5878-II.Primeras 8/2/00 10:12 Página III IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI LA ACUICULTURA: Biología, regulación, fomento, nuevas tendencias y estrategia comercial TOMO II ECONOMÍA Y GESTIÓN DE LA ACUICULTURA 5878-II.Primeras 8/2/00 10:12 Página V IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Dirección ELISA POLANCO Coordinación JOSÉ FERNÁNDEZ POLANCO SANTOS M. RUESGA LA ACUICULTURA: Biología, regulación, fomento, nuevas tendencias y estrategia comercial TOMO II ECONOMÍA Y GESTIÓN DE LA ACUICULTURA FUNDACIÓN ALFONSO MARTÍN ESCUDERO Avda. de Brasil, 30. 28020 Madrid www.fundame.org 2000 5878-II.Primeras 8/2/00 10:12 Página VI IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Producido y distribuido por: Grupo Mundi-Prensa • Mundi-Prensa Libros, s. a. Castelló, 37 - 28001 Madrid Tel. 914 36 37 00 - Fax 915 75 39 98 E-mail: [email protected] Internet: www.mundiprensa.com • Mundi-Prensa Barcelona • Editorial Aedos, s. a. Consell de Cent, 391 - 08009 Barcelona Tel. 934 88 34 92 - Fax 934 87 76 59 E-mail: [email protected] • Mundi-Prensa México, s. a. de C. V. Río Pánuco, 141 - Col. Cuauhtémoc 06500 México, D. F. Tel. (+52)-5-25-533 56 58 - Fax (+52)-5-25 514 67 99 E-mail: [email protected] Esta publicación es el resultado de una costosa investigación patrocinada por la Fundación Alfonso Martín Escudero ideada con el propósito de obtener un análisis desde el punto de vista científico y económico que permitiera conocer la situación del sector de la acuicultura, así como sus perspectivas, con el objetivo de contribuir al impulso de una actividad en continuo desarrollo. © 1999, Fundación Alfonso Martín Escudero Depósito Legal: M. 3.187-2000 ISBN: 84-7114-868-8 (Tomo II) No se permite la reproducción total o parcial de este libro ni el almacenamiento en un sistema informático, ni la transmisión de cualquier forma o cualquier medio, electrónico, mecánico o fotocopia, registro u otros medios sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. IMPRESO EN ESPAÑA - PRINTED IN SPAIN Imprime: Artes Gráficas Cuesta, S. A. Seseña, 13. 28024 Madrid 5878-II.Primeras 8/2/00 10:12 Página VII IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI A Claudio, que sin estar, siempre formó parte de este equipo. Con el cariño de todos. 5878-II.Primeras 8/2/00 10:12 Página VIII IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Autores: Arturo Cobo David González López Víctor Iglesias Argüelles Fernando Ledesma Ladislado Luna Sotorrio Francisco Javier Martínez Antonio Martín Hernández José Fernández Polanco Santos M. Ruesga Francisco Somohano Juan Antonio Trespalacios Gutiérrez Colaboradores: Silvia Aparicio Cristina Egusquiza Adolfo Fernández Fernández Alejandro Ruiz Julimar da Silva Bichara José Ramón Sánchez Robledo 5878-II.Introducción 17/2/00 07:22 Página IX IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Introducción Como reconoce la declaración final de la cumbre de países celebrada en 1997 en Kyoto, la pesca y la acuicultura desempeñan un papel fundamental en el suministro adecuado de alimentos, tanto a través de la oferta de pescado como produciendo bienestar económico y social. Además, reconoce la capacidad de la acuicultura como el sector con mayor potencial de crecimiento entre los sectores productores de alimentos y, supone la más importante alternativa para mantener la proporción de pescado en la dieta mundial, debido especialmente a la degradación del medio ambiente y a la sobrepesca. Tal declaración enfatiza no solo la necesidad, a escala mundial de potenciar la producción acuícola, como alternativa de producción alimentaria, particularmente de productos que son una fuente básica de proteínas, y cuyo escenario de producción/ reproducción natural está sujeta a fuerte tensión derivadas de la sobreexplotación y la contaminación. Bajo este punto de vista, la acuicultura constituye un factor básico de desarrollo para los países más atrasados, que pueden encontrar en su impulso una fuente básica de productos alimenticios, pero al mismo tiempo de valor añadido, empleo e innovación tecnológica. La extensión de la actividad acuícola hacia los países en desarrollo es una necesidad urgente, que debería suponer en los próximos años uno de los capítulos más destacados de la cooperación internacional. Bajo esta perspectiva resulta de sumo interés el conocimiento detallado de la dinámica productiva de esta actividad, desde sus fundamentos biológicos hasta sus condicionantes de desarrollo tecnológico, pasando por lo que es esencial para su viabilidad económica: las características singulares de la empresa acuícola, como unidad básica para potenciar esta opción estratégica de desarrollo en los países emergentes. Y, sin duda, que más allá de la consideración de esta industria como factor potencial de desarrollo, constituye también un sector clave en determinados países con mayor nivel de desarrollo que por la conjunción de diferentes factores socieconómicos y culturales (posición geográfica, hábitos alimenticios, etc.) mantienen una fuerte tradición de producción y consumo piscícolas, cual es el caso español. A todos estos retos pretende responder, desde el ámbito de la investigación académica, este trabajo. Así, tras la revisión que se realiza en la primera parte del trabajo de los principales vectores biológicos que configuran el escenario natural y tecnológico para el desarrollo de la industria acuícola, en esta segunda parte se profundiza sobre los aspectos económico-empresariales de la misma. Para ello, en el primer capítulo se lleva a cabo un detallado análisis de la situación de la acuicultura en el mundo, especificando por áreas económicas e investiIX 5878-II.Introducción 17/2/00 07:22 Página X IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI gando sobre el comercio internacional de la producción piscícola. Con ello se obtiene una visión agregada de las condiciones económicas del sector que sirven de contexto general al análisis económico-empresarial que sobre el caso español se realiza en los capítulos ulteriores. El segundo capítulo incorpora el estudio de la producción y el comercio exterior piscícolas de España, especificando hasta donde la información estadística lo permite, para el subsector acuícola. Este análisis inicial da pie a la elaboración, en la segunda parte del mismo capítulo, de un modelo de proyección para la predicción de la demanda de pescado en España, con el fin de establecer algunas consideraciones en distintos escenarios alternativos sobre las tendencias que se apuntan para este sector productivo en nuestro país. Con el capítulo tercero de este tomo se inicia una exhaustiva investigación de la empresa acuícola y sus características básicas, desde las condiciones de viabilidad de la misma hasta el detalle de sus diferentes áreas económico-funcionales. El análisis de la problemática económica de las empresas acuícolas comienza con el estudio de viabilidad que requiere el proyecto encaminado a la creación de una empresa que explote comercialmente una especie. La viabilidad se estructura en cuatro etapas, viabilidad biológica, comercial, técnica y financiera, en las que se agrupa y ordena de forma sistemática toda la información que posee el promotor del proyecto. El estudio de viabilidad comienza cuando se desarrolla la tecnología que permite la reproducción y alimentación de una especie en entornos controlados. Una vez lograda la viabilidad biológica se procede a ajustar la producción hasta lograr unos costes que puedan dar lugar a la explotación comercial de la especie. Este proceso se estructura atendiendo primero a la previsión de la respuesta del mercado, viabilidad comercial, a la estimación de las inversiones y los costes, viabilidad técnica, y, por último, a la financiación y puesta en marcha del proyecto, viabilidad financiera. Ahora bien, ya hablemos de viabilidad comercial o financiera, la decisión debe apoyarse en información y una vez puesto en marcha el proyecto resulta imprescindible un Sistema de Información Contable (SIC) que asuma las exigencias de los usuarios externos e internos. El capítulo cuarto recoge el diseño de dicho sistema, la finalidad de nuestro estudio consiste en establecer las líneas maestras del Sistema de Información Contable de las empresas del sector acuícola. A estos efectos, y en este primer capítulo, analizaremos y presentaremos los elementos base de cualquier SIC como parte de un sistema de información para la dirección, y de forma particular el subsistema identificado como la Contabilidad Financiera, productor de documentos contables de síntesis para usuarios múltiples, reflejados esencialmente en las Cuentas Anuales (en adelante CA). Para nuestro propósito seguiremos, en cierta medida, el análisis de los distintos elementos que configuran lo que podría ser una adaptación del Plan General de Contabilidad (en adelante PGC) a las empresas del sector, señalando desde los prinX 5878-II.Introducción 17/2/00 07:22 Página XI IINNIICCIIOO IINNIIntroducción ICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI cipios contables, el plan de cuentas y el proceso contable hasta llegar a la configuración de los modelos de CA. Por lo que hace referencia al subsistema de Contabilidad de Gestión, al que haremos alguna breve mención, es nuestra intención desarrollarlo en la medida de lo posible en una segunda etapa del trabajo. De hecho, la información relativa a la estructura de costes presente en las explotaciones acuícolas es básica para comprender la evolución del sector, su situación actual, así como la definición de estrategias futuras, temas todos ellos recogidos en el conjunto de la obra multidisciplinar a la que pertenece este capítulo. En lo tocante a la comercialización de los productos de la acuicultura, se ha desarrollado una revisión del sistema de marketing de este tipo de empresas, estructurado en función de las variables que definen la estrategia comercial. En esta parte de la obra se describen los elementos básicos del marketing en una empresa, para que puedan servir de base en el planteamiento de una gestión orientada al mercado. En cada uno de los apartados en que se divide el capítulo se presentan ejemplos y aplicaciones al campo de la acuicultura, contemplando esta actividad dentro de un mercado más amplio, el de productos pesqueros, donde compite directamente con la oferta de los desembarcos de capturas. La aplicación de técnicas como la segmentación, diferenciación y la investigación de mercados se presentan e ilustran como, junto con otros, instrumentos que permiten mejorar la posición en el mercado de la pesca de los productos de la acuicultura. Por último, en el capítulo dedicado a la gestión de los recursos humanos, se persigue ofrecer, a modo de manual o guía, al actual o futuro directivo de empresas acuícolas unos conocimientos para poder optimizar el trabajo realizado por las personas que componen la empresa, presentándole modelos de dirección de recursos humanos que incluyen varios campos de actividad, desde el estudio de los puestos de trabajo hasta el desarrollo y desvinculación de las personas en la empresa. Se pretende ofrecer, asimismo, al directivo de la empresa acuícola las ideas suficientes para que pueda convertir los miembros de su empresa en un factor claramente diferenciador y relevante para la buena marcha de la misma. Otra de las pretensiones de este trabajo es que pueda servir de utilidad al directivo para poder reflexionar sobre cómo se están haciendo las cosas respecto al personal en su propia empresa, cómo se están desarrollando en las empresas que conoce y qué actuaciones y cómo se podrían implantar. Quizás pueda encontrar en él una nueva forma de ver las cosas, reorientar las que se están llevando a cabo en su empresa e incluso reafirmarse en sus propios procedimientos o formas de ver las cosas. Tampoco se trata de buscar en estas páginas varitas mágicas que solucionen conflictos en las empresas de acuicultura; los departamentos de recursos humanos son departamentos de servicios que sirven al resto en las necesidades que éstos tengan de personal y la diferencia en el trabajo diario en estos departamentos no es tan grande como lo pueden ser en otros, como por ejemplo en los departamentos productivos; con lo cual no sería aconsejable que cada persona intente encontrar su propia XI 5878-II.Introducción 17/2/00 07:22 Página XII IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI empresa en este documento, pero sí una guía para que, de forma flexible, pueda adaptar lo que le resulte interesante a las especifidades de su empresa. Y, antes de extraer las principales conclusiones de esta parte del trabajo, en el capítulo séptimo se ha elaborado un detallado estudio del marco regulador que afecta a la industria acuícola, deteniéndose no sólo en el ámbito legislativo, sino también realizando una revisión de la jurisprudencia que interpreta tales normas. XII 5878-II.Indice General 17/2/00 07:21 Página XIII (Negro plancha) IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Índice general Págs. Introducción ................................................................................................... IX 1. La acuicultura en el escenario económico mundial ............... 1 1.1. Introducción ...................................................................................... 1.2. La economía pesquera ....................................................................... 1.2.1. Cambios en la estructura de producción de alimentos por regiones ..................................................................................... 1.2.2. La demanda de pescado ........................................................ 1.3. La producción acuícola mundial ....................................................... 1.3.1. La acuicultura en la producción mundial de alimentos ........ 1.3.2. Importancia de la acuicultura y evolución reciente .............. 1.3.3. Oferta acuícola ...................................................................... 1.4. Comercio internacional de productos de la pesca ............................. 1.4.1. El comercio de productos piscícolas dentro del comercio mundial de alimentos ............................................................. 1.4.2. Apertura comercial: producción de pescado y comercio exterior ...................................................................................... 1.4.3. Distribución geográfica del comercio internacional de pescado ....................................................................................... 1.4.4. Valor unitario de las transacciones internacionales de pescado ....................................................................................... 1.4.5. Principales productos pesqueros comercializados ................ 1 1 1 3 5 5 9 11 15 16 23 23 26 28 2. La economía acuícola en España .................................................. 37 2.1. La pesca en la producción de alimentos ............................................ 2.2. La producción acuícola española ...................................................... 2.2.1. Situación actual ..................................................................... 2.2.2. Evolución reciente ................................................................. 2.2.3. Principales productos ............................................................ 2.2.4. Relación entre la acuicultura y la producción total de pescado. Principales productos ...................................................... 2.3. Comercio exterior de productos pesqueros ....................................... 2.3.1. España en el comercio mundial de pescado .......................... 2.3.2. El comercio de productos piscícolas sobre el total de alimentos .. 2.3.3. Principales productos comercializados ................................. 37 39 39 40 42 50 50 50 55 58 XIII 5878-II.Indice General 17/2/00 07:21 Página XIV (Negro plancha) IINNIICCIIOO Índice general IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. 2.4. Modelo de predicción de la demanda de pescado en España ............ 2.4.1. Explicación del Modelo ......................................................... 2.4.2. Resultados .............................................................................. 2.4.3. Proyecciones .......................................................................... 2.4.4. Implicaciones en la acuicultura ............................................ 60 60 61 63 72 3. La viabilidad de la empresa acuícola .......................................... 77 3.1. Introducción: definición y estructura de un estudio de viabilidad .... 3.2. Viabilidad biológica de un proyecto acuícola ................................... 3.3. Viabilidad comercial ......................................................................... 3.3.1. Evolución de la oferta ............................................................ 3.3.2. Evolución de los precios ........................................................ 3.3.3. Estimación de los ingresos de una explotación acuícola ...... 3.4. Viabilidad técnica de una empresa acuícola ...................................... 3.4.1. El papel de la producción en un proyecto acuícola .............. 3.4.2. Cuantificación de la viabilidad técnica: el presupuesto de capital y la estimación de costes ............................................... 3.5. Viabilidad financiera de una empresa acuícola ................................. 3.5.1. La estructura y evolución de las principales magnitudes económicas de las empresas acuícolas ....................................... 3.5.2. La financiación de un proyecto acuícola ............................... 3.6. Constitución y legalización de empresas acuícolas .......................... 77 81 84 86 90 95 102 102 107 111 112 118 123 4. El sistema de información contable en las empresas del sector acuícola ................................................................................................... 125 4.1. Introducción. Objetivos del capítulo y metodología ......................... 4.2. El sistema de información contable (SIC) ........................................ 4.2.1. Contabilidad financiera y contabilidad de gestión ............... 4.2.2. Verificación y consolidación contables ................................. 4.2.3. Análisis y comprensión de la información contable .............. 4.3. El sector acuícola desde la perspectiva contable. Segmentación de la información contable ......................................................................... 4.4. Contabilidad financiera en empresas del sector acuícola .................. 4.4.1. Principios contables .............................................................. 4.4.2. El plan de cuentas .................................................................. 4.5. Las cuentas anuales ........................................................................... 4.5.1. Formulación de las cuentas anuales: normas y modelos ...... 4.5.2. Auditoría de las cuentas anuales ........................................... 4.5.3. Cuentas anuales consolidadas ............................................... 4.5.4. Aprobación de las cuentas anuales ....................................... 4.5.5. Depósito y publicidad de las cuentas anuales ....................... XIV 125 125 127 129 129 130 132 133 135 154 154 167 167 168 168 5878-II.Indice General 17/2/00 07:21 Página XV (Negro plancha) IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Índice general BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. 4.6. Contabilidad de gestión en empresas del sector acuícola ................. 4.6.1. El control de costes en la empresa acuícola .......................... 4.6.2. Contabilidad de Costes en empresas de cría del sector acuícola .. 4.6.3. Contabilidad de Costes en empresas de engorde del sector acuícola ................................................................................. 4.6.4. Modelos de costes parciales o direct costing ........................... 169 169 170 173 177 5. Estrategias de mercado para las empresas acuícolas ........... 179 5.1. El marketing y la producción de recursos pesqueros ........................ 5.1.1. Introducción ........................................................................... 5.1.2. El Sistema de Marketing y el Entorno ................................... 5.1.3. Tipos de Mercados y Comportamiento del Consumidor ....... 5.1.4. Segmentación del Mercado .................................................... 5.1.5. Elección de la estrategia comercial ...................................... 5.1.6. Investigación de Mercados .................................................... 5.2. Decisiones sobre el producto acuícola .............................................. 5.2.1. Introducción ........................................................................... 5.2.2. El concepto de producto acuícola ......................................... 5.2.3. Diferenciación y posicionamiento de los productos acuícolas .......................................................................................... 5.2.4. Identificación de los productos acuícolas ............................. 5.2.5. Ciclo de vida del producto ..................................................... 5.2.6. Desarrollo de nuevos productos ............................................ 5.3. Decisiones sobre precios en acuicultura ........................................... 5.3.1. El precio y su papel en el proceso de decisión de compra ..... 5.3.2. El precio como variable de decisión comercial ..................... 5.3.3. Métodos de fijación de precios .............................................. 5.3.4. Fijación de precios con información imperfecta ................... 5.3.5. Reacción a precios cambiantes ............................................. 5.4. Decisiones de distribución en acuicultura ......................................... 5.4.1. El canal de distribución en la industria pesquera ................. 5.4.2. Distribución física ................................................................. 5.5. La comunicación comercial en el mercado acuícola ......................... 5.5.1. Instrumentos de comunicación comercial en la acuicultura . 5.5.2. La publicidad en la industria acuícola .................................. 5.5.3. Aplicaciones publicitarias en la industria pesquera española ........................................................................................ 5.5.4. La venta personal .................................................................. 5.6. El plan de marketing ......................................................................... 179 179 181 186 191 193 196 199 199 200 202 207 210 214 217 217 218 219 223 225 227 227 233 235 235 238 239 241 243 XV 5878-II.Indice General 17/2/00 07:21 Página XVI (Negro plancha) IINNIICCIIOO Índice general IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. 6. La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas ............................................................................................................. 245 6.1. Importancia de la Dirección de Personal en las empresas acuícolas 6.2. Estructura de puestos en las empresas acuícolas ............................... 6.2.1. Organización del personal en una empresa acuícola ............ 6.2.2. Análisis de Puestos de Trabajo .............................................. 6.3. Incorporación de personal ................................................................. 6.3.1. Política de incorporación del personal: modelos de contratación ..................................................................................... 6.4. Desarrollo del personal en las empresas acuícolas ........................... 6.4.1. Política retributiva en las empresas acuícolas ...................... 6.4.2. Evaluación del desempeño en empresas acuícolas ............... 6.4.3. Plan de carreras profesionales en empresas acuícolas ......... 6.4.4. Política formativa en las empresas acuícolas ....................... 245 250 250 257 262 262 271 271 284 287 291 7. Legislación sobre el sector acuícola ............................................ 299 La acuicultura: crónica legislativa y jurisprudencial ................................ I. Ámbito de esta crónica .................................................................... II. Concepto de acuicultura ................................................................. III. Los artículos 148.1.11 y 149.1.19 CE ............................................. IV. La Ley 23/1984, de 25 de junio, de Cultivos Marinos ..................... V. Exposición del contenido de la LCM ............................................... VI. Los Títulos III a VI de la LCM ........................................................ VII. La jurisprudencia del TS sobre responsabilidad de las Administraciones Públicas competentes por lesiones económicas causadas a titulares de explotaciones de acuicultura ........................................ VIII. La Legislación de las CC.AA. sobre acuicultura ............................ IX. Normativa legal aplicable en el territorio de las CC.AA. que no hayan ejercido su potestad legislativa en el ámbito de la acuicultura .. X. La acuicultura y medio ambiente .................................................... XI. Coordinación y cooperación entre las diferentes Administraciones Públicas ........................................................................................... XII. El Código Penal de 23 de noviembre de 1995 ................................. XIII. Fomento de la Acuicultura .............................................................. 299 299 299 300 303 306 313 318 320 329 329 335 336 336 8. Conclusiones ........................................................................................ 343 8.1. El futuro de la acuicultura ................................................................. 343 8.1.1. Algunas consideraciones sobre la acuicultura como instrumento de desarrollo económico ............................................. 343 XVI 5878-II.Indice General 17/2/00 07:21 Página XVII (Negro plancha) IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Índice general BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. 8.1.2. Algunas conclusiones sobre la situación actual y evolución reciente de la pesca y acuicultura ............................................ 8.1.3. Comercio internacional de pescado ....................................... 8.1.4. Tendencias y perspectivas de la producción acuícola ........... 8.2. Viabilidad de la empresa acuícola ..................................................... 8.3. El tratamiento de la información en las empresas de acuicultura ..... 8.4. La estrategia comercial en el sector acuícola..................................... 343 345 346 351 352 352 9. Anexos .................................................................................................... 354 9.1. Anexo A: Resultado de la estimación de la demanda de pescado .... 355 9.2. Anexo B: Ejemplo de manual de valoración de puestos de trabajo ... 360 9.3. Anexo C: Ejemplos de cuestionarios de evaluación del desempeño ... 366 10. Bibliografía ........................................................................................... 371 XVII 5878-II.Indice Figuras 17/2/00 07:21 Página XIX IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Índice de figuras Págs. Figura 1. Producción total de pescado (ton.) por regiones, 1984-1995 .......... Figura 2. Evolución de la participación porcentual de la producción acuícola en la producción mundial de pescado, 1984-1995 ...................... Figura 3. Evolución de la producción acuícola mundial (ton.), por regiones, 1984-1995 ........................................................................................ Figura 4. Distribución porcentual de la producción acuícola mundial por regiones, 1984 y 1995 ........................................................................ Figura 5. Principales grupos, España y China: Evolución del índice de comercio de pescado (ton.), 1984-1995 .................................................... Figura 6. Principales grupos, España y China: Evolución del índice de comercio de pescado (US$), 1984-1995 ................................................... Figura 7. Evolución por regiones de la relación porcentual entre el comercio de pescado y de alimentos, 1984-1995 ............................................ Figura 8. Evolución por regiones del índice de importación de pescado (ton.), 1984-1995 ....................................................................................... Figura 9. Evolución por regiones del índice de importación de pescado (US$), 1984-1995 ....................................................................................... Figura 10. Evolución por regiones de la relación porcentual entre la importación de pescado y de alimentos, 1984-1995 .................................... Figura 11. Evolución por regiones del índice de exportación de pescado (ton.), 1984-1995 ........................................................................................ Figura 12. Evolución por regiones del índice de exportación de pescado (US$), 1984-1995 ....................................................................................... Figura 13. Evolución por regiones de la relación porcentual entre la exportación de pescado y de alimentos, 1984-1995 .................................... Figura 14. Evolución por regiones de la relación porcentual entre el volumen total de comercio y la producción de pescado, 1984-1995 ............. Figura 15. Distribución porcentual del comercio mundial de pescado primario, por regiones, 1995 ........................................................................... Figura 16. Evolución por regiones de la distribución porcentual del comercio de pescado (ton.), 1984-1995 .......................................................... Figura 17. Evolución por regiones de la distribución porcentual del comercio de pescado (US$), 1984-1995 ......................................................... Figura 18. Evolución por regiones del valor unitario del comercio total medio (X+M/2) de pescado (1.000 US$/ton.), 1984-1995 ........................ Figura 19. Evolución por regiones del valor unitario de las importaciones de pescado (1.000 US$/ton.), 1984-1995 .................................................. 6 9 10 12 16 17 18 19 19 20 21 21 22 23 24 25 26 27 27 XIX 5878-II.Indice Figuras 17/2/00 07:21 Página XX IINNIICCIIOO Índice de figuras IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. Figura 20. Evolución por regiones del valor unitario medio de las exportaciones de pescado (1.000 US$/ton.), 1984-1995 .................................. Figura 21. Evolución de la distribución del comercio mundial de pescado y de crustáceo y moluscos, 1980-1995 ................................................... Figura 22. Evolución de la distribución del comercio de pescado y de crustáceo y moluscos de la Unión Europea, 1980-1995 ........................... Figura 23. Evolución de la distribución del comercio de pescado y de crustáceo y moluscos de América del Norte, 1980-1995 ......................... Figura 24. Evolución de la distribución del comercio de pescado y de crustáceo y moluscos de Asia, 1980-1995 ................................................ Figura 25. España: Evolución de la distribución porcentual de la producción de alimentos, 1984-1995 ...................................................................... Figura 26. España: Participación porcentual de la industria pesquera en la producción de alimentos, 1984-1995 .................................................... Figura 27. España: Evolución de la participación porcentual en el total de la producción acuícola de la UE y del mundo, 1984-1995 ................. Figura 28. España: Evolución del índice de producción acuícola y tendencia, 1983-1995 ....................................................................................... Figura 29. España: Evolución de la producción acuícola, del mejillón y de los demás cultivos, 1984-1995 .............................................................. Figura 30. España: Evolución de la producción de la acuicultura marina: peces, crustáceo, y moluscos (ton.), 1985-1995 ................................. Figura 31. España: Evolución de la producción de la acuicultura continental y de la trucha (ton.), 1984-1995 ......................................................... Figura 32. España, Italia, Grecia y Francia: Evolución del precio medio de la tonelada de dorada, en dólares, 1984-1995 ..................................... Figura 33. Participación porcentual del volumen total del comercio de pescado de España sobre el total del comercio mundial y de la UE, 19851990-1995 ....................................................................................... Figura 34. España: Evolución de la participación porcentual en el comercio mundial de pescado (en volumen, ton.), 1984-1995 .............................. Figura 35. Participación porcentual de España en el valor total del comercio de pescado en el mundo y en la UE (US $ 1.000), 1985-1990-1995 ... Figura 36. España: Evolución de la participación porcentual en el valor del comercio mundial de pescado (en US$), 1984-1995 .......................... Figura 37. España: Participación porcentual en el volumen (ton.) y valor (US $) de las exportaciones e importaciones mundiales de pescado, 1984-1995 ................................................................................. Figura 38. España: Participación porcentual en el volumen (ton.) y valor (US $) de las exportaciones e importaciones de la UE de pescado, 19841995 ................................................................................................. XX 28 31 32 33 34 37 38 39 40 41 43 45 49 51 52 53 53 54 55 5878-II.Indice Figuras 17/2/00 07:21 Página XXI IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Índice de figuras BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. Figura 39. Evolución de la tasa de penetración de las importaciones, por regiones, 1984-1995 ................................................................................ Figura 40. España: Evolución de la distribución del comercio mundial de pescado y de crustáceo y molusco 1980-1995 ...................................... Figura 41. España: demanda futura de pescado (1997-2005): Tendencia actual .. Figura 42. España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de crisis ................................................................................................ Figura 43. España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de Crecimiento ..................................................................................... Figura 44. España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de agotamiento de los caladeros y crisis económica .................................. Figura 45. España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de agotamiento de los caladeros y crecimiento económico ....................... Figura 46. España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de agotamiento de los caladeros y tendencia actual .................................. Figura 47. Esquema del proceso a seguir para estudiar la viabilidad de un proyecto para crear una empresa acuícola ............................................ Figura 48. Representación gráfica de la evolución de las ventas de una empresa acuícola ....................................................................................... Figura 49. Representación gráfica de la evolución de las ventas en la fase de introducción de una empresa acuícola con demanda absolutamente elástica ............................................................................................. Figura 50. Representación gráfica de la evolución de las ventas en la fase de introducción de una empresa acuícola con demanda elástica ......... Figura 51. Representación gráfica de la evolución de las ventas en la fase de introducción de una empresa acuícola con demanda inelástica ...... Figura 52. El sistema productivo de la empresa acuícola ................................. Figura 53. Modelo utilizado para el cálculo del margen y la rentabilidad económica ............................................................................................. Figura 54. Sistema de marketing para una empresa productora de pescado .... Figura 55. Entorno de marketing de una empresa productora de trucha .......... Figura 56. Proceso de decisión de compra ....................................................... Figura 57. Proceso de diferenciación ............................................................... Figura 58. Valoración de los atributos de un pescado ...................................... Figura 59. Mapa de posicionamiento del pescado de cultivo para los atributos sabor y consistencia de la carne ...................................................... Figura 60. Mapa de posicionamiento del pescado de cultivo para los atributos precio y tamaño ............................................................................... Figura 61. Logotipo del certificado de Salmón de Calidad de la Bahía de Fundy .. Figura 62. Logotipo identificativo de una Trucha Escocesa de Calidad .......... Figura 63. Ciclo de vida del Producto .............................................................. 58 59 64 65 67 68 69 71 79 99 100 101 101 104 113 182 182 189 202 203 205 206 208 209 211 XXI 5878-II.Indice Figuras 17/2/00 07:21 Página XXII IINNIICCIIOO Índice de figuras IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. Figura 64. Equilibrio entre oferta y demanda ................................................... Figura 65. Equilibrio bajo condiciones de cuota de captura ............................. Figura 66. Desplazamiento de la curva de demanda por efecto de la promoción .................................................................................................. Figura 67. Desplazamiento de la curva de demanda por efecto de publicidad negativa ............................................................................................... Figura 68. Flujos en el canal de distribución .................................................... Figura 69. Canal de distribución en la pesca de captura .................................. Figura 70. Canal de distribución de los productos acuícolas ........................... Figura 71. Portada del folleto promocional de los productores canarios de dorada y lubina .................................................................................... Figura 72. Anuncio de la campaña publicitaria del bonito del norte ................ Figura 73. Anuncio de la campaña publicitaria del salmón noruego ............... Figura 74. Folleto de la campaña de APROMAR para la mejora de la imagen del pescado de cultivo en los restaurantes ....................................... Figura 75. Anuncio de la campaña de APROMAR para la mejora de la imagen del pescado de cultivo entre los consumidores ............................... Figura 76. Actuaciones concretas en materia de Dirección de Recursos Humanos que se van a analizar en este trabajo ......................................... Figura 77. Modelo de organigrama de una empresa acuícola de producción de semillas y alevines ........................................................................... Figura 78. Modelo de organigrama de una empresa acuícola de engorde de peces ................................................................................................ Figura 79. Opciones de incorporación de personas a la empresa ..................... Figura 80. La empresa flexible ......................................................................... Figura 81. La empresa acuícola flexible de semillas y alevines ..................... Figura 82. La empresa acuícola flexible de engorde de peces ......................... Figura 83. Composición del salario total .......................................................... Figura 84. Rangos salariales por niveles profesionales .................................... Figura 85. Las flechas indican posibles alternativas de crecimiento profesional en las empresas de alevines y semillas ...................................... Figura 86. Las flechas indican posibles alternativas de crecimiento profesional en las empresas de engorde de peces .............................................. XXII 219 220 221 221 228 229 230 236 240 241 242 242 249 251 254 264 266 268 270 272 274 289 290 5878-II.Indice Tablas 17/2/00 07:22 Página XXIII IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Índice de tablas Págs. Tabla 1. Producción de alimentos por principales grupos. Total Mundial (ton.): 1984-1995 ......................................................................................... Tabla 2. Distribución porcentual de la producción de alimentos según principales grupos: 1984-1995 ................................................................... Tabla 3. Producción total de pescado por regiones (ton.), 1984-1995 ........... Tabla 4. Producción total acuícola por regiones (ton.), 1984-1995 ................ Tabla 5. Producción total acuícola por regiones (1000 US$), 1984-1995 ...... Tabla 6. España: Producción acuícola (ton) y tasa de variación (%), 1985 y 1995 .................................................................................................. Tabla 7. España: Evolución de la producción de los principales productos cultivados, toneladas, 1984-1995 .......................................................... Tabla 8. España: Principales especies cultivadas y sus competidores, 1995 .. Tabla 9. España: Participación porcentual de la producción acuícola de las principales especies en el total de la producción española de estos pescados, toneladas, 1984-1995 ............................................................. Tabla 10. Coeficientes estimados del primer modelo de predicción ................ Tabla 11. Coeficientes estimados del segundo modelo de predicción .............. Tabla 12. Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Tendencia actual .. Tabla 13. Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de crisis .. Tabla 14. Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de Crecimiento ............................................................................................ Tabla 15. Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de agotamiento de los caladeros y crisis económica ................................... Tabla 16. Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de agotamiento de los caladeros y crecimiento económico ........................ Tabla 17. Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de agotamiento de los caladeros y tendencia actual .................................... Tabla 18. Tasa de crecimiento porcentual de la producción acuícola en los escenario, 1996-2005 (demanda total y oferta acuícola en mil toneladas) .. Tabla 19. Participación porcentual de la producción acuicola en la demanda total y tasa de crecimiento, 1995-2005 ................................................ Tabla 20. Producción acuícola (mil toneladas) y tasa de crecimiento en cada escenario ............................................................................................... Tabla 21. Demanda total de pescado y producción acuícola (mil toneladas), aplicando las estimaciones de la FAO a escala munidal ......................... Tabla 22. Evolución de las cantidades comercializadas (en toneladas) de las distintas especies acuícolas en España en el período 1985-1996 .......... 2 5 7 13 14 42 46 47 51 62 62 64 65 67 69 70 71 73 74 74 75 88 XXIII 5878-II.Indice Tablas 17/2/00 07:22 Página XXIV IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Índice de tablas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. Tabla 23. Variaciones anuales en porcentaje de las cantidades comercializadas de las distintas especies acuícolas en España en el período 1985-1996 .. Tabla 24. Incremento de la cantidad producida de los distintos grupos de especies acuícolas ................................................................................. Tabla 25A. Precios por kilogramo en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996 A) Pesetas corrientes ...................................................................... Tabla 25B. Precios por kilogramo en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996 B) Pesetas constantes...................................................................... Tabla 25C. Precios por kilogramo en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996 C) IPC base 92 e índice corrector ................................................... Tabla 26. Variación de los precios en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1989-1996 ......................................................................................... Tabla 27. Variaciones en los precios de las especies acuícolas en el período 1988-1996 ......................................................................................... Tabla 28. Variación anual en % del valor de mercado de la producción acuícola en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) en España en el período 1989-1996 .............................................................. Tabla 29. Variaciones medias anuales del valor de mercado de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996 ......................................... Tabla 30. Tabla resumen para la elaboración del presupuesto de capital ......... Tabla 31. Modelo para la cuantificación de los costes fijos y variables ........... Tabla 32. Indicadores de la actividad económica de las empresas acuícolas ... Tabla 33. Indicadores de las expectativas de las empresas acuícolas ............... Tabla 34. Diferencias entre los indicadores de situación y de experiencia de las empresas acuícolas rentables y no rentables ..................................... Tabla 35. Balance de la empresa XXXX. Ejercicio cerrado el 31 de diciembre del año n............................................................................................. Tabla 36. Cuenta de pérdidas y ganancias de la sempresa XXXX. Ejercicio cerrado el 31 de diciembre del año n ..................................................... Tabla 37. Modelo de memoria de una sociedad ............................................... Tabla 38. Generación y distribución del valor añadido .................................... Tabla 39. Cuenta de pérdidas y ganancias analítica de la empresa XXXX. Ejercicio cerrado el 31 de diciembre del año n. (Valores expresados en...) Tabla 40. Clasificación de los factores de costes .............................................. XXIV 89 90 91 92 92 93 94 97 98 108 111 114 115 117 158 160 162 164 160 172 5878-II.Indice Tablas 17/2/00 07:22 Página XXV IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Índice de tablas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. Tabla 41. Tabla 42. Tabla 43. Tabla 44. Tabla 45. Tabla 46. Tabla 47. Tabla 48. Tabla 49. Tabla 50. Tabla 51. Tabla 52. Tabla 53. Tabla 54. Tabla 55. Tabla 56. Tabla 57. Tabla 58. Tabla 59. Tabla 60. Tabla 61. Tabla 62. Tabla 63. Tabla 64. Tabla 65. Tabla 66. Tabla 67. Tabla 68. Tabla 69. Tabla 70. Tabla 71. Reparto primario (hatchery) ............................................................. Cálculo del coste por línea de producción ........................................ Coste de la producción terminada en el período ............................... Márgenes y resultados ...................................................................... Clasificación de los factores de costes en nursery intermedio y nursery .................................................................................................... Reparto primario (nursery intermedio y nursery) ............................. Cálculo del coste por fase de engorde y Coste de la producción de engorde terminada en el período .......................................................... Coste de la producción vendida en el período .................................. Márgenes y resultados ...................................................................... Clasificación de los factores de costes según su variabilidad en nursery intermedio y nursery ................................................................. Márgenes y resultados ...................................................................... Características de los mercados industrial y de consumo inmediato .. Conceptos clave en el diseño de la estrategia comercial para la acuicultura ............................................................................................... Valoración de los atributos de un pescado ........................................ Creencias acerca de los atributos del pescado de cultivo frente al de captura ............................................................................................... Preferencias de los consumidores ante los distintivos de calidad ..... Puestos de trabajo y funciones en una estructura tipo para una empresa de semillas y alevines ................................................................... Puestos de trabajo y funciones en una estructura tipo para una empresa de engorde .................................................................................... Ventajas e inconvenientes del análisis de puestos de trabajo ............ Tipología de factores a considerar en el APT de una empresa acuícola .. Un ejemplo de análisis de puestos de trabajo (1) .............................. Un ejemplo de análisis de puestos de trabajo (2) .............................. Relación entre el tipo de puesto de trabajo y tipo de contrato .......... Evaluación de la plantilla de una empresa acuícola ......................... Análisis de retribuciones ................................................................... Asignación de la parte variable del salario ....................................... Asignación de incentivos salariales según rendimientos .................. Valoración de puestos de trabajo en una empresa de alevines y semillas ................................................................................................. Modelo retributivo para una empresa de alevines y semillas ........... Modelo de retribución variable para una empresa de alevines y semillas ................................................................................................. Coste salarial para una empresa de alevines y semillas .................... 172 173 173 174 175 175 176 176 177 177 178 187 195 203 205 210 251 255 258 259 261 263 267 274 275 276 277 278 279 279 280 XXV 5878-II.Indice Tablas 17/2/00 07:22 Página XXVI IINNIICCIIOO Índice de tablas IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Págs. Tabla 72. Coste salarial más cotizaciones salariales por contingencias comunes para una empresa de alevines y semillas .......................................... Tabla 73. Valoración de puestos de trabajo en una empresa de engorde .......... Tabla 74. Modelo retributivo para una empresa de engorde ............................ Tabla 75. Modelo de retribución variable para una empresa de engorde ......... Tabla 76. Coste salarial para una empresa de engorde ..................................... Tabla 77. Coste salarial más cotizaciones salariales por contingencias comunes para una empresa de engorde ............................................................ Tabla 78. Ejemplos de planes básicos de formación ......................................... XXVI 281 282 282 282 283 283 296 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 1 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 1. La acuicultura en el escenario económico mundial 1.1. Introducción La producción acuícola ha experimentado un significativo desarrollo en los últimos 15 años, incrementando su participación tanto en la producción total de pescado como en la producción total de alimentos a nivel mundial, llegando a duplicar su nivel entre 1984 y 1995, como se verá a continuación. Aunque en términos relativos la producción acuícola no llega a representar el 0,5% de la producción mundial de alimentos, significa el 23% de la producción total de pescado. Este último dato es especialmente importante ya que se inscribe en una tendencia al alza de la participación de la producción acuícola en la producción total de pescado, que en 1984 era del 11%. Estos datos revisten especial importancia si se tiene en cuenta que la oferta de pescado, tanto de agua dulce como de agua salada ha encontrado su techo, mientras que la demanda sigue una clara tendencia al alza. Esta limitación para aumentar la producción de pescado a través de capturas es resultado de la sobreexplotación, especialmente por parte de los países más industrializados, de los recursos acuáticos y de la degradación del medio ambiente. En este contexto de crecimiento de la demanda y de estancamiento de la oferta, la acuicultura asume un papel fundamental en la producción futura de pescado, especialmente porque significa formas de producción ordenadas y planificadas, que permiten un ajuste anticipado de la oferta sin casi oscilaciones aleatorias, y con pocos problemas ambientales. En principio, representa una fuente importante de formación de la oferta, poco explotada aún, incluso por los países desarrollados. Este capítulo pretende analizar el papel desempeñado hasta hoy por la acuicultura a nivel mundial y su potencial futuro, haciendo especial referencia a la Unión Europea, Asia y América del Norte. 1.2. La economía pesquera 1.2.1. Cambios en la estructura de producción de alimentos, por regiones La producción mundial de alimentos se divide fundamentalmente en producción agrícola, producción agropecuaria, que incluye la producción de carne, miel, leche y huevo, y producción de pescado, incluyendo ésta a su vez la producción acuícola. 1 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 2 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La producción de alimentos ha seguido creciendo desde 1984, pasando de 7.303 millones de toneladas a los 9.233 millones de 1995 (Tabla 1). A pesar de ello, la malnutrición y el hambre en el mundo continúan aumentando (ONU, 1997). En todas las regiones, la producción agrícola es la que tiene mayor peso en la producción de alimentos; sin embargo, entre 1984-1995 ha sufrido una pequeña disminución de su nivel de participación en favor del incremento de las participaciones tanto de la producción de pescado (incluso acuícola) como de la producción agropecuaria. Por áreas geográficas, la distribución de la producción de alimentos es como sigue: Asia es la zona que alcanza una mayor producción agrícola (2.905 millones de toneladas para 1995), y es también Asia la región que presenta un mayor porcentaje de producción de pescado, un 2,04% en 1995 frente al total de su producción de alimentos. La tendencia es igual a la de la media mundial, es decir, una disminución del nivel de participación de la producción agrícola en la producción de alimentos, y un consecuente aumento de la participación de la producción de pescado (incluso acuícola) y de la producción agropecuaria. La producción acuícola de Asia representó, en 1995, un 0,78% sobre el total de la producción de alimentos, aumentando progresivamente desde 1984 cuando dicho porcentaje se situaba en el 0,38%. La producción agrícola asiática en 1995 representaba un 90% del total de la producción de alimentos, porcentaje que ha disminuido desde 1984 cuando éste se situaba en un 92%. Así pues se puede concluir que ha aumentado la participación de la producción agropecuaria y de la producción de pescado en el total de la producción de alimentos entre 1984 y 1995 en esta región. Tabla 1 Producción de alimentos por principales grupos. Total mundial (ton), 1984-1995 Año Producción de pescado Producción acuícola Producción agropecuaria Producción agrícola Producción de alimentos 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 87.562.091 90.037.563 96.480.702 97.740.933 102.715.051 104.100.074 101.273.061 101.949.122 105.559.898 109.486.536 117.443.850 119.751.347 10.150.747 11.185.466 12.245.800 13.176.139 14.537.776 15.174.964 15.704.743 17.140.786 19.826.652 22.744.811 25.331.742 27.768.284 602.927.430 621.501.010 635.505.080 640.754.880 656.173.220 666.410.890 684.115.720 696.380.360 822.043.860 835.795.750 861.357.620 888.445.360 6.612.587.850 6.626.663.530 6.666.083.220 7.700.648.240 6.652.054.060 6.873.646.700 7.034.001.600 7.035.157.510 8.047.800.900 8.017.515.400 8.057.996.680 8.225.250.970 7.303.077.371 7.338.202.103 7.398.069.002 7.439.144.053 7.410.942.331 7.644.157.664 7.819.390.381 7.833.486.992 8.975.404.658 8.962.797.686 9.036.798.150 9.233.447.677 Fuente: FAO (1998). 2 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 3 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En la Unión Europea, la producción agrícola también representa la mayor parte de la producción total de alimentos, pero con un porcentaje inferior tanto a la media mundial como a China; en 1995, la producción agrícola representaba el 85,2 y apenas ha variado entre 1984-1995; sin embargo, la participación de la producción agropecuaria ha aumentado, del 13,8 al 14,2% en 1995, representando un mayor porcentaje que en la región asiática. En consecuencia, la participación de la producción de pescado disminuyó, pasando del 0,79 en 1984 al 0,66 en 1995, y la producción acuícola se mantuvo prácticamente constante (lo que indica un crecimiento de la participación de la producción acuícola en el total de la producción de pescado). La producción de pescado y la acuicultura siguen teniendo una participación ínfima dentro del total de alimentos europeo, sin llegar a superar el 1% en el primer caso o el 0,1% en el segundo. Además, en relación a los últimos 10 años, existe una tendencia a la baja de la participación de la producción de pescado y un comportamiento estacionario de la participación de la producción acuícola en el total de la producción de alimentos. En América del Norte, la producción de pescado es prácticamente la misma desde 1984, con continuos altibajos, aumentando en el período 1987-1991 para luego disminuir en el 92 y volver a aumentar en el 93 hasta 1995 donde volvió a decaer. En cambio, la producción acuícola de esta región ha seguido una progresión creciente desde 1984. Un dato representativo es que la producción total de alimentos desde 1984 hasta 1995 también ha sufrido constantes variaciones sin experimentar ninguna tendencia clara. En este sentido, no hubo alteraciones significativas en la participación de los distintos grupos en la demanda total de alimentos. 1.2.2. La demanda de pescado Según el informe SOFIA (1996) las perspectivas de la demanda mundial de pescado para consumo humano vienen determinadas por el crecimiento de la población, los cambios de ingreso per cápita y el ritmo de urbanización. Las estimaciones (por lo bajo) de la demanda de pescado para consumo alimentario en el 2010, a precios constantes de 1990, serían de 110-120 millones de toneladas en pescado vivo frente a los 75-80 millones de 1994/95. La harina de pescado es el principal producto derivado que se utiliza para fines no alimentarios Haciendo una estimación del consumo aparente para 1995 (producción total de pescado + importaciones – exportaciones), éste fue, a nivel mundial, de 119.281.449 toneladas de pescado; cerca de 43.000 millones de dólares. En relación a 1984, este nivel, en términos de toneladas, es un 40% superior, lo que indica una clara tendencia al alza, con un nivel medio de crecimiento del 2,8% al año. Por áreas geográficas, se apunta que la demanda de pescado en el continente asiático en 1995, medida a través de su consumo aparente, es de 65.448.157 toneladas, lo que suma 35.000 millones de dólares. Esta demanda se ha venido incrementando desde la década pasada, pasando de los 40 millones de toneladas en 1984 a los 3 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 4 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 65 millones de 1995, correspondiendo a un crecimiento del 63%, lo que equivale a un nivel medio de crecimiento del 4% al año, muy superior a la media mundial. Esto ayuda a explicar el incremento de la participación del sector de piscicultura asiático en el total mundial. El consumo de pescado, en esta zona, es bastante elevado. El suministro anual medio de pescado para consumo humano directo es de 21 kg per cápita (equivalente de peso en vivo) y el pescado representa una cuarta parte del total de la ingestión de proteínas animales (SOFIA, 1996). En general es preferido el pescado fresco aunque la demanda se compone también de productos elaborados. En cuanto a la demanda de pescado por parte de la Unión Europea, ésta se satisface principalmente por la pesca marina, por la pesca continental y por la acuicultura. La estimación del consumo aparente asciende en 1995 a 13.279.035 toneladas de pescado, volumen superior a su nivel de producción, lo que indica que se trata de un importador neto de pescado. En relación a 1984, este nivel de consumo es apenas un 9,5%, lo que indica un comportamiento prácticamente estacionario (nivel medio de crecimiento del 0,7% al año). Esto también ayuda a entender las causas del descenso del nivel de participación de la piscicultura europea en el total mundial. El consumo de pescado per cápita varía desde los niveles más elevados, donde se sitúan los países mediterráneos y nórdicos, con un consumo de 30 kg al año y los países sin salida al mar, con 10-15 kg al año (SOFIA,1996). Los países industrializados, demandan productos en conserva, ahumados y congelados, además de harina de pescado. Alrededor de estos productos se ha creado una gran industria, y los grandes vendedores participan activamente para introducir los nuevos productos en el mercado. Es de señalar la presión ejercida por los consumidores sobre la industria pesquera en defensa del medioambiente. Según el informe SOFIA, es bastante probable que la demanda de pescado aumente en un futuro debido fundamentalmente a: • La aceptación del pescado como alimento en la parte de Europa occidental. • La recuperación de los anteriores niveles de consumo en el Este. En América del Norte el incremento en el consumo aparente de pescado ha sido de elevada cuantía pasando de algo más de 5 millones y medio de toneladas en 1984 a 6 millones y medio en 1995. Sin embargo ha habido continuos altibajos sobrepasando los 7 millones de toneladas métricas en los años 1990, 1993 y 1994. Traduciéndolo a dólares americanos, el consumo aparente en 1995 fue de 1.139 millones, un gran aumento comparado con el valor alcanzado en 1984 de 469 millones de dólares. Esta diferencia tan grande se debe, fundamentalmente, al aumento en los precios reales del pescado en comparación con los productos cárnicos. El consumo medio de pescado para fines alimentarios es de 22-23 kg per cápita al año (equivalente en peso vivo) y se ha mantenido estable durante los últimos años (SOFIA, 1996). Además la tendencia es a un aumento en el consumo de pescado y productos pesqueros y un desplazamiento de la demanda de carne roja (el consumo de pescado en América el Norte pasó de 14,7 kg por persona en 1970 a casi 22 kg en los últimos 4 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 5 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI años de la década de los 80, manteniéndose estable desde entonces). Los productos pesqueros más populares son el atún, sobre todo en conserva, el camarón, colín, bacalao, salmón, almejas, cangrejos, etc. 1.3. La producción acuícola mundial 1.3.1. La acuicultura en la producción mundial de alimentos La acuicultura tiene aún una escasa presencia relativa dentro de la producción mundial de alimentos; en 1995, apenas representaba un 0,3% de la producción mundial de alimentos, incluyendo carne, pescado, leche, miel, y huevos. Sin embargo, entre 1984 y 1995 dicho porcentaje se incrementó en un 100% pasando de un 0,14 a un 0,3% (Tabla 2), evidenciando una clara tendencia al alza. A todo esto hay que añadir que la producción mundial de pescado tampoco ha tenido una gran relevancia en el contexto de la producción mundial de alimentos, pues en 1995 representaba apenas un 1,3%, aunque se ha incrementado ligeramente su participación desde 1984, cuando representaba el 1,2%, pasando por un máximo del 1,39% en 1988, aún a pesar de sufrir fuertes fluctuaciones. Dentro de la pesca, la acuicultura ha venido incrementando su aportación a la producción pesquera mundial y continúa siendo una de las actividades de producción de alimentos con mayor ritmo de crecimiento en todo el mundo aunque en términos absolutos todavía está muy por debajo de la producción agrícola y no representa ni el uno por ciento de la producción total de alimentos (Tablas 1 y 2). Tabla 2 Distribución porcentual de la producción de alimentos según principales grupos, 1984-1995 Año Producción de pescado Producción acuícola Producción agropecuaria Producción agrícola Producción de alimentos 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1,20 1,23 1,30 1,31 1,39 1,36 1,30 1,30 1,18 1,22 1,30 1,30 0,14 0,15 0,17 0,18 0,20 0,20 0,20 0,22 0,22 0,25 0,28 0,30 8,26 8,47 8,59 8,61 8,85 8,72 8,75 8,89 9,16 9,33 9,53 9,62 90,55 90,30 90,11 90,07 89,76 89,92 89,96 89,81 89,67 89,45 89,17 89,08 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 Fuente: FAO (1998). 5 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 6 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La producción de pescado incluye las capturas, tanto marinas como de aguas continentales (ríos, lagos, embalses), así como la producción acuícola. Así pues, se analizará a continuación la producción total de pescado, su importancia en el contexto mundial y a nivel de las diferentes regiones, así como una clasificación de la producción de las especies de mayor relevancia. Principalmente se analizarán las zonas de la Unión Europea, la zona Asiática y América del Norte, además de China por ser el país con mayor volumen de producción. España, aunque se menciona en algunos puntos de este epígrafe, se tratará con mayor detalle en el siguiente apartado; el resto de los países productores se agruparán bajo la rúbrica «otros». Concretamente, la producción mundial de pescado en 1995 alcanzó un volumen de 119.751.347 toneladas siendo Asia el mayor productor (65.805.047 toneladas), lo que equivale al 55% del total de la producción, y dentro de esa área, China era el mayor país productor (29.240.387 toneladas), respondiendo por el 44% de la producción de la zona, seguido de Japón y de la República de Corea. Como se puede observar en la figura 1, en el período estudiado, entre 19841995, la producción asiática de pescado presenta una clara tendencia al alza, lo que sin duda se trata de un resultado exclusivo de esta zona, ya que en las demás se observa un comportamiento estacionario. Además, el nivel de producción mundial sigue la misma tendencia que el de la zona asiática, lo que evidencia el elevado peso de la participación de la producción de esta zona sobre el total mundial. Por lo que respecta a la pesca en las aguas marinas de la región asiática, concretamente en el mar de China, las pesquerías son, en general, a pequeña escala, y entre las principales especies capturadas se encuentran el atún, caballa, camarón, Figura 1 Producción total de pescado (ton) por regiones, 1984-1995 70.000 60.000 España 50.000 U.E. 40.000 Asia 30.000 China A.Norte 20.000 10.000 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 6 93 94 95 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 7 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI sabalote, y moluscos y crustáceos de diferentes tipos. Todas las especies están sobreexplotadas y las capturas de las especies más valiosas han descendido recientemente (SOFIA, 1996). La producción de las pesquerías en aguas continentales de la región asiática están nuevamente dominadas por China. Sin embargo, la degradación del medio ambiente, así como la sobrepesca, han provocado una disminución de los rendimientos de las pesquerías de los ríos chinos, perdiéndose muchas especies comerciales de alto valor añadido. Por otra parte, se están consiguiendo mayores rendimientos explotando de manera intensiva los embalses y lagos mediante la repoblación y la fertilización. La producción de la Unión Europea (UE) en el contexto europeo representa en torno a un 60%. Concretamente la producción total de pescado de la Unión Europea en 1995 fue de 8.106.886 toneladas, la mayor producción desde 1984 y representaba apenas un 7% de la producción mundial (Tabla 3), siendo inferior a la de China y de América Latina. Como se observa en la figura 1, el nivel de producción de la UE ha sido prácticamente estacionario, creciendo apenas un 5% en el total del período estudiado. La producción de las aguas marinas de la subregión occidental europea está dominada por las capturas del Atlántico nororiental, y las principales especies capturadas son el arenque, el lazón, capelán, caballa, sardina, etc. La contaminación ha contribuido al deterioro ambiental en algunas zonas costeras del Atlántico norte y a la consecuente disminución de la producción de las especies de estas aguas. En el mar Báltico se pesca bacalao, arenque, espadín y salmón, aquí las poblaciones están amenazadas por las enfermedades y por la competencia de las poblaciones cultivadas. Tabla 3 Producción total de pescado por regiones (ton), 1984-1995 Año España UE Asia China A. Norte Mundo 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1.441.395 1.484.764 1.493.493 1.524.084 1.593.486 1.522.585 1.304.040 1.273.000 1.260.000 1.255.000 1.372.000 1.320.000 7.685.377 7.725.746 7.758.245 7.712.126 8.060.914 7.858.436 7.101.055 7.236.665 7.585.739 7.483.316 7.915.456 8.106.886 40.643.852 41.366.005 44.377.542 45.919.340 47.825.162 48.794.467 49.324.386 50.655.198 54.208.165 58.408.454 62.055.734 65.805.047 7.567.549 8.461.323 9.489.405 10.670.722 11.940.048 13.065.142 13.809.899 15.667.617 18.560.584 21.975.429 25.483.929 29.240.387 6.283.624 6.405.816 6.702.074 7.559.523 7.635.418 7.414.304 7.552.852 7.054.857 6.975.912 7.151.830 7.015.256 6.539.020 87.562.091 90.037.563 96.480.702 97.740.933 102.715.051 104.100.074 101.273.061 101.949.122 105.559.898 109.486.536 117.443.850 119.751.347 Fuente: FAO (1998). 7 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 8 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En el mediterráneo la mayor parte de las poblaciones demersales están sobreexplotadas. Muchas de estas poblaciones de peces de fondo se han explotado de forma intensiva en los últimos decenios, rebasando de esta manera los límites biológicos de seguridad y poniendo a algunas especies en peligro de extinción. En consecuencia, las flotas de la UE buscan posibilidades de acceso a otros países; para ello, han aumentado la asignación de fondos presupuestarios para los recursos de acceso (Fishing News International en SOFIA, 1996). Por ejemplo, Noruega realiza actividades de pesca al amparo de varios acuerdos bilaterales. Las pesquerías europeas se caracterizan por un exceso de capacidad; atendiendo a un estudio reciente de la UE, sería preciso reducir un 40% el total de la capacidad de la flota para nivelarla a los recursos pesqueros realmente disponibles (Grainger, 1996). Los países industrializados poseen una tecnología muy elevada en lo que se refiere a sus flotas, lo cual ha producido una sustitución parcial de buques con gran intensidad de mano de obra por embarcaciones con una mayor concentración de capital. La pesca en aguas continentales en la Unión Europea deriva de las pesquerías de subsistencia y con fines recreativos. Las capturas han disminuido en los últimos años. Estas pesquerías se ven inmersas continuamente en programas de ordenación como la repoblación de especies (trucha arcoiris) (SOFIA,1996), leyes contra la contaminación, y demás programas de rehabilitación. Los países industrializados europeos tienen actividades de elaboración tales como industrias conserveras, ahumado, congelación. También existe un sector dedicado a la producción de harina de pescado. Dentro de la Unión Europea, España es uno de los principales productores. En 1995, representó el 16% de la producción de la UE; sin embargo, desde 1984 el nivel de producción ha presentado una ligera tendencia a la baja, con el máximo nivel de producción alcanzado en 1988. Estas diferencias de comportamiento respecto a la UE, han supuesto un pérdida de participación relativa de nuestro país en la producción total de pescado de la UE desde 1984. La producción de América del Norte con 6.539.020 toneladas, en 1995 (Tabla 3), es inferior a la de las otras dos zonas geográficas consideradas, pero no obstante, de gran relevancia. Esta región aporta aproximadamente el 6% de las capturas mundiales. Como en la UE la producción de pescado de esta zona fue prácticamente estacionaria a lo largo de todo el período. En cuanto a la pesca marina de América del Norte, la producción ha sufrido fluctuaciones hasta 1990 (SOFIA, 1996), la razón principal es la sobrexplotación, tantas veces mencionada, de las principales poblaciones de pesca comerciales, donde las pesquerías están ahora cerradas o sujetas a restricciones, caso del bacalao en el Atlántico norte. Por otra parte el arenque y la caballa se encuentran en una situación más favorable, así como el cangrejo de las nieves, el camarón y la langosta. En el Pacífico norte, la especie más importante es el colín de Alaska, el bacalao del 8 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 9 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Pacífico, el arenque, la merluza del Pacífico, los túnidos y los salmones, la mayoría de cuyas poblaciones están sufriendo una explotación intensiva. Las flotas de América del Norte se caracterizan por su elevado nivel tecnológico, lo que les ocasiona problemas de exceso de capacidad. Con el objetivo de superar parte de estos problemas, se han emprendido programas regionales para reducir el esfuerzo de pesca basados en la retirada de licencias de pesca en las diferentes zonas. En las pesquerías continentales de América del Norte, se está desarrollando fundamentalmente la pesca deportiva en detrimento de la pesca comercial a pequeña escala. 1.3.2. Importancia de la acuicultura y evolución reciente Entre 1984 y 1995 el volumen de la producción acuícola mundial creció a un promedio anual del 8,7%, lo que, comparado con el 2,6% para el total de la producción de pescado, nos da una idea de la rapidez del crecimiento de este sector, en plena expansión. Esto significa que en el período de referencia, mientras que la producción acuícola creció 2,7 veces, la producción de pescado creció apenas 1,4 veces. Como se puede observar en la figura 2 y como resultado de esta tendencia al alza, la participación de la producción acuícola en la producción mundial de pescado también ha crecido de forma significativa, pasando de representar un 11% en 1984 a un 23% en 1995. En relación a la producción total de alimentos, este comportamiento también se hace evidente, pues la participación de la producción acuícola en el total de la producción mundial de alimentos se duplica en los 12 años estudiados. Figura 2 Evolución de la participación porcentual de la producción acuícola en la producción mundial de pescado, 1984-1995 24 22 20 18 16 14 12 10 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 9 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 10 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En 1995, la producción acuícola mundial, que fue valorada en 42,31 miles de millones de dólares, registró un récord de 27,76 millones de toneladas, lo que supuso un crecimiento del 9,64% respecto al año anterior. Además, como se observa en la figura 2, la producción acuícola mundial presenta una tendencia claramente alcista en los 12 años estudiados, tendencia marcada, fundamentalmente, por la evolución en China. El 17 de marzo de 1997, la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) anunció que se había vuelto a alcanzar un récord, en lo que se refiere a la producción acuícola, dado a conocer en el informe: «El Estado Mundial de la Pesca y la Acuicultura, 1996». En este informe se señalaba, además, que, para seguir satisfaciendo una continua y creciente demanda de pescado, se hace necesaria una mejor ordenación que evite una presión excesiva sobre los recursos marinos además de una mayor expansión de la acuicultura. Es decir, la acuicultura se erige como la mejor alternativa posible ante una situación de crecimiento de la demanda de pescado que se enfrenta a la saturación de la oferta de capturas, tras un período de sobreexplotación de los recursos naturales. En efecto, y como ponía de manifiesto el citado informe, entre 1984 y 1995, la producción acuícola mundial experimentó un significativo aumento, con un nivel de crecimiento mayor que el de la producción mundial de pescado. Este se debe, como se verá con más detalle a continuación en el análisis por regiones, tanto al mayor desarrollo de la acuicultura a través de una producción racional y ordenada, como a la sobrexplotación y degradación ambiental de los mares y ríos, como al exceso de capacidad y alta tecnología de las flotas pesqueras de los países desarrollados. Figura 3 Evolución de la producción acuícola mundial (ton), por regiones, 1984-1995 5.000 España U.E. Asia China A.Norte 0.000 5.000 0.000 5.000 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 10 94 95 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 11 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 1.3.3. Oferta acuícola A nivel mundial, el número de especies en cultivo continúa aumentando, así como el número de países con producción acuícola registrada. Además, cada vez más países cultivan crustáceos y ostras. El pescado, los moluscos y los crustáceos cultivados contribuyen en gran medida al total de la producción pesquera mundial, según la FAO. Cada país de cultivo está especializado en un número reducido de especies. Por ejemplo en la India y en China dominan las carpas, en Japón, Corea y Francia los mejillones y las ostras y así se podrían seguir enumerando cada una de las zonas que aparecen representadas en el siguiente cuadro: País China . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . India . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Japón . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Corea . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Francia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Indonesia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Filipinas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Estados Unidos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Especie cultivada Carpas Carpas Ostras y mejillones Ostras y mejillones Ostras y mejillones Sabalote Sabalote Langostino Jumbo y diversas carpas Fuente: Elaboración propia a partir del informe SOFIA, 1996. La acuicultura mundial ha estado dominada, tanto en términos de peso como de valor, por la producción de peces de escama de agua dulce, por ejemplo las cuatro carpas chinas (plateada, herbívora, común y nobilis) son las cuatro especies más cultivadas en China (en lo que a peso se refiere), representando la mitad del total de la producción de peces de escama (SOFIA, 1996). La producción acuícola mundial en 1995 ascendió a 27.768.284 toneladas, en un valor equivalente en dólares que se situó en torno a los 42.000 millones, frente a las 10.150.747 toneladas y 12.000 millones de dólares de 1984. Como se ha visto anteriormente, existe una tendencia clara a la alza, con un nivel medio de crecimiento del 8,7% al año desde 1984. Para las distintas áreas geográficas la situación es la siguiente: En Asia, el total de la producción acuícola ascendió, en 1995, a 25 millones de toneladas, con un volumen alrededor de 34.000 millones de dólares, lo cual la convierte en la mayor región productora de productos acuícolas. Este nivel de producción acuícola representa el 90% de la producción mundial y el 83% de su valor en dólares. Lo más significativo de estos datos es que la participación asiática en la producción acuícola mundial viene creciendo; se ha pasado del 83% de 1984 al 90% de 1995. Como se puede observar en la Tabla 4, tan sólo esta zona ha experimentado, consecutivamente, tasas de crecimiento de la producción positivas, lo que explica el nivel de crecimiento del total de la producción mundial. 11 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 12 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 4 Distribución porcentual de la producción acuícola mundial por regiones, 1984 y 1995 7,6 % 6% 3,3 % 83 % 3,3 % 4,6 % 1,7 % 90 % Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). China es el gran productor acuícola de este área, produciendo en 1995 17.599.087 toneladas. Por sí sola representa casi el 63% de la producción acuícola mundial; sin embargo, si lo traducimos a dólares, el valor disminuye hasta el 39%. Para tener una idea del nivel de importancia de la producción acuícola de esta zona en relación a la producción mundial basta notar que apenas la producción acuícola de China equivale, en toneladas, a 17 veces la producción de la UE. 12 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 13 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 4 Producción total acuícola por regiones (ton), 1984-1995 Año España UE Asia China A. Norte Mundo 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 247.426 266.608 268.449 270.724 271.403 223.520 205.066 226.646 171.828 128.021 182.390 138.260 776.241 857.101 869.875 900.214 910.149 905.796 934.099 926.171 915.659 925.051 1.027.187 1.020.871 8.437.015 9.347.799 10.267.603 11.070.856 12.357.249 12.875.766 13.315.557 14.765.660 17.419.689 20.314.071 22.728.216 25.033.012 3.826.026 4.504.312 5.068.125 5.705.204 6.658.686 7.293.728 7.518.171 8.676.262 10.762.682 13.277.699 15.377.499 17.599.087 334.173 332.371 382.889 397.046 378.791 399.098 352.058 407.280 458.120 468.567 444.659 479.580 10.150.747 11.185.466 12.245.800 13.176.139 14.537.776 15.174.964 15.704.743 17.140.786 19.826.652 22.744.811 25.331.742 27.768.284 Fuente: FAO (1998). Asia es la región que posee un mayor porcentaje de participación acuícola con respecto a su producción de alimentos, alcanzando en 1995, un 0,78%, impulsado por China. En esta zona, las principales especies cultivadas son la carpa plateada, la carpa herbívora y la tilapia. En relación a China, además de estas especies, la producción de peces de aleta es significativa, siendo producida con bajas densidades de población y dentro de sistemas semiintensivos y de policultivo en estanques (Cortéz, 1996). En Japón la producción se limita a especies diadromas y marinas carnívoras de elevado valor, cultivadas en sistemas intensivos. Las especies más cultivadas son la seriola y el besugo, aunque también se cultivan plantas acuáticas, moluscos y crustáceos. La práctica de la piscicultura con corrales de pesca, produce unas 80 especies, entre las que se incluye la dorada, el langostino japonés, la jaiba de manchas blancas, la oreja marina y el erizo. En términos dinámicos, Asia es la región que mayor crecimiento ha registrado en el sector acuícola, impulsada en gran medida por China. No ha parado de crecer desde 1984, pasando de los 8,4 millones de toneladas de 1984 a los 25 millones de 1995. Sin embargo el valor que alcanza en el mercado es muy inferior, proporcionalmente, al volumen de su producción, sobre todo si se compara con otras áreas geográficas. La tasa de crecimiento medio durante el período de estudio, 1984-1995, ha sido del 9,4%, aunque sorprendentemente este mismo porcentaje ha sido superado por América Latina y por África en el mismo período de tiempo. En cuanto a la producción acuícola per cápita, es la más elevada, alcanzando en 1995, 7,28 kg/año, impulsada por el principal productor acuícola de la región, 13 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 14 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI China, con una producción acuícola per cápita de 14,42 kg/año. Hay que destacar el importante nivel de crecimiento de la producción per capita tanto en China como en toda la zona asiática, que en el primer caso se cuadruplica y en el segundo se duplica en el período considerado. Sin embargo, los informes de la FAO alertan sobre el creciente nivel de contaminación ambiental en la región, que está aumentando considerablemente en los últimos años. Este factor podría incidir de manera decisiva en el desarrollo futuro de la acuicultura, pues la producción mundial está básicamente concentrada en esta zona. La participación de la acuicultura europea en la producción mundial de pescado se situaba, en 1995, en torno al 3,7%. En ese mismo año, se produjeron en la Unión Europea (UE) 1,02 millones de toneladas de pescado con un valor de 2.400 millones de dólares, lo que representó, respectivamente, el 3,7 y el 5,8% del total de la producción mundial. En relación al total de Europa, la UE cultiva prácticamente el 65% de toda Europa. A lo largo del período estudiado, la producción acuícola de la UE presenta una ligera tendencia a la alza, siendo la producción de 1995 un 31% superior a la de 1984, lo que representa una tasa media de crecimiento del 2% al año. Sin embargo, el nivel de crecimiento es inferior al de la producción mundial (8,7%), lo que ha supuesto una caída en la participación de esta zona en el total mundial, del 7,6% en 1984 al 3,7 en 1995. En relación a las especies cultivadas, en los países industrializados de Europa, la mitad de la producción es de moluscos alcanzando, en 1995, 243.983 toneladas; y el segundo componente más importante es el de los peces diácromos, es decir, el salmón y la trucha arcoiris. Hay que destacar también que el sector de la Tabla 5 Producción total acuícola por regiones (1.000 US$), 1984-1995 Año España UE Asia China A. Norte Mundo 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 209.226 234.600 236.898 269.371 300.191 354.156 357.246 354.917 259.024 201.261 248.917 259.268 1.020.920 1.108.083 1.420.512 1.649.891 1.749.228 1.956.092 2.093.746 2.144.612 2.254.431 2.125.490 2.404.128 2.439.364 9.365.302 10.660.096 13.374.016 16.337.789 19.140.202 19.773.586 21.335.156 23.692.032 26.500.039 29.531.260 33.024.250 34.850.383 3.950.333 4.805.462 5.763.514 7.220.826 8.187.554 8.624.274 9.074.510 10.303.504 11.960.415 13.454.844 14.828.275 16.387.512 497.811 437.089 493.354 554.212 619.893 674.164 700.091 765.231 853.883 927.324 918.575 999.242 12.028.589 13.437.190 16.812.724 20.542.802 24.169.176 25.103.929 27.262.528 29.649.972 32.908.516 36.113.424 40.186.268 42.318.054 Fuente: FAO (1998). 14 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 15 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI acuicultura en la UE ha experimentado una revolución debido al éxito, en particular, del cultivo del salmón (SOFIA, 1996). Los cultivos de mejillón y ostra, representan otra gran industria. En cuanto a la producción acuícola per cápita ésta se sitúa, desde 1984, en torno a 2,2 kg/año, alcanzando su mayor valor en 1994 con una producción per cápita del 2,7 kg/año lo que le sitúa desde 1986 por debajo de la producción per cápita mundial. Durante la última década, la UE y más concretamente Europa del Norte han sido líderes en el desarrollo «industrial» de cultivos marinos realizado a través del desarrollo de nuevas técnicas, lo que le llevó a producir de una manera más controlada y eficiente, abaratando los productos de alto valor adquisitivo. En relación a América del Norte, la producción acuícola en 1995 fue de 479.580 toneladas, que, en términos monetarios representaron casi 1.000 millones de dólares, la mayor cifra desde la década pasada. En relación a 1984, este volumen de producción de 1995 es un 43% mayor, lo que equivale a un nivel de crecimiento medio anual del 3%, nivel inferior a la media mundial, lo que implica también una disminución de la participación en la producción mundial total en favor de la participación de Asia y China, en particular. Por otro lado, el nivel de producción per cápita presenta este mismo comportamiento, sin embargo, la velocidad de crecimiento experimentada es menor que la de la producción total. A lo largo del período estudiado, el crecimiento de la producción per cápita fue del 28%, lo que equivale a una tasa media anual del 2%. El nivel de producción per cápita de 1995 fue de 1,62 kg/año, por debajo del volumen europeo y asiático. En América del Norte la acuicultura es una actividad diversificada, produciéndose peces de agua dulce, peces marinos, crustáceos, moluscos y plantas. En Estados Unidos, las principales especies son el bagre, la trucha arcoiris, el salmón y el cangrejo y en Canadá se crían especies de aguas frías como el salmón, la trucha y los moluscos. 1.4. El comercio internacional de productos de la pesca En este apartado se pretende, por una parte, analizar la evolución del comercio mundial de productos primarios de la pesca (considerando los volúmenes referentes al cultivo y a la captura de productos de la pesca) y, por otra, estudiar la distribución del comercio internacional entre los tres principales grupos de países productores de pescado (Unión Europea, Asia y China y América del Norte) y su evolución en el período que transcurre entre 1984-1995. Finalmente, se analizan los principales productos de la pesca comercializados internacionalmente por cada región a través de las principales partidas arancelarias y su evolución mundial en términos de importaciones y exportaciones. 15 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 16 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 1.4.1. El comercio de productos piscícolas dentro del comercio mundial de alimentos El volumen medio1 de comercio internacional de pescado ha experimentado, a lo largo del período que transcurre entre 1984-1995, una tendencia al crecimiento tanto en términos de volumen como en términos de valor. El nivel de crecimiento de las transacciones internacionales de pescado en términos físicos se sitúa en una tasa media anual de 2,66%. Sin embargo, durante 1995 el comercio mundial total sufrió una caída repentina del orden del 13%, motivada esencialmente por una reducción del 26% del volumen de comercio de la Unión Europea, mientras que, en el mismo período todas las demás regiones objeto de análisis aumentaron sus niveles de transacciones comerciales de pescado. El único grupo de países que experimentó una reducción del volumen físico de comercio de pescado en el mercado internacional fue el de América del Norte (Estados Unidos + Canadá). En la figura 5 se observa que el índice de volumen de comercio crece entre 1984 y 1988 para después caer hasta 1992, año en que se sitúa en un nivel cercano al 60% del nivel de transacciones registrado en 1984. Cuando el análisis se centra en el valor de los intercambios, como se observa en la figura 6, la tasa media de crecimiento es sensiblemente mayor para todos los Figura 5 Principales grupos, España y China: Evolución del índice de comercio de pescado (ton), 1984-1995 400 300 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 200 100 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 1 El volumen total medio del comercio de pescado está medido por el promedio de las importaciones y exportaciones, es decir (importaciones + exportaciones) / 2. 16 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 17 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 6 Principales grupos, España y China: Evolución del índice de comercio de pescado (US$), 1984-1995 1000 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 800 600 400 200 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). casos, incluso para América del Norte, situándose la tasa media de crecimiento mundial en el 12%, como resultado del incremento del nivel de precios internacionales del pescado. Sin embargo, como en el caso anterior, en 1995 y solamente para el caso de la Unión Europea, hubo una pequeña caída del índice de transacciones comerciales medido en unidades monetarias como consecuencia de la ya constatada disminución del volumen físico en este mismo año. La relación entre el comercio total medio de pescado y el comercio total medio de alimentos presentó, a lo largo del período entre 1985-1995, una ligera tendencia al crecimiento, como se observa en la figura 7; el nivel medio de la participación porcentual del comercio de pescado en el comercio total de alimentos ha sido de un 16,8%. La tasa media de crecimiento de esta relación es del 4,1% al año, lo que queda explicado, fundamentalmente, por el crecimiento experimentado en el continente asiático (5,4%) y particularmente en China (14,6%). El nivel medio de la relación entre el comercio de pescado y de alimentos de la región asiática es de un 31,5%, lo que les sitúa a la cabeza seguidos, en segundo lugar, por América del Norte, cuya relación se sitúa ligeramente por encima del 20%. En relación a las demás zonas, merece la pena destacar que China es el único país que presenta una clara tendencia creciente de la relación entre comercio de pescado y alimentos, sin embargo, su nivel medio está por debajo de la media mundial, situándose en 12,5% al año. Para la Unión Europea este indicador presenta una trayectoria estacionaria, alrededor de su media que es del 10,3% al año, mientras que América del Norte experimenta una pequeña tendencia de caída, con una media del 22,6%. 17 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 18 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 7 Evolución por regiones de la relación porcentual entre el comercio de pescado y de alimentos, 1984-1995 1000 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 800 600 400 200 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: FAO (julio 1997), FISHCOMM-PC y FAO, Comercio Internacional de Alimentos (varios números). El análisis de la evolución del volumen de comercio internacional de pescado se realizará por separado en exportaciones e importaciones. En relación a las importaciones de pescado, en general todas las regiones aumentaron sus compras de pescado tanto en términos de unidades físicas como de unidades monetarias. China sigue representando un papel destacado como uno de los países responsables de las mayores tasas de crecimiento de las importaciones de pescado. La figura 8 presenta la evolución de los índices de importación de pescado en toneladas métricas, donde se excluye a China, a causa de sus elevados índices de importación. Por ejemplo, en 1995, las importaciones de pescado de este país son 42 veces mayores que las de 1984, muy por encima del resto de las demás regiones. En la figura 9 se presenta la evolución de los índices de importaciones de pescado en unidades monetarias, donde se ve como el ritmo de crecimiento de las importaciones en unidades monetarias, para todas las regiones, es superior al ritmo de crecimiento de las importaciones en unidades físicas, lo que significa un aumento del precio medio de las importaciones de pescado. La relación entre las importaciones de pescado y de alimentos sigue un comportamiento similar en casi todas las regiones, con excepción de China, como se observa en la figura 10. En el caso de la Unión Europea, apenas el 11,6% de sus importaciones de alimentos medias al año, son relativas a importaciones de pescado, muy por debajo de la media mundial. Esto puede ser resultado de que la dieta media de la UE es menos intensiva en pescado. 18 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 19 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 8 Evolución por regiones del índice de importación de pescado (ton), 1984-1995 400 300 España U.E. Asia A.Norte Mundo 200 100 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Figura 9 Evolución por regiones del índice de importación de pescado (US$), 1984-1995 1200 1000 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 800 600 400 200 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Además, merece la pena destacar el continente norte americano y el asiático, pues sus importaciones de pescado también suponen una parte importante en el total de las importaciones de alimentos, que son, respectivamente, en media, el 24,7% y el 20,9%, al año, entre 1985-1995. 19 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 20 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 10 Evolución por regiones de la relación porcentual entre la importación de pescado y de alimentos, 1984-1995 40 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 30 20 10 0 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: FAO (julio 1997), FISHCOMM-PC y FAO, Comercio Internacional de Alimentos (varios números). En relación a las exportaciones de pescado, destaca también el crecimiento experimentado por China. Este país exportó, en 1995, un volumen de pescado en términos físicos (Fig. 11) del orden del 210% mayor que el registrado en 1984, muy superior a la media mundial que fue del 21%. También destaca la reducción del volumen de exportación de pescado de América del Norte que, en 1995, representaba apenas el 31% del volumen total exportado en términos físicos en 1984. Además, hay que destacar la acentuada reducción de las exportaciones de la UE en 1995, lo que explica la reducción también observada en el volumen medio del comercio para el año de 1995 analizada anteriormente. Cuando se analizan las exportaciones en términos de unidades monetarias (Fig. 12), el comportamiento de todos los grupos es similar al observado en términos de volumen. La tasa media de crecimiento mundial de las exportaciones fue del 13%, situándose por encima de dicha tasa, las exportaciones de China, con un nivel cercano al 17%. Además, llama la atención el comportamiento de las exportaciones, en términos de valores, de América del Norte, puesto que presentaron un crecimiento, a pesar de la reducción de las exportaciones en unidades físicas. Las exportaciones de esta región crecieron a una tasa media anual en torno al 14%, mayor que la de la media mundial y de la UE, que fue del 12% al año. En resumen, todas las regiones experimentaron un crecimiento de las exportaciones de pescado, especialmente en términos monetarios, lo que indica un creci20 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 21 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 11 Evolución por regiones del índice de exportación de pescado (ton), 1984-1995 400 300 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 200 100 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Figura 12 Evolución por regiones del índice de exportación de pescado (US$), 1984-1995 700 600 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 500 400 300 200 100 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). miento del precio medio de las toneladas de pescado. Merece la pena destacar especialmente el acelerado crecimiento que se produce en las exportaciones de China, lo que resalta el importante papel desempeñado por esta economía en el sector de productos pesqueros. 21 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 22 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En lo que se refiere a la relación entre las exportaciones de pescado y de alimentos, ésta es muy distinta de la de las importaciones, lo que puede ayudar a identificar la vocación de las regiones objeto de estudio, es decir, si se trata de importadoras o exportadoras netas de pescado. Si comparamos las figuras relativas a la evolución del comercio medio total de pescado respecto al de alimentos y el correspondiente a las exportaciones, podemos observar que, para el caso de Asia, se observa que el alto nivel de la relación entre el comercio total medio de pescado y alimentos está determinado por el alto nivel de relación entre las exportaciones de pescado y alimentos, lo que viene a indicar que es un continente exportador de pescado. De hecho, el nivel medio de exportaciones de pescado de Asia alcanza, al año, el 29% de las exportaciones totales de alimentos, lo que es reflejo de su fuerte nivel competitivo en la producción de pescado. En relación al saldo comercial de pescado primario, la UE es superavitaria cuando se mide en toneladas, pero deficitaria cuando se mide en valores monetarios, lo que indica que el precio medio de una tonelada de sus importaciones es superior que el de sus exportaciones. Este hecho indica que existen diferencias en términos de nivel de demanda y calidad entre los productos importados y exportados de la UE; resultado que también se pone de manifiesto en Asia, en general, y en China, en particular, que es un exportador neto, con niveles de exportaciones que representan el 15,99% de las exportaciones mundiales y el 43,6% de las exportaciones de Asia. Figura 13 Evolución por regiones de la relación porcentual entre la exportación de pescado y de alimentos, 1984-1995 35 30 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 25 20 15 10 5 0 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: FAO (julio 1997), FISHCOMM-PC y FAO, Comercio Internacional de Alimentos (varios números). 22 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 23 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 1.4.2. Apertura comercial: producción de pescado y comercio exterior Considerando la relación entre comercio de pescado primario y su producción es posible observar que la Unión Europea se sitúa a la cabeza del resto de regiones consideradas, con una tasa cercana al 16%, muy por encima de la media mundial. Las demás zonas geoeconómicas presentan una relación muy pequeña entre comercio y producción, con la media mundial alcanzando apenas el 2,47% en 1995. Asia y China que representan la principal zona productora y el primer país productor de pescado, respectivamente, sólo comercializaron el 1,43 y el 0,93%, de su producción en el mismo año. Figura 14 Evolución por regiones de la relación porcentual entre el volumen total de comercio y la producción de pescado, 1984-1995 25 20 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 15 10 5 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). En la figura anterior se puede observar una clara tendencia al crecimiento de la parcela de la producción que es comercializada en el mercado internacional en la Unión Europea, especialmente a partir del año 1989. Para los demás grupos, como Asia y la media mundial se constata un comportamiento prácticamente constante, sin fluctuaciones a lo largo del período. Sin embargo, para América del Norte se aprecia una clara tendencia a la reducción de la participación del comercio en la producción, especialmente a partir de 1988. 1.4.3. Distribución geográfica del comercio internacional de pescado La gran mayoría de las transacciones internaciones de pescado entre las regiones del mundo son realizadas por las tres principales zonas económicas: Unión Europea, 23 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 24 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI América del Norte y Asia. Estas tres zonas absorben el 92,5% del volumen de comercio medido en unidades físicas y el 94%, en unidades monetarias. De estas tres regiones, la Unión Europea es el principal participante en el volumen total medio de comercio de pescado primario (acuicultura y capturas), seguido, muy de cerca, por Asia y, después, por América del Norte (EUA y Canadá). Figura 15 Distribución porcentual del comercio mundial de pescado primario, por regiones, 1995 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). En 1995, como se puede observar en las figuras anteriores, la Unión Europea representa el 47,6% del volumen total medio de comercio mundial, medido en toneladas, y el 43%, si se mide en valores monetarios. En el mismo año, Asia fue el responsable del 35,4% del volumen total medio de comercio medido en toneladas y del 37,5%, si se mide en unidades monetarias. Debe destacarse la importancia relativa de China que, individualmente, además de ser el principal productor de pescado del mundo, también es el principal país en términos del volumen total medio del comercio internacional. En términos de toneladas, su participación es del 10% en el total del comercio mundial, lo que representa el 28,3% de la cuota de mercado de Asia; y, considerando el comercio medido en unidades monetarias, su participación es del 11 y 29,2%, respectivamente. Sin embargo, es posible realizar un análisis con mejor detalle de la evolución del comportamiento de cada región respecto a sus participaciones en el total del comercio a través de las siguientes figuras. La primera recoge la evolución de la distribución porcentual de pescado medido en términos de toneladas métricas. 24 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 25 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 16 Evolución por regiones de la distribución porcentual del comercio de pescado (ton), 1984-1995 100% 80% Otros A.Norte Asia U.E. 60% 40% 20% 0% 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). En relación a esta figura y en términos dinámicos, lo más importante es la acentuada tendencia a la disminución de la participación porcentual de América del Norte pasando de representar un 25% del total de comercio en 1985 a representar apenas el 9,5% en 1995. Este hecho está bastante relacionado con la acentuada reducción del volumen de exportaciones, en términos de toneladas, de esta región. El gran beneficiado de este declive ha sido Asia, con una fuerte tendencia al crecimiento, que pasa de representar el 20,4% del comercio mundial de pescado, en 1985, al 35%, en 1995. De nuevo, destaca China como el país con mayor peso de la región, con una tendencia marcada de crecimiento. Frente a estas variaciones, en cierto modo compensadas, la Unión Europea mantiene estable su participación en el comercio internacional de pescado, con un promedio de alrededor del 48% a lo largo del período, con un salto significativo en los años 90 cuando la media se sitúa por encima del 50%. En relación a la segunda figura, que recoge la evolución de la distribución porcentual del comercio internacional de pescado, medido en unidades monetarias, hay que destacar las importantes diferencias en relación a los datos anteriores. En primer lugar, la participación relativa de la Unión Europea disminuye acentuadamente, cayendo del 59%, en 1984, al 43%, en 1995. Esta caída supone una tendencia a la reducción de los precios de los productos comercializados por esta región. En segundo lugar, existe una ligera tendencia al crecimiento de la participación de América del Norte, especialmente en los años 80, lo que, al contrario de lo ocurrido con la Unión Europea, supone un aumento de los precios de los productos comercializados por esta región; y, en último lugar, observamos un crecimiento de 10 puntos porcentuales en la cuota de participación de Asia, pasando del 28% en 1985 al 38% en 1995. 25 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 26 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 17 Evolución por regiones de la distribución porcentual del comercio de pescado (US$), 1984-1995 100% 80% Otros A.Norte Asia U.E. 60% 40% 20% 0% 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Por lo tanto, aunque todavía hoy la Unión Europea es responsable de casi la mitad de todas las transacciones internacionales de pescado en el mundo, ha ido disminuyendo paulatinamente su participación en favor del continente asiático, cuya participación viene creciendo, tanto en términos físicos como en términos monetarios. En las diferencias detectadas juega un papel fundamental la demanda nacional de estos productos. El pescado forma parte fundamental de la dieta asiática, por lo que la producción nacional es mayor, y su comercio, en términos de importaciones y exportaciones también es superior al del resto de las zonas. 1.4.4. Valor unitario de las transacciones internacionales de pescado Del análisis del comercio internacional en términos de toneladas y valor monetario, es posible derivar el precio medio de una tonelada comercializada en cada una de las zonas. El valor unitario medio de una tonelada de pescado comercializada en el mercado internacional siguió, como se puede ver en la figura 18, una tendencia clara al crecimiento para todas las regiones estudiadas, llegando a representar, para el conjunto mundial, en 1995, un valor cerca del 160% mayor que el de 1984. Para España, China y Asia el valor unitario medio es de 2,6 mil US$ por tonelada y para la UE de 2,3 mil US$ por tonelada. En relación a las importaciones, el valor unitario medio también sigue una tendencia clara al crecimiento, como se puede ver en la figura 19. Sin embargo, estos 26 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 27 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 18 Evolución por regiones del valor unitario del comercio total medio (X+M/2) de pescado (1.000 US$/ton), 1984-1995 5 4 España U.E. Asia China A.Norte Mundo 3 2 1 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Figura 19 Evolución por regiones del valor unitario medio de las importaciones de pescado (1.000 US$/ton), 1984-1995 5 4 España U.E. Asia A.Norte Mundo 3 2 1 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). valores unitarios medios son mayores, en todos los casos estudiados, que los valores unitarios medios de una tonelada para el comercio total (medido como X+M/2), lo que viene a indicar que los valores unitarios medios de las importaciones son mayores que los de las exportaciones. 27 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 28 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El valor unitario medio de una tonelada de importación para la totalidad de los países es de 2,7 mil US$, un 17% mayor que el correspondiente al comercio total medio. América del Norte es la región donde los precios de las importaciones son mayores, llegando a 4 mil US$ la tonelada. Estos resultados indican que las importaciones de las regiones estudiadas son de productos de la pesca de mayor valor y demanda, que suelen ser los crustáceos y moluscos y los pescados frescos. Además, que sus exportaciones son, en gran parte, de productos, por su menor valor, destinados a la preparación industrial, como pueden ser harina y aceite. Para finalizar, los valores unitarios medios de las exportaciones de pescado, además de ser menores que los de las importaciones, también presentan una tendencia creciente a lo largo del período estudiado, como se observa en la figura siguiente. Figura 20 Evolución por regiones del valor unitario medio de las exportaciones de pescado (1.000 US$/ton), 1984-1995 5 4 2 España U.E. Asia China 1 A.Norte Mundo 3 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). El valor unitario medio de las exportaciones para el mundo es de 1,9 mil US$ por tonelada en el período entre 1984-1995, un 30% menor que el valor unitario medio de las importaciones. Finalmente resta destacar que el valor unitario de la exportación de América del Norte equivale a la mitad del valor unitario de la importación. 1.4.5. Principales productos pesqueros comercializados Para analizar y determinar los productos pesqueros con mayor importancia, en términos de volumen, en el comercio internacional, entre las regiones considera28 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 29 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI das, tenemos que utilizar los datos de la FAO del programa FISHCOMM-PC, disponible a través de internet (www.fao.org), donde los datos están clasificados por las principales partidas arancelarias armonizadas internacionalmente. Estos datos se refieren al capítulo 03 y parte de los capítulos 15, 16 y 23 de las partidas arancelarias. Capítulo 03: Pescado y Crustáceos, Moluscos y otros invertebrados acuáticos. 03.01: Peces vivos (ornamentales). 03.02: Pescado fresco o refrigerado, con exclusión de los filetes y demás carnes de pescado de la partida núm. 03.04. 03.03: Pescado congelado, con exclusión de los filetes y demás carnes de pescado de la partida núm. 03.04. 03.04: Filetes y demás carne de pescado (incluso picada), fresco, refrigerados o congelados. 03.05: Pescado seco, salado o en salmuera; pescado ahumado, incluso cocido antes o durante el ahumado; harina, polvo y «pellets» de pescado aptos para la alimentación humana. 03.06: Crustáceos, incluso pelados, vivos, frescos, refrigerados, congelados, secos, salados o en salmuera; crustáceos sin pelar cocidos con agua o vapor, incluso refrigerados, congelados, secos, salados o en salmuera; harina, polvo y «pellets» de crustáceos aptos para la alimentación humana. 03.07: Moluscos, incluso separados de las valvas, vivos, frescos, refrigerados, congelados, secos, salados o en salmuera; invertebrados acuáticos, excepto crustáceos y moluscos, vivos, frescos, refrigerados, congelados, secos o en salmuera; harina, polvo y «pellets» de invertebrados acuáticos, excepto de los crustáceos, aptos para la alimentación humana. Además, parte del capítulo 15 y 16 correspondientes a grasas y aceites de pescado y mamíferos marinos, refrigerados o sin preparar y del capítulo 23, correspondiente a harinas y polvo de pescado y crustáceos. Utilizando exclusivamente los datos correspondientes a las secciones 02, 03, 06 y 07 del capítulo 03 se hará referencia a los datos de pescado primario, sin ninguna transformación industrial, con lo que se asemejan bastante a los datos analizados anteriormente. Sin embargo, al comparar estos datos con los utilizados anteriormente en el análisis del comercio del pescado se ha de tener en cuenta que estas incluyen harinas, polvo y pellets de crustáceos y moluscos aptos para la alimentación humana e hígado, hueva y lechas de pescado. En el comercio mundial de pescado es posible distinguir dos categorías: peces y crustáceos y moluscos. Utilizando los datos referentes a las secciones del capítulo 3 de las partidas armonizadas descritas anteriormente, nos encontramos con que las importaciones mundiales de pescado fresco, refrigerado o congelado, en unidades monetarias, suponen un promedio del 56% de las importaciones totales de productos piscícolas, para el período 1980-1995. Este porcentaje se eleva al 78% si se consideran las importaciones en toneladas. En el caso de las exportacio29 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 30 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI nes estos indicadores alcanzan el 55 y el 79%, respectivamente, del total de las exportaciones mundiales de pescado. Las diferencias corresponden a crustáceos y moluscos frescos, refrigerados o congelados. Como se puede notar, el precio medio de una tonelada de crustáceos y moluscos es sustancialmente mayor que el de pescado. Es importante observar que la distribución del comercio internacional de pescado entre los dos grupos mencionados anteriormente no presenta ninguna tendencia clara. A lo largo del período entre 1980-1995 la participación porcentual de pescado y de crustáceos y moluscos es estable alrededor de las medias presentadas anteriormente, sin ninguna fluctuación sustancial, tanto en términos de unidades físicas como de unidades monetarias, lo que puede ser observado en las figuras que se presentan a continuación, donde la evolución de la participación de los grupos es estacionaria a lo largo del período considerado. Como era de esperar, la tasa media de crecimiento del volumen de comercio, tanto importación como exportación, y tanto en toneladas como en valores monetarios, es muy semejante a lo largo del período. Es decir, para importaciones en unidades monetarias, la tasa media de crecimiento es del 10,28% para crustáceos y moluscos y del 10,10% para pescado, del 10,21% y del 9,51%, respectivamente, para exportaciones, en toneladas, del 6,48% y del 6,42%, para importaciones y del 7,30% y del 6,21%, para exportaciones. En consecuencia se puede esperar un comportamiento similar entre precios internacionales de las importaciones y las exportaciones de las cantidades comercializadas. Además los precios internacionales de los dos grupos de productos de la pesca también tuvieron un nivel de crecimiento semejante, tanto en términos de importaciones como de exportaciones. Resta destacar las principales partidas arancelarias comercializadas de productos de la pesca. Los principales productos de la pesca comercializados son los de la partida 0306.13, que se refieren a «camarones, langostinos, quisquillas y gambas», seguido del 0303.43 «listados o bonitos de vientre rayado», 0302.12 «salmón» y 0303.42 «atunes de aleta amarilla», además de pulpos (0307.59) y calamares, jibias y potas (0307.49). Resulta también interesante destacar la distribución porcentual mundial tanto de las importaciones como de las exportaciones en relación a los dos grupos referenciados de productos de la pesca (los datos de referencia están en anexo). En relación a las importaciones medidas en términos de unidades monetarias, se constata que Asia es el mayor importador de crustáceos y moluscos, con una media del 48% a lo largo del período comprendido entre 1980-1995, seguido de la Unión Europea; por otro lado, la Unión Europea es el mayor importador de pescado con una media del 37%, a lo largo del mismo período, pero con una tendencia declinante, seguido de cerca por Asia que, por el contrario, presenta una tendencia a aumentar su participación en las importaciones de pescado. 30 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 31 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 21 Evolución de la distribución del comercio mundial de pescado y de crustáceo y moluscos, 1980-1995 1.00 1.00 0.80 0.80 0.60 MMTP 94 92 88 90 86 94 92 90 88 86 84 0.00 82 0.20 0.00 80 0.20 1.00 MMTCM 0.40 84 M$P 82 M$CM 0.40 80 0.60 1.00 0.80 94 92 90 88 86 94 92 90 88 0.00 86 0.00 84 0.20 82 XMTP 0.40 0.20 80 XMTCM 0.60 84 X$P 0.40 82 X$CM 0.60 80 0.80 Fuente: FAO, FISHCOMM-PC (julio 1997). Obs: M$CM: Importación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. M$P: Importación de pescado en unidades monetarias. MMTCM: Importación de crustáceos y moluscos en toneladas. MMTP: Importación de pescado en toneladas. X$CM: Exportación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. X$P: Exportación de pescado en unidades monetarias. XMTCM: Exportación de crustáceos y moluscos en toneladas. XMTP: Exportación de pescado en toneladas. En relación a las importaciones medidas en unidades físicas, Asia es el mayor importador mundial tanto de pescado como de crustáceos y moluscos, seguido de la Unión Europea. Esto convierte al continente asiático en el mayor importador de productos primarios de la pesca. En relación a las exportaciones, el comportamiento es semejante al de las importaciones, con Asia a la cabeza como el mayor exportador de pescado y de crustáceos y moluscos tanto en términos de unidades físicas como en términos monetarios. Es decir, de nuevo se viene a confirmar el hecho de que Asia es el principal importador y exportador de pescado, tanto en términos globales como en las dos categorías consideradas. A continuación se analiza detalladamente el comportamiento experimentado por las importaciones y exportaciones de los dos grupos de productos primarios de la pesca en el período de 1980-1995 para cada una de las regiones. 31 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 32 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 22 Evolución de la distribución del comercio de pescado y de crustáceo y moluscos de la Unión Europea, 1980-1995 1.00 1.00 0.80 0.80 MMTP 94 92 90 88 94 92 90 88 86 84 0.00 82 0.20 0.00 80 0.20 1.00 MMTCM 0.40 86 0.40 0.60 84 M$P 82 M$CM 80 0.60 1.00 0.80 0.80 0.60 XMTP 94 92 88 90 86 94 92 90 88 0.00 86 0.00 84 0.20 82 0.20 80 XMTCM 0.40 84 X$P 0.40 82 X$CM 80 0.60 Fuente: FAO, FISHCOMM-PC (julio 1997). Obs: M$CM: Importación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. M$P: Importación de pescado en unidades monetarias. MMTCM: Importación de crustáceos y moluscos en toneladas. MMTP: Importación de pescado en toneladas. X$CM: Exportación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. X$P: Exportación de pescado en unidades monetarias. XMTCM: Exportación de crustáceos y moluscos en toneladas. XMTP: Exportación de pescado en toneladas. La Unión Europea presenta un comportamiento semejante al de la media mundial, con estacionalidad en la evolución de todas las variables. Tanto las importaciones como las exportaciones son en su gran mayoría de pescado, lo que corresponde a un valor porcentual de alrededor del 70% de las transacciones comerciales de la UE, es decir, la UE está fundamentalmente especializada en la comercialización de pescado. Los principales productos importados por la UE son los de la partida 0306.13 (camarones, langostinos, quisquillas y gambas), seguido de 0302.12 (salmón), 0303.78 (merluza), 0303.42 (atunes de aleta amarilla) y 0302.50 (bacalao). Por otro lado, los principales productos de la pesca exportados por la UE son 0302.12 (salmón), 0303.50 (arenques), 0303.74 (caballas y estorninos), 0302.23 (lenguado), 0302.50 (bacalao) y 0306.13 (camarones, langostinos, quisquillas y gambas). En el caso de América del Norte, como se puede ver en la figura 23, se aprecia un comportamiento distinto de la media mundial, pues existe una tendencia de 32 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 33 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI aumento de la participación de las importaciones, en términos de unidades monetarias, de crustáceos y molusco en detrimento de las importaciones de pescado. Lo mismo ocurre en términos de unidades físicas, sin embargo, las importaciones de pescado son la mayoría, lo que viene a indicar que los precios internacionales de las importaciones de crustáceos y moluscos son mucho mayores. En relación a las exportaciones, se observa un movimiento de fluctuación en los años 80 en favor de las exportaciones de pescado, tanto en unidades monetarias como físicas. Sin embargo, en los años 90, existe un distribución igualitaria entre los dos grupos cuando consideramos las unidades monetarias; y una vuelta a los patrones de 1980 en términos de toneladas, es decir, 28% de las exportaciones en crustáceos y moluscos y 72% de pescados. Como en las importaciones, los precios de exportación de los primeros son mucho mayores que de los últimos. Los principales productos importados por América del Norte son los camarones, langostinos, quisquillas y gambas (0306.13), salmón (0302.12), atún blanco Figura 23 Evolución de la distribución del comercio de pescado y de crustáceo y moluscos de América del Norte, 1980-1995 1.00 1.00 0.80 94 92 88 90 86 94 92 88 90 86 84 0.00 82 0.20 0.00 80 MMTP 0.40 0.20 1.00 MMTCM 0.60 84 M$P 0.40 82 M$CM 0.60 80 0.80 1.00 0.80 0.80 94 92 90 88 86 94 92 90 88 86 0.00 84 0.20 0.00 82 XMTP 0.40 0.20 80 XMTCM 0.60 84 X$P 0.40 82 X$CM 80 0.60 Fuente: FAO, FISHCOMM-PC (julio 1997). Obs: M$CM: Importación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. M$P: Importación de pescado en unidades monetarias. MMTCM: Importación de crustáceos y moluscos en toneladas. MMTP: Importación de pescado en toneladas. X$CM: Exportación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. X$P: Exportación de pescado en unidades monetarias. XMTCM: Exportación de crustáceos y moluscos en toneladas. XMTP: Exportación de pescado en toneladas. 33 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 34 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI (0303.41), langosta (0306.11), bogavante (0306.12) y bacalao (0303.60). Los principales productos exportados por esta región son el salmón del pacífico (0303.10), los camarones, langostinos, quisquillas y gambas (0306.13), cangrejo del mar (0306.14) y bogavantes (0306.12). Para el caso de Asia se constata también un comportamiento distinto del de la media mundial y de América del Norte, pues mientras este último aumentaba sus importaciones de crustáceos y moluscos y, disminuía sus exportaciones, Asia, por el contrario, aumentaba sus exportaciones y disminuía sus importaciones de este grupo en particular. Como se puede ver en las correspondientes figuras, las exportaciones de crustáceos y moluscos pasaron, entre 1980 y 1995, del 50 al 57%, en términos monetarios, y del 29 al 32% en términos de toneladas, del total de las exportaciones de productos de la pesca, lo que representa una disminución relativa de las exportaciones de pescado. Sin embargo, y como era de esperar, en relación a las importaciones el Figura 24 Evolución de la distribución del comercio de pescado y de crustáceo y moluscos de Asia: 1980-1995 1.00 1.00 0.80 0.60 1.00 1.00 0.80 0.80 94 92 Fuente: FAO, FISHCOMM-PC (julio 1997). Obs: M$CM: Importación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. M$P: Importación de pescado en unidades monetarias. MMTCM: Importación de crustáceos y moluscos en toneladas. MMTP: Importación de pescado en toneladas. X$CM: Exportación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. X$P: Exportación de pescado en unidades monetarias. XMTCM: Exportación de crustáceos y moluscos en toneladas. XMTP: Exportación de pescado en toneladas. 34 94 92 88 90 86 XMTP 88 94 92 90 88 86 0.00 84 0.20 0.00 82 XMTCM 0.40 0.20 80 84 0.60 90 X$P 86 X$CM 0.40 MMTP 84 94 92 88 90 86 84 0.00 82 0.20 0.00 80 0.20 0.60 MMTCM 0.40 82 M$P 0.40 80 M$CM 82 0.60 80 0.80 5878-II.Cap1 17/2/00 07:23 Página 35 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La acuicultura en el escenario económico mundial BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI comportamiento es exactamente el contrario, es decir, aumentan las importaciones relativas de pescado en el total de las importaciones de productos de la pesca. De la región asiática destaca el comportamiento de China, donde se constata un comportamiento igual al del resto del continente. En términos de toneladas, sus importaciones de pescado corresponden al 87% de las importaciones totales de productos de la pesca y al 54% de sus exportaciones. Por lo tanto, hay un mayor equilibrio distributivo entre los dos grupos cuando se trata de las exportaciones. En términos de valor, este equilibrio es mayor. China es, sobre todo, un gran exportador, pues sus exportaciones representan, de media, el 10% de las exportaciones de la zona, siendo en 1995 del 14%. En relación a las importaciones, sus importaciones representan de media el 1 y 4 % de las importaciones de la zona en términos de unidades monetarias y físicas, respectivamente. Los principales productos exportados por esta zona son también los camarones, langostinos, quisquillas y gambas (0306.13), vieiras (0307.29), pulpos (0307.59), cangrejo del mar (0306.14) y mejillones (0307.31); y los principales productos importados son, además de los anteriores, los carboneros (0303.73), eglifinos (0303.72), bogavantes (0303.12) y el salmón del pacífico (0303.10). 35 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 37 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2. La economía acuícola en España 2.1. La pesca en la producción de alimentos La producción de alimentos en España, así como en todo el mundo, está básicamente concentrada en la producción agrícola que, por ejemplo, en 1995 representó el 85,6% de la producción total de alimentos. En segundo lugar, pero con menor importancia, está la producción agropecuaria, con el 12,9% y, por último, la producción de pescado, incluyendo tanto las capturas como la acuicultura, que representó apenas el 1,5%. Del total de la participación en la producción alimentaria del pescado, la acuicultura supone apenas el 0,15%. Entre 1984 y 1995 la producción de pescado ha ido aumentando paulatinamente su peso en el total de la producción de alimentos. Sin embargo, la participación de la acuicultura en la producción de alimentos ha sufrido una tendencia contraria. Desde 1984, cuando representaba el 0,23%, hasta 1995, cuando representó el 0,15%, la acuicultura ha ido disminuyendo paulatinamente su participación en el total de alimentos en España. La significativa concentración de la producción de alimentos en la producción agrícola, puede ser explicada fundamentalmente porque el nivel tecnológico desarrollado para esta actividad es muy superior al alcanzado para la producción de los Figura 25 España: Evolución de la distribución porcentual de la producción de alimentos, 1984-1995 100% 80% 60% Pescado Agropecuaria Agrícola 40% 20% 0% 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 37 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 38 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI demás alimentos. Por ejemplo, es en época muy reciente cuando la ingeniería genética está empezando a ser utilizada en la producción de agropecuaria y no habiéndose utilizado todavía para la producción acuícola. La acuicultura moderna en España empezó apenas en la década de los 60, desarrollándose a partir de la mitad de los años 70; está basada, especialmente, en cultivos en pequeñas empresas familiares de carácter muy tradicional, concentrados en algunas especies como la trucha arco iris, el mejillón de las rías gallegas y los esteros gaditanos. Tan sólo recientemente este sector está incorporando técnicas de producción modernas en el cultivo, con nuevos sectores altamente industrializados y pujante, como la dorada, la lubina y el rodaballo. Sin embargo, como se observa en la figura anterior, la evolución de la distribución de la producción de alimentos ha experimentado una pequeña alteración entre 1984-1995. El principal cambio es el incremento de la participación de la producción agropecuaria, que aumentó su participación en 3,1 puntos porcentuales a lo largo del período estudiado, en detrimento de la producción agrícola, que ha disminuido 3,3 puntos porcentuales, apreciándose una clara tendencia a la alza desde 1997. La producción de pescado representó en 1995 el 1,48% de la producción total de alimentos, volumen superior al de 1984 (1,33%) lo que significa un aumento en la participación de la producción de pescado en el total de la producción de alimentos en el período. Merece la pena destacar que esta proporción es superior al promedio de la UE. Sin embargo, este aumento es pequeño, del orden de 1,5 puntos porcentuales entre 1984-1995. Figura 26 España: Participación porcentual de la industria pesquera en la producción de alimentos, 1984-1995 1,6 1,2 0,8 Capturas Acuicultura 0,4 0,0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 38 94 95 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 39 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La acuicultura, que está incluida en la producción de pescado, presenta una tendencia clara de disminución de la participación en la producción de alimentos, pues disminuye su participación en un 35% entre 1984 y 1995, del 0,23 al 0,15%, respectivamente. Esto se debe, como se analizará cuidadosamente a continuación, a la disminución de la producción de mejillón en las rías gallegas. Por lo tanto, la importancia de la producción de pescado en la producción de alimentos en España es muy pequeña, ya que la participación de la acuicultura, además de pequeña, presenta una tendencia a la baja. 2.2. La producción acuícola española 2.2.1. Situación actual Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la producción acuícola española en 1996 fue de 231.600 toneladas (que representa aproximadamente el 18% de la producción total de la pesca), que se reducen a 43.200 si descontamos el mejillón. Esto supone un crecimiento del 65%, aunque se trata de datos preliminares, de la producción acuícola respecto al año anterior. Este éxito es relativo porque se debe básicamente a la producción del mejillón, que creció el 104%, mientras los demás sectores de la acuicultura, en su conjunto, presentaron una disminución de la producción del 6% respecto a 1995. Figura 27 España: Evolución de la participación porcentual en el total de la producción acuícola de la UE y del Mundo, 1984-1995 35 30 Esp/Mundo Esp/UE 25 20 15 10 5 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 39 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 40 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La acuicultura española está entre las más importantes dentro de la UE, alcanzando el 13,5% de la producción comunitaria en volumen en 1995, y el 0,5% de toda la producción mundial. España está situada en el puesto 17 del ranking mundial de productores acuícolas. Por delante de nuestro país se encuentran Francia e Italia, aunque en el mismo rango de producción, la franja de las 200-300 mil toneladas/año, lo que hace que seamos el tercero productor de la UE. 2.2.2. Evolución reciente A pesar de su creciente importancia y su competitividad internacional, la acuicultura española, entre 1984-1995, parece sufrir un proceso de deterioro bastante acentuado tanto en relación a la producción de pescado como en relación a la producción total de alimentos. La producción acuícola española en 1995 alcanzó apenas el 55% del nivel de producción de 1984; la participación de la producción acuícola en la producción total de pescado en España ha disminuido del 17% en 1984 al 10% en 1995; finalmente, la participación de la producción acuícola española en el total de la producción acuícola mundial disminuyó del 2,4% en 1984 al 0,5% en 1995. La figura 28 representa este proceso de disminución de la acuicultura española, que se observa a partir de 1987, cuando la tendencia cambia de signo y el índice de producción alcanza su máximo, un 109,7% (1983 = 100); sin embargo, a partir de ahí el nivel de producción disminuye hasta 1995, cuando el índice representa el 54% de la producción de 1983. La disminución de la producción fue muy acentuada, llegando a un 50% en estos 8 años, con una tasa media del 5,2% al año. Figura 28 España: Evolución del índice de producción acuícola y tendencia, 1983-1995 120 P.Acuícola Tendencia 100 80 60 40 84 85 86 87 88 89 90 91 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 40 92 93 94 95 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 41 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Al analizar los datos se puede comprobar que el bienio de mayor caída para el sector acuícola español fue el de 1992-1993, año este último en el cual se alcanzó una tasa de crecimiento negativa del 25,49%, la más alta en todo el período. En conjunto para el período 1984-1995 se ha pasado de producir 247.426 toneladas a 138.260, lo que da una dimensión exacta del nivel de crisis a la que el sector se ha enfrentado. Figura 29 España: Evolución de la producción acuícola, del mejillón y de los demás cultivos, 1984-1995 300000 Total Mejillón Demás 250000 200000 150000 100000 50000 0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Este comportamiento de la acuicultura española es debido exclusivamente al cultivo del mejillón. La acuicultura española está fuertemente especializada en el cultivo de esta especie, aunque su participación en el total de los cultivos ha disminuido sustancialmente; en 1985 el cultivo del mejillón representaba el 93% del total de cultivo, en 1995 este nivel disminuyó al 67%. La evolución de la producción del mejillón es un reflejo exacto de la acuicultura española, pues tras un período de producción estable entre 1984 y 1988, experimentó un descenso espectacular (245.655 toneladas en 1985 y 92.250 en 1995) debido fundamentalmente a una saturación del mercado, pérdida de calidad que provoca el descrédito, así como la contaminación, etc. Sin embargo, cuando se excluye el mejillón del análisis, la producción acuícola obtiene un desempeño completamente diferente, es decir, muy positivo. Según los datos de la FAO, la producción acuícola exceptuando el mejillón ha pasado de 20,9 mil toneladas en 1984 a 46 mil toneladas en 1995; es decir, ha crecido un 120% 41 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 42 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI en el período considerado, lo que equivale a una tasa de crecimiento anual media del 6,8%. La mayor tasa de crecimiento se ha realizado en la acuicultura marina, con un 14,5% medio al año, respecto a la continental, que sólo ha alcanzado el 2,6%. Tabla 6 España: Producción acuícola (ton) y tasa de variación (%), 1985 y 1995 Tasa de variación % Especies 1985 1995 Crustáceos . . . . . . . . . . . . . Peces marinos . . . . . . . . . . Moluscos . . . . . . . . . . . . . . Continental . . . . . . . . . . . . Mejillón . . . . . . . . . . . . . . . 55 517 4.126 16.250 245.655 2.368 6.365 15.124 22.153 92.250 4.200 1.100 267 36 –62 TOTAL . . . . . . . . . . . . . 266.603 138.260 –48 Crustáceos: langostino, camarón y cangrejo rojo. Peces: Rodaballo, lubina, dorada, mugílidos, seriola, lenguado, túnidos, anguila, salmón. Moluscos: Almeja, ostra, escupiña, vieira, tellerina, berberechos. Continental: Trucha arcoiris, tenca. Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 2.2.3. Principales productos España tiene una acuicultura especializada y concentrada en pocas especies, pues entre las 10 principales producidas en España, en 7 de ellas es el principal productor mundial. Las 10 principales especies producidas por orden son el mejillón, la trucha arco iris, la ostra, la almeja, el berberecho, la dorada, el cangrejo rojo, el rodaballo, el salmón y la lubina; por ejemplo, en 1995, la producción de estas especies concentraba el 99,5% de la producción total de la acuicultura española. Además, está bastante concentrada en el sector del mejillón, que representa el 66,7% de la producción. La acuicultura marina incluye la producción de peces marinos, de crustáceos y moluscos. Excluyendo el mejillón, la acuicultura marina está dominada básicamente por la producción de moluscos, que corresponde al 63,4% del total de la producción, mientras que la producción de peces marinos es de un 26,7%, y la de crustáceos, un 9,9%. La producción acuícola marina alcanza un crecimiento de la producción del orden del 300% entre 1985 y 1995. Merece la pena destacar el nivel de crecimiento experimentado en el cultivo de crustáceos y de peces marinos, del orden del 4.200 y 1.100% en los 11 años analizados, respectivamente; esto equivale a una tasa media de crecimiento anual del 41 y del 28%, respectivamente. Los moluscos, excluyendo el mejillón, experimentaron un menor nivel de crecimiento, pero significativo, de cerca del 267% (con un 12,5% medio al año) en el mismo período. 42 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 43 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La producción de peces marinos1, en la actualidad, se centra en la producción de la dorada y del rodaballo y, en menor escala, del salmón y de la lubina. Los dos primeros representan el 42,5 y el 34,2%, respectivamente, del total de la producción, mientras los siguientes el 11 y el 7,2%, respectivamente. La dorada se obtiene en el Sur de la Península y en Canarias, mientras el rodaballo se produce en Galicia y en la Costa cantábrica. Figura 30 España: Evolución de la producción de la acuicultura marina: peces, crustáceos y moluscos (ton), 1985-1995 16000 14000 Peces Crustáceos Moluscos 12000 10000 8000 6000 4000 2000 0 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). La producción de crustáceos está básicamente concentrada en la producción del cangrejo rojo, que representa el 93% del total de la producción, según los datos de la FAO. La evolución del subsector de crustáceos es la única que disminuye en la acuicultura marina, esto se debe básicamente a la producción del cangrejo rojo, que disminuye entre 1987 y 1991, cuando se estabiliza en una producción anual de 2.200 toneladas. La producción de moluscos, excluyendo el mejillón, se centra en la producción de ostras, almejas y berberechos, que juntos representan el 99% de la producción total de moluscos, encontrándose ubicados, básicamente, en las rías gallegas. 1 La moderna piscicultura marina aparece en España hace más de veinte años, constituyéndose en 1973 dos empresas pioneras que se dedicaron en sus comienzos a actividades de Investigación y Desarrollo. La actividad industrial del sector se ha iniciado apenas hace diez años (APROMAR, 1995). 43 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 44 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Si se compara el desarrollo de dichos cultivos con la UE se concluye que el sector español dispone de un gran potencial de crecimiento, incluso para ser líder del sector en Europa, aunque ha sido desperdiciado hasta ahora. Las ventajas españolas son propiciadas fundamentalmente por dos factores, según el informe de CES (1996): • al potencial de las costas y mares españoles, • y a las preferencias del consumidor español por consumir productos del mar. La existencia de una demanda fuerte de productos de la pesca en España es, sin duda, uno de los principales factores determinantes de su crecimiento y de la búsqueda de fuentes alternativas a la captura, como es la acuicultura. El sector de los cultivos marinos españoles creció enormemente entre 1985 y 1991. Este crecimiento fue sustentado básicamente por los incentivos de carácter financiero (subvenciones a la inversión en activos fijos otorgados por las Administraciones nacionales y comunitarias), CES (1996). Sin embargo, este éxito no se prolongó en los años 90 debido, según CES (1996) a la falta de una actividad previa de apoyo en I + D y a problemas derivados de la administración equívoca de los fondos de financiación. Según este mismo informe, la desorganización de las actividades de I + D era completa, pues se llegaron a validar los resultados obtenidos en otras regiones con especies parecidas, que no idénticas, a las que ahora se pretendía cultivar en nuestro entorno. Las facilidades financieras, debido a su falta de control y administración eficiente hicieron que gran parte de los recursos destinados a la producción fuesen en realidad utilizados por grupos empresariales con intereses únicamente especulativos. Estos grupos trataban de aprovecharse de las subvenciones, de las concesiones administrativas en terrenos públicos para llevar a cabo proyectos sin suficientes conocimientos ni experiencia previa en la actividad, todo ello sin arriesgar sus propios capitales (CES, 1996). A partir de 1990 comienzan a sentirse los primeros efectos de los problemas anteriormente mencionados, además comienzan a observarse los efectos perniciosos ocasionados al sector por la normativa vigente en materia de costas, los cuales contribuyeron a una contracción del sector. Esto ha tenido su reflejo en el cierre de más de la mitad de las instalaciones de engorde y de un número muy importante de criaderos (CES, 1996). Sin embargo, este comportamiento no ha sido generalizado sino que la evolución difiere en función de la especie cultivada. Las empresas del sector han optado por realizar una costosa labor de investigación, experimentación y desarrollo. Esto ha tenido diferentes resultados dependiendo del tipo de especie: • En el caso de la dorada, lubina y rodaballo se ha logrado culminar a nivel global con relativo éxito, permitiendo de esta manera el desarrollo de una actividad productiva de nivel industrial. • En el caso del langostino y de la almeja, el esfuerzo de investigación no se ha visto acompañado por una coordinación o racionalización de las actuaciones individuales que hubiera permitido rentabilizar su cultivo; se han quedado sin actividad el 90% de las empresas (APROMAR, 1995), y además, por sus características, requieren instalaciones que se han visto afectadas por la normativa de costas. 44 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 45 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Por otro lado, la producción acuícola continental está básicamente concentrada en la producción de la trucha arco iris, que corresponde al 99% del total de la producción. La producción de la trucha se desarrolla fundamentalmente en el tercio norte de la península. Como ya se observó, la producción acuícola continental, ha experimentado un aumento considerable desde 1985 hasta 1995, pasando de 16.216 toneladas a 22.153, lo que supone un incremento del 35% en el período y una tasa de crecimiento medio anual del 2,6%. A pesar de este crecimiento, merece la pena destacar que, en la acuicultura española, la acuicultura continental ha perdido importancia relativa en los últimos años, pues mientras que en 1995 representaba el 48% del total de la producción, en 1985 representaba el 77,5% del total de la producción acuícola. En la acuicultura continental la especie con mayor producción es la trucha arco iris, que mantiene un proceso productivo organizado y consolidado; concentrado, sobre todo, en el tercio norte de la península. Esto se debe sencillamente a la menor tasa de crecimiento de la producción acuícola continental respeto a la acuicultura marina. Uno de los problemas que la acuicultura continental viene sufriendo es el continuo aumento de los costes de producción que, dada la competencia internacional y al exceso de oferta, no ha podido ser transferido para los precios de venta, por lo contrario, los precios han ido decreciendo en los últimos diez años (CES, 1996). Figura 31 España: Evolución de la producción de la acuicultura continental y de la trucha (ton), 1984-1995 23000 Trucha Continental 21000 19000 17000 15000 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 45 46 40 16 — 56 245.655 —11 3.264 706 150 6 249.781 4.126 16.000 250 16.250 266.604 20.949 —11 —11 —11 —11 230.000 —11 3.000 295 —11 —11 233.295 3.295 13.812 150 13.962 247.422 17.422 17.000 350 17.350 270.294 24.839 245.455 —11 3.156 425 150 2 249.188 3.733 40 20 3.100 3.160 109 50 150 38 34 90 6 99 20 596 1987 17.500 450 17.950 271.291 28.281 243.010 —11 3.269 3.541 150 2 249.972 6.962 12 55 2.689 2.756 160 97 150 29 36 75 6 47 13 613 1988 18.000 463 18.463 223.367 30.357 193.010 —11 3.885 3.885 150 2 200.932 7.922 15 87 2.690 2.792 348 271 150 24 66 59 8 237 17 1.180 1989 18.000 350 18.350 205.020 31.720 173.300 —11 4.157 4.157 120 10 181.744 8.444 160 41 2.500 2.701 565 640 355 31 130 118 7 358 21 2.225 1990 18.000 396 18.396 226.641 31.421 195.220 —11 3.922 3.922 120 3 203.187 7.967 60 32 2.213 2.305 1.073 825 553 92 98 56 9 16 31 2.753 1991 18.483 403 18.886 171.823 32.913 138.910 —11 3.531 3.531 120 3 146.095 7.185 111 42 2.200 2.353 1.675 1.622 782 143 105 108 13 19 22 4.489 1992 19.689 400 20.089 128.021 37.540 90.481 3.185 3.581 3.581 110 5 100.943 10.462 130 55 2.000 2.185 2.014 1.539 562 370 175 110 12 19 3 4.804 1993 20.049 400 20.449 182.390 39.703 142.687 2.210 4.614 4.614 92 5 154.222 11.535 92 67 2.100 2.259 2.094 1.810 909 351 134 144 12 —11 6 5.460 1994 22.000 153 22.153 138.260 46.010 92.250 4.594 5.213 5.212 100 5 107.374 15.124 110 58 2.200 2.368 2.706 2.174 695 461 174 114 25 15 1 6.365 1995 Economía y gestión de la acuicultura 16.500 300 16.800 268.445 21.450 246.995 —11 3.174 693 150 2 251.014 4.019 —11 16 —11 16 124 40 150 31 26 165 10 60 9 615 1986 17/2/00 07:24 Fuente: AQUACULT-PC, marzo 1997, FAO (1998). 127 38 150 29 20 95 7 38 13 517 —11 —11 150 —11 15 —11 —11 —11 —11 165 1985 1984 Nombre científico Peces Dorada Sparus aurata Rodaballo Psetta maxima maxima Salmón Salmo salar Lubina Dicentrarchus labrax Anguila Anguilla anguilla Mugílidos Mugilidae Lenguado Solea vulgaris Túnicos Thunnus thynnus Seriola Seriola dumerili Subtotal Crustáceos Camarón Palaemon serratus Langostinos Penaeus japonicus Cangrejo rojo Procambarus clarkii Subtotal Moluscos Mejillòn Mytilus edulis Berberecho Cardium edule Ostra Ostrea edulis Almeja Ruditapes decussatus Vieira Pecten maximus Escupiña Veneridae Subtotal Subtotal-Mejillón Continental Trucha arco iris Oncorhynchus mykiss Tenca Tinca tinca Subtotal Total General Total General-Mejillón España: Evolución de la producción de los principales productos cultivados, toneladas, 1984-1995 Tabla 7 5878-II.Cap2 Página 46 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 47 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Resta destacar que tras el ingreso de España en la Unión Europea, la acuicultura española comenzó a acceder a subvenciones del FEOGA y otras ayudas como las del CDTI (Centro de Desarrollo Tecnológico e Industrial). España sufrió unos cuantos años caracterizados por ensayos y errores, realización de esfuerzos de I + D por parte de las empresas acuícolas sin la colaboración de los organismos oficiales de investigación, lo cual también ha contribuido a su declive. Por último, el estudio del CES (1996) destaca que el último Plan Sectorial de Pesca 1994-1999 está influyendo en el desarrollo de la acuicultura con la concesión de ayudas para el cultivo de nuevas especies, inversiones en infraestructuras ligadas al sector productivo, incorporación al sector de la acuicultura de la mano de obra excedente del sector de la pesca tradicional, etc. Como se puede observar en la tabla 8, la acuicultura española está bastante concentrada en pocas especies, pues el 83% de la producción corresponde apenas al mejillón (66,7%) y a la trucha arco iris (16,3%). Las 10 principales especies producidas son el mejillón, la trucha arco iris, la ostra, la almeja, el berberecho, la dorada, el Tabla 8 España: Principales especies cultivadas y sus competidores, 1995 Especie Producción (ton) 1995 Posición relativa* Competidores potenciales** 1. Mejillón 92.250 1.º (34%) Holanda (2) y Francia (3) 2. Trucha arco iris 22.000 8.º (6,2%) Francia (1), Chile (2), Dinamarca (3), Italia (4), USA (5), Alemania (6), Finlandia (7), Japón (9) y UK (10) 3. Ostra 5.213 1.º (60,4%) 4. Almeja 5.212 1.º (70%) 5. Berberechos 4.594 1.º (65,6%) 6. Dorada 2.706 4.º (11%) Grecia (1), Italia (2), Turquía (3) y Francia (5) 7. Cangrejo Rojo 2.200 2.º (7,6%) USA (1) y Costa Rica (2) 8. Rodaballo 2.174 1.º (73.3%) 9. Salmón 695 11.º (0,15%) 10. Lubina 461 7.º (2,4%) 138.260 17.º (0,5%) Total General Francia (2), Irlanda (3), UK (4) y Holanda (5) Portugal (2), Francia (3) e Irlanda (4) Francia (2) y UK (3) Francia (2) Noruega (1), UK (2), Chile (3) y Canadá (4) Grecia (1), Italia (2), Francia (3), Egipto (4), Israel (5) y Marruecos (6) Fuente: AQUACULT-PC, marzo 1997, FAO (1998). ** Posición relativa respecto al total mundial. Entre paréntesis, participación porcentual. ** Entre paréntesis se indica la posición relativa respecto a los demás países productores. 47 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 48 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI cangrejo rojo, el rodaballo, el salmón y la lubina. Juntos representan el 99,5% de toda la producción acuícola española. Cada una de estas especies tiene una problemática específica, por lo que se analizarán a continuación las más importantes, destacando la capacidad competitiva internacional. España es el principal productor mundial de mejillones, seguido de Holanda y Francia, sus principales competidores. La producción española representa el 34% de la producción mundial, que sirve para atender al mercado interno y para exportación. El mejillón, como se ha visto, es el principal producto de la acuicultura española representando en 1995 el 66,7% de la producción total, convirtiéndose, después un largo período de experiencia en el cultivo más consolidado y maduro de los que se practican en la actualidad (Ruiz Molina, 1997). El cultivo del mejillón, que se concentra en las rías gallegas, tuvo su inicio en los años cuarenta, su desarrollo desde mediados de los sesenta a mediados de los 70, y su consolidación productiva en los años 80 y 90 con una fuerte modernización tecnológica del proceso productivo. Sin embargo, como se puede observar en la figura 27, la evolución experimentada en los últimos 12 años, desde cuando se dispone de datos, refleja la existencia de dificultades. En efecto, la producción del mejillón ha disminuido constantemente desde 1988, cuando la producción alcanzaba 271.000 toneladas (el máximo histórico), hasta 1995, cuando se produjeron apenas 92.000 toneladas. Según Ruiz Molina (1997) y el informe del CES (1996), las causas que han provocado este comportamiento crítico en el sector son, por un lado, la producción del mejillón con alto índice de toxinas y los problemas zoosanitarios y ecológicos y, por otro, la falta de política de comercialización adecuada para el sector, la falta de calidad del producto, sin diferenciación, la reducción del precio y la saturación del mercado. Todo eso ha llevado a una pérdida de mercado, al descrédito por parte del consumidor y a la pérdida de calidad. Todo eso lleva el sector a un punto de crisis profunda que puede conducir a su hundimiento, con consecuentes impactos socioeconómicos en las rías gallegas, si no se toman medidas adecuadas para el desarrollo futuro. En relación a la trucha, el segundo producto acuícola, el interés de los piscicultores ha sido posible gracias a la facilidad de domesticación y de alimentación. Se adapta muy bien al cultivo intensivo y es capaz de soportar altas densidades por metro cuadrado. Es rústica, resistente a muchas enfermedades y presenta una tasa de crecimiento muy elevada. Por estas razones la trucha es uno de los pescados más cultivados en todo el mundo, siendo España el octavo productor mundial, con una parcela de producción del 6% en 1995. Por delante de España están, en orden de producción, Francia, Chile, Dinamarca, Italia, EUA, Alemania y Finlandia. El principal problema de la trucha en España, según la OPAC (1997) (Organización de Productores de Acuicultura Continental) se refiere al proceso de comercialización, que se realiza mayoritariamente en fresco y se presenta el producto habitualmente entero. Aunque la calidad del producto en origen es buena, la puesta del mismo en los mercados, no siempre da un nivel de calidad uniforme. 48 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 49 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Con el objetivo de superar estos problemas, la OPAC propone una política cuya medida básica es el procesado de la trucha a fin de ofrecer una variada gama de productos que permitan al consumidor elegir aquellos que mejor se adapten a sus hábitos de consumo, entre los cuales se señala: Trucha viscerada (fresca o congelada), filete de trucha, trucha sin espina, trucha gorda (en rodajas o filetes), caviar de trucha, paté de trucha y trucha ahumada. Con esto se espera mejorar el proceso de comercialización y de mantenimiento de la calidad de los productos. A nivel internacional, los principales competidores son los productores europeos que, sin embargo, no representan ninguna amenaza al productor español, porque gracias a los mejores costes de mano de obra, impuestos y transporte, se accede a estos mercados con mayor competitividad que el productor local. Además, en relación a los productores del este europeo y de Iberoamérica (Chile), la calidad del producto español le permite ser más competitivo, OPAC (1997). Como se observa en el cuadro anterior, España es el mayor productor de ostra, produciendo el equivalente al 60% de la producción mundial, seguido por Francia, Irlanda, Reino Unido y Holanda. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la ostra considerada es del tipo «ostrea edulis» (european flat oyster), un tipo distinto, pero competitivo, al producido por Francia: «Crassostrea gigas» (Pacific cupped oyster), el mayor productor de ostras del mundo. La producción francesa alcanzó en 1995 el volumen de 130.000 toneladas, frente a las 5,2 mil toneladas españolas. Por lo tanto, es una producción muy pequeña y que debería ser mejor explotada. Figura 32 España, Italia, Grecia y Francia: Evolución del precio medio de la tonelada de dorada, en dólares, 1984-1995 25.000 España Italia Grecia 20.000 Francia 15.000 10.000 5.000 - 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). 49 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 50 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La dorada y la lubina, productos de gran valor en el mercado, están entre los principales productos cultivados en España. Sin embargo, los productores nacionales se enfrentan con la competencia de Grecia, Italia, Turquía y Francia, algunas veces superior, especialmente en el caso de Grecia, el principal productor mundial en las dos especies, considerado más competitivo. La ventaja de Grecia no se evidencia en el precio medio de la tonelada, como se puede observar en la figura 32, donde el nivel de precio de la dorada en España no se diferencia mucho del griego; por el momento, el español es ligeramente mayor. Por el contrario, la ventaja de Grecia, según el informe CES (1996), está en los recursos naturales y en los incentivos institucionales. El conglomerado de islas griegas conforman un conjunto de enclaves protegidos de las inclemencias del mar, que permite desarrollar el cultivo de forma relativamente barata. Sin embargo, los incentivos institucionales, según dicho informe, son los fundamentales para esta mayor competitividad, pues los productores griegos disponen de legislación que impulsa y favorece el desarrollo de su acuicultura y se han visto favorecidos por créditos subvencionados por parte de un banco oficial, el Banco Agrícola de Grecia. 2.2.4. Relación entre la acuicultura y la producción total de pescado. Principales productos Claramente, la acuicultura ha ido ganando terreno a las capturas, en los principales productos. En 1995, la totalidad de la producción de mejillón, trucha, salmón y prácticamente, la ostra, procedía de la acuicultura. Entre 1985 y 1995, el crecimiento de la proporción de la acuicultura sobre el total de la pesca, para determinadas especies, ha sido espectacular. Como se observa en la tabla 9, tal ha sido el caso de las almejas, los berberechos, la dorada o el rodaballo cuya producción, en 1995 ya estaba prácticamente copada por la acuicultura, mientras que, en 1984, no existía acuicultura en estas especies o si existía, era ínfima. En tan sólo dos productos: el cangrejo rojo y la lubina, la proporción de capturas es superior a la de la acuicultura. 2.3. Comercio exterior de productos pesqueros 2.3.1. España en el comercio mundial de pescado España juega un papel fundamental en el comercio internacional de pescado. En 1995, la economía española representó el 5,79% del volumen total del comercio internacional de pescado primario, lo que representa una cifra un 11% mayor que la correspondiente al año 1990 y un 92% mayor que la correspondiente al año 1985 (Fig. 33). Esto no es sino resultado de un crecimiento constante a lo largo del pe50 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 51 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 9 España: Participación porcentual de la producción acuícola de las principales especies en el total de la producción española de estos pescados, toneladas, 1984-1995 Año Mejillón Trucha Ostra Almejas Berberecho Dorada Cangrejo rojo Rodaballo Salmón Lubina 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 100 100 98 99 99 99 100 99 100 100 100 100 77 94 92 92 92 92 100 100 100 100 100 100 90 92 97 97 99 99 99 100 89 99 99 98 16 30 80 39 100 90 90 89 89 90 92 93 0 0 0 0 0 0 0 0 0 80 74 92 0 18 42 100 25 41 48 65 74 80 80 82 0 0 0 62 50 45 42 37 37 33 35 37 0 20 15 19 28 58 76 80 87 86 87 89 100 100 100 100 100 100 100 100 100 100 100 100 0 8 7 9 6 5 5 18 28 40 35 42 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Figura 33 Participación porcentual del volumen total del comercio de pescado de España sobre el total del comercio mundial y de la UE, 1985-1990-1995 14 12 10 8 6 4 2 0 12,17 8,63 6,43 4,53 5,79 Esp/Mundo Esp/UE 3,02 1985 1990 1995 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). ríodo 1984-1995 (con la excepción de 1994, año en que se produjo una caída del 12%, como se puede observar en la Fig. 34). Sin embargo, su importancia relativa es mucho mayor cuando la comparación se limita a la Unión Europea, porque la cifra de participación de España en el volumen total de comercio internacional (intra y extra comunitario) de pescado de la Unión Europea alcanza el 12,17% en 1995, que es un 41% mayor que la participación relativa en 1990 y un 89% que la de 1985. 51 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 52 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 34 España: Evolución de la participación porcentual en el comercio mundial de pescado (en volumen, ton), 1984-1995 7,0 6,0 5,0 4,0 3,0 2,0 1,0 0,0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Es importante considerar que los datos anteriores se refieren a toneladas, porque cuando se considera en valores monetarios, estas participaciones suben, en 1995, hasta el 5,71% y el 13,27%, respectivamente. Sin embargo, a lo largo del período de análisis se constata una reducción de la participación de España en el comercio internacional a partir de 1992, recuperándose parcialmente en 1995, pero todavía por debajo de la participación porcentual de 1992. En relación a la Unión Europea, la participación española crece a lo largo de todo el período, lo que significa que el volumen de comercio internacional de pescado de España creció por encima de la media del crecimiento de la Unión Europea. Este hecho indica que el precio medio por tonelada de España es mayor que el promedio de la Unión Europea y del Mundo. En consecuencia, se podría pensar que la participación española en el comercio internacional se centra en los productos de mayor calidad o de mayor demanda internacional2. España ostenta, por tanto, una posición relativa importante en el comercio internacional de pescado primario; posición que se debe, sobre todo, a su papel como gran importador mundial de pescado. 2 En relación a los precios internacionales es interesante destacar que, excepto en las regiones de América Latina y Caribe, Oceanía y África, en todas las demás regiones analizadas, es decir, España, Unión Europea, Asia, China y América del Norte, los precios por tonelada de las importaciones son mayores que los de las exportaciones. Por ejemplo, en España el precio de la tonelada importada es un 57% mayor que el de la exportada, mientras la media mundial es tan sólo un 50% mayor. 52 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 53 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 35 Participación porcentual de España en el valor total del comercio de pescado en el mundo y en la UE (US $ 1.000), 1985-1990-1995 14 13,27 12 Esp/Mundo 10 Esp/UE 11,77 8 6 6,36 5,49 4 5,71 2,96 2 0 1985 1990 1995 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Figura 36 España: Evolución de la participación porcentual en el valor del comercio mundial de pescado (en US$), 1984-1995 8,0 7,0 6,0 5,0 4,0 3,0 2,0 1,0 0,0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). En 1995, en relación al resto del mundo y considerando los datos en toneladas, mientras las exportaciones españolas representaban el 2,69% del total de las exportaciones mundiales, sus importaciones representaban el 9,49% del total de las importa53 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 54 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ciones mundiales. Esta participación es mayor, prácticamente el doble, cuando la comparación se refiere a la Unión Europea, pues la participación relativa de las exportaciones se eleva al 6,1% y de las importaciones al 18,5%. No existen alteraciones importantes cuando se analizan los datos en unidades monetarias para el año 1995. Sin embargo, cuando se analiza la evolución de la participación del comercio español de pescado en el total mundial, como se puede observar en la figura anterior, se constata que la participación de las exportaciones españolas, medidas tanto en toneladas como en unidades de valores, es prácticamente constante a lo largo del período de 1984-1995 en relación a las exportaciones mundiales. El dato se pone en evidencia cuando el análisis recae sobre las importaciones, puesto que se observa una tendencia creciente hasta 1992 si lo consideramos en unidades monetarias y hasta 1993 en toneladas. En relación a los datos en unidades monetarias, en 1992 se alcanza un máximo histórico en el que las importaciones españolas de capturas de pescado primarias llegan a representar el 11,8% del total de las importaciones mundiales, disminuyendo después para un 8,5% en 1994 y recuperándose ligeramente en 1995 (9,1%). Por otro lado, en relación a los datos en toneladas, el máximo histórico se alcanza un año después, en 1992, con las importaciones españolas representando el 10,3% del total de las importaciones mundiales; después, sufre un proceso de reducción hasta el 9,5% en 1995. Con estos datos se constata que España es un importador neto de pescado primario y uno de los principales países importadores de pescado considerando los datos tanto en toneladas y como en unidades monetarias. Figura 37 España: participación porcentual en el volumen (ton) y valor (US $) de las exportaciones e importaciones mundiales de pescado, 1984-1995 14,0 12,0 10,0 Exp-ton Imp-ton Exp-$ Imp-$ 8,0 6,0 4,0 2,0 0,0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Obs: Exp-ton: Exportaciones medidas en toneladas. Exp-$: Exportaciones medidas en unidades monetarias. Imp-ton: Importaciones medidas en toneladas. Imp-$: Importaciones medidas en unidades monetarias. 54 94 95 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 55 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 38 España: participación porcentual en el volumen (ton) y valor (US $) de las exportaciones e importaciones de la UE de pescado, 1984-1995 25,0 20,0 Ex-ton Im-ton Ex-$ Im-$ 15,0 10,0 5,0 0,0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). Obs: Exp-toneladas: Exportaciones medidas en toneladas. Exp-$: Exportaciones medidas en unidades monetarias. Imp-toneladas: Importaciones medidas en toneladas. Imp-$: Importaciones medidas en unidades monetarias. En relación a la Unión Europea, los datos de importación de España son todavía más impresionantes, pues en 1995 llegaron a representar el 20,7% de las importaciones totales de la UE medidas en unidades monetarias y el 18,5% de las importaciones medidas en toneladas. A lo largo del período de 1984-1995 la tendencia es creciente, a igual que en relación a la participación en las importaciones totales, experimentando un pequeño declive en 1994 y posterior recuperación en 1995. Estos datos ponen de manifiesto que el nivel de consumo interno creció más rápidamente que la producción tanto interna como externa y que la demanda española creció más rápido que la oferta mundial de pescado. 2.3.2. Comercio de productos piscícolas sobre el total de alimentos Analizamos el volumen de comercio medio de pescado de España, entendido como la media de la suma de importaciones y exportaciones, a semejanza del análisis realizado a nivel mundial. Si volvemos a la figura 5 (capítulo 1), se observa que el volumen de comercio español presenta una clara tendencia de crecimiento a lo largo del período de 19841995, siendo incluso superior a la media mundial y a la de la Unión Europea. El volumen de comercio de 1995 es un 174% superior que el de 1984, muy por encima del volumen total de comercio mundial que es de apenas 28% y de la Unión Europea 55 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 56 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI que es de 17%. Este indicador sólo es superado por China. Este hecho se ve reflejado en la tasa media de crecimiento del volumen de comercio, donde la española es del 10,3%, superior a la media mundial, del 2,7%, y a la de la UE, del 2,6%, y apenas inferior al de la China, que creció a un ritmo del 13% medio al año. Como en el caso anterior, pero de forma más acentuada, hay que destacar el crecimiento sustancial del volumen de comercio de España, con una pequeña reducción entre 1992-1995, que no impide que se sitúe por encima de los grupos o países considerados en este análisis. El nivel medio de crecimiento del volumen de comercio medido en unidades monetarias es de alrededor del 24%, el doble de la media mundial y mucho mayor que el de la UE (9,7%) e incluso de China (17%). El volumen de comercio internacional de pescado de España creció, tanto en términos físicos como monetarios, principalmente en el período que transcurre entre la segunda mitad de los años 80 hasta 1992. A partir de este período, el índice de volumen físico se estabilizó, y el medido en unidades monetarias presentó una pequeña fluctuación, cayéndose en 1993, estabilizándose en 1994 y recuperándose en 1995, pero todavía a un nivel menor que el de 1992. La participación del comercio de pescado en el comercio de alimentos presenta, para el caso de España, una trayectoria ascendente de crecimiento en el período entre 1985-1989, fecha en la que se inicia una caída que continuará hasta 1995. Sin embargo, el nivel medio de la relación entre el comercio de pescado y de alimentos a lo largo del período es del 24% al año, nivel sólo inferior al del continente asiático, que es del 31,5%, pero por encima de la media mundial y de la Unión Europea. Esta mayor participación española en el comercio de pescado derivado de sus importaciones, es reflejo de la importancia del pescado en la dieta del español que es superior al de la media de la Unión Europea. Como quedaba patente en la figura 9 (capítulo 1), España ha experimentado un crecimiento espectacular de las importaciones de pescado, muy por encima de las demás regiones. Como en el caso del volumen medio de comercio medido en unidades monetarias, este acelerado crecimiento ocurrió especialmente entre los años de 1984-1992, con una pequeña tendencia a la baja hasta 1994, recuperándose en 1995, aunque a un nivel inferior al de 1992. El ritmo de crecimiento de las importaciones en unidades monetarias es superior al crecimiento de las importaciones en unidades físicas. Y, en aquellos países donde este ritmo es mayor que el de la media, como es el caso típico de España, puede estar representando un cambio en la estructura de las importaciones hacia productos pesqueros de mayor valor en el mercado. Como se destacó y puede ser observado en la figura 10 (capítulo 1), el comportamiento de la relación entre las importaciones de pescado y de alimentos de España es similar al del nivel mundial medio de comercio. Es decir, una trayectoria semejante a una parábola con un punto de máximo, igual al de inflexión, siendo en el año 1989 donde el 34% de las importaciones de alimentos es de pescado; nivel no alcanzado por ninguna de las zonas o países estudiados. La relación media entre las 56 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 57 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI importaciones de pescado y de alimentos de España, entre el período 1985-1995, es del 29,3% al año, superior a la media mundial que es del 14,4%. Comparando las figuras 10 y 13 con la 7 (capítulo 1), se observa que la curva que representa la evolución de la relación entre las importaciones de pescado y de alimentos para España (Fig. 10) es idéntica a la curva que representa la relación entre el comercio medio total de pescado y alimentos (Fig. 7). Esto indica que el comportamiento del volumen medio de comercio de pescado de España está determinado por el comportamiento de las importaciones, lo que viene a indicar que es un país con una vocación importadora de pescado. Como quedaba recogido en la figura 12 (capítulo 1), España ha experimentado el mayor crecimiento de las exportaciones, respecto al resto de regiones. En 1995 las exportaciones españolas de pescado, medidas en unidades monetarias, alcanzaron un nivel 515% mayor que las exportaciones de 1984, con una tasa media de crecimiento del 20% al año, nivel de crecimiento sólo equiparado por China, con una tasa media de crecimiento anual del 17% en el mismo período. Respecto a las exportaciones de alimentos, las exportaciones españolas de pescado mantuvieron, a lo largo del período entre 1985-1995, un comportamiento oscilante alrededor del 10% de las exportaciones de alimentos, muy por debajo de la media mundial, que es del 14,3% al año, pero por encima de la media de la UE, el 6,8% al año. En relación al saldo comercial de pescado primario, España es deficitaria tanto en términos de unidades físicas como monetarias, lo que viene a reforzar la idea ya mencionada de que España es un importador neto de pescado. Este déficit alcanzó, en 1995, el 155.990 toneladas con un valor equivalente a 675.000 miles de dólares, valores que son los mayores en términos de unidades físicas, pero inferior al déficit de Asia en términos monetarios. El déficit de España, en términos de toneladas, presenta una tendencia creciente hasta 1993, para después disminuir ligeramente hasta 1995; en términos de unidades monetarias, el comportamiento es similar situándose el punto de inflexión en 1992. Considerando la tasa de penetración de las importaciones, indicador que suele ser utilizado para representar el nivel de competitividad de un determinado sector de una economía: cuanto mayor es la tasa de penetración de las importaciones, menor es el nivel de competitividad de este sector en la economía internacional. Los productores externos son más competitivos, por esto conquistan mayores parcelas del mercado doméstico, lo que, por otro lado, implica que el productor doméstico no tiene suficiente capacidad para atender las necesidades de la demanda interna. Como puede observarse en la figura 39, España es el país que presenta mayores niveles de crecimiento de la tasa de penetración de las importaciones en relación a los demás grupos, cuadruplicándose a lo largo del período. Esto puede indicar que la producción interna no ha sido suficiente para atender al crecimiento de la demanda, haciendo que los españoles busquen atender su demanda en el mercado exterior. Esto también ayuda a explicar porqué la participación del comercio en la producción de España tiene una tendencia creciente, como fue visto anterior57 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 58 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 39 Evolución de la tasa de penetración de las importaciones, por regiones, 1984-1995 25,0 20,0 España U.E. 15,0 Asia China A.Norte 10,0 5,0 0,0 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la FAO (1998). mente. Por otro lado, sugiere la incapacidad de la producción doméstica para atender a la demanda doméstica, lo que puede ser explicado por la reducción de la oferta doméstica de pescado, tanto capturados como los cultivados en piscifactorías. Finalmente, considerando la relación entre comercio de pescado primario y su producción se constata que, en 1995, el comercio de España representaba el 11,91% de su producción, por debajo de la media de la Unión Europea, que es de 15,93%, pero muy por encima de la media mundial. Como se comentaba en el análisis de la situación mundial, España presenta una tendencia creciente de la proporción de la producción que se dedica a los mercados internacionales. 2.3.3. Principales productos comercializados Hemos visto que España es un gran importador de productos primarios de la pesca, con una participación importante en las importaciones de la UE, representando de media el 27% y el 13% de las importaciones en toneladas de pescado y de crustáceos y moluscos de la UE, respectivamente; y el 29 y el 12% de las importaciones en términos monetarios de pescado y de crustáceos y moluscos de la UE. España tiene un comportamiento muy particular, que difiere de la media mundial. En principio, se observan grandes fluctuaciones en la estructura de las importaciones, especialmente en términos de valores monetarios, con varios puntos de inflexión. Alrededor del 50% de estas fluctuaciones se refieren, a lo largo de todo el período, a los dos grupos de productos primarios de la pesca, con un promedio del 58 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 59 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 49% para las importaciones de crustáceos y moluscos y del 51% para las de pescado, entre 1980-1995. Sin embargo, estas fluctuaciones constantes no son observables cuando las importaciones están medidas en toneladas, apreciándose fundamentalmente a partir de 1985 un crecimiento de las importaciones de pescado mayor que de las importaciones de crustáceos y moluscos. Los principales productos importados por España son los de la partida arancelaria 0306.13 (camarones, langostinos, quisquillas y gambas), 0303.78 (merluza), 0307.49 (calamares, jibias y potas), 0303.42 (atunes de aleta amarilla) y 0303.43 (listados o bonitos de vientre rayado). En relación a las exportaciones se constata un cambio muy importante en la estructura de las exportaciones de productos primarios de la pesca, pues en la mitad de los años 80 España deja de ser un exportador especializado en crustáceos y moluscos para especializarse en pescados. En 1980, el 70% de las exportaciones en unidades monetarias y el 62% de las exportaciones en toneladas eran de crustáFigura 40 España: Evolución de la distribución del comercio mundial de pescado y de crustáceo y molusco 1980-1995 1.00 1.00 0.80 0.60 MMTP 94 92 90 88 94 92 90 88 86 84 0.00 82 0.20 0.00 80 0.20 1.00 MMTCM 0.40 86 M$P 0.40 84 M$CM 82 0.60 80 0.80 1.00 0.80 0.80 0.60 XMTP 94 92 90 88 86 94 92 90 88 86 0.00 84 0.20 0.00 82 0.20 80 XMTCM 0.40 84 X$P 0.40 82 X$CM 80 0.60 Fuente: FAO, FISHCOMM-PC (julio 1997). Obs: M$CM: Importación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. M$P: Importación de pescado en unidades monetarias. MMTCM: Importación de crustáceos y moluscos en toneladas. MMTP: Importación de pescado en toneladas. X$CM: Exportación de crustáceos y moluscos en unidades monetarias. X$P: Exportación de pescado en unidades monetarias. XMTCM: Exportación de crustáceos y moluscos en toneladas. XMTP: Exportación de pescado en toneladas. 59 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 60 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ceos y moluscos; en 1995 esto cambió radicalmente, pues apenas el 37% de las exportaciones en unidades monetarias y el 30% en toneladas eran en crustáceos y moluscos. Entre los productos de la pesca exportados por España destaca, en primer lugar, los de las partidas 0303.42 (atunes de aleta amarilla), seguido de 0307.49 (calamares, jibias y potas), 0303.78 (merluza), 0303.43 (listados o bonitos de vientre rayado) y 0307.31 (mejillones) que, como se mencionaba anteriormente, es uno de los principales productos de la acuicultura española. 2.4. Modelo de predicción de la demanda de pescado en España En este apartado se hará un modelo de predicción de la demanda de pescado en España a partir de la estimación de una función de demanda. La función de demanda será estimada a través de un modelo econométrico y tendrá la forma tradicional de las funciones de demanda, es decir, determinada por el precio del propio bien, por el precio de los productos concurrentes y por la renta. Una vez estimado el modelo y con base en los resultados encontrados, se hará una simulación de la demanda futura entre 1997 y 2005. Esta simulación será realizada con base en tres escenarios, uno de crisis y otro de crecimiento económico, el tercero con base en la tendencia actual y, el último, suponiendo una situación de agotamiento de los caladeros. En un último apartado de esta sección se hará también una especulación sobre la participación de la acuicultura en cada uno de estos escenarios, considerándola siempre como un residuo ya que es imposible calcular una función de demanda específica para la acuicultura. 2.4.1. Explicación del modelo El modelo de estimación de la demanda del pescado, para su proyección futura, es un modelo tradicional de la demanda, que utiliza como variables explicativas indicadores del precio, tanto del precio del propio bien objeto de la estimación de la demanda como del precio de los productos competidores (demás alimentos) y de la renta. Es decir: Di = f (Pi, Pj, R) [1] con: Pi es el precio del propio bien; Pj el precio de los bienes competitivos; R la renta. El precio del propio bien representa variaciones en la propia demanda explicada por variaciones en sus precios. El precio de los productos concurrentes expresa 60 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 61 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI el efecto sustitución, es decir, a cualquier aumento del precio de un producto, para mantener el nivel de consumo y de renta real, los consumidores tienden a sustituir este producto por otro sustituto que ha mantenido el precio constante o aumentado menos. La renta explica la capacidad de la población en demandar los productos, cuando mayor la renta, se espera un mayor consumo. Para la estimación de la demanda de pescado para España se utilizarán variables con el objetivo de representar, lo más fielmente posible, los tres componentes explicativos de la demanda expresos en la ecuación anterior y también la demanda. Como variable dependiente, es decir, la demanda, se utilizará el Consumo Aparente (CA), que se define como el volumen total de la producción más las importaciones y menos las exportaciones, en toneladas. Esta variable expresa el volumen total consumido al año, lo que representa fielmente la cantidad demandada por los españoles. Como variables explicativas, es decir, las que representan los precios y la renta, se utilizarán las siguientes: la Renta per Cápita (RP), la tasa de crecimiento de la Población (P), el índice de precio del pescado fresco y congelado (PB) y el índice de precio de los demás alimentos (PA)3. La estimación de la demanda de pescado para España y su simulación futura será elaborada a través de un modelo econométrico tradicional, con estimador de mínimos cuadrados lineal. El modelo econométrico que se pretende estimar tiene la siguiente forma funcional: CA = f (RP, P, PP, PA, ε) [2] Donde CA es el consumo aparente de pescado, el RP es la renta per cápita, el P es la tasa de crecimiento de la población, PP el precio del producto, PA el precio de los productos competitivos y el error. La serie que se utilizará para el pescado corresponde al período entre 1976 y 1996, porque los datos referentes a los índices de precios son publicados por el INE a partir de esta fecha y porque no se dispone de los datos de producción y comercio de pescado para España para 1997. 2.4.2. Resultados En esta sección se presentarán los resultados de las estimaciones econométricas para las funciones de demanda de pescado. Para el modelo de estimación de la función de demanda de pescado para España las estimativas obtenidas a partir del software Eviews para la ecuación 2 son las siguientes: 3 Definición de las variables y la respectiva serie de datos disponible en el anexo C. 61 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 62 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 10 Coeficientes estimados del primer modelo de predicción Variable C RP PA PP POB R2 F-estad. Coeficiente 6.361,87 –0,58 7,59 4,28 –0,13 0,72 10,71 t-estadístico 0,63 0,48 0,77 0,46 Como se puede observar, los coeficientes estimados referentes a las variables de renta per cápita, población y precio del pescado tienen un signo contrario al esperado teóricamente. Se espera que tanto el aumento de la población como de la renta per cápita indique también un aumento de la demanda de pescado, así como un aumento de los precios del pescado indique una disminución de la demanda, relaciones que no se observan en la estimación anterior. Dados estos resultados se decidió estimar una vez más la función de demanda excluyendo la población, porque se observa que ésta presenta una tendencia a disminuir su tasa de crecimiento mientras el consumo de pescado aumenta (segundo modelo de predicción). Los resultados de la nueva estimación son los siguientes: Tabla 11 Coeficientes estimados del segundo modelo de predicción Variable C RP PA PP R2 F-estad. Coeficiente 1,081,95 0,20 6,66 –2,26 0,71 13,58 t-estadístico 0,34 0,65 –0,20 Como se observa4, las variables explicativas presentan el signo esperado, es decir, a una variación positiva de la renta y del precio de los productos competidores, mayor la demanda de pescado, y a una variación positiva del precio del pescado, menor la demanda. La variable con mayor impacto en el volumen demandado de pescado es el precio de los productos competidores, pues una variación positiva unitaria en el 4 En anexo se presentan las salidas del software Eviews, utilizado para la estimación de la función de demanda de pescado para España. 62 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 63 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI índice de precio de los productos competidores aumenta la demanda de pescado en 6,6 mil toneladas, que, para el caso del índice de precio del propio bien produciría una disminución de 2,3 mil toneladas. Es decir, la demanda de pescado es más sensible a fluctuaciones en los precios de los productos competidores que del propio precio del pescado. Por otro lado, la demanda de pescado es poco sensible a fluctuaciones en la renta per cápita, pues una variación de 1000 pesetas en esta variable apenas aumentaría la demanda en 0,2 mil toneladas. Este hecho se debe a que la renta per cápita ha aumentado más que proporcionalmente a la demanda de pescado en los últimos años, que como sabemos estuvo limitado por el lado de la oferta doméstica. 2.4.3. Proyecciones Con las ecuaciones estimadas y debidamente ajustadas para que los estimadores no sean sesgados se harán proyecciones futuras con base a los resultados encontrados (Tabla 9). Se hará una simulación sobre la evolución futura de la demanda de pescado para España entre 1998 y 2005. Se simulará con base en cuatro escenarios: 1. Escenario medio, donde las tendencias actuales se mantienen en el futuro. 2. Escenario de crisis, suponiendo una disminución del nivel de crecimiento de las variables explicativas, especialmente la renta per cápita y la tasa de crecimiento de la población5, en relación a los actuales. 3. Escenario optimista, donde se supone un crecimiento de la renta per cápita y de la población mayor que el actual. 4. Escenario de agotamiento de los caladeros y la consecuente disminución de la oferta y aumento de los precios del pescado. Antes de seguir con los escenarios, es importante, a modo de recordatorio, destacar que en la estimación de la función de la demanda de pescado en España la variable con mayor impacto sobre fluctuaciones de la demanda es el precio de los productos competidores, seguido del precio del pescado y de la renta per cápita. Escenario 1: Tendencia actual El escenario 1 es aquel construido con base en la extrapolación futura de las tendencias actuales de las variables explicativas. El estudio de la tendencia demuestra que hay una tendencia de crecimiento para todas las variables independientes, pero a tasas cada vez menores, como se puede observar en la tabla 12. Merece destacar el hecho de que la tasa de crecimiento del índice de precio del pescado sea mayor que la de los alimentos, con lo cual, al final del período 2005, los dos índices son prácticamente iguales, ya que en el inicio del período 1996, el índice de precio de los alimentos era mayor que el del pescado. 5 Existe una previsión del crecimiento de la población española, elaborado por el INE, hasta 2045. 63 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 64 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 12 Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Tendencia actual C 1.091,845 Coeficiente 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 RP 0,198577 PA 6,660049 PP –2,261044 Demanda 1.393,11 1.393,11 1.416,51 1.439,90 1.463,29 1.486,68 1.510,08 1.533,47 1.556,86 1.580,25 113,48 114,46 118,76 123,07 127,37 131,67 135,98 140,28 144,59 148,89 106,04 112,22 116,81 121,41 126,01 130,60 135,20 139,80 144,39 148,99 1.884,48 1.877,05 1.899,97 1.922,89 1.945,80 1.968,72 1.991,63 2.014,55 2.037,47 2.060,38 RP, en mil pesetas; PA y PP, índices de precios y demanda en mil toneladas. La renta per cápita seguirá creciendo a una tasa de 1,6% al año, con una ligera disminución hasta alcanzar el 1,5% en 2005. En anexo se presentarán todas las ecuaciones de tendencia de cada una de estas variables. Como resultado, y como se observa en la figura 41, la tendencia de crecimiento de la demanda de pescado también se mantiene en estos ocho años futuros. El volumen de demanda estimado pasa de 1,88 millones de toneladas, en 1996, a 2,06 millones de toneladas en 2005, lo que significa un volumen 9,3% mayor y una tasa media de crecimiento en estos ocho años del 1,12% al año. Figura 41 España: demanda futura de pescado: tendencia actual 2.200 2.000 1.800 Realizado Estimado 1.600 1.400 1.200 1.000 76 78 64 80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 65 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Escenario 2: de Crisis En este escenario se reflejará una situación futura de estancamiento e inflación en la economía española, es decir, que no se registra ningún crecimiento de la renta per cápita y que los precios crecen a tasas constantes (3% el índice de precio de los alimentos y 4% el índice de precio del pescado) entre 1997 y 2005. Los valores de las variables independientes y la correspondiente demanda están representados en la tabla 13, y la demanda futura consecuente en la figura 42. Tabla 13 Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de crisis C 1.091,845 Coeficiente 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 RP 0,198577 PA 6,660049 PP –2,261044 Demanda 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 113,48 114,46 117,89 121,43 125,07 128,82 132,69 136,67 140,77 144,99 106,04 112,22 116,71 121,37 126,23 131,28 136,53 141,99 147,67 153,58 1.884,48 1.877,05 1.889,77 1.902,77 1.916,06 1.929,63 1.943,50 1.957,66 1.972,12 1.986,89 RP, en mil pesetas; PA y PP, índices de precios y demanda en mil toneladas. Figura 42 España: demanda futura de pescado (1997-2005): escenario de crisis 2.200 2.000 1.800 Realizado Estimado 1.600 1.400 1.200 1.000 76 78 80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 65 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 66 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Como se observa, a pesar de este entorno adverso que combina estancamiento con inflación, la aplicación al modelo base produce un resultado surprendente, es decir, el nivel de demanda del pescado sigue aumentando, aunque a tasas cada vez menores. El volumen de demanda estimado pasa de 1,88 millones de toneladas, en 1996, a 1,99 millones de toneladas en 2005, lo que significa un crecimiento del 5,4% en estos ocho años, a una tasa media del 0,7% al año. Este resultado se debe, sobre todo, al efecto sustitución que produce el nivel de aumento de los precios de los productos competidores, es decir, de los demás alimentos, que se supone como hipótesis de este escenario. La sensibilidad detectada en el resultado estimado a fluctuaciones en los precios de los productos competidores es mayor que a variaciones en el precio del propio pescado. Esto puede significar una alta preferencia del español por consumir pescado frente a los demás alimentos, puesto que su disposición para sustituir otros alimentos por el pescado es mayor que el caso contrario. Sin embargo, este escenario es el menos probable de ocurrir porque implicaría una combinación de estancamiento de la renta per cápita con aumento de los niveles de precio bastante improbable en la actual situación macroeconómica de España. En todo caso, la demanda de pescado sólo vendría a disminuir si, suponiendo que la renta per cápita no crezca, el nivel de aumento del precio del pescado sea 3 veces superior al aumento de los precios de los demás alimentos, situación bastante improbable, especialmente la de estancamiento del nivel de crecimiento de la renta per cápita. Escenario 3: de Crecimiento En este escenario se supone una aceleración del nivel de crecimiento de la renta per cápita y una disminución del crecimiento de los precios de los productos, es decir, crecimiento con estabilidad de los precios. Las hipótesis son de que la renta per cápita pasa a crecer un 4% al año, los precios de los alimentos un 0,5% al año y el precio del pescado un 1% al año. Las estimaciones de la demanda futura de pescado con base en estas hipótesis son presentadas en la tabla 14 y en la figura 43. Como se observa, la demanda sigue creciendo, pero en un nivel inferior al del escenario 1 y equivalente al escenario de crisis. Esta aparente paradoja es explicada exclusivamente por el nivel de sensibilidad de los consumidores españoles a fluctuaciones en los precios de los productos, como ya se discutió anteriormente. Por otro lado, este comportamiento también destaca el bajo nivel del efecto renta, es decir, una pequeña respuesta del consumo a mayor renta. Esto significa que el consumidor español consume una determinada cantidad constante de pescado al año y sólo está dispuesto a aumentar si ocurre una disminución del precio relativo del pescado frente a los demás alimentos. Por lo tanto, a pesar de que la tasa de crecimiento de la renta per cápita es muy elevada, el mantenimiento del precio relativo del pescado impide que se aumente proporcionalmente el nivel de consumo. 66 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 67 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 14 Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de Crecimiento C 1.091,845 Coeficiente 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 RP 0,198577 PA 6,660049 PP –2,261044 Demanda 1.393,11 1.393,11 1.448,84 1.506,79 1.567,06 1.629,75 1.694,94 1.762,73 1.833,24 1.906,57 113,48 114,46 115,03 115,61 116,18 116,76 117,35 117,93 118,52 119,12 106,04 112,22 113,34 114,47 115,62 116,77 117,94 119,12 120,31 121,51 1.884,48 1.877,05 1.889,77 1.902,17 1.915,40 1.929,10 1.943,29 1.958,00 1.973,23 1.989,02 RP, en mil pesetas; PA y PP, índices de precios y demanda en mil toneladas. Figura 43 España: demanda futura de pescado (1997-2005): escenario de Crecimiento 2.200 2.000 1.800 Realizado Estimado 1.600 1.400 1.200 1.000 76 78 80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 Escenario 4: Agotamiento de los caladeros En este último escenario se quiere evaluar los probables efectos sobre la demanda futura derivados de un agotamiento de los caladeros de pesca. Situación que es relativamente probable y bastante alertada por la FAO, dado el alto nivel de sobrepesca en las costas españolas y la degradación medioambiental. El análisis se efectúa con tres subescenarios, primero considerando la combinación de una situación de agotamiento de los caladeros con crisis económica, el segundo, de agotamiento de los caladeros con crecimiento económico y, el tercero, de 67 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 68 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI agotamiento de los caladeros y tendencia actual. En estos dos casos se supone, evidentemente, que no existe ninguna relación entre el agotamiento de los caladeros con el nivel de crecimiento económico, por lo que se pueden analizar separadamente. Subescenario 4.1: Agotamiento de los caladeros con crisis económica El agotamiento de los caladeros, tanto en este subescenario como en los posteriores, será reflejado por un aumento acelerado de los precios del pescado derivado de una reducción importante en la oferta. Suponiendo que el nivel de la demanda se mantiene, una disminución de la oferta impacta sobremanera en los precios del producto en cuestión. Para representar este subescenario, se supone que la renta per cápita se mantendrá constante (crecimiento cero), que los precios del pescado crecerán aceleradamente (a tasas del 10% al año) y que los precios de los demás alimentos crecerán a un ritmo más lento (a tasas del 3% al año), todos para el período entre 1997 y 2005. El comportamiento de las variables renta per cápita y precio de los demás alimentos, para mantener la misma lógica, son iguales que el del escenario 2 de crisis. Con estos datos reflejamos una situación de agotamiento de los caladeros con crisis económica. La figura y la tabla que se presentan a continuación reflejan los resultados encontrados con base en los coeficientes estimados para el modelo inicial (Tabla 10). Figura 44 España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de agotamiento de los caladeros y crisis económica 2200 2000 Realizado Estimado 1800 1600 1400 1200 76 78 80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 Como se observa y se esperaba, la cantidad demandada disminuye sensiblemente un 5% entre 1996 y 2005, lo que equivale a una tasa media anual del 0,72%. Como en el escenario de crisis anterior, esta situación es poco probable, especialmente por causa de la hipótesis de crisis económica, expectativa no considerada por casi nadie para el futuro de la economía española dada la tendencia actual. 68 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 69 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 15 Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de agotamiento de los caladeros y crisis económica C 1.091,845 Coeficiente 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 RP 0,198577 PA 6,660049 PP –2,261044 Demanda 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 1.393,11 113,48 114,46 117,89 121,43 125,07 128,82 132,69 136,67 140,77 144,99 106,04 112,22 123,44 135,78 149,36 164,30 180,73 198,80 218,68 240,55 1.884,48 1.877,05 1.874,55 1.870,19 1.863,75 1.854,97 1.843,56 1.829,21 1.811,57 1.790,25 Subescenario 4.2: Escenario de agotamiento de los caladeros y crecimiento Las hipótesis referentes a este subescenario son equivalentes a del anterior para el caso del precio del pescado. Como se trata de una situación de crecimiento, se establece, al igual que en el escenario 3 de crecimento, que la renta per cápita crecerá un 4% al año y que el precio de los demás alimentos crecerá apenas un 0,5% al año entre 1997 y 2005. Los resultados de esta simulación están presentados en la figura y tabla destacados a continuación. Figura 45 España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de agotamiento de los caladeros y crecimiento económico 2200 2000 Realizado Estimado 1800 1600 1400 1200 76 78 80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 69 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 70 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 16 Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de agotamiento de los caladeros y crecimiento económico Coeficiente 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 C 1.091,845 RP 0,198577 PA 6,660049 PP –2,261044 Demanda 1.393,11 1.393,11 1.448,83 1.506,79 1.567,06 1.629,74 1.694,93 1.762,73 1.833,24 1.906,57 113,48 114,46 115,03 115,61 116,18 116,76 117,35 117,93 118,52 119,12 106,04 112,22 123,44 135,78 149,36 164,30 180,73 198,80 218,68 240,55 1.884,48 1.877,05 1.866,56 1.853,98 1.839,10 1.821,65 1.801,33 1.777,84 1.750,82 1.719,88 Como se observa y también se esperaba, la cantidad demandada disminuye sensiblemente, un 9% entre 1996 y 2005, lo que equivale a una tasa media anual del 0,76%. Aquí, como en el caso del escenario 3 de crecimiento, se observa una pequeña paradoja, pues la demanda disminuye en un nivel mayor que en el subescenario anterior, a pesar del crecimiento económico. Como ya se comentó anteriormente, esta aparente paradoja se explica porque el efecto sustitución es mayor que el efecto renta, que es muy pequeño. En otras palabras, los aumentos de la renta per cápita que ocurren en la economía española son destinados al consumo de otros bienens y no a los de alimentación. Además, la demanda de pescado es fuertemente afectada por variaciones en los precios relativos del pescado respecto al de los demás alimentos. Por eso, en el subescenario 4.1, cuando hay un cambio en los precios relativos más favorable al pescado que en el subescenario 4.2, la demanda futura de pescado es mayor. Subescenario 4.3: Escenario de agotamiento de los caladeros y tendencia Este escenario es equivalente al escenario 1 de tendencia de las series, escepto para el precio del pescado que sigue un comportamento común a los dos subescenarios anteriores. Como se mencionó anteriormente en el escenario 1, la renta per cápita seguirá creciendo a 1,6% al año, con una ligera disminución hasta alcanzar el 1,5% en 2005. El índice de precio de los demás alimentos sigue la misma trayectoria de crecimiento a tasas cada vez menores. Los resultados de esta simulación están presentados en la figura y tabla que se destacan a continuación. Como se observa, el escenario de agotamiento con manutención de la tendencia actual de la economía y de los precios de los demás alimentos produce una situación mejor que las dos anteriores, aunque también hay reducción de la demanda de 70 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 71 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI pescado de 31,1 mil toneladas a lo largo de los 9 años siguientes. Esta situación se explica porque, a pesar del agotamiento de los caladeros, ocurre una mejora en los precios relativos del pescado respecto a los demás alimentos, mejor que en cualquiera de los dos anteriores subescenarios (crecimiento medio de 3,3% del precio de los demás alimentos), y por la ligera mejora en la renta per cápita, que crece a una tasa media del 1,6%. Figura 46 España: demanda futura de pescado (1997-2005): Escenario de agotamiento de los caladeros y tendencia actual 2200 2000 Realizado Estimado 1800 1600 1400 1200 76 78 80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 Tabla 17 Proyección de la demanda de pescado: 1997-2005: Escenario de agotamiento de los caladeros y tendencia actual Coeficiente 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 C 1.091,845 RP 0,198577 PA 6,660049 PP –2,261044 Demanda 1.393,11 1.393,11 1.416,51 1.439,90 1.463,29 1.486,68 1.510,08 1.533,47 1.556,86 1.580,25 113,48 114,46 118,76 123,07 127,37 131,67 135,98 140,28 144,59 148,89 106,04 112,22 123,44 135,78 149,36 164,30 180,73 198,80 218,68 240,55 1.884,48 1.877,05 1.884,98 1.890,42 1.893,00 1.892,51 1.888,72 1.881,14 1.869,54 1.853,38 71 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 72 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2.4.4. Implicaciones en la acuicultura Tomando como base el modelo estimado para la demanda de pescado en España y los escenarios presentados anteriormente, en este apartado se hará una extrapolación de los resultados para considerar también la acuicultura. Para alcanzar este propósito se hacen algunas simplificaciones, se elimina del total de producción acuícola los datos referentes al mejillón y se considera que toda la producción acuícola española es vendida en el mercado doméstico. Estas simplificaciones son necesarias para poder elaborar los análisis, primero porque la inclusión del mejillón añadiría una serie de dificultades estadísticas dada la alta volatilidad de la producción y, segundo, porque es imposible estimar una función de demanda para el pescado procedente de los cultivos. Evidentemente, este análisis con base en estas simplificaciones implica muchos problemas, con lo cual no se pueden utilizar los resultados sin hacer, con antelación, las alertas necesarias sobre la metodología. En todo caso, el objetivo de este apartado es presentar una ilustración estadística destacando el papel de la producción acuícola nacional en la demanda española de pescados. Este análisis está dividido en tres apartados, en el primero se evaluará cuándo debe crecer la producción acuícola para que se mantenga su posición relativa en la oferta de pescado en cada uno de los escenarios. En el segundo se calculará cuánto crecerá la oferta acuícola con base en la tendencia actual y, por último, se calculará el nivel de participación futura de la acuicultura en la demanda total de pescado considerando como base las expectativas de crecimiento de la acuicultura mundial de la FAO. a) Mantenimiento de la posición relativa de la acuicultura En este primer ejercicio se calculará, con base en los cuatro escenarios anteriores, cuánto deberá crecer la producción acuícola para que se mantenga su participación porcentual, del año de 1995. La participación de la producción acuícola en la demanda total de pescado para España en 1995 ha sido de 2,598%. Como se puede observar en la tabla siguiente, para que la acuicultura mantenga el nivel de participación en la demanda total de 1995 en el peor de los casos, precisa crecer apenas en un promedio del 1% al año entre 1997-2005, cuando se supone que la tendencia actual se mantendrá. En los demás casos el nivel de esfuerzo del sector acuícola para mantener su parcela en el mercado será siempre menor, incluso negativa en el caso de que ocurra un agotamiento de los caladeros. Estos resultados pueden indicar que la importancia de la acuicultura en la demanda de pescado en España será cada vez mayor en los próximos años, especialmente porque esto no supone un esfuerzo grande para la acuicultura. 72 1.884,48 1.877,05 1.899,97 1.922,89 1.945,80 1.968,72 1.991,63 2.014,55 2.037,44 2.060,38 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 Promedio Demanda total 48,96 48,76 49,36 49,95 50,55 51,14 51,74 52,34 52,93 53,53 Oferta acuícola Escenario 1 1,00 –0,39 1,22 1,21 1,19 1,18 1,16 1,15 1,14 1,13 Tasa de crecimiento Promedio 1.884,48 1.877,05 1.889,77 1.902,77 1.916,06 1.929,63 1.943,50 1.957,66 1.972,12 1.986,89 Demanda total 48,96 48,76 49,09 49,43 49,78 50,13 50,49 50,86 51,23 51,62 Oferta acuícola Escenario 2 0,59 –0,39 0,68 0,69 0,70 0,71 0,72 0,73 0,74 0,75 Tasa de crecimiento Promedio 1.884,48 1.887,05 1.889,39 1.902,17 1.915,40 1.929,10 1.943,29 1.958,00 1.973,23 1.989,02 Demanda total 48,96 49,02 49,08 49,42 49,76 50,12 50,48 50,87 51,26 51,67 Oferta acuícola Escenario 3 0,60 0,14 0,12 0,68 0,70 0,72 0,74 0,76 0,78 0,80 Tasa de crecimiento Promedio 1.884,48 1.877,05 1.884,98 1.890,42 1.893,00 1.892,51 1.888,72 1.881,14 1.869,54 1.853,38 Demanda total 48,96 48,76 48,97 49,11 49,18 49,16 49,07 48,87 48,57 48,15 Oferta acuícola Escenario 4 –0,18 –0,39 0,42 0,29 0,14 –0,03 –0,20 –0,40 –0,62 –0,86 Tasa de crecimiento 17/2/00 07:24 Año Tabla 18 Tasa de crecimiento porcentual de la producción acuícola en los escenarios, 1996-2005 (demanda total y oferta acuícola en miles de toneladas) 5878-II.Cap2 Página 73 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España 73 BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 74 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI b) Tendencia de crecimiento de la acuicultura En este segundo ejercicio se calculará la tasa de crecimiento de la producción acuícola y la evolución de su participación en la demanda total de pescado con base en la tendencia de crecimiento de la oferta comprobada entre 1984-1995. Según la tendencia estimada, la acuicultura presenta un nivel de participación creciente, llegando a representar el 3,5% en el año 2005. Sin embargo, este nivel es todavía muy pequeño comparado al nivel mundial, donde esta participación llegó a 29% en 1996 y puede llegar, según los datos de la FAO, a 34% en el 2010. En la tabla 19 se presenta la participación porcentual de la producción acuícola en la demanda total de pescado y la tasa de crecimiento. Como se puede observar, la tendencia indica un crecimiento a tasas decrecientes de la participación de la Tabla 19 Participación porcentual de la producción acuícola en la demanda total y tasa de crecimiento, 1995-2005 Año Relación prod. acuícola/demanda total Tasa de crecimiento 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2,33 2,45 2,56 2,68 2,79 2,91 3,02 3,14 3,25 3,37 3,48 4,92 4,69 4,48 4,29 4,11 3,95 3,80 3,66 3,53 3,41 Tabla 20 Producción acuícola (mil toneladas) y tasa de crecimiento en cada escenario Año Escenario 1 P. acuícola Tasa de crecimiento Escenario 2 P. acuícola Tasa de crecimiento Escenario 3 P. acuícola Tasa de crecimiento Escenario 4 P. acuícola Tasa de crecimiento 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 46,12 48,10 50,86 53,69 56,56 59,48 62,46 65,50 68,58 71,72 4,28 5,76 5,55 5,35 5,17 5,01 4,85 4,71 4,58 46,12 48,10 50,59 53,12 55,69 58,30 60,95 63,65 66,38 69,16 4,28 5,19 5,01 4,84 4,69 4,55 4,42 4,30 4,19 46,12 48,35 50,58 53,11 55,67 58,29 60,95 63,66 66,42 69,23 4,83 4,61 4,99 4,84 4,69 4,56 4,45 4,34 4,24 46,12 48,10 50,46 52,78 55,02 57,18 59,24 61,16 62,93 64,51 4,28 4,92 4,59 4,25 3,92 3,59 3,24 2,89 2,52 Promedio 74 5,03 4,60 4,62 3,80 5878-II.Cap2 17/2/00 07:24 Página 75 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La economía acuícola en España BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI acuicultura en la demanda total. En base a estos resultados se puede calcular el nivel de crecimiento de la participación de la producción acuícola en cada escenario, resultados que se presentan en la tabla 20. Como se puede observar, el nivel de crecimiento de la producción acuícola en cada uno de los escenarios es superior al encontrado en el ejercicio anterior. Evidentemente, esto refleja que la tendencia actual indica un nivel de crecimiento de la participación de la producción acuícola en la industria pesquera española. c) Estimaciones de crecimiento de la FAO Según los datos de la FAO (SOFIA, 1996), la demanda mundial total de pescado crecerá a una tasa media del 2,396% entre 1996-2010; en el mismo período, la producción acuícola crecerá a un 4,115%. Aplicando estas tasas a España, encontramos los siguientes resultados: Tabla 21 Demanda total de pescado y producción acuícola (mil toneladas), aplicando las estimaciones de la FAO a escala munidal Año Demanda total Producción acuícola Producción acuícola/Demanda % 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 1.777,07 1.819,65 1.863,25 1.907,90 1.953,61 2.000,42 2.048,35 2.097,43 2.147,69 2.199,15 2.251,84 46,01 47,90 49,87 51,93 54,06 56,29 58,60 61,02 63,53 66,14 68,86 2,59 2,63 2,68 2,72 2,77 2,81 2,86 2,91 2,96 3,01 3,06 Como se observa, la producción acuícola crecerá en un nivel inferior pero bastante semejante a la de los tres primeros escenarios, como se indica en la tabla 18. Un resultado importante de estos dos últimos ejercicios es que la producción acuícola crecerá cerca de un 50% en 10 años considerados y aumentará su importancia en la industria pesquera española. 75 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 77 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 3. La viabilidad de la empresa acuícola 3.1. Introducción: definición y estructura de un estudio de viabilidad El concepto de viabilidad es el más empleado a la hora de valorar la oportunidad o la conveniencia de crear una empresa. El objetivo de un estudio de viabilidad es responder, de forma estructurada, a algunas de las cuestiones que se plantea el promotor de un proyecto acuícola en el momento de adoptar la decisión de crear una empresa y de buscar la colaboración de terceras personas. Así pues, en síntesis, se pretende responder a tres cuestiones básicas: • ¿Cuáles son las magnitudes económicas que mejor explican las posibilidades del negocio? • ¿Cómo estructurar toda la información que tiene el promotor para poder decidir, con ciertas garantías, crear la empresa? • ¿Cómo puede comunicar a los demás la potencialidad del negocio? No debe confundirse la viabilidad con una especie de certificado o de garantía de éxito, puesto que esta seguridad nunca la tiene la empresa (ni la ya creada ni la nueva empresa). Por tanto, el estudio de la viabilidad de un proyecto empresarial consiste en «la elaboración de un informe formalizado en el que se recopila, de manera estructurada, toda la información que posee el promotor de una iniciativa empresarial acerca del producto o servicio en que se materializa la idea, la transacción mediante la cual realizará la oferta, la tecnología que va a utilizar en el proceso de producción y la demanda prevista del mercado». Dicho informe ha de permitir valorar las posibilidades de éxito del proyecto; de esta manera puede decirse que un proyecto es viable cuando «la idea se materializa en una transacción para la que se ha detectado una demanda, en un determinado mercado, suficiente, en cuantía y duración, para rentabilizar las inversiones necesarias para producir el producto/servicio objeto de transacción». La viabilidad del proyecto ha de poner de manifiesto los puntos fuertes y débiles del mismo, documentando como aprovechar las ventajas y en que medida las debilidades pueden comprometer su éxito, con el fin de poder evaluar el riesgo que se asume cuando se adopta la decisión de crear la empresa. Es importante no caer en la tentación de considerar el estudio de viabilidad como una justificación del proyecto, ya que si únicamente se exponen las ventajas no se pueden valorar las posibilidades reales y, por tanto, se generan serias dudas sobre el riesgo que éste entraña. Si por el contrario, en el estudio de viabilidad se aclaran tanto las ventajas como los peligros, se dispondrá de un instrumento útil para estimar el riesgo, lo que permitirá tomar una decisión racional sobre el valor del proyecto. 77 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 78 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El estudio de viabilidad ha de conseguir, en primer lugar, clarificar las distintas etapas que han de seguirse para hacer realidad el proyecto para, a continuación, pasar a cuantificar (en la medida en que los medios disponibles lo hagan posible) la demanda, las inversiones, los costes y los beneficios. De manera que la fiabilidad del estudio dependerá de la capacidad del promotor para detallar el proyecto y de las técnicas empleadas en su cuantificación. El estudio de viabilidad ha de considerar y organizar los innumerables factores que confluyen a la hora de crear una empresa acuícola. La cantidad, diversidad y complejidad de las cuestiones a considerar incrementa la importancia de estructurar el estudio de forma clara y ordenada con el fin de lograr transmitir las posibilidades reales del proyecto. La estructura del estudio de viabilidad sigue un método con el que se persigue tanto economizar los recursos que emplea el promotor, como diferenciar los distintos aspectos y etapas para facilitar su interpretación. El orden en el que se ha estructurado el proyecto es importante si no se quiere correr el peligro de incurrir en costes de elaboración inútiles. Por este motivo el proyecto de viabilidad se divide en cuatro partes: viabilidad biológica, comercial, técnica y financiera (Fig. 47). Para que un proyecto de creación de una empresa acuícola sea viable es necesario que sean asimismo viables cada una de estas etapas. En cada parte del estudio se detallan de forma genérica los aspectos que se deben analizar para determinar su viabilidad. Dichos aspectos cambian para cada especie y para cada tipo de explotación, por lo que el método que se propone debe particularizarse para la problemática concreta de cada proyecto. Las etapas a seguir para el estudio de viabilidad son las siguientes: • Viabilidad biológica: El punto de partida para la creación de una empresa acuícola es necesariamente el estudio experimental de la especie. Este aspecto es vital dado que, si no hay producto, no tiene sentido siquiera plantearse la creación de una empresa que lo explote. La viabilidad biológica comienza con un estudio experimental de la especie, en el que debe quedar claro cual es el ciclo de reproducción y alimentación, y las posibilidades de llevarlo a cabo en cautividad. Los conocimientos biológicos son indispensables para el éxito de los proyectos acuícolas, sin embargo, su estudio y descripción no es el objetivo de esta parte del estudio (restringida al ámbito económico); por este motivo, en el análisis de viabilidad vamos a suponer que son conocidos, o lo que es lo mismo, que el promotor del proyecto dispone de los conocimientos biológicos precisos sobre la reproducción y alimentación de una especie, en el caso de empresas de alevines, o únicamente de alimentación en el caso de una empresa de nursery o engorde. La viabilidad biológica de una empresa acuícola se puede entender como el conocimiento que tiene el promotor de la biotecnología necesaria para criar en cautividad una especie. Este conocimiento ha de permitir calcular una productividad (en número de peces, si es una empresa de alevines, o de kilos, si es de engorde) y unos costes iniciales. Dejando claro que estos datos no son constantes, ni aun cuando los 78 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 79 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 47 Esquema del proceso a seguir para estudiar la viabilidad de un proyecto para crear una empresa acuícola Estudio experimental de la especie Estandarización del proceso de reproducción Estandarización del proceso de alimentación Viabilidad biológica Definición del producto Determinación del mercado de referencia Estimación de la demanda Viabilidad comercial Dimensión de la empresa Presupuesto de capital Estimación de los costes Viabilidad técnica Adecuación técnicocomercial Obtención de financiación Constitución y legalización Viabilidad financiera Fuente: Elaboración propia. procesos están estandarizados, puesto que se puede constatar un importante efecto experiencia debido a la incidencia que tiene la I + D en ellos. • Viabilidad comercial: para crear una empresa es necesario estimar si existe una demanda suficiente en el mercado para la transacción que se pretende ofertar. La problemática comercial de las empresas acuícolas es muy peculiar ya que el producto que se oferta al consumidor final es homogéneo, de manera que la demanda se relaciona, fundamentalmente, con el precio y con los hábitos alimenticios. En este sentido es importante señalar la similitud, en el ámbito comercial, de estas empresas con las empresas ganaderas. El análisis de la viabilidad comercial comienza con la elección del mercado objetivo, en el que se define la estrategia a seguir y se desarrolla un plan de actua79 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 80 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ción en el que se determinan las condiciones comerciales de la transacción, el canal de distribución y la forma en que se va a comunicar la oferta. Con estos datos se obtiene información esencial para concretar el proyecto empresarial, ya que permiten prever: — El impacto financiero de darse a conocer en el mercado (campaña de lanzamiento). — La respuesta del mercado cuantificada en la previsión de la demanda por medio de la cual se podrán estimar los ingresos. • Viabilidad técnica: Una vez definido el producto que se oferta y estimada su demanda, el proceso para el análisis de la viabilidad técnica comienza con la determinación de la dimensión de la empresa y de las inversiones necesarias para materializarla, cuantificadas en el presupuesto de capital. Tras el diseño de la empresa y posterior cuantificación de las inversiones, se analiza, a continuación, el proceso productivo con el fin de poder estimar los costes totales (diferenciando los fijos de los variables) y determinar el intervalo operativo en el que la empresa obtiene beneficios. El resultado del estudio de la viabilidad biológica, comercial y técnica permite al promotor disponer de un documento en el que se especifica de que manera se puede llevar a la práctica la idea original. • Viabilidad financiera: en esta fase el proyecto está ya plenamente definido y presupuestado. Suponiendo que la demanda prevista sea suficiente para cubrir las necesidades operativas de la empresa y obtener los beneficios necesarios para rentabilizar la inversión, sólo restará conseguir la financiación necesaria para hacer realidad el proyecto. Hay que hacer constar que las posibilidades de financiación aumentan sustancialmente cuando el promotor dispone de la información anterior (en la medida en que pueda emplearla para transmitir las posibilidades de éxito del proyecto a los posibles socios e instituciones que puedan colaborar en la financiación). La forma jurídica que adopta la empresa y los trámites necesarios para su legalización estarán condicionados, en buena medida, por la alternativa de financiación y la localización que convenga al promotor. Es decir, cuando el promotor tiene suficiente capacidad para financiar por sí mismo el proyecto los trámites serán muy sencillos, ya que podrá adoptar la forma jurídica de empresario individual; sin embargo, cuando precise el apoyo financiero de otras personas, socios o trabajadores, tendrá que adoptar formas jurídicas más complejas, como por ejemplo las sociedades mercantiles o laborales. En conclusión, el estudio de viabilidad es el documento mediante el cual el promotor de un proyecto acuícola aporta toda la información que tiene, con el fin de solicitar la colaboración de instituciones públicas y privadas, por lo que es conveniente que su estructura sea clara y se adapte a los requisitos formales exigidos. El método propuesto responde a esta doble finalidad de forma que el promotor, a la vez que realiza el análisis necesario para tomar la decisión de crear la empresa, dispondrá de un informe que le facilitará la búsqueda de financiación y la obtención de ayudas. 80 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 81 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 3.2. Viabilidad biológica de un proyecto acuícola La biotecnología que propicia la viabilidad biológica de un proyecto acuícola ha de abarcar todas las fases del ciclo vital de la especie: fecundación, puesta, desarrollo larvario y crecimiento hasta adulto. El desarrollo de la técnica necesaria para conseguir la reproducción durante todo el año, marca el comienzo de la posible explotación acuícola de una especie al hacer posible, mediante el suministro continuado de alevines para su posterior engorde, mantener una oferta estable en el mercado. Dependerá del grado de estandarización y eficiencia de la tecnología el que los costes de reproducir y alimentar una especie en cautividad permitan comercializarla a precios competitivos. De manera que sólo cuando se alcanza el nivel de eficiencia necesario, una especie cuya explotación es biológicamente viable, será explotada comercialmente por empresas acuícolas. Aun cuando el objetivo de este apartado no sea el profundizar en los aspectos biológicos de las empresas acuícolas, hemos de describir, aunque de forma sintética, cómo inciden los conocimientos biotecnológicos en el tipo de empresa acuícola que se puede crear. Los factores más relevantes a la hora de diferenciar las peculiaridades de las distintas empresas acuícolas son tres: la especie, la etapa o etapas del ciclo vital y el tipo de explotación. • Primer factor: La elección de la especie es el factor que más incide en las variables económicas y en la viabilidad de las empresas acuícolas ya que cada especie tiene un precio de mercado distinto, lo que limita los ingresos que se pueden obtener con su comercialización y los costes que puede tener la empresa para hacer rentable la explotación acuícola. Además condiciona el medio en el que se ha de realizar la explotación, diferenciando entre acuicultura continental o de agua dulce y acuicultura marina o de agua salada. Por último, cada especie tiene unas peculiaridades biológicas tan distintas que se puede hablar de una rama específica de la acuicultura para cada una. Por ejemplo, la ostricultura es la rama de la acuicultura que estudia la problemática específica de la ostra. Las peculiaridades de cada especie propician la creación de empresas especializadas en una sola especie, sin embargo cada vez son más frecuentes las empresas con policultivos, puesto que éstas hacen posible un mejor aprovechamiento de los conocimientos biotecnológicos y de las condiciones naturales de los nichos ecológicos. • Segundo factor: La etapa o etapas del ciclo vital que realice la empresa acuícola se puede emplear para clasificar las explotaciones en integrales, cuando las realizan todas, o semiintegrales, cuando se especializan en alguna de ellas. La tendencia actual se dirige hacia el desarrollo de empresas semiintegrales. Para clasificar este tipo de empresas se atenderá a la etapa o etapas del ciclo vital y a la biotecnología utiliza. Dichas etapas son: — Etapa 1: Centros de inducción a la puesta. El objetivo de estas empresas es lograr una producción de huevos controlada, que supere la estacionalidad reproduc81 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 82 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tiva de las especies. Este objetivo se puede alcanzar mediante diversas técnicas que van, desde el ajuste de los ciclos reproductivos de los especímenes destinados a este fin por fotoperíodos y control de la temperatura, hasta el tratamiento hormonal. — Etapa 2: Criaderos o hatchery. Una vez obtenidos los huevos, el objetivo de este tipo de empresas es criar la especie desde las primeras larvas hasta la etapa de alevín, para lo cual es necesario conocer su cadena vital de alimentación. Tradicionalmente esta cadena consiste en una unidad productora de fitoplanton que produce algas celulares sencillas, estas algas son utilizadas para nutrir una unidad de producción de zooplacton que, mediante la técnica de bioencapsulación, proporciona una dieta ideal para las primeras etapas de la larva. A medida que la larva crece, se modifica la alimentación hasta lograr que se alimente con piensos en la etapa de alevín. Un ejemplo de los problemas de calidad en el proceso de cría de alevines lo proporciona el nacimiento de alevines sin vejigas natatorias o con vejigas natatorias poco o nada funcionales, lo que produce deformidades en la espina dorsal, un pobre rendimiento en el crecimiento y un aspecto antiestético poco propicio para la venta. Este problema de calidad de los alevines se solucionó mediante la instalación de limpiadores flotantes en la superficie de los tanques en los que crecían las larvas en las primeras etapas, al comprobarse que el defecto se debía a que el aceite flotante y otros residuos del proceso de alimentación impedían que las larvas de pez alcanzasen la superficie para tomar el aire esencial para el correcto desarrollo de la vejiga natatoria. Otros problemas semejantes se produjeron con la pigmentación, la mortandad o la eficiencia de la alimentación de las especies en cautividad, lo que muestra claramente la complejidad de la tecnología necesaria para alcanzar la viabilidad biológica en el proceso reproductivo de una especie. — Etapa 3: Prengorde o nursery. En esta etapa se alimentan los alevines hasta que pueden ser transportados a las explotaciones de engorde, evitando así la mortalidad por stress e incrementando la eficacia de las dietas. — Etapa 4: Engorde hasta el tamaño comercial. El desarrollo de técnicas de engorde específicas para cada especie ha sido decisivo para el incremento de la producción acuícola. En particular, se pueden señalar como avances más relevantes en las técnicas de engorde, el diseño de instalaciones específicas para este fin (en el Mediterráneo se realiza en jaulas flotantes o semisumergidas), el desarrollo de alimentos cada vez más eficaces y las mejoras en la gestión con un incremento de la mecanización y el control. Especial importancia tiene el desarrollo de sistemas informáticos que permiten hacer un seguimiento del crecimiento, tasa de alimentación y ratio de conversión con el fin de optimizar el sistema productivo de la explotación. • Por último, el tercer factor que diferencia las explotaciones acuícolas es el origen del alimento y grado de control del hombre sobre el proceso productivo. Utilizando este criterio podemos diferenciar tres tipos de explotaciones: Tipo 1: Explotaciones intensivas, en donde se controla artificialmente la alimentación en todas las etapas del ciclo vital de la especie, para ello es necesario que 82 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 83 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI la explotación disponga de unas instalaciones que permitan la optimización del sistema productivo. Entre los factores más destacables que han de ser controlados en este tipo de empresas cabe señalar: — La calidad del agua, tanto en lo que se refiere a su limpieza, que hace necesario el empleo de sistemas de filtrado, como al mantenimiento de sus parámetros físico-químicos, entre los que podemos destacar la cantidad de oxígeno. — La temperatura del agua que condiciona el crecimiento, que en aguas frías se relentiza, y las necesidades de oxigenación. En general, este tipo de explotaciones utilizan sistemas de bombeo para optimizar la utilización del agua. — El aporte de alimento. La dieta que se suministra incide en: • Eficiencia del proceso de engorde. Los peces tienen una alta eficacia en la transformación de los alimentos en aumento de peso, aunque los diferentes tipos de alimentación tienen distintos ratios de transformación. • Problemas derivados del tipo de la dieta utilizada. Así cuando la dieta está constituida por alimento fresco (restos de carnes y pescados) aumentan los problemas derivados de la manipulación y conservación de los alimentos. Si se utilizan harinas o alimentos compuestos deshidratados se eliminan, en parte, los problemas anteriores, pero se incrementan los costes y se precisa la preparación de un compuesto específico para cada especie. Mención aparte requieren las especies o etapas del ciclo vital que necesitan alimento vivo, lo que obliga a la creación de instalaciones de fitoplanton o zooplanton para su alimentación. • Porcentaje de la dieta no digerible y nivel de desecho y material orgánico que provocan. De manera que cuanto mayores sean el porcentaje no digerible y los desechos, más problemas de contaminación se presentarán y, por tanto, más importantes serán las instalaciones de limpieza, filtrado, oxigenación y renovación del agua. — Inversión en infraestructura e instalaciones. Los cultivos intensivos, dado el grado de control que ha de tenerse sobre todos los aspectos del proceso productivo, requieren instalaciones artificiales complejas y costosas, lo que incide directamente en las necesidades de capital para financiar este tipo de empresas. Tipo 2: Explotaciones extensivas. Esta forma de explotación se fundamenta en el aprovechamiento de los recursos naturales del ecosistema en el que se localiza la empresa. Entre los aspectos más destacables que caracterizan este tipo de explotaciones cabe señalar: • Requieren la existencia de zonas naturales en las que se den las condiciones necesarias para realizar y acotar la explotación. Entre los requisitos más importantes podríamos citar la posibilidad de instalar sistemas de embalse de aguas con diques o cierres y sistemas para hacer circular el agua. • En la zona acotada debe darse de forma natural la especie que se pretende explotar. • Posibilidad de lograr un equilibrio ecológico entre las distintas poblaciones del medio, limitando la intervención humana a favorecer el desarrollo de la especie de interés y a su recogida una vez finalizado el período de engorde. 83 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 84 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tipo 3: Explotaciones mixtas, semintensivas y semiextensivas. En estas explotaciones la intervención del hombre en el proceso productivo es menor que en las intensivas y mayor que en las extensivas, dependerá del grado de intervención el que puedan calificarse de uno u otro tipo (el límite entre ambos tipos es muy ambiguo). En general se suelen utilizar zonas naturales en las que la intervención del hombre es mayor para controlar: el nivel y renovación del agua, la fertilización del medio, la oxigenación del agua y el complemento de la alimentación. El estudio de la viabilidad biológica de las empresas acuícolas nos permite extraer dos ideas que comentaremos a modo de conclusiones de este apartado. En primer lugar, reseñar la especial importancia que tiene la biotecnología en la creación de este tipo de empresas, en especial la tecnología que se refiere al proceso reproductivo y a la forma de alimentación de cada especie puesto que sin estos conocimientos no sería posible siquiera plantearse este tipo de empresa. En resumen, podemos apreciar la variedad y complejidad de las empresas acuícolas. Teniendo en cuenta los tres factores utilizados para tipificar las empresas acuícolas en este apartado: las 25 especies más comunes (9 de peces marinos, 5 de peces continentales, 8 de moluscos y 3 de crustáceos), los 4 tipos de empresa en función de las etapas del ciclo vital que realizan (centros de inducción a la puesta, criaderos o hatchery, nursery y engorde) y las 3 formas de explotación más utilizadas (intensiva, extensiva y mixta) nos dan 300 tipos de empresas sin contar con las posibles combinaciones de empresas que realizan más de una etapa del ciclo vital ni aquellas con policultivos. Cada tipo de empresa acuícola tiene unas características específicas en cuanto a las necesidades de inversión, estructura de costes y productividad que limitan cualquier intento de descripción pormenorizada. Por este motivo la descripción de los siguientes apartados para determinar la viabilidad de una empresa de este tipo han de ser generales, utilizando aquellos indicadores que recojan de la forma más genérica los factores que condicionan la viabilidad. 3.3. Viabilidad comercial El objetivo principal del análisis de la viabilidad comercial de un proyecto acuícola es la previsión de las ventas, con el fin de evaluar si los ingresos derivados de éstas son suficientes para cubrir los costes y obtener los beneficios necesarios para rentabilizar la inversión. La previsión de las ventas en las empresas acuícolas se obtiene multiplicando de la producción estimada de la empresa por el precio de mercado previsto. VP = PE · PM VP = Ventas previstas. PE = Producción estimada. PM = Precio de mercado. 84 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 85 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La evolución de las ventas depende de la evolución de las dos variables que lo determinan, cantidad producida y precio de mercado, circunstancia que obliga a hacer un doble análisis: • Por lo que se refiere a la cantidad producida, se debe estimar teniendo en cuenta que en este tipo de empresas se produce un rápido avance en la I + D y en el efecto experiencia, que permite un incremento de la producción. • Por otra parte, se ha de prever la evolución de los precios en el mercado. Este aspecto es muy importante debido a la alta volatilidad de los precios de las especies acuícolas como consecuencia de sus peculiaridades, entre las que cabe destacar la homogeneidad del producto, su carácter perecedero y rápido incremento de la producción. El efecto de la volatilidad de los precios unido a las variaciones de la producción y de los costes, consecuencia de los avances de I + D, conducen a un alto nivel de incertidumbre en este sector. Así, se puede constatar en la comercialización de las diferentes especies, que, tras conseguir la viabilidad biológica, se produce una rápida irrupción de empresas atraídas por los elevados precios que alcanzan estos productos en el mercado. Sin embargo, en poco tiempo, el incremento de la oferta conduce a una reducción de precios que altera sustancialmente los ingresos, lo que explica el elevado índice de fracaso en este tipo de proyectos. La previsión de las ventas ha de hacerse teniendo en cuenta tres aspectos distintivos de las empresas en este sector: • El constante incremento de la oferta debido a la capacidad que tienen las empresas para incrementar su producción y a la aparición de nuevos competidores. En este sentido se observa que una vez que se han estandarizado los procesos biológicos se produce un rápido incremento de la oferta propiciado por unas elevadas economías de escala, como resultado de la optimización de la capacidad productiva de las instalaciones y del efecto experiencia. • La evolución a la baja del precio del producto en el mercado. La homogeneidad del producto (en la pescadería o en los restaurantes no se piden lubinas o mejillones de una determinada marca) restringe, en gran medida, las acciones comerciales de las empresas acuícolas, que se limitan, al igual que las empresas ganaderas, a hacer fluctuar la producción y los precios con la demanda. Esta situación se ve agravada al tratarse de un producto perecedero, teniendo como consecuencia una alta volatilidad en los precios. • Por último, la fuerte tendencia al incremento de la demanda. Las necesidades alimenticias, la evolución en los hábitos de consumo y la reducción de los precios, propician la existencia de una elevada demanda a largo plazo para este tipo de productos; sin embargo, su evolución no puede seguir el ritmo de incremento de la oferta, lo que produce en muchos casos desajustes que llevan a una situación de abundancia y, consecuentemente, a la caída de los precios. Las características de los productos acuícolas no hacen temer por el incremento de su demanda futura, pero limitan, en buena medida, las posibilidades de una empresa concreta para realizar acciones comerciales que incidan específicamente en la demanda de sus propios productos. 85 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 86 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Las peculiaridades señaladas anteriormente, limitan la explicación de la viabilidad comercial a la previsión de las ventas, obtenida como producto de la producción de la empresa —ya que estas empresas venden todo lo que producen aunque tengan que bajar los precios— por el precio de mercado —cuya tendencia es decreciente debido a la presión de la oferta—; por lo que tiene especial relevancia la estimación de la evolución de la producción y de los precios como variables críticas del proceso de previsión de las ventas. Por otra parte, las ventas varían según cual sea el momento del ciclo de vida de la especie, ciclo que va desde el momento en que se logra la viabilidad técnica hasta que se satura el mercado y comienza la diversificación de productos ofertados que lo utilizan en su composición, variando las cantidades producidas y los precios en cada una de las fases del ciclo. Con el fin de obtener una estimación de la demanda se realiza un análisis comparado de las cantidades vendidas y de los precios de mercado (precio medio anual) de las diferentes especies utilizando los datos recogidos por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). Estos datos reflejan la producción de las distintas especies acuícolas en el período 1985-1996 y su valor de mercado en el período 1988-1996. Además permiten obtener información sobre el ciclo de vida de cada especie (etapas y duración) y de la evolución de la producción, precios y valor de mercado. Con esta información se puede hacer una previsión de las ventas de una empresa, sabiendo cual es su capacidad productiva inicial y el momento del ciclo de vida en el que se encuentra la especie objeto de explotación. 3.3.1. Evolución de la oferta Para analizar la evolución de la oferta acuícola se hace un seguimiento de las cantidades vendidas en el mercado de las diferentes especies. El hecho de considerar equivalentes las cantidades vendidas y producidas se justifica por tratarse de un producto perecedero que, en el momento en que está en condiciones de ser ofertado, no queda más remedio que venderlo aunque para ello se tengan que bajar los precios. El análisis de la evolución de la producción permite determinar su tendencia y, además, es útil para observar las similitudes y diferencias que tiene esta variable a lo largo del ciclo de vida en las distintas especies. Con ello, una vez conocido el nivel inicial de la producción, la etapa del ciclo en la que se encuentra y cual fue la evolución que siguió en el pasado alguna especie similar, podremos prever la evolución de la producción y, por tanto, de la oferta de cada especie. Las expectativas productivas de las empresas acuícolas son consecuencia, entre otras razones, de: • La existencia de un mercado interior de productos pesqueros caracterizado por una elevada demanda, tanto en cantidad, con un consumo per cápita anual alto, como en calidad, puesto que los pescados y mariscos de más precio tienen también 86 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 87 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI una elevada demanda. Además, los hábitos de consumo se orientan hacia los alimentos con las características dietéticas semejantes a los productos acuícolas, lo que permite prever un incremento mayor del consumo de este tipo de alimentos. • Las buenas condiciones medioambientales que han permitido el cultivo de la mayoría de las especies de interés en nuestro mercado. • El interés que han demostrado las instituciones públicas en el desarrollo de este sector. Este interés ya se recoge en la Constitución de 1978, donde se prevé la transferencia a las Comunidades Autónomas de las competencias sobre acuicultura. La actuación pública en el sector comienza a articularse en 1980 con la Primera Convención Nacional sobre Cultivos Marinos que permitió, mediante la reunión de representantes de la Administración y del sector privado, sentar las bases para la elaboración del primer Plan Estratégico Nacional de Acuicultura. La necesidad de planificar estratégicamente este sector condujo a la Administración a la elaboración de un marco regulador (comenzando por la ley 23/1984 de Cultivos Marinos) que tiene tres objetivos básicos: racionalizar la actividad del sector (prestando especial atención a los aspectos ecológicos), normalizar la forma en que se instrumentan las distintas ayudas, evitando los problemas derivados de la falta de coordinación y, a partir del 86, defender la estrategia del sector frente a la CEE. Cuando una nueva empresa inicia su actividad en este sector ha de tener presente cual va a ser la evolución de la oferta de la especie a la que piensa dedicar su explotación. Utilizando los datos de cantidades vendidas, en el período 1985-96, (Tabla 22) y el incremento interanual (Tabla 23) de las distintas especies acuícolas se obtiene una estimación de los siguientes datos (anuales): • El incremento medio de la oferta de los productos acuícolas. • El incremento medio de la oferta de cada especie en particular, y • El incremento medio en función de cual sea la etapa del ciclo de vida en que se encuentre la especie. Los resultados obtenidos del análisis de los datos anteriores (Tablas 22 y 23) son: • La oferta de productos acuícolas ha experimentado un incremento muy importante en todas las especies, pasando de 21.048,51 toneladas en 1985 a 43.404,9 en 1996, lo que supone un incremento medio anual para las ventas de este sector del 6,8. El incremento se observa en todas las especies acuícolas menos el mejillón, incrementos que recogemos en la tabla 24. • El incremento de la oferta por familias de especies (Tabla 24) es del 30,56 para los peces marinos, 4,08 para los peces continentales, 8,24 para los moluscos y el 13,66 para los crustáceos. 1 Esta cantidad es la producción de todas las especies acuícolas: peces marinos y continentales, crustáceos y moluscos excluyendo el mejillón. El motivo de la exclusión de esta especie es que se ha alcanzando un volumen de producción muy elevado y ha sufrido una regulación de la producción, de manera que si se añadiese distorsionaría la información. 87 88 Año 20,2 127,2 0 29 0 40 150 13 417,4 706 0 5,8 248.648 3.263,5 150 252.773,3 40 15,8 55,8 450 16.000 16.450 269.697 21.048,5 1985 25,8 123,8 10 30,5 165 40 150 9 614,1 698,3 0 1,8 246.995 3.170 150 251.015,1 0 16 16 450 16.500 16.950 268.595 21.600,2 1986 29,4 109,2 5,8 37,5 89 50 150 20 598,9 423,1 0 1,5 245.455 3.155,5 150 249.185,1 40 19,7 59,7 450 17.000 17.450 267.294 21.838,7 1987 31,2 160,2 0 29 0 97 150 13 526,4 3.841,4 0 2 243.010 3.269,1 150 250.333 0 55 55 455 17.500 17.955 268.869 25.859,4 1988 61,4 347,7 8,4 23,8 58,9 271,1 150 17,4 1.174,7 3.884,7 0 2 193.010 3.289,1 150 200.396,3 0 86,6 86,6 463 18.000 18.463 220.121 27.110,6 1989 124,8 564,6 4,1 30,7 118,1 640,3 355 20,8 2.215,4 4.157,2 0 10 173.300 2.857,4 120 180.541,6 160 40,6 206,5 350 18.000 18.350 201.314 28.013,5 1990 98,1 1.072,9 9,1 92,1 56 825 553 31 2.753,2 3.922,3 0 3 195.220 2.247 120 201.512,3 60 32 96,5 396 18.000 18.396 222.758 27.538 1991 105 1.675 13,2 143,1 108,3 1.622 782 22 4.489,6 3.521,3 0 3 138.910 2.862,1 120 145.416,4 111,2 42,4 153,6 403 18.482,6 18.885,6 168.945 30.035,2 1992 175 2.014,5 11,9 370,4 109,5 1.583 562 3 4.848,3 3.580,6 3.185 5 60.481 2.710,1 110 70.071,7 130 55,4 185,4 400 19.689 20.089 95.194 34.713,4 1993 134,1 2.094,3 12 351 144 1.809,8 909,1 5,5 5.459,8 4.613,9 2.209,8 5 142.587 2.264 92 151.771,7 91 67,5 158,5 400 20.049 20.449 177.839 35.252 1994 152,6 2.706,5 25,4 461 113 2.173,6 695 1 6.342,8 5.198,3 4.584 5 182.250 3.103 78 195.218,3 110 57,8 167,8 163 22.000 22.224 223.953 41.702,9 1995 189,3 3.818,1 23 693 125 2.189 726 1 7.841,2 3.324,6 2.344 1,8 188.462 3.719,4 207 198.325,6 139 86,9 225,9 160 25.237 25.474,2 231.867 43.404,9 1996 17/2/00 07:24 Economía y gestión de la acuicultura Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Anguila Dorada Lenguado Lubina Mugílidos Rodaballo Salmón Seriola Total peces marinos Almejas Berberecho Escupiña Mejillón Ostras Vieira Total moluscos Camarón Langostinos Total crustáceos Tenca Trucha arcoiris Total continentales Total sector Total sector-mejillón Especie Evolución de las cantidades comercializadas (en toneladas) de las distintas especies acuícolas en España en el período 1985-1996 Tabla 22 5878-II.Cap3 Página 88 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI –2,87 0,00 –0,70 –100,00 1,27 –71,33 0,00 3,13 3,04 –0,41 2,62 Ostras Vieira Total moluscos Camarón Langostinos Total crustáceos Tenca Trucha arcoiris Total continentales Total sector Total sector-mejillón –0,46 0,00 –0,73 0,00 23,13 273,13 0,00 3,03 2,95 –0,48 1,10 25,00 0,00 122,22 –2,48 –39,41 0,00 –16,67 –0,62 13,95 –11,79 –42,00 22,95 –46,06 1987 3,60 0,00 0,46 –100,00 179,19 –7,87 1,1 2,94 2,89 0,59 18,41 94,00 0,00 –35,00 –12,11 807,92 0,00 33,33 –1,00 6,12 46,70 –100,00 –22,67 –100,00 1988 0,61 0,00 –19,95 0,00 57,45 57,45 1,76 2,86 2,83 –18,13 4,84 179,48 0,00 33,85 123,16 1,13 0,00 0,00 –20,58 96,79 117,04 0,00 –17,93 0,00 1989 –13,13 –20,00 –9,91 0,00 –53,12 138,45 –24,41 0,00 –0,61 –8,54 3,33 136,19 136,67 19,54 88,59 7,01 0,00 400,00 –10,21 103,26 62,38 –51,19 28,99 100,51 1990 –21,36 0,00 11,62 –62,50 –21,18 –53,27 13,14 0,00 0,25 10,65 –1,70 28,85 55,77 49,04 24,28 –5,65 0,00 –70,00 12,65 –21,39 90,03 121,95 200,00 –52,58 1991 27,37 0,00 –27,84 85,33 32,50 59,17 1,77 2,68 2,66 –24,16 9,07 96,61 41,41 –29,03 63,07 –10,22 0,00 0,00 –28,84 7,03 56,12 45,05 55,37 93,39 1992 –5,31 –8,33 –51,81 16,91 30,66 20,70 –0,74 6,53 6,37 –43,65 15,58 –2,40 –28,13 –86,36 7,99 1,68 0,00 66,67 –56,46 66,67 20,27 –9,85 158,84 1,11 1993 –16,46 –16,36 116,59 –30,00 21,84 –14,51 0,00 1,83 1,79 86,82 1,55 14,33 61,76 83,33 12,61 28,86 –30,62 0,00 135,76 –23,37 3,96 0,84 –5,24 31,51 1994 37,06 –15,22 28,63 20,88 –14,37 5,87 –59,25 9,73 8,68 25,93 18,30 20,10 –23,55 –81,22 16,17 12,67 107,44 0,00 27,82 13,80 29,23 111,67 31,34 –21,53 1995 19,86 165,38 1,59 26,36 50,35 34,62 –1,84 14,71 14,62 3,53 4,08 0,71 4,46 0,00 23,62 –36,04 –48,87 –64,00 3,41 24,05 41,07 –9,45 50,33 10,62 1996 17/2/00 07:24 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 0,00 0,00 –30,77 47,13 –1,09 0,00 –68,97 –0,66 Rodaballo Salmón Seriola Total peces marinos Almejas Berberecho Escupiña Mejillón 1986 27,72 –2,7 0,00 5,17 0,00 Año Anguila Dorada Lenguado Lubina Mugílidos Especie Variaciones anuales en porcentaje de las cantidades comercializadas de las distintas especies acuícolas en España en el período 1986-1996 Tabla 23 5878-II.Cap3 Página 89 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola 89 BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 90 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 24 Incremento de la cantidad producida de los distintos grupos de especies acuícolas Especie Producción en 1985 (en ton) Producción en 1985 (en ton) Incremento de producción (en ton) Incremento anual (en %) Peces marinos . . . . . . . . . . . Peces continentales . . . . . . . Moluscos-mejillón . . . . . . . . Crustáceos . . . . . . . . . . . . . . Mejillón . . . . . . . . . . . . . . . . 417 16.450 4.125,3 55 248.648 7.841 25.474 9.863,6 225,9 188.462 7.424 9.024 5.738,3 170,9 –60.186 30,56 4,05 8,24 13,66 –2,48 Total-mejillón . . . . . . . . . 21.048,5 43.404,9 22.355 6,8 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. • El incremento varía de una especie a otra en función de cual sea la etapa del ciclo de vida de la especie. Así, para las especies que están en la etapa de saturación, donde el producto hace más de 5 años que está introducido en el mercado y los consumidores ya conocen su origen acuícola (como es el caso de los peces continentales), el incremento medio anual es del 4,05, siendo este crecimiento mayor para moluscos (sin el mejillón) y crustáceos que crecen de media un 8,2 y un 13,6, respectivamente. Sin embargo, para productos en fase de introducción y crecimiento, presentes en el mercado desde hace menos de 5 años y no reconocidos como acuícolas por los consumidores finales, como por ejemplo los peces marinos, el crecimiento aumenta hasta el 30,56 anual. 3.3.2. Evolución de los precios El segundo factor a tener en cuenta, a la hora de estimar la demanda de las empresas acuícolas, es la evolución de los precios de la especie objeto de explotación en el mercado. En el análisis de esta evolución se deben tener presentes algunas peculiaridades que propician una elevada volatilidad, entre las que cabe destacar: • La oferta de estos productos puede incrementarse de forma rápida, bien sea por la entrada de nuevas empresas o por la optimización de las inversiones por parte de las empresas existentes, lo que lleva a situaciones coyunturales de abundancia que para ser corregidas por el mercado fuerzan una caída de los precios. • El carácter perecedero de este tipo de productos obliga a las empresas a reducir los precios de venta para colocarlos en el mercado en el momento óptimo de su crecimiento, como única alternativa para evitar incurrir en mayores pérdidas al reducirse la eficacia del sistema de engorde. • La volatilidad de los precios responde también a dos razones de tipo estratégico: — Las dificultades que tienen este tipo de empresas en adoptar estrategias de diferenciación que permitan canalizar la demanda hacia la oferta específica de su 90 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 91 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI empresa. Esta circunstancia las obliga a utilizar las variaciones de los precios como estrategia comercial ante desajustes entre la oferta y la demanda. — La tendencia a la competencia en precios también se ve propiciada por la estructura de costes de las empresas acuícolas. El precio de mercado de estos productos se ve presionado a la baja por la posibilidad que tienen las empresas de reducir sus costes medios, lo que les permite mantener su margen con menores precios de mercado. Esta reducción de costes es posible, por una parte, por la existencia de economías de escala que permiten reducir los costes medios cuando se incrementa la producción; y, por otra parte, por la incidencia que tiene en los costes el efecto experiencia y la I + D que hacen posible el incrementar la productividad y la eficiencia. La evolución de los precios de las especies acuícolas (Tabla 25) y de las variaciones interanuales en porcentaje (Tabla 26) en el período 1988-1996, permite hacer una previsión de cual va a ser el comportamiento de los precios de mercado. Tabla 25A Precios por kilogramo en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996. A) Pesetas corrientes Precio del kilogramo en pesetas corrientes Año 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1.188,6 Anguila 961,5 1.514,7 1.017,6 897,0 1.361,9 1.171,4 2.177,5 2.077,3 Dorada 1.379,5 1.570,3 1.521,4 1.378,5 1.216,1 1.106,5 1.018,0 1.179,4 1.047,1 0,0 1.428,6 2.439,0 1.428,6 1.136,4 1.260,5 1.333,3 1.338,6 1.400,0 551,7 882,4 2.019,5 1.422,4 1.404,6 1.457,9 1.279,2 1.344,9 1.398,6 Lenguado Lubina Mugílidos 0,0 220,7 296,4 303,6 323,2 401,4 291,7 300,9 416,0 Rodaballo 1.958,8 1.781,6 1.586,8 1.409,6 1.038,2 1.061,3 1.147,1 1.074,3 1.237,9 Salmón 0,0 0,0 701,4 600,4 469,3 489,3 532,4 541,0 494,5 Seriola 1.230,8 1.206,9 1.298,1 1.322,6 1.181,8 1.666,7 1.090,9 1.000,0 1.200,0 Almejas 1.088,1 1.180,5 942,0 1.026,2 1.055,6 1.042,6 969,7 1.321,6 1.210,3 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 201,9 209,5 254,6 264,4 Escupiña 1.000,0 1.000,0 1.000,0 1.000,0 1.000,0 2.600,0 2.600,0 2.600,0 2.222,2 Mejillón 44,4 51,0 50,8 86,0 62,8 81,9 53,2 33,7 46,0 Ostras 419,4 445,1 455,7 586,1 453,9 367,1 504,4 442,8 367,8 Vieira 533,3 600,0 708,3 750,0 750,0 754,5 945,7 1.000,0 1.000,0 Berberecho Langostinos 0,0 0,0 0,0 383,3 296,8 330,8 362,6 363,6 341,7 2.254,5 2.413,4 2.463,1 2.593,8 2.853,8 2.599,3 2.607,4 3.408,3 2.991,9 Tenca 800,0 799,1 800,0 800,5 799,0 645,0 300,0 797,5 750,0 Trucha arcoiris 300,0 333,0 333,0 333,0 300,0 300,0 300,0 300,0 287,3 Camarón Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 91 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 92 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 25B Precios por kilogramo en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996. B) Pesetas constantes Precio del kilogramo en pesetas constantes con base en 1988 Año 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 Anguila 961,5 1.418,3 892,9 743,0 1.064,9 876,0 1.554,9 1.417,1 Dorada 1.379,5 1.470,4 1.334,9 1.141,8 950,9 827,4 726,9 804,6 689,8 0,0 1.337,7 2.140,1 1.183,2 888,6 942,6 952,1 913,2 922,3 Lenguado Lubina 783,0 551,7 826,2 1.772,0 1.178,1 1.098,3 1.090,2 913,5 917,5 921,3 Mugílidos 0,0 206,7 260,0 251,4 252,7 225,4 208,3 205,3 274,0 Rodaballo 1.958,8 1.668,3 1.392,3 1.167,6 811,8 793,6 819,1 732,9 815,4 Salmón 0,0 0,0 615,4 497,3 367,0 365,9 380,2 369,1 325,7 Seriola 1.230,8 1.130,1 1.139,0 1.095,5 924,1 1.246,3 779,0 682,2 790,5 Almejas 1.088,1 1.105,4 826,5 850,0 825,4 779,6 692,4 901,6 797,3 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 151,0 149,6 173,7 174,2 1.000,0 936,4 877,4 828,3 781,9 1.944,2 1.56,6 1.773,7 1.463,9 Berberecho Escupiña Mejillón 44,4 47,8 44,6 71,2 49,1 61,3 38,0 23,0 30,3 Ostras 419,4 416,8 399,8 485,5 354,9 274,5 360,2 302,1 242,3 Vieira 533,3 561,8 621,5 621,2 586,5 564,2 675,3 682,2 658,8 0,0 0,0 0,0 317,5 232,1 247,3 259,0 248,1 225,1 Langostinos Camarón 2.254,5 2.259,9 2.161,1 2.148,3 2.231,5 1.943,7 1.861,9 2.325,1 1.970,9 Tenca 800,0 748,3 701,9 663,0 624,8 482,3 214,2 544,1 494,1 Trucha arcoiris 300,0 311,8 292,2 275,8 234,6 224,3 214,2 204,7 189,2 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Tabla 25C Precios por kilogramo en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996. C) IPC base 92 e índice corrector IPC base 1992 Índice corrector 78,5 1,000 83,9 0,936 89,5 0,877 94,8 0,828 100,4 0,782 105,0 0,748 110,0 0,714 115,1 0,682 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 92 119,2 0,659 Año 57,5 13,8 0 59,9 0 –9 0 –1,9 15,0 8,5 0 0 14,8 6,1 12,5 6,98 0 7 3,5 –0,1 11 5,45 7,74 1989 –32,8 –3,1 70,7 129 34,3 –10,9 0 7,6 24,3 –20,2 0 0 –0,3 2,4 18,1 0,00 0 2,1 1,05 0,1 0 –0,8 6,15 1990 –11,8 –9,4 –41,4 –29,6 2,4 –11,2 –14,4 1,9 –14,2 8,9 0 0 69,1 28,6 5,9 18,75 0 5,3 2,65 0,1 0 0,3 1,88 1991 51,8 –11,8 –20,5 –1,2 6,5 –26,4 –21,8 –10,6 –4,3 2,9 0 0 –27 –22,6 0 –7,78 –22,6 10 –6,3 –0,2 –9,9 –9,4 –6,93 1992 –14 –9 10,9 3,8 –6,7 2,2 4,3 41 4,1 –1,2 0 160 30,5 –19,1 0,6 28,47 11,5 –8,9 1,3 –19,3 0 –1,2 8,16 1993 85,9 –8 5,8 –12,3 –3,2 8,1 8,8 –34,5 6,3 –7 3,8 0 –35 37,4 25,3 4,08 9,6 0,3 4,95 –53,5 0 –2,3 3,26 1994 –4,6 15,9 0,4 5,1 3,2 –6,3 1,6 –8,3 0,9 36,3 21,5 0 –36,7 –12,2 5,7 2,43 0,3 30,7 15,5 166 0 1 4,95 1995 –42,8 –11,2 4,6 4 38,3 15,2 –8,6 20 2,4 –8,4 3,9 –14,5 36,3 –16,9 0 0,07 –6 –12,2 –9,1 –6 –4,2 –4,3 –2,72 1996 Variación de los precios en pesetas corrientes 11,1 –2,9 3,8 19,8 9,3 –4,8 –3,8 1,9 4,3 2,5 3,6 18,2 6,5 0,5 8,5 6,63 –0,9 4,3 1,7 10,9 –0,4 –0,8 2,96 Media anual 23,6 –24,1 –2,0 153,5 88,5 –36,8 –29,5 –2,5 25,8 11,2 31,0 122,2 3,4 –12,3 87,5 40,50 –10,9 32,7 10,93 –6,3 –4,2 –7,3 17,48 Variación 1989-1996 47,5 6,6 0 49,8 0 –15 0 –8,2 10,1 1,6 0 –6,4 7,5 –0,6 5,3 1,23 0 0,2 0,1 –6,5 3,9 –1,3 2,5 1989 –3,7 –9,2 60 115 25,8 –17 0 0,8 17,3 –25 0 –6,3 –6,6 –4,1 10,6 –5,27 0 –4,4 –2,2 –6,2 –6,3 –6,3 0,9 1990 –17 –15 –45 –34 –3,3 –16 –19 –3,8 –19,0 2,8 0 –5,6 59,6 21,4 0 13,03 0 –0,6 –0,3 –5,5 –5,6 –5,6 –3,0 1991 43,3 –16,7 –24,9 –6,8 0,5 –30,5 –26,2 –15,6 –9,6 –2,9 0 –5,6 –31,1 –26,9 –5,6 –12,02 –26,9 3,9 –11,5 –5,8 –14,9 –10,4 –10,9 –18 –13 6,1 –0,7 –11 –2,2 –0,3 34,9 –0,5 –5,5 0 149 24,8 –23 –3,8 23,58 6,6 –12,9 –3,2 –22,8 –4,4 –13,6 1,6 1992 1993 77,5 –12 1 –16 –7,6 3,2 3,9 –38 1,5 –11 –0,9 –4,5 –38 31,2 19,7 –0,62 4,7 –4,2 0,3 –55,6 –4,5 –30,1 –7,2 1994 –8,9 10,7 –4,1 0,4 –1,4 –11 –2,9 –12 –3,6 30,2 16,1 –4,5 –4,0 –16 1 –2,13 –4,2 24,9 10,4 154,0 –4,5 74,8 19,8 1995 –45 –14 1 0,4 33,5 11,3 –12 15,9 –1,1 –12 0,3 –18 31,7 –20 –3,4 –3,38 –9,3 –15,2 –12,3 –9,2 –7,5 –8,4 –6,3 1996 Variación de los precios en pesetas constantes (base 1992) 5,4 –7,8 –0,7 13,5 4,6 –9,5 –7,1 –3,3 –0,6 –2,7 1,9 12,3 1,1 –4,7 3 1,82 –3,6 –1,0 –2,3 –5,3 –5,5 –0,1 –0,3 Media anual –18,6 –50,0 –31,1 –67,0 –32,6 –58,4 –47,1 –35,8 –17,7 –26,7 –15,4 –46,4 –31,9 –42,2 –23,5 –2,59 –29,1 –12,6 –20,8 –38,2 –36,9 –37,6 –19,7 Variación 1989-1996 17/2/00 07:24 IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola 93 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Anguila Dorada Lenguado Lubina Mugílidos Rodaballo Salmón Seriola Media peces marinos Almejas Berberecho Escupiña Mejillón Ostras Vieira Media moluscos Camarón Langostinos Media crustáceos Tenca Trucha arcoiris Media continentales Media sector Especie Tabla 26 Variación de los precios en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) de las especies acuícolas en España en el período 1989-1996 5878-II.Cap3 Página 93 IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 94 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La información obtenida de estos datos se estructura en tres grupos: • Variación media de los precios acuícolas. • Análisis pormenorizado de la variación de precios para cada especie. • Especificación de la variación de precios en función de cual sea la etapa del ciclo de vida de la especie. Los resultados obtenidos del análisis de los datos, sintetizados en la Tabla 27, son: — El precio de los productos acuícolas, cuando se analiza en pesetas corrientes, ha experimentado un ligero incremento del 17,48 de media, lo que supone un incremento medio anual de precios para este sector del 2,96. El incremento que han sufrido los precios acuícolas es muy inferior al de los precios en general2 para dicho período (el IPC sufrió un incremento acumulado del 51,8 con un incremento medio anual del 5,4) de manera que, si deflactamos los precios acuícolas eliminando la variación debida a factores monetarios, nos encontramos con que han sufrido un descenso del 19,7, con una bajada media anual del 0,3. Tabla 27 Variaciones en los precios de las especies acuícolas en el período 1988-1996 PERÍODO 1988-1996 ESPECIE Pesetas corrientes Pesetas constantes (Base 1992) Variación media anual Variación acumulada Variación media anual Variación acumulada Peces marinos . . . . . . Peces continentales . . Moluscos . . . . . . . . . . Crustáceos . . . . . . . . . 4,3 –0,8 6,63 1,7 25,8 –7,3 40,5 10,93 –0,6 –0,1 1,82 –2,3 –17,7 –37,6 –2,59 –20,8 Total sector . . . . . . 2,96 17,48 –0,3 –19,7 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. — La evolución de los precios varía mucho de una especie a otra. Así, se puede observar que: • Los moluscos han incrementado su precio un 40,5 en el período de estudio, con lo que han logrado mantener su precio en pesetas constantes con una pérdida de sólo un 2,59. La situación para las demás especies es mucho peor con ligeros incrementos en pesetas corrientes que suponen importantes reducciones en pesetas constantes. • Los peces marinos han sufrido un incremento del 4,5 anual en precios corrientes, lo que supone una pérdida del 17,7 en pesetas constantes para el período. 2 La evolución del IPC en España en el período 1988-1996 se obtuvo de la base de datos del INE (www.ine.es) con base en 1992. 94 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 95 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI • Los crustáceos, con un leve incremento del 1,7 anual de los precios corrientes, han sufrido un descenso de precios en pesetas constantes del 20,8 en el período de referencia. • La situación de los peces continentales es crítica ya que no logran mantener los precios ni siquiera en pesetas corrientes, con una reducción del 0,8 anual que supone una caída de precios de un 37,6 en pesetas constantes en el período estudiado. — Las diferencias en la evolución de los precios puede explicarse, en parte, por cual es la etapa del ciclo de vida en la que se encuentra la especie. Así, para las especies que están en la etapa de saturación, donde el producto hace más de 5 años que está introducido en el mercado y los consumidores ya conocen su origen acuícola, como es el caso de los peces continentales, los precios no se mantienen ni en pesetas corrientes, sufriendo las empresas una reducción de precios en pesetas constantes muy elevada. Sin embargo, cuando está en las primeras etapas la situación se ve amortiguada aunque se sigue produciendo un descenso de precios en pesetas constantes como en el caso de los peces marinos. — Los cambios en los gustos de los clientes permiten explicar las variaciones de los precios de algunas especies concretas como la anguila, la lubina o los mugidos. Pero el resultado más espectacular a la hora de mantener los precios lo logran los moluscos que han logrado desarrollar una industria de transformación que permite comercializar los productos acuícolas en igualdad de condiciones que los no acuícolas con lo que, prácticamente, han logrado mantener los precios en pesetas constantes. 3.3.3. Estimación de los ingresos de una explotación acuícola La estimación de los ingresos de una explotación acuícola presenta peculiaridades debido a las especiales características de este tipo de empresas, que han sido consideradas en los apartados anteriores y que podemos sintetizar en tres puntos: • La capacidad productiva y, por tanto, la cantidad ofertada está condicionada por la especie seleccionada, el proceso biológico empleado, el tipo de explotación y la infraestructura de las empresas. La capacidad productiva de la empresa no es constante dado que se va incrementando por el efecto experiencia y la I + D. • Los ingresos fluctúan debido a la volatilidad de los precios. Detectándose una tendencia a la bajada de precios, provocada por el incremento de la oferta y de la competencia. • La demanda de este tipo de productos homogéneos es muy difícil de estimar concretamente para cada empresa, dada la limitada capacidad que tienen las empresas de este sector para diferenciar su oferta. Por este motivo, dependerá, de forma global, de los hábitos de consumo y de las fluctuaciones de los precios que hacen posible equilibrar la oferta con la demanda. La evolución de las ventas y por tanto de los ingresos de las empresas acuícolas dependerá de la cantidad producida y de la evolución de los precios de mercado de manera que, para realizar una previsión de los ingresos, nos tendremos que referir a la evolución del valor de la producción global en el mercado. Esta previsión la rea95 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 96 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI lizamos utilizando los datos del valor de la producción acuícola global en el mercado en el período 1988-1996, mediante los cuales se calculan las variaciones interanuales en porcentaje (Tabla 28). Estos datos globales permiten hacer una previsión de cual va a ser el comportamiento de las ventas y, por tanto, de los ingresos de explotación de las empresas. La información obtenida se estructura en tres apartados: • Variación media anual del valor de la producción del sector acuícola en el mercado. • Análisis pormenorizado de la evolución del valor para cada especie. • Especificación de la variación del valor en función de cual sea la etapa del ciclo de vida en el que se encuentre la especie. Los resultados obtenidos del análisis de los datos, sintetizados en la tabla 29, son: — La evolución del valor agregado de la producción del sector acuícola, cuando se analiza en pesetas corrientes, ha experimentado un fuerte incremento del 16,1 de media anual (un 12,1 sin tener en cuenta el mejillón que, por su alto volumen, puede distorsionar el resultado), lo que revela la capacidad de las empresas para incrementar sus ingresos dado que el incremento de la producción es mucho más importante que el efecto que produce su incremento en las ventas. Este incremento se mantiene en pesetas constantes a pesar del fuerte impacto de la inflación en el período de análisis (el IPC sufrió un incremento acumulado del 51,8, con un incremento medio anual del 5,4) de manera que el crecimiento anual del valor, eliminando la variación debida a factores monetarios, es del 10,7 anual (un 6,9 sin tener en cuenta el mejillón), crecimiento que es muy significativo si valoramos que los precios de las especies acuícolas han sufrido un descenso del 19,7, con una bajada media anual del 0,3, en dicho período. — El análisis pormenorizado del valor de mercado de las distintas especies pone de manifiesto que su evolución varía mucho de una especie a otra (Tabla 27). Así, se puede observar que: • Los peces marinos han incrementado el valor de sus ventas en el mercado un 34,2 en pesetas corrientes que queda reducido a un 27,6 en pesetas constantes, con lo que las empresas que se dedican a explotar estas especies pueden contar con un incremento de los ingresos muy importante a pesar del reducido incremento de los precios. El comportamiento de las ventas de las algunas especies marinas permite apreciar incrementos muy importantes como el incremento del 49,3 de la dorada, 79,7 de la lubina, 47 del rodaballo o el 43 de la anguila. • Los moluscos tienen un comportamiento positivo en cuanto a la evolución del valor de las ventas, con un incremento medio anual del 19,2 que se reduce a un 13,7 cuando lo calculamos en pesetas constantes. Es de especial importancia destacar la importancia del mejillón en esta evolución ya que su volumen distorsiona, no sólo los datos de los moluscos, que son de un 3,2 anual que se reduce a un –1,4 cuando pasamos a pesetas constantes, sino que afectan al valor de las ventas del sector en su conjunto; razón por la cual siempre aportamos el dato de la evolución del sector incluyendo el mejillón y sin contarlo. 96 Tabla 28 210,0 147,1 0,0 31,3 0,0 154,2 0,0 31,3 71,7 9,7 0,0 0,0 –8,8 6,8 12,5 3,4 9,0 0,0 68,5 34,3 1,6 14,2 7,9 29,3 30,7 Anguila Dorada Lenguado Lubina Mugílidos Rodaballo Salmón Seriola Media anual peces marinos Almejas Berberecho Escupiña Mejillón Ostras Vieira Media anual moluscos Media anual mol. sin el mejillón Camarón Langostinos Media anual crustáceos Tenca Trucha arcoiris Media anual peces continentales Media anual sector Media sin el mejillón 36,6 57,3 –16,7 195,2 169,2 110,4 0,0 28,6 72,6 –14,6 0,0 400,0 –10,5 –11,1 –5,6 59,7 –13,5 0,0 –52,2 –26,1 –24,3 0,0 –12,2 23,5 5,2 1990 –30,7 72,2 30,0 111,3 –51,4 14,5 33,3 51,9 28,9 2,8 0,0 –70,0 90,5 1,2 5,9 5,0 2,3 0,0 –17,0 –8,5 13,2 0,0 6,6 8,0 7,3 1991 62,5 37,7 15,4 53,4 105,9 44,8 10,5 –36,6 36,7 –7,7 0,0 0,0 –48,1 –1,4 0,0 –9,5 –6,0 43,5 45,8 44,6 1,6 –7,5 –3,0 17,2 18,1 1992 43,4 9,4 0,0 168,7 –5,7 –0,2 –25,1 –80,8 13,7 0,4 0,0 333,3 –43,2 –23,4 –7,8 43,2 7,0 30,3 19,0 24,7 –19,9 6,5 –6,7 18,7 9,7 1993 42,4 –4,4 6,7 –16,9 27,3 23,6 76,0 20,0 21,8 19,8 –28,0 0,0 53,1 14,8 4,8 10,8 13,0 –23,3 22,2 –0,5 –53,5 1,8 –25,8 1,6 2,1 1994 8,6 49,7 112,5 38,1 –19,0 12,5 –22,3 –83,3 12,1 53,6 152,1 0,0 –19,0 20,3 –10,3 32,8 53,8 21,2 11,9 16,6 8,3 9,7 9,0 17,6 22,9 1995 Incremento anual en el valor de la producción acuícola en pesetas corrientes –29,0 25,3 –5,3 56,3 52,9 16,0 –4,5 20,0 16,5 –41,4 –46,9 –69,2 41,0 –0,4 165,4 8,1 –34,5 18,8 32,0 25,4 –7,7 9,8 1,1 12,7 2,1 1996 43,0 49,3 17,8 79,7 34,9 47,0 8,5 –6,1 34,2 2,8 9,6 74,3 6,9 0,8 20,6 19,2 3,2 11,3 16,3 13,8 –10,1 4,3 –2,9 16,1 12,1 190,3 131,3 0,0 22,9 0,0 138,0 0,0 22,9 63,2 2,7 0,0 –6,4 –14,6 0,0 5,3 –2,2 2,1 0,0 57,8 28,9 –4,8 6,9 1,0 22,7 23,8 1989 28,0 47,4 –21,9 176,6 152,3 97,1 0,0 20,5 62,5 –20,0 0,0 368,5 –16,1 –16,7 –11,5 50,7 –18,9 0,0 –55,2 –27,6 –29,1 –6,3 –17,7 17,0 –0,4 1990 –34,6 62,5 22,7 99,5 –54,1 8,1 25,9 43,4 21,7 –3,0 0,0 –71,7 79,8 –4,5 0,0 0,1 –3,4 0,0 –21,6 –10,8 6,9 –5,6 0,6 2,9 2,0 1991 53,4 30,0 8,9 44,8 94,3 36,7 4,3 –40,1 29,1 –12,8 0,0 –5,6 –51,0 –6,9 –5,6 –13,6 –11,3 35,4 37,6 36,5 –4,1 –12,7 –8,4 10,9 11,5 1992 37,1 4,7 –4,4 156,9 –9,8 –4,6 –28,3 –81,6 8,7 –3,9 0,0 314,4 –45,6 –26,7 –11,8 37,7 2,3 24,6 13,8 19,2 –23,4 1,9 –10,7 13,7 4,9 1993 36,0 –8,7 1,9 –20,6 21,5 18,0 68,1 14,6 16,4 14,4 –31,2 –4,5 46,2 9,6 0,1 5,8 7,9 –26,7 16,7 –5,0 –55,6 –2,8 –29,2 –3,0 –2,5 1994 37,1 43,0 103,0 31,9 –22,7 7,5 –25,8 –84,1 7,1 46,7 140,8 –4,5 –22,6 14,9 –14,3 26,8 46,9 15,8 6,9 11,4 3,5 4,8 4,2 12,4 17,4 1995 1996 –35,5 35,3 21,0 41,4 –8,5 12,7 51,0 70,4 47,7 28,7 12,1 39,1 –7,8 4,5 15,9 –11,1 12,5 27,6 –43,4 –2,4 –48,7 7,6 –70,3 65,0 36,2 1,5 –3,9 –4,3 156,3 14,8 4,4 13,7 –36,8 –1,4 14,7 8,0 27,5 10,4 21,1 9,2 –10,9 –14,7 6,1 –1,0 –2,4 –7,8 8,9 10,7 –1,4 6,9 Incremento anual en el valor de la producción acuícola en pesetas constantes (base 1992) 17/2/00 07:24 IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola 97 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 1989 Especie Año Variación anual del valor de mercado de la producción acuícola en pesetas corrientes y en pesetas constantes (base 1992) en España en el período 1989-1996 (%) 5878-II.Cap3 Página 97 IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 98 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 29 Variaciones medias anuales del valor de mercado de las especies acuícolas en España en el período 1988-1996 Valor de la especies acuícolas período 1988-1996 Categorías de especies acuícolas Incremento anual en pesetas corrientes Incremento anual en pesetas constantes (base 1992) Peces marinos 34,2 27,6 Peces continentales –2,9 –7,8 Moluscos 19,2 13,7 3,2 –1,4 Moluscos-mejillón Crustáceos 13,8 9,2 Total sector 16,1 10,7 Total sector sin mejillón 12,1 6,9 Fuente: Elaboración propia sobre datos Secretaría de Pesca, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. • Las ventas de crustáceos sufren un incremento anual del 13,8 en pesetas corrientes que se reduce a un 9,2 en pesetas constantes. • La situación de los peces continentales es crítica puesto que no logran mantener el valor de mercado de sus ventas, ni siquiera en pesetas corrientes, con una reducción del 2,9 anual que supone una caída de las ventas de un 7,8 en pesetas constantes en el período estudiado. — Las diferencias en la evolución del valor de las ventas en el período objeto de estudio pueden explicarse, en parte, por la etapa del ciclo de vida en que se encuentre la especie. Así, para las especies que están en la etapa de saturación, donde el producto hace más de 5 años que está introducido en el mercado y los consumidores ya conocen su origen acuícola, como es el caso de los peces continentales, las ventas no se mantienen ni en pesetas corrientes, sufriendo las empresas una reducción de las ventas y, por tanto, de los ingresos en pesetas constantes muy elevada. Sin embargo, cuando está en las primeras etapas la situación es muy distinta dado que, aunque se sigue produciendo un descenso de precios en pesetas constantes, el aumento de la producción permite incrementar las ventas de forma importante, como en el caso de los peces marinos. — Los cambios en los gustos de los clientes permiten explicar las variaciones de las ventas de algunas especies concretas como la anguila, la lubina o los mugidos. Pero el resultado más espectacular a la hora de mantener los precios lo logran los crustáceos y el mejillón, que han logrado desarrollar una industria de transformación que permite comercializar los productos acuícolas en igualdad de condiciones que los no acuícolas, con lo que consiguen mantener un incremento de las ventas importante, a pesar de ser especies que llevan mucho tiempo en el mercado. 98 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 99 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El resultado del análisis de la viabilidad comercial de una empresa de estas características se refleja en la estimación de los ingresos a lo largo del tiempo, mediante la previsión de la evolución de la oferta y de los precios de mercado. Con el fin de mejorar la comprensión se muestran las etapas de la evolución gráficamente, señalando, para cada una de ellas, las razones que explican su forma y las variables críticas a la hora de explicar la duración y la magnitud de los efectos que se muestran. La representación gráfica genérica de los ingresos previstos en una empresa acuícola tiene la forma que muestra la figura 48; en ella distinguimos 4 etapas: 1 Etapa: Introducción – Crecimiento (0 – T1): En esta primera etapa la empresa comienza a estandarizar los procesos de producción lo que permite conseguir un incremento de la producción elevado; además, como el incremento de la oferta no es muy grande, los precios se mantienen constantes o fluctúan a la baja ligeramente lo que produce un aumento de las ventas. La cuantía del incremento de la demanda en este período depende de las variables críticas siguientes: Figura 48 Representación gráfica de la evolución de las ventas de una empresa acuícola Ventas * Producción: ALTA * Incremento producción: ALTO * Precio: BAJANDO-INESTABLE * Ventas: DECRECIENTES * Identificación del Origen acuícola: CRECIENTE * Producción: BAJA * Incremento producción: ALTO * Precio: ALTO-ESTABLE * Ventas: CRECIENTES * Identificación del Origen acuícola: BAJA * Producción: ALTA * Incremento producción: MODERADO * Precio: BAJO-ESTABLE * Ventas: DECRECIENTES/CRECIENTES * Identificación del origen acuícola: TOTAL * Producción: ALTA * Tiempo T= INTRODUCCIÓN-CRECIMIENTO T1 SATURACI ÓN-CRISIS T2 RECONVERSION NN Ó T3 ESTABILIZACIÓN T4 Fuente: Elaboración propia. — Efecto experiencia, que permite el incremento de la producción mediante la optimización de las instalaciones y la I + D de los procesos biológicos. Cuanto mayor sea este efecto, mayor será el incremento de las ventas. — Elasticidad de las ventas, definida como el efecto de la evolución de los precios en las ventas. Así, cuanto mayor sea la elasticidad de las ventas, menores serán las variaciones de precios que permiten absorber un incremento de las ventas. Es frecuente que se produzca un incremento de la cantidad vendida y del precio simultáneamente en esta etapa. 99 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 100 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI — Volumen de la producción de la empresa comparado con la oferta global de la especie de manera que, cuanto menor sea el incremento global de la oferta, menor será el efecto que produce sobre los precios. — Percepción que tenga el consumidor final del origen del producto. Así, cuanto menor sea la percepción del origen acuícola del producto, mayor será el precio que está dispuesto a pagar, no siendo extraño que en la fase de introducción el consumidor final no tenga conocimiento del origen acuícola. Por ejemplo en pocos restaurantes aclaran el origen acuícola de la dorada de ración que ofertan en la carta. Sin embargo, cuando se supera esta primera etapa, el oferente aclara el origen para justificar el precio, por ejemplo las truchas o el salmón de río en restaurantes situados en zonas ribereñas; diferenciación que llega al límite con el primer salmón de la temporada (el «campanu») que puede alcanzar precios altísimos en el mercado. Para ilustrar mejor las diferencias en la evolución de las ventas en la fase de introducción, mostraremos tres casos concretos: a) Empresa con un elevado efecto experiencia, que le permite incrementar la producción y las ventas, sin que ello suponga una variación grande en la oferta global y sin que el consumidor final conozca el origen acuícola del producto. En este caso, la demanda es absolutamente elástica al permitir incrementarse las cantidades vendidas sin reducir los precios, provocando un incremento lineal de las ventas (véase Fig. 49). b) Empresa cuyo efecto experiencia le permite incrementar las ventas en un porcentaje mayor que la reducción de los precios que se produce para absorber el incremento de la oferta, debido a que se trata de una especie cuya demanda es elástica. En este caso se produce un incremento convexo de las ventas al incrementarse las cantidades reduciéndose algo los precios (véase Fig. 50). Figura 49 Representación gráfica de la evolución de las ventas en la fase de introducción de una empresa acuícola con demanda absolutamente elástica Ventas Tiempo T=0 Fuente: Elaboración propia. 100 T1 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 101 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI c) El caso menos frecuente en la etapa de introducción se produciría cuando la empresa, por tener una dimensión grande y una capacidad productiva que permite alterar significativamente la oferta global del producto, incrementa las ventas en un porcentaje menor que la reducción de los precios que se produce para absorber el incremento de la oferta, debido a que se trata de una especie cuya demanda es inelástica. En este caso se produce un incremento convexo previo para comenzar rápidamente una reducción de las ventas (véase Fig. 51). Figura 50 Representación gráfica de la evolución de las ventas en la fase de introducción de una empresa acuícola con demanda elástica Ventas Tiempo T= T1 Fuente: Elaboración propia. Figura 51 Representación gráfica de la evolución de las ventas en la fase de introducción de una empresa acuícola con demanda inelástica Ventas Tiempo T= T1 Fuente: Elaboración propia. 101 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 102 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2 Etapa: Expansión con saturación del mercado – Crisis (T1 – T2): En esta etapa se produce un incremento sustancial de la oferta, propiciado por el desarrollo y difusión de la biotecnología, que permite la proliferación de este tipo de empresas. Y, por otra parte, las empresas existentes estandarizan los procesos optimizando la capacidad productiva. Este incremento de la oferta no puede ser absorbido por la demanda provocando luchas competitivas entre las empresas con caídas de los precios. En esta etapa sólo sobreviven las empresas más eficientes, saliendo las menos eficientes del sector o desplazando su oferta hacia otras especies. La intensidad de la crisis en esta etapa será mayor cuanto: — Mayor sea el incremento de la oferta debida a la creación de nuevas empresas y a la optimización de la capacidad productiva de las existentes. — Menor sea la elasticidad de la demanda, de forma que para absorber el incremento de la producción será necesaria una reducción mayor de los precios. — Mayor sea el volumen de la producción acuícola comparado con la oferta global de la especie. — Mayor percepción tenga el consumidor final del origen acuícola del producto. 3 Etapa: Reconversión (T2 – T3): En esta etapa se produce un reajuste de las empresas del sector con la salida de las menos eficientes. La oferta se estabiliza y los precios se recuperan, con lo que se produce un incremento de los ingresos. Ahora las empresas vuelven a tener resultados positivos. 4 Etapa: Estabilización (T3 – T4): En esta etapa se produce una estabilización de la oferta y de los precios, con tendencia a un crecimiento moderado de las ventas, debido a que los consumidores demandan cada vez más este tipo de productos, y de los beneficios, motivado más por una gestión eficiente que por nuevos incrementos en la producción. Esta situación puede variar cuando: • Se logra la viabilidad biológica de una especie nueva que permita una mejor utilización de las instalaciones aprovechando el comienzo de un nuevo ciclo con la nueva especie. • Se produce un avance en: nuevos alimentos, investigación en genética o farmacología, que propician reducciones en los costes o incrementos en la productividad. • Se desarrolla una industria de transformación que permite comercializar los productos acuícolas con un mayor valor añadido. 3.4. Viabilidad técnica de una empresa acuícola 3.4.1. El papel de la producción en un proyecto acuícola Se entiende por producción el proceso tecnológico que permite la transformación de unas entradas o factores (materias primas, mano de obra, maquinaria, capital, etc.) 102 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 103 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI en salidas (productos terminados, servicios, etc.). El proceso de producción debe ser considerado el aspecto central de la empresa, ya que tiene una gran incidencia en la cantidad, calidad y coste de la oferta. Para que la empresa pueda llevar a cabo su actividad es preciso disponer de unos medios técnicos, humanos y financieros que, debidamente coordinados, permitan la fabricación y comercialización de un producto o la prestación de un servicio. Los factores de producción o entradas son diferentes para cada tipo de empresa acuícola, aunque pueden sintetizarse en: materias primas diversas, mano de obra, energía, maquinaria, instalaciones, información y tecnología. El ámbito de aplicación del concepto de producción es cada día más amplio, pudiendo aplicarse a todos los sistemas que utilicen un proceso tecnológico para ofertar un producto, con independencia de la naturaleza del producto final y del tipo de factores utilizados. El sistema productivo depende fundamentalmente de la tecnología, dado que ésta condiciona la proporción de factores que se utilizan, su capacidad productiva y la calidad del producto. La tecnología proporciona al sistema un procedimiento específico para transformar los distintos factores, de forma que un cambio en la tecnología utilizada puede modificar las necesidades del sistema productivo, el producto final y, por tanto, la competitividad de la empresa. Las cuestiones que se deben considerar a la hora de diseñar el sistema productivo varían sustancialmente según la especie, etapa del ciclo vital y tipo de explotación de la empresa, pero las podemos sintetizar en tres aspectos claves a considerar para caracterizar el sistema productivo en un proyecto acuícola: la localización, la infraestructura y el proceso productivo. A) Localización: Entendemos por localización de la empresa el sitio elegido por el empresario para situar ésta. Así pues es el lugar donde tiene lugar la actividad productiva, esto es, el emplazamiento adonde se deben trasladar los factores de producción y donde se obtienen los productos que, a su vez, son transportados hasta el mercado. La localización, dadas las peculiares características de este tipo de empresas, tanto a la hora de solicitar permisos como debido a las exigencias del tipo de explotación es el primer factor a determinar. La decisión sobre la localización debe tener en cuenta los siguientes aspectos: — Condiciones ambientales que favorecen la productividad de la empresa y el tipo de explotación como, por ejemplo, la temperatura del agua o la existencia de un ecosistema adecuado. — Legislación medioambiental, ayudas económicas y fiscales. En el momento de efectuar la selección es preciso conocer la legislación de cada una de las zonas consideradas. Los Planes Generales de Ordenación Urbana, los Planes Parciales y las Ordenanzas Municipales establecen el tipo de uso autorizado en cada zona y las condiciones que deben reunir las instalaciones que en ellas se ubiquen. Además, a fin de promover la instalación de empresas en determinadas zonas, la Administración las ha dotado de determinados beneficios económicos y fiscales que han de considerarse. 103 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 104 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 52 El sistema productivo de la empresa acuícola SISTEMA DE PRODUCCIÓN DE LAS EMPRESAS ACUÍCOLAS FACTORES • • • • • • • Mano de obra Materiales Equipos Instalaciones Energía Información Tecnología TIPO DE EMPRESA PROCESO DE PRODUCCIÓN HATCHERY ALEVINES NURSERY PROCESO DE PRODUCCIÓN ADULTOS S ENGORDE Fuente: Elaboración propia. — Precio. Éste es un factor que en muchos casos puede ser determinante a la hora de la elección. No obstante, en el momento de evaluar el precio no sólo hay que tener en cuenta la cantidad que se va a pagar, sino también lo que va a costar acondicionar el terreno y la relación del precio con el resto de los factores. — Proximidad del mercado. Éste es un objetivo a alcanzar que en muy pocas ocasiones se consigue, puesto que es frecuente una amplia dispersión del mismo. No obstante, puede interesar localizarse en su punto medio o en zonas que permitan un acceso rápido y eficiente. — Facilidad para disponer de materias primas. La empresa va a consumir constantemente determinados productos (factores productivos), interesa asegurarse el fácil suministro de los mismos y evitar tener que disponer de grandes stocks. — Infraestructuras y comunicaciones. La existencia en la zona de diferentes fuentes de energía que la empresa puede utilizar, los servicios existentes y las comunicaciones con el resto de territorios son factores que deben tenerse en cuenta. — Restricciones laborales de la zona. En concreto, interesa que en la zona a elegir exista personal cualificado para cubrir los distintos puestos de trabajo y profesionales especializados que puedan asesorar a la empresa, prestando especial atención a la conflictividad laboral y a las relaciones con sindicatos. 104 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 105 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI — Otros factores. Entre los que se podría citar la climatología, la actitud de la comunidad o cualquier aspecto que sea relevante para la empresa que no hubiera sido tenido en cuenta con anterioridad. Para elegir la localización óptima se puede utilizar un índice mediante el cual, una vez seleccionados los factores que inciden específicamente en la localización de la empresa, se valoran de acuerdo con una escala numérica y se ponderan en función de la importancia del factor, lo que nos permite obtener una valoración de cada localización. B) La infraestructura (inversiones en activo fijo). La tecnología empleada, el tipo de explotación y la etapa del ciclo vital requiere la utilización de unos equipos e infraestructura específica. La selección de los equipos e instalaciones dependerá de sus características técnicas que condicionan la capacidad productiva y la utilización de los demás factores. El tipo y la cuantía de las inversiones en equipamiento e infraestructura son algunas de las decisiones más importantes que tiene que tomar el promotor de un proyecto acuícola, dado que comprometen una gran cantidad de recursos económicos, no se pueden modificar a corto plazo y afectan a la competitividad de la empresa en el mercado. El tipo de explotación es el factor que más condiciona la inversión en infraestructura de manera que, cuanto más extensivo sea el sistema, mayor será la necesidad de disponer de un espacio natural con unas condiciones ecológicas, geográficas y climáticas adecuadas, pero menor será la necesidad de grandes inversiones en equipamiento (que, generalmente, se limitarán a un sistema de compuertas y bombeo de agua). Sin embargo cuando el sistema es intensivo requerirá una gran inversión en equipos e infraestructura, diferenciando las necesidades de inversión de las empresas en función de la etapa del ciclo vital a que se dediquen. Así, para las empresas de reproducción y cría de alevines los equipos básicos serían: las instalaciones de captación y bombeo de agua, los equipos para trasladar y tratar el agua (conducciones y equipos de filtrado, desinfección, control de temperatura y aireación) y por último los tanques de cultivo. Las empresas de engorde tendrán una infraestructura distinta cuando están en tierra firme que cuando están en el mar, ya sean flotantes, sumergidas o fondeadas. En el caso de instalaciones en tierra firme, la distancia y altura respecto al nivel natural del agua incide en las instalaciones de bombeo, siendo comunes los estanques, las instalaciones para el movimiento y el mantenimiento de la calidad del agua. Cuando las instalaciones están en el mar, las jaulas y cajas de engorde y los sistemas de flotación y anclaje al fondo son las inversiones más importantes. Los equipos e infraestructura son factores críticos a la hora de determinar las necesidades financieras y el presupuesto de capital de la empresa y su capacidad productiva, que puede venir medida en unidades o kilos por metro cuadrado al año, según sean empresas de alevines o de engorde. 105 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 106 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI C) Definición de proceso productivo: En sentido amplio y para cualquier tipo de actividad y tamaño de empresa, el proceso de producción puede definirse como el conjunto de actividades que constituyen el proceso de transformación que tiene lugar en el seno de la empresa. Este proceso se justifica económicamente por la creación de valor añadido, debido a que los productos tienen más valor que los factores productivos. El diseño del sistema productivo es un problema técnico cuya solución normalmente requiere de la colaboración de expertos, de manera que el promotor de un proyecto acuícola lo primero que tiene que saber, antes de comenzar a analizar la viabilidad técnica, es la forma en que se van a realizar los procesos tecnológicos necesarios para poder ofertar los productos previstos. Si el promotor no tiene una idea clara del proceso de producción no le quedará más remedio que contratar a un gabinete técnico para que se lo diseñe. El concepto de proceso de producción puede extrapolarse de la empresa industrial, típicamente transformadora, que compra materias primas y productos semielaborados para combinarlos o transformarlos con el fin de obtener un producto. Los aspectos más importantes en la caracterización del proceso productivo son: — La distribución en planta entendida como la ordenación de los espacios e instalaciones, con el fin de conseguir la mejor coordinación entre las actividades de los factores de producción para que los procesos se lleven a cabo de la forma más racional y económica posible. Los beneficios que se obtienen con una buena distribución en planta son: • Aumenta la capacidad de producción, evitando los cuellos de botella y optimizando la utilización de todos los elementos de fabricación. • Reduce al mínimo el movimiento de materiales. • Ahorra espacio ocupado en las áreas de producción, almacenamiento y servicios. • Facilita el proceso de fabricación, proporcionando seguridad y confort al personal. — La productividad es la medida que nos permite valorar el rendimiento de los procesos y factores de que depende la producción. PRODUCTIVIDAD = Producción obtenida Cuantía del elemento necesario para obtenerla Entendiéndose por producto todo lo que se obtiene en un proceso de fabricación en el más amplio sentido de la palabra y por producción la cantidad de producto obtenido en un tiempo determinado. Para definir la productividad hay que precisar además el elemento o factor que interviene en la producción, con relación al cual se valora la productividad. Los factores que más corrientemente se consideran son: • El capital o las máquinas que intervienen en el proceso de producción. • Las materias primas empleadas. • La mano de obra empleada directamente en la producción. 106 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 107 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Para lograr este aumento de productividad se aplican mejoras sobre: los productos (Normalización y Control de calidad), los elementos de producción (disposición de las máquinas y de los operarios, materiales, seguridad e higiene en el trabajo, relaciones humanas, selección, formación y remuneración del personal) y sobre el sistema de producción (planificación y control de la producción, métodos de trabajo y control de costes y producción). — Los recursos humanos. Una vez definida la actividad de la empresa, las instalaciones y los medios técnicos necesarios, los promotores del proyecto deberán plantearse algunas preguntas en relación con las personas que van a colaborar en el mismo. ¿Cuántas personas va a necesitar la empresa? ¿de qué forma se les va a contratar? ¿qué actividades van a subcontratarse? ¿qué cualificación deberá tener cada una de las personas contratadas? ¿cómo efectuar la selección? ¿qué categorías profesionales van a tener y qué responsabilidades se les van a asignar? ¿qué formación será necesaria? etc. El equipo humano con el que cuenta la empresa constituye uno de sus principales activos puesto que disponer de personal capacitado y adaptado a los diferentes puestos de la empresa va a ser fundamental para la marcha de la misma. Por lo tanto, la elección de las personas necesarias debe ser objeto de una especial atención. Dada la importancia de este aspecto se trata específicamente en otro apartado de esta publicación. 3.4.2. Cuantificación de la viabilidad técnica: El presupuesto de capital y la estimación de costes Una vez que se han examinado los aspectos técnicos más importantes para llevar a cabo la actividad de la nueva empresa, lo que quiere decir que ya hemos decidido donde se va a localizar, las necesidades de infraestructura y equipos, la forma en que se va a organizar la producción y las necesidades de personal, hemos de cuantificarlas para buscar las fuentes de financiación necesarias para llevarla a cabo, siendo el reflejo de esta cuantificación el presupuesto de capital. 3.4.2.1. El presupuesto de capital El presupuesto de capital hace referencia a las inversiones, tanto en inmovilizado (aquellos activos que permanecen en la empresa por un período superior al año) como en circulante (aquellos activos que permanecen en la empresa por un período inferior al año), necesarias para la puesta en marcha y funcionamiento de la empresa. Estas inversiones generan unas necesidades de financiación cuya problemática es distinta a la de los gastos corrientes de funcionamiento, dado que las inversiones han de ir repercutiéndose durante un período largo de tiempo a los costes y son previas, mientras que los gastos se producen a medida que la empresa va realizando su actividad por lo que van a poder pagarse con los ingresos que la empresa obtiene. Contablemente la inversión en inmovilizado y en circulante figuran en el balance, mientras que los gastos corrientes de funcionamiento se recogen en la cuenta de explotación. 107 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 108 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Este presupuesto debe calcularse de forma realista, rigurosa y objetiva, ya que señalará la financiación que se precisa para constituir la empresa. Si se hace así se evitarán problemas posteriores. El presupuesto de capital puede variar en función de las diferentes alternativas que se tomen. Las inversiones en inmovilizado material serán las adquisiciones de la infraestructura física y medios productivos necesarios para el inicio de la actividad, que variará en función de la forma contractual empleada para tener poder de disposición sobre el activo. En los gastos amortizables están incluidos todos los gastos necesarios de iniciación, además de los propios de su constitución; los impuestos que hay que pagar antes de poner la empresa en funcionamiento, los gastos publicitarios iniciales, gas- Tabla 30 Tabla resumen para la elaboración del presupuesto de capital PRESUPUESTO DE CAPITAL Concepto Inmovilizado (Activo fijo) Inmovilizado material (Terrenos, edificios, máquinas y equipos, elementos de transporte, mobiliario...) Inmovilizado inmaterial (Patentes, logotipos, marcas y fondo de comercio) Inmovilizaciones Financieras Gastos amortizables (Gastos de constitución y establecimiento) Total Inmovilizado Activo Circulante Existencias (Mercaderías, productos acabados, productos en proceso de fabricación, productos auxiliares, envases y embalajes...) Realizable (Clientes, Deudores, Efectos a cobrar, Anticipos a personal, Anticipos a proveedores, inversiones financieras temporales...) Disponible (Caja y bancos) Total Activo Circulante Total presupuesto de capital Fuente: Elaboración propia. 108 Importe 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 109 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tos de alta en teléfono, luz y restantes suministros, etc.; es decir, todos aquellos gastos que se recuperan en los años sucesivos mediante el proceso de amortización. El volumen de la inversión en circulante estará en función de las peculiaridades del tipo de explotación acuícola y de la estrategia seguida. Al referirnos a inversiones en circulante se hará en términos medios. Así, por ejemplo, las existencias de piensos serán el stock medio en almacén de cada tipo de pienso que ha de tener para garantizar la continuidad del proceso productivo. Respecto al realizable (aquellos elementos del activo, susceptibles de convertirse en recursos líquidos) será el saldo medio, entendiendo que hay que tener en cuenta, a la hora de realizar el presupuesto de capital, los costes de aplazamiento de cobro, al igual que los anticipos a personal y proveedores. Esto podrá variar en función de los plazos de pago y cobro que establezcamos con proveedores y clientes. Por último el disponible, que es el dinero necesario que hay que tener en caja o bancos para hacer frente a pagos que vayan surgiendo y que será necesario prever antes de iniciar la actividad. A la hora de cuantificar el presupuesto de capital normalmente no se tienen dificultades para hacerlo con el activo fijo dado que, una vez decidida la dimensión los precios de los diferentes elementos, se pueden obtener con facilidad. Un problema bien distinto se produce cuando tenemos que cuantificar la inversión en circulante puesto que la empresa, al no haber comenzado a realizar la actividad, tiene una tendencia a minusvalorar este aspecto; cuando se tendría que hacer lo contrario ya que, cuando el proceso de producción está en la etapa inicial, es frecuente que se produzcan ineficiencias, errores y gastos inesperados que requieren un nivel mayor de existencias y de tesorería que cuando el proceso ya lleva tiempo funcionando y está más ajustado. El presupuesto de capital está en función de la dimensión que hayamos decidido dar a la nueva empresa que, a su vez, estará limitada por la demanda prevista y por las restricciones tecnológicas y de financiación. Su cálculo es indispensable para poder hacer una previsión de los costes ya que de éste dependen algunas de las partidas más importantes como las cargas financieras, las amortizaciones, los costes de almacenaje, etc. 3.4.2.2. Estimación de los costes Una vez que se decide la dimensión de la empresa, teniendo en cuenta la demanda prevista y las restricciones de financiación que tiene el empresario para hacer frente a las inversiones que se han cuantificado en el presupuesto de capital, se procede a hacer un análisis de los costes que supone poner en funcionamiento la empresa, diferenciando y cuantificando los costes fijos (que no dependen del volumen de producción) y los costes variables (que dependen del volumen de producción). El análisis de costes y su estimación es uno de los pasos más importantes para estudiar la viabilidad de un proyecto acuícola ya que es imprescindible para concretar los siguientes aspectos del proyecto: 109 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 110 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Costes totales y el coste unitario para cada nivel de producción, con lo que se tiene una idea clara de las necesidades operativas de la empresa. Previsión de los beneficios, que será una pieza clave para determinar la rentabilidad prevista para la inversión y, por tanto, a la hora de adoptar la decisión de hacer realidad el proyecto. La estimación de costes fijos y variables le permite calcular el punto muerto, o lo que es lo mismo, el nivel de ventas a partir del cual la empresa empieza a tener beneficios. El punto muerto es muy importante dado que nos permitirá apreciar, mediante su comparación con la demanda prevista, la facilidad con que la empresa puede entrar en beneficios. Para calcularlo hay que haber estimado previamente el precio de venta (PV), los costes fijos (CF) y los costes variables unitarios (CV), viniendo la relación de los beneficios esperados con el volumen de ventas previsto en unidades (NV) y la estimación de costes reflejada en la siguiente fórmula: Beneficio = PV · NV – (CF + CV · NV) El punto muerto es el nivel de ventas NV para el que el beneficio es cero, suponiendo que las ventas, cuando son inferiores a esa cantidad, la empresa tiene pérdidas y cuando es superior, tiene beneficios. Su cálculo se deriva de forma sencilla, al igualar a cero el beneficio en la fórmula anterior: PM = CF PV – CV La estimación de los costes permitirá calcular la dependencia que tienen los beneficios del nivel de ventas de la empresa, denominado apalancamiento operativo, que pone de manifiesto como incrementará el negocio su rentabilidad a medida que vaya aumentando su capacidad productiva. Si la empresa tiene un apalancamiento operativo bajo, le resultará muy difícil incrementar su rentabilidad mediante el aumento de las ventas, por lo que necesita tener una demanda de partida elevada. Si, por el contrario, la empresa tiene un apalancamiento operativo elevado, como es el caso de las empresas acuícolas, significa que podría aumentar mucho los beneficios incrementando las ventas, por lo que podría comenzar su actividad con niveles de ventas bajos cuando las expectativas de crecimiento de las ventas fuesen adecuadas. La fórmula que nos permite calcular el apalancamiento operativo (AOP) es: AOP = Q PV CV CF 110 Q · (PV – CV) Q · (PV – CV) – CF = Cantidad vendida en unidades. = Precio de venta unitario. = Costes variables unitarios. = Costes fijos. 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 111 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La enumeración exhaustiva de todos los costes fijos y variables que se pueden presentar en las empresas acuícolas resulta casi imposible dada su gran variedad, por lo que proponemos una tabla que sintetiza, de forma genérica, únicamente los costes que se dan con mayor frecuencia para que el promotor agrupe sistemáticamente los costes previstos en la categoría de fijos o variables, con el fin de poder calcular posteriormente el punto muerto y el apalancamiento operativo. Dichos costes se agrupan según se indica en la tabla 31. 3.5. Viabilidad financiera de una empresa acuícola Un proyecto acuícola es viable financieramente cuando puede generar suficientes beneficios para rentabilizar la inversión necesaria para llevarlo a cabo. Teniendo en Tabla 31 Modelo para la cuantificación de los costes fijos y variables Costes fijos Cantidad Amortización de la infraestructura (Provisión por la depreciación de construcciones, instalaciones, maquinaria, elementos de transporte...) Parte fija de la remuneración de personal (Sueldos, salarios y cargas sociales) Parte fija de las prestaciones contractuales (Leasing, servicios recibidos, otras obligaciones contractuales) Cargas financieras fijas Parte constante de los gastos generales (Gastos de publicidad, suministros, gastos de almacenaje, mantenimiento...) Parte constante de los tributos Seguros TOTAL Costes variables Cantidad Consumo de explotación (Compra de envases y embalajes, materias primas, productos semiterminados...) Parte variable de la remuneración personal Cargas financieras variables (Dependientes del volumen de actividad) Parte variable de tributos Parte variable de gastos genenerales TOTAL Fuente: Elaboración propia 111 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 112 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI cuenta esta definición, la realización de este apartado requiere el análisis de dos aspectos del proyecto: — La estructura y evolución de las principales magnitudes económicas que lo caracterizan. — La financiación del proyecto: fuentes de financiación y estructura financiera. El análisis de la estructura y evolución de las principales magnitudes económicas y financieras de los proyectos acuícolas se realiza mediante el estudio del balance y la cuenta de resultados de varios años (un mínimo de 3 años) de 16 empresas españolas del sector: 5 de cría y engorde, 1 de cría y 10 de engorde. Los datos se obtuvieron de las cuentas anuales presentadas en el Registro Mercantil. La obtención de datos económicos fiables respecto a este tipo de empresas no es una tarea sencilla debido a los siguientes motivos: • La mayor parte de las empresas presentan cuentas simplificadas y sin auditar. • En este sector hay una alta rotación, con frecuentes altas y bajas en la actividad, lo que dificulta la obtención de series de datos continuas. • Los datos contables son «maquillados» para la obtención de alguna de las muchas ayudas públicas que reciben las empresas de este sector. Todas estas limitaciones redujeron la muestra de 25 a 16 empresas que eran las únicas que cumplían las condiciones exigidas: datos de al menos tres años consecutivos, con un balance y cuenta de resultados completos3. 3.5.1. La estructura y evolución de las principales magnitudes económicas de las empresas acuícolas La viabilidad financiera de un proyecto acuícola depende de la capacidad que tenga el proyecto para generar beneficios con los que rentabilizar las inversiones privadas de capital; es, por tanto, necesario conocer cuál es la estructura de los costes y los márgenes de beneficio que se pueden obtener en cada tipo de empresa. Con el fin de analizar las peculiaridades de este tipo de empresas modelizamos el proceso mediante el cual se calcula la rentabilidad de la empresa, especificando el porcentaje de las ventas que se destinan a las compras, al personal, a los gastos generales y el margen que, unido a la rotación del negocio, permitirá conocer la rentabilidad económica de la empresa. La estructura del gasto de las empresas acuícolas se diferencia en tres tipos según las etapas del ciclo de la vida que se explota, engorde, cría y cría y engorde. Las empresas que forman la muestra tienen dimensiones muy diferentes, lo que impide que se puedan utilizar los valores absolutos de ventas y de gasto. Así pues, no 3 Las empresas analizadas son: Acuinova Andalucía, S.A., Acuinova Galicia, S.A., ADRAPEC, S.A., Alevines y Doradas S.A., AQUADELT, S.A., Blanes Peix, S.A., Centamar S.L., CULMANOR, S.A., CULMAREX, S.A., Cultius Marins del Delta de L’Ebre, S.A., Esteros de Santi Petri, S. A., Gas y Electricidad S.A., Langostinos de Huelva S.A., Stolt Sea Farm, S.A., Tinamenor, S.A., Valenciana de Acuicultura, S.A. 112 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 113 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 53 Modelo utilizado para el cálculo del margen y la rentabilidad económica FINANCIACIÓN INVERSIÓN RENTABILIDAD + ROTACIÓN PRODUCCIÓN % MARGEN EXPLOTACIÓN + VENTAS/INGRESOS % CONSUMOS DE EXPLOTACIÓN % GASTO DE PERSONAL % GASTOS GENERALES Fuente: Elaboración propia. queda más remedio que utilizar indicadores relativos utilizando las ventas como referencia. El análisis realizado utiliza ratios que miden el porcentaje de las ventas que se destinan a cubrir los distintos gastos y el margen que queda, ratios que, unidos a la rotación y rentabilidad económica que tienen en cuenta la dimensión por volumen de activo, nos permiten homogeneizar la información para cada período. Los ratios utilizados son: A) Utilizando las ventas para homogeneizar los valores: — Consumo de Explotación = Consumo de explotación / Ventas — Gastos de Personal = Gastos de Personal / Ventas — Gastos Generales = Gastos generales / Ventas — Margen = Beneficio Bruto / Ventas B) Utilizando el activo para homogeneizar los valores: — Rotación = Ventas / Activo Total — Rentabilidad Económica = Beneficio Bruto / Activo Total Los resultados obtenidos para los indicadores anteriores en las empresas de la muestra, diferenciándolas en función de la etapa del ciclo de la vida de las especies que explotan, son los que se pueden ver en la tabla 32. 113 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 114 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 32 Indicadores de la actividad económica de las empresas acuícolas TIPO DE EMPRESA ACUÍCOLA Indicadores económicos (en) Ingresos/Ventas . . . . . . . . . Consumos/Explotación . . . Gastos de Personal . . . . . . . Gastos generales . . . . . . . . Margen . . . . . . . . . . . . . . . . Rotación . . . . . . . . . . . . . . . Rentabilidad económica . . Empresa de engorde Empresa de cría Empresa de cría y engorde Media1 Media Media 100 49,5 34,6 81,1 –65,2 30,2 –3,5 100 8,9 38,1 82,4 –29,4 29,7 1,8 100 46,9 55,7 12,1 –14,7 48,2 –5 1 Indica el porcentaje medio del indicador en los períodos analizados. Fuente: Elaboración propia. El análisis de la situación de las empresas acuícolas en los períodos estudiados no puede ser más desalentador. Nos encontramos con empresas muy poco eficientes, que trabajan con márgenes de explotación negativos que no justifican las expectativas que despierta el sector, ya que sólo es posible mantener este tipo de empresas mediante las ayudas públicas. Esta situación parece indicar que el sector acuícola en el período 93-97 se encuentra en fase inicial, donde la mayor parte de las empresas están comenzando su actividad; de manera que, si queremos valorar la viabilidad financiera de este tipo de negocios, no podemos quedarnos sólo con los datos económicos actuales sino que tenemos que analizar cual es su evolución. El análisis de las expectativas de las empresas acuícolas lo vamos a realizar por un doble camino: • En primer lugar analizaremos el efecto experiencia mediante el seguimiento de la evolución de ventas, costes de explotación, costes de personal y rentabilidad económica. • En segundo lugar, analizaremos las posibles diferencias en cuanto a indicadores medios y efecto experiencia de las empresas rentables en comparación con las no rentables para poder valorar los factores que determinan la rentabilidad de este tipo de negocios. 3.5.1.1. Evolución de los principales indicadores económicos de las empresas acuícolas: el efecto experiencia Las expectativas de futuro del sector, teniendo en cuenta los limitados resultados que obtienen las empresas en esta etapa inicial, han de estar unidos a la consecución de un amplio efecto experiencia que ha de materializarse de dos formas: 114 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 115 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI • En primer lugar debe permitir incrementar la producción y con ello las ventas y los ingresos, optimizando la utilización de las instalaciones. • En segundo lugar, en una acepción más clásica del término, ha de permitir mejorar la eficiencia, con un menor coste por unidad vendida de los consumos de explotación y de la mano de obra. Los indicadores que analizaremos para valorar el efecto experiencia en la evolución y expectativas del sector son tres: • Incremento medio anual de las ventas durante los períodos analizados. Este indicador, debido a las peculiaridades del sector como es que todo lo producido es vendido y la presión a la baja de los precios, permite darnos una idea sobre la capacidad de las empresas para incrementar los ingresos y optimizar las instalaciones. • Mejora de la eficiencia y productividad de la mano de obra. Medida por la variación anual del porcentaje de los ingresos por ventas que se gastan en mano de obra. • Mejora de la rentabilidad. Medida por la variación anual de la rentabilidad económica de la empresa, que podemos considerar como un indicador sobre las expectativas del sector. Los datos obtenidos para los cuatro indicadores anteriormente citados, diferenciando los tres tipos de empresas, se detallan en la tabla 33. En ella se puede observar que las expectativas del sector son muy favorables. Por una parte, se está produciendo un incremento muy grande de las ventas y de la producción, una media del 42 anual, que indica claramente las posibilidades que tienen las empresas acuícolas de ir aumentando sus ingresos, optimizando la capacidad productiva de sus instalaciones. Además, este incremento de la capacidad productiva y de las ventas se consigue, de una forma eficiente, con una mejor utilización de la mano de obra, se reduce su incidencia en las ventas un 12,9 anual, y unos consumos inferiores que provocan un incremento anual medio de la rentabilidad económica del 38. Los datos sobre la situación actual y la evolución de los indicadores económicos de las empresas acuícolas son muy reveladores en cuanto a las dificultades que tienen este tipo de empresas para iniciar su actividad, por el gran potencial de desarrollo que tienen; datos que justifican sobradamente el interés que despierta este sector. Tabla 33 Indicadores de las expectativas de las empresas acuícolas Evolución indicadores (medio variación anual) Ingresos/Ventas . . . . . . . . . Gastos de Personal . . . . . . . Rentabilidad económica . . TIPO DE EMPRESA ACUÍCOLA Empresa de engorde 85,7 –13,9 21,3 Empresa de cría 13,6 –16,3 57,7 Empresa de cría y engorde 27,7 –8,6 35,3 Media del sector 42 12,9 38 Fuente: Elaboración propia. 115 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 116 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Este análisis sobre la situación de las empresas acuícolas y sus expectativas nos permite apreciar el difícil momento que pasan estas empresas en las etapas iniciales pero también el rápido efecto que tiene la experiencia en sus resultados. Todo ello no sería suficiente si no tuviésemos una referencia sobre las diferencias que existen entre las empresas rentables y no rentables, con el fin de determinar cual es la situación y la evolución que ha de tener una empresa acuícola para ser viable. 3.5.1.2. Diferencias en cuanto a situación y efecto experiencia de las empresas rentables en comparación con las no rentables Los datos obtenidos sobre las empresas acuícolas no permiten diferenciar la situación de las empresas que hace poco que entraron en el negocio de aquellas que ya tienen una situación más consolidada puesto que hace más tiempo que están en el sector y, por tanto, lo conocen y explotan mejor. A la vista de la gran incidencia que tiene la experiencia en este negocio podemos calcular los indicadores utilizados en el apartado anterior para evaluar la situación (indicadores medios de consumo de explotación, gastos de personal, gastos generales, margen, rotación y rentabilidad económica) y las expectativas (evolución media anual de las ventas, gasto de mano de obra y rentabilidad económica) específicamente para las empresas rentables y no rentables, con el fin de poder valorar cual ha de ser el camino que debe seguir una empresa que entre en el sector para ser viable. Los datos específicos de situación y evolución de las empresas acuícolas rentables y no rentables únicamente se pueden obtener para dos de los tipos de empresas ya que no disponemos de datos para realizar el análisis con empresas de cría. Los datos citados se sintetizan en la tabla 34. El estudio detallado de la situación y evolución de los indicadores económicos de las empresas acuícolas es concluyente en la medida en que se pueden apreciar, claramente, las diferencias que explican la rentabilidad en este tipo de empresas. Para una mejor comprensión de los resultados se interpretarán, separadamente, los resultados de los dos tipos de empresas. A) Empresas de cría y engorde La muestra se compone de 5 empresas, de las que un 60 obtienen resultados negativos. Podemos observar que los indicadores de eficiencia del proceso productivo: porcentaje de las ventas que se emplean en las compras de explotación, pagar al personal y gastos generales, muestran cómo las empresas de cría y engorde rentables son mucho más eficientes, consumiendo un 31,3 menos de compras de explotación, gastando un 75,7 menos en personal y un 64,8 menos en gastos generales. Esta mayor eficiencia permite obtener un margen positivo que, unido a una mayor rotación, les permite obtener una rentabilidad positiva. Especial importancia tiene la diferencia de rotación del 200 que nos indica, claramente, como las empresas rentables optimizan más la capacidad productiva de sus instalaciones. La evolución de los indicadores nos muestra como la experiencia permite incrementar las ventas un 26,7 anual de media, aunque se detecta que este incre116 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 117 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 34 Diferencias entre los indicadores de situación y de experiencia de las empresas acuícolas rentables y no rentables TIPO DE EMPRESA ACUÍCOLA Indicadores económicos (en) Empresa de cría y engorde No rentable Ingresos/Ventas . . . . . . . 100 Consumos Explotación . 53,7 Gastos de Personal . . . . . 79,9 Gastos generales . . . . . . . 84,4 Margen . . . . . . . . . . . . . . –118,0 Rotación . . . . . . . . . . . . . 16,8 Rentabilidad económica . . –13,6 Evolución indicadores (medio variación anual) Ingresos/Ventas . . . . . . . Gastos de Personal . . . . . Rentabilidad económica . . Empresa de engorde No Rentable Diferencia rentable Rentable Diferencia 100 36,8 19,4 29,7 14,1 50,3 8,0 — –31,35 –75,76 –64,8 112 200 158,59 100 56,5 53,8 32,5 –42,8 37,6 –20,1 Empresa de cría y engorde No rentable 31,5 –6,2 –21 100 44,8 21,8 29,4 4,0 55,3 7,5 — –20,76 –59,4 –9,5 109,4 47,2 137,5 Empresa de engorde No Rentable Diferencia rentable Rentable Diferencia 21,9 –12,1 119,7 –30,41 –95 669,9 94,6 –16,3 –29,4 79,7 –12,3 55,1 –15,7 24,3 287,3 Fuente: Elaboración propia mento es mayor en las empresas no rentables dado su bajo nivel de productividad. En las empresas rentables la experiencia, además de conseguir un incremento sustancial de la producción, un 21,9 anual, permite reducir las costes de personal un 95 más que en las no rentables y ajustar el resto de los costes hasta lograr un incremento de la rentabilidad del 119 anual. Sin embargo las empresas no rentables, a pesar de los esfuerzos que realizan con incrementos de la producción del 31,5 y reducción de las cargas de personal del 6,2 anual, no consiguen acercar la empresa a los límites de eficiencia que permitan hacerlas rentables, de forma que su situación se deteriora cada vez más con un descenso de la rentabilidad económica de un 21 anual. B) Empresas de engorde La muestra se compone de 10 empresas, de las que un 40 obtienen resultados negativos. Los resultados obtenidos para este tipo de empresas son similares a los obtenidos para las empresas de cría y engorde, aunque con diferencias menos importantes, lo que podemos interpretar como una mayor facilidad para adquirir los conocimientos tecnológicos y la experiencia para rentabilizar las empresas dedicadas únicamente al engorde. 117 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 118 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Podemos observar que los indicadores de eficiencia del proceso productivo: porcentaje de las ventas que se emplean en las compras de explotación, para pagar al personal y en gastos generales, muestran como las empresas de engorde rentables son mucho más eficientes, consumiendo un 20,7 menos de compras de explotación, gastando un 59,4 menos en personal y un 9,5 menos en gastos generales. Esta mayor eficiencia permite obtener un margen positivo que, unido a una mayor rotación, les permite obtener una rentabilidad positiva. Tiene especial importancia la diferencia de rotación del 47,2 como indicador del mejor aprovechamiento de la capacidad productiva de sus instalaciones. La evolución de los indicadores nos muestra como la experiencia permite incrementar, de forma muy importante, la producción y las ventas, un 87,1 anual de media, aunque se detecta que este incremento es mayor en las empresas no rentables dado su bajo nivel de productividad. En las empresas rentables la experiencia además de conseguir un incremento sustancial de la producción, un 79,7 anual, permite reducir los costes de personal un 24,3 más que en las no rentables y ajustar el resto de los costes hasta lograr un incremento de la rentabilidad del 55,1 anual. Sin embargo, las empresas no rentables a pesar de los esfuerzos que realizan, con incrementos de la producción del 94,6 y reducción de las cargas de personal del 16,3 anual, al igual que sucedía en el caso anterior, no consiguen acercar la empresa a los límites de eficiencia que permitan hacerlas rentables, de manera que su situación se deteriora cada vez más con un descenso de la rentabilidad económica de un 29,4 anual. La conclusión que se puede extraer del análisis de la situación económica y evolución de las empresas acuícolas rentables y no rentables parece indicar la necesidad de partir de unos conocimientos de la tecnología que permitan crear la empresa y hacerla evolucionar con unos niveles de eficiencia adecuados. Siendo más fácil alcanzar dicho nivel en las empresas que se dedican exclusivamente al engorde, por lo que no sería extraño que se produjese un proceso de especialización en el sector, con la aparición de nuevos competidores en el engorde y una concentración de la cría de alevines en muy pocas empresas que alcanzan el nivel tecnológico necesario para rentabilizar este tipo de explotación. 3.5.2. La financiación del proyecto acuícola Las necesidades de financiación de un proyecto acuícola únicamente puede resolverse cuando se ha definido con claridad el proyecto y de manera especial: • Previsión de cobros: Los cobros de una empresa al comienzo de su actividad se derivan de las ventas casi en su totalidad, luego para prever los cobros lo que se tienen que prever son las ventas de la nueva empresa, especificando las condiciones de pago que se van a ofertar. También tiene importancia la posibilidad de obtener ayudas públicas. • Previsión de pagos. El proceso tecnológico que emplea la empresa requiere realizar inversiones en equipos, instalaciones, existencias, tesorería, etc., inversiones 118 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 119 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI que se cuantifican en el presupuesto de capital que muestra al promotor del proyecto la cantidad de financiación que debe obtener para llevarlo a cabo. Además es necesario incurrir en una serie de pagos debido a los gastos que genera la actividad que no siempre podrán ser financiados con los cobros procedentes de los ingresos, sobre todo cuando nos referimos a la etapa inicial de la empresa. Por tanto, el promotor de un proyecto acuícola únicamente puede plantearse cuantificar sus necesidades financieras después de haberlo concretado y presupuestado completamente, motivo por el cual la viabilidad financiera se analiza en último lugar. En la determinación de las necesidades financieras del proyecto ha de tenerse en cuenta que el promotor puede prever, con mayor precisión, los pagos que los cobros, por lo cual es conveniente mantener un alto nivel de tesorería para hacer frente a posibles desajustes financieros no previstos. La diferencia en la facilidad con que el promotor obtiene datos sobre cobros y pagos, así como en la fiabilidad de los mismos, radica en que aquéllos que se refieren a los pagos proceden de los costes e inversiones derivados de la tecnología empleada, sobre los que el promotor siempre tiene más información. Esta información puede estimarla él mismo o bien recurrir al asesoramiento técnico y a presupuestos de las empresas que ofertan los equipos, instalaciones y componentes. Sin embargo, en lo que se refiere a la previsión de los cobros, el promotor siempre está condicionado por la respuesta del mercado, cuantificada en la previsión de la demanda. La dificultad, en este caso, estriba en la variedad de aspectos exógenos que han de ser considerados, sobre los cuales el promotor no dispone de fuentes de datos propias y resulta difícil recabar información de agentes externos. 3.5.2.1. Las fuentes de financiación Las alternativas de financiación son muy variadas lo que permite al promotor de un proyecto acuícola disponer de un amplio abanico de posibilidades para financiarlo. La descripción detallada de todas las alternativas posibles para financiar un proyecto sería demasiado amplia para que resultase de utilidad, por tanto nos limitaremos a describirlas de forma genérica. A) Fuentes de financiación clásicas son: • Financiación propia. La característica más importante de la financiación propia es que no genera ninguna carga financiera para la empresa, con lo que se facilita su viabilidad. Sin embargo ello no quiere decir que se pueda usar esta forma de financiación indiscriminadamente, ya que afecta de manera importante a la rentabilidad de la empresa y al riesgo que corre el empresario. La empresa también puede autofinanciarse con los beneficios derivados de su actividad (ir pagando sobre la marcha) pero, dadas las dificultades que va a tener para abrirse un hueco en el mercado y la cantidad de gastos imprevistos que suele tener en su inicio, no parece aconsejable dejar la financiación del proyecto sometida a los avatares financieros de una empresa en creación. 119 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 120 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI • Financiación ajena. Este tipo de financiación permite obtener fondos de agentes externos a la empresa, en general intermediarios financieros, que mediante un contrato, generalmente formalizado, se convierten en acreedores de la empresa. Los acreedores fijan a través del contrato la cuantía, el plazo y las condiciones en que han de ser aportadas las contraprestaciones pactadas por la empresa a cambio de la financiación. La empresa cuando comienza su actividad tiene dificultades para lograr financiación externa, puesto que para obtenerla es necesario convencer a los agentes externos de la viabilidad del proyecto. Por este motivo, aun cuando las fuentes de financiación externa son muchas, la empresa dispone de pocas alternativas para obtener financiación, casi siempre limitadas a su capacidad para garantizar la financiación mediante hipotecas o avales. • Financiación por leasing. Este tipo de financiación permite a la empresa disponer de algunos elementos del activo fijo a cambio de unas contraprestaciones periódicas, en general mensuales. Mediante el leasing la empresa dispone del activo sin necesidad de incrementar su presupuesto de capital y sus necesidades financieras, pero sufre un incremento de los costes. • Financiación de los proveedores. La empresa en su actividad ha de mantener una relación con los proveedores de los factores utilizados en el proceso productivo de manera que, mediante una negociación adecuada, puede lograr disponer de un plazo de tiempo desde que le envían la mercancía hasta que tiene que pagarla, contribuyendo así los proveedores a financiar el activo circulante. • Ayudas públicas. En la actualidad existe una gran variedad de ayudas públicas a las que pueden optar empresas acuícolas que difieren en la institución que la concede, la finalidad y los requisitos formales para su solicitud, lo que unido a la falta de coordinación ha provocado que las ayudas públicas se conviertan en un sistema confuso, poco eficiente, donde a menudo naufragan proyectos interesantes por falta de información, a la vez que se propician conductas oportunistas. Aurioles y Pajuelo (1988) admiten la importancia de los estímulos oficiales en las etapas iniciales de las empresas y consideran su inexistencia como motivo de rechazo en la decisión de localización de la misma. Sin embargo, no consideran la existencia de dichas ayudas como elemento dinamizador de la inversión ni como factor crítico en la localización. Por su parte, Lasheras y Álvarez (1988) destacan el alto porcentaje de empresas que tienen en consideración las ayudas públicas en sus procedimientos de decisión, bien de inversión y/o localización, señalando que son aquellos esquemas automáticos los más tomados en consideración, y estableciendo la importancia que el tamaño de la empresa y el grado de conocimiento de las ayudas existentes tienen a la hora de determinar su importancia y eficacia. B) Fuentes de financiación alternativas Salas Fumás (1990) señala tres instrumentos financieros principales que permiten reducir los costes de transacción a que dan lugar la utilización de métodos estandarizados de financiación como son la deuda y las acciones comunes. Estos instrumentos, que permiten la reducción de dichos costes son: los contratos de Venture 120 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 121 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Capital, que surgen cuando el inversor externo financia a la nueva empresa a través de una participación en los fondos propios de la misma; la deuda convertible, que permite canjear ésta por acciones de la empresa en unas condiciones de precio y plazo determinados; y por último, los préstamos participativos, que constituyen técnicamente deuda subordinada, en cuanto que los acreedores financieros que suscriben los mismos ocupan el último lugar entre todos los acreedores a la hora de recuperar su inversión si la empresa llega a una situación de quiebra. El promotor de la empresa para llevar a cabo su proyecto puede analizar la posibilidad de cooperar con otras empresas, de manera que se favorezcan los intereses de ambas. El desarrollo de nuevas formas contractuales posibilitan la creación de empresas mediante la formalización de acuerdos y alianzas estables para las PYMES que respeten las leyes de la competencia y se materialicen en diferentes modalidades atendiendo a la configuración jurídica del acuerdo. Esta configuración puede revestir distintas fórmulas basadas en el «Venture Management» distinguiéndose cuatro modalidades principales de cooperación (Navarro Elola, 1993): • Corporate venture capital o «capital riesgo de la empresa», que supone la participación minoritaria, por parte de una gran empresa, en el capital de otra nueva empresa con buenas perspectivas de crecimiento. • Venture nurturing o «tutela de proyectos», que da lugar a un mayor grado de compromiso por parte de la gran empresa en el nuevo proyecto externo ya que facilita asesoramiento a la nueva empresa, especialmente en las áreas comerciales, de producción y de inversión. • Venture spin-off o «disgregación de la nueva empresa», referido a la creación de nuevas empresas por parte del personal procedente de una nueva empresa más grande. • Joint Ventures o «colaboración entre empresas», que significa la creación de una empresa conjunta entre una grande y normalmente otra pequeña. Esta aportará el espíritu empresarial, la nueva tecnología, la otra el capital, y los sistemas y canales de distribución, pudiéndose encontrar un problema de existencia potencial de conflicto entre los socios a causa de sus diferentes características. En una empresa conjunta dos o más empresas matrices participan en el capital y en la gestión de una empresa de negocios para favorecer, a través de una inversión compartida, sus respectivas metas y objetivos. Esta forma de cooperación entre empresas facilita las inversiones en alta tecnología al diversificar el alto riesgo que conlleva este tipo de inversiones. La característica más importante de este tipo de acuerdos radica en que la empresa conjunta se configura con personalidad jurídica propia y realiza negocios por sí misma, con la finalidad de beneficiar de alguna forma a las empresas matrices. En este sentido, la ventaja de la política de ayudas orientada al fomento de la cooperación es doble: por un lado, existe una ventaja directa, por cuanto la empresa recibe financiación para el establecimiento de acuerdos o alianzas, y por otro, nos encontra121 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 122 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI mos con una ventaja indirecta, por cuanto que la cooperación en sí misma tiene como objetivo el beneficiar a las empresas matrices. A su vez, las empresas conjuntas pueden clasificarse en tres grupos distintos en función de la implicación que los socios tengan en la misma, dando lugar a fórmulas de cooperación alternativas, cuya conveniencia estará en función de la situación inicial de las empresas y de los resultados obtenidos con la unión: • Empresas Conjuntas Dominadas. Son aquéllas en las que uno de los socios domina la empresa, bien por razones de ubicación, bien por tener la mayoría de las acciones, o bien por ser la parte más capacitada para dirigirla. El otro socio desempeña un papel pasivo en la relación y se limita a recibir los frutos de su aportación. • Empresas Conjuntas Independientes. En este caso, las empresas matrices no tienen una participación directa en la dirección operativa desempeñando un papel de meros inversores en la operación, bien porque el cometido de la Empresa Conjunta no afecta directamente a sus intereses, o bien, porque el personal directivo de la nueva sociedad realiza su cometido satisfactoriamente. • Empresas Conjuntas Participativas. Son aquéllas en las que los socios están directamente implicados en sus operaciones y, por tanto, interesados en seguir muy de cerca la gestión de la nueva empresa. La relación entre las empresas socios debe ser equilibrada en cuanto a capital aportado y participación en la gestión. Por otro lado, debemos tener en cuenta la dificultad que supone el llevar a cabo cualquier acción de cooperación, ya que aunque por un lado se pueden conseguir mejores resultados uniendo esfuerzos que actuando separadamente, también es cierto que la elección de un socio adecuado resulta complicada. En resumen, las dificultades para obtener financiación y/o el elevado coste que debe pagarse por ella, están incluidos entre los tres primeros problemas a que se enfrenta una empresa en su creación y puesta en marcha, los otros dos son los impuestos y las regulaciones legales. Centrándonos en el primero de los problemas, la información proporcionada por la Encuesta de Estrategias Empresariales, que elabora la Fundación de Empresa Pública, nos permite extraer las siguientes conclusiones sobre la financiación de las PYMES: el endeudamiento aumenta cuanto más pequeña es la empresa, existe una escasa presencia de financiación a L/P, representando el endeudamiento a C/P más de las tres cuartas partes del endeudamiento total, y por último, los mayores costes financieros a los que se enfrentan las PYMES, los cuales disminuyen a medida que se incrementa el tamaño de la misma. Por otro lado, las encuestas (Salas Fumás, 1990), en las que se pide expresamente a los empresarios que valoren la importancia de diferentes factores que pueden dificultar el nacimiento y desarrollo de la empresa reafirman la idea antes planteada, ya que de nuevo los problemas de acceso a la financiación y el coste de la misma ocupan los primeros lugares en importancia. La situación financiera que caracteriza nuestras PYMES hace evidente la necesidad de acceder a fuentes de financiación alternativas que contribuyan a su 122 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 123 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La viabilidad de la empresa acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI creación y faciliten su funcionamiento, de manera que puedan hacer frente a sus necesidades para alcanzar una posición competitiva en un entorno cada vez más complejo. 3.5.2.2. La estructura financiera El empresario lo primero que tiene que decidir antes de elegir las fuentes de financiación es la estructura financiera que va a tener la empresa. Los criterios a seguir para decidir cual ha de ser la estructura financiera se pueden simplificar, para no complicar mucho el problema a la hora de crear la empresa, en dos: Primero: Decidir el grado de endeudamiento que va a tener la empresa, determinado la cuantía de fondos propios y ajenos que va a utilizar para financiar el presupuesto de capital. De esta decisión depende la solvencia (capacidad para hacer frente a las deudas a largo plazo) de la empresa, los costes financieros que va a soportar y la rentabilidad que obtendrá para los fondos propios invertidos. Como consideración general, cuanta más financiación propia utilice mayor será la solvencia y menores serán los costes financieros, dependiendo la rentabilidad del coste de la financiación externa (si el coste es bajo puede ser rentable para la empresa financiarse con fondos externos, por ejemplo si se obtiene financiación privilegiada). Segundo: Una vez decidida la cuantía de la financiación externa se ha de decidir sobre cual ha de ser el porcentaje a corto y a largo plazo. Esta decisión afecta a la liquidez, o lo que es lo mismo a la capacidad de la empresa para hacer frente a las deudas a corto plazo. No existen unas proporciones fijas para la estructura financiera de la empresa, ya que está condicionada por el tipo de actividad y las posibilidades que tiene el promotor para obtener financiación. La estructura financiera que adopta la empresa en su comienzo no tiene porqué ser la más adecuada, dada la cantidad de dificultades y restricciones que convergen en ese momento. Generalmente, el promotor llegado a este punto, convencido de la viabilidad del proyecto, suele hacer todo lo posible para obtener financiación aunque ésta proceda de fuentes inadecuadas, que sin duda rechazaría en otras circunstancias. 3.6. Constitución y legalización de empresas acuícolas La decisión de crear una empresa debe superar un último obstáculo antes de hacerse efectiva que es el de sortear la barrera burocrática que dificulta su constitución y legalización. La complejidad de los trámites administrativos dependen del tipo de actividad y de la forma jurídica de la nueva empresa, pero en todos los casos son lo suficientemente engorrosos como para justificar una escueta reflexión y síntesis. La primera cuestión que cabría plantearse es la necesidad de dichos trámites, en este sentido podemos observar que una buena parte de ellos tienen por finalidad 123 5878-II.Cap3 17/2/00 07:24 Página 124 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI evitar las conductas oportunistas del empresario debido a la asimetría de la información que tiene respecto a terceros, así se protege a la colectividad de posibles resultados colaterales perniciosos, derivados de la actividad de la empresa, a los trabajadores de posibles actitudes explotadoras (mucho más fáciles en mercados laborales como el presente), a los consumidores de posibles fraudes (en especial en el caso de productos con atributos de experiencia y de creencia) y a los demás empresarios de posibles incumplimientos de contratos. Sin embargo, ciertos trámites únicamente tienen una función recaudadora, agravada por un fuerte componente discrecional por parte de las Administraciones Locales, de muy difícil justificación económica y claramente discriminatorios. Como queda dicho, estas medidas se pueden justificar en parte por el control que ejercen sobre las posibles conductas oportunistas de las nuevas empresas, pero en lo que se refiere a su eficiencia nos encontramos con un panorama desolador, observando un entramado burocrático complejo, con trámites interrelacionados formalizados con documentación semejante para entregar en distintos lugares, así se suceden las altas, permisos, licencias, autorizaciones, etc., en la administración central, autonómica y local. En síntesis, podemos clasificar en tres tipos los trámites necesarios para crear una empresa: trámites de constitución de la sociedad mercantil, trámites generales de creación de la empresa y trámites específicos, a su vez cada uno de estos trámites se pueden realizar ante la administración central, autonómica, local y ante otras instituciones. Una vez constituida la sociedad hay que realizar una serie de trámites generales ante las tres administraciones, para, por último, realizar una serie de trámites especiales que dependen del tipo de actividad y zona de ubicación de los centros de la nueva empresa. Estos trámites son muy variados (autorizaciones, licencias, registros, carnés especiales, certificados) y ante organismos tan diversos que resulta imposible su enumeración aunque hay que tener en cuenta su importancia sobre todo en el caso de actividades peligrosas, registros sanitarios, utilización de espacios naturales, comercio (sobre todo cuando es exterior) e instalaciones. Este tipo de trámites está teniendo un amplio desarrollo por la administración autonómica, de manera que suelen ser presentados ante esta administración. 124 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 125 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 4. El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola 4.1. Introducción. Objetivos del capítulo y metodología La finalidad de nuestro estudio consiste en establecer las líneas maestras del Sistema de Información Contable (SIC) de las empresas del sector acuícola. A estos efectos, y en este primer capítulo, analizaremos y presentaremos los elementos base de cualquier SIC como parte de un sistema de información para la dirección, y de forma particular el subsistema identificado como la Contabilidad Financiera, productor de documentos contables de síntesis para usuarios múltiples, reflejados esencialmente en las Cuentas Anuales (en adelante CA). Para nuestro propósito seguiremos, en cierta medida, el análisis de los distintos elementos que configuran lo que podría ser una adaptación del Plan General de Contabilidad (en adelante PGC) a las empresas del sector, señalando desde los principios contables, el plan de cuentas y el proceso contable hasta llegar a la configuración de los modelos de CA. Por lo que hace referencia al subsistema de Contabilidad de Gestión, al que haremos alguna breve mención, es nuestra intención desarrollarlo en la medida de lo posible en una segunda etapa del trabajo. De hecho, la información relativa a la estructura de costes presente en las explotaciones acuícolas es básica para comprender la evolución del sector, su situación actual, así como la definición de estrategias futuras, temas todos ellos recogidos en el conjunto de la obra multidisciplinar a la que pertenece este capítulo. 4.2. El Sistema de Información Contable (SIC) En este tipo de trabajos en los que se intenta exponer unas líneas básicas para la orientación de la actividad contable en una empresa, partimos de conceptos o ideas fundamentales que se adaptan a las características de las empresas y sectores estudiados. Se trata de comparar dos sistemas, el primero formado por una organización y el segundo el sistema de información que le sustenta (ver ACODI, 1992). La organización dispone de un órgano de dirección que establece unos objetivos que recaen sobre las personas que la forman, sobre los medios productivos y tecnologías que disponen, con la finalidad de aprovechar las circunstancias del entorno y satisfacer el mercado. Las personas, tanto las que constituyen la organización en la actualidad como las que la formaron en su momento, han dejado un balance de conocimiento o saber, que sin duda es su principal activo. 125 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 126 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Dicho conocimiento consiste en la obtención de unos outputs mediante la utilización eficiente de inputs (actividad económica) que cambiarán en el mercado por un precio (circulación económica) con la finalidad de lograr un excedente (acumulación económica). El excedente, así como los restantes elementos que conforman la empresa tanto de carácter económico como financiero reciben la consideración de stocks o fondos, que mediante el ejercicio de la actividad económica se ven sometidos a variaciones, tanto positivas como negativas, constitutivas de lo que se denomina circulación económica, y que se presenta en forma de flujos. Los flujos, que en general son patrimoniales, se clasifican en dos categorías: flujos financieros cuando se refieren a los movimientos de tesorería, derechos de cobro y obligaciones de pago, y económicos si se trata de corrientes de bienes y servicios. Pues bien, el logro de los objetivos depende del buen funcionamiento de las operaciones de decisión y control, las cuales se apoyan en el sistema de información. Este sistema recoge la información en forma de datos y devuelve el conocimiento o experiencia, por lo tanto, el futuro de la empresa, definido por las decisiones adoptadas por la cúpula directiva, depende de la fiabilidad, calidad y pertinencia de dicho sistema. La forma del sistema informativo está a su vez definida por el grupo directivo, de acuerdo con las necesidades por él determinadas, que desembocará en una organización informativa ad-hoc, que dispondrá de unas metodologías o reglas de funcionamiento para llevar a cabo la secuencia de recogida de datos, proceso de esos datos, comunicación del conocimiento, y siendo el objeto, por tanto, todos los elementos constitutivos de la propia organización. La finalidad de nuestro trabajo es el estudio de la organización contable en un sentido amplio, considerando que el término «contable» no está unido a la idea de «asiento contable» o mero registro, sino que incluye todo tipo de información, incluso la de carácter no monetario. En definitiva, cualquier sistema que ayude a tomar decisiones mediante la recogida de información cuantitativa o cualitativa, de acuerdo con una metodología establecida a priori, que permita determinar su fiabilidad para el control de un sistema de circulación económica, podemos considerarlo como un SIC. Tal y como se expone en el Documento de ACODI ya mencionado, dicha consideración viene determinada por la unidad del objeto de conocimiento (sistema de circulación económica), la unidad del método o de los instrumentos metodológicos empleados (modelos contables) y la unidad del fin (conocimiento científico del sistema de la circulación económica). El directivo de una empresa acuícola necesita saber cuánto le ha costado el engorde de los alevines el último trimestre, o las previsiones de ventas para el próximo año; el director de ventas el tiempo necesario para transportar el producto final a un punto geográfico determinado; el biólogo la variación de temperatura del medio acuático durante un período determinado, el accionista la rentabilidad de su inver126 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 127 IINNIICCIIOO INICIO INICIO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI sión y el riesgo asumido, referido también a un período, etc., etc. También están interesados en conocer su situación, trayectoria y perspectivas potenciales, las entidades financieras, los trabajadores, la Administración, y en general cualquier usuario externo perteneciente al colectivo social. De acuerdo con estos fines se utilizarán unos modelos adecuados dependiendo de cuales sean los usuarios de la información. De la breve relación de usuarios apuntados anteriormente obtenemos la siguiente imagen: que existen usuarios internos y usuarios externos de la información contable, con necesidades distintas y perspectivas temporales también diferentes. Por lo tanto, podemos establecer dos subclases dentro del SIC con utilidades distintas para cada grupo, la Contabilidad de Gestión y la Contabilidad Financiera. En cuanto a la fiabilidad de la información proporcionada por el sistema, ésta se apoya en las características que debe reunir y que en última instancia le dota de plena utilidad para los usuarios: 1. Relevancia. Si de ella se derivan acciones pertinentes o adecuadas. 2. Fiabilidad. Si expresa con el máximo rigor las características básicas y condiciones de los hechos reflejados. 3. Completa. En la cantidad necesaria, puede entrar en colisión con la cualidad de oportunidad. 4. Identificabilidad. Debe referirse a sujetos económicos perfectamente definidos en cuanto a su área de actividad económica y a momentos temporales perfectamente identificados. 5. Claridad. Debe tener capacidad de comprensión e interpretación. 6. Comparabilidad-consistencia. Comparable en el espacio y tiempo y consistente con las normas contables establecidas. 7. Sustancia sobre la forma. Debe reflejar los hechos de acuerdo a su realidad económica y no con su forma jurídica o legal, cuando una y otra no coincidan. 8. Importancia relativa o materiabilidad. Debe ser significativa. 9. Imparcialidad. Debe ser neutral y sin sesgos significativos. 10. Objetividad. No debe atender a beneficiar a un usuario en detrimento de otros. 11. Verificabilidad. Susceptible de control. 12. Oportunidad. Medida y comunicada tan pronto como sea posible. 13. Razonabilidad. Debe perseguir una aproximación adecuada y suficiente de los sucesos de la actividad económica, ya que no puede alcanzar en todos los casos una exactitud completa sobre ellos. 14. Economicidad. No debe representar un elevado coste para la empresa. 4.2.1. Contabilidad Financiera y Contabilidad de Gestión Ambas son complementarias y presentan ciertas peculiaridades en razón de las finalidades para las que se utilizan, que en el caso de la Contabilidad Financiera es la presentación de la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa, de acuerdo con unos principios y normas contables 127 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 128 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI generalmente aceptados y definidos con carácter general por organismos reguladores, públicos y/o privados, a fin de homogeneizar al máximo posible los documentos contables fruto del sistema de información. Incidiendo en esta idea, los objetivos de la Contabilidad Financiera pueden clasificarse en los siguientes términos (Accounting Principles Board del American Institute of Certified Public Accountants, APB Statement n.4): a) Proporcionar información fiable de los recursos económicos y obligaciones de una empresa de negocios a fin de evaluar sus puntos fuertes y débiles, mostrar su financiación e inversiones, evaluar su capacidad para atender sus compromisos y mostrar su base de recursos para el crecimiento. b) Proporcionar información acerca de los cambios en los recursos netos resultantes de las actividades a fin de mostrar expectativas de dividendos esperados a los accionistas; demostrar la capacidad de las operaciones para pagar a los acreedores y proveedores, proporcionar trabajo a los trabajadores, pagar impuestos y generar fondos para la expansión; proporcionar a la gerencia información para la planificación y el control; indicar la capacidad de beneficios a largo plazo. c) Proporcionar información financiera que pueda ser utilizada para estimar los resultados potenciales de la empresa. d) Proporcionar otra información necesaria acerca de los cambios en los recursos económicos y las obligaciones. e) Comunicar otra información relevante para las necesidades de los usuarios de los estados financieros. Para lograr los objetivos anteriores se definen en el propio marco conceptual de la Contabilidad Financiera unos elementos, reglas de representación y medida y unos documentos de síntesis informativos, que generalmente se denominan estados financieros y que son: • La Cuenta de pérdidas y ganancias. • El Balance. • La Memoria (anexo, notas). • El Estado de valor añadido. • Estado de recursos generados. • Estado de origen y aplicación de fondos. • Estado de variaciones de tesorería (o estado de cash-flow). • Otros estados relativos a movimientos de cuentas. En nuestro contexto económico y jurídico la expresión que representa de forma global y unitaria la información financiera que todas las empresas están obligadas a suministrar periódicamente es la de las cuentas anuales (CA), conformadas por el balance, la cuenta de pérdidas y ganancias y la memoria. Por lo que respecta a la Contabilidad de Gestión su utilidad estará íntimamente relacionada con su capacidad para cumplir como objetivos los siguientes (Blanco, 1994): a) Poner a disposición de los directivos una información concebida para servir en la elaboración de planes de todas las funciones de la organización. 128 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 129 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI b) Ayudar en la expresión, en términos financieros, del plan en que se plasmen las responsabilidades individuales a todos los niveles de la gestión. c) Señalar, analizar y enjuiciar, una vez fijados en el plan los rendimientos estándar que sirven de referencia y las desviaciones que se vayan produciendo, a medida que se van reconociendo los datos históricos o a posteriori. d) Informar, de manera global, sobre la consecución de los objetivos fijados en el plan, así como del modo de aplicar los medios o recursos previstos en el mismo Dentro de la Contabilidad de Gestión la parcela relativa a la Contabilidad de Costes tiene como finalidad primordial la evaluación de existencias, políticas de precios, análisis coste-volumen-beneficios, diagnósticos económicos del sistema productivo y control de costes. En definitiva, la Contabilidad de Gestión constituye una herramienta que correctamente utilizada sirve de apoyo para el proceso de planificación y control en la empresa, que lleva como resultado a unos estados contables previsionales (balance previsional, cuenta de resultados previsional y el presupuesto de tesorería, entre otros). La Contabilidad Directiva, dentro del ámbito del sistema de dirección económica, en consideración del horizonte temporal al que afecta la decisión, se apoya en la Contabilidad Estratégica, la Contabilidad de Gestión y la Contabilidad Operativa (ACODI, 1992). 4.2.2. Verificación y consolidación contables Una vez elaborada la información por los subsistemas de Contabilidad Financiera y Contabilidad de Gestión y antes de su utilización finalista por los usuarios, caben, con relación al SIC, dos actuaciones concretas dirigidas a la verificación de la información contable y, en el caso de grupos de empresas, a la consolidación de estados contables. La verificabilidad de la información concede mayor confianza o credibilidad al permitir el control necesario. Dicha verificabilidad se realiza mediante la instrumentalización de unos procesos de auditoría, ya sea interna o externa, por personal especializado en dicha tarea que se convierte en garante de la razonabilidad y fiabilidad. La consolidación, desde la perspectiva de la Contabilidad Financiera, consiste en la aplicación de unos métodos preestablecidos con la finalidad de presentar estados únicos representativos de la imagen fiel de un conjunto de empresas que forman un grupo, haciendo especial incidencia en las operaciones realizadas dentro del grupo. 4.2.3. Análisis de la información contable En este punto, dependiendo del perfil y necesidades del usuario de la información, también debemos diferenciar a efectos de su análisis, comparación y utilización, el realizado respecto de la información producida por la Contabilidad Financiera y la producida por la Contabilidad de Gestión. 129 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 130 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La normalización de la primera, una vez verificados y consolidados, en su caso, los estados contables, permite una actuación rápida mediante la aplicación sobre los mismos de análisis patrimoniales, financieros y económicos perfectamente conocidos y manejados con generalidad. Precisamente sustentar estos análisis en las premisas de comparabilidad y alto nivel de agregación, posibilita el establecimiento de unos ratios, índices e informes normalizados por entidades de referencia básica, como podría ser la Central de Balances del Banco de España, que proporcionan análisis agregados por sectores de actividad. En el caso de la Contabilidad de Gestión el análisis y la comprensión de la información contable está orientado hacia la propia dirección, lo que implica el conocimiento del proceso productivo. Dado que este subsistema contable no está sometido a regulación-normalización, la generalización de indicadores de análisis a efectos de comparabilidad entre empresas es más complejo. 4.3. El sector acuícola desde la perspectiva contable. Segmentación de la información contable Como hemos comentado, la actividad económica genera una serie de subprocesos de circulación de valores, tanto internos como externos, dependiendo de si son operaciones de intercambio en el interior de la organización o entre ésta y el exterior. Por otra parte el subproceso de circulación de valores internos puede ser originado por una única actividad de explotación o varias, estando éstas más o menos diferenciadas, de modo que podrían ser cada una de ellas en sí mismas el objeto de la actividad económica de empresas distintas. Al considerar la actividad de una empresa acuícola continental observamos que existen dos áreas completamente diferenciables y con connotaciones propias que las hace independientes en gran medida: la cría o hatchery y el engorde. Cada una de estas actividades está caracterizada por una estructura productiva permanente y particular común al sector (laboratorios, piscinas, reproductores, inversiones en I + D, concesiones administrativas, etc.), por unos materiales y una financiación. En el sector acuícola hay empresas cuya actuación se focalizaría en una de las áreas señaladas pero otras trabajan con ambos tipos de actividad, por lo que desde la perspectiva de la teoría contable podemos hablar de segmentación de la información contable. Según el International Accounting Standards Comittee (IASC, 1981) «el objetivo de la información segmentada es suministrar a los usuarios de los estados financieros datos sobre el tamaño relativo, contribución al resultado y tendencia al crecimiento de las diferentes actividades industriales1, y áreas geográficas en las cuales 1 En nuestro caso, cría y engorde. 130 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 131 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI opera una empresa diversificada, con el objeto de darles la posibilidad de obtener juicios más informados acerca de la unidad económica en su totalidad». Un primer ejemplo de segmentación podría ser el que se desprende de la propia Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE-1993) que utiliza como criterio la localización de la explotación, según se realice en aguas dulces o saladas, lo que lleva a que, el epígrafe correspondiente a la actividad objeto de estudio, la acuícola, se presenta con el siguiente desglose: 05 Pesca, acuicultura y actividades de los servicios relacionadas con las mismas: 05.02 Acuicultura: 05.02 05.021 Acuicultura de aguas continentales. 05.02 05.022 Acuicultura de aguas marinas. El tamaño de la empresa (grande o pequeña), la diversificación de sus explotaciones (actividades de cría o engorde), la heterogeneidad de sus productos (larvas, lubina, dorada, moluscos, etc.) y la diversidad de mercados (locales, regionales, nacionales, comunitarios, internacionales), hace que la agregación de la información contable pueda no ser completamente satisfactoria a los ojos de los usuarios externos ya que por ello les dificulta el conocimiento de algunos aspectos de la situación económico-financiera actual y pasada. La segmentación viene a paliar en alguna medida estas deficiencias. Ahora bien, la propia normalización contable ha recogido referencias a la información segmentada en función de lo que los propios organismos emisores de normas contables, internacionales o nacionales, han considerado necesario. En concreto, el artículo 200, 8.ª, del Texto Refundido de la Ley de Sociedades Anónimas, señala que en la memoria de la sociedad deberá recoger «la distribución del importe neto de la cifra de negocios correspondiente a las actividades ordinarias de la sociedad, por categorías de actividades, así como por mercados geográficos, en la medida en que, desde el punto de vista de la organización de la venta de productos y de la prestación de servicios correspondientes a las actividades ordinarias de la sociedad, esas categorías y mercados difieran entre sí de una manera considerable». Añade que «las menciones previstas en este número podrán omitirse indicándolo en la memoria, cuando por su naturaleza puedan acarrear graves perjuicios a la sociedad. También podrán omitir tales menciones las sociedades que pueden formular cuenta de pérdidas y ganancias abreviada». Dicho artículo únicamente adapta las directivas comunitarias, de igual modo que lo hace su desarrollo en el PGC, que establece la obligatoriedad de incluir en la memoria normal, con relación a las actividades ordinarias de la empresa, información sobre la distribución del importe neto de la cifra de negocios por categorías de actividades así como por mercados geográficos, además, sin hacer referencia específica a las sociedades anónimas. Esta obligación se amplía al grupo cuando se deban formular CA consolidadas y queda omitido cuando hacemos referencia a la memoria abreviada, a formular por aquellas empresas que puedan presentar el balance abreviado. 131 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 132 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI No obstante, si las ventajas de la segmentación han sido puestas de manifiesto repetidamente en diversos trabajos (entre otros, Babío Arcay, 1991), también se han aducido inconvenientes, sobre todo el perjuicio que puede representar la información desglosada al ser susceptible de debilitar la posición competitiva de la empresa en el mercado. El desconocimiento del sector acuícola es una importante barrera para futuros nuevos competidores teniendo en cuenta que se trata de un sector emergente. Podría considerarse que al segmentar la información, según Aguayo Moral (1997), se facilita a las empresas de la misma actividad datos relevantes que pueden orientar sus propias decisiones; se proporcionan a numerosos agentes económicos y sociales justificaciones para exigir o defender frente a la empresa sus intereses particulares y, finalmente, se pueden alejar algunos inversores ante el aumento del riesgo apreciado para la empresa. Por otro lado, la información que se recoge en la segmentación es exigible al conjunto de las empresas del sector por lo que se encuentran en un plano de igualdad desde la perspectiva de la competencia. En este sentido, tal vez resulta muy ilustrativo finalizar refiriéndonos nuevamente al IASC (1981) cuando apunta que la revelación de información segmentada no afecta a la empresa diversificada, en nuestro caso en actividades de cría o engorde, más que la información exigida a otra que actúe en un solo subsector de actividad industrial, o en un área geográfica. Es necesario tener presente que a la hora de fijar los segmentos, los criterios más habituales a utilizar, que no son excluyentes y sí pueden ser complementarios, serían: — La actividad industrial, según sean los productos. — Las áreas geográficas en las que se localizan las unidades productivas. — Las áreas geográficas en las que se venden los productos o presta los servicios. — Los clientes, según sus características. — Las entidades o sociedades del grupo empresarial así como las divisiones que formen la organización. Para el propósito de nuestro trabajo, en esta primera etapa, proponemos una segmentación de acuerdo con la actividad, de forma tal que en la adaptación del cuadro de cuentas del PGC, que detallaremos más adelante, pueda ser utilizado tanto por empresas que reúnan ambos tipos de actividad, cría y engorde, así como las que trabajen con uno sólo de ellos, y dentro de cada tipo de actividad segmentaremos por especies, ya sea lubina, rodaballo, dorada, almeja, u otras. 4.4. Contabilidad Financiera en empresas del sector acuícola A lo largo del apartado nos ajustaremos a la estructura propia del PGC sin pretender, ni mucho menos, ya que no es nuestro objetivo, llegar a presentar una adaptación sectorial completa, sino un posible enfoque a seguir a la hora de aplicar 132 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 133 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI el Plan a determinados elementos y operaciones, así como al elaborar las cuentas anuales. 4.4.1. Principios contables Los principios contables, de obligado cumplimiento según la normativa contable española recogidos en la legislación mercantil y el PGC, son los siguientes: Principio de prudencia: únicamente se contabilizarán los beneficios realizados a la fecha de cierre del ejercicio. Por el contrario, los riesgos previsibles y las pérdidas eventuales con origen en el ejercicio o en otro anterior, deberán contabilizarse tan pronto sean conocidas; a estos efectos, se distinguirán las reversibles o potenciales de las realizadas o irreversibles. En consecuencia, al realizar dicho cierre se tendrán presentes todos los riesgos y pérdidas previsibles, cualquiera que sea su origen. Cuando tales riesgos y pérdidas fuesen conocidos entre la fecha de cierre del ejercicio y aquella en que se establecen las CA, sin perjuicio de su reflejo en el balance y cuenta de pérdidas y ganancias, deberá facilitarse cumplida información de todos ellos en la memoria. Igualmente, se tendrán presentes toda clase de depreciaciones, tanto si el resultado del ejercicio fuese positivo como negativo. Supongamos que una empresa acuícola tipo adquirió, en su momento, con la perspectiva de ampliar las instalaciones productivas, unos edificios para la ubicación de instalaciones de frío como última fase, previa a la comercialización de lubina y rodaballo. La construcción de un acceso a una autovía a escasos metros ha supuesto una revalorización de toda el área al aumentar la demanda de suelo industrial en la zona. Únicamente consideraremos la plusvalía en el momento de la venta, salvo que las autoridades económicas mediante disposición legal permitan recoger la plusvalía en nuestros estados contables. Principio de empresa en funcionamiento: se considerará que la gestión de la empresa tiene prácticamente una duración ilimitada. En consecuencia, la aplicación de los principios contables no irá encaminada a determinar el valor del patrimonio a efectos de su enajenación global o parcial ni el importe resultante en caso de liquidación. Supongamos el caso de una empresa acuícola que por motivos de índole social y medioambiental no ve renovada su concesión sobre los terrenos en los que se asientan las instalaciones, por lo que decide dar por finalizado el objeto social a partir del primer día del ejercicio siguiente. En ese caso las CA que presente la empresa irán dirigidas a informar de su situación previa a la liquidación, por lo que no cumpliría el principio de empresa en funcionamiento. Principio de registro: los hechos económicos deben registrarse cuando nazcan los derechos u obligaciones que los mismos originen. Supongamos que una empresa acuícola tipo acordó con un cliente, el 25 de diciembre del año n, la venta de una partida de alevines de rodaballo por un importe de 6.100.000 ptas., cuyo coste había sido de 4.800.000 ptas. Al 31 de diciembre del citado año el cliente no había retirado aún la mercancía, que se encuentra en los 133 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 134 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI estanques de la empresa completando el ciclo de engorde hasta la talla pactada y, por lo tanto, la propiedad se transferirá el próximo 15 de enero del año n+1. No se podrá incluir en el resultado del año 98 ningún ingreso por no haberse concluido la venta. En consecuencia, estas existencias, valoradas a su precio de adquisición, habrán de formar parte del inventario al 31 de diciembre del año n. Principio del precio de adquisición: como norma general, todos los bienes y derechos se contabilizarán por su precio de adquisición o coste de producción. Supongamos que de una forma repentina ha aumentado la demanda de una determinada especie cultivada en piscifactoría. Debido a la rigidez de la oferta, por el ciclo de crecimiento de la especie, resulta imposible satisfacer inmediatamente la demanda, por lo que los precios se elevan de forma notable. De cualquier modo el valor de las existencias únicamente recogerá los costes de producción ya que el margen o beneficio se pondrá de manifiesto en el momento de la venta. El principio del precio de adquisición deberá respetarse siempre, salvo que, como ya se comentó anteriormente, se autoricen por disposición legal rectificaciones al mismo; en ese caso, deberá facilitarse cumplida información en la memoria. Principio de devengo: la imputación de ingresos y gastos deberá hacerse en función de la corriente real de bienes y servicios que los mismos representan y con independencia del momento en que se produzca la corriente monetaria o financiera derivada de ellos. Supongamos que el 1 de enero del año n, una empresa acuícola tipo paga 120.000 ptas. por el arrendamiento de un local utilizado como delegación comercial en Madrid para la venta de lubina y rodaballo a minoristas, correspondiente al trimestre que termina el 1 de marzo del año n+1. El gasto que la empresa debe imputar al ejercicio del año n es de 40.000 ptas., por el mes de diciembre, el resto son alquileres pagados anticipadamente. Principio de correlación de ingresos y gastos: el resultado del ejercicio estará constituido por los ingresos de dicho período menos los gastos del mismo realizados para la obtención de aquéllos, así como los beneficios y quebrantos no relacionados claramente con la actividad de la empresa. Supongamos que en el mes de diciembre una empresa acuícola vende existencias por 500.000 ptas., que tienen garantía por un año y se estima, por la experiencia de ejercicios precedentes, que el coste de las reparaciones o sustituciones de productos garantizados es del 3% de la cifra de ventas; habrá que imputar como gasto del presente ejercicio los gastos que esta operación nos puede acarrear en el futuro. Principio de no compensación: en ningún caso podrán compensarse las partidas del activo y del pasivo del balance ni las de gastos e ingresos que integran la cuenta de pérdidas y ganancias, establecidos en los modelos de las CA. Se valorarán separadamente los elementos integrantes de las distintas partidas del activo y del pasivo. Supongamos que una empresa acuícola tipo, al hacer una venta de alevines, contrata su transporte hasta las instalaciones del cliente y el transportista, pese a 134 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 135 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ser un gasto por cuenta del cliente, hace la factura a nombre de la empresa y ésta atiende su pago; lo contabilizaría como gasto en la cuenta de «Transportes»; si posteriormente repercutimos al cliente el importe del gasto de transporte lo tendrá que contabilizar como ingreso en la cuenta «Ingresos por servicios diversos», es decir, no se puede eliminar el gasto al cobrarle los gastos del transporte al cliente. Principio de uniformidad: adoptado un criterio en la aplicación de los principios contables dentro de las alternativas que, en su caso, éstos permitan, deberá mantenerse en el tiempo y aplicarse a todos los elementos patrimoniales que tengan las mismas características en tanto no se alteren los supuestos que motivaron la elección de dicho criterio. De alterarse estos supuestos podrá modificarse el criterio adoptado en su día; pero, en tal caso, estas circunstancias se harán constar en la memoria, indicando la incidencia cuantitativa y cualitativa de la variación sobre las CA. Supongamos que debido a la conclusión de un ciclo económico caracterizado, entre otros aspectos por una inflación elevada, nos encontramos con comportamientos estables y en niveles de los precios muy inferiores, lo que lleva a que para una empresa dedicada a la comercialización de especies con períodos de engorde superiores a un año, decida abandonar para la valoración de existencias el criterio FIFO, seguido hasta ese momento, adoptando para este ejercicio el criterio de precio medio ponderado o LIFO. Principio de importancia relativa: podrá admitirse la no aplicación estricta de algunos de estos principios contables, siempre y cuando la importancia relativa en términos cuantitativos de la variación que tal hecho produzca sea escasamente significativa, y, en consecuencia, no altere las CA como expresión de la imagen fiel a la que nos referimos anteriormente. Supongamos que se compran grandes cantidades de ciertos componentes químicos para el tratamiento del agua, con precios unitarios bajos y fluctuantes, la identificación una a una de las partidas sería complicada y dada la escasa importancia relativa de su valor sobre el total de gastos se podría presentar una valoración global para todos los componentes. Además, reconociéndose en el propio PGC el principio de prudencia como prevalente ante los demás, lo cierto es que en los casos de conflicto entre principios contables obligatorios deberá prevalecer el que mejor conduzca a que las CA expresen la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa. 4.4.2. El plan de cuentas Tal y como se pone de manifiesto en la introducción del PGC el cuadro de cuentas, así como los movimientos de las mismas contenidos en la segunda y tercera parte de este Plan, son de aplicación facultativa por parte de las empresas. No obstante, es 135 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 136 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI aconsejable que, en el caso de hacer uso de esta facultad, se utilicen denominaciones similares, con el fin de facilitar la elaboración de las cuentas anuales cuya estructura y normas que desarrollan su contenido y presentación son obligatorias. Por motivos obvios durante la exposición de nuestro trabajo adoptaremos los criterios del Plan. A la hora de elaborar un cuadro de cuentas aplicable al sector observaremos que existen diferencias dependiendo del tipo de actividad. En principio exigen especial atención los grupos 2, 3, en parte el 1 y, por supuesto, el 6 y 7; para los grupos 4 y 5, salvo excepciones que consideramos de interés al igual que para los aspectos que no abordemos expresamente de los grupos anteriores, remitimos al lector a lo establecido con carácter general en el propio PGC. 4.4.2.1. Grupo 1: Financiación Básica Descripción Recoge las cuentas relativas a fondos propios y financiación ajena a largo plazo, y como norma general ambos están destinados a financiar el activo permanente y cubrir un margen razonable del circulante. Otras cuentas recogidas en este grupo son los ingresos a distribuir en varios ejercicios, las acciones propias y otras situaciones transitorias de la financiación básica. Subgrupos 10 11 12 13 Capital Reservas Resultados pendientes de aplicación Ingresos a distribuir en varios ejercicios 14 Provisiones para riesgos y gastos 15 Empréstitos y otras emisiones análogas 16 Deudas a largo plazo con empresas del grupo y asociadas 17 Deudas a largo plazo por préstamos recibidos y otros conceptos 18 Finanzas y depósitos recibidos a largo plazo 19 Situaciones transitorias de financiación Por lo que respecta a los subgrupos anteriores podemos señalar que para las empresas acuícolas, mantienen un contenido (elementos y cuentas) y funcionamiento que en esencia es el planteado con carácter general por el PGC, por lo que no requieren especiales comentarios, salvo el tema de las subvenciones de capital, que estimamos significativas en el sector, por lo que haremos una referencia específica a continuación. Subvenciones de capital Se recogen en el subgrupo 13 «Ingresos a distribuir en varios ejercicios» y su desglose en cuentas podría ser el siguiente: 136 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 137 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 130 Subvenciones oficiales de capital: 1300 Subvenciones del Estado: 13000000 Construcción de diques. Ministerio de Fomento. 13000001 Instalación de nueva depuradora. Ministerio de Medio Ambiente. 1301 Subvenciones de otras administraciones públicas: 13010000 Plan de Desarrollo de Cultivos. Unión Europea. 13010001 Adquisición jaulas. Comunidad Autónoma. 13010002 Ampliación de instalaciones. Administración Local. Estas subvenciones ya sean con la finalidad de realizar investigaciones como para dotar de instalaciones y medios vienen especificadas en la norma 20ª del plan señalando que se valorarán por el importe concedido, cuando tengan carácter de no reintegrables. Tienen dicha condición aquellas en las que ya se hayan cumplido las condiciones establecidas para su concesión o, en su caso, no existan dudas razonables sobre su futuro cumplimiento. Su imputación al resultado del ejercicio se realizará en proporción a la depreciación experimentada durante el período por los activos financiados con dichas subvenciones, que en el caso de ser no depreciables, se imputarán al resultado del ejercicio en que se produzca la enajenación o baja en inventario de los mismos, si bien AECA2 en sus documentos de Principios Contables, en concreto en el número 2, «Inmovilizado material», y en el número 10, «Recursos Propios», propone minorar el valor de adquisición del elemento de inmovilizado con el importe de la subvención recibida. Para constatar el efecto de las subvenciones sobre los resultados vamos a plantear un ejemplo explicativo: supongamos la compra de unas jaulas de engorde con un precio final una vez puestas en explotación el 1 de enero de 3 millones de pesetas para las que hemos recibido una subvención oficial de la Consejería de Pesca de la Comunidad de Cantabria de 1 millón de pesetas a fondo perdido. Las jaulas se amortizarán en 5 años con un valor residual nulo mediante cuotas constantes. Al adquirir las jaulas 3.000.000 480.000 2 (22200001) Jaulas de engorde (47200001) Hacienda Pública, IVA soportado a (57000000) Tesorería, y/o a (16400000) Proveedores de inmov. a largo plazo, empresas del grupo, y/o otra cuenta de proveedores de inmovilizado o efectos a pagar. 3.480.000 Asociación Española de Contabilidad y Administración de empresas (AECA). 137 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 138 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Al recibir la subvención 1.000.000 (5720008) Banco de Santander, c/c vista, ptas. a (13010001) Subvenciones oficiales de capital de la Comunidad de Cantabria. Jaulas 1.000.000 Por la amortización del primer año, al cierre del ejercicio 600.000 (68200001) Amortización del inmovilizado material. Jaulas. a (28220001) Amortización acumulada de instalaciones técnicas. Jaulas. 600.000 Por la imputación al ejercicio de la parte correspondiente de la subvención 200.000 (13010001) Subvenciones a (77510001) Subvenciones oficiales de capital de la de capital traspasadas al Comunidad de Cantabria. Jaulas resultado del ejercicio. 200.000 Debemos señalar que si bien las subvenciones a la explotación recibidas se consideran ingresos del ejercicio y se recogen en la cuenta de pérdidas y ganancias dentro del apartado de ingresos de explotación, las subvenciones de capital se imputan mediante el abono a la cuenta 775, perteneciente al epígrafe de resultados extraordinarios. Desde la perspectiva patrimonial, el efecto de esta imputación es una posible minoración de los fondos propios en la proporción que le corresponda a las subvenciones por el impuesto sobre sociedades, mientras que desde la perspectiva económica supone un mayor beneficio antes de impuestos en la cuantía de la subvención al corregir el efecto de la amortización sobre los resultados. No conlleva ningún flujo financiero con el exterior. Como nota final decir que aquellas subvenciones con la condición de reintegrables tienen la consideración de pasivos y se contabilizan en la cuenta 172, Deudas a largo plazo transformables en subvenciones. 4.4.2.2. Grupo 2: Inmovilizado Descripción Este grupo comprende los elementos del patrimonio destinados a servir de forma duradera en la actividad de la empresa, de ahí que presente distintas cuentas dependiendo de que la actividad sea de cría o de engorde. En este grupo haremos mención en especial al inmovilizado inmaterial, material y provisiones de inmovilizado. 138 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 139 IINNIICCIIOO INICIO INICIO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Subgrupos 20 21 22 23 Gastos de establecimiento 25 Otras inversiones financieras Inmovilizaciones inmateriales permanentes Inmovilizaciones materiales 26 Finanzas y depósitos constituidos a Inmovilizaciones materiales largo plazo en curso 27 Gastos a distribuir en varios ejercicios 24 Inversiones financieras en 28 Amortización acumulada del empresas del Grupo y inmovilizado asociadas 29 Provisiones de inmovilizado Al igual que señalamos en el grupo 1, a continuación sólo vamos a realizar algunos comentarios sobre aquellos aspectos del inmovilizado que consideramos de mayor interés a los efectos de los objetivos de nuestro trabajo. Valoración de las inmovilizaciones materiales e inmateriales De acuerdo con la norma 2.ª del Plan, la valoración del inmovilizado material debe realizarse al precio de adquisición o al coste de producción. Cuando se trate de bienes adquiridos a título gratuito, se considerará como precio de adquisición el valor venal de los mismos en el momento de la adquisición. Asimismo, prosigue diciendo que, se incorporarán al valor del inmovilizado correspondiente el importe de las inversiones adicionales o complementarias que se realicen, valorándose éstas de acuerdo con los criterios establecidos en el párrafo anterior. En el apartado 2 de esta norma se especifica la inclusión de todos los gastos adicionales que se produzcan hasta su puesta en condiciones de funcionamiento y permite la inclusión de los gastos financieros, pero siempre que se hayan devengado antes de la puesta en condiciones de funcionamiento del activo y hayan sido girados por el proveedor, o correspondan a préstamos u otro tipo de financiación ajena, destinada a financiar la adquisición, y en este caso se deberá señalar en la memoria. Tiene gran importancia en las empresas de acuicultura dedicadas a la cría, el apartado 3 de la citada norma, por lo que se refiere a la construcción de instalaciones con los medios de la propia empresa y, en concreto, a la cría de los animales reproductores. Dice el Plan, en ese apartado, que el coste de producción de los bienes fabricados o construidos por la propia empresa se obtiene añadiendo al precio de adquisición de las materias primas y otras materias consumibles, los demás costes directamente imputables a dichos bienes. Deberá añadirse la parte que razonablemente corresponda de los costes indirectamente imputables a los bienes de que se trata, en la medida en que tales costes correspondan al período de fabricación o de construcción. Además, al igual que en la compra se permite la inclusión de los gastos financieros en las mismas condiciones. En cuanto al inmovilizado inmaterial, según el Plan, se valorarán por su precio de adquisición o coste de producción, de acuerdo con lo reflejado anteriormente. 139 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 140 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 210 Gastos de investigación y desarrollo: 2100 Gastos de investigación y desarrollo en proyectos no terminados. 2101 Gastos de investigación y desarrollo en proyectos terminados. 211 Concesiones administrativas. 212 Propiedad industrial. 213 Fondo de comercio. 214 Derechos de traspaso. 215 Aplicaciones informáticas. 217 Derechos sobre bienes en régimen de arrendamiento financiero. 219 Anticipos para inmovilizaciones inmateriales. Gastos de investigación y desarrollo Debemos hacer algunos comentarios específicos sobre los gastos de investigación y desarrollo, por ser una actividad habitual la de investigación tanto para las empresas de cría como de engorde, ya sea con el propio personal o subcontratado. El PGC dice que se considerarán gastos del ejercicio según la norma de valoración 5.ª, ahora bien, podrán activarse3 cuando reúnan las siguientes condiciones: — Estar específicamente individualizados por proyectos, y su coste claramente establecido para que pueda ser distribuido en el tiempo. — Tener motivos fundados del éxito técnico y de la rentabilidad económicocomercial del proyecto o proyectos de que se trate. Sigue diciendo el PGC que los gastos de investigación y desarrollo que figuren en el activo deberán amortizarse con la mayor brevedad posible, siempre dentro del plazo de cinco años desde que se concluya el proyecto de investigación o desarrollo que haya sido capitalizado; en el caso en que existan dudas razonables sobre el éxito técnico y de la rentabilidad económico-comercial del proyecto, los gastos capitalizados deberán llevarse directamente a pérdidas. Por otro lado, la Resolución del ICAC4 de 21 de enero de 1992 por la que se dictan normas de valoración del inmovilizado inmaterial establece la posibilidad de activar los gastos de I + D si se cumplen todas y cada una de las siguientes condiciones: — Existencia de un proyecto específico e individualizado para cada actividad de I + D. — La asignación, imputación y distribución temporal de los costes de cada proyecto deben estar claramente establecidas. — En todo momento debe haber motivos fundados de éxito técnico en la realización del proyecto de I + D, tanto para el caso en que la empresa tenga la inten3 4 En este caso que nos ocupa se trata de recoger en una cuenta de activo del balance del subgrupo 21, cuenta 210 el valor de los gastos, sin considerarlos a los efectos del resultado del ejercicio. Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), organismo público dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda. 140 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 141 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ción de su explotación directa como para el de la venta a un tercero del resultado del proyecto una vez concluido, si existe mercado. — La rentabilidad económico-comercial del proyecto debe estar razonablemente asegurada. — La financiación de los distintos proyectos de I + D debe estar razonablemente asegurada para completar la realización de los mismos. El PGC define investigación como la indagación original y planificada que persigue descubrir nuevos conocimientos y superior comprensión en los terrenos científico o técnico. Asimismo define el desarrollo como la aplicación concreta de los logros obtenidos en la investigación hasta que se inicia la producción comercial. Esta diferenciación desemboca en que el ICAC, en la mencionada resolución de 1992, entra en contradicción con la norma de valoración 5.ª del PGC ya que, según el ICAC, las actividades de investigación comenzarán a amortizarse a partir del ejercicio en el que se capitalicen, y las actividades de desarrollo, comenzará a partir de la fecha de terminación del proyecto y se extenderá durante el período en el cual genere ingresos. Ahora bien, cabe destacar que desde la perspectiva legal el Plan posee un mayor rango normativo. En aquellos casos en que se obtengan resultados positivos en las investigaciones, que lleven a su explotación en forma de patentes, estaremos ante una propiedad industrial, que según el Plan recoge también el coste de registro y formalización de la propiedad industrial. Supongamos que una empresa acuícola dedicada a la cría comienza en el año n unos trabajos de investigación en sus propios laboratorios sobre la reproducción de una determinada especie de peces en cautividad con la finalidad de su explotación comercial dirigida al consumo humano. Al cierre del ejercicio, los gastos aplicados a los trabajos señalados, consistentes en la nómina del personal investigador, depreciaciones, consumo de materiales, suministros, etc., ascienden a 6 millones de pesetas durante tres años, de los cuales dos años son de investigación y uno de desarrollo. Si realizamos su contabilización de acuerdo con la Resolución del ICAC. Al cierre del ejercicio del año n, 6.000.000 (21050012) Gastos de investigación. Proyecto de cría de la especie A. a (73100012) Trabajos realizados para el inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. 6.000.000 Previamente se habrán devengado y, en su caso, pagado los distintos gastos en sus correspondientes cuentas del grupo 6. Si consideramos la amortización en el período máximo, es decir, cinco años, su contabilización será: 141 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 142 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 1.200.000 (68100012) Amortización del inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la de la especie A. a (2810012) Amortización acumulada de inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. 1.200.000 Si en ese momento se considera que el proyecto no tiene éxito y se abandona, no se procedería a la realización de estos últimos asientos. Al cierre del ejercicio del año n+1, 6.000.000 (21050012) Gastos de investigación. Proyecto de cría de la especie A. a (73100012) Trabajos realizados para el inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. 6.000.000 Y la amortización, 1.200.000 ptas. por 1/5 de amortización del primer año y las restantes 1.200.000 ptas. por 1/5 de los 6 millones del segundo año. 2.400.000 (68100012) Amortización del inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. a (28100012) Amortización acumulada de inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. 2.400.000 Si durante el ejercicio del año n+1 se decidiese abandonar el proyecto, 4.800.000 1.200.000 (67000012) Pérdidas procedentes del inmovilizado inmaterial. (68100012) Amortización del inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. a (21050012) Gastos de investigación. Proyecto de cría de la especie A. 6.000.000 a Si por el contrario avanzan las investigaciones, al final del tercer año, dedicado al desarrollo, 6.000.000 (21060012) Gastos de desarrollo. Proyecto de cría de la especie A. a (73100012) Trabajos realizados para el inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría especie A. 6.000.000 Que una vez que reúnen las condiciones legales para su inscripción en el Registro de la Propiedad Industrial, el importe por el que se contabilizará será el de 142 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 143 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI los gastos activados pendientes de amortizar más el gasto de registro y formalización de la propiedad industrial que asciende a 14.800 pesetas. Suponiendo que se registra a los pocos días de terminar el proyecto no se procede a la amortización de los gastos de desarrollo. 6.014.800 (21200012) Marca especie A. a (21060012) Gastos de del inmovilizado desarrollo. Proyecto de cría inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. a (57000001) Caja, pesetas 6.000.000 14.800 Y la amortización de los gastos de investigación, 2.400.000 (68100012) Amortización del inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. a (28100012) Amortización acumulada de inmovilizado inmaterial. Proyecto de cría de la especie A. 2.400.000 Este asiento se repite al 31 de diciembre de los años 1997, 1998 y 1999. Y en el año 2000 su cuantía sería por 1.200.000. Por otro lado, los gastos de desarrollo, convertidos en marca, deberán seguir un proceso de amortización en el menor tiempo posible por ser inmovilizado inmaterial. Concesiones administrativas Las concesiones administrativas son los gastos efectuados para la obtención de derechos de investigación o de explotación otorgados por el Estado u otras Administraciones Públicas, o el precio de adquisición de aquellas concesiones susceptibles de transmisión que han sido adquiridas a terceros. En el caso de las empresas acuícolas es una partida importante ya que dependen del entorno en el que se ubican, y de hecho las concesiones pueden ser tanto para la explotación directa como para la protección de su entorno inmediato, normalmente se trata de amplias o pequeñas zonas costeras, dependiendo de la especie y la técnica a utilizar. En definitiva, las concesiones pueden ser sobre terrenos costeros o sobre litoral marítimo, pero en cualquier caso, la necesidad de dotar o no el Fondo de Reversión, de hecho, depende de la consideración de la propia empresa de las posibilidades de renovación de las concesiones. Inmovilizaciones materiales Las inmovilizaciones materiales, si bien el PGC propone unos epígrafes, en nuestro caso incluirán: 220 Terrenos y bienes naturales. 221 Construcciones. 222 Instalaciones técnicas. 143 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 144 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 223 Animales reproductores y maquinaria. 224 Utillaje. 225 Otras instalaciones. 226 Mobiliario. 227 Equipos para el proceso de información. 228 Elementos de transporte. 229 Otro inmovilizado material. En las cuentas del epígrafe 220 se recogen, sobre todo en la acuicultura continental, los terrenos propiedad de la empresa en los que se ubican las instalaciones de explotación. En el 221 los edificios para oficinas, piscinas, laboratorios, viveros, etc. Las correspondientes al 222 son todos los sistemas de cría de las larvas, engorde mediante jaulas, engorde de moluscos e incluso las dedicadas a reproductores. En la 223, en el caso de las empresas dedicadas a la cría, los animales reproductores son aquellos escogidos para la obtención de las puestas de las que se obtendrán los alevines que, bien se engordarán en la propia empresa, o bien se comercializarán sin proceder a su engorde. Asimismo, incluiremos en este epígrafe los elementos de transporte interno en las instalaciones de la empresa. Recogeremos en la 224 los utensilios o herramientas que se pueden utilizar autónomamente o junto con la maquinaria. En la 225 las depuradoras de agua, instalaciones de bombeo, instalaciones de cogeneración, laboratorios, etc. En la 228 se incluirá cualquier tipo de vehículos utilizables para el transporte terrestre, marítimo o aéreo. Y en la 229 aquellas otras inmovilizaciones no recogidas en las cuentas anteriores. Tal y como se comentó en su momento, la segmentación por subsectores permite la diferenciación de cada una de las cuentas en función de la actividad, es decir, de las especies explotadas. Consideremos pues que la cifra de centenas del código de la subcuenta en el caso de reproductores el número 1, para la cría el 2 y engorde el 3, el 4 para conceptos generales; de esta forma el desglose de la cuenta de Animales reproductores y maquinaria podría ser: 223 Animales reproductores y maquinaria: 2230 Animales reproductores: 2230 22300100 Animales reproductores: especie A. 2230 22300101 Animales reproductores: especie B. 2230 22300102 Animales reproductores: especie C. 2230 22300103 Animales reproductores: especie D. 2231 Maquinaria: 2230 22310200 Maquinaria asignada a cría: especie A. 2230 22310201 Maquinaria asignada a cría: especie B. 144 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 145 IINNIICCIIOO INICIO INICIO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2230 22310202 Maquinaria asignada a cría: especie C. 2230 22310203 Maquinaria asignada a cría: especie D. 2230 22310300 Maquinaria asignada a engorde: especie A. 2230 22310302 Maquinaria asignada a engorde: especie B. 2230 22310302 Maquinaria asignada a engorde: especie C. 2230 22310303 Maquinaria asignada a engorde: especie D. Del mismo modo podría procederse con las restantes cuentas. Sobre las inmovilizaciones en curso, manteniendo el criterio utilizaremos la cuenta 233 Animales reproductores en crecimiento y maquinaria en montaje, que recoge el período hasta su consideración de animales adultos capaces de reproducirse, momento en el que contablemente se procede a la reclasificación de la cuenta de en curso a definitiva. Supongamos que se contabilizan los gastos de cría de los animales reproductores que, en conjunto, ascienden en el ejercicio a 200.000 pesetas. Al final de dicho ejercicio consideraremos el siguiente asiento (manteniendo los criterios de numeración para los códigos): 200.000 (23300100) Animales reproductores en curso: especie A. a (73300100) Trabajos realizados para el inmovilizado material en curso. Animales reproductores especie A. 200.000 Una vez que los animales pasan a ser adultos, si consideramos que los gastos activados en la cuenta 23300100 ascienden a un millón de pesetas, 1.000.000 (22300100) Animales reproductores: especie A. a (23300100) Animales reproductores en curso: especie A. 1.000.000 Momento a partir del cual comenzarán a ser amortizados. En cuanto a la amortización acumulada de inmovilizado, así como las provisiones de inmovilizado remitimos al tratamiento del PGC. 4.4.2.3. Grupo 3: Existencias Descripción Se consideran en este grupo los bienes que permanecen en el inventario al final del ejercicio, que son adquiridos en el exterior o elaborados por la empresa e intervienen en el ciclo de explotación. Se incluyen materias primas, otros aprovisionamientos, productos en curso y productos terminados. 145 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 146 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Subgrupos 30 Comerciales 31 Materias primas 35 Productos terminados 36 Subproductos, residuos y materiales recuperados 32 Otros aprovisionamientos 33 Productos en curso 39 Provisiones por depreciación 34 Productos semiterminados existencias En general, las cuentas de los subgrupos 30, 31, 32, 33, 34 y 35 figuran en el activo del balance y solamente funcionarán con motivo del cierre de ejercicio. En ese momento se abonarán por el importe del inventario de las existencias iniciales con cargo a las cuentas de los subgrupos 61 y 71 que correspondan, cargándose por el importe del inventario de existencias al final del ejercicio que se cierra, igualmente con abono a las cuentas de los subgrupos 61 y 71 que resulten precedentes. Y dichas cuentas del grupo 3 pueden presentar la siguiente estructura: Comerciales En este epígrafe se recogen los animales adquiridos por la empresa y que se destinan a la venta sin transformación, es decir, los adquiridos con una finalidad comercial exenta de engorde. Materias primas Definidas por el PGC como aquellas existencias que se destinan a formar parte de los productos fabricados son recogidas en el subgrupo 31. Dentro del mismo y con relación a la actividad de la empresa acuícola podemos, a título de ejemplo, desglosar así: 31000020 Artemia. Alimento vivo, crustáceos, para la cría de las larvas. 31000030 Piensos. Alimentos inertes para el engorde de los peces. 31000040 Oxígeno. Otros aprovisionamientos Se trata de bienes o cosas comprados y que intervienen en el ciclo de explotación de forma directa o indirecta (mantenimiento del inmovilizado) y que son destinados a ser consumidos, generalmente de forma inmediata. Se desglosa de la siguiente manera: 321 Combustibles. 322 Repuestos y materiales de reparación. 325 Materiales diversos. 326 Embalajes. 327 Envases. 328 Material de oficina. En el apartado de combustibles encontramos las materias energéticas susceptibles de almacenamiento. 146 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 147 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Los repuestos y materiales de reparación son piezas destinadas a ser montadas en instalaciones, equipos o máquinas en sustitución de otras semejantes. Se incluirán en esta cuenta las que tengan un ciclo de almacenamiento inferior a un año. Como materiales diversos consideraremos otras materias de consumo que no han de incorporarse al producto fabricado, como por ejemplo el oxígeno o sustancias utilizadas en el tratamiento del medio acuático, desinfectantes, medicamentos, vestuario, etc. Son embalajes según el PGC las cubiertas o envolturas, generalmente irrecuperables, destinadas a resguardar productos que han de transportarse, mientras que los envases son recipientes o vasijas, normalmente destinadas a la venta juntamente con el producto que contienen. Por lo que respecta al material de oficina, el que se encuentre pendiente de consumir al final del ejercicio. Productos en curso Son las existencias (peces, larvas o moluscos) en una fase del proceso productivo anterior al necesario para considerarlo como apto para la comercialización. Si mantenemos la codificación, el desglose podría ser el siguiente: 330 Peces. Individuos que se encuentran en fase de engorde: 33000300 Especie A, engorde. 33000301 Especie B, engorde. 33000302 Especie C, engorde. 33000303 Especie D, engorde. 331 Larvas. Individuos que se encuentran en la fase de cría: 33100200 Especie A, cría. 33100201 Especie B, cría. 33100202 Especie C, cría. 33100203 Especie D, cría. 332 Moluscos. En la fase de cría, en semilleros: 33200204 Especie E, cría. 33200205 Especie F, cría. 33200206 Especie G, cría. 33200207 Especie H, cría. Recordamos que los individuos reproductores tienen la consideración de inmovilizado material. Por regla general, la duración del período medio de engorde, incluida la fase de cría, de un individuo en cautividad depende de la especie pero supera por término medio el año. Esto se tendrá en cuenta a posteriori cuando pasemos a analizar los estados contables de las empresas de este sector. Productos terminados En aquellas empresas que se dedican a la cría no es necesaria ya que hasta el momento de la venta los alevines tienen la consideración de producción en curso. Es 147 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 148 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI en las empresas de engorde en las que aparece el producto terminado en sentido estricto ya que una vez embalados, o pendientes de embalaje, están listos para su consumo, ya sean frescos o congelados. 35000000 Especie A. 35000001 Especie B. 35000002 Especie C. 35000003 Especie D. Particularmente importante es la problemática de la valoración de existencias, sobre todo en las empresas dedicada a la cría ya que el producto final es el animal vivo de una talla determinada (3 cm en el caso del rodaballo). Dicha complejidad no está ocasionada por la norma a seguir ya que el Plan Contable se decanta por el precio de adquisición o coste de producción tal y como establece la norma 13.ª, que especifica que el precio de adquisición comprenderá el consignado en factura más todos los gastos adicionales que se produzcan hasta que los bienes se hallen en almacén, tales como transportes, aduanas, seguros, etc. El importe de los impuestos indirectos que gravan la adquisición de las existencias sólo se incluirá en el precio de adquisición cuando dicho importe no sea recuperable directamente de la Hacienda Pública. Y en el apartado 3 de dicha norma especifica que el coste de producción se determinará añadiendo al precio de adquisición de las materias primas y otras materias consumibles los costes directamente imputables al producto. También deberá añadirse la parte que razonablemente corresponda de los costes indirectamente imputables a los productos de que se trate, en la medida en que tales costes correspondan al período de fabricación. La dificultad está en que se trata de animales vivos, y como tales en constante movimiento, que añadido a lo relativamente reducido del entorno tridimensional en el que se crían, a su tamaño y a la dificultad de su diferenciación como individuos hace necesaria la utilización de sistemas de recuento e inventario especiales. Provisiones por depreciación de existencias Las depreciaciones estimadas en la realización del inventario al cierre del ejercicio y reversibles, según el Principio de Prudencia se considerarán como gastos del ejercicio y se recogen en la cuenta de Provisiones por depreciación de existencias que figurará en el activo del balance con signo negativo minorando el saldo de existencias que figurará con su precio de adquisición o coste de producción. El PGC establece que cuando el valor de mercado de un bien o cualquier otro valor que le corresponda sea inferior a su precio de adquisición o a su coste de producción, procederá efectuar correcciones valorativas, dotando a tal efecto la pertinente provisión, cuando la depreciación sea reversible. Si la depreciación fuera irreversible, se tendrá en cuenta tal circunstancia al valorar las existencias. A estos efectos, se entenderá por valor de mercado: a) para las materias primas, su precio de reposición o el valor neto de realización, si fuese menor. 148 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 149 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI b) para mercaderías y los productos terminados, su valor de realización, deducidos los gastos de comercialización que correspondan. c) para los productos en curso, el valor de realización de los productos terminados correspondientes, deducidos la totalidad de los costes de fabricación pendientes de incurrir y los gastos de comercialización. Teniendo en consideración que el engorde de los alevines puede hacerse en estanques comunes, sin diferenciación de lotes, el Plan considera a la hora de valorar bienes cuyo precio de adquisición o coste de producción no sean identificables de modo individualizado se adoptará con carácter general el método del precio medio o coste medio ponderado. Los métodos FIFO, LIFO u otro análogo son aceptables y pueden adoptarse si la empresa los considera más convenientes para su gestión. 4.4.2.4. Grupo 4: Acreedores y deudores por operaciones de tráfico Descripción Son cuentas personales y efectos comerciales activos y pasivos que tienen su origen en el tráfico de la empresa, así como las cuentas con las Administraciones Públicas incluso las que corresponden a saldos con vencimiento superior a un año. Subgrupos 40 41 43 44 Proveedores Acreedores varios Clientes Deudores varios 46 47 48 49 Personal Administraciones públicas Ajustes por periodificación Provisiones para operaciones de tráfico 4.4.2.5. Grupo 5: Cuentas financieras Descripción Tal y como recoge el Plan son deudas y créditos por operaciones ajenas al tráfico, con vencimiento no superior a un año y medios líquidos disponibles. Subgrupos 50 Empréstitos y otras emisiones análogas a corto plazo 51 Deudas a corto plazo con empresas del grupo y asociadas 52 Deudas a corto plazo por préstamos recibidos y otros conceptos 53 Inversiones financieras a corto plazo en empresas del grupo y asociadas 54 Otras inversiones financieras temporales 55 Otras cuentas no bancarias 56 Fianzas y depósitos recibidos y constituidos a corto plazo 57 Tesorería 58 Ajustes por periodificación 59 Provisiones financieras 149 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 150 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 4.4.2.6. Grupo 6: Compras y gastos Descripción Consideramos en este grupo las adquisiciones realizadas por la empresa de materias primas, otros aprovisionamientos, gastos del ejercicio, variación de existencias adquiridas, gastos financieros y las pérdidas extraordinarias. Todas estas cuentas se abonarán al cierre del ejercicio con cargo a la cuenta 129 (Pérdidas y Ganancias). Subgrupos 60 61 62 63 64 65 Compras Variación de existencias Servicios exteriores Tributos Gastos de personal Otros gastos de gestión 66 Gastos financieros 67 Pérdidas procedentes del inmovilizado y gastos excepcionales 68 Dotaciones a la amortización 69 Dotaciones a las provisiones Compras En el subgrupo 60, Compras, quedan reflejadas las operaciones de adquisición de alevines para el engorde, medicamentos, productos químicos, desinfectantes, materiales diversos (de laboratorio, de oficina, etc.) y cualquier tipo de recurso necesario para la actividad de la empresa y que esté disponible en el mercado. De acuerdo con la búsqueda de la segmentación en función de la actividad realizada, aprovecharemos los códigos de las subcuentas para la clasificación de las cuentas de forma que sea útil para la gestión de la explotación ya que nos permitirá la preparación de estados contables por áreas de actividad, ya sean funcionales o productos. Su desglose podría ser: 601 Compras de materias primas: 6010 Compras de alevines para engorde: 6010 60100300 Especie A, engorde. 6010 60100301 Especie B, engorde. 6010 60100302 Especie C, engorde. 6010 60100303 Especie D, engorde. 6011 Compras de piensos para engorde: 6010 60110300 Especie A, engorde. 6010 60110301 Especie B, engorde. 6010 60110302 Especie C, engorde. 6010 60110303 Especie D, engorde. 6012 Compras de crustáceos, para engorde: 6010 60120305 Especie E, engorde. 6010 60120306 Especie F, engorde. 150 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 151 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6010 60120307 Especie G, engorde. 6010 60120308 Especie H, engorde. 602 Compras de otros aprovisionamientos: 6021 Compras de medicamentos 6010 60210300 Especie A, engorde. 6010 60210301 Especie B, engorde. 6010 60210302 Especie C, engorde. 6010 60210303 Especie D, engorde. 6010 60210200 Especie A, cría. 6010 60210201 Especie B, cría. 6010 60210202 Especie C, cría. 6010 60210203 Especie D, cría. Y así sucesivamente para el resto de cuentas. Ahora bien, la segmentación en función de la actividad, en ocasiones, exige la búsqueda de criterios diferentes, como puede ser la organización de la empresa, en la que podríamos encontrar secciones como: • Compras. • Producción cría. • Producción engorde. • Laboratorio. • Comercial. • Administración. • Oficina técnica. A las cuales se imputaría los gastos susceptibles de ser repartidos. De acuerdo con la norma de valoración 17.ª del Plan, en la contabilización de la compra de mercaderías y demás bienes para revenderlos, se tendrán en cuenta las siguientes reglas: a) los gastos de las compras, incluidos los de transportes y los impuestos que recaigan sobre las adquisiciones, con exclusión del IVA soportado deducible, se cargarán en la respectiva cuenta del subgrupo 60. b) los descuentos y similares incluidos en factura que no obedezcan a pronto pago se considerarán como menor importe de la compra. c) los descuentos y similares que le sean concedidos a la empresa por pronto pago, incluidos o no en factura, se considerarán ingresos financieros, contabilizándose en la cuenta 765 (Descuentos sobre compras por pronto pago). d) los descuentos y similares que se basen en haber alcanzado un determinado volumen de pedidos, se contabilizarán en la cuenta 609 («Rappels» por compras). e) los descuentos y similares posteriores a la recepción de la factura originados por defectos de calidad, incumplimiento de los plazos de entrega u otras causas análogas, se contabilizarán en la cuenta 608 (Devoluciones de compras y operaciones similares). 151 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 152 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI f) la contabilización de los envases cargados en factura por los proveedores, con facultad de su devolución, queda expuesta en la cuenta 406 (Envases y embalajes a devolver). El subgrupo 61 es el correspondiente a variación de existencias de materias primas y de otros aprovisionamientos. Servicios exteriores Podría presentarse de acuerdo con el siguiente desglose: 620 Gastos de investigación y desarrollo del ejercicio. Los correspondientes a los contratados a otras empresas: 62000100 Producción cría. Proyecto alfa. 62000101 Producción cría. Proyecto beta. 62000202 Producción engorde. Proyecto gamma. 62000203 Producción engorde. Proyecto lambda. Con las restantes cuentas se procedería del mismo modo: 621 Arrendamientos y cánones. 622 Reparaciones y conservación 623 Servicios de profesionales independientes. 624 Transportes. 625 Primas de seguros. 626 Servicios bancarios y similares 627 Publicidad, propaganda y relaciones públicas 628 Suministros. 629 Otros servicios. Los servicios de profesionales independientes incluye veterinarios, abogados, asesores, auditores, etc. En la cuenta 624 se recogen aquellos transportes a cargo de la empresa realizados por terceros cuando no proceda incluirlos en el precio de adquisición del inmovilizado o de las existencias. En esta cuenta se registrarán, entre otros, los transportes de ventas. Por lo que se refiere a los suministros, se consideran como tales el agua, la electricidad, el gas butano, el gas propano, los combustibles, el oxígeno líquido, el dióxido de carbono y, en general, cualquier otro abastecimiento que no tuviere la cualidad de almacenable. Para finalizar este apartado de servicios exteriores, el teléfono, correos y telégrafos, transporte del personal, mensajería, etc., se incluirán en la cuenta 629. Gastos de personal Los gastos de personal podrían presentar el siguiente aspecto: 640 Sueldos y salarios: 152 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 153 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 64081001 64081002 64083201 64083202 64082501 64082502 y así sucesivamente. Sección de Administración. D. Luis García. Sección de Administración. D.ª Luisa Miguel. Sección de Producción cría. D.ª Marta Giménez. Sección de Producción cría. D. Fidel Gutiérrez. Sección de Compras. D. Vicente García. Sección de Compras. D.ª Antonia Sánchez. 4.4.2.5. Grupo 7: Ventas e ingresos Descripción Hace referencia a la enajenación de bienes y prestación de servicios, aunque también incluye otros ingresos, variación de existencias y beneficios extraordinarios. Subgrupos 70 Ventas de mercaderías, de producción, propia, de servicios, etc. 71 Variación de existencias 73 Trabajos realizados para la empresa 74 Subvenciones a la explotación 75 Otros ingresos de gestión 76 Ingresos financieros 77 Beneficios procedentes del inmovilizado e Ingresos excepcionales 79 Exceso de aplicaciones de provisiones Generalmente las ventas se gestionan a efectos de la realización de los presupuestos, y por lo tanto en la fijación de objetivos, por zonas geográficas y especies, por ello, en el subgrupo 70, ventas de producción, y más concretamente la cuenta 701 venta de productos terminados, utilizaremos el código cuya posición corresponde a los millares para codificar dicha área geográfica, de forma tal que podríamos proponer la siguiente distribución de las subcuentas: 701 Ventas de producto: 7010 Ventas generales: 7010 70101300 Ventas de la especie A, engorde, en la zona 1. 7010 70102300 Ventas de la especie A, engorde, en la zona 2. 7010 70103300 Ventas de la especie A, engorde, en la zona 3. 7010 70101301 Ventas de la especie B, engorde, en la zona 1. 7010 70102301 Ventas de la especie B, engorde, en la zona 2. 7010 70103301 Ventas de la especie B, engorde, en la zona 3. 7010 70101201 Ventas de la especie B, cría, en la zona 1. 7010 70102201 Ventas de la especie B, cría, en la zona 2. 7010 70103201 Ventas de la especie B, cría, en la zona 3. aunque también cabría la posibilidad de segregar las cuentas por clientes y especie. 153 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 154 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 4.5. Las Cuentas Anuales 4.5.1. Formulación de las Cuentas Anuales: normas y modelos Las CA comprenden el Balance, la cuenta de Pérdidas y Ganancias y la Memoria. Estos documentos forman una unidad y deben ser redactados con claridad y mostrar la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa, de conformidad con el Código de Comercio, con lo previsto en el Texto refundido de la Ley de Sociedades Anónimas y con el PGC. Las CA son la base de la información financiera externa y forman un todo compuesto por los documentos ya citados. Para que la información presentada en las CA sea útil a sus distintos usuarios, la misma ha de cumplir una serie de cualidades o requisitos, a las cuales hicimos referencia en su momento. El empresario, en el caso de empresas individuales, y los administradores, en el caso de las sociedades, son quienes están obligados a formular las CA de la empresa, estos deben prepararlas en un plazo máximo de tres meses contados a partir de la fecha de cierre del ejercicio. Las CA deben estar identificadas, expresándose de forma clara su denominación, la empresa y el ejercicio a que se refieren, y se expresarán sus valores en pesetas (a partir del año 1999 también en Euros). No obstante, si la magnitud de las cifras lo aconseja se pueden presentar en miles o en millones de pesetas, haciéndose la oportuna indicación al respecto. En lo que respecta a la firma se presentan los siguientes casos: En el caso de empresas individuales se deben firmar por el propio empresario. En las sociedades colectivas o comanditarias por todos los socios ilimitadamente responsables de las deudas sociales. En el caso de sociedades anónimas o de responsabilidad limitada, por todos los administradores. A excepción del primer caso, en los demás debe de figurar la firma de todos los citados y si faltare la firma de alguna de las personas referidas, se señalará en los documentos que falte, indicando expresamente la causa. El PGC establece, como desarrollo de lo dispuesto en la legislación mercantil, modelos de las CA normales y modelos abreviados. Podrán elaborar la cuenta de Pérdidas y Ganancias abreviada, aquellas sociedades que, a la fecha de cierre del ejercicio, concurran al menos dos de las circunstancias siguientes 5: • que el total de las partidas de activo (total que figura en el modelo del balance) no supere los 2.080 millones de pesetas (12.500.000 euros). • que el importe neto de su cifra anual de negocios sea inferior a 4.160 millones de pesetas (25.000.000 euros); 5 Directiva 1999/60/CE del Consejo de 17 de junio de 1999. 154 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 155 IINNIICCIIOO INICIO INICIO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI • que el número medio de trabajadores empleados durante el ejercicio no sea superior a 250. Podrán asimismo elaborar el Balance y Memoria abreviados aquellas sociedades que, a la fecha de cierre del ejercicio concurran al menos dos de las circunstancias siguientes: • que el total de las partidas de activo (total que figura en el modelo del balance) no supere los 520 millones de pesetas (3.125.000 euros); • que el importe neto de su cifra anual de negocios sea inferior a 1.040 millones de pesetas (6.250.000 euros); • que el número medio de trabajadores empleados durante el ejercicio no sea superior a 50. Es necesario el incumplimiento de dos de las circunstancias durante dos años consecutivos para cambiar de modelos abreviados a normales y viceversa. El importe neto de la cifra anual de negocios se determinará deduciendo del importe de las ventas de los productos y de las prestaciones de servicios, correspondientes a las actividades ordinarias de la empresa, el importe de las bonificaciones y demás reducciones sobre las ventas y el del impuesto sobre el valor añadido y otros impuestos directamente relacionados con la misma. Para determinar el número medio de trabajadores se considerarán todas aquellas personas que tengan o hayan tenido alguna relación laboral con la empresa durante el ejercicio, promediadas según el tiempo durante el cual hayan prestado sus servicios. El Informe de Gestión, documento al que nos referiremos mas adelante, también deberá ir firmado por todos los administradores de la sociedad, siendo aplicable lo señalado anteriormente para las ausencias de firmas. 4.5.1.1. Normas comunes para la elaboración del Balance y la Cuenta de Pérdidas y Ganancias Según el PGC, en la contabilización de la venta de bienes, se tendrán en cuenta las siguientes reglas: a) Las ventas se contabilizarán sin incluir los impuestos que gravan estas operaciones. Los gastos inherentes a las mismas, incluidos los transportes a cargo de la empresa, se contabilizarán en las cuentas correspondientes del grupo 6, sin perjuicio de lo establecido en las reglas d) y e) siguientes. b) Los descuentos y similares incluidos en factura que no obedezcan a pronto pago se considerarán como menor importe de la venta. c) Los descuentos y similares que sean concedidos por la empresa por pronto pago, estén o no incluidos en factura, se considerarán gastos financieros, contabilizándose en la cuenta 665 (Descuentos sobre ventas por pronto pago). d) Los descuentos y similares que se basen en haber alcanzado un determinado volumen de pedidos se contabilizarán en la cuenta 709 («Rappels» sobre ventas). 155 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 156 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI e) Los descuentos y similares posteriores a la emisión de la factura originados por defectos de calidad, incumplimiento de los plazos de entrega u otras causas análogas, se contabilizarán en la cuenta 708 (Devoluciones de ventas y operaciones similares). f) La contabilización de los envases cargados en factura a los clientes, con facultad de su recuperación, queda expuesta en la cuenta 436 (Envases y embalajes a devolver por clientes). En cada partida deberán figurar, juntamente con las cifras del ejercicio que se cierra, las del ejercicio inmediatamente anterior. Ello va a facilitar el análisis comparativo de la situación o de los resultados de dos ejercicios consecutivos. Cuando unas y otras no sean comparables, bien por cambios en la estructura del balance o bien por realizarse un cambio de imputación, habrá que adaptar los importes del ejercicio anterior, para su presentación en el presente ejercicio. No figurarán las partidas a las que no corresponda importe alguno en los dos ejercicios consecutivos, el actual y el precedente. No se podrá modificar la estructura de un ejercicio a otro (Principio de Uniformidad), salvo casos excepcionales que se indicarán en la Memoria. Podrán añadirse nuevas partidas a las dispuestas en los modelos normales y abreviados, siempre que su contenido no esté previsto en las existentes. Podrán llevarse a cabo subdivisiones más detalladas en las partidas que aparecen en los modelos normales y abreviados. Podrán agruparse las partidas precedidas de números árabes, si representan un importe irrelevante para mostrar la imagen fiel o si se mejora la claridad informativa de las CA. Una de las características de las CA es la referencia explícita a operaciones con empresas del grupo y asociadas. (El PGC en el punto 19 de su Introducción define las empresas del grupo, asociadas y multigrupo)6. 4.5.1.2. El Balance El balance, que comprende, con la debida separación, los bienes y derechos que constituyen el Activo de la empresa y las obligaciones y los fondos propios que for6 A efectos de la presentación de las cuentas anuales de una sociedad se entenderá que otra empresa forma parte del grupo cuando ambas estén vinculadas por una relación de dominio, directa o indirecta, análoga a la prevista en el artículo 42.1 del Código de Comercio para los grupos de sociedades o cuando las empresas estén dominadas directa o indirectamente por una misma entidad o persona física. Se entenderá que una empresa es asociada cuando sin que se trate de una empresa del grupo, en el sentido señalado anteriormente, alguna o algunas de las empresas que forman dicho grupo, incluida la entidad dominante, ejerce sobre la empresa una influencia notable. A estos efectos se entenderá que existe una influencia notable cuando se produzca una participación en el capital de la empresa, que se distingue como asociada, de al menos el 20% o el 3% si ésta cotiza en Bolsa. En las partidas correspondientes a empresas asociadas se incluirán también las relaciones con empresas multigrupo. Se entenderá por empresa multigrupo aquella que esté gestionada conjuntamente por una empresa del grupo y uno o varios terceros ajenos al grupo de empresas. 156 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 157 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI man el Pasivo, deberá formularse teniendo en cuenta, además de lo ya apuntado, lo siguiente: La clasificación entre corto y largo plazo, se realizará teniendo en cuenta el plazo previsto para el vencimiento, enajenación o cancelación. Se considerará largo plazo cuando sea superior a un año contado a partir de la fecha de cierre del ejercicio. El importe global de los derechos sobre los bienes afectos a operaciones sobre arrendamiento financiero que deban lucir en el activo figurará en rúbrica independiente. A estos efectos se creará una partida en el epígrafe B.II del Activo del balance, con la denominación «Derechos sobre bienes en régimen de arrendamiento financiero». Las deudas correspondientes a tales operaciones también figurarán en rúbrica independiente. A estos efectos se crearán las partidas «Acreedores por arrendamiento financiero a largo plazo» y «Acreedores por arrendamiento financiero a corto plazo» en los epígrafes D.II y E.II, respectivamente del Pasivo del balance. Las inversiones financieras con vencimiento no superior a un año figurarán en el epígrafe D.IV del Activo, «Inversiones financieras temporales». Los desembolsos pendientes sobre acciones que constituyan inversiones financieras permanentes, que no estén exigidos pero que conforme al artículo 42 del Texto Refundido de la Ley de Sociedades Anónimas sean exigibles a corto plazo figurarán en la partida E.V.3 del Pasivo del balance. La financiación ajena (obligaciones), con vencimiento no superior al año figurará en el Pasivo del balance en la agrupación E, «Acreedores a corto plazo». Cuando existan provisiones para riesgos y gastos con vencimiento no superior a un año se creará la agrupación F del Pasivo, con la denominación de «Provisiones para riesgos a corto plazo». Cuando se posean acciones propias, pendientes de amortización, adquiridas en ejecución de un acuerdo de reducción de capital adoptado por la Junta General se creará el epígrafe A.VIII del Pasivo, con la denominación de «Acciones propias para reducción de capital», tendrá signo negativo y minorará los fondos propios. Para las cuentas deudoras por operaciones de tráfico con vencimiento superior a un año se creará el epígrafe B.VI del Activo, con la denominación de «Deudores por operaciones de tráfico a largo plazo». Para las cuentas acreedoras por operaciones de tráfico con vencimiento superior a un año se creará el epígrafe D.VI del Pasivo, con la denominación de «Acreedores por operaciones de tráfico a largo plazo». Sin agotar todos las posibilidades respecto a los epígrafes que podrían formarlo, sirva como ejemplo de balance de situación de una empresa del sector acuícola el siguiente: 157 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 158 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 35 Balance de la empresa XXXX Ejercicio cerrado el 31 de diciembre del año n ACTIVO B) Inmovilizado B) III. Inmovilizaciones inmateriales 1. Gastos de investigación y desarrollo 1.1. Gastos de investigación 1.2. Gastos de desarrollo B) III. 2. Concesiones, patentes, licencias 5. Aplicaciones informáticas 8. Amortizaciones B) III. Inmovilizaciones materiales 1. Terrenos piscifactoría 2. Instalaciones técnicas, maquinaria y reproductores 2.1. Centro reproductor lenguado 2.2. Estación de bombeo 2.3. Centro reproductor lenguado 2.4. Maquinaria 2.5. Reproductores 2.9. Otras B) III. 3. Otras instalaciones, utillaje y mobiliario 3.1. Útiles pesca 3.2. Útiles laboratorio 3.3. Instalaciones hatchery 3.9. Otras B) III. 7. Amortizaciones B) IV. Inmovilizaciones financieras 1. Participaciones en empresas del grupo 1.1. Rompeolas, S.A. 1.2. Rodaballos Ulises, S.A. 1.9. Otras C) Gastos a distribuir en varios ejercicios B) III. 1. Gastos financieros diferidos D) Activo circulante B) III. Existencias 2. Materias primas 2.1. Existencias de artemia 2.2. Existencias de piensos 2.3. Otras B) III. 3. Productos en curso y semiterninados 3.1. Existencias nursery 158 199x 199x-1 PASIVO A) A) A) A) A) Fondos Propios III. Capital suscrito III. Prima de emisión III. Reserva de revalorización IV. Reserva 1. Reserva legal 2. Reserva voluntaria A) IV. Resultados negativos de ejercicios anteriores A) VI. Pérdidas y ganancias B) Ingresos a distribuir en varios ejercicios A) IV. 1. Subvenciones de capital 1.1. Subvenciones FEOGA 1.2. Otras D) Acreedores a largo plazo A) III. Deudas con entidades de crédito 1. Préstamos y otras deudas 2. Deudas por intereses E) Acreedores a corto plazo A) III. Deudas con entidades de crédito 1. Préstamos y otras deudas 2. Deudas por intereses A) III. Deudas con empresas del grupo y asociadas a corto plazo 1. Deudas con empresas del grupo 2. Acreedores diversos A) IV. Acreedores comerciales 1. Proveedores 2. Proveedores, efectos comerciales a pagar A) IV. Otras deudas no comerciales 1. Administraciones públicas 3. Otras deudas 4. Remuneraciones pendientes de pago 5. Fianzas y depósitos recibidos a corto plazo B)VII. Ajustes por periodificación 199x 199x-1 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 159 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI B) III. B) III. B) III. B) III. B) IV. B) III. B) VI. B)VII. 3.2. Existencias hatchery 3.3. Otros 4. Productos terminados 4.1. Rodaballo 4.2. Lubina 4.3. Dorada 4.9. Otros 5. Provisión por depreciación de existencias Deudores 1. Clientes 1.1. Clientes 1.2. Clientes, facturas pendientes de formalizar 1.3. Efectos comerciales a cobrar 1.4. Provisión para insolvencias de tráfico 5. Personal 6. Administraciones públicas 6.1. H.P. deudora por IVA 6.2. HP deudora por Imp. Sociedades 6.3. H.P. retenciones y pagos a cuenta Inversiones financieras temporales 2. Créditos a empresas del grupo 7. Depósitos y fianzas constituidos a corto plazo Tesorería 1. Caja, pesetas 2. Banco Santander, moneda extranjera Ajustes por periodificación TOTAL ACTIVO TOTAL PASIVO 4.5.1.3. Pérdidas y ganancias La cuenta de pérdidas y ganancias, que comprende, con la debida separación, los ingresos y los gastos del ejercicio y, por diferencia, el resultado mismo, se formulará teniendo en cuenta, además de lo ya apuntado, lo siguiente: Los gastos financieros de deudas a largo plazo con vencimiento a corto figurarán en el Debe, en la agrupación 7 «gastos financieros y gastos asimilados». Al igual que en el epígrafe anterior sirva como ejemplo la siguiente cuenta de pérdidas y ganancias del sector: 159 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 160 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 36 Cuenta de pérdidas y ganancias de la empresa XXXXX Ejercicio cerrado el 31 de diciembre del año n DEBE A) Gastos B) III. 1. Reducción de existencias de prod. terminados y en curso 2. Aprovisionamientos a) Consumos hatchery b) Consumos nursery c) Otros gastos externos 1. Combustibles 2. Oficina 3. Gastos generales varios B) III. 3. Gastos de personal a) Sueldos, salarios y asimilados b) Cargas sociales B) III. 4. Dotaciones para amortizaciones de inmovilizado 5. Variación de las provisiones de tráfico a) Variación de provisiones de existencias b) Variación de provisiones y pérdidas de créditos incobrables B) III. 6. Otros gastos de explotación a) Servicios exteriores 6.a.1. Suministros 6.a.2. Limpieza 6.a.3. Primas de seguros 6.a.4. Publicidad B) III. 6. c) Otros gastos de gestión corriente 6.c.1. Pérdidas de créditos comerciales incobrables A) III. Beneficios de explotación (B1+B2+B3+B4–A1–A2– A3–A4–A5–A6) B) III. 7. Gastos financieros y gastos asimilados c) Por deudas con terceros y gastos asimilados 7.c.1. Intereses de préstamos 160 199x 199x-1 HABER B) Ingresos B) III. 1. Importe neto de la cifra de negocios a) Ventas 1.a.1. Ventas rodaballo hatchery 1.a.2. Ventas lubina hatchery 1.a.3. Ventas dorada hatchery 1.a.4. Ventas piensos 1.a.5. Ventas pescado externo B) III. 1. c) Devoluciones y «rappels» sobre ventas B) III. 2. Aumento de existencias de productos terminados y en curso de fabricación B) III. 4. Otros ingresos de explotación b) Subvenciones a la explotación A) III. Pérdidas de explotación (A1+A2+A3+A4+A5+A6– B1–B2–B3–B4) 7. Otros intereses e ingresos asimilados c) Otros intereses d) Beneficios en inversiones financieras 199x 199x-1 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 161 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI B) III. 8. Variación de las provisiones de inversiones financieras 9. Diferencias negativas de cambio A) III. Resultados financieros positivos (B5+B6+B7+ B8–A7–A8–A9) A) III. Beneficio de las actividades ordinarias (A+AII–BI–BII) 13. Gastos extraordinarios A)IV. Resultados extraordinarios positivos (B9+B10+B11+ B12+B13–A10–A11–A12– A13–A14) A) V. Beneficios antes de impuestos (AIII+AIV–BIII–BIV) 15. Impuesto sobre sociedades A)VI. Resultado del ejercicio (beneficios) (AV–A15–A16) B) III. 8. Diferencias positivas de cambio A) III. Resultados financieros negativos (A7+A8+A9–B5– B6–B7–B8) A) III. Pérdidas de las actividades ordinarias (BI+BII–AI–AII) B) III. 11. Subvenciones de capital transferidas al resultado del ejercicio B) III. 12. Beneficios extraordinarios A)IV. Resultados extraordinarios negativos (A10+A11+A12+ A13+A14–B9–B10–B11– B12–B13) A) V. Pérdidas antes de impuestos (BIII+BIV–AIII–AIV) A)VI. Resultado del ejercicio (pérdidas) (BV+A15+A16) 4.5.1.4. La Memoria La memoria completa, amplía y comenta la información contenida en el balance y en la cuenta de pérdidas y ganancias. El modelo de memoria recoge la información mínima a cumplimentar; no obstante en aquellos casos en los que la información que se solicita no sea significativa no se cumplimentarán los apartados correspondientes. Deberá indicarse cualquier otra información no incluida en el modelo de la memoria que sea necesaria para facilitar la comprensión de las CA objeto de presentación, con el fin de que las mismas reflejen la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa. Lo establecido en la memoria, en relación con las empresas asociadas deberá entenderse también referido a empresas multigrupo. Lo establecido en el apartado 4 de la memoria deberá adaptar para su presentación, en todo caso, de modo sintético y conforme a la exigencia de claridad. El PGC recoge dos modelos para la memoria: el normal y el abreviado. Los requisitos que debe cumplir una sociedad para cumplimentar el modelo abreviado coinciden con los exigidos para presentar el balance abreviado y fueron enumerados anteriormente. 161 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 162 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 37 Modelo de memoria de una sociedad Normal 1. Actividad de la empresa 2. Bases de presentación de las cuentas anuales 3. Distribución de resultados 4. Normas de valoración 5. Gastos de establecimiento 6. Inmovilizado inmaterial 7. Inmovilizado material 8. Inversiones financieras 9. Existencias 10. Fondos propios 11. Subvenciones 12. Provisiones para pensiones y obligaciones similares 13. Otras provisiones del grupo 1 14. Deudas no comerciales 15. Situación fiscal 16. Garantías comprometidas con terceros y otros pasivos contingentes 17. Ingresos y gastos 18. Otra información 19. Acontecimientos posteriores al cierre 20. Cuadro de financiación 21. Cuenta de pérdidas y ganancias analítica Abreviada 1. Actividad de la empresa 2. Bases de presentación de las cuentas anuales 3. Distribución de resultados 4. Normas de valoración 5. Activo inmovilizado 6. Capital social 7. Deudas 8. Empresas del grupo y asociadas 9. Gastos 10. Otra información 4.5.1.5. Otros estados contables El Cuadro de Financiación El cuadro de financiación, que como vimos forma parte de la memoria cuando ésta se formula en su estado normal, recoge los recursos financieros generados en el ejercicio y sus diferentes orígenes, así como la aplicación o el empleo de los mismos en inmovilizado o en circulante y formará parte de la memoria. Se formulará teniendo en cuenta que: En cada partida deberán figurar además de las cifras del ejercicio que se cierra las correspondientes al ejercicio anterior en las mismas condiciones que para el balance y la cuenta de pérdidas y ganancias. Las rúbricas incluidas en el cuadro de financiación deberán adaptarse en función de la importancia que para la entidad hayan tenido las distintas operaciones, realizando agrupaciones de los distintos conceptos cuando resulten de escasa importancia e incorporando aquellos no incluidos que puedan ser significativos para apreciar e interpretar los cambios acaecidos en la situación financiera. 162 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 163 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El cuadro de financiación deberá anotar separadamente los distintos orígenes y aplicaciones permanentes de recursos en función de las operaciones que los han producido y con independencia de si dichas operaciones han afectado o no formalmente al capital circulante, incluidas entre otras, las ampliaciones de capital realizadas mediante conversión de deudas a largo plazo, que deberán figurar simultáneamente como aplicación y como origen de fondos. Asimismo deberá mostrar resumidamente los aumentos y disminuciones que se han producido en el ejercicio en dicho capital circulante. Los resultados del ejercicio serán objeto de corrección para eliminar los beneficios o pérdidas que sean consecuencia de correcciones valorativas de activos inmovilizados o pasivos a largo plazo, los gastos y los ingresos que no hayan supuesto variación del capital circulante y los resultados obtenidos en la enajenación de elementos del inmovilizado. Las partidas que dan lugar a la corrección del resultado son, entre otras, las siguientes: Aumento del beneficio o disminución de pérdidas: • Dotaciones a las amortizaciones y provisiones de inmovilizado. • Dotación a la provisión para riesgos y gastos. • Gastos derivados de intereses diferidos. • Amortización de gastos de formalización de deudas. • Diferencias de cambio negativas. • Pérdidas en la enajenación de inmovilizado. • Impuesto sobre sociedades diferido en el ejercicio y los ajustes pertinentes. Disminución del beneficio o aumento de la pérdida: • Exceso de provisiones de inmovilizado. • Exceso de provisiones para riesgos y gastos. • Ingresos derivados de intereses diferidos. • Diferencias de cambio positivas. • Beneficios en la enajenación de inmovilizado. • Subvenciones de capital traspasadas a resultado del ejercicio. • Impuesto de sociedades anticipado en el ejercicio y crédito impositivo generado en el ejercicio por compensación de pérdidas y los ajustes pertinentes. Cuando el resultado del ejercicio corregido fuese positivo se mostrará el recurso bajo la denominación «Recursos procedentes de las operaciones». Por el contrario si dicho resultado del ejercicio corregido fuese negativo, se mostrará en aplicaciones con la denominación «Recursos aplicados en las operaciones». Como nota al cuadro de financiación se deberá incluir un resumen de las correcciones al resultado, conciliando el resultado contable del ejercicio con los recursos procedentes de las operaciones que se muestran en el mencionado cuadro. El Estado de Valor Añadido Es el aumento de riqueza generado por la empresa durante un período y constituye la base de retribución de diferentes factores productivos: trabajo, capital ajeno, el 163 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 164 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Estado y capitales propios. Se concibe también como un documento cuya información contempla un sesgo social en la medida que refleja el reparto de excedente a la colectividad. En ese reparto destacará, en la mayoría de las ocasiones, la partida de los gastos de personal. Tabla 38 Generación y distribución del valor añadido A) GENERACIÓN Ejercicio 199x Ejercicio 199x-1 Generación del valor añadido Importe % Importe % Importe neto de la cifra de negocios ± Variación de existencias de productos terminados y en curso + Trabajos realizados por la empresa para su inmovilizado + Ingresos accesorios y otros ingresos de gestión corriente + Subvenciones a la explotación + Exceso de provisiones para riesgos y gastos = Total A (valor de la producción) Compras netas y trabajos realizados por otras empresas ± Variación de existencias de mercaderías, materias primas y otras + Servicios exteriores + Otros gastos de gestión corriente = Total B (valor de adquisiciones a otras empresas) Valor añadido de la producción (A–B) + Ingresos financieros y asimilados ± Resultado de participaciones, otros valores y créditos ± Ingresos y gastos extraordinarios y asimilados ± Resultados de enajenación de inmovilizados = Valor añadido empresarial 164 100 100 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 165 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI B) DISTRIBUCIÓN Ejercicio 199x Ejercicio 199x-1 Distribución del valor añadido Importe % Importe % Participación del factor trabajo Sueldos y salarios + Participaciones en beneficios = Total A Participación del Estado Tributos e impuestos + Seguridad Social a cargo de la empresa = Total B Participación del capital ajeno Gastos financieros y asimilados = Total C Participación del capital propio Dividendos = Total D + + + – Participación de la propia empresa (autofinanciación) Amortizaciones Provisiones netas Reservas de beneficios Remanente Pérdida del ejercicio = Total E Valor añadido empresarial (A+B+C+D+E) 100 100 El PGC en el apartado 21 de la memoria, formato normal, incluye como información adicional y meramente optativa, una estructura de cuenta de pérdidas y ganancias analítica, es decir, una estructura operativa, uno de cuyos escalones es el valor añadido de la empresa, presentándose como un diferencial entre el valor de producción de un período y los consumos o adquisiciones externas. A continuación presentamos solamente la primera parte de dicha cuenta, hasta el escalón donde se obtiene el «valor añadido de la empresa». 165 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 166 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 39 Cuenta de pérdidas y ganancias analítica de la empresa XXXX Ejercicio cerrado el 31 de diciembre del año X (valores expresados en ...) Ejercicio 199x Importe % Ejercicio 199x-1 Importe % Ventas netas, prestaciones de servicios y otros ingresos de explotación ± Variación de existencias de productos terminados y en curso fabricación + Trabajos realizados por la empresa para su inmovilizado + Subvenciones a la explotación = VALOR DE LA PRODUCCION – Compras netas ± Variación de existencias de mercaderías, materias primas y otras – Gastos externos y de explotación = VALOR AÑADIDO DE LA EMPRESA El Informe de Gestión Finalmente, siempre que se analizan las CA, debemos referirnos al informe de gestión, haciendo especial énfasis en que si bien este documento no forma parte de las CA, sí puede considerarse como un complemento natural de las mismas. Debe recoger, como mínimo, una exposición fiel sobre la evolución de la actividad empresarial y la situación de la sociedad. También deberá informar sobre: • Los acontecimientos importantes acaecidos después del cierre del ejercicio. • La evolución previsible de la sociedad. • Las actividades en materia de investigación y desarrollo. • Las adquisiciones de acciones propias en los términos establecidos en el Texto Refundido de la Ley de Sociedades Anónimas (TRLSA). El informe de gestión está regulado en el TRLSA, no en el Código de Comercio. Por ello, este documento será obligatorio para las sociedades anónimas, incluidas las laborales, para las sociedades de responsabilidad limitada y para las sociedades comanditarias por acciones. Ahora bien, las sociedades que formulen el balance abreviado no están obligadas a presentar el informe de gestión. Los administradores de las sociedades deben formular el informe de gestión, al igual que las CA y la propuesta de aplicación del resultado, en el plazo de tres meses, contados a partir del cierre del ejercicio. 166 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 167 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 4.5.2. Auditoría de las Cuentas Anuales Los estados contables se deben formular aplicando de forma adecuada los principios y normas contables para que expresen la imagen fiel de la situación económica y financiera de la empresa. Pero esto no es suficiente; es preciso que unos profesionales expertos e independientes, los auditores de cuentas, den una opinión sobre la razonabilidad de la información contenida en las CA, considerándola como representativa o no de la citada imagen fiel. Cada vez con mayor énfasis los usuarios externos de la información contable exigen cuentas auditadas, con la finalidad de disponer de una información financiera emitida por las empresas con altos niveles de fiabilidad. La auditoría reporta credibilidad a la información económico-financiera contenida en las CA. En España la auditoría de las CA tiene regulación específica a través de la Ley de Auditoría de Cuentas, del Reglamento que desarrolla la Ley y de las distintas Normas Técnicas de Auditoría aprobadas y emitidas por las Corporaciones representativas de los auditores de cuentas y publicadas por el ICAC. En la Ley se establece la obligación de someterse a la auditoría de cuentas para las empresas que estén obligadas a formular el balance normal. De conformidad con la legislación sobre auditoría de cuentas, los auditores emitirán un informe sobre el resultado de su revisión. 4.5.3. Cuentas Anuales Consolidadas En principio toda sociedad mercantil dominante está obligada a formular los estados financieros consolidados para ello se aprobó el R. D. 1815/1991, de 20 de diciembre, por el que se aprueban las normas para la formulación de las CA consolidadas. Sin embargo, hay excepciones que vamos a clasificar en tres grupos: Por razones de tamaño. Si durante dos ejercicios consecutivos el conjunto de un grupo no sobrepasa dos de los límites siguientes para los ejercicios que se cierren con posterioridad a 1 de enero de 2000, no hay obligación de consolidar7: Total de activo no superior a 2.080 millones de pesetas (12,5 millones de euros). Ventas netas no superiores a 4.160 millones de pesetas (25 millones de euros). Número medio de trabajadores no superior a 250. Por razones prácticas. Estas pueden las siguientes: a) La sociedad tiene un interés relativo poco significativo. b) Hay restricciones importantes y permanentes que impiden o dificultan sustancialmente la gestión de la sociedad (una intervención judicial). c) Para obtener la información necesaria hay que incurrir en gastos desproporcionados o retrasar excesivamente la elaboración de los estados consolidados. 7 Para permitir a las empresas de tamaño medio adaptarse a la obligación de consolidar se elevaron estos límites transitoriamente, hasta el año 2000, hasta 2.300 millones de activo, 4.800 millones de ventas y 500 trabajadores. 167 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 168 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI d) La participación es adquirida con el propósito de ser vendida en un plazo corto. Por pertenecer a un grupo mayor. Una sociedad dominante puede a su vez tener la consideración de sociedad dependiente. Si la sociedad dominante del grupo mayor es española o de un Estado miembro de la Unión Europea, el subgrupo puede quedar dispensado de formular cuentas consolidadas. 4.5.4. Aprobación de las Cuentas Anuales Las CA se aprobarán por la Junta General ordinaria de los accionistas, la cual habrá de reunirse necesariamente dentro de los 6 meses primeros de cada ejercicio, con el objeto de evaluar la gestión social, aprobar si procede las CA del ejercicio precedente y decidir sobre la aplicación del resultado. 4.5.5. Depósito y publicidad de las cuentas anuales Dentro del mes siguiente a la aprobación de las CA, se presentará para su depósito en el Registro Mercantil del domicilio social correspondiente a la empresa la siguiente documentación: 1. Solicitud firmada por quien presente las CA para su depósito. 2. Hoja de identificación de la empresa. 3. Certificación de los acuerdos de la Junta General ordinaria de aprobación de las CA y de aplicación de resultado. Las firmas de esta certificación deberán estar notarialmente legitimadas. 4. Un ejemplar de las CA en los modelos aprobados por Orden del Ministerio de Justicia, de 30 de abril de 1999, que modifica la de 14 de enero de 1994. 5. Un ejemplar del Informe de Gestión, si procede. 6. Cuando la sociedad esté obligada a auditoría, habrá que presentar un ejemplar del correspondiente informe de los auditores. 7. Los administradores de la sociedad dominante están obligados a presentar, cuando proceda y en los mismos plazos que las CA de la sociedad, las CA consolidadas. La inscripción del empresario individual en el Registro Mercantil es potestativa y en caso de no inscripción no podrá pedir el depósito de ningún documento en el Registro Mercantil. Dentro de los 15 días siguientes a la presentación en Registro Mercantil de los documentos referidos previamente, el Registrador calificará bajo su responsabilidad si los documentos presentados son los exigidos por la Ley, si están debidamente aprobados por la Junta General y si contienen las firmas preceptivas. El primer día hábil de cada mes los Registradores mercantiles remitirán al Registro Central una relación de las sociedades que hubieran cumplido con la obligación del depósito de las CA durante el mes anterior. Cualquier persona podrá obtener información de los documentos depositados. El Registro Mercantil está obligado a conservar los documentos depositadas por la empresa durante 6 años. 168 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 169 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 4.6. Contabilidad de gestión en el sector acuícola 4.6.1. El control de costes en la empresa acuícola El análisis de costes hace referencia al ámbito interno de la organización, mientras que el gasto pertenece al ámbito externo, a la Contabilidad Financiera. Por definición el coste supone el consumo de factores con la finalidad de añadir valor al producto final que venderemos por un precio determinado. Dicho consumo es la consecuencia desde la perspectiva económica de la actividad desarrollada por la empresa, es decir, para poder obtener un producto o servicio se consumen factores, consumo que se puede medir económicamente en forma de costes. Teniendo en cuenta todas las opciones posibles y en función de nuestros planteamientos posteriores, la estimación de los costes se puede realizar mediante la elaboración de un sistema formal o modelo de costes, en el que se recogen tanto datos técnicos como económicos de los procesos y actividades realizadas por la empresa para cumplir sus objetivos (modelo orgánico). La información técnica muestra como se realiza la transformación de los factores o inputs en productos o outputs desde la perspectiva de la tecnología. La información económica, suministrada en gran parte por la Contabilidad Financiera en forma de gastos e ingresos según las necesidades del modelo, se clasifica, ordena, agrupa, asigna, reparte y controla dependiendo de las necesidades del decisor, y por tanto de los objetivos del modelo. Una de las necesidades de información que debería satisfacer dicho modelo es la valoración de existencias al final del ejercicio, dato necesario para la elaboración de las Cuentas Anuales. Se podría considerar como objetivos de la Contabilidad de Costes, por tanto, los siguientes: — Conocer, lo más exactamente posible, los consumos realizados o previstos para conseguir un producto. — Medir y valorar la producción. — Medir la productividad de la empresa por elementos o grupos de elementos de la misma. — Establecer y controlar previsiones. — Prever y comprobar los resultados de la empresa. — Distribuir equitativamente el producto bruto entre los factores. — Establecer comparaciones para estudiar el grado de eficiencia logrado por las distintas secciones de una empresa en tiempos distintos, o de una empresa en relación con otras. — Poder decidir la política de ventas de una empresa y las variaciones a establecer en los programas de producción según las situaciones esperadas de mercado. La Contabilidad de Costes se enmarca en el ámbito de la Contabilidad de Gestión, que más amplia, recoge otras técnicas relacionadas con la Contabilidad de Costes pero con finalidades diferentes como pueden ser el diseño y elaboración del Sis169 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 170 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tema Presupuestario de la empresa. Frente a la Contabilidad Financiera, de carácter obligatorio, la Contabilidad de Costes es voluntaria y sus resultados se mantienen en el ámbito interno incluso guardándose con celo sobre todo en aquellos sectores con tecnologías emergentes como es el que tratamos en esta obra. Además es la de Costes una contabilidad que hace referencia básicamente a información de corto plazo, es decir, dependiendo del ciclo de explotación de la empresa se realiza una tarea de recopilación, elaboración, análisis y control continuo para períodos que no suelen superar el ciclo económico de la empresa. En nuestro caso pretendemos elaborar un modelo de costes útil para tomar decisiones en una empresa del sector acuícola para lo cual deberíamos partir del sistema de producción o ámbito tecnológico. Considerando que el presente es un capítulo que pertenece a una obra más general en la que se detallan dichos procesos en otros capítulos realizados por expertos en estos temas, únicamente haremos una propuesta sencilla obviando las cuestiones de mediciones técnicas. Al ser nuestra propuesta de tipo orgánico, esto significa que el modelo se realiza «a la medida» dependiendo de la actividad de la empresa. Dicha actividad en el sector estudiado es de dos tipos: cría o engorde, por lo tanto el modelo propuesto recoge ambos tipos de empresa. 4.6.2. Contabilidad de Costes en empresas de cría del sector acuícola Supongamos una empresa tipo dedicada a la cría de alevines de lubina y rodaballo que incorpora las fases relativas a la fabricación de artemia y rotífero y que las necesidades del gerente se refieren básicamente al control de costes y cálculo de márgenes de venta dependiendo de los precios del producto final. En este caso planteamos un modelo de costes, denominado «costes completos» que incorpora como coste de producto los relativos a materias primas y fabricación, y considera costes de período los costes comerciales y de administración. Los costes se clasifican en directos o indirectos en función de la relación entre el factor y el producto final y los presentaremos agrupados en función de las distintas secciones en las que se organiza el negocio. Supongamos además que nuestra empresa, «Crías de Lubinas y Rodaballos, S.A.» (CRILUROSA) se organiza en las siguientes secciones al frente de las cuales encontramos un responsable, y que consideraremos como secciones de coste: — Aprovisionamientos: su actividad consiste en el suministro controlado de todos aquellos materiales necesarios para la cría de los animales. • Alimento vivo: artemia y rotífero. Se realizan todas las operaciones necesarias para su producción. • Alimento inerte: piensos. • Otros aprovisionamientos: medicinas, gases, geles, etc. — Cría: se realizan todas las tareas efectivas de cría de los animales en cautividad hasta llegar al producto final, incluye los trabajos de tratamiento previo y depurado final de las aguas utilizadas en la empresa. A su vez se organiza en las dos líneas de producción disponibles: lubinas y rodaballo. 170 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 171 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI — Laboratorio: es una sección auxiliar pero con entidad suficiente como para que exista un responsable que organiza y controla su actividad. Dicha actividad consiste en la realización permanente de análisis del medio en el que se realiza la cría, elaborando análisis de la calidad de las aguas que entran en el proceso, de los alimentos, y de los individuos, etc. — Mantenimiento: se trata de otra sección auxiliar a las secciones de cría y aprovisionamiento. — Administración y comercialización: agrupa al personal de asistencia a la gerencia así como a las personas cuya actividad consiste en las operaciones relativas a promoción, venta y transporte, en su caso, del producto terminado. Consideremos la producción realizada en dos líneas en serie, lubina y rodaballo, a lo largo de un año. De la Contabilidad Financiera se obtienen los datos relativos a los distintos gastos soportados a lo largo del período. Para el cálculo del coste de la producción del período se procede a la clasificación de los centros de costes, que con finalidad didáctica y aceptando las limitaciones de un ejemplo se pueden presentar de acuerdo con la tabla 39. Por lo que se refiere al consumo de materias primas y otros aprovisionamientos, se recogen los costes por consumo de piensos, harinas, medicamentos, bolsas para la reproducción de la artemia, oxígeno y CO2, geles, etc., todos estos productos han sido adquiridos en el exterior y en el caso de las harinas y piensos pueden almacenarse y consumirse según se necesiten, por lo tanto se consideran un gasto en el momento de la compra mientras que son coste cuando se retiran del almacén para ser consumidos durante el período. Los gastos de personal recogen los sueldos y salarios, Seguridad Social a cargo de la empresa, primas, planes de pensiones, etc. Tienen la consideración de costes directos aquellos empleados que están asignados a las líneas de producción concretas, rodaballo o lubina, mientras que la mano de obra indirecta, como puede ser el personal de mantenimiento, limpieza, laboratorio o electricidad son costes indirectos. Las amortizaciones aunque pueden considerarse desde diversas perspectivas, en nuestro caso por simplificar estableceremos un criterio técnico, ajeno al utilizado en la Contabilidad Financiera, tanto para los edificios, como para tanques, equipos de análisis de laboratorio, almacenes, reproductores, etc. En el apartado de energía se observa únicamente el consumo de energía ya que la instalación eléctrica se recoge en la amortización. Supongamos que existen equipos de medición independientes por líneas de producción, para por ejemplo el calentamiento y circulación del agua, por lo que sería un coste directo a los dos tipos de productos. Si los equipos de medición fuesen únicos y se repartiesen con todos los servicios de la empresa, serían indirectos. Los repuestos de equipos, gastos varios, servicios exteriores, etc. recogidos en el epígrafe otros costes son costes indirectos al producto y agrupa entre otras partidas las siguientes: el transporte de las ventas, seguros, combustibles y material de oficina. Una vez realizada la distribución de costes por secciones se procede al subreparto de las secciones auxiliares o reparto secundario, el Laboratorio y Manteni171 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 172 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura M I NEI NC ÚI Tabla 40 Clasificación de los factores de costes Coste Fuente Tipo Consumo materias primas y otros aprov. Gastos de personal Amortizaciones* Energía** Otros costes*** Cont. Financiera Cont. Financiera Calculadas Cont. Financiera Cont. Financiera Directo/Indirecto Directo/Indirecto Indirecto Directo Indirecto *** Se consideran también los reproductores. *** Sin incluir la instalación eléctrica. *** Incluye los repuestos, gastos varios, servicios exteriores. Fuente: elaboración propia. Tabla 41 Reparto primario (hatchery) Centros de coste Aprovisionamiento Larvario Hatchery Lubina Hatchery Rodaballo Energía Laboratorio mantenimiento Comercio Administración Consumo materias primas y otros aprov. Son básicamente los costes directos, los que formando parte del coste los recogemos en aprovisionamiento, el resto según se identifique el consumo en la sección correspondiente. Gastos de personal Se reparten entre las secciones en función de la adscripción de los empleados. Amortizaciones Se reparte en función de la localización del inmovilizado. Energía (sin incluir la instalación Su reparto se realiza dependiendo de la disponibilidad de mediciones. Otros costes Se reparten según los criterios de la dirección, o destino de los gastos. Fuente: Elaboración propia. miento en la misma tabla de acuerdo con criterios tales como el número de análisis realizados para cada línea de producción en el primer caso y las operaciones de mantenimiento y reparaciones realizadas en el segundo. Posteriormente se procede al cálculo del coste de la producción del período teniendo en cuenta el valor de las existencias de producción en curso iniciales y finales para cada una de las líneas. Un ejemplo de elaboración de la tabla para el cálculo del coste son las tablas 42 y 43. La valoración de la producción en curso final se realiza mediante la consideración de las unidades terminadas, así como de las unidades pendientes de finalizar a las que podemos referirnos como unidades equivalentes terminadas. En nuestro caso esto 172 BBUUSSCCAARR 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 173 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 42 Cálculo del coste por línea de producción Aprovisionamiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Larvario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Hatchery Lubina . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Hatchery Rodaballo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Lubina Rodaballo X X X X X Total X Coste de la producción del período Fuente: elaboración propia. Tabla 43 Coste de la producción terminada en el período Lubina Rodaballo Total Existencias iniciales producción en curso Coste de la producción del período – Existencias finales producción en curso Coste de la producción terminada Fuente: elaboración propia. se hace para aquellos individuos que no han alcanzado la talla adecuada, evaluando el grado de desarrollo de los animales en los estanques, que equivale a asociarles un porcentaje sobre el período de desarrollo total, y por lo tanto los costes a considerar8. En el caso de la empresa que nos ocupa, a efectos del cálculo del resultado desde la perspectiva de la Contabilidad de Costes, consideramos el coste de la producción vendida en el período según un criterio de valoración de inventarios FIFO (First In, First Out: primera entrada, primera salida) que supone que la programación de la producción se realiza de manera tal que se van vendiendo los individuos que alcanzan la talla adecuada. En el caso de empresas que hayan integrado verticalmente dentro de la misma empresa la cría y el engorse pasaríamos a una segunda fase, y por lo tanto no cabe el cálculo de resultado, aunque lo normal es que si sucede de esta manera, se haga en empresas diferentes dentro de un mismo grupo. El cálculo de márgenes y resultados se realiza en la tabla 44. 4.6.3. Contabilidad de Costes en empresas de engorde del sector acuícola Básicamente recogeremos en el modelo una empresa que realiza el engorde en dos etapas, el preengorde se lleva a cabo en tierra mientras que el engorde se hace en estructuras flotantes. 8 Remitimos al lector a consultar cualquier manual para profundizar más en la operativa del cálculo de costes con producción en curso. 173 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 174 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 44 Márgenes y resultados Lubina Rodaballo Total Ingresos por ventas – Costes de la producción vendida = Existencias iniciales producción terminada + Coste de la producción terminada – Existencias finales producción terminada = Margen industrial – Costes comerciales = Margen comercial – Costes administración = Resultado Contabilidad Analítica Fuente: elaboración propia. En este tipo de empresas con actividad combinada tierra-mar presentan los mismos factores de costes con distinta carga, en cuanto a que por ejemplo, el coste de la amortización de las instalaciones recoge en ambos casos tanto los estanques como las jaulas pero obviamente las necesidades de la instalación suponen mayores costes que las jaulas. Por otro lado, existen diferencias entre las actividades de los centros de coste, puesto que los cultivos en jaulas no exigen depuración de aguas ni su oxigenación, además la necesidad de personal es menor, por lo que los costes son también menores. Supongamos ahora que nuestra empresa se dedica al engorde de rodaballos y lubinas que se realiza en las dos fases comentadas. En la primera, el nursery intermedio o preengorde, consiste en hacer un primer proceso de aclimatación de los individuos al nuevo entorno formado por unas instalaciones, mantenidas en funcionamiento por un personal, con consumos de energía, agua y unas necesidades de análisis para realizar los controles que si bien son menores que en la fase de cría, exigen la disponibilidad de unas instalaciones al efecto. El engorde final no requiere control de los animales y los centros de coste difieren en la necesidad de un medio de transporte si se trata de engorde en jaulas. Resumimos los factores en la tabla 45, remitiéndonos a la tabla 39 en cuanto a su contenido al guardar similitud. Al tratarse de períodos medios de engorde superiores al año, los animales se consideran, tal y como se explicó en el capítulo relativo a la Contabilidad Financiera, producción en curso (Existencias en el Plan General de Contabilidad) y por lo tanto, los hemos diferenciado como factores de coste del consumo de materias primas y otros aprovisionamientos, destinado a los piensos, medicinas, oxígeno, etc. En la tabla 46 se presentan los centros de coste. Al igual que en la empresa de hatchery, una vez realizado el reparto primario de los costes indirectos, se procede a hacer el reparto secundario, de los costes de las secciones auxiliares (mantenimiento) a las principales, de acuerdo con un criterio de reparto. 174 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 175 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 45 Clasificación de los factores de costes en nursery intermedio y nursery Coste Fuente Tipo Consumo materias primas y otros aprov.* Animales para engorde Gastos de personal Amortizaciones Energía** Otros costes*** Cont. Financiera Cont. Financiera Cont. Financiera Calculadas Cont. Financiera Cont. Financiera Directo/Indirecto Directo Directo/Indirecto Indirecto Directo Indirecto *** Se consideran los alimentos (piensos) como costes directos, los productos para el tratamiento del agua pueden considerarse indirectos. *** Sin incluir la instalación eléctrica. *** Incluye repuestos, gastos varios y servicios exteriores. Fuente: elaboración propia. Tabla 46 Reparto primario (nursery intermedio y nursery) Centros de coste Aprovisionamiento Nursery intermedio Nursery Mantenimiento Comercial Administración Consumo materias primas y otros aprov. De aprovisionamiento. Animales para engorde Gastos de personal De aprovisionamiento. Se reparten entre las secciones en función de la adscripción de los empleados. Puede darse la circunstancia de que varios empleados se encarguen de tareas en ambas fases, por lo que se procederá al reparto de los costes entre el preengorde y el engorde. Amortizaciones Se reparte en función de la localización del inmovilizado, incluido el barco para el transporte hasta las jaulas de engorde. Energía (sin incluir la instalación) Su reparto se realiza dependiendo de la disponibilidad de mediciones, exceptuando el grupo Nursery que no consume energía al estar en el mar. Otros costes Se reparten según los criterios de la dirección, o destino de los gastos. Total Aunque se podría haber considerado como un grupo independiente a los efectos de control, habiendo además una persona encargada del barco, hemos preferido incluir los costes de transporte en el grupo de coste correspondiente a Nursery ya que se trata de una tarea, la de transporte, imprescindible para las de vigilancia, alimentación, etc. Por otro lado es necesaria la existencia de un laboratorio para el control de la producción así como del medio acuático, pero debido a que el control es mucho mayor en la fase de preengorde cabe la posibilidad de que aparezca recogido en dicho centro de coste. Al igual que hicimos en la empresa de hatchery, procedemos al cálculo de coste de la producción del período así como de la producción terminada en el período, para lo que se presenta en la tabla 47. 175 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 176 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Manteniendo la estructura para el cálculo de costes utilizada en la actividad de cría, completaríamos el proceso mediante la determinación de los costes de la producción vendida tal y como se muestra en la tabla 48. Y para el cálculo de márgenes y resultados remitimos al lector a la estructura recogida en la tabla 49. La estructura del modelo presentada cubre las necesidades de estimación, evaluación y control de costes orientada hacia el establecimiento de márgenes dependiendo de los precios del mercado. Ahora bien, cabe la posibilidad de utilizar modelos más orientados hacia esta última tarea como puede ser un Target Cost o coste objetivo, si bien exige una orientación diferente. A efectos de la utilización de los costes como generadores de decisiones se plantea la utilización de costes parciales como paso previo a la realización de análisis coste-volumen-beneficio. Tabla 47 Cálculo del coste por fase de engorde y Coste de la producción de engorde determinada en el período Aprovisionamiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Nursery intermedio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Nursery . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Lubina Rodaballo X X X X X X Lubina Rodaballo Total Coste de engorde del período Total Existencias iniciales producción en curso Coste de la producción del período – Existencias finales producción en curso Coste de la producción terminada Fuente: elaboración propia. Tabla 48 Coste de la producción vendida en el período Lubina Existencias iniciales producto terminado Coste de la producción terminada en el período – Existencias finales producto terminado Coste de la producción vendida Fuente: elaboración propia. 176 Rodaballo Total 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 177 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO El Sistema de Información Contable en las empresas del sector acuícola BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 49 Márgenes y resultados Lubina Rodaballo Total Ingresos por ventas – Costes de la producción vendida (tabla 47) = Margen industrial – Costes comerciales = Margen comercial – Costes administración = Resultado Contabilidad Analítica Fuente: elaboración propia. 4.6.4. Modelos de costes parciales o direct costing El modelo direct costing está orientado hacia decisiones de previsión de costes en función de la capacidad y de la relación entre costes fijos y variables. Los costes variables varían con el nivel de actividad mientras que los costes fijos permanecen constantes en función de la mencionada capacidad a corto plazo. Apoyándose en esta terminología, el modelo, en su formulación más sencilla, establece que el coste de dicho producto únicamente incorpora los costes variables, considerando los fijos como costes del período. Por lo tanto, una primera clasificación de los costes básica en este modelo es la relativa a su variabilidad, que en nuestro ejemplo de la empresa de engorde serían: Tabla 50 Clasificación de los factores de costes según su variabilidad en nursery intermedio y nursery Coste Fuente Tipo Consumo materias primas y otros aprov.* Animales para engorde Gastos de personal Amortizaciones Energía** Otros costes*** Cont. Financiera Cont. Financiera Cont. Financiera Calculadas Cont. Financiera Cont. Financiera Variables Variables Proporcionales Fijos Variables Proporcionales *** Se consideran los alimentos (piensos) como costes directos, los productos para el tratamiento del agua pueden considerarse indirectos. *** Sin incluir la instalación eléctrica. *** Incluye repuestos, gastos varios y servicios exteriores. Fuente: elaboración propia. 177 5878-II.Cap4 17/2/00 07:25 Página 178 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Aquellos costes como los gastos de personal, que en caso de contratos permanentes, presentan un comportamiento caracterizado por una parte del coste que permanece fija a lo largo del tiempo, independientemente del volumen de producción como puede ser el sueldo base o la aportación a la Seguridad Social, y otra parte que sí varía con la producción: las primas de producción y horas extraordinarias, se denominan proporcionales. Por lo tanto el cálculo de resultados se realiza mediante las aportaciones de cada producto a la cobertura de los costes fijos, margen bruto, y al resultado, margen neto. Ahora bien, este cálculo se puede realizar apoyándonos en mercados o en productos. En este último caso puede realizarse su determinación tal y como se muestra en la tabla 51: Tabla 51 Márgenes y resultados Lubina Rodaballo Total M. lubina M. rodaballo Margen total Ingresos por ventas – Costes variables = Margen bruto – Costes fijos – CF = Margen neto M. neto Fuente: elaboración propia. Una variante del modelo direct costing es el direct costing evolucionado que recoge junto con los costes variables los costes fijos directos o costes fijos de fabricación dando lugar a lo que se conoce como margen semibruto. La utilización del modelo direct costing se completa con el cálculo del punto muerto o umbral de rentabilidad, que se trata del nivel de actividad para el cual se cubren todos los costes de la empresa, tanto los fijos como los variables. Para su determinación, en nuestro caso, con varios productos diferentes se aplica la siguiente relación: Ventas de punto muerto = Ventas a precio venta × Costes fijos Ventas a precio venta – Costes variables O lo que es lo mismo, el umbral de rentabilidad se determina mediante el producto de los ingresos de ventas del período por la relación entre costes fijos y el margen de cobertura. 178 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 179 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5. Estrategias de mercado para empresas acuícolas 5.1. El marketing y la producción de recursos pesqueros 5.1.1. Introducción La orientación inicial de la actividad empresarial se centró en el proceso productivo. Cuando los bienes y servicios eran escasos el problema básico era encontrar maneras efectivas de aumentar la producción. Sin embargo, en el momento en que la producción industrial supera a la demanda, los ingresos de una empresa ya no están garantizados simplemente por su capacidad de producir bienes. Este entorno, más competitivo, hizo reconocer a las grandes empresas la debilidad de la orientación a la producción, que supone considerar al mercado siempre receptivo ante sus productos. Algunas empresas decidieron que el punto de partida del proceso directivo era la identificación de las demandas de los clientes potenciales. Con esa información se desarrollaría un producto capaz de satisfacer de una forma más eficaz esas necesidades. Esto es lo que se ha dado en llamar dirección orientada al mercado. Supone, además, un cambio en la lógica de la empresa orientada a la producción, que elabora primero el producto y luego intenta llegar al consumidor. Con la orientación al mercado se procura en primer lugar identificar los deseos concretos de los consumidores para luego desarrollar un producto que se adapte de la mejor forma a ellos. La orientación al mercado requiere un mecanismo para identificar las necesidades. Esto se consigue con la investigación de mercados, que evalúa, mide e interpreta la actitud y el comportamiento del consumidor potencial. La empresa triunfadora toma estos datos como base para desarrollar su producto, con el objetivo de crear bienes que supongan una ventaja sobre los competidores. Tales bienes son luego presentados al consumidor acompañados de una combinación de las variables producto, precio, promoción y distribución de la manera más efectiva para asegurar el establecimiento de una relación de intercambio estable con el consumidor. A pesar de los beneficios demostrados por la dirección orientada al mercado, se trata de un concepto que la industria pesquera ha sido reacia a admitir. La postura generalizada parte de que los pescadores capturarán ciertas especies según la temporada y el lugar. Por otro lado, los competidores estarán capturando las mismas especies. Nadie tiene control sobre la venta de su producto, ya que, técnicamente, no se diferencia del que ofrece la competencia. No quiere decirse que estos problemas serían resueltos por la industria pesquera con aceptar el concepto de marketing. Sin embargo, no es casualidad que los supervivientes tras una depresión económica suelen ser aquellas empresas orientadas a identificar las demandas cambiantes del mercado e intentan 179 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 180 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI satisfacer los modelos de comportamiento de sus clientes. Han admitido que se debe hacer un seguimiento constante de las necesidades del consumidor y, además, aún cuando un pescado es igual a otro en el momento de la captura, la materia prima puede ser la base de una diferenciación efectiva que asegure una demanda sostenible de productos particulares incluso cuando el volumen total del mercado desciende. Un ejemplo de esta orientación al mercado lo proporciona la industria del salmón noruego. Los productores noruegos parten con la ventaja de que su salmón está considerado entre los de mayor calidad del mundo, lo que consiguen mantener cuidando la calidad tanto en su cría y procesamiento como en la distribución. La idea de que el producto es superior se extiende por medio de un plan integrado de marketing y es lo que ha llevado al salmón noruego a una situación privilegiada en la que puede establecer precios superiores a los del resto de productores de Europa. Un factor que se suele citar como apoyo de la orientación a la producción en la industria pesquera es el hecho de que las capturas hoy día están estabilizadas en un determinado nivel y, ante una demanda creciente, la consecuente escasez de pescado implicará que siempre habrá un mercado para cualquier cosa que se capture. Este razonamiento suele ser la base de proyectos tanto públicos como privados en varias partes del mundo sobre el desarrollo potencial de nuevas pesquerías, recurriendo a especies alternativas destinadas a nuevos mercados, como fue el caso de la flota gallega de altura con el fletán. En muchos casos no se hace un intento de evaluar la aceptación de esas especies en el mercado. Las empresas implicadas han reaccionado, mayoritariamente, incrementando sus inversiones en buques de pesca y técnicas de procesamiento para explotar esos nuevos recursos. En algunos casos, como el comentado, el mercado de la nueva especie ya se encontraba establecido en otros países distintos a los del productor. En este caso, el problema de disponer de los suficientes recursos se reduce a introducirse como nuevo competidor entre los exportadores a ese país o área geográfica en el caso de la introducción de una especie innovadora se parte de una situación de absoluta incertidumbre, que deberá ser, en la medida de lo posible, reducida. En cuanto a los costes asociados a esta reducción de la incertidumbre, una investigación de mercados previa a cualquier otro tipo de inversiones supondría un pequeño incremento del coste y proporcionaría información que permitiría reducir el riesgo asociado a que las nuevas especies no sean capaces por sí mismas de hacerse un hueco en el mercado frente a los demás productos. La acuicultura es una industria relativamente nueva y con un elevado nivel de cualificación, donde cabría esperar que, ya desde sus principios, se haya adoptado la postura de adecuar la producción a las necesidades del mercado. Sin embargo, y a pesar de sus ventajas en planificación de la producción, hasta hace bien poco ha seguido políticas comerciales idénticas a las empleadas en la industria de la pesca de captura. Sólo recientemente se ha comenzado, a través de campañas encabezadas por los productores y las administraciones públicas, a crear entre el gran público una imagen identificable del pescado de cultivo como objeto habitual de consumo. Para que un producto criado pueda competir con las materias primas de la pesquería tradicional con una mayor aceptación entre los consumidores hay que conse180 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 181 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI guir que el producto pueda venderse a precios inferiores a los del mercado. Por tanto, la investigación inicial se solía enfocar a las especies de altos precios, que a su vez garantizaban márgenes de beneficio aceptables para la organización, dejando de lado la explicación de tales precios, debidos, principalmente, a las limitaciones de la oferta. Cuando las granjas intensivas han comenzado a sacar grandes volúmenes de producción de peces este planteamiento, debido a las oscilaciones de los precios derivadas de los incrementos de oferta, se ha mostrado ineficaz, y ha trastocado muchas de las previsiones de ingresos de los productores, poniendo en peligro la capacidad financiera de muchas empresas del sector. Otro error muy común cometido en los inicios de la explotación empresarial de la acuicultura tuvo lugar en el proceso de selección de la especie a cultivar. Con el ánimo de reducir las inversiones iniciales en infraestructura y los costes de mantenimiento se ha primado la explotación de aquellas especies que mejor se adaptan a las condiciones ambientales de las zonas geográficas elegidas para la instalación de las plantas de cultivo, buscando una mayor facilidad técnica. A principios de los años 80 se consideraba que la costa nordeste de Estados Unidos constituía un entorno adecuado para el desarrollo del mejillón. Una serie de empresas decidieron criar estas especies en Canadá y Estados Unidos con la esperanza de acaparar una considerable cuota en el sector de la pesca dentro del mercado nacional. El gran error de este grupo de productores fue que dieron por hecho que los consumidores aceptarían rápidamente el nuevo producto, que por entonces era relativamente desconocido. Después de llevar a cabo la instalación de las plantas los productores tuvieron que afrontar el problema de una demanda insuficiente. Esta situación ha ido cambiando gradualmente debido a los esfuerzos que se han realizado para fomentar el uso de mejillones en los restaurantes americanos. Sin embargo, mirando atrás, hubiera sido más lógico comenzar esta actividad usando mejillones importados de Europa y postergar la instalación de bateas hasta haber conseguido una penetración adecuada en el mercado americano (Chaston, 1983). 5.1.2. El Sistema de Marketing y el Entorno Para que exista una relación de intercambio estable entre productor y consumidor debe crearse algún tipo de estructura institucional. Para proveer de pescado a los habitantes de cualquier lugar es necesaria la creación de un sistema de marketing usando intermediarios para poner en contacto al productor con el mercado (Fig. 54). Para que una compañía pesquera sobreviva es necesario que la dirección comprenda la naturaleza de este sistema y las variables de marketing que pueden influir en las decisiones de compra. A modo de ilustración se desarrollará un sistema de marketing para una pequeña empresa de engorde de trucha (Fig. 55). La empresa se dedica a la producción de trucha fresca de alta calidad para abastecer a los restaurantes y mayoristas del mercado local. Un análisis del mercado dará información sobre el tipo de oportunidades y las amenazas a que habrá de enfrentarse. 181 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 182 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 54 Sistema de marketing para una empresa productora de pescado Información Productor de Pescado Información Consumidor de Pescado Pescado Pescado Intermediario Dinero Dinero Fuente: Elaboración propia. Figura 55 Entorno de marketing de una empresa productora de trucha Macroentorno Componente productivo Componente de consumo Componente de intermediación Alimentación Minorista Trucha de alta Calidad Pescado Mayorista Otros productores de trucha Minorista Trucha Minorista Trucha fresca Microentorno Económico 182 Cultural Político Legal Tecnológico 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 183 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El producto está en competencia directa con otras marcas de criadores de trucha que, a su vez, son parte de un mercado mayor: el mercado de pescado fresco. Incluso esta forma general del producto no constituye el límite del mercado. El pescado fresco está, de hecho, inmerso en un sistema mucho mayor, el mercado de alimentos en general. El objetivo de la dirección comercial es identificar las variables que afectan a las ventas y separar aquellas sobre las que pueda actuar la empresa. Las ventas totales de comida, por ejemplo, evolucionan en función de la capacidad adquisitiva o el volumen de población. Nuestro pequeño productor no podrá actuar sobre las grandes magnitudes, no obstante sí podrá afectar a otras variables, más próximas a su actividad, como puede ser la evolución de los precios en las zonas que abastece. A medida que se delimita el componente del mercado que suponen las truchas frescas, la empresa puede usar esas variables que hacen que los consumidores compren sus productos. Sin embargo, si la empresa está en condiciones de hacer predicciones sobre la tendencia futura de las ventas, la dirección también debe tener en cuenta, desde el propio sistema de marketing, la influencia que sobre las ventas totales de alimentos ejercen las variables que no puede controlar. Las variables relevantes de que dispone la empresa son el propio producto, el precio, la distribución y la comunicación comercial. La empresa ha decidido de antemano que el beneficio básico del producto que caracterizará a sus truchas será la gran calidad de las mismas. Normalmente, esto hará incurrir a la empresa en unos costes medios de fabricación superiores a la media pero, en cambio, recibirá un precio también superior al medio. El propósito de la comunicación será usar los instrumentos disponibles, como publicidad, fuerza de ventas y promoción para difundir información suficiente sobre la calidad para diferenciar sus productos de los del resto de productores de la zona. De nada valdría aplicar las variables de producto, precio y promoción si el cliente potencial no encuentra la trucha de nuestro productor en el restaurante donde acude habitualmente a consumir este animal. La función de distribución tiene como fin persuadir a los intermediarios de que consideren el producto de la empresa como parte de su oferta de artículos alimentarios. El intermediario esperará que la empresa tenga un programa de marketing que estimule la demanda del consumidor, o bien, será el intermediario el que se ocupe de ello. Se requerirá asimismo a la empresa que tenga un programa de cobertura de los pedidos hechos por los restaurantes, que apoye de alguna manera sus acciones de promoción, que ofrezca una política de crédito y un sistema de reparto. A cambio, la empresa está en condiciones de negociar el manejo del producto en el almacén. Intentará llegar a acuerdos en temas como el nivel de inventario que evite una ruptura de stock y el nivel de la actividad promocional del intermediario para difundir el consumo de las truchas de ese productor. El macroentorno El marketing es básicamente una actividad centrada en el exterior y la empresa ha de identificar las oportunidades y las restricciones ocasionadas por cambios en el 183 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 184 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI entorno. El referente inmediato para la empresa es el mercado del que forma parte. La capacidad de reacción ante las variaciones del comportamiento de los agentes que intervienen en ese mercado constituirá un requisito importante para una dirección eficaz. No obstante, el conjunto de fuerzas que afectan a la empresa trasciende los límites del mercado en la que esta opera, pues éste, a su vez, se haya inmerso en un entorno de mayor amplitud que contiene variables de naturaleza diversa como son los factores económicos, tecnológicos, políticos, legales y culturales que afectan de hecho a las operaciones de la empresa. El entorno económico El futuro de cualquier empresa está íntimamente ligado al clima económico del país en que se desarrolla. En el caso de la industria pesquera, donde muchas empresas dependen en gran medida de la relación entre importaciones y exportaciones, la dirección debe tener en cuenta las condiciones globales de la economía al revisar los factores que afectan a su existencia. El crecimiento económico que mejora el bienestar va acompañado por un mayor consumo de artículos de lujo y actividades de ocio. Aparece así la oportunidad de aumentar las ventas de productos más caros y también de predecir un descenso en la demanda de pescado más barato y mundano. Tendencias de recesión o el desempleo tienen un efecto inmediato y perjudicial sobre la capacidad de compra de los consumidores. Para el director de marketing esto supone la necesidad de adaptar la estrategia comercial con el fin de orientar al consumidor hacia el consumo del pescado frente a otras fuentes alimentarias. Las oscilaciones en los tipos de cambio también afectan a los precios del sector, sobre todo en paises que, como es el caso de España, son importadores netos de pescado. La relación de sustitución que tengan las especies importadas con las capturadas y cultivadas en nuestro país determinará la consideración de las variaciones de los tipos de cambio como oportunidades o amenazas. El entorno cultural La cultura, el conjunto de variables que conforma los valores y expectativas de la población. En cualquier tipo de negocio resulta imprescindible que la dirección comercial comprenda la cultura del mercado al que se dirige, porque los valores de la sociedad tienen una influencia vital en el comportamiento de compra del consumidor. Puesto que entre el conjunto de valores que definen a una cultura se encuentran, también, los hábitos alimenticios, la importancia de esta variable se hace especialmente crítica cuando se plantea la introducción de nuevas especies en los mercados controlados por la empresa, o bien, cuando la empresa planea introducirse en mercados con fuertes diferencias étnicas con respecto a los que está acostumbrada a trabajar. A pesar de que la comunicación global ha cambiado la influencia de algunos valores culturales hasta el punto de que algunos alimentos procedentes de otras cul184 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 185 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI turas se han incluido en la dieta habitual de los españoles, todavía existen barreras que imposibilitan el éxito de algunas especies en mercados muy concretos, como podría ser el caso de los crustáceos y moluscos en Israel, donde su consumo va en contra de las religiones mayoritarias. El principal problema para las empresas reside en que muchos cambios culturales son graduales. Resulta difícil medir una variación que supusiera un descenso de las ventas de los productos actuales o definir nuevas oportunidades en un punto óptimo del proceso de planificación. El entorno político La influencia de la política en la industria es un componente del entorno que también debe ser tenido en cuenta como factor que puede afectar a las acciones de marketing. Esta influencia se establece por medio de regulaciones, algunas específicas para la industria pesquera, cuotas de captura pactadas con terceros países, procedimientos de control de tallas y calidad y otras de mayor impacto que afectan a todas las industrias, como por ejemplo las negociaciones entre el gobierno y los sindicatos sobre aumento salarial. Algunos países, como fue el caso de Canadá durante la guerra del fletán, ejercen cierto dominio sobre las existencias de pescado mediante acciones como extensión de derechos territoriales sobre aguas costeras y en temas como las licencias de buques foráneos que explotan caladeros locales. Estas acciones pueden ocasionar fluctuaciones a corto plazo en la provisión de pescado que son difíciles de predecir pero que han de ser observadas por la dirección al evaluar las futuras condiciones del mercado. El entorno legal Una buena parte de la influencia del factor legal de la legislación creada para hacer obligatorias las decisiones políticas comentadas en el apartado anterior. Conceptos como la legislación medioambiental y las licencias necesarias para operar en determinadas áreas geográficas son asuntos que las empresas del sector pesquero deben atender si pretenden alcanzar el éxito bajo estos controles. También es importante que se observen los conceptos legalmente obligatorios sobre la práctica comercial que puedan perjudicar a la empresa. El entorno tecnológico Una fuente que ocasiona influencias inmediatas en la industria es la innovación tecnológica. El progreso científico y su aplicación a la producción de recursos constituye un punto de especial atención para las empresas, tanto por las nuevas oportunidades que ofrece la innovación como por la amenaza que supone el que sea adoptada por la competencia antes que por la propia empresa. 185 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 186 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La acuicultura como industria debe sus orígenes a la innovación científica de biólogos e ingenieros. En un principio, la idea fue bien acogida por la industria pesquera como posible solución al problema del agotamiento de recursos naturales. Se ha llegado a una situación en la que los costes de producción de ciertas especies cultivadas son menores que los de la pesquería natural. Esto tiene serias consecuencias para empresas con grandes inversiones en flotas pesqueras. En las industrias altamente tecnificadas la tasa de innovación suele ser exponencial. Tras desarrollar un concepto basado en una nueva tecnología, la empresa debe decidir si introducir esta metodología en su proceso a sabiendas de que será superada por una innovación más perfeccionada en un corto período de tiempo. En la acuicultura, las nuevas técnicas de cultivo se desarrollan sobre una base común, por tanto, al planificar programas de futuro, la dirección debe asumir que, en un momento dado, un competidor puede introducir una técnica de cultivo más eficiente en cuanto a costes y, por tanto, establecer una ventaja en el mercado. Los conceptos anteriores se refieren a cambios tecnológicos que afectan a la producción de peces. Pero, además, hay que tener en cuenta que uno de los mayores riesgos es el de que organizaciones de fuera de la industria desarrollen tecnología que dé lugar a productos sustitutivos superiores. La industria pesquera debe aceptar que es parte de la industria alimentaria y seguir con cuidado investigaciones en campos competidores como la agricultura y la ganadería que algún día podrían representar serias amenazas como productos alimenticios alternativos. 5.1.3. Tipos de Mercados y Comportamiento del Consumidor Cada mercado tiene sus peculiaridades en cuanto a los procesos de intercambio. Como es de suponer, la comercialización del mejillón gallego a las empresas de la industria conservera requiere unas habilidades directivas muy distintas de las necesarias para vender salmón ahumado noruego a las amas de casa de una ciudad española. Ha habido varios intentos de sistematizar estas diferencias, pero uno de los más simples y aceptados es el de dividir los mercados en dos tipos básicos: el mercado de consumidores y el industrial. Así mismo, dentro del mercado de consumidores se puede diferenciar entre bienes y servicios y dentro de los primeros entre bienes de consumo inmediato y bienes duraderos. Los productos alimenticios, entre los que se encuentra la producción acuícola, constituyen bienes de consumo inmediato, por lo que en este capítulo únicamente serán tratados este tipo de mercados y los industriales. En los mercados de consumidores los productos son adquiridos por particulares y economías domésticas para el consumo personal. En el mercado industrial la compra forma parte de una actividad que genera beneficios al comprador. En algunos casos, esa parte puede ser una materia prima que es tratada por el comprador incorporando un mayor valor, por ejemplo el tratamiento de enlatado o ahumado que asegura una mejor conservación del producto. Las principales características, así como las diferencias entre uno y otro tipo de mercado, se ilustran en la tabla 52 (Vázquez, Trespalacios y Rodríguez-Del Bosque, 1997). 186 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 187 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 52 Características de los mercados industrial y de consumo inmediato MERCADOS DE BIENES DE CONSUMO INMEDIATO Demanda Oferta 1. Compra frecuente 2. Decisión impulsiva o por costumbre 3. Alta rotación de productos con márgenes relativamente bajos 4. Pago al contado 5. Proximidad del punto de venta al consumidor 6. Importancia del valor de marca 1. 2. 3. 4. Competencia intensa Gran variedad de productos Canales de distribución largos Gran importancia del precio como elemento competitivo 5. Fuerte apoyo publicitario y promocional MERCADOS INDUSTRIALES Demanda 1. 2. 3. 4. 5. Número de clientes reducido Demanda derivada, indirecta Importancia de servicios añadidos Compras basadas en la rentabilidad Decisiones de compra racionales y analíticas comparando diferentes ofertas 6. Amplio conocimiento técnico del producto 7. Transacciones escasas y de gran volumen Oferta 1. 2. 3. 4. Número de oferentes reducido Fuerte diferenciación del producto Canales de distribución cortos o directos Gran importancia de la capacidad de financiación 5. Comunicación selectiva 6. Gran importancia del servicio postventa Fuente: Vázquez, Trespalacios y Rodríguez-Del Bosque, 1997. Al afrontar una situación novedosa del mercado, la dirección comercial necesita conocer los objetivos del consumidor porque hay una diferencia clave en la naturaleza del comportamiento de compra en ambos tipos de mercado. La esencia del concepto de marketing es el comprender la naturaleza de la demanda del producto. Esta función de demanda y la eficacia de la empresa al satisfacer necesidades están íntimamente ligados al comportamiento del consumidor. Los mercados de consumidores están formados por particulares que actúan para satisfacer sus intereses y expectativas personales, mientras que en los mercados industriales la compra está ligada al objetivo económico de usar el producto para obtener una renta tangible. En teoría, cabría esperar un comportamiento más racional y menos emotivo en el segundo modelo. Sin embargo, en cualquier mercado que se esté estudiando, no se puede poner en práctica la función de marketing con éxito hasta no haber comprendido el comportamiento del consumidor potencial. A pesar de la considerable investigación, aún no existe una teoría que proporcione al director comercial una perfecta comprensión de la relación que hay entre el comportamiento de compra del consumidor y la influencia del marketing mix, es 187 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 188 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI decir producto, precio, promoción y distribución. Ha habido intentos por parte de economistas, sociólogos, psicólogos y biólogos para llegar a una explicación general pero sin ningún éxito. Las empresas se ven obligadas a aproximarse a obtener, por medio de la investigación de mercados, aquellos comportamientos que pueden ser medibles y a comprender cómo se relacionan con la decisión de compra de un determinado producto. Una de las razones de la gran dificultad del proceso de medida es que en la actividad de compra intervienen cinco roles distintos, que pueden o no corresponder con un único individuo. Son: A) El «iniciador», que sugiere el producto. B) El «prescriptor», que tiene alguna influencia en la decisión final. C) El «decisor», que toma definitivamente la decisión de cómo, qué, cuándo y dónde comprar. D) El «comprador» que esté efectivamente implicado en la transacción. E) El «consumidor», que usa el producto. En un intento de comprender los procesos implicados, muchos analistas de marketing desarrollan un modelo generalizado de la actividad de compra. Una versión de tal modelo es la que recoge cinco etapas sucesivas (Lambin, 1995) que se ilustran en la figura 56. Para los productores de pescado, la necesidad básica a que apelan sus productos es la alimentación. Esta necesidad es relativamente constante y los niveles actuales de satisfacción por medio de un producto en concreto se pueden obtener mediante la investigación de mercados. El proceso de búsqueda de información también puede ser analizado, aunque en muchos casos en los negocios pesqueros puede asumirse que la publicidad institucional o de empresa y la venta personal son las fuentes básicas de información del consumidor potencial. Cualquier consumidor, al evaluar la posibilidad de una compra, incorpora una serie de actitudes preestablecidas sobre el producto como, por ejemplo, una creencia de superioridad en calidad de la captura frente al cultivo. Tras sopesar estos prejuicios, ante el abanico de productos alternativos de que dispone, tiene lugar la decisión de compra. En el sector piscícola es habitual el uso continuado del producto, lo que hace que la evaluación post-compra del mismo pueda afectar de manera positiva o negativa a la siguiente compra según la experiencia haya sido calificada como satisfactoria o insatisfactoria. Dados los requisitos para comprender el modelo de compra, el investigador de mercados puede comenzar la investigación para medir muchos de sus elementos. Estas mediciones se pueden usar para evaluar el esfuerzo óptimo de marketing necesario para asegurarse de que el consumidor se decante por el producto de la empresa. El comportamiento es más racional en los mercados industriales, lo que simplifica el proceso de comprender por qué el consumidor llega a una decisión concreta de compra. Sin embargo, el estudio del proceso real de compra es complicado porque, al tratarse de organizaciones en las que participan un conjunto de particula188 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 189 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 56 Proceso de decisión de compra Reconocimiento del problema Identificación de la necesidad Busqueda de información ¿Cómo satisfacer la necesidad? Evaluación de alternativas ¿Qué producto es mejor? Decisión de compra Evaluación del producto tras la compra Fuente: Lambin, 1997. res, en el caso de una compra importante, o de la compra de un producto de uso frecuente a un nuevo proveedor, se suelen ver implicadas más de una persona de la organización compradora. Para comercializar un producto en estas circunstancias es, por tanto, necesario identificar a los individuos responsables en la compañía consumidora para que las acciones tendentes a las ventas puedan dirigirse a las personas adecuadas. Para ilustrar este problema supongamos que una empresa conservera decide aumentar su presencia en el mercado de mejillón enlatado. En el caso de que los pro189 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 190 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI veedores habituales de mejillón no puedan aumentar su suministro de este molusco, la empresa deberá obtenerlo de otras fuentes. Siguiendo el modelo general de comportamiento ya descrito, el primer paso consistirá en la identificación de la necesidad de localizar nuevas ofertas de mejillón, que recaerá principalmente en el director gerente y el director de producción. En la segunda fase, el director gerente y el jefe de suministros o compras, partiendo de su propio conocimiento de la industria mejillonera y de la información proporcionada por los productores, pueden reunir la información necesaria sobre nuevas fuentes de suministro. Los elementos clave de la evaluación de alternativas serán la calidad de la materia prima, la continuidad de la oferta y los precios relativos. En el tercer eslabón se requerirán mayores aprovisionamientos de los productores así como muestras para examinar. Las características técnicas de la necesidad de materias primas requerirán la intervención del director de producción y control de calidad. El jefe de compras se ocupará de obtener información sobre precios y ofertas disponibles. La decisión efectiva de compra es un tema vital y probablemente implique a todos los miembros del grupo y muy posiblemente también requerirá la confirmación de informes sobre productores que la empresa tiene en lista como posibles proveedores. Una vez que el mejillón ha pasado el proceso de elaboración y enlatado, el director de producción y control de calidad volverá a considerar su decisión, lo que supondrá una confirmación en cuanto a si todo el mundo está satisfecho. Bajo estas condiciones resulta evidente que el director de ventas de un nuevo grupo de productores de mejillón tendrá que comunicarse con cierto número de personas de la compañía consumidora potencial si pretende conseguir que se le haga algún pedido. Dadas las responsabilidades de las personas de la empresa cliente, las sucesivas compras a los proveedores tendrán lugar sobre una base más rutinaria en la que sólo el jefe de compras se verá implicado en la decisión de compra. Sin embargo, se verá influido en cierta medida por los mecanismos de evaluación post-compra como son los informes de control de calidad y la respuesta del mercado de consumidores finales. De aquí la importancia que para la dirección comercial del productor de mejillón tiene el mantener la comunicación con los miembros de este departamento de la empresa consumidora y la realización de un seguimiento efectivo en el mercado. Construir un modelo de compra para una determinada situación industrial es relativamente sencillo y no requiere más que una mínima experiencia prospectora para adquirir los datos necesarios. Se pueden concertar entrevistas no estructuradas con particulares de otras compañías que ya sean proveedores del cliente potencial o, en muchos casos, una reunión informal con el responsable de compras de la empresa revelará cuándo y cómo participan en el proceso de compra otros miembros de la empresa. Aunque con frecuencia se acepta la idea de que el comportamiento industrial es racional, conviene recordar que en el proceso de compra aún estamos tratando con 190 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 191 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI personas, y que en la toma de decisiones de consumo, como en cualquier otra, interviene siempre una parte emocional. Donde los proveedores apenas se diferencian en cuanto a calidad, precio o servicio, el comprador industrial tiene menos base para una decisión racional. Dado que tiene varias alternativas para satisfacer las necesidades de aprovisionamiento de la empresa, su decisión puede verse sesgada por motivos personales. En estas condiciones, es más probable que el pedido se lo lleve el agente comercial a quien el comprador industrial conoce y en quien confía frente a una empresa con la que apenas ha tenido contacto anteriormente. 5.1.4. Segmentación del Mercado La postura de la empresa tradicional, que no sigue una filosofía de orientación al mercado, ha consistido en asumir que el mercado es un conjunto de necesidades homogéneas en el que se introduce un producto intentando atraer al mayor número de compradores. Esto suele llamarse marketing en «masa» o no diferenciado y aún está muy difundido entre la industria pesquera. Una alternativa con un potencial de crecimiento en la industria acuícola consiste en aprovechar la oportunidad de aumentar las ventas mediante la introducción de una gama de productos, que permita cubrir de manera más efectiva a grupos de compradores con motivaciones diferentes (Kinnukan y Wessells, 1997). La ventaja evidente de tener una línea de productos más diversificada ha llevado a muchas empresas pesqueras a entrar en un abanico más amplio de diferentes especies y formas del producto, como el pescado empanado, ahumado o fileteado y derivados como el caviar de trucha (San Miguel Bel, 1998). La diversificación del producto o «diferenciación» elevará, normalmente, las ventas pero irá acompañada de mayores costes operativos debido a una o más de estas razones: Costes de producción: en muchos casos, una empresa que sólo produzca un artículo será más efectiva en costes que una que produce varios, ya que, en el segundo caso, se pierde capacidad productiva en los períodos en los que se cambia la línea de proceso de un artículo a otro. Costes de inventario: para evitar rupturas de stocks deberá mantener stocks de seguridad para cubrir variaciones no esperadas de la demanda. Cuantos más artículos se comercialicen más habrá que invertir en stocks de seguridad para todos los artículos de la línea. Costes de promoción: la comercialización diferenciada puede implicar a una serie de programas de marketing para apoyar a varios productos de la empresa. En esta situación, la suma de programas individuales superará al de la empresa que comercializa en masa un único producto. Las importantes consecuencias financieras de la diferenciación han llevado a la idea de que una dirección más efectiva en costes podría ser, primero, el intentar dividir cualquier mercado en categorías homogéneas de consumidores y seleccionar como objetivo unos segmentos determinados que puedan ser explotados mediante un marketing mix apropiado para cada caso. Esta técnica, conocida como segmenta191 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 192 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ción de mercado, es especialmente atractiva para una empresa con recursos limitados. Esto se debe a que, en lugar de perseguir una pequeña porción del gran mercado, puede elegir un segmento específico del que resultará expulsado cualquier competidor si se consigue dominar este área de las necesidades del consumidor. Mediante el marketing concentrado la empresa puede especializarse hasta llegar a lograr economías operativas en terrenos como la producción, la promoción o la distribución y maximizar por tanto la rentabilidad de sus activos. En los casos de mercados homogéneos y de preferencias difusas, no hay posibilidad de segmentar. Sin embargo, en el caso de un mercado con preferencias agrupadas, un producto cualquiera podría llevar a la empresa a reorientar su producción hacia la especialización en uno o más nichos del mercado. Si los competidores continúan ofreciendo un único producto para todo el mercado pronto será considerado insuficiente para satisfacer las necesidades de los distintos segmentos del mercado. Para ejecutar de manera efectiva una estrategia de segmentación de mercado es necesario poder medir las características de los compradores específicos. La explotación de los mercados definidos debe ser accesible mediante el marketing mix de la empresa. Por ejemplo, los productores de mejillón en conserva pueden establecer una preferencia para un tamaño concreto del molusco. Los criadores de mejillón podrían suministrar el artículo, pero el coste de seleccionar los moluscos con ese tamaño exacto de todos los disponibles sería, en muchos casos, superior al precio que los conserveros estarían dispuestos a pagar. Además, el segmento definido debe tener el tamaño suficiente para justificar la inversión en el desarrollo y ejecución de un programa específico de marketing para explotar ese segmento. Se pueden emplear muchas variables para dividir el mercado en subsecciones específicas cuando una empresa se plantea la posibilidad de segmentar mercado. Los cuatro criterios más utilizados en el sector acuícola son la geografía, la demografía, la psicografía y el comportamiento del consumidor (Chaston, 1983; Kinnukan y Wessells, 1997). La primera forma de segmentación fue la geografía, en la que una empresa identificaba las regiones del país en las que podría explotar una ventaja competitiva. Así, los pequeños productores de pez gato (Catfish) del estado norteamericano de Maryland han concentrado sus esfuerzos en los establecimientos hosteleros del entorno geográfico de sus instalaciones de cría, segmento en el que se defienden con éxito frente a los grandes productores de la cuenca sur del Mississippi (Maryland Aquafarmer, 1997). Variables demográficas como los ingresos, edad, sexo, tamaño de la familia, clase social y ocupación son relativamente fáciles de medir. Por ello, un mecanismo de segmentación muy popular es el de correlacionar dichas variables con el uso de un producto en concreto. Una vez establecidas tales relaciones, se puede acudir a medios especializados, como algún tipo de revista o publicación, o a la inserción de anuncios de radio y televisión en las bandas horarias adecuadas, para difundir el mensaje publicitario de la empresa. 192 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 193 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Las complejidades y falta de predictibilidad del comportamiento humano han obligado a los analistas de marketing a concluir que algunos productos no son susceptibles de segmentación mediante la demografía. Una alternativa ha sido el uso de psicográficos como los factores del «estilo de vida». La segmentación por estilos de vida resulta especialmente útil para especies como la ostra o la langosta, considerados como artículos de lujo. Otra manera de segmentar según el comportamiento consiste en identificar las características de uso del producto en la población. Puede ser posible dividir el mercado en no usuarios, usuarios potenciales y usuarios habituales. Los usuarios habituales seguramente reaccionen ante un marketing mix muy distinto del necesario para atraer a los potenciales o a los no consumidores. Otra manera similar es dividir el mercado en función de la tasa de utilización, con las categorías de grandes usuarios, medios y pequeños. La idea es que cada tipo de usuario tiene sus propias características personales y hábitos en cuanto a los medios que lee, lo que permitiría el uso de campañas publicitarias selectivas con la intención de apelar a distintos modelos de comportamiento en cuanto al uso. El objetivo evidente en este caso es conseguir que todos los compradores acaben siendo «grandes consumidores». Las elasticidades precio de algunas especies, que reflejan las preferencias de los consumidores, también proporcionan una base natural para la identificación de segmentos (Kinnucan y Wessells, 1997). Por ejemplo, las diferencias estacionales y espaciales en las elasticidades precio del salmón en Japón pueden constituir la base para definir segmentos lucrativos para los exportadores de salmón hacia el mercado Japonés (Wessells y Wilen, 1993). 5.1.5. Elección de la estrategia comercial Una vez que una empresa ha definido el objetivo de su negocio, normalmente concretado en forma de objetivos financieros sobre ventas y beneficios netos, es necesario desarrollar una estrategia de marketing para definir cómo puede la empresa alcanzar esos objetivos. El primer paso es decidir si la postura más apropiada ante el mercado es la no diferenciación, la diferenciación o la concentración. Se elija lo que se elija, debe tenerse en cuenta que la segmentación suele ser factible y que una empresa cuyos productos satisfacen necesidades concretas tendrá una mayor probabilidad de éxito. Para que un segmento sea atractivo ha de ser suficientemente grande, preferiblemente con potencial de crecimiento, no debe estar saturado por la competencia y debe tener una necesidad en concreto, para cuya satisfacción la empresa está especialmente dotada. Si una empresa no tiene experiencia en el segmento elegido será necesario plantearse una estrategia de penetración de mercado. Esto puede conseguirse mediante el desarrollo interno, usando las habilidades del equipo directivo, colaborando con otra compañía o adquiriendo una que ya operara en el segmento elegido. 193 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 194 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Otro elemento de la estrategia de marketing es la determinación por parte de la empresa de cuántas variables del marketing mix (producto, precio, promoción y distribución) pueden usarse para influir en el comportamiento del consumidor. Una de las decisiones fundamentales sobre el producto es la calidad del artículo a ofrecer. Por otra parte, el precio constituye una de las fuentes de información utilizada por los compradores para evaluar la calidad del producto, ya que un pescado demasiado barato puede ser considerado como un pescado de mala calidad. La promoción es la variable a través de la cual se transmite al mercado la información pretendida sobre el producto. Si un pequeño número de compradores dominan el mercado, como en el caso de los mercados industriales, puede llegarse a ellos a través de la fuerza de ventas. Si el mercado está compuesto por particulares que hacen pequeñas compras unitarias, la actividad promocional en la que se invertirá el dinero de manera más efectiva será la publicidad. La gestión de la distribución está relacionada con factores como la disponibilidad de los productos según la temporada, la distancia geográfica entre la planta y el lugar de compra y el comportamiento de compra del consumidor final. En la industria pesquera, donde la mayoría de productores se encuentran alejados del mercado final, la distribución puede ser una variable de marketing de importancia vital. El hecho de que el pescado sea un artículo extremadamente perecedero complica más el proceso de distribución. En el sector de la maricultura, en donde existe separación entre empresas de cría y empresas de engorde, el proceso de distribución física de los alevines, como producto industrial para su transformación, constituye un decisión estratégica para las dos partes implicadas. Kinnucan y Wessells (1997), siguiendo a Dickson y Ginter (1987), establecen como punto de partida de la formulación de una estrategia de desarrollo de mercado de especies acuícolas la definición e identificación de cuatro conceptos básicos del marketing (Tabla 53). Estos conceptos son la diferenciación del producto, la segmentación del mercado, la modificación de la demanda y el desarrollo del segmento. De igual forma, estos conceptos deberán ser contemplados en la investigación de mercados si se quiere que esta sea realmente ventajosa para los productores de especies acuícolas. Los atributos que permiten la diferenciación del producto pueden ser físicos o subjetivos. El tamaño de ración única del pescado de cultivo constituye un ejemplo del primer tipo de atributos, mientras que el mayor prestigio del salmón noruego frente al de otro país europeo constituye un ejemplo de los atributos subjetivos. La distinción entre uno y otro tipo de atributos resulta importante para la creación de la imagen del producto. La diferenciación del producto se puede conseguir de forma que afecte a la percepción de todos los atributos de un producto mediante la creación de una imagen de marca favorable, que en el caso de la acuicultura y la pesca se encuentra estrechamente vinculada a la procedencia geográfica del producto. Desde el punto de vista del vendedor, el objetivo de la diferenciación del producto está en crear la lealtad suficiente por parte del cliente para que el producto en 194 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 195 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 53 Conceptos clave en el diseño de la estrategia comercial para la acuicultura Concepto Definición Comentarios Diferenciación del Producto Condición por la cual un producto es considerado como único frente a otros semejantes por la posesión de uno o más atributos. La marca y el etiquetado (denominación de procedencia) son métodos comunes de diferenciación, también los atributos captura o cultivo, como atributos intangibles, presentan retos y oportunidades especiales. Segmentación del Mercado Estado de heterogeneidad de la demanda de forma que esta puede ser dividida en segmentos con funciones de demanda diferentes. La cultura, el hábito y las diferencias étnicas aparecen como las principales fuentes de heterogeneidad en las preferencias de los consumidores de productos acuícolas. Modificación de la función de demanda Alteración de la relación funcional entre las características percibidas en un producto y la reacción de la demanda del mercado o segmento. Combinación de acciones de los productores tendentes a alterar la percepción de alguno de los atributos de un pescado por parte de los consumidores. Ej. Campaña publicitaria de APROMAR ensalzando la calidad del pescado de cultivo. Desarrollo del Segmento Alteración de las funciones de demanda para un grupo de consumidores de tal forma que lleguen a constituir un segmento de mercado. Programas de educación del consumidor que presentan los beneficios del pescado en la prevención de las enfermedades del corazón pueden crear un segmento de consumidores entre los adultos hipertensos o con problemas de colesterol. Fuente: Kinnucan y Wessells, 1997. cuestión justifique un mayor precio. La lealtad del consumidor se establece, en un primer momento, mediante la creación de la imagen de marca. La considerable ausencia de marcas en el mercado de la pesca puede facilitar la diferenciación del producto por medio del atributo subjetivo que constituye dicha imagen (Anderson y Anderson, 1991). La identificación precisa de segmento es crítica en el desarrollo de estrategias comerciales efectivas para los productos acuícolas. Las líneas a seguir en este sentido se han descrito con anterioridad en el epígrafe correspondiente. Los conceptos de diferenciación del producto y segmentación conducen a un conjunto de estrategias administrativas que pueden llevarse a cabo para aumentar la acción de los productores de acuicultura en el mercado. Una de estas estrategias es la modificación de la función de demanda. Esto puede lograrse introduciendo un nuevo atributo en la situación de elección de compra o influyendo en la combinación de atributos que el consumidor considera ideal. La modificación de la función de demanda se distingue del concepto de diferenciación de producto en que esta última tiene lugar cuando el esfuerzo de marketing se dirige a influir las apreciaciones de 195 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 196 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI los consumidores sobre la posesión de algún atributo por parte del producto, en tanto que la modificación de la función de demanda se dirige a crear unas condiciones en el mercado que llevan a los consumidores a plantearse de forma favorable el consumo del producto en cuestión. Un anuncio que aumente la preocupación de los consumidores por las consecuencias sobre la salud de consumir cierto tipo de alimentos constituye una modificación de la función de demanda, en tanto que favorece el consumo de unos productos frente a otros (Kinnucan y Wessells, 1997). En definitiva, el objetivo de la estrategia de modificación de la función de demanda consiste en enfocar el gusto y las preferencias de los consumidores hacia los productos acuícolas. La segunda estrategia que plantean las definiciones de diferenciación del producto y la segmentación de mercado es el desarrollo de segmentos. El desarrollo de segmentos se refiere a un tipo especial de modificación de la función de demanda en la que el objetivo está en crear un grupo de consumidores tales que sus preferencias son relativamente homogéneas comparados a las de otras agrupaciones de consumidores. El desarrollo de un segmento requiere un conocimiento preciso de las necesidades del comprador y cómo el producto en cuestión puede satisfacer esas necesidades. Ninguna estrategia asegura el éxito a una empresa a no ser que, tras ponerse en práctica, se intenten medir los resultados del programa, para lo que usamos un sistema de control. Por tanto, el programa original debería contener una cuantificación de las ventas esperadas por el vendedor, del número de clientes, los costes de marketing del programa y el beneficio neto esperado. Entonces, en poco tiempo la organización podrá examinarlos los resultados reales y determinar si la estrategia de posicionamiento en el mercado, de penetración en el mercado y el marketing mix son correctos o si hay que revisar algo para asegurar el logro de los objetivos exigidos por la empresa. 5.1.6. Investigación de Mercados El riesgo asociado a cualquier decisión empresarial se puede reducir adquiriendo información sobre las variables implicadas. La recogida y análisis de datos se consigue mediante la investigación de mercados, pero el mecanismo de investigación puede ser complejo y caro. Resulta útil adoptar la postura de no llevar a cabo la investigación si su coste excede al valor esperado de la acción empresarial que se vería apoyada por la investigación. Al desarrollar un plan de investigación del mercado debería tenerse en cuenta que el coste de adquirir información secundaria, es decir, información que ya está publicada, suele ser bastante más bajo que el coste de obtener información nueva o primaria. Por tanto, el primer paso en la investigación de mercado, habiendo establecido la naturaleza del problema a estudiar, es iniciar la búsqueda de información secundaria. Los datos procedentes de fuentes como registros financieros, estadísticas de ventas, cifras sobre producción o informes previos de directivos sobre anteriores problemas de marketing se pueden obtener de la empresa que financia el proyecto. 196 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 197 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Las fuentes externas de información secundaria disponibles para el investigador son las publicaciones de asociaciones de productores, las estadísticas publicadas por el gobierno, artículos en revistas especializadas, los registros financieros de empresas públicas y la información contenida en los reportajes elaborados por asociaciones que sirven a la industria como bancos, cámaras de comercio e instituciones profesionales. Un objetivo básico en la investigación de marketing es la minimización del riesgo mediante la reducción de la incertidumbre. Incluso cuando la información secundaria obtenida arroja luz sobre el problema investigado, es necesaria una crítica para valorarla. Si, por ejemplo, estamos intentando evaluar la actitud del mercado de la Unión Europea hacia la calidad de las doradas españolas, un informe de la federación de productores española puede no contener la suficiente parcialidad al comentar la calidad de la producción nacional. Cuando no se detecte ninguna fuente de información existente, o bien las disponibles no merezcan la suficiente confianza, será necesario obtener datos primarios. Esto se puede hacer mediante la observación, la experimentación o las encuestas. De las tres opciones, la observación es la que probablemente ofrece menos información porque el estado mental y los motivos de compra rara vez son visibles para el observador. Además, la compra suele tener lugar en el entorno habitual de compra del consumidor, que es la superficie comercial, donde no es posible controlar variables externas, como la información disponible por los consumidores acerca de la calidad del pescado de cultivo, lo que afecta a su comportamiento de compra. Por el contrario, en la experimentación, se elige un conjunto de estímulos que son introducidos en unas circunstancias ya controladas, midiéndose los efectos de variar dichos estímulos. El propósito del control es proporcionar una cierta medida de la «normalidad» sobre la que medir los resultados del experimento. Una cadena de pescaderías puede que sólo venda pescado fresco y desea evaluar una potencial ampliación hacia el pescado congelado. En las tiendas «controladas» no tendrá lugar ningún cambio, mientras que en las «experimentales» se instalaría una sección de pescado congelado. Tras cierto tiempo, el minorista compararía las ventas totales, las de pescado fresco y las de congelado en las tiendas experimentales con las de las tiendas controladas. Si hay una mejora positiva en las tiendas experimentales frente a las controladas, la investigación revelaría que el añadir una sección de pescado congelado sería beneficiosa para los intereses económicos de la cadena. Si no hubiera control, la dirección no estaría en condiciones de concluir si el incremento de las ventas en las tiendas experimentales se debe a la incorporación del pescado congelado o a otra variable externa como un comportamiento de compra estacional por parte del consumidor. Los datos recogidos en un experimento sólo proporcionan una cantidad limitada de información y hay significativos errores potenciales en el diseño del experimento o en el análisis que pueden afectar a las conclusiones obtenidas. Las encuestas suelen proporcionar una información más amplia, sobre todo al medir las actitudes y las motivaciones que llevan al consumidor a tomar la decisión de compra. 197 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 198 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En el caso de las encuestas, el instrumento de recogida de información es el cuestionario. Para obtener una respuesta fiable es necesario un alto nivel de preparación al elaborar esta herramienta de investigación. Las preguntas se pueden plantear de manera abierta, donde los encuestados responden con sus propias palabras, por ejemplo: «Describa qué le inspiran las ostras». Las respuestas proporcionarán una amplia gama de comentarios, pero la magnitud de lo obtenido dificultará el análisis. Las preguntas planteadas de manera cerrada presentan respuestas al encuestado de manera dicotómica, «¿le gustan las ostras? , conteste sí o no», o mediante propuesta múltiple: «cuál de las siguientes 6 frases describe mejor su actitud hacia las ostras» o también sobre escalas de valoración o percepción como «Indique en una escala de uno a cinco la importancia que atribuye a las siguientes características de una ostra». Para obtener los resultados deseados habrá que desarrollar un plan de muestreo. Este plan definirá quién debe ser encuestado (la unidad de muestreo), cuánta gente ha de ser encuestada (tamaño de la muestra), cómo se les debe elegir (procedimiento de muestreo) y cómo se va a contactar con ellos (método de muestreo). Lo normal es definir como unidad de muestreo a los particulares que se sepa que compran y usan el producto. Cuanto más grande sea la muestra mayor será la fiabilidad de lo obtenido. No obstante, debe sopesarse por un lado la fiabilidad que se obtiene y, por otro, el incremento de coste asociado a hacer más encuestas, planteándonos el trabajar con una muestra menor. Hay un riesgo de error asociado a cualquier muestreo que mida respuestas de sólo una parte limitada de individuos de la población total. El muestreo aleatorio, es decir, un muestreo en el que cada miembro de la población tiene la misma probabilidad de ser encuestado, proporciona una valoración más fiable de los intervalos de confianza para los datos recogidos. El coste del muestreo aleatorio puede ser muy alto, por lo que en ocasiones la investigación de mercados puede realizarse mediante procedimientos de muestreo no aleatorios (o no probabilísticos). Un ejemplo de esto último sería el de una compañía interesada en evaluar el potencial de vender pescado a restaurantes y que, para ahorrar tiempo y dinero en las encuestas, sólo visita establecimientos locales con la confianza de que el comportamiento de compra será homogéneo con respecto al resto del país. No obstante, esta opción entraña riesgos importantes en el caso de que existan diferencias de comportamiento relevantes entre la muestra estudiada y el conjunto de la población objetivo debidos a la ubicación geográfica de los primeros. Se puede llegar a los encuestados por teléfono, correo o entrevista personal. Aunque la entrevista telefónica es la manera más rápida de obtener datos. Sin embargo, la poca disposición de la gente a pasar algo más que un momento en el teléfono limita la cantidad de información que se puede obtener con el cuestionario. Un cuestionario enviado por correo presenta el problema de que la tasa de respuesta suele ser pequeña y esta puede contener sesgos derivados del interés particular del entrevistado en el tema a investigar. Las entrevistas son el método de muestreo más fiable porque el entrevistador puede explorar en profundidad, utilizar 198 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 199 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI preguntas suplementarias y observar reacciones. Por desgracia, este método es también el más caro y requiere un alto nivel de habilidad y control en caso de haber varios encuestadores implicados en el trabajo de recogida de información. Los datos obtenidos en una encuesta requerirán habitualmente un análisis previo a alcanzar cualquier conclusión general. Si los resultados tienen forma numérica, se pueden aplicar tests estadísticos para hallar los intervalos de confianza que cabe asignar a los datos. La investigación del mercado es un área muy especializada de la dirección comercial que normalmente sólo puede llevarse a cabo recurriendo a una compañía de investigación de mercados. Para maximizar los beneficios de utilizar una organización externa (o incluso si se decide hacer el estudio desde dentro de la empresa) el director comercial debe leer más exhaustivamente una serie de textos disponibles sobre prácticas de investigación de mercados. 5.2. Decisiones sobre el producto acuícola 5.2.1. Introducción Desde el punto de vista del diseño de la estrategia de marketing de cualquier tipo de empresa, el producto constituye una variable de importancia vital, en torno al que girarán la mayor parte de las decisiones de la organización en el mercado. Resulta indudable que sin producto, sea este bien o servicio, no cabe hablar de actividad comercial, en cuanto que no existiría el objeto de intercambio. Así, el producto resulta ser el componente más importante del esfuerzo de marketing, es la base para satisfacer las necesidades del consumidor y genera los beneficios que posibilitan las actividades y el desarrollo de la empresa. Por producto se entiende el instrumento a través del cual los consumidores satisfacen una o varias necesidades y, por esta razón, cualquier objeto que oferte una empresa en un mercado dado deberá aportar a quienes lo consumen, cuando menos, la misma utilidad y el mismo valor que otro ofrecido por los competidores. En el mercado que nos ocupa, el de las especies acuáticas de cultivo, la necesidad a satisfacer se encuadra en el nivel más básico de estas, la supervivencia por medio de la alimentación, por lo que la utilidad percibida por parte del consumidor resulta evidente. No ocurre lo mismo con el concepto de valor, ya que aún en el caso de que dos productos satisfagan una misma necesidad el valor que el sujeto atribuye a uno de ellos puede, y de hecho así ocurre, ser superior al de otro. En este sentido, una misma persona puede satisfacer sus necesidades alimenticias con pescado de captura, pescado cultivado o cualquier otro producto agroalimentario, sin que por ello el valor percibido de cada uno de ellos sea el mismo. De hecho, existe una tendencia, al menos en nuestro país, a valorar en mayor medida al pescado de captura que al cultivado, aunque en muchas ocasiones se desconozca la procedencia de las especies consumidas. 199 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 200 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El análisis del producto acuícola debe contemplar a éste inmerso en un marco de competencia con otros bienes alimenticios, donde su principal sustitutivo lo constituye la pesca de captura. 5.2.2. El concepto de producto acuícola Desde una perspectiva teórica se puede contemplar el producto a través de dos enfoques diametralmente opuestos. Un primer concepto de producto que considera a este en si mismo, como la suma de una serie de atributos físicos y un segundo concepto centrado en las necesidades del consumidor, que se centra en los beneficios buscados e identificados por las personas que demandan el producto. De esta forma, se puede definir a una especie acuícola cualquiera como lo que es en si misma, una variedad animal con unas características físicas concretas, o bien, en función de la satisfacción que reporta su consumo a las personas. Atendiendo a la primera consideración del producto, se contemplará a la empresa como una organización de producción de tal o cual especie, en la que el resto de las actividades empresariales están subordinadas al sistema productivo, en nuestro caso la cría o el engorde. Bajo esta perspectiva, la función del marketing en la empresa se limita a la venta y comercialización de las piezas cultivadas en la planta, pasando a ser una actividad subsidiaria cuya importancia y desarrollo dependerá del volumen de producción y de la seguridad de los mercados. Esta concepción es típica en los pequeños productores vinculados a organizaciones de mayor amplitud tales como cooperativas, centrales de compras o empresas con mayor capacidad. En el sector del mejillón gallego, por ejemplo, los pequeños propietarios de bateas centran todo su esfuerzo en la obtención del molusco, dejando las labores de comercialización en manos de las cooperativas a las que están vinculados. Por otra parte, la demanda nacional de mejillón supera a la oferta tanto en productos frescos como transformados, por lo que los productores no han tenido que llevar a cabo grandes esfuerzos para colocar sus productos a disposición de los consumidores, dando lugar a una inercia en los modos y la planificación comercial marcada por el inmovilismo. El principal objeto de atención de los gestores, tanto productores como transformadores, se centra en la mejora de las técnicas productivas dirigidas a la estructura de costes de las empresas como medio de lograr una ventaja competitiva en precios (CES, 1997). Esta situación deja sin aprovechar otras ventajas que el mejillón gallego tiene frente al procedente de otros países, limitando su crecimiento tanto en el mercado nacional como en el internacional. La política de orientación al producto es extensible al cultivo de otras especies, concretamente en los sectores más tradicionales con estructuras productivas familiares, e incluso en los sectores altamente industrializados del cultivo de lubina, dorada y rodaballo, las empresas más pequeñas depositan las responsabilidades de comercialización en empresas más grandes, que son las que disponen de la capacidad económica suficiente para dotarse de sus propios centros de expedición homologados. Estas, a su vez, dirigen toda su oferta a los intermediarios mayoristas de la 200 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 201 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI pesca tradicional. Sin embargo, las especies ofertadas son menos conocidas por el público, dada la reducida oferta por parte de la pesca tradicional. La situación en el ámbito de la comercialización es, por lo tanto, diferente a la descrita en el sector del mejillón, si bien, los productores dirigen su esfuerzo de marketing al control de los precios en el mercado, manteniendo todavía, con excepciones, la subordinación de la comercialización a la producción. La alternativa a la política de orientación a la producción parte de la definición del producto como un objeto de satisfacción de necesidades, que como tal deberá adaptarse a los deseos actuales y futuros de las personas que los consumen. Una filosofía empresarial orientada a dar satisfacción al mercado adaptándose a sus cambios, en el que el objetivo no es producir en cantidad, si no en las condiciones que permitan a los consumidores alcanzar mayor satisfacción que con otros productos destinados a cubrir las mismas necesidades. Tal concepción del producto imprime a las empresas productoras un mayor dinamismo, a la vez que exige unos niveles de preparación suficientes para poder llevar a cabo las actividades destinadas a posicionar el producto dentro de las preferencias de los consumidores. En esta línea se pueden enmarcar los proyectos de desarrollo de nuevas formas comerciales de la trucha propuestas por la Organización de Productores de Acuicultura Continental, como alternativas a la comercialización tradicional de la trucha fresca entera que no garantiza niveles de calidad uniformes (San Miguel Bel, 1998). La falta de una mayor orientación al mercado y la necesidad de desarrollar políticas de producto más activas fuera del ámbito puramente técnico, está siendo reconocida por los representantes de los productores, quienes recomiendan una mayor atención al desarrollo de estrategias comerciales más competitivas, que, girando en torno a la idea de un producto de calidad, mejoren la posición que las especies de cultivo ofertadas en nuestro país ocupan en la escala de preferencias de los consumidores. De esta forma, no sólo se pretende garantizar la estabilidad del sector, sino además su crecimiento. Para poder implantar en la empresa una filosofía de orientación al mercado primeramente habrá que considerar los aspectos no tangibles que rodean al producto acuícola y que lo convierten en algo más que un simple pescado. Surge la necesidad de obtener información del mercado, por medio de las técnicas de investigación, que permita determinar el lugar que el producto ocupa en la mente de los consumidores. Esta posición se contemplará siempre en términos comparativos frente al conjunto de los bienes que satisfacen la misma necesidad. Debe tenerse también en cuenta a que tipo de cliente se dirige la empresa, si se trata de los consumidores finales, intermediarios, mayoristas, restaurantes o transformadores. Cada uno de estos impondrá al producto unas exigencias que le son particulares. Así, el consumidor final se fijará más en los atributos tangibles de la especie, su calidad y también su precio. Sin embargo, todos los clientes para los que el pescado cultivado no constituye un objeto de consumo si no de intercambio, tomarán en consideración, además de la calidad alimenticia de la especie, otros aspectos intangi201 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 202 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI bles del producto, como son todos los servicios añadidos que presta el productor: condiciones de entrega, transporte, conservación... 5.2.3. Diferenciación y posicionamiento de los productos acuícolas La diferenciación es una estrategia de marketing que resalta las características del producto de manera que sea percibido como algo único, con el fin de crear una situación de privilegio en el mercado, presentando al producto como algo distinto a todo lo que se ofrece para satisfacer la misma necesidad. De esta forma, si una persona desea adquirir un producto con unas características determinadas, tendrá que comprar el único que las posee. Del mismo modo que los consumidores potenciales hacen frente a numerosas alternativas de compra, la empresa raramente se encuentra en una situación de monopolio. Es, por lo tanto, necesario que la empresa establezca una identidad para el producto, utilizando características o atributos que puedan permitirle diferenciarse de sus competidores en el mercado. Un producto no diferenciado es incompatible con la supervivencia. Sin embargo, las empresas pueden alcanzar situaciones de monopolio relativo cuando sus productos son presentados como los únicos en el mercado que cumplen con una serie de requisitos o características que los distinguen de otros con los cuales compiten a través de un proceso que se representa en la figura 57. Para llegar a decidir sobre la naturaleza de la diferenciación de los productos, la empresa necesitará determinar en primer lugar cuales son los atributos importantes para el consumidor, a fin de compararlos con los de su producto y ver si cumple con las exigencias del mercado. Un producto consiste en un amplio conjunto de características que incluye el precio, la textura, el nombre, la disponibilidad y la calidad, pudiendo ser cada uno de ellos la base de la diferenciación. En muchos casos, sin embargo, el comprador potencial sólo tendrá en cuenta alguno de estos atributos al tomar su decisión de compra. La importancia relativa que el comprador asocia a cada atributo se puede medir usando una serie de técnicas de investigación. Figura 57 Proceso de diferenciación ATRIBUTOS DIFERENCIALES Fuente: Santesmases Mestre (1992). 202 PRODUCTO ÚNICO MONOPOLIO 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 203 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Para ilustrar el empleo de alguna de estas técnicas sencillas de investigación de mercados se ha seleccionado una muestra aleatoria de 505 consumidores de la ciudad de Santander (Anexo D) a quienes se les realizó una serie de preguntas estructuradas en un cuestionario. Entre las cuestiones planteadas se incluyó una batería en la que se pedía a los entrevistados que valorasen, en una escala de uno a cinco, la importancia que confieren a cuatro atributos de un pescado para decidirse por su compra1 (Tabla 54; Fig. 58). Tabla 54 Valoración de los atributos de un pescado Atributo Valoración media Consistencia de la carne . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Precio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Sabor . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Tamaño . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4,22 3,33 4,63 2,87 Fuente: Elaboración propia. Figura 58 Valoración de los atributos de un pescado 5 4,33 4,22 4 3,33 2,87 3 2 1 0 Consistencia de la carne Precio Sabor Tamaño Fuente: Elaboración propia. 1 Las especies a las que se ha referido el cuestionario han sido las cinco más cultivadas, tres especies marinas (lubina, dorada y rodaballo) y dos continentales (trucha y salmón). 203 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 204 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Los atributos valorados por los integrantes de la muestra han sido: la consistencia de la carne, el precio, el sabor y el tamaño del pescado. Como puede apreciarse en las medias presentadas en la tabla, los atributos mejor valorados por los consumidores son, en este orden, el sabor y la consistencia de la carne, ambos estrechamente ligados al concepto de calidad de un bien alimenticio animal. El precio presenta una importancia intermedia, esto puede indicar que los consumidores están dispuestos a admitir un mayor precio a cambio de una mejor calidad en las especies ofertadas. Por último, el tamaño del animal no parece ser una característica relevante y, en todos los casos, aunque la pregunta se refería a todo tipo de pescados, dependerá de la especie de la que se esté hablando. La debilidad de esta aproximación radica en que los resultados no se pueden usar fácilmente para identificar la relación entre atributos importante y los posicionamientos del producto. Para llevar a cabo esta forma de evaluación se necesitará una escala multidecisional en la que se pida al encuestado que clasifique una serie de productos en función de unos atributos determinados. Los resultados se podrán combinar para formar un mapa de espacio de producto que ofrecerá una descripción visual de posicionamientos. El posicionamiento constituye el segundo aspecto importante que deberá ser investigado, para poder definir de una forma eficaz una estrategia de diferenciación de producto. Conocidos los atributos que un consumidor considera importantes en su decisión de compra, es necesario saber en que medida se percibe que el producto que se ofrece satisface las condiciones que se imponen a esos atributos. De igual forma se comprobará la percepción que se tiene de los productos competidores, a fin de comparar la posición que nuestro producto ocupa en la escala de preferencias de los consumidores. Atendiendo a los atributos estudiados entre los consumidores de la ciudad de Santander, cabe esperar que, en una situación de elección de compra entre un pescado de cultivo cualquiera y otro producto competidor de distinta procedencia, escogerá aquel que, a igualdad de precios, satisfaga mejor las exigencias de calidad alimenticia, pudiéndose aceptar un mayor precio a cambio de una mejor calidad. Para poner un ejemplo de la técnica de los mapas de posicionamiento se han utilizado las respuestas que los entrevistados dieron cuando se les pidió que evaluasen los cuatro atributos presentados en un pescado de cultivo y en otro de captura. Para ello se les presentaron cuatro escalas en las que se expresaban sus opiniones acerca de la consistencia de la carne, el sabor, el precio y el tamaño de un pescado cualquiera según su procedencia. Para medir dichas opiniones se utilizaron escalas de cinco puntos cuyos extremos se identificaron con los términos: nada consistente —muy consistente; nada sabroso— muy sabroso; muy caro —muy barato y muy pequeño— muy grande. Con el total de las respuestas se calcularon las puntuaciones medias de cada una de las dos denominaciones de procedencia del pescado, cultivo o captura (Tabla 55). 204 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 205 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Según se desprende de las respuestas de los consumidores de la muestra, el pescado de cultivo está considerado como de peor calidad, en cuanto a sabor y consistencia de la carne, que el pescado de captura. Si las puntuaciones obtenidas por estos dos atributos se llevan a un eje de coordenadas se obtiene el correspondiente mapa de posicionamiento de sabor y consistencia de carne de los dos tipos de productos pesqueros (Fig. 59). Tabla 55 Creencias acerca de los atributos del pescado de cultivo frente al de captura Consistencia de la carne . . . . . . . . . . . . . . . . Precio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Sabor . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Tamaño . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Cultivo Captura 2,88 2,59 2,94 3,27 3,97 4,48 2,21 2,90 Fuente: Elaboración propia. Figura 59 Mapa de posicionamiento del pescado de cultivo para los atributos sabor y consistencia de la carne 5 4,5 4 Sabor 3,5 3 Cultivo 2,5 Captura 2 1,5 1 0,5 0 0 1 2 3 4 5 Consistencia de la carne Fuente: Elaboración propia. 205 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 206 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Un mapa de las mismas características se puede construir con las medias de las opiniones acerca del precio y el tamaño de los pescados de ambas procedencias. En este caso se puede observar cómo los consumidores estudiados en la ciudad de Santander consideran el pescado de cultivo como ligeramente más barato y de mayor tamaño que el de captura (Fig. 60). Figura 60 Mapa de posicionamiento del pescado de cultivo para los atributos precio y tamaño 3,3 3,25 Tamaño 3,2 3,15 3,1 Cultivo 3,05 Captura 3 2,9 5 2,9 2,8 5 0,00 1,00 2,00 3,00 4,00 Precio Fuente: Elaboración propia. Al interpretar los mapas de posicionamiento debe tenerse en cuenta que estos reflejan las creencias que los consumidores tienen de los productos a que se refieren, y que estas creencias no tienen por qué reflejar fielmente las verdaderas características que el producto tiene. Esto último dependerá del nivel de conocimiento que se tenga del producto. En nuestro país, y salvo especies muy conocidas como el mejillón y algún otro molusco, los consumidores muestran un gran desconocimiento acerca del origen de las especies piscícolas que consumen. Este nivel de desconocimiento se puede estimar comparando las procedencias que apuntan los entrevistados con las tasas reales de consumo de especies cultivadas. 206 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 207 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Por último, la empresa deberá determinar cuál es la mejor posición o espacio de producto que puede ocupar, variando su posición percibida actual en función de los objetivos de posicionamiento que se haya fijado hasta alcanzar los niveles que le garanticen a su producto una diferenciación positiva frente a los de la competencia. Estos cambios en el posicionamiento de un producto suelen llevarse a cabo con acciones promocionales, consiguiendo que la opinión de los consumidores coincida con la deseada por la empresa. Otra aplicación muy interesante de la técnica de los mapas de posicionamiento es la que consiste en determinar el lugar que el producto de la empresa ocupa frente al ideal del mercado. En nuestro caso, por ejemplo, la trucha de cultivo frente a la trucha ideal. No obstante, puesto que en la mayoría de las especies de pescado cultivado la referencia del producto ideal es la especie capturada, se puede considerar equivalente al análisis anterior. 5.2.4. Identificación de los productos acuícolas La identificación del producto constituye una forma de diferenciación formal, por la que a un objeto que satisface una necesidad bajo unas condiciones determinadas se le asocia un rasgo identificativo que lo distingue del resto de productos de características similares. Este rasgo suele ser un nombre, una imagen, o el propio envase. En la práctica comercial, la forma principal de identificación es la marca (Vázquez, Trespalacios y Rodríguez-Del Bosque, 1998). En el caso concreto de la acuicultura, la necesidad de identificar y diferenciar el producto aparece más como un problema de especie y procedencia que como una cuestión de marca del fabricante. Los objetivos que deberá marcarse el esfuerzo de diferenciación del producto en el ámbito de la acuicultura afectarán a todo el colectivo de productores, en tanto que las especies de cultivo llegan al consumidor final sin ningún tipo de identificación que haga referencia a su productor. Esta misma situación tiene lugar en el sector de la pesca tradicional, donde el único elemento de diferenciación asociado a una empresa lo constituye la marca del transformador, conservero, y otros agentes que intervienen en el proceso de intercambio. La estrategia de imagen de los productores acuícolas se centra en resaltar la calidad de los productos cultivados en una determinada zona y con unas técnicas específicas. En este sentido, el planteamiento de una estrategia de marca para las empresas de acuicultura se aproxima en gran medida a la problemática de la denominación de origen de otros productos alimenticios. En este sentido, los productos procedentes de la acuicultura se beneficiarán de la imagen de calidad que transmiten las campañas institucionales de promoción de alimentos de una determinada comunidad autónoma, como son «Galicia Calidade» o «Alimentos de Andalucía». En el campo de la acuicultura, este tipo de iniciativas promovidas por las instituciones públicas se pueden concretar todavía más desarrollando acciones conducentes a la identificación de tal o cual especie procedente de un área geográfica determinada como un producto de calidad. En esta línea se enmarca la propuesta de la 207 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 208 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI denominación de origen «Galicia» como garantía de calidad en el mejillón fresco y congelado (Polanco, 1985). Así, entre las actividades que se recomienda llevar a cabo por el Consejo Regulador Gallego de Calidad-Mejillón de Galicia figuran las siguientes (CES, 1997): • Lanzamiento del mejillón de calidad como producto diferenciado, garantizado y de calidad contrastada. • Puesta en funcionamiento de un control de calidad externo. • Elaboración de planes específicos de calidad para la producción y comercialización del mejillón. Iniciativas de este tipo pueden ser también llevadas a cabo en una conjunción de esfuerzos entre las instituciones y la iniciativa privada. Los productores e intermediarios comerciales de salmón de la bahía de Fundy (New Brunswick, Canadá) acuden al «Bay of Fundy Salmon Marketing Institute» para obtener de este instituto la certificación que identifique a sus salmones como de la más alta calidad. El instituto opera como un agente externo de control de calidad, habiendo elaborado una lista de treinta criterios que dividen por igual en tres categorías. Estas categorías son: condición física de los salmones; procedimientos de cultivo y captura; y procedimientos de comercialización y embalaje. Para la obtención del certificado de calidad los productores deberán cumplir cada uno de los treinta criterios definidos por el instituto para poder lucir el distintivo de dicha certificación (Fig. 61). Para garantizar la validez de la certificación, el Instituto lleva a cabo inspecciones aleatorias entre los productores, seleccionando salmones en los que se comprueba que cumplen con cada uno de los treinta criterios que establece el certificado. Si un productor no alcanza a satisfacer los criterios de calidad tendrá un plazo para una segunda inspección. Si tras la segunda inspección el productor continúa sin satisfacer los requisitos de calidad del salmón será apartado del programa y se le Figura 61 Logotipo del certificado de Salmón de Calidad de la Bahía de Fundy Fuente: Bay of Fundy Salmon Marketing Institute. 208 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 209 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI retirará la certificación y el derecho al uso del logotipo. De esta forma, los consumidores de las áreas abastecidas por salmones procedentes de la bahía de Fundy disponen de un elemento diferenciador con el que pueden identificar al salmón de calidad, al tiempo que los productores pueden beneficiarse de la imagen que esta variedad de marca transmite a sus productos como una ventaja competitiva frente a la oferta de salmones de Alaska, Chile, Escocia y Noruega. En el año 1993, la compañía «Scottish Food Quality Certification ltd.» lanzó un programa semejante destinado a los criadores de trucha de trucha de Escocia. El objeto de este programa es idéntico al del instituto de la Bahía de Fundy, diferenciar la trucha de los productores escoceses acogidos al programa de las ofrecidas por los competidores dentro de la oferta de la misma especie, imponiendo unos requisitos mínimos de calidad a los productores asociados a esta iniciativa. Una vez que los cultivadores demuestran que sus truchas cumplen con las exigencias de calidad podrán mostrar el distintivo (Fig. 62) que los define como productores de trucha escocesa de calidad. Figura 62 Logotipo identificativo de una Trucha Escocesa de Calidad Fuente: Scottish Quality Trout. www.fishlink.co.uk/sqt/market.html. Los responsables del consorcio escocés han llevado a cabo una investigación de mercado en la que han estudiado el efecto que los distintivos de calidad tienen en las decisiones de compra de los consumidores finales (Tabla 56), en la que se puede observar cómo el empleo de estos distintivos goza de una buena aceptación entre el público. Un dato de gran interés lo constituye el hecho de que un 73% de los consumidores escoceses entrevistados afirmen sus preferencias por la trucha identificada con el distintivo «Scottish Quality Trout» frente a cualquier otra trucha, lo que muestra la gran eficacia de estos programas a la hora de identificar y diferenciar el producto. A la vista de los resultados obtenidos por los productores canadienses y escoceses, cabe recomendar a los productores españoles la puesta en marcha de programas de este tipo, conducentes a identificar los productos procedentes de la piscicultura nacional y a posicionarlos como productos de calidad. Este tipo de iniciativas pueden llevarse a cabo en el marco de una cooperación entre los consejos reguladores de las distintas comunidades autónomas y las asociaciones de productores. 209 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 210 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 56 Preferencias de los consumidores ante los distintivos de calidad Consumidores que consideran que un distintito de calidad implica que están comprando el mejor pescado que hay en el mercado 85% Consumidores que consideran que los supermercados deberían dar preferencia a la venta de pescados con distintivos de calidad 84% Consumidores que consideran que las pescaderías deberían dar preferencia a la venta de pescados con distintivos de calidad 89% Consumidores a los que les gustaría ver en los menús de hoteles y restaurantes pescados con distintivos de calidad 84% Consumidores que prefieren comprar una trucha con el distintivo de calidad «Scottish Quality Trout» antes que otra sin distintivo 73% Fuente: Scottish Quality Trout. www.fishlink.co.uk/sqt/market.html. 5.2.5. Ciclo de vida del producto Un producto no debe ser considerado nunca como un concepto estático, puesto que todos los productos presentan un ciclo de vida más o menos largo que vendrá asociado a su grado de aceptación en el mercado. El ciclo de vida de un producto se suele representar gráficamente por medio de una curva en forma de S con 3 etapas, correspondientes a las fases de introducción, crecimiento y madurez. A esto le seguirá una fase de declive en la que las ventas descienden hasta desaparecer (Fig. 63). En los productos de reciente introducción, la aceptación del mercado será baja porque los consumidores estarán comprando otros artículos que ya conocen para satisfacer sus necesidades. Será necesario crear un cambio en el comportamiento de compra usando programas promocionales para hacer posible que se pruebe el producto y se dé a conocer. En esta fase el gasto de marketing por unidad vendida es alto debido al esfuerzo necesario para dar a conocer el producto a los consumidores y al bajo volumen de ventas iniciales. Una vez que el nuevo producto ha logrado un nivel de prueba inicial, es de esperar un crecimiento en las ventas a medida que el uso empieza a desarrollarse y se van incorporando nuevos consumidores. Finalmente, el número de nuevos usuarios comenzará a caer y se desarrollará un negocio asentado en la recompra, llevando al producto a la fase de madurez de su ciclo de vida. En la fase de crecimiento la empresa continuará realizando gasto en promoción con el objeto de alcanzar una mayor cuota de mercado antes de que entren nuevos competidores. Las ventas crecerán en esta fase y la relación entre el esfuerzo de marketing y aquellas descenderá gradualmente. El nivel de beneficios aumentará en 210 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 211 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 63 Ciclo de vida del Producto Beneficios Ventas Tiempo Introducción Crecimiento Madurez Declive Fuente: Elaboración propia a partir de diferentes autores. una proporción superior a las ventas, por lo que el negocio se irá haciendo cada vez más rentable. A medida que el mercado evoluciona hacia la madurez, el número de competidores aumenta, mientras que las empresas ya instaladas intentan maximizar su cuota de mercado estático. Las empresas participantes en ese mercado se ocupan de mejorar el producto, segmentar el mercado y desarrollar estrategias de marketing para aumentar las ventas. La reacción a estas actividades hará aumentar el ratio entre el gasto de marketing y las ventas, reduciendo los beneficios. La rentabilidad disminuirá cuando el mercado empiece su declive. En la industria acuícola, las acciones para elevar las ventas están asociadas habitualmente con la necesidad de invertir en la expansión de la capacidad y habilidades productivas de las plantas de cultivo instaladas. El aumento de ventas en la madurez sólo puede venir de la competitividad, y el gasto resultante de marketing e investigación disminuye la rentabilidad. La menor rentabilidad y la expansión de la capacidad actuarán conjuntamente para reducir la tasa de retorno de las inversiones. Una proposición alternativa consiste en aumentar las ventas de un producto en la fase de crecimiento de su ciclo de vida, alargando ésta lo más posible. Esto se puede conseguir incrementando el uso de las especies por parte del consumidor, 211 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 212 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI dando lugar a una mayor rentabilidad si el incremento del beneficio supera la inversión para aumentar la capacidad productiva. En el ámbito de las pesquerías se puede utilizar un modelo de predicción para definir una típica curva con forma de S asociada a la tasa de intercambio entre una población de peces a lo largo del tiempo y el número de buques que participan sobre dicha población (Chaston, 1983). Este modelo de población puede tener influencia directa en el ciclo de vida del producto, porque cuando se introduce una nueva especie en el mercado la aceptación del mercado puede ser baja. Por tanto, la demanda del mercado no aportaría más que un nivel mínimo de capturas. A medida que crece la capacidad del mercado, se pueden vender más peces y el esfuerzo de pesca aumentará para cumplir las ventas al tiempo que el producto se mueve por la fase de crecimiento del ciclo de vida. En el punto de madurez de la curva del ciclo de vida, la dinámica de la población en la pesquería puede influir en los acontecimientos de tres formas: a) Las capturas potenciales máximas en el equilibrio exceden la demanda del mercado. Las capturas continúan creciendo más allá del tamaño del mercado. La oferta puede exceder a la demanda; los pescadores pueden recurrir a reducciones del precio para mantener el volumen de ventas, lo que hace suponer que algunos de ellos abandonarán la pesquería al no poder cubrir costes con los precios reducidos. Esto dará lugar a oscilaciones en las capturas mientras los pescadores entren y salgan en la actividad y hasta que se alcance un equilibrio entre oferta y demanda en la madurez. b) Las capturas potenciales máximas en el equilibrio son menores que la demanda del mercado. En el caso de que las capturas en el punto de equilibrio sean menores que la demanda de mercado en la madurez, el volumen de ventas se estabilizará a un nivel más bajo que el tamaño potencial del mercado para el producto si la pesquería está bien dirigida. En estas condiciones habrá un desajuste entre los volúmenes de oferta y demanda. c) Sobre explotación de la pesquería hasta llegar a causar un daño irreparable a la población objeto de pesca. Si se pesca en exceso y las capturas comienzan a descender drásticamente, las ventas serán bastante menores que las potenciales en el punto de madurez del ciclo de vida del producto. Si se permite que la sobrepesca no disminuya, los pescadores pueden verse obligados a abandonar debido a los costes excesivos por unidad capturada. Las capturas evolucionarán en sentido descendente y el ciclo de vida del producto se desplazará a la fase de declive ante la falta de disponibilidad del producto. Cabe esperar el mismo comportamiento del ciclo de vida del producto en el desarrollo de un mercado para una nueva especie introducida por la industria acuícola. La aceptación inicial del mercado será baja hasta que se logre la aceptación de un amplio sector de los consumidores. A medida que la demanda aumenta, se incorporarán nuevas empresas de cultivo y la capacidad de expansión puede llevar al punto de madurez del mercado en el ciclo de vida del producto. Mas allá de este 212 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 213 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI nivel de demanda, la producción adicional de la acuicultura no sería aconsejable, pues excedería las ventas potenciales totales del mercado. Tal situación ha sido experimentada por los cultivadores de trucha del Reino Unido, que a finales de los años 70 tuvieron que hacer frente a una superproducción mediante reducciones de precios que llevaron a la ruina a los pequeños cultivadores al no poder compensar estos sus costes de producción (Chaston, 1983). Esta situación afecta especialmente a aquellos sectores en los que, dados los volúmenes de producción por instalación de cultivo, el volumen total de peces puestos en circulación, incluidas las capturas, pueda superar la demanda potencial del mercado, dando lugar a una caída en el nivel de precios por debajo de los costes de producción. A estos problemas parecen ser potencialmente sensibles los productores de lubina, dorada y rodaballo. En general se recomienda que, cuando se planee iniciar una actividad de cultivo, se evalúe el desajuste actual entre la oferta de capturas de la pesca tradicional más el volumen de producción cultivada y el potencial de ventas del mercado, teniendo en cuenta el impacto que el incremento de la oferta pueda tener sobre los precios. Allí donde la diferencia entre las ventas y el volumen de oferta sea pequeña los nuevos acuicultores deberán abstenerse de entrar, porque el incremento de producción debido a la acuicultura llevará rápidamente al mercado a un exceso de oferta con el consiguiente riesgo de una caída en los precios de los mayoristas. Por último, la fase de declive del ciclo de vida del producto puede sobrevenir como consecuencia de un cambio en los hábitos de compra de los consumidores, o de una nueva tecnología que hace que un producto se vuelva obsoleto, por ejemplo, la introducción de nuevas especies de cultivo. Un error que cometen muchas empresas es la insuficiente atención dada a la eliminación de productos que están en la fase de declive de su ciclo de vida. La actitud de la dirección es seguir con ellos mientras los ingresos por ventas superen a los costes directos de producción. Esta actitud se mantiene debido a no considerar los siguientes costes ocultos asociados a esta situación (Chaston, 1983): a) Los productos consumen una cantidad desproporcionada de tiempo directivo. b) La rápida evolución de la producción supone cambios caros en la línea de montaje. c) El volumen de ventas es menos predecible, requiriendo la cobertura de inventarios adicionales para evitar la ruptura de «stocks». d) El gasto en promoción es menos efectivo a la hora de generar demanda que si los artículos estuviesen aún en la fase de crecimiento. e) El producto puede dañar la imagen de la empresa tanto entre los consumidores como entre los miembros del canal de distribución. Para evitar esta situación, el departamento de marketing debe llevar a cabo una revisión periódica para identificar los productos a eliminar por haber alcanzado, o estar a punto, unos logros mínimos determinados. 213 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 214 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5.2.6. Desarrollo de nuevos productos Puesto que todos los productos alcanzan la fase de declive, para poder mantener el nivel de ingresos que garantice la supervivencia de la empresa, ésta deberá responder introduciendo nuevos productos. Ninguna empresa puede asumir con tranquilidad que los productos en fase de madurez de su ciclo de vida serán fuente de beneficio en el futuro. Por lo tanto, el desarrollo de nuevos productos debe recibir una constante atención dentro de la empresa. Por nuevo producto puede entenderse una innovación radical en el mercado o una adaptación de un producto ya existente que lo convierta en algo distinto. Como ejemplo del primer caso cabe destacar el desarrollo de híbridos entre especímenes del mismo género cuya práctica aumenta en el campo de la investigación y atrae cada vez más el interés de las empresas (Bartley et al., 1997). Un caso mucho más sencillo de innovación en el mercado lo constituye la introducción de una nueva especie de cultivo en un área en la que hasta el momento no se había desarrollado la actividad acuícola para dicha especie. Dentro del segundo caso puede considerarse cualquier forma nueva de presentar o tratar una especie de cultivo. En la industria de aprovechamiento de los recursos pesqueros, las empresas suelen afrontar la restricción de que sólo hay un tipo de materia prima disponible para ser procesada. Si se va a desarrollar un nuevo producto, la proposición menos arriesgada es el uso de la materia prima existente y la actual tecnología para formar la base de un nuevo concepto, Un nuevo uso y aprovechamiento de la especie conocida que la identifique como algo distinto a lo que antes era. Un ejemplo lo constituye la venta de peces en porciones para restaurantes con el objetivo de estabilizar los costes de servicio mediante el control de estas. Si no es posible encontrar nuevos usos que respondan a distintas necesidades del mercado, una alternativa es introducir nueva tecnología, manteniendo la misma especie. Nuevas instalaciones y tecnologías de cultivo que usen la materia prima existente como un ingrediente para desarrollar un producto procesado de manera superior, como por ejemplo el momento en el que se introdujo el uso de jaulas de engorde en el mar. En determinados sectores de la acuicultura es posible cambiar a nuevas especies sin tener que variar significativamente la tecnología. Esta alternativa podrá ser atractiva si una reducción de la oferta de la actual especie hace subir los precios. Para evitar la reducción en el tamaño del mercado, la empresa decide explotar especies de menor coste. También puede suponer una alternativa en situaciones de sobre explotación, cuando la caída de los precios hace peligrar la supervivencia de las empresas. Sin embargo, la mayoría de los sistemas de acuicultura se centran en una especie o una familia de éstas de características muy similares. Cambiar a otra suele requerir el uso de nueva tecnología. Para que el desarrollo de nuevos productos tenga éxito es necesario que dentro de la empresa se lleve a cabo un programa que maximice la generación de ideas y 214 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 215 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI evalúe y pruebe estas ideas para asegurarse de que sólo las mejores son desarrolladas y lanzadas al mercado. La generación de ideas dadas las materias primas existentes debería ir encaminada a una satisfacción más efectiva de las actuales necesidades del mercado. Antes de invertir en desarrollo del producto deberá realizarse un análisis sobre aspectos tales como la estrategia de marketing, recursos de la empresa, compatibilidad de la producción y necesidades de investigación y desarrollo y todos aquellos requisitos que habrán de cumplirse para poder convertir la idea en un producto tangible. Se confeccionará una lista con la valoración numérica de cada factor, que se utilizará para obtener una puntuación completa de cada una de las nuevas ideas. Si la puntuación total supera un nivel predeterminado debería afrontarse el siguiente paso en el desarrollo del producto, que es el análisis y estimación de la demanda que la innovación va a tener en el mercado. Si una empresa tiene experiencia en productos similares puede usar datos de éstos para desarrollar estimaciones de la demanda futura. Cuando no hay información será necesario investigar el probable comportamiento del consumidor. Las tasas de prueba se pueden evaluar deduciendo la intención de compra de una muestra de la población del mercado. La colocación del producto con una serie de clientes potenciales puede dar una idea de la probabilidad de adopción y tasas de uso. Otros dos elementos en el paso de la idea al concepto terminado son el nombre y el envase. La elección del nombre requerirá habitualmente una investigación de mercado para descubrir la imagen creada en la mente del consumidor y para determinar el nombre más fácil de pronunciar y recordar. El nombre elegido deberá comunicar idealmente algo sobre el beneficio del producto. En la mayor parte de los casos que aquí se tratan, el nombre del producto corresponde a la especie que se cultiva, si bien, se puede identificar con la procedencia o con algún distintivo de calidad. El envase no tenía hasta ahora otra función que la de proteger el producto, al mínimo coste posible, durante la distribución. Muchas empresas se dan cuenta ahora de que es parte del concepto total del producto y en ciertos casos supone un elemento que participa en el uso. Además, como en muchas tiendas el autoservicio es la práctica habitual, el envase debe ser capaz de ratificar la actividad promocional previamente ejecutada por el comercial. Por lo tanto, el envase debe llamar la atención, describir las utilidades del producto, transmitir al cliente confianza y apoyar la imagen del producto ya instaurada en la mente de los consumidores a través de los anuncios. A medida que un producto se aproxima a la fase de concepto final, el gasto y el trabajo directivo aumentan a un ritmo exponencial. Es preceptivo que el equipo de desarrollo tenga un sistema de evaluación del progreso para asegurarse de que cualquier fallo potencial sea reconocido y enmendado de inmediato. En la historia de la industria acuícola se han cometido errores costosos por dejar de tener en cuenta estos peligros potenciales, introduciéndose nuevas especies o nuevas tecnologías de cultivo para una especie existente a pesar de las evidencias 215 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 216 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI de potenciales problemas. Los altos costes del cultivo de peces carnívoros han llevado a una serie de grupos a considerar a los exóticos herbívoros como especie alternativa. A pesar de que la textura de la carne y la estructura del esqueleto de estas especies reduce la probabilidad de su aceptación por el consumidor, la investigación continúa a menudo acompañada por la lógica de que con el descenso en el suministro de proteínas per cápita en la población mundial el mercado de estos peces está garantizado (Chaston, 1983). Uno de los problemas a afrontar por cualquier grupo directivo es que incluso tras haber completado el desarrollo del concepto del producto, la habilidad del nuevo producto para sobrevivir en el mercado aún está por probar. En los mercados industriales, el comportamiento racional del comprador implica que si el nuevo artículo presenta ventajas sustanciosas frente a la competencia, con toda probabilidad a la prueba del producto le seguirá su aceptación. Las decisiones de juicio sobre introducción de nuevos productos pueden hacerse en el sector industrial sin mayor investigación. En los mercados de consumidores, sin embargo, la interacción de las variables de marketing en un modelo de comportamiento del consumidor menos predecible da lugar a juicios que sustentan decisiones muy arriesgadas para la dirección. Esta situación ha llevado a muchas empresas a mejorar su conocimiento de las ventas potenciales y a evaluar planes alternativos de introducción, mediante el uso de un mercado de prueba. La lógica que hay tras los mercados de prueba es introducir el producto en un número limitado de pequeños mercados cuya estructura poblacional es similar a la del mercado nacional. El coste de ejecutar el plan de marketing en mercados de prueba es bastante menor que un lanzamiento a gran escala. La empresa puede evaluar el impacto en el mercado potencial sin arriesgar todos los recursos necesarios para introducir el producto en toda la población de consumidores de un país. Un aspecto crítico es la duración del período del mercado de prueba. Debería prolongarse hasta quedar evaluadas la compra de prueba y la recompra. Si la compra de primera prueba es escasa o la frecuencia de recompra pequeña, el test de mercado puede continuar durante meses. A pesar de que cuanto más largo más preciso es el resultado, la empresa se arriesga a que los competidores introduzcan sus nuevos productos tomando el control del mercado. El resultado optimista para un test de mercado es que tanto la tasa de prueba como la de recompra sean altas. En este caso se debería introducir en el mercado de inmediato. Si la tasa de prueba es alta y la recompra baja cabe concluir que el producto no cubre las expectativas del consumidor. Será necesario un desarrollo posterior del producto. La situación opuesta es baja prueba pero alta recompra, lo que suele indicar un fallo a la hora de despertar la curiosidad del consumidor por el nuevo producto. Normalmente, esto se supera aumentando la promoción. El resultado menos favorable es bajas tasas de prueba y recompra. Este es un claro indicador de que el artículo ha fracasado al competir con el resto de artículos existentes y deberían olvidarse los planes de introducción en el mercado. 216 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 217 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Por último, la confianza en un único producto en un único mercado en la industria acuícola es una proposición muy arriesgada. Los costes promocionales de apoyar un único producto suelen ser mayores por unidad de los que resultan en el caso de una gama de productos. De hecho, la industria alimentaria en general se caracteriza por escasos márgenes y, para muchas empresas, el único mecanismo efectivo para permitirse mayor promoción es aumentar la base de ingresos mediante la diversificación de la línea de productos. La única ocasión en que es correcto estar en un solo mercado es cuando se espera que las condiciones generales de la economía favorezcan un modelo estable de gasto de los consumidores potenciales. 5.3. Decisiones sobre precios en acuicultura 5.3.1. El precio y su papel en el proceso de decisión de compra La ciencia económica suele definir el precio como la contrapartida monetaria que el consumidor debe entregar a cambio de una unidad de producto. Sin embargo, el sacrificio total que el consumidor lleva a cabo para obtener un bien no se limita a una simple cantidad de dinero de la que aquel ha de desprenderse, si no que debe tenerse también en cuenta todo el conjunto de acciones que deben ser llevadas a cabo para la realización de la compra tales como la búsqueda de información, el desplazamiento y otras. Una condición indispensable para que un bien cualquiera sea objeto de intercambio es que se le reconozca un valor por parte de quien desea adquirirlo. De igual forma, un objeto tendrá un valor reconocido en la medida en que satisfaga una necesidad, sea ésta del tipo que sea. Como primera aproximación al concepto de precio dentro de una filosofía empresarial de orientación al mercado puede entenderse éste como una medida del valor del objeto que se desea intercambiar. Como ya se ha indicado en los capítulos anteriores, los consumidores no compran un bien por si mismo, si no por el servicio o función que este le reporta. En este caso concreto, la necesidad básica a cubrir es la alimentación, y el consumidor conferirá valor al producto en cuanto que le satisface esta necesidad. Sin embargo, el valor conferido a una determinada especie de pescado va más allá de la simple capacidad nutricional del mismo, viéndose afectado por apreciaciones tales como el prestigio que se puede adquirir al ser observado consumiendo en un establecimiento público especies reconocidas de alto valor como por ejemplo la langosta o el bogavante. La calidad percibida en un producto es el resultado de la evaluación por parte del consumidor del conjunto de atributos identificados en el producto, tanto las características físicas como las intangibles resultantes de las combinaciones de variables de marketing. La calidad así definida conforma un valor positivo, en tanto que el precio, como sacrificio del consumidor, constituye un valor negativo, el resultado de la confrontación de valores tendrá como resultado la compra siempre que los 217 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 218 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI valores positivos aparezcan a los ojos del consumidor como superiores al sacrificio que éste tendrá que realizar. El precio, así mismo, podrá formar parte de los valores positivos, en tanto que éste se encuentra estrechamente ligado a la imagen de calidad que los consumidores se forman del producto. En el caso concreto de los productos de la pesca, se asume que la calidad del pescado está asociada a su precio, y algunas especies como la ostra y la langosta llegan a ser considerados como un artículo de lujo. En estos casos un precio bajo puede hacer dudar al consumidor de la calidad del pescado y optar por el de precio más alto, situación que puede observarse entre los compradores habituales de ostra al optar en un mismo establecimiento entre las especies Ostrea eduli y Crassostrea gigas, esta última más barata y menos apreciada por su sabor que la primera. 5.3.2. El precio como variable de decisión comercial El precio determina en gran medida la supervivencia de la empresa al afectar a la rentabilidad de la empresa y a su capacidad para competir en el mercado y generar recursos. Por otra parte, el precio presenta una serie de características que le confieren una importancia especial en el diseño de la estrategia comercial de la empresa, entre las que cabe destacar las siguientes: (Bello, Vázquez y Trespalacios, 1996). 1. El precio determina directamente el volumen de ventas y el tamaño de la demanda. Como se ha visto en el epígrafe anterior, la capacidad de aceptación de un producto por parte del consumidor depende en parte de la apreciación de éste en función de su precio. Precios demasiado altos podrían superar los valores de calidad atribuidos al producto y precios demasiado bajos afectar a su imagen de calidad, haciendo que aquel no sea aceptado. El precio de cualquier especie de pescado debe estar comprendido dentro de una banda de precios que sean considerados aceptables por los consumidores, alejado, en la medida de lo posible, de los límites considerados como demasiado alto o demasiado bajo. 2. El precio tiene una influencia directa sobre los beneficios y la rentabilidad de la empresa. El beneficio se obtiene restando a los ingresos totales de la empresa los costes de la producción. Y puesto que, de una forma directa en el caso de los ingresos e indirecta en el caso de los costes, ambos dependen de los precios, resulta que el beneficio, que a su vez determinará la rentabilidad, se verá afectado por los precios con los que opere la empresa en el mercado. 3. El precio es la única variable de marketing que genera ingresos sin requerir una inversión previa. A diferencia de la comunicación, la distribución y el propio diseño y desarrollo del producto, las acciones de marketing fundamentadas en el precio no precisan gasto alguno. 4. El precio sirve como factor de diferenciación frente a los productos de la competencia. La calidad percibida del producto se ve afectada por el precio tanto en sentido positivo como negativo, lo que puede reforzar el posicionamiento. 5. El precio constituye un instrumento competitivo flexible que puede ser aplicado con facilidad y rapidez. Si bien, no resulta recomendable abusar de esta 218 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 219 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI variable por los efectos negativos que el mal uso puede producir tanto en la demanda como en la competencia y la propia empresa. 5.3.3. Métodos de fijación de precios Los economistas han desarrollado teorías de precios que relacionan a estos con las cantidades intercambiadas para explicar cómo se alcanza el equilibrio entre los compradores potenciales y vendedores del mercado. Las relaciones entre cantidad y precio existen tanto por el lado de la demanda como por el lado de la oferta: a medida que el precio unitario aumenta, los productores desean ofrecer más producción, y de forma inversa, a medida que el precio disminuye, los consumidores desean comprar más producto. Esto tiene lugar constantemente en la industria pesquera al establecerse los precios de las capturas. Cuando los precios de algunas especies son altos, hay más patrones interesados en aumentar el esfuerzo de captura que dé lugar a un mayor volumen de oferta. Los compradores por subasta, sin embargo, limitarán las compras de especies cuando su precio es alto, aumentando sus intervenciones sólo cuando los precios tiendan a descender (Fig. 64). El punto de intersección de estas dos variables, conocidas como curvas de oferta y de demanda respectivamente, darán lugar a un punto de equilibrio en el que compradores y demandantes están de acuerdo en cuanto a la cantidad a intercambiar a un determinado precio. Figura 64 Equilibrio entre oferta y demanda Precio Oferta Pe Demanda Qe Cantidad Fuente: Elaboración propia. 219 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 220 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Este planteamiento no sólo es útil para explicar cómo se llega a un precio de equilibrio, sino que también puede aplicarse para analizar las consecuencias de introducir cambios en la producción de recursos pesqueros. Por ejemplo, la introducción de cuotas anuales de captura, como ocurre en las aguas de la Unión Europea, implicará que la oferta se fijará independientemente de la fuerza que puede tener la demanda del mercado. El precio de mercado para la cuota capturada será consecuencia del tamaño de la cuota. Si la cuota se reduce de un año para otro, por ejemplo, se esperaría un aumento de los precios de las capturas, ya que la curva de oferta se ha desplazado a la izquierda (Fig. 65). Por el contrario, un aumento en la cuota de capturas aumentaría la oferta y los precios bajarían. Figura 65 Equilibrio bajo condiciones de cuota de captura Cuota Cuota Precio P Pe Demada Qe Qe Cantidad Fuente: Chaston, 1983. Por otra parte, si los productores, tanto pesqueros como acuicultores, deciden promover el uso de algunas especies entre los consumidores, la curva de demanda tenderá a moverse hacia la derecha con el consecuente aumento del precio de mercado (Fig. 66). La reacción contraria tiene lugar, por supuesto, si una especie pierde popularidad debido a publicidad perjudicial como a un impacto ambiental: la curva de demanda se desplazará a la izquierda y el precio de equilibrio caerá (Fig. 67). 220 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 221 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 66 Desplazamiento de la curva de demanda por efecto de la promoción Precio Oferta Pe2 Pe1 Demanda Demanda Qe1 Qe2 Cantidad Fuente: Chaston, 1983. Figura 67 Desplazamiento de la curva de demanda por efecto de publicidad negativa Precio Oferta Pe1 Pe2 Demanda Demanda Qe2 Qe1 Cantidad Fuente: Chaston, 1983. 221 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 222 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI A partir de la teoría económica se puede desarrollar un modelo sencillo por medio del cual un productor puede determinar el precio óptimo de su producción si el objetivo de la empresa es la maximización del beneficio. Supóngase una empresa de cría de rodaballo en la que se ha llevado a cabo una investigación de mercado y se ha podido establecer una curva de demanda para su producción tal como sigue: Q = 40.000 – 100P [1] donde Q = cantidad vendida en toneladas. P = precio unitario en euros. Esta ecuación indica que, cuando el precio es igual a cero, la demanda máxima del mercado será de 40.000 toneladas. Además, a medida que el precio se acerca a los cuatro mil euros por kilogramo, la cantidad vendida se aproxima a cero. Los ingresos por ventas, V , se pueden describir mediante la ecuación: V = PQ y el beneficio neto, BN, como BN = PQ – C siendo C = costes totales de producción y, como los costes totales de la granja se componen de unos costes fijos de 100.000 euros más unos costes variables relacionados directamente con la producción (Q), entonces: C = 100.000 + Q por tanto: BN = PQ – (100.000 + Q) y sustituyendo Q en [2] usando la ecuación [1] resulta: BN = P(40.000 – 100P) – (100.000 + 40.000 – 100P) = 40.000P – 100P2 – 100.000 – 40.000 + 100P = 39.900P – 100P2 – 60.000 y, si diferenciamos, obtenemos: ∂ BN = 39.900 – 200P ∂P lo que da un punto de máximo beneficio en el que: 200P = 39.900 en donde: P = 199,5 euros 222 y Q = 20.050 toneladas [2] 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 223 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI y el beneficio neto = (199,5) (20.050) – (100.000 + 20.050) = 2.395.975 – 79.950 = = 2.316.025 euros. Los modelos de la teoría económica suponen que el precio es el único componente funcional en la decisión de compra. Esto podría ser válido en una economía con fuertes restricciones presupuestarias pero, a medida que la riqueza individual aumenta, otras variables como la calidad del producto, la diferenciación y el posicionamiento adquieren una influencia más importante sobre el comportamiento. Otra crítica a los modelos es que en la práctica las empresas no están capacitadas para obtener los datos sobre la demanda del mercado o la curva de oferta, a pesar de que puedan disponer de información precisa sobre la curva de costes de fabricación para varios niveles de producción. Sin embargo, un asunto más importante es si la maximización del beneficio, tanto a largo como a corto plazo es un objetivo efectivo de la empresa. Puede ser una meta final, pero en muchos casos, como al introducir una nueva especie, prevalecen objetivos más inmediatos y concretos como: a) Penetración de mercado: donde la empresa establece precios relativamente bajos para maximizar la prueba del producto y desanimar actividades competidoras. b) Descremación de mercado: donde la empresa ve una oportunidad de exigir un mayor precio que puede limitar las ventas totales pero proporciona una alta rentabilidad por unidad vendida. Las empresas suelen adoptar esta postura cuando consideran que el volumen del mercado inmediato es limitado y que podrán reducirse precios más adelante si las economías de escala permiten reducir costes de producción unitarios. 5.3.4. Fijación de precios con información imperfecta Aunque las ideas de la teoría económica sobre decisiones de precio son útiles al evaluar principios teóricos, lo normal es que en los negocios reales el establecimiento del precio tiene lugar en circunstancias de información imperfecta. Bajo estas condiciones los métodos de máximización del beneficio y el estudio del equilibrio del mercado no pueden ser utilizados. En su lugar, la dirección de la empresa puede optar a uno de los tres métodos que se describen a continuación. A pesar de que en algunos casos el empleo de un único método de cálculo del precio de mercado puede ajustarse a las necesidades específicas de la empresa, no debe olvidarse que las influencias sobre el comportamiento de los consumidores y que las acciones de la empresa nunca constituyen hechos aislados, sino que tendrán su consiguiente respuesta en el mercado. Por estos motivos, se recomienda contemplar los métodos de fijación de precios como complementarios, mucho mejor que ceñirse exclusivamente a la aplicación de uno de ellos. Precios orientados al coste Muchas empresas calculan el precio a cobrar a sus clientes mediante la adición arbitraria de un margen de beneficio fijado sobre sus costes conocidos de producción. Si 223 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 224 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI un criador de lubinas ha estimado que el coste de criar un espécimen se reparte en un 50% en alimentación y otro 50% en productos para el mantenimiento de la calidad del agua. Supóngase que el número de unidades necesarias de cada uno de los insumos es de 15.000 euros en cada uno, el coste total de producir una lubina será: C = 15.000x + 15.000y + gastos de administración general donde: x = precio de cada unidad de alimento. y = precio por cada unidad de producto de mantenimiento. Gastos de Administración = 6.000 euros para 30.000 piezas criadas. y si x = 1,20 euros y = 0,40 euros entonces los costes de producción C = 18.000 + 6.000 + 6.000 C = 30.000 y el coste por animal C = 30.000 / 30.000 C = 1,00 euros Si la empresa tiene un beneficio predeterminado del 20%, el precio a cobrar por cada lubina será: P = 1,00 (1 + 0,20) P = 1,20 euros. Este método es de fácil aplicación, por lo que está ampliamente aceptado en muchas empresas. Se le puede criticar, sin embargo, que no tiene en cuenta la influencia del elemento demanda en el entorno del mercado. Una decisión alternativa sobre el precio podría alterar las ventas totales de la empresa porque los clientes potenciales cambian su decisión sobre la cantidad en función directa al precio. Del mismo modo, si la competencia tiene menores costes productivos y desea aceptar un beneficio menor por unidad vendida, la empresa puede perder ventas porque el cliente puede obtener el mismo artículo más barato de otro productor. Si, no obstante, la mayoría de las empresas de la industria tienen estructuras semejantes de costes, como se da el caso con muchas especies acuícolas, el método del beneficio sobre el coste puede ser un mecanismo muy efectivo y sencillo de fijar el precio. Precios orientados a la demanda Este método se usa en empresas que consideran que el precio es sólo una de las variables a utilizar en el marketing mix para actuar sobre la demanda. Normalmente, estas organizaciones sólo consideran al precio como un punto de referencia para los consumidores que tienen a los distintos grados de calidad como componentes de sus exigencias en la compra. 224 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 225 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Para aplicar esta idea sobre el precio es necesario que el mercado responda a otras variables de marketing como la actividad promocional, y que haya una gama de productos con distintas características de calidad. En esta situación, un criador de pescado puede vender una especie de alto precio apoyado por anuncios y una segunda especie de coste más barato apoyada básicamente en enfatizar su bajo precio. Precio orientado a la competencia En la mayoría de los segmentos del mercado suele haber una empresa, generalmente el líder, que comienza los cambios en el precio. Una solución habitual en estas circunstancias para las demás empresas es ignorar lo relativo a los precios según la demanda o sobre el coste y adoptar una postura en cuanto al precio en función de la empresa que lidera. Cuando ésta revise los precios, el resto de empresas sigue en proporción directa a la magnitud de la revisión del líder. Una forma de competir en precios nos la ofrece el caso de las capturas frescas de una misma especie, donde el producto está considerado relativamente homogéneo. Ninguna empresa es capaz de poner un precio significativamente superior a la tasa aceptada por el mercado sin arriesgarse a una pérdida total del negocio. Cuando es necesario un cambio, éste suele comenzarse por uno de los grandes productores, que produce una proporción significativa de la captura total. Esta acción es el estímulo para que el resto de compañías revisen sus precios. En un mercado en el que los productos pueden ser diferenciados más fácilmente, las empresas pueden establecer su propia política de precios, ya que en la decisión de compra influyen otros factores como la calidad. Sin embargo, incluso en esta situación, si las condiciones de oferta imponen un descenso general de precios, sería extremadamente arriesgado para cualquier productor individual ignorar este factor, recurrir a otros elementos del marketing mix mantendrá la demanda y no se reducirán los precios. 5.3.5. Reacción a precios cambiantes Una vez que la empresa ha establecido su política de precios en la industria pesquera, lo normal es que se preste más atención a reaccionar a los precios de la competencia que a revisar oportunidades que den lugar a cambios contrarios a las tendencias generales. Las rápidas fluctuaciones en la disponibilidad de materias primas son una característica del sector pesquero, lo que refleja tanto la estacionalidad de las capturas como los efectos de las circunstancias ambientales, como el mal tiempo, sobre las capturas por unidad de esfuerzo realizado. La acuicultura porporciona una fuente de oferta más estable porque los encargados de las granjas pueden revisar su decisión sobre el volumen de producción en función de la situación general del mercado. Sin embargo, con pocas excepciones, como la trucha y el mejillón, este sector ya ha alcanzado el punto en el que la producción supone la oferta principal y puede, por 225 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 226 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tanto, mejorar la estabilidad de la materia prima hasta el punto en el que la volatilidad del precio deje de ser una característica del mercado. Con frecuencia, los volúmenes de producción de la acuicultura se han traducido en reducciones importantes del precio debidas a excesos de oferta (CES, 1997). Estas oscilaciones han puesto en peligro la supervivencia de aquellos productores menos eficientes en sus procesos y que no podían permitirse recortar sus márgenes. Tales situaciones pueden evitarse llevando a cabo una planificación de la producción que sea acorde con las necesidades reales del mercado, evitando producir por encima de la capacidad de absorción de la demanda. En la industria pesquera de captura, la entrada al mercado de un competidor que explota un nuevo recurso suele ir acompañada del uso de precios muy inferiores a los existentes. En algunos casos, la menor calidad de la nueva fuente de oferta justificaría un precio inferior, pero es normal que el producto sea igual a los existentes, lo que podría obligar a los oferentes a reducir su precios a un nivel inferior al umbral de rentabilidad. Además, la carga financiera puede dar lugar a cierres de fábricas o recortes severos de plantilla, como ha venido sucediendo con la industria británica de la sardina (Chaston, 1983). Al examinar las consecuencias a largo plazo de un nuevo competidor parecerá que la expansión del negocio a través de la competencia en precios es una proposición muy arriesgada. Lo lógico en esta estrategia es que el nuevo recurso explotado dará pié a un mejor esfuerzo por unidad capturada que las pesquerías ya establecidas, proporcionando menores costes operativos. En el sector acuícola, el desarrollo de nuevas tecnologías suele acarrear reducciones importantes en los costes de producción. Muchos productores aprovechan estos recortes de los costes para salir al mercado con una estrategia competitiva centrada en el precio. Sin embargo, con el tiempo, otras organizaciones habrán copiado o desarrollado tecnologías que les permitan situarse a la altura del líder en costes, y podrán, igualmente, competir en precios en el mercado. Ante esta situación, la ventaja de la primera empresa desaparece, y cabe esperar que se produzca una pérdida de clientes. Por este motivo, se recomienda que una reducción en costes no sea inmediatamente reflejada en los precios. Por el contrario, mantener los precios anteriores supone manejar márgenes mayores, que pueden ser invertidos en el logro de objetivos estratégicos como la creación de una fuerte lealtad por parte de los consumidores o al desarrollo de un sólido posicionamiento del producto en el mercado. De esta forma sus ventas se mantendrán relativamente estables cuando un nuevo competidor aparezca en el mercado a precios inferiores. Bajo estas condiciones, si una empresa con una clientela consolidada y fiel, y una imagen de calidad notoria, se encuentra ante acciones competitivas centradas en el precio, se recomienda no responder con reducciones en este último, sino examinar planes de marketing alternativos para responder a las nuevas circunstancias. A pesar de los beneficios que se pueden derivar del empleo de estrategias comerciales alternativas a la competencia en precio, muchos países productores y 226 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 227 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI exportadores de pescado han venido subvencionando a sus respectivas industrias pesqueras con el fin de generar saldos favorables en sus balanzas de pagos. Esta práctica es especialmente dañina para aquellos productores ubicados en países que no practican este tipo de políticas. 5.4. Decisiones de distribución en acuicultura 5.4.1. El canal de distribución en la industria pesquera En el mercado de productos pesqueros es poco habitual que la localización del productor y el consumidor final permita el comercio directo entre ellos. Lo normal es que la transacción tenga lugar a través de uno o más intermediarios, cuya actividad puede suscitar críticas por parte de algunos productores, en especial en el campo de las capturas, que se quejan de que los mayoristas encarecen en exceso el producto, lo que reduce la demanda del consumidor. El conjunto de todos los flujos, instituciones y agentes a través de los cuales circulan los productos pesqueros desde su producción o captura hasta su consumo final recibe el nombre de canal de distribución pesquero. Hay cinco tipos de flujos dentro de un canal de distribución: el flujo físico de bienes; la transmisión de la propiedad de las mercancías; el flujo monetario; la promoción y comunicación comercial y el flujo de información de mercado (Fig. 68). Todos estos flujos reflejan la naturaleza de las distintas responsabilidades aceptadas por cada miembro del canal, donde se aprecia la existencia de una delegación de responsabilidades sobre los flujos por parte del productor primario y del transformador de pescado. Esta delegación lleva implícita una pérdida de control sobre la comercialización del producto para estos dos miembros del canal. Esto sólo ocurrirá cuando las empresas perciban alguna ventaja con la delegación de ciertas funciones a los intermediarios. Una de las ventajas más importantes es la reducción en el número de transacciones. Si tres consumidores requirieran productos a tres fabricantes serían necesarias 3 × 3 = 9 transacciones para que se consumara el proceso de compra. Si se añade un intermediario al sistema, el número de transacciones se reduce a 3 + 3 = 6. Además, en la mayoría de los canales, la producción de un solo fabricante supera con creces las necesidades de un único consumidor final. Para minimizar los costes de distribución el fabricante podrá embarcar grandes cantidades en una única operación, pero puede que el consumidor individual sólo quiera comprar una porción reducida de dicha cantidad. El intermediario aceptará la función de almacenar la cantidad repartida inicialmente para después ofrecerla al consumidor final en la forma de pequeñas porciones individuales, adecuando la oferta a la demanda. Esta última situación es típica de la piscicultura intensiva, en la que las cantidades producidas en cada ciclo son muy superiores a las demandas de los consumidores particulares, haciéndose especialmente necesario el papel de los intermediarios. 227 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 228 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 68 Flujos en el canal de distribución Productor Intermediarios Consumidor Transformado Bienes Propiedad Comunicación Dinero Información Fuente: Vázquez, Trespalacios y Rodríguez del Bosque, 1997. En la práctica, la situación de los fabricantes en relación a los mercados finales, el carácter perecedero de las materias primas, la variedad de necesidades del consumidor final y la estacionalidad de las capturas conforman un complejo conjunto de variables cuyo manejo resulta costoso. Por tanto, en lugar de localizar defectos en los sistemas actuales, el productor deberá preocuparse de conocer todos los elementos implicados y utilizar el método más efectivo en costes y en tiempo para asegurarse el reparto de productos de alta calidad entre los consumidores. El número de niveles en la cadena de distribución variará en función de la producción y de la localización de los participantes. Un pequeño vivero de langostas que vende toda su producción entre restaurantes del mercado local operará seguramente en un sistema de dos niveles, repartiendo directamente al consumidor final. Una granja piscícola de mayor tamaño cuyos consumidores finales no se encuentran en la misma zona puede recurrir a un sistema de tres o más niveles en el que los productos son distribuidos por unos mayoristas capaces de servir a un área mayor. Lo normal es que, a medida que aumenta la producción y, a su vez, la distancia entre el productor y el consumidor final, se añadan más niveles al sistema, viniendo a participar intermediarios adicionales. En nuestro país, la comercialización de productos procedentes de la pesca de captura se estructura en forma de canales largos, en donde los pescadores venden a los mayoristas de la lonja por el procedimiento de subasta, estos a continuación negocian los repartos con los mayoristas del interior, que después proveerán a los detallistas, encargados de la distribución final al cliente. A esta secuencia habrá que añadir a los transformadores, cuando los haya, hasta que el producto llega a manos de los consumidores finales (Fig. 69). La comercialización del pescado cultivado difiere de los canales que siguen los productos pesqueros procedentes de las capturas en que estos no tienen obliga228 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 229 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 69 Canal de distribución en la pesca de captura Pescador - Mariscador Lonja Mercados de consumo Comprador Exportador Mayorista Mayorista conservero Grandes superficies Restaurantes Industria conservera Mayorista Asentadores Detallistas Consumidores Fuente: FAME (1996). ción expresa de pasar por lonja para efectuar la primera venta. Con esto se simplifica la estructura del canal de distribución, vendiendo directamente desde las instalaciones de producción a la hostelería y a mercados de mayoristas y detallistas locales (Fig. 70). 229 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 230 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 70 Canal de distribución de los productos acuícolas Productor Mercados de consumo Restaurantes Exportador Mayorista Mayorista conservero Detallistas Asentadores Consumidores Fuente: FAME (1996). Por otra parte, teniendo en cuenta la capacidad de la acuicultura moderna de programar la producción para suministrar las cantidades, tallas y calidades en determinadas fechas contra pedido, apunta hacia un canal lo más directo posible, lejos de la larga y complicada estructura comercial de los productos de la pesca extractiva: Consumidor, los intermediarios disponibles, la competencia, la estructura de la empresa y el entorno del negocio. El pescado fresco y el marisco son productos muy perecederos y requieren el uso de canales de distribución lo más ágiles como sea posible, con una participación mínima de intermediarios, permitiendo reducir los retrasos asociados a los sucesivos cambios de propiedad. Por tanto, para asegurar que la calidad se mantiene en el lugar de consumo, algunas empresas podrían comercializar el producto directamente al consumidor final si se lo permiten las disposiciones legales sobre el tráfico de productos pesqueros. Cuando la localización de un productor o su dificultad para acceder a recursos financieros excluye la posibilidad de un sistema de comercialización directa, la empresa se ve obligada a distribuir el producto transformado en un formato que permita alargar su conservación, enlatado o congelado, a no ser que la responsabilidad de una rápida distribución se traspase a un intermediario. Cuando el consumidor final está disperso en una extensa zona geográfica y compra pequeñas cantidades con mucha frecuencia, el productor primario suele decantarse por recurrir a los servicios de intermediarios para los diversos mercados, mayoristas que provean a los detallistas para regular el proceso de distribución. Por 230 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 231 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI otra parte, si el productor primario abastece a un pequeño número de grandes clientes, como a importantes cadenas de alimentación e hipermercados, que cursan importantes pedidos, la empresa se encontrará en condiciones de minimizar la participación de intermediarios. Aunque el formato del producto y el comportamiento de compra del consumidor pueden dar lugar a la aparición de numerosos intermediarios, es necesario que estos sean capaces de llevar a cabo la distribución de manera responsable. Si, por el contrario, los intermediarios disponibles carecen de la capacidad o de los recursos necesarios para responsabilizarse del reparto de productos en el tiempo requerido sin que se resienta la calidad, la compañía puede verse obligada a aceptar una mayor implicación en el proceso de distribución. Por ejemplo, en algunos países, como en el África subsahariana, no hay mayoristas con el equipamiento necesario para manejar productos congelados. Si una compañía deseara penetrar en tales mercados sería necesario invertir en el establecimiento de un almacén de comida congelada así como proveer a detallistas con cámaras frigoríficas. Cuando la mayoría de la industria utiliza un determinado canal de distribución y el consumidor final desea comprar productos en un punto de venta específico, una empresa particular tendrá que recurrir al mismo canal de distribución para generar ventas. Esto no es obligatorio, pues la empresa puede decidir que hay una excesiva presión competitiva en el canal existente y, para evitar esta situación, intente la localización por un sistema alternativo. Un ejemplo es la industria acuícola de salmón ahumado en Escocia, donde algunos fabricantes decidieron evitar el tradicional sistema de distribución mayorista-minorista y comercializar sus productos directamente a los hogares particulares mediante la venta por correo (Chaston, 1983). Es muy común en un canal de distribución que los intermediarios sólo quieran manejar productos de un número limitado de proveedores. Una característica de la industria pesquera es la presencia de un gran número de fabricantes y una intensa competencia para entrar en los canales de distribución disponibles. En estas circunstancias, una empresa con una gama de productos limitada o recursos financieros insuficientes para respaldar su oferta con una importante actividad de marketing, estará en una débil posición negociadora cuando pretendan persuadir a un mediador, un distribuidor alimentario a nivel industrial, de que se haga cargo del reparto de la producción de la empresa. Otro problema que afecta a los canales disponibles es el derivado del entorno del negocio. Las condiciones económicas podrían aumentar la importancia del precio en el comportamiento de compra del consumidor, haciendo que resulte menos atractivo un suministro con mayor calidad de servicio y mayores costes. Las disposiciones gubernamentales y de control alimentario, definiendo los niveles bacteriológicos y químicos aceptables, podrían suponer otro obstáculo en el proceso de selección del canal de distribución. A la empresa productora se le presentarán, normalmente, una serie de canales alternativos, algunos de los cuales se verán afectados por los defectos ya descritos, 231 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 232 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI basándose la decisión final en dos criterios: coste económico y disponibilidad de mecanismos de control para la Dirección. De los dos, el económico tiende a ser el más importante, procurándose seleccionar el canal que proporcione un equilibrio óptimo entre el volumen de ventas y los costes de la distribución. Un ejemplo sencillo de esta idea sería un fabricante que está penetrando en un nuevo mercado suministrando a detallistas y dudando entre abrir una oficina de ventas y emplear un agente de ventas. El uso de la fuerza de ventas por una empresa tiene la ventaja de que la atención del vendedor se concentra exclusivamente en los productos de la empresa, al tiempo que su experiencia les permite orientar a los consumidores hacia decisiones óptimas de compra. Un agente representará normalmente una gama muy diversa de productos y carecerá de un conocimiento en profundidad de la empresa. Obviamente, un concepto clave es determinar cuál de las alternativas tiene las mayores posibilidades de generar el mayor volumen de ventas, estimación que se basa en la experiencia acumulada por la empresa y, si es necesario, opiniones de expertos y previsiones sobre situaciones similares. Tras evaluar el nivel probable de ventas es necesario calcular los costes para las dos opciones. Los agentes suelen operar en base a un porcentaje fijo sobre las ventas, por lo que un descenso de éstas no hará aumentar los costes de distribución. Sin embargo, una oficina de ventas de la empresa supone un alto nivel de costes fijos, debido a factores tales como el establecimiento de las instalaciones y los salarios del personal. Debido a esta variabilidad de los costes y las posibles diferencias en las ventas la mejor manera de evaluar las alternativas es comparar las distintas tasas de retorno de la inversión (ROI). Las tasas de retorno se calculan por medio de la expresión ROIi = Si – DCi DCi en donde: ROIi = rentabilidad de la alternativa i. Si = ingresos estimados por ventas para la alternativa i. DCi = costes estimados de distribución para la alternativa i. La capacidad de ejercer el control en un canal depende de si los intermediarios son proclives a aceptar recomendaciones de la empresa productora sobre la calidad, programas de promoción y establecimiento de precios. Si la empresa considera que el control de calidad es básico para la aceptación del producto por parte del consumidor final, se tenderá a elegir, ante tasas de retorno similares, el canal de distribución que permita un seguimiento más fiable de la calidad del producto. Los canales de distribución están en continua transformación. Es una responsabilidad clave del equipo de marketing el estar atento a estas transformaciones, así como el reaccionar a esos cambios antes de que afecten negativamente al volumen de ventas. El cambio no sólo tiene lugar entre los subcomponentes de un canal, sino que también puede tener lugar a lo largo de todo el sistema de distribución. 232 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 233 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5.4.2. Distribución física El propósito de la distribución física es asegurar el reparto de la producción hasta el punto de venta de una manera que resulte efectiva en costes y en tiempo. En la industria pesquera, el carácter perecedero de las materias primas, la estacionalidad de las capturas y la distancia entre productor y consumidor se combinan para hacer de la distribución una importante área de decisión. Si bien, en la industria acuícola estos problemas se ven reducidos por la disponibilidad continuada del producto, lo que da lugar a una mayor estandarización de los procesos de la distribución física. Un sistema de distribución física incluye como componentes del coste fácilmente identificables a los siguientes: el transporte de mercancías; el almacenaje y el mantenimiento de inventarios. A estos hay que añadir un elemento menos cuantificable, como es el coste que suponen para la empresa las ventas perdidas debido a que los clientes no aceptan retrasos en el reparto y cambian el producto por alguno de sus competidores directos en el mercado alimenticio. El proceso de selección del sistema de distribución más apropiado es similar al de elección del canal. La empresa se encontrará con una serie de opciones y su decisión se basará en equilibrar las ventas totales con el objetivo de minimizar los costes de distribución. En la industria pesquera rara vez se vende la producción sin haberse visto modificada, excepción hecha de algunos tipos de moluscos y crustáceos, como mejillones y langostas. En el caso de los peces, cuando estos se destinan al consumo son descabezados y eviscerados y, posteriormente, partidos y fileteados. En este proceso el producto pierde entre un 60 y un 75% del peso original lo que resulta especialmente importante en el caso de la pesca de captura. Como resulta contraproducente pagar los costes de desembarco por un material que no va a ser incluido en la venta final, la solución habitual suele ser localizar la planta de tratamiento más cerca del punto de desembarco que del mercado final. Cuando tiene lugar un tratamiento posterior, como en la producción de transformados y derivados, las plantas pueden localizarse más cerca del mercado final. Sin embargo, esta última situación no suele resolverse basándose sólo en los costes de distribución, pues también hay que tener en cuenta los factores de coste de la actividad productiva. Tanto los costes laborales como los de la tierra tienden a ser mayores en entornos urbanos y los ahorros en la distribución podrían no compensar los mayores costes de fabricación inherentes a una planta localizada en un mercado urbano. Por otra parte, la industria transformadora de pescado española está ampliamente asentada en la costa, en torno a los grandes centros de desembarco, y próxima a las principales zonas de producción acuícola. Las alternativas de transporte disponibles hoy día presentan notables diferencias en el tiempo empleado, variando los costes en proporción directa al período de reparto. A medida que el período de entrega se prolonga, el coste por ventas perdidas aumenta, debido tanto a la intención por parte de los clientes de no aceptar retrasos, como al deterioro de la calidad del producto, en el caso del pescado fresco, 233 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 234 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI hasta un nivel no aceptado por el cliente final. La combinación de costes de transporte y de ventas perdidas puede ser útil para determinar los costes totales mínimos de la distribución y determinar el sistema de reparto óptimo. El tiempo es un factor de vital influencia sobre los costes por ventas perdidas, debido a sus efectos sobre la calidad del producto. Por tanto, los métodos óptimos para un producto fresco de corta vida son el transporte aéreo u otros más rápidos. Los productos tratados tienen una vida más larga, lo que permite el uso de sistemas más lentos y baratos como el tren o el barco. A medida que la empresa se expande hacia una serie de mercados más dispersos geográficamente, los costes de distribución desde una sola planta pueden ser mayores que los de establecer un segundo centro de procesamiento más cercano al mercado final, pero lo normal es que los costes de producción y distribución en un mercado libre actúen frente a la implantación de una nueva planta cercana al mercado final. Por su parte, la adquisición y mantenimiento de inventarios es una decisión de inversión a corto plazo que las empresas financian habitualmente con su capital circulante. La industria pesquera suele afrontar una producción estacional mientras que la demanda es constante a lo largo del año. Esto requerirá el mantenimiento de un inventario por un período de tiempo mayor que en otras industrias y muchos productores suelen mantener un inventario medio equivalente a las ventas de 4 ó 5 meses. Por esto, muchas se ven forzadas a solicitar préstamos bancarios para cubrir estos costes y apareciendo, en consecuencia, los intereses de estos préstamos como un importante elemento encarecedor. El reconocimiento por parte del mercado de la estacionalidad de la producción se refleja en las tendencias de los precios, que alcanzan su valor mínimo en la época de capturas y se incrementa gradualmente durante el año a medida que la escasez sobreviene. El productor primario debe preocuparse de predecir el momento en el que la diferencia entre el coste del producto y su precio en el mercado se encuentra en el punto de máximo beneficio. Por desgracia, muchas empresas no incorporan los intereses de los préstamos al valor de las mercancías que tienen en el almacén, lo que les lleva a la consideración errónea de que el momento de vender es aquel en el que el precio del mercado alcanza su máximo valor. Sin embargo, la realidad es que, si consideramos todos los gastos de mantener un inventario, el máximo beneficio puede obtenerse penetrando en el mercado un poco antes. Esta decisión se complica por la imposibilidad de predecir las tendencias futuras de los precios. La decisión de «vender o guardar» es clave; por ello, en muchas empresas, no se deja esta decisión en manos del Departamento de Marketing, sino que es controlada por la Alta Dirección. Un error en este asunto puede tener un impacto clave sobre toda la situación financiera y con toda seguridad la causa más frecuente de bancarrota en la industria. Aunque los detallistas que participan en los mercados alimentarios se dan cuenta del carácter estacional de la producción pesquera y acuícola, esperan estar abastecidos todo el año con la misma fluidez. Para conseguir esto, los proveedores 234 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 235 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI de productos enlatados o congelados tendrían que aceptar la idea de un «nivel de servicio al 100%», sin permitir que el nivel de existencias baje del nivel a partir del cual aparecerían los quebrantos. Por desgracia, es un hecho que hay una relación exponencial entre los costes de inventario y el nivel del servicio, lo que debería llevar al Departamento de Marketing a evaluar el nivel de servicio que la empresa desea proporcionar. Incluso cuando el beneficio bruto por unidad es lineal, la naturaleza exponencial de la curva de costes de inventario revela que, a medida que los niveles de servicio al cliente se aproximan al 100%, el beneficio neto, el beneficio bruto menos los costes de inventario, descenderá. Una solución es establecer un objetivo para la Rentabilidad Financiera (RF), calculada según la fórmula: RF = Bfcio. Bruto Ventas × Ventas Gastos en inventario para mantener las ventas Tras realizar varias iteraciones se establecería el nivel de ventas que permitirá la consecución del objetivo financiero propuesto. En la mayoría de los casos esto dará lugar a que las empresas proveedoras proporcionen un nivel de servicio inferior al 100%, viéndose los clientes forzados a aceptar que, a lo largo del año, los productores pueden ocasionalmente quedarse sin existencias de algunos productos. Una dificultad adicional que deben afrontar las empresas dedicadas a la fabricación de una gama de pescado elaborado o marisco es el equilibrio a conseguir entre los costes de fabricación, por una parte, y los de mantenimiento de un inventario por otro. En la parte de la ecuación correspondiente a la producción, los costes medios de producción descienden a medida que aumenta el volumen producido debido a que los costes de instalación se minimizan y los trabajadores de la fábrica tienen tiempo suficiente para optimizar la eficiencia del proceso. Sin embargo, procesos de producción más largos darán lugar a una cantidad de productos terminados excesiva para las necesidades de los consumidores y los costes del inventario empezarán a aumentar. La consideración conjunta de costes unitarios por estos factores permitirá la determinación gráfica del nivel óptimo de producción que minimizaría los costes totales del producto. 5.5. La comunicación comercial en el mercado acuícola 5.5.1. Instrumentos de comunicación comercial en la acuicultura La comunicación comercial constituye una variable crítica en la formación de las preferencias del consumidor. Por muchas que sean las ventajas de la empresa en cuanto a producto, precio y distribución, éstas no se verán reflejadas en ventas a no ser que el consumidor sea consciente de ellas. Este conocimiento se logra a través de las acciones de comunicación comercial, por medio de las cuales el productor transmite información al mercado a través de una serie de instrumentos al efecto: la publicidad, la promoción de ventas, las relaciones públicas y la venta personal. 235 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 236 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Los principales instrumentos de comunicación son la publicidad, la promoción de ventas, las relaciones públicas, el marketing directo y la venta personal. La promoción de ventas, por medio de descuentos, regalos, cupones y otro tipo de ofertas que repercuten de una forma más o menos directa en el precio final del producto, tienen efectos limitados en el tiempo, y su influencia sobre las ventas desaparece al finalizar la campaña de comunicación. Por otra parte, este tipo de instrumentos son muy poco utilizados en este sector, casi exclusivamente por los intermediarios comerciales y excepcionalmente por los productores y transformadores en épocas de acumulación de stocks, las cuales, debido a la capacidad de regulación de la producción, son muy infrecuentes. No obstante, algunas formas de promoción de ventas, no centradas exclusivamente en el precio del producto, como la animación de redes del distribuidor han sido llevadas a cabo con el objeto de mejorar, en el punto de venta, la imagen del pescado de cultivo. En esta línea se enmarca la campaña llevada a cabo en el verano de 1999 por los productores de dorada y lubina de Canarias en grandes superficies del país. La campaña consistía en ofrecer la degustación de preparados de dorada a los clientes y el reparto de unos folletos en los que se señala la procedencia y la naturaleza de cultivo de estos pescados, acompañados por una serie de recetas para su preparación (Fig. 71). El objetivo inmediato de esta campaña promocional consiste en actuar favorablemente sobre la opinión de los consumidores acerca de la dorada y lubina de cultivo en el lugar donde realizan la compra de este tipo de productos. De esta forma se consigue, durante el tiempo en que se lleva a cabo la campaña, una predisposición favorable hacia la compra, lo que debería reflejarse en un incremento en las ventas de dichos peces. Las relaciones públicas, que buscan el reconocimiento social, repercuten directamente sobre la imagen de la empresa, pudiendo decantar la decisión última Figura 71 Portada del folleto promocional de los productores canarios de dorada y lubina 236 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 237 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI del consumidor hacia nuestros productos frente a los de un competidor con menor prestigio público. En este ámbito, las empresas acuícolas pueden beneficiarse de una imagen de mayor conservación del medio ambiente frente a la industria extractiva, si bien, para poder llevar a cabo acciones eficaces de este tipo, gozar de cierta relevancia en el macroentorno de la empresa, por lo que sólo está al alcance de las grandes empresas y agrupaciones de productores. Dentro de este instrumento de comunicación se pueden encuadrar los reportajes sobre acuicultura que se ofrecen en espacios televisivos de divulgación científica, que acercan la actividad al gran público, logrando, de esta forma, una mayor familiaridad y aceptación por parte de éste. Cuando las decisiones de comunicación recaen en un único productor con una capacidad media, o bien cuando la actividad de la empresa es novedosa o poco conocida, se establece, con frecuencia, el debate sobre la combinación adecuada del empleo de publicidad y de fuerza de ventas. Aunque son muy pocas las empresas que empleen únicamente uno de estos dos instrumentos de comunicación, la decisión entre uno u otro depende principalmente de los recursos de la empresa y de la dispersión de sus mercados. Así, a una empresa con recursos limitados que opera en un mercado muy concentrado, como puede ser el caso de un vivero de moluscos que abastece a los restaurantes de un mercado local, le resultará más ventajoso el empleo de agentes de ventas que una campaña publicitaria, opción mucho más recomendada para empresas con amplios recursos que operan en mercados geográficamente dispersos. Por otra parte, los objetivos y la forma en que de ambos instrumentos de comunicación operan sobre los consumidores, difieren considerablemente, aunque tanto la publicidad como la venta personal busquen, en última instancia, un aumento de la demanda. En el caso de la industria acuícola, la venta personal se aplica, generalmente, a una relación de carácter mercantil entre el productor y los intermediarios del canal, con un marcado énfasis en la venta del producto al cliente. Todas las empresas del sector, desde las pequeñas explotaciones particulares hasta las grandes plantas de cría y engorde, emplean agentes de ventas, cuyas responsabilidades de comunicación variarán en función de la capacidad de crecimiento de la empresa y de la estabilidad de sus relaciones en el mercado. Por su parte, la publicidad busca en mayor medida la creación de una actitud favorable hacia los productos y la empresa por parte del consumidor, que un impacto directo en las ventas, efecto que podrá tener lugar a medio plazo y a través de procesos más complejos. En España, la publicidad masiva en los medios de comunicación ha empezado a emplearse recientemente por las agrupaciones de productores, con el claro objetivo de mejorar la imagen que los consumidores e intermediarios tienen del pescado de cultivo. Un último instrumento de comunicación lo constituye el marketing directo, consistente en la comunicación directa e interactiva con el consumidor final y que se formaliza en acciones tales como la venta por correo o por teléfono. Este tipo de acciones de comunicación han sido utilizadas, con resultados desiguales, por las agrupaciones de productores de Estados Unidos y Escocia para productos transformados como los ahumados y enlatados. Sin embargo, no parece que sea, al menos por el momento, un 237 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 238 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI instrumento recomendable en nuestro país, donde la adquisición de alimentos por correo no goza de la aceptación que tiene en otros países de nuestro entorno. 5.5.2. La publicidad en la industria acuícola La publicidad es un instrumento de comunicación de masas que, mediante el uso de los medios de comunicación convencionales pretende crear y favorecer la imagen de marca y de la empresa, fomentar actitudes favorables hacia el consumo del producto y por último, influir, positivamente, en la demanda de los bienes ofertados por la empresa. Como instrumento masivo constituye la forma de comunicación comercial de mayor alcance, si bien, su efecto sobre las ventas no resulta inmediato, como sería el caso de la promoción de ventas o la acción de los agentes de ventas. No obstante, su utilidad resulta evidente cuando se trata de acondicionar los gustos de los consumidores y sus hábitos hacia el producto ofertado y la entidad que lo pone a disposición del mercado. Básicamente, los componentes clave de la comunicación publicitaria son cuatro: la fuente de información, el canal o medio a través del cual se propaga la información, el mensaje y la audiencia. En la industria pesquera, bien sea de cultivo o de captura, el comunicador, la fuente de información, puede ser una empresa particular, una institución pública o una agrupación de productores. Los ejemplos de publicidad por parte de una única empresa se circunscriben al ámbito de las grandes compañías de captura y transformación, y sus campañas, sobre todo las emitidas por televisión, son ampliamente conocidas. Dentro de estas formas de publicidad se incluyen las campañas de Pescanova y de las grandes firmas conserveras, que, dirigidas al consumidor final, buscan la creación de imagen de marca entre los compradores sin que se llegue a indicar la procedencia de la materia prima. Estas campañas individuales son muy infrecuentes en la industria acuícola, limitándose al esfuerzo de pequeños y medianos productores que operan en mercados locales y regionales, empleando principalmente anuncios en la prensa local o campañas selectivas entre los intermediarios del mercado en el que operan. La publicidad institucional reviste un carácter muy general, promocionándose el consumo de alimentos de una determinada zona geográfica. Dentro de la comunicación publicitaria realizada por este tipo de fuentes se engloban todas las campañas dirigidas a fomentar el consumo de productos autóctonos tales como «Alimentos de España», «Galicia Calidade» o «Alimentos de Andalucía». Este tipo de campañas, si bien no inciden directamente en el consumo de pescado del sector acuícola, contribuyen a favorecer la demanda de los productos de las empresas radicadas en la zona a promocionar, siendo uno de los ejemplos más claros la producción del mejillón gallego. Por último, la fuente publicitaria puede ser una agrupación de productores, cuyo objetivo principal radica en la creación de imagen y actitudes favorables hacia bienes elaborados bajo un sistema productivo común a los miembros de dicha agrupación. Dentro de este tipo de publicidad se enmarcan las campañas de la Asociación 238 5878-II.Cap5 8/2/00 10:04 Página 239 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI de Productores de Maricultura (APROMAR), destinadas a mejorar la imagen de calidad del pescado de cultivo entre intermediarios y consumidores finales que serán comentadas a continuación. En relación al medio de comunicación a emplear en las campañas publicitarias, se podrá emplear un único medio o una combinación de un conjunto de estos. En las campañas institucionales es frecuente el empleo de más de un medio de comunicación, siendo los más frecuentes la televisión y la prensa. La decisión entre el empleo de uno u otro medio, así como de las diferentes combinaciones que se puedan llevar a cabo dependerá principalmente del alcance que se pretenda lograr en cuanto al número de consumidores que reciban el anuncio y del presupuesto que la empresa u organización haya destinado para la campaña. Por último, el diseño del mensaje vendrá determinado principalmente por los objetivos que se haya marcado el comunicador. El desarrollo de un mensaje apropiado es una tarea altamente especializada y muchas empresas recurren a los servicios de una agencia publicitaria para dirigir este proceso. Los mensajes más efectivos son aquellos que se centran en un solo beneficio del producto y lo comunican de manera creíble y atractiva. Hay que utilizar información disponible sobre el comportamiento del consumidor, como la alta calidad de los pescados de cultivo, para elegir el elemento de beneficio más importante en el proceso de decisión de compra. El énfasis en el beneficio puede relacionarse con la creación de una mayor difusión de un determinado atributo del producto, como puede ser un proceso de cría y engorde que respete los parámetros del entorno naturales de la especie. Un procedimiento recomendable en el desarrollo de un mensaje publicitario es especificar la superioridad elegida mediante una estrategia creativa que presente el beneficio del producto y las características o atributos del producto que justifican el beneficio seleccionado. 5.5.3. Aplicaciones publicitarias en la industria acuícola española Como ya se ha comentado, el uso de la publicidad entre las empresas productoras de recursos de la acuicultura en nuestro país ha sido muy limitada, encabezada por las asociaciones de productores y con el patrocinio de las instituciones públicas. Los anuncios publicitarios del sector pesquero dirigidos al público español en el pasado más reciente2 hacen énfasis principalmente en la procedencia y la calidad de los productos. En el caso de la pesca de captura se incide, al mismo tiempo, en la idea de la pesca responsable, como en el caso de la campaña que el FROM ha presentado en diferentes medios de comunicación sobre el control de las tallas de las capturas. Con este tipo de campañas, las instituciones fomentan la sensibilidad de los consumidores hacia las artes de pesca que no perjudican el entorno, al tiempo que pueden aprovecharse para influir favorablemente en el consumo de ciertas especies. En esta línea puede enmarcarse la campaña que el Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación ha publicado en los suplementos de varios periódicos españo2 1998-1999. 239 5878-II.Cap5 8/2/00 10:05 Página 240 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI les promoviendo, bajo el slogan «Artesano», la imagen del bonito del norte como un alimento sano que es capturado respetando la conservación del medio ambiente (Fig. 72). Cuando se trata de especies cultivadas, el objetivo de la publicidad parece estar dirigido hacia el logro de un cambio de actitud de los consumidores en cuanto a la idea que estos tienen de calidad de los peces de granja. Una vez más, el origen y la presentación de los procedimientos productivos acordes con la naturaleza centran el contenido del mensaje. La campaña que los productores noruegos de salmón han Figura 72 Anuncio de la campaña publicitaria del Bonito del Norte difundido en España en los meses previos al verano de 1998 (Fig. 73) emplea ambos reclamos, resaltando además otros atributos del producto como la disponibilidad en cualquier época y en varios formatos. Los productores españoles integrados en APROMAR han llevado a cabo en el último año dos campañas sucesivas dirigidas a los intermediarios, la primera, y al consumidor final la segunda. La campaña dirigida a los intermediarios y restauradores consistía en un folleto en el que se destacaba el carácter natural de los procesos de cría y engorde, asegurando la buena calidad del producto. Con esta campaña se pretendía que los intermediarios actuasen como prescriptores recomendando y transmitiendo una imagen de calidad asociada al pescado «criado» (Fig. 74). La segunda campaña de APROMAR consistió en la inserción de anuncios en revistas especializadas, dirigidas a intermediarios, y suplementos de periódicos, dirigidas al consumidor final. En ellos se muestran las tres principales especies de peces de cultivo, dorada, lubina y rodaballo, resaltando su procedencia de cultivo. El bene240 5878-II.Cap5 8/2/00 10:05 Página 241 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 73 Anuncio de la campaña publicitaria del salmón noruego ficio del producto que se expone es la posibilidad de disponer de dichas especies frescas en cualquier época del año (Fig. 75). 5.5.4. La venta personal La venta personal es el instrumento de comunicación más empleado en los mercados industriales, de transformación o en el trato con los intermediarios. El vendedor es el miembro de la empresa sobre la que recae la responsabilidad principal de generar los ingresos de ventas de los que depende la supervivencia de la empresa. Sin embargo, sus actividades no se centran exclusivamente en la consecución de las ventas, siendo a su vez un muy eficaz vehículo promocional. Las tareas del vendedor comprende, entre otras, la definición de perfiles de clientes, localización de nuevos clientes, desarrollar la presentación, recepción de 241 5878-II.Cap5 8/2/00 10:05 Página 242 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 74 Folleto de la campaña de APROMAR para la mejora de la imagen del pescado de cultivo en los restaurantes Figura 75 Anuncio de la campaña de APROMAR para la mejora de la imagen del pescado de cultivo entre los consumidores 242 5878-II.Cap5 8/2/00 10:05 Página 243 IINNIICCIIOO INICIO INICIO Estrategias de mercado para empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI pedidos, así como supervisión de la distribución, del pago y de la satisfacción del cliente tras la compra. Estos papeles variarán en importancia y algunos vendedores se verán implicados en sólo algunas de estas actividades. En cualquier caso, el vendedor. La dirección de ventas será la responsable de establecer los sistemas de remuneración de los vendedores, el número óptimo de estos, las cuotas de ventas que deberán fijarse y la forma de asignarles una cartera de clientes a cada uno de ellos. Hay una serie de estructuras en que basar una organización de ventas y la decisión final dependerá de cuál es la más efectiva para asegurar la consecusión de los objetivos marcados. El método más sencillo es asignar a cada vendedor una zona, responsabilizándose de toda la gama de productos de la empresa. Esta postura funciona bien para productos homogéneos, por lo que es muy común en la industria pesquera. Sin embargo, las industrias transformadoras y los grandes mayoristas de pescado se localizan concentrados en zonas muy concretas, lo mismo ocurre con los principales productores acuícolas. La empresa podrá optar por asignar los vendedores por líneas de productos, tal como un equipo de vendedores dedicados a molucos y otros a peces en una planta que produzca individuos de ambos grupos. También se podrán asignar a clientes concretos, siempre que puedan establecerse segmentos claros entre los compradores. Así, una empresa mejillonera que abastece simultáneamente a la industria farmacéutica, a la conservera y fresco a los mayoristas de alimentación podrá especializar a sus vendedores en la atención a un grupo específico de compradores. El vendedor es el trabajador que personifica a la empresa, por lo que su capacidad de diálogo y trato al cliente serán vitales para transmitir al mercado la imagen que la empresa quiere formar. El rendimiento del vendedor está estrechamente ligado a su nivel de satisfacción en el puesto. Tratándose de un empleado que cubre funciones tan importantes para la supervivencia de la empresa en el mercado, deberá contarse con sistemas de motivación eficaces. Todos los métodos de gestión de recursos humanos en la empresa, que se exponen en el capítulo posterior, serán de aplicación por parte de la dirección de ventas. 5.6. El plan de marketing La consecusión eficiente de resultados sólidos sólo es posible si se hace énfasis en la planificación. La formalización del proceso de planificación anima a pensar de manera anticipada, lleva a una mejor coordinación del esfuerzo, crea unos instrumentos en función de los cuales medir los resultados posteriores y habilita a la dirección para afrontar los cambios del entorno. El efecto combinado de estas actividades se refleja en el establecimiento de objetivos para la empresa y estrategias mediante las que guiar la línea general de actuación. El proceso de planificación suele estar dividido en dos fases: largo plazo y planes anuales. 243 5878-II.Cap5 8/2/00 10:05 Página 244 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El plan a largo plazo diseña la dirección general que ha de orientar los esfuerzos de la empresa en un futuro que se suele considerar como un período de 3 a 5 años. De este proceso puede desprenderse la estructura en torno a la cual centrar el plan, diseñado para llegar a objetivos concretos y definir políticas para alcanzarlos. El punto de partida evidente para la planificación a largo plazo es el diagnóstico de la posición actual de la empresa en el mercado, así como de los factores que han contribuido a esta situación. Muchos de estos datos están contenidos en información disponible en el equipo de marketing. Si toda esta revisión mostrara futuros problemas en la actividad, la empresa deberá plantearse unas estrategias alternativas. El objetivo que se pretende alcanzar con la realización de las políticas propuestas en el plan puede consistir simplemente en intentar aumentar la penetración en el mercado para los productos actuales o, en el otro extremo, un cambio importante en la dirección que sigue la empresa, posiblemente hacia la diversificación en áreas totalmente ajenas al mercado actual de la empresa. Si el plan a largo plazo es suficientemente preciso, el plan anual se puede centrar en detallar la estrategia y las políticas para superar los objetivos financieros de los doce meses siguientes. Un punto de partida muy habitual en cualquier plan anual es una evaluación de la actuación en el momento corriente frente a la predicción de las ventas, de los costes de los artículos, del beneficio bruto, del gasto de marketing y de los beneficios netos previstos en la planificación a largo plazo. Si se identifica la variación, negativa o positiva, es beneficioso elaborar una explicación sobre todo ello con la finalidad de evitar incurrir en esos mismos errores en el futuro. Si hay una aceptación generalizada de los objetivos financieros marcados para el año siguiente, el proceso de planificación puede centrarse en la validación cuantitativa de esas metas financieras y definir un marketing mix óptimo. En la práctica, el plan no se desarrolla como una línea que se mueve a lo largo de una secuencia porque es frecuente que un obstáculo en cierto momento requiera la revisión de las conclusiones anteriores. El plan anual, si bien es el esqueleto de toda la actuación de marketing para los doce meses siguientes, es también la base para definir el esfuerzo que hay que dedicar a cada mercado de la empresa en todo el país. El equilibrio entre objetivos y programas al nivel de mercado dependerá de si el equipo de marketing desea centrarse en mantener el nivel de ventas en zonas fuertes actualmente o en generar crecimiento mediante la explotación del volumen que presentan las posibles oportunidades que se presentan en territorios menos desarrollados. Dada la necesidad que tiene la empresa de estar preparada para reaccionar ante los cambios, el plan también hace referencia tanto a planes totalmente alternativos como a la prueba de nuevas propuestas. Sin lo anterior, un plan anual puede, frecuentemente, degenerar en una serie de soluciones mal elegidas para asuntos de corto plazo que reflejan un intento de remediar los problemas del año anterior y predecir nuevos problemas que deberá afrontar la empresa en los meses inmediatamente siguientes. 244 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 245 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6. La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas 6.1. Importancia de la Dirección de Personal en las empresas acuícolas Todas aquéllas actividades para las que se necesiten más de una persona, precisan un orden y una coordinación entre ellas. Esta frase viene a representar el problema que tienen gran número de organizaciones de carácter empresarial que, preocupándose tan sólo de estudiar los aspectos de estrategia comercial, estructura de capitales, infraestructuras, etc., no otorgan la suficiente importancia a las personas de su empresa, considerándolas, en el mejor de los casos, como un recurso más de la actividad empresarial. La experiencia alcanzada por las empresas con éxito, las investigaciones y los analistas en materia de competitividad de empresa manifiestan, de forma continuada, que si una empresa desea obtener ventajas competitivas sostenibles necesita (Bueno y Morcillo, 1990, 22) estar bien dirigida y saber formular y desarrollar con éxito sus estrategias competitivas, y para ello la dirección de recursos humanos ostenta un importante papel de cara al éxito empresarial (González y de Elena, 1998, 97; Dowling, y Schuler, 1990). Las personas, tanto directivos como trabajadores, están presentes en todos los procesos que se llevan a cabo en la empresa, con formas e intensidad participativas distintas en cada una de ellas; por eso resulta difícil encontrar alguna organización, empresarial o no, en la que tanto los éxitos como los fracasos no estén ligados de alguna forma con el grado de bondad de la gestión de personal. Además, la gestión de personal no debiera plantearse como un conjunto de tareas rígidas totalmente sistematizadas y sin espacio para cierto grado de discrecionalidad. Es preciso tener en cuenta que en aquellas situaciones en las que la intervención humana sea posible, existen sentimientos, reacciones, comportamientos, éxitos, fracasos, etc., factores éstos que van a influir en el devenir de las acciones que se estén llevando a cabo en la empresa y que el buen directivo tiene que solventar no sólo con variables de carácter económico-laboral sino también con argumentos psico-sociológicos. Hasta tal punto puede tener fuerza esta visión de la dirección de personal, que no resulta, en absoluto, exagerado apuntar que nos encontramos ante una nueva era de empresarios que, para ser competentes, necesitan del dominio, entre otras cosas, del arte de coordinar personas tanto cuando trabajan aisladas como cuando lo hacen en grupos de trabajo1. 1 Además de la bibliografía que se adjunta en este capítulo, se aconseja a los directivos la lectura periódica de revistas de divulgación mensual como son la editada por la Asociación Española de Directores de Personal y Capital Humano (grupo Especial Directivos). 245 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 246 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Pero volviendo a los orígenes de esta disciplina, cierto es que cada vez se ha dado, y sobre todo desde la década de los ochenta, más importancia a la dirección de recursos humanos, aunque a la hora de hablar de ello, se emplean, no sin cierta confusión, diferentes acepciones: dirección de personal, dirección de recursos humanos, dirección de relaciones industriales y de personal y relaciones con empleados y personal (French, 1983). Resulta necesario exponer brevemente la diferenciación básica entre ellos para, posteriormente, decantarse en el término que en este capítulo vamos utilizar. Así, la administración de personal clásica supone una visión tradicional de la función de personal teniendo como funciones principales la aplicación de la normativa laboral: contratación y salarios fundamentalmente; por su parte todo lo relativo a relaciones industriales se refiere a la relación entre los agentes sociales (empresarios y sindicatos) y giran siempre en torno al término negociación. Por otro lado, la dirección de recursos humanos que se encarga (Chiavenato, 1981) del aprovisionamiento, de la aplicación, del mantenimiento y del desarrollo de las personas en las organizaciones. Para Hampton (1986) la dirección de recursos humanos tiene que ver con todas las actividades dedicadas a identificar y satisfacer todas las necesidades de personal de una organización: planificación, reclutamiento, selección, formación y contratación del personal, diseño de puestos de trabajo, evaluación de desempeño y administración de salarios. La necesidad de incorporar habilidades de carácter humanista a la organización del personal ha dado pie a autores como Gasalla (1993) a aportar una nueva denominación como es la «dirección de personas», la cual plantea la necesidad, tal y como habíamos señalado anteriormente, de considerar a los trabajadores como personas y no como recursos productivos equiparables a máquinas y tecnología. De todos estos vocablos, quizás sea el de Dirección de Recursos Humanos el que pueda englobar a todos los demás y es, desde luego, el que, sin olvidar la vertiente humanista, ofrece el matiz de carácter estratégico que necesita toda gestión de personas y que podrá diferenciar a unas empresas de otras. Mientras la mayoría de las pequeñas y medianas empresas subcontratan el servicio de dirección y gestión administrativa de personal, la visión estratégica y el planteamiento y necesidad del desarrollo de las personas para el progreso de todos necesita de la involucración activa de la dirección general de la empresa, quien podrá delegar en una dirección específica si el tamaño de la empresa se lo permite. La comprensión de la utilidad real de los departamentos o funciones de dirección de recursos humanos puede ampliarse con la exposición de objetivos que, citando a Chiavenato (1981), se pueden concretar en: • Crear, mantener y desarrollar un contingente de recursos humanos, con habilidad y motivación para alcanzar los objetivos de la organización. • Crear, mantener y desarrollar las condiciones organizacionales que permiten el desarrollo y satisfacción plena de los recursos humanos y la consecución de los objetivos individuales. 246 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 247 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI • Alcanzar el mayor nivel posible de eficiencia y eficacia con los recursos humanos disponibles. Llegados a este punto podemos afirmar que todo lo señalado hasta ahora es válido para empresas en acuicultura, las cuales pueden encontrar en los miembros de su plantilla una buena fuente de desarrollo para la consecución de sus objetivos empresariales. Las empresas acuícolas están necesitadas de personas que conozcan la gestión de este tipo de empresas, de profesionales conocedores de las técnicas de reproducción, mantenimiento y crecimiento de las especies, que se dediquen a la investigación, personas cualificadas en el manejo y transporte de los peces y moluscos, etc., todas ellas necesarias por mucha tecnificación que los procesos alcancen, pero también de personas que sepan organizarlas y aprovechar al máximo su potencial humano y profesional. Podemos contemplar, además, que cada vez resultan más trascendentes variables como interés, dedicación y formación del personal en el desarrollo de la empresa, máxime cuando las nuevas exigencias en materia de calidad en las empresas requieren trabajar con equipos de personas altamente cualificados, motivados e inmersos en una cultura de empresa en el que los valores de mejora continuada y flexibilidad estén presentes. Por tanto, en la actualidad, todas las empresas y, por supuesto, las acuícolas necesitan directivos capaces de transmitir estas nueva formas y mentalidad de trabajar. Por estas razones, con este trabajo se persigue ofrecer, a modo de manual o guía, al actual o futuro directivo de empresas acuícolas unas ideas y conocimientos para poder optimizar mejor el trabajo realizado por las personas que componen la empresa, presentándole modelos de dirección de recursos humanos, que incluyen varios campos de actividad, desde el estudio de los puestos de trabajo hasta el desarrollo y desvinculación de las personas en la empresa. Se pretende ofrecer, asimismo, al directivo de la empresa acuícola las ideas suficientes para que pueda convertir a los miembros de su empresa en un factor claramente diferenciador y relevante para la buena marcha de la misma. Como va a poder comprobarse, cada una de las actividades expuestas van a poderse desarrollar de forma muy parecida, por no decir idénticas, en la mayoría de las empresas (en todas las personas necesitan ser motivadas, retribuidas, seleccionadas adecuadamente, etc.), no obstante, el entorno, el sector, las particularidades del trabajo y la cultura de cada empresa obliga a un tratamiento individualizado en función de las necesidades de cada una; de ahí, que tras una exposición genérica de cada intervención, se ofrece un análisis específico de la empresa acuícola tratada, para que el directivo pueda orientarse y aplicar, en su propia empresa, lo que crea conveniente. Otra de las pretensiones de este trabajo es que pueda servir de utilidad al directivo para poder reflexionar sobre cómo se están haciendo las cosas respecto al personal en su propia empresa, cómo se están desarrollando en las empresas que conoce, y qué actuaciones y cómo se podrían implantar. Quizás pueda encontrar en él una nueva forma de ver las cosas, reorientar las que se están llevando a cabo en su empresa e, incluso, reafirmarse en sus propios procedimientos o formas de ver las 247 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 248 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI cosas. Tampoco se trata de buscar en estas páginas varitas mágicas que solucionen conflictos en las empresas de acuicultura; los departamentos de recursos humanos son departamentos de servicios que sirven al resto en las necesidades que estos tengan de personal, y la diferencia en el trabajo diario en estos departamentos no es tan grande como lo pueden ser en otros, como por ejemplo en los departamentos productivos2; con lo cual no sería aconsejable que cada persona intente encontrar su propia empresa en este documento, pero sí una guía para que, de forma flexible, pueda adaptar lo que le resulte interesante a las especifidades de su empresa. A la hora de abordar el estudio del personal en las empresas acuícolas es necesario tener en cuenta las diferentes modalidades de explotaciones existentes. Cada una de ellas tendrá unos requerimientos distintos de personal, tanto en cantidad como en cualificación, debido a que lógicamente las formas productivas son distintas. A lo largo de todo el capítulo tendremos que ir distinguiendo, en cada uno de los apartados, las diferentes vertientes empresariales. Concretamente, podemos hablar de tres producciones distintas: 1. Producciones de semillas y alevines (hatchery). Configuran una producción agroindustrial, con gran énfasis en la tecnología, en la cual tienen mucha importancia el desarrollo e investigación tecnológicos. 2. Engorde de peces. Se trata de empresas con sistemas productivos de carácter animal en el que la investigación es más técnica que tecnológica. 3. Engorde de moluscos. La producción de moluscos (mejillones, almejas y ostras, etc.) se lleva a cabo, prácticamente en su totalidad, en empresas de carácter familiar (en bateas, parques de tierra o jaulas suspendidas en el mar), agrupándose en cooperativas para las labores de comercialización. En este estudio nos vamos a dedicar a las dos primeras modalidades productivas por cuanto que la tercera, la producción de moluscos, está muy establecida y regida por comunidades familiares y su estructura no se adapta a los cánones estrictamente empresariales; sin embargo, el resto de producciones permiten un examen exhaustivo de su organización y del personal que ayude a establecer estudios de viabilidad y de organización, así como a hacer más eficientes este tipo de explotaciones. A través de la clasificación anterior abordaremos el estudio de los recursos humanos en las empresas acuícolas partiendo primero de su estructura productiva, diseñando un modelo de organigrama a partir del cual se analizan las características de todos y cada uno de los puestos de trabajo. El estudio de estos nos conducirá al establecimiento de unos perfiles que informarán de las características humanas y profesionales necesarias para ocuparlos. Una vez definidos y valorados los puestos de trabajo, será necesario seguir ejercitando una política de recursos humanos que 2 Supongamos una empresa de producción de muebles de cocina y otra acuícola. La diferencia existente entre los departamentos productivos es mucho más grande que la existente entre sus respectivos departamentos de gestión de personal o de recursos humanos (los procedimientos de selección, contratación, jornada, etc., pueden ser muy similares). Así sucede, por ejemplo, cuando una misma persona posee varias empresas en sectores totalmente distintos. 248 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 249 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ayude a la optimización del trabajo en la empresa, lo que conducirá al análisis de las posibles intervenciones a llevar a cabo como política de contrataciones, política retributiva, planes de formación, liderazgo, planes de carrera, inventario de competencias, evaluación de desempeño, etc. Todas las actuaciones a tratar quedan reflejadas en la figura 76. La disposición de cada una de ellas en el gráfico no es casual, dado que son tan numerosos y profundos los vínculos entre ellas que marcan de forma casi automática una disposición circular. Así, aunque existan grandes empresas con un organigrama muy amplio del departamento de Recursos Humanos (por ejemplo un gran banco) que se dediquen particularmente a cada una de las intervenciones en recursos humanos, eso no quiere decir que se configuren como compartimentos estancos: por ejemplo, la actividad formativa se relaciona con la selección de personal, con la contratación, evaluación del desempeño, retribución, etc. al igual que sucede con el resto de intervenciones. A lo largo del capítulo se expondrán, a modo de ejemplo, unos supuestos prácticos que hagan referencia a las directrices teóricas aportadas, de manera que sean de utilidad al directivo o aspirante a directivo de una empresa acuícola, el cual podrá comprobar hasta qué punto puede adoptarlas y adaptarlas a su empresa. Figura 76 Actuaciones concretas en materia de Dirección de Recursos Humanos que se van a analizar en este trabajo Estructura de la empresa Evaluación del desempleo Análisis de puestos de trabajo Política de promociones Política de contrataciones Política formativa Política Fuente: Elaboración propia. 249 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 250 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6.2. Estructura de puestos en las empresas acuícolas 6.2.1. Organización del personal en una empresa acuícola Para comenzar el estudio de la política de recursos humanos de esas empresas, analizaremos primero su estructura de puestos y sus necesidades de personal. Al igual que haremos con todas las intervenciones de personal, nos dedicaremos inicialmente a la presentación de la organización en una empresa de producción de alevines y semillas y, posteriormente, nos ocuparemos de las empresas dedicadas al engorde de peces. Como parece fácil comprender, es prácticamente imposible abarcar con un solo gráfico las diferentes particularidades que presentan las empresas acuícolas; sin embargo, esto no impide que en este trabajo se exponga un modelo genérico de organización que sirva de indicador para que los dirigentes de las empresas puedan diseñar su propio organigrama en función de las características de la empresa que dirigen. Para comenzar el estudio de la organización de una empresa, y máxime cuando se trata de un estudio relativo al personal de la misma, resulta pertinente empezar el estudio de la estructura de puestos de la misma, su interacción, así como las funciones y tareas más representativas en cada uno de ellos. 6.2.1.1. Estructura de una empresa de semillas y alevines Como modelo de organigrama de una empresa de producción de alevines y semillas, cuyas variantes pueden ser múltiples, proponemos el mostrado en la figura 77. Como se observa en la figura, una estructura tipo sitúa en la cúspide de la organización a la Gerencia o Dirección de la empresa, la cual tendrá que rendir cuentas al Consejo de Administración o propietarios de la empresa. En una segunda línea jerárquica se encuentran los directores: director financiero, director de personal, director técnico, director comercial y director de calidad; en la tercera línea los jefes: jefes administrativos, de mantenimiento, de compras, de producción, de investigación y desarrollo; y por debajo de estos los responsables del producto, los cuales tendrán a su cargo operarios o auxiliares. Cada puesto de la línea jerárquica puede, a su vez, disponer de los auxiliares necesarios en función de las cargas de trabajo de cada uno. Sería, a nuestro juicio, interesante asignar a algún puesto las funciones de control de calidad y planes de mejora continua, sin descartar la incorporación de un director de calidad al modelo de organigrama propuesto, sobremanera con la aconsejable normalización de procesos y aseguramiento de la calidad que toda empresa debiera incorporar. A continuación se van a especificar las funciones más importantes de los puestos que figuran en este organigrama. 250 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 251 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Figura 77 Modelo de organigrama de una empresa acuícola de producción de semillas y alevines GERENTE Director Financiero Director Personal Jefe Jefe Administrativo Mantenimiento Auxiliares administrativos Operarios Secretaría Director Técnico Jefe Compras Director Comercial Jefe Producción Director Calidad Jefe de I +D Responsable Producto A Responsable Producto B Responsable Producto C Operarios Operarios Operarios Técnicos de calidad Fuente: Elaboración propia. Tabla 57 Puestos de trabajo y funciones en una estructura tipo para una empresa de semillas y alevines Puesto GERENTE SECRETARIA DE GERENCIA Funciones y relaciones funcionales • Máximo responsable del funcionamiento de la empresa. • Coordinador de todas las actividades de la empresa, de los distintos departamentos de la misma. • Propone al Consejo de Administración los presupuestos y programas de inversión y financiación necesarios. • Relación funcional y directa con los directores de departamento. • Supervisa y canaliza tanto la información que se emite desde la Dirección General como la que se recibe, ya sea procedente de otros departamentos o desde el exterior de la empresa por los distintos medios: teléfono, fax, correos, etc. • Organiza viajes, entrevistas y reuniones dentro y fuera de la empresa y algunas veces asiste, toma nota y confecciona un informe de los temas tratados. • Transmite información e instrucciones de la Dirección General a los distintos departamentos, disponiendo normalmente de autonomía para la elaboración formal de textos y mensajes que debe transmitir. • Puesto de staff o apoyo a la persona responsable de gerencia o dirección. 251 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 252 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Departamento financiero DIRECTOR FINANCIERO JEFE ADMINISTRATIVO AUXILIARES ADMINISTRATIVOS • Máximo responsable de la política económica, financiera y administrativa de la empresa. • Supervisa las áreas de finanzas, contabilidad, inversiones, tesorería, créditos y tributación. • Encargado de atender las necesidades financieras de cada departamento, decidiendo sobre las fuentes más convenientes de financiación en cada caso. • Depende jerárquicamente del gerente. • Coordina a su jefe y auxiliares administrativos (si los tuviere). • Responsable de la administración, contabilidad y/u otras actividades del área. • Supervisa habitualmente las actividades de contabilidad, tesorería, facturación, cobros, pagos, inversiones, créditos y tributación. • Proporciona al departamento financiero la información financiera y económica necesaria para el funcionamiento de la empresa. • Prepara los balances y cuentas de resultados de la sociedad y sus filiales así como la información precisa para las liquidaciones de impuestos. • Depende jerárquicamente del Director Financiero y puede tener a su cargo auxiliares administrativos. • Colaboran en las tareas de carácter administrativo dependiendo del Jefe Administrativo. • Los elementos que componen sus tareas suelen ser de poca complejidad, pero de gran laboriosidad y monotonía. Departamento técnico DIRECTOR TÉCNICO JEFE DE COMPRAS 252 • Máximo responsable de la vertiente técnica y tecnológica de la actividad industrial de la empresa, de la política de producción y de todas las actividades relacionadas con la fabricación, aprovisionamiento de materias primas, terminación y expedición de productos. • Dirige y coordina las acciones precisas para que los productos se ajusten a las necesidades tecnológicas requeridas por el mercado. • Depende directamente del gerente. • Coordina y dirige a los jefes de compras, de mantenimiento y obras, jefes de producción y jefe de investigación y desarrollo y/o ingeniería de procesos. • Coordina a su jefe y auxiliares administrativos (si los tuviere). • Puede tratarse de compras de materia prima y/o de maquinaria y equipos. Dependiendo del tamaño de la empresa se trataría de dos puestos o uno. • En caso de compra de materia prima, será el responsable de la gestión de compras y aprovisionamiento de materias primas y productos auxiliares. Elabora los programas de compras, estudia el mercado de proveedores, informándose y tomando las decisiones de compra oportunas. Solicita oferta de los productos requeridos, negocia y cierra acuerdos de suministro. Supervisa el seguimiento de las órdenes de compra hasta su recepción en las cantidades, calidades y demás condiciones pactadas. • En el caso de compra de maquinaria, será responsable de la compra de los componentes precisos, programando las compras, estudiando las ofertas de los proveedores y estableciendo las opciones pertinentes. A su vez, supervisa las órdenes de compra hasta su recepción en las cantidades, calidades y demás condiciones pactadas. • Depende jerárquicamente del Director Técnico y puede estar auxiliado en su función, si es preciso. 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 253 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI JEFE DE MANTENIMIENTO • Responsable del mantenimiento —tanto en su faceta preventiva como en la correctiva— de la infraestructura, instalaciones y equipos productivos. • Establece los programas de mantenimiento preventivo, analiza sus resultados e introduce los ajustes precisos. Supervisa las tareas de reparación, organizando y revisando la labor de los operarios y técnicos de mantenimiento si los tuviere. • Depende jerárquicamente del director técnico y puede tener operarios y técnicos de mantenimiento a su cargo. JEFE DE INVESTIGACIÓN Y DESARROLLO • Responsable de la investigación de nuevos procesos productivos, así como de las causas de las enfermedades y medios para prevenirlas. • Responsable de la mejora de los procesos productivos. • Ingeniería de procesos. JEFE DE PRODUCCIÓN • Responsable directo de todas las actividades de carácter productivo que se desarrollan en la empresa. Supervisa y dirige, con la colaboración de los responsables de cada sección productiva, todos los aspectos relacionados con el control de los diversos productos. • Depende jerárquicamente del Director Técnico y coordina a los responsables de cada sección productiva. RESPONSABLES DE PRODUCTO A, B, C OPERARIOS • Responsables directos de las actividades productivas que en su sección se lleven a cabo. Estas pueden ser un criadero (reproductores, huevos y larvas), nursery de alevines, criadero y semillero industrial de moluscos, etc. • Estudia las necesidades de su área productiva y propone los cambios y mejoras oportunos para alcanzar rendimiento óptimo de la planta. • Depende del Jefe de Producción y supervisa y controla un equipo de varios operarios. Dependiendo de la dimensión de la sección podrían existir también otro nivel de mandos intermedios, capataces o supervisores. • Organiza y distribuye el trabajo entre los miembros del equipo. • Se ocupa de su formación y entrenamiento en el puesto de trabajo. • Tareas de cuidado de las instalaciones. • Captura de reproductores, cuidados y transporte, inducción de la puesta, fecundación, incubación, funcionamiento de aparatos, controles, distribución de la comida, etc. Departamento de Recursos Humanos DIRECTOR DE PERSONAL • Responsable máximo de la política de personal de la empresa. • Recluta, selecciona y contrata las personas necesarias para la empresa. • Encargado de establecer los planes de formación, promoción, retribución relaciones laborales, y, en definitiva, de todo lo concerniente a la administración del personal. • Depende jerárquicamente del director de la empresa, se encuentra en línea junto con el resto de directores, y de este puesto dependen sus jefes administrativos y auxiliares respectivos si los tuviere. Departamento comercial DIRECTOR COMERCIAL • Máximo responsable de la política de promoción, venta y distribución de los productos de la compañía. • Encargado de definir las políticas comerciales y controlar su aplicación, dirigiendo su actividad comercial. • Depende funcional y directamente del director general, al mismo nivel jerárquico que el resto de directores, y de él dependen los jefes comerciales y comerciales si los tuviere. 253 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 254 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Departamento de calidad DIRECTOR CALIDAD • Máximo responsable de la gestión de calidad de la empresa, tanto en lo referente a los productos como a los procesos y procedimientos. • La existencia de este puesto va asociada a la existencia de una filosofía de calidad integral, siendo la misión principal del puesto su impulsión, desarrollo y control. • Supervisa el desarrollo y la aplicación de las normas de calidad en cuanto a los productos, impulsa y coordina todas las actividades destinadas a mejorar la eficacia y eficiencia de los procesos en las diferentes áreas: compras, producción, distribución, venta, servicio a clientes, etc. • Responsable de inculcar la filosofía de calidad a todas las personas y puestos de la empresa, así como del establecimiento de las bases para el cálculo de los costes de calidad. • Depende directamente del Director Gerente, y puede tener a su cargo técnicos en calidad. Fuente: Elaboración propia. 6.2.1.2. Estructura de una empresa de engorde de peces Un ejemplo de organigrama de una empresa acuícola de engorde de peces podría ser el que se muestra en la figura 78. Figura 78 Modelo de organigrama de una empresa acuícola de engorde de peces GERENCIA Director de explotación Jefe Administrativo Administrativos Fuente: Elaboración propia. 254 Secretaría Director de explotación Director de explotación Capataz jaulas Capataz jaulas Capataz jaulas Operarios (3 ó 4) Operarios (3 ó 4) Operarios (3 ó 4) Jefe Comercial Comerciales 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 255 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La estructura de una empresa de engorde de peces es, como ha podido apreciarse, relativamente más sencilla que la de una dedicada a semillas y alevines. La organización de este tipo de empresas suele ser similar a la de cualquier empresa de reproducción animal, estructurada en explotaciones que se dividen en grupos de operarios a cargo de un capataz. El tamaño de la empresa viene configurado por el número de explotaciones, que, generalmente, suelen estar separadas geográficamente por una distancia mínimamente prudencial y, asimismo, deben respetar un tamaño óptimo en ambos casos, y entre otras razones, para evitar propagaciones de enfermedades o epidemias. El director de explotación abarcaría, asimismo, las funciones de dirección de personal, dirección financiera y dirección técnica, estando apoyado en su tarea por los jefes comercial y administrativo. Las funciones de mantenimiento, compras y dirección productiva estarían también a cargo del director de explotación; labores éstas que suelen ser menos complejas que sus afines en las empresas de semillas y alevines. Las funciones más importantes de estos puestos son: Tabla 58 Puestos de trabajo y funciones en una estructura tipo para una empresa de engorde Puesto GERENTE Funciones y relaciones funcionales • Máximo responsable del funcionamiento de la empresa. En este puesto ha delegado el Consejo de Administración o propietarios de la empresa para su buen funcionamiento. • Máximo responsable de la política económica, financiera y administrativa de la empresa. • Propone al Consejo o Propiedad de la empresa los presupuestos y programas de inversión y financiación necesarios. • Coordinador de todas las actividades de la empresa y de las distintas explotaciones de la misma. • Supervisa las áreas de finanzas, contabilidad, inversiones, tesorería, créditos y tributación. Encargado de atender las necesidades financieras de cada explotación, decidiendo sobre las fuentes más convenientes de financiación en cada caso. • Relación funcional y directa con los directores de explotación. • Coordina a su jefe y auxiliares administrativos (si los tuviere). • Responsable máximo de la política de personal de la empresa. • Recluta, selecciona y contrata las personas necesarias para la empresa. • Responsable del mantenimiento —tanto en su faceta preventiva como en la correctiva— de la infraestructura, instalaciones y equipos productivos. • Encargado de establecer los planes de formación, promoción, retribución, relaciones laborales, y, en definitiva, de todo lo concerniente a la administración del personal. • Máximo responsable de la gestión de calidad de la empresa, tanto en lo referente a los productos como a los procesos y procedimientos. • Máximo responsable de la política de promoción, venta y distribución de los productos de la compañía. 255 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 256 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI DIRECTOR DE EXPLOTACIÓN SECRETARIA DE GERENCIA • Responsable directo de todas las actividades de carácter productivo que se desarrollan en la empresa. Supervisa y dirige, con la colaboración de los responsables de cada sección productiva, todos los aspectos relacionados con el control de las diversas especies. • Máximo responsable de la vertiente técnica y tecnológica de la actividad industrial en cada explotación. • Puede encargarse de las compras de materia prima y/o de la maquinaria y de los equipos necesarios. • Ayuda en las labores de reclutamiento, selección y contratación de las personas necesarias para la explotación. • Depende directamente del gerente. Coordina a los capataces y sus equipos de operariosbuceadores. • Coordina a su jefe y auxiliares administrativos (si los tuviere). • Supervisa y canaliza tanto la información que se emite desde la Dirección General como la que se recibe, ya sea procedente de otros departamentos o desde el exterior de la empresa por los distintos medios: teléfono, fax, correos, etc. • Organiza viajes, entrevistas y reuniones dentro y fuera de la empresa y algunas veces asiste, toma nota y confecciona un informe de los temas tratados. • Transmite información e instrucciones de la Dirección General a las distintas explotaciones, disponiendo normalmente de autonomía para la elaboración formal de textos y mensajes que debe transmitir. • Puesto que podemos considerar de staff o apoyo a la persona responsable de gerencia o dirección. JEFE ADMINISTRATIVO • Responsable de la administración, contabilidad y/u otras actividades del área. • Supervisa habitualmente las actividades de contabilidad, tesorería, facturación, cobros, pagos, inversiones, créditos y tributación. • Proporciona al gerente y a su director de explotación la información financiera y económica necesaria para el funcionamiento de la empresa. • Prepara los balances y cuentas de resultados de la sociedad y sus filiares y la información precisa para las liquidaciones de impuestos. • Depende jerárquicamente del Director de Explotación y puede tener a su cargo auxiliares administrativos. AUXILIARES ADMINISTRATIVOS • Colaboran en las tareas de carácter administrativo dependiendo del Jefe Administrativo. • Los elementos que componen sus tareas suelen ser de poca complejidad, pero de gran laboriosidad y monotonía. CAPATAZ DE JAULAS • Depende jerárquicamente del Director Técnico y coordina a los responsables de cada sección productiva. Responsable directo de las actividades productivas que en su sección se lleven a cabo. Estas pueden ser un criadero (reproductores, huevos y larvas), nursery de alevines, criadero y semillero industrial de moluscos, etc. • Depende del Jefe de Explotación y supervisa y controla un equipo de varios operarios. • Organiza y distribuye el trabajo entre los operarios con los que trabaja directamente. • Se ocupa de la formación y entrenamiento de su equipo de operarios. OPERARIO • • • • Fuente: Elaboración propia. 256 Tareas de cuidado de las instalaciones. Revisado y reparación de las jaulas o estanques. En caso de jaulas se precisa buceo. Distribución de la comida. Recogida de las especies. 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 257 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6.2.2. Análisis de Puestos de Trabajo La evaluación de puestos o Análisis de Puestos de Trabajo (en adelante, APT) es una técnica que consiste en determinar sistemáticamente la posición de los puestos de trabajo en la estructura de salarios basándose en el análisis de la importancia relativa de las tareas de que se trata, esto es, es un medio técnico que trata de estimar el valor relativo de los trabajos de una empresa (Claver, Gasco y Llopis, 1995; Fernández Caveda, 1995; Gómez Mejía, Balkin y Cardy, 1996), sin tener en cuenta el titular del puesto3. El APT es una herramienta muy útil, entre otras cosas, porque ayuda a establecer una jerarquía de puestos con el objetivo de implantar una política salarial en una empresa, y viene a responder a la pregunta ¿Cuánto más importante es un puesto que otro? A nuestro juicio, en muchas ocasiones no desmotiva la existencia de un salario considerado por el empleado como bajo, sino que le resulta mucho más frustrante el hecho de observar otra persona que, con un puesto similar al suyo, tenga una retribución claramente superior. Este conflicto se resuelve, en parte, con el APT, el cual, aunque sin ausencia de inconvenientes (ver tabla adjunta), prácticamente perfila por sí sólo la parte fija del salario de una persona. La parte variable del salario vendrá dada por otros factores como son la consecución de objetivos, competencia profesional y actitudes humanas, valores estos que podrán descubrirse mediante la evaluación del desempeño. Dentro de los diferentes métodos existentes para evaluar los puestos de trabajo descartamos los métodos globales, que jerarquizan los puestos sin detenerse en factores concretos, analizándolos de una forma global. Estos métodos globales pueden ser útiles en empresas con una plantilla muy pequeña y un abanico de puestos muy reducido (menor a 10 puestos). Sin embargo, las empresas acuícolas tienen una dimensión lo suficientemente grande como para necesitar métodos de valoración de puestos más objetivos y analíticos; concretamente se aconseja utilizar el método de asignación por puntos. El método propuesto, de asignación por puntos, permite asociar una puntuación a cada puesto de trabajo; gracias a esta puntuación se podrá comparar la importancia que tiene cada uno de los puestos en la empresa. Para la puesta en marcha de todas las fases del proceso se nombrará un comité de valoración de puestos4, el cual plasmará todo el proceso en un documento, denominado manual de valoración de puestos de trabajo, en el que quedan recogidos los factores utilizados, su definición, la definición de los grados y su medida, así como el cuestionario para la observación de cada uno de los puestos de trabajo. 3 4 El titular del puesto será evaluado por medio de la intervención en materia de recursos humanos denominada evaluación del desempeño, que se estudiará más adelante. Suele estar compuesto por representantes de la dirección de la empresa, representantes de los trabajadores y una consultora en recursos humanos externa. De no ser así, los acuerdos a que se llegasen podrían ser boicoteados por las partes no intervinientes. 257 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 258 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 59 Ventajas e inconvenientes del análisis de puestos de trabajo Ventajas del APT 1. Mayor objetividad en el sistema retributivo. 2. Mejor gestión de los Recursos Humanos. 3. Mayor y más exacto conocimiento de las misiones, responsabilidades y rendimientos de cada uno de los puestos de trabajo. 4. Establecimiento de estructuras y medidas organizativas más racionales. 5. Mejora el clima laboral y supone un mayor estímulo. 6. Ayuda a descubrir necesidades de formación. Inconvenientes del APT 1. 2. 3. 4. Resistencia a los cambios, suspicacias. Aumento del coste. Falta de colaboración de los mandos. Reclamaciones de los puestos infravalorados. 5. El tradicional estatus social de ciertos oficios y profesiones y la ley de la oferta y de la demanda. 6. Puede crear algún conflicto por discrepancias salariales después del APT. Fuente: Elaboración propia. De forma más precisa, las etapas que comprende este método son las siguientes: 1. Selección y definición de factores. Los factores pueden ser: Adopción de decisiones, autonomía de trabajo, condiciones de trabajo, conocimientos, creatividad, experiencia, formación, responsabilidades en materia de seguridad, esfuerzo, responsabilidad por el trabajo de otros, condiciones de trabajo, etc. 2. Repartición de los criterios en grados. Seleccionados los factores, es preciso dividirlos en grados a fin de poder aplicarlos a los puestos. Cada factor va a tener «n» grados, de menor a mayor importancia o cualidades. Por ejemplo, el factor Supervisión y Mando puede desglosarse en cinco grados: Grado 1: hasta 3 personas; grado 2: de 4 a 8 personas; grado 3: entre 8 y 15; grado 4: entre 15 y 30 y grado 5: mando sobre más de 30 personas. 3. Ponderación de factores. En general, se efectúa en forma pragmática la ponderación y dependerá del conocimiento en la labor de la empresa. La importancia de los factores dependerá del tipo de empresa, así en una empresa de servicios tendrá mucha importancia el factor relación con personas, en cambio en una de carácter industrial, las condiciones de trabajo pueden ser consideradas muy relevantes. Los factores hay que jerarquizarlos de forma que uno tenga, pongamos por caso, el doble de importancia que otro, igual que otros, o quizás la mitad que otro factor. 4. Asignación de puntos a cada grado. El comité de valoración de puestos deberá otorgar a cada uno de los respectivos grados en los que se gradúa cada factor una puntuación. La puntuación de cada puesto resultará de la suma de los productos entre los puntos de cada factor y la ponderación de éste. 5. Validación del plan. Se coge una muestra de puestos a fin de comprobar si se establece una distancia adecuada entre los puntos y una jerarquía aceptable. Se 258 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 259 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI pueden modificar la ponderación de factores si se detectara alguna anomalía hasta que llegue a la ponderación definitiva. Concretamente, y para las empresas de acuicultura, y a modo de sugerencia o ejemplo para el comité de valoración de cada empresa en particular, podríamos elegir los siguientes factores: Tabla 60 Tipología de factores a considerar en el APT de una empresa acuícola • Factores que miden la CAPACIDAD necesaria para ocupar el puesto: 1. Formación o educación. 2. Experiencia. 3. Iniciativa. • Factores que miden el nivel de ESFUERZO necesario para el titular del puesto: 4. Esfuerzo físico. 5. Diversidad de tareas. • Factores que miden el grado de RESPONSABILIDAD del titular: 6. Responsabilidad por el trabajo de otros. 7. Responsabilidad por la tarea. 8. Relaciones con otros. • Factores que miden las CONDICIONES DE TRABAJO a las que está sometido el titular del puesto: 9. Condiciones de trabajo. Fuente: Elaboración propia. Los puestos de trabajo de nuestra hipotética empresa acuícola van a ser sometidos a valoración de los factores citados, atendiendo a los grados y puntuación que figuran en el Anexo E. El comité de valoración y análisis de puestos de cada empresa tiene libertad para elegir los factores que consideren más relevantes para diferenciar unos puestos de otros, así como para que, una vez elegidos, otorgar a cada uno de ellos una importancia o peso específico. Por ejemplo, no puede tener la misma importancia el factor condiciones de trabajo en una empresa minera (en la cual la variabilidad entre las condiciones de trabajo de unos y otros puestos puede ser muy grande) que en una academia formativa (en la cual no se diferencian apenas las condiciones de trabajo y de unos y otros). En las empresas de acuicultura se podría suponer que, a pesar de seleccionar los mismos factores, la importancia de éstos puede variar, según se trate de una empresa de semillas y alevines o de una empresa de engorde de peces, detalles estos que estudiaremos en los subapartados siguientes. Resulta de gran interés resaltar nuevamente la importancia del papel desempeñado por el comité de valoración. Los debates en el seno de la comisión son 259 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 260 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI trascendentales: desde la elección del método (que depende del sector y tamaño de la empresa), análisis de la situación y problemática de la empresa en esos momentos, hasta la ponderación de los factores son decisiones que pueden afectar posteriormente a la política retributiva de la empresa, política de formación, política de promoción, etc. Así, por ejemplo, un comité que considere con la máxima puntuación el nivel de experiencia en la empresa transmite la idea de que la estrategia de recursos humanos en la empresa estima oportuno contar con personal experto; si potencia la iniciativa, este factor estaría, según este razonamiento, altamente valorado. 6.2.2.1. Análisis y valoración de puestos en una empresa de semillas y alevines Partiendo de los factores elegidos en la exposición genérica anterior sobre métodos utilizados en el APT, se pueden proponer las siguientes ponderaciones: • 3 puntos: factores experiencia, iniciativa, y responsabilidad por la tarea. • 2 puntos: factores formación, diversidad de tareas, responsabilidad por el trabajo de otros y relaciones con otras personas. • 1 punto: factores esfuerzo físico, y condiciones de trabajo. Con todo ello resulta que la valoración e importancia relativa de cada puesto está constituida por la suma de los productos de la ponderación de cada factor y los puntos obtenidos por el puesto en este factor. La tabla 61 refleja el resultado del análisis de puestos de trabajo con el ejemplo propuesto. La tabla refleja una jerarquía de puntuaciones que, a simple vista, parecen lógicas. El puesto de gerente ha resultado ser el más valorado, y el de auxiliar administrativo el que menos puntuación ha obtenido. Tanto con éstos como en el resto de puestos de trabajo se observa la importancia relativa entre unos y otros; un observador interesado, conocidas las funciones de cada puesto, podría haberse imaginado que unos puestos son más importantes que otros, pero necesitaría un instrumento para poder determinar «en cuánto es más importante un puesto que otro»; así, por ejemplo, dos puestos que aparentemente tienen importancia parecida como son el Jefe de I + D (740 puntos) y el Jefe de Producción (760 puntos) resulta que el segundo es algo más importante que el primero. Esta diferencia cuantitativa nos va ser de gran utilidad para el establecimiento de políticas remunerativas. En el Anexo F hemos adjuntado los perfiles profesiográficos de cada puesto, o perfil de exigencias para que una persona aspirante al puesto pueda ocuparle de forma adecuada. Los perfiles profesiográficos se obtienen del propio APT y son muy útiles para las políticas de reclutamiento y selección de personal, planes formativos, evaluación del desempeño y planes de carrera o promoción; dado que es muy difícil que exista una convergencia total entre el perfil profesiográfico del puesto y el perfil humano y profesional de la persona que en esas fechas lo está ocupando. 260 50 50 50 Director Personal Director Comercial Director Calidad Fuente: Elaboración propia. 30 30 Operario producción 40 Jefe de Producción Responsable Producto 40 Jefe de I + D 50 Director Técnico 40 30 Auxiliar Administrativo 40 40 Jefe Administrativo Jefe de Mantenimiento 50 Director Financiero Jefe de Compras 60 40 Secretaria Gerente Formación 2 50 50 50 10 40 40 40 40 40 50 10 40 50 4 60 Experiencia 3 70 70 70 30 40 40 40 40 40 70 20 50 70 30 80 Iniciativa 3 20 20 10 50 30 30 30 30 20 20 10 10 10 10 10 Esfuerzo físico 1 70 70 70 20 60 50 50 50 50 70 20 40 70 40 80 Diversidad de tareas 2 20 20 30 10 30 40 30 30 30 50 10 20 20 10 50 Responsabilidad por el trabajo de otros 2 40 40 20 30 30 30 30 20 30 40 20 20 20 20 30 Responsabilidad por la tarea 3 70 70 70 10 60 60 60 60 60 70 10 70 70 40 80 Relaciones con otros 2 10 10 10 30 20 20 20 20 20 20 10 10 10 10 20 Condiciones de trabajo 1 930 930 880 430 740 760 740 710 730 1.000 310 690 860 550 1.080 Total 17/2/00 07:27 Gerente Puestos Factores Pesos de los factores Un ejemplo de análisis de puestos de trabajo (1) Tabla 61 5878-II.Cap6 Página 261 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas 261 BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 262 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6.2.2.2. Análisis y valoración de puestos en una empresa de engorde de peces Al igual que hemos desarrollado el análisis de puestos en las empresas de alevines y semillas, en las empresas dedicadas a engorde de peces, al tratarse de puestos y condiciones de trabajo diferentes a los de aquéllas, es necesario un replanteamiento del nivel de importancia de los factores elegidos. Así que se propone la siguiente tabla ponderativa de factores: • 3 puntos: factores diversidad de tareas, condiciones de trabajo y esfuerzo físico. • 2 puntos: factores experiencia, iniciativa, responsabilidad por la tarea y responsabilidad por el trabajo de otros. • 1 punto: factores formación y relaciones con otras personas. Tras las deliberaciones del comité de valoración de puestos de trabajo, y una vez confeccionado y aplicado su correspondiente manual de valoración5 (que lo ideal es que fuera expresamente confeccionado y «personalizado» para cada empresa), supongamos que el resultado es el que figura en la tabla 62. En él se observa, como es lógico, que el puesto más valorado ha sido el de gerente (790 puntos), el cual es el máximo responsable de todas las explotaciones existentes. En cada explotación, el gerente dispone de una persona encargada de dirigirla, el Director de explotación ; por eso este puesto le sigue en importancia (770) pero no muy alejado, debido al trabajo que desempeña, mucho más cercano de la operatoria de trabajo que el propio gerente, en contacto directo con los capataces y operarios. En el ejemplo expuesto, la importancia de los operarios de jaulas o tanques es grande, equivalente a la del jefe administrativo, a pesar de necesitar éste de mayor titulación académica para ejercer sus funciones, y superior al de auxiliar administrativo. El puesto de capataz constituye el centro de gravedad de todo el trabajo en jaulas; suele trabajar con dos o tres operarios, con los que desciende (bucea) a las jaulas, organizando el ritmo de trabajo y los turnos de descenso. 6.3. Incorporación de personal 6.3.1. Política de incorporación del personal: modelos de contratación Toda empresa, y por supuesto la acuícola, cuenta con sus formas y filosofía propias de incorporación de personas, que pueden deducirse, por ejemplo, por medio de una entrevista con el director o el empresario, el cual nos puede transcribir las variables que para él suelen ser más relevantes para el ingreso de nuevos trabajadores. Pero no 5 Para simplificar tenemos en cuenta el mismo manual de valoración que habíamos utilizado para la empresa de alevines y semillas (Anexo E), a pesar de que es fácil deducir que podrían modificarse algún factor o ponderación de los mismos. En este sentido llama poderosamente la atención el factor condiciones de trabajo, el cual podría en una empresa de engorde de peces definirse de otra forma y podría contener mayor número de grados. 262 30 50 50 30 20 20 Director de explotación Jefe Administrativo Auxiliar Administrativo Capataces Operarios Fuente: Elaboración propia. 50 Secretaria Gerente Formación 1 Gerente Puestos Factores 20 40 30 40 50 30 60 Experiencia 2 20 50 30 50 70 20 80 Iniciativa 2 3 50 40 20 20 20 20 10 Esfuerzo físico 3 30 30 30 30 60 40 60 Diversidad de tareas 2 10 20 10 20 30 10 40 Responsabilidad por el trabajo de otros 2 30 30 20 20 30 30 30 Responsabilidad por la tarea 1 20 40 20 50 60 70 80 Relaciones con otros 3 30 30 10 10 20 10 10 Condiciones de trabajo 530 600 370 540 760 490 790 Total 17/2/00 07:27 Pesos de los factores Un ejemplo de análisis de puestos de trabajo (2) Tabla 62 5878-II.Cap6 Página 263 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas 263 BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 264 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI en todos los casos estos planteamientos, que denominamos política de incorporación del personal, están suficientemente estructurados y sistematizados, tal y como proponemos y sugeriremos en este apartado. La política de incorporación de personas consiste, por tanto, en el diseño de las líneas de actuación básicas de la empresa ante la necesidad de cubrir una vacante para un puesto determinado, bien se trate de un puesto de nueva creación o nos encontremos ante un puesto en el que ha causado baja su titular. Así, por ejemplo, la empresa podría optar, ante la posibilidad de una promoción, a que el puesto superior se cubra por medio de la contratación interna o acudir a la contratación externa; igualmente en la política de incorporación cabe reflexionar (Fig. 79) sobre la política de contrataciones, subcontrataciones, utilización de las empresas de trabajo temporal, planes de acogida e integración de nuevas personas, etc. Como se ha visto, no todas las posibilidades de incorporación de personas conllevan una relación contractual con la persona incorporada; puede haber personas contratadas, otras que procedan de empresas de trabajo temporal y otras que, laboralmente dependientes de otras, trabajen en subcontratas. Quedan descritas, de esta manera, las distintas posibilidades de abordar una política flexibilizadora de personal dedicado a la empresa y que pueda hacer frente a las oscilaciones en las necesidades productivas que pueda llegar a tener la organización a lo largo del tiempo. El proceso de contratación interna (reclutamiento interno) puede llevarse a cabo de dos maneras diferentes. La primera va unida a los procesos de promoción de las personas en la empresa de tal manera que, conocidas las competencias de las mismas y su línea de puestos promocional, la organización pretenda motivar por este procedimiento a personas cuya evaluación del desempeño y competencia en puestos de menor relevancia ha sido notable. Queda demostrada así la gran importancia que tiene la relación tan estrecha entre contratación interna y planes promocionales en la empresa. Otro procedimiento para acudir a la contratación interna consiste en la existencia de una plaza en un puesto determinado y que la política de personal de la Figura 79 Opciones de incorporación de personas a la empresa # Reclutamiento interno " Contractuales METODOS PARA LA INCORPORACION DE PERSONAS A LA EMPRESA # Reclutamiento externo " Sin relación laboral # Trabajadores en misión (ETTs) " # Subcontratación de actividades " 264 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 265 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI empresa decida que, preferentemente, pueda ser ocupada por personas de la propia empresa de menor rango jerárquico. En este caso la organización funciona como un mercado, ofertando el puesto, siendo necesario comunicarlo a los diversos departamentos o secciones. Esta forma de cubrir vacantes por medio del reclutamiento interno tiene sus ventajas en costes y rapidez para la empresa siempre y cuando en ella estén incorporadas intervenciones en materia de personal como planes de promoción, evaluación de competencias, planes formativos, análisis de clima laboral, etc. Los procesos de selección basados en reclutamiento interno son más rápidos y baratos, sobre todo cuando se conocen los perfiles profesiográficos de los puestos y los perfiles profesionales y competenciales de las personas: tan sólo es necesario combinarlos correctamente. A su vez, los planes promocionales son motivadores para el personal, mucho más que la incorporación a un puesto de personas del exterior cuando se tiene conocimiento de la existencia de una persona en la empresa con perfil adecuado. Se aconseja también a las empresas la realización y puesta en marcha de inventario de habilidades y competencias para que, conociendo mejor la cualificación del personal, se pueda evitar en determinados casos acudir al reclutamiento externo sin que exista realmente tal necesidad, ya que el puesto podría ser ocupado a través de la promoción interna. Por su parte, la contratación externa consiste en recurrir a candidatos externos para cubrir las vacantes en la organización. Puede resultar realmente interesante como remedio a la imposibilidad de la contratación interna, convirtiéndose en una obligación cuando no existe en la organización ningún candidato que se adapte suficientemente a las necesidades de la empresa. También es una manera de renovar parte de los recursos humanos, tanto en lo referente a conductas como a alternativas culturales y tecnológicas. Las fuentes de reclutamiento externo son muy variadas: desde bases de datos de centros de formación, anuncios en periódicos y revistas especializadas, INEM, agencias privadas de colocación (en España legales únicamente las que están sin ánimo de lucro), la propia base de datos del departamento de personal de la empresa, etc. Ante cualquier tipología de reclutamiento, la empresa tendrá que estudiar los planes formativos que pueden llevar incorporadas las nuevas personas para que su nivel de acoplamiento al puesto sea lo más efectivo posible. Una vez seleccionados los candidatos potenciales al puesto, estos serán sometidos a los procesos de selección pertinentes, puestos en marcha por la propia empresa si cuenta con los medios y profesionales adecuados o por gabinetes o consultorías especializadas, a los cuales se les podrá encargar parte o todo el proceso de selección. Otro procedimiento de selección de personal (con ánimo de contratar) consiste en la búsqueda, en primera instancia, de una persona en misión a través de las empresas de trabajo temporal. El proceso es tan sencillo como contratar con la ETT 265 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 266 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI la puesta a disposición de una persona y, pasado un período y contrastada su competencia, facilitarle la contratación directa por parte de la empresa, evitándose, de esta forma, el proceso de selección. En cuanto a política de contrataciones, nos parece más interesante exponer un modelo de contratación para las empresas de acuicultura que detenernos en las características de cada una de las modalidades contractuales que, obviamente, serán citadas (en vigor en julio 1998). Este modelo trata de ayudar a la necesidad flexibilizadora que tiene el empresario de hoy día. Para ello, utilizaremos el modelo de «empresa flexible» elaborado por el Institute of Manpower Studies (Fig. 80)6, de gran utilidad porque sitúa dentro de un marco sencillo los nuevos elementos que figuran en las prácticas de los empresarios en materia de mano de obra, manifestando las relaciones existentes entre ellas y su posibilidad de aplicación a diferentes sociedades y grupos de trabajadores» (Atkinson J.S, 1975)7. El modelo contempla tres tipos de trabajadores: 1. Trabajadores del núcleo. Son trabajadores que ocupan puestos de trabajo considerados fundamentales en la empresa, que inciden sobremanera en la calidad ofrecida al cliente y en la imagen de la organización. Se trata de puestos que constituyen los pilares básicos de las actividades desarrolladas en la empresa. Es aconsejable que las personas que ocupen estos puestos tengan buenas aptitudes y su actitud y motivación en el trabajo sean igualmente elevadas. Figura 80 La empresa flexible 1 6 1. Empleo autónomo 2. Agencias de empleo temporales 3. Subcontratos 5 4 7 4. Grupo núcleo (flexibilidad funcional) 5. Grupo periférico (flexibilidad numérica) 2 6. Grupo periférico 2. Contratos a c/p. 7. Trabajadores a tiempo parcial (flexibilidad numérica) 8. Empleo a tiempo compartido 3 9 8 10 11 Fuente: IMS (Atkinson, 1987, 107) y elaboración propia. 6 7 Seguiremos la explicación aportada por Atkinson, 1987, del modelo del IMS. Este modelo ha sido citado también en Martín A., 1994 , y para esta ocasión es también de gran utilidad. 266 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 267 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2. Trabajadores periféricos. Estos empleados realizan tareas consideradas ordinarias y muy mecánicas, que vienen a ser auxiliares a las propias de núcleo. Estas personas conviene que tengan un nivel de cualificación bueno, aunque sus aptitudes son fáciles de encontrar en el mercado de trabajo exterior. 3. Trabajadores exteriores. Son personas que no son empleados de la empresa, y que proceden de subcontrataciones, por lo que dependen de otras empresas que ofrecen sus servicios especializados por medio de una relación mercantil. Se sugiere, de acuerdo con el modelo planteado, que los trabajadores de núcleo sean contratados de forma permanente, con predominio de contratos por tiempo indefinido. Por su parte, los trabajadores periféricos pueden ser utilizados en flexibilizar la plantilla en épocas de gran actividad, pudiéndose contratar de forma temporal. Los exteriores, por su parte, pueden ser incorporados a la organización mediante subcontratas o bien como trabajadores en misión, procedentes de ETTs. Siguiendo esta línea metodológica confeccionamos la siguiente tabla que relaciona tipo de puesto con posibilidades contractuales. Tabla 63 Relación entre el tipo de puesto de trabajo y tipo de contrato Tipo de puesto NUCLEO PERIFERICO EXTERIOR Tipo de contrato • Contrato indefinido. • Transformación de contratos temporales y de duración determinada, en indefinidos. • Trabajadores mayores de 45 años. • Mujeres en oficios o profesiones en los que se encuentren subrepresentadas. • Trabajadores minusválidos. • Trabajadores afectados por síndrome tóxico. • Contrato a tiempo parcial. • Contrato de trabajo a domicilio. • Contrato de trabajo de grupo. • • • • • • • • • • Contrato de relevo. Contrato en prácticas. Contrato para la formación. Contrato de obra o servicio determinado. Contrato eventual por circunstancias de la producción. Contrato de interinidad. Contrato de sustitución por anticipación de la edad de jubilación. Contrato a tiempo parcial. Contrato de trabajo a domicilio. Contrato de trabajo de grupo. • Subcontratar actividad. • Trabajador en emisión. Fuente: Elaboración propia. 267 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 268 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Las posibilidades de flexibilización dependen, según lo anteriormente expuesto, de la consideración de este criterio clasificador de la plantilla. Los trabajadores de núcleo pueden estar expuestos a flexibilidad cuantitativa interna (variación en la jornada, número de horas, etc.), flexibilidad salarial, flexibilidad funcional o flexibilidad geográfica. Los trabajadores periféricos pueden verse afectados por una flexibilidad cuantitativa externa, flexibilidad salarial y flexibilidad cuantitativa interna. Los trabajadores exteriores dependen únicamente de externalidades de la empresa cliente (en este caso, más bien, se flexibiliza la relación entre empresas, considerando en ellas los trabajadores autónomos) o de la decisión de su empresa por convertirlos en periféricos. 6.3.1.1. Modelos de contratación en empresas de alevines y semillas Una vez expuesto el planteamiento del modelo de contratación, corresponde ahora su aplicación a las empresas de alevines y semillas y, posteriormente, a las de engorde de peces. En las primeras, la distribución por grupos de importancia de los puestos podría ser la que se expone en el siguiente gráfico: Figura 81 La empresa acuícola flexible de semillas y alevines Secretaria Gerente Operarios de mantenimiento Operarios de producción Jefe de I+D Gerente Director Financiero Jefe Administrativo Director Técnico Jefe de Compras Jefe de Producción Director Personal Director comercial Director Calidad Operarios de e producción Auxiliar administrativo Operarios de mantenimiento Puestos de núcleo Jefe de Mantenimiento Puestos periféricos Puestos exteriores Fuente: Elaboración propia. 268 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 269 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Esta figura corresponde interpretarla con suficiente flexibilidad para no dar la imagen de una contratación de personal excesivamente rígida. Simplemente es un modelo que, tal y como ya se ha apuntado, ayuda a concretar y a situar a los empleados de acuerdo con la importancia que el puesto que ocupan tiene para la empresa, partiendo de que todos los puestos son necesarios. Ahora bien, el empresario necesita un control de los costes de personal que permita la supervivencia de la empresa, máxime cuando se trata de empresas cuyo grado de intervencionismo en los precios es mínimo, dado que los establece el mercado. El reto de estas empresas consiste en producir con costes los más bajos posibles dado que de ello depende la viabilidad de la empresa, viabilidad que en muchas de ellas se empieza a divisar, cuando hay éxito, pasados unos años. Se aconseja, por tanto, calcular la dimensión mínima (en personas) de funcionamiento de la empresa, es decir, el número mínimo de personas con el cual la empresa puede desarrollar sus actividades, y atendiendo a las circunstancias, poder reclamar más efectivos humanos, pero sin «hipotecas» laborales futuras. Partiendo de esta base, los puestos directivos (Gerente, Directores y Jefes Administrativo y de Producción) pueden considerarse claves en toda empresa acuícola de semillas y alevines. Dependiendo del tamaño de la empresa podrá la dirección agrupar en una persona varios puestos de los aludidos, pero este detalle no resta para que puedan ser calificados del núcleo fundamental de la empresa. Los puestos periféricos son necesarios en el caso de que la actividad de la empresa creciera y, por lo tanto, de esta forma podría flexibilizarse (creciendo y en momentos necesarios, decreciendo efectivos humanos) cuantitativamente. Asimismo, como se observa, las labores de mantenimiento y algunos puestos de operarios de producción podrían ser considerados como trabajadores externos e incluso acudir a alguna subcontrata. El régimen de subcontrataciones se podría ampliar, en el caso de empresas de pequeño tamaño a las tareas burocrático-contables y/o laborales a través de asesorías. Atendiendo al modelo de contratación que estamos aplicando, en los puestos de núcleo en las empresas de alevines y semillas se aconseja la contratación mediante modalidades de contrato de duración no determinada. Consideramos oportuna la política de contratación consistente en contratar, al principio mediante modalidad temporal y, una vez contrastada la competencia de la persona, contratarle indefinidamente, aprovechándose así de las ayudas gubernamentales existentes en la transformación de contratos temporales y de duración determinada en indefinidos. Por su parte, los puestos periféricos, de por sí, más volátiles y dependientes de la marcha de la empresa o de la temporada anual de que se trate pueden ser contratados mediante las modalidades de contrato por obra o servicio, contrato eventual por circunstancias de la producción, contrato de interinidad, etc. Dentro de este bloque la empresa podría incluir el Jefe de I + D, Jefe de Mantenimiento, algunos operarios de producción y de mantenimiento, la secretaría del gerente y auxiliares administrativos. El modelo permitiría la utilización de un contrato de puesta a disposición con una Empresa de Trabajo Temporal para la cesión de un trabajador en misión en un 269 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 270 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI puesto periférico, que en estas empresas podrían ser los operarios de mantenimiento y de producción. 6.3.1.2. Modelos de contratación en empresas de engorde de peces El modelo de contratación para empresas de engorde de peces, tal y como se desprende del gráfico, es el mismo que el aplicado en la tipología de empresas acuícolas anterior, aunque el número de puestos y su contenido den la apariencia de mayor sencillez expositiva. Figura 82 La empresa acuícola flexible de engorde de peces Secretaria Gerente Operarios de mantenimiento Operarios Gerente Director Explotación Jefe Administrativo Capataces Auxiliar administrativo Puestos de núcleo Puestos periféricos Puestos exteriores Fuente: Elaboración propia. Se pueden diferenciar, por lo tanto, puestos claves o de núcleo, periféricos y exteriores. En este tipo de empresas, que no se caracterizan por tener plantillas muy amplias, se puede decir que la mayoría de los puestos son de núcleo. La estacionalidad de la producción no suele ser muy alta, al estar ubicadas en aguas donde su temperatura no es muy oscilante, por lo que no es previsible la necesidad de una gran flexibilización de plantilla; por esta razón, hemos considerado que podrían incorporarse al grupo de periféricos la secretaría del Gerente, algunos operarios y auxiliares administrativos, así como algunas labores de mantenimiento podrían ser subcontratadas; el resto de puestos podrían ser considerados de núcleo. 270 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 271 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6.4. Desarrollo del personal en las empresas acuícolas 6.4.1. Política retributiva en las empresas acuícolas 6.4.1.1. Planteamientos generales de la política retributiva Uno de los pilares fundamentales de toda empresa en lo referente a la optimización del trabajo de las personas que la integran, y referente a la gestión del personal, está constituido por su política retributiva, entendida como la filosofía con que una empresa recompensa y distribuye su masa salarial entre sus empleados. El objetivo de toda política retributiva consiste en llevar a cabo prácticas competitivas de remuneración que contribuyan al fomento de un clima favorable entre los empleados que posibiliten la retención de profesionales competentes, sin perjudicar la salud financiera de la empresa. Por esta razón, se aconseja a la empresa que fije una política retributiva con sistemas de remuneración justos y equitativos que recompensen a cada empleado según las tareas y funciones que desarrolla, el rendimiento o resultados que obtiene y su dedicación e integración en la empresa. La relación entre la política retributiva y la estrategia de la empresa es muy estrecha. La mejor política retributiva será aquella que mejor se adapte al planteamiento estratégico de la empresa y, dentro del mismo, las filosofía de gestión de recursos humanos. En un entorno económico, tal y como en el que se desarrollan las empresas acuícolas, en que son mínimas las posibilidades de influencia en el precio de venta, con un gran estrechamiento de los márgenes comerciales, cobra gran importancia el apartado retributivo, máxime cuando éste representa un alto porcentaje del coste total de la empresa. Esto no quiere decir, en absoluto, que a menor masa salarial se corresponda directamente un menor nivel de costes; puede resultar que, obsesionados por la reducción de salarios, surjan otros conceptos de costes inherentes a la falta de motivación y/o profesionalización de las personas, que incrementen el coste de producción total y que se manifiestan en costes de demoras, fallos, retrasos, reclamaciones, etc., denominados costes de «no calidad»; a los que podríamos agregar lo costes de accidentes, enfermedades profesionales, estrés, etc. 8 Por otro lado, la política retributiva de las empresas acuícolas necesariamente tendrá que ser distinta cuando se esté refiriendo a los primeros años de la vida de la empresa, en los cuales, y a la vista de las estadísticas, no suelen ser rentables estas empresas, que una vez consolidadas y que empiecen a dar beneficios. Los salarios, al principio, no podrán ser elevados y podrán ser superiores en momentos de bonanza empresarial. 8 Estos conceptos de costes son ignorados en muchas ocasiones por las empresas. A pesar de ser difíciles de incorporar como partida contable, suponen en muchas empresas grandes cantidades monetarias que no pueden ser desechadas. Justamente, una buena fuente para reducir costes salariales reside en esta vía, en la reducción de accidentes, enfermedades y coste de mala calidad. 271 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 272 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI De forma explícita estamos aludiendo al concepto de costes laborales unitarios, que expresan el cociente entre el coste laboral por trabajador y la productividad media o aparente del trabajo9. Planteadas estas premisas generales sobre la retribución, se va a exponer a continuación un modelo de política retributiva. Posteriormente y mediante ejemplos prácticos, se aplicará primero a las empresas de alevines y semillas y, después, a las de engorde de peces. 6.4.1.2. Modelo retributivo a aplicar Una explicación sencilla del modelo teórico de retribución empieza por descomponer la retribución total de cada empleado en dos partes claramente diferenciadas: una fija y otra variable (Fig. 83.). La parte fija salarial remunera a cada individuo una cantidad fija en función del nivel en el que se encuentra su puesto de trabajo (los puntos obtenidos en el APT), el llamado salario-puesto de trabajo. Asimismo, se Figura 83 Composición del salario total RETRIBUCION FIJA – – – RETRIBUCION TOTAL = Salario base (A.P.T.) Complementos salariales Otros complementos + RETRIBUCION VARIABLE " Evaluación desempeño – – Rendimiento/objetivos – Bonos (directivos) " Fuente: Elaboración propia. 9 Con frecuencia, se afirma la conveniencia de que el salario evolucione según la productividad para evitar que el coste laboral unitario crezca y se pierda competitividad. (Salas, 1998). 272 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 273 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI incorporan a esta parte del salario los complementos salariales en concepto de antigüedad y pluses de productividad, calidad y otros. La parte variable se constituye a partir de los datos recogidos de la evaluación de desempeño que se realice cada año de los empleados, en la cual son evaluados por su actitud, aptitud y cumplimiento de los objetivos marcados. La cantidad monetaria variable a percibir podrá materializarse en la percepción de unos bonos o en una promoción económica determinada dentro de su rango salarial. La política salarial de la empresa, según nuestra apreciación, debiera garantizar unos niveles mínimos de homogeneidad en el reparto de la masa salarial. Se entiende por homogeneidad salarial o equidad interna la inexistencia de grandes diferencias salariales entre puestos de similar importancia. Este criterio varía según el sector o empresa, así, por ejemplo, en banca suele ser muy corriente que los intervalos salariales no se separen más del 40% sobre la media de un intervalo retributivo dado; en otras empresas perfectamente puede cifrarse en un 25%. Esta cifra necesita ser concretada por la dirección de la empresa como parte del trabajo de diseño de su política salarial. Salario anual bruto: Salario Base y complementos personales Continuando con la explicación del modelo, el salario anual bruto está compuesto por el salario base o salario puesto y los complementos personales. A la hora de su determinación deben tenerse en cuenta la homogeneidad salarial, la situación de mercado, el salario mínimo interprofesional (SMI) y el convenio colectivo correspondiente10. A partir de los resultados de la evaluación de puestos se pueden definir cada uno de los niveles que conforman la plantilla de las empresas de acuicultura, tal y como queda reflejado en el cuadro adjunto que se utilizará, posteriormente, para confeccionar la tabla salarial que contemple la retribución básica de cada puesto, en cada uno de los dos tipos de empresas acuícolas estudiados. A cada puesto le suele corresponder un intervalo definido por el mínimo (salario puesto) y el máximo salarial. En el caso de las empresas acuícolas, se han diseñado los intervalos o rangos salariales con un cierto grado de solapamiento. Resulta significativo establecer gráficamente los intervalos salariales, ya que es una herramienta muy útil de cara a una posible reelaboración de las políticas salariales, en caso de ser necesario. En la figura 84 se muestra un ejemplo gráfico de intervalos salariales con solapamientos por niveles. 10 En las fechas de redacción de este documento no tenemos información de la existencia de un convenio colectivo para empresas de acuicultura en el ámbito nacional. La mayoría de ellas realizan acuerdos con sus trabajadores en materia retributiva. Tan sólo disponemos y podremos utilizar como referencia el Convenio Colectivo de Trabajo de Ámbito Interprovincial de Acuicultura Marina de Andalucía (BOJA, 9-9-1997), en vigor hasta el 32-12-1999. 273 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 274 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 64 Evaluación de la plantilla de una empresa acuícola Niveles Puntos I II III IV V VI Personal de la empresa acuícola 900-1.100 800-900 700-800 500-700 400-500 300-400 Fuente: Elaboración propia. Figura 84 Rangos salariales por niveles profesionales Rasgos salariales por niveles profesionales V III I 0 2 .000.000 4 .000.000 6 .000.000 8 .000.000 10.000.0 0 0 Fuente: Elaboración propia. La tabla 65 muestra el salario medio fijado para cada uno de los niveles de los distintos grupos existentes en la empresa acuícola. Se especifica también el mínimo —salario puesto—, el máximo, y la variabilidad correspondiente a cada nivel. La variabilidad puede ser mayor a medida que se ascienda a niveles superiores, debido al elevado grado de responsabilidad que ostentan los mismos, junto con la incidencia que sus decisiones pueden conllevar en la evolución futura de la entidad. La empresa podría optar, incluso, por asignar el mismo porcentaje de variabilidad para cada nivel de puestos, dado que en términos absolutos el rango salarial también se aumenta de esta forma. 274 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 275 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 65 Análisis de retribuciones Niveles I II III IV V VI Puntos Salario medio Variabilidad (%) Mínimo (Salario Base) Máximo 900-1.100 800-900 700-800 500-700 400-500 300-400 Fuente: Elaboración propia. La suma de la totalidad de complementos salariales al mínimo salarial o salario base fijado para cada puesto no puede exceder del máximo salarial determinado para cada nivel. El directivo de personal, para confeccionar la política retributiva de la empresa, deberá tener en cuenta que los salarios mínimos no pueden ser inferiores a los pactados en el convenio de referencia en su empresa, y que normalmente incluyen el salario base y una serie de complementos que dependen del convenio (pluses de convenio, antigüedad, plus de vacaciones, etc.). A este mínimo salarial pueden incrementarle unas determinadas cantidades, que para mantener la equidad distributiva, se aconseja que no superen los máximos salariales. De esta forma se observa con facilidad la promoción económica que una persona que está en un puesto de trabajo pueda alcanzar. La retribución exacta de cada persona dependerá de las medidas retributivas de carácter variable que tenga establecidas la empresa a las cuales nos vamos a referir a continuación. Salario anual bruto: Retribución variable La faceta incentivadora del salario no debe ser olvidada por toda buena política salarial. El rendimiento sobresaliente de sus empleados debe ser una de las claves para el crecimiento y la obtención de buenos resultados. Para conseguirlo se hace preciso recompensar el esfuerzo de todos los trabajadores en cantidades considerables, de manera que estén estrechamente relacionadas con el rendimiento de los mismos y para evitar que personas que ocupen puestos de igual categoría se vean recompensadas de igual forma con independencia de la dedicación y rendimiento. Como ya se ha dicho, el APT evalúa el puesto de trabajo con independencia de la persona que lo ocupa, es precisamente por ello que con el objetivo de retribuir mejor a los empleados más eficaces se lleva a cabo una evaluación del desempeño que permita distinguir de una manera objetiva el trabajo y dedicación de cada uno. 275 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 276 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Así, la evaluación del desempeño va a diferenciar el trabajo realizado por los integrantes de la empresa, sobremanera los que ocupan puestos de similar importancia. A la hora de determinar la retribución variable se pueden utilizar distintos métodos que dependerán de las funciones y entorno de cada puesto de trabajo. Así, los comerciales pueden ser evaluados de acuerdo con unos objetivos de venta marcados y mediante una entrevista de desempeño realizada por su superior jerárquico; los operarios de producción por gestión del desempeño (cantidad, calidad, aptitud y actitud) y los directivos por una serie de objetivos genéricos de la empresa (cuota de mercado, cuota de beneficios, imagen de empresa, etc.) y por una evaluación del desempeño llevada a cabo por el resto de directivos. El salario base y los complementos personales se verán incrementados por la cuantía correspondiente a la evaluación del desempeño. Así, en función de la puntuación obtenida en la evaluación de cada empleado por su inmediato superior, se determinará la cuantía a cobrar por aquél. Es necesario señalar una cuantía máxima a percibir por este concepto (que dependerá del porcentaje sobre la remuneración total que la empresa considere oportuno), que será cobrada íntegramente en el caso en el que la evaluación del empleado haya resultado con la puntuación máxima. En el resto de los casos se ponderará la cuantía a cobrar en función de unos porcentajes preestablecidos que serán definidos próximamente. Se pretende diseñar una política retributiva que premie a aquellos que lleven a cabo su cometido tanto eficaz como eficientemente, de este modo los empleados que reciban una puntuación más elevada en su evaluación serán gratificados con un mayor salario. Una modalidad de asignación de la parte variable a cada empleado puede ser la que se realiza en función de unos porcentajes a aplicar sobre una cantidad (V). Estas cantidades denominadas bonos son determinadas por la dirección de la empresa, de tal manera que es fácilmente detectable si un empleado está bien, sobre o infrarremunerado dependiendo de la puntuación obtenida en su evaluación. Tabla 66 Asignación de la parte variable del salario Niveles Puntos I II III IV V VI 900-1.100 800-900 700-800 500-700 400-500 300-400 Fuente: Elaboración propia. 276 Salario medio Mínimo (Salario base) Cantidad a distribuir (retribución variable) V Máximo 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 277 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En caso de recibir una puntuación que suponga una evaluación del desempeño inferior al nivel considerado como bueno —inferior a dos— no se percibirá cantidad alguna por este concepto con el único fin de no premiar actitudes pasivas. Así, para puntuaciones iguales o superiores a tres, las cantidades establecidas son las siguientes: • Si el empleado obtiene una valoración del desempeño comprendida entre 2 y 3, siendo bueno el nivel de desempeño, percibirá hasta un 65% de la cantidad V. • Si el empleado obtiene una valoración del desempeño comprendida entre 3 y 4, resultado de un nivel destacado de desempeño, percibirá hasta un 90% de V. • Si el empleado obtiene una valoración del desempeño comprendida entre 4 y 5, resultado de un nivel de desempeño excepcional, percibirá hasta un 100% de V. Tabla 67 Asignación de incentivos salariales según rendimientos Puntuación Rendimiento % sobre V 1 >1y<=2 >2y<=3 >3y<=4 >4y<=5 Inferior Próximo a lo esperado Bueno Destacado Excepcional 0 0 65 90 100 Fuente: Elaboración propia. Pero con el objeto de que la dirección de la empresa pueda planificar el presupuesto necesario para afrontar las necesidades de personal, no es aconsejable que los directivos responsables se detengan únicamente en los costes de carácter salarial. Es preciso tener en cuenta que, además de los costes salariales, la incorporación de una persona a la plantilla conlleva otra serie de gastos que conviene cuantificar y precisar, tales como: • Gastos de incorporación de la persona: reclutamiento, selección y adscripción al puesto. • Gastos de funcionamiento: ayudas financieras, préstamos, becas, percepciones extrasalariales, etc. • Gastos de formación y desarrollo. Formación (retribución de formadores y formados, desplazamientos y estancias), servicios sociales, mantenimiento administrativo, etc. • Gastos de separación. Indemnizaciones legales, jubilaciones anticipadas, etcétera. Estos conceptos de coste existen, pero no suelen tenerse en cuenta desde un punto de vista de costes de personal 277 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 278 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6.4.1.3. Costes de los empleados en empresas de alevines y semillas A continuación se va a aplicar a cada tipo de empresa acuícola, a modo de ejemplo práctico, el modelo retributivo anteriormente explicado. Comienza con la clasificación de los niveles retributivos que, como puede observarse, es bastante similar a la distribución que podría llevarse a cabo por categorías profesionales. Tabla 68 Valoración de puestos de trabajo en una empresa de alevines y semillas Niveles I Puntos 900-1.100 II III 800-900 700-800 IV V VI 500-700 400-500 300-400 Personal de la empresa de alevines y semillas Gerente, Director Técnico, Director Comercial, Director Calidad Director Personal, Director Financiero Jefe de Producción, Jefe de I + D, Responsable Producto, Jefe de Compras, Jefe Mantenimiento Jefe Administrativo, Secretaría del Gerente Operario producción Auxiliar Administrativo Fuente: Elaboración propia. Una vez distribuidos los puestos entre los niveles retributivos correspondientes, siempre teniendo cuidado de que no queden fuera de los intervalos algún puesto de trabajo, corresponde a la dirección de la empresa cifrar el salario medio en cada nivel. Este salario se suele calcular teniendo en cuenta los niveles salariales medios del sector (basándose en encuestas, publicaciones, y conocimiento del mismo), la situación económica de la empresa, el presupuesto para mano de obra existente, etc. Posteriormente, la dirección, que podría consultar con el comité de valoración de puestos, podría indicar el índice de variabilidad en cada intervalo, que puede ser el mismo para cada intervalo o creciente a medida que se baja de nivel (es decir, cuando el puesto tiene más puntos). En nuestro ejemplo, y para las empresas acuícolas, hemos considerado un índice de variabilidad creciente, tal y como se presenta en el cuadro correspondiente. De estas dos columnas se pueden obtener las otras dos, que indicarían el mínimo salarial y el máximo a percibir en los puestos que contiene dicho intervalo de puntos. Siempre teniendo en cuenta que el salario que perciba cada trabajador, de acuerdo con su categoría, no sea inferior a lo marcado en el convenio colectivo correspondiente que, como ya se indicó anteriormente, en estas empresas no existe, con lo cual la única referencia restante es el salario mínimo interprofesional (en nuestro país en 1999 es de 69.270 ptas.) 278 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 279 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La tabla salarial básica, en definitiva, quedaría como sigue: Tabla 69 Modelo retributivo para una empresa de alevines y semillas Niveles I II III IV V VI Puntos 900-1.100 800-900 700-800 500-700 400-500 300-400 Salario medio Variabilidad (%) Mínimo (Salario Base) Máximo 4.500.000 3.500.000 3.000.000 2.000.000 1.700.000 1.500.000 25 25 25 20 20 10 3.375.000 2.625.000 2.250.000 1.600.000 1.360.000 1.350.000 5.625.000 4.375.000 3.750.000 2.400.000 2.040.000 1.650.000 Fuente: Elaboración propia. Este cuadro representa la parte fija del salario, a la que se puede añadir la parte variable. Para ello, y tal y como se explicó, se determina una cantidad V, que le podríamos denominar bono, y se percibirá un determinado porcentaje del mismo atendiendo a la evaluación del desempeño llevada a cabo de la persona, como se muestra en la tabla 70. Tabla 70 Modelo de retribución variable para una empresa de alevines y semillas Niveles Puntos I II III IV V VI 900-1.100 800-900 700-800 500-700 400-500 300-400 Salario medio 4.500.000 3.500.000 3.000.000 2.000.000 1.700.000 1.500.000 Mínimo (Salario Base) Cantidad a distribuir (retribución variable) V 3.375.000 2.625.000 2.250.000 1.600.000 1.360.000 1.350.000 1.000.000 800.000 700.000 600.000 500.000 300.000 Máximo 5.625.000 4.375.000 3.750.000 2.400.000 2.040.000 1.650.000 Fuente: Elaboración propia. 279 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 280 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Como ejemplo de práctica retributiva, una vez expuestas estas tablas salariales, vamos a calcular el coste salarial anual en un puesto de trabajo concreto. Supongamos que elegimos el puesto de Jefe de Producción, con un nivel salarial III. Partimos de la base de que se trata de una persona con experiencia y seis años de antigüedad en la empresa y que, por tanto, supera la media correspondiente a su nivel salarial. Salario base = 3.500.000 ptas./año. Llevada a cabo la evaluación de desempeño en el año 1999, resultó alcanzar una puntuación media de 3,5 (destacado), lo que significa que le corresponde un 90% del bono correspondiente a su nivel salarial, que es de 700.000 ptas., es decir, 630.000 ptas. Por lo tanto, el sueldo total que le corresponde en el año 1999 sería de 4.130.000 ptas./año. Como es sabido, el coste salarial de todo trabajador por cuenta ajena lleva aparejado unas cargas sociales necesarias para afrontar las posibles contingencias que a toda persona, como trabajador, le pueden suceder. Así se reflejan en la siguiente tabla11: Tabla 71 Coste salarial para una empresa de alevines y semillas Concepto % sobre la Base Reguladora Contingencias Comunes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Fondo de Garantía Salarial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Desempleo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Formación Profesional . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23,6 0,4 6,2 0,6 TOTAL CARGAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 30,8 A este porcentaje hay que sumar las cargas por contingencias profesionales que, como dependen del puesto que desempeñe el personal, en función del riesgo de accidente o enfermedad profesional que en dicho puesto tenga el titular, nos podemos encontrar con los siguientes tipos de cotización (R. D. 9/1991): 11 Los porcentajes que se presentan son los correspondientes al año 1999 y aplicables a contratos indefinidos y temporales excepto para los de formación. El Instituto Nacional de la Seguridad Social puede variarlos cada año. 280 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 281 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 72 Coste salarial más cotizaciones salariales por contingencias comunes para una empresa de alevines y semillas Puesto de trabajo % sobre la Base Reguladora ILT + IMS Personal de mantenimiento (epígrafe 76) . . . . . . . . . Vigilancia marítima (epígrafe 116) . . . . . . . . . . . . . . Personal de planta (epígrafe 54) . . . . . . . . . . . . . . . . Personal de oficina (epígrafe 113) . . . . . . . . . . . . . . Técnico transporte (epígrafe 109 ó 54) . . . . . . . . . . . Resto del personal y en caso de Incapacidad temporal del trabajador (epígrafe 126) . . . . . . . . . . . . . . . . 3,15 4,50 1,26 0,99 4,05 0,81 Fuente: Elaboración propia. Continuando con el ejemplo, y salvando las precisiones numéricas que un caso real conlleva, y únicamente con el afán de orientar acerca de los costes salariales en las empresas de acuicultura, supongamos que el salario bruto anual se distribuye en catorce pagas mensuales y que a efectos de cotización suponen doce, debido a que la base reguladora de cotización a la Seguridad Social por todos los tipos de contingencia se prorratea, lo que significa que la base de cotización mensual quedaría en: Base de cotización = 344.166 ptas./mes Esta cifra, al estar comprendida entre la base mínima y máxima de cotización para el grupo 2, es necesario normalizarla, al múltiplo de 3.000 más próximo, que es 345.000 ptas., que constituirá la base de cotización de este trabajador. Esto supone unas cargas sociales (epígrafe 54) 345.000 · 32,06% = 110.607 ptas.; cifra ésta que multiplicada por doce meses hace un total de 1.327.284 ptas., lo cual significa un coste total de este trabajador de: Coste salarial total = 4.130.000 + 1.327.284 = 5.457.284 ptas./año Este mismo ejemplo puede aplicarse al total del colectivo de personal de la empresa acuícola, con lo que el gerente de la empresa puede tener una idea aproximada del coste salarial de toda su plantilla. 6.4.14. Costes de los empleados en empresas de engorde de peces De la misma forma que se ha expuesto un ejemplo en las empresas de alevines y semillas, vamos a proceder en una empresa de engorde de peces. La distribución del personal por niveles retributivos quedaría de la siguiente forma: 281 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 282 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 73 Valoración de puestos de trabajo en una empresa de engorde Niveles I II III IV V Puntos Personal de la empresa engorde de peces 750-800 550-750 500-550 400-500 300-400 Gerente, Director de Explotación Capataces Jefe Administrativo, Operario Secretaría del Gerente Auxiliar Administrativo Fuente: Elaboración propia. Al igual que se llevó a cabo en el otro tipo de empresas acuícolas, y suponiendo un índice de variabilidad ligeramente creciente en las empresas de engorde de peces, la tabla de retribuciones fijas quedaría así: Tabla 74 Modelo retributivo para una empresa de engorde Niveles Puntos Salario medio Variabilidad (%) Mínimo (Salario Base) Máximo I II III IV V 750-800 550-750 500-550 400-500 300-400 4.500.000 3.000.000 3.000.000 2.000.000 1.700.000 30 20 20 10 10 3.150.000 2.400.000 2.050.000 1.800.000 1.530.000 5.850.000 3.600.000 3.000.000 2.200.000 1.870.000 Fuente: Elaboración propia. En lo que respecta a la prima variable, podemos poner como ejemplo práctico las siguientes cantidades: Tabla 75 Modelo de retribución variable para una empresa de engorde Niveles I II III IV V Puntos 750-800 550-750 500-550 400-500 300-400 Fuente: Elaboración propia. 282 Salario medio 4.500.000 3.000.000 3.000.000 2.000.000 1.700.000 Mínimo (Salario Base) Cantidad a distribuir (retribución variable) V 3.150.000 2.400.000 2.050.000 1.800.000 1.530.000 800.000 700.000 600.000 500.000 300.000 Máximo 5.850.000 3.600.000 3.000.000 2.200.000 1.870.000 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 283 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Un ejemplo: Una vez expuestas estas tablas salariales, vamos a calcular el coste salarial anual de un puesto de trabajo concreto en una empresa de engorde de peces. Supongamos que elegimos el puesto de Capataz, nivel salarial II. Se trata de una persona que no tiene mucha experiencia, pero que es competente con lo que le situamos en un salario fijo ligeramente superior al mínimo de su nivel salarial. Salario base = 3.300.000 ptas./año Llevada a cabo la evaluación de desempeño en el año 1998, resultó alcanzar una puntuación media de 4,5 (destacado), que le corresponderá un 100% del bono correspondiente a su nivel salarial, que es de 700.000 ptas. Por lo tanto, el sueldo total que se le asignaría en el año 1998 sería de 4.000.000 ptas./año. Aunque ya quedaron reflejadas las tablas de cotización a la Seguridad Social, cuando nos referimos a las empresas de alevines, creemos necesario reproducirlas de nuevo, para su mejor comprensión. Tabla 76 Coste salarial para una empresa de engorde Concepto % sobre la Base Reguladora Contingencias Comunes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Fondo de Garantía Salarial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Desempleo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Formación Profesional . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23,6 0,4 6,2 0,6 TOTAL CARGAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 30,8 Fuente: Elaboración propia. Repetimos, asimismo, las cargas por contingencias profesionales: Tabla 77 Coste salarial más cotizaciones salariales por contingencias comunes para una empresa de engorde Puesto de trabajo Personal de mantenimiento (epígrafe 76) . . . . . . . . . Vigilancia marítima (epígrafe 116) . . . . . . . . . . . . . . Personal de planta (epígrafe 54) . . . . . . . . . . . . . . . . Personal de oficina (epígrafe 113) . . . . . . . . . . . . . . Técnico transporte (epígrafe 109 ó 54) . . . . . . . . . . . Resto del personal y en caso de Incapacidad temporal del trabajador (epígrafe 126) . . . . . . . . . . . . . . . . % sobre la Base Reguladora ILT + IMS 3,15 4,50 1,26 0,99 4,05 0,81 Fuente: Elaboración propia. 283 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 284 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Continuando con el ejemplo, y salvando las precisiones numéricas que un caso real conlleva, y únicamente con el afán de orientar acerca de los costes salariales en las empresas de acuicultura, supongamos que el salario bruto anual se distribuye en catorce pagas mensuales y que, a efectos de cotización suponen doce, debido a que la base reguladora de cotización a la Seguridad Social por todos los tipos de contingencia se prorratea, lo que significa que la base de cotización mensual quedaría en: Base de cotización = 285.714 ptas/mes Esta cifra, al estar comprendida entre la base mínima y máxima de cotización para el grupo 3, es necesario normalizarla, al múltiplo de 3.000 más próximo, que es 285.000 ptas., que constituirá la base de cotización de este trabajador. Esto supone unas cargas sociales (epígrafe 76) 285.000 · 35,3% = 100.605 ptas. cifra ésta que multiplicada por doce meses hace un total de 1.207.260 ptas., lo cual significa un coste total de este trabajador de: Coste salarial total = 4.000.000 + 1.207.260 = 5.207.260 ptas./año Este mismo ejemplo puede aplicarse al total del colectivo de personal de la empresa acuícola de engorde de peces, de tal forma que podrían hacerse, con estos cálculos, previsiones sobre el coste salarial de la empresa. 6.4.2. Evaluación del desempeño en empresas acuícolas La evaluación del desempeño debiera ser, por sí misma, motivadora. La existencia de una intervención en materia de dirección de recursos humanos que instaure un procedimiento en el que se revise la cantidad y calidad del trabajo realizados por las personas debe incentivar para trabajar mejor. Lo que, a nuestro juicio, claramente no motiva es la inhibición por parte de algunos gerentes de empresas ante actitudes hacia el trabajo poco correctas y que son vistas por personas que, pretendiendo trabajar bien, no encuentran en ello recompensa alguna, observando que las personas que no trabajan adecuadamente no son advertidas ni corregidas; de ahí que se plantee de gran utilidad una técnica como la que aquí proponemos y que trata de evaluar objetivamente el trabajo y dedicación de las personas. La evaluación del desempeño es, por tanto, un procedimiento que permite apreciar, de la forma más objetiva posible, el rendimiento de los empleados en una organización. Esta evaluación se realiza basándose en el trabajo desarrollado, los objetivos fijados, las responsabilidades asumidas y las características personales. Todo ello con vistas a la planificación y proyección de actividades futuras de cara a un mayor desarrollo del individuo, grupo y organización (Harper & Lynch, 1992). Esta evaluación es de gran utilidad porque, entre otras finalidades, sirve de base para recompensar económicamente al empleado en función de sus resultados u objetivos, 284 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 285 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI actuación profesional y las actitudes personales, las cuales implican juicios y apreciaciones subjetivas que es preciso reducir al mínimo posible por medio de técnicas objetivas de observación y evaluación para que ésta sea lo más acorde posible a la realidad. En cuanto a la logística en esta intervención, el encargado de realizar la evaluación del empleado es su propio jefe o superior, ya que nadie mejor que él puede conocer el desempeño que ha venido realizando. Esto implica la existencia de un alto grado de coordinación y colaboración entre los distintos departamentos y directivos responsables. Para la evaluación del desempeño vamos a tener en cuenta tres elementos: 1. Los objetivos alcanzados. 2. La actuación profesional. 3. Las actitudes desarrolladas. La ponderación de cada uno de estos tres elementos se asignará a criterio de la empresa (por ejemplo, al personal comercial podría ponderarse 50% los objetivos, 35% la actuación profesional y 15% la actitud personal). Las etapas para la evaluación de objetivos son las siguientes: 1. Establecimiento de los objetivos que van a ser evaluados. Estos objetivos tienen que ser medibles, cuantificables, claros, específicos, realistas, alcanzables, enunciados en términos positivos, ponderados, coherentes, aceptados por empleado y superior y supervisados de forma continuada. 2. Ponderar cada objetivo. 3. Valoración del resultado en términos de porcentaje sobre el objetivo fijado (se sugiere una escala entre 1 y 5 puntos). 4. Obtención de la puntuación de acuerdo con el grado de cumplimiento del objetivo que se trate y multiplicarlo por su peso o ponderación correspondiente, obteniéndose un resultado en puntos. 5. Adición de todos los resultados parciales. Esta cifra es la Consecución Global de Objetivos del empleado evaluado. Para evaluar las aptitudes y actitudes personales del trabajador podemos utilizar el método de escalas gráficas, consistente en evaluar dentro de una escala de 1 a 5 una serie de factores previamente determinados. La técnica más común es la entrevista de desempeño llevada a cabo entre el empleado y su supervisor directo12. Previo a la realización de la entrevista, el evaluador deberá estudiar, por su parte, cuáles fueron los objetivos asignados al empleado para ese año así como el grado de cumplimiento de los mismos para poder discutir las causas de las posibles desviaciones a lo largo de la entrevista. Se debaten las dificultades que el evaluado ha encontrado en el desarrollo de su labor profesional y se toman decisiones conjuntas para mejorar y lograr los objetivos marcados para el año próximo. Un modelo de entrevista figura en el anexo F. 12 En el Anexo F se muestran ejemplos de cuestionarios para entrevista de desempeño. 285 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 286 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El proceso sería el siguiente: 1. Determinación de los factores o rasgos a evaluar. Como ejemplo de factores podemos considerar: disposición hacia el trabajo, esfuerzo realizado, interés mostrado, grado de implicación en los objetivos y proyectos, grado de responsabilidad ante compromisos, constancia, nivel de integración en el grupo, valores compartidos con la empresa, etc. 2. Establecimiento de la escala de valores, que podría ser: 1, inferior a lo esperado; 2 próximo a lo esperado; 3, bueno; 4, destacado y 5, excepcional. 3. Cálculo de la media aritmética (o ponderada) de las puntuaciones. La evaluación global de desempeño de la persona se consigue con la media ponderada de la puntuación obtenida por objetivos, por aptitudes profesionales y actitudes personales, con lo que se obtiene una puntuación, que da una imagen cualitativa del nivel de desempeño del empleado: 1. Bajo, su desempeño ha sido claramente inferior a lo esperado en la mayoría de las exigencias del puesto. 2. Necesita mejorar, no ha cumplido completamente las exigencias del puesto en las principales áreas de responsabilidad, no compensándose los puntos débiles con los fuertes. 3. Bueno, su desempeño durante el año ha cubierto claramente las exigencias del puesto que ocupa, tanto en cantidad como en calidad. 4. Destacado, su desempeño ha sido superior al esperado en términos de cantidad y calidad. 5. Excepcional, ha demostrado logros extraordinarios en las principales áreas de responsabilidad. Los resultados obtenidos en la evaluación del desempeño, tal y como se señaló, son de gran utilidad. En el apartado anterior se pudo comprobar su trascendencia para el establecimiento de la retribución variable de las personas. La evaluación del desempeño también va descubriendo las carencias formativas de las personas y el grado de adecuación que tienen con el puesto que ocupan, de tal forma que no se trata de «examinar» a las personas, sino de utilizar la evaluación como medio para que se desarrollen y se adapten mejor al puesto y a la empresa. Por lo tanto, gran parte de las necesidades formativas de la empresa se descubren gracias a esta intervención. Las disfunciones organizativas de la empresa también suelen salir a flote cuando se lleva a cabo la evaluación del desempeño. Las personas tienen un escenario idóneo para comentar cuáles han sido sus dificultades para alcanzar los objetivos y trabajar con más calidad, etc. La dirección puede observar el desarrollo de las personas a lo largo del tiempo gracias a las evaluaciones realizadas en cada uno de los años. Puede detectarse que la persona puede ir mejorando hacia un desarrollo profesional «de carrera» adecuado, que la línea profesional de la persona no es adecuada, que ha llegado a la meseta profesional y que pocas motivaciones además de las económicas pueden incentivarle, o que, en el peor de los casos, la persona no se adapta ni a la empresa, 286 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 287 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ni al puesto y que quizás habría que encontrarle una salida a su situación desvinculándole de la empresa. 6.4.3. Plan de carreras profesionales en empresas acuícolas El desarrollo de carrera consiste en la dirección y planificación de carrera o proceso mediante el cual los empresarios individuales identifican y ponen en marcha las acciones para alcanzar sus metas de carrera. Otra definición podría ser: proceso mediante el cual las organizaciones seleccionan, estiman, asignan y desarrollan a los empleados con el fin de proporcionar un grupo de personas calificadas que satisfagan las necesidades futuras. Con un plan de carrera es mucho más probable que se alcance la satisfacción a medida que se progresa en esa trayectoria. Para ello se colocan unos «hitos», a lo largo del camino, de ahí que el plan de carrera se manifieste en la estimación de posibles rutas promocionales, que se presupone es capaz de seguir una determinada persona dentro de una organización, en función de su potencial, de sus preferencias previamente identificadas y de las perspectivas de futuro que ofrece la empresa. Debe incluir, asimismo, acciones de desarrollo y formación que han de ayudar a recorrer las expresadas rutas. Se entiende por potencial la determinación o pronóstico de las posibilidades de una persona, en orden a estimar qué tipo de puestos puede llegar a alcanzar dentro de una organización. Se suele llevar a cabo mediante la evaluación de expertos, comisiones de altos ejecutivos, opiniones del jefe directo y autoevaluaciones. En cuanto a las acciones de desarrollo y formación se refieren a la determinación de las actividades formativas reveladas como las más pertinentes para una determinada persona. Desde el punto de vista de la organización, la planificación de la carrera puede reducir los costes derivados de la rotación de personal, se ayuda a los empleados a desarrollar planes de carrera, que aparezcan más ligados a la organización con lo que es menos probable que abandonen la empresa; se mejora la moral, se aumenta la productividad y se potencia la eficiencia, por eso es conveniente que las empresas de acuicultura puedan incorporarla a sus procesos de dirección de personal. La planificación de la carrera tiene, genéricamente, tres objetivos principales: 1. Satisfacer oportunamente las necesidades inmediatas y futuras de recursos humanos de la organización. 2. Informar mejor a la organización y al individuo acerca de las trayectorias potenciales que ofrece aquélla. 3. Aprovechar al máximo los programas actuales de recursos humanos integrando en los planes de la organización actividades que permitan seleccionar, asignar, desarrollar y dirigir las carreras individuales. Un plan de carreras consta de cuatro etapas: 1. Inventario de los directivos actuales. Un inventario de recursos humanos es una base de datos del personal de la empresa, en la que constan los datos objetivos que refieren a cada directivo, empleado u obrero. 287 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 288 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2. Evaluación del potencial. Consiste en la emisión de un juicio valorativo y subjetivo sobre la capacidad del trabajador. 3. Elaboración del plan individual de formación: Cuando una persona está interesada en la promoción, se le debe dar a conocer simultáneamente cuáles son sus posibilidades de promoción en un futuro. 4. Establecimiento de los planes de sucesión. Lo normal es que los interesados conozcan solamente la parte que les afecta a ellos, no la totalidad de los planes de sucesión que afecta a otras personas en la organización. Refiriéndonos en términos generales, los responsables del establecimiento de un plan de carreras profesionales son tres: el propio empleado, los directivos y la organización acuícola. El propio empleado. El propio trabajador tiene y debiera ser el primer interesado. Es una tarea nada sencilla que necesita de un gran trabajo de reflexión. La organización puede ayudarle ofreciéndole especialistas que le animen y le guíen. Lo que no parece normal es que una persona no tenga ninguna aspiración más allá de la del puesto y cargo que ostenta, con independencia de que sea consciente de la imposibilidad de promoverse a un puesto superior en la empresa en la que trabaja. Los directivos también son responsables, deben actuar como caja de resonancia o catalizadores de los planes de carrera. No suele ser normal que los directivos añadan a sus funciones la de planificar la carrera de las personas. Los papeles potenciales de los directivos en la planificación de carreras pueden servir de: comunicadores, orientadores, evaluadores, entrenadores, mentores, asesores, intermediarios, defensores y agentes de remisión. La propia organización debe preparar y comunicar al empleado las opciones de carrera que ofrece. Generalmente es el departamento de recursos humanos el que se ocupa de mantener al día esta información según van creándose y suprimiéndose empleos. La organización acuícola puede explicar a los empleados en distintas etapas de la vida laboral de la persona su plan promocional: en la entrevista de selección, en el plan de acogida en los primeros días que se incorpora a la empresa, en el día a día con su mando intermedio, cuando se lleva a cabo las evaluaciones de desempeño, etc. El desarrollo de un plan de carrera consta de las siguientes etapas, claramente interconectadas con la evaluación del desempeño: 1. Exploración o valoración individual de sus capacidades, intereses y objetivos de carrera; lo que se denomina competencias. 2. Valoración por parte de la organización de las capacidades y potencial del individuo. 3. Comunicación de las opciones y oportunidades de carrera existentes dentro de la organización. 4. Orientación sobre la carrera con el fin de establecer objetivos y planes realistas para su logro. 288 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 289 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6.4.3.1. Planes de carrera en las empresas de alevines y semillas Una vez expuesto de forma teórica el significado de esta intervención tan importante podemos proponer diversos planes de carrera en las empresas acuícolas. Vamos a acompañarlos de gráficos orientativos para el directivo de las empresas de alevines y de engorde de peces, con su respectiva explicación, para que sirva de ejemplo a aplicar en su propia empresa. Partiremos en los gráficos de los organigramas respectivos de los dos tipos de empresas acuícolas que estamos analizando. La figura 85 presenta varias líneas promocionales: la de auxiliar administrativo, las de operarios de mantenimiento, operarios de plantas, técnicos de calidad y comerciales. Así, si nos situamos como operario de producto, se puede promocionar a Responsable de producto y, posteriormente, a Jefe de Producción. Los Jefes pueden ser promocionados, de acuerdo con sus competencias, a directores; el que desee seguir la carrera comercial lo hará a Director Comercial; el que desee hacerlo en la línea más administrativa podrá ascender a Director Financiero o a Director de Personal. En caso de quedar vacante, cualquier director con capacidad y competencias suficientes podría ocupar el puesto de Gerente. Asimismo, el gráfico incorpora la posibilidad de rotación en los puestos de directores. Figura 85 Las flechas indican posibles alternativas de crecimiento profesional en las empresas de alevines y semillas GERENTE Director Financiero Director Personal Jefe Jefe Administrativo Mantenimiento Auxiliares administrativos Operarios Secretaria Director Técnico Jefe Compras Director Comercial Jefe Producción Director Calidad Jefe de I +D. Responsable Producto A Responsable Producto B Responsable Producto C Operarios Operarios Operarios Técnicos de calidad Fuente: Elaboración propia. 289 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 290 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 6.4.3.2. Planes de carrera en las empresas de engorde de peces Al igual que en el caso anterior, la secuencia de flechas presenta varias líneas promocionales en el organigrama referido a las empresas de engorde de peces: la de auxiliar administrativo, las de operarios de jaulas, y comerciales. Al tratarse de empresas con una estructura más sencilla que las anteriores, las empresas de engorde de peces tienen un abanico de posibilidades promocionales muy limitado. Un operario de jaula, con determinada antigüedad en el puesto y con perfil de mando, podría aspirar a ser capataz de jaula; a su vez, un buen capataz con visión de negocio amplia encontraría una vía promocional como director de explotación. A los directores de explotación les quedaría la posibilidad, quizás muy remota, de encargarse de la gerencia de una serie de explotaciones. Figura 86 Las flechas indican posibles alternativas de crecimiento profesional en las empresas de engorde de peces GERENTE Director de explotación Jefe Administrativo Administrativos Secretaría Director de explotación Director de explotación Capataz jaulas Capataz jaulas Capataz jaulas Operarios (3 ó 4) Operarios (3 ó 4) Operarios (3 ó 4) Jefe Comercial Comerciales Fuente: Elaboración propia. En las dos tipologías que estamos aquí estudiando de empresas acuícolas, a la hora de diseñar los planes de carrera conviene concretar por niveles algunos requerimientos básicos que en cada puesto deben tenerse en cuenta para poder acceder a promoción: 1. Misión: Definir las misiones específicas de cada puesto. 2. Dependencia: Es necesario señalar la dependencia que se tiene en cada puesto de trabajo. 290 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 291 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 3. Permanencia en el puesto: También conviene definir el tiempo mínimo de permanencia necesario en un puesto para poder ser promovido a otro superior. 4. Formación: En este apartado se indicarán las actividades formativas mínimas en las que una persona que desea aspirar a un puesto debe participar; las cuales deberá superar adecuadamente. 5. Seguimiento: Se concretarán, asimismo, el grado de seguimiento y evaluaciones de desempeño a las que estará sometida la persona para comprobar si es apta para el puesto que desea promocionar. 6. Progresión profesional: Una vez completadas las actividades formativas y tras un desempeño de sus funciones adecuado durante el período mínimo de permanencia, llega el momento de explicar al candidato a ser promovido el siguiente escalón dentro de su carrera profesional, así como las alternativas a las que tuviere oportunidad. Estos seis factores precisan ser definidos en cada nivel promocional y por puesto de trabajo, para que la empresa acuícola pueda transmitir con claridad y suficiente transparencia las posibilidades promocionales de las personas que en ella trabajan. 6.4.4. Política formativa en las empresas acuícolas Si todas las actividades analizadas hasta el momento, desde la perspectiva de la dirección de personal en empresas de acuicultura, son importantes, no lo es menos el diseño, ejecución y control de un adecuado programa de formación para todas las personas que componen la empresa. Uno de los objetivos de los directivos de personal en las empresas debiera consistir en la mejora de las capacidades, conocimientos y aptitudes de los hombres y mujeres que trabajan en la empresa, con lo que a corto plazo el rendimiento de las personas en las funciones que desempeñan puede mejorar y a largo plazo se origina un incremento de sus posibilidades, al incrementarse sus competencias. En un sentido más amplio, la formación constituye un incremento del potencial de la organización, conseguido a partir del perfeccionamiento profesional y humano de los individuos, algo considerado de suma relevancia teniendo en cuenta no sólo los factores internos sino también los externos que rodean a la entidad. Consecuencia de esta inversión en formación, se consiguen efectos positivos sobre distintos aspectos. En lo referente al proceso de trabajo, se incrementa la calidad del producto o servicio; en lo referente al personal se aumenta el nivel de satisfacción, la motivación e integración del empleado en la empresa. Si se observa el impacto sobre los costes, éste es positivo porque al garantizar la cualificación del capital humano disponible, dicho capital puede asumir nuevos retos y responsabilidades, pasando a puestos jerárquicos superiores y minimizando los costes, ya que con la formación que se relaciona con los planes de carrera, se reduce el coste de reposición de las bajas que se produzcan en la empresa. Ahora bien, es difícil calcu291 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 292 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI lar la rentabilidad económica de la inversión en formación13, precisamente porque sus efectos son difíciles de valorar, pues afecta a numerosos factores a lo largo del tiempo. Son muchos los efectos positivos de la formación, entre los que podemos destacar: — Sobre el proceso de trabajo: • Incremento de la cantidad de trabajo. • Aumento de la calidad de lo producido. • Disminución de las piezas defectuosas. • Reducción de los desechos de materias primas. • Mejor aprovechamiento de la hora/máquina. • Disminución de las averías. • Disminución, por tanto, del coste de la «no-calidad». — Sobre el personal: • Reducción del absentismo. • Aumento de la puntualidad. • Disminución de los abandonos del puesto de trabajo. • Incremento del clima y satisfacción laborales. • Mejora de la motivación y de la integración del trabajador en la empresa. — Sobre la actividad directiva: • Fácil introducción de nueva tecnología. • Promoción de un mejor clima de trabajo. • Mejora de la comunicación vertical y horizontal. • Identificación de las personas más aptas para la promoción. Los inconvenientes de las políticas formativas, pueden derivarse de la no-adecuación de las actividades formativas programadas con las necesidades reales de la empresa, o que los participantes entiendan mal el sentido de la formación y se crean con el derecho a que se les proporcione o mejore su retribución por el hecho de haber realizado una serie de cursos14. Otras disfunciones que pueden plantearse pueden ser la salida de la empresa de personal altamente formado, para lo cual sería necesario acompañar unos planes retributivos y promocionales lo suficientemente atractivos para ser capaces de mantener a la plantilla motivada. La elaboración del plan de formación en la empresa pasa, según Puchol (1986), por cinco etapas: 13 14 Esta es una cuestión que utilizan algunos empresarios para argumentar la escasa creencia que tienen en las actividades formativas, sobre todo las que se refieren a formación gerencial, en integración del personal en los objetivos de la empresa, etc. Este tipo de empresarios sólo apuestan por la formación sobre el terreno a nivel técnico y aquélla que venga impuesta (como por ejemplo cuando les obligan a normalizarse a una norma ISO). En otras ocasiones, los empresarios rehuyen de llevar a cabo actividades formativas porque son utilizadas para aflorar las deficiencias organizativas y técnicas de la empresa (los «trapos sucios»), detalle que, lejos de ser inútil, no les agrada. 292 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 293 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 1. 2. 3. 4. 5. Objetivos de la política de formación. Recogida de datos. Confección del plan de formación. Seguimiento de la formación. Evaluación de la formación. Objetivos de la política de formación La formación debe ser planificada dentro de una estrategia global de la empresa a corto, medio y largo plazo. El criterio formación por formación debe ser cambiado por el de formación necesaria para el futuro 15. Podría plantearse, como objetivo en sí mismo, el extender la cultura de la formación en toda la empresa; así, existen empresas que tienen previsto un número «x» de horas al año de formación por persona. La formación debe ser planificada convenientemente y para ello es necesario primero realizar una recogida de datos para evaluar las necesidades formativas reales, tal y como se describe en el punto siguiente. Recogida de datos La primera actividad a emprender será iniciar una campaña de información al personal para ir creando una actitud positiva hacia la formación. Una vez creado un ambiente favorable, se está en condiciones de realizar el prediagnóstico de necesidades. Las necesidades podrán ser de cuatro tipos: • Necesidades del sistema ideológico. • Necesidades del sistema social. • Necesidades del sistema tecnológico. • Necesidades derivadas del entorno exterior. Para recoger los datos existen varias técnicas: a) Cuestionarios, a los jefes de departamento. b) Entrevistas, permiten un contacto directo con cada interesado. c) Análisis de puestos, diferencian entre lo que un hombre hace y debería hacer. d) Solicitudes individuales, de los propios interesados o de sus jefes. e) La observación, por los responsables de formación. f) Estudio de algunos indicadores, control de calidad, rotación, absentismo. g) Reuniones de grupo. h) Resultados de la evaluación del desempeño. i) Resultados de la valoración y programación de carreras. 15 Si se realiza algún curso que, posteriormente, no vaya a ser de utilidad directa a la empresa, se convierte en un gasto más que en una inversión. 293 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 294 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI j) Necesidades futuras de la empresa (nuevos productos o servicios, estrategia de empresa, etc.) Una tarea muy laboriosa consiste en detectar las necesidades y carencias que presenta la plantilla, para ello podemos utilizar varios sistemas: • Estudiar el número y contenido de las quejas y reclamaciones que presentan los clientes en nuestra entidad. • Realizar encuestas sobre atención al cliente, tanto interno como externo y calidad de producto y servicio ofertados. • Realizar cuestionarios que deben ser rellenados por los componentes de la plantilla de la empresa. • Realizar entrevistas, tanto a empleados como a superiores, para que entre todos puedan manifestar directamente sus carencias de formación, incluyendo también las de los directivos. • Acudir a los análisis de puestos de trabajo para conocer las diferentes funciones y actividades de cada puesto, y así descubrir las necesidades formativas específicas de los mismos. • Analizar la evaluación del desempeño de la plantilla, ya que muestra las debilidades y fortalezas de cada uno de ellos. • Conocimiento de los indicadores de absentismo laboral, productividad, etcétera. Una vez detectadas, las necesidades deben ser analizadas y seleccionadas, estableciendo prioridades de urgencia en orden a su incidencia sobre los objetivos generales de la empresa se estará en disposición de redactar un plan de formación adecuado a las necesidades de la empresa. Confección del plan El contenido del Plan de Formación debe plasmarse por escrito, y además debe ser fácilmente entendible por todas las partes. El contenido básico debe abarcar: 1. Breve exposición de la Política de Formación. 2. Objetivos del Plan. 3. Proceso seguido para su elaboración. 4. Resumen y valoración del planes anteriores. 5. Revisiones. 6. Objetivos pedagógicos. 7. Presupuestos de las actividades formativas, así como subvenciones y ayudas existentes. El plan de formación debe ser consensuado entre los trabajadores y dirección de la empresa, entre el comité y el empresario; de lo contrario puede ser boicoteado, no contando con la colaboración de los implicados y constituyendo, por tanto, un esfuerzo inútil. Es importante resaltar que la asistencia a las actividades formativas por parte de la plantilla de una empresa debiera plantearse, a nuestro juicio, de carácter voluntario (a nadie se le puede forzar a que aprenda algo), inclusive esta predis294 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 295 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI posición de las personas constituye una variable a tener en cuenta en su evaluación de desempeño. Otro detalle que conviene tener presente es el lugar de impartición de la formación. Conviene que el sitio en que se imparta la formación sea el propio lugar de trabajo cuando lo que se trata de conseguir es el adiestramiento de operarios y supervisores; sin embargo, para la formación de ejecutivos, directivos, personal de ventas, etc., se aconseja la utilización de hoteles y centros de formación (de todas formas, fuera de la empresa). Concretando más en empresas de acuicultura, el trabajo consiste en decidir qué personas o empleados de la empresa van a ser los destinatarios de una determinada actividad formativa, con qué objetivo y qué utilidad práctica van a representar dichas actividades. Esto dependerá de los puestos y de las necesidades formativas de cada persona y en cada puesto de trabajo. Un debate que suele estar abierto de forma permanente es el relativo a la logística a llevar a cabo en las actividades formativas. Mientras, por un lado, los empresarios tienden a que la formación se realice fuera de la jornada laboral, los trabajadores están más dispuestos a formarse dentro de la misma. En muchas ocasiones, el horario lo impone la propia actividad formativa, de tal forma que si se trata de transmitir conocimientos de operaciones y tareas concretas en el puesto de trabajo, la formación podrá impartirla el jefe de equipo o mando intermedio y tendrá que llevarse a cabo en el lugar de trabajo y dentro de la jornada laboral. Sin embargo, de tratarse de formación de carácter gerencial tendría que impartirse fuera de la jornada laboral y por instituciones especializadas en este tipo de formación. Encontrar el lugar y horarios adecuados para llevar a cabo las actividades formativas se convierten siempre en un escollo difícil de salvar. Al esfuerzo que supone la organización de la actividad formativa los empresarios suelen argumentar que la mayoría de las actividades formativas de carácter general se llevan a cabo en las capitales de provincia, y son muchas las empresas que están alejadas de ellas, lo que supone un coste de tiempo y dinero en desplazamientos. Por otro lado, la formación «ad hoc» para la propia empresa requiere de consultores especializados que, o bien deben acercarse al establecimiento empresarial o a hoteles cercanos al mismo. Este último tipo de formadores suelen suponer un alto coste para la empresa que, tal y como ya se ha señalado, al empresario le cuesta descubrir su grado de rentabilidad. A modo de ejemplo, enumeramos algunos planes básicos de formación: 295 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 296 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla 78 Ejemplos de planes básicos de formación Tipo de formación Plan de Integración y Socialización Formación Técnico-Operativa Formación comercial Formación Gerencial Otras actividades formativas Fuente: Elaboración propia. 296 Cursos • • • • Cultura de empresa. Formación de formadores. Conocimiento del sector y de la problemática de la empresa. … • • • • • • • • • • • • Conocimientos biológicos. Acuicultura en general. Técnicas de criaderos marinos. Entrenamiento práctico en sistemas de cultivo particulares: moluscos, crustáceos o peces, preparación de piensos, cuidado de los estanques, etc. Genética y selección de reproductores. Control de maduración y reproducción. Nutrición larvaria. Estrategias de alimentación durante el engorde. Ingredientes alternativos en piensos para peces. Engorde durante el invierno. Vacunación y profilaxis. … • • • • • • • Problemas del mercado. Técnicas de venta. Calidad del producto. Control de calidad. Seguimiento de clientela. Problemática de la comercialización de productos de pesca. … • • • • • • • • • • Mando y liderazgo. Dirección de equipos. Gestión de grupos de trabajo. Gestión empresarial. Gestión de la calidad. Formación laboral. Programas de mejora continuada. Técnicas de negociación. Determinación de impacto ambiental. … • • • • Prevención de riesgos laborales. Idiomas. Informática. … 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 297 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO La gestión de los recursos humanos en las empresas acuícolas BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El plan de integración y socialización pretende informar acerca del gran valor añadido que las actividades formativas representan para las empresas. Dentro de este plan los empleados pueden ser partícipes de los planes de formación al transmitir sus ideas acerca de posibles cursos o prácticas que ellos estiman convenientes. También aquí se suelen incluir sesiones de carácter informativo sobre la problemática actual de la empresa, sus planes futuros, cambios en procesos fundamentales que deban ser conocidos, informados y formados para la plantilla, etc. La formación técnico operativa se refiere a la formación de carácter operativo de utilidad directa en los puestos de trabajo de carácter productivo. Dentro de este apartado podríamos considerar los puestos de carácter comercial que necesitarían una formación en materia comercial específica. La formación gerencial está constituida por las actividades formativas tendentes a mejorar la organización de la empresa y la organización de personas. En otro orden de cosas, y dentro de ámbito formativo, son numerosas las instituciones y/o entidades que pueden colaborar en las actividades formativas en las empresas de acuicultura; podemos citar: • Las Universidades: Las universidades no son tenidas en cuenta lo suficiente para el desarrollo de actividades formativas en el mundo de la empresa. Son, a nuestro juicio, idóneas para la impartición de formación de carácter gerencial, aunque hay centros universitarios como los de Biología, Química, Física que pueden aportar formación en el campo técnico. Asimismo, se exhorta a la empresa a que colabore con las universidades en el campo de investigación científica. • Consultoras de formación: Aquí se incluyen consultoras en organización y gestión de empresas, de recursos humanos, en marketing, etc. • Asistencia a congresos: La información de los congresos que se celebran suelen remitirse a través de asociaciones de este tipo de empresas acuícolas. Concretamente, la Asociación Empresarial de Cultivos Marinos de España (APROMAR) y las publicaciones periódicas del sector, como por ejemplo Fish Farming International, que edita la asociación Aquaculture Europe suelen informar al respecto. Así, los congresos más destacables que tienen lugar en el sector acuícola son, entre otros: Aquaculture Europe (bianual); Aquavisión, organizado por el grupo Nutreco; NorFishing, feria bianual en Noruega; Aquaculture International, Glasgow, Escocia; Aquacoltura, feria bianual que se celebra en Verona (Italia); World Aquaculture, organizado por la World Aquaculture Society. • Instituto Agronómico Mediterráneo de Zaragoza (IAMZ), en su Centro Internacional de Altos Estudios Agronómicos Mediterráneos (CIHEAM). En el programa de los últimos cursos figuran: Master en Acuicultura, Acuicultura Mediterránea: cultivo en mar abierto, Nuevas técnicas para criaderos marinos, Nuevas especies para la acuicultura mediterránea, Genetics and breeding of mediterranean aquaculture species. Ahora bien, los cursos que en este apartado sugerimos pueden servir de idea para empresas de acuicultura que ya estén funcionado así como a empresas de reciente creación 297 5878-II.Cap6 17/2/00 07:27 Página 298 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Seguimiento de las actividades formativas La empresa necesita realizar un seguimiento de los programas de formación que se estén llevando a cabo para confirmar que se imparten de acuerdo con lo previsto y teniendo en cuenta lo solicitado por la dirección de la empresa. Gracias al seguimiento de las actividades formativas pueden corregirse algunos errores que se detecten por deficiente orientación de la actividad, o cualquier otra razón, de forma que sirva de experiencia para la organización de futuros planes o actividades formativas. Evaluación del plan formativo Toda formación debe ser evaluada en todos sus términos: profesorado, horario, material, comunicación, utilidad práctica, etc. Esta evaluación debe servir para medir el grado de utilidad de la misma y para la mejora en la planificación de la formación en períodos venideros. Ahora bien, debe tenerse en cuenta que la evaluación de la formación puede llevarse a cabo en tres períodos diferentes: en el momento inmediato tras su finalización, transcurridos unos meses de su finalización y al cabo de unos años. Este trabajo se desarrolla en su mayoría por medio de observaciones directas en los puestos de trabajo y a través de encuestas. 298 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 299 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 7. Legislación sobre el sector acuícola En recuerdo de Claudio Movilla Álvarez Esta crónica debió ser escrita por el Magistrado del Tribunal Supremo Claudio Movilla Álvarez. Su prematuro fallecimiento se lo impidió. De haber podido hacerlo, el trabajo sería mejor en todo. Mi participación —generoso encargo de Elisa Polanco, su viuda— se propone honrar su memoria y reiterar mi afecto hacia tan inolvidable compañero y amigo. La acuicultura: crónica legislativa y jurisprudencial I. Ámbito de esta crónica Este trabajo no contiene una exhaustiva exposición de los numerosos problemas jurídicos que la acuicultura —en su doble dimensión marina y continental— plantea. Mucho más modestamente, se propone tan sólo hacer la crónica de la evolución legislativa y jurisprudencial que se ha producido en España a lo largo de los años comprendidos desde la entrada en vigor de la Ley de Cultivos Marinos 23/1984, de 25 de junio — en lo sucesivo LCM— hasta la actualidad, seleccionando principalmente las normas con rango de Ley y centrando la atención en aquellas cuestiones que guardan más directa relación con los aspectos prácticos que se plantean a quienes proyectan su esfuerzo laboral, profesional o económico en el mundo de la acuicultura, que es, como se reconoce expresamente en las Exposiciones de Motivos de recientes Leyes Autonómicas, una muy importante riqueza colectiva (Exposición de Motivos de la Ley 6/1998, del País Vasco, párrafo 2.º) de vital importancia tanto social como económica (Exposición de Motivos de la Ley 2/1993 de la Comunidad Valenciana). II. Concepto de acuicultura en el ámbito jurídico No hay en nuestro ordenamiento jurídico una definición de acuicultura que comprenda tanto la que se desarrolla en aguas marinas como en aguas continentales. La LCM limita su objeto (art. 1) a la «regulación y ordenación de los cultivos marinos en el territorio nacional, zona marítimo-terrestre, rías, estuarios, lagunas y albuferas en comunicación permanente o temporal con el mar, mar territorial y zona económica exclusiva, tanto en bienes de dominio público como de propiedad privada». En dicha Ley se entiende por cultivos marinos «la realización de las acciones y labores apropiadas para la reproducción o crecimiento de alguna o varias especies de la 299 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 300 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI fauna y flora marinas o asociadas a ellas» [art. 2.a)]. El artículo 148.1.11.ª de la CE reconoce a las Comunidades Autónomas la posibilidad de asumir competencias en materia de acuicultura. Todas ellas la han asumido en su correspondiente Estatuto con carácter de competencia exclusiva [como se desprende de los siguientes preceptos: E.A. del País Vasco: art. 10.10; E.A. Cataluña: art. 9.17; E.A. Galicia: art. 27.15; E.A. Andalucía: art. 13.18; E.A. Asturias: art. 10.1.h); E.A. Cantabria: art. 22.9; E.A. la Rioja: art. 8.9; E. Región de Murcia: art. 10.h); E.A. Comunidad Valenciana: art. 37.17; E.A. Aragón: art. 35.12; E.A. Castilla-La Mancha: art. 31.1.h); E.A. Canarias: art. 29.5; L.O. 13/1982 Navarra: art. 50.1.b); E.A. Extremadura: art. 7.8; E.A. Islas Baleares: art. 10.18; E. Comunidad Madrid: art. 26.9, en relación con arts. 25.1, 2 y 3; E.A. Castilla y León: art. 26.10]. No todas las CC. AA. han ejercido la potestad legislativa para aprobar una Ley reguladora de tal actividad. Esa competencia exclusiva es indudable que comprende la de establecer definiciones no coincidentes con la Ley estatal, como acontece por ejemplo con la vigente Ley Gallega núm. 6/1993, de 11 de mayo, cuyos artículos 8 y 9 contienen las definiciones de establecimientos de cultivos marinos y de establecimientos auxiliares de cultivos marinos, habilitando en ambos casos a la Xunta de Galicia para la definición de nuevos tipos de establecimientos si las necesidades lo requieren. Otro ejemplo lo encontramos en la Ley 9/1998, de 15 de diciembre, de Pesca Marítima de la C. Valenciana, cuyo artículo 41.1 define «La acuicultura o cultivos marinos como la actividad que, llevada a cabo por medios técnicos y científicos, se realiza para obtener y desarrollar especies marinas en sus diversas fases de reproducción, desove, crecimiento, preengorde y engorde», precisando (art. 41.2) los establecimientos donde puede realizarse tal actividad. Consiguientemente, para conocer el ámbito del concepto acuicultura habrá que acudir a la correspondiente normativa autonómica. Sólo en defecto de ella resultará invocable la definición contenida en la LCM, constreñida, recuérdese, a los cultivos marinos. III. Los artículos 148.1.11.ª y 149.1.19.ª de la Constitución Española 1. El reparto de competencias entre el Estado y las CC. AA. en la jurisprudencia del Tribunal Constitucional El artículo 148.1.11.ª CE establece que las CC. AA. podrán asumir competencias en las siguientes materias: «La pesca en aguas interiores, el marisqueo y la acuicultura, la caza y la pesca fluvial». El artículo 149.1.19.ª CE dispone que el Estado tiene competencia exclusiva sobre «la pesca marítima, sin perjuicio de las competencias que en la ordenación del sector se atribuyan a las CC. AA.». Desde muy poco después de la entrada en vigor de la CE fue muy controvertido el reparto de competencias en las materias a que se refieren los artículos transcritos. El Gobierno del Estado y las Comunidades Autónomas acudieron con frecuencia ante el TC en busca de criterios delimitadores. La reciente STC 147/1998, de 2 de julio, dictada en el conflicto positivo de competencia promovido por el 300 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 301 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Gobierno Vasco, en relación con el Plan de Pesca en aguas comunitarias elaborado por el MAPA para los meses de enero y febrero de 1988, resume la doctrina constante del TC sobre la distribución de competencias en temas pesqueros contenida en las SSTC 56/1989, 147/1991, 44/1992, 57/1992, 68/1992, 149/1992 y 184/1996. Dice el Fundamento Jurídico 7.º de la STC 147/1998 (reproducido en la parte que aquí interesa): «De un lado, la Constitución reserva al Estado la competencia exclusiva en materia de “pesca marítima, sin perjuicio de las competencias que en la ordenación del sector se atribuyan a las Comunidades Autónomas” (art. 149.1.19.CE) y, de otro, la CA del País Vasco, como las restantes Comunidades con litoral, han asumido en su Estatuto de Autonomía competencia exclusiva en materia de «pesca en aguas interiores, marisqueo y acuicultura» (art. 10.10 EAPV), y de desarrollo legislativo y ejecución, dentro de su territorio, de la legislación básica del Estado en materia de “ordenación del sector pesquero del País Vasco” [art. 11.1.c) EAPV]. Interpretando el referido esquema de distribución competencial, la STC 56/1989 viene a establecer que los títulos “pesca marítima” y “ordenación del sector pesquero” constituyen materias distintas sobre las que operan criterios diferentes de distribución competencial. Así, mientras que la pesca marítima es competencia exclusiva del Estado, salvo en aguas interiores, donde lo es de las Comunidades Autónomas, la ordenación del sector pesquero es una materia compartida en la que corresponde al Estado la legislación básica y a las Comunidades Autónomas su desarrollo normativo y ejecución. Sintéticamente, por “pesca marítima” hay que entender la regulación de la actividad extractiva, y, como presupuesto de ella, el régimen de protección, conservación y mejora de los recursos pesqueros, mientras que la ordenación del sector pesquero hace referencia a la regulación del sector económico y productivo de la pesca en todo lo que no sea actividad extractiva directa. De manera más detallada, la “pesca marítima incluye la normativa referente a los recursos y las zonas donde puede pescarse (fondos, caladeros, distancias, cupos), a los períodos en que puede pescarse (vedas, horas) y a la forma y medios de realización de la actividad extractiva en el mar (artes, medios de pesca)”, mientras que la “ordenación del sector pesquero abarca todo lo relativo a la organización de tal sector económico, que, desde el punto de vista de los sujetos o empresarios intervinientes, comprende las medidas referentes a las condiciones profesionales de los pescadores y otros sujetos relacionados con el sector, construcción de buques, registros oficiales, cofradías de pescadores, lonjas de contratación y otras similares”». 2. La materia de acuicultura competencia exclusiva de las CC. AA. De lo hasta aquí transcrito se desprende que siempre ha sido pacífico el reconocimiento de la competencia exclusiva de las CC. AA. en materia de acuicultura. Con mayor claridad se desprende tal conclusión de las SSTC 113/1983, de 6 de diciembre, y 103/1989, de 8 de junio. La primera recayó en el conflicto positivo de competencia planteado por el Gobierno del Estado en relación con el Decreto del Gobierno 301 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 302 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Vasco 67/1982, de 29 de marzo, de Ordenación del Servicio de Inspección Pesquera, Marisquera y de Plantas de Acuicultura, reconociendo que la competencia ejercida por el Decreto citado, interpretada en los términos contenidos en los fundamentos segundo y tercero de dicha sentencia, pertenece al Gobierno Vasco. En el F.J. 3 se afirma: «La CA del País Vasco, por medio de su Estatuto, asumió la competencia exclusiva sobre pesca en aguas interiores, marisqueo y acuicultura. Esta última competencia, porque la Constitución así lo permite y porque así se dispuso en el texto estatutario, es la asumida, desde la entrada en vigor del Estatuto, por la Comunidad. Es claro, pues, que la competencia comunitaria no nace con el Decreto, sino con el Estatuto. No cabe duda: la competencia asumida en el artículo 10.10 del E.A. del País Vasco, por derivación del 149.1.19 CE, implica como uno de sus contenidos el dictar normas sobre inspección y sanción». La STC 103/1989 (F.J. 2) dice: «Como todas las demás CC. AA. constituidas en el litoral y en los archipiélagos, la de Galicia asumió en su Estatuto competencias exclusivas sobre el marisqueo y la acuicultura (art. 27.15), asunción competencial específicamente prevista en el artículo 148.1.11.ª de la CE y no limitada o excepcionada, de modo expreso, por ninguna de las competencias atribuidas exclusivamente al Estado por el artículo 149.1 de la misma Norma Fundamental». Y añade: «Las competencias plenas (en la normación y en la ejecución) que así asumió la Comunidad Autónoma de Galicia deben entenderse comprensivas de la maricultura o cultivos marinos en las aguas del litoral gallego, pues ni la CE (art. 148.1.11) ni el Estatuto de Autonomía (art. 27.15) restringen la competencia autonómica en este ámbito a las aguas interiores, como sí hacen los preceptos citados, por el contrario, respecto de la competencia sobre la pesca; ello sin perjuicio, claro está, del necesario respeto por la Comunidad Autónoma de las competencias que, sobre el mismo ámbito físico, ostente el Estado en virtud de alguno o algunos de los títulos competenciales que relaciona el artículo 149.1 de la CE. Las competencias de Galicia, por tanto, se extienden también a lo que la propia Ley 23/1984 denomina Acuicultura Marina (párrafo 3.º de su art. 29)». Aunque la última sentencia citada se refiere exclusivamente a las CC. AA. constituidas en el litoral y en los archipiélagos, nos parece claro que sus razonamientos y conclusiones son también aplicables —respecto de la acuicultura continental— a las restantes CC. AA., es decir, a aquellas carentes de costa, respecto de las cuales hay que afirmar sus competencias plenas —en la normación y en la ejecución— en materia de acuicultura. 302 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 303 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI IV. La Ley 23/1984, de 25 de junio, de Cultivos Marinos (LCM) 1. El carácter supletorio de esta Ley La LCM fue aprobada ante la insuficiencia de la legislación (el Reglamento para la explotación de viveros de cultivo, aprobado por Decreto 2559/1961, de 10 de noviembre, y la Ley 59/1969, de 30 de junio, de Ordenación Marisquera) que había venido ordenando la maricultura. Los grandes avances científicos en el desarrollo de los cultivos marinos, las condiciones excepcionales de nuestras costas y su fuerte potencial de producción que puede cubrir nuestra demanda de pescado y marisco, su compatibilidad con la pesca extractiva, más la falta de una normativa actualizada son algunas de las razones que fueron tenidas en cuenta para la aprobación de dicha Ley. Consciente sin embargo el legislador de la competencia exclusiva de las Comunidades Autónomas, la Disposición Adicional de la LCM establece que lo dispuesto en ella «será de aplicación supletoria respecto de las normas que puedan dictar las Comunidades Autónomas que ostenten competencias en la materia», añadiendo que «estas normas habrán de respetar, en todo caso, el ejercicio de las facultades atribuidas por el Título II de la presente Ley a los órganos correspondientes de la Administración del Estado». 2. Análisis del artículo 1 y de la Disposición Adicional de la LCM en la STC núm. 103/1989, de 8 de junio El carácter supletorio de la LCM, expresamente establecido en su Disposición Adicional, fue el objeto principal de los recursos de inconstitucionalidad promovidos por la Junta y el Parlamento de Galicia contra la totalidad y buena parte de los artículos de dicha Ley. La STC 103/1989, de 8 de junio, que los resolvió, declaró inconstitucional, y por consiguiente nulo, el inciso «o autonómica» contenido en el párrafo 1 del artículo 26, desestimándolos en todo lo demás. Resulta de gran interés conocer los argumentos que llevaron al TC a declarar la constitucionalidad del carácter supletorio de la LCM. Frente a la tesis sostenida por los recurrentes de que ni siquiera por vía supletoria podían las Cortes Generales, vigente ya el Estatuto de Autonomía, innovar la regulación estatal preestatutaria, ni tampoco proceder a una redefinición o armonización de las competencias autonómicas en el sector de los cultivos marinos, el TC responde, en lo que aquí importa, con las consideraciones siguientes [F.J. 4.a), b) y c)]: «No merece objeción constitucional la adopción por las instituciones generales del Estado (por las Cortes, en el presente caso) de una normación sobre materias que correspondan, en régimen de competencia exclusiva a una o, incluso, a todas las CC. AA., pues si bien la regla de supletoriedad del Derecho estatal del artículo 149.3 CE en manera alguna constituye una cláusula universal atributiva de competencias para legislar sobre cualesquiera materias a favor del Estado —STC 15/1989, F.J. 1— porque, obviamente, no es una norma competencial, sino ordenadora de la preferen- 303 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 304 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI cia en la aplicación de las normas en el Estado compuesto configurado por la Constitución, tampoco puede ignorarse que la normación estatal sólo nacería viciada de inconstitucionalidad, por incompetencia, si pretendiera para sí una aplicación incondicionada en el respectivo territorio —STC 85/1983, F.J. 3—». «No es reprochable, pues, la adopción de una Ley que discipline con el alcance supletorio que declara la Disposición Adicional impugnada lo relativo a la acuicultura marina en todo el territorio nacional. Y ello no sólo en razón de la existencia, en el presente caso, de una zona litoral del territorio nacional no integrada en CC. AA., así como de competencias estatales concurrentes en la costa, sino también por la propia finalidad reguladora de la Ley 23/1984, puesta de relieve en su preámbulo, de ordenación de un sector de cierta importancia en todo el territorio nacional, acomodando la legislación estatal preexistente a los avances científicos en el desarrollo de los cultivos marinos. Se sigue de esta declaración de supletoriedad, por tanto, que las determinaciones de la Ley 23/1984 podrán ser sustituidas por las CC. AA. competentes en la materia, a no ser que alguna o algunas de estas reglas legales resulten, por su tenor literal o en tanto aludan a competencias estatales, indisponibles para las potestades autonómicas. Siendo esto así, las disposiciones impugnadas sólo serían de aplicación directa en aquella parte del territorio nacional no integrado en CC. AA., pues todas las constituidas en litoral y en los archipiélagos han asumido ya competencias sobre cultivos marinos, si bien la mayoría no ha ejercido, en el plano legislativo, su competencia sobre la materia». «Mediante esta normativa, no ha pretendido la Ley proceder a una ordenación de las competencias respectivas del Estado y de las CC. AA. La Ley no ordena aquí competencias estatales y autonómicas, sino que, presumiéndolas, procede a una regulación, abstracta, por así decir, de atribuciones administrativas en los procedimientos que afectan a la acción pública sobre los cultivos marinos, regulación que parte de la convergencia en el litoral de una pluralidad de responsabilidades administrativas y que nada dice en si misma cabe reiterar, sobre si la autoridad llamada a intervenir en cada caso ha de ser del Estado o de las CC. AA., cuestión ésta que ha de resolverse según conexiones competenciales a identificar con arreglo a lo que dispongan las normas integradas en el bloque de la constitucionalidad. Una ordenación de atribuciones como la que aquí hace la Ley no es, en si misma, contraria a la Constitución o, más ampliamente, al bloque de la constitucionalidad, pues el legislador estatal no ha pretendido imponer esta regulación administrativa a todas y cada una de las CC. AA. con competencias en este ámbito, lo que habría supuesto, ciertamente, desconocer la potestad de autoorganización que establece, a favor de aquellas, el artículo 148.1.1 de la Constitución. La interpretación más correcta de esta regulación de la Ley 23/1984 —la única compatible con la Constitución y con el dictado de la Disposición Adicional de la misma Ley— es más bien la que parte del carácter supletorio de sus normas respecto de las que puedan dictar, sobre su propia Administración, las CC. AA. competentes, con la única excepción de que el organismo llamado por la Ley a intervenir en cada caso resulte ser, según criterios ya competenciales, un órgano de la Administración del Estado; pues, cuando así sea, es claro que la normación organizativa autonómica no podrá eliminar o desplazar la competencia estatal. Así se cuida por lo demás de señalarlo la citada Disposición Adicional, en la que, tras enunciarse el carácter supletorio de la Ley, se concluye advirtiendo que las normas que puedan dic- 304 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 305 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tar las CC. AA. habrán de respetar, en todo caso, el ejercicio de las facultades atribuidas por el Título II a los órganos correspondientes de la Administración del Estado». «La supletoriedad declarada por tal Disposición Adicional lo es respecto de las normas que puedan dictar las CC. AA. “que ostenten competencias en la materia”, concepto éste —el de «materia» regulada por el legislador estatal— que alcanza aquí virtualidad sólo en atención a cada precepto de la misma Ley, cuyo objeto específico de normación habrá de considerarse en cada caso para apreciar el grado de aplicación (supletoria o directa) que para sí busquen las reglas estatales. La Ley versa, ciertamente, sobre un ámbito, cultivos marinos, asumido como competencia propia por todas las CC. AA. afectadas, mas ello no impide al legislador estatal la simultánea regulación, en el mismo texto legal, de materias atribuidas constitucional o estatutariamente a su competencia, regulación que, en la medida en que aquí esté impugnada, habrá de enjuiciarse atendiendo ya a criterios competenciales». Hace el TC [en el F.J. 4.b) párrafo 3.º de esta misma sentencia 103/1989] una aclaración que resulta necesario destacar para tenerla en cuenta y volver sobre ella cuando más adelante nos ocupemos del contenido de la Ley. Dice así: «Las referencias presentes en la Ley a los “organismos competentes” en los distintos sectores de la actuación administrativa remiten, en suma, tanto a la Administración estatal como a las autonómicas, según las reglas de competencia que sean aplicables, si bien es preciso aclarar desde ahora que semejante referencia indistinta no es, en cambio, reconocible en las diversas menciones que se contienen en la Ley 23/1984 al «organismo competente en materia de Pesca», pues con dicha expresión se designa en la Ley a la autoridad llamada a gestionar directa y principalmente lo relativo a los cultivos marinos, y ya hemos tenido ocasión de advertir que, en lo que se refiere a las relaciones de competencia entre el Estado y las CC. AA., esa autoridad no es sino la Autonómica». 3. El cambio de criterio adoptado por el TC en la interpretación de la cláusula de supletoriedad del artículo 149.3, último inciso, CE: la STC 118/1996, de 27 de junio No debemos omitir que criterios diferentes a los hasta aquí expuestos se mantienen en más recientes SSTC. Así, entre otras, en la STC 118/1996, de 27 de junio (F.J. 6 párrafo 1) se dice lo siguiente: «Existen numerosas materias atribuidas por los Estatutos de Autonomía a la competencia exclusiva de todas y cada una de las Comunidades Autónomas, lo cual impide al Estado dictar disposiciones en dichas materias», puesto que la «asunción de competencias exclusivas confiere a las Comunidades Autónomas no sólo el poder oponerse a que las normas del Estado incidan en esas materias sometidas a su competencia exclusiva con alcance de aplicación directa, sino que también atribuyen a las Comunidades decidir si tales materias deben ser sometidas, por su parte, a reglamentación específica y en qué momento debe hacerse ( F.J. 7 de la STC 147/1991)». 305 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 306 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI El último párrafo del F.J. 5 de la STC 118/1996 concluye así: «Sólo en la STC 103/1989 se admitió que el Estado, en virtud de la cláusula que analizamos, pudiese dictar Derecho supletorio en materias atribuidas, en régimen de competencia exclusiva, a una o incluso a todas las Comunidades Autónomas [F.J. 4.a)], pronunciamiento que fue corregido anteriormente por las SSTC 214/1989, 133/1990 y 147/1991». Por su parte el apartado 7.º del F.J. 6 de la STC 118/1996 añade: «Para que el Estado pueda dictar normas jurídicas que regulen una materia determinada, no basta con que ostente un título que le atribuya cualesquiera competencias en esa materia, sino que debe poder invocar aquel título específico que le habilite en concreto para establecer la reglamentación de que se trate, sin que, como correctamente se afirmaba en la STC 147/1991, que acabamos de transcribir, pueda invocar como tal la cláusula de supletoriedad». No obstante, tal cambio de criterio en la doctrina constitucional, la aplicabilidad con carácter supletorio de la LCM no puede ser puesta en duda. Recientes Leyes autonómicas posteriores a la STC 118/1996 asumen tal supletoriedad. Así, por ejemplo, en la Exposición de Motivos de la Ley del Principado de Asturias 2/1993 se puede leer lo siguiente: «Hasta ahora, y parcialmente, se ha ido regulando alguna de las actividades descritas con apoyo en la legislación estatal mediante Decretos del Consejo de Gobierno, siendo necesaria la promulgación de una norma que, con rango de Ley, establezca los principios del ejercicio de las competencias descritas y cubra lagunas existentes, sin perjuicio de la aplicación, con carácter supletorio, de la normativa vigente emanada de la Administración Central». V. Exposición del contenido de la LCM 1. Especial consideración del Título II La LCM consta de seis títulos (31 artículos), una Disposición Adicional y otra Disposición Transitoria. El Título I está dedicado a precisar el objeto de la Ley que ya conocemos (art. 1) y a establecer una nomenclatura unificada de los principales conceptos de la actividad y de los establecimientos de cultivo, dada «la creciente confusión existente», como se reconoce en la Exposicón de Motivos, aunque ello se hace «sin un carácter de exclusividad» y sin menoscabo de las competencias y facultades asumibles por las CC. AA. (arts. 1 y 2.2 párrafo 2.º). El Título II regula materias que van más allá de su denominación: «Del otorgamiento de las concesiones y autorizaciones». En efecto, en dicho Título se regulan los conceptos de concesión y autorización; las distintas concesiones y autorizaciones que es preciso obtener para la instalación, explotación y funcionamiento de cualquier establecimiento de fauna y flora marinas, y sus correspondientes tomas de agua y evacuaciones al mar, estableciendo 306 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 307 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI que cuando tales otorgamientos impliquen obras fijas dentro del mar, precisarán, además, una concesión del organismo competente de puertos y costas, conforme el artículo 10.3 de la Ley 28/1969, sobre Costas, precepto hoy derogado que debe entenderse sustituido por los arts. 64 y siguientes de la LC, a su vez desarrollados por los arts. 129 y siguientes del Reglamento General para Desarrollo y Ejecución de la LC (en lo sucesivo RGLC), ordenamiento jurídico éste —el integrado por la LC y su RG— al que hay que entender que remite la LCM siempre que se refiere a autorizaciones o concesiones sobre bienes de dominio público marítimo-terrestre estatal, que son los comprendidos en los arts. 3 a 5 de la LC, con el desarrollo que de los mismos llevan a cabo los artículos 3 a 7 del RGLC. Consiguientemente, la regulación referente a plazos, procedimiento para el otorgamiento, inscripción en el Registro de la Propiedad, condiciones, causas de modificación y extinción, régimen económico financiero (cánones, tasas, fianzas) de estas concesiones, y régimen de infracciones y sanciones se encuentra en el conjunto normativo constituido, principalmente, por la LC y su RG. Así resulta de la Disposición Derogatoria de la LC (que aparte derogaciones específicas contiene una cláusula derogatoria de cuantas disposiciones de carácter general se opongan a lo establecido en ella), como de la propia LCM, cuando en el inciso final de su Disposición Adicional establece que las normas que puedan dictar las CC. AA. con competencia en la materia de cultivos marinos habrán de respetar, en todo caso, el ejercicio de las facultades atribuidas por el Título II de la propia Ley a los órganos correspondientes de la Administración del Estado. Todo ello sin olvidar las competencias que correspondan a los entes locales, cuya intervención se sujetará a la regulación contenida en el bloque de legalidad integrado sustancialmente por la CE, la LBR Local (Ley 7/1985, de 2 de abril), el TRR Local (R. D. Legislativo 781/1986, de 18 de abril) y las Disposiciones con rango de Ley aprobadas por las CC. AA. al amparo de lo previsto en el artículo 148.1.2, en relación con el 149.1 apartado 2, del texto fundamental. De lo dicho hasta aquí se desprende que el régimen jurídico sobre concesiones y autorizaciones previsto en los artículos 4 a 6, 8, 14, 15 y 17 de la LCM se refiere a las que no son objeto de regulación en la LC y RG, cuyas normas serán en todo caso de preferente aplicación, rigiendo tan solo las contenidas en la LCM en defecto de legislación autonómica sobre las mismas materias que, en caso de existir, no por razón de jerarquía sino en virtud del principio de competencia (STS 7 de marzo de 1997, F.J. 2.º) será la que rija, desplazando así a la LCM, sin perjuicio, claro está, del necesario respeto de la competencia exclusiva del Estado en virtud de otros títulos (STC 103/1998, F.J. 6.º, párrafo 2) y sin olvidar tampoco que «no cabe afirmar una competencia principal o directa del Estado sobre los espacios físicos designados en el artículo 1 de la LCM sobre la sola base de su carácter de bienes de dominio público, pues la condición de dominio público no es un criterio utilizado en la CE ni en los E.A. para delimitar competencias ni tampoco sirve para aislar una porción de territorio de su entorno y considerarlo como una zona exenta de competencias de los diversos entes públicos que las ostentan» [STC 103/1989, F.J. 6.a)]. 307 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 308 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Debemos aclarar, antes de seguir adelante, que cuando se trate de establecimientos de acuicultura que aprovechen aguas continentales, cuyo carácter demanial resulte del artículo 2 de la Ley de Aguas 29/1985, de 2 de agosto, serán de aplicación las normas contenidas en el Capítulo III del Título IV («de la Utilización del Dominio Público Hidráulico») de dicha LA, desarrolladas por los artículos 93 al 197 del Reglamento del Dominio Público Hidráulico, de 11 de abril de 1986 (en lo sucesivo RDPH), determinándose la competencia para el otorgamiento de dichas concesiones en función del carácter intercomunitario o intracomunitario de la cuenca hidrológica, pues en el primer caso serán facultades atribuidas a los órganos del Estado, en tanto que en el segundo serán los órganos de las CC. AA., según resulta de lo previsto en los artículos 15.c) y 22.a) de la LA. Toda concesión se otorgará según las previsiones de los planes hidrológicos, con carácter temporal y por plazo no superior a 75 años, siguiéndose en su otorgamiento el orden de preferencia que establece el artículo 58 LA, que será el previsto en el Plan Hidrológico de cuenca y en su defecto las concesiones con destino a la acuicultura ocupan el quinto lugar (art. 58.3 LA). No está fuera de lugar recordar aquí —aunque luego volvamos sobre este extremo— la exigencia del artículo 90 LA sobre la preceptividad de la presentación de una evaluación de sus efectos siempre que la concesión pueda implicar riesgos para el medio ambiente. Dentro del Título II se regulan los distintos informes (arts. 9 a 12) que han de ser emitidos en los expedientes de concesiones y autorizaciones en bienes de dominio público. Se exige informe favorable de los órganos competentes en materia de Defensa, Seguridad de la Navegación y Puertos y Costas, siempre que el establecimiento de cultivos marinos pueda causar modificación de calados, desviación de cursos naturales de las aguas y canales de navegación, tanto por medio de obras fijas o por dragado u otros procedimientos. Cuando aquellos expedientes no hayan sido declarados de interés para cultivos marinos, se realizará información pública y será preceptivo el informe de aquellos mismos órganos más el de los competentes en materia de turismo, así como de los Ayuntamientos afectados. Los informes de los correspondientes organismos serán vinculantes cuando se trate de expedientes relativos a accesos a los puertos, pasos navegables, zonas de interés para la defensa nacional y centros o zonas declaradas de interés turístico. En zonas declaradas de interés para cultivos marinos (lo que tendrá lugar de conformidad con el procedimiento establecido en el art. 26 de la LCM), o en propiedad privada, únicamente será preceptivo el informe del órgano autonómico competente en materia de Pesca. Debe tenerse en cuenta que el artículo 112.d) de la LC atribuye a la Administración del Estado la competencia para emitir informe con carácter preceptivo y vinculante en las declaraciones de zonas de interés para cultivos marinos, concesiones y autorizaciones de acuerdo con la legislación específica, precepto que la STC 1449/1991 considera constitucional siempre que se interprete en el sentido de que el informe de la Administración del Estado sólo será vinculante cuando las objeciones propuestas se basen en el ejercicio de sus propias facultades, pero no cuando aludan a normas cuya ejecución corresponda a las CC. AA. 308 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 309 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En el artículo 7 se reconoce un derecho de preferencia para el otorgamiento de concesiones y autorizaciones que tengan por objeto la instalación, explotación y funcionamiento de establecimientos de cultivos marinos en zonas de dominio público promovidos por Cofradías de Pescadores, cooperativas de cultivos marinos y organizaciones de productores. Tal preferencia se encuentra condicionada a la concurrencia de los requisitos que el precepto establece. 2. Criterios jurisprudenciales en las sentencias del TC y del TS sobre las principales cuestiones reguladas en este Título Ha sido este título de la LCM el que ha dado lugar a una mayor litigiosidad. Dedicaremos, pues, este apartado a la exposición de los criterios jurisprudenciales más importantes establecidos en relación con las materias objeto de su regulación. Empecemos por la doctrina constitucional. En la STC 103/1989 [F.J. 6.b)] se rechaza el alegato deducido por el Parlamento de Galicia frente al artículo 7 por una supuesta vulneración de los principios constitucionales de igualdad (art. 14) y de libertad de empresa (art. 38). El TC, además de advertir que el precepto —con alguna variación— fue introducido en la Ley 15/1985, del propio Parlamento Autonómico, sobre «Ordenación marisquera y cultivos marinos» (actualmente derogada por la Ley 6/1993, de 11 de mayo, de Pesca de Galicia) afirma que dicho artículo no entraña trato discriminatorio alguno, pues tal preferencia ha de verse como un medio de protección promocional que la Constitución otorga a las sociedades cooperativas (art. 129.2 CE), estableciendo una limitación a la discrecionalidad administrativa consistente en la exigencia a los interesados de unas condiciones idénticas, limitación de la discrecionalidad que permite afirmar la inexistencia de trato desigualitario alguno. Esta misma sentencia rechaza la impugnación dirigida contra el párrafo 2 del artículo 10 (en el que se establece el carácter vinculante de los informes a que antes nos hemos referido). Afirma el TC que la disposición impugnada se limita a ordenar, para el supuesto que contempla, unas atribuciones administrativas que corresponderán al Estado o a las CC. AA. según las pertinentes conexiones competenciales. La hipotética competencia estatal —que la sentencia no prejuzga— sobre determinado puerto, sobre pasos navegables o sobre centros o zonas de interés turístico no podría ser mediatizada a través de una actuación incondicionada por parte de la Comunidad Autónoma competente sobre cultivos marinos, a la hora de conceder autorizaciones o concesiones en aquellos espacios que fueran de la exclusiva responsabilidad de la Administración estatal, de tal modo que la previsión de un informe vinculante en tales supuestos ha de verse como un instrumento de preservación de la competencia estatal, que no ha de desplazar, sin embargo, en tal hipótesis, a la correlativa competencia autonómica para todas las demás actuaciones administrativas sobre las concesiones y autorizaciones cuyo otorgamiento así se condiciona. Afirma también esta sentencia que: 309 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 310 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI «Los informes vinculantes previstos en este artículo 10 no suponen, en el caso de que alguno de ellos hubiera de recabarse de un organismo de la Administración estatal, una constricción ilegítima de las competencias autonómicas sobre cultivos marinos, sino un expediente de acomodación o integración entre dos competencias concurrentes —estatal y autonómica— que, partiendo de títulos diversos con distinto objeto jurídico, convergen sobre un mismo espacio físico, y que están llamadas, por consiguiente, a cohonestarse [F.J. 7.a)]». La LCM también ha sido objeto de frecuente interpretación por el TS en relación con su artículo 1. La STS 17 de julio de 1996 (F.J. 6) rechaza los argumentos de los recurrentes referentes a la vulneración de la LCM por el Reglamento de la Ley de Costas. Dice así esta sentencia: «En el artículo 1 de dicha Ley, efectivamente, se reconoce la existencia de cultivos marinos tanto en bienes de dominio público como de propiedad privada. Este reconocimiento no implica, sin embargo, un estancamiento de la acción normativa en orden a definir lo que deba considerarse por dominio público marítimo-terrestre, pues, como señala la STC 149/1991, de 4 de julio, tal facultad la concede la Constitución al legislador, y nada impide que con arreglo a los nuevos conceptos dados por la LC, que es posterior a aquélla, cambie la calificación de determinadas zonas en que ciertos cultivos marinos se encuentran». En esta misma línea de pensamiento, la STS de 22 de diciembre de 1995 (F.J. 3) afirma: «La existencia primaria del dominio público por naturaleza, como es el caso de la zona marítimo-terrestre, viene ligada a hechos naturales, pudiendo verse alterada su configuración como consecuencia de afectaciones o desafectaciones provocadas por fenómenos naturales. Si a consecuencia de fenómenos naturales el mar avanza invadiendo propiedades colindantes con la zona marítimo-terrestre se produce ope legis una afectación determinante de su inclusión en el dominio público, en la medida en que el supuesto es incluible en las previsiones del artículo 132.2 de la CE y de los artículos 3 y 4 de la LC». 3. Particular examen de la jurisprudencia recaída en relación con las autorizaciones y concesiones que tienen por objeto explotaciones de acuicultura En relación con los artículos 13 y 14, la STS 9 de diciembre de 1992 (F.J. 3 y 4) afirma que, de acuerdo con ambos preceptos pueden distinguirse dos tipos de concesión: de actividad y de ocupación; la primera de competencia de la Administración autonómica, la otra, de la Administración del Estado, que opera como «conditio sine qua non» cuando supongan obras fijas dentro del mar. Pero es en la posterior sentencia de 29 de enero de 1993 (R. núm. 6729/1990) donde se establece una precisa doctrina en relación con la controvertida cuestión referente a la competencia en el otorgamiento de concesiones y autorizaciones admi310 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 311 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI nistrativas. Dicha sentencia revoca la de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria desestimatoria del recurso interpuesto por la Administración del Estado contra determinada Orden de la Consejería competente en cuya virtud se había otorgado a una sociedad cooperativa autorización administrativa para la instalación, explotación y funcionamiento de parques de cultivo de moluscos en la bahía de Santoña. El Estado había invocado, sustancialmente, la vulneración de los artículos 64 y 110 de la LC, a lo que la Sala de Cantabria respondió: que la tesis del Estado sería impecable si sólo existiera la LC y no la LCM o si aquélla hubiera derogado a ésta; que la CA de Cantabria había asumido en su Estatuto competencias exclusivas en materia de pesca en aguas interiores, marisqueo y acuicultura; que la Consejería que otorgó la autorización es el órgano competente, en Cantabria, aludido en la LCM; que el mecanismo de tramitación prevé el informe preceptivo de la Administración del Estado en los expedientes de concesiones de dominio público, informe que puede ser vinculante en determinados supuestos; que tal sistema excluye la paralela tramitación, sustituyéndose la concesión de la Administración del Estado en la LCM por el informe preceptivo y eventualmente vinculante; y que el esquema de otorgamiento de concesiones regulado en la LCM no ha sido sustancialmente alterado por la LC, pues en caso contrario la nueva regulación alteraría el reparto de competencias diseñado en los Estatutos de Autonomía. El recurso de apelación entablado por el Abogado del Estado contra dicha sentencia del TSJ de Cantabria sostuvo la siguiente tesis: «la autorización para la instalación de unos parques de cultivo de almeja fina, efectuada por la Diputación Regional de Cantabria, no dispensa de obtener de la autoridad competente de la Administración del Estado la concesión para la ocupación de dominio público marítimo-terrestre con obras o instalaciones no desmontables, o concesión de obras fijas dentro del mar, requeridas por los artículos 64 y 110.d) de la LC» (F.J. 2). En su respuesta, el TS (F.J. 4), tras resumir la doctrina constitucional contenida en la STC 149/1991, de 4 de julio, y recoger en particular las consideraciones de tal sentencia sobre los artículos 64, 65, 110.b) y 112.d) de la LC, concluye así: «De lo expuesto se deduce que el TC se pronuncia por que en aquellos casos —como el ahora enjuiciado— en que es necesario obtener de la Diputación Regional de Cantabria una autorización para la instalación de unos parques de cultivo de almeja fina, conforme a lo prevenido en la LCM, ello no dispensa al sujeto que realiza tales actividades de obtener del órgano competente de la Administración del Estado la concesión para la ocupación de los metros cuadrados en terrenos de dominio público de la zona marítimo-terrestre en que se deben situar las instalaciones del parque. El artículo 150 del RGLC regula el procedimiento para el otorgamiento de autorizaciones o concesiones competencia de las CC. AA. y que necesiten también la concesión o autorización del entonces MOPU para la ocupación del dominio público marítimo-terrestre. Dicho artículo ha sido declarado válido por la STC 198/1991. En conclusión, la cooperativa tiene obligación de obtener de la Administración del Estado la correspondiente concesión para la ocupación de los metros cua- 311 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 312 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI drados en terrenos de dominio público de la zona marítimo terrestre, sin que ello le dispense la autorización otorgada por la Diputación Regional de Cantabria, ni el informe favorable de la Demarcación de Costas (arts. 10 y 11 de la LCM), informe que se refiere a la procedencia de autorizar las instalaciones, pero que no implica la concesión de ocupación de bienes de dominio público marítimo-terrestres estatal» (F.J. 4). La misma doctrina se desprende de la STS 22 de diciembre de 1995 (F.J. 5). En ella, partiendo de la naturaleza demanial de los terrenos, se dice: «El artículo 22.9 del EA de Cantabria atribuye a la Diputación Regional de Cantabria competencia exclusiva, entre otras, en materia de acuicultura, pero ello, en manera alguna, afecta a las competencias que corresponden al Estado por su titularidad demanial. De esa titularidad derivan también, ineludiblemente, facultades de gestión y tutela para la Administración del Estado encaminadas a asegurar la integridad del dominio público marítimo-terrestre. Consecuentemente, partiendo prejudicialmente de que el establecimiento de las instalaciones a que la autorización se refería afectaban a pertenencias del demanio marítimo-terrestre de titularidad estatal, resultaba preceptivo el procedimiento relativo a las concesiones demaniales, sin que, por otra parte, se aprecie obstáculo alguno para la exigencia de los informes a que se refieren los artículos 10 de la LCM, y 112.d) de la LC». El artículo 5 de la LCM regula las causas de extinción de las concesiones y autorizaciones. Dicho precepto es interpretado por la STC de 24 de enero de 1991 (F.J. 8 y 9). Aborda esta sentencia un supuesto en que se afirma la concurrencia de causas de caducidad imputables a la empresa concesionaria, planteándose si dichas causas vinculan o no a la Administración concedente a declararlo así y extinguir la relación concesional. Pese a que la sentencia concluye confirmando la sentencia apelada, revocándola tan sólo en el sentido de que la declaración de caducidad no puede hacerla por si mismo el Tribunal «a quo», sino que la intervención sustitutiva de éste ha de limitarse a ordenar a la Administración autonómica demandada que dicte la correspondiente resolución declaratoria de la caducidad de la concesión, previamente establece la siguiente doctrina: «En el sector de cultivos marinos, no todo incumplimiento o causa de resolución imputable al concesionario vincula a la Administración a declarar formalmente extinguida la concesión por caducidad, vinculación que sólo se producirá, eliminando las facultades discrecionales del órgano competente, cuando la normativa aplicable señale determinadas causas, por su especial gravedad, como causas obligadas de caducidad que vinculan a la Administración a declarar ésta. Tal es el criterio que de manera clara se hace patente en la regulación de la vigente LC, al distinguir su artículo 79 entre causas de caducidad potestativas, recogidas en el apartado 2 del precepto, y causas necesarias o de obligado ejercicio por parte de la Administración enumeradas en el apartado 1 que considera los supuestos muy graves o especialmente cualificados de incumplimiento del objeto de la concesión. A diferencia de la rever- 312 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 313 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI sión, la caducidad de las concesiones no es un supuesto de extinción caracterizado por su automatismo, pues requiere una declaración formal producida tras el adecuado expediente en el que, como trámite garantizador, haya sido oído el concesionario afectado». Las STS de 5 de febrero y 3 de diciembre de 1982, aplicando legislación anterior a la LCM, declaran la improcedencia de la caducidad de la concesión de actividad de cultivos marinos porque, en el primer caso, referente a la explotación de una cetárea en el Puerto de Mahón, la cesación en la normal explotación fue a causa de la contaminación de las aguas, factor no imputable a la voluntad del concesionario, y porque en el segundo supuesto (referente a un parque de cultivos marinos en Isla Cristina, Huelva) el retraso en el cumplimiento del plazo para la puesta en explotación no se consideró imputable al concesionario. Los artículos 10, párrafo 2.º (informes vinculantes) y 12 (informes preceptivos en zonas declaradas de interés para cultivos marinos o en propiedad privada) son objeto de análisis por la STS 11 de noviembre de 1991 (F.J. 4): «En los expedientes de concesiones y autorizaciones en bienes de dominio público que no hayan sido declarados de interés para cultivos marinos, tan sólo serán vinculantes los informes de los distintos organismos que están en el párrafo 1.º del artículo 10 de la LCM, cuando les corresponde la competencia según se trate de expedientes sobre accesos a los puertos o pasos navegables, zonas de interés para la defensa nacional, centros o zonas de declaradas de interés turístico. Según el artículo 12 únicamente será preceptivo el informe del organismo competente en materia de Pesca». VI. Los Títulos III a VI de la LCM 1. Doctrina del TC contenida en la sentencia 103/1989 Del Título III de la LCM («Inspecciones y Experiencias») nos interesa destacar que la inspección y reconocimiento de los establecimientos de cultivos marinos corresponde exclusivamente al órgano autonómico competente en materia de pesca, lo cual no excluye las inspecciones que ordenen los organismos competentes en materia de sanidad (art. 18 LCM y STC 103/1989). En este ámbito sanitario son de obligada consideración los RR. DD. 1437/1992, de 27 de noviembre, parcialmente modificado por el R. D. 1840/1997, de 5 de diciembre, mediante el cual se incorpora la Directiva 95/71/CEE que a su vez modificó parcialmente el Anexo de la Directiva 41/493/CEE. Al artículo 19 (concesiones y autorizaciones temporales para efectuar experiencias sobre nuevos cultivos marinos o mejoras de los existentes) se refiere la STC 103/1989 (F.J. 6) aceptando la constitucionalidad de la preferencia que se reconoce en el otorgamiento de concesiones y autorizaciones. En el Título IV de la LCM («Comercialización») se determinan los requisitos que deben concurrir para que pueda tener lugar el traslado y las exportaciones de 313 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 314 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI huevos, esporas o individuos de talla no comercial, así como la importación de especies de cualquier talla y ciclo vital con destino a cultivos o simple inmersión (arts. 20 a 22). La STC 103/1989 examina en su F.J. 7.b) la impugnación dirigida contra el artículo 22, la cual desestima porque: «El Estado ostenta competencia exclusiva y plena sobre el comercio exterior (art. 149.1.10 de la CE y STC 2552/1988)». «A idéntica conclusión ha de llegarse en lo que respecta al párrafo 2 de este artículo 22 que exige, antes de la autorización para la importación, un informe favorable del Instituto Español de Oceanografía, pues, correspondiendo al Estado la competencia exclusiva sobre el comercio exterior, someter la decisión de sus propios órganos sobre la importación de especies foráneas que no se den naturalmente en nuestras aguas al condicionamiento del informe favorable de un organismo científico estatal, no sólo es razonable desde el punto de vista de la preservación del equilibrio ecológico, sino que en manera alguna limita las competencias de la Comunidad Autónoma, pues tal regulación es independiente de la que puedan llevar a cabo sobre la materia las CC. AA. en uso de su competencia, así como de las autorizaciones o informes de los organismos científicos que estas tengan a bien establecer». El Título V («Contaminación y Defensa Ecológica») dedica el primero de los artículos que lo integran (art. 23) a preservar las zonas declaradas de interés para cultivos marítimos frente a las agresiones contaminantes que puedan provenir de los diversos agentes que el precepto establece (industrias o servicios) imponiendo a dichos agentes el cumplimiento, como mínimo, de la legislación vigente sobre tratamiento de aguas y depuración de vertidos residuales, y estableciendo la intervención por vía de informe del organismo autonómico competente en materia de Pesca, al cual también encomienda (párrafo 3.º, in fine) la inspección de las condiciones de construcción y funcionamiento de los sistemas de eliminación y depuración de los residuos y excretas, con independencia de las competencias que correspondan a otros órganos. La STC 103/1998 [F.J. 8.a) párrafo 2.º] rechaza que pueda considerarse inconstitucional la remisión que dicho precepto hace a «las normas de desarrollo de la LCM», pues ni tal remisión tiene por objeto de modo expreso las disposiciones estatales, ni en la misma se excluyen, por consiguiente, las que puedan dictar (sobre los sistemas de evacuación al mar) las CC. AA. en el ejercicio de sus competencias. Eso si, en caso de que en el desarrollo normativo al que la Ley remite se llegaran a infringir competencias del Estado o de las CC. AA., en tal caso, quedarían abiertas las vías en derecho existentes para depurar tal hipotético exceso competencial. El siguiente artículo (24) establece, de un lado, el carácter preceptivo del informe del MAPA, previa audiencia de las CC. AA. afectadas, en la elaboración de disposiciones de carácter general de ámbito nacional que puedan incidir en los cultivos marinos, informe que será vinculante cuando se trate de zonas de interés para cultivos marinos. Por dos razones rechaza la STC 103/1989 [F.J. 8.b)] la impugnación de inconstitucionalidad dirigida a este precepto: porque su objeto no es otro que 314 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 315 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI el modo de elaboración de anteproyectos y disposiciones estatales, y porque se refiere a anteproyectos y disposiciones que puedan incidir en los cultivos marinos, siendo notorio que el Estado ostenta competencias cuyo ejercicio puede llegar a determinar una tal incidencia (apartados 13, 15, 19 y 20 del art. 149.1 CE). Por su parte, la STS de 17 de julio de 1996 [F.J. 2.c)], en la que se aborda el recurso de los demandantes contra los RR. DD. 1471/1989, de 1 de diciembre, y 1112/1992, de 18 de septiembre, el segundo parcialmente modificatorio del anterior por el que se aprueba el Reglamento General de la Ley de Costas, rechaza la pretensión de nulidad de dichas disposiciones generales reglamentarias por haberse omitido el informe preceptivo del MAPA exigido por el artículo 24 de la LCM, pues el mismo: «Se refiere a anteproyectos y disposiciones que puedan incidir en ellos en cuanto tales, es decir, en su naturaleza, permisión, prohibición o extinción, como se infiere de la inclusión del artículo en el Título V de dicha Ley, y es obvio que los Reales Decretos impugnados se limitan a regular el régimen del dominio público marítimo, sin interferir para nada en la pervivencia de esos cultivos, aunque, como consecuencia de las nuevas normas, pueda haber cambiado en ciertos casos la calificación del suelo donde se ubiquen». El Título VI («Coordinación y Junta Asesora») contiene preceptos (arts. 25 a 31) de gran importancia. Las normas de los artículos 25 a 29 tienden a asegurar en este ámbito la debida coordinación entre el MAPA y los órganos competentes de las CC. AA. Examinamos dichas normas separadamente. El artículo 25 atribuye al MAPA competencias para proponer planes nacionales de cultivos marinos, cuya elaboración se hará de común acuerdo con las CC. AA., las cuales procederán a su ejecución en el ámbito de sus competencias estatutarias. El artículo 25 fue impugnado por inconstitucional en sus cuatro párrafos, siendo rechazados los recursos por la repetida STC 103/1989 con los siguientes argumentos [F.J. 9.a)]: «La competencia exclusiva del Estado para establecer las bases y la coordinación de la planificación general de la actividad económica (art. 149.1.13 de la CE) puede proyectarse sobre el sector económico de los cultivos marinos y siempre, claro está, que en el ejercicio de dicha competencia no resulten vaciadas de contenido, o limitadas irrazonablemente, las correspondientes competencias autonómicas. No cabe oponer tal reproche, desde luego, a las reglas contenidas en este artículo 25. Los planes nacionales de cultivos marinos que en él se contemplan no son impuestos sino propuestos por la Administración del Estado, exigiéndose, así, la conformidad de las CC. AA. afectadas para su aprobación y reconociéndose en el mismo precepto que su ejecución corresponderá, en todo caso, a las Comunidades que ostenten competencias en la materia. Tampoco es reconocible lesión a las competencias autonómicas en la previsión legislativa de una necesaria coordinación entre los órganos correspondientes del Estado y las CC. AA.; el establecimiento de fórmulas e instancias de coordinación es, no se olvide, algo que corresponde necesariamente a la competencia estatal 315 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 316 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI (art. 149.1.13 de la CE) por más que tal competencia no entrañe apoderamiento alguno a favor del Estado para normar directamente el ámbito material sobre el que la coordinación se establece (por todas, la STC 106/1987, F.J. 4)». «Tampoco merece reproche de inconstitucionalidad el deber de informar al Estado por parte de las CC. AA., a efectos de “valorar el cumplimiento de los planes”. Una previsión semejante (establecida, con carácter general, en el art. 2 de la Ley del Proceso Autonómico) responde adecuadamente al principio general de cooperación ínsito en nuestra forma de organización territorial del Estado (STC 186/1988 F.J. 7, entre otras muchas) y se justifica aquí, además, en atención a las exigencias de la coordinación de la planificación que la Ley ha previsto». El artículo 26 regula la declaración por las CC. AA. de zonas de interés para cultivos marinos a aquellas que por sus condiciones óptimas para tal actividad aconsejen protección oficial. La declaración de tales zonas, que se considerarán de interés pesquero, habrá de contar con la conformidad de los órganos de la Administración estatal que tengan competencia en la costa, pudiéndose delimitar dentro de estas zonas espacios aptos para fondeo de viveros y jaulas flotantes en polígonos de cultivo. La LCM preveía que aquella declaración se hiciera con la conformidad de los «órganos de la Administración autonómica», inciso que la STC 103/1989 ha declarado inconstitucional porque «la exigencia impuesta por una Ley estatal de la conformidad de organismos de la Administración autonómica invade la potestad de autoorganización de las CC. AA., con vulneración del orden constitucional y estatutario de competencias establecido en el artículo 148.1.1 de la CE y el artículo 27.1 del EAG». Tal argumentación fundante de la inconstitucionalidad que se declara va precedida de una argumentación que también debemos destacar: «La “conformidad” de la Administración estatal para la declaración, por la Administración autonómica, de una zona de interés para cultivos marinos sólo habrá de considerarse exigible cuando dicha declaración afecta a espacios o enclaves físicos sobre los que se proyecte una competencia estatal concurrente, a fin de garantizar, efectivamente, la integridad de la competencia del Estado» [F.J. 7.c)]. En el artículo 27 la LCM procede a la creación de la Junta Nacional Asesora de Cultivos Marinos, a la que encomienda la función de facilitar la coordinación de las actividades de las distintas CC. AA., y efectuar un seguimiento de los planes nacionales. De ella forman parte todas las Consejerías de Pesca y será oído el sector de cultivos marinos. Remite al Reglamento —sancionado y publicado por el MAPA, previa conformidad de las CC. AA.— la concreción de sus objetivos, composición y funcionamiento. También este precepto superó la tacha de inconstitucionalidad invocada ante el TC, cuya sentencia 103/1989 [F.J. 9.d)] dice: «La previsión de una instancia de coordinación de este carácter no es, desde luego, ajena a las competencias estatales del artículo 149.1.13 de la CE, siempre que a 316 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 317 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI través de dicha Junta no se pretenda, de hecho, limitar o condicionar, más allá de lo que la estricta coordinación demanda, las competencias autonómicas». A la coordinación de la investigación en materia de cultivos marinos se refiere el artículo 29. Para ello, la JNACM preparará un plan de investigación. Se reitera además la preferencia reconocida en el artículo 7 LCM (para otorgamiento de concesiones y autorizaciones) a los organismos científicos públicos o privados que realicen investigaciones en las materias que el propio precepto establece, con la limitación que prevé (que no lleven a cabo actividades comerciales). La STC 103/1989 mantiene la constitucionalidad de los tres párrafos de este artículo (F.J. 10) al pronunciarse en los siguientes términos: «Las disposiciones contenidas en los dos primeros párrafos de este artículo 29 no son contrarias a la Constitución, pues dichas reglas afectan directamente al fomento y a la coordinación general de la investigación científica, que, como es patente, corresponde a la competencia del Estado (art. 149.1.15 de la CE) y cuyo ejercicio se prevé aquí en términos que no pueden decirse incompatibles con las competencias sustantivas de las CC. AA. en virtud de sus respectivos Estatutos. El citado artículo 149.1.15 reconoce inequívocamente al Estado una competencia para la acción de fomento en este específico sector, con independencia, claro es, de la actuación propia que pueda ser llevada a cabo por las CC. AA. (STC 53/1988 F.J. 1)». La posibilidad de que el MAPA proponga al Gobierno la declaración de industrias de interés preferente en el ámbito de los cultivos marinos está prevista en el artículo 28 LCM, si bien la remisión que este precepto hace a la Ley 152/1963, de 2 de diciembre, se encuentra desactualizada, como reconoce la STC 103/1989 [F.J. 9.c)] en la que se recuerda que aquella norma fue derogada por la Ley 50/1985, de Incentivos Regionales para la Corrección de Desequilibrios Económicos Interterritoriales. Los dos últimos artículos de la LCM (30 y 31) establecen que, sin perjuicio de las competencias que le vienen atribuidas a las CC. AA., en orden a la regulación de la normativa sancionadora, en las infracciones que se cometen en materia de cultivos marinos se atenderá a lo dispuesto en la Ley 53/1982, de 13 de julio, con las especificaciones que establece derivadas de la naturaleza de estos cultivos, precisando que las infracciones cometidas contra la LCM serán consideradas como violación de precepto técnico marítimo-pesquero y sancionadas como faltas leves conforme a la citada Ley 53/1982, preceptos con los que no se pretende impedir ni menoscabar el ejercicio por las CC. AA. de las competencias que en este extremo les corresponden (STC 103/1989 F.J. 10), de las que por cierto han hecho ejercicio, como veremos cuando lleguemos al apartado de este trabajo referente a la legislación autonómica. Ahora bien, la Ley 53/1982 ha sido derogada por la reciente Ley 14/1998, de 1 de junio, que establece el Régimen de Control para la Protección de Recursos Pesqueros. En la Exposición de Motivos de esta Ley 14/1998 se reconoce que la Ley 53/1982 resulta hoy inadecuada desde la perspectiva del orden constitucional de 317 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 318 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI competencias y también en lo relativo a su contenido sustantivo, que no responde ya a la realidad actual de la actividad extractiva y del sector pesquero. En todo caso, añade, el régimen sancionador propio de la pesca marítima, objeto de esta Ley, es de competencia exclusiva del Estado y se aplica en las llamadas aguas exteriores. Estas aguas exteriores se delimitan de las interiores a través de las llamadas líneas de base recta, correspondiendo a las CC. AA. la exclusiva competencia sobre la actividad pesquera que se realice en dichas aguas interiores. Es decir, la Ley deja a salvo las competencias de las CC. AA. para regular y aplicar el régimen sancionador que consideren conveniente sobre la pesca en aguas interiores, así como el que corresponda en materia de marisqueo y acuicultura. A la luz, pues, del artículo 1 de la Ley 14/1998 es claro que el régimen sancionador en materia de cultivos marinos será el que establezcan las correspondientes Leyes Autonómicas, careciendo de aplicación el previsto en la LCM, que el legislador estatal (probablemente teniendo en cuenta la más reciente doctrina constitucional sobre la cláusula de supletoriedad) no ha sustituido por otro distinto en la Ley 14/1998, inaplicable en el ámbito de la acuicultura. La urgencia, pues, con que deben actuar las CC. AA. para evitar lagunas jurídicas en una materia tan importante resulta de todo punto evidente. Todo ello sin olvidar la aplicabilidad de las normas —los principios— contenidas en la Ley 30/1992, de 26 de noviembre (con la modificación introducida por la Ley 4/1999, de 13 de enero) a la que se refiere por ejemplo en lo no previsto por ella la Ley de Pesca Marítima del País Vasco 6/1998, de 13 de marzo. VII. La jurisprudencia del TS sobre responsabilidad de las Administraciones Públicas competentes por lesiones causadas a titulares de explotaciones de acuicultura La exposición y anotación jurisprudencial que hasta aquí hemos realizado de la LCM no agota en absoluto los temas que, en relación con la acuicultura (comprendiendo la que se desarrolla en aguas continentales) han llegado a los Tribunales. Nos parece por ello de interés completar la crónica con la referencia a las respuestas del TS a reclamaciones por responsabilidad extracontractual planteadas por los titulares de diversas explotaciones de acuicultura. Aludimos, en concreto, a los supuestos que han constituido el objeto de las SSTS de 7 de febrero, 6 de marzo y 6 de octubre de 1998. La STS de 6 de marzo de 1998, manteniendo el criterio previamente sentado en la STS 7 de febrero de 1998, resuelve el recurso de casación interpuesto por una cooperativa titular de una explotación de cultivos marinos contra la sentencia del Tribunal de instancia que había desestimado el recurso deducido por aquélla contra la desestimación de la solicitud de indemnización por los daños y perjuicios producidos por una orden de cese de actividades dictada por el órgano competente de la Comunidad Autónoma a causa de la contaminación de las aguas producida por concentración de metales pesados en las aguas del litoral, que afectaba a los ostreidos con anterioridad a la promulgación de la Orden de la Consejería por la que se prohibió preventivamente la captura y venta en lonja de los moluscos bivalbos proceden318 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 319 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tes de los bancos naturales y de los establecimientos de acuicultura del litoral onubense. La jurisprudencia establecida es la que se desprende de las consideraciones siguientes (F.J. 3 y 4): «La recurrente pretende basar la existencia del imprescindible nexo causal en las competencias que, en materia de vertidos, ordenación del litoral, acuicultura, ordenación del sector pesquero, medio ambiente, higiene, contaminación biótica ostenta la Administración Autonómica demandada. Sin embargo el que dicha Administración tuviese indiscutiblemente competencias sobre las indicadas materias y en los expresados sectores no le hace, sin más, responsable de la contaminación de las aguas del litoral y de todas las consecuencias derivadas de ésta, pues no es acorde con el principio de responsabilidad objetiva, recogido por los artículos 40.1 de la LRJAE y 139.1 de la vigente Ley de 26 de noviembre de 1992, la generalización de dicha responsabilidad más allá del principio de causalidad, aún en forma mediata, indirecta o concurrente, de manera que, para que exista aquélla, es imprescindible la concurrencia del nexo causal entre la actuación de la Administración y el resultado lesivo o dañoso producido, que en este caso, como ha declarado la Sala de instancia, no puede apreciarse aunque la Administración hubiera incumplido sus deberes de vigilancia para evitar vertidos contaminantes, pues se desconoce el factor o agente determinante del aumento de los niveles máximos autorizados de metales pesados en las aguas del litoral onubense con el consiguiente riesgo en el consumo de moluscos bivalbos, que obligó a la Administración demandada, en uso de sus aludidas atribuciones, a prohibir su comercialización como medida para salvaguardar la salud. La socialización de los riesgos, que justifica la responsabilidad de la Administración cuando actúa en defensa de los intereses generales lesionando para ello intereses particulares, no permite extender dicha responsabilidad hasta cubrir las pérdidas en este caso de los acuicultores por más que su actividad hubiese sido promovida y fomentada por la propia Administración, ya que, cuando así procedió, no existía el riesgo después generado por hechos y circunstancias en los que no se ha acreditado que la misma tuviese participación alguna directa ni indirecta, inmediata o mediata, exclusiva ni concurrente. La asunción por la Administración Autonómica de competencias transferidas por el Estatuto de Autonomía no liberaba a las empresas dedicadas a la acuicultura de soportar los riesgos procedentes de la posible contaminación de las aguas con la consiguiente paralización de las capturas y venta de ostreidos, pues no cabe considerar que el vigente sistema de responsabilidad patrimonial objetiva de las Administraciones Públicas convierta a éstas en aseguradoras universales de todos los riesgos con el fin de prevenir cualquier eventualidad desfavorable o dañosa para los administrados, derivada de la actividad de estos, por el hecho de que ejerzan competencias en la ordenación de un determinado sector o sea necesaria su autorización, porque, de lo contrario, como pretende la representación procesal de la recurrente, se transformaría aquél en un sistema providencialista no contemplado en nuestro ordenamiento jurídico». Un supuesto basado en hechos diferentes, en el que se llega a reconocer la responsabilidad patrimonial por los daños causados al concesionario de una piscifacto319 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 320 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI ría a consecuencia de la disminución del caudal del río provocada por empleados municipales, es el que contempla la STS 6 de octubre de 1998, cuya doctrina se formula (F.J. 6) en los siguientes términos: «La abundante prueba practicada en la instancia revela que por acuerdo municipal la extracción de agua realizada en el río Menéndez, también conocido como río Coalla, durante al menos unas horas redujo de modo excesivo el caudal de agua que recibía la piscifactoría Alcubiella, propiedad del recurrente, hasta tal extremo que en algún momento el caudal ordinario de 100 metros cúbicos por segundo quedó reducido a 18 litros, y con ello se originó por falta de oxígeno la muerte de alevines y truchas existentes en las cubas que estaba previsto trasladar para engorde a otro lugar, así como retrasos en el crecimiento de otras, por lo que concurren los requisitos exigidos para apreciar responsabilidad patrimonial por funcionamiento del servicio, dado el sacrificio extraordinario y singular impuesto al recurrente para atender a las necesidades urgentes de aprovisionamiento de agua. No es necesario entrar a examinar si la actuación de la Administración Municipal fue normal o anormal (como pudiera haber ocurrido si no respetó el procedimiento establecido en el art. 56 de la Ley de Aguas o no se realizó la extracción en la forma más adecuada para evitar en lo posible perjuicios al titular de la concesión), pues el carácter objetivo de la responsabilidad patrimonial reconocida en el artículo 40 de la LRJ de la AE, en consonancia con los artículos 121 y 122 de la LEF, obliga a responder, también en los casos de funcionamiento normal, de los perjuicios patrimoniales ocasionados por los servicios públicos que el particular no tiene la carga de soportar»... VIII. Leyes de las CC. AA. sobre acuicultura Una vez expuesta la legislación estatal —y su interpretación jurisprudencial— en materia de cultivos marinos, llegado es el momento de iniciar la crónica de las normas con rango de Ley aprobadas en el ámbito de la acuicultura —marina o contintental— por las CC. AA. 1. En el País Vasco rige la Ley 6/1998, de 13 de marzo, de Pesca Marítima, cuyo objeto es (art. 1) la ordenación de la pesca en aguas interiores, el marisqueo y los cultivos marinos y el establecimiento de las infracciones y de las sanciones que correspondan a las mismas en el litoral de la CA del País Vasco. Esta Ley persigue también la protección y conservación de los recursos marinos, el aprovechamiento racional de los mismos y la ordenación de la actividad para el disfrute de esta riqueza colectiva. Sustancialmente, los preceptos a tener en cuenta constituyen el contenido de los Títulos I («Disposiciones Generales y Definiciones»), II («De la Ordenación y Regulación de la Actividad Pesquera, Marisquera y de Cultivos Marinos», en particular las Secciones 1.ª y 2.ª del Cap. III), III («De las Infracciones y Sanciones») y IV («Procedimiento y Competencia en el Ejercicio de la Potestad Sancionadora»), remitiendo la Disposición Adicional 3.ª a los principios contenidos en la Ley 30/1992, de 26 de noviembre (entiéndanse principios sobre el ejercicio de la potestad sancionadora, como ya recordábamos con anterioridad). 320 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 321 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Reconoce esta Ley que «hasta la fecha actual, el País Vasco ha carecido de un marco legal que pudiera acoger las líneas directrices de una política de conservación de los recursos y de desarrollo de la actividad pesquera». Y añade que «ante la necesidad de contar con el marco legal adecuado que posibilite a la Administración realizar una ordenación de la actividad pesquera que tienda a conseguir el rendimiento máximo continuado y la recuperación de los stocks de las poblaciones de peces, se ha articulado la presente norma, cuya finalidad básica es la conservación de los recursos y de los ecosistemas marinos». 2. En Cataluña fue aprobada la Ley 1/1986, de 25 de febrero, de Pesca Marítima. Dicha Ley tiene por objeto (art. 1) «regular, en el ámbito de competencias de la Generalitat, la pesca, la cría y recogida de marisco y la acuicultura, y ordenar adecuadamente el sector pesquero, con la finalidad de conseguir la racional explotación y conservación de los recursos marinos renovables». En su preámbulo se afirma textualmente «que el objetivo primordial de la Ley consiste en establecer las bases para conseguir la correcta explotación y gestión de los recursos marinos vivos y compatibilizar el mantenimiento y la conservación necesarios del ecosistema con una explotación eficaz. En esta línea es importante la definición del rendimiento sostenible máximo como punto de equilibrio deseable entre el factor producción-explotación y el factor conservación de la cantidad y calidad total o por especie». Dice, también, que la presente Ley regula, además de la actividad extractiva de recursos marinos, «el régimen de permisos y concesiones para ocupar parcelas de dominio público para la explotación de establecimientos de los que se obtengan recursos marinos renovables». Y añade que «presta una atención especial al marisqueo y establece la posibilidad de crear zonas de interés marinero y reservas en determinados bancos naturales y fomentar la acuicultura en general». En el Título I se recogen las Disposiciones Generales —y entre ellas, las definiciones de los conceptos que la Ley maneja—; el III se refiere al Marisqueo y a los Cultivos Marinos, previendo la posibilidad de declarar zonas de interés marisquero las áreas merecedoras de protección especial, así como la de delimitar reservas en determinados bancos naturales para instalar en ellos parques y viveros de cultivo; y el V a las Infracciones y Sanciones, apreciándose respecto de esta materia (art. 20) una significativa indeterminación en la tipificación de las infracciones que puede plantear problemas desde la perspectiva de las exigencias del principio de legalidad. Igualmente en este Título se determina la competencia para la función inspectora. La Disposición Final 2.ª habilita al Consejo Ejecutivo para el ejercicio de la potestad reglamentaria. Contra determinados preceptos de la Ley 1/1986 interpuso el Gobierno de la Nación recurso de inconstitucionalidad, resuelto por STC 44/1992, de 2 de abril, la cual declara la inconstitucionalidad (por invasión de competencias estatales) de los artículos 4.1, 9.2, 10.a), b), c) y d), 11, apartados 1 y 2; y por su conexión con estos: el artículo 2, inciso «actividades que inciden en la extracción y producción de los recursos marinos renovables»; y el artículo 3.a), b) y c). Declara también que el ar321 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 322 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tículo 11.3 de la citada Ley no es inconstitucional siempre y cuando sea interpretado en la forma señalada en el F.J. 3.b) de esta sentencia. Sin embargo, rechaza la impugnación referida a los artículos 3.d), 11.3 y 23, con los siguientes argumentos que debemos transcribir: «Puede perfectamente la Generalidad de Cataluña matizar qué deba entenderse por otros conceptos incluidos en el artículo 3.d), que caen dentro de su competencia sobre pesca en aguas interiores, marisqueo y acuicultura (art. 9.17 del Estatuto), conceptos cuales son: “depuradora de mariscos”, “granja marina a efectos de acuicultura”, “criadero”, “sementera”, “vivario”, “vivero”, “parque natural de cultivo de mariscos”». «No es inconstitucional —pese a su colocación sistemática en el Título II, Cap. II, referido a los recursos marinos— lo dispuesto en el artículo 11.3 que permite a la Consejería correspondiente realizar los planes experimentales que considere más adecuados “para el mejor desarrollo del sector”, siempre y cuando este artículo y, en concreto, la cláusula entrecomillada se interprete en la forma en que ha venido sosteniéndose por este Tribunal desde la STC 56/1989 y reproduce esta sentencia, es decir, deslindando entre pesca marítima y ordenación del sector pesquero». «La asunción estatutaria por parte de la Generalidad de Cataluña de competencia sobre pesca en aguas interiores, marisqueo y acuicultura (art. 9.1.7) de un lado y, de otro, sobre la ordenación del sector pesquero (art. 10.1.7) impide entender viciada de incompetencia la cláusula legal mencionada (contenida en el art. 23, en el que se establece que en el marco de sus competencias el Departamento de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Generalidad de Cataluña ejercerá la inspección de las actividades pesqueras y de las demás actividades de producción natural y artificial, transformadoras y de comercialización en origen y aquellas otras funciones objeto de la presente Ley que no sean encomendadas de manera expresa a otros organismos) puesto que la referencia excesivamente genérica a “inspección de las actividades pesqueras”, viene acompañada expresamente de la referencia a “en el marco de sus competencias”, lo cual sólo puede ser entendido como excluyendo la inspección de la pesca marítima en aguas exteriores, que es competencia exclusiva del Estado». 3. Galicia ha sido la Comunidad Autónoma pionera en la regulación de las actividades de pesca. Con fundamento puede hablarse de un sistema jurídico pesquero de Galicia. Fue, en efecto, esta Comunidad Autónoma la primera que aprobó un conjunto de normas con rango de Ley que en la actualidad han sido derogadas por otras de más reciente factura. Tal sistema jurídico se encuentra integrado por las siguientes Leyes: La Ley 6/1991, de 15 de mayo, de Infracciones en materia de protección de recursos marítimo-pesqueros, derogatoria de las Leyes 5/1985, 13/1985 y 3/1989. La Ley 12/1992, de 9 de noviembre, de creación de determinadas escalas de personal funcionario al servicio de la Xunta de Galicia. La Ley 6/1993, de 11 de mayo, de Pesca de Galicia, derogatoria de las Leyes 2/1985 y 15/1985, de 23 de octubre, de Ordenación Marisquera y de Cultivos Marinos. La Ley 9/1993, de 8 de julio, de Cofradías de Pescadores. 322 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 323 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI En este sistema legislativo, desarrollado por numerosas disposiciones generales, de las que no es posible dar cuenta en esta reducida crónica, hemos de destacar las Leyes 6/1993 y 6/1991. En la Exposición de Motivos de la Ley 6/1993 se dice que «la pesca y el marisqueo en Galicia han sido y son un motor básico de la economía gallega, tanto por el empleo directo que generan como el gran efecto multiplicador de esta actividad en toda la industria auxiliar, entre la que se encuentra la de cultivos marinos, la conservera, los transportes y la de equipamiento de pesca, además de la propia industria de construcción naval en medianos y pequeños astilleros». «Hasta ahora las Leyes 2/1985 y 15/1985 regulaban la actividad extractiva pesquera y las actividades marisqueras y de cultivos marinos en esta Comunidad Autónoma y han cubierto una importante etapa histórica en la que se trataba de dotar a las instituciones gallegas de un contenido legislativo mínimo», pues, «abarcaban tan sólo una parte de la base legislativa del sector pesquero y marisquero de Galicia, que debe ser completada por la legislación subsidiaria del Estado». «La citada base legislativa estaba desarrollada en su práctica totalidad antes de la adhesión de España a la CEE y también, en buena medida, hace demasiado tiempo, lo que la convierte a su vez en poco adaptada al progreso técnico y a la nueva coyuntura internacional». «La próxima entrada en vigor del Mercado Único hace precisa una reordenación del sector pesquero... y esta reordenación requiere inexcusablemente disponer de un marco legislativo actualizado y coherente... de un ordenamiento jurídico que considere el desarrollo global del sector pesquero». De sus siete Títulos (103 artículos), seis Disposiciones Adicionales (la 4.ª está dedicada a las instalaciones de la acuicultura en zonas distintas del dominio público marítimo y marítimo terrestre) y dos Disposiciones Finales (en la 2.ª se habilita a la Xunta para el desarrollo reglamentario) son de especial interés para el objeto de esta crónica los Títulos I (Disposición Generales); II (De la Explotación de los Recursos Marinos de Galicia), en el que se contienen las normas respectivamente referentes a la acuicultura en zona marítimo-terrestre, en zona marítima y en zona terrestre; IV, (Empresas de Transformación de Productos de Pesca, Marisqueo y Acuicultura); VI, (De la Inspección y Vigilancia de las Actividades de Explotación de los Recursos Marinos); y VII, (De la Conservación de los Productos de la Explotación de los Recursos Marinos). La Ley 6/1991 (cuatro capítulos, 19 artículos, 2 Disposiciones Adicionales, 2 Disposiciones Transitorias, 2 Disposiciones Derogatorias y 2 Disposiciones Finales) deroga, entre otras, la Ley 5/1985 que constituyó el primer cuerpo normativo propio de la CA de Galicia sobre esta materia. Esta Ley, como se afirma en la Exposición de Motivos de la Ley 6/1991, recogía lo que de positivo tenía la norma estatal 53/1982, sobre Infracciones en Materia de Pesca Marítima, al objeto de no provocar una ruptura traumática con la legislación hasta entonces vigente. Sin embargo, se ha sentido la necesidad de proceder a su reforma integral. En tal sentido se añaden nuevos supuestos infractores, pero sin descargar todo el peso en la actividad represiva, fiando la preventiva a los asesoramientos y orientaciones dirigidos al sector por los 323 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 324 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI agentes de vigilancia e inspección de la Consejería de Pesca, Marisqueo y Acuicultura. La Exposición de Motivos afirma también que se cubren lagunas existentes en la legislación anterior y se respetan los principios que el TC ha consagrado en relación con el ejercicio de la potestad sancionadora. 4. En el Principado de Asturias ha sido promulgada la Ley 2/1993, de 29 de octubre, de pesca marítima en aguas interiores y aprovechamiento de recursos marinos. Hasta ahora, dice su preámbulo, «parcialmente, se ha ido regulando alguna de las actividades descritas en el párrafo anterior (entre ellas la acuicultura) con apoyo en la legislación estatal y mediante Decretos del Consejo de Gobierno, siendo necesaria la promulgación de una norma que, con rango de Ley, establezca los principios del ejercicio de las competencias descritas y cubra las lagunas existentes, sin perjuicio de la aplicación, con carácter supletorio, de la normativa vigente emanada de la Administración Central». Está integrada la Ley por 10 Títulos (64 artículos, 1 Disposición Adicional, 1 Disposición Transitoria, 1 Disposición Derogatoria en la que se derogan determinados preceptos de la Ley 3/1988, de 10 de junio, de sanciones de pesca) y 3 finales. La Disposición Final 1.ª habilita al Consejo de Gobierno para su desarrollo reglamentario, y la Disposición Final 2.ª dispone que «tendrá carácter supletorio de la presente legislación la normativa vigente emanada de la Administración del Estado». De los 10 Títulos debemos destacar el I «Disposiciones Generales», el II «Cultivos marinos», el VII sobre «Comercialización de productos pesqueros»; el VIII regulador de la «Inspección y Vigilancia»; y el IX «Infracciones y Sanciones». Con relación al Título II, el preámbulo de la Ley afirma que «la actividad de cultivos marinos, de vital importancia, tanto social como económica, se regula expresamente por la Ley 23/1984, de 25 de junio, que respeta las competencias asumidas por las CC. AA., pretendiendo realizar una ordenación competencial de los distintos organismos con intereses en la costa sin vulnerar las atribuciones de aquéllas». 5. En la CA Valenciana ha sido promulgada la reciente Ley 9/1998, de 15 de diciembre, de Pesca Marítima, que remite en su Disposición Adicional 3.ª a la regulación del régimen sancionador contenido en la Ley 2/1994, de 18 de abril, de la Generalidad Valenciana, sobre Defensa de los Recursos Pesqueros, así como «a la normativa básica estatal» (la actividad inspectora está regulada en las Disposiciones Adicionales 1.ª y 2.ª). Partiendo del reconocimiento del carácter disperso que tiene el conjunto normativo relativo a la pesca marítima, el marisqueo, a la acuicultura y a la ordenación de todo el proceso económico del sector pesquero, con disposiciones procedentes de la Unión Europea, del Estado y de la propia Comunidad Autónoma, confiesa el preámbulo que esta Ley quiere satisfacer la necesidad de disponer, en la CA Valenciana, respecto de la pesca en su litoral y al servicio de su sector pesquero, de una norma de referencia del máximo rango en todas dichas materias, hasta donde lo permitan las competencias autonómicas. 324 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 325 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI De sus 7 Títulos (72 artículos), el V está dedicado a los cultivos marinos, respecto de los cuales se afirma también en el preámbulo que «está emergiendo, como complemento o alternativa, con posibilidades en el litoral valenciano, la actividad de acuicultura marina de cultivo de peces de especies marinas, de crustáceos y de moluscos», añadiendo más adelante que «la acuicultura constituye una importante actividad económica en la Unión Europea, y se encuentra en plena expansión en la CA Valenciana, comenzando a implantarse para nuevas especies de peces, y no sólo de marisco. La acuicultura aumenta la disponibilidad de pescado y marisco, contribuyendo a reducir el déficit comercial comunitario de estos productos, determinante de las importantes ayudas comunitarias establecidas para el desarrollo de este sector, constituyendo además una alternativa a las restricciones en la flota y en los caladeros impuestas para evitar la sobreexplotación de los recursos». Por ello, sigue diciendo este preámbulo, «el Título V de la Ley, dedicado a los cultivos marinos, aporta una regulación adecuada a la realidad de la acuicultura en la CA Valenciana, reducida pero en expansión, con un régimen simple, concentrado en el aspecto de la autorización de las actividades, de tal forma que su fomento se produzca por la vía de las ayudas económicas comunitarias y facilitando las tramitaciones administrativas, aunque ello sin perjuicio del rigor en el control de unas actividades que se producen e inciden plenamente en el medio natural». Esta Ley contiene sus Disposiciones Generales en el Título I y las medidas de comercialización en el Título VI. 6. En la CA de Castilla-La Mancha, la acuicultura está regulada por la Ley 1/1992, de 7 de mayo, de Pesca Fluvial. En su Exposición de Motivos se resalta la obsolescencia de la Ley de Pesca Fluvial de 1942 —que considera como normativa básica— por lo que se hace necesaria una nueva Ley de ámbito autonómico que regule en esa región, entre otras materias, el ejercicio de la acuicultura de una forma más racional y acorde con las necesidades y demanda actuales de los ciudadanos y las exigencias de conservación de los recursos naturales. La Ley se compone de 7 Títulos. El VI está dedicado a la acuicultura y a la pesca científica. En los únicos preceptos sobre acuicultura (arts. 43 y 44) se somete la explotación industrial de la pesca (por la que se entiende la orientada al cultivo intensivo de peces o cangrejos) a la previa autorización de la Consejería de Agricultura, precedida de Proyecto de Piscifactoría o Astafactoría, así como una evaluación del impacto ambiental que puede ocasionar en el medio natural. No se autorizará este tipo de instalaciones en aquellos tramos de cursos de aguas de significado valor ecológico para las especies de pesca, quedando prohibida la producción, expedición o venta de productos de acuicultura no incluidos en la autorización correspondiente para cada explotación, así como la expedición o venta de huevos para incubación, semen o peces con destino a la reproducción, cría o repoblación, excepto en aquellos centros de acuicultura expresamente autorizados por la referida Consejería. El Título I contiene las Disposiciones Generales y el VI las normas sobre infracciones, sanciones y procedimiento. 325 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 326 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Contra diversos artículos contenidos en esta Ley y por considerarlos invasores de competencias estatales, interpuso el Abogado del Estado recurso de inconstitucionalidad, resuelto por la STC 15/1998, de 22 de enero. De todos los preceptos que esta sentencia declara inconstitucionales nos interesan en particular las consideraciones referentes a los arts. 22 y 23,1, este último sobre prohibición de vertidos, que se declaran inconstitucionales (F.J. 9) en cuanto invaden competencias exclusivas del Estado para dictar la legislación básica en materia de medio ambiente, pues el sometimiento de los vertidos a un sistema general de autorización administrativa por el respectivo organismo de cuenca ya ha sido declarado básico por la STC 227/1988 (F.J. 23, apart. F). La sentencia, especialmente en su F.J. 3, contiene interesantes consideraciones sobre la distribución de competencias entre el Estado y las CC. AA. en relación con los aprovechamientos de aguas continentales, según se trate de aguas supracomunitarias o intracomunitarias, reiterando la doctrina sentada en las SSTC 227/1988, 243/1993 y 161/1996. 7. La Comunidad Foral de Navarra ha ejercido sus competencias exclusivas sobre la caza, pesca fluvial y lacustre y la acuicultura por medio de la Ley Foral 2/1993, de 5 de marzo, de protección y gestión de la fauna silvestre y su hábitats. De sus cinco Títulos (124 artículos), 3 Disposiciones Adicionales, 12 Transitorias, Derogatoria y Final (en la que se habilita para el desarrollo reglamentario) son de especial significación en materia de acuicultura los Títulos II («Protección de la fauna silvestre y de su hábitats»), III («Ordenación del aprovechamiento de la fauna silvestre y sus hábitats») y IV («Infracciones y Sanciones»). Dentro de ellos, los artículos 41.f), 48, 92,121.3 y 4 y la Disposición Adicional 3.ª revisten un particular interés. En el artículo 41 se sujetan a autorización las piscifactorías; en el 48 se permite prohibir en determinados tramos de ríos las actividades que puedan suponer perjuicio para la fauna; los siguientes se refieren a infracciones y sanciones; y la Disposición Adicional deja a salvo las autorizaciones que puedan exigir otras Administraciones Públicas en ejercicio de sus competencias. 8. La Ley 8/1995, de 27 de abril, de Pesca Fluvial, de la CA de Extremadura, consta de 11 Títulos, 10 Disposiciones Adicionales, 2 Transitorias, 1 Derogatoria y 2 Finales. Se presenta en su Exposicón de Motivos como «uno de los pilares básicos de la política de conservación de la naturaleza y de gestión, ordenación y aprovechamiento de los recursos naturales renovables». El Título VIII (arts. 52 a 59) regula la acuicultura y la pesca científica, sometiendo ambas a un régimen análogo al contenido en la Ley de Castilla-La Mancha. El Título IX está dedicado a la «Vigilancia» y el X al «Régimen de Infracciones y Sanciones». La Disposición Final 1.ª habilita al Consejo de Gobierno para el desarrollo de la Ley. Pende de sentencia ante el TC el R. de inconstitucionalidad interpuesto por el Abogado del Estado contra determinados artículos de esta Ley. La interposición produjo la suspensión de los artículos impugnados. Por auto núm. 11/1996, de 16 de enero, ha sido levantada la suspensión. El TC reitera los argumentos de los AATC 326 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 327 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 101, 243 y 335/1993, referentes los dos primeros a los recursos que tuvieron por objeto las Leyes de Pesca Fluvial de Castilla-La Mancha, de Protección de los Sistemas Acuáticos y de Regulación de la Pesca de Castilla y León, y de la Ley Foral 2/1993, de 5 de marzo, de protección y gestión de la fauna silvestre y sus hábitats. 9. En la CA de las Islas Baleares, la Exposición de Motivos de la Ley 14/1998, de 23 de diciembre, dice en el apartado V que esta CA «no dispone de una Ley propia que le permita sancionar las infracciones de pesca en aguas interiores, acuicultura y cría y recogida de marisco, por lo que es necesario adoptar de forma provisional unas medidas que permitan el ejercicio de la potestad sancionadora en las materias antes mencionadas». A este fin tienden las normas contenidas en su artículo 20, titulado «Régimen sancionador de la pesca en aguas interiores, cría y recogida de marisco y cultivos marítimos». El núm. 1 de este artículo establece literalmente lo siguiente: «Transitoriamente, mientras no se apruebe la Ley de infracciones y sanciones en materia de pesca en aguas interiores, cría y recogida de marisco y cultivos marítimos de la CA de las Islas Baleares, será de aplicación, como régimen sancionador en las materias de pesca en aguas interiores, cría y recogida de mariscos y cultivos marítimos de esta Comunidad Autónoma, la Ley 14/1998, de 1 de junio, por la cual se establece el régimen de control para la protección de los recursos pesqueros». La referencia es a la Ley estatal 14/1998. Paradójicamente, en la Exposición de Motivos de la Ley de la CA de las Islas Baleares 14/1998, de 23 de diciembre, se dice, también textualmente, que «la Ley estatal 14/1998 ni siquiera hace referencia a la acuicultura y a la cría y recogida de marisco, dado que estas materias son competencia exclusiva de las CC. AA., con independencia del lugar donde se realice la actividad». Los núms. 3 y 4 del artículo 20 antes citado tipifican las conductas que se consideran infracciones graves y muy graves en materia de cultivos marinos, así como los órganos competentes para imponer las sanciones pecuniarias que igualmente prevé, aunque sin establecer adecuadamente la correspondencia entre infracciones y sanciones. En la Disposición Final 1.ª se habilita al Gobierno de la Comunidad para su desarrollo. Para la CA de las Islas Baleares, la Ley estatal 30/1998, de 29 de julio, que tiene como finalidad, en desarrollo del artículo 138.1 de la CE, «establecer y regular el régimen de medidas de todo orden, destinadas a compensar los efectos de la insularidad de las Illes Balears», recoge en su Título III un conjunto de disposiciones para garantizar el desarrollo sostenible del archipiélago. Entre ellas, el artículo 23 prevé que «Con el fin de propiciar el desarrollo del sector de la acuicultura en las Islas Baleares, se constituirá una Comisión mixta integrada por representantes de la Administración del Estado y del Gobierno de la CA, Comisión que «desarrollará un plan de medidas y establecerá el modo en que el Estado y la Comunidad Autónoma pueden cooperar en esta materia». 10. En la CA de Castilla y León rige la Ley 6/1992, de 18 de diciembre, de Protección de los Ecosistemas Acuáticos y de Regulación de la Pesca. Se inspira en los siguientes principios: 1.º) las aguas continentales forman parte del dominio 327 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 328 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI público hidráulico; 2.º) la riqueza de los ecosistemas acuáticos tiene la consideración de bien común, no privado; 3.º) la pesca tiene un marcado carácter social; 4.º) transparencia en la gestión del recurso y establecimiento de causas de participación de los distintos afectados». La Ley tiene por objeto «la conservación, protección, fomento y ordenado aprovechamiento de los ecosistemas acuáticos de Castilla y León y de los seres que los integran (art. 1)». Se estructura en 6 Títulos (69 artículos), 2 Disposiciones Adicionales, 4 Transitorias, 1 Derogatoria y otra Final. El Título III regula la acuicultura en el artículo 42. Define el centro de acuicultura como «toda instalación fija o móvil, permanente o temporal, dedicada a la producción de huevos embrionados, alevines, jaramugos o peces adultos cuyo destino final sea el consumo». Somete el establecimiento de los centros al otorgamiento de una autorización por la Junta, previa evaluación del impacto ambiental, encomendando a aquella entidad la inspección y vigilancia de los centros y de su funcionamiento. Se crea un Registro de Centros de Acuicultura donde deberán inscribirse todos los que existan y se prevé el establecimiento de masas de agua en las que no se autorizarán tales centros. El Título V regula las infracciones, sanciones y el procedimiento sancionador. Contra algunos preceptos de esta Ley interpuso recurso de inconstitucionalidad el Abogado del Estado. La STC 110/1998, de 21 de mayo, que lo resuelve, declara la inconstitucionalidad de varios artículos. De entre todos ellos nos interesa en particular —al igual que en la sentencia que resolvió idéntico recurso contra la Ley de Castilla-La Mancha— el que se refiere al artículo 12.1, el cual dispone que «toda actividad susceptible de provocar la contaminación o degradación en el Dominio Público Hidráulico y, en particular, el vertido de aguas y de productos residuales o de cualquier tipo, capaces de contaminar las aguas continentales, exige autorización administrativa y para su obtención será necesario y vinculante un informe de la Junta sobre las materias de su competencia». El TC (F.J. 6) señala la diferencia existente entre este supuesto y el que resolvió las STC 15/1998 (F.J. 9): «A diferencia de la norma enjuiciada en la STC 15/1998, el artículo 12 de esta Ley 6/1992 no establece una prohibición general de vertidos, que vacíe de contenido la capacidad decisoria del organismo de cuenca sobre la materia, a quien corresponde, según lo dispuesto en el artículo 92 de la Ley de Aguas y sus normas de desarrollo (particularmente el R. D. 484/1995 de 7 de abril), otorgar, denegar y, en su caso, suspender las pertinentes autorizaciones. Sin embargo, precisa que la autorización del organismo de cuenca para realizar vertidos sobre el dominio público hidráulico sólo podrá otorgarse cuando medie informe de la Junta sobre materias de su competencia, informe que, además, tiene carácter vinculante. Ello significa que la capacidad decisoria del organismo de cuenca sobre la materia vertidos, reconocida por una normas que revisten la condición de básicas, queda, en la práctica, condicionada y sometida al informe que emita la CA. El carácter vinculante de dicho informe supone sin duda una interferencia directa en el régimen de autorizaciones previsto en la Ley de Aguas y, por tanto, una invasión de la competencia del Estado sobre la legislación básica en materia de medio ambiente que, en este caso, está al servicio de una unidad mínima 328 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 329 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI en la gestión medio ambiental de las cuencas supracomunitarias. Se trata, en suma, de un precepto inconstitucional». IX. Normativa legal aplicable en el territorio de las CC. AA. que no hayan ejercido su potestad legislativa en el ámbito de la acuicultura Hay, pues, CC. AA. que no han ejercido su potestad legislativa en la materia. En ellas, se aplicará, en tanto se mantenga tal situación, la Ley estatal 23/1984, junto con las otras Leyes estatales (Costas y su Reglamento General, Aguas y su Reglamento sobre el Dominio Público Hidráulico, principalmente) a las que la propia LCM remite explícita o implícitamente en cuanto son expresiones del ejercicio del poder legislativo en materias competencia del Estado. Este conjunto normativo, interpretado de conformidad con la jurisprudencia del TC y del TS de la que hemos venido dando cuenta, al que habrá que añadir las normas sobre protección del medio ambiente y las que se proponen cumplir los objetivos del IFOC (Instrumento Financiero de Orientación de la Pesca), a las que más adelante nos referiremos, podrá ser integrado por las disposiciones generales que, dentro de sus competencias en materia de acuicultura, se den las propias CC. AA. El conjunto de estas normas constituirá, en lo sustancial, el ordenamiento jurídico regulador de la acuicultura marítima y continental en las CC. AA. sin Ley autonómica específicamente reguladora. X. La acuicultura y medio ambiente 1. La preocupación por la conservación de los ecosistemas está presente de modo acuciante en todo el mundo. Es evidente el impacto que en el medio ambiente y en los recursos naturales pueden provocar las explotaciones de acuicultura. Antes que la medidas represivas están las preventivas para evitar que se produzcan situaciones que desencadenen efectos perjudiciales irreversibles. Entre las medidas preventivas, la más eficiente e importante es la evaluación de impacto ambiental. En anteriores apartados de esta crónica hemos hecho referencia a las normas sectoriales (entre ellas, los arts. 42.2 de la LC y 90 de la LA) de rango legal que la exigen. En este vamos a centrar nuestra atención en un reducido ámbito de temas: la determinación de la naturaleza jurídica de la declaración de impacto ambiental según la jurisprudencia del TC y del TS y las previsiones que se encuentran en la legislación estatal y autonómica sobre dicha evaluación referentes a la acuicultura. Concluiremos con una referencia a la Estrategia española para la conservación y el uso sostenibles de la diversidad biológica. 2. Sobre la naturaleza jurídica de la evaluación y declaración de impacto ambiental —respectivamente, EIA y DIA— se ha pronunciado recientemente el TS en sentencia de 17 de diciembre de 1998, que ha tenido presente la doctrina constitucional contenida en la STC 13/1998, de 22 de enero. Ha dicho el TS en cuanto a la naturaleza jurídica de la declaración de impacto ambiental lo siguiente: 329 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 330 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI «A) La Directiva del Consejo de las Comunidades Europeas 85/337/CEE, de 27 de junio de 1985, relativa a la evaluación de las repercusiones de determinados proyectos públicos y privados sobre el medio ambiente, no impone a los Estados miembros un tratamiento jurídico-procesal de tales evaluaciones que permita su control jurisdiccional autónomo o desligado del que quepa abrir contra la resolución autorizatoria del proyecto; ni impone tampoco lo contrario. La autonomía procesal de los Estados miembros en ese aspecto queda incólume, limitándose las obligaciones que el Derecho Comunitario les impone, en lo que ahora importa, al necesario sometimiento de determinados proyectos a una previa evaluación de su repercusión sobre el medio ambiente, y a la necesaria toma en consideración de ella en el marco del procedimiento de autorización. Destaca aquélla en consecuencia, como es lógico, la relación existente entre la evaluación y la toma de decisión sobre la realización del proyecto, haciéndolo en términos suficientemente indicativos del carácter instrumental o medial de la primera respecto de la segunda. Así, su artículo 1.º, núm. 2, advierte que por “autorización” ha de entenderse “la decisión de la autoridad o de las autoridades competentes que confiere al maestro de obras el derecho a realizar el proyecto”; y dispone en su artículo 2.º, núm. 1, párrafo primero, que “los Estados miembros adoptarán las disposiciones necesarias para que, antes de concederse la autorización, los proyectos que puedan tener repercusiones importantes sobre el medio ambiente, en particular debido a su naturaleza, sus dimensiones o su localización, se sometan a una evaluación en lo que se refiere a sus repercusiones”; en el núm. 2 del mismo artículo que “la evaluación de las repercusiones sobre el medio ambiente podrá integrarse en los procedimientos existentes de autorización de los proyectos en los Estados miembros o, a falta de ellos, en otros procedimientos o en los procedimientos que deberán establecerse para satisfacer los objetivos de la presente Directiva”; y en el artículo 8.º que “las informaciones recogidas de conformidad con los artículos 5.º, 6.º y 7.º deberán tomarse en consideración en el marco del procedimiento de autorización”. Además de lo anterior, no puede por menos de observarse que la Directiva se refiere reiteradamente a la idea o concepto de evaluación, en el que no integra un componente de decisión propiamente dicha; y que cuando se detiene a contemplar la intervención de “las autoridades que puedan estar interesadas en el proyecto, debido a su responsabilidad específica en materia de medio ambiente”, lo que impone a los Estados miembros es el deber de que adopten las medidas necesarias para que dichas autoridades “tengan la posibilidad de dar su dictamen sobre la solicitud de autorización (art. 6.1)”». «B) La transposición de dicha Directiva a nuestro Derecho interno se llevó a cabo a través del Real Decreto Legislativo núm. 1302/1986, de 28 de junio, de Evaluación de Impacto Ambiental, cuya normativa se desarrolla en el Reglamento para su ejecución, aprobado por Real Decreto núm. 1131/1988, de 30 de septiembre. De ese conjunto normativo fluye la idea de que la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA, en lo sucesivo) constituye una técnica singular que introduce la variable ambiental en la toma de decisiones sobre los proyectos con incidencia importante en el medio ambiente (preámbulo del Real Decreto Legislativo en el inciso primero de su párrafo segundo), que supone y garantiza una visión más completa e integrada de las actuaciones sobre el medio en que vivimos (preámbulo del Real Decreto, en su párrafo segundo) y, en definitiva, una mayor reflexión en los procesos de planificación y de 330 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 331 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI toma de decisiones (ídem); se trata de tener en cuenta a priori las incidencias que puedan derivarse de los procesos técnicos de planificación y de decisión, de tal manera que no se ejecute ninguna actividad que conlleve incidencias notables, sin que previamente se haya realizado un estudio evaluatorio de las mismas (preámbulo de la norma reglamentaria, en su párrafo tercero). De esa técnica evaluatoria, de la EIA, forma parte, a modo de precipitado, la Declaración de Impacto Ambiental (DIA en lo sucesivo), en la que se plasma un juicio prospectivo, técnico y jurídico, de la Autoridad competente de medio ambiente, que determina, en relación con un proyecto dado, y a los solos efectos ambientales, si su realización es o no conveniente y, en caso afirmativo, las condiciones que deban establecerse en orden a la adecuada protección del medio ambiente y los recursos naturales (v. Real Decreto legislativo en su art. 4.1, y Real Decreto en sus arts. 16 y 18, así como el concepto técnico que sobre ella incluye éste en su anexo 1). Pero además, de aquel conjunto normativo deriva también otra idea acerca de cual sea la funcionalidad procedimental y la eficacia jurídica de ese “juicio” o DIA; ésta ha de ser remitida a la Autoridad competente sustantiva, es decir, al órgano de la Administración que ha de dictar la resolución administrativa de autorización del proyecto (artículo 19 del Real Decreto), ha de hacerse pública en todo caso (art. 4.3 del Real Decreto legislativo), y si en el procedimiento de otorgamiento de la autorización sustantiva está prevista la previa notificación de las condiciones al peticionario, ésta se hará extensiva al contenido de la Declaración de Impacto (art. 21 del Real Decreto); sin embargo, la Autoridad competente sustantiva, lejos de quedar absolutamente vinculada por aquel juicio, puede discrepar de él en cualquiera de los aspectos que lo integran, esto es, tanto en el aspecto referido a la conveniencia de ejecutar el proyecto, como en el del contenido del condicionado al que haya de sujetarse (art. 20 del Real Decreto); discrepancia que, de producirse, será resuelta por el Consejo de Ministros o por el órgano de Gobierno de la Comunidad Autónoma correspondiente, según cual sea la Administración Pública donde resida la competencia sustantiva para la realización o autorización del proyecto (arts. 4 y 5 del Real Decreto legislativo y 20 del Real Decreto)». «Resultan así, de aquel conjunto normativo, dos conclusiones que en buena lógica parecen imponerse, importantes sin duda para decidir sobre la cuestión que se examina: una de ellas es que la DIA no se configura propiamente como un acto autorizatorio más, que en concurrencia con otro u otros haya de obtenerse para que el proyecto pueda ser llevado a cabo; éste, en lo que ahora importa, queda sujeto a un único acto autorizatorio que integrará en su contenido las determinaciones de la DIA o del Consejo de Ministros u órgano de Gobierno de la Comunidad Autónoma, según que no exista o exista aquella discrepancia (son las condiciones medioambientales que al final resulten, bien directamente de la DIA, bien de la decisión resolutoria de la discrepancia, las que han de formar un todo coherente con las exigidas para la autorización del proyecto —art. 18.2 del Real Decreto— y las que tendrán el mismo valor y eficacia que el resto del condicionado de la autorización —art. 27 de dicha norma reglamentaria—); y otra, que el contenido de la DIA no constituye, por tanto, la decisión última de la Administración, ni acerca de la conveniencia de ejecutar el proyecto, ni acerca tampoco de las condiciones medioambientales a que haya de sujetarse. En la misma línea, no parece que deba olvidarse como elemento interpretativo, pese a su menor valor, el término de “trámite” que en varias ocasiones se emplea en aquel Real 331 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 332 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Decreto Legislativo para referirse a la EIA; así, en el párrafo penúltimo del preámbulo, en el artículo 9.1 y en la Disposición Adicional Segunda». «La precisión del significado que en nuestro Derecho interno haya de atribuirse al procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental y al acto administrativo de Declaración de Impacto Ambiental, se ve también esclarecido a través de la doctrina del Tribunal Constitucional recogida en su reciente sentencia núm. 13/1998, de 22 de enero, resolutoria de un conflicto positivo de competencia promovido por el Gobierno Vasco en relación con determinados artículos del Real Decreto 1131/1988. Así, se lee en ella (F.J. 4) que la finalidad propia de la evaluación de impacto ambiental “es facilitar a las autoridades competentes la información adecuada, que les permita decidir sobre un determinado proyecto con pleno conocimiento de sus posibles impactos significativos en el medio ambiente”; entre los varios modelos posibles que existen para trasponer la Directiva 85/337/CEE (se añade en el F.J. 6), la normativa estatal “ha elegido establecer que la evaluación de impacto ambiental se formule en dos momentos sucesivos: en un primer momento, un ‘órgano ambiental’ distinto del órgano competente para aprobar o autorizar el proyecto debe emitir una ‘declaración de impacto ambiental’; en un segundo momento, el órgano con competencia sustantiva sobre el proyecto decide si conviene realizar la obra, instalación o actividad y, en caso afirmativo, fija las condiciones en que aquélla debe realizarse para salvaguardar el medio ambiente y los recursos naturales. En caso de discrepancia entre el órgano ambiental y el órgano competente sobre el proyecto, decide el Consejo de Ministros o el órgano que resulte competente en cada Comunidad Autónoma”; “la evaluación de impacto ambiental (F.J. 7) es una técnica transversal, que condiciona... la práctica totalidad de la actuación... que se materializa físicamente... (y) no puede caracterizarse, por consiguiente, como ejecución o gestión en materia de medio ambiente. La finalidad, contenido y efecto de la norma básica estatal conduce a que todas las Administraciones públicas valoren el medio ambiente cuando ejercen sus competencias sobre cualquiera de las obras, instalaciones u otras actividades de su competencia”; la Administración competente para realizar o autorizar el proyecto (F.J. 8), “está ejerciendo sus competencias sectoriales propias cuando... formula la declaración de impacto ambiental, la cual viene a formar parte de la autorización final del proyecto”; y (F.J. 13) “siendo la evaluación de impacto ambiental un trámite de cumplimiento obligado en todos los proyectos comprendidos en el anexo del Real Decreto legislativo...”. Es más, de los dos votos particulares que acompañan a la sentencia, el discrepante, en la medida en que resalta cuál es la razón de la discrepancia, ilustra también sobre el significado o sentido de la opinión mayoritaria del Tribunal, pues en él, en concreto al analizar la conexión procedimental entre la evaluación ambiental y los actos finales de aprobación o autorización del proyecto, se lee lo siguiente: “no existe a mi juicio —y creo que es aquí donde se produce la discrepancia más sustancial con la mayoría que ha votado a favor de la Sentencia— una relación de accesoriedad entre lo ambiental (secundario) y la autorización administrativa autorizatoria (principal)”; “no es aceptable, en consecuencia, degradar al simple y formalizado trámite de un informe o dictamen, recabado por vía de consulta por el Ente autorizante o de competencia sustantiva, lo que es en rigor una actuación que incumbe al Ente público que tiene a su cargo las actuaciones de gestión o ejecución en materia de protección medioambiental”». 332 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 333 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI «Lo expuesto conduce a entender que nuestro Legislador optó por configurar la DIA como un acto administrativo que, no obstante su esencialidad, participa de la naturaleza jurídica propia de los actos de trámite, o no definitivos, pues su funcionalidad es la de integrarse en el procedimiento sustantivo, como parte de él, para que sea tomado en consideración en el acto que le ponga fin, el cual sin embargo no queda necesariamente determinado —ni en el sentido de la decisión, autorizatoria o denegatoria, ni en el del contenido de las condiciones de protección medioambiental— por la conclusión o juicio que en aquella se haya alcanzado. Su carácter instrumental o medial con respecto a la decisión final, y su eficacia jurídica, no permite conceptuarla como una resolución definitiva, directamente impugnable en sede jurisdiccional. Ni tampoco conduce a ello el que la DIA sea el precipitado de unos trámites precedentes (iniciación, consultas, información al titular del proyecto, estudio de impacto ambiental, información pública, informes) ordenados procedimentalmente, pues todo ello constituyen meras secuencias lógicamente necesarias o convenientes para la formación del juicio en que la DIA consiste, que no transforma su naturaleza jurídica. Ni su enorme transcendencia, también predicable de otros dictámenes, como es obvio. Ni la especialización del órgano que la emite, por la misma razón. Ni su carácter de órgano no consultivo, pues esta nota o elemento no determina por sí sola la naturaleza jurídica de la totalidad de los actos que de él puedan emanar». 3. El Estado y las CC. AA. comparten las competencias sobre el medio ambiente (art. 149.1.23 CE). El Estado tiene la competencia exclusiva sobre la legislación básica y las CC. AA. pueden dictar normas adicionales y gestionar. La legislación estatal sobre evaluación de impacto ambiental se contiene en el R. D. Legislativo 1302/1986, de 28 de junio, de evaluación de impacto ambiental, desarrollado por el Reglamento para su ejecución aprobado por R. D. 1131/1988, de 30 de septiembre. Ni en el Anexo de este, ni en la ampliación de la lista de actividades llevada a cabo en las Leyes 4/1989 (Disposición Adicional 2.ª) y 54/1997, de 27 de noviembre, se incluyen las empresas o actividades de acuicultura. Ello no ha dejado de ser criticado por la doctrina que, invocando la Carta Europea del Medio Ambiente y de la Salud (redactada en la primera Conferencia de la OMS celebrada en Frankfurt, el 7 y 8 de diciembre de 1989) y el artículo 2 de la Directiva 85/337, de 27 de junio, propone una modificación normativa que someta a EIA, entre otras, las piscifactorías, como ya lo han hecho varias CC. AA. (Baleares y Valencia, entre ellas) y por otra parte se recoge en la legislación sectorial a que antes nos hemos referido. 4. Con posterioridad a las normas estatales, la mayoría de las CC. AA. han aprobado normas referentes a dicha evaluación. Así, podemos destacar las siguientes normas: Cataluña: Ley 3/1999, de 27 de febrero, de Intervención Integral de la Administración Ambiental, y Decreto 114/1988, 7 de abril, norma esta última que ha de entenderse derogada únicamente en cuanto se oponga a la Ley que acabamos de citar; Galicia: Decreto 442/1990, de 23 de septiembre; Andalucía: Decreto 292/1995, de 12 de diciembre; Cantabria: Decreto 50/1991, de 29 de abril; Murcia: Ley 1/1995, de 8 de marzo, de Protección del Medio Ambiente; CA Valenciana: Ley 333 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 334 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2/1989, de 3 de marzo; Aragón: Decreto 45/1994, de 4 de marzo; Canarias: Ley 11/1990, de 13 de julio; Extremadura: Decreto 45/1991, de 16 de abril; Islas Baleares: Decreto 4/1986, de 23 de enero; Madrid: Ley 3/1988, de 13 de octubre; Castilla y León: Ley 8/1994, de 24 de junio; Castilla-La Mancha: Ley 5/1999, de 8 de abril. En esta legislación específica, aparte las previsiones que ya conocemos contenidas en la LCM y en las Leyes Autonómicas de que hemos dado cuenta, se encuentran normas que se refieren a la evaluación del impacto ambiental que pueden producir las actividades de la acuicultura. Así, por referirnos sólo a las más recientes, tal exigencia se recoge en el Anexo I.1.c) de la Ley de Murcia; en el Anejo II.1.g) de la Ley de Castilla-La Mancha, al que se refiere la Disposición Adicional 1.ª, en cuyo apartado a) se prevé la regulación reglamentaria de un procedimiento simplificado de evaluación de impacto ambiental para las actividades señaladas en el Anejo II; y en los Anexos II.1.11.3, II.2.11.13.a) y b) y III.9.8 de la Ley de Cataluña, Anexos estos últimos que, en cuanto al concreto contenido del control ambiental, deben ser interpretados de conformidad con las normas previstas en los artículos 24, 27 y 29 (respecto de las actividades incluidas en los Anexos II.1 y II.2) y 41 (en cuanto a las del Anexo III) de dicha Ley de Cataluña. 5. La acuicultura ocupa un lugar destacado en la «Estrategia española para la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica», capital documento por medio del cual se da respuesta no sólo a los compromisos adquiridos por el Estado español con la ratificación del Convenio sobre Diversidad Biológica, sino también a los que se derivan de las firmas de otros convenios, de los acuerdos internacionales y de las normas de la Unión Europea, así como a los que proceden de su propio texto, consensuado como documento, en el mayor grado posible después del correspondiente debate nacional. Como se dice en su introducción «la estrategia española ha de entenderse como el puente natural entre la que está elaborando la Unión Europea para el ámbito comunitario y las que deseablemente habrán de elaborar las CC. AA. como responsables de la aplicación de medidas y acciones sobre el territorio, debiendo ser coherente con aquélla y constituir un marco para éstas». El referido documento establece los objetivos básicos y hasta veinticinco principios orientadores de las acciones a llevar a cabo para la consecución de dichos objetivos. Sin querer establecer ninguna jerarquía entre ellos, resulta de especial importancia el núm. 9, conforme al cual «la planificación del territorio y la evaluación de impacto ambiental incorporada al proceso planificador se consideran instrumentos capaces de garantizar la incorporación de los objetivos de sostenibilidad en etapas tempranas de toma de decisiones». La primera parte está dedicada al diagnóstico de la situación actual. Al examinar los procesos que, en el ámbito de la pesca y la acuicultura, inciden sobre la diversidad biológica según los sectores y actividad implicados, se consideran los siguientes: sobreexplotación de recursos; mortalidad de especies no objetivo de pesca; transformación de los fondos marinos; contaminación de las aguas; modificación de ambientes litorales; actividades recreativas; introducción de especies y genomas exóticos y agen334 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 335 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tes patógenos en el medio natural. Como resultado de tales procesos se apuntan los siguientes efectos: pérdida de efectos poblacionales; desaparición de especies a escala local y regional; pérdida de diversidad genética; fragmentación de las poblaciones; fragmentación, modificación y destrucción de hábitats y ecosistemas. En la parte segunda («estrategias autonómicas, planes sectoriales, líneas directrices y medidas») se abordan las líneas directrices de los planes sectoriales, proponiéndose, entre otras medidas, la optimización de la aplicación de la evaluación de impacto ambiental, que se traduce, fundamentalmente, en una ampliación de la normativa de evaluación de impacto ambiental. También en esa parte segunda se especifican las acciones que deberán aplicarse de manera más urgente una vez aprobada esta estrategia. Se distingue entre la conservación «in situ» y «ex situ» de los recursos naturales. Sugiere reformas institucionales, legislativas (entre ellas, la puesta al día de la Ley 4/1989) y económicas. Asimismo, el sometimiento a evaluación de impacto ambiental de todos los proyectos listados en el Anexo 2 de la Directiva 337/1985, cualquiera que sea el umbral cuando el proyecto esté dentro de un espacio protegido o de un lugar de la Red Natura 2.000. El Anejo III está dedicado a la pesca y la acuicultura. Respecto de esta última se afirma lo siguiente: «la acuicultura entraña un enorme potencial como complemento de la actividad pesquera, al permitir, al menos en potencia, la disminución de las extracciones del medio marino manteniendo la oferta de pescado y otros productos marinos en el mercado. Sin embargo, puede llegar a tener consecuencias negativas sobre el medio natural a través, principalmente, de tres tipos de procesos: la alteración del equilibrio químico de los sistemas así como procesos de contaminación, la alteración del equilibrio biológico por introducción de especies foráneas, agentes patógenos e invasión del reservorio genético de las poblaciones silvestres y, finalmente, alteración del equilibrio físico por construcciones e intervenciones sobre el relieve costero. La acuicultura debería ser motivo de un mayor desarrollo. Su correcta planificación, regulando y controlando los posibles aspectos negativos comentados, podría contribuir sólidamente a una gestión más sostenible del sector pesquero». XI. Coordinación y cooperación entre las diferentes Administraciones Públicas En el ámbito de la acuicultura se produce, lo hemos visto, la concurrencia de competencias de diferentes Administraciones públicas: Estatal, Autonómica y Local. El Título I de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre (arts. 4.º a 10) reguló los principios de las relaciones entre las Administraciones Públicas, que la jurisprudencia del TC había venido estableciendo, las Conferencias sectoriales y los Convenios de colaboración, así como las relaciones con la Administración local y las Comunicaciones a las Comunidades Europeas. Esta regulación se ha visto recientemente afectada por la Ley 4/1999 que procede a su modificación con el propósito de dar respuesta a los problemas reales existentes. Además de introducir el principio de lealtad constitucional se prevé la existencia de órganos de cooperación diferentes de las Conferencias 335 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 336 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI sectoriales, tanto para el apoyo de estas Conferencias como ajenos a las mismas y referidos a ámbitos específicos que requieren una adecuada especialización. Y se introduce y desarrolla el concepto de plan y programa conjunto, que tanta utilidad puede tener en nuestro ámbito. La LCM encomienda la coordinación entre la Administración del Estado y la CC. AA. a la JNACM (art. 27 y F.J. 9.B) de la STC 103/1989, de 8 de junio). XII. El Código Penal de 23 de noviembre de 1995 En el título XVI del Código Penal (LO 10/1995, de 23 de noviembre) los Capítulos III (arts. 325 a 331) IV (arts. 332 a 337) y V (arts. 338 a 340), referidos, respectivamente, a «los delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente», «los delitos relativos a la protección de la flora y la fauna» y a «las disposiciones comunes» se contienen normas que pudieran ser aplicables a supuestos relacionados con actividades desarrolladas en explotaciones de acuicultura. Tal posibilidad se percibe claramente en las tipificaciones referentes a conductas sobre emisiones y vertidos en aguas terrestres y marítimas, así como en las de captación de aguas que puedan perjudicar gravemente al equilibrio de los sistemas naturales (art. 325), hechos que reciben una pena agravada en los supuestos del artículo 326 (entre ellos, el funcionamiento clandestino o sin autorización administrativa de la industria o actividad) y la introducción o liberación de especies de fauna no autóctona de modo que perjudique el equilibrio ecológico, contraviniendo las Leyes o disposiciones generales protectoras (art. 333). El Código Penal también habilita a los Tribunales para que, en caso de comisión de estos delitos, puedan adoptar medidas encaminadas a restaurar el equilibrio ecológico perturbado (art. 339). XIII. Fomento de la acuicultura 1. Intervenciones con finalidad estructural en el sector de la acuicultura y de la comercialización, transformación y promoción de sus productos. El Acta Única Europea introdujo el concepto de cohesión. Ello produjo profundas reformas de los fondos estructurales europeos. Hasta 1993 la política pesquera tuvo un tratamiento jurídico y financiero diferenciado del esfuerzo de cohesión. Con la reforma de los fondos estructurales se crea el IFOP como instrumento financiero de orientación de la pesca, más precisamente como fondo específico para su aplicación en beneficio de la política de estructuras pesqueras tanto en regiones menos desarrolladas (objetivo núm. 1) como en el resto de las regiones. En la obra titulada «El Sector Pesquero Español en la Unión Europea», promovida por la Fundación Alfonso Martín Escudero, se lleva a cabo un estudio detenido del IFOP, de su proceso de creación y de sus características principales. No vamos a exponer en esta crónica lo que puede conocerse a través de las detenidas consideraciones recogidas en la obra que acabamos de citar. Únicamente nos vamos a referir a aquellas normas aplicables a la acuicultura tendentes a realizar los fines del IFOP. 336 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 337 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 2. La disposición general de mayor relevancia es el R. D. 798/1995, de 19 de mayo, por el que se definen los criterios y condiciones de las intervenciones con finalidad estructural en el sector de la pesca, de la acuicultura y de la comercialización, la transformación y la promoción de sus productos. Este R. D. recibe y adapta al ordenamiento jurídico español los Reglamentos (CE) 2080/1993 y 3699/1993. Tiene como precedentes los RR.DD. 222/1991 y 2112/1994, que se derogan. Se dicta al amparo del artículo 149.1.19 y 13 de la CE. Potencia la participación de las CC. AA. en la resolución de expedientes de gran parte de los capítulos y la gestión y pago de las ayudas, dando así un nuevo impulso a la cooperación entre las Administraciones territoriales y la Administración General del Estado. En el Capítulo I («Aspectos Generales») el artículo 1 determina los objetivos del Reglamento, que son: definir los criterios y condiciones de las intervenciones comunitarias con finalidad estructural en el sector de la pesca, la acuicultura y la transformación y comercialización de sus productos; regular los aspectos relativos a la construcción, modernización y reconversión de buques; promover el desarrollo de la acuicultura así como el acondicionamiento de zonas marítimas litorales; y otros aspectos referentes a la comercialización y transformación de los productos de la pesca y de la acuicultura, y a la promoción y búsqueda de nuevas salidas comerciales. El Capítulo IV (arts. 32 a 36) es el que específicamente se dedica al «Desarrollo de la acuicultura». El artículo 32 determina las medidas encaminadas a ese desarrollo: ayudas a inversiones encaminadas a los fines que concreta, así como fomento de la estadística y la investigación. En las Secciones 1.ª, 2.ª y 3.ª de este Capítulo se regulan los requisitos para la concesión de ayudas, los límites cuantitativos y la tramitación (el órgano competente de la Comunidad Autónoma tramita y resuelve los expedientes teniendo en cuenta las disponibilidades presupuestarias del MAPA y el IFOP). El Capítulo V está destinado al Acondicionamiento de las zonas marinas litorales. En el artículo 37 se determina que el MAPA podrá establecer —por fuera de aguas interiores— zonas protegidas en las que podrán instalarse arrecifes artificiales, previo informe del Instituto Español de Oceanografía. Los requisitos para la concesión de ayudas y las normas sobre la tramitación de las mismas están en los artículos 50 a 53, el último de los cuales (así como el art. 36.3 en el caso de las ayudas a la acuicultura) remite a las normas del Capítulo XVI de este mismo R. D. (arts. 95 y 96). En los Capítulos XII «Comercialización de los productos de la pesca y acuicultura», XIII «Transformación de los productos de la pesca y la acuicultura», XIV «Promoción y búsqueda de nuevas salidas comerciales» y XV «Acciones realizadas por los profesionales», se regulan otras tantas ayudas, remitiéndose igualmente al Capítulo XVI en todo cuanto hace a la gestión. En este Capítulo XVI se hallan las normas sobre: a) Delimitación de las competencias del MAPA y las CC. AA.; b) Recursos disponibles: Subvenciones previstas en los Presupuestos 337 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 338 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Generales del Estado y anticipos del IFOP; c) Distribución territorial de los créditos previstos en los Presupuesto Generales del Estado; d) Reparto, tramitación y abono de las ayudas con cargo a los fondos del IFOP; y e) Remisión por las CC. AA. al MAPA de la información sobre el grado de ejecución del gasto, etc. En las Disposiciones Adicionales, la 5.ª extiende las ayudas a —entre otras— las inversiones materiales de los ámbitos de la acuicultura, acondicionamiento de zonas marinas litorales y transformación y comercialización de los productos de la acuicultura destinados a mejorar las condiciones de higiene o sanidad, humana o animal, la calidad de los productos o a reducir los daños en el medio ambiente. La Disposición Adicional 9.ª exige para el percibo de las ayudas estar al corriente de las obligaciones tributarias y con la Seguridad Social. La Disposición Adicional 12 prevé la celebración de Convenios de colaboración entre la Administración del Estado y de las CC. AA. para la tramitación de los expedientes. 3. Las modificaciones introducidas en el R. D. 798/1995 por el R. D. 312/1996, de 23 de febrero, no afectan a la acuicultura. El objetivo de esta reforma es conceder ayudas a los pescadores afectados por ajuste estructural de la flota, bien por paralización definitiva o por exportación del buque a un país tercero como consecuencia de la creación de una sociedad mixta. El R. D. 696/1996, de 26 de abril, modifica parcialmente el R. D. 798/1995. La reforma no afecta a la acuicultura, pues la Disposición Adicional 15 que introdujo fue después suprimida por el artículo único 11 del R. D. 290/1997. Determinados preceptos [18 ap.3; 32 ap. 6; 36 ap. 2.c) y ap. 4; 48 ap. 5; 50 ap. 1; 66; 71; 89 ap. 3; 94 ap. 2; Disp. Ad. 11; Disp. Ad. 15, que se suprime; Anexo I, ap. 1 párrafo a)] del R. D. 798/1995 han sido modificados por el R. D. 290/1997, de 28 de febrero. De las reformas referentes a la acuicultura nos interesan especialmente las contenidas en los artículos 32. apart. 6 y 36 ap. 2 y ap. 4. En aquél se amplían las actuaciones susceptibles de ayuda, incluyendo la elaboración de estudios y la dotación de infraestructura informática destinados, en general, a cumplir los objetivos del plan sectorial de pesca y, en particular, a disminuir el impacto de la acuicultura sobre el medio marino. En el artículo 36 ap. 2.c) y ap. 4 se prevé la posibilidad de minorar en hasta tres puntos el tipo de interés de los créditos que se concedan por las distintas entidades de crédito a los titulares de instalaciones de acuicultura, para lo que se destinará, hasta un máximo del 50% de la subvención del IFOP. También se dispone que en la estimación del coste total de los estudios y aquellas otras acciones previstas en el artículo 32, último párrafo del R. D. 798/1995, podrán incluirse los gastos de las organizaciones representativas del sector titulares de los proyectos, que se generen directamente en la realización de los mismos. Asimismo se introducen modificaciones en el Cap. V regulador del acondicionamiento de zonas marinas litorales. Se añade al artículo 48 un apartado sobre hundimiento de buques de madera con destino a arrecifes artificiales en zonas previamente designadas por el MAPA, y se reforma el apartado 1 del artículo 50 para atribuir al MAPA la competencia para adoptar medidas de fomento de inversiones materiales en el ámbito de la protección, 338 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 339 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI regeneración y desarrollo de los recursos pesqueros de zonas marítimas litorales, pudiendo ser instituciones públicas u organizaciones representativas del sector pesquero los titulares de las inversiones. Es también objeto de modificación el núm. 3 del artículo 89, comprendido en el Capítulo XIV del R. D. 798/1995 («Promoción y Búsqueda de Nuevas Salidas Comerciales») que se sustituye por otro del siguiente tenor literal: «Las medidas tendentes a promover el consumo no podrán orientarse en función de marcas comerciales y no deberán hacer referencia a un país o a una región determinada, debiendo ser, por lo tanto, acciones genéricas excepto en el caso particular que la referencia al origen geográfico de un producto o de un método de elaboración haya sido objeto de reconocimiento oficial con arreglo a lo dispuesto en el Reglamento CEE 2081/1992, del Consejo, de 14 de julio, relativo a la protección de las indiciaciones geográficas y las denominaciones de origen de productos agroalimentarios. Dicha referencia sólo podrá hacerse valer a partir de la fecha en que la denominación figure en el registro previsto en el ap. 3 del artículo 6 del citado Reglamento». En el Capítulo XV («Acciones realizadas por los profesionales») se sustituye el ap. 2 del artículo 94 por otro con este texto: «Las solicitudes de ayuda para acciones realizadas por los profesionales, relativas a organizaciones de productores pesqueros que excedan del ámbito de una CA, se dirigirán al Ministro del MAPA, correspondiendo a éste la resolución de las mismas». Se modifica la Disposición Adicional 11.a para establecer que las resoluciones de los procedimientos de ayudas cuya gestión corresponda a la Administración General del Estado, previstas en los artículos 53.1.b) y 94.2 (referentes, respectivamente, a ayudas para arrecifes instalados en aguas exteriores y a ayudas para organizaciones de productores pesqueros que excedan del ámbito de una CA) ponen fin a la vía administrativa. Nuevamente ha sido modificado el R. D. 798/1995 por el R. D. 1040/1997, de 27 de junio, por el que se incorpora la utilización del arqueo bruto en las normas de ordenación que, sobre construcción y modernización, contiene el R. D. modificado. Las reformas no afectan a la acuicultura Asimismo han sido modificados diversos artículos del R. D. 798/1995 por R. D. 2287/1998, de 23 de octubre. Sólo en un extremo concreto la reforma afecta a la acuicultura: se añade un segundo párrafo a la Disp. Ad. 10.ª con el siguiente texto: «En los procedimientos de concurrencia competitiva iniciados de oficio, dicho plazo se computará a partir de la fecha que se establezca en la correspondiente orden de convocatoria». (El párrafo 1.º de esa Disposición Adicional determina el efecto desestimatorio del silencio administrativo por transcurso de seis meses desde que la solicitud haya tenido entrada en los órganos competentes del MAPA y la resolución corresponda a este Ministerio). 4. El R. D. 2666/1998, de 11 de diciembre, por el que se establecen los criterios de selección para el fomento de la mejora de las condiciones de transformación y comercialización de productos agrarios, de la pesca, de la acuicultura y la alimen339 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 340 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI tación (derogatorio de los RR. DD. 1462/1986 y 59/1994, y de la O.M. de 10 de marzo de 1994) considera actividades promocionables, entre otras, las citadas en su Anejo 1. En este Anejo, ap. K, se comprende el sector de productos de la pesca y de la acuicultura, dentro del cual se concretan como inversiones que pueden ser objeto de ayudas públicas (para lo cual habrán de cumplir los requisitos establecidos por el art. 2 de ese R. D.) las que se destinen a: 1.º) la mejora de las estructuras de la comercialización en destino; 2.º) la mejora de las estructuras de transformación de los productos de la pesca y la acuicultura; y 3.º) a la adecuación a las normas sanitarias. Dice también el citado artículo 2 que las inversiones relativas a la transformación y comercialización de productos de la pesca o la acuicultura deberán ajustarse a la Comunicación 97/C 100/05. Todas estas inversiones señaladas como subvencionables por el Anejo 1 podrán ser auxiliadas con cargo al presupuesto de la Dirección General de Alimentación de la Secretaría General de Agricultura y Alimentación del MAPA, a través de la cofinanciación regulada por el R. D. 798/1995. Las menciones que se hacen del R. D. 1462/1986, en los RR.DD. de delimitación de las zonas de promoción económica y de zona promocionable, previstos en la Ley 50/1985, de 27 de diciembre, de Incentivos regionales para la corrección de desequilibrios económicos interterritoriales, en lo relativo a los criterios sectoriales para establecer qué industrias de acuicultura o de transformación y conservación de productos pesqueros pueden ser consideradas como promocionables, deben entenderse referidas a este R. D. 2666/1998, para las solicitudes de ayudas presentadas a partir de su entrada en vigor, lo que se produjo al día siguiente de su publicación, que tuvo lugar el 30 de diciembre de 1998. 5. Interpretación jurisprudencial de las normas contenidas en la Ley 50/1985 de Incentivos regionales para la corrección de desequilibrios económicos interterritoriales. Hemos visto anteriormente que la LCM (art. 28, interpretado por la STC 103/1989) prevé la aplicabilidad a los cultivos marinos de los beneficios regulados por la Ley 50/1985 y los Reglamentos para su aplicación (RR. DD. 1535/1987, de 11 de diciembre, 302/1993, de 26 de febrero y 2315/1993, de 29 de diciembre). Más recientemente, a dicha Ley se refiere la Disposición Adicional 2.ª del anteriormente citado R. D. 2666/1998. De aquí la utilidad que puede tener el conocimiento de la jurisprudencia recaída en el ámbito de las subvenciones para la corrección de desequilibrios económicos interterritoriales. Entre otras muchas, la jurisprudencia se contiene en las SSTS de 6 de junio y 13 de noviembre de 1997, 18 de marzo, 2 de abril y 3 de noviembre de 1998, y 29 de abril, 4 de junio y 23 de septiembre de 1999. Los principales criterios recogidos en estas sentencias son los siguientes: a) Cualquier incumplimiento de las condiciones aceptadas por el beneficiario de la ayuda habilita a la Administración para la declaración de caducidad, con la consiguiente obligación de proceder a la devolución de lo percibido o disfrutado. b) La acción de la Administración para iniciar, con conocimiento del interesado, el expediente administrativo que tenga por objeto exigir el reintegro de lo perci340 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 341 IINNIICCIIOO INICIO INNIICCIIOOacuícola Legislación sobre el Isector BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI bido prescribe transcurridos cinco años computados a partir de la fecha en que concluya el plazo dentro del cual el beneficiario debe cumplir las obligaciones contraidas. c) No es posible una modificación ni en cuanto al plazo de cumplimiento, ni en cuanto al contenido de las obligaciones aceptadas, que no haya sido propiamente autorizada por la Administración. d) Las obligaciones son exigibles a la persona natural o jurídica que aceptó las condiciones impuestas por la Administración en la resolución de concesión de los beneficios. Cualquier subrogación en la relación jurídica que así queda entablada entre la persona aceptante y la Administración debe ser autorizada por esta última. e) Dado el sentido finalista de los beneficios, las obligaciones deben ser cumplidas en los términos de lo convenido, afectándolas a los fines específicamente establecidos, sin que quepa al beneficiario decidir autónomamente cambiar el objeto de la inversión. f) No cabe admitir el argumento de que se debe estimar cumplida la inversión, computando el exceso que se ha efectuado por otros conceptos, pues la subvención se otorgó por capítulos, fijándose en la resolución individual la distribución, asignándose a cada partida una determinada cantidad a invertir, de tal forma que este destino es el que ha de darse al capital y, por ello, si individualmente no se cumple con cada uno, hay que entender que existe incumplimiento, sin que pueda compensarse con lo invertido en otros campos, al impedirse de esa forma que se logren los objetivos particularizados previstos con la subvención. g) La realidad de la inversión «en terrenos» ha de ser corroborada por el oportuno asiento contable que justifique, o bien la salida de fondos de la Tesorería de la sociedad con esta finalidad, o bien la existencia de una deuda contraída para ello. A falta de esos asientos, hay que estimar que los terrenos serán de la entidad solicitante y que no necesitaba ser subvencionada su adquisición, por lo que la inversión por este concepto, al faltar tales detalles contables, no se ha cumplido. h) El R. D. 302/1993 introdujo una reforma de carácter beneficioso en cuanto al reintegro de las subvenciones, reforma que supuso la incorporación a este sector de las normas generales que sobre ayudas y subvenciones públicas contenía la reforma de la Ley General Presupuestaria. El artículo 37 del R. D. 1535/1987, añadido por el R. D. 302/1993, regula el reintegro de las subvenciones en términos que ligan el incumplimiento total de las condiciones al reintegro pleno de las cantidades percibidas. La norma —que distingue cinco supuestos de incumplimiento— permite, sin embargo, que, tratándose de inversiones comprometidas, en los casos en que aquél sea parcial (esto es, no superior al 50% de la cuantía de la inversión) el reintegro se limite a la parte proporcional al incumplimiento. Este mismo criterio de proporcionalidad se establece igualmente para los casos de incumplimiento de condiciones relativas a puestos de trabajo (ap. 4) y, en general, para cuando derivara de la inobservancia de alguna condición o supuesto distinto de los anteriores (ap. 6), determinándose entonces el alcance del incumplimiento en función del grado y de la entidad de la condición incumplida. 341 5878-II.Cap7 17/2/00 07:28 Página 342 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI i) Quien es beneficiario de una ayuda no queda desligado de las obligaciones contraídas por el sólo hecho de que él decida la introducción de un tercero en el desenvolvimiento de la actividad; al contrario, sigue obligado en los mismos términos y responde de la idoneidad de ese tercero y de la actuación de éste. Pero cuando nada se objete en contra de esa idoneidad o esa actuación, tal intervención no resulta en si misma contraria a ninguna norma o condición. No hay propiamente —en tal caso— un supuesto de cambio de titularidad, de aquellos a los que se refiere el artículo 38.1 del R. D. 1535/1987. No cabe sostener por tanto que era inexcusable una previa aprobación de la incidencia. La expresión «la empresa queda obligada» con que se inicia la condición particular de la resolución individual de concesión del beneficio, no alcanza a tener el significado de incidir sobre la naturaleza misma de la obligación transformándola en personalísima. La exigencia que la condición particular impone al beneficiario de mantener una determinada cifra de recursos propios, obliga ciertamente a ello a fin de introducir un cierto nivel de seguridad en orden a la posibilidad efectiva de abordar y llevar a cabo lo proyectado, pero no comporta en sí misma la prohibición de la intervención de terceros. Fernando Ledesma Bartret 342 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 343 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 8. Conclusiones 8.1. El futuro de la acuicultura 8.1.1. Algunas consideraciones sobre la acuicultura como instrumento de desarrollo económico Como reconoce la declaración final de la cumbre de países celebrada en 1997 en Kyoto, la pesca y la acuicultura desempeñan un papel fundamental en el suministro adecuado de alimentos, tanto a través de la oferta de pescado como produciendo bienestar económico y social. Además, reconoce la capacidad de la acuicultura como el sector con mayor potencial de crecimiento entre los sectores productores de alimentos y supone la más importante alternativa para mantener la proporción de pescado en la dieta mundial, debido especialmente a la degradación del medio ambiente y a la sobrepesca. Tal declaración enfatiza no sólo la necesidad, a escala mundial, de potenciar la producción acuícola, como alternativa de producción alimentaria, particularmente de productos que son una fuente básica de proteínas, y cuyo escenario de producción/ reproducción natural está sujeta a fuerte tensión derivadas de la sobreexplotación y la contaminación. 8.1.2. Algunas conclusiones sobre la situación y evolución reciente de la pesca y acuicultura Este estudio elaborado especialmente a partir de los datos de la FAO, existente para el período entre 1984-1995, ha permitido sacar una serie de conclusiones tanto sobre el estado actual como sobre la evolución de la producción, demanda y comercio de productos piscícolas, destacando especial interés a la acuicultura. El análisis también ha incidido sobre algunas regiones como Asia, UE y América y, además, concedió importancia especial para la situación española. La acuicultura ha incrementado significativamente su participación en la producción mundial de alimentos y de pescado y, lo más importante, la tendencia es al alza. En relación con los primeros, esta participación pasó del 0,14% en 1984 para el 0,3 en 1995, más que el doble; en relación a la producción de pescado, esta participación pasó del 11 al 23% en el mismo período. Asia es el mayor productor mundial de pescado, aunque en los últimos años está sufriendo una disminución del rendimiento, debido, especialmente, a la sobrepesca y a la degradación ambiental. En esta zona merece la pena destacar China, el mayor productor mundial de pescado, donde la producción se caracteriza por ser a pequeña escala. Esta zona respondió por el 55% de la producción mundial en 1995 y, lo más importante, con una tendencia al alza. 343 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 344 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La situación de la industria de la pesca tanto en la UE como en América del Norte se encuentra en una situación muy semejante: estancamiento de la producción y bajo nivel de rendimiento derivado, sobre todo, de la sobrexplotación, la degradación ambiental, el exceso de capacidad y la alta tecnología que aumenta la sobrexplotación de los recursos acuíferos. La UE responde por el 7% de la producción mundial de pescado y América del Norte por el 6%. La UE representa el 5% de la producción mundial acuícola. En el período entre 1984 y 1995 experimentó una ligera tendencia al alza, pero con un nivel de crecimiento inferior al de la media mundial, lo que explica la disminución de la participación de la acuicultura europea en el total mundial. En relación a la producción acuícola en España hay que destacar la intensa crisis que la acuicultura española ha sufrido entre 1984-1995. La producción acuícola española en 1995 representaba el 55% del nivel de producción de 1984; la participación de la producción acuícola en la producción total de pescado en España cayó del 17% en 1984 al 10% en 1995; y, la participación de la producción acuícola española en el total de la producción acuícola mundial disminuyó del 2,4% en 1984 al 0,5% en 1995. El comportamiento de la producción acuícola norteamericana es equivalente a la europea, es decir, una ligera tendencia al alza, pero en nivel inferior al mundial, lo que implica la disminución de la participación en el total mundial. En esta zona la acuicultura es una actividad diversificada, produciéndose peces de agua dulce, peces marinos, crustáceos, moluscos y plantas. En relación a los cambios en la estructura de la producción de alimentos por regiones se observa que en Asia, el mayor productor mundial de pescado, la participación de la producción de pescado y acuícola en la producción mundial de alimentos ha aumentado, en detrimento de la reducción de la participación de la producción agrícola. Para el caso de la UE y España, la participación de la producción de pescado y acuícola ha disminuido, en favor de un aumento de la participación de la producción agropecuaria. En América del Norte, no se observó ninguna variación significativa en la estructura de la producción de alimentos. En lo relativo a la evolución de la demanda de pescado, medida en términos del consumo aparente, se observa que la demanda mundial creció un 40% en el período, lo que representa un tasa media de crecimiento anual del 2,8%. Para Asia, el nivel de crecimiento de la demanda fue superior, cerca del 63%, lo que equivale a una tasa media anual de crecimiento del 4%; esto explica el crecimiento de la participación de esta zona en la producción mundial de pescado. En la Unión Europea, el nivel de crecimiento de la demanda fue bastante lento, apenas creció un 9,5% en los 12 años de estudio, lo que equivale a una tasa media anual de crecimiento del 0,7%; esto explica porqué la participación de esta zona en la producción mundial de pescado ha disminuido. En América del Norte la demanda creció, pero en niveles inferiores al crecimiento mundial, lo que también supone una disminución de la participación en la producción mundial de pescado. 344 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 345 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Conclusiones BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Considerando el proceso de desarrollo de la producción acuícola, la UE experimentó un desarrollo industrial fuerte y selectivo. Europa se ha especializado en el desarrollo de nuevas técnicas, produciendo de manera eficiente y controlada, abaratando los precios de los productos. La zona norte de Europa ha sido líder en el desarrollo industrial de cultivos marinos. En relación a Asia, se destaca apenas el bajo valor añadido de las principales especies cultivas. Finalmente, se espera, tanto para la UE como para España, un aumento de la producción acuícola, aunque existen importantes barreras a superar, especialmente aquellas derivadas de la limitada disponibilidad de recursos acuáticos, del precio más barato de las importaciones de otras regiones y de los controles medioambientales muy estrictos. Uno de los elementos fundamentales en esta desarrollo futuro positivo es el alto nivel tecnológico de la zona. 8.1.3. Comercio internacional de pescado El comercio internacional de productos piscícolas ha sido otro elemento analizado, las principales conclusiones derivadas son presentadas a continuación: 1. El comercio total medio de productos piscícolas primarios, es decir, aquellos considerados para consumo humano y que no sufrieron ninguna transformación, incluso industrial, presenta una ligera tendencia al crecimiento en los últimos 12 años (1984-1995). Esto es verdadero tanto en toneladas como en términos monetarios. 2. La tasa media de crecimiento del comercio total medio de productos piscícolas primarios, en el período, es del 2,7%, medido en toneladas, y del 9,7% medido en unidades monetarias. Estos datos permiten concluir que la tendencia creciente, aunque desacelerando en próximos años y con algunas fluctuaciones, como ocurrió con 1995, va a continuar en los próximos años. 3. En relación a las exportaciones mundiales de pescado, las expectativas son equivalentes a las anteriores, especialmente porque su comportamiento a lo largo del período estudiado también presenta una tendencia creciente. Esto es especialmente verdadero cuando se considera las exportaciones en términos monetarios, pero también lo es en términos de volumen físico, excepto para el caso del continente norteamericano. Sin embargo, esta tendencia declinante no llega a ser suficientemente fuerte para cambiar la tendencia mundial de crecimiento de las exportaciones. 4. En relación a las importaciones, la tendencia especificada anteriormente se mantiene si se considera apenas los datos en unidades monetarias, donde se nota una tendencia generalizada al crecimiento. Sin embargo, cuando la unidad de análisis es la tonelada, esta tendencia cambia ligeramente, especialmente porque se nota una estabilización del volumen mundial importado de alrededor de 2,5 millones de toneladas a partir de 1992. Ese resultado deriva de la tendencia declinante presentada tanto por la UE como por las demás regiones no destacadas directamente en el estudio (África, América Latina, Oceanía, etc.) 345 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 346 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 5. En relación a la distribución del comercio internacional de pescado, destacar la tendencia declinante de la UE, que viene perdiendo participación relativa para Asia en el comercio total de pescado. 6. Resta destacar que los principales productos piscícolas comercializados son los pescados frescos o refrigerados y los congelados, que se refieren a las partidas arancelarias 03.02 y 03.02, tanto para el total mundial como para España. Individualmente, los principales productos comercializados en el total mundial son: los camarones, langostinos, quisquillas y gambas, seguido de listados o bonitos de vientre rayado, salmón y atunes de aleta amarilla, además de pulpos y calamares, jibias y potas. En relación a España, la tendencia creciente del comercio total medio es más clara que para la media mundial, especialmente medido en unidades monetarias, donde presenta la mayor tasa media de crecimiento, alrededor del 24% al año. Sin embargo, en los últimos 4 años (1992-1995) esta tendencia acaba, llegando incluso a invertirse hasta 1994. Con estos datos en mente, y considerando que el período de reversión de la tendencia fue un período de crisis para la economía española y europea, y que la economía española está viviendo un período de crecimiento, esperamos que su comercio de pescado continúe creciendo en el futuro, pero en niveles menores que el experimentado en los años anteriores. En relación a las importaciones y exportaciones, destacar especialmente que España es un país importador neto de pescado dado su gran nivel de consumo y la incapacidad de la oferta doméstica de atender las necesidades de la demanda de los españoles. En relación a la participación de las regiones en el comercio mundial de pescado, España es un país que viene creciendo su tasa de participación, tanto en el total del comercio mundial como en relación a la UE. Estos resultados son especialmente verdaderos en relación a las importaciones, donde, en el período entre 1984-1995, la participación de España más que duplicó, tanto en relación al total mundial como en relación a la UE. 8.1.4. Tendencias y perspectivas de la producción acuícola Antes de analizar detalladamente las tendencias y las perspectivas es importante destacar los factores que han contribuido al desarrollo de la acuicultura tanto a escala europea como a nivel español, siguiendo los informes de APROMAR (1996) y CES (1996). En el ámbito europeo influyen numerosos factores que pueden tanto impulsar como limitar el desarrollo de la acuicultura (estos pueden extenderse para todo el mundo). En relación a los primeros destaca, en primer lugar, la demanda de productos del mar, medida por el consumo aparente, que se prevé continúe creciendo. Sin embargo, la oferta de capturas no puede aumentar indefinidamente ya que se trata de un recurso limitado, lo que implica una oportunidad significativa para el aumento futuro de la participación de la acuicultura en la producción total de pescado y alimentos. 346 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 347 IINNIICCIIOO IIConclusiones NNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI También es importante tener en cuenta el nivel tecnológico del sector, que ha aumentado en los últimos años. La tecnología y las condiciones naturales determinan la selección de enclaves y de especies a ser producidas, a la vez que ayudan en el desarrollo de la acuicultura. La utilización de una tecnología sofisticada permite desarrollar la acuicultura en lugares inhóspitos de Europa, a la vez que puede intensificar las operaciones de cultivo. En cuanto a los factores que limitan el desarrollo de la acuicultura, se encuentran las restricciones medioambientales. Sin embargo, los acuicultores son auténticos ecologistas, ya que la buena calidad del agua que utilizan es un requisito fundamental para la supervivencia de la industria a largo plazo. Otro factor limitante es el suministro de piensos, ya que la acuicultura depende de lograr fuentes baratas para la obtención del pescado, lo que afecta al coste de producción. También hay que tener en cuenta las restricciones del mercado. La acuicultura europea ha desarrollado especies de alto valor económico, como el salmón, la ostra y, en los últimos años, la lubina, la dorada y el rodaballo. Esto configura un mercado donde las empresas tienen bajos costes de producción y unas posibilidades de rentabilidades muy atractivas. Sin embargo, a pesar del potencial de alta rentabilidad, es peligroso incrementar muy rápidamente las cantidades cultivadas, porque la rentabilidad cae en proporción al aumento de la producción. Esto, por ejemplo, ocurrió con el salmón atlántico en 1991, cuando el mercado de este producto se vio inmerso en una crisis de rentabilidad, lo que produjo la quiebra de muchas empresas. Un último factor a tener en cuenta son las fluctuaciones de precio. Estas actúan como limitación al desarrollo, pues generan una constante inestabilidad en el sistema a través de la incertidumbre en la rentabilidad de las inversiones. 8.1.4.1. Tendencias en la oferta y demanda de productos acuícolas Es de esperar que el consumo de pescado en la región asiática se mantenga elevado debido, fundamentalmente, al crecimiento demofigura y a un mayor poder adquisitivo de los consumidores. Japón puede constituir una excepción ya que el crecimiento demofigura es prácticamente nulo. Es probable que los aumentos de producción conseguidos con la piscicultura se contrarresten con un nuevo descenso de las flotas que faenan en aguas distantes. En la República de Corea, la acuicultura esta adquiriendo una mayor importancia como fuente de productos pesqueros. En China, un rápido crecimiento económico permitirá un crecimiento de la acuicultura de agua dulce mediante la rehabilitación de estanques y las bastas superficies de los arrozales. El creciente número de piscifactorías permitirán hacer realidad ese potencial (Cortez, 1996). En el caso de la región europea es probable que aumente la producción acuícola, aunque existen importantes barreras a superar, especialmente aquellas derivadas de la 347 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 348 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI limitada disponibilidad de recursos acuáticos, del precio más barato de las importaciones de otras regiones y de los controles medioambientales muy estrictos. La producción acuícola de países en transición podría diversificarse a favor del cultivo de especies de valor más elevado como el salmón y las anguilas (Grainger, 1996). Según las expectativas de Lizárraga (1996), el aumento de la producción pesquera en la UE vendrá determinado, fundamentalmente, por la expansión de la acuicultura. Si se mantienen las tendencias del pasado, esta evolución es casi cierta y tendrá como componente fundamental el alto nivel tecnológico y, además, deberá prestar atención a los problemas ambientales. 8.1.4.2. Tendencias en la producción acuícola española Tendencias generales En el caso español, los principales factores que ayudan al desarrollo de la acuicultura marina son similares a los que se mencionaban en el apartado anterior con relación a Europa; entre los principales incentivos se destacan la creciente demanda de productos de mar, que se enfrenta a una ralentización de las capturas debido a la creciente escasez de productos marinos y el aumento del nivel tecnológico de la acuicultura que favorece la selección de mejores enclaves y una mayor producción. En sentido negativo, el desarrollo de la acuicultura se ve limitado por restricciones medioambientales, los problemas asociados a la rentabilidad de las explotaciones acuícolas y las fluctuaciones de los precios a las que están sometidos los productores y que afectan considerablemente la rentabilidad de sus inversiones. Además, hay que destacar, en primer lugar, el hábito alimenticio del consumidor español (consume 33 kg por habitante y año —muy superior a la media europea— 16 kg por habitante y año), lo que representa una importante demanda. En segundo lugar, la climatología y su perímetro costero, uno de los mayores de Europa. No hay que olvidar las ingentes inversiones en Investigación y Desarrollo llevadas a cabo por las principales empresas productoras de dorada y rodaballo, las cuales han desarrollado una tecnología de cultivo adecuada para obtener altas productividades en los diferentes enclaves utilizados. Esta tecnología es el activo más útil que posee nuestro país en materia de piscicultura marina y le concede una ventaja competitiva que será fundamental para el desarrollo de la acuicultura española. El desarrollo de la piscicultura marina española es consecuencia de haber destinado a I + D la practica totalidad de los recursos de explotación de años anteriores. Por lo que respecta a los factores que limitan el desarrollo, un dato relevante es la incapacidad de la Administración española de desarrollar un marco legal que protegiera al sector y que fuera consecuente con el carácter primario de éste (al igual que la ganadería o la pesca). Además el sector ha estado sometido a criterios divergentes por parte de las distintas Administraciones, tanto estatales como autonómicas, lo que ha dificultado las actuaciones de las distintas empresas. 348 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 349 IINNIICCIIOO IINConclusiones NIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Otro tipo de limitación es la dificultad para financiar las actividades y el fallo estratégico en la planificación y desarrollo de la actividad (CES, 1996). Por ejemplo, las subvenciones a la inversión en activos fijos han funcionado como una trampa, ya que algunas empresas realizaban inversiones en inmovilizado por encima de sus posibilidades y necesidades técnicas, lo que generó dificultades a la hora de financiar el circulante. Además, hay que destacar que la cantidad subvencionada es ínfima para las empresas que realmente producen. Mucho dinero oficial ha ido a parar a instalaciones que están cerradas en la actualidad o que costaron el doble o el triple. Tendencias en la demanda España mantiene un nivel de consumo aparente que, desde 1984, oscila alrededor de un millón y medio de tonelada lo que, en 1995, equivalía a mil millones de dólares. El volumen de consumo siempre ha sido superior a su nivel de producción, lo que indica que se trata de un importador neto de pescado. Esto también ayuda a entender, como en el caso europeo, porqué ha disminuido el nivel de participación de la piscicultura española en el total mundial. El nivel medio de consumo de pescado se encuentra entre los más altos del mundo. En 1995 representaba 33 kg per cápita por año, aunque ha sufrido fuertes fluctuaciones desde 1984. El elevado nivel de demanda de pescado del consumidor español es, sin duda, una de las principales ventajas. La existencia de una demanda nacional fuerte es un poderoso incentivo para las industrias productoras. En este caso, la demanda nacional supone una clara ventaja para el desarrollo de la piscicultura. En la medida en que el nivel de capturas continúe reduciéndose, y la demanda continúe fuerte, habrá mayores incentivos a la producción acuícola doméstica en detrimento de las importaciones de pescado del exterior. Por otro lado, considerando los resultados del modelo de simulación de la demanda de pescado para España, se encontró que la demanda responde a fluctuaciones en la renta per cápita (con signo positivo), en el precio del pescado (con signo negativo) y en el precio de los demás alimentos sin elaborar (con signo positivo). Los resultados más importantes son que el consumidor español es más sensible a fluctuaciones en los precios de los demás alimentos que en fluctuaciones en su propio precio o en la renta. Es decir, que el efecto sustitución es más fuerte que el efecto precio y que el efecto renta. Esto, entre otras cosas denota que el español es más propenso a sustituir otros alimentos por el pescado que la situación contraria, cuando existen fluctuaciones de precios relativos. Los resultados mostraron que en el escenario 1, de manutención de la tendencia actual, la demanda proyectada también sigue una tendencia de crecimiento pero a tasas decrecientes, como ocurre con todas las variables explicativas. El escenario de crisis y el de crecimiento, aunque opuestos en las hipótesis de comportamiento de las 349 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 350 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI variables explicativas, produjeron proyecciones de demanda futura de pescado equivalentes. Esto se debe, sobre todo, a que la demanda responde especialmente a cambios en el precio relativo del pescado frente a los demás alimentos y a que la renta afecta muy poco la demanda. Además, se mostró que existen grandes posibilidades de que la acuicultura aumente su nivel de importancia en la industria pesquera española al aumentar su participación en la oferta de pescado doméstica, pues la oferta de pescado procedentes de capturas tiende a crecer a tasas menores que la de los cultivos. Tendencias en la Política Pesquera y Acuícola Española Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la acuicultura española en los años 80 estaba dominada por pequeñas empresas de economía familiar y muy tradicionales. Tres tipos de cultivo caracterizaban a esta actividad: 1. El cultivo de la trucha arcoiris, cuyo despegue tuvo lugar durante la década de los 60. 2. El cultivo del mejillón en las rías gallegas cuyo inicio fue en los años 40 y su desarrollo tuvo lugar desde mediados de los 70 a mediados de los 80. 3. La acuicultura de esteros gaditanos, iniciada a comienzos de los 40 al entrar la industria salinera local en una grave crisis y cuyo desarrollo, muy lento al principio, no alcanzó su despegue definitivo sino hasta finales de los 70. Actualmente, a estas modalidades tradicionales se ha incorporado un nuevo sector, altamente industrializado y pujante. Sus exponentes más característicos son el cultivo del rodaballo en el norte, en los cultivos de la lubina y dorada en el sur y Canarias. Aprovechando este impulso se está produciendo una fuerte modernización en el cultivo del mejillón, así como una mayor industrialización, incorporando conceptos empresariales más actuales, en los cultivos de la trucha y en los esteros de la región suratlántica. Sin embargo, como destaca el informe, el Plan Estratégico de la Acuicultura en España del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (mayo de 1998), en la actualidad, la acuicultura española se encuentra en una situación en que los avances se producen con excesiva lentitud. Como resultado existen dificultades en cumplir los objetivos de producción previsto por el Plan Sectorial de la Pesca, habiéndose producido ya, a mitad del Plan, una modificación de los mismos a la baja. Con el objetivo de identificar y dar soluciones a las limitaciones existentes, para permitir a la acuicultura española dar un salto, cualitativo y cuantitativo, el informe del Ministerio destaca la necesidad de la realización de una serie de análisis con profundidad de diversas materias como la transferencia de tecnología, los mecanismos de financiación, los programas de investigación, las nuevas especies y tecnologías, los planes educativos, la legislación comparada, etcétera. 350 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 351 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Conclusiones BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 8.2. Viabilidad de la empresa acuícola La creación de una empresa acuícola presenta unos problemas muy específicos que hacen que sea un proyecto de alto riesgo. El análisis de estos problemas, formalizado en el estudio de viabilidad, permite destacar los siguientes aspectos como los determinantes del éxito del proyecto: • En primer lugar, una empresa acuícola requiere unos conocimientos técnicos muy importantes, sobre todo cuando se especializa en la etapa de reproducción y cría de alevines, siendo más sencillo el engorde. En cualquier caso, la necesidad de alcanzar un alto nivel de eficiencia hace necesario mantener siempre al día los conocimientos de los últimos avances en biotecnología en el campo de: evolución genética de las especies, posibilidades de las nuevas especies, farmacología, desarrollo de piensos y técnicas de engorde, resolución de problemas específicos como serían el grado de mortandad, la apariencia del producto final o la eficacia de los sistemas de producción. Todo ello hace que este sector requiera muchos conocimientos técnicos reservados sólo para promotores con experiencia en este ámbito. • Los ingresos de las empresas acuícolas sufren perturbaciones debido al fuerte incremento de la oferta y a la dificultad que tienen las empresas para diferenciar el producto. Así, a pesar de que la demanda es alta se suceden períodos de abundancia que generan caídas de los precios y de los ingresos. Para mantener los ingresos las empresas acuícolas deben poder estabilizar los precios de mercado de sus productos, situación que sólo se produce cuando: — Se desarrolla una industria de transformación que emplea los productos acuícolas diferenciando e incrementando el valor añadido de la oferta. — Se alcanza un nivel de reputación para los productos acuícolas muy alto que los hace competitivos con los productos que no tienen este origen. • Los proyectos acuícolas han de tener un constante efecto experiencia que permita optimizar la utilización de las instalaciones alcanzando una mayor producción y, a la vez, mejorar la eficiencia reduciendo los costes medios para lograr tener éxito. De manera que el proyecto difícilmente es rentable en los primeros años, siendo necesario para determinar su viabilidad dar por supuesto que se logrará alcanzar índices de productividad y eficiencia competitivos. • Por ultimo, la financiación suele estar apoyada por subvenciones y ayudas públicas y los trámites de legalización son muy complejos ya que suelen utilizarse recursos naturales, circunstancias que hacen necesario que los promotores de estos proyectos tengan un amplio conocimiento de las relaciones con las distintas Administraciones Públicas que hagan posible superar todos los tramites necesarios para llevarlo a cabo. En definitiva, el sector acuícola, por su potencialidad, parece que tiene grandes expectativas de futuro, aunque los problemas que presenta hacen que sea necesario dominar algunos factores ciertamente complejos, que ensombrecen, con altos riesgos, el panorama actual del sector. 351 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 352 IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 8.3. El tratamiento de la información contable en las empresas de acuicultura Las empresas del sector acuícola, al igual que el resto de sujetos económicos contemplados en la legislación mercantil, deben cumplir unas exigencias de información en el contexto amplio en el que circunscriben su actividad económica. Estas exigencias de información llevan a adoptar unas técnicas de recogida y procesamiento de información de acuerdo con unos métodos recogidos en dicha legislación, materializándose, entre otros elementos, en la adopción del Plan General Contable (PGC), normas de valoración y principios contables generalmente aceptados. Estos elementos definidos en el marco conceptual de la Contabilidad Financiera no están especificados de manera concreta, para el sector que nos ocupa hasta el momento, en lo que sería un plan sectorial definido por las autoridades contables. A lo largo de dicho capítulo se propone una segmentación de acuerdo con la actividad, de forma tal que la adaptación del cuadro de cuentas del PGC pueda ser utilizado tanto por empresas que reúnan ambos tipos de actividad, cría y engorde, así como las que trabajen con un solo tipo de actividad, y dentro de cada tipo de actividad se segmenta por especies, ya sea lubina, rodaballo, dorada, almeja, u otras. Ahora bien, en el trabajo se sigue la estructura del PGC sin pretender llegar a presentar una adaptación sectorial completa, sino un posible enfoque a la hora de aplicar el Plan. Un problema diferente es la información dirigida al usuario interno, en este caso la información recogida por la Contabilidad Financiera se ha mostrado claramente insuficiente. En la segunda parte del trabajo se propone un modelo con la finalidad de valorar la producción y controlar los costes, con una estructura orgánica que si bien puede presentar diversas modalidades, nos hemos decantado por un sistema de costes completos que permita alcanzar los objetivos establecidos. 8.4. La estrategia comercial en el sector acuícola Como inmediato competidor, las empresas productoras de recursos acuícolas han seguido políticas comerciales paralelas a la pesca de captura. Frente a esta modalidad productiva, el pescado de cultivo no goza de la mejor imagen de calidad, por lo que se espera de éste que tenga un menor precio en el mercado. La política empresarial en el sector pesquero ha estado durante mucho tiempo orientada a la producción, disfrutando de una demanda capaz de absorber la oferta de los productores. Los incrementos en la producción debidos al cultivo de ciertas especies, así como la competencia en este campo de países con ventajas en coste debidos a su capacidad productiva, como Noruega con el salmón o Grecia con la dorada, hacen necesaria una orientación al mercado para poder competir en este escenario. 352 5878-II.Cap8 17/2/00 07:29 Página 353 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Conclusiones BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI La orientación al mercado implica la orientación al consumidor, la comprensión de sus necesidades y la satisfacción de éstas a largo plazo. Las acciones más recientes de los productores españoles muestran cómo la filosofía de orientación al mercado se va imponiendo en el sector. El empleo de instrumentos de comunicación, como la promoción de ventas y la publicidad, tendentes a posicionar al pescado cultivado como un alimento de calidad con garantía de origen, muestran la aceptación de esta filosofía empresarial dentro de la industria. En un sector donde las economías de escala y el efecto experiencia se trasladan inmediatamente a los precios del mercado, los productores españoles parecen haber optado por estrategias competitivas apoyadas en otras formas de generar valor en el producto que ofrecen, además de competir en precio. Las ventajas que la planificación de la producción ofrece a la industria acuícola a la hora de abastecer los mercados con puntualidad y regularidad constituye otra de las ventajas para el desarrollo de políticas comerciales mucho más dinámicas que las que se puedan plantear en la industria de captura. Las posibilidades de la acuicultura como fuente importante de abastecimiento de pescado entre los consumidores españoles aún están por explotar. No obstante, se están dando los primeros pasos destinados a familiarizar al gran público con el sector, venciendo la desconfianza que inicialmente se tenía de los productos cultivados. 353 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 355 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 9. Anexos 9.1. Anexo A. Resultado de la estimación de la demanda de pescado 9.1.1. Definición de las variables Variable Dependiente Consumo Aparente (CA), es el volumen total de la producción más las importaciones y menos las exportaciones, en toneladas, que expresa el volumen total consumido. La serie más larga de consumo aparente y con alguna coherencia de que se dispone (dado que los datos pertenecen a una misma base), para el pescado, es la existente en la base de datos FISHCOMM-PC de la FAO, que se presenta a continuación en la tabla. Variable Dependiente: Demanda. Consumo Aparente del Pescado Año Pescado 1976 1977 1978 1979 1980 1981 1982 1983 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1.496.109 1.423.316 1.468.026 1.363.050 1.464.307 1.410.837 1.603.328 1.490.798 1.533.331 1.597.681 1.597.187 1.864.389 1.995.975 1.898.857 1.768.453 1.773.794 1.720.119 1.835.665 1.833.851 1.771.073 1.768.979 Fuente: FISCHCOMM-PC. 355 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 356 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Los datos de esta tabla se refieren al consumo aparente del pescado calculado como se explica anteriormente, utilizando el volumen de producción, importación y exportación de los productos tanto frescos como congelados, a partir de la base de datos de la FAO, FISHCOMM-PC. Variable Independiente 1. La renta per cápita (RP), como un indicador de renta, de capacidad de consumo. Tiene la función de evaluar el efecto renta sobre la demanda del producto. Se espera que esta variable tenga un efecto positivo sobre la demanda, es decir, que cuanto mayor la renta de los consumidores, mayor sea la demanda. 2. La tasa de crecimiento de la población (P), que indica el crecimiento del mercado consumidor. Esta variable, junto con la renta per capita, expresa la renta total de los españoles, con lo que, conjuntamente, representan adecuadamente la renta. Como la variable anterior, también se espera que esta variable tenga una relación positiva con la demanda. 3. El índice de precio del pescado fresco y congelado (PB) del INE, indicando el nivel de evolución del precio del producto. Tiene el objetivo de evaluar el efecto precio sobre la demanda del producto; se espera que esta variable tenga un Variables Explicativas Año RP* P** PP** PA** ED** 1976 1977 1978 1979 1980 1981 1982 1983 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 981.662 997.567 1.000.884 992.409 997.831 986.296 995.864 1.012.834 1.023.244 1.047.744 1.077.988 1.135.984 1.191.008 1.245.941 1.290.690 1.317.629 1.323.706 1.305.221 1.330.745 1.365.631 1.393.114 1,19 1,20 1,13 0,90 0,75 0,99 0,59 0,51 0,44 0,20 0,30 0,25 0,22 0,20 0,15 0,18 0,23 0,20 0,16 0,15 0,15 15,15 20,77 25,49 29,91 33,51 38,98 43,06 47,98 55,38 60,85 68,41 73,57 79,45 84,72 92,16 97,56 100,96 99,48 102,63 0,423 106,04 22,70 28,85 33,94 37,03 39,94 45,05 51,97 56,84 64,62 71,35 78,50 83,12 86,25 92,02 90,87 102,06 103,13 100,05 106,30 110,29 113,48 0,15 0,15 0,15 0,15 0,16 0,16 0,16 0,16 0,17 0,17 0,18 0,18 0,18 0,19 0,19 0,20 0,20 0,20 0,21 0,21 0,21 ** Pesetas de 1990. Fuente: IFS. ** Fuente: INE. 356 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 357 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Anexos BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI impacto negativo sobre la demanda del pescado, es decir, mayor precio, menor demanda de pescado. 4. El índice de precio de los demás alimentos (IPC alimentos sin elaborar) del INE (PA), que indica la evolución de los precios de los productos competidores y tiene el objetivo de evaluar el efecto substitución, es decir, capta el impacto de la sustitución del consumo entre productos dada cualquier variación en los precios de los demás productos. Se considera como los principales productos competidores los demás alimentos sin elaborar, es decir, se está suponiendo que los consumidores, dada cualquier fluctuación del precio de un alimento, lo sustituirá por otros alimentos alternativos. Se espera que un aumento de esta variable implique un aumento de la demanda de pescado. 9.1.2. Estimación de la función de demanda LS // Dependent Variable is CA Date: 12/14/98 Time: 12:18 Sample: 1976 1996 Included observations: 21 Variable Coefficient Std. Error t-Statistic Prob. C RP PA PP 1091.845 0.198577 6.660049 –2.261044 548.3919 0.589015 10.31091 11.32585 1.990993 0.337134 0.645922 –0.199636 0.0628 0.7401 0.5270 0.8441 R-squared Adjusted R-squared S.E. of regression Sum squared resid Log likelihood Durbin-Watson stat 0,705632 0,653685 109.3232 203176.6 –126.1594 1.071594 Mean dependent var S.D. dependent var Akaike info criterion Schwarz criterion F-statistic Prob(F-statistic) 1651.863 185.7704 9.558261 9.757218 13.58361 0.000090 Estos resultados se refieren a la estimativa de la demanda de pescado para España. El primer cuadro presenta la estimativa de los coeficientes de la función de demanda, el segundo la tabla de residuos y el gráfico de residuos. Como se puede observar, la ecuación presenta buenas medidas de ajuste final dado que el F estadístico es significativo a 5% y las variables presentan el signo teóricamente esperado. Por otro lado, ninguna de las variables es significativamente diferente de cero, lo que puede ser explicado por el tamaño de la serie y por las grandes fluctuaciones de la variable dependiente en los últimos 10 años. Sin embargo, en general, este modelo presenta excelentes medidas de ajuste final, con un R2 altísimo y estadísticamente diferente de cero en su conjunto y todas las variables con el signo teóricamente esperado. 357 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 358 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI Tabla del Residuo Actual Fitted Residual Residual Plot 1496.109 1423.316 1468.026 1363.05 1464.307 1410.837 1603.328 1490.798 1533.331 1597.681 1597.187 1864.389 1995.975 1898.857 1778.453 1773.794 1720.119 1835.665 1833.851 1771.073 1768.979 1403.72149928 1435.13447293 1459.02439167 1467.90307165 1480.2279874 1499.60611996 1538.33259431 1563.26407473 1600.20789834 1637.49155962 1674.06921693 1704.64268716 1723.13805653 1760.60688508 1744.96531918 1812.66270326 1813.31314148 1792.45337294 1831.98547376 1861.89899049 1884.47548332 92.3875007211 –11.8184729302 9.00160833173 –104.853071646 –15.9209873966 –88.7691199554 64.9954056923 –72.4660747298 –66.8768983444 –39.8105596196 –76.8822169331 159.746312844 272.836943465 138.250114924 33.4876808171 –38.8687032608 –93.1941414753 43.2116270627 1.86552624001 –90.8259904871 –115.49648332 · * · * * * · * * * * · · · · * * · * * * * · * · · · * · · · · * * * * · · * · · · Gráfico del Residuo 2200 2000 1800 300 1600 200 1400 100 1200 0 -100 -200 76 78 80 82 84 Residual 358 86 88 Actual 90 92 94 Fitted 96 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 359 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Anexos BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 9.1.3. Análisis de tendencia de las variables explicativas en los modelos de simulación de la demanda a) Renta per Cápita Evolución y Tendencia de la Renta Per Capita 1.800.000 1.600.000 1.400.000 1.200.000 y = 23598x+ 883952 1.000.000 2 R = 0,9055 800.000 RP* Lineal(RP*) 600.000 400.000 200.000 94 19 19 91 88 19 85 19 82 19 79 19 19 76 0 b) Índices de precios Evolución y Tendencia de los Indices de Precios 180 y = 4,6118x + 21,184 160 2 R = 0,9785 140 120 PA 100 PP 80 Lineal (PA) 60 y = 4,876x + 11,762 Lineal (PP) 2 R = 0,9819 40 20 96 19 94 92 19 90 19 19 88 19 86 84 19 82 19 19 80 78 19 19 19 76 0 359 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 360 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 9.2. Anexo B. Ejemplo de manual de valoración de puestos de trabajo FACTOR 1: FORMACIÓN O EDUCACIÓN Definición: Conocimientos o formación que el titular o titulares del puesto deben poseer para comprender y mejor resolver los problemas que surjan en el desempeño de sus funciones y responsabilidades, y en el cumplimiento de las tareas y objetivos. Grados Puntos 1. Conocimientos de nivel elemental que capacitan para desempeñar tareas de naturaleza manual o realizar trabajos de ejecución simple. Formación básica requerida: EGB o equivalente. 10 2. Conocimientos profesionales que capacitan para desempeñar oficios de tecnología simple o trabajos intelectuales que requieren el dominio de una especialidad poco compleja. Formación básica requerida: FP, BUP, o similar. 20 3. Conocimientos profesionales que capacitan para realizar especialidades cualificadas y complejas, tanto de índole industrial como administrativa. Formación básica requerida: FP2 o equivalente, completada con formación específica en distintos puestos de trabajo. 30 4. Conocimientos de técnicas cualificadas con coordinación y supervisión de especialidades simples. Formación básica requerida: Maestrías Industriales, Técnicos Comerciales, o similares. 40 5. Conocimientos de técnicas complejas con coordinación y supervisión de técnicas específicas cualificadas. Formación básica requerida: Titulados medios universitarios. 50 6. Conocimientos amplios de una disciplina científica con dirección, coordinación y supervisión de técnicas complejas distintas. Formación básica requerida: Titulación superior universitaria. 60 FACTOR 2: EXPERIENCIA Definición: Duración del tiempo normalmente requerido para aprender el trabajo satisfactoriamente desde el punto de vista de calidad y cantidad, bajo condiciones normales. Grados Puntos 1. Menos de un mes 10 2. De uno a seis meses 20 3. De seis a un año 30 4. De un año a tres años 40 5. De tres a seis años 50 6. Más de seis años 60 360 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 361 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Anexos BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI FACTOR 3: INICIATIVA Definición: Capacidad para actuar independientemente en la planificación y desarrollo de las tareas, tomar decisiones para la ejecución satisfactoria de las mismas, desarrollar recursos necesarios para el trabajo y alcanzar las prescripciones escritas sobre procedimientos o métodos para guía de la persona que ocupa el puesto. Grados Puntos 1. Realizar tareas que requieran poca o ninguna planificación o decisión, ejecutar tareas sencillas, clasificaciones simples, bajo instrucciones verbales exactas o bajo estrecha supervisión. 10 2. Trabajar con instrucciones detalladas, tomar decisiones menores fáciles sobre trabajos rutinarios sencillos o rutinarios complejos, clasificar material según tamaño, peso o apariencia, decidir cuándo un trabajo sencillo está satisfactoriamente terminado. 20 3. Planificar, ejecutar y deducir el orden de sucesión de operaciones de las que se conoce sólo el método general a seguir; tomar decisiones generales en cuanto a calidad; realizar operaciones y puesta a punto o montaje de un equipo moderadamente complicado; clasificar productos mediante pruebas de ensayo físico, químico o por sentido común; determinar el tipo de maquinaria y utillaje para ejecutar un trabajo; decidir cuándo un trabajo complicado está satisfactoriamente terminado. 30 4. Planificar la ejecución de un trabajo inusitado y difícil del que se conoce solamente el método general de trabajo; tomar decisiones que requieran el empleo de considerable iniciativa y juicio; planificar, antes de poner en marcha, operaciones complejas; consultar a sus jefes sólo en casos raros de extrema complicación. 40 5. Poseer una habilidad extraordinaria para trabajar independientemente, con el mínimo asesoramiento, hacia resultados generales; idear nuevos métodos de actuación; resolver situaciones nuevas de tareas complicadas que necesiten un alto grado de iniciativa y juicio en trabajos muy complicados. 50 6. Realizar tareas que requieran investigar situaciones muy complicadas que normalmente suponen responsabilidad de jefe y que originan nuevos métodos o procedimientos para obtener los resultados deseados; sensiblemente apto para puestos de alto mando. 60 7. Reservado para puesto de alto mando, en los cuales es necesario constantemente hacer frente y decidir importantes cuestiones; realización de trabajos técnicos que presentan a veces problemas que requieren una avanzada habilidad en la materia; tomar decisiones que implican una acción y responsabilidad considerables. 70 8. Puestos de alta dirección; establecer la política de la Empresa para una mayor efectividad de la misma y mejor resolución de sus problemas. 80 361 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 362 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI FACTOR 4: ESFUERZOS FÍSICOS Definición: Aprecia la intensidad y persistencia del esfuerzo muscular necesario para la ejecución del trabajo. Considera también el esfuerzo debido a las posiciones difíciles de trabajo. Grados 1. Posición de trabajo de pie o sentado a voluntad del operario; andar pero con posibilidad de descensos periódicos; manejo intermitente y espaciado de materiales o mandos que requieren menos de 5 kg de esfuerzo o similares. 2. Posición de trabajo normal pero casi invariable; trabajo constante, de pie, con cierta libertad de movimientos; posiciones incómodas de algún momento; trabajos que exigen un ritmo rápido sin esfuerzo apreciable; esfuerzos casi permanentes hasta 5 kg; esfuerzos intermitentes hasta 12 kg o similares. 3. Posición algo incómoda persistente; posición incómoda intermitente; necesidad de un ritmo de trabajo muy rápido, con esfuerzos ligeros hasta 5 kg; esfuerzos casi permanentes entre 5 y 12 kg; esfuerzos temporales hasta 24 kg; trabajos normales en máquinas herramientras medianas, en las que hay que colocar piezas, apretar garras o bridas fuertemente con bastante continuidad o similares. Puntos 10 20 30 4. Trabajos que requieren cierto esfuerzo con posición de trabajo incómodo persistente o posición muy incómoda intermitente; trabajos que requieren un ritmo de trabajo rápido con esfuerzos medios; esfuerzos casi permanentes hasta 20 kg; esfuerzos temporales hasta 30 kg o similares. 40 5. Trabajos que exijan notables esfuerzos en posición violenta o muy anormal; ritmo de trabajo con esfuerzos importantes; esfuerzos generalmente superiores a 40 kg o similares. 50 362 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 363 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Anexos BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI FACTOR 5: DIVERSIDAD DE TAREAS Definición: El esfuerzo de atención ocasionado por la variedad de los trabajos a ejecutar, y las decisiones de que tales cambios pueden precisar. Grados 1. Tareas de rutina simple, que requieren la utilización de sólo hasta cinco procedimientos de trabajo definidos y pequeños juicios individuales, puesto que el trabajo se efectúa bajo inmediata supervisión y hay poco campo de elección para el método de actuación. 2. Tareas rutinarias que incluyen la aplicación de prescripciones o estándares, requiriendo el uso de varios procedimientos y la toma de decisiones menores que requieran algún juicio. 3. Tareas semirrutinarias, que incluyen un conocimiento intenso de un campo restringido, requiriendo el uso de una extensa serie de procedimientos y el análisis de factores en situaciones que determinan qué acción se debe emprender dentro de los límites de normas o estándares a utilizar. 4. Tareas semirrutinarias, incluyendo un conocimiento general de las normas y procesos de la Empresa. Fijación de sus aplicaciones en casos no previamente determinados. Tareas que requieren trabajo independiente dirigido a resultados generales, proyectos de nuevos métodos, modificación o adaptación de procesos estándares, haciendo frente a nuevas condiciones o tomando decisiones basadas en la política anterior de la Empresa. 5. Trabajo difícil o altamente técnico, o implicando proyectos que presentan problemas nuevos o que cambian constantemente. Tareas que requieren una avanzada habilidad para tratar con factores complejos de no fácil evaluación o tomar decisiones basadas en conclusiones para las cuales existen pocos precedentes. 6. Participación de la formulación y conducción de la política de la Empresa, objetivos y programas para su mejor división de funciones. Dirección y coordinación del Trabajo de Departamentos subordinados en orden a obtener objetivos. Puntos 10 20 30 40 50 60 7. Tareas especiales de gran variedad que precisan de muchas tomas de decisión con escasos o nulos precedentes. 70 8. Reservado para quienes se ven precisados de tomar decisiones inciertas de forma casi constante. 80 363 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 364 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI FACTOR 6: RESPONSABILIDAD POR EL TRABAJO DE OTROS Definición: La responsabilidad derivada de tener que planificar, enseñar y dirigir eficazmente el trabajo de otras personas, y la implicada en el puesto de trabajo, por ayudar o dirigir el trabajo de otros, formar y manejar personal y mantener su buena disposición hacia la Empresa. Grados Puntos 1. Responsabilidad solamente de su propio trabajo. 10 2. Responsable de instruir y dirigir el trabajo de hasta 5 personas, asigna trabajos, comprueba aplicación de métodos y controla resultados. 20 3. Responde de la ordenación, coordinación y control de resultados de una unidad orgánica. Supervisión y mando entre 6 y 15 personas. 30 4. Responsable del trabajo de 15 a 30 personas. 40 5. Responde de una unidad orgánica con autoridad para fijar políticas, estrategias, planificación, coordinación y control. Supervisión entre 30 y 60 personas. 50 FACTOR 7: RESPONSABILIDAD POR LA TAREA Definición: Consecuencias de los errores que puedan cometerse en el desempeño habitual de las tareas. (Se entiende por error la acción desafortunada, fortuita e involuntaria, pero comprensible y excusable). Grados Puntos 1. Errores de poca consideración, detectados por el titular, que no suponen pérdidas. 10 2. Errores pequeños que suponen la repetición del trabajo, que suponen alguna pérdida y que son detectados en controles rutinarios o por el mando directo. 20 3. Posibilidad de errores de cierta importancia por la naturaleza de los materiales que pueden perderse o de los equipos que pueden averiarse. Errores que pueden afectar a un grupo de personas que ven retrasados sus trabajos. Los errores pueden detectarse por superiores no directos. 30 4. Posibilidad de cometer errores importantes que afectan a materiales, equipos, etc., de coste elevado, y/o que pueden afectar a varias secciones. Los errores se detectan una vez finalizado el trabajo. 40 5. Posibilidad de errores muy importantes de graves consecuencias para la empresa. Difíciles de descubrir, y cuando lo son los detecta el cliente. Es necesario repetir todo el proceso completo. 50 364 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 365 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Anexos BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI FACTOR 8: RELACIONES CON OTROS Definición: La responsabilidad de que está investido el empleado o técnico, con respecto a contactos de trabajo con otras personas, dentro y fuera de la Empresa. Grados Puntos 1. Se aplicará a tareas de las cuales el empleado está sólo en contacto con sus jefes o compañeros de trabajo. 10 2. Se aplicará a tareas en las que el empleado tiene contacto de naturaleza rutinaria con otras personas del mismo departamento. 20 3. Se aplicará a tareas en las que el empleado tiene contactos rutinarios con personas del mismo o de otro departamento, o contactos personales o por teléfono con personas ajenas a la Empresa. 4. Tareas que habitualmente suponen contactos personales, por carta o por teléfono, con el exterior; contactos no rutinarios con otros departamentos de la propia empresa; contactos con personas del propio departamento, que requieren cierta habilidad de tacto, por haber delegado mando en las mismas (capataces, jefes de equipo, etc.). 5. Propio de tareas que suponen contactos entre departamentos con el exterior, comprometiendo a la empresa sin necesidad de supervisión o aprobación del jefe superior, para el suministro de materiales o servicios que suponen una cifra razonable; contactos por razón de mando directo sobre ellos, con personas del propio departamento que requieren de gran personalidad y habilidad para obtener su colaboración. 6. Aplicable a ocupaciones en las cuales el empleado tiene que tener frecuentes o regulares contactos entre Departamentos y con el exterior, que requieren un alto grado de tacto y de conocimientos técnicos para adquirir compromisos de naturaleza contractual, que implican considerables gastos. 7. Aplicable a ocupaciones en las que el empleado dedica la mayor parte de su tiempo a conferencias con altos empleados de la propia empresa, o con empleados responsables de otras empresas de carácter técnico, que implican grandes sumas de dinero y requieren un sentido de la estrategia bien desarrollada. 8. Aplicable a posiciones de dirección donde la personalidad y habilidad para cooperar son cualidades primordiales. Pueden ser el factor decisivo de donde resulte un mayor beneficio o pérdida para la Empresa. 30 40 50 60 70 80 365 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 366 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI FACTOR 9: CONDICIONES DE TRABAJO Definición: Condiciones ambientales de iluminación, temperatura, ruidos, así como la tensión nerviosa que resulta del ejercicio normal del trabajo. Grados Puntos 1. Condiciones de trabajo normales. Trabajos que exigen un ritmo normal de actuación. Trabajos que no tienen prácticamente riesgos. 10 2. Condiciones de trabajo en cuanto a iluminación, temperatura o ruido, con algunas incomodidades. Tareas que exigen un ritmo acelerado en la actividad de trabajo. El trabajo da lugar a algunos riesgos de accidentes o enfermedades por la iluminación, temperatura o ruido que se produce. 20 3. Frecuentes incidencias e importantes incomodidades por iluminación, temperatura o ruido que se produce. Tareas que exigen un ritmo muy acelerado. Trabajo que puede ser origen de enfermedades importantes o accidentes profesionales graves. 30 9.3. Anexo C. Ejemplos de cuestionarios de evaluación del desempeño EVALUACIÓN ANUAL DEL DESEMPEÑO Empleados Apellidos y Nombre: Puesto: Departamento: Área: Período de Evaluación: I. Aspectos a Evaluar Valoración 1. Cantidad de Trabajo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha conseguido volúmenes adecuados de trabajo en las tareas asignadas a un puesto. 2. Calidad de Trabajo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha realizado con precisión, exactitud, cuidando los detalles y sin errores, los trabajos que le han sido asignados. 3. Organización en el Trabajo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha demostrado capacidad para trabajar de forma ordenada y metódica. 366 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 367 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Anexos BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 4. Competencia Profesional . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha utilizado con efectividad los conocimientos y habilidades profesionales que son necesarios para el correcto desempeño del puesto. 5. Atención al cliente (interno o externo) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha demostrado capacidad para tratar al cliente con amabilidad, rapidez y precisión, proporcionando una información clara y relevante. 6. Comunicación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Se ha comunicado con claridad y agilidad, demostrando un elevado grado de escucha con los demás, así como disposición para el diálogo con todos. 7. Innovación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha sido capaz de aportar nuevos métodos o sistemas que han permitido una mejora del servicio o de la operativa en su puesto de trabajo. 8. Flexibilidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha adaptado con facilidad su comportamiento a las nuevas situaciones. 9. Capacidad de Aprendizaje . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha asimilado con facilidad nuevos conocimientos, relacionándolos con coherencia e incorporándolos con rapidez a su trabajo. 10. Afán de Superación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha demostrado una elevada motivación por ocupar puestos de mayor responsabilidad, manifestando un esfuerzo constante por mejorar y preocupándose de su propia formación. 11. Actitud Personal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha demostrado interés, esfuerzo, constancia, integración en la unidad y se ha comprometido con los objetivos de fábrica. 12. Gestión de Cartera de Clientes (sólo comerciales) . . . . . . . . . . 1. Ha gestionado eficientemente la cartera de clientes asignada según los criterios fijados. Escala de Valoración: 1. No cumple lo expresado en el factor. 2. Sólo cumple en parte lo expresado en el factor. 3. Cumple lo expresado en el factor. 4. Ha cumplido habitualmente todos los aspectos expresados en el factor. 5. La actuación de la persona ha sido sobresaliente en todos los aspectos contemplados en el factor. 367 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 368 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI II. Resultados A lo largo del ejercicio, la persona con su actuación: — No ha conseguido la mayoría de los resultados esperados . . . . . . . — Sólo ha conseguido parcialmente los resultados previstos, no compensándose los puntos débiles con los puntos fuertes . . . . . . . . . . . — Ha cubierto los resultados esperados en cotas consideradas normales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . — Ha conseguido con holgura los resultados previstos, excediendo las expectativas de resultados en los aspectos principales . . . . . . . — Ha superado de forma excepcional la mayoría de los resultados previstos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . III. Evaluación Global — Aspectos valorados: * 0,60 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . — Resultados: * 0,40 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Evaluación Global EVALUACIÓN ANUAL DEL DESEMPEÑO Directores y mandos intermedios Apellidos y Nombre: Puesto: Departamento: Área: Período de Evaluación: I. Valoración de la Actuación por Factores Valoración 1. Competencia Técnica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha resuelto habitualmente los problemas técnicos y operativos de su función evitando errores. 2. Capacidad Comercial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha iniciado relaciones con clientes con facilidad y las mantiene con carácter duradero. Ha tenido impacto en las relaciones de negocio y influyendo positivamente en sus clientes tanto externos como internos para conseguir los objetivos de negocio. 368 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 369 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Anexos BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 3. Calidad de Servicio al Cliente . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ofrece un trato excelente, agilidad en la respuesta, buen nivel de asesoramiento e información tanto a clientes externos como internos adaptándose a las necesidades de cada uno. 4. Toma de decisiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha tomado decisiones consistentes y viables, ponderando los riesgos y asumiendo las consecuencias de las mismas. 5. Flexibilidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Se ha adaptado con facilidad a los cambios y a las nuevas situaciones, tanto de las condiciones externas de negocio, como en los cambios internos en su puesto de trabajo. 6. Liderazgo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha mostrado capacidad para dirigir, organizar el trabajo e influir positivamente sobre sus colaboradores dinamizando al equipo para alcanzar los objetivos previstos. Orienta y reconoce a las personas fomentando activamente la formación y el desarrollo de su equipo humano. 7. Gestión de Cartera de Clientes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1. Ha realizado un seguimiento permanente de las necesidades y grado de satisfacción de cada cliente. Escala de Valoración: 1. No cumple lo expresado en el factor. 2. Sólo cumple en parte lo expresado en el factor. 3. Cumple lo expresado en el factor. 4. Ha cumplido habitualmente todos los aspectos expresados en el factor. 5. La actuación de la persona ha sido sobresaliente en todos los aspectos contemplados en el factor. II. Actitud Personal Valoración Para valorar la Actitud Personal debe considerar aspectos como: — La disposición a actuar en el trabajo de forma positiva o negativa. — El esfuerzo realizado. — El interés mostrado. — El grado de implicación con los objetivos y proyectos asignados. — La constancia y voluntad puestas y demostradas en el trabajo. — La disposición a integrarse en la factoría o fábrica. — La postura ante política y normativa de la empresa. 369 5878-II.Anexos 17/2/00 07:29 Página 370 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO Economía y gestión de la acuicultura BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI III. Valoración de los Objetivos Asignados Valoración 1. Contribución a los objetivos fijados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2. Morosidad (conseguir los objetivos fijados) . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3. Calidad del Servicio (conseguir los objetivos fijados) . . . . . . . . . . . IV. Evaluación Global — Valoración de la actuación: * 0,40 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . — Actitud Personal: * 0,20 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . — Consecución de objetivos: * 0,40 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Evaluación Global 370 5878-II.Bibliografía 17/2/00 07:29 Página 371 IINNIICCIIOO IINNIICCIIOO BBUUSSCCAARR M I NEI NC ÚI 10. Bibliografía AECA (1994): Principios de Contabilidad de Gestión. APROMAR (1995): Asociación Empresarial de Productores de Cultivos Marinos, presente y futuro de la acuicultura marina española. ATKINSON, J. S. (1987): ¿Flexibilidad o Fragmentación? El mercado de Trabajo del Reino Unido en la Década de los Ochenta. Institute of Manpower Studies, Brigthon. Trabajo y Sociedad, vol. 12, n.º 1, enero, ps. 99-121. AURIOLES, J.; PAJUELO, A. (1988): «Factores Determinantes de la Localización Industrial en España». Papeles de Economía Española, n.º 35, pp. 188-207. BAUTISTA PAREJO, C. 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