La guerra - Hemeroteca Digital

Anuncio
&*!,;.•"-
0n
• JUEVES 21 DE OCTUBRE DE 1915
MADRID—ANO XUX.—NüM. 17.487
—
TARIFA DE ANUNCIOS
•
PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN
ILukiuB: Un met
•íWttrtaplan»: NacionalM.
0,00 pt«í. Upefc
U«m: Extranjero*.....
"•¡^ »
*
fa tareera •plan»: I''í"'''°<'*"**"
e'iv! *
*
ídem: Comunicado»
^•Jj' » »
l Unncie ¡«tlsfari 10 síat». del Iinpueito. (Lty U Otínbr* M
«^'--*
EI^JMPARCIAL
DIARIO LIBERAL
FUNDADO POR D. EDUARDO GASSET Y ARTIME
m
la De«lrá(li|ji9ipiaia
Desde el adveHHíú¿»to aí Poáeir de este
Gobierno conserv«lor hemos tenido ocasión
dé apoyarle, sigtáendo las inspiraciones de
nuestro patriotismo, siempre que áflrtaaba
con sus palabras o con sus actos el respeto
a la única poKtica .posible en España: la política de la neutralidad. Antes de enarbolarla como una bandera grata a las auras
populares, antes de encontrar tierra firme
b ^ o sus pies, halW este Gobierno refuerzo
inapreciable en elemeáfos polítkos y .en periódicos Irtjeiales. Y »o hablemos ya del
sostén decisivo que, ea horas difíciles, íué
p ^ a él la minoría liberal. Yendo todavía
m | s allá, tenemos por nuestra parte derecho a recortJar que cuando comenzaron diarios de las iz^uierjdas €l ataque a tina supuesta dictadura del; Sr. Dato, interpusimos nuestra opinión de que no había tal
dictadura ni el Gobierno trataba de violentar la CóHstitación. Mn cuanto a la neutralidad, antes ^ después de proclamarla el señor Dato h a sido por nosotros defendida con
tal empeño que algumji vez nos vimos frente
ft frente de las tendencias iniciadas dentro
del propio partido liberal.
E l recuerdo de este período tan reciente
^ tan agitado se aduce aquí para dar más
valor—todo el valor de una conducta recta
e imparcial—a la protesta que nos sugiere
la campaña contra los liberales, iniciada y
oeseavuelta desde hace días por la Prensa
conservadora y ultraconservadora. Aquel
artículo titulado «Neutralidades que matrn» está siendo ya objeto de demasiada explotacióii política por parte de los ministeriales. Cualquier movimiento del jefe liberal ha ido cuidadosamente acompañado de
esa exhibición en forma tan primitiva que
ya no parece un argumento, sino un conju,ro. Y ahora, al publicar algunos periódicos
de París, sobre todo Le Temps, informacior e s sobre la crisis española, la frase de
«crisis total» remueve de tal modo la acometividad oficiosa de La Época, que aparecí al desnudo la intención de servirse de
aquel artículo como del puñal de misericordia. Comprendemos la tesis ^n El Correo
Espaüol, que uo ha de reparar en el arma
d«» ataqué, tratándose del partido liberal. N o
nos la explicamos, ^ . J á b a o s áfH Sr. Dato,.
ni concebimos cómo pueden inspirarse por
e' jefe dé un partido,de Gobierno palabras
qne injustamente tratan de proyectar sombras y recelos sobre el porvenir de la política de otro partido.
Desiiués del artículo'mil veces citado el
jefe de los liberales' ha expuesto clara, concreta y ^enérgicamente sti opinión. A raíz
de publicarse ya hizo l^astaote para que conociéramos su actitud; Luego, en reiteradas
ocasiones, expresó su fórmula de Ja neutralidad sin adjetivos. Y ahora, cuando los periódicos franceses—^por exceso de celo, desconociendo acaso la verdadera temperatura
de la opinión en España y creyéndola caldeada eu favor suyo—se felicitan de una
trisis total que dé el Poder al conde de Romanones, éste proclama su respeto a la neutialidad y se obliga con la palabra firme,
prenda y garantía del mañana^Porque ¿hay
*lgo más que pedir a un hombre de Estado,
• un gobernante, que la reiterada declara•són de su pensamiento y el compromiso de
^^mplirlo?
E n los diarios franceses, su Utien deseo
y ^1 de servir a sus lectores nuevas halagüeñas sebre la actitud de los pueblos neutrales justifican cualquiet error, hasta el de
suponer que puffid«i precipitarse los sucesos
en la jwlíti&a españok en Jforma que aquí,
dentro de casa, consi'dcramos harto prema'
tura. E n los periódicos españoles de tendencia reaccionaria es también explicable que,
a sabiendas de que no ha llegado el momento del cambio de política y de que el conde
de Romanones no quiere ahora el Poder,
aprovechen la ocasión de inventar una dificultad -i- aunque sea ilusoria — para crear
obstáculos, a su manera, al partido liberal.
Pero la inspiraqíén de un jefe de partido
debe alcanzar a más altas previsiones. Dtíx
anticiparse a un mañana—quizá próximo,
¿quién lo ¿abe?—en que él mismo se vea
obligado a presentarse ante la Corona pidiendo el cambio de Gobierno. Y si eso es
tan posible que todas k s probabilidades
coinciden en dar por supuesta, más prcnto
o más tarde, esa solución, ¿para qué manejar ahora el arma peligrosa de la política
internacional? ¿Lo necesita para defenderse contra los liberaleá que le han sostenido,
que no han hostilizado, que han visto pasar
meses y inéses sin dibujar apenas una linea de oposición? ¿Considera preciso contestar con eLnavajeo de nuestras luchas de
campanario a ias declaraciones formales de
un partido que prodlama su propósito de
mantenerse en perfecta solidaridad con 'a
política internacional, que él mismo, con
éxito reconocido sin regateos, ha iiiiciaJo?
Algo hay, sin duda, tea los comentarios de
ayet que traspasa los límites de la defen.sa
y que no debe quedíUf sin respuesta.
Nadie puede hoy alegar justo título para
quedarse con el monopolio de la neutralidad
y negociar a cuenta de él la permanencia
en el Gobierno. Quien lo intente fracasará
porque, del más alto al más bajo, teda E s paña sabe qae<et'ílfeHtímiento^ de la neutralidad nació del instinto de conservación :
li^lS!:::::::-::::::::: i^ ;
íismmu? de EL IMFAROIAL Aparíaüo 122
4k Qaile del Duque de Alba, 4
La guerra
institito colectivo, ni liberal ni conservador,
instinto popular, nacional. Todos sabemos
también que la corriente neutralista lleva
en su cauce fuerza bastante para arrastrar
cuanto se oponga a su paso y que el éxito
de la neutralidad—^tan explotado—^no le
costó al Gobierno otro esfuerzo que el de
respetat un estado de heicho. Los que gobiernen después habrán de respetarlo también. ¿Para qué la burda habilidad de sembrar sospechas en el camino del sucesor?
Comentarios
miUtares
La cultura milita'? del público, adquirida,
o ampJiada, ,por la Prensa, por Jas conversaciones, por,, el natural interés que despier'
t.i el •desiiíDsiiratíii «tiasus bellm europeo,
facilita grandemente la misión del comentarista. Ya pue<1e decirse que no hay profanos
en arte militar, que todos entienden poco
o mucho (Te.cos&s de la guerra y que,' por
lo tanto, están capa.citi'Jos para comprender claramente ¡a.s diversas situaciones milita.res o fases de la grandiosa campaña.
La atención pública va derecha a fijarse
en aquel episodio, íletulle o particularidad
que más viv:unente atrae su interé.s. Así, la
reciente cam'paña de los Balkanes tiene en
suspenso UKWR '. «J ánirpos y apartado r,n
tanto el interés de los demás teatros de la
guerra.
Sin embargo, el enlace entre unos y otros
campos de batalla es tal, que no puede formar el obson'ador un juicio aproximado a
la realidad si no abarca en conjunto todo el
inmenso tabíero esitraté^oo de los beligerantes.
En esta enorme guerra unas cosas se han
agrandado y otras empequeñecido de un
modo inesperado. Los grandes ejércitos, las
muichedumbres para cuyo manejo parece
que se escribieron los tratados de estrategia
han qued'ado j-educidos a un papei táctico.
La estrategia se iha engrandecido, porque
sus eJementüs son enormes v las distancias
son extensísinaas. El papel de los grupos de
eiercitos, en cambio; se reduce al tacto de
codos y al combate en línea sin solución de
continuidad. Lo que en las campañas clásicas hacían los Cuerpo.? de ejército, separados par una doceua de leguas, lo hacen hoy
níwiones enteras en armas y a distancias
como las que median entre Francia y Rusia e Itahá/y Set-bia.
^ y «u
Del conjunto de las operaciones se deduce
que en todos los frentes hay refativa quietud
Los avanee.s alemanes en las cercanías de Riga no son maniobra esencial- lo* <i¡iPina or
CATÁSTROFE ENéPASiS
V o l a d ^ a de una fálirica
TreMa y fiétt AAArtM y imniMvsos Mrícies.
• * París 20 (9 noche)
En una fábrica de la calle de Tolbiac, y per
causa hasta ahora desconocida, .pero sin Que
quepa pensar en ,una mano crirninal, ha sobrevenido esta tarde una tremenda explosión.
El edificio, más que. derrumbarse, puede decirse que voló. De entre los escombros han
sido extraídos 37 muertos y numerosos herido.5.
Varias casas inmediatas se han venido abajo también y todos los cristales del barrio
han quedado hechos añicos.
El presidente de la República y el ministro
del Interior "se han personado en el lugar de
la catástrofe.
UlUllll|AII|!|ÉIllW
En Le Journal, de París, llegado' ayer a Mar
dri'd', que publica el retrato del Sr. Dato, un
escritor que dedica la mayor parte de sus comentarios a la política e.tíranjera, y que firma con las iniciales S. B., dice lo siguiente
acerca de la crisis política, que ya supone
planteada en España:
«¿Qué saldrá de la crisis espafióla? ¿Volverán los liberales al Poder?
La crisis que acaba de sobrevenir en España es, ante todo, una crisis interior. Es *ina
manifestación de la dificultad de vivir de un
Gobierno cuya debilidad congénita era notoria.
Cuando los liberales, quebrantados, abandonaron el Poder, a fines de octubre de 1913,
la lógica habría mandado llamar al jefe del
partido conservador. Se desistió de haberlo
ante los recuerdos evocados por la enérgica
personalidad del Sr. Maura. Ún subordinado
suyo, el' Sr. Dato, fué el llamado. Por ese hecho el partido conservador sa encfjRtró dividido. Todos- los elementos favorables al señor Maura pusieron la proa ül Ministerio
Dato, quicaa 6e vio condenado ft ufiáMlSt^nCJa.,PTQC?!ria, .»• pb ^ivir mas gue de la tolerancia de ía oposición.
La guerra vino a complicar las cosas; la
guerra ha colocado a nuestros vecinos del
otro lado de los Pirineos en una situación
falsa. España está fuera del conflicto y no
tiene ningún deseo 'de entrar en él. Pero no
quisiera estar completamente fuera de un
arreglo que trastorna las condiciones de!
equilibrio europeo. Poir otra pafte, también
ha sufrido las repercusiones de la guerra:
crisis económica y crisis de opiíjión.
Todo eso ha contribuido a debilitar a un
Gobierno débil. Ha bastado un incidente de
presupuestos para precipitar el malestar y
determinar el desacuerdo; de ahí el origen del
conflicto.
¿Qué saldrá de ello? Otra combinación conservadora, aun más incierta que la precedente,
senradora, aun más it^ierta que la presente,
o la vuelta de los liberales al Poder, que no
han olvidado por completo la rivájldad entre
el conde de Romanones y el Sr. García Prieto. De todas maneras, un Gobierno que, bajo
la mano del simpático rey D. Alfonso, no podrá más que proseguir una política simpática a Francia.»
H iRenol de CortuSüDii
La C^rtil4n y «i ministre de Marina
No obstante el fuerte eatarro que padece,
el ministro de Marina concurrió ayer al minisierio para recibir a ia Comisión de Cartagena.
Lleg<5 ésta a las once de la mañsuaa, acompañada del conde de RomaBiopea y de los diputados y senadores por la provincia de MIH*cia.
«ttii
Portugal; Trimestre..
7,60 »
Kaciones coniprendiíjas ei la Unión postel- Trimestre
10
»
ffacionea so coa>preiididai; Trimestre
,.. - 15
$,
'Boát la eoirespondeodia y giros debe.i diríjame •}
Ufít i SBt Ifltíflres ? anoflciantes I presencia
las grantts rb^dss de sos caatro edictoaes
aiúmero sueHo: S cérJimos
i
j
En nombre de los comisionados, el señer^
Maestre expuso al minisfro el objeto de la
visita. Este es solicitar del Gobierno que
adopte las medidas necesarias para aliviar
la situación de los obreros de la Maestranza
en la íona industrial de aquel Arsenal que
la Sociedad Española' de Construcciones Navales se fe obligada a despe(Ur por falta de
trabajo.
Como están pendientes de ultimarse los
contratos relatíroo a las obras que debe ejecutar dicha Sociedad, entre otras las referentes a la construcción de cañoneros y a
los servicios áe aprovisionamientos de petróleo y varias más de importancia que se
hallan en preparación, pudo el ministro satisfacer los deseos de la Comisión, manifestándola que ha encargado que se active todo
lo posible el despacho de los expedientes de
dichos cañoneros v del teferido servicio, cuyas
obras comenzarán en cuanto se reciban los
materiales necesarios en el Arsenal.
En éste además, por virtud de la ley de
17 de febrero último, ha de haber trabajo
más que suficiente para el mantenimiento de
toda la actividad industrial.
Mienb'as se realizan dichas obras se,llevará
a efecto la carena del cañonero «Miarqués de
la Victoria».
Adviiifió el general Miranda a los comisionados que 'una vez concedidos estos trabajos
el Gobierno no (puexíe comprometerse a sostener la Maestranza ni la intervenir en las admisiones o des1>i)dos que la Sociedad Española d6í.Con'struccion€s Navales lleve a efecto,
pues tales despidos o admisioiies estarán-en
rdación coai las necegidiades impusátas por
la índole <¡'3 las obras.
—íEl Gobieamo—añadió—no puede influir ni
obligafl" a la Emipresa .% mantener operarios
que no necesite. No obstante, procurará mantener la TOgiuJaridad en los trabajos.
Lcfs comisionadtos saKeron muy aatfsfecbos
de su visi'ta al ministito de MarínA.
hoguera aparece más viva en los Balkanes, y
es justo que atraiga la mirada.
Allí hay un dato de importancia para deducir el..plan: los auatTOaieroanes han tomado
la ciudad de Pojarevatz, situada en la divisoria de los valles del Moj;ava y del Mlava; estos -dos vaUea son los caminos de inVasfón,
lc« que a los alemanes interesa tener expeditos.
Al m¡.smo tiempo, los búlgaro.? se acercan
o negaron a Paratchin, que se halla en A curso superior del Morava. Entre los búlgaros y
los austroalemanes maniobra un ejército ser.
bio, cuya situación no debe ser muy halagüeña.
Mientras tanto, los anglofranceses continúan desembarcando gente en Salónica, y han
enviado algunos refuerzos a los serbios; pero
el núcleo principal aun no se ha movida
La idiflwuiltad (suipoesta por los críticos miIteres) que ha de encontrar el cjéreiito expeditíionario para comipl«tn,r sus elementos indiute a dliichos críticos a juzgan- como 'un error
esa leoopeictíicióin. Oreen que sería más eficaz
para la a'cci4n die 3os aliadbs repetir Ja ofensiva^onérgica en el frente occidental, romper
las líneas al'smianas de Francia, Devar todto el
petso die la guerra allí donde más cerca estén
los (feteur^a
No está mal ese ^plan si fuese posible, y no
le faltará deseo al general!' Joffre y a "su vaWeinte «jército die realizario; pero para juzgar
la BitUBJcii(5n basta flieer el artículo que en
La Guerre Sociale publica Hervé bajo el título de «Un general republicano».
En ese #rtícuilo, que la censura ha dejadio
íntegro, se trasluce lo (jue a Francia 'ha cosadlo la ofensiva victoriosa de la Champaña
y 'se est-ableoe una separación técnica entre
los generales cuyas tropas tienen muchas o
pocas bajas.
El precedente ser,á funesto. Cierto que los
franceses han tenido más de 100.000 bajas
{el pico es de importancia) en su ofensiva;
pero vencieron, rompieron la línea, hicieron
millares de prisioneros y lograron un éxito
cuya gloria no le regatea el enemigo en sus
partes oficiales. Vencer sin tener bajas es
difícil'batiéndose contra moros e imposible
con un enemigo como cualquiera de los beligeranteSi
En honor a la verdad, Hervé no se duele
precisamente del número de bajas, sino de
la incapacidad de los generales que lanzaron "sus regimientos contra líneas de alambradas Intaictas, entre cuyas redes fueron
aniquilados por el fuego enemigo. La hecatombe no achicó el ánimo de los soldados
franceses, y eso abrillanta su conducta; pero
si los regimientos quedaron deshechos, si la
organización de los Cuerpos sufrió tanto que
imposibilita continuar la ofensiva, ya está
explicada la razón del alto en aquel brioso
avance, cuyo empuje hizo en la línea alemana un desgarrón de 25 kilómetros con el
tronar de 3.000 piezas de artillería y el heroísmo de 80 divisiones de infantería en masa compacta.
tralidad cuya benevolencia para k>s aliadas
pudiera comprometer la situación interior y
hacen presión sobre el rey para mantener a
Dato.
La Prensa inglesa no disimula la anormalidad de la situación política en Inglaterra. La
crisis es alli latente; pero se ha manifestado
poc la dimisión de Edward Carson, determinada, según uno.<í, por ser opuesto a la expedición en favor de Serbia, y según otros, como protesta contra la inacción del Gobierno
en la cuestión del servicio obligatorio. Créese
que saldrán también ChurcliiH, que quiere
luchar en el frente de operaciones, y tai vez
Edward Grey, que está casi ciego, aunque
sus servicios son muy necesarios, por haber
estado diez años eneargado del ministerio de
Npgorios extranjeros.
El corre.">|jonsal de í.e Journal en el gran
Cuartel general ruso dice que el ataque a la
playea de Dnnatourgo ha costado ya a los alemanes 80.000 hombres inútilmente. Los relatos de los prisioneros hacen alusiones a graves disentimientos entre el emperador Guillermo y el general Ilindenburg, motivados por
e.ste fracaso. Los alemanes, amenazados en
.su flanco derecho, retiran paulatinamente
sus cañones de mayor calibre en previsión de
que se haga indispensable una retirada general.
Respecto a la situación en los Balkanes, los
críticos militare^ y la Prensa reconocen la
importancia y la gravedad de haber sido cortada por los búlgaros la via férrea de Salónica
a NicH; pero un despacho posterior de Atenas niega la exactitud de tal noticia.
Continúa ignorándose la verdadera situación en Grecia y Rumania. Según ciertos informes, f.i los .lerbios y francoingleses obtienen el triunfo en' alguna bataHa importante,
tanto Grecia como Rumania entrarán en acción al lado de los aliados. Otros informes
manifiestan que un Tratado secreto con Alemania impone la neutralidad a Grecia, mientras que otro Tratado asegura también el
respeto a Rumania; pero la agresión a Serbia ha producido gran emoción en el pueblo y en la Prensa."
Los intervencionistas ponen de relieve los
I grandes peligros ^ue resultan de esta inva
y Serbia, y declaran que. ha llegado la hora
de actuar para impedir que Rumania sea estiangulad.a.
. . .
La sitiución de Móiice.—Dsrrota «iMMma.—fiaiio&ntracianes turoobúlg8ra'«.T—Nota 4» I«B itiar
dos a Gracia.--Trabajas para riftUbl«k)«r la Mananfufa an ctrina.
París 20 ^fi,^ ta.tde)
Le Temps consagi-a su «Bolsíia ¡áipíométii00!) a la situación de Méjico.
«Carranza—dice—ha triunfado- sobre sus
enemigos; las fuerzas de Zapata se haUan reducidas al e.stado de bandas dispersas, y Villa, desprovisto de dinero y de municiones,
abandonado de los especuladores yanquis
que le facilitaban fondos, sólo cuenta con Sonora y Tahascü; pero las fuerzas carrancistas
se aprestan a echarle del último refugio. Carranza-es más fuerte y popular, mas para
afirmarse definitivamente en el Poder tendrá que dominar, de Sonora a Yucatán, numerosos focos y fermentos de la revolución,
aunque con §J apoyo de los Estados Unidos,
en dinero y municiones, tiene más probabilidades de triunfar que Huet-ta. También debe
obtener el reconocimiento de las potencias europeas, acabando con la anarquía y respetando los derechos y los intereses de los extranjeros.»
La Tribuna, de Ginebra, publica el telegrama siguiente, que es preciso acoger con toda
respira:
«Al norte de Chabatz los alemanes han sufrido un grave revés y se han retirado en desorden.
"Los serbios han emprendido una vigorosa
ofensiva en Podjarovatz, y en la noche del 17
se apoderaron de las posiciones alemanas. En
la noche del 18 acentuaron el avance y se aproximaron a Podjarovatz, cogiendo de flanco a
los alemanes.
»La unión de Mas tropas alemanas con las
búlgaras está lejos aun de realizarse-»
Desde Salónica dicen, con fecha de ayer,
que Bulgaria ha concentrado tropas rápidamente en Dobrudja, porque Rumania se inclina de modo apreciable hacia la Cuádruple. En 1.a-frontera griega se han concentrado
tres divisiones búlgaras, y los turcos también
han reunido tropas en la región de Dedeagatch.
Los minisírps Je Inglaterra, Francia y Rusia en Atenas han expuesto, en una nota
ami-stosa, la decisión de sus respectivos Gobiernos de enviar al frente balkánico refuerzos considerables. Además, han declarado al
Gabinete de Atenas que sus Gobiernos interpretan el Convenio serbogriego de diferente
modo que Grecia.
Comunican de Pekín que se están realizando rápidos preparativos para restablecer la
Monarquía. A las próloneadas reuniones que
se celebran en el Gran Palacio, Yuansikai ha
invitado a sus fiartidarios.
CIGES AMRICiO
El día 17 una patrulla enemiga de 19 hombres fué apresada por los nuestros, gue. sa
apoderaron también de armas, raunicíoaes,
instrumentos y material telefónico.
En el Carso hubo en la tardé de ayer vivo
fuego de artillería, que se prolongó basta eatra(}a la noche.»
Vlaientos ataques «n el tsonxa
Norddeioh 20 (U meJJana)
Parte oficial austrohúngaro;
«Dicen del frente italiano que aameníaa ea
Violencia los combates en el sector del lisonzo.
La infantería italiana, protegida por el fuegü de su artillería, íicometió en vaiios punto»
a los aust^acos. Todos los ataques fueron
rechazados.»
En ei mar
tía vaiwr alemán perugulde
Norddeich 20 (11,30 mañana)
Un vapor, el «Scotia», cargado de minerat,
de la matrícula de Stettin, fué perseguido por
un submarino inglés a la altura de Borneliolm.
Sin duda el vapor hubiera sido víctima de*
submarino a no ha))erse presentado de repente un zeijpelin que evoluriünaba sobre el
Báltico, y al cual.'el «SCofla» hizo señales de
que iba perseguido por un submarino.
El submarino .se sumergió y desapareció ai
divisar al zeppelin.
Los submarinos Ingleses en el Bíitioe
Londres 20 (1,10 tai-de)
Los periódicos .suei^o.s dicen que 12 subm».
riuos inglese,? operan actualmente en el Báltico, y que el último barco alemán torpedeailo
es el vapor «Wolter Leonbardt».
»
Aunque la censura prohibe riguosamente en
Alemania la publicación de esta.s noticias, la
emoción es viva en todo el Imperio, y muy'especialmente en la costa.
ODho buques alemanes torpedeados
Londres 20 (2,30 tarde)
El Daily Mail dicQ que uri barco a!omán, destinado a colocar minas en el estrerho
de Langeiand, ha sido torpedeado por un áubmarino ihglé.s y que todos los tripulantes
se han aliogado.
Otros tres vapores alemanes, cargados de
acero y madera, que se trasladaban de Suecia a Aleniaaia, fueron torpedeados a.la alr
tura de Oxele Sumí, y cuatro buques más,
también alemanes, han corrido igual suerte,
lo que hace un total de ocho buques alemanea
torpedeados en el día de ayer.
Excusas de Alemania
París 20 a,r.0 tHida)
Comunican de Amsterdam que ol Gübicrno
de Berlín ha presentado sus excusas al Gobierno holandés -por el ataqiíe de un aeroplano alemán a un vapor holandés en él mar del
Norte.'
Norddeich 20 (12 noche)
Berlín.—De origen oflcio.so se comunica que
los relatos publicados en la Prensa uliada
aóerca de lá acción de los submarinos euenúgos en el mar Báltico son muy cxagoiadoa.
La información acerca del Inmdlíniínito de
s.eis transportes Eüernanes se reduce, df.spués
de "las averiguaciones realiz'ados, a buquea
mercantes, y-para esto en júm-lios casos fué
violada la neutralidad de SúíOia.
Las disposiciones .adoptadas por las autoridades navales alemanas ptírmit-;» esjierar
confiadaipenté que los submarinos enemigos
no conseguirán perjudicar "considérableniente
lá navegación en el Báltico. ' •
' • •
ka invasión de Serbia
Continiia ei avance austrobúlgaro
Norddeich 20 (11,10 mañana)
Parte oficial austrohúngaro:
«Contingente» -austrohúngaros han tornaáo
a la bayoneta el monte de los Gitanos, al sur
de Grock.
Las fuerzas auítrohúngaras, que en unión
de contingentes alemanes avanzan en ambas
orillas del^MovaWa, han cogido prisioneros
estos últimos días a 15 oficiales y 2.000 soldados serbios.
i,os búlgaros se han apoderado de lá primera línea atrinchfrada por los serbios al este de PiTOt, y ihan penetrado hasta la región
de Vranje.»
nivIaitSn da opiniones en Greda
PiEU-ís 20 (10,10 mañana)
Los partes telegráficos de los griegos qua
viven en el extranjero llegan sin interrupción
a Atenas. Piden respetuosamente al soberano
que salve el honor y el porvenir de Grecia, y
que vaya a socorrer a ios serbios, según el
Tratado de alianza.
La Prensa germanófila de Grecia continúa
interpretando el Tratado de uri modo diferente, y afirma que Grecia no debe auxiliar a los
serbios mas que en el caso de que sean atacados por una sola potencia, y abora aoB
atacados por trea.
inearnizades combMas.—l.iínoa ferro* anwnazMia
Pai-ís 20 (10,3Ú mañana)
Dicen de Nich que los encarnizados combates-continúan en la frontera búlgara, en el
valle de la Vlassina, y que entre Urania y
Bistovatz la vía férrea de Nidi-Uskub está
amenazada ww las tropas búlgaras. En el
Norte los seroios han rectificado su frente de
batalla.
Se coitflrma que las pérdidas auatroalemañas V búlgaras son considerables.
La sitttaeiM militar en Bulgaria
Éxitos parciales da lea itallanoa
París 20 (1,15 tarde)'
Roma 20 (8 maílana)
(DE NUESTRO REI>ACTOR-CCRRES?ONSAL)
Telegraffan de Salónica que la ciudad .d«
Comantarios a la crisis españal».—Probabia mo*
Parte del generalísimo Cadoma:
Sbrumitea no ha sido ocupada por la« is-opaa
«Apoyadas por intenso y eficaz fuego de ar- francesas, las cuales han recibido ottle.n. 0*
dificaoión d«l Gabinete inglés<—Fracase alemán
anto Dunaburgo.—La situación •» Ms Balka* tillería, nuestras tropas entablaron ayer accio- no pasar de la frontera serbia, lies ofensivas en varios puntos a lo largo de
ñas.
Todo el litoral búlgaro del Egeo ha sido
I la frontera del Tirol y Trentlno y obtuvieron evacuado por la población y autoridades ciParís 20 (10,35 mañana)
El corresponsal de Le Journal en Madrid I señalados éxitos.
viles.
dice que de la solución de la crisis española, I En el valle de Langarina íué ocupado Bren- , La protección de comunicaciones por la via
'
tónico
y
Chateat,
por
delante
de
la
carretera
virbualmente planteada, depende Ja contiférrea de Uskub está desde luego asegurada.
nuación de la propaganda germanóftla des- I de Morí.
Bulgaria concentra con urgencia tropas eu
En
el
alto
de
Cordevole
nuestras
tropas
se
enfrenadla que se viene realizando y la reDunbrudja,
en vista de que el Gobierno rupresión del espionaje alemán en Francia, apoderaron (al noreste de Sksso di Mezzodi)
cuya dirección no se encuenti-a én Barcelo- do una importante altura, cota 3.249 y con- mano se inclina cada vez más hacia la Cnána, como ciertos periódicos han dicho, sino trafuerte que desciende por la vertiente dere- drople; los búlgaros han encontrado igtialcha del torrente entre Sorarnaz y Omella.
mente tres divisiones en la frontera griega'.
en..San Sebastián.
En ]» orilla opuesta fueron ocupados tam- !
Manifiesto del, zarflntra los búlgaros
El acceso al Poier de los liberales con el bien ios contrafuertes que desde la garganta
París 20 (2,10 tardo)
conde de Romanones pondría freno a las ges- de Dil6ma descienden-a Livin&
Telegrafían de Petrográdo que el sar Im
tiones de numerosos agentes alemanes, que
En la zona de Falzarego se completó la con- dirigido un inaniflesto al pueblo ruso rto
cada día adquieren una extensión más peli- quista de Sasso di Stria corónalüto la cúspi- nunciándolo
la traición realizada por Butgft- ..'
grosa. El corresponsal cree que e.sta perspec- •de, a 2.477 metros de altura.
ría, la cual, a pesar de la anexión de |a Ht^- ''^
tiva impulsa a la corona a llamar a los libeEn Camia siguen muy áctíVa» operaciones cedonia, asegurada por los aliados, se ha c ^ ¿í
rales; pero los elementos moderaidos temen para desalojar al enemigo de lea bosques de locado abiertamente al lado del enemigo 4 # ' . '
que el Gabinete Romanones. adopte una neu- la cabeza del torrente de Chiafzo.
l a t e cristiana, del asiavisnw y de AU^IB,, r,
Desde París
En Kalia
...
^ú^^
-í3
Descargar