Prueba: MINI Clubman Corazón deportivo en cuerpo familiar Hace casi medio siglo existió correspondencia similar con el auto que dio origen al diseño. El Clubman conserva el volumen y las prestaciones dinámicas para que más de dos disfruten del comportamiento deportivo del modelo. Este juguete caro se disfruta como pocos por los amantes de los autos veloces. En el Salón de Frankfurt 2005, se presentó el Mini Concept Frankfurt, un estudio de diseño que conmemoraba las formas clásicas del Traveller, estrenado hacía 45 años, en septiembre de 1960. El «Leitmotiv» del diseño del MINI Concept Frankfurt consistió en crear un auto al que se accediera con facilidad y que permitiera introducir de modo sencillo el equipaje. El salón de Frankfurt 2007 fue el escenario para lanzar el nuevo modelo de Mini derivado del concepto, al que se denominó Clubman y que desembarcó en Argentina poco tiempo atrás. De frente, el Clubman repite las formas del Cooper S, a excepción del nacimiento de las nervaduras que se extienden a lo largo del techo, siendo en este plano tan simpático como todos sus antecesores. De perfil luce raro, con la carrocería alargada 24 cm y 8 cm entre ejes parece una limousine para personas de pequeña estatura. El lateral izquierdo es una extensión plena por detrás de la columna central y otro tanto después del pasarruedas Texto: Alberto Juárez | Fotos: Hernando Calaza De frente el Clubman luce casi idéntico al Cooper S de 3 puertas, pero de perfil todo cambia, agregando 24 cm al largo y una tercera puerta del lado derecho, tipo suicida o de apertura invertida, denominada Club Door, para facilitar el acceso a las plazas traseras. 078 MegaAutos 75 Precio: Versión: Origen: Velocidad máxima: Aceleración 0-100 km/h: Consumo promedio: u$s 45.900.Clubman S Inglaterra 224,8 km/h 7s5 7.8 l/100 km Prueba: MINI Clubman posterior. El plano derecho agrega una mini puerta tipo suicida, o de apertura en sentido contrario que mejora la estética y ayuda a ingresar a las plazas traseras. Donde ésta se articula, la línea del techo se eleva y mejora la altura interior. Atrás, a excepción del spoiler montado en el borde de fuga del techo con forma de visera, nada es igual al Cooper S. El portón ahora es doble, como en algunos utilitarios, y calado en el espacio de los faros -de menor superficie- montados en la carrocería. Los dos escapes fueron desplazados del centro a los extremos, ofreciendo un perfil plano a la salida de aire bajo piso y hay un marco de plástico en todo el contorno que acentúa la diferencia. El habitáculo ganó 10 cm en su longitud y también aumentó la distancia al techo en las plazas traseras, mejorando así el espacio habitable en ese siempre comprometido sector. Para las plazas delanteras no hay limitaciones y atrás viajarán cómodos aquellos de contextura normal. El acceso es lógico; hay que rebatir el respaldo de la butaca delantera y abrir la mini puerta, pero habrá que sortear el cinturón de seguridad, que se interpone en el camino. En síntesis, es un hábitat para invitar a quienes quieran compartir el cóctel de adrenalina generado por los modelos de este tipo. Por su parte, el baúl ganó 100 dm3 y con la posibilidad de plegar los asientos se homologaron 930 dm3, lo que representa 250 más que los disponibles en el tres puertas. La visibilidad es lógica en el frente y los laterales, no así hacia atrás por el volumen de los apoyacabezas y los parantes de empalme de la doble puerta trasera, complicándose para quienes utilizamos con frecuencia el retrovisor. Lo mismo sucede en la maniobra de estacionamiento por la ausencia de sensores de aproximación, sumando el riesgo de dañar el faldón inferior de fibra que excede la línea del paragolpes. El puesto de conducción es ligeramente bajo, como corresponde a un deportivo, las butacas son confortables, correctos los laterales de contención y para aquellos excedidos en peso y ya no tan jóvenes, el ingreso y sobre todo el egreso, puede presentarse un poco complicado. En el interior se repite la vistosa ornamentación deportiva del Cooper S, que se disfruta visualmente aunque no tanto al tacto por los desniveles de calidad en los materiales utilizados, especialmente los plásticos y el policarbonato, con pronóstico reservado preocupante como posibles generadores de ruido a corto plazo. El tacómetro en línea de visión a través de la me- 080 MegaAutos 75 Equipamiento Airbags frontales, laterales y de cortina Asientos deportivos / Asientos delanteros regulables en altura Asiento trasero rebatible 50/50 / Sistema Isofix Cierre central c/mando a distancia Climatizador automático Computadora / Control de velocidad crucero Espejos exteriores eléctricos Faros antiniebla / Faros Bi-xenón Indicador de presión de neumáticos Levantacristales eléctricos delanteros Sistema de alarma c/mando a distancia Radio AM/FM c/CD, MP3 (adaptador para iPod) y 6 parlantes Tapizado de cuero / Techo de cristal eléctrico Volante multifunción en cuero regulable en alt. y profundidad dia luna libre del volante, de correcto diámetro y tamaño de empuñadura, vale en función del paso de marchas y el control de vueltas, pero siempre es mejor con el complemento del velocímetro a la par. Éste último, enorme como ninguno, parece haber sido diseñado más en función del resto de los pasajeros. Sin objeciones respecto de la tecnología y confiabilidad «Bee Me», pero por tratarse de un vehículo destinado a herejes con el pie derecho pesado, se extraña algún medidor de temperatura y presión de aceite presentes en otros modelos de similares características. El equipamiento destinado al confort es correcto, destacándose la luminosidad, resultado de la generosa área traslúcida que alcanza hasta las plazas traseras. El habitáculo cuenta con distribuidores del climatizador dual independiente bien ubicados, la insonorización califica como correcta para un vehículo de sus características y suena bien el sistema de audio Radio/CD/MP3 con comandos en el volante, donde además también se encuentra el control de velocidad crucero. La seguridad corresponde al tipo de vehículo, con airbags que cubren todos los sectores, menos las rodillas. Los frontales son progresivos, sincronizados con los cinturones con pretensionador y los de cortina abarcan toda la extensión del techo. La estructura se anuncia con absorción de energía de impacto dirigida a los pilares más fuertes y la mini puerta derecha la refuerza en el sector y se abre luego de la principal, evitando así que pueda accionarse desde adentro. Importante en la asistencia dinámica es el control de estabilidad, más los de patinamiento y tracción, combinando freno por rueda y fuerza del motor. Pulsando un botón, este sistema se desconecta y entonces aparece el «demonio de Tasmania» oculto tras la «S», con un modo de conducción que lo aproxima a los autos de competición y entonces, es fundamental activar a fondo todos los sentidos. Por el contrario, si el control de estabilidad continúa activado aporta a la seguridad de marcha, aunque su carácter apenas brusco o nervioso, o como se lo quiera calificar, igual genera emociones. Sin temor a pecar de reiterativos, no se puede dejar de resaltar la tecnología del motor -expuesta en detalle cuando se ensayó el Mini Cooper S en la edición 68 de MegaAutos- razón de la performance y rendimiento en general del auto. Inyección di- Prueba: MINI Clubman Aceleración: C/control tracción Especificaciones 0 a 100 Km/h 0 a 400 m 0 a 1.000 m Velocidad máxima (km/h) Al corte a 6.500 rpm Motor delantero, transversal 4 cilindros en línea, 16 válvulas, doble árbol de levas Inyección directa + turbo + intercooler Cilindrada / Diam. x Carrera: 1.598 cc. / 77 x 85.8 mm Potencia: 175 cv a 5.500 rpm Torque: 24.4 kgm entre 1.600 / 5.500 rpm Relación de compresión: 10.5:1 Dirección: Piñón y cremallera, asist. electrohidráulica Tracción: Transmisión: Suspensión delantera: Suspensión trasera: Frenos del/traseros: Delantera 6 velocidades, manual McPherson con brazo triangular inferior, compensación hundimiento frenado, barra estabilizadora Multibrazo con eje Z, barra estabilizadora Discos autoventilados / Discos Seguridad activa: Llantas: Neumáticos: ABS, EBD, CBC, DSC, ASC+T Aleación 6.5Jx16 195/55 R 16 1ª) 62,4; 4ª) 181,2; 2ª) 97,7; 5ª) 214,6 7s8 15s8 a 147,0 Km/h 28s3 a 190,2 Km/h 3ª) 139,6; Aceleración: S/control tracción Velocidad de punta 224,8 a 5.800 rpm 0 a 100 Km/h 0 a 400 m 0 a 1.000 m Velocímetro corrido en 3,5 Km/h en+ 7s5 15s5 a 151,6 Km/h 27s8 a 194,2 Km/h Poder frenante 60 km/h a 0 80 km/h a 0 100 km/h a 0 120 km/h a 0 140 km/h a 0 160 km/h a 0 180 km/h a 0 Nivel sonoro del habitáculo 13,4 m en 1s9 19,9 m en 2s4 35,7 m en 3s0 58,0 m en 3s6 75,2 m en 4s1 95,5 m en 4s5 121,7 m en 5s1 A 60 Km/h A 80 Km/h A 100 Km/h A 120 Km/h A 140 Km/h Del. / tras. 65 / 64 db 66 / 65 db 69 / 68 db 71 / 71 db 74 / 74 db Poder de reacción 60 a 100 km/h 80 a 120 km/h 100 a 140 km/h en 3ª 5s1 en 113,0 m 5s2 en 146,0 m en 4ª 6s4 en 142,0 m 6s4 en 178,0 m 6s7 en 225,0 m en 5ª 7s9 en 219,5 m 8s2 en 273,0 m Consumo de combustible Urbano a 90 km/h a 120 km/h a 140 km/h Por litro 11,2 Km 17,3 Km 13,8 Km 11,2 Km Con 20 l 224,0 Km 345,0 Km 276,0 Km 223,0 Km c/100 Km 8,9 litros 5,8 litros 7,3 litros 9,0 litros Autonomía 562,0 km 862,0 km 690,0 km 554,0 km Dimensiones y Pesos Largo/ancho/alto - Dist. entre ejes: Trochas del / tras: Radio de giro / Despeje: Peso / Capacidad de carga: Volumen del baúl: Capacidad del tanque: 3.930/1.685/1.425 - 2.545 mm 1.455 / 1.460 mm 5.5 m / 135 mm 1.280 / 485 kg 260-930 Lts 50 lts. nafta de 95 octanos recta, turbo de geometría variable, variador constante de los ejes de levas, activación eléctrica según temperatura del motor en la circulación del líquido refrigerante, bomba de aceite regulada en función de caudal, generador de energía eléctrica desconectable al acelerar, son los ítems más importantes y lo dicen todo. En la conducción es un placer disponer del torque máximo entre 1.600 y 5.000 rpm -24,5 mKg- con el plus al hundir bruscamente el acelerador proporcionando 26,5 por acción del overboost. Este Mini es ligeramente más doméstico en su comportamiento en ruta, pero solo muy poco. En otras palabras, pasó a ser el de un karting de chasis corto a otro de chasis largo. Aunque la asistencia eléctrica variable de la dirección -precisa pero tremendamente directa- permite percibir lo que copian las ruedas, cuando se va rápido y el piso no es completamente liso hay que ir muy atento. De todas maneras, quien compra un Cooper S busca y disfruta este comportamiento. Lo mismo se comprobó en el circuito ubano, en las calles recientemente asfaltadas luce la tendencia al confort generada por el aumento en la distancia entre ejes, pero en la irregularidad del piso mortifica el lógico valor elástico de suspensión y amortiguación requerido por el tipo de vehículo. El Clubman pesa más, ofrece mayor espacio habitable, pero podemos aseverar que no paga por ello en performance respecto del Mini normal. Acelerando desde 0, los valores son casi idénticos, apenas a favor en alcanzar 100 km/h, ligeramen- te por debajo en el 1/4 de milla y en el kilómetro. Similar comportamiento se midió en el destacado poder de reacción prácticamente en todas las marchas, resultado del torque elevado y la amplia gama de RPM en que se mantiene. La selectora es precisa y de recorrido acotado, pero por seguridad sería mejor aumentar la resistencia en la conexión del retroceso ya que esta marcha es paralela y a la izquierda de la 1ª. Superior en 3,2 km/h fue la velocidad máxima, en esto puede deberse a las diferencias mínimas propias de unidades distintas, la relación de la 6ª ligeramente más larga o la mejora homologada para el modelo en el coeficiente de forma o Cx. Concordante con el comportamiento dinámico fue la eficiencia comprobada en los frenos. Además del ABS cuenta con distribuidor electrónico de intensidad -EBD- y de asistencia de frenado en curva -CBC- y ello se nota en las mediciones. El consumo de combustible se relaciona más con los 1.6 litros de cilindrada que con la potencia del motor, especialmente en ruta donde influye la relación de 6ª apenas más larga, pero en general se puede calificar de económico. La existencia del Mini Clubman se remonta a 1969, cuando se lanzó al mercado la primera generación, que en comparación con el tres puertas tuvo muy poca presencia en la Región, por eso no despierta nostalgia en esta parte de América. Se lo ve raro, pero al conservar la identidad del modelo que lo precedió y con las propiedades del Cooper S, resulta ideal para que cuatro puedan disfrutar de un auto deportivo.