INFORME ETHOS CENTRO DE ÉTICA UNIVERSIDAD ALBERTO HURTADO UNA POBLACIÓN INVISIBLE Primera parte El Centro de Ética (Universidad Alberto Hurtado) publica periódicamente un breve Informe Ethos, ofreciendo una lectura ética de un tema de interés nacional para ayudar en el discernimiento de un juicio moral responsable con vistas a una acción ?KDANAJPA /A [email protected]= AH IÛ[email protected] ECJ=?E=JK @AH PNELHA L=OK ATLANEAJ?E= DA?DK NAATEäJ OQ comprensión e implicaciones éticas) -­ acción (elementos para el discernimiento): una NAATEäJ sobre la ATLANEAJ?E= con miras a una acción consecuente. 2012 ISSN 0717-­6430 Nº 86 1. El hecho 1.-­ El día 8 de diciembre de 2010, Chile despertó con la noticia del incendio en la Cárcel de San Miguel (Santiago), que causó la muerte de 81 internos. 1J=[email protected]=>ä[email protected][email protected][email protected]=O una y otra vez por los canales de televisión. La reacción de la sociedad no se dejó esperar al darse cuenta de las condiciones miserables y precarias de la población penal en Chile. 2.-­ Anteriormente, el 15 de octubre de 2010, el Gobierno había anunciado un plan de once medidas para mejorar la situación carcelaria: (1) Propor-­ cionar 14 mil colchones, 42 mil frazadas y más de 4 mil literas, para cubrir [email protected]Û?EPMQA=HIKIAJPKATEOPß=)AFKN=NH==HEIAJP=?Eä[email protected]­ JKO)[email protected]=NE=OAJ [email protected][email protected][email protected][email protected]=OQIAJP=NAJDKN=U [email protected][email protected]@[email protected])AFKN=N [email protected][email protected]@ANA=??EäJIÛ@[email protected]?E=)AFK-­ [email protected]@[email protected]?KJPNKHOK>NAHKOEJPANJKO=O)[email protected] REOEP=O=EJPANJKO=O"KNP=HA?ANH==OAOKNß[email protected] NA?EJPKOLAJ=HAO)[email protected][email protected]>AN=?EäJ,KPAJ?E=N [email protected][email protected]?=?EäJU0N=>=FK!0U)[email protected][email protected]=H interior de los penales. !H,[email protected]/A>=OPEbJ,Eã[email protected][email protected]@A=>[email protected] anunció una inversión de US$ 410 millones a ejecutar mediante un pro-­ yecto de ley de modernización que introduciría “11 mil nuevas plazas al sistema carcelario, junto con poner especial énfasis en la separación de presos de distinta peligrosidad, mejorar las condiciones de los reclusos, una profunda modernización al Servicio de Gendarmería, fortalecimien-­ to de las penas alternativas a reclusión, y la puesta en práctica durante AOPA=ã[email protected]!OP=PQPK(=>[email protected],NAOK !H,[email protected]@AJEäOQ anunció como “más y mejores cárceles, más y mejores oportunidades de PN=>=FKNAD=>EHEP=?EäJUNAEJOAN?EäJOK?E=HL=N=JQAOPNKONA?HQOKO 1 4.-­ El 18 de abril de 2012 la Cámara del Congreso aprobó el proyecto so-­ >[email protected]=HLNARE=IAJPAN=PE[email protected]/[email protected] !HK>[email protected] proyecto, enviado por el Ejecutivo, es disminuir el hacinamiento carce-­ lario y mejorar las condiciones de habitabilidad en los recintos peniten-­ ?E=NEKO ,=N=P=H[email protected]@[email protected]?=Nb?PAN?KJIQP=-­ tivo a condenados por delitos menores, que incluye a mujeres que estén [email protected][email protected]>[email protected]=OOQFAP=O=H>AJA?EK de la salida controlada al medio libre o reclusión nocturna. Además, se AOP=>[email protected]=ã=IEAJPKL=N=ATPN=JFANKOMQAJK?QAJPAJ=H momento de haber cometido el delito, con el permiso de permanencia @AJEPER= /EJAI>[email protected][email protected][email protected][email protected] [email protected]?=HE[email protected] 0=I>EÛ[email protected]?=AHNÛ[email protected]>[email protected][email protected]?EKJ=HUOAAOP=>HA-­ ce, en caso de multa, la pena alternativa de trabajos comunitarios. En los casos de los condenados por faltas a la ley de control de drogas, la norma concordada entrega al juez tres opciones: Si aplica la multa y el condenado no la paga, el juez puede enviarlo a rehabilitación o a traba-­ jos comunitarios y sólo si no cumple con esas alternativas, es enviado a un programa de reclusión. ([email protected]=?Eä[email protected]?EKOAJ>AJA[email protected][email protected][email protected]­ @[email protected][email protected]=?KIKH=NA=HEV=?Eä[email protected][email protected][email protected][email protected]=O=B=RKN @[email protected][email protected]>AJA[email protected]=OAJOEPQ=?Eä[email protected][email protected][email protected] coordinadas por un delegado de Gendarmería. Esta institución deberá facilitar este tipo de penas por medio de convenios con organismos pú-­ >HE?KO U [email protected] OEJ JAO @A HQ?NK @A>[email protected] [email protected] H= EJOPEPQ?EäJ U sus delegados velar para que no se atente contra la dignidad del penado. [email protected]@QHPKK?KJIQP=?Eä[email protected]=>AJA-­ ?E=Nb= NA?HQOKOMQAEJ?HQUA [email protected]­ na en Chile. La norma sólo contempla aquellos condenados por delitos de baja complejidad y con buena conducta para que puedan cumplir lo que les queda de pena en libertad, bajo un régimen de vigilancia. Sin embargo, quedaron excluidos del indulto aquellos delitos relacionados con violaciones a los derechos humanos, homicidio, robo con homicidio, parricidio, delitos sexuales contra menores y violación con homicidio. 2. Comprensión del hecho 8.-­ A lo largo de la historia, las sociedades se han organizado para con-­ trolar las transgresiones contra el orden social de la convivencia, oca-­ sionadas por alguno de sus miembros. Así, se ha ido estableciendo una autoridad, una institución de justicia y leyes para castigar las conductas anti-­sociales. No obstante, también se ha preguntado permanentemen-­ PAOK>NAH=A[email protected][email protected][email protected]= delincuencia y la supuesta rehabilitación de los anti-­sociales. a) Algo de historia !JDEHAOAAOP=>[email protected]?=-­ rácter nacional y se conforma un Cuerpo de Gendarmería de Prisiones. !JAH=ãKOAAOP=>HA?AQJ= ENA??EäJ#[email protected],NEOEKJAOMQAAJ [email protected]=U=OQIAAHJQARKJKI>[email protected]/[email protected],NEOEKJAO !J AH=ãKOALKJAAJI=N?D=QJ=LKHß[email protected][email protected]==IAFKN=NAHPN=P=-­ miento de los internos.2 [email protected][email protected])E?D=AH"KQ?=QHPOK>[email protected]=O?bN?AHAO [email protected]=LNEOEä[email protected]?=O-­ tigo corporal y público a la privación de la libertad, aunque concluye que [email protected]@[email protected]=A[email protected]?EANNKLKNMQANAOQHP=[email protected] AOEJéPEHLANK=H=RAVJKOARALKNMQÛNAILH=V=NH=. 11.-­ En diversos estudios sobre la historia carcelaria en Chile se destacan el hurto que se producía entre los reos, la participación de los presos en juegos de azar y la existencia de relaciones homosexuales entre ellos, su-­ >[email protected]=?KJ?HQOEä[email protected][email protected]=NAD=>EHEP=?EäJU la cárcel como la escuela “más perfecta para el aprendizaje y progreso @[email protected]@[email protected]?EK 12.-­ En un texto de comienzos del siglo XX se describe una situación pro-­ ducida en la cárcel de Iquique: “Me contaba un guardián el repugnante espectáculo que se repite en la cárcel cada vez que ingresa un menor de edad… Llega el muchacho, e inmediatamente se ve asediado por una mul-­ [email protected]@[email protected]=JUNALAHAJAJPNAOßOEJATLANEAJ?E= sin fuerzas para defenderse, el infeliz se ve obligado a entregarse a uno de aquellos monstruos, por lo común al más capaz de defenderlo de los demás. Ese muchacho pasa a ser el cabrito del preso preferido y desde [email protected]=I=NEP=H?KJÛH4. b) La situación actual DEHAAOAHL=ß[email protected][email protected]ÛNE?= (=PEJ= ?KJ EJPANJKO LKN [email protected]= D=>EP=JPAO IEAJPN=O H= P=O= promedio de la región está entre 100 y 150 presos y la tasa europea entre U /AAOPEI=MQAAH=?PQ=HJé[email protected]ÛCEIAJ?A-­ [email protected]?=QJ=OK>NALK>H=?Eä[email protected] Ò ADA?DK/=J)ECQAHPAJß= QJ=LK>H=?Eä[email protected] [email protected][email protected][email protected][email protected]=V=O HK MQA AMQER=Hß= = QJ Ò @A OK>NALK>H=?EäJ 5 Además, la población carcelaria ha presentado un aumento sostenido durante las dos últimas @Û[email protected]=OAH=ãKD=>ß= NA?HQOKOAH=ãK [email protected] [email protected] !H Ò@[email protected][email protected]>KOKJFäRAJAOAJPNAU=ãKO [email protected]@NKC=O ÒUDQNPKO Ò !JPNAHKOU=ãKOAHI=-­ [email protected]@[email protected]=H=([email protected] Ò@NKC=O ÒUNK>KO Ò !JPNAHKOU=ã[email protected]?KJPN=H= ([email protected] Ò@NKC=O Ò@AHEPKOA?KJäIE?KO ÒUOATQ=-­ HAO Ò [email protected]=ã[email protected]?KJPN=H=(AU @A0NbJOEPK Ò[email protected]@AHEPKOOATQ=HAO Ò[email protected] A?KJäIE?KO Ò[email protected]=O Ò 14.-­ En una investigación realizada por Gendarmería de Chile (2011) se detalla que la población carcelaria, correspondiente al mes de diciembre @AAOP=>[email protected]=LKN LANOKJ=OAH ÒDKI>NAO !H Ò@AAOPAPKP=HLANPAJA?A=HOQ>OEOPAI==>EANPKAH Ò=HOQ>OEOPA-­ [email protected] Ò=HOQ>OEOPAI=OAIE=>EANPK 21.-­ En otro estudio8, se considera que el aumento de la población penal [email protected]>A>bOE?=IAJPA=H=A[email protected]=LKNH=NABKNI=LNK?AO=HLA-­ nal (aumento de internos), la falta de aplicación de medidas alternativas [email protected]>[email protected]=EJOQ?EAJPAEJRANOEäJAJEJBN=AOPNQ?PQN= Además, los estudios convergen en detectar los siguientes principales problemas del sistema carcelario: (a) el hacinamiento, (b) el trato otorga-­ @[email protected][email protected]=>EHEP=?Eä[email protected] el sistema penal para menores y adolescentes. 15.-­ El subsistema cerrado corresponde a aquellos internos privados de libertad (detenidos, procesados según el antiguo sistema penal, imputa-­ dos según el nuevo sistema penal, y condenados privados de libertad). El subsistema semiabierto dice relación a aquellos condenados privados de libertad que cumplen su condena accediendo a actividades de ca-­ pacitación y trabajo remunerado. El subsistema abierto corresponde a aquellos condenados a medidas alternativas (se sustituyen a las penas en prisión de corta duración por una sanción que permite continuar de-­ sarrollando la vida laboral, familiar y social). !H%JBKNIA?KJOP=P=MQA[email protected]=ß[email protected]=NACEäJ?KJ IbOLK>H=?Eä[email protected]Û[email protected][email protected]@KO éJIbOAHOEOPA-­ ma penitenciario y la situación de las cárceles están en crisis desde hace IQ?DKO=ãKO (=LKHß[email protected]=HäCE-­ ca penal persecutoria que castiga preferentemente los ilícitos con pri-­ R=?Eä[email protected]>[email protected]=H=>[email protected]>HAI= @AIbOOAAOPEI=MQA ATEOPAQJ=OK>NALK>H=?Eä[email protected]@AHÒAJAHOEOPAI=?=N?AH=NEK (=EJRAOPEC=?Eä[email protected]#[email protected]=NIANß=LNAOAJP=QJLAN[email protected] según criterios criminológicos. En el sistema penitenciario cerrado y semiabierto, los condenados son mayoritariamente hombres, con sólo QJ Ò @A IQFANAO !H Ò @A AHHKO OA @A?H=N= ?=PäHE?K U AH Ò AR=JCÛHE?K (= I=UKNß= OKJ OKHPANKO Ò IEAJPN=O AH Ò ?=O=-­ @KOK?KJREREAJPAOUAH Ò[email protected]@[email protected] Ò@[email protected] /ä[email protected]@AAHHKO?QNOäH=AJOAã=JV=>bOE?= ÒAH ÒH= [email protected]?=?Eä[email protected]=AH Ò[email protected] ÒJKPQRK EJOPNQ??EäJ [email protected][email protected]>K Ò[email protected] @[email protected]=O Ò[email protected]=HAO Ò[email protected] ÒUHKO DQNPKO Ò !H%[email protected]#[email protected]=NIANß=AH=>KN=AHOECQEAJPALAN[email protected] MQAOAAJ?QAJPN=JAJAHOQ>[email protected]=>EANPK=DKI>NAOKH-­ tero, católico, condición heterosexual, proveniente de Santiago, sin con-­ OQIEND=>[email protected]=UOEHKD=?AAOP=OANß==H?KDKH>[email protected]­ LAã=>=?KIKK>[email protected]>[email protected]=IEHE=OJQIANKO=O?KJ [email protected][email protected][email protected]>KUOE OAHHAC=N==KPKNC=N=HCéJ>AJA[email protected][email protected]?=H [email protected]@ANK>[email protected]=QJ=NAH=?Eä[email protected]@[email protected] éste por lejos el delito de mayor ocurrencia entre los solteros, mientras los casados son mayoría en el delito de las drogas. El tipo de delito tiene una clara diferencia entre los hombres y las mujeres, ya que mientras en-­ PNAHKODKI>[email protected][email protected]>K ÒAJPNAH=OIQFA-­ [email protected][email protected]= Ò 22.-­ Por consiguiente, las propuestas para mejorar el sistema carcelario giran en torno a (1) fortalecer la institucionalidad del sistema peniten-­ ?E=NEKBKNP=HA?ANAHOEOPAI==HPANJ=PERK=H=LNER=?Eä[email protected]>[email protected] B=RKNA?ANH=NAEJOAN?EäJOK?E=HAJHKONA?EJPKOLAJEPAJ?E=NEKOBKNP=HA-­ ?ANH=NAEJOAN?EäJOK?E=HLKOP,[email protected]= LNER=?Eä[email protected]>[email protected][email protected]?KJPNKHAOATPANJKO de la ejecución de las penas. Estas propuestas tienen un fuerte compo-­ nente de modernización institucional, focalizado en el uso de la priva-­ ción de libertad como última reacción del sistema y fortalecimiento de la reinserción social. [email protected]?QAJP=MQAAJPNAUH=LK>H=?EäJLAJ=HPQRKQJ [email protected] EJPANJKONAOQHP=QNCAJPA=QIAJP=NAHJé[email protected] las cárceles para eliminar la sobrepoblación penal y mejorar con ello la calidad de vida de los reclusos. Al respecto, también ayudaría establecer el cumplimiento alternativo a la privación de libertad, mediante un sis-­ tema de cumplimiento alternativo de penas para todos aquellos delitos [email protected]=LAJ=AJQJNÛ[email protected]=N= ello es necesario hacer una reforma integral que sincere la relación entre la severidad de la pena y la gravedad del delito. 24.-­ Por otra parte, es preciso asegurar la protección de los derechos de los reclusos, para evitar los tratos indebidos al interior de los recintos carcelarios y el cumplimiento de los compromisos internacionales, es-­ LA?E=HIAJPA ?KJ NAH=?EäJ =H LNKPK?KHK ?KJPN= H= PKNPQN= N=PE[email protected] LKN DEHAAJAH +>[email protected][email protected]=?Eä[email protected] Gendarmería. En 2010, se estimaba que la falta de personal de Gendar-­ mería tenía la dramática proporción de 5 gendarmes para resguardar la [email protected][email protected]@A [email protected]@[email protected]=K 5 internos. ?1JLNK>HAI=OK?E=H 25.-­ La gravedad de los problemas derivados de la sobrepoblación car-­ celaria y la falta de segregación de la población penal (infractores pri-­ merizos y reincidentes conviviendo en un mismo módulo) se agudizan al no existir las condiciones necesarias para su rehabilitación y rein-­ OAN?EäJ ,[email protected][email protected]@[email protected]?=NH=NAOLQAO-­ P= LAJ=H H= [email protected][email protected] @A IAFKN=N AH OEOPAI= @A [email protected]@=O =HPANJ=PER=O =H=NA?HQOEä[email protected][email protected]=JPAÛJB=OEOAJ [email protected][email protected]>NAH=NAEJOAN?Eä[email protected][email protected]??EKJ=H @AH=AFA?Q?Eä[email protected]=OLAJ=O=Oß[email protected][email protected]@[email protected]=NNKHH=NQJ= política penitenciaria integral y con continuidad en el período post pe-­ nitenciario. $=>Nß[email protected][email protected]= la sanción y un sistema social que criminaliza la pobreza, separando a la [email protected]?AJPA@AHKO@AHEJ?QAJPAO ,KNP=JPKOAD=?AJA?AO=NEK=J=-­ lizar, junto con los problemas contingentes, los problemas estructurales que han permitido la ocurrencia de estos hechos. En otras palabras, se impone una comprensión de la delincuencia como un fenómeno social, como una de las numerosas consecuencias de ser un país en vías de de-­ sarrollo económico pero con profundas inequidades sociales. Por tanto, cualquier solución a largo plazo exige ir a las causas de raíz del aumento de la población encarcelada.10 !JAH%JBKNIAJQ=HOK>NA ANA?DKO$QI=JKOAJDEHA1JERAN-­ [email protected][email protected] EACK,KNP=HAOOA=NI=MQAL=N==>[email protected]=NOANE=IAJPAAHLNK>HAI= de la sobrepoblación penal, es preciso no limitarse a promover reformas al sistema penitenciario, porque se necesita analizar críticamente la po-­ lítica criminal y reformular aquellos aspectos que impiden que la herra-­ mienta penal y la cárcel sólo se utilicen como último recurso. En otras palabras, el hacinamiento y la inseguridad en las cárceles no son fruto de la casualidad ni representan una fatalidad inevitable. Por el contrario, es el resultado de opciones políticas concretas en este ámbito. 28.-­ La política criminal no puede limitarse al sistema penal, porque al hacerlo se corre el riesgo de distanciarla de otros aspectos relevantes relacionados con la criminalidad, como, por ejemplo, la política social. Las medidas contra la pobreza y la marginación social son fundamenta-­ les para prevenir la delincuencia y la violencia. Esto es particularmente relevante en países con altos grados de desigualdad social como Chile, donde la población penal está conformada de manera casi exclusiva por personas pertenecientes a los sectores más desventajados en tér-­ minos socioeconómicos.11 B AJPNK [email protected][email protected], %JBKNIAOK>[email protected]#K>EANJK @E?EAI>NALL B )=N?KJPKJEK(AäJ [email protected]=OLNEOEKJAOAJDEHAAJAHOECHK44AJ Revista Chilena de Historia del Derecho. *vL B [email protected]/=J"N=J?EO?K!HREAFKLNK>[email protected]=O?bN?AHAOAJ =LEP=H ?H, =NPß[email protected]=HJé[email protected]@E?EAI>[email protected] enero 2011). 4 [email protected]=O /[email protected][email protected] DEHAßJPEIK [email protected][email protected][email protected]/=J"N=J?EO?K!HREAFKLNK>[email protected]=O?bN?AHAOAJ =LEP=H ?H, artículo [email protected]=HJé[email protected]@E?EAI>[email protected] 5 Cf. Marianela Jarroud, ([email protected]=[email protected]@[email protected] $$, miércoles 15 de febrero de 2012, Amnistía Internacional – Chile. B [email protected][email protected] EACK,KNP=HAOAJPNK ANA?DKO$QI=JKO Informe Anual sobre Derechos Humanos en Chile 2011, p. 85. Cf. Unidad de Investigaciones Criminológicas, =N=?PANEV=?Eä[email protected]=LK>H=?Eä[email protected]@=AJHKOOQ>[email protected]=>EANPKU=>EANPK, Santiago, @AJKREAI>[email protected] 8 B AJPNK [email protected][email protected], %JBKNIAOK>[email protected]#K>[email protected]?EAI>NALL B =NKHEJ=2EHH=CN= La tragedia de la cárcel en Chile"[email protected]@AEAJ?E=O/[email protected][email protected]@ADEHAAJLbCEJ=SA>@AIEOI="[email protected] de diciembre de 2010. 10 B =NKHEJ=2EHH=CN= La tragedia de la cárcel en Chile"[email protected]@AEAJ?E=O/[email protected][email protected]@ADEHAAJLbCEJ=SA>@AIEOI="[email protected] de diciembre de 2010. 11 B [email protected][email protected] EACK,KNP=HAOAJPNK ANA?DKO$QI=JKO Informe Anual sobre Derechos Humanos en Chile 2011LL 1 2 INFORME ETHOS Centro de Ética Almirante Barroso 10, Santiago. 0AHÛBKJK"=T /EPEKSA>DPPLAPE?= [email protected] ?H (sin www). El libro Ethos Cotidiano (compendio de los 50 primeros Informes Ethos), está a la venta en Revista Mensaje (Cienfuegos 21) y en Centro de Espiritualidad Ignaciana [email protected]?EK,[email protected]([email protected]?DN=JA Los Informes Ethos no pretenden agotar un tema como tampoco pronunciar una palabra conclusiva. Su propósito es poner de relie-­ ve la dimensión ética en la discusión sobre temas que inciden en la vida ciudadana. Por ello, no se pretende LAJO=N éticamente LKN otros sino estimular a otros L=N=LAJO=N éticamente. (KO%JBKNIAOOKJAH=>[email protected])[email protected]/ & K?PKNAJ0AKHKCß= )[email protected]@[email protected]^PE?=!HEV=>APD(EN= E-­ [email protected],OE?äHKC=2ANäJE?=JCQEP=([email protected]=AJEAJ-­ ?E=O.AHECEKO=OU)=CEOPANAJEKÛ[email protected]ÛO/[email protected][email protected] Público y Magister en Gerencia Pública). !OP=LQ>HE?=?EäJOA[email protected][email protected] la Universidad Alberto Hurtado. Gracias a esta contribución es po-­ sible distribuir un cierto número de ejemplares en forma gratuita.