Editorial - Revista Pentecostes

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Editorial
Raquel Rojas.
Servidora Nacional RCC
Queridos hermanos.
“El primer mandamiento de todos es: el Señor nuestro Dios es el único
Señor. Ama al Señor, tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma,
con toda tu mente y con todas tus fuerzas” (MC.12,29-30).
El mundo actual necesita de hombres y mujeres que amen a Dios, lo
busquen, tengan un diálogo profundo con Él día a día, a través de la
ORACIÓN, cuando oro estoy conversando con el amado, es allí donde
puedo encontrarme a solas con Él, gozar de su presencia y descubrir
cuanto me ama.
Tú y yo necesitamos tener un encuentro personal con el amado por eso
te exhorto a que tengas diariamente tu oración personal, para avivar
el fuego de Dios en tu interior y que tu corazón pueda arder de amor
hacia Él y que este mandamiento se haga realidad en ti.
La oración personal es parte vital de tu vida, es un tiempo privilegiado
y muy bendecido, allí hablas con el amado, puedes escucharlo y de
esta manera responder a lo que ÉL te pide. Es en esos momentos de
intimidad con Dios donde puedes bajar a la casa del alfarero y dejar que
te moldee a su manera.
Queridos Hermanos y Hermanas, que tu oración sea esa llave maestra
que diariamente te lleve a un encuentro profundo y personal con el Rey
de Reyes y Señor de Señores, busca los momentos de comunión con
Dios de soledad de silencio interior, descansa en Él, y Él escuchará las
peticiones de tu corazón.
Dios te ama y tiene un plan maravilloso para ti, por eso te digo ora sin
cesar, entra en tu cuarto y comunícate a solas con tu Padre Dios, y Él te
premiará.
Bendiciones.
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PENTECOSTÉS • N° 256
MAYO • JUNIO • 2015
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Papa Francisco
a los carismáticos:
“La acción insustituible
en la Iglesia
es el Espíritu Santo”
VATICANO, 3 de julio de 2015.“Tengamos claro esto: el único insustituible en la Iglesia es el Espíritu
Santo, y Jesús es el único Señor”,
recordó el Papa Francisco durante
el multitudinario encuentro con
miembros de la Renovación Carismática Católica y la Fraternidad
Católica de Comunidades Carismáticas de Alianza, realizado en la
Plaza de San Pedro.
En su discurso a las cerca de
30.000 personas, el Papa afirmó
que “todos los servicios en la Iglesia es conveniente que tengan una
caducidad, no hay líderes de por
vida en la Iglesia”.
En ese sentido, el Santo Padre
alertó a los líderes del peligro de
caer en la gran tentación, que viene
del demonio, “de creerse indispensables, sea cual sea el encargo”.
Al hablar de “aquellos que
guían”, el Pontífice reconoció que
le gusta más el término de “servidores” en lugar de “líderes” y aseguró que “el demonio les lleva a
querer ser los que mandan, aquellos que están en el centro y así,
paso a paso, caen en el autoritarismo, en el personalismo y no dejan
vivir a las comunidades renovadas
en el Espíritu”.
“Dejemos que nos guíe el Espíritu Santo, esta corriente de gracia que busca siempre la unidad.
Nadie es el patrón. Un solo Señor,
¿quién es? (el público: Jesús) Jesús
es el Señor. Les recuerdo, que la Renovación Carismática es una gracia
para toda la Iglesia”.
Asimismo dejó una tarea para
la RCC: “organizar seminarios de
vida en el Espíritu para los hermanos que viven en la calle y para los
hermanos marginados por tantos
sufrimientos de la vida”.
Unidad en la diversidad
El Papa Francisco también se refirió a una idea que dio a la RCC el
año pasado en el Estadio Olímpico
de Roma. “Allí hablé de la unidad
en la diversidad, he dado el ejemplo de la orquesta. En la Evangelii
Gaudium, he hablado de la esfera y
del poliedro. El poliedro demuestra
la confluencia de todas las partes
que, en éste, mantienen su originalidad. Estos son los carismas, en
la unidad, pero en la propia diversidad. Unidad en la diversidad, la
distinción es importante porque
estamos hablando de la obra del
Espíritu Santo, no de la nuestra”.
Por eso añadió “no se puede
decir nosotros somos la corriente
denominada Movimiento Carismático Católico, ustedes no. ¡Esto
no se puede decir! Por favor, hermanos esto no es así, no viene del
Espíritu, porque el Espíritu Santo
sopla donde quiere, cuando quiere, y como quiere. Unidad en la diversidad y en la verdad, que es el
mismo Jesús”.
Agregó: “¿Cuál es el signo común de quienes han renacido de
esta corriente de gracia?, convertirse en hombres y mujeres nuevos,
este es el Bautismo en el Espíritu.
Les pido que lean Juan 3, versículos
7,8 Jesús a Nicodemo. Si han vivido
“No se puede
decir: ‘nosotros
somos la corriente
denominada
Movimiento
Carismático Católico,
ustedes no’. ¡Esto no
se puede decir! Por
favor, hermanos, esto
no es así, no viene
del Espíritu, porque
el Espíritu Santo
sopla donde quiere,
cuando quiere, y
como quiere. Unidad
en la diversidad y en
la verdad, que es el
mismo Jesús”.
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PENTECOSTÉS • N° 256
MAYO • JUNIO • 2015
“Si el Señor nos da vida les espero a todos
quienes quieran venir en el 2017. No es tan
lejos. Aquí en la Plaza de San Pedro para
celebrar el jubileo de oro de esta corriente de
gracia”.
esta experiencia, compártanla en la
Iglesia y este es el servicio más importante que se pueda dar a todos
en la Iglesia. Ayudar al pueblo de
Dios al encuentro personal con Jesucristo, que nos cambia en hombres y mujeres nuevos. En pequeños grupos humildes pero eficaces,
porque es el Espíritu el que opera.
No apuntar tanto a las grandes
concentraciones que terminan allí,
sino a las relaciones artesanales
que derivan del testimonio cotidiano en la familia, en el trabajo, en
la vida social, en la parroquia, con
los grupos de oración, con todos,
con todos”.
Además pidió tomar la iniciativa para crear lazos de amistad y de
confianza con los obispos, quienes
tienen la responsabilidad pastoral
de guiar al cuerpo de Cristo, incluido a la Renovación Carismática.
Habló asimismo de ecumenismo. “Hay otro signo fuerte del
Espíritu en la Renovación Carismática: la búsqueda de la unidad del
cuerpo de Cristo. Porque los carismáticos tienen una gracia especial
para rezar y trabajar en favor de la
unidad de los cristianos. Porque la
corriente de gracia cruza a todas
las Iglesias cristianas. La unidad
de los cristianos es obra del Espíritu Santo, y tenemos que rezar
juntos. El ecumenismo espiritual,
el ecumenismo de la oración. Unidad antes de todo en la oración. El
trabajo por la unidad de los cristia-
nos comienza con la oración. Rezar
juntos. Unidad porque la sangre de
los mártires de hoy nos hace uno.
Sabemos que aquellos que odian
a Jesucristo, cuando asesinan a un
cristiano no le preguntan ¿Tú eres
luterano, ortodoxo, evangélico,
bautista, metodista? ¡Tú eres cristiano! Y le cortan la cabeza. Estos
no confunden, saben que hay una
raíz allí, que nos da la vida a todos y que es Jesucristo, y que está
el Espíritu Santo que nos lleva a la
unidad”.
Finalizó diciendo: “si el Señor
nos da vida les espero a todos juntos, en el ICCRS y la Fraternidad
Católica, a todos quienes quieran
venir en el 2017. No es tan lejos.
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Aquí en la Plaza de San Pedro para
celebrar el jubileo de oro de esta
corriente de gracia. Una oportunidad para la Iglesia como dijo el
beato Pablo VI en la basílica de
San Pedro en 1965. Nos reuniremos para dar gracias al Espíritu
Santo por el don de esta corriente de gracia que es para la Iglesia
y para el mundo. Y para celebrar
las maravillas que el Espíritu Santo ha hecho durante estos 50 años
cambiando la vida de millones de
cristianos. Nuevamente gracias por
haber respondido con alegría a mi
invitación. Que Jesús les bendiga y
la Virgen santa les proteja. Y no se
olviden de rezar por mí, porque lo
necesito. Gracias”.
Asimismo dejó
una tarea para la
RCC: “organizar
seminarios de vida
en el Espíritu para
los hermanos que
viven en la calle y
para los hermanos
marginados por
tantos sufrimientos
de la vida”.
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PENTECOSTÉS • N° 256
F a m i l i a
¿Cómo
orar
hijos?
enseñarle a
a los
José A. Pagola
MAYO • JUNIO • 2015
Hoy, en muchas de nuestras familias, ya no se reza. Y empiezan
las justificaciones: nos da vergüenza proponer a la familia; la oración
parece algo forzado, artificial, no
nos sale; los hijos son demasiado
pequeños o demasiado grandes.
Sin embargo, la oración en familia
es hoy posible.
El primer paso lo tiene que dar
la pareja aprendiendo a orar ellos
juntos. Una oración en pareja, sencilla, normal, sin demasiadas complicaciones, hace bien a la pareja
creyente y es la base para asegurar
la oración en los hijos.
Provocar el ambiente
apropiado
La oración en familia pide un
cierto clima. Algunas familias llegan a reservar en la casa un lugar o
“rincón de oración” especialmente
destinado para orar, como expresión de que se le deja a Dios un
sitio en la casa. Es un rincón preparado con alguna Biblia, un cirio, alguna planta, que se puede adornar
de manera apropiada en algunos
tiempos litúrgicos.
También se puede cuidar más lo
que entra en el hogar (cierto tipo
de revistas, DVD, libros, programas
de TV). No es difícil hoy suscribirse a alguna revista cristiana (como
Pentecostés), comprar libros sanos
y educativos para los hijos, Evangelios y Biblia para los niños, CD con
grabaciones para orar, grabación
del Rosario.
Se puede también introducir
algún símbolo, imagen o signo religioso de buen gusto. Los lugares
más apropiados son, sin duda, la
sala de estar donde la familia se
reúne para descansar, hablar o ver
la tele, y las habitaciones de los
hijos donde, entre otros pósters y
objetos variados, pueden haber algunos de tipo religioso, algún recuerdo de la primera comunión o
de la confirmación, los Evangelios,
alguna imagen de Jesús.
Saber enseñarles
Antes que nada, es necesario
que el niño vea rezar a sus padres.
Si ve a sus padres rezar sin prisas,
quedarse en silencio, cerrar los ojos,
ponerse de rodillas, hacer las cuen-
tas del Rosario, poner el Evangelio
en el centro de la mesa después
de haberlo leído despacio, el niño
que capta la importancia de estos
momentos, percibe la presencia de
Dios en el hogar como algo bueno, aprende un lenguaje religioso,
palabras y signo que quedan grabados en su experiencia, aprende
unas actitudes y se va despertando
en él la sensibilidad religiosa.
Nada puede sustituir a esta experiencia. Pero, además, es necesario orar con los hijos. Los niños
aprenden a orar rezando con sus
padres. Hay que hacerlo participar en la oración, que aprendan
hacer los gestos, a repetir algunas
fórmulas sencillas, algún canto, a
estar en silencio hablando a Dios.
El niño ora como ve orar. Llegará
un momento en el que el mismo
podrá bendecir la mesa, iniciar una
oración o leer el Evangelio con la
mayor naturalidad. La oración
queda grabada en su experiencia
como algo bueno, que pertenece a
la vida de la familia, como el reunirse, el hablar, el reír, el discutir o
el divertirse.
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PENTECOSTÉS • N° 256
El Papa Francisco
participó en el en
el III Retiro Mundial
de Sacerdotes,
organizado por
la Renovación
Carismática Católica
Internacional y la
Fraternidad Católica
de Comunidades
Carismáticas de
Alianza.
MAYO • JUNIO • 2015
Francisco
a sacerdotes:
“Dejen el látigo
colgado en la sacristía
y sean pastores tiernos”
Tablets, teléfonos, cámaras de
fotos... Todo valía para inmortalizar el momento. El Papa llegaba así
a la Basílica de San Juan de Letrán
para dirigir una meditación en el III
Retiro Mundial de Sacerdotes organizado por la Renovación Carismática Católica Internacional y la Fraternidad Católica de Comunidades
Carismáticas de Alianza.
En el retiro participaron más de
1.000 sacerdotes y obispos de 90
países. El Papa les dijo que es bueno que estén juntos e incluso, que
discutan.
“Una Iglesia donde no hay
discusiones es una Iglesia muerta. ¿Saben donde no se discute?
En los cementerios, nadie discute
nada. Nadie”.
Hizo un repaso por varios temas. Reflexionó sobre el ministerio
sacerdotal, sus dificultades y su misión. Volvió a pedir a los sacerdotes
que estén cerca de las personas y
que no olviden ser misericordiosos,
sobre todo, en el confesionario.
“Por favor, una Iglesia sin Jesús
y sin misericordia, no. No espanten
al pueblo fiel. Cuando pasa esto,
cuando el corazón del sacerdote
es burócrata y apegado a la letra
de la ley, la Iglesia que es madre de
tantos fieles, se transforma en una
madrastra”.
Además los llamó a ser “pastores con la ternura de Dios. Dejar el
látigo colgado en la sacristía y ser
pastores con ternura, también con
aquellos que les creen más problemas” puesto que “es una gracia
divina”.
Asimismo, les aconsejó acudir “en momentos de soledad”,
al capítulo 11 del libro del profeta Oseas, en el que Dios habla del
amor por su pueblo y de cómo le
ha sacado de la esclavitud. “De la
esclavitud del pecado, de la esclavitud de la autodestrucción y de todas las esclavitudes que cada uno
conoce, que ha tenido y que tiene
dentro… Qué bonito escuchar que
Dios me enseña a caminar. El Omnipotente se abaja y me enseña a
caminar... Sin Él no sabría caminar
en el Espíritu”, dijo Francisco.
El Papa aseguró que todos pueden ver en esto su propia historia
y no tener miedo porque Dios está
con cada uno. Es el ejemplo de
los mártires coptos asesinados en
la costa de Libia por el autodenominado Estado Islámico el pasado
mes de febrero. Ellos, señaló, “estaban seguros de que Dios no les
habría abandonado” y los decapitaron “pronunciando el nombre de
Jesús”. “Sabían que Dios, mientras
cortaban sus cabezas, no les abandonaría”.
Sobre la ternura de Dios, indicó
que “se enciende” puesto que “Él
es el único capaz de tener una ternura cálida”. “A veces pienso que
tenemos miedo de la ternura de
Dios y que por el hecho de que tenemos miedo de la ternura de Dios
no dejamos que se experimente en
nosotros mismos” y por eso “muchas veces somos duros, exigentes,
castigadores”.
Francisco también alentó a los
sacerdotes a cuestionarse si, como
pastores, ellos también salen a buscar la oveja perdida dejando atrás
las 99 o si por el contrario solo se
buscan a sí mismos.
También hizo unas recomendaciones a los sacerdotes para que
sus homilías ayuden y no alejen a
los cristianos.
“No se olviden de que la homilía no es una conferencia. No es
una clase de catequesis”.
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Había pasado una hora, pero
no estaba cansado. Por eso, varios
sacerdotes le hicieron preguntas.
A uno del Perú le dijo que debe
“estar cerca de los pobres, pero sin
despreciar a los demás, porque eso
sería ideología”.
A otro europeo le confesó que
la Iglesia está dispuesta a unificar
con el resto de cristianos la fiesta
de la Resurrección de Jesús, quizá
el segundo domingo de abril.
Tras el largo encuentro, celebró
misa con ellos. Una misa según el
estilo espontáneo de los sacerdotes de la Renovación Carismática, y
que el Papa conoció bien durante
sus años en Buenos Aires.
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La Conferencia Episcopal puso a disposición
de la sociedad chilena y sus autoridades un
mensaje en torno al proyecto de ley sobre
despenalización del aborto en tres causales.
Chile:
Obispos promueven
derecho humano
a una vida digna
para toda persona
El respeto y consideración por
las personas enfrentadas a la realidad del aborto, que casi siempre
deriva de situaciones de gran sufrimiento, es el punto de partida del
mensaje de la última sesión de la
109ª Asamblea Plenaria.
En su mensaje, los obispos
afirman que una actitud auténticamente humanista y verdaderamente cristiana mirará siempre, en
estos casos, la vida, la dignidad y
el mayor bien de la madre y de su
hijo, y jamás la exclusión y supresión deliberada de uno de ellos.
Valorando el rol de las instituciones democráticas llamadas a
discernir, a estudiar y a decidir las
leyes, los obispos buscan contribuir
a una reflexión y diálogo que es-
peran se realice con respeto, “sin
prejuicios, descalificaciones ni caricaturas, recordando lo que nos ha
enseñado la historia acerca del derecho a la vida, y buscando siempre acercarnos a partir de lo que
nos une y reconociendo aquello
que hay de bueno y verdadero en
las posiciones contrarias”.
El mensaje reitera que la Iglesia Católica reconoce, respeta,
defiende y promueve el valor de
la vida y la dignidad de la persona humana como un fundamento
esencial e irrenunciable de la vida
en la sociedad. Al mismo tiempo,
promueve el derecho a la vida de
la persona humana, sin discriminación alguna, desde la concepción hasta su muerte natural. Pero
este derecho no se reduce a estos
dos momentos: “supone procurar
como sociedad, además de prohibir todo atentado injusto contra la
vida inocente, para todas las personas y sus familias, sin ninguna
exclusión, las condiciones de vida
acorde con su dignidad personal:
vivienda adecuada, educación de
calidad, trabajo decente, remuneración justa, medio ambiente
favorable a la vida, oportunidades
de desarrollo integral, etc. Al respetar y promover la vida humana,
en todas sus dimensiones, rechazamos el aborto, como asimismo las
escandalosas e injustas desigualdades sociales, la usura, la eutanasia
y la discriminación arbitraria”, manifiestan los pastores.
Tres causales, dolor vivido al
límite
Los obispos expresan que las
tres situaciones que plantea el
proyecto son excepcionales y dramáticas, donde el dolor se vive al
límite: “El aborto en ningún caso
aporta sanación a dichas vivencias
traumáticas. El aborto nunca es terapéutico”.
Afirman que no constituye
aborto la acción de suyo terapéutica para salvar la vida de una madre
en peligro, cuando no busca eliminar directamente la vida de la persona concebida, aunque su muerte
sea una posibilidad prevista, aunque no querida o buscada.
Sobre los casos de “inviabilidad
del feto”, admiten que presentan
desafíos éticos mayores. Aunque
el respeto a la vida y la dificultad
de un certero diagnóstico impiden fundamentar la necesidad del
aborto para estos casos, los obispos hacen presente que esto no
reduce el drama personal de mujeres y familias que viven un proceso
doloroso que podría derivar en la
muerte prematura del hijo. Y piden
centrar los esfuerzos en procurar
programas de acompañamiento y
acogida para las madres y sus familias en estas dolorosas situaciones.
Frente al embarazo de una mujer violada, a los obispos no les parece “humano” dejarla sola en el
drama que ha sufrido, y tampoco
consideran “humano” privar de la
vida al más indefenso e inocente,
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que es su hijo. Abogan por un Estado y una sociedad activos y presentes junto a la mujer agredida,
ofreciéndole caminos y ayuda para
que ella u otra familia puedan acoger a un ser humano vivo e inocente. “Creemos que ‘despenalizar
el aborto ante situaciones de violación es renunciar a la tutela de
los más débiles e indefensos, y un
acto de rendición del Estado ante
el flagelo de la agresión sexual a
mujeres, un drama respecto al
cual Chile todavía está en deuda,
porque ni los gobiernos ni la sociedad en su conjunto hemos podido
abordar y superar este mal en su
raíz”.
Sin exclusiones
A juicio de los obispos católicos, sin adecuados programas integrales de educación sexual orientados hacia el amor y el respeto de
toda vida humana, “difícilmente
avanzaremos en una educación
humanizadora como escuela para
la vida”.
Animados a “trabajar por una
sociedad sin exclusiones”, los pastores no quieren “sumar niños no
nacidos a la lista no pequeña de
personas y grupos que Chile deja
fuera de su mesa y que, como ha
dicho el papa Francisco, son como
seres ‘descartables’”.
Los obispos invitan, tanto “a
quienes ayer promovían junto a la
Iglesia la defensa de la vida y dignidad de los perseguidos políticos”
como a quienes hoy se oponen al
aborto, a ser consecuentes promoviendo la vida y la dignidad humana siempre y en toda circunstancia.
La declaración concluye invitando a los católicos a reflexionar a
partir de “un sereno discernimiento en la tierra sagrada de su conciencia”, a dialogar estos temas en
sus comunidades y con otros actores sociales en sus ambientes.
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¿Qué es
una atadura espiritual?
Este tipo de esclavitud espiritual puede
originarse cuando una persona busca
un conocimiento, protección o poderes
sobrenaturales por medios ocultos.
Boletín ICCRS
Una atadura espiritual es una
influencia demoníaca oculta que
entorpece o bloquea el progreso
en la vida espiritual de una persona. Este tipo de esclavitud espiritual puede originarse cuando una
persona busca un conocimiento,
protección o poderes sobrenaturales por medios ocultos.
Por ejemplo, formas comunes
de buscar poderes ocultos son
la brujería y la magia; formas corrientes de buscar un conocimiento oculto son la adivinación y el
espiritismo. El espiritismo se refiere
a la consulta de espíritus o almas
de difuntos para saber u obtener
algo. Existen muchas maneras de
adivinación, incluyendo el uso de la
astrología, el tarot, la lectura de la
mano, la clarividencia y la geomancia, todas ellas pueden dar a las
personas un conocimiento falso o
envolvente de personas y eventos.
Dios prohíbe terminantemente
esas prácticas en la Escritura (Dt
18,10-12), puesto que representan
un rechazo a la confianza en Él y
un intento de manipular las fuerzas
espirituales para alcanzar propósitos personales. El Catecismo también afirma claramente que todas
esas prácticas son pecado grave,
incluso cuando se hacen para devolver la salud (N° 2117). La razón por la cual el implicarse con
lo oculto es tan peligroso es que
la persona puede quedar atada y
esclavizada por espíritus malignos.
Estos espíritus pueden utilizar la
conexión de una persona con lo
oculto para que se dé un beneficio
aparente, solo con el fin de conducir a la persona a una atadura
espiritual mayor. Por ejemplo, una
niña de doce años siempre estaba
enferma. Alguien le dio un amuleto para que lo llevase colgado en el
cuello. La enfermedad desapareció
inmediatamente. Pero la niña cayó
en depresión, dejó de reír e intentó
suicidarse. Satanás puede mantener el cuerpo en una salud aparente pero enviar el alma al infierno.
Cómo se originan las
ataduras
A continuación pueden encontrar algunas de las causas fundamentales que dan origen a ataduras espirituales:
• Acciones que invitan a los demonios y suscitan ataduras espirituales, como, por ejemplo,
la consagración a Satanás y los
juramentos de sangre, la iniciación en el vudú, las órdenes
esotéricas de sociedades secretas, la Nueva Era, la masonería,
o los rosacruces.
• Las prácticas orientales –espirituales y basadas en energías–
como el yoga, Tai Chi, Feng
Shui, mantras, la meditación
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transcendental, Zen, reiki o la
apertura de chakras.
Consultar adivinos y seguir
sus consejos: videntes, magos
(brujos, santeros, hechiceros,
etc.), astrólogos, hipnotizadores, tarotistas, chamanes y curanderos.
Llevar amuletos, talismanes,
signos del zodíaco, cuernos,
fetiches, azabaches, dijes,
patas de conejo, piedras bezoares, cemíes, anillos u objetos mágicos que se dice portan
energía.
Participar en sesiones de espiritismo con mesas giratorias, la
güija, consultas con bolas de
cristal, el juego de los abalorios
o sesiones con médiums.
Lectura aplicada de libros de
ocultismo, satanismo y horóscopos.
Lazos del alma o relaciones
sexuales con maestros de lo
oculto.
Persistencia en cometer pecados veniales y mortales.
Cuáles son los efectos de las
ataduras
Una atadura es devastadora
espiritualmente. Esta debilita la fe,
mata el deseo de alabar a Dios, de
proclamar a Jesús como Señor y
único mediador y de rezar a la Virgen María. Provoca ansiedad y desasosiego cuando una persona está
en lugares sagrados. Pensamientos
obscenos pueden asaltar la mente
de la persona en presencia de la
Eucaristía. Las prácticas ocultistas
pueden dar origen a perversiones
sexuales, alcoholismo, abuso de
drogas, violencia contra los seres
queridos y, en última instancia,
depresión y tendencias suicidas.
Puesto que estos síntomas pueden
tener otras posibles causas, sin embargo, solo aquellos con formación
y experiencia en el ministerio deberían intentar discernir si una persona tiene una atadura espiritual.
La liberación es
posible mediante
la oración hecha
con autoridad
en el Nombre de
Jesucristo.
Cómo se rompen las
ataduras
La liberación es posible mediante la oración hecha con autoridad
en el Nombre de Jesucristo. Pero la
persona que ha practicado el ocultismo debe tomar primero una decisión radical de conversión.
Se deberían seguir estos pasos:
• Reconocer los pecados ocultos
y confesarlos al Señor mediante el sacramento de la Reconciliación.
• Quemar y deshacerse de cualquier objeto o libro de lo oculto que posea (ver Hch 19,19 y
Dt 7,25).
• Renovar las promesas bautismales y renunciar a Satanás,
a sus obras y seducciones, haciendo una renuncia específica
a cualquier forma de lo oculto
en la que haya estado involucrado.
• Hacer una oración de liberación, con la ayuda de alguien
maduro y lleno del Espíritu,
para romper las ataduras,
ejercitando la autoridad bautismal y así rechazar espíritus
malignos en el Nombre de Jesús.
• Finalmente, consagrarse a
Jesús y llenarse del Espíritu
Santo. Jesús advirtió que no
es suficiente con expulsar los
espíritus malignos. «Cuando
el espíritu inmundo sale del
hombre, anda vagando por
lugares áridos en busca de
reposo, pero no lo encuentra.
Entonces dice: “Me volveré a
mi casa de donde salí”. Y al
llegar la encuentra desocupada, barrida y en orden. Enton-
ces va y toma consigo otros
siete espíritus peores que él;
entran y se instalan allí, y el
final de ese hombre viene a
ser peor que el principio» (Mt
12,43-45).
Si queremos experimentar una
libertad completa y duradera, debemos dejar que nuestra mente y
corazón se llenen con la Verdad
que es Jesucristo. Esto tiene lugar
por medio de la recepción frecuente de los sacramentos, la oración
diaria y la lectura de la Escritura, la
formación sólida y la relación con
otros católicos con los que seamos
transparentes y responsables.
Jesús vino a deshacer las obras
del diablo y a liberar a los cautivos (1
Jn 3,8; Lc 4,18). Ninguno está condenado a permanecer en una esclavitud espiritual si se vuelven a Él con
arrepentimiento y confianza.
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Receta:
Las 5
vitaminas
para animar
a parroquianos apáticos
Marc y Florence de Leyritz,
matrimonio católico francés con
experiencia en evangelización, fundaron una plataforma para dar herramientas de avivamiento pastoral
a sacerdotes y obispos llamada
“Pastores según mi corazón”.
El matrimonio da a conocer “5
vitaminas que necesita el Cuerpo
de Cristo para crecer” y cómo puede aplicarse en la vida personal y
en las parroquias o diócesis.
1. Vitamina A de “Alabanza y
Adoración”
Tanto la persona como la parroquia requieren oración, alabanza,
adoración, liturgia… “Nuestras comunidades han de permitir que en
la oración se sienta, que se experimente, a Dios. Que nuestra ora-
ción colectiva, sea con gregoriano
o con guitarra eléctrica, muestre al
visitante que se percibe la presencia de Dios”.
2. Vitamina B de “Buena
comunidad”
Para evangelizar y para crecer
espiritualmente, el individualismo
es malo, y la comunidad es buena,
incluso imprescindible. “En Francia
somos muy individualistas y eso es
malo para crear comunidad cristiana”, advierte Marc de Leyritz. “Hay
estudios que señalan que las comunidades religiosas que crecen son
aquellas que generan amistades:
eso es clave. Estas comunidades
han de estar abiertas a la amistad
con recién llegados. Conozco docenas de personas que dicen: ‘hace
10 años que estoy en esta parroquia y nunca nadie me ha saludado’. ¿Sólo en Francia pasa eso?”
3. Vitamina C de “Carismas,
cercanía y caridad”
Dios ha repartido sus dones y
carismas, sus talentos, para que
cada cristiano los ponga al servicio de los demás. Eso incluye servir desde la caridad y la cercanía,
como Cristo que era cercano y caritativo, y que aún hoy “nos busca
en un encuentro y un trato personal”. Este servicio necesita detectar
en nosotros los dones espirituales:
“los describe Pablo en 1 Corintios
y en Romanos capítulo 12 y cada
uno tenemos uno o varios para
ayudar a construir el Cuerpo de
Cristo. El problema es que en mu-
chas comunidades desconocen
qué dones tienen sus integrantes.
Los líderes y los sacerdotes deberían ayudar a discernir esos dones y
ponerlos a trabajar”.
4. Vitamina D de
“Discipulado”
Jesús ordenó: “Id y haced discípulos”. Hacer discípulos es discipular, formar cristianos maduros. “Si
los parroquianos no cambian y maduran en su fe con los años, no hay
discípulos, no hay crecimiento en
la vida cristiana”, denunció Marc
de Leyritz. Cada parroquia o grupo
debería plantearse si está haciendo
discípulos, como pide Cristo, o meramente ofrece servicios y atiende
a “consumidores de productos religiosos”.
5. Vitamina E de
“Evangelización”
Como dejó ya claro Pablo VI en
Evangelium Nuntiandii, “la Iglesia
existe para evangelizar”. Evangelizar no es una cosa más que hacen
algunos, sino la razón de ser de la
Iglesia, y todo en ella, y en cada comunidad, parroquia, grupo, debe
supeditarse a evangelizar. Lo que
dificulte la evangelización debe retirarse. Los evangelizadores han de
contagiar la salvación en Cristo.
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PENTECOSTÉS • N° 256
Eliana Agneses Labbe
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No hay dudas que muchos de
la renovación carismática pensaron
que los carismas son de los carismáticos. Eso no es cierto, porque
los carismas son gracias especiales
que Dios nos da cuando se lo hemos pedido para servir mejor, no
para servirnos a nosotros mismos.
Ahora bien, para que cada uno
pueda contribuir a la construcción
del mundo, Dios ha puesto en nosotros, además de la naturaleza
humana, aptitudes, cualidades,
capacidades personales; y esto, de
acuerdo a las diferentes etapas de
nuestra existencia humana, a los
diversos estados de vida, a nuestro
género y a la misión personal que
en el mundo tenemos que llevar.
Estas capacidades gratuitas
es lo que llamamos “carismas del
Espíritu”, que son nuestros instrumentos para contribuir en la edificación de la Iglesia del Señor. Nos
da los carismas no solo donde no
reina “envidias y discordias” (1 Cor
3,1ss) sino donde reina el amor,
aquel “camino más excelente” que
propone Pablo en (1 Cor 13) cuando habla de los carismas.
El amor es el que hace que los
carismas sirvan para “provecho”. El
carisma verdadero es un don del
amor del Espíritu.
Los carismas no son un valor
por sí y para sí. Están orientados
al crecimiento de la santidad de la
Iglesia en cuanto a comunidad. Los
Los Carismas
del Espíritu
Es importante
tener claro que
no hay cristiano
que carezca de
dones del Espíritu,
pues todos somos
instrumentos
vivos que
contribuirnos y
trabajamos en la
edificación de la
Iglesia.
carismas son gracias, dones gratuitos del Espíritu, tanto para la persona dotada de ellos, como para
los que se benefician de él, cuya finalidad está en suscitar el ejercicio
de la fe, la esperanza y la caridad.
Por esta razón los carismas no pueden usarse para beneficios propios,
su destino es el crecimiento de la
santidad de la comunidad eclesial.
El Espíritu Santo no obra la santificación solamente por el ejercicio
de las virtudes infusas teologales:
fe, esperanza, caridad y por los
sacramentos. La realiza también
a través de los carismas pero de
modo distinto a como lo hace por
los otros medios enumerados.
En ellos, el ejercicio de las virtudes teologales y la recepción de los
sacramentos desarrollan directamente la gracia: nos hacemos más
hijos de Dios, nos edificamos más
interiormente a imagen de Jesucristo. Por los carismas, gracias actuales, somos impulsados a hacer
actos de fe, esperanza y caridad;
somos movidos interiormente a recibir los sacramentos de una manera más consciente, con una mayor
preparación y fidelidad. Es la gracia
del Espíritu Santo que obra en la
visibilidad de los carismas.
Es importante tener claro que
no hay cristiano que carezca de dones del Espíritu, pues todos somos
instrumentos vivos que contribuimos y trabajamos en la edificación
de la Iglesia.
Cada uno, según el momento
de su vida, según el género estable
de su existencia, según su tarea en
la comunidad eclesial, recibe varios
carismas.
Tenemos carismas adecuados a
la época de la niñez, carismas de
la juventud, carismas para la edad
madura, carismas propios de la ancianidad, carismas para la vida de
soltería, para el estado matrimonial, para la viudez; carismas para
la vida consagrada a Dios, carismas
para el ministerio sacerdotal.
Aquí es conveniente resaltar
que tanto el carisma del matrimonio, como el carisma sacerdotal,
son tan importantes para la construcción de la Iglesia, que han sido
colocados en la dimensión de sacramentos.
En esta forma, los carismas son
inmensurables y de diferente naturaleza. Viniendo de la riqueza del
Espíritu, son inagotables, y la Iglesia los recibe en sus miembros de
acuerdo a las diferentes épocas y
diversas circunstancias por las que
la Providencia de Dios la va conduciendo.
La palabra carisma se encuentra
en el Nuevo Testamento diecisiete
veces en San Pablo y en la primera
carta de San Pedro; veamos:
• 1 Cor 1, 1,7: “A causa de la
gracia de Dios que os ha sido
dada en Cristo Jesús... no os
falta ningún carisma...”
• 1 Cor 7,7: “Cada uno tiene
su propio carisma de parte de
Dios: este así, aquél así”.
• 1 Cor 12,4: ”Hay diversidad de
carismas, pero es el mismo Espíritu”.
• 1 Cor 12,9.28.30: ”Carismas
de curaciones”.
• 1 Cor 12,31:” ¡Aspirad a los
carismas superiores!”.
• Rom 12,6: ”Teniendo carismas
diferentes según la gracia a
nosotros dada”.
• 1Tim 4,14: ”No descuides el
carisma que hay en ti”.
• 2 Tim 1,6: ”Reaviva el carisma
de Dios que está en ti por la
imposición de mis manos”.
• 1 Ped 4,10: ”Cada uno según
el carisma que recibió, póngalo al servicio de los demás
como buenos administradores de la multiforme gracia de
Dios”.
La palabra carisma es el resultado de la gracia de Dios que obra
de salvación.
19
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PENTECOSTÉS • N° 256
MAYO • JUNIO • 2015
La gracia de Dios es Cristo Jesús
y su obra de salvación, cuyo término es la vida eterna.
Algunos textos principales del
nuevo testamento que es importante leer y orar:
1 Cor 12,7-11; 1 Cor 12,2728; Rom 12,6-8; Ef 4,11-14; 1 Ped
4,10-11
San Pablo, antes de entregar su
definición de carismas, nos entrega tres vocablos que describen los
dones del Espíritu de tres maneras
distintas y complementarias a la
vez (1 Cor 12,4-6).
a) Carisma: el término carisma
significa la fuente de los dones: la gracia divina (Jaris) que
se hace concreta y que proviene del espíritu de Cristo. Son el
efecto de la gracia de Dios que
nos dio en Jesucristo de manera absolutamente gratuita.
b) Ministerios o servicios: denotan los modos en que los carismas se hacen reales en la práctica (1 Cor 12,5). Las misiones
precisas desempeñadas a favor
de la iglesia, a veces de un
modo duradero (Rom 11,13),
a veces, de un modo menos
estable (1 Cor 9,12-13).
c) Operaciones: expresan la acción de Dios que, de manera
tan especial supera la acción
del hombre. “Cuando un cristiano ejercita un carisma, está
actuando como un miembro
del cuerpo místico de Cristo, es
Jesús mismo quien obra a través de esta persona: (Gal 2,8;
Ef 1,19; 1 Cor 12,6).
San Pablo parece, indistintamente, atribuir cada aspecto mencionado, al Espíritu, a Jesucristo, al
Padre (1 Cor 12, 4-6) porque tienen por fuente a Dios que es Padre,
Hijo y Espíritu. Y por esta razón los
carismas se atribuyen a Dios Padre
(1 Cor 12,6) o al Señor Jesús (1 Cor
12,5; Ef 4,11) o al Espíritu Santo
(1 Cor 12,4; 7-11).
Pero en todo hay un fuerte
énfasis sobre la unidad; el mismo
Espíritu; el mismo Señor; el mismo
Dios (Padre). Es la igualdad en la
variedad: (1 Cor 12,1-6). La naturaleza de Dios es infinitamente
variada: tiene muchos aspectos.
Esto aparece en la estructura del
universo y en los carismas con que
enriquece a los hombres, pero la
manifestación de estos, son limitados, canalizados por el Espíritu
según su voluntad.
Por lo tano: carismas, ministerios y operaciones son tres expresiones que, prácticamente, pueden
utilizarse como sinónimos.
Los carismas son todos, a diversos niveles, ministerios, es decir,
servicios a la comunidad. San Pablo pasa sin distinción de la palabra carisma a la palabra ministerio
(diaconía); luego a la palabra operación (energía) para significar la
misma realidad (1 Cor 12,6-4).
En resumen: los elementos
constitutivos del carisma son esencialmente tres:
• Es un don de Dios.
• Tiene una eficacia particular.
• Es para el bien común.
Insistimos en que los dones del
Espíritu son diversos, como diversos son también los ministerios de
la Iglesia y las operaciones de los
hombres.
La unidad entre los diversos
carismas –unidad ciertamente profunda– se halla en que todos provienen del único Espíritu, así como
los ministerios proceden del único
Señor y las operaciones, a su vez,
del único Dios (1 Cor 12,4 ss).
Una división de los carismas
que se hace aquí no es la única,
pero nos puede ayudar.
1) Carismas de palabra: (poder
hablar)
a) El don de lenguas: (los tres aspectos)
- Hablar en lenguas
b)
c)
2)
- Orar en lenguas
- Canto en lenguas
El don de profecía
El carisma de interpretación
Carismas de entendimientos:
(poder conocer)
a) Palabra de sabiduría
b) Palabra de conocimiento, (de
ciencia)
c) El don del discernimiento
3)Carisma de significación:
(poder obrar)
a) EI don de sanación Física
- Interior
- Liberación como aspecto aislado de la sanación interior
b) Carisma de milagros
c) El don de fe carismática
Los grupos de oración que los
aprecian debidamente, piden con
humildad disponible los carismas
del Espíritu y esperan con fe expectante que el Señor prodigará en
ellos los dones espirituales, según
su plan de salvación, y los ponen
en servicio del amor fraterno, serán pronto testigos de su eficacia:
verán crecer la comunidad en toda
clase de frutos cristianos, evangelizarán con poder y con valentía darán testimonio de Jesús resucitado.
Los carismas deben ser usados
en el orden, en la humildad, en Ia
obediencia, en el discernimiento en
el amor y la oración. Es un verdadero morir a sí mismo.
Hay que dejar bien en claro que
los carismas, aún cuando la persona sea usada por el Señor con
frecuencia (o habitualmente), no
son gracias estables, son mociones pasajeras, ocasionales, siempre
dependientes de la gratuidad del
Espíritu.
Pero si queremos tener carismas
para servir, tenemos que pedirlo al
Espíritu.
¿Qué significa pedir al Espíritu?
Bueno significa varias cosas: nos da
gracias santificantes, gracias actua-
21
les y gracias extraordinarias. Para
muchos, el Espíritu estaba limitado
a actuar de esta forma. Lo podemos representar en este esquema:
Espíritu
Santo
GRACIAS
S
DINARIA
EXTRAOR
GRACIAS ACTUALES
GRACIAS
SANTIFIC
ANTES
Pero lo que hace Dios hoy en la
Iglesia es abrir este esquema; se le
pide y se espera mucho más:
RM
NSFO
TRA
ZAS:
N
TURA
Espíritu
Santo
N
ACIO
RISTO
EN C
AVEN
DIO
BIEN
IONES DE
ACTUAC
:
S
A
M
IS
CAR
FRUTOS DEL ESPIRITU
DONES DEL ESPIRITU
VIRTUD
ES
GRA
CIA
SAN
TIFIC
ANT
E: N
OS H
ACE
HIJ
OS D
E DIO
S
Cuando pedimos, debemos pedir con responsabilidad, sabiendo
a que nos comprometemos.
Nos puede ayudar este esquema en toda petición hay 2 dimensiones vertical y horizontal ytambién 4 tiempos.
DESEAR
(sabiduría, inteligencia)
PEDIR
(consejo, fortaleza)
PERSEVERAR
(temos de Dios, piedad)
RECIBIR
(ciencia)
MAS
A LOS DE
ROS PAR
ST
ES DE NO
S A TRAV
22
PENTECOSTÉS • N° 256
MAYO • JUNIO • 2015
Y aquí un ejemplo en el mismo
esquema: los 7 dones que el Espíritu Santo nos regala gratuitamente.
Es muy importante tener presente la Doctrina del Concilio Vaticano II, porque posee una verdadera pneumatología; y en su
“eclesiología pneumatológica” ha
logrado recuperar la doctrina de
los siete dones del Espíritu Santo.
Encontrarnos menciones importantes de los dones del Espíritu
Santo en la constitución dogmática Lumen Gentium en los números
4; 23.1 y 28.1.
Pero además hay dos textos explícitos de particular riqueza que
adjunto.
1) Lumen Gentium 12,2
“Además del mismo Espíritu
Santo no sólo santifica y dirige el
pueblo de Dios mediante los sa-
cramentos y los ministerios y los
llena de virtudes. También reporta
gracias a especiales entre los fieles
de cualquier estado a condición y
distribuye sus dones a cada uno
según quiera (1 Cor 12,11). Con
estos dones hace que estén preparados y dispuestos a asumir
diversas tareas o ministerios que
contribuyen a renovar y construir
más y más la Iglesia, según aquellas palabras: “A cada uno se le da
la manifestación del Espíritu para
el bien común” (1 Cor 12,7). Estos
carismas, tanto los extraordinarios
como los ordinarios y comunes hay
que recibirlos con agradecimiento
y alegría, pues son muy útiles y
apropiados a las necesidades de la
Iglesia. Los dones extraordinarios,
sin embargo, no hay que pedirlos
temerariamente ni hay que esperar imprudentemente de ellos los
frutos de los trabajos apostólicos.
El juicio acerca de su autenticidad
y la regulación de su ejercicio pertenece a los que dirigen la Iglesia.
A ellos compete sobre todo no
apagar el Espíritu, sino examinarlo
todo y quedarse con lo bueno (1
Tes 5,12.19-21)”.
2) Decreto Apostolicam
Actuositatem 3.4
“Para ejercer este apostolado,
el Espíritu Santo opera la santificación del pueblo de Dios por
el ministerio y los sacramentos,
concede también dones peculiares a los fieles (1 Cor 12,7), distribuyéndolos a cada uno según
quiere (1 Cor 12,11), para que todos, poniendo cada uno la gracias
recibida al servicio de los demás,
sean buenos administradores de
la multiforme gracias de Dios (1
Pe 4,10), en orden a la edificación de todo el cuerpo en el amor
(Ef 4,16). De la recepción de estos carismas, incluso de los más
sencillos surge en cada uno de los
creyentes el deber y el derecho
de ejercerlos, en la iglesia y en el
mundo, con la libertad del Espíritu Santo, que sopla donde quiere. (Jn 3,8) y al mismo tiempo en
comunión con sus hermanos en
Cristo, y en especial con los pastores, a quienes corresponde juzgar
sobre la auténtica naturaleza y el
ordenado ejercicio de esos carismas, no ciertamente por alagar el
Espíritu, sino para probarlo todo
y retener lo que es bueno (1 Tes
5,12.19.21)”.
La renovación en el Espíritu sin
pretender tener el monopolio de
los carismas, se interesa nuevamente por ellos; quiere integrarlos
de nuevo en el curso ordinario de
la vida normal de la Iglesia tanto
local como universal, desea reintroducir no solamente algunos
dones –los más necesarios y elevados– sino la gama de carismas en
toda su amplitud, incluyendo aún
aquellos que parecían carecer de
actualidad, como la profecía (en
el sentido de 1 Cor 14,3), los milagros, las curaciones tanto espirituales como físicas (1 Cor 12,910.28) el don de lenguas (1 Cor
12,10.28). Es muy importante que
la Renovación Carismática incorpore y organice en el cuadro de la
vida de las comunidades cristianas
los dones y carisma del Espíritu
que durante siglos han crecido y
que sólo fueron el privilegio de la
iglesia prometida.
En el buen uso de los carismas
dentro y fuera de la reunión, la
oración es muy importante y por
lo tanto el servidor del grupo de
oración tiene una responsabilidad
muy grande, debido al discernimiento que se debe tener para la
autenticidad de los carismas.
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PENTECOSTÉS • N° 256
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Servidores:
Una visión dada
por Dios con
una misión
Cyril John (Boletín ICCRS)
El 8 de julio de 1996, durante
mi oración personal, tuve una visión en la cual podía apreciar un
edificio enorme. Me sobrecogí y le
pregunté al Señor qué quería decir la visión. Recibí en oración una
fuerte convicción de que era un
centro lo que el Señor quería que
estableciera en Nueva Delhi.
Durante un retiro de crecimiento en los carismas al que había
asistido en el Centro de Retiros Jeev
Jyoti ubicado en Moovattupuzha,
Kerala, del 16 al 21 de mayo de
1993, el asesor había compartido
conmigo un mensaje en el que el
Señor me llamaba a reconstruir
Nueva Delhi, la capital espiritual de
la India.
Para entonces ni siquiera era
miembro del equipo de servicio del
grupo de oración de mi parroquia.
Después de volver del retiro me incluyeron en el equipo de servicio
del grupo de oración de la parroquia y a los tres meses fui elegido
responsable del equipo. La función
de presidente del Equipo de Servicio Arquidiocesano (ESD) de Delhi
fue discernida a mi persona el 14
de diciembre de 1994.
Fue durante mi ejercicio como
presidente del ESD cuando recibí
el mensaje sobre el centro de retiros. No me atreví a compartir este
mensaje con los miembros del
equipo porque en ese momento
no teníamos ni siquiera una cuenta bancaria. Si llegaba a compartirlo, sentí que me convertiría en el
hazmerreír de los demás. Lo único
que hice fue comenzar a orar por
ello y le pedí a nuestro equipo de
intercesión que elevaran esta intención en oración.
En el año 1999, durante una reunión que el EDS tuvo con el Rev.
Alan de Lastic, entonces arzobispo
de Delhi, él nos sugirió que deberíamos iniciar las gestiones para
comprar un terreno y así tener un
centro de nuestra propiedad, ya
que solíamos organizar un gran
número de eventos de la Renovación en la arquidiócesis.
Esto pasó a ser una confirmación de la visión por parte de la
jerarquía de la Iglesia. Después de
una larga búsqueda encontramos
un terreno de uso agrícola que medía unas 7 hectáreas en las afueras
de la ciudad. En oración el Señor
nos confirmó que compráramos
esa parcela. Con donativos y préstamos personales y un gran préstamo
bancario el equipo logró comprar el
terreno en el 2001. Por entonces mi
segundo período como presidente
del EDS había terminado. Hubo un
serio impedimento para utilizar el
terreno para la construcción de un
centro. Como el terreno era para
uso agrícola, la ley de tierras no
permitía su conversión y utilización
para otros propósitos.
Al principio se construyó un pequeño centro con una capilla de
adoración. Se comenzó a adorar e
interceder durante 24 horas en la
capilla. Al habernos instado a comprar el terreno, el Señor intervino
poderosamente.
En el 2009 el gobierno local
presentó un nuevo plan maestro
para la ciudad según el cual toda el
área alrededor de nuestro centro se
convertía en propiedad de dominio
pleno destinada a la construcción
de edificios comerciales y residenciales.
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PENTECOSTÉS • N° 256
Una visión es una
llamada del Señor
para una forma
particular de vida,
misión o proyecto.
Es una manera de
vivir el Evangelio.
Es una dirección
hacia la que una
persona o grupo
deben avanzar.
MAYO • JUNIO • 2015
De nuevo para nuestra sorpresa, en el 2011, el gobierno elaboró
un plan para hacer una autopista
que pasaría por el centro. El Equipo
de Servicio de entonces comenzó
la construcción del centro. El centro ha sido bautizado como Jeevan
Jyoti Ashram (Centro de la Luz de
la Vida). Hoy en día tiene capacidad como para 100 personas, utilizándose para retiros y cursos de
formación. Dos sacerdotes y varios
voluntarios sirven a tiempo completo en el centro. Es un ejemplo
claro de una visión dada por Dios
que reforzó mi liderazgo y misión.
La visión se convirtió en realidad
incluso frente a las circunstancias más desfavorables y adversas.
Existían varios impedimentos que
se atravesaron en el camino para
cumplir la visión, pero se superaron porque el proyecto era el plan
de Dios.
¿Qué es una visión?
Una visión es una llamada del
Señor para una forma particular de
vida, misión o proyecto. Es una manera de vivir el Evangelio. Es una dirección hacia la que una persona o
grupo deben avanzar. «Luego vi un
cielo nuevo y una tierra nueva» (Ap
21,1). Es prever algo o ver con los
ojos del interior. La declaración de
una visión por un grupo de oración,
equipo de servicio o comunidad es
la declaración de lo que ellos consideran que Dios quiere para ellos.
Les ayuda a ver el posible futuro
con mayor claridad. Solo aquellos
con visión podrán esforzarse por
algo más profundo y nuevo.
Una visión tiene dos aspectos.
En primer lugar, esclarece nuestra
propia identidad. Por ejemplo, se
observa que algunos de los grupos
carismáticos de oración no tienen
muy clara su identidad –si son un
simple grupo piadoso, un grupo
de estudio bíblico, un grupo amistoso o un grupo carismático de
oración–. La visión pone en claro
la propia identidad. En segundo
lugar, la visión esclarece la misión.
Dios tiene un plan para cada persona, grupo y comunidad para su
bienestar (Jer 29,11). A través de la
visión Dios da claridad a la misión.
La clave para el éxito de Jesús al llamar a sus discípulos al servicio es
que Él vino con una visión divina
para su misión. Él poseía y proclamaba una visión espiritual clara. La
misión está bajo una unción especial cuando está inspirada por una
visión divina.
Visión y compromiso
La visión nos motiva y vigoriza
invariablemente. La visión, como
la estrella polar, ayuda a la navegación por rutas, incluso con mal
tiempo, para llegar al destino con
éxito. Nos ayuda a percibir cosas
que de otro modo no hubiéramos
visto y a soñar con lo inimaginable.
Nos ayuda a seguir adelante: «olvido lo que dejé atrás y me lanzo a
lo que está por delante» (Flp 3,13).
La visión lleva con sí un entusiasmo
contagioso. Conduce al compromiso y el compromiso impulsa a
la acción. La visión dada por Dios
nos ayuda a seguir continuamente nuestra misión. Nelson Mandela
no se convirtió en un líder de la lucha por la libertad meramente porque fuera bien parecido o carismático. Forjó su influencia por todo el
mundo contando los minutos en
celdas y recorriendo senderos solitarios.
Durante más de veinte años
estuvo en prisión, negándose a
poner en peligro su compromiso
por la libertad. Todo ello requería
compromiso. «Nadie que pone
la mano en el arado y mira hacia
atrás es apto para el Reino de Dios»
(Lc 9,62). Se dice de Moisés que a
los 120 años «no se había apagado
su ojo ni se había perdido su vigor»
(Dt 34,7). Era porque Moisés había
visto al Señor cara a cara y había
hecho suya la visión divina. La visión divina nos ayuda a ser «valientes y firmes» (Jos 1,6).
27
Johannes Hartl, miembro de
la RCC de Alemania y director
de la Casa de Oración de
Augsburg, cree que es urgente
“anunciar en lo público las
verdades de la fe, con valentía
y lealtad sólida al Evangelio”.
Pero primero, orar y adorar.
“En Occidente, en la Iglesia,
hay una crisis masiva de oración”
Portaluz.
Adaptado por Pentecostés.
Muchos católicos “no viven con
Jesús como Señor de sus vidas.
Cuando él se convierte en el Señor
del corazón de alguien, esto tiene
repercusiones significativas en todas las áreas de la vida: identidad,
las palabras que usa, el dinero, la
sexualidad, el pensamiento...”.
La frase pertenece a Johannes
Hartl, teólogo y director de la Casa
de Oración de Augsburg (Alemania) y se refiere al estado actual
de los católicos alemanes. Sin embargo, sus palabras también se
pueden aplicar a muchos católicos
chilenos.
Hartl –casado y padre de cuatro hijos– lidera la Casa de Oración,
una “iniciativa de los jóvenes cris-
tianos dentro de la Renovación Carismática de la Iglesia Católica, que
entró en vigor en 2005”.
En entrevista con el periódico
alemán Kath.net, Johannes Hartl
explica el método que se emplea
en la casa. “Creemos que Dios es
absolutamente fascinante. Él es
digno de ser adorado, glorificado,
día y noche. Lo hacemos a nuestra
manera, juvenil, ecuménicos y con
música de alabanza moderna”.
—¿Cómo evitar que el encuentro con Dios no sea sólo
una experiencia intensa, indefinida y emotiva?
“Las personas que piensan eso
de la conversión nunca han conocido a alguien que realmente
28
PENTECOSTÉS • N° 256
MAYO • JUNIO • 2015
29
Cuando la persona alaba a Dios de corazón,
centra en Él todo su ser y le nace del
alma proclamar su grandeza, su poder, su
misericordia y su amor. En estas circunstancias,
es el Espíritu Santo quien inspira en él la
alabanza. Él está siempre orando al Padre por
sus hijos con ruegos intensos y profundos.
“Estoy convencido de que la verdadera
renovación en la fe sólo viene de una
relación personal con Jesús. Y esto a su vez
crece de manera decisiva en la oración...”
Sylvia Álvarez Ramírez
se ha convertido. Una conversión
verdadera –y he visto un montón
de ellas, especialmente entre los jóvenes– es una transformación real
y duradera del corazón. El Nuevo
Testamento lo llama con razón:
“nacer de nuevo” (cf Juan 3: 3, 1
Corintios 5:17.)”.
—Este encuentro con Jesús:
¿Tiene efectos concretos y visibles en la persona y su forma
de vida? ¿Qué quiere hoy Jesús
de nosotros?
“Jesús predicó el reino de Dios.
Él no predicó que uno debe ser
una mejor persona, ser un poco
más ético o ir a la iglesia con más
frecuencia. Lo importante para
vivir el Reino de Dios es conocer
y reconocer que Dios es el Señor.
¡La mayoría de los católicos bautizados en Alemania de hecho no
viven con Jesús como Señor de sus
vidas! Él quiere que el Reino de
Dios irrumpa en todas las áreas de
nuestras vidas. Nada más y nada
menos”.
—En el último encuentro
de Casas de Oración tú hablaste de signos de los tiempos
¿Cuáles son estos signos de los
tiempos?
“Estoy convencido de que la
verdadera renovación en la fe sólo
viene de una relación personal con
Jesús. Y esto a su vez crece de manera decisiva en la oración. Por esa
razón, el regreso a la oración, al
discipulado personal con Jesús es
la preocupación más urgente e importante del momento. Tenemos
que mirar las cosas con seriedad y
honestidad, observando que nuestra sociedad occidental está a la
deriva. Nuestra respuesta debe ser
una renovación interior a lo único
puede cambiar al mundo: el fuego
del Espíritu Santo. Él puede hacer
las cosas si nos entregamos a él, a
su palabra… creer y rezar”.
—“Orad sin cesar” pide san
Pablo en su carta a los Tesalonicenses. ¿La crisis de Occidente tiene su raíz en una crisis de
la oración, especialmente en la
iglesia?
“Sí, en Occidente, en la Iglesia,
hay una crisis masiva de oración.
Una gran parte de todos los creyentes (incluso sacerdotes, consagrados religiosos y teólogos) simplemente no han aprendido cómo
orar. O por lo menos no a orar de
tal manera que en realidad les toque en el interior. Creo que en este
siglo 21 podemos encontrar nuevos caminos para desarrollar una
intensa vida de oración. En la Casa
de Oración en Augsburg vemos de
primera mano cuán profundo y estable es el cambio en las personas
(jóvenes, principalmente) una vez
que se encuentran con Dios en la
oración. La gente ama orar una vez
que descubren a Dios. Los jóvenes
que nos visitan y quienes trabajan
con nosotros en realidad pasan 4
horas al día en oración y están encantados de hacerlo”.
–¿Qué caracteriza una auténtica adoración y verdadera
alabanza?
“Si realmente estás tras los pasos de Jesús, entonces la adoración
auténtica siempre se caracteriza
por los dos polos: “En Espíritu y en
verdad” (Juan 4,26). Para mí, el “en
Espíritu” significa que la oración
no es sólo algo que yo produzco
frenéticamente, sino un evento,
donde el Espíritu Santo viene y me
ayuda. Algo que no es sólo un esfuerzo humano, sino una verdadera experiencia, real, de lo sobrenatural y algo que el Espíritu de Dios
mismo produce en mí.
“En verdad” significa para mí
que una respuesta a Dios nunca
pierde de vista la Palabra que Dios
comunicó primero. Sólo a través
de Jesucristo, que es la Palabra, tenemos acceso a Dios. Jesús, quien
se hace visible con autoridad en la
Sagrada Escritura, tal como la iglesia ha conservado e interpretado su
tradición. ¡No hay verdadera oración sin una verdadera revelación
de Dios! Al mismo tiempo, “en
verdad” quiere decir que yo sea
totalmente auténtico. Yo no necesito fingir ser otra persona delante
de Dios. No es un gesto piadoso.
Es la posibilidad de estar directa y
abiertamente ante el Padre que me
muestra su amor, a mí, en Jesucristo y que me hace capaz de rezar
incluso en mi debilidad por medio
de su espíritu de consuelo. Así la
oración no sólo se convierte en auténtica, sino en muy satisfactoria.
¡Es un gran privilegio!”.
¿Por qué y cómo debemos alabar
a Dios?
¿Qué nos dice
la biblia?
¿Qué es alabar a Dios?
La alabanza es una expresión
gozosa que nace del corazón del
creyente que ha “encontrado” a su
Dios. Alabar a Dios se refiere, por
ejemplo: proclamar su grandeza,
sus maravillas y omnipotencia; reconocer y admirar su santidad y su
victoria; agradecer su misericordia
y su amor infinito e incondicional;
manifestar los incontables beneficios que nos otorga; declarar que
es digno de todo homenaje y adoración; brindarle honor y gloria
por el plan de salvación que tiene
para todos los hombres; testimoniar que es justo y perfecto; manifestar su bondad sin medida y su
prudencia; ensalzarlo por su sabiduría y por su humildad; declarar
que es nuestro refugio y fortaleza.
Cuando hemos proclamado a
Jesús como único Salvador y Señor, nuestro ser alaba su nombre,
y como el apóstol podemos afir-
mar: “Dios lo exaltó hasta lo sumo
y le dio un nombre que está sobre
todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla
en el cielo y en la tierra, y debajo
de la tierra y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor para
gloria del Padre” (Fil 2, 9-11).
¿Por qué debemos alabar a
Dios?
Alabarlo por lo que es. Alabamos al Señor por ser quien es:
por ser Dios. Por ser Rey de reyes
y Señor de señores (Ap 19, 16).
La Biblia nos dice: “Ofrezcamos a
Dios en todo tiempo por medio de
Jesús el sacrificio de alabanza, que
consiste en celebrar su nombre”
(Heb 13, 15).
En la Biblia encontramos también lo siguiente:
– “Yavé tú eres mi Dios, yo te saludo y celebro tu nombre, pues
hiciste maravillas” (Is 25,1a-b).
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“Al único inmortal, al que habita en la luz inaccesible, a
quien ningún hombre ha visto
y no puede ver, a El honor y
poder por siempre jamás” (1
Tim 6, 15- 16).
Alabarlo por su poder y su
gloria. El poder infinito y la
gloria inmortal de Dios, lo hacen digno de toda alabanza.
Entre los textos bíblicos que lo
confirman están los siguientes:
“Fijando en ellos su mirada Jesús les dijo: “Para los hombres
es imposible, pero para Dios
todo es posible” (Mt 19,26).
“Pero nosotros tenemos este
tesoro en vasos de barro para
que se manifieste la excelencia del poder de Dios y no el
nuestro”(2 Cor 4,7).
“Bendito sea el Señor Dios de
Israel, pues solo Él hace maravillas .Bendito sea por siempre su nombre de gloria , que
su gloria llene la tierra entera
¡Amén, amén! (Sal 72, 1920).
“Tú eres la gloria de Jerusalén,
orgullo supremo de Israel, la
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honra de nuestra raza” (Jdt
15, 9)
Alabarlo porque nos da la Salvación, porque es Santo, por
su victoria y por su grandeza.
Estas poderosas cualidades de
Dios, son fuente de sentidas
alabanzas, como lo demuestran numerosos textos bíblicos. De ellos seleccionamos
los que se presentan a continuación:
“Dios no envió a su Hijo al
mundo para condenar al
mundo, sino para que se salve
el mundo gracias a El” (Jn 3,
17) .
“No hay salvación en ningún
otro , pues bajo el cielo no se
ha dado a los hombres ningún otro Nombre por el que
debamos ser salvados” (Hech
4, 12).
“Santo, santo, santo es el Señor Dios, el Todopoderoso, el
que era, es y que ha de venir”
(Ap 4, 8).
“No temas, que yo estoy contigo; no desmayes que yo soy
tu Dios. Yo te fortaleceré y
vendré en tu ayuda, y con la
diestra victoriosa te sostendré” (Is 41, 10).
– Otras razones por las que debemos alabar a Dios.
La Biblia nos señala numerosas
otras razones por las que debemos alabar al Señor. Por ejemplo:
– Por su Palabra (Is 61, 8), por
su voluntad (Jn 4, 34) , porque nos llama al arrepentimiento (Cr 7, 14), por su infinita misericordia (Tob 3, 2),
por sus obras (Sal 89, 12) ,
por sus promesas (Lc 24, 49),
por su bondad (Sal 135, 3),
por su misericordia y compasión (Lam 3, 22-23), por su
humildad (Jn 13, 5).
¿Cuándo y cómo alabar a
Dios?
¿Cuándo alabar?
La persona agradecida de Dios
abunda en todo tiempo en alabanzas. El profeta Isaías dice que
el alabar a Dios es uno de los motivos por los que fuimos creados:
“Este pueblo he creado para mí,
mis alabanzas publicará“(Is 43,
21). La frecuencia de las alabanzas
al Señor debe ser semejante a la
de respirar. A esto alude el Salmo
34 en su versículo 1: “Bendeciré al
Señor en todo tiempo, su alabanza estará siempre en mi boca”.
Volvamos, pues , el corazón a
Dios constantemente en alabanzas, para dejarnos iluminar por su
luz bendita.
¿Cómo alabar?
Especialmente en el libro de
Los Salmos, la Biblia nos enseña
cómo alabar a Dios. Los Salmos
están dirigidos a la alabanza; por
eso, al conjunto de ellos se les
puede llamar Las alabanzas (Catecismo Iglesia Católica 2589). Ellos
invitan a la alabanza, responden a
ella y se refieren a cómo se debe
alabar a Dios. Además, diversos
libros de la Biblia citan continuamente esta apreciada devoción.
Respecto a cómo debemos alabar al Señor, la Biblia nos dice:
– Con fervor y santidad .Que
no caigamos nosotros en la
advertencia que hace el Señor
cuando dice: “Este pueblo se
me acerca con palabras, y me
honra solo con los labios” (Is
29, 13).
– Con un corazón recto: “Te
daré gracias con toda sinceridad cuando aprenda tus justas normas (Sal 119, 7).
– Con aclamaciones de alegría, gozo y agradecimiento:
“Venid cantemos gozosos a
Yahvé, aclamemos a la Roca
que nos salva; entremos en
su presencia dándole gracias,
aclamándole con salmos” (Sal
95, 1- 2).
– Con decoro y orden: “….hágase todo con decoro y orden” (1 Cor 14, 40).
– Con instrumentos y cantos:
“Dad gracias a Yahvé con la
cítara, cantad con el arpa,
cantadle un cántico nuevo,
acompañad la música con
aclamaciones” (Sal 33, 2-3).
–
Alzando las manos y batiendo
palmas Sal 63, 5 y Sal 45, 2.
Frutos de la alabanza
Muchos y de gran importancia
son los frutos de la alabanza. Nos
referimos solo a algunos de ellos a
continuación.
– La persona que alaba es fuente de bendiciones de Dios . Al
bendecir al Señor, ella recibe
sus bendiciones.
– Sanación de heridas internas
profundas, al ser iluminadas
por la luz bendita del Señor.
El profeta Isaías en el capítulo
57 dice: “Yo le curaré y le daré
ánimo a él y los que con él lloraban, poniendo en su boca la
alabanza” .
– Se recibe la misericordia de
Dios y la gracia divina de convertirse en instrumento de
misericordia con el prójimo,
lo que es altamente valorado
por el Señor.
– Se vive la ternura de Dios y El
va haciendo su obra benéfica
en la persona, liberándola de
complejos, tendencias y costumbres inapropiadas, como
asimismo de prejuicios de distinta índole.
– La alabanza continua facilita
en la persona el discernimiento de la voluntad de Dios.
– Va inspirando en la persona
cada vez más alabanza, y va
derribando los impedimentos
que ella puede tener para alabar al Señor.
Súplica
“Señor que estás vivo en nuestro ser, danos la gracia de alabarte
continuamente, y poder palpar las
maravillas que por tu bondad vas
haciendo en nosotros como fruto
de la alabanza. Te pedimos que hagas brotar un manantial de Agua
Viva que vaya santificando día a día
nuestra existencia”. Amén.
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“Es un bien para la humanidad y para el mundo
que los creyentes reconozcamos mejor los
compromisos ecológicos que brotan de nuestras
convicciones”.
de los más pobres, provocando
millones de muertes prematuras”.
“Estos problemas están íntimamente ligados a la cultura del descarte, que afecta tanto a los seres
humanos excluidos como a las cosas que rápidamente se convierten
en basura”.
“Mientras se deteriora constantemente la calidad del agua
disponible, en algunos lugares
avanza la tendencia a privatizar
este recurso escaso, convertido en
mercancía que se regula por las leyes del mercado”.
El resto del capítulo detalla
problemas como el de la pérdida de la biodiversidad, la pérdida
de calidad de vida, la inequidad
planetaria, las desigualdades y la
debilidad de respuesta de los gobiernos.
Las claves
de la encíclica
“Laudato Si”
El Papa Francisco acaba de publicar la Carta
Encíclica “Laudato si”, un alegato para
salvar el medio ambiente. A continuación
hemos seleccionado una serie de extractos.
La encíclica está precedida por una
introducción y dividida en seis capítulos.
Mi llamado
“El desafío urgente de proteger nuestra casa común incluye
la preocupación de unir a toda la
familia humana en la búsqueda de
un desarrollo sostenible e integral,
pues sabemos que las cosas pueden cambiar”.
“Hago una invitación urgente
a un nuevo diálogo sobre el modo
como estamos construyendo el futuro del planeta”.
Capítulo I. Lo que está
pasando a nuestra casa
“Existen formas de contaminación que afectan cotidianamente
a las personas. La exposición a los
contaminantes atmosféricos produce un amplio espectro de efectos sobre la salud, especialmente
Capítulo II. El evangelio de
la creación
“La ciencia y la religión, que
aportan diferentes aproximaciones a la realidad, pueden entrar
en un diálogo intenso y productivo para ambas”.
“Es un bien para la humanidad
y para el mundo que los creyentes
reconozcamos mejor los compromisos ecológicos que brotan de
nuestras convicciones”.
Capítulo III. Raíz humana de
la crisis ecológica
“No nos servirá describir los
síntomas, si no reconocemos la
raíz humana de la crisis ecológica.
Hay un modo de entender la vida
y la acción humana que se ha desviado y que contradice la realidad
hasta dañarla“.
“Propongo que nos concentremos en el paradigma tecnocrático dominante y en el lugar del
ser humano y de su acción en el
mundo”.
El texto analiza también el papel de la tecnología, la globalización de la tecnocracia y “la crisis
y los efectos del antopocentrismo
moderno”.
Capítulo IV. Una ecología
integral
“No hay dos crisis separadas,
una ambiental y otra social, sino
una sola y compleja crisis socioambiental. Las líneas para la solución requieren una aproximación
integral para combatir la pobreza,
para devolver la dignidad a los excluidos y simultáneamente para
cuidar la naturaleza”.
“Cualquier menoscabo de la
solidaridad y del civismo produce
daños ambientales. En ese sentido, la ecología social es necesariamente institucional, y alcanza progresivamente las distintas
dimensiones que van desde el
grupo social primario, la familia,
pasando por la comunidad local
y la nación, hasta la vida internacional”.
“Las predicciones catastróficas ya no pueden ser miradas con
desprecio e ironía. A las próximas
generaciones podríamos dejarles
demasiados escombros, desiertos
y suciedad”.
Capítulo V. Algunas líneas
de orientación y acción
Corresponden a las proposiciones concretas que hace la encíclica.
“La estrategia de compraventa
de « bonos de carbono » puede
dar lugar a una nueva forma de
especulación, y no servir para reducir la emisión global de gases
contaminantes”.
“Los países pobres necesitan
tener como prioridad la erradicación de la miseria y el desarrollo
social de sus habitantes”.
“Urgen acuerdos internacionales que se cumplan, dada la fragilidad de las instancias locales para
intervenir de modo eficaz”.
“El creciente problema de los
residuos marinos y la protección
de las áreas marinas más allá de
las fronteras nacionales continúa
planteando un desafío especial”.
“La mayor parte de los habitantes del planeta se declaran creyentes, y esto debería provocar a
las religiones a entrar en un diálogo entre ellas orientado al cuidado de la naturaleza, a la defensa
de los pobres, a la construcción
de redes de respeto y de fraternidad”.
Capítulo VI. Educación y
espiritualidad ecológica
“Se destaca así un gran desafío
cultural, espiritual y educativo que
supondrá largos procesos de regeneración”.
“Cuando somos capaces de superar el individualismo, realmente
se puede desarrollar un estilo de
vida alternativo y se vuelve posible
un cambio importante en la sociedad”.
“Invito a todos los cristianos
a explicitar esta dimensión de su
conversión (ecológica)”.
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Ministerio de la Familia:
Nuestras familias en vivo
y en Pentecostés
“Nosotros no podemos dejar
de hablar de lo que hemos visto y
oído” (Hech 4,20).
No. No podemos callar las maravillas que el Señor ha obrado en
nuestros matrimonios y por desborde de gratitud, en tantos hermanos que han asistido, orado y
colaborado con nosotros en tantos
retiros, jornadas y encuentros.
Hoy somos renovados una vez
más en el fuego del Espíritu Santo
para contar esta experiencia, y para
comunicar la familia como un ambiente privilegiado del amor.
Desde hace casi 20 años venimos caminando como Ministerio
de la Familia en medio de esta bendita corriente de gracia anunciando el Evangelio de la Familia y de
la alegría de experimentarnos gozosamente guiados como hijos del
Espíritu Santo consolador y vivificador a todos los rincones de nuestra
amada Iglesia, con un testimonio
humilde, pero perseverante.
De esta manera, los días 16 y
17 de Mayo vivimos el Primer Encuentro Nacional de Formación de
Monitores para Retiros y Jornadas
de Matrimonios y Pastoral Familiar,
el que se realizó en la Parroquia
El Milagroso Niño Jesús de Praga,
y culminó con el envío de más de
20 matrimonios provenientes de
distintas ciudades del país con el
objetivo de formar comunidades
misioneras en sus respectivas diócesis, en comunión con sus pasto-
res. Cada uno de estos matrimonios recibió su material de trabajo
que les guiará en la realización de
esta valiosa misión. Este encuentro
contó con la presencia de Monseñor Galo Fernández, quien celebró
la eucaristía el sábado 16.
Les alentamos decididamente
a ustedes y a sus comunidades de
oración a través de estas líneas, a
ser parte de este bonito desafío,
orando desde ya por el éxito de
esta misión y por el próximo Sínodo para la Familia a celebrarse
en el mes de Octubre en Roma, pidiendo al Señor que se manifieste
poderosamente en favor de la familia cristiana.
“Vayan, pues, a las gentes de
todas las naciones, y háganlas mis
discípulos, bautizándolas en el
nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”. (Mat 28, 19).
Comentarios del padre Luis
Andrés Matta, párroco de
El Milagroso Niño Jesús de
Praga (Santiago de Chile):
En nuestra comunidad parroquial del Niño Jesus de Praga se
realizó un encuentro nacional de
matrimonios de la Renovación
Carismática en dos jornadas, los
días 16 y 17 de Mayo. Acudieron
matrimonios de diferentes ciudades del país. En dichas jornadas se
analizaron, en un ambiente de oración, alabanza y reflexión, algunos
aspectos del matrimonio y la vida
en familia como: el sacramento
del matrimonio, la comunicación
y oración en parejas, el plan del
mundo y el plan de Dios, el perdón, Jesús Salvador y el Espíritu
Santo. También hubo confesiones
y la eucaristía. Tuvimos la visita de
Monseñor Galo Fernández, obispo
auxiliar de la Arquidiócesis de Santiago.
Ha sido un encuentro lleno de
la presencia del Señor, y en comunidad de creyentes, deseosos de
contribuir al Reino desde esta vocación tan hermosa del matrimonio.
En esta jornada nos acompañan
los matrimonios responsables del
Ministerio de la Familia de la Renovación en el Espíritu, Gastón y
Sonia, Ricardo y María Teresa, Luis
y Gloria, Jaime y Carolina y Alejandro y Cándida, los que estuvieron a
cargo de los temas de formación y
el ministerio de la música. También
tuvimos el hermoso testimonio del
matrimonio de Fernando y Carolina.
La comunidad carismática de
nuestra parroquia prestó los servicios necesarios para que este
encuentro se realizara de manera
armoniosa. Damos gracias al Señor
por todas las obras realizadas en
los participantes, quienes volvieron a sus respectivas comunidades
muy alegres y animosos para seguir
la misión evangelizadora.
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Eduardo Basombrio
Revista Resurrección, Argentina
¿Qué vale más?
¿Mis propios pensamientos
o los de Dios?
Parecería que, después de todo
lo que nos ha sido revelado por
Dios, muchos aun, inclusive en
la RCC, siguieran acariciando
indebidamente los propios
pensamientos, sobre temas que
ya están definidos y tratados
por Jesús y la Iglesia.
El escándalo de Pedro
Precisamente el escándalo máximo de Pedro es “por tener pensamientos que son de los hombres
y no de los de Dios” (Mt 16,23).
¿Qué nos está diciendo Jesús? Está
haciendo recordar que si verdaderamente hemos renunciado a nosotros mismos, como Él ha pedido;
que si, además, “debemos morir
a nosotros mismos” para tener la
vida en Cristo Jesús y que, en todo
caso, lo que vale es seguirlo a Él, no
debemos tener pensamientos que
contradigan. El que no renuncia a sí
mismo, el que mire a sí mismo obviamente carece de pensamientos
propios. Entonces, lo que no vale
es seguir acariciando los propios
pensamientos o los pensamientos
de otros cuando se apartan de los
de Dios. Esto es absoluto, porque
así lo afirma el Señor. Por eso nos
pide una renuncia radical. Además
es un discernimiento que va formando nuestro carácter cristiano,
sin dejarnos llevar de cualquier
viento de opiniones.
Y, ¿cuál es el signo de esta postura tan equivocada? Que enseguida se va armando el espíritu de
contienda, las divisiones, la confusión y toda clase de males para la
misma comunidad.
Entonces, ¿qué debemos hacer,
hermanos? es una pregunta excelente. Primero, porque significa
reconocer el problema. Luego por
que significa querer saber cuál es
la solución. Pedro les dijo: “¡Conviértanse!”. Hay que volver a pensar que hemos muerto a nosotros
mismo por amor al Señor; que hemos negado, incluyendo nuestros
pensamientos exclusivos sobre lo
que ha sido rebelado y que solo
escuchamos a Dios sobre todas las
cosas y nos limitamos a hacer lo
que ha hecho Jesús, para nuestra
enseñanza: 1) No hablar por cuenta propia. 2) Repetir lo que hemos
Escuchado de Dios, sin agregar ni
quitar nada. Solo entonces estaremos viviendo su Palabra y realizando la Voluntad de Dios y no la
nuestra. Solo así viviremos el Reino.
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Por lo tanto, no importa quien
afirma algo en temas religiosos. Lo
que importa es si lo afirma Dios.
Si esta persona esta fundamentada en la Palabra de Dios, en lo que
enseña la Iglesia y se da en la Tradición. Pero sucede que hay quienes cuando afirman algo, simultáneamente piensan que es algo así
como la Palabra de Dios, sin embargo, muchas veces hallamos que
no lo es. No es otra cosa que un
pensamiento propio y aquí es donde se escandaliza Jesús, porque
esta persona edifica su casa sobre
arena: pensamientos que no son
los de Dios (cfr .Mt 16, 23).
Cuando algo no se entiende o
no se sabe, lo lógico es acudir a
quienes pueden dar mejor consejo,
siempre será la Palabra de Dios y la
de aquellos que han aprendido a
usar su palabra con exclusividad en
temas de fe, sin el influjo nocivo de
los propios pensamientos.
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M E M O R I A M
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A nuestra querida hermana
María Hilda
Una hermana muy querida de
nuestra comunidad ha sido llamada por nuestro Padre Dios a su encuentro.
María Hilda comenzó a participar en la Iglesia Católica en la Legión de María, donde participó por
varios años.
Posteriormente el padre Juan
José Meyer la invitó al primer encuentro de oración que se realizó
en Copiapó después de participar
él en el primer retiro efectuado por
esta corriente de gracia, la Renovación Carismática Católica, en Santiago el año 1972.
Ella siempre contaba que ésta
invitación era lo que ella había buscado en la Iglesia, porque al realizar ese retiro de iniciación, tuvo
ese encuentro personal con Jesús,
que había recibido de la Madre
Santísima.
La hermana María Hilda fue
para la Renovación Carismática de
Copiapó una verdadera discípula
que el Señor nos puso en nuestro
caminar y que supo realizar la misión que Dios le había designado
realizar en esta vida terrenal.
Junto a nuestro hermano Eustaquio y la hermana Marcelina, fueron grandes hermanos. Ellos participaron con especial dedicación en
atender a hermanos enfermos, no
sólo corporalmente sino que también tenían una especial dedicación para que se encontraran con
Jesús vivo. No les importaba donde
vivía la persona ni la hora que debían acudir para llevar el mensaje
de Dios. Ellos siempre le dijeron sí
a nuestro Señor.
En el grupo de oración, Juan
José Meyer, ellos nos contaban de
sus comienzos en que el padre y
María Hilda nos entregaban sus
vivencias. Nos contaban cómo llevaban la Palabra de Dios a varios
sectores de Copiapó movilizados
en la moto del padre Juan José. Era
una verdadera evangelizadora enamorada del Señor.
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Homenaje a un Juez Carismático
Ella nos entregó su alegría para
alabar al Señor. Con su alegría y
baile contagiaba a participar en las
misas de oración por sanación.
Ahora el Señor mandó a sus ángeles a recibir a nuestra hermana
María Hilda y la ha revestido con
traje de honor para que con él entre en la morada del Cielo y alabe
su bondad, junto a los hermanos
de sus comienzos y que hoy los
vuelves a reunir en tu Reino.
Dios de misericordia y de amor
ponemos en tus manos amorosas
a nuestra hermana a quien siempre
recordaremos con especial cariño
por todos sus años sirviéndote con
alegría y dedicación a pesar de sus
años.
El cuerpo de nuestra hermana
María Hilda vuelve a la tierra, pero
el espíritu de su ser ha vuelto a Ti,
porque Tú se lo diste y siempre estará presente en nuestro días de
oración, Amén.
“Qué alegría cuando me dijeron, vamos a la casa del Señor”.
“Ya están pisando nuestros
pies; tus umbrales Jerusalén” (Sal
122, 1-2).
Estábamos en la estación de
Otoño, donde caen las hojas; las
mece el viento y se las lleva lejos,
lejos; así “cayó” nuestro querido
hermano en Cristo, Milton Valdebenito. Él era un juez que nunca
juzgo a nadie, un juez que se dejó
moldear por el Espíritu Santo; un
juez que de verdad le creyó a Jesús
y empezó a reflejar su rostro.
Perteneció al grupo de oración
Los Estandartes por trece años. El
día que llegó al grupo se encontró
con el cardiólogo del Universo; Jesús hizo la operación prodigiosa,
transformo su corazón, lo purificó
con su Sangre Bendita derramada
en la Cruz del Calvario. Gracias a
ese llamado, se entregó por entero, derramando ese amor en el
grupo. Juntos hicimos grandes
evangelizaciones y viajes, asistimos
a innumerables retiros a Punta de
Tralca. Estuvo con nosotros cuando
repletamos la Quinta Vergara.
Sin importarle su altísimo puesto de juez, él levantaba sus manos
alabando. Grande era su entusiasmo por alabar a su querido Señor.
Fue él quien organizó el Gran Equipo de Música, compró grandes
parlantes que se instalaban para
las “Fiestas de la Candelaria” y para
las misas de sanación en la Parroquia San Francisco. Era el alma del
grupo en los encuentros diocesanos, porque llegaba con su gran
pianola que tanto le gustaba tocar.
A veces también se paraba, tomaba el bombo y lo tocaba fuerte. Era
un niño.
Pero la enfermedad golpeó su
puerta. ¿Cómo explicarla? La gloria
en Getsemaní es una escena sintética, profunda.
Nuestro hermano Milton, en
medio de su dolor, fue un hombre
capaz de consolar, como lo hacía
con su amada esposa Laura, la que
en ningún momento lo dejó solo;
con sus amadas hijas Lidia y Valentina, y con su querido nieto Matías.
Cabe también destacar toda la Fe y
el Amor, toda la confianza que les
entregaba nuestro querido hermano Francisco Javier, esposo de Lidia.
En esta bendita familia tenían todo
muy claro. Decían que Dios no dejaba nada al azar. Se abrieron caminos en medio de la amargura y
vivieron en vivo la enfermedad, el
dolor, las lágrimas de Milton. Y a
través de él, el Señor tejió una inmensa malla de amor en los grupos de oración de muchas ciudades, incluso del extranjero.
En medio del dolor, nuestro
hermano Milton contó con un
amigo que nunca le falló y que le
había dicho: “estoy contigo siempre hasta el fin del mundo, conozco tus luchas, tus dolencias, yo las
he experimentado. Pero levanta la
vista. Por la fe entra detrás del velo
y ancla allí tus esperanzas”.
De pronto, lo inimaginable ocurrió. Unos cantos de alabanzas al
Señor, entonados por su inagotable esposa Laura Cerda y por su
jovial hija Valentina, al lado de su
moribundo esposo y papito, tu-
vieron el poder de abrir los Cielos.
Canciones que rasgaron el alma y
movilizaron a todos los ángeles.
¡Qué gran fe de estas mujeres!
Mantuvieron siempre la cabeza encima de las olas, aunque parecía
que se hundían. ¡Ésa es fe! Cantaron alabanzas hasta que Dios dio la
orden. Era un 28 de Abril del 2015
cuando el reloj marcó las 17:30
horas y se oyó un grito de alegría
en el cielo. Dios Padre, con su vestidura reluciente, le sonreía con su
hermoso rostro. Ahí estaba Milton
abrazado al Creador del Universo,
Sublime Majestad. Ante el juez
de jueces, dos jueces mirándose
de frente, y Jesús inundándolo de
amor. Milton, con su amor y su generosidad, estaba allí sin manchas
ni culpas porque el Padre ya lo había vestido de Luz: “Enjugará Dios
toda lágrima de sus ojos”. Y Dios le
dice: “querido colega ven a compartir la mesa con tu Señor”.
José Salamanca Véliz
Grupo de oración Los Estandartes,
Copiapó.
T E S T I M O N I O S
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T E S T I M O N I O S
PENTECOSTÉS • N° 256
MAYO • JUNIO • 2015
“Mis caminos no son tus caminos”
“Pues sus proyectos no son los míos,
Y mis caminos no son los mismos de
ustedes, dice Yavé.
Así como el cielo está muy alto por encima de la tierra,
Así también mis caminos se llevan por
encima de sus caminos
Y mis proyectos son muy superiores
a los de ustedes”.
(Isaías 55. 8, 9)
Una amiga está viviendo una separación difícil y dolorosa y, como aún
no encuentra trabajo, vive en otra casa con dos de sus hijos.
En Enero ella había dado un cheque a fecha para comprar un medicamento y no tenía ahora cómo cubrirlo.
Sólo basándonos en esta Palabra del Señor (más arriba) nos mantuvimos firmes y sin desfallecer, porque sabíamos que el Señor tenía para ella
la solución a su problema.
No dejábamos de decir que los proyectos del Señor eran muy superiores a los nuestros. No teníamos idea cuál sería la solución, pero fuera cual
fuera, era muy superior a lo que nosotros podíamos pensar.
Su ejecutiva del banco tenía retenido el cheque hasta el 27 de mayo,
sólo hasta las 11 de la mañana.
La verdad es que cuando dijo eso el día anterior, nos miramos y pensamos ¿para qué? No tenemos nada que hacer ya, porque es de noche.
Pero sigamos orando y confiando en Su Palabra: sus caminos eran superiores a los nuestros y Él tenía todo en sus manos.
Como todos los días nos encontramos en misa, juntas le entregamos
nuevamente el cheque al Señor y además mi amiga le dio al Señor un
cheque en blanco de su vida.
A la salida de misa una dulce y maravillosa amiga que usó el Señor
como instrumento, nos invitó a tomar desayuno a su casa. Y cuando
estábamos conversando trajo su chequera, hizo el cheque y además le
pagó el teléfono donde recibe las llamadas de las entrevistas de trabajo.
Ella a las 10:55, estaba en el banco cambiando su cheque por el de
nuestra amiga. “Mis proyectos son muy superiores a los de ustedes”.
La Palabra es viva y eficaz. Hace su obra cuando el Señor lo quiere.
Tenemos que confiar que Él tiene grandes cosas para nosotros. Gracias,
mil gracias Jesús amado, seas por siempre bendito y alabado.
Gladys Contreras Navarrete
Grupo de Oración San Vicente Ferrer
Zona Cordillera
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Eucaristía en los
campos de refugiados
Tenía setenta años cuando conoció una vez más de la misericordia
de Dios al superar un cáncer de páncreas. Para él su recuperación fue
un signo explícito de Cristo invitándolo a continuar su labor entre los
refugiados en África. Hoy, a sus 78 años y con más de cincuenta de sacerdote, el jesuita Gary Smith, miembro del Servicio Jesuita de Refugiados,
testimonia cómo la Eucaristía, “Cristo vivo”, es la fuente de toda gracia y
esperanza en los campos de refugiados…
“A punto de acabar la misa en Obilokogno, una capilla en un campo
de refugiados, tras la comunión, me trajeron una mujer. Tuvo convulsiones y se desmayó cuando acababa de comulgar y regresaba a su sitio
en esta capilla con suelo de tierra y techo de paja. Estaba catatónica,
en un estado post-traumático, cuando me la trajeron en brazos, con
mucho amor y cuidado, los cristianos que la rodeaban. Su mirada era la
de quienes se preocupan y – más profundamente – la de un pueblo que
había soportado tanto castigo en su huida de Sudán y que había visto el
sufrimiento de sus hermanos y hermanas.
Ungí a Rachel, orando en su lengua materna para que Dios la curase
y bendijese. Se relajó y su cuidadora la llevó afuera, donde la pusieron
con cuidado sobre una manta y entre varios robustos jóvenes la llevaron
a una clínica cercana, a un kilómetro de distancia. Aquí la Eucaristía nuevamente acompaña, siendo la ocasión en que las personas pueden traer
a sus enfermos. Y lo hacen con amor. La Eucaristía es un momento en el
que las personas y la comunidad pueden compartir su amor y sufrimiento
con los demás; los refugiados son víctimas de la enfermedad por su inestabilidad. Algunos de los padecimientos son, por supuesto, físicos y en
algunos, la enfermedad puede atacar el alma en la oscura incertidumbre
de la vida cotidiana en los campamentos de refugiados”.
ENCUENTRO NACIONAL
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ENCUENTRO NACIONAL
PENTECOSTÉS • N° 256
MAYO • JUNIO • 2015
Testimonio de
participación
Mi nombre es Pedro Pablo
Fernández Hunuman, pertenezco al grupo de oración “Jesús de Nazareth” de Pucón de
la Diócesis de Villarrica y me
correspondió asistir al ampliado nacional de servidores llevado a cabo en la casa de ejercicios Padre Hurtado los dias 29,
30 y 31 de mayo pasado.
En mi grupo de oración yo
tengo a mi cargo el ministerio
de música pero en este encuentro tuve que participar en
el taller de interseción donde
quedé encantado y maravillado
de la obra que el Señor hace a
través de este ministerio, con
tantos testimonios aportados
por los servidores y las dos hermanas que dirigieron este taller,
sellado en la noche de poder
donde tuvimos que orar por
muchos hermanos que pidieron
oración, con descanso espiritual
y sanación de muchos de estos.
Como gran enseñanza comprendí que todos los cristianos
somos intercesores y junto a
nuestra Madre, la Virgen María
podemos orar en pro de muchos necesitados.
Retiro Nacional Ampliado
Por Gracia de Dios se
pudo vivir en Padre
Hurtado durante el
último fin de semana
de mayo el retiro
nacional ampliado,
donde participaron
hermanos y
hermanas de las
distintas zonas de
este largo país,
representantes de
los jóvenes y la
compañía del Padre
Reinaldo Osorio
asesor de la Diócesis
de Valparaíso y del
Equipo Nacional.
Se vivió en un clima de fraternidad comenzando el viernes con
la bienvenida por parte de nuestra
servidora nacional Raquel Rojas.
Durante el día sábado los representante zonales y diocesanos se
reunieron por regiones para revisar
y compartir sobre las orientaciones
del servicio en mira a los próximos
discernimientos que se realizarán a
lo largo de todo el país desde los
servidores responsables de comunidades, como zonales y diocesanos, mientras los representantes
de ministerios vivían los talleres de
“seminario de vida, intercesión y
revista”.
Día sábado después de misa se
vivió la noche de poder con el envío
de la Paloma que será el símbolo
de las actividades que se realizaran
durante el presente año en las distintas zona del país como prepa-
ración para el Encuentro Nacional
que viviremos el 3 y 4 de octubre.
Durante la mañana del domingo se tomaron algunos acuerdos
para el bien de nuestra amada renovación luego del almuerzo los
hermanos iniciaron los regresos a
sus respectivos hogares.
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Mi testimonio
Mi nombre es Adriana
Molina Muñoz y pertenezco
al grupo de oración “Jesús de
Nazareth” de Pucón y tengo a
cargo la distribución de la revista Pentecostés por muchos
años.
Fui invitada a participar en
el ampliado nacional de servidores de fines del mes de
mayo pasado integrandome
al taller de la Revista Pentecostés donde realmente me
dí cuenta de la importancia
que tiene pertenecer a este
nuevo ministerio que nació
a partir de este encuentro ya
que anteriormente solo era
distribuidora y vendedora de
la revista.
Con el aprendizaje obtenido en el taller pudimos comprender que este elemento
es una gran oportunidad de
evangelización hacia nuestros
hermanos que no conocen
a fondo la obra de nuestro
Maestro, y que los podemos
llevar a nuestros grupos de
oración.
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¡3 veces sí!
“JOVEN, A TI TE DIGO…”
Noel Chircop
Nuevo Pentecostés , España
Uno de los relatos evangélicos
más llamativo que tiene lugar después de la resurrección de Cristo
es la conversación de Jesús con Pedro. Jesús le pregunta a Pedro tres
veces: ¿Me Amas? (Jn 21, 15-17).
Esto sucede mientras Jesús esta
desayunando con sus discípulos y
utiliza esta oportunidad para estimular, corregir y desafiar a Pedro.
Es posible que a través de esta
pregunta repetida, Jesús le esté
recordando a Pedro sutilmente sus
tres negaciones. No hay duda de
aquellas negaciones que quedaron grabadas profundamente en la
memoria de Pedro (Lc 22,54-62).
A Pedro no le pasó desapercibido
que Jesús le repitiera esta pregunta
tres veces, al igual que él había negado tres veces a Jesús. ¡Qué conversación tan incómoda para tener
al principio del día!
Un “sí” es siempre un “sí”
Jesús esta tratando de hacerle ver claramente a Pedro que un
“sí” es siempre un “sí”. Si buscamos la palabra griega que se refiera a `amor´ utilizada en esta historia, encontramos dos palabras:
Agape (amor incondicional) que
Jesús utiliza en la dos primeras
preguntas a Pedro y Phileo (amistad o amor fraternal) que Pedro
utiliza en su respuesta a Jesús. Si
traducimos esto en su lenguaje
actual, sonaría algo así: “Pedro,
¿me amas incondicionalmente?” y
Pedro responde: “Sí, Sí Señor, tú
sabes que soy tu amigo”. Mirándolo de esta forma, no hay duda
de que Jesús y Pedro no están en
la misma “frecuencia”. ¡Jesús nos
esta pidiendo a nosotros el mismo
tipo “sí” incondicional! Un “sí” es
siempre un “sí” no puede depender de las circunstancias. No puede ser que algunas veces sea un
sí y otras veces un no. Para Jesús
el amor es siempre incondicional
y el amor incondicional es la garantía de la fidelidad que es “para
siempre”.
Jesús pregunta, Jesús espera
nuestra respuesta y Jesús nos instruye.
Lo mismo que Jesús hizo con
Pedro durante el desayuno, al principio del día, lo esta haciendo con
nosotros al principio de este nuevo día (de esta época) de nuestras
vidas. Jesús nos esta pidiendo una
respuesta constante e incondicional de nuestra parte, desde el
constante e incondicional amor
por su parte. En este punto, es crucial entender de qué tipo de amor
nos está hablando Jesús: si alguno
me ama guardara mi palabra, y mi
Padre le amará y vendremos a él, y
haremos morada en él (Jn 14,23).
Cuando Jesús nos pide amor incondicional, en realidad nos esta
pidiendo permiso para hacer morada en nosotros junto a su Padre… y
entonces así llamar al Espíritu Santo para que venga también a nosotros…¡Guau! Nos está diciendo
claramente que si nos llama a ser
sus discípulos y centinelas, necesitamos entender el tipo de lenguas
del que habla y vivir el mismo estilo
de vida que Él vive. Cuando amamos a Jesús, ¡DIOS VIENE Y VIVE
EN NOSOTROS!
Jesús nos muestra un estilo de
vida en 3D ¡A mi me encanta ir al
cine! Cuando se proyecta una película en 3D, la experiencia es tan
real y tan hermosa… y el mismo
Jesús nos esta llamando a vivir
este evangelio tridimensional para
que otros puedan ver que nuestra vida en Cristo es también real
y hermosa. La primera dimensión
es el amor, tal como lo explicábamos anteriormente. La segunda
dimensión es vivir en la verdad del
Evangelio: “Y conoceréis la verdad,
y la verdad os os hará libres” (Jn
8,32). El mundo que nos rodea intenta convencernos de que vivir de
acuerdo al Evangelio nos encierra
y nos aprisiona. ¡Esto es una gran
mentira! Cuando Dios viene a ha-
cer su morada en nosotros, también nos da una incalculable libertad en la manera en que vivimos,
porque ¡nuestro Dios no es un carcelero! La tercera dimensión es ser
luz y testigos para el mundo que
nos rodea. Un mundo que esta necesitado de nueva luz y nueva vida.
No tengáis miedo de hacer brillar
la luz de Cristo dentro de vosotros.
¡Os ha sido dado el poder para HACERLO! Recibiréis la fuerza (capacidad, eficiencia, y poder) del Espíritu
Santo, que vendrá sobre vosotros,
y seréis mis testigos en Jerusalén,
en toda Judea y en Samaría y hasta
los confines de la Tierra (Hch 1,8).
¿A qué estás esperando? Este
es el tipo de “menú” que Jesús ha
preparado para ti al principio de
este día (época) en tu vida. ¿Estás
preparado? ¿Estás preparado para
decirle 3 veces Sí?
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retiro de
servidores
en VALPARAíSO
Retiro de Servidores que se vivió en la casa de Emaús Olmué, los
días 24, 25 y 26 de abril.
Comenzamos el Viernes pudiendo presentarnos ante el Santísimo, reconociendo quién soy
y hacerlo acompañado por otro
hermano. Nos deja la enseñanza
de que la salvación, es personal
pero se camina acompañado de la
comunidad, en este caso con un
integrante de rcc. Nos fuimos a
dormir sintiendo que ya sabemos
quiénes somos y porque Dios nos
ha llamado por nuestro nombre
para ser parte de esta corriente de
gracia. Seguimos el sábado viendo
cuáles son los riesgos que tenemos
de contagiarnos de esa lepra espiritual, cuando nos vamos enfriando,
Caminata por
la vida en
Antofagasta
“El aborto es el acto más cruel
de terrorismo” (Madre Teresa de
Calcuta)
El sábado 18 de abril, “hicimos
bulla”, como dice nuestro amado
Papa Francisco.
Tuvimos la oportunidad histórica de manifestar nuestro descontento con la despenalización del
aborto que el gobierno nos intenta
imponer.
Somos creyentes, cristianos y es
nuestro deber defender la vida. Sabemos que así se empieza y luego
terminamos siendo un país en que
se practica el aborto bajo cualquier
excusa. Incluso bajo el pretexto del
derecho a elegir.
cuando nos acomodamos, cuando
no nos movemos, cuando no dejamos que el Espíritu Santo nos renueve.
Por eso oramos pidiendo una
nueva efusión del Espíritu Santo
para poder escuchar, servir, poner-
Visita del signo de la Paloma
en la arquidiócesis de Puerto Montt
Nos acompañó en todo el trayecto nuestra alcaldesa Karen Rojo,
quien abiertamente está en contra
del aborto. También se unió a nosotros el pueblo evangélico, ya que
en la UNIDAD es donde reside la
fortaleza.
Somos la voz de los que no
pueden defenderse.
Ma. Teresa Muñoz López
(Corresponsal Antofagasta)
En la eucaristía por los enfermos que se celebra en la Catedral de
Puerto Montt y en el encuentro mensual que se efectúa en el Consistorio
Municipal de la misma comuna, recibimos el signo de la Paloma que
representa El Espíritu Santo como signo de Unidad y testimonio que irá
pasando por toda la Región Sur, desde Punta Arenas hasta Temuco. En
Octubre la Paloma arriba a Santiago, en donde se reunirán todos los
Servidores. La convocatoria es a congregarse en el Coliseo de San Miguel
los días 3 y 4 de Octubre.
Marianela Angulo Mansilla, Servidora regional Sur
nos la camiseta de Jesucristo, enfrentar con oídos, mente y corazón
de discípulos.
Irma Luttges
Diócesis de Valparaíso
DESPEDIDA
Con profundo pesar, comunicamos el sensible deceso de nuestro presbítero
asesor Tomás Palma Moreno, quien fue despedido en
eucaristía oficiada por el
obispo monseñor Cristián
Caro Cordero, acompañado
por todo el clero de la ciudad de Puerto Montt.
Rodrigo Arancibia Ávila
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La Iglesia latinoamericana tiene una gran riqueza.
Es una Iglesia joven, y esto es importante
En el vuelo de
regreso a Roma,
después de su visita
apostólica a los países
Latinoamericanos
de: Ecuador, Bolivia
y Paraguay, el Papa
Francisco concedió
una rueda de prensa
de 64 minutos a
los periodistas que
viajaron con él.
franciscoenbolivia.org/E
El Papa Francisco respondió a diversas preguntas entre ellas:
¿Qué mensaje ha querido dar a la Iglesia latinoamericana en
estos días y qué papel tiene la iglesia latinoamericana, también
como señal al mundo?
La Iglesia latinoamericana tiene una gran riqueza. Es una Iglesia joven,
y esto es importante. Una Iglesia joven con cierta frescura. También con
cierta informalidad. Y también tiene una teología rica de búsqueda. Yo he
querido dar ánimo a esta Iglesia joven y creo que puede darnos mucho
a nosotros.
Digo algo que me ha impresionado mucho. En los tres países había
por todas las calles grupos de padres, madres, con los niños. Nunca he
visto tantos niños. Es una lección para nosotros, para Europa, donde el
descenso en el número de los nacimientos asusta un poco. También las
políticas para ayudar a las familias numerosas son pocas.
Pienso en Francia que tiene una buena política para ayudar a las familias numerosas. Creo que más del 2% de nacimiento. Otros sobre el 0.
No todos: en Albania creo que el nivel de edad es del 45%. En Paraguay
el 72-75% de la población tiene menos de 40 años. Es la riqueza de este
pueblo y de esta Iglesia viva. Es una Iglesia de vida. Esto es importante.
Creo que es algo que tenemos que aprender y corregir. Porque, por el
contrario, si no vienen los hijos es algo que a mí me toca tanto del descarte. Se descartan los niños y los ancianos. Todos sabemos de los ancianos.
La falta de trabajo hace que se descartan los jóvenes. Estos pueblos
nuevos con los jóvenes nos dan tanto. Es una Iglesia con tantos problemas, pero joven, puede ser también un poco indisciplinada, pero luego
se disciplinará, pero nos da mucho bueno.
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