“Mi intención es contar cómo los cuerpos revisten formas diferentes; los dioses, autores de estos cambios, me ayudarán, o así lo espero, con un poema que viene desde los orígenes del mundo hasta nuestros días”. Metamorfosis de Ovidio CONTENIDO INTRODUCCIÓN………………………………………………………………….. 4 1. LA ALQUIMIA EL ARTE DE TRANSMUTAR LOS METALES………….. 2. DE LA ALQUIMIA A LA QUÍMICA………………………………………….. 3. LAVOISIER Y EL SIGLO DE LAS LUCES DE LA QUÍMICA…………… 4. DEL AIRE AL OXIGENO……………………………………………………. 5. EL OXIGENO DE LAVOISIER………………………………………………. 6. LA UNIVERSALIDAD DE UN METODO……………………………………. BIBLIOGRAFIA. COCLUSIONES INTRODUCCIÓN Por más de 1500 años en los grandes centros urbanos de la antigüedad como Alejandría y Bagdad, estuvo concentrado todo el conocimiento y los cimientos de las futuras artes y la ciencia, uno de los aspectos que más intereso al hombre antiguo, hace referencia al arte de moldear los metales tan escasos en los primeros tiempos y por ende tan valorados. Es aquí y en estos lugares donde debemos ahondar y escudriñar para encontrar los orígenes de lo que hoy conocemos como química, su recorrido no ha sido menos doloroso que la de otras ciencias, desde los alquimistas babilonios y caldeos, pasando por el antiguo Egipto y hasta le edad media , la química ha trasegado caminos de aciertos y desaciertos. La alquimia fue en sus orígenes una mezcla de lo sacro y lo profano, mitológico y sacerdotal en Egipto y Asiria, pero filosófico en Grecia y en las antiguas escuelas de Alejandría, alquimia, magia, astrología y matemática, mezcladas, confundidas y cultivadas, por sabios y charlatanes; perseguida en unas épocas y aceptada en otras, la alquimia es la base de la química moderna que vio con Lavoisier su mayor esplendor. Lavoisier fue el modelo a seguir, el fundamento e inicio de una nueva ciencia, apoyado en el concepto de elemento, cambio el rumbo de la historia, fundamentando además la universalización de la nomenclatura y demostrando lo inadecuado del flogisto como sustancia fundamental de los cuerpos. No obstante no vivió demasiado para ver su creación, ni la revolución Francesa perdono al asentista, ni el desconocido médico Jean Paul Marat, perdono la negativa a ser aceptado en la Real Academia de la Ciencia, por Lavoisier, pero sea cual sea la causa; lo cierto del caso es que nuestro genio murió un día cualquiera de mayo, en la guillotina, cuando solo cumplía 51 años. Nos queda su legado y la convicción de su gran aporte a las ciencias. LA ALQUIMIA EL ARTE DE TRANSMUTAR LOS METALES La alquimia precede la química como la geometría al algebra y tenía esta por objeto el estudio de las sustancias que la componen y la manipulación de estas, a tal punto que se pudieran crear sustancias nuevas , las historias urbanas cuentan de innumerables alquimistas que lucharon durante años para transformar en oro y en plata los metales comunes y su interés en perpetuar la existencia humana, No obstante nos dice Simón José Auals que “ en su comienzo la alquimia , la magia y la astrología anduvieron mezcladas, confundidas y cultivadas por los mismos hombres , formando un solo cuerpo doctrinal con los conocimientos de Medicina , de las virtudes de las plantas y aun de las matemáticas” Alquimia y química pg. 7, pero esta unión solo era temporal y cada una tomo un rumbo diferente. Pero concentrémonos en la alquimia o arte de transmutar los metales, su origen cronológico no está muy claro, algunos autores hablan de que ya en el año 300 d.c en el antiguo Egipto, el alquimista Zósimo de panópolis practicaba este arte y a él se le atribuyen algunos escritos de los cuales traeremos un aparte con el que inicia uno de sus libros “Aquí se establece el libro de la Verdad. Zósimo te saluda ¡oh Theosebeia! Todo el reino de Egipto, señora, depende de estas dos artes, la de las cosas estacionales y la de los minerales. En lo que se refiere a aquella que llaman arte divina, sea por aspecto filosófico o dogmático o por sus fenómenos en general , fue dada a los que eran maestros en ella para que la custodiaran , y no sólo esta arte , sino también aquellas que son llamadas las cuatro artes liberales y los procedimientos técnicos , porque su capacidad creadora es propie- dad de los reyes” y continua en otro aparte “ De la misma manera, bajo los reyes Egipcios , los trabajadores de las operaciones químicas y aquellos que conocen el procedimiento, no trabajan por su cuenta, sino que servían a los reyes Egipcios , trabajando para llenar las arcas de sus tesoros” . No obstante otras fuentes creen que la alquimia nace en algún lugar antiguo de habla griega como Alejandría en el año 300 a.c, pero que ve su ocaso para el año 200 d.c en esta misma región, de esta época encontramos el manuscrito más antiguo que data del año 100 d.c; otros autores como Campbell Thompson, creen haber encontrado en una tablilla asiria (siglo VII a.c) inscripciones que hacen referencia a la manipulación de la plata y la manufacturación de la misma. El hecho es que la alquimia fue en sus inicios más una ciencia ocultista que cualquier otra cosa – F. SHERWOOD TAYLOR fondo de cultura económica. MEXICO - 1977. Regresando a los alquimistas Egipcios, estos conocían ocho productos minera- les alrededor de los cuales clasificaban cualquier tipo de sustancia, estos eran, el oro, la aleación de plata y oro, la plata , mineral azul, mineral verde , bronce o cobre , el hierro , el plomo; el estaño y el mercurio; no eran conocidos aun por ellos, este último de suma importancia para los alquimistas futuros, con este saber los Egipcios lograron la preparación de productos como la sosa, las sales amoniacales , el jabón, pastas cerámicas y colores, medicamentos y venenos, pero fueron los alquimistas babilonios los que establecieron por vez primera una relación entre los metales y los planetas , el sol produce el oro, la luna, la plata , Saturno el plomo , Marte el hierro , Venus el cobre y Hércules el estaño, también encontramos trabajos valiosos de los caldeos, Ostemés por ejemplo habla del agua que cura todas las enfermedades , esto deja entrever que aun en el campo de la medicina la alquimia incursiono. Otros pueblos no menos importantes como la antigua china también desarrollaron la alquimia, atribuyéndose a Ko- Hong que vivió en la dinastía de los U ( 222-227 d.c) el inicio de trabajos sobre la alquimia , también se le atribuyen a la secta Tao y seguidores de Lao – Tsé el inicio de este arte, sea cual sea el que haya iniciado esta práctica, lo cierto del caso es que en China por esta época se inicia el trabajo tendiente a la transformación del estaño en plata y la plata en oro, además de la preparación del salitre , el alumbre, la porcelana , el cristal e incluso la pólvora. Pero regresando a Egipto el mismo Zósimo describe haber revisado un viejo horno en el templo de Menfis, cuenta además el uso de colorear el oro con barnices y líquidos corrosivos, artes que posteriormente aplicarían los alquimistas de la edad media, son conocidos también los papiros de Leyden y de Estocolmo, escritos hacia finales del siglo III d.c, donde encontramos infinidad de fórmulas para falsificar más que para preparar oro, plata, el asemos(Metal blanco parecido a la plata), piedras preciosas y colorantes. para aumentar el peso del oro por ejemplo se fundía este con una cuarta parte de cadmia(Mezcla impura de óxidos de metales comunes, cobre, zinc, arsénico, etc. obtenida en las paredes de las chimeneas en las fundiciones de cobre), resultando este más pesado y duro , pero había otras formas de producir oro, por ejemplo mediante el tratamiento de la superficie, lo cual se hace a través del calentamiento al rojo de objetos a base de oro con sulfato de hierro, alumbre y sal, lo cual desprende ácidos sulfúrico y clorhídrico, que separan los metales comunes del oro de la superficie, dejando una capa delgada de oro puro, que luego es pulida y presentada como oro puro. Y aún más los papiros presentan una fórmula para convertir objetos de cobre en oro, de tal suerte que ni frotándolos contra las piedras se descubra su falsedad, así escribieron; se tritura oro y plomo hasta quedar en polvo fino, dos partes de plomo por una de oro, mézclese goma y y cúbrase el objeto con esta mezcla y caliéntese, repitiéndose este proceso hasta que el objeto tome el color dorado, finalmente el calor explican consume el plomo y no el oro. El alquimista no obstante tenía una gran diferencia con el químico moderno, ya que mientras el uno buscaba reinterpretar los escritos antiguos, el segundo prefería innovar a través de nuevos métodos y descubrimientos; en la alquimia se procuro aplicar el principio más simple, cual intentar introducir propiedades que los metales comunes no tenían, así por ejemplo pensaban que se podía sacar el color blanco de la plata y amarillo del oro en introducirlos en otros metales, pues para ellos el color era un “pneuma” o “espíritu” como el que poseían las plantas. De todas formas de las actividades llevadas a cabo por los alquimistas la más eficiente fue el doblado de oro, proceso al que los alquimistas griegos llamaron diplosis, es decir una duplicación del peso, en virtud de una aleación del oro con plata y cobre, ya que la primera da un color verdoso y la segunda uno rojizo, lo que difícilmente permite un cambio del color en dicho metal. ¿Pero qué técnicas o equipos usaban los alquimistas para desarrollar sus técnicas y poder colorear superficialmente los metales para que pareciesen oro? Pues bien fueron estos quienes crearon y usaron por vez primera los destiladores o alambiques, dicho aparato fue probablemente inventado por los alquimistas griegos, la primera descripción que se tiene de este, aparece referido en los escritos de Zósimo quien atribuye su construcción a la llamada María la Judía y en cuyas líneas encontramos “ He de describiros el tribikos. Porque así se llama el aparato hecho de cobre y descrito por María, la transmisora del Arte. Dice lo que sigue: Háganse tres tubos de cobre dúctil un poco más gruesos que los de una sartén de cobre de pastelero; su longitud ha de ser aproximadamente de un codo y medio. Háganse tres tubos así y también un tubo ancho del ancho de una mano y con una abertura proporcionada a la de la cabeza del alambique. Los tres tubos han de tener sus aberturas adaptadas en forma de uña al cuello de un recipiente ligero, para que tengan el tubo-pulgar, y los dos tubos dedo unidos lateralmente en cada mano. Hacia el fondo de la cabeza del alambique hay tres orificios ajustados a los tubos, y cuando se hayan encajado éstos se sueltan en su lugar, recibiendo el vapor el superior de una manera diferente. Entonces, colocando la cabeza del alambique sobre la olla de barro que contiene el azufre y tapando las juntas con pasta de harina, colóquense frascos de cristal al final de los tubos, anchos y fuertes para que no se rompan con el calor que viene del agua del medio. Lo cierto del caso es que parte de la alquimia se convertiría en parte de la química, si bien entre ambas existe un gran abismo, también sabemos que ambas fueron alimentadas por un cordón umbilical común, la curiosidad. Desde los propósitos hasta los métodos hay diferencias tangibles en ambas, pues en la primera los alquimistas buscan la perfección de todas las cosas, en tanto que en la segunda, es la adquisición del conocimiento y su uso para diferentes fines lo que la estimula, en cuanto al método, la alquimia se limita al estudio de los textos antiguos en los que se encuentra la verdad y las leyes generales que rigen el comportamiento de los cambios, lo que solo se lograba a través de los experimentos aleatorios que se limitaban a encontrar las condiciones y resultados expuestos en los textos, en cuanto a la química su método es una descripción cuidadosa de los cambios en la materia, cuyo fin último es descubrir leyes generales que permitan ser demostradas y aplicadas en todos los contextos . ¿Pero entonces que hay en común en ambas ciencias? Los alquimistas fueron los únicos laboratoristas hasta finales del siglo XVI, disgregados en diferentes puntos del planeta como Europa, medio oriente, china y áfrica; desarrollaron técnicas para separar y combinar la materia. Los equipos usados prácticamente no tuvieron cambios en los laboratorios de química hasta mediados del siglo XVIII, cuando se inicia la técnica para la captación y el estudio de los gases. DE LA ALQUIMIA A LA QUÍMICA Fue Teofrasto Paracelso (1493- 1541) quien propone las primeras ideas primitivas de lo que luego se llamaría química , al ampliar el significado de la alquimia y definirla como el arte de separar lo puro de lo impuro, ampliando su uso a un variado número de personas como médicos, panaderos, fundidores de metales, cocineros y otros, luego se pasa por uno de los primeros atomistas que vivió en el siglo XVI, Giordano Bruno ( 1548-1600), el cual escribió en su libro sobre los principios , elementos y causas de las cosas en 1590, “ los compuestos se forman por mezcla de los cuerpos, pero están compuestos de átomos” . Luego fue Robert Boyle quien intento construir una teoría de la materia que fuera útil para la ciencia y cuya hipótesis fundamentalmente era una teoría atómica, hipótesis esta argumentada en sus obras “Sceptical Chymist” 1661 y en el “Origin of Forms and Qualities” 1667 y en la cual expresa que el mundo de la materia está formado por racimos de átomos en movimiento y que los diferentes cambios en la naturaleza se dan por los continuos choques de una partícula con otra. Igualmente Boyle junto a Van Helmont, Joseph Priestley, Henry Cavendish y Joseph Black, quienes iniciaron el camino que daría al traste con la empírica alquimia y con la teoría del flogisto creada por los químicos Alemanes Johann Joacchim Becher y Georg Ernst Stahl y que domino el pensamiento occidental durante un siglo, y la cual planteaba que cuando arden los objetos, el flogisto se escapa de estos con movimientos de rotación y cuando se recupera por educción, el flogisto regresa a dicho objeto; expone además dicha teoría que algunos cuerpos como el carbón o el azufre contienen mas flogisto que otros, y pueden cederlo a otros que lo han perdido. Pero para lograr demostrar la inefectividad de dicha teoría tendremos que retroceder en el tiempo hasta el año de 1630 cuando Van Helmont quién crea la palabra gas, para referirse por lo menos a dos gases, el silvestre (dióxido de carbono) y gas pingüe (Hidrógeno impuro o gas de los pantanos),expresa la imposibilidad de recogerlos y contenerlos en un recipiente, pero fue Robert Boyle, quien demostró lo contrario al recoger por vez primera un gas y descubrir su poder inflamable, era el hidrógeno, también descubre Boyle en el año de 1662 la ley que lleva su nombre y que establece que el volumen de un gas dado a temperatura constante es inversamente proporcional a la presión. Posteriormente Joseph Priestley diseño muchos de los equipos usados hasta ahora en el manejo de los gases, con los cuales recogió gases sobre el agua, y demostrando que las sustancias solubles en agua podían ser recogidas sobre el mercurio. En esta larga fila de hombres de ciencia encontramos también a Joseph Black quien trabajo con álcalis, demostrando que estos desprenden gas y por lo tanto esta era la causa de la pérdida de peso, pero añade “Del mismo modo con el que las tierras calcáreas y los álcalis atraen fuertemente a los ácidos y pueden saturarse con ellos, también atraen al aire fijo y en su estado natural se saturan con él”. historia de la química – Jr.PARTITINGTON 1945- pg109 , las experiencias de Black fueron ratificadas por Henry Cavendish en su primera publicación referente a los temas de química y la cual titulaba On Factitious Air (1766) , en su obra Cavendish da el nombre de aire ficticio a cualquier aire contenido en un cuerpo cualquiera y que se puede liberar de forma controlada a través de los experimentos, por lo tanto para Cavendish, el gas fijo de Black era un ejemplo de esto. Otros descubrimientos de Cavendish fue que “el aire que contiene un décimo de su volumen de aire fijo, apaga una vela encendida, que el agua absorbe un poco más de su volumen de aire fijo, a la temperatura ambiente y una cantidad mayor en frío, la que es expedida al hervir el agua y que el espíritu del vino absorbe cerca de 2 ½ veces su volumen de aire fijo” “ historia de la química –Jr.PARTITINGTON 1945-pg115. En síntesis fueron estos algunos hombres de ciencia, los que abrieron el camino que cerraría Lavoisier y que haría que la química como el ave Fénix renaciera de sus cenizas. LAVOISIER Y EL SIGLO DE LAS LUCES DE LA QUÍMICA Antoine Laurent Lavoisier nace en Paris el 26 de agosto de 1743 y muere el 8 de mayo de 1794. De familia rica Lavoisier fue educado en el Collège Mazarin, pero siguió también y de forma independiente , un curso de Astronomía, dictado por La Caille, otro de Botánica, dictado por Bernard de Jussien y de química con Rouelle, fue designado académico en el año 1768, y nombrado posteriormente por Turgot , inspector de pólvora y salitre, secretario de hacienda en el año 1791 y finalmente después de la Revolución formo parte de la comisión encargada de establecer el Sistema Métrico; en 1793 es encarcelado y acusado de mojar el tabaco destinado a los soldados y llevado a plaza pública el 8 de mayo de 1794, donde fue guillotinado junto a su suegro. Aunque largo tiempo olvidado, Lavoisier recibió su estatua en París en el año de 1900. Antonio Laurent Lavoisier se caracterizó toda su vida por hacer uso constante de la balanza y no fue el único, otros lo hicieron antes, pero su obsesión por la precisión fue algo único en él, su laboratorio bien dotado fue obtenido con el dinero que le dejaba el buen puesto de “asentista”, al cual accedió en 1770 cuando fue integrado a la Fermé Générale, una compañía privada que fue contratada por el rey de Francia Luis XV, para cobrar los impuestos a una Francia cada vez más pobre y hambrienta, esta labor le dejo a Lavoisier grandes dividendos, con los cuales pudo construir su laboratorio, un año más tarde se caso con la joven Marie Anne Pierrette Paulze, con quien nunca tuvo hijos, pero quien fue su mano derecha en su labor investigativa. Aunque Lavoisier fue el gran Newton de la química y constructor de una verdadera Ciencia en esta rama del conocimiento, fue poco lo que aporto en materiales a esta ecuménica obra; y sus trabajos fueron dirigidos a organizar y terminar de forma sistemática los trabajos de otros, como Black, Priestley y Cavendish, de quienes no solo culmino sus obras, si no que además interpreto de forma brillante DEL AIRE AL OXIGENO Con Carl Wilhelm Scheele (1742-1786) el aprendiz de un boticario, se inicia un camino que habría de culminar el gran Lavoisier, pues fue este quien en su pequeño y frío laboratorio en Köping Suecia, sentó las bases que explicarían la composición del aire y el descubrimiento del oxígeno como elemento fundamental en los procesos de la respiración, esto sucede cuando Scheele, buscando la explicación al fenómeno por el cual el volumen de una cantidad dada de aire encerrada en un recipiente y en contacto con diferentes materiales , experimentaba una contracción. Scheele trataba de explicar a través del flogisto estas diferencias, pero descubrió algo mas, la existencia de una sustancia inflamable diferente del aire común que no solo no lo igualaba en peso, 1/3 del total, sino que además resultaba ser más liviano, que la segunda ¾ del total, la existencia de dos fluidos en el aire, el segundo que atraía al flogisto y el primero más liviano que no lo hacía, y nombrados por Scheele como Aire Inmundo y Aire del fuego, fue de vital importancia para los trabajos posteriores de Lavoisier, estos dos fluidos se conocieron más tarde como nitrógeno y oxígeno, gracias a Joseph Priestley cuando “obtuvo el oxígeno el primero de agosto de 1774 en Calne, mediante el calentamiento del óxido de mercurio, usando para dicho calentamiento una lente convergente” ” historia de la química –Jr.PARTITINGTON 1945- PG131. Priestley demostró además que dicho gas no era soluble en agua y que su capacidad de combustión era sumamente alta. Y fue el mismo Priestley, quien en 1775 demostraría que un ratón vivía el doble del tiempo en una cantidad dada de este gas, que en otra de aire solo. No obstante continuaba en él la idea del flogisto y explicaba que cuando ese nuevo gas ardía en un recipiente cerrado, este se saturaba de flogisto y por eso se apagaba, cosa que no sucedía al aire libre, de todas formas lo que Priestley evidencio es que “el nuevo aire contiene muy poco o nada de flogisto y por ese motivo lo llamó aire deflogisticado. El gas que queda en el aire común cuando los cuerpos queman en él se llamó, por ese motivo, aire flogisticado” historia de la química –Jr.PARTITINGTON 1945pg133. EL OXIGENO DE LAVOISIER Una de las características más específicas en los trabajos de Lavoisier es su carácter sistemático y cuantitativo, pues como dijimos en páginas anteriores, este era un hombre sumamente obsesivo con la precisión en los pesos y medidas, su uso constante de la balanza lo llevo a tener cada vez pesos más exactos; pero el método cuantitativo propone además cumplir con una ley sumamente importante para la química “ la de la indestructibilidad de la masa ” y que fue enunciada por el mismo Lavoisier en los siguientes términos “ porque nada se crea en los procesos, sean éstos naturales o artificiales, y puede tomarse como un axioma que en todo proceso existe igual cantidad de materia, antes y después del mismo, permaneciendo constantes la cantidad y la naturaleza de los principios que intervienen, siendo todo lo que sucede, sólo cambios y modificaciones” historia de la química – Jr.PARTITINGTON 1945- PG138. En 1772 Lavoisier demuestra a través de las experiencias que cuando se queman sustancias en recipientes cerrados, el producto generado resulta ser más pesado que el compuesto inicial, lo que sucede según el por la absorción de aire en medio de la combustión , esto lo demostró al repetir las experiencias de Boyle, calcinando plomo y estaño en retortas de vidrio, las cuales peso antes y después de la quema, sin abrirlas, encontrando que su peso no variaba; luego abrió por un extremo dichas retortas y encontró que el aire que ingresaba a ellas hacia que estas pesaran mas en una proporción similar al aumento que presentaba el metal después de ser quemado y formar la cal, a dicho aire respirable lo llamo “mofette atmosphérique o aire residual”. Más tarde lo llamo “azote” y al final Chaptal lo denominó nitrógeno en el año de 1790, en este punto Lavoisier se empieza a encontrar con el gas de Scheele y con la teoría antiflogista, la cual estructuro finalmente al describir cuatro conclusiones después de muchas experiencias en la combustión de diferentes sustancias y que fueron expuestas como siguen: 1. Las sustancias sólo arden en el aire puro. 2. Los no metales, tales como azufre, fósforo y carbón, al quemar producen ácidos y por este motivo al gas se le llama oxigeno. 3. Los metales por combustión producen cales con absorción de oxigeno. 4. La combustión no es, de ningún modo, un proceso debido al escape de flogisto, sino a la combinación de la sustancia combustible con oxígeno. historia de la química –Jr.PARTITINGTON 1945- pg133. Si bien es cierto Lavoisier no descubrió el oxigeno, si fue el primero en reconocer la importancia de este y en determinar que este era un elemento o principio, entendido este como la etapa última en la que no es posible separar una sustancia simple, por lo tanto hasta no demostrarse lo contrario no se entenderá como un compuesto; Cavendish demostró que el agua se podía producir quemando un gas inflamable en aire y Lavoisier posteriormente repitió el experimento de un modo más moderno y bautizó al aire inflamable con el nombre de hidrógeno. Otro de los grandes aportes de Lavoisier fue el estructurar la teoría de la combustión y de la calcinación de los metales, a través de experiencias cuantitativas, demostrando la ley de las proporciones definidas y la de las atracciones específicas de los cuerpos. Finalmente llega a la conclusión que la teoría del flogisto es innecesaria para explicar los fenómenos de la combustión, propone en 1777 en su memoria “Consideraciones generales sobre la naturaleza de los ácidos y de los principios que los componen” el nombre de oxígeno y expone que dicho elemento es el constituyente de todos los ácidos. Para finalizar en sus experimentos sobre la respiración demuestra Lavoisier que hay una gran similitud entre la combustión y la respiración, pues ambas se realizan en presencia de oxigeno, y que esta última se realizaba en los pulmones cuando el oxigeno inhalado, oxida los compuestos de la sangre, entre los que se encuentran el carbono, el cual se convierte en dióxido de carbono. Si bien es cierto Mayow demostró que dicho proceso se realizaba en todo el organismo del animal, el gran aporte de Lavoisier radica en el uso que empieza a dar al nuevo elemento. LA UNIVERSALIDAD DE UN METODO “La imposibilidad de separar la nomenclatura de la ciencia, y la ciencia de la nomenclatura, depende de que toda ciencia física se forma precisamente de tres cosas: de la serie de hechos que constituyen la ciencia: de las ideas que los recuerdan; y de las palabras que las expresan.” Tomado de un texto de Lavoisier- tratado elemental de química – EL INVESTIGADOR DEL FUEGO - HORACIO GARCIA – 2003 Ya sentados los nuevos pilares de la química moderna, Antonio Lavoisier, se prepara para realizar lo que ninguno de los antecesores de la química había hecho, ni la alquimia, ni la iatroquímica, formalizar una nomenclatura capaz de unificar estas ciencias alrededor de un lenguaje común y universal capaz de nombrar desde lo elemental, lo más complejo. Si bien es cierto ni Cavendish, ni Priestley , quisieron salir del modelo del flogisto, otros hombres de ciencia como Black ,Bergman en Suecia y Klaproth en Alemania siguieron las doctrinas de Lavoisier. En compañía de otros hombres de ciencia como Berthollet y Fourcroy, Lavoisier pública en el año de 1787 su obra “Métodos de nomenclatura Química”, donde se establecen las primeras normas que se usaban para dar nombre a cada sustancia con base a los elementos que componían dicho compuesto y así ponerlos de acuerdo con las nuevas teorías; la idea central era identificar los elementos que formaban el compuesto con el solo nombre, y este era tan claro que fue adoptado de forma vertiginosa en el planeta. En 1789 pública un texto llamado “ Tratado elemental de Química” en el cual se estructura su nueva doctrina, convirtiéndose en el primer texto de química moder- na y donde se hace un compendio de todos los elementos químicos conocidos en esa época y que corresponden muchos de ellos a sustancias que aun no se habían podido descomponer; en cuanto al flogisto si bien es cierto destruyo una teoría inviable, su clasificación del calor y la luz como elementos , así como llamar al primero “fluido imponderable o calórico”, hicieron que este reemplazara al flogisto y permaneciera en el seno de la comunidad científica por medio siglo mas. No obstante Lavoisier tuvo un merito mayor al superar la critica misma de Boyle en cuanto a su concepto de elemento, pues lo libera de la teoría mecánicocorpuscular, permitiendo con esto que la química se separe de la física y adquiera su estructura propia y nacer como una ciencia independiente, con capacidad de crear métodos nuevos para alcanzar sus propios conocimientos CONCLUSIONES Lavoisier, llamado el Newton de la química, saca a la alquimia de su prehistórica coraza y hace de esta una herramienta sofisticada capaz de transformar el mundo, convierta lo empírico en experimental , lo dudoso en lo cierto y lo oculto en visible, su genialidad logra discernir entre el pasado y el futuro y haciendo uso de un método científico bien desarrollado y de una lógica poco común , organiza los viejos símbolos en un cuerpo capaz de permitir a todos los hombres leer una misma lengua. La obra de Lavoisier tiene una connotación trascendental en la química moderna, por una parte, desmitifica la teoría del flogisto, la cual había atrasado el desarrollo de tan noble ciencia más de un siglo; segundo da fin a las discusiones alrededor de los gases y de la combustión y por último instaura la nomenclatura química, como una rama de la química, que permitirá a esta organizar elementos y compuestos en un cuerpo común. BIBLIOGRAFIA Taylor F. Sherwood. Los alquimistas fundadores de la química moderna. Fondo de cultura Económica. México, 1961 Simón José Avais. Los titanes de la química. Editorial Nacional S.A . México, 1954 J.R. Partington. Historia de la química. Espasa-alpe. Argentina, 1945 Teresa de la selva, De la alquimia a la química, Fondo de cultura Económica,2003 Horacio García, El investigador del fuego, Alfaomega Colombiana S.A. 2003 http://quimica.ugto.mx/revista/1/Lavosier.htm