EL ROMANTICISMO 1. EL ESPÍRITU ROMÁNTICO. 1.1. Nacimiento del Romanticismo. La Revolución francesa (1789) aportó un nuevo marco político, ideológico y social que se extendió por Europa. Supuso el fin del poder absoluto de la monarquía y la desaparición de la sociedad estamental. A estos cambios de carácter político hay que sumar el impacto de la Revolución industrial, que se inició en Inglaterra a finales del siglo XVIII y se difundió luego por toda Europa a lo largo del siglo XIX. Esta revolución trajo consigo la aparición de una nueva clase social, el proletariado, además de la consolidación de la burguesía como clase dominantes y el inicio de la doctrina económica capitalista. Estos acontecimientos históricos propician el nacimiento, a finales del XVIII y principios del XIX, de un movimiento cultural de carácter liberal y revolucionario, que se opone al racionalismo ilustrado del Neoclasicismo. Nace y se desarrolla con gran vigor en Alemania e Inglaterra. Esta nueva corriente de pensamiento, que se manifiesta en todas las artes, reclama el protagonismo del ser humano y sus emociones, frente al dominio de la razón. Se trata del Romanticismo. 1.2. El movimiento romántico en España El movimiento romántico llegó a España a mitad del siglo XIX, más tarde y más atenuado que en el resto de Europa, cuando allí ya despuntaba el Realismo. Este retraso se explica por la situación política del país. Veamos, a grandes rasgos, cómo era la España de esta época: - Economía. España no ha superado la decadencia económica iniciada en el siglo XVIII. Cultura. La población sufre en este período un grave retraso cultural. Política. La primera mitad del siglo XIX está marcada por el enfrentamiento entre absolutistas y liberales. Las tensiones políticas se vieron agravadas por la invasión napoleónica, que dio lugar a la Guerra de la Independencia (1808-1814). 2. FUENTES DE LA LITERATURA ROMÁNTICA En el Romanticismo español influyeron algunos autores extranjeros, entre los que destacan el alemán Johann Wolfgang Goethe y el inglés Lord Byron. 1 3. CARACTERÍSTICAS DE LA LITERATURA ROMÁNTICA El Romanticismo aportó una nueva visión del mundo, el artista romántico se subleva contra el orden establecido y busca nuevas formas expresivas en las que pueda manifestar su subjetividad. Veamos con detenimiento los rasgos de este movimiento: - - - - Subjetividad. El arte se convierte en un instrumento para reflejar el mundo interior del artista, sus sentimientos, sus deseos, sus frustraciones… Deseo de libertad. El romántico es un defensor a ultranza de la libertad personal: en las ideas, en el arte, en la política…; por ello, se rebela contra las normas sociales y las costumbres de su época. Angustia vital. El mundo, para el romántico, es injusto e imperfecto, muy alejado de sus grandes ideales y su sensibilidad artística. Esta confrontación entre la realidad y el ideal provoca una constante insatisfacción. Nacionalismo. Los románticos valoran la cultura propia y la perciben como algo auténtico y genuino. 4. LA POESÍA ROMÁNTICA. Los románticos encontraron en la poesía el cauce ideal para la expresión de los sentimientos. La poesía romántica se caracteriza por la ruptura de las formas neoclásicas y la búsqueda de la libertad creativa más allá de lo racional. Veamos cómo se materializó esta ruptura en los temas, el estilo y la métrica. 4.1. Temas. Los temas más tratados en la lírica romántica son los relacionados con sentimientos íntimos del poeta: - El amor. Es el gran tema de los románticos y, para ellos, el fundamento de su existencia. El amor tiene una doble vertiente: o Amor idealizado: se concibe como un sentimiento supremo que provoca en el poeta un estado de máxima felicidad. o Amor trágico: se entiende como una fuerza apasionada que arrastra al poeta hacia la melancolía o un destino fatal. - La existencia. La vida es una fuente continua de agonía. El romántico está en conflicto con un mundo que no le satisface y que no acepta. Este enfrentamiento le produce desaliento, frustración, tristeza, soledad o, incluso, suicidio. 2 o A veces, el desengaño provoca la evasión de la realidad. El poeta se refugia en ambientes o tiempos lejanos y exóticos. o El poeta identifica su estado de ánimo con la naturaleza. Por eso la naturaleza es desapacible (relámpagos, tormentas…) para expresar la angustia existencial, o serena, para transmitir felicidad. - La libertad. Es el gran deseo de los románticos, por eso luchan contra las normas y la opresión. Una variante de este tema es el patriotismo, entendiendo la patria como territorio de libertad. 4.2. Estilo. El reflejo de sus sentimientos, es lo que condiciona el estilo empleado por los escritores románticos. Por este motivo: - Utilizan un vocabulario sugerente y sonoro (sustantivos y adjetivos de un enorme colorido y expresividad...). - El lenguaje es musical y enfático (interrogaciones y exclamaciones retóricas y abundantes hipérbatos). 4.3. Métrica. Se usa la polimetría, de modo que con frecuente se mezclan estrofas y versos de distintas medidas. Para reforzar el efecto musical, se tiende a la rima consonante. Es muy típica la rima aguda, por su contundencia sonora. 4.4. - Tipos de poesía: Poesía lírica, que expresa los sentimientos y la visión del mundo del poeta. Poesía narrativa, en la que son frecuentes las historias basadas en leyendas. 4.5. Principales poetas románticos: a) José Espronceda. Fue el poeta español que mejor encarnó el Romanticismo, tanto en su obra como en su estilo de vida rebelde e inconformista. En su libro titulado Poesías, quedaron recogidos sus poemas líricos. Además escribió dos poemas narrativos extensos: El estudiante de Salamanca y El diablo mundo. b) Gustavo Adolfo Bécquer. La obra de Bécquer se caracteriza por el tono delicado y sencillo, menos rotundo que otros románticos. Su obra poética esencial se recopila bajo el título de Rimas. c) Rosalía de Castro. Fue la gran poetisa del Romanticismo español y gallego. Sus obras principales son: En las orillas 3 del Sar, escrito en castellano, y dos gran obras escritas en gallego: Cantares gallegos y Follas novas. 5. LA PROSA ROMÁNTICA 5.1. Obras de ficción: Destacan las Leyendas de Gustavo Adolfo Bécquer. 5.2. Periodismo y costumbrismo. El periodismo surge en el siglo XVIII, pero es durante el Romanticismo cuando adquiere popularidad y relevancia literaria, merced a los artículos de costumbres, en los que sobresale el escritor Mariano José de Larra, autor de una serie de Artículos en los que analiza los hábitos de los españoles. Aunque hay muestras interesantes de narrativa romántica como la novela histórica, el género en prosa de mayor auge es el periodismo. 6. EL TEATRO ROMÁNTICO El drama fue el subgénero teatral más cultivado en el Romanticismo. Se caracteriza por la ruptura con el teatro neoclásico: - El drama romántico no sigue las reglas de unidad y tiempo. Las acciones se desarrollan en distintos escenarios y épocas, y se mezclan los elementos trágicos y cómicos, la prosa y el verso. - Se dan numerosas acotaciones, ausentes en el teatro neoclásico. - Como en la poesía romántica, el lenguaje del drama es exagerado. - Prefiere los escenarios tétricos (cementerios, iglesias solitarias, escenas nocturnas...) y los temas de aventuras legendarios y medievales, con el amor y la libertad como trasfondo. - Se crean nuevos personajes, como el héroe solitario, marcado por la tragedia, y la heroína espiritual, cuyo ideal es la pasión amorosa. - El drama romántico no tiene intención didáctica. Su propósito es conmover, provocar la emoción: ira, llanto, sorpresa... 6.1. Dramaturgos destacasos: a) José Zorrilla. Es uno de los dramaturgos más relevantes del Romanticismo español. Destaca principalmente por su obra Don Juan Tenorio (1844), que es la pieza teatral más representada en la historia del teatro español. b) Duque de Rivas. Entre sus piezas más notorias destaca Don Álvaro o la fuerza del sino, cuyo estreno en Madrid fue el primer éxito del teatro romántico español y lo eleva a la cúspide de la literatura. 4