de sin causales en el estado de Queretaro La Nota: La Comisión de Administración y Procuración de Justicia aprobó la iniciativa de Divorcio Incausado, también conocido como divorcio exprés, con 21 votos a favor; iniciativa impulsada por los diputados Carlos Lázaro Sánchez Tapia y Héctor Iván Rentería Magaña, del PRD y PRI respectivamente, con lo que se reforman diversas disposiciones del Código Civil y del Código de Procedimientos Civiles del Estado de Querétaro. La Comisión aprobó el proyecto de dictamen de la iniciativa de Ley que modifica los artículos 246, 247, 248 y 268; y deroga los artículos 252, 253, 255, 257, 258, 260, 265, 267 y 270, todos del Código Civil para el Estado de Querétaro. También avaló la Iniciativa de ley que reforma, modifica y adiciona párrafos a los artículos 202, 259, 264, 275 bis; se adicionan los artículos 264 bis y 736 bis; y deroga los artículos 711 al 719, todos del Código de Procedimientos Civiles vigente para el estado de Querétaro; y la Iniciativa de ley que deroga, reforma y adiciona diversas disposiciones del Código Civil en vigor en el Estado de Querétaro. El “Divorcio sin causa”, también conocido como divorcio incausado se refiere a no dar vigencia a causales para decretar el divorcio, es decir, se reducen las causales y basta con que se presenten los interesados y manifiesten su voluntad de divorciarse. El Presidente de la comisión legislativa, Luis Antonio Rangel Méndez. afirmo: “En los hechos esto ya sucede, no se realiza un cambio o modificación trascendental, simplemente estamos adecuando la Ley a lo que ya sucede”, Destacó que con esta aprobación lo que sigue es legislar a favor de los hijos producto de una unión para que, en caso de divorcio, se les proteja y se de cumplimiento a la responsabilidad de los padres de la pensión alimenticia El divorcio en la Palabra de Dios S. Mateo 5, 32 Pero yo les digo: El que se divorcia de su mujer, excepto en caso de unión ilegal, la expone a cometer adulterio; y el que se casa con una mujer abandonada por su marido, comete adulterio. S. Mateo 19, 3-10 Se acercaron a él algunos fariseos y, para ponerlo a prueba, le dijeron: «¿Es lícito al hombre divorciarse de su mujer por cualquier motivo?» Él respondió: «¿No han leído ustedes que el Creador, desde el principio, los hizo varón y mujer; y que dijo: Por eso, el hombre dejará a su padre y a su madre para unirse a su mujer, y los dos no serán sino una sola carne? De manera que ya no son dos, sino una sola carne. Que el hombre no separe lo que Dios ha unido». Le replicaron: «Entonces, ¿por qué Moisés prescribió entregar una declaración de divorcio cuando uno se separa?» Él les dijo: «Moisés les permitió divorciarse de su mujer, debido a la dureza del corazón de ustedes, pero al principio no era así. Por lo tanto, yo les digo: El que se divorcia de su mujer, a no ser en caso de unión ilegal, y se casa con otra, comete adulterio». Los discípulos le dijeron: «Si esta es la situación del hombre con respecto a su mujer, no conviene casarse». Y él les respondió: «No todos entienden este lenguaje, sino sólo aquellos a quienes se les ha concedido. Según Precisó el diputado Héctor Magaña.esta iniciativa atiende el hecho de que Querétaro es considerada una de las entidades con más procedimientos de divorcio iniciados anualmente a nivel nacional, lo que, dijo, representa costos emocionales, sicológicos, físicos y económicos. El diputado Carlos Lázaro Sánchez Tapia, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), precisó que su fracción partidista presentó esta iniciativa desde noviembre de 2015, y que contó con el asesoramiento del Tribunal Superior de Justicia, que hizo conocer las necesidades más apremiantes en la materia. El divorcio en la Exhortación Amoris Laetitia 19. ...Una realidad amarga... marca todas las Sagradas Escrituras. Es la presencia del dolor, del mal, de la violencia que rompen la vida de la familia y su íntima comunión de vida y de amor. Por algo el discurso de Cristo sobre el matrimonio (cf. Mt 19,3-9) está inserto dentro de una disputa sobre el divorcio. La Palabra de Dios es testimonio constante de esta dimensión oscura que se abre ya en los inicios cuando, con el pecado, la relación de amor y de pureza entre el varón y la mujer se transforma en un dominio: «Tendrás ansia de tu marido, y él te dominará» (Gn 3,16). 41. En este contexto, «los cónyuges se sienten a menudo inseguros, indecisos y les cuesta encontrar los modos para crecer. Son muchos los que suelen quedarse en los estadios primarios de la vida emocional y sexual. La crisis de los esposos desestabiliza la familia yy,, a través de las separaciones y los divorcios, puede llegar a tener serias consecuencias para los adultos, los hijos y la sociedad, debilitando al individuo y los vínculos sociales»[Relatio synodi 2014, 10]. Las crisis matrimoniales frecuentemente «se afrontan de un modo superficial y sin la valentía de la paciencia, del diálogo sincero, del perdón recíproco, de la reconciliación y también del sacrificio. Los fracasos dan origen a nuevas relaciones, nuevas parejas, nuevas uniones y nuevos matrimonios, creando situaciones familiares complejas y problemáticas para la opción cristiana»[III Asamblea General Extraordinaria del Sínodo de los Obispos, Mensaje (18 octubre 2014)]. 78. «La mirada de Cristo, cuya luz alumbra a todo hombre (cf. Jn 1,9; Gaudium et spes, 22) inspira el cuidado pastoral de la Iglesia hacia los fieles que simplemente conviven, quienes han contraído matrimonio sólo civil o los divorciados vueltos a casar casar.. Con el enfoque de la pedagogía divina, la Iglesia mira con amor a quienes participan en su vida de modo imperfecto: pide para ellos la gracia de la conversión; les infunde valor para hacer el bien, para hacerse cargo con amor el uno del otro y para estar al servicio de la comunidad en la que viven y trabajan [...] 242. Los Padres indicaron que «un discernimiento particular es indispensable para acompañar pastoralmente a los separados, los divorciados, los abandonados. Hay que acoger y valorar especialmente el dolor de Página 8 quienes han sufrido injustamente la separación, el divorcio o el abandono, o bien, se han visto obligados a romper la convivencia por los maltratos del cónyuge. El perdón por la injusticia sufrida no es fácil, pero es un camino que la gracia hace posible. De aquí la necesidad de una pastoral de la reconciliación y de la mediación, a través de centros de escucha especializados que habría que establecer en las diócesis»[Relatio synodi 2014, 47]. Al mismo tiempo, «hay que alentar a las personas divorciadas que no se han vuelto a casar —que a menudo son testigos de la fidelidad matrimonial— a encontrar en la Eucaristía el alimento que las sostenga en su estado. 243. A las personas divorciadas que viven en nueva unión, es importante hacerles sentir que son parte de la Iglesia... 245. ...A los padres separados les ruego: «Jamás, jamás, jamás tomar el hijo como rehén. Os habéis separado por muchas dificultades y motivos, la vida os ha dado esta prueba, pero que no sean los hijos quienes carguen el peso de esta separación, que no sean usados como rehenes contra el otro cónyuge. Que crezcan escuchando que la mamá habla bien del papá, aunque no estén juntos, y que el papá habla bien de la mamá»[ Catequesis (20 mayo 2015)]. Es una irresponsabilidad dañar la imagen del padre o de la madre con el objeto de acaparar el afecto del hijo, para vengarse o para defenderse, porque eso afectará a la vida interior de ese niño y provocará heridas difíciles de sanar. Nadie puede ser condenado para siempre, porque esa no es la 297. ...Nadie lógica del Evangelio. No me refiero sólo a los divorciados en nueva unión sino a todos, en cualquier situación en que se encuentren. Obviamente, si alguien ostenta un pecado objetivo como si fuese parte del ideal cristiano, o quiere imponer algo diferente a lo que enseña la Iglesia, no puede pretender dar catequesis o predicar, y en ese sentido hay algo que lo separa de la comunidad (cf. Mt 18,17). Necesita volver a escuchar el anuncio del Evangelio y la invitación a la conversión. Pero aun para él puede haber alguna manera de participar en la vida de la comunidad, sea en tareas sociales, en reuniones de oración o de la manera que sugiera su propia iniciativa, junto con el discernimiento del pastor...