Santiago, 20 de agosto de 2014 m.o.o. OFICIO N° 10.013 Remite resolución. EXCELENTÍSIMO SEÑOR PRESIDENTE DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS: Remito a V.E. copia de la resolución dictada por esta Magistratura con fecha 20 de agosto en curso, en el proceso Rol N° 2690-14-INA sobre acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad presentada por Antonio Andrés Alarcón Azocar, en representación de Tomás Ignacio Smith Smith, respecto de los artículos 175 y 177 del Código de Procedimiento Civil, a los efectos que indica. Asimismo, acompaño copia del requerimiento y de la resolución que declaró su admisibilidad. Dios guarde a V.E. MARTA DE Secretaria A S.E.EL PRESIDENTE DE LA H. CÁMARA DE DIPUTADOS DON ALDO CORNEJO GONZÁLEZ HONORABLE CÁMARA DE DIPUTADOS PEDRO MONTT S/N° VALPARAÍSO r .p . f . Santiago, veinte de agosto de dos mil catorce. VISTOS Y CONSIDERANDO: 1° „ Sala Que, por de admisible esta el resolución de esta fecha, la Primera Magistratura requerimiento inconstitucionalidad deducido Constitucional de en declaró inaplicabilidad estos autos por por el abogado Antonio Andrés Alarcón Azocar, en representación de Tomas Ignacio Smith Smith, respecto de los artículos 175 y 177 del Código de Procedimiento Civil, en el marco de la acción de reclamación de filiación no matrimonial que se encuentra actualmente en tramitación ante el Juzgado .de Familia de Concepción, RIT N° 1231-2014, RUC N° 14-2-0169362-5; 2°. Que, en cumplimiento de lo dispuesto incisos tercero y cuarto del artículo 17.997, Orgánica Constitucional, los 82 de la Ley N° Constitucional se ordenó comunicar en del Tribunal al Tribunal de la gestión pendiente la resolución que admitió a tramitación este requerimiento, para constancia en el respectivo expediente, y se le solicitó el envío de copia de las piezas principales de éste; Y TENIENDO PRESENTE lo dispuesto en el artículo 86 de la Ley N° 17.997, Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional, SE RESUELVE: 1) Confiérase un plazo de veinte días a Erik Edgardo Cartes Bustamante, en su calidad de parte en la gestión judicial en que incide el presente requerimiento, para formular observaciones y presentar antecedentes. 2) Póngase el requerimiento de autos en conocimiento de la Cámara de Diputados, del Senado y de la Presidenta de la República, mismo y de la resolución enviándoles que declaró copia del su admisibilidad, confiriéndoles un plazo de veinte días para formular observaciones y presentar antecedentes. Notifíquese y comuniqúese. Rol N° 2690-14-INA. PROVEÍDO POR LA SEÑORA PRESIDENTA/DEL TRIBUNAL SEÑORA SE XA. CONSTITUCIONAL oeoofii n J EN LO PRINCIPAL: deduce acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad; PRIMER OTROSÍ: acompaña documentos; SEGUNDO OTROSÍ: solicita suspensión TERCER OTROSÍ: notificaciones; CUARTO OTROSÍ: patrocinio y poder. EXCMO. TRIBUNAL CONSTITUCIONAL DE LA REPÚBLICA ANTONIO ANDRÉS ALARCON AZOCAR, abogado, cédula nacional de identidad N° 12.529.408-1, con domicilio en calle Dr. Soteno del Río N° 508 Oficina 618, comuna y ciudad de Santiago, en representación de TOMAS IGNACIO SMITH SMITH, según se acredita con mandato judicial que se adjunta en un otrosí de esta presentación, a Us. respetuosamente digo: 1. Que en virtud de las atribuciones conferidas a este Excelentísimo Tribunal por el artículo 93 n° 6 de la Constitución Política de la República, y cumpliéndose con los requisitos establecidos en el inciso undécimo del mismo precepto constitucional, vengo a interponer acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad en el marco de la gestión judicial pendiente que se especifica en el siguiente párrafo respecto del artículo 175 del Código de Procedimiento Civil, y artículo 177 del Código de Procedimiento Civil, en tanto dichas normas vulneran los artículos 1°, 4°, 5° inciso segundo, 19 n° 3 , 4 y 5 inciso 2° de la Constitución Política de la República, y atreves de este último, los artículo 18 de la Convención Americana de Derechos Humanos, el artículo 24.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y en el artículo 7 numerales 1 y 2 de la Convención sobre los Derechos del Niño; de la manera que se expondrá a lo largo de este escrito. 2. La gestión judicial pendiente en que incide la presente acción de inaplicabilidad es la Demanda de acciíón de reclamación de filiación no matrimonial, RIt 1231-2014, RUC N° 14- 2-0169362-5, del Juzgado de Familia de Concepción. Actualmente la Causa se encuentra en espera del informe del Servicio Médico Legal, respecto de la prueba pericial Biológica que se solicitará a las partes de este juicio, a efectos de fijar la respectiva audiencia de juicio. D C O» 000002 fJ TABLA DE CONTENIDOS ' (P*^ I. ANTECEDENTES DE HECHO 3 A. Hechos que dieron origen a la demanda de reclamación de filiación no matrimonial. B. Tramitación ante el Juzgado de Familia de Concepción. 3 3 II. ADMISIBILIDAD DE LA PRESENTE ACCIÓN DE INAPLICABIUDAD POR INCONSTITUCIONALIDAD 3 A. Persona u órgano legitimado. 4 B. Que exista gestión judicial pendiente en tramitación. 4 C. Que se promueva respecto de un precepto que tenga rango legal. D. Que los antecedentes de la gestión pendiente en que se promueve la cuestión aparezca que el precepto legal impugnado ha de tener aplicación o resultará decisiva en la resolución del asunto. E. Que tenga fundamento plausible 4 4 III. ANÁLISIS DE LAS GARANTÍAS CONSTITUCIONALES INFRINGIDAS POR LA EVENTUAL APLICACIÓN DE LAS NORMAS LEGALES CITADAS EN EL CASO SUB-LITE ~5> "O é A. Consideraciones Previas B. Tratados internacionales sobre Derechos Humanos Ratificados por Chile. C. El Derecho a la identidad. D. La Cosa Juzgada invocada por el demandado. & 8 8 9 E. Jurisprudencia Nacional. F. Jurisprudencia en Derecho Comparado 11 18 IV. PETICIONES CONCRETAS DEL PRESENTE RECURSO. 0) TJ ts D é 33 PRIMER OTROSÍ 33 SEGUNDO OTROSÍ 33 TERCER OTROSÍ 34 CUARTO OTROSÍ 34 I. ANTECEDENTES DE HECHO A. Hechos que dieron origen a la querella demanda. 1°.- Entre los años 1992 y 1995 mi madre doña NYDIA SHIRLEY SMITH AGUAYO y el demandado don ERIC EDGARDO CARIES BUSTAMANTE mantuvieron una relación sentimental de la cual siempre he sabido a través de familiares y de mi propia madre. 2°.- Producto de esta relación mi madre quedó embarazada, produciéndose mi nacimiento, TOMAS IGNACIO SMITH SMITH, con fecha 2 de Marzo de 1996. 3°.- Al momento del nacimiento, la madre de mi representado, producto del malestar ocasionado ante la negativa por parte de ERIC EDGARDO CARIES BUSTAMANTE, en orden a reconocer como hijo a mi representado y además por el hecho de abandonarla a su suerte, omitió señalar la atribución de paternidad sobre la ' persona de mi representado por parte del demandado, razón por la cual, figura sólo con el apellido de su madre, sin filiación paterna, como consta en certificado de nacimiento que acompaño. 4°.- De todas estas noticias mí representado ha tenido conocimiento toda su vida, pero sólo ahora que he cumplido su mayoría de edad, cuenta con la legitimación activa que le permite demandar en juicio a su progenitor a fin de que el Tribunal de Familia determine su verdadera filiación paterna y en definitiva, su identidad identidad. B. Tramitación ante el Juzgado de Familia. El día 25 de abril de 2014, mi representado interpuso ante el Juzgado de Familia de Concepción Demanda de Reclamación de Filiación no Matrimonial en contra de don ERIC EDGARDO CARTES BUSTAMANTE, comerciante domiciliado en Calle Freiré N° .522, Loca 106 de Concepción, la cual el Tribunal admitió a tramitación, citando a las partes a la audiencia preparatoria, para el día 05 de junio de 2014 a las 10:00 horas, en las dependencias del Tribunal, ubicado en el Palacio de Tribunales, Castellón N° 432, de la ciudad de Concepción, bajo apercibimiento del artículo 21 inciso 2° de la Ley 19.968. II. ADMISIBILIDAD DE INCONST1TU CION ALID AD LA PRESENTE ACCIÓN DE INAPLICABILIDAD POR El artículo 93 numeral 6° de la Constitución de la República establece la acción de inaplicabilidad porinconstitucionalidad de un precepto legal y otorga la competencia exclusiva para su conocimiento a este Excelentísimo Tribunal. Dicha norma y el artículo 47 F de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional exigen como requisitos de admisibilidad que: a. b. c. d. -§ El requerimiento sea formulado por una persona u órgano legitimado; Que exista gestión judicial pendiente en tramitación; Que se promueva respecto de un precepto que tenga rango legal. Que de los antecedentes de la gestión pendiente en que se promueve la cuestión, aparezca que el precepto legal impugnado ha de tener aplicación o resultará decisiva en la resolución del asunto, y . e. Que tenga fundamento plausible. A. Persona u órgano legitimado. El Artículo 205 del Código Civil prescribe. "La acción de reclamación de la filiación no matrimonial corresponde sólo al hijo contra su padre o su madre, o a cualquiera de éstos cuando el hijo tenga determinada una filiación diferente,...." Que respecto a quienes son legítimos contradictores, el inciso primero del artículo 317 del Código Civil, no modificado por la nueva Ley de Filiación, dice que lo son, en las cuestiones de paternidad, el padre contra el hijo o el hijo contra el padre. De la norma anterior queda claro que mi representado en su calidad de hijo de filiación no matrimonial, tiene legitimidad activa para presenta la demanda de reclamación de filiación no matrimonial en contra del presunto padre. B. Que exista gestión Judicial pendiente en tramitación. Como condición de procedencia señala que debe existir cualquier gestión seguida ante un tribunal ordinario o especial en la que sea aplicable un precepto legal que pueda resultar contrario a la Constitución. En el caso que motiva la presentación de esta acción, dicha gestión judicial pendiente, es 1 causa RIt 1231-2014, RUC N° 14- 20169362-5, del ingreso del Tribunal de Familia de Concepción, la cual se encuentra en tramitación. C. Que se promueva respecto de un precepto que tenga rango legal. En la presente acción de inaplicabilidad por vicios de inconstitucionalidad, se impugna la constitucionalídad en el caso concreto de las siguientes normas legales: 1. El artículo 175 del Código de Procedimiento Civil, que dispone que "las sentencias definitivas o interlocutorias firmes producen la acción o la excepción de cosa juzgada". 2. El artículo 177 del Código de Procedimiento Civil que señala "La excepción de cosa juzgada puede alegarse por el litigante que haya obtenido en el juicio y • por todos a quienes según la ley aprovecha el fallo, siempre que entre la nueva demanda y la anteriormente resuelta haya: identidad legal de personas; identidad de la cosa pedida; y identidad de la causa de pedir. Se entiende por causa de pedir el fundamento inmediato del derecho deducido en juicio". Los artículos antes citados del Código Civil, son normas de carácter legal, por lo cual se cumple plenamente el requisito de que la acción de inaplicabilidad debe promoverse respecto de un precepto que tenga carácter legal. Se cumple también con lo señalado por la jurisprudencia del Excmo. Tribunal Constitucional en orden a que se individualicen con precisión los preceptos legales cuya inconstitucional se impugna (STC Rol 550-00, cons. 9°). D. Que los antecedentes de la gestión pendiente en que se promueve la cuestión, aparezca que el precepto legal Impugnado ha de tener aplicación o resultará decisiva en la resolución del asunto. Por otra parte, este mismo Tribunal ha establecido que, además de la gestión judicial pendiente, es necesario que se invoque un precepto legal determinado que pueda ser 0) TJ •«r ? aplicado en el juicio pendiente y cuya aplicación pueda resultar decisiva en la 000005 resolución de un qsunto produciendo efectos contrarios a la Constitución (Rol No 1064- 08). Respecto a este requisito, este Excmo. Tribunal ha interpretado este requisito en términos amplios, señalando que el precepto cuya aplicación se impugna no debe, necesariamente, ser considerado por el juez de fondo para resolver el asunto. Basta la sola posibilidad de su aplicación para que pueda ser declarado inaplicable. Ha señalado el Tribunal Constitucional que "para realizar el referido juicio de constitucionalidad basta que el juez que conoce de la gestión pendiente tenga la posibilidad de aplicar dicho precepto en la decisión que ha de adoptar ya que, al hacerlo, pueda vulnerarse la Constitución (...)" (STC Rol 550-06, cons. 4°). En el caso en cuestión, el demandado contestando la acción incoada, opuso primero la excepción dilatoria de cosa juzgada, señalando que de conformidad a lo dispuesto en las normas pertinentes de la Ley 19.968 y en los artículos 303 y siguientes del Código de Procedimiento Civil, opone a la demanda de autos, como excepción dilatoria, la de excepción de cosa juzgada. El demandado Invoca a su respecto los efectos producidos por la sentencia firme y ejecutoriada dictada en los autos civiles caratulados "SMITH CON CARIES", Rol N° 5628-2004, del Segundo Juzgado Civil de Concepción, y sobre esta base opone a la demanda como dilatoria la de excepción de cosa juzgada ya que la referida sentencia rechazó en todas sus partes la demanda de reclamación de filiación no matrimonial interpuesta por doña Nydia Shiriey Smith Aguayo en contra de del demandado con el objeto que se declarara judicialmente que su entonces hijo menor de edad, ahora demandante, don Thomas Ignacio Smith Smith era a su vez hijo del Sr. Cortes Bustamante. Agrega que dicha sentencia, firme y ejecutoriada, rechazó la demanda por falta de acreditación de los supuestos de procedencia de la acción, como se lee claramente, en el considerando noveno del fallo, cumpliéndose en la especie las condiciones establecidas en el citado artículo 177 del Código de Procedimiento Civil. En subsidio de lo anterior, contesto derechamente la demanda de autos oponiendo como perentoria la acción de cosa juzgada, señalando nuevamente que el artículo 175 del Código de Procedimiento Civil dispone que "las sentencias definitivas o interlocutorias firmes producen la acción o la excepción de cosa juzgada" y que a su turno, el artículo 177 señala que "La excepción de cosa juzgada puede alegarse por el litigante que haya obtenido en el juicio y por todos a quienes según la ley aprovecha el fallo, siempre que entre la nueva demanda y la anteriormente resuelta haya: Identidad legal de personas; identidad de la cosa pedida; y Identidad de la causa de pedir. Se entiende por causa de pedir el fundamento inmediato del derecho deducido en Juicio". T3 Uí D üMílüfi Invoca nuevamente los efectos producidos por la sentencia firme y ejecutoriada dictada en los autos civiles caratulados "SMITH CON CARTES", Rol N° 5628-2004, del Segundo Juzgado Civil de Concepción y sobre esta base- oponemos a la demanda como excepción perentoria la de excepción de cosa juzgada, señalando que la referida sentencia rechazó en todas sus partes la demanda de reclamación de filiación no matrimonial interpuesta por doña Nydia Shirley Smith Aguayo en contra de mi representado con el objeto que se declarara judicialmente que su entonces hijo menor de edad, ahora demandante, don Thomas Ignacio Smith Smith era a su vez hijo del Sr. Cartes Bustamante. Por lo tanto, dichos preceptos resulta decisivos para la resolución de la demanda de reclamación de filiación no matrimonial presentada por mi representado, toda vez que según lo expresado, la defensa del demandado se basa exclusivamente en la aplicación de dichos preceptos a la resolución del caso concreto, esto es, que el Tribunal de familia de Concepción en la causa Rtt 1231-2014, RUC N° 14- 2-0169362-5, acoja la excepción de cosa juzgada, ya sea como dilatoria o como perentoria. E. Que tenga fundamento plausible. Como se demostrará por extenso en el presente escrito, la acción de inaplicabilidad interpuesta tiene fundamento plausible y la aplicación de las normas impugnadas genera violaciones constitucionales concretas. En consecuencia, el control de constitucionalidad que se solicita a este Excelentísimo Tribunal no tiene un interés puramente abstracto o doctrinario, sino que persigue asegurar la vigencia de las garantías constitucionales y sus principios en un caso concreto, a través de la declaración de este Tribunal en orden a que el Tribunal de Familia de Concepción prescinda de la norma impugnada, desde que su aplicación al caso sometido a su escrutinio tendrá un efecto inconstitucional inadmisible en nuestro ordenamiento jurídico. A continuación haremos un análisis de las normas constitucionales que resultarían infringidas de aplicarse la disposición arriba citada del Código de Justicia Militar al caso sometido a su conocimiento. Ul. ANÁLISIS DE LAS GARANTÍAS CONSTITUCIONALES INFRINGIDAS POR LA EVENTUAL APLICACIÓN DE LAS NORMAS LEGALES CITADAS EN EL CASO SUB-LITE. A. CONSIDERACIONES PREVIAS. En este punto se hará un análisis del artículo 5 Constitución Política del Estado, e! que sédala en su inciso segundo, primera parte: "El ejercicio de la soberanía reconoce como limitación el respeto de los derechos esenciales que emanan de la naturaleza humana". De acuerdo a lo señalado en esta disposición y lo dispuesto en el art. 19 Constitución Política de la República, estos derechos no los crea ni establece el Estado, sino que emanan directamente de la dignidad y naturaleza del ser humano. Por ello el constituyente sólo se limita a reconocerlos, asegurarlos y garantizarlos, siendo derechos universales, absolutos, inalienables e imprescriptibles. Ahora bien, se entiende que estos derechos no pueden ser enumerados taxativamente de una vez y para siempre, cuestión de que se dejó constancia en Actas Oficiales de la Comisión de Estudio de la Nueva Constitución en la sesión 203 (1976): "La protección constitucional se refiere no sólo a los derechos establecidos en ella, sino a todos los que son inherentes a la naturaleza, humana, entre los que se incluyen los que forman parte del acervo cultural de la humanidad". En 1989, mediante la Ley N ° 18.825, se agrega al inciso segundo original del art. 5°, lo siguiente: "Es deber de los órganos del Estado respetar y promover tales derechos garantizados por esta Constitución así como por los Tratados Internacionales ratificados por Chile y que se encuentren vigentes". Su objeto fue robustecerlos derechos humanos en nuestro ordenamiento jurídico y establecer un deber constitucional para los órganos y autoridades del Estado. Así, la Constitución establece en el art. 5 inc. 2°, en forma expresa dos modalidades de institucionalizacíón de derechos naturales, la propia norma de derecho constitucional y el Tratado internacional; siendo esta última la modalidad que permite incorporar a la Constitución material, los derechos fundamentales que no están expresamente contenidos en su texto. La obligación del Estado de respetar y promover los derechos esenciales garantizados en los Tratados internacionales se traduce, según lo ha señalado la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en "garantizar el libre y pleno ejercicio de los derechos reconocidos en la Convención (Americana de Derechos Humanos) a toda persona sujeta a su jurisdicción. Esta obligación implica el deber de los Estados Partes de organizar todo el aparato gubernamental y, en general, todas las estructuras a través de las cuales se manifiesta el ejercicio del poder público, de manera tal que sean capaces, de asegurar jurídicamente el libre y pleno ejercicio de los derechos humanos. Como consecuencia de esta obligación los Estados deben prevenir, investigar y sancionar toda violación de los derechos reconocidos por la Convención y procurar, además, el restablecimiento, si es posible, del derecho conculcado y, en su caso, la reparación de los daños producidos por la violación de los derechos humanos"! 3. Los tratados sobre derechos esenciales se diferencian de los demás a decir de la Corte Interamericana de Derechos Humanos porque "No son tratados multilaterales concluidos en función de un intercambio recíproco de derechos sino el beneficio « mutuo de los Estados contratantes. Su objeto y fin es la protección de los derechos T3 0 fundamentales de los seres humanos independiente de su nacionalidad, tanto frente a _c ™ su propio Estado como frente a los demás" ¿oU B. TRATADOS INTERNACIONALES SOBRE DERECHOS HUMANOS RATIFICADOS POR CHILE. 1. La Convención Americana de Derechos Humanos: fue ratificada por Chile, con fecha 21 de agosto de 1990, fecha en que el Gobierno de Chile deposita el instrumento de ratificación de la Convención Americana de Derechos Humanos, la que es publicada en el Diario Oficial con fecha 05 de enero de 1991. 2. Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos: fue promulgado por Decreto N° 778 de fecha 30 de noviembre de 1976, promulga el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos adoptado por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas por Resolución N°2.200, el 16 de diciembre de 1966 y suscrito por Chile en esa misma fecha. Fecha de Publicación 29 de abril de 1989. 3. La Convención sobre los Derechos del Niño: fue promulgado por Decreto N° 830 de fecha 14 de agosto de 1990, promulga La Convención sobre los Derechos del Niño, suscrita por Chile con fecha 26 de enero de 1990 y adoptada por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas el 20 de Noviembre de' 1989. Fecha de Publicación 27 de septiembre de 1990. C. EL DERECHO A LA IDENTIDAD. Este derecho a la identidad, se encuentra específicamente en tres tratados suscritos por Chile, donde se reconocería el derecho a la identidad; a saber: 1. El artículo 18 de la Convención Americana de Derechos Humanos, 2. El artículo 24.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos 3. En el artículo 7 numerales 1 y 2 de la Convención sobre los Derechos-del Niño; Dichas normas de tienen rango Constitucional por aplicación del Artículo 5 inciso 2° del Constitución Política del Estado, y aceptar la aplicación por el Tribunal de Familia de Concepción, de los artículos 175 y 177 del Código de Procedimiento Civil, para el caso sublite, acogiendo ya sea como excepción dilatoria o como perentoria la cosa juzgada, vulneraría el Derecho a la Identidad. El derecho a la identidad, es entendido como un derecho esencial, que emana de la naturaleza de toda persona, por lo que beneficia a todas ellas y no sólo a los niños, y debe ser respetado y promovido en virtud del artículo 5° de la Constitución, y teniendo en cuenta además "que lo que ¡imita el ejercicio de la soberanía son aquellas facultades propias o inherentes a toda persona en cuanto tal, que no pueden ser desconocidas o atropelladas por el ejercicio concreto de la potestad soberana del Estado que, de conformidad con la misma Carta Fundamental, "está al servicio de la persona humana" (artículo 1°, inciso tercero C.P.)" (Considerando 11° de la prevención de los Ministros Hernán Vodanovlc Schnake, Mario Fernández Baeza, Marisol Peña £ -o D _c DI Torres, Francisco Fernández Fredes y José Antonio Vlera-Gallo Quesney en TC, 30 agosto 2011. Rol N° 1563-2009; TC, 1 septiembre 2011. Rol N° 1656-2009 y de TC, 1 OO nV AV IUi A £ \J í, V septiembre 2011. Rol N° 1537-2009) /#M^C Este Tribunal Constitucional ha señalado que "la afirmación precedente se concilio perfectamente con el criterio sostenido por esta Magistratura en el sentido de que el derecho a la identidad personal está estrechamente ligado a la dignidad humana, en cuanto valor que, a partir de su consagración en el artículo 1°, inciso primero, de la Ley Suprema, constituye la piedra angular de todos los derechos fundamentales (...). Asimismo, que aun cuando la Constitución chilena no reconozca, en su texto, el derecho a la identidad, ello no puede constituir un obstáculo para .que el juez constitucional le brinde adecuada protección, precisamente por su estrecha vinculación con la dignidad humana y porque se encuentra protegido expresamente en diversos tratados internacionales ratificados por Chile y vigentes en nuestro país (Sentencia Rol K° 834, considerando 22°); En esta perspectiva, el reconocimiento del derecho a la identidad personal -en cuanto emanación de la dignidad humana- implica la posibilidad de que toda persona pueda ser ella misma y no otra. Por lo anterior, cabe restringir su reconocimiento y protección a los menores de edad. Ello, porque el derecho a la identidad personal constituye un derecho personalísimo, inherente a toda persona, independientemente de su edad, sexo o condición social. La estrecha vinculación entre el derecho a la identidad personal y la dignidad humana es innegable, pues la dignidad sólo se afirma cuando la persona goza de la seguridad de conocer su origen y, sobre esa base, puede aspirar al reconocimiento social que merece." (TC, 29 septiembre 2009. Rol N° 1340-2009; considerando 9° y 10°) También el este Tribunal Constitucional ha argumentado que "dicha afirmación se sustenta en el hecho de que no puede existir una facultad más ligada a ¡a naturaleza humana que la necesidad de reafirmar el propio yo, la identidad y, en definitiva, la posición que cada quien ocupa dentro de la sociedad." (Considerando 13° de la prevención de los Ministros Hernán Vodanovic Schnake, Mario Fernández Baeza, Marisol Peña Torres, Francisco Fernández Fredes y José Antonio Vlera-Gallo Quesney en TC, 30 agosto 2011. Rol N° 1563-2009; TC, 1 septiembre 2011. Rol N° 1656-2009 y de TC, 1 septiembre 2011. Rol N° 1537-2009). D. LA COSA JUZGADA. El demandado invoca a su respecto los efectos producidos por la sentencia firme y ejecutoriada dictada en los autos civiles caratulados "SMITH CON CARTES", Rol N° 56282004, del Segundo Juzgado Civil de Concepción, y sobre esta base opone a la demanda como dilatoria la de excepción de cosa juzgada ya que la referida sentencia rechazó en todas sus partes la demanda de reclamación de filiación no matrimonial interpuesta por doña Nydia Shiriey Smith Aguayo en contra de del | o •••a demandado con el objeto que se declarara judicialmente que su entonces hijo menor de edad, ahora demandante, don Thomas Ignacio Smith Smith era a su vez hijo del Sr. Caries Bustamante. Es de! caso que en dicha causa tramitada ante un Tribunal Civil, con criterio civilista, se rechazo la demanda sin aue se resolviera respecte de la declaración de verdadera o falsa paternidad o maternidad del hijo, ya que se desestimo la demanda por negativa del Juez del grado de aplicar la presunción grave de paternidad contemplada en el inciso 2° del artículo 199 del Código Civil, por estimar el Juez de la causa que no existían pruebas suficientes, sin tomar en consideración la negativa en tres ocasiones de don ERIC EDGARDO CARIES BUSTAMANTE, a realizarse la prueba pericial biológica (ADN). En este sentido el profesor RENE ABELIUK plantea la. cosa juzgada en los juicios de filiación, sólo en relación a las sentencias definitivas aue en ellos se dictaren, respecto de la declaración de verdadera o falsa paternidad o maternidad del hijo, concluyendo que en tanto estén basadas en autoridad de cosa juzgada producen los efectos del artículo 315 del Código Civil, originándose la acción o excepción de cosa juzgada del artículo 175 del Código de Procedimiento Civil ("La Filiación y sus efectosTomo 1 Editorial Jurídica- año 2000 página 138). La doctrina nacional entiende que las "ideas fuerza" de la reforma introducida por la Ley N° 19.585, son tres: A) El derecho a la Identidad: esto es, el derecho de toda persona a conocer sus orígenes, a saber quiénes son sus padres, pues sólo así sabrá esa persona quién es; principio que está contenido en la Convención sobre los Derechos del Niño, cuyo artículo 7, punto 1°, señala: "El niño será inscripto inmediatamente después de su nacimiento y tendrá derecho desde que nace a un nombre, a adquirir una nacionalidad, a conocer a sus padres y a ser cuidado por ellos", y que se concreta en la citada ley al establecer una amplia posibilidad de investigación de la paternidad y la maternidad; B) El trato Igualitario a todos los hijos, de modo que no sean discriminados cualquiera que sea la circunstancia de su nacimiento, es decir, sean habidos dentro o fuera del matrimonio; lo anterior, en cumplimiento a lo prevenido en el artículo 1°, inciso 1°, de nuestra Carta Fundamental, que prescribe que "Las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos", y que "es deber del Estado asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional", y dar cumplimiento a los diversos tratados ratificados por Chile, que su artículo 5° obliga a respetar, entre ellos, el Pacto de San José de Costa Rica que en su artículo 17 N°5 establece que "La ley debe reconocer iguales derechos tanto a los hijos nacidos fuera del matrimonio como a los nacidos dentro del mismo"; y C) Supremacía del interés superior del niño, lo cual supone considerarlo como sujeto de derecho, procurando su mayor realización espiritual y material posible, guiarlo en el ejercicio de sus derechos esenciales conforme su edad y desarrollo, adecuándose de ese modo a -o o lo consignado en (a Declaración de los Derechos del Niño, proclamada por la Organización de las Naciones Unidas en el año 1959, en orden a que "El interés superior del niño debe ser el principio rector de quienes tienen la responsabilidad en su O i¿ lyf ¿ educación y orientación; dicha responsabilidad incumbe en primer término a sus padres."; En consecuencia, se debe inferir que la Institución de la cosa Juzgada no tiene aplicación en un caso como el sub lite, en la medida que aparece erigiéndose como un verdadero obstáculo al ejercicio del derecho a la Identidad, esto es, al derecho que le asiste a la parte demandante a conocer su origen biológico, y que, como se señaló, está reconocido en la Convención de los Derechos del Niño, instrumento internacional que forma parte de lo que la doctrina denomina "bloque de constitucionalidad", atendido lo establecido en el artículo 5, inciso 2°, de la Constitución Política de la República; más aún si la sentencia que el recurrente invoca para alegar la cosa juzgada, y que se dictó en el proceso rol Rol N° 5628-2004, del Segundo Juzgado Civil de Concepción, no resolvió el conflicto sometido a la consideración del tribunal, pues, como se lee en el de la sentencia de primera instancia, la demanda incoada en dicha causa fue rechazada porque la prueba rendida no fue idónea para acreditar la paternidad, sin que tampoco permita excluirla. En este sentido se ha pronunciado la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia de San José de Costa Rica, en el marco de una consulta judicial facultativa de constitucionalidad formulada por un Tribunal Inferior (Exp: 07-000647-0007-CO Res. N° 2007-011158, del 1° de agosto de 2007), expuso que el recurso de revisión que puede ser interpuesto por los justiciables interesados, cuando les fue Imposible, por el estado de desarrollo de la técnica o de la ciencia contar con la prueba de marcadores genéticos o se lo Impidió cualquier otra razón de fuerza mayor, no debe estar sujeto a ningún plazo de caducidad, puesto que, cualquier restricción al respecto vacía de contenido el derecho fundamental y humano "a saber quiénes son sus padres". Los derechos fundamentales y humanos, en sus contornos o extremos, estrictamente, extrapatrimoniales, en cuanto tienen fundamento en la dignidad humana intrínseca a la persona, no caducan o prescriben por razón del tiempo, el- principio de la seguridad jurídica, aunque de profunda raigambre constitucional, no puede ser antepuesto para concluir lo contrario, puesto que, los derechos fundamentales y humanos son la base del entero ordenamiento jurídico y, según la reglas de la hermenéutica constitucional, en caso de colísionar con un principio constitucional, se les debe otorgar un valor preferente, adicionaImente, tales derechos deben ser objeto de una interpretación extensiva y progresiva E. JURISPRUDENCIA NACIONAL 1. Sentencia rechaza Casación en el Fondo. Caratulado : JARJALAKIS CASTRO ELY CON MUSALEM TAPIA JORGE PATRICIO Fecha de Resolución : 24 de Septiembre de 2013 .§ Emisor : Excelentísima Corte Suprema de Justicia, Sala Cuarta (Mixta) ^ Rol :N° 3.784-2013. . <••> * ' í '• ' • ( ! " ' < • V U1 v t-* ¿i. f v Rol :N° 3.784-2013. "Santiago, veinticuatro de septiembre de dos mil trece. Vistos: Ante el Juzgado de Familia de La Serena, en autos RIT C-995-2011, RUC 11203902737, doña Ely María Jarjalakis Castro, en representación de su hija Savka Galle Jarjalakis Jarjalakis, dedujo demanda de reclamación de paternidad en contra de don Jorge Patricio Musalem Tapia, solicitando que establecida que sea la paternidad se ordene la subinscripción en el Registro Civil correspondiente, y se prive al padre de la patria potestad y, en general, de todos los derechos que por el ministerio de la ley se le confieren respecto de la persona y bienes del hijo o de sus descendientes, con costas. Por sentencia de once de enero último se rechazó la excepción dilatoria de cosa juzgada opuesta, sin costas, y se acogió la demanda declarándose que Savka Galíe Jarjalakis Jaq'alakis es hija de filiación no matrimonial de don Jorge Patricio Musalem Tapia, sin perjuicio de su filiación materna ya determinada, y se lo privó de la patria potestad y de todos los derechos que por el ministerio de la ley se le confieren respecto de la persona y bienes de su hija, sin costas; la que fue confirmada por la Corte de Apelaciones de La Serena por sentencia datada el veinticinco de abril de dos mil trece. En contra de esta última sentencia el demandado dedujo recurso de casación en la forma y en el fondo, siendo el primero declarado inadmisible, ordenándose, respecto del segundo, traer los autos en relación, según consta a fojas 62. Considerando: 1° Que, en primer lugar, el recurrente denuncia que los sentenciadores violaron lo que dispone el artículo 177 del Código de Procedimiento Civil , en relación con lo que previene el artículo 304 del mismo cuerpo legal, por no aplicar la excepción de cosa juzgada opuesta en tiempo y forma. Señala que entre las mismas partes se siguió un juicio con la finalidad que se declarara que Savka es hija no matrimonial, en el que se dictó sentencia desestimándose la demanda, la que se encuentra firme y ejecutoriada, por lo que provoca el efecto de cosa juzgada dado que entre aquel . proceso y el actual se da la triple identidad; alegación que fue rechazada por estimarse que la sentencia no resolvió el asunto de la paternidad biológica de la niña, lo que constituiría un obstáculo para reconocer el referido efecto, y porque lo que corresponde aplicares el derecho a la identidad a que tiene derecho la niña. Afirma que dicho derecho no tiene el carácter de permanente, sino que tiene como límite la cosa juzgada, lo que significa que ejercido ante tribunal competente y resuelto no se puede volver a ejercerlo una y otra vez, de lo contrario no se podría reclamar certeza judicial ni jurídica, tampoco invocar la paz social. El derecho a la identidad, que « sustenta el fallo, transgrede el artículo 177 del Código de Procedimiento Civil, también o el artículo 7, inciso 2°, de la Carta Fundamental, que prohibe a los magistrados entrar «o de nuevo al conocimiento y resolución de asuntos ya resueltos; transgresión que se 10 manifiesta en el hecho que la sentencia impugnada decide un asunto ya determinado por los tribunales competentes. En segundo lugar, afirma que el examen practicado por el Servicio Médico Legal es nulo de nulidad absoluta, ya que el tribunal declaró que la "notificación que ordenaba practicarlo,' como la practica misma del examen, son nulos" (slc), por consiguiente, se aplicó una disposición que no resulta eficaz, el artículo 199 del Código Civil . Indica que el tribunal de primera instancia se formó la convicción que el demandado fue debidamente informado y requerido para la práctica de la prueba pericial biológica, y, por ende, considera como suficientes las circunstancias tácticas que dan lugar a la aplicación del apercibimiento del artículo 199 del Código Civil , y sobre la base de ese medio tuvo por acreditada la paternidad respecto de la menor. En seguida, el recurrente afirma, en el capítulo que se titula "Forma como se ha producido la infracción y causal de casación", que en la sentencia se contravinieron los artículos 195, 199, 199 bis del Código Civil ; 38, 48 y 417, inciso final, y 134 y 177 del de Procedimiento Civil; y 1, inciso 3°, 18, 23 y 32 de la Ley N° 19.968, lo que constituye causal de casación en el fondo porque se acogió la demanda y se desestimó la alegación de cosa juzgada y, además, porque se aplicó la presunción del artículo 199 del Código Civil . En esta parte del recurso se señala qué debe entenderse por las llamadas "leyes reguladoras de la prueba", y que la norma del artículo 199 del Código Civil es una que provoca la alteración de la carga de la prueba al establecer una presunción legal, pero para que opere es menester que se den los presupuestos que señala, y, en el caso sub lite, la notificación que se practicó es nula, lo que no puede conducir a una prueba válida sino a una ilegítima y falsa. Lo anterior, importa infringir las leyes reguladoras de la prueba, y los artículos 32 y 45 de la Ley N° 19.968, 417 y 48 del Código de Procedimiento Civil, también el artículo 195 del Código Civil que posibilita la investigación de la paternidad o maternidad en la forma y con ios medios previstos en los artículos que siguen, de forma que se la viola cuando se aplica erradamente los artículos 199 y 199 bis del citado código. Añade que si su representado no tuvo conocimiento del día y hora en que debía asistir a la prueba pericial biológica, malamente puede estimarse que se negó a practicársela, por lo mismo no pudo hacerse efectiva la presunción legal . de paternidad, más aún si no se cumplió con el requisito del inciso 5° del artículo 199 del Código Civil , por lo tanto, de haberse aplicado acertadamente la ley procesal especial debió tenerse por incumplida la exigencia de la notificación y del apercibimiento, no debió aplicarse la presunción legal y, en ese contexto, correspondía que se desestimara la demanda por falta de pruebas. Solicita, en definitiva, se acoja el recurso e invalidándose la sentencia impugnada se dicte una de reemplazo que resuelva que se hace lugar a la excepción de cosa juzgada, y, además, que desestime la demanda de reconocimiento por no haberse acreditado legalmente la paternidad, con costas; o _c a A í) A ft f 4. \i \ U l> A i 2° Que de la atenta lectura del libelo se advierte que son dos los errores de derecho que se denuncian cometidos por los sentenciadores del fondo. El primero, en concepto del recurrente, se habría configurado porque se rechazó la excepción de cosa juzgada, razón por la que afirma que se conculcó la norma contenida en el artículo 1 77 del Código de Procedimiento Civil , en relación a lo que previenen los artículos 304 del mismo código y 7, inciso 2°, de la Carta Fundamental, y, el segundo, porque se acogió la demanda de reclamación de paternidad en base a una normativa que resultaba inaplicable al caso sub lite -la contemplada en los artículos 199 y 199 bis del Código Civil -, atendido a que no se configuraron los presupuestos que señalan, por lo que se dan por infringidos los artículos 195, 199, 199 bis del Código Civil ; 38, 48 y 417, inciso final, y 134 y 177 del de Procedimiento Civil; y 1, inciso 3°, 18, 23 y 32 de la Ley N° • 19.968; . 3° Que, en forma previa, se debe tener presente que la Ley N° 19.585, de 26 de octubre de 1998, introdujo en materia de filiación importantes modificaciones, y su objetivo fundamental fue sustituir el régimen de filiación existente a la época por otro que terminara con las diferencias entre hijos legítimos e ilegítimos, estableciendo un trato igualitario para todos ellos. Según da cuenta la historia de la ley, en el Mensaje Presidencial, las reformas se articularon sobre la "idea de igualdad", para eliminar la diferencia entre los hijos nacidos dentro o fuera del matrimonio, estableciendo un estatuto igualitario cualquiera sea el origen de su filiación. En base a lo anterior, y según da cuenta dicho mensaje, se consagraron los siguientes principios: el de la libre investigación de la paternidad y la maternidad y el de la posibilidad de utilizar toda clase de pruebas, incluidas las biológicas, para determinar la paternidad y maternidad. Así, se sostuvo por el Ejecutivo que la virtud esencial del proyecto era la de "pretender armonizar nuestro sistema legal, con el derecho a la plena igualdad ante la ley, que la Carta Fundamental reconoce y asegura a todas las personas, así como con los principios contenidos en los instrumentos internacionales relativos a los derechos esenciales de la persona, que los órganos del Estado se han comprometido no sólo a proteger, sino a promover." En ese contexto, la doctrina nacional entiende que las "¡deas fuerza" de la reforma introducida por la Ley N° 19.585, son tres: A) El derecho a la identidad: esto es, el derecho de toda persona a conocer sus orígenes, a saber quiénes son sus padres, pues sólo así sabrá esa persona quién es; principio que está contenido en la Convención sobre los Derechos del Niño, cuyo artículo 7, punto 1°, señala: "El niño será inscripto inmediatamente después de su nacimiento y tendrá derecho desde que nace a un nombre, a adquirir una nacionalidad, a conocer a sus padres y a ser cuidado por ellos", y que se concreta en la citada ley al establecer una amplia posibilidad de investigación de la paternidad y la maternidad; B) El trato igualitario a todos los hijos, •«r .« de modo que no sean discriminados cualquiera que sea la circunstancia o nacimiento, es decir, sean habidos dentro o fuera del matrimonio; lo anterior, en £ cumplimiento a lo prevenido en el artículo 1°, inciso 1°, de nuestra Carta Fundamental, c de su .'i ? V í l í) í i,' Ir O u O 1 \ «\¿**'Vs-CJfc*' senos", y que que prescribe que "Las personas nacen libres e iguales en dignidad y deredhos", que "es deber del Estado asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional", y dar cumplimiento a los diversos tratados ratificados por Chile, que su artículo 5° obliga a respetar, entre ellos, el Pacto de San José de Costa Rica que en su artículo 17 N°5 establece que "La ley debe reconocer iguales derechos tanto a los hijos nacidos fuera del matrimonio como a los nacidos dentro del mismo"; y C) Supremacía del interés superior del niño, lo cual supone considerarlo como sujeto de derecho, procurando su mayor realización espiritual y material posible, guiarlo en el ejercicio de sus derechos esenciales conforme su edad y desarrollo, adecuándose de ese modo a lo consignado en la Declaración de los Derechos del Niño, proclamada por la Organización de las Naciones Unidas en el año 1959, en orden a que "El interés superior del niño debe ser el principio rector de quienes tienen la responsabilidad en su educación y orientación; dicha responsabilidad incumbe en primer término a sus padres."; 4° Que, en consecuencia, se debe Inferir que la institución de la cosa juzgada no tiene aplicación en un caso como el sub lite, en la medida que aparece erigiéndose como un verdadero obstáculo al ejercicio del derecho a la identidad, esto es, al derecho que le asiste a la parte demandante a conocer su origen biológico, y que, como se señaló, está reconocido en la Convención de los Derechos del Niño, instrumento internacional que forma parte de lo que la doctrina denomina "bloque de constitucionalidad", atendido lo establecido en el artículo 5, inciso '2°, de la Constitución Política de la República; más aún si la sentencia que el recurrente invoca para alegar la cosa juzgada, y que se dictó en el proceso rol 730-2000 seguido ante el Segundo Juzgado de Letras de la Serena, no resolvió el conflicto sometido a la consideración del tribunal, pues, como se lee en el motivo noveno de la sentencia de primera instancia reproducido por la de segunda, la demanda incoada en dicha causa fue rechazada porque "...la prueba rendida no fue idónea para acreditar la paternidad, sin que tampoco permita excluirla...". Lo anterior, conduce a la conclusión que los jueces del fondo no han conculcado las normas contenidas en los artículos 177 y 304 del Código de Procedimiento Civil y 7, inciso 2°, de la Carta Fundamental al desestimar la excepción de cosa juzgada, opuesta como dilatoria y perentoria; 5° Que, en lo que concierne ai segundo capítulo del recurso, como de la lectura del motivo undécimo, letra D}, de la sentencia de primera instancia, reproducido por la de segundo grado, se advierte que el demandado concurrió al Servicio Médico Legal a entregar muestras de sangre, con las que dicho organismo, unidas a las tomadas a la niña Savka y a su madre, y previo análisis de rigor, determinó que es posible establecer una probabilidad de paternidad de 99,95 %, lo que equivale a paternidad biológica acreditada, lo que significa necesariamente que aquél fue debidamente notificado de la resolución que dispuso dicha prueba biológica y de aquella que le ordenaba concurrir al Servicio Médico Legal para entregar las muestras de sangre pertinentes, por CCS016 lo mismo, que se dio estricto cumplimiento a lo que dispone el artículo 199 bis del Código Civil , y que para resolver el asunto controvertido no se dio aplicación a la presunción legal establecida en ei artículo 199 del mismo, se debe concluir que los jueces del fondo no infringieron las citadas disposiciones legales, tampoco las otras mencionadas en el motivo segundo de esta sentencia, en ia medida que todas están destinadas a dar sustento al postulado del recurso en orden a que se acogió la demanda aplicando de manera errada la presunción legal consagrada en el artículo 199 del referido cuerpo legal; 6° Que, atendido lo expuesto, el recurso de casación en ei fondo no puede prosperar y debe ser rechazado. Por estas consideraciones y de conformidad, además, con lo que disponen los artículos 764 y siguientes del Código de Procedimiento Civil, se rechaza el recurso de casación en el fondo Interpuesto en contra de la sentencia de veinticinco de abril último dictada por una sala de la Corte de Apelaciones de La Serena. Acordada con el voto en contra de la Ministro señora Egnem y del Abogado Integrante señor Lecaros, quienes fueron del parecer casar de oficio la sentencia impugnada por las causales del artículo 768 N° 5 en relación con el artículo 170 N° 4 del Código de Procedimiento Civil, esto es por falta de consideraciones de hecho y de derecho, que resultaban indispensables para la decisión del conflicto, y ello por las siguientes razones: 1.) Que para abordar las peticiones que configuran el objeto del presente juicio, entre cuyas materias figuraba la excepción de cosa juzgada era previo y perentorio determinar si la sentencia definitiva había sido o no dictada en el marco de un proceso seguido entre legítimos contradictores, por constituir este aspecto un elemento básico y primordial de toda acción en general, y en particular de la deducida en estos autos. 2.) Que el examen antes referido no ha podido soslayarse por los jueces para la aplicación material del derecho aún cuando no se hubiera formulado petición de parte sobre e] particular, pues aquella aplicación íntegra precisamente el marco de las obligaciones principales del juzgador tal como lo ha resuelto reiteradamente esta Corte Suprema (verbigracia, causas Rol N° 4213-2006 y 5615-2005) 3.) Que de la mayor relevancia resultaba en la especie el estudio y exposición de raciocinios atingentes a la legitimación pasiva,, desde que, como quedó asentado en el fundamento décimo cuarto del fallo de primer grado, por haber nacido ia menor de autos Savka Galie Jarjalakis Jarjalakis durante la vigencia del matrimonio de su madre con don Ángel Castro Garfn, regía en plenitud la presunción pater ¡s est prevista por el *Z artículo 184 del Código Civil que establece e] estado civil de hijo, el que sólo puede ser 3 cuestionado e impugnado en la forma y con las modalidades que la propia ley -o establece. } A n. ÍH 7 V \j \j \J .i- i 4.) Que en concordancia con lo anterior, si se ha pretendido por la parte actora reclamar la paternidad del demandado Jorge Patricio Musalem Tapia, ha debido intentarse conjuntamente las acciones de impugnación en contra de Ángel Castro Garín y de reclamación en contra de Jorge Patricio Musalem Tapia, como lo ordena perentoriamente el artículo 208 del Código Civil , salvaguardando de este modo el principio de indivisibilidad del estado civil. 5. ) Que determinados por ley, -de acuerdo a lo dispuesto entre otras normas, por los artículos 205, 208 y 214 del Código Civil -, los legítimos contradictores para sustanciar y resolver lo conveniente a la paternidad de la menor Savka Galie Jarjalakis Jarjalakls, no era posible otorgar la tutela impetrada si no se han ejercido las acciones precedentemente indicadas conjunta y, respectivamente, en contra de Jorge Patricio Musalem Tapia y Ángel Castro Garín, desde que como se ha visto se requería expresamente de una duplicidad de acciones y de un litis consorcio pasivo necesario, no quedando al arbitrio de la parte actora la determinación y elección del sujeto pasivo. 6.) Que al omitirse en el fallo impugnado las consideraciones indispensables para despejar un presupuesto básico de la acción como única vía para posibilitar el análisis de las alegaciones objeto del debate, se ha incurrido en su dictación en la causal de casación ya indicada, lo que impone su invalidación de oficio por no resultar posible otra forma de remediar el vicio ya explicitado. 7.) Que observando idénticas falencias a las ya especificadas, en el fallo de primer grado, los disidentes fueron de parecer de dictar sentencia de reemplazo revocando en todas sus partes esa decisión y, teniendo únicamente presente lo hasta aquí razonado. Regístrese y devuélvase. Redacción de la ministra señora Gloria Ana Chevesich Ruiz y de la disidencia, sus autores. Rol N° 3.784-2013 Pronunciado por la Cuarta Sala de la Corte Suprema integrada por los Ministros señora Rosa Egnem S., señor Juan Fuentes B., señora Gloria Ana Chevesich R., y los Abogados Integrantes señores Arturo Prado P., y Raúl Lecaros I. No firma el Abogado Integrante señor Prado, no obstante haber concurrido a la vista y al acuerdo de la causa, por estar ausente. Santiago, veinticuatro de septiembre de dos mil trece. Autoriza la Ministra de Fe de la Excma. Corte Suprema. En Santiago, a veinticuatro de septiembre de dos mil trece, notifiqué en Secretaria por el Estado Diario la resolución precedente. o _c a ^ 1" L O F. JURISPRUDENCIA EN DERECHO COMPARADO. 1. Jurisprudencia Argentina. Sentencia de la Sala G de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil que rechazó la excepción de cosa juzgada en un juicio de filiación post mortem, ya que la prueba de ADN no existía a esa época. (http://decursos.wordpress.eom/2013/n/04/cosa-juzgada-y-adn/) SALA G - 13971/2012- "B., E. j. C/ G. B., J. E. (SUCESIÓN DE) S/RLIAC1ON"J.2. R. 625.297. Buenos Aires, 5 de septiembre de 20] 3. Y VISTOS: I.- Arriban los autos al Tribunal, a efectos de tratar el recurso de apelación interpuesto por los demandados contra la resolución de fs. 226/8 que desestimó la excepción de cosa juzgada e impuso las costas en el orden causado. La memoria se presentó a fs. 234/42 y fue contestada por la actora a fs. 246/8. A fs. 258/60 se pronunció el Representante del Ministerio Público Fiscal ante la Alzada, quien propicia la revocación del decisorio en crisis. II.- La Sra. E. J. B. promovió esta demanda en la que procura la reclamación de filiación extra matrimonial post mortem, invocando que es hija de quien fuera en vida J. E. G. B.. Al presentarse a estar a derecho, los legatarios opusieron en el marco de su responde la excepción de cosa juzgada (v. punto tercero del escrito de fs. 1 13/34), invocando la existencia de una acción idéntica -ya resuelta y rechazada por sentencia firme del día 16.08.61- seguida por la madre de la actora en este nuevo juicio, durante la menor edad de la citada. La actora, al contestar la excepción, postula el rechazo del planteo, poniendo basas en que al sustanciarse y decidirse la acción interpuesta por su progenitora no se contaba con la prueba biológica de ADN, y que en tal escenario, cede la inmutabilidad de la cosa juzgada, ante la posibilidad de contar ahora con dicho medio probatorio, en el marco de una acción de estado. El Sr. Juez de la instancia de grado rechazó la defensa por entender que ante la magnitud del derecho relativo a la identidad de las personas, en función de los lineamientos del texto constitucional y los tratados internacionales de igual jerarquía, dada la posibilidad de concretar en la actualidad la prueba de ADN, inexistente en la época en que se llevó a término el pleito anterior, debe prevalecer el derecho de la pretensora por sobre la -no menos importante, mas no absoluta- autoridad de la cosa juzgada. III.- En orden a la controversia que se ha suscitado en los presentes obrados, se ha ^ precisado que la limitación temporal de la cosa juzgada se produce cuando por •o determinadas causas el devenir del tiempo permite alterar lo decidido. En ciertas 1 ocasiones, cuando se trastruecan las circunstancias que dieron origen al fallo, se ^. admite que semejante mutación lleva consigo no la ineficacia absoluta del decisorio, eo- o» 'ü u V .i t/ pero sí la posibilidad de que ésta deje de ser inatacable y se permita abrir un nuevo litigio sobre el tema central antes juzgado aunque con distintos elementos tácticos. Se estará, entonces, en presencia -como dice Guasp- de una inequívoca limitación d'e la cosa juzgada, que es factible considerar como un límite de carácter temporal de la misma (Hitters, Juan Carlos, "Alcances de la cosa juzgada en los denominados procesos sumarios propiamente dichos", en Libro de ponencias presentadas al XI Congreso Nacional de Derecho Procesal, T I, página 328). Ya Chiovenda explicaba que nada tiene de irracional en sí mismo, que la ley admita la impugnación de la cosa juzgada: la autoridad misma de la cosa juzgada no es absoluta y necesaria, sino establecidas por consideraciones de utilidad y oportunidad; de tal manera, que estas mismas consideraciones pueden a veces aconsejar su sacrificio, para evitar el desorden y el mayor daño que se derivaría de la conservación de una sentencia Intolerablemente injusta (Principios de Derecho Procesal, Ed. Reus, Madrid, 1925, t. II, p. 51 1). Carnelutti señalaba en esa línea de pensamiento que- cuando la materia de la decisión es de de tal índole que su injusticia aparezca como socialmente intolerable, la justicia puede prevalecer sobre la certeza, hasta el extremo de excluir en todo caso la inmutabilidad (Sistema de Derecho Procesal Civil, Ed. Uteha Argentina, Buenos Aires, 1 944). Couture también ha expresado que la necesidad de firmeza debe ceder, en determinadas condiciones, ante la necesidad de que triunfe la verdad. La cosa juzgada no es de razón natural. Antes bien, la razón natural parecería aconsejar lo contrario: que el escrúpulo de verdad sea más fuerte que el escrúpulo de certeza; y que siempre, en presencia de una nueva prueba o de un nuevo hecho fundamental antes desconocido, pudiera recorrerse de nuevo el camino andado para restablecer el imperio de la justicia (Fundamentos del Derecho Procesal CMl, Aniceto López Editor, Buenos Aires, 1 942, p. 245). Bldart Campos ha afirmado que por la inserción que desde el punto de vista procesal tiene la cosa juzgada en el derecho de familia, con perspectiva constitucional, ha de poder revocarse la cosa juzgada en materia de paternidad si nuevas técnicas posteriores a una sentencia hacen viable Indagar una filiación biológica que no era posible acreditar de esa manera al momento en que fue dictado el fallo (Tratado Elemental de Derecho Constitucional Argentino, Edlar, Buenos Aires, 2009, 1. 1 1- A, p. 62). Así, en lo atinente a los procesos de filiación, la doctrina procesalista ha ¡do elaborando una nueva causal de revisión de la sentencia firme ante la evolución de las pruebas científicas y en aquellos casos en que se indaga la verdad biológica. Básicamente fundado en la especial relatividad de los decisorios en materia de derechos de familia; en el interés social y por ende el orden público involucrados !* cuando se trata del derecho a conocer la identidad de origen; en la preponderancia de conocer la verdad material objetiva en temas de identidad, en mérito a la jerarquía otorgada en la hermenéutica constitucional, por sobre la seguridad jurídica; y en la existencia de un medio probatorio que da certeza cuasi absoluta como lo es el estudio (Wft'¿ft V V \J V hJ 1j de ADN (v. Andrade Antonio; "El Derecho a conocer "la verdad biológica" en conflicto con otros derechos fundamentales"; apartado XI "Derecho a la Verdad Biológica y la cosa juzgada", citas allí efectuadas y antecedentes mencionados; publicado en DJ del! 7.06.09). Héctor Eduardo Leguisamón, al abordar el asunto, expresó que establecida la importante repercusión de la prueba biológica de ADN en las pretensiones de filiación, interesa analizar la posibilidad de que, en su virtud, pueda ser revisada una sentencia que haya pasado en autoridad de cosa juzgada, sea que hubiese determinado, o desestimado, la paternidad o la maternidad reclamada o impugnada. La cosa juzgada en las pretensiones de filiación, al menos como excepción a la regla de inmutabilidad, debe tolerar su revisión, no ya por ser el producto de un proceso fraudulento o simulado u otras causales aceptadas por la doctrina hipótesis en la cual cabe entenderte incluida dentro de la teoría de la cosa juzgada írrita, sino por haber variado las circunstancias que llevaron a la justicia a determinar o no un determinado estado filiatorio, lo cual se verifica con el advenimiento de las nuevas pruebas científicas. Si una sentencia determinó o desconoció la filiación reclamada o impugnada en su oportunidad según los medios de prueba con los cuales se contaba a la época, el advenimiento de una prueba científica puede demostrar que el estado filiatorio determinado o no en la sentencia no responde a la realidad biológica, y, por tanto, puede y debe ser revisada, pues se trata de una cosa juzgada irreal, máxime teniendo en cuenta que comporta una cuestión que, a más de las partes involucradas, tiene interés la sociedad toda (v. Ponencia del citado autor, en Comisión de Derecho Procesal Civil; "Prueba científica de ADN vs cosa juzgada en procesos de filiación. (www.fileden.com/.../Artícub%20pnenecia%20PRUEBA%20cintÍfic...24/08/20l-iV) revisión de la cosa juzgada en materia de filiación). En idéntico sentido se ha sostenido que, al encontrarse en colisión estos dos valores constitucionalmente protegidos, la seguridad jurídica por un lado y el derecho a la identidad, con todos los derechos que el mismo integra, ei segundo debe prevalecer sobre el primero. Ello propicia la adecuación de la verdad jurídica -formal a la verdad biológica, la cual, es, al final de cuentas una adecuación vinculada a la dignidad de la persona, la igualdad, la intimidad y el libre desarrollo de la personalidad o autonomía. Es decir, que en este supuesto ei principio de la inmutabilidad de la cosa juzgada debe ceder frente a la máxima preambular de "afianzar la justicia", traducida e el caso concreto en el respeto al derecho de la identidad y dignidad de la persona (Milagros Pierri Alfonsín; "Filiación y Cosa Juzgada"; p3.usal.edu.ar/index.php/aequitas/article/download/l 502/1929). En similar orden de ideas se han pronunciado Kielmanovich, Derecho Procesal de Familia, Ed. Lexis Nexis, Buenos Aires, 2007, p. 481; Lloverás y Orlandi, "Costa Rica. TÍ » Revisión de la cosa juzgada en las sentencias de filiación", en Revista Derecho de <£ Familia, 2008-1, p. 196; D'Antonio, "El Derecho a la Identidad y la protección jurídica del JC g menor", El Derecho t. 195, p. 1297; Krasnow, "El Derecho de acceso a la verdad biológica no tiene límite de tiempo", en La Ley 2007-A, p. 444; Maurino, "Revisión de la cosa juzgada. Acción autónoma de nulidad", en La Ley 2001-B, p. 1131; Fama, "Filiación, pruebas biológicas y revisión de la cosa juzgada", en Revista Derecho de Familia, 36, marzo/abril 2007, p.. 1; Fernández, "El derecho a una filiación 'verdadera'. La revisión de la cosa juzgada en materia de filiación a la luz de los derechos humanos fundamentales: hacia una cosa juzgada 'justa1 ", en APBA, 2009-11- 1253; Tierra, "medios de revisión de la cosa juzgada en el Derecho de Familia", en Jurisprudencia Argentina 2006-1, p. 1314; Carbone, "Impugnación de la sentencia firme en el proceso civil y en el proceso penal: nociones generales", en Jurisprudencia Argentina 2005-1V, p. 1153). En esta relación de ideas, en el precedente fallado por la Sala "B" de esta Cámara, "G.R.M.c/EJ.M. s/filiación", del 21.03.05, cuya analogía al supuesto de autos es esbozada como principal argumento por la quejosa a fin de desvirtuar la posición del colega de la instancia de grado (en cuanto precisó que la decisión que adoptó la mayoría encontró una plataforma disímil a la que acaece en estos obrados); no es ocioso poner de relieve la trascendencia de los argumentos esgrimidos por el Vocal disidente -Dr. Sansó- para motivar su divergencia a la opinión de la mayoría, en orden a las premisas esbozadas en los parágrafos anteriores de este pronunciamiento. En los considerandos de su voto, el recordado Magistrado de este Tribunal, tras señalar el interés social de la averiguación de la verdad en los procesos de filiación, puso de relieve que: "Los valores en juego en este asunto trascienden las meras referencias teóricas como las especulaciones que la ciencia procesal pueda formular sobre las bondades y beneficios derivados de la inmutabilidad de los fallos. El derecho regula la dinámica de las relaciones humanas; no puede permanecer ajeno a la realidad y por más que se pregone que la sentencia debe ser inmutable por razones de política y de seguridad, la sentencia, que no deja de ser un producto cultural, no es ajena a esas variaciones". En el orden Provincial, la 'Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Dolores, falló en un caso muy similar (se trató de una acción de filiación promovida por la madre de la actora -entonces menor de edad-, rechazada por falta de pruebas), desestimando la excepción de cosa juzgada en el nuevo pleito, ante la importancia de la prueba biológica y las garantías reconocidas por la Constitución Nacional y los numerosos tratados de índole constitucional (Art. 75 inc. 22 y 23 Constitución Nacional, Arts. 7 y 8 de la Convención sobre los Derechos del Niño, Art. XVII de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, Art. 6 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, Arts. 3 y 19 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos -Pacto de San José de Costa Rica-, Arts. 16 y 24 del Pacto Internacional por los Derechos Civiles y Políticos, Art. 10.3 del Pacto Internacional por los Derechos •^ Económicos, Sociales y Culturales y normas de ia Constitución Provincial). En el precedente en análisis, al abordar sus fundamentos adherentes al voto en ™ primer término, el Dr. Hankovits sostuvo que: "...la cosa juzgada en la cuestiones de £ estado de las personas en general, y el estado de familia en particular, reviste ribetes _c f\. ¿} I ] propios en cuanto a los límites subjetivos de la misma y en razón del carácter que asume el derecho en cuestión. El estado es un atributo de la personalidad y como tal es único, necesario, imprescriptible, inalienable, intransmisible, indivisible y además de orden público. Por ello la sentencia hace cosa juzgada no sólo contra quienes han intervenido en el proceso sino también erga omnes, excepto contra el legítimo contradictor primario, salvo -claro está- que éste haya tomado parte en el juicio". (Cám. Apel. Civil y Comercial de Dolores; Autos: Pme c/ MGJM s/Filiac¡ón; 16-08-201 1; IJ-L-ÓÓÓ). Por otro lado, en orden a la trascendencia del asunto, resultan ilustrativos los precedentes de Tribunales Americanos en la materia contestes con el temperamento que por la presente se sostiene. La Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia de San José de Costa Rica, en el marco de una consulta judicial facultativa de constitucionalidad formulada por un Tribunal Inferior (Exp: 07-000 647-0007-C O Res. N° 2007-01 1 158, del 1° de agosto de 2007), expuso que el recurso de revisión que puede ser interpuesto por los justiciables interesados, cuando les fue imposible, por el estado de desarrollo de la técnica o de la ciencia contar con la prueba de marcadores genéticos o se lo impidió cualquier otra razón de fuerza mayor, no debe estar sujeto a ningún plazo de caducidad, puesto que, cualquier restricción al respecto vacía de contenido el derecho fundamental y humano "a saber quiénes son sus padres". Los derechos fundamentales y humanos, en sus contornos o extremos, estrictamente, extrapatrimoniales, en cuanto tienen fundamento en la dignidad humana intrínseca a la persona, no caducan o prescriben por razón del tiempo, el principio de la seguridad jurídica, aunque de profunda raigambre constitucional, no puede ser antepuesto para concluir lo contrario, puesto que, los derechos fundamentales y humanos son la base del entero ordenamiento jurídico y, según la reglas de la hermenéutica constitucional, en caso de colisionar con un principio constitucional, se les debe otorgar un valor preferente, adicionalmente, tales derechos deben ser objeto de una interpretación extensiva y progresiva (V. http://sitios.poderjudÍc¡aLgo.cr/salaconstÍtucional/Constitucíon/20Politica/Sentencias/2 007/07-111 58.htm). El Pleno del Tribunal Constitucional del Perú, en pronunciamiento dictado el día 1 7 días del mes de setiembre de 2010, afirmó que, si bien es cierto que la cosa juzgada constituye una de las expresiones básicas de todo Estado de Derecho, también lo es que dicho atributo se caracteriza no sólo por su contenido formal, sino también por poseer un contenido material, compatible con la vigencia plena y efectiva de los derechos que la Norma Fundamental reconoce. De este modo, la cosa juzgada sólo es tal, en tanto se complementa con el cuadro de valores materiales proclamado desde la Constitución. En el presente caso, sin embargo, se aprecia que lo que se invoca como cosa juzgada, adolece de una falta de visión integral en relación con el resto de derechos fundamentales; esto es: el derecho a la identidad, que es el atributo específicamente involucrado, es asumido como un simple enunciado carente de contenido a la par que de efectividad práctica. Tal extremo, lleva a la convicción de que la sentencia firme vertida en un proceso de filiación con eficacia y autoridad de cosa juzgada, admite el recurso extraordinario de revisión, sine die -sin límite de tiempo- y por una única vez -en tanto no haya variación en los medios probatorios científicos y técnicos que permitan acreditar con mayor exactitud la filiación, particularmente las pruebas biológicas- cuando a la parte interesada le haya sido imposible, por el estado de desarrollo de la técnica y la ciencia, contar con la prueba de marcadores genéticos o alguna causa de fuerza mayor le haya impedido ofrecerla o participaren su producción, (http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2010/00550-2008AA.htmi). Idéntico reconocimiento, ha formulado el Tribunal Europeo de Derechos Humanos con fecha 13/7/06 en la causa "Jaggi c. Suiza", al habilitar un proceso para efectuar un análisis de ADN para determinar la filiación de una persona respecto de la cual ya se había rechazado en 1948 una acción de declaración de paternidad, afirmó que la protección de la seguridad jurídica no es suficiente por sí misma como argumento para privar al requirente de su derecho a conocer su ascendencia (http://echr.coe.Ínt/Docuements/Reports_Recueíl_2006-X.pdf). Por otra parte, no puede soslayarse que la Corte Suprema ha reconocido que no siempre se puede invocar la inmutabilidad de la cosa juzgada y que la seguridad de las sentencias firmes dictadas en el orden civil debe ceder a la razón de la justicia (Fallos: 254:320; 279:54; 281:421; 283:66), como así también que la falta de un procedimiento ritual específico no es óbice para que un órgano jurisdiccional disponga la revisión de sentencias firmes (Fallos: 279:54; 319:2527). Además, el máximo tribunal federal ha puesto de manifiesto, en el marco de los derechos fundamentales, la importancia de la identidad filiatoria (Fallos: 319:3370; 323:91; 328:2870, entre otros) que en el presente Juicio se procura dilucidar, como así también la particular relevancia de la prueba biológica como la que aquí se intenta producir (Fallos: 310:1698), que arroja conclusiones de certeza casi absoluta (Fallos: 318:1573, voto del juez Bossert). La falta de oportunidad para aportar esta decisiva prueba debido a circunstancias del todo ajenas a la demandante y a tos que actuaron en su representación, habilita a quien se encuentra autorizada para accionar en todo tiempo (art. 254 del Código Civil), a hacerlo a despecho del pronunciamiento decidido sin atender - obviamente en razón de la oportunidad en que fue dictado - a este .elemento científico, cuya precisión lindante con la total certeza ha conducido a que el ordenamiento civil prescriba que puede ser decretada aún de oficio (art. 253 del Código Civil). En definitiva, se advierte que el derecho de propiedad que se desprende de la cosa juzgada no es absoluto y admite la limitación que surge de su articulación con el derecho de identidad, sin afectar ni el contenido esencial ni la finalidad propia de cada uno de estos derechos. Por todo lo expuesto, en función de ios antecedentes de doctrina y jurisprudencia evaluados, esta Sala arriba a la convicción de que ante el supuesto excepcional acaecido en autos y la eficacia del medio probatorio que constituye e! único fundamento de la promoción de estos nuevos obrados (inexistente en la época en la que tramitaron los autos promovidos por la Sra. R. F., en ejercicio de la patria potestad de la actora], debe rechazarse el agravio y proseguir el trámite de las actuaciones. Por ende, oído que fue el Sr. Representante del Ministerio Público Fiscal ante la Alzada, se RESUELVE: Confirmar la decisión de fs. 226/8, en todo lo que decide y fuera motivo de agravios, con costas de Alzada en el orden causado, dada la índole de la prestación debatida. Regístrese, notifíquese a las partes por Secretaria, al Fiscal de Cámara en su despacho. Oportunamente cúmplase con la Acordada 24/13 y devuélvase. Carlos A. Bellucci - Beatriz Arean - Carlos A. Carranza Casares 2. Jurisprudencia Peruana. Sentencia del Tribunal Constitucional de Perú de rechazó la excepción de cosa juzgada en un juicio de filiación, (http://www.tc.gob.pe/jurlsprudencla/2010/005502008-AA.html) "EXP. N.° OQ550-2008-PA/TC LIMA RENÉQUENTA CALDERÓN SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL En Lima, a los 17 días del mes de setiembre de 2010, el Pleno del Tribunal Constitucional, integrado por los magistrados Mesía Ramírez, Beaumont Callirgos, Calle Mayen, Eto Cruz, Álvarez Miranda y Urviola Hani, pronuncia la siguiente sentencia ASUNTO Recurso de agravio constitucional interpuesto por don Rene Quenta Calderón contra la resolución de la Sala de Derecho Constitucional y Social de la Corte Suprema de Justicia de la República, de fojas 75 del segundo cuaderno, su fecha 23 de octubre de 2007, que, revocando la apelada, declara improcedente la demanda de autos. ANTECEDENTES Con fecha 22 de agosto de 2006, don Rene Quenta Calderón interpone demanda de amparo contra don Luis Ernesto Rojas Flores, juez del Segundo Juzgado de Familia de Tacna, solicitando que se declare inaplicable y sin efecto legal la Resolución Judicial N.° 14, de fecha 8 de agosto del 2006, recaído en el proceso N.° 2005-1416, O S3 sobre filiación judicial de paternidad extramatrimonial, promovido por doña Regina v I/ Pilco Ayala, mediante la cual se revoca la apelada y declara infundada la excepción de cosa juzgada, disponiéndose la continuación de dicho proceso. A entender del demandante, la resolución cuestionada vulnera sus derechos a la tutela jurisdiccional y al debido proceso, específicamente la cosa juzgada. Refiere que en el año 1995, doña Regina Pilco Ayala interpuso ante el Segundo Juzgado Civil de Tacna demanda sobre filiación extramatrimonial (Exp. N.° 150-95), con el objeto de que el recurrente reconociera como hijo al menor Héctor José Pilco, la misma que es declarada infundada mediante sentencia de fecha 22 de julio de 1996, impugnada por la demandante y confirmada mediante Sentencia de Vista de fecha 15 de noviembre de 1996, pronunciamiento contra el cual la misma citada persona interpuso Recurso de Casación que fue desestimado por la Corte Suprema de Justicia de la República con fecha 7 de julio de 2007. En tales circunstancias y tras agotarse las instancias judiciales y los medios impugnatorios previstos por ley, lo resuelto adquirió carácter de cosa juzgada. Añade que, luego de diez años, ante el Primer Juzgado de Paz Letrado de Tacna, la misma persona, doña Regina Pilco Ayala, nuevamente promueve proceso de filiación judicial de paternidad extramatrimonial (Exp. N.° 2005-1 41 6), con el objeto al igual que en el anterior proceso- de que se reconozca la paternidad del menor antes mencionado, razón por la cual dedujo la excepción de cosa juzgada la cual es declarada fundada en primer grado, disponiéndose la nulidad de actuados y dando por concluido el proceso, fallo judicial que, sin embargo, es recurrido por la demandante y al cual fue avoca el juez emplazado, quien, actuando como de segundo grado, expide la Resolución Judicial N.° 14, mediante la cual, revocando la apelada, se declara infundada la excepción deducida y se dispone la continuación del proceso. Alega que la resolución cuestionada afecta sus derechos fundamentales, toda vez que en ambos procesos civiles se configura la triple identidad, esto es, ambos tienen idénticos sujetos procesales, el mismo objeto e idéntica pretensión, lo que afecta la santidad de la cosa juzgada y violenta la prohibición constitucional de revivir procesos fenecidos con sentencia ejecutoriada. El Procurador Público de los asuntos judiciales del Poder Judicial contesta la demanda alegando que no existe vulneración de derechos fundamentales, dado que la resolución cuestionada fue expedida en estricta aplicación del debido proceso y la tutela procesal efectiva. El juez emplazado contesta la demanda, solicitando que en su oportunidad sea declarada improcedente; añade que si bien en ambos procesos concurren todos los elementos que configuran la triple identidad, toda regla tiene excepciones, como _c a ocurre en el presente caso, en el que existen otras opciones probatorias. En dicho f\- ••• A í-JI b- '-ü 'v/ U í- I contexto, se dispone la continuación del proceso con el objeto de que se practique la prueba de ADN, ya que dicha prueba no existía cuando se archivó el primer proceso. La Sala Civil de la Corte Superior de Tacna, con fecha 1 1 de abril de 2007, declara fundada la demanda, por considerar que la resolución judicial cuestionada afectó la garantía fundamental de la cosa juzgada y quebrantó la prohibición constitucional de revivir procesos fenecidos, lesionando con ello los derechos fundamentales del demandante. La Sala Suprema revisara, revocó la apelada y reformándola declaró improcedente la demanda por considerar que el segundo proceso se basó en un nuevo fundamento de hecho y de derecho no invocado en el primer proceso, esto es, la declaración judicial de filiación extramatrimonial prevista en el inciso 6) del artículo 402.° del Código Civil, mediante medios probatorios distintos. FUNDAMENTOS 1 . El presente proceso constitucional tiene por finalidad que se declare inaplicable o se deje sin efecto la Resolución Judicial N° 14, de fecha 8 de Agosto del 2006, emitida en segundo grado por el Segundo Juzgado de Familia de Tacna, mediante la cual se declara infundada la excepción de cosa juzgada deducida por el recurrente y se dispone la continuación del proceso de filiación extramatrimonial promovido por doña Regina Pilco Ayala contra el actual recurrente. Alegatos del demandante 2. El demandante alega la vulneración de sus derechos fundamentales, específicamente los derechos a la prohibición constitucional de revivir procesos fenecidos y a la inmutabilidad de la cosa juzgada en cuanto atributos integrantes del derecho al debido proceso. Dicha afectación, como ya se ha señalado, se habría concretizado mediante la Resolución Judicial N.° 14 que, revocando la apelada, declara infundada la excepción propuesta y ordena la continuación del proceso de filiación extramatrimonial promovido contra el accionante. Argumenta que la resolución cuestionada es inconstitucional porque la pretensión de la demandante fue resuelta en .forma definitiva en el proceso N.° 150-95, por lo que ordena 'continuar con la tramitación de la segunda causa, esto es, la N.° 2005-1416, implica una violación constitucional, tanto más si ambos procesos son idénticos, pues en ambos concurren la igualdad de petitorio, el objeto y los sujetos procesales. Puntualiza que la sentencia recaída en el proceso 150-95 fue desestimatoria, con pronunciamiento de fondo expedido en doble instancia, mediante el cual se declaró infundada la demanda, el mismo que al ser recurrido ante la Corte Suprema de Justicia de la República, también fue desestimado, siendo que a la fecha dicho fallo se encuentra ejecutoriado. Av f>.v Alégalos del emplazado 3. El magistrado emplazado aduce que no existe afectación de derechos constitucionales ya que si bien ambos procesos son idénticos -en tanto ambos son seguidos por las mismas partes, tienen el mismo petitorio y el interés para obrar es el mismo- el presente caso constituye la excepción de la regla, ya que atendiendo al interés superior del adolescente involucrado, "[n]o es suficiente ampararse en una institución jurídica que protege una verdad formal, para preferir la verdad real y despejar una incertidumbre de relevancia jurídica" (ff. 63/68). La Procuraduría Pública encargada de los asuntos judiciales del Poder Judicial, por su parte, sostiene que la resolución judicial cuestionada se expidió en estricta aplicación del debido proceso y de la tutela procesal efectiva. Materias constitudonalmente relevantes 4. Considera este Tribunal que para la dilucidación de la presente controversia se hace necesario analizar sí la judicatura, en el ejercicio de la función jurisdiccional, ha observado o no los principios y garantías reconocidos en la-Constitución, como límite a su facultad de impartir justicia, o si, por el contrario, al dejar de lado los enunciados previstos en ella, ha afectado de alguna manera los derechos fundamentales invocados. Específicamente, este Colegiado evaluará si en el caso concreto el magistrado emplazado se encontraba obligado a observar la prohibición constitucional de revivir procesos fenecidos y, por ende, respetar la cosa juzgada, o si, como sostiene en su defensa, la controversia hecha de su conocimiento constituye, por sus características, una excepción a la institución de la cosa juzgada. La Inmutabilidad de la cosa juzgada como garantía de la función jurisdiccional 5. El inciso 2) del artículo 139.° de la Constitución reconoce el derecho de toda persona sometida a un proceso judicial a que no se deje sin efecto resoluciones que han adquirido la autoridad de cosa juzgada. En los términos de dicho precepto constitucional, Son principios y derechos de la función jurisdiccional: 2) La "Independencia en el ejercicio de la función jurisdiccional. Ninguna autoridad puede avocarse a causas pendientes ante el órgano jurisdiccional ni interferir en el ejercicio de sus funciones. Tampoco puede dejar sin efecto resoluciones que han pasado en autoridad de cosa juzgada, ni cortar procedimientos en trámite, ni modificar sentencias ni retardar su ejecución (...) [énfasis añadido]. <N D _C 6. Esta disposición constitucional debe interpretarse -Dpor efectos del principio de unidad de la Constitución- de conformidad con el inciso 13) del mismo artículo 139.° de la Ley Fundamental/el cual prevé que Son principios y derechos de la función jurisdiccional: (...) 13. La prohibición de revivir procesos fenecidos con resolución ejecutoriada. La amnistía, el indulto, el sobreseimiento definitivo y la prescripción producen los efectos de cosa juzgada. 7. Se ha sostenido en reiterada jurisprudencia que "mediante el derecho a que se respete una resolución que ha adquirido la autoridad de cosa juzgada se garantiza el derecho de todo justiciable, en primer lugar, a que las resoluciones que hayan puesto fín al proceso judicial no puedan ser recurridas mediante medios ¡mpugnotorios, ya sea porque estos han sido agotados o porque ha transcurrido el plazo para impugnarla; y, en segundo lugar, a que el contenido de las resoluciones que hayan adquirido tal condición, no pueda ser dejado sin efecto ni modificado, sea por actos de otros poderes públicos, de terceros o, incluso, de los mismos órganos jurisdiccionales que resolvieron el caso en el que se dictó" (Cfr. STC N.° 4587-2004-AA/TC Fund. Jurídico 38.°, entre otros). Se ha sostenido también que: "[l]o establecido en una sentencia o resolución que ponga fin al proceso debe ser respetado y no puede ser objeto de nueva revisión, salvo las excepciones previstas" (Cfr. STC N.° 1279-2003-HC/TC, Caso Navarrete Santulón). 8. En consecuencia, lo que corresponde a los órganos jurisdiccionales es ajustarse a lo juzgado en un proceso anterior cuando tengan que decidir sobre una relación o situación jurídica respecto de la cual existe una sentencia firme, derivada de un proceso seguido entre las mismas partes (perfecta identidad), en relación con los mismos hechos y tramitado ante la misma autoridad jurisdiccional. Dicho pronunciamiento constituye, en consecuencia, un antecedente lógico concerniente a aquello que nuevamente se pretende someter a juzgamiento. 9. En este orden de ideas, resultaría legítimo que al existir una sentencia firme que pone fin al proceso seguido entre los mismos sujetos procesales, en la cual el Poder Judicial se pronunció respecto a los mismos hechos, se opte prima facie por declarar que ésta tiene la calidad de cosa juzgada. Sin embargo, el fallo dictado en el presente caso, si bien finaliza el conflicto de intereses de los progenitores, no resuelve en modo alguno el problema del menor, que por su condición de persona humana, constituye el fin supremo de la sociedad y del Estado y a quien, por tanto, le asiste el derecho a la identidad. Tampoco y por otra parte, toma en cuenta un aspecto que más adelante V se detallará y que resulta particularmente capital en el caso de autos; que quien resulta involucrado en sus derechos tiene la condición de menor adolescente y, por consiguiente, debe gozar de una especial protección conforme lo disponen la Constitución y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Derecho a la identidad y cosa juzgada 10. Todos las personas son iguales por el solo hecho de su condición humana y de la dignidad que les es inherente; sin embargo, aun siéndolo, no existen dos o más personas idénticas, pues cada una responde a las características individuales o autodeterminativas que le son propias, y tienen derecho a que las mismas sean respetadas o en su caso, defendidas. En reiterada jurisprudencia se ha subrayado: "[e]I artículo 2.1 de la Constitución expresamente refiere que toda persona tiene derecho a la identidad [...] que comprende [...] el derecho a un nombre -conocer a sus padres y conservar sus apellidos-, el relativo a tener una nacionalidad y la obligación de que el Estado reconozca su personalidad jurídica" (Cfr. STC N.° 02432-2005-PHC/TC, Fund. Jur. 4 Caso Espinoza Joffre) Más aún, se ha precisado que dicho atributo implica: "[u]n doble carácter de rasgos, por un lado es objetivo (nombre, seudónimo, registros, herencia características corporales, etc.) y, por otro, es de carácter subjetivo (ideología, identidad cultural, valores, reputación, etc.), pudiendo ser en muchos casos mucho más relevante este último. En este sentido, este derecho implica distinguir a una persona frente a otras a partir de datos tan elementales como ei nombre o las características físicas, pudiéndose requerir de referentes mucho más complejos como las costumbres o creencias; por consiguiente, este derecho se concibe de una manera integral (Cfr. STC N.° 02273-200Ó-PHC/TC Fund. Jur. 21/23 Caso Quiroz Cabanillas). 11. Si bien es cierto que la cosa juzgada constituye una de las expresiones básicas de todo Estado de Derecho, también lo es que dicho atributo se caracteriza no sólo por su contenido formal, sino también por poseer un contenido material, compatible con la vigencia plena y efectiva de los derechos que la Norma Fundamental reconoce. De este modo, la cosa juzgada sólo es tal, en tanto se complementa con el cuadro de valores materiales proclamado desde la Constitución. •*r ^ o*- En el presente caso, sin embargo, se aprecia que lo que se invoca como cosa juzgada, adolece de una falta de visión integral en relación con el resto de derechos ^ fundamentales; esto es: ei derecho a la identidad, que es el atributo específicamente -u involucrado, es asumido como un simple enunciado carente de contenido a la par _c ü 0)030 __ f % //it+ftff^ */•' que de efectividad práctica. El órgano judicial ni se pronuncia respecto del mismo ni respecto de la eventual implicancia que tendría en la controversia resuelta. Principios universales de orientación proteccionista 12. Los derechos fundamentales, son en buena medida, la concretízación de diversos valores constitucionales. Para el caso materia de análisis, resultan especialmente relevantes el principio de protección especial del niño y el principio del interés superior del niño. 13. El principio de protección especial del niño se erige en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos como un principio fundamental. Inicialmente enunciado en la Declaración de Ginebra sobre los Derechos del Niño, parte de la premisa de que los niños representan el valor más preciado que tiene la humanidad, razón por la cual deben ser especialmente protegidos. De una manera mucho más amplia y precisa este principio fue también reconocido en la Declaración de los Derechos del Niño, cuyo Principio 2 señala que el "niño gozará de una protección especial y dispondrá de oportunidades y servicios (...) para que pueda desarrollarse física, mental, moral, espiritual y socialmente en forma saludable y normal, así como en condiciones de libertad y dignidad". El artículo 25.2 de la Declaración Universal de Derechos Humanos también reconoce este principio al proclamar que la infancia tiene "derecho a cuidados y asistencia especiales". En sentido similar, el artículo 3.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño reconoce que los "Estados Partes se comprometen a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar". Finalmente, el artículo 19.° de la Convención Americana sobre Derechos Humanos dispone que "todo niño tiene derecho a las .medidas de protección que por su condición de menor requiere por parte de su familia, de la sociedad y del Estado". En línea similar, el Principio de Protección Especial del Niño es reconocido por los artículos 23.4 y 24.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y por el artículo 10.3 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. 14. El principio concerniente al interés superior del niño en el ámbito del Derecho Internacional de los Derechos Humanos fue reconocido primigeniamente en la Declaración de los Derechos del Niño, cuyo acápite 2 estableció que: •*r « c. a» El niño gozará de una protección especial y dispondrá de oportunidades y servicios, dispensado todo ello por la ley y por otros medios, para que pueda desarrollarse física, mental, moral, espiritual y socialmente en forma saludable y normal, así como en "• * *7 condiciones de libertad y dignidad. Al promulgar leyes con este fin, la consideración fundamental a que se atenderá será el interés superior del niño. El mismo criterio se reitera y desarrolla en el artículo 3.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño, que dispone: En todas las medidas concernientes a ios niños que tomen las instituciones públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, una consideración primordial a que se atenderá será el interés superior de los niños. 15. Los instrumentos internacionales sobre derechos humanos aquí mencionados, llevaron a este Colegiado a sostener en reciente jurisprudencia (STC N.° 1817-2009PHC/TC) que: El Tribunal estima que para el Derecho Internacional de los Derechos Humanos el niño, entendido como todo ser humano menor de dieciocho años de edad, es un sujeto de derecho de protección especial que requiere de asistencia y cuidados adecuados, necesarios y especiales para su desarrollo y bienestar, tanto antes como después del nacimiento. Sobre esta base normativa supranacional, el artículo 4° de la Constitución reconoce que la "comunidad y el Estado protegen especialmente al niño". Así pues, teniendo presente el enunciado normativo de este artículo, este Tribunal estima que el constituyente ha reconocido el principio de especial protección del niño, que se fundamenta en la debilidad, inmadurez (física y mental} o inexperiencia en .que se encuentran los niños, y que impone tanto al Estado como a la familia, a la comunidad y a la sociedad, entre otras acciones y deberes, la obligación de brindarles atenciones y cuidados especiales y el deber de adoptar tas medidas adecuadas de protección para garantizar su desarrollo libre, armónico e integral. 16. Es en este contexto que se analizará si, en el caso concreto, es menester observar la garantía de la cosa juzgada -que le asiste a la sentencia dictada en la causa de filiación extramatrimonial- o si, por el contrario, resulta legítimo desestimar la excepción deducida y continuar, con la tramitación de la demanda incoada a efectos de descartar o establecer el vinculo parental entre el presunto padre y el menor. Ello, en salvaguarda del derecho a la identidad que le asiste a este ultimo. Dilucidación de la controversia. •tí t*5 Oí g 17. ¿Existen razones jurídico constitucionales para considerar que en el caso concreto £ es atendible priorizar el derecho a la identidad y el interés superior del niño frente a la inmutabilidad que le asiste a la cosa juzgada? O dicho de otro modo: ¿Hay razories juridico-constitucíonales, para que en el presente caso se 'ampare el derecho del adolescente -que pretende conocer a su progenitor y su apellido- frente al derecho del padre a que se respete la inalterabilidad y definitividad que le asiste al fallo expedido en un proceso anterior? 18. A juicio de este Tribunal, la respuesta es afirmativa. Ningún esquema constitucional donde se reconoce la justicia como valor esencial y se le rodea de garantías de seguridad puede, a la vez de proclamarse legítimo, operar en forma contraria a los mismos derechos que pretende proteger. Ello significaría que una parte de la Constitución quedaría Invalidada so pretexto de otra, lo que resultaría no solo paradójico sino abiertamente Irrazonable e irracional. En dicho contexto, considera este Colegiado que, aun cuando la cosa juzgada es importante, esta institución no puede superponerse al derecho a la identidad, por lo que en el presente caso debe ampararse la pretensión de quien exige conocer a su progenitor, así como, de ser el caso, de conservar su apellido. De este modo el Estado -y los poderes y organismos que integran su estructuramaterializan la especial protección que mandatoriamente prevé el artículo '4° de la Norma Fundamental, que impone el deber de adoptar las medidas correspondientes para garantizar el bienestar físico, psíquico, moral, intelectual, espiritual y social de la persona, siendo inevitable la incidencia sobre el proyecto de vida, cuando no se descarta o establece a cabalidad el vínculo parental entre una persona y su presunto progenitor. 19. Por otro lado, es menester subrayar que si, como sostiene el demandante, no existe vínculo parental alguno -conforme afirma en la demanda- resultan infundados los temores a que durante la tramitación del proceso se ordene la práctica de pruebas genéticas o científicas que no se actuaron en anterior oportunidad. 20. Por consiguiente, al no acreditarse en autos la inconstitucionalidad de la resolución judicial cuestionada ni la afectación de los derechos fundamentales invocados, la presente demanda de amparo debe desestimarse. Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, en uso de las atribuciones que le confieren la Constitución Política del Perú HA RESUELTO Declarar INFUNDADA *a vulneración de los derechos alegados. <N O ^C >o la demanda de amparo, por no haberse acreditado la Publíquesey notifíquese. SS. MESÍA RAMÍREZ BEAUMONT CALLIRGOS CALLE HAYEN ETO CRUZ ÁLVAREZ MIRANDA URVIOLA HANI". ¡\-r. >+ A v >^ <t, \ -o u <> u7 IV. PETICIONES CONCRETAS DEL PRESENTE RECURSO. POR TANTO, y de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 93 N° 6 de la Constitución Política de la República, y las demás disposiciones constitucionales y legales citadas,; SOLICITO A SU SEÑORÍA EXCELENTÍSIMA: se sirva tener por interpuesto el presente recurso de inaplicabilidad por inconstitucionalidad en relación con la causa Rlt 12312014, RUC N° 14- 2-0169362-5, sobre demanda de reclamación de filiación no matrimonial, en tanto tos artículos 175 y 177 del Código de Proced/m/enfo CMI, vulnerarían el artículo 18 de la Convención Americana de Derechos Humanos, el artículo 24.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el artículo 7 numerales 1 y 2 de la Convención sobre los Derechos del Niño; normas de rango Constitucional por aplicación del inciso 2° del artículo 5 de la Constitución Policita de la República, declarando inaplicables dichas normas al caso concreto. PRIMER OTROSÍ: Solicito tener por acompañado los siguientes documentos con el apepelbímtento legal que corresponda: Certificado extendido por el Ministro de fe, del Tribunal de Familia de Concepción, donde consta que la causa Rlt 1231-2014, RUC N° 14- 2-0169362-5, del Juzgado de Familia de Concepción se encuentra actualmente pendiente y se individualizan a partes. Copias de las actuaciones efectuadas en la Causa Rlt 1231-2014, RUC N° 14- 20169362-5, del Juzgado de Familia de Concepción obtenidas del Sistema SITFA. /3/Copias Sentencias Causa Rol 5628-2004 2° Juzgado Civil Concepción. /A./Copia Sentencia Causa Rol 3026-2006 lltma. Corte de Apelaciones de Concepción. A. Copia Sentencia Rol 5.806-2006 Exceletisima Corte Suprema. 6. Mandato judicial otorgado por escritura Púbica. POR TANTO, solicito a Us. Excelentísima los tenga por acompañados apercibimiento que corresponda. con el SEGUNDO OTROSÍ: Para efectos de que el acogimiento de esta acción de control de constitucionalidad pueda tener los efectos para lo cual la estableció el constituyente y en conformidad al artículo 85 de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional, solicito a Vuestra Excelencia que ordene a la brevedad la suspensión del conocimiento de la Causa de acción de reclamación de filiación no matrimonial, Rlt 1231 -2014, RUC N° 142-0169362-5, del Juzgado de Familia de Concepción que motiva esta acción hasta la completa resolución del presente procedimiento. Así mismo, solicito que comunique esta suspensión de la forma más expedita posible a la Ilustre Corte de Apelaciones de Santiago. •*r «» E? £ Esto debido a que la las partes eta a la espera de la audiencia de juicio, en la cual el Tribunal de Familia deberá resolver tanto la excepción presentada por el demandado como la cuestión de fondo, siendo necesaria para la acertada resolución V \j \ ¿Tt del caso de autos, que esta Excelentísimo Tribunal Constitucional, se pronuncie sobre la inconstituclonalidad de las normas ya citadas POR TANTO, solicito a Us. Excelentísima acceder a los solicitado, comunicando lo anterior de la forma más expedita al Tribunal de Familia de Concepción, ubicado en Castellón N° 432, comuna y ciudad de Concepción, correo electrónico [email protected]. TERCER OTROSÍ: Sírvase US. Excelentísima tener presente que mí parte propone que todas las resoluciones judiciales, actuaciones y diligencias le sean notificadas vía correo electrónico a las casillas de correo electrónico de [email protected], por ser ésta suficientemente eficaz y no causar indefensión. POR TANTO: solicito a US. Excelentísima tenerlo presente. CUARTO OTROSÍ: Que, en mi calidad de abogado habilitado para el ejercicio de la profesión y en razón del mandato que se acompaña a esta presentación, asumiré personalmente el patrocinio en estos autos y actuare personalmente. POR TANTO: solicito a Us. Excelentísima tenerlo presente. ACREDITA CALIDAD DE ABOGADO AUTORiZO PODER Santiago, ...ír;.l, fe .¿h&k&LO) •o o o f~l < Santiago, veinte de agosto de dos mil catorce. Proveyendo al escrito de fojas 101, a lo principal, téngase por evacuado'el traslado; .al primer otrosí, téngase por acompañado el documento; bajo apercibimiento legal, al segundo otrosí, no ha lugar por ahora; al tercer otrosí, téngase presente. VISTOS Y CONSIDERANDO; . 1°. Que, por resolución de primero de agosto de 2014, esta Sala admitió a tramitación el requerimiento de inaplicabilidad por inconstitucionalidad deducido en estos autos por el abogado Antonio Andrés Alarcón Azocar, en representación de Tomas Ignacio Smith Smith, respecto de los artículos 175 y 177 del Código de Procedimiento Civil, en el marco de la acción de reclamación de filiación actualmente en tramitación no matrimonial ante el que Juzgado se de encuentra Familia de Concepción, RIT N° 1231-2014, RUC N° 14-2-0169362-5; 2° o Que la Sala, para pronunciarse acerca de la admisibilidad del requerimiento, confirió traslado por el plazo de diez días a las demás partes en la gestión sub lite, y 3°. Que, examinado el requerimiento, para el solo efecto de pronunciarse sobre su admisibilidad, y sin perjuicio de lo que se resuelva en el fondo, esta Sala concluye que se ha dado cumplimiento a todos los requisitos exigidos por el artículo 93, inciso decimoprímero, de la Constitución Política, en relación con lo previsto en el artículo 84 de la Ley Orgánica Constitucional de esta Magistratura. Y TENIENDO PRESENTE lo dispuesto en el artículo 93, inciso primero, N° 6°, e inciso decimoprimero, de la Política de la República y en los artículos pertinentes de la Ley N° 17.997, Orgánica Constitución 83, 84 y demás Constitucional del Tribunal Constitucional, SE RESUELVE: Que se declara admisible el requerimiento deducido a fojas 1. Suspéndase el procedimiento en la gestión invocada, oficíese. Pasen los autos a la Presidenta del Tribunal para que les dé curso progresivo. Acordada la admisibilidad y la suspensión procedimiento con el voto en contra del Ministro del señor Domingo Hernández Emparanza/ por considerar que, en la medida que se busca cuestionar y determinar los efectos de una sentencia invocada en una excepción de cosa juzgada, además de no explicitarse la forma en que se produciría el efecto inconstitucional que se pretende, concurre la causal de inadmisibilidad del numeral 6° del articulo 84 de la Ley N° 17.997. Notifíquese y comuniqúese. Rol N° 2690-14-INAo Pronunciada por la- Primera Sala del Excmo. Tribunal Constitucional, integrada por su Presidenta, Ministra señora Marisol Peña Torres, por los Ministros señores Hernán Vodanovic Schnake, Domingo Hernández Emparanza y Juan José Romero Guzmán. Autoriza la Secretaria del Tribunal, señora Marta de la Fuente Olguin.