superyo | generación y Computadoras, consolas de juego, celulares y otros dispositivos similares son parte de la vida cotidiana de los millennials Generación Y Nativos digitales Viven conectados a las redes sociales, no se imaginan anclados muchos años en el mismo trabajo y no tienen prisa por dejar la casa de sus padres. Éstos son algunos de los comportamientos que identifican a los jóvenes del nuevo milenio / Elizabeth Levy Sad | FOTOGRafía roberto mata Comprender a los jóvenes, sus inclinaciones y su forma de pensar ha sido siempre un desafío para los adultos. No obstante, esta tarea resulta más difícil y necesita herramientas particulares de análisis cuando se trata de la generación que creció acompañando el salto de la tecnología y el auge de Internet, la cual prioriza el bienestar personal y no cree mucho en el sacrificio en pos de lograr ciertas metas, tampoco tiene prisa por independizarse económicamente ni por formar una familia. Se utiliza la denominación “Generación Y” para definir a quienes nacieron entre los años 1982 y 1994 (algunas fuentes la ubican, de un modo menos preciso, entre principios de los ochenta y finales de los noventa). También se les llama “Ge- Multitasking: habilidad del momento La capacidad de realizar varias tareas al mismo tiempo y prestar atención a diversas cosas a la vez parece ser una de las características de la Generación Y. Es frecuente que estos jóvenes contesten mensajes, chequeen correos electrónicos, miren televisión, lean y escuchen música, todo al mismo tiempo. No obstante, algunos psicólogos advierten que esta habilidad puede ser síntoma de una gran dispersión mental, una incapacidad de concentrarse. 38+SALUD neración del Milenio” o “millennials”. Son jóvenes que actualmente están ingresando en la etapa adulta, terminando sus estudios o insertándose en el mercado laboral. Los historiadores estadounidenses William Strauss y Neil Howe expusieron en su libro Generations –publicado en 1991– sus observaciones sobre las distintas generaciones en Estados Unidos. Muchos de esos criterios pueden aplicarse al análisis generacional de todo el mundo, válido para comprender un poco mejor los nuevos paradigmas de la época. En esa obra, Strauss y Howe plantean un método analítico que permite identificar las características de grupos de personas que atraviesan por el mismo rango de edad en un momento determinado. Ese instrumento es utilizado hoy en el campo de la Sociología, en los estudios de las tendencias de mercado y en el área de los recursos humanos. Porque más allá de la historia personal y el contexto individual, los integrantes de una misma generación comparten ciertas formas de usar el lenguaje, algunas creencias y comportamientos y el mismo tipo de recuerdos. La sumatoria de estos factores incide, de alguna manera, en la realidad que les toca vivir. 39+SALUD modelos María eleonora Dao | pedro cambas | Thomas di Francescantonio (agencia niñitos) / maquillaje martha ramírez superyo | generación y En el banquillo Así como las nuevas generaciones muestran habilidades emocionales y destrezas que sorprenden, también suelen recibir críticas por algunas actitudes características: •Al ser hijos de padres que los han mimado mucho, que les han dado todo lo que ellos no tuvieron en su infancia, pueden llegar a ser arrogantes, perezosos, incapaces de afrontar conflictos, aniñados o irresponsables. •No siempre comprenden el valor de los procesos de trabajo, el esfuerzo o la experiencia. Quieren resultados inmediatos y esperan siempre recompensas. •Sobrevaloran actos cotidianos o íntimos, por el solo hecho de estar difundidos en las redes sociales. Perfiles online Los “nativos digitales” (término acuñado por el educador estadounidense Marc Prensky) conforman una generación global que nació inmersa en una cultura tecnológica y digital, en la que computadoras, consolas de juego, celulares y otros dispositivos similares son parte de la vida cotidiana y modifican la forma de incorporar conocimientos y procesar las emociones y expectativas con respecto al presente y al futuro, y hasta el modo de vivir los vínculos afectivos. 40+SALUD Entre las características que diferencian a los millennials de las generaciones anteriores se cuentan: Independencia tardía. Los integrantes de esta generación no tienen prisa por formar una familia o vivir solos. De hecho, muchos piensan que la adultez no se vincula con la autonomía económica. Algunos protagonizan el llamado “efecto boomerang”: después de haber convivido en pareja o con amigos durante un tiempo, vuel- generación y | superyo Los integrantes de una misma generación comparten ciertas formas de usar el lenguaje, algunas creencias y comportamientos y el mismo tipo de recuerdos ven a la casa de los padres para ahorrar dinero o para no estar solos. ­Nueva perspectiva laboral. Sienten que el trabajo es un medio para lograr metas, pero no se identifican ni se definen a sí mismos a partir del rol laboral que ejercen. No están dispuestos a tolerar mucho si ese ambiente los presiona demasiado o les roba mucho tiempo de su vida personal. Muchos prefieren proyectar un emprendimiento económico personal, aunque sea de pequeña escala, antes que trabajar en una corporación en la que no se sienten cómodos. Alta exposición. Para algunos no existe el concepto de intimidad: acostumbran a publicar y compartir en las redes sociales tanto fotos como informaciones de su vida íntima. Resulta llamativo que consideren “amigos” a sus contactos de las redes sociales, a muchos de los cuales ni siquiera conocen en persona. Satisfacción inmediata. Estos jóvenes viven más centrados en el presente, no se sacrifican pensando en el largo plazo. No se muestran tan interesados en acumular bienes y ahorrar dinero como sus antecesores, más bien utilizan sus recursos económicos para satisfacer sus necesidades inmediatas conforme a sus posibilidades: viajes, consumos tecnológicos, experiencias gourmet y otras actividades relacionadas con el tiempo libre están en sus prioridades. Experiencias de corto plazo Si es grande el desconcierto de los padres ante los valores y tendencias de los hijos jóvenes, mucho mayor es el impacto de estos cambios en el mundo laboral (ámbito en el que están obligadas a convivir personas de distintas edades). A los millennials no les entusiasma quedarse toda una vida en el mismo trabajo, muchas veces renuncian para tomarse un año sabático o para viajar. No siempre se ponen la “camiseta” de las empresas: toman los trabajos como algo circunstancial, con lo cual no están comprome- tidos en el largo plazo. La diversión y el placer que les proporciona lo que hacen son factores de vital importancia. El aburrimiento y el clima autoritario pueden ser motivo de renuncia. El psicólogo Alejandro Frenkiel, especializado en capital humano, suele recibir la consulta de los empresarios o ejecutivos que necesitan capacitarse para poder comprender y liderar a las nuevas generaciones. “Estos jóvenes valoran 41+SALUD superyo | generación y muestra como una persona y no como un “jefe”. Valoran que en el ámbito del trabajo se pueda hablar de la vida personal y que se les pueda apoyar emocionalmente si es necesario. Nueva masculinidad estímulos como los horarios flexibles, la libertad, la posibilidad de aprender y divertirse en el trabajo. Incluso, estas condiciones son más valiosas para ellos que un salario alto”, explica Frenkiel. El especialista advierte que a la hora de contratar a un millennial, hay que tener presente algunas conductas que los caracterizan: •Pueden generar contactos excelentes, por su facilidad a la hora de manejarse en las redes sociales. •Prefieren trabajar por objetivos concretos, más que cumplir un horario sin hacer nada. •Responden mejor cuando la autoridad se Hijos del baby-boom En su mayoría, los padres de la Generación Y son de la Generación Baby-Boomer, nacida luego de la Segunda Guerra Mundial –entre 1945 y 1960–, durante la explosión de la tasa de natalidad (baby-boom). Es un grupo identificado con la conquista de los derechos civiles en el mundo. Esta generación hizo una ruptura fuerte con los valores de sus padres y lideró el mundo político, social y empresarial de las últimas décadas. 42+SALUD Si las generaciones anteriores se caracterizaron por los enormes cambios en cuanto al rol social de la mujer, quien fue avanzando desde su ámbito de injerencia histórico –el hogar, lo privado– hacia el espacio público y el mercado laboral, “en las nuevas generaciones aparecen nuevas formas de vivir la masculinidad”, explica Mariela Mociulsky, psicólogo especialista en tendencias de consumo. Cabe aclarar que estas nuevas “masculinidades” no son patrimonio exclusivo de la Generación Y, pues hay varones de la Generación X –los nacidos entre 1961 y 1981, según algunas fuentes– que también están comprendidos en estos conceptos. Mociulsky agrega que “emergió un nuevo hombre que aprendió a combinar la solidez con la sensibilidad, que se permite la coexistencia de aspectos tradicionalmente pensados como masculinos –la agresividad, la competitividad, el deseo de éxito–, con aspectos adjudicados culturalmente al universo de lo femenino”. Muchos varones jóvenes dejaron atrás el modelo machista de las generaciones anteriores y se proponen integrar actitudes y comportamientos tradicionalmente considerados femeninos: “Aceptan la propia vulnerabilidad, aprenden a expresar emociones y sentimientos, piden apoyo y ayuda. Estas nuevas características también van perfilando hombres que invierten en productos de estética, que están más interesados en su imagen. También hay entre ellos una revalorización de consumos asociados al placer gourmet (como el saber de vinos y comidas)”, concluye Mociulsky. generación y | superyo En el ámbito laboral la Generación Y valora estímulos como los horarios flexibles, la libertad y la posibilidad de aprender y divertirse El lado oscuro Si bien los millennials tienden a dedicar mucho tiempo de su vida a los estudios y al perfeccionamiento profesional, en países en los que hubo o hay una crisis económica muy profunda también se registra un número creciente de jóvenes a los que se les llama Generación Ni-Ni, porque no estudian ni trabajan. El porcentaje de la población en esta situación varía según los países, pero las cifras son, en todos los casos, alarmantes. Suelen ser hijos de padres que han perdido el empleo, que sufren la carencia de recursos y la falta de oportunidades, y que no tienen nin- guna esperanza respecto al futuro. La falta de proyecto de vida caracteriza a este sector, y sin políticas de estado específicas es muy difícil que se integren de alguna manera al sistema económico y social. Son las dos caras del complejo mundo que plantea el nuevo milenio. • Fuentes consultadas º Mariela Mociulsky, psicólogo social y especialista en investigación de mercado, opinión pública y análisis de tendencias. Directora de la consultora Trendsity (www.trendsity.com). º Alejandro Frenkiel, psicólogo, docente e investigador. Titular de la cátedra de Psicología Organizacional y Empresarial en la Universidad Maimónides de Buenos Aires. Consultor en capital humano y desarrollo organizacional. º Generations. HarperCollins (1991) y Millennials Rising. Vintage Books (2000). Neil Howe y William Strauss. 43+SALUD