TÉCNICAS PARA LA INTERPRETACIÓN DE LOS TEXTOS LITERARIOS. INTRODUCCIÓN: EL COMENTARIO DE TEXTOS LITERARIOS. El comentario de textos es el mejor instrumento para el conocimiento del texto, de su forma y de su contenido. Lógicamente, el análisis de los textos literarios también se puede y se debe realizar recurriendo a esta técnica: el texto literario-como cualquier otro-encierra un mensaje en su interior que debe ser descodificado por el lector atendiendo especialmente a las peculiaridades de la lengua literaria como lenguaje artístico que es -y, en consecuencia, diferente al lenguaje usual- sin olvidar, lógicamente, los aspectos lingüísticos que lo envuelven. Al igual que ocurre en el comentario lingüístico de textos, podemos afirmar que todo texto literario posee una forma y un contenido propios que configuran su estructura. Forma y contenido son dos aspectos inseparables en el texto y se deben tener muy en cuenta a la hora de realizar el análisis literario pues están íntimamente relacionados, de manera que el uno no existe sin el otro: la forma determina el contenido y viceversa. Nunca se podrá realizar la comprensión perfecta de un texto literario sin atender por igual a ambos aspectos. La adecuación entre forma y contenido depende, por una parte, de la intención del autor y, por otra, de las características del mensaje literario. Así pues, el equilibrio formal y significativo de un texto literario depende de la mayor o menor adecuación entre su forma y su contenido; es competencia del lector descubrir dicha adecuación. Se trata, por tanto, de analizar los aspectos lingüísticos (formales y de contenido) y los aspectos puramente literarios del texto (métrica, recursos estilísticos), integrándolos, es decir, valorándolos de la misma manera y al mismo tiempo puesto que todos ellos conforman el propio texto. No se puede, pues, separar lo lingüístico de lo literario porque los aspectos lingüísticos sirven de soporte a los aspectos literarios y estos, a su vez, influyen notablemente en aquellos por ser el lenguaje literario, como hemos dicho anteriormente, un lenguaje “especial”, una desviación del lenguaje usual con intención estética. Finalmente, y ,a modo de conclusión, podemos decir que el comentario literario, al igual que el lingüístico, debe atender por igual todos los planos de la lengua (fónico, morfosintáctico y semántico) pues de ello depende que se obtenga una visión global e integradora del texto. CARACTERÍSTICAS DEL LENGUAJE LITERARIO: La característica fundamental del lenguaje literario es su gran expresividad, es decir, su capacidad para expresar mensajes artísticos cuyo principal componente es la belleza y su finalidad principal es producir placer estético para disfrute del lector. Dicho objetivo se consigue con la combinación de recursos lingüísticos y literarios, propios de la lengua literaria, que aportan al texto belleza y expresividad tanto en su forma como en su contenido. El placer estético literario es el placer intelectual que produce el texto literario en la mente del lector cuando éste lee y comprende el texto, asimilando el mensaje que contiene. La consecución del placer estético está encaminada, por tanto, al propio disfrute de la obra literaria. A lo largo de la Historia de la Literatura, el placer estético ha estado relacionado siempre con el gusto literario, que ha variado según las épocas históricas. Por ello, el lenguaje Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 1 literario, del mismo modo, ha sufrido distintas variaciones a lo largo del tiempo en un proceso constante de adaptación a los gustos artísticos y sociales, como veremos más adelante. Como se deduce, la lengua literaria es diferente de la lengua coloquial porque posee recursos propios que la hacen diferente pues su finalidad no es solamente la comunicación sino también la búsqueda de belleza y expresividad. Debe entenderse que el material lingüístico es siempre el mismo, la lengua española, sólo que manipulado, en este caso, por el autor literario. METODOLOGÍA PARA EL ANÁLISIS DE TEXTOS LITERARIOS DIVERSOS ENFOQUES PARA EL COMENTARIO DE TEXTOS LITERARIOS. Existen muchos métodos, posturas o planteamientos para el comentario de textos literarios aunque casi todos coinciden en los aspectos más importantes, variando el orden de los factores o etapas a seguir, incluyendo o sustituyendo etapas, etc. Los más adecuados, a nuestro entender, son los siguientes. DÍEZ BORQUE, J. M1. Presenta un método muy completo, casi perfecto, un método clásico que podríamos esquematizar así: ETAPA PREVIA: COMPRENSIÓN DEL TEXTO. ETAPA EXTERNA: APLICACIÓN DE CONOCIMIENTOS PREVIOS: -Situación del texto en su marco y caracterización global. -Género literario y forma de expresión. ETAPA DE ANÁLISIS DEL CONTENIDO. -El autor en el texto: actitud-postura-punto de vista-disposición-implicación. -Argumento. Asunto. Tono. -Estructura del contenido. -Tema e idea central. ETAPA DE ANÁLISIS DE LA FORMA. -Plano fónico-fonológico-prosodemático. -Plano morfosintáctico. -Plano semántico. EL TEXTO EN CUANTO A COMUNICACIÓN LITERARIA EN SOCIEDAD. CONCLUSIÓN Y CRÍTICA PERSONAL 1 DÍEZ BORQUE, J. M. Comentario de textos literarios. Método y práctica. Madrid, Playor, 1984 (11ª ed.) Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 2 NAVARRO DURÁN, Rosa2, en una línea más actual propone la siguiente guía para el comentario: 1)VERSIFICACIÓN. 2) ESTRUCTURA INTERNA. 3)TEMA. 4)RECURSOS ESTILÍSTICOS. 5) SÍNTESIS FINAL. INTEGRACIÓN DE LOS MÉTODOS ANTERIORES Como podemos observar, los métodos anteriores coinciden en tratar los mismos aspectos: localización, análisis de la forma, análisis del contenido y juicio crítico. Por ello, un modelo válido de esquema para el comentario de textos literarios puede ser el siguiente: 1ª) LOCALIZACIÓN Contexto histórico-social y cultural Autor Género literario. 2ª) ANÁLISIS DE LA FORMA Análisis fónico, fonológico y prosodemático. Análisis morfosintáctico. Análisis léxico-semántico. 3ª) ANÁLISIS DEL CONTENIDO Tema. Argumento. Estructura del contenido. Forma de expresión textual. Funciones del lenguaje presentes en el texto. Implicaciones socioculturales 4ª)JUICIO CRÍTICO 2 NAVARRO DURÁN, Rosa. Comentar textos literarios. Madrid, Alhambra Longman, 1995, colecc. “Nueva Breda”. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 3 A continuación, exponemos pormenorizadamente el contenido y los aspectos que se deben tratar en las diferentes etapas y apartados anteriormente referidos: LOCALIZACIÓN • Género literario: poesía (lírica, narrativa), narrativa (novela, cuento, leyenda...), teatro (tragedia, comedia, drama). Se deben señalar las características del género literario al que pertenece el texto y que estén presentes en él. Subgénero literario al que pertenece el texto. Estudio de la forma externa del texto: prosa, verso, prosa poética... Características formales3. • Contexto histórico-social y cultural. Encuadre del texto en su época histórica y movimiento literario: 1. Primer acercamiento al tema y al mensaje del texto (alusión a la época histórica a la que pudiera pertenecer en función de lo que dice y de cómo lo dice). 2. Establecimiento de hipótesis sobre la época histórica y movimiento literario en los que se puede encuadrar el texto en función del lenguaje, el estilo y el tema que presenta, aludiendo especialmente a los aspectos socioculturales que pudiera contener. 3. Relación del texto con su época histórica y su movimiento literario. 4. Planteamiento de las primeras conclusiones para la datación del texto, basadas fundamentalmente en aspectos lingüísticos (grafías, léxico, sintaxis), sin olvidar otros factores no estrictamente lingüísticos tales como: tema, tópicos literarios, gusto estético... • Autor: especulación sobre la posible autoría del texto a partir de las conclusiones extraídas en el apartado anterior: 1. Postura del autor: -Objetiva: fidelidad hacia lo exterior (función representativa). Normalmente se da en la actitud externanarrativa. -Subjetiva: valoración sentimental desde la intimidad (función expresiva). Normalmente se da en la actitud interna intimista (lírica). -Postura racional e intelectual/postura afectiva. -Postura lógica, realista/imaginativa, fantástica. -Postura irónica y crítica. Mayor grado de madurez literaria. 2. Punto de vista: -Tercera persona limitada: el autor se refiere a todos los personajes en tercera persona. No tiene un conocimiento omnisciente sino limitado. Ve y presenta los hechos por medio de uno de los personajes. 3 Vid. Apéndice 1: Géneros literarios. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 4 -Tercera persona omnisciente (narrador omnisciente):el autor actúa simulando que tiene un conocimiento completo de todo y describe todo lo que los personajes ven, oyen, sienten... -Tercera persona observadora. El autor narra como si fuera testigo; no puede adentrarse en el interior de los personajes. -Primera persona central. Relato autobiográfico. Pueden coincidir autor y personaje o no. -Primera persona periférica. Un personaje secundario narra en primera persona la historia del protagonista que él conoce por estar envuelto en ella. -Primera persona testigo. Un testigo de la acción que no participa en ella narra en primera persona los acontecimientos. 3. Tono: pesimista, optimista, sombrío, alegre, sentimental... 4. Implicación del autor en el texto: obsesiones, filias, fobias, palabras clave, etc. Búsqueda e identificación de posibles características estilísticas personales del autor: asimilaciones gongorinas (-ello, cogello), arcaísmos garcilasianos (do, aqueste...), palabras obsesivas lorquinas (verde), simbolismos machadianos (la fuente) , etc. 5. Situación del texto dentro del conjunto de su obra. ANÁLISIS DE LA FORMA Tiene la finalidad de analizar la forma externa del texto, los elementos que lo forman y las relaciones existentes entre ellos, es decir, el descubrimiento de su estructura lingüística. Se debe realizar atendiendo también al contenido, es decir, integrando forma y contenido. Consta de tres subapartados: a) Análisis fónico, fonológico y prosodemático: 1. Figuras retóricas basadas en el sonido: La repetición de unos determinados fonemas marca ritmo determinado que está relacionado con el contenido del texto. • Aliteración: consiste en la repetición constante de un mismo sonido vocálico o consonántico con el fin de llamar la atención del lector: En el silencio sólo se escuchaba un suave susurro de abejas que sonaba (Garcilaso de la Vega). • Onomatopeya: consiste en la imitación de un sonido natural o artificial con fonemas vocálicos y consonánticos: el tic-tac del reloj. • Paronomasia: consiste en la confrontación de palabras en el texto que se pronuncian de manera muy parecida pero que tienen un significado muy diferente. También afecta al plano semántico del texto debido al contraste de significados que produce: Aquí se vive porque se bebe (Quevedo). Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 5 • Similicadencia: consiste en la repetición de varios verbos en el mismo tiempo y persona o varios sustantivos y adjetivos en el mismo género y número: goza cuello, cabello, labio y frente (Góngora). 2. Análisis métrico: 2.1 Medida de los versos: sinalefa, sinéresis, diéresis, hiato, acento final de verso; versos simples, versos compuestos... Estudiar preferentemente: heptasílabo, octosílabo, endecasílabo y verso libre.4 -Versos cortos: popularismo (octosílabo, heptasílabo). Se considera al octosílabo como el verso popular por excelencia. -Versos largos: cultismo (endecasílabo, dodecasílabo, alejandrino). Según las épocas y movimientos cambia el gusto por unos versos y otros: -Edad Media: verso épico, compuesto (Mester de Juglaría), alejandrino, también compuesto (Mester de Clerecía), octosílabo (Romancero y lírica tradicional). En general, el octosílabo se utilizó para la lírica popular y los versos compuestos para la lírica culta, salvo el verso épico (popular). -Siglos de Oro: introducción de metros italianos (endecasílabo) cultos. Se sigue utilizando el octosílabo en la poesía popular. -Neoclasicismo: uso de metros cultos renacentistas. -Romanticismo: polimetría (uso indistinto de versos cortos y largos según el tema y la intención: verso largo para los temas solemnes y corto para expresar la pasión). -Modernismo: proliferación del verso largo culto (endecasílabo, dodecasílabo, hexasílabo), interés por los versos clásicos como el hexámetro y recuperación de metros medievales: dodecasílabo o el alejandrino. -Vanguardismo: revolución métrica (verso libre, caligramas, verso suelto, etc.), en general, gusto por la métrica culta. -Generación del 27: la métrica culta y de influencia vanguardista coexiste con la popular (Lorca, Alberti, G. Diego). -Lírica posterior a 1939 (Generación realista de postguerra, Novísimos y poesía actual): generalización del versolibrismo. 2.2 Ritmo (acento). -Acento estrófico (ritmo yámbico/ritmo trocaico). -Posición de los acentos del verso: (acento rítmico, extrarrítmico y antirrítmico) 4 Vid. QUILIS. A. Métrica española. Barcelona, Ariel, 1996 (9ª ed.) y HERRERO PRADO, J. L. Métrica española. Teoría y práctica. Madrid, Ediciones del Orto, 1996. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 6 2.3 Rima: -Según el timbre: total y parcial (asonante y consonante). La asonante es, generalmente, popular mientras que la consonante es la típica de la métrica culta. -Según la disposición: continua, gemela, abrazada, encadenada. 2.4 Encabalgamiento: suave y abrupto, preferentemente. Propio de versos largos (endecasílabo). Utilizado a partir del Renacimiento y fundamentalmente en el Barroco, en donde adquiere un papel preponderante (Culteranismo y Conceptismo). 2.5 Pausas: estrófica, versal, interna, cesura. La abundancia de pausas internas favorece la lentitud del texto. 2.6 Tono: -ascendente (↑): implica sentimiento, pasión, desequilibrio, emoción. -descendente (↓): implica equilibrio, serenidad, sencillez. -de suspensión desequilibrio. (→): implica complicación del contenido, ruptura, 2.7 Clase de estrofa: poema monoestrófico (una sola estrofa) o poliestrófico (varias estrofas). Las estrofas más comunes son: pareado (2: aa, AA), terceto (3: ABA), cuarteto (4 ABBA), serventesio (4:ABAB), cuarteta (4: abba), redondilla (4: abab), lira (5: 7a, 11B, 7a, 7a, 11B), octava real (8: ABABABCC); series de versos: silva, romance, poema de versos sueltos, poema de versos libres. Según las épocas, se han utilizado unas u otras estrofas: -Edad Media: series de versos épicos (M. De Juglaría), cuaderna vía (M. De Clerecía), romance, canción tradicional, canción provenzal, copla de arte menor, copla de arte mayor, copla de pie quebrado, villancico... -Siglos de Oro: introducción de estrofas italianas cultas como el soneto, la silva, la octava real, la canción petrarquista, el cuarteto, el terceto, el terceto encadenado, la estancia...Prolifera el uso del romance (Romancero Nuevo) -Neoclasicismo: -Romanticismo: -Modernismo: -Vanguardismo: introducción de las series de versos libres. Caligramas. -Generación del 27: series de versos libres y estrofas populares tradicionales. -Lírica posterior a 1939: generalización de las series de versos libres aunque aún se siguen utilizando estrofas clásicas como el romance o el soneto. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 7 b)Análisis morfosintáctico Morfología • Sustantivo. Si el texto presenta muchos sustantivos concretos ofrecerá mucha información y realismo pero si, por el contrario, presenta pocos sustantivos y éstos son abstractos su contenido será abstracto o idealista: Concretos--------------realismo Abstractos-----------idealismo La abundancia de sustantivos cultos o populares también aporta datos sobre la autoría y el movimiento literario al que pertenece el texto: Sustantivo culto: Renacimiento, Barroco, Neoclasicismo, Romanticismo, Modernismo, Vanguardismo y Generación del 27 y Realismo experimental de los 60 y 70. Sustantivo popular: Barroco (vena popularista de autores como Góngora, Quevedo y Lope de Vega), Realismo (tanto el tradicionalista como el liberal),Generación del 98 (palabras tradicionales y terruñeras), Generación realista de postguerra. El diminutuvo: connota afectividad. • Adjetivo. Si el texto presenta muchos adjetivos embellecedores será muy expresivo, es decir, expresará muchas cualidades, sensaciones, colores o sonidos y será, por tanto, más bello y atrayente. También tenemos que tener muy en cuenta la clase de adjetivos (concretos o abstractos) para delimitar el grado de concreción o abstracción del texto. Normalmente, aparecerán muchos adjetivos en un texto si éste, a su vez, contiene muchos sustantivos y, del mismo modo, los adjetivos serán concretos o abstractos según lo sea el sustantivo al que acompañan. El empleo abundante de adjetivos embellecedores tiene lugar en la literatura española a partir del siglo XVI, debido a la influencia petrarquista italiana: el Renacimiento y el Barroco son los movimientos literarios de mayor esplendor en el uso del adjetivo. Posteriormente, durante el Romanticismo y el Modernismo y la Generación del 27 se revitalizó la adjetivación profusa. Del mismo modo, conviene también atender al carácter culto o popular del adjetivo: -Adjetivos cultos: Renacimiento, Barroco, Neoclasicismo, Romanticismo, Modernismo, Vanguardismo, Generación del 27. -Adjetivos populares: Barroco (vena popularista de algunos autores como Góngora, Quevedo y fundamentalmente Lope de Vega), Generación del 98, Generación de postguerra. • Verbo. La abundancia de verbos en un texto connota sensaciones de movimiento, rapidez y agilidad. Si los verbos son, además, de movimiento aumentarán dichas sensaciones. En general, la abundancia de verbos en un texto implica realismo. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 8 Del mismo modo, el verbo será la palabra más abundante en un texto narrativo o expositivo, y más aún si se utiliza mucho la tercera persona. En el discurso dramático es imprescindible por las necesidades del diálogo (forma de expresión dialogada). La presencia del subjuntivo connota subjetividad, intimismo, mientras que la presencia del indicativo connota objetividad o realismo. El imperativo es el modo dominante en la función apelativa y, por tanto, en los textos dialogados. En cuanto a los tiempos, el pasado es el tiempo propio de la narración, el presente narrativo implica generalmente realismo, el futuro expresa incertidumbre y el condicional posibilidad o duda. En cuanto a las personas, la primera persona implica realismo, autobiografía y personalización (función expresiva en todos los géneros aunque fundamentalmente en la lírica), la segunda apelación (función apelativa) y la tercera objetivad (función representativa). La primera y la tercera personas son típicas de la narración pero téngase en cuenta que la segunda persona narrativa empieza a utilizarse a partir de los años 60 como una más de las nuevas técnicas narrativas del Realismo experimental, que supuso el nacimiento de la novela moderna. Las perífrasis verbales indican desarrollo de la acción: comienzo, duración y finalidad. La abundancia de perífrasis indicaría una implicación especial por parte del autor en la acción del texto. • Determinantes. La abundancia de determinantes o actualizadores indica que el texto está muy bien estructurado y que expresa ideas claras, concretas. Según sus clases: -Artículo: concreción. -Posesivo: personalización, realismo. -Demostrativo: localización. -Indefinido: indefinición, abstracción. -Numeral: concreción, información. • Pronombres: La abundancia de pronombres personales de primera persona en un texto indica que está muy personalizado, es decir, que el autor o protagonista se manifiesta constantemente en el texto (función expresiva) y, por tanto, también indica subjetividad. El pronombre personal de segunda persona expresa relación con el tú (función apelativa) y el de tercera indica objetividad (función representativa). Los pronombres relativos implican una mayor complicación sintáctica y de contenido • Nexos. La abundancia de nexos: adverbios, preposiciones y conjunciones indica claramente que el texto está muy bien articulado, es decir, muy bien construido y que pertenece a un nivel medio-alto de lengua (normalmente ocurre en los textos literarios). -Nexos típicos de textos realistas: y y que y, en general, los nexos coordinantes. -Nexos propios de textos idealistas: porque, puesto que, de modo que, a fin de que, aunque, ya que, pues... y, en general, los nexos subordinantes adverbiales. En general, los nexos coordinantes implican sencillez sintáctica, rapidez, concreción y realismo, mientras que los subordinantes implican todo lo contrario: complicación sintáctica, lentitud, abstracción, idealismo. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 9 • Interjección. Expresa emociones y sentimientos. Imprime afectividad, emotividad y expresividad al texto y refuerza la participación del sujeto. Posee un mínimo contenido conceptual y una máxima carga afectiva. Observar si aparecen otras clases de palabras con valor de interjección. Sintaxis • Delimitación de las estructuras oracionales dominantes. Oraciones simples/compuestas: -La sintaxis simple o compuesta yuxtapuesta supone la máxima sencillez formal. -La sintaxis coordinada supone un mayor grado de complicación formal y conceptual aunque no demasiado alejado del carácter yuxtapuesto: rapidez y naturalidad. Propia de textos realistas, concretos. -La sintaxis subordinada connota el mayor grado de complicación formal y conceptual posible. Un texto en el que domine la sintaxis subordinada será más difícil de comprender que los anteriores. Es propia de los textos jurídicos, administrativos, científicos y muchos literarios de contenido fundamentalmente abstracto o idealista. • Simetrías, paralelismos. Cuando más inhabitual sea la estructura oracional, mayor artificio y elaboración supone. • Valores coloquiales de la estructura sintáctica: oración suspensiva (incompleta desde el punto de vista de la sintaxis), oración sincopada (le faltan algunos elementos que pueden suplirse), simplicidad en el encadenamiento de oraciones y comodines sintácticos. • Clases de oraciones y consecuencias derivadas transitiva/intransitiva, reflexiva/recíproca, impersonales). • La oración desde el punto de vista sociolingüístico y los matices que expresa: afectividad, duda, subjetivismo (exclamación, dubitativa); apelativa (optativas); interrogación (directa, indirecta, retórica); representativa, simple enunciación (enunciativas afirmativas y negativas). • Estructuración en párrafos: estructuración de ideas principales y secundarias. de ello (activa/pasiva, Figuras retóricas más usuales: • Epíteto: es todo aquel adjetivo embellecedor dotado de mucha expresividad y que califica poderosamente al sustantivo: lucientes perlas, purpúreas rosas... • Pleonasmo: consiste en la aportación de palabras al texto que no son necesarias para la comprensión de la idea pero que sí son muy expresivas: lo vi con mis propios ojos. • Sinonimia: consiste en la acumulación de palabras sinónimas que inciden sobre un concepto o una idea, aportando varias precisiones en el significado: noche loca, imaginativa, quimerista... (Lope de Vega). • Derivación: consiste en la sucesión de palabras derivadas de un sustantivo o de un adjetivo y de varios tiempos, modos y personas de un mismo verbo: Y el no ser, por amar, será mi gloria (Quevedo). • Enumeración: consiste en la sucesión de series de adjetivos, sustantivos, verbos y adverbios: En tierra, en humo, en polvo, en nada (Góngora). Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 10 • Asíndeton: consiste en la supresión de conjunciones para imprimir rapidez al texto: la sombra, el miedo, el mal se te atribuya (Lope de Vega). • Polisíndeton: es el fenómeno contrario, es decir, la repetición de conjunciones que no son necesarias con el fin de imprimir lentitud al texto: y llegó, y habló y se marchó... • Elipsis: consiste en la supresión de palabras sin que se dificulte la comprensión de las ideas para producir concentración de significado y efectos sugestivos: Gloria llamaba a la pena, / a la cárcel libertad, / miel dulce al amargo acíbar (Góngora). • Anáfora: consiste en la repetición de una o varias palabras al comienzo de varios versos en la poesía o de varias oraciones en la prosa: ¿Qué tengo yo que mi amistad procuras?/¿Qué interés se te sigue, Jesús mío? (Lope de Vega). • Epífora: consiste en la repetición de una o varias palabras al final de varios versos u oraciones: por el helecho es mi alma/al iris verde es mi alma/al viento lento es mi alma (J. R. Jiménez). • Paralelismo: consiste en la repetición de una misma estructura sintáctica en dos o más versos: en el ejemplo anterior también podemos ver un paralelismo. • Reduplicación: consiste en la repetición consecutiva de una palabra o un sintagma: verde que te quiero verde (Federico García Lorca). • Equívoco: consiste en el uso de palabras con doble sentido para conseguir efectos irónicos o cómicos: vendado que me has vendido (Góngora). • Hipérbaton: Consiste en la ruptura del orden lógico de la oración para realzar algún concepto o idea del mensaje. Es típico de la poesía culta: Cómo de entre mis manos te resbalas (Quevedo). • Interrogación retórica. Es una pregunta que no exige respuesta: ¿Qué tengo yo que mi amistad procuras? c) Análisis léxico-semántico: • Sinonimia, polisemia, antonimia. • Estudio de los campos semánticos presentes en el texto. • Cultismos, arcaísmos, extranjerismos, vulgarismos, expresiones coloquiales, diminutivos. • Figuras literarias que afectan al plano semántico (Tropos): Se basan en la asociación de ideas y en la concentración de significados: Sinécdoque: es un cambio semántico basado en la relación de totalidad/parcialidad y consiste en la confusión o identificación de ambos conceptos. Existen varios tipos: La parte por el todo: cien cabezas de ganado/ cien animales El género por la especie: ganarse el pan/ganarse el alimento. El singular por el plural: el hombre es mortal/los hombres son mortales. La materia por el objeto: lo atravesó con su acero/ ...con su espada. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 11 Metonimia: es un cambio semántico basado en la confusión de dos conceptos entre los que hay relaciones de causa-efecto, de continente-contenido, el lugar por el producto, lo físico por lo moral, el instrumento por la persona, etc: La causa por el efecto: tener canas/ ser viejo El continente por el contenido: tomar una copa/el contenido de una copa. El lugar por el producto: el jerez/ el vino de Jerez. Lo físico por lo moral: no tener corazón/ ser cruel. El instrumento por la persona: los tres espadas/ los tres toreros. Símil: consiste en la comparación entre dos conceptos utilizando siempre el término comparativo “como”: sus ojos brillan como diamantes. Imagen tradicional: consiste en la identificación total de dos conceptos o términos (el término real y el imaginario): sus ojos (T. Real) son diamantes (T. Imaginario). Se produce, por tanto, un desplazamiento significativo del término imaginario al real. Dicho desplazamiento tiene base objetiva: el brillo de los ojos puede ser parecido al de los diamantes. Metáfora: es una imagen en la que no aparece el término real porque el término imaginario asume ya todo el significado. Es más expresiva que la imagen: los diamantes de su cara (T. Imaginario). La metáfora es el recurso semántico más significativo debido a las relaciones que establece entre los objetos y los significados reales o imaginarios, identificándolos. Es un recurso puramente connotativo pues afecta al plano del significado imaginario que se puede aplicar a cualquier término con fines expresivos. Hay varias clases de metáforas: Sensoriales: afectan a los sentidos (visuales, auditivas...) Oníricas: referentes al sueño, al ensueño y al subconsciente. Abstractas: aluden a lo metafísico, alegórico y simbólico. La metáfora responde al esquema B (Término imaginario) en lugar de A (Término real): su luna de pergamino Preciosa tocando viene (G. Lorca), el plano real, el pandero, está omitido. Recordemos también que muchos estudiosos de la literatura denominan metáfora impura a la imagen puesto que toda metáfora es una imagen desprovista de término real, pero no toda imagen es metáfora porque se puede crear una imagen haciendo una descripción muy viva de un objeto sin usar lenguaje figurado y sin establecer comparación alguna. Sinestesia: es una metáfora que consiste en la mezcla de sensaciones: el suave olor de este prado (tacto y olfato). Imagen visionaria: es una imagen en la que no existe ninguna relación objetiva entre el término real y el imaginario sino que procede directamente de la subjetividad del autor. Es propia de la poesía del siglo XX: enhiesto surtidor de sombra y sueño (G. Diego), la imagen se refiere aquí al ciprés. Símbolo: Es una palabra que expresa la asociación de ideas entre un concepto real y su significado imaginario. Dicha asociación de ideas es tradicional, el hombre la ha hecho desde siempre: la bandera simboliza la Patria, la rosa simboliza la vida, el ciprés la muerte... No obstante, en la poesía actual es normal que el poeta tenga sus propios símbolos subjetivos y obsesivos (el color “verde” en Lorca). Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 12 Alegoría: es una cadena de símbolos referidos a un concepto o a una idea normalmente moral o religiosa: Dios es nuestro pastor, nosotros somos sus ovejas y la Iglesia es el redil. ANÁLISIS DEL CONTENIDO Se debe hacer en relación con los resultados obtenidos en el análisis de la forma. No quiere decir esto que se deba hacer “en función” del análisis de la forma, sino “en unión” con él, integrando ambos análisis. Su objetivo es el estudio de la estructura interna del texto, es decir, el análisis del significado y de la intención que el autor ha dado al texto, así como el reconocimiento de la forma de expresión utilizada para su creación. 1. Tema: idea central del texto. Descripción con pocas palabras. Relación con tópicos literarios (“carpe diem”, “beatus ille”, etc.) 2. Argumento: desarrollo del tema. Resumen del texto sin parafrasear. 3. Estructura del contenido: partes en las que se divide el texto según el contenido. 4. Forma de expresión textual: forma que tiene el texto de presentarse ante el lector: Narrativa: frase corta y yuxtaposición; abundancia de formas verbales (generalmente en pasado), nexos y nombres propios; agilidad, rapidez narrativa. Propia de los textos literarios épicos. Descriptiva: abundancia de adjetivos calificativos y determinantes; utilización de los verbos atributivos y frecuencia de enumeraciones o cadenas de adjetivos referidos a un solo sustantivo. Propia de los textos literarios líricos, épicos y de algunos periodísticos. Dialogada: abundancia de verbos de pensamiento o juicio, interrogaciones, exclamaciones y adverbios de afirmación y negación; frases cortas en las preguntas y respuestas; abundancia de anacolutos, cortes en la comunicación, vulgarismos y expresiones coloquiales. Propia de los textos orales, de los literarios dramáticos y de muchos narrativos en los que se intenta plasmar una conversación. 5. Funciones del lenguaje: función del lenguaje dominante en el texto: Expresiva: función del emisor. Expresión de los sentimientos personales. Propia de los textos líricos y dramáticos y de las formas de expresión narrativa y expresiva. Representativa: función del contexto. Expresión de la realidad objetiva. Propia de los textos literarios, periodísticos, científicos, humanísticos, jurídicos, administrativos y de las formas de expresión narrativa y expositiva-argumentativa. Apelativa o conativa: función del receptor. Llamada de atención al receptor. Propia de los textos orales y literarios dramáticos y de la forma de expresión dialogada. 6. Implicaciones socio-culturales: -Relación texto-sociedad: influencias mutuas. -Relación autor-texto-sociedad: influencias recíprocas. Gusto estético. Implicación del texto y del autor en la sociedad. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 13 JUICIO CRÍTICO Una vez concluido el análisis del texto, es necesario reflexionar sobre él y extraer conclusiones acerca de su forma, contenido e intención. Dichas conclusiones serán estrictamente personales y surgirán directamente del espíritu crítico del comentarista. No obstante, se deben tratar los siguientes aspectos, integrándolos, con la única finalidad de elaborar un juicio estrictamente personal sobre ellos: • Tema: aspectos sociológicos, históricos, pervivencia en el tiempo. • Implicaciones socio-culturales: relación autor-texto-sociedad. • Mensaje: valoración del mensaje por parte del comentarista; opinión personal, relacionándolo con su propio pensamiento y con la época actual. • Intencionalidad. APÉNDICE 1: GÉNEROS LITERARIOS. GÉNEROS Y SUBGÉNEROS LITERARIOS: LÍRICA, ÉPICA, DRAMÁTICA, CUENTO, ENSAYO, ETC. CARACTERÍSTICAS Y ESTRUCTURAS FUNDAMENTALES Las obras literarias suelen dividirse en tres grandes grupos, según sus características y su finalidad: obras líricas o poéticas, épicas o narrativas y dramáticas o teatrales. El concepto de género literario sería pues, la visión o la concepción del arte literario que presenta la propia obra literaria, aunque, históricamente esta concepción ha sufrido diferentes variaciones en función del propio devenir histórico: unos géneros desaparecieron, nacieron otros nuevos, y los existentes varían constantemente. La Lírica Por medio de la lírica, el autor expresa directamente sus sentimientos y emociones. Domina en ella la función expresiva del lenguaje. Los textos líricos se construyen con arreglo a una métrica determinada y poseen un ritmo poético que les viene dado por la repetición de los versos, las estrofas, la rima, el tono, el acento y el encabalgamiento. También existen textos líricos en prosa, es la llamada “prosa poética”. Tradicionalmente se han distinguido tres géneros líricos fundamentales: la poesía lírica, que expresa los sentimientos del autor; la poesía épica, que expresa hazañas bélicas o guerreras (épica mediaval) y la poesía dramática, que expresa conflictos dramáticos en la obras teatrales en verso (comedia Barroca y drama romántico). Los géneros líricos son, en esencia, los siguientes: Géneros líricos mayores: • El himno: es una composición solemne destinada al canto coral (interviene un coro) o alternado (solista y coro) que expresa sentimientos o ideales religiosos, patrióticos, guerreros, Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 14 políticos, etc. Este género se desarrolló fundamentalmente en la antigua Grecia y ejemplos destacables son los Himnos atribuidos a Homero. • La oda: es una composición lírica extensa y grandilocuente que expresa generalmente los sentimientos del poeta en relación a algún tema, acontecimiento o personaje. Se desarrolló fundamentalmente en el Renacimiento y es famosa la Oda a la vida retirada de Fray Luis de León. • La elegía: es un poema lírico extenso que expresa sentimientos de dolor por la desaparición de alguna persona o por la pérdida de algo. Se cultivó fundamentalmente durante el Renacimiento pero también se han escrito odas en las épocas posteriores. Son muy conocidas las elegías A las ruinas de Itálica de Rodrigo Caro y la elegía a Ramón Sitgé de Miguel Hernández. • La Canción amorosa: es una composición también solemne que expresa sentimientos amorosos. De origen trovadoresco, se cultivó durante el Renacimiento y el Barroco. Son famosas las canciones de Petrarca y Quevedo. Géneros líricos menores: • El madrigal: es un poema breve de tema amoroso expresado con delicadeza e ingenio. Destacan los madrigales renacentista de Gutierre de Cetina. • La anacreóntica: es un poema alegre que invita al disfrute de los placeres del vino y del amor. Surgió en la Grecia antigua y también se cultivó durante el Neoclasicismo. • La égloga: es una composición culta y extensa que expresa sentimientos amorosos en un ambiente pastoril y bucólico. Se cultivó fundamentalmente durante el Renacimiento (Garcilaso de la Vega) • La sátira: es un poema corto y punzante cuya finalidad es censurar vicios, defectos y costumbres sociales. Surgió en la antigua Roma y se cultivó también durante la Edad Media (Arcipreste de Hita), el Barroco (Quevedo) y el Neoclasicismo (Moratín). • La epístola: es un poema lírico que aborda temas doctrinales fundamentalmente de carácter filosófico-moral. Surgió en la antigua Roma (Horacio) y se cultivó también en el Barroco (Epístola moral a Fabio). • El epigrama: es una composición breve y punzante de carácter satírico y burlesco que comprende diversos temas: políticos, morales, sociales, personales, etc. Surgió también en la antigua Roma y se cultivó durante el Barroco (Góngora) y el Neoclasicismo (Moratín). La épica Por medio de la épica el autor expresa. con mayor o menor objetividad hechos y circunstancias del mundo real o figurado. En ella domina la función representativa del lenguaje. Los textos épicos o narrativos se construyen con arreglo a un argumento o acción que desarrollan unos personajes en un espacio y en un tiempo concretos. En algunos es frecuente encontrar elementos líricos fundamentalmente en las descripciones (Baroja y Azorín). Están escritos en prosa. Los géneros narrativos son los siguientes: Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 15 Géneros épicos mayores: ♦ La novela: es el género épico más variado y desarrollado actualmente. Expresa todo tipo de acciones y hechos reales o ficticios y en ella intervienen también toda clase de personajes en diversos ambientes y tiempos. Es una composición muy extensa y se suele dividir en capítulos, unidos entre sí por una trama de sucesos y caracteres. Junto a esto, los elementos más importantes de la novela son: la acción o sucesión de hechos, los personajes que son los protagonistas de esos hechos y el narrador, que es el conductor o director de la acción y de los personajes. Surgió en el Siglo XV y se ha desarrollado constantemente hasta nuestros días; es por ello que existen muchos tipos de novela: • Novela de aventuras: en ella domina el interés por la acción, desarrollada por medio de sucesos extraordinarios, acciones peligrosas y emocionantes, en ambientes generalmente insólitos o exóticos. • Novela bizantina: narra viajes en los que se producen aventuras extraordinarias: separaciones y encuentros de personajes, reconocimientos causales, sucesos extraordinarios. Se cultivó durante el Renacimiento: Los trabajos de Persiles y Segismunda de Cervantes. • Novela costumbrista: Describe las formas de vida cotidiana de una sociedad y una época determinada: las costumbres, los modos de vida, los personajes, etc. • Novela histórica: refleja con mayor o menor fidelidad el ambiente social y los acontecimientos históricos de una época determinada. • Novela pastoril: nace en el Renacimiento y, de forma convencional y artificiosa, refleja la vida idealizada e irreal de los pastores en un mundo también idealizado, de sentimientos naturalistas y amorosos. • Novela picaresca: nace y se desarrolla también durante el Renacimiento y el Barroco. Expresa de forma realista las aventuras y desventuras de un antihéroe, el pícaro, que, de forma autobiográfica, cuenta su vida miserable plagada de adversidades en un deseo continuo por salir de la miseria y el hambre. El Lazarillo de Tormes (anónima) inició este exitoso género popular que continuaron magistralmente otros grandes escritores como Quevedo y Mateo Alemán. • Novela realista: expresa con objetividad y afán de crítica la realidad social de la época histórica en que surge. Se cultivó fundamentalmente en la segunda mitad del siglo XIX con mucho éxito: Fortunata y Jacinta (Galdós), La Regenta (Clarín) y tuvo un gran resurgimiento durante la postguerra española (Cela, Carmen Laforet) y los años 60 (Delibes, Goytisolo), merced a las circunstancias históricas del momento. • Novela existencial y psicológica: plantea problemas psicológicos y existenciales y se centra más en la descripción de estados de ánimo que en la acción externa. Surge en el siglo XX y es típica de la literatura de postguerra: La metamorfosis (Kafka), Señas de identidad (Goytisolo). • Novela policíaca: es un producto típico del siglo XX y expresa acciones policiacas y aventuras de todo tipo. Es un género típicamente anglosajón pero en España también se ha desarrollado con éxito: Crónica Sentimental en rojo (Francisco González Ledesma). ♦ La epopeya: es un género narrativo cultivado durante la Antigüedad Griega y Latina e incluso durante la Edad Media en toda Europa, que expresa de forma solemne y grandilocuente las hazañas guerreras e históricas de un pueblo con intención nacionalista y engrandecedora. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 16 Se escribía en verso. El componente legendario y mitológico está muy presente en ella. Cada país tiene su epopeya nacional: La Ilíada y La Odisea (Grecia), La Eneida (Roma), El poema del Mío Cid (España), La chanson de Roland (Francia), El poema de los Nibelungos (Alemania), etc. Géneros épicos menores: ♦ El cuento: es un relato corto de carácter popular, de tradición oral y de asunto ficticio protagonizado por un personaje o personajes también ficticios. Pueden distinguirse tres tipos fundamentales de cuento: el fantástico, en el que domina la imaginación y lo legendario; el anecdótico, que gira en torno a un hecho o dicho significativo o ingenioso y el didáctico o moralizante, del cual se desprende una moraleja útil para el lector. El cuento se ha desarrollado desde los orígenes de la literatura con mucho éxito entre las clases populares, que en un principio se encargaron de transmitirlo oralmente. Existen, pues, cuentos populares (Blancanieves)-la mayoría-y cultos (Cuentos de los hermanos Grimm). ♦ La leyenda: es un género parecido al cuento pues también expresa hechos ficticios, sólo que suele tener una mayor trascendencia social y cultural para la memoria colectiva de la sociedad en la que surge. Lo legendario es al mismo tiempo real e imaginario y nunca se sabe con seguridad cuál de estos dos componentes es el más fuerte en una leyenda. Puede estar escrita en prosa o en verso. Son muy conocidas las Leyendas de Bécquer. ♦ El artículo de costumbres: es una narración breve de costumbres sociales que roza lo periodístico y describe con detalle ambientes y tipos con intención satírica y crítica. El humor está muy presente en este género pues, en muchos casos, intenta desmitificar y parodiar costumbres sociales. Se desarrolló durante el Romanticismo: son muy famosos los Artículos de costumbres de Larra. La dramática El género dramático expresa también acciones pero, a diferencia de la lírica y de la épica, las representa, es decir, hace que aparezcan desarrollándose ante los ojos del público mediante un simulacro realizado por los actores. Por tanto, la obra dramática está concebida y preparada para la representación aunque ha habido excepciones en la Historia de la Literatura española: La Celestina (F. de Rojas). Los textos dramáticos están escritos en prosa o verso y en ellos domina la función apelativa del lenguaje; se basan en el diálogo expresivo mantenido por los personajes. El autor no actúa como narrador sino que se limita a indicar los lugares, situaciones y ambientes por medio de las llamadas “acotaciones” y deja total libertad a sus personajes y al desarrollo de la acción. Debemos tener también muy en cuenta que el teatro no es sólo una creación literaria sino que además es un espectáculo y como tal está concebido para entretener y divertir a toda clase de públicos. La obra teatral tiene también una estructura que la diferencia de las demás creaciones literarias: se divide en actos, o momentos fundamentales de la acción (presentación, nudo y desenlace) y cada acto, a su vez, se divide en escenas, o desarrollo pormenorizado de cada uno de estos momentos. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 17 Géneros dramáticos mayores: • La tragedia: presenta un conflicto entre un héroe y la adversidad o la fatalidad (el destino) ante el cual sucumbe siempre. También se caracteriza por la idealización de ambientes y personajes, el tono solemne y el lenguaje elevado. El desenlace de estas obras es generalmente trágico y recibe el nombre de catástrofe. Este género surgió y se desarrolló en la época clásica Edipo Rey (Sófocles) y volvió a ser cultivado durante el Neoclasicismo Raquel ( V. García de la Huerta). • La comedia: es un juego alegre que busca el regocijo mediante la representación de conflictos imaginarios, situaciones falsas y personajes ridículos. El humor y la ironía son los componente más importantes de este género que, casi siempre, se resuelve con un desenlace feliz. Surgió igualmente en la Grecia clásica como espectáculo propio de las fiestas en honor de Dionisos (dios de los placeres materiales) y se ha desarrollado profundamente desde el Renacimiento hasta nuestros días: Tres sombreros de copa (Miguel Mihura). • El drama: es un género que, como la tragedia, presenta un conflicto doloroso, dramático, pero no lo sitúa en un plano idealista sino en la propia realidad, con personajes reales extraídos de la vida cotidiana-muy diferentes a los grandes héroes trágicos-y con un tono mucho menos solemne. Podríamos decir que el drama es la escenificación de nuestra realidad vital, de las tristezas y alegrías de nuestra vida cotidiana. Contiene, pues, elementos trágicos y cómicos. Surgió durante el Romanticismo y es el género que, junto con la comedia, más se ha cultivado y se cultiva actualmente: Historia de una escalera (Buero Vallejo). La comedia y el drama pueden ser históricos, religiosos, de costumbres, según el tema tratado. Se llaman de tesis cuando defienden una idea filosófica, moral o política. Si el análisis se concentra en las cualidades del espíritu humano, se denomina drama psicológico. Géneros dramáticos menores: • Auto sacramental: es una composición dramática de corta extensión (un acto), de carácter religioso-alegórico y con personajes también alegóricos (La Muerte, La vida, El Bien, El Mal...) mediante la cual se exponen los principales misterios de la Liturgia y la Eucaristía. Tenía una función didáctico-moral (enseñar al pueblo) y gozó de gran éxito durante el Barroco, época en que surgió y se desarrolló. Destacan los autos sacramentales de Calderón de la Barca: El gran teatro del mundo. • Los Pasos: son obritas teatrales de argumento muy sencillo y de carácter cómico (satírico y burlesco). Su comicidad se basa en el lenguaje y en las características populares de los propios personajes. Se cultivaron durante el Renacimiento y supusieron un antecedente al teatro de Lope de Vega. Son muy conocidos los Pasos de Lope de Rueda. • El entremés: se llama así a una composición también corta, semejante al paso, que se representaba en los entreactos de las comedias barrocas. La acción era más complicada que en los pasos y la burla grotesca adquirió una importancia mayor. Destacan los Entremeses de Cervantes y Quiñones de Benavente. • El sainete: es un entremés ampliado. Surge en el siglo XVIII como continuación de los entremeses barrocos y es una comedia breve (de uno o dos actos) que representa las costumbres populares con realismo, ironía y desenfado. Son famosos los Sainetes de D. Ramón de la Cruz. Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 18 Otros géneros dramáticos: Englobamos bajo este epígrafe a todos aquellos géneros teatrales menores que poseen un marcado carácter lírico y se representan con acompañamiento de música o danza. • La ópera: es una obra teatral íntegramente cantada durante su representación. Surgió en la Italia del siglo XVII y se perfeccionó en el siglo XVIII y XIX con artistas como Mozart o Verdi. Suele expresar temas graves o trágicos pero también existen óperas cómicas. • La zarzuela: es un género típicamente español. En sus inicios, fue un espectáculo dramático y musical de gran aparato escénico y abundante intervención musical alternando partes cantadas y partes habladas. Se llama así porque las primeras representaciones se hicieron en el Palacio de La Zarzuela. Se desarrolló fundamentalmente durante el siglo XVIII, en donde adquirió un contenido típicamente costumbrista español: Las segadoras (Ramón de la cruz). BIBLIOGRAFÍA: Antonio Ramírez IES “SIERRA MÁGINA” Mancha Real (Jaén) 19