Isla Negra 4/158 Casa de poesía y literaturas. -Noviembre 2008- suscripción gratuita. Lanusei,Italia. Dirección: Gabriel Impaglione. Publicación inscripta en el Directorio Mundial de Revistas Literarias UNESCO [email protected] http://isla_negra.zoomblog.com - - Eugenio Montale Italia Huesos de jibia XIV Quizás una mañana caminando en el aire de vidrio, árido, volteándome veré con el terror del ebrio cumplirse el milagro: la nada a mis espaldas, detrás de mí el vacío. Luego, como en la pantalla, se amontonarán árboles, casas, colinas con el habitual engaño, pero será demasiado tarde, y yo me iré callado entre los hombres que no miran hacia atrás, con mi secreto. traducción libre del italiano por Adriana Alarco de Zadra Adriana Versiani Ouro Preto – MG, Brasil- 1963 Caleidoscópio Debaixo da escada, na fresta, esse tubo: Milhões de anos e a lei da ira arrancando os olhos de animais domésticos, perfurando ventres, violando meninas que tingem de vermelho a água do rio. Aos berros ou germinando em cérebros doentes, fogo, a ira da ira: Corpos torturados soluçam nas grutas, nas prisões, nos terreiros. Castelos destruídos, portas arrombadas, bebês abandonados congelam nas matas, nas latas de lixo, nos formigueiros. Chamas devoram árvores, consomem seus espíritos que gemem e imploram e formam densa fumaça. Gás, a expiração da ira sobe os degraus da escada e faz arder os olhos do prisioneiro algemado no calabouço, da mulher queimada viva, do menino que empunha metralhadora e faz dormir: as feras na selva, as folhas na relva, as raízes, os infelizes Veneno, tormento, céu cinza, uma lágrima ácida escorre dos meus olhos, enquanto escuto as sádicas hienas. Urubus miram vísceras e planam. Corvos na Europa e Ásia nos ignoram. A limpeza elimina a carne podre sobre a terra, não interessa etnia, Carne é carne. Um tigre salta para matar. Loucura, a ira dos famintos, como fera, devora os mortos até os ossos. 1 Corpos mutilados partidos ao meio, multidões catatônicas pisando a areia em brasa , devotos do ópio prostrando-se exaustos diante do jardim de papoulas, a água impura da bacia de alumínio refletindo o eclipse no fundo da bacia de alumínio onde um dia lindas ninfas lavaram seus cabelos longos quando ainda era limpa e perfumada a água da bacia de alumínio. Ira, linguagem dos proscritos. Na esfera de cristal, entre uma centena de degraus eu vi : letras negras picharem muros, lacrarem portas, portais, janelas, entupirem a garganta do inferno que em êxtase as cuspia de volta numa chuva de meteoros, clarins de cobre retorcidos na fogueira , uma névoa de gases subindo do centro da terra turvando milhares de olhos. Cortados os tendões dos tornozelos, deitados em catre de bambu, nenhum de nós conseguia mais enxergar. Na esfera de cristal eu vi Silêncio: A Obstinada Natureza de Deus. Domingo Alfonso Jovellanos, Cuba, 1930 El libro que es todo el universo (Para Alex Pausides) Como existe el Libro depósito de Todo no en forma de Biblioteca, porque sus páginas oscuras lo asemejan a una noche sin principio ni fin (o a un día donde el sol desaparece como envuelto por un ejército de mariposas al tejer un velo con sus alas negras): Este Volumen sin límites, expandiéndose sin cesar forma una madeja donde la Suma de los hilos se entrecruza. Aquí las letras, los avisos y las imágenes delante de nuestros ojos están; pero no las podemos ver. A veces un Vidente, como un relámpago presiente la sombra de una escena, la apariencia de un renglón hundidos después en esa falta de luz. Puede que quien mueva tan sólo una letra hará girar al Orbe sobre sus bisagras rompiendo la Eterna Sucesión. (oculta entre los pliegues del Tiempo) ¿Pero acaso este Cambio no fue previsto por el Autor desde el Principio? De “En la ciudad dorada”, 2002, Jorge Montealegre Chile, 1954 Alta poesìa Todos los vecinos de mi barrio duermen siesta, pero hay chicos que golpean puertas fastidiando: piden pan y no dejan escribir los mejores poemas sobre el hambre. Angel Guinda España Vidas Hay quien hace de su vida una frontera. Otros la comparten como aire, luz, o la levantan sobre un campo de minas. Quien la deja al azar, y el que a control severo la somete. Algunos imitan la vida de sus héroes, y quienes la embalsaman en un búnker de oro. 2 Todas las vidas trabajan para la muerte. De Conocimiento del medio, Ediciones Olifante, Zaragoza 1996 Pedro Shimose Riberalta, Beni, Bolivia, 1940 ( radicado en Madrid) Ribera Alta En la alta ribera un hombre espera volver a Riberalta. En su tierra colorada todo es alborada. No hace falta la melancolía de la tarde en el barranco. El cielo arde y el amor fermenta su melaza. Junto a un banco de la plaza el tataí cuenta lo que fuimos y el bibosi lamenta lo que no hicimos. En la alta ribera: el sol y la palmera. En la ribera alta sólo tú prevaleces en forma de alegría. A veces, te llamas Riberalta; otras, Poesía. Eugenio Montejo Venezuela Amantes Se amaban. No estaban solos en la tierra; tenían la noche, sus vísperas azules, sus celajes. Vivían uno en el otro, se palpaban como dos pétalos no abiertos en el fondo de alguna flor del aire. Se amaban. No estaban solos a la orilla de su primera noche. Y era la tierra la que se amaba en ellos, el oro nocturno de sus vueltas, la galaxia. Ya no tendrían dos muertes. No iban a separarse. Desnudos, asombrados, sus cuerpos se tendían como hileras de luces en un largo aeropuerto donde algo iba a llegar desde muy lejos, no demasiado tarde. Envio “El Primer Fuego. Camilo Retana San José, Costa Rica, 1983 3 Ser el humo que tocàs Ser el humo que tocás el violento humo que tocás Comprar a plazos un poco de alegría No ser ya más ese humano sangrante que calla se angustia Volver atrás donde nada te espera José-Augusto de Carvalho Viana do Alentejo- Évora -Portugal Quase uma oração Saudade, palavra linda, a que me abraço, hora a hora... Porque tarda a vossa vinda? Ai, quanto mais tempo ainda a cruzada vos demora? Ah, meu amigo, que espera no tempo que me avassala! Ah, viçosa primavera que, em mim, solitária gera ânsias que o pudor me cala! Que Deus a salvo vos tenha, na sua divina mão! E a desventura detenha, p'ra que no peito eu matenha, a bater, meu coração. Meu Deus, meu Deus, dai-me alento! De mim tendes a inocência! Ai, que esta dor que alimento seja, na massa, o fermento do pão da vossa clemência! Do livro em construção: O MEU CANCIONEIRO, Parte II, Cantigas de amigo Andrè Cruchaga El Salvador Lázaros de este reino… A Malcom X y Martin Luther King. Recorrieron el desierto humano y plantaron Su respiración en las calles, junto a las manzanas; Entre los barrotes negros de la cárcel, sus voces, Se oyeron sobre la nieve a ritmo de blues y tambores. Entre vagas fisonomías, junto a fúnebres pinos, La brisa como un huracán en las sienes, La verdad haciéndose roca, la tierra rompiendo El terror al futuro. Candiles de vencidas lenguas lamen el cielo, Ahora que sus semblantes dejaron de ser Yertos brazos y se han tornado en semilla. Leche de estrellas forman sinfonías, allí donde El rocío evaporaba sutiles mejillas de vitrales siniestros. El destino ha cambiado su telar de catacumbas; Ahora la memoria es posible en el umbral, O la vida se ciñe a la memoria salvando De la hoguera, el telar rojo de la fábula. 4 Se alzaron sobre su propio sudor y sus heridas, Y entre el paisaje del sollozo, la noche Jamás pudo sacar su lengua de avieso halcón. Hoy danzan los duraznos en la entraña del día. Sus voces crearon cuerpos, vuelo de bocas jubilosas, No dormidos pabilos flotando sobre andenes De quemadas crepitaciones… Desde Soweto, el viento sobre los tejados, Es un pecho de ombligos y ferrocarriles, Un espeso whisky golpeando los pulmones, Una fila de puertas sobre las pupilas: Ventanas goteando pájaros de sudorosa palabra, Bocas con sed sofocando sombreros inertes, Alas para el aliento del alba bajo lunas agonizantes. “Yo soy Malcom X” viva llama en el aire de la Esperanza. “Yo soy Martin Luther King”, luz venida de la sed ardida… Ambos cuerpos con la caricia espesa de la sangre, Balbucean en la memoria caracoles de sueños en todas las entrañas: Ramas son de un cuerpo sin frío, destinos de la esencia del aire, Para romper con la desigualdad de la noche Y abrir los sueños cegados por antiguas pieles de ceniza. Ahora es posible que la sed fluya, sin barrotes de herrumbre. El tiempo no da cataratas, lo que el ojo de las cerraduras… Hay que mirarlos cada día, para desterrar el odio Y que un arpa abra, en vez de llaves, las puertas de la conciencia. En los aleros que habitan sus palabras la alegría con su sombrero Corona aquellos corazones que sembraron en el surco Un canto de fervorosa armonía… Ahora Malcom y Martin Luther King se han vuelto una diadema Trocada en Esperanza, una sola boca para sacudir el misterio del arcano. Barataria, 13.IV.2008, reescrito el 05.XI.2008 María Belén Duet Resistencia, Chaco, Argentina Hilaciones (a Dora) De tus brazos me salen raíces / en mañana/ me salen los ojos de mañana / como echando raíces / como inventando / otra vez / el lenguaje en el habla / y la palabra / libre removiendo cuervos / en la ceniza de ayer / viniéndome desde el invierno / tu boca cantando / amorosamente / cantando / en el silencio de mi noche / en que me vierto la vida / porque la vida / me arde el pecho encendido de vos / con las manos dispuestas / a reconstruir los puentes / que me dicen de vos / y que en la voz / cantando / se echan a volar los pájaros dormidos / como luciérnagas / con los ojos de vos que miran mañana / con la sonrisa de vos / que grita mañana / en mi raíz con tus brazos / en mi memoria de tu raíz. Miguel Barnet Cuba Fe de erratas Donde dice un gran barco blanco debe decir nube donde dice gris debe decir un país lejano y olvidado donde dice aroma debe decir madre mía querida donde dice César debe decir muerto ya reventando donde dice abril 5 puede decir árbol o columna o fuego pero donde dice espalda donde dice idioma donde dice extraño amor aquel debe decir naufragio en letras grandes. Angélica Torres Ipameri, Goiana, Brasil Ao navegante Desveste o coração das plumas e dos pesos da existência Deste portal em diante só existem paisagens: os riscos esboçados dos pórticos do olhar Neles não cabe ciência, sequer filosofia, mas o simples gozo de vagar Tomado de: poesia.net- Washington Benavides Tacuarembó, Uruguay -1930 Guillaume Apollinaire Noble polaca y sangre vaticana? Eres diamante como el Ritz de falso? Naciste para sangre del cadalso seducir La Gioconda o la liviana intitutriz de sàbanas de Holanda; Ser un erotikon por unos francos; descubrir el Cubismo entre la blanda imitación de los artistas mancos?.. Entre las bellas y los caligramas, lo sé, nunca te fuiste por las ramas, subteniente marcado por obús... Sólo con la ramplonería tú discrepas; tu corazón protege al de Jesús, y justo el Día de La Victoria, crepas... (Te veo en la pintura de El Aduanero cuando te casaste. Te veo con la cabeza remendada,leo tus poemas sexuales a la última bella que seduciste en plena guerra. Adios, gran poeta,Guillaume Apollinaire.. .8 /6 /08. Montevideo) fuente: http://www.cronopios.com.br Otto René Castillo Quetzaltenango, Guatemala- 1937 -1967 Vàmonos patria a caminar Vámonos patria a caminar, yo te acompaño. Yo bajaré los abismos que me digas. Yo beberé tus cálices amargos. Yo me quedaré ciego para que tengas ojos. Yo me quedaré sin voz para que tú cantes. Yo he de morir para que tú no mueras, para que emerja tu rostro flameando al horizonte 6 de cada flor que nazca de mis huesos. Tiene que ser así, indiscutiblemente. Ya me cansé de llevar tus lágrimas conmigo. Ahora quiero caminar contigo, relampagueante. Acompañarte en tu jornada, porque soy un hombre del pueblo, nacido en octubre para la faz del mundo. Ay, patria, a los coroneles que orinan tus muros tenemos que arrancarlos de raíces, colgarlos en un árbol de rocío agudo, violento de cóleras del pueblo. Por ello pido que caminemos juntos. Siempre con los campesinos agrarios y los obreros sindicales, con el que tenga un corazón para quererte. Vámonos patria a caminar, yo te acompaño. Jacques Viau Haitì, 1942- 1962 II Ya no es necesario atar al hombre para matarlo. Basta con apretar un botón y se disuelve como montaña de sal bajo la lluvia. Ni es necesario argüir que desprecia al amo. Basta con proclamar --ceñuda la frente-que comprometía la existencia de veinte siglos. Veinte siglos, dos mil años de combatida pureza, dos mil años de sonrisas clandestinas, dos mil años de hartura para los príncipes. Ya no es necesario atar al hombre para matarlo. La noche, los rincones, no, nada de eso sirve ya. Plazoletas y anchas calles se prestan bulliciosas. No cuenta el asesino con los pacientes, no cuenta el príncipe con los sumisos. Todos han olvidado que el hombre es aún capaz ..... de cólera. Las llamas se extinguen sin haber consumido el ..... odio. El día irredento ha postergado la resurrección del ..... hombre. Y los otros, aquellos que presencian la matanza sentenciando: "¡Locos, habéis tocado a la puerta de la muerte y ella se quedó en vosotros!" Esos sólo saben predecir la muerte. No han aprendido a combatirla. No han aprendido a cobijar la tierra en el corazón. Y el sumiso, ¿qué hace? ¿Dónde deposita su silencio? ¿En qué lugar del corazón teje la venganza? Nadie lo sabe. Todos le han olvidado. Se ha dictaminado que su morada sea la sombra, que el pan deshabitado sea su alimento, que el pico le prepare el lecho y la pala le cubra el corazón. ¿Qué es el hombre combatido? Nadie lo recuerda. 7 Lo visten los trapos. Lo arrojaron en la parte trasera de la casa y allí con los residuos un guiñapo se amontona. Las llamas se extinguen. Se arrinconan los hombres en una sola sombra, en un solo silencio, en un solo vocablo, en un llanto solo y cuando todo sea uno, uno el llanto y el vocablo uno no habrá paz sobre la tierra. ¡No habrá paz! Y aquellos que dictaminaron el destino del ..... hombre, los que jamás contaron con los sumisos, amasarán con sangre su propia podredumbre. ¡No habrá paz! ¡Llanto para quebrar el llanto, muerte para matar la muerte! Francisco Garzaro Guatemala Nota de duelo Ayer murió Luisa "la China" pregunto al viento qué voz dirá por ella la negra palabra el adiós sin flor sin pagado responso qué muerte murió quizás erguida la pizpireta la del sueño de cualquier violáceo alcalde o cualquier ricachón empedernido la que gritaba ¡que-no-que-no-y-que-no! y que más dio si ahora nadie ni nadie reclama su pálida piel morena los tristes pechos cansados de ir y venir de mano en mano la estrujada la tierna roja flor tirada en la mísera morgue tras tanta soltura de alegre alboroto la que vendió cuquitos chiles de bus en bus de sol en sol la que rió las pacayas en la retina sus deliciosos besos de niña traviesa de mañana golondrina de ésos vividos amorosos nunca sólo a mamá digna la-sin-papá "besos vendidos no son besos ni caricias compradas caricias no-me-di-no-me-di pero no importa ¡y a mi qué yo sólo alquilé!" viva al viento al sol la vivaracha su cantarina voz "¡y qué va querer mi rey!" como sonrisa la encantadora risa la de la Luisa tierna y dura -míre cómo vende mi patoja chula "¿ya ve qué linda está?" sí que era linda la chinita morena la que no se dio jamás sólo se prestó qué lejano llanto puede ser este adiós 8 un beso con respeto en su muerta en su pálida en su tersa mejilla. (Luisa Palmira Quesada Juarán, chinita, tu sonrisa triste ya es mariposa y se ha ido en el viento). "cuquitos"= refrescos que se empacan en pequeñas bolsas plásticas y que se venden por la calle o en los autobuses; "pacayas" que es un vegetal frito que se come en la calle con la tradicional tortilla; y también los "chiles" rellenos de carne y envueltos en huevo. Estas comidas las ofrecen muchachas a los pasajeros de los autobuses extraurbanos que transitan entre la capital del país y las provincias. "Patoja" se dice en Guatemala a las jovencitas... João Carlos Luz Brasil Violencia e Poesia Rio de Janeiro, milhares de soldados do exercito vigiando o que supostamente é certo. Garantir o voto sem ser manipulado pelo esperto. Violências fatias no dia a dia sem perder o show no diário da notícia. O poeta anda pelas ruas recitando versos trazendo um pouco de alegria. O grito sai da garganta garantindo a reflexão sem hemorragia. A cidade a passos de quotidiano muitos só pensando no fim do ano. Anestesiados sem meio de reagir levantando o que é sagrado. Recebo fanzine xerografado alguns até autografados. As palavras do universo poético a refletir o manifesto. As praças comemorações lembrando Machado. parece que o tempo do que é lúdico do que é educador com frescor. Na tarde quase chuvosa pessoas ouvindo versos e prosas. Enaltecendo o emocional na vida literária Nacional. Assim se faz um cotidiano ímpar a nos exaltar. POETAS E POETAS que ainda não foi vencido encontra seu lugar. Vasco Baigorri Misiones, Argentina Razòn de lucha Yo quiero un pueblo de gente que sonría, que aunque no nos conozca nos diga “ Buenos días”. Yo quiero un pueblo que guarde en la memoria los gritos de aquellos que escribieron su historia. Yo quiero un pueblo que cante en amaneceres, mientras la vida crece dulcemente en sus mujeres. Yo quiero un pueblo que se alce en rebelión cuando al silencio lo imponga la represión. Yo quiero un pueblo de niños que sean libres, que conozcan los leones fuera de las prisiones. Yo quiero un pueblo 9 de gente que sonría, que aunque no nos conozca nos diga “Buenos días”. Darío Jaramillo Agudelo Santa Rosa de Osos, Antioquia, Colombia, 1947 Poemas de amor 1 Ese otro que también me habita, acaso propietario, invasor quizás o exiliado en este cuerpo ajeno o de ambos, ese otro a quien temo e ignoro, felino o ángel, ese otro que está solo siempre que estoy solo, ave o demonio, esa sombra de piedra que ha crecido en mi adentro en mi afuera, eco o palabra, esa voz que responde cuando me preguntan algo, el dueño de mi embrollo, el pesimista y el melancólico y el inmotivadamente alegre, ese otro, también te ama. Nancy Morejòn Cuba Apodaca Todavía despoblada, brillando en el corazón sin habla de la peregrina, entro hacia tus corrientes sumida por ahora bajo las presiones de un golfo mudo que toca el fondo de las islas. Un mono pequeñito asoma sus ojazos de lechuza intranquila y acecha en la penumbra la sombra de la Reina; monito vivaz como un colibrí chiapaneco. Y un gavilán levanta vuelo. Transcurren las horas como un agua tibia que saltara entre piedras, ante cada puerta vieja, ante cada umbral de humo, entre vitrales cenicientos y rejas escondidas, destartaladas, enrojecidas por el sano viento del Prado. Y rueda la mañana para que esta peregrina vaya recorriendo la estrecha y larga calle habanera que llaman Apodaca. Raquel Jodorowsky Iquique, Chile, 1927 poema Cuando la furia agita el agua un solo poema sube y establece la estatura del cielo es otra lluvia. Poderoso es el viento de la poesia que sopla nuestra alma 10 la eleva igual que un muro y la mantiene de pie. temida es la palabra del poeta contienen huesos sus palabras. En las horas solares de la noche cuando se vuelve sin haber muerto con una larga exploracion en la mirada se descubren los mundos ocultos dentro del mundo. El poeta habla entonces vive el hombre. Diana Espinal Honduras Versos Del Ladrido del Sombrero a la Escama del Sol 57 En esta biela de egresada Dejaré cargas de electrólisis En cada uno de los poros de los faros y de los postes Dejaré a 100 metros bajo la ebullición de los echa cuervos Las cúpulas sobre las pechinas Con la Proto-ilusión de várices en alto relieve Desdoblaré los delfines del armario Empotraré doscientas epístolas de vocación en cuellos de flamingos Aunque Se embarace el macho hipocampo Y solo de a luz hembras Taty Hernández Durán Jarabacoa, República Dominicana Reflejos de Maracay A Miriam Mirelles En este Valle del apamate siguen mis pies largos senderos y un elefante, en su piel de anciano, captura mis pensamientos. Un lago inmisericorde empuja el terraplén… se come los edificios con aguas negras preñadas de mosquitos que bordan un telar de rebeldía y buscan refugio las vidas cuyos sueños son impelidos al olvido. Dante Milano Brasil- 1899-1991 Composição Duas mulheres juntas Formam desenhos dúbios 11 Se numa só há tantas, As duas serão quantas? Uma na outra transformo E, misturando as formas, No mesmo luar as banho, Metamorfoses sonho. Todas parecem uma A quem a todas ama. envio: poesia.net- Carlos Machado. Zingonia Zingone Costa Rica. 1971 Amarrada ya Del otro lado del tiempo una línea casi imposible se estira, cruza el tablero y desordena las estrellas. Puntual como la noche, llega tu caricia -insospechadade puntillas llega tu caricia como fantasma que se adueña ¿o ya era dueña? Línea que transita y asombra envuelve amarra alta, cambia el rumbo de mi sangre y me hace nudo: moño que soy de ti. Raùl Romero Auad Tarija, Bolivia - 1965 receta para preparar un trago de celebración Embriagar con palabras los ojos como tostadas remojadas en vino. Mientras se ejecuta a ritmo desenfrenado la lectura de un texto o la iluminación de los huesos* batir cuidadosamente el dedo índice alrededor de la sien. Acercar luego el pocillo con la pócima al borde de la nariz que deberá permanecer con las alas de las ventanas extendidas como las de un buitre al acecho de su presa inmunda y aspirar suavemente tan delicioso aroma. A continuación se deberá agregar un poco de la sal del olvido y otro poco del agrio jugo del recuerdo. Beberlo, natural muy lentamente y celebrar ebrio la siguiente (a)parición. 12 Eduardo Espòsito Argentina Le gustaba Beethoven Ayer nevó en Bs As después de 89 años También ayer falleció Lidia la vecina después de 85 Eventos que no ocurren a menudo como ases en la manga salen a la luz Dos buenas jugarretas del destino un extraño combo inesperado Si no viajo pienso no veré la nieve nuevamente si no muero no veré a Lidia como ayer Lo cierto es que nada garantiza que si viajo en Bariloche habrá nevado que si muero iré a tomar el té con la vecina o a escuchar a Beethoven tocarle un solo de arpa La nieve comienza a disolverse igual que Lidia y yo sentado frente al mar de lo ya escrito me abrigo bien en mi afán de perdurar Yehuda Amijái Israel, 1924 – 2000 (a) En todos los días que estuve aquí jamás ví el mar. Una vez, en la noche, me contaste sobre él. Y no quise escuchar, para que Buenos Aires fuera como Jerusalén, sin mar. Te llamabas Dolores, y Susana era el nombre de tu amiga. "Chica" te gritó un conductor que pasaba. Ambos hemos desaparecido para siempre como si nunca nos hubiéramos conocido: dos pérdidas llorando y riendo a la vez en la oscuridad. Luis Franco Argentina Mediodía Oh mediodía, corona de oro del mundo. Equilibrio de oro del día. Profundo diamante sin sombra. Armonía tácita y serena. Melodía de la luz plena. De: "Insurrección del poema", editorial Colihue. 1979 Ana Marìa Veas Gonzalez Viña del Mar, Chile , 1947 Amor Grabo los rostros que vienen a mí. 13 Los esculpo, los acaricio, los rememoro, oro por ellos. Como si nos los fuera a ver de nuevo. Cada detalle de los ojos quedan en mí y me suplican. El rictus de la boca se me prende en la memoria. Es la Humanidad que me rodea. Son los miles de corazones que laten y por ellos es el Cielo. La gran propuesta, la dádiva, el sentido. Como aves abandonadas en un desierto interminable me parecen los hombres y mujeres que me llegan como preciosas ovejas sin pastor que balan en la lluvia de sombras. Y mis pupilas les dicen en silencio: allí, allí, está el que calla. Búsquenlo y hallarán reposo para vuestras almas amadas. Qué hermoso es el temblor de una mano a la que palpo y yo trasmitiéndole mi amor en ese roce pequeño. Tal vez mi rostro también se vaya con ellos. Como una estampita de Jesús envejecido. Y el invierno haciendo sus caligrafías tristes. Márcio Almeida Brasil Verniz As palavras se fazem aos dizer os nomes onde mallarmágicas falas habitam os mitos, meu Zeus! – o poema é imagem e o homem, herança do silêncio – ata dos delitos. Em vão, porém, não se p-resume o tempo, que o signo só enruga o verniz da estética, muito mais que a saga vinda de outros ventos é ser o nome informação e poética. O que fica, então, de uma metáfora, do discurso e da épica de um povo? o que fica da irrequieta âncora: o labirinto é decifrar o (n) ovo? Em vão é assim a notícia do poeta que lavra as atas e os discursores, aquele que no futuro se fez antigo além de Ceres e toda poluição? Em vão a escrita dos profetas, a história úbere dos cultores, o poemanúncio laser e urtigo ser(viço) entre o mal e o não? Nada é vão nesse país de palavras, onde mesmo o silêncio conspira seu comício. Aqui, nessa áurea terra onde sangram as lavras, aqui onde a liberdade é herança e ofício. do livro Falúdica, 1986 Juan Luis Hernández Milián Matanzas, Cuba - 1938 De una gota salta espléndida la vida. En una gota la muerte se agazapa. 14 Y si la poesía es esa paciencia, esa hondura, cierta radiación impoluta de realidad y sueño: ¿no será también apenas una gota saciando la sed de infinito en cada hombre? De: “Perfección del imposible” (Ediciones Unión, 1998) Hèctor Berenguer Rosario, Argentina Habla la arcilla ¿Qué busca el hombre en el borde de su vida? ¿El olor acre de la carne florecida, la voz de una palabra irrefutable, quizás lo rígido que es máscara contra el espantoso silencio que conmueve? Miras los ojos estáticos, las bocas resecas habituadas al hambre. Allí estás , perdido entre preguntas despreciando el mercado de consuelos, de un abismo a otro va la vida imaginándose. De: Entre la nada y el asombro Marco Aqueiva Brasil Há ocasiões em que talvez não fosse apenas história reunir coragem e loucura no rosto moreno parar o monumento e a luta mal recomeçada recolher por honra da grã-Domadora o gosto de exibir a raiva e as armas e deixar rebentar no olhar fixo e sedento outro tempo futuro com as crias do Dragão Gustavo Pereira Venezuela Cuando se dice amigo Cuando de dice la palabra amigo se dice sólo lo indispensable Vale decir Hermano Compañero Familia La vida que soñamos El mar Cotidianos sabores Una cerveza bajo el limpio cielo Un olor a escafandra de cierto muelle 15 Una calle sola por donde desandamos nuestros huesos Vale decir también Agua cálida El sol (que no es el mismo de otras partes) Alguien en quien se piensa especialmente Un hogar un rincón No se dice desprecio Tampoco Humillación Ni adiós Ni escupitajo Cuando se dice amigo se dice Certidumbre Se dice Ternura Se dice Costa Blanca y Común Como Un Pan Y se tiene una lámpara encendida en los ojos Y un resplandor adentro. Envio “El Primer Fuego. Alejandro Seta A. Korn, Buenos Aires, Argentina El pan “...ellos contaban las cosas que les habían acontecido en el camino y cómo le habían reconocido al partir el pan…” Lucas 24:35 ¿Cómo partía el pan Jesús, con qué dedos, con qué delicadeza lo cortaba? ¿Con qué gesto o sonrisa? ¿De qué manera llevaba puesto el manto, cómo caía el lienzo sobre su mano mientras cortaba. Con qué dulzura o rostro imaginaba qué pasaba afuera mientras partía el pan con sus propias manos? ¿Por qué Él y no otro? ¿Cómo partía su pan entre todos, con qué dulzura, con qué delicadeza lo dio todo, con qué gesto, sin quejarse, llevaba puesto el sufrimiento? ¿Cómo caía el clavo sobre su mano sabiendo lo que pasaba afuera? ¿Cómo dio sus propias manos y sus pies y su cabeza, su torso todo, todo su ser lo dio, sin quedarse con nada? ¿Por qué Él y no otro? De: La rosa invisible Hernando Socarrás Bogotá, Colombia, 1945 Camajorù 1 La semilla como un cielo que espera bajo la tierra. Es un llanto de los primeros ojos que fueron prohibidos por amar dentro de la lluvia. 2 16 En vez de la ilusión los lugares del campo. Las hojas de las manos por donde pasaron las hojas de los libros y el viento, mientras el árbol Camajorú pierde otros cazadores y desaparece. tomado de Confabulaciòn 63 Daniel Rivera Rosario, Argentina Rota Estás rota, y es cierto, en cada fragmento de tu arte, nos subyugas. Devienes como el aura de miles de galaxias, que se agolpan en el cielo opaco de tu fundamento. Diadema de colores envejeciste al tiempo con tus eternidades. De: Frida, Píntame una Poesía Ernesto Cardenal Nicaragua Tomarse con los brazos el uno al otro, dándose cada uno a los brazos del otro. Qué diferente sentirte dentro de uno que sentirse uno solo dentro de uno es decir, vacío. ¿Será que es soledad tu abrazo y tus besos sólo sed? Me parece oírte que de mí no te sacias nunca. Yo que fui antes buen catador de amarguras. Marina Tsvietáieva Moscù, Rusia – 1894- 1941 No quiero ni amores ni honores: - Embriagadores. – ¡No tengo ambiciones! Yo ni siquiera quiero una manzana Tan tentadora – de aquella canasta. Detrás de mí se arrastran cadenas y cerrojos. Pronto comenzará a tronar su trüeno. - ¡Qué ganas tengo! ¡Ay, que ganas tengo De irme muriendo poco a poco! (julio de 1920) - traducción de Selma Ancira y Francisco Segovia Otoniel Guevara El Salvador, 1967 Sobre las artes de la liberación El más auténtico de los orgasmos significa un salvaje dolor para la carne. El poema, en cambio, solo es 17 un infinito dolor en la conciencia. De: Canción Enferma Fernando Rendòn Colombia Guerra Siempre tendrás razones. Tú vas a sacar la espada como un ángel. Y cuando la has desenvainado ya eres un demonio. Máximo Simpson Buenos Aires, Argentina, 1927 To be or not to be Yo quise ser un rojo violín desorbitado, un ex abrupto eterno, un jardín de magnolias o una tromba, y sólo soy ahora profesor de nostalgias, edecán del otoño pesaroso. Yo quise ser el mar, o tal vez quise ser lo que no quise, un triángulo isósceles o un trueno, o una momia egipcia con su paz infinita, imperturbable. Eso quise tal vez en mi constancia, en mi apuro, en mi afán, en mi zozobra, quise ser el revés, la mano izquierda, el costado de mí, mi renegado, y sólo soy mi tú, mi pobre mí, un pronombre ya exhausto, un posesivo huérfano, un despojado mi. Eso quise tal vez, y sólo soy ahora mi vecino, apenas mi perfil, mi suroeste, mi terco lateral: estoy en la adyacencia limítrofe de mí, y siento desazón, me extraño mucho. (De Poemas del hotel melancólico, 1963.) Tomado de Poemanìa 163. Argentina. Richard Piñeyro Uruguay Cartas a la vida Un día una persona caminará por una calle recibirá el sol sin pensar en nada (como tiene que ser) caminará (sol) y no te recordará (como tiene que ser) y caminará por una calle. Y habrá sol. “El otoño y mis cosas”-Ediciones de Uno, Montevideo, Uruguay,1992 18 Patricia Pèrez Madrid Chile La Poesía La poesía es como el buen vino. Hay que beberla de verso en verso. Odete Costa Semedo Bissau Quando tudo começou Bissau não quis acreditar Bissau não quis acreditar no que via no que estava a sentir Bissau despediu-se de seus filhos nua deitou-se de bruços para receber chicotadas para receber açoite com ramos espinhosos de nhára-sikidu Bissau não quis acreditar No fundo do canto, publicado no Brasil em 2007 pela editora Nandyala. Ramòn Oviero Panamà, 1938- 2008 Bajo tu piel cabalgo loco iconoclasta de mí y desato muslos y conocidos senos colinas de mi infancia y volvemos siempre en espiral a aquel mismo camino en tanto voy mordisqueando tu pezón izquierdo cuando te da por reclamar entre cortos aullidos la consumación del juicio final. De Contrapartida, México 1974 Blas de Otero Bilbao, España – 1916- 1979 Juntos Esta tierra, este tiempo, esta espantosa podredumbre que me acompañan desde que nací (porque soy hijo de una patria triste y hermosa como un sueño de piedra y sol; de un tiempo amargo como el poso de la historia): esta tierra, este tiempo que tiran de mis pies hasta arrancar los huesos a mi esperanza última, ¡ah, no podrán, jamás podrán vencerme, porque mi mano se me va y se agarra a otra mano de hombre y a otra mano que me encadenan, madre inmensa a ti! De Pido la paz y la palabra, Santander, 1955) Francisco Quiroz Valparaíso, Chile, 1964 19 Habitò Eyzaguirre Motel A Solano San Martín y a León Fernán Por si viera remolinos cándidos, uñas gráciles y pestañas, habitó Eyzaguirre Motel, mordiendo trasnochadas enaguas a la deriva de un viejo tango. Y por ahí su poema, rasguñando cierta nube en el catre. En ese torbellino azul, de arcilla, inventó el parto de un hermoso paisaje, como sol zigzagueante, como árbol penetrando estridente y ecos estentóreos reclamaron el sabor exacto de sus labios. Liliana Celiz Argentina como contradicción mayor del nido en algún pájaro despeñándose mi rostro en nervadura hacia las aguas (las aguas a la inversa) en la estocada abrupta al solsticio de verano el fluir de la conciencia el aro del recuerdo en plegación de las visiones despeñándose ensimismada a la sílaba no escrita aquí en mi carne en compulsión del verbo múltiple aplacándose la cara en el vacío no la visión maligna del espacio Del libro inédito"En la versión de verte": Luìs Alberto Crespo Venezuela Costumbres Bajo el cielorraso cargado de lluvias están los comerciantes y sus arreos de burro, los de mercancías que hacen dormir. Dejan una vejez en mis servicios, y el polvero en los puentes llevándole a uno las lejanías. Trajeron una guitarra. La vi quemándose en el patio. Y caminar, caminar, hasta el río terminado en una piedra. El agua me tiró lejos. Más allá se borraban colinas y colinas. Así toda la noche: el cuerpo envuelto en aceite, en sábana blanca un tiempo llevado por las tejas, a los quince años de vivir creyendo estar en todas partes, de querer ropas para volar y la luna me pasaba silbando por la cara. Julia de Burgos Puerto Rico Pleito del Amar y Querer Corno cuando se abrieron por tus sueños mis párpados, rota y cansadamente, acoge mi partida. Como si me tuvieras nadando entre tus brazos, donde las aguas corren dementes y perdidas. Igual que cuando amaste mis ensueños inútiles, apasionadamente, despídeme en la orilla... Me voy como vinieron a tus vuelos mis pájaros, 20 callada y mansamente, a reposar heridas. Ya nada más detiene mis ojos en la nube... Se alzaron por alzarte, y ¡qué inmensa caída! Sobre mi pecho saltan cadáveres de estrellas que por ríos y por montes te robé, enternecida. Todo fue mi universo unas olas volando, y mi alma una vela conduciendo tu vida... Todo fue mar de espumas por mi ingenuo horizonte... Por tu vida fue todo, una duda escondida. ¡Y saber que mis sueños jamás solos salieron por los prados azules a pintar margaritas! ¡Y sentir que no tuve otra voz que su espíritu! ¡Y pensar que yo nunca sonreí sin su risa! ¡Nada más! En mis dedos se suicidan las aves, y mis pasos cansados ya no nacen espigas. Me voy como vinieron a tu techo mis cielos... fatal y quedamente, a quedarme dormida... Como el descanso tibio del más simple crepúsculo, naturalmente trágico, magistralmente herida. Adiós. Rézame versos en las noches muy largas.. En mi pecho sin lumbre ya no cabe la vida... Maikel Garcìa Cabaiguán, S. Spíritus, Cuba- 1980 Uno Convocados se agitan los durmientes confinando todo bostezo a la carne, bebiendo toda carne ante la manada de relámpagos que acampa en el pulmón. Se triplican. Se incineran aquellos sobrinos, abuelos, amigos y esclavos del calor nunca seguros de ser los escogidos, nunca conformes con labrar el sueño que les perdona pese al adiós. Hoy desataré el reino y siete canciones no volverán a ser las mismas, tampoco la espada ni los trozos de soledad que en mí se endurecen. Nada va a regresarme a las praderas donde enjaulaba al desvelo que me hacía roer fechas y sentir que era simiente perfecta, corazón apuntalado. El susurro poco a poco me subasta y acaricio, por primera vez, las murallas. Al final permanecen los durmientes blandiendo el asedio, convidándome a gritar. Antonio Pérez Morte España 21 Quizá no esperamos demasiado (Para J. A. Labordeta) ¡Quizá no esperamos demasiado, abrazando esperanzados la utopía, aprendiendo las paredes de ciudades que gritaban lo mismo día a día! ¡Quizá no anduvimos lo bastante, y seguimos todavía en un desierto sobre el que brotarán versos como flores y los poemas de Miguel serán eternos! ¡Quizá nos olvidemos de la sangre, del terror cotidiano y del silencio, de los ojos claros de Violeta: del futuro socialista que fue sueño! ¡Cuando Emilio me preste alguna estrella y tu Izquierda Depresiva... sea recuerdo, cantaremos contentos tus canciones, sin preocuparnos nada por su eco! ¡Cuando Pedro acaricie su paloma y a todos nos contagie el aleteo de una paz real y colectiva; comenzará a vivir un hombre nuevo! Del poemario inédito "De puño y letra", 1974-1991 Eduardo Figueroa Santiago del Estero, Argentina La casa vacìa La casa de la infancia esta vacía, ausentes los seres y las voces que otrora poblaran sus ámbitos. Al verla así, sentí que un oscuro viento golpeaba mi rostro en sombras mientras la tarde caía con su carga de soles sobre el ocaso. Hoy a pesar que tanto ha pasado, la casa sigue siendo “un compromiso de la memoria”; por eso aquí la vuelvo a nombrar como se nombra lo sagrado. Después pensé, si es tan sólo la vida quién me deja en el camino sus señales. Marìa Calcaño Venezuela Canciòn de los ritmos eternos Mirarte la cara Es como cuando tengo paseo al campo. Dime. ¿qué tienes tú que así me das de sed? Sed de sueño, y de vida, Y hasta de muerte… ¡Cómo yo te quiero!, Con mi voz de espanto Quebrada en tus vigilias. Siempre nuevo y el mismo. Como este dolor mío 22 De ancha pubertad, Como las hojas, como los nidos, Como el mar. ¡Ah! , mirarte la cara Es agrupar al mundo Y volcarlo en mi vida. Yo no soy más Que esta grieta de sed que tú me abres. Envio “El Primer Fuego. Roque Dalton El Salvador, 1935 - 1975 Atalaya Una religión que te dice que sólo hay que mirar hacia arriba y que en la vida terrenal todo es bajeza y ruindad que no debe ser mirado con atención es la mejor garantía para que tropieces a cada paso y te rompas los dientes y el alma contra las piedras rotundamente terrenales. Pedro Llanes Placetas, Villa Clara, Cuba- 1962 II Oscuros guerreros al borde de la planicie derrumban el lucero chisporroteante y el naipe nocturno de la floresta. El espacio de las amapolas gira dentro del grillo escondido en la hoja recién abierta mientras la música sobre las tejas y las tataguas incrustan su responsorio a ras del molino. Siento a los oscuros guerreros, deslizarse por las paredes del pozo hasta una dimensión embebida en la concavidad y la espuela en el liquen. Oscuros guerreros al borde de la planicie me buscan entre el susurro del agua y los escarabajos que vienen a remansar. La noche recompone en las sombras sus guanteletes y sus rostros que escrutan el cintillo húmedo de las pilastras. He visto a los oscuros guerreros llevarme a través de las hilazas de sus múltiples manos decapitadas, para marcharse bruscamente por el agujero y el batir de alas de la floresta. Marìa Tereza Horta Lisboa, Portugal- 1937 Pequena càntiga à mulher Onde uma tem o cetim a outra tem a rudeza Onde uma tem a cantiga a outra tem a firmeza 23 Tomba o cabelo nos ombros o suor pela barriga Onde uma tem a riqueza a outra tem a fadiga Tapa a nudez com as mãos procura o pão na gaveta Onde uma tem o vestígio tem a outra a pele seca Enquanto desliza o fato pega a outra na enxada Enquanto dorme na cama a outra arrranja-lhe a casa De: Cronista não é recado Alejandro Drewes Buenos Aires, Argentina -1963 Kleiner mann, was nun? (Hombrecito: ¿Y ahora qué?) Ya sabes ahora -pero es tardeque eres parte del largo sueño de Dios y alzas y hundes las manos asidas al último frágil madero: Te espera un certero naufragio bajo las olas de la realidad, aunque intentarás ahora -pero ya tarde, muy tardematar al viejo ciego que grita en la carne áspera, nocturna. Claribel Alegría Nicaragua Mi gata Cómo envidio a mi gata que no sufre de insomnio sobre el sofá se duerme sobre el piso si la despierta un ruido abre apenas los ojos y los vuelve a cerrar. Me atrae su indolencia su levedad su holgura. No se somete a nadie su despertar es lento hace yoga mi gata 24 viene hacia mi se acerca contra mi piel se frota la acaricio me araña se escabulle de un salto. ¿Me quiere? ¿No me quiere? Misteriosa mi gata y jamás lo sabré. Edgar Ramírez Mella Puerto Rico Noche de San Juan 2008 Para Edgardo Nieves Herminia Alemañi -intro- Las sombras del crepúsculo arañan la brea de la rúa Hay una multitud febril desbordando la playa Es día de hogueras y dulces siquitraques –solsticio de verano – Los cuerpos desnudos de los muchachos son todo un espectáculo que no sé ya beber Exuberante, como el mar que susurra eróticas sílabas de desconocidas máquinas De una canción arcaica, una estrella fugaz como los ojos del odio Rompe el loco silencio ruboroso, todo el aroma íntimo lo reviento en la pared grafitada, luego crece una calma, rara y espesa Me abrumo indeciso, ulcerado, maldito y acechado por las muertas candelas del cielo Y sin atreverme a decir o hacer ya nunca nada corro hacia la casa solitaria. Marjorie Ross Costa Rica He visto a una anciana exorcizar con danzas el temido contagio desconocía la tos evanescente de la muerte no había aprendido a distinguir su golpe sordo a separarlo de los que llegan con el viento en la nuca o con el frío no sabía que quien baila a la muerte solo engaña a su sombra ante el espejo (De: Duelo por la rosa y otros poemas, 2000 Jorge Lemoine y Bosshardt Mendoza, Argentina- 1948 Poema 4 cuando inaugure mi historia habré pasado la espera hoy soy mi propio testimonio el heraldo de mis soledades 25 y digo solo porque mi historia tiene un solo nombre el mío Jaime Saenz La Paz, Bolivia. 1921 - 1986 Como una luz Llegada la hora en que el astro se apague, quedarán mis ojos en los aires que contigo fulguraban Silenciosamente y como una luz reposa en mi camino la transparencia del olvido. Tu aliento me devuelve a la espera y a la tristeza de la tierra, no te apartes del caer de la tarde -no me dejes descubrir sino detrás de ti lo que tengo todavía que morir. Rodolfo Ybarra Lima, Perù Viuda negra Ojo por ojo como diente por diente me deshago en absurdas teorías cuento las patas al cordero y encuentro las cuatro patas de una silla. Si alguien me enseñara sus manos hallaría la libertad de los esclavos -el tiempo de los tiempos perdidos al voltear la clepsidra-, pero estoy preso en un cubo de luz asiéndome a la ventana estrecha de la indiferencia, preguntando a orejas mutiladas por el resto de sus cuerpos extraviados, canjeando cuatro botellas vacías por una palabra que me diga algo, muy pegado a las recetas para construir dioses de yeso, tablillas de salvación y escudo de Vida a prueba de balas, -chaleco y casco a prueba de golpes-. He tachado calendarios preguntándome lo mismo, y hoy que es lunes igual que ayer o anteayer encuentro que los días no existen. Todos los días pueden ser lunes o martes y como en la ley del Talión un ojo vale lo que un ojo, y un diente lo que otro diente, es cuestión de no hacerse problemas y tomar las cosas con calma, a veces los dedos no bastan para contar estrellas cuando pensamos (pretéritos) en la viuda negra que abandonó siameses en la puerta de una iglesia. De: "Animal Carnívoro", Mainor González Calvo Costa Rica, 1974 Vida real versus cine Generalmente las historias de amor no se llevan a cabo en hoteles cinco estrellas ni en lujosos salones de baile bajo el auspicio de una orquesta milenaria ni bajo el brindis postrero del champán luego de una noche brillante y amparada por la luna y su cooperación usualmente las historias de amor no se desarrollan en habitaciones de terciopelo y baño con yakuzi ni en camas de pluma de ganso ni en recepciones con vista al mar ni en bulevares ventajosos mientras se conduce un automóvil capaz de desafiar la economía y el tumulto que provocan los zapatos del tiempo presuroso con frecuencia 26 las historias de amor no conocen restaurantes de categoría ni yates ambarinos o clubes de golf que se visten con el linaje de una tarde veraniega mucho menos se desarrollan en asientos de primera clase o en piscinas reservadas sólo para el encanto y el desliz que brinda cálidamente el dinero y por supuesto las historias de amor no suelen tener música de fondo letras blancas con el nombre de los protagonistas bajando sin premura y claro está ni siquiera esa cómoda sensación de sentir que el mundo es bueno y maravilloso mientras se viaja de regreso hacia el resto del día y su trivial itinerario. De Esbozos de un citadino cualquiera Gloria Nolasco-Garcìa Repùblica Dominicana Canto de hoy Ya ensayan su requien las estrellas. Languidecen sus luces como cirios buscando para arrimo una playa desierta de cohetes. La noche se ha hecho noche, en sus crecidas de ausencias siderales. Abocado en las sombras nace el miedo. Sembrados con minas homicidas, los paramos florecen en arboles de muerte. Mientras nuevos Judas fabrican nuevos besos para entregar al hombre. Ulrich Grasnick Alemania La guitarra Homenaje a Víctor Jara Igual como un caracol roto en la orilla, fragmento de sonido y brillo en septiembre bajo los cardos del recuerdo – Un cántaro 27 lleno de la oscuridad del silencio definitivo – Esa guitarra una muralla de orgullo y canto, construido contra el sufrimiento, contra la soledad, contra el olvido. Esa guitarra que nadie más sabe tocar sin que toque la cuerda del dolor. (Traducción del alemán al castellano José Pablo Quevedo) Maria Laura Quiroga Merlo, Buenos Aires, Argentina Desperdicio Sólo la luna estudia las matemáticas del cielo y las arañitas comen confites de cianuro hay que verter elixir en alguna tumba que pida socorro en el hombre que suene a cizaña. Amilkar Feria Flores Ciudad de La Habana, Cuba Regurgitación Es de esas cosas que no exigen de un orden. Puedes pensar y luego, con calma, volver a pensar, que es lo mismo que repensar. A fin de cuentas, timando el aparente control de la razón, los pensamientos terminan por encontrarse a nuestras espaldas. Karina Sacerdote Argentina inevitable el labio el que se sabe dios hormiguero de mañanas apacible bufón de naufragios entelequia de abismo solo el que ama ese el tuyo el que besa besos de intrépida rompiente ese labio inferior que es nirvana cuando roza sutilmente como capullo rabioso 28 errante mi boca Ana Rüsche Brasil Possessão Às vezes aquele corpo não era meu — um outro me possuía todo. A noite é lenta, escura e difícil e aquele meu corpo rude já fora de muitos. Ele tinha ódio desses passados, esfaqueava fantasmas nos lençóis num círculo em volta da cama. Dizem que o amor era a entrega. A ampulheta escorria, ele iria me perder rápido como tantos outros. A noite é lenta, escura e difícil. Envio Carlos Machado, poesia.net Dolores Castro Aguascalientes, Mèxico-1923 Sequía En espera, tendida como yerba que apresura su flor en la sequía, oigo el viento quebrado, el espiral, la seña. Quiero decir ahora, que yo amo la vida: que si me voy sin flor, que sino he dado fruto en la sequía, no es por falta de amor. Quiero decir que he amado los días de sol, las noches, los árboles, el viento, la llovizna. De. Cantares de vela- Fragmento, Editorial Jus, Voces Nuevas, 1960 Virginia Grutter Costa Rica Mi canto Yo quiero ser un canto. Yo quiero ser un canto cualquiera que haga dormir un niño, reírse un marinero, soñar la lavandera. Yo quiero solamente ser un canto volando en la tierra; un canto de hoja verde, primer gota de lluvia, esperanza en la espera. Quiero cantar mi canto, aunque sea pobrecito y descalzo, con humilde hermosura 29 y clara voz de pájaro. Mi canto canto y canto muy duro y alto y sin pena, porque no tengo más que mis canciones para tus tormentas. Antonio Cruz Argentina Òleo de tarde de lluvia (Tarde de otoño a orillas del río Lules en Tucumán) Gris oscuro en el cielo. Terciopelo ceniciento en las nubes diseñadas. Pátina gris en tarde clausurada. Gris sobre gris, pincel, pintor. Desvelo de tarde gris sobre borroso anhelo. Agua mansa del cielo y ondulada agua de río. Sierpe encadenada a memoria, nostalgia, desconsuelo. Prófugas gotas. Río fugitivo en la tarde. Memoria en la ribera, de otra lluvia, otro río y otra espera. Llovizna gris sobre árboles altivos. Mansa el agua del cielo. Sensitivo pincel. Pintor pintando una quimera. Jaime Nisttahuz La Paz, Bolivia, 1942 Opinión El sufrimiento no asumido en vez de redimir esclaviza. Marlene Denis Cuba Tocarte en las canciones el miedo que habita las tinieblas anuncia que podré acabar como suicida en tus piernas. cómo resolver mi vida si tropiezo cuesta abajo con otras latitudes y soy el sol que abrasa tu piel entre manzanas y locuras el papel que trata de sugerir que te quedes otro poco la Caja de Pandora el descaro para desnudarme en la caída o el naipe ante próximas escaramuzas. soy la mitad de lo que fui y la musaraña 30 que teme callar este poema con su música. De: Donde termina el infinito Rosina Valcarcel Lima, Perù No hemos perdido (a Julio Yao) Nos roe aquel retrato pálido del preso político Pero no hemos perdido el tren ni la Historia La urbe rebelde bajo avisos claros La armonía flota como un violín antiguo Esta noche escucho tu sonoro cántico leve Sediento de recuerdos y jazmines Dos corazones locos sobre el reloj Me echo a los brazos de tu patria Mientras tu pincel dibuja nuestra América Eres un astro vivo en esta hora, juglar Un silbo de árboles colgado en mi ventana ¡Qué viva, viva Panamá…! Angye Marcela Gaona Colombia Bajo tierra Miles de preguntas arden bajo tierra, preparan la erupción. Ya bullen, ya se sacuden; de combate provocadas, pronto hallan los cráteres, están por venir afuera, no valen trabas. Manos son y en las montañas se alzan, manos de magma toman las estancias. No queda en pie trono ni posesión ni usura algunos. Suenan las preguntas, chasquidos en los tímpanos de los estados. Se recuerdan los nombres hostigados, los desmembrados insepultos, ocultos bajo lodo impune. Se avivan los nombres en las voces; pueden derruirse los muros de las prisiones, pueden tomarse los tronos, se diluyen las fronteras, si se invocan esos nombres. Ni cañón ni injuria, nada, nunca habrá de replicar esos nombres calcinantes. Gabriel Impaglione Argentina, 1958 No se trata de la hecatombe universal 31 No se trata de la hecatombe universal, un maremoto, por ejemplo, de polo a polo, cierto viento de carbòn, como la noche avanzando terminante. Hay cotidianos fin del mundo, pequeños gigantes ignorados fines absolutos. La bomba que arranca el alma de la carne rota. La casa derribada, àcido en el surco. Palabras decapitadas por el filo de un billete. No serà la tierra desovillàndose como una bestia fantàstica, abrièndose el vientre de un tajo feroz. Serà el hàbito cruel de la indiferencia, la sumatoria de tanto azufre y hoguera que a veces parece no ser demasiado. Como un largo dìa de siglos donde nadie jamàs llame a ninguna puerta, donde el aquì y el ahora ya no importe. Isla Negra no se vende ni se compra ni se alquila, es publicación de poesía y literaturas. Isla Negra es territorio de amantes, porque el amor es poesía. Isla Negra también es arma cargada de futuro, herramienta de auroras repartidas. Breviario periódico de la cultura universal. Estante virtual de biblioteca en Casa de Poesía. Visitá el blog: http://isla_negra.zoomblog.com Isla Negra en el Directorio Mundial de la Poesia - www.unesco.org/poetry 32